Revista trimestral gratuita edición Junio - Agosto número 1 Revista de divulgación e intercambio cultural en lengua española Madrid 2009 Más pegado al suelo, cuando me hice con mi primer OK, así de primeras, suena un poco esnob y sectario. reproductor de CD, tardé poco en completar la colec- Cuando me hice con el disco, sentí lo mismo que años ción de discos de . Aún hoy no deja de sor- atrás con el : perplejidad, ansiedad prenderme la distancia que hay entre los pasajes líri- y, finalmente, la hipnosis. Treinta guitarristas tocando cos, en todas sus etapas, incluido el «Walking On Air» las mismas notas al mismo tiempo en una cadencia re- del disco , con sus fogonazos instrumentales, tam- petitiva y, en ocasiones, una guitarra solista marcando El día bién en todas las etapas. Leí que Fripp afirmaba que la una melodía: Fripp. Libros en los energía de la banda era fruto de la frustración creativa. Un vecino que me desafió con el volumen de su equipo Finalmente, durante uno de mis pasatiempos en de música pudo comprobar que Fripp no bromeaba youtube probé a buscarlo en imágenes. En efecto, son cuando coloqué el Thrakattak contra su pared. Y es que treinta tíos sentados dispuestos como los tres lados de en el recorrido de cuarenta años de King Crimson está un rectángulo que completa el público. Y sí, resultan lú- en que toda la música que puedas imaginar, de lo más delicado gubres e inquietantes tocando todos al mismo tiempo, a lo más disociado. como un monstruo sin cabeza, hasta que la guitarra so- lista alcanza el clímax y toda la emoción contenida se tiempos de Así, fui descubriendo que Fripp era uno de los hé- libera con un simple gesto: Robert se levanta pulsando roes que estaba detrás del Bowie berlinés, que con sus las cuerdas de su guitarra, incapaz de mantenerse sen- llamados Frippertronics fue uno de los adelantados en tado, doblándose, retorciéndose, disfrutando, contán- Robert procesar electrónicamente la música de sus instrumen- donos su historia de trastornos psicológicos o fobias so- tos, que en su disco Exposure se atreve a introducir en ciales, perdiéndose en su maelstrom. uno de los temas una discusión grabada en su vecinda- rio, que no ha dejado de realizar colaboraciones con Para la edición de estos discos, Fripp creó su propio , o , que siempre sello discográfico con el nombre de Discipline. No es ca- Grossman ha estado a la cabeza de la música de vanguardia. Con sual. Es lo que hay detrás de años de dedicación, de es- Fripp se focos o sin ellos. Recuerdo el relato de un músico local fuerzos, de convicción, lejos de los focos, lejos del mains- que había estado en Nueva York a principios de los no- tream, por la simple necesidad de contar… lo que se venta, supongo que de turismo, en el que tachaba de quiera contar. Lo ha hecho y aún sigue haciéndolo. ¡Qué esnob y sectaria a la gente que acudía a unos conciertos más da lo que digan los turistas! Todos los días habrá un Edith Grossman ha «reimaginado» la literatura en español para que Fripp daba entonces junto a un grupo de guitarris- levantándose de su silla. Olé sus huevos. tas. Yo había escuchado una grabación de esos concier- lectores de inglés, convirtiéndose en una de las más renombradas levantó tos. Era The League of Crafty Guitarists. traductoras del mundo. Estos conciertos formaban parte de una serie de cursos que, bajo el nombre de .Craft, Robert Fripp se en- cargó de dirigir, entendién- dolos como un desarrollo Por Adriana V. López de su silla en la relación con la gui- La oficina de Grossman se encuentra escondida Ilustración Didaç Pérez tarra, con la música en una esquina lejana del apartamento, cerca de la y con uno mismo. La cocina. Adentro tiene una pared llena de fotos de son partícipes, he disfrutado de unos coleguillas que Edith Grossman vive en un clásico aparta mento sus músicos favoritos y confiesa que si el mundo li- Por Wolfeimer vive se marcan un cover del «Sketch for Summer» de la de techos altos del Upper West Side de Nueva York. terario no la hubiese cautivado le habría gustado ser Durutti Column de Vini Reilly que suena mejor Ilustración Ernesto Ramírez Cuando entras al centro del recibidor, no sabes muy una cantante de blues. Las estanterías de Grossman que el original, y me he quedado acojonado bien en cuál de los seis cuar tos, con paredes blancas van desde el piso hasta el techo y las divide en «re- viendo lo que hace Adrian Bellew con su y ubicuas estanterías de madera, centrar tu aten- pisas para libros que he leído y repisas para libros Vuelvo de un festival de animación en la República guitarra en un «Elephant Talk» para otro ción. Conversamos un rato paradas firmes en la en- que he traducido y que por lo tanto puedo regalar». Checa, donde he tenido la oportunidad de ver un mon- programa de la tele… Los King Crimson trada. Noto unas familiares reproducciones de Pi- Me da una copia de La edad de oro: Poemas del Re- tón de cortometrajes a cuál mejor, y no solo por habili- de los ochenta. Sí, lo admito; por un lado o espada casso y Goya sobre las paredes, mientras Grossman nacimiento Español, recopilación que hizo para la dad técnica ni por narrativas complacientes y fáciles de por otro, vuelvo siempre a King Crimson. sostiene su mentón tratando de recordar dónde nos editorial Norton. «No te puedo hacer una recopila- ver, sino por la frescura de las propuestas. Vale, al final Vuelvo siempre a Robert Fripp. conocimos. ción académica –le dijo al editor –. Tienen que ser casi todas son metáforas de algún tipo de trastorno psi- poemas de poetas que me gusten». La recopilación cológico o alguna fobia social, pero ¿no va de eso toda He de confesar que yo llegué al maelstrom del Rey Por Elisa Puerto Aubel No tardé mucho en darme cuenta de que Gross empieza con Coplas de Jorge Manrique y termina esta mierda? Pienso en la entrega minuciosa que hay Carmesí a través del mainstream, exactamente con man aún no tenía planeado el itinerario que se- con Sor Juana Inés de la Cruz. Cuando le hago un detrás de cada trabajo, de cada segundo filmado, en el disco I Advance Masked que mi policía favorito, Ilustración Ernesto Jaramillo guiríamos por la vida interior de las estanterías comentario sobre la repisa llena de trabajos de la ocasiones, años de esfuerzos guiados solo por la con- Andy Summers, editó con otro tío en 1982, un tal de su apartamento en el que ha vivido los últimos escritora cubana Mayra Montero, Grossman me vicción y por la necesidad de contar… lo que se quiere Robert Fripp. Escuché una y otra vez aquella ca- veintinueve de sus setenta y dos años; ella es así dice con gusto: «¡Ah, mi querida Mayra, es una contar. Veo el resultado y me digo: «¡Hostias!, lo han sette quedando al principio un tanto abrumado por Todo el barrio sabía que Eugenio había estado en la guerra, de de relajada. escritora con tanto talento!». La última novela de hecho. Olé sus huevos y sus ovarios». las cadencias repetitivas, esperando más cambios joven, cuando aún quería ser alfarero y tenía una novia en Alicante Montero, Almendra, traducida por Grossman, llegó de tercio en las melodías, pero finalmente fui ab- que había conocido en un tren. Por otro lado, me abrumaba la sola idea de cómo a la lista «Notable Books» de The New York Times No hay ningún foco que apunte, señale e identifique ducido por completo por la hipnótica combinación Cada tarde se sentaba en la barra del Umbral y saludaba a Ca- absorber en un par de horas una colección consti- en 2007. Ese fue un buen año: Grossman también a ninguno de esos artistas. Cuando era más joven esto de aquellos dos tipos. Todavía considero entre los marero, que le ponía un café solo y un chupito de coñac. «El coñac, tuida por cinco décadas de ficción internacional y tuvo Nada, escrita por la catalana Carmen Laforet, era algo que me frustraba al compararme con los músi- temas más preciados que he escuchado nunca Imágenes para la tensión», decía Eugenio. nor teamericana, materiales académicos para el es- en la lista del «Best-of» del Washington Post, y La cos, ya que coges un instrumento, interpretas algo con cortes como «Girl On A Swing» o «Painting tudio de literatura clásica y contemporánea en cas- niña mala de Vargas Llosa apareció en las dos listas. él y puedes obtener una respuesta de empatía inme- and Dance». Recuerdo que años después le Era un ser apacible que, a diferencia del resto de los presentes, tellano, y su obra de traducciones. Debo admitir que diata de quien te escucha. Siempre he pensado que el ofrecí esa cassette a un buen amigo del insti- no se metía en ninguna de las conversaciones. Miraba un punto fijo Edith («Llámame Edie, por favor»), ha sido como Cruzamos un amplio comedor que albergaba a exceso de ego de los músicos tenía que ver con ese reco- tuto ya entonces guitarrista. Me dijo: «Joder, entre las patatas fritas y la bollería industrial, parpadeaba de vez en una estrella del rock para mí desde que empecé en escritores rusos y alemanes en una estantería, y bri- nocimiento inmediato, algo aún más acusado, pero más qué curioso. De toda la gente que conozco cuando, y le daba un sorbo a su chupito. A veces, también a su café. el mundo editorial. tánicos en otra. Llegamos a una rústica sala, de es- real que el aplauso continuo que en el teatro se dedi- solo dos personas me habéis hablado de Cuando se terminaba el coñac, Camarero se acercaba a él y, con la tanterías bajas, donde la estación de jazz WBGO re- can unos a otros aunque no haya público alguno. Todos este disco: Manolo y tú». Manolo era el parsimonia del oficio, le preguntaba cómo le había ido ese día en el Grossman, la célebre traductora de la literatura tumbaba al fondo. Apagó la radio y luego le echó la del cielo necesitamos ese calor no paternal que nos diga que sí, profesor de filosofía. Coño, dicho así, esto frente. Entonces Eugenio solía contestar más o menos lo mismo: a en español al inglés, ha re-imaginado el canon la- culpa a la emisora, esta es la razón por la cual nunca que somos de puta madre. Quien no tiene ese calmante empieza a sonar esnob y sectario. Paco le había estallado una bomba en el pie y había saltado por los tinoamericano para lectores en inglés que, quizá podría trabajar en otra ciudad que no fuese Nueva regocijo casi a diario se acostumbra a no echarlo de aires. Temía que tuvieran que amputarle la pierna; se sonrojaba un como ella, solo se han aventurado a Latinoamérica York: «Nunca tienes que levantarte para cambiar el menos. Pero ¿y los músicos? Hasta entonces todo mi conocimiento a través de sus páginas. CD». Hablamos de Auster, Saramago, Roth, y Co- sobre quién era ese tal Robert Fripp se poco al contar que había recibido por la tarde una carta de Alicante, etzee; los vi en la repisa, pero la conversación ter- Uno de mis pasatiempos preferidos es rescatar cadá- ceñía a una foto de la carátula en la que y se rascaba una mano mientras pronunciaba el nombre de Mari Pili Con sus elogiadas traducciones, Edith ha escol- minó irremediablemente en escritores en español, veres musicales en youtube. Esos que tuvieron su mo- aparecía junto a Andy Summers. Un tipo con aire infantil. También solía cambiar lentamente de postura en el tado a la gloria a escritores de alto prestigio. Al- lo cual nos llevó a la mejor novela de la historia, mento de gloria y luego desaparecen arrastrados por las serio, se diría. De Robert, claro, de Andy taburete usado y retomar un aire más grave para decir que el ene- gunos de ellos aún viven, como por ejemplo Car- Don Quijote. Un día el editor de la editorial Ecco, en la tierra modas. Si combinas esa búsqueda con el dios definitivo no. Esto último pude comprobarlo años migo estaba siendo cauteloso en sus estrategias. No había manera los Fuentes, Gabriel García Márquez, Mario Var- Dan Halpern, llamó a Grossman para proponerle (wikipedia) puedes seguir el rastro de entretenidas después cuando acudí a verle junto a ese cubos de basura, toallas faciales, cortinas que com- de saber por dónde iban a salir la próxima vez. gas Llosa y Álvaro Mutis. Otros, como Miguel de el reto de asumir la traducción de la obra maestra historias de auge y caída: Haircut 100 y su «Love Plus mismo amigo guitarrista del instituto en -Pero sobre el mar binan con los tapetes que serán puestos a lado de la Camarero lo escuchaba atentamente mientras secaba vasos con Cervantes, ya murieron hace tiempo. Hoy en día de Cervantes. «Le dije, “Dan, ¿estás seguro que One», o saliendo del llamado rock progre- el Festival de Jazz de Vitoria: hizo pirue- cama y varias clases de muebles que ayudan a pasar un trapo asintiendo con la cabeza de vez en cuando. Cuando Euge- cualquier escritor en español desearía a Grossman me quieres a mí? Yo traduzco escritores latinoa- es bien lindo, abuela. sivo para hacerse muchimillonario con Asia y disiparse tas sobre el escenario, se puso a interpre- bien la cena en la cama, como televisores y mesas nio volvía a callarse, Camarero preguntaba si había comido algo en como traductora. Y en la industria editorial norte- mericanos contemporáneos”». Halpern dijo que sí. en el alcoholismo… Joder, John Wetton. Todavía me dan tar un reggae, y cambiaba cada cinco mi- -No, eso es muy lejos y no sabe para poner los televisores. Sin embargo, esta prolija americana, donde se cuidan de ocultar al compra- escalofríos cuando le escucho cantar en «» o en nutos de guitarra sin que uno tuviera la el frente, a lo que Eugenio siempre contestaba que sí, que una sopa reducción de la vida a los objetos que son imprescin- dor de un libro el hecho de que sea traducido, es La interpretación artística que hizo Picasso de «Fallen Angel», aquellos temas del álbum Red de King impresión de que la hubiese exprimido. de garbanzos aguada, pero que la guerra era la guerra. Ahí termi- nadie a dónde va uno a parar. dibles para tener la experiencia de la misma está ma- una de las pocas traductoras a quienes se les da Don Quijote, con brochas negras y gruesas, un Crimson… King Crimson. Y es que youtube también te Vamos, lo suyo. Pero que nadie deje naba la conversación diaria. Camarero se retiraba para poner al- tizada con la ilusión de no serlo: el hipermercado es crédito en la portada. grabado que tiene en la pared de su oficina, fue -Y aquí arriba en la montaña? puede ayudar a escarbar lo más granado, aquello con de leer su autobiografía, esa en la que guna caña y Eugenio volvía a mirar con languidez hacia las bolsas apabullante, enorme e inabarcable para los sentidos, utilizada para la portada de la versión británica lo que siempre has tenido una relación íntima pero que cuenta cómo él, un guitarrista trotamun- de patatas. -Que frío tan horroroso. Eso es y este hecho crea la ilusión de estar en ese lugar, digá- Grossman es alta, con cabello ondulado y me- de su traducción. La de los Estados Unidos tiene nunca estuvo tan al alcance de la mano como ahora. dos al que la suerte llama a su puerta casi moslo así, casi mágico, donde realmente «todo está», Un día Eugenio apareció en el bar con una escopeta de madera chones plateados. Hay algo en su apariencia que te una portada en rojo profundo con un yelmo me- pa las bestias, mija. a última hora, logró con su improvisación una especie de Aleph de la sociedad de consumo. colgada al hombro, de las que usaban los niños en sus juegos a me- recuerda a Lauren Bacall; también en su voz ronca, dieval. Grossman tiene varias ediciones de Don He buceado en busca de directos para la tele de Led para «Every Breath You Take» alcanzar el -¿Entonces en un cementerio diados del siglo pasado. Como cada día, se sentó en la barra y esperó con una dicción genuina de la costa este de los Es- Quijote expuestas en su oficina actual, la cual era Zeppelin, en los que compruebas que los presentes no sueño de cualquier músico: crear una com- cuando arrancan los anaqueles a que Camarero le sirviera su licor. Camarero tuvo que calmar las tados Unidos. la antigua habitación de su hijo. Cuando él se fue como hace todo el mundo? están siendo conscientes del momento histórico del que binación de notas para la inmortalidad. y las cosas... risas que estallaron entre los demás clientes. de casa, Grossman le advirtió: «Dejaré todo tal -No, que pereza, “¡Pero qué es eso que llevas, Eugenio, cagondios!”, gritó alguna Criada en un barrio de clase media de Filadel- cual como está durante un año, al cabo del cual no se compliquen la vida: Y visto así, el universo ya no está en una biblioteca. mujer desde el fondo del local. Camarero la miró con desaproba- fia, asistió al Girls High School («por mis pecados», este cuarto será mío». Ahora tiene dos profun- El universo en todos sus planos, materiales y metafí- ción, y el resto de clientes retomó sus copas. Sirvió un chupito de dice ella, aunque el colegio gozaba de buena repu- dos closets llenos de libros, cosas de su hijo y fe- a mí mejor me tiran sobre sicos, aspira a estar en un hipermercado. No de ma- tación). Grossman tenía buen oído y un don para la rros de primeras y segundas galeradas de manus- coñac y se inclinó hacia Eugenio al ponerse delante. “Mira Eugenio”, nera nominal (como sucede en las bibliotecas), sino memorización. Pero siendo una alumna renuente, critos altamente codiciados por muchas bibliote- Makro, que por lo menos ahí voy susurró, “si te traes aquí la escopeta me pones nerviosa a la gente”. de cuerpo presente: hay tornillos, taladros, hilos, se encontró «aburrida como una ostra» hasta que cas. «No soy una coleccionista de ediciones finas, alambres, sogas, piolas, armas, cables, panelas, café, Eugenio alzó la vista hacia Camarero con solemnidad. “¿No lo has conoció a la profesora de español Naomi Zieber. pero sí soy un gran ratón de biblioteca». La libre- todos los días. oído por la radio? Están al caer.” Eugenio miró hacia la puerta de papas. Todo lo que se necesita para vivir una vida plena Con ella se dio cuenta de que tenía facilidad para ría que abarca toda la pared ejemplifica la serie- y completa se puede comprar en el hipermercado. Y entrada del bar con el cuello estirado y expresión arrogante. “Pero los idiomas. Pero más importante aún, Grossman dad de su trabajo y el detallismo de su dedicación no solamente esto: se puede tomar del anaquel, como Mentiras tú tranquilo, que conmigo aquí sentado tu bar está a salvo” dijo en encontró en Zieber a alguien para emular. «Era una investigadora. Se aprecian libros sobre México y antes tomábamos un libro. El hecho mismo de expo- Por Verner Duarte voz muy baja. Camarero lo observó durante un par de segundos y mujer tan humana... –dice Grossman– Era seria y Perú, referencias sobre Simón Bolívar que con- ner hasta los seres vivos en anaqueles parece una bi- asintió finalmente con una mirada cómplice. exigente, pero no era rígida. No podías payasear. sultó para El general en su laberinto de García Ilustración Ernesto Ramírez ¿Existe hoy en día el cine latinoamericano? De ser de La Habana. Hay una diferencia grande entre su ge- Argentino, se tratan temas personales, ajenos a los zarra continuación del proyecto ilustrado: porque los Por Nicolas Serrano Zbinden Desde aquella tarde nadie volvió a ver a Eugenio sin su escopeta. Aprendí tanto en su clase que pensé: “Ah, cual- Márquez, y la undécima edición de la Enciclope- libros de autoayuda, diccionarios de la lengua, máqui- así, habría elementos unificadores, miradas compin- neración y las dos siguientes. La suya optó por la unidad contextos políticos y sociales puramente latinoameri- quier cosa que ella haga, yo lo voy hacer también”». dia Británica, colección que utilizó para dilucidar El juguete le daba un aire digno y una energía en su caminar que no Las cenizas de la abuela de Catalina fueron a dar a nas para hacer ejercicio, computadores, películas, cá- Ilustración Ernesto Jaramillo chadas sobre la diversa realidad de y la lucha contra un enemigo común de Latinoamérica, canos, es decir, ligados a su historia. Cineastas como referencias de Mutis en Empresas y tribulaciones su extenso territo rio. En ese caso, o sea contra la explotación de la potencia de turno que Lucrecia Martel, que admite formar parte de la gene- tenía antes de llevar colgado el artefacto. Al cabo de unos días nadie un cementerio y no a los techos del Makro del barrio La maras, pornografía disfrazada de pedagogía tántrica, Grossman asistió becada a la Universidad de de Maqroll el Gaviero. Una vez, Grossman intentó Floresta. De entrada, vale anotar que siendo una mujer amor en todas sus expresiones, ternura a raudales en «Sexo, amor, esperanza y violencia en la mejor pelí- aparte de juzgar a una película heredó el látigo de las metrópolis colonialistas. Sin em- ración “que mira para otro lado” (1) (corroborando la volvió a mencionar la novedad, como si el palo de madera hubiera Pensilvania, en donde se graduó en Español. Fue clasificar sus libros en categorías, pero al final se -bestia- cula latina desde Amores perros». Esta afirmación enca- como buena o mala, habría que bargo ese ene migo común se impuso violentamente y idea de que el cine latinoamericano como se entendió formado siempre parte de la vestimenta del anciano. Eugenio ha- católica, la abuela de Catalina hizo del supermercado forma de muñecos de peluche o de camisitas bordadas allí, en la revista literaria de la Universidad, donde abstuvo. «La organización no ha sido uno de mis su cielo en una sola imagen, por cierto muy poderosa para bebés, se pueden tomar de los anaqueles. beza el afiche promocional de la coproducción EE. UU./ pensar si es una buena o mala logró dividir a América Latina y hacer que con una de- en un principio ya no existe) ha tratado los temas que blaba de trincheras y barro, de desaparecidos, sacrificios y lealtad. publicó su primera traducción: un poema del escri- puntos fuertes. Siempre llega el momento cuando y blasfema. Si el Cielo es reposo, tranquilidad y paz (lo Colombia, Paraíso Travel (2007). La cita es de un crí- película latinoamericana, asu- cena de dictadores cada país viviera su infierno parti- le son cercanos a ella en La Ciénaga, La Niña Santa y Si se sentaba, nunca se quitaba el arma de encima. Se tomaba sus tor español y premio Nobel Juan Ramón Jiménez. digo: “Al carajo con todo esto, no lo aguanto”». tico de una conocida revista española de cine y, aunque miendo entonces que habría cular, por separado: divide y vencerás. Como en toda La Mujer sin Cabeza. Algunas otras películas que creo mismo que ofrecen los cementerios del norte de Bogotá) Otro hecho fascinante es que las personas sean fe- coñacs con una expresión más quejumbrosa y gestos más pausa- Después se fue al Oeste, a la Universidad de Cali- Adyacente a su gran escritorio de madera está ella encontraba todo eso en el Makro de su barrio, y era lices mientras están allí: la gratificación que se obtiene no figura en el afiche de otros países donde se ha distri- un ideal de tal película. ¿Cuál dictadura, muchos artistas e intelectuales fueron ase- que representan bastante bien lo que se está haciendo dos que antes. Tanto, que si algún joven se tomaba la molestia de fornia en Berkeley. En 1962 viajó a España con una una caseta con varios diccionarios internacio- buido la película, fue incluida a modo de presentación podría ser ese ideal? sinados, desaparecidos o exiliados, como fue el caso de en cine en América Latina son, por ejemplo de México, esa la razón de fondo, por la que iba a diario. al encontrar lo deseado y luego poseerlo está garanti- fijarse en el abuelo lo que sentía era cierto respeto hacia aquellos beca Fulbright y regresó a Nueva York para termi- nales en fila. Cuando está trabajando, mantiene zada. Pero también está el otro hecho nuevo: que antes en su página web oficial. Raúl Ruiz o Miguel Littín, aunque éste último regresó de Japón de Carlos Reygadas, Sangre, de Amat Escalante, nar su doctorado en estudios latinoamericanos. Su el diccionario Inglés-Español-Inglés de Simon & En 1968, en el festival forma clandestina para registrar con su cámara lo que La Virgen de la Lujuria, de Arturo Ripstein, El Violín de veteranos olvidados. Eugenio no se daba cuenta, pero había alcan- Cada cosa en su lugar de comprar, en el mero momento de elegir o soñar con tesis sobre el poeta chileno Nicanor Para atrajo la Schuster (1973) abierto a su izquierda y el de Co- y un lugar para cada cosa el uso de los objetos, se extrae felicidad, la de la pose- Es común que los afiches de las películas ostenten de cine de Viña del Mar, un estaba sucediendo en su país en un mo- Francisco Vargas, Cobrador: in god we trust, de Paul zado sus días de gloria. atención de su asesor, quien la recomendó a Ro- llins (1976) a su derecha. Ahora está en el medio los sellos de los premios que hayan recibido en festiva- grupo de cineastas combati- mento de absoluta censura (Gabriel Leduc, de Guatemala, Gasolina, de Julio Hernández La vida de Eugenio dio un giro al abrirse una tienda de cómics en sión hipotética de algo que por añadidura puede gene- nald Christ, en ese tiempo, el editor de la que ahora de la traducción de la novela de Carlos Fuentes He aquí una de las premisas fundamentales del su- rar envidia entre los demás compradores. Ya otra cosa Powerpaola les para atrapar espectadores. Lo de incluir la cita posi- vos, herederos de la ideología García Márquez escribió su his- Cordón, de Ecuador, Crónicas, de Sebastián Cordero, la esquina de la calle del Albergue. En la vitrina se dispusieron ico- se conoce como la American Society’s Review. Así Todas las familia felices. Grossman también re- permercado. Un pensamiento que expresa en su apa- es pagar (para muchos, clímax; para otros, fuente de tiva de algún critico o periodista es más una costumbre de la revolución cuba na en sus toria en Miguel Littín, clandes- de Paraguay, Hamaca Paraguaya de Paz Encina, de nos de ciencia ficción y pósteres de inmensa envergadura. Eugenio fue como Grossman empezó a escribir críticas. vela que recientemente se encargó dichosa- Entrevista Pero ya no tienes que ser de Hollywood ya que sus películas rara vez participan en respectivos países, se reunió por tino en Chile). Pino Solanas, Uruguay, Whisky, de Pablo Stoll y Juan Pablo Rebella, riencia de regaño paternal el papel del hombre en el angustia), y ya otra muy distinta salir de este Paraíso y no pareció prestarle atención a la nueva tienda, hasta que una ma- mente de un escritor joven, el peruano y ganador cosmos: darle un nombre, una categoría, un sentido armar los muebles uno mismo en la casa. Pero mien- asistente de chef… festivales. Lo de llamar “latina” a una película de Amé- primera vez para compartir sus por poner solo otro ejemplo, de Argentina, Leonera de Pablo trapero, El Abrazo Par- Lo que pasó enseguida continuaría por el resto ñana se expuso una espada láser de plástico fluorescente en el cen- del premio Alfaguara, Santiago Roncagliolo. Es- y un lugar a los seres conocidos. Ahora bien, el super- tras se escoge, se calculan precios, se evalúa el futuro rica Latina, también es muy de allá. visiones y preocupaciones sobre sobrevivió a un atentado a tido de Daniel Burman ó Liverpool de Lisandro Alonso, de su vida: gente contactándola por trabajo. Christ Powerpaola es el nombre tro del escaparate. Profundamente asombrado, Eugenio se acercó pera trabajar con más escritores así en el futuro. mercado no hace otra cosa que poner aquellos seres uso de la compra, las hormonas de la felicidad trabajan Ahora estoy pintando bastante y dibujando, la vida en el continente y sem- balazos por ver las cosas de por mencionar solo algunas estupendas películas de le preguntó a Grossman si quería traducir el cuento despacio al resplandeciente objeto y pegó las palmas de sus manos de la naturaleza y aquellos nuevos seres creados por a marchas forzadas. de guerra de Paola Gaviria, me salí de la autobiografía un poco. Estaba un “(…) la mejor película latina desde Amores Perros”, brar así la semilla de lo que sería una manera distinta a la algunos de los directores latinoamericanos que están corto, sobre cómo borrar la memoria, Cirugía psí- Sobre un estante en el pasillo fuera de su dormi- al cristal que los separaba. No vio pasar los minutos, aturdido por el nosotros en el lugar que le corresponden a la hora de poco cansada de contar siempre mi vida, mis días, es decir, desde 2000. ¿Qué hace de esa película el anno el movimiento del Nuevo Cine de los que estaban en trabajando en este momento. La mayoría de las pelícu- quica de extirpación del escritor argentino Macedo- torio hay una torre gigante de libros. «Estos están comprarlos. De hecho, en el supermercado comprar En el supermercado la teología y la teleología se una artista colombiana así que estoy haciendo trabajos sobre situacio- domini del cine hecho en América Latina? Es una opera Latinoamericano. Era una genera- el poder en su país. las que cito aquí fueron hechas después del 2000, es diseño y el color brillante del arma ficticia. Finalmente una vecina nio Fernández. Grossman estuvo vacilante. «Dije, por leer, sin ningún orden de preferencia. Pero des- tiene un valor epistemológico: es un acto de conoci- funden continuamente. Tenemos la evidencia de que nes absurdas de los políticos latinoamericanos. prima y la película más premiada del cine mexicano; ción de cineastas muy comprometi- decir, después de Amores Perros. Y hay muchas más. lo separó de la vitrina, alegando que lo estaban esperando en el Um- “Ronald, yo no soy traductora, soy crítica”». Y él emergente que tiene mucho pués de leer uno largo solo quiero leer uno corto». miento que se va refinando con el tiempo. Aprende- alguien en el más allá de las fronteras de lo conocido costó menos de dos millones de dólares y recaudó más dos políticamente que se propusieron Las más recien- bral. Sentaron a Eugenio en la barra ante un chupito de coñac, aun- le dijo: «Llámate lo que quieras, pero inténtalo». Grossman es una lectora para lectores, muy feliz de mos a comprar. ha pensado en todo, ha diseñado el plan maestro para que decir. Hace seis años que, Me decías que en Colombia el cómic es el de diez en taquilla; su director huyó del cine latinoame- reafirmar la identidad de un pueblo opri- tes generaciones Para muchos en la industria cinematográfica del gla- que sin la expresión altiva que lo caracterizaba. Grossman recuerda que le encantó el trabajo. tener libros baratos de tapa rústica comprados en nuestras vidas. Esta evidencia corrobora que el orden gran desconocido. ricano para hacer cine latino y dirigió a Sean Penn en su mido y explotado durante siglos, despoja- de latinoameri- mour y las alfombras rojas “cine latinoamericano” sig- Otros proyectos siguieron, incluyendo una novela becada en París, descubrió Durante tres tardes Eugenio tuvo a Camarero preocupado: no tiendas del vecindario como el viejo Shakespeare Se decía antes que las modernas catedrales del de las cosas existe y que es bueno. Cada departamento segunda película y a Brad Pitt en su tercera; uno de sus do de su voz y, por tanto, de su dignidad. Se canos no vivieron nifica mercado latinoamericano equiparando su distri- escrita por el peruano Manuel Scorza y publicada terminaba sus coñacs ni probaba sus cafés. Su mirada era la de & Co., el Labyrinth Books (ahora Bookculture), o consumismo eran los centros comerciales, porque cubre un área de la vida humana, de la misma manera qué era lo que quería hacer el Sí, como acá no se oye tanto, uno siente que se protagonistas saltó a la fama y ha rodado veinte pelícu- trata de cineastas como Glauber Rocha, Alfre- las dictaduras bución a la de cualquier otro producto, convirtiendo sus por Harper & Rowe en 1977. Luego vino la oferta siempre, lánguida y desdibujada, aunque Camarero notó su ceño el Papyrus (ahora Morningside Bookshop). Le in- allí no solo estaban todas las cosas que uno deseara en que cada fibra del cuerpo humano posee un feroz pueden hacer muchas cosas. Cuando estaba en las en nueve años; su guionista desarrolló rápidamente do Guevara, Julio García Espinosa, Miguel pero heredaron pantallas de cine en lo que Miguel Littín llama un “en- para traducir a Gabo. Recuerda que un agente que resto de su vida: fruncido y un pliegue desagradable bajo los labios del soldado. Ca- teresa el contenido, no las cubiertas ni las prime- comprar (y las que no también), sino porque en su he- equipo de marketing. El ojo tiene quien le venda gafas, Australia o en Francia pensaba que nunca podría un complejo mesiánico y protagonizó un duelo de vani- Littín, Jorge Sanjinés, Paul Leduc, Fernan- de sus padres el clave colonial”. vivía en su edificio la llamó y le preguntó directa- ras ediciones. «Me gusta comprar libros por la calle marero disimuló y le hizo las preguntas de rigor, a las que Eugenio terogénea nómina de propietarios, marcas y ofertas, gotas, lentes de colores, pestañina, sombras, inter- dibujar historietas. llegar a nada, que con tanta producción de histo- dades con el director que los medios se tomaron muy en do Solanas, Tomás Gutierrez Alea, Fernan- miedo de la ex- mente: «Edie, ¿estarías interesada en traducir también, pero ahora tengo serias dudas por las pla- quedaba la impronta de la sociedad democrática que venciones quirúrgicas. El pelo tiene sus champús, rietas yo no iba a destacar. En cambio, en Colom- serio. En fin, fue un éxito. Puede que hasta haya contri- do Birri, entre otros. Entre sus filmogra- periencia vivida En una rueda de prensa en Cannes en 1988, Godard, contestó como cada día, aunque con menos garbo. a García Márquez?». Grossman pone los ojos en gas de ácaros». Su colección también se ha nutrido les servía de pivote ontológico. Ahora las modernas acondicionadores, rulos, secadores y tinturas. La piel, bia todavía no existen las novelas autobiográfi- buido en poner de moda en los festivales al cine hecho fías se encuentran hitos del cine como en esos años. La señalando al camarógrafo que lo filmaba, invasivo, Cuenta el sin techo Pepe que en una de esas madrugadas se blanco y estruja su boca reviviendo aquel día y dice de los viajes que hizo en su juventud. Sonríe amplia- tiendas por departamentos, o grandes superficies, sus cremas; la nariz, sus gotas; los labios, sus labiales; cas, hechas por colombianos, claro. Conozco a va- en América Latina. Y, según el critico español, la mejor Antonio Das Mortes (G. Rocha, 1969), cinematogra- desde un costado, dijo al público “Este es el enemigo. pudo ver a Eugenio salir a la calle descalzo, en pijama y bata. Con que contestó: «¿Qué? ¡Pues claro que estoy intere- Por Irene Serrano mente: «Mi ropa cabía en un mochila de fin de se- han ido tomando este carácter de una manera más su- los dientes; los oídos; las cejas; las pestañas; las orejas, rios que están peleando y haciendo, pero es muy desde entonces es Paraíso Travel. El Chacal de Nahueltoro (M. Littin, fía argentina de No él como hombre sino la cultura. Este es el enemigo. paso sigiloso se acercó a la tienda de cómics, sacó un paraguas de sada!». Grossman presentó una prueba de veinte mana. Pero mis libros ocupaban baúles y baúles». maria y menos confortable (no es lo mismo ver los te- las arrugas, todos ellos tienen más productos por sepa- difícil porque no hay una cultura de esto. Sin em- 1969), Reed – México Insurgente (P. los ochenta y no- La manera en que tiene que filmarme es tan asquerosa páginas de Amor en los tiempos del cólera para la sus ropas y empezó a dar golpes a la vitrina del comercio en medio levisores expuestos en anaqueles gigantes, igual que rado que como parte de la unidad que, se supone, es ¿Cómo te encuentras con el mundo del bargo, hay mucha gente como que quiere leer có- Si una cosa es mejor que otra, es porque es más Leduc, 1970), Las Aventuras de Juan venta trata exten- como algunos seguidores de, digamos Le Pen, que dicen casa editorial Knopf y fue escogida. «Supe que este del silencio nocturno. Según Pepe, Eugenio se esforzó durante lar- Copyright of BookForum February/March 2008 si fueran latas de sopa, que verlos en el almacén de quien las posee. La cabeza humana es ella misma una cómic y la historieta? mics y creo que de pronto uno puede luchar para buena que algo bueno. ¿Y qué es bueno? Se podría Quinquín (J. García Espinosa, 1967), samente, a modo que los campos de concentración son solamente un de- escritor colombiano era excéntrico cuando me es- gos minutos hasta que la vecina salió a su encuentro pegando gri- Sony ubicado en el mejor centro comercial de la ciu- tienda por departamentos inagotable. que las próximas generaciones sepan qué es y decir que lo bueno es el valor que se le da a lo que con- La Hora de los Hornos (Pino Solanas, de catarsis, lo suce- talle. Viene de esa manera de mirar las cosas”. cribió diciéndome que no utilizaba adver- tos, «con camisón de vieja», dijo Pepe. La señora le arrancó el pa- dad). Las grandes superficies ampliaron el concepto En Colombia es algo casi inexistente. Si hay algo, es puedan disfrutar de una gran producción propia. tribuye a hacer el bien, pero el bien en sí no es nada ya 1968) ó Memorias del Subdesarrollo dido unos años atrás. bios que terminaban en –mente y raguas de las manos y guió a Eugenio hasta su casa. del supermercado que vendía alimentos y artículos de Y, poco a poco, también descubrimos que el hiper- underground y difícil de conseguir. Conocí el mundo que depende del mal para ser puesto en valor. Así que (T. Gutiérrez Alea, 1968). Todas estas Apenas ahora, en Si uno conoce a una persona por primera vez y ésta, que le gustaría evitar el uso de higiene, ahora quieren venderlo todo. La diferencia mercado ofrece productos especializados para rodi- del cómic cuando viví en París, gracias a una vecina. Pero tú colaboras con gente de otros el bien se desea por encima del mal, es lo deseable. películas, por mencionar solo algunas, lo que se ha venido a al presentarse, dice que es muy aconsejable que se le co- Pepe se echaba una cabezada en su banco cuando, al día si- adverbios terminados en –ly política es que ahora es una sola corporación la que llas hinchadas, uñas encarnadas, hemorroides san- Y me empezaron a interesar sobre todo las historie- países también, ¿no? Como lo deseable no existe aún debe existir un ideal fueron hechas antes de Amores Perros. llamar nuevo cine nozca porque la gente dice que es una gran persona, es guiente, percibió de reojo a la vecina entrar en la tienda de cómics, en inglés». Recuerda que aspira a venderle a sus fieles clientes todo lo necesa- grantes, intestinos estreñidos, vellos no natos, pero tas autobiográficas. Cuando descubrí a Julie Doucet de lo que se llama el bien. Si se dice que algo es bueno, Teniendo en cuenta lo difícil que era pro- normal que a uno se le encienda la sospecha de la que salió al poco rato con un paquete alargado. Según Pepe, se pensó «¿qué se dice rio para una vida plena. también para cosas intangibles, como la aventura, y su Diario de Nueva York, no podía creer que alguien En Argentina el movimiento es muy grande, y por ejemplo una película, debe ser porque se acepta ducir una película en ese entonces, vale la de que esa persona es, en realidad, todo dirigió decidida hacia el portal del edificio de Eugenio con «el coso en inglés en vez de convertida en carpas y lámparas Coleman. Para el ro- pudiera hacer eso, ¡era genial! Se me quedó en la ca- gracias a un grupo argentino he conseguido difun- que contribuye al bien, a un ideal escondido, inabar- pena mencionar que no ha vuelto a haber lo contrario. Lo mismo pasa con las pe- ese» bajo el brazo. Todos creyeron aquél testimonio, por la simple slowly?». «Pues bien, dir un poco más mi trabajo. Allá sí hay más gente que Cómo hacerse cómplice de los demás mance hay flores, chocolates, ligueros y películas de beza y pensé que eso era justo lo que yo quería hacer. cable, detrás de su forma y su intención. Una película en Latinoamérica cineastas tan prolíficos lículas. Así que, aparte de las vacuas razón de que Eugenio no apareció ese día en el Umbral. Camarero me inventé todo tipo se dedica a la historieta. Publico mis historias en un Meg Ryan en descuento. El hipermercado progresa será buena en la medida en que se acerque a ese ideal. como los mencionados arriba. En la base promesas de “sexo, violencia, amor se dedicó a acallar cualquier rumor con su mirada severa. de cosas, como Además de ella, ¿hay otros que te sirvan blog de allí, historietasreales.wordpress.com. Este lo Pero, por supuesto, ese ideal es relativo, al igual que de su trabajo había un fuerte compromiso y esperanza” que enjugan la boca El adolescente, que no es autónomo, que no gana hacia el resumen de la vida humana, hacia la com- Pasaron otros tres días. A la cuarta tarde, la vecina se asomó without haste». de modelo, que te influencien? pusieron en marcha dos chicos argentinos y en un lo es el éxito. Sin embargo, algo hay que admitir: una político, ético y social. de cualquier espectador sin cri- lo suficiente, que no está a gusto con obedecer las re- pra por partículas de la vida humana. Para alimentar principio colaboraban solo artistas de este país, ahora película se hace para ser vista por otros. El cine, como terio, es Paraíso Travel “la mejor por el Umbral. Camarero le preguntó inmediatamente por Euge- glas gratis, niega este orden y, mientras su fuerza cada átomo del cuerpo humano por separado. Lo cual Sí, casi todo mujeres que hacen historieta auto- somos unas veinte personas de diferentes lugares. la voz, es un medio de comunicación. Aunque, a dife- En 1978 se celebró el primer Fes- película latina desde Amores Pe- nio. Sorprendida, contestó que ella tampoco lo había visto en toda vital se lo permite, pelea contra él, la mayoría de las es una misión tan dispendiosa e inacabable que per- biográfica. Me gustan Marjane Satrapi, Aline Komin- rencia de la voz, el cine siempre lleva un mensaje im- tival del Nuevo Cine Latino- rros”? Pues, como dice Godard, la semana. “¿No lo has visto por las noches?” preguntó Camarero. veces, cambiando de uso y de lugar todas la cosas fectamente le da sentido a la corta vida de la mayoría sky y Debbie Dreschler. Y ¿cómo funciona? personal que va dirigido a todos en general y a nadie en americano de la Habana depende de cómo se mire. “No, ¿qué noche?” contestó la vecina. hechas por los adultos. Ahí lo vemos rompiendo los de los mortales. pantalones recién comprados. Poniéndose la gorra al particular. El éxito o fracaso de una película se mide en Camarero salió de la barra abandonando el Umbral, cosa que revés. la cama al cuarto de San Alejo y dur- Fractalización De hecho, tus historietas son muy auto- Cada uno de los participantes tiene que publicar la cantidad de gente que la vea, que reciba su mensaje. jamás se le había visto hacer. Cruzó de acera y descolgó el teléfono semanalmente una historieta. Yo, por ejemplo, pu- miendo en el piso. El adolescente nada a contraco- biográficas… Entre más gente la vea mayor será el consenso sobre lo (1) entrevista concedida al público. Llamó a los bomberos, dio la dirección de Eugenio, colgó blico los viernes. Es muy chévere, porque uno tiene el rriente hasta que se cansa. Hasta que le echan de Finalmente arribamos al sueño de los propieta- cerca que esté de su ideal diario del 30 Festival Interna- y volvió a entrar en su local. Ningún cliente se aventuró a pedirle Sí. Todo empezó en una época en que viví en feedback de la gente, y además te obligas a trabajar, cional del Nuevo Cine Latino- casa y la selva de la supervivencia se encarga de do- rios de los grandes hipermercados: fidelizar la mayor nada. Todo permaneció en silencio hasta que Camarero escuchó las Sydney. Allí trabajaba de asistente de chef en un a no desistir. Como somos muchos, siempre vamos Según Boris Groys, es el elemento inédito que se americano. mesticar o exacerbar su rabia. Pero para el adulto el cantidad de clientes, que al pertenecer al cosmos Ca- restaurante y sentía que mi vida era una mierda. a tener público, aunque seamos solo los que escribi- añade a un discurso existente lo que hace que una obra sirenas invadir la calle; entonces retomó su trapo, ordenó dos mon- placer está en que por fin puede ir a favor de la co- rrefour, por ejemplo, se convierten progresivamente Empecé a burlarme de ella dibujando cómics. En mos. Además, en los cinco años que lleva en marcha, adquiera relevancia y se le ponga en un pedestal, es taditos para la mesa cinco y se sirvió una cerveza sin alcohol que se rriente, por fin tiene una lancha a motor, por fin en ciudadanos Carrefour. Si alguien puede comprar momentos de depresión uno mismo cae en la au- a casi todos los colaboradores les han publicado libros. decir, lo novedoso. Que una película llegue a ser pro- bebió con calma, apoyado en una esquina de su barra. puede pagar por comprar todas las cosas que fueron desde una motosierra, una casa, un carro o toda la tocompasión, y me pareció que era un poco nece- yectada en una sala de cine la convierte, de hecho, en Eugenio fue encontrado muerto sentado en su sillón. Llevaba hechas para su consumo. Ya no está en inferioridad ropa de la familia en un lugar que le ofrece comodida- de condiciones frente a las reglas. Ahora le pagan por des y descuentos, ¿por qué iría a perder el tiempo en sario reírme de eso, porque las cosas no me iban ¿Crees que existe la historieta latinoame- un objeto relevante. Sin embargo con mucha frecuencia puesta una chaqueta roída aunque impecablemente planchada. De cumplirlas. Ahora se puede desquitar cumpliéndolas. otros lugares? Las dimensiones del concepto de este tan mal. Los cómics me ayudaron a salir del bache. ricana, con características comunes que las películas llegan a las salas más por los tratos y nego- su hombro colgaba su escopeta de madera y, fuertemente apretada la diferencian de la europea o la estado- cios de los productores que por que realmente valgan Aleph del consumo tiene dos ventajas. Por un lado, de- ¿Estás haciendo ahora algo reseñable unidense? con su mano derecha, una espada láser de plástico verde lucía, ele- Esta relación entre el adulto cómodamente ins- finir los contenidos materiales de la vida de los clien- la pena ser vistas. En tal caso la prueba de fuego será el gante, posada sobre sus rodillas. Los bomberos y la policía tiraron respecto a esto? tiempo que duren en cartelera. La obra permanecerá vi- como continuación del espíritu de Viña del Mar. En talado en el orden y el orden de la vida expuesto en tes (lo que otros llaman estilo de vida) y, por otro, ven- la escopeta junto con otras de sus viejas pertenencias. Aunque, a Hay una tradición en la historieta argentina, en gente en el tiempo en la medida en que lo novedoso no 1985 se creó la fundación del Nuevo Cine Latinoame- Más información vitrina por la sociedad de consumo es una vieja doc- derle esos ingredientes de manera periódica e incluso En la actualidad estoy trabajando en una novela la chilena y en la mexicana. Ellos sí tienen una his- se vuelva irrelevante. ricano para la gestión, promoción y conservación del petición de la vecina y Camarero, Eugenio fue enterrado con la es- trina hippie. La novedad tal vez sea lo que la abuela a cuotas, con atractivos planes de crédito. gráfica que se llama Virus tropical, que cuenta mi toria. Pero para cada uno, por mucho que exista, patrimonio fílmico de América Latina y ese mismo año Han colaborado sobre los pada de plástico. de Catalina agregó: el cielo contemporáneo es este historia vital desde que mi madre estaba embara- siempre ha sido muy amateur, muy inspirada en la Hace poco, en una charla que dio en Albacete, es- se abrió la Escuela Internacional de Cine y Televisión nuevo concepto de supermercado, el hipermer- Es cierto que el modelo de la tienda por departa- en este número: colaboradores cado, la tienda por departamentos, las grandes su- mentos imita la vida, y viceversa. Pero en ese ir y venir, zada. Cada viernes subo una página a mi blog. Ten- de afuera. Aunque sí creo que hay cosas comunes cuché a Carlos Reygadas decir algo que me parece, de San Antonio de los Baños. Estas iniciativas se die- Artista invitada drá como 11 capítulos, cada uno de 10 ó 12 páginas. en la historieta latinoamericana, como que su te- valga la redundancia, relevante. Alguien del público le ron para lograr la unidad cultural del continente, ga- Textos y colaboraciones: perficies. Simplemente porque conjuga el poder del supermercado a la casa, se genera otra tendencia: Póster comprar ordenadamente y el encontrar todo aque- la de reproducir en casa y a escala el hipermercado y Puede que sea el comienzo de varios volúmenes, por- mática es muy política. Pero tengo la sensación de preguntó algo así como que si no le importaba que sus ranti zar su producción cinematográfica y protegerla Powerpaola Verner Duarte, Adriana V. López, www.quetengoenlacabeza.com llo que puede llenar de sentido la vida (que no es con él la sociedad, extendiendo el modelo de la vida que mi idea era narrar hasta que me gradúo en el co- que todo está cambiando, de que hay una fuerza películas resultaran inaccesibles para mucha gente. Él de la abrumadora incursión de películas del norte que Elisa Puerto Aubel, Pedro Rivero, otra cosa que aquello que ocupa nuestro tiempo). como una tienda por departamentos. Y surge entonces legio. Y de momento mis anécdotas llegan hasta que común. Se está logrando que cada vez más haya contestó algo así como que probablemente Armagge- mostraban sociedades y valores completamente ajenos. Diseño Irene Serrano Vázquez, Nicolás Las opiniones vertidas una imagen fractal: cada hogar se vuelve una réplica tengo un año, así que igual me demoro un poco más. una historieta latinoamericana, con característi- don reventara la taquilla durante unas semanas y ven- Durante las décadas de los 60, 70 y 80, era posible ha- Ernesto Ramírez / Serrano Zbinden. en las notas firmadas o por las En el hipermercado todo está prolijamente dise- o sucursal del hipermercado. Una minibodega donde cas únicas. Y está pasando que como somos muy diera muchos dvd, mientras que La Palabra de Dreyer blar de cine Latinoamericano. [email protected] personalidades entrevistadas no ñado para cada necesidad. Hay camas, colchones, todos los productos deben sustituirse periódicamente. ¿Y vives de los cómics? pocos, estamos muy unidos. Hay mucha solidaridad. (o alguna otra, no recuerdo) lleva siendo vista durante Ilustraciones reflejan necesariamente la opinión cubre-lechos, cobijas, mantas, edredones, fundas Y es comprensible que la gente quiera dejarse llevar 55 años y no perderá nunca su relevancia. ¿Quién ha “Hace treinta años afirmábamos nuestra identidad y Editora Ernesto Jaramillo, Didaç Pérez, de LACABEZA. para las almohadas, mesitas para comer en la cama, por semejante modelo: quién no quisiera convertir su A ratos. Pero no solamente dibujo y hago historie- http://www.flickr.com/photos/powerpaola vuelto a ver Armaggedon? hoy la prolongamos, la proyectamos hacia el futuro. No Julie Turcas / Ernesto Ramírez. mesas de noche y lámparas para poner sobre ellas. hogar en una especie de cielo en la tierra, un remanso tas, también coso. Diseño camisetas con telas recicla- solo fuimos una generación, son cuatro generaciones [email protected] Todos los derechos de las ilustracio- http://powerpaola.blogspot.com El dormitorio, todo ese microcosmos de la tragedia de orden, de paz, de reposo con «cada cosa en su lugar das cosidas a mano. Volviendo de nuevo al comentario promocional del que hoy en día están haciendo cine latinoamericano con Corrección de textos nes y textos aquí reproducidas son humana, que tantas guerras han visto nacer, está re- y un lugar para cada cosa». afiche de Paraíso Travel, supongo que lo que el crítico un claro compromiso con el hombre, con su historia”(1) Portada - Muertita - Powerpaola Henar Pérez de sus creadores. llama “latino”, será traducible a “latinoamericano”. , decía Littín al recibir el coral de honor en el 30 festival ducido a enseres especiales para comer en la cama,