2009-01-25 “Tanto Apuro Es Señal De Algo Turbio”
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Noticias y comentarios aparecidos en medios de prensa de la ciudad de Córdoba, Argentina, sobre el proyecto provincial para la venta de edificios públicos. Recopilación: Arq. Arquímedes Federico café de las ciudades – número 75, febrero de 2009 2009-01-25 “Tanto apuro es señal de algo turbio” http://www.diaadia.info/?q=content/%E2%80%9Ctanto-apuro-es-se%C3%B1al-de-algo-turbio%E2%80%9D La polémica por la venta de las tierras más valiosas que el Estado provincial tiene esconde dentro de sí misma una controversia quizá aún mayor. A la férrea resistencia de la oposición para que no se enajenen predios como los de Casa de Gobierno y el Pablo Pizzurno, la cuestión que inunda de dudas a la operatoria es la presunción instalada de que esas ventas escondan algún acto de corrupción. Tan pronto se conoció la noticia, hicieron sentir su voz los directivos del Colegio de Martilleros y los de la Asociación de Peritos Judiciales, quienes sostienen que cuando vende la Provincia, siempre lo hace por menos valor. Al menos eso es lo que afirma Jorge Carlos Gait, presidente de la segunda entidad mencionada más arriba, quien aporta elementos para justificar sus sospechas. –Usted dice que el Estado vende barato y compra caro ¿A qué apunta con esto? –Cuando el Estado quiere vender, el organismo encargado de tasar el bien a desprenderse es el Consejo General de Tasaciones, que pertenece al Ministerio de Finanzas. El tema es que ese organismo depende directamente del Poder Ejecutivo provincial que es el que nombra a su presidente. Entonces, no actúa como un órgano independiente y sus dictámenes, en vez de ser técnicos, son políticos. –La actuación del Consejo es clave en este tipo de negocios ¿no? –Lo es cuando el negocio se convierte en negociado. Y este Consejo ha tenido varios desatinos, lo que me hace pensar que se trata de eso, de un negociado. Fueron los casos del Batallón 141; el predio del Ferrocarril Mitre, donde quieren hacer el centro cívico; el Palacio Ferreyra; y el Patio Olmos con sus dos salas. –¿Y por cuánto le “erraron” a la tasación? –Al Batallón lo tasaron en 103 millones de pesos y lo vendieron en 107, cuando desde la asociación advertimos que valía arriba de 337 millones. Al Mitre lo tasaron en 43 millones, cuando el cálculo nos da 185. Y al Palacio Ferreyra lo expropiaron en ocho millones, pero después la Justicia dictaminó que valía 23, y ahora la Provincia tendrá que pagar ese importe. –¿A cuánto tasarían la Casa de Gobierno? –El primer cálculo nuestro está arriba los 150 millones de dólares si se extiende el permiso constructivo de Nueva Córdoba. Y ya hemos escuchado al Gobierno y a los desarrollistas decir que vale 50 millones, justo un tercio. Otra vez, se cumple la regla de la rebaja de precio. –El gobernador dice que con la ley de mejora de oferta continua se impide que los desarrollistas se pongan de acuerdo, ¿es así? –No, porque en Córdoba se han juntado en la Cámara de Desarrollistas Urbanos (Ceduc) los empresarios que construyen, venden y financian; entonces ellos se ponen de acuerdo y compran barato. Se termina convirtiendo en un remate privado. –Pero el piso de la oferta la da el Consejo de Tasaciones. –Es que cuando la cotización de entrada es muy baja, eso repercute directamente en el precio. Todos saben que nadie va a ofrecer muy por encima de ese primer valor. –¿Y no puede venir alguien de afuera y patearles el asado? –Lamentablemente, en la forma en que se hacen estos concursos de precios, a veces nos damos cuenta de que tienen de antemano el nombre y apellido del ganador. Los requisitos sólo los puede cumplir una persona. Acá en Córdoba, es el comprador el que fija el precio. –¿Cuánto pueden salir los 58 bienes que quiere vender la Provincia? –Es otro de los misterios. Fue una irresponsabilidad de los legisladores. ¿Cómo puede ser que hayan aprobado vender todos esos bienes sin saber cuánto valen? Están autorizando a ciegas. Si valen poco, está mal, porque nos vamos a desprender de esos inmuebles que se podrían utilizar para un fin social. Si valen mucho, está mal también, porque estamos despojando al Estado de su patrimonio. –¿Pero no hay un dato, aunque sea somero, del valor? –Es que depende de muchas cosas. La ubicación, la posibilidad de construcción, el estado en el que se encuentran, sin tienen algo edificado, si tienen poseedores o están ocupados. Para determinar todas esas variables no queda otra que ir al lugar y constatarlo, y eso cuesta dinero. Desde la Asociación de Peritos Judicial tenemos la intención de hacerlo, pero estamos buscando apoyo económico, porque cuesta más de 30 mil pesos. –¿¡Tanto!? –Hay que movilizar gente a puntos muy distantes del interior. Pero también hay que hacer un estudio de los títulos, para ver si están saneados o son parte del desastre que hay dentro del Registro de la Propiedad. –Tocó un tema clave ¿Qué papel juega el Registro con su caos en todo esto? –Es un caldo de cultivo excelente para este tipo de acciones, pero también para el sinnúmero de negocios que se suponen que existen y que enriquecen a particulares a costa del Estado. Yo me pregunto por qué en Córdoba no podemos tener un registro como el de Mendoza o el de La Plata, donde está todo informatizado y uno puede tirar automáticamente el listado de propiedades a nombre de una persona; o averiguar fácilmente a quién pertenece tal o cual inmueble. Acá en cambio parece que hay un halo de misterio en el que nadie puede saber bienes tiene tal o cual persona. Privados y apurados. La semana anterior, Gait sostuvo que la venta de la Casa de las Tejas y el Pizzurno no eran realmente necesarias, siempre que se vendan bien los otras 58 propiedades. –¿Es una buena época para vender inmuebles? –Es relativo. Los inmuebles se mantuvieron en alza mucho tiempo recuperando sus valores en dólares, pero ahora se han amesetado con la crisis internacional. No se puede decir que es mala época, porque nadie sabe hasta donde llega esta crisis. Lo que es malo es venderlos apurados. Ahí siempre se pierde. –¿Ese apuro empezó con la misma aprobación de la ley que enajenó los 58 inmuebles? –Y sí. Se hizo en la última sesión del año pasado, salteando el tratamiento en comisiones. Ni los legisladores oficialistas sabían qué estaban aprobando. Cuando uno ve que que la sanción de una ley se precipita, o cuando te topás con el vallado de la Policía en la Legislatura, es porque algo huele mal. –Cuesta no ver algo raro… –Es que si yo soy turbio, me apuro y especulo con los tiempos. Si soy transparente, ¿qué apuro tengo? Mejor lo discuto, lo diseño, lo cotizo, y veo cuál es la mejor opción para pagarlo. –¿Qué opina del mecanismo de la iniciativa privada? –Un despropósito. Hemos puesto el carro adelante del caballo. Si yo quiero casa nueva, primero determino qué comodidades necesito, cómo quiero el baño y la cocina. Y no aceptaría que venga alguien y me diga cómo va a ser mi casa, cuánto me va a costar, y que estoy obligado a aceptarla así. Yo le aseguro que el concurso de proyectos que hizo (el ex gobernador) De la Sota fue más transparente que esto. Se pagó el premio, se adquirió el proyecto y todos lo podíamos ver. Acá nos quieren convencer de que una empresa va a tener ventaja porque hizo el aporte de diseñar el proyecto. No hay ningún aporte, acá hay un aprovechamiento de la cosa pública. –¿Se habrán enamorado del proyecto? ¿O del negocio? –Y... da que pensar. Este es un proyecto que se hizo a las sombras. 2009-01-22 Vecinalistas plantearon su rechazo a la UCR y el PJ http://www2.lavoz.com.ar/nota.asp?nota_id=483305 Dirigentes vecinalistas de Córdoba se reunieron ayer con concejales de los bloques radical y justicialista para ratificar su postura de que no se vendan la actual Casa de Gobierno y el ex Instituto Pablo Pizzurno. La postura fue ratificada luego de las reuniones, por los dirigentes Enrique Barreto, titular del Plenario de Centros Vecinales, y Horacio Antolín Solache. Los vecinalistas ya habían planteado esta posición a los ediles del Frente Cívico, dos semanas atrás. Dejaron claro que no se oponen a la construcción de un centro cívico y otro de convenciones, como propone el gobernador Juan Schiaretti. Pero sí rechazan que se vendan esos inmuebles de la Provincia para financiar las obras propuestas. En ese punto hay acuerdo general. Luego, se abren distintas visiones sobre el destino de la Casa de las Tejas y el ex Pizzurno, en caso de que la Provincia no los necesite más. Algunos como Barreto reclaman que vuelvan a cumplir las funciones sociales que tenían antes, en beneficio de la ancianidad y la niñez. Otros, como Antolín Solache, dicen que en ese caso se debe estudiar cuidadosamente qué hacer con los inmuebles. Explicaciones. Ayer, la primera reunión de los vecinalistas fue con miembros del bloque radical, con quienes coincidieron en rechazar las ventas. El jefe de la bancada de ediles, Ramón Mestre, les recordó que tiempo atrás su partido propuso sin éxito una ley para restringir la enajenación de propiedades del Estado. Quedó clara la voluntad del bloque radical de concejales no permitir que se construya en altura en la actual Casa de Gobierno y en el ex Pizzurno. Mestre explicó también que el radicalismo impulsó en abril del año pasado la creación de un Instituto Mixto de Planificación Urbana para debatir ésta y otras obras y que el juecismo le cajoneó la iniciativa.