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ISSN 0328-2333 Programa Nacional de Cartas Geológicas de la República Argentina 1:250.0001:250.000

Hoja Geológica 3569-I Volcán Maipo

Vista panorámica del flanco oriental del volcán Maipo. Provincia de Mendoza

Patricia Sruoga, Mariela Etcheverría, Alicia Folguera y David Repol

Neotectónica: José M. Cortés

Recursos Minerales: Juan Carlos Zanettini

Supervisión: Luis Fauqué

Boletin Nº 290 Buenos Aires - 2005

Programa Nacional de Cartas Geológicas de la República Argentina 1:250.000

Hoja Geológica 3569-I Volcán Maipo Provincia de Mendoza

Patricia Sruoga, Mariela Etcheverría, Alicia Folguera y David Repol

Neotectónica: José M. Cortés

Recursos Minerales: Juan Carlos Zanettini

Supervisión: Luis Fauqué

Normas, dirección y supervisión del Instituto de Geología y Recursos Minerales

SERVICIO GEOLÓGICO MINERO ARGENTINO INSTITUTO DE GEOLOGÍA Y RECURSOS MINERALES

Boletín Nº 290 Buenos Aires 2005 SERVICIO GEOLÓGICO MINERO ARGENTINO

Presidente: Ing. Jorge Mayoral

Secretario Ejecutivo: Pedro Alcántara

INSTITUTO DE GEOLOGÍA Y RECURSOS MINERALES

Director: Roberto F. Page

DIRECCIÓN DE GEOLOGÍA REGIONAL

Director: José E. Mendía

SEGEMAR Avenida Julio A. Roca 651 • 10º Piso • Telefax 4349-4450/3115 (C1067ABB) Buenos Aires • República Argentina www.segemar.gov.ar / [email protected]

Referencia bibliográfica

SRUOGA, P., M. ETCHEVERRÍA, A. FOLGUERA, D. REPOL, J. M. CORTÉS y J. C. ZANETTINI, 2005. Hoja Geológica 3569-I, Volcán Maipo. Provincia de Mendoza. Instituto de Geología y Recursos Minerales, Servicio Geológico Minero Argentino. Boletín 290, 92 p. Buenos Aires.

ISSN 0328–2333 Es propiedad del SEGEMAR • Prohibida su reproducción CONTENIDO RESUMEN ...... 1 ABSTRACT ...... 2 1. INTRODUCCIÓN ...... 3 Ubicación de la hoja y área que abarca ...... 3 Naturaleza del trabajo ...... 4 Investigaciones anteriores ...... 4

2. ESTRATIGRAFÍA ...... 5 Relaciones generales ...... 5 2.1. Paleozoico ...... 5 2.1.1. Ordovícico - Silúrico ...... 5 Formación La Horqueta ...... 5 Formación Las Lagunitas...... 7 2.1.2. Carbonífero ...... 9 Tonalita Carrizalito ...... 9 2.1.3. Carbonífero - Pérmico inferior ...... 10 Formación El Imperial ...... 10 2.2. Paleozoico - Mesozoico ...... 11 2.2.1. Pérmico - Triásico ...... 11 Formación Choiyoi ...... 11 2.3. Mesozoico ...... 15 2.3.1. Triásico - Jurásico ...... 15 Formación Arroyo Malo ...... 15 2.3.2. Jurásico ...... 16 Grupo Cuyo ...... 16 Formación El Freno...... 17 Formación Puesto Araya ...... 18 Formación El Codo ...... 19 Fomación Tábanos ...... 21 Grupo Lotena ...... 21 Formación Lotena y Formación La Manga ...... 21 Formación Auquilco (Yeso Principal) ...... 22 2.3.3. Jurásico superior - Cretácico ...... 23 Grupo Mendoza ...... 23 Formación Río Damas ...... 24 Formación Tordillo ...... 25 Formación Vaca Muerta ...... 26 Formación Chachao y Formación Agrio ...... 28 Formación Vaca Muerta, Formación Chachao y Formación Agrio ...... 30 2.3.4. Cretácico inferior - superior ...... 30 Grupo Rayoso ...... 30 2.3.5. Cretácico superior ...... 32 Grupo Neuquén ...... 32 Formación Saldeño...... 33 2.4. Mesozoico - Cenozoico ...... 33 2.4.1. Cretácico superior - paleógeno ...... 33 Grupo Malargüe ...... 33 2.5. Cenozoico ...... 34 2.5.1. Paleógeno ...... 34 2.5.1.1. Oligoceno ...... 34 Formación Molle ...... 34 2.5.2. Paleógeno - Neógeno ...... 35 2.5.2.1. Oligoceno superior- Mioceno inferior ...... 35 Formación Palaoco ...... 35 2.5.3. Neógeno ...... 37 2.5.3.1. Mioceno medio ...... 37 Formación Papal ...... 37 Formación Agua de la Piedra ...... 39 2.5.3.2. Mioceno medio - superior ...... 41 Formación Huincán ...... 41 2.5.3.3. Mioceno superior ...... 42 Formación Loma Fiera...... 42 2.5.3.4. Plioceno ...... 43 Formación Tristeza...... 43 Formación Agua de la Piedra, Formación Loma Fiera y Formación Tristeza...... 44 2.5.4. Neógeno - Cuaternario ...... 45 2.5.4.1. Plioceno-Pleistoceno inferior...... 45 Formación Coyocho ...... 45 2.5.5. Cuaternario ...... 47 2.5.5.1. Pleistoceno inferior...... 47 Formación Los Mesones...... 47 Asociación Volcánica Paleopleistocena ...... 48 Formación La Invernada...... 49 Asociación Piroclástica Pumícea ...... 50 2.5.5.2. Pleistoceno superior ...... 51 Asociación Volcánica Neopleistocena ...... 51 Formación Las Tunas...... 54 Depósitos glaciales...... 55 2.5.5.3. Holoceno ...... 56 Formación El Zampal ...... 56 Asociación Volcánica Postglacial...... 56 Depósitos aluviales, coluviales y de remoción en masa ...... 58

3. ESTRUCTURA ...... 58 3.1. Evolución estructural ...... 58 3.2. Descripción de las estructuras ...... 59 3.2.1. Faja plegada y corrida de Malargüe (Kozlowski et al., 1993) ...... 59 3.2.2. Faja plegada y corrida del Aconcagua (Ramos, 1988b; Cegarra, 1994) ...... 60 3.2.3. Bloque de la Cordillera Frontal ...... 62 3.2.4. Sector pedemontano ...... 62 3.3. Neotectónica ...... 62 3.3.1. Antecedentes ...... 62 3.3.2. Sismicidad ...... 63 3.3.3. Descripción de las estructuras cuaternarias...... 63 3.3.4. Consideraciones cronológicas ...... 66

4. GEOMORFOLOGÍA ...... 67 4.1. Zona montañosa ...... 67 4.1.1. Relieve de faja plegada y corrida predominantemente modelado por erosión glacial y formas de acumulación asociadas ...... 67 4.1.2. Relieve serrano predominantemente modelado por procesos fluviales ...... 67 4.1.3. Aparatos volcánicos modificados por procesos de remoción en masa y acción glacial... 67 4.1.4. Remoción en masa ...... 69 4.1.5. Paisaje kárstico ...... 71 4.1.6. Planicies estructurales lávicas ...... 71 4.1.7. Glaciares actuales ...... 71 4.2. Zona pedemontana ...... 71 4.2.1. Planicies aluviales pedemontanas ...... 71 4.2.2. Huayquerías ...... 71 4.2.3. Paisaje volcánico ...... 71

5. HISTORIA GEOLÓGICA ...... 71

6. RECURSOS MINERALES ...... 75 Depósitos de minerales metalíferos ...... 75 Depósitos de minerales industriales ...... 79 Combustibles sólidos ...... 83

7. SITIOS DE INTERÉS GEOLÓGICO ...... 84

BIBLIOGRAFÍA ...... 85

Volcán Maipo 1

RESUMEN tos transgresivos y regresivos. Intercalaciones de rocas volcánicas en el Kimmeridgiano y el La Hoja 3569-I, VOLCÁN MAIPO está ubicada en Maastrichtiano testimonian la actividad de un arco el sector centro-occidental de la provincia de volcánico occidental. La vasta transgresión atlánti- Mendoza. Se halla enmarcada entre los 34° 00´ y ca en el Maastrichtiano y el aporte de abundante 35° 00´de latitud sur y en sentido meridiano entre los material piroclástico implican un importante cambio 69°00´de longitud oeste y la traza limítrofe con Chi- paleogeográfico, probablemente vinculado al desa- le. Cubre una superficie aproximada de 10.900 km2 rrollo de un cinturón orogénico incipiente. Durante y abarca parte de la Cordillera Principal y de la Cor- el Cenozoico tiene lugar el desarrollo del Ciclo dillera Frontal y el dominio extraandino. Desde el Ándico, caracterizado por la estructuración de los punto de vista geomorfológico se distinguen dos uni- terrenos mesozoicos, la acumulación de depósitos dades. Una de ellas comprende la parte occidental y sinorogénicos y el emplazamiento de magmas corresponde a un paisaje montañoso con predomi- calcoalcalinos vinculados a las sucesivas fases de nio de geoformas derivadas de la acción glaciaria. deformación orogénica. A partir del Mioceno el La otra unidad, en la zona pedemontana, está cons- marco geodinámico regional determinó condiciones tituida por un paisaje modelado principalmente por de subducción de tipo andino con la instalación de la acción fluvial, donde se destacan extensos niveles un arco volcánico que experimentó migración y ex- de bajadas y huayquerías. El registro estratigráfico pansión durante los últimos 20 millones de años. Los abarca el lapso Paleozoico inferior-Cenozoico. Los esfuerzos compresivos provocaron la estructuración terrenos más antiguos son asignados tentativamente de la Cordillera Principal como una faja plegada y al Ordovícico-Silúrico y corresponden a corrida y el bloque de la Cordillera Frontal y el relle- leptometamorfitas. El Carbonífero se halla represen- no sinorogénico en cuencas de antepaís con la con- tado por intrusiones tonalíticas y el Permotriásico por siguiente migración hacia el este del frente orogénico. un voluminoso complejo magmático de composición Durante el Cuaternario se suceden episodios de se- andesítica y riolítica conocido como Formación dimentación pedemontana vinculados a discretos Choiyoi. Todo este conjunto de unidades aflora en el ascensos neotectónicos del frente montañoso. En el bloque de la Cordillera Frontal. Durante el Triásico área pedemontana tiene lugar la reactivación de an- se produce un cese gradual de la subducción y la tiguas zonas de fractura de orientación oblicua al instalación de un régimen de extensión regional. La frente montañoso y el derrame de basaltos de era mesozoica está caracterizada por el relleno retroarco. El principal exponente del arco volcánico sedimentario de una cuenca de retroarco, conocida actual es el volcán Maipo, emplazado en la caldera como Cuenca Neuquina en su porción surmendocina, Diamante. Los depósitos de origen aluvial, coluvial asociada a un arco volcánico occidental de tipo in- y de remoción en masa completan la columna sular. Se trata de la columna más completa en toda estratigráfica. Los recursos minerales más impor- la cuenca, ya que abarca desde el Triásico superior tantes, desde el punto de vista económico, son los hasta el Cretácico superior. Durante el Jurásico in- hidrocarburos líquidos y gaseosos de los campos ferior el sistema de rift consistía en numerosos petrolíferos Vega Grande y El Sosneado. Dentro de depocentros desconectados, mientras que a partir los depósitos metalíferos merecen destacarse los ya- del Sinemuriano, la subsidencia en la cuenca estuvo cimientos de Hierro Indio y Las Choicas. Entre los controlada por un efecto térmico, dando lugar a la minerales industriales son de particular interés eco- etapa de sag. Durante la mayor parte del Mesozoico nómico los depósitos de granulado volcánico, tobas y la cuenca estuvo sometida a las oscilaciones piedra pómez. Como recursos potenciales, previamen- eustáticas globales, cuyo carácter cíclico es el prin- te explotados, cabe mencionar algunas yacencias de cipal responsable de la sucesión alternada de even- carbones y asfaltitas, azufre y baritina. 2 Hoja Geológica 3569-I

ABSTRACT mesozoic record, from to Late , is represented. During the earliest the rift The geological sheet 3569-I, VOLCÁN MAIPO is system was structurally controlled and many isolated located in western Mendoza, between 34° and 35° small basins were generated, while since Sinemurian south latitude and 69° 00´ west and the international times the thermally controlled subsidence led to the border. It covers an area of 18.000 km2 approximately onset of the sag stage. During mezosoic times the and includes areas in Cordillera Principal, Cordillera basin was affected by global eustatic changes. At Frontal and in the extraandean domain. Two least two volcanic units of Kimmeridgian and geomorphologic units may be distinguished: an occi- Maastrichtian ages are interlayered among the dental unit characterized by steep mountain relief, sedimentary deposits, suggesting the activity of a dominated by glacial features, and an oriental unit of western volcanic arc. During the Andean cycle the low relief generated by fluvial processes, with major event was the uplifting of Cordillera Principal widespread badlands and plains. The stratigraphic as a Fold and Thrust Belt and Cordillera Frontal. record spans from the Lower Paleozoic to the Related events, such as the deposition of Cenozoic. The oldest terrains are tentatively assigned synorogenic sediments in foreland basins and the to - times. During the emplacement of calcalkaline magmas, took place tonalitic intrusions took place and a during tertiary times. The Late Cenozoic is large volume magmatic complex of andesitic to represented by fluvial, glacial and mass-wasting rhyolitic composition, known as Choiyoi Formation deposits. Recurrent volcanic activity between occurred in the Permotriassic. All of these units pleistocene and historic times is recorded in the outcrop in the Cordillera Frontal. During the Triassic andean and extraandean domains. The potentially the convergence velocity decreased gradually and a active Maipo volcano is the main hazardous widespread and long-lived extensional regime eruptive center. The most important mineral developped. The mesozoic sedimentary record resources are: oil and gas (Vega Grande and El corresponds to the Neuquen Basin infill in south Sosneado), metalliferous deposits (Hierro Indio and Mendoza, associated to an insular type volcanic arc. Las Choicas), and non metalliferous deposits as It is the best section in the whole basin since all the well. Volcán Maipo 3

1. INTRODUCCIÓN jón Negro (3.896 m) y los pasos de las Leñas (4.130 m) y de las Damas (3.050 m). En el ámbito UBICACIÓN DE LA HOJA Y ÁREA QUE ABARCA pedemontano, con una altura media de 1.500 m so- bre el nivel del mar, se destaca el cerro Volcán Dia- La Hoja Geológica 3569-I, Volcán Maipo, se en- mante, el cual se eleva a 2.354 metros. cuentra ubicada en el sector centro-occidental de la La red de drenaje se halla integrada por dos co- provincia de Mendoza. Se halla enmarcada entre los lectores principales: el río Diamante y el río Atuel, 34° 00´ y 35° 00´ de latitud sur y en sentido meridia- los cuales atraviesan el cordón montañoso con orien- no entre los 69° de longitud oeste y la traza limítrofe tación noroeste-sudeste y surcan la llanura con (Fig. 1). pedemontana recibiendo el aporte de numerosos tri- Abarca una superficie de 10.900 km2 aproxima- butarios, muchos de los cuales son de carácter in- damente, e incluye dos ambientes geomorfológicos termitente. En el sector norte de la Hoja, los arroyos bien definidos con marcadas diferencias de relieve: del Rosario, Yaucha y Papagayos constituyen un sis- la llanura pedemontana al este y el macizo tema hidrográfico independiente. cordillerano al oeste. El rasgo geográfico más cons- En el área abarcada por la Hoja no existen nú- picuo es el volcán Maipo, el cual le da nombre a la cleos poblacionales de importancia. La escasa po- Hoja. De acuerdo al glosario etimológico de Armengol blación estable se reparte en estancias en la zona de (1918) el nombre proviene de maipun, que en idio- llanura y en las áreas aledañas a la cuchilla de la ma araucano significa “romper o arar la tierra”. Tristeza. El sector montañoso es empleado durante Constituye un centro eruptivo potencialmente activo la época estival como campo de veranada por los emplazado en la Cordillera Principal. Alcanza una criadores de chivos. La cría de ganado caprino es la altura de 5.323 m sobre el nivel del mar, determinan- actividad productiva tradicional de la zona. La in- do la divisoria de aguas junto con otros cerros im- dustria petrolera tiene su importancia en la zona de portantes tales como Picos Bayos (4.992 m) y Mo- Vega Grande, cuchilla de la Tristeza y cerro Los

-70° 30' 00" -69° 00' 00" -67° 30' 00" -66° 00' 00" -33° 00' 00” -33° 00' 00” San Martín Río de las T Río Tunuyán SAN LUIS 40 Río Desaguadero unas Emb. El Carrizal La Paz

Tunuyán unuyán Río T San Carlos CHILE -34° 00' 00" -34° 00' 00" Vn. Maipo 143

146 Río Diamante Emb. Agua San Rafael Río Diamante del Toro

Gral. Alvear 40 188 -35° 00' 00" -35° 00' 00" El Sosneado Emb. El Nihuil Río Atuel 143

Malargüe Lag. R ío Llancanelo A tu e l -36° 00' 00" -36° 00' 00"

-70° 30' 00" -69° 00' 00" -67° 30' 00" -66° 00' 00" 66° 00' 00"

0 50 100 km

Figura 1. Mapa de ubicación de la Hoja Volcán Maipo. 4 Hoja Geológica 3569-I

Buitres, con varios yacimientos productivos. La in- b) Tareas en campaña dustria minera se destaca por la explotación de can- teras de pómez en el sector nororiental de la Hoja y Las labores de campo totalizaron 70 días repar- por la exploración de diversos prospectos metalíferos tidos de la siguiente manera: 30 días entre noviem- en el área cordillerana. Por último, cabe destacar el bre y diciembre de 1997, 30 días entre enero y fe- potencial turístico de la zona, en particular el valle brero de 1998 y 10 días en enero de 1999. El conjun- del río Atuel, por su atractivo paisaje, la presencia to de trabajos consistió en: de fuentes termales, conocidas desde principios de siglo como Baños termales del Sosneado y la Re- - Chequeo de campo del mapa geológico preli- serva Natural Laguna del Diamante. Esta área pro- minar. Se caracterizaron las unidades litoestratigrá- tegida provincial convoca anualmente un número cre- ficas que integran la columna local, atendiendo a su ciente de visitantes, atraídos por la belleza natural distribución areal, relaciones estratigráficas infra y de este reducto andino, la riqueza ictícola de la lagu- suprayacentes, estructura, espesores y geometría y na, la población de guanacos en estado silvestre y la todos los rasgos particulares de las unidades imponente existencia del volcán Maipo, desafío de sedimentarias y magmáticas. andinistas y amantes de la naturaleza en estado prís- - Confección de perfiles estratigráficos y estruc- tino. turales de detalle. - Toma de muestras de roca no sistemático con NATURALEZA DEL TRABAJO el fin de efectuar estudios petrográficos, químicos y radimétricos. El presente trabajo consiste en la descripción - Toma de fotografías. geológica de la Hoja 3569-I, Volcán Maipo, a escala 1:250.000, la cual se basa en la integración de la c) Trabajos en gabinete post campaña información disponible publicada e inédita, con el agregado de resultados producidos por los autores - Descripción petrográfica de 100 cortes delga- durante la confección de la misma. Ha sido realiza- dos. da de acuerdo con las normas vigentes establecidas - Selección de muestras para la realización de por el Programa Nacional de Cartas Geológicas de análisis isotópicos (K/Ar) con fines radimétricos en la República Argentina. laboratorios del INGEIS. Las tareas de campaña tuvieron como objetivo - Integración de la información generada en cam- recorrer la mayor parte de la superficie abarcada paña con aquella preexistente. por la Hoja, tendiendo a compensar el déficit en la - Confección del mapa geológico final sobre base información preexistente y a definir algunos proble- topográfica a escala 1:250.000 llevado a cabo en el mas de índole geológica. No obstante, debido a la sector de Topografía del SEGEMAR. inaccesibilidad de ciertas áreas, en particular las fron- - Realización de cortes estructurales. terizas, y al requerimiento de ceñirse a un presu- - Confección de columnas estratigráficas. puesto y un cronograma preestablecidos, el chequeo - Redacción de la memoria final de acuerdo con de campo dista mucho de ser completo. las normas establecidas.

El trabajo fue sistematizado en tres etapas: INVESTIGACIONES ANTERIORES

a) Trabajos en gabinete pre-campaña El análisis de la información preexistente, publi- cada e inédita, permite reconocer un grado de co- - Recopilación de antecedentes bibliográficos bertura y un nivel de detalle muy desparejos. Esto publicados e inéditos. se debe a que el relevamiento a escala 1:200.000 del - Confección del mapa geológico sobre imagen Programa Nacional de Cartas Geológicas de la Re- satelital Landsat a escala 1:250.000, complementa- pública Argentina no está completo y a que determi- da con fotointerpretación sobre fotogramas a escala nadas áreas poseen interés petrolero, hecho que ha 1:50.000, mosaicos fotográficos e imágenes satelitales suscitado la implementación de estudios geológicos parciales ampliadas a escala 1:100.000. de gran detalle por parte de YPF. En consecuencia, - Redacción de la memoria preliminar de acuer- la zona entre los ríos Diamante y Atuel, al este de la do con las normas establecidas. línea determinada por los cerros Bayo, Guanaquero, Volcán Maipo 5

Sosneado y Risco Plateado y la zona de la cuchilla su reducida extensión areal, los afloramientos de edad de la Tristeza son aquellas que tienen una mayor paleozoica pertenecientes a esta provincia geológica densidad de información, mientras que el resto del son tratados muy brevemente. área abarcada por la Hoja cuenta, en el mejor de los El registro estratigráfico en la Hoja 3569-I, Vol- casos, con antecedentes de carácter regional. La cán Maipo (cuadro 1) abarca el lapso Paleozoico in- franja limítrofe constituye el sector más desprovisto ferior - Cenozoico. El basamento precámbrico no se de información previa. encontró en la comarca como en el ámbito de la Hoja Los antecedentes de relevamientos geológicos 3369-III, Cerro , inmediatamente al norte más importantes a distinta escala son los siguientes: (Ramos et al., 1999). Los terrenos más antiguos son Burckhardt (1900), Gerth (1925, 1931), Groeber asignados tentativamente al Ordovícico-Silúrico y se (1929, 1947), Yrigoyen y Martínez Cal (1953), distribuyen a lo largo del flanco oriental de la Cordille- Buenanueva (1956), Dessanti (1956, 1959), Polanski ra Frontal. El Carbonífero se halla representado por (1963, 1964 a y b), Volkheimer (1978), Yrigoyen intrusiones tonalíticas y el permotriásico por un volu- (1979), Caminos (1979) y Kozlowski y Baldi (1983). minoso complejo magmático andesítico-riolítico que Entre los trabajos que profundizan el conocimien- constituye la unidad dominante a lo largo y a lo ancho to de la estratigrafía y volcanismo paleozoicos en la de toda la Cordillera Frontal. El registro sedimentario comarca cabe citar a Dessanti (1945), Dessanti y mesozoico corresponde al relleno de la Cuenca Caminos (1967), González Díaz (1981), Llambías et Neuquina en su porción surmendocina. Es la colum- al. (1991), Caminos (1993), Llambías et al. (1993) y na más completa en toda la cuenca, ya que abarca Rubinstein (1997). Numerosas son las contribucio- desde el Triásico superior hasta el Cretácico superior. nes a la estratigrafía y bioestratigrafía mesozoicas, Intercalaciones volcánicas han sido reconocidas en entre las principales se destacan: Lahee (1927), varias unidades sedimentarias. El Terciario está inte- Weaver (1931), Herbst (1964), Leanza (1945), grado por unidades sedimentarias de ambiente conti- Stipanicic (1969), Stipanicic y Bonetti (1970), nental y unidades volcánicas y subvolcánicas cuya Westermann y Riccardi (1972), Volkheimer y Sa- edad es al momento incierta. El Cuaternario está ca- las (1975), Uliana et al. (1977), Legarreta et al. racterizado por depósitos de origen fluvial, glacial y (1981, 1993), Legarreta y Kozlowski (1984), de remoción en masa, con registro de actividad vol- Riccardi et al. (1988), Legarreta y Uliana (1991) y cánica recurrente desde el Pleistoceno inferior hasta Gulisano y Gutiérrez Pleimling (1994). Los princi- la actualidad. pales trabajos con énfasis en la estructura y Esta columna estratigráfica, compuesta por ro- tectónica de la zona son de Kozlowski (1984), cas sedimentarias y magmáticas, ha sido deformada Kozlowski et al. (1990) y Manceda y Figueroa sucesivamente por varios eventos orogénicos, entre (1995). La estratigrafía de los depósitos los cuales se destaca la Orogenia Ándica como prin- sinorogénicos terciarios fue abordada por Herrero cipal responsable de la estructuración de la faja ple- Ducloux e Yrigoyen (1952), Combina et al. (1993, gada y corrida de la Cordillera Principal y del ascen- 1994, 1997) y Pérez et al. (1997). El volcanismo so de la Cordillera Frontal durante el Cenozoico. cenozoico cuenta con los siguientes aportes: Kittl (1944), Stern et al. (1984), Harrington (1989), 2.1. PALEOZOICO Baldauf et al. (1992), Guerstein (1993), Ramos y Nullo (1993), Nullo et al. (1996) y Sruoga et al. 2.1.1. ORDOVÍCICO-SILÚRICO (1998a, 1998b). Formación La Horqueta (1) 2. ESTRATIGRAFÍA Esquistos cuarzo-micáceos y filitas

RELACIONES GENERALES Antecedentes

La Hoja 3569-I, Volcán Maipo, abarca parte de Dessanti (1956) acuñó el término de “Serie de las provincias geológicas de Cordillera Principal y la Horqueta” para las unidades pre-carboníferas Cordillera Frontal y la llanura pedemontana o desarrolladas ampliamente en el ámbito del Bloque extraandina aledaña. En el sector oriental, a la altu- de San Rafael. Criado Roque e Ibáñez (1979) rea- ra del curso inferior del río Diamante, incluye un lizaron una revisión regional de la formación. Más pequeño sector del Bloque de San Rafael. Debido a tarde, González Díaz (1981) propuso el desdobla- 6 Hoja Geológica 3569-I

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Cuadro 1. Cuadro estratigráfico de la Hoja Volcán Maipo. Volcán Maipo 7

miento de la “Serie de la Horqueta” en dos unida- Edad des: una más antigua, denominada Formación La Horqueta, integrada por metamorfitas de bajo gra- Polanski (1964b), ante la ausencia de fósiles, do, con intrusiones gábricas asociadas y otra más sugirió una edad proterozoica aunque consideró que moderna la Formación Río Seco de los Castaños, la diferencia en el grado metamórfico podría obe- compuesta por sedimentitas portadoras de corales decer a la presencia de dos unidades: una de edad devónica. La relación entre ambas unida- metamorfizada, de edad proterozoica, y otra no des ha sido motivo de controversias ya que fue con- metamorfizada, de edad paleozoica inferior. siderada discordante por algunos autores (por ejem- Dessanti (1956) identificó un basamento integrado plo González Díaz, 1981) y transicional por otros por rocas con variable grado metamórfico de la Serie (Rolleri y Criado Roque, 1970; Criado Roque, 1972; de la Horqueta y cuerpos intrusivos gábricos y Di Persia, 1972). granodioríticos, asignándole una edad precámbrica a paleozoica inferior. A partir de los hallazgos Distribución areal paleontológicos realizados por Marquat y Menéndez (1985, en Caminos 1993) y Rubinstein Reducidos asomos de la Fomación La Horqueta (1997), se le otorga una edad probable ordovícico- aparecen en las inmediaciones de la represa Agua silúrica. del Toro y continúan un par de kilómetros aguas abajo por el río Diamante. Formación Las Lagunitas (2) Lutitas, areniscas, grauvacas con bajo grado meta- Litología mórfico

En la zona de la represa Agua del Toro afloran Antecedentes esquistos cuarzo-micáceos y filitas de color gris ver- doso intensamente deformados. La primera mención acerca de rocas asimilables a esta unidad se remonta a Groeber (1947), quien Paleontología describió esquistos con variable grado metamórfi- co en el área ubicada al este de la pampa de los Di Persia (1972) dio a conocer el primer ha- Avestruces. Más tarde, Volkheimer (1978) esta- llazgo de fósiles dentro de la Serie de La Horque- bleció la denominación de Formación Las Lagunitas ta. Se trata de tetracorales del género para un conjunto metamórfico de bajo grado Pleurodictyum sp.. Marquat y Menéndez (1985, aflorante en el extremo suroriental de la Cordillera en Caminos 1993) encontraron graptolitos Frontal. caradocianos en las proximidades del cerro Bola, al oeste de la ciudad de San Rafael. Rubinstein Distribución areal (1997), por su parte, comunicó el primer registro de palinomorfos de la Formación La Horqueta en La localidad tipo de la Formación Las Lagunitas la zona de El Nihuil. se encuentra en el curso inferior del arroyo homóni- mo, extendiéndose a modo de faja meridiana a lo Ambiente largo de 58 km, con un ancho máximo de 10 km, entre el cañadón del río Diamante hasta las inme- Polanski (1964b) le asignó a los metasedimentos diaciones del arroyo Yaucha. de la Serie de La Horqueta un ambiente netamente marino, de caracter anaeróbico. Litología

Relaciones estratigráficas El conjunto leptometamórfico se halla integrado por una alternancia de pizarras sericíticas, limolitas, La Formación La Horqueta infrayace en discor- areniscas cuarcíticas, grauvacas, esquistos cuarzo- dancia a las sedimentitas carboníferas y en la zona biotíticos y en menor proporción sabulitas y conglo- de la represa de Agua del Toro se presenta cubierta merados finos. Presenta un color gris verdoso y pro- por ignimbritas pleistocenas y coladas basálticas pro- fusa inyección de venas de cuarzo lechoso como venientes del cerro Volcán Diamante. rasgo característico. 8 Hoja Geológica 3569-I

En el arroyo Las Lagunitas predominan las conjunto se halla afectado por inyección de venillas cuarcitas y areniscas cuarcíferas con estratifica- de cuarzo con carácter penetrativo, con disposi- ción entrecruzada poco clara y con fuerte impreg- ción concordante y discordante con respecto a la nación de óxidos de hierro (Yrigoyen y Martínez esquistosidad. La secuencia se presenta deforma- Cal, 1953). En la zona de contacto con los cuer- da predominantemente en pliegues isoclinales de pos intrusivos de edad carbonífera se desarrolla tipo paralelo e integrando estructuras más com- una aureola de esquistos moteados y areniscas plejas. micáceas con porfiroblastos de andalucita. Sin base expuesta, alcanza un espesor de 2.000 m Ambiente aproximadamente, aunque cabe señalar que se trata de un dato indicativo ya que la unidad se Sobre la base de sus características halla afectada por intenso plegamiento. En el arro- sedimentológicas, Volkheimer (1978) interpretó yo Cruz de Piedra, Groeber (1947) mencionó una el origen de esta formación como vinculado a un alternancia de esquistos arcillosos y areniscas ambiente de flysch. cuarcíticas intensamente plegados y afectados por tres sistemas de diaclasas: S36°E/30°NO, S40°O/ Relaciones estratigráficas 70°SE y S36°E/70°NE. A lo largo del arroyo Pa- pagayos, en el ambiente de la Cordillera Frontal, Con respecto a la relación que guarda con en- aflora una secuencia de tipo turbidítica con bajo tidades formacionales más jóvenes, la Formación grado metamórfico, integrada por grauvacas de Las Lagunitas se comporta como roca de caja de grano fino de color gris verdoso y lutitas pizarreñas cuerpos intrusivos de edad carbonífera (Tonalita de color gris plomo (Fig. 2). En algunos sectores Carrizalito) y permotriásica (Facies plutónico- se preservan ondulitas con diseño paralelo y hipabisal de la Formación Choiyoi) e infrayace a entrecruzado en los planos de estratificación. Res- las volcanitas de edad equivalente y a las tos de materia orgánica carbonizada y huecos de sedimentitas neocomianas (Formación Vaca pirita oxidada indican un ambiente reductor. El Muerta).

Figura 2. Secuencia turbidítica plegada de la Formación Las Lagunitas en el arroyo Papagayos. Volcán Maipo 9

Edad y correlaciones bito de la Cordillera Frontal. Posteriormente, Volkheimer (1978) le otorgó a la unidad magmática Groeber (1947) correlacionó a las formaciones categoría formacional, denominándola Tonalita Horqueta y Las Lagunitas con las unidades de alto Carrizalito. metamorfismo regional que afloran en el cordón del Portillo y les otorgó una edad precámbrica. La asig- Distribución areal nación de la Formación Las Lagunitas al Devónico por Volkheimer (1978) está acotada por la edad de Este stock tonalítico abarca una superficie de la Tonalita Carrizalito (334 ± 16,5 Ma, en Dessanti y 110 km2 aproximadamente en el extremo austral Caminos, 1967) y por su correlación con la “Serie de la Cordillera Frontal. El cuerpo intrusivo se halla de La Horqueta” (Dessanti, 1956), aflorante en el limitado al noroeste por el arroyo de la Invernada ámbito de la sierra Pintada y portadora de Colorada y hacia el oeste por el arroyo de los tetracorales devónicos (Di Persia, 1972). Al com- Buitreros inferior. Hacia el sudoeste, el plutón parar las características de la Formación Las aflora en la margen izquierda del cañón del río Lagunitas con las de la “Serie de La Horqueta” en Diamante. El límite oriental, de tipo curvilíneo, se el Bloque de San Rafael (Polanski, 1964b; Dessanti, extiende a lo largo 12,5 km con orientación nor- 1956), surgen rasgos comunes que permiten consi- te-sur. derar equivalentes a ambas formaciones. En efecto, litológicamente ambas unidades abarcan grauvacas, Litología lutitas y cuarcitas normales y metasedimentitas (filitas y esquistos sericíticos y cuarzo-sericíticos) en El cuerpo plutónico incluye términos facies de esquistos verdes (Polanski, 1964b). La in- granodioríticos y tonalíticos, ricos en inclusiones yección de venillas y guías de cuarzo lechoso repre- microgranulares máficas. Petrográficamente, la senta un rasgo típico y aparentemente único para tonalita biotítica es de color gris claro, fresca y ho- estas unidades, ya que no afecta a las sedimentitas mogénea, y está compuesta por oligo-andesina carboníferas, y su origen estaría vinculado, según (50%), cuarzo (25%), biotita (23%) y microclino Polanski (1964b), con fluidos hidrotermales prove- intersticial (Caminos, 1979). nientes de intrusivos graníticos sin y post tectónicos. Desde el punto de vista estructural, ambas unidades Relaciones estratigráficas se hallan deformadas por plegamiento y fallamiento, con características similares. El plutón intruye a los esquistos de la Formación En función del estado actual del conocimiento Las Lagunitas, subyace discordantemente a las y debido a que los análisis palinológicos de mues- volcanitas de la Formación Choiyoi, y está intruido tras provenientes del arroyo Papagayos resultaron por cuerpos plutónicos de la misma unidad, asignada infructuosos debido al estado altamente carboniza- al Permotriásico. do de la materia orgánica, se arriba a la conclusión de que no hay elementos probatorios acerca de la Edad y correlaciones edad de la Formación Las Lagunitas. En conse- cuencia, por correlación con la Formación La Hor- Muestras provenientes del cordón del queta, se la asigna tentativamente al Ordovícico- Carrizalito arrojaron una edad K/Ar sobre biotita Silúrico. de 334±16,5 Ma (Dessanti y Caminos, 1967), edad que actualizada por la modificación de la cons- 2.1.2. CARBONÍFERO tante de desintegración (Linares, 1977) es de 341±17 Ma. Caminos et al. (1979) comunicaron Tonalita Carrizalito (3) una edad K/Ar de 350±15 Ma para diques Tonalita biotítica graníticos aplíticos que afloran en reducidos aso- mos en la pampa de los Avestruces. Llambías et Antecedentes al. (1993) incluyeron a la Tonalita Carrizalito en el Carbonífero, dentro del evento magmático La datación de una tonalita del cordón del gondwánico, el cual se extiende entre el Carrizalito permitió a Dessanti y Caminos (1967) Carbonífero y el Triásico. Las unidades plutónicas definir una fase magmática eocarbónica para el ám- de este ciclo se hallan escasamente representa- 10 Hoja Geológica 3569-I

das en el ámbito de la Cordillera Frontal. Otro reales debido al fallamiento que afecta a esta uni- plutón granodiorítico perteneciente a este ciclo es dad. En el ámbito de la Hoja La Tosca, Polanski el del cerro Punta Blanca, en el cordón del Porti- (1964b) le asignó un espesor de 1.200 m a 1.600 llo, fuera del ámbito de la Hoja, con una edad K/ metros. Ar de 337±15 Ma (Caminos et al., 1979). Paleontología 2.1.3. CARBONÍFERO – PÉRMICO INFE- RIOR En el Grupo Inferior, Dessanti (1956) descri- bió niveles portadores de Orbiculoidea sp., Formación El Imperial (4) Lingula sp., Pleurotomaria sp., Cyrtospirifer Conglomerados, areniscas micáceas, lutitas y nive- leoncitensis Harr., Syryngothyris keideli Harr., les carboníferos Spirifer cf. supramosquensis Ischern. y otros braquiópodos, gastrópodos y bivalvos. Además, Antecedentes detalló niveles con restos vegetales carbonizados. En el Grupo Superior, Césari y García (1989, Esta unidad fue definida por Dessanti (1945, en Azcuy, 1993) reseñaron la presencia de 1956) como Serie del Imperial para referirse a los Botrychiopsis weisiana (Kurtz) Archangelsky, estratos aflorantes en el arroyo El Imperial, cerca- Diplothmema bodenbenderi (Kurtz) Césari, nos a su desembocadura en el río Diamante y la Fedekurtzia argentina (Kurtz) Archangelsky, dividió en Grupo Inferior y Superior. Posteriormen- Cordaites riojanus Archangelsky y Leguizamón te, Giudici (1971) confirmó la existencia de dos y Paracalamites australis (Rigby). García (1991, miembros litológicamente diferentes y Espejo (1990) en Azcuy, 1993) agregó Nothorhacopteris reconoció 10 litofacies. Espejo et al. (1991) propu- argentinica (Geinitz) Archangelsky. sieron una reconstrucción paleogeográfica para la unidad. Ambiente

Distribución areal El ambiente de depositación corresponde a mares someros con frecuentes oscilaciones en su Esta unidad se halla ampliamente representada nivel de base. Espejo et al. (1991) reconocieron en el Bloque de San Rafael. En la Hoja se recono- tres estadíos en la evolución de la cuenca: 1) re- cen afloramientos correspondientes a esta forma- lleno transgresivo inicial y sedimentación ción únicamente en un sector, al este de la represa glacimarina, 2) dominio fluvial-deltaico-marino Agua del Toro. somero y 3) continentalización y reversión de la pendiente regional. Litología Relaciones estratigráficas Dessanti (1956) dividió a esta serie en dos gru- pos litológicos, uno inferior y otro superior, con Las sedimentitas de la Formación El Imperial se pasaje transicional. El Grupo Inferior está inte- apoyan en discordancia angular sobre la Formación grado por conglomerados basales con clastos de La Horqueta. Polanski (1964b) describió a la super- basamento, areniscas estratificadas, areniscas ficie de contacto entre el Proterozoico y el micáceas y arcillosas y lutitas de color gris verdo- Carbonífero como buzando fuertemente hacia el so con restos de vegetales, bivalvos y niveles de naciente en el sector norte del Bloque de San Ra- carbón. Este conjunto se halla intruido por cuer- fael. La serie se halla cubierta en discordancia por pos de pórfido dacítico. El Grupo Superior está la Brecha Verde, de probable edad pérmica constituido por areniscas de color castaño rojizo (Dessanti, 1956). con estratificación entrecruzada, niveles de lutitas intercalados y conglomerados lenticulares. En los Edad y correlaciones bancos de arenisca se menciona el hallazgo de tallos vegetales fósiles en posición vertical. El es- Criado Roque e Ibáñez (1979) destacaron la pesor estimado por Dessanti (1956) es de 800 m presencia de Syryngothyris como indicador de aproximadamente, aunque no se trata de valores edad carbonífera para toda la unidad. Los Volcán Maipo 11

palinomorfos reconocidos en el Grupo Superior Distribución areal permitieron establecer palinozonas para los dife- rentes estadíos evolutivos, extendiendo la edad de En el área abarcada por la Hoja, la Formación la formación hasta el Pérmico inferior (Azcuy, Choiyoi aflora a lo largo de la Cordillera Frontal. En 1993). el extremo sur de esta provincia geológica, la unidad se presenta en facies intrusiva en el cañadón del río 2.2. PALEOZOICO-MESOZOICO Diamante y en facies efusiva a lo largo del arroyo Moro. También se identifican remanentes de ero- 2.2.1. PÉRMICO-TRIÁSICO sión sobre la vertiente oriental de la Cordillera Fron- tal. Otra zona donde afloran rocas choiyoilitenses es Formación Choiyoi (5) el sector próximo a las nacientes de los arroyos Pa- Andesitas, riolitas, ignimbritas, pórfidos riolíticos y pagayos y Yaucha. Al norte, la Cordillera Frontal dacíticos, granitos biotíticos está compuesta exclusivamente por el complejo vol- cánico - plutónico atribuible a este ciclo magmático. Antecedentes Litología El evento magmático conocido como Choiyoi presenta una amplia distribución en todo el ámbito Dentro de la Formación Choiyoi se discriman cordillerano entre los 22° S, en el norte de Chile y facies volcánicas y plutónico - hipabisales. Esta dis- 40° S en Neuquén y en el Bloque de San Rafael. tinción no es estricta, ya que existe una gradación Ha sido objeto de estudio por numerosos autores continua desde cuerpos intrusivos epizonales, stocks entre los cuales se destacan Avé Lallement (1892), subvolcánicos y términos hipabisales hasta derrames Stappenbeck (1917) y Groeber (1918, 1947), quien lávicos e ignimbríticos de emplazamiento netamente la denominó como Serie Porfirítica Supratriásica y superficial. No obstante, se ha logrado mapear a más tarde como Choiyoilitense. Polanski (1958) ambas independientemente, razón por la cual se las dividió al ciclo magmático en una Asociación Vol- describe en forma separada. cánica Mesovaríscica, una Asociación Volcánica Tardíovaríscica y asociaciones plutónicas equiva- Facies volcánica (5a) lentes. Caminos (1965, 1979) optó por la denomi- Andesitas, riolitas, ignimbritas nación de Asociación Volcánica Varíscica o Ciclo Eruptivo Varíscico y su equivalente plutónico. Volkheimer (1978) describió un conjunto lávico Stipanicic (1965) acuñó la denominación de Gru- - piroclástico compuesto por brechas ígneas po Choiyoi, mientras que Rolleri y Criado Roque basales, coladas andesíticas y riolíticas e (1970) prefirieron utilizar la categoría de forma- intercalaciones ignimbríticas con un espesor esti- ción para la unidad. Otras contribuciones impor- mado de 500 metros. Las mejores exposiciones tantes, en particular para el ámbito de la Cordille- se encuentran a lo largo del arroyo Moro, donde ra Frontal mendocina, son las de González Díaz las coladas andesíticas inclinan aproximadamente (1958), Polanski (1958, 1964b), Dessanti y Cami- 20° al oeste-noroeste. nos (1967), Coira y Koukharsky (1976), En el arroyo Carrizalito, la Formación Choiyoi Volkheimer (1978), Zeil (1981), Cortés (1985), (facies volcánica) se inicia con una brecha basal de Rapalini (1989), Kay et al. (1989), Sruoga y 30 m de espesor con fragmentos provenientes de la Llambías (1992), Poma y Ramos (1994), Gregori Formación Las Lagunitas y matriz riolítica y conti- et al. (1996), Pérez et al. (1997) y Ramos et al. núa con coladas riolíticas e intercalaciones de man- (1999). Volkheimer (1978) propuso las denomina- tos lávicos andesíticos. Esta brecha basal podría ser ciones Asociación Volcánica La Totora y Granito equivalente al Conglomerado del Río Blanco La Estrechura para referirse a la expresión local descripto por Caminos (1965). Algo más al norte, se de la Formación Choiyoi en la zona del río Dia- han reconocido coladas fenoandesíticas de color ro- mante. Llambías et al. (1993) distinguieron, den- jizo. Al microscopio tienen hasta 35% de fenocristales tro del evento magmático gondwánico, el ciclo de plagioclasa (andesina-labradorita) y lamprobolita permotriásico inferior al cual identificaron como como componentes principales y minerales opacos ciclo Choiyoi, integrado por una Asociación Vol- y piroxeno como accesorios, inmersos en una pasta cánica y una Asociación Plutónica. hialopilítica desvitrificada. 12 Hoja Geológica 3569-I

En el arroyo Casa de Piedra afloran mantos En general, para todo el ámbito de la Cordillera ignimbríticos de 15 m de espesor aproximadamente, Frontal se admite (Caminos, 1965, 1979; Coira y densamente soldados y con marcada disyunción Koukharsky, 1976; Cortés, 1985) que la unidad se columnar. Se trata de ignimbritas vítreas con textura halla integrada por dos secciones, una inferior de eutaxítica conspicua, determinada por fiammes de composición basáltica a andesítica, con sendas color negro que no superan 1 cm de largo. En los intercalaciones de depósitos sedimentarios de am- sectores basales desarrollan zonas con biente continental y una sección superior, de natura- pseudofluidalidad. Aguas arriba, en el mismo arro- leza netamente riolítica. Sin embargo, en el área yo, afloran masas de pórfido riolítico de color rojizo. abarcada por la Hoja no se han reconocido términos Las ignimbritas son de composición riolítica y con- basálticos como se describen en otras zonas ubica- tienen oligoclasa, feldespato potásico y cuarzo como das más al norte (González Díaz, 1958; Polanski, componentes principales y titanita y apatita como 1964a; Poma y Ramos, 1994; Ramos et al., 1999). accesorios. La matriz se presenta como un agrega- do felsítico. Facies plutónico - hipabisal (5b) En las nacientes del arroyo Papagayos la For- Pórfidos riolíticos y dacíticos, granitos biotíticos mación Choiyoi se halla representada por un apilamiento de coladas, mantos de brecha, flujos En el ámbito de la Hoja, las facies intrusivas de ignimbríticos con variado grado de soldamiento y la Formación Choiyoi están bien representadas en depósitos piroclásticos. Esta sucesión lávico - el extremo austral de la Cordillera Frontal y desde volcaniclástica varicolor, de centenares de metros el arroyo Papagayos hacia el norte. En el primer de espesor, inclina unos 30° aproximadamente hacia sector aflora un cuerpo granítico de color rojo ca- el oeste. Se apoya en relación de discordancia sobre racterístico que intruye a las leptometamorfitas las lutitas y grauvacas plegadas de la Formación Las ordovícico-silúricas y a las tonalitas carboníferas. Lagunitas y está cubierta por volcanitas de edad ter- Corresponde a la unidad denominada por Volkheimer ciaria (Fig. 3). (1978) Granito La Estrechura o Granito Rojo. Se

Figura 3. Lavas, ignimbritas y otros depósitos piroclásticos de la Formación Choiyoi (CH). Por encima, en discordan- cia, se aprecian volcanitas de la Formación Huincán (H). Nacientes del arroyo Papagayos. Volcán Maipo 13

trata de un cuerpo granítico de pequeñas dimensio- nítico con dimensiones de stock, con cataclasis e nes, ya que se extiende unos 7,5 km a lo largo del intensamente afectado por alteración hidrotermal. río Diamante cubriendo una superficie de 28 km2. Este granito porfiroide tiene megacristales de Forma las abruptas paredes del cañadón del río Dia- ortosa de hasta 10 cm de tamaño y se encuentra mante en el paraje La Estrechura, aguas arriba de atravesado por vetas aplíticas y pegmatíticas por- la desembocadura del arroyo Las Lagunitas. Tam- tadoras de turmalina y muscovita. En la localidad bién se incluye en esta facies a un enjambre de conocida como mina Yaucha aflora otro cuerpo diques de pórfido granítico rojo y posibles apófisis granítico de grano grueso y color rojo anaranjado, desconectadas del cuerpo principal. El granito es con fuerte diaclasamiento vertical. Presenta una de grano medio, muy homogéneo y está compues- relación de intrusividad con respecto a las to por feldespato potásico de color rosado, abun- volcanitas andesíticas de la Formación Choiyoi y dante cuarzo hialino y biotita. gran desarrollo de venas aplíticas y pegmatíticas En el segundo sector considerado, más preci- en la zona de contacto. El cuerpo muestra en cier- samente en las adyacencias del arroyo Cruz de tos sectores evidencias de alteración hidrotermal Piedra, pequeños cuerpos espacialmente desco- y mineralización diseminada de sulfuros metáli- nectados de la Formación Choiyoi, con tonalida- cos, motivo por el cual ha sido objeto de algunas des blanquecinas y blanco-amarillentas, intruyen labores mineras en tiempos pasados. En las na- a las metamorfitas de la Formación Las Lagunitas. cientes del arroyo Papagayos afloran pequeños Cerca del Refugio Alvarado aflora un pórfido cuerpos de granito porfiroide de color gris, porta- riolítico portador de fenocristales de feldespato dores de megacristales de feldespato potásico de potásico de hasta 1 cm de tamaño, en pasta hasta 6 cm de largo (Fig. 4). Estos cuerpos, de microgranular. Aguas abajo sobre el mismo arro- 10-20 km2 , exhiben variaciones texturales que in- yo, asoman masas aplíticas de color blanquecino cluyen diques aplíticos, pórfidos, granitos con fuerte tinción por óxidos de hierro. En las porfiroides y granitos de grano grueso como re- nacientes del arroyo Yaucha aflora un cuerpo gra- flejo de los distintos niveles de emplazamiento. Si

Figura 4. Granito porfiroide con megacristales de feldespato potásico en las nacientes del arroyo Papagayos. 14 Hoja Geológica 3569-I

bien se hallan espacialmente desconectados en- incluidos en la Hoja Cerro Tupungato (Ramos et al., tre sí estarían vinculados en profundidad a una 1999) permiten caracterizar a ambas facies. Las única fuente magmática de edad choiyoilitense. volcanitas abarcan un rango en contenido de sílice En el extremo norte de la Hoja, los afloramien- entre 51% y 77%, presentan altos tenores en álcalis tos de las facies volcánicas de la Formación Choiyoi en general y K2O en particular, alta relación FeO*/ se hallan flanqueados por cuerpos graníticos de ma- MgO en los basaltos, y altas relaciones La/Ta y Ba/ yores dimensiones, como por ejemplo en el cerro La en las andesitas y dacitas. Las características Nacimiento de los Indios, atravesado por el curso geoquímicas de los granitoides son equivalentes, es inferior del arroyo del Rosario. En el puesto de la decir que se trata de magmas calcoalcalinos,

Cantera afloran rocas graníticas de color rojo ana- subalcalinos, ricos en K2O, metaluminosos a ranjado, de grano medio a grueso, con abundante peraluminosos. Estos rasgos definen una impronta ortosa, plagioclasa parcialmente alterada, cuarzo y geoquímica de arco magmático continental (Ramos muscovita escasa. et al., 1999). El magmatismo asociado a la Fuera del ámbito de la Hoja, en la Cordillera Fron- subducción en el margen gondwánico se inició con tal del norte de la provincia de Mendoza, las facies el derrame de basaltos y continuó con el emplaza- plutónicas de la Formación Choiyoi adquieren dimen- miento de andesitas y dacitas y del complejo siones batolíticas (Polanski, 1964a; Caminos, 1965, tonalítico-granodiorítico asociado. Las riolitas y 1979). En el cordón del Plata, el batolito está com- pórfidos riolíticos y granitos leucocráticos que coro- puesto por gabros, tonalitas, granodioritas y granitos nan la formación estarían representando el cese pau- (Caminos, 1979). Estos granitos, que representan latino del magmatismo de arco a consecuencia de cerca del 80%, son leucocráticos y están estrecha- una disminución en la velocidad de convergencia mente asociados con enjambres de diques riolíticos. (Ramos, 1988a; Kay et al., 1989) y la instalación de Inmediatamente al norte de la Hoja, en el cordón del un régimen de extensión regional. Portillo, Polanski (1964a) diferenció dos complejos, uno granodiorítico-tonalítico y otro granítico. Sato y Relaciones estratigráficas Llambías (1993) propusieron la denominación de batolito El Portillo para englobar a todos los aflora- Los cuerpos granitoides de la Formación Choiyoi mientos de granitoides que se extienden entre los intruyen indistintamente a las leptometamorfitas de ríos Diamante y Mendoza. Gregori et al. (1996, en la Formación Las Lagunitas y a la Tonalita Ramos et al., 1999) estudiaron en detalle una serie Carrizalito, mientras que las rocas volcánicas ya- de stocks graníticos en la zona del cordón del Porti- cen sobre estas unidades y a su vez están cubier- llo y algo más al sur, en la zona del arroyo Manzano, tas por conglomerados neocomianos de la Forma- en tanto que Ramos et al. (1999) describieron un ción Vaca Muerta en la zona del río Diamante y conjunto de granitoides integrado por monzonitas por volcanitas neógenas. cuarzosas, pórfidos graníticos a granodioríticos y microgranitos. Edad y correlaciones

Geoquímica Si bien los terrenos asignados al Pérmico - Triásico en la Hoja no cuentan con estudios de deta- La mayor parte de los autores que han tratado lle, las características observadas sugieren su ho- las características químicas de esta asociación mologación con la Formación Choiyoi reconocida en magmática (Polanski, 1964a; Caminos, 1965, 1979; el ámbito de la Cordillera Frontal mendocina y en el Coira y Koukharsky, 1976; Zeil, 1981; Llambías et Bloque de San Rafael. Al establecer comparacio- al., 1991; Poma y Ramos, 1994; Gregori et al., 1996) nes surge como diferencia a resaltar la menor ex- han detectado una progresiva acidificación como tensión relativa de los afloramientos y la homoge- rasgo evolutivo de la unidad. En efecto, tanto en las neidad litológica determinada por abundancia de gra- rocas plutónicas como en las volcánicas es posible nitos leucocráticos y ausencia de términos gábricos observar un incremento en la participación de com- y tonalíticos, lo cual estaría obedeciendo más a dife- posiciones riolíticas con el transcurso del tiempo, hasta rencias en el nivel de exposición que a variaciones hacerse francamente dominantes hacia la parte su- en el tipo de magmatismo. perior de la formación. Los estudios geoquímicos de Dentro del área abarcada por la Hoja, la For- rocas volcánicas y plutónicas de la Formación Choiyoi mación Choiyoi no posee información radimétrica Volcán Maipo 15

pero las relaciones estratigráficas indican una edad son: los de Uliana et al. (1977), Legarreta y post carbonífera (Tonalita Carrizalito) y pre-triásica Kozlowski (1984), Legarreta y Gulisano (1989), superior (Formación Arroyo Malo). En el cordón Legarreta (1991), Legarreta y Uliana (1991), del Plata, Dessanti y Caminos (1967) comunicaron Legarreta et al. (1993). En este trabajo se adopta edades K/Ar que van desde 231 Ma a 202 Ma para el esquema estratigráfico propuesto por Kozlowski granitos y tonalitas que intruyen a las sedimentitas (1984) y el ordenamiento bioestratigráfico de carboníferas. En la cordillera del Tigre, provincia Riccardi et al. (1999). de San Juan, las dataciones correspondientes a uni- dades equivalentes arrojaron valores de 281 y 230 2.3.1. TRIÁSICO - JURÁSICO Ma (Rapalini, 1989). Pérez et al. (1987) obtuvie- ron valores de 203 y 204 Ma para rocas riolíticas Formación Arroyo Malo (6) de Paramillos de las Vacas, provincia de Mendoza. Pelitas laminadas, sabulitas y areniscas Llambías et al. (1991) consideraron que el com- plejo volcánico-plutónico choiyoilitense se halla Antecedentes acotado en su base por el desarrollo de la Superfi- cie San Rafael, generada a partir de la fase Riccardi et al. (1988) señalaron la existencia de orogénica Sanrafaélica de edad carbonífera supe- sedimentitas de probable edad triásica por debajo de rior. capas del Jurásico inferior, documentadas paleontológicamente, en la zona del alto valle del río 2.3. MESOZOICO Atuel. Posteriormente, el hallazgo de invertebrados marinos permitió a Riccardi et al. (1997) definir la Las unidades de edad triásica, jurásica y existencia de Triásico marino en la zona y categorizar cretácica que representan el relleno sedimentario la unidad como Formación Arroyo Malo. Además de la Cuenca Neuquina han merecido la atención de su importancia local, las sedimentitas del arroyo de numerosos autores, en especial debido a su im- Malo constituyen los únicos afloramientos triásicos portancia económica en la producción de petróleo de ambiente marino en la Argentina. y gas. Desde principios de siglo pasado hasta los años ´70 aproximadamente, el enfoque en el estu- Distribución areal dio de las secuencias mesozoicas ha sido esencial- mente cronoestratigráfico, basado en la identifica- Riccardi et al. (1997) propusieron como área ción de biozonas y su comparación con aquellas tipo a la región ubicada sobre la margen izquierda del hemisferio norte (Burckhardt, 1900; Gerth, 1925, del arroyo Malo, más precisamente en el curso me- 1931; Lahee, 1927; Groeber, 1918, 1929; Weaver, dio de uno de sus afluentes, el arroyo Alumbre. No 1931). Groeber (1946 y 1947) introdujo el trata- se han detectado otros afloramientos, aunque no se miento de las secuencias mesozoicas en ciclos descarta una distribución areal más amplia sedimentarios: el Jurásico (Lías-Dogger), que in- infrayaciendo a las areniscas hettangianas, tanto en cluye el Cuyano inferior y superior y el Chacayano, superficie como en subsuelo. el Ándico (Kimmeridgiano- Albiano) y el Riográndico (Cenomaniano-Paleoceno). Los traba- Litología jos de Leanza (1945), Stipanicic (1969), Rolleri y Criado Roque (1970) e Yrigoyen (1972), entre otros, La sección tipo, de 286 m de espesor, consiste, constituyeron valiosos aportes que enriquecieron el esencialmente, en pelitas laminadas y masivas de conocimiento desde los enfoques paleontológico, color gris azulado con inclusión de cadilitos litoestratigráfico y tectónico. A partir de los años (dropstones) e intercalación de lentes de areniscas ´80, la aplicación de los modelos de facies y sabulitas (Fig. 5). Es posible reconocer varios ci- sedimentarias, de la noción de cambios eustáticos clos granocrecientes dentro de la sección. globales y de los conceptos modernos de estratigrafía secuencial permitieron elaborar Paleontología ordenamientos cronoestratigráficos más refinados, actualmente en vigencia. Numerosos son los tra- Los restos fósiles hallados incluyen varias espe- bajos realizados por geólogos vinculados a la in- cies de bivalvos, dos de gastrópodos, un braquiópodo, dustria petrolera, entre ellos, los más destacados un nautiloideo y un cnidario. Las determinaciones 16 Hoja Geológica 3569-I

preliminares incluyen: Cassianella cf. peruana rece cubierto en concordancia por los conglome- Korner, Otapiria spp., Liostrea sp., Minetrigonia rados de la Formación El Freno. ? multicostata, “Astarte” incae ? Jaworski, Palaeocardita peruviana ? Cox, Septocardia cf. Edad peruviana Cox, Tutcheria? sp., Guidonia sp., Omphaloptycha ? sp., Zugmayerella ? cf. El hallazgo de Choristoceras Hauer permitió koerneri Sandy, Nautiloidea indet. y Cnidaria indet. asignar a esta unidad al lapso Triásico superior También se han descripto foraminíferos, ostrácodos (Rhaetico) Jurásico inferior (Hettangiano). y restos vegetales. Recientemente, el hallazgo de amonites del género Choristoceras Hauer (Riccardi 2.3.2. JURÁSICO e Iglesia Llanos, 1999) permite definir con precisión la transición de las facies marinas del Triásico y el GRUPO CUYO Jurásico. Antecedentes Ambiente Este tramo jurásico inferior a medio correspon- A modo de interpretación preliminar, Riccardi et de al denominado Ciclo Cuyano (Groeber, 1947), al. (1997) propusieron para las sedimentitas de la Grupo Cuyo o Mesosecuencia Cuyo (Legarreta y Formación Arroyo Malo un origen en ambiente Gulisano, 1989). Volkheimer (1970, 1978) propuso deltaico (fan-delta) alimentado por un sistema flu- el ordenamiento estratigráfico de las unidades liásicas vial entrelazado. a doggerianas, que muestra el cuadro 2. Sin embargo, de acuerdo al esquema Relaciones estratigráficas estratigráfico propuesto por Kozlowski y Baldi (1983) y Kozlowski (1984), la Formación Tres Esquinas, Esta unidad no presenta base aflorante, aun- equivalente de la Formación El Codo, es considera- que se infiere que se apoya en discordancia sobre da como una variación de facies de la Formación la Formación Choiyoi en el subsuelo. Su techo apa- Puesto Araya.

Figura 5. Secuencia pelítica de la Formación Arroyo Malo infrayaciendo a los conglomerados de la Formación El Freno en el arroyo Alumbre. Volcán Maipo 17

                          

Cuadro 2. Ordenamiento estratigráfico de las unidades liásicas a doggerianas.

Formación El Freno (7) mación El Freno está integrada por tres intervalos Conglomerados, areniscas de grano medio a grue- en sentido vertical: I) areniscas conglomerádicas y so, niveles limolíticos conglomerados polimícticos en sucesión granocreciente y arreglo en capas masivas, Antecedentes lenticulares y con estratificación entrecruzada de bajo ángulo, II) conglomerados polimícticos masivos y III) Esta unidad ha sido definida por Reijenstein conglomerados arenosos, areniscas y arcilitas de color (1967) y retomada por Volkheimer (1970, 1978). El verdoso. Las capas del Jurásico inferior del río Atuel Subgrupo Río Atuel de Volkheimer (1978) ha sido se hallan estructuradas según un sistema de denominado de varias formas por distintos autores: corrimientos y retrocorrimientos con pliegues por Arenisca del río Atuel (Gerth, 1925), Matilda Se- propagación de falla asociados (Kozlowski et al., ries (Lahee, 1927), Cuyano inferior (Groeber, 1947), 1993; Fortunatti y Dimieri, 1999). Formación Río Atuel, Grupo Río Atuel (Stipanicic, 1969). Ambiente

Distribución areal La secuencia conglomerádica inicial correspon- de a un ambiente continental, más precisamente de La Formación El Freno se halla excelentemente abanicos aluviales y ambiente fluvial entrelazado representada al norte del río Atuel, desde el arroyo (Legarreta et al., 1993). Hacia arriba la secuencia Malo hasta el arroyo Blancoy en las nacientes de los evoluciona a un ambiente litoral a nerítico caracteri- arroyos La Manga y Tábanos. Junto con la Forma- zado por alta energía de transporte (Volkheimer, 1978). ción Puesto Araya conforma una serranía que alcan- Lanés (1999) describió facies turbidíticas potentes en za los 4.000 m de altura, constituyendo los depósitos los arroyos Malo y El Pedrero cuyas particularidades de mayor antigüedad de la Cuenca Neuquina. Tam- sedimentarias indican la somerización de un abanico bién aflora en el cerro La Brea, al sur del río Atuel. deltaico desde áreas de prodelta hasta zonas proximales del lóbulo con un talud orientado hacia el Litología OSO hasta NO. Las variaciones de facies indican que el borde de la cuenca liásica estaba situado hacia De acuerdo con Volkheimer (1978), se compo- el este del arroyo Blanco. ne de areniscas de grano medio a grueso, micáceas a feldespáticas, conglomerados y vaques. Los clastos Paleontología de los conglomerados son de riolitas y andesitas pro- venientes de la Formación Choiyoi y de cuarcitas La unidad contiene restos de troncos e improntas pertenecientes a la Formación Las Lagunitas. El color fósiles y amonites correspondientes a la Zona de del conjunto es gris claro hasta blanco amarillento. Psiloceras planorbis (Riccardi et al., 1988). Con un espesor estimado en 900 m, se destaca una predominancia de conglomerados al este y una ma- Relaciones estratigráficas yor participación relativa de areniscas e intercalaciones de niveles limolíticos hacia el oeste. Localmente la formación se dispone por encima Según Gulisano y Gutiérrez Pleimling (1994), la For- de la Formación Arroyo Malo, aunque no se descar- 18 Hoja Geológica 3569-I

ta su relación sobre las rocas magmáticas de la 1967), Formación El Cholo (Stipanicic y Bonetti, Formación Choiyoi en el subsuelo. La Formación 1970) y Formación Puesto Araya (Volkheimer, Choiyoi es considerada el basamento en todo el 1978). Este último autor realizó una descripción ámbito de la Cuenca Neuquina. Esta relación se halla muy detallada de esta unidad y de la zonación bien expuesta un poco más al sur de la zona de tra- bioestratigráfica correspondiente. Debido a su bajo, en la zona de Portezuelo Ancho, cerca de Las abundante contenido fosilífero cuenta con nume- Leñas. Hacia arriba pasa en concordancia a la For- rosos trabajos paleontológicos, entre los que se mación Puesto Araya. destacan los de Herbst (1964, 1968) y Stipanicic y Bonetti (1970). Edad y correlaciones Distribución areal La presencia de amonites de la zona de Psiloceras planorbis permite asignar la unidad al En general, su distribución areal coincide con la Hettangiano-Sinemuriano (Riccardi et al., 1988). De de la Formación El Freno. Sus exposiciones más acuerdo a Legarreta y Uliana (1999), esta formación completas se encuentran en la margen norte del va- correlacionable, al menos en parte, con la Formación lle del río Atuel. En las nacientes del río Atuel, entre Piedra Pintada del sur de la provincia del Neuquén. el arroyo del Gateado y la laguna del Atuel, Groeber (1947) describió al Cuyano inferior muy perturbado Formación Puesto Araya (8) tectónicamente, en escamas corridas sobre la For- Areniscas finas, calcarenitas, limolitas, limolitas mación Auquilco. Inmediatamente al norte del vol- margosas, niveles carbonosos cán Maipo, Groeber (1947) mencionó la existencia de afloramientos del Cuyano inferior en las nacien- Antecedentes tes del arroyo El Gorro.También aflora en el codo del arroyo Blanco, en los arroyos La Manga y Esta unidad ha recibido diversas denomina- Tábanos, extendiéndose hacia el norte hasta la base ciones: Formación Las Chilcas (Reijenstein, del cerro Malo.

Figura 6. Restos de amonite en el área del cerro La Brea. Volcán Maipo 19

Litología Edad y correlaciones

Consiste en una alternancia de areniscas lajosas De acuerdo con Volkheimer (1978) esta forma- de grano fino, feldespáticas y micáceas, donde se ción puede ser asignada al lapso Sinemuriano- intercalan calcarenitas, limolitas y limolitas margosas Toarciano en virtud de su abundante contenido de color gris a negro. Aparecen niveles carbonosos fosilífero, en particular por la presencia de las si- intercalados que contienen abundante flora fósil guientes especies de amonites: Arietites nodosaries (mina Cervantes, arroyo Las Chilcas, cerro La Brea y Arnioceras geometricum, del Sinemuriano infe- y mina Tránsito). En el valle del río Atuel la sucesión rior, Echioceras, del Sinemuriano superior, está penetrada por enjambres de diques andesíticos Gemmellaroceras sp., Uptonia jamesoni y y pequeños cuerpos intrusivos de edad terciaria. Al- Tragophylloceras weschsleri, del Pliensbachiano canza un espesor de 400 m aproximadamente. inferior, Hildoceras, del Toarciano inferior y Hammatoceras, Dumortieria y Pleydellia del Paleontología Toarciano superior. Esta unidad sería correlacionable con la porción inferior de la Formación Los Molles El principal contenido fosilífero consiste en (Pliensbachiano-Calloviano, Riccardi et al., 1999) amonites: Arietites nodosaries, Arnioceras ampliamente extendida en la provincia del Neuquén. geometricum, Echioceras, Gemmellaroceras sp., Uptonia jamesoni, Tragophylloceras weschsleri, Formación El Codo (9) Hildoceras, Hammatoceras, Dumortieria y Lutitas negras en parte areniscosas, margas y cali- Pleydellia (Fig. 6); pelecípodos: Pholadomya zas oscuras decorata, Pecten sosneadoensis, Trigonia chubutensis; braquiópodos: Lobothyris punctata, Antecedentes Spiriferina rostrata, Rhynchonella vigilii; flora: Cladophlebis, Otozamites, Equisetites, Volkheimer (1970) definió esta formación en alu- Neocalamites, Sagenopteris, Asterotheca fuchsii, sión al codo del arroyo Blanco, localidad tipo ubica- Asplenium whibyense, Pterophyllum princeps, da a 13 km al norte de su desembocadura en el río Psilophyllum sp., Thinnfeldia sp. y Coniferae. Atuel. Es considerada equivalente al Cuyano supe- También se han hallado restos de gasterópodos, rior de Groeber (1947) y a la Formación China Muer- crinoideos y hexacorales (Volkheimer, 1978). ta de Stipanicic y Bonetti (1970). En trabajos poste- riores (Yrigoyen, 1979; Legarreta y Gulisano, 1989) Ambiente esta unidad fue denominada como Formación Tres Esquinas. Corresponde, según Volkheimer (1978), a un am- biente epinerítico en la zona del arroyo Blanco hasta Distribución areal infranerítica en el arroyo Malo. En el oeste (arroyo Malo) y norte (arroyo Tordillo) el predominio de limolitas Aflora en tres sinclinales situados al sur del y lutitas oscuras ricas en pirita indica aereación reduci- río Atuel, en la zona de los arroyos Blanco y Tordillo da del fondo marino. El área oriental, epinerítica, fue y al sudoeste del cerro Malo. En la zona del alto transformada en pantanos costaneros con un desarro- río Atuel, Groeber (1947) describió al Cuyano su- llo de abundante vegetación, principalmente de hele- perior amasado tectónicamente con la Formación chos y Bennettitales (Volkheimer, 1978). De acuerdo Auquilco y dispuesto en una faja que cruza los con Legarreta y Gulisano (1989), las areniscas de la cursos superiores de los ríos Bravo, Barroso y Bor- Formación Puesto Araya representan un ambiente bollón. Afloramientos reducidos fueron mencio- marino marginal (playa hasta shoreface inferior). nados por Groeber (1947) en el faldeo occidental del cerro El Gorro, en las proximidades del límite Relaciones estratigráficas con Chile.

La base, concordante sobre la unidad anterior, Litología está dada por la aparición de contenido fosilífero en abundancia. En forma concordante, lateral y verti- Esta unidad está compuesta esencialmente por calmente pasa a la Formación El Codo. lutitas gris oscuras, en parte areniscosas, con 20 Hoja Geológica 3569-I

Figura 7. Calizas estromatolíticas de la Formación El Codo en el codo del arroyo Blanco. intercalaciones de margas y calizas oscuras y cali- Ambiente zas estromatolíticas gris azuladas (Fig. 7), con abun- dante contenido amonitífero. En el codo del arroyo La acumulación sedimentaria tuvo lugar en un Blanco las capas integran una estructura monoclinal ambiente marino relativamente profundo de plata- de rumbo meridiano e inclinación de 40° a 60° ha- forma externa y centro de cuenca. Representa el cia el este, con un espesor de 200 m aproxima- acmé de la transgresión durante el Jurásico infe- damente. Volkheimer (1978) destacó una disminu- rior a medio para estas latitudes (Yrigoyen, 1979; ción importante en el espesor de esta unidad de sur Legarreta y Gulisano, 1989). El neto carácter a norte, pasando de 600 m al sur del río Atuel a 140 transgresivo de la unidad estaría sugiriendo la adi- m en el arroyo Tordillo. Kozlowski y Baldi (1983) ción del efecto de la subsidencia térmica al ascen- describieron a esta unidad, a la cual denominaron so eustático global registrado para estos tiempos Formación Tres Esquinas, constituida por dos (Legarreta et al., 1993). La ocasional presencia litofacies: una dominante de pelitas negras y otra de turbiditas gruesas indica relativa proximidad al de areniscas y conglomerados. En ciertas localida- talud continental (Kozlowski y Baldi, 1983). des (Vega Montosa y arroyo de La Yesera), nive- Volkheimer (1978) propuso un escenario les clásticos de escaso espesor se disponen por paleogeográfico dominado por golfos y dorsales encima de las pelitas. internas transitorias para explicar las variaciones litofaciales y los cambios de espesor y tamaño de Paleontología grano de los depósitos clásticos.

Los principales géneros de amonites con valor Relaciones estratigráficas cronoestratigráfico, los cuales han permitido esta- blecer la zonación del Jurásico medio (Westermann La Formación El Codo muestra una relación y Riccardi, 1972) son: Leioceras opalinum, concordante y parcialmente diacrónica con la For- Eudmetoceras gerthi, Sonninia zitelli, mación Puesto Araya y es cubierta a su vez por las Pseudotoites sp., Emileia multiforme. capas yesíferas de la Formación Tábanos. Volcán Maipo 21

Edad y correlaciones poco marcada, por los depósitos de la Formación Lotena. Esta unidad es asignada al Eomesojurásico (Aaleniano-Bajociano) en función de la fauna de Edad amonites con valor cronoestratigráfico (cf. Paleontología) y es correlacionable parcialmen- Esta unidad ha sido asignada al Calloviano infe- te con la Formación Los Molles (Riccardi et al., rior, sobre la base de relaciones estratigráficas y al 1999). contenido amonitífero descripto por Riccardi et al. (1991). Fomación Tábanos (10) Yeso GRUPO LOTENA

Antecedentes El Grupo Lotena (Legarreta y Gulisano, 1989) incluye tres formaciones: Lotena, La Manga y Esta unidad fue denominada como Yeso inferior Auquilco (Fig. 8). por Yrigoyen y Martínez Cal (1953), más tarde fue definida como Formación Tábanos por Stipanicic Formación Lotena y Formación La Manga (11) (1965) y descripta por Dellapé et al. (1979) y Areniscas, conglomerados, arcilitas, margas y calizas Riccardi et al. (1991). Antecedentes Distribución areal Tradicionalmente han sido consideradas como Su localidad tipo se encuentra en el arroyo dos unidades separadas (Weaver, 1931; Groeber, Tábanos, afluente de la margen izquierda del arroyo 1929; Stipanicic y Mingramm, 1952 y Stipanicic, La Manga.También integra el perfil del codo del arro- yo Blanco, aunque en muchos sitios aledaños ha sido eliminado tectónicamente. Al sur del río Atuel, Volkheimer (1978) mencionó la presencia de esta unidad en el arroyo Las Piedras.

Litología

La formación está compuesta por un nivel de yeso masivo, blanco, poco estratificado, con algunas intercalaciones de calizas estromatolíticas (Kozlowski y Baldi, 1983). Su espesor no supera los 30 m y tien- de a acuñarse hacia el norte y sur. En el codo del arroyo Blanco, la Formación Tábanos se inicia con calizas oscuras poco potentes.

Ambiente

La depositación de esta unidad está indicando un período de circulación restringida a casi comple- ta desecación, debido a una caída breve y brusca en el nivel medio del mar (Legarreta et al., 1993).

Relaciones estratigráficas Figura 8. Perfil del codo del arroyo Blanco, donde se Esta formación se dispone de modo concor- observa las unidades del Grupo Lotena: Formación dante sobre las capas lutíticas de la Formación El Lotena (L), Formación La Manga (M) y Formación Codo y es cubierta, mediante discordancia erosiva Auquilco (A). 22 Hoja Geológica 3569-I

1965). Sin embargo, de acuerdo a estudios ras, poco profundas y con salinidad marina normal sedimentológicos, Legarreta (1991) consideró a la bajo procesos predominantes de tipo hidrodinámico Formación Lotena como el tramo basal de la For- y participación subordinada de construcciones de mación La Manga dentro del ciclo Neocaloviano - carácter organógeno (biohermos) (Legarreta y Oxfordiano. Gulisano, 1989).

Distribución areal Relaciones estratigráficas

Aflora al sur del río Atuel en la zona de los arro- La Formación Lotena se dispone en forma con- yos Felipe, Las Piedras y Las Animas y al norte del cordante sobre los niveles yesíferos de la Forma- mismo, en el codo del arroyo Blanco, en el arroyo ción Tábanos y es cubierta en pseudoconcordancia La Manga, en Yeseras Grandes, en el faldeo sur de por la Formación La Manga, la cual a su vez mues- los cerros Sosneado y Guanaquero y en la zona del tra un pasaje transicional hacia la Formación arroyo Tordillo y del río Negro. Auquilco.

Litología Edad

Esta unidad se inicia con areniscas arcósicas El conjunto Lotena-La Manga es asignado al de color gris verdoso y conglomerados finos lapso Calloviano superior- Oxfordiano por su conte- lenticulares. Los bancos de areniscas finas pre- nido fosilífero (cf. Paleontología). sentan estratificación paralela y entrecruzada. Hacia arriba aparecen delgados bancos de margas Formación Auquilco (Yeso Principal) (12) y calizas gris verdosas, portadoras de restos de Yeso, niveles micríticos amonites. Los estratos manguenses, conocidos como Calizas azules con Gryphaea (Groeber, Antecedentes 1929) están compuestos por una neta predominancia de sedimentos calcáreos y en for- Esta unidad constituye una de las formacio- ma subordinada se incluyen componentes nes mesozoicas mejor representadas en todo el siliciclásticos. En el perfil del codo del arroyo Blan- ámbito de los neuquino-mendocinos. Schiller co y en el curso medio del arroyo La Manga (1912) la llamó Yeso Principal en la zona del ce- afloran calizas fétidas de color gris azulado, fina- rro Aconcagua. Posteriormente, Weaver (1931) mente lajosas, con intercalaciones de yeso, chert, acuñó el nombre de Formación Auquinco y más calizas oolíticas, margas y lutitas negras. Local- tarde Groeber (1946) introdujo la denominación mente, con los grainstones calcáreos se asocian de Formación Auquilco, de mayor arraigo en la facies de calizas coralígenas y calizas micrítico- literatura geológica. En otro intento de esqueléticas. El espesor total de la unidad oscila reordenamiento estratigráfico, Groeber (1947) entre 250 y 400 metros. propuso el término Chacayano, el cual consta de una sección inferior o Auquilcoense y una sec- Paleontología ción superior o Tordillense. Yrigoyen y Martínez Cal (1953) emplearon Auquilcoense para descri- En la Formación Lotena se han hallado restos bir los afloramientos yesíferos del codo del arro- de Reineckeia anceps (Stipanicic, 1965, en yo Blanco. Volkheimer, 1978), mientras que la Formación La Manga es portadora de pelecípodos (Gryphaea) y Distribución areal variedad de amonites de la Zona de Transversarium (Peltoceras, Euaspidoceras, Perisphinctes). La formación aflora al sur del valle del río Atuel, en el arroyo Felipe y en el cerro Chivato y Ambiente al norte del citado río, en el codo del arroyo Blan- co, en los arroyos La Manga y de las Yeseras, El ambiente evoluciona de continental en su parte hasta las playas del Jote y al pie del cerro inferior a marino en la sección superior. Este último Guanaquero. En el curso superior del río Atuel, corresponde a un medio de plataforma de aguas cla- desde la laguna homónima hasta el cerro Volcán Maipo 23

Sosneado aproximadamente, esta unidad presenta cerro Tres Lagunas, en las playas del Jote y en el una amplia distribución, aflorando a ambos lados cerro Guanaquero, las masas yesíferas de la For- del valle y conformando cerros como el Calabo- mación Auquilco están cubiertas por volcanitas ter- zo. En esta zona se halla muy perturbada ciarias. tectónicamente o, según descripción de Groeber (1947), “amasado tectónicamente”, razón por la Edad cual su relación con otras formaciones jurásicas no está muy clara y su espesor está incrementado Esta unidad carece de restos paleontológicos y debido a repeticiones de origen tectónico. En el es asignada al Oxfordiano - Kimmeridgiano por la área del cerro Las Choicas los estratos yesíferos existencia de Perisphinctes (Orthosphinctes) aff. se hallan bien representados e intensamente ple- Tiziani (Oppel), perteneciente a la Zona del gados. bimammatum en estratos infrayacentes (Volkheimer, 1978). Litología 2.3.3. JURÁSICO SUPERIOR – Se trata de yeso casi puro, de color blanco a CRETÁCICO blanco grisáceo, bandeado, con intercalaciones de delgados bancos de calizas fétidas portado- GRUPO MENDOZA ras de restos de amonites mal conservados. Al- canza una potencia de 200 m en el codo del arro- Antecedentes yo Blanco. En la zona al sur del río Diamante la secuencia se inicia con micritas laminadas de Tradicionalmente se consideró con esta deno- color gris oscuro, con olor a hidrocarburos, de minación al conjunto depositacional transgresivo probable origen algáceo. El yeso presenta dos de edad titoneocomiana (Groeber, 1946; litofacies: yeso laminado y nodular. La primera Stipanicic, 1969; Yrigoyen, 1979). En Neuquén, es la más abundante e indica la existencia de el Grupo Mendoza aumenta considerablemente en cuerpos de agua hipersalinos, mientras que la espesor y en variedades de sus facies, pudiendo segunda es de origen diagenético (Kozlowski y diferenciarse, según Weaver (1931), cuatro for- Baldi, 1983). maciones: Vaca Muerta, Quintuco, Mulichinco y Agrio. Yrigoyen (1979) destacó las notables va- Ambiente riaciones de espesor y litología que presenta este grupo entre localidades no muy distantes. En De acuerdo con Legarreta et al. (1993) y en Mendoza, Groeber (1947) definió al Ciclo un sentido más regional, las variaciones Mendociano como una sola entidad estratigráfica, litofaciales reconocidas en esta unidad permiten criterio adoptado por Volkheimer (1978) para su identificar períodos de tiempo cuando prevalecía Grupo Mendoza. La tendencia actual es incluir a un medio marino mesohialino sometido a reitera- la Formación Tordillo y su equivalente Formación da exposición subaérea (facies calcáreas: Río Damas dentro de este grupo (Legarreta et boundstone criptoalgal con estructuras al., 1981; Legarreta y Gulisano, 1989; Legarreta intraplegadas), momentos en los cuales el medio et al., 1993). Para la zona entre los ríos Diamante acusaba salinidad próxima a la normal (facies y Atuel, el Grupo Mendoza se halla integrado por carbonáticas: grainstones y packstones) y pe- las formaciones Río Damas/Tordillo, Vaca Muer- ríodos póstumos en los cuáles se produjo una ta, Chachao y Agrio (Legarreta et al., 1981; exposición subaérea completa (facies detrítica: Kozlowski y Baldi, 1983). pelitas rojas). Debido a la escala del mapa, en algunos sec- tores se ha optado por un tratamiento conjunto Relaciones estratigráficas de las formaciones Vaca Muerta, Chachao y Agrio, mientras que en otros se las ha mapeado Se dispone en relación transicional con la For- separadamente, salvo las Formaciones Chachao mación La Manga y se presenta en casi todos los y Agrio, que aparecen mapeadas en conjunto, en casos cubierta por las sedimentitas continentales de todos los casos, por el escaso espesor de la pri- la Formación Tordillo. En algunos casos, como en el mera de ellas. 24 Hoja Geológica 3569-I

Formación Río Damas (13) Hoja se encuentra bien representada en el ángulo Basaltos, andesitas, diques andesíticos, brechas vol- sudoeste, formando el límite con Chile al sur y al cánicas. Conglomerados y areniscas norte del portezuelo de las Damas. Aflora princi- palmente en toda la cuenca de los arroyos Las Antecedentes Lágrimas y Los Gateados y al oeste del cajón del Burro. Esta unidad fue definida en Chile por Klohn (1960) en el valle del río homónimo, a los 35° S, como Litología un “complejo de sedimentos clásticos, finos y grue- sos y de esporádicos sedimentos químicos”. Groeber Corresponde a un complejo volcano- (1947) denominó como Chilelitense a un “potente sedimentario integrado por coladas basálticas y conjunto de mantos, brechas y tobas de porfirita andesíticas, potentes mantos de brechas, conglo- …que posee propagación horizontal vastísima y un merados y areniscas, depósitos piroclásticos inter- espesor de 4.000 y más metros en la ladera occi- calados y enjambres de diques andesíticos. En la dental de los Andes”. Es considerada como el equi- región limítrofe inmediatamente al sur de la Hoja, valente lateral de la Formación Tordillo (Davidson y Davidson y Vicente (1973) destacaron la brusca Vicente, 1973; Yrigoyen, 1979). variación de facies de la unidad, que pasa de miles de metros de brechas volcánicas y coladas en Chi- Distribución areal le a centenares de metros de areniscas rojas en el río Tordillo. En la Hoja , Thiele (1980) des- Esta unidad presenta amplia distribución en te- cribió a esta formación compuesta por “conglome- rritorio chileno, alcanzando espesores de hasta rados y brechas de color rojizo y verdoso, con 5.500 m en las nacientes del río Tinguiririca y en intercalaciones potentes de areniscas y limolitas y Las Choicas (Klohn, 1960). En el ámbito de la abundantes niveles de rocas volcánicas

Figura 9. La Formación Auquilco en primer plano, en las nacientes del arroyo La Horqueta. En segundo plano, interdigitación entre las sedimentitas de la Formación Tordillo y las volcanitas de la Formación Río Damas. Volcán Maipo 25

andesíticas”. Dentro de la Hoja, en la zona del arro- derrames lávicos de edad coyocholitense. Late- yo La Horqueta, afluente sur del arroyo de Las ralmente pasa a los depósitos clásticos de la For- Lágrimas, y en el cajón del Burro se puede apre- mación Tordillo. ciar el pasaje lateral entre la Formación Tordillo y la Formación Río Damas, por neto incremento de Edad material de origen volcánico (Fig. 9). Las brechas polimícticas intercaladas entre los depósitos rojos De acuerdo con sus relaciones estratigráficas, típicamente tordillenses se caracterizan por englo- en particular por la interdigitación con las capas bar gran cantidad de clastos andesíticos porfíricos. clásticas tordillenses, se le asigna a la formación una También las coladas intercaladas son más frecuen- edad kimmeridgiana. tes y potentes en dirección oeste. Se trata de fenobasaltos olivínicos alterados, porfíricos, porta- Formación Tordillo (14) dores de grandes cristales de plagioclasa parcial- Areniscas, conglomerados, limolitas rojas, arcilitas. mente reemplazada por agregados arcilloso- Basaltos calcíticos, piroxeno y olivino serpentinizado. Las andesitas se caracterizan por poseer grandes Antecedentes fenocristales de plagioclasa (hasta 3 cm) en pasta vítrea. Se presentan asociadas con potentes bre- Gerth (1925) denominó inicialmente a esta uni- chas de flujo. El conjunto está afectado por altera- dad Areniscas Coloradas y Conglomerados del Malm. ción propilítica. Los diques andesíticos, de 15 m de Posteriormente, Groeber (1946) introdujo el término espesor, exhiben disyunción columnar perpendicu- de Tordillense, categorizado luego como Formación lar a las paredes. La roca presenta textura porfiroide Tordillo por Stipanicic (1969). con plagioclasa y mafitos totalmente alterados. Distribución areal Ambiente Posee amplia distribución areal. Aflora al sur del La secuencia sedimentaria de este complejo río Atuel en varios núcleos de anticlinales en los arro- se habría acumulado en el borde oriental de un yos Felipe y Paulino, y al norte del mismo río, a lo arco volcánico activo, en un sistema de abanicos largo del flanco oeste de la loma del Medio a modo aluviales coalescentes y ríos anastomosados de faja de rumbo meridiano. De modo discontinuo (Davidson, 1988). Sobre la base de considera- se reconocen afloramientos de la Formación Tordillo ciones de las facies es posible separar: 1) una en varios anticlinales en el arroyo homónimo y en región occidental caracterizada por sedimenta- playas del Jote. Hacia el norte, la unidad se presenta ción de tipo torrencial de pie de monte y corrien- integrando pliegues y láminas de corrimiento en la tes de barro al pie de una cordillera volcánica, región de las nacientes del río Diamante (arroyo bajo condiciones de clima árido a semiárido, 2) Bravo y ríos Barroso y Borbollón). Al norte del vol- una región oriental central, dominada por una se- cán Maipo, fajas tordillenses de orientación meridia- dimentación más fina de cuenca endorreica con na continúan hacia la Hoja vecina. Por último, esta facies lagunares temporales de tipo sabkha y 3) formación también aflora en la margen sur del río una región oriental marginal al cratón, particula- Diamante, en las proximidades del cerro de la Mala rizada por depositación clástica gruesa con áreas Dormida y en el arroyo Moro, afluente norte del río de proveniencia situadas al este (Davidson y Vi- Diamante. cente, 1973). Litología Relaciones estratigráficas Estos depósitos con espesores importantes (600 a Esta unidad se apoya en discordancia sobre 700 m) consisten en una alternancia de conglomerados los depósitos yesíferos de la Formación Auquilco polimícticos de color rojizo, areniscas en parte arcósicas y es cubierta en concordancia por las capas mari- y niveles de arcilitas y limolitas de color marrón rojizo. nas del Tithoniano inferior. Se presenta intruida En el ámbito de la Hoja, el Miembro Verde de la For- por pórfidos riodacíticos terciarios y en dirección mación Tordillo, compuesto por areniscas verdosas de al cerro Risco Plateado desaparece debajo de los ambiente lacustre, se halla escasamente representado. 26 Hoja Geológica 3569-I

Kozlowski y Baldi (1983) diferenciaron dos secciones: Relaciones estratigráficas una inferior constituida por vaques y una superior por conglomerados. Las vaques son de color morado a Al igual que la Formación Río Damas, su equiva- verde amarillento, con espesores de 400 m en el arroyo lente lateral, esta unidad se apoya en discordancia La Manga y 800 m en el cerro Amarillo. Los conglo- sobre la Formación Auquilco y es cubierta por los merados son de color morado a verde amarillento, grue- depósitos marinos de edad tithoneocomiana. En el río sos a muy gruesos y contienen clastos de volcanitas de Diamante y en el arroyo Moro se apoya en fuerte la Formación Choiyoi, evidenciando un área de aporte discordancia sobre la Formación Choiyoi, reflejando coincidente con el extremo sur de la actual Cordillera el comportamiento transgresivo que caracteriza al Frontal. Al sur del río Atuel, remontando el arroyo Grupo Mendoza en esta porción de la cuenca. Paulino, esta unidad alcanza un espesor de unos 500 m aproximadamente y está integrada por areniscas y Edad limolitas rojizas con lentes sabulíticas y conglomerádicas (Fig. 10). Los estratos psamíticos, de geometría tabu- Debido a la ausencia de restos fosilíferos, las lar, presentan estratificación planar y entrecruzada. En relaciones estratigráficas permiten asignar a esta los planos de estratificación suelen preservarse calcos unidad al Kimmeridgiano. de ondulitas y grietas de desecación. Al sur del río Dia- mante, cerca del cerro de la Mala Dormida, se identifi- Formación Vaca Muerta (15) can coladas basálticas intercaladas en las capas rojas Pelitas negras, calizas, margas, conglomerados y tordillenses. areniscas. Diabasas

Ambiente Antecedentes

El ambiente es de tipo continental, con cursos Esta formación fue definida por Weaver (1931) fluviales y abanicos aluviales conectados a depre- para referirse a un conjunto de pelitas negras y cali- siones de tipo playa-lake (Legarreta et al., 1993). zas, portadores de una rica fauna amonitífera, en la

Figura 10. Secuencia psamítico-conglomerádica de ambiente fluvial de la Formación Tordillo en el arroyo Paulino. Volcán Maipo 27

sierra de la Vaca Muerta, en la provincia del el norte de la provincia de Mendoza, en la extensión Neuquén. Leanza (1972) enmendó su sentido origi- aconcagüina de la Cuenca Neuquina, Sanguinetti y nal extendiéndola hasta la base de la Formación Ramos (1993) describieron una sucesión de basal- Mulichinco. tos olivínicos y rocas volcaniclásticas mesosilícicas correspondientes a la actividad de un arco externo. Distribución areal En el curso medio del arroyo de los Caballos se re- conocen filones capa de diabasa amigdaloide de 5 m Esta unidad se halla bien representada en la zona de potencia aproximadamente, intruyendo las pelitas de las nacientes del río Diamante, entre el río Barro- negras de la Formación Vaca Muerta. so y el límite con Chile, integrando anticlinales y sinclinales junto a las formaciones Tordillo y Agrio. Paleontología Otras zonas dentro de la Hoja donde aflora con menor extensión areal son: a lo largo de la costa sur El contenido de amonites ha permitido diferen- del río Diamante, entre lomas Bayas y la desembo- ciar sucesivas biozonas desde el Tithoniano al cadura del río Negro, en la costa norte del río Dia- Valanginiano para la porción mendocina de la Cuenca mante conformando una estructura ubicada al sur Neuquina (Leanza y Hugo, 1978; Riccardi et al., 1993): del Negro de las Mesillas, en una faja extensa y casi Virgatosphinctes mendozanus, Pseudolissoceras continua entre la loma del Medio y el río Negro y al zitelli, Aulacosphinctes proximus, Windhauseni- sur del río Atuel en el arroyo de los Caballos, cajón ceras internispinosum, Corongoceras alternans, del Burro y en un anticlinal situado al sur del arroyo Substeueroceras koeneni, Argentiniceras Paulino. noduliferum, Spiticeras damesi, Neocomites wichmanni, Olcostephanus curacoensis. En parti- Litología cular, para el arroyo de Las Yeseras / mina La Eloísa, Volkheimer (1978), basado en las investigaciones de En el arreglo de facies propuesto por Legarreta Leanza (1945), estableció la siguiente sucesión de et al. (1981, 1993), para la porción surmendocina de ammonites desde el Tithoniano inferior hasta el la Cuenca Neuquina se definen cuatro fajas parale- Valanginiano inferior: Pseudolissoceras zitelli, las al borde oriental de la cuenca: 1) facies de are- Windhauseniceras internispinosum, Kossmatia sp., niscas conglomerádicas y pelitas rojas, 2) facies de Corongoceras sp., Aulacosphinctes mangaensis, clásticos calcáreos, 3) facies de calizas (packstone Substeueroceras striolatissimum, Parodontoceras y boundstone) y 4) facies de pelitas oscuras y callistoides, Substeueroceras sp., Substeueroceras mudstones fosilíferos. En el ámbito de la Hoja es koeneni, Berriasella laxicosta, Thurmannites sp., posible reconocer litofacies proximales, siendo el Argentiniceras sp., Spiticeras gigas, Spiticeras único sector de la cuenca donde están bien expues- groeberi, Spiticeras damesi, Pseudoblanfordia tas las facies de borde del Grupo Mendoza y litofacies australis, Thurmanniceras sp., Neocomites distales. En la costa del río Diamante, las facies wichmanni y Olcostephanus curacoensis. proximales están constituidas por un conglomerado polimíctico basal de 60 m de espesor y areniscas Ambiente lítico-cuarzosas con intercalaciones calcáreas fosilíferas. En el arroyo de Las Yeseras, correspon- Las facies proximales corresponden a un am- diente a las facies distales, se distinguen 2 seccio- biente fluvial de baja a moderada sinuosidad y las nes: la sección inferior, de 220 m de espesor, está facies distales a un ambiente marino disaeróbico a constituida por una alternancia de boundstone anaeróbico con variaciones periódicas de profundi- algáceo, lutitas negras, mudstones arcillosos, dad (Legarreta et al., 1993). wackestones esqueléticos y limolitas calcáreas con nódulos discoidales de micrita. La sección superior, Relaciones estratigráficas de 100 m de potencia, está formada por una alter- nancia de arcilitas limosas castaño amarillentas con A lo largo del margen sur del río Diamante, en- vaques calcáreos esqueléticos y wackstones are- tre la desembocadura del arroyo Las Aucas y el arro- nosos esqueléticos. Localmente, la intercalación de yo Moro y en el margen norte, al sur del cerro Ne- bancos de tobas y coladas lávicas indica actividad gro de las Mesillas, la Formación Vaca Muerta ma- volcánica contemporánea con la sedimentación. En nifiesta un carácter transgresivo apoyándose en dis- 28 Hoja Geológica 3569-I

cordancia sobre los terrenos paleozoicos de la Cor- La Formación Agrio presenta una litología y un dillera Frontal. En dirección sur y oeste, las pelitas arreglo de facies muy similares a los descriptos para negras tithonianas descansan concordantemente so- la Formación Vaca Muerta. Las facies proximales bre los depósitos clásticos de la Formación Tordillo. o de borde, bien expuestas en la zona de las lomas A su vez, son cubiertos en concordancia por los de- Bayas, consisten en areniscas calcáreas y limolitas pósitos marinos de la porción superior del Grupo arenosas amarillentas, con restos fragmentarios de Mendoza. En la zona de las nacientes del río Dia- bivalvos y anélidos coloniales (Fig. 12). Al este y mante la unidad se presenta intruida por diques y norte de las lomas Bayas se produce el pasaje a filones capas asociados a cuerpos intrusivos de edad clásticos rojos de origen fluvial. En la zona distal la terciaria. unidad puede ser separada en un Miembro inferior y otro superior, con el Miembro Avilé en el medio. Edad Los dos miembros son similares litológicamente, constituidos por alternancia de limoarcilitas, El abundante contenido amonitífero de la For- limoarcilitas calcáreas y algunos bancos de mación Vaca Muerta ha permitido establecer mudstone con pelecípodos e impresiones de biozonas que documentan el inicio de la transgresión amonites. En el arroyo de las Yeseras, el Miembro en el Tithoniano inferior, extendiéndose hasta el inferior alcanza unos 170 m de espesor mientras Valanginiano inferior. que el Miembro superior no supera el centenar de metros (Kozlowski y Baldi, 1983). El Miembro Formación Chachao y Formación Agrio (16) Avilé, de 10 m de espesor, está formado por limolitas Calizas, margas, calcarenitas, pelitas y areniscas calcáreas de color oliva pálido con intercalación de delgados niveles de arenisca. Antecedentes Paleontología Boehm (1938) llamó Calizas con Exogyra al banco calcáreo dispuesto por encima de las pelitas La Formación Chachao presenta una rica fauna negras tithonianas, posteriormente, fueron denomi- de amonites y bivalvos. Para los primeros cabe desta- nadas Formación Chachao por Legarreta y car la Asociación de Olcostephanus curacoensis, Kozlowski (1981). La Formación Agrio fue definida incluyendo además Olcostephanus spp.; por Weaver (1931) en las márgenes del río homóni- Karakaschiceras attenuatum (Behrendsen), mo, en la provincia del Neuquén. Leopoldia sp. y Lissonia riveroi (Liss.). La fauna de bivalvos contiene como elementos característicos, en Distribución areal su parte inferior, a Aetostreon latissimun, Grammatodon mendozanus, Ceratostreon minos, La distribución de sus afloramientos es prác- Eriphyla lotenoensis, Aphrodina quintucoensis, ticamente igual a la de la Formación Vaca Muer- Sphaera koeneni, Panopea dupiniana, Pinna ta, con facies de borde en la zona del río Diaman- robinaldina, y en su parte superior, además de te (lomas Bayas) y facies más distales en la faja Aetostreon latissimun, Ptychomya koeneni, Trigonia situada entre la loma del Medio y el río Negro. carinata, Panopea gurgitis, Myoconcha También se reconoce la presencia de la Forma- transatlantica, Eriphyla argentina, Pterotrigonia ción Agrio en la zona de las nacientes del río Dia- coihuicoensis (Riccardi et al., 1993). La Formación mante. Agrio es portadora de una rica fauna amonitífera, la cual ha permitido establecer tres biozonas (Gerth, 1925, Litología en Riccardi et al., 1993): Lyticoceras pseudoregale, Holcoptychites neuquensis y Crioceratites andinus. La Formación Chachao está constituida casi exclusivamente por packstones esqueléticos de Ambiente color gris oliva claro con restos de pelecípodos, amonites, gastrópodos, equinodermos, anélidos y La Formación Chachao corresponde a un ambien- corales (Fig. 11). Su espesor no supera los 30 me- te de rampa carbonática. Para la Formación Agrio, las tros. En la margen sur del río Diamante el banco facies distales corresponden a un ambiente marino de calcáreo aparece atravesado por diques de diabasa. aguas calmas de tipo disaeróbico hasta anaeróbico, con Volcán Maipo 29

Figura 11. Formación Chachao. Packstones esqueléticos en el arroyo La Manga.

Figura 12. Formación Agrio. Packstone bioclástico con predominio de restos de gasterópodos en la comarca de las lomas Bayas. 30 Hoja Geológica 3569-I

ocasionales variaciones de profundidad. La asociación rreado, Troncoso y La Tosca) y Formación Rayoso, de pelitas oscuras y calizas micríticas fosilíferas sugie- integradas en el Grupo Rayoso (Legarreta y re un ambiente de aguas calmas y profundas, variando Gulisano, 1989). Volkheimer (1978) optó por con- desde plataforma profunda hasta talud. Para las facies servar la denominación de Formación Salas (“Sa- proximales se infiere un medio marino somero, de aguas las Sandstone”, Lahee, 1927) para referirse a un agitadas, sujeto a la influencia intermareal y con desa- potente conjunto de conglomerados, areniscas y rrollo de fuerte corrientes tractivas que producen limolitas rojas que se disponen por encima de la encauzamientos localizados (Legarreta et al., 1981). Formación Huitrín.

Relaciones estratigráficas Distribución areal

Ambas unidades se apoyan en concordancia so- Esta unidad presenta una distribución similar a bre las distintas facies de la Formación Vaca Muer- la del Grupo Mendoza, a modo de faja submeridiana ta y son cubiertas mediante discordancia por la For- desde la loma del Medio hasta el curso medio del río mación Huitrín. La Formación Chachao es conside- Diamante. Debido a la escala de trabajo se optó por rada como equivalente lateral de la Formación Lin- mapear la unidad con categoría de grupo. Al sur y dero de Piedra, descripta en subsuelo. norte del río Negro se presenta estructurada junto a las capas del Grupo Neuquén (Fig. 13). Entre el ce- Edad rro La Brea y las lomas Bayas, las secciones evaporíticas tienen importante desarrollo. Al norte La Formación Chachao es asignada al Valanginiano del río Diamante aflora principalmente en el cerro superior-Hauteriviano inferior de acuerdo a la biozona Plomo, al sur del río Atuel lo hace en un sinclinal de Olcostephanus curacoensis, mientras que las tres ubicado al sur del arroyo Felipe. biozonas de amonites establecidas para la Formación Agrio permiten ubicarla en el lapso Hauteriviano- Litología Barremiano inferior (ver Paleontología). La unidad se caracteriza por una notable parti- Formación Vaca Muerta, Formación cipación de evaporitas, anhidrita y sal con respecto Chachao y Formación Agrio (17) a los sedimentos de origen marino y por un incre- Pelitas negras, calizas, margas, calcarenitas, conglo- mento de depósitos clásticos hacia el techo. merados y areniscas Tïpicamente, las capas huitrinianas están compues- tas por yeso, con intercalaciones de calizas En el sector comprendido entre el cerro Media dolomíticas y en algunos casos areniscas grises. Luna y el puesto El Chacayal y al norte y sur del Según Kozlowski y Baldi (1983), es posible diferen- volcán Maipo, la reducida dimensión de los aflora- ciar en la zona, entre los ríos Diamante y Atuel, los mientos o en algunos casos, la falta de estudios de- tres miembros de la Formación Huitrín. El Miembro tallados, dificultaron el mapeo de estas formaciones, Chorreado abarca una parte inferior de pelitas y por lo cual, se optó por integrarlas en una única uni- calizas litoclásticas, de 45 m de espesor y una parte dad indiferenciada. superior rica en yeso. El Miembro Troncoso, cuyo espesor alcanza 200 m en el arroyo La Manga, pre- 2.3.4. CRETÁCICO INFERIOR-SUPERIOR senta una distribución más restringida y al igual que para el miembro anterior se diferencian dos seccio- GRUPO RAYOSO (18) nes, una inferior de pelitas verdes y yeso que pasan Yeso, calizas, areniscas, pelitas, conglomerados y a pelitas rojas hacia el borde y una superior formada limolitas rojas exclusivamente por yeso. El Miembro La Tosca, con un espesor de 20 m se apoya sobre el Miembro Antecedentes Troncoso en las posiciones más internas y sobre el Miembro Chorreado en el borde de la cuenca. Su Las tradicionales denominaciones de litofacies más frecuente la constituyen los Huitriniano, Yeso de Transición y Diamantiano de wackestones y packstones peletoidales y en forma Groeber (1946, 1947) han sido reemplazadas por subordinada grainstones oolíticos y boundstones las de Formación Huitrín con tres miembros (Cho- criptoalgáceos en la zona del río Diamante. Cabe Volcán Maipo 31

resaltar la presencia de asfalto asociado a los depó- sitos evaporíticos en varias localidades, como por ejemplo en las minas Eloísa, América y Hullera y en los cerros La Brea y Alquitrán, los cuales compo- nen verdaderos manaderos de asfalto. La Formación Rayoso corresponde a un episo- dio de sedimentación terrígena de capas rojas, el cual representa la regresión definitiva de los mares mesozoicos. Abarca dos litofacies: una evaporítica y la otra clástica, consideradas tradicionalmente como Huitriniano y Diamantiano respectivamente (Groeber, 1946). La litofacies de evaporitas, compuesta por anhidrita, está íntimamente ligada a las pelitas rojas y verdes y a calizas criptoalgáceas, con desarrollo areal en el sector occidental, mientras que hacia el este pre- senta mejor expresión la litofacies de clásticos rojos, en la cual participan vaques que alternan con conglome- rados y areniscas gruesas. Alcanza un espesor de 200 metros. Volkheimer (1978) le asignó a las capas referi- das a la Formación Salas hasta 1.150 m de espesor en la zona de Los Toscales y cerca de 500 m en el arroyo Paulino, al sur del río Atuel. El mismo autor destacó el carácter cíclico de la sedimentación, identificando has- ta 5 ciclos granodecrecientes en el desarrollo de un mismo perfil.

Paleontología

Los restos fósiles huitrinianos corresponden a bivalvos y gastrópodos (Corbicula sp., Diplodon sp., Modiola sp., Diplodon sp., Melania macrochilinoides). Los estudios palinológicos (Volkheimer y Salas, 1975) permi- tieron diferenciar dos zonas, una inferior que contiene morfoespecies como Classopollis spp., Coptospora spp. y Cicatricosisporites australiensis y una superior que contiene el primer polen retipilado de angiospermas ( Huitrinipollenites transitorius, Stephanocolpites mastandreai, Retitricolpites sp. y Tricolpites sp.). La Formación Rayoso, en cambio, no contiene macrofósiles, solo acritarcos, polen y esporas, dinoflagelados y Perfil Los Toscales. Formación Rayoso y Grupo Neuquén intruidos por domos andesíticos de edad terciaria. Perfil Los Toscales. foraminíferos.

Ambiente Figura 13. La Formación Huitrín refleja un ciclo de cambio en el régimen hidrológico de la cuenca, el cual se ex- presa por una restricción notable en el área de acu- mulación y por la aparición abrupta de evaporitas. Los miembros Chorreado y La Tosca pertenecen a un ambiente marino somero, de salinidad anormal y el Miembro Troncoso corresponde a un ambiente hipersalino y continental. La Formación Rayoso re- 32 Hoja Geológica 3569-I

presenta un ambiente continental de tipo barreal a flu- por la Cordillera Frontal y al oeste por una línea ima- vial para los clásticos rojos y un ambiente marino ginaria que parte de la loma del Medio hacia el río hipersalino para las evaporitas. Las capas de la For- Barroso, línea que corresponde a un corrimiento mación Rayoso registran una marcada expansión de mayor que pone en contacto los estratos la cuenca en dirección al antepaís, ya que exceden el supracretácicos con aquellos de edad jurásica. Al borde depositacional del Albiano-Eocenomaniano has- norte, los afloramientos neuquenianos desaparecen ta sobreponerse a la serie del Neocomiano y even- por debajo de las volcanitas huincalitenses. Otro grupo tualmente a las volcanitas pérmicas del Grupo Choiyoi de afloramientos se sitúa al este del cordón del (Legarreta et al., 1993). Carrizalito, por ejemplo en las nacientes del arroyo homónimo. Relaciones estratigráficas Litología Este grupo se dispone en relación discordante so- bre las sedimentitas mendocianas y es cubierto por las Litológica y genéticamente este grupo es muy capas rojas del Grupo Neuquén. En los sectores de semejante a la Formación Rayoso. Corresponde a borde de cuenca, los grupos Rayoso y Neuquén se una sucesión continental de color rojo de varios cen- hallan separados por la discordancia intersenoniana, de tenares de metros de potencia. Las litofacies más carácter regional, que se pierde hacia el sector central frecuentes pertenecen a areniscas y conglomera- de la cuenca, resultando difícil establecer el pase dos con estratificación en capas gruesas, laminación formacional salvo por identificación de asociaciones paralela y entrecruzamiento planar de mediana es- distintivas de ostrácodos (Yrigoyen, 1979). cala. Otro tipo de facies está dado por capas de are- niscas con intercalación de fangolitas con nódulos Edad carbonáticos. En algunos sectores, como en el arro- yo la Carpa, se intercalan delgados niveles de yeso. La edad de la Formación Huitrín se halla acotada por bivalvos y gastrópodos de edad barremiana y Ambiente palinomorfos aptianos. Debido a la ausencia de fósiles diagnósticos, la edad de la Formación Rayoso es difícil Corresponde a un ambiente aluvial con una zona de establecer, aceptándose una edad albiana hasta qui- de borde caracterizada por la coalescencia de cana- zás eocenomaniana por su contenido en palinomorfos les fluviales que desaguaban a través de avenidas (Legarreta, 1985, en Legarreta et al., 1993). mantiformes de tipo efímero. Los fangos rojos se habrían acumulado por decantación en zonas de 2.3.5. CRETÁCICO SUPERIOR intercanal y en cuerpos de agua temporarios locali- zados hacia la parte distal del sistema (Legarreta et GRUPO NEUQUÉN (19) al., 1993). Conglomerados, areniscas y pelitas rojas Relaciones estratigráficas Antecedentes En la zona entre los ríos Diamante y Atuel la Groeber (1946) incluyó a estos depósitos en su relación con el Grupo Rayoso es de ciclo Diamantiano, en tanto que Volkheimer (1978) paraconcordancia. En ciertas localidades al este de los denominó Formación Salas, mientras que Legarreta la Cordillera Frontal se apoya directamente sobre el y Gulisano (1989) los asimilaron a la Mesosecuencia sustrato choiyoilitense. Hacia arriba el Grupo o Grupo Neuquén, integrado por tres formaciones: Río Neuquén es cubierto discordantemente por los sedi- Limay, Río Neuquén y Río Colorado. mentos del Grupo Malargüe.

Distribución areal Edad

Esta unidad presenta amplia distribución al nor- Debido a la ausencia de registro fosilífero en la te de la cuchilla de la Tristeza. Los afloramientos se zona, la edad del Grupo Neuquén queda acotada al disponen en sucesivas láminas de corrimiento de lapso Cenomaniano-Santoniano de acuerdo a sus orientación submeridiana en el sector limitado al este relaciones con las unidades infra y suprayacentes. Volcán Maipo 33

Formación Saldeño (20) intermareal, mientras que la asociación de facies B Calizas, limolitas y areniscas corresponde a un ambiente de depositación intermareal superior a supramareal. Antecedentes Relaciones estratigráficas Polanski (1957) definió a esta unidad y ubicó su perfil tipo en el ambiente de la Cordillera Frontal, en el En la zona, la unidad se presenta muy Real Bayos o Saldeño y extendió su distribución desde tectonizada y cubierta por volcanitas terciarias. En el área del río Palomares hasta el área de la laguna del el área del arroyo Papal se observa una relación de Diamante. Yrigoyen (1979) describió a esta formación concordancia o paraconcordancia con los depósitos en las cabeceras del alto río Tunuyán, en tanto que de la Formación Pircala. Tunik (1999) realizó una caracterización de sus facies. Edad y correlación Distribución areal Sobre la base de las relaciones estratigráficas, se En el área abarcada por la Hoja Volcán Maipo, le asigna una edad cretácica superior (Polanski, 1957; esta unidad está poco representada, ya que su mejor Ramos et al., 1999). Correspondería a un equivalente desarrollo se halla en la Hoja vecina del norte. Al de la Formación Roca, ampliamente extendida en el norte de la laguna del Diamante, en los arroyos del sur de la provincia de Mendoza y en Neuquén. Durazno, Salinillas y al sur del arroyo Papal se reco- nocen afloramientos asignables a esta formación. 2.4. MESOZOICO-CENOZOICO

Litología 2.4.1. CRETÁCICO SUPERIOR - PALEÓGENO En los perfiles mejor desarrollados al norte de la Hoja, esta unidad alcanza un espesor máximo de GRUPO MALARGÜE (21) 250 m y es posible dividirla en tres miembros (Ra- Calizas, conglomerados, areniscas, pelitas y tobas mos et al., 1999): Miembro Conglomerado basal, de 50 m de espesor, Miembro Pelitas y Tobas, com- Antecedentes puesto por pelitas y arcilitas de color rojizo con intercalaciones de delgados bancos calcáreos y Groeber (1947) denominó Rocanense a las ca- Miembro Calizas y Tobas, que es el más potente y pas calcáreas fosilíferas que afloran a ambos lados mejor representado y está integrado por bancos de la cuchilla de la Tristeza. Volkheimer (1978) con- calcáreos con intercalaciones de delgados niveles servó el término Formación Malargüe de Gerth (1931) de areniscas y tobas. Tunik (1999) describió dos aso- para los depósitos continentales a marinos de edad ciaciones de facies: A) pelitas masivas y laminadas maastrichtiana, separándola de la Formación Pircala- intercaladas con bancos de areniscas finas masivas y Coihueco del Paleoceno-Eoceno. Más tarde, los tér- en forma subordinada niveles de mudstones y tobas minos inferiores de la Formación Malargüe fueron y B) mudstones masivos y laminados, wackestones asimilados a la Formación Loncoche, reservando la con concreciones, yeso y bancos estromatolíticos su- denominación de Formación Roca para los depósi- bordinados. tos calcáreos de origen marino de la parte superior (Legarreta et al., 1989). Legarreta y Gulisano (1989) Paleontología agruparon en su Mesosecuencia o Grupo Malargüe a cuatro unidades formacionales: Loncoche, Roca, Hasta el momento se han hallado algunas trazas fó- Pircala y Coihueco. Kozlowski y Baldi (1983) des- siles: Tripanites sp. y Thalassinoides sp. y restos de cribieron la unidad en la zona del arroyo Las Aucas conchillas (Tunik, 1999; Raggio, en Ramos et al., 1999). y de la cuchilla de la Tristeza.

Ambiente Distribución areal

De acuerdo con Tunik (1999), la asociación de Los mejores afloramientos de esta entidad se ha- facies A corresponde a un ambiente submareal a llan en la zona del arroyo de Las Aucas integrando 34 Hoja Geológica 3569-I

estructuras homoclinales. Al norte del tramo superior nan sistemas fluviales con lacustres de aguas salo- del río Diamante en sinclinales al oeste del cerro Plo- bres y barreales. La Formación Roca pertenece a mo. Al este del cordón del Carrizalito entre los arroyos un ambiente marino de plataforma somera, vincu- la Faja y El Carrizalito y en los flancos oeste y este de lada con la transgresión atlántica. Las característi- la cuchilla de la Tristeza. Debido a la escala de trabajo cas de las formaciones Pircala y Coihueco sugie- se optó por mapear la unidad con categoría de grupo. ren un ambiente continental, de barreales y cuer- pos lagunares someros, temporariamente interrum- Litología pido por breves inundaciones marinas someras (Legarreta et al., 1993). Para la Formación Loncoche se distinguen dos sec- ciones: la inferior integrada por conglomerados y are- Relaciones estratigráficas niscas gruesas en la base, seguidas por areniscas ver- de azuladas, arcilitas, limoarcilitas, areniscas Esta unidad se apoya en discordancia sobre el esqueléticas, grainstones oolíticos de color castaño y Grupo Neuquén y es cubierta en discordancia por delgadas intercalaciones de yeso. La sección superior depósitos sedimentarios (formaciones Tristeza y está constituida por limoarcilitas castaño rojizas y are- Loma Fiera) y volcánicos (Formación Coyocho) de niscas finas. Su espesor total es de 116 m en el arroyo edad terciaria. Es intruida por cuerpos hipabisales de Las Aucas y 150 m al sur de la cuchilla de la Triste- de la Formación Huincan. za (Kozlowski y Baldi, 1983). En el arroyo de las Aucas suelen aparecer geodas y concreciones de calcedonia Edad y correlación dispersas entre las arcillitas y limolitas rojo-violadas, que estarían relacionadas con procesos pedogenéticos La ausencia de restos fosilíferos diagnósticos en la (Volkheimer, 1978). La Formación Roca está compues- zona impide precisar la edad de esta unidad. Por corre- ta por calizas esqueléticas, de tipo packstone y lación con unidades equivalentes a la Formación wackestone, con alternancia de limolitas calcáreas y Loncoche del sur de la provincia de Mendoza y regiones areniscas coquinoideas. Posee un contenido faunístico aledañas de La Pampa y norte de Neuquén, que contie- rico en bivalvos, corales, briozoarios, anélidos y nen restos de inocerámidos, la base de la unidad es asig- foraminíferos. Su espesor es de 31 m en el arroyo de nada al Campaniano. La Formación Roca y equivalen- Las Aucas. La Formación Pircala y la Formación tes son ubicados en el lapso Maastrichtiano-Daniano por Coihueco se tratan a menudo en forma conjunta ya la presencia de microfósiles diagnósticos, tales como que resulta difícil su separación. Consisten esencial- Guembelitria cretacea (Maastrichtiano inferior a me- mente en sedimentos clásticos finos con participación dio), Eubaculites argentinicus (Maastrichtiano supe- subordinada de material calcáreo y tobas intercaladas rior) y Globoconusa daubjerjensis (Daniano). Por úl- de variados y vivos colores. La Formación Pircala está timo, debido a la ausencia de fósiles en los estratos de constituida por limolitas y vaques con abundante con- Pircala-Coihueco, su asignación temporal está basada tenido piroclástico de 300 m de espesor. La Formación en la ubicación estratigráfica. De acuerdo con Coihueco está compuesta por vaques y limoarcilitas de Volkheimer (1978), el límite superior se extendería hasta color verde pálido con espesores cercanos a los 100 el Eoceno, con reservas. metros. 2.5. CENOZOICO Paleontología 2.5.1. PALEÓGENO En el arroyo de las Aucas se han hallado restos de pelecípodos y gasterópodos con variado grado de con- 2.5.1.1. Oligoceno servación (Turritella sp., Ostrea sp., Venericardia sp., Cardita beaumonti, Trigonia gerthi, Turritella cf. Formación Molle (22) sylviana, Gryphaea mendozana) (Volkheimer, 1978). Basaltos, andesitas, dioritas y granitos

Ambiente Antecedentes

La Formación Loncoche corresponde a un am- Corresponde a las “porfiritas labradoríferas” de biente de sedimentación complejo, en el cual alter- Gerth (1931) y a lo que Groeber (1946, 1947) denominó Volcán Maipo 35

Andesita Molle o Andesita 0, asignándola al Oligoceno. asignables a la actividad del cerro Risco Plateado En el ámbito de la Hoja Cerro Sosneado, Volkheimer de la Formación Coyocho. (1978) ubicó, dentro de esta formación, a una serie de diques y cuerpos intrusivos como el del cerro Chivato, al Edad y correlaciones sur del río Atuel. Sin embargo, recientes dataciones de Nullo et al. (1997) permitieron reasignar esos cuerpos al Groeber (1946, 1947) le atribuyó a esta forma- evento volcánico huincanlitense. ción una edad oligocena superior, la cual sería correlacionable con la datación obtenida en la zona Distribución areal de la mina Hierro Indio (K/Ar sobre anfíbol= 37 ± 20 Ma, Linares y González, 1990), ubicada inmedia- Los afloramientos pertenecientes a esta unidad tamente al sur de la Hoja. Debido a la imprecisión se hallan restringidos al cuadrante sudoeste de la Hoja, geocronológica de la unidad, se efectuó una datación principalmente en la zona del límite con Chile. En par- K/Ar sobre roca total, la que dio un valor de 35 ± 1 ticular, se reconocen rocas ígneas mollelitenses en la Ma, lo cual confirmaría su edad oligocena. zona del cerro Las Choicas, en el cajón del Burro, sur del cajón del Perdido y en el portezuelo de Las Lágri- 2.5.2. PALEÓGENO-NEÓGENO mas (Fig. 16). Este es el último afloramiento en terri- torio argentino y en Chile pasa a la base del cerro 2.5.2.1. Oligoceno superior- Mioceno inferior Palomo. Groeber (1947) le otorgó a esta formación una mayor distribución areal. Formación Palaoco (23) Pórfidos dacíticos, basaltos Litología Antecedentes Yrigoyen (1979) describió a esta unidad como in- tegrada por facies volcánicas y plutónicas. Las prime- Esta denominación fue acuñada por Groeber ras abarcan andesitas hornblendíferas, aglomerados (1947) para definir un evento volcánico de edad andesíticos y en menor proporción basaltos. Las se- miocena caracterizado por una monótona sucesión gundas corresponden a intrusiones dioríticas, de coladas basálticas con intercalaciones de tobas adamellíticas y graníticas, que suelen constituir relieves dacíticas, tal como está expuesto en la sierra de elevados. Según Groeber (1947), los términos efusivos Palaoco en el sur de la provincia de Mendoza. Este incluyen mantos y brechas de basalto, en parte alcalino, mismo autor introdujo el término Domuyolitense para y andesitas hornblendíferas, siendo las facies intrusivas abarcar la facies intrusiva de composición de composición equivalente (ej.: diorita Las Choicas). adamellítico-dacítica cuya localidad tipo es el volcán El Mollelitense efusivo se encuentra con gran desarro- Domuyo, en la provincia del Neuquén. Sruoga et al. llo entre el límite sur de la Hoja y el cajón del Perdido (1998a) realizaron un reordenamiento estratigráfico. donde, en el cerro Iglesia, adquiere más de 2.000 m de espesor. El cordón del límite con Chile está compuesto Distribución areal por el Mollelitense intrusivo desde el paso de las Da- mas hasta el portezuelo de Las Lágrimas, mostrando Los afloramientos de mayor extensión areal están allí sus torres y agujas características. En el cajón del situados en el área de: cerro de Los Pantanos (Fig. 14) Burro, espesas secuencias lávicas del orden de cente- - cerros Amarillos, al sur del río Atuel, en la sierra Ne- nares de metros se hallan plegadas. Los términos más vada (Fig. 15), en las nacientes del río Diamante, en los frecuentes son fenobasaltos alterados que contienen picos Bayos, al sur de la caldera Diamante y en el ce- plagioclasa (reemplazada por agregados sericítico-ar- rro Blanco, en la sierra del Atuel. Núcleos de menores cillosos), piroxeno y olivino serpentinizado, rodeado por dimensiones, que corresponderían a apófisis de un cuer- gruesos bordes de magnetita. po mayor de dimensiones batolíticas, se reconocen al sudoeste de los cerros Amarillos. Relaciones estratigráficas Litología Presenta una relación discordante sobre los de- pósitos del Grupo Mendoza. Es intruida por pórfidos Según Groeber (1947), en el ámbito de la Hoja riodacíticos y cubierta localmente por coladas la Formación Palaoco está representada por un 36 Hoja Geológica 3569-I

Figura 14. Cerro de los Pantanos, domo exógeno de la Formación Palaoco.

Figura 15. Intrusivo riodacítico de la Formación Palaoco, en sedimentitas pelíticas negras de la Formación Vaca Muerta en el arroyo de las Minas, sierra Nevada. Volcán Maipo 37

complejo magmático que incluye facies intrusivas del cerro Risco Plateado, pequeños cuerpos y facies volcánicas (lávicas y piroclásticas). Cuer- intrusivos atraviesan las rocas asignadas al pos intrusivos adamellítico-dacíticos hasta graníti- Mollelitense. co-liparíticos afloran al sur del río Atuel frente al cerro Sosneado y al sur del arroyo de Las Lágri- Edad y correlaciones mas inferior. Según este autor, los depósitos de tobas ignimbríticas blancas situadas al sur del Atuel, frente Se ha obtenido una edad K/Ar sobre biotita a las termas del Sosneado, estarían relacionados de una muestra proveniente del pórfido riodacítico con los cuerpos intrusivos adamellíticos. Las fa- del cerro de los Pantanos, que arrojó un valor de cies lávicas se hallan en el cerro Malo, representa- 28±1 Ma, correspondiente al Oligoceno superior. das por gruesas coladas de basalto y basandesita, En la sierra de Palaoco - Río Grande, Kozlowski que alcanzan hasta 600 m de potencia y coronando et al. (1987) reconocieron una interdigitación la- los cerros Amarillos (Fig.16). En la zona del cerro teral entre las formaciones Palaoco y Loma Fie- Blanco, Volkheimer (1978) describió cuerpos ra, con abundante contenido piroclástico y varios intrusivos y diques andesíticos de probable filiación episodios efusivos. De aquí proviene una edad de palaocolitense. De acuerdo con la reinterpretación 17±2 Ma (Mina Theys) la cual podría considerar- de Sruoga et al. (1998a), se engloba únicamente se representativa para la unidad volcánica en dentro del evento palaocolitense a una serie de cuestión. Las rocas palaocolitenses serían cuerpos subvolcánicos y facies hipabisales aso- correlacionables tentativamente con la parte basal ciadas de composición dacítica a riodacítica. To- de la Formación Farellones en Chile, una unidad dos estos cuerpos comparten las siguientes ca- que alcanza 2.400 m de espesor, compuesta por racterísticas: a) volumen de magma importante a coladas andesíticas y depósitos piroclásticos in- juzgar por las dimensiones aflorantes, del orden tercalados de edad miocena. De acuerdo a estas de centenares de km2, b) alto nivel de emplaza- consideraciones, la Formación Palaoco es asig- miento (subvolcánico a volcánico) en forma de nada al lapso Oligoceno superior-Mioceno infe- stocks subvolcánicos, diques, filones capa y domos rior. exógenos, con texturas que exhiben mayor afini- dad volcánica que plutónica, aunque se advierte 2.5.3. NEÓGENO un pasaje de rocas porfíricas con pastas microgranosas a rocas granosas hipidiomorfas en 2.5.3.1. Mioceno medio función de los diferentes gradientes térmicos es- tablecidos durante el enfriamiento del cuerpo, c) Formación Papal (24) contactos intrusivos con sedimentitas meso a Yeso, limolitas suprajurásicas, d) composición modal dacítica a riodacítica con anfíbol y biotita y diferenciados Antecedentes aplíticos leucocráticos y e) alteración hidrotermal de tipo arcilloso-sericítica y mineralización Esta unidad fue descripta por Baulíes (1952), metalífera (Cu-Fe) de tipo diseminado y vetiforme Polanski (1964a) y Herrero Ducloux e Yrigoyen (Sruoga et al., 1998a). La facies lávica de com- (1952) en la zona del río Palomares. Los autores posición basáltica, similar a la descripta en el área citados en último término designaron con el nombre tipo, es reasignada en este trabajo al de Papalense a una secuencia constituida en sus dos Cochoyolitense. terceras partes por yeso, aflorante en las inmedia- ciones del cerro Papal y le asignaron una edad Relaciones estratigráficas miocena inferior. Recientemente, Pérez et al. (1997) revisaron la posición estratigráfica de esta unidad y Su relación es intrusiva en todos los casos, cor- la vincularon con la ingresión paranaense, de vasto tando los estratos jurásico-cretácicos, principalmen- alcance regional. te los estratos yesíferos de la Formación Auquilco, como en el caso del cerro de los Pantanos, las Distribución areal pelitas negras de la Formación Vaca Muerta como en sierra Nevada, o las formaciones Río Damas- Esta formación muestra buen desarrollo al norte Tordillo en el área del cajón del Burro. Al sudoeste de la Hoja y penetra escasamente, reconociéndose 38 Hoja Geológica 3569-I

REFERENCIAS PLIOCENO Fase Diaguita N + + Huincanlitense + ab Fase Quechua MIOCENO + Palaocolitense + + Vn. Maipo a b c Fase Pehuenche + + Mollelitense Lag. + Fase Incaica OLIGOCENO ab Diamante a: Facies efusiva, b:Facies intrusiva, c: con alt. hidrotermal

70º 00´

e

t

Río Borbollón n

a

m a

i

D í o R

Ao. Barroso Sa. Nevada

Ao. Bravo Río Diamante 34º 50´ + Co. Guanaquero CHILE Co. de la Vn. Overo Mala Dormida + + + Sierra del + +

+ Perdido + + + + + + + + + + + + Co. Malo + + + Co. Media + + Luna + + + + + + + + + + + + + Ao. Colorado Co. Blanco + + + + + + + + + Ao. de la Manga Ao. Las Lágrimas + + + + + Co. Laguna + + + + + Cerros Co. Sosneado + . + . Amarga Amarillos...... Ao. Blanco . . + + . . + + + . +++ + . + + Co. Los + . . + Co. de los Pantanos + + + + Río Atuel + + + Buitres + + + + + Po. De las + + + + + + Damas + + + Co. Las Co. Risco + + + Plateado Choicas + + + + + + + Co. 0 2,5 5 7,5 km + Ao. Paulino + + Chivato

Figura 16. Distribución del volcanismo de edad terciaria. Volcán Maipo 39

afloramientos asignables a la misma en las nacien- Relaciones estratigráficas tes del arroyo Duraznito, en el cajón de las Overas, en el cerro Papal y en el arroyo homónimo, al norte Esta unidad se apoya en discordancia angular sobre de la laguna del Diamante. los estratos plegados de edad mesozoica. Se presenta intruida por stocks y filones capa de edad huincanlitense Litología y es cubierta por basaltos de edad chapualitense inferior (Herrero Ducloux e Yrigoyen, 1952). Herrero Ducloux e Yrigoyen (1952) dividieron a esta unidad , de base a techo, en cuatro grupos: un Edad y correlaciones Grupo Basal constituido por margas grises, rojizas y pardo verdosas, con areniscas lajosas, un Grupo Sobre la base de correlaciones estratigráficas con Yesoso inferior compuesto por bancos de yeso con niveles equivalentes situados en San Juan y en el río arcillas arenosas intercaladas, un Grupo Arcilloso Grande de Mendoza, Pérez et al. (1997) le asignaron Intermedio, de color rojizo, con areniscas tobáceas a la Formación Papal una edad miocena media. grises y un Grupo Yesoso superior. La secuencia alcanza un espesor de 350 metros. Pérez et al. (1997) Formación Agua de la Piedra (25) describieron el perfil tipo de la Formación Papal en Conglomerados, areniscas y limolitas la ladera oeste del cerro Yeso, al norte de la Hoja. Allí, la secuencia se inicia con un miembro inferior Antecedentes constituido por fangolitas yesíferas finamente lami- nadas de color rojizo y verde amarillento, con nive- Criado Roque (1950) describió los Estratos de Agua les estratificados de yeso nodular. Siguen potentes de la Piedra en el sur de la provincia de Mendoza. Pos- bancos de yeso concrecional de color rojizo y un teriormente Volkheimer (1978) formalizó la unidad como miembro de arcilitas con intercalaciones de yeso. Formación Agua de la Piedra. Gorroño et al. (1979) La secuencia culmina con un miembro superior for- aportaron datos paleontológicos con el fin de datar los mado por yeso finamente laminado con comienzos de la orogenia Ándica. Yrigoyen (1993) rea- intercalaciones de fangolitas rojizas, yeso cristalino lizó una síntesis y puesta al día del conocimiento de los con abundantes concreciones y yeso fibroso. Cerca depósitos sinorogénicos en la provincia de Mendoza. del techo se intercalan dos coladas andesíticas. El Combina et al. (1993, 1994, 1997) contribuyeron al estu- espesor medido es de 340 metros. dio sedimentológico y paleoambiental de la unidad y pro- pusieron su reubicación cronoestratigráfica. Ambiente Distribución areal De acuerdo con Pérez et al. (1997), correspon- de a un sistema lagunar de aguas someras Esta unidad se extiende principalmente al sur de la hipersalinas sometidas a marcada exposición Cordillera Frontal. Aflora en la cuchilla de la Tristeza, subaérea. Las condiciones de subsidencia habrían formando parte de sus faldeos oriental y occcidental, permitido esporádicas conexiones con el mar en una faja en media luna entre el cerro Laguna Amarga paranaense. y la desembocadura del arroyo Las Aucas en el río Diamante. Reducidos asomos se han reconocido en el Paleontología paraje denominado La Jaula y en el cerro Alquitrán. También aflora en el sector nordeste del volcán Maipo, En el perfil tipo, la Formación Papal contiene una en los alrededores del cerro de la Media Luna. asociación de nanofósiles integrada por: Cyclagelosphaera margerelli, Ellipsagelosphaera Litología britannica, Micrantholithus hoschulzii, Nannoconus kamptneri, Watznaueria barnesae, En la mayor parte de los perfiles la base de la Watznaueria biporta y Zeughrabdotus embergerii unidad está dada por los conocidos informalmente (Pérez et al., 1997). Esta asociación indica una edad como Rodados Lustrosos (Groeber, 1946). Corres- cretácica inferior, correspondiente al Grupo Mendoza, ponden a conglomerados de aspecto lustroso debido lo cual estaría reflejando el retrabajamiento de estos a la pátina de barniz del desierto, constituidos por estratos y su incorporación en los depósitos papalenses. clastos pulidos y facetados de tamaño variable, en 40 Hoja Geológica 3569-I

su mayor parte de rocas andesíticas, envueltos en de conglomerados y areniscas. Estos autores desta- una matriz blanquecina areno-tobácea. caron el cambio vertical en la composición de los La Formación Agua de La Piedra es una secuen- clastos no volcánicos, desde calizas con Ostrea sp. cia granocreciente con predominio de areniscas fi- hasta areniscas de la Formación Tordillo, lo que indi- nas, rojizas, algo tobáceas en la base; hacia arriba se ca un cambio en la proveniencia del material detrítico intercalan conglomerados polimícticos y en la parte durante la evolución de la cuenca de antepaís. superior los depósitos son netamente conglomerádicos con rodados grandes de andesitas, pórfiros y Ambiente sedimentitas mesozoicas con moderada cementación (Yrigoyen, 1993). Hacia el este, en La Jaula, afloran La Formación Agua de la Piedra corresponde en únicamente las facies distales, es decir que disminuye sus inicios a depósitos de planicie aluvial baja, con posi- el porcentaje de conglomerados y abundan areniscas bles cursos meandrosos que permitieron una distribu- rosadas megaentrecruzadas y limolitas rojizas, con in- ción uniforme del material detrítico. Los términos me- tercalación de capas de toba, tufita blanca y delgados dio y superior muestran una progresiva inestabilidad y niveles de yeso. En el flanco oriental de la cuchilla de mayor energía, con cauces anastomosados sumados a la Tristeza pueden diferenciarse dos secciones: la in- una creciente subsidencia de la cuenca de antepaís ferior, en cuya base se ubica el nivel de los Rodados (Yrigoyen, 1993). Los espesores de la Formación Agua Lustrosos, está compuesta por limolitas y areniscas de la Piedra son sumamente variables aún en distan- castaño rojizas con un espesor de 200 m, y una supe- cias cortas. En dirección oriental se produce una brus- rior constituida por conglomerados polimícticos grue- ca disminución de la granulometría por pérdida de la sos a muy gruesos con un espesor de 500 m aproxi- energía de transporte. Las areniscas megaentre- madamente (Kozlowski y Baldi, 1983). Combina et cruzadas de La Jaula representan campos de médanos al. (1994) describieron varios perfiles de detalle en el de posición distal (Fig. 17). De acuerdo al análisis de arroyo La Manga, en Puente Viejo y en la estancia asociación de facies reconocidas, Combina et al. (1994) Coihueco, estos dos últimos sitios, fuera del límite sur propusieron un paleoambiente de abanicos aluviales, de la Hoja, en los cuales distinguieron nueve litofacies en secuencias de cabecera a cuerpo externo, desarro-

Figura 17. Facies distales de la Formación Agua de la Piedra, correspondientes a areniscas eólicas, en la comarca de La Jaula. Volcán Maipo 41

llados bajo clima semiárido. Este sistema de abanicos et al. (1997) al Mioceno medio. Esta unidad se aluviales estaría asociado al ascenso de la Cordillera correlacionaría con otros depósitos sinorogénicos de los Andes con un arco volcánico activo situado al miocenos de la zona cordillerana del norte de oeste de la cuenca de antepaís, representado por la Mendoza (Conglomerado Tunuyán de la cuenca de Formación Huincan (Combina et al., 1997). antepaís del Alto Tunuyán, Giambiagi, 1999).

Relaciones estratigráficas 2.5.3.2. Mioceno medio - superior

El miembro basal se apoya sobre el sustrato por Formación Huincán (26) medio de una discordania erosiva y/o suavemente an- Andesitas hornblendíferas, ignimbritas, depósitos gular que suele pasar a fuertemente angular en algu- piroclásticos y laháricos (26a). Pórfidos andesíticos, nos sectores. Ésta resulta bien visible en el arroyo dacíticos y granodioríticos (26b) Las Ramaditas donde se apoya sobre la Formación Pircala-Coihueco mediando una discordancia de 30° Antecedentes (Kozlowski, 1984). En otras localidades, como por ejemplo en el cerro Alquitrán, la relación con la mis- Bajo la denominación de Huincanlitense, Groeber ma unidad es de paraconcordancia. Por encima, me- (1947) reunió a las rocas volcánicas y subvolcánicas diante una discordancia angular, se apoyan las forma- del Terciario superior del sur de Mendoza y Neuquén; ciones Loma Fiera y Tristeza. su localidad tipo está en la Puntilla de Huincán, pro- vincia de Mendoza. Más tarde fue conocida como Edad y correlaciónes Andesita Huincán (Yrigoyen, 1979; Volkheimer, 1978).

Tradicionalmente considerada de edad oligocena Distribución areal y asociada a la actividad de la Fase Incaica del ciclo Ándico, los depósitos sinorogénicos de la Formación Sus afloramientos muestran una distribución a lo largo Agua de la Piedra fueron reasignados por Combina de una faja de orientación noroeste-sudeste aproxima-

Figura 18. Intrusivo andesítico de la Formación Huincán en capas del Grupo Mendoza en el cerro de la Mala Dormida. 42 Hoja Geológica 3569-I

damente. Al sur del río Diamante, las andesitas (1947) y descripta por Dessanti (1959) en los alrede- huincanlitenses están agrupadas en tres áreas bien defi- dores del cerro Alquitrán. Yrigoyen y Martínez Cal nidas: sierra del Perdido - cerro de la Mala Dormida, (1953) consideraron como “colloncurenses” a las tobas laguna Amarga y cerro Alquitrán (Fig. 16). Al norte del y aglomerados dispuestos en discordancia angular so- río Diamante, las volcanitas asignadas al Huincanlitense bre la Formación Agua de la Piedra que afloran en se presentan en facies lávicas stricto sensu. Tienen gran ambos faldeos de la cuchilla de la Tristeza. Volkheimer extensión areal en el cordón del Eje y cerros Morro del (1978) extendió la distribución de esta formación a la Cuero, Borbarán y de la Laguna. zona cordillerana. Kozlowski (1984) analizó el com- portamiento estructural de la unidad. Yrigoyen (1993) Litología aportó nuevos datos en su síntesis de los depósitos sinorogénicos de la provincia de Mendoza. Finalmente, En las inmediaciones del río Diamante predomina el Combina y Nullo (1999) realizaron una reinterpretación modo de emplazamiento en domos exógenos del tipo de los depósitos del Cenozoico superior en la cuchilla plug o tapón y en menor proporción en filones capa y de la Tristeza. diques. Los domos andesíticos intruyen a las sedimentitas de las formaciones Agrio y Huitrín y del Grupo Neuquén, Distribución areal formando cerros puntiagudos de poca altura (Fig. 18), con fuerte disyunción columnar vertical. Muchos de ellos Esta formación aflora en ambos faldeos de la (cerro La Brea, cerro Manantiales) se hallan afectados cuchilla de la Tristeza, en la loma de las Ovejas y en por corrimientos importantes, tentativamente relaciona- la zona del cerro Alquitrán. En la zona cordillerana dos con la última fase de deformación (Fase Diaguita) se halla en el pie norte del cerro Sosneado y en el de la orogenia Ándica. La sucesión de coladas, pie occidental del cerro Malo. ignimbritas, depósitos laháricos y piroclásticos que tipifica a la unidad en la pared oriental de la caldera Diamante Litología permite suponer la existencia de estratovolcanes de con- siderables dimensiones para tiempos miocenos. Son Yrigoyen (1993) describió a esta unidad como in- andesitas hornblendíferas claras y porfíricas, de tonos tegrada por conglomerados, aglomerados, brechas, are- verdes, rosados, gris azulados y amarillentos. niscas tobáceas, tobas y tufitas con franco predominio volcanógeno y coloración gris clara. En la bardita Blan- Edad y correlaciones ca, la Formación Loma Fiera se inicia con tobas ceni- cientas y lapilli de piedra pómez de 50 m de potencia La edad del Huincanlitense se halla acotada al con estratificación entrecruzada y pobre cementación. Mioceno medio a superior, por la existencia de edades Por encima continúan aglomerados y tobas de lapilli Ar/Ar para localidades situadas al sur del río Diaman- andesíticos. En el pie norte del Sosneado asoman tobas te, que oscilan entre 13 y 5 Ma (Baldauf et al., 1992; brechosas cristalolíticas andesíticas y tobas masivas y Nullo et al., 1997). El pórfido granodiorítico del cerro compactas, mientras que en el valle del arroyo Colora- Chivato, asignado oportunamente por Volkheimer (1978) do se intercalan entre la brechas ígneas, delgadas cola- al Mollelitense, ha sido datado por Nullo et al. (1997), das dacíticas y andesíticas (Volkheimer, 1978). Según arrojando una edad Ar/Ar de 13,6±2,6 Ma. Según Com- Kozlowski y Baldi (1983), la Formación Loma Fiera bina et al. (1997), este evento volcánico es sincrónico está integrada por dos secciones: una inferior formada con la sedimentación miocena representada por las for- por tobas y lapillitas de color blanquecino, y la superior maciones Agua de la Piedra y Loma Fiera. por aglomerados y coladas clastolíticas de composi- ción andesítica y basáltica de colores oscuros. Combi- 2.5.3.3. Mioceno superior na y Nullo (1999) dividieron a esta unidad en dos miem- bros: uno basal (Miembro Cerro Alquitrán) de origen Formación Loma Fiera (27) piroclástico y otro cuspidal (Miembro Nido del Águila) Tobas, aglomerados volcánicos, lacitas y andesitas compuesto por depósitos de origen epiclástico (Fig. 19).

Antecedentes Ambiente

Esta unidad, de carácter esencialmente piroclástico, De acuerdo a Combina y Nullo (1999), esta uni- fue denominada como Santamariense por Groeber dad representa la acumulación de productos volcá- Volcán Maipo 43

2.5.3.4. Plioceno

Formación Tristeza (28) Conglomerados

Antecedentes

Groeber (1947) denominó Tristecense a la po- tente serie de conglomerados gruesos que afloran en la cuchilla de la Tristeza, los cuales se apoyan en discordancia angular sobre las capas santamarienses. Dessanti (1956) usó el término Estratos del Diamante al conjunto Santamariense-Tristeza. Yrigoyen (1972) le otorgó a esta unidad categoría de formación. Volkheimer (1978) la denominó Formación Cuchilla de la Tristeza, desglosando la Formación Río Dia- mante, la cual abarca los afloramientos del valle del río Diamante aguas arriba y abajo de La Jaula, que se disponen en discordancia sobre la Formación Agua de la Piedra. Kozlowski y Baldi (1983), debi- do a la imprecisión en establecer un deslinde formacional optaron por incluir dentro de la Forma- ción Tristeza a los estratos asignados por Volkheimer (1978) a la Formación Diamante y por Yrigoyen (1993) al Santamariense. Recientemente, Combina Figura 19. Secuencia piro-epiclástica de la Formación y Nullo (1999) reinterpretaron a la Formación Río Loma Fiera, con intercalaciones de niveles Diamante como una variación de facies, parcialmente conglomerádicos gruesos en un afluente del arroyo La equivalente a la Formación Loma Fiera, dentro de la Manga. evolución de la cuenca de antepaís cenozoica. Para este trabajo se adopta el ordenamiento propuesto por nicos primarios, lluvia de cenizas y oleadas Kozlowski y Baldi (1983) y Kozlowski (1984). piroclásticas, y secundarios, lahares y depósitos retrabajados de tefra por acción fluvial, en una posi- Distribución areal ción de borde de cuenca. Además de su perfil tipo en la cuchilla de la Tristeza, Relaciones estratigráficas integrando el sinclinal homónimo (Kozlowski, 1984), esta formación aflora al sudeste del cerro Tres Lagunas y al Esta unidad se apoya en discordancia angular pie del cerro Yeseras Grandes. También aflora en una sobre diversos niveles de la Formación Agua de la faja en media luna entre el cerro La Amarga y la des- Piedra, con valores de 35° en Tres Esquinas y 5° embocadura del arroyo Las Aucas en el río Diamante en la loma de la Mina (Kozlowski, 1984). Por enci- (Fig. 20). Groeber (1947) también reconoció afloramientos ma se dispone en discordancia angular la Forma- asignables a esta unidad en las nacientes del arroyo Moro, ción Tristeza. adosado al ambiente de Cordillera Frontal.

Edad y correlaciónes Litología

Teniendo en cuenta el sincronismo con la For- Está compuesta por conglomerados polimícticos mación Huincan y la discordancia angular que la gruesos de colores grisáceos y en general poco separa de la Formación Agua de la Piedra, la For- cementados. Los clastos son de origen volcánico y mación Loma Fiera es asignada al Mioceno supe- sedimentario. En el valle del río Diamante tienen abun- rior (Combina et al., 1997; Combina y Nullo, dante matriz arenosa y tobácea con tonalidad rojiza. 1999). Su espesor varía entre120 y 220 m en la cuchilla de 44 Hoja Geológica 3569-I

Figura 20. En primer plano, afloramientos de la Formación Tristeza en el arroyo Las Aucas, tributario del río Diaman- te. Al fondo el cerro Diamante. T: Fm. Tristeza. TI: Terciario indiferenciado. B: Basaltos cuaternarios.

La Tristeza y en la desembocadura del arroyo de los cerro Gaspar se ubican afloramientos que se Chacayes supera los 500 m (Kozlowski y Baldi, 1983). correlacionan con las formaciones Agua de la Pie- dra, Loma Fiera y Tristeza. Los mismos fueron Ambiente mapeados como una unidad indiferenciada debido a la falta de estudios detallados. Corresponde a un sistema fluvial de abanicos aluviales. 2.5.4. NEÓGENO-CUATERNARIO

Relaciones estratigráficas 2.5.4.1. Plioceno-Pleistoceno inferior

Esta unidad se apoya en discordancia angular so- Formación Coyocho (30) bre la Formación Loma Fiera en la vega del Burro y Basaltos, basandesitas, andesitas, tobas, brechas y sobre la Formación Agua de la Piedra en La Jaula y aglomerados volcánicos en el arroyo de Las Aucas. A su vez, es cubierta por depósitos pedemontanos y volcanitas cuaternarios. Antecedentes

Edad y correlaciones Groeber (1947) propuso la denominación de Coyocholitense (=Basalto II) para abarcar a los pro- Debido a la falta de dataciones directas, esta ductos volcánicos de composición basáltica y unidad se asigna al Plioceno sobre la base de las andesítica que constituyen los cerros Risco Platea- relaciones estratigráficas. do, Sosneado, Overo, Listado-Borbollón y Paredón. Kittl (1944) realizó una descripción minuciosa de los Formación Agua de la Piedra, Formación principales centros efusivos mencionados. Loma Fiera y Formación Tristeza (29) Conglomerados, areniscas, limolitas, tobas, aglome- Distribución areal rados volcánicos, lacitas y andesitas Los principales afloramientos de esta unidad se En el sector pedemontano, más precisamente al hallan en los cerros mencionados en el apartado an- este del cerro Alquitrán, al norte del cerro de la Leña, terior. Los cerros Tres Lagunas, Mesón Morado, Me- en ambas márgenes del río Diamante y de los arro- són de Afuera y Yeseras Grandes constituyen cen- yos El Carrizalito, La Faja y Hondo y al norte del tros efusivos parcialmente desmantelados. Éstos, su- Volcán Maipo 45

mados a los afloramientos aislados de coladas que composición basáltica y andesítica de edad proba- comparten la misma cota topográfica, los cuales re- blemente pliocena hasta cuaternaria preglacial. La presentan remanentes erosivos de derrames de parte superior estaría compuesta por productos proveniencia incierta, son asignados a esta unidad lávicos más modernos, probablemente correspon- (Volkheimer, 1978). También se reconoce esta for- dientes a emisiones laterales más que centrales. En mación en la parte septentrional de la cuchilla de la la orilla sur del río Atuel queda expuesto el flanco Tristeza y en la sierra del Perdido. norte del cerro Risco Plateado, donde se observa una sucesión de coladas de color gris oscuro, con Litología disyunción columnar y niveles piroclásticos interca- lados. Las muestras colectadas corresponden a Además de coladas lávicas, esta unidad incluye fenoandesitas basálticas y basaltos olivínicos. Las tobas, brechas ígneas y aglomerados volcánicos de primeras contienen labradorita, olivino, augita e composición basáltica y basandesítica hasta hipersteno, la plagioclasa domina sobre los mafitos, andesítica. Núcleos intrusivos de composición equi- mientras que los segundos poseen augita y olivino valente completan la serie. A continuación, se des- dominantes sobre la labradorita. Es frecuente en- criben los principales centros efusivos asignados a contrar al olivino serpentinizado en una mesostasis esta formación, sobre la base de las observaciones con alteración clorítica y carbonática. Rodeando el de Kittl (1944) y propias. Los cerros Risco Platea- cerro por el flanco oeste, a lo largo del arroyo de los do, Sosneado y zócalo del volcán Overo constituyen Caballos, es posible observar la inclinación original estratovolcanes, los cuales a pesar de haber sido de las coladas a partir del posible cráter, actualmen- profundamente desmantelados por las glaciaciones te destruido. Esta inclinación aumenta hacia la cima cuaternarias, conservan la disposición radial original del cerro (Fig. 21). de los mantos lávicos y piroclásticos a partir de un centro que muestra alteración hidrotermal conspi- Cerro Sosneado: De modo análogo al cerro cua, enjambre de diques y brechas de relleno de las Risco Plateado, Kittl (1944) consideró que el edifi- chimeneas. cio volcánico del cerro Sosneado está constituido por un zócalo andesítico de probable edad pliocena y Cerro Risco Plateado: Según Kittl (1944), en coladas y aglomerados de composición basáltica de la ladera septentrional es posible diferenciar una parte edad preglacial a interglacial. El volumen estimado inferior integrada por un apilamiento de coladas de por este autor es de 18-20 km3 para las andesitas

Figura 21. Vista del flanco noroccidental del cerro Risco Plateado. Coladas radiales de la Formación Coyocho. 46 Hoja Geológica 3569-I

del zócalo y 3-5 km3 para los basaltos cuspidales. brechoso, de 7 m de espesor, de tipo matriz sostén, el Según Groeber (1947), el cerro Sosneado está for- cual engloba clastos de procedencia variada y exhibe mado por dos núcleos intrusivos, uno de composi- estructuras de corriente (entrecuzada, en artesa, ción andesítica (4.875 m), más antiguo y otro de com- lenticular y gradación normal). Sus características per- posición basáltica (5.189 m). Sobre la margen norte miten interpretarlo como un depósito de lahar. Por en- del río Atuel, entre las termas del Sosneado y el arro- cima se dispone una unidad de enfriamiento yo Bayo queda expuesta la estructura interna del ignimbrítica compuesta por varias unidades de flujo. aparato volcánico. Las coladas basales se apoyan El grado de soldamiento es bajo y uniforme para toda indistintamente sobre capas pertenecientes a los gru- la unidad. Se observa predominancia de fragmentos pos Cuyo, Lotena y Mendoza. Se ha podido obser- pumíceos con respecto a los líticos (basaltos y var el siguiente perfil, de abajo hacia arriba: andesitas, areniscas, clastos indeterminados de color -10 m. Andesitas grises en coladas gruesas con disyun- verde). El pómez contiene biotita. Se estima una com- ción columnar. Andesitas hornblendíferas, porfíricas, posición riodacítica. con fenocristales de labradorita de hasta 0,3 cm de -18 m. Monótona sucesión de coladas andesíticas con tamaño, hornblenda, augita e hipersteno en pasta con brechas basales de color gris. textura hialopilítica. -16 m. Brechas grises matriz sostén. Probablemente se -25 m. Brechas gruesas de color gris morado. trata de un depósito de lahar. Monolitológicas, los clastos andesíticos de tamaño -20 m. Monótona sucesión de coladas andesíticas con variable se disponen de modo caótico en matriz esca- brechas basales. El conjunto presenta un color ana- sa. Se interpreta como un depósito de avalancha. ranjado por meteorización. Andesitas piroxénicas -17 m. Brechas gruesas a muy gruesas de tipo mátrix sos- porfíricas en pasta pilotáxica. Contienen labradorita, tén. Polimícticas, engloban clastos de hasta 3 m de augita e hipersteno. tamaño. Lahar proximal. -25 m. Basaltos cuspidales. Corresponde a una sucesión -30 m. Ignimbrita rosada con estratificación gruesa. Este de coladas, más delgadas en relación a sus equivalen- depósito piroclástico se inicia con un surge basal de tes andesíticos, niveles de escoria, aglomerados y de- 10 m de espesor aproximadamente, compuesto por pósitos de lahares. El conjunto se destaca por su colo- delgadas capas de color gris oscuro, con laminación ración negra a rojiza por oxidación, así como también paralela y entrecruzada. Luego sigue un depósito por las coloraciones amarillentas y verdosas de altera-

Figura 22. Vista del flanco sudoriental del cerro Sosneado, desde el río Atuel. A la derecha el arroyo Malo y las ca- pas del Jurásico inferior. Volcán Maipo 47

ción. En diversos sectores se observan diques que (1944), es muy probable que la actividad de los intruyen esta sucesión. Se trata de basaltos, algunos principales centros haya comenzado en el Plioceno vesiculares, que contienen escasos fenocristales de y se haya extendido hasta el Pleistoceno. Adop- labradorita, augita, hipersteno y olivino en pasta tando un criterio geomorfológico y al no existir intersertal, con abundante vidrio fresco. dataciones absolutas de ninguno de los centros descriptos, lo único que se puede afirmar es que Las coladas andesíticas que afloran en ambas se trata de aparatos volcánicos cuya etapa de márgenes del arroyo Bayo, corresponden probable- máxima actividad tuvo lugar en tiempos mente a los derrames más jóvenes emitidos por el preglaciales. Conos parásitos y emisiones de me- antiguo volcán. Pertenecen a coladas que han fluido nor volumen se registran en algunos casos en tiem- en dirección sureste hacia el valle del río Atuel, pero pos posteriores. que no se han extendido aguas abajo del arroyo Malo (Fig. 22). Se apoyan directamente sobre las 2.5.5. CUATERNARIO sedimentitas del Jurásico inferior. Las morenas desa- rrolladas al sureste de su frente, sobre el río Atuel, 2.5.5.1. Pleistoceno inferior engloban gran cantidad de clastos de lavas y brechas, indicando la antigüedad preglacial de las volcanitas. Formación Los Mesones (31) Se trata de una espesa sucesión de coladas que al- Fanglomerados y areniscas gruesas canza un espesor de 200 m aproximadamente, con niveles de brechas de flujo intercaladas y marcada Antecedentes disyunción columnar. Petrográficamente son andesitas piroxénicas de color gris, porfíricas, con fenocristales Esta unidad, también conocida como Depósitos de andesina de hasta 0,3 cm de tamaño, augita e del Primer Nivel de Piedemonte (Groeber, 1947) o hipersteno, en pasta de textura intersertal. Primer Nivel de Agradación, fue definida por Polanski (1963) para abarcar a los sedimentos Volcán Overo: con una altura de 4.804 m el aluviales gruesos de edad eopleistocena que consti- volcán Overo constituye un volcán en escudo, con tuyen una antigua bajada adosada al frente monta- flancos tendidos y un cráter central semidestruido ñoso entre los ríos Mendoza y Diamante. Volkheimer (Kittl, 1944). Los mantos lávicos de la base, de (1978) adoptó esta definición y extendió el mapeo edad coyocholitense (Groeber, 1947), se disponen de la formación al sur del río Diamante. sobre las capas de yeso de la Formación Auquilco y sobre las formaciones Tordillo, Vaca Muerta y Distribución areal Loma Fiera. Son andesitas piroxénicas, de color gris, porfíricas, con un contenido de fenocristales Esta formación tiene su mejor desarrollo en la de 50% aproximadamente de labradorita, piroxeno llanura pedemontana oriental, con una extensión ha- y augita en pasta criptocristalina. También hay cia el este en forma discontinua de hasta 60 km variedades holohialinas con fluidalidad conspicua. (Polanski, 1963). Desde la loma Grande del Yaucha La actividad del volcán Overo continuó hasta tiem- se prolonga hacia el sur a modo de faja adosada a pos recientes, por lo cual los productos más jóve- la Cordillera Frontal, expandiéndose hacia el este nes se incluyen en la Asociación Volcánica en la bajada del Diamante. En el ámbito de la Hoja postglacial. La Tosca (Polanski, 1964b), la Formación Los Me- sones aflora a modo de remanente de erosión al Relaciones estratigráficas este de la loma de los Corralones. Al sur del río Diamante, Volkheimer (1978) describió esta for- Se apoya en marcada discordancia angular so- mación en la cuchilla de la Tristeza, en la loma del bre los estratos plegados mesozoicos y terciarios. Medio y alcanzando su mejor desarrollo en el sec- tor pedemontano al norte del puesto Los Buitres. Edad y correlaciones Esta unidad constituye una planicie levemente in- clinada hacia el este. Según Polanski (1963), la Groeber (1947) asignó esta unidad al Plioceno superficie tope inclina unos 4° en el sector proximal, más alto, mientras que Volkheimer (1978) la situó 3° en la zona media y menos de 1° en las zonas en el Pleistoceno inferior. De acuerdo con Kittl más distales. 48 Hoja Geológica 3569-I

Litología Distribución areal

Está compuesta por fanglomerados gruesos a Se reconocen volcanitas atribuibles a esta uni- muy gruesos, con predomimio de clastos de hasta dad en el ámbito cordillerano, asociadas al volcanismo 1 m y excepcionalmente hasta 5 m, provenientes de arco, y en el pedemontano, representando el de los ambientes de la Cordillera Principal y de la volcanismo de retroarco. En el área cordillerana Cordillera Frontal (volcanitas y plutonitas Volkheimer (1978) consideró que la localidad tipo de choiyoilitenses, tonalitas, basaltos pliocenos y su Formación Cerro Guanaquero se halla en el ce- sedimentitas mesozoicas). La matriz del rro homónimo, un centro efusivo muy erosionado. fanglomerado es arenosa sabulítica. El grado de Algunas coladas de basalto provenientes de este úl- cementación es variable y suelen intercalarse ni- timo descienden, en la zona comprendida entre el río veles arenosos gruesos. Los espesores disminuyen Negro y el arroyo Bravo hasta el valle del río Dia- drásticamente en dirección oriental; así, en las proxi- mante. Esta formación también se halla presente en midades del frente montañoso la unidad supera los las manifestaciones post coyocholitenses de los ce- 100 m de espesor y en la loma de los Corralones no rros Risco Plateado y Sosneado, descriptas oportu- sobrepasa los 20 m de espesor. De igual modo dis- namente. El cerro La Guardia, situado en la margen minuye el tamaño de los clastos que constituyen el sur del arroyo Yaucha, donde éste abandona el ám- depósito y aumenta la selección textural. bito cordillerano, corresponde a un pequeño centro efusivo con coladas asociadas emplazado en las ro- Ambiente cas hipabisales de la Formación Choiyoi. Este cen- tro sería equivalente a los extensos afloramientos de Corresponde a un sistema de abanicos aluviales edad tilhuelitense descriptos por Groeber (1947) en coalescentes vinculados al ascenso neotectónico del las inmediaciones de la pampa de los Avestruces. frente montañoso (Polanski, 1963). En varias localidades del ambiente cordillerano se observan afloramientos aislados de ignimbritas y Relaciones estratigráficas tobas, cuya procedencia es incierta y que podrían ser incluidos en esta unidad con reservas. Es el caso Se dispone mediante discordancia angular sobre de la ladera sur del río Negro, del arroyo La Manga, depósitos de edad terciaria y es cubierta por unida- frente a Tres Esquinas, y de ambas márgenes del des más jóvenes. arroyo Las Aucas inferior, que debido a su reducida extensión areal no han sido incorporados en el mapa. Edad y correlaciones En el ámbito pedemontano se incluyen varios conos parcialmente erosionados, remanentes de co- De acuerdo con Polanski (1963), esta unidad se ladas y escoriales asociados, muy bien representa- depositó en el Pleistoceno inferior sobre la base de dos en el Bloque de San Rafael, al este de la Hoja. criterios estratigráficos. Como ejemplos cabe citar los cerros Chato y Negro de las Mesillas. Asociación Volcánica Paleopleistocena (32) Andesitas, basaltos, ignimbritas y tobas Litología

Antecedentes En el ámbito cordillerano esta unidad está re- presentada por andesitas basálticas, porfíricas, que Esta unidad fue definida por Polanski (1963) contienen hasta un 30% de fenocristales de para abarcar a las volcanitas de composición labradorita, hipersteno y escaso olivino en pasta andesítica y basáltica atribuidas al Pleistoceno in- criptocristalina, como en los afloramientos del cerro ferior, que afloran a modo de fajas meridianas des- La Guardia. de la Cordillera de los Andes hasta el Bloque de En la margen sur del río Negro aparece una toba San Rafael. Volkheimer (1978) acuñó el término lapillítica, de color gris blanquecino, de hasta 15 m de Formación Cerro Guanaquero para reunir los de espesor, intercalada entre las coladas basálticas términos volcánicos equivalentes al “Basalto III” o de la Asociación Volcánica Paleopleistocena y los “Chapualitense inferior” y “Tilhuelitense inferior” basaltos neopleistocenos. En el arroyo La Manga, de Groeber (1947). frente a Tres Esquinas, adosada a la pared superior Volcán Maipo 49

del valle, aflora una ignimbrita andesítica de color definida por Polanski (1963) en el puesto La negro, vítrea, con abundantes fiammes y grado de Invernada, en la margen derecha del arroyo Papa- soldamiento medio, portadora de abundantes clastos gayos. accidentales de calizas y pelitas. En el ámbito pedemontano este volcanismo, de Distribución areal carácter esencialmente basáltico olivínico, está ca- racterizado por una breve fase andesítica y una pro- En la zona próxima al frente montañoso se pre- longada fase basáltica (Polanski, 1964b). El cerro senta como terrazas encajonadas en la Formación Chato, cuya morfología no se corresponde con la de Los Mesones, mientras que hacia la zona distal de- un cono monogenético sino más bien con un domo o sarrolla un definido nivel de agradación. Se halla bien lava-domo, está compuesto por andesitas basálticas expuesta entre los arroyos Yaucha y Papagayos rojizas, muy alteradas y oxidadas, y basaltos olivínicos (Polanski, 1964b). Dos terrazas de erosión, recono- vesiculares hacia la parte superior. cidas a lo largo de ambos arroyos, han sido labradas en esta formación (Polanski, 1963). En la zona Relaciones estratigráficas abarcada por la Hoja 32b, Cerro Sosneado, Volkheimer (1978) ubicó dentro de esta formación a Los derrames lávicos de esta unidad descien- las terrazas altas del río Atuel y algunos de sus den generalmente a un nivel topográfico mucho afluentes, tales como los arroyos La Manga y Blan- más bajo que aquellos pertenecientes a la For- co. Por razones de representatividad gráfica, estos mación Coyocho, hecho que se explica por un afloramientos no han sido incluidos en el mapa. Esta fuerte ascenso y erosión durante el Pleistoceno unidad acompaña a modo de altas terrazas el reco- inferior y medio (Volkheimer, 1978). En la des- rrido pedemontano del río Diamante. El área llana embocadura del arroyo Negro, espesas coladas situada al sur del mismo se asigna con reservas a masivas con brechas asociadas se disponen por esta formación, haciendo la salvedad de que futuros encima de las capas plegadas del Grupo estudios de detalle de la estratigrafía del Cuaternario Mendoza. En el ámbito pedemontano las cola- podrán modificar este cuadro simplificado. das se disponen de modo discordante sobre los estratos terciarios. Litología

Edad y correlaciones En su perfil tipo consta de dos miembros: uno inferior, de 18 m de espesor, compuesto por arenis- La falta de dataciones absolutas impide acotar cas estratificadas, conglomerados y areniscas me- con precisión este evento volcánico. Al norte del dianas de color rosado y un miembro superior, de 20 río Diamante, la ignimbrita de la Asociación m de espesor, constituido por fanglomerados grue- Piroclástica Pumícea constituye un excelente con- sos con clastos de hasta 5 m de diámetro y matriz trol estratigráfico. En los lugares donde puede ob- arenosa (Polanski, 1963). servarse la relación estratigráfica entre ambas uni- dades, como por ejemplo en el cerro La Guardia o Ambiente en las coladas del río Diamante, es posible discer- nir la edad pleistocena inferior de las volcanitas. Corresponde a un sistema de abanicos aluviales Sin embargo, no es posible establecer la exacta vinculados al ascenso del frente montañoso. Polanski magnitud de este evento, en particular en el ámbito (1963) se ocupó especialmente de demostrar la gé- cordillerano, debido a la falta de información nesis fluvial de los depósitos, rechazando un origen geocronológica básica. glacial asociado a un englazamiento pedemontano.

Formación La Invernada (33) Relaciones estratigráficas Fanglomerados y areniscas En la zona comprendida entre los arroyos Antecedentes Yaucha y Papagayos se dispone sobre sedimentitas plegadas asignadas al Terciario indiferenciado y se También denominada Depósitos del Segundo halla cubierta por los depósitos piroclásticos de la Nivel de Piedemonte (Goeber, 1947), esta unidad fue Asociación Piroclástica Pumícea. 50 Hoja Geológica 3569-I

Figura 23. Depósitos ignimbríticos de la Asociación Piroclástica Pumícea por encima de los conglomerados de la Formación La Invernada en el arroyo Papagayos.

Edad y correlaciones del pómez atendiendo a su potencial minero. Herre- ro Ducloux e Yrigoyen (1952) describieron tobas y Polanski (1963), sobre la base de las relaciones lapilli pumíceos en la zona del arroyo Papal y asig- estratigráficas, asignó a esta unidad al Neopleisto- naron estas rocas al Tilhuelitense. En los últimos años, ceno. Sin embargo, la edad de la ignimbrita Stern et al. (1984) dieron a conocer dataciones, re- suprastante indica una edad mayor, por lo que se la señaron sus características y sus implicancias ubica en el Pleistoceno inferior. volcanológicas en la vertiente chilena. Esta unidad fue denominada como Diamante Tuff por Harrington Asociación Piroclástica Pumícea (34) (1989) en un estudio preliminar del volcán Maipo. Ignimbritas riolíticas Guerstein (1989, 1990, 1993) realizó una investiga- ción exhaustiva de la Asociación Piroclástica Antecedentes Pumícea, atendiendo a los aspectos litológicos, texturales y faciales e interpretó los parámetros Esta unidad fue definida por Polanski (1963) para volcanológicos vinculados al origen y emplazamien- identificar a las rocas piroclástico-pumíceas que cu- to de esta unidad piroclástica. bren a modo de manto continuo extensas áreas de la llanura pedemontana. Este autor destacó su impor- Distribución areal tancia estratigráfica y le asignó categoría formacional, criterio adoptado por los autores de la presente Hoja. Los afloramientos asignados a esta unidad se ex- Anteriormente, Groeber (1947) incluyó este evento tienden en forma discontinua en la Argentina y en piroclástico en su Tilhuelitense superior, correspon- Chile, abarcando una superficie de 23.000 km2 diente al último interglacial, considerando que la pam- (Guerstein, 1993). En Chile, los depósitos están loca- pa de los Avestruces podría haber constituido un lizados en los valles intermontanos de la cordillera del “foco dacítico” que habría dado origen a estos de- límite y continúan en el valle Central hasta la costa pósitos piroclásticos. Dessanti y Bassi (1947) con- pacífica. Los afloramientos más importantes se reco- feccionaron informes acerca de las características nocen a lo largo de los ríos Maipo, Cachapoal y Rapel, Volcán Maipo 51

en los alrededores de las ciudades de Santiago y que Guerstein (1990) lo estimó en el orden de 260- Rancagua (Stern et al., 1984). En la Argentina, 350 km3. Constituye una sola unidad de enfriamien- Polanski (1963) consideró que esta unidad se extien- to de bajo grado de soldamiento, aunque localmente de al sur del graben de Tunuyán hasta Malargüe. Sin exhibe variaciones hacia términos con soldamiento embargo, Guerstein (1993) estableció los límites aproxi- moderado (Guerstein, 1993). Su composición es mados de propagación de los flujos ignimbríticos en- riolítica de alto potasio, con plagioclasa, cuarzo, tre la latitud de la localidad de Pareditas, al norte y el sanidina, biotita y excepcionalmente hornblenda valle del río Diamante, al sur. Los principales aflora- (Stern et al., 1984; Guerstein, 1993). mientos se encuentran a lo largo de los arroyos del La Asociación Piroclástica Pumícea correspon- Rosario, Yaucha y Papagayos (Fig. 23). Hacia el sur, de a una ignimbrita de gran volumen y baja tempera- los afloramientos son más discontinuos, encontrándo- tura (menos de 600°C, Guerstein, 1993) vinculada al se buenas exposiciones en el área del cerro El Pozo, colapso de la caldera Diamante, una megaestructura a lo largo de los arroyos Hondo y Carrizalito y en el de forma elíptica de 20 km x 16 km y 700 m de pro- valle del río Diamante en las proximidades del cerro fundidad aproximadamente. De acuerdo con la inter- homónimo y de la represa Agua del Toro. En la mar- pretación de Guerstein (1993), la erupción habría sido gen sur del río Diamante, se reconocen reducidos aflo- de muy corta duración y gran magnitud, estimando un ramientos al este de Las Aucas. Estos últimos no han VEI (índice de explosividad volcánica)=7. sido representados en el mapa debido a lo reducido de su extensión areal. Relaciones estratigráficas

Litología En varias localidades pedemontanas los depósi- tos ignimbríticos se disponen sobre los fanglomerados Polanski (1963) dividió a esta unidad en dos de la Formación La Invernada y se presentan cu- miembros: 1) Miembro Pumíceo Granular, integrado biertos por depósitos recientes. Hacia el este de los por granulado de pómez y arena de pómez, de vasta 69° de longitud, los depósitos piroclásticos desapa- extensión en el ámbito pedemontano y 2) Miembro recen debajo de acumulaciones más modernas. Tobáceo Aglutinado, el cual abarca tobas de agluti- nación incipiente y sueltas, tobas de aglutinación Edad y correlaciones parcial y tobas de aglutinación densa. Guerstein (1993), sobre la base de un estudio muy detallado de Según Polanski (1963), sobre la base de relacio- numerosos perfiles, diferenció 11 litofacies teniendo nes estratigráficas, la Asociación Piroclástica Pumícea en cuenta los rasgos texturales, las estructuras queda acotada temporalmente entre las Formaciones sedimentarias, el color y el grado de coherencia de La Invernada y Las Tunas, motivo por el cual este los depósitos. Estas 11 litofacies son: Aglomerado autor le asignó una edad pleistocena superior. Las piroclástico, Aglomerado piroclástico lítico, Lapillita dataciones por trazas de fisión sobre circones conte- y toba lapillítica lítica, Toba moderadamente solda- nidos en muestras del sector chileno arrojaron valo- da, Lapillita y toba lapillítica, Ceniza rosada, Ceniza res de 0,47±0,07 Ma y 0,44±0,08 Ma (Stern et al., blanca, Lapilli lítico, Lapilli cinéreo, Ceniza lapillítica 1984), correspondientes al pleistoceno inferior. y púlvica, Lapilli pumíceo y Lapillita lítica. De acuerdo a la interpretación de Guerstein (1993) la Asocia- 2.5.5.2. Pleistoceno superior ción Piroclástica Pumícea se halla integrada por tres unidades: dos de caída pliniana y una de flujo Asociación Volcánica Neopleistocena (35) piroclástico denso. La unidad de caída inferior está Andesitas, ignimbritas, brechas, basaltos olivínicos compuesta por un sector basal proximal rico en líticos y dacitas y otro cuspidal de naturaleza pumícea. En las áreas proximales su espesor es de 4 metros. Por encima Antecedentes se depositó la unidad de caída superior y en contac- to neto la unidad de flujo ignimbrítico, que constituye Esta unidad fue definida por Polanski (1963) para la unidad principal de esta secuencia. Su espesor abarcar a las volcanitas del Pleistoceno superior, varía entre 200 m en los valles cordilleranos y 10 m reemplazando los términos de Basalto IV, en la llanura. Con respecto al volumen eruptado, Stern Chapualitense superior y Tilhuelitense superior de et al. (1984) dieron un valor de 450 km3, mientras Groeber (1947). 52 Hoja Geológica 3569-I

Distribución areal río Borbollón. De color gris rosado y bajo grado de soldamiento, exhibe zonación incipiente en la mitad Esta unidad se halla representada en el ámbito inferior, con una base pseudofluidal, una parte me- cordillerano (Volkheimer, 1978; Groeber, 1947) y en dia con textura eutaxítica y una parte superior con el pedemontano (Polanski, 1964b), manifestando la bajo grado de soldamiento. Muestra un alto conteni- persistencia del par arco-retroarco volcánico esta- do de litoclastos frente al de fragmentos pumíceos. blecido probablemente en el Plioceno y con seguri- Su composición es riodacítica, con plagioclasa, dad a comienzos del Pleistoceno. En el área abarcada sanidina, cuarzo, biotita y hornblenda. El supuesto por la Hoja Cerro Sosneado, Volkheimer (1978) asig- centro emisor estaría situado en la cordillera del lí- nó a esta unidad a las coladas de andesita mite, debido a que ciertas características de esta hornblendífera de las playas del Jote que descien- unidad ignimbrítica, como el alto porcentaje relativo den hasta el río Diamante, a las coladas que forman de litoclastos y el bajo grado de soldamiento indican la meseta basáltica entre los cerros Malo y Tres La- lejanía a la fuente. gunas y a los depósitos piroclásticos del arroyo Bra- Para el caso del volcán Maipo (Fig. 24) Sruoga vo. En todos los casos se trata de productos volcáni- et al. (1998b) presentaron un esquema volcanoestra- cos desconectados del correspondiente centro emi- tigráfico preliminar en el cual diferencian cuatro sor. Las coladas de las playas del Jote podrían per- episodios eruptivos de composición andesítica a tenecer a la actividad reciente del volcán Overo, en- dacítica. Los primeros tres episodios serían cauzadas en un antiguo valle de origen glacial. asignables a la Asociación Volcánica Neopleisto- Afloran en la parte superior del valle del río Negro cena. Las Andesitas I corresponden a las emisiones en su margen sur. En el sector norte de la Hoja, el más antiguas y se presentan como remanentes de volcán Maipo puede ser asignado casi completamen- coladas cubiertas por depósitos de origen glacial; son te a esta unidad. Posteriormente al emplazamiento rocas porfíricas que contienen hasta un 15% de de la Asociación Piroclástica Pumícea, en algún fenocristales de andesina y piroxeno. Las Dacitas II momento del Pleistoceno superior se formó el apa- representan el episodio de mayor volumen; se trata rato volcánico. de una sucesión de coladas fluidales y depósitos En el ámbito pedemontano se reconoce la etapa piroclásticos intercalados con espesores cercanos a más antigua en la construcción del volcán poligenético los 60 m; son dacitas porfíricas, portadoras de 30% Cerro Diamante y de numerosos conos de fenocristales de plagioclasa, piroxeno y hornblenda monogenéticos con lavas y campos de escoria aso- en una mesostasis vítrea a criptocristalina. Las ciados asignables a esta unidad, entre los cuales se Andesitas III corresponden probablemente a la emi- destacan los cerros de las Bolas, Morado y Chico, sión de coladas a partir de un cono adventicio situa- relacionados a la evolución del volcán Diamante. do al pie del flanco oriental del volcán. Tanto el cono También se incluyen los cerros Sepultura y Gaspar. como las coladas en bloque se presentan cubiertas Por último, siguiendo el criterio de Volkheimer por una fina capa de origen glacial. Se trata de (1978) se incluyen dentro de la Asociación Volcáni- andesitas vesiculares que contienen 40% de ca Neopleistocena al cerro Negro, situado al suroeste fenocristales de andesina y piroxeno en pasta del cerro Chato y a algunos de los pequeños conos hialopilítica. El olivino tiene carácter de accesorio. sin nombre ubicados en las cercanías del arroyo El cerro Diamante constituye un cono Carrizalito. poligenético (Fig. 25), con una altura de 2.354 m, siendo el representante más imponente del Litología volcanismo de retroarco cuaternario en el sector meridional. Se trata de un aparato con forma cóni- Las andesitas de la playa del Jote son fluidales, ca, con un cráter central y conos cinéreos parásitos porfíricas y contienen hasta un 40% de fenocristales en su flanco oriental. Los derrames lávicos asocia- de labradorita, hipersteno y lamprobolita en pasta dos fueron encauzados por el antiguo valle del río pilotáxica. Las ignimbritas del arroyo Bravo se pre- Diamante, encontrándose remanentes de coladas de sentan adosadas a las paredes altas del valle, hallán- hasta 150 m de espesor coronando la pared sur del dose mejor preservadas en la margen sur. Esta uni- valle hasta las proximidades del cerro Angostura. dad de enfriamiento potente, de aproximadamente En las inmediaciones de la represa Agua del Toro 100 m, aflora en forma continua a lo largo del arro- las coladas se disponen por encima de los depósitos yo, desde sus nacientes hasta su confluencia con el ignimbríticos correspondientes a la Asociación Volcán Maipo 53

Figura 24. Vista panorámica del flanco oriental del volcán Maipo.

Figura 25. Cerro Diamante, a cuyo pie se desarrollan las huayquerías. 54 Hoja Geológica 3569-I

Piroclástica Pumícea y se hallan cubiertas por de- Los cerros El Pozo, Sepultura y Gaspar están pósitos considerados como fluvioglaciales por compuestos predominatemente por basaltos Dessanti (1956). Se trata de basaltos de color ne- olivínicos. El área conocida como cerro El Pozo se gro, con escasas vesículas tapizadas con calcita. En interpreta como un par de maares coalescentes de una mesostasis de labradorita, augita y minerales 0,5 km de diámetro (Cortés y Sruoga, 1998). El maar opacos se destacan fenocristales de olivino de hasta occidental, considerado previamente como una cal- 2 mm de tamaño. El edificio volcánico está formado dera de explosión (Polanski, 1964b) contiene un cono por andesitas, mantos de brechas basálticas y cola- cinéreo en su interior (cerro El Pozo). Remanentes das de basalto olivínico. En el flanco nordeste se de un delgado anillo de toba se hallan preservados destaca un pequeño cuerpo de pórfido andesítico, en el borde oriental de la estructura. El cerro El Pozo, compuesto por fenocristales de andesina, constituido por acumulación de escoria y pequeñas lamprobolita, augita-egirina e hipersteno en una pas- coladas asociadas, presenta una morfología “muy ta microgranosa de plagioclasa, piroxenos y minera- fresca” por lo cual no se descarta que sea de edad les opacos. Estrechamente asociadas a este pórfido holocena. La distribución espacial de los centros se presentan coladas de composición equivalente, descriptos en el sector pedemontano y su alineación con fenocristales de labradorita, lamprobolita y augita con trenes de escarpas de falla y escarpas de falla en pasta hialopilítica. Por encima de este conjunto rocosas, han permitido definir dos extensas zonas andesítico se dispone una sucesión de mantos lávicos de fracturamiento oblicuo (310° a 325°) al frente y piroclásticos (brechas, aglomerados y escoria montañoso (Cortés y Sruoga, 1998), que fueron su- lapillítica) de composición modal basáltica y cesivamente reactivadas durante el Cuaternario, pro- andesítico basáltica. Los fragmentos incluidos en los moviendo el emplazamiento de magma basáltico y depósitos de escoria corresponden a andesitas la construcción de conos monogenéticos de peque- basálticas muy vesiculares, con fenocristales de ño volumen como los cerros Sepultura y Gaspar y andesina, augita, hornblenda y olivino en pasta volcanes de mayor envergadura como el cerro Dia- hialofítica. Las coladas cuspidales son basaltos mante. olivínicos portadores de labradorita, augita, olivino e hipersteno como fenocristales, inmersos en una pasta Edad y correlaciones con textura hialopilítica. Los cerros de las Bolas, Morado (Fig. 26) y Chico, La localización topográfica de las coladas de las ubicados al noroeste y este del cerro Diamante res- playas del Jote y los depósitos morénicos que tapizan pectivamente, constituyen pequeños centros el valle del río Negro permiten asignar a estas cola- monogenéticos, presumiblemente contemporáneos con das una edad anterior a la última glaciación. Según la actividad principal del mismo. El cerro Morado com- Dessanti (1956), gran parte de la actividad del volcán pone un cono hidrovolcánico formado a partir de la Diamante tuvo lugar en el Pleistoceno superior. Ante interacción de magma ascendente con la napa freática la falta de dataciones absolutas, esta unidad se atribu- o bien con un cuerpo de agua de escasa profundidad. ye al Pleistoceno superior (Polanski, 1963). La mayor parte del cono está compuesto por un anillo de toba (tuff ring) de escasa altura y un cráter central Formación Las Tunas (36) de gran tamaño relativo. El depósito volcaniclástico de Fanglomerados, conglomerados, gravas y arenas tipo matriz-sostén está conformado por una matriz de color castaño rojizo, de origen clástico, y fragmentos Antecedentes de basalto olivínico cuyo tamaño varía entre pocos cen- tímetros hasta 1 metro. Posee estratificación Esta unidad, también llamada Depósitos del Ter- entrecruzada en capas de gran longitud de onda, ca- cer Nivel de Piedemonte o Tercer Nivel de racterístico de los depósitos de tipo surge. Hacia la Agradación, fue definida por Polanski (1963) para parte superior este cono presenta una sucesión de referirse a los fanglomerados que constituyen la gran mantos de brechas y delgadas coladas intercaladas. El bajada del graben de Tunuyán. cráter tiene una escotadura hacia el norte, por la cual se derramaron las coladas más extensas. Se considera Distribución areal a este cono de tipo mixto, debido a que fue construido bajo condiciones de ambiente subácueo al inicio y Se presenta como terrazas encajonadas en los subaéreo hacia la etapa final de actividad. depósitos de la Asociación Piroclástica Pumícea. Las Volcán Maipo 55

Figura 26. Cerro Morado. terrazas, de escasa altura, se desarrollan a lo largo de Piroclástica Pumícea, y se halla cubierta por los se- los arroyos Papagayos y Yaucha y en algunos de sus dimentos limosos de la Formación El Zampal. tributarios (Polanski, 1964b). Además, aflora en an- chas terrazas sobre ambos lados del río Diamante. Edad y correlaciones

Litología De acuerdo con las relaciones estratigráficas se asigna esta unidad al Pleistoceno superior. Consiste en depósitos fanglomerádicos muy gruesos, conglomerados medios, gravas medianas Depósitos glaciales (37) a gruesas y arenas limosas. A veces los Bloques, gravas y arenas fanglomerados presentan leve estratificación. La variedad de clastos abarca rocas sedimentarias En todo el macizo montañoso de la Cordillera Prin- mesozoicas, riolitas de la Formación Choiyoi, cipal se preservan depósitos morénicos correspondien- tonalitas, lutitas de la Formación Lagunitas y clastos tes a la última glaciación. Un ejemplo de arco morénico pumíceos de la Asociación Piroclástica Pumícea. terminal se encuentra en el valle del río Atuel, donde Los fanglomerados pasan distalmente a conglome- desemboca el arroyo Bayo, donde también se recono- rados fluviales y arenas depositadas en depresio- cen morenas laterales bien expuestas y un valle en U, nes (Polanski, 1964b). perfectamente conservado. Arcos de morenas bien pre- servados se ubican al sur del río Atuel en las inmediacio- Ambiente nes del arroyo Felipe. Al norte del volcán Maipo, contra la pared norte de la caldera, se han acumulado espesos Constituye un sistema de abanicos aluviales vin- depósitos morénicos pertenecientes a varios episodios culados al ascenso del frente montañoso, correspon- de retroceso glacial. Como no se han realizado trabajos dientes al tercer subciclo de agradación aluvial de estratigrafía glacial en la zona, la ubicación cronológica (Polanski, 1963). de estos avances y su número es al momento incierto.

Relaciones estratigráficas Edad

La Formación Las Tunas cubre a la Asociación De acuerdo con las relaciones estratigráficas se Volcánica Neopleistocena y a la Asociación asigna esta unidad al Pleistoceno superior. 56 Hoja Geológica 3569-I

2.5.5.3. Holoceno actividad volcánica pueden ser atribuidas a esta uni- dad. Pertenecen al ambiente de arco volcánico, cuya Formación El Zampal (38) posición debió ser muy parecida a la actual. Las tobas Limos loessoides blancas que tapizan el valle longitudinal del río Blan- co fueron consideradas por Volkheimer (1978) de Polanski (1963) definió esta unidad para referir- mayor antigüedad, sin embargo las evidencias se a los sedimentos limosos amarillentos, parecidos geomorfológicas permiten reasignarlas a la Asocia- al loess, que se disponen sobre las terrazas fluviales ción Volcánica Postglacial (Fig. 27). En el ámbito recientes. Niveles de gyttia que infrayacen a la For- pedemontano se incluyen los numerosos conos mación El Zampal han arrojado una edad de 9.625 monogenéticos (cerritos alineados al norte del arro- A.P., razón por la cual se le asigna a esta unidad una yo Carrizalito y el cerro Arroyo Hondo) y el registro edad postglacial (Polanski, 1963). de actividad eruptiva más moderna del volcán Dia- mante (Fig. 28). Éstas corresponden a las manifes- Asociación Volcánica Postglacial (39) taciones más septentrionales del extenso volcanismo Andesitas, dacitas, ignimbritas y basaltos olivínicos de retroarco desarrollado en el sur de la provincia de Mendoza y Neuquén. En esta unidad se incluyen el Basalto V o El cerro Arroyo Hondo es un cono de escoria Puentelitense y el Basalto VII o Tromenlitense, se- que se eleva a 2.160 m con un cráter central y ca- gún el ordenamiento estratigráfico propuesto por pas piroclásticas con disposición radial. En su flanco Groeber (1947). Representantes asignables a esta sur, la erosión fluvial expone la estructura interna entidad se encuentran en la alta cordillera, inmedia- del cono, se observan capas de escoria de color ro- tamente al oeste del cerro Guanaquero. Estos pro- jizo amarillento con una inclinación de 22° al sur. ductos volcánicos, que no han podido ser vinculados Hacia arriba, en dirección al cráter, las capas son a un centro en particular, se han emplazado en un más potentes, con mayor grado de aglutinación, de relieve excavado por las glaciaciones. En los volca- mayor granulometría y presentan una inclinación nes Overo y Maipo, las últimas manifestaciones de próxima al ángulo máximo de reposo del material

Figura 27. Los Toscales. Ignimbrita encauzada en el río Blanco. Volcán Maipo 57

Figura 28. Cerro Diamante. Depósito de tefra de caída de composición andesítica correspondiente a erupciones en épocas recientes.

Figura 29. Pared norte de la caldera Diamante. Alojado en un circo glaciar (C), un típico ejemplo de glaciar de roca (GR). 58 Hoja Geológica 3569-I

(30°). En la parte inferior del flanco, por encima de b) Ciclo Tectónico Gondwánico (Carbonífero las capas amarillas, se dispone una acumulación de inferior - Triásico superior): durante este período se escoria lapillítica de color negro, incoherente, que destaca el desarrollo de complejos de subducción a correspondería a la actividad póstuma de este vol- lo largo del margen pacífico indicando un comporta- cán. Debido al excelente grado de preservación de miento de típico margen activo. El evento magmático sus rasgos morfológicos primarios se asigna a este sobresaliente corresponde al emplazamiento de cuer- cono a la Asociación Volcánica Postglacial. pos hipabisales, lavas e ignimbritas de composición andesítico-riolítica, conocido como Grupo Choiyoi. Depósitos aluviales (40), coluviales (41) y Este evento registra un cambio evolutivo en el am- de remoción en masa (42) biente tectónico imperante, desde subducción con Arenas, gravas y limos. Brechas y bloques desarrollo de un típico arco magmático calcoalcalino hasta extensión generalizada con volcanismo riolítico Depósitos aluviales, coluviales y de remoción en asociado, a consecuencia de una disminución en la masa de edad reciente y actuales son muy frecuen- velocidad de convergencia (Ramos, 1988a, Ramos tes en todo el ámbito de la Hoja. Los primeros se et al., 1999). hallan alojados en los principales ríos, como el Atuel y el Diamante, en su tramo pedemontano. El relieve c) Ciclo Tectónico Ándico (l.s.) (Jurásico escabroso de Cordillera Principal y la disponibilidad inferior - Cuaternario): los principales eventos que de detrito abundante determinan condiciones favo- caracterizan este ciclo se hallan relacionados a rables para la generación de depósitos coluviales y un profundo cambio en las condiciones de remoción en masa. En particular, entre los depó- paleogeográficas. Entre el Jurásico y el Cretácico sitos de remoción en masa cabe destacar los glaciares medio - superior prevaleció un régimen de roca que se pueden observar en la pared norte de extensional, el cual determinó el desplazamiento la caldera Diamante (Fig. 29) y en la cima del cerro del arco volcánico hacia el oeste y favoreció el Sosneado. desarrollo de una serie de cuencas de retroarco interconectadas, cuyo conjunto se conoce como 3. ESTRUCTURA Cuenca Neuquina. Durante la mayor parte del Mesozoico la misma estuvo sometida a periódi- 3.1. EVOLUCIÓN ESTRUCTURAL cos ingresos marinos provenientes del océano Pacífico. El régimen extensional perduró hasta el Desde principios de la década del ’70, la Cordi- Cenomaniano, cuando se produjo una reorganiza- llera de los Andes ha sido considerada como ejem- ción de los esfuerzos tectónicos dando como re- plo de orógeno tipo, en el cual la paleogeografía, el sultado el cierre de la cuenca. Se conoce como magmatismo y la tectónica son el resultado de la Ciclo Araucánico (Leanza et al., 1997) al pe- evolución de un margen activo, producto de la ríodo dominado por un régimen esencialmente subducción de la corteza oceánica por debajo de la extensional y Ciclo Patagonídico (Keidel, 1921) corteza continental. Sin embargo, analizando en de- a aquel caracterizado por un régimen de tipo talle la evolución de los Andes Centrales, se pone en compresional. El Ciclo Ándico s.s. (Digregorio evidencia una historia geológica más compleja, en la y Uliana, 1980), que abarca los períodos Terciario cual una serie de eventos tectónicos superpuestos y Cuaternario, se halla dominado por un régimen de colisión y subducción producidos desde el tectónico de tipo compresivo. Este último ciclo es Paleozoico inferior generaron sucesivas orogénesis el responsable del alzamiento y estructuración de (Ramos, 1988b). la Cordillera de los Andes. Las características del De acuerdo con Mpodozis y Ramos (1989), tres arco magmático al sur de la latitud de 33º S ponen estadíos pueden ser reconocidos en la evolución de manifiesto la casi nula migración del mismo. tectónica de la comarca: Este comportamiento obedece a la persistencia de la geometría de la zona de Wadati-Benioff, con a) Ciclo Tectónico Famatiniano un ángulo de inclinación cercano a los 30º (Ra- (Cámbrico-Devónico superior): corresponde a un mos y Nullo, 1993) en comparación con el seg- período dominado por la acreción de terrenos mento andino ubicado inmediatamente al norte de alóctonos al margen pacífico del continente de los 33º S, afectado por subducción horizontal des- Gondwana. de el Mioceno. Volcán Maipo 59

3.2. DESCRIPCIÓN DE LAS ESTRUCTURAS estructuras, aspecto que estaría relacionado con la orientación de la inclinación de los planos de falla La Hoja 3569-I, Volcán Maipo, puede ser dividi- del sistema extensional previo. Un ejemplo de es- da en función del comportamiento tectónico y es- tructura controlada por el basamento es el Anticlinorio tructural en cuatro sectores diferentes y cinco del río Atuel (Fig. 31), situado en la margen norte subáreas de características claramente distinguibles: del río y constituido por depósitos del Cuyano infe- · Faja plegada y corrida de Malargüe rior plegados. Cabe destacar la morfología de algu- - Sector interno nas estructuras, tales como algunos anticlinales y - Sector externo sinclinales que presentan una amplia semilongitud de · Faja plegada y corrida del Aconcagua onda, lo cual pone en evidencia la inversión diferen- - Zona de imbricación cial de los hemigrábenes en este sector. - Sistema de corrimientos en secuencia - Sistema de corrimientos fuera de secuencia b) Sector externo: se caracteriza por aflora- - Zona de inversión tectónica mientos de unidades de edad cretácica inferior tem- · Bloque de la Cordillera Frontal prano hasta Plioceno. Los depósitos terciarios están · Sector pedemontano mayormente representados en el ámbito de la cu- chilla de la Tristeza, ubicada en la porción sur del 3.2.1. FAJA PLEGADA Y CORRIDA DE sector. Se presenta como una faja de imbricación MALARGÜE (Kozlowski et al., 1993) integrada por corrimientos emergentes, que afectan a depósitos mesozoicos y a los depósitos Posee gran desarrollo areal, extendiéndose ha- sinorogénicos terciarios de la cuenca de antepaís cia el sur de la caldera Diamante. En su tramo aus- (Kozlowski, 1991). A diferencia del sector interno, tral constituye el frente montañoso en virtud de la las estructuras muestran una orientación general desaparición de la Cordillera Frontal. NNO-SSE, cuyo origen corresponde exclusivamen- La faja plegada y corrida de Malargüe está ca- te a la orogenia Ándica, sin intervención de estruc- racterizada por un estilo estructural en el cual pre- turas previas posteriormente reactivadas. Así tam- domina el fenómeno de inversión tectónica en rela- bién la vergencia de las estructuras se mantiene cons- ción con el plegamiento y un bajo porcentaje de acor- tante hacia el este. tamiento (Kozlowski, 1984). El promedio es de 32% En la zona del río Diamante al oeste del cerro (Manceda y Figueroa, 1995), siendo este valor infe- de la Ventana, se repiten varias veces secciones rior a la mitad del acortamiento determinado para la competentes del Grupo Mendoza (Fig. 32) y de la faja plegada y corrida del Aconcagua. Formación Huitrín. Más al sur, estos despegues, En función de la distribución areal de las unida- próximos a la base del Grupo Neuquén, se propa- des sedimentarias y de la orientación de las estruc- gan en la Formación Rayoso, a través de pelitas turas se propone, de acuerdo con Kozlowski et al. rojas, observándose importantes fallas que se ge- (1996) para la Cuenca Neuquina, la división de este neran al este del río Blanco y alcanzan su mayor sector en dos dominios, uno interno y otro externo expresión en las del Sosneado y del Mesón. Estas (Figs. 30 y 33) fallas producen un importante rechazo en el Grupo Malargüe y los terrenos cenozoicos. Ambas fallas a) Sector interno: se halla caracterizado por la llegan a tener un considerable rechazo vertical en exposición de unidades correspondientes al registro superficie; la del Mesón presenta el máximo (1.200 mesozoico, desde el Triásico superior al Cretácico m) en el arroyo del Salto (próximo al extremo nor- inferior temprano y por el control estructural ejerci- te de la cuchilla de la Tristeza); mientras que la del do por el basamento. La Formación Choiyoi no Sosneado exhibe su máximo rechazo (800 m) al aflorante posee una activa participación, condicio- oeste de Los Buitres. Esta última falla, atravesada nando el origen de las estructuras ándicas. La orien- en subsuelo a esta latitud, muestra un rechazo ver- tación general de estas estructuras, NNE-SSO, cons- tical de unos 200 m repitiendo parte del Grupo tituye la expresión del período de extensión ocurrido Neuquén. Al oeste del río Blanco (mina Eloísa, loma durante el Jurásico (Manceda y Figueroa, 1995) y de las Mulas), los niveles plásticos del Grupo no es coincidente con aquella originada durante la Mendoza se presentan plegados junto con las ca- última orogenia (NNO-SSE). Otra característica pas más competentes, como las calizas de la For- importante es la variabilidad de la vergencia de las mación Chachao (Kozlowski, 1984). 60 Hoja Geológica 3569-I

La cuchilla de La Tristeza constituye la principal aflorantes y del comportamiento de las unidades fren- estructura sinclinal del sector externo, dada su ex- te a la deformación. tensión y su espesor sedimentario terciario. La geo- Sistema de corrimientos en secuencia: se metría de esta depresión controla la orientación y extiende desde el arroyo Durazno, donde las vergencia de las estructuras de los terrenos sedimentitas mesozoicas se disponen tectónicamente mesozoicos y terciarios. La morfología es asimétrica, sobre depósitos terciarios, hasta el frente de el flanco occidental determina el límite oeste del sec- corrimientos de la Cordillera Principal. Allí afloran tor externo y el flanco oriental está vinculado al le- principalmente unidades cenozoicas debido a la vantamiento que producen los corrimientos del Me- somerización del nivel de despegue, el cual se pro- són y El Sosneado afectando las unidades cretácico- paga aparentemente en la Formación Saldeño. Otra terciarias. La falla El Sosneado constituye el frente característica del área es el mayor espaciamiento orogénico emergente de la Cordillera Principal en- relativo entre los corrimientos, atribuible a una pro- tre los ríos Diamante y Atuel (Kozlowski et al., gresiva disminución del esfuerzo compresivo en for- 1989). ma relativamente lenta (Morley, 1986). El acortamiento estimado para la faja plegada y Sistema de corrimientos fuera de secuen- corrida de Malargüe a la latitud del río Diamante, cia: se extiende hacia el oeste de la primera y se para el tramo que se extiende entre El Chacayal y el caracteriza por la exposición de unidades mesozoicas arroyo Moro, es de 15 km aproximadamente. A este debido a que el nivel de despegue estructural es más valor deben agregarse más de 5 km, los cuales han profundo. Éste se halla representado por los niveles sido erosionados al levantarse el cordón del Carrizalito evaporíticos de la Formación Auquilco y en menor en la Cordillera Frontal (Kozlowski et al., 1993). medida, probablemente, por los niveles pelíticos de Cabe destacar que si se analizan tramos de similar la Formación La Manga. Además, la distribución de longitud, la tendencia regional indica una pérdida de las estructuras del sistema de corrimientos se pre- acortamiento hacia el sur. senta más concentrada en comparación con la otra subárea del sector imbricado. 3.2.2. FAJA PLEGADA Y CORRIDA DEL Cabe destacar el desarrollo de un anticlinal vol- ACONCAGUA (Ramos, 1988b; cado asimétrico que forma el flanco occidental de la Cegarra, 1994) quebrada del arroyo Durazno y cuyo núcleo está constituido por la Formación Tordillo. A su vez, este De menor desarrollo areal, ubicada al norte de anticlinal se encuentra limitado en su flanco oriental la caldera Diamante, la faja plegada y corrida del por el corrimiento que dispone a las sedimentitas Aconcagua se caracteriza por presentar, de modo mesozoicas sobre los depósitos terciarios aflorantes predominante, una estructura de tipo epidérmico (thin en la quebrada del arroyo Durazno. Este anticlinal skinned). Se halla ubicada en el ambiente de ha sido interpretado como un pliegue de propaga- retroarco y muestra un sentido de cizalla antitético ción, posteriormente trasladado (transported fault con respecto a la subducción andina. Esta faja se propagation fold) (Folguera, 1997). Los desarrolló y fue activa principalmente entre el corrimientos aflorantes hacia el oeste de este Mioceno inferior y el superior, siendo progresivamen- anticlinal se clasificarían, según sus características te desactivada y atrapada en el interior del orógeno estructurales, como del tipo fuera de secuencia (out- andino debido al avance de la deformación hacia el of-sequence thrust). Éstos representan la respues- este a partir del Mioceno superior. ta estructural frente a la dificultad para continuar A la latitud de la Hoja en análisis, la faja plegada avanzando a causa de la fijación del sistema de y corrida del Aconcagua puede ser dividida, siguien- corrimientos (sticking point) en el frente orogénico do a Ramos et al. (1997), en dos sectores de carac- debido al ascenso de la Cordillera Frontal. terísticas estructurales y sedimentológicas diferen- Zona de inversión tectónica: limita al este con tes (Repol, 2000) (Figs. 30 y 33). el sector de imbricación y hacia el oeste interesa el Zona de imbricación: abarca el área compren- área cordillerana chilena, donde posiblemente tenga dida entre el frente de corrimiento y las nacientes un mayor desarrollo. Este sector se caracteriza por del arroyo Durazno. Se caracteriza por la presencia presentar dos estructuras de primer orden, repre- de un sistema de siete u ocho corrimientos. A su sentadas por un anticlinal y un sinclinal, ambos vol- vez, este sector puede ser subdividido en dos cados con sus flancos inclinando hacia el oeste subáreas menores en función del tipo de litologías (Bühler, 1997). Estas estructuras poseen Volcán Maipo 61

Sector pedemontano

Faja plegada y corrida del Aconcagüa

Sistema de corrimientos en secuencia Zona de imbricación Sistema de corrimientos fuera de secuencia

Zona de inversión tectónica

Faja plegada y corrida de Malargüe

Sector externo

Sector interno

Bloque de la Cordillera Frontal

Caldera Diamante

Figura 30. Dominios estructurales de la Hoja 3569-I, Volcán Maipo.

Figura 31. Anticlinorio del río Atuel sobre la margen norte del río homónimo. 62 Hoja Geológica 3569-I

Figura 32. Formación Agrio sobre la margen norte del río Diamante. semilongitudes de onda apreciables, en comparación lugar una estructura anticlinal asociada a una falla cuyo con aquellas observadas en el sector imbricado. buzamiento se orienta hacia el este. Además, se registran cambios en el rumbo de las La estructuración de la Cordillera Frontal como tal, estructuras, como es el caso del sinclinal que con se produjo durante los estadíos finales de la orogenia rumbo N-S atraviesa el del arroyo Quebrado, y lue- Ándica, pero con posterioridad a la Cordillera Principal go cambia la orientación adquiriendo un rumbo E-O (Polanski, 1964a, 1972). Cabe agregar que el sistema de (Bühler, 1997). En consecuencia, se presume que el fallas de La Carrera ha sido activo durante el Plioceno, desarrollo de las estructuras en este sector estaría poniendo en evidencia la actividad neotectónica del blo- controlado por la inversión de hemigrábenes, relictos que de Cordillera Frontal (Cortés, 1993). del antiguo sistema extensional jurásico (Manceda y Figueroa, 1995). 3.2.4. SECTOR PEDEMONTANO

3.2.3. BLOQUE DE LA CORDILLERA Pese a tratarse del sector en donde predominan FRONTAL los depósitos más modernos y siendo en general es- tos ámbitos caracterizados por una estructuración El extremo sur de este bloque presenta las caracte- mínima y/o nula, cabe destacar las evidencias de rísticas de un gran anticlinal, donde afloran las volcanitas actividad neotectónica en algunos sectores debido de la Formación Choiyoi cubiertas por depósitos al avance del frente orogénico actual. mesozoicos (Kozlowski et al., 1993). La existencia de esta gran estructura anticlinal se deduce de las actitudes 3.3. NEOTECTÓNICA estructurales del flanco occidental que buza unos 30º al oeste y del oriental que llega a ser vertical, estando el 3.3.1. ANTECEDENTES límite oriental controlado por un fallamiento de alto ángu- lo con buzamiento al este. Esta falla fue reconocida por Para el examen de la actividad tectónica Lahee (1927), quien la denominó Diamante Fault. En cuaternaria registrada en la Hoja 3569-I, Volcán las lomas Bayas, ubicadas en el sector más austral, tiene Maipo, se han tomado en cuenta la deformación de Volcán Maipo 63

sedimentos y volcanitas de edad cuaternaria y las tañoso oriental, en especial de la cuchilla de la Tris- evidencias de generación y modificación tectónica teza, haciendo referencia al diastrofismo Diaguita y de geoformas asociadas al frente montañoso. No se mencionando algunas evidencias de la deformación han considerado aquí las estructuras generadas du- durante el Cuaternario. rante el Plioceno tardío a Pleistoceno temprano por En un trabajo de síntesis acerca del peligro el diastrofismo Diaguita, el cual deformó rocas sísmico y la neotectónica de la provincia de Mendoza, precuaternarias. Bastías et al. (1993) indicaron la existencia de fallas El río Diamante separa dos tramos cuaternarias vinculadas al frente montañoso y fallas morfotectónicos diferentes del frente montañoso, rumbodeslizantes de orientación noroeste en el sec- caracterizados por su composición, morfología y es- tor pedemontano. Tales estructuras fueron tratadas tructura. Hacia el norte, entre el río Diamante y el posteriormente por Tello (1994), quien destacó la arroyo del Rosario el frente corresponde a la por- relación de las estructuras oblicuas al frente (fallas ción austral de la Cordillera Frontal, representada Papagayos y Diamante) con el volcanismo por el cordón del Carrizalito; hacia el sur, está defi- cuaternario y con rasgos geomórficos locales. Cor- nido por la cuchilla de la Tristeza que forma parte de tés y Sruoga (1998) mapearon las escarpas de falla la Cordillera Principal. La localización de ambos tra- asociadas a esas estructuras e hicieron referencia mos está controlada por el fallamiento neógeno. En acerca de su evolución cronológica. el cordón del Carrizalito, el frente está definido por la falla Agua Escondida, mientras que en la cuchilla 3.3.2. SISMICIDAD de la Tristeza lo está por las fallas del Mesón y El Sosneado. Estas fallas, inversas y de vergencia orien- La distribución de epicentros de sismos localiza- tal, muestran evidencias de reactivación tectónica dos entre 0 y 20 km de profundidad revela que la cuaternaria en distintos tramos. mayor parte de la actividad sísmica moderna super- Durante el Neógeno, el sector pedemontano for- ficial se concentra preferentemente en la franja del mó parte de la cuenca de antepaís denominada por límite próxima a los 70°00' de longitud oeste. Si bien Polanski (1963) Depresión de los Huarpes; a la lati- se han reconocido numerosas evidencias de tud de la Hoja dicha depresión evolucionó durante el tectónica activa en distintas fallas del frente serrano Cuaternario a una cuenca intermontana limitada al y del piedemonte de la Cordillera Frontal, esta acti- este por el Bloque de San Rafael y modificada por vidad no está reflejada en el registro instrumental de la acción tectónica. sismos de esa región. Por otra parte, la inferencia Un estudio detallado y precursor de la de actividad cuaternaria en la cuchilla de la Tristeza estratigrafía, neotectónica y geomorfología del am- a partir de la compilación de los escasos anteceden- biente pedemontano de la Cordillera Frontal del nor- tes geológicos disponibles se ve respaldada por una te de Mendoza fue realizado por Polanski (1963); en anómala concentración de sismos modernos. ese trabajo presentó un mapa a escala aproximada 1:320.000 de la mayor parte del sector pedemontano 3.3.3. DESCRIPCIÓN DE LAS ESTRUC- nororiental de la Hoja, al norte del río Diamante. TURAS CUATERNARIAS Volkheimer (1978) estudió el sector sur de la Hoja entre los 34º30' y los 35º00’ de latitud sur; Los elementos estructurales cuaternarios están mapeó distintas unidades sedimentarias localizados en el sector oriental de la Hoja, tanto en el tardíocenozoicas y distinguió acumulaciones volcá- frente cordillerano como en el ámbito pedemontano nicas cuaternarias de distinta edad que, siguiendo a adyacente. Las principales fallas, zonas de falla y Polanski (1963), relacionó a los movimientos escarpas de falla cuaternarias constituyen, según su neotectónicos; asimismo, no mapeó fractura alguna orientación, dos grupos principales (cuadro 3). en coincidencia con el frente montañoso de la Cor- dillera Frontal. En el texto, dicho autor hizo referen- Estructuras longitudinales del frente mon- cia a la reactivación cuaternaria de extensas fallas tañoso y del sector pedemontano proximal longitudinales localizadas al este y oeste de la cuchi- lla de la Tristeza, citando cientos de metros de re- Falla Chalet chazo. Kozlowski (1984) y Kozlowski et al. (1989, 1993) presentaron reconstrucciones de la estructu- En el extremo nordeste de la Hoja, una zona de ra superficial y de subsuelo de parte del frente mon- falla de traza irregular más o menos paralela al fren- 64 Hoja Geológica 3569-I

13 km

Cº Diamante

0

Vn. Maipo

Cº Risco Platedo

Cº Overo

Cº Sosneado Esquema estratigráfico y tectónico. Figura 33.

Gr. Malargüe Gr. Neuquén Gr. Rayoso

Fm. Choiyoi Fm. El Imperial Tonalita Carrizalito Fm. La Horqueta Fm. Las Lagunitas

Gr. Mendoza Gr. Lotena Gr. Cuyo Fm. A. Malo

riásicos a

Sinclinal

Anticlinal Anticlinal volcado

Falla inversa

Centro volcánico Sinclinal volcado

Volcanitas Cenozoicas

Basamento paleozoico y triásico

Depósitos cuaternarios Hielo, nieve Estratos oligocenos a Pliocenos

Estratos cretácicos (inf.) a eocenos Estratos T Cretácicos (Inf.) Volcán Maipo 65

te montañoso limita por el este al conjunto de suaves de la escarpa; constituyen escarpas de falla lomadas pedemontanas y hacia el sur, la loma Gran- pedemontanas con ladera al este, en las que se han de de Yaucha (Fig. 34). Fue inicialmente reconocida medido desniveles de 8 a 19 m y pendiente máxima por Polanski (1963, 1964b) quien la consideró una de 10° y 14°. Están ubicadas pocos kilómetros al nor- falla gravitacional con labio hundido al este; según te del puesto Viejo en la estancia Tierras Blancas y al ese autor, formaba parte de la falla Tupungato, la sudeste de la loma Grande de Yaucha. cual continuaba hacia el norte con orientación norte La porción sur de la superficie rocosa de erosión - sur debajo de la cubierta aluvial. Posteriormente pedemontana y la cubierta pleistocena están fue denominada falla Chalet por Bastías et al. (1993) segmentadas por numerosas fallas oblicuas de orienta- y Tello (1994), quienes reconsideraron su traza, con- ción noroeste que forman parte de la zona de falla Pa- tinuándola hacia el noroeste a lo largo del cerro Chalet pagayos; entre ellas se destaca la falla Casa de Piedra y del frente montañoso hasta el río Tunuyán. Cortés (Figs. 34 y 35), en la que el desplazamiento oblicuo y Sruoga (1998) coincidieron con esta última recons- dextral permitió la rotación del bloque pedemontano. trucción y la interpretaron como una falla inversa que en la loma Grande de Yaucha ascendió un ex- Segmento reactivado de la falla Agua Es- tenso pedimento rocoso elaborado en rocas del For- condida mación Choiyoi y deformó la cobertura constituida por la Formación Los Mesones. La falla Agua Escondida, de edad neógena, deli- En la zona de falla Chalet es posible reconocer mita el frente montañoso de la Cordillera Frontal en- varios segmentos estructurales (De Polo et al., 1989) tre el arroyo del Rosario y el río Diamante. La exten- de los cuales el más austral se extiende dentro de la sión del frente es de 70 km y en él se reconocen dos Hoja, hasta la loma Grande de Yaucha. Al norte del tramos con distinta geometría y morfología. El tramo arroyo del Rosario, la falla está inferida por la culmi- norte, entre los arroyos del Rosario y de los Papaga- nación rectilínea de las lomadas pedemontanas que yos, posee una orientación nor-nordeste y un diseño exhuman una superficie de erosión regional muy sinuoso definido por entrantes y salientes, que evi- erosionada, cubierta parcialmente por remanentes de dencian su importante degradación. En todo este tra- la Asociación Piroclástica Pumícea. Entre el arroyo mo las rocas del sector montañoso están cortadas por del Rosario y la loma Grande de Yaucha, la zona de una densa red de fracturas de rumbo noroeste, las falla emergente representada por escarpas rocosas y cuales controlan en gran medida la erosión del frente pedemontanas, delimitan al oeste un extenso bloque y el desarrollo del fracturamiento cuaternario. El tra- occidental elevado (pared colgante), que muestra una mo sur, entre el arroyo de los Papagayos y el río Dia- rotación de 7° a 15° contrapendiente (al oeste) y un mante, posee una orientación general norte-sur y un amplio arqueamiento sinclinal kilométrico en la co- diseño con menor sinuosidad, controlado tanto por la bertura pleistocena. La escarpa de falla rocosa ela- actividad cuaternaria de la falla Agua Escondida, como borada en volcanitas de la Formación Choiyoi pre- por el rumbo paralelo a la falla de las capas de senta una altura variable entre 75 m y 120 m aproxi- volcanitas permo-triásicas y de sedimentitas cretácicas madamente. De la falla principal se desprenden rami- en el frente montañoso. Al oeste del cerro Chato, en ficaciones laterales más jóvenes que afectan a los la zona de Agua Escondida, la reactivación cuaternaria depósitos pedemontanos holocenos acumulados al pie de este tramo de la falla originó una pronunciada

                                         !  " # $ % &   ' (  ) 

Cuadro 3. Localización de fallas, escarpas de fallas y lineamientos cuaternarios en el sector nororiental de la Hoja Volcán Maipo. Basado en Cortés y Sruoga (1998). 66 Hoja Geológica 3569-I

flexión de arrastre (Fig. 34) en los depósitos psefíticos Falla Cerro Negro de Yaucha de la Formación Los Mesones, con inclinaciones que superan los 20° al este. Si bien Polanski (1963) consideró al cerro Ne- gro de Yaucha (2.031 m) como un remanente erosivo Fallas El Sosneado y del Mesón mesetiforme de la Formación Los Mesones, vincu- lado a la falla Tupungato, se han hallado evidencias La actividad tectónica cuaternaria en el sec- de su desconexión con cualquier falla longitudinal tor externo del cinturón plegado y corrido de paralela al frente y su asociación a una línea de Malargüe, estaría evidenciada según Kozlowski fracturamiento oblicua de rumbo noroeste. La zona (1984) en el truncamiento de basaltos cuaternarios elevada que constituye el cerro Negro muestra un y en la presencia de rasgos geomórficos de ori- diseño romboidal y está limitada en su borde gen tectónico asociados a la estructura sinclinal suroccidental por un conjunto de escarpas de falla de la cuchilla de la Tristeza. Movimientos pedemontanas elaboradas en las Formaciones Los cuaternarios a lo largo de las fallas del Mesón y Mesones y La Invernada y en sedimentos fluviales El Sosneado serían los responsables del desplaza- holocenos, las cuales conforman la falla del Cerro miento vertical en varios centenares de metros Negro de Yaucha (Fig. 34). que tienen las acumulaciones psefíticas de la For- La estructura del cerro Negro de Yaucha es in- mación Los Mesones, entre la parte cuspidal de terpretada como una dorsal de presión (pressure la cuchilla de la Tristeza (Volkheimer, 1978) y el ridge) asociada a una curvatura restrictiva o con- pie oriental de la misma. La tectónica activa aso- vergente (restraining bend) bajo un régimen de ci- ciada al sector externo del cinturón está documen- zalla simple con desplazamiento de rumbo sinistral, tada por el registro instrumental de sismos super- reactivado progresivamente en distintos eventos du- ficiales. rante el Cuaternario.

Estructuras oblicuas y transversales del Fallas oblicuas y transversales en el sector sector pedemontano del arroyo El Carrizalito

Zonas de falla Papagayos y Diamante Al norte del cerro Chato y junto al frente montaño- so (Fig. 34) se han determinado al menos dos trazas Las zonas de falla Papagayos y Diamante son oblicuas de rumbo noreste definidas por cambios en la estrechas fajas de fracturamiento de rumbo noroes- coloración de los sedimentos superficiales y numero- te, definidas por escarpas pedemontanas y rocosas sas vertientes alineadas. Al nordeste de ese cerro, una subparalelas adyacentes al frente serrano (Fig. 35) decena de centros volcánicos presentan una notoria y conjuntos de volcanes monogénicos y poligénicos alineación este - oeste en al menos dos zonas de frac- alineados, localizados en una posición más distante tura. Estas últimas alineaciones son similares a las que del frente (Cortés y Sruoga, 1998). Estos elemen- se observan inmediatamente al oeste del volcán Payún tos están separados por tramos cubiertos por Matru y son coherentes con una deformación local con ignimbritas de la Asociación Piroclástica Pumícea una componente de extensión norte-sur. y por sedimentos más modernos que no muestran evidencias de una significativa deformación 3.3.4. CONSIDERACIONES CRONO- cuaternaria (Fig. 36). Las zonas de falla muestran LÓGICAS segmentos con diferencias en el grado de actividad tectónica cuaternaria. Presentan asimismo una ci- El diferente grado de deformación que presen- nemática compleja con evidencias de componen- tan las sucesiones cuaternarias pleistocenas y tes de desplazamiento de rumbo y componentes de holocenas aflorantes en la Hoja permiten reconocer inclinación con hundimiento generalizado al suroeste distintos eventos de actividad tectónica durante el en distintos sectores de la faja. Se han determina- Cuaternario. La zona de falla Chalet, las fallas Agua do reactivaciones sucesivas con actividad tectónica Escondida y Cerro Negro de Yaucha y los tramos durante el Pleistoceno temprano anterior a los 450 proximales de las zonas de falla Papagayos y Dia- ka (equivalente a la Fase Neotectónica Póstuma mante muestran que la mayor deformación se aso- de Polanski, 1963) y probable deformación cia a eventos tectónicos sucesivos acaecidos duran- holocena. te el Pleistoceno temprano a Pleistoceno medio tem- Volcán Maipo 67

prano, con anterioridad a la acumulación de la Aso- 4.1.2. RELIEVE SERRANO PREDOMI- ciación Piroclástica Pumícea. Asimismo, tanto la falla NANTEMENTE MODELADO POR Cerro Negro de Yaucha como la zona de falla Cha- PROCESOS FLUVIALES let exhiben evidencias de reactivaciones durante el Holoceno. La deformación activa más reciente a El sector más oriental de este paisaje tectónico partir del registro instrumental de sismos superficia- constituido por la faja plegada y corrida de la Cordi- les muestra una mayor concentración en la franja llera Principal y por los afloramientos de rocas ígneas del límite internacional y en el sector externo de la y metamórficas de la Cordillera Frontal fue modela- Cordillera Principal al sur del río Diamante. do por acción fluvial y fluvioglacial. Los depósitos aluviales se han acumulado cons- 4. GEOMORFOLOGÍA tituyendo depósitos sinorogénicos en la zona pedemontana y la acción fluvial generó niveles de Dos unidades morfológicas netamente discímiles erosión en las cabeceras de los valles y quebradas. caracterizan diferentes paisajes en la Hoja Volcán La red de drenaje se organiza a partir de dos Maipo. Al oeste se extiende una zona montañosa colectores principales, los ríos Atuel y Diamante, los que abarca un segmento de la Cordillera Principal y cuales reciben las aguas de alta montaña. la sección sur de la Cordillera Frontal, en tanto que Dentro del ambiente de Cordillera Frontal, for- hacia el este se halla la región pedemontana. mado por granitoides, volcanitas y sedimentitas El área es atravesada en dirección noroeste - paleozoicas, el relieve pierde progresivamente altura sudeste por los ríos Diamante y Atuel. Aproximada- hacia el este y sur y es muy variado debido a los dife- mente paralelos entre sí, son los dos colectores de la rentes procesos geomórficos que lo modelan. Pre- zona y en ellos desaguan numerosos afluentes. senta una red de drenaje de textura gruesa. Este pai- A continuación se describen las distintas formas saje tiene un estado de juventud avanzada demorado que integran cada una de estas unidades morfológicas. en su desarrollo por las condiciones climáticas duran- te el Pleistoceno superior y las de englazamiento ac- 4.1. ZONA MONTAÑOSA tual (González Díaz y Fauqué, 1993). En el ambiente de Cordillera Principal, González 4.1.1. RELIEVE DE FAJA PLEGADA Y Díaz y Fauqué (1993) reconocieron en el paisaje CORRIDA PREDOMINANTEMEN- un relieve maduro labrado por un ciclo fluvial, un TE MODELADO POR EROSIÓN importante control estructural sobre la red de dre- GLACIAL Y FORMAS DE ACUMU naje, valles de rumbo, anaclinales y cataclinales y LACIÓN ASOCIADAS distinguen también mesas, cuestas, crestas y espi- nazos. En este sector la estructuración de la faja plegada y corrida constituye el elemento 4.1.3. APARATOS VOLCÁNICOS MODI- morfológico más importante determinando un FICADOS POR PROCESOS DE RE- paisaje tectónico. MOCIÓN EN MASA Y ACCIÓN La orogenia andina elevó la zona por encima GLACIAL de los 2.500 m, donde dominan condiciones climáticas que permitieron el modelado glaciario del En la Cordillera Principal las volcanitas forman paisaje, sobre todo durante el englazamiento extensas planicies lávicas que sepultaron en gran parte pleistoceno. En esa época se formaron casquetes el paisaje mesozoico previo. Es de destacar la pre- glaciarios de alta montaña en las mayores eleva- sencia de cinco centros efusivos, importantes por su ciones . De éstos, partían glaciares de descarga extensión areal y altura, ellos son el Risco Plateado, que avanzaban sobre los principales valles de la Sosneado, Overo, Guanaquero y Maipo. Están for- región. Las geoformas producidas se encuentran mados en general por potentes mantos de andesitas y en los ríos Atuel, Diamante y sus tributarios, donde basaltos que, dependiendo de la edad del ciclo efusi- se reconocen artesas, valles en U y morenas. Ac- vo, exhiben mayor o menor degradación. Volkheimer tualmente, con los glaciares en retroceso, las (1978) consideró que las formas de relieve son juve- geoformas vinculadas a esta morfogénesis están niles y que la red de drenaje no está bien integrada. siendo modificadas por procesos de remoción en Este ambiente se encuentra muy afectado por masa, fluviales, criogénicos y de disolución. procesos de remoción en masa, que generaron pre- 68 Hoja Geológica 3569-I

Figura 34. Bosquejo geológico del sector de la loma Grande de Yaucha en el que se aprecia la traza de las fallas Cha- let y Casa de Piedra. Volcán Maipo 69

Figura 35. Foto aérea del sector sur de la loma Grande de Yaucha en el que se indica: FCh: zona de falla Chalet, FCP: falla Casa de Piedra, AY: arroyo de Yaucha. En línea de guiones: traza de plano axial de sinclinal desarrollado en depó- sitos de la Formación Los Mesones. Las flechas muestran la localización de escarpas de falla, las cuales forman parte de la zona de falla Papagayos. dominantemente glaciares de roca y deslizamientos, Otras geoformas que se incluyen en este item como los que se observan en los volcanes Maipo y son los necks y farallones, que como resultado de la Sosneado. erosión diferencial (González Díaz y Fauqué, 1993) En los aparatos volcánicos, la actividad glaciaria se forman cuando plutonitas terciarias intruyen a las modificó el paisaje. Sruoga et al. (1998b) describie- sedimentitas mesozoicas. ron en el volcán Maipo formas erosivas mayores, entre las cuales dominan circos glaciarios y otras 4.1.4. REMOCIÓN EN MASA formas menores como pulimento, surcos y estrías, sobre las coladas en el piso de la caldera. También Este proceso es muy importante en la región propusieron que el origen de la laguna del Diamante y se halla favorecido por la intensa congelifra- estaría relacionado con el retiro del hielo. cción en la zona montañosa, la escasa cubierta 70 Hoja Geológica 3569-I

Figura 36. Foto aérea del sector de La Cienaguita (LC) en el que se indica con flechas la localización de escarpas de falla pedemontanas impresas en depósitos psefíticos de la Formación Los Mesones, las cuales forman parte de la zona de falla Diamante. AAP: segmento cubierto por depósitos de la Asociación Piroclástica Pumícea, del Pleistoceno medio, en el cual no se observan escarpas de falla cuaternarias. vegetal y el régimen de precipitaciones. Los flu- das por congelifracción y movilizadas por reptaje. jos lentos como reptaje, geliflucción y soliflucción Buenos ejemplos de reptaje se encuentran en la la- son los más típicos y se los encuentra presentes dera oeste del cerro Plomo y en la margen sur del en casi todas las laderas, formando mantos río Bravo, aunque estos últimos no son mapeables. detríticos, taludes y mantos o lóbulos de Merecen mención los glaciares de roca ubica- soliflucción. dos en las laderas del cerro Sosneado y en la pared A mayores alturas predominan las pendientes norte de la caldera Diamante, como así también los verticales a subverticales debido al modelado de la margen este del arroyo Malo. glaciario, a las cuales se asocian procesos de caída Se han reconocido fenómenos de remoción en de rocas. A menores alturas se hacen más frecuen- masa que han producido la obstrucción de cursos tes las cubiertas de detritos, en su mayoría genera- fluviales, tal como el deslizamiento que se puede Volcán Maipo 71

observar en las cabeceras del río Atuel, que ha for- Se incluyen también en este ambiente, lo que mado, por endicamiento, la laguna homónima. Polanski (1963) denominó planicie piroclástica pumícea y los pedimentos antiguos del pie de sierra, 4.1.5. PAISAJE KÁRSTICO estos últimos ubicados al norte del arroyo Papaga- yos. Se encuentra asociado a los depósitos evaporíticos de la cuenca mesozoica. Se manifiesta 4.2.2. HUAYQUERÍAS en forma de dolinas de hasta 6 m de diámetro, como las que se encuentran en las márgenes del río Dia- Se encuentran labradas sobre los sedimentos mante en el paraje denominado Aguas Amarillas. terciarios de las Formaciones Tristeza y Agua de la En general es difícil estimar la profundidad de las Piedra. Se distinguen por poseer un paisaje muy ás- mismas debido a que se encuentran inundadas. pero debido a la alta densidad de drenaje y estre- Geoformas semejantes se distinguen en el cajón del chos interfluvios, a pesar que el relieve relativo de la Burro. zona es escaso. La red de drenaje dendrítica está compuesta por quebradas estrechas de poca pro- 4.1.6. PLANICIES ESTRUCTURALES fundidad. A causa de la erosión, es común observar LÁVICAS fenómenos de remoción en masa en las cabeceras de la red fluvial. Volkheimer (1978) señaló la pre- Se originaron a partir de derrames basálticos, sencia de este relieve en el valle del río Diamante y destacándose las playas del Jote y los mesones sobre el flanco oriental de la cuchilla de la Tristeza. Morado y de Afuera. Algunas de ellas son coladas modernas encauzadas en amplios valles actuales, 4.2.3. PAISAJE VOLCÁNICO mostrando por lo tanto geometrías alargadas. Los deslizamientos en los bordes de las mesetas son Edificios volcánicos solitarios o formando gru- mayoritariamente de tipo rotacional, ofreciendo un pos, interrumpen la monotonía de la extensa zona aspecto escalonado. pedemontana, entre ellos se destacan los cerro Dia- mante, Morado, Chato y Negro. 4.1.7. GLACIARES ACTUALES 5. HISTORIA GEOLÓGICA En el cordón limítrofe los glaciares de valle son escasos y las lenguas glaciarias que provienen de En función del marco geodinámico imperante, la los campos de nieve ocupan las quebradas tributarias descripción de la historia evolutiva de la comarca y en algunos pocos casos llegan hasta la desembo- puede ser sistematizada en tres grandes etapas, co- cadura en los valles mayores (Groeber, 1947). Las rrespondientes a las eras paleozoica, mesozoica y cabeceras de los ríos Atuel y Diamante, el sector de cenozoica. las altas cumbres, y las calderas del cerro Overo, por encontrarse a alturas superiores a los 5.500 – a) Paleozoico 6.000 m, tienen hielo y nieve permanente (González Díaz y Fauqué, 1993). Presumiblemente en el Ordovícico-Silúrico tuvo lugar la depositación en ambiente marino de sedi- 4.2. ZONA PEDEMONTANA mentos esencialmente turbidíticos conocidos como formaciones Las Lagunitas y La Horqueta. La de- 4.2.1. PLANICIES ALUVIALES PEDE- formación y el metamorfismo de bajo grado que afec- MONTANAS taron a esta secuencia eopaleozoica serían atribuibles a la orogenia Chánica. Ocupan el sector este de la Hoja y se extienden Durante el Carbonífero no se registró sedimen- integrando amplias bajadas. Están poco disectadas tación en el ámbito de la Cordillera Frontal. En cam- por la erosión y presentan una suave pendiente ha- bio, tuvo lugar la intrusión de cuerpos tonalíticos, los cia el Este (Polanski, 1964b). Volkheimer (1978) di- cuales conjuntamente con otros intrusivos análogos ferenció tres niveles como resultado de la agradación en el norte de Cordillera Frontal estarían represen- pedemontana, representados por las Formaciones tando las raíces de un arco volcánico aún poco estu- Los Mesones, La Invernada y Las Tunas. diado. La inyección de cuarzo hidrotermal de carác- 72 Hoja Geológica 3569-I

ter penetrativo y exclusivo para las sedimentitas lados a un sistema de rift desarrollado en todo el eopaleozoicas estaría relacionada con la intrusión de ámbito de la Cuenca Neuquina (Gulisano, 1981; estos cuerpos. Legarreta et al., 1993). Posteriormente, a partir del En un ambiente geomorfológico cercano a la Sinemuriano, la subsidencia en la cuenca estuvo con- peneplanización aconteció uno de los eventos trolada por un efecto térmico, dando lugar a la etapa magmáticos de mayor trascendencia del Paleozoico de sag. Para el intervalo Sinemuriano - Bajociano, superior, el emplazamiento de una asociación volcáni- representado por los depósitos de las formaciones co - plutónica de gran distribución areal y amplio rango Puesto Araya y El Codo, Legarreta et al. (1993) temporal. Este complejo dominantemente volcánico, con destacaron la existencia de una única cubeta de se- facies hipabisales asociadas y cuerpos plutónicos su- dimentación dominada por una polaridad sedimentaria bordinados presenta composición andesítica en sus tra- orientada de este a oeste, en comparación con la mos inferiores y se torna netamente riolítica hacia la configuración de depocentros aislados que imperó parte superior. Este cambio en la composición química durante el Jurásico temprano. Este período está ca- del magma está reflejando un cambio tectónico duran- racterizado además por un ascenso eustático global te su emplazamiento. Al comienzo, en el Pérmico, su (Uliana y Biddle, 1988), lo cual determinó un neto filiación calcoalcalina indica asociación a un régimen carácter transgresivo de las secuencias de subducción de margen convergente, mientras que sedimentarias. El acmé de la inundación habría ocu- hacia el Pérmico superior - Triásico su impronta rrido presumiblemente en el Aaleniano - Bajociano geoquímica indica un cese gradual de la subducción y (Yrigoyen, 1979). la instalación de un régimen de extensión regional. El Hacia fines del Dogger, más precisamente ha- colapso extensional que sucedió a la orogénesis cia el Calloviano temprano, tuvo lugar un descenso paleozoica (Uliana et al., 1989) se halla sustentado por brusco del nivel de base con condiciones de deseca- evidencias paleomagnéticas (Rapalini, 1989), que se- miento, que provocaron la depositación de evaporitas ñalan una desaceleración de la velocidad de conver- representadas por la Formación Tábanos (Legarreta gencia durante el lapso Pérmico superior - Triásico et al., 1993). Durante el Neocaloviano - Oxfordiano medio. En el norte de la provincia de Mendoza, el de- se produjo un nuevo ascenso eustático global, hecho rrame de basaltos tholeíticos en la cuenca de Cuyo que resulta en la depositación de las areniscas lito- marca el acmé de la extensión en el Triásico medio rales de la Formación Lotena y de las calizas fétidas (Ramos, 1993). de la Formación La Manga. A este episodio de inun- dación le sucedió otro de circulación restringida hasta b) Mesozoico total desecamiento de la cuenca, con precipitación del yeso de la Formación Auquilco. El denominado La era mesozoica se caracterizó por el relleno Yeso Principal constituye un nivel guía de gran im- sedimentario de una cuenca de retroarco asociada a portancia estratigráfica y nivel de despegue estruc- un arco volcánico occidental de tipo insular. En tiem- tural. pos jurásicos el arco volcánico estaba desdoblado El Kimmeridgiano está caracterizado por la sedi- en un arco interno y otro externo, con una cuenca mentación clástica de las capas de la Formación de intra-arco entre ambos (Sanguinetti y Ramos, Tordillo. Esta unidad, de neto ambiente continental en 1993). A lo largo de la mayor parte del Mesozoico, la porción correspondiente al Miembro Morado, en- la cuenca estuvo sometida a las oscilaciones grana lateralmente con las rocas volcánicas andesíticas eustáticas globales, cuyo carácter cíclico es el prin- de la Formación Río Damas. Con un espesor que al- cipal responsable de la sucesión alternada de even- canza los 5.500 m en territorio chileno (Yrigoyen, tos transgresivos y regresivos. 1979) y una típica impronta calcoalcalina, esta unidad En el Triásico superior, el registro de depósitos evidencia la actividad de un importante arco volcáni- marinos en la cuenca del río Atuel, único en toda la co al oeste de la cuenca. La presencia de coladas de Cuenca Neuquina, marca el inicio de la sedimenta- basalto olivínico entre los depósitos de origen fluvial ción en una cuenca de tipo rift. Los sedimentos de la Formación Tordillo en la zona de margen de conglomerádicos de la Formación El Freno repre- cuenca, estaría indicando la existencia de un ambien- sentan los típicos depósitos asociados a la etapa de te volcánico de retroarco vinculado al arco principal. sinrift del Jurásico temprano. Se estima que para la En la zona cordillerana del norte de Mendoza se des- época del inicio de la sedimentación mesozoica exis- criben intercalaciones basálticas equivalentes tían numerosos depocentros desconectados vincu- (Sanguinetti, 1989). Volcán Maipo 73

Un nuevo ascenso eustático global durante el arco de tipo insular por un arco emplazado en corte- Tithoniano determinó el restablecimiento de las con- za continental estarían vinculados al desarrollo de diciones marinas de sedimentación, representadas un cinturón orogénico incipiente (Legarreta et al., por la Formación Vaca Muerta. Entre el Tithoniano 1993). y el Berriasiano tuvo lugar la mayor expansión de la cuenca hacia el antepaís (Legarreta et al., 1993). c) Cenozoico En la margen sur del río Diamante, depósitos clásticos de edad berriasiana se apoyan directamente La era cenozoica para estas latitudes está sobre el sustrato. El Valanginiano, un período de ni- enmarcada por el desarrollo del Ciclo Ándico, que vel de base relativamente bajo, se halla representa- abarca las sucesivas fases de deformación orogénica, do en esta parte de la cuenca por las calizas los depósitos sinorogénicos alojados en las cuencas esqueléticas de la Formación Chachao, mientras que de antepaís y un volcanismo acompañante de arco y en otros sectores se registró depositación clástica y retroarco. volcaniclástica. En el lapso Hauteriviano - La escasez de información radimétrica de los Barremiano se registran entre 9 y 14 secuencias diferentes eventos magmáticos reconocidos y de depositacionales correspondientes a fluctuaciones estudios detallados de las diversas fases de defor- menores del nivel del mar (Legarreta et al., 1993). mación acaecidas desde el Terciario hasta la actua- Con respecto al período anterior, los mares lidad impide establecer una ajustada evolución hauterivianos muestran un aumento en la magnitud tectomagmática de la comarca. En consecuencia, y del onlap costero, quedando bien documentado en teniendo en cuenta el eventual diacronismo existen- la región de la margen sur del río Diamante, donde te entre las fases de deformación y el volcanismo a las calizas fosilíferas de la Formación Agrio se dis- lo largo de todo el segmento cordillerano, se propo- ponen por encima de las capas berriasianas ne un esquema evolutivo de carácter provisorio en (Legarreta y Kozlowski, 1984). la aplicación de las Fases o Movimientos que inte- En el Aptiano - Albiano se produjo el último gran el Ciclo Ándico en el sentido de Yrigoyen descenso eustático que determinó el retiro defini- (1979). tivo de los mares pacíficos. El fenómeno de re- Durante el Paleógeno aparentemente prevale- troceso y desecamiento de la cuenca está repre- cieron condiciones de estabilidad tectónica similares sentado por los depósitos evaporíticos de la For- a las que se registran más al sur (Nullo et al., 1998). mación Huitrín. La presencia de niveles calcáreos En el lapso Paleoceno - Eoceno continuó la sedi- en las formaciones Huitrín y Rayoso indican que mentación correspondiente al Grupo Malargüe, mien- el proceso fue gradual, dando lugar a sedimenta- tras que el Oligoceno representa un período de no ción de ambiente netamente continental en el in- depositación y de reducida actividad magmática co- tervalo Cenomaniano - Santoniano (Grupo rrespondiente a la Formación Molle. Neuquén). En otros sectores de la Cuenca A partir del Mioceno el marco geodinámico re- Neuquina, los grupos Rayoso y Neuquén se en- gional determinó condiciones de subducción de tipo cuentran separados por una discordancia corres- andino, con la instalación de un arco volcánico que pondiente a los movimientos Intersenonianos experimentó migración y expansión, no así cese de (Yrigoyen, 1979). actividad, en los últimos 20 millones de años. El registro sedimentario atribuible al lapso Concomitantemente, los esfuerzos compresivos pro- Campaniano-Eoceno (Grupo Malargüe) refleja con- vocaron la estructuración de la Cordillera Principal diciones de depositación en ambiente continental con en una faja plegada y corrida y en el bloque de la importante participación piroclástica (Formación Cordillera Frontal. Las cuencas de antepaís vincula- Loncoche), marino con abundante fauna de filiación das a las sucesivas fases de deformación fueron atlántica (formaciones Roca y Saldeño) y nuevamen- rellenadas por depósitos sinorogénicos que acompa- te continental piro-epiclástica (Formación Pircala - ñaron la migración del frente orogénico hacia el Coihueco). La vasta transgresión atlántica en el antepaís. Maastrichtiano y el aporte de abundante material Tentativamente asignados al Oligoceno supe- piroclástico implica un importante cambio rior-Mioceno inferior, los intrusivos subvolcánicos paleogeográfico con respecto al Jurásico-Cretácico de la Formación Palaoco estarían representando inferior. La interrupción de la conexión pacífica, la la actividad de un arco expandido hacia el este, inversión en el área de aporte y el reemplazo de un en comparación con el arco mesozoico. De acuer- 74 Hoja Geológica 3569-I

do con los datos radimétricos aportados por Nullo nifestación de la misma consistió en la reactivación, et al. (1997), la actividad del arco mioceno se halla durante el Pleistoceno y Holoceno, de antiguas zo- acotada entre los 17 y los 5 Ma. Durante este lap- nas de fractura de orientación oblicua al frente mon- so de tiempo tuvo lugar la máxima expansión del tañoso, íntimamente asociadas al derrame de basal- arco andino, representado por los estratovolcanes tos en el ámbito del retroarco andino (Cortés y y los intrusivos andesíticos de la Formación Huincán. Sruoga, 1998). Los Rodados Lustrosos de la Formación Agua de La actividad volcánica registrada durante el la Piedra, separada del sustrato por una fuerte dis- Cuaternario en el ámbito cordillerano y cordancia angular, representa los depósitos pedemontano, evidencia un sistema de par arco- sinorogénicos más antiguos del Cenozoico. Según retroarco. A causa de la falta de dataciones Kozlowski (1984), esta discordancia estaría aso- radimétricas y de análisis químicos, es difícil preci- ciada con la acción de la Fase Incaica, en la base sar en qué momento comenzó a funcionar ese sis- del Oligoceno. Sin embargo, Combina et al. (1997) tema como tal. De acuerdo con Bermúdez et al. y Combina y Nullo (1999) reasignaron esta unidad (1993), entre el Plioceno y el Holoceno se produje- al Mioceno medio y correlacionaron la discordan- ron zonas distensivas locales con emplazamiento cia basal con la Fase Pehuenche. Según este mo- de magma basáltico alcalino, las cuales han alter- delo, la depositación de la Formación Agua de la nado con la actividad de los volcanes andesíticos Piedra habría ocurrido en el lapso entre los 12 y los desarrollados bajo esfuerzos compresivos. Es no- 8 Ma, sobre el paleorelieve generado por la acción table la presencia de centros poligenéticos de com- de la Fase Pehuenche y contemporáneamente con posición andesítica, tales como el cerro Diamante el volcanismo huincanlitense. Aparentemente exis- y la sierra del Nevado en Mendoza y los volcanes te un hiatus entre el Oligoceno y el Mioceno me- Domuyo y Tromen en Neuquén, dentro de un cam- dio. Esta discontinuidad fue interpretada por Com- po volcánico dominado por centros monogenéticos bina et al. (1997) como producto de la acción basálticos. Este escenario fue interpretado por tectónica y magmática de la Fase Pehuenche. Pos- Bermúdez y Delpino (1989) como un ambiente de teriormente, tuvo lugar una nueva fase compresiva, arco en su máxima expansión, con volcanismo correlacionable con la Fase Quechua según Com- alcalino de intra-arco estrictamente en lugar de bina y Nullo (1999) o con la Fase Pehuenche se- retroarco. Este volcanismo, ampliamente extendi- gún Kozlowski (1984), la cual se pone de mani- do en el sur de Mendoza y norte de Neuquén, está fiesto en la discordancia que infrayace a la For- vinculado a la subducción de corteza oceánica cuya mación Loma Fiera. Esta unidad, de composición edad es mayor a 25 Ma (Muñoz Bravo et al., 1989) netamente piroclástica, testimonia la actividad inin- y a un sistema de fracturación profunda que favo- terrumpida de un arco situado al oeste y la reció el rápido ascenso de magmas muy primitivos, depositación de sus productos en una cuenca de en equilibrio con un manto peridotítico (Bermúdez antepaís generada a expensas de un nuevo pulso y Delpino, 1989; Bermúdez et al., 1993). de levantamiento y avance orogénicos. De modo Dentro de la Hoja, el representante más impor- análogo, la depositación de la Formación Tristeza tante del volcanismo activo es el volcán Maipo, em- representa la respuesta sedimentaria sinorogénica plazado en la caldera Diamante. Este centro, cata- a una nueva fase diastrófica, interpretada como logado como potencialmente activo (Sruoga et al., la Fase Quechua por Kozlowski (1984). Este au- 1998b) forma parte del arco volcánico actual en lo tor destacó que al finalizar la acción de esta fase que se conoce como segmento norte de la Zona la configuración de la cuchilla de la Tristeza ha- Volcánica Sur, la cual se extiende entre los 33° y 46° bría sido similar a la que presenta en la actualidad de latitud sur. Hacia el sur, el arco actual continúa y que las fallas del Mesón y El Sosneado habrían en el volcán Tinguiririca, situado en territorio chileno alcanzado su rechazo actual. Hacia fines del a los 34° 49´ de latitud sur. Plioceno, la Fase Diaguita culmina el ciclo de El escenario cuaternario se completa con los epi- orogénesis terciaria. sodios de avance glacial acaecidos en el Pleistoceno Durante el Cuaternario se sucedieron episodios - Holoceno. Si bien no hay estudios detallados de de sedimentación pedemontana (formaciones Los estratigrafía glacial para la zona abarcada por la Hoja, Mesones, La Invernada y Las Tunas) vinculados a la información disponible para la cuenca del río discretos ascensos del frente montañoso producto Mendoza (Espizúa, 1993), en el norte de la provincia, de la actividad neotectónica en la comarca. Otra ma- indica que la glaciación fue de tipo alpino y se produ- Volcán Maipo 75

jeron sucesivos estadíos glaciales durante el DEPÓSITOS DE MINERALES Cuaternario. Esta autora reconoció seis glaciaciones METALÍFEROS que ocurrieron durante el Pleistoceno (cinco) y Holoceno (una). La más extensa y antigua fue datada Cobre en 360.000 años y la más nueva ocurrió en el lapso 5.000 a 2.500 años A.P. Estudios palinológicos La mineralización cuprífera de la comarca se (Markgraf, 1983, 1986, en Espizúa, 1993) permitieron vincula con el magmatismo del Jurásico superior y realizar interpretaciones paleoclimáticas que indican del Paleógeno, distribuyéndose en yacencias y ma- un cambio importante a los 12.000 años A.P., lo cual nifestaciones que se sitúan próximas al límite inter- significa el dominio de condiciones postglaciales a partir nacional con Chile y se concentran, en su mayoría, de esa fecha. De acuerdo a la cronología glacial en el sector sudoccidental de la Hoja. holocena realizada por Stingl y Garleff (1985) para la Se reconocen depósitos hidrotermales cuenca del río Atuel, se reconoce un período de signi- volcanogénicos, filonianos, mixtos (metasomático- ficativo avance glacial entre los 6.000 y los 4.500 años filoniano), manifestaciones estratoligadas en A.P., seguido de un rápido retroceso a los 3.000 años sedimentitas y de diseminado. A.P., durante el cual los glaciares alcanzaron posicio- Los yacimientos volcanogénicos, que se hallan nes cercanas a las actuales. En el sector abarcado en la comarca de Las Choicas, son El Burrero, por la Hoja, las evidencias del paso del hielo, tales Amelia, Marcial, Clotilde, Juanita y Borsuno. Entre como depósitos morénicos y fluvioglaciales, circos, ellos se destaca la mina El Burrero, ubicada al este valles en U y rasgos menores tales como estriación y del cerro Leñas Choicas. Desde el complejo turísti- pulimento en todo el ámbito cordillerano, prestan tes- co de Las Leñas, al sur de la Hoja, se accede reco- timonio de la importante y recurrente acción glacial rriendo 8 km por camino de tierra, que conduce a durante el Cuaternario. Valle Hermoso, hasta el abra de los Entumidos y Por último, los depósitos de origen aluvial, coluvial desde allí se continúa 30 km al norte por huella para y de remoción en masa testimonian la acción de los vehículos doble tracción. agentes modeladores del paisaje en épocas recien- De acuerdo con Angelelli (1946) y Zanettini tes y actuales, los que sumados al volcanismo y (1984), en el sitio afloran areniscas de grano media- neotectónica determinan una dinámica de cambio no a fino, de colores rojo y violado, con permanente y constante evolución. intercalaciones de pelitas rojas y lavas andesíticas y basálticas de tonos oscuros. El conjunto correspon- 6. RECURSOS MINERALES de a la Formación Río Damas, de edad kimmeridgiana superior. En el ámbito de la Hoja, los hidrocarburos líqui- La mineralización cuprífera está contenida en dos y gaseosos constituyen los recursos minerales fisuras, a manera de stockwork, en la parte superior más importantes desde el punto de vista económico. e inferior de un manto de lava andesítica labradorítica, Ellos fueron explorados y desarrollados por Yaci- confinado entre areniscas rojas. La andesita es de mientos Petrolíferos Fiscales y, posteriormente, ex- color gris rojizo y presenta alteración hidrotermal plotados por compañías privadas como consecuen- propilítica, arcillosa y sericítica, con prehnita, calcita y cia de la desregulación petrolera. delessita rellenando alvéolos y grietas. Las Con respecto a los depósitos metalíferos, fueron sedimentitas no muestran signos de alteración ni de relevantes las mineralizaciones de cobre de la co- metamorfismo. El mineral ocurre en alvéolos y como marca de Las Choicas, las que recientemente han venas y venillas de 1 a 3 cm de espesor, en algunos sido objeto de nuevos estudios por parte de empre- casos hasta 15 cm; ocupan fracturas en la parte su- sas privadas, y la de hierro de Hierro Indio. perior del cuerpo lávico, próxima al contacto volcanita- Entre los minerales industriales son de particu- sedimentos, y está ausente en estos últimos. La lar interés económico los depósitos de granulado vol- mineralización hipogénica está constituida por cánico, tobas y piedra pómez del área de los arroyos calcosina gris y, subordinada, calcopirita, acompaña- Yaucha y Papagayos. Algunas yacencias de carbo- das por ganga de prehnita y calcita de depositación nes y asfaltitas fueron explotadas para combustible posterior a los metalíferos. Los minerales secunda- y, aunque a la fecha abandonadas, representan un rios son calcosina azul, cuprita, malaquita, azurita y recurso potencial para la comarca, al igual que la limonitas; la calcosina azul es la más abundante y re- baritina. llena fracturas e intersticios de la roca, además de 76 Hoja Geológica 3569-I

reemplazar a calcosina primaria y a calcopirita y con- con centro en la mina Las Choicas. La yacencia tener inclusiones de cuprita (Santamaría, 1984). Mena metasomática-filoniana Las Choicas se sitúa en el (1912) y Angelelli (1946) ligaron esta mineralización paraje del mismo nombre en el sudoeste de la Hoja. a la intrusión de cuerpos dioríticos cercanos (mina Las Se ubica en el faldeo norte del cerro Las Choicas. Choicas), a pesar de que las sedimentitas por arriba y Desde el complejo turístico de Las Leñas, al sur de por debajo del manto volcánico no contienen la Hoja, se accede recorriendo 8 km por camino de mineralización ni están alteradas. Zanettini (1984) in- tierra, que conduce a Valle Hermoso, hasta el abra terpretó un depósito singenético con la lava andesítica de los Entumidos y desde allí se continúa 36 km al hospedante, donde mineralización y alteración provie- norte por huella para vehículos doble tracción. nen de fluidos hidrotermales derivados del mismo pro- De acuerdo con Angelelli (1946) y Zanettini ceso volcánico. (1984) en el sitio aflora un conjunto sedimentario Los valores químicos en muestras con calcosina del Jurásico integrado por areniscas, limolitas y supergénica son de 15,5% Cu, 0,08 g/t Au y 9,5 g/t calcáreos de las formaciones Puesto Araya y La Ag. Como ley media, Angelelli (1946) estimó 1,5% Manga y yeso de la Formación Auquilco y arenis- Cu. Las labores alcanzan hasta 25 m de profundi- cas, lavas y brechas volcánicas de la Formación dad. Los ocho caserones practicados, de disposición Río Damas, intruidos por un stock, diques y filones irregular, estuvieron dirigidos a explotar los sectores capa de diorita piroxénica de edad oligocena supe- más ricos; tienen hasta 9 m de longitud, 4 a 6 m de rior atribuidos a la Formación Molle; ésta ha oca- ancho y 4 m de alto, comunicándose entre sí por sionado alteraciones hidrotermales propilítica y galerías y chiflones. Una galería de 120 m de longi- silícea en sí misma y silicificación masiva con tud se abrió en la parte inferior del depósito. venulación de calcita y de cuarzo con sulfuros en Los yacimientos filonianos no han tenido mayor la roca encajante. desarrollo dadas sus escasas reservas. Correspon- El yacimiento está constituido por tres cuerpos den a los depósitos del Grupo Violeta y a los de las mineralizados internos, mesotermales, localizados dos minas Las Choiquitas, Clota, Hilda, Águila, El Colo- de ellos en el contacto diorita-calcáreos y el restan- so, España y Chile. te dentro de estos. Sus dimensiones son variables, En el noroeste de la Hoja, en la comarca del río teniendo el mayor 50 m de longitud, 20 m de espesor Barroso, se sitúa el grupo minero Violeta (Santa Fi- y de 8 a 15 m de alto. La mineralización se compone lomena, Lagarto y Borrachera), compuesto por ve- de bornita, calcopirita y pirita en venillas con ganga tas de rumbo 85° e inclinación sudeste, de 0,07 a de calcita y escaso cuarzo; los minerales de cobre 1,35 m de espesor, alojadas en calizas de la Forma- aparecen además en granos dispersos. De manera ción Vaca Muerta (Jurásico superior-Cretácico in- muy subordinada se encuentra calcosina asociada a ferior). La mineralización consiste en calcopirita, bornita. El cuerpo contenido en los calcáreos está bornita, calcosina y malaquita en ganga de cuarzo, formado por vetillas de posición horizontal, de 0,30 a probablemente relacionada a intrusiones andesíticas 0,40 m de espesor, integradas por calcita-pirita- próximas (Angelelli, 1950), de edad neógena. calcopirita y otras de cuarzo-pirita. Los cuerpos ex- En el sudoeste de la Hoja se hallan los demás ternos, epitermales, se ubican en la parte superior depósitos filonianos, de escasas dimensiones, que del depósito. Consisten en vetillas y vetas de 0,05 a rodean por el norte, el oeste y el sur al stock de Las 0,50 m de potencia, alojadas en fisuras del intrusivo Choicas. Son yacencias consistentes en vetillas y y de los calcáreos, y cuerpos irregulares. Están com- vetas lenticulares, de 5 a 50 cm de potencia, aloja- puestos por calcopirita y pirita en ganga de baritina, das en diaclasas e intercaladas en calcáreos de la siderita, calcita y cuarzo, teniendo como secunda- Formación Puesto Araya (Jurásico inferior); la rios calcosina, malaquita, azurita, cuprita, cobre na- mineralización está compuesta por calcopirita, piri- tivo y limonita; la zona de oxidación que alcanza unos ta, calcosina, cuprita, cobre nativo, malaquita, azuri- 20 m de potencia. ta y limonita, con ganga de baritina, siderita, calcita Zanettini (1984) consideró a la diorita como fuente y cuarzo. Solamente labores de exploración subte- de la alteración-mineralización hidrotermal, admitiendo rráneas y a cielo abierto fueron hechas en ellas. reemplazo metasomático en los calcáreos. Zanettini y Angelelli (1950) y Zanettini y Carotti (1993) vincu- Carotti (1993) expresaron que la distribución de sulfuros laron a estos depósitos con la intrusión diorítica del y ganga sugieren una zonación térmica de la cerro Las Choicas, sugiriendo los últimos que co- mineralización. De acuerdo con Abra S.A. (1997), las rresponden a una zonación térmica meso a epitermal leyes son de 3 a 4% Cu (12 a 15% en los clavos prin- Volcán Maipo 77

cipales) y 30 g/t Ag. La misma empresa ha demostra- fue escasamente trabajado de manera rudimentaria do reservas de 389.700 t, con leyes medias de 4,25% mediante un destape a la fecha soterrado. Cu y 30 g/t de plata. En los desmontes se encuentran Solamente una manifestación de mineral cuprífero tenores variables entre 12 y 17% de cobre. El yaci- diseminado se reconoce en el sector noroeste de la miento se explotó de manera irregular hasta 1941. En- Hoja. La misma, denominada Bayo Norte, fue des- tre 1994 y 1996 fue objeto de nuevos estudios geológicos cubierta y estudiada durante el desarrollo del Plan y geofísicos, con realización de perforaciones por parte Cordillerano (Naciones Unidas, 1970). Se ubica in- de empresas privadas. La explotación subterránea se mediatamente al sur del paso Maipo. Desde Pareditas, realizó a través de tres niveles que totalizan 530 m, al norte de la Hoja, se accede por la rutas provincia- comunicados entre ellos por chiflones; en la parte su- les 101 y 98 hasta el grupo de Gendarmería Nacional perior del depósito se hicieron labores a cielo abierto y de laguna Diamante, desde donde se deben recorrer algunas galerías. 15 km hacia el sudoeste en animales de silla. Manifestaciones estratoligadas epitermales en De acuerdo con Naciones Unidas (1970) en el sedimentitas son Don Vicente y Cerro Gateado, si- área aflora, sobresaliendo del derrubio de reciente tuadas al oeste del alto curso del río Atuel. Don Vi- depositación, un complejo subvolcánico de la For- cente es la que reviste cierto interés; desde El mación Palaoco (Paleógeno-Neógeno) compuesto Sosneado, al sur de la Hoja, se arriba a ella reco- por un stock mayor de pórfido andesítico intruido rriendo 76 km por la ruta provincial 220, de tierra, por una chimenea de brecha y pórfido riodacítico; que lleva hasta la antigua planta de refinación de la éste a su vez es penetrado por un cuerpo de pórfido mina Volcán Overo, desde la cual se debe continuar diorítico de 700 m de longitud en sentido norte-sur y en animales de silla 3,5 km hacia el noroeste. Según 400 m de ancho. Este último se halla inalterado, mien- Zanettini (1984), en el sitio afloran areniscas grises tras que los anteriores presentan alteración y pardas con intercalaciones lentiformes de calcáreos hidrotermal propilítica y sericítico-arcillosa, con impuros y brechas calcáreas grises de la Formación venulación de cuarzo. La mineralización, consisten- Puesto Araya (Jurásico inferior); la cubierta de te en pirita y calcopirita diseminadas y venillas de derrubios no permite buenas observaciones, pero la cuarzo con malaquita y limonita, se encuentra en el fracturación de las rocas sugiere una zona de falla. pórfido diorítico y parcialmente en el riodacítico. Areniscas y calcáreos presentan alteración El relevamiento geoquímico indica anomalías de hidrotermal, consistente en silicificación y venulación cobre (100-850 ppm), cinc (150-480 ppm) y de cuarzo, cuarzo-carbonato y cuarzo-clorita, ocu- molibdeno (10-120 ppm) coincidentes con el área rriendo además venillas de calcita con sulfuros, que ocupa el intrusivo diorítico, a las que se suman sericitización y argilización. La mineralización anomalías geofísicas de polarización inducida. hipogénica está contenida en una lente de caliza y brecha calcárea, de 15 m de longitud en sentido nor- Hierro te-sur y 2 m de potencia máxima. La mineralización rellena fisuras, rodea clastos de la brecha, parcial- Los depósitos ferríferos son limitados en el ám- mente sigue planos de estratificación y está escasa- bito de la Hoja. Se enmarcan dentro del tipo skarn, mente diseminada. Consiste en calcopirita, bornita, originados por la acción metamórfica de intrusiones tetraedrita, pirita y escasa chispas de oro disemina- subvolcánicas andesíticas de la Formación Huincán do. Este último y la pirita se hallan además, aunque (Neógeno) sobre rocas calcáreas del Cretácico in- escasos, en las areniscas. Como alteración de ferior. Se conocen los yacimientos Hierro Indio y calcopirita y bornita se encuentra calcosina y Poblet y pequeñas manifestaciones en el arroyo Fe- covelina; malaquita y azurita forman pátinas super- lipe; el primero nombrado es el más importante. ficiales y tapizan fracturas y oquedades de las ro- El yacimiento Hierro Indio se ubica próximo al cas. Se interpreta que esencialmente la cerro Chivato, al sur del río Atuel. Se accede a él mineralización de los calcáreos se produjo a partir desde el puente de la ruta nacional 40 sobre el río de fluidos hidrotermales circulantes por la zona de Atuel, al sur de la Hoja, recorriendo 25 km al no- falla. roeste por huella de tierra que pasa por el puesto Los valores químicos en muestras con mineral Canale. hipogénico indican 0,53 a 0,77% Cu, leyes que con Según Rigal (1942) y Vendramini y Zanettini mineral secundario alcanzan a 3,40% Cu; el tenor (1982), en el sector del yacimiento se encuentran de oro varía de 0,02 a 0,07 g/tonelada. El depósito calizas y pelitas calcáreas del Grupo Mendoza 78 Hoja Geológica 3569-I

(Cretácico inferior) intruidas por rocas subvolcánicas dose baja cantidad de magnetita y granate disemi- de composición andesítica y diorítica de la Forma- nados. Las venas mencionadas se presentan tam- ción Huincán (Neógeno), que adoptan formas de bién en el pórfido andesítico, que está argilizado, stocks, filones capa y diques y con las cuales se sericitizado, propilitizado y con pirita diseminada. La vincula la mineralización. En el contacto de las mena de hierro se emplazó en el pórfido andesítico y sedimentitas con las hipabisales se encuentra pirita en las calizas a través de diaclasas, planos de estra- diseminada y en venillas dentro de una zona de tificación y en la zona de contacto intrusivo-calizas, metamorfismo de contacto y, localmente, en varios formando bolsones y vetas tabulares con bordes de afloramientos se presentan venillas de calcita epidoto-actinolita-calcita. supergénica como relleno de diaclasas. El cuerpo mineral 4 se halla situado en el faldeo El yacimiento está compuesto por cuatro cuer- nororiental del cerro de las Aguadas. En él los pos minerales dispuestos de manera discontinua. Los calcáreos se disponen en bancos delgados a grue- números 1 y 4 se han emplazado en rocas calcáreas, sos de azimut 340° e inclinación de 43° al oeste; próximos al contacto de éstas con pórfido andesítico, están recristalizados por la intrusión de filones capa y los números 2 y 3 encajan en la roca porfírica y en de pórfido andesítico, el cual es en partes muy de- calcáreos. Los cuatro son de forma irregular, leznable debido a la alteración meteórica. Una clara elongándose con escasa extensión en dirección nor- zona de skarn se observa entre la mena de hierro y te a nordeste la roca intrusiva. Desde aquella hacia ésta existe El cuerpo mineral 1 es el más austral de ellos, una secuencia mineralización-alteración que se puede hallándose a la fecha soterrado. De acuerdo con sintetizar de la siguiente manera: magnetita - mag- Bonfils (1972) es de forma elíptica, de 18 m de lon- netita-pirita-epidoto-granate - epidoto-granate-calcita gitud por 9 m de ancho, constituido por un banco de - granate-epidoto-calcita - pórfido andesítico. El gra- mineral de hierro y skarn, inclinado el conjunto al nate tapiza fracturas, reemplaza totalmente algunos oeste; la roca de caja del skarn es un pórfido bancos calcáreos y se lo encuentra escasamente andesítico epidotizado y calcitizado. diseminado en la roca intrusiva. La epidotización es El cuerpo mineral 2 se localiza en el extremo sur generalizada, y aparece también en venillas. La cal- del valle de las Aguadas. La labor fue abierta sobre cita se halla independiente en venillas o acompaña- pórfido andesítico y solamente en su extremo sur se da por oligisto. La silicificación se manifiesta en for- observa un skarn que aloja baja cantidad de mineral ma de ópalo en contacto con el banco principal de ferrífero. La roca hipabisal se encuentra argilizada y mena y como reemplazo de calizas, hallándose ade- cloritizada; venas y venillas compuestas por epidoto- más escasa cantidad de fluor-apatita. Epidotización calcita-granate (andradita), calcita-epidoto-oligisto y y calcitización se han desarrollado además en la roca otras de calcita-magnetita, epidoto-pirita y calcita-cal- hipabisal, la cual también está argilizada y sericitizada, cedonia la atraviesan en varias direcciones. Local- conteniendo localmente núcleos de calcita rodeados mente aparecen biotita y menor cantidad de moscovita, por vesubiana, granate verde y epidoto. actinolita y fluor-apatita. La mena se alojó en el pórfido La mena hipogénica está formada por magneti- andesítico como una masa lentiforme aprovechando, ta y, de manera subordinada, oligisto, con algunas posiblemente, una zona de falla que con rumbo norte inclusiones de calcita y granate diseminados. La e inclinación vertical se observa en la pared sur de la magnetita es compacta, de grano fino y color gris labor, introduciéndose también a través de diaclasas oscuro. El oligisto es hojoso, de color negro, y se formando vetas tabulares y en el contacto intrusivo- dispone en venillas atravesando a la magnetita y a calcáreos. En el skarn se advierte el reemplazo total las rocas granatíferas; se lo encuentra además en la y parcial de algunos bancos, conservándose la estra- roca encajante como diseminación y en venillas, in- tificación original de los calcáreos. dependiente o acompañado por epidoto y calcita. El cuerpo mineral 3 se encuentra situado en el Diseminada en mediana cantidad se presenta pirita valle de las Aguadas, presentándose en él calizas en el cuerpo 4. El mineral ferrífero ocurre en forma recristalizadas de grano fino y color blanco, dispues- de reemplazo total o parcial de bancos calcáreos, tas en bancos de 7 a 20 cm de espesor con azimut como cuerpos lentiformes y en bolsones, habiéndo- 70° e inclinación 60° al este; las intruye un pórfido se introducido a través de superficies de estratifica- andesítico alterado. La alteración hidrotermal en las ción y fracturas, ocupándolas a la vez como cuerpos calizas consiste en venas de epidoto-calcita, epidoto- tabulares de corta longitud. La mineralización calcita-oligisto y epidoto-granate incoloro, encontrán- supergénica está constituida por hematita roja y Volcán Maipo 79

limonita ocres; una escasa cantidad de malaquita, argentífera, de grano mediano a grueso, que forma azurita y crisocola sugieren un bajo contenido de «ojos» irregularmente distribuidos en una ganga de calcopirita. fluorita de colores blanco amarillento, violáceo y verde Los análisis químicos realizados por Rigal (1942) claro con la que se asocian baritina rosada y escaso sobre muestras de mineral del cuerpo 2 y por cuarzo. La fluorita es el principal relleno de la veta. Vendramini y Zanettini (1982) sobre muestras de tes- La mineralización secundaria está compuesta por tigos de perforación, indican los siguientes tenores: limonitas y baja cantidad de cerusita.

Fe: 63,05 a 65,00 %; Fe2O3 : 71,59 a 90,10 %; FeO: Las leyes de mineral, sobre muestras tomadas 7,14 a 16,71 %; S: 0,05 a 0,21 %; P: 0,01 a 0,03 %; Ti: en canaleta, arrojan los siguientes tenores extremos vestigios; Ca: vestigios; As: no contiene; ganga silícea: y medios ponderados: 0,60 a 23,35% Pb (5,65%),

3,40 a 6,88 %; pérdida al fuego, total: 2,01 a 4,38 %. 263 g/t Ag, 30,70 a 60,10% CaF2 (47,58%) y 0,24 a

La explotación de los cuerpos mineralizados se 3,10% BaSO4 (1,61%). El yacimiento fue trabajado realizó a cielo abierto en labores de 65 a 135 m de mediante 63 m de galerías, un rajo de 14 m de largo, largo, 25 a 35 m de ancho y 3 a 15 m de profundi- 2 chiflones y 2 piques poco profundos. dad. Las reservas originales del yacimiento eran de 400.800 toneladas (Angelelli, 1984). DEPÓSITOS DE MINERALES INDUSTRIALES Manganeso Azufre Únicamente manifestaciones de minerales de este elemento, conocidas como Manganeso del Atuel, En el cerro conocido como volcán Overo, 21 km se ubican próximas al cerro Chivato, en el límite cen- al noroeste de las termas del Sosneado, se localiza tro - sur de la Hoja. El acceso a ellas es el mismo el depósito de azufre exhalativo Volcán Overo. Des- que para llegar a la mina Hierro Indio. Según Angelelli de la localidad de El Sosneado, al sur de la Hoja, se (1950) y Ugarte (1955) consisten en varios aflora- accede al mismo recorriendo 76 km por la ruta pro- mientos vetiformes, situados en una estructura de vincial 220, de tierra, hasta la antigua planta de falla de dirección este - oeste y aproximadamente refinación, desde la cual se siguen 35 km hacia el un kilómetro de extensión. Las vetas inclinan 43° S noreste por camino de tierra que conduce al yaci- y tienen estructura brechosa, dentro de la cual se miento. De acuerdo con el presente trabajo, el de- encuentran pirolusita de grano fino a masiva. Sólo pósito se emplaza en una secuencia volcánica deno- en un sitio se realizó un reconocimiento mediante minada Asociación Volcánica Postglacial una trinchera de 7 m de largo. (Holoceno). El yacimiento se ubica sobre la ladera sudoeste del cono central del aparato volcánico. Plomo Según Angelelli et al. (1980) la mineralización, de variable calidad, ocurre en mantos de 1 a 3 m de Solamente una yacencia de plomo, denominada potencia, presentándose como relleno de poros y Yaucha, se halla en el nordeste de la Hoja; es de grietas en tobas traquiandesíticas. El azufre es de carácter hidrotermal filoniano y está ligada al colores amarillo, ocre y verde oscuro, dispuesto como magmatismo permo-triásico. El yacimiento se ubica polvo, en cristales y en masas de gran pureza; el que 6,5 km al norte del refugio militar General Alvarado, rellena grietas es más puro que el de impregnación. al cual se accede por las rutas provinciales 101 y 98, Inferimos procesos de impregnación y sublimación debiéndose continuar desde allí en animales de silla. para la génesis de este yacimiento, relacionado a De acuerdo con Angelelli (1950) en el área del actividad geotermal. Las reservas calculadas, distri- depósito aflora un cuerpo de granito color rosado buidas en tres sectores, ascenderían a 1.000.000 t que intruye a riolitas de la Formación Choiyoi. El entre mineral probado y probable, con una ley media granito es la roca encajante de la mineralización, de 40% S. El yacimiento fue trabajado durante el encontrándose hidrotermalmente alterado y con período 1942-1980 con labores a cielo abierto. venulación de cuarzo. La mineralización se dispone en una veta de rumbo general N60°O e inclinación Baritina al sudoeste entre 65° y 75°, con una longitud visible de 250 m y anchos variables entre 0,40 m y 1,50 Los depósitos y manifestaciones de baritina se metros. El mineral primario consiste en galena circunscriben a la zona centro - sur de la Hoja, entre 80 Hoja Geológica 3569-I

el río Atuel y el arroyo Felipe, donde se conocen las ral seleccionado registra leyes de 83,7 % CaF2 y de minas Rojino, Don Luis, Arroyo Las Piedras, Las 7,5 % SiO2. Las labores, a la fecha abandonadas, Lagunitas, Doña Antonia y Santa Catalina. Los ac- consisten en 60 m de destapes y rajos. cesos para vehículos se encuentran intransitables. De acuerdo con Sarudiansky y del Carril (1984), Materiales volcánicos consisten en uno a dos mantos singenéticos de bari- tina, color amarillento a castaño por los compuestos Los materiales volcánicos utilizables económica- férricos que los tiñen, emplazados concordantemente mente se localizan en el sector nordeste de la Hoja, en pelitas jurásicas del Grupo Cuyo. Afloran en co- entre el pie del área cordillerana y el arroyo rridas de hasta 50 m de largo (200 m en Rojino); la Salamanca. Se encuentran allí depósitos de granulado potencia de los mantos varía entre 0,50 y 5 m, lle- volcánico, arena pumícea y tobas, que corresponden gando en la mina Rojino a 7 metros. En el yacimien- a la Asociación Piroclástica Pumícea (Pleistoceno to Santa Catalina se encuentra escasa galena. inferior). Se conocen con los nombres de Abraham, Los resultados analíticos señalados por los auto- Los Coroneles, Lagos, Juan Góngora e Hijos, González res citados indican: BaSO4: 39,40 a 95,20%; SrSO4: Lemos, Santa Rosa de Lima, Fernández, Granuterm 1,00 a 3,40%; densidad real: 3,19 a 4,48 kg/dm³. La Molino Tarquini y Vega, a las que se accede por las explotación de los depósitos se efectuó hasta 1980- rutas provincial 101 y nacional 40, de tierra, desde la 82 mediante labores rudimentarias a cielo abierto y, localidad de Pareditas, al norte de la Hoja. en pocos casos, por galerías a la fecha inaccesibles. Polanski (1964a) manifestó que, de abajo hacia arriba, las yacencias consisten en mantos horizonta- Fluorita les a subhorizontales de granulado pumíceo, arena de pómez y tobas pumíceas con clastos y bloques de pie- Un depósito de fluorita se localiza en la comar- dra pómez, cubiertos por arenas y suelos actuales. El ca de Agua del Toro, en el ámbito del Bloque de San granulado y la arena de pómez son de color blanco a Rafael. Formando parte de un agrupamiento gris (rosado por alteración en el caso de la arena), de fluorítico que se extiende hacia oriente y se vincula- tamaño arena gruesa a grava fina el primero y arena ría a intrusiones silíceas de edad permotriásica, se fina a mediana la segunda; ambos materiales son li- conoce la mina La Esperanza. El yacimiento se ubi- vianos, muy friables y compuestos en un 97% por ca sobre la margen sur del río Diamante, próxima al vidrio volcánico y granos de feldespato, cuarzo y biotita. dique Agua del Toro. Se accede a él por la ruta na- Los mantos de arena de pómez contienen clastos y cional 40 hasta el mencionado dique, desde donde bloques de piedra pómez de hasta 20 cm de diámetro, se debe continuar en animales de silla. excepcionalmente 50 centímetros. Se disponen en De acuerdo con Angelelli et al. (1980), la mantos de 1,20 m a 8 m de espesor. Las tobas son mineralización hidrotermal filoniana se emplaza en cineritas, de colores pardo amarillento, pardo rosado, fallas, de dirección general este - oeste, que cortan a rosado y blanco, de grano fino y muy friables, con sedimentitas de la Formación El Imperial (Carbonífero escasos lapilli y bombas de pómez, en capas de 0,50 – Pérmico inferior) que se hallan silicificadas y m a 25 m de potencia. Su composición mineralógica caolinizadas. Las vetas son de corrida continua aun- es similar a la del granulado. El espesor de la cubierta que de poca longitud, variando su potencia entre 0,05 varía de 0,80 m a 6 metros. El granulado tiene una a 0,30 metros. La fluorita se presenta compacta y de densidad aparente de 0,7 g/m³ y su granulometría es colores blanco, verde y violáceo; se han observado la del cuadro 4. también geodas con cubos de mineral de 2 cm de Los yacimientos ocupan superficies de 15 a 25 lado. Ocurren además cuarzo y calcedonia. El mine- ha y son trabajados a cielo abierto.       "  "*+,'*+' -  +*" * % +  *-'%*%+ " -." "*-' '*%+ " -." +*'-* 

Cuadro 4. Granulometría de los materiales volcánicos. Volcán Maipo 81 )! ((  (;! (( . )! /((       .  . * .--- ((3 * / )*/ *     "  / *? *6* *7* /(;! *)*/ * * )**/ * *6* *8 */ * E  * *!**)* /((  / ** * * *7** !*6*!** *    /(;!         /(;!      /(;! 55  6 /(;! 5555 6 6 6 6 /((  /((  /((  /((  5    / 5 !*6* ***  #  #      )***8 *7*  *7**)*/  - !     ! ! ! ! ! !   !@  !)  !)  !)     5 7*  <   !*6***7 /(;! <3      5 !*              !** *6* ** /((   8 #   "&$+&34#"  /  5  * *!*8 */ /(;!    @&  5! !*!***)* /((    ?!)    ?       5 6      #  !* **/ *7*   @&  5! !****)* /(;!   >   > 5  /(;!   > 5  /(;!                   5 !**   <    /(;!   ? /   ? /  /   ? ?   / *  * ? (     #$'$+ !#(( (( #&'$+ '%$&#& *  /  5 8 /(;! (*(  !3     )*   ? & *3 )*  ?  *) ? & *) !       *3  83 # *  *) ? - . /0/112111  2 2 %, 2 %, %2 "%,3 "%,3    '2 %,  2 "%,3-+  " --2 %, '2 -2 "%,3 %, 2  "%,3-+  "2 %, +2 "%,3-   "+2 "+2 ",2 %, "2 %, " 2 %, %2 "%,3 "%,3 "%,3    %2 %, "2 "%,3-   "2 %, "%2 "%,3-+ " 2 )  "2 "2 %, "%2 "2 %, ""2 "2 %, "2 "%,3  "2 %, "+2 "%,3 %, ""2 "%,3 %, " 2 "%,3 "%,3 "%,3   ,2 %, '2  2 "%,3-+ %, '2  "%,3-+   ,2 %, %2 "%,3-+   " 2 '- -2 "%,3   ""2 '- 2 "%,3 ""2 '- 2  "%,3   2 '- "2 "%,3   ""2 ""2 '- '2 '- %2 "%,3 "%,3 )  ""2 "%2 '- '2 '- '2 "%,3 "%,3   2 '- - 2 "%,3-' >  2 '- -"2 "%,3 )  ,2 '- -'2 "%,3-'   +2 '- -,2 "%,3-' ) Cuadro-Resumen de Indic ios y ocurrencias minerales de la Hoja Volcán Maipo. Cuadro-Resumen de Indic ios y ocurrencias minerales la Hoja Volcán (( "$$&(( )$* '  #     ! / / / * /      @  / (  @  6  *9  / &B        * ! !  6 @6 @6   / 6  / //   /     D&/ / /  / 3  /   6*5 * /  *6 ! . ?  ( //    ( ( /4 *  / " ( ( 8 *!* / % ) <= = , 8 + ( ?  /?  ' ( &<  /?     ?   /      + , 8-      8B  < ?   < ?  ( 6#  ! % 8      " ' 6      " ( ?!< .   @6 %    , -  6  6   6   ) @ 6   ( < @   &  '    8  )  $  @    (  +     - ( :!"# $%& '$"'# 82 Hoja Geológica 3569-I )! )! )! )! /((   %- (!3  **6*7 alaquita, Pirol= pirolusita, Pre= prehnita, Py= onia, Cp= calcopirita, Cu= cobre nativo, Cup=           /(;!    /(;! 5  /((  5   ! !  3   /((   3   /((  !#4   !#4                                        3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((   3   /((      ? "&$+&34#"   ?  ?   B !3 (3 *7*     8  8 # #    8 #   ?      (   (   (   (   (   (   (   (   (   (  #$'$+ !#(( (( #&'$+ '%$&#&  (*   (*  @ *   *!3 ? pirita, Q= cuarzo, S= azufre, Sid= siderita. - . /0/112111 :2 %, -%2 "%,3-   -2 %, -,2 "%,3-   -2 %, -'2 "%,3-   -2 %, -"2 "%,3-   -2 %, - 2 "%,3-   -2 %, -2 "%,3-   -"2 %, -+2 "%,3-   -%2 %, -2 "%,3-   -,2 %, -,2 "%,3-    2 %, -%2 "%,3-   -2 %, - 2 "%,3-   2 %, ,2 "%,3    2 %, 2 "%,3   "2 %, -2 "%,3-,   "2 ""2 %, 2 ",2 %, -2 %, 2  2 "%,3 "%,3 %, -2 "%,3   "%,3-  "2 %,  2 "%,3  "2 %, +2 "%,3"  Cuadro-Resumen de Indicios y ocurrencias minerales de la Hoja Volcán Maipo. Cuadro-Resumen de Indicios y ocurrencias minerales la Hoja Volcán (( "$$&(( )$* '   - 2 %, -'2 "%,3-      -2 %, -"2 "%,3-   @ >6 >6   5 6D  /    <   6   /6 @ / ) >4 ! ) ! ) ! ) ! ) ! ) ! ) ! ) ! ) ! ) ! )     ! ) ! )  Ag= plata, Asf= asfaltita, Au= oro, Az= azurita, Ba= baritina, Bo= bornita, C= carbón, Ca= calcita, Cc= calcosina, Cld= calced cuprita, Cv= covelina, Fl= fluorita, Ga= galena, Garg= galena argentífera, Hem= hematita, Lim= limonitas, Mag= magnetita, Ml= m  ? /  /   " ? 5? 8D /   % ? ?))/  /   ' ? + ?    , ?  @ "- ? " ? ?   $ " ?   ? ( 3  >( /         ? ? " ? <  6D  "   /!)  > %'+    ,      ? /     /  ( /  $  /? " (-    6E /6  :!"# $%& '$"'# Volcán Maipo 83

COMBUSTIBLES SÓLIDOS 0,60 a 0,80 m de potencia; tienen rumbo nor-noroes- te a noroeste, inclinando 20° a 75°. Sus rocas Asfaltita encajantes corresponden al Grupo Cuyo (Jurásico inferior a medio). Los análisis químicos han demos- Las manifestaciones de asfaltita son numerosas en trado la siguiente composición de los carbones: hu- la región pero, si bien fueron exploradas, no han tenido medad: 0,19 a 3,40%; material volátil: 5,50 a 8,09%; explotación por no alcanzar niveles económicos. Las carbono fijo: 40,06 a 65,81%; cenizas: 25,91 a 50,50%; yacencias se localizan hacia el norte y el sur del río coque: 91,10 a 91,72%; aspecto del coque: pulveru- Diamante, siendo ellas El Cóndor, Río Bravo, América, lento a cementado; color de las cenizas: grisáceo; Cerro Plomo, Hullera Brillante, Eloísa, General Roca, azufre: 3,00 g/%; solubilidad: insoluble a ligeramente General Mitre y otras menores. El acceso a estos de- soluble; poder calorífico: 6.441 cal/g. Los yacimien- pósitos debe realizarse en animales de silla desde el tos fueron explorados en las décadas del ‘40 y ‘50. grupo de Gendarmería Nacional de laguna Diamante o Las labores de exploración consistieron en desta- desde puesto Araya, sobre el río Atuel. pes, socavones y galerías, arribándose a una cubi- De acuerdo con Borrello (1956) son yacencias cación de 100.000 t de mineral posible en ambos filonianas y mantos lentiformes de 15 a 300 m de lon- depósitos. gitud y de 0,01 a 0,50 m de potencia, que alcanzan en casos extremos de 2 a 3 m de espesor. Tienen rum- HIDROCARBUROS bos variables dentro del cuadrante noroeste, inclinan- do desde 20° a la vertical. Sus rocas encajantes co- Petróleo y gas rresponden a sedimentitas de la Formación Tordillo (Jurásico superior) y de los Grupos Mendoza Los yacimientos de petróleo se localizan en el ám- (Cretácico inferior), Rayoso (Cretácico inferior) y bito mendocino de la Cuenca Neuquina, manifestándo- Neuquén (Cretácico superior). Los análisis químicos se en el sector sudoriental de la Hoja. Se agrupan den- han demostrado la siguiente composición de las tro de los campos petrolíferos Vega Grande y El asfaltitas: humedad: 0,30 a 2,71%; material volátil: Sosneado, comprendiendo los depósitos Vega Grande, 36,62 a 45,79%;carbono fijo: 51,78 a 60,04%; ceni- General San Martín, La Paloma, Minas del Sosneado, zas: 0,63 a 2,20%; coque: 53,36 a 61,20%; azufre: Bakú y Matilde. Los trabajos de exploración fueron 2,84 a 5,03%; solubilidad: algo a fuertemente soluble; realizados por Yacimientos Petrolíferos Fiscales entre poder calorífico: 8.050 a 9.075 cal/g; aspecto del co- las décadas del ’40 y el ‘50 y se reanudaron a partir de que: pulverulento a cementado. Los yacimientos 1974, dando lugar a la explotación de varios yacimien- Eloísa, General Roca y General Mitre se conocen tos por parte de la empresa estatal. A partir de 1978 los desde 1890 y los restantes desde la década del ‘40. recursos fueron paulatinamente privatizados. La mayor cantidad de labores de exploración se rea- Los estudios efectuados señalan que la roca lizaron sobre las minas El Cóndor, Río Bravo y Eloísa, oleogeneradora es principalmente la Formación Vaca aunque solamente en la segunda se arribó a una cubi- Muerta, de edad jurásico superior-cretácica inferior, cación de 6.000 t de mineral probable. constituida por sedimentitas negras, fétidas, de am- biente marino profundo. Los reservorios son Carbón estratigráficos y estructurales y se alojan en rocas pelíticas y calcáreas de la Formación Agrio, en ro- Si bien las ocurrencias de carbón de tipo parálico cas arenosas del Grupo Neuquén y en estructuras son numerosas en el sector centro - sur de la región, de rocas magmáticas neógenas. Los fluidos conte- solamente dos yacencias fueron exploradas, no ha- nidos son una mezcla en proporciones variables de biendo tenido explotación al no alcanzar niveles eco- petróleo, gas, CO2 y agua de formación. nómicos. Ellas son Cervantes y Coihueco - Minatuel. El reservorio de Minas del Sosneado es conocido El acceso al primer depósito debe realizarse en ani- desde el siglo pasado por los asfaltales del cerro Al- males de silla desde puesto Araya, siguiendo el cur- quitrán. Las reservas petrolíferas en el reservorio de so del arroyo Blanco, y al segundo de igual manera Vega Grande alcanzaban a 990.000 m³ a fines de 1990 desde puesto Los Arroyos, remontando el curso del (Benítez, 1993). Un depósito menor, conocido como río Atuel. mina Matilde, se encuentra sobre la ladera sud-su- De acuerdo con Borrello (1956) son uno a dos deste del cerro La Brea, alojado en areniscas y pelitas mantos principales de 250 a 800 m de longitud y de del Grupo Cuyo (Ugarte, 1955; Volkheimer, 1978). 84 Hoja Geológica 3569-I

7. SITIOS DE INTERÉS GEOLÓGICO Sierra del Atuel

Centro eruptivo Caldera Diamante - Vol- Esta serranía está ubicada al norte del río Atuel, cán Maipo entre el arroyo Blanco y el cerro Sosneado. Su im- portancia geológica radica en el hecho de ser el úni- Este centro eruptivo, situado a los 34° 10´S, co lugar en todo el ámbito de la Cuenca Neuquina sobre el límite argentino-chileno se erige como un donde afloran los depósitos correspondientes al re- excelente ejemplo de formación de estructuras de lleno sedimentario más antiguo de la cuenca. Se tra- tipo caldera asociadas a la erupción de ignimbritas ta de la Formación Arroyo Malo (Triásico) y de las de gran volumen. Debido a su edad reciente (0,5 formaciones El Freno y Puesto Araya (Hettangiano Ma) los depósitos piroclásticos se hallan extraor- a Toarciano). La Formación Arroyo Malo es el úni- dinariamente preservados y es posible observar co registro de Triásico marino del país. los cambios de facies, las variaciones en el grado de compactación y soldamiento, diversas estruc- Manaderos de petróleo turas tales como gas pipes y otras poco suscepti- bles de ser preservadas. El volcán Maipo, empla- Dentro de la Hoja se han detectado vertientes zado en su interior, representa la reactivación del naturales o manaderos de petróleo, los cuales han sistema en tiempos más modernos. Su interés ra- orientado la exploración petrolera desde principios de dica en ser un centro potencialmente activo. El siglo. Algunos de ellos carecen de importancia eco- conjunto constituye un verdadero laboratorio nómica y constituyen curiosidades geológicas como volcanológico de gran interés para la comunidad es el caso del cerro La Brea. Otros, como el caso de geocientífica. cerro Alquitrán, siguen hoy en explotación.

Entregado: septiembre de 1999 Validado: marzo de 2000 Actualizado: septiembre 2005 Volcán Maipo 85

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