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Vivat Academia E-ISSN: 1575-2844 [email protected] Universidad Complutense de Madrid España Sáez González, Jesús Miguel THE GHOST WRITER (EL ESCRITOR) DE ROMAN POLANSKI Vivat Academia, núm. 111, junio, 2010, pp. 108-109 Universidad Complutense de Madrid Madrid, España Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=525752961008 Cómo citar el artículo Número completo Sistema de Información Científica Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto Revista de Comunicación Vivat Academia RevistaISSN: 1575-2844de Comunicación · DOI: http://dx.doi.org/10.15178/va.2010.111.108-109 Vivat Academia ISSN: 1575-2844 JunioDiciembre 2010 · Año 2011 XIII · nº Año 111 ·XIV pp. 108-109 Nº117 pp 131-163 Sáez González, Jesús Miguel (2010). Reseñas de cine. Vivat Academia. nº 111. http://www.ucm.es/info/vivataca/inicio_va/JesusMiguel.pdf SáezRESEÑA/REPORT González, Jesús Miguel (2010). Reseñas de cine . Vivat Academia. nº 111. ___________________________________________http:/ /www.ucm.es/info/vivataca/inicio_va/JesusMiguel.pdf______________________________ _________________________________________________________________________ CRÍTICAS DE CINE / FILM REVIEWS Ficha Técnica:RESEÑA S DEOctubre-Diciembre, CINE / FILM 2011 REVIEWS Guión y dirección. Terence Davies Fotografía:Jesús Miguel Tim Sáez-GonzálezPollard 1: Crítico de cine. Alcalá de Henares. España AUTOR Mú[email protected] seleccionada: Ian Neil Editor:Jesús Miguel Lisa Sáez Ryan González : Crítico de cine. Alcalá de Henares. Madrid (España). [email protected] 2011 Reino Unido 2008 Abril 2010 THE GHOST WRITER (EL ESCRITOR) DE ROMAN POLANSKI OF TIME AND THE CITY DE TERENCE DAVIES SoloMás quese puede un argumento ser un manipulador (sobre la gue temporal,rra de Irak es ydecir las responsabilidades operar con las manos éticas o intervenirmorales de medianteAlan Lang un versus instrumento, Tony Blair, es y decirde un teniendonegro literario en consideración que trata de darel montajeforma a (utilizaciónunas memorias) de imágenes y unos personajes de archivo elaborados en blanco - yque negro subyacen y de estasdentro al delcolor, texto fotográficas, de Robert citasHarris; literarias El poder intervenidas en la sombra, como a la significante sazón también pero coguionistatambién como con significado el propio Polanski desde Eliot-; la amirada Dickinson se construye o Jung oa Engels,base de adiestradasla creación mediantede atmósferas composiciones y detalles, simétricas cuyo perfilado que no y ocultanmilimetrado sus raíces tempo en narrativo la música facilita clásica la desdeeconomía Mahler en ela relato,Sibelius sin o perderBruckner el ritmoo los Hollies,con sus EL ÁRBOL DE LA VIDA DE TERRENCE MALICK cuyapreciados estructura crescendos estilísticamente -se alternan sinfónica las notas se agudasdota de conun ritmolas graves, medido como controlado), ajustadísimos para adentrarsesubrayados en de la losficción estados evocada emocionales -siempre oimperfecta por el contrario-, que en sugieren este caso anticipacionesva más allá de delser unpeligro poema y lo visual inquietante, o un mero a ello ensayo justifica temporal, la composición sino que sonora al estar de este Alexandre contaminado, Desplat no-, Como desentrañar tamaña complejidad, el misterio de lo inabarcable, la génesis del ocultahasta formalizar que lo narrado un tur porbulento subjetivo Mcguffin, -evocado que- ,subvierte mediante el voz género en off como (articulada pura abstracción mediante mundo, lo absoluto, el puro y zigzagueante recorrido abstracto de la vida, sometido digresiones),paranoica, desgarrada o participando y maligna, de otras siempre voces, desencantada no ocurra ni ysea cínica, fidedigno, que estalla si se echa en humor mano quizás a una cosmogonía en imágenes –intensamente visual gracias al trabajo delácido, recuerdo con unas (constatar solo precisas que hubogotas algo,autobiográficas, y que ya nonada está aparentes, físicamente, sobre solo la identidadpermanece y fotográfico de Lubezki-, entendiendo como cosmogonía un relato mítico relativo a los graciasla pérdida al cine de porquela misma, a través o la desuplantación la repetición de es la capaz personalidad, de hacer volverque del ese mismo tiempo, modo esos orígenes del mundo, una teoría científica que trata del origen y evolución del universo lugarestrasforma transitados), en obsesión, que más puede bien tenderen obsesiones, a la repetición dentro deconcéntrica gélidas atmósferas -sin dejar cerradasde ser lineal (un – Malick sostiene un espíritu creacionista, alejándose del evolucionismo de Darwin-. enbunker su trascurso como vivienda)-, pero delimitando o abiertas (paisajessolo una partedesérticos, de ese donde escenario se advierte natural ely sentimental,peligro y la dondeinestabilidad) la acción, siempre trascurre, delimitadas y que es Liverpool, con sus situaciones con sus trasformaciones casi Kafkianas, no cuya solo percepción materiales El realizador necesita la vida, no tanto la ficción, tomando modelos experimentales, (de la lointervención real como cambiantepura ambigüedad, de la arquitectura siempre incideirresoluble, como demoliciónsubscribe un y sustitución,existencialismo que deshaciéndose de todo decorado, situando a los actores en la escena por espacios libres entormentoso, ocasiones mástiende bien a volatizarclaustrofóbico, los sedimentos que hace convertidosdel desequilibrio en relato individual y por qué fruto no delen que puedan recorrer libremente, incluso durante el montaje, aunque es este en un narración),juicio ajeno, sinoparticipado espirituales, por una cuya composición sensibilidad aparentemente esta siempre neutraapegada de losa la encuadres condición - último término quien escoge y almacena, por otro lado nunca nada es homogéneo, obreraayuda lade iluminación clase (en su dedignidad) Pawel Edelman y su desgarro-, que no(el ocultadel propio trucajes realizador ópticos, en por permanente no hablar contrariamente a lo que el flujo de imágenes nos pueda hacer pensar, existe un espacio conflictode la cámara frente estática a la familia, con los al protagonistas padre dictador en yprimer castrador, plano también y otros haciasecundarios Dios y enel rasgado, más bien una grieta, una fisura que se establece entre la naturaleza y la conceptosegundo planode culpa, -suficientemente al propio descubrimiento puestos estos, de comosu condición para resultar homosexual, inquietantes a la liberación a la vez queomnipresentes supuso el cine-, o yesos las tardesotros deplanos futbol que como ofrecen redención una sinperspectiva que no existiese semisubjetiva una tensión del entreprotagonista.1Autor las correspondiente: creencias y los deseos; también a la condición de clase y la necesidad y austeridad,Jesús Miguel si empreSáez-González: en dialéctica Crítico de crítica cine. Alcalá frente de Henares.a la sociedad Madrid alienante, que ha sido Correo: [email protected] subyugada por los estamentos superiores; la iglesia y la monarquía, cuando no las diferenciasFicha técnica: sociales y la guerra; la banalidad surgida desde lo histórico y que irrumpe en Dirección:el presente Roman frente alPolanski pasado, y que viene a ser la influencia del pop o el exacerbado consumo que seduce, anulando la personalidad y lo que ha acontecido, desde este hoy 131108 queGuión: es presente,Robert Harris asolándolo), y Roman por Polanski no mencionar históricas (que en ocasiones se detienen como materia o avanzan linealmente) 2 1 Sáez González, Jesús Miguel (2010). Reseñas de cine. Vivat Academia. nº 111. http://www.ucm.es/info/vivataca/inicio_va/JesusMiguel.pdf _________________________________________________________________________ Ficha Técnica: Guión y dirección. Terence Davies Fotografía: Tim Pollard Música seleccionada: Ian Neil Editor: Lisa Ryan Reino Unido 2008 THE GHOST WRITER (EL ESCRITOR) DE ROMAN POLANSKI Más que un argumento (sobre la guerra de Irak y las responsabilidades éticas o morales de Alan Lang versus Tony Blair, y de un negro literario que trata de dar forma a unas memorias) y unos personajes elaborados - que subyacen dentro del texto de Robert Harris; El poder en la sombra, a la sazón también coguionista con el propio Polanski-; la mirada se construye a base de la creación de atmósferas y detalles, cuyo perfilado y milimetrado tempo narrativo facilita la economía en el relato, sin perder el ritmo con sus preciados crescendos -se alternan las notas agudas con las graves, como ajustadísimos subrayados de los estados emocionales o por el contrario sugieren anticipaciones del peligro y lo inquietante, a ello justifica la composición sonora de Alexandre Desplat-, hasta formalizar un turbulento Mcguffin, que subvierte el género como pura abstracción paranoica, desgarrada y maligna, siempre desencantada y cínica, que estalla en humor ácido, con unas solo precisas gotas autobiográficas, nada aparentes, sobre la identidad y la pérdida de la misma, o la suplantación de la personalidad, que del mismo modo trasforma en obsesión, más bien en obsesiones, dentro de gélidas atmósferas cerradas (un bunker como vivienda) o abiertas (paisajes desérticos, donde se advierte el peligro y la inestabilidad), siempre delimitadas con sus situaciones casi Kafkianas, cuya percepción de lo real como pura ambigüedad, siempre irresoluble, subscribe un existencialismo tormentoso, más bien claustrofóbico, que hace del desequilibrio individual