Hispania, 2016, vol. LXXVI, nº. 253, mayo-agosto, págs. 355-384 ISSN: 0018-2141, e-ISSN: 1988-8368, doi: 10.3989/hispania.2016.011 Micer García de Gibraleón († 1534), un bróker eclesiástico en la Roma del Renacimiento* José Antonio Ollero Pina Universidad de Sevilla
[email protected] RESUMEN: Los conversos se pueden entender como un grupo definido que adoptó incluso conductas comunitarias, pero en su seno se encontraban situa- ciones sociales y culturales muy diferentes, de manera que su historia debe reconstruirse a partir del estudio de individuos y familias múltiple- mente interrelacionados y que vivieron trayectorias muy diversas. García de Gibraleón (†1534) representa un caso ejemplar de supervivencia y adaptación. Hijo de Pedro Fernández Benadeva, uno de los primeros condenados y ejecutados por la Inquisición sevillana, ya a principios de 1481, y de una madre cuyo rastro se pierde en el destierro, nunca regre- saría a su ciudad natal. Sin embargo, desde Roma y durante el primer tercio del XVI, valiéndose de la posición a la que había escalado en el medio curial, estuvo en condiciones de actuar como un intermediario im- prescindible, un auténtico bróker, del mercado de las sinecuras y los be- neficios eclesiásticos y ponerse al servicio de varias iglesias españolas, entre ellas de la de Sevilla, de donde sus hermanos tuvieron que abando- nar sus prebendas para salvar sus vidas, al mismo tiempo que se hacía con un apreciable patrimonio. Hasta en el legado que dejó al morir sig- nificó la trágica ironía de aquel tiempo de angustia. PALABRAS CLAVE: Conversos; Inquisición; Sevilla; Curia pontificia; Beneficios eclesiásticos; Patronazgo.