N°9 Vol. 9 Año 2017 9 RevIISE - Revista de Ciencias Sociales y Humanas Vol 9 Año 9 - abril - septiembre 2017. Argentina. ISSN: 2250-5555 Editor: [UNSJ - FaCSo -IISE] Formato: Digital [PDF] Plataforma: [OJS] url: www.reviise.unsj.edu.ar

Ilustración de la Tapa: Arq. Fernando Giudici Consejo Científico Externo Dibujo Nº 44 de la serie América Mabel Thwaites Rey (Universidad de Buenos Diseño de tapa: Molina Quijano, Matías. Aires, Argentina) Silvia Castillo (Paris-Sorbonne University, Abu Dhabi, United Arab Emirates) Mabel Manzanal (Universidad de Buenos Aires, Indexación y Catálogo Argentina) Mario Pecheny (Universidad de Buenos Aires, Sistemas de evaluación Argentina) Alicia Itatí Palermo (Universidad Nacional de ◊ Latindex (Catálogo) Luján, Argentina) ◊ ERIH PLUS Julio César Gambina (Universidad Nacional de ◊ DOAJ Río Cuarto, Argentina) Ana María Pérez Rubio (Universidad Nacional e-Sumarios: del Nordeste, Argentina) Natalia Fischetti (Universidad Nacional de Cuyo, ◊ DIALNET Argentina) José Luis Jofré (Universidad Nacional de Cuyo, Directorios: Argentina) Pedro Ochoa George (Universidad de Cienfuegos, ◊ REDIB Cuba) ◊ BINPAR Martín Ferreyra (Universidad Nacional de Cuyo, ◊ PPCT Argentina) ◊ MIAR Juan Jesús Morales (Universidad Bernardo ◊ BASE O’Higgins, Chile) ◊ ROAD Vignale, Silvana Paola (Universidad Nacional de ◊ Journals & Authors Cuyo, Argentina) Frédérique Langue (Centre National de la Recherche Scientifique, Francia) Izaskun Álvarez Cuartero (Universidad de Salamanca, España) Dirección - Leonardo Drazic [IISE - UNSJ] Comité Editorial Marina Campusano [CONICET - CES - UNNE] Victoria Galoviche [CONICET - IISE - UNSJ] Consejo Científico Interno Gerardo Larreta [CONICET - IISE] Universidad Nacional de San Juan Damián López [FACSO - UNSJ] Alicia Beatriz Naveda Margarita Moscheni [ IISE - UNSJ] Delia De la Torre Guadalupe Seia [IIGG - UBA] José Casas Laura Garcés Mabel Guevara Marcelo Lucero María Griselda Henriquez Pablo Rodríguez Bilella Nota de copyright Sara Mabel Valenzuela Susana Montañez Zulma García

RevIISE by Departamente de publicaciones IISE is licensed under a Creative Commons Recono- cimiento 4.0 Internacional License. Índice

Editorial [ 5 ] Leonardo Drazic Artículos Libres

El enfoque epistémico [ 7 ] de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben De la crítica nietzscheana del conocimiento y la genealogía a la arqueología del poder político en Occidente Daniel Inojosa Bravo (Argentina)

Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales [ 21 ] y metodológicas para el análisis del juicio moral sobre las acciones de “justicia por mano propia” María Belén Muñiz Oller (Argentina)

¿Y el género en la seguridad social argentina [ 35 ] durante los gobiernos kirchneristas? Estudio sobre las implicancias de la Asignación Universal por Hijo y el Plan de Inclusión Previsional Virginia Noemí Alonso | Tatiana Marisel Pizarro (Argentina) Artículo Joven

Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales [ 51 ] para una investigación con perspectiva de género Las significaciones de las mujeres en torno a sus experiencias de aborto medicamentoso María Natalia Santarelli (Argentina) Ensayo La universidad como agente de igualdad de género [ 63 ] Prácticas universitarias para mujeres empoderadas Paola Ingrassia (Argentina) Dossier Abierto Epistemologías-Metodologías Críticas [ 73 ] Invitaciones/Investigaciones/Interpelaciones Natalia Fischetti (Argentina)

Investigar en situación [ 77 ] Aproximaciones metodológicas y otras imprecisiones Virginia S. Martinez Coenda (Argentina) Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 97 ] Reflexiones críticas en torno a la Colonialidad en la teoría y en la práctica feminista latinoamericana Marcelo Alejandro Catalán Marshall (Chile)

Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 111 ] Aproximaciones al paradigma indígena Weimar G. Iño Daza (Bolivia)

Contribuciones desde una epistemología plebeya [ 127 ] al Trabajo Social frente a la restauración neoliberal María E. Hermida (Argentina)

Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio [ 147 ] Una propuesta para revisar críticamente la politicidad que habita nuestras investigaciones Manuel Cuervo Sola (Argentina)

Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas [ 157 ] para una historia de las ideas de las mujeres del Sur Mariana Alvarado (Argentina) Editorial

omenzar el año 2017 con un nuevo número de un volumen, que cuenta con la incorporación Cde la RevIISE, Revista de Ciencias Sociales y de un Dossier Temático coordinado por Natalia Humanas [IISE – FACSO, UNSJ] es una bocanada Fischetti, favoreciendo la proyección interna- de aire fresco que nos alienta a continuar reflexio- cional de la publicación. nando y a potenciar un auténtico instrumento Agradecemos especialmente a todo el Comité de divulgación científica en una etapa de crisis y Editorial y cada uno de los evaluadores que cola- ajuste de la política pública de carácter científico. boraron con un producto que se destaca, no solo Nos preocupa y ocupa esencialmente aportar por la calidad sino por la cantidad de artículos, a la construcción de un espacio científico sólido, en referencia a publicaciones anteriores. crítico e independiente, que contribuya a la cons- Sólo resta continuar trabajando y los invitamos trucción de la equidad y la inclusión social. a leer y compartir un espacio de divulgación que Desde el Instituto de Investigaciones Socio- esperamos contribuya a enfrentar las tensiones Económicas, valoramos sustancialmente todos de un pensamiento hegemónico que fragmenta los aportes que contribuyeron para la elaboración identidades y resquebraja la integridad personal.

Leonardo Drazic

Leonardo Drazic | Editorial RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 p. 5 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 5 ] Evaluadores/as RevIISE Nº 9 (artículos libres)

Mg. Alonso, Graciela Beatriz - UNCOMA Dra. Bard Wigdor, Gabriela - CIECS CONICET UNC Dra. Brown, Josefina - CONICET/IIGG- UBA Mg. Carrizo Muñoz, Cindy - UNSJ Dra. Díaz Boada, Lina - Universidad Industrial de Santander Dr. Gorra, Daniel - UNSL Mg. Inojosa Bravo, Daniel - UNSJ Dra. Martínez de Castro, María Celia del Valle - UBA Médica Maure, Gabriela Cecilia - INCIHUSA-CONICET Dra. Molina, Sara Leticia - UNCUYO Dra. Pla, Jesica - CONICET IIGG UBA Lic. Spinelli, Eleonora - UNLP Dra. Vignale, Silvana Paola - INCIHUSA CCT CONICET Mg. Fernández Vázquez, Sandra - IIGG UBA UNDAV

Estadísticas de envíos Periodo julio - diciembre 2016

◊ Recibidos 13 ◊ Aceptados 11 ◊ Rechazados 2 El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben De la crítica nietzscheana del conocimiento y la genealogía a la arqueología del poder político en Occidente

Daniel Inojosa Bravo (Argentina) Facultad de Ciencias Sociales (UNSJ) [email protected]

Fecha de recepción: 16-10-2016 Fecha de aceptación: 08-12-2016

Resumen Abstract l presente artículo busca aproximarse al he present article seeks to approach the Eenfoque epistémico de las perspectivas bio- Tepistemic approach of the biopolitical políticas de Michel Foucault y Giorgio Agamben. perspectives of Michel Foucault and Giorgio Por ello, en la primera parte analizamos una Agamben. For this reason, in the first part we de las claves para comprender el reajuste en la analyze one of the keys to understanding the perspectiva foucaulteana del periodo genealógico: readjustment in the Foucaultean perspective su recepción de la filosofía de Nietzsche. Comen- of the genealogical period: its reception of the zando con un análisis de la utilización que philosophy of Nietzsche. Beginning with an realizara el filósofo alemán de la noción de analysis of the use of the German philosopher Ursprung (origen), la definición del concepto de of the notion of Ursprung (origin), the definition genealogía aparece con mayor precisión desde of the concept of genealogy appears more otros conceptos como Herkunft (procedencia), precisely from other concepts such as Herkunft Entstehung (emergencia) y Erfindung (invención). (provenance), Entstehung (emergency) and A continuación, trataremos el concepto fou- Erfindung (invention). Next we will deal with caulteano de genealogía y su relación con la the Foucaultean concept of genealogy and its historia que significan un viraje importante en relation with history that means an important sus investigaciones sobre la biopolítica y que turn in its investigations of the biopolitical and concluyen en sus análisis del biopoder. En la that they conclude in their analyzes of biopower. tercera parte, buscamos comprender algunos In the third part, we try to understand some axes ejes del Proyecto Homo Sacer de Giorgio Agamben of the Project Homo Sacer of Giorgio Agamben in en cuanto supone una ampliación de la lectura that it supposes an extension of the biopolitical biopolítica iniciada por Foucault. Partiendo de reading initiated by Foucault. Starting from la influencia de algunas tesis desarrolladas por the influence of some theses developed by the del filósofo francés y siguiendo en buena medida French philosopher and largely following his su estrategia metodológica, el pensador italiano methodological strategy, the Italian thinker elabora una perspectiva arqueológica para escla- elaborates an archaeological perspective to recer los arcanos del poder soberano a través de clarify the arcana of sovereign power through conceptos como homo sacer, Ausnahmezustand, concepts such as homo sacer, Ausnahmezustand, iustitium, nómos basileús, campo de concentración, iustitium, nómos basileús, Concentration

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 7 ] Muselmann, gloria, aclamatio, potestas o auctoritas. camp, Muselmann, glory, aclamatio, potestas or Como podremos apreciar, a partir de la crítica auctoritas. As we can see, from the Nietzschean nietzscheana del conocimiento y los alcances critique of knowledge and the methodological metodológicos de la genealogía aparece con la scope of genealogy, a radical rethinking of the perspectiva biopolítica un replanteo radical de fundamental categories of the political appears las categorías fundamentales de lo político. Lo with the biopolitical perspective. This means, que significa, además, una lectura crítica del moreover, a critical reading of the way in which modo en que es pensado el espacio de la política the space of politics is thought from the classical desde las coordenadas clásicas del zoon politikon coordinates of Aristotelian zoon politikon. aristotélico.

Palabras clave: Biopolítica, Genealogía, Keywords: Biopolitics, Genealogy, Archeology. Arqueología.

I

xisten múltiples perspectivas en la teoría indagaciones de Michel Foucault en torno a la Epolítica actual. Si bien algunas de ellas no biopolítica moderna, lo que supone la necesidad de dejan de pretender especificidad disciplinar abordar la estrecha relación entre ambos autores, atenta al campo autónomo y supuestamente en especial su perspectiva genealógica que resulta irreductible de la Ciencia Política, lo cierto es de la crítica nietzscheana del conocimiento. que semejante aspiración resulta problemática, Porque es Foucault el que destaca la impor- como bien lo advirtió Klaus von Beyme hace ya tancia de los aportes que hiciera Nietzsche más de dos décadas. Basta señalar como ejemplo sobre la pretensión de verdad del conocimiento. las vertientes más importantes de la teoría de la De hecho, las rupturas que implicara la obra democracia, a las cuales, por su confusa relación del filósofo alemán no pueden comprenderse con la Ética, se las ha denominado atinadamente cabalmente si no se tiene en cuenta su perspectiva enfoques deontológicos de la democracia. gnoseológica. Lo que significa, a su vez, que Dentro del variado panorama que ofrece la cualquier lectura que se adopte sobre el saber politología aparece una perspectiva que no deja remite a una lectura crítica. De lo que se trata es de estar presente en el debate contemporáneo: la de elegir. O bien, lo que Nietzsche denominaba lectura biopolítica. Lejos de ignorar las múltiples la perspectiva de rana, la Froschperspektive (o, implicancias de la vida humana en los cálculos también, lo exotérico, que ve las cosas de abajo del poder que han operado desde la antigüedad, a arriba»), que es el modo corriente y vulgar de en realidad esta perspectiva postula que la lógica pensar, o bien, la perspectiva de pájaro que mira biopolítica se ha radicalizado con el advenimiento con agudeza, la que propiamente puede saber. de la modernidad, ampliando considerablemente Si bien esta contraposición tiene en el mismo las diversas formas de control y gestión de la vida Nietzsche otros alcances y exige de precisiones por el poder político. que trascienden los límites del presente aporte, Sus aportes han sido significativos en el cam- lo cierto es que en un contraste como este lo que po de la Política, el Derecho o la Economía y, aparece en juego es una determinada forma de por su misma naturaleza, no rechaza el sesgo entender el saber una vez que ha desaparecido disciplinar a condición de situarla en relación la ilusión aristotélica de la disposición natural con los más diversos discursos. Tampoco, como del hombre al conocimiento tal como quedara puede desprenderse en sus distintas variantes, es plasmada en las primeras líneas de Metafísica. posible circunscribir a la biopolítica a un simple De esta crítica del conocimiento se deriva la episodio epocal del pensamiento como sostienen estructura epistemológica de los estudios con- ciertas opiniones que acusan de cronolatría a los temporáneos de la biopolítica. que se dedican a estudiarla. Justamente, el presente trabajo busca Más allá de las polémicas, lo cierto es que la aproximarse al enfoque epistémico de las pers- biopolítica ha captado como pocas perspectivas pectivas biopolíticas de Michel Foucault y la estructura profunda de lo moderno. Una Giorgio Agamben1. Por ello, en la primera parte de estas lecturas que aparece en boga es la de 1 Parte de los desarrollos que presentamos en este trabajo Giorgio Agamben con su Proyecto Homo Sacer y corresponden a la fundamentación metodológica del cuya tesis fundamental pretende continuar las Proyecto de Investigación El dilema de la soberanía: el

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben [ 8 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar analizamos una de las claves para comprender algunos ejes del Proyecto Homo Sacer de Giorgio el reajuste en la perspectiva foucaulteana del Agamben en cuanto supone una ampliación periodo genealógico: su recepción de la filosofía de la lectura biopolítica iniciada por Foucault. de Nietzsche. Comenzando con un análisis de Partiendo de la influencia de algunas tesis la utilización que realizara el filósofo alemán desarrolladas por del filósofo francés y siguiendo de la noción de Ursprung (origen), la definición en buena medida su estrategia metodológica, del concepto de genealogía aparece con mayor el pensador italiano elabora una perspectiva precisión desde otros conceptos como Herkunft arqueológica para esclarecer los arcanos del (procedencia), Entstehung (emergencia) y Erfin- poder soberano a través de conceptos como homo dung (invención). A continuación, trataremos el sacer, Ausnahmezustand, iustitium, nómos basileús, concepto foucaulteano de genealogía y su relación campo de concentración, Muselmann, gloria, con la historia que significan un viraje importante aclamatio, potestas o auctoritas. en sus investigaciones sobre la biopolítica y que Como podremos apreciar, a partir de la crítica concluyen en sus análisis del biopoder. nietzscheana del conocimiento y los alcances En la tercera parte, buscamos comprender metodológicos de la genealogía aparece con la perspectiva biopolítica un replanteo radical de paradigma del estado de excepción en el pensamiento jurídico- las categorías fundamentales de lo político. Lo político contemporáneo. El Proyecto es dirigido por el autor del que significa, además, una lectura crítica del presente artículo en el Gabinete de Estudios e Investigaciones modo en que es pensado el espacio de la política Jurídicas (Departamento de Ciencias Jurídicas, FACSO), y fue aprobado por la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UNSJ desde las coordenadas clásicas del zoon politikon según Res. 018/14-CS y ampliado según Res. 0003/16-CS. aristotélico.

II

ueden distinguirse dos grandes etapas en la Ursprung (origen) en cuando significa la esencia Pproducción de Michel Foucault: el periodo exacta de la cosa, de algo existente desde siempre arqueológico y el periodo genealógico. Fueron a partir de su forma inmóvil y anterior de lo que varios los factores que influyeron en el giro es externo, accidental y sucesivo. La cosa no tiene de la obra foucaulteana a fines de los años 60, origen en el sentido de Ursprung, carece de esen- destacándose los sucesos de mayo de 1968, los cia, al contrario, su esencia lejos de tener un debates posteriores que siguieron al fracaso de origen solemne, fue creada pieza a pieza a partir la revuelta y la recepción del pensamiento de de figuras extrañas a ella. (Foucault, 2008 c: 17-18) Nietzsche, al cual Foucault le dedica una lectura Nos señala Foucault que, a diferencia de lo que sistemática que abarca varios años. sucede con Ursprung, el objeto de la genealogía A fin de comprender este reajuste en la pers- aparecería con más claridad a partir de conceptos pectiva foucaulteana, nos detenemos en la como Herkunft (procedencia) y Entstehung influencia importante para el periodo genealó- (emergencia). Herkunft es la vieja pertenencia a un gico: la filosofía de Nietzsche. Y es en dos escri- grupo y, aparentemente, remitiría a una perte- tos donde Foucault aborda directamente la nencia común, como una raza, pero, lejos de este cuestión de la historia, precisando de qué trata la significado, la procedencia no esuna categoría de la genealogía, primero con Nietzsche, la Genealogía, semejanza, sino, más bien, permite separar lo que la Historia (1971) y luego la conferencia Nietzsche hay de individual, o sea, a partir de la procedencia y su crítica del conocimiento (1973). Comenzando la genealogía le hace lugar a todas las marcas con un análisis de la utilización que realizara el diferentes, evitando la síntesis unificadora que filósofo alemán de la noción de Ursprung (origen), hizo perder acontecimientos que se han perdido. la genealogía sería una forma de indagación Indagar el pasado no quiere decir seguir las cosas que aparecería con mayor claridad desde otros en su evolución, en su continuidad de algo formado conceptos que también están presentes en la obra desde el principio, ante todo quiere decir conservar nietzscheana, Herkunft (procedencia), Entstehung lo que ha sucedido en su propia dispersión, en sus (emergencia) y Erfindung (invención). accidentes, en sus giros y desviaciones, sus errores En el primero de estos escritos, el artículo y desaciertos, en fin, de todo aquellas dispersiones Nietzsche, la Genealogía, la Historia (Nietzsche, la y accidentes que han dado origen a las cosas que Généalogie, l’Historie, 1971), nuestro autor aborda existen en el presente. Por la procedencia no hay el carácter de la genealogía. En una indagación ser ni verdad, sino la exterioridad del accidente. sobre el origen, Nietzsche no apela a la idea de (Foucault, 2008 c: 25-28).

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 9 ] Por otro lado, Entstehung (emergencia) del laberinto en el que jamás verdad alguna los ha significa elpunto de surgimiento, pero su carácter tenido bajo custodia. (Foucault, 2008c: 20-23) singular y su condición de principio no debe Unos años después de la publicación de este confundirse con un fin determinado al que artículo, Foucault vuelve a tratar el problema de inevitablemente debería tender. No existe un fin la genealogía en la lección Nietzsche y su crítica último de las cosas. La emergencia sobre la que del conocimiento, una de las cinco conferencias trata la genealogía significa el juego azaroso de que pronunció en Río de Janeiro entre el 21 y el 25 las dominaciones, es decir, debe hacer aparecer de mayo de 1973 durante un evento organizado el juego de esas fuerzas, la manera en que luchan por la Pontificia Universidade Católica do Río de unas contra otras. (Foucault, 2008c: 33-34) Janeiro y que fueron publicadas más tarde con el De allí que la genealogía, definida como título La verdad y las formas jurídicas (A verdade e Herkunft (procedencia) y Entstehung (emergencia), as formas jurídicas, 1978). presente una particular relación con la historia. El objetivo de Foucault en la conferencia no es Ante todo, tal como lo hemos visto, significa un exponer la teoría del conocimiento de Nietzsche. rechazo a la historia como teleología, a partir Su propósito es demostrar que en el pensamiento de fines preestablecidos que inexorablemente del filósofo alemán existen herramientas teóri- deben realizarse por estar presupuestos desde cas muy útiles para comprender la relación el comienzo. No hay que apelar a algún punto de entre poder y saber, ofreciendo un modelo vista suprahistórico para comprender la historia, para un análisis histórico que Foucault llama al contrario, la historia sólo podrá ser instrumento la política de la verdad. El gran error, según la privilegiado de la genealogía cuando no esté crítica nietzscheana, sería la de considerar al sustentada sobre ningún absoluto. (Foucault, conocimiento como pacificación, adecuación o 2008c: 43-44) inclinación al objeto. Porque si se quiere saber Nietzsche opone a la historia tradicional, qué es el conocimiento, cuál es su naturaleza, como la teológica y racionalista, lo que llama cómo surge, no hay que acercarse a él como la historia “efectiva” (“wirkliche Historia”). filósofos, sino como políticos, sólo así podremos Mientras la primera relata la historia desde la entender cuáles son las relaciones de lucha y de continuidad que aparece entre la irrupción de poder, y sólo a través de esas relaciones por las un acontecimiento y su posterior evolución cuales los hombres se odian, luchan, buscan (hasta disolver el acontecimiento singular -en dominarse estableciendo entre ellos relaciones una continuidad ideal- movimiento teleológico o de poder se podrá comprender realmente de encadenamiento natural), la segunda coloca en qué se trata el conocimiento. (Foucault, 2008a: primer plano el acontecimiento entendido como 28-29) Por eso Foucault considera que a través relación de fuerza (es decir, el acontecimiento, de los textos de Nietzsche se puede tener a pero que no debe ser entendido como una disposición un modelo para analizar el problema decisión, un tratado, un reino o una batalla). Las de la formación de ciertos dominios de saber a partir fuerzas que aparecen implicadas en la historia de relaciones de fuerza y relaciones políticas en la siguen la lógica del azar de la lucha, carecen de sociedad. (Foucault, 2008 a: 31) una intención primigenia y, cuando se enfrentan Para Nietzsche el conocimiento no tuvo algo están lejos de anticipar de anticipar un resultado así como un origen (Ursprung), sino que, más previsible. (Foucault, 2008c: 47-49)2. bien, fue una invención (Erfindung). Invención Apelar a un origen solemne de la historia significa en este caso tantoruptura , como algo significa narrarla como una teogonía. En cambio, que posee un comienzo pequeño, bajo, mezquino, el genealogista considera que los comienzos en la inconfesable. No hay un origen solemne de las historia son bajos e irrisorios tanto que repelen cosas humanas, no hay un origen majestuoso cualquier pretendida suficiencia. El genealogista, como puede ser en la religión o la poesía. Tal como con el fin de observar la minuciosidades y apa- aparece en el sentido nietzscheano de Ursprung se rentes bajezas de los pequeños inicios, debe estar pretende dar la idea de algo que tiene un origen atento para verlos surgir, al fin sin máscaras, con primordial que se expresa a través del tiempo con la cara de lo otro […] darles tiempo para ascender asombrosa continuidad, por ejemplo, en la crítica de Nietzsche a Schopenhauer quien explicaba el 2 Claro, no es de la razón de donde surgen las cosas, si ésta origen de la religión derivándola de un sentimiento es en efecto un producto del azar, tampoco de un impulso metafísico que estaría presente en todos los hombres desinteresado por conocer sino por aquellos afectos o instin- y que permitiría explicar cualquier religión, con tos que han incitado la polémica entre sabios, o, menos aún, la cual es de suponer que toda religión ya estaría por un ejercicio de libertad que, en realidad, es un invento de las “clases dirigentes”: ¿La razón? Que ha nacido de una forma dada previamente, existiría con anterioridad en del todo “razonable”, -del azar-. ¿El apego a la verdad y el rigor ese sentimiento. Esto es falso, la religión no tiene de los métodos científicos? De la pasión de los sabios, de su odio origen, fue inventada, fabricada. La historia no recíproco, de sus discusiones fanáticas y siempre reanudadas, de tiene Ursprung: aquellas creaciones humanas la necesidad de vencer, -armas lentamente forjadas a lo largo de que fueron realizadas históricamente surgieron las luchas personales-. ¿Y sería la libertad, en la raíz del hombre, lo que le liga al ser y a la verdad? De hecho, es una “invención de por oscuras relaciones de poder, es decir, fueron las clases dirigentes”. (Foucault, 2008 c: pp. 18-19) producidas por una invención o Erfindung, de allí

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben [ 10 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar se entiende la frase de Nietzsche de alguna vez, El conocimiento fue inventado, lo que quiere en un astro, unos animales inteligentes inventaron decir también que el conocimiento no forma el conocimiento. No hay nada de sublime en esas parte de la naturaleza humana. No hay en la invenciones, al contrario, sus móviles fueron naturaleza del hombre un instinto de conoci- mucho más oscuros, mezquinos, bajos, villanos. miento, al contrario de lo que se afirma está (Foucault, 2008 a: 19-20)3. lejos de ser el instinto más antiguo del hombre. Es decir, en el comportamiento humano, en los apeti- 3 Foucault en esta conferencia cita algunas obras de tos o el instinto humano, no existe un origen del Nietzsche con el fin de exponer la importancia que tiene conocimiento. Ciertamente para Nietzsche el co- el filósofo alemán para una crítica del conocimiento: Sobre nocimiento está relacionado con los instintos, verdad y mentira en un sentido extramoral, La gaya ciencia y La genealogía de la moral. Foucault comienza con un pasaje tiene que ver con ellos, pero, y esto es lo decisivo, conocido de Sobre verdad y mentira en sentido extramoral no forma parte de ellos en el sentido de que es un (Über Wahrheit und Lüge im aussermoralischen Sinn, 1873): instinto más. Entonces, ¿qué es el conocimiento En algún apartado rincón del universo centelleante, desparra- y cómo surge? La respuesta no puede dejar de mado en innumerables sistemas solares, hubo una vez un astro ser consecuente con la idea de Erfindung: el en el que animales inteligentes inventaron el conocimiento. Fue el minuto más altanero y falaz de la “Historia Universal”: pero, conocimiento es simplemente el resultado del juego, a fin de cuentas, sólo un minuto. Tras breves respiraciones de la el enfrentamiento, la confluencia, la lucha y el naturaleza el astro se heló y los animales inteligentes hubieron compromiso entre los instintos. El conocimiento es de perecer. Alguien podría inventar una fábula semejante pero, el compromiso que viene luego del enfrentamiento con todo, no habría ilustrado suficientemente cuán lastimoso, que se produce entre los instintos, el conocimien- cuán sombrío y caduco, cuán estéril y arbitrario es el estado en que se presenta el intelecto humano dentro de la naturaleza. to surge cuando concluye la pugna, colisión o Hubo eternidades en el que no existía; cuando de nuevo se acabe lucha entre los instintos. Ahora bien, el conoci- todo para él no habrá sucedido nada, puesto que para ese inte- miento tiene la misma naturaleza que los lecto no hay ninguna misión ulterior que conduzca más allá de instintos, pero sólo en el sentido de que es su la vida humana. No es sino humano, y solamente su poseedor refinamiento, cabe decir, el conocimiento tiene y creador lo toma tan patéticamente como si en el girasen los goznes del mundo. (Nietzsche, 1996: 17) por fundamento, base o punto de partida a los El conocimiento fue inventado, creado, producido. En la instintos siempre y cuando los instintos estén inmensidad del universo ese instante altanero no es nada y enfrentados. El resultado del enfrentamiento es no hay ninguna cualidad en el intelecto humano. Ampliando el conocimiento, es su efecto, es algo parecido al sus alcances y refinando su perspectiva, Nietzsche luego centelleo que brota del choque entre dos espadas, de publicado Así habló Zaratustra comienza a esbozar su indagación sobre el origen de la moral en Más allá del bien si bien no está hecho del mismo material que y del mal. Preludio de una filosofía del futuro (Jenseits von Gut ellas. (Foucault, 2008a: 21-22) und Böse. Vorspiel einer Philosophie der Zukunft, 1886) Se El conocimiento no está dado a priori en la trata, en efecto, de esclarecer la procedencia de la moral naturaleza humana. Es sólo un efecto de super- de señores y la moral de esclavos. (Nietzsche, 2007a: 222- ficie,actúa frente a los instintos, encima o en medio de 226). De allí que la crítica nietzscheana del conocimiento encuentra un capítulo importantísimo en La genealogía ellos, el conocimiento en tal caso los comprime o, de la moral (Zur Genealogie der Moral, 1887), justamente lo que es muy importante, traduce un cierto estado porque su autor trata de indagar cómo y porqué surgen de tensión o apaciguamiento entre los instintos, las ideas de lo Bueno y lo Malo, en definitiva intentará pero, lo que aún es más relevante, no puede dedu- responder a la pregunta de cuál es el origen de la moral cirse necesariamente de los instintos como si o, lo que es lo mismo, la procedencia de nuestros prejuicios morales. (Nietzsche, 2009:22) No obstante, son significativas fuese algo natural. Es más incluso no forma parte las tesis de Sobre verdad y mentira en sentido extramoral en de la naturaleza humana, surge de la lucha, de tanto nos muestra que esta crítica al conocimiento aparece un enfrentamiento, y por eso es el producto del tempranamente en el filósofo alemán, a tan sólo dos años azar. Verdadero escándalo, la tesis nietzscheana de la publicación de su primer libro dedicado al nacimiento es concluyente: El conocimiento no es instintivo, de la tragedia ática. Incluso, podemos afirmar que todo comienza con su primera obra. Entre los variados tópicos es contra-instintivo; e igualmente, no es natural, es que aparecen en El nacimiento de la tragedia (Die Geburt contra-natural. Pero la concepción de Nietzsche va der Tragödie, 1871), encontramos la consideración que los aún más lejos, porque esta diferencia que existe griegos inventaron su religión (para poder vivir tuvieron los entre el conocimiento y la naturaleza humana griegos que crear, por una necesidad hondísima, estos dioses) es precisamente la misma distancia que separa y la tesis del origen fisiológico-psicológico del sueño y la embriaguez representados respectivamente por lo apolíneo al conocimiento y el mundo a conocer. No hay y lo dionisíaco. (Nietzsche, 2007b: 41-53) Por cierto, se nos afinidad, semejanza o incluso lazo de naturaleza hace preciso detenernos en el título del libro: investigar el entre el conocimiento y el mundo a conocer, nacimiento (Geburt) es lo mismo que indagar sobre el origen. sino que del mismo modo que entre entre instinto Con lo cual el joven Nietzsche comienza a elaborar su y conocimiento encontramos no una continuidad perspectiva con esta interpretación del origen o nacimiento de un fenómeno estético-metafísico. Es por ello que el sino confrontación y lucha también entre el mismísimo Giorgio Colli en su ya clásico libro comienza con conocimiento y el objeto no puede haber ninguna la hipótesis nietzscheana para emprender su interpretación sobre el origen de la filosofía: decadencia de la tragedia griega, y después una interpretación Como es sabido, Nietzsche parte de las imágenes de dos dioses de conjunto de lo griego e incluso una nueva visión del mundo. griegos, Dionisos y Apolo, y mediante el examen detenido, Pues bien, una perspectiva idéntica parece abrirse cuando, en estético y metafísico, de los conceptos de dionisíaco y apolíneo lugar del nacimiento de la tragedia, consideramos el origen de delinea ante todo una doctrina sobre el surgimiento y la la sabiduría. (Colli, 2010:15)

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 11 ] relación de continuidad natural sino fuerza, poder, decir, lo que está en cuestión es el estatuto del imposición, dominación sobre las cosas a conocer. sujeto en cuanto tal, su existencia, su unidad y Por ello, Foucault es concluyente: El conocimiento necesidad. Sobre la primera ruptura ya hemos sólo puede ser una violación de las cosas a conocer expuesto sus ideas centrales, la segunda es, y no percepción, reconocimiento, identificación de o según creemos, una de esas perspectivas claves con ellas. (Foucault, 2008a:22-23) en el pensamiento de Foucault. (Foucault, No puede haber aporte más que importante 2008a:24-25) como la de Nietzsche para una crítica del cono- Es por ello que con la perspectiva foucaulteana cimiento como claramente se puede apreciar en aparece una nueva forma de historiografía. La el análisis de Foucault, el cual destaca la doble genealogía no sería la búsqueda de un primordial ruptura, primero la que hemos visto, entre el Ursprung (origen), sino de indagar cómo han conocimiento y las cosas, cuya garantía de con- aparecido ciertas instituciones y saberes que tinuidad en la tradición filosófica occidental se han dado en ciertos momentos a los que es había sido Dios, por ejemplo en los sistemas de más útil analizarlos desde los conceptos que Descartes y Kant, la segunda, la ruptura de la hemos visto: Herkunft (procedencia), Entstehung unidad y soberanía del sujeto cognoscente, es (emergencia) y Erfindung (invención).

III

sclarecer la noción foucaulteana de genea- la discontinuidad y los quiebres históricos. Elogía implicaría también precisar el de (Foucault, 2011b: 173; 26) arqueología. A fines de los años 60 Foucault El giro genealógico que se puede apreciar en comienza a plantear un desplazamiento en la perspectiva foucaulteana implica una profun- sus investigaciones con la publicación de La dización de la estrategia arqueológica y una arqueología del saber (L’Archéologie du savoir, 1969). nueva forma de entender la historiografía. La Empieza problematizando los vínculos entre genealogía no sería la búsqueda de un primordial filosofía e historia. Partiendo de una pro-puesta Ursprung (origen), sino de indagar cómo han que se orienta a un dominio, el dado como pura aparecido ciertas instituciones y saberes que existencia de los enunciados, el campo enunciativo se han dado en ciertos momentos a los que y las prácticas discursivas (analizados desde lo que es más útil analizarlos desde conceptos como llama las formaciones discursivas, la positividad Herkunft (procedencia), Entstehung (emergencia) y el archivo), surge una forma de indagación y Erfindung (invención). La genealogía cuestiona histórica que denomina arqueología. En este la idea de un sujeto, su pretendida suficiencia y sentido, la arqueología no incita a la búsqueda de su calidad de agente creador de la historia y se ningún comienzo, sino que trata de una forma de historia que dé cuenta de la constitución de saberes, discursos, dominios de designa el tema general de una descripción objetos, etc. (Foucault, 1988: 136). que interroga lo ya dicho en el plano de la O, también, Foucault llama genealogía al existencia: de la función enunciativa que acoplamiento de los saberes eruditos y las memorias se ejerce en él, de la formación discursiva locales, acoplamiento que permite la constitución a que pertenece, del sistema general de de un saber histórico de las luchas y la utilización archivo de que depende. de ese saber en las tácticas actuales. Para 1976 Foucault avanza en sus análisis del poder, pero Esta estrategia se opone a la historia tal como esta vez estableciendo que el modelo es el de tradicionalmente se la ha entendido, de la his- la lucha y la estrategia invirtiendo la célebre toria que apela a una concepción totalizante sentencia de Clausewitz. Es en este contexto y a una férrea determinación teleológica, en cuando señala la siguiente distinción entre cambio la arqueología foucaulteana incita la arqueología y genealogía: la arqueología sería el indagación histórica en el sentido de la ruptura, método propio del análisis de las discursividades

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben [ 12 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar locales, y la genealogía, la táctica que, a partir de la comunicación que desconoce la conflictividad y esas discursividades locales así descriptas, pone violencia de la historia subsumiéndola en la forma en juego los saberes liberados del sometimiento apaciguada y platónica del lenguaje y el diálogo. que se desprenden de ellas (Foucault, 2010:22; (Foucault, 1988: 134-135) 24). He aquí, justamente, una de las diferencias Foucault, siguiendo a Nietzsche, propone fundamentales entre arqueología y genealogía, una nueva forma de indagación de la historia. como lo indicáramos al comienzo, el reajuste de En el caso de lo político, problematiza los enfo- mirada en Foucault, es decir, el paso de la pre- ques tradicionales de la teoría del Estado, sea la gunta por el saber (el método arqueológico) a la perspectiva típicamente de derecha que, tomando pregunta por el poder (el método genealógico), por objeto la constitución o la soberanía, plan- significa la prioridad de la categoría del poder, tean la discusión en términos jurídicos, como los lo que permite, a su vez, ir más allá de los meros de izquierda propios del marxismo que lo anali- análisis de las formas históricas con que aparecen zaban en términos de aparato del Estado. En uno y los enunciados. otro caso los análisis estaban atravesados por las Según Jürgen Habermas, en ello estriba la polémicas ideológicas por las cuales se acusaba diferencia entre arqueología y genealogía en la de totalitarismo al poder soviético, o bien de obra de Foucault. La primera, trata sobre el puro dominación de clase a las formas de poder capita- darse de los enunciados, excluyendo el análisis listas, pero se dejaba de lado la mecánica del de su posible verdad o falsedad, indagando, más poder. A partir de ahora el “foco” de indagación bien, por la voluntad que en ellos se expresa y se desplaza a los dispositivos concretos del poder, por las reglas de exclusión que determinan esa sus modos que adquiere en la historia, sus tácti- pretensión de verdad; la segunda, interroga por cas específicas y las condiciones históricas de su el entramado de poder que subyace a esa voluntad surgimiento. (Foucault, 1988: 134) y que posibilitan determinadas prácticas que Desde este reajuste de mirada que hemos han surgido históricamente. (Habermas, 2010: analizado, Foucault llega en sus indagaciones 270) De esta manera la mirada del historiador a la perspectiva biopolítica que tuvo una gran genealógico se complementa con la del arqueólogo: influencia posterior en Giorgio Agamben. En tal sentido, según Foucault, el clásico poder de la El arqueólogo, en cambio, tratará de soberanía sobre los súbditos del derecho a la vida reconvertir los parlanchines documentos y muerte se transforma durante la modernidad en monumentos mudos, en objetos que occidental. El cambio lo analiza nuestro autor es necesario liberar de su contexto para en el capítulo 5 de Historia de la sexualidad I: hacerlos accesibles a una descripción la voluntad de saber (Historie de la sexualité 1: estructuralista. El historiador genealógico La volonté de savoir, 1976): el poder no busca se acerca desde afuera a los monumentos simplemente prohibir o destruir, ahora sobre arqueológicamente desenterrados para todo aspira producir fuerzas, a hacerlas crecer y explicar su procedencia a partir del ordenarlas, es un poder que administra la vida contingente vaivén de luchas, victorias y (Foucault, 2011a:128-129). Entre los siglos XVII y derrotas. (Habermas, 2010: 273) XVIII se produce el advenimiento de dos poderes, uno el de las disciplinas de la anatomopolítica del En 1975, en un diálogo con Fontana sobre verdad cuerpo humano dirigido a dominar el cuerpo- y poder, Foucault ya ha avanzado en esta línea de máquina en los colegios, talleres o cuarteles con investigación y se sorprende de sí mismo por no base en el ejército y la escuela; el otro la biopolítica haberse percatado de la necesidad de plantearse de la población orientado hacia el cuerpo-especie la cuestión sobre el poder en sus indagaciones por medio de estudios sobre longevidad, vivienda anteriores. De ahora en más ya no piensa en o salud pública con base en la demografía y la simples análisis sobre los campos simbólicos ni estadística. Se establece un poder sobre la vida, y de las «estructuras significantes», sino a aquellas gracias a estas tecnologías anatómica y biológica, indagaciones sobre la genealogía de las relaciones el poder no tiene por objeto suprimir sino invadir de fuerza. Busca alejarse de aquellas perspectivas la vida enteramente. (Foucault, 2011a:131-132) meramente simbólicas sobre los signos, En el mismo año en que se publica Historia considerando que la historia debe leerse por el de la sexualidad I, Foucault continúa con sus modelo de la guerra: la historicidad que nos lastra clases en el Collège de France. En Defender y nos determina es belicosa; no es lenguaraz. Relación la sociedad, el curso 1975-1976, avanza en su de poder y no relación de sentido. La historia carece enfoque destacando el fenómeno de estatización de “sentido”, lo que no implica que sea absurda o de lo biológico que se produce en el siglo XX, la irracional, pero que sólo podrá ser comprensible extensión de un poder sobre el hombre en tanto desde el modelo de la lucha, del enfrentamiento, no ser viviente, reite-rando y ampliando en buena desde la dialéctica hegeliana que niega su carácter medida lo que se-ñalara en el capítulo 5 de La azaroso para encerrarla en un sistema conceptual voluntad de saber sobre la anatomopolítica del prefijado o tampoco desde el modelo semiótico de cuerpo humano y la biopolítica de la población.

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 13 ] (Foucault, 2010: 217-221) Unos años después, en Durante milenios, el hombre siguió siendo dos cursos en el Collège de France, los de 1977- lo que era para Aristóteles: un animal vivien- 1978 y 1978-1979, Foucault continúa en esta línea te y además capaz de existencia política; de indagación extendiendo sus análisis sobre el el hombre moderno es un animal en cuya biopoder al problema de la gubernamentalidad, política está puesta en entredicho su vida los dispositivos de la seguridad y su relación con las como ser viviente. (Foucault, 2011a:135) políticas sobre población y la economía política. (Foucault, 2006:15-27) En tal sentido, cobra parti- Al mismo tiempo, esta radical transformación cular relevancia en el estudio del biopoder el modifica sensiblemente el orden de la episteme vínculo entre la razón gubernamental con la clásica, al suponer un nuevo modo de relación entre economía de mercado y el liberalismo. (Foucault, la historia y la vida, tanto situada exteriormente 2008b:29-36) como entorno biológico, como, fundamentalmente, La biopolítica moderna incluye cada vez más en su interior al ser objeto de las «técnicas de a la vida en los cálculos del poder estatal, modifi- poder y de saber». (Foucault, 2011a: 136). cando sustancialmente las coordenadas del A partir del gran objetivo de Foucault de mundo clásico a partir del momento en que la realizar una genealogía del Orden Burgués, sus especie entra en juego en sus propias estrategias investigaciones lo llevaron a una de las lecturas políticas. Una transformación radical operada más influyentes, la perspectiva biopolítica. Y a por la modernidad que Foucault expresa desde la más de diez años de su muerte, Giorgio Agamben clásica definición aristotélica del hombre como continuará su enfoque, corrigiendo y ampliando zoon politikon: a la vez la tesis foucaulteana con el fin de sacar a luz los arcanos del poder en Occidente.

IV

l Proyecto Homo Sacer busca comprender la paradoja, sólo puede hacerlo por medio de la Ela estructura fundamental de la política servidumbre. En la ciudadanía y los derechos, occidental que se remonta hasta Aristóteles. Es las metaestructuras jurídico-políticas del Estado, una estructura efectivamente metafísica porque se encuentra, una vez más, el cuerpo del hombre la politización es esa tarea por medio de la cual sagrado con su doble soberano, su vida insacrificable se decide acerca de la humanidad del ser vivo y, sin embargo, expuesta a que cualquiera se la quite. del hombre. Es la modernidad la que continúa (Agamben, 2003: 19-20)4. tal misión definiendo constantemente qué es lo 4 En Medios sin fin. Notas sobre la política (Mezzi senza fine. específicamente humano. Se puede apreciar que Note sulla politica, 1996), una publicación directamente la dicotomía fundamental no es la de amigo/ conectada con el Proyecto Homo Sacer, Agamben comienza enemigo como lo pensaba Schmitt, sino la de con la referencia a zoé y bíos, pero esta vez en el contexto nuda vida-existencia política. Para Agamben la de conceptualizar la forma-de-vida. Luego de señalar que las lenguas contemporáneas han perdido esa distinción, indica perspectiva de Foucault debe ser «corregida» o al que existe solamente un término para indicar el desnudo menos ampliada, porque no se trata de la simple presupuesto común que se puede aislar en las distintas formas de inclusión de la vida en lo político, una idea tan vida. Al contrario, una forma de vida siempre tiene una forma antigua como la política misma, sino más bien y, justamente, es aquello sobre la que no se puede aislar algo que, a medida que la excepción se convierte así como una nuda vida que sea independientemente de su forma. Como la vida humana es potencia y en su propia vida en regla, el espacio de la nuda vida tiende a está en juego su felicidad, por ello, dato más que importante, coincidir con el de la política y así «exclusión e la forma-de-vida es vida política. (Agamben, 2001: 13-14) La inclusión, externo e interno, bíos y zoé, derecho idea aristotélica del zoon politikon significa justamente eso, y hecho, entran en una zona de irreductible el hombre, ante todo, es vida que potencialmente puede indiferenciación». (Agamben, 2003: 18) ser política. El oîkos en el mundo griego era el espacio de la vida natural, de la vida reproductiva y su mantenimiento, Lo interesante de destacar es que este proceso aparece claramente dife-renciado del espacio de la política, de inclusión de la nuda vida también comprende la polis. La distinción entre lo que era y no era propiamente a la democracia moderna que hace al hombre político tiene una radical transformación en la modernidad: objeto y sujeto de la soberanía a la vez. A diferencia todo aspecto de la vida humana se hace objeto de la política. de la democracia clásica, la moderna democracia Esta es, justamente, la tesis de Michel Foucault, para quien la modernidad transforma a la política en bio-política por surge para liberar a la zoé, para transformar medio de los cálculos del poder estatal, haciendo que cada la nuda vida en forma de vida, de encontrar el vez más la vida humana sea incluida en la esfera del poder bíos de la zoé. Sin embargo, y esto constituye político. Es más, el triunfo del capitalismo no hubiese sido posible sin estos mecanismos disciplinarios del biopoder

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben [ 14 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar El punto de partida del proyecto de Agamben las dicotomías tradicionales de la lógica, ni es el concepto de nuda vida, la de la vida humana busca una síntesis superadora, sino que como a la que cualquiera puede dar muerte pero que tercero analógico neutraliza esas distinciones a la vez es insacrificable. Nuda vida expresada tradicionales) y Platón (en el cual las hipótesis no en un sentido originario por el homo sacer, una son tratadas como principio o archaí, sino como figura del derecho romano arcaico que significa propiamente tales, es decir, como paradigmas que que la vida humana se inscribe (se incluye) en el en su prestación específica consiste en la suspensión y orden jurídico pero bajo la forma de su exclusión, desactivación de su facticidad empírica para exhibir es decir, por la posibilidad que cualquiera le sólo una inteligibilidad). (Agamben, 2009: 26-36) mate. Hacer esto es la primera formulación de la Al mismo tiempo, de acuerdo a la naturaleza soberanía como capacidad de incluir por medio de los tópicos abordados por Agamben, aparece de la exclusión a la vida humana en el poder, la impronta de una lectura teológico-política siendo la mutua implicación entre homo sacer y a través de una teoría de las signaturas5. En tal estado de excepción lo instituyente-constituyente sentido, los conceptos claves del Proyecto Homo de lo político. (Agamben, 2003: 19-20) Sacer, tienen que comprenderse o bien desde la El filósofo italiano utiliza a lo largo del Proyec- perspectiva de los paradigmas o bien de la teoría to Homo sacer toda una estrategia conceptual de las signaturas: homo sacer, Ausnahmezustand, orientada a develar la matriz del poder en Occi- iustitium, nómos basileús, campo de concentración, dente. Si la deuda con Foucault sobre la tesis biopo- Muselmann, gloria, aclamatio, potestas, auctoritas, lítica es evidente, no lo es menos la estrategia inoperosidad. Desde estos conceptos (o paradig- metodológica, mereciendo, de hecho, un capítulo mas) el proyecto intenta sacar a la luz la lógica aparte la complejidad de su estrategia en la que del poder soberano. el autor revela un interés permanente por una La estrategia global es llamada arqueología serie de tópicos que puede remontarse hasta sus por Agamben, la cual con evidente influencia primeros escritos, unos tópicos que retoma una y de Foucault y Nietzsche, resulta imprescindible otra vez a medida que fue profundizando en sus de conocer a fin de comprender su indagación reflexiones. Homo Sacer: Podemos llamar provisionalmente Si bien las cuestiones de método no habían “arqueología” a aquella práctica que, en toda indaga- tenido un tratamiento sistemático, no ción histórica, trata no con el origen sino con la emer- obstante, los lineamientos fundamentales de gencia del fenómeno y debe, por eso, enfrentarse de su metodología han sido expuestos por el autor nuevo con las fuentes y la tradición. (Agamben, en Signatura rerum. Signatura rerum. Sobre el 2009: 124) Aparece como vemos la idea del origen método (Signatura rerum. Sul metodo, 2008) un como emergencia, lo que significa indagar al libro donde expresa su deuda con Foucault, al conocimiento como algo que “aparece” o emerge considerarlo una influencia importante en su en tanto que es producido, creado. Para ello, a pensamiento. La comprensión de la compleja fin de esclarecer su metodología, el pensador trama conceptual que utiliza Agamben supone italiano se detiene en los textos de Foucault que un enorme esfuerzo metodológico. Porque en analizan los conceptos nietzscheanos de Herkunft la indagación agambeneana, su búsqueda por y Entstehung, ampliando incluso su comprensión. comprender los arcanos fundamentales de lo (Agamben, 2009: 115-119) político, el esclarecimiento de los conceptos- Ahora bien, si el Proyecto Homo Sacer de límite, la estructura de la exceptio (en el sentido Giorgio Agamben tiene por objetivo profundizar schmittiano), en definitiva, todos los abordajes la perspectiva biopolítica iniciada por Foucault, que emprende su estrategia si bien supone un ¿qué aspecto de la biopolítica foucaulteana es tratamiento de fenómenos históricos positivos, son, objeto de indagación de parte de Agamben? Para con más propiedad, una compleja investigación responder esta pregunta es preciso considerar sobre los paradigmas que tiene por objetivo los planos hacia los cuales se dirigen las indaga- constituir y hacer inteligible la totalidad de ciones del filósofo francés. Así, cuando propone un contexto histórico-problemático más vasto. su análisis del poder, aunque sin formular una (Agamben, 2009: 13) teoría unitaria, aborda dos planos: las técnicas Agamben, con el fin de precisar el significado políticas y las tecnologías del yo. Las primeras, del paradigma en sus investigaciones, considera 5 Una signatura, como ejemplifica el filósofo italiano a una serie de aportes que, entre otros, incluye a propósito del concepto de secularización, es un operador Aristóteles (el paradigma procede de lo parti- estratégico, que marca los conceptos políticos para remitirlos cular a lo particular, a diferencia de la inducción a su origen teológico. Con el fin de explicar esteoperador que va de lo particular a lo universal y de la estratégico realiza la siguiente comparación: deducción que va de lo universal a lo particular), Del mismo modo que, según el derecho canónico, el sacerdote reducido al estado secular debía llevar un signo de la orden a Enzo Melandri (el análogon no se sitúa en la cual había pertenecido, así, el concepto “secularizado” exhibe como una signatura su anterior pertenencia a la esfera teológica. por medio de los cuales el ser humano es incorporado en la La signatura es aquello que aparece en un signo o un con- lógica del Estado para producir los cuerpos dóciles necesarios. cepto, lo marca o excede para remitirlo a una determinada in- (Agamben, 2003: 10-12) terpretación o a un determinado ámbito. (Agamben, 2009: 106)

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 15 ] como la ciencia de la policía, analizan cómo el vez, derivan dos paradigmas políticos, la teología Estado se encarga de la vida natural de sus habi- política que funda en un único Dios la trascendencia tantes, mientras que, las segundas, tratan aquel del poder soberano, y la teología económica de la proceso de subjetivación que lleva al individuo a que procede una oikonomía, concebida como un vincularse a la propia identidad y a la propia con- orden inmanente domestico y no político. Del ciencia y, al mismo tiempo, a un poder de control primer paradigma se deriva la filosofía política y exterior. Es por ello que Agamben se pregunta la moderna teoría de la soberanía, del segundo, si existe o no un centro unitario en que esas dos la biopolítica moderna hasta el actual triunfo de la formas de ligar lo político encuentren su sentido, economía como gobierno sobre todo otro aspecto de se trata de indagar ese arcano fundamental de lo la vida social. (Agamben, 2008: 10-13)6. político, el punto oculto sobre el que concurren, 6 por una parte, el modelo jurídico-institucional y, La indagación arqueológica del poder en Occidente se amplía con otros libros de la serie. Así, en El sacramento por otra, el modelo biopolítico del poder. (Agamben, del lenguaje. Arqueología del juramento (Il sacramento del 2003: 14-15) linguaggio. Archeologia del giuramento, Homo Sacer II, 3, De esta manera, la estrategia arqueológica 2008) aborda una cuestión fundamental en la perspectiva sobre los paradigmas es la más conveniente para teológico-política: la indagación arqueológica del juramen- sacar a luz los arcanos del poder, es decir, el centro to. Desde una de sus primeras tematizaciones, el lenguaje, considera que el juramento se trata de un instituto funda- unitario que aborda el Proyecto Homo Sacer. Por mental en la tradición jurídico-política desde orígenes cierto, para Agamben la biopolítica ha existido remotos y que, pasando por la gran influencia del rango desde siempre y es tan antigua como la excepción sacramental en el cristianismo y a pesar de su decadencia soberana. Sin embargo, es la política moderna actual (síntoma de la crisis de las instituciones políticas), la que amplía sus alcances haciendo evidente el debe considerarse cada vez que se piensa en la condición del homo sapiens como ser hablante: más inmemorial de los arcana imperii. Porque el De aquí la actualidad de una arqueología del juramento. Estado moderno al someter la vida humana a los En efecto, la ultra-historia, como la antropogénesis, no es un cálculos del poder no hace otra cosa que sacar a acontecimiento que pueda considerarse definitivamente aca- luz ese vínculo fundamental, esa matriz central bado. Está siempre en curso, ya que el homo sapiens nunca deja de lo político, la relación entre nuda vida y poder de convertirse en hombre, quizás no haya terminado aún de acceder a la lengua y de jurar por su naturaleza de ser hablante. soberano. Una matriz que, incluso, está presente (Agamben, 2010: 21) en concepciones aparentemente tan diferentes La misma estrategia arqueológica la utiliza Agamben para entre sí como la democracia y el fascismo. Si analizar un problema político del oficio officium( ) en su la idea aristotélica de la política partía de la libro Opus Dei. Arqueología del oficio( Opus Dei. Archeologia distinción entre vivir y vivir bien, significando la dell’ufficio, Homo Sacer II, 5, 2012) En esta investigación arqueológica que tiene por objeto el oficio como concepto inclusión de lo primero en lo segundo, entonces la más antiguo, originario, que luego es desplazado por el de pregunta que debemos hacernos no es sólo sobre liturgia (que significaservicio público y cuya designación los modos que puede tener ese vivir bien, sino por teológico-técnica es opus Dei), se demuestra una poderosa qué la política occidental se constituye por medio influencia en las instituciones políticas de Occidente, si bien, de una exclusión (que es al mismo tiempo una en la actualidad aparece en crisis. La estrategia arqueológica demuestra que históricamente el paradigma del oficio fue inclusión) de la nuda vida. (Agamben, 2003: 16) más eficaz que la ley, porque no puede transgredirse sino La complejidad de la indagación agambeneana sólo falsificarse, más real que el ser porque sólo consiste en sobre los arcanos fundamentales de lo político la operación a través de la cual se realiza, más efectivo que en Occidente continúa con el volumen II de cualquier acción humana porque obra ex opere operato [en la serie Homo Sacer. Como el mismo Agamben virtud de la obra realizada]. señala en la Premisa de El Reino y la Gloria. Una Tal es la importancia de esta categoría que la ética kantiana genealogía teológica de la economía y del gobierno y la teoría del derecho kelseneana dependen del significado (Homo sacer II, 2) ( de oficio, lo mismo puede decirse de cualquier acción Il Regno e la Gloria. Per una política, desde el militante hasta el funcionario público. genalogia teologica dell’ economia e del governo, Sin embargo, a pesar de le extensión que ha tenido la 2008), la indagación comenzada con Homo Sacer liturgia del poder en el siglo XX, actualmente está en crisis I llega a una articulación decisiva. O sea, que esa justamente cuando alcanza su esplendor. (Agamben, 2012: doble estructura de la máquina gubernamental que 8-10) Por último, tenemos El misterio del mal. Benedicto XVI había sido planteada en Estado de excepción a y el fin de los tiempos (Il mistero del male. Benedicto XVI e la fine dei tempi, 2013), una reciente contribución donde se través de la correlación de las categorías auctoritas analiza el renunciamiento histórico de Benedicto XVI y potestas, esta vez aparece bajo la forma de desde el contexto teológico y eclesiológico que le es propio y Reino y Gobierno y culmina en la relación entre que, al mismo tiempo, contribuye a comprender la crisis de oikonomía y Gloria, cabe decir, entre el poder legitimidad la democracia liberal contemporánea. Aparece una interpretación actual de los conceptos de potestas y como gobierno y gestión eficaz y el poder como auctoritas que habían sido abordados desde su estrategia majestuo-sidad ceremonial y litúrgica. La Gloria arqueológica. El problema central es el de la legitimidad es el arcano central del poder. Se manifiesta en que junto a la justicia como tema genuinamente político y su carácter aclamativo y doxológico, y tiene sustancial, no puede reducirse a meros criterios técnicos una importancia tal que resulta indiscernible y procedimentales. Reconociendo que el cuerpo de nuestra de la y el gobierno. Ahora se trata de sociedad política tiene igualmente un cuerpo bipartito oikonomía como lo tiene la Iglesia, es evidente que se encuentre reconstruir la genealogía de otro paradigma que entremezclado de mal y de bien, de crimen y honestidad, de tiene su origen el orden teológico del cual, a su injusticia y justicia. Surge, por lo tanto, la necesidad de

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben [ 16 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar El gran desafío de Agamben en su monumental fundizar la tesis biopolítica foucaulteana que Proyecto Homo Sacer es corregir, ampliar y pro- hemos visto esbozada Historia de la sexualidad I: la voluntad de saber. En uno y otro caso, tanto en articular sustancialmente aquello que ha constituido el Foucault como Agamben, lo que resulta fundamen- mejor legado de Occidente, es decir, legitimidad y legalidad, tal es el hecho de que traen a la reflexión un tópico poder espiritual y poder temporal, auctoritas y potestas, justicia y derecho al haberse demostrado el fracaso del paradigma clásico, el concepto de zoon politikon aristotélico, autorregulado del mercado sostenido por la perspectiva de la cuya complejidad no ha dejado de tener, según ideología liberal hoy dominante. (Agamben, 2013: 31-32) creemos, la cifra de la política occidental.

V

s indudable que toda aproximación al enfoque de la lucha. La concepción nietzscheana del co- Eepistémico de las perspectivas biopolíticas de nocimiento ofrece herramientas útiles para Foucault y Agamben deja innumerables interro- comprender la relación entre poder y saber, es gantes. Como señalamos al comienzo, lejos de decir, sobre lo que Foucault llama la política de pretender agotar los tópicos abordados en el la verdad, ofreciendo, además, una perspectiva presente trabajo nuestro intento ha buscado crítica para comprender de qué se trata el conoci- establecer ciertas conexiones entre ambos con el miento al que no hay que aproximarse como fin de comprender de qué se trata la perspectiva filósofos, sino como políticos. biopolítica. A partir del recorrido propuesto, Como hemos podido apreciar, la pregunta por podemos concluir lo siguiente: el poder se sustenta en una estrategia metodo- lógica, el método genealógico, que ha tenido una 1. importancia decisiva a partir de las lecturas de Cualquier lectura desde el pensamiento de los textos nietzscheanos realizadas por Foucault. Foucault implica una problematización de los El objetivo que se propuso el filósofo francés, es tradicionales abordajes de lo político. Como se decir, realizar una genealogía del Orden Burgués, ha señalado reiteradamente, sus indagaciones va a significar una serie de hitos bibliográficos se alejan de los típicos enfoques institucionales que cuestionan sustancialmente los tradicionales de la teoría del Estado, cuestionado como abordajes de lo político. afirma Deleuze, los Postulados del Poder que Por ello las investigaciones emprendidas por históricamente se han considerado como la Foucault se alejan de los modelos semióticos que se summa de cualquier enfoque politológico: el concentraban en formas apaciguadas del diálogo, Postulado de la propiedad, el Postulado de la también de aquellas lecturas inspiradas en la localización, el Postulado de la subordinación, el dialéctica hegeliana que interpretan la historia Postulado de la esencia o del atributo, el Postulado como teogonía a partir de sistemas conceptuales de la modalidad» y el «Postulado de la legalidad. prefijados. También la perspectiva de Foucault se (Deleuze, 2008: 51-56) Es por ello que su obra es aparta de los tradicionales enfoques de la teoría referencia obligada en cualquier indagación del Estado que se concentraban en los análisis de acerca de lo político, precisamente por tratarse de la constitución o la soberanía, o, también de las una línea de pensamiento que inteligentemente lecturas marxistas que enfocan sus estudios en puede colocar en entredicho la estrategia los aparatos del Estado. epistémico-teórica que tradicionalmente ha Desde su estrategia genealógica, Foucault constituido a la politología. concentra sus investigaciones en los dispositivos En Foucault la genealogía analiza la proce- concretos del poder de la sociedad disciplinaria, dencia, emergencia e invención de los objetos de la la prisión, el poder psiquiátrico o el encierro. indagación histórica. No existe un origen solem- Aparece entre los siglos XVII y XVIII el poder ne de aquellas cosas que investiga el historiador, de las disciplinas de la anatomopolítica del cuerpo sino que han sido creadas, fabricadas a partir humano y el de la biopolítica de la población, que de comienzos bajos, pequeños, mezquinos. El significa un poder que tiene por objeto el invadir historiador debe evitar las síntesis unificadoras la vida, sometiéndola cada vez más a los cálculos que desconocen la heterogeneidad de los acon- del poder estatal. Se produce una transformación tecimientos, su dispersión, su ausencia de cualitativa de las coordenadas políticas del continuidad, y debería considerarlos desde la mundo clásico tal como alguna vez las formulara procedencia que fragmenta lo que se pensaba unido. Aristóteles, si el hombre es una animal capaz Los acontecimientos, lejos de un origen pacífico, de existencia política, en la modernidad será un emergen por los juegos de fuerzas, no contienen animal en cuya política está puesta en entredicha un fin preestablecido sino que obedecen alazar su vida como ser viviente. Sólo desde una historia

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 17 ] genealógica se puede analizar estos dispositivos, En este sentido, al finalizar este primer se puede sacar a luz los mecanismos concretos de volumen de la serie Homo Sacer el autor poder que reúnen una multiplicidad de técnicas adelanta una serie de conclusiones que permiten de poder-saber por medio de los cuales la vida comprender el alcance de su mirada escéptica de cada vez más es sometida a la ratio del poder. la matriz política demoliberal. La primera de estas conclusiones cuestiona la sustancia de la ilusión liberal al poner en entredicho cualquier teoría del 2. origen contractual del poder estatal, lo mismo Pocos intentos por comprender la lógica de que todo intento de fundar el poder apelando a lo político son tan fructíferos como el Proyecto alguna especie de identidad; la segunda, como Homo Sacer de Giorgio Agamben. La tesis funda- lógica consecuencia del des-velamiento de los mental con la que se inicia el proyecto pretende arcanos de lo político en Occidente, supone que continuar las indagaciones de Foucault en torno desde siempre la política occidental ha sido a la biopolítica moderna, denominando paradig- biopolítica, algo que impide fundar las libertades mas a aquellas categorías que utiliza en su inda- políticas en los derechos del ciudadano; por último, gación. Conceptos como Ausnahmezustand, la tercera conclusión, que según creemos es la iustitium, campo de concentración o Muselmann más compleja y polémica del autor, trata sobre son fenómenos históricos positivos, cuya función una redirección de la mirada que cuestiona el es hacer comprensible al investigador contextos significado del espacio público tal como tradicio- históricos más amplios. Buscando esclarecer nalmente lo han entendido los modelos de las el concepto de paradigma, Agamben considera ciencias humanas, incluso la arquitectura y el detenidamente el desplazamiento foucaulteano urbanismo, una lectura que arroja una sombra de la epistemología a la política, con lo cual el siniestra sobre tales modelos y remite a un centro paradigma se constituye en un fenómeno genui- está una nuda vida que, aunque transformada namente político. Como puede desprenderse de la y más humana en apariencia, es la misma que lectura de Signatura rerum, la metodología agam- definía la política de los grandes estados totalitarios beneana pretende fundamentarse a partir de múl- del siglo veinte. (Agamben, 2003: 230-232) tiples influencias, incluso desde un análisis de los Si bien Agamben está avanzado en su propuesta conceptos nietzscheanos de Herkunft y Entstehung, política, lo cierto que por los desarrollos que cuya importancia debe considerarse a la par de la conocemos aparece una fuerte impronta escép- teoría de las signaturas, un enfoque éste que utiliza tica con respecto a la politicidad humana. el autor en trabajos como El Reino y la Gloria. Podemos afirmar que las tesis kojèveanas que La conclusiones del filósofo italiano son escép- aparecen en su obra así también como el concepto ticas con respecto a las conquistas civili-zatorias de inoperiosidad de todas las obras humanas de Occidente. Nadie duda, afirma Agamben, que están en la misma línea epistémico-teórica no se deba negar los esfuerzos y conquistas de la de la crítica nietzscheana del conocimiento democracia a favor de la digni-dad humana, sin recuperada por Foucault. Por lo demás, esta embargo, de lo que se trata es de comprender que, postura crítica tiene como fundamento el si bien es cierto que la cosmovisión democrática se rechazo a las tesis aristotélicas sobre el instinto muestra triunfante, en cambio aparece incapaz de natural del conocimiento que se proyecta en la salvar a la zoé que supuestamente debería liberar. potencia ético-política del zoon politikon.

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben [ 18 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibliografía

Agamben, G. (2001). Medios sin fin. Notas sobre la ------(2006). Seguridad, territorio, población. política. Valencia: Pre-Textos. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica. ------(2003). Homo Sacer. El poder soberano y la ------(2008a). La verdad y las formas jurídicas. nuda vida I. Valencia: Pre-Textos. Buenos Aires: Gedisa. ------(2008). El Reino y la Gloria. Una genealogía ------(2008b). Nacimiento de la biopolítica. teológica de la economía y del gobierno (Homo Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica. sacer II, 2). Buenos Aires: Adriana Hidalgo. ------(2008c). Nietzsche, la Genealogía, la ------(2009). Signatura rerum. Buenos Aires: Historia. Valencia: Pre-Textos. Adriana Hidalgo. ------(2010). Defender la sociedad. Buenos ------(2010). El sacramento del lenguaje. Arqueo- Aires: Fondo de Cultura Económica. logía del juramento (Homo sacer II, 3). Buenos ------(2011a). Historia de la sexualidad I: la Aires: Adriana Hidalgo. voluntad de saber. Buenos Aires: Siglo XXI. ------(2012). Opus Dei. Arqueología del oficio (Homo ------(2011b). La arqueología del saber. Buenos sacer II, 5). Buenos Aires: Adriana Hidalgo. Aires: Siglo XXI.. ------(2013). El misterio del mal. Benedicto XVI Habermas, J. (2010). El discurso filosófico de la y el fin de los tiempos. Buenos Aires: Adriana modernidad. Buenos Aires: Katz. Hidalgo. Nietzsche, F. (1996). Sobre verdad y mentira en Calarco, M., De Caroli, S. (Ed.) (2007). Giorgio sentido extramoral. Madrid: Tecnos. Agamben. Sovereignty and Life. Stanford Uni------(2007a). Más allá del bien y del mal. versity Press: California. Buenos Aires: Alianza. Colli, G. (2010). El nacimiento de la filosofía. Buenos ------(2007b). El nacimiento de la tragedia. Aires: Tusquets. Buenos Aires: Alianza. Deleuze, G. (2008). Foucault. Buenos Aires: Paidós. ------(2009). La genealogía de la moral. Madrid: Foucault, M. (1988). Un diálogo sobre el poder y Alianza. otras conversaciones. Madrid: Alianza Editorial. Veyne, P. (2014). Foucault: pensamiento y vida. Buenos Aires: Paidós.

Daniel Inojosa Bravo | El enfoque epistémico de las perspectivas biopolíticas de Foucault y Agamben RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 7-19 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 19 ]

Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas para el análisis del juicio moral sobre las acciones de “justicia por mano propia”

María Belén Muñiz Oller (Argentina) Universidad Nacional de Mar del Plata [email protected]

Fecha de recepción: 09-06-2016 Fecha de aceptación: 16-10-2016

Resumen Abstract l propósito central del artículo es abordar la he central purpose of the article is to address Ecuestión conceptual y parte de la cuestión Tthe conceptual question and part of the metodológica de una investigación en curso cuyo methodological issue of an ongoing investigation objeto de estudio es identificar la diversidad de whose object of study is to identify the diversity concepciones y juicios morales a través de los of ideas and moral judgments through which a cuales un conjunto significativo de fracciones significant number of sections of the working de la clase obrera de la ciudad puerto de Mar class the port city of Mar del Plata describes del Plata describe y evalúa los distintos modos and evaluates the different modes of collective de violencia punitiva colectiva como formas no punitive violence and non-state forms of conflict estatales de resolución de conflictos intra clase e resolution of intra -class and inter class. Following inter clase. Siguiendo esta reflexión, en el presente this reflection, in this article we seek to bring artículo buscamos acercar herramientas, tools, analytical, conceptual and methodological analíticas, conceptuales y metodológicas para la research of complex social phenomena such as investigación de fenómenos sociales complejos the study of social justice. como lo es el estudio de la justicia social.

Palabras claves: Identidad moral, Criterios de Key words: Moral identity, Moral evaluation, evaluación moral, Acciones colectivas punitivas. Collective punitive actions.

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 21 ] Introducción y génesis del problema de investigación

l propósito central del presente artículo es Respecto de la cuestión conceptual, en el primer Eabordar la cuestión conceptual y parte de la apartado desarrollamos las nociones centrales cuestión metodológica de una investigación en que refieren al juicio moral desde una perspectiva curso. El objeto de dicha investigación es identi- piagetiana. Para ello se introduce primero qué se ficar, a nivel exploratorio, en primer lugar, la entiende por moral y por representación. Seguido diversidad de concepciones y juicios morales de esto se desarrollan las nociones de juicio a través de los cuales un conjunto significativo moral heterónomo y autónomo, necesarias para de fracciones de la clase obrera de la ciudad comprender las nociones de justicia sobre las puerto de Mar del Plata describe y evalúa los que se ancla el presente escrito -y la investigación distintos modos de violencia punitiva colectiva de la cual forma parte- : la justicia retributiva y la como formas no estatales de resolución de con- justicia distributiva. flictos intra clase e inter clase. En segundo lugar, Respecto de la cuestión metodológica, en el se- desentrañar con cuales otros juicios, ideas, re- gundo apartado describimos el diseño muestral y flexiones y concepciones morales sobre el sistema los criterios de selección de los casos, la técnica de penal en particular y el orden social en general, investigación aplicada en el relevamiento en campo se corresponde la diversidad moral sobre las y las distintas dimensiones de análisis que aborda. acciones de violencia colectiva punitiva en el Asimismo, se da cuenta de la técnica elegida -la universo empírico de estudio. entrevista estructurada- y se presentan sus módu- De lo anterior se desprende que el artículo los y las preguntas construidas para dar cuenta mostrara una articulación entre teoría y metodo- -partiendo de las conceptos teóricos abordados logía: esto es, la construcción de un diseño de in- en el primer apartado- de las representaciones de vestigación que permita abordar los conceptos la justicia social y penal de los/as trabajadores/as implicados. entrevistados/as.

La cuestión conceptual

1. Introducción Siguiendo esta reflexión, entendemos que tanto el desarrollo cognitivo psicogenético como ras una recopilación de las principales marcos el desenvolvimiento de los órdenes sociales Tinterpretativos y explicativos surgidas en potencian o inhiben determinado proceso de EEUU y América Latina a fines del siglo XIX y socialización. Por lo que sostenemos la necesidad principios del siglo XX sobre la temática, obser- de desplazarnos del orden social como sistema vamos que dicho objeto de estudio suele tener un enfoque particular desde el punto de vista 1) La primera de las hipótesis consideradas se fundamenta teórico-conceptual. Por un lado, no son estudios en los estudios de Thompson y Foucault sobre la “justicia que se orienten a dilucidar la vinculación entre popular”, teorías que enmarcan las acciones en su relación con la asimetría de poder propia de determinados contextos conciencia social y castigo, pesquisando la in- y procesos históricos. fluencia de los significados y prácticas cultu- 2) Una segunda hipótesis explicativa tiene que ver con la in- rales en los comportamientos penales y el terpretación y explicación de la presencia de este fenómeno control social. Por otro, tampoco son enfoques a partir de la conceptualización de la seguridad pública/ que busquen descifrar la vinculación entre los ciudadana o defensa social presentan las acciones como res- puestas sociales a situaciones de inseguridad y ponen el cambios en los comportamientos penales y el acento en procesos de deterioro social producto de grandes desenvolvimiento de las formaciones sociales, conmociones sociales, políticas o económicas; ante los esto es, la configuración de mentalidades en las cuales la población se “auto-defiende” (Benavides y Ficher distintas etapas históricas1. Ferreira, 1983; de Souza Martins, 1996; Garay Montañés, 1998; Castillo, 2000; Rodriguez Guillén, 2002; Goldstein, 1 Tras un recorrido por las principales hipótesis explicativas 2003; Clark, 2004; Handy, 2004; Mendoza, 2004; MINUGUA, surgidas en EEUU y América Latina a fines del siglo XIX 2004; Santillán, 2008; Gamallo 2012, 2013; etc.). y principios del siglo XX nos encontramos con, a grandes 3) Las que presentan características de confrontación/ rasgos, tres hipótesis explicativas/interpretativas sobre el negociación explicita con el Estado (Holston, 1999; Goldstein, fenómeno de las acciones colectivas de violencia punitiva: 2003; Vilas, 2001, Guerrero, 2000).

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 22 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar sociocultural operante en la inhibición o promo- o conductas individuales, el enfoque relacional ción de cursos de acción y comportamientos para describe la violencia y su variación basándose también centrar los marcos interpretativos y ex- en las dinámicas interactivas de los actores, plicativos de la cuestión penal en el desarrollo la violencia como una relación social. En este cognitivo psicogenético. Siguiendo lo anterior, sentido Tilly no niega los estudios psicologisistas en la investigación nos centraremos en los fac- de este tipo de violencia, centrados en las ideas tores descriptivos y constituyentes de los juicios o en las conductas, impulsos, sensaciones, sino y concepciones morales sobre las acciones colec- que hace foco en que estas actúan en un con- tivas de violencia punitiva. texto relacional concreto. Por lo tanto, desde Entendemos que para que se lleve a cabo esta perspectiva se entiende que toda acción es una acción de justicia por mano propia y/o, su la resultante de un proceso social, y lo es aún legitimación -en el plano moral- no solo tiene en el caso de ser realizada individualmente. que haber un grado social muy significativo de En síntesis, Charles Tilly nos permite hacer ob- aceptación e instaurado un proceso de interio- servable la dimensión sociogenética de estas rización y regulación de los comportamientos formas de acción. Sin, embargo, en lo que refiere en una formación social histórica dada, sino a la cuestión conceptual de la investigación, se que también se vincula con la representación avanza en dos sentidos distintos a partir de la del mundo en términos del desarrollo cognitivo propuesta de Charles Tilly. En primer lugar, en que construyan los individuos. Una de las un sentido que permite reflexionar en torno al fuentes centrales de legitimación y aceptación proceso mismo de la interrelación e interacción del ejercicio del poder de unos grupos humanos psicogenética y sociogenética en la relación social por otros, es su representación como un modo que se establece a partir de una acción violenta. de realización de una “justicia”: para que sea En segundo lugar, en el sentido de otorgar a estas aceptado, para que sea respetado, el poder debe acciones de violencia colectiva la indisoluble ser vivido y sentido como “justo” (Marín, 2013). unión con la política institucional, a grandes El enfoque que se acerca en mayor medida rasgos, con el ordenamiento social dominante a nuestra propuesta de abordaje al fenómeno en una situación histórico determinada y los de las acciones colectivas de violencia punitiva discursos que de ella emanan. es el del Enfoque relacional de la violencia, cuyo principal mentor fue Charles Tilly. Este autor en su libro The Politics of Collective Violence define a la 2. La conformación de concepciones violencia colectiva como morales a partir de discursos sociales en torno al control del delito Una interacción social episódica que infrin- ge daños físicos a personas y/u objetos Uno de los fundamentales marcos teóricos re- (“daños” incluye la retención por la fuerza lacionados con la sociología del castigo, que nos de personas u objetos pasando por encima permiten comenzar a contextualizar y analizar de cualquier restricción o resistencia); las acciones de violencia colectiva punitiva, es la implica por lo menos a dos autores en los investigación de David Garland en La Cultura del daños, y es consecuencia, al menos en parte, Control. de la coordinación entre las personas que A grandes rasgos, en ella Garland da cuenta de realizan los actos que provocan los daños. la crisis del paradigma del control del delito que (Tilly, 2007: 3). él denomina welfarisimo penal, modelo punitivo característico del período 1890-1970, crisis a partir Esta definición centra su análisis al nivel de de la cual se produjeron cambios drásticos en la acción, acotando el universo tan amplio de los modos de concebir los dispositivos penales y teorías y definiciones sobre la violencia; por un rápido surgimiento de nuevas formas de pensar nombrar algunos: violencia simbólica2 violencia y actuar sobre el delito y el concomitante descrédito estructural3, violencia objetiva4, entre otros. El de viejos supuestos y orientaciones profesionales enfoque relacional de Tilly se acerca en gran (Garland, 2005: 36). parte a nuestra comprensión del objeto de Garland expresa una variedad de cambios y estudio porque, a diferencia de los enfoques que transformaciones explicativas de la declinación se centran en explicar la violencia solamente a del welfare penal, pero aquí sólo tomaremos las partir de las desigualdades estructurales, las ideas consideradas significativas para el acercamiento a nivel histórico, penológico y sociológico de 2 Véase Bourdieu, P y Wacquant, L. (1995). “Respuestas. Por una antropologia reflexiva”. Estudios sobre las Culturas nuestro objeto de estudio. Contemporáneas, vol. IV, Nº 7. Colima, México. Entre las transformaciones acaecidas es im- 3 Véase Galtung, J. (1975), citado en Imbusch, P. (2003). “The portante remarcar el marcado declive que los concept of violence” en Wilhelm Heitmeyer & John Hagan profesionales y especialistas del welfare experi- (Eds.) International Handbook of violence research, Kluwer mentaron en cuanto a su estatus e influencia Academic Publishers, Dordrecht. 4 Véase Zizek, S. (2009). Sobre la Violencia: Seis Reflexiones -lo que formó parte de una reacción más gene- Marginales. Buenos Aires: Paidós. ral contra los tipos de saber experto sobre lo

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 23 ] social. Asimismo entró en declive el ideal de que se necesitan para suministrar energía rehabilitación típico del Estado de Bienestar emocional a las políticas punitivas y la gue- del welfare, lo cual desprendió el fracaso de los rra contra el delito. (p. 324) supuestos, valores y prácticas sobre los que se había construido la penalidad moderna. Así tam- Otro marco teórico desde el cual nos basamos bién se comenzaba a vivenciar la reaparición de para comenzar a aproximarnos a las concepciones la retribución, del “merecimiento justo”, como o juicios morales sobre las acciones colectivas un objetivo político generalizado, promovido de violencia punitiva, es el de Norbert Elías en el inicialmente contra la supuesta injusticia de Proceso de Civilización. Nos parecía importante las condenas individualizadas. Así Garland basarnos en sus herramientas conceptuales que hace referencia explícita al resurgimiento de sustentan, no sólo la articulación de aspectos las sanciones punitivas y la justicia expresiva. psicogenéticos y sociogenéticos, sino también un Garland analiza también la aparición del temor análisis de la noción de venganza. El autor insiste al delito como un tema característico de la cul- en que la moderación de las pasiones, de los tura contemporánea y su constitución como un afectos tanto como de los estallidos de agresión problema en y por sí mismo, desde la década de contra el otro son paralelas a la realización pau- 1970. Esta sensación de miedo y descreimiento latina de la monopolización de la violencia física en la capacidad del sistema de justicia penal por el Estado. Sostiene que la “agresividad” se para hacer algo al respecto, tuvo un impacto en ha refinado, civilizado a partir del desarrollo de la construcción y estilo de políticas públicas, las un progresivo autocontrol emocional y moral cuales comenzaban a centrarse no en reducir el correspondiente a un proceso de individuación delito, sino en los niveles de temor. Asimismo creciente, que de algún modo pone en evidencia la imagen del delincuente y su consecuente el proceso de pasaje de una heteronomía fundada intervención sufrió modificaciones significativas. en el control coercitivo “externo” del compor- La mirada del welfarismo al delincuente como un tamiento, hacia una heteronomía interiorizada, sujeto necesitado y desfavorecido que merecía sustentada en el autocontrol subjetivo (Elías, ayuda se sustituyó por una imagen cargada de 2008). descripciones estereotipadas de jóvenes irrecupe- Este marco en la penalidad estaba presidido rables y peligrosos. Siguiendo a Garland (2005), por una configuración específica del poder pe- nal: la relación concentrada entre el Estado y El sentimiento que atraviesa la política sus relaciones burocráticas y la exclusión de la criminal es ahora con más frecuencia un opinión pública del ámbito penal junto con su enojo colectivo y una exigencia moral de indiferencia. Sin embargo, si continuamos con retribución en lugar del compromiso por lo expuesto por David Garland sobre los cambios buscar una solución justa, de carácter social. de paradigma del control del delito acaecidos La temperatura emocional de las políticas en la actualidad, observamos una mutación en públicas se ha elevado (p. 45). los dispositivos penales del mundo moderno que deriva en un colapso de la civilización (Pratt, Asimismo, este autor hace referencia al retor- 2006). Pratt analiza este colapso civilizatorio no de la víctima al centro de la escena en la polí- como producto de una nueva configuración tica de la justicia penal, las cuales se invocan del poder penal que refleja tanto influencias ahora rutinariamente para apoyar medidas de civilizadoras como descivilizadoras, esto es, segregación punitiva. Las leyes Blumberg en una ampliación de la frontera de lo tolerable Argentina, con el propio apellido de la víctima, en el cual subyace un giro pre-civilizatorio en son un claro ejemplo de ello. términos de castigo. Según Pratt, los actuales Esta serie de modificaciones que hemos pre- distanciamientos con respecto al racionalismo sentado en el paradigma del control del delito burocrático de la penalidad parecieran sugerir (declive del ideal de rehabilitación, resurgimiento un reajuste de las precondiciones para ese de las sanciones punitivas, cambios en el tono énfasis: monopolio del Estado central del poder emocional de la política criminal, el retorno de de castigar, fuertes interdependencias y un la víctima, mayor temor al delito, cambios en el alto umbral de vergüenza. A grandes rasgos, pensamiento criminológico y la estrategia de res- Pratt analiza una contratendencia, conse- ponsabilizar a otros actores como los medios de cuencia de la globalización que posibilita nue- comunicación y la sociedad civil) son algunas de las vas interdependencias: la erosión desde la dimensiones que evidencian la implementación y década del 70 de fundamentos establecidos recurrencia de las acciones colectivas de violencia (el cuestionamiento de la familia, la iglesia, la punitiva. En palabras de Garland (2005) escuela, etc). También hace observable ciertos efectos descivilizadores como el que los peligros El declive de la fe en las instituciones públicas devienen más omnipresentes e incalculables; los implica actualmente que sólo la visión del mitos y las fantasías empiezan a reemplazar a sufrimiento de «individuos como nosotros» la objetividad. Asimismo sostiene que el Estado puede provocar las respuestas apasionadas comienza a revalidar las posibilidades de casti-

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 24 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar gar, extendiendo su poder de castigar por un individuales de personas en posición social des- lado (por ejemplo: sentencias más largas), pero ventajosa. En tal sentido este autor sostiene que relegando en el público las demandas sobre otras la posición social, y no la comisión de delitos, aspectos del cuerpo social y, fomentado de esta es lo que determina el estado de vulnerabilidad manera, la “punitividad populista”. frente el poder punitivo estatal (Pegoraro, 2003). Por último, un marco teórico de la criminología Pegoraro sostiene que el fenómeno social de las que engloba discursos sociales permeables a la ilegalidades ha tenido una escasa relevancia en construcción de concepciones morales sobre la concepción de la sociedad para la teoría socio- las acciones colectivas de violencia punitiva, lógica. Según este autor el contenido social ha es el que apela a un Estado garantista de sido reducido a manifestaciones particulares o derechos. A la par del paradigma de la nueva desviaciones explicadas ya sea por patologías criminología o criminología crítica5 surgida entra- personales, o por carencias, de algo que falta. da la década del 70, uno de los desarrollos más Ante lo cual Pegoraro manifiesta que las conductas emblemáticos en el ámbito del pensamiento ilegales en la producción, distribución e intercambio criminológico latinoamericano ha tenido que de bienes y servicios está generalizada en la vida ver con el penalismo crítico -que sostenía una social y funciona como un lazo social que integra suerte de derecho penal mínimo- encabezado y sostiene las conductas recíprocas de los diferentes fundamentalmente en Argentina por Eugenio actores sociales (2003: ). Raúl Zaffaroni, pero representado también en Estas concepciones correspondientes al pensa- otros países de la región por autores como Juan miento criminológico -aquí explicitadas de Bustos Ramírez, Gonzalo Fernández o Fernández manera general y acotada- se corresponden con Carrasquilla (Bombini, 2008). una necesidad de contener el poder punitivo. Siguiendo a Zaffaroni, Slokal y Alagia (2000) Zaffaroni expone un detallado programa político el estado constitucional de derecho se refuerza de control del poder punitivo del Estado inspirado a través de la aplicación de un saber penal aca- en la Cautio Criminallis de Friedrich Spee von tante del ejercicio del poder punitivo estatal. El Langenfeld de 1631-, que pretende controlar, punto de partida de la obra de Zaffaroni es la reducir y acotar las pulsiones vindicativas del existencia de una tensión dialéctica constante sistema penal y promover la prevención cautelar entre dos estados que conviven en la realidad: de la “violencia criminal”. el estado de derecho y el estado de policía. En el Asimismo, estos autores son enormemente primero, todos los individuos son sometidos a la crítico del rol de la televisión sosteniendo que la ley y rigen los principios limitadores constitu- criminología mediática crea la realidad de un cionales e internacionales, en cambio en el estado mundo de personas decentes frente a una masa de de policía los habitantes se encuentran subordi- criminales identificada a través de estereo-tipos, nados a los mandatos del poder. El estado de que configuran un ellos separado del resto de la derecho, constantemente, intenta contener al sociedad, por ser un conjunto de diferentes y malos. poder punitivo ejercido por el estado de policía Concluyendo el precedente apartado, soste- y serán las agencias judiciales, las que a través nemos que los tres marcos teórico-epistemo- de sus decisiones racionales, tendrán la ardua lógicos citados, aportan enormemente a la concep- tarea de reducir al estado de policía. Asimismo tualización analítica de las respuestas otorgadas esta tensión entre los dos estados conlleva por el universo de análisis de entrevistados/ diferencias en el pensamiento criminológico, en as. No sabemos a priori si nos encontraremos el saber penal. Zaffaroni, por su parte, da cuenta con una homogeneidad o, por el contrario, una de la selectividad del ejercicio del poder punitivo diversidad en las concepciones morales respecto al recaer siempre sobre ciertos estereotipos a las acciones colectivas de violencia punitiva. Sin embargo, el involucramiento de tales herra- 5 En palabras de Gabriel Bombini mientas analíticas nos permite justamente [...] pueden señalarse una diversidad de tendencias que arrimarnos a tal distinción, así como también actualmente se desarrollan en el interior del movimiento aproximarnos a responder con cuáles expresiones delimitadas según el ámbito geográfico cultural de proce- dencia: en el sector nórdico europeo, surge el abolicionismo ideológicas/ visiones sobre el papel del estado y la penal (Hulsman, Christie, Van Swaaningen, entre otros); en sociedad corresponden las concepciones morales. el ámbito anglosajón, el denominado realismo de izquierda Es decir, nos permiten pesquisar qué tipos de (Lea, Young, entre otros); y una tercera reflexión propia ordenes normativos/ sociales promueven estas del sector latino europeo: el garantismo penal o derecho concepciones morales a partir de preguntarnos penal mínimo (Baratta, Ferrajoli, entre otros); y aun cuando puedan -precisamente por ello- verificarse divergencias o cuáles son las corrientes ideológicas promovidas congruencias epistemológicas entre estos distintos filones actualmente en la Argentina sobre el control (Zaitch y Sagarduy, 1992:31-51; Martinez, 1990). social en general, el papel del control penal, la Las obras fundacionales de la criminología crítica, por seguridad ciudadana, etc.; y en particular, en la tanto, son: “La nueva criminología” de Taylor-Walton-Young; actualidad sobre los hechos de “justicia por mano “La criminología crítica y crítica del derecho penal” de Alessandro Baratta, “La criminología” de Massimo Pavarini, propia” (desde los medios de comunicación, desde “El pensamiento criminológico” de Bergalli-Bustos, entre el poder ejecutivo y sus políticas de seguridad, otras. desde el poder judicial).

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 25 ] En este sentido, específicamente nos pregun- Jean Piaget es pionero en la investigación tamos: ¿predomina una concepción expiatoria y experimental sobre la cuestión. En su investi- punitiva ligada a la criminalización de la pobreza gación de 1932 El criterio moral en el niño nos da que reclama un estado severo de control social que una clave para abordar este aspecto. Respecto de aplica sanciones altamente represivas? ¿Expresa nuestro interés concluye que en las sociedades el comportamiento colectivo aquí estudiado una contemporáneas coexisten dos nociones funda- concepción irracional y vengativa, asociada a lo mentales de justicia que se expresan a través de pre-social/ pre-civilizatorio? ¿Predominan las dos tipos de juicio moral diferentes en la eva- concepciones que buscan resguardar y preservar luación de un hecho, proceso o situación social ciertos lazos comunitarios y de solidaridad entre que implique respeto o ruptura normativa. pares? ¿O prima una concepción más ligada a la Las investigaciones de Piaget en torno a los búsqueda de un estado garantista de derechos? procesos involucrados en la construcción de los juicios morales (Abduca, Ainora y Perez, 2010)

3. La construcción del juicio moral demostraron que la realidad moral, a nivel y las concepciones de justicia del individuo, depende del tipo de respeto que predomine hacia las reglas y que a su vez, Las principales tradiciones sociológicas ponen la construcción de una concepción acerca en evidencia que el ejercicio del poder de unos de qué es lo obligatorio para la conciencia, grupos humanos sobre otros se asienta no sólo se encuentra condicionada sobremanera en la amenaza y/o uso de la coacción física sino por el carácter que asuman las relaciones también en la capacidad de ciertos grupos sociales sociales dominantes en cada etapa de la de lograr la internalización y normalización de socialización. (p.36). una representación del mundo, a nivel de la tota- lidad social. En esta línea, se concibe al poder De acuerdo con Piaget existe un consenso como la capacidad de instalar acciones sobre acerca de que una moral es un sistema de reglas otros, es decir, la manera en que determinadas ac- o normas, y la esencia de tal moralidad es preciso ciones modifican otras (Marín en Muleras, 2008). buscarla en el respeto que los individuos tengan Sin embargo, no se piensa únicamente al poder hacia esas normas. La norma para Piaget implica como la coacción física, sino también como la dos elementos: la sumisión y la obligación. constante disputa por instalar un conjunto de A partir de la lectura de Jean Piaget focali- formas sociales e institucionales de normas, re- zamos nuestra atención en la relación que se presentaciones, valores que influyen y moldeen establece entre lo que ha dado en llamarse la los comportamientos (Muleras, 2008). Basta heteronomía y la autonomía normativa, como mencionar el desarrollo de una sociología de la distintas etapas y/o procesos constitutivos de dominación en Max Weber; la teoría de Emile la génesis normativa en el ámbito de lo político Durkheim de las representaciones sociales y su social. Entendemos que estas etapas y/o procesos función productiva y reproductiva del orden social; constitutivos de los diversos estadios del proceso la teoría social de Karl Marx sobre la lucha de clases evolutivo del conocimiento -es decir de la etapa y la disputa cultural expresada en las diversas evolutiva de la representación y explicación de formas de conciencia social y concepciones ideo- los procesos sociales que afectan las situaciones lógicas del mundo, que de ella se derivan. Aún de vida- no son independientes del operador en su heterogeneidad, estas tradiciones han normativo que se hace presente en la identidad hecho observable al dominio cultural como un moral de distintas fracciones sociales. ámbito de complejas confrontaciones entre agru- El concepto de génesis evolutiva implica el pamientos sociales que disputan -teleonómica reconocimiento de temporalidades diferenciales y teleológicamente- la producción social de las y precondiciones estructurales heterogéneas en el significaciones y explicaciones atribuidas a los origen y desarrollo de las diversas representaciones hechos y procesos de la realidad. En este sentido el de la justicia social. Las concepciones y juicios apartado precedente hace mención de los distintos más complejos surgen necesariamente de la re- discursos sobre la penalidad que emanan del orden estructuración de los antecedentes, no surge social dominante, factores descriptivos de las ex nihilo. En tal sentido, toda evolución supone posibles concepciones morales sobre los hechos de una secuencia u ordenamiento de sucesión de “justicia por mano propia”. las etapas del desenvolvimiento de un proceso. Sin embargo, en el presente apartado nos Precisamente, uno de los objetivos de nuestro desplazamos del orden social como sistema trabajo investigativo es poder identificar cuáles sociocultural operante en la inhibición o promo- son las precondiciones socioculturales necesarias ción de cursos de acción y comportamientos, para que tal evolución se lleve a cabo. para focalizarnos en el papel de la diversidad de Las investigaciones piagetianas hacen obser- concepciones socioculturales de lo penal y del vable la centralidad del carácter del proceso orden normativo en el plano de la construcción de socialización -el tipo/carácter de relaciones moral de los sujetos. sociales que se establece con la autoridad y con

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 26 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar sus pares en las distintas etapas de la psicogénesis de una concepción de la justicia en la que los (mental) y de la sociogénesis (agrupamientos contenidos de significación atribuidos se expresan sociales)- en el desarrollo del potencial cognitivo a través de un instrumento mental inherente a de la especie humana. la lógica egocéntrica, subjetiva y singularmente El punto de partida de la identidad humana motivada: la creencia. El autocentramiento se es autocentrado, egocéntrico. Esto significa que hace inteligible en la prescindencia de cualquier en las etapas primarias del desarrollo predo- tipo de procedimiento de verificación racional mina una clara indiferenciación entre el sujeto capaz de comunicar, socializar y en consecuencia y el medio físico natural y sociocultural. Los objetivar, las significaciones y los contenidos efectos del autocentramiento en el plano de atribuidos a la justicia. la representación de lo real se prolonga en la Asimismo Piaget explica la dimensión de la incapacidad de distinguir entre un yo (ego) y otro sacralización, propia de las representaciones rea- (alter), entre el grupo social de pertenencia y los listas de los estadios iniciales, por el fenómeno del otros grupos sociales, diferenciados del propio, egocentrismo y realismo moral. Siguiendo a Edna entre lo que es producto de la propia acción y Muleras, el proceso de sacralización del orden pensamiento, de lo que no lo es; entre la con- de lo real consiste en el proceso en el cual todo ciencia de uno mismo y la conciencia de los otros producto de la acción y elaboración intelectual como seres diferenciados de uno. El proceso de subjetiva pierde su origen y carácter humano descentramiento, por otro lado, es el producto para adquirir uno externo y trascendente. La de una larga y compleja construcción que posi- sacralización consiste en el desconocimiento, bilitará, en las etapas avanzadas, complejas, la ignorancia y la negación del origen humano del desarrollo psicogenético e histórico social, de ciertos hechos y procesos. Los seres humanos el reconocimiento de las otros seres humanos viven estos hechos y procesos como ajenos a su como pares en la diversidad, con conciencia propia interacción (Muleras, 2008). Por lo cual, la y puntos de vista diferenciados de la propia sacralización surge de lo inobservable, del desco- perspectiva, con los cuales es posible establecer nocimiento del origen de los procesos y hechos un intercambio social cooperativo regido por sociales, del origen de las normas y reglas. Es el normas compartidas, con significaciones comu- desconocimiento del origen humano del sistema nes, es decir comunicables y socializables, en vez normativo. Por eso se reifica o cosifica, se piensa de singularmente motivadas. como esencial y eterno, como que no se puede El tipo de relación social que prevalece en la modificar o transformar. práctica cada etapa del desarrollo psicogenético La sacralización en el plano de lo normativo se (mental) del sujeto y sociogenético (estructura, expresa en la concepción de la norma originada funcionamiento y organización social en las e impuesta a través de relaciones sociales de formaciones sociales), propicia -en el plano de presión y constreñimiento. El realismo moral se la conciencia- un tipo de concepción de justicia encuentra caracterizado por un sentimiento de social y una cierta imagen de la totalidad social. obligación basado en la obediencia por respeto En lo que sigue describiremos las características unilateral a quien ejerce la autoridad, el deber de las distintas concepciones de la justicia social es heterónomo, el bien se define a través de la según la Escuela Epistemológica piagetiana. obediencia y la gravedad de la falta se evalúa en función de los efectos materiales. La regla impues- 3.1 Justicia retributiva ta (por el adulto, por la autoridad, por el poder) es Noción de responsabilidad objetiva, sacralizada, vista como intangible e inmutable. Al heteronomía y autocentramiento no prevalecer una relación de iguales, la norma no debe ser entendida en su significado, en su En las etapas primarias de construcción de sentido, simplemente debe ser respetada porque la identidad moral, predomina una conciencia simboliza y representa el “bien” y el “deber”. realista. Siguiendo a Piaget el realismo consiste en De esta manera, el realismo moral nace del ignorar la existencia del yo y en tomar la perspectiva encuentro de la relación social de obligación propia por inmediatamente objetiva y absoluta con el egocentrismo, como etapa primaria del (2001: 38). Por lo que una de las principales desarrollo psicogenético, atravesada por todos los características del realismo es la ausencia de con- seres humanos en su desarrollo mental. Siguiendo ciencia del yo: el fenómeno del egocentrismo. Sin a Piaget, llamaremos realismo moral a la tendencia a embargo, no sólo es ausencia de conciencia del considerar los deberes y los valores, como subsistentes “yo” sino de conciencia de un yo diferenciado de en sí mismos, independientemente de la conciencia y otros sujetos, de acciones realizadas por otros como obligatoriamente impuestos” (1971:92). sujetos, de otros puntos de vista y pensamiento. El realismo moral se corresponde con una noción No se observa lo social, el comportamiento de de responsabilidad objetiva. El criterio para juzgar otros, distinguido del propio. Por lo que en el te- es la obediencia/desobediencia a la norma, por lo rreno de la justicia retributiva se expresa una que si se falta a una norma hay consecuencias concepción socio y psicocéntrica de lo real en materiales. De esta forma, se evalúan los actos la cual prevalece el autocentramiento. Se trata no en función de la intencionalidad consciente

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 27 ] y subjetiva del transgresor, sino en función del la propia perspectiva, con los cuales es posible grado de daño producido a lo material, de su establecer un intercambio social cooperativo conformidad o distancia material con las reglas regido por normas compartidas, con significa- planteadas. En esta concepción no hay “respon- ciones comunes, es decir comunicables y sociali- sable”: justamente, lo que importa es “castigar”, zables, en vez de singularmente motivadas. El no sobre quién/qué recae. La falta a la norma descentramiento representativo es favorecido tiene como consecuencia necesaria un castigo. La y propiciado por la socialización creciente del intención de quien realiza la acción, aunque puede sujeto, así como la socialización se hace posi-ble ser discernida, no es tomada en cuenta como parte en tanto y en cuanto las precondiciones psico- del criterio de juzgamiento. La gravedad de la falta genéticas del descentramiento la posibiliten. se regirá por los efectos materiales (una mentira Sólo en las etapas avanzadas del desarrollo será más grave cuanto más inverosímil, un daño moral, tanto a nivel psico como sociogenético cuanto mayor sea la materialidad involucrada). se configura una noción alternativa de justicia a la retributiva.: la justicia distributiva. Puede Noción de responsabilidad subjetiva, surgir cuando entra en conflicto con la noción de la heteronomía a la autonomía normativa de justicia retributiva, originando una oposición a la obediencia “debida” propia del realismo La justicia retributiva para Piaget, abarca moral, en el que prevalece la obediencia a la una evolución que va de la valorización de la autoridad independientemente del contenido presión social a una valorización de la reciprocidad de la norma que prescriba, sin procurar la (Muleras, 2008: 126). Piaget identifica dos estadios comprensión de las circunstancias que originan en la construcción del juicio moral retributivo: la ruptura normativa y de la significación del el estadio egocéntrico, de heteronomía y presión comportamiento transgresor. Puede surgir en unilateral del individuo por la autoridad y el oposición a la sanción arbitraria o “injusta”; estadio de autonomía, de reciprocidad y coope- cuando se experimenta la necesidad de igualdad, ración entre pares. De esta manera la noción de de reciprocidad y solidaridad con respecto a los responsabilidad, en la concepción de justicia semejantes. La autonomía normativa aparece retributiva, responde tanto a una noción de res- con la reciprocidad cuando el respeto mutuo ponsabilidad objetiva ligada al interés por los es lo bastante fuerte para que el individuo resultados de los actos, como a una noción de experimente la necesidad de tratar a los demás responsabilidad intencionada y subjetiva ligada como el querría ser tratado. a la motivación de los actos. En este sentido, la Seguidamente, el igualitarismo da lugar a una concepción moral de responsabilidad subjetiva noción más refinada de justica, la noción de equi- es una etapa tardía del desarrollo moral, donde dad. La equidad consiste en matizar el igualitaris- todo acto de ruptura o adecuación normativa se mo, es decir, en no definir la igualdad sin tener en evalúa teniendo en cuenta fundamentalmente la cuenta la situación particular de cada cual. intencionalidad y motivación consciente, interior, En esta noción de justicia prevalece una con- del agente responsable. En ella varía enormemente cepción de responsabilidad colectiva, que supera la instalación del sistema normativo a nivel de la y trasciende a la concepción subjetiva e individual organización corporal subjetiva, evolucionando -en relación a una construcción sociocultural hacia una creciente internalización del control que se configura evolutivamente- según la cual en el desenvolvimiento del proceso civilizatorio. los hechos nos son “juzgados” moralmente a Siguiendo a Elías, se desarrolla un progresivo partir de una concepción de la responsabilidad autocontrol emocional y moral correspondiente “personificada” a nivel individual, sino que se a un proceso de individuación creciente, que sustituye por una concepción en la cual las de algún modo pone en evidencia el proceso de “responsabilidades individuales” deben ser pasaje de una heteronomía fundada en el control analizadas en el marco de las circunstancias o coercitivo “externo” del comportamiento, hacia conjunto de factores (interrelación social) que una heteronomía interiorizada, sustentada en el condicionan, restringen o constriñen el campo autocontrol subjetivo (Elías, 2008). de acción “subjetivo”-. Lo social se estructura en la interacción de una teleología de la acción y de 3.2 Justicia distributiva una teleonomía que va más allá de la “voluntad”, Noción de responsabilidad colectiva, consciencia e intencionalidad de los actores. Se descentramiento, autonomía comienza a pensar el hecho cuestionado como y construcción normativa originado en un sistema de relaciones sociales, no en términos de decisiones, intenciones, volun- El proceso de descentramiento permitirá la tades meramente individuales de sujetos que constitución de una lógica operatoria reversible no se someten a la ley. Se hacen observables las desde el punto de vista cognitivo, y desde el punto condiciones diferenciales de configuración de de vista afectivo, el reconocimiento de las otros todo comportamiento individual. Su interacción. seres humanos como pares en la diversidad, con En la concepción de justicia distributiva, se conciencia y puntos de vista diferenciados de dice que una sanción es injusta cuando castiga a

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 28 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar un inocente, recompensa a un culpable, cuando constreñimiento y presión- y se preservan la favorece a unos a expensas de los demás. igualación social, de condiciones y derechos, En esta etapa, se piensa el orden normativo a través de relaciones de reciprocidad, respeto como producido activa y conscientemente entre mutuo y cooperación entre pares. La preser- pares en condiciones de igualación. Asimismo, vación del orden social y normativo no depende las condiciones sociales de vida se juzgaran bajo ya de relaciones heterónomas fundadas en un un principio de equidad de los miembros de principio jerárquico de autoridad sino que es un orden social, en función de las necesidades, construido activa y participativamente en la capacidades y posibilidades determinadas por cooperación entre pares. En tal sentido, prima la circunstancias ajenas a la decisión y voluntad atribución de responsabilidad colectiva ya que individual. El responsable deja de ser individual las circunstancias sociales ajenas a la voluntad y para pasar a ser colectivo. decisión individual son consideradas. Siguiendo En suma, de acuerdo con las investigaciones a Juan Carlos Marín (2011): experimentales sobre la construcción del juicio moral, desarrolladas por la Escuela de Epistemo- Si la justicia retributiva evoluciona hacia la logía Genética de Jean Piaget, podemos encontrar observación de un responsable individual en las sociedades contemporáneas (producto sustentada en una mirada de lo social escin- del desarrollo sociogenético) dos concepciones dida en unidades independientes, la justicia diversas de la justicia, las cuales dan forma a distributiva propone un modelo relacional modos diversos de reflexión moral sobre los que permite evaluar la acción individual en el hechos y acontecimientos sociales que afectan la contexto de las condiciones o circunstancias propia situación de vida. sociales propiciadas por un estado dado de Por un lado encontramos una concepción de interrelaciones sociales (p.17). la justicia retributiva, según la cual el compor- tamiento humano es evaluado en función de su Por último y siguiendo los postulados de Jean adscripción o transgresión a la norma y desen- Piaget, el desarrollo de una u otra no es lineal, cadena necesariamente una sanción positiva o de hecho pueden coexistir, operando juntas. Sin negativa según corresponda. Es decir, cada hecho, embargo Piaget atestigua, desde un punto de acontecimiento, fenómeno que afecta positiva o vista genético-evolutivo, que la noción de justicia negativamente, favorable o desfavorablemente la retributiva es más primaria que la distributiva, vida social en general, y a sus propias situaciones tanto a nivel psico como sociogenético; así de vida en particular, es evaluado moralmente, como Durkheim sostiene que la primacía de un juzgado como el necesario y correspondiente derecho penal corresponde a las etapas más tem- premio o castigo. En esta lógica reflexiva, los pro- pranas de la organización social. A la vez que cesos suceden para retribuir inexorablemente, dentro de esta noción retributiva, la atribución más tarde o más temprano, la propia conducta, de “responsabilidad” a la acción individual expresan una sanción moral, y en tal sentido, intencional y consciente -responsabilidad cada quien se asume como responsable de lo que subjetiva- expresa una etapa de la concepción de haya sucedido, lo cual implica una concepción de la responsabilidad. Sin embargo, no es la más pri- justicia de carácter meritocrática. maria; es relativamente tardía históricamente En las etapas anteriores a la de justicia social hablando. Está precedida por la concepción más distributiva, incluso en la etapa de concepción primaria de la responsabilidad objetiva de las moral retributiva, la norma es pensada como in- sociedades primarias, totémicas, de solidaridad tangible e inmutable, originada en la autoridad mecánica. Pero por supuesto, es un estadio inter- y sólo modificable por la identidad que detenta medio. La noción de responsabilidad individual, el poder. En tal sentido la norma se impone reifi- “subjetiva” e “intencional” surge, en sociedades cadamente con exterioridad a la conciencia caracterizadas por procesos crecientes de divi- subjetiva, a través del constreñimiento y la sión social del trabajo y se corresponde con el presión que ejerce una autoridad que se res- proceso de autocentramiento, individuación/ peta unilateralmente. Prima la atribución de diferenciación individual propio de sociedades responsabilidad individual, (no objetiva) o sub- complejas funcionalmente interdependiente jetiva, haciendo inobservable las condiciones (Durkheim, 2001; Elías, 2008). En suma, es evo- diferenciales de configuración de todo compor- lucionada en relación a siglos de historia con pre- tamiento individual. Expresiones tales como “se dominio de otra noción, y primaria, en relación lo merece”, “por algo será” y “algo habrá hecho” a las concepciones más avanzadas, recientes, de ilustran con nitidez la lógica involucrada en la carácter democrático, que postulan igualación y concepción de una justicia retributiva inmanente equidad y que se corresponden con una noción de responsabilidad subjetiva. de responsabilidad social/colectiva; algunos En cambio la justicia distributiva es propia ejemplos podemos encontrarlos durante el de etapas más tardías de desarrollo cognitivo. siglo XVIII (Revolución Francesa), el XX con los Se desplazan las relaciones propias de la impo- movimientos socialistas y la Revolución Rusa, etc. sición de una autoridad trascendente -de Lo que refleja que no existe una moral unívoca ni

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 29 ] a nivel social ni a nivel individual, sino órdenes desarrollo de un juicio moral autónomo. normativos en pugna en una misma formación En una formación social coexisten y se con- social, en un momento histórico determinado, frontan órdenes normativos, cuyo origen cuyo origen temporal es diferencial. Siguiendo a se vincula a estructuras de relaciones Muleras (2013): sociales de distinto carácter, surgidos con temporalidades diferentes en el desarrollo La identidad moral es la resultante de una histórico de las formaciones sociales (Elías, compleja construcción que evoluciona aso- 1989). (p.18) ciada a la transformación del carácter de las interrelaciones sociales características En síntesis, el precedente apartado nos permite de cada etapa de la vida de un ser humano analizar no sólo si en las concepciones morales y de la historia de las formaciones socia- analizadas existe un predominio cultural en el les. Si las relaciones asimétricas de presión plano moral de una visión retributiva punitiva unilateral dan lugar a una moral ego- o, por el contario, una visión distributiva no céntrica y heterónoma, las relaciones punitiva, sino también cuáles de las distintas sociales de respeto mutuo, solidaridad y etapas evolutivas del juicio moral sobre lo penal cooperación -las relaciones sociales de expresan las concepciones morales del universo igualación- ejercen un papel nodal en el de trabajadores/as entrevistados/as.

Cuestión metodológica

n este apartado describiremos lo realizado mayor énfasis en las primeras. En este sentido, Ehasta este momento referido específicamente se tiene en cuenta que al ser una investigación de a la cuestión metodológica de la investigación. carácter exploratorio, deberá estar atenta a los En relación al diseño de investigación y técnicas emergentes. de relevamiento, la presente investigación se La técnica de investigación consistió en una caracteriza por ser de carácter exploratorio. cédula de entrevista estructurada que combina Pues, indaga un ámbito de la realidad social poco alternativas o preguntas precodificadas, propia de estudiado hasta el momento. En este sentido, las encuestas, y alternativas o preguntas abiertas procura constituir un acercamiento empírico al propias de las entrevistas en profundidad y la problema objeto de estudio con el fin de sentar entrevista de carácter clínico. Las entrevistas es- una base a partir de la cual poder formular nuevas tructuradas que se aplicarán buscan registrar preguntas y nuevas hipótesis que se propongan en empíricamente el conjunto de imágenes, creen- clave de explicación. cias, juicios, evaluaciones y apreciaciones sobre En esta primera etapa, el desarrollo de una las relaciones de poder y la justicia social en la investigación empírica no tiene ningún tipo Argentina, con el fin de lograr captar las represen- de pretensión verificativa, sino adecuado a la taciones del universo de estudio. Al mismo formulación más precisa de los interrogantes tiempo, interesa poder rastrear la relación que e hipótesis de partida. Adentrados en un nuevo se establece entre dichas representaciones y el campo de estudio, que toma como objeto la rela- conjunto de características sociodemográficas, ción que se establece entre la psicogénesis y la familiares, sociocupacionales, educativas, cultu- sociogénesis de la identidad moral de diversos rales, económicas y afectivo-emocionales de los trabajadores/as de la industria pesquera de entrevistados, que permitirá identificar los fac- Mar del Plata, se entiende que el desarrollo de tores explicativos de la diversidad representativa. una investigación empírica de base permitirá La versión final quedó compuesta de 12 módulos: avanzar en la especificación conceptual de di- mensiones de análisis y en la identificación de ◊ Inserción sociocupacional/proceso de trabajo los correspondientes observables empíricos. ◊ Historia ocupacional Para alcanzar satisfactoriamente los objetivos ◊ Conflictos laborales formulados, diseñamos una propuesta metodo- ◊ Identidad emocional sobre inserción lógica que triangula técnicas cualitativas y cuan- sociocupacional titativas de investigación social, aunque con

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 30 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar ◊ Concepción de justicia social (juicios La primera historia hipotética refiere morales y valores) textualmente: ◊ Concepción de causalidad de lo social (imagen/ factores explicativos del orden social) ◊ En la prensa periódicamente aparecen noticias ◊ Representaciones del poder en Argentina; sobre adultos que abusan sexualmente de niños ◊ Representaciones de la justicia penal vecinos del mismo barrio, y de vecinos que ◊ Grado de conciencia social y política; indignados incendian la vivienda del abusador. ◊ Dimensión religiosa ◊ Dimensión afectiva-emocional / identidad La segunda: subjetiva ◊ Identidad sociodemográfica y sociocupacional. ◊ También aparecen noticias sobre motochorros “cagados a piñas” por transeúntes que pasan Los módulos analizados en la presente inves- por la calle cuando se los pesca “in fraganti” tigación son el 1, 5, 6, 8 y 12. (robando carteras, billeteras, celulares, etc.). El módulo que indaga las cuestiones sociodemo- gráficas y ocupacionales está constituido por un Ante ambas historias hipotéticas preguntamos conjunto de preguntas que desde el Programa textualmente: ¿Para Ud. la reacción de los vecinos P.I.Ca.So se viene trabajando desde hace más “Está bien” o “Está mal”? de 20 años. La mayoría de las preguntas fueron Por ultimo pedimos nos explicitaran cuáles elaboradas teniendo como referencia la Encuesta son los argumentos de justificación o cuestio- Permanente de Hogares (EPH). namiento moral de estas acciones. Esto es, pre- El módulo que indaga el juicio moral sobre la guntamos ¿Por qué? ante la evaluación positiva o justicia penal se realizó específicamente para la negativa, según sea el caso. presente investigación, con lo cual sus preguntas En relación al proceso de “operacionalización” son la primera vez que se aplican. Busca indagar de las variables podemos adelantar que el cri- en qué medida el universo de estudio expresa terio de agrupamiento de las respuestas en rela- el juicio moral dominante correspondiente a ción a la evaluación positiva o negativa ante las una noción retributiva de la justicia, a partir historias hipotéticas de acciones de violencia de diversos indicadores que dan cuenta de las colectiva punitiva, se encuentra intrínsecamente representaciones vinculadas a la justicia penal, ligado a las formas clásicas de concebir las pero específicamente indagando sobre las opi- formas de castigo. Para ello agrupamos las niones en lo referente a hechos hipotéticos respuestas en relación a diversos modos de de “justicia por mano propia”. Se compone de concebir la justicia penal, fundamentados a preguntas con respuestas pre-codificadas, pre- nivel teórico en los autores mencionados en guntas de respuesta abierta e historias hipotéticas la primer sección (Elías, 1988; Piaget, 1984; que se le plantean a la entrevistada y se le solicita Garland, 1990, 2005; Zaffaroni, 1989; Pegoraro, su opinión al respecto6. 2003, etc.). Es decir, intentamos abarcar, en La primera historia hipotética relata un acto estos tres agrupamientos, los principales marcos de abuso sexual y el segundo un robo reflejo descriptivos e interpretativos del castigo como de la criminalidad callejera, amateur. Esto es expresión moral. Asimismo la descripción y así porque nos parece importante diferenciar análisis de los distintos agrupamientos -concep- la justificación o cuestionamiento moral en su ciones morales- se realizará en términos de la vinculación con la evaluación de la gravedad Escuela Epistemológica de Piaget, buscando social de un tipo de delito determinado, y en pesquisar en qué etapa del desarrollo del juicio consecuencia, con el daño ocasionado y el senti- moral se encuentra/n. miento provocado que él mismo produce. En En relación a los criterios de selección mues- definitiva, nos preguntamos ¿en qué medida tral, el instrumento se aplicó en una muestra no los/as entrevistados/as relacionan de manera probabilística definida por cuotas intencionales proporcional el tipo de delito con un determinado del universo de trabajadores/as de la industria castigo? Asimismo, en ambas historias el castigo del procesamiento de pescado/filet de Mar del que se relata, la acción colectiva de violencia Plata. Se aplica una muestra no probabilística punitiva, se caracteriza por ser una acción ya que, por tratarse de un estudio exploratorio, directa, es decir se trasgrede la normatividad por la precariedad y flexibilización laboral y lo (jurídico-penal) vigente. llamativo de no contar con estadísticas actua- lizadas sobre la mano de obra ocupada -la realización del último censo en el año 1996- , desconocemos a priori el total de universo de trabajadores en la rama del filet lo que impide que todos los trabajadores/as tengan una proba- bilidad conocida de quedar incluidos en la 6 Esta forma de pregunta se deriva del método aplicado por muestra. En tal sentido, se emplea un método Piaget en sus investigaciones (1984a). de muestreo sin probabilidad, en el cual La clave

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 31 ] para la configuración de la muestra está constituida significativos. En definitiva, diseñamos una por los criterios conceptuales que el investigador/a muestra de carácter intencional por cuotas de considera teóricamente relevantes y pertinentes entrevistados/as según los siguientes criterios: para seleccionar una muestra de entrevistados ocupación en la empresa/ sexo/ tamaño de la (Muleras, 2008: 369). Estos criterios permiten empresa como indicador asociado a distintas definir cuotas de entrevistados/as que cumplan formas de contratación laboral y explotación de con determinados requisitos estimados como la fuerza de trabajo.

I. Cuadro de entrevistas realizadas por cuota. Ocupación según sexo y tamaño/tipo de empresa.

Tipo de Emprelijador Calibrador/ Línea de Sexo Envasadora Filetero Peón Operario Despinadora Total empresa de raya tareas varias producción Empresa 8 12 1 2 22 Varón S.A. Cooperativa 14 7 1 2 24 Total 22 19 2 2 2 47 Empresa 21 3 1 1 4 31 Mujer S.A. Cooperativa 6 4 1 4 15 Total 27 7 1 1 1 8 45 Totales 27 29 20 3 2 1 8 2 92

Fuente: Relevamiento en terreno en empresas de procesamiento del pescado. Empresas: Mardi S.A y Solimeno, Cooperativas: Sueños del Mar, San Francisco y Argentina Frozen Fish. Diciembre de 2015.

Las entrevistas fueron realizadas a un total palabras, los/as entrevistados/as se seleccionaron de 92 trabajadores de la rama del filet, de las azarosamente teniendo dentro de las cuotas cuales 47 fueron realizadas a hombres y 45 a proporcionales cantidades de hombres y mujeres. mujeres. A su vez, 53 de las entrevistas fueron En relación al trabajo en el campo, hasta el realizadas en empresas formalizadas y 39 en momento se abordaron aproximadamente ocho cooperativas. En lo que refiere a las ocupaciones, empresas y cooperativas, con la realización de 92 27 de los trabajadores/as entrevistados/as son entrevistas. envasadoras, 29 son fileteros/as (22 hombres y 7 Antes del día del relevamiento se realizó una mujeres), 20 son peones (19 hombres y una mujer), capacitación dónde brindábamos recomen- 8 son despinadoras, 3 son operarios (2 hombres y daciones generales en torno al instrumento y la 1 mujer), 2 son emprelijaradores, 2 se ocupan de la situación de entrevista. El trabajo de campo se línea de producción y 1 es calibradora. realizó en diciembre de 2014. En este mes, los días A pesar de tratarse de una muestra exploratoria de relevamiento fueron dos, con jornadas de ocho no probabilística, una vez estipuladas las cuotas horas aproximadamente cada uno. En cada uno de de entrevistas a realizar en terreno, optamos por los cuatro encuentros fuimos aproximadamente un método sistemático de selección de los/as un total de 10 encuestadores. Tanto el diseño entrevistados/as, construyendo un criterio lo más del instrumento a aplicar en el relevamiento en azaroso posible. En concreto, la metodología de terreno como la realización del relevamiento se selección consistió en: recorreré la fila seleccio- llevó a cabo con el Equipo UBACYT y el Equipo nando un entrevistado/a cada dos. Es decir, desde UNMdP bajo la dirección de Edna Muleras, un primer trabajador/a sorteado al azar, cada dos directora de la presente investigación. trabajadores se seleccionaba uno de cada sexo. En El relevamiento en terreno en las empresas y caso de rechazó a la realización de la entrevista se cooperativas, fue durante el proceso de trabajo seleccionó la persona inmediatamente siguiente. y descanso dependiendo la ocupación del traba- En el caso de los fileteros/as, las despinadoras, jador. La encuesta la realizamos durante el pro- envasadoras y emprolijadores que se encuentran ceso de trabajo a todos los trabajadores cuyas trabajando en la fila de proceso del pescado fue ocupaciones no. Este criterio se basó en el riesgo más sencillo. Realizábamos el conteo sin interrum- que implica la necesidad de concentración para pir el proceso de trabajo. En el caso de los/as responder y el trabajo con cuchillo en mano, trabajadores/as que no se ocupaban de filetear características propias de la ocupación del armábamos la fila mecánicamente. En otras filetero/a.

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 32 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Por último, la construcción de la base de datos La base empírica corresponde a la realización y el análisis de datos cuantitativos es de tipo de una base de datos mediante el relevamiento estadístico mediante la aplicación del programa que nos permitió analizar y reconstruir los prin- informático de procesamiento de estadísticas cipales rasgos y elementos que nos permitieron sociales (SPSS). El análisis cualitativo se realizó acceder a las auto-representaciones que portan mediante la lectura y sistemática de las trans- los fileteros/as en relación su situación laboral cripciones textuales. y de vida así como a las representaciones de la justicia social y la justicia penal.

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 33 ] Bibliografía

Abduca, L; Ainora, J; y Peréz, V. (2010). El cuerpo, Marín, J. (2013). Proyecto UBACYT programa de territorio de poder. Buenos Aires: Colectivo investigaciones de cambio social. IIGG, UBA. Ediciones PI.Ca.So Disponible en: http:// Muleras, E. (2008). Sacralización y desencanta- antroposmoderno.com/word/libro-El%20 miento. Las formas primarias del conocimiento cuerpo%20(final)%5B1%5D.pdf del orden social. Buenos Aires: Ediciones Miño Bombini, G. (2008). De la criminología a la sociología y Dávila. jurídico-penal. Breve recapitulación epistemológica ------(2013). Pedagogía de la desobediencia a en torno a la ‘cuestión criminal’. Documento de la inhumanidad del orden social. La construcción Cátedra, Materia Criminología, Facultad de de una reflexión para la acción. España: Edición Derecho, UNMdP. Disponible en http://www. Académica Española. criminologiamdp.com.ar/catedra.html Pegoraro, J. (2003). “La trama social de las Durkheim, E. (2001). La división del trabajo social. ilegalidades como lazo social”. Sociedad, Nº Madrid: Ediciones AKAL. 22, agosto. Revista de la Facultad de Ciencias Elías, N. (1989, 2008). El proceso de la civilización. Sociales - UBA. México: Fondo de cultura económica. Piaget, J. (1932, 2001). La representación del mundo Garland, D. (1999). Castigo y sociedad moderna. en el niño. Madrid: Edición Morata. México: Siglo XXI. ------(1971, 1984). El criterio moral en el niño. ------(2005). La Cultura del Control. Delito y Barcelona: Ediciones Martínez Roca. Orden Social en la Sociedad Contemporánea. Pratt, J. (2006). Castigo ostentoso y emotivo. Santa Barcelona: Gedisa. Fe: Delito y Sociedad. Santa Fe: UNL Ediciones. Marín, J. et al. (2011). La representación de lo real Tilly, C. (2007). Violencia Colectiva Barcelona: y su diversidad [fragmentos bibliográficos]. Editorial Hacer. Argentina, Universidad Nacional de Mar del Zaffaroni, E. R. (1988).Criminología. Bogotá: Temis. Plata: Documento del Seminario/taller de ini- Zaffaroni, E; Slokal, A y Alagia, A. (2000). ciación a las prácticas de investigación social. Comentario a derecho penal. Parte general. Manuscrito no publicado. Buenos Aires: Ediar.

María Belén Muñiz Oller | Un acercamiento hacia las herramientas conceptuales y metodológicas... [ 34 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 21-34 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar ¿Y el género en la seguridad social argentina durante los gobiernos kirchneristas? Estudio sobre las implicancias de la Asignación Universal por Hijo y el Plan de Inclusión Previsional

Virginia Noemí Alonso (Argentina) Institutos Multidisciplinarios - UNCuyo - CONICET [email protected]

Tatiana Marisel Pizarro (Argentina) IISE – UNSJ – CONICET [email protected]

Fecha de recepción: 30-09-2016 Fecha de aceptación: 01-02-2017

Resumen Abstract l presente artículo busca analizar las impli- he current article is intended to analyze the Ecancias de las transformaciones del Sistema Timplications of the transformations of the de Seguridad Social Nacional mediante la National Social Security System by means of the consideración de los efectos de la Asignación consideration of the effects of the Asignación Universal por Hijo y del Plan de Inclusión Universal por Hijo and the Plan de Inclusión Previsional en las relaciones de género. Para Previsional in gender relations. Hence, a ello, se adopta un enfoque teórico que permite theoretical approach is adopted which allows abordar el estudio de estos cambios durante los to tackle the study of those changes during the gobiernos kirchneristas desde una perspectiva Kirchnerist administrations from a gender de género. Y se realiza la indagación mediante la perspective. And the inquiry is conducted through utilización de la técnica de análisis documental the use of the document analysis technique y de datos estadísticos oficiales. De esta manera, and of official statistical records. In this way, gracias a la inspección de documentos oficiales, thanks to the inspection of official documents, a través de esta metodología, y al diálogo con through this methodology, and to the dialogue estudios sobre los efectos de ambas medidas with studies on the effects of both measures on en la población beneficiaria, los resultados del the benefited population, the results of the work trabajo permiten entender los aspectos positivos permit to understand the positive aspects of these de estas modificaciones. Asimismo, plantea las modifications. Likewise, it poses the limitations limitaciones de la seguridad social para el logro de of social security for the attainment of more relaciones de género más simétricas y equitativas. symmetrical and equitable gender relations.

Palabras clave: Asignación Universal por Keywords: Asignación Universal por Hijo, Hijo para Protección Social, Plan de Inclusión Plan de Inclusión Previsional, Gender. Previsional, Género.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 35 ] Introducción

ras la consolidación del enfoque neoliberal en efectos de la Asignación Universal por Hijo (AUH) Tla política social argentina y sus consecuencias y el Plan de Inclusión Previsional (PIP) en las negativas para el bienestar de la población en relaciones de género. Para alcanzar este propósito general y de las mujeres en particular, durante los se persiguen dos objetivos específicos. El primero gobiernos kirchneristas (2003-2015) se produjeron aspira a identificar los efectos que la AUH puede transformaciones con vistas al mejoramiento de generar en términos de igualdad/desigualdad de la protección social. En el caso de la seguridad género y en la autonomía económica. Mientras social, dadas las características innovadoras y/o que el segundo es interpretar las implicancias las pretensiones de superación de la impronta del PIP en las amas de casa beneficiarias como neoliberal, diversas investigaciones se volcaron a producto de una externalidad positiva de la ley o analizar los sentidos que suponían estos cambios, un reconocimiento en el ámbito de la protección la resignificación que aparejaban y los efectos social del valor del trabajo de reproducción que sobre la población beneficiaria. En esta dirección, se realiza al interior de los hogares. el presente artículo busca contribuir a ese debate El abordaje de estos objetivos se efectúa mediante al estudiar estas modificaciones en la seguridad el uso de la técnica de análisis documental para social desde el enfoque de género. el tratamiento de ambas medidas. A través de Si bien estos cambios no han incorporado, la interpretación de estos documentos desde el en forma explícita, una perspectiva de género enfoque de género junto con la consideración de que atienda a los efectos de la política sobre las datos estadísticos oficiales y estudios respecto desigualdades entre varones y mujeres, dado a los efectos sobre la población beneficiaria, se que se entiende que el accionar estatal influye da tratamiento a los propósitos del estudio y se siempre sobre las relaciones de género -ya sea pretende comprender la dimensión de género de una forma deliberada o no-, para este trabajo implícita en ambas medidas. se han seleccionado aquellas medidas que han A continuación de esta introducción, en entrañado, con su ampliación de la cobertura, la segunda sección se presenta el enfoque una titularidad predominantemente femenina. teórico metodológico del estudio. La siguiente Éstas han supuesto el incremento significativo sección describe brevemente la evolución y de la inserción femenina dentro de la seguridad las características de la seguridad social para social, pero que ante la carencia del enfoque mencionar sus implicancias de género. Luego, mencionado suponen efectos no esperados. en el cuarto apartado se analiza la Asignación De esta manera, el objetivo general de este Universal por Hijo y en el próximo, el Plan de artículo es analizar las implicancias de las trans- Inclusión Previsional. Finalmente, se da cierre al formaciones del Sistema de Seguridad Social trabajo mediante exposición de las principales Nacional mediante la consideración de los conclusiones.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 36 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Acerca del enfoque teórico-metodológico del estudio

al como se dijo en la introducción, el presente de las políticas públicas, tanto en el ámbito Ttrabajo se realiza desde la perspectiva de los público como en el privado (Levín, Campostrini, estudios de género. Éstos se centran en el análisis Sosa y Voras, 2007). De este modo, según el efecto de las relaciones de poder que existen entre de género presente en las distintas acciones del mujeres y varones, entendiéndolas como social Estado, se refuerza o debilita la estructura gené- e históricamente construidas (Gamba, 2009). rica tradicional (Levín et al., 2007). Al respecto, se De acuerdo a este encuadre, la desigualdad de pueden mencionar distintos efectos de las polí- género se presenta como una cristalización de ticas públicas según su relación con la división estas relaciones y remite, conforme a lo postulado sexual del trabajo vigente en la esfera privada y por Varella Martí (2001), a las posiciones sociales pública, en tanto esta división se encuentra en el asimétricas que ocupan las mujeres en relación núcleo de los procesos de estructuración social y a los varones en las distintas esferas de la vida explica las desigualdades de género presentes en social. Esta desigualdad llevada al ámbito del nuestras sociedades. mercado de trabajo -una de las esferas centrales Para ello, se toman las reflexiones de Varella en nuestras sociedades- es visible en la asimetría Martí (2001) que identifica tres tipos de efectos: de las tasas relativas a la participación económica reproductor, compensador y transformador. El de mujeres y varones, en la segregación horizontal primero no realiza cambios a la división sexual u ocupacional, en la segregación vertical, en las del trabajo, reproduce los procesos de estructu- diferencias salariales y en las desiguales condi- ración social y, por lo tanto, las desigualdades ciones laborales (Mayordomo y Domínguez, 2006). de género. El segundo, implica la compensación Este enfoque explica la desigualdad mediante en las desigualdades en la medida que posibilita la incorporación de factores externos al mercado una cierta emancipación de las mujeres gracias laboral, pero que lo atraviesan y están presentes a la autonomía otorgada, pero no realiza modifi- en su funcionamiento, haciendo hincapié en la caciones en la división sexual del trabajo. Y el relación existente entre el Estado, la familia y tercero implica cambios en esta división gene- el mercado. Para esto, se vale del concepto de rando transformaciones en las relaciones de división sexual del trabajo entendido, grosso género desde formas asimétricas y desiguales modo, como la atribución del trabajo productivo hasta formas simétricas y equitativas. a los varones y la atribución del trabajo doméstico Respecto al concepto de autonomía económica no remunerado reproductivo a las mujeres1, a de las mujeres, en este estudio se plantea una pesar que cada vez son más numerosas las que definición acotada al entenderla comola capacidad quieren insertarse y permanecer en el mercado de las mujeres de generar ingresos y recursos propios laboral (Hirata y Kergoat, 1998). a partir del acceso al trabajo remunerado en igualdad A su vez, cabe destacar que, según Kergoat y de condiciones que los hombres (Observatorio de Hirata (Hirata y Kergoat, 1998 y Hirata, 2000), si Igualdad de Género de América Latina y el Caribe, bien la división sexual del trabajo no es inmutable 2016). Y otro concepto más amplio de autonomía y se transforma en tiempo y espacio, en todas se lo asocia a la capacidad de acceder a bienes y partes y en todos los tiempos el “valor” distingue servicios necesarios para satisfacer necesidades al trabajo femenino del trabajo masculino. Dicho y deseos en manera independiente a través de “valor” induce una jerarquía social. De este diversas formas: participación en el mercado modo, valor y principio de jerarquía permanecen de trabajo, propiedad de activos económicos, inmutables bajo múltiples apariencias: el trabajo de distribución de recursos al interior del hogar, un hombre pesa más que el de una mujer (Hirata y acceso a recursos mediante intervenciones públi- Kergoat, 1998:142). cas, entre otras (Esquivel, 2012). En cuanto al papel del Estado, éste incide en la Teniendo en cuenta este enfoque conceptual, modelación de las relaciones de género a través el análisis de las dos medidas de seguridad social también se valdrá de conceptos específicos que 1 La división sexual del trabajo estructura las relaciones permitirán precisar con mayor profundidad las de género en todas las sociedades y establece una división implicancias de género de la AUH y el PIP. En el naturalizada de las áreas reproductivas asignada a las caso del estudio de los efectos de la Asignación mujeres, y de las productivas a los hombres. El trabajo no Universal por Hijo en las relaciones de género remunerado realizado para la reproducción social y las tareas del cuidado adquieren la categoría de no trabajo y se adopta la propuesta analítica planteada por son marginados como objeto de estudio por la economía. Rodríguez Enríquez (2011) en su trabajo sobre (Carrasco; 2001). los Programas de Transferencia Condicionadas

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 37 ] de Ingreso (PTC) en América Latina2. La autora que éste es el que establece la división entre trabajo ofrece un marco para abordar las implicancias remunerado “productivo” y trabajo doméstico de estos programas en la situación de las mujeres no remunerado “reproductivo” -generalmente y la igualdad de género. En este trabajo se toman asignado a la mujer- (Fraser, 1997:31). Estos cuatro dimensiones de este marco: contextos tienen como resultado una

◊ base del derecho al beneficio y titularidad; estructura político-económica que genera ◊ magnitud de beneficio modos de explotación, marginación y pobre- ◊ características de las condicionalidades; za, específicos de género. […] Cuando se ◊ implicancias de los PTC para la distribución mira desde este punto de vista, la injusticia del trabajo productivo y reproductivo. de género aparece como una especie de la injusticia distributiva que exige a gritos la A su vez, la autora hace hincapié en la necesidad redistribución” (Fraser, 1997:32). de reflexionar desde un enfoque de género sobre la forma en que se relacionan estos programas De este modo, la autora pregona la visión crítica con los sistemas de protección social. ante medidas sociales que deberían promover la Por otro lado, para analizar las implicancias plena e igual participación de las mujeres a la par del Plan de Inclusión Previsional bajo un enfo- con los hombres, en todas las esferas de la vida social que de género se indaga esta medida a la luz -en el trabajo, la política, la vida asociativa de la de la relación bidimensional reconocimiento- sociedad civil- (Fraser, 1997:68). redistribución planteada por Nancy Fraser3. La En cuanto a la metodología y fuentes de autora postula que el género tiene dimensiones información, este trabajo se realiza mediante político económicas debido a que es un principio la técnica de análisis documental. Al estudio de de la estructuración de la economía política en el los documentos oficiales relativos a la creación y aplicación de la AUH mediante el esquema 2 La creación de esta medida suscitó distintas formas de analítico planteado, se suma el análisis docu- comprenderla. En este trabajo se adopta la postura de aque- mental del PIP consistente en el contraste de llos/as autores/as que la entienden como un programa de transferencia condicionada de ingreso, aún teniendo en los fundamentos explícitos en su normativa y cuenta que su incorporación al componente no contributivo presentación con el estado actual de la situación del sistema de seguridad es una diferencia que la separa de según datos oficiales. A través de la interpretación otros de estas características. Para un desarrollo más pro- de estos documentos desde el enfoque de género fundo véase la cuarta sección. junto con la consideración de datos estadísticos 3 Para contextualizar la realidad en la que se da esta rela- ción, Nancy Fraser presenta dos nociones de injusticia: oficiales y estudios respecto a los efectos sobre la socioeconómica -enraizada en la estructura político- la población beneficiaria, se da tratamiento a los económica de una sociedad- y la cultural o simbólica objetivos de este análisis. -enraizada en los patrones sociales de representación, Con esto se pretende comprender la dimen- interpretación y comunicación-. La autora plantea que la sión de género implícita en ambas medidas, injusticia socioeconómica incluye la explotación (es decir, la apropiación del usufructo del trabajo propio en beneficio de otros); entendiendo que el Estado tiene un papel fun- la marginación económica (esto es, el verse confinado a trabajos damental en la reproducción o transformación mal remunerados o indeseables, o verse negada toda posibilidad de la desigualdad que suponen este tipo de de acceder al trabajo remunerado); y la privación de los bienes relaciones. Para ello, y antes de pasar al análisis materiales indispensables para llevar una vida digna (Fraser, pormenorizado de la AUH y PIP, en la próxima 1997:21). Mientras que la injusticia cultural o simbólica incluye la dominación cultural (estar sujeto a patrones de sección se hará un breve repaso sobre las interpretación y comunicación asociados con otra cultura y ser características del sistema seguridad social en extraños u hostiles a los propios); el no reconocimiento (hacerse los últimos años pretendiendo contextualizar las invisible a través de prácticas representativas, interpretativas medidas que se estudiarán y brindar elementos y comunicativas de la propia cultura); y el irrespeto (ser ca- para comprender su relevancia dentro de lumniado o menospreciado habitualmente en las represen- taciones culturales públicas estereotipadas o en las interacciones este sistema y su importancia para nuestra cotidianas) (Fraser, 1997:22). indagación.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 38 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Los derroteros de la seguridad social y las implicancias de género

l concepto de seguridad social remite usual- Así, concluye que Emente al conjunto de programas y políticas, llamados seguros sociales, que busca cubrir a las los seguros sociales en América Latina se personas ante determinados riesgos asociados a constituyen en una expresión de la desigual- la probabilidad de ocurrencia de algunos hechos dad que impera en la región y que deriva en (Centrángolo, 2009). Como indica Centrángolo una parte sustantiva de la dinámica de los (2009), entre estos riesgos aparecen la pérdida de mercados laborales. La desigualdad se pone ingresos o los shocks de gastos vinculados al retiro de manifiesto en dos elementos principales: en la vejez, la invalidez, accidentes, entre otros. 1) la exclusión de contingentes importantes En el caso de la Argentina, y para precisar los de la población de la cobertura de estos alcances del estudio, se considera al Sistema cuerpos centrales de la protección social; y 2) de Seguridad Social Nacional constituido por la estratificación en el nivel de los beneficios, el Sistema Único de la Seguridad Social (SUSS) en la medida que los mismos reproducen la creado en 1991 y el Sistema Nacional del Seguro discriminación salarial del mercado laboral de Salud creado en 1988. Mientras este último (Rodríguez Enríquez, 2012:404). incluye al Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJyP) Al tener en cuenta estas precisiones respecto a y a las obras sociales nacionales, el SUSS está la conformación de la seguridad social en América conformado por el Subsistema Previsional, Latina, puede decirse que la consideración de el Subsistema de Asignaciones Familiares, el las reformas laborales y de la seguridad social Seguro de Desempleo y el Subsistema de Riesgos realizadas en la Argentina de los años noventa, de Trabajo. contribuyeron a reforzar las desigualdades seña- Respecto a las características de los sistemas ladas. Sin embargo, los cambios operados en los de seguridad social, Rodríguez Enríquez (2012) subsistemas de previsión social y asignaciones plantea que su principal particularidad ha sido familiares durante el siglo XXI intentaron correr su conformación bajo la lógica de seguros socia- en dirección contraria al extender la cobertura a les que, de manera predominante, han asociado segmentos hasta entonces excluidos, incorporar el acceso a los beneficios a cierta historia contri- prestaciones de carácter no contributivo y mejo- butiva vinculada al mercado laboral. Siguiendo rar el nivel de las prestaciones. Entre las medidas a la autora, se requiere de un empleo y de una adoptadas se puede mencionar: la Ley N° 25.994 contribución en relación al ingreso laboral para de Jubilación Anticipada en el año 2005, la Ley N° ser parte de la seguridad social. 24.476 de Moratoria Previsional, la Ley N° 26.417 De esta manera, en los esquemas de transfe- de 2008 de Movilidad Jubilatoria, la Asignación rencias monetarias contributivas, tales como la Universal por Hijo de la Protección Social (AUH) previsión social, el seguro de desempleo y las asig- implementada mediante Decreto N° 1.602/09, la naciones o subsidios familiares, el acceso y las Asignación por Embarazo (AUE) por Decreto N° características de los beneficios quedan asociados 406/11 y la Ley 26.970 de 2014. a la situación de las personas en el mercado de Gracias a estas modificaciones aumentó la trabajo. Es decir, el rendimiento de la seguridad cantidad de personas cubiertas por la seguridad social se determina por el funcionamiento de social, fundamentalmente debido a la inclusión este mercado (Rodríguez Enríquez, 2012). vía moratoria previsional y a la aplicación de la Según la autora, esto ha sido problemático en AUH (Lombardía y Domeniconi, 2015). A su vez, América Latina producto de: el gasto público ejecutado en la seguridad social casi se duplica entre 2003 y 2011, al pasar de ◊ Los altos niveles de trabajo asalariado no representar el 5,3% del PBI al 10% (Golbert, 2012), registrado y del empleo informal y se explica fundamentalmente por el incre- ◊ La manera en que los bajos niveles salariales mento del peso de los gastos en prestaciones afectan a los recursos sobre los que sustenta previsionales y asignaciones familiares, 2,9% y financieramente estos seguros 1% de aumento respectivamente. ◊ La discriminación de género en los mercados La lectura de estos datos nos permite com- de trabajo. prender en mayor medida las dimensiones del PIP y la AUH dentro de la seguridad social argen- tina en el presente siglo. Así, la ampliación de la cobertura que ha conllevado ambas medidas,

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 39 ] teniendo como principales titulares a las mujeres, a la discriminación laboral y a las características nos lleva a preguntarnos sobre sus implicancias de esta inserción) al excluir a las mujeres de en las relaciones de género en un sistema que ciertas posiciones dentro de estos sistemas o por ha estado estructurado alrededor de la figura el lugar que ocupan dentro de la estratificación del varón asalariado formal. Si bien este tipo de de beneficios, el análisis de las medidas objeto de estructuración ha reproducido la desigualdades este estudio buscará entender hasta dónde llegan de género en el mercado de trabajo (vinculadas los avances en la cuestión del género.

La Asignación Universal por Hijo para Protección Social4

Acerca de la medida4 el/la menor tuvieran documento nacional de identidad y que los/as menores concurrieran a fines de 2009 se implementó la Asignación establecimientos educativos públicos (desde los AUniversal por Hijo para Protección Social cinco a los dieciocho años) y cumplieran con los con el objeto de extender el alcance de las controles sanitarios. asignaciones familiares a aquellos sectores de De esta manera, expuesta brevemente la AUH, la población excluidos de este componente de resulta necesario aclarar que si bien con ella la seguridad social. Esta medida se formuló se daba lugar en la Argentina a un subsistema como una prestación monetaria no retributiva a no contributivo dentro del subsistema de asig- pagar mensualmente a un padre, madre, tutor/a, naciones familiares, esta medida conservaba curador/a o familiar (hasta el tercer grado de las características típicas y respondía a las consanguinidad) por cada menor de dieciocho años finalidades de los Programas de Transferencia e hijo/a con discapacidad (sin límite de edad) que Condicionada de Ingreso (PTC). Pues, la AUH se encontrara a su cargo, siempre que no estuviera ha sido una transferencia monetaria que se empleado/a, emancipado/a o recibiera alguno de ha realizado mediante condicionalidades y su los beneficios presentes en la Ley N° 24.714. Y, a aplicación se ha focalizado a la población enun- diferencia de las asignaciones familiares por hijo, ciada anteriormente y, a su vez, ha respon-dido el pago del beneficio se abonaría por cada hijo/a al objetivo que ha promovido a este tipo de con o sin discapacidad acreditado por el grupo programas en la región. familiar hasta un máximo acumulable al monto Tal como señala Rodríguez Enríquez (2011), equivalente a cinco menores. los PTC se han implementado en América Latina La extensión de asignaciones familiares se como modo de atender a las personas en situación aplicaría a hijos/as de las personas que se estu- de pobreza. Y en este sentido, el análisis del decre- vieran desocupadas sin seguro de desempleo o to de la AUH permite observar que su campo bien se desempeñaran en la economía informal, de acción se remitió a esta problemática en la fueran monotributistas sociales o trabajaran Argentina. Pues, según la letra de este decreto, con en servicio doméstico con ingresos iguales esta extensión de las asignaciones se pretendía o inferiores al Salario Mínimo, Vital y Móvil brindar un “paliativo” a la situación de pobreza (SMVM). De esta manera, quedarían excluidos en la que se encontraban aquellos sectores vulne- grupos de trabajadores/as que tampoco percibían rables que, a pesar de la política llevada a cabo por asignaciones familiares. Entre ellos se encontraban el Gobierno, estaban desempleados o trabajando el servicio doméstico con ingresos mayores al dentro de la economía informal. SMVM y el resto de los/as monotributistas. A su vez, la AUH ha cumplido con las tres carac- La percepción de esta transferencia también terísticas que comparten los PTC: transferencia suponía que el menor fuera argentino, hijo/a monetaria de ingresos, establecimiento de condi- de argentino/a o haber residido en el país por cionalidades y focalización. La forma en que han lo menos tres años, que tanto el titular como actuado las condicionalidades implicaba que el cobro total de las prestaciones monetarias no re- 4 La descripción y el análisis tanto de la Asignación Uni- tributivas estaba sometida al cumplimiento de versal por Hijo como de su relación con el resto de los componentes del subsistema de asignaciones familiares se las exigencias de asistencia escolar y la atención limita al recorte temporal 2009-2015, ya que es objeto de este sani-taria. Más especí-ficamente, los/as titulares estudio analizar cuáles fueron las implicancias de género del beneficio (en su gran mayoría mujeres) en la seguridad social dentro de las administraciones cobraban mensualmente el 80% del monto kirchneristas. Si bien las transformaciones realizadas previsto y el 20% restante cuando acreditaban el durante el gobierno de Mauricio Macri no han cambiado sustancialmente las características de la AUH, no es objeto cumplimiento de los requisitos sobre educación de este artículo la consideración de las modificaciones por y salud. Asimismo, la falta de acreditación impli- lo que éste se remitirá únicamente al periodo señalado. caba la pérdida del beneficio.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 40 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar La focalización del programa remite a la decir, la AUH no las convirtió en portadoras de definición de los/as sujetos/as para los que derechos propios, sino que derivó la posibilidad estaban destinadas estas transferencias: niños, de acceder a estos ingresos de la condición de niñas y adolescentes de familias excluidas de madre o tutora de los menores. las asignaciones familiares, pero cuyos padres, Dada esta característica de la forma de gestión, madres o tutores se encontraran en determinadas la proporción de mujeres titulares se incrementó posiciones laborales. Como ya se señaló existían con el transcurso del tiempo, pasando de 85% en grupos de trabajadores que quedaban fuera diciembre de 2009 a 97% en diciembre de 2015 de la AUH a pesar de no percibir asignaciones (Anses, 2016). De esta manera, la transferencia se familiares. A estos excluidos, Arcidiácono, Barre- realizó casi en su totalidad a las mujeres de los nechea y Strachnoy (2011) agregaron, con objeto grupos familiares. de señalar la ausencia de universalidad en la En cuanto a la magnitud del beneficio, la AUH se medida, a los privados de libertad (incluyendo per- presentó como ventajosa frente a otros programas sonas con discapacidad psicosocial), los migrantes que no consideraban la cantidad de hijos e hijas que no tengan residencia de al menos 3 años y pue- al momento de determinar el monto del beneficio. dan demostrarlo, aquellos que no tengan DNI y, Otro de los aspectos positivos correspondió a la sobre todo, quienes declaren tener un salario superior fijación del valor de la prestación en relación al al SMVyM (Arcidiácono et al., 2011:11). A su vez, el máximo monto de las asignaciones familiares. incumplimiento de los requisitos por parte de los/ Pero, a pesar de estas características, se as mayores también limita la universalidad de la observan aspectos negativos referidos a la AUH. Lo que concuerda con la idea de los PTC potencialidad de la AUH para la igualdad. Pues para los que existirían personas merecedoras y las titulares de la prestación, en el rol de adminis- no merecedoras del beneficio. tradoras de este beneficio para sus hijos, han Para concluir, se puede agregar que la AUH señalado las limitaciones del mismo en relación como PTC se focalizó en una población signifi- con las necesidades de los/as menores (Pautassi, cativa en cuanto a su tamaño. Dada su rápida Arcidiácono y Straschnoy, 2014). También, se implementación, en diciembre de 2009 Anses advierte la limitación de montos si se tienen en contabilizó más de 3.400.000 niños y niñas bene- cuenta los costos de adquisición de los servicios ficiarios/as y más de 1.900.000 titulares. Lo que de cuidado. equivalía, según datos oficiales, al 30% de los El tratamiento de la dimensión sobre las con- menores de 18 años del país. dicionalidades permite observar que eran las mujeres quienes resultaban responsables de ges- tionar el cobro de la AUH y del cumplimiento de La Asignación Universal por Hijo los requerimientos relativos a la salud y educa- desde una perspectiva de género ción de menores e hijos con discapacidad. Es necesario subrayar que mientras el programa En este apartado se analizan, siguiendo la pro- responsabilizaba a las madres y tutoras, éste no puesta de Rodríguez Enríquez (2011), los posibles preveía ningún mecanismo que afirmara las res- efectos de la AUH sobre las relaciones de género y ponsabilidades de los padres respecto al trabajo re- la desigualdad entre varones y mujeres, mediante productivo, recayendo sobre las mujeres el peso de la consideración de las distintas dimensiones del las condicionalidades que se ejercían de manera enfoque analítico5. punitiva. En este sentido, las mujeres perdían la Respecto al derecho al beneficio y titularidad, y percepción mensual ante el incumplimiento de tomando como base la Ley de Protección Integral algunas de las exigencias planteadas. de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes La última dimensión es la de las implicancias (Ley 26.061), el decreto de la AUH estableció que de la AUH para la autonomía económica de la percepción del beneficio tenía como sujeto de las mujeres y para la distribución del trabajo derecho a los menores y a los hijos e hijas con productivo y reproductivo. En este sentido, se discapacidad de grupos familiares de los sectores advierte el refuerzo simbólico que hace de los vulnerables de la población. Y se delimitó, como mandatos socialmente construidos para varones ya se ha visto, a estos grupos vulnerables en y mujeres -vinculados a la división sexual del situación de pobreza según la inserción laboral trabajo- y de las responsabilidades relativas de los padres, las madres o mayores a cargo. butivo. En tanto mientras para el primero el Estado otorga En este contexto, eran las mujeres, en su calidad la prioridad de la titularidad para las mujeres, para el de madres o tutoras, las titulares prioritarias segundo las familias tienen mayor posibilidad resolver de la prestación en el caso de que los padres esta titularidad. Al respecto, cabe mencionar que si bien el compartieran la custodia de los hijos e hijas6. Es Decreto 614/2013 del Poder Ejecutivo Nacional introdujo un cambio en el subsistema contributivo al plantear que el 5 Estas dimensiones son: a) base del derecho al beneficio y pago de las asignaciones familiares se hará a las mujeres titularidad; b) magnitud de beneficio; c) características de independientemente del integrante del grupo familiar que las condicionalidades; d) implicancias de los PTC para la genere el derecho al cobro de la prestación, el cobro efectivo distribución del trabajo productivo y reproductivo. por parte de las mujeres suponía un trámite por parte de 6 En esta dimensión se plantea una diferencia entre el éstas para realizar el traspaso, en el caso de que Anses no subsistema no contributivo relativo a la AUH y el contri- contara con sus datos.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 41 ] al trabajo de cuidado. Y, se encuentra que el sentido amplio también resulta problemático en refuerzo simbólico del rol de cuidadora y el tanto se plantean distintas aristas de análisis. Por aumento del trabajo reproductivo que conlleva la un lado, tal como postulan Pautassi, Arcidiácono AUH, en ausencia de mecanismos que permitan y Straschnoy, las receptoras no siempre identifican la conciliación entre trabajo productivo y repro- la titularidad femenina como un problema en sí ductivo, podría funcionar como un escollo o des- mismo; por el contrario, del trabajo de campo surge aliento a la inserción laboral de las titulares. una valoración positiva con relación a su impacto Distintos estudios permiten arrojar luz sobre en términos de la autonomía que implica percibir los efectos en el comportamiento de la pobla- un ingreso propio (2014:68). De esta manera, las ción beneficiaria con relación al mercado de mujeres sienten que la posibilidad de contar trabajo. Al respecto, Maurizio y Vázquez (2014) con un ingreso propio las empodera frente a sus concluyen que los efectos a corto plazo -un año parejas más allá de que este ingreso esté desti- de su implementación- no mostraron desincen- nado a sus hijos/as. Pero, por otro lado, como se tivos importantes ya que no se desalentó la par- ha visto anteriormente, crecen las dificultades de ticipación de los adultos y las adultas ni supuso las mujeres de mejorar sus ingresos a partir de una disminución de las horas trabajadas. La la participación en el mercado laboral y, como comparación entre mujeres receptoras de la AUH y consecuencia, se refuerza la dependencia de las mujeres de hogares elegibles y no beneficiarios ellas a una transferencia del Estado que dejará tampoco presentó diferencias en estos aspectos. de percibir al cumplir 18 años su último hijo. También, Garganta y Gasparini (2012) permi- Todas las dimensiones analizadas permiten ten observar el impacto del programa sobre la sostener, según la propuesta analítica adoptada, informalidad laboral. En su estudio -que abarca el eescaso potencial de la AUH para la igualdad el periodo 2005-2011-, exponen que la AUH resul- de género. Asimismo, dejan observar el sesgo tó ser un desincentivo para pasar de la desocu- reproductor de esta medida en tanto refuerza la pación o informalidad a la formalidad, siendo división sexual del trabajo. mayor en el caso de las mujeres. Por último, cabe resaltar que si bien la AUH Si bien los hallazgos realizados hasta el mo- busca incluir a grupos de la población excluidos mento muestran algunos efectos negativos de la protección social, es necesario destacar que sobre la inserción laboral de las mujeres, es sig- la segmentación del sistema supone diferencias a nificativo resaltar la importancia de estudiar favor de aquellos que se insertan en el subsistema las posibles brechas entre mujeres y varones de contributivo. Entre estas diferencias a favor de hogares beneficiarios que se pueden dar con el este subsistema se encuentran: la ausencia de paso del tiempo. En este sentido, como señala límites respecto a la cantidad de hijos e hijas por Rodríguez Enríquez (2011), conviene tener pre- las que se cobra la asignación, la inexistencia de sente que se trata de personas con trayectorias condicionalidades punitivas, la mayor cantidad laborales débiles y con bajo estímulo a insertarse de componentes de las asignaciones familiares en el mercado de trabajo debido a las malas y la ausencia de un límite tan bajo como el del condiciones en las que pueden participar. Según SMVM para dejar de percibir la prestación. la autora, para las mujeres que poseen trayec- Si a estas diferencias que actúan en detrimen- torias más vinculadas con la “inactividad”, los to de los ingresos y la protección social de los PTC podrían operar como trampa de la inactividad. sectores más vulnerables, se le suma la diferencia Bajo esta trampa, las mujeres no intentarían de género observada entre los dos subsistemas insertarse en el mercado porque no pueden de las asignaciones (entiéndase: mientras el hallar buenas oportunidades y puesto que el subsistema no contributivo establece condicio- costo de esa inserción es alto por los problemas nalidades punitivas y privilegia la titularidad de la conciliación entre trabajo y familia. femenina, no se establecen condiciones vincu- Para la AUH el accionar de esta trampa se ladas al cuidado para las mujeres del subsistema fundamenta en que, aunque no crea incompati- que sí es contributivo), se pueden observar las bilidad entre la percepción de la prestación y disimilitudes que el sistema de seguridad social el trabajo productivo remunerado, el refuerzo implica para mujeres de distintos estratos socio- del rol cuidador y la recarga del trabajo repro- económicos. Pues, ambas diferencias aumentan ductivo aumenta el costo de inserción ante un las dificultades para conciliar la vida familiar contexto laboral desfavorable. Y en estos casos y la laboral para las perceptoras de la AUH. Ya entra en cuestión las posibilidades de autonomía que para estas mujeres, el refuerzo de las respon- económica (bajo la acepción acotada de la misma) sabilidades ligadas al trabajo reproductivo y la que implicaría la titularidad de este beneficio, menor posibilidad de externalizar vía mercado en tanto obstaculizaría la capacidad de generar este trabajo (dada la menor percepción de ingre- ingresos a partir del acceso al trabajo remunerado. sos) les dificulta en mayor medida la posibilidad A su vez, la consideración del concepto en su de conciliar el trabajo productivo y reproductivo.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 42 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar El Plan de Inclusión Previsional

Detalles del plan incompletos o ausencia de éstos, o bien aportes completos pero personas menores de 65 años-. n Argentina, las consecuencias de las polí- A partir de esta normativa, cualquier individuo Eticas neoliberales de los 80 y 90 fueron devas- podría inscribirse en una moratoria, lo que impli- tadoras: factores como la precarización de los caba el pago en cuotas de la deuda reconocida mercados laborales, cambios en las estructuras por los años no aportados (que se descuentan familiares y restricciones fiscales, entre otras, directamente de la prestación previsional). Pau- que llevaron a impulsar políticas de contención latinamente, el sistema previsional expandió del gasto previsional, en lugar de políticas que su alcance mediante la implementación del permitieran ampliar la cobertura y los beneficios Monotributo Social9 y del Régimen de Regula- (Arza, 2013). rización de Deudas de los trabajadores/as autó- Contrarrestando esta realidad, en la última nomos/as10, que en su conjunto propusieron década se vivió un proceso de contrarreforma saldar la deuda de contribuciones que tenían los que abarcó la lógica misma de funcionamiento aportantes previa a 1994. del sistema (de un sistema mixto a un sistema de El Monotributo Social consideraba como be- reparto), su administración (de mixta a estatal) neficiario al “trabajador/a” que no había reali- y se crearon así programas que permitieron zado aportes formales, por lo que se estipuló ampliar el número de beneficios y la cobertura, como requisito el detalle de un historial de las como es el caso del Plan de Inclusión Previsional. actividades laborales consideradas productivas A partir del 2004, el Plan de Inclusión Previ- durante sus años de actor económicamente sional7 marcó un antes y un después en la uni- activo. Cabe destacar que el Monotributo Social versalización de las políticas públicas, sobre todo es una categoría tributaria permanente, creada con un grupo relegado en el ámbito de la pre- con el objeto de facilitar y promover la incor- visión social: aquellos que teniendo la edad de poración a la economía formal de aquellas perso- retiro no pudieron acceder a una jubilación. Esto nas en situación de vulnerabilidad que han es- puede ser porque se desempeñaron en trabajos tado históricamente excluidas de los sistemas enmarcados dentro del mercado informal -lo que impositivos y de los circuitos económicos. tuvo como consecuencia directa la inexistencia o El PIP contó con dos etapas. La primera inició insuficiencia de aportes previsionales- o porque en 2004 y la moratoria para saldar deudas pre- tuvieron trayectorias laborales inestables -ya visionales correspondió a la Ley 25.994. Ésta sea por periodos extensos de inactividad o permitía que pudieran acceder a su jubilación desempleo-, entre otras razones. aquellas personas a la que le faltaran años de apor- Con el Plan de Inclusión Previsional (PIP), tes para cumplir con los requisitos de la Ley 24.241. el Estado previó la inserción en el sistema Es necesario recalcar que esta moratoria habilitó jubilatorio de personas que incumplieran los re- la obtención del beneficio a quienes nunca se quisitos previstos para el acceso a la prestación inscribieron ni aportaron a la seguridad social, de vejez impuestos por el Sistema Integrado mediante el pago de una deuda que se determinó de Jubilaciones y Pensiones8 -aportes formales según el valor histórico de los aportes.

7 Permitió que personas en edad jubilatoria (mujeres a los 60 26.425, que dispone la unificación del Sistema Integrado de años y varones a los 65 años), que carecían de años de aportes for- Jubilaciones y Pensiones en un único régimen previsional males, pudieran acceder a una prestación previsional. A través público denominado Sistema Integrado Previsional Argen- del Decreto 1454/05 permitió por primera vez a los autónomos tino -SIPA-. A través de dicha ley, se eliminó el Régimen de con problemas de regularización de deudas de aportes, poder ins- Capitalización -fue absorbido y sustituido por el Régimen cribirse en un plan de regularización de deudas anteriores a 1994, de Reparto-. En consecuencia, los fondos del Sistema de que les permitiera acceder al beneficio previsional (Anses, 2010:8). Capitalización (AFJP) pasaron automáticamente a la Admi- 8 De acuerdo a lo estipulado por la Ley 24.241, en su artículo nistración Nacional de Seguridad Social. 1 (1993), el Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones 9 Estipulado en el año 2004 a través de la Ley 25.865 “Ley cubrirá las contingencias de vejez, invalidez y muerte y se de Impuesto al Valor Agregado” (…) Establécese un régimen integrará al Sistema Único de Seguridad Social (SUSS). especial de regularización de obligaciones provenientes del aporte Conforman este sistema: 1) Un régimen previsional público, previsional de los trabajadores autónomos, regulado por las Leyes fundamentado en el otorgamiento de prestaciones por parte del Nros. 24.241, 18.038, 19.032 y 21.581 y del impuesto integrado y Estado que se financiarán a través de un sistema de reparto, en cotizaciones previsionales fijas con destino al Sistema Único de la adelante también Régimen de Reparto, y 2) Un régimen previ- Seguridad Social, correspondiente a los responsables adheridos al sional basado en la capitalización individual, en adelante Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes instituidos también Régimen de Capitalización. por la Ley 24.977 y sus modificaciones”. En 2008, el Poder Ejecutivo Nacional promulga la Ley 10 Ley 24.476, sancionada en 1995.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 43 ] Cabe aclarar que en la práctica no era necesa- cumplan la edad jubilatoria prevista en rio ser trabajador/a autónomo/a, bastaba con de- el artículo 19 de la Ley 24.241 dentro del clararse como tal en forma retroactiva -y siempre plazo de dos (2) años desde la vigencia de por períodos previos a septiembre de 1993-, de tal la presente, podrán regularizar sus deudas manera de poder pagar los aportes que hicieran previsionales conforme el régimen especial falta para completar el requisito de 30 años pedi- establecido en la presente ley. do por ley. Por este mecanismo, entonces, podía adherir a la moratoria una persona sin ningún Es decir, el plan incluía a quienes tenían aportes aporte registrado. El potencial beneficiario, para insuficientes y a quienes nunca los hicie-ron o no sumar años de aportes, debía presentar en la estuvieron siquiera inscriptos. La Anses realizaba AFIP los formularios 460 y 929 -de alta y baja, una evaluación socioeconómica del solicitante, respectivamente- del sistema de autónomos, mediante un cruce de datos con la AFIP. aclarando que la inscripción se realiza para ingresar a la moratoria. Al hacerse la inscripción, se debía optar por un código de actividad acorde El Plan de Inclusión Previsional a lo que se declara. Por ejemplo, para el personal desde una perspectiva de género doméstico correspondía el código 898, de servicios de higiene y limpieza; y para amas de casa un En Argentina, el PIP resultó ser una política código posible es el 307, de costureras. El listado emblemática para las mujeres mayores. Tal es de códigos es el que está previsto en el decreto 433 así que ésta se conoce coloquialmente como del año 1994. El período por el que una persona Jubilación de ama de casa. Esta denominación se inscribía dependía de la cantidad de aportes deviene del hecho que la mayoría de las personas que le faltasen. Pero, había que tener en cuenta beneficiadas por la moratoria11 -parte del Plan dos características del sistema jubilatorio: es de Inclusión Previsional- ha sido mujeres; en posible contabilizar hasta siete años de aportes mayo de 2010, del total de beneficios otorgados aún sin pagos efectivos, por períodos anteriores a un 78% corresponden a mujeres, mientras que 1969; esto significa, por ejemplo, que quien nunca el 22% restante a varones (Observatorio para la aportó no tendrá que pagar por 30 sino por 23 Seguridad Social, 2011:14). años. En el caso de las mujeres de 60 años sin Al respecto, es necesario subrayar que la ningún aporte, la deuda era de $14.465, y podía desigualdad de género es una de las limitaciones pagarla en 30 cuotas de $526 o en 60 de $284,92. más relevantes de los sistemas previsionales ba- Si tuviera 64 años en lugar de 60, su compromiso sados en el diseño bismarckiano. Camila Arza sumaría $12.540 y tendría la posibilidad de sal- (2013) plantea que esto se debe a que en estos darlo en 30 cuotas de $456 o en 60 pagos men- sistemas la unidad de protección es la familia, suales de $247 (Stang, 2016). definida como un núcleo estable en el cual la Por otro lado, la segunda etapa del PIP se dio en mujer que se dedica al trabajo no remunerado del 2014, a través de la Ley 26.970. Con esta normativa hogar (incluyendo cuidado de niños o ancianos) se implementó un nuevo Plan de Inclusión Previ- se encuentra protegida a través de su marido. sional destinado a todas aquellas personas que El derecho a una pensión en caso de muerte es se encontraban en edad jubilatoria y que no un ejemplo de esta cobertura “derivada” de la pudiesen acceder a una prestación previsional. La condición familiar. Uno de los problemas de nueva moratoria estuvo en vigencia por el plazo este diseño es que responde cada vez menos a la de dos años, comprendiendo a los trabajadores/ realidad de la organización familiar actual. Por as autónomos/as y monotributistas, para que otro lado, a pesar de la tendencia al alza, aún hoy pudiesen acceder a las prestaciones tpevisionales las mujeres siguen presentando tasas de parti- que otorga la Ley 24.241. Permitía alcanzar este cipación en el mercado laboral menores que los beneficio jubilatorio quienes tenían la edad hombres, por lo que a la hora de reclamar un requerida pero no la cantidad de aportes que beneficio jubilatorio contributivo las mujeres exigía el sistema. El procedimiento consistía en se encuentran en desventaja: acumulan menos declarar una deuda por aportes impagos y sal- aportes y por lo tanto muchas de ellas no logran darla con un plan de pago en cuotas, que se iban alcanzar el mínimo requerido para obtener un descontando de los haberes mensuales una vez beneficio; y las que sí lo obtienen, reciben bene- que la Anses otorgaba la prestación. ficios más bajos, sea por haber contribuido pocos En el artículo 1° de la Ley 26.970 se postulaba años o porque sus aportes y/o ingresos laborales como beneficiarios a fueron menores. 11 Cabe aclarar que esta política corresponde a una pensión no con- los trabajadores autónomos inscriptos o tributiva que no tiene como requisito el haber realizado aportes al no en el Sistema Integrado Previsional sistema previsional, salvaguardando a la población en situación de Argentino (SIPA), y los sujetos adheridos vulnerabilidad social y de pobreza. Estas prestaciones previsionales al Régimen Simplificado para Pequeños de vejez y sobrevivencia están garantizadas de forma vitalicia una vez que son otorgadas, aunque han resultado bastante volátiles Contribuyentes (RS), en adelante monotri- por el contexto inflacionario y los mecanismos de indexación esta- butistas, que hayan cumplido a la fecha o blecidos en distintos momentos.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 44 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar La puesta en marcha de la Jubilación de amas de a sí mismas como “amas de casa”. Lo mismo casa, que favorecía a personas -sobre todo muje- sucedió en la segunda etapa del plan, que si bien res- que no pertenecieron al mercado formal fue más accesible, se declararon bajo la figura del trabajo, trajo aparejado cierto descontento de trabajadoras autónomas -aunque sin la nece- en quienes fueron plenos actores en el mercado sidad de estar inscriptas en el Sistema Integrado formal, por considerar que tales pensiones no Previsional Argentino-. contributivas se estarían financiando con la Esta situación pone de manifiesto la falta de re- “licuación” de los beneficios de quienes sí lo conocimiento histórica del sistema previsional hicieron. argentino hacia el trabajo no remunerado que Partiendo de un análisis sectorial es posible in- se realiza al interior de los hogares. El abordaje ferir que la diferencia de clases y la concepción de esta cuestión se vincula con la necesidad de machista de la sociedad es más notoria entre diseñar sistemas de pensiones que, o bien reco- quienes dicen merecer este beneficio y los que nozcan el costo de continuidad y calidad de los argumentan “dar” los fondos necesarios para que empleos que soportan quienes sostienen la carga esta política pública se lleve a cabo. Estos planteos no remunerada del trabajo, o bien prevean que se dan en un contexto en el que se invisiviliza una proporción importante de la pensión futura el hecho que esta ayuda dotaría a un inmenso no dependa del vínculo formal en el mercado grupo de ancianas de una independencia econó- laboral (CEPAL, 2009). mica que el mismo capitalismo -y el modelo pa- Esto implica discutir la concepción prevale- triarcal de la sociedad- perjudicó al excluirlas del ciente del trabajo exclusivamente como la acti- mercado laboral formal, privándolas así de un vidad que produce bienes y servicios destinado derecho que todo/a trabajador/a en su fase pa- al intercambio con vistas a satisfacer necesidades siva merecería (Retolaza, 2010, p. 17). humanas. Bathyany (2010) señala que los sesgos de Además, es importante tener en cuenta que género predominantes en los estudios económicos las políticas sociales son formuladas de acuerdo y sociológicos relacionados al tema del trabajo, a ciertos conceptos de modelos familiares preva- han tendido a desconsiderar gran parte de las lecientes. Y los hogares interactúan con éstas para actividades vinculadas con lo reproductivo del alcanzar determinados estándares de bie-nestar. mundo del trabajo, concentrándose tan sólo en Como señala Hintze: la unidad familiar genera o aquellas que producen bienes intercambiables en selecciona satisfactores para alcanzar sus fines repro- el mercado. ductivos por medio de la combinación de las posibili- Esta reproducción y reconstrucción de fuerza de dades a su alcance a través de un entramado de ac- trabajo repercute en la generación de bienes y ser- tividades que la relacionan con los demás agentes vicios, pero al desarrollarse en el ámbito privado del sociales (2004:4). El problema, tal como lo señalan hogar y fuera de los circuitos de intercambio mer- los estudios de las dimensiones de género de las cantil, se torna invisible. El trabajo de las mujeres políticas sociales, es que las instituciones sociales constituye un todo inseparable y el proceso de construidas en torno a estos dos organizadores reproducción social está interrelacionado con básicos (el mercado laboral y las conformaciones otros procesos socioeconómicos por lo que si se familiares), fallan en reconocer las asimetrías, re- analiza el trabajo reproductivo aislado del traba- produciendo el papel subordinado de las mujeres12. jo productivo y del proceso de reproducción Por el contrario, la ciudadanía basada en la social, se contribuye a ocultar la importancia, la igualdad de género supone una división sexual complejidad y dimensión del trabajo doméstico. del trabajo más igualitaria en el mercado de Al relacionar el trabajo reproductivo con su papel trabajo y respecto de los cuidados domésticos. social, el trabajo femenino es entonces un tema Ya el fundamento de una ciudadanía basada en para todo el sistema, no se trata ya de un problema el reconocimiento de la diferencia supone que específico de las mujeres (Lagarde, 1990). autonomía y libertad de elección respecto de la En la primera moratoria previsional en 2004, reproducción y de las actividades de cuidados de los 2,7 millones de personas que pudieron constituyen otras bases de derechos específicos acceder al beneficio (con un promedio de ocho de la mujer -derechos reproductivos, derecho a la o diez años de aportes), el 73% fueron mujeres socialización de los cuidados domésticos- (Draibe (Peker, 2016). Diez años después, durante la segun- y Riesco, 2006). Por esto, el abordaje del papel de da ola de la moratoria previsional, del total de las mujeres en el imaginario colectivo, merece una beneficiarios/as un 86% fueron mujeres y el 14% mirada que conjugue las necesidades de recono- varones. La diferencia es notoria: ocho de cada cimiento con las de redistribución (Fraser, 2000). diez beneficiarias de esta medida son mujeres. Sin En el PIP, es claramente visible. tenerlo como su objetivo primordial, esta política Un ejemplo notorio fue durante la primera ha tenido como externalidad positiva la ayuda a etapa del plan, en la que muchas mujeres tuvie- las mujeres que efectuaron labores infor-males ron que declarar alguna actividad “productiva” a o cuya invisibilización laboral las convirtió en fin de acceder a este beneficio, y no presentarse trabajadoras vulnerables. Al analizar los resul- tados de la moratoria, Boudou, D’Elía y Lo Valvo 12 Ver al respecto Lewis (1993), Hallet (1996), Pascall (1997). (2007) manifiestan que

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 45 ] establecida de forma permanente, ya que los go- el incremento de la tasa de cobertura: revierte biernos kirchneristas no le dieron forma de ley, la tendencia decreciente de la última década. por lo que con un decreto quedaba sin efecto. Gracias al Plan de Inclusión Previsional Cabe destacar que esta moratoria fue una medida pudieron incorporarse al sistema gran efectiva e inmediata al cumplir con una cobertura parte de los adultos mayores en situación previsional casi total de la franja etaria de los 60 de vulnerabilidad social… No es casual que a 64 años, reconociendo el derecho universal de la mayoría de los beneficiarios sean mujeres la ancianidad a acceder a protecciones previ- ya que al tener menor participación en el sionales. Contraponiendo esta realidad, deviene mercado laboral que los varones son las que la decisión del gobierno macrista de no renovar se encontraban más desprotegidas y sólo las moratorias previsionales, ya que propone hubieran podido acceder al sistema previ- una reformulación del sistema jubilatorio que sional a través del cobro de una pensión por recuerda al vigente en los 90 -consistente en viudez (p. 14). la transformación del actual modelo de repar- to por una pensión universal de la vejez que Asimismo, Anses (2010) sostiene que para acceder prolonga la edad jubilatoria y corresponde a un 80% del monto total de una es un hecho estilizado que la mayoría de los jubilación considerada mínima-. regímenes de pensiones contributivos no El escenario es similar, la vigente recesión brindan cobertura frente riesgos especí-ficos económica al igual que la reciente ola de despidos asociados a la maternidad y a las respon- -que asciende a 143.423 según el informe de sabilidades familiares históricamente asig- CEPAL de abril de 2016-, son determinantes en nadas a la mujer, tales como el cuidado de la reducción de la generación de empleo, lo que los niños, ancianos y enfermos. Asimismo, recae en un desfinanciamiento de las cajas de las trayectorias interrumpidas de empleo seguridad social y en la interrupción del sistema y los salarios más bajos en general llevan de solidaridad intergeneracional propio del siste- también a que cada vez menos mujeres ma de reparto (Letcher, y Strada, 2016). participen en un régimen de pensiones con- El Plan de Inclusión Previsional no sólo tributivo durante su trayectoria laboral y fue una medida para universalizar las presta- reciban beneficios durante la edad de retiro ciones previsionales a ancianos y ancianas con (AISS, 2002)…. En este sentido, el Plan de vulnerabilidad social, sino que fue el reconoci- Inclusión Previsional ha tenido un papel ac- miento implícito que las amas de casa ancianas tivo en favor de la igualdad de género en los alcanzaron, el logro de una autonomía económica regímenes de pensiones (p. 26). desconocida y una concepción de trabajadoras visibilizadas. Con el nuevo gobierno de corte neoliberal del Si bien el beneficio que tuvieron miles de presidente electo Mauricio Macri se anunció amas de casa ancianas sólo fue una externalidad el fin de esta medida universal. De este modo, positiva de esta medida, pone en manifiesto lo se concluyó con una solución transitoria a las que Nancy Fraser propone al plantear que las consecuencias de políticas del mismo modelo políticas de redistribución y las de reconoci- tomadas en los 90 -precarización de los mercados miento no deben ser excluyentes entre sí, sino laborales, cambios en el sistema jubilatorio, que por el contrario, deben armonizarse para restricciones fiscales, entre otros-. Este escenario alcanzar esa justicia social e inclusión. Es decir, político, como se mencionó antes, condujo a que es necesario una política que pretenda combatir miles de ancianos y ancianas no tuvieran los la exclusión social debe combinar una política de años de aportes previsionales requeridos para redistribución con una política de reconocimiento acceder a una prestación, lo que los llevó a una (Fraser, 2003:56). clara situación de vulnerabilidad social. Ante esta Estas conclusiones respecto del PIP permiten realidad, cabe aclarar que las mujeres siempre entender los efectos compensadores de las han sufrido informalidad laboral, que las obliga desigualdades en tanto brindó una cierta auto- a aceptar trabajos con evasión de aportes patro- nomía económica para las mujeres que se incor- nales, dejándolas sin jubilación ni obra social, poraron al sistema de seguridad social, pero entre otros beneficios. no realizó modificaciones en la división sexual La solución a estas situaciones -la implemen- del trabajo en tanto la normativa no implicó un tación del Plan de Inclusión Previsional- no fue reconocimiento explícito del trabajo reproductivo.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 46 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Conclusiones

on este trabajo se pretendió analizar las trans- ducción de la división sexual del trabajo, las di- Cformaciones en la seguridad social desde una ficultades de conciliación entre vida familiar perspectiva de género. Y dadas las características y laboral y los obstáculos para la inserción y que estructuraron la conformación de la seguri- permanencia en el mercado laboral. dad social, centrada en la figura del trabajador- Por otro lado, el Plan de Inclusión Previsional varón formal, y dada la carencia de un enfoque habría sido un camino de reconocimiento tácito de género a la hora de formular estos cambios, se hacia la tarea realizada por las amas de casa seleccionaron aquellas medidas que supusieron dentro del hogar, un modelo ejemplificador de un incremento significativo de la inserción de la importancia de articular políticas sociales, mujeres dentro del Sistema de Seguridad Social económicas y culturales con una perspectiva Nacional gracias al predominio femenino de la de género. Podríamos decir que con esta mo- titularidad. ratoria previsional se le dio visibilidad al traba- En el caso de la Asignación Universal por Hijo, se jo de cuidado, lo que generó justicia social concluye que ésta planteó una débil potencialidad e inclusión. Su implementación tuvo impli- para la igualdad de género. Pues, las mujeres no cancias de género como una externalidad aparecieron como portadoras de derechos propios positiva de su objetivo original -extender la al recaer el derecho al acceso al beneficio sobre cobertura previsional a personas sin registros otros miembros del hogar. La titularidad estuvo contributivos suficientes-. Sin pretenderlo, esta restringida a la condición de madre o tutora de política desafió a la desigualdad de género, los niños/as y, gracias a las condicionalidades, se imaginarios y la naturaleza de la actividad como reforzó el rol de la mujer como responsable del persona trabajadora activa, reconociendo el cuidado de otros. Asimismo, la magnitud del bene- valor que tiene la labor del ama de casa al sumi- ficio resultó insuficiente con relación a los costos nistrarles beneficios monetarios básicos. En con- de servicios de cuidado. secuencia, el PIP resultó ser para las amas de Como consecuencia de todos estos aspectos, casa un vehículo para alcanzar un cierto nivel el programa habría implicado una recarga sobre de autonomía económica y una concepción de el tiempo de las mujeres y habría generado, ante sujetas merecedoras de este derecho. un contexto de deficiencia de los servicios pú- Como resultado el plan tuvo efectos compen- blicos de cuidado, problemas de conciliación sadores de las desigualdades en tanto brindó entre trabajo productivo remunerado y trabajo una cierta autonomía para las mujeres que se doméstico no remunerado. De esta manera, se incorporaron al sistema de seguridad social, pero habrían intensificado las dificultades de acceso no implicó modificaciones en la división sexual al mercado laboral para estas mujeres poniendo del trabajo en tanto la normativa no formuló un en tensión la supuesta autonomía económica reconocimiento explícito del trabajo reproductivo. que la AUH les habría brindado. De esta manera, la reflexión en torno a ambas A su vez, las diferencias observadas entre el medidas plantea que a pesar de los aspectos positivos subsistema contributivo de las asignaciones fa- que supusieron para la situación de un cuantioso miliares y el subsistema no contributivo han grupo de mujeres, estas transformaciones en la permitido entender cómo este componente de seguridad social no lograron romper la lógica re- la seguridad social ha reforzado las responsabi- productora de la división sexual del trabajo que lidades reproductivas para las perceptoras de aún predomina en la política social. Pues, éstos la AUH. De esta forma, la seguridad social ha no consiguieron superar los efectos reproductores tenido efectos diferenciales para mujeres de dis- y pasar de los efectos compensadores a los trans- tintos estratos socioeconómicos, en donde las formadores. Así la seguridad social, acabado un pertenecientes a los sectores más vulnerables periodo político de pretendida contrarreforma de han encontrado mayor presión por parte del las consecuencias negativas de la aplicación del Estado respecto a su rol de cuidadoras con las enfoque neoliberal, todavía queda en deuda con consecuentes implicancias respecto a la repro- las reivindicaciones de género.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 47 ] Bibliografía

ANSES (2010). Análisis de la Cobertura Previsional Fraser, N. (2003). Redistribución, reconocimiento del SIPA: Protección, Inclusión e Igualdad. Recu- y exclusión social. En: Inclusión social y nuevas perado de http://observatorio.anses.gob.ar/ ciudadanías. Bogotá, Colombia: Departamento archivos/documentos/An%C3%A1lisis%20 Administrativo de Bienestar Social. DABS & de%20la%20Cobertura%20del%20SIPA.pdf Pontificia Universidad Javeriana. ------(2016). Boletín Trimestral. Asignación ------(2008). La justicia social en la era de la Universal por Hijo para Protección Social. Recu- política de identidad: redistribución, reconoci- perado de http://observatorio.anses.gob.ar/ miento y participación. Revista de Trabaj, 4 (6), archivos/publicaciones/PPT%20-%20AUH%20 83-99. I%20C%202016%20G_v99.pdf Gamba, S. (2009). Estudios de género/ perspectiva Arcidiácono, P., Barrenechea, V., y Strachnoy, M. de género. Recuperado el día 22 de febrero de (2011). La asignación universal por hijo para la 2010, de http://agendadelasmujeres.com.ar/ protección social: rupturas y continuidades, index2.php?id=3¬a=5703 ¿hacia un esquema universal? Margen, 61, 1-16. Garganta, S. y Gasparini, L. (2012). El impacto de Arza, C. (2013). La política previsional y la preven- un programa social sobre la informalidad laboral. ción de la pobreza: elementos salientes de la El caso de la AUH en Argentina. Buenos Aires, trayectoria latinoamericana reciente. Voces en el Argentina: Cedlas. DT 133. Fénix, 23, 102-109. Hallet, C. (1996). Women and Social Policy: An Boudou, A., D’Elía, V. y Lo Valvo (2007). El Plan de Introduction. Londres: Prentice Hall. Inclusión Previsional. Resultados Preliminares. Hintze, S. (2004). Capital social y estrategias de Estudios Especiales de la Seguridad Social. Buenos supervivencia. Reflexiones sobre el capital social Aires: ANSES. de los pobres. Recuperado de http://www. Carrasco, C. (2001). La sostenibilidad de la vida hu- flacsoandes.edu.ec/agora/capital-social-y- mana ¿un asunto de mujeres? Barcelona: Icaria. estrategias-de-supervivencia-reflexiones-sobre- CEPAL (2009). Género, trabajo remunerado y no el-capital-social-de-los remunerado: eslabones en la discriminación Hirata, H. y Kergoat, D. (1998). Una nueva mirada y la desigualdad y Políticas Públicas y crisis a la división sexual del trabajo. En M. Maruani, de cuidado en América Latina: alternativas C. Rogerat y T. Torns (Dir.), Las nuevas fronteras e iniciativas. En CEPAL, Panorama Social en de la desigualdad. Hombres y mujeres en el América Latina 2009 (pp. 173-197), Santiago de mercado de trabajo. Barcelona, Icaria. Chile, Chile: CEPAL. Lagarde, M. (1990). Cautiverio de las mujeres: madres, Batthyány, K. (2010). Pobreza, globalización y esposas, monjas, putas, presas y locas. México: género: avances teóricos, de investigación y es- UNAM. trategias. Recuperado en http://issuu.com/ Levín, S., Campostrini, A., Sosa, R. y Voras, C. catunescomujer.org/docs/sinergias/27 (2007). La política de género de las políticas pú- Draibe, S. y Riesco, M. (2006). Estado de Bienestar, blicas en la Argentina. En Carbonero Gamundí, desarrollo económico y ciudadanía: algunas lec- M. y Levín, S. (Comp.), Entre familia y trabajo. ciones de la literatura contemporánea. Serie Es- Relaciones, conflictos y políticas de género en tudios y perspectivas 55. México: CEPAL. Europa y América Latina (pp. 203-239). Santa Fe: Esquivel, V. (2012). La Economía Feminista desde Homo Sapiens. América Latina. Una hoja de ruta sobre los de- Letcher, H. y Strada, J. (24 de abril de 2016) Se bates recientes en la región. Santo Domingo, jubiló la moratoria. Suplemento Cash. Página/12. República Dominicana: ONU Mujeres. Recuperado de http://www.pagina12.com.ar/ Fraser, N. (1997). Iustitia Interrupta. Reflexiones diario/suplementos/cash/40-9283-2016-04-28. críticas desde la posición “postsocialista”. Recupe- html rado de http://perio.unlp.edu.ar/catedras/ Lewis, J. (1993), Women and Social Policies in system/files/fraser-iustitia-interrupta- Europe: Work, Family and the State. Aldershot, reflexiones-criticas-desde-la-posicion- Inglaterra: Edward Elgar. postsocialista.pdf Ley 24.241, Sistema integrado de jubilaciones y pen- Fraser, N. (2000). ¿De la redistribución al recono- siones. Boletín Oficial de la República Argentina, cimiento? Dilemas de la justicia en la era post- 23 de septiembre de 1993. socialista. Revista New Left Review4, 126-155.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... [ 48 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Ley 25.865, Ley de Impuesto al Valor Agregado. Pautassi, L., Arcidiácono, P. y Straschnoy, M. (2014). Boletín Oficial de la República Argentina, 17 de Condicionando el cuidado. La Asignación Uni- diciembre de 2004. versal por Hijo para la Protección Social en Ar- Ley 24.476, Sistema integrado de jubilaciones y gentina. Íconos. Revista de Ciencias Sociales, 18 pensiones. Boletín Oficial de la República Ar- (50), 61-75. gentina, 29 de marzo de 1995. Peker, L. (18 de marzo de 2016). Sin Resguardo. Lombardía y Domeniconi (2015). Incluir para Suplemento Las 12. Página/12. Recuperado de crecer. La inversión nacional entre 2004 y 2014. http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/ Buenos Aires: Secretaría de Política económica las12/13-10464-2016-03-18.html y planificación del Desarrollo. Retolaza Euguren, I. (2010). Teoría de cambio. Maurizio, R. y Vázquez, G. (2014). Argentina: Un enfoque de pensamiento para navegar en la Efectos del programa Asignación Universal complejidad de los procesos de cambio social. por Hijo en el comportamiento laboral de los Guatemala: PNUD/Hivos. adultos. Revista Cepal,113, 121-144. Rodríguez Enríquez, C. (2011). Programas de Trans- Mayordomo, M. y Domínguez, M. (2006). El lado ferencias Condicionadas de Ingreso e Igualdad oculto del empleo. La desigualdad de género de Género. ¿Por dónde anda América Latina? y el modelo de trabajo. En J. Vara (Coord.), Serie Mujer y Desarrollo 109. Santiago, Chile: Estudios sobre género y economía. Madrid, Akal. Cepal. Observatorio de Igualdad de Género de América Stang, Silvia. (3 de abril de 2006). Podrán jubilarse Latina y Caribe (2016). Recuperado de http:// aún quienes nunca hayan hecho aportes. oig.cepal.org/es/autonomias/autonomia- Sección Economía. La Nación. Recuperado de economica http://www.lanacion.com.ar/794215-podran- Observatorio para la Seguridad Social (2011). jubilarse-aun-quienes-nunca-hayan-hecho- Análisis de la cobertura previsional del SIPA: aportes protección, inclusión e igualdad. Recuperado Varella Martí, R. (2001). Las políticas de igualdad de http://observatorio.anses.gob.ar/archivos/ en el ámbito del trabajo: una propuesta de documentos/An%C3%A1lisis%20de%20la%20 construcción teórica desde el género. En J. Cobertura%20del%20SIPA.pdf Monreal, C. Díaz y J. García Escribano. (Ed.), Pascall, G. (1997) Social Policy: A New Feminist Viejas sociedades, nueva Sociología (pp. 105-125). Analysis. Londres: Routledge. Madrid, España: CIS. Pautassi, L. (2010) Cuidado y derechos: la nueva cuestión social. En: Montaño Virreira, S. y Cal- derón Magaña, C. (coord.) El cuidado en acción. Entre el derecho y el trabajo, 69-92. Santiago de Chile, Chile: CEPAL.

Virginia Noemí Alonso y Tatiana Marisel Pizarro | ¿Y el género en la seguridad social argentina... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 35-49 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 49 ]

Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales para una investigación con perspectiva de género Las significaciones de las mujeres en torno a sus experiencias de aborto medicamentoso

María Natalia Santarelli (Argentina) CONICET- FaPsi-Universidad Nacional de San Luis [email protected]

Fecha de recepción: 30-09-2016 Fecha de aceptación: 07-12-2016

Resumen Abstract n el presente escrito se comparten algu- his work seeks to share some initial reflections Enas decisiones iniciales relativas al posicio- Ton the epistemological position adopted in namiento epistemológico elegido para explorar order to explore the significations that women las significaciones que las mujeres construyen attribute to their experience of medical abortion. en torno a sus experiencias de aborto medica- It also considers the project’s inscription within mentoso. También se indaga sobre la inscripción the field of qualitative research on gender de este proyecto de investigación en un determi- studies, and the process of selection of a relevant nado campo de saberes y en las elecciones teóri- conceptual framework. cas que guiaron su formulación en base a la It is proposed that adopting an epistemological investigación cualitativa en Estudios de Género. and theoretical feminist position enables the Se plantea que asumir un posicionamiento addressing of the knowledge problem from the epistemológico y teórico feminista permite abor- perspective of groups that have been historically dar los problemas de conocimiento desde las silenced, and makes it possible to build up perspectivas de grupos históricamente acallados situated knowledges and knowledge committed to y posibilita construir saberes situados y compro- the social transformation, in this case, in relation metidos con la transformación social, en este to gender oppression. caso, en relación a las opresiones de género. Moreover, the article shows the need to adopt Además, se plantea la necesidad de adoptar a critical deconstructive attitude towards certain una actitud crítica y deconstructiva ante ciertas hegemonic currents within psychology and lógicas propias de las corrientes hegemónicas psychoanalysis, in order to arrive at enriching -dentro de la psicología y el psicoanálisis- para conceptual contributions. In this regard, lograr articulaciones teóricas enriquecedoras this project seeks to combine the conceptual entre conceptualizaciones relativas a la noción contributions from psychoanalytic psychology de subjetividad y salud mental pertenecientes surrounding the notions of subjectivity and al campo de la psicología psicoanalítica y herra- women’s mental health, with conceptual tools mientas que nutren desde los Estudios de Género. provided by . Nuestra propuesta teórica capta la especifi- Our theoretical proposal captures the cidad presente en la salud mental de las mujeres specificity present in women’s mental health, and y considera los anclajes socioculturales, políti- considers socio-cultural, political and historical

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 51 ] cos e históricos propios de los procesos de subje- characteristics of subjectivation processes. tivación. De esta manera, supera oposiciones In this way, it overcomes binary oppositions binarias tales como salud/enfermedad, normal/ such as health/sickness, normal/pathological, patológico, subjetivo/objetivo, interno/externo. subjective/objective, internal/external.

Palabras Clave: Estudios de género, aborto Keywords: Gender studies, medical abortion, medicamentoso, salud mental. mental health.

Introducción

n el presente escrito compartimos ciertas Nos acercamos a estos y otros interrogantes Edecisiones iniciales relativas al posiciona- haciendo referencia a algunos procesos impli- miento epistemológico elegido para construir el cados en la construcción de la propuesta de inves- problema de conocimiento, su inscripción en un tigación que estamos emprendiendo, titulada Las determinado campo de saberes y algunas de las significaciones que las mujeres construyen en torno elecciones teóricas que guiaron la formulación a sus experiencias de abortar con medicamentos de un proyecto de investigación cualitativa en en relación con la salud mental. Análisis desde Estudios de Género. una perspectiva de género en la región de Cuyo a En primer lugar, nos interiorizamos en las partir de 2010. La misma busca comprender las implicancias de adoptar un posicionamiento epis- significaciones que otorgan las mujeres a sus temológico feminista que cuestiona y desmonta experiencias de aborto voluntario con medica- los presupuestos de neutralidad, objetividad e mentos en contexto de clandestinidad, en la imparcialidad asociados a la ciencia positivista. región de Cuyo, Argentina.1 En segundo lugar, nos preguntamos desde 1 qué nociones de subjetividad y salud mental es Se trata de una investigación en una fase inicial de cons- trucción del diseño epistemológico y metodológico que posible posicionarse para construir un saber será llevada adelante con la dirección de la Dra. Claudia científico feminista, situado y comprometido. Anzorena y la co-dirección de la Dra. Erika Valdebenito y el financiamiento de CONICET (Beca Doctoral 2016).

Decisiones iniciales: en busca de nociones conceptuales alternativas

n el año 2014 comencé a cursar un Doctorado campo de la salud mental, desde una perspectiva Een Estudios de Género. Debido a múltiples de género y derechos. En aquel momento, experiencias de vida, personales, académicas, consideraba que una primera elección con im- profesionales y de activismo feminista, mis portantes implicancias políticas en el proceso intereses de investigación estaban orientados mismo de investigación era elegir un doctorado, hacia las vinculaciones existentes entre las prác- ya que implicaba una respuesta directa: ¿en cuál ticas de aborto voluntario medicamentoso2, campo de conocimiento inscribir los esbozos de las experiencias subjetivas de las mujeres y el esta investigación? La pregunta surgía debido a que mis escasos 2 El aborto medicamentoso -también llamado médico, no conocimientos en epistemología crítica y mi quirúrgico o farmacológico- consiste en el uso de fármacos reciente formación de grado en Psicología me -como el misoprostol o la combinación de mifepristona/ llevaban a pensar que existía una única Psicología misoprostol- para finalizar un embarazo. Esta estrategia, legitimada y que la misma no podría admitir poli- bajo determinadas condiciones en su administración, incre- menta la seguridad del aborto autoinducido y reduce las tización, pues eso afectaría directamente los -por complicaciones asociadas al aborto inseguro (CLACAI - Ipas, entonces- valorados atributos de neutralidad y 2011; OMS, 2012) objetividad de mi investigación.

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... [ 52 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar La tendencia dominante en Psicología se en- resistencias para poder articular ciencia con cuentra claramente vinculada a los orígenes compromiso político, en comparación con otras sociales y a las condiciones de su nacimiento disciplinas como la sociología, la antropología como disciplina independiente, cuyas improntas o la historia. Se reconoce, entonces, una suerte persisten hasta en la actualidad (Dazinger, 1979). de despolitización de la Psicología hegemónica, Estas improntas se corresponden, en primer con la consiguiente necesidad de plantear com- lugar, con el afán por identificarse y demostrar promisos ético-políticos y asumir posturas claras ser una ciencia experimental; con la idea de dentro de una Psicología dispuesta a la transfor- psicología neutra, objetiva y universal, de corte mación y a la liberación. positivista (Cabruja Ubach, 2008). Frente a estas dificultades propias de la disci- La adscripción a ciertos presupuestos domi- plina, acarreadas desde sus inicios y aún hoy refle- nantes en la Psicología, que han sido presentados jadas en los conocimientos e ideologías que se como incuestionables, ha clausurado notable- transmiten en la formación de grado en Psicología mente las oportunidades de generar aportes -en general4-; ¿cómo articular el compromiso psicológicos situados que apunten a transfor- político feminista con la investigación en y maciones sociales. Para el caso de la Psicología desde la Psicología? Considerando que toda en Latinoamérica, Martín-Baró (1986) advierte narrativa teórica se sostiene en un dispositivo la dificultad en atender las realidades de depen- político-social que la valida, ¿en cuál/es dispo- dencia y dominación que azotan a los pueblos sitivo/s de conocimiento inscribir nuestras in- latinoamericanos en general. A esto agregamos, vestigaciones? En respuesta a esta pregunta y las dificultades en considerar los sufrimientos con la avidez necesaria para un encuentro con lo y hostilidades vinculadas con realidades de que suponía sería una complejidad desconocida, desigualación3 que afectan a ciertos sectores mi elección se inclinó hacia el Doctorado en subalternizados. Estudios de Género en una universidad pública Algunos de estos presupuestos señalados por de una provincia cercana y no al Doctorado en el teórico de la psicología de la liberación son el Psicología que se dicta en la Universidad pública individualismo, la marca positivista y la visión de la provincia que habito. La introducción en el homeostática (Martín-Baró, 1986). El presupuesto campo de los Estudios de género/feministas me individualista, desde una postura reduccionista, permitió ir tomando algunas decisiones en torno tiende a explicar las problemáticas en niveles a los posicionamientos epistemólogicos desde personales e ignora las estructuras sociales y los cuales se podrían pensar ciertos problemas políticas. La visión homeostática, en su afán de investigación y ciertos modos de encarar la de mantener a los individuos en pretendido aproximación a los mismos. equilibrio -¿equilibrio en cuál sistema/ordena- Luego de realizar un primer rastreo biblio- miento?- valora como malos y negativos los gráfico sobre investigaciones cualitativas sobre procesos implicados en los conflictos, las crisis experiencias de aborto voluntario, sobre todo y los cambios. La marca positivista hace del medicamentoso, en países latinoamericanos, hecho positivo el único centro, y considera que y a partir del contacto directo y sostenido con la realidad no es más que lo dado. De lo cual se mujeres que abortan con medicamentos debido desprenden análisis positivistas que reconocen a la participación en grupos feministas que sólo lo dado e ignoran aquello que no existe aún brindan información y acompañamiento5 en pero que sería históricamente posible, si se dieran dos provincias de la región de Cuyo (San Luis otras condiciones, tal como señala Martín-Baró (1986). Adoptar esta impronta conlleva el peligro, 4 Cabe aclarar que se hace alusión a las corrientes hegemó- más o menos explícito, de terminar produciendo nicas y a su influencia, sin desconocer los intentos, ensayos conocimientos que reafirmen realidades de y concreciones provenientes de corrientes más críticas dentro de las narrativas psi. opresión y desigualdad. En términos de salud 5 Socorristas en Red-feministas que abortamos- es una articu- mental de las mujeres, conlleva a la legitimación lación política-feminista presente en más de 40 localidades de determinadas condiciones actuales de riesgo de Argentina que surgió, entre otras cosas, como estrategia para la salud mental. frente a la penalización del aborto en el país y en el marco A su vez, tal como señala Cabruja Ubach de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto legal, seguro y gratuito. Desde el año 2012, brinda información (2008) se ha planteado un falso dualismo entre sobre aborto seguro con medicamentos y acompañamiento profesionalismo/despolitización que entre a las mujeres que abortan con medicamentos. Para mayor otras consecuencias, ha generado mayores información en cuanto modalidad de acción y principios políticos que sostiene este accionar, veasé: 3 Se hace uso del término desigualación de Ana María Fer- Declaración de la 3º reunión plenaria nacional de Socorristas nández (2009b) para poner el énfasis en los procesos de en Red (feministas que abortamos). 2014. Disponible en: construcción de las diferencias dentro de dispositivos de http://socorristasenred.org/index.php/2015/12/11/en-lucha- poder (discriminación, marginación, inferiorización, vulne- por-el-derecho-al-aborto-legal-seguro-y-gratuito-ponemos-el- rabilización, exclusión, exterminio). La construcción de la cuerpo-a-los-abortos-en-clave-feminista/ diferencia y la institución de la desigualación se producen Declaración de la 5º reunión plenaria nacional de Soco- en el mismo movimiento: diferencias desigualadas, al decir rristas en Red (feministas que abortamos). 2016. Disponible de la autora, que no sólo son de género, sino también geopo- en: http://socorristasenred.org/index.php/2016/04/21/5ta- líticas, culturales, étnicas, de clase, de orientación sexual. reunion-plenaria-nacional/

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 53 ] y Mendoza, Argentina) fuimos perfilando la empleadas. El contexto social y los propósitos propuesta de investigación junto a mi directora. que la disciplina acepta como propios -en un Decidimos ubicar nuestra propuesta dentro complejo ejercicio de maniobras de aceptación de los trazos marcados por las epistemologías frente a determinadas fuerzas sociales- definen feministas (Harding, 1987; Haraway, 1993) y cuáles son los problemas considerados legítimos dentro de lo que podría englobarse como teoría y las maneras de resolverlos. Siguiendo con esta feminista (Gross, 1986). El marco teórico se valdrá idea, vale decir que los problemas que propone- de herramientas provenientes de los Estudios de mos a la comunidad científica, mucho más Género aplicadas al campo de la salud mental cuando se trata de ciencia con financiación junto con aquellas que provienen del campo pública en instituciones públicas, portan en sí psicoanalítico para el entendimiento de las mismos el poder y la responsabilidad de legitimar dimensiones subjetivas implicadas, destacán- determinados intereses de determinados grupos dose el carácter sociocultural e histórico de los hacia los cuales pretendemos “poner la ciencia a procesos de subjetivación femenina y de cons- su servicio” o, mejor, junto a los cuales preten- trucción de género (Burin, 1990, 1992, 2002; de demos desarrollar este acto creativo -y no de Lauretis, 1996; Fernández, 2009, 2016b; Meler, descubrimiento- que hemos de llamar ciencia, 2012). Principalmente, se tomarán los aportes de como bien refiere Santos (2009) desde posturas psicoanalistas argentinas pioneras en la articu- de pensamientos decoloniales. lación local de la teoría psicoanalítica con la En efecto, un punto de encuentro entre posturas perspectiva de género.6 epistemológicas feministas y decoloniales es la capacidad crítica para evidenciar que no exis- ten problemas de conocimiento dados sino 1. Acerca del posicionamiento desde donde grupos de personas que los definen como tales. construir el problema de investigación Tradicionalmente, la ciencia ha partido y se ha diseñado desde las experiencias e intereses de Desde los comienzos, el interés de investigación un supuesto Sujeto Universal. Éste es por defini- estaba puesto en los posibles entrecruzamientos ción varón, blanco, occidental, propietario, entre las experiencias de aborto medicamentoso heterosexual, que ubica sus intereses en el norte y la salud mental de las mujeres. Se parte del -vale decir, colocándose arbitrariamente en supuesto de que decidir y atravesar un aborto un “arriba” jerárquico- y que imprime el sello voluntario en condiciones de clandestinidad es del androcentrismo y del sexismo a los conoci- una experiencia compleja y multidimensional a mientos por él y para él generados. nivel corporal y subjetivo, que activa en quienes lo Allí donde la ciencia se engrandecía a través transitan un entramado compuesto por aspectos de atribuciones de neutralidad, objetividad, ideológicos, psicológicos, sociales e inclusive universalidad; los feminismos junto a otras culturales. Ahora bien, ¿qué preguntar sobre posiciones epistemológicas críticas, vienen a estos entrecruzamientos? ¿A quiénes dirigir estos denunciar y a disputar nuevas formas en los interrogantes? ¿Quién preguntaría, quien proble- procesos sociales de investigación. Las teorías matizaría estos posibles entrecruzamientos? y feministas cuestionan seriamente los contenidos ¿desde dónde se problematizarían? y las estructuras de los discursos disciplinares Harding (1987) señala que una de las especifi- patriarcales, desarrollando alternativas y pers- cidades de las investigaciones feministas es la pectivas específicas (Gross, 1986). Desnudan a los atención y el cuidado en la explicitación del saberes científicos de los disfraces de neutralidad, contexto de descubrimiento y del origen de objetividad e imparcialidad en su proceso de la formulación de los problemas e hipótesis. construcción y validación. Las formulaciones y elecciones en torno a los Estos disfraces de neutralidad quedan problemas que nos proponemos investigar no develados por el acto de cuestionamiento y son ingenuas, por el contrario, están cargadas revisión epistemológica de los saberes hegemó- de intereses políticos e implicancias éticas nicos; cuando se desestabilizan una y otra vez las dentro de los campos de disputa científica. Tal trampas que asocian lo masculino con lo neutro como demostró Dazinger (1979) en su análisis y con lo universal, e invisibilizan y ocultan otras sociológico de los orígenes de la psicología corporeidades y subjetividades. También se como ciencia moderna, los desarrollos y rumbos hacen caer los disfraces positivistas relativos a la de las disciplinas se definen por los intereses posibilidad de miradas no marcadas, de ver todo intelectuales, es decir, por el punto de encuentro desde ninguna parte (Haraway, 1993, p.325). En la entre los intereses sociales -de determinados investigación feminista, la voz de quien investiga grupos- y las construcciones cognitivas no se sitúa desde la invisibilidad y el anonimato. Contrariamente, quien investiga es una persona 6 Algunas de las académicas precursoras en Argentina en real e histórica con intereses particulares y cuanto a la introducción de los Estudios de la Mujer, luego llamados Estudios de Género son: Mabel Burín, Irene Meler, específicos. La clarificación del lugar de/la inves- Ana María Fernández, Clara Coria, Eva Giberti, Débora Tajer, tigador/a constituye un rasgo fundamental en Martha Rosenberg, Gloria Bonder, Irene Fridman, entre otras. este posicionamiento alternativo. Se trata de

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... [ 54 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar explicitar lo más rigurosamente posible desde entrevista en profundidad y no estructurada, en donde se es un sujeto de conocimiento, situado tanto herramienta apropiada en un diseño de genérica, histórica y socialmente. Para ello es investigación cualitativa, nos proponemos recu- necesario explicitar sus creencias, rasgos y prác- perar las narrativas de las mujeres, mediante la ticas culturales y cómo sospecha que esto ha comprensión de las significaciones que otorgan influido en los proyectos de investigación, en y construyen sobre sus experiencias de aborto las argumentaciones y en los resultados de los voluntario, enmarcadas en sus vidas históricas, análisis realizados (Harding, 1987). relacionales y contextuales. Se reconoce que así como los cuerpos están Acordamos con que el aborto constituye un hito marcados y su consideración sexual no es (in)di- en las trayectorias personales con consecuencias ferente, las miradas también están marcadas y sentidas en la vida sexual, afectiva, reproductiva, posicionadas. Para los feminismos la única forma anticonceptiva y en la salud en general. Este de objetividad posible son los conocimientos situa- hito afecta diferencialmente a las mujeres -que dos, la asunción de la encarnación particular y protagonizan el proceso y en cuyo cuerpo es específica para desde allí, poder generar circuitos practicado- respecto a los varones, participantes universales de conexiones y diálogos (Haraway, secundarios del proceso, quienes podrán acom- 1993). pañar o no (Petracci et al., 2012). La práctica del Finalmente, se corren los disfraces positivistas aborto sólo tiene lugar en el cuerpo de una mujer en cuanto a las intencionalidades de la ciencia. o persona con capacidad de gestar. Se pierde Alejada de nociones de imparcialidad y pureza de vista la especificidad política de género cada frente a “contaminantes políticos”, la investiga- vez que en el discurso sobre el debate del aborto ción feminista supone conocimientos responsa- se borran las líneas que dibujan los cuerpos de bles, comprometidos con valores y proyectos las mujeres y sus vidas históricas (Chaneton y emancipatorios, antiautoritarios, participativos Vacarezza, 2011). (Haraway, 1993). Su intencionalidad política Por otra parte, nuestra propuesta prioriza el es clara y constituye, en cierto punto, su razón carácter contextualizado de la ocurrencia de los de existir. Tiene el mérito de aceptar y afirmar abortos medicamentosos. En términos generales; activamente sus propias posiciones políticas en un determinado contexto legal y cultural (Gross, 1986). Va directo a la transformación: (caracterizado por la penalización y clandesti- transformación en los modos de hacer y con- nidad de la práctica) y concretamente, en una siderar la ciencia, transformación en las condi- determinada región geopolítica como lo es Cuyo, ciones de posibilidad para que emerjan otros Argentina7. sujetos de investigación y de enunciación, aporte Es interesante destacar cómo en las investiga- en la transformación de los sentidos y las narra- ciones donde se exploran las experiencias de abor- tivas construidas para apostar a existencias to, que hemos podido relevar hasta el momento, humanas menos desigualadas, más libres y el contexto resulta determinante. Varios estu- democráticas. dios indican al respecto que la ilegalidad y los A diferencia de investigaciones desde otros contextos restrictivos producen reacciones emo- posicionamientos epistemológicos, la investiga- cionales dolorosas, principalmente incertidum- ción feminista define muchos de sus problemas bre, angustia y temor (Carril Berro y López Gómez, desde las perspectivas de las mujeres y otros 2010; Chaneton y Vacarezza, 2011; Petracci et grupos históricamente acallados y subalterni- al., 2012; Rostagnol et al., 2013). Los resultados zados. Asume la responsabilidad de intentar obtenidos de diversas investigaciones son con- identificar aquellas preguntas que un grupo cluyentes respecto a los efectos negativos de oprimido desea que se respondan, sabiendo que los contextos legales restrictivos para la vida esto se vincula con las posibilidades de modificar y la salud de las mujeres (López Gómez, 2015). sus condiciones. Tal como explica Harding El marco de ilegalidad que carga al aborto con (1987), las experiencias de las mujeres en tanto significaciones de culpa y muerte influye en valioso recurso empírico y teórico, deben ser las significaciones que las mujeres hacen de su reveladas por las mismas mujeres. Para el caso propio aborto, más allá del grado de certeza o de nuestra investigación, se trata de experiencias ambivalencia en la decisión. En palabras de Fer- de aborto voluntario medicamentoso, donde nos nández y Tajer (2006), la clandestinidad opera interesa dirigir la mirada y la escucha al quien, como base sobre la que las mujeres construyen su al sujeto del aborto. Coincidimos con Marta subjetividad y las significaciones imaginarias de Rosenberg (1997, 2013) cuando afirma que en la esta práctica, favoreciendo la aparición de deter- experiencia del aborto siempre hay un quién, minados efectos psíquicos que, en gran medida, un sujeto que se manifiesta. Se trata de mujeres conciernen a las estrategias biopolíticas de control en tanto seres ya actuantes y pensantes, con y disciplinamiento de los cuerpos de las mujeres. una determinada encarnación histórica, sujetas 7 Se toma la región de Cuyo (provincias de San Juan, San de vínculos socio-sexuales y emocionales, con Luis y Mendoza) al considerar la existencia de un contexto funciones sociales, familiares, en el marco de particular común, tanto desde el punto de vista social como un determinado proyecto de vida. A través de la institucional.

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 55 ] Además de reconocer un contexto geopolítico de potenciar su capacidad traductora para común, nuestra investigación parte del supuesto realizar elucidaciones de las opresiones de de que cada experiencia cuenta con sus particu- género (Fernández, 1992, 1994). La ideología laridades, en función de múltiples determinantes patriarcal hegemónica produce marcas en las y de las tramitaciones psíquicas posibles en cada subjetividades y cuerpos. También lo hace al caso. Como señala Fernández (2009) es necesario interior de las mismas disciplinas. considerar tanto las diversas condiciones de exis- Las producciones teóricas y las formaciones tencia (como la clase social, edad, etnia, religión, discursivas se ven atravesadas en sus posibilidades orientación sexual, región geopolítica) así como mismas de enunciación por determinados a los múltiples organizadores de sentido, tales priori históricos que conforman el campo episte- como el estado civil o tipo de vínculo con el varón mológico en el cual se inscriben. Éste no sólo involucrado en el embarazo -si lo hubiera-, el delimita las condiciones de posibilidad de un momento en que la mujer se encuentra respecto saber, sino también las zonas de visibilidad y, por a su proyecto de vida, el grado de obligatoriedad ende, de invisibilidad y los principios lógicos que con el que enlaza el embarazo y la maternidad; la ordenan sus conocimientos (Fernández, 2016). vigencia, eficacia y adscripción a determinados Para el caso de la teoría psicoanalítica freudiana, valores del entorno y propios respecto a la vida fundante del campo, Ana María Fernández (1992, sexual, a los derechos sexuales de las mujeres, 1994, 2016) explica cómo ha operado la Episteme a lo legal y a lo legítimo de esa decisión, entre de lo mismo en la organización de conocimientos, otros. A lo señalado por la autora, agregamos premisas y lógicas del psicoanálisis para que en nuestra investigación se considera fun- pensar las diferencias en relación al género. La damental en relación a la experiencia en sí dife-rencia es pensada a partir de la ecuación y sus implicancias emocionales, el modo en humanidad=hombre y diferente=inferior. A que se realiza la práctica. Por ello, nos interesa partir de “lo uno” y por lo tanto, de “lo mismo”, la poder explorar las particularidades que conlleva diferencia se plantea en términos de lo comple- abortar con medicamentos en la experiencia mentario y lo equivalente en menos. Es decir, emocional de las mujeres. desde parámetros de corte jerarquizantes e infe- riorizantes para lo que no se corresponda con el espectro asociado a lo masculino. Esta ecuación 2. Acerca de las elecciones teóricas opaca las especificidades, lo heterogéneo, lo di- verso y de esta manera, quedan invisibilizadas Como base del marco teórico de nuestra inves- posiciones fundamentales de la subjetividad tigación, partimos del posicionamiento que reco- de las mujeres (Fernández, 1992). Frente a este noce la utilidad de las herramientas teóricas psi- reconocimiento y cuestionamiento de la Episte- coanalíticas para la comprensión de los procesos me de lo mismo, las posturas psicoanalíticas de subjetivación femenina generizada, vale decir, con perspectiva de género proponen un trabajo en el entramado de una sociedad patriarcal, hete- deconstructivo y reconstructivo en términos ronormativa y sexista donde tienen lugar dichos epistemológicos. Esto implica que no se pierda la procesos. especificidad y la positividad de las diferencias. Introducir la mirada crítica feminista También comprende que se puedan considerar implica apuntar directo a las coordenadas de las inscripciones en procesos histórico-políticos construcción del saber. Implica una operación de las diferencias y de las subjetividades, sin teórica de deconstrucción de las naturaliza- recurrir a esencialismos reduccionistas. Es decir, ciones y los dualismo fundantes y el abordaje que en el intento de articular la pluralidad de de sus sesgos, en este caso, sexistas. Por ello, idénticos, se pueda pensar en las diferencias nos inscribimos en posturas psicoanalíticas (de clase, etarias, sexuales, raciales, étnicas) y que reconocen que si bien, el objetivo primero no en la diferencia. En este sentido se destaca del psicoanálisis no estuvo centrado en las arti- que hay diferentes maneras de ser otra y que si culaciones entre formaciones inconscientes y bien todas tenemos en común las cicatrices de la formaciones histórico-sociales; resulta necesa- discriminación, […] no todas tenemos las mismas ria la indagación crítica de la teoría, en pos marcas (Fernández, 2016:53).

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... [ 56 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Un modelo de comprensión de la salud mental de las mujeres

os objetivos específicos de investigación que 2009). En este sentido, la presente propuesta de Lnos hemos planteando ponen el foco en las investigación está pensada como un aporte más implicancias emocionales que puede generar para continuar enriqueciendo esta construcción. el abortar con medicamentos y, a su vez, con el La concepción participativa se centra en un acompañamiento -o no- de activistas socorristas proyecto de concientización y transformación de que ofrecen discursos alternativos sobre el aborto, las condiciones opresivas de vida de las muje-res provenientes del movimiento feminista que en lo cotidiano. Considera a las mujeres como consideran el aborto como uno de los derechos sujetos sociales activos y reconoce que la salud sexuales y (no) reproductivos, en tanto Derechos mental se va construyendo a partir de las necesi- Humanos de las mujeres. Teniendo en cuenta dades que surgen en diferentes momentos de las estos objetivos, una de las primeras definiciones vidas. teóricas responde a desde qué nociones de Esta concepción se complementa con el subjetividad y salud mental posicionarse. modelo tensional-conflictivo (Burin, 1990, 1992) el Dentro de la multiplicidad de maneras de cual pone en suspenso la noción de salud mental conceptualizar las implicaciones del aborto como normatización -adaptación a las normas sobre la salud mental y de los modelos teóricos culturales-. El modelo tensional-conflictivo se de abordaje existentes (Rondón, 2009), el marco apoya en las nociones de conflicto y crisis como teórico de nuestra investigación se nutre de propiciadoras para la transformación de la herramientas provenientes de los Estudios de salud mental. La subjetividad femenina puede Género aplicadas al campo de la salud mental y entenderse a través del modo en que se atravie- los derechos sexuales y reproductivos, junto con san las crisis evolutivas y accidentales -que son aportes del campo psicoanalítico con perspec- agudizaciones de los conflictos- entre las que tiva de género para el entendimiento de las di- figura el aborto. Los indicadores de salud mental mensiones sociosubjetivas implicadas. de los que se vale este modelo se vinculan a la Para introducirnos en la comprensión de la presencia de cierto dinamismo y flexibilidad salud mental de las mujeres, elegimos el modelo para resolver las tensiones producidas por los tensional-conflictivo, desde una concepción conflictos. Es decir, que los conflictos no se participativa (Burin, 1990, 1992, 2009; Burin et al., estabilicen de manera estereotipada sino que 2002).8 Este modelo enuncia e investiga la especi- promuevan la gestación y el uso de recursos para ficidad de la salud mental de las mujeres, en transformar las tensiones. En consonancia con tanto área que se encuentra en formación dentro esta idea, Meler (1999) señala como indicadores del campo de la salud en general (Burín, 2002, insoslayables de salud mental la flexibilidad y la potencialidad creativa. Frente a circunstancias 8 Se considera la existencia de, al menos, tres modelos vitales que pueden generar conflictos, fracturas de comprensión de la salud mental de las mujeres vinculares y/o psicopatología, como lo es la (Burin, 2002; 1992). Tradicionalmente, han regido rebelión frente al mandato de la maternidad dos grandes enfoques. Por una parte, un modelo médico-psiquiátrico que se apoya en una rígida obligatoria, lo saludable es poner en juego estos diferenciación psicopatológica entre “lo normal/ recursos en pos de la recreación de nuevos lo patológico” y se basa en principios biologicistas, sentidos. En palabras de la autora, nuevos sentidos ahistóricos, individualistas, asociales y esencialistas, que permitan transitar por experiencias no previstas donde las mujeres quedan ubicadas en el polo de lo en el proyecto vital, sin significarlas forzosamente patológico. Por otra parte, un modelo tecnocrático de salud, donde la salud mental es considerada como un como pérdidas o injurias narcisísticas. (1999:246) estado a lograr asociado al equilibrio y la armonía. Este Situarse desde esta orientación teórica conlleva modelo, también conocido como “emotivo-sensible”, a superar las concepciones médico tradicionales se apoya en una supuesta sensibilidad femenina para -psiquiátrica y tecnocrática-, al menos por dos detectar los estados emocionales de su medio familiar grandes razones. o más cercano y para dar respuestas apropiadas. La idea es poder mantenerse en equilibrio para neutra- En primer lugar, porque permite salir de la lizar los conflictos familiares y domésticos, mediante dicotomía normal-patológico, haciendo uso del la intervención de los “expertos”, en quienes queda concepto transicional de malestar psíquico (Burin, depositado todo el saber y la construcción de la salud. 1990, 1992, 2002, 2009). Este es un recurso desde Podría decirse que en esta concepción subyace la idea los enfoques de género que permite analizar de mujer como ser-para-los otros. Finalmente, una concepción más actual y en estado de gestación es la las condiciones que producen y preservan la concepción participativa (Burin, 2009; 1992, Burin et salud mental de las mujeres. Se trata de una al., 2002). percepción ambigua de disconfort y desasosiego

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 57 ] que no permite sentirse ni saludable ni enferma, A su vez, permite destacar el carácter social de por lo cual desarticula y supera los dualismos la salud. Tal como señala Meler (2007:167): Son las salud/enfermedad, subjetivo/objetivo, interno/ sociedades humanas las que crean las condiciones externo. Alude a los sufrimientos psíquicos y para la salud de sus habitantes y también las difi- emocionales de las mujeres como emergentes de cultades que generan formas específicas de pade- su condición de tales, desde un posicionamiento cimiento físico y psíquico. Situarse desde una con- teórico e ideológico que enfatiza las dimensiones cepción participativa posibilita la legitimidad socioculturales e históricas en la producción de de la participación de actores sociales, saberes subjetividades femeninas a partir de modelos y y experiencias diversas en la definición y cons- lugares sociales, en tanto factores de riesgo en la trucción colectiva de la salud mental. Para el salud mental de las mismas. Entre estos factores caso de nuestra investigación nos interesa cono- de riesgo, figura la obligatoriedad del rol materno. cer cómo significan las mujeres el ser acompa- La maternidad, culturalmente, se impone a las ñadas por activistas-feministas socorristas en mujeres como la garantía de su salud mental. su experiencia de aborto voluntario con medi- Pero al ser considerado como el único rol legítimo camentos, o en otras palabras, qué implican- y legitimante para las mujeres y al desconocer los cias tiene en esta experiencia emocional, la par- deseos, experiencias y particularidades de cada ticipación de otros actores sociales que pueden mujer en relación a la maternidad, puede generar aportar nuevas formas de transitar la experiencia tal tensión y contradicción que se convierte en un del aborto. factor de riesgo para la salud mental (Burin, 1999). Desde la visión de las socorristas, el soco- Este modelo de comprensión constituye una rrismo como práctica y discurso ofrece a las postura crítica frente a las representaciones mujeres en situación de embarazo no deseado, sociales ofrecidas a las mujeres sobre su salud el contacto con una posición política sobre el mental. Existe todo un sistema de representaciones aborto como derecho colectivo de las mujeres a de género, mitos e imágenes hegemónicas sobre la ser conquistado. A su vez, como un derecho vin- femineidad que ha implantado la ecuación mujer- culado al valor de la propia vida, de la salud y de madre (Fernández, 2016b). La cultura patriarcal la capacidad de decisión legítima sobre el propio dominante ha identificado a las mujeres en tanto cuerpo y la propia fertilidad en el marco de sujetos con la maternidad, mediante el uso de cada proyecto de vida singular. Estos discursos diversos recursos materiales y simbólicos para habilitan otros modos de pensar y vivir el hecho, mantener dicha identificación (como por ejemplo, ya no vinculado a la soledad, lo dramático, lo los conceptos y prácticas de rol maternal, deseo indecible, el pecado o la culpa. El acontecimiento maternal, instinto materno, ideal maternal, etc.). subjetivo y colectivo de abortar en compañía y de Cuando el rol maternal es ubicado en el plano de lo manera autogestionada puede acompañarse de natural; cuando es impuesto como el único garante un movimiento de autorización propia e interna, de identi-dad que reza que para ser mujer hay que que colabore con el resquebrajamiento de ciertos ser madre, actúa despojando a la maternidad de dispositivos de poder y disciplinamiento que han su costado deseante y elegido. Esto ha tenido un operado históricamente sobre las subjetividades considerable impacto en la producción de las de las mujeres (Maffeo et al., 2015). Las activistas subjetividades femeninas, entendidas como social socorristas sostienen que en el transcurrir de e históricamente construidas a partir de modelos esta práctica se va de-construyendo el peso del y lugares sociales que producen identidades de patriarcado sobre los cuerpos de las mujeres. género. (Burín, 1990; Fernández, 2016b) En cada encuentro, en el transcurrir de cada En segundo lugar, adoptar el modelo tensional- materialización de la decisión de interrumpir conflictivo desde una concepción participativa un embarazo no deseado, se asumen lugares de permite alejarnos del modelo tecnocrático, al enunciación y se generan construcciones propias considerar la salud mental no como estado al sobre el proceso de aborto medicamentoso, sus cual se llega, sino como un proceso o devenir vivencias y sus representaciones, nutridas por la siempre abierto e inacabado, signado por las grupalidad de los acompañamientos. diversas crisis evolutivas o accidentales que los Considerando la noción de experiencia que seres humanos atraviesan constantemente y por propone Teresa de Lauretis (1992, 1996) y las los modos de resolución o no de las mismas. Esta vías propuestas para abordar la cuestión de la idea se encuentra en consonancia con la actual subjetividad femenina -experiencias, institucio- definición de Salud Mental, a saber:un proceso nes y prácticas con que las mujeres y cada ser determinado por componentes históricos, socio- humano se constituye como sujeto social y económicos, culturales, biológicos y psicológicos, cuya psíquico (de Lauretis, 2000, citada por Bach, preservación y mejoramiento implica una dinámica 2010)- podemos pensar que el atravesar un aborto de construcción social vinculada a la concreción de los medicamentoso con acompañamiento feminista derechos humanos y sociales de toda persona”9. puede calarse de distintas maneras en las 9 Ministerio de Salud (2013). Decreto Reglamentario 603/2013 Disponible en: http://www.msal.gob.ar/saludmental/images/ de la Ley Nacional de Salud Mental Nº 26.657. Capítulo II, stories/info-equipos/pdf/2013-09-26_ley-nacional-salud- artículo 3°. mental.pdf

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... [ 58 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar subjetividades de aquellas que abortan. Se trata acarreada por la penalización del aborto; así de una experiencia concreta y con alto grado de como la consiguiente necesidad de legalización compromiso subjetivo, a partir de la cual será En muchas situaciones esta experiencia de posible experimentar la materialización corporal acompañamiento podrá sacudir, o al menos, del lema feminista mi cuerpo es mío. Y con ello, la tensionar aquellas representaciones sociales aprehensión de una realidad histórica y social hegemónicas sobre el aborto como crimen o atrocidad (Santarelli, 2016).

Los procesos de subjetivación femenina en clave de género

En consonancia con los posicionamientos ciones sobre los procesos de producción de subje- planteados hasta el momento, nos ubicamos tividades, al adoptar una postura que articula dentro de concepciones psicoanalíticas con pers- social e históricamente los procesos identifica- pectiva de género que reconocen que existen torios tempranos, clásicamente estudiados, con modos sociohistóricos de subjetivación. Afirmar las prácticas de sí construidas en el tránsito por esto implica, por un lado, que la condición social las sucesivas instituciones, para dar cuenta que de hombres y mujeres resulta primordial en la el conjunto de las instituciones -no sólo la familia- comprensión de la subjetividad sexuada (Meler, produce subjetividad. (Fernández, 2009:55) Se 2012). A partir de la introducción de los Estudios amplía la mirada, y con ello, se comienzan a de Género se abren las puertas para pensar la superar algunas limitaciones dentro del psicoa- construcción sociohistórica de las subjetividades nálisis. Limitaciones como las señaladas por la femeninas teniendo en cuenta la ubicación social historiadora feminista Joan Scott (1990) en rela- de las mujeres en una cultura por definición pa- ción a las teorías angloamericanas de las rela- triarcal. A la vez, se posibilita el estudio de las ciones objetales que al pensar en los procesos de marcas en la constitución subjetiva a partir de producción de identidades de género se centran subjetivarse en y por determinados procesos de en las pequeñas estructuras -familiares- en exclusión y marginación, en el marco de determi- desdeño de la consideración de otros ordena- nadas relaciones de poder asimétricas (Burin, mientos simbólicos; sociales, económicos y polí- 1999). ticos que intervienen. El análisis de los modos sociohistóricos de Esta concepción de subjetividad, que no deniega subjetivación implica indisolublemente el recono- su construcción social, asume que las formas par- cimiento del carácter político y de disciplinamien- ticulares de devenir sujetos son el precipitado de to estratégico que comportan dichos modos, la concurrencia de diversos discursos y prácticas marcando no sólo las formas de pensar, sentir, ac- sociales, violencias materiales y simbólicas que tuar sino también los cuerpos mismos. Analizar definen posicionamientos subjetivos y sociales de la subjetividad desde esta perspectiva, conlleva quienes encarnan las subordinaciones de género. la necesaria indagación sobre las estrategias de En los múltiples giros y desenlaces transitorios poder que intervienen y los focos de resistencias a resultan primordiales las experiencias, las prác- las mismas, siguiendo una lógica foucaultiana que ticas y los discursos que se recorren en compañía afirma que siempre donde hubo poder, hubo resis- de otras/os. tencia. Siempre habrá un punto de origina-lidad Varios puntos de unión se pueden encontrar en la expresión de la resistencia, ya sea, a través de entre esta línea de pensamiento y las conceptua- síntomas, malestares, transgresiones o institución lizaciones teóricas que realiza Teresa de Lauretis de nuevas prácticas de sí (Fernández, 2016). sobre la subjetividad, la experiencia y el género. Enunciar las dimensiones sociohistóricas de Dentro del feminismo deconstruccionista y en el la subjetividad habilita nuevas formas de enten- marco de un modo de pensamiento complejo, la dimiento. Primeramente, lejos de pensamientos autora se pregunta por el género y la experiencia en términos binarios -tales como interioridad/ en términos de procesos y de productos en exterioridad, sujeto/objeto, individuo/sociedad, construcción; de significados y complejos de estructura/acontecimiento- y de las narrativas psi efectos sobre los cuerpos, las subjetividades y las tradicionales que equiparan la noción de subjeti- relaciones sociales. vidad a la de “interioridad”, surge la necesidad de De Lauretis (1990) aleja la categoría de experien- teorizar desde diversos modos de objetivación- cia del terreno de lo obvio al considerarla como subjetivación históricos, de género, de clases, de un concepto difícil, ambiguo y frecuentemente etnias, que superen dichas oposiciones binarias. sobresimplificado, que comporta una importancia En segundo lugar, se complejizan las considera- crucial para la teoría y el movimiento feminista

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 59 ] en interrelación directa con sus grandes temas, renovable y en constante construcción a partir como lo son la subjetividad, la sexualidad, el de las experiencias historizadas y mediadas dis- cuerpo y la actividad política. cursivamente, donde resulta fundamental el com- Plantea la experiencia en estrecha interrelación promiso subjetivo en las actividades, discursos e con la subjetividad, definiéndola como: instituciones que dotan de importancia (valor, significado, y afecto) a los acontecimientos del el proceso por el cual se construye la sub- mundo. El pensar la subjetividad en contextos jetividad de todos los seres sociales. A través sociales e históricos permite revalorizar la no- de ese proceso uno se coloca a sí mismo o se ción de especifidad y variabilidad histórica, ve colocado en la realidad social, y con ello cuya introducción ha quedado truncada en las percibe y aprehende como algo subjetivo teorizaciones psicoanalíticas -específicamente (referido a uno mismo u originado en él) de corte francés- debido a la tendencia a pensar esas relaciones -materiales, económicas e los procesos de producción del sujeto genérico interpersonales- que son de hecho sociales, como más o menos predecibles por la existencia y en una perspectiva más amplia, históricas. de un único significante, tal como advierte Scott (de Lauretis, 1992:253) (1990) en su revisión de las principales escuelas psicoanalíticas. Esta noción feminista de experiencia se en- En la interrogación por las implicancias subje- cuentra en estrecha relación con las prácticas tivas del aborto en términos de salud mental y en sociales-materiales y con los compromisos sub- la consideración de las heterogeneidades y com- jetivos, en un interjuego constante entre las plejidades de las experiencias de aborto medica- representaciones sociales y las representaciones mentoso de las mujeres cuyanas, nos resulta muy subjetivas (autorepresentaciones) de género. interesante poder dilucidar y describir cómo se La subjetividad se constituye en el género, es producen desde la singularidad de cada mujer las decir, las experiencias son siempre generizadas, mediaciones entre los funcionamientos psíquicos afectadas o más precisamente, producidas por particulares y los sistemas de represen-taciones los dispositivos de género, en tanto aparato de género sobre la feminidad, y también sobre lo semiótico que otorga significados, cuya función moral y lo normal (Meler, 1999). Repre-sentaciones es la de constituir individuos concretos como de género que provenientes tanto desde los varones y mujeres (de Lauretis, 1996). A su vez, centros hegemónicos de producción de sentido la subjetividad implica un proceso, diariamente como desde los márgenes (de Lauretis, 1996).

A modo de conclusión

diferencia de las posiciones epistemológicas mental de las mujeres en relación a las significa- Atradicionales, la adopción de un posiciona- ciones que le otorgan a sus experiencias de aborto miento epistemológico feminista conlleva cla- medicamentoso, priorizando su especificidad y ras y explícitas intencionalidades políticas. Se enfatizando el carácter sociohistórico y político encamina a revolucionar críticamente las co- de los procesos de subjetivación feme-nina. ordenadas implicadas en la construcción del saber Las articulaciones planteadas hasta el momento que atraviesan las disciplinas. Se compromete, se posibilitan mediante la asunción de una actitud ya desde el primer momento de delimitación de crítica y deconstructiva ante ciertas lógicas sus problemas de conocimiento, con los procesos presentes en las corrientes hegemónicas -en este colectivos de transformación de los dispositivos caso, dentro de la psicología y el psicoanálisis-. políticos que producen desigualaciones de género, Además, requieren de una apertura para adoptar principalmente aunque no de manera exclusiva. criterios multireferenciales que implican el Para dotar de la complejidad necesaria a la desafío de correrse de lugares persecutorios investigación que estamos emprendiendo, asu- respecto a la pérdida de la identidad disciplinar, mimos un posicionamiento feminista y nos va- al poner a jugar algunas teorizaciones de corte lemos de herramientas conceptuales propias psicoanalítico con teorías provenientes de otras de posturas psicoanalíticas con perspectiva de disciplinas. Encontramos en los indisciplinados género y provenientes de otras disciplinas. Nos Estudios de Géneros el piso sólido para generar proponemos abordar la comprensión de la salud las articulaciones conceptuales necesarias.

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... [ 60 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibiliografia

Bach, A. M. (2010). Las voces de la experiencia: el viraje ------(1996 [1989]). “La tecnología del género”. en la filosofía feminista. Buenos Aires: Biblos. Mora, Nº 2, 6-34. Disponible en: http://www. Burin, M. y cols. (1990) El malestar de las mujeres. caladona.org/grups/uploads/2012/01/ La tranquilidad recetada. Buenos Aires: Paidós. teconologias-del-genero-teresa-de-lauretis.pdf ------(1992). “Nuevas perspectivas en salud Fernández, A. M. (1992). “La diferencia en psicoa- mental de las mujeres”. En Fernández, A.M. nálisis: ¿teoría o ilusión?”. En Fernández, A. M, (comp.): Las mujeres en la imaginación colectiva. (comp.) Las mujeres en la imaginación colectiva. (p. 314- 332). Buenos Aires: Paidós. Una historia de discriminación y resistencias (1º ------(2009). “Salud mental”. En Gamba S. ed). Buenos Aires: Paidós. (coord.). Diccionario de estudios de género y ------(1994). “De eso no se escucha. El género feminismos -2° ed.- (p. 291-292) Buenos Aires: en Psicoanálisis”. Actualidad Psicológica. N°210. Biblos. Buenos Aires. Disponible en http://www. Burin, Mabel. y col. (2002. [1987]) Estudios sobre la anamfernandez.com.ar/2016/08/17/revistas- subjetividad femenina. Mujeres y salud mental. nacionales-1994-de-eso-no-se-escucha-el- -2º ed.- Buenos Aires: Librería de mujeres. genero-en-psicoanalisis/ Cabruja Ubach, T. (2008). “¿Quién teme a la ------(2009a). “Embarazos adolescentes: psicología feminista? Reflexiones sobre las ¿preco-cidades desventajosas?” En Las lógicas construcciones discursivas de profesores, estu- sexuales: amor, política y violencias. Buenos diantes y profesionales de psicología para que Aires: Nueva Visión. cuando el género entre en el aula, el feminismo ------(2009b). “Violencias, desigualaciones y no salga por la ventana”. Pro-Posições, v. 19, n. 2 géneros”. En Las lógicas sexuales: amor, política (56), 25-46 Disponible en http://www.scielo.br/ y violencias. Buenos Aires: Nueva Visión. pdf/pp/v19n2/a04v19n2.pdf ------(2016a [1993]). “La bella diferencia”. En Carril Berro, E. y López Gómez, A. (2010). “Aborto La mujer de la ilusión. Pactos y Contratos entre voluntario y subjetividad en contextos de pe- hombres y mujeres (1 ed., 7 reimp.). Buenos Aires: nalización”. Efectos y significados en mujeres, Paidós. varones y profesionales de la salud. Psicología, ------(2016b [1993]). “Madres en más, mujeres Conocimiento y Sociedad - Revista de la Facultad en menos: los mitos sociales de la maternidad”. de Psicología, nº 2, 1-36. Universidad de la En La mujer de la ilusión. Pactos y Contratos República. Montevideo, Uruguay. entre hombres y mujeres (1 ed., 7 reimp.). Buenos Chaneton, J. y Vacarezza, N. (2011). La intemperie y Aires: Paidós. lo intempestivo: experiencias del aborto voluntario Fernández, A. M. y Tajer, D. (2006). “Los abortos en el relato de mujeres y varones. Buenos Aires: y sus significaciones imaginarias: dispositivos Marea. políticos sobre los cuerpos de las mujeres”. En CLACAI-Ipas (2011). Misoprostol y aborto con medi- Checa, S. (comp.) Realidades y coyunturas del camentos en Latinoamérica y el Caribe. Disponible aborto: entre el derecho y la necesidad. Buenos en http://lac.unfpa.org/public/lang/es/pid/7247 Aires: Paidós. Danziger, K. (1979). “The social origins of modern Gross, E. (1986). “¿Qué es la Teoría Feminista?” psychology: Positivist sociology and the socio En Pateman, C. y Gross. E, (eds.) Feminist logy of knowledge”. En Buss, A. R. (Ed.) The challenges social and political theory. Boston: social context of psychological theory: Towards a Northheastern University Press. sociology of psychological knowledge (p. 27-45). Haraway, D. (1993). “Saberes situados: el problema New York: Irvington. de la ciencia en el feminismo y el privilegio de De Lauretis, T. (1990). “La esencia del triángulo, una mirada parcial”. En Dubois y Cangiano o tomarse en serio el riesgo del esencialismo: (comp.). De mujer a género. Buenos Aires: CEAL. teoría feminista en Italia, los EUA y Gran Bre- Disponible en: http://epistemologiascriticas. taña. Debate feminista, Año 1 Vol. 2. Septiembre; files.wordpress.com/2011/04/haraway- pp. 77-115. conocimientos-situados.pdf ------(1992). “Semiótica y experiencia”. En Harding, S. (1987). “¿Existe un método feminista?”. Alicia ya no. Feminismo, semiótica y cine. (p. 251- En and Methodology, Bloomington: 294) Madrid: Cátedra. Indiana University Press. Trad. Gloria Elena Bernal.

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 61 ] López Gómez, A. (2015). “El papel de las condiciones Rondón, M. (2009). Resultados de la investigación legales y sociales en las trayectorias y experien- sobre las consecuencias emocionales y psicológicas cias subjetivas de las mujeres frente al aborto del aborto inducido. Lima: PROMSEX. inducido”. En Ramos, S. (comp.) Investigación Rosenberg, M. (1997). “Las mujeres como sujetos... sobre aborto en América Latina y El Caribe: una De las elecciones reproductivas, las condiciones agenda renovada para informar políticas públi- de las mismas y los derechos que garantizan cas e incidencia. Buenos Aires: CEDES. la libertad para tomarlas”. En AAVV, Nuestros Maffeo, F., Santarelli, N., Satta, P. y Zurbriggen, cuerpos, nuestras vidas. Propuesta para la promoción R. (2015). “Parteras de nuevos feminismos. de los Derechos Sexuales y Reproductivos. Buenos Socorristas en Red - feministas que abortamos: Aires: Foro por los Derechos Reproductivos. una forma de activismo corporizado y sororo”. ------(2013). “¿Quiénes son esas mujeres?” En Revista Venezolana de Estudios de la Mujer, Nº 44 Zurbriggen, R. y Anzorena, C. (comp.). El aborto Vol. 20 Enero - Junio 2015. Centro de Estudios de como derecho de las mujeres. Otra historia es la Mujer de la Universidad Central de Venezuela. posible. Buenos Aires: Herramientas. Martín-Baró, I. (1986). Hacia una psicología de la Rostagnol, S., Viera, M., Grabino, V. y Mesa, S. liberación. Boletín de Psicología, Nº 22, 219-231. (2013). Transformaciones y continuidades de los Meler, I. (1999). “Psicoanálisis y género. Aportes sentidos del aborto voluntario en Uruguay: del para una psicopatología”. En Burin, M. y Dio AMEU al misoprostol. Bagoas [Internet]. 7(9):17- Bleichmar, E. (Comp.) Género, Psicoanálisis y 42. Disponible en: http://www.radiouruguay. subjetividad. Buenos Aires: Paidós. com.uy/innovaportal/file/48018/1/transfor------(2007). Mujeres, varones y salud mental. maciones_y_continuidades_de_los_sentidos_ El enfoque psicoanalítico y los aportes de los del_aborto_voluntario_en_uruguay.pdf. estudios de género. En Oliva, L. y Maneiro, N. Santarelli, N. (2016). “Categorías de género, expe- (comp.). Miradas sobre género. Aportes desde el riencia y subjetividad en el pensamiento de conocimiento. San Luis: Universidad Nacional Teresa de Lauretis. La potencia del acompaña- de San Luis. miento socorrista en la construcción de ------(2012). “Las relaciones de género: su género”. En Actas 2º Congreso AAS y 1º Jornadas de impacto en la salud mental de mujeres y Sociología UNVM: Las ciencias sociales en América varones”. En Hazari, C. (Comp.) La crisis del Latina y el Caribe, hoy: perspectivas, debates y patriarcado. Buenos Aires: Topía. agendas de investigación. Tomo I (954-965), 1º ed. OMS (2014). Clinical practice handbook for a safe Córdoba: Universidad Nacional de Villa María. abortion. London: OMS. Santos, B. De Sousa (2009). “Un discurso sobre Petracci, M., Pecheny, M., Mattioli M. y Capriti, las ciencias”. En Una epistemología del Sur. A. (2012). “El aborto en las trayectorias de México: Siglo XXI-CLACSO. mujeres y varones de la ciudad de Buenos Scott, J. (1990 [1986]). “El género: una categoría útil Aires”. Sexualidad, Salud y Sociedad - Revista para el análisis histórico”. En Nash y Amelang Latinoamericana, Nº 12, 164-197. Disponible en (eds.) Historia y género: las mujeres en la europa www.sexualidadsaludysociedad.org moderna y contemporánea. Valencia: Alfons el Magnanim.

María Natalia Santarelli | Consideraciones teórico-epistemológicas iniciales... [ 62 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 51-62 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar La universidad como agente de igualdad de género Prácticas universitarias para mujeres empoderadas

Paola Ingrassia (Argentina) Universidad Nacional de San Juan [email protected]

Fecha de recepción: 12-10-2016 Fecha de aceptación: 04-02-2017

Resumen Abstract n el marco de los hechos de violencia que pa- he objective of this work is to expose the Edecen millones de mujeres en todo el mundo, TFreirean critique of the concepts of ideology el objetivo de este trabajo es exponer la crítica and political education that cross university freireana a los conceptos de ideología y educación pedagogy and suggest possible alternatives política que atraviesan la pedagogía universitaria for the empowerment of Women and gender y sugerir posibles alternativas para conseguir el equality in our society. empoderamiento de las mujeres y la igualdad de A woman is killed every 30 hours in our género en nuestra sociedad. country according to the Research Area of the​​ Una mujer es asesinada cada 30 horas en Civil Association La Casa del Encuentro. In total, nuestro país según el Área de Investigación de La 275 women were victims of between Asociación Civil La Casa del Encuentro. En total, June 2015 and May 2016. 275 mujeres fueron víctimas de femicidio entre In that context, the following reflections are junio del 2015 y mayo de 2016. proposed: how to achieve from En ese contexto, se plantean las siguientes re- academic practices that aim to promote gender flexiones: ¿cómo conseguir la equidad de género equality?; What are the cultural expressions desde prácticas académicas que apunten a pro- and language used in classrooms to talk about mover la igualdad entre los géneros?; ¿cuáles son “the dominated classes”, about women in social las expresiones culturales y el lenguaje que se inequality? What are the concepts and values ​​ utiliza en las aulas para hablar sobre “las clases with which academic practices reinforce the dominadas”, sobre las mujeres en inequidad so- patriarchal ideology and naturalize the situation cial?; ¿cuáles son los conceptos y valores con los of inequality and helplessness of women? que las prácticas académicas refuerzan la ideo- The Question and Critique Pedagogies are logía patriarcal y naturalizan la situación de ine- considered an appropriate theoretical framework quidad y desamparo de la mujer? to analyze current academic practices and Las Pedagogías de la Pregunta y Crítica se promote learning based on respect for women’s consideran un marco teórico apropiado para rights. analizar las prácticas académicas actuales y Contributions such as the one presented propiciar aprendizajes basados en el respeto a los here are in line with initiatives and research derechos de la mujer. worldwide that seek to end gender inequality

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 63 ] Contribuciones como la que aquí se presenta from the redefinition of social actors and actors están en línea con iniciativas e investigaciones in the different domains of everyday life. a nivel mundial que buscan terminar con la desigualdad de género desde la redefinición de los y las actores y actoras sociales en los distintos ámbitos de la vida cotidiana.

Palabras claves: Estudios de Género, Keywords: Gender studies, Feminism, Feminismo, Educación universitaria University education

Introducción

a violencia de género es una de las mayores en terapia. Lproblemáticas que padece nuestra sociedad. Johana Carranza, de 23 años y sus dos hijas, Tal como indica la Entidad de las Naciones Unidas Luciana y Candela, de 5 y 7 años, fueron asesi- para la Igualdad de Género y el Empoderamiento nadas por Juan Pablo Ledesma, ex pareja de Ca- de las Mujeres (ONU Mujeres) rranza, quien además mató al novio de Carranza, Carlos Peralta (unoentrerios: Fecha de Captura 7 En todo el mundo, una de cada tres mujeres de noviembre de 2016). ha sufrido violencia física o sexual, princi- Con el fin de brindar soluciones a la situación palmente por parte de un compañero senti- de la mujer a nivel mundial, ONU Mujeres plan- mental. Ya sea en el hogar, en la calle o en tea la necesidad de implementar estrategias de los conflictos armados, la violencia contra prevención holísticas, que incluyan múltiples las mujeres es una pandemia mundial que intervenciones para conseguir efectos duraderos ocurre en espacios públicos y privados y permanentes. (Fecha de Captura: 25 de septiembre de 2016). Es preciso involucrar a muchos sectores, ac- En Argentina, según el Área de Investigación tores y partes interesadas. Cada vez se cuenta de La Asociación Civil La Casa del Encuentro, 275 con más pruebas sobre las intervenciones mujeres fueron víctimas de femicidio entre junio que funcionan para prevenir la violencia: del 2015 y mayo de 2016. desde la movilización comunitaria hasta Como consecuencia, el 3 de junio de este el cambio de las normas sociales, desde año se realizó la segunda marcha denominada intervenciones escolares exhaustivas #NiUnaMenos, para reclamar por los derechos centradas en el personal y el alumnado de género. hasta el empoderamiento económico y los Sin embargo, meses después, en Mendoza complementos a los ingresos junto con mataron a tres mujeres en tres días por el sólo he- capacitación sobre la igualdad de género cho de ser mujeres. Janet Zapata, Julieta González (ONU Mujeres, Fecha de Captura: 30 de y Ayelén Arroyo fueron asesinadas en septiembre, septiembre de 2016). víctimas de la violencia machista. El 28 de ese mes, más de 15 mil personas organizaron la tercera En este sentido, ONU Mujeres y AMGS (Asocia- marcha #NiUnaMenos en la provincia cuyana ción Mundial de las Guías Scouts) promueven el para reclamar por los 12 femicidios perpetrados desarrollo de programas de educación no formal desde enero del corriente en ese lugar. enmarcados en dos de los principales objetivos En Entre Ríos hubo 6 víctimas de violencia de planteados por la ONU para este año: garantizar género en 27 horas, entre las 21.30 del sábado 5 y una educación inclusiva y de calidad mediante, entre las 0.30 del domingo 6 de noviembre. otras acciones, la formación en derechos humanos e Romina Ibarra (37) y Lidia Milessi (45) fueron igualdad de género y eliminar todas las formas de asesinadas por Orlando Ojeda, ex pareja de ambas. violencia contra todas las mujeres y las niñas en los Evangelina Moledo, de 33 años, fue atacada por ámbitos público y privado(ONU Mujeres, Informe su ex pareja, Miguel Ángel Rodríguez y terminó Anual 2015-2016:19).

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género [ 64 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Por su parte, Desirée Akpa Akpro Loyou, traba- como los “proveedores” de la familia, lo que les jadora social y Comisionada General Adjunta confiere mayor grado de libertad, poder, indepen- responsable de capacitación en la AMGS, afirma dencia, fortaleza y protección, frente al rol que que hablar sobre violencia en instituciones ocupa la mujer, relegada al ámbito privado educativas y realizar capacitaciones de concien- para ocuparse de las tareas domésticas y repro- ciación disminuye la violencia machista. Cuando ductivas. Ésto la ubica en un lugar de sumisión, hablamos con las y los estudiantes, surgen muchos dependencia (económica y emocional) y debilidad. casos de abuso, especialmente entre las niñas […] Así, la ideología patriarcal, entendida como Quiero llegar a las niñas y pedirles que alcen la voz un sistema de creencias y valores socialmente y no se queden calladas (ONU Mujeres, Informe compartidos, se conforma en una ideología hege- Anual 2015-2016:19). mónica. El concepto de género desde una perspectiva Por su parte, el feminismo surge como una crítica implica la reflexión acerca de las estruc- ideología de resistencia frente a esa hegemonía turas sociales y culturales que determinan los que es la base de la violencia de género a nivel distintos roles y posiciones que ocupan en la mundial, ya que es la que permite mantener las sociedad hombres y mujeres. relaciones de poder históricamente definidas a La teoría feminista afirma que estas diferencias través de las distintas formas de dominación físi- derivan de un modelo de sociedad patriarcal, ca y psicológica hacia las mujeres. que organiza a la familia en torno al padre y que En este contexto cabe reflexionar acerca de las adjudica al varón la máxima autoridad y poder ideologías que las teorías y prácticas académicas en el grupo social. Esta estructura implica el so- refuerzan o renuevan. Entonces ¿cómo conseguir metimiento de las mujeres hacia los hombres. la equidad de género desde prácticas académicas Esa distribución de poder en el grupo primario que apunten a promoverla? se traslada a los distintos ámbitos sociales en los A partir de lo expuesto el objetivo principal es que se organiza a la comunidad en dos partes: exponer la crítica freireana a los conceptos de hombres y mujeres, y se subdividen los espacios ideología y educación política que atraviesan de actuación en públicos o privados. la pedagogía universitaria y sugerir posibles Los primeros se vinculan al trabajo y desde los alternativas para conseguir la igualdad de género. primeros años de la humanidad se posicionan

Transformar la ideología cristalizada

a Pedagogía de la Pregunta resulta crucial a Para ello resulta preciso advertir que la noción Llos fines de este trabajo ya que considera al de una educación “neutra” conlleva a reforzar el ámbito educativo como un proceso de indaga- sistema machista dominante. Al enfatizarse tan- ción e interpretación. En ese sentido, se opone to la apoliticidad de la ciencia y de la educación, a las pedagogías clásicas basadas en relaciones termina por resaltarse su carácter político. La nega- jerárquicas de dominación docente sobre el ción de la politicidad es en definitiva un acto político alumnado y propone una participación activa (Freire y Faundez, 2014: 64). de educador/educando, en la que el diálogo es Entonces, el primer paso para conseguir la una estrategia de doble aprendizaje y la interpre- transformación social en materia de derechos de tación del contexto una necesidad. género reside en trabajar con los y las estudiantes, Asimismo, proporciona un concepto de ideo- no para ellos ni sobre ellos, como señala Freire. logía que no se limita a las ideas que circulan en De esta forma, se anula la unilateralidad del la sociedad sino que sostiene que son esas ideas acto de enseñar, ya que, en palabras del pedagogo las que constituyen una forma de poder cuando brasileño, es el proceso de enseñar el que enseña se cristalizan en nuestras acciones cotidianas. a enseñar. Esta noción de ideología en la acción es el Este proceso, tan necesario en nuestra universi- punto de partida para el presente análisis. El poder dad, inicia con preguntas, con una curiosidad, no de dominio de una ideología reside básicamente en con las respuestas que los y las educadoras traen de su capacidad de encarnar en la acción cotidiana antemano a preguntas inexistentes. “Si se establecen (Freire y Faundez, 2014: 58). las respuestas, el saber queda limitado a eso, ya está En línea con los autores, la pregunta aquí es dado, es un absoluto, no da lugar a la curiosidad ni ¿cómo la ideología patriarcal atraviesa discursos propone elementos a descubrir. Ya está hecho: esta es la y prácticas académicas? enseñanza actual” (Freire y Faundez, 2014: 69).

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 65 ] Entonces, la transformación implica pensar a En oposición a esta pedagogía, Rousseau, a la educación en el contexto de violencia actual y pesar de su manifiesto interés por la igualdad, en una dinámica relación entre palabra-acción- propuso una pedagogía centrada en los niños reflexión. como sujetos educativos. El reconocido filósofo Es preciso que la institución educativa aporte brega por la igualdad de todos los sectores a la ruptura de las ideologías históricamente sociales, libres de prejuicios religiosos, pero definidas y el primer paso es educar considerando excluye deliberadamente a las mujeres de los el contexto de violencia actual y las necesidades ámbitos dela razón y del conocimiento (Bedia, del estudiantado frente a ella. 2011). De esta forma se consolidan los dos modelos pedagógicos opuestos que subsisten hasta la ac- Ideologías históricamente definidas tualidad: el feminista y el patriarcal. Sin embargo, la pedagogía con enfoque pa- En la Modernidad se configura la Ilustración triarcal se impuso por asegurar posiciones de feminista que sostiene que la libertad y la igual- privilegio a los varones y consagrar su ventaja dad son atributos que pertenecen a ambos sexos. social. Poullain de la Barre (1993) y Wollstonecraft (1994) Actualmente, y desde un enfoque de derechos son los precursores de una educación igualitaria de género, el desafío debe ser incluir en las prác- para ambos sexos. ticas teorías que demuestren que no existe un Asimismo, Wollstonecraft se convirtió en la orden natural de las cosas, que las personas son máxima exponente de la liberación femenina naturalmente iguales y que el mundo es un espa- desde la educación por su idea de considerar a cio abierto por construir. la pedagogía como el medio más idóneo para La educación es y necesita ser entendida como construir la individualidad y desasirse de la un espacio de discusión y reflexión, capaz de normatividad patriarcalmente asignada a las reformular la actuación pedagógica tradicional. mujeres (Bedia, 2011).

Prácticas universitarias en y para el contexto: el rol del educador-político

nalizar críticamente las expresiones sociales es que los profesores, pedagogos y políticos detentan Acontra la violencia machista, o en palabras parte del poder, porque lo reciben del Estado (Freire de Freire, reflexionar sobre las resistencias de las y Faundez, 2014: 110). clases sociales oprimidas, es fundamental para En consecuencia, considera que es preciso estructurar planes de estudio político pedagógi- reinventar el poder que consiste en reinventar cos que sean coherentes y coetáneos con la mane- la lucha que permite alcanzarlo. Dice Freire: en ra en que las mujeres oprimidas leen su realidad. verdad, la reinvención del poder implica antes la re- En este sentido, ¿cuáles son las expresiones invención de la lucha (Freire y Faundez, 2014: 111). culturales y el lenguaje que se utiliza en las aulas Puede establecerse entonces que el aula es uno para hablar sobre “las clases dominadas”, sobre de los grandes centros de poder, ya que tal como las mujeres en inequidad social? enuncian los pensadores la toma del poder em- Sin comprender esas relaciones, sin considerar los pieza a partir de un pequeño y gran poder, y debe límites de la resistencia de las clases populares, en ser a partir de él que se transforme el poder en el sentido de estimularla para superarlos, es difícil uno del cual participen las minorías, nuestras actuar políticamente con eficiencia revolucionaria mujeres. Esta reinvención será posible a partir (Freire y Faundez, 2014: 84). de considerar la lucha de millones de mujeres Así, los autores destacan que es fundamental contra la violencia machista y patriarcal, esa el rol del educador-político (o político-educador) lucha que hizo que hombres y mujeres se unieran para aprender con el sector oprimido los espacios en un mismo grito: “¡NI UNA MENOS!”. de resistencia, que incluye la comprensión del Ese poder debe manifestarse en todas las activi- miedo y de sus límites. dades humanas, debe penetrar toda la actividad Para Faundez el Estado es tanto la administración de las masas y de los intelectuales [...] se trata de [...] y su forma coercitiva como sus aparatos ideológicos, transformar la sociedad desde sus bases para construir como el lugar donde se administra el poder. Por eso una nueva sociedad (Freire y Faundez, 2014: 111).

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género [ 66 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Así, desde la apropiación del poder en las lu- siendo parte de su formación, que reflexionaron chas cotidianas de docentes y alumnos/as será desde y para el contexto. posible la construcción de una sociedad más Tal como enuncia Freire, es a partir de los justa, igualitaria y equitativa, en la que el poder problemas concretos de la población desde donde será de todos y todas, a través de la formación y hay que abrir el espacio y provocar el cambio. futuros y futuras profesionales que se formaron

La construcción de lo identitario desde la equidad: Desnaturalizar para concientizar

uáles son los conceptos y valores con los El reencuentro con el pasado y el presente, el ¿Cque las prácticas académicas refuerzan la lugar que se le asigna a la historia, la memoria ideología patriarcal y naturalizan la situación de y la identidad son nociones im-portantes. Si inequidad y desamparo de la mujer? entendemos por identidad aquello que los La pedagogía Crítica resulta valiosa en este individuos asumen como lo que los identifica apartado, ya que es una pedagogía para la transición y les pertenece, ello implica la posibilidad social, y por tanto define su actividad educativa de estos sujetos, durante el proceso de como una acción cultural cuyo objetivo central aprendizaje y socialización, de concientizar puede resumirse en el término concientización su yo al tiempo que lo hacen respecto de su (Torres, 2002: 36-37) (Brito Lorenzo, 2008:31-32). grupo o colectivo (Brito Lorenzo, 2008:36). Es precisamente esta concientización en materia de derechos de género la que posibilitará modificar Concebir a lo identitario como un proceso de las estructuras patriarcales del poder establecido. educación popular implica entender y aceptar Por ello, se considera imperioso transmitir cono- que la identidad constituye una formación cimientos que redefinan los roles y funciones sociopsicológica en la que se realizan las si- sociales de hombres y mujeres para conseguir el guientes acciones: toma de conciencia del ser empoderamiento de estas últimas en los distintos del grupo; creación de sentido y sentimientos de ámbitos de la sociedad y lograr la igualdad. pertenencia; configuraciones de valores, creen- En esta línea, es preciso relacionar la propuesta cias, y tradiciones, etc., desde aprendizajes sociales de educación popular de Freire con la perspectiva compartidos. de la cultura y la identidad que sugiere Brito Por tanto, en el proceso educativo y desde la pro- Lorenzo (2008). puesta freireana, no se deben absolutizar ni simpli- ficar identidades, sino que es necesario que estas La educación popular aboga por la con- puedan coexistir con otras formaciones identitarias fluencia entre los espacios simbólicos, la (Brito Lorenzo, 2008:37) que pueden ser colectivas, vivencia, la experiencia, los aprendizajes étnicas, culturales o de género, entre otras. de la cotidianidad, de las potencialidades En suma, el proceso educativo tiene que apuntar de cada sujeto participante desde los dife- a consolidar un espacio de aprendizaje cognosciti- rentes compromisos que asume en la so- vo y, al mismo tiempo, propiciar experiencias ciedad. Una concepción de la educación destinadas a problematizar, resignificar y trans- que acepta y legitimiza la diferencia, la formar críticamente la realidad de violencia actual. transformación del ser humano, su papel El desafío, entonces, consiste en desnaturalizar en la construcción y en la crítica perma- aquellas prácticas académicas que refuerzan los nente de la realidad social y cultural más estereotipos de género e incorporar a la ense- inmediata en la que se inscribe (p.34). ñanza universitaria enfoques que permitan con- seguir la igualdad social desde la formación de La pedagogía crítica resulta pues una práctica profesionales comprometidos con la equidad. liberadora en la que educandos y educandas se La pedagogía crítica demanda “analizar los fenó- convierten en actores indispensables que redi- menos educativos desde una perspectiva social consi- mensionan su propia realidad social. derándolos fundamentalmente como procesos de Asimismo, se acuerda con Brito Lorenzo res- reproducción y de transformación cultural” (Russo, pecto de la influencia universitaria en la forma- 2002: 135) (Brito Lorenzo, 2008:31). ción identitaria de sujetos y sujetas. Por ello, la Asimismo, se considera imperiosa la mayor enseñanza debe partir del análisis de la biografía inclusión de teorías y prácticas feministas, de los y las estudiantes y de su contexto actual, de conceptos relacionados con la igualdad de a fin de convertirlos/las en protagonistas de su oportunidades y de autorías femeninas en las propia educación. bibliografías de cátedras.

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 67 ] Reflexiones finales

e considera que la Universidad es una que apunten a eliminar la violencia de género de Sinstitución fundamental en el proceso de nuestra sociedad. formación ideológica y reformulación de las Es preciso concebir a la enseñanza universi- distribuciones de poder respecto de los géneros. taria desde un enfoque humanista, capaz de En ese sentido, la propuesta es repensar las transformar las relaciones patriarcales de poder prácticas académicas desde la propuesta freireana y de articular con el contexto actual para avanzar y desde las categorías de análisis desarrolladas: en la lucha por los derechos de género. Así será ideología cristalizada; el rol del educador-político posible demostrar que no existe un orden natural y la construcción de lo identitario desde la de las cosas y que las personas son naturalmente equidad, a fin de propiciar aprendizajes basados iguales en un mundo que no es más que un en el respeto a los derechos de la mujer y prácticas espacio socialmente construido.

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género [ 68 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibliografía

Bedia, R. (2011). “¿Educación para la libertad? Las López García et al. (2013). Universidad y feminismo: mujeres ante la reacción patriarcal”. Revista la integración transversal de los estudios de Interuniversitaria de Formación del Profesorado, género en las prácticas docentes en Humanidades. 71 (25.2). Universidad de La Coruña. Universidad de Málaga. Brito Lorenzo, Z. (2008). “Educación popular, cul- tura e identidad desde la perspectiva de Paulo Bibliografía Digital Freire”. En Paulo Freire. Buenos Aires: CLACSO. Freire, P. y Faundez, A. (2014). Por una pedagogía http://derechoepja.org/wp-content/ de la Pregunta. Crítica a una educación basada uploads/2015/05/freire-paulo_educacicion-y- en respuestas a preguntas inexistentes. Buenos cambio.pdf Aires: Siglo XXI. http://www.unwomen.org/es/digital-library/ publications/2016/6/annual-report-2015-2016 http://www.unwomen.org/es

Paola Ingrassia | La universidad como agente de igualdad de género RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 63-69 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 69 ] Revista del Instituto de Investigaciones Socioeconómicas

Revista del Instituto de Investigaciones Socioeconómicas Convocatoria Abierta Epistemologías-MetodologíasVol 10 año 9 | marzo - Críticasjunio 2017 Dossier Abierto - Vol 9 año 8 - agosto - diciembre 2016

Convocatoria de artículos para investigadores, docentes, estudi- antes de posgrado, becarios y comunidad académica en general. Epistemologías-MetodologíasConvocatoria de artículos para investigadores, Críticas docentes, estudiantes Dossier Abiertode - Volposgrado, 9 año becarios 8 - agosto y comunidad - diciembre académica 2016 en general.

nvitamos a realizar aportes a la comunicación Esta revista usa Open Journal Systems 2.4.7.1, Ide investigaciones en el campo de las ciencias que es software libre de gestión y publicación de socialesbrimos y humanas. un espacioConvocatoria de discusiones de artículos teóricas para investigadores, revistasEsperamos desarrollado, docentes, recibir estudiantes textossoportado, indisciplinados y libremente que LosA artículosanudadas son con dede posgrado, narrativastemática becarios libre de experienciasy se y comunidadorga- distribuidoplanteen académica al menosenpor general. el algunoPublic deKnowledge los siguientes Project tópicos: bajo nizande en investigación tres categorías que arrojencon diferentes preguntas especifi- cuestio- Licencia Pública General GNU. cacionesnadoras de delformato conocimiento para cada científico una: en sus mode- ◊ rupturas disciplinarias, espacios de vincu- los hegemónicos y disciplinarios, que sean capaces lación crítica entre los saberes ◊de Artículos problematizarbrimos un espacio la ciencia de discusiones en el entramado teóricas ◊Esperamos experiencias recibir de desarrollo textos indisciplinados de metodologías que ◊Asocio Ensayosanudadas político cultural, con narrativas que ponderen de experiencias la ligazón planteende investigación al menos alguno críticas de los siguientes tópicos: epistemología-de investigación metodología que arrojen desde preguntas perspectivas cuestio- ◊ Reseñas ◊ perspectivas críticas de la tecnología críticasnadoras de del la conocimiento producción de científico los saberes en científicos sus mode- ◊ rupturas disciplinarias, espacios de vincu- ylos tecnológicos, hegemónicos desde y disciplinarios, enfoques feministas, que sean capaces de los ◊ lacióndecolonialidad crítica entre de los los saberes saberes sures,de problematizar descoloniales. la ciencia en el entramado ◊ experienciasepistemologías de feministas desarrollo de metodologías socio político cultural, que ponderen la ligazón de investigación críticas epistemología- metodología desde perspectivas ◊ perspectivas críticas de la tecnología críticas de la producción de los saberes científicos y tecnológicos, desdeCoordinan enfoques feministas,Natalia Fischetti de los | INCIHUSA◊ decolonialidad CONICET Mendozade los saberes sures, descoloniales. Comité editorial RevIISE◊ epistemologías feministas

Fecha de cierre:Coordina 30 de septiembreEquipo editorial RevIISE BasesCoordinan y condiciones:Natalia http://www.ojs.unsj.edu.ar/index.php/reviise Fischetti | INCIHUSA CONICET Mendoza Informes: [email protected]é editorial RevIISE

Fecha de cierre: 30 de junioseptiembre de 2017 BasesREVIISE y condiciones: (ISSN: 2250-5555) http://www.ojs.unsj.edu.ar/index.php/reviise es una revista indexada (Latindex) Informes:con evaluación [email protected] ciega de pares, dedicada a la publicación de investigaciones socioeconómicas.

REVIISE (ISSN: 2250-5555) es una revista indexada (Latindex) con evaluación ciega de pares, dedicada a la publicación de investigaciones socioeconómicas.

Periodo de recepción Julio - diciembre de 2016 Fotografía de portada: Gerardo Larreta Escultura Taller Cinco Elementos

Propuesta: Dra. Natalia B. Fischetti – INCIHUSA CONICET Coordina: Dra. Natalia B. Fischetti – INCIHUSA CONICET Comité editorial RevIISE – IISE FaCSo UNSJ Evaluadorxs: Dr. Alejandro J. De Oto – UNSJ Dr. Alejandro F. Haber – UNCA Dra. Gabriela Bard Wigdor – CIECS, CONICET Lic. María V. Martínez Espínola - INCIHUSA CONICET Dra. Natalia B. Fischetti – INCIHUSA CONICET Lic. Maria Paula D’Amico - FCEN UNCuyo Dra. Valeria Fernández Hasan - INCIHUSA CONICET Epistemologías-Metodologías Críticas Invitaciones/Investigaciones/Interpelaciones

Natalia Fischetti (Argentina) Doctora en Filosofía (UNCórdoba) Investigadora Asistente INCIHUSA CONICET Mendoza | Argentina [email protected]

Relojes Un fama tenía un reloj de pared y todas las semanas le daba cuerda CON GRAN CUIDADO. Pasó un cronopio y al verlo se puso a reír, fue a su casa e inventó el reloj-alcachofa o alcaucil, que de una y otra manera puede y debe decirse. El reloj alcaucil de este cronopio es un alcaucil de la gran especie, sujeto por el tallo a un agujero de la pared. Las innumerables hojas del alcaucil marcan la hora presente y además todas las horas, de modo que el cronopio no hace más que sacarle una hoja y ya sabe una hora. Como las va sacando de izquierda a derecha, siempre la hoja de la hora justa, y cada día el cronopio empieza a sacar una nueva vuelta de hojas. Al llegar al corazón el tiempo no puede ya medirse, y en la infinita rosa violeta del centro el cronopio encuentra un gran contento, entonces se la come con aceite, vinagre y sal, y pone otro reloj en el agujero. (Julio Cortázar, Historias de cronopios y de famas)

brimos un espacio de discusiones teóricas feminista de las ciencias ha introducido y Aanudadas con narrativas de experiencias visibilizado en la discusión epistemológica la pro- de investigación que buscan arrojar preguntas blemática de las mujeres con una impronta eman- cuestionadoras del conocimiento científico en cipatoria. Un enfoque histórico, social y político sus modelos hegemónicos y disciplinarios, que de los saberes es capaz de leer y deconstruir son capaces de problematizar la ciencia en el los saberes instituidos e instituyentes en claves entramado socio político cultural, que ponderan interpelantes. la ligazón epistemología-metodología desde pers- Hablamos de investigar, no de las certezas pectivas críticas de la producción de los saberes de la ciencia, sino de las incertidumbres de la científicos y tecnológicos, desde enfoques femi- investigación. La praxis de lectura-escritura se nistas, situados, del sur, decoloniales. inscribe en el espacio en el que los objetos de La teoría crítica ha puesto en cuestión a la la ciencia y los sujetos científicos, mujeres y ciencia moderna desde el fundamento mismo hombres se entraman como preguntas. Entre los de la dominación que la constituye y define. El problemas de investigación, las ideas, las hipótesis pensamiento decolonial ha incorporado a la y los resultados, se encuentran los entremeses, las crítica de los saberes hegemónicos, la perspectiva disputas, las rupturas, la vida misma: el cuerpo, la geopolítica de la colonización. La perspectiva carne, la materialidad de las prácticas. ¿Y qué hay en

Natalia Fischetti | Epistemologías-Metodologías Críticas: Dossier Abierto RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 73-76 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 73 ] el medio? (Latour) preguntamos insistentemente. sujetos históricos que producen y recepcionan La elección del tema, las instituciones que hacen la ciencia. Estos métodos de validación son al posible la investigación, los resultados de la misma. mismo tiempo de innovación, con lo cual los Entre la vida personal y social, privada y pública límites entre metodología y epistemología no son de la investigadora o del investigador, y el caso, la ya claramente definibles. cosa, el objeto, la representación, el producto, la Proponemos entonces problematizar acerca de interpretación, la producción, el descubrimiento, epistemologías y metodologías en el sentido am- no hay vinculación causal. No son efectos unos de plio y a la vez riguroso que supone la reflexión otros, sino que cada porción de la historia produce y la práctica críticas del conocimiento científico. variaciones en las otras y son estas variaciones Epistemología en un sentido filosófico fuerte que las que pueden explicar(nos). Las modulaciones involucra la reflexión acerca de la ciencia en su entre las coyunturas en trama con las estructuras relación con elementos históricos, económicos, científica, política, social y cultural, se pueden culturales, sociales, políticos. A su vez, es preciso abrir a las preguntas que aquí se abren. continuar problematizando el vínculo de la Desde esta postura, lo importante del conoci- ciencia con la tecnología, un vínculo que ya no miento científico no se halla ni en el sujeto ni en el puede seguir repitiendo vetustas versiones de objeto de la investigación sino en todo el abanico ciencia básica y ciencia aplicada. Es decir que de las interacciones posibles que se dan en la praxis la propuesta de análisis epistemológico que su- entre los sujetos y con los objetos. La propuesta gerimos rompe con la tradición de historia in- invita a un pensar del cuerpo, los sentidos, las terna y externa, así como de los contextos, de sensaciones, el corazón, los pulmones y el hígado descubrimiento, justificación, aplicación, etc., (Rivera Cusicanqui), indagando, dejando salir, de la ciencia. No caben, desde esta perspectiva poniéndole voz, a todo aquello que queda fuera crítica, la pretensión de que la ciencia pueda de los conceptos y de las teorías canonizadas, en seguir pensándose y haciéndose en una burbuja, una perspectiva epistemológica reveladora de descontextualizadamente, o desde las categorías las ausencias. Es decir que la apuesta va en un de causa-efecto. doble sentido: el cuestionamiento a la ciencia Con la noción de metodología ocurre algo si- intrínsecamente, es decir a sus modos de enten- milar: la metodología no puede referirse a un der la validez del conocimiento y al mismo tiempo recetario de métodos y técnicas que se aplican a la posibilidad de establecer diálogos en igualdad externamente a un objeto de estudio. La cons- de condiciones con otros saberes, con otras trucción del caso rompe también con la dicoto- voces. Ambos sentidos de la revisión se requieren mía sujeto-objeto. La propuesta es que desde recíprocamente, rompiendo también con la esta perspectiva crítica de la epistemología, pretendida escisión entre lo interno y lo externo. la metodología de investigación se despliega Al modo de una cinta de Moebio, la apertura de conjuntamente con la tarea investigativa. la ciencia a otros saberes pone en cuestión su Es decir que el llamado es a repensar y socavar los rigidez metodológica al tiempo que su flexibilidad supuestos de la ciencia moderna que planteaban metodológica, en tanto nexo entre las teorías y las el conocimiento en términos dicotómicos, y por prácticas, amplían su comprensión del mundo. lo mismo, acríticos: sociedad-naturaleza; teoría- Apostamos a que la tarea de reflexionar acerca praxis; mente-cuerpo; particular-universal y de las ciencias no puede dejar de lado ni la historia subjetivo-objetivo. Una reorganización de las del surgimiento del conocimiento científico, ciencias debería asentarse en una transformación ni las condiciones de posibilidad que le dieron profunda de índole epistemológica de los funda- origen, ni al sujeto protagónico de la praxis mentos del conocimiento científico. Sólo sobre científico-tecnológica, ni a su vinculación con una modificación tal sería posible construir un otras acciones en el “mundo de la vida”. La ciencia nuevo modelo de ciencia (Wallerstein). no es un saber acabado cuya metodología está Desde la perspectiva de la problemática de las instalada consensuadamente en la comunidad ciencias sociales latinoamericanas, es preciso científica. Por el contrario, la ciencia es un saber hacer epistemología desde una crítica al neolibe- que se hace, rehace y deshace constantemente ralismo en tanto discurso hegemónico de nuestro según circunstancias particulares y generales modelo de sociedad (Lander). Es desde esta crítica que afectan la vida de la gente individual y so- que es posible formular alternativas a la lógica cialmente. Metodología y epistemología pueden totalitaria del mercado. Al mismo tiempo, esta pensarse en compartimentos estancos, pero deconstrucción requiere de parte de las ciencias también es posible romper con la dicotomía y sociales el cuestionamiento de sus pretensiones entrever una trama común en la ciencia. Para de neutralidad y objetividad, de otro modo se las posiciones epistemológicas críticas de la naturaliza el modelo neoliberal: desde la lógica concepción heredada del Círculo de Viena, las disciplinar de las ciencias que compartimentan el ciencias sociales y aún las ciencias naturales mundo, en sucesivas escisiones, por un lado y por utilizan una multiplicidad de métodos de vali- el otro desde los poderes coloniales e imperiales dación que parten de la teoría y de la cultura y afirmados en los saberes de las ciencias sociales. que tienen que ver con la multiplicidad de los Las ciencias sociales se vuelven conservadores

Natalia Fischetti | Epistemologías-Metodologías Críticas: Dossier Abierto [ 74 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 73-76 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar del status quo y dejan de enfrentarse y de resistir la ciencia de una adaptación de las mujeres a el modelo liberal cuando pasan a formar parte sus normas y la demanda de las mujeres de una del mismo como única forma de vida posible. transformación profunda de la ciencia en todas Ante un modo de desarrollo de la epistemología sus instancias. Esto supondría una ampliación de afincado en este presupuesto de superioridad la racionalidad concebida en términos modernos de Occidente, de sus lógicas y modus operandi, a partir del trabajo explícito con la subjetividad, retomamos la idea de una epistemología del Sur la sensibilidad, las pasiones, la singularidad, el (de Sousa Santos), término que mantiene la pala- cuerpo y la narratividad. Esta introducción de bra epistemología pero que busca revertir su sig- nuevos modos de conocer en el proceso de pro- nificado en forma contrahegemónica. El Sur en ducción de saberes científicos modificaría un mo- tanto concepto que engloba el sufrimiento hu- delo de ciencia y tecnología que ha sido muy cues- mano causado por, y las luchas contra, el capita- tionado desde hace más de medio siglo, a la vez lismo, el colonialismo y el imperialismo, en que prácticamente intocado. Una ciencia nueva cualquier lugar geográfico del mundo en el que rompería con las dicotomías modernas, incluso se encuentren, incluso en el Norte. Los saberes con la de lo masculino y lo femenino, hacia una del pensamiento crítico de una tal epistemología apertura a la multiplicidad. requieren, a diferencia de las construcciones La epistemología se anuda con la política teóricas críticas eurocéntricas, ir acompañando en la búsqueda de una ciencia de perspectivas por detrás a los movimientos de transformación parciales, no totalizante ni totalitaria. Una ciencia social, pensando lo impensado, dejándose sor- paradójica, contradictoria, crítica, multidimen- prender, en una labor epistemológica de tipo arte- sional, objetiva y encarnada (Haraway). Tomar sanal (Rivera Cusicanqui). La metodología rompe posición, ocupar un lugar, un punto de vista, con el disciplinamiento que el mercado impone genera responsabilidad en nuestras prácticas, a las ciencias si se instala en la resistencia de los un compromiso corporal con la investigación, conocimientos de los movimientos sociales, si nuevos modos para la teoría y la praxis del co- es capaz de indisciplinar la investigación, discu- nocimiento, lo que supone una lucha contra tiendo sus supuestos (Haber). absolutismos y totalitarismos científicos, tecnoló- Han sido los estudios decoloniales y los estu- gicos, discursivos, políticos y mercantiles. dios feministas, en sus nuevas perspectivas episte- Hermosas y bellos cronopios han asistido a mológicas, los que han abierto para las ciencias en la invitación y han hecho una fiesta a puertas Latinoamérica la posibilidad crítica, reveladora de abiertas. Invitan a entrar a todos los curiosos que la diversidad y las contradicciones (Mignolo). La pasan por aquí: cronopios, famas y esperanzas epistemología crítica y decolonial recibe el influjo latinoamericanxs. Salen luego a armar la fiesta en de la epistemología feminista (Espinosa Miñoso) la calle. Al poner en cuestión al tiempo impuesto, en tanto sus reflexiones acerca de las ciencias no es el lugar, el espacio, el territorio, el locus de se contentan con describirlas sino que buscan de- enunciación lo que ha emergido. Las voces de Ma- nunciarlas, desnudarlas en sus silenciamientos ría Eugenia, Manuel, Mario, Mariana, Virginia y y contradicciones, para que los saberes sean a Weimar cantan. Son cronopios, desobedientes, su vez revolucionarios del status quo en pos de la músicos, indisciplinadxs. Cantan cada unx su emancipación de las mujeres, la naturaleza y de canción, hecha con otrxs. Cantan superpuestos, las sociedades. Esta perspectiva se irriga con múl- por momentos hasta se oye algún grito. A veces, tiples estudios de la ciencia desde perspectivas de si escuchamos con cuidado, los sonidos se acom- género (Bartra, Blázquez Graf, Espinosa Miñoso, pasan y surge una melodía común. Otras veces Maffía) que ponen en cuestión incluso el núcleo cantan en dúos o en tríos. Hacen silencio al uníso- duro del modelo hegemónico del conocimiento no para mirarse unxs a otrxs. Hacen silencio por científico. Los estudios feministas de la ciencia se turnos para escuchar las canciones de los demás. formulan la pregunta recíproca por el predominio Bailan. Las palabras danzan y se escabullen por el del modo hegemónico de representación del géne- aire hacia otros destinos, donde empezarán a ser ro masculino, con sus ideales de racionalidad, tarareadas. objetividad, neutralidad y universalidad, en los Algo está pasando con los saberes científicos y métodos y las teorías científicos, así como en la filosóficos: las ciencias políticas, el trabajo social, misma estructura y organización de la ciencia la economía, la filosofía, la sociología... Sus bordes como institución, con su contraparte: ¿cómo es permean entre sí. Algunas cuestiones se están que la ciencia es la principal herramienta para moviendo, nos están movilizando, están cam- la reproducción de los prejuicios y estructuras biando. Necesitamos que cambien si queremos sociales de género? enfrentar las injusticias que nos ahogan, necesi- La perspectiva feminista de la ciencia (y de la tamos que se escuchen las voces disidentes y crea- tecnología) busca evidenciar la ideología sexista tivas en nuestras sociedades latinoamericanas, hoy que la ha constituido históricamente, con el obje- fuertemente doblegadas, avasalladas por el mercado tivo explícito de producir transformaciones en la monocorde y la política/empresa silen-ciadora. praxis científica y política. Se impone entonces Lxs invito a la fiesta. Salgan, escuchen, canten la pregunta en la tensión entre la imposición de y bailen con ellxs.

Natalia Fischetti | Epistemologías-Metodologías Críticas: Dossier Abierto RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 73-76 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 75 ] Bibliografía

Bartra, E. (comp.) (2002), Debates en torno a una Latour, B. (2010). Crónicas de un amante de las metodología feminista. México: UNAM. ciencias. Buenos Aires: Dedalus. Blázquez Graf, N.(2012), “Epistemología feminis- Maffía, D. (2007). “Epistemología feminista: la sub- ta: temas centrales”. En: Blázquez Graf, N., versión semiótica de las mujeres en ciencia”. Flores Palacios, F. y Ríos Everardo, M. (coord.) Revista Venezolana de Estudios de la Mujer, vol. Investigación feminista. Epistemología, metodología 12, n° 28. y representaciones sociales. México: UNAM. Mignolo, W. (2003) Historias locales/diseños glo- De Sousa Santos, B. (2009). Una epistemología del bales: colonialidad, conocimientos subalternos y sur. México: Siglo XXI - Clacso. pensamiento fronterizo. Madrid: Akal. ------(2010) Mas allá del pensamiento abismal, ------(2005). “Prefacio”, en: Walsh, C. (ed.) Pensa- Buenos Aires: Prometeo. miento crítico y matriz (de) colonial. Reflexiones Díaz, E. (2007). Entre la tecnociencia y el deseo. latinoamericanas. Quito: Universidad Andina Argentina: Biblos. Simón Bolivar. Espinosa Miñoso, Y., Gómez Correal, D. y Ochoa Rivera Cusicanqui, S. (1990). “El potencial episte- Muñoz, K. (eds.) (2014). Tejiendo de otro modo: mológico de la historia oral: de la lógica instru- feminismo, epistemología y apuestas descoloniales mental a la descolonización de la historia”, Re- en Abya Yala. Colombia: Universidad del Cauca vista temas sociales, 11: 49-75. Haber, A, (2011) “Nometodología payanesa: Notas ------“Oralidad, mirada y memoria del cuerpo de Metodología indisciplinada”. Revista de en Los Andes”. (mimeo) Antropología, n° 23, pp. 9-49. Varsavsky, O. (1989). Ciencia, Política y Cientifi- Haraway, D. (1995) “Conocimientos situados: la cismo. Buenos Aires: Centro Editor de América cuestión científica en el feminismo y el privi- Latina. legio de la perspectiva parcial”. En: Ciencia, Walsh, C. (ed.) (2005). Pensamiento crítico y matriz Simios y mujeres. La reinvención de la naturaleza. (de) colonial. Reflexiones latinoamericanas. Quito: Madrid: Cátedra. Universidad Andina Simón Bolivar. Horkheimer, M. (1974). Teoría crítica. Buenos Wallerstein, I. (2006). Abrir las ciencias sociales. Madrid: Aires: Amorrortu. Siglo XXI. Lander, E. (comp.) (2000). La colonialidad del saber: eurocentrismo y ciencias sociales. Perspectivas latinoamericanas. Buenos Aires: Clacso.

Natalia Fischetti | Epistemologías-Metodologías Críticas: Dossier Abierto [ 76 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 73-76 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Investigar en situación Aproximaciones metodológicas y otras imprecisiones1

Virginia S. Martinez Coenda (Argentina) CIECS-CONICET-UNC [email protected]

Fecha de recepción: 13-09- 2016 Fecha de aceptación: 22-2- 2017

Resumen1 Abstract n el presente trabajo esbozaré algunas n this paper, I will outline some approaches to the Eaproximaciones a la perspectiva metodológica Imethodological perspective that we have been que venimos construyendo en el Colectivo producing in the “Colectivo Co-construcción”. Co-construcción. Se anudarán en el texto Descriptions, analysis and reflections born from descripciones, análisis y reflexiones que nacen situated experiences in the cities of Concordia de las experiencias situadas en las ciudades and Bariloche (Argentina) will be tied in the text. de Concordia y Bariloche (Argentina). Las Notions of “procedure” and “situation” will be nociones de “procedimientos” y “situación” serán crucial in the argumentations. The emphasis centrales en las argumentaciones. El énfasis will be methodological, but the effort will be será metodológico, pero el esfuerzo estará en ir to identify the political, epistemological and reconociendo todo lo político, lo epistemológico, theoretical aspects that are at stake in those lo teórico que se juega en esas definiciones. definitions.

Palabras clave: Procedimientos, Experiencias, Key words: Procedure, Experiencias, Situación. Situación.

1 Agradezco a mi directora y compañera Noelia Cejas por la lectura atenta y sensible y, sobre todo, por el humor.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 77 ] Introducción

ratar de decir algo sobre nuestra1 perspectiva gunas líneas ilustrativas acerca del colectivo de Tmetodológica es, ya, una tarea dificilísima. investigación Co-construcción y de las experiencias Desligarla de “la cuestión epistemológica” y de “la de Bariloche y de Concordia. Espero que después cuestión política” es decididamente imposible. de esta parte, el/la lector/a pueda hacerse una Sabemos que la escritura académica nos dispone primera imagen, todo lo difusa que se quiera, de muchas veces a separar en partes aquello que, de nuestras investigaciones. tan anudado, una no cree siquiera que existan En la segunda parte, intentaré tirar del hilo de tales partes. Nos dicen que ésta es la forma en algunas preguntas que nos venimos haciendo la que se procede en toda investigación que se con el colectivo y que sólo hemos podido ir res- pretenda científica. Entiéndase bien: objetivos, pondiéndolas parcialmente: ¿cómo construir marco teórico, metodología, recolección de datos, conocimientos junto a nuestras/os compañe- análisis de datos, conclusiones. Lo que presentaré ras/os de Concordia y Bariloche? ¿Cómo despla- en estas páginas es, en cambio, un texto que zarnos del lugar de privilegio conferido al saber transcurre, al mismo tiempo, por distintos académico para habilitar la emergencia de esos lugares. Se anudan en él descripciones, análisis y saberes otros? ¿Cómo escuchar la voz “verdadera” reflexiones de un colectivo de investigación que del otro/a? ¿Cómo expresarla aquí sin hablar por nacen de sus experiencias situadas en las ciu- él/ella? ¿Cómo armar un horizonte común ante dades de Concordia y Bariloche (Argentina) y se semejante diversidad? ¿Cómo poner a funcionar vale, para ello, de elementos diversos: teóricos, esos conocimientos para la transformación so- empíricos, imágenes, tonos, todos ellos dispuestos cial? ¿Cómo correr los límites un poco más? al ritmo que la escritura vaya marcando. ¿Cómo transformar al Estado? ¿Cómo dislocar los El modo de organizar el texto que me pareció poderes establecidos? ¿Cómo articular las tempo- más conveniente fue el siguiente: una primera ralidades instituidas de las investigaciones y las parte de presentación que intenta esbozar al- que transcurran en los territorios? Por supuesto que preguntas de este espesor abrieron infinitas 1 La alternancia, a veces poco clara, entre la primera persona consideraciones, algunas de las cuales organizaré del singular y del plural tiene que ver con el cruce entre una en este escrito. El énfasis será metodológico (la investigación que es ante todo colectiva y este artículo que expresa reflexiones personales que, sin embargo, sólo tienen persistencia del “cómo” en todas las preguntas nos sentido en su inscripción colectiva. Opté por ir recurriendo, da una señal sobre eso), pero el esfuerzo estará en según la ocasión, a la forma que encuentre más apropiada, ir reconociendo todo lo político, lo epistemológico, priorizando en general a la primera persona del singular. lo teórico que se juega en esas definiciones.

Primera parte

A propósito del colectivo Co-construcción y de Sin embargo, fuimos aún un poco más lejos. En las experiencias enConcordia y Bariloche el trascurrir de nuestras investigaciones hemos comprendido que había otro límite por traspasar, pues advertimos que el conocimiento científico, l equipo de investigación del cual formo aún interdisciplinar, tampoco es suficiente. Eparte está constituido hoy por doce personas Llegamos así a nuestro segundo aprendizaje: la aproximadamente. Un poco más de la mitad resolución de nuestras problemáticas sociales proviene de formación de grado en arquitectura, requiere de la combinación no sólo de saberes mientras que el resto nos hemos formado en de distintas disciplinas sino que, aún más, de distintas carreras de ciencias sociales, en mi saberes construidos por fuera de los mecanis- caso ciencias económicas. Primer aprendizaje: mos convencionales de la academia. las disciplinas por sí solas no son capaces de De este doble aprendizaje nace la idea de comprender la complejidad de las realidades co-construcción del conocimiento, que nos que habitamos. La interdisciplina constituye en- resultó expresiva de la posición política, epis- tonces el primer intento de rebasar ese límite. temológica y metodológica que asumimos como

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 78 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar investigadores/as. De allí que hemos optado por amplio, abarcando tanto el artefacto-producto identificarnos con el nombre de Colectivo de que resulta de ese desarrollo, como así también Investigación Co-construcción2. los procesos organizativos que moviliza. Cuando La noción de lo colectivo me resulta particu- hablamos de procesos de desarrollo nos referimos larmente interesante como modo de composición concretamente a las instancias de diseño, pro- en la pluralidad. Una investigación colectiva, ducción, construcción y montaje de prototipos del modo que la estoy planteando, no supone la tecnológicos. fusión de las diferencias. Se parece más al ch’ixi de Problematizando los procesos de producción Silvia Rivera Cusicanqui, en tanto gris jaspeado de conocimiento con que se conciben tales tec- resultante de la mezcla del blanco y el negro, nologías, quisimos complejizar la perspectiva que se confunden a la percepción sin nunca heredada de transferencia de conocimiento tecno- mezclarse del todo (Rivera Cusicanqui en Gago, lógico. Con los aportes de los Estudios Sociales de 2014). En ese mismo sentido, tampoco supone la Ciencia y la Tecnología que señalaban el fracaso la difusión de las asimetrías. Soy consciente relativo de experiencias transferencistas -que de que cualquier forma otra de investigar que endilgan el “no funcionamiento” de artefactos nos propongamos va a estar tensionada por las “bien diseñados” a la incapacidad cultural de las formas ya sedimentadas e institucionalizadas. poblaciones “adoptantes”- fuimos construyendo Los esquemas enquistados (cristalizando deter- un modo investigativo colectivo cuyos sentidos minados intereses) van a ejercer sus fuerzas se sintetizan en aquello que llamamos renglones ordenadoras. Gestada en esta tensión, nuestra más arriba co-construcción del conocimiento. investigación colectiva va a combinar prácticas Forman parte de la investigación redes de ac- y racionalidades en apariencia contradictorias: tores locales compuestas por organizaciones de lo asimétrico se superpone con lo horizontal, lo trabajadores/as de la construcción (carpinteros/ individual con lo comunitario. as, albañiles y/o herreros/as), gobiernos munici- Si bien el equipo está radicado institucional- pales, escuelas e instituciones del sector científico- mente en Córdoba, nuestras experiencias de in- tecnológico. El horizonte es aportar al desarrollo vestigación se extienden hasta las ciudades de de la actividad forestal local, que en ambas Concordia (provincia de Entre Ríos) y Bariloche ciudades constituye una actividad de escaso (provincia de Río Negro). Así, ese modo de arti- valor agregado, bajo lógicas incluyentes que no culación de las diferencias que hemos llamado reproduzcan el funcionamiento segregador del colectivo es expresivo no sólo del modo relacional mercado capitalista tradicional. que nos damos hacia el interior del grupo, sino En el año 2010, Gustavo, el ex intendente de que al mismo tiempo, y necesariamente, hacia la ciudad de Concordia, se comunicó con Paula afuera de él, con los territorios y actores locales. Peyloubet (la directora del programa) para Digo necesariamente ya que, ambas dimensiones convocar al equipo de investigación a trabajar (y convengamos por ahora es que posible, al junto al municipio en una problemática que menos analíticamente, hacer esa separación anuda, en principio, dos cuestiones: la promoción entre el interior y el exterior del grupo) son parte de la actividad forestal local y la resolución de constitutiva de un mismo movimiento epistemo- la problemática de la deficiencia habitacional lógico. En otras palabras, no creemos que el gesto de la ciudad3. Ese primer anudamiento entre “la de la co-construcción pueda hacerse cuerpo sólo cuestión productiva” y “la cuestión habitacional” “adentro” o sólo “afuera” del equipo. que nos traía Gustavo hizo sentido con una Ahora bien, desplacemos la idea abstracta afirmación conceptual que el equipo venía de colectivo y de co-construcción hacia un terre- construyendo desde su experiencia en Villa no más concreto. De manera resumida (y muy Paranacito: la problemática habitacional no reducida) lo que hacemos, tanto en la expe- puede reducirse a la vivienda4. Cuestiones riencia de Concordia como en la de Bariloche, sociales, económicas, tecnológicas, políticas van es promover la integración de saberes diferen- 3 Gustavo conocía la trayectoria del equipo a partir de una ciados (académicos y no académicos) en pro- experiencia de desarrollo tecnológico habitacional en base cesos de desarrollo colectivo de tecnologías al recurso forestal que se llevó a cabo en la ciudad de Villa para el hábitat. Cuando hablamos de tecnologías Paranacito, también provincia de Entre Ríos, entre los años para el hábitat nos referimos específicamente a 1998 y 2009. Esa experiencia está relatada en la tesis doctoral de la Dra. Valeria Fenoglio, actual compañera del equipo. sistemas constructivos en base a madera, tanto 4 Recientemente hemos referido en un texto colectivo la para viviendas como para edificios públicos importancia de estirar los márgenes de las definiciones (salones de usos múltiples por ejemplo). La tradicionales de hábitat para introducir en ellas la discusión tecnología es comprendida aquí en sentido acerca de lo productivo o, en otras palabras, de las dinámicas económicas que movilizan los desarrollos tecnológicos 2 El colectivo está inscripto institucionalmente en el programa orientados a la producción de hábitat. Ocultas tras el velo de investigación Construcción Interactoral del Conocimiento. de la pretendida objetividad, las discusiones en torno a los Dicho programa, dirigido por la Dra. Arq. Paula Peyloubet, desarrollos tecnológicos para el hábitat parecen no querer está radicado en el Centro de Investigaciones y Estudios sobre rastrear y explicitar su vinculación con “lo político”, “lo Cultura y Sociedad (CIECS) dependiente del CONICET y de la económico”. Ver: http://revistas.javeriana.edu.co/index.php/ Universidad Nacional de Córdoba. cvyu/article/view/16855/13636 (último acceso 15/11/2016)

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 79 ] articulándose para componer una definición de de unas/os pocas/os, planteamos como primer la problemática habitacional verdaderamente punto nuestra voluntad de conformar una red que compleja, que es necesario desenmarañar para vincule, en principio, a pequeños/as produc-tores/ abordarla con seriedad. En el reconocimiento as de la economía popular, a gestores municipales de esa complejidad, a nosotras/os nos interesa y a nosotras/os (a la que luego se fueron sumando (por la trayectoria del equipo) aquello que se otros actores). El propósito era ir construyendo encuentra en la intersección de entre todos/as un proyecto que sea capaz de arti- cular nuestras diferencias en pos de accionar ◊ lo económico/productivo (específicamente transformaciones en aquello que nos conmueve. a lo que se refiere a un tipo de vinculación En otras palabras, organizar colectivamente nues- en red de trabajadores/as locales de la eco- tros deseos a partir de los puntos en los que ellos nomía social o popular) se tocan, se encuentran. En ese camino conocimos ◊ el desarrollo de tecnología (específicamente a los compañeros de la Asociación de Carpinteros para artefactos habitacionales en base a de Concordia, de la Dirección de Vivienda y de la madera local). Secretaría de Producción y Trabajo (ambas muni- cipales) y de la Universidad Nacional de Entre Ríos, Así, desde la convicción de no querer contribuir con quienes seguimos trabajando hasta el día de a la ya obscena acumulación de capital por parte hoy. Así nació nuestra experiencia en Concordia.

En el año 2013 Paula recibió un llamado de de baja calidad (por no haber recibido nunca los Alejandro, del INTA Bariloche. Había leído acerca cuidados que requiere su producción) en manos de la experiencia de Villa Paranacito en la página de propietarios que no se dedican a la actividad del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Na- forestal y tampoco tienen interés en hacerlo5. ción y, luego de conversar con sus compañeras/ Esa mesa de trabajo había estado pensando en os decidieron contactar al equipo. Ellas/os venían la posibilidad de generar un producto maderero trabajando en una mesa de trabajo público- que, a través de su inserción en el mercado, privada en torno a la situación forestal de la traccione el circuito económico forestal desde región junto a la Comisión Forestal y Maderera la demanda. Las/os propietarias/os de los bos- de esa ciudad (CFMB), el director del área forestal ques ya habían demostrado el desinterés por de la provincia y un técnico forestal del entonces invertir en la actividad, por lo que la opción de Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca “empujar” el circuito desde la oferta estaba, al de la Nación. La encrucijada era la siguiente: menos temporalmente, desestimada. En ese en los años 80, a partir de la sanción de la Ley con-texto, y conociendo nuestras experiencias 25.080 que promovía inversiones en nuevos em- de investigación anteriores, nos convocaron prendimientos forestales y en ampliaciones de 5 Como dicen las/os productoras/es asociadas/os en la los bosques existentes, muchos terratenientes CFMB, se trata de propietarias/os de bosques que son ma- vieron una oportunidad: cobrar subsidios por yormente empresarias/os vinculadas/os al monopolio del sembrar pinos. El proceso de forestación no tuvo turismo o del chocolate (las dos actividades económicas un seguimiento estatal (ni de control ni de inver- principales de la ciudad) y que no tienen “cultura forestal”. sión económica) en las etapas subsiguientes a la Sumado a ello, la Administración de Parques Nacionales no tienen potestad jurídica para imponer medidas respecto a la siembra. El resultado es evidente: existen hoy miles producción de esos bosques, a pesar de que muchos de ellos de hectáreas forestadas que producen madera están asentados bajo su jurisdicción.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 80 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar para desarrollar un sistema constructivo (ya en los deseos y las diferencias irreconciliables no sea para viviendas o edificios públicos) en base tardaron en hacerse evidentes con la mayor parte a las características técnicas de la madera local de las/os integrantes de esa mesa de trabajo. Sin disponible. embargo, no fue con todas/os así. Conectamos de A diferencia de Concordia, donde fuimos manera interesante con la gente del INTA y del convocadas/os por el entonces intendente de área forestal de la provincia, con sus búsquedas, la ciudad, en Bariloche fue esa mesa de trabajo sus intereses, sus deseos, sus modos de pensar la público-privada quien nos llamó. Quizás esto relación con el territorio y fue con ellas/os que explique, al menos en parte, ciertas tensiones emprendimos los inicios de este proceso. Con a la hora de definir los acuerdos iniciales, espe- el correr de los meses nos fuimos acercando al cíficamente en relación a nuestra posición de municipio, al Taller Integral Angelleli, al Taller desacuerdo respecto a que el sector científico- San José Obrero y a la Cooperativa Laburar (entre tecnológico se dedicara a investigar en favor de otros actores que se siguieron sumando después). la acumulación empresarial6. Los desencuentros Así nació nuestra experiencia en Bariloche.

6 Entiendo que esa distinción respecto de quién nos con- vocó a trabajar no dice mucho o, por lo menos, no dice todo: sobran ejemplos de cómo el Estado ha favorecido la acumulación empresarial. Sin embargo, para el caso de cada caso: para Concordia fue la máxima autoridad del nuestras experiencias, fue efectivamente muy distinta poder ejecutivo municipal y para Bariloche fueron actores la conversación que pudimos entablar con el entonces del sector científico tecnológico (INTA), un referente técnico intendente de la ciudad de Concordia respecto de la que de una secretaría nacional y un director del área forestal de pudimos entablar con la mesa de trabajo público-privada la provincia. Queda como interrogante abierto profundizar de Bariloche. Asumo que eso se explica, al menos en parte, en los efectos que tuvo para las experiencias esos modos por los diferentes modos que tuvo la presencia estatal en distintos de presencia estatal.

Del para quién al con quién investigamos praxis de Paulo Freire que concibe a la reflexión y la acción como unidad indisoluble me parece Creo que la dimensión política de nuestras in- especialmente interesante. Así fue que nos fuimos vestigaciones se juega de manera más clara en las acercando al amplio y heterogéneo espectro preguntas fundantes (y refundantes, puesto que de la investigación-acción (de Fals Borda para se van actualizando con el correr de los años) del adelante) y a la investigación militante (Colectivo para qué y para quién investigamos. En algunas Situaciones). ocasiones he tenido la oportunidad de compartir Ahora bien, ¿para quién investigamos? ¿Para estas preguntas con colegas y compañeras/os y aportar al “acervo de conocimientos sociales” la primera respuesta que suele aparecer tiene y ponerlos así a disposición de la sociedad que ver con la comprensión: investigar para para que los tome y los use a la medida de sus comprender. Claro, pero comprender para qué necesidades? ¿No debiéramos investigar para me pregunto. Comprender para la acción: no contribuir a resolver problemas que sufren creo en una comprensión que no esté anudada los sectores más desfavorecidos? ¿No es acaso a la acción, al movimiento. De allí que la idea de nuestra responsabilidad como investigadoras/os

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 81 ] financiados por el Estado nacional la de producir objetivación que se enuncia como problema de conocimientos para las/os excluidas/os? investigación (2011, p.6). Estas preguntas, planteadas de este modo, Coincido con el Colectivo Situaciones (2004) pueden tener un derrotero peligroso. Investigar- cuando plantea que quebrar la distinción sujeto- para-alguien, así sea para ese genérico impersonal objeto de investigación implica pensar, en todo que llamamos “la sociedad” o bien, en una apuesta caso, que el objeto de investigación son los pro- más jugada, para “los sectores desfavorecidos”, blemas, incluyendo el modo de plantearlos. Plan- propone un esquema donde quien investiga queda tear el problema en clave de demanda (tal sector separada/o de quien es investigada/o. En esa bre- de la sociedad demanda producir conocimiento para cha se produce un problema de investigación que resolver tal problemática) supo-ne necesariamente parece estar depositado en las/os investigadas/os, la existencia de alguien que asista esa demanda. lejos y ajeno a las/os investigadoras/es. Y conlleva también la idea de carencia: aquellas/ Dice Alejandro Haber (2011) que os que demandan aparecen como sujetas/os de necesidad pero aparentemente vacías/os de es nuestro principal interés que haya un potencialidades. problema que nos cree a nosotros como El punto es, entonces, que si investigamos para investigadores. [...] El problema de investi- alguien es, en todo caso, para nosotras/os mismas/ gación es, pues, nuestra coartada: nos ofrece os. Con esto no me refiero al típico individualismo la posibilidad de decir que el mundo nos neoliberal. Me refiero más bien a esa compleja y necesita. [...] Por eso es que lo enunciamos dinámica relación entre lo personal y lo social. como si el problema fuese independiente de Lo diré de esta forma: para que la investigación nosotros, como si estuviese allí, y nosotros de un problema social opere por fuera del aquí [...] Así las cosas, el problema es nuestro esquema de la asistencia, es necesario que problema. Es decir, si no problematizamos ese problema nos interpele en lo personal, lo nuestra relación con el problema, si simple- sintamos propio. Para ello requerimos, como mente omitimos pensarnos en relación dice Haber, problematizar nuestra relación con con el problema y develar la invitación el problema. Creo, entonces, que la sensibilidad que nos ofrece a constituirse en nuestra ante ciertas situaciones es el primer indicador de coartada, habremos concedido dejarnos que estamos frente a un problema que, de alguna llevar por el lugar que nos tiene reservado manera, nos es propio, puesto que activa en no- la institucionalidad de la ciencia, los roles, sotras/os distintas emociones: enojo, tristeza, objetivos, misiones y lenguajes, habremos angustia, impotencia. Sin embargo, creo que no renunciado a hacer otra cosa que reproducir toda sensibilidad nos activa el deseo de movernos. esa institucionalidad, es decir, gozar de Además de sensibilizarnos, necesitamos que ese nuestro lugar en ella (p.3) problema nos conmueva. La palabra conmover viene del latín conmovere y significa “mover Siguiendo con el planteo de Haber, me parece completamente”: con (junto, todo, completo) y que crear la idea de que existe un problema en movere (mover). Digo entonces que, cuando un otras personas para justificar nuestra existencia problema nos sensibiliza al punto de hacerse como investigadoras/es y como gestoras/es de insoportablemente presente diría Haber, nos la resolución de ese problema es la fórmula que activa el deseo de la acción, nos conmueve. Ese sostiene la maquinaria (y el negocio, digámoslo) problema es, así, irremediablemente nuestro. Se de la asistencia. La asistencia resulta así un abre allí la posibilidad de una acción colectiva esquema relacional asimétrico, donde alguien que se funda en la conexión que ese deseo propio parece que “se hace cargo” del problema de puede establecer con el deseo de otras/os. otra/o, y en eso de sus posibilidades para elegir los Abandonamos así el esquema de investigar modos de resolverlo. Este esquema asistencial es para alguien y la necesaria asimetría que ello muy habitual en ciertas intervenciones estatales, conlleva para empezar a colocarnos en otro sitio. incluidas algunas iniciativas de investigación Me refiero a un sitio en el que, conectadas/os con orientadas a la acción y de desarrollos tecnológicos nuestros dolores y deseos, o sea, conmovidas/ (ligadas a las prácticas transferencistas a las que os, nos conectamos también con otras/os, habi- referí antes). Así planteado, nos lleva sin escalas litando un proceso colectivo de investigación. al viejo positivismo del hombre neutral que, al Este corrimiento del investigar para otras/ no estar conectado subjetiva ni emocionalmente os al investigar con otras/os tensiona con las con el problema a resolver, es capaz de elaborar prácticas académicas instituidas. Sin ir más soluciones objetivas y transferibles a ellas/os, las/ lejos, cuando presentamos un proyecto de in- os que poseen problemas, las/os que adolecen vestigación nos es solicitado que predefinamos de potencialidades, las/os sujetas/os de falta, los (solas/os, nosotras/os, desde nuestras oficinas) objetos de investigación. Dice Haber que, en esta la problemática a abordar, los objetivos, la meto- operación, toda relación social que una/o tenga dología, los “beneficiarios”, entre otros ítems. ya establecida con ese mundo, queda oculta en En este esquema, la definición colectiva de esos la distancia epistemológica que introduce la elementos no encuentra lugar.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 82 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Sin embargo, en el año 2008 el Ministerio compañeros de la Asociación de Carpinteros de de Ciencia y Tecnología de la Nación creó el Concordia y otros actores de la comunidad que Programa Consejo de la Demanda de Actores se sumarían posteriormente al proceso, lo cual Sociales (PROCODAS) con la idea de promover pone en evidencia que la apertura no conlleva políticas que favorezcan la interacción entre necesariamente la dislocación de ciertos órdenes el sector científico-tecnológico y los sectores de poder. Segundo, si bien la formulación del socio-productivos ligados al ámbito de la econo- proyecto resultó de una conversación con actores mía social de pequeña escala productiva7. no académicos, fuimos nosotras/os, como equipo Para ello, el Programa dispuso de una línea de de investigación, quienes lo escribimos y admi- financiamiento específica llamada Proyectos de nistramos, ejerciendo allí nuestro poder de orde- Tecnologías para la Inclusión Social (PTIS), con nar y nominar sentidos bajo un criterio que quiso cuatro áreas de aplicación: Economía Social; abrirse pero que no deja de ser el nuestro. Agricultura Familiar; Hábitat y Discapacidad. Todo esto nos convoca a plegarnos a las pro- A pesar de que esta nueva línea reprodujo fundas discusiones que se están dando en torno muchos de aquellos sentidos que veníamos a relación entre el Estado y las organizaciones cuestionando con el equipo (por ejemplo, la sociales. El tema se complejiza aún más si consi- noción de beneficiario como un actor pasivo de deramos que nosotras/os, como Colectivo de In- ese proceso de investigación o la predefinición vestigación, somos el Estado, trabajamos desde de objetivos por parte de las/os investigadoras/ el Estado. Ante esto apelamos, como dicen Borio, es), abrió al mismo tiempo algunas posibilidades Pozzi y Roggero (2004) a la contrautilización de los interesantes. De ellas, me interesa resaltar la medios capitalistas (incluidos los instrumentos afirmación de la importancia de construir vín- movilizados por las políticas públicas) para po- culos con actores extra-académicos. Si bien ese tenciar nuestra propia acción. El problema, no vínculo es planteado desde el esquema de la obstante, no consiste en su mera utilización para demanda (sobre lo que ya expresé mis críticas fines distintos, porque los medios no son neutros: a las posibilidades que un vínculo de ese tipo hay que someterlos al mismo tiempo a discusión, arroja), pudimos dar allí una disputa. Al mismo combinarlos de maneras peculiares, curvarlos, tiempo que festejamos el gesto de apertura que invertirlos, transformarlos. Nuestra lucha por la estaba instaurando el Ministerio con ese pro- transformación de esas inercias, esos órdenes, es, grama, plantamos bandera: esa apertura no pues, desde, hacia y contra el Estado. puede reproducir el esquema transferencista Así, de la artesanía que implicó situarnos en si pretendemos poner a trabajar allí un tipo de esa tensión entre un gesto de apertura que no ter- producción de conocimiento colectiva. mina de ser pero que empieza a correrse del lugar Para la convocatoria de proyectos del año 2010, de la clausura total, resultó el siguiente objetivo: propusimos entonces un proyecto para trabajar junto a algunos actores concordienses cuyo obje- Generar un proceso tecnológico en el campo tivo era, precisamente, la definición colectiva del hábitat, alternativo al convencional, del problema de investigación. Tomamos como que desarrolle un producto co-construido insumos para la definición del proyecto que pre- -vivienda de madera de Eucalyptus grandis- sentamos al Ministerio aquello que Paula había en el marco de un circuito interactoral ba- conversado con Gustavo en su primer encuentro. sado en una productividad cooperativa y so- Quisiera señalar aquí dos aspectos: el primero de lidaria, a partir de una necesidad sentida por ellos, que lo defino como habilitante, es el hecho la población, pasible de ser modificado en de que las premisas de trabajo que expresamos una decisión colectiva y autogestionaria, en la formulación del proyecto tuvieron la haciendo uso del recurso local tanto natural voluntad de expresar aquello que había sido renovable como socio cultural productivo. construido en las conversaciones con Gustavo, Localización en Concordia, provincia de lo cual significó un avance en la tradicional Entre Ríos (Proyecto Tecnología para la inclu- clausura del sector científico-tecnológico. Sin sión social en el marco del desarrollo local, embargo, no puedo dejar de señalar al menos dos PTIS-PROCODAS, convocatoria 2010, las limitaciones, y grandes, de esa apertura. Primero, negritas son mías) las conversaciones iniciales se dieron con el entonces intendente de la ciudad y no así con los Más adelante, traeré algunas escenas que 7 Los objetivos que se planteó el programa en la Resolución expresan cómo se pudo hacer cuerpo (con sus Ministerial Nº609/2008 fueron: 1) Promover e Impulsar la posibilidades y limitaciones) aquella idea de lo inclusión social, con participación y protagonismo de todos pasible de ser modificado en una decisión colectiva los actores, a través del desarrollo y/o la implementación de y autogestionaria. La experiencia de Bariloche Tecnologías que mejoren la calidad de vida. 2) Promover la también tuvo como primera línea de financia- transversalidad de las políticas públicas para el desarrollo social a través de acciones conjuntas, vinculadas a espacios miento un proyecto de Tecnología para la Inclu- Institucionales que fortalezcan el rol del Estado y, a través de sión Social que se propuso la conformación de éste, del Sistema Científico-Tecnológico Nacional. (http://www. una red de actores locales para la definición mincyt.gob.ar/programa/procodas-programa-consejo-de-la- colectiva del problema de investigación. demanda-de-actores-sociales-6399 último acceso 10/11/2016)

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 83 ] Segunda parte

Investigar en situación I y la dispersión, mientras que la organización, (las experiencias situadas) que requiere de una sostenida práctica, amenaza todo el tiempo con estallar9. ntes que metodología de casos, prefiero hablar Late aquí una pregunta que vale hacerse: ¿por Ade experiencias situadas. La literatura acerca qué experiencias situadas en Concordia y en de la metodología de casos de tipo cualitativa Bariloche? Si bien mencioné en el apartado ante- (al menos con la que me encontré hasta ahora) rior que en ambos casos fuimos convocadas/os aporta una mirada indiscutiblemente interesante por actores locales, la pregunta tiene otro sentido, para nuestra perspectiva de investigación8. Sin apela a otra cuestión: ¿por qué salir a buscar sitios embargo, sigue moviéndose en un registro que de intervención afuera? ¿No se trata de una suerte no me queda del todo cómodo. Persiste muchas de escape a la exigencia de politizar las “propias veces en ella la idea de metodología como un vidas” en lo que éstas tienen de cotidianas?10 Estas momento previo, anterior a algo, que prefigura preguntas me llevaron, en palabras de Haber, a el camino investigativo. Al convocar la idea de problematizar mi relación con el problema de situación, en cambio, ponemos en primer plano investigación. No me interesa desplegar aquí un a lo contingente, a lo imprevisible. O, como dice recorrido autobiográfico que revele esos puntos Haber (2011), a aquello que sucede en los márgenes de conexión entre mi trayectoria personal y de nuestra mirada, lo cual sólo podríamos notar estas experiencias. Sólo quisiera plantear que si desviamos nuestra atención hacia lugares investigar en lo cotidiano no es una opción, distintos de los previstos y nos descubrimos así todas/os somos en lo cotidiano e investigamos en donde nunca habíamos pensado estar. desde ahí. En todo caso, la opción es devenirlo La noción de situación también pone de primero consciente y después explícito. Por otra relieve a la diferencia, la diversidad. Pero, parte, las experiencias de Concordia y Bariloche que quede claro: la situacionalidad no es una tienen de cotidiano para mí mucho más de lo apología al multiculturalismo neoliberal ni al que hallo de cotidiano a tres cuadras de mi casa. relativismo paralizante que, so pretexto de la Es que la conexión que hice (y sigo haciendo) con diversidad y la especificidad, no dirigen ni un esas personas, con esas experiencias, me son tan esfuerzo en ensayar algún modo de articularla. propias, tan cercanas, que relativizan la distancia El Colectivo Situaciones la define como aquello física, geográfica, y ponen en jaque la definición del que se funda en la articulación de puntos de una “afuera” y del “adentro”. En otras palabras ¿hasta cierta homogeneidad. No se trata ni de borrar, ni qué punto Concordia y Bariloche están “afuera” de disimular las diferencias, sino de convocarlas de mi cotidianeidad si se juegan allí muchas de las desde el planteamiento de ciertos problemas luchas que me constituyen más profundamente, comunes (2004:104). Así, una metodología que en mi “interior”, en la politización de mi “propia opere en situación requiere de cierta flexibilidad vida”? Como expresa el Colectivo Situaciones con para transcurrir el dinamismo, tiempo para contundente claridad: ¿sacrificaríamos nuestro construir confianzas, sensibilidad para provocar ser común con ellos en nombre de una vecindad el emerger de las diversidades y persistencia puramente física determinada por criterios bur- para trabajar en la creación de un horizonte damente espaciales? (2004: 105). común que las encuentre y potencie. En otras Sin embargo, es cierto que la distancia geo- palabras, se trata de hallar, al mismo tiempo, gráfica hace más difícil esa conexión. Quiero la multiplicidad en lo común y lo común en lo decir que, si bien no creo que exista una rela- múltiple para no caer en eso que Borio, Pozzi y ción de determinación entre los kilómetros Roggero (2004) denominaron el pensamiento que separan dos o más cotidianeidades y sus débil que, no pudiendo dominar la complejidad, posibilidades de conectarse, sí creo que su la trocean en mil fragmentos, reivindicando la incidencia es significativa, o al menos en mi propiedad de uno específico. Tarea nada sencilla experiencia. Insisto: existe una conexión con mis en un contexto donde la regla es la fragmentación 9 Coincido con el Colectivo Situaciones en que resulta curiosa 8 Valoro el aporte que estas perspectivas hacen para la la acusación de espontaneísmo a este tipo de investigaciones comprensión de que lo microsocial es un espacio-tiempo de cuando lo espontáneo es, precisamente, la dispersión. creación, de agencia, y no una reproducción reducida del 10 Una vez leí estas preguntas en un intercambio entre sistema general donde los sujetos son efectos de las estruc- Precarias a la Deriva y el Colectivo Situaciones (Nociones turas. Pero, sobre todo, valoro la reivindicación que hacen Comunes, 2004) que me conectaron con nuestras expe- de las micro-historias de la “gente común”. riencias de investigación.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 84 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar compañeras/os de Córdoba, de Concordia y de Ahora bien, ¿qué sucede en esos viajes? Bariloche que motoriza una acción colectiva, aún ¿Cómo se construyen los itinerarios? ¿Cómo con los kilómetros que median entre nosotras/ investigamos colectivamente? ¿Cómo trabajamos os. Aún así, reconozco que durante los viajes, en y acordamos con otras/os? Para empezar a los que se da el encuentro cuerpo a cuerpo con responder estas preguntas, retomo aquí la ellas/os, se produce una suerte de reactivación, idea de procedimientos metodológicos. Con reactualización de esa conexión. Así, en nuestras ella no quiero referirme a pasos secuenciales experiencias de investigación, lo corporal, el predefinidos al modo de una receta, sino más encuentro cara a cara, parece ser inmanente al bien a la puesta en práctica, siempre situada, que proceso de conmovernos y, con él, al de la acción surge de las preguntas sobre cómo se asume la colectiva. existencia de las diferencias (Colectivo Situaciones, 2004:103). Creo que esta definición pone sobre la mesa tres cuestiones cruciales para nuestra Investigar en situación II perspectiva metodológica: (los procedimientos metodológicos) ◊ La acción como lugar de legitimación/ Tanto en Concordia como en Bariloche, el apropiación de cualquier teoría, atendiendo financiamiento, con todo lo que ello implica a la contribución pragmática de esos saberes (formulación y administración de proyectos en el campo de experiencias13 principalmente) es un aspecto metodológico ◊ La situación como expresión de la contin- fundamental. Luego de los primeros proyectos del gencia, de lo que no se puede prefigurar Programa PROCODAS que mencioné antes, con- ◊ Las diferencias y, sobre todo, el ejercicio tinuamos con otros proyectos11 que financiaron, siempre difícil de articularlas. junto a los otros actores, la continuidad del proceso12. Promovimos, en ambos casos, la con- Entendidos de esta forma, suelen producirse formación de redes interactorales que articulen al durante los viajes algunos (o todos) de los sector productivo (organizaciones de trabajadoras/ siguientes procedimientos: es), gubernamental (gobiernos municipales) y científico-tecnológico (nosotras/os y, para el ◊ Talleres de producción: Los talleres son el caso de Bariloche, algunas/os compañeras/os de motor, el corazón de la investigación que INTA); todos actores vinculados de uno u otro moviliza pulsiones, manos, palabras, emo- modo con la actividad forestal. En Bariloche, ciones, cuerpos, que circulan por todas las la red fue ampliándose hacia otros sitios, como arterias del proceso. Se trata de encuentros escuelas técnicas orientadas a la construcción y que duran varias horas (desde los primeros diversas dependencias estatales (Administración mates de la mañana hasta bien entrada la de Parques Nacionales, Dirección de Producción tarde) y que producen un suceder extraño Forestal de la Nación, Concejo Deliberante del tiempo. Me refiero a una suerte de sus- Municipal). pensión de la velocidad inscripta en nues- En consideración de la distancia geográfica que tras memorias corporales inaugurando una separa nuestros domicilios, los viajes constituyen temporalidad diferente. Encuentros itineran- un dispositivo metodológico fundamental. Con tes que rotan entre una u otra carpintería una periodicidad variable (a veces cada mes, de una u otra organización, convocados a veces cada dos o tres meses, en función a la con la excusa de co-producir un artefacto disponibilidad de fondos y a lo que vaya acon- tecnológico, y abiertos a la participación teciendo), suelen durar entre tres o cuatro días. de todos los actores, habilitan un espacio- Lo fundamental de estas instancias es que, al tiempo especialmente interesante para la habilitar encuentros con cuerpo presente, si se me composición de heterogeneidades. Sobre permite la expresión, constituyen los momentos estos talleres, sobre sus temporalidades de mayor intensidad del proceso investigativo. y sobre las posibilidades que allí se crean 11 Proyecto de Desarrollo Tecnológico Municipal (DETEM) volveré más adelante. del Concejo Federal de Ciencia y Tecnología. Proyectos de Investigación y Desarrollo (PID) y Proyectos de Investigación Científico Tecnológicos (PICT) de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica. 13 Dice Esther Fernández Moya que cuando Fanon enuncia 12 Financiamientos vigentes de nuestras investigaciones: que hay un punto donde los métodos se reabsorben, quiere “Innovación para la gestión de tecnología social en decir que hay una ausencia de criterios de validación el campo del hábitat. Experiencias: Villa Paranacito, externos en los procesos de investigación siendo de esta Concordia y Bariloche”. Directora: Dra. Paula Peyloubet. manera reabsorbidos por el propio fin de la investigación PICT-MINCYT. 2016-2019; “Desarrollo de una tecnología (2015). Ante este hecho habitual en nuestros sistemas social de base cognitiva plural, para el uso sustentable de científico-tecnológicos, nosotras/os postulamos, en cambio, un recurso regional (madera), en el marco de un circuito una idea de validez que involucre una apropiación productivo interactoral, que promueva una economía práctica, concreta y real de los conocimientos, apropiación social. Caso: Bariloche. Provincia de Río Negro.”. Directora: que es factible en tanto y en cuanto exista una participación Dra. Paula Peyloubet. PID-ANPCYT-MINCYT. 2016-2018. de esas personas en la producción de esos conocimientos.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 85 ] Reuniones de organización de la producción: (sólo por ponerlo en esa clave) en la que se gesta Son encuentros entre los referentes de las este proceso. En otras palabras, revela una de organizaciones de trabajadores y el equipo de las tantas formas en que lo instituyente le gana investigación (se suma el INTA para el caso terreno, no sin dificultades, o lo instituido (o de Bariloche). Inseparables de los talleres de como lo mencionáramos en aquel PROCODAS producción, estas reuniones constituyen el que presentamos en el año 2010 para la expe- complejo ejercicio de construir acuerdos en riencia de Concordia, cómo lo instituido es pasi- palabras en relación a la organización de la ble de ser modificado en una decisión colectiva y producción. La dificultad estriba en, digamos, autogestionaria). tres cuestiones fundamentales. Por una parte, Como dijimos anteriormente, los procesos el trabajo, como ámbito privilegiado para la de desarrollo de tecnología que se producen en reproducción de la acumulación capitalista, las experiencias de Bariloche y Concordia van está permanentemente atravesado por fuerzas siendo financiados por distintos actores y a través del mercado, con los ya conocidos efectos de de distintos modos de financiamiento. Para el normalización y atomización de la producción. caso de Bariloche, el pago del trabajo para la La potencia transformadora que habita allí construcción del prototipo es financiado por el tiene, entonces, su correlato en altos grados de Instituto Municipal de Tierra y Vivienda para el dispersión, conflictos y tensiones que hacen Hábitat Social. Para tal fin, el instituto requiere complejo el proceso de ponerse de acuerdo para la firma de un convenio donde se predefinan las la organización cooperativa del trabajo. Por otra condiciones de esa relación contractual. En este parte, la palabra, como mecanismo también sentido, lo que quede definido en ese convenio normalizador y excluyente, no sólo no es un lugar va a incidir directamente en la organización del cómodo para muchas/os compañeras/os, sino trabajo de las/os carpinteras/os. que, además, a falta de significantes que puedan Tradicionalmente, el Instituto contrata a una expresar mejor lo que somos, lo que deseamos, empresa constructora quien asume las tareas de lo que creemos, nos deja al desamparo de un la obra (pagar a las/os constructoras/es, contratar lenguaje que poco tiene que ver con nosotras/os. el seguro de trabajo, gestionar los materiales Finalmente, los sentidos distintos en torno a la e insumos, dirigir la obra, etc.). Los convenios, idea de organización del trabajo que entran en para esos casos, están prácticamente tipificados, tensión. Los dispositivos de financiamiento de puesto que las condiciones en general no varían estos procesos14, que precisamente por eso operan demasiado. Sin embargo, al presentar nuestra también como dispositivos reguladores, exigen a experiencia características diferentes, se creó las/os trabajadoras/es un modo de organización un convenio que no respondió al modelo típico. del trabajo en el que se predefinan tiempos, Voy a puntualizar sólo en tres aspectos que me actividades, precios, mecanismos de distribución parecen elocuentes: del ingreso, antes de comenzar con la instancia de producción propiamente dicha. ◊ Instancias de confección colectiva del Hace menos de un mes el municipio de Barilo- convenio: Para la definición de las condi- che firmó un convenio con los tres grupos ciones del convenio hubo una instancia de productivos que conforman la red interactoral: reunión colectiva de la que participaron los la Cooperativa Laburar, el Taller San José Obrero referentes de los tres grupos productivos. y el Taller Angelelli, para el pago del trabajo por Allí, tomaron como base uno de los con- la construcción del primer prototipo de la tec- venios tipificados que suele usar el Insti- nología que estamos desarrollando: un salón de tuto y fueron discutiendo cada punto y usos múltiples. definiendo condiciones no sólo diferentes a Es interesante pensar en el proceso de formu- las típicamente instauradas, sino que espe- lación de ese convenio ya que es expresivo de las cíficas para cada grupo. Me refiero, por tensiones entre lo instituido y lo instituyente ejemplo, al tipo de facturación. Las formas jurídicas de cada grupo son distintas y exi- 14 Cuando me refiero aquí a dispositivos de financiamiento necesito hacer algunas precisiones. Me refiero a los medios gen formas específicas de facturación. Eso a partir de los cuales el Ministerio de Ciencia y Tecnología debió quedar expreso en el convenio. Luego de la Nación (con sus proyectos) y el Gobierno Municipal de esa primera reunión, circuló un modelo (con sus contratos y convenios) ponen a circular dinero de convenio que tuvo que ser nuevamente en efectivo y en especies (insumos, maquinarias) para la revisado porque no se ajustaba a los reque- consecución de los objetivos del proceso. Este es el modo de financiamiento que estos actores accionan. Sin embargo, rimientos que pudieron expresar los/as otros actores también financiamos el proceso con otros carpinteros/as. modos. Me refiero, por ejemplo, a las/os carpinteras/os que ◊ Redefinición de la “dirección de obra”: La ponen a disposición del proceso su horas de trabajo, muchas figura del director/a de obra, al menos como veces no remuneradas. Eso, entiendo, es otro modo de habitualmente se la concibe, no hacía sentido financiar el proceso pero que, sin embargo, no les otorga a ellas/os las mismas posibilidades de regular y marcar ritmos en el contexto de este proceso. No existía, ni y condiciones que les otorga al Ministerio y al Gobierno había voluntad de que exista, una persona Municipal sus propios modos de financiamiento. que centralice toda la información y defina

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 86 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar los modos y los tiempos de la producción. grado de previsibilidad parcial algunos aspec- Nosotras/os, como equipo de investigación, tos de la construcción, aunque sujeto a las éramos quienes más nos acercábamos a variabilidades específicas que puedan ir esa definición, puesto que contábamos con aconteciendo. el manual técnico completo y podíamos ◊ Forma de pago: Tradicionalmente, en el visualizar, al menos a nuestro parecer, las rubro de la construcción, el pago de la mano distintas acciones que podía llegar a implicar de obra se hace luego de una certificación la construcción del salón. Sin embargo, en de obra, donde el contratista da cuenta el ejercicio siempre difícil y evidentemente de haber cumplido con el compromiso inconcluso de deconstruir tal centralidad, pactado para cierta fecha. Sin embargo, en decidimos que ese lugar no lo queríamos el contexto de esta experiencia, el Instituto habitar. Esto produjo desplazamientos aceptó la condición que los productores múltiples. Por un lado, tanto nuestro equipo le plantearon: no era posible para ellos como el Instituto tuvimos que comprender comenzar a producir sin un adelanto del que debíamos movernos de la centralidad pago. De este modo, el convenio estipuló el de la información y la previsibilidad de las pago por adelantado de un porcentaje del acciones que son tan habituales en nuestros total de mano de obra presupuestado. modos de actuar, en nuestras racionalidades y en las lógicas de las instituciones a las que Esto no quiere decir que se desanduvieron las pertenecemos. Por otra parte, los grupos relaciones de poder históricamente sedimentadas productivos debieron juntarse a crear un en este tipo de vinculación contractual. Lo que sí modo organizativo que no sólo los contenga quiere decir es que hubo un modo que, si bien a ellas/os, que de por sí presentan situaciones desigual, fue haciendo lugar al emerger de voces específicas bien diversas15, sino que también siempre silenciadas y a su institucionalización establezca un canal de diálogo con el Insti- en un convenio. Que hubo aspectos en los que la tuto municipal, ya sea para tensionar aque- pulsada la ganó el Instituto, los hubo. Que hubo llos aspectos en que se pudieron efectuar aspectos que ni siquiera pudieron cuestionarse transformaciones como para acatar aquellos por ese orden tácito pero súper efectivo que que permanecieron invariables. El resultado define lo decible y lo no decible por parte de fue el desdibujamiento, al menos por ahora, de quien está en situación desigual, los hubo. Pero la figura de dirección de obra individual para hubo otros, hubo grietas en las que otras voces pasar a, en todo caso, un grupo de referentes se colaron, hablaron, definieron. Y pensemos que productivos que centralizan colectivamente no es sólo las voces de las/os trabajadoras/es que la información y van definiendo con cierto sabemos que siempre llevan las de perder contra el capital. Son las voces de las/os trabajadoras/ 15 Una cooperativa de trabajo, un taller inserto en una institu- es de la economía popular que, dentro del ción educativa y un taller que trabaja con jóvenes en situación de consumo problemático y que está en plena transición de heterogéneo mundo del trabajo, son uno de los dejar de ser parte de la estructura del Estado nacional para sectores más desamparados y desprotegidos por volver a asumirse como un espacio comunitario. las leyes laborales y de seguridad social.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 87 ] Reuniones de la red ampliada: Son momentos eje funcional/no funcional: ¿cómo, cuándo y de de encuentro entre las organizaciones de tra- qué manera funciona para las organizaciones bajadores/as, los/as gestores/as municipales, sociales la relación con el Estado? el equipo de investigación y, para el caso de Volvamos un segundo a la situación del con- Bariloche, todos los demás actores que partici- venio relatada anteriormente. Leída en clave pan en el proceso. Discutimos allí aspectos decolonial, hubo una transformación más bien que exceden “lo productivo”, involucrando en los temas de la conversación, pero no preci- otras cuestiones que componen al escenario samente en los términos en las que ella se pro- local. Esta red ampliada se mueve a un ritmo dujo: la cuestión siguió organizándose bajo un poco diferente al que se mueve el núcleo de el modo institucional de un convenio, aunque producción16. Justamente, parece que el núcleo de transformado, y en torno a una idea de centralidad producción, al que he dado en llamar el corazón y de previsibilidad, aunque transformada. Sin de nuestra investigación, late en una red que, en embargo, no soy pesimista respecto de esto. No un entramado de venas y arterias, vincula múl- se trata de negar la relación siempre y estructu- tiples núcleos. Y la metáfora no es casual: hablo ralmente asimétrica que se produce entre las de corazones, núcleos, venas y arterias, porque organizaciones sociales y el Estado. Se trata, en hablo de procesos altamente vitales. Y la vitalidad, cambio, de ir produciendo rupturas, ensayos, como sabemos, es movimiento permanente. momentos, situaciones, micropolíticas como Como es propio de ese constante movimiento dice Guattari, donde esas asimetrías se vayan nos suele suceder que, más de una vez, llegamos dislocando, desordenando, aún cuando la inercia al límite de tensiones que la red puede soportar. empuje nuevamente al orden. Coincido con Se generan allí momentos de recomposición, de Liendo (2011) en que el momento instituyente de reacomodo, de replanteo: se producen nuevos un movimiento algunas veces hasta exige su núcleos, se conciben nuevos planos y nos abri- institucionalización, precisamente, para abrir el mos así, cada vez que esto sucede, a tramos espacio a la posibilidad de un nuevo proceso de desconocidos de la red. Lo que sucede en estas institución, que pueda ganarle terreno a lo que reuniones de red ampliada es, entonces, no sólo ya va quedando como instituido, que pueda ir el encuentro y reconocimiento recíproco, sino corriendo el límite y la fijación que implica todo que, también, el ejercicio de hallar y de construir estatuto establecido. esas superposiciones de puntos entre los núcleos, Encuentros en las escuelas: La escuela es, qui- esa sinergia, esas relocalizaciones. zás, lo primero que se nos venga a la cabeza Reuniones de gestión estatal: Se trata de cuando pensamos en educación. Sin embargo, encuentros entre las/os referentes de las organi- sabemos que los espacios donde se producen y zaciones de trabajadoras/es, las/os gestoras/es circulan saberes exceden por mucho las paredes municipales, el INTA (en Bariloche) y el equipo de esas instituciones. Lo que suele suceder es que de investigación. Allí, intentamos superar las la escuela moderna, tal como la conocemos, está tradicionales relaciones asistencialistas y pater- desacoplada de esos otros espacios, separada del nalistas entre Estado y organizaciones sociales, hacer cotidiano, provocando una suerte de doble para construir una relación que habilite la carril por donde circulan saberes diferentes: los emergencia de mayores autonomías. La cuestión escolares y los asociados a la práctica cotidiana. del Estado en las luchas emancipatorias es un Cuando nos acercamos a las escuelas de oficio nudo problemático largamente abordado por Nehuen Peuman y al Taller Integral Angelelli17, distintas/os autoras/es y organizaciones sociales hallamos allí compañeras/os comprometidas/ y representa en nuestro equipo y en la red una de os por transformar la escuela, por desbordar las las discusiones más intensas. Creo que persiste fronteras de las instituciones educativas, hacerlas hoy, como continuidad de larga duración, aquel porosas, para dejarse interpelar por lo que sucede mandato unificador y homogeneizador que operó más allá de sus paredes. Así fue que no hicieron en la génesis de los modernos Estados-nación. falta más que unas palabras para que se sumaran Sin embargo, creo también que en tanto no se a este proyecto y empezáramos a trabajar juntas/ conciba al Estado como mero instrumento de las os. A medida que profesoras/es y estudiantes se clases dominantes y se incorpore su dimensión fueron acercando al proceso, conociendo de qué productiva y articuladora, la complejidad de se trata, preguntando, opinando, respondiendo, su abordaje es insoslayable. Me acerco así a la fuimos buscando entre todas/os aquel lugar que propuesta de García Linera (2010) de pensar al les permitiera participar sin abandonar su lugar Estado como un campo de lucha, de disputa de específico de formación de jóvenes en el oficio sentidos. De allí que, como Cortés (2008), creo que de la carpintería. Este punto no es menor ya que el eje adentro/afuera del Estado se corre hacia el los objetivos, las lógicas y las prioridades de las 16 Llamo núcleo de producción a los dos procedimientos men- escuelas son diferentes a las de las organizaciones cionados anteriormente: el de los talleres de producción y el de las reuniones de organización de la producción. La idea 17 Ambas instituciones son de Bariloche, puesto que en Con- de “núcleo” no es casual, ya que representan los espacios- cordia, si bien hubo acercamientos a algunas escuelas, la tiempos centrales de la investigación. relación nunca logró consolidarse.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 88 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar de trabajadores. Una vez más, el desafío fue (y es) articuladora desaparezca, sino que se relaja articular tiempos e intereses diferentes en una y admite la posibilidad de una temporalidad plataforma de trabajo común. más lenta para la construcción de los acuerdos Notas de campo colectivas: Al regreso de los que las decisiones operativas muchas veces no viajes las escribimos entre las/os integrantes del logran contener. Así, el proceso de investigación equipo que estuvimos allí. Se trata de un ejercicio va operando, simultáneamente, en diversas de sistematización de lo sucedido, de lo vivido. temporalidades. Es una combinación de registros textuales, Talleres de tesis: Como su nombre lo indica, fotográficos, auditivos y audiovisuales. son encuentros donde compartimos avances de tesis, dudas, reflexiones, preguntas, respuestas. Si bien los viajes constituyen los momentos Si bien la producción de una tesis se asume como de mayor intensidad de la investigación, no es una instancia individual, su inscripción en una posible pensar que exista tal cosa como un vacío investigación que es eminentemente colectiva investigativo entre viaje y viaje. Pensar en la idea hace necesaria la generación de estos espacios. de continuidad en el proceso (en Concordia, en Bariloche, en Córdoba), aunque con ritmos diferentes, hace más justicia a lo que efectivamente Investigar en situación III (la conversación) sucede que pensar en la idea de vacío. Los procedimientos que como equipo practicamos (en La conversación es, sin duda, el procedimiento Córdoba) entre cada viaje son los siguientes: más transversal a toda la investigación. Ocurren Reuniones de proyectos: Se trata de encuentros durante los viajes, ocurren telefónicamente o vía semanales en los que nos reunimos a discutir correo electrónico entre los viajes, ocurren entre acciones a seguir. Si bien es imposible escindir lo algunas/os, ocurren entre todas/os. Hace tiempo reflexivo de lo práctico, puesto que a toda acción ya que, como Colectivo, estamos reflexionando práctica le corresponde una acción reflexiva, en torno a la conversación como procedimiento estas reuniones tienen un carácter fuertemente metodológico. Hallamos en ella posibilidades sin- operativo, programático. Con ello quiero destacar gularmente potentes, sobre todo la de romper (o la voluntad de estos encuentros de generar al menos achicar) la distancia entre nosotras/ acuerdos para la acción, que serán siempre resig- os y ellas/os, las/os investigadoras/es y las/os nificados y de alguna manera reformulados investigadas/os, que tan fácilmente aparece en la cuando se pongan a circular por la trama de forma-entrevista y en otras técnicas de la socio- relaciones más amplias que configuran las redes logía cualitativa como la observación o, incluso, interactorales. Los temas de agenda de estas la observación participante. Creo que una de las reuniones participan siempre como momento: cuestiones más interesante de la conversación son las experiencias y, sobre todo, aquello que tal como la estamos pensando (y haciendo) definimos como lo urgente o lo prioritario lo que es que no sólo nos compromete al habla sino dicta el temario. que también -y necesariamente- al silencio. El Reuniones Irene18: Pueden ser comprendidas, de silencio es, primero, la producción de la escucha. alguna forma, como el reverso de las anteriores: Pero es, también, el correr un rato la voz, suspen- aún con la imposibilidad de escindir lo reflexivo der el dominio de la palabra, para permitir el flore- de lo práctico, estos encuentros pisan fuerte cimiento de otras formas de expresión. sobre lo reflexivo. Nos damos aquí el permiso o Cuando a partir del texto de Juan Pablo Puentes la licencia del desacuerdo. Si bien las diferencias (2015) llegué al de Alejandro Haber (2011), me existen siempre (no hay que “permitir” su entusiasmó encontrarme en él con la idea de existencia, es más bien inevitable), también existe conversación. Me interesó también el intercambio la voluntad de construir un horizonte común que que sostiene Haber con Dante Angelo en ese mismo las articule en plataformas de acuerdo colectivo. texto en relación a la conversación y al diálogo. Estas plataformas no clausuran la expresión Conecté, por un lado, con el planteo de Haber de la diversidad, sino que operan como un acerca de la posibilidad de transformarnos en la momento de acuerdo temporal para luego seguir conversación. Se corre así el carácter instrumental, andando, algo así como los descansos en una muy propio de la entrevista tradicional, de re- escalera. Una suerte de procesualidad abierta, cabar información acerca de cómo otras/os un devenir en espiral que sedimenta nuevos viven, hacen, resisten. Una conversación, en el estratos de acuerdos, de los que volver a partir sentido que la estoy planteando, produce una si- para construir a su vez otros nuevos. Cuando tuación de conexión profunda con otras/os, una digo que en estas reuniones nos permitimos el disposición a transformarnos con y en ella. Nos desacuerdo, no quiero decir que esa voluntad convertimos, dice Haber, no en el sentido de que nos convertimos en el otro de la conversación, 18 Llamadas de esa manera por Irene Vasilachis, referente en sino que ambos devenimos versiones hechas en la los estudios sobre metodología de investigación cualitativa que nos acompañó como Colectivo en nuestras primeras conversación, con/versiones (2011:7). preguntas metodológicas y con quien aún tenemos una Por otro lado, me interesa cuando Haber habla relación afectuosa. de una conversación con los sujetos subalternos

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 89 ] o con el lado subalterno de los sujetos. La mismo tiempo, me pareció que encerraban una conversación nos convida así un aprendizaje idea muy potente: junto a aquellas/os que están ya siendo, estando, viviendo, a contrapelo de lo hegemónico, sea por En nuestra experiencia de MI [militancia de opción política consciente o por supervivencia. investigación] ha resultado fundamental la Si conversar nos convoca a aprender, a dejarnos labor de disolver la ideología como cemento transformar, estamos hablando entonces de un constituyente de cohesión (sea “autonomista”, desplazamiento de nuestro lugar epistémico de “horizontalista”, “situacionista” o de lo “múl- privilegio, que nos sitúa, supuestamente, en el tiple”). La idealización, en nuestro contex- lugar del “recabado de información” o bien en el to, es una fuerza destructiva. Se coloca de la “transferencia de conocimiento”. Ese lugar una experiencia real, contradictoria, rica epistémico otro al cual nos desplazamos puede y siempre conflictiva, en el pedestal unidi- expresarse como el de la co-construcción de mensional del ideal redentor. Se idealizan las conocimientos y, en ella, el dialogo de saberes. operaciones que permiten a la experiencia Entiendo cuando Angelo expresa sus reparos producir existencia. Luego, se la transforma respecto a la noción de diálogo que se viene en “buena forma” a aplicar en todo tiempo y construyendo en los últimos años. Dice Angelo lugar, como un nuevo conjunto de principios que la idealización en torno al carácter igualitario a priori. Se le pide, a continuación, ser capaz del dialogo lo constituyen como un bálsamo que de confirmar este ideal de cada quien. cura los errores del pasado y nos desembaraza del La fragilidad de la experiencia tensiona. legado colonial (2011:22). Soy consciente de que la ¿Cómo sostener esa carga? Luego, claro, postulación de la idea de dialogo desde un lugar viene la decepción y, con ella, se continúa que desconozca las relaciones de poder que lo la destrucción: «creí que esta vez sí era, pero constituyen puede convertirse en demasiadas sólo era una estafa» (2004:100-101) ocasiones en una herramienta de producción de consenso y apaciguamiento del malestar social. Es Cuando decimos que la investigación es un por eso que subrayo con vehemencia el carácter viaje abierto que sabemos de dónde y cómo ineludiblemente conflictivo que supone la co- parte pero no adónde nos llevará, decimos, hasta construcción de conocimientos. No me interesa donde yo comprendo, algo sobre esto. Saber de abonar posiciones románticas ni demasiado con- dónde y cómo partimos es reconocer el espacio sensistas acerca de las posibilidades de articular que una ocupa, su domicilio diría Haber, su lugar diferencias. Siendo políticamente incorrecta, creo de enunciación. Es explicitar quién es una, qué que no cualquier diferencia es tolerada. Y sobre quiere, que desea, con quién sí, con quién no, cuáles todo creo que la construcción de “los límites de son sus no negociables, cuáles son sus límites. El esa tolerancia” es, primero, un proceso con otras/ punto crucial que aparece aquí, en esta negación os, puesto que los límites son eminentemente del a priori, es, más precisamente, la negación relacionales; luego, conflictivo, puesto que invo- de la clausura que opera a veces en ese a priori. lucra siempre una disputa de intereses y senti- O es, en su reverso, asumir la posibilidad de la dos; y por último, situacional, puesto que no transformación. Asumir que una parte desde un se cristalizan de una vez y para siempre, sino sitio (y no desde ningún sitio como pretenden que atienden a los acontecimientos que los van hacernos creer las/os objetivistas), explicitarlo y definiendo. estar dispuesta a transformarse en el devenir de la investigación, de la acción con otras/os, de la construcción colectiva. Y no es menor, aunque Investigar en situación IV (los a prioris parezca obvio, el planteo de esa disposición a la y ese espacio-tiempo que llamamos taller) transformación. Digo que no es menor porque es justamente contra eso que nos quiere proteger Párrafos atrás mencioné el desfasaje de las la metodología, contra lo imprevisto, contra temporalidades instituidas de la investigación y lo no planificado, siendo que habita allí, en lo las de los territorios. Ello conlleva, a mi entender, nuevo (y no porque su existencia sea nueva preci- la imposibilidad de definir metodologías a priori samente, sino porque nunca miramos hacia cuando investigamos con otras/os. Ahora bien, ese lugar) la potencialidad transformadora. ¿qué significa negar ela priori? Significa negar la Esa planificación que opera como motor es, receta pero jamás el lugar desde el que una parte. en otras palabras, la desnaturalización de lo Y a veces significa, incluso, cierta planificación dado y la organización de lo deseado. O sea, que opere como motor, planificación dispuesta es un ejercicio político. Insisto, organización a ser transformada. Tomo unas palabras del dispuesta a ser transformada junto a otras/os, Colectivo Situaciones que cuando las leí me inco- sí, pero organización al fin. No es dejar todo al modaron un poco (sobre todo en lo que al inicio azar, porque en el azar la dispersión y la frag- me pareció cierta obstinación con la disolución mentación llevan las de ganar. Porque en el de aquellas premisas o postulados previos con azar, bien que lo sabemos, habita la hegemonía los que una se acerca al territorio) pero que, al naturalizada.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 90 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Antonio Conti expresa esto con contundencia producción19. Los talleres ocupan un espacio- cuando reflexiona en torno a la desaparición tiempo singularmente interesante en tanto en- de la fábrica como el lugar por excelencia para sayo de articulación de las heterogeneidades la producción de subjetividades antagónicas, que confluyen en nuestras investigaciones. Mate rebeldes. y criollitos mediante, inauguramos la jorna- da de trabajo que, todas/os sabemos, va a ser Allí donde falta un lugar específico, cargado larga. Alguna/o de nosotras/os toma la palabra de un significado socialmente compartido, (registro evidentemente habitual para las/os en el que la intervención se pueda dar in- investigadoras/es) para dar inicio al taller y definir mediatamente como política, lo político se algunas pautas y objetivos del día. Sin embargo, hace abstracto, no consigue aferrar lo real, da la ansiedad de los cuerpos presentes por ponerse vueltas en el vacío. Para encontrar un lugar en movimiento estrecha lo decible, lo arrincona. semejante, es preciso recurrir a una argucia Claro, si queremos dialogar con otras/os debemos de lo político, y postularlo previa-mente. repensar nuestros lenguajes, nuestros modos. Porque sólo se puede plantear la cuestión de Negociamos: hacemos una ronda, invitamos una intervención política a la altura de los (insistentemente) a la palabra, que alguien se tiempos a partir de la identificación del topos anime a decir algo decimos, nos conformamos con de su despliegue concreto, y no a partir de un unas voces que salen de algunas bocas que pocas genérico “caminar preguntando” sin meta veces antes fueron convocadas a la palabra, a ser ni huella, sin haber pensado un dispositivo escuchadas. Desarmamos la ronda y nos ponemos de puesta en relación y de producción de a hacer. Y comprendemos: quien trabaja la madera subjetividad, sin haber meditado sobre habla con las manos. dónde y cómo se puede producir una nueva potencia, una nueva riqueza de 19 subjetividades antagonistas. (2004, p.46). Cortometraje de un día de taller en Bariloche: https:// www.youtube.com/watch?v=lKCYJNQQqWo&feature=you Y ahí aparece, para nosotras/os, el taller de tu.be (último acceso 15/11/2016)

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 91 ] Poner el cuerpo en acción, entonces, habilita en el desarrollo de la tecnología era preciso la construcción de ese espacio-tiempo que ope- parar la pelota, organizar las ideas, preparar rará de soporte para el diálogo. Un soporte el terreno para la acción. Propusimos divi- que tendrá que poder sostener los múltiples dirnos por grupo productivo y, en la moda- registros con los que hablan nuestros cuerpos. lidad de mesa redonda, poner a circular la Dije más arriba, cuando presenté brevemente pregunta por las expectativas. El fracaso no estos talleres, que producen un suceder extraño pudo ser más rotundo. Apenas si pudimos del tiempo, una suerte de suspensión de la ve- acercarnos a algunas ideas muy vagas res- locidad inscripta en nuestras memorias corpo- pecto de las expectativas, en un dialogo para rales inaugurando una temporalidad diferente. nada fluido. Conversando con uno de los La convergencia de varias condiciones (de las referentes de una de las organizaciones, nos cuales seguramente apenas puedo percibir dijo que la cuestión era, para él, al revés de algunas) habilita esa situación/procedimiento/ como la estábamos planteando. A pesar de los taller. Me refiero intentos de movernos de ese sitio, seguimos operando en ese momento bajo la premisa ◊ al hecho de que sólo en esos talleres se pro- de que acción y pensamiento son instancias duce el encuentro (con cuerpo, cara a cara) separadas, y que a la primera le corresponde de la gran mayoría de las personas que el cuerpo como territorio privilegiado y al participamos del proceso. En la mayoría segundo el discurso. Básicamente, nosotras/ de los otros espacios/procedimientos la os queríamos empezar por poner palabras y participación es normalmente a partir de ellas/os querían empezar por clavar maderas. referentes o representantes. Comprendimos que fue en el mismo ejercicio del trabajo con la madera que la pregunta ◊ a la posibilidad de expresión a través de por las expectativas pudo circular con mayor múltiples lenguajes. Mientras que en los fluidez. Que poner el cuerpo de ese modo, otros espacios/procedimientos hay un claro en contacto con la madera, nos dispuso a predominio de la palabra, y muchas veces conversar de una forma que no nos dispuso una palabra un tanto acartonada, en el taller el típico formato de mesa redonda, propia se permite el despliegue de otras formas del de las metodologías participativas. Que la lenguaje, se habla con las manos, con los aparición del artefacto (el taladro, el martillo, martillos, con los chistes, con las risas, con la tabla, el machimbre) producía la aparición los enojos, con el mate, con las fotos. Esto me de un canal para la palabra que, sin él, no lleva directamente. existía. Que la sepa-ración entre el mundo de las ideas-discursos-abstracciones y el de las ◊ a la aparición concreta del producto tec- acciones-cuerpos-concreciones no nos sirve nológico. Es cierto que los sentidos de la para pensar nuestras experiencias. investigación exceden por mucho la cons- trucción efectiva y concreta del producto ◊ a la cuestión de lo afectivo. Creo que plan- tecnológico. Sin embargo, su aparición, o tear el desligue de lo emocional en la tarea mejor, su creación, genera una suerte de investigativa es un disparate que sólo “tiene efecto de verdad, como si el producto viniera a sentido” en ese modelo científico que se basa afirmar que todo el proceso existe “en serio”. en la metafísica de la racionalidad como No quiero decir con esto que, efectivamente, principio ordenador de las acciones de las la existencia del proceso dependa de su ma- personas. ¿Qué tiene que ver la investigación, terialización en una casa de madera. Es la política con nuestras formas afectivas, con obvio que una conversación, por ejemplo, nuestras formas de sentir? Si la/el sujeta/o existe aunque no podamos tocarla. Y creo es el que se involucra, lo hace con todo su que, aún sin ser tangible, involucra cierta ser; en otras palabras, también con su carne. materialidad, al menos en los efectos que esa Y esta/e sujeta/o encarnada/o, que siente conversación provoca en nuestros cuerpos. y piensa, actualiza sus respuestas políticas Sin embargo, hay algo en los diálogos, en la según su carnalidad, según su cuerpo afec- organización, en la gestión, que no termina tivo. Los afectos son, entonces, políticos. No de ser aprehensible. Deja en algunas/os de se trata de negar lo racional, sino de asu- no-sotras/os esta sensación de que “falta mir que su carácter de eje ordenador de las algo”, de que esto que hacemos no se termina decisiones no vale para todos los tiempos y de concretar. lugares. Muchas veces, para no decir siem- A unos meses de haber comenzado el pre, los mecanismos de la racionalidad se proceso en Bariloche propusimos que du- entrelazan con la emocionalidad a tal punto rante un taller ocupemos media jornada que resulta imposible establecer cuál de- a conversar sobre las expectativas de cada termina a cuál. De allí que, lejos de negar uno/a de nosotros/as sobre la experiencia. lo emocional, lo afectivo, lo sensible, lo Convenimos que, antes de seguir avanzando reivindicamos, levantamos sus banderas.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 92 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Hallamos en la idea de la confianza aquello de esa superioridad, expuestas/os en la in- que mejor expresa para nosotras/os esa completitud de nuestro saber, heridas/os cuestión afectiva. De nuevo, no porque no en nuestro privilegio. Se produce así una opere en la construcción de la confianza dislocación, un corrimiento (aunque parcial mecanismos racionales, sino por el interés y momentáneo) de nuestro lugar de poder. de nominar de alguna forma, de ponerle ◊ a la condición de ensayo, de prueba, que deja alguna palabra, a todo aquello de orden lugar a la equivocación, que no la castiga sensible, intuitivo, de lo que se siente en la sino que, por lo contrario, la convoca casi piel si se me permite la expresión. El tema como una pedagogía. Se subvierte así la idea con la confianza es que requiere de tiempo de productividad, de eficiencia, nos “desen- para hacerse. Y el tema del tiempo es que, ganchamos” de la espacialidad y la velocidad al representar hoy un recurso económico inmediata que impone el ritmo del mercado, privilegiado, debe usarse para producir para que seamos nosotras/os mismas/os aquello que sea valorizable en términos quienes espacialicemos y temporalicemos monetarios. Todo lo otro, es una pérdida de según nuestros propios requerimientos. tiempo. Las rupturas y los dislocamientos que intentamos crear en los talleres Cabe explicitar una suerte de advertencia sobre habilitan temporalidades que permiten la estos talleres: creer que porque allí se produce, creación de esa confianza. en ocasiones, una ruptura a la imposición capi- ◊ al hecho de que el taller es el lugar donde talista significa que hallamos la solución a la las/os trabajadoras/es de las organizaciones dispersión es una pésima ilusión. Lo cierto es que, se sienten cómodas/os, seguras/os en sus después de los talleres, la fragmentación vuelve a saberes, ese es su espacio cotidiano. Nos ganar terreno. Precarias a la deriva propone una colocamos, así, en un lugar extraño, no imagen que me parece muy ilustrativa: quizás la esperado: las/os investigadoras/es, porta- paradoja de nuestro tiempo esté en el hecho de doras/es del conocimiento supuestamente que, como las abejas, después de ser enjambre, superior, nos hallamos de cara a la ficción volvemos a dispersarnos.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 93 ] Cierre

l inicio del texto expresé que nuestra investi- ahí una existencia otra. Y no estoy hablando Agación se gesta en una tensión, combinando acá del futuro. O acaso hable de un futuro que prácticas y racionalidades en apariencia contra- ya está siendo, que ya empezó a ser, porque esas dictorias (asimétrico/horizontal; individual/colec- existencias otras habitan, hoy, en los pliegues tivo). Asumir esa ambivalencia e intentar producir ambivalentes del presente; basta con afinar el conocimiento desde ahí es indispensable, como ojo para verlas. Las experiencias de Bariloche y dice Marta Malo (2004), para orientarnos y mo- Concordia constituyen, a mi entender, un ensayo vernos sobre un paisaje de relaciones y dispositivos de esa forma otra de habitar el mundo. De allí la de dominación en acelerada mutación. importancia de volver una y mil veces sobre las La potencia política que encuentro en ese experiencias, pensarlas, percibir sus tex-turas, posi-cionamiento en la ambivalencia, en la sus bemoles. Aprender siendo y estando allí, con tensión, es que nos permite corrernos de dos el cuerpo, junto a nuestras/os compañeras/os. lugares: por un lado, de la crítica edulcorada al La advertencia indispensable que cabe hacer es estado de cosas que no cuestiona los privilegios que nada de lo que dije puede considerarse una de pocas/os que se sostienen sobre los hombros “receta para el éxito”. No sólo porque lo exitoso dolorosos de tantas/os otras/os. Por otro de nuestras investigaciones es tan cuestionable lado, de la crítica totalizante anti-todo que, al como la idea de éxito en sí misma, sino que, sobre constituirse como “todo lo contrario” a eso que todo, porque el carácter de los procedimientos critica construye una dependencia ontológica: que accionamos tanto en Concordia como en sólo es en tanto exista aquello que reafirme la Bariloche son ineludiblemente situacionales. diferencia, su antítesis. La invitación es otra: Con esto quiero decir que, un taller de pro- suspender por un momento el pensamiento ducción o una conversación pueden ser, según dicotómico para situarnos en la complejidad cómo sucedan, acontecimientos banales o ver- de la experiencia, en las contradicciones, en el daderos momentos de ruptura de tiempos, espa- dolor de la diferencia colonial y construir desde cios, prácticas y subjetividades.

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación [ 94 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibliografía

Borio, G.; Pozzi, F. y Roggero, G. (2004). La conives- Gago, V. (2014). La razón neoliberal. Economías tigación como acción política. En Marta Malo barrocas y pragmática popular. Buenos Aires: (ed.) Nociones comunes. Experiencias y ensayos Tinta Limón. entre investigación y militancia. Madrid: Trafi- García Linera, Á. et al. (2010). El Estado. Campo de cante de sueños. lucha. La Paz: Muela del diablo/CLACSO. Colectivo Co-construcción. (2016). “Dimensión Haber, A. (2011). “Nometodología Payanesa: productiva del hábitat. Reflexiones a partir de Notas de metodología indisciplinada (con una experiencia situada (Concordia, Entre Ríos, comentarios de Henry Tantalean, Francisco Argentina)”. Cuadernos de vivienda y urbanismo, Gil García y Dante Angelo)”. Revista chilena 9 (17), pp. 6-27. Recuperado de: http://dx.doi. de antropología, 23, pp. 9-49. Recuperado de: org/10.11144/Javeriana.cvu9-17.dphr http://www.revistas.uchile.cl/index.php/RCA/ Colectivo Situaciones. (2004). Algo más sobre la article/viewFile/15564/16030 Militancia de Investigación. Notas al pie sobre Ley Nº 25.080. Ley de inversiones para bosques procedimientos e (in)decisiones. En Marta cultivados, Argentina, 16 de diciembre de 1998. Malo (ed.) Nociones comunes. Experiencias y ensa- Malo, M. (2004). Prólogo. En Nociones comunes. yos entre investigación y militancia. Madrid: Experiencias y ensayos entre investigación y Traficante de sueños. militancia. Madrid: Traficante de sueños. Conti, A. (2014). La encuesta hoy. De la “coinves- Peyloubet, P. y Loggio, N. (2010). Tecnología para tigación obrerista» al «caminar preguntando” y la inclusión social en el marco del desarrollo local. más allá: la encuesta sobre las “formas de vida” Co-construcción de tecnología para vivienda en en el “taller metropolitano del saber difuso”. En madera (Eucalyptus grandis) en el marco de Marta Malo (ed.) Nociones comunes. Experiencias un proceso habitacional colectivo en la ciudad y ensayos entre investigación y militancia. Madrid: de Concordia. Proyecto de Tecnologías para la Traficante de sueños. Inclusión Social, PROCODAS-MINCYT. Cortés, M. (2008). Movimientos sociales y Estado Puentes, J. P. (2015). “Descolonización metodo- en Argentina: entre la autonomía y la insti- lógica e interculturalidad. Reflexiones desde tucionalidad. Informe final del concurso: la investigación etnográfica”. Revista Latinoa- Gobiernos progresistas en la era neoliberal. mericana de Metodología de las Ciencias Sociales, Programa Regional de Becas CLACSO. 5 (2). Recuperado de: http://www.relmecs.fahce. Fenoglio, V. (2015). El papel de la Tecnología Social unlp.edu.ar/article/view/relmecsv05n02a06 en los Procesos Socio-Habitacionales. Propuesta Rivera Cusicanqui, S. (2006). “Chhixinakax utxiwa. Alternativa en el campo del Hábitat a partir de la Una reflexión sobre prácticas y discursos aplicación de Tecnologías basadas en la adecuación descolonizadores”. En Yupi, M. (comp.). Moderni- Socio-Técnica. Tesis de doctorado de la Facultad dad y pensamiento descolonizador. Memoria del de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Seminario Internacional, pp. 3-16. La Paz: U-PIEB. Nacional de Tucumán. Fernández Moya, E. (2015). “La descolonización de nuestros gestos en el trabajo etnográfico”. Otros logos. Revista de estudios críticos, 6, pp.54- 68. Recuperado de: http://www.ceapedi.com.ar/ otroslogos/Revistas/0006/05%20Fernandez%20 Moya%2022.pdf

Virginia S. Martinez Coenda | Investigar en situación RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 77-95 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 95 ]

Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo Reflexiones críticas en torno a la Colonialidad en la teoría y en la práctica feminista latinoamericana

Mario Alejandro Catalán Marshall (Chile) Universidad de Chile [email protected]

Fecha de recepción: 30-09- 2016 Fecha de aceptación: 23-02- 2017

Es imprescindible descolonizarnos, descolonizar nuestros cuerpos, descolonizar nuestro tiempo, descolonizar nues- tros imaginarios. Julieta Paredes

Resumen Abstract l presente artículo invita a reflexionar sobre his paper is an on-going discussion about Elas características epistemológicas en las que Tthe and practice in Latin se ha ido desarrollando la teoría y práctica femi- America. Going on the Yuderkys Espinosa, nista desde la emergencia de los estudios de gé- Ochy Curiel and Francesca Gargallo thesis, this nero en la región latinoamericana durante las is based on how the feminism in Latin America últimas décadas. Retomando los planteamientos has been influenced by the hegemonic European de Yuderkys Espinosa, Ochy Curiel y Francesca and American . This point of view will Gargallo, sobre la adscripción discursiva del be analyzed to discover if there is a common feminismo local a los discursos hegemónicos collaboration on the sub-continent feminisms y normativos del norte geopolítico europeo y and also to find a rescue of our own identity by norteamericano, se pretenderá generar una dis- them. cusión que permita identificar de qué manera el feminismo o los feminismos de la región, han elaborado o no una articulación epistemológica común en base a los rasgos identitarios de nuestra región, en donde las temáticas latentes y presentes en cuanto a opresión de raza, clase, orientación sexual y de género, estén siendo significadas y puestas en tensión por estos discursos y prácticas feministas contemporáneos situados en el sur.

Palabras clave: Feminismo, género, colonialidad. Key words: Feminism, gender, colonization.

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 97 ] Introducción

a emergencia de los estudios de género en la sobre las distintas discusiones teóricas que han Lregión latinoamericana, se han enmarcado emergido sobre la situación de la teoría y la práctica dentro de diversos contextos históricos y sociales feminista latinoamericana actual, especialmente que responden a características, muchas veces, dentro de los contextos académicos, para de esta comunes para los países de la región. Por un lado, forma, llegar a identificar de qué manera y bajo hemos sido testigos de la expansión y difu-sión de qué circunstancias se han integrado a la discu- los discursos democráticos estatales mo-dernos, sión feminista, los diversos elementos comparti- que han abogado por la reducción de las diversas dos de la realidad social de nuestra región, en desigualdades al interior de nuestras so-ciedades, pos de un marco epistemológico común a nivel y por el otro, se ha hecho reconocible la apertura latinoamericano. En definitiva, el poder recono- -pero escasa legitimidad- de diferentes espacios de cer o no la existencia de una “articulación” femi- visibilidad a las demandas específicas, provenientes nista trasnacional que examine y estudie las ca- desde una diversidad de sujetos y colectividades que racterísticas de los diferentes tipos de opresión componen nuestra realidad local. Pero, teniendo presentes en nuestra región, desde una matriz en cuenta este contexto, es imposible no poder decolonial. preguntarse: ¿Cuáles han sido los ejes rectores de la Para ello, realizaré una descripción general de teoría y práctica feminista latinoamericana durante la introducción de los estudios de “La Mujer” y de las últimas décadas?, ¿de qué manera nuestra “Género” en los círculos académicos de América identidad latinoamericana está siendo significada Latina, para luego problematizar cómo dicha in- por los análisis epistemológicos feministas troducción, se entrecruza o no, con la existencia presentes en nuestra región? ¿es nuestra historia de una teoría y práctica feminista que abogue por y cultura local, un elemento a considerar por los el reconocimiento de nuestra identidad y/o ejes discursos feministas locales, cuando pensamos característicos comunes a nivel latinoamericano. en cómo se articulan las diversas opresiones que Con respecto a estos objetivos, ocuparé como re- afectan a mujeres y hombres en Latinoamérica? ferentes bibliográficos a los planteamientos de y, final-mente, ¿existe una teoría y una práctica Yuderkys Espinosa, Breny Mendoza, Ochy Curiel feminista común a nivel latinoamericano? y Francesca Gargallo, entre otros y otras, para con Es a partir de esta amplitud de simples interro- ellos/as, poder llegar a generar una discusión so- gantes, que el presente artículo tendrá dentro de bre la situación de la teoría y práctica feminista sus finalidades, el poder generar una reflexión latinoamericana reciente.

La colonización permanente de América Latina: Entre La Mujer y el Género

ara iniciar esta reflexión, es necesario realizar en el que surgió, desde diversos grupos de mujeres Puna aclaración conceptual en torno a lo que feministas, en su mayoría afrodescendientes, una llamaré como “la génesis” de los estudios de fuerte crítica respecto a los estudios de “La Mujer” gé-nero en América Latina. Respecto a ello, no (Women’s Studies), los cuales habían emergido preten-do aquí hacer un detallado análisis sobre dentro del círculo académico estadounidense y las ca-racterísticas y procesos sociohistóricos europeo, durante la primera mitad del siglo XX, en los cuales dichos estudios se posicionaron y a los cuales se les atribuye el haber formulado dentro de la región, sino más bien, pretendo importantes postulados conceptuales y epistemo- poder esbozar las relaciones de influencia que lógicos respecto a posicionar el concepto “Mujer” permearon a las academias latinoamericanas, como una categoría de análisis en las diversas influencias que como se verá, ejercieron un áreas de las Ciencias Sociales. Sin embargo, sus fuerte poder de colonización. postulados van a ser fuertemente criticados por Para reconocer esta génesis, es necesario am- este emergente grupo de mujeres feministas pliar nuestros márgenes geográficos y temporales, otras, en base a las supuestas parcialidades, situándonos desde el Norte geopolítico durante la vacíos e invisibilizaciones teóricas, como también década de los 60 y 70 del siglo recién pasado. Periodo analíticas que presentaban.

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 98 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Las críticas estuvieron orientadas principal- darán paso en la década de los ‘80s, a un nuevo mente a señalar el carácter “esencialista” y giro epistemológico dentro del feminismo “universalista” de los estudios de “La Mujer”, (primermundista), a partir del cual, emergerán los cuales habían nacido al alero de un grupo los estudios de Género. prácticamente homogéneo de mujeres blancas y Por su parte, los estudios de género o Gender burguesas, y en donde las mujeres de color no se Studies como hemos visto a partir de este sentían identificadas, debido principalmente, a breve recorrido histórico, tienen una génesis que en dichas elaboraciones teóricas se dejaba de específica, la cual está ligada al intento de su- lado la existencia de relaciones diferenciadas de perar las limitaciones que tenían los estudios opresión hacia las mujeres, cuando las variables de “La Mujer”. Pero, en base a esto, lo que me de raza y género se entrecruzan. De esta forma y interesa problematizar aquí, es el poder analizar tal como plantea Curiel (2007): cómo se enmarcan los estudios de género en el contexto y realidad situada desde nuestra región El concepto de patriarcado, fundamental latinoamericana. En esta perspectiva, es bastan- para la teoría feminista, fue puesto en tela te claro apreciar, que todas las discusiones epis- de juicio por haber sido considerado como temológicas vinculadas a la emergencia de los una dominación masculina indiferenciada, estudios de género, no serían propias de una ori- sin examinar como éste se hacía concreto ginalidad teórica y epistémica de las academias en las experiencias particulares donde de América Latina, sino que más bien, se fueron la raza, la clase y la sexualidad jugaban generando en una territorialidad alejada de nues- papeles fundamentales en la reproducción tra región, en un espacio académico en su esencia social. (p. 2) y europeo o norteamericano en su geografía. Ahora bien, con respecto a América Latina, Bajo esta crítica epistemológica, se fueron los estudios de género se inician también -en su levantando diversas voces dentro de la territo- mayoría- dentro del ámbito académico, y en el rialidad discursiva norteamericana, dando forma contexto de las postrimerías de las dictaduras a un movimiento de mujeres feministas de color, militares surgidas en la región a fines del siglo XX, entre cuyas exponentes se encuentran Angela e impulsados además, por diversas organizaciones Davis, Bell Hooks, Bárbara Christian y Audre internacionales durante los diferentes procesos de Lorde, entre otras más, quienes en conjunto y retorno a la democracia acontecidos en gran parte desde diferentes perspectivas irán denunciando de la región, durante la década de los 90. Ante el racismo, esencialismo y elitismo del feminismo dicho panorama, Sonia Montecino (1996) señala: blanco burgués de la segunda ola, dejando en claro, la marcada ausencia del tratamiento de En la década del 90 comienzan a surgir las intersecciones entre clase, sexo y raza como otras iniciativas que asumen el término experiencias superpuestas que afectarían en el de Estudios de Género y que presentan tratamiento del, hasta ese momento, concepto nuevas estrategias, como por ejemplo la homogéneo de “La Mujer”. Maestría en Psicología con orientación en Como ejemplo de esta denuncia epistemológica, Género de la Universidad de las Américas Audre Lorde a fines de los años 70, interpelará en México, el Programa Universitario de críticamente a un grupo de mujeres feministas Estudios de Género de la UNAM de ese blancas, en un panel sobre “Lo personal y lo mismo país y la interesante experiencia de político”, realizado en la ciudad de Nueva York, Perú, del Diploma de Estudios de Género señalando: que se otorga en la Pontificia Universidad Católica. En el caso chileno, se inicia la Si la teoría blanca americana no tiene que instalación pionera del Diplomado de Es- tratar con la diferencia entre nosotras, tudios Interdisciplinarios de la Mujer de la no con las diferencias que resultan en los Universidad de Concepción y el Programa aspectos de nuestras opresiones, entonces de Estudios Interdisciplinarios de Estudios ¿Qué hacen ustedes con el hecho de que de Género de la Universidad de Chile. Re- las mujeres que limpian sus casas y cuidan cientemente surgen nuevas iniciativas co- a sus hijos mientras que ustedes asisten mo en Bolivia, en la Universidad de San a conferencias sobre la teoría feminista Simón de Cochabamba, donde se imparte son, en su mayoría, pobres, y mujeres ter- un Diplomado sobre Género y Desarrollo; en cermundistas? ¿Cuál es la teoría tras el fe- Argentina, en la Universidad de Rosario, en minismo racista? (Audre Lorde, citado en la que se aprobó una Maestría en Estudios de Bidaseca, 2012:6) la Mujer. Por último, se destaca la creación del Comité de Estudios de Género en las Es así, como las críticas a la universalidad del Américas, perteneciente a Lasa que intenta sujeto mujer, junto con las críticas a la existencia ser un espacio de confluencia de académicas de una esencia universal femenina y una esencia de Estados Unidos y América Latina. (p. 6) universal de opresión común a todas las mujeres,

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 99 ] Como bien se puede apreciar, y tal como región. Sin embargo, cabe ahora preguntarnos indica Sonia Montecino, en América Latina los sobre cuáles son los fundamentos teóricos estudios de género surgen dentro de un contexto desde donde se han ido situando y actuando los académico que responde, muchas veces, al proceso estudios de género surgidos en el contexto local, de institucionalización de la temática de género o específicamente, cómo estos estudios de género presente en los gobiernos latinoamericanos, los han sido capaces de nutrir a la discusión epistemo- cuales responden a la vez, a los diferentes pro- lógica feminista mundial y bajo qué perspectivas cesos de retorno a la democracia ocurridos en la de análisis.

Feminismo y estudios de género en América Latina: ¿hacia dónde vamos?

on respecto a esta producción teórica del fe- Continuando con los planteamientos de Cminismo latinoamericano, quisiera poder Yuderkys, ella nos denuncia la complicidad ahondar principalmente en lo que podrían ser “las que ha tenido el feminismo de los países de la características” discursivas y epistemológicas que región latinoamericana, con los discursos de se han ido significando en los estudios de La Mujer las feministas burguesas del primer mundo y la y el Género dentro de América Latina durante ideología eurocéntrica, a través de la adscripción las últimas décadas. Y junto con ello, ir proble- a diversos discursos de tipo Liberal, Radical o matizando en la colonialidad occidental del cono- Marxista, expandidos principalmente en los di- cimiento que se ha ido conformando dentro del versos espacios de cooperación internacional feminismo académico y teórico en su amplitud. como por ejemplo, Naciones Unidas y en donde Para ello, retomaré los principales argumentos estos discursos, que ella nombra como “hegemó- que plantea Yuderkys Espinosa, quien describe nicos” no han podido y no podrán representar en su artículo Etnocentrismo y Colonialidad en del todo a la realidad sociocultural y contextual los feminismos Latinoamericanos: Complicidades y de la “Otra”, la otra subalterna, la otra indígena, consolidación de la hegemonías feministas en el es- la otra afroamericana, la otra mestiza, la otra les- pacio transnacional (2009), el cómo los discursos biana, la otra pobre, la otra analfabeta o la otra locales del feminismo latinoamericano han sido tercermundista latinoamericana. aprendidos y colonizados en función de otros Para profundizar en esta situación, Yuderkys discursos, en este caso, discursos provenientes retoma los planteamientos de Breny Mendoza desde el primer mundo y que obedecen a reali- (citado en Espinosa, 2009), en donde esta última dades ajenas y muy distantes a las nuestras. se pregunta: Partiendo desde lo que ella señala como la mis- ma historicidad de estos discursos feministas ¿Cómo es que [las feministas] llegan a trans- europeizantes, anclados en el empoderamiento y formarse en un suplemento e incluso hasta construcción discursiva de una elite de mujeres, en cómplices del plan neocolonial? ¿Cómo en su mayoría de origen blanco/burgués, que han es que América Latina continúa en el seno influido y colonizado la construcción empírica del de la democracia cultivando una estructura discurso feminista latinoamericano, llegándose socio-económica, política-cultural e ideas de incluso a conformar una elite feminista local, que género y raza que en muchos aspectos con- en alianza con las feministas del primer mundo, serva los legados de la colonia, los mismos han llegado a establecer complicidades implícitas valores del poder patriarcal y la crueldad y o explicitas (Espinosa, 2009). corrupción de los militares y gobernantes De esta forma Yuderkys nos explica cómo se ha del pasado? (p. 45) colonizado la teoría feminista latinoamericana, enfatizando que: Siguiendo esta línea de análisis, Espinosa (2009) llega a determinar la existencia de una Ha sido documentado ampliamente la mane- marcada ausencia de abordaje hacia las pro- ra en que las clases dominantes e intelectuales, blemáticas de raza y clase por parte del femi- dentro de las cuales podemos ubicar a las nismo latinoamericano en general, identi- feministas, fueron influenciadas por el pro- ficando aquellas condiciones que han impedido grama político e ideológico noreuropeo. históricamente un tratamiento adecuado de Si efectivamente el feminismo del Sur se estos sistemas de opresión dentro del análisis y alimentó de las ideas emancipatorias y de la política del feminismo local; condiciones que igualdad de las feministas europeas y estado- sintetizaré de la siguiente manera: unidenses, seguramente también, habrá que admitir la herencia etnocéntrica de tal ads- ◊ Las feministas del norte, incluyendo las cripción. (Espinosa, 2009, p. 43) oriundas del sur, ubicadas geopolíticamente

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 100 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar en el norte, están lo suficientemente alejadas dios de la Mujer y el género presentes en la de los problemas y vicisitudes de las vidas de región. Sobre esta situación, Curiel es enfática las mujeres de la región. en aclarar que la discusión, al igual que lo ocu- ◊ La colonización discursiva de las feministas rrido en el norte geopolítico, fue planteada no del tercer mundo por parte de las feministas por las feministas “burguesas” de la región, del norte, se alimenta de las complicidades sino por esas Otras mujeres, las mismas otras de los feminismos hegemónicos del sur. afrodescendientes e indígenas latinoamericanas ◊ Hay un origen blanco burgués, urbano y quienes posicionaron como premisa central que: heteronormativo del feminismo latinoame- ricano, donde las feministas fueron influen- La afrodescendencia o la indígenodescen- ciadas por el programa ideológico y político dencia, si bien está presente en toda la noreuropeo con una herencia etnocéntrica, población latinoamericana y caribeña, ac- lo cual ha traído consecuencias nefastas túa de manera diferente para aquellas/os en la instalación de una mirada y unos que son más racializadas que otras/os […] objetivos políticos productivos exclusivos siendo las afrodescendientes y las indígenas a las mujeres de determinadas clases, quienes han tenido que encargarse de evi- orígenes y sexualidades del continente denciar estas diferencias entre mujeres, de latinoamericano (Espinosa, 2009). denunciar el racismo en el feminismo que se erigía sobre bases elitistas y clasistas y Ahora bien, es necesario retomar algunas que no tomaba en cuenta en sus postulados preguntas planteadas al inicio de este artículo, teóricos y en sus acciones políticas los referidas a la presencia o ausencia en el abordaje múltiples niveles de opresión que traspasaba teórico del feminismo latinoamericano, sobre a la mayoría de las mujeres. (Curiel, 2007:11) las características comunes de nuestra cultura e historia pasada como región. Esto debido en Por lo abordado hasta aquí, y en base a los plan- parte, a lo evidenciado por los planteamientos teamientos de Ochy Curiel y Yuderkys Espinosa, de Yuderkys, quien, como hemos visto, nos de- es posible inferir que en América Latina se han nuncia que el abordaje de las problemáticas repetido, de cierta manera, los patrones evolu- asociadas a la raza y clase, se han mantenido tivos de los estudios de la mujer y el género primer- prácticamente ausentes dentro de los marcos mundista, en los espacios de discusión de la teoría de análisis del feminismo latinoamericano. Por y práctica feminista local. Si bien la presencia de lo que cabe ahora preguntarse: ¿es posible que la racialidad fue denunciada y puesta en tela de dentro del feminismo latinoamericano no se esté juicio con respecto a los discursos dominantes del reflejando la premisa central de la emergencia de feminismo latinoamericano, sería interesante los estudios de género, como lo fue la crítica al también vislumbrar, de qué manera la academia esencialismo y la universalidad de las mujeres?, latinoamericana se ha estado haciendo cargo de ¿de qué manera la racialidad y “mesticidad” dicha denuncia y de qué manera se ha integrado o propias de la construcción histórica de nuestra no a la teoría académica y práctica feminista, las región han sido olvidadas por la teoría feminista temáticas de racialidad e indigenismo presentes en un contexto donde los estudios de género en nuestras sociedades. abogaron por estudiar las características de opre- Para esto, creo que sería necesario ahondar sión, asumiendo y abordando las diferencias? en las reflexiones de Francesca Gargallo (2006), Para aclarar esta confusión, retomaré los plan- quien señala: teamientos de Ochy Curiel, quien en su texto Los aportes de las afrodescendientes a la teoría y la ¿Por qué en la década de 1990 el feminismo práctica feminista: Desuniversalizando al sujeto Mu- latinoamericano dejó de buscar en sus jeres (2007), nos invita a reflexionar sobre cómo propias prácticas, en su experimentación un sector del feminismo de América Latina y el y en la historia de sus reflexiones los sus- Caribe, se ha nutrido teórica y políticamente de tentos teóricos de su política y aceptó acrí- los principales postulados del “feminismo ne-gro” ticamente la categoría de gender-género (Black Feminist), surgido tras las críticas a la esen- para explicarse la participación en “políticas cialidad y universalidad hacia los estudios de La públicas” como solución a la crisis del movi- Mujer, que se plantearon al inicio de este artículo. miento, según lo exigía la cooperación Ochy Curiel indica que es necesario reconocer internacional? (p. 3) que las luchas y acción política de las mujeres en Latinoamérica, han sido en contextos de colo- Haciéndonos parte de estas reflexiones, y tal nialismo y dependencia económica, con toda la como señalaba anteriormente, la introducción carga histórica, económica y sociocultural que de la categoría de género en las academias lati- esto ha generado. Sin embargo, no fue hasta noamericanas, respondió a los ideales logocén- la década de los 80 que la temática sobre el tricos y eurocentrados del academicismo occi- “racismo” fue puesta sobre la mesa, respecto a dental, pero también respondió a los ideales la necesidad de su abordaje dentro de los estu- desarrollistas de los gobiernos de la región, quie-

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 101 ] nes fueron receptores (hasta el día de hoy) de los a las mujeres empobrecidas, indígenas, diversos proyectos de desarrollo económico im- campesinas, trabajadoras. Muchas organi- pulsados por los organismos dotados del capital zaciones de mujeres se convencieron y internacional, tan apetecido por los estados aceptaron la intermediación de las “exper- locales. tas” que se dedicaron a la política del lobby, De esta manera, es posible apreciar cómo este (definir políticas, en charlitas con sus “saber” feminista, durante el periodo de los 90, fue cuarteles neoliberales), para las políticas siendo coaptado por las prácticas y mecanismos públicas y la llamada incidencia, para institucionales, incluyendo su producción teórica, hacer incidencia y no transformación y así la cual muchas veces sirvió de base y sustento desmovilizar a las mujeres, que era el manda- para poder justificar y atraer a esos múltiples to de los organismos internacionales. (p. 47) financiamientos internacionales, enmarcados en un proceso de consolidación de un feminismo de Es así como se fue profundizando un discurso corte “Liberal”, y en donde una parte importante feminista en alianza con la nueva gobernabilidad del movimiento feminista latinoamericano se democrática, propia de las emergentes demo- replegaría dentro de múltiples oficinas estata- cracias latinoamericanas, bajo premisas tan ne- les, difusos programas de género de corte acadé- cesarias y familiares para los oídos latinoame- mico, como también, en un movimiento social ricanos, tales como: el fortalecimiento de la feminista prácticamente disgregado y que se igualdad de oportunidades entre hombres y comenzará a articular de manera “autónoma” o mujeres, la reestructuración de la conducción por qué no también, de manera disidente a los del desarrollo económico, social y tecnológico feminismos de corte estatal. Así, este feminismo en función de los valores recién conquistados que se podría caracterizar como liberal en su por la ciudadanía; de equidad social, pluralismo esencia, de tacones altos, traje dos piezas y de ideológico, cohesión territorial, sustentabilidad extensas agendas públicas dentro de los espacios medioambiental y la profundización de la parti- institucionalizados, fomentará la producción de cipación política (Matos y Paradis, 2012). ideas serviles a los intereses blanqueados de un Sin embargo, este sector del feminismo, en sector específico de feministas, como también a disonancia de lo que podría estar sucediendo los intereses del capital económico internacional, con el feminismo de carácter “autónomo” de la bajo la mascarada del proceso de “desarrollo misma época, no se estaría haciendo cargo de económico a escala humana” ampliamente cuestionar la eurocéntrica forma de transmisión difundido dentro de la era global. y producción de conocimientos de las academias Así lo denuncia también Julieta Paredes (2014), latinoamericanas contemporáneas, cuyos progra- quien indica: mas feministas están -unos más que otros- siendo participes activos en la dotación de significado Las tecnócratas de género convertían las de las necesidades blanqueadas de sus mismos luchas en algo técnico y no político y nos países, e invisibilizando como diría Gargallo, las contaban el cuento de la equidad de género, lenguas, las cosmovisiones, las relaciones de género, tratando de convencernos con porcentajes así como los sistemas educativos y de salud que de de participación política “de ellas”, no de ellas se derivan, de más de 607 pueblos de nuestra nosotras, ellas que no nos representaban región Latinoamericana” (2014:33).

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 102 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar (Re)pensando el feminismo desde el sur y para el sur

e la situación expuesta, es posible apreciar saberes académicos e institucionales vigentes que Dcómo dentro de la teoría y la práctica fe- se hagan cargo de abordar estas problemáticas minista latinoamericana, se han sucedido desde una perspectiva interseccional. múltiples transformaciones en su devenir; Bajo estas certezas, nos surgen nuevas y más pero, aun así, la gran premisa sigue siendo la interrogantes, tales como: ¿sería necesario poten- recepción y reelaboración de corrientes episte- ciar los Otros espacios de participación teórica y mológicas provenientes de un territorio teóri- práctica feminista? ¿cómo se podrían legitimar co y académico alejado de nuestra realidad si- las demandas feministas dentro de estos espa- tuada. Así también, es interesante evidenciar cios Otros de poder/saber no tradicionales? cómo el colonialismo histórico, expresado en sus ¿de qué manera es posible rescatar y dotar de vertientes económicas, políticas e incluso teóricas autoridad epistémica a nuestro indigenismo, discursivas, no se ha alejado de nues-tro espacio afroascendencia y disidencia sexual, dentro de geográfico, manteniéndose y consolidán-dose los contextos territoriales de producción euro- los lazos de dependencia y alianzas con el norte centrada y logocentrista? geopolítico. Por lo que sería necesario re-pensar, Para ir pensando en unas posibles respuestas de qué manera y por qué razones los discursos a estas interrogantes, creo que sería necesario feministas hegemónicos colonizantes siguen inicialmente, volcar nuestra mirada y subjetividad aún vigentes en el círculo académico latinoame- colonizada, hacia la creación de relaciones más ricano, con las inevitables implicancias teóricas horizontales entre los diversos agentes y espacios y prácticas que esto estaría trayendo para el fe- que convocan al movimiento feminista, teniendo minismo de la región. en consideración que en América Latina el movi- En relación a este contexto, es interesante miento feminista presenta una importante hete- ver cómo se sitúa la relación entre el Estado y rogeneidad, y que la presencia de esta misma el movimiento feminista, desde sus diferentes heterogeneidad, ha ido evolucionando desde vertientes, con el fin de poder entender las diver- su reclamo al autoritarismo de Estado propio sas transformaciones que han tenido los estudios de los años 80, a la institucionalización y “ong- feministas y de género desarrollados en la región ización” propia de los 90, volcando en el día de durante las últimas décadas. En este sentido, la hoy, en una abundante emergencia de diversos crítica tendría que ver más bien con los procesos movimientos y sujetos que han comenzado a rei- de institucionalización de las demandas feminis- vindicar un pasado pre-colonial y el retorno a tas que se han producido en la región y cómo el formas propias de sociabilidad tradicionales de Estado (en sus diferentes expresiones locales), diversas comunidades indígenas de Abya Yala, como agente articulador e instrumental, ha ido como también a la visibilización de otras formas demarcando las demandas propias de las mu- de sentir y expresar el deseo sexual y amoroso, jeres e incluso de la producción discursiva y teó- en sintonía con el reclamo de su legitimidad. rica del feminismo local. Movimientos, sujetos y colectividades a través de Con respecto a ello, la situación actual enmar- los cuales se ha ido desplegando una emergente y cada en los discursos decoloniales emergentes potente producción de teoría y práctica feminis- propios de la región, y los cuales expusimos de ta, tendiente a cuestionar la relación entre mo- manera bastante parcial, mediante las diversas dernidad/colonialidad propia de los discursos problemáticas planteadas por Espinosa, Curiel, coloniales presentes en determinados sectores Mendoza y Gargallo, darían cuenta sobre cómo del mundo académico local, y que aún continúan los movimientos feministas locales, han ido dormidos en las políticas públicas de corte liberal y buscando como finalidad, un camino propio de en la producción eurocentrada del conocimiento. resignificación discursiva, un encuentro con sus Sin embargo, y a pesar de que en los últimos propias matrices históricas ancestrales, ligadas años dentro de nuestra región han comenzado a a la idea principal de descolonizar la práctica y emerger diversos discursos contrahegemónicos la teoría feminista, en donde se hace evidente la y críticos a la colonialidad del saber, movilizados necesidad de visibilizar la existencia de relaciones por mujeres y hombres feministas que han de poder estructurales y cotidianas que afectan expuesto sus experiencias y su palabra desde a un sinnúmero de personas, en relación a su diversas plataformas y espacios (incluyendo género, raza, etnia, preferencia sexual y clase el académico), expresando su resistencia a ser social, generándose un llamado urgente, a la hablados/as y teorizados por otros (Ciriza, 2015), expansión de una epistemología decolonial de los mi propio recorrido académico situado dentro

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 103 ] de los márgenes nacionales desde donde habito y de éstas, para no recaer así, en lo que bajo mi me posiciono como sujeto, me han hecho ver con ojo crítico se ha ido levantando como el nuevo sospecha e inquietud, el cómo estos discursos “slogan” o frase feminista de moda a introducir emergentes podrían peligrosamente llegar a cosi- en todos los análisis de género actuales, los que ficarse dentro del espacio académico, a partir comúnmente terminan en oraciones celebres que de un continuo tramposo que los ubique como apuntan a pensar nuestras vivencias de opresión “lo otro novedoso” a anexar en las discusiones en relación a las posiciones de raza, clase, etnia teóricas del feminismo local. Esta inquietud la y orientación sexual, de cada sujeto, colectivos hago trasparente y explicita, debido a que en mi o comunidades, hecho que no estaría más que recorrido por diversos cursos y programas de cimentando la despolotización misma de un saber género presentes en la academia, he ido consta- ampliamente subversivo y cuestionador de las tando, cómo un pequeño sector de mujeres lógicas patriarcales aún vigentes en los círculos “feministas” se han vuelto referentes en las temá- académicos. Sin perjuicio de lo anterior, al ampliar ticas que trabajan, siendo invocadas por el resto nuestra mirada hacia otras latitudes, la emergencia de la comunidad académica, como la fuente de un de diferentes voces y movimientos feministas a lo marco teórico que se considera a sí mismo como largo de las diversas territorialidades que dibujan “legitimo”, monopolizando en términos prácti- el paisaje latinoamericano, nos hace constatar el cos, un saber que se hace llamar “feminista” y cómo se ha ido conformando una programación demarcando de manera simbólica, ya sea desde feminista que se acoge a la perspectiva situada, la posición de saber-poder que detentan dentro histórica, cultural y geopolítica propia de nues- de la institucionalidad académica, o desde sus tra región, y como bien decía, se han ido situan- diversas producciones teóricas-discursivas, los do desde una complicidad epistemológica lineamientos de lo que hoy se consideraría como decolonial, levantando un saber-hacer que relevante a investigar y teorizar por el resto de cuestiona profundamente las matrices racistas, los actores involucrados en la elaboración del sexistas, androcéntricas y eurocéntricas de los conocimiento, reproduciendo así, las mismas feminismos colonizados por los programas fe- abyecciones que ellas dicen o pretenden criticar. ministas de dependencia político-ideológica y Ante esta situación, la cual he vivenciado y económica introducidos por las políticas de corte corporizado en primera persona, me llevan a ver desarrollistas, en los diversos países pobres del con asombro, la reproducción de una paradoja mundo, incluidos los de nuestra región. que siempre he considerado desde mi propia Ante esta nueva emergencia, no quisiera entrar subjetividad, como mera una falsedad; la cual se a profundizar en las bases epistemológicas de refiere a la existencia de una historicidad cíclica su saber teórico, sino más bien, la intención en relación a determinados procesos histórico- expresada hasta aquí, ha sido el ir develando sociales, y que en esta ocasión, tendrían que ver desde una matriz histórica y georeferenciada, la con el hecho de que en ciertos contextos de la colonialidad discursiva presente en los feminis- academia latinoamericana, se estuviesen repro- mos latinoamericanos, la cual ha estado en sin- duciendo las mismas tensiones de un feminismo tonía con una matriz teórico/discursiva propia que fue cuestionado en su momento, por su rol de la colonialidad. en la reproducción e invisibilización de las desi- Sin embargo, creo que es necesario aclarar este gualdades de raza, clase y preferencia sexual viraje, desdibujar el perfil identitario de lo que dentro de su accionar y elaborar teórico. podría ser “la emergencia” de estos nuevos saberes En esta misma línea, el hecho de constatar que algunos encarnan como “posmodernos”. desde mis propias vivencias, el cómo estos diver- Para ello, me remitiré someramente a lo que sos programas de género de corte académico señala Yuderkys Espinosa (2014), cuando define continúan reproduciendo marcos teóricos y epis- al feminismo descolonial como: temológicos importados, abriéndose en determi- nadas ocasiones a invitar mediante congresos, Un movimiento en pleno crecimiento y ma- seminarios, foros y charlas a estos discursos duración que se proclama revisionista de la críticos como lo “otro” exótico que merece ser teoría y la propuesta política del feminismo analizado, pero, paradójicamente a la vez, esta- desde lo que se considera su sesgo occiden- rían escasamente generando una producción teó- tal, blanco y burgués. Entendemos que el rica y epistemológica que no siga dependiendo feminismo descolonial aglutina las pro- de la colonialidad del saber, lo cual a mi parecer, ducciones de pensadoras, intelectuales, pudiese y debiese ser desarrollado y ampliado activistas feministas, lesbianas feministas, desde estos mismos lugares, potenciando diversas afrodescendientes, indígenas, mestizas po- instancias y espacios de enseñanza-aprendizaje bres, así como algunas académicas blancas vinculados al desarrollo de habilidades de aná- comprometidas con la tarea de recuperación lisis teórico, que permitan problematizar y histórica de un nombre propio, de una teoría abordar las diversas opresiones de raza, clase, y práctica feminista antirracista en Abya etnia y sexualidad, desde una perspectiva que Yala. (p. 32) se haga cargo de la interseccionalidad misma

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 104 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Tomando en cuenta esta última definición, y ◊ 3.-Ponerse en sintonía con los movimientos retomando una interrogante esbozada al inicio de de mujeres y trabajar con ellas, entablando un este ejercicio de reflexión, respecto a la existencia diálogo, en donde la investigación académica o no de una articulación feminista común en trabaje en una relación co- constructiva del Latinoamérica, cometería un craso error al afirmar conocimiento, entre sujetos investigados y tajantemente la no existencia de un discurso común sujetos investigadores, transparentando y articulado en la región, debido a que considero, posicionando dentro de la construcción em- según la evidencia presentada en la última década, pírica, todos los privilegios de raza y de clase que se han ido levantando distintas voces que que gran parte de los actores académicos nos invitan a cuestionarnos sobre la colonialidad podrían llegar a tener antes de comenzar a de los discursos hegemónicos presentes en la levantar información de carácter feminista. teoría y práctica feminista. Hecho que se ha visto ◊ 4.-Ahondar en la historia de las ideas conti- reflejado también, en la emergencia de unos dis- nentales del pensamiento feminista de las cursos “Otros”, en donde la presencia indígena mujeres indígenas, americanas no occi- latinoamericana y feminista, no han estado ausen- dentales, en la construcción de los idea- tes dentro de las discusiones generadas en espacios rios feministas que buscan formas de orga- tan legitimados como por ejemplo, en torno al nización propias, contra las desigualdades Foro Social Mundial o en la emergencia de una existentes en nuestra región, al mismo nueva epistemología latinoamericana que se ha tiempo que se resisten en la construcción abanderado, en palabras de Breny Mendoza por la de los idearios feministas continentales do- diversidad y eclosión ontológica de sujetos hasta ahora minados por la colonización y la hegemonía invisibilizados y violentados por la modernidad, el occidental (Gargallo, 2014). capitalismo y el conocimiento eurocentrado (2010:19), ◊ 5.-Abordar el reconocimiento de la historia pensamiento del cual las autoras y aca-démicas moderna de cada uno de los pueblos que analizadas a lo largo de este artículo, entre muchas conforman a la región. Desde el recono- otras -Sonia Montecino, Rita Segato, Julieta Paredes, cimiento de esta modernidad americana Sylvia Marcos, Aura Cumes, María Lugones- compleja, no dependiente de los aportes podrían identificarse y situárseles como tal. externos, sino responsable de su configu- Creo que los desafíos para estos nuevos saberes ración, podremos destejer imágenes occi- emergentes son múltiples y se encarnan en cada dentales (y su lectura eurocentrada) del uno de nosotros/as, al momento de evidenciar desarrollo como imitación, del racismo nuestra corporalidad situada en espacios de alta como rechazo y de la interiorización de carga androcéntrica y heteronormativa, como lo todo lo proveniente de los grupos humanos son evidentemente, los círculos de saber-poder que no eran el colonizador dominante. Solo académico locales. Estos desafíos si bien son así podrán releerse el mestizaje, la trans- múltiples, quisiera transparentarlos de manera formación de las naciones originarias en sencilla y sintética, arriesgándome a recaer en “grupos étnicos”, la identificación de los lo grotesco que podría llegar a ser la apropiación africanos como “negros esclavos” y de los discursiva, mediante los estrictos cánones y nor- pobres como víctimas (Gargallo, 2014). mas del citado o parafraseo propios de nuestra ◊ 6.-Identificar una realidad que para muchos formación academicista. está invisibilizada, una realidad creada por Dichos desafíos de producción latinoamericana la llegada de las nuevas prácticas económicas pensados desde lo local y para lo local, los articulo y sociales de la modernidad, al Mundo Aldea bajo los siguientes ejes: (Segato, 2011), en donde las atribuciones de lo “femenino” y lo “masculino” han sido ◊ 1.-Posicionarse no desde la subalternidad, ya transformadas completamente, alterando que aceptarse como subalternos/as, es aceptar incluso la misma historicidad y devenir de una jerarquía y hablar desde ahí (Paredes, muchas comunidades indígenas. Ante esta 2014:39). Por lo que en concordancia a lo que situación, se hace necesaria la idea de res- plantea el feminismo comunitario en Bo- tituir la deliberación y autonomía interna livia, sería necesario posicionarse desde una de estas comunidades, en donde el Estado “autonomía epistémica” que se traduzca a la en conjunto con el mundo académico, vez, en una teoría de acción y práctica social. sean actores clave en la protección de la ◊ 2.-Estudiar las teorías y posicionamientos cosmovisión de las diversas comunidades políticos y prácticos de las propuestas femi- indígenas latinoamericanas, reconocedores nistas tanto de las intelectuales, activis- por excelencia de la riqueza que implica esta tas, dirigentes y mujeres en general que diversidad y autonomía interna, propia de se suscitan al interior de nuestra región, muchos hombres y mujeres indígenas. confrontando las renovadas políticas de identi- ◊ 7.-Contribuir en la dotación de significado dad, de defensa del territorio y del derecho pro- a la estrategia de la devolución de las pio de los pueblos indígenas de América Latina autonomías internas a las sociedades “in- (Gargallo, 2014:18). tervenidas” por la matriz colonizadora neo-

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 105 ] liberal, bajo la idea de Pluralismo Histórico deberíamos mirar profundamente. Son (Segato, 2011), en donde cada pueblo sea nuestras raíces olvidadas y borradas por la un vector histórico y soberano propio, y en imposición cultural colonizadora. Creo que donde el Estado lejos de ser un agente que debemos mirar al pasado y hacerlo presente, “imponga” la ley, sea un Estado restituidor cuestionar nuestros patrones culturales y de la jurisdicción propia de las comunidades volver a la búsqueda del equilibrio, un equi- indígenas y a la vez un Estado “garante” de librio que nos permita “vivir bien” entre la deliberación interna de estas mismas, lo hombres y mujeres y en comunidad. que podría ser fomentado desde las esferas ◊ 11.- Acercarnos a la historia y cultura de académicas del saber latinoamericano. los pueblos que por más de 500 años han ◊ 8.- Profundizar en temáticas pioneras del producido conocimientos claros sobre su feminismo negro primermundista, en lo realidad, haciendo transitar sus propias sub- referente a las temáticas relacionadas al jetividades individuales y colectivas para la heterosexismo que ha sido poco abordado construcción y transmisión de conocimientos por las organizaciones de mujeres negras propios, dialogando con ellos, retomando los latinoamericanas en sus orígenes, y ante conocimientos que han generado a los largo lo cual desconozco si han habido avances. de estos cientos de años de crítica al sistema Personalmente, creo que es fundamental patriarcal que se han anquilosado en nuestra reconocer el aporte de este movimiento [Black región (Gargallo, 2014). feminist], en el punto de que nos muestra ◊ 12.- Como último punto, quisiera exponer cómo este gran sistema de “opresión”, que a modo personal, el cómo me ha llamado conocemos como Patriarcado, se nutre de profundamente la atención, la motivación otras categorías de opresión como el Racismo por generar una explicación y análisis de (Curiel, 2007). En este sentido, en América las diversas opresiones existentes en nues- Latina, un continente tan racializado y tra región latinoamericana, desde una mi- colonizado por lo “blanco” no dejaría de rada local y bajo una óptica que problema- ser un tema menor, debido al impacto que tice el legado colonial. Considero que el este sistema de opresión ha tenido en la aporte feminista está siendo crucial en el configuración de nuestra misma identidad poder identificar los patrones de domi- cultural como pueblos. nación y subordinación existentes en nues- ◊ 9.- Visibilizar y validar las experiencias tras sociedades hasta el día de hoy, y que que han surgido en los emergentes deveni- además, se continúan reproduciendo. Con res históricos de diferentes pueblos lati- esto me refiero específicamente a la discri- noamericanos que han dado inicio a un minación racial, social, de género y por proceso de cambio, en donde se han ido sobre todo a la sexual. A mi parecer, creo desarrollando nuevas formas de organi- que es sumamente importante continuar zación social ligadas en torno a la idea de este trabajo, ampliando y difundiendo las comunidad y su autosuficiencia, enmarcada perspectivas de análisis epistémicos que se en una resignificación del sistema sexo/ hagan cargo del tratamiento de los sistemas género marcados por una mayor horizon- de opresión existentes desde marcos teóricos talidad y equivalencia, en rechazo a la hege- interseccionales, profundizando en sus fi- monía masculina y cualquier expresión nalidades como herramienta metodológica. neoliberal del patriarcado (caso del feminis- De esta manera, considero que todos los es- mo comunitario en Abya Yala, Bolivia) fuerzos por generar una nueva corriente ◊ 10.- Reelaborar una teorización feminista de pensamiento desde lo local, desde la he- en la cual el género sea una variable teórica rida colonial quedarán invisibles si es que más, que no sea separada de los otros ejes de no se comparten, se difunden y bajan de opresión, sustentada en una epistemología la academia. Para esto, a mi juicio, sería feminista descolonizada, en donde habría cla-ve desarrollar una incorporación real y que desalambrar la teoría y hacerlo con la efectiva de la perspectiva de género e inter- práctica “saber hacer” y no “saber sobre”. seccionalidad de las opresiones en el área Visibilizando y (re)apropiándonos de los dis- educativa escolar formal, específicamente tintos saberes y prácticas del mundo indí- a los programas de estudio de asignaturas gena latinoamericano. Problematizando vinculadas a las humanidades y las ciencias el concepto de “corporización” de la teoría sociales, debido a que como se puede ver en (Marcos, 2014), tomando como ejemplo a las la realidad escolar de nuestro país (Chile), diversas comunidades del mundo mesoame- cada cierto tiempo las temáticas ligadas al ricano, en donde el cuerpo no se opone a género, sexo y culturas indígenas son una la mente, la teoría en sí es hablada, vivida, y otra vez, relegadas a un rincón mínimo sentida, olida y bailada. En síntesis, es otra dentro de los programas escolares, los cuales forma de ver y aprehender el mundo, otra deberían ser la base y génesis de la reflexión episteme, de la cual nosotros y nosotras propia de nuestras nuevas generaciones.

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 106 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar A modo de conclusión

ara ir concluyendo esta reflexión, estimo Ante lo señalado por Braidotti, podríamos Pque considerar sólo al género, desde su proponer que en América Latina se cultive una construcción social y simbólica, como único conciencia nómade dentro de los círculos de la elemento que oprimiría y subordinaría a las teoría y la práctica feminista, en un sentido de mujeres latinoamericanas, vendría siendo reconocer nuestras diferencias y elementos un error. La problemática debe ser abordada comunes respecto al espacio social e histórico de manera multidimensional y tomando en en el cual estamos situados. Para ello, no sería cuenta de manera rigurosa el cómo se articulan necesario desechar del todo las premisas epis- y se encarnan en los cuerpos los diversos tipos temológicas provenientes de otras latitudes y de opresiones existentes, tanto en el discurso contextos, sino que podríamos ser capaces de académico y/o políticas públicas que pretendan introducir nuestra propia cultura, pasado y equiparar géneros dentro de nuestra sociedad. presente latinoamericano en una articulación Solo de esta forma podríamos replantearnos de diferentes marcos epistemológicos ajustados el lugar que estaría ocupando el feminismo a nuestra realidad local, entrando en sintonía latinoamericano en su producción teoría y con lo que bien señala Braidotti (2000), cuando práctica, y la relevancia de cómo éste, desde su afirma que propio “construir”, estaría aportando hacia la equidad de género de la región. las feministas necesitan llegar a manejar En dicha línea, tal mirada sería necesaria fluidamente una variedad de estilos y án- visibilizarla y expandirla a nuestra realidad y gulos disciplinarios, y en muchos dialectos; medios cercanos, llegando a establecer lazos de jergas y lenguas diferentes, para renunciar comunicación y retroalimentación entre la cons- así a la imagen de hermandad en el sentido trucción empírica de los discursos feministas de similitud global de todas las mujeres con la comunidad social, problematizando en cuanto segundo sexo, a favor de un re- los mecanismos de opresión de raza, clase y conocimiento de la complejidad de las sexualidad, en la cual están insertas día a día miles condiciones semióticas y materiales en las de mujeres y hombres de Chile y Latinoamérica. cuales operan las mujeres. (p. 78) Por lo que vendría siendo interesante propo- ner aquí, desde esta última reflexión sobre el Por último, no podemos olvidar del todo el feminismo latinoamericano, la noción de Sujetos lugar desde donde nos ha tocado hablar y posi- Nómades planteada por Rosi Braidotti (2000) cionarnos. El feminismo latinoamericano, como como una estrategia de resistencia critica a hemos visto, no puede hacer oídos sordos a su los discursos hegemónicos y normativos del pasado y también presente colonizado. Por lo que feminismo regional actual, y en donde sería su- considero necesario, fomentar una articulación mamente necesario posicionar la situación de feminista latinoamericana transfronteriza que la “diferencia” dentro del actual contexto global. tenga como elemento en común, una política de Acuñando lo que ella define al referirse a sujetos localización, la cual reconozca nuestras múltiples nómades como diferencias respecto a los discursos y prácticas feministas hegemónicas colonizadas. Solo de mi propia figuración de una interpretación esta forma, a mi juicio, se podrá develar la matriz situada, posmoderna, culturalmente dife- racista y clasista que existe en la modernidad renciada del sujeto en general y del sujeto latinoamericana, lo que nos ayudará en cierta feminista en particular. Este sujeto puede medida, a comprender la opresión en la que están caracterizarse como posmoderno/indus- insertos esos Otros de los Otros de nuestra región. trial/colonial, según la posición en la que Finalmente, creo que como todo discurso teó- uno se halle. En la medida en que ejes de rico, el discurso feminista se ha ido quedando diferenciación tales como la clase, la raza, reservado a una elite, en este caso la elite acadé- la etnia, el género, la edad y otros entren mica del género y que esta misma, ha mantenido en intersección e interacción entre sí para una constante desconexión con las bases sociales constituir la subjetividad, la noción nómade a las cuales pretende estudiar, teorizar y politizar se refiere a la presencia simultánea de en su “discurso”. Desconexión que muchas veces muchos de tales ejes. (p. 30) es considerada por muchos/as sujetos como una característica propia e históricamente perma- nente de este sector, lo que no hace más que

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 107 ] naturalizar determinadas prácticas y posturas Ante esta situación, y en un país y en una región dentro de estas añosas instituciones de saber- donde los movimientos sociales y la ciudadanía poder. en sí están cada día más empoderados, sería De esta forma, la actual emergencia de los necesario acercar y proselitizar estas teorías y saberes y prácticas decoloniales que he ido car- estas prácticas a las mismas comunidades lo- tografiando hasta aquí, estarían siendo parte cales, empapándonos mediante una retroalimen- de una lógica paradojal, lo cual en palabras de tación fluida y constante de saberes, vivencias y Espinosa (2009) tiene que ver con el hecho de experiencias hacia esas otras formas de generar que los avances en la investigación y perspectiva conocimiento, explicaciones y posibles soluciones decolonial, han venido desarrollándose y pro- a nuestras problemáticas situadas desde el sur, blematizándose muy lentamente dentro del rescatando y legitimando la producción cultural de mundo académico latinoamericano, en donde nosotros/as y ellos/as “subalternos”/“autónomos”, efectuando también una relectura critica de las académicas latinoamericanas compeli- nuestra propia realidad y saberes populares, das a reconocer a estas pensadoras y acti- ampliando estos mismos saberes emergentes y vistas como la fuente del gran desarrollo cuestionadores, en diálogos constantes y fluidos teórico del feminismo contemporáneo que sur-sur tanto en el plano teórico academicista, importan en la vos de las teóricas femi- como en el plano práctico-comunitario. Por lo que nistas blancas, no se han visto sin embargo la discusión generada en este artículo, solamente seducidas ni comprometidas con continuar podría ser tomada hasta aquí, como un punto con su legado. (p. 194) de partida para (re)pensar un feminismo o “los” feminismos latinoamericanos actuales y futuros.

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo [ 108 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibliografía

Braidotti, R. (2000). Sujetos nómades. Argentina: Gargallo, F. (2006). Las ideas feministas latinoame- Paidós. ricanas. México: UACM. Bidaseca, K. (2012). “Voces y luchas contempo------(2014). Feminismos desde Abya Yala: ideas ráneas del feminismo negro. Corpolíticas de y proposiciones de las mujeres de 607 pueblos en la violencia sexual racializada”. En Afrodescen- nuestra América. Ciudad de México: Quimantú. dencia. Aproximaciones contemporáneas de Amé- Mendoza, B. (2010). “Epistemología del Sur: la rica Latina y el Caribe. Colección de ensayos del colonialidad del género y feminismos en Centro de Información de las Naciones Uni- América Latina”. En Espinosa, Y. (coord.), das para México, Cuna y Rca. Dominicana, en Aproximaciones críticas a las prácticas teórico- el marco del Año Internacional de los Afro- políticas del feminismo latinoamericano. Buenos descendientes, México: ONU. Aires: En la frontera. Ciriza, Alejandra. (2015). Construir genealogías Montecino, S. (1996). De la Mujer al Género: Impli- feministas desde el sur: Encrucijadas y cancias académicas y Teóricas. Disponible en: tensiones. En MILLCAYAC, Revista Digital de http://www.unfpa.org.sv/dmdocuments/ Ciencias Sociales Nº 3, 83- 104. mujer_genero_sm.pdf Curiel, O. (2007). “Los aportes de las afrodescen------(1997). Palabra Dicha: Escritos sobre géne- dientes a la teoría y la práctica feminista. ro, identidades y mestizajes. Santiago de Chile: Desuniversalizando el sujeto “Mujeres”. En Universidad de Chile. Femenías, M. L. et al., Perfiles del Feminismo Matos, M y Paradis, C. (2013). “Los feminismos La- Iberoamericano, vol. III. Buenos Aires: Catálogos. tinoamericanos y su compleja relación con el Espinosa, Y. (2009). “Etnocentrismo y colonialidad Estado: debates actuales”. ICONOS, Revista de en los feminismos latinoamericanos: Compli- Ciencias Sociales Nº 45, 91-107. cidades y consolidación de las hegemonías fe- Marcos, S. (2014). “Feminismos en camino deco- ministas en el espacio transnacional”. Revista lonial”. En Millán, M. (coord.) Más allá del femi- Venezolana de los estudios de la Mujer. Vol. 14. Nº nismo: caminos para andar. Red de Feminismos 33, 37-54. Decoloniales. México DF. Espinosa, Y. y Castelli, R. (2011). “Colonialidad y Paredes, J. y Guzmán, A. (2014). El Tejido de la Re- dependencia en los estudios de género y sexua- beldía ¿Qué es el Feminismo Comunitario? La lidad en América Latina: el caso de Argentina, Paz, Bolivia: Comunidad Mujeres Creando Uruguay y Chile”. En Bidaseca, K. y Espinosa, Comunidad. Y. (coord.), Feminismos y poscolonialidad. Desco- Segato, R. (2011). “Género y colonialidad: en bus- lonizando el feminismo desde y en América Lati- ca de claves de lectura y de un vocabulario es- na. Buenos Aires: Godot. tratégico descolonial”. En Bidaseca, K. y Vásquez Espinosa, Y., Gómez, D. y Ochoa, K. (Ed.) (2014). Laba, V. (comp.), Feminismos y poscolonialidad. Tejiendo de otro modo: feminismo, epistemología Descolonizando el feminismo desde y en América y apuestas descoloniales desde el Abya Yala. Latina. Buenos Aires: Godot. Colombia: Universidad del Cauca.

Mario Alejandro Catalán Marshall | Feminismos y Estudios de Género en el Sur del mundo RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 97-109 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 109 ]

Epistemología pluralista, investigación y descolonización Aproximaciones al paradigma indígena1

Weimar G. Iño Daza (Bolivia) Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) [email protected]

Fecha de recepción: 01-10- 2017 Fecha de aceptación: 21-02- 2017

Resumen Abstract l artículo es una aproximación al paradigma he article is an approach to indigenous Ede investigación indígena. Para ello se explica Tresearch paradigm. This requires the la presencia de la epistemología pluralista, que presence of pluralistic epistemology, which es la complejidad de epistemes, la democracia is the complexity of epistemes explained, de los saberes, por ende una interculturalidad democracy of knowledge, therefore an emancipadora que se traduce en el horizonte emancipatory multiculturalism which results descolonizador. Posteriormente se abordan in the decolonization horizon. Later research los paradigmas de investigación en el campo paradigms is addressed in the field of education: de la educación: racionalista; interpretativo, y rationalist; interpretive, and socio-critic. Then, socio-crítico. Luego, se enfatiza en el paradigma it is emphasized in the indigenous paradigm indígena desde su surgimiento, su presencia since its inception, its presence in response to como respuesta al proceso colonialista como the colonialist process as a practice of resistance una práctica de resistencia y recuperación de la and recovery of the «ecology of knowledge». Also “ecología de saberes”. Asimismo, interesa men- would like to mention its ontology, epistemology, cionar su ontología, epistemología, metodología methodology and axiology. In the final part, y axiología. En la parte final se desarrolla la scientific research and decolonization is investigación y la descolonización científica. developed.

Palabras clave: Epistemología pluralista; Keywords: Epistemology pluralistic; research paradigmas de investigación; paradigma indí- paradigms; Indigenous paradigm; research and gena; investigación y descolonización. decolonization.

1 El presente artículo forma parte del estudio Epistemología plural, saberes, interculturalidad e investigación en ciencias sociales (2015-2016) que se viene desarrollando en el marco de las líneas de investigación del Postgrado en Ciencias del Desarrollo (CIDES) de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 111 ] Introducción

l artículo aborda la epistemología pluralista, la a la condición colonial, a la asimilación y acul- Ecuestión de los paradigmas, la investigación y turación, por ende, plantea un proceso de des- descolonización, y la aproximación al paradigma colonización en la investigación. Una muestra indígena. Para ello parte de la reflexión sobre la de ello es la fuerte presencia de la interacción, forma de hacer investigación, siendo los métodos interrelación e intercambio permanente, desde un empleados en el estudio el análisis de contenido sentido holístico y complementario que va desde y la investigación documental. lo racional, lo espiritual, lo vivencial y lo intuitivo. Primero, se ofrece una mirada a la epistemolo- Esto se hace evidente en su comprensión de la gía pluralista, la cual permite avanzar hacia una realidad, lo ontológico; su epistemología reside interculturalidad emancipatoria del conoci- en el conocimiento indígena; su metodología miento, es decir, una “ecología de saberes” y una es participativa, liberadora y transformadora; problematización de la forma de producir cono- y la axiología plantea la responsabilidad rela- cimiento que no solamente se centra en el saber, cional, las cuatro Rs: rendición de cuentas, sino también en el problema del pensar: lo que representación respetuosa, reciprocidad y se piensa, cómo se piensa o se está pensando la reglamentos y derechos. realidad. Esto se analizará a partir de los aportes En cuarto lugar, se desarrolla la descolonización de la teoría de la complejidad, la contrainducción científica en la investigación, a fin de comprender y la epistemología pluralista. la presencia de una “colonialidad del saber”, En segundo lugar, se abordan de forma general un “colonialismo científico”, una “colonización los paradigmas de investigación en ciencias sociales intelectual” y de la subjetividad, como las expre- y humanas educación, como el racionalista- siones concretas que buscan la permanencia de positivista, interpretativo y sociocrítico. Esto con la monoculturalidad, es decir, de un solo saber el fin de comprender sus orígenes, su ontología, su científico. Frente a este escenario se traduce la epistemología, su metodología y su axiología. Para necesidad de una epistemología descolonizadora a partir de ello explicar sus diferencias respecto en la investigación, en la producción y creación a la visión de mundo que tienen cada uno de los de conocimiento. Es decir, el comprender que paradigmas. la investigación puede reposicionar los saberes En tercer lugar, se plantea una a aproximación sometidos, lo que implica comprender a la inves- al paradigma indígena, que es abordado desde tigación como una acción política. Por ende, sus inicios y aportes que provienen, por un lado, el horizonte descolonizador busca superar el de académicos indígenas angloparlantes; pero multiculturalismo y la monocultura del saber por otro lado, desde experiencias educativas científico (colonialidad del saber, de lo subjetivo, latinoamericanas. Asimismo, su presencia en el de lo científico e intelectual) por una ecología de campo de la investigación surge como respuesta saberes.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 112 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Epistemología pluralista: hacia una interculturalidad emancipatoria del conocimiento

a epistemología proviene de la unión de dos del conocimiento. Esto implica que no hay una sola Lpalabras: episteme, que significa “conocimiento” soberanía epistemológica, sino una epistemología o “ciencia” y logos, que es “discurso”. Para Zamudio pluralista en donde el conocimiento y la ciencia (2012), se trata de un análisis, una reflexión, no pueden ser simplificadas, porque al estar una forma de racionalidad, una manera de presentes en la realidad (naturaleza) y en lo pensar en algo, una crítica y/o una indagación humano, necesariamente se genera un proceso referente al conocimiento. La epistemología de complejidad. es, entonces, un metalenguaje, un saber acerca Prada (2014) sugiere que la epistemología plu- del saber, es la dimensión de la filosofía que se ralista es el reconocimiento y la búsqueda de aboca a la investigación científica y su producto, diálogo hermenéutico. Este diálogo debe partir el conocimiento científico. Sería el estudio del de una episteme ancestral, resistente, alternativa, conocimiento, de la ciencia y el pensamiento. Como de saberes y cosmovisiones nativas, además de lo sugiere Bautista (2013), es la intencionalidad reconocer otros saberes: de la gente, los culturales, explícita que piensa el problema del “pensar”, el los concretos, los invalidados por las ciencias. cual consiste no en determinar lo que se piensa o Es decir, los saberes sometidos que mencionó debe ser pensado, sino en problematizar cómo se Foucault (2006), los descalificados como saberes piensa o se está pensando cuando se dice o afirma no conceptuales, como insuficientemente ela- estar pensando “la realidad.” borados: saberes ingenuos, jerárquicamente De acuerdo a Prada (2014), se debe diferenciar inferiores, por debajo del nivel del conocimiento entre pluralismo epistemológico y epistemología o de la cientificidad exigida. pluralista. La primera alude a un eclecticismo, Según de Sousa, la compresión del mundo es varios paradigmas, modelos, epistemes, formas mucho más amplia que la comprensión occidental de pensar puestos en juego y en movimiento. del mundo (2003: 171). Por ello se puede hablar de La epistemología pluralista, en cambio, es un ecología de saberes, sociología de las ausencias pensamiento de la pluralidad y del aconteci- y de sociología de las emergencias. La sociología miento, concebido como multiplicidad de sin- de las ausencias es lo desconocido y lo que es gularidades. En este artículo se hace referencia descartado, lo invisibilizado, los silenciados por a la epistemología pluralista, es decir, el pensa- las sociologías académicas, por la modernidad, miento crítico, la heterogeneidad, la multipli- la colonialidad y las visiones eurocéntricas y su cidad y complejidad de epistemes. sistema de conocimiento. Feyerabend (1986) desde su contrainducción menciona que muchos de los cambios y sucesos La sociología de las ausencias tiende a sus- se manifestaron porque algunos pensadores tituir la monocultura del saber científico por decidieron “no someterse a ciertas reglas obvias”. una ecología de los saberes. Esta ecología Lo que implica que el desarrollo de la ciencia se permite no solo superar la monocultura del valora e enriquece de otras ideas y teorías, es decir, saber científico, sino la idea de que los sa- de las alternativas y el pluralismo de opiniones. beres no científicos son alternativos al saber Esta forma de concebir a la epistemología científico (de Sousa, 2008: 97). permite comprender que en el campo de la investigación se dieron cambios en los sustentos A partir de ello la sociología de las emergencias teóricos. Como lo sugiere Feyerabend (1986) una consiste en sustituir el vacío del futuro según el tiempo teoría nueva, como todas las cosas nuevas, dará lineal (un vacío que tanto es todo como es nada) un sentimiento de libertad, estímulo y progreso. por un futuro de posibilidades plurales y concretas, Morin desarrolló varios aspectos sobre la simultáneamente, utópicas y realistas, que se va epistemología de la complejidad. Uno de ellos es construyendo en el presente… (de Sousa, 2008: 102). su análisis del conocimiento, la crítica que hace a Es decir, estudia lo que emerge de nuevo, como la ciencia y su paradigma positivista. Para Morin las resistencias, las luchas de emancipación y de (2004) el pensamiento simplificante fue fundado liberación que irrumpen en las realidades. sobre la disyunción entre objeto y medio ambiente, De Sousa (2005) sugiere que la ecología de en donde las visiones de ser y de existencia están saberes es la coexistencia y la co-habitabilidad eliminadas. Frente a ello Morin (2004) plantea la de los saberes como en un sustrato de procesos epistemología compleja, que se refiere a entender interconectados e interdependientes, en cons- al conocimiento desde una pluralidad de tante diálogo e interpretación. instancias como la bioantropología y la sociología

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 113 ] Consiste en la promoción de diálogos entre el mocracia de los saberes y una interculturalidad saber científico y humanístico que la univer- emancipadora, que se traduce en el horizonte sidad produce y los saberes legos, populares, descolonizador. tradicionales, urbanos, campesinos, provin- El pluralismo epistemológico conduce hacia la cianos, de culturas no occidentales (indígenas democracia de los saberes, por lo tanto a la necesaria de origen africano, oriental, etc.) que circulan transformación estructural de la educación, sobre en la sociedad (de Sousa, 2007: 68). todo al desenvolvimiento del proyecto descoloni- zador (Prada, 2014:18). Esto se traduce en sustituir En suma, la epistemología pluralista conduce la monocultura del saber científico por una hacia una ruptura con las formas de pensar ecología de saberes: un conjunto de prácticas que modernas y el sistema de conocimientos, la promueven una nueva convivencia activa de saberes colonialidad del saber, de lo científico y la colo- con el supuesto de que todos ellos, incluido el saber nización de la subjetividad. Para Rivera (2010), el científico, se pueden enriquecer en ese diálogo (de multiculturalismo ha sido el mecanismo encu- Sousa, 2007: 68). En el caso del conocimiento bridor y renovador de las prácticas efectivas de implica construir una interculturalidad eman- colonización. Entonces, el re-posicionamiento cipadora que emerge de la generación cono- y la búsqueda del diálogo hermenéutico de la cimiento propio y autogestionario, que supere el epistemología pluralista pueden permitir una de- multiculturalismo.

Paradigmas de investigación en ciencias sociales y humanas

ara Kuhn (1971), un paradigma es un conjunto Los libros y manuales de investigación en cien- Pde suposiciones interrelacionadas respecto cias sociales y humanas clasifican a tres grandes al mundo social que proporciona un marco filo- paradigmas: el racionalista; el interpretativo sófico para el estudio desde ese mundo. Morín y el sociocrítico -aunque en las últimas cuatro menciona que los paradigmas determinan los décadas se ha ido desarrollando el indígena-. modos de pensamiento, las visiones del mundo El paradigma racionalista se basa en la teoría […], son incapaces de comprenderse unos a otros positivista con origen en el método científico en (2006:129). Esto permite entender al paradigma las ciencias fácticas naturales (Física, Química como un esquema teórico, o una vía de percepción y Biología). De acuerdo a Rodríguez (2005), y comprensión del mundo, que un grupo de a principios del siglo XIX la ciencia positiva científicos ha adoptado. Por lo que existe una estaba legitimada como la única vía para lograr pluralidad de usos y significados que se dan en un conocimiento objetivo y universal sobre las ciencias y disciplinas. En palabras de Kuhn el mundo. La investigación científica para ser (1971) esta pluralidad de significados y diferentes considerada como tal debía asumir los métodos y usos es el conjunto de creencias y actitudes, procedimientos propios del positivismo. Comte, como una visión del mundo “compartida” por un Mill y Durkheim plantearon el método y los grupo de científicos que implica una metodología procedimientos para el estudio de los hechos y determinada. fenómenos sociales.2 Guba (1990) señala que los paradigmas res- El positivismo se basa en la idea de que la ciencia ponden a tres preguntas de corte: ontológico, natural es la única base para el conocimiento epistemológico y metodológico. Según Wilson verdadero. Sostiene que los métodos, técnicas (2008), se compone de cuatro aspectos: ontología y procedimientos utilizados en las ciencias na- o la explicación sobre la naturaleza de la rea- turales ofrecen el mejor marco para investigar el lidad y la respuesta a la pregunta por el ser y mundo social (Hitchcock y Hughes, 1995 citado la existencia; epistemología o la forma como se por Chilisa, 2012: 25). Por su parte Carr y Kemmis genera y valida el conocimiento; metodología o el camino del pensamiento para comprender, 2 Para Durkheim (1982), la construcción del método socio- reflexionar, analizar e interpretar la realidad; lógico se da en base a las estructura-representaciones sociales y a la estructura-función. Por ende consideró a los y, finalmente, la axiología o el conjunto de hechos sociales como cosas u objetos que pueden ser estu- posiciones éticas y morales del investigador. diados por la ciencia social.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 114 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar (1988) mencionan que sus postulados básicos son investigación son abiertas y libres; las hipótesis la concepción de la realidad (natural y social) se van construyendo a posteriori como parte de como dada, la cual tiene existencia propia más procesos de observación continuos […] el proceso de allá de los sujetos. Por lo que su posición onto- investigación supone una comunión e identidad lógica considera a la realidad como objetiva entre sujeto y objeto (Rodríguez, 2005:15). Para que existe al margen de la razón y la conciencia Carr y Kemmis (1988), la investigación está humana sobre su existencia: está sujeta a un orden inevitablemente influida por los valores y la propio y opera según leyes y mecanismos naturales ideología del investigador. Dado que se busca e inmutables, que permiten explicar, predecir y la comprensión de las experiencias humanas, controlar los fenómenos” (Rodríguez, 2005: 10). se recurre a la etnografía, la fenomenología, la Su epistemología es objetivista pues la reali- biografía, los estudios de caso, la hermenéutica, dad puede ser descubierta y descrita de manera la teoría fundamentada y la etnometodología, objetiva y libre de valores: el investigador adop- entre otros. ta una posición distante respecto del objeto que Con respecto al paradigma sociocrítico, pretende investiga (Rodríguez, 2005:11). Es decir, busca superar el reduccionismo del racionalismo y del la neutralidad y objetividad durante la investi- interpretativismo, es decir, que no se focaliza en gación, en donde se deben emplear métodos lo empírico ni en lo interpretativo. Arnold (2013) científicos de recopilación de datos libres de sugiere que tuvo sus raíces en los años 70. Sur- valores subjetivos. El método es experimental: gen críticas a la investigación convencional como hipotético-deductivo, con diseños definidos y el carácter elitista, alejamiento de la realidad; cerrados. Para Carr y Kemmis (1988) posibilita la no incorporación de los actores sociales; la su- la generalización de resultados; las hipótesis puesta incapacidad de dar una respuesta y solu- se establecen a priori y luego son contrastadas ción a los problemas (Rodríguez, 2005:16). Sus empíricamente en condiciones de control aportes proceden del campo del desarrollo experimental. Por ende, su orientación respon- comunitario, la etnografía crítica neomarxista, de a estudios cuantitativos en donde los inves- la teoría feminista, la teoría de Paulo Freire, los tigadores comienzan con ideas, teorías o con- estudios poscoloniales e indígenas, la corriente ceptos que definen operacionalmente a través de latinoamericana antropológica, entre otros. las variables o la relación de causa-efecto. De acuerdo a Capocasale (2015), la finalidad de El paradigma interpretativo plantea una la investigación es la transformación de las concepción distinta de la interacción sujeto- estruc-turas de las relaciones sociales. A partir objeto. Sus principales representantes son Dilthey, de la base conceptual del cambio social propone: Rickert, Husserl, Mead y Weber.3 Para Rodríguez conocer y comprender la realidad como praxis; (2005), proponen la singularidad de los objetos unir teo-ría y práctica; orientar el conocimiento propios de las ciencias sociales y de la relación para emancipar al ser humano; e implicar a toda entre sujeto-objeto al interior de las mismas, como la co-munidad en un proceso de compromiso justificación para el desarrollo de propuestas social. Su posición ontológica nominalista epistemológicas y metodológicas alternativas al considera a la realidad como una construcción positivismo. intersubjetiva (sujeto-sujeto) que se produce dentro Según Carr y Kemmis (1988), su interés se de ciertos marcos referenciales, que resulta de la centra en comprender e interpretar la realidad densidad del conocimiento acumulado por grupos construida por los sujetos. Siendo el ambiente sociales específicos y que se manifiesta como con- observado como compleja, holística, divergente y sensos sociales (Rodríguez, 2005:17). múltiple, su ontología es nominalista: la realidad A decir de Chilisa (2012 citando a Neuman, es una construcción social intersubjetiva, no existe 2010), adopta la postura de que la realidad social una realidad objetiva e independiente de su com- está históricamente vinculada y está cambiando prensión y conceptualización (Rodríguez, 2005:15). constantemente los factores sociales, políticos, Su epistemología es subjetivista en donde el culturales y de poder. Por todo ello, la participación conocimiento es construido, compartido e es central en el proceso de investigación, siendo interpretado por los sujetos en interacción su postura epistemológica subjetivista. Como con la realidad. Como lo sugiere Rodríguez lo menciona Chilisa (2012), el conocimiento se (2005), el proceso de investigación incorpora construye a partir del marco de referencia de los necesariamente la subjetividad del investigador. participantes. La relación entre el investigador y Su metodología es interpretativa de carácter los investigados no se basa en una jerarquía de inductivo-cualitativo en donde las estrategias de poder, como en el paradigma interpretativo, sino que implica una transformación y emancipación 3 Weber se encargó de desarrollar los fundamentos y sentido tanto del participante y el investigador, lo de la comprensión como método particular de las ciencias que Freire denomino como el despertar la sociales. Para Weber (1956) la comprensión consiste en entender las acciones humanas mediante la captación o conciencia del oprimido; o la descolonización de aprehensión subjetiva, empática, de los motivos y los pro- la subjetividad: Su aporte radica en sostener que el pósitos de los actores. conocimiento supone asumir una posición crítica

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 115 ] y una acción transformadora frente a la realidad, La metodología es dialógica y participativa e posición que despertaría en el investigador una incluye las diversas perspectivas de los diferentes “conciencia verdadera” (Rodríguez, 2005:17). actores sociales en procesos participativos, donde Desde el punto de vista axiológico, al buscar la se genera una democracia de los conocimientos transformación y emancipación, para Rodríguez o una ecología de saberes. Según Chilisa (2012) (2005) promueve la incorporación de los valores los actores participan en la identificación y (subjetividad) e intereses del investigador como definición del problema, la recolección y análisis la de los participantes, lo que se traduce en una de los datos, la difusión de resultados, y el uso de visión democrática del conocimiento. Según los hallazgos para informar la práctica. Asume de Chilisa (2012), los investigadores ven la investi- forma explícita el componente axiológico enmarcado gación como una actividad moral y política en su interés esencialmente emancipatorio. Su que les obliga a elegir y comprometerse con los método por excelencia es la investigación-acción valores de la justicia social, la promoción de los (Capocasale, 2015: 45). derechos humanos y el respeto de las normas El investigador se constituye como un sujeto colec- culturales. tivo de autoreflexión, que no sólo está inmerso en el Kemmis (1993) menciona que el investigador objeto investigado sino que es parte constitutiva del procura desarrollar o mejorar las acciones, las for- mismo […] la acción transformadora juega el rol mas de comprensión y las situaciones por medio principal en la praxis investigativa (Rodríguez, de acciones participativas. Esta manera de percibir 2005:17-18). De acuerdo a Chilisa (2012), su a la gente investigada revela un in-terés en lograr propósito es empoderar a la gente a actuar para su emancipación respecto a los obstáculos de transformar la sociedad. Sus principales mé- irracionalidad, injusticia, opre-sión y sufrimiento todos son la evaluación rural participativa, la que desfiguran sus vidas, y desarrollar en ellos el investigación acción participativa, talleres par- sentido de que son producto de la historia. Pero ticipativos, la tradición oral, grupos focales, bio- también forjadores de ésta, ya que comparten gráfico-narrativo, historias de vida, entre otros que circunstancias antes las cuales pueden actuar contribuyen a generar un diálogo participativo en conjuntamente para retarlas y cambiarlas. la investigación.

La emergencia del paradigma indígena de investigación

us raíces se remontan a la década de los años (THOA)5; la investigación-acción participativa en S70 al interior de los ámbitos intelectuales. Colombia que describió Orlando Fals-Borda. Estas Para Arévalo (2013) proviene de los académicos serían algunas de las vertientes que contribuyen indígenas que pertenecen al eje angloparlante. a comprender la emergencia de la investigación Autoras y autores procedentes de los pueblos indígena. Sami, Cree, Mäorí, Cree-Metis, Bantú, Hawai, Quandamooka y aborígenes (australianos) han Lo cierto es que en la década del 70 sur- venido posicionando este debate en los campos gen en toda el área vigorosos procesos de de la educación y la investigación. Asimismo, autoconciencia étnica y se forman organi- se deben mencionar las experiencias en el zaciones que reclaman para sí el derecho desarrollo rural de metodologías participativas en de generar sus propias sistematizaciones Tanzania (África), así como el modelo Bamenda de ideológicas y políticas, desplazando del investigación-acción en Camerún. rol de intermediarios a los intelectuales y Por otra parte, en Latinoamérica se tiene el cientistas sociales de las diversas disciplinas aporte liminar de Paulo Freire y su metodología (Rivera, 2006:16). de alfabetización; el movimiento de educación popular de los 704; los katarista en los 70 y su planteamiento de descolonización; el surgimiento 5 El Taller de Historia Oral Andina se crea en 1983, de acuerdo de la investigación compartida en Cartagena (1977); a Criales y Condoreno (2016) fue alrededor de la carrera la experiencia del Taller de Historia Oral Andina de Sociología de la Universidad Mayor de San Andrés (La Paz-Bolivia), a la cabeza de Silvia Rivera. Su propósito es 4 En el caso de Bolivia se debe mencionar la experiencia de recuperar la historia, la memoria de los pueblos indígenas, la Comisión Episcopal de Educación, las y los promotores/as y asimismo promocionar comunidades de investigadores culturales aymaras. en el país y en el exterior.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 116 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Según Chilisa (2012:9), este paradigma surge y espiral,7 como el alax pacha (mundo de arriba), el como respuesta al proceso colonialista, a la aka pacha (centro, lo terrenal) y el manqha pacha invasión y pérdida de territorios acompañados de (mundo de abajo). En esta dimensión está presente destrucción de sistemas políticos, sociales, y eco- la relacionalidad entre el mundo material y el nómicos de sus habitantes, que conllevó a un proceso inmaterial, en donde todo está relacionado con de dependencia económica y política de Occidente: todo lo que tiene espíritu: pachamama, achachilas, Francia, Gran Bretaña, Alemania, España, Italia, uywiris, plantas, animales, espíritu de los lugares, Rusia y Estados Unidos. Para Arévalo (2013), es una entre otros. propuesta reciente que irrumpe en los espacios Por ende, se tiene una comprensión total de clásicamente destinados a la ciencia moderna, la realidad. Es decir, múltiples realidades social- así como una práctica para la recuperación y mente construidas, en donde los seres humanos conservación del saber ancestral. De acuerdo a se relacionan con el medio ambiente, el cosmos, la Rivera (2006), es la crítica a la instrumentalización vida, y lo no vivo (Chilisa, 2012:42). Como lo sugiere implícita de la metodología positivista, con su Arévalo (2013), el contexto es más amplio que en la pretendida “neutralidad valorativa”. visión occidental, la realidad indígena contiene la La base del paradigma indígena reside en la occidental (la versión racional-material), pero va ciencia nativa6, que es lo vivencial, la experiencia, más allá incluyendo lo que la visión occidental el saber acumulado y compartido. no logra captar por los sentidos o lo que el pensamiento racional no puede explicar. La investigación debe hacerse no solamente Su epistemología se basa en el sistema teorizando, si no, en la práctica; cuando de conocimiento indígena, el cual debe ser estoy en un proceso de investigación, en incorporado a la investigación. Este conocimien- ese mismo proceso debo estar ayudando to hace referencia a las culturas, las cosmovisiones, a transformar esa realidad, por lo tanto, los tiempos, los lenguajes, las historias, las espiri- si estoy oprimido, esta investigación tiene tualidades y el cosmos. (Wilson, 2008:74). Asimis- que ayudarme a librarme de esa opresión, mo, se construye a partir de las relaciones sociales si estoy sometido, esa investigación debe (Chilisa, 2012: 41). Arévalo (2013), dis-tingue seis ayudar a que yo pueda liberarme de esas características: cadenas (Palechor, 2010:211). ◊ su profunda relación con el contexto y la Una de las características de este paradigma conexión general de las cosmovisiones8 en su interacción, interrelacionamiento e inter- ◊ la importancia de las relaciones9 cambio permanente y participativo, desde un ◊ la necesidad de la lengua10 sentido holístico y complementario que va desde ◊ la supervivencia del saber ancestral11 lo racional, lo espiritual, lo vivencial y lo intuitivo. De acuerdo a Arévalo (2013), el punto transversal es que la investigación no debería rebanar la realidad, ni separarla y aislarla en partes como si 7 A decir de Laymi (2002), tiene dos dimensiones: laqampu cada una tuviera una vida propia. es todo lo que es espacio y como condición real y natural En este sentido, lo ontológico se centra en de existencia y comportamiento de las cosas tangibles; en comprender a la realidad desde lo holístico, lo cambio, la dimensión saräwi es expresión real y natural de complementario y la naturaleza relacional de la sistemas en movimiento. 8 En la relación con el contexto y la conexión general de existencia en cada una de las cosmovisiones de las cosmovisiones, se reconoce la diversidad de saberes. Es cada cultura, pueblo o nación. La relacionalidad una red de relaciones vivas y espirituales conviviendo en una en cierto sentido define la “totalidad” como uni- “totalidad-relacional” (Árevalo, 2013: 66). dad de todo lo que vive. Esta totalidad se refiere 9 Las relaciones son las que hacen posible componerla y a los objetos materiales y conocidas por los sen- darle movimiento. Las ideas y los conceptos son importantes dentro del conocimiento ancestral pero son más importantes tidos, va más allá al integrar a su “unidad” como las relaciones que los articulan (Wilson, 2008). Las relaciones el de arriba y el de abajo. El mundo medio es en interpersonales, intrapersonales, medioambientales y espiri- el que caminan los humanos, viven los animales tuales son tomadas en cuenta por la epistemología holística y y las plantas (Arévalo, 2013: 64). relacional (Chilisa, 2012; Wilson, 2008). Para el caso andino, en los aymaras la dimen- 10 Chilisa (2012) afirma que las lenguas tienen un enfoque determinante en los procesos cognitivos: como medio de sión esencial de la realidad universal es pacha comunicación, de preservación de los conocimientos indí- (espacio-tiempo), que es una relación ascendente genas, y como símbolo de objetos, eventos y experiencias de la comunidad. 11 Para Arévalo (2013), se da gracias a las fuentes del cono- 6 Para Cajete (2000), la ciencia nativa incluye espiritualidad, cimiento que anidan en los sueños, las visiones, durante las comunidad, creatividad y tecnologías para mantener el ceremonias y rituales que ofrecen orientación y asistencia a medio ambiente y cuidar la vida humana. Envuelve aspectos los procesos del conocimiento y actuando como portales del como el espacio y el tiempo, el lenguaje, el pensamiento y saber. Otras fuentes de gran importancia son la memoria, las la percepción, la naturaleza y sentimientos humanos, la re- historias y mitos que mantienen la experiencia ancestral y lación de los seres humanos y el cosmos y todos los aspec- adicionan nuevos conocimientos por quienes las transmiten tos revelados con la realidad natural. y aprenden dando lugar a un proceso de endoculturación.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 117 ] ◊ la colectividad del conocimiento12 ¿Cuál es el rol del investigador en éstas relaciones ◊ el papel relacional del investigador.13 y cuáles son las responsabilidades y compromisos a asumir? ¿Cómo la investigación contribuye al En el caso de la axiología, al ser relacional el fortalecimiento de la relacionalidad? ¿Es compar- paradigma su comprensión debe ser desde el con- tido el aprendizaje de la investigación con los cepto de responsabilidad relacional. A decir de demás participantes? ¿Se construyen relaciones Louis (2007), la cuatro Rs abarcan una axiología de reciprocidad? relacional: rendición de cuentas, representación Según Chilisa (2012) la metodología es parti- respetuosa, reciprocidad en la apropiación, y cipativa, liberadora y transformadora que se reglamentos y derechos durante el proceso de basa en los sistemas de conocimiento indígenas. investigación (citado en Chilisa, 2012: 22). La rendición de cuentas implica que el in- Las metodologías indígenas son una apuesta vestigador al comienzo, durante el proceso y política por la autodeterminación para que la finalización ofrezca los resultados o la infor- la investigación pueda ser transformada mación obtenidos. La representación respe- y permita a los pueblos indígenas tomar tuosa implica que el investigador escucha, re- el control sobre la producción del conoci- conoce, presta atención, diáloga en espacios miento, cambiar sus procesos, recuperar de aprendizajes abiertos y flexibles, observa y y consolidar sus identidades culturales y participa interculturalmente; es decir, el inves- promover la búsqueda de alternativas a tigador debe desarrollar el aprendizaje de la la multiplicidad de problemas a los que se mirada, del diálogo y del registro. enfrentan (Arévalo, 2013: 70). La apropiación recíproca significa que los beneficios y conocimientos generados por la Para Arévalo (2013) las metodologías serían investigación son compartidos, es decir, que sea la observación, la formulación de modelos, la útil al investigador como a la comunidad. Los experimentación, la espiritualidad, la interpre- reglamentos y derechos, de acuerdo a Chilisa tación, la mente metafórica, la explicación, el (2012) son los protocolos éticos que otorgan a los rol de los mayores y sabedores, las historias, las colonizados y los marginados la propiedad del ceremonias, los sueños, la meditación, las visio- proceso de la investigación y el conocimiento nes y los rituales. La implementación de cada producido. Estos protocolos se refieren a la uno de ellos depende de cada investigación, de su socialización de la investigación; el comprender propósito, de su horizonte político y del apren- si el problema identificado por el investigador dizaje que el proceso de investigación ofrece. es útil a la comunidad, pueblo o nación, sujetos, En este sentido, Chilisa (2012) sugiere la etno- etc.; el respetar la voz de los participantes en filosofía, los marcos de lenguaje, los sistemas la recogida de información, como el caso del de conocimiento indígenas, las historias de idioma originario; la redacción del informe de entrevistas, y los círculos de conversación; y las investigación: por ejemplo, la transcripción de la técnicas adecuadas de los otros tres paradigmas. memoria oral-narrada a la memoria escrita. Se coincide con Chilisa en que se debe tomar Asimismo, un punto de partida es el posicio- en cuenta los métodos de los otros paradigmas. namiento que toma el investigador. Por ello Por ejemplo, la etnografía crítica; el análisis de Wilson (2008) sugiere que un investigador debería imagen14; la historia oral15; el análisis del dis- preguntarse: ¿cómo los métodos construyen curso; la investigación acción-participativa y relaciones respetuosas entre el tópico de inves- transformadora; la etnometodología; la histo- tigación, los pueblos y el investigador? ¿Cómo ria de vida16; el taller participativo; la teoría los métodos ayudan a construir relaciones respe- tuosas entre la investigación y sus participantes? 14 Para Rivera (2010), las imágenes permiten que se puedan realizar interpretaciones, narrativas sociales y perspectivas 12 Según Arévalo (2013) la concepción del conocimiento de comprensión crítica de la realidad. Por ende, se tiene ancestral es una creación colectiva e histórica que se una mayor interacción entre investigador-investigados produce por el acumulado de generaciones en convivencia porque ofrece diferentes interpretaciones y genera diálogos relacional. En el sistema de conocimiento ancestral, si todo participativos. está relacionado, el conocimiento no puede ser ajeno a este 15 Ticona (2005) menciona que la historia oral, es el principio cósmico. El conocimiento es co-producido de ma- reconocimiento de las múltiples voces, principalmente nera relacional. Para Palechor (2010), cada miembro de la de poblaciones marginadas y explotadas, como indígenas comunidad aporta desde el rol que ha asumido y desde su y sectores subalternos. Asimismo, se debe mencionar la experiencia de vida. Esta característica de construcción experiencia metodológica que ha desarrollado el Taller de colectiva es lo que hace que la propiedad también sea colec- Historia Oral Andina con respecto a la recuperación de tiva, no existe el conocimiento como propiedad privada. saberes y memoria de los pueblos indígenas. Según Criales 13 Chilisa (2012) sugiere que son varios los roles y posibilidades y Condoreno (2016), es una contrapropuesta innovadora: que juega el sistema de conocimientos: como fuente, guía de develar lo que había ocultado la historia oficial, es decir, nuevos tópicos o temas, develar los saberes sometidos por la historia india; fue toda una catarsis, la rabia por todo la ciencia oficial, la teorización de métodos y procesos de el pasado de opresión que se volcaba en una pasión investigación desde la perspectiva de las culturas y valores reivindicativa, una historia con identidad. colonizados; protección del saber ancestral y creador de 16 Langness (1965) define a las historias de vida como un códigos éticos de respeto y reciprocidad. extenso registro de la vida de una persona, que puede ser

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 118 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar fundamentada, el estudio de caso, lo biográfico- (2006) es el desplazamiento de una exigencia narrativo, entre otros. Por ende, esto conlleva interna de la lógica del investigador, a una exi- a posicionar al investigador desde qué lugar gencia externa políticamente comprometida: pro- se quiere hacer investigación, así como de la ducir conocimientos y resultados de investigación comprensión de la relacionalidad. Para Rivera significados no sólo para el investigador y la comunidad académica, sino también para los presentado por la misma persona, o por otra (el etnógrafo) intereses del grupo estudiado. y en algunos casos por ambos (biografiado e investigador), ya sea de manera escrita (por la misma persona) u obtenida mediante entrevistas (grabadas o no) (citado en Ticona, 2005: 28-29).

Investigación y descolonización científica

ace décadas, González Casanova mencionaba basa en la creencia de que la civilización occidental Hla existencia de un colonialismo interno. Una es la mejor y la más avanzada por sustentarse en la estructura de relaciones de dominio y explotación ciencia y se rechaza a otras civilizaciones por no ser entre grupos culturales heterogéneos distintos científicas. Esto se traduce en el desconocimiento (1971:26). González Casanova (1965) menciona que de la “ecología de saberes”: se expresa en el monopolio sobre el comercio por parte del “centro rector” o “metrópoli” con El conocimiento impuesto ha sido un me- relaciones de intercambio desfavorables para los canismo de aculturación y en consecuencia indígenas y su consecuente exclusión del mer- está terminando con nuestros elementos cado, por ejemplo, salarios diferenciales para culturales (educación, lengua, medicina, trabajos iguales. Asimismo, este monopolio se etc.). Una de las razones de este daño cultural extiende al terreno de la cultura y la información es el desconocimiento e invisibilización que generando una exclusión social, política y cultural. se ha hecho del cono-cimiento indígena. En este contexto, de acuerdo a González (Palechor, 2010: 204) Casanova (1971) se tiene la presencia de desigual- dades económicas, políticas y culturales entre Por su parte, para Chilisa (2012) el colonialismo la metrópoli y la periferia, y también una desi- científico es la imposición del enfoque y el para- gualdad interna: racial, religiosa, rural, de digma positivista de la investigación de las colonias clases, etc. Fanon (1975) explica que se deben y otros grupos oprimidos históricos. Bajo el disfraz a la conquista de un territorio nacional y la del colonialismo científico, los investigadores opresión de un pueblo, por otro. Por ende, en viajaron a tierras colonizadas distantes, donde el conocimiento se tiene la presencia de una convirtieron a la gente residente en objetos de colonialidad del saber,17 un colonialismo científico, investigación. Es decir, se fue fundamentando una colonización intelectual y de la subjetividad, el etnocentrismo en la investigación, pues la es decir, un contexto de opresión colonial en lo ciencia jugó un papel determinante para someter y cultural. desacreditar a los pueblos indígenas, su sistema de La colonialidad del saber plantea la mono- conocimientos, valores, comportamientos y creencias polización y dominación de un solo conocimiento (Árevalo, 2013: 6). Como lo sugiere Palechor (2010), y saber, que es el de la cultura dominante. Spivak el interés es la producción de capital y como tal se (1987), sugiere que es de las universidades del monopoliza el conocimiento, para poder venderlo norte de donde salen las ideas dominantes, al mejor postor y hacer de él el mejor negocio, los thinktanks (tanques de pensamiento) de los hecho que condiciona el beneficio que pueda poderes imperiales (citado en Rivera. 2010: 63). prestar a la humanidad. La academia gringa no Como lo menciona Patzi (2004), este proceso se sigue el paso de nuestros debates, no interactúa con la ciencia social andina en ningún modo significativo 17 Sobre este tema se retoma los aportes del movimiento katarista de los 70, los aportes liminares de Fausto Reinaga, (Rivera, 2010: 64). el aporte de Pablo González Casanova, Silvia Rivera y el La “colonización intelectual” está relacionada Taller de Historia Oral Andina. con la monocultura del saber y de lo científico.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 119 ] La ideología de la opresión se inocula en el cerebro Oral Andina en los 80, en el campo histórico del escritor nativo […] Los escritores de la colonia crítico la historiografía oficial, por ende, planteó intelectual se desempeñan como una legión enfu- la presencia de racionalidades históricas diversas recida de cipayos (Reinaga, 1964:24). Por ende, la y una reconstrucción histórica que toma como colonización intelectual reproduce y naturaliza base la memoria oral y el mito. las relaciones de dominación y las condiciones En suma, el colonialismo científico, del saber, opresión. Para Reinaga (1964), olvidan el pigmento de lo intelectual y de lo subjetivo es el resultado indio, escriben y elaboran pensamientos blancos. de la monoculturalidad del saber científico. Frente a este escenario se traduce la necesidad de La elite de la izquierda marxista en Bolivia, una epistemología descolonizadora. De acuerdo por su visión ilustrada y positivista habían a Prada (2014), ésta nace de la experiencia dra- obviado la arena de la identidad india y los mática y dolorosa de los cuerpos colonizados, problemas de descolonización, aplicando un emerge de la experiencia de despojamiento y análisis reduccionista y formulístico que les desposesión, de la experiencia de la descalifi- permitía reproducir cómodamente la domi- cación y desvalorización, de las sombras a la que nación cultural que ejercían por su origen de fueron arrojados los cuerpos. clase y por su dominio de la lengua legítima y Ante esto, la descolonización, según Bautista el pensamiento occidental (Rivera, 2010:66). (2014) no es “volver atrás” sino recuperar la propia historia negada, restaurar la humanidad La “mente cautiva” o “colonización de la sub- que había sido despojada. No significa el encierro jetividad” se caracteriza por cambiar el pensa- fundamentalista hacia lo meramente autóctono, miento, la razón, la manera de pensar. Por un lado, sino la apropiación crítica del conocimiento ac- es un proceso que se centra en el despojo y susti- tual, para que se pueda posibilitar, de mejor tución de las culturas y saberes de los pueblos modo, la recuperación del conocimiento propio. colonizados, por los de la cultura euroccidental Para Prada (2014), implica desmontar las forma- (Fanon, 1983). En la investigación se hace más ciones discursivas de dominación. Es la evidente con los investigadores que adoptan elementos occidentales, por lo que se presenta descolonización de nuestros gestos, de nues- una alienación académica que reproduce la pre- tros actos, y de la lengua con que nombramos tendida “neutralidad valorativa” del paradigma el mundo. El retomar el bilingüismo como racionalista-positivista. Si la estructura oculta, una práctica descolonizadora permitirá subyacente de la sociedad es el orden colonial, los crear un “nosotros” de interlocutores/as y investigadores occidentalizados están siendo repro- productores/as de conocimiento, que puede ductores inconscientes de este orden… Se convierten posteriormente dialogar, de igual a igual, en cómplices del etnocidio y del despojo (Rivera, con otros focos de pensamiento y corrientes 2006:20). en la academia de nuestra región y del Por otro lado, naturaliza las condiciones mundo (Rivera, 2010:70-71). dominación: colonizadores-colonizados, opreso- res-oprimidos-; dominantes-dominados, las Por ello, se hace preciso comprender que la cuales son mediatizadas y concretadas por descolonización no es solamente el campo de las relaciones de dominación y la violencia las educaciones o en lo sociocultural, sino tam- simbólica a través de la educación, los medios bién en la investigación, en la producción y de comunicación y las políticas culturales18. la creación de conocimiento. En este sentido, Según Fanon el colonizado no reconoce ninguna supone, por un lado, crear e innovar estrategias instancia. Está dominado, pero no domesticado. de liberación de la colonialidad del saber, de lo Está interiorizado, pero no convencido de su científico, de lo intelectual y de lo subjetivo; por inferioridad” (1983: 46). En los 70 en el contexto otro lado, la restauración, redescubrimiento, boliviano fue puesto en evidencia por el autovaloración de las prácticas culturales, pa- movimiento katarista-indianista al establecer trones de pensamientos, conocimientos que la presencia de una estructura mental, un solo fueron suprimidos o ignorados por el colonia- modo de concebir al mundo desde lo europeo y lismo. Como lo menciona Bautista (2014: 22), el norteamericano. Asimismo el Taller de Historia proyecto de liberación, sólo podrá tener una seria pretensión de universalidad, si los fundamentos 18 Para Bourdieu (1997), el capital cultural desempeñará un epistémicos de los cuales parte, partan de lo más papel fundamental en las relaciones de producción. A través propio; de lo que, precisamente, había negado la del sistema educativo se marginara los conocimientos de otras culturas, la de los dominados, por la de los dominantes. Modernidad para afirmarse exclusivamente ella. Como lo sucedido en Bolivia con la intelectualidad liberal y Para Dussel (2009), la afirmación como nacionalista del siglo XX, que no abordó el tema indígena auto-valoración de los momentos culturales y su condición colonial, a lo que Reinaga denominó como propios negados o simplemente despreciados la intelectualidad del cholaje blanco-mestizo: Desde la y los valores tradicionales ignorados por la fundación de la República hasta nuestros días, los escritores de Bolivia, han hecho el triste papel de cipayos ideológicos de los Modernidad de-ben ser el punto de arranque de escritores de las Metrópolis (Reinaga, 1964:25). una crítica interna, resistencias, maduración y

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 120 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar acumulación de fuerzas presentes en el tiempo de saberes. Por otro lado, puede iniciarse largo de la historia. desde otras formas de hacer investigación como los paradigmas sociocrítico e indígena. Es un proceso de liberación que parte de Considerando que el indígena la propia identidad, pero de modo crítico y responsable. Porque se trata de reconstruir se caracteriza por ser parte de una agen- la forma de vida que nos presupone, la co- da social y política de decolonización y munidad, que era y es nuestro horizonte de autodeterminación de los pueblos indíge- vida (Bautista, 2014: 31). nas que, basada en la cosmovisión y cono- cimientos indígenas, guía la creación de De acuerdo a Chilisa (2012), la descolonización marcos “teóricos” y “metodológicos” de la en la investigación es un proceso que incluye las investigación en donde las prácticas cultu- visiones del mundo de los que han sufrido una rales y formas de expresión indígenas larga historia de opresión y marginación, se les tienen una profunda conexión con el inves- da el espacio para comunicarse desde sus marcos tigador, el proceso de investigación y los de referencia. Como son sus conocimientos, participantes (Arévalo, 2013:62). saberes que desde su propia historia e idioma conduce a la de-construcción y reconstrucción, Es decir, se trata de una apuesta a partir la autodeterminación que es a partir de la auto- del respeto y valoración de la pluralidad de valoración y la posición crítica. Por lo anterior, conocimientos y saberes entre investigador- en el caso de las universidades el investigados. Para ello se puede acudir a métodos de inves- desafío tiene que ver con la incorporación tigación como los sistemas de conocimiento de saberes de las culturas originarias como indígenas, la etnografía crítica; el análisis de parte del acervo cultural universitario, la imagen; la historia oral; el análisis del discur- reorientación de la formación científica so; la investigación acción-participativa y trans- integrando los conocimientos más elevados formadora; la etnometodología; la historia de vida, (llámense científicos o tecnológicos) de las el taller participativo; la teoría fundamentada, la culturas originarias (Weise, 2007:140). hermenéutica, el estudio de caso, lo biográfico narrativo, entre otros. Por ejemplo, la historia En la investigación se hace necesario un oral,19 de acuerdo a Rivera (2006), es un ejercicio horizonte descolonizador que se traduce en la de desalienación y descolonización, tanto para el investigador como para su interlocutor. Como lo investigación como acción política se sus- manifiesta Ticona (1986), escuchar y rastrear en tenta en la idea de lo educativo como un la memoria oral de los protagonistas, a través de campo de disputa por el poder: el poder de las leyendas, cuentos o sawis y mitos (citado por definir y delimitar aquello que se considera Criales y Condoreno, 2016: 59). conocimiento, sobre qué realidad investigar y a partir de qué enfoques metodológicos se Lo oral es en Bolivia el espacio fundamental investiga (Palechor, 2010:206). de la crítica de toda la concepción occidental de la historia, que sitúa lo “histórico” tan Como lo sugiere de Sousa (2008: 68), la inves- sólo a partir de la aparición de la escritura, tigación como horizonte político involucra una y legitima por lo tanto la invasión colonial amplia gama de acciones de valoración, tan- como una heroica misión “civilizadora” to del conocimiento científico como de otros (Rivera, 2006:19). conocimientos prácticos considerados útiles, compartidos por investigadores, estudiantes y En el caso de la descolonización subjetiva se grupos de ciudadanos. Este proceso sirve de base debe generar la toma de posición del investigador, para la creación de comunidades epistémicas su lugar, su subjetividad, su comprensión que más amplias que convierten a la universidad en la producción del conocimiento es un lugar de un espacio público de inter-conocimiento donde poder: para mantener, reproducir o transformar. los ciudadanos y los grupos sociales pueden Implica saber desde dónde se escribe, investiga, intervenir sin la posición exclusiva de aprendices. habla y escribe. Para Tuhiwai (2016) la investi- El horizonte descolonizador científico puede gación existe dentro de un sistema de poder. Lo ser realizado; por un lado, desde la superación de que esto supone para los investigadores indí- las visiones tradicionales de hacer investigación. Con el fin de construir una interculturalidad 19 Una muestra del desarrollo de una metodología descolo- emancipadora en la producción de conocimiento nizante es la experiencia del THOA que ha venido haciendo propio y autogestionario, que apunta a superar investigación en base a la historia oral, la cual ha permitido el multiculturalismo; la monocultura del saber poder re-escribir la historia de los pueblos indígenas boli- vianos desde la memoria oral y desde los propios sujetos, científico (colonialidad del saber, de lo subjetivo, una historia desde la propia identidad, desde los abuelos y de lo científico e intelectual) por una ecología abuelas.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 121 ] genas, así como para los activistas indígenas y indio o reinventándolo y reivindicándolo, sus comunidades es que el trabajo indígena tiene entendiendo el colonialismo interno y la que “responder a”, o “elevar su voz hacia” el poder. descolonización en renovadas formas de Rivera (2010) sugiere que los intelectuales juegan comunicación más de igual a igual (Criales, un rol importante en la dominación del imperio, y Condoreno, 2016:66). ya que al participar en foros e intercambios de ideas se puede estar brindado, sin querer, armas Chilisa (2012) menciona que deberían plan- al enemigo. tearse algunas preguntas antes de iniciar una Para Arévalo (2013:74), es posible aprender investigación: ¿cuál es el paradigma que alumbra e incorporar a los procesos de investigación, la metodología: el paradigma post/positivista, el dejarse atravesar el corazón y la mente por interpretativo, transformativo o el indígena? prácticas y cosmovisiones que fluyen a di- ¿Cuáles son las teorías que inducen los temas de mensiones no-modernas de la existencia. Si investigación, las preguntas, la literatura a revisar, la investigación tiene la tarea de subvertir el los métodos de recolección de datos, los análisis e mundo, podría comenzar por subvertir al in- interpretaciones? ¿El enfoque de la investigación vestigador. Por ende, implica comprender la es participativo, etnográfico, o una mezcla de intención política que tiene la investigación. métodos? ¿Qué enfoque teórico alumbra los aná- lisis e interpretación de los datos? ¿Cuáles son los Nuevos rumbos donde se ven múltiples ma- contenidos éticos de la investigación? ¿La inves- neras de abordajes […] teniendo como base tigación se preocupa por la transformación social? fundamental la oralidad y la memoria del Estas preguntas permiten que el investigador pasado, presente, tratando de dar claridad a reflexione sobre la cuestión ética, metodológica, una posición, luchando con nuestro propio teórica, epistémica, ontológica y teleológica.

Reflexiones finales

na de las primeras reflexiones a las que se una ecología de saberes y una interculturalidad Ullega sobre el estudio del conocimiento, es emancipatoria del conocimiento. El paradigma que debe ser problematizado no solamente desde indígena permite cuestionar la forma convencio- el saber acerca del saber, sino desde el cómo nal de hacer investigación, posiciona a los sujetos se piensa y está pensando o se dice estar pen- como participantes desde un sentido epistémico sando la realidad. El cual puede ser abordado y ético. Porque conlleva la aplicación de enfoques desde la epistemología pluralista. Que por un participativos y liberadores que buscan la trans- lado, hace referencia al reconocimiento de la formación social de las realidades en las que se heterogeneidad, multiplicidad y complejidad investiga. de epistemes que coexisten, un diálogo herme- Con respecto a la investigación y descoloni- néutico. Por otro lado, una ruptura con el pen- zación científica en el artículo se ha desarrollado samiento moderno, la colonialidad del saber, de la colonialidad del saber que plantea la mono- lo científico y la colonización intelectual y de la polización y dominación de un solo conoci- subjetividad. Que implica superar la monocultura miento, que es el de la cultura dominante. Un del saber científico por una interculturalidad colonialismo científico, que es la imposición emancipadora y una ecología de saberes, que del paradigma positivista e interpretativo en las emergen de la generación de conocimiento colonias. Una colonización intelectual que hace propio y autogestionario. referencia a la monocultura del saber y de lo En cuanto a los paradigmas: racionalista, in- científico. Unamente cautiva o colonización de la terpretativo y sociocrítico, fueron abordados subjetividad, que por un lado, es el despojo y sus- desde sus orígenes, su ontología, epistemología y titución de las culturas y saberes de los pueblos metodología. En el caso del sociocrítico se debe colonizados; y por otro lado, la reproducción destacar su axiología y su finalidad, la transfor- de las relaciones de dominación, por medio del mación de la realidad. Los cuales dialogan con conocimiento. el paradigma indígena, que es una respuesta Frente a estas diferentes colonialidades, la al colonialismo cultural y una crítica a la ins- descolonización científica no implica destruir trumentalización positivista. Que parte del y negar lo ajeno, sino dialogar y retomar la di- sentido ético, las cuatro Rs y desde un enfoque ferencia y diversidad: la identificación de lo participativo. propio y el reconocimiento de lo ajeno; y la rela- Por ello se comprende que desde el paradigma cionalidad y armonización, entre lo propio y aje- sociocrítico y el indígena se puede avanzar hacia no, que prácticamente es una interculturalidad

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 122 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar emancipatoria. Tampoco es volver atrás sino sociales y humanas, sobre todo si se piensa en recuperar y re-escribir la historia negada, es lo propio, lo intercultural, lo intracultural, lo re-construir las formaciones discursivas de comunitario y lo descolonizador. De este modo, dominación desde la autovaloración de las prác- la investigación debe girar su mirada hacia los ticas culturales, patrones de pensamientos, saberes, las prácticas, valores, experiencias, sen- conocimientos que fueron y son suprimidos o tidos y vivencias de las poblaciones indígenas, ignorados por la colonialidad; es avanzar hacia como de otros sectores sociales periféricos y la autodeterminación y consecuentemente hacia subalternos que son portadores de conocimientos una emancipación. y saberes. Se razona que desde el paradigma indígena es Pero para ello, a nivel de los espacios académicos posible un horizonte descolonizador de lo cien- que producen conocimientos implica cuestionar tífico, que se traduce en la investigación como las formas tradicionales de hacer investigación, acción política contestataria y emancipadora. hacia otras que generen transformación en Es el investigar hacia atrás y adelante para las relaciones de dominación. ¿Es posible ge- comprender lo dominado y excluido; el re- nerar una interculturalidad y ecología de sa- escribir y hablar de nuevo lo que excluye y beres en la universidad que permitan una des- margina la colonialidad del saber y científico, colonización científica desde lo subjetivo e la colonización intelectual y subjetiva. Un intelectual en las formas de hacer investigación? ejemplo, de ello, es la experiencia del THOA y su ¿La descolonización científica posibilita la trans- horizonte epistemológico del Qhip nayr uñtasis formación de la universidad en un espacio sarnaqapxañäni (“mirando atrás y adelante hay público de inter-conocimiento que sustituye la que vivir o camina”).20 A través de lo propio y la forma institucionalizada e instrumentalizada de metodología de la historia oral: hacer investigación? A nivel del investigador-investigados, un que consiste en el retorno a la palabra de aspecto a resaltar es la toma de posición en el los mayores. La premisa de partida fue que contexto donde se encuentra, el reconocer que los abuelos y las abuelas expresan la otra la investigación, es poder. ¿Para qué se quiere ontología, diametralmente opuesta a las investigar: transformar, cambiar, reproducir epistemes occidentales que se caracterizan o mantener las desigualdades y relaciones de por instrumentalizar el conocimiento y con- dominación? Lo que implica que el problema o vertirlo en poder de dominación (Fernández, tema de investigación surja de las necesidades 2009:2). del contexto y de los sujetos con los que se inves- tiga. Por ende, los métodos deben posibilitar En este sentido conduce a re-pensar la forma una investigación compartida, colectiva, partici- de hacer investigación en el campo de las ciencias pativa, relacional, recíproca, transformadora y liberadora, que permita a los pueblos coloni- 20 Según Fernández (2009), bajo este axioma, el THOA se zados tomar el control sobre la producción del lanzó a la tarea de reconstitución del ayllu y al mismo tiempo conocimiento. El cual puede ser mediatizado se inició las acciones de reconstitución del conocimiento y principalmente desde el paradigma indígena y el la epistemología indígena. Dicho de otro modo, en el aka sociocrítico, que comprenden a la investigación pacha, el presente, se halla la semilla o hatha del nayra pacha (“aquellos tiempos”), que vivirá en el futuro. como acción política de autodeterminación.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 123 ] Bibliografía

Arnold, D. (2013). “Metodologías en las ciencias ------(1975). Por la revolución africana. sociales en la Bolivia postcolonial: Reflexiones México DF: FCE. sobre el análisis de los datos en su contexto”. En Fernández, M. (2009). El Ayllu y la reconstitución Mario Yapu (Coord.) Pautas metodológicas para del pensamiento aymara. Tesis de Doctorado investigaciones cualitativas y cuantitativas en en Filosofía. Carolina del Norte: Escuela de ciencias sociales y humanas. La Paz: Universidad Posgrado de Universidad de Duke. de Postgrado para la Investigación Estratégica Feyerabend, P. (1986). Tratado contra el método. en Bolivia. Esquema de una teoría anarquista del conoci- Arévalo Robles, G. A. (2013). “Reportando desde un miento. Londres: Tecnos. frente decolonial: la emergencia del paradigma Foucault, M. (2006). Defender la sociedad. Buenos indígena de investigación”. En Arévalo, G. y Zaba- Aires: Fondo de Cultura Económica. leta, I. (Coord.), Luchas, experiencias y resistencia Freire, P. (1970). La pedagogía del oprimido. Monte- en la diversidad y la multiplicidad. Cuadernos de video: Tierra Nueva. Trabajo N° 2. Bogotá: Mundu Berriak. González Casanova, P. (1965). La democracia en Bautista, J. José (2013). Hacia una crítica-ética de la México. México: DF: Era. racionalidad moderna. La Paz: Rincón. ------(1971). Sociología de la explotación. Bautista, R. (2014). Reflexiones des-coloniales. La México DF: Siglo XXI. Paz: Rincón. Guba E. G. (1990). “The alternative paradigm Bourdieu, P. (1997) Capital cultural, escuela y espa- dialog”. En Guba, E. G. (Ed.) The paradigm cio social. México DF: Siglo XXI. dialog. Newbury Park: Sage. Cajete, G. (2000). Native Science: Natural Laws Kemmis, S. (1993). El currículum: más allá de la of Interdependence. Santa Fe, NM: Clear Light teoría de la reproducción. Madrid: Morata. Publishers. Kuhn, T. (2004). La estructura de las revoluciones Capocasale, A. (2015). “¿Cuáles son las bases epis- científicas. México: FCE. temológicas de la investigación educativa?”. En Laymi, T. (2002). “Reflexiones acerca del ser andi- Abero, L. et al., Investigación educativa. Abriendo no (ensayo)”. Kollasuyo, 1, 31-36. puertas al conocimiento. Montevideo: CLACSO. Morin, E. (2004). “La epistemología de la comple- Carr, W. y Kemmeis, S. (1988). Teoría crítica de la jidad”. Gazeta de Antropología, 20, 1-20. enseñanza. La investigación-acción en la formación Palechor, L. (2010). “Epistemología e investigación del profesorado. Barcelona: Martínez Roca. indígena desde lo propio”. Revista guatemalteca Chilisa, B. (2012). Indigenous Research Metodologies. de educación, 3, 195-227. Los Ángeles: SAGE. Patzi, F. (2004). Sistema comunal. Una propuesta Criales, L. y Condoreno, C. (2016). “Breve reseña alternativa al sistema liberal. La Paz: Comunidad del Taller de Historia Oral Andina (THOA)”. de Estudios Avanzados. Fuentes, 43, 57-66. Popper, K. (1990). La lógica de la investigación cien. De Sousa Santos, B. (2003). Crítica de la razón in- tífica. Madrid: Tecnos dolente: Contra el desperdicio de la experiencia. Prada, R. (2014). “Epistemología pluralista”. En Vol. I.Bilbao: Desclée de Brouwer. Zambrana, A. (Ed.) Pluralismo epistemológico. ------(2005). El milenio huérfano. Ensayos para Reflexiones sobre la educación superior en el una nueva cultura política. Madrid: Trotta. Estado Plurinacional de Bolivia. Cochabamba: ------(2007). La Universidad en el siglo XXI. FUNPROEIB Andes, Facultad de Humanidades Para una reforma democrática y emancipatoria y Ciencias de la Educación-UMSS. de la universidad. La Paz. CIDES-UMSA, Plural, Reinaga, F. (1964).El indio y el cholaje boliviano. Asdi. Proceso a Fernando Diez de Medina. La Paz: ------(2008). Conocer desde el Sur. Para una PIAKK. cultura política emancipatoria. La Paz: Plural, Rivera, S. (2006). “El potencial epistemológico y CLACSO; CIDES-UMSA. teórico de la historia oral: de la lógica instru- Durkheim, É. (1982 [1895]). Las reglas del método mental a la descolonización de la historia”. socioló-gico. Barcelona: Morata. Voces recobradas, 21, 13-22. Dussel, E. (2009). La pedagógica latinoamericana. (2010). Ch’ixinakaxutxiwa: una reflexión sobre prác- La Paz: Instituto de Estudios Bolivianos-UMSA, ticas y discursos descolonizadores. Buenos Aires: ASDI. Tinta Limón. Fanon, Frantz (1983) Los condenados de la tierra. Rodríguez, J. (2005). La investigación acción edu- México DF: Fondo de Cultura Económica. cativa: ¿Qué es? ¿Cómo se hace? Lima: DOXA.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización [ 124 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Ticona, E. (2005). Memoria, política y antropología en Weise, C.(2007). Visiones de país, visiones de los Andes bolivianos. Historia oral y saberes locales. universidad. Políticas universitarias: ¿cambio La Paz: Plural, Universidad de la Cordillera, real o aparente? Umbrales, 15, 119-150. AGRUCO-UMSS. Wilson, S. (2008). Research is Ceremony: Indigenous Tuhiwai, L. (2016). A descolonizar las metodologías. Research Methods. Halifax: Fernwood. Investigación y pueblos indígenas. Trad. Tathryn Zamudio, J. (2012). Epistemología y educación. Lehman. Santiago: Lom. Tlalnepantla: Red Tercer Milenio. Weber, M. (1956). Sobre la teoría de las ciencias so- ciales. México DF: FCE.

Weimar G. Iño Daza | Epistemología pluralista, investigación y descolonización RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 111-125 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 125 ]

Contribuciones desde una epistemología plebeya al Trabajo Social frente a la restauración neoliberal1

María E. Hermida (Argentina) Universidad Nacional de Mar del Plata [email protected]

Fecha de recepción: 05-10- 2016 Fecha de aceptación: 20-02- 2017

Resumen Abstract l trabajo tiene por objetivo analizar algunos his work aims at analyzing some of the Esupuestos y efectos de la epistemología moder- Tassumptions and effects of the modern na colonial, para contrastarla con la epistemología colonial epistemology in contrast with plebeian plebeya, poniendo el énfasis en las contribuciones epistemology, emphasizing the contributions que esta última puede hacer al Trabajo Social. A that the latter can make to Social Work. Through través de la explicitación de diez tesis, se propone the development of ten theses, we propose to caracterizar la epistemología plebeya como characterize the plebeian epistemology as a una praxis pluriversal, productura de discursos pluriversal praxis; such praxis produces discourses que aportan a analizar el giro a la derecha that shed light into the right wing turn in the en la región y promover transformaciones. region and foster transformations. Relying on Relevando contribuciones del pensar situado the contributions of the nuestroamericano (our- nuestroamericano, la epistemología del sur, el American) situated thinking, the Epistemology posestructuralismo, el poscolonialismo, el giro lin- of the South, post-structuralism, postcolonialism, güístico y el giro descolonial, se busca reconocer and the linguistic and decolonial turns, we intend las inscripciones que en las biografias subjetivas to recognize the marks that modern coloniality has y en las genealogías disciplinarias imprimió la made in biographies and disciplinary genealogies modernidad colonial a través de la epistemología by means of an hegemonic epistemology. hegemónica. Particularmente, se tiende a recono- Particularly, we intend to single out the elements of cer elementos de una epistemología plebeya que a plebeian epistemology that can be actively used pueda ponerse en acto en la investigación y la in social research and intervention, questioning intervención en lo social, interpelando hábitos y the habits and practices of Social Work, and prácticas del Trabajo Social, y proponiendo ma- proposing other ways to think and practice in this neras otras de pensar y hacer esta disciplina. discipline.

Palabras clave: Epistemología plebeya, Keywords: Plebeian epystemology, Situated Pensar situado, Trabajo Social. thinking, Social Work.

1 Una versión preliminar de este trabajo fue presentada en el Panel de las Jornadas Académicas 2016: El porvenir del Trabajo Social frente a la restauración neoliberal, organizado por la Carrera de Trabajo Social de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la UNR y la FAUATS. Rosario, 11 de agosto de 2016.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 127 ] Presentación

a epistemología de las ciencias sociales se ha en el marco de la intervención en lo social, inter- Lcaracterizado por un amplio y casi incuestio- pelando hábitos y prácticas del Trabajo Social, y nado perfil eurocéntrico. Este trabajo tiene por proponiendo maneras otras de pensar y hacer objetivo revisitar algunos supuestos y efectos de esta disciplina de las ciencias sociales que de esta disciplina filosófica, para repensarla investiga e interviene en el marco de la cuestión como una práctica social que puede aportar a social. comprender, cuestionar e interpelar la actual Presentaré diez tesis, escritas en un estilo un coyuntura nacional y regional. Para esta tarea, tanto heterodoxo y muy apasionado, que intenta recupero una serie de máquinas para pensar recuperar una estética de oralidad, confrontando gestadas en Nuestra América (Martí, 2005), con los usos y costumbres del cientificismo que confrontan con los supuestos de la episte- europeizante que privilegia forma a contenido. mología moderna colonial, apostando a una epistemología que se nutra de la potencia plebeya (García Linera, 2009), sustentada en un tura hispanoparlante. Una alusión he encontrado en la pensar situado (Kush, 1976). Particularmente, prosa anglosajona (Laudan, 1981) En ese texto la plebeian buscaré reconocer supuestos y elementos de una epystemology alude a la propuesta de Hume, de una práctica 2 científica inductivista que se aleja del racionalismo de la epistemología plebeya que pueda ponerse en acto filosofía griega. De esa manera nuestro concepto toma una significación totalmente diferente, buscando contrastar la 2 He relevado el estado del arte relativo al concepto de inducción teórica del aristotelismo, con la inducción sensua- epistemología plebeya. Si bien existe una variedad de pro- lista del pragmatismo inglés de Hume, rescatando la primera ducciones que confrontan con la epistemología tradicio- en detrimento de la segunda. En todo caso, la significación nal, sobre todo provenientes del grupo Modernidad/ Colo- que esta narrativa da al concepto de plebeyo, es la del uso nialidad/ Decolonialidad, este sintagma no ha sido ubicado común y hegemónico, como expresión de aquello que carece de manera literal, en ningun artículo indexado de la litera- de fundamentos teóricos, y por tanto de valor o validez.

1- Una epistemología plebeya es una epistemología situada que implica re-conocer las inscripciones biográficas de la cuestión social.

ste trabajo parte de ubicarse desde la perspec- en términos epistemológicos, no opera sólo ni Etiva del pensar situado (Kush,1976). Esto implica linealmente en los objetos que estudiamos, sino situarme como productora de unos discursos, que prioritariamente en nuestra propia subjetividad a la vez son construidos social e históricamente y la de lxs otrxs con los que trabajamos. Diversos y por lo tanto también me producen a mí. Somos procesos de enajenación y alienación nos arrojan nuestros discursos, y en nuestros discursos habi- a un pensar heterónomo. Para interpelar estas tamos, y los límites y movimientos de nuestros tendencias de la epistemología eurocéntrica im- cuerpos han sido bordados con palabras. perante, de borramiento del sujeto y sus condi- Pero el pensar situado no implica una onto- ciones geoculturales, propongo el ejercicio de logía: por el contrario, relega la primacía occi- re-conocer las inscripciones biográficas que las dental del ser para inscribirse en el estar, un condiciones materiales e históricas nos impri- “estar siendo”, haciendo, pensando, sintiendo. mieron, y que producen efectos en nuestro trabajo Problematizar dónde estamos, y desde dónde académico, militante, social. Porque ¿en qué fala- escribimos, es entonces el primer paso para ins- cia argumentativa, en qué prejuicio colectivo no cribirse en una genealogía nuestroamericana explicitado, se basa el supuesto por el cual la ma- que tienda a interpelar las estructuras y coyun- nera en que “estamos siendo”, y las profundas turas que nos oprimen. Subjetividad e historia, marcas que la cuestión social genera en el pasado estructura y agencia, tiempo y espacio se im- y presente de quienes trabajamos escribiendo, brican para que hagamos el acto político de reco- no afecta a nuestras producciones, o no importa, nocernos como sujetos situados, y así ensayar o pero aún, opera como una desviación que es estéticas de de-sujeción. preferible ocluir, ocultar, desarmar? ¿Y a qué Esta geocultura en la que emergemos como intereses sirve que presupongamos que recuperar sujetos no es contextual sino constitutiva, y nuestros trayectos biográficos es una tarea inútil,

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 128 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar no pertinente, o indeseable? ¿Por qué creemos Escribo situada como mujer mamá, atravesada que eliminarnos de la ecuación va a redundar en por los avatares que las mujeres madres deben un trabajo de mayor calidad académica? Quizás sortear en su cotidianeidad para entrelazar el algo de esto se explique con los mecanismos trabajo asalariado, el doméstico y el militante. que ya Fanon (1973) denunciara, de asunción Escribo como parte de una generación muy de máscaras blancas que oculten nuestras pieles particular. La que nació en los oscuros años de la negras, mestizas, nuestroamericanas. dictadura cívico-militar que se arrebató 30.000 Así que situándome en mi propia historia, compañerxs y cientos de bebés que hoy tienen escribo en mi carácter de trabajadora social, que exactamente mi edad, que no pudieron ser cria- va a hablar de epistemología. Lo que me convierte dos y amamantados por sus mamás, que no sa- en una verdadera impertinente, que descree un ben quiénes son. ¿Cómo no sufrir entonces en poco de la división del trabajo intelectual de la carne propia el retroceso en materia de derechos Modernidad. Lo que sí puedo decir es que no soy humanos que estamos viviendo? Ese plan siste- la única rebelde, y que otrxs colegas abrieron este mático de robo de bebés generó profundas conse- camino antes que yo, con esfuerzo y solvencia. cuencias en mi generación, que veinte años des- Así, soy una trabajadora social, que como todxs pués de nacida, en la eclosión neoliberal, vio aprendió y aprende de y con otrxs, y que tran- cómo le robaban el derecho a crecer en su país, sitó el proceso de formación en el grado y en generando un verdadero exilio económico. Los el posgrado, en universidades públicas, donde que quedamos acá, lo hicimos en muchos casos me hice de muchas de las herramientas que en desempeñándonos en trabajos precarizados, este escrito pongo en juego. Estos trayectos for- estudiando de una manera muy particular, en mativos, particularmente el posgradual, que medio de la militancia estudiantil, la resistencia generalmente es significado como resultante al ajuste, a la Ley de Educación Superior, al aran- de capacidades individuales, fue posible gracias celamiento, en medio de marchas y tomas a la al acceso a una Beca doctoral del CONICET, Universidad. Esas experiencias nos marcaron y posibilidad que hoy se ve sustancialmente mer- hoy hacen que en este contexto político se des- mada, en tanto estamos presenciando una re- pierte nuestra memoria emotiva y militante, y ducción considerable de plazas para becarixs e tengamos que esforzarnos por no nombrar como investigadorxs. Este dato busca explicitar una “lo mismo” a un proceso que si bien necesaria- postura: el conocimiento que se produce no se mente se explica por estos hitos del pasado, tam- produce de mentes iluminadas, sino del cruce de poco se explica sólo por ellos. subjetividades que se sienten interpeladas, con Así, en estas páginas, yo somos muchos5. Los políticas activas que permiten y promueven que aciertos serán colectivos, y los errores propios. el trabajo de la reflexión y la escritura se realice. Estas palabras son hilos de un tapiz que comenzó Escribo como docente e investigadora de la a tejerse hace al menos quinientos años. Espero UNMDP, donde vengo trabajando con un grupo que esta comunicación se inscriba en este proce- de colegas docentes e investigadorxs trabajadorxs so, que es el de co-construir un discurso rebelde e sociales, filósofxs, historiadorxs3, grupo con el insurgente para este período de reflujo de lo peor que venimos tejiendo unos discursos de crítica de nuestra historia. al capitalismo moderno colonial, lo que redunda Situarse entonces, no es presentarse, es expli- en que incluso las producciones individuales citar un supuesto epistemológico: el que afirma sean de alguna manera colectivas, haciendo que que los discursos son productos histórico-político- la función autor (Foucault, 1969) que erigiera el social-subjetivos. Anudar texto a contexto es un liberalismo moderno, instaurando esta figura criterio de validez, que nos permite una vigilancia individual, siempre idéntica a sí misma y desco- epistemológica: la de observar hasta qué punto nectada de otrxs, como productura de discursos somos habitados por una palabra ajena que propios, no se ajuste necesariamente a nuestras nos coloniza y nos impide aprehender la vida, o producciones4. por el contrario, hasta qué punto habilitamos Escribo situada como mujer militante del cam-po la creación de palabras propias que se nutran popular, interpelada fuertemente por una se-rie de de nuestra situacionalidad, que, desde una hechos y procesos políticos que se están sucediendo perspectiva benjaminiana6 honren a nuestrxs en nuestro país y nuestramérica, entre los que muertxs, expandan nuestro presente (Santos, puedo destacar la persecución judi-cial a Milagro 2006) y produzcan vida para nuestrxs hijxs. Tal Sala, mujer, india, morena, pobre, militante. 5 El nombre mismo de esta comunicación fue un hermoso 3 Integrantes del Grupo de Investigación Problemáticas regalo que me hiciera nuestro colega José Alberdi al convo- Socioculturales de la UNMDP, bajo la dirección de la Lic. Paula carme al Panel en la carrera de Trabajo Social en la UNR Meschini, colega, compañera y amiga entrañable. Puede al que referí en nota al pie N° 1, donde nació mi interés en visitarse nuestro sitio web en: http://www.piaicecchetto. escribir estas líneas. Al él mi especial agradecimiento. com.ar/GRUPO.html 6 Existe una cita secreta entre las generaciones que fueron y la 4 Otro de los colectivos en los que se gestaron muchas de las nuestra. Y como a cada generación que vivió antes que nosotros, ideas que aquí inscribo, es el de la comisión directiva de la nos ha sido dada una flaca fuerza mesiánica sobre la que el FAUATS (Federación de Unidades Académicas de Trabajo pasado exige derechos. No se debe despachar esta exigencia a la Social de la Argentina). ligera.” (Benjamin, 1973, tesis II: s/d)

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 129 ] como le susurraron los dioses del yatiri a Rodolfo mucho menos que un enciclopedista. Pero mira, nos Kush hace algunas décadas, escucho hoy los ecos hemos caído contigo, ayudémonos y subamos juntos.” de quienes nos precedieran: Eres realmente poco, (Kush, 1976:24)

2- Hay una realidad política que merece ser pensada y una manera de pensar que merece ser problematizada

sta comunicación pretende contribuir a las Estos enfoques nos empujaron en algún punto Einterpelaciones que la actual coyuntura na- a renunciar a nuestro deber de analizar los con- cional y regional, de giro a la derecha, genera en dicionamientos estructurales y la dinámica diversos sujetos sociales, colectivos y políticos, política, económica y social. Analizar otros dispo- entre los que se cuenta el colectivo de trabajadorxs sitivos desde los cuales pensar, nos permitirá sociales. Esta coyuntura, que es percibida en gran descubrir y desafiar8 la realidad política actual. medida como una restauración neoliberal, generó Si catalogamos esta realidad como ya vivida y ya en pocos meses una serie de transformaciones pensada, corremos el riesgo de apelar a las mismas que impactaron directamente en el ejercicio respuestas construidas en ese neoliberalismo de profesional, en términos ocupacionales, salaria- fin de siglo XX, que no necesariamente vayan les, así como en las orientaciones éticas, políti- a ayudarnos a transitar los desafíos de nuestro cas y procedimentales de las instituciones y las presente. políticas públicas en las que ejercemos, sin des- Ahora bien, antes de pensar una realidad, conocer el impacto directo que a pocos meses de es importante problematizar cómo, con qué y iniciada esta gestión se pudo observar en la ca- desde dónde pensamos. Un abanico de preguntas, lidad de vida de los sectores subalternos con los problemas y temas emergen en este contexto que trabajamos, y en las posibilidades de acceso y reclaman nuestra atención. La contribución a un conjunto de derechos elementales. que pretendo realizar, no es la de describir o Estos cambios, referenciados a partir de la caracterizar esta coyuntura, sino antes bien, asunción del gobierno de la Alianza Cambiemos problematizar las herramientas teóricas y meto- en diciembre de 2015, leídos en tanto procesos his- dológicas de las que nos valemos para realizar el tóricos, nos reclaman la necesidad de situarlos trabajo de analizar este presente y otros posibles, para comprender en términos dialécticos7, qué y de intervenir en los mismos. Es en ese sentido se está perdiendo, qué es lo nuevo que adviene, que nos ubicamos en el campo de la epistemología, y que es lo que se mantiene respecto de períodos pero desde una manera muy particular de en- anteriores. tenderla. Comenzaremos entonces, como hizo En los noventa gran parte de nuestro colec- Marx, sospechando de muchas de las teorías que tivo profesional optó por teorías como el geren- explican la realidad, y de los supuestos meto- ciamiento social, apostando a administrar dológicos que las estructuran. eficazmente lo escaso, o fundamentaron sus prácticas amparados en la teoría de la resiliencia, 8 concepto éste que de alguna manera festejaba La Dra. Ana Arias, en una conferencia brindada en la UNMDP en abril de 2016, retomaba el concepto de desafío en la “dimensión constructiva” que los estragos sus alcances etimológicos. El sufijodes alude a sustracción, del capital generaba en los sectores populares. mientras que fiar viene de fiat, acto de fe o confianza ciega. Desafiar es dudar, es lograr que la crítica advenga allí 7 Tomando a Benjamin (1973), significamos el término hegeliano donde el sentido común ofrece explicaciones cerradas e aufheben en su sentido triple: conservar, elevar, anular. incuestionables.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 130 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar 3- El desafío de pensar cómo pensamos se aborda de forma más potente no desde la epistemología tradicional, sino desde una epistemología plebeya

se ejercicio de pensar cómo pensamos dentro encontrarán aquellxs autorxs9 que más allá de Ede la academia, que es el que realiza la epis- sus pertenencias geográficas, escribieron desde temología, lo vamos a hacer no desde las pro- y para la(s) periferia(s), los intersticios y las puestas de la epistemología tradicional, sino des- derivas. Entiendo esta estrategia de traducción de una epistemología plebeya. Para esto vamos como válida, en pos de aportar a los procesos de a recorrer una serie de contribuciones: algunos justicia social y cognitiva global (Santos, 2006). elementos de los denominados por Ricoeur (1999) y Foucault (1995) como maestros de la sospecha (Marx, Nietzsche, Freud), algunos aportes del giro 9 En este trabajo que se ofrece como un primer gesto para interpelar a la epistemología moderna desde una perspec- lingüístico (tomando sobre todo la idea de discurso tiva plebeya y nuestroamericana, quedan varias deudas del posestructuralismo) y de la denominada por pendientes, a retomar en futuras contribuciones. Una de Santos (2009) Epistemología del Sur, así como los ellas refiere a la necesidad de ampliar el corpus de autorxs cruces que con ella se pueden hacer desde el pen- trabajados, a los aportes del feminismo poscolonial así como samiento de Fanon (1994), el giro descolonial, la de otras autoras que abordan una crítica a los supuestos androcéntricos, falocéntricos y machistas que subyacen a filosofía de la liberación de Dussel (2014), el pensar la epistemología moderna. Si bien se han tomado aportes nuestroamericano (Martí, 2005; Kusch, 1976) y las de una decena de mujeres, y se ha aludido a categorías de contribuciones de García Linera (2010). esta tradición, como la de interseccionalidad, la bibliografía La estética de este texto es nuestroamericana. aquí citada es en su mayoría escrita por hombres. El tra- Y los usos que haremos de discursos europeos se bajo de des-colonizar(se) implica apuntar también las pro- pias deudas pendientes y asumir el reto de avanzar en la entienden en el marco de un trabajo epistemoló- apertura a la circulación de los discursos minorizados, gico de pensar en y para el Sur global. Veremos entre los cuales destacan por su ausencia los dicursos de las así ecos de voces múltiples, entre las que se mujeres (incluso en nuestros propios trabajos).

4- La epistemología no es una disciplina neutral, es un aparato político, un trabajo que genera productos, cuyos efectos se registran también en lo social

como diría Alicia González Saibene, es el acto justificación del conocimiento11 (donde el foco es- Opolítico del ejercicio de la crítica10. Pero no hay tuvo puesto en el método) que fueron y son los una sola epistemología o una única manera de protagonistas. Otros, vinculados al contexto de entenderla. Por eso, primero vamos a analizar los descubrimiento, a los condicionantes subjetivos alcances de su concepción tradicional. y sociales que impactan en la ciencia, han sido La epistemología es una disciplina filosófica que significados como historia externa (Lakatos) y su estudia la pretensión de validez del conocimiento interés en estos temas fue sustancialmente menor. científico. No es una historia de la ciencia. No es Esta epistemología que toma elementos de la fi- metodología. Busca diferenciar el conocimiento losofía griega, básicamente de la lógica, comienza científico de otros tipos de saber, e indagar en las a sistematizarse en la Modernidad. Así Capital, razones por las cuales deberíamos dar por cierto Burguesía, Ciencia (método experimental), Con- y válido un determinado conocimiento. Esto es quista, Colonización y Estado, emergen de forma importante, ya que las acciones están orientadas simultánea. La epistemología desconoce este sur- por ideas a la cuales se les atribuyó valor de gimiento concomitante, toma uno solo de estos verdad. Y pocas veces nos detenemos a analizar elementos, la ciencia, desde una perspectiva ra- qué procesos mediaron para otorgarle validez a cionalista heredera del cartesianismo, y se erige una afirmación. con peso como disciplina autónoma a inicios Hay dos conjuntos de preocupaciones a los del siglo XX con el Círculo de Viena. Historia y que la epistemología atendió: los vinculados a la 11 La distinción entre contexto de descubrimiento y justifica- 10 Definición de epistemología de la autora, ofrecida en el ción fue presentada por el Círculo de Viena a inicios de siglo Seminario Epistemología de las Ciencias Sociales, dictado en XX. Las epistemologías críticas y descoloniales la critican Mar del Plata en el año 2011, en el marco del Doctorado en fuertemente. Sin embargo el metodocentrismo sigue siendo Trabajo Social de la UNR. el discurso hegemónico de la academia.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 131 ] sujeto son los dos ausentes de este planteo de la La epistemología moderna está signada por epistemología positivista que bregaba por una una serie de reduccionismos que son propios ciencia con objeto pero sin sujeto cognoscente. Ya de la racionalidad moderna: eurocentrismo, an- González Saibene (2007) ha analizado los alcan- drocentrismo, racismo, adultocentrismo, hetero- ces de este mito del objeto en el caso particular sexualismo, entre otros. del Trabajo Social. Podemos advertir entonces Pero desde esta visión, la epistemología no que hay un verdadero borramiento del sujeto. se reduce a un conjunto de conceptos y reglas La noción de perspectivismo nietzscheana brilla estáticos, sino que es un tipo de trabajo, y por por su ausencia: como no hay sujeto no hay tanto un acto que se tensa entre la alienación y punto de vista. Así la epistemología moderna se la creatividad, de acuerdo a los condicionantes piensa a sí misma universal, omnicomprensiva, históricos en los que se desenvuelve, tal como perenne y descontextualizada. Desde el registro Marx (2008) supo analizar; trabajo que en la pro- descolonial esta tensión ha sido estudiada a puesta de Dussel (2014), se enuncia como un acto partir de la denominada “hybris” del punto cero de relación del hombre12 con la naturaleza (poiesis) y (Castro Gómez, 2007) que genera este efecto con los otros hombres (praxis). de universalizar un particular (el pensamiento eurocéntrico moderno colonial), tomando una parte como el todo, reservando para sí el caracter de pensamiento racional, haciendo que otras for- 12 El término hombre es el utilizado por Dussel en su texto. mas de ser, de hacer, de estar, se resistan a ser Corresponde aquí, por las implicancias que esta categoría tuviera desde las narrativas modernas coloniales, hablar en significadas desde ese particular universalizado. términos de sujeto.

5- La epistemología tradicional produce ausencias y minoriza realidades13

as teorías modernas coloniales son el resul- contienen otra idea: la de ser una figura Ltado de la relación de determinados sujetos “menor” o “mayor” en un contexto deter- con determinada realidad que no fue la nuestra. minado.” (Chakrabarty, 1999:92) Aquí me interesa introducir el término producción de ausencias (Santos, 2006), en tanto nuestras Así, los europeos son mayoría siendo minoría en realidades han sido producidas como ausentes términos estadísticos. Y los pueblos no europeos por la academia eurocéntrica. Si, recuperando a ni norteamericanos son significados desde el Dussel, la poiesis es el acto creativo que deviene centro como minoría en términos kantianos, de la relación del sujeto con la naturaleza, y la pueblos que yacen en un estado de “minoría de epistemología tradicional es, desde mi punto de edad” a la espera de que el espíritu hegeliano y la vista, en tanto poiesis, acto de relación de sujetos cultura del capitalismo colonial los haga pasar al académicos con las realidades del centro (o de estatuto de adultez civilizatoria. Las guerras que la periferia vista desde el centro), entonces hay libra EEUU con el apoyo de la OTAN legitimando un mundo muy vasto de realidad que no ha sido su intervención con la pretensión de que sus actos siquiera visto. Esta ausencia es positiva, es decir, se implementan para “liberar” a los pueblos que producida. No es un olvido casual. La Moder- “no saben autoconducirse”, y para “proteger la nidad produce ausencias invisibilizando las ex- democracia contra del terrorismo”, son también periencias del Sur global. prueba de este hecho. Estos problemas habían sido ya vistos por los Esta cuestión de las mayorías minorizadas no poscoloniales subalternistas a partir de la proble- solo se observa en política internacional. Trabajo matización de las historias de las minorías: Social, por ejemplo, suele tener la mayoría de los estudiantes en las unidades académicas donde Minoría y mayoría no son, después de todo, se cursa, mientras conserva una minoría de re- entidades naturales, son construcciones. presentación en los gabinetes de gestión. Las Los significados comunes de las palabras mujeres solemos ser mayoría en las bases de las “mayoría” y “minoría” son estadísticos. organizaciones populares, y minoría en sus con- Pero los campos semánticos de las palabras ducciones, etc. Podemos hablar entonces más que de mayorías o minorías numéricas, de posiciones 13 Algunas de las reflexiones consignadas en este punto 6, particularmente las relativas al planteo de Chakrabarty, menores o mayores. y en el punto 9, en alusión a los aportes de Guha, fueron Pensando la epistemología como el resultado desarrolladas con mayor profundidad en Hermida (2015). de una relación de un sujeto (condicionado his-

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 132 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar tóricamente) que trabaja de pensar y escribir lo situaciones prioritarias ha analizar por lxs traba- que piensa, con una realidad determinada, nos jadorxs sociales? Entiendo que parte de esto se debemos preguntar: ¿qué realidades no fueron explica porque nuestras ideas de ciencia, disci- pensadas simplemente porque han sido minoriza- plina y profesión (elementos que son pensados das o producidas como ausentes? El problema por la epistemología y que son a la vez consti- no se acota sólo a la mirada de la academia del tutivamente políticos) presuponen que lxs tra- centro, sino que se replica al interior de nuestras bajadorxs sociales tenemos pertinencia para organizaciones y también de nuestras disciplinas. intervenir en el campo de los derechos, pero no ¿Cuántos hechos políticos, sociales y culturales para analizar, escribir y denunciar públicamente de los últimos tiempos no fueron tomados como cuando se toman decisiones políticas que implican violaciones flagrantes a los mismos.

6- La Epistemología produce discursos. Los discursos no son representaciones de la realidad, son realidades que producen efectos.

l resultado de esa poiesis, (denominado que hago una crítica a la idea de que las palabras Epoiémata) que se sistematiza como teoría, tesis, solo representen lo que existe, o describan lo que o conocimiento, y que en el anállisis que hace los sentidos perciben. Dije que el discurso no Marx del conocimiento científico de su tiempo es epifenoménico sino que tiene un estatuto de es superestructura o ideología burguesa, es desde materialidad, como verdadero configurador de mi perspectiva, antes que nada, un discurso. La la realidad social. Como diría Austin (1982) las dimensión discursiva no es aquí epifenoménica, palabras hacen cosas. Unas pocas palabras escritas sino constitutiva. El resultado del trabajo inte- en un papel (que llamamos título) por quien tiene lectual, que se condensa en teorías, no es para la potestad de escribirlas, hacen que un estudiante nosotros representacional. Ninguna teoría repre- de Trabajo Social se convierta en un graduado. senta una realidad. Sino que construye una rea- Incluir el género en la semántica también tiene lidad-otra. Como dice Foucault (2005), la idea de un efecto performativo. No es lo mismo decir no- que la relación de las palabras con las cosas es del sotros, que nosotros y nosotras. Vemos en estos orden de la representación, es un invento de la ejemplos cómo el discurso construye realidades. Modernidad. Si se quiere, en términos kantianos, Cabe la pregunta sobre la potencialidad de la realidad es noúmeno, es decir materialidad in- estas reflexiones relativas al discurso, inspiradas abordable sino es “por medio de” un discurso que en la lectura de autores de las academias euro- la coagule, la ordene, la signifique. De esta forma, peas y norteamericanas, en el marco de una co- al decir de Nietzsche, que replica Ricoeur (1999), no municación que se describe a sí misma como accedemos a la realidad direc-tamente, sino a la(s) crítica al eurocentrismo. Esta cuestión va al foco interpretación(es) que hacemos de la misma. Y mismo de uno de los grandes reproches que se cómo olvidar al otro gran maestro de la sospecha, le realizan al giro descolonial: me refiero a la su- Sigmund Freud, que ató la cura a la palabra, puesta desestimación in totto que este enfoque siendo el discurso el acto por antonomasia. hiciera del corpus científico europeo (más o menos Pero tampoco hace falta viajar tanto en tiempo reivindicada por los diferentes exponentes de y espacio. Podemos acercarnos más a nuestra este colectivo intelectual). Al respecto me permi- casa, y ver cómo, en las culturas ancestrales de to esbozar sintéticamente tres cuestiones. En nuestramérica, las palabras tuvieron y tienen principio, un pensar situado no es un pensar el poder de curar, de concebir, de expulsar, de chauvinista. No implica un elogio per se de lo crear. Vemos que so-mos muchxs, los que desde propio, ni una demonización de lo extranjero. diferentes miradas, llegamos a esta conclusión: las Implica asumir la idea de que las condiciones de palabras no repre-sentan la realidad, la producen, producción son constitutivas de lo producido. o al menos, la hacen aprehensible. Sin discurso, Y las condiciones son geográficas, pero no sólo el hiato entre sujeto y objeto y entre sujeto y geográficas, sino también históricas, de género, sujeto, se hace insalvable. Esto no quiere decir disciplinares, políticas, sociales, económicas, de que bregue por una concepción estructuralista de clase, etarias, etc. En segundo término, las ideas discurso que nos determina, ni por una ausencia de Sur global y de traducción que nos ofrece de de cualquier tipo de determinación material. Sino Souza Santos me parecen por demás interesantes

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 133 ] para abordar este debate. La primera porque pectiva, el pensamiento nuestroamericano, no pone de relieve la necesidad de situarse del lado es ontológico, no remite a un desvelamiento de de las periferias, que en términos geopolíticos nuestro ser más profundo y ancestral, como si hu- se visualizan como naciones del tercer mundo, biera una identidad predefinida a recuperar. La pero que también se expresan como enclaves de identidad no es un objeto, es un proceso político, pobreza, o como minorías raciales, religiosas, o una construcción que permite que el momento sexuales en el centro mismo del Imperio. A su vez de la nominación pueda ser el momento de la el concepto de traducciones nos permite evaluar emancipación, del acontecimiento. Hacer episte- la posibilidad de operaciones del tipo usar a Marx mología plebeya es recuperar, validar y construir en contra de Marx, como supo decir Foucault. discursos insurgentes que litiguen con los discur- Esto, en este contexto, implicaría reconocer con sos que legitiman la colonialidad del poder de ayer claridad la determinación contextual del autor y de hoy. o autora en términos de criterios eurocéntricos Esta tesis vinculada al estatuto de lo discursivo de producción del saber, pero asumiendo que hu- interpela a lxs trabajadorxs sociales, que en gene- bo también otras determinaciones. Estas otras ral nos resistimos a formarnos en la analítica de variables que intervinieron, quizás menores, los discursos. Lo nuestro es la política pública, quizás no, permitieron que eventualmente esos decimos. Y es cierto. Pero la política pública es intelectuales se dejaran atravesar por discursos uno de los discursos políticos más potentes. No de resistencia a otras de las operaciones de la solo en los documentos oficiales que las regulan, Modernidad Colonial, como pueden ser las del sino en otros campos discursivos, como son los falocentrismo (en el caso de los feminismos de decires de lxs funcionarixs, de los medios masivos primera y segunda generación) o del racionalismo de comunicación, de lxs docentes que enseñan (en el caso del postestructuralismo), entre mu- política pública diciendo que es un mecanismo chas otras. Así, entiendo que el marxismo, el de reproducción del sistema, por ejemplo, pero giro lingüístico, el posestructuralismo, y hasta la también en los decires de los usuarios, etc. Casos semiología y el pragmatismo americano en algun paradigmáticos como la AUH, y los recientes punto, desde diferentes lugares, han habilitado dichos de funcionarios públicos15 que con sus la crítica a las nociones representacionales de intervenciones refrendan la opinión pública de lo discursivo, y que esa crítica se ha vuelto más que las chicas se embarazan para cobrar un plan interesante cuando ha sido asumida desde la muestran hasta qué punto el tema de la política posicionalidad del Sur global.14 pública no es sólo un problema de gestión eficaz, Por último, entiendo que una perspectiva sino también un tema de análisis discursivo y crítica siempre parte de entender que la realidad batalla cultural. Las políticas públicas son el es modificable, que cabe cierto grado de indeter- resultado de agendas sociales que se configuran minación. Esto implica posicionarse desde una en base a las necesidades que cuentan con legiti- crítica a los esencialismos. Los discursos esencia- midad suficiente como para que una sociedad listas producen como efecto una tendencia a la decida que es adecuado transferir parte de sus fosilización, condicionando fuertemente la po- recursos a solventar su satisfacción. Y, como sibilidad de ejercer una crítica. Desde mi pers- diría Gramsci (1980), si no se gana la batalla cultural, lo que implica entre otras cuestiones 14 He trabajado algo más este problema de “qué hacer” la legitimación de las demandas de los sectores con las teorías eurocéntricas cuando hablamos desde subalternos, estamos complicadxs. Creo que un nuestramérica, en otros escritos, en los que afirmaba que no se trata entonces de “limpiar” el acervo categorial, sino de Trabajo Social que renuncie a analizar la dimen- recuperar la noción de performatividad, el efecto de verdad sión discursiva, es un Trabajo Social que renuncia que estas categorías producen, dado que el decir/hacer que a comprender la realidad. implica el discurso es siempre un decir situado, y es esa posi- cionalidad la que debe ser repensada. Así podemos decir que para el poscolonialismo sus metodologías preferidas son la 15 Nos referimos a los dichos del Diputado Juan Dindart, “reconstelación” y la “catachresis”, esto es el uso estratégico de las de la Alianza Cambiemos, Presidente de la comisión de fa- cateogrías más autocríticas desarrolladas por el pensamiento milia de la Cámara de Diputados, quien en un rapto que occidental para recontextualizarlas y devolverlas en contra de en el mejor de los casos puede explicarse por una total sí mismo (Castro-Gómez, Mendieta, 1998: s/d) (…) [L]os propios desinformación sobre el tema, afirmó que las mujeres que autores del pensamiento poscolonial (…) explicitan sus deudas reciben la AUH buscan tener otro hijo para cobrar más intelectuales y advierten de forma abierta sobre la necesidad de dinero. El hecho fue documentado por todos los medios de recuperar herramientas conceptuales del pensamiento moderno comunicación masiva. Al respecto se puede leer la nota del para volverlas contra sí mismo, como es el caso del planteo de Diario La Nación de fecha 28 de junio de 2016: http://www. Castro-Gómez citado, o la propuesta de De Souza Santos (2006) lanacion.com.ar/1913504-para-un-diputado-de-cambiemos- de hacer uso de nuestras ciencias sociales modernas, pero retra- las-mujeres-que-reciben-la-asignacion-universal-buscan- bajando sus postulados. (Hermida, 2016: s/d) tener-otro-hijo-para-tener-mas-de-dinero

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 134 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar 7- La epistemología es una praxis condicionada por la elección de los sujetos con quienes decide trabajar

asta aquí, siguiendo la propuesta de Dussel epistemología plebeya como praxis, implica pro- H(2014) de pensar el trabajo en términos de blematizar la ausencia (así como los usos y lec- poiesis y praxis, hicimos algunas puntuaciones de turas de las escasas presencias) de autores que la epistemología como poiesis. Vamos a ver ahora nos podrían hacer mucho bien si les diéramos la qué implica pensar la epistemología como praxis. oportunidad de decir su palabra. La filosofía griega definía la praxis como la re- En clara vinculación con este corpus de auto- lación de unos sujetos con otros. Así vemos que res minorizados, está la ausencia de los sectores es muy importante analizar con qué sujetos nos subalternos en cuanto tales. Las lógicas de la aca- relaciona la epistemología moderna colonial. demia hacen prácticamente imposible que sea el En general, pensamos con y desde las ideas de sujeto popular el que escriba su propia historia. los sujetos que escribieron los libros con los que Algunxs investigadorxs realizan trabajo de campo nos formamos. Y quizás esos autores, están del en villas, cárceles, hospicios y demás espacios de otro lado (en términos geográficos pero también subalternidad. Pero suelen acercarse impulsados ideológicos) del Sur global. Y si solo referimos por problemas de investigación propios que no nuestro trabajo intelectual al corpus de autores necesariamente tengan vinculación con los inte- de academias europeas o norteamericanas, o peor reses de los sectores populares, a la vez que, en aún, si “somos hablados” por los discursos del muchos casos, se acercan munidos de teorías y norte global... ¿con quién no nos estaríamos sen- metodologías eurocéntricas que, tal como denun- tando a pensar? Cuando el plan de estudios de ciara Guha, distorsionan lo que ven. nuestras carreras de grado y posgrado “reparte las Podría replicarse que en Trabajo Social esto invitaciones” a formar parte del curriculum, ¿de no es así, que pasamos el día entre pobres... Que quién se está olvidando? Acá aparece la ausencia más allá de lo que leamos o no, nosotrxs tenemos no ya solo de temas o de objetos, sino de sujetos. un contacto “directo” con el/la subalternx. Pero No nos sentamos a pensar con el Otro, el damné creo que el problema es más complejo de lo que (Fanon, 1994), el subalterno. La ausencia es la de un parece. Por eso es tan importante la epistemo- sujeto histórico que, cuando aparece tematizado logía. Reparemos en que estas reflexiones episte- en el canon de enseñanza oficial, lo hace desde el mológicas que venimos desarrollando, nos permi- prisma del eurocentrismo. El encuentro que no se tieron desconfiar de la posibilidad misma de que está dando es doble. pueda existir algo como un contacto “directo”. Por un lado se percibe la ausencia o minori- El acceso a la realidad está siempre mediado por zación de todo un corpus de intelectuales que un discurso que lo dota de sentido. Así es como supieron problematizar la alteridad subalterni- llegamos al barrio, poblados de voces y sentidos zada desde un pensar situado. Si realizamos que hemos incorporado y que filtran, ordenan, y un rastreo bibliográfico: ¿cuánto leemos de significan la situación de los sujetos con los que Martí, de Mariátegui, de Bolívar, de Jauretche, intervenimos. Esta epistemología plebeya nos de Kusch, de Aricó, de Fals Borda, de Freire, de puede ayudar entonces a problematizar dónde Fanon, de Fernandez Retamar, de ese corpus ubicamos a ese otrx en nuestros procesos de maravilloso nacional y nuestroamericano que análisis y transformación de la realidad. nos supo recordar Argumedo (1993)? Pensar la

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 135 ] 8- El Trabajo Social es un locus de enunciación subalternizado

ara problematizar esta idea de con quiénes pen- Social16. Somos una profesión vista por el resto Psamos, y si pensamos sin, con, para o desde lxs de las ciencias sociales, y por muchxs de nuestrxs pobres y subalternxs, vamos a ubicar al Trabajo propixs colegas, como tecnología, o servicio, o Social como locus de enunciación (Mignolo, 1995). asistencia. Y seguimos haciendo algunas cosas Lo que se enuncia no sale del vacío, sino de una que favorecen directa o indirectamente que esta boca que lo enuncia, de un sujeto individual o representación se sostenga. En la UNMDP por colectivo que ocupa una posición determinada ejemplo, seguimos teniendo el plan de estudios en el sistema-mundo (Wallerstein, 2006). Quién de 1985. Las asignaturas mal llamadas específicas es el que dice algo, no es un dato contextual, es se denominan “Metodología de... Caso, Grupo, constitutivo del contenido de lo que se dice. La Comunidad”, a las que se suman los Talleres validez que tanto desvela a la epistemología, al de Práctica. Tenemos entonces metodologías, contrario de lo que se presupone, no se analiza la y prácticas. ¿Cuál es el elemento ausente? Hay más de las veces por el contenido de lo dicho, sino método, hay práctica pero lo que no hay como por el lugar del enunciante. ¿Estx qué va a saber si “específico” es teoría. La teoría, se presupone, la es alumno, si es pobre, si es mujer, si es peronista, si es “sacamos” de las otras disciplinas. “zurdo”, si es negro, si es indio, si es niño, si es asistente En tercer lugar, somos profesionales del Sur social? Los enunciados del Tra-bajo Social son global, del tercer mundo, de la periferia. Nues- ubicados como emergiendo de un lugar, un locus tros papers no valen lo mismo en el sistema particular: el de una disciplina subalternizada, al científico por el hecho de estar escritos en espa- menos por lo que entiendo son las cuatro grandes ñol. Nuestros doctorados valen menos que un marcaciones subalternizantes que nos imprimió PHD norteamericano, etc. El Trabajo Social el capitalismo moderno colonial. nuestroamericano tiene menos posgrados, me- Primero, todxs sabemos que la nuestra es nos producción académica, se citan menos una profesión feminizada, y esto, en un mundo nuestros trabajos, en definitiva, en los términos falocéntrico y patriarcal, tiene ciertos efectos. que proponen los criterios del cientificismo domi- Nuestro lugar, como lugar atribuido, es el que nante, tenemos menos “peso específico” que el históricamente se le ha asignado a la mujer: el Trabajo Social de otras latitudes. del servicio, la asistencia y el cuidado. Podemos Cuarto, y vinculado con todo lo anterior, somos decir (quizás tensando pero no distorsionando una profesión en muchos casos mal paga, con muy al autor) que Florear Forni (1993) llega a suponer malas condiciones de trabajo. Cuando el Estado de que las denominadas “pioneras” del Trabajo So- Bienestar entra en crisis, nuestra profesión junto cial de principios de siglo XX en EEUU, fueron de con lxs colegas de la educación y la salud, es de alguna manera las fundadoras de la sociología las primeras en notarlo, en términos de pérdida nor-teamericana, pero que por una cuestión de de puestos de trabajo y precarización laboral. género, fueron subordinadas al lugar de mano de Parte de nuestro colectivo profesional se centró obra para conseguir datos de los pobres, para que más que nada en este cuarto aspecto, sin analizar los hombres sociólogos construyan las grandes prioritariamente los otros procedimientos de teorías. subalternización (aquí nombré algunos, pero En segundo término, además de una profesión podemos encontrar sin dudas otros) que desde feminizada, el Trabajo Social es una profesión una visión de interseccionalidad (Hill Collins, tardíamente reconocida como pasible de ser 2000) no deberían quedar fuera de los planteos. enseñada en el nivel universitario. Muchas de Entiendo que analizar las condiciones labora- nuestras carreras de grado nacieron de las denomi- les de lxs trabajadorxs sociales es un gran nadas Escuelas de nivel terciario, que por la lucha aporte. Pero un aporte que puede convertirse del colectivo profesional pasaron a incorporarse en metonímico. Que toma la parte por el todo. a Facultades. Esta tardía in-corporación al ámbito No somos subalternizados sólo ni porque so- universitario, y por lo tanto a la vida y funciones mos mal pagos. Algún viso de endogenismo y de este nivel (como son la investigación, y el corporativismo se puede colar si analizamos posgrado por ejemplo) implicó que aun hoy se 16 persiga por reduccionismo teórico o desviación aca- Coincido con Aquin (2006) en que el Trabajo Social tiene tres campos de intervención: la formación de sus propios demicista a quienes fomentan la investigación cuadros (docencia), la construcción de conocimiento sobre como tercer campo de intervención del Trabajo lo social (investigación) y la intervención en lo social.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 136 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar sólo la cuestión laboral de nuestro colectivo sin que trabaja en proyectos de salud colectiva? analizar las otras subalternizaciones, A la vez Acá lo que juega nuevamente es la narrativa creo que no solemos reparar en el hecho de que moderna colonial, que niega que la salud es nuestra posición en el marco de la reproducción una construcción biopolítica, que niega que “el social tiene puntos de disidencia y diferencia en hacer vivir” analizado por Foucault merece ser términos simbólicos con otras prácticas sociales, repensado, que niega que al decir de Carrillo, las tal como ha analizado ya Bourdieu (2000). ¿A qué bacterias son “pobres causas” para analizar la me refiero? Somos trabajadorxs como cualquier salud pública. ¿Quién dijo que no es de alta com- otrx trabajadorx, y por tanto los mecanismos de plejidad en términos de Educación Inicial facilitar opresión del capital funcionan también sobre no- a un niñx el acceso al mundo social al que llegó, sotrxs. Esto es así. Pensarnos por fuera es errar y antes, que sea fácil aprender como adultos a el camino. Pero también hemos sido formados jugar nuevamente? ¿Quién puede creer que si la (en muchísimos casos en instituciones públicas, prosa de Heidegger es compleja, no lo es más el es decir con el aporte de las clases trabajadoras) pasaje abisal de la no palabra a la palabra que para hacer una diferencia. Vemos que parecería debe transitar un niño de 2 años? ¿Quién puede que somos una profesión para pobres y por tanto suponer que es sencillo compartir cuatro o cinco pobre. Pero tenemos un capital simbólico y un horas con veinte niñxs o más, de 3 o 4 años, y no poder delegado del Estado que si lo utilizáramos morir en el intento, sino vivir, cuidarlos, que no en todo su potencial podríamos aportar más se lastimen, que no aprendan lo peor de nuestra en esta hora de lucha y resistencia. Nuestro cultura (como por ejemplo los estereotipos de aporte no puede ser solo el de sumarnos como género) y que sí aprendan lo mejor, el arte, la un/a trabajador/a más. Tenemos que aportar literatura, el juego, la música, las letras, los nú- nuestro saber hacer y nuestro lugar en el Estado meros? Y en términos de salud ¿por qué es de para favorecer a los trabajadores ocupados y alta complejidad una cirugía (que no hace tanto desocupados con quienes intervenimos. Tenemos tiempo era tarea de carniceros, y no contaba las herramientas que nuestra condición de tra- con ningún tipo de reconocimiento social) y no bajadorxs nos habilita: el paro, la marcha y el es de alta complejidad analizar, diagnosticar e gremio. Y debemos utilizarlas. Pero tenemos tam- intervenir en los problemas sociosanitarios, en bién el informe social, la firma autorizada, las las lógicas de producción y reproducción de la potestades institucionales que por incumbencia vida que se desarrollan en el territorio? Todas nos competen, y un título que nos habilita como estas son construcciones discursivas con efectos cientistas sociales para analizar la realidad social políticos, educativos, sanitarios, económicos. y denunciar públicamente las atrocidades que Estas cuatro marcaciones, que hacen de nuestra en materia de desmantelamiento de protección profesión un locus de enunciación minorizado, ope- social se están cometiendo. Me pregunto si esta- ran también dentro de nuestra propia disciplina, mos asumiedo esta tarea. configurando nuestra identidad como trabajado- Somos una profesión subalternizada, pero no rxs sociales. Así también se replica al interior de somos la única. Vemos el caso de las mal llamadas nuestra profesión un proceso de diferenciación “maestras jardineras”, que son profesorxs de ni- que, en vez de potenciarnos en la diversidad de vel inicial. Hay toda una representación de que incumbencias, nos enfrenta con discursos de de- son sólo mujeres, y que además son aniñadas, que sacreditación, donde lxs que intervenimos en la estudian una carrera corta porque “no podrían docencia y la investigación somos catalogados de afrontar una formación más compleja”, que teoricistas y desconectados de la realidad, y lxs aprenden a usar la tijera y cantar nanas pero no que intervenimos en el territorio, la política social saben mucho más que eso. Hay un imaginario de o las instituciones, somos catalogados de empi- que, comparando un profesor universitario (que ristas acríticos y tecnocráticos. Hasta que no nos en el imaginario siempre es hombre y adulto) y asumamos como colectivo diverso y sinérgico, has- una “maestra jardinera” (que en el imaginario ta que no hagamos una crítica radical al discurso siempre es mujer y joven), el primero sin dudas liberal que cree que la unidad de análisis es el “sabe más” y cosas “más difíciles” que la segunda. individuo y no los colectivos, no podremos salir Esto es una representación construida por el del mandato de que cada unx de nosotrxs sea una relato moderno adultocéntrico y misógino. Lo especie de semidiós omnipresente en la docencia, mismo sucede con las mal llamadas “salitas”, la investigación, y la intervención en lo social. Esto que son centros de atención primaria de la salud. se resuelve si trabajamos colectivamente, circu- ¿Qué médico tiene más prestigio y mayor salario? lando las experiencias diversas y potenciándolas, ¿El cirujano que trabaja en alta complejidad aportando a los procesos de formación y cons- o el médico generalista de la unidad sanitaria trucción disciplinar que Cazzaniga (2007) analiza.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 137 ] 9- Pensar con el “Otro” en Trabajo Social implica apostar a un “pensar situado”

n la intervención del Trabajo Social hay cierto barcos”, o que en nuestro país “ya no hay indios Econsenso, o al menos un deber ser legitimado, ni negros”, o que ya no hay discriminación a las que afirma que hay que respetar al sujeto con el mujeres en el trabajo, son algunos ejemplos que que intervenimos en sus opiniones, deseos y pers- nos permiten notar que no siempre el que está pectivas, desestimando los posicionamientos azotado por el látigo se sabe azotado, o puede más verticalistas o autoritarios que ponen al pro- reconocer al azotador, o ve en él la causa de su fesional en el lugar del “saber” y el “poder”. mal. El pensar situado no es entonces una condi- Sin embargo cuando nos acercamos al devenir ción natural, es una tarea política. de la intervención, aparecen en algunos casos, Ya Fanon (1994) nos explicó mejor que nadie planteos del tipo: “ver que hay detrás del pedido este problema. Fanon era un psiquiatra antillano, de la chapa”, o “problematizar la demanda”, o di- negro, marxista y crítico de la colonialidad, que ferenciar “la necesidad sentida de la necesidad se fue a Argelia a ejercer su profesión. Comenzó real”. Estas afirmaciones de alguna manera cues- a ver que los problemas de salud mental de los tionan la idea de que el sujeto sabe lo que quiere, negros argelinos no se explicaban con los ma- y re-sitúan al profesional en un lugar de ser el que nuales de psicopatología europeos con los que sabe “en verdad” lo que el otro necesita. Si la epis- había estudiado, y cruzando su casuística con temología es praxis, relación entre sujetos para su formación en enfoques críticos, comenzó a pensar con ellos, en Trabajo Social este proceso construir su teoría de la sociogénesis de los pro- de praxis no puede partir de suponer que el otro blemas de salud mental de los sujetos a los que no piensa lo suficientemente bien. Hay otra di- atendía. Sujetos negros colonizados, expoliados mensión que vale la pena explorar, que implica por los blancos colonizadores. Así Fanon descu- construir conocimiento epistemológicamente brió cómo el sistema colonial imperante en Ar- válido y socialmente útil. Pensar con el/la otrx, no gelia había envenenado el sentido común de la es una tarea que se agote en el proceso de inter- población, generando una posición imposible en vención en lo social. Implica sabernos cientistas los negros, a quienes la colonia les decía que no sociales comprometidos en la justicia cognitiva. eran verdaderos hombres porque no eran blan- Creo que se ve y se piensa desde donde se está cos. Discursos como el de la meritocracia que (lo que implica una situacionalidad geográfica, hoy están tan de moda, le decían al negro que histórica, de género, etaria, ideológica, es de- si se esforzaba mucho, quizás podría llegar a ir cir, el entramado de ubicaciones asignadas o contra su propia naturaleza inferior y rozar algo elegidas, de discursos que nos atraviesan). Tal de los beneficios que están reservados para los como diría Chomsky: El mundo se ve muy distinto blancos en el orden natural de las cosas, que es el según si es usted el que sostiene el látigo o quien viene orden racializado construido por la Modernidad siendo azotado por él durante cientos de años. Muy Colonial. La salida individual era volverse lo más distinto (2005:9). Pensamos desde donde estamos. blanco posible. Y en ese camino imposible se Pero ya lo dijo Marx, el pasaje de “clase en sí” a borraba la imagen de quién era el que tenía el lá- “clase para sí” no es lineal ni natural, implica tigo en la mano, y se borraba también la propia un movimiento. Dicho en otros términos, el identidad. Piel negra, máscaras blancas dirá Fanon problema es que, como ya afirmé, accedemos a la (1973). realidad siempre a través de una interpretación. Y Y aquí, en nuestramérica y en nuestra Patria, hay discursos hegemónicos que logran hacernos hoy pasa algo parecido. Los sectores concentra- tan miopes que no podemos ver dónde estamos dos gozan de total inmunidad gracias, entre otras parados, o caídos, y quién es el que tiene el látigo cosas, a los medios de comunicación social, que que nos está azotando. Entiendo que nuestro borran los rostros de los sectores que sostienen lugar material tiene que convertirse en un lugar el látigo, y le atribuyen al Otro, al negro, a los jó- percibido, tenemos que situarnos en términos venes con gorrita, la causa de todos los males, de clase, como trabajadorxs, pero también en también gracias a los procesos de mostrificación términos geopolíticos (como afirma la teoría de la pobreza (Hermida, 2015) que los medios y su de la dependencia), en términos de gé-nero, etc. retórica construyen. Las marcaciones en la sub- Situarse para pensar implica esto: com-prender jetividad de los procesos de colonización pasados las marcaciones que la colonialidad del poder y presentes no pueden seguir siendo pasados imprimió a nuestra subjetividad social. El pensar por alto por nuestra academia. El discurso del situado se construye, porque vivimos alienados. Otro mostrificado tiene que ser recuperado La idea de que los argentinos “bajamos de los sin necesidad de “blanquear” su cultura y sus

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 138 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar estéticas, sin conceptualizar sus prácticas y para los expoliados por la colonialidad del po- discursos como “errores” producidos por un der? Esa historia no nos la han contado. Creo sistema que los excluyó, sino como prácticas que el Trabajo Social tiene que construir otras otras que quizás tengan alguna respuesta a la genealogías. Favorecer la circulación de los dis- pregunta de como salir del horror colonial. La cursos de los sectores minorizados. Y también vi- epistemología como praxis, como encuentro sibilizar otros presentes. entre sujetos, implica re-conocer formas otras Cada disciplina tiene su propia aporía. Su de ser y hacer, y no significarlas desde las lógicas tensión irresoluble. Y cada unx elige la profe- de la modernidad colonial. En esas formas otras sión con cuya tensión cree que puede con- estoy segura de que hay pistas para revolucionar vivir. Nosotros también tenemos nuestra con- nuestras propias prácticas, subvertir lo instituido tradicción. Entre el control y la autonomía. y salir de los cuellos de botella donde estamos Entre el disciplinamiento y la emancipación. atorados por repetir hace dos siglos las mismas Un pensar situado en Trabajo Social implica sa- recetas del cientificismo eurocentrista. bernos herederos de movimientos como el Hi- ¿Con quiénes digo entonces que no estamos gienismo, que apostaron al disciplinamiento a relacionándonos para hacer la praxis de la episte- través del cambio de conductas de los sectores mología? Esos otros con quienes creo que hay populares, “perniciosas” en términos sanitarios. que pensar, son sujetos individuales y colectivos Pero también, al reconocer las marcaciones en del Sur global. Intelectuales, movimientos socia- nuestra historia, podemos conectarnos con otras les, agrupaciones políticas, espacios del arte y experiencias del pasado, que hicieron cosas más de la cultura, sectores populares marcados por parecidas a las que queremos hacer muchxs de la herida colonial. Creo que si hay que pensar la nosotrxs hoy, y que luchamos para que se reco- actual coyuntura, necesitamos deconstruir los nozcan como verdaderas incumbencias de nues- discursos que nos la dan ya significada de una tra profesión. Por ejemplo queremos pensar pro- determinada manera, donde todo se explica por yectos políticos de distribución de la riqueza, como el sinceramiento, la meritocracia y la revolución pensaron los pueblos y los caudillos del interior. de la alegría. Otros discursos, entendidos como Queremos discutir los denominados modelos de máquinas para pensar, pueden activarse. La rica desarrollo (Meschini, 2015). Queremos trabajar historia rebelde y litigante de nuestramérica, esta con movimientos sociales y políticos. Queremos tierra fértil en términos de biodiversidad, ha sido manifestar nuestra rebeldía a los procedimientos y es fértil también en experiencias intelectuales del mercado y de los gobiernos que le hacen eco, y organizacionales. ¿Por qué conocemos a los de expoliación de nuestros mal llamados “re- autores intelectuales de la Revolución Francesa cursos naturales”, experiencias que vienen ha- y no a los de la Revolución Haitiana que fue la ciendo nuestros pueblos originarios hace 500 única revolución de esclavos triunfante en la años, y muchos movimientos ambientales en las historia, y la que generó cambios más radicales últimas décadas.

10- Los enfoques liberales que denuncian el asistencialismo, el populismo y el clientelismo inferiorizan al pobre; los enfoques nuestroamericanos subrayan el protagonismo popular

uisiera ahora detenerme en ciertas herra- litigio, se configura diferenciándose, y cuando se Qmientas teóricas que la epistemología ple- estabiliza vuelve sobre sí para volver a cuestionarse. beya ofrece. Elegí algunos conceptos de gran po- Es diferencia, deriva, disrupción, des-prendimiento, tencialidad heurística para analizar este momento apertura, es crítica, nunca canon. Comencemos de restauración neoliberal: me refiero a los de esta confrontación de ideas, para desandar algunos poder y potencia plebeya (García Linera, 2009) y de estos caminos pseudo-progresistas. pueblo (Laclau, 2008). Propongo confrontar estas Hay una serie de conceptos que lxs trabajadores nociones con otras categorías que abundan en sociales tenemos en alta estima porque creemos la prosa del Trabajo Social desde supuestas pers- que nos separan de las tendencias filantrópicas o pectivas progresistas o de izquierda, como son las disciplinadoras, y otros a los que escapamos como de la crítica al asistencialismo, al clientelismo y si fueran la peste, porque simbolizan enfoques al populismo. La idea de confrontar posiciones es perimidos que asociamos a la beneficencia, o por- también constitutiva de esta epistemología ple- que sugieren una “politización partidaria” que beya, que lejos de bregar por un descriptivismo implicaría una falta al principio de neutralidad enciclopedista, construye territorios de discusión, que algunas deontologías liberales pregonan.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 139 ] Comencemos con los conceptos de asistencia que fue responsable de esta situación, debe, y promoción. La tarea de analizarlos ya fue en manos de gobiernos populares, viabilizar el hecha por nuestra lúcida Ana Arias (2012). La acceso a derechos, y la asistencia en ese sentido, idea de promoción toma mucha fuerza en la dé- es una estrategia de restitución. A su vez la asis- cada de los noventa, y es por eso que creo muy tencia puede ser respuesta a una demanda que necesario que hoy, en una nueva avanzada del performativamente permita el surgimiento de proyecto neoliberal, la repensemos. El modelo un sujeto colectivo con capacidad de agencia, de promocional, gestado en los sesenta y setenta, construcción de hegemonía. El reclamo de asis- y relanzado en los noventa, se diferenciaba del tencia puede gestar organización popular. La ta- modelo de asistencia, que era entendido como rea de facilitar el acceso a un recurso/derecho, mecanicista y obturador de la participación es en sí misma una incumbencia de la profesión del asistido, quien quedaba en un supuesto lu- (ya sea a partir de la gestión, o del compromiso gar de beneficiario y no de ciudadano. Para los directo en el reclamo), que no debe ser entendida defensores de la idea de promoción, en las prác- peyorativamente, aunque tampoco estoy diciendo ticas de asistencia el profesional se aparecía co- que las competencias profesionales se agoten ahí. mo desdibujado, como “entregador de recursos A su vez entiendo que la figura de la promoción escasos” en un rol prácticamente administrativo. no necesariamente es la que única ni la que me- El modelo de promoción en cambio, buscaba pre- jor permite dar cuenta de un posicionamiento cisamente “promover” a los sujetos desde un rol crítico y situado en la intervención. activo por parte del profesional y sobre todo del En ese marco aparece otro concepto que circula mismo sujeto, que en ese proceso se capacitaba, en medios de comunicación y en las agendas de generaba cambios de conducta y se asociaba las ciencias sociales en general y de Trabajo So- con otros en dispositivos de promoción barrial cial en particular, y que es el de clientelismo, o sectorial. Quiero explicitar que no es la idea donde el asistido es víctima de una cooptación. demonizar la noción de promoción, de hecho Creo que estos enfoques caen en lo que ya el creo que hay experiencias muy interesantes que poscolonialismo subalternista en general, y pudieron hacerse de la mano de la promoción Guha (2002) en particular, denunciaran como social y sobre todo territorial. Pero me interesa mecanismos de apropiación de la conciencia del evidenciar algunos de los supuestos que sostie- sujeto social por parte del cientista social. Es decir nen esta categoría (en tanto la promoción se que sucede en algunos de nuestros intelectuales, concibe como un movimiento evolutivo, un pro- algo así como una proyección en términos psi- mover, un movimiento ascendente que se expli- coanalíticos: no es necesariamente el político cita en el cambio de formas de ser, de pensar, de corrupto el que se apropia de la conciencia del hacer). Así, este modelo, proponía y propone el sujeto que recibe la asistencia, sino el cientista so- trabajo a partir de la capacitación, o dicho en otros cial que antes de tomarse el trabajo de analizar la términos, el objetivo de cambios de conducta en perspectiva de un sujeto que modificó su curso los sujetos, en algunos casos como condición pa- cotidiano por el acceso a un bien, recurso o de- ra el acceso a recursos. Arias hace una crítica al recho, entiende que el mismo fue cooptado por la presupuesto acerca de que los sujetos debían mutar beneficencia. Así muchos académicos se apropian sus características, conductas, cuestiones culturales, de la conciencia de los sectores subalternos, capacidades o hábitos como parte del tratamiento re-significando un comportamiento a través de la pobreza (2012:186). Vale hacer notar que el de las coordenadas que el relato de su teoría le acceso a derechos en los sectores medios rara vez ofrece. Éste es el señalamiento que hace Guha implica la exigencia de participación en procesos respecto de la historiografía radical marxista y de capacitación o promoción. Sin embargo a los mecanismos de interpretación que imprimen los sectores populares históricamente se les ha a las revueltas de los campesinos indios. Creo que exigido esta instancia como condición para el el Trabajo Social debe escuchar en la propuesta acceso a recursos y derechos. Pareciera que, en de Guha la posibilidad de ejercer la crítica, no las estretagias promocionales, la asistencia no es sólo hacia el orden social que estructura la un derecho, en tanto su efectivización depende vida política pasada y presente, sino también de una contraprestación. La lógica que subyace a a los efectos que ese orden social produce en la promoción puede velar el caracter restitutivo las propias prácticas disciplinares. Y apostan- del derecho a la asistencia en tanto lo supedita do a un pensar situado, no caer en análisis eu- al cumplimiento de requisitos. Entiendo que rocentristas donde lo popular es visto como de- la asistencia no puede ser confundida con magogia, como atentando al republicanismo, asistencialismo, sino que debe pensarse en el como participación dirigida por clientelismos, marco del acceso a un derecho, más aun en so- etc. No podemos sostener el “sentido común” en ciedades neoliberales que han profundizado la términos gramscianos, entendiendo la política desigualdad. Las situaciones de indigencia son, social de asistencia como dádiva tal como quiere en prinicipio, resultantes de políticas econó- construirla el discurso hegemónico difundido micas que configuraron una estructura social por los medios de comunicación concentrados. que arrojó a la misera a millones. El Estado, Deberíamos por el contrario legitimarla por su

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 140 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar carácter restitutivo y de justicia social, frente tiempos, implican una distribución de la renta aquellos que la denostan por “alimentar vagos”, hacia las mayorías, y no hicieron que la fórmula ya que las supuestas posturas críticas que las que representaba al gobierno en ciernes ganara deslegitiman en términos académicos afirmando la última elección. Entonces, ¿por qué creemos que “generan clientelismo”, desconocen un sinfín que los pobres son víctimas del clientelismo? ¿No de particularidades de as políticas sociales que el hay ahí una suposición de que algunas personas enfoque de derechos implementó en la última dé- pueden acceder a transferencias de recursos de cada, como la tendencia a universalizar y elminar distinto tipo sin que ello implique un “lavado de intermediarios en la gestión y acceso a derechos cerebro” y otras personas no pueden recibir una (como la AUH, el PROGRESAR, el Conectar reparación de una injusticia sin por eso perder Igualdad, entre otros programas, que no fueron su estatuto de autonomía para convertirse en efectivizados por “punteros” sino por agencias clientes cooptados? Pareciera que para el senti- estatales como la ANSES, a todxs aquellxs ciu- do común hegemónico, la clase media puede dadanxs que cumplieran los requisitos estipu- hacer “mediaciones” que los pobres no... Y esta lados por ley para ser beneficiarios de estos dis- hipótesis subyacente rara vez se explicita. En positivos). Tampoco hay que olvidar los efectos paralelo quiero plantear otra cuestión: Que al- que estos discursos de estigmatización de la guien sienta simpatía o tienda a acompañar un asistencia y de lxs asistidxs generan, en tanto proyecto político que le permitió el acceso a un abonan al discurso meritocrático de los sectores derecho, ¿no merece cierto respeto? ¿por qué til- concentrados. dar de víctima del clientelismo a quien vota por Vemos que la idea de clientelismo lleva en sí proyectos populistas, y no a quienes votaron por un presupuesto que rara vez se explicita: que el un Presidente que invitó al Rey emérito de España sujeto “cooptado” por el “beneficio institucional” el día del Bicentenario de nuestra independencia, de determinada política social, o por el “beneficio balbuceando que nuestros próceres sufrieron an- militante” del pancho, la coca o la bolsa de ali- gustia al gestar la independencia? ¿Quién tiene mentos, es un sujeto incapacitado para re- motivos más válidos? flexionar, que responderá de forma mecánica Responsabilizo en gran medida a estas concep- y acrítica, acompañando con su cuerpo en una ciones sobre los pobres y sus relaciones con los mani-festación o con su voto en una elección, recursos, al discurso eurocéntrico sobre el popu- a su supuesto “benefactor”. No quiero negar la lismo. Podríamos decir que en la academia hay existencia de prácticas extorsivas en el territorio, dos grandes relatos sobre el populismo. Uno es donde el sujeto debe responder de determinada el que construyó la ciencia política liberal, que manera so pena de ser punido. Sin embargo creo muchos hemos estudiado en la escuela o incluso que esas dinámicas están más asociadas a los en la facultad, de la mano de Touraine (1993), por mecanismos represivos de los aparatos policiales ejemplo, y al que contribuyó también en gran o del narcotráfico, que a los mecanismos asis- medida, cierto marxismo escolarizado, que en la tenciales de otorgamiento de recursos, que, por academia supo trazar muchas veces lazos con el otra parte, como vengo afirmando, fueron sien- pensamiento conservador, llegando por ejemplo do institucionalizados en gran medida como a echar de sus filas a intelectuales marxistas de derechos, eliminando los intermediarios en las la talla de José M. Aricó en nuestro país. Este pri- gestiones, y universalizando las prestaciones mer concepto del populismo, es el que lo define (Arroyo, 2016), por lo menos hasta el cambio de como régimen demagógico que se sostiene en gobierno de diciembre de 2015. la ignorancia del pueblo, la transferencia de Estas ideas que se esconden detrás del concepto migajas (pan y circo a los pobres), y el carácter de clientelismo, son herederas de otras teorías mo- carismático de un líder que, obsesionado por el dernas que mucho daño nos han hecho, como son poder, destruye la República y sus instituciones algunas de las propuestas teóricas de la psicología con tal de perdurar. Esta prosa se sustenta en y la psiquiatría decimonónicas, que veían en las un pensamiento profundamente heterónomo masas a hordas de sujetos que perdieron sus ca- y antinacional, que cree que nuestras jóvenes pacidad de raciocinio por estar en una especie de democracias adolecen de la capacidad de auto- trance o fenómeno psicológico de sugestión. El li- conducirse, mientras se anhela la capacidad beralismo siempre bregó por mantener en el altar de los europeos de gobernarse racional y orde- al individuo y demonizar a los colectivos. nadamente. Tal como advierte Barros (2014): Ahora bien, ¿en qué evidencia se sustenta esta afirmación de que el que recibe un beneficio de Todos los enfoques sobre el populismo algún tipo, luego obra de forma mecánica arro- en América Latina hacen referencia a la jándose a los pies de quien se lo otorgó? En ninguna centralidad de la figura de los líderes en evidencia. ¿Las clases medias no recibimos “bene- estos movimientos. En su generalidad, la ficios” o “transferencias económicas directas o presencia de líderes fue asociada al carisma indirectas”? Las tarifas subvencionadas, el acceso y a la demagogia. Las ciencias sociales han gratuito a la Universidad Pública, o a cualquiera sido bastante injustas con los sujeto repre- de las políticas instrumentadas en los últimos sentados en dichos liderazgos. (p. 300).

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 141 ] De esta forma, el sentido mayormente atri- “des-subjetivizar”, cooptar voluntades, arriar buido a la noción de populismo, es que el que lo cuerpos, o eliminar conciencias, produce proce- identifica con el liderazgo carismático y la masa sos de “subjetivización” sociales, culturales, polí- uniforme y acrítica. Y es que este relato encastra ticas que permiten, en lo que Laclau llamará la perfectamente con nuestra contradicción princi- cadena equivalencial de demandas, hacer emer- pal que no es, como diría Carballeda (2013), prima- ger al sujeto pueblo. ria ni únicamente la de capital-trabajo, sino la En el concepto de pueblo juegan la noción de de civilización o barbarie, que de la conquista populus -el conjunto de todos los ciudadanos- y hasta la fecha recorre nuestra historia, y que fue la de plebs -los menos privilegiados-. ¿Cuál es el tomando distintas formas, coagulando con fuer- sujeto político del populismo? Es una plebs que za en las posturas antiperonistas a mediados de se arroga para sí la pretensión de ser el populus siglo XX y en el odio visceral al “negro” (al indio, legítimo. Son estos movimientos trópicos, meto- al descamisado, al negro de “m”, al pibe chorro, nímicos, los que aborda Laclau, a partir de la al negro de alma, etc.). El clientelismo que de- distinción entre los dos sentidos que habitan este nuncian ciertos enfoques de la ciudadanía, el concepto. populismo eurocéntrico y ciertas versiones an- quilosadas del marxismo, le imprimen a los El pueblo era a la vez parte y todo. Estos sectores populares un lugar de pasividad, o al me- liderazgos tienen entonces que represen- nos cierta insuficiencia intelectual que los hace tar, a la vez y de manera constante, a la presa fácil de la demagogia, objetos de medidas parte y al todo. Pero ni el todo ni las partes de promoción que favorezcan cambios en sus son compartimentos estancos o espacios conductas. Y no reparan quizás en el hecho de inmóviles. Por lo tanto, estos liderazgos que las clases medias pueden estar siendo coop- operan sobre, y son operados desde, una tadas con mucho mayor éxito por los medios de multiplicidad y diversidad de identifica- comunicación periodísticos o académicos, que ciones populares. (Barros, 2014: 301) un pobre por una coca o un pancho. El otro gran relato del populismo es el que El pueblo, conjunto de sectores plebeyos, no propone Laclau (2008). El autor dice que el es una clase social predeterminada, un sujeto populismo es un rasgo inherente a todo pro- histórico necesario y con una identidad inma- yecto político, y que implica básicamente la nente, sino una posibilidad discursiva y material construcción de un pueblo contra un no pueblo. que se constituye en tanto se da un movimiento Advierte, desde una perspectiva schmittiana, que hegemónico. He aquí una de las diferencias sus- lo constitutivo de la política no es el consenso tanciales de la propuesta de Laclau con relación a sino el antagonismo. El fundamento que hace que la ontología marxista: la opción por el concepto de una sociedad sea posible no es natural ni dado, es pueblo antes que por el de clase social, y por con- construido. Y se litiga para ponerle un nombre siguiente, la prioridad que le otorga a la política en al motivo por el cual vivir juntos: bien común, detrimento de la determinación histórica del ser democracia, socialismo, etc. Será ese significante revolucionario y la estructura económica. No hay vacío el que nuclee una cadena de demandas un antagonismo predeterminado, con sujetos con populares, y dibuje la frontera entre un nosotros identidades fijas que preexisten al conflicto social, y los otros. Así el proyecto de Laclau consiste en y con un destino teleológico prefijado. Hay por el despejar de sentencias peyorativas al populismo que contrario una agencia por la cual un particular lo describen como una política menor, manipulatoria, toma la representación de un universal, y distri- marginal y sin entidad para otorgarle un lugar de buye el mapa político diferenciando al conjunto preeminencia en la teoría política contemporánea pueblo del enemigo. (Groppo: 69). Es en esta línea también que Barros La idea de potencia plebeya de García Linera afirma que los gobiernos populistas tienden a viene en esta línea. ¿Quiénes son los plebeyos? Es ampliar derechos. Pero que esta cuestión tras. la plebs de Laclau, los damnés de Fanon, los sub- ciende la esfera de transferencia de recursos de alternos de Gramsci. Son sujetos muy concretos, sectores concentrados a desfavorecidos, para los que la pasan mal, cuya vida cotidiana es un configurarse como un proceso de subjetivización calvario injusto y planificado por una política, política. No se trata simplemente de dar una res- una cultura y una economía moderna colonial puesta a una demanda. La articulación de identi- y capitalista. ¿Cómo es entonces que podemos ficaciones populares por parte de los populismos hablar de potencia plebeya cuando nos referimos supone una transformación en la estima de los in- a quienes parecen ser las víctimas saqueadas por dignos.” (Barros, 2014:299) De alguna manera el un poder monolítico y sin fisuras? Podemos por- populismo otorga legalidad e igualdad discursiva que el poder es una relación, y tal como advierte a aquellos que por definición quedan por fuera Foucault (2001), no hay poder sin resistencia. de la comunidad política. Es el proceso de trans- Pero estas resistencias microfísicas y rizomáticas formación de estima-de-sí que refiere el autor. son aquí hilvanadas por los movimientos arti- Este proceso no es menor, en tanto lo que aquí culatorios que el populismo habilita. Y tal queremos apuntar es que el populismo lejos de como advierte la historia del Sur global, la

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 142 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar lucha de lxs plebeyxs cuenta con innumerables de unificación de los movimientos sociales, batallas ganadas. Es cierto que los reflujos de la y una irradiación práctica, ideológica, que historia siempre han estado presentes. Pero la materialice un liderazgo político, moral, “indefención aprendida” de creer que los sectores cultural, organizativo del polo indígena- subalternos por no tener determinados lugares popular sobre la mayoría de las capas popu- ganados en la estructura económica están con- lares y medias de la sociedad boliviana. denados a vivir mal hasta que lo diga una te- (García Linera, 2009: 444) leología histórica que solo pueden desentrañar los escribas y exégetas de determinadas teorías De esta forma, una concepción de potencia ortodoxas de la academia, implica replicar las plebeya que se configura a partir de un Pueblo, expectativas de los sectores concentrados. la parte de los oprimidos que reclama para sí su La potencia plebeya para expandirse debe lugar como pueblo legítimo en la comunidad asumir como propia la batalla cultural: política, articulando demandas, confronta fuer- temente tanto con los planteos de hacer la revo- el polo indígena-plebeyo debe consolidar lución sin tomar el poder bajo la metáfora de las una capacidad hegemónica (Gramsci), en- picaduras de abeja (Holloway, 2005), como con tendida ésta como liderazgo intelectual y las reflexiones de la biopolitica antinormativa moral sobre las mayorías sociales del país. que ven el condenados de la tierra una nuda vida No habrá triunfo electoral o insurrección (Agamben, 1998), desarmada frente a un Estado victoriosa sin un amplio y paciente trabajo que siempre es de excepción.

Consideraciones finales

ay una realidad política que merece ser pen- gía plebeya. Entendiendo la misma como un tra- Hsada. Sus efectos en materia de desigualdad y bajo en el sentido marxista, acto creativo y pro- expoliación reclaman nuestra mirada. Un desafío ductivo, fui reconociendo aquellos elementos primero nos convoca: revisar nuestro propio que Dussel denomina como poiesis y praxis, el mirar, las herramientas con las que pensamos, trabajo como relación del sujeto con la realidad analizamos y proponemos. En esa línea he inten- y con los otros sujetos atendiendo a la pregunta tado señalar algunos de los supuestos de la epis- ¿con qué realidades y con qué sujetos trabaja (y temología tradicional, que en tanto artefactos de no trabaja) la epistemología tradicional? Ubi- la Modernidad Colonial, distorsionan con su lente cando el producto del hacer epistemológico las realidades históricas, políticas y subjetivas como un discurso, busqué confrontar con las de Nuestra América. Frente a esta propuesta del nociones representacionales del mismo, para con- pensamiento eurocéntrico, se erige una manera ceptualizarlo como proceso, producto y productor otra ejercer el trabajo epistemológico (que es el de realidades. En ese sentido remarco la idea de de analizar la condiciones de validez del conoci- pensar el Trabajo Social como un locus de enun- miento): el camino que propone el pensar situado. ciación discursiva, lugar simbólico y material Situarse aquí es reconocer la geocultura en la que que padece una diversidad de marcaciones que cada quien ejerce su tarea, pero también advertir lo subalternizan. Esta posición menor nos pone las inscripciones biográficas que la historicidad frente al desafío de parir nuestra propia potencia y el patrón de poder mundial imprimieron en plebeya disciplinar: la de una práctica social que nuestra propia subjetividad, configurando los pueda, desde sus propias subalternizaciones, ejer- discursos que decimos y que nos dicen. Situarse cer la rebeldía y litigar para construir formas es des-alienarse, conjurar las voces hegemónicas otras de pensar. Haciendo uso de las herramientas y heterónomas que nos habitan y poder hacer el conceptuales que provee esta epistemología plebe- acto politico de decir nuestra palabra. De esta for- ya, busqué demostrar que el Trabajo Social no ma, sin descartar in totto las tradiciones de otros puede tener miedo de recuperar el concepto de lares (y antes bien recuperando aquellos discursos pueblo, ni la idea de asistencia como derecho en minoritarios, intersticiales, periféricos, de diver- su carácter restitutivo, ni la estética militante y re- sos tiempos y espacios, que puedan aportar a belde nuestroamericana. comprender y transformar las situaciones de Creo que el Trabajo Social tiene mucho para injusticia social y también cognitiva del Sur aportar en la batalla cultural que tienda a for- global), he buscado caracterizar esta epistemolo- talecer esa potencia plebeya. No sólo debe ocu-

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 143 ] parse de gestionar mejoras materiales en las que se des-marca de los criterios eurocéntricos condiciones de vida, sino contribuir como voz hegemónicos) y socialmente útiles, legitimando autorizada en las discusiones sobre lo social, las estéticas y la ética popular. Situarse, de-su- construyendo discursos científicamente válidos jetarse, pensar, trabajar y luchar con otrxs, son las (atendiendo a los criterios de una epistemología tareas.

Bibliografía

Agamben, G. (1998) Homo Sacer: el poder soberano Chomsky, N. (2005). El terror como política exterior y la nuda vida. Valencia: Pre-Textos. de los Estados Unidos. Buenos Aires: Libros del Aquín, N. (comp) (2006) Reconstruyendo lo Social: Zorzal. Prácticas y experiencias de investigación desde el Dussel, E. (2014). 16 tesis de economía política: inter- Trabajo Social. Buenos Aires: Espacio. pretación filosófica. México: Siglo XXI. Argumedo, A. (1993) Los silencios y las voces en Amé- Fanon, F. (1973). Piel negra, máscaras blancas. rica Latina. Notas sobre el pensamiento nacional Buenos Aires: Abraxas. Consultado el 20 de y popular. Buenos Aires. noviembre de 2015 en http://www.bsolot.info/ Arias, A. (2012) Pobreza y modelos de intervención. wp-content/uploads/2011/02/Fanon_Franz-Piel_ Aportes para la superación del modelo de asisten- negra_mascaras_blancas.pdf. cia y promoción. Buenos Aires: Editorial Espacio ------(1994) Los condenados de la tierra. México: Arroyo, C. (2016). Paradigmas en disputa en la Políti- Fondo de cultura económica. ca Social Argentina. Buenos Aires: Espacio. Forni, F. (1993) “Estrategias de recolección y estra- Austin, J. (1982) Cómo hacer cosas con palabras. tegias de análisis en la investigación social”. Barcelona: Paidós. En Vasilachis et al: Métodos cualitativos II. La Barros, S. (2014) “Populismo, pueblo y liderazgo práctica de la Investigación. Centro Editor de en América Latina”. Colombia Internacional, Nº América Latina. 82, septiembre-diciembre, pp. 297-302 Bogotá: Foucault, M. (1969). “Qu’est-ce qu’un auteur?”, Universidad de Los Andes. Extraído el 11 de Bulletin de la Société française de philo­sophie, año noviembre de 2016 de: http://www.redalyc.org/ 63, n° 3, julio-setiembre, págs 73-104 (société articulo.oa?id=81232436013 française de philosophie, 22 de febrero de 1969; Benjamin, W. (1973). Tesis de filosofía de la histora. debate con M. de Gan­dillac, L. Goldmann, J. Lacan, Traducción de Jesús Aguirre. Madrid: Taurus. J. d‘Ormesson, J. Ullmo, J. Wahl.) Extraído el 12 de noviembre de 2016 de: http:// Foucault, M. (2005). Las palabras y las cosas: una biopoliticayestadosdeexcepcion.blogspot.com. arqueología de las ciencias humanas. 32º edición ar/2011/04/tesis-de-filosofia-de-la-historia.html en español. México: Siglo XXI. Bourdieu, P. (2000). Poder, derecho y clases sociales. ------(1995). Nietzsche, Freud, Marx. Buenos Bilbao: Desclée. Aires: El cielo por asalto Carballeda, A. (2013). “La cuestión social como ------(2001). “El sujeto y el poder”. En Dreyfus, cuestión nacional”. En La intervención en lo H. y Rabinow, P., Michel Foucault. Más allá del social como proceso. Una aproximación metodo- estructuralismo y la hermenéutica. Buenos Aires: lógica. Buenos Aires: Espacio. Nueva Visión Castro Gómez, S. (2007) “Decolonizar la universi------(2005) Las palabras y las cosas. Una dad: la hybris del punto cero y el diálogo de arqueología de las ciencias humanas. Madrid: saberes. En El Giro decolonial. Reflexiones para Siglo XXI una diversidad epistémica más allá del capita- García Linera, Á. (2009) La potencia plebeya: lismo global. Bogotá: Pontificia Universidad acción colectiva e identidades indígenas, obreras Javeriana, Universidad Central, Siglo del Hom- y populares en Bolivia. Bogotá: Siglo del Hombre bre Editores. y Clacso. Cazzaniga, S. (2007). Hilos y nudos. La formación, González Saibene, A. (2007) “El objeto de la inter- la intervención y lo político en Trabajo Social. vención profesional: Un mito del Trabajo Buenos Aires: Espacio. Social.” Revista Umbral, Prácticas y Ciencias Chakrabarty, D. (1999). “Historia de las minorías, Sociales del Sur. Santa Fe: Fundación Futuro pasados subalternos” Revista Historia y grafía, Solidario. año 6, Nº 12.

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... [ 144 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar GRAMSCI, Antonio (1980) Notas sobre Maquiavelo, Kusch, R. (1976) Geocultura del Hombre Americano. sobre la política y sobre el Estado moderno. Buenos Aires: Fernando García Cambiero. Madrid: Grijalbo. Laclau, E. (2008) La razón populista. Buenos Aires: Groppo, A. (2010) “Heterogeneidad y política Fondo de cultura económica. en Bataille y Laclau”. Studia politicae, Nº 20. Laudan, L. (1981) Science and Hypothesis: Historical Facultad de Ciencia Política y Relaciones In- Essays on Scientific Methodology. Dordrecht: ternacionales de la Universidad Católica de Reidel Publishing Company. Córdoba. Córdoba, Argentina. Disponible en: Martí, J. (2005). Nuestra América y otros escritos. http://bibdigital.uccor.edu.ar/ojs/index.php/ Buenos Aires: El Andariego. Prueba2/article/view/875 Marx, K. (2008). Contribución a la crítica de la eco- Guha, R. (2002) “La Prosa de la Contrainsurgencia”. nomía política. México: Siglo XXI. En Las voces de la historia y otros estudios subal. Meschini, P. (2015). “El Modelo de Desarrollo Ar- ternos. Barcelona: Crítica. gentino (MDA). Una forma de hacer posible/ Hermida, M. (2015) “Colonialismo y producción de visible otro modelo de desarrollo.” Revista Cá- ausencias. Una crítica desde el Trabajo Social tedra Paralela, Nº12. Rosario. URL: http://www. para visibilizar los presentes subalternos.” catedraparalela.com.ar/images/rev_articulos/ Revista Debate Público. Reflexión de Trabajo So- arti00173f001t1.pdf cial. Año 5, Nº 10, pp. 67-87. Disponible en: http:// Mignolo, W. (1995). “La razón poscolonial: heren- trabajosocial.sociales.uba.ar/web_revista_10/ cias coloniales y teorías poscoloniales.” Revista PDF/09_Hermida.pdf Fecha de consulta 18 de chilena de literatura. Nº 47. Extraído el 10 de junio febrero 2016. de 2012 desde: http://www.estudiosecologistas. ------(2016). “El Estado, el poder y la política org/docs/reflexion/imperialismo/postcolonial. en los estudios poscoloniales y el enfoque pdf descolonial. Aportes para el Trabajo Social”. Ricoeur, P. (1999). Freud: una interpretación de la En Hermida, M. y Meschini, P., Trabajo Social cultura. Buenos Aires: Siglo XXI. y Descolonialidad. Epistemologías insurgentes Santos, B. de Sousa (2006) Renovar la teoría crítica para la intervención en lo social. Mar del Plata: y reinventar la emancipación social (encuentros EUDEM (en prensa). en Buenos Aires). Buenos Aires: CLACSO. Hill Collins, P. (2000). Black feminist thought: Santos, B. de Sousa (2009) Una epistemología del Knowledge consciousness and the politics of sur. La reinvención del conocimiento y la emanci- empowerment. London/ New York: Routledge. pación social. Buenos Aires: CLACSO - Siglo XXI Holloway, J. (2005) Cambiar el mundo sin tomar Touraine, A. (1993). “América Latina: del populis- el poder. El significado de la revolución hoy. mo a la socialdemocracia”. En Vellinga, M. Caracas: Vadell Hermanos S.A URL: http:// (comp.) Democracia y política en América Latina. ilusionismosocial.org/pluginfile.php/601/mod_ México: Siglo XXI. resource/content/3/cambiar-el-mundo-el- Wallerstein, I. (2006). Análisis de sistema-mundo. poder-1275850.pdf Fecha de consulta: 05/ 01/16 México: Siglo XXI

María E. Hermida | Contribuciones desde una epistemología plebeya... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 127-145 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 145 ]

Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio Una propuesta para revisar críticamente la politicidad que habita nuestras investigaciones

Manuel Cuervo Sola (Argentina) CONICET-INCIHUSA-CCT Facultad de Ciencias Políticas y Sociales - UNCuyo [email protected]

Fecha de recepción: 12-10- 2016 Fecha de aceptación: 28-11- 2016

Resumen Abstract n el presente trabajo nos proponemos com- ur purpose is to share some reflections regar- Epartir algunas reflexiones acerca de la utilidad Oding the utility of setting a precise moment de incorporar en nuestras pesquisas sobre fenó- to critically review our ontological assumptions menos políticos un momento específico para in our investigations on political phenomena. reflexionar críticamente sobre los supuestos on- Studies on sociopolitical phenomena face -in tológicos que en ellas asumimos. Los estudios de spite of the diversity of disciplinary and theo- fenómenos sociopolíticos, a pesar de las diversas retical-methodological approaches- important miradas disciplinares y enfoques teórico-metodo- difficulties (epistemological obstacles) at the mo- lógicos disponibles, enfrentan apreciables dificul- ment of specifying politics as the object of study. tades (obstáculos epistemológicos) a la hora espe- Defining an ontological moment, within cificar lo político como objeto de estudio. the development of our investigations, which Asumir un momento ontológico en el desarrollo postulate the radical political malleability of de nuestras investigaciones que postule la radical society, permits an epistemological surveillance maleabilidad política de lo social, nos permite over the politics inside the very configuration realizar un ejercicio de vigilancia epistemológica of sociopolitical phenomena, just as they are sobre la politicidad que habita en la propia experienced; and also over the politics within the configuración de los fenómenos sociopolíticos, tal theoretical concepts that we use to define those y como estos se presentan a la experiencia; y sobre phenomena as our object of study. la politicidad que reside también en los conceptos The study of Alain Badiou’s singular ontological teóricos que utilizamos para construirlos como reflection becomes a particularly useful tool in objeto de estudio. this stage of our investigation since it provides El estudio de la singular reflexión ontológica de pertinent elements for the speculative exercise of Alain Badiou, que toma como punto de partida el cancelling any social form (of any kind of political axioma que certifica que lo uno no es, constituye power sedimentation in institutions and/or una herramienta particularmente productiva identities), and allows us to figure the sociopolitical para trabajar este momento de la investigación phenomena under study as a sheer dispersion of ya que nos brinda elementos pertinentes para intensities with no consistency at all. realizar el ejercicio especulativo de suspender la The aim of this article is to show how Badiou’s vigencia de cualquier forma social (de cualquier theoretical tools are adequate to check the

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 147 ] forma de sedimentación del poder político en implicit politics in our investigations, since they instituciones y/o identidades) y figurarnos el enable us to suspect that everything that appears fenómeno sociopolítico que estamos estudiando consistently (as told by us) in the sociopolitical como una pura dispersión de intensidades sin phenomenon as institutions and social identities, consistencia alguna. and the constitution of our subject of study by La apuesta de este artículo es mostrar means of concepts and categories, are already a cómo estas herramientas teóricas badiouanas result of the performative work by some type of resultan adecuadas para revisar las politicidades political power. implícitas en nuestras investigaciones ya que nos permiten sospechar que todo aquello que aparece de manera consistente (contado por uno) en el fenómeno sociopolítico como instituciones e identidades sociales; y en la producción que del mismo hacemos como objeto de estudio por medio de conceptos y categorías, es ya producto del trabajo performativo de alguna forma de poder político.

Palabras clave: Plasticidad ontológica, Politi- Keywords: Ontological plasticity, Politics, cidad, Obstáculos epistemológicos, Alain Badiou. Episthemological obstacles, Alain Badiou.

Introducción: la invisibilización de ciertas politicidades

n el presente trabajo presentamos algunas aquello que según las reglas de organización de Ereflexiones teóricas que surgieron durante la vida de la sociedad que estamos estudiando es la elaboración de nuestra tesis de doctorado1 considerado como propio de “la política”. vinculadas con la posibilidad de delimitar las Buena parte de las investigaciones en el campo coordenadas de un territorio teórico que contri- de la ciencias políticas alimentan este modo de buyera a evitar algunas de las limitaciones teó- construir la especificidad disciplinar ya que ricas y metodológicas que más comúnmente limitan sus estudios a investigar los comporta- afectan las pesquisas que desarrollamos en el mientos y las instituciones vinculadas con “la campo de la Ciencia Política en particular, y de política”, es decir: estudiar aquello que hacen los las Ciencias Sociales y Humanas en general, al “políticos profesionales”, las instituciones que abordar los fenómenos políticos. regulan ese quehacer, las formas de incidencia ¿Cuáles son estos obstáculos epistemológicos de la ciudadanía en ese ámbito específico de la o limitaciones que caracterizan los estudios política y las posibles relaciones que puedan políticos? darse entre estos fenómenos. Aquello que la propia formación social que a) En primer lugar limitaciones que se vin- estamos estudiando ha establecido como específi- culan con una especie de “recorte ontológico” de camente político es lo que recorta el conjunto de los fenómenos que estudiamos como políticos. fenómenos que debemos asumir como objeto de Eso que Bachelard identifica como el obstáculo estudio cuando queremos estudiar problemas propio del empirismo inmediato (2000:23) Estas políticos. Desde este punto de vista, el objeto de limitaciones se relacionan entonces con el hecho estudio “la política”, ya está allí recortado por de dirigir nuestros estudios políticos sólo hacia las propias reglas que organizan la vida de la aquellos fenómenos que aparecen en la forma- sociedad que estamos estudiando. ción social que estamos investigando como emi- Ahora bien, no se percibe desde este punto nentemente políticos. Es decir, investigamos sólo de vista que estamos haciendo una especie de “concesión de parte” a favor de lo instituido, y 1 Trabajo presentado como informe final de la investigación estamos reificando aquello que no es más que el realizada para la carrera de Doctorado en Ciencias Sociales, resultado histórico de una determinada corre- con mención en Ciencia Política y Administración, inti- tulado Sujeto, Ontología Política y Estado: Elementos para una lación de fuerzas que ha estabilizado (por medio Teoría Política en clave emancipatoria a partir de Alain Badiou, de una serie de instituciones específicas) los “ca- Ernesto Laclau y Franz Hinkelammert” (UNCUYO, 2016). nales normales” por los que circula la política.

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... [ 148 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar De este modo, cuando asumimos el empirismo Esto ocurre por ejemplo, cuando asumimos inmediato como mirada puede quedar ciega a el enfoque teórico-metodológico individualista dos cuestiones: y tomamos como punto de partida o supuesto básico la existencia de individuos, la racionalidad ◊ podemos perder de vista la propia genealogía instrumental de los mismos para maximizar de enfrentamientos políticos y de relaciones sus preferencias, etc. Estos presupuestos, en de poder que produjo/produce/reproduce la caso de ser explicativos de algún fenómeno política como fenómeno específico que se político específico, quizás lo son porque el propio encuentra sometido a las reglas que rigen fenómeno está configurado de esa manera; pero el campo político, tal y como éste último ha esa configuración originaria del fenómeno es un sido instituido por la formación social en aspecto político central que queda inadvertido cuestión. Es decir, perdemos de vista la diná- cuando se asume acríticamente este punto de mica instituyente que subyace y soporta el vista teórico-metodológico. orden instituido, cualquiera sea este orden Se trata de un problema de enfoque. Algo instituido, y que define las instituciones que similar a esa advertencia que efectuaba Rousseau organizan la actividad política como tal. en su Discurso sobre el origen de la desigualdad ◊ podemos perder de vista las dinámicas polí- entre los hombres, y que podríamos llamar el ticas que pudieran circular por fuera de los recaudo epistemológico rousseauniano, cuando canales políticos “normales”, es decir, la poli- afirma elípticamente, pero en clara referencia a ticidad que puede expresarse en aquellas las producciones de Hobbes y de Locke, que todo prácticas sociales que no se inscriben direc- lo que estos han dicho del hombre natural en tamente en el ámbito de “la política”2. realidad no nos dice mucho de la naturaleza del hombre sino que son atributos o características b) En segundo lugar, incluso en aquellas oca- que pueden predicarse perfectamente del hom- siones en las que sí se reconoce que la politicidad bre civil, tal y como este aparece y ha sido mol- es un fenómeno o dimensión de la vida social que deado por las sociedades europeas de su tiempo. excede el ámbito de lo que ha sido instituido como Es decir, toman como punto de partida para “la política”, las limitaciones en el abordaje del explicar el fenómeno político algo que ya es re- fenómeno político pueden venir de la mano de los sultado contingente de un proceso político. abordajes teórico-metodológicos que utilizamos Específicamente nos dice Rousseau (2004): normalmente en nuestros estudios políticos. Es decir, incluso cuando logramos evitar la Los filósofos que han examinado los fun- limitación que supone asumir el “recorte ontoló- damentos de la sociedad han sentido todos gico” de nuestro objeto de estudio; es decir, la necesidad de remontarse hasta el estado incluso cuando encontramos que la política (o natural, pero ninguno de ellos ha tenido la politicidad, para ser más precisos) puede even- éxito… todos, hablando sin cesar de necesi- tualmente manifestarse en cualquier punto del dad, de codicia, de deseos y de orgullo, han tejido social, en cualquier momento de cualquier transportado al estado natural del hom-bre práctica social; incluso en estos casos, puede las ideas que habían adquirido en la sociedad: ocurrir que el enfoque teórico-metodológico que todos han hablado del hombre salvaje a la vez adoptemos nos lleve a naturalizar o reificar parte que retrataban el hombre civilizado. (p. 26) de lo que se presenta en el fenómeno que esta- mos estudiando y por tanto puede llevarnos a Es decir, muchos de los conceptos de los perder de vista una parte o aspecto relevante del enfoques teórico-metodológicos que utilizamos fenómeno político. en nuestras investigaciones (teorías vinculadas En estos casos nuestras limitaciones provienen al individualismo metodológico, a los enfoques de adoptar lentes teóricas que implican un sistémicos, institucionalistas, comparatistas punto de vista que asume que alguna porción o marxistas, entre otros) pueden llevarnos si o dimensión de lo que allí se presenta en el no son utilizados con suficientes precauciones fenómeno político estudiado es, de partida, un epistemológicas a hipostasiar dimensiones o aspecto no político: es decir, asumir como dato a aspectos del fenómeno político (instituciones, priori de cualquier análisis, que algo o parte de lo comportamientos o modos de vida) que por más que se presenta en el fenómeno político no es el sólidos y permanentes que aparezcan no son más resultado de luchas y confrontaciones históricas que eventuales y contingentes. entre diversos actores políticos. Muchas veces se toma como punto de partida, 2 Rinesi y Nardacchione han señalado que la incapacidad “como dato duro”, algún aspecto de la realidad o que mostraron los estudios politológicos para pronosticar del fenómeno estudiado cuya politicidad también la profunda crisis que sufrió el sistema político argentino debiera ser explicada o al menos problematizada en 2001 y para dar cuenta de la miríada de formas de en el estudio que se está realizando. politización popular que irrumpieron en la escena pública a En este caso, los puntos ciegos de nuestra partir de esas jornadas, constituyen un claro síntoma de este tipo de limitación que se produce en la construcción de la mirada científica proviene de los conceptos que mirada disciplinar sobre los fenómenos políticos (Cfr. 2007). la configuran. Permanece invisibilizada la poli-

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 149 ] ticidad que habita nuestros conceptos y que de los fenómenos estudiados que de otra ma- subyace silenciada en aspectos relevantes del fe- nera permanecerían invisibilizados es preciso nómeno político estudiado. incorporar explícitamente un momento ontoló- Para evitar entonces este doble problema: el gico en la investigación que resulte útil para de los puntos ciegos que se producen por vía de realizar una permanente “vigilancia epistemoló- la ilusión del “recorte ontológico” de “la política” gica” sobre la presencia de esos puntos ciegos y el de los puntos ciegos que se producen por en nuestras investigaciones. Según nuestra vía de ciertas naturalizaciones que pueden al- perspectiva, para que ese momento de reflexión bergar los “enfoques teórico-metodológicos” ontológica sea productivo en la crítica de estos que asumimos; para construir un enfoque que obstáculos precisamos postular una radical nos permita alumbrar aspectos de la politicidad plasticidad ontológica de la realidad.

La ontología en Badiou: herramientas para postular la plasticidad ontológica como punto de partida de nuestras investigaciones

l sonido que hacen las teclas ahora cuando Alain Badiou propone pensar el problema on- Eescribo. El plazo perentorio de las horas. Las tológico por fuera del registro metafísico que po- estaciones. La partida chirriante de los trenes ne a lo uno en el origen de todo. Pero para ello rumbo a las oficinas. El ciclo sempiterno de los no adopta una actitud nostálgica, tal como la que planetas, los noticieros de la mañana, las indes- muestran algunas filosofías contemporáneas que criptibles multiplicidades de la naturaleza. Las rondan el motivo de la finitud y del desamparo horas y las estaciones nuevamente. Las revolu- humano frente a la pérdida de lo uno. Por el con- ciones políticas. Los libretos, los ensayos gene- trario, Badiou propone pensar este asunto con rales, la ciencia. La muerte de las guerras. La in- un talante distinto, entusiasta, afirmativo, audaz, soslayable muerte de los días. La muerte de Dios; ¿moderno?, a fin de restituir la infinita potencia su interminable ausencia. Los renglones torcidos. del sujeto político, pero por fuera de la tutela Las trincheras de ideas. La perennidad de los ár- final de la lógica de lo uno. boles. Y de las piedras. Y las piedras mismas. Y El punto de partida para eludir la primacía del la memoria de los elefantes. El bar de la esquina. uno es pensar ese fondo común como un múl- Todo está aquí. tiple puro, o múltiple sin-uno. Lo que hay: una Aquí es el problema. multiplicidad inconsistente. Una multiplicidad de ¿Qué podemos decir?, ¿qué podemos pensar de multiplicidades, una superficie en la que reina una un “aquí” que reúne una colección de singulares pura vibración diferencial sin punto de detención. tan disímiles?, ¿cuál es la argamasa que aglutina ¿Qué significa una multiplicidad sin uno? tales disparidades?, ¿de qué manera se salda la dis- En primer lugar, que el múltiple puro no en- tancia abisal que hay entre ellas?, ¿cómo ocurre cuentra ningún límite inmanente. Es decir, la que el “aquí”, tan heterogéneo y disperso, se pre- multiplicidad pura, o multiplicidad que despliega el senta como algo consistente, como “un” aquí? recurso ilimitado del ser como evitación de la potencia Para responder estas preguntas no alcanza con del uno, no puede adquirir consistencia por sí misma” averiguar lo que cada uno de los singulares que (Badiou, 2002:28). Esto quiere decir que lo múltiple se presentan aquí es. No alcanza con desentrañar se despliega ilimitadamente sin que ninguna parte aquello que justamente los singulariza. Como de esa multiplicidad se pueda recortar por su resultado de una tarea tal, aun en caso que tu- propia consistencia interna como unidad frente viésemos un éxito rotundo, no tendríamos más al resto. O, dicho de otro modo, lo múltiple puro que una colección de saberes disciplinares espe- jamás está compuesto de unos. La multiplicidad no cíficos, incapaces de responder sobre aquello que está compuesta más que por multiplicidades, las hace que esos varios singulares estudiados con- cuales, a sí mismo, reúnen otras multiplicidades. sistan en un “aquí”. Y así, ad infinitum: en ausencia de lo múltiple no hay Para pensar el “aquí” es necesario estudiar pri- nada (Badiou, 2002:29). mero el fondo común desde el cual emergen esas Ahora bien, según Badiou, un pensamiento de singularidades. La ontología, ciencia del ser en lo múltiple sin uno no nos permite recurrir al ca- tanto que ser, es el esfuerzo teórico por indagar mino de las definiciones para aprehender lo múl- sobre ese fondo común del aquí y sobre su modo tiple: el terreno de la definición es justamente el de aparecer. reino de lo uno. Por ello, la ontología se halla, para

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... [ 150 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar este autor, en la difícil situación de tener que exponer Este autor nos provee de herramientas muy el carácter pensable de lo múltiple puro sin poder precisas para pensar el ser en tanto que ser, decir en ningún caso cuáles son las condiciones que antes de que aparezca como ser ahí de manera permiten reconocer a lo múltiple como tal (Badiou, consistente, articulado y modulado por las 2002:30). Asumir una definición o algún principio determinaciones que organizan el mundo en implicaría abandonar la exposición de lo múltiple el cual aparece. Creemos que este aspecto del en la pura inmanencia de su multiplicidad y forzar trabajo de Badiou, las herramientas que brinda un orden, un límite, el retorno del uno. para el momento ontológico de una investigación La propuesta teórica badiouana nos muestra son pertinentes para problematizar nuestras con una pedagogía formidable algunos senderos investigaciones y hacer aparecer en ellas las posibles para realizar el ejercicio de pensar esto diversas politicidades inherentes a los fenómenos problemas propios de la reflexión ontológica en el estudiados y a los conceptos con los que los ámbito de las investigaciones políticas (2008). producimos como objetos de estudio.

Hipótesis para pensar un fenómeno político específico con estas herramientas ontológicas

omemos como punto de partida una situa- esos términos, registrándolos civilmente, inscri- Tción social concreta. Pensemos que nos en- biéndolos bajo la figura jurídica de persona, enti- contramos con una cierta formación social que dad abstracta susceptible de ejercer derechos y presenta sus miembros como individuos. Es contraer obligaciones en sus actos. decir, una sociedad en la cual esa multiplicidad de Cualquier irrupción política susceptible de lo humano, que podría organizarse bajo diversos hacer aparecer el múltiple inconsistente que so- modos para aparecer, se muestra específicamente porta esa presentación de individuos, cualquier como conjunto de individuos. Ni más, ni menos movimiento susceptible de poner en cuestión el que la forma regular de organizarse que muestran régimen de distribución de identidades indivi- las sociedades contemporáneas. duales de la situación social vigente, puede ser Ahora bien, eso de lo humano que se presenta reconducido, limitado y puesto en su lugar a bajo un régimen de distribución individual de partir de la instancia de representación estatal. identidades, es representado en el nivel estatal Es decir, para cualquier forma práctica, ya sea como ciudadanía. Es decir, los individuos que se que produzca o no la inconsistencia de la pre- presentan en esa sociedad son representados por sentación individual, hay un nombre en la re- el Estado como personas (entidades jurídicas). Sin presentación que puede capturarla y ubicarla embargo, el tratamiento que realiza el Estado bajo ordenadamente para mantener la consistencia la figura jurídica de la ciudadanía no se ajusta es- de la formación social. Un claro ejemplo de esta trictamente al modo tal como se presentan los función estatal puede observarse en la pretensión individuos. La representación jurídica no trata a de aplicabilidad universal que caracteriza el los individuos en función del múltiple infinito que sistema jurídico moderno: el derecho procura ser cada uno de ellos es (la infinitud inaprensible de un instrumento capaz de subsumir en sus pro- una vida), sino que trata con ellos como elemen- pios términos cualquier realidad humana que tos o partes de una formación social, con su es- se presente para decidirla, resolverla, asignarle tatuto jurídico, su distribución de derechos y obli- el lugar justo. El trabajo que el derecho realiza gaciones, de lugares y funciones. El individuo se a través de sus operadores implica siempre una representa en el Estado como persona jurídica: la determinación de las responsabilidades y de representación abstrae completamente el múltiple las obligaciones que emergen en una situación; y se queda con su figura. Nos preguntamos en este la propia determinación de esto supone la punto si acaso sería posible pensar la existencia existencia de entidades en la situación sobre o siquiera la idea de una administración estatal las cuales pueda deslindarse o imputarse una de justicia si aquello con lo que trata el estado responsabilidad. Esa entidad universalmente es considerado en la infinita particularidad de supuesta es la persona, representación jurídica cada uno de los individuos que se presentan del individuo: cuando algo se sale de la cuenta en una situación social. La cuenta-por-uno que por uno de la presentación individual, surge el la presentación de la situación histórico social reaseguro del derecho para justipreciar esa apa- hace del múltiple de múltiples que compone cada rición irregular en la situación social y forzar el individuo aparece reasegurado por la segun-da retorno de las cosas a su lugar. Cuando se produce cuenta que el Estado realiza sobre cada uno de un acontecimiento político en el cual aquello

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 151 ] que en el nivel ontológico es un puro continuum de violencia que atraviesa la vida del barrio los de multiplicidades irrumpe en la escena e inte- días 19 y 20 de diciembre de 2001, o es en realidad rrumpe la cuenta de los unos, el derecho y sus un pasaje más de una línea de intensidad que operadores son los encargados de establecer los viene de antes? Si esto último es cierto, ¿hasta cortes precisos para preservar el principio de in- dónde se extiende esa línea de intensidad?, ¿hay dividuación en esa formación social. conexiones entre la violencia de ese hambre que Si tenemos en cuenta las consecuencias que sufren los vecinos del barrio y la violencia de la se desprenden de este ejercicio de revisión onto- dictadura de 1976? ¿no están hiladas sus inten- lógica que proponemos de una situación social sidades?, ¿y qué decir respecto de la violencia en la que se presenta lo humano como conjunto que se oculta tras la inconmensurable venalidad de individuos, resulta evidente -por ejemplo- que de los operadores políticos y económicos del ré- asumir el individualismo metodológico como gimen neoliberal vigente en esos años? ¿y qué punto de partida de nuestras investigaciones decir también de esa misma violencia, habitando conlleva algunas complicaciones. En ese caso, solapada en el consenso que prestaron gozosos ya desde un principio estaríamos haciendo una los coetáneos que tenían la suerte de no caerse concesión de parte a favor de la estructura jurí- del mapa durante esa década?, ¿hasta dónde po- dica que ordena esa formación social y cuya po- drían extenderse los vectores de continuidad de liticidad implícita no resultaría problematizada. esa múltiple trama de violencias? Pensemos en la línea de intensidad, en el forza- Quizás la aparición en la calle de esa masa miento violento que atraviesa la superficie social amorfa dispuesta a saquear pueda pensarse argentina durante los sucesos de diciembre como la interrupción momentánea del principio de 20013. Específicamente situémonos el día 19 de individuación que organiza la situación social. de diciembre en el distrito de Tres de Febrero Quizás esa interrupción se produjo por la aparición (Buenos Aires) en las calles del barrio de Ciuda- fugaz de una serie de intensidades violentas que dela. Esa mañana, la irrupción de una multitud atravesaron largamente, y desde largo tiempo, de saqueadores descompone la escena habitual la superficie de la vida social argentina. Frente a de la vida social conurbana. La situación que or- ello, el sistema de representación estatal tuvo que ganizaba la vida en la ciudad hasta ese momento intentar reordenar la situación para garantizar se muestra inconsistente. Algo, que no ha sido el régimen de la presentación individual de lo so- contado por uno en la situación, se presenta cial. Tuvo que recortar esas líneas de intensidad, adusto y violento. Es la violencia de la nueva fragmentarlas, forzarlas para que reaparezcan escena que se configura, en la cual un tumulto en ellas las entidades susceptibles de imputación de pobladores saquea y destruye todo lo que en- de responsabilidades. cuentra en el supermercado chino de Avenida El centro del asunto se focaliza en la violencia Gaona al 4200. que tuvo lugar efectivamente el día del saqueo. Pensada en su infinita multiplicidad, la Hacia atrás, hacia el pasado de esa irrupción de violencia que aparece en el saqueo y en el llanto intensidades, el proceso debe ser cortado. Los desconsolado del supermercadista Whan Chon operadores del Estado no indagan sobre las res- Ju, teje su propia historia de intensidades y se ponsabilidades de la violencia que hubo en la muestra el ápice ínfimo de una trama infinita producción del hambre. No siguen la genealogía de violencias que la constituyen. Hay un vector de esa trama de violencias. Tampoco hacia ade- de violencia, una línea de intensidad que va, lante el Estado tiene para decir: ese territorio por poner un corte arbitrario, desde la violencia corresponde a la política. El Estado recorta esa del hambre y de la indigencia a la que se ve multiplicidad de intensidades que implicó la reducida la vida de los habitantes de ese barrio, ruina de la formación social argentina y la cir- hasta la violencia que se manifiesta en la turba cunscribe estrictamente al día 19 de diciembre, saqueadora del supermercado en el que, hasta y a los hechos ocurridos en la Avenida Gaona el día anterior, esos mismo vecinos adquirían en Ciudadela. Luego, a través de una simple sus vituallas conforme los usos y costumbre operación judicial, y merced a la condición regulares del intercambio mercantil cotidiano. de significante universal que se le da al Código Ahora bien, ¿dónde empieza esa línea de inten- Penal, procede a imputar individualmente res- sidad? ¿El hambre de los pibes de Ciudadela es ponsabilidades a quienes participaron del saqueo el origen absoluto, el creador ex nihilo del vector por la comisión de un delito4. Si se extiende la imputación de responsa- 3 Los hechos que aquí exponemos para ilustrar cómo se bilidades a lo largo de toda la línea de intensidad, interpretarían desde una lectura badiouana pueden en- si se intenta forzar el derecho para que reabsorba contrarse con mayor detalle en el trabajo de María Rosa toda esa violencia múltiple, se llevaría el sis-tema Neufeld y María Cristina Cravino, Entre la hiperinflación y la devaluación: “saqueos” y ollas populares en la memoria y trama jurídico a encontrarse con su propia inconsis- organizativa de los sectores populares del Gran Buenos Aires tencia. Sería el intento absurdo de querer repre- (1989-2001). Publicado en Cravino, M. Ed. (2007). Resistiendo en los barrios. Acción colectiva y movimientos sociales en el Área 4 Durante esas jornadas hubo alrededor de 860 saqueos y Metropolitana de Buenos Aires. Buenos Aires, UNGS. cerca de 3780 detenidos.

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... [ 152 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar sentarlo todo5. Si, por el contrario, se decide Maximiliano Kosteki derrumbado en el suelo suspender el deslinde de responsabilidades, se por los disparos policiales es una clara muestra confirma la ruina del orden social que producen de la potencia del Estado para establecer un los hechos de diciembre de 2001, la inconsistencia corte. Maximiliano Kosteki es separado violenta- del modo “normal” de presentarse la vida humana mente del cuerpo colectivo que había com- en esa formación social; la recomposición de la puesto en las calles. La potencia política del situación descansa entonces en forzar un corte cuerpo de Maximiliano Kosteki para entrar a en las líneas de intensidad para circunscribir formar parte de un colectivo es cercenada por el el evento, imputar responsabilidades a quienes terrorismo policial. Pero la fuerza represiva va intervienen allí y forzar la reconversión de esa más allá. Incluso la infinitud del múltiple que multitud en un grupo de individuos-personas particularmente es Maximiliano Kosteki como susceptibles de imputación; poner a esos sujetos individuo acaba amputada por el corte policial. nuevamente en caja. Ni infinitud colectiva, ni infinitud individual. El Claro está que, en la mayoría de los casos, corte es altamente eficaz. Al final queda un cuerpo como en este que estamos reseñando, no resulta absolutamente separado del resto. Un cuerpo ensi- necesaria la intervención efectiva y directa de la mismado. Un cuerpo reducido a su pura finitud. fuerza del Estado sobre todos los términos de la Maximiliano Kosteki yace muerto en el piso. situación. En efecto, muchas veces ocurre que el Los dispositivos represivos de la estructura hecho de poner en caja una parte del múltiple que jurídica que soporta una formación social, rease- hizo irrupción en el acontecimiento alcanza para guro que garantiza la consistencia de la situación, que la amenaza cierta que muestra la potencia puede reposar en paz. Nuestras metodologías del Estado fuerce el reordenamiento de toda la tradicionales, también. Para el individualismo situación social previamente conmocionada. metodológico -por ejemplo- ese hiato que pro- La secuencia de militantes que caen abatidos a duce la irrupción del 19 de diciembre, esa manos de las fuerzas policiales que va desde los multiplicidad de líneas de fuerza, esa miríada asesinatos de las jornadas del 19 y 20 de diciembre de intensidades múltiples que se extienden in- de 2001, hasta los de Kosteki y Santillán en la Es- determinadamente hacia el pasado y hacia el tación Avellaneda el 26 de junio de 2002, quizás resto de la formación social en cuestión, nunca dibuje una línea que sea un ejemplo de ello. La tuvo lugar. Desde ese pun-to de vista teórico- represión implica un forzamiento para que la in- metodológico se trató siempre de una “anomalía” finitud que aparece con la multitud en las calles producida por la sumatoria de comportamientos vuelva a su lugar. individuales. El corolario final del proceso de intervención del estado que fuerza la re-indivi- 5 Tal como en el cuento Del rigor de la ciencia, en el que duación del múltiple emergente, como si se Borges narra el absurdo intento de aquel emperador que tratara de un resultado natural y no político, quería representar exactamente el territorio; mapa que termina coincidiendo exactamente, punto por punto con el vendría a confirmar la “adecuación” entre el en- territorio (Borges, 1974:847). foque asumido y “la realidad”.

Conclusiones parciales

firmamos al comienzo de este trabajo que lidad social antes que el trabajo de modulación Aexisten una serie de obstáculos epistemo- de las mediaciones institucionales y el de las lógicos que regularmente afectan nuestros prácticas políticas instituyentes de los sujetos estudios políticos y no nos permiten apreciar tengan lugar. Es decir, qué podemos predicar de cabalmente la politicidad que habita en los fenó- ese mundo social, antes que el poder moldeador menos políticos que estudiamos. A partir de ello de instituciones y sujetos le brinden una deter- hicimos un recorrido sucinto por las reflexiones minada forma, relativamente consistente y ontológicas de Alain Badiou y formulamos un articulada. ejercicio hipotético de trabajo sobre un fenómeno ¿Podemos decir algo del mundo antes de eso? político específico asumiendo estos presupuestos Es importante preguntarnos esto en las investi- ontológicos. gaciones de los fenómenos políticos porque “eso” Planteamos la relevancia de tener en nuestras que podemos decir constituiría un dato pre- investigaciones políticas un momento explícito político (el a priori no problematizado) con que se de reflexión ontológica porque ello nos lleva a encuentra la politicidad (en tanto dimensión de preguntarnos qué podemos predicar de la rea- las prácticas sociales vinculadas a la posibilidad

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 153 ] de moldear, darle forma a la vida social). Iden- (y de cualquier elemento que se presente en ella) tificar qué de aquello que se presenta allí, en no es natural, sino el resultado de relaciones de el fenómeno político que queremos estudiar, poder que resulta preciso desentrañar. no está siendo trabajado por el poder; es decir, La reflexión badiouana sobre el problema on- identificar aquello cuya presentación no está tológico es una llave pertinente para realizar el moldeada por el poder que ejercen instituciones ejercicio de embragar el trabajo de lo instituido o eventuales sujetos políticos sobre la vida social. sobre eso que se presenta en el fenómeno estu- Aclarémonos un poco en este punto. Para diado. Este momento nos permite realizar el cualquier estudio sobre lo político el fenómeno ejercicio especulativo de suspender la vigencia de del poder y su papel en la construcción de las cualquier forma social para pensar el campo so- relaciones sociales es un aspecto central que de cial como una pura dispersión de intensidades sin manera directa o indirecta exige ser tematizado. consistencia alguna es una instancia altamente Comenzar una pesquisa sobre un fenómeno polí- productiva en una investigación politológica, tico cualquiera sin pasar por un momento de tanto para la explicación de los fenómenos polí- ejercicio de reflexión ontológica, tal como el que ticos estudiados, como para la teorización que propone Badiou, puede inducirnos a hipostasiar pueda surgir a partir de ellos. parte de lo dado, a naturalizar lo que se presenta Encontramos en estas herramientas una ins- de manera consistente (contado por uno) en tancia práctica de vigilancia epistemológica para nuestro objeto de estudio. De este modo, puede nuestra investigaciones que sirve para percibir ocurrir que pase desapercibido a nuestra mirada con mayor precisión cómo el poder está ya pro- el trabajo que el poder, bajo la forma de sedimento duciendo eso que se presenta parcialmente institucional o de una emergencia subjetiva, consistente en nuestro objeto de estudio y, para- está realizando para hacer consistir eso que se lelamente, para que tengamos mayor claridad presenta en un fenómeno político. Es decir, sin respecto al modo en que ese trabajo del poder la instancia de reflexión ontológica corremos habita en los conceptos que utilizamos para desa- el riesgo de que parte del trabajo que el poder rrollar en nuestras pesquisas. realiza sobre el fenómeno que nos proponemos Empezar a construir nuestro objeto de estudio estudiar permanezca invisible a nuestra mirada. a partir de un fenómeno político cualquiera pa- Frente a cualquier fenómeno político que nos sando por una instancia de reflexión ontológica propongamos estudiar entonces, demorarse en bajo el axioma badiouano lo uno no es puede re- una primera reflexión sobre nuestro objeto de es- sultar fructífero en este sentido. Es decir, tomar tudio bajo las prescripciones que propone Badiou como punto de partida de nuestras investigaciones para pensar la cuestión ontológica, nos conduce a un ejercicio de sospecha sobre lo que aparece en concebir aquello que se presenta en una situación el fenómeno que abordaremos como objeto de política de manera consistente como el resultado estudio; sospecha que esté orientada por el axio- del constante trabajo productivo del poder. Si el ma que afirma queel ser en tanto que ser, antes del axioma ontológico de Badiou nos dice que lo uno trabajo de cualquier mediación institucional que no es; la consecuencia epistemológica que de allí se le brinde consistencia y lo haga aparecer como ser- deriva para el estudio de los fenómenos políticos ahí o fenómeno, es pura dispersión múltiple, infinita es que la consistencia de una situación política multiplicidad inconsistente de multiplicidades.

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... [ 154 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibliografía

Bachelard, G. (2000). La formación del espíritu no publicada). Universidad Nacional de Cuyo, científico. Contribución a un psicoanálisis del Mendoza, Argentina. conocimiento objetivo. Buenos Aires, Siglo XXI. Neufeld R. y Cravino M. (2007). Entre la hiperin- Badiou, A. (2002). Breve tratado de ontología tran- flación y la devaluación: “saqueos” y ollas po- sitoria. Barcelona: Gedisa. pulares en la memoria y trama organizativa de ------(2008). Lógicas de los mundos: el ser y el los sectores populares del Gran Buenos Aires acontecimiento, 2. Buenos Aires: Manantial. (1989-2001). En M. Cravino, (Ed.) Resistiendo Borges, J.L. (1974) Obras completas. Buenos Aires: en los barrios. Acción colectiva y movimientos Emecé. sociales en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Cuervo Sola, M. (2013) “La torsión política del Buenos Aires: UNGS. concepto de verdad en Michel Foucault”. Rinesi, E. y Nardachionne, G. (2007). Prólogo. Estudios de Epistemología, Nº X, Universidad Teoría y práctica de la democracia argentina. Nacional de Tucumán. En E. Rinesi, G. Nardachionne y G. Vommaro ------(2016), Sujeto, ontología política y Estado: (Eds.) Los lentes de Víctor Hugo. Buenos Aires: elementos para una teoría política en clave UNGS-Prometeo. emancipatoria a partir de Alain Badiou, Ernesto Rousseau, J.J. (2004) El origen de la desigualdad Laclau y Franz Hinkelammert (tesis doctoral entre los hombres. Buenos Aires: Leviatán.

Manuel Cuervo Sola | Plasticidad ontológica y construcción del objeto de estudio... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 147-155 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 155 ]

Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas para una historia de las ideas de las mujeres del Sur

Mariana Alvarado (Argentina) INCIHUSA - CCT – Mendoza [email protected]

Fecha de recepción: 30-09- 2016 Fecha de aceptación: 02-03- 2017

Resumen Abstract cercarnos al pensamiento que algunas muje- pproaching some Latin American women’s Ares han generado en Latinoamérica, especial- Athoughts, especially from Peru and Argentina, mente en Perú y Argentina, puede contribuir a may contribute to explain the construction of explicar la construcción de la sujeto de Nuestra the female subject of Our America as an emer- América como emergente de un andar asintótico gence of the asymptotic way of Latin American entre las preocupaciones fundamentales del fe- feminism between its fundamental concerns and minismo latinoamericano desde su propio desa- the paradigms imported from other regions of rrollo y los paradigmas importados de otras the world. The attempt to revert the invisibility regiones del mundo. El intento por revertir la and marginalization of the production of invisibilidad y la marginalidad de la producción women, named as “third world women” by the de las mujeres nombradas por occidente como West, cannot be solely the recovery of names mujeres del tercer mundo, no puede residir sólo en and works forgotten by tradition, or the repor- recuperar nombres y obras olvidadas por el canon ting of phallogocentric oblivion and the biased denunciando el olvido falogocéntrico y la mirada patriarchal production. It is necessary to stop sesgada de la producción patriarcal. Es preciso at that exclusion and the harmful ways in detenernos en esa exclusión y en los modos en which it is expressed. I particularly want to los que se expresa. Particularmente quiero poner reassess “women’s experiences” as a knowledge- en valor las “experiencias de mujeres” como generator “point of view”, in and from the South, “punto de vista” generador de conocimiento en for a history springing “from the bottom”, which y desde el Sur para una historia “desde abajo” will open new areas of historical research in each que abra nuevas áreas de investigación histórica “episode” -sensu Gramsci- or “restart” -sensu en cada “episodio” -en sentido gramsciano- o “re- Roig- or, even better, in each “interruption” comienzo” -en sentido roigiano-, mejor aún, en -sensu Ocampo- that it names. cada “interrupción” -en el sentido de Ocampo- que nombra. Hacer visibles los discursos de mujeres en Keywords: Woman’s experience, Point of el marco de una ensayística propia, es una ta- view, Subject’s positions, Latin American femi- rea que requiere en principio de una labor de nist epistemology recopilación y de invención de los cuerpos de expresión -en términos gaosianos- pero además

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 157 ] supone un volver a leer de nuevo de otro modo a las que pudieron/quisieron tomar la palabra desde el Sur. En esta línea, fue posible formular la pregunta por la experiencia de las mujeres en el lugar de la palabra formulada desde el Sur. Las respuestas intuidas me llevaron a una vía de investigación que liga en el cuerpo las marcas de la clase, la lengua, el contexto, los legados, la ubicación geográfica y sitúa en la piel el saber que se juega en las posiciones de la sujeto.

Palabras claves: Experiencia de mujer, Pun- to de vista, Posiciones de sujeto, Epistemología feminista latinoamericana

Ausencias/ pensadoras /matriz moderna capitalista patriarcal/ mujeres de América latina /

tender a los modos en los que la filosofía ha percepciones, intereses, necesidades, afecciones. Asido institucionalizada en América Latina Entendía que era imposible hacer una historia de supone dar cuenta de los discursos fundantes las ideas en sí, por sí solas, ajenas a lo humano. que instalaron la normalización con nombres de Asumía que las ideas se presentan concretas varones (Alvarado, 2014). Tal normalización ha en los hombres que las piensan. Las ideas son silenciado, invisibilizado y encubierto los pen- humanas, afectan humanamente y sus efectos sares de mujeres del Sur del Río Bravo1. son corporizados. En los términos de Gaos, Hago aquí alusión al término “pensadora” todos los hombres son sujeto de ideas, de allí -ampliando lo referido por José Gaos- para que hayan sujetos profesionales de las ideas, los nombrar(nos) a las mujeres del Sur. Gaos (1969) pensadores, los especialistas de ideas. Este detalle afirmaba la historicidad de las ideas y de los no es menor puesto que en este marco quienes sujetos que las piensan atravesados por sus hacen historia de las ideas, no son historiadores, tampoco filósofos, son pensadores ocupados en la 1 Para muchas de nosotras, para quienes pensar es un modo de hacer, caben formas de activismo que encuentran su lugar materialidad de las ideas humanas. en la academia, así como dimensiones de la militancia que Cabe, entonces advertir sobre el sistema sexo- encuentran su tiempo en la institucionalización de ciertas género y visibilizar que hombre/humano ha re- prácticas. En el I Encuentro de Investigadoras e Investigadores ferido -y aún refiere- a varón -blanco, hetero- en Estudios de Género, Mujeres y Teoría Feminista realizado sexual, intelectual con los privilegios que estas en Mendoza desde el IDEGEM, Alejandra Ciriza respondía -con la ironía que la caracteriza- a los silenciamientos aca- posiciones de sujeto le confieren- y que, si bien démicos actuales, visibilizando la trayectoria de los estudios Gaos pretendía situar esa materialidad haciendo feministas de género y mujeres, tanto a nivel nacional, espacio a diversas voces, “pensador” supone como en la UNCuyo, apelando a la genealogía de nuestros hombre y, hombre refiere a un tipo de varón que lugares, los de las mujeres del sur, en la academia. Aludió se impuso como norma a propósito de sus pri- entonces a UFA, CENET, CEDES saberes acumulados en tiempo de reclusión obligada, espacios colectivos que vilegios de raza, clase, género. formaron parte de lo que Eva Gilberti llamó la cultura de Aun así, la misma argumentación gaosiana, catacumbas durante la dictadura de los 70 en Argentina. radicalizada, permite incorporar los cuerpos de las Pero también aludió a la creación de la Secretaría de la mujeres por fuera de la categoría mujer -y del mito mujer, al Centro de Estudios Históricos Interdisciplinarios de la mujer2 que esa categoría supone en cuanto sobre las Mujeres de la Universidad Nacional de Tucumán, al Área Interdisciplinaria de Estudios de la Mujer de la UBA un universal con el que se operan reducciones, a partir del cual se crea luego el Centro Interdisciplinario simplificaciones, homogeneizaciones e imper- de Estudios de Género, al Instituto Interdisciplinario de meabilizaciones- en la interseccionalidad3 de clase, Estudios de la Mujer de la Universidad Nacional de La género, raza, sexualidad como pensadora situada Pampa. Aludió también a las dos revistas mejor indexadas en Argentina: de la Universidad Nacional de Comahue y de 2 Puesto que no nacemos hombres pero tampoco mujeres, la Universidad Nacional de La Pampa depende la edición somos efecto de lo que las sociedades han hecho con nosotrxs, de La Aljaba, mientras que Mora es editada por Estudios de los cuentos que nos cuentan y de lo que hacemos con esos Interdisciplinarios de estudios de género. La primera cuentos. maestría en estudios de género de nuestro país fue la de la 3 Interseccionalidad -viene del feminismo de color de EEUU- Universidad Nacional de Rosario. La Universidad Nacional desenmascara la lógica categorial que se presenta como de Cuyo cuenta con el IDEGEM. (16 de setiembre de 2016, conteniendo a todas las mujeres. En términos de María CICUNC, Cilindro Sur). Lugones, fusión.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... [ 158 ] RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar y comprometida. Pensadora y no intelectual4. no somos todas las mismas. En este sentido, el Pensadoras comprometidas como incluso constructo complejiza la trama epistémica en las argentinas Juana Manuela Gorritti, Josefina tanto quiebra el sujeto mujer (universal) y lo Pelliza Sagasti, Marta Traba, Herminia Brumana, singulariza en el lugar de referencia para situar a María Rosa Oliver o Hebe Clementi; las chilenas la producción discursiva en el borde de una com- Inés Echeverría de Larraín, Gabriela Mistral y prensión totalizadora de la mujer hacia un locus Julieta Kirkwood; las peruanas Flora Tristán, geopolítico, el Sur, Nuestra América, Abya Yala. Maria Jesús Alvarado Rivera, Clorinda Matto El constructo liga con ciertas genealogías que de Turner, Mercedes Cabello de Carbonera, despliegan un modo de solidaridad con algunas Margarita Práxedes Muñoz, Teresa Gonzalez de las mujeres, aunque no con todas, apenas con de Fanning, Carolina Freire de Jaimes o Magda esas otras a aquellas -las otras de las occidentales Portal; la cubana Gertrudis Gómez de Avellaneda; blancas del norte incapaces de advertir sus com- la colombiana Soledad Acosta de Samper, la plicidades con el capitalismo patriarcal, racista, mexicana Rosario Castellano o la dominicana- neocolonial (bell hooks). Ellas, nosotras, algunas, cubana Camila Henríquez Ureña no han sido las subordinadas, las subalternadas. consideradas en las compilaciones de las ideas Ese mismo constructo que sitúa y liga, ancla en de América Latina. Olvido -intencional- que no la posibilidad de pensar si para luchar contra el radica en la insignificancia de los aportes desde patriarcado hay que ser o no la sujeto producido el Sur sino en la matriz moderna-occidental- y sujetada por ese régimen de opresión como si colonial-patriarcal que las evita, las silencia5. efectivamente cupiese la posibilidad de devenir La inquietud, en este primer apartado, refiere otra, como si fuese posible colocarnos fuera del al constructo mujeres de América Latina, mujeres sistema y de sus efectos en nosotras para pensar latinoamericanas, pensadoras de Nuestra América, las sujetos que produce. pensadoras de Abya Yala o escritoras del Sur. Esta Así apenas esbozada esta inquietud, el cons- inquietud con la que estoy comprometida pre- tructo, se(me) perfila contra la colonialidad del gunta por la sujeto de ciertos discursos que género y contra el racismo de género para resituar pueden considerarse feministas, por el lugar de la(mi) producción como una mujer pensadora la palabra de las mujeres en las producciones del en/desde el Sur que goza de los privilegios de una Sur y por la forma en que esa palabra se modula académica (re)producida por el sistema. No puedo y las redes en las que se articula. más que preguntar por mi lugar de enunciación La pregunta se sitúa en la/s sujeto/s de lo(s) sin eludir la referencia a ¿Cómo escribir? ¿A feminismo(s). En la diferencia y la desigualdad quiénes interpelar? ¿Cómo intervenir? O en los de los feminismos latinoamericanos puesto que términos de Julieta Paredes ¿para qué teorizar? Estas preguntas suponen por cada respuesta un 4 Julieta Paredes advierte que (auto)denominar(se) inte-ectual posicionamiento epistémico-político que inelu- a gentes con actividades específicas es un modo de hacer(nos) cómplices no sólo de la división capitalista del trabajo sino diblemente se traduce en el tono, el ritmo, la y, sobre todo, con cierto sistema que está a la base y que cadencia del escrito. El posicionamiento, al me- asigna determinados trabajos a las mujeres a los que refiere nos para mí, no se formula en términos de las determinada valoración social, el patriarcado. Intelectuales formas de opresión y de privilegios sino en la hijos de una academia voraz que deglute saberes y prácticas lucha que supone combatir aquello que produce de los pueblos y sus organizaciones para permanecer y legitimarse fosilizando una práctica de vida. (Paredes, J. Las esos lugares diferenciados en los que nos en- trampas de la academia. A propósito de la reflexión sobre Femi- contramos algunas aquí, otras allí, muchas otras nismo Comunitario, Comunidad y Comunalidad). entre, aunque no todas juntas. Las que estamos 5 Cabe aquí tramar con Raúl Fornet Betancourt Mujer y aquí, aquellas con las que comparto este lugar filosofía en el pensamiento iberoamericano; con Sara Beatriz de enunciación, estamos dispuestas a revisar Guardia Mujeres que escriben en América Latina también con la Antología del pensamiento feminista nuestroamericano de los lugares de privilegio que sostienen nuestra Francesca Gargallo. propia enunciación.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 159 ] Invención de las cuerpas

tender a las mujeres pensadoras del Sur implica organización discursiva elementos que permitan Areconocer una tradición ensayística que les discutir el (mi) propio trabajo, el (mi) lugar de es propia. Una tarea que requiere en principio enunciación, los privilegios y los obstáculos. Y, de una labor de recopilación y de invención del luego, en esa escritura me interesa, como ya lo cuerpo de expresión lo cual nos lleva, por un lado, anticipe, la posibilidad de pensar los procesos de a (re)pensar el canon y el inventario. Y, por otro, subjetivación y las posiciones de sujeto de éstas, las nos vuelve a situar en la pregunta por quiénes, del Sur, no todas las mujeres. Puesto que el modo es decir cuáles mujeres. Respecto de esta última en el que hemos sido nombradas “mujer”, encubre pregunta se trataría tal vez de hacer espacio a un relaciones de poder y apunta a una univocidad cuerpo por inventar6 a ser habitado por víctimas de sentido. No da lo mismo “mujer” en mujer- o heroínas; santas o putas; figuras de mujeres blanca que “mujer” en “mujer de color”. “Mujer” siniestras o mujeres fuertes; la intelectuales no pueden ser reemplazada en una u otra mujer fracasadas o editoras exitosas; pensadoras pero puesto que ellas no son intercambiables. Mujer en también brujas, chamanas, académicas, autóno- mujer blanca está constituido por una relación de mas, militantes, institucionalizadas y activistas poder muy distinta a la mujer en mujer de color (Alvarado, 2014 y 2010). (Cfr. Lugones, 2008) ¿Cómo se modula mujer en Aquí se configuran al menos tres dimensiones mujeres pensadoras del Sur? de mis indagaciones. Por un lado, el acceso a las Un modo posible de visibilizar las formas en fuentes como escrituras que refieren a un contexto las que la raza, la clase, el sexo, cambia el senti- determinado. Allí, entre en el texto-contexto se do de “mujer” implica atender a los temas y pro- configuran determinadas discusiones. Pero allí, blemas que estas mujeres abordaron, a las formas también podrían aparecer no sólo ejemplares de discursivas y los géneros a través de las cuales ciertas escrituras de ciertas mujeres sino categorías se expresaron, a los materiales y artefactos que que podrían poner en cuestión nuestras preguntas ocuparon, a los trayectos, traslados, tránsitos que iniciales, que podrían instalar en su propia emprendieron/padecieron. Tales devenires po- drían dar cuenta de porqué ciertas mujeres, las 6 Digo un cuerpo por inventar articulando dos recorridos. mujeres blancas-mestizas7 tenemos la vida que Por un lado los cuerpos de expresión (Gaos) y, por otro las posibilidades de inventar esos cuerpos (Barthes). Puesto tenemos y porqué las mujeres de color tienen que asumo que los cuerpos como los campos del saber se la vida que tienen y así, también las mujeres co- acoplan interdisciplinariamente anudando problemas trans- lombianas, las peruanas, las bolivianas y aquellas versalmente, ese cuerpo por inventar adquiere una organi- otras que no por nómadas (Rosi Braidotti) sino por cidad móvil capaz de materializarse en formas plurales en migrantes llegaron a EEUU para lavar, planchar, el trayecto. La invención estaría ligada a esa práctica a la que alude Roland Barthes cuando el/la lector actúa, juega, cocinar, cuidar hijos de otras mujeres en lenguas ejecuta la diferencia y acorta las distancias entre lectura que les son extrañas (Alejandra Ciriza). Invención y escritura y abre un lugar del engendramiento (Barthes, de un cuerpo a desembarazar en el que como 1987: 77). Allí, un tipo de engendramiento que emerge como pensadoras comprometidas ahondamos en la lectura-escritura aunque los hubo otros. A fines del del siglo pregunta por nues-tro locus para mirar la vida XIX, una pensadora del Sur, convocó a mujeres escritoras de Perú y Argentina a licuar los bordes del espacio doméstico. que vivimos porque otras viven la vida que viven Juana Manuela organizó un tipo de reuniones como espacios (Yuderkys Espinosa Miñolo). de engendramiento. No se trataba de aquellas que luego Volvamos entonces a la primera cuestión, el conocimos como Conferencias de maestras o Conferencias cuerpo de expresión, el canon, incluso el inven- Pedagógicas de las que Carlos Norberto Vergara da cuenta tario como recuento de lo que hay y de lo que en El Instructor Popular y de las que fue impulsor como ins- pector, en una provincia del interior de Argentina; o incluso falta. Asumiendo la posibilidad del inventario de aquellas que tuvieron lugar en el Salón de Marcos Sastre cabrían, quizás, ejercicios decoloniales de (re) para reunir a la generación del 37 -como lo sugeriría la tesis de visión de lo real, de “lo que hay” y otros sobre “lo Francesca Denegri en su El abanico y la cigarrera-. Las veladas que falta” -lo ausente, lo silenciado, lo ocluido-. limeñas a diferencia del Salón de Marcos eran domésticas y, a diferencia de las tertulias coloniales rompía con los límites 7 Mujeres blancas-mestizas es decir no-india, no-negra. Me entre los sexos. La particularidad de las veladas en lo de Ma- interesa radicalizar la expresión en tanto que mestiza nuela radicó en que inauguraron un espacio fronterizo para responde al mito fundacional del crisol de las razas que y entre mujeres y varones decididamente ajeno a la casa implicó salir del cuerpo del bárbaro indio y de la piel del aunque en lo doméstico, público, aunque íntimo. Hizo de su negro hacia la posibilidad de nombrar la herencia europea casa en Perú un lugar de exhibición en el que se configura una de ser la esperanza del blanqueamiento en posibilidad de cuerpa colectiva que parió una epistemología relacional o de reclamar(nos) hijas de europa. La blanca-mestiza responde a las relaciones como espacio de engendramiento sostenido los privilegios de una clase hegemónica que se impone sobre por los afectos y las afecciones. la indígena y la negra.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... [ 160 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Podríamos tal vez aquí hacer espacio a la zona dental falogocentrado y norteurocentrado quizás del no-ser -en términos fanonianos-. En cualquier poco puedan hacer para escapar a cierta mirada caso sería preciso (des)aprender los modos en y apelar a saberes y haceres otros para poner en los que hemos aprendido a (re)leer el mundo y valor escritos venidos de grupos subalternados, la palabra que en él nos nombra y nos asigna subordinados o excluidos. Probablemente poco un lugar. Inventariar lo que “no hay”, lo eludido sabrán hacer fuera de las estructuras replicadas aunque aludido, supondría localizar las heridas en los trayectos académicos que insisten en va- coloniales lo cual implicaría ineludiblemente lorar la hegemonía del discurso científico y (re) anclar en las patriarcales -marcas que han re- producir sus propias víctimas. Quizás nada gulado nuestros cuerpos -que aún regulan la puedan saber, interpretar o disfrutar de esos es- sexualidad y el género- y aquellas otras que ar- critos otros y no puedan más que nombrar su ticularon los procesos de racialización. banalidad o ilegibilidad. Urgen otras prácticas Visibilizar las formas en las que hemos apren- de lectura-escritura. Un desaprender las formas dido a leer requiere atender a los procesos de en las que nos han enseñado a leer ciertos docu- canonización. El canon que reproducen acade- mentos compromete otros modos de acceder a mias y universidades responde a ciertas prácticas los materiales, otros materiales y maneras otras de lectura-escritura que legitiman las normativas de consultarlos pero sobre todo afecta las posi- que hacen que un escrito sea digno de ser leído. bilidades de prácticas de engendramiento. De este modo los cánones son estructuras que Intuimos un contra-canon como la invención se reproducen a sí mismas en prácticas de lec- de un cuerpa capaz de ser ocupado por ensayos. tura-escritura. Asumir el desprendimiento im- Algunos tienen forma de enumeraciones plica des-centrar(se) (d)el canon que aborta la históricas con nombre de mujeres ejemplares posibilidad de otros decires -como los de las mu- entre las que aparecen la condición social de la jeres, los de las lesbianas, los de las negras, los de mujer; otros con forma de catálogo presentan los gays o los de los indígenas-. contribuciones que permanecen en la visibili- Quienes se hayan formado en el canon8 occi- zación de la participación de mujeres, algunos exponen hechos más que ideas, otros sobre todo 8 Las antologías son los grandes mapas del canon. El pensa- los positivistas nos han hecho parte del progreso miento latinoamericano está tomado por nombres conoci- dos: Bello, Echeverría, Sarmiento, Hostos, Martí, Rodó, Vas- y la evolución. Pero en cualquier caso las mujeres concelos, Mariátegui, Ureña, Retamar, Martinez Estrada, pensadoras del Sur que han optado por no repro- Reyes, Zea. Basta una breve revisión de las bibliotecas para ducir el discurso falogocentrado proponen alter- cotejar nombres y periodizaciones de los padres fundadores, nativas de intelectualidad que interrumpen el de los patriarcas y advertir lo ausente. La opción es evidente. monólogo androcentrado. Al menos a primera vista aparecen dos formas de acceso: nombrar lo que hay o lo que no aparece, lo silenciado lo invi- sibilizado. Cada elección requiere de caminos diferentes y de metódicas distintas. Renunciar a sostener el monólogo andro- céntrico y denunciar la condición de autómata parlante son condiciones de posibilidad de un discurso que contribuiría a desmantelar el discurso vejatorio patriarcal.

Punto de vista

n ese tejido asumo que la historia de las ubi desde donde se produce el discurso o, en otros Eideas de las mujeres no puede homologarse términos, la pregunta por la quién, ¿quién es la a la historia de los varones y la de sus ideas en sujeto que habla?. Ciertas mujeres pensadoras la historia de las ideas de la región puesto que el del Sur pudieron contrabandear sus ideas en punto de vista de las mujeres del Sur refiere a re- el Sur, desde el Sur, para el Sur (Boaventura de gistros, formatos, circuitos, temas y problemas Sousa Santos). Traspasar fronteras10 en un trán- diferentes. Ellas aportan un espacio específico sito que incluyó sujetos, saberes y prácticas, así como interrupciones9 que configuran una his- como relaciones de subordinación Norte-Sur. En toria que les es propia. los tiempos que corren nos vienen traducciones Mi preocupación inicial, velada en un principio, explícita ahora, señala el lugar de enunciación, el 10 No se trata aquí de la frontera en el sentido en el que ha sido senti-pensado por Gloria Anzaldúa en su Vivir en la 9 No me interrumpas era para Victoria Ocampo la frase predi- Frontera publicado en Borderlands sino de la frontera literal lecta de los hombres en conversaciones con mujeres cuando por la que atraviesan los cuerpos migrantes de Sur a Norte y tales intentos desvirtuaban el monólogo. De allí, la analogía las ideas de Norte a Sur, tal como lo sugiere Alejandra Ciriza. con los escritos: el monógolo como la forma consagrada del Sin embargo, nos ha interesado resaltar circulación Sur-sur ensayo masculino y el diálogo como la interrupción femenina. propia de nuestros feminismos anclados en Latinoamérica.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 161 ] desde las que somos tomadas como sujetas de Esta experiencia enraizada en la marginalidad recepción de lo dicho por el feminismo blanco discursiva de las mujeres pensadoras del sur, en el del norte. La circulación de los cuerpos ha carac- descentramiento geo-político-económico desde el terizado a las mujeres del Sur del Río Bravo con que se configura un discurso como interrupción, traslados y exilios como marcas distintivas de los en las diferencias a las que adscribimos con feminismos del XIX (Alejandra Ciriza). nuestros devenires confiere una perspectiva en la Clorinda Matto de Turner disertaba sobre la producción, legitimación, circulación y traducción presencia y la ausencia de las obreras del pen- de prácticas, procesos, saberes y sujetas. Las ex- samiento11. Ausentes, excluidas y olvidadas entre periencias de las mujeres de América Latina han varones; presentes, incluidas y visibilizadas entre sido el desde dónde emergieron los escritos de las mujeres. Una cartografía de la profesionalización mujeres pensadoras del Sur. de la mujer como escritora, que coloca como Atender al locus de enunciación de las mujeres protagonistas a periodistas, poetas, narradoras, pensadoras del Sur nos ha permitido visibilizar dramaturgas en América Latina en la segunda una red de pensadoras intelectuales de fines del mitad del siglo XIX. Hacia 1877, Mercedes Cabello, siglo XIX y principios del XX que articula com- critica a la ideología que terminó encerrándola pañeras de oficio entre María Trinidad Enriquez, en un manicomio, donde pasó los últimos años Margarita Práxeres Muñoz, Mercedes Cabellos de de su vida. Con su “Mujer escritora”, aparecida en Carbonera, Teresa Gonsalez de Faning, Clorinda El almanaque de la bronca, expone el temor que Matto de Turner, Juana Manuela Gorriti, Carolina provocan ciertas mujeres en los varones que no Freire de James. En esa trama, Juana Manuela, tendrían por esposa a mujeres escritoras. Juana Mercedes y Clorinda configuran un espacio de Manuela Gorriti propone un catálogo de recetas engendramiento sostenido desde las prácticas y en su Cocina Ecléctica. Saca a la calle el espacio de los proyectos que las convocan y contienen. Será producción asignado a la mujer y naturalizado la guerra del pacífico la grieta que separará a la en la función femenina por el patriarcado. Juana red de intelectuales sumergiendo a las mujeres compila con la participación de un nutrido pensadoras del Sur en una década de silencio número de mujeres los secretos culinarios de que las termina separando de quienes formarán Nuestra América amasado en un espacio de en- parte del grupo de Mariátegui: Magda Portal, gendramiento pan-americano. Ángela Ramos, María Wiesse. Las interrupciones que tuvieron lugar hacia Esas voces, ya no la de la Clorinda, ya no la de fines del siglo XIX estuvieron condicionadas Juana Manuela ni la de Mercedes. Las voces de por la posición de la sujeto que escribe12. Las las otras, están y han estado. Es la enunciación lo mujeres pensadorsas del Sur nos encontramos que transforma al subalterno (Chandra Talpade en la situación particular a la que adscribe Mohanty). Hablar es poder salir del estado de nuestro cuerpo socio-histórico-políticamente si- subalternidad13. La opción política es intensificar tuado. Visibilizar nuestro locus de enunciación la voz. Ciertas mujeres blancas, burguesas, he- ha requerido la opción de un punto de vista que teronormadas, letradas, que gozaron de los pri- nos solidariza con algunas pero no junto a todas. vilegios de clase, raza y sexualidad, mujeres pen- sadoras del Sur que contaron con el privilegio 11 Las obreras del pensamiento en la América del Sud fue publi- de enunciación, visibilizaron a otras, a las que cado en el primer número de El Búcaro y, también en 1902, no. Hicieron espacio a las voces sofocadas, se como parte de su libro Boreales, miniaturas y porcelanas. 12 El punto de vista feminista es una perspectiva epistemológica pusieron a la escucha aunque no en su lugar. diseñada por Sandra Harding, Nancy Harstock, Dorothy Restituyeron la escritura como un espacio de Smith, Hilary Rose y Evelyn Fox Keller -entre otras- que enunciación colectivo, hablaron con ellas y no por argumenta a favor de la superioridad epistémica de las ellas; un gestar solidario que supuso relaciones mujeres como punto de partida para la producción de cono- fraternales. En esa restitución colocaron ciertos cimientos alternativos y femeninos. La teoría del punto de vista desarticula las relaciones poder-saber. La posición de problemas y no otros en discusión, instalaron sujeta que una ocupa en el orden social establece límites de un orden de prácticas discursivas, inventaron un lo por saber. En esta perspectiva, la posición hegemónica espacio de engendramiento (Alvarado, 2016). del monólogo masculino no puede más que aportar un conocimiento parcial y sesgado. La situación de las muje- 13 Las mujeres blancas, burguesas, hetonormadas y letradas res abre una perspectiva privilegiada por la posición de difieren de aquellas mujeres negras, pobres, lesbianas e sujeta que condiciona las posiblidades de lo que puede ver, iletradas. Unas como otras forman parte de la cuestión escuchar, atender, sentir, preguntar. Su privilegio episte- de la mujer en al menos cuatro formas diferentes. Spivak mológico radica en la situación de marginalidad, subor- decontruye la presunción de uniformidad con la que la sub- dinación o subalternidad. Lo que ella puede preguntar no alternidad podría fundar una identidad unitaria desde la puede ser preguntado por ni desde él. construcción académica de la categoría.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... [ 162 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Narrativas de experiencias

ué se pone en juego cuando se silencian, antes de ingresar en la dimensión de lo- ¿Qniegan, omiten, invisibilizan nuestras pa- todo-(im)posible me acuesto con él. Juntos, labras? ¿Qué audibilidad tiene nuestra decibi- desnudos. Permanecemos, una al lado del lidad? ¿Cuándo ha sido dicho lo que queremos otro, durante una seis horas, lo que dura la decir? ¿Cómo se obstruye la circulación de rutina de una noche de semana. Allí, quizás, nuestros decires? ¿Cuáles son los formatos de a veces algo acontece entre nosotres y la no- nuestra enunciación? ¿En qué géneros se expre- che se acorta mucho antes de que llegue la san nuestras voces? ¿Qué relación tenemos noso- madrugada. El caso es que salto. Camino tras con las palabras que nos nombran, con las unos pasos y me miro la cara. Ay! Será que que han dicho de y para nosotras, con las que así me veo? Será que así me ven? Me lavo la nos decimos para diferenciarnos de aquellas? cara con agua. Le pongo tonificador. Reduc- ¿Cómo articulamos nuestras palabras cuando tor de poros. Humecto el entorno de ojos. hablamos de las diferencias que nos desigualan? Aplico una loción para la rosácea. Un poco ¿Qué habilita nuestra palabra corporizada? ¿Qué de crema y adiós a la piel seca. Ay! Será que abre y qué cierra el testimonio, la narrativa, lo me veo así... qué hago este pozo debajo de autobiográfico y cómo repercute en la vida de la nalga, uffff... estos dos no los vi ayer.... las mujeres y de sus relaciones esta particular mmmm y con las estrías ya no hay nada manera de decir(nos)? ¿En qué medida la particu- qué hacer... agrietan mis entrepiernas.... laridad de este decir(nos) juega a las escondidas Y qué hago con estos pelos??!!! Será que el con mecanismos de regulación, de control, de láser me ayudaría, mmmm es que tienen supresión, de ocupación, de usurpación, de ex- que ser pelos negros, si no no funciona… propiación a los que son sometidos nuestros cuer- tendría que afeitarme un par de veces... pos? ¿Cuál es el lugar de nuestras palabras y del y andar así, pinchuda.... será que vale la cuerpo que las dice y en las que se dice? La palabra pena??? ahhhh mi panza... esta semana que nos relata en la experiencia que narramos quito harinas, basta de cerveza!!!! estos despliega de un modo u otro la diferencia sexual. rollitos entre la espalda y el inicio de las No se puede tener experiencia del cuerpo que no sea nalgas; la grasa se concentra en lugares in- experiencia del cuerpo sexuado (Violi, 1990:138). Las sostenibles!!!!! A ver... me plancho el pelo, formas en las que nuestro cuerpo se dice es en la alisado se ve más ... no, no, mejor me baño experiencia de la sexualidad y la reproducción; y con la crema para peinar salgo a puro la vestimenta y la apariencia; la conducta, los há- rulo. Así, como sin querer estar peinada. bitos y los usos; la fuerza y la debilidad; la salud Así, como al viento.... síiiii savage, la última y la enfermedad; el deseo, los excesos, el placer y tendencia en peinados, así le llaman ahora, las normas; el tamaño y el peso; los movimientos, al natural … y entre los rulos las canas se los aquietamientos y los apareamientos... disimulan. Me lo digo, reducir celulitis, adiós a la piel seca, hacer desaparecer los Sí, sí... ya escuché. Me digo a mí misma casi pelos, disminuir las estrías, perder peso, engañándome. Sí, sí... ya voy. Me animo a disolver grasas, atenuar las manchas de la mí misma, como si faltara un rato todavía. edaaaaaaaaaaaaaddddddddddd.... me lo Ex0tiendo la mano por debajo de la sábana repito, cada vez, para convencerme... co- y llego al celular. Qué sencillo era parar la mo si con eso bastara para intervenir-me. campana del despertador hace algunos años Preparo mates. Buen día amor, le digo. atrás. Ahora, si no miro, no puedo dar con el Buen día!!! ufff... todavía no me visto. Amor!! ícono en la pantalla táctil para que paren de le digo, mi amor!!! Y sí, qué sinónimos hay cantar los pajaritos... sí, sí... salto de la cama para esa palabra que nombra una relación, así como vine al mundo. Es que desde hace un tipo de vínculo.... es que si no es él mi algunos meses duermo acompañada -como amor... es amor de quién?? No, ya sé, no es si fuese posible dormir con alguien-. Si hay mío no quiero ese tipo de vínculos.... pero algo que hacemos a solas es dormir, aunque el lenguaje me traiciona y no tengo palabra seamos varias en la cama... qué costumbre para nombrar su libertad, ni la mía. Le paso extraña esa, la de dejar el cuerpo ahí, al lado un trapito al inodoro antes de sentarme... a de otrx mientras se está dormida. Dormir veces se olvidan de levantar la tabla -pero es una práctica que habita mi cuerpo en con él es diferente- tiene la costumbre de soledad, aunque con otrx. Pero antes de eso, no sacudirse... se seca con papel las últimas

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 163 ] gotitas... a veces, prefiere echarse agua en mira. Le miro. Su nariz acaricia la mía. Ni el pene al terminar de hacer pis y moja la una palabra. Apenas un suspiro. Me eriza la tabla. ¿Será que asume que el ambiente seco piel, como si ya nos extrañáramos. Mi len- de la montaña por vaya a saber qué efecto gua toca ligeramente el borde sus labios. Me centrípeto la secará? Pasta de dientes en el quita el mentón de los dientes. Una abun- cepillo y veo que falta papel higiénico. ¿Se dancia me sobreviene. Me humedezco. No lo acabó anoche? Pero, es que, ¿se levantó y deja de apretarme. No dejo de anudarme. no lo advertí? Repongo. Abro el lavarropas Siento que mis manos no alcanzan para y meto la ropa negra... ay! No tenemos tactarlo. Suelto los broches y me tomo de suavizante, me olvidé de comprar. Saco la sus hombros. La pava chilla y me derramo. ropa negra y meto la ropa deportiva... la que Camisa al suelo. Manos en los senos. Nos se lava con agua fría y no lleva productos tiramos en la cama. Me baja las calzas. Nos para enjuagar porque percude las telas.... olfateamos. Le paso la lengua a sus axilas. Me enjuago la boca. Tremendo el aliento Y con la tanga en las rodillas, me coloca de mañana -en algún lado había un líquido de espaldas y me lame el culo. Arrugo las para hacer buches-. Creo que ya decidí qué sábanas con las manos. Ahhhhh sí, los me pondré esta mañana. Mientras termi- broches quedaron en el piso... extiendo mi no de definir si la calza va con camisa brazo hacia atrás pellizco su tetilla, me da o con remera, pongo el agua a calentar una palmada en las nalgas y me penetra. para unos mates. Buen día amor -repito- Me sujeta de la cintura y, acoplados nos obviando el “mi”, como si con eso hiciera la movemos a la par. Así, rico. Suda. Se mueve. diferencia... como si la diferencia estuviera Me agito. Así, húmedo. Así, calentito... se en el gesto de visibilizar la imposibilidad de inclina. Raspa, arde, me seco, soplo, gimo, la posesión... aunque ya sé, no basta, pero grito. Me lame y entra profundo. Apoya su es necesario, nos urge! Y me muerdo la pecho en mi espalda. Me muerde la nuca. boca para no decirle: levantate... levantate Ahhh síiiii... la pava sigue chillando... dibuja amor, levantate! Ayudame! - ¿ayudame?.... mi columna con su pulgar mientras pone ayudame!!! cómo que ayudame!! colabora- su palma entre el cuello y mi omóplato. me! ¿Es que tampoco hay sinónimos para Escupe, expande su baba en mi coxis. Me este tipo de relación que pretendo recíproca perdí. Baila una danza desconocida para y termina por insistir en la igualdad que mí hasta entonces. No se dónde se separa reproduce la dependencia y la opresión?-. su piel de la mía. Levanto la cabeza y mi Corto el pan, con las calzas puestas y mi cabello, mojado todavía, se estampa en mi torso descubierto. Se siente suave el frío de espalda. Algunas gotas se deslizan por los la mañana en la cocina que apenas empieza bordes de su frente. Lo miro de reojo. Giro, a erizar mis pezones. Hago tostadas y pre- aún prendida. Quieta me quedo adherida a paro el desayuno para dos. Ya sé, mejor su sexo. Le paso la lengua a cada gota. Su musculosa en vez de remera. La musculosa rostro se enrojece. Casi acaba. Mi bulba cremita con la camisa marrón. El dulce y la se expande y contrae. Me mira. Sonríe. Le manteca están en la heladera. El café y la como la boca. Me corro, me dice. Síiiii venite leche para él. Cereales, frutos secos y yogurt conmigo, le digo. Voy adentro? No, le digo. para mí. Vuelvo al baño, vamos con quita Me quita su verga y se frota en mi pelvis. ojeras... de las fórmulas que vi en Google Sus bolas rozan mi clítoris y se abre un río sólo una me resulta... descarto las bolsas rojo entre nosotros. Huele a mestruación. de té y las rodajas de pepino... no tengo Me inundo en mi luna roja. Hembra en celo. tiempo. Pero la punta acero quirúrgico Quito las sábanas. Enciendo el lavarropas. recién sacada del freezer hace lo suyo sin Apago la hornalla. Y la copa? Auch..... demasiada espera y, con un poco de rímel... !!! busco una toallita, agarro un culotte. Amor, desayunamos? Lleno el balde. Derra- Me siento en el bidet. Dejo pasar el agua mo algo de agua en el piso. Es mejor con el entre mis piernas. Cambio las calzas por secador. A puro trapo no termina de salir la pollera. Me seco, ayyyy los pelos.... que la basura. Un poquito de crema de cacao en no sea minifalda. Ah, no, ya sé. Vamos con los labios y... será que ya son las 8? Abro el calzas y mini.... muscolosa y camisa. lavarropas. Ufff, las uñas!!! tomo algunas Ropa limpia y tendida, piso brillante, banitori prendas. Salgo de la casa y las tiendo. seco, desayuno servido, cama destendida, Vuelvo. Él parado al lado de la cama me orificios dilatados, cuerpo habitado. Listo, extiende los brazos para darme el abrazo ufff son las 8.40, a trabajar. del día. Corro. Me arremolino en sus brazos. Me toma de la cintura. Me alza. Cierro los ojos. Caigo sobre su pecho. Abro mis pier- Los cuerpos que las mujeres somos ocupan un nas. Lentamente me expando. Anudo mis lugar. pies en su cadera. Inclina su cabeza. Me

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... [ 164 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar En la determinación del valor de la fuerza al mismo tiempo que los pone en movimiento del trabajo entre lo histórico-social-moral es al pesar lo dicho, lo sabido, lo esperado, lo que- donde entra la configuración de la sujeto en rido, lo deseado en lo que quiebra -a fuerza de la estructura de la opresión sexual. Aparece contradicciones, oposiciones, conflictos- la idea una necesidad específica y propia del capi- de que las palabras reflejan la realidad, de que lo talismo la esposa-madre; sitiada en “su” lu- dicho es lo que es para habilitar la posibilidad del gar “natural”, el hogar; con tareas propias discurso como construcción social que produce de “su género”, el trabajo doméstico y la eco- a la sujeto que es tomada por las palabras que la nomía del hogar. El sistema sexo-género paren. El decir de la experiencia no pone en juego que configura el capitalismo produce una la verdad de la narrativa sino un tal vez -nada sujeto, asigna una posición e impone un ti- haya para aportar desde esa lectura-escritura- un po de relación sexual (Alvarado, 2016b). impensado del/para el patriarcado. La sujeto que articula el relato no es el sujeto Las narraciones de experiencias corporizadas de la experiencia o el sujeto que experimenta, el recuperan la singularidad de lo que nos distingue sujeto del que se predica tal o cual predicado como de otrxs, la especificidad que nos diferencia. La ex- un algo que le pasa sino que la experiencia es el periencia de las mujeres no es un conocimiento lugar de producción de la sujeto. Es en la narrativa universal sino por el contrario un saber de la cor- de la experiencia donde se abre la posibilidad de poreidad que hay en cada una de nosotras y, por inscribir, restituir, reiterar, repudiar posiciones ello, precario, de corto alcance, de baja durabilidad. de sujeto diferentes, diferenciadas y diferenciales. En narrativas de experiencias, como la presen- Es a partir del relato donde se quiebran las ins- tada líneas arriba, se configura una cotidianidad tituciones modernas occidentales -matrimonio, que traslada el hecho biológico de la hembra al familia, heterosexualidad no voluntaria, emb- constructo social de “la mujer”, en la trama de arazo obligatorio- tanto como las posibilidades de relaciones heteronormadas que fija estereotipos devenir mujeres, madres, lesbianas, feministas.

Ensayos de mujeres

cercarnos al pensamiento de algunas mujeres heterosexual y niega a la mujer y a los no-blancos. Agenerado en Latinoamérica, especialmente Pese al restringido lugar que ellas y aquellos en Perú y Argentina, puede contribuir a explicar pudieron habitar, algunas pudieron legitimar su los procesos de sujetivación y racialización de las posición como sujetas sociales, como agentes de la sujetos de Nuestra América. historia, como pensadoras subsumidas en el pacto Si bien contamos con antologías del ensayo sexual. Es en ellas en las que es posible visibilizar latinoamericano; grandes monumentos a la in- un proyecto ensayístico gestado por mujeres, el telectualidad masculina (Alvarado, 2014a), ellas ensayo de género (Pratt, 2000). para hablar y ser audibles debieron hacerlo como Entendemos que es posible referir al pensa- mujeres intelectuales, es decir, ingresar al espacio miento latinoamericano en ensayos de identidad androfalocéntrico y hacer uso de la escritura como que se configuran al mismo tiempo que emergen espacio de legitimación de la palabra. Si bien por los ensayos de mujeres, es posible en ese entre un lado, el ensayo de identidad (Pratt, 2000) nombra medio (in between) divisar discursos indigenistas/ los escritos que han circulado en los últimos 150 indianistas/andinos; interculturales; discursos años por varones latinoamericanos integrantes de mujeres; discursos liberacionistas. de la elite iberoamericana que pudieron abordar El desarrollo de la conciencia intelectual ame- el problema de la identidad en Nuestra América ricana ha tenido protagonistas femeninas que y cuya producción discursiva forma parte de bien pueden alimentar una historia capaz de lo que conocemos como Historia de las Ideas o atravesar la topología masculinizante. Ponerle bien, Pensamiento Latinoamericano, las mujeres palabras a nuestras experiencias como punto de escritoras, pensadoras, intelectuales no han te- vista no solo le pone nombre a nuestros terrores nido lugar, puesto que la “identidad” que el pensa- secretos sino que descentra al patriarcado y des- miento latinoamericano -ha pretendido- refiere al prende epistémicamente la jerarquía del orden discurso falocéntrico del varón, blanco, burgués, falogocentrado.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar [ 165 ] De la restitución del espacio de enunciación Una epistemología de la situacionalidad, de la emerge la posibilidad de invertir la lógica que localización, del posicionamiento tiene en la expe- ha sostenido la hegemonía del discurso falogo- riencia el locus de enunciación y haría lugar a que la céntrico desde la visibilización del diálogo si- palabra de cada una se enuncie de manera parcial lenciado entre los ensayos de identidad y los en- en la singularidad de los cuerpos que nombra y las sayos de mujeres situados y en contexto a fines sujeto que produce. La narración de experiencia, el del XIX y principios del XX, en tanto que es en testimonio, el relato, la (auto)biografía sitúa el punto esa inversión donde las voces sofocadas salen de vista en un constructo corporizado aquí y ahora del estado de subalternidad y (des)organizan el que pronuncia un espacio de engendramiento co- archivo en, desde, para el Sur en cada interrupción mo puente entre lo ya dicho por los ensayos de desde una historia desde abajo. identidad y lo por decir, lo no dicho todavía, a partir de los ensayos de mujeres.

Notas

e interesa aquí enfatizar la acción feminista propósito de la reflexión sobre Feminismo Comuni- Mque reivindica feminismos como práctica tario, Comunidad y Comunalidad de Julieta política de la diferencia cada vez que cita, puesto Paredes. En Feminismo, ciudadanía y política de- que citar es un hecho político, como afirma la pa- mocrática radical de Chantal Mouffé pueden en- nameña Urania Ungo tanto como nombrar. En contrarse desarrollos vinculados a la posición este sentido, refiero aquí las fuentes con las que de sujeto. Para pensar las complicidades y los anudo ideas. Para interseccionalidad o fusión pue- privilegios, Etnocentrismo y colonialidad en los fe- de remitirse a Interseccionalidad y feminismo deco- minismos latinoamericanos: complicidades y conso- lonial de María Lugones pero también puede ras- lidación de las hegemonías feministas en el espacio trearse en Spelman (1988); Barkley Brown (1991); trasnacional de Yuderkys Espinosa Miñoso. Para Crenshaw (1995); Espíritu (1997); Collins (2000). ampliar mujeres del tercer mundo o lo que puede Para tráfico de ideas puede consultarse Mujeres de un subalterno, Can the Subaltern Speak? y Under América Latina: des(re)encuentros, tráfico de ideas y western eyes. Feminist scholarship and colonial traducción” y Contrabandistas entre testigos sospe- discourses de Gayatri Chakravorty Spivak. Para chosos y autómatas parlantes, ambos de Mariana establecer vínculos entre los ensayos de identidad Alvarado. También Perspectivas feministas desde y los géneros, “No me interrumpas”: Las mujeres y América latina: habitar/ migrar/ tomar la palabra el ensayo latinoamericano de Mery Louise Pratt. desde el sur de Alejandra Ciriza, a partir de éste Para re-pensar por quiénes, para quiénes ha- último texto podrán tomarse recaudos para pen- blamos y entre quiénes provoca transitar el des- sar los devenires nómades y los migrantes. Para prendimiento epistemológico que Francesca profundizar respecto de la noción de “intelectual” Gargallo camina entre su Ideas Feministas Lati- puede consultarse Las trampas de la academia. A noamericanas y Los Feminismos desde Abya Yala.

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... [ 166 ]RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar Bibliografía

Alvarado, M. (2014) “La ausencia femenina en la Gaos, J. (1969). Seminario de historia de las ideas. normalización de la filosofía argentina. Notas México: el colegio de México. al espistolario de Francisco Romero”. RAUDEM. Lugones, M. (2008) “Colonialidad y género”. Revista de Estudios de las Mujeres. Vol 2. pp. 25-40. Tabula Rasa, Nº 9, julio-diciembre. Bogotá. ------(2010) “Contrabandistas entre testigos Colombia. sospechosos y autómatas parlantes.” Revista Sul Spivak, G. C. (2003). “¿Puede hablar el subalterno?” Americana de Filosofía y Educaçâo. Brasilia DF, Revista Colombiana de Antropología, vol. 39. Nº 14, mayo/octubre. En línea: http://filoesco. Enero-diciembre, pp. 297-364. Colombia. unb.br/resafe/numero014/ Stone-Mediatore, S. (1999). “Chandra Mohanty y ------(2016) “Voces del Sur que hacen experien- la revalorización de la experiencia”. Hiparquía, cia de frontera”. Revista Intersticios de la política vol. 10, Nº 1, pp. 85-107. (Trad. Ana María Bach). y la cultura. Intervenciones latinoamericanas. Violi, P. (1990). “Sujeto lingüístico y sujeto feme- Vol. 5, Nº 8, Septiembre. Grupo de Filosofía Lati- nino”. En: Colaizzi, G. (Ed.). Feminismo y teoría noamericana de la Universidad Nacional de del discurso. Madrid: Cátedra, 1990. Córdoba y el Programa “Poscolonialidad, pen------(1991) El Infinito Singular. Madrid: samiento fronterizo y trans-fronterizo en los Cátedra Feminismos. estudios feministas” (IDAES/UNSAM)

Mariana Alvarado | Experiencia y punto de vista como aperturas epistemológicas... RevIISE | Vol. 9, Núm. 9, Año 2017 pp. 157-167 | ISSN: 2250-5555 | www.reviise.unsj.edu.ar[ 167 ] Revista del Instituto de Investigaciones Socioeconómicas

MineríaRevista del Instituto de Investigaciones Socioeconómicas Dossier Abierto | Vol 10 año 9 | marzo - junio 2017 Epistemologías-Metodologías Críticas Dossier AbiertoConvocatoria - Vol 9 año de artículos8 - agosto para - diciembre investigadores, 2016 docentes, estudiantes de posgrado, becarios y comunidad académica en general.

Epistemologías-MetodologíasConvocatoria de artículos para investigadores, Críticas docentes, estudiantes nvitamosDossier aAbierto realizarde - Volposgrado,aportes 9 año albecarios 8 debate- agosto y comunidadsobre - diciembre académica◊ Impactos 2016 en degeneral. la megaminería. Ila actividad minera a gran escala y sus ◊ Estrategias y discursos empresariales (licencia consecuencias (ambientales, sociales, políticas, social, responsabilidad empresaria, minería económicas, culturales, etc.). Considerando que sustentable). la megamineríabrimos un ha espacio sido,Convocatoria en de las discusiones últimas de artículos décadas, teóricas para investigadores, ◊ EsperamosAspectos docentes, económicos recibir estudiantes textos de indisciplinados la minería a gran que unaA deanudadas las actividades conde posgrado, narrativas más becarios promocionadas de experiencias y comunidad planteen académicaescala. al menosen general. alguno de los siguientes tópicos: en deAmérica investigación Latina quepor arrojen gobiernos preguntas y sectores cuestio- ◊ Conflictos socioambientales y movilizaciones empresariosnadoras del y, aconocimiento la vez, una de científico las más rechazadas en sus mode- ◊sociales. rupturas disciplinarias, espacios de vincu- y losdenunciadas hegemónicos y pordisciplinarios, diversos que seancolectivos capaces ◊ Perspectivaslación crítica teóricasentre los saberesy metodológicas de socioambientales, buscamos reunir experiencias investigación. Estudios de caso. de problematizarbrimos un espacio la ciencia de discusiones en el entramado teóricas Esperamos recibir textos indisciplinados que de investigación que contribuyan a reflexionar ◊ ◊Marco experiencias internacional: de desarrollo cambios de ymetodologías perspectivas. socioanudadas político cultural, con narrativas que ponderen de experiencias la ligazón planteen al menos alguno de los siguientes tópicos: sobreA las implicancias de una de las caras más ◊ Debatesde investigación sobre extractivismo,críticas neoextrac- epistemología-de investigación metodología que arrojen desde preguntas perspectivas cuestio- visibles –y cuestionadas- del modelo extractivo. ◊tivismo, perspectivas postextractivismo, críticas de la tecnología transiciones y críticasnadoras de del la conocimiento producción de científico los saberes en científicos sus mode- ◊ rupturas disciplinarias, espacios de vincu- Esperamoslos hegemónicos recibir ycontribuciones disciplinarios, que que sean aborden capaces ◊alternativas. lacióndecolonialidad crítica entre de los los saberes saberes diversosy tecnológicos, tópicos en desde relación enfoques a esta feministas, problemática, de los ◊ Aspectos éticos y culturales. sures,de problematizar descoloniales. la ciencia en el entramado ◊ epistemologías feministas entre ellos: ◊ ◊Minería experiencias de litio. de desarrollo de metodologías socio político cultural, que ponderen la ligazón de investigación críticas epistemología- metodología desde perspectivas ◊ perspectivas críticas de la tecnología críticas de la producción de los saberes científicos y tecnológicos, desdeCoordinan enfoques feministas,Natalia Fischetti de los | INCIHUSA◊ decolonialidad CONICET Mendozade los saberes Coordinan Marcelo Giraud ◊ epistemologías feministas sures, descoloniales. Profesor y ComitéLicenciado editorial en Geografía RevIISE Departamento de Geografía - Facultad de Filosofía y Letras - UNCuyo Fecha deLucrecia cierre: 30 Wagner de septiembre Dra. en Ciencias Sociales - Lic. en Diagnóstico y Gestión Ambiental Natalia Fischetti | INCIHUSA CONICET Mendoza BasesCoordinan y condiciones:IANIGLIA | CCT Mendozahttp://www.ojs.unsj.edu.ar/index.php/reviise | CONICET Informes: [email protected]é editorial RevIISE

Fecha de cierre: 30 de junioseptiembre de 2017 BasesREVIISE y condiciones: (ISSN: 2250-5555) http://www.ojs.unsj.edu.ar/index.php/reviise es una revista indexada (Latindex) Informes:con evaluación [email protected] ciega de pares, dedicada a la publicación de investigaciones socioeconómicas.

REVIISE (ISSN: 2250-5555) es una revista indexada (Latindex) con evaluación ciega de pares, dedicada a la publicación de investigaciones socioeconómicas.