Indios Y Negros En El Pago De Chivilcoy
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INDIOS Y NEGROS EN EL PAGO DE CHIVILCOY María Amanda Caggiano CONICET –UNLP, IMIACH 2001. Actas del XIIIº Congreso Nacional de Arqueología Argentina, II:157-166. Universidad Nacional de Córdoba. 1. Introducción Al promediar el siglo XVIII el vasto territorio pampeano, que formaba un amplio abanico en torno a Buenos Aires, no contaba con grandes poblados. Hecho éste que obligó a España a fijar nuevas estrategias para la ocupación territorial. Hacia la frontera oeste de Buenos Aires, la actual Luján estaba establecida en torno a la folklórica decisión de la imagen de la Virgen, que en 1688 decidió aquerenciarse. En 1745 se tornó imperiosa la necesidad de establecer unos kilómetros más hacia el oeste de Luján, (1) una fortificación que resguarde a los pobladores. Nace así la Guardia de Luján que servirá además como presidio, mercado de intercambio de bienes y productos entre blancos e indígenas y punto de partida de las caravanas hacia las Salinas Grandes. Crónicas y relatos de viajeros, como así también censos, dan cuenta del avance paulatino e incremento de población y del entretejido social. Es nuestro interés destacar algunos datos sobre la presencia de indios y negros en la región reconocida como Chivilcoy dentro la Guardia de Luján, y resaltar su participación como otros actores sociales y que fueron casi ignorados en la historia oficial. El rescate de aborígenes y de la presencia de negros o pardos, además de resultar una herramienta útil para la difusión de la historia propia, conlleva a la consolidación de una conciencia histórica y a la activación de una memoria crítica. Su valor es innegable en la medida que permite enriquecer el aún difuso conocimiento de nuestro pasado pampeano. Intentamos rescatarlos del olvido a través de la investigación lograda en variados documentos, actas parroquiales y testimonios orales, que dan cuenta de su presencia en el entretejido social desde antes de crearse el partido de Chivilcoy (Bs. As.) 2. Base documental Los censos poblacionales realizados aproximadamente entre 1740 y 1840, ordenados para Buenos Aires y la campaña adyacente, obedecían preferentemente a dos propósitos: el impositivo y el de servicios a las armas. Los empadronamientos constituyen listas de vecinos donde se indicaba no sólo en afincamiento al lugar, a los que se discriminaba en blancos, indios y una amplia gama entre mulatos, pardos y negros, sino también la carga tributaria al estado. El censo de 1744, ofreció los siguientes resultados: ____________________________________________________________________________ Blancos Indios Mulatos Negros Mestizos Pardos ____________________________________________________________________________ Buenos Aires 10056 188 330 1150 99 221 Campaña 6055 431 180 327 40 123 La creación del Virreinato del Río de la Plata determinó la necesidad de un nuevo censo general que, practicado en 1778, arrojó los siguientes resultados: ____________________________________________________________________________ Blancos Indios Mulatos Negros Mestizos Pardos ____________________________________________________________________________ Buenos Aires 24083 524 2997 3837 627 1 Campaña 12926 1620 760 49 - 263 Para esa época, Félix de Azara transita gran parte del territorio, señalando que “... está poblado de tres castas de hombres bien diferentes, que son indios, europeos o blancos y africanos o negros. Las tres se mezclan resultando los individuos de que voy a hablar, llamados con el nombre general de pardos, aunque bajo el mismo incluyen a los negros. Si el pardo es hijo de indio y blanco, se llaman mestizo y lo mismo a toda la descendencia de este, con tal que no intervenga en ninguna de sus generaciones, quien tenga sangre de negro poca ni mucha. Si el africano se une con blanco o con indio, llaman el resultado mulato y también a la descendencia de este, aunque por continuar sus generaciones con blancos llegan a resultar individuos muy blancos y rubios con pelo lacio y largo. En algunas otras partes les dan otros nombres por ejemplo, si el hijo mulato hijo de negro y blanco se junta con blanco, sale lo que llaman cuarterón por tener sólo la cuarta parte de negro; pero si tal junta o unión del mulato es con negro, le llaman salto atrás porque en vez de salir blanco se retira teniendo tres cuartos de negro”. El crecimiento vegetativo y la doble inmigración (la de los provincianos y la europea) pronto hacen eclosión en Buenos Aires. El siglo XIX se manifiesta por un constante avance de dispersos caseríos que, como isletas en la verde llanura de duras gramíneas, avanzan hacia el Salado incluyendo la región de Chivilcoy. La presencia de negros en la región que nos ocupa, se manifiesta a través del censo de 1836, cuando ya desde hacía aproximadamente una década la tierra fiscal fuera entregada a enfiteutas. El registro censal estaba a cargo de los alcaldes de cada partido, quienes apuntaron además del número con que se componía cada población, la denominación de tales. Lamentablemente, en uno de los cuadernillos donde se asentaban los datos no consta la denominación del partido. Discriminado en Blancos, Pardos y Negros y Extranjeros, el censo arroja un total de 3972 pobladores para el territorio de la Guardia de Luján, donde se distinguen los siguientes partidos, a saber: ____________________________________________________________________________ Partido Blancos Pardos y Negros Extranjeros Tropa Total ____________________________________________________________________________ Leones 531 26 1 9 567 M. Gallegos 256 16 - - - Salado Arriba 255 20 1 10 286 Saladas 251 11 - - 262 Cañada Rica 795 23 9 1 827 Chivilcoy 418 9 1 - 428 ¿? 1234 86 10 - 1330 Total general 3740 191 22 19 3972 Dos años después, en 1838, el padrón de habitantes de la Guardia de Luján ofrecía un incremento de pobladores, arrojando los siguientes datos: Blancos: 5009; Pardos o Negros: 335; Extranjeros. 46; Tropa: 1, Familia de Tropa: 43; Total: 5404. De acuerdo al censo de 1836 las poblaciones compuestas exclusivamente en la Guardia de Luján de negros o pardos, son las siguientes: Partido Población Nº de negros que integran la población _______________________________________________________________________ Leones José María Carro 10 Leones María Martines 4 Leones Manuel Vestad 4 M. Gallegos Bautista Ribero 10 Salado Arriba Lorenza Ibarra 4 Salado Arriba Petrona Ribero 10 Salado Arriba Antonio Lescano 2 Cañada Rica Bernardo Rocha 3 Cañada Rica Tránsita Olmos 3 ¿? Inocencia Benites 3 ¿? Francisco Donas 3 ¿? Justo Isuvin 1 ¿? María Gutiérrez 3 ¿? Pascuala Bello 1 ¿? José Iturri 2 ¿? Estanislao Rodriguez 1 ¿? Valentín Montiel 4 ¿? Andrés Almirón 3 De estas 18 poblaciones compuestas por sólo negros o pardos, en sólo 7 se registran mujeres como cabezas de familia, apellidos Martines (o Martínez), Ibarra, Ribero, Olmos, Benites (o Benítez), Gutiérrez y Bello. Cabe destacar que las familias establecidas hace más de 150 años en los partidos reconocidos como Cañada Rica y Salado Arriba, actualmente forman parte del partido de Chivilcoy. El partido de Chivilcoy nace como una necesidad de control del régimen rosista, dado el amplio espacio pampeano que ya ocupaba la diseminada población de la Guardia de Luján, algunos en terrenos otorgados por “boletos de indios” (2), otros por enfiteusis o simplemente ocupando tierras del estado. Se decreta su creación un 28 de diciembre de 1845. A partir de la fundación del pueblo de Chivilcoy, un 22 de octubre de 1854, se comienzan a registrar nacimientos, matrimonios y defunciones en libros propios pues con anterioridad a esa fecha debían asentarse en la iglesia de Mercedes, distante unos 60 km. En las actas parroquiales se discriminaba en cuanto al color de la piel y al tributo que exigía la iglesia para poder ser registrado. Los aranceles eclesiásticos para toda la campaña bonaerense habían sido fijados mediante decreto rubricado por Miguel García (Provisor Vicario Capitular y gobernador del Obispado) y aprobados por el Ministro de Gobierno Ireneo Portela. Entre la contribución a la iglesia se destaca que “nadie dejará de ser bautizado por no tener con que pagar el derecho parroquial pero los que no se hallen en este caso, satisfarán $20, siendo blancos, los que no lo sean abonarán $10”. Similar discriminación ofrecen los artículos referidos al matrimonio y permiso para las sepulturas. Con respecto al derecho al “matrimonio de personas blancas, son de $150 ... y toda otra clase pagará $100”. En lo que se refiere a los fallecidos, “quedan asignados $100 para sepultar el cadáver de los adultos, contándose estos desde la edad de 8 años en adelante, los de menor edad pagarán $50. Las gentes de color y de servicio, pagarán siendo adultos $50”. Por último mencionaremos que en el primer libro de actas de defunciones correspondientes a Chivilcoy, se especifican las muertes de “pardos” o “de color”, omitiéndose su ascendencia y lugar de origen como ocurre con el resto de fallecidos. Así se registran a: ____________________________________________________________ Parda Edad Fecha de muerte ____________________________________________________________ Florentina Díaz 50 años 7 diciembre 1854 Manuel Forner 80 años 21 mayo 1856 ____________________________________________________________ De color Edad Fecha de muerte ____________________________________________________________ Narcisa Rodríguez 10 meses 3 mayo 1855 Paula Rodríguez 50 años 1 junio 1855 Manuel de Cardozo 70 años 25 enero 1856 Leonor Masa 40 años 28 enero 1856 Mercedes Mercado 60 años 16 noviembre 1856 Valerio Martínez 38 años 5 diciembre 1856 Eulogio