II CONGRESO DE HISTORIA DE

Del 22 al 25 Novielllbre de 2000

IV EDAD CONTEMPORÁNEA

INSTITUTO DE ESTUDIOS ALBACETENSES "DON JUAN MANUEL" DE LA EXCMA. DIPUTACIÓN DE ALBACETE Serie 111 - Congresos, Seminarios, Exposiciones y Honlenajes - Núm. 6

ALBACETE 2002 COORDINADORES DE LA EDICIÓN:

VOLUMEN 1: RUBÍ SANZ GAMO

VOLUMEN 11: AURELIO PRETEL MARÍN

VOLUMEN 111: ALFONSO SANTAMARÍA CONDE, LUIS G. GARCÍA-SAÚCO BELÉNDEZ

y JOSÉ SÁNCHEZ FERRER

VOLUMEN IV: CARLOS PANADERO MOYA y MANUEL REQUENA GALLEGO ÍNDICE DEL VOLUMEN IV

Pág.

PRESENTACIONES CARLOS PANADERO MOYA: El siglo XIX en la historia de Albacete: balance historiográfico 11 - 18

MANUEL REQUENA GALLEGO: Estado de la cuestión sobre el siglo XX albacetense 19 - 27

PONENCIA MARÍA TERESA PÉREZ PICAZO: Las cuentas del Concejo de Albacete y la oligarquización de su gobierno del antiguo régimen a la revolución liberal (1750-1845) 31 - 43

COMUNICACIONES

FRANCISCO FUSTER RUIZ: Datos para la historia de la historiografía de Albacete (1636-1967) .. 47 - 62

JOSÉ MANUEL ALMENDROS TOLEDO: , la larga y costosa disolución de una propie- dad señorial... 63 - 80

LUCIO GALLEGO GINER: Desamortización eclesiástica. Los bienes muebles de los conventos de San Francisco y Santa Clara de la villa de Hellin 81 - 91

CARMEN GARCÍA SERRANO: En torno a la creación de la Audiencia Territorial de Albacete 93 - 104

MATILDE MORCILLO ROSILLO: La seguridad municipal de Albacete durante el siglo XIX a tra- vés de los serenos 105 - 111

Ma LUZ LÁZARO SALAS - OLGA SÁNCHEZ HUEDO: La actividad artistico-n1usical de Albacete afinales del siglo XIX desde "El Diario de Albacete" 113 - 133

ALFREDO ANTONIO LOSADA AZORÍN: El Ayuntan1iento de Hellin y sufuncionamiento interno durante la restauración 135 - 145

ALFREDO ANTONIO LOSADA AZORÍN: La evolución de la población hellinera desde 1875 a 1950...... 147 - 159

MIGUEL-JUAN PEREDA HERNÁNDEZ: Sociedades obreras aln1anseñas fundadas entre 1891 y 1911...... 161 -180

MIGUEL LUCAS PICAZO: El ciclo vital en la provincia de Albacete. La encuesta del Ateneo de Madrid de 1901/02. Costumbres populares sobre el nacilniento, el matrilnonio y la muerte 181 - 191

MANUEL LUNA SAMPERIO: "A las ánimas benditas": cofradías y grupos para el ritualfestivo en la provincia de Albacete 193 - 198

MARÍA DOLORES GARCÍA GÓMEZ: Un espacio para la lnuerte: acerca del origen del celnente- rio de Santa Ana de 199 - 203

ANTONIO CAULÍN MARTÍNEZ - MIGUEL LUQUE TALAVÁN: Don Francisco Ramos y Bascuiiana (1845-1917): un general de brigada hellinense en Filipinas 205 - 215

FERNANDO RODRÍGUEZ DE LA TORRE: El albacetense Juan Morcillo y Olalla, cumbre de la veterinaria española 217 - 237 Pág. JESÚS GÓMEZ CORTÉS: Herminio Almendros y la generación del 27 en . Algunas cartas inéditas desde su exilio cubano . 239 - 250 a M DOLORES DÍAZ NOGUERA - JESÚS GÓMEZ CORTÉS: Aproxilnación a la figura y a la innovadora obra pedagógica del maestro José Conde García .. 251 - 268

ÁNGEL LUIS ARJONA MÁRQUEZ: Aproximación al director de fotografía Tomás Duch Bebnonte .. 269 - 279

ROSA MARÍA SEPÚLvEDA LOSA: El sistema de partidos en albacete durante la segunda· república .. 281 - 288 ANTONIO SÁNCHEZ MORENO: Evolución política 111unicipal durante la II república en Villarrobledo . 289 - 299 JOSÉ DEOGRACIAS CARRIÓN ÍÑIGUEZ: La persecución religiosa en la provincia de Albacete durante la guerra civil (1936-1939) . 301-315 JOSÉ DEOGRACIAS CARRIÓN ÍÑIGUEZ: Pozo-Cañada: los primeros sucesos luctuosos de nues- tra guerra civil en la provincia . 317 - 322

DAMIÁNA. GONZÁLEZ MADRID: Algunas notas sobre el personal políticofranquista. Albacete en el contexto Castellano-Manchego: las elecciones 111unicipales de 1948 y los prilneros diputados provinciales corporativos de 1949. Un análisis cuantitativo y cualitativo .. 323 - 336

DANIEL SÁNCHEZ ORTEGA: Una aproximación al estudio de la oposición al franquismo en Albacete . 337 - 348

FRANCISCO ALCÁZAR RUBIO - JAVIER HERNÁNDEZ PÉREZ: La lucha arn1ada antifranquista en la postguerra de Albacete . 349 - 357

ANTONIO ESTEBAN GARVÍ: La lucha clandestina contra elfranquislno. La resistencia contra la dictadura en Albacete . 359 - 366

PABLO MARTÍN DE SANTA OLALLA SALUDES: La diócesis de Albacete del Concilio Vaticano 11 alfinal de la transición democrática de la Iglesia española .. 367 - 380

JULIÁN ROS CÓRCOLES: Arturo TaberaAraoz, Obispo de Albacete, en el Concilio Vaticano 11 . 381 - 392

LUIS MIGUEL MARTÍNEZ-GÓMEZ SIMÓN: Las instituciones de atención social al menor en la ciudadde Albacete . 393 - 407

ELlA GUTIÉRREZ MOZO: Tipologías arquitectónicas y arquitectos ele la ciudad de Albacete en el primer tercio del siglo XX . 409 - 433

JOSÉ Ma ARISTÓTELES MAGÁN PERALES: La configuración urbana de la actual ciudad de Albacete: normativa versus realidad urbanística . 435 - 447

GABINO PONCE HERRERO: La estructura industrial de la provincia de Albacete en los inicios del "desarrollismo" . 449 - 457

ROSA MARÍA SEPÚLVEDA LOSA: Un nuevofondo doculnental para el estudio delfranquislno: la comisaría de policía de Albacete . 459 - 464

BLANCA R. PASCUAL GONZALO: Archivo histórico provincial de Albacete nuevas posibilidades de investigación (identificación archivística e historia institucional) . 465 - 479

JUAN RAMÍREZ DE LUCAS: Albacete ¿ciudadde museos? . 481 - 484

JESÚS MARTÍNEZ-MORATALLA - LUIS PIQUERAS - PEDRO A. SERRANO: Patrimonio ar- queológico y espacios naturales de Albacete en peligro ante las centrales eólicas .. 485 - 497 PRESENTACIONES

EL SIGLO XIX EN LA HISTORIA DE ALBACETE: BALANCE HISTORIOGRÁFICO Carlos PANADERO MOYA Instituto de Estudios Albacetenses

INTRODUCCIÓN

Al realizar una mirada al estado actual sobre los estudios a partir de Hemández Sandoica, 1998). Enfoques tan relevan­ históricos relativos al Albacete decimonónico, se observa el tes en la historiografía española, desde la necesidad de estudiar importante salto protagonizado en los últimos veinticinco años la historia COlno totalidad hasta la subespecialización en teInas sobre ese período por lo que puede llamarse historiografía y etapas ha tenido su reflejo en nuestra historiografía albace­ albacetense contemporánea. tense del siglo XIX, contribuyendo, de esta forma, a otra de sus A partir de 1975 late una etapa de cambio sobre la atmós• características actuales: la abundancia de historias locales, tan fera. Hasta entonces el conocimiento del siglo XIX pasaba necesarias para una correcta interpretación y explicación de necesariamente por la consulta de contados autores: Roa y nuestra historia nacional. Erostarbe (1891) y Sánchez Torres (1898,1916). Sus trabajos El impulso de los estudios históricos albacetense debe rela­ tienen una fuerte carga erudita, muy apegados a las fuentes por cionarse con otros procesos de cambio que han actuado a la ellos consultadas, que mantienen su interés precisamente por vez. Así, el crecimiento del alumnado universitario, y más cer­ el contenido documental sobre el que se apoyan. A su vez, los ca de nosotros de la propia Universidad de Castilla-La Man­ aspectos por ellos tratados constituyen la parte final de un cur­ cha, ha impulsado el incremento de investigadores; a su vez, es so histórico que se remonta a tiempos pretéritos. Por tanto, no necesario, como ha ocurrido, que aparezcan organismos dedi­ son sólo acontecimientos de historia de su época sino de todas cados a dar salida a las investigaciones realizadas mediante su las que se dan cita en estas obras. publicación. En ello ha jugado un papel destacado el Instituto En esta corriente de erudición, existen otros trabajos de de Estudios Albacetenses de la Diputación Provincial de Alba­ ámbito local, de interés muy desigual, en ocasiones auténticas cete el cual ya convocó en 1983 un Congreso de Historia de misceláneas, donde se amontonan acontecimientos de todo Albacete que tiene, en el que ahora celebramos, su continua­ tipo y de épocas muy diversas, biografías y rasgos costumbris­ ción. Junto al LE.A. otros organismos han contribuido a difun­ tas. Las biografías de los personajes relevantes de cada locali­ dir las investigaciones históricas: Ayuntamientos, Diputación dad tienen su interés al constituir, para nosotros, una fuente Provincial, Cajas de Ahorro, Universidad regional,... y Junta de secundaria válida para el estudio de las élites de poder, econó• Comunidades, bajo cuyo patrocinio se celebró en 1985 el pri­ mico o político. En conjunto, las obras que proporcionan estos mer Congreso de Historia de Castilla-La Mancha. Ya en ese rasgos son, con todo, muy pocas. Cuentan con esta historio­ Congreso, el profesor Femández García (1988) presentó una grafía, Villarrobledo (Sandoval, 1961), (García Sola­ ponencia donde exponía, a la altura de 1985, los estudios dis­ na, 1973), (Cano, 1989), (González Bermúdez, ponibles para el siglo XIX en Castilla-La Mancha con su 1960), (Martínez Angulo,1985) y (Sánchez correspondiente análisis y comentario. Díaz,1956 ). Los Congresos de Historia citados, tanto el de Albacete Al lado de esta escasa producción, toda ella publicada con como el de Castilla-La Mancha, han incorporado, al igual anterioridad a 1975 (a excepción de dos), se asiste desde que éste, estudios sobre el siglo XIX que pueden parecer entonces a un cambio de rumbo traducido en la actualidad, modestos por su número si los comparamos con el tratamien­ veinticinco años después, en más de treinta títulos de libros y to historiográfico que han recibido otras comunidades de en más de cincuenta artículos, donde está presente la historia España, con un envidiable elenco de Congresos o de estudios contemporánea de Albacete en sus contenidos, métodos y debidos al formidable impulso de sus Universidades. Con aspectos lnás variados. todo, Albacete se ha incorporado a los aires de renovación Este crecimiento se enmarca en el espectacular cambio metodológica y temática. Se ha pasado de una historia políti• vivido por la historiografía española contemporánea desde los ca tradicional a otra más integradora que viene procurando años sesenta, cuya transformación ya vislumbró en un estudio compreder todos los aspectos de la vida social de Albacete en pionero José María Jover Zamora (1974) y para cuyos rasgos el siglo XIX. actuales se dispone de múltiples trabajos (véase, por ejemplo,

LA HISTORIOGRAFÍA ALBACETENSE DEL OCHOCIENTOS: RENOVACIÓN METODOLÓGICA Y TEMÁTICA

El que la historia de Albacete en el siglo XIX haya dado no haya encontrado el suficiente eco para ser utilizado como un giro en estos últimos veinte años no quiere decir que nues­ instrumento metodológico para el análisis demográfico de tro conocimiento de la centuria sea lo suficiente satisfactorio. otras poblaciones de Albacete. Nos referimos al trabajo de Hay todavía muchos aspectos por estudiar como tendremos Martínez Carrión (1983) sobre Yeste, municipio al que aplica ocasión de presentar a continuación al hilo de la exposición de el autor la "teoría de la transición demográfica", cuyos resulta­ las distintas cuestiones históricas abarcadas por los trabajos dos responden al de una población serrana con fuerte ais­ publicados. lamiento; su comportamiento demográfico convendría contras­ En el ámbito de la demografía histórica Albacete cuenta tarlo con el de otras poblaciones de la provincia al objeto de con un estudio excelente del que sólo debemos lamentar que encontrar, si es que los hubo, inicios localizados de la transi- 12

ción demográfica en la segunda mitad del sigo XIX. El mislTIo Navarro González (1993) Y el trabajo conjunto de Plácida autor, en unión de Sánchez Iniesta, presentó al congreso de Ballesteros y Joaquín Malina Cantos (1998). Historia de Albacete una comunicación sobre la trayectoria de La construcción del Canal de María Cristina, ejemplo per­ la mortalidad en el área rural albacetense, también con Yeste fecto de actuación del reformismo ilustrado, obra para cuya como eje (1984). En un marco temporal más amplio, desde el financiación Albacete no contaba con suficientes recursos, y siglo XIV, Martínez Carrión y Rodríguez Llopis analizaron los que, tras una visita de Carlos IV a la población (1802), se con­ cambios demográficos de Yeste en otro trabajo (1983). Por siguió que fuera costeada por el Estado, cuenta con nuevas último, un factor de modernización demográfica, indicativo del aportaciones al lado de las clásicas exposiciones de Blanch e tránsito de un ciclo demográfico antiguo a otro moderno, como lIla (1866), Roa Erostarbe (1891) y Sánchez Torres (1898, es el de la estacionalidad de los nacimientos, las nupcias y las 1916). Todas ellas han contado para sus respectivos estudios, muertes ha tenido por parte de Martínez Carrión (1984a) su al igual que los que han seguido tratando esta materia, con el correspondiente estudio, centrado también en Yeste, con resul­ trabajo pionero de Cano Manuel (1830). Nos referimos a las tados que se comparan con tasas medias provinciales. Todo investigaciones de Guerra Martínez (1984) y de Sánchez Orte­ parece indicar que el ciclo vital observado en el siglo XIX, no ga (1995). La primera estudia la gestión del Canal como se transforma, no se moderniza, a lo largo de la centuria: los empresa económica. La segunda, donde se dan a conocer pro­ resultados estudiados por nosotros para Albacete a mediados yectos anteriores a la aprobación del definitivo, se enmarca en del siglo (Panadero, 1979) y en sus últimos veinticinco años la perspectiva de la transformación del espacio natural por el parecen confirmarlo (Panadero, 1991 a). hombre. En otro trabajo, ahora de Morcillo (1995), se advierte Las crisis de mortalidad a lo largo del siglo XIX, bien por sobre el lamentable estado del Canal en tomo a los años sesen­ alzas de las subsistencias como por invasiones epidémicas, ta del siglo XIX. cuentan también con estudios monográficos. Es bien conocida La Guerra de la Independencia desencadenó, a su vez, un la crisis de subsistencias de 1857 en Albacete, que estudiamos proceso en el que las estructuras del Antiguo Régimen sufrie­ hace años (Panadero,1979), cuyo enfoque debería aplicarse a ron la sacudida de la revolución liberal, plasmada en la obra otras alzas de las que se tiene seguridad de su existencia aun­ legislativa de las Cortes de Cádiz, que Fernando VII, cuyo paso que se desconoce su impacto social y demográfico. por Albacete nos cuenta en un estudio Fuster (1977), se encar­ En cuanto a las enfermedades epidémicas, se dispone de un gará de anular al restaurar el absolutismo. Un acontecimiento estudio sobre las epidemias de viruelas en Albacete (Briones y de tanta trascendencia histórica posterior, como fue la extin­ Úbeda, 1988) algo tan propio del siglo XVIII, y el realizado por ción del régimen señorial, en concreto la abolición de los seño­ Losada Azorín (1988) para el siglo XIX en Hellín donde se ríos jurisdiccionales y la conversión de los señoríos territoria­ registran las diferentes epidemias que afectaron a la población. les o solariegos en propiedad privada del señor, no podía dejar Sobre las epidemias de cólera, se cuenta con los trabajos de de contar también con estudios. El de Juan Romero permite Gabino Ponce (1984), dedicados a y para las conocer la estructura de la propiedad de la tierra de algunos de epidemias de 1854-55 y 1865, Y el de Torres Falero (1993) los lugares sometidos a régimen señorial (1983). Pedro Losa relativo a la invasión colérica de 1885 en Albacete. ha presentado un estudio sincrónico del condado de La literatura médica de la época, tan dada a denunciar las (1993), ejemplo de señorío jurisdiccional y solariego, y José carencias de la infraestructura sanitaria, cuenta también con un M. Almendros ha centrado su atención en el Estado de Jorque­ estudioso entre nosotros: José Manuel Almendros, el cual ha ra (1987). Por último, a través de Zuazo conocemos el cariz dado a conocer diversas topografías médicas de varias locali­ antiseñorial que tuvo en Montealegre la crisis de 1808 al tra­ dades de Albacete (1988,1992). En ellas, los médicos, al estar ducirse por el campesinado en una oportunidad para liberarse en contacto con las capas de población n1ás desprotegidas, del yugo señorial (1915) Con todo, afortunadamente, el cono­ denuncian la grave situación sanitaria de los barrios de clase cimiento de la evolución histórica del señorío de Montealegre popular. pasa por la consulta de la reciente investigación de Francisco A la hora de enfrentarse a las distintas etapas históricas que Javier Losa (1998). componen nuestro siglo XIX se advierte la falta de estudios Otra cuestión tratada, que es consecuencia del proyecto que tengan por objeto la crisis del Antiguo Régimen en tierras liberal de Estado y de organización territorial, es la creación de de Albacete, es decir, del período 1808-1833. No hay manera la provincia durante el Trienio Constitucional, tema investiga­ de engarzar, porque lo desconocemos todo, los años finales del do por Angel Ñacle (1990), entonces con capital en Chinchilla siglo XVIII en Albacete, con sus problemas económicos y ten­ en contra de la candidatura de Albacete, decisión en donde siones sociales, con la etapa que se abre a partir del emblemá­ contó la influencia del entonces presidente de las Cortes, el tico año 1808, cuando los acontecimientos vividos por este chinchi11ano Vicente Cano Manuel. De esta etapa se empiezan país anuncian tanto la liquidación del viejo sistema del Anti­ a conocer las dificultades de aplicación de otro de los aspectos guo Régimen como su pertinaz resistencia a querer morir. de la obra legislativa del Trienio, en concreto de la desamorti­ Del largo período que va de 1808 a 1833, que, por otra par­ zación civil en Chinchilla, dado a conocer por Plácida Balles­ te, coincide en el tiempo con el reinado de Fernando VII, nece­ teros y Joaquín Malina Cantos (1993). sitamos encontrar respuestas a cómo se estructuraba la socie­ La compleja etapa que se abre con el triunfo de la revolu­ dad albaceteña, sus conflictos, las fuerzas productivas y las ción liberal, al introducir un nuevo sistema político y de poder relaciones sociales de producción, ideología de los distintos y al atentar contra los fundamentos sociales y econólnicos del grupos sociales ante el liberalismo,.. Antiguo Régimen en Albacete, constituye el marco donde se No obstante la ausencia de estudios históricos de enfoque dan cita muy diversos trabajos. total sobre el período, si existen análisis de aspectos puntuales Los ilnportantes cambios de esta etapa en Albacete, que ocurridos en esta larga etapa de 1808 a 1833. Así, los efectos ocuparía el reinado de Isabel II y el Sexenio Democrático, tie­ de la Guerra de la Independencia, el paso de las tropas france­ nen un tratamiento particularizado en el estudio que dedicamos sas, las requisas, el desorden económico, el vacío de poder y el por nuestra parte al siglo XIX (1985). movimiento juntista encuentran eco en el estudio pionero de Al descender a nivel monográfico es necesario comenzar Mateos y Sotos (1974) Yse prolonga con los de Ramón Carri­ con el trabajo de Guerra Martínez, en el que nos presenta a lera (1984), Sánchez Picaza (1988), Meya Íñiguez (1993), Albacete durante la regencia de María Cristina, es decir, en los 13

inicios de su andadura como capital de la recién nacida provin­ ma colectiva al titular del señorío, han sido dados a conocer cia. Se estudian en él la población, la estructura socioeconómi• por Juan Romero (1987). En otra investigación, ahora de ca y las consultas electorales para diputados a Cortes (1987). Almendros Toledo (1987), el punto de mira se sitúa en la casa En otra investigación, también de Guerra Martínez, el tema de Villena como titular del señorío de Jorquera, objeto de objeto de estudio es el impacto de la guerra carlista de 1833­ extinción. Por último, hay que citar la reciente investigación de 1839 en tierras de Albacete (1991). En ella se muestra como Francisco Javier Losa (1998) sobre el señorío de Montealegre. tropas carlistas del Bajo Aragón y del oeste de Valencia, más Su autor advierte como hay que esperar a los primeros años del las partidas "guerrilleras" procedentes de Ciudad Real, hicie­ siglo XX para que cesen las disputas entre los moradores de la ron muy difícil la vida a los albacetenes de aquellos momentos. villa señorial y los titulares del dominio como consecuencia de La provincia, sin rodaje admistrativo, quedaba indefensa, aban­ la redención de la renta territorial. donada a sus fuerzas, siendo fácil presa del carlismo para pro­ Otra vía de análisis, por la que han entrado diversos auto­ veerse de víveres y de recursos monetarios. En toda la provin­ res, ha sido la de estudiar los efectos sobre la propiedad del cia, sólo dos poblaciones, y , pudie­ conjunto de medidas legales aprobadas por el Estado liberal, ron contar con mayores simpatías los carlistas, según plantea comparando, para ello, la estructura de la propiedad de la tie­ como posible Ana María Guerra. Otro autor, Agustín Sandoval, rra a mediados del siglo XVIII con la de los años sesenta del se ha detenido en uno de los hechos de armas, como fue la bata­ siglo XIX. En esta dirección están los trabajos de Juan Rome­ lla de Villarrobledo, acaecida el 19 de septiembre de 1836 ro (1983), Rosa Sepúlveda (1981), José Sánchez (1984), Fran­ (1986). Se trata de una victoria cristina en contraste con otro cisco Fernández y Carmen García (1988), o bien, con un enfo­ hecho de armas acaecido al final de la guerra cerca de Casas que tnás centrado en la evolución de los cultivos, el de Jacinto Ibáñez, el 14 de noviembre de 1839, estudiado por Almendros González y Pablo Jaquero (1984). Toledo (1990) Y que finalizó con una victoria carlista. El La industria en este período, en cambio, ofreció escasas encuentro le costó un consejo de guerra al comandante general modificaciones, según demuestran nuestros propios trabajos de la provincia de Albacete, D. Francisco Valdés. (1981, 1985) Ylos de José Miguel Martínez (1989), con secto­ El triunfo de la revolución liberal acaba con las anteriores res destinados a cubrir las necesidades de los habita~tes de la formas de propiedad (amortización, vinculación y régimen provincia y cuando la industria textil catalana, ya antes del señorial) para verse sustituidas por la propiedad burguesa, ple­ establecimiento del ferrocarril, ha logrado comercializar su na, libre e individual. producción en Albacete (C. Panadero, 1985). En torno a 1875, De todos los cambios introducidos en el régimen de pro­ según advierte García Bueno (1975), la industria tradicional piedad de la tierra el mejor conocido es el de la desamortiza­ seguía siendo la nota predominante. De las Fábricas de San ción, gracias a la paciente labor investigadora de Díaz García, Juan de , no obstante el trabajo pionero de Francisco cuando únicamente contábamos con los resultados de la desa­ Fuster (1976), cabe lamentar que no dispongamos para el siglo mortización en Hellín (Molina Grande y Morales Gil, 1975). XIX de una investigación del calibre de la realizada por Juan Antonio Díaz empezó presentando los resultados de la desa­ Helguera para el siglo XVIII (1984). Este autor ha dado ya, por mortización en los municipios de Albacete (1978) YEl Bonillo fortuna, los primeros pasos en una investigación cuyo título lo (1979), sin perder de vista el conjunto provincial. Los resulta­ dice todo (1987). dos, recogidos en su tesis doctoral (1996), hablan con minu­ En cuanto a la minería, ese boom tan destacado en el siglo ciosidad del derrumbe del potencial agrario de la Iglesia y de XIX en el que España jugó un itnportante papel, ha merecido los municipios de Albacete, de los nuevos propietarios y de los la atención de Juan B. Vilar y Pedro María Egea (1986) en sus graves perjuicios causados en sus niveles de vida a las clases aspectos más destacados: las calaminas de Riópar, los depósi• populares. Otro autor, Rodríguez de la Torre (1996), ha estu­ tos salinos, aquí con otro trabajo de José M. Almendros (1985), diado la figura y obra de José de Salamanca, político y hombre y el azufre de Hellín, también estudiado por Losada Azorín de negocios, elevado a la categoría de noble (marqués de Sala­ (1994). Un último trabajo, donde el azufre ocupa un lugar des­ manca), propietario de un enorme latifundio situado al sur de tacado, como no podía ser menos, es otro de Egea Bruno Albacete, ejemplo de potencial agrario construido a partir de la (1987). desamortización. La Restauración, a partir de 1875, constituye la etapa final Al lado de la desamortización, tan bien conocida, la des­ del siglo XIX, en cuyo marco se ubican diferentes trabajos por vinculación es la gran desconocida, lo cual es una pena si tene­ su temática y enfoque. En unos, la Restauración es un período mos en cuenta que, como hemos podido comprobar (Panadero, dentro de un proceso histórico más largo, como el de Hellín, de 1991 a), en la relación de las principales fortunas rústicas de Losada Azorín (1994) y el de Villarrobledo, donde Virgilio Albacete, ya en el último cuarto del siglo XIX, figuran propie­ Espinar (1993) hace un ejercicio de transcripción de las actas tarios con bienes en otro tiempo amayorazgados. Un trabajo de acuerdos municipales, permitiendo repasar el turno entre como el de Pérez Picazo (1990) para Murcia, aplicado en tie- conservadores y liberales y conocer las élites políticas. En .rras de Albacete, ayudaría a aclarar muchas incógnitas. En otros autores, la Restauración es el ámbito temporal donde se Albacete está claro que los soportes que permitieron la consti­ abre y cierra la investigación. Así, José Antonio Ayala (1988) tución, en unos casos, o el mantenimiento, en otros, de la gran ha estudiado la masonería. Comprueba que en la ciudad de propiedad fueron la desamortización y la desvinculación, o Albacete vivían cerca del 40% de los masones calculados para proceso por el que se pone fin a los mayorazgos y se reconoce el conjunto provincial, siguiéndole en iInportancia Hellín y la propiedad privada a sus titulares. Almansa. Es decir, los núcleos de estructura socioprofesional En cuanto a los efectos de la abolición del régimen señorial más compleja de la provincia. Matilde Morcillo, por su parte, en tierras de Albacete la información disponible procede de se centra en un acontecimiento del final de la etapa, la crisis varios autores. A través de Pedro Losa (1993) y de Juan Rome­ colonial del 98, la respuesta y la repercusión que tuvo para ro (1983) puede seguirse la evolución de las rentas y propieda­ Albacete la guerra contra los Estados Unidos (1996). En otro des del titular del condado de Balazote, ejemplo de señorío estudio anterior, Matilde Morcillo ya pudo observar el fuerte territorial en esta provincia. Las vicisitudes de los enfitéutas de eco patriótico con que Albacete respondió a las expediciones los señoríos de y , que logran el rescate del militares de O'Donnell, en sintonía con el comportatniento dominio directo y el acceso a la propiedad, previo pago de for- nacional (1993). 14

En la dirección apuntada de conocer la estructura social de da monografía llena de sugerencias, escrita por José María Albacete se encuentran otros diversos trabajos escritos por Sánchez Ibáñez (1997). Analiza su andadura como hospital nosotros. En uno, a partir del censo electoral de 1878, se expo­ local y provincial, desde 1863, y aspectos como el movimien­ nen los electores con su dedicación profesional y cuota de con­ to de enfermos, deteniéndose en los momentos de alta morta­ tribución al Tesoro (1983); en otro, la vivienda constituye la lidad, personal y recursos destinados a su sosteniIniento. variable utilizada como exponente de la posición económica de De los Ayuntamientos, del que más aspectos conocemos es su dueño (1990 ) y, por último, en otro trabajo más (1991 b) se sobre el de la capital. La vida de los primeros ayuntamientos ofrecen las posibilidades de los padrones de habitantes, de las de la regencia de María Cristina de Barbón (1833-1840), estu­ matrículas de contribución y de las escrituras de partición de diados por Ana María Guerra (1985). Los problemas presu­ bienes hereditarios, que permiten, estas últimas, presentar una puestarios durante la Restauración (Panadero Moya, 1984b); visión dinámica y más completa de la sociedad y de sus clases los pormenores sobre la instalación de la luz eléctrica y su difí• sociales. cil sostenimiento por las arcas municipales (Juan Sánchez, También se ha iniciado el estudio de los partidos políticos 1984) y, a partir del trabajo de Matilde Morcillo, Juan Cañiza­ de la Restauración y los procesos electorales para diputados a res y Manuel Sánchez (1998) conocemos muy bien el na­ Cortes (C. Panadero, 1985). Dentro de la órbita historiográfica cimiento y evolución, a lo largo del siglo XIX, de la guardia sobre el caciquismo, hay otro trabajo, cuyo autor (Benito municipal y del resto de cuerpos de seguridad municipal en Sanz, 1980) analiza la constitución de un distrito propio, el de Albacete. Casas Ibáñez, bajo el poderío de la familia Ochando. La Historia de la cultura tiene también su historiografía. El Otro de los campos investigados ha sido el de las activida­ Ateneo albacetense, creado en 1880, tiene ahora su primera des económicas entre la crisis agrícola y pecuaria de mediados época, como refleja Ángel Ñacle (1993). El teatro, con otras de los ochenta y los comienzos del siglo XX, donde se sitúa un manifestaciones culturales, contamos con la aportación inicial estudio de Egea sobre la agricultura (1988). de Francisco Fuster (1974) al minucioso estudio de Emilia Centrado en tierras de Albacete existe un trabajo (Panade­ Cortés (1999); la escuela de Magisterio de Albacete a través de ro Moya, 1991a) donde se profundiza en el conjunto de la acti­ las investigaciones de Francisco Belmonte (1987, 1997, 1998) vidades económicas y su dinámica, es decir, en la agricultura~ la enseñanza secundaria en el trabajo de Mercedes Vico (1984) la industria, el comercio y las finanzas, cuyos resultados en y en el de Sánchez Sánchez y Millán Miralles (1986); la pren­ cuanto a la sucursal del Banco de España en Albacete fue pre­ sa de Albacete como actividad elnpresarial y, por supuesto, sentado en otra publicación (C. Panadero, 1995). En este cam­ como órgano de expresión de una ideología política cuenta con po, en una investigación de López Yepes, se ofrecen los inten­ los estudios pioneros de Francisco Fuster (1971, 1972), el tos, frustrados, de establecimiento de Cajas de Ahorro en el detallado análisis de Isidro Sánchez (1985) Y el que toma como siglo XIX (1984 ). centro a La Roda, escrito por Miguel Sánchez (1987). Junto a la estructura económica se ha profundizado en la La prensa es también una fuente de primer orden para el coyuntura: en la conocida "crisis agraria". Ya Martínez Carrión historiador. Y sobre fuentes también es posible presentar publi­ (1984) al exponer la evolución de las explotaciones ganaderas caciones de series documentales válidas para la historia del en Albacete la utiliza como argumento explicativo de aquélla; siglo XIX en Albacete. Así, el libro de Francisco Fuster y José a su vez, sabemos el amplio ilnpacto de la ""crisis agraria" al Cano Valero (1985) a partir de los libros de correspondencia de demostrar cómo en nuestra ciudad no fue sólo agraria sino que la Audiencia Territorial de Albacete con el Gobierno de la afectó al conjunto de la economía, por su "efecto dominó" (C. nación. Esta investigación cuenta con el inconveniente de que Panadero, 1991a ). También, en otro estudio, el mismo autor no puede llegarse al contenido de las comunicaciones origina­ resalta el impacto, ahora social, de la crisis (C. Panadero, les, pues tan sólo se esboza el tema. En otra publicación, en 1984c). cambio, si puede llegarse, nos referimos al catálogo de pleitos Dentro del marco temporal en que nos movemos hay que y expedientes albacetenses en el Consejo Supremo de Castilla resaltar el trabajo de Gabino Ponce (1989), un estudio geográ­ en plena crisis del Antiguo Régimen, escrito por Rodríguez de fico sobre la comarca de Almansa que contiene múltiples la Torre (1998). Ambos libros cuentan con un buen índice final. aspectos muy válidos para la historia económica. Entre otras, Resta, por último, citar las obras de síntesis, que tanto se resalta la actividad zapatera, motor del desarrollo económi• agradece el público lector, aquellas con las que los historiado­ ca y demográfico de Almansa. Un ejemplo de actuación res, al descubrir el pasado de Albacete, contribuyen a hacer empresarial plenamente moderno en ese sector es el protago­ comprensible el presente y a proyectar el futuro. nizado por la familia Coloma, estudiado por Gómez Cortés, El conjunto de trabajos disponibles pueden agruparse en Piqueras García y Sánchez Uribelarrea (1984). dos direcciones. En una, como consecuencia de la creación de En otra temática, en el campo de las instituciones, hay que la región de Castilla-La Mancha, Albacete aparece con las resaltar los trabajos que giran en torno a los Ayuntamientos y otras provincias castellano-manchegas en estudios relativos a a la Diputación Provincial, sobre cuya concepción tanto pole­ la historia contemporánea de la región, como el escrito, en uno, mizaron moderados y progresistas en el siglo XIX. y coordinado, en otro, por Isidro Sánchez (1986, 1998 ); el tra­ La Diputación cuenta con una publicación sobre sus presi­ bajo conjunto de Eduardo González y Javier Moreno sobre la dentes debida a Carmen Gil (1990) Y la obra coordinada por historia electoral (1993); el estudio sobre la población de José Manuel Requena, cuya parte del siglo XIX ha sido redactada Camacho (1999) Y el relativo a la industria de Miguel Pardo por Ana María Guerra (1993), Antonio Díaz (1993), Angel (1996) que ofrece, a pesar de que por su título parece centrar­ Ñacle (1993a) y Carlos Panadero Moya (1993 a, 1993b). En se únicamente en el tiempo reciente, una visión panorámica de general se presentan los procesos electorales provinciales, que los inicios de la industrialización. reproducen a esa escala lo que son las pugnas políticas a nivel La otra dirección de los trabajos de síntesis se caracterizan nacional, la hacienda provincial, con sus ingresos y gastos, las por centrarse en Albacete como unidad espacial. Tres autores dificultades de la Diputación para impulsar un programa de han hecho su correspondiente aportación: Francisco Fuster inversiones... Entre las obligaciones de la Diputación destaca­ (1978, 1992), Carlos Panadero Moya en distintos trabajos ba por sus gastos el cuidado de la Beneficencia, y dentro de (1984a, 1985, 1992, 1998) YManuel Requena (1999) autor del ella, el Hospital de San Julián. Sobre él se cuenta con una sóli- último esfuerzo de síntesis de nuestra historia contemporánea. 15

Unas últimas palabras para indicar que aún queda mucho conocitniento histórico de la sociedad albacetense en los últi­ por hacer, sin duda; pero contemplado desde aquí podemos mos años, gracias al notable esfuerzo intelectual de los autores reconocer el importante salto cualitativo que se ha dado en el reseñados en este breve balance.

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1. VISIÓN GENERAL

Todo Congreso supone un empuje importante a la investi­ fecha en la que apareció la primera síntesis de Francisco Fus­ gación y por ello este balance trata de dar a conocer los temas ter Ruiz sobre aspectos históricos, artísticos, sociales y econó• investigados y las lagunas aún existentes con el fin de que sean micos3• Posteriores investigaciones dieron lugar a dos nuevos cubiertas en un futuro inmediato. El estado actual de la inves­ compendios en las que intervinieron especialistas que pusieron tigación histórica sobre el Albacete del siglo XX es buena, ya al día el estado de la investigación. Uno se publicó en 1985, que se han publicado acerca de dicho siglo, unos ciento trein­ Historia de Albacete y su Caja de Ahorros, 1833-1985 y la ta artículos y 65 libros. Ello se debe, sobre todo, a la gran labor otra, de reciente aparición, titulada Historia de Albacete, cuyas realizada por la revista Al-Basit, el Instituto de Estudios Alba­ últimas 170 páginas están referidas al siglo XX4. cetenses y la Universidad de Castilla-La Mancha, junto a las En lo que respecta a la historia local de algunas poblacio­ aportaciones de los Congresos de Historia de Albacete (1983) nes es pobre la producción de obras referidas al siglo XX. Y el de Castilla-La Mancha (1985). Entre las localidades ha sido la capital quien ha merecido más No sólo se ha progresado cuantitativamente sino, y esto es atención al dedicarle tres trabajos, aunque carecen de la meto­ lo más importante, muchas de las obras de investigación han dología histórica. Sin embargo, aportan una gran cantidad de supuesto una renovación metodológica siguiendo las corrien­ datos desde el principio de siglo hasta 1958 que las hacen tes actuales españolas y extranjeras. Se observan destacadas valiosas para los investigadores. De los primeros años del siglo aportaciones en los estudios sobre la población procedentes de XX nos habla Francisco Javier Sánchez Torres en sus Apuntes la demografía histórica y acerca de la historia social en cuanto para la historia de Albacete, siendo ampliada por Joaquín Qui­ que ha incorporado conceptos y métodos de la sociología, jada Valdivieso, a mi entender la mejor de las tres, Albacete en antropología y psicología. También se han registrado impor­ el siglo XX (Apuntes para la historia de esta ciudad) y com­ tantes cambios en la desprestigiada historia política que se pletada por Francisco del Campo Aguilar, Albacete contempo­ basaba en los relatos de los grandes personajes y efemérides, ráneo (1925-1958). Solo tres municipios han dispuesto de pasando a centrarse en los sucesos populares, en las masas. obras de cierto interés sobre el período contemporáneo, gracias Además incorpora aportaciones de la ciencia política, de la al esfuerzo de investigadores e instituciones, como Almansa sociología y de la geografía electoral, volviéndose al empleo siglo XX, de varios autores; la de Alfredo Losada Azorín sobre de la historia narrativa. Por lo tanto, se han ido cubriendo los Hellín en su Historia y la de Virgilio Espinar, Villarrobledo campos de investigación del siglo XX a partir de los años entre las dos repúblicas (1873-1936)5. En general, podemos ochenta, siguiendo las corrientes de la historiografía españolal. concluir que se han dedicado tres obras generales a la provin­ La historia de la provincia de Albacete referida al siglo XX cia y seis a los municipios, destacando tres a la capital y una a ha sido poco tratada hasta finales de la década de los setenta2, Almansa, a Hel1ín y a Villarrobledo.

2. DEMOGRAFÍA

Han aparecido numerosas publicaciones con importantes (nupcias, defunciones y nacimientos) están directamente vin­ avances metodológicos y aportaciones de nuevas fuentes, culados a los ritmos agrarios y la transición demográfica no se siguiendo las orientaciones de la demografía histórica. La obra produce hasta las primeras décadas del siglo XX. Fenómeno modélica es la de José Miguel Martínez Carrión6 referida a la este último que ha sido observado en otras localidades como zona rural de Yeste entre 1850 y 1935. Esta se apoya metodo­ Bogarra y Albacete capital, y que podría hacerse extensible al lógicamente en las aportaciones de los teóricos franceses, resto de los pueblos. Dicha transición originó un incremento ingleses e italianos, así como en diversas y variadas fuentes rápido de la población, muy superior al desarrollo económico (INE, el Registro Civil, registros parroquiales y archivo muni­ provocando un desequilibrio malthusiano que originó el pro­ cipal)' junto a un excelente aparato crítico. Observa que los ceso de emigración en busca de trabajo del campo a la ciudad efectos epidémicos son cada vez menores, los ciclos vitales o a otros núcleos industriales.

1 CASANOVA, Julián: La Historia y los historiadores. Barcelona, Crítica, 1991. Destacados trabajos metodológicos se pueden encontrar en las prestigiosas revis­ tas de Historia Social y de Historia Contemporánea. Para una síntesis de las últimas aportaciones, ver la obra de Gonzalo PASAMAR: Historia contemporá­ nea. Aspectos teóricos e Historiográficos. Madrid, Síntesis, 2000.

2 Existían tres libros referidos a la capital pero ninguno a la provincia de Albacete.

3 FUSTER RUIZ, Francisco: Aspectos históricos, artísticos, sociales y económicos de la p,vvincia de Albacete. Valencia, Caja de Ahorros de Valencia, 1978; del mismo autor es Fondos bibliográficos albacetenses. Albacete, Ayuntamiento, 1972.

4 Congreso de Historia de Albacete. Vol. IV: Edad Contemporánea. Albacete, lEA, 1983. Las dos obras colectivas son Historia de Albacete y su Caja de Ahorros, 1833-1985. Albacete, Caja de Ahorros, 1985, pp. 143-464, e Historia de Albacete, Toledo, Azacanes, 1999, pp. 403-574.

5 VARIOS AUTORES: Almansa siglo XX. Almansa, Ayuntamiento, 1999; LOSADA AZORÍN, Alfredo: HelUn en su Historia. Hellín, 1994; ESPINAR, Virgilio: Villarrobledo entre las dos repúblicas (1873-1936). Villarrobledo, Biblioteca de Autores y Telnas de Villarrobledo, 1993; SANDOVAL, Agustín: Historia de mi pueblo. Villarrobledo, 1961. 6 MARTÍNEZ CARRIÓN, José Miguel: La población de Yeste er los inicios de la transición demográfica, 1850-1935. Albacete, lEA, 1984. En la misma línea se encuentran dos artículos del mismo autor: "Estacionalidad y cambio demográfico: La transformación del ciclo vital anual en tierras albacetenses durante los siglos XIX Y XX". Al-Basit, n° 13, 1984, pp. 87-136 Y "El declive de la mortalidad en el área rural albacetense, siglo XIX-XX". Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV: Edad Contemporánea, lEA, 1984. 20

La relación entre población y economía ha sido puesta de tos diferentes. El gran aumento poblacional de la capital se manifiesto en los trabajos de José Sánchez, Juan Romero y Fran­ debe, en gran parte, según Miguel Panadero10, a la emigración cisco Díaz. Todos están basados en sucesivos recuentos pobla­ hacia ella del resto de los habitantes de los pueblos de la pro­ cionales y en las tasas naturales. Los dos primeros han manteni­ vincia, especialmente entre los años 1950-1990, originándose do que la emigración fue consecuencia de que la población ha una planificación urbana bastante caótica. Sobre Hellín, Anto­ crecido más rápidamente que la economía. El trabajo de José nio Losada11 analiza como la población agraria desciende por Sánchez7 demuestra que la provincia de Albacete era predomi­ debajo del sector secundario y terciario a partir de 1970 y ade­ nantemente agraria, poco modernizada y de bajos rendimientos, más como el cambio en la familia se aprecia menos en las con escasa industrialización y poco desarrollo comercial hasta pedanías rurales que en la zona urbana. Sobre la población 1970. Ello sirvió de freno al incremento de la población ya que almanseña entre 1970 y 1980 está la obra de Rafael Piqueras l2• se registró un alto índice de emigración exterior a partir de 1950. Acerca de la evolución y planificación urbana de la capital Juan Romer08 mantiene que hubo un crecimiento demográfico disponemos de la obra pionera de Miguel Panadero, citada hasta 1950 y a partir de esta fecha hasta 1975 decayó como con­ anteriormente. Sobre este mismo tema, aparecieron posterior­ secuencia de la emigración. El índice de aumento vegetativo fue mente dos investigaciones 13. La de Jacinto González, enfocada más elevado en la provincia que en la capital hasta los años 40, desde la geografía urbana y la de José María Magán, desde el invirtiéndose la relación a partir de 1960 ya que en las zonas campo del derecho administrativo, quienes señalaban que la rurales quedaba predominantemente población vieja que no pro­ necesidad de crecimiento acelerado, la especulación urbana, la creaba. Francisco Díaz9 hace un estudio de proyección demo­ poca sensibilidad del ayuntamiento en algunas etapas lo cual gráfica utilizando los datos poblacionales entre 1900 y 1985. ha originado una deficiente planificación urbana y un gran des­ Elaboró una propuesta para 1986-2010 en la que señala que cuido del patrimonio histórico, causando un caos en la estética habrá un incremento lento de la población, debido sobre todo a de la construcción. las zonas expansivas del noroeste y suroeste que compensarán el Quedan algunos aspectos interesantes que no han sido tra­ retroceso o estancamiento de las demás zonas. La población tados aún. La crisis de viruela de 1918 que tanta repercusión sufrirá un envejecimiento, finalizará la endémica emigración y tuvo en toda la provincia, así como su incidencia sobre los dis­ seguirá disminuyendo la dedicada al sector primario en benefi­ tintos estratos sociales y diversos barrios. Hay que indagar en la cio de los sectores terciario y secundario. emigración exterior, sabiendo el número de personas que salen, Debemos añadir algunos trabajos locales referidos a aspec- a las provincias o países que se dirigen y las razones de ello.

3. ECONOMÍA

El plano economlCO ha sido el menos atendido por los ción15. Se introdujeron cultivos más rentables como la vid 16 en investigadores, dedicándole más atención a lo acaecido con sustitución de los cereales, como sucedió en la zona de Villa­ posterioridad a 1970. Hay un enfoque general en los trabajos rrobledo. La concentración de la propiedad la convertía en una de José Sánchez Sánchez, Miguel Panadero Moya y Miguel R. provincia latifundista a la que afectó la Reforma Agraria, con­ Pardol4• Conocemos que esta provincia siguió manteniendo feccionándose una amplia lista de albacetenses que les expro­ una economía agraria poco modernizada hasta 1970, obser­ piaban las tierras 17, pero después de la guerra les fueron vándose a partir de dicha fecha unas mejoras al tiempo que se devueltas. iniciaba un desarrollo de la industria ligera y del comercio. Diversos trabajos analizan la evolución en algunas zonas, observándose en todas la práctica de una agricultura tradicio­ 3.1. AGRICULTURA nal con diversas y variadas mejoras. Juan Romero 18 estudia la El sector más estudiado es la agricultura, ya que estamos comarca de Albacete partiendo de la utilización del Avance hablando de una provincia agraria. Durante el primer tercio del Catastral de 1909, el Registro Inventariado de la Propiedad siglo XX se realizaron algunas mejoras en el campo que per­ Expropiable de 1933, los censos agrarios de 1962 y 1972, los mitieron el incremento de la productividad y de la produc- datos reunidos por Pascual Carrión en Los latifundios en Espa-

7 SÁNCHEZ sÁNCHEZ, José: Geografía de Albacete. Factores del desarrollo económico de la provincia y su evolución reciente. Albacete, lEA, 1982, 2 v.

8 ROMERO GONZÁLEZ, Juan: La despoblación de la Mancha. Evolución de la población de Albacete y su problemática actual. Albacete, lEA, 1980.

9 DIAZ MARTÍNEZ, Francisco: Demografía de la provincia de Albacete, bases para una planificación económica. Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 1990. 10 PANADERO MOYA, Miguel: La ciudad de Albacete. Albacete, Caja de Ahorros Provincial, 1976.

11 LOSADA AZORÍN, Antonio: "La estructura de la población económicamente activa en Hellín". Al-Basit n° 13, 1984, pp. 137-161; "La composición familiar en el municipio de Hellín". Al-Basit n° 20, 1987, pp. 67-78.

12 PIQUERAS GARCÍA, Rafael [y otros]: "Evolución de la población de Almansa en el decenio 1970-1980", Congreso de Historia de Albacete. Edad Contemporánea, Albacete, lEA, 1984. a 13 GONZÁLEZ, Jacinto: La ciudad nueva: Albacete 1833-2000. La Siesta del Lobo, Albacete, 2000; MAGÁN PERALES, J.M : El desarrollo urbanístico de la ciudad de Albacete. Albacete, LE.A., 1997.

14 PANADERO MOYA, Miguel: "Albacete en el período 1939-1960" y "Estructura económica y social de Albacete (1960-1985)", en Historia de Albacete 1833­ 1985 Y su Caja de Ahorros. Albacete, Caja de Ahorros, 1985, pp. 201-218 Y 221-270, respectivamente; SÁNCHEZ SÁNCHEZ, José: Geografía de Albacete. Factores del desarrollo económico de la provincia y su evolución reciente. Albacete, lEA, 1982, 2 v. PARDO, Miguel R.: (Coord.): Historia económica de Castilla-La Mancha (siglos XVI/-XX). Biblioteca Añil, Madrid, 2000.

15 REQUENA GALLEGO, Manuel: "Transformaciones y expansión de la agricultura albacetense, 1890-1935". Cultural Albacete, enero 1990, pp. 3-20.

16 RODRÍGUEZ DE LA TORRE, Fernando: "Catastro vitícola y vinícola de la provincia de Albacete". Al-Basit n° 8, 1980, pp. 163-172; GÓMEZ ESCUDERO, L.J.: "El viñedo en el paisaje agrario de Villarrobledo". Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV: Edad Contemporánea, lEA, 1984.

17 ESPEJO MARÍN, Cayetano: "Las grandes explotaciones agrarias en la provincia de Albacete". Al-Rasit n° 25, 1989, pp. 165-179.

18 ROMERO GONZALEZ, Juan: "Agricultura tradicional y transformaciones recientes en el campo de Albacete", Al-Basit, n° 7, enero 1980, pp. 37-61. 21

ña y el Censo de Rústica. Llegó a la conclusión de que en todo registró un gran aumento en la etapa 1916-1924 y se fue cam­ el período predominó el latifundio y no sufrió importantes biando la ganadería extensiva por la estabulada. Ahora falta cambios la propiedad. A partir de los años cincuenta se aprecia profundizar con trabajos puntuales y fuentes nuevas, así como un progresivo aumento de la explotación directa, sobre todo, la relación entre ésta y la agricultura. en las grandes extensiones. El escaso nivel de desarrollo tec­ nológico y los bajos niveles de productividad podían mante­ 3.2. INDUSTRIA nerse gracias a la superabundancia de mano de obra y bajos La industrialización comienza a tener sus efectos en Alba­ salarios. A partir de los años sesenta se introducen mejoras en cete durante el primer tercio del siglo XX. Aparecen las fábri­ los utensilios agrarios, aumenta el índice de mecanización y de cas de harinas y chocolates, las bodegas, la cuchillería y el cal­ abonos. Sin embargo se mantiene el empleo de los cultivos tra­ zado, entre las más importantes. Su lenta mecanización estuvo dicionales con predominio de los cereales. El abundante agua apoyada, sobre todo, en la electricidad. Así lo muestran los subterránea ofrecía la posibilidad de la puesta en regadío de estudios de Manuel Fernández y José Sánchez22• Este último una parte del secano, incrementando así los rendimientos, sin señala que nuestra industria eléctrica cubría no sólo la deman­ embargo no se realizaron importantes inversiones en regadíos. da provincial sino que enviaban gran parte de su producción a Hay que resaltar la labor colonizadora llevada a cabo en Aguas Madrid. La empresas eran pequeñas dando trabajo a un pro­ Nuevas donde 2.500 Ha. de secano expropiadas con indemni­ medio de unos diez obreros. Son una excepción las del calza­ zación por el Estado se trasformaron en regadío y fueron dis­ do de Almansa con siete fábricas y más de cincuenta emplea­ tribuidas en lotes de unas 10 ha. entre colonos sin tierras veni­ dos cada una, en especial la de los Coloma23 quienes hacia dos de otras zonas pobres. 1930 iban a la cabeza de este sector en España en tecnifica­ Benito Sanzl9 señala que Villamalea es una comunidad ción, ocupando a 845 trabajadores y con una producción de campesina donde predomina el reparto de la propiedad y el setecientos mil pares de zapatos anuales. Las escasas posibili­ cultivo de la vid. Esta dominada con la familia caciquil de los dades de la minería a finales del siglo XIX y el primer tercio Ochando y será durante la II República cuando surja el sindi­ del siglo XX se hacen patentes en la obra de Juan Bautista cato ugetista y los partidos obreros y republicanos. Dicha tra­ Vilar y P.M. Brun024• dición de izquierdas permanecerá oculta durante los primeros El renacer industrial se inicia de forma lenta aprovechando años del franquismo que, a través del partido comunista, se que Albacete se encuentra bien situado respecto a los merca­ infiltrará a partir de los años cincuenta, logrando controlar la dos de Madrid, Valencia y Alicante, recibiendo un impulso con Hermandad de Labradores y la Cooperativa del vino. José Sán­ la creación de Campollano en 1960. Vivió una etapa entre 1975 chez20 analiza los graves problemas que tiene un pueblo agra­ y 1985 de estancamiento debido a los efectos de la crisis de rio, aislado y de montaña como Bogarra. El escaso de-sarrollo 1975, para realizar un período de recuperación en la década económico choca con el alto crecimiento poblacional conse­ siguiente, según muestran los trabajos de Miguel Pard025, cuencia de la revolución demográfica originando una gran Carmen García y Carmen Romero. Se aprecia una renovación emigración a partir de 1960, lo que supone un retroceso del para poder competir con los mercados europeos tras nuestra número de habitantes y un progresivo envejecimiento. Para integración en la CEE. Ello significó un crecimiento en la pro­ salir de dicha decadencia se hacen unas propuestas integrales ducción y en la exportación. En la industria del calzado de de carácter económico para zonas de alta montaña con el fin de Almansa, junto a la innovación se desarrolló el trabajo a domi­ retener la población joven. cilio, dando lugar a la economía sumergida26• Falta por conocer el ritmo de mecanización y empleo de abonos minerales, el proceso de sustitución de los cereales por 3.3. TRANSPORTE, COMERCIO Y BANCA la vid y el olivo, las oscilaciones de la productividad y sus cau­ Hay una gran deficiencia de estudios en estos sectores eco­ sas, a qué sector se invierten las rentas agrarias, la incidencia nómicos. Necesitamos conocer el grado de abandono de los de las Cajas Rurales en el campo, la propiedad de las tierras y transportes por carretera y ferrocarril, así como el avance del la incidencia de la política de precios agrarios del gobierno en comercio y los problemas de la banca albacetense. Se han los diversos sectores propietarios. publicado algunos trabajos como el ferrocarril a cargo de Una visión general de la ganadería en los siglos XIX y XX Fuensanta Casado y Jacinto González27, quienes presentaron nos la ofrece José Miguel Martínez21 a través de las estadísti• los diversos proyectos ferroviarios que afectaban a la provincia cas oficiales de los censos generales de ganadería. Señala que de Albacete y las posibilidades de realización como es el de

19 SANZ DIAZ, Benito: Villamalea, 1900-1939. Estudio sobre una comunidad rural de La Mancha. Del caciquismo a la aparición de la organización de clase. Valencia, 1978. Tesis doctoral inédita.

20 SÁNCHEZ SÁNCHEZ, José: "Problemas de desarrollo rural en la sierra de Alcaraz, y su difícil solución: el ejemplo de Bogarra". Al-Basit n° 18, 1986, pp. 105­ 119.

21 MARTÍNEZ CARRIÓN, J.M.; "Explotación ganadera y transformaciones pecuarias en tierras de Albacete en el siglo XIX y primera mitad del XX". Congreso !i de Historia de Albacete, Vol. IV: Edad Contelnporánea, lEA, 1984.

1I 22 FERNÁNDEZ NIETO, Manuel: Estadística industrial de la provincia de Albacete. Albacete, 1913; SÁNCHEZ SÁNCHEZ, José: "Orígenes y desarrollo de la industria eléctrica en la provincia de Albacete (1887-1932)". Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV: Edad Contemporánea, lEA, 1984. 11 23 GÓMEZ CORTÉS, J., Yotros: "Orígenes de la industria del calzado en Almansa. El caso de la familia Coloma". Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV: 11 Edad Contemporánea, lEA, 1984.

24 VILAR, Juan Bautista y EGEA BRUNO, P.M.: "Aproximación a la minería albacetense contemporánea (1840-1930)". Al-Basit n° 19, 1986, pp. 33-67. 1I

25 PARDO, Miguel: La industria de Castilla-La Mancha en el periodo de la recuperación (1985-1991). Madrid, Civitas/JCCM, 1996; GARCÍA MARTÍNEZ, C.; ROMERO SÁNCHEZ, C.: Las transformaciones de la industria de Albacete dentro del contexto de la reestructuración económica española. Albacete, lEA, 1996.

26 GARCÍA MARTÍNEZ, F. J.: "La industria de calzado en Almansa: de los orígenes a la economía sumergida". Almansa, Cuaderno de Estudios Locales n° 9, 1990.

a 27 CASADO MORAGON, M Fuensanta y GONZÁLEZ GÓMEZ, Jacinto: "Revisión de los proyectos de ferrocarril no realizados en la provincia de Albacete", Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV. Edad Contemporánea. Albacete, LE.A., 1984, pp. 367-393. 22

López Yepes sobre la banca28• Disponemos de información comercial de la capital y la de Francisco Santamaría29 sobre el para los años ochenta, la de Carmen García a la actividad transporte público por carretera.

4. SOCIEDAD

4.1. CLASES SOCIALES Y SUS AGRUPACIONES tación. La etapa donde se dieron las condiciones idóneas fue la Hay un gran vacío sobre la distribución de las clases socia­ II República y la guerra civil, períodos en que se producen les en el siglo XX, por lo cual debemos realizar investigacio­ muchos más enfrentamientos. La provincia de Albacete se nes siguiendo el modelo que Carlos Panadero realizó para la había caracterizado por el orden social que casi nunca fue per­ capital de finales del siglo XIX. Para ello disponemos de las turbado, excepto en la II República y la guerra civil. Así se fuentes estadísticas municipales que permiten saber el número puede apreciar en la obra sobre agitaciones de Francisco Fus­ de artesanos, comerciantes, trabajadores, etc., así como los ter y José Can035 y en el artículo de Vilar y Egea, citado ante­ salarios; las listas de los mayores contribuyentes rurales y riormente, en el que se señala el completo orden social, excep­ industriales; los censos electorales, etc. También hay una to en 1918-1921. Después hubo tranquilidad social hasta la lle­ amplia laguna sobre las organizaciones obreras y patronales, gada de la II República. Fue en este período en el que se regis­ así como acerca de las reformas sociales y laborales. Una tró la mayor conflictividad. Los hechos más destacados han visión general al movimiento obrero la encontramos en el tra.,. sido la huelga campesina del verano de 1934, estudiada por bajo de Vilar y Egea30 quienes nos indican la existencia de la Pedro üliver y Manuel Requena; la revolución de octubre de Unión General de Trabajadores a comienzos de siglo en 1934, analizada por José Deogracias Carrión36; éste mismo Almansa y en Albacete capital y que el sindicalismo campesi­ estudia los sucesos campesinos de Bonete. Será Manuel no empezó a tener fuerza a partir de 1916. Sin embargo, care­ Requena37 quien analice los sucesos de Yeste, los hechos más cemos de trabajos sobre las organizaciones patronales. Queda graves acaecidos durante el Frente Popular, donde murieron un mucho por indagar de la sociabilidad durante este tercio de guardia civil y 17 campesinos. La gravedad de los hechos pro­ siglo. Una aproximación la tenemos en la obra de Miguel Sán­ vocó una interpelación en las Cortes que pudo finalizar con chez sobre asociaciones culturales y sociales durante la Res­ una crisis de gobierno, pero las fuerzas de izquierdas apoyaron tauración en La Roda31 • Manuel Requena analiza la relación a éste, limitándose a pedir se depurasen responsabilidades en entre masonería y política durante la II República32• la guardia civil. Tampoco conocemos la aplicación de las leyes laborales ni Durante el franquislTIo el orden social se mantuvo en casi el funcionamiento de los mecanismos de negociación, excepto toda la provincia, produciéndose enfrentamientos de baja los Jurados Mixtos durante la II República a cargo de Pedro intensidad en algunas poblaciones como Villamalea, caso estu­ üliver y Manuel Requena33, que sirvieron para fijar acuerdos diado por Benito Sanz38• Durante la etapa democrática faltan laborales y ser tribunal de reclamaciones que debilitó los con­ por analizar los años conflictivos de 1976-1980, la aparición flictos entre una intransigente patronal y un sólido sindicalis­ de otros grupos sociales como las asociaciones de barrios, los mo ugetista. También conocemos los problemas que tuvieron ecologistas, los insumisos, etc. dos instituciones del régimen, las Hermandades y las coopera­ tivas34• Ambas sufrieron en Villamalea la política de los comu­ 4.3. EDUCACIÓN y PRENSA nistas de infiltrarse poco a poco en ambas y controlarlas. Ambos aspectos han sido tratados, aunque con mayor pro­ fusión el de la prensa. Los análisis sobre la educación nos reve­ 4.2. Los CONFLICTOS SOCIALES lan que la provincia de Albacete tiene un alto índice de analfa­ Este es un tema estudiado. El carácter conflictivo de la betismo a comienzos del siglo XX como consecuencia del sociedad aparece especialmente en las etapas donde las liber­ atraso educativo, se aprecia en la deficiencia de la enseñanza tades y la fortaleza de las organizaciones posibilita la confron- primaria y secundaria hasta la II República en la cual se dio un

28 LÓPEZ YEPES, J.:"Los proyectos de Cajas de Ahorros y Monte de Piedad de Albacete" Congreso de Historia de Albacete 1984, tomo IV, pp. 201-224.

29 FERNÁNDEZ SANTAMARÍA, Francisco: "Transporte público de viajeros por carretera y accesibilidad en la provincia de Albacete", Ensayos, n° 14, 1999, pp. 27-42; GARCÍA MARTÍNEZ, Carmen: Actividad comercial y espacio urbano (La organización espacial del comercio minorista en la ciudad de Albacete). Cuenca, Publicaciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 1995. a 30 VILAR, Juan Bautista y EGEA BRUNO, Pedro M : "Movimiento obrero en Albacete durante la crisis de la Restauración (1902-1923)", Congreso de Historia de Albacete, tomo IV: Edad Contemporánea. Albacete, LE.A., 1984, pp. 63-95.

31 SÁNCHEZ PICAZO, Miguel, "Entidades y asociaciones culturales y sociales en La Roda desde la Restauración a la guerra civil (1875-1939)", Congreso de Historia de Albacete, 1984. 32 REQUENA GALLEGO, Manuel: "Masonería y política en Castilla-La Mancha (1928-1936)", La masonería en la Espaíia del siglo XX, Toledo, 1996, Vol. 1, pp. 153-168.

33 OLIVER OLMO, Pedro: Control y negociación: los jurados mixtos de trabajo en las relaciones laborales republicanas de la provincia de Albacete (1931-1936), Albacete, LE.A., 1997. REQUENA GALLEGO, M.: "Los jurados mixtos de trabajo en la provincia de Albacete durante la 11 República", Mercado y organiza­ ciones del trabajo en España.

34 ORTIZ HERAS, Manuel: Las Hermandades de Labradores en el franquismo. Albacete 1943-1977. Albacete, lEA, 1992. SANZ DIAZ, Benito: "Historia de la Cooperativa San Antonio Abad de Villamalea (1946-1977)". Al-Basit n° 7, 1980, pp.113-148.

35 FUSTER RUIZ, E; CANO VALERO, J.: Agitaciones sociales y políticas en La Mancha y Murcia, 1858-1927. Aportación doculnental de los libros de correspon­ dencia de la Audiencia Territorial de Albacete. Albacete, LE.A., 1985.

36 CARRIóN ÍÑIGUEZ, José D., La insurrección de octubre de 1934 en la provincia de Albacete. lEA, Albacete, 1990. De este mismo autor es "Suceso-de Bonete (Marzo de 1936)". Al-Basit n° 20, 1987, pp. 195-210; OLIVER OLMO, Pedro: "La huelga general campesina de 1934 en la provincia de Albacete", Al-Basit, N° 41,1997, pp. 279-291. REQUENA GALLEGO, M.: "La huelga campesina de junio de 1934 en Albacete", Estado, protesta y movimientos sociales. Vitoria, Universidad del País Vasco, 1998, pp. 283-294. .

37 REQUENA GALLEGO, Manuel: Los sucesos de Yeste (mayo 1936). Albacete, LE.A., 1983.

38 SANZ DÍAZ, Benito: "Bastiones de resistencia en Castilla-La Mancha: el caso de Villamalea", España franquista. Causa General y actitudes sociales ante la Dictadura. Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 1993, pp. 233-246. 23 gran impulso con la creación de nuevas escuelas y centros de (Casas Ibáñez). Además se ha realizado un balance de lo publi­ enseñanza media, la contratación de un gran número de profe­ cado durante la guerra civil44• sores así como la renovación en los métodos pedagógicos en los Institutos y las Escuelas Normales. Junto a la enseñanza 4.4. CULTURA y ARTE estatal se desarrollará también la privada laica y religiosa. De Existe una amplia información del desarrollo cultural y la evolución de la enseñanza primaria estatal nos informa Juan artístico que vivió esta provincia en las etapas de 1910 a 1936 Peralta, Martínez Sánchez habla de la docencia privada y Enri­ y de 1970 a 1999. Destacándose la decadencia entre 1940 y que Sánchez del Instituto de la capital en el primer tercio del 1970. Juan Bravo se dedica a la obra narrativa y José Manuel XX39. En cuanto a la labor pedagógica realizada durante la Martínez Cano a la poética45 • Ampliando este último campo, República, resaltar la figura del almanseño Herminio Almen­ Francisco Fuster se ha centrado en los autores de principios de dros40 y en la difícil tarea desarrollada por la escuela de Magis­ siglo y los de la II República. Matías Perier y Carmelo Blanco terio durante la guerra civil, están las aportaciones de José relatan algunas anécdotas de Federico García Lorca y Miguel Deogracias Carrión, Onofre Contreras, Pedro Serrano y Matil­ de Unamuno durante su estancia en Albacete en 193346• Cono­ de Morcill041 • cemos los perfiles de nuestro destacado filólogo Tomás Nava­ Se ha de profundizar en la política de creación de escuelas rro Tomás gracias al estudio de Alonso Zamora Vicente47 y el y de institutos, así como la evolución y renovación pedagógica de la musicóloga Carmen Ibáñez48, gracias a Fernando Rodrí• de la Escuela de Magisterio influenciada por personalidades guez. Esta actividad cultural, junto a la política estuvo impul­ del Instituto Libre de Enseñanza, indagar sobre el desarrollo de sada desde el Ateneo Albacetense, creado en 1880 y que ejer­ la enseñanza privada, saber sobre el abandono de ésta en las ció un gran dinamismo en el siglo XX, excepto en algunas épo­ zonas rurales frente a las urbanas y la evolución de las escue­ cas de inactividad49• las de oficios. Se realizó una gran actividad teatral50 en la capital y Hellín, El progreso y la renovación sobre la prensa se debe al tesón según señalan Francisco Fuster y Antonio Moreno. Profundi­ de Isidro Sánchez Sánchez42 quien a comienzos de la década zando en el ambiente teatral de la capital, Francisco Linares de los ochenta presentó su trabajo referido a la provincia entre investigó 10 acaecido en las dos primera épocas del siglo XX y 1833 y 1936, aportando la relación de títulos, su contenido, la Emilia Ochando para 1924-1936. Acerca del cine albacetense orientación, las personas que trabajaban en él, el consejo de trata la obra de Jesús García y José Fidel López, describiendo dirección, etc. En dicho trabajo se resaltaba el gran dinamismo las diversas salas donde se proyectaban, así como las películas periodístico en la capital y algunos pueblos importantes como y el ambiente que les rodeaba5l . También fue la época de Hellín, Almansa, Villarrobledo y La Roda, junto a localidades esplendor de los arquitectos al servicio de la burguesía enri­ medianas como Casas Ibáñez por ser el cacicazgo de los quecida que construyeron sus viviendas en el centro de la ciu­ Ochando. Resalta la importancia documental para futuros tra­ dad, alrededor del eje de la calle "ancha" (Tesifonte Gallego y bajos, así como la orientación partidista de cada periódico. Marqués de Molins). Destacan Miguel Ortiz, Julio Carrilero, Siguiendo esta metodología, Miguel Sánchez Picazo realizó Daniel Ortiz, entre otros, como lo muestran los trabajos de varios trabajos, profundizando en el contenido de dicha pren­ María Victoria Cardoso y Rosa María Romer052• sa. Uno, referido al partido judicial de La Roda, otros dedica­ Luis Guillermo García-Sauco realizó un balance de la dos a un periódico concreto como El Manchego (Tarazona de aportación artística de Albacete a la exposición de Sevilla en La Mancha), La Gaceta de la Mancha y La Voz del Distrito43 1929 y José Sánchez sobre los resultados de una encuesta etno-

39 PERALTA JUAREZ, Juan: La escuela en la provincia de Albacete. Albacete, lEA, 1997; MARTÍNEZ SÁNCHEZ, A.: "Los establecimientos de enseñanza no oficial en la provincia de Albacete a principios del siglo XX. Elementos organizativos más destacados". Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV: Edad Contemporánea, lEA, 1984; SÁNCHEZ SÁNCHEZ, Enrique: "Apuntes históricos del Instituto de Enseñanza Media de Albacete, 1839-1933". Al-Basit, n° 18, 1986, pp. 47-61.

40 BLAT JIMENO, Amparo: "Herminio Almendros Ibáñez. Vida, época y obra", Almansa, Cuadernos de Estudio Locales, n° 13, 1998.

41 CARRIóN ÍÑIGUEZ, J. D.; CONTRERAS JORDÁN, O. R.: "Aproximación al estudio del magisterio en la Escuela Normal durante la Guerra Civil (1936­ 1939)", Ensayos, n° 7, 1987, pp. 25-38; LOSA SERRANO, Pedro; MORCILLO ROSILLO, Matilde: "La escuela de Magisterio durante la Guerra Civil a tra­ vés de las Actas del Claustro y Junta de Gobierno", Ensayos n° 7, 1987, pp. 83-96.

42 SÁNCHEZ SÁNCHEZ, Isidro: Historia y evolución de la prensa albacetense (1833-1939). Albacete, lEA, 1984.

43 SANCHEZ PICAZO, Miguel: "El Manchego. Seminario de ", Al-Basit, n° 16, 1985, pp. 179-194; del mismo autor, Prensa periódica del partido judicial de La Roda. Albacete, lEA, 1987. Actualmente tiene finalizado el estudio de La Voz del Distrito, semanario de la familia caciquil de los Ochando que dominaba el distrito de Casas Ibáñez y que se publicó entre 1917 y 1936.

44 PELAEZ ROPERO, J.M.; OLIVER OLMO, P.: "La prensa en Albacete durante la Guerra Civil". Al-Basit, 1996, pp. 51-58.

45 BRAVO CASTILLO, Juan: Narrativa albacetense del s. XX, Albacete, Diputación Provincial, 1985, II Vol. MARTÍNEZ CANO, J.M.: Antología poética de autores albacetenses. Albacete, Diputación Provincial, 1983; FUSTER RUIZ, Francisco: "Cinco poetas del silencio: la generación del 36 en Albacete". Cultural Albacete n° 61, 1992, pp. 3-18 Y"Poetas albaceteños de principios de siglo: realismo y modernismo". Cultural Albacete n° 67, 1993, pp. 3-22.

46 BLANCO MAYOR, Carmelo: "Don Miguel de Unamuno en Albacete", Anales del Centro Asociado de Albacete, n° 5. GOTOR PERIER, Matías: "Federico García Larca en Albacete". Al-Basit n° 3, 1976, pp. 59-61.

47 ZAMORA VICENTE, Alonso: "Tomás Navarro, albaceteño ilustre", Grandes Personales de la Historia de Albacete. Albacete, Cultural Albacete, 1996, pp. 239-253.

48 RODRÍGUEZ DE LA TORRE, Fernando: "Recuerdo de una musicóloga: Doña Carmen Ibáñez Ibáñez (1895-1962)", Ensayos n° 7, 1987, pp. 145-161.

49 ÑACLE GARCIA, A.: El Ateneo albacetense, 1880-1993. Albacete, Caja Castilla-La Mancha, 1993.

50 FUSTER RUIZ, Francisco: "Historia del teatro en Albacete", Albacete, 1974; MORENO GARCÍA, Antonio: "El teatro en Hellín". Al-Basit n° 3, 1976, pp. 51­ 58; LINARES VARCÁRCEL, Francisco: Representaciones teatrales en Albacete 1901-1923: cartelera, compañías y valoración. Albacete, LE.A, 1999; OCHANDO MADRIGAL, Emilia: El teatro en Albacete durante la edad de plata: (1924-1936J. Albacete, LE.A., 2000.

51 GARCÍA RODRIGO, Jesús; LÓPEZ ZORNOZA, José Fidel: La aventura del cine (Albacete, en el centenario del séptimo arte). Albacete, 1995. a 52 CADARSO VECINA, M Victoria: "Miguel Ortiz e Iribas (18!85-1967), arquitecto". Al-Basit n° 23, 1988, pp. 203-239; ROMERO SORIANO, Rosa María: "Notas para el estudio de la arquitectura de Albacete (1920-1930)". Al-Basit n° 8, 1980, pp. 33-53. 24

lógica contestada en 13 pueblos53 • Disponemos una panorámi­ todo lo que rodea a la fiesta taurina, la plaza de toros, los tore­ ca de los pintores albacetenses del siglo XX en la obra de Rubí ros y la tradición ganadera de Samuel Flores se lo debemos a Sanz, así como diversos artículos referidos a Benjamín Palen­ José Sánchez55• cia por ser el más destacado de nuestros pintores54. Así como

5. POLÍTICA

La historia política de Albacete en el siglo XX ha sido la torales, la élite política, el funcionamiento de Hacienda, las parcela más investigada y muchos de sus trabajos han seguido inversiones provinciales, etc. A ella hay que añadir la biografía las pautas de renovación historiográfica. En total se contabili­ de los presidentes de dicha institución, -realizada por Ma del zan 85 investigaciones, frente a las 52 de historia social y a las Carmen Gil Pertusa. Se hace una reflexión global sobre las éli­ 31 de economía. Atendiendo a los períodos, las etapas que se tes políticas albacetenses contemporáneas58, donde se sientan conocen mejor son la 11 República (7 libros y 9 artículos) y la las bases para estudios concretos, así como la utilización de guerra civil (6 libros y 11 artículos), mientras que con respec­ fuentes como las Listas de Mayores Contribuyentes, las listas to a la crisis de la Restauración, el franquismo y la transición cobratorias de los ayuntamientos, el censo electoral que con­ y consolidación democrática quedan muchos aspectos por ana­ tiene datos sociológicos, etc. Para ello hay que aprovechar la lizar. En cuanto a los temas, son múltiples y variados. Tenemos información que aparece en diversas obras59 con el fin de obte­ un aceptable conocimiento de los partidos, elecciones, institu­ ner datos biográficos que se encuentran en los trabajos de Juan ciones como Gobierno Civil, Diputación y Ayuntamientos, éli­ Bravo, J. A. Díaz, Tita Martínez, Antonio Moreno y Andrés tes políticas, regionalismo y violencia política. Gómez Flores y en las propias memorias de Maximiliano Mar­ tínez Moreno, Juan Martínez Ortiz y José Prat García. El 5.1. DIVERSOS TEMAS POLÍTICOS regionalismo manchego ha sido tratado por Francisco Fuster La panorámica de las elecciones parlamentarias del siglo Ruiz60 manifestando como se refleja dicho sentimiento desde XIX y XX, nos la ofrece Eduardo González y Javier Moreno, principios del siglo XX, incidiendo levemente durante la II en Elecciones y Parlamentarios. Dos siglos de Historia en República, para volver a surgir a comienzos de los ochenta. En Castilla-La Mancha. En ella relata la forma en que se elaboran el campo jurídico la obra de Ricardo Gómez River061 nos las candidaturas, se recogen los resultados electorales de las explica cómo funcionó el juzgado popular durante el primer cinco provincias de Castilla-La Mancha y breves biografías de tercio del siglo XX en Albacete. los parlamentarios. Ganaba siempre el partido que dirige la consulta, o sea, el del gobierno, excepto durante la II Repúbli­ 5.2. PERIODIZACIÓN ca, en que resultaron derrotados. A esta visión general, hay que 5.2.1. La escasez de estudios sobre la Restauración y la añadir los trabajos sobre partidos y elecciones de Manuel Dictfldura Requena referidos a la Restauración y a la II República y la Se ha dedicado poca atención a la crisis de la Restauración evolución del Partido Comunista de Albacete desde su crea­ y a la Dictadura de Primo de Rivera. Respecto a la primera, ción hasta 197956• Manuel Requena62 analiza el sistema de partidos y el compor­ Además, se da a conocer el funcionamiento de la Diputa­ tamiento electoral en los diversos distritos, así como el peso ción provincial 57, cuya obra colectiva ha sido coordinada por del caciquislllo, mientras Benito Sanz centra su estudio en el Manuel Requena Gallego donde se analizan los procesos elec- cacicazgo que ejercen los Ochando en el distrito de Casas Ibá-

53 GARCÍA-SAUCO BELÉNDEZ , Luis Guillermo: "Patrimonio artístico albacetense en la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929", Al-Basit. n° 25, 1989, pp. 5-66; SÁNCHEZ SÁNCHEZ, José: "La encuesta etnológica de 1929", Cultural Albacete, n° 45, 1990, p. 3-22.

54 SANZ GAMO, Rubí: Pintores albacetenses contelnporáneos, 1900-1983. Albacete, lEA, 1984. Varios artículos de ESTEBAN LEAL, Paloma: "Benjamín Palencia y la vanguardia artística española en los años 20-30". Grandes Personajes de la Historia de Albacete. Albacete, Cultural Albacete, 1996, pp. 255-274: De GÚZMAN PÉREZ, M. E; LÓPEZ GUZMÁN, R.: "Benjamín Palencia: Valoración de su lenguaje plástico". Congreso de Historia de Albacete, Vol. IV: Edad Contemporánea, lEA, 1984, Págs. 529-551 y De LÓPEZ CAMPUZANO, Julia: "Influencias en la obra pictórica de Benjamín Palencia", Al-Basit n° 8, 1980, pp. 9-20.

55 SANCHEZ ROBLES, José: Samuel Flores: la pasión por el toro: 200 años de tradición ganadera en la provincia de Albacete. Albacete, 1996; SÁNCHEZ ROBLES, J.; GUTIERREZ GARCÍA, C.: Plaza de toros de Albacete. Desde 1917. camino de un siglo en lafiesta brava. Albacete, 1987.

56 RUIZ, D. [y otros]: Los Comunistas en la Historia de Albacete. 1921-1979. Albacete, Partido Comunista, 1981. a 57 GIL PERTUSA, M del Carmen: Libro de los presidentes de la Diputación Provincial de Albacete. Albacete, Diputación Provincial, 1990; REQUENA GALLE­ GO, Manuel (Coord.): Historia de la Diputación de Albacete. Albacete, Diputación Provincial, 1993, 2 v.

58 PANADERO MOYA, Carlos: "Las elites contemporáneas en Albacete, (1834-1936): balance historiográfico y propuestas de investigación", Al-Basit, n° 31, 1992, pp. 5-17; REQUENA GALLEGO, Manuel: "Las elites castellano-manchegas en el período contemporáneo, 1810-1936", Relaciones de poder en Castilla: El ejemplo de Cuenca. Cuenca. Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 1997, pp. 231-250.

59 Contienen datos biográficos los trabajos de BRAVO CASTILLO, Juan: Seis albacetenses ilustres, Albacete, Ayuntamiento, 1986; DÍAZ, J.A. (Coord.): Castellanos sin Mancha. Exiliados Castellanos-Manchegos tras la guerra civil. Madrid, Añil, 1999; MARTÍNEZ, Tita: Albacetenses en la diáspora. Albacete, Diputación Provincial, 1997; GÓMEZ FLORES, Andrés: Memoria de una lealtad (conversaciones con José Prat). Albacete, Diputación Provincial, 1986; MORENO GARCÍA, Antonio: Gente de HelUn. Albacete, lEA, 1982. También las biografías de MARTÍNEZ MORENO, Maximiliano: Vivencias. Albacete, 1982; MARTÍNEZ ORTÍZ, Juan: Una vida, infancia y juventud. Albacete, 1952; PRAT GARCÍA, José: Memorias. Albacete, Diputación Provincial, 1994.

60 FUSTER RUIZ, Francisco: "Para una historia del regionalismo manchego: la bandera y el himno de la Mancha". Al-Basit n° 9,1981, pp. 5-27; YuAlbacete y el tema regional. (Aportación a la historia de un problema)", Congreso de Historia de Albacete. Edad contemporánea, Albacete, lEA, 1984.

61 GÓMEZ RIVERO, Ricardo: El tribunal del Jurado en Albacete (1888-1936). Albacete, LE.A., 1999.

62 REQUENA GALLEGO, Manuel: "La clase política y las contiendas electorales en la provincia de Albacete, 1901-1923", Cultural Albacete, n° 15, junio 1987, pp. 3-15; Y"La hegemonía liberal en las elecciones a Cortes en el distrito electoral de Hellín, 1918-1923", Al-Basit, n° 26, abril 1990, pp. 139-149; SANZ DIAZ, Benito: "Caciquismo en La Mancha: los Ochando en el partido judicial de Casas Ibáñez", Almud, n° 3, 1980, pp. 119-133. 25

ñez, y Carlos Panader063 describe los efectos de la crisis de CEDA, al tiempo que la política de derechas hace que se radi­ 1909 en Albacete. Algo similar le sucede a la Dictadura. calicen los socialistas, adquiriendo más fuerza el sector caba­ Manuel Requena presentó una panorámica general del período llerrista. Ello se manifestará en la primavera de 1936, hacien­ y un análisis de Unión Patriótica en donde demostraba que en do inviable la República social, debido a la insurrección mili­ ésta se habían refugiado muchos caciques o sus "amigos polí• tar en julio de 1936. ticos" desde donde controlaron la Diputación Provincial y los Los múltiples problemas agrarios afectan especialmente a a ayuntamientos64• En cuanto a los movimientos conspiratorios Albacete. José M Gómez Herráez70 trata sobre los efectos de del final de la dictadura y de la transición, Francisco Fuster nos la legislación social, los conflictos que supone su aplicación, relata la participación republicana y masónica albacetense en los diversos problemas de los precios de los granos y los sala­ 1929 y Manuel Requena analiza cómo en Albacete, y en las rios, así como los enfrentamientos entre la patronal Unión demás provincias de Castilla-La Mancha, los republicanos y Agraria y los sindicatos UGT y CNT. Albacete al ser una pro­ socialistas realizaron un doble "juego". Mientras utilizaban los vincia latifundista le afectó la Reforma Agraria como lo deja cauces legales intentando reforzar su partido y triunfar en las bien claro el estudio de Cayetano Espejo Martín71 sobre el elecciones, al mismo tiempo colaboraron en acciones insurrec­ Registro de Propiedad Expropiable que incluía a 858 propieta­ cionales hasta que se proclamó la II República65 . rios con 344.574 Ha. (23% del total). De ellos, los diez mayo­ 5.2.2. La II República y la guerra civil. res poseían más de cuatro mil Ha. cada uno, y los cien siguien­ Esta ha sido la etapa mejor estudiada del siglo XX. No tes más de mil Ha. Entre las familias más afectadas estaban sólo en el ámbito político, sino en el social, económico y cul­ con más de diez mil Ha. cada una, los Flores, los Larios, los tural. Aquí únicamente nos vamos a detener a describir la Jiménez de Córdoba, Acacia Sandoval y, con algo menos, acción política, ya que los otros aspectos ya han sido tratados Marín Barnuevo, Pérez-Pastor y Alfara Fernández. anteriormente. La obra pionera fue la de José Sánchez y En cuanto a conflictividad señalaremos de pasada, ya que Miguel Ángel Mateos66 que a mitad de la década de los seten­ los hemos indicado en otro apartado, los estudios de Pedro ta analizaba las elecciones dentro de la renovación metodoló• üliver y Manuel Requena sobre la huelga campesina de 1934; gica introducida por Tusell. Poco después Manuel Requena los de Deogracias Carrión Íñiguez sobre los hechos revolu­ publicó sobre las elecciones del Frente Popular y las de com­ cionarios de octubre de 1934 y los acontecimientos de Bone­ promisarios, así como un estudio de las fuentes existentes te, y el de Manuel Requena sobre los sucesos de Yeste (mayo sobre la II República67 • A finales de los ochenta, ampliando 1936). esta orientación, con la inclusión de partidos políticos y gru­ Se han realizado bastantes trabajos sobre la guerra civil pos de presión, otras instituciones como los ayuntamientos, pero, sin embargo, han quedan aspectos sin analizar, como las Diputación y Gobernadores Civiles, etc., éste publica su tesis colectividades industriales y de servicios, la evolución de las referida a 1931-193368, tratando de explicar cómo una pro­ fuerzas políticas y sindicales, así como su actuación en los vincia eminentemente monárquica en la que triunfan los ayuntamientos y otros problemas sociales. Recientemente, dinásticos en abril de 1931, resulta dominada después de pro­ Antonio Selva Iniesta, ha realizado una síntesis del período de clamada la república por republicanos y socialistas. Este estu­ la guerra72• El tema fue inicialmente tratado en 1975 por Fran­ dio demuestra la pervivencia de comportamientos caciquiles cisco Fuster quien criticó los errores que se habían cometido entre las fuerzas republicanas, así como engaños electorales en algunas obras generales respecto a Albacete73. Conocemos típicos de la Restauración. El creciente republicanismo des­ que la rebelión en Albacete iniciada el 19 de julio estuvo pro­ pués del 14 de abril se debe a la llegada masificada de monár­ tagonizada por la Guardia Civil con la colaboración de la dere­ quicos al republicanismo, el cual se va consolidando durante cha, en donde se destacó la minoría falangista. Acción que fra­ el bienio. Actualmente, Rosa Sepúlveda Losa69 ha realizado casó, rindiéndose los sublevados el 25 de julio ante las fuerzas su tesis sobre la etapa 1933-1936, siguiendo dicha metodolo­ llegadas de Alicante, Murcia y Ciudad Real. Inmediatamente gía en la cual mantiene que se continúan realizando trampas se desencadenó la persecución y asesinatos sobre la gente de electorales, aunque menos, y se emplean los ayuntamientos derechas, dando lugar a desmanes y desórdenes injustificados. para apoyar las victorias en las urnas. Durante el segundo El gobierno comenzó la acción represiva contra los insurrectos bienio se produce el enfrentamiento entre los radicales y la a través de los Jurados Populares y los de Urgencia, conde-

63 PANADERO MOYA, Carlos: "Albacete y la crisis de 1909 a través de la prensa local", Anales del Centro Asociado de Albacete, n° 1, 1979, pp. 263-265.

64 REQUENA GALLEGO, Manuel: "La vida política en Albacete durante la Dictadura de Primo de Rivera", Cultural Albacete, junio 1989, pp. 3-14; Y"Unión Patriótica o la cobertura al caciquismo de la Restauración", Estudios sobre la derecha espaltola contemporánea. Madrid, UNED, 1993, pp. 279-292.

65 FUSTER RUIZ, Francisco: "Conspiradores republicanos en Albacete de ]929". Al-Rasit n° 8, 1980, pp. 91-106; REQUENA GALLEGO, Manuel: "Vía insu­ rreccional y vía electoral en las provincias de Castilla-La Mancha (1929-1931). Movilización urbana y pasividad rural", Historia Contemporánea, n° 12, 1995, pp. 339-356.

66 SÁNCHEZ SÁNCHEZ, José y MATEOS RODRIGUEZ, Miguel Ángel: Elecciones y partidos en Albacete durante la Il República J93J-J936. Análisis demo­ gráfico, actividad económica. Sociología electoral y cOlnportamiento político. Albacete, Imprenta de Julián GÓlnez, 1977.

67 REQUENA GALLEGO, Manuel: "Las elecciones del Frente Popular en Albacete", Al-Rasit, n°. 11, diciembre ]982, pp. 27-72; "Las elecciones a compromi­ sarios en Albacete (Abril 1936)", Al-Rasit, n°. 12, diciembre 1983, pp. 170-195; Y"Albacete durante la II República: estado actual de la cuestión y fuentes para su estudio", Congreso de Historia de Albacete, tomo N: Edad Contelnporánea. Albacete, LE.A., 1984, pp. 97-109.

68 REQUENA GALLEGO, Manuel: Partidos, elecciones y elite política en la provincia de Albacete 1931-1933. Albacete, LE.A. 1991. De este mismo autor ver "La proclamación de la II República en una provincia monárquica: Albacete 1931". Cultural Albacete n° 49, 1991, pp. 3-18 Y"El triunfo monárquico en las elecciones municipales de abril de 1931 en Castilla-La Mancha", Hispania, n° 190, 1995, pp. 673-691.

69 SEPÚLVEDA LOSA, Rosa: Republicanos tibios y socialistas beligerantes. La República social inviable. Albacete, 1933-1936. Albacete, lEA (en imprenta) a 70 GÓMEZ HERRÁEZ, José M ., Voces del campo yecos en la prensa. Problemas agrarios en Albacete durante la Segunda República, Albacete, lEA, 1988.

71 ESPEJO MARTÍN, Cayetano: "El Registro de la Propiedad Expropiable en la provincia de Albacete (1933), Al-Rasit, n° 26, 1990, pp. 81-108.

72 SELVA INIESTA, Antonio: La Guerra civil en Albacete", La Guerra civil en Castilla-La Mancha. De El Alcázar a Los Llanos. Madrid, Biblioteca Añil, 2000, pp. 35-64.

73 FUSTER RUIZ, Francisco: "Albacete en los libros de la Guerra Civil Española", Al-Rasit n° O, 1975, pp. 12-24; n° 1, pp. 24-43. 26 nando a muchos de ellos a muerte o a la pena de cárcel. De y en la Diputación. Otro soporte importante del régimen fue la todo ello hemos tenido información a través de las obras de iglesia como la describe Pablo Martín de Santa 01alla81 • Este Francisco Sevillano y, sobre todo, de Manuel Ortiz74• extiende su ideología y se consolida a través de la cultura y la M.L. Prado señala que una gran parte de las tierras, prove­ educación. La economía sigue siendo predominantemente nientes de la burguesía agraria insurrecta que fue castigada con agraria, poco modernizada, con problemas de precios, especial­ la expropiación por desafecta, pasaron a manos campesinas rea­ mente el vino, y de escasa industrialización. El Consejo Eco­ lizándose las colectividades agrarias75, estudiadas por José Deo­ nómico y Sindical propuso una serie de medidas para mejorar gracias Carrión quien nos indica que se realizaron muchas con la economía albacetense como la creación de la Caja de Aho­ el concurso de la UGT y la CNT, aunque algunas fracasaron. Las rros, la terminación del ferrocarril Baeza-Utiel, la ampliación incautaciones de las fincas urbanas en la capital, de muchas del regadío, el cooperativismo y el acceso al crédito. familias ricas, así como las funciones a las que se dedicaron Aunque aparentemente hubo un entendimiento entre las estos locales y los problemas que causó el cobro de los alquile­ fuerzas que apoyaban al régimen, el análisis detallado refleja res las conocemos gracias a Rosa María Sepúlveda76• El cono­ la lucha por el poder, y para ello recurrieron a la descalifica­ cimiento de los efectos físicos y psicológicos de los bombar­ ción del adversario. Así se realizaron acusaciones contra algu­ deos sobre la ciudad, así como la construcción de los refugios, nos alcaldes por actuaciones anólualas, contra los presidentes se debe a Antonio Selva77• El haber sido elegida como sede don­ de las hermandades por malversación de fondos y favoritismo de se formaron las Brigadas Internacionales ha dado a Albacete o contra los jefes falangistas82• Hubo estabilidad social como un protagonismo internacional lo cual ha motivado algunos estu­ corresponde a una dictadura, aunque se produjeron algunas dios aunque insuficientes. Ya a principios de los ochenta, Fran­ acciones debidas a la actividad clandestina de los comunistas, cisco Fuster78 puso de manifiesto la necesidad de prestar aten­ a la acción las guerrillas entre 1945 y 1950. ción a este tema y posteriormente nos describe una visita de Fue muy dura y extensa la represión ejercida por el fran­ Peter Weis en busca de recuerdos de un brigadista amigo; quismo sobre la sociedad albacetense según lo refleja el Manuel Requena hace un balance de la presencia de los volun­ amplio trabajo de Manuel Ortiz83 • Entre abril de 1939 y 1950 tarios en la capital y algunos pueblos de la provincia y su impac­ fueron procesados por los tribunales militares 34.550 ciudada­ to, Julián Palmero estudia el correo de las Brigadas, José Manuel nos (9,2% de la población), de los que se ejecutaron a 1.026 Peláez y Pedro Oliver analizan su prensa y se recogen algunos personas y 712 sufrieron cárcel, a las que hay que añadir 573 testimonios orales. Fernando Rodríguez de la Torre realiza una muertes indiscriminadas realizadas por los incontrolados fran­ síntesis bibliográfica del tema. José Deogracias y Vicente quistas. A la que abría que añadir los efectos de la prisión. Carrión79 nos describen cómo en febrero de 1939 el doctor Muchas personas fueron privados de libertad durante años y Negrín reunió a los jefes militares en el aeródromo de Los Lla­ sufrieron malos tratos físicos y psicológicos, además del des­ nos (Albacete) con el fin de animarles a continuar la guerra, al precio social hacia él y su familia. Algunos murieron por cau­ que apoyó Miaja, mientras que un sector amplio se manifesta­ sa de dichos malos tratos y una deficiente alimentación, como ban partidarios de acabarla. sucedió con el comunista Andrés Alcalá. Finalmente hay que 5.2.3. El franquismo y la democracia hablar de las depuraciones llevadas a cabo en todas las institu­ Son las dos etapas con menos trabajos de investigación que ciones y empresas sobre los republicanos y marxistas. Se rea­ abarcan más de medio siglo. Una visión de los primeros veinte lizaron despidos en la Diputación y ayuntamientos (13 de cien años del franquismo nos la ofrece José María Gómez Herraez80• en el de la capital), en los cargos de la diversas Delegaciones, El "movimiento" cumple la función de reforzar al franquismo en la enseñanza, ya fuesen maestros (cien de los 860), profe­ y el ingreso en él permite ocupar cargos en los ayuntamientos sores de bachillerato o de la Escuela Normal.

74 SEVILLANO CALERO, F.: La Guerra Civil en Albacete: Rebelión militar y justicia popular (1936-1939). Alicante, Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, 1995; ORTIZ HERAS, Manuel: Violencia política en la Segunda República yen el primerfranquismo. Madrid, Siglo XXI, 1996. Muy poco aporta el artículo de MOR­ CILLO ROSILLO, Matilde: "Los tribunales populares durante la Guerra Civil en la provincia de Albacete (Los paseos de la muerte)", Ensayos n° 2, 1988, pp. 121-132. a 75 PRADO HERRERA, M • L. y otros: "Las expropiaciones a campesinos desafectos a la República: un análisis de las provincias de Albacete y Valencia; "CARRIÓN ÍÑIGUEZ, J. D.: Las colectividades agrarias en la provincia de Albacete durante la guerra civil, Tesis doctoral inédita. Universidad de Murcia; SANZ DÍAZ, Benito: "Las colectividades campesinas durante la Guerra Civil Española. Villamalea (1936-1939)". AI-Basit, n° 5, 1978, pp. 119-130.

76 SEPÚLVEDA LOSA, Rosa María: "Incautaciones de fincas urbanas en Albacete durante la Guerra Civil". AI-Basit, 1996, pp. 11-21.

77 SELVA INIESTA, Antonio: Refugios antiaéreos en Albacete (memoria para la paz). Albacete, LE.A., 2000.

78 FUSTER RUIZ, Francisco: La guerra. Las Brigadas Internacionales, Albacete, 1985. Del mismo autor, "Peter Weis en Albacete, en busca del tiempo perdido de las Brigadas Internacionales", Al-Basit, 1996, pp. 86-129. En este mislllo monográfico de Al-Basit aparecieron otros artículos de PALMERO CUÉLLAR, Julián: "La plaza del Altozano, estafeta central de las Brigadas Internacionales", pp. 131-144; PELÁEZ ROPERO, J. M. YOLIVER OLMO, P.: "La prensa de Albacete durante la guerra civil", pp. 51-58; REQUENA GALLEGO, M. y PELÁEZ ROPERO, J. M.: "Memorias de vida: Albacete y las Brigadas Internacionales en el recuerdo de los voluntarios de la libertad", pp. 207-232; RODRÍGUEZ DE LA TORRE, Fernando: "Esbozo bibliográfico de las Brigadas Internacionales con especial atención a la base de Albacete (Fondos de la Biblioteca Nacional, Madrid)", pp. 145-204; REQUENA GALLEGO, Manuel: "Albacete, base de las Brigadas Internacionales, 1936-1938", La Guerra Civil Espa170la y las Brigadas Internacionales. Cuenca, Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 1998, pp.147-179.

79 CARRIóN ÍÑIGUEZ, J. D. YCARRIÓN ÍÑIGUEZ, V: La reunión de los LLanos (Albacete). Epílogo de la Segunda República. Albacete.

80 GÓMEZ HERRÁEZ, José María: Instituciones, perspectivas económicas y problemas sociales durante eljranquismo. Albacete entre el silencio y el éxodo rural (1939-1962). Albacete, lEA, 1993. De este mismo autor la "Politización, concepciones socioeconómicas e irracionalismo. Enseñanza y cultura en Albacete, 1939-1962", AI-Basit, n° 33, 1993, pp. 179-204; Y"Las posibilidades de los trabajadores agrarios en el sindicalismo vertical, Albacete, 1939-1960", Mercado y organización del trabajo en España (s.X/X-XX), Sevilla, Ed. Atril, 1997, pp. 349-364.

81 MARTÍN DE SANTA OLALLA, Pablo: "El colaboracionismo entre la Iglesia y el régimen de Franco: La creación de la diócesis de Albacete, El Franquis1110: El Régimen y la oposición. Guadalajara, ANABAD Castilla-La Mancha, 2000, pp. 219-238.

82 ORTIZ HERAS, Manuel: Las Hermandades de Labradores en el Franquismo. Albacete, 1943-1977. Albacete, lEA, 1992.

83 ORTIZ HERAS, Manuel: Violencia política en la Segunda República y en el primerfranquismo. Madrid, Siglo XXI, 1996. 27

También se analiza el efecto sobre el panorama intelectual sus reuniones y manifestaciones. La mayor parte de los acon­ albacetense, prestando atención al drama personal. Francisco tecimientos que narra suceden en la capital. Con una orienta­ Fuster84 señala que una gran parte de ellos tuvo que salir fuera ción similar, Juan Luis Hernández90 nos cuenta lo acaecido en de España como Eleazar Huerta, Ramón Castellanos, Antonio Almansa en el mismo período. El comportamiento electoral Rodríguez Romea, José Prat, etc. Otro grupo quedó en el inte­ entre 1977 y 1987 queda estudiado por Juan de Dios Izquierdo rior como Alberto Mateas, Francisco del Campo Aguilar, José S. y Manuel Robliz091 . Vence UCD, el partido del gobierno, en Serna, Eduardo Quijada Alcázar, Matías Gotor, etc., los cuales las dos primeras consultas a Cortes, mientras el PSOE consi­ posibilitaron un renacer cultural con la aparición hacia la mitad gue la Diputación y el ayuntamiento de la capital y de la mitad de la década de los cuarenta de la revista Feria y a finales de los de los pueblos de la provincia. A partir de 1982, con el hun­ cincuenta, Cal y Canto. La vida en la capital en este período la dimiento de UCD hay un gran giro hacia los socialistas que contemplamos en un libro sobre su alcalde Luis Martínez de la logran una hegemonía a partir de este año en la elecciones Ossa donde se aprecia el ambiente clerical y favorable al régi­ generales, municipales, autonómicas y europeas, captando men85 . Así lo refleja el referéndum de 1947 realizado sin ningu­ durante estos años alrededor del 50% de los votos, mientras nas garantías de libertad y transparencia86. La escasa oposición que Alianza Popular se sitúa alrededor del 30%, PCEIIU con el al régimen en los primeros años debido a la durísima represión 7% y el CDS con un oscilante 11 %. Los mismos autores nos estuvo encabezada por los comunistas y la acción de los indican que Comisiones Obreras y Unión General de Trabaja­ "maquis", que se pueden apreciar en los recuerdos de Andrés dores se consolidan y decaen Unión Sindical Obrera y otras María Picaza, Antonio Esteban y de Moya "El Chichango"87. fuerzas minúsculas. Al contrario que la media española, en esta Posteriormente se realizará a través de la filtración en las Her­ provincia CC.OO. aventajó a UGT en todo el período. mandades y cooperativas como sucedió en Villamalea88 . Para finalizar, deseo que este balance historiográfico sirva Para el período de la transición disponemos del relato de para impulsar futuras investigaciones que supongan una reno­ Andrés Gómez89 como protagonista de excepción. Nos explica vación temática y metodológica en nuestro panorama provin­ los primeros momentos de los partidos políticos, el comienzo cial, especialmente en aquellos aspectos menos trabajados y de de las libertades y los problemas de la izquierda para celebrar gran interés en el campo histórico.

BIBLIOGRAFíA DE LA PROVINCIA DE ALBACETE EN EL SIGLO XX Temas o períodos Nº libros Nº artículos OBRAS GENERALES 11 11 O DEMOGRAFíA 16 Población 4 8 Urbanismo 3 1 ECONOMíA 32 Agricultura 3 14 Industria 4 7 Comercio y transportes 1 3 SOCIEDAD 52 Conflictos 1 9 Organizaciones sociales 2 6 Educación O 7 Prensa 2 4 Cultura y arte 6 15 pOLíTICA 85 Temas 6 10 Restauración O 6 Dictadura de Primo de R. O 4 II República 7 9 Guerra civil 6 11 Franquismo 5 10 Transición y democracia 4 7 TOTAL 196 65 131

84 FUSTER RUIZ, Francisco: "Panorama intelectual de una ciudad de posguerra: el Albacete de Luis Martínez de la Ossa", Con el corazón. El alcalde Luis Martínez de la Ossa. Albacete, Papeles de la Diputación, 1998, pp. 79-120.

85 MARTÍNEZ DE LA OSSA, Julia: Con el corazón. Alcalde Luis Martínez de la Ossa, 1950-1957. Albacete, Papeles de la Diputación, 1998.

86 IZQUIERDO COLLADO, Juan de Dios: "El Referendum de 1947. Antecedentes del Referendum de la Ley de Reforma Política de 1976", Al-Basit, n° 14, Págs. 179-202. a 87 PICAZa VILLENA, Andrés M : Treinta años después. Alicante, 1991; GONZÁLEZ SEVILLANO, J. J.: Muerte y pasión de un maquis: Sebastián Eustaquio Moya Moya "El Chichango". Albacete, 1985.

88 SANZ DÍAZ, Benito: "Bastiones de resistencia en Castilla-La Mancha: El caso de Villamalea", Españafranquüta. Cuenca, 1993, pp. 233-246.

89 GÓMEZ FLORES, A.: Anatomía de una transición. Albacete del fascismo a la democracia. Albacete, Diputación Provincial, 1991.

90 HERNÁNDEZ PIQUERAS, J. L.: 1976-1986: Almansa en la década de la transición. Almansa. Cuaderno de Estudios Locales, n° 7, 1988.

91 IZQUIERDO COLLADO, Juan de Dios: Las elecciones de la transición en Castilla-La Mancha. Albacete. Albacete, LE.A., 1984,2 Vol., y "El voto popular en las comunidades castellanas", en López, Enrique (Coord.), Historia de Castilla-León, Vol. X, Madrid~ 1986; IZQUIERDO COLLADO, J. D. YROBLIZO COL­ MENERO, M.: Las elecciones en la consolidación democrática de Castilla-La Mancha. Albacete 1983-1987. Albacete, lEA, 1993.

PONENCIA

LAS CUENTAS DEL CONCEJO DE ALBACETE y LA

I OLIGARQUIZACIÓN DE SU GOBIERNO DEL ANTIGUO RÉGIMEN A LA REVOLUCIÓN LIBERAL (1750-1845)

~ María! TERESA PEREZ PICAZO. Universidad de Murcia

INTRODUCCIÓN

I En estos últimos años nuestros conocimientos sobre las ferente del impacto de la Guerra de Independencia (J. de la haciendas municipales han mejorado de manera notable~ tanto Torre, 1985, 1991), de la temprana enajenación del patrimonio en cantidad como en calidad, merced a la publicación de un municipal (A. M. Bernal, 1978, A. Otaegui, 1991) o de los creciente número de sólidas monografías. Si bien es cierto que efectos de las reformas fiscales de absolutistas y liberales a las concernientes a los siglos XVI y XVII se han llev~do la corto plazo (M. Martínez Neira, 1995; F. Lorente, 1990). parte del león, resulta asimismo perceptible el interés de los La investigación cuyos primeros resultados presento en investigadores por las siguientes centurias, tanto en lo que se este trabajo tiene por objeto, precisamente, avanzar en el cono­ refiere al siglo XVIII como al XIX. Merece la pena recordar, cimiento de la precitada etapa. Se trata, por un lado, de averi­ llegados a este punto, el revulsivo que supuso para la il)vesti­ guar el peso que sobrellevaron los ingresos municipales en un gación la celebración en Palma de Mallorca de un coloquio núcleo urbano concreto, el de Albacete, a lo largo de esa pro­ coordinado por J. Fontana cuyas propuestas fueron publicadas longada fase de penuria hacendística que se inicia a finales del ulteriormente bajo el título de Fiscalitat estatal i hisend~ local siglo XVIII y se mantiene cuanto menos hasta los años 1840 y, (ss. XVI-XIX)' Funcionament i repercussions socials {Palma por otro, de presentar un breve resumen de la estrategia adop­ de Mallorca, 1988). tada durante la misma por la élite de poder que aplicó esas Existe, sin embargo, una etapa que hasta ahora ha sido medidas -los Regidores-, estrategia cuya orientación es insepa­ poco estudiada y aún menos considerada como unidad qe aná­ rable de la incidencia económico-social del fenómeno. El uni­ lisis: la constituida por los años bisagra entre el Antiguo Régi­ verso de análisis espacial elegido constituye un buen indicador men y el régimen liberal, es decir, el tramo temporal que va de lo sucedido al respecto en otros municipios de la España desde el decenio 1750-1760 hasta el año 1845. Los trab~jos de interior, dada la fisonomía y tamaño de la población albace­ B. Yun sobre la Tierra de Campos (1987), 1. Mugártegu~ sobre tense, las estructuras sociales de la misma y el predominio del varias poblaciones vascas (1993) y, sobre todo, de C. García sector agropecuario (con algunos matices) en su economía. La sobre Valladolid (1997) constituyen una excepción. De ahí que opción por el largo plazo me ha permitido seguir la génesis de se sepa todavía muy poco sobre el impacto local de las refor­ la crisis del Antiguo Régimen en el municipio manchego y mas borbónicas y aún menos sobre los problemas que se plan­ mostrar hasta qué punto, como tantas otras veces en las econo­ tearon a esa escala como consecuencia de los zigzagueqs de la mías preindustriales, la coyuntura adversa se vio reforzada por política hacendística en las primeras décadas del siglo XIX. la presión fiscal, precipitando de esta forma el agotamiento del Los escasos estudios existentes se han ocupado de man~ra pre- viejo modelo organizativo.

l. LA VERSIÓN ALBACETENSE DE UNA INSTITUCIÓN CASTELLANA: EL MUNICIPIO "ABSOLUTO"

1.1. LA IMPORTANCIA DEL CONCEJO COMO CÉLULA en torno a los 1.231 km2, lo que le alinea con los de Cartagena,

ORGANIZATIVA DE LA VIDA LOCAL I Jumilla, Lorca, Moratalla o Murcia capital, cuya enorme exten­ Uno de los rasgos más característicos de la región manche­ sión situó al reino de Murcia a~tes y a la Comunidad Autóno• ga durante el Antiguo Régimen es el papel primordial desem­ ma correspondiente después por encima de la media nacional al peñado por los municipios en la articulación económica! y polí• respecto (215 Km2 frente a 62,7). En cuanto a la densidad de tica de la vida rural. La bien conocida influencia de la institu­ población, en 1755 era de 4,89 habitantes por km2 y todavía al ción concejil en la estructura jurisdiccional de la Co~ona de final del período aquí estudiado suponía solamente la mitad de Castilla, se vio reforzada en este caso tanto por razones histó- la nacional: 13,53 habitantes frente a 36,6 en 1857.

ricas como medioambientales. I Los, caracteres medioambientales contribuyeron de manera En lo que se refiere a la herencia histórica, parece necesario decisiva a esta evolución. La Mancha de Albacete constituye, recordar que nos encontramos ante un territorio reconquistado como es sabido, una cuenca endorreica que forma parte de la y repoblado tardíamente, por lo que las densidades hum~nas no gran depresión tectónica en la que se ubica la gran región de la pudieron progresar con rapidez en una época durante la cual la Mancha. En ella predomina la línea horizontal; de hecho, en población disponía de otros territorios dotados de mayor atrac­ los alrededores de la capital y en los términos de , tivo económico donde instalarse. Esta escasa presión demográ­ Madrigueras o Tarazona hasta llegar a La Roda la inmensa lla­ fica y las características físicas de la zona, de las que nos ocu- nura resulta impresionante. Este tipo de relieve combinado con paremos a continuación, favorecieron a su vez la puesta! en pie la aridez del clima constituye el origen de las manifestaciones de una red organizativa de mallas muy amplias, apoyaQa en el de endorreismo que venimos de señalar: hasta la construcción gran municipio -de realengo o de Órdenes- en much~ mayor del Real Canal de la Villa de Albacete, luego de María Cristi­ medida que en el señorío y/o en la comunidad campesina. Tras na, en el primer tercio del siglo XX, las inmediaciones del una serie de compras y pleitos, casi siempre en relación con núcleo urbano abundaban en lagunas, charcas y zonas semi­ Chinchilla, el término jurisdiccional de Albacete se fijó én 1741 pantanosas que creaban un foco de paludismo endémico. Es lo 32 que sucedió precisamente en las dos últimas décadas del XVIII tos (derrota de mieses). Aquí la propiedad aparecía sumamen­ y en la primera del XIX a consecuencia de un ciclo de pluvio­ te concentrada entre los miembros de una reducida élite terra­ sidad particularmente intensa. Lo anticipado en el párrafo teniente y la unidad de explotación, la gran finca o "labor", anterior sobre la dureza del medio físico cobra así sentido. solía abarcar centenares de hectáreas. La escasísima población Resumiendo, en el área y en el período aquí considerados se concentraba en pequeña heredades o "aldeas", que comien­ coincidieron tres factores que explican el papel preponderante zan a ganar peso delnográfico justamente entre 1750 y 1850. desempeñado por la institución concejil y sus representantes Esta triple serie de circunstancias originó una fuerte con­ así como la fisonomía asumida por la organización del espacio. centración de poder y competencias en el Concejo albaceten­ A. Una institución de derecho público, el municipio caste­ se. Entre sus atribuciones económicas figuraban la organiza­ llano, caracterizado por un elevado grado de autonomía frente ción y reparto de los pastos por medio del sistema de dehesas al poder central. Se puede afirmar que uno de los rasgos de y rastrojeras -actividad de gran trascendencia en una zona de base del "gobierno político" en la Monarquía española fue la dominante ganadera-, el control del proceso de roturaciones (la dialéctica entre unas unidades de base -los municipios­ concesión de licencias constituía un ingreso de los Propios) y ampliamente autónomos y el poder central, obligado continua­ la organización y vigilancia de las transacciones comerciales. mente a negociar con ellos. Obviamente dicha autonomía se Y en el aspecto social dependían de dicha institución sectores veía favorecida por la disponibilidad por parte de los Concejos de tanta trascendencia en la vida cotidiana como el orden de su propio patrimonio, que les permitía autofinanciarse. En público, la enseñanza, la sanidad y la beneficencia , así como el caso de Albacete, además, la gran extensión de su circuns­ la organización de las festividades religiosas más importantes cripción conllevaba la posibilidad de disfrute de una masa rela­ del año. El desempeño de este conjunto variopinto de funcio­ tivamente importante de bienes de todo tipo. nes y el manejo consiguiente de los ingresos necesarios para B. Un medio físico árido e ingrato, reconquistado tardía• llevarlas a buen término correspondía a unos Regidores proce­ mente, con su consiguiente reflejo en la incompleta ocupación dentes de las filas los "poderosos" locales. Lo cual equivale en del espacio. La constante presencia de "animales dañinos" este caso concreto al colectivo constituido por los grandes (cuyo exterminio constituía un capítulo fijo de los gastos muni­ terratenientes y los ganaderos "mayores", los cuales disponían cipales) y de malhechores, así como la existencia de un ininte­ del poder sobre la tierra y el poder sobre los hombres sin nece­ rrumpido proceso de roturaciones prolongado hasta la segunda sidad de recurrir al señorío. mitad del siglo XIX, constituyen otros tantos testimonios indi­ El Cuadro 1muestra hasta que punto la propiedad de la tie­ rectos de la situación descrita. rra estaba concentrada: de ese 10,44 % de propietarios que con­ C. Una organización del territorio concéntrica, dividida en trolaba más de las tres cuartas partes del suelo cultivado salió el una serie de aureolas en cuyo seno la intensidad económica y grupo de poder al que acabamos de aludir. Es fácil imaginar la demográfica descendía del centro a la periferia. En primer privilegiada situación de la que sus miembros disfrutaban fren­ lugar aparecía un núcleo urbano de tamaño modesto pero que te a unos campesinos, que dependían de un colectivo restringi­ concentraba la mayor parte de la población -5976 habitantes en do y poderoso para acceder al mercado del trabajo y de la tie­ 1755-; después, la Redonda de la Villa, aureola semirural a tra­ rra. Tanto más cuanto que coincidían en las mismas familias la vés de la cual se verificaba la transición de la ciudad al campo posesión del máximo número de hectáreas y de los rebaños de y único lugar del término donde la población presentaba cier­ ovejas y cabras más numerosos: en 1787, 25 ganaderos "mayo­ ta dispersión; además, la propiedad de la tierra estaba aquí bas­ res" disponían del 86,5 de las 30.282 ovejas existentes en el tér­ tante repartida, con el consiguiente predominio de las peque­ mino municipall. La élite del grupo estaba integrada por dos ñas parcelas, y el uso del suelo era relativamente intensivo: docenas largas de linajes: Agraz, Alfara, Arce, Barnuevo, Bas­ cultivos de regadío, desarrollo del viñedo, rotaciones cereale­ tida, Benítez, Bustamente, Cantos, Cañabate, Carcelén, Carras­ ras más cortas, etc. Y, en tercero y último lugar, el Campo pro­ co, Cortés, Espinosa, Haro, Lozano, Moreno, Munera, Pando, piamente dicho (dividido en Diputaciones rurales), una enorme Robres, Sandoval, Santaella, Urrea y Zamora. Aparte de los extensión de tierra semidespoblada y en gran parte inculta, azares demográficos, que diezmaron a unas familias y favore­ explotada de manera muy extensiva: ganadería menor y predo­ cieron a otras, la situación preponderante de las aquí enumera­ minio de una cerealicultura caracterizada por la presencia de das tuvo mucho que ver con la estrategia matrimonial endogá­ prolongados barbechos, práctica que, unida a la ausencia de mica del grupo, que facilitó la concentración de vínculos y de cercados facilitaba los aprovechamientos agropastoriles mix- hectáreas en las manos de unos pocos linajes.

Cuadro l. Reparto de la propiedad en los Llanos de Albacete (%) en 1752

Hectáreas Propietarios Superficie

Oa 10 69,63 3,6

11 a 110 19,93 16,0

111 a >500 10,44 80,4

Fuente: Romero González, J. (1983), p.202.

1 Archivo Histórico Municipal de Albacete (AHMA), Dehesas, Caja 573 33

Para llegar a una cabal comprensión de la situación de pequeñas "hazas" en la Redonda, pero prácticamente nada en semimonopolio de la tierra, el factor productivo más impor­ el extenso y semivacío camp03. Lo cual confrrma lo bien fun­ tante en una economía preindustrial, no basta con la cuantifi­ dado de las críticas ilustradas sobre el bloqueo del mercado de cación: es preciso tener en cuenta el estatuto de la misma. la tierra, atribuido al excesivo porcentaje de suelo cultivado Señalemos al respecto que la mayor parte de las fincas eJtaban ocupado por mayorazgos y bienes de manos muertas. incluidas en mayorazgos2: los Núñez, por ejemplo, poseían en Pero el colectivo propietario iba a atravesar una etapa de 1821 la nada despreciable extensión de 3.138 hectáreas tasadas controversias y vacilaciones a partir de las décadas centrales en 2.064.784 millones de reales y distribuidas en doce vincu­ del siglo XVIII, etapa que desembocó en un cuestionamiento laciones, lo que supone la ausencia de bienes libres. La tpayor del estatuto de la tierra vigente. En el caso de Albacete, como parte de estos mayorazgos se habían fundado en la segunda en casi todo el Estado español, el problema se planteó a con­ mitad del siglo XVI y en la primera del XVII, período durante secuencia del temor a que el aumento de la población y, por el cual la élite de Regidores de Albacete y Chinchilla se auto­ consiguiente, de la presión sobre la tierras incultas que resta­

concedió extensos lotes de terreno: los Carrasco, en I Pozo ban en el término -los Baldíos o Realengo- impulsara a la Rubio (1552); los Alfaro, en Balazote (1570); los Cortés y los Monarquía a una política de repartos que alterase el equilibrio Cantos, en los Llanos (1571 y 1576 respectivamente), etc. social (Pérez Picazo, M.T., 1998). A lo cual se añadía, obvia­ (Pérez Picazo, M.T., 1990, p. 45). mente, la desconfianza hacia unos derechos de propiedad Ahora bien, estas tierras no se roturaron ni se introdujo en ambiguos, en virtud de los cuales las tierras eran de apropia­ ellas la cerealicultura -por 10 menos de momento-, sino que ción privada cuando estaban cultivadas y la cosecha aún no se siguieron utilizándose como pastizales; se trataba de aprove­ había recogido, pero de apropiación colectiva después de la char la privilegiada situación de los miembros de los linajes en siega. Diversas pistas nos inducen a creer que la tendencia los concejos para atribuirse los lotes más extensos y del mejor demográfica ascendente era un hecho en Albacete: calidad, apartándolos rápidamente de la circulación comercial A. Desde el punto de vista meramente cuantitativo, los tes­

• I Y de la cOlnpetencia con los futuros repobladores de la zona timonios de los Censos Nacionales y de los Padrones de Veci­ por medio de la inclusión de los mismos en vinculaciones. De nos no dejan lugar a dudas sobre la tendencia ascendente de la esta forma se retrasó la apropiación de la tierra por los labra­ población en la segunda mitad del siglo XVIII ni sobre la rápi­ dores, la roturación de la misma -con la consiguiente reducción da recuperación de la misma tras la crisis del Antiguo Régi­ de las superficies de cultivo- y la ocupación del espacio. La men. A mayor abundamiento el aumento en cuestión se operó situación había llegado a tal punto que en la segunda mitad del en gran medida en el área rural, donde en 1840 vivía ya el XVIII apenas aparecen operaciones de compraventa len los 25,33 % de los habitantes del municipio. protocolos notariales; de hecho, solo se venden majuelos y

I Cuadro 11. Evolución de la población en Albacete, 1752-1860

Aftos Habitantes Indice

1752 I 5976 100

I 1787 9954 166,5

1797 9096 152,20

I 1818 7908 132,3 I

I 1840 11039 184,7 I

1848 12295 205,7

1857 I 16607 277,9

1860 I 17088 285,94

I Fuente: Censos Nacionales y para 1818, 1841 Y 1858, Padrones Vecinales de Albacete.

B. La presencia de una serie de hechos, indicativos dF la cre­ cias de roturación, mencionado páginas atrás, etc. O el incre­ ciente presión sobre los recursos existentes. Por ejemplo¡ las fre­ mento puntual de aprovechamientos agrícolas más intensivos en cuentes denuncias sobre "arrompidos" (roturaciones) ilegales, la trabajo como el viñedo. Y, en otro orden de cosas, la repetida repetición de apeos y mediciones de la tierra cultivada por parte solicitud de solares para edificar nuevas viviendas, tal como se del Concejo para controlar el posible retroceso de los B3;ldíos, la expresa en las Actas Capitulares de 17854: "En este Ayun­ existencia de' un ingreso fijo en la Data procedente de las licen- tamiento se trató de haberse representado por alguno de sus

I

2 Según Clavero, el gran especialista del tema, se puede definir el mayorazgo como un conjunto de bienes y derechos para los cuales el fundador, mediante su testamento o un acta particular, prevé un orden determinado del sucesión. Los elementos de la definición explican la doble denominación vigente: vínculo es decir, patrimonio indivisible e inalienable cuyo titular dispone sblo de la renta, no del capital, y mayorazgo, es decir, un orden sucesorio apoyado en principio

en la primogenitura. (B.Clavero, 1974). I

3 AHMA, Escribanos A. J. Martínez, Leg. 37; M. del Peral Oñate, Leg. 37-45; R. Tafalla, lego 45; F. J. de Vera, Leg. 45-86; J.Vila, Leg. 46-57; A. Moreno Ponce,

Leg. 57-51. I

4 AHMA. Actas Capitulares del 15 de febrero de 1785, Fol. 28. ~aja 244.

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vecinos de esta villa la necesidad en que se hayan de falta de los representantes de la nueva tendencia política. Ya en 1813, y habitación por el mucho aumento de vecinos... por lo que pre­ mucho más durante el Trienio, resulta perceptible que la gran tenden se les asigne del terreno erial o ejidos concejiles que des­ mayoría de los nuevos Regidores habían salido de las filas del de la calle de Santa Catalina de esta población guía a la Feria". colectivo, como es el caso del conde de Pino Hermoso y de La inquietud del grupo se destapó a través del cuestio­ algunos miembros de las familias Cortés y Cantos. Esta teln­ namiento del sistema de dehesas, cuya organización se llevaba prana -y oportuna- opción política les convertiría andando el a cabo -lo hemos dicho ya- desde el Ayuntamiento. Dicho sis­ tiempo en intermediarios netos entre el poder central y el enor­ tema consistía en la medida y acotamiento por los dependien­ me bloque campesino. tes concejiles de las tierras incultas -o en barbecho- del térmi­ Si del poder sobre la tierra pasamos al poder sobre los hom­ no, procediéndose después a su sorteo entre los ganaderos bres, el mecanismo mediante el cual se produjo la concentra­ locales, lo cual suponía meter en el mismo saco tanto los Bal­ ción del mismo en manos de la élite de los linajes urbanos no díos y las dehesas del Concejo propiamente dichas como las fue otro que el acceso masivo de sus miembros a los cargos tierras de la oligarquía. Las primeras y las segundas solían ser municipales, es decir, a las Regidurías. Ello se vio facilitado por dehesas de "pasto puro" (caso de las de Cerro Lobo, Ontalafia la progresiva enajenación de dichos cargos en la segunda mitad o Abuzaderas), pero las últimas eran de "pasto y labor" y los del siglo XVI y en la primera del XVII a causa a los apuros miembros del indicado colectivo las consideraban como pro­ financieros de la Monarquía austríaca. La venalidad de este tipo pias. Sin embargo, el sistema tradicional de la derrota de mie­ de oficios constituye un rasgo peculiar del Antiguo Régimen ses impedía a estos últimos una oposición frontal a dicha prác­ español que lo diferencia de otros estados como Francia e tica, aunque la constitución del señorío de Pozo Rubio por los Inglaterra, donde lo que estaba en venta eran los puestos de los Carrasco tuvo mucho que ver en su momento con un intento Tribunales de Justicia y los oficios de los Parlamentos: en ellos, bien conseguido de reservarse los pastos del patrimonio fami­ pues, predominaba la escala nacional a ese respecto mientras liar a sus propios rebaños. La situación se hizo insostenible que en España la local (Dedieu, P.P. y Loupes, Ph., 1999). El cuando empezó a aumentar el número de ganaderos modestos, cuerpo de Regidores de Albacete se convirtió así en hereditario, que implicó una presencia cada vez más nutrida de ovejas en al igual que en la mayor parte de los grandes municipios caste­ los aprovechamientos colectivos. llanos. Aunque la retribución económica era mínima -cuando la Ya en 1755 surge un primer conflicto sobre el tema5 y a par­ había-, el componente honorífico del cargo era muy importan­ tir de entonces el goteo de reclamaciones y querellas será con­ te, al igual que la influencia y poder que confería. tinuo. El terreno estaba abonado: no es difícil entender la opo­ Esta enajenación de cargos a nivel local contribuyó a con­ sición que despertaba un sistema como el descrito en unos años solidar las élites territoriales al asegurar su continuidad en el en los que se estaba difundiendo entre las élites propietarias disfrute del gobierno municipal. Tanto más cuanto que al ejer­ españolas y europeas el individualismo agrario. Los avances cicio del poder vitalicio no tardó en añadirse el derecho a alie­ del liberalismo dieron al grupo la cobertura ideológica que pre­ nar el cargo adquirido y a transmitirlo a los descendientes; de cisaba: en 1814 se elevó una exposición del problema ante las hecho, las Regidurías fueron rápidamente incluidas en mayo­ Cortes de Cádiz, que consideró razonable la petición y ordenó razgos, práctica que aseguraba su permanencia en el propio suspender el viejo sistema de adehesamiento generalizado. Por linaje. A veces, bien por la vía de compras sucesivas, bien por poco tiempo, debido al regreso de Fernando VII, aunque duran­ la de enlaces matrimoniales, una familia podía llegar a disponer te el Trienio Liberal se volvió a las andadas. Existe un docu­ de varios cargos de Regidor, fenómeno muy extendido en el mento en el que se resumen de manera magistral los argumen­ siglo XVIII (sobre todo en los grandes municipios) y que va a tos de la oligarquía: la escritura de Poderes que los "hacenda­ acentuar la tendencia hacia la oligarquización, ya favorecida dos de esta villa" confirieron a su agente de Madrid para que por la concentración de la propiedad de la tierra. En Albacete la una vez más expusiera sus razones ante las Cortes6. Allí se lista de Regidores hereditarios proporcionada por el Catastro de habla "del poder en que había estado el Ayuntamiento de aco­ Ensenada muestra una serie de individuos cuyos apellidos se tar y repartir para pasto de ganados todo el terreno de su térmi­ repiten y que en conjunto salían de once linajes íntimamente no sin excepción de los propietarios... abuso extinguido por el entroncados entre sí (Agraz, Alfara, Bastida, Benítez, Cantos, Congreso Nacional el 8 de junio de 1813 por el que se protege Carrasco, Cortés, Espinosa, Munera, Santaella y Zamora). la propiedad y consecuente con él entraron a la posesión de los La capacidad de control a nivel interno se veía reforzada por pastos de sus terrenos y leñas que producían hasta el año la estrecha relación del grupo con ciertos cargos de alcance siguiente de 1814 pero vuelto Fernando VII quedaron las cosas nacional, concretamente los de nivel intermedio (Corregidores, en el estado en que estaban en el de 1808... hasta la llegada del Alcaldes Mayores, Intendentes, miembros de las Chancillerías, sistema constitucional que tan felizmente nos rige". La reitera­ oficialidad del Ejército), verdadero nervio de la Monarquía aus­ da petición se justifica alegando que "de la operación de ade­ triaca. Muchos de los miembros de estos cuerpos salieron de las hesamiento y sorteo resultaba comúnmente que a los ganados filas de la pequeña nobleza urbana. En Albacete fue el caso de de los otorgantes les tocaban los pastos más distantes y áridos, los Carrasco, Cantos, Cortés y Bastida. Ello ampliaba la longi­ al paso que disfrutaban de los de sus cortijos o casas de campo tud de onda y la influencia del grupo familiar y facilitaba el donde tienen sus labores los menestrales que sin ser labradores reclutamiento de una clientela más extensa. y por pura granjería tienen ganados". Esta confortable situación va a verse cuestionada por la De esta manera, la opción precoz por la causa liberal de un Monarquía borbónica, cuyas refonnas se dirigieron en amplia porcentaje destacado de los individuos de la oligarquía tuvo medida a recuperar el control de su propia administración des­ mucho que ver con la definición precisa de los derechos de de el escalón más bajo, el municipal. La amplia autonomía de propiedad en el sentido de la privatización, llevada a cabo por los Concejos castellanos y el considerable margen de discre-

5 AHMA, Poder de los Ganaderos Mayores para alegar a su favor ante el Consejo de Castilla, Escribano A. Moreno Ponce, ]5 de Septiembre de ]785. Leg. 47.

6 AHMA, Poder ante el escribano A. Pío de Luzuriaga, 8 de Marzo de ]821, Leg. 53. En el documento firman prácticament todos los individuos de la élite pro­ pietaria: Juan Antonio, Salvador y Francisco de la Bastida, Julián y José Alfara, Alonso Bustamante, Miguel Femández Cantos, Juan José y Manuel de Agraz, Francisco Cañabate, Manuel Carrasco, José Encina, Julián de Zamora, Ramón Núñez, Pedro de la Mota, Ana Alarcón Espinosa, Josefa de los Arcos Benítez, el conde de Pino Hermoso (familia Carrasco), Paulina Saavedra....."todos vecinos de esta villa y ganaderos de esta jurisdicción". 35 cionalidad de que gozaban los Regidores hereditarios eran do. En el siguiente apartado tendremos ocasión de presentar la unos de los aspectos que exigían, en opinión de ministros ilus­ respuesta del Concejo albacetense a esta exigencias, que no trados como Ensenada o Floridablanca, un remedio más Irápi- tardaron en ir unidas a una serie de nuevas cargas fiscales.

11. DE LAS CUENTAS DE PROPIOS A LOS PRESUPUESTOS MUNICIPALES

11.1. LAS FUENTES sos por falta de medios y de personal, ambas carencias dieron Resulta sumamente problemático el estudio de las hacien­ lugar a un control insuficiente del manejo de las fincas de Pro­ das locales -y la de Albacete no constituye una excepción-'debi­ pios y, sobre todo, a una excesiva lentitud en el examen de las do a la aridez, complejidad y carácter farragoso de las fuentes y cuentas por parte de los precitados organismos, tanto en el caso a la carencia de objetivos contables hasta bien avanzado e~ siglo de las Juntas como en el de la Contaduría central. XIX. A todo lo cual se añaden los frecuentes cambios infrodu­ Esta documentación, aunque supone un progreso respecto a cidos en la forma de verificar y de presentar las cuentas a con­ la etapa anterior, presenta no pocos problemas al investigador. secuencia, primero, de las reformas borbónicas verificadas a En primer lugar la excesiva complejidad burocrática lo cual, partir de 1760 (Real decreto e Instrucción del 30 de julio de unido a las irregularidades aludidas más arriba, daba lugar a la

dicho año) y, después, de las alternancias de poder entre I abso­ exclusión de partidas cuando presentaba las cuentas. Hasta los lutistas y liberales, como señalé inicialmente. Y ello, pe~e a la años 1830 se arrastraron procedimientos de este tipo en el magnífica organización de los fondos documentales y al buen Ayuntamiento de Albacete, cuyo Depositario solía impugnar las estado de conservación de los mismos en el Archivo Histórico decisiones de exclusión ante el Consejo de Castilla, con la for­

Municipal de Albacete, verdadero modelo en su género. I mación de los correspondientes expedientes, desembolsos en En el caso que nos ocupa el principal problema ha ~ido la viajes y retrasos. Y, en segundo lugar, la endeblez contable del existencia de lagunas en la documentación. Lagunas que se sistema, como lo demuestra el desfase considerable de las concentran especialmente en la etapa correspondiente al siglo liquidaciones y, sobre todo, cierto tipo de prácticas como la XIX. En efecto, entre 1750 y 1800 sólo faltan cuatro años sal­ consistente en incluir dentro del Cargo y la Data de cada año las teados -] 751, 1790, 1792 Y 1796-, mientras que a partir de deudas no cobradas que tenía a su favor la corporación, así 1800 las carencias son más numerosas y, lo que es peor, con­ como los "débitos de primeros y segundos contribuyentes" y centradas cronológicamente, por lo que determinados tramos los "alcances" del año anterior cuando los había. Por consi­

temporales quedan en la sombra; se nota la ausencia i de los guiente, para conocer la suma real de lo percibido y de lo gas­ años 1808, 1814, 1816, 1819-1821, 1823 Y 1827-1832.7• Una tado es preciso descontar las indicadas partidas, con el proble­ fuente de la época atribuye dichas lagunas "a causa drl tras­ ma añadido de que a veces no figuran en los documentos como torno y confusión en que se halla el Archivo desde el tiempo tampoco se anotaban las deudas acumuladas de otros años. Sin de la última invasión francesa"8. Aún suponiendo que s!ea ver­ olvidar que, cuando faltaba liquidez, el Mayordomo de Propios dad, ello no explica los fallos ulteriores, que en mi opinión se no solía adelantar el dinero: simplemente se dejaban de cubrir deben más bien a la agitación característica de un período algunas de las obligaciones pendientes, _pero sin hacerlo constar durante el cual los enfrentamientos entre absolutistas y¡ libera­ Ha~~a 1836, fecha en que aparece la nueva ley de Ayunta­ les estuvieron a la orden del día. mientos progresista, no reciben los municipios el primer mode­ Para empezar, hasta la década de 1760 no se implanta la lo oficial de Presupuesto, que no se aplica en Albacete hasta unidad de caja. Es decir, las diversas rentas de la ciudad se dis­ 1837. Habrá que esperar, sin embargo, hasta el ejercicio 1845­ tribuían entre diferentes pagadurías, asignándose a cada una de 1846, fuera ya de los límites cronológicos de este trabajo para ellas una serie concreta de gastos; de esta forma, se convierten que se formalicen unos Presupuestos completamente ajustados. en unidades económicas con sus correspondientes ingresos y gastos. Debido a dicha práctica los datos concernientes a los 11.2. Los INGRESOS: PROCEDENCIA y PECULIARIDADES años 1750-1760 deben ser acogidos con cierta reserva, ! dada la Parte de los problemas metodológicos a los que me acabo posibilidad de que se hayan extraviado -voluntaria o ipvolun­ de referir están íntimamente ligados con la naturaleza y origen tariamente- alguno de los balances parciales: ello afecta sobre de los ingresos municipales. Se trata de un conjunto de rentas todo a los gastos, ya que los ingresos pueden co'nocerse procedente de una masa de bienes que durante el Antiguo mediante el recurso a otro tipo de fuentes como las listas de las Régimen habían sido objeto de apropiación colectiva: los Pro­ diversas contribuciones municipales9• pios y Comunes de los pueblos y, en cierta medida, los Bal­ La reforma de 1760, obra de Esquilache, introdujo por vez díos o Realengos. Dada la confusión existente entre los tres, primera un modelo o plantilla único para presentar los ingresos que en el caso de Albacete se fomentó de forma interesada, (Cargo) y los gastos (Data), plantilla que estaría vigente hasta conviene definir con precisión cada uno de ellos. 1796 y en muchos aspectos hasta 1836 y que, al ser homogénea Los Baldíos eran las tierras de la Corona aún no apropiadas facilita al investigador la comparación con las haciendas muni­ ni individual ni colectivamente. Su presencia solía ser bastan­ cipales de otras regiones. A partir de 1768 se elaboraron unos te más importante en la mitad meridional de la Península por Formularios Generales por la recién creada Contadurí~ de Pro­ razones históricas; en Albacete suponían a mediados del siglo pios y Arbitrios, de las que dependían unas Juntas que repre­ XVIII un tercio del término municipal: lo sabemos por un sentaban a dicho organismo a nivel provincial y cuyal función documento en el que consta la concesión por la Corona en más importante era la de impedir los abusos de las diversas oli­ 1753 de "diferentes dehesas en calidad de tal durante diez garquías de Regidores por medio de una estrecha vigilancia de años... habiéndose de adehesar las dos terceras partes del tér­ las finanzas municipales. Pese a ello persistieron muchos abu- mino antiguo de la villa y quedar baldío un tercio" 10 •

7 AHMA, Cajas 590 a 594 y 597. I

8 AHMA, Relación estadística de 1818, Leg. 430. I

9 AHMA. Legs. 430, 555 - 556 Y571 a 573. I

10 AHMA. Facultad concedida a la villa sobre el acondicionamiento de pastos. Dehesas, Caja 571 36

En cuanto a los Propios y Comunes la confusión procede casi de Propios y Arbitrios, por el arrendamiento de una porción de siempre de la época en la que los Concejos adquirieron su patri­ tierras de labor, amén de la venta de las simientes de los aza­ monio rústico -la correspondiente a la Reconquista- por conce­ franares y, a partir de 1833, por el alquiler de unos cuartos sión de los sucesivos monarcas. En el momento del traspaso de situados debajo de las Salas Capitulares. Las Dehesas propor­ bienes por la Corona el aprovechamiento de todos ellos corres­ cionaban el ingreso más importante, por término medio un pondía al colectivo de vecinos, lo que equivale a decir que eran 75% del subsector que estamos estudiando, como corresponde de uso comunal. Más adelante la necesidad obligó a destinar una a una econolnía en la cual la ganadería había constituido la parte de los mismos al sostenimiento de los gastos concejiles: así actividad económica de mayor peso hasta fechas tardías. Exis­ nacieron los Propios, que eran las rentas usufructuadas por el te, sin embargo un dato que llama la atención: en una época de municipio para subvenir a sus necesidades. Con el tiempo precios altos las rentas generadas por las mismas presentan un comenzaron a avanzar a costa de los Comunes, como sucedió en índice de crecimiento tan moderado que casi puede hablarse de Albacete con la apropiación del derecho de rastrojeras, consis­ estancamiento: 115,28 entre 1750 y 1808. En mi opinión ello tente en el tradicional aprovechamiento colectivo de las hierbas guarda relación con los manejos de los oligarcas que desde su que crecían en los rastrojos y que en el siglo XVIII se había con­ posición de poder en el municipio maniobraron para evitar el vertido en un derecho a pagar por los usuarios al Ayuntamiento. incremento de unos pagos que les afectaban directamente dada Habitualmente se medían "por heredades... fuera de la dehesa... la riqueza pecuaria de la mayoría..En conjunto, el porcentaje expresando los labradores los alrnudes y precios al año"ll; luego del total representado por el tipo de ingresos enumerados osci­ se repartían, abonándose los derechos consiguientes a un arren­ ló entre 1750 y 1834 entre el 38,7 Y:~l 31,4 %, si dejamos fue­ datario designado por la indicada institución. A señalar, por últi­ ra algunos años especialmente malo~ por motivos climáticos y, mo que tanto los Propios como los Comunes eran propiedades por supuesto, las etapas de gobierno liberal: en la década 1836­ amortizadas que, al igual que los mayorazgos y los bienes de 1845, la parte alícuota representada por los mismos descendió manos muertas, estaban fuera del circuito comercial. entre el 19 y el 27 %. Un último problema. En los documentos de la época suele B. Derechos sobre las transacciones. Consisten en una aparecer la distinción entre Propios y Arbitrios, que a veces sir­ serie de impuestos indirectos que, por orden de importancia ven para designar las mismas rentas. Es lo que sucede en el económica, eran los siguientes: la Almotacenia, la Feria, el Fiel municipio que estamos estudiando con las denominadas Dehe­ Medidor y los "sobrantes" de ciertos tributos de la Monarquía sas de Propios (13) y de Arbitrios (38): estas últimas se conce­ sobre el tráfico comercial que, una vez cubiertas las cantidades dieron en 1753, como nos dice el documento que venimos de pactadas en los encabezamientos, ingresaban en las arcas citar. En él se precisa con claridad que lo que distinguía a ambas municipales (la alcabala "de viento y mercado", la renta del era el plazo de tiempo durante el cual la renta en cuestión podía aguardiente, el impuesto sobre el vino forastero o sobre el afo­ ser disfrutada: las de Propios "son las que goza esta villa en ro del vino local y, desde 1833, la Saca y Medida de granos). dotación perpetua" y las de Arbitrios sólo las disfruta "en virtud El más productivo de todos ellos, la Almotacenia, gravaba de real facultad temporal, bajo las reglas que prescribe el Ayun­ todas las operaciones de compraventa y su enorme crecimien­ tamiento". Normalmente, pues, debían dejar de percibirse cuan­ to -índice 495,8 entre 1750 y 1808- constituye un buen indica­ do se hubiera cubierto la necesidad para la que habían sido soli­ dor del aumento de la actividad mercantil, evidenciado asimis­ citadas, por lo menos en teoría. En la práctica se seguían recau­ mo en otros núcleos urbanos del reino de Murcia provistos del dando después del plazo fijado, convirtiéndose en un ingreso mismo tipo de tasa: Larca -índice 1000-, Cartagena -índice fijo: es 10 que sucedió en Albacete en 1763 y de nuevo en 1773, 800-, Murcia capital -índice 500-, etc. (M. T. Pérez Picaza, pese al oposición interesada de don Gil Fernández Cortés, rela­ 1989, Op. cit.. tor del Consejo de Castilla... y ganadero "mayor" de la villa. Vienen después los derechos que se percibían sobre las 11.2.1. La composición de los ingresos operaciones comerciales verificadas en la Feria. Se trataba de El municipio de Albacete presenta una peculiaridad en lo un evento anual (días 4 a 9 de septiembre), cuya celebración que se refiere a la composición de los ingresos: el carácter mix­ había sido confirmada por privilegio de Felipe V el 6 de mar­ to de los mismos, fiel reflejo de la fisonomía de las estructuras zo de 1710. A partir del año 1783 dichos derechos cobraron económicas del Concejo manchego. La disponibilidad de una una importancia económica mucho mayor debido al traslado masa importante de bienes patrimoniales le aseguraba el ele­ de las operaciones a una zona más próxima al núcleo urbano vado nivel de las rentas de ese origen, en especial de las pro­ (desde la inmediaciones del santuario de los Llanos a la ermi­ cedentes del sector agropecuario. Pero a la vez los ingresos ta de Santa Catalina) a la vez que se edificaban nuevas instala­ relacionados con la circulación comercial ocupaban un lugar ciones, de mayores dimensiones y mejor organizadas. La ini­ muy destacado y, lo que es más importante, tendieron a crecer ciativa fue del Ayuntamiento, estimulado por el visible incre­ en la segunda mitad del siglo XVIII. El hecho debe atribuirse mento de la circulación comercial que prometía buenos bene­ a las rentas de situación de una ciudad ubicada en el eje que ficiosl 2• Los resultados fueron espectaculares: en 1782 los unía Madrid con el litoral mediterráneo, emplazamiento del ingresos procedentes de la Feria ascendieron a 4.088 reales, en que siempre sacó partido, pero mucho más en un período 1783 a 10.387 y en 1784 a 21.716. Considerado el período en durante el cual el tráfico mercantil atravesaba una buena conjunto, los indicados derechos pasaron de representar el 3,64 coyuntura (M.T. Pérez Picaza, 1989). Por consiguiente, he cla­ de los ingresos procedentes de las transacciones en 1783 al sificado los ingresos en dos grandes grupos en función del sec­ 48,13 % en el mejor año (1792) y el 14,17 % en el peor (1808). tor económico del que proceden: Unas palabras sobre los tributos procedentes de los sobran­ A. De origen agropecuario y/o de inmuebles urbanos. Son tes de gravámenes de alcance nacional. Su percepción era posi­ las rentas percibidas por el aprovechamiento de las 51 Dehesas ble porque la Monarquía delegaba en los municipios la recau-

11 AHMA. Plan de alistamiento de rastrojos, Dehesas, Caja 571

12 AHMA. Actas Capitulares de 1783 a 1785. Acuerdos del 4 y del 6 de agosto de 1983. Caja 244. Se acuerda que el dinero librado para la construcción de los nuevos locales y el acondicionamiento del lugar se libre contra el caudal de Propios "con calidad de reintegro". Las nuevas instalaciones se describen "como un círculo capaz de contener 200 tiendas y todas resguardadas por ordenamiento central y puertas". Se ordena asimismo avisar al agente del villa en Madrid para que solicite se coloque en una de sus gacetas la noticia, atrayendo así un mayor número de comerciantes. 37 dación de muchos de ellos, por lo que se veían obligados a ¿Cómo se administraban esta masa de bienes y derechos? hacer el reparto de la cantidad acordada entre los vecinos, pri­ Siguiendo la tendencia general de la época, la forma de explo­ mero, a cobrarla después y a llevarla a Murcia, por últifi1.o. La tación más común era el arrendamiento a corto plazo, tanto en ventaja de tales prácticas consistía en que facilitaba a las insti­ el caso de los Propios como en el de los Arbitrios. Los arren­ tuciones concejiles la detracción de los indicados sobrahtes y dadores debían ser personas solventes y presentar fiadores el inconveniente, el margen de discrecionalidad que daba al competentes con bienes equivalentes al valor del remate, el poder central para mantenerlas o suprimirlas, lo que sucecjió en cual se ajustaba en una subasta pública. Este sistema daba Albacete con la alcabala en 1783. lugar a frecuentes episodios de clientelismo, ya que los capitu­ Resta por aludir a ciertos cargos o derechos que el Conce­ lares intentaban reservar a sus parientes y paniaguados los jo había comprado a la Monarquía aprovechando una vez más ramos más lucrativos, lo que dio lugar a más de una denuncia los apuros financieros de la misma. En Albacete eran dos: el a lo largo del período aquí considerado. Las reformas borbóni• cargo de Fiel de Tercias y el derecho de Correduría. El prime­ cas se dirigieron parcialmente a limitar la práctica del arren­ ro fue enajenado por Felipe III en 1618 y su finalidad era la de damiento y a sustituirla por la administración directa de cada controlar el cobro de las Tercias Reales: el Ayuntamidnto lo renta por el municipio, pero su éxito fue muy mediocre. arrendaba desde entonces por una cantidad fija que alcanzó la 11.2.2 La coyuntura los ingresos suma de 9.650 reales entre 1750 y 1800, desapareciendo des­ Los Cuadros III y IV resumen tanto la evolución global de pués de dicha fecha tras un largo pleito con el Consejo de Cas­ los ingresos como la de sus diferentes capítulos. En el primero tilla, cuyos fiscales deseaban la reversión a la Corona de los de ambos se presenta lo percibido a lo largo del período utili­ cargos enajenados. En cuanto a la segunda, se trataba simple­ zando las medias quinquenales, práctica que permite suavizar mente de la supervisión de la actividad mercantil y de vigilar las tremendas oscilaciones sufridas, rellenar los huecos exis­ el estado de las pesas y medidas usados obligatoriamente en tentes en los datos y ofrecer una versión más coherente del pro­ las transacciones, cobrando una pequeña cantidad a los usua­ ceso a largo plazo. rios. También solía estar arrendada por una cantidad que osci­ He seguido la opción de expresar los totales en moneda ló entre 2.000 y 2.500 reales entre 1750 y 1836; a señalar que corriente (reales de vellón) y en moneda constante; el deflactor se concedió en una fecha que desconocemos para ayudar a elegido ha sido el precio de la fanega de trigo (Libro de Fábri­ pagar uno de los dos censos de la Iglesia de Toledo cargados ca de Chinchilla para los años 1750-1827 y estadísticas muni­ sobre los Propios de Albacete. cipales de Albacete desde 1827 hasta 1845). Se recoge así el He dejado para el final un tipo de ingresos que no p!ertene­ impacto del movimiento de precios, lo cual parece imprescin­ ce a ninguno de los apartados establecidos: los Repartimientos dible en este caso dada la sucesión de dos coyunturas de signo Vecinales. Aunque comenzaron a practicarse de manera siste­ opuesto, inflacionista la primera (1750-1817) y violentamente mática en la primera década del siglo XIX no aparecen de deflacionista la segunda (1817-1845). La falta de unidad de caja

I manera clara en las cuentas hasta 1833-1834, lo que dificulta hasta la década de 1760 me ha obligado a presentar de manera su evaluación. En ocasiones figuran total o parcialmente en el separada el total de ingresos y el Cargo, que sólo figura en los pozo sin fondo del capítulo de los Débitos acumulados :(10 que documentos desde 1770: las diferencias entre ambos se deben a permite incluirlos en el Cargo) o se alude a ellos en la ¡Data al la inclusión en el segundo de los débitos acumulados, fuera cual especificar que".. .10 que falta para cubrir los débitos se repar­ fuese su origen (deudas de los contribuyentes, partidas exclui­ tirá entre los vecinos" das, restos de los Repartimientos sin percibir, etc)

Cuadro 111. Ingresos totales del municipio de Albacete en reales corrientes y constan tes, 1750-1845.Med·las qUlnquena· les. R. corrientes R. constantes Años Indice Indice Total Ing. Cargo Total Ing. Cargo 1750-1754 96.233 100 3.436 100 1755-1759 120.269 4.625 1760-1764 128.074 4.002 1765-1769 124.966 2.975 1770-1774 124.462 191.690 3.377 5.180 1775-1779 138.957 284.682 3.755 7.907 1780-1784 132.945 202.700 3.593 5.334 1785-1789 102.221 298.205 2004 5.847 1790-1794 115.308 296.123 2681 5.483 1795-1799 106.682 167.044 2784 2.784 1800-1804 125.397 130 132.256 1501 43 1.510 1805-1809 118.790 214.502 2284 4.563 1810-1814 138.336 237.815 1554 2.672 1815-1819 151.984 261908 1955 4.224 1820-1824 98.976 170.710 2199 3.793 1825-1829 153.049 141.648 2473 2.724 1830-1834 147.932 297.857 2783 9.308 1835-1839 129.608 323.695 3502 9.808 1840-1844 177.433 184 379.899 4795 139 10.084 Fuente. AHMA, Cajas 590 a 594. 38

La lectura de estos datos nos autoriza a afrrmar que la evo­ dían cada vez menos, por lo que los caudales procedentes de lución de los ingresos se caracterizó por una moderada ten­ los Repartimientos pasaron a situarse en cabeza. Y, por supues­ dencia ascendente hasta las décadas finales del siglo XVIII, to, la acumulación de deudas continuó. tendencia que se invierte después: obsérvese el creciente des­ Pasando a la estructura de los ingresos, se ha reproducido nivel existente entre la cuantía de las entradas en las arcas de recogiendo el doble origen económico de los mismos añadiendo Propios y el Cargo, que refleja a su vez el aumento de las deu­ los débitos para obtener el balance final. Los datos se presentan das pendientes. Sólo a partir de 1834-1836 la situación parece en porcentajes del total, recurriendo al igual que en el Cuadro lIT enderezarse, pero ello se debe en gran parte a la aplicación de a las medias quinquenales. Este procedimiento permite apreciar las reformas verificadas en esa fecha, que introdujeron cierto más fácilmente los cambios relativos habidos en el peso econó• orden en la presentación de las cuentas. De hecho, tal como se mico de ambos tipos de rentas a lo largo de la centuria. percibe en el Cuadro IV, las antiguas fuentes de ingresos ren-

Cuadro IV. Estructura de los Ingresos del Concejo de Albacete (O~). 1750-1845

Años R. patrimoniales R. transacciones Débitos Rep. Vecinales 1750-1754 38,7 34,8 26,5 1755-1759 43,8 49,2 7,00 1760-1764 33,15 44,3 22,55 1765-1769 32,3 49,6 18,1 1770-1774 31,1 50,3 18,6 1775-1779 32,6 48,5 18,9 1780-1784 34,8 58,41 6,79 1785-1789 45,5 32,9 21,6 1790-1794 40,7 36,15 23,15 1795-1799 42,8 38,5 18,7 1800-1804 43,7 37,00 19,3 1805-1809 38,7 31,06 30,24 1810-1814 35,3 16,7 48 1815-1819 31,4 26,5 42,21 1820-1824 1825-1829 1830-1834 16,7 9,8 34,36 39,14 1835-1839 13,14 12,5 32,03 42,33 1840-1844 14,5 8,8 38,3 38,4 Fuente: AHMA. Cajas 555 y 556; 572 Y573; 590 a 594.

La evolución diferencial de cada apartado arroja mucha luz mayor repercusión en el tema que aquí nos ocupa fue la cre­ sobre la coyuntura del período. Obsérvese como los derechos ciente resistencia a pagar los impuestos indirectos debido a la sobre las transacciones "tiran" del conjunto -tanto al alza como difusión de las ideas liberales sobre el libre comercio; de ahí el a la baja- debido a las violentas fluctuaciones que experimen­ colapso financiero experimentado por el Ayuntamiento duran­ tan, mientras que los de origen patrimonial permanecen más o te el Trienio y el descenso drástico sufrido por dichas cargas menos estables por las razones que apuntamos en su momen­ desde 1836. Ello explica la creciente importancia asumida por to; de hecho, las escasa subidas que presentan lo son en térmi­ los Repartimientos Vecinales. En el fondo, lo que está en cues­ nos relativos -se elevan cuando el otro tipo de rentas descien­ tión es el sistema fiscal del Antiguo Régimen, apoyado en ren­ de- pero no en cifras absolutas. En cuanto al origen esos alti­ tas y usufructos: es lo mismo que sucede con el pago de los bajos es de índole tanto económica como política. Económica: derechos señoriales, las pensiones de censo o los diezmos. la buena coyuntura comercial de las décadas centrales del siglo XVIII provoca un crecimiento que parece imparable (en los 11.3. LA ESTRUCTURA DEL GASTO años 1780 las cargas sobre las transacciones llegaron a repre­ La estructura del Gasto se mantuvo en los mismos términos sentar el 58% del total), pero a partir de entonces se invierte la entre 1750 y 1836, fijándose a partir de la reforma de 1760, tendencia (son los años de la guerra con Inglaterra) y sobre como se señaló. Desde entonces, la Data o cuenta de salidas todo comienzan a sucederse una serie de catástrofes de diver­ del arca de Propios quedó dividida en los siguientes capítulos: sa naturaleza cuya consecuencia inmediata sería el colapso de Gastos fijos (salarios, pensiones de censo y festividades reli­ las comunicaciones. Climáticas: el incremento de la pluviosi­ giosas) y Gastos Ordinarios y Extraordinarios, aunque desde dad a fines del XVIII y comienzos del XIX, que amplió y pro­ 1796 una parte de los mismos pasó a integrar un apartado espe­ fundizó la zona semipantanosa que rodeaba Albacete incomu­ cífico denominado Gastos Alterables. Dicho esquema no se nicando a la ciudad13. Epidémica: los brotes de paludismo liga­ modificará hasta 1836. dos a la expansión del encharcamiento y la presencia de los 11.3.1. Gastos fijos cordones sanitarios que fue preciso organizar por las mismas Dentro de Ayuntamiento conviene distinguir en 10 que con­ fechas debido a la fiebre amarilla o "peste de Argel", como se cierne a los salarios entre los cargos superiores y los subalter­ la denominaba en las fuentes de la época. Y bélicas: la Guerra nos. Entre los primeros figuraban el Corregidor, los Regidores, de la Independencia. En cuanto a los problemas políticos, el de los escribanos (2), un representante o Agente del municipio en

13 El 4 de abril de 1802 se presenta un informe ante los capitulares en el que se describe la situación como sigue: "el pueblo se halla aislado y el término de la cir­ cunferencia inundado por las abundantes y continuas lluvias....por las que se habían formado varias lagunas inagotables por la situación profunda de esta población". 39

Madrid y el Mayordomo de Propios o tesorero -retribuido des­ caso del municipio manchego se trataba de las Pías Memorias de 1760 con el 15 al millar o sea el 1,5% de todos los caudales de la Iglesia de Toledo, de las que se habían recibido 297.500 que pasasen por sus manos-. Curiosamente en las Datas no reales en fonna de dos capitales de censo, y de otros dos pro­ figuran los sueldos de los Regidores que, por muy redqcidos cedentes del Duque de Ación y Marqués de Fontanar (8.000 que fueran, se percibían anualmente. Y entre los segundos esta­ ducados) y de Sancho Barnuevo (52.000 reales). El origen de ban el Portero, el Peón público, el Veredero, el Relojero y, de los censos de la Iglesia de Toledo fue precisamente la adquisi­ manera eventual, músicos y tambores. Fuera del Ayuntamien­ ción de Pozo Cañada a Chinchilla en 1741 con los gastos con­ to recibían retribuciones diversos funcionarios que hubieran siguientes (deslinde de términos, pago por la apertura de expe­ debido figurar en los capítulos de Beneficencia, Educación, diente ante el Consejo de Castilla, compensaciones al munici­ Orden Público y Sanidad, práctica que hace bajar artificial­ pio vecino, etc.). En la segunda mitad del siglo XVIII se liqui­ mente el desembolso real destinado a estos conceptos. Es el dó uno de ellos (140.500 reales en 1779) amén del finiquito que caso de las nodrizas, el preceptor de Latinidad, los maestros restaba de Sancho Barnuevo (11.650 en 1762). "de primeras letras" (dos de niños y una de niñas), el Alcayde 11.3.2. Gastos Ordinarios y Extraordinarios de la cárcel, los Guardas de Montes (2), el albéitar o cirUjano, Estaban integrados por los siguientes capítulos: el médico y la matrona. Los sueldos de todos ellos vatiaron A. Gastos "menores". Constituían un apartado muy amplio poco entre 1750 Y 1836 (la suma total de los mismos aSgendía en el que figuraban los gastos de oficina (papel sellado, escri­ a 22.540 reales), pero como no se les pagaba con regularidad y torio, suscripción a la Gaceta, etc); el porte de cartas o "plie­ sus cargos quedaron vacantes a veces varios años, el porcenta­ gos"; la verificación de Apeos anuales cuyo objetivo consistía je del presupuesto que representan oscila ampliamente, lo que en acotar y medir los baldíos y áreas cerealícolas del campo puede inducir a error. Señalemos, por último, que la reforma con el fin de facilitar su adehesamiento y reparto ulterior, el liberal de 1836 produjo un cambio muy importante en este "alistamiento" de los rastrojos y los reconocimientos periódi• apartado; primero, porque aumenta el número de empleados cos del término para vigilar los "rompimientos" de tierras; la que trabajaban en las oficinas y, después, porque se incr~men­ elaboración de Padrones recaudatorios de las diversas contri­ ta la cuantía de los salarios, especialmente en los escalones buciones y derechos (la alcabala por ejemplo) y los desembol­ inferiores. La suma total de los mismos subiría en aqelante sos ocasionados por la matanza de "animales dañinos" (zorras

hasta 106.480 reales. ! y lobos). Pasando a las festividades religiosas, aunque su coste no B. Relacionados de una u otraforma con el Ejército. Con­ sea muy alto, tampoco resultaba despreciable y, sobre t¿do, se sisten en la asistencia a las tropas en tránsito ("utensilios") y abonaba con bastante regularidad. Téngase en cuenta el alto los pagos hechos a los vecinos por el alojamiento de los solda­ contenido social de estos eventos durante el Antiguo Régimen dos o los desembolsos ocasionados por los sorteos de "quinta­ ya que en ellos se mezclaba lo profano y lo religioso. La cera dos" y su traslado a Murcia.

solía ser el gasto más importante junto con el adorno I de las C. Justicia y Orden Público. Se trata del sostenimiento de calles y el estipendio de los sacerdotes que venían a Albacete las "cadenas de presos" en su paso por el municipio y/o del a predicar. La celebración más costosa, como en otros muchos alojamiento de algunos de ellos; el cuidado de la cárcel y la ali­ lugares, era la del Corpus Christi (595 reales), seguida por las mentación de los '''presos pobres", amén del abono de un sala­ de la Virgen de los Llanos, la Purísima, San Juan de Mayo y rio al Alcayde de la misma, como ya se señaló. Navidad: en total, un desembolso que osciló entre 1~093 y D.. Gastos de finalidad social. Son los capítulos concernien­ 1.435 reales desde 1750 a 1836. A todo lo cual es preciso aña­ tes a Beneficencia, Enseñanza y Sanidad. En lo que respecta a dir las Rogativas que se celebraban con carácter extraordinario la primera el mote más importante era el relativo a los Niños para pedir la ayuda del cielo contra las áleas climáticas: su Expósitos, que incluía una suma bastante elevada destinada al concentración en determinados períodos constituye una buena pago de nodrizas y otras más modestas correspondientes a la pista para detectar los ciclos de malas cosechas, tan influyen­ ropa de los niños ("envolturas"). Muy por detrás figuraba la tes en el cambio de coyuntura. Es lo que sucede en las décadas asistencia a los enfermos y presos pobres. En cuanto a la Ense­ de 1780, 1790 y, ya en el siglo XIX, en 1802-1803 y en 1814­ ñanza y la Sanidad, los desembolsos que les concernían figura­ 1817 (en las Actas Capitulares de 1818 se alude al fenómeno ban en otros apartados: los sueldos de los distintos funcionarios con las siguientes palabras "...pérdida de cosechas... cuya cala­ en el de gastos fijos, como indiqué más arriba, y las reparacio­ midad tiene a este pueblo en el extremo grado de destruc­ nes de los edificios de asistencia -Hospital, asilos, viviendas de ción"). La reforma de 1836 recortó drásticamente este :capítu• los maestros- en el de Obras y Reparos. De todas formas el por­ lo, cuyo monto quedó fijado en 616 reales. centaje representado por estos tres apartados fue siempre bajo y Por último, el pago de las "pensiones de censo" constituye lo siguió siendo tras la reforma de 1836, pese a la presencia de la versión antiguo regimental del endeudamiento. Se tra~aba de algunos pequeños retoques en lo concerniente a los Expósitos. censos consignativos impuestos sobre los Propios (casi siempre E. Pleitos. Su frecuente presencia era una de las principales el aval era una sisa o arbitrio), comprometiéndose el Concejo a causas de endeudamiento en los municipios castellanos; de ahí abonar los intereses anualmente mientras no se devolviese el que dispusiesen de un Agente en la Corte que los representaba "principal", es decir, la suma prestada 14• El rédito esta~lecido, en los procesos pendientes. En el período estudiado Albacete bastante moderado, era del 3%. Los municipios del reino de arrastraba un contencioso con el Consejo de Castilla por el tan­ Murcia presentaban un bajo nivel de endeudamiento en relación teo del oficio de Fiel de Tercias, otro con Chinchilla liquidado con la media nacional y el de Albacete no constituía un~ excep­ en los años 1760 y un tercero con la familia Carrasco debido a ción: el monto de las pensiones (13.764 reales) representaba la oposición del Municipio a la concesión por la Corona del aproximadamente un 8,5% de la cuenta de gastos, no muy ale­ "señorío, jurisdicción y vasallaje de la villa de Pozo Rubio a jado del 5,6% de Murcia capital (en Valladolid, por eje~plo, se Don Fernando Carrasco Rocamora". A medida que avanza el elevaban a un 36,1% según C. García). Los prestamistas solían siglo XVIII cambian los orígenes de los pleitos: ahora tienen que ser instituciones eclesiásticas o miembros de la oligarquía; en el ver casi siempre con "agravios" en el reparto de los nuevos 40 impuestos, como sucedió con la Unica Contribución, o con sis del Antiguo Régimen entre 1780 y1817 con tanta mayor reclamaciones ante el Consejo de Castilla contra la exclusión de facilidad cuanto que van acompañadas de un incremento del partidas en las cuentas por la Contaduría de Propios y Arbitrios. gasto en este capítulo: en total se desembolsaron 271.087 reales. F. Obras y Reparos. En este capítulo sólo se incluían teóri• -1780-1782: 26.925 reales destinados a la compra de trigo camente los arreglos verificados en los inmuebles que depen­ por el Ayuntamiento para paliar el hambre provocada por la dían del Ayuntamiento: Salas Capitulares, Cárcel, Hospital y, sucesión de malas cosechas. por supuesto, las instalaciones de la Feria. El monto de lo inver­ -1772 y 1789-1790: 5.623 y 3.871 reales respectivamente tido en Obras comenzó a incrementarse debido a las iniciativas cuando, debido a las avenidas, se hizo preciso limpiar y repa­ borbónicas relativas a la construcción y cuidado de las vías de rar la Acequia Madre. comunicación, ya que los municipios de los territorios concerni­ -1803: 53.272 reales abonados por las obras del Hospital, dos por ellas estaban obligados a compartir la financiación de seriamente dañado por las lluvias continuas. los trabajos. Albacete desembolsó con tal fin 13.681 reales en -1791 y 1803: 22.169 reales gastados en los cordones sanita­ 1780 con destino al nuevo puente de Montalbán, 17.446 en 1794 rios, la construcción de una empalizada y el pago a la tropa para para la composición de caminos y 152.721 en 1796 como con­ defender al ciudad del contagio en ocasión de la "peste de Argel". tribución a la construcción del nuevo Camino Real de Madrid. -1810-1813: 159.227 reales gastados en abastecimientos a Resulta significativo que desde 1796 este tipo de gastos deje de las tropas durante la Guerra de la Independencia y en repartos figurar el apartado de Obras y pase al de Gastos Alterables. forzosos entre los vecinos. G. Contribuciones. A partir de las décadas centrales del Hubo otros gastos menos justificados como los ocasiona­ siglo XVIII las aportaciones de las Haciendas locales a la dos por sendas visitas reales: 62.249 reales en 1803 y 67.500 Hacienda central fueron creciendo paulatinamente, de acuerdo en 1807; en este último caso el dinero hubo de ser adelantado, con los objetivos no confesados de la reforma de 1760. La con carácter excepcional, por el Mayordomo de Propios. estrecha relación entre ambas no constituía una novedad; ya se 11.3.3. Cuantificación del proceso ha aludido a la recaudación de los impuestos generales por los Se ha procedido de la misma manera en lo relativo a los Gas­ municipios bajo la Monarquía austríaca, por lo que la forma de tos y a los Ingresos. Es decir, en los dos cuadros que se inclu­ repartir y cobrar la Única Contribución en 1770 no supuso nin­ yen (números V y VI) los datos aparecen en forma de medias gún tipo de cambio. Sí lo fue, por el contrario, el incremento quinquenales, tanto en el que se resume la evolución global del peso fiscal, que pasó del 7 al 17% de los rendimientos de (Cuadro V) como en el que se muestra la coyuntura de los dis­ los Propios entre 1750 y 1800, llegando al 20% de los mislnos tintos capítulos del Gasto (Cuadro VI). En este último se han a partir de la reforma de Martín de Garay en 1818. Aún más sustituido asimismo las cifras absolutas por los porcentajes que grave resulta la presencia de contribuciones extraordinarias, representaron sus principales apartados a lo largo del período. resultado de la supeditación progresiva de los ingresos munici­ Las conclusiones que se extraen de la información presen­ pales a las necesidades fiscales de la Monarquía; el Ayun­ tada en el cuadro anterior permiten completar el panorama pro­ tamiento de Albacete hubo de pagar por tal concepto 379.166 porcionado por las cifras de Ingresos. Aparentemente los Gas­ reales entre 1770 y 1813: tos siguen uria evolución similar, aunque el ritmo de la misma -1770: 33.379 reales, parte alícuota que correspondió al sea más rápido: en moneda corriente el índice de crecimiento municipio en el repartimiento de la Única Contribución y que de los primeros ascendió entre 1750 y 1800-1805 a 131 y el de por su enormidad dio lugar a la apertura de un pleito por "agra­ los segundos a 272. Pero cuando se convierten los reales de vios" con el Consejo de Castilla. Todavía figuraba en la Data de vellón en moneda constante se percibe que, en realidad, los 1836 una suma de 6.344 reales que no habían sido reembolsados. ingresos han bajado y los gastos han subido: la cuantía de -1779: 19.106 reales por atrasos en los "Aumentos" de las ambos se eleva ahora a 43 y 199 respectivamente. Aún tenien­ Reales Contribuciones. Es el momento en que suben del 7 al do en cuenta que en los primeros años los totales están proba­ 17% de los ingresos. blemente calculados a la baja, lo que presiona en la misma -1780-1783 : 58.464 reales por la Contribución Extraordi­ dirección el punto de partida estadístico -base 100- las cifras naria de 160 millones. que hemos reproducido páginas atrás constituyen un buen indi­ -1783: 50.000 reales por la suscripción obligatoria de 25 cador del incremento vertiginoso experimentado por las sali­ acciones destinadas al fondo del Banco de San Carlos. das de las arcas municipales. El fenómeno resulta todavía más -1792: 52.061 reales de préstamo obligatorio procedentes espectacular cuando se observa lo que sucede con la Data (que de los "sobrantes de Propios". incluye los débitos acumulados): entre 1790-1794 y 1840­ -1797: 79.996 reales como inversión también obligatoria en 1844 su cuantía se ha triplicado. Estos datos nos permiten afir­ la adquisición de Vales Reales. mar, con escasa o nula posibilidad de error, que las salidas de -1800: 73.160 reales pertenecientes al contingente que numerario fueron muy superiores a las entradas. La cuestión a correspondió a Albacete en el Subsidio de los 300 millones. dilucidar ahora es cuales fueron los desembolsos que llevaron -1813: 13.00 reales con destino al nuevo "Cabezón" o con­ al Ayuntamiento de Albacete a una situación que podemos cali­ tribución directa aprobada por las Cortes de Cádiz. ficar de quiebra técnica o, dicho en otras palabras, cual fue la Esta constante punción fiscal sobre los ingresos de Propios, coyuntura de los distintos apartados en los que se invirtieron a todas luces excesiva, imposibilitó la atención a las demás los fondos del Concejo. obligaciones del Concejo manchego en una etapa caracteriza­ Primer hecho a constatar: en términos relativos, los gastos da por la sucesión de adversidades de todo tipo. Tanto más denominados "fijos" crecieron entre 1750 y 1790; son los años cuanto que la situación no mejoró en la primera mitad del siglo durante los cuales las reformas ilustradas dieron lugar en Alba­ XIX, ya que la quiebra de la Hacienda central durante el rei­ cete a la regularización salarial de preceptores, maestros, médi­ nado de Fernando VII se tradujo en un nuevo incremento de las cos y matronas, etc, las inversiones en obras nuevas alcanzaban deducciones sobre los recursos municipales (la ya mencionada niveles moderados y aún no había comenzado el rosario de reforma de Garay). Todo lo cual ayuda a explicar la enonne catástrofes aunque ya se anunciaba. Segundo: a partir de dicha masa de deudas pendientes en 1845. fecha, por el contrario, sube la parte alícuota representada por H. Gastos extraordinarios. La sucesión de calamidades rei­ los Gastos Ordinarios, Extraordinarios y Alterables y, dentro de teradamente aludida permite identificar la fase álgida de la cri- ellos, los capítulos concernientes a las contribuciones y/o a las 41

Cuadro IV. Gastos totales y Datas del Ayuntamiento de Albacete en reales de

I vellón y constantes, 1750-1845. Medias quinquenales. Reales de vellón Reales constantes Afios Total Gasto Indice Data Total Gasto Indice Data

1750-1754 43.873 100 ! 1.561 100

1755-1759 56.983 I 2.221 1760-1764 76.887 2.485 1765-1769 57.925 1.393 1770-1774 74.409 2.031 1775-1779 68.571 1.948

1780-1784 55.977 i 1.486 1785-1789 50.471 983 1790-1794 87.438 106.835 1.546 1.978 1795-1799 169.521 194.594 2.756 3.165 1800-1804 133.095 272 157.083 1.644 199 1.936 1805-1809 157.269 175.423 3.121 3.248 205.042 2.266 2.426 1810-1814 191.822 I 1815-1819 259.811 355.296 4.936 6.686 1820-1824 95.984 113.182 1.920 2.263 1825-1829 304.152 496.811 5.244 8.565 1830-1834 175.212 316.820 4.867 8.796 338.567 9.404 1835-1839 223.779 ! 7.437 1840-1844 220.369 502 382.305 7.128 456 10.060 Fuente: Ver Cuadros III y IV. inversiones destinadas a las Obras públicas y a paliar l~s cala­ salidas se debió, pues, a la fuerte subida de las cargas fiscales midades; recuérdese al respecto la considerable elevación de en una coyuntura de crisis múltiple. Resta por ver el impacto las cifras que se dieron páginas atrás. A señalar, por último, que social y económico de una situación de estas características que otro tanto ocurre con los débitos, lo cual constituye un buen hizo descuidar, indudablemente, otros aspectos importantes de indicador de las dificultades que los habitantes del municipio la vida cotidiana como los salarios -los impagos al respecto se encontraban para atender a sus obligaciones fiscales, pero tam- acumulan y, sobre todo, su cuantía no se incrementó práctica­

I bién de su resistencia a responder a algunas de ellas en las eta- mente entre 1760 y 1836- Ylas atenciones sociales. pas liberales. En mi opinión, el aumento desbordante de las

Cuadro VI. Estructura de GastÓs de Ayuntamiento de Albacete (%), 1750-1845.

Medias quelnquenaIes I Años Gastos G.Ord,Ext. Debitos Alcance Total Fijos y Alt. RealesV. 1750-54 38,8 20,8 39,2 1,2 100,0 1755-59 41,4 25,1 24,8 8,7 100,0 1760-64 43,6 24,9 29,5 2,0 100,0 1765-69 40,0 28,7 31,4 0,0 100,0 1770-74 36,0 29,1 34,9 0,0 100,0 1775-79 39,2 24,6 36,3 0,0 100,0 1780-84 33,5 37,9 28,6 0,0 100,0 1785-89 44,6 29,9 25,5 0,0 100,0 1790-94 23,9 52,5 23,6 0,0 100,0 1795-99 15,1 53,9 12,7 18,3 100,0 1800-04 17,1 54,5 14,4 14,1 100,0 1805-09 12,7 27,3 22,8 37,2 100,0 1810-14 6,9 39,6 33,7 19,8 100,0 1815-19 7,5 40,8 26,2 25,5 100,0 1820-24 13,1 28,5 32,1 26,3 100,0 1825-29 5,8 22,7 25,9 45,7 100,0 1830-34 12,8 39,4 47,8 0,0 100,0 1835-39 40,3 26,4 33,3 35,5 100,0 1840-44 48,6 26,0 25,4 39,8 100,0 Fuentes: Ver Cuadros III y IV. 42

CONCLUSIONES

El balance entre Ingresos y Gastos, que aparece a conti­ que queda al producirse la consolidación del régimen liberal en nuación, puede ayudamos a reconstruir la trayectoria seguida 1845. Sólo a partir del mismo pueden establecerse las conclu­ por la Hacienda del municipio de Albacete y la situación en la siones del análisis realizado en las páginas que anteceden.

Cuadro VII. Balance de Ingresos y Gastos, 1750-1845. Medias quinquenales

Años Ineresos Gastos Balance Careo Data Balance 1750-1754 96.233 43.873 52.360 1755-1759 120.269 56.983 63.286 1760-1764 128.074 76.887 51.187 1765-1769 124.966 57.924 67.142 1770-1774 124.462 74.409 50.053 191.690 1775-1779 138.957 68.471 70.486 284.682 1780-1784 132.945 55.977 76.968 202.700 1785-1789 102.221 50.471 51.750 298.205 1790-1794 115.308 87.438 27.870 296.123 106.825 189.288 1795-1799 106.682 169.521 -62.839 167.044 194.594 -27.550 1800-1804 125.397 133.094 -7.697 132.256 157.083 -24.550 1805-1809 118.790 157.269 -38.479 214.502 175.423 39.079 1810-1814 138.336 191.822 -53.486 237.815 205.041 32.774 1815-1819 151.984 259.811 -107.827 261.908 355.296 -93.388 1820-1824 98.976 95.984 2.992 170.710 113.181 57.529 1825-1829 153.049 304.152 -151.103 141.648 496.811 -355.163 1830-1834 147.932 175.212 -27.280 297.857 316.567 -18.972 !835-1839 129.608 223.778 -94.170 323.695 338.567 -14672 1840-1844 177.433 220.368 -42.935 379.899 382.305 -2406 Fuentes: Las mismas que las de los cuadros de Ingresos y Gastos

Salta a la vista la existencia de dos coyunturas de distinto la local por el presupuesto municipal- sino su distribución. signo, caracterizada la una por la existencia de superavits Pero en la etapa que estamos analizando la parte del león se la anuales en las cuentas (desde 1750-54 a 1795-99) y la otra por llevaron los gastos de transferencia (contribuciones) y los un déficit constante (desde 1795-99 a 1840-44). En la etapa improductivos (1a Guerra de Independencia). correspondiente al Setecientos, la Hacienda municipal se bene­ Una vez superada la crisis y ya en la nueva centuria, los ficia de un "tirón" de los ingresos consecuente al incremento balances seguirán siendo negativos. El problema ahora es otro: de los derechos sobre las transacciones y los gastos crecen los ingresos rinden cada vez menos debido a la fuerte oposi­ moderadamente. La práctica de ocultaciones en lo referente a ción de los habitantes de Albacete -al igual que los del resto del estos últimos, ya señalada, se percibe a través de la frecuente país- a seguir pagando los impuestos indirectos; asimismo, las resistencia de los Regidores a presentar justificantes de los de­ prácticas agropecuarias tradicionales se ven contestadas por selnbolsos verificados, de la ausencia de Datas hasta 1790 y en los terratenientes. La situación durante el Trienio Liberal llegó el hecho de que la Junta de Propios excluyese casi todos los a ser dramática. En lo relativo a los Gastos, la carga fiscal vuel­ años alguna partida. Por consiguiente, la sospecha de los ve a incrementarse a raíz de la reforma de Garay y las contri­ gobiernos ilustrados sobre la existencia de irregularidades y, en buciones extraordinarias reaparecen durante la primera guerra otro orden de cosas, sobre la presencia de "sobrantes" de los carlista. Hay que esperar a la reforma de 1836 para que se Propios parecen justificadas. De ahí la continua presión sobre enderece -aunque muy levemente- la situación mediante el los mismos, dirigida a conseguir la mayor detracción de fon­ recurso sistemático a los Repartimientos Vecinales, que desde dos posible con destino a las arcas del Tesoro. el año en cuestión se convierten en la principal fuente de ingre­ El cambio de tendencia se opera a partir de unos años par­ sos, y una mayor vigilancia de los gastos. ticularmente dramáticos, los comprendidos entre 1790 y 1815, En segundo lugar llama la atención el importante nivel que corresponden a la fase álgida de la crisis del Antiguo Régi­ alcanzado por los débitos a lo largo de todo el período. Débi­ men. Durante dicho lapso de tiempo se sumaron los fuertes tos que unas veces son a favor del Ayuntamiento ("atrasos de desembolsos destinados a hacer frente a las sucesivas calami­ primeros y segundos contribuyentes", alcances de los arrenda­ dades que afligieron Albacete a un incremento extraordinario tarios) pero otras en su contra (salarios impagados, facturas de de la presión fiscal, mientras que los ingresos descendían en las obras realizadas, contribuciones atrasadas, etc). Las apa­ términos reales, tal como aparece en el Cuadro 111. Esta situa­ rentes fluctuaciones de la suma que representan no se debe a ción trunca la política de saneamiento de la Hacienda -pago un descenso de la misma sino al mayor o menor rigor contable progresivo de los capitales de censo- y, sobre todo, hace des­ con que se verificaban las cuentas. De ahí que salga a relucir cender drásticamente los fondos destinados a lo que hemos en toda su cuantía en cada nueva reforma, como sucede en denominado "gastos sociales". Los salarios no suben pese a la 1760, 1796, 1808, 1818 ó 1836.. Un buen indicador al respec­ fase alcista que atravesaban los precios, los desperfectos de los to lo constituye la creciente elevación del Cargo y la Data, den­ inmuebles no se reparan, la asistencia a pobres y enfermos se tro de los cuales figuran, aparte de los débitos acumulados reduce a un nivel mínimo, etc. Es preciso señalar, llegados a determinadas partidas que aparecen en ambos apartados bajo este punto, que para el bienestar de una población concreta no el eufemismo de "entrada por salida". De ahí que para seguir sólo cuenta el tamaño del sector público -representado a esca- la evolución de las cuentas resulten más rigurosos los totales 43 de ingresos y gastos que los reiteradamente citados Cargo y contra el proyecto inicial del Real Canal. Sin embargo, a medi­ Data, en gran medida artificiales. da que nos aproximamos a las décadas finales del siglo XVIII No quisiera terminar sin destacar la importancia de las resulta evidente que las inquietudes de los oligarcas están cam­ fuentes utilizadas para un mejor conocimiento de la pugna biando de signo: lo que ahora les preocupa es una redefinición entre la oligarquía local y la Monarquía borbónica. La persis­ de los derechos de propiedad que elimine toda ambigüedad y tencia de abusos (manejos en el precio de las Dehesas, Qculta­ les permita disfrutar libremente de sus tierras y sus pastos sin ción de las partidas de gastos, arrendamiento de las rentqs más la hipoteca de las prácticas colectivas, amén de un libre acce­ productivas de los Propios a familiares o a clientes, etc.) justi­ so a los Baldíos cuya enajenación por el Municipio era cosa de fica la política reformista de los funcionarios ilustrados, políti• fechas. Si a todo ello añadimos el indudable avance de la agri­ ca muy contestada por los miembros del colectivo alega1ndo el cultura sobre la ganadería se explica muy bien el viraje en lo punto más criticable de la misma: el creciente peso fiscal. El que concierne al mencionado Canal y, sobre todo, el apoyo enfrentamiento conoció su punto álgido con el tema Ide las progresivo a la causa liberal: la conducta del conde de Pino dehesas y, sobre todo, al producirse una actitud de oposición Hermoso constituye un buen ejemplo de la evolución descrita.

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BIIBLIOGRAFÍA

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COMUNICACIONES

DATOS PARA LA HISTORIA DE LA HISTORIOGRAFÍA DE ALBACETE (1636-1967)

I Francisco FUSTER RUIZ

La celebración del JI Congreso de Historia de Albacete es conservados en dos centros, pero no es una bibliografía gene­ una excelente excusa para reflexionar sobre el aumento que ha ral temática de la provincia. Otro serio intento fue el empren­ tenido la Bibliografía de la Historia de la provincia de Albace­ dido por el gran bibliógrafo don José Alfonso Tarragó Pleyán, te en las tres últimas décadas del siglo XX. Creemos qu:e esta cuando fue delegado de Información y Turismo en Albacete, fecunda etapa investigadora empieza precisamente en ·1967, organizando una exposición bibliográfica manchega en Barce­ porque esta es la fecha en la que se inicia también la rec·opila­ lona, con un catálogo muy interesante, aunque pobre, por ser ción y organización científica de los principales archivos alba­ una mínima selección: LIBROS manchegos (selección). Expo­ cetenses. Principalmente el Archivo Histórico Provincial que, sición bibliográfica de La Mancha presentada en la Biblioteca aunque creado en 1931, se mantenía totalmente inoperante de Cataluña. (Albacete, Gráficas Panadero, 1974,20 h.)." como institución, conservando tan sólo algunos pocos fondos "En donde la depuración de las fuentes tiene que ser más documentales que ocupaban una estantería del depósito de la rigurosa es en lo relativo a la historia de Albacete. Desgracia­ Biblioteca Pública. Con la rehabilitación del Archivo Histórico damente hasta ahora el tema se ha venido tratando de un modo y la recogida en él de multitud de fuentes documentalesI de harto ligero, por aficionados y eruditos locales poco escrupulo­ toda la provincia se propició también la llegada paulatjna de sos a la hora de utilización de las fuentes. Así, la historiografía los investigadores de la Historia de Albacete, que anteriormen­ de la provincia de Albacete es totalmente desastrosa. Los pri­ te ni siquiera sabían de la existencia real del centro y que final­ meros libros que se escribieron sobre historia provincial, a fina­ mente formaron un gran equipo, fundamental para el luturo les del siglo XIX y principios del XX (Blanch e lIla, Amador conocimiento científico de la provincia. Creemos que está bien de los Ríos, Roa Erostarbe, Sánchez Torres...), estaban basados clara la relación causa-efecto: la labor archivística propició de casi todos en escritores antiguos poco fiables, como Espinalt y inmediato el nacimiento de la investigación. García, el P. La Caballería, el bachiller Alonso de Requena, el El panorama de la historia local anterior a esta fecha era P. Pérez Pareja, etc. Los errores e interpretaciones gratuitas, las extremadamente pobre, en cantidad y en calidad. Creo qlle está noticias carentes de rigor histórico, se fueron transmitiendo de suficientemente explicado en los comentarios sobre fuentes y un libro a otro, porque cada escritor posterior, en vez de enfren­ bibliografía de Albacete que, unos años más tarde, ha~íamos tarse directamente con la historia buceando en los archivos, en la introducción de un libro general sobre la provincia: 1 tomaba la cómoda postura de aceptar como artículo de fe cuan­ "Antes de comenzar cualquier estudio sobre la provihcia de to aparecía en los libros anteriores. Y este cúmulo de dispara­ Albacete el principal problema que se plantea es la pobreza de tes historiográficos ha llegado también a nuestros días por algu­ su bibliografía. Los libros que se han escrito sobre nuestra pro­ nos eruditos locales que se han atrevido a escribir y publicar, vincia son lTIUY pocos, y muchos de ellos fio debieran haber sin la más mínima preparación historiográfica, las historias de sido publicados, ya que por su falta de documentación y rigor algunos pueblos de la provincia, transmitiendo también nu­ científico lo que hacen es llevar al error a cualquiera que los merosos errores de la bibliografía no científica del pasado y utilice. En general, la bibliografía de Albacete, salva algunas otros exclusivamente de su propia cosecha." honrosas excepciones anteriores, empieza a tener entidad de "Por otro lado, la verdadera historiografía científica de unos diez años a esta parte, y no toda ella está editada 'en for­ Albacete estaba desperdigada en algunos libros o artículos ple­ ma de libro, sino también en periódicos y revistas. La falta de namente fiables, referidos casi siempre a temas generales de difusión de esta bibliografía reciente de Albacete -casi toda ella .. toda España, y en algunas monografías concretas referidas a publicada por sus propios autores y sin la distribución ¡comer­ cualquier aspecto de la provincia de Albacete. Principalmente cial adecuada- es otro de los inconvenientes que se plantean a en diferentes guías de archivos y colecciones documentales y la hora de hacer un estudio sobre la provincia. Pero no hay que en otras obras de interpretación histórica, que demuestran una olvidar que la bibliografía es tan sólo una fuente secundflrla del suficiente documentación y rigor científico. Lo difícil era la conocimiento científico. Todo investigador serio tiene que ir en búsqueda y selección de todas estas noticias históricas desper­ busca de las fuentes de conocimiento que correspond,an, por digadas para ir componiendo, como las piezas de un mosaico, difícil que sea su búsqueda. y cuando se carece de la biblio­ un todo coherente. A estos libros de temas generales se une, grafía necesaria es preciso acudir a los archivos, donde se últimamente, una serie de monografías históricas sobre la pro­ encuentra la documentación, fuente primaria y fundamental vincia de Albacete, escritas por un puñado de especialistas para toda investigación que se precie de científica." I (agrupados en torno a la revista Al-Basit y al Instituto de Estu­ "No sólo existe pobreza de bibliografía en Albacete, sino dios Albacetenses), que se han empezado a tomar en serio la que también hay una escasez de estudios bibliográficos. Hasta historiografía de la provincia." ahora el único intento en este sentido es el de Fuster Ruiz, A pesar del tono negativo que expresaba en mi libro, escri­ Francisco: Fondos bibliográficos albacetenses. Colección de to en 1978, sobre muchos de los libros y artículos de temas his­ impresos albacetenses conservados en los archivos Histórico tóricos de la provincia de Albacete publicados antes de 1967, Provincial y del Ayuntamiento de Albacete, precedida! de una sin embargo el panorama no había sido tan desolador, como historia de la imprenta en esta provincia. (Albacete, Publica­ veremos a continuación. Los trabajos realizados hasta esa fecha

1 ciones del Excmo. Ayuntamiento de Albacete, 1972-73 , XLVI, por los historiadores albacetenses no eran tan pobres, y de 185 p.). Sin embargo, este es un libro bibliográfico incomple­ muchísimos de ellos podían, y pueden aún, extraerse datos to, como su título indica, ya que se trata tan sólo de los libros aprovechables, siempre que en cada caso particular sean some-

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I Francisco FUSTER RUIZ: Aspectos históricos, artísticos, sociales y económicos de la provincia de Albacete. Valencia, Caja de Ahorros de Valencia, 1978. 48 tidos a la necesaria crítica historiográfica. Por otro lado, la lista asequible. Su especialidad era la Mística Teológica. Dejó escri­ no es tan corta. La que aquí daremos ahora, por orden cronoló• tos unos Papeles sobre la vida y virtudes de sor María de Jesús, gico, es sólo una aproximación a los historiadores que ha teni­ natural de Villarrobledo, que sirvieron de bibliografía para escri­ do Albacete desde 1636 a 1967, sin ánimo de agotar el tema. bir otro libro más extenso al párroco BIas Franco Femández.4 Pero ni que decir tiene que esta lista tan larga parece ahora casi Bias FRANCO FERNÁNDEZ, (Moratalla, Murcia, hacia insignificante, si la comparamos con el verdadero boom que ha 1618-1678), durante mucho tiempo fue cura párroco de tenido la investigación histórica en la provincia en los últimos Villarrobledo y publicó: Vida de la Venerable sierva de Dios 34 años del siglo XX, gracias a la organización de los archivos María de Iesvs, natural de Villa-Robledo, de la Tercera Orden locales y a la creación de la revista Al-Basit y del Instituto de del Seráfico Padre S. Francisco... Trátanse los pvntos más Estudios Albacetenses. Pero esta es otra parte, brillantísima, de dificvltosos de la Mística Teología, y camino de vnirse las la Historia de la Historiografía Albacetense que habrá que almas con Dios (Madrid, loseph Femández de Buendía, 1675, comentar más cumplidamente en otra ocasión y quizás por 2 Vals.). Este libro se le encargó por el arzobispo de Toledo, otros investigadores más preparados que yo para el tema. para hacer la información prescrita sobre la vida y milagros de la beata roblense en el proceso de su beatificación. En el mis­ *** mo se daban también noticias interesantes sobre la historia de Al parecer el primer historiador que han tenido los territorios Villarrobledo, que fueron aprovechadas por historiadores pos­ de la actual provincia de Albacete fue Fray Cristóbal GRANA­ teriores de esta ciudad, como el Padre La Caballería y Agustín DOS DE LOS RÍos, que parece que era natural de Villarrubia Sandoval. Del libro se conservan ejemplares en la Biblioteca de los Ojos (Ciudad Real) y hacia 1621 era fraile del Convento Pública de Logroño y en la Nacional de Madrid.5 de Padres Trinitarios Calzados de Fuensanta. Después, el "padre Fray Francisco GARCÍA SUÁREZ, religioso francisca­ maestro Fray Christoval Granados" fue "predicador mayor del no de la Orden de Menores descalzos, posiblemente natural de Real Convento de la Santissima Trinidad, Redempción de capti­ Yeste, y morador por muchos años en el convento de San Die­ vos y Calificador del Santo Oficio de la Inquisición". Uno de sus go, de Murcia, donde falleció el 3 de octubre de 1697. Fue libros tiene interés para la provincia de Albacete: Historia de autor, entre otras, de las siguientes obras: Vida del fltmo. Sr. D. Nuestra Señora de los Remedios de La Fuensanta (Toledo, 1636, Fr. Martín Pérez de Ayala, arzobispo de Valencia; y Grandezas edición documentada por Nicolás Antonio y Cristóbal Pérez Pas­ y antigüedades de la Villa de Yeste, que no se sabe si llegaron tor; 2a ed. Madrid, por Diego Díaz de la Carrera, 1646; 3a ed., por a imprimirse, aunque lo más lógico es que acabaran manuscri­ el mismo en 1648, 8 h., 269 p., 1 h.).2 tas. Tienen mucho interés para la bibliografía de Albacete, y El Bachiller Alonso de REQUENA ARAGÓN, natural de sería interesante encontrar los manuscritos.6 , es célebre en la historiografía española por un curioso De la misma época y localidad es Pedro TAHUSTE y libro titulado Venida del Apóstol San Pablo a España y predi­ GUERRERO, natural de Yeste, autor de una historia de dicha cación en ella, y como estuvo en Libisosa (oi Lezuza), su fun­ población serrana, que no llegó a imprimirse. Del manuscrito, dación y antigüedad, y martirio de San Vicente y Leto, herma­ del que no se ha encontrada ninguna copia, se tienen noticias a nos, patrones de ella y naturales de Toledo. Escrita por el mediados del siglo XVII, por una mención que hace Lorenzo Bachiller Alonso de Requena, presbítero, natural de la dicha, Vander-Harnmen en la introducción a la Historia de Andújar ilustrador de su patria (Madrid, Imprenta de María Quiñones, de Antonio Terrones.7 1647, 8 h., 233 p.). La segunda parte de la obra está encamina­ José BARNUEVO, natural de Chinchilla, es citado por da a demostrar la antigua supremacía de la Iglesia de Cartage­ Lozano en su Bastitania y Contestania como autor de una na, considerándola como Metropolitana de todas las españolas. Miscelánea sobre antigüedades, seguramente manuscrita. No obstante la gran curiosidad que despierta este libro, y la Fray Esteban PÉREZ PAREJA, fraile franciscano hijo de amenidad de su lectura por el estilo sencillo y natural, hay que alcaraceños, pero nacido en Villanueva de los Infantes a fina­ decir que las fuentes en las que basa sus peregrinas teorías his­ les del siglo XVII, fue morador durante mucho tiempo en el tóricas no merecen gran fe, por estar basadas en falsos cronico­ convento de San Francisco de Murcia, donde ejerció el empleo nes, y por lo tanto este libro entra más bien entre los raros y de Lector de Filosofía, y más tarde en el de Alcaraz. Fue tam­ curiosos que entre los verdaderamente científicos.3 bién definidor de toda su provincia religiosa, examinador sino­ Fray Francisco CASTAÑO, padre franciscano, natural de dal del Obispado de Cuenca y guardián de los conventos fran­ Mota del Cuervo. En el segundo tercio del siglo XVII residió ciscanos de Cuenca y Huete. Cuando en 1732 se embarcó para principalmente en los conventos de Tabarra, Cartagena, Larca y Orán a tomar posesión del convento franciscano de aquella Villarrobledo. Debió morir en este último. En 1657 se le confió plaza, ofreció, si salía con bien de esta empresa, escribir una el cargo de vicecomisario general de Indias y en 1672 fue nom­ Historia de la Virgen de Cortes. Y en 1738, como un exvoto brado predicador general, cargo de gran estimación y no a todos Inás hacia esta Virgen alcaraceña, fue escrito este libro, que

2 Nicolás Antonio (Nicolao Antonio Hispalensi, 1617-1684): Biblioteca hispana vetus y Biblioteca hispana nova; Cristóbal Pérez Pastor, La Imprenta en Toledo. Descripción bibliográfica de las obras bnpresas en la Imperial Ciudad desde 1483 hasta nuestros días. (Madrid, 1887), 213; Palau: Manual del librero hispa­ noamericano; J. Simón Díaz: Bibliografía de la Literatura Hispánica. (NOTA ACLARATORIA DE LA BIBLIOGRAFÍA: Sólo pondré a pié de página los datos resumidos de las fuentes bibliográficas de donde he sacado los datos, en los autores más antiguos. En los autores más modernos tan sólo me he basado en mis propias investigaciones, eludiendo por tanto las citas bibliográficas de mis propios trabajos ya publicados o inéditos.

3 Andrés Baquero Almansa: Hijos ilustres de la provincia de Albacete (Madrid, 1884), 159-161; José Pío Tejera y Rodríguez de Moneada: Biblioteca del Murciano o ensayo de un diccionario biográfico y bibliográfico de la literatura en Murcia (Madrid, 1922), 1, 676; Joaquín Roa y Erostarbe: Crónica de la provincia de Albacete (Albacete, 1891 y 1894), v. 11, 448-453; Palau, Diccionario Enciclopédico Espasa.

4 Pío Tejera, 11, 56.

5 Nicolás Antonio, 1, 229; Padre La Caballería: Vida de la ~ Virgen Sierva de Dios la Madre Agueda de la Natividad (Madrid, 1750), 2 Y58; Roa 11, 502; Agustín Sandoval Mulleras: Historia de mi pueblo. La muy noble y leal ciudad de Villarrobledo (Albacete, 1960), 121-122; Pío Tejera 1, 232-234; J. Simón Díaz: Bibligrafia de la Literatura Hispánica; Palau.

6 Pío Tejera. 1, 247.

7 Baquero Almansa, 208; Pío Tejera 1, 805; Roa, n. 49 tituló de la siguiente manera: Historia de la primera fundación la presidencia de la Junta Directiva del Canal de Albacete, lla­ de Alcaraz; y milagroso Aparecimiento de Nuestra Señora de mado después de María Cristina. Obtuvo el nombramiento de Cortes... (Valencia, por Joseph Thomás Lucas, Impresor del prócer del Reino y fue notable jurisconsulto, político honrado Ilust. Sr. Obispo de Teruel, 1740, 9 h., 428 p.). El libro es una y orador elocuente, como puede verse sobre todo en sus dife­ disparatada mescolanza de sucesos reales tomados de algunos rentes discursos documentados en el Diario de Sesiones de las documentos de los archivos alcaraceños, junto a infinidad de Cortes. Publicó una Exposición sobre el restablecilniento de datos fabulosos que tienen poco de fehacientes, basados prin­ conventos y su reforma (Cádiz, 1812, 32 p.), y una Memoria cipalmente en los falsos Cronicones. No obstante es un l libro Histórica y analítica del Real Canal de la villa de Albacete peregrino y singular, interesantísimo en la bibliografía'de la para hacerlo navegable (Madrid. Imprenta de Sancha, 1830, provincia de Albacete, que tiene, como ya hemos indicado, el 69 p. 62 de apéndices), una especie de memoria administrativa valor etnográfico y folklórico de un exvoto más hacia la Virgen y científica sobre la empresa que dirigía, que lo acredita de his­ de Cortes. El autor murió en el convento de su ciudad en 11748. toriador y hombre de ciencia. Por esta obra merece, por lo El libro, ha sido reeditado en 1997 por el Instituto de Estudios menos, figurar con todos los honores en la bibliografía albace­ Albacetenses, con estudio de José Sánchez Ferrer.8 tense. 12 Francisco de la CAVALLERIA y PORTILLO (Villarro­ José RODRÍGUEZ CARCELÉN, regidor perpetuo del

bledo, s. XVIII), jesuita, maestro de Teología Mística I en el Ayuntamiento de Hellín y propietario de numerosas tierras de Colegio Máximo de Alcalá. Se le conocen dos obras: Historia regadío en su término y en otros municipios, era miembro de la Muy Noble, y Leal Villa de Villarrobledo en la provincia correspondiente de la Real Academia de la Historia. Su mujer, de la Mancha Alta, en el Reyno de Toledo, con algunos elogios Vicenta Zanoni, hija del italiano Conde de Zanoni, poseía en y vidas de sus varones ilustres (Madrid, en la oficina de la Viu­ Valencia una buena fortuna personal. Escribió numerosos ar­ da de Manuel Fernández, 1751, 10 h., 313 p., 3 h.), obra que fue tículos sobre geografía de localidades de Albacete, Murcia y elogiada por los críticos de la época. Y también Vida de la .~ Vir­ Valencia para el Diccionario geográfico-estadístico de España gen Sierva de Dios la Madre Agueda de la Natividad (Madrid, y Portugal de Sebastián Miñano (Madrid, 1826-1829), que le 1750), relativa a la fundación de la comunidad religiosa de Car­ fueron publicados, con el reiterado agradecimiento del autor melitas. Sus obras han servido de base a historiadores locales de la obra general, en el tomo XI, Apéndice. Formó parte de la posteriores y la primera reeditada en 1987 por el Instiwto de "Sociedad de Literatos" que publicó una obra más importante Estudios Albacetenses, con estudio de Aurelio Pretel.9 que la anterior, el Diccionario Geográfico Universal (Barcelo­ Fray José Miguel UCLAUS,lO posiblemente natural de na, 1830-1834, en X tomos). Pascual Madoz, en la traducción Peñas de San Pedro, religioso de la Orden de la Santísima Tri­ y adición de la obra de Moreau de Jonnes, Estadística de Espa­ nidad, escribió una obra titulada Epítome historial de ,la SS. ña (Barcelona, 1835), agradece especialmente la colaboración Cruz que se venera en la ermita del castillo de la villa 'de las del historiador hellinero para la actualización de los datos de Peñas de San Pedro, Obispado de Cartagena (Madrid, por Joa­ esta obra. 13 chin Ibarra, 1767,450 p., 2 h., 1 Lam., con escudo). Nhrra la Carlos María PERIER (Hellín 1822-1893), fue uno de historia de esta cruz, su culto y sus milagros, y parece .que la los primeros en estudiar los yacimientos arqueológicos del tér­ compuso por encargo de la villa, sobre la base de unos papeles mino municipal de su ciudad natal, con el artículo "Antigüe• antiguos. Al imprimirse el libro, el autor residía en el conven­ dades de Hellín ", que publicó en el Boletín Oficial de la Pro­ to del Rosario de Fuensanta.ll vincia de Albacete del 24 de marzo de 1862. Excepto esta El Padre Fray Francisco RUIZ, prior del Convento de pequeña colaboración a la historia provincial, el resto de su Padres Trinitarios de Fuensanta a principios del siglo XIX, producción intelectual abarca temas mucho más amplios y publicó un Compendio histórico de la maravillosa ap~rición generales. De conocimientos enciclopédicos, realizó estudios de la devotísima Imagen de Nuestra Señora que con el título universitarios de Derecho, Matemáticas, Astronomía, Minera­ del Remedio de Fuensanta se venera en el Convento, que en la logía, Zoología, Historia, Economía, Política y Lenguas clási­ Villa del mismo nombre en el Obispado de Cuenca tienen los cas y modernas, aprobando todo con las máximas calificacio­ Religiosos Trinitarios Calzados. Dalo a luz el P. Fr. Francisco nes. Fue catedrático universitario, abogado, periodista, funcio­ Ruiz, Ministro de dicho Convento (Valencia, por Joseph Orga, nario público, político, parlamentario y, finalmente, al final de

1798, 188 p., 1 Lam.). I sus días, sacerdote de la Compañía de Jesús. En las Cortes se Antonio CANO-MANUEL RAMÍREZ DE ARELLA­ distinguió por su defensa de ideales tradicionales y católicos. NO (Chinchilla, 1768-1836), ilustre magistrado y político, La base de su pensamiento filosófico-político la cifraba en la abogado en Madrid, alcalde de Casa y Corte y fiscal de la Real familia, a la que consideraba "el elemento cardinal de la socie­ Casa. En la Guerra de la Independencia acompañó al Gobierno dad". Como periodista fue director de La Defensa de la Socie­ a Cádiz, desempeñando el Ministerio de Gracia y ~usticia dad, famosa revista madrileña (1872-1879) en la que colabo­ (1813). Como su hermano Vicente, sufrió persecuciones políti• raron los escritores políticos más famosos de su época. En esta cas durante el reinado de Fernando VII por sus ideas li1?erales, revista publicó Perier más de cien extensos artículos, colabo­ hasta 1820 en que fue elegido diputado, presidente de las Cor­ rando también en otras publicaciones periódicas de toda Espa­ tes de 1821 y presidente del Tribunal Supremo. En 1823, con ña. Su labor literaria más importante la desarrolló a través de la reacción absolutista, se retiró a Chinchilla y en 1830 ocupó la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, desde 1880,

1 8 Pío Tejera, II, 149-150; José Marco Hidalgo: "Cultura intelectual y artística. Estudios para la historia de la ciudad de Alcaraz", en Revista de Archivost Bibliotecas y Museos, Madrid, 1908 y 1909; Baquero Almansa, 141-144.

9 Sandoval, 204-205, Baquero Almansa, 38-40, Roa II 498-9, Palal;!, Espasa.

10 Baquero Almansa, sin ver el libro, lo apellida VELAUS.

11 Baquero, 209; Pío Tejera 1, 817; Roa, II, 375; Muñoz y Romero: ¡Diccionario bibliográfico histórico de los Antiguos Reinos de España.

12 Baquero 50-53, Roa II 339-343, Joaquín Quijada Valdivieso: Albacete en el siglo XX (Albacete, 1925),60-61 YEspasa.

13 El rescate histórico de este intelectual hellinero se debe a investig~ciones bibliográficas de Fernando Rodríguez de la Torre, realizadas en la Biblioteca Nacional de Madrid. Posteriormente, a su solicitud, yo le ayudé eficazmente aportando los datos que sobre él y su familia existían en los protocolos notariales heIlineros del Archivo Histórico Provincial de Albacete. 50 en la que leyó sus más importantes discursos filosóficos y polí• documental se podrían encontrar las primeras fotografías, es ticos, algunos de ellos de temas candentes sociales y de políti• decir, daguerrotipos, que se hicieron en Albacete. Con todas ca internacional. Azorín consideraba a Perier como una de las estas cualidades se supone que, aunque prácticamente no ejer­ máximas glorias literarias de la provincia de Albacete. ció nunca como periodista profesional, sin embargo fuera el Juan de Dios AGUADO Y ALARCÓN, agricultor inte­ alma y el principal colaborador de todos los periódicos que por lectual, preocupado por temas científicos, artísticos, arqueoló• su época se publicaban en Albacete. gicos e históricos, fue el descubridor y primer divulgador del La vinculación periodística más profunda fue con El Liceo, yacimiento ibérico del Cerro de los Santos, de Montealegre del "revista semanal de literatura, artes y ciencias de Albacete". Castillo. Después de analizarlo en 1860, remitió a la Academia Antonio Rentero compartió la dirección de la misma con Santos de Bellas Artes de San Fernando una reseña y algunos dibujos Jorreto Heredia y escribió en casi todos los números una sección de las estatuas ibéricas localizadas, aconsejando la realización titulada "Revista de la semana ", la más periodística de cada inmediata de excavaciones oficiales para impedir el saqueo de número, ya que en ella solía hacer comentarios a la actualidad merodeadores furtivos. La reseña fue enviada posteriormente a política, literaria y social de Albacete y de toda España. El resto la Academia de la Historia, sin hacer caso a sus advertencias. de las páginas del semanario lo componían artículos literarios y Mientras tanto desaparecían las piezas más importantes y científicos, y numerosas poesías, algunas de las cuales eran tam­ arqueólogos aficionados y auténticos desaprensivos ocasiona­ bién del co-director Antonio Rentero. En El Liceo publicó un ban el barullo más impresionante de la Arqueología española. artículo que se haría famoso: "El Cerro de los Santos, Inonu­ El trabajo del intelectual manchego no permaneció totalmente Inento arqueológico ", demostrando sus profundos conocimien­ inédito. Parte de su memoria y sus dibujos fueron reproducidos tos también en esta materia. Le contestó el Padre Carlos Lasal­ en 1863 por Amador de los Ríos en la revista El Arte de Espa­ de, Escolapio de Yecla, con quien mantuvo en aquellas mismas ña. Aguado y Alarcón publicó también en la Revista Histórica páginas una interesante polémica de tipo arqueológico: HCuatro Latina (1875 y 1876) unas breves aclaraciones sobre el Cerro palabras en contestación al señor Lasalde". Fue decano del de los Santos. Colegio de Abogados de Albacete entre 1883 y 1885, en cuya Cumpliendo compromisos editoriales que pretendían abar­ representación asistió al Congreso Jurídico de Madrid de 1886. car las crónicas históricas de todas las provincias españolas, En 1893 levantó su bufete de abogado de nuestra ciudad y se Narciso BLANCH E ILLA se atrevió a escribir desde la dis­ trasladó a Madrid. En el Círculo de l~ Unión Mercantil de aque­ tancia su Crónica de la Provincia de Albacete (Madrid, 1866), lla capital dio una famosa serie de conferencias sobre H Estudios que, a pesar de sus evidentes defectos y lagunas, será muy egipcios, desde los tiempos más relnotos". aprovechada por otras obras posteriores. Es una primera gran Ricardo MATEO-GUERRERO Y GALERA, coman­ aproximación al tema histórico total de la provincia, con los dante graduado, capitán de Infantería, nació en Hellín a princi­ defectos consiguientes a toda obra que utiliza tan sólo medios pios del siglo XIX. Vivía en su ciudad natal desde 1869, reti­ bibliográficos, sin criticarlos adecuadamente, y sin acudir a las rado del servicio por heridas de guerra, después de un año de fuentes documentales conservadas en los archivos. Pero desde campaña. Publicó la obra Proyecto de Ordenanzas de campo y Lérida, y sin que los archivos de Albacete estuviera organiza­ huerta del térlnino nlunicipal de la villa de Hellín, y reseña dos, tampoco se podía hacer más. histórica de dicha villa (Hellín, Tipografía de José María de Antonio RENTERO Y VILLOTA (Albacete, Paredes, 1883). De ella existe un extracto en HLigeros apuntes 1835-1900), abogado, académico y profesor de la Real Aca­ sobre la villa de Hellín", en la revista Macanaz, núm. 6, abril­ demia de Jurisprudencia y Legislación de Madrid, vocal de la junio 1953, pp. 190-214. Es una obra muy interesante en cuan­ Comisión de Reformas de las Constituciones, abogado y to al primer aspecto, el agrícola, pero llena de disparates histo­ teniente fiscal de la Audiencia Territorial de Albacete... El riográficos, como era corriente en la época. También fue autor Gobierno revolucionario de 1868 le separó de la carrera judi­ de algunas semblanzas biográficas de paisanos suyos ilustres, cial, y se dice que después de esto hizo voto solemne de no entre ellas la de su padre, José Rafael Mateo-Guerrero, que al servir más al Estado a través de un cargo público. Así lo cum­ cabo del tiempo fueron publicadas en la revista hellinera plió y en 1869 se estableció en Albacete como abogado. Su Macanaz (1953). bufete fue, desde los primeros momentos, uno de los más soli­ José SABATER y PUJALS, a pesar de sus apellidos tan citados y Antonio Rentero consiguió merecida fama por sus catalanes, era natural de Albacete, donde nació en 1825 y murió notables escritos forenses, sus brillantes informes y su gran en 1894. Sus padres se habían trasladado a .esta ciudad en ple­ elocuencia. Como intelectual enciclopédico, dominaba todas na guerra de la Independencia, en 1810, desde Torlellá (Gero­ las ciencias y las artes. Era también un gran conocedor de idio­ na),14 sin duda buscando un lugar más pacífico para vivir en mas, dominando el inglés, italiano, francés, alemán, portugués, aquellos años azarosos, o quizás atraídos por el empuje vitalis­ latín, griego y árabe. Aunque en Albacete, como es natural y ta que al comercio de Albacete le proporcionaba su entonces mucho menos en aquella época, bien poco podría practicarlos, famosísima Feria. Solterón de buena fortuna (comerciante y sin embargo le sirvieron de mucho para sus lecturas. Tenía una propietario agrícola) y con grandes inquietudes culturales, José espléndida biblioteca, con la que aumentó aún mas sus cono­ Sabater se dedicó a resolver algunas incógnitas del pasado de cimientos enciclopédicos. En el Ateneo Albacetense, en la pri­ Albacete, demostrando su erudición y estilo elegante en nota­ mera época de esta institución, dio numerosas conferencias bles trabajos literarios publicados en diferentes periódicos y sobre asuntos literarios y científicos. Estaba al día en casi todas revistas de Madrid y de otras capitales, así como en los de su las ciencias y las artes. Aficionado a la música, a la pintura, a tierra chica. Principalmente fue colaborador habitual de El la poesía, e incluso a la fotografía, que él aprendió casi inme­ Liceo (1871) de Albacete. Sobre todo es famosa su obrita diatamente que su técnica llegó a la Península. Fue uno de los Memoria de la Feria de Albacete, premiada con la rosa de oro primeros que en Albacete practicaron el nuevo arte. Sería muy del ExcnlO. Ayuntalniento de esta ciudad, en los Juegos Flora­ interesante encontrar, si aún existe, el archivo privado o la les del Ateneo Albacetense, celebrados en 1883 (Albacete, biblioteca de Antonio Rentero y Villota, ya que en este fondo Imprenta de Ruiz, 1883, 69 p. 3 h.). Por todos estos méritos lite-

14 Datos averiguados del Censo de Población de Albacete de 1885. Otras referencias biográficas en el Diccionario del Murciano de José Pío Tejera, y en la Crónica de Albacete de Joaquín Roa, Roa, 11, y bibliográficas en el Palau. 51 rarios fue elegido el 20 de mayo de 1884 miembro correspon­ vincia: Historia de la Provincia de Albacete, Toledo, Editorial diente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Azacanes, 1999), toda la significación y trayectoria que la fra­ Pertenecía también a la Real Academia de Bellas Artes de San se de Amador de los Ríos ha supuesto para Albacete, y cómo, Fernando, y ejerció algunos cargos públicos en Albacete, como finalmente, el esfuerzo de todos nosotros, los historiadores sur­ regidor y teniente de alcalde de su Ayuntamiento. Su labor his­ gidos desde 1967 a la actualidad, ha servido para demostrar tórica sobre la Feria de Albacete es definitiva por lo bien docu­ cumplidamente todo lo contrario: que Albacete sí que tiene mentada, y ha servido de base a cuantos trabajos históricos se Historia, muy rica y muy profunda, y que lo que le faltaba en han intentado posteriormente sobre el mismo asunto. tiempos de Amador de los Ríos era, precisamente Historiogra­ El gran profesor murciano Andrés BAQUERO ALMAN­ fía, aquello que no hacía en absoluto aquel autor aprovechado SA, uno de los fundadores de la Universidad de Murcia, qui­ y desaprensivo, que escribía un libro de tema histórico sin áni­ zás por aquella idea regionalista del "Murcia dos: Murcia y mo de investigar lo más mínimo. Albacete", concibió una de las mayores empresas histori'ográ­ Antonio José GONZALEZ, cura párroco de Montealegre ficas sobre nuestra provincia: el estudio exhaustivo de la bio­ del Castillo por los últimos años del siglo XIX y posterior­ bibliografía de sus gentes desde los tiempos más remotos has­ mente párroco de la iglesia de Santa Catalina de Murcia. Eru­ ta finales del siglo XIX. La investigación fue muy exhaustiva dito, arqueólogo e investigador fue uno de los primeros en y casi definitiva, por lo bien hecha. Así surgió la monumental hacer excavaciones en el Cerro de los Santos y en el Llano de obra Hijos ilustres de Albacete. Prólogo del Sr. Marqu1és de la Consolación. También fue el culpable de la falsa teoría que Molíns (Madrid, A. Pérez Dubruell, 1884, XVII, 1 h., 250 p., 1 atribuye naturaleza montealegrina al famoso pintor murciano h.). Todos cuantos continuamos con la empresa de rescatar del Pedro Orrente. Publicó unos apuntes históricos sobre Montea­ olvido a multitud de personajes de la provincia de Albacete, de legre, en el libro de Roa Erostarbe Crónica de Albacete, (Alba­ "resucitar Lázaros" ya muertos y olvidados por los añosl y los cete, 1894, tomo 11, pp. 189-193) Yuna serie de artículos sobre siglos, siempre tendremos que acudir, inevitablemente, a la los yacimientos arqueológicos de , en gran obra investigadora de Baquero Almansa, lo mismo :que a La Enseñanza Católica, periódico murciano de 1890. 15 su sucesor en el empeño para todo el Reino de Murcia~ José Joaquín ROA Y EROSTARBE (Madrid, 1863), vivió en Pío TEJERA Y RODRÍGUEZ DE MONCADA, Biblioteca Albacete desde 1885, llegando a ser secretario del Ayun­ del Murciano o ensayo de un diccionario biográfico y biblio­ tamiento y Cronista Oficial de la provincia. Aparte de otras gráfico de la literatura en Murcia (Madrid, 1922). obras de carácter nacional, el libro de su vida fue Crónica de A finales del siglo XIX un escritor entonces muy famoso la provincia de Albacete. Con una carta-prólogo de Rafael

I en España, Rodrigo AMADOR DE LOS RIOS y FERNAN- Serrano Alcázar (Albacete, Imprenta J. Collado, 2 v., 1891 Y DEZ-VILLALTA escribió, también por encargo ed~torial 1894). Es una obra fundamental en la bibliografía albacetense, como Blanch e Illa, un libro desde la distancia, con sólo biblio­ a pesar de sus muchos errores en la parte histórica antigua, que grafía y sin acercarse a las fuentes archivísticas de la provin­ recoge de otras fuentes también poco escrupulosas. Sin embar­ cia: España: sus monumentos y artes. Su naturaleza e historia. go, se muestra más documentado en 10 referente a su siglo, el Murcia y Albacete (Barcelona, Ed. Daniel Cortezo, 1889). En XIX, y, sobre todo, en los aspectos geográficos, económicos y el mismo, aparte de los lugares comunes que sacaba d¿ otros sociales. Es por ello que su libro constituye verdaderamente un libros anteriores, escribió y publicó una frase desafortunada y hito en la historiografía de la provincia y por lo que su autor sumamente menospreciadora para la capital de la provincia: consiguió merecidamente el título de Cronista Oficial de ella. que "la ciudad de Albacete no tiene historia", que "carece de Elías NAVARRO Y SABATER (Albacete, 1829), fue genealogía y de abolengo", que era un "lugar fronterito, de médico, inspector sanitario de la provincia y recibió el premio nombre oscuro y sin historia propia y verdadera". Quizás esta de la Cruz de Epidemias por su abnegada labor en aquellos frase significó más para Albacete que el libro en sí mismo, que años tan difíciles para la Sanidad. Publicó los siguientes libros: en realidad era muy pobre desde el punto de vista cieijtífico. Memoria que por encargo de la dirección de Beneficencia y Ocasionó una reacción positiva en vez de negativa para la capi­ Sanidad presenta a la misma el subdelegado de Medicina y tal de la provincia, que evidencia claramente la nueva m~ntali­ Cirugía del distrito de Albacete sobre los trabajos de sa­ dad ciudadana, sobre todo la de una élite liberal y burguesa que neamiento y demás extrelnos que interesan, con motivo de la no quería saber nada del pasado y sí, mucho, del futuro. La éli­ epidemia colérica que en 1890 se padeció en cl pueblo de te intelectual, económica y política de Albacete no recibió esta Pozo-Cañada (Albacete, Imprenta de Luciano Ruiz, 1892, 23 frase como despectiva, como un insulto, sino como un halago, p.) YApuntes para la topografía Médica de Albacete (Albace­ como un reconocimiento a sus propios esfuerzos humanos, ya te, Imprenta de Luciano Ruiz, 1893,75 p.).16 que, sin ayuda de nadie, ni siquiera de los albacetenses del Jesús CARRASCOSA GONZÁLEZ (Alcaraz, 1868­ pasado, estaba transformando vertiginosamente la ciuda~l. Una 1947), maestro nacional, licenciado en Filosofía y Letras y población dinámica y activa que no se entretenía en mirar abogado. El amor a su patria chica le hizo abandonar el porve­ hacia atrás, que vivía sin el anquilosamiento de la historya, que nir que podía haberle deparado su preparación intelectual en era una auténtica ciudad proyectada hacia el futuro. "Albacete Madrid y decidió regresar a Alcaraz, para dedicarse al estudio no tiene historia, ergo se hace a sí misma". Un espíritu bur­ de su historia y de su arte. Primeramente creó un Colegio de gués, dinálnico, frente al lánguido y estéril aristocratismb, pen­ Segunda Enseñanza en Villarrobledo y más tarde regentó saban, de otras regiones, comarcas y pueblos. Flotaba en todas escuelas nacionales en y, finalmente, en Alcaraz, la las mentes la frase y el pensamiento de Joaquín Costa: ~'Doble meta de sus sueños. Multiplicándose en el trabajo, ejercía en su llave al sepulcro del Cid". tierra la abogacía, regentaba el Colegio de Segunda Enseñanza No vamos a repetir aquí, (ya lo hemos dicho en muchas y la Escuela Graduada, e investigaba incansablemente los ocasiones, y de forma muy elocuente, creemos, en el ~rólogo temas artísticos e históricos alcaraceños. Entre sus méritos de uno de los últimos libros de síntesis histórica sobre Ila pro- puede contarse el haber conseguido que la bellísima plaza

15 Pío Tejera, 11, 352 Y387.

16 Roa, 11, apéndice, 49. 52 mayor de Alcaraz fuera declarada Monumento Nacional. En (Albacete, Imprenta de Eliseo Ruiz), cuando ya su autor había 1946 se le concedió la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio. Su fallecido hacía varios años y el trabajo había perdido también erudición y cultura las demostró en sus enseñanzas pedagógi• gran parte de su actualidad. El diario "Albacete" publicó varias cas y en los numerosos artículos de prensa y libros que publi­ décadas después, en 1944, también por entregas, la obra resu­ có. Aparte de otras obras poéticas y narrativas, publicó Nues­ mida de Sánchez Torres, un estudio clásico e importante de la tra Señora de Cortes, Leyenda histórico-religiosa de la M.N. y historiografía local, aunque, como hemos dicho, malogrado por M.L. Ciudad de Alcaraz (1895), Las torres de la ciudad de falta de metodología y por el uso inadecuado de bibliografía no Alcaraz (Albacete, Imprenta de Enrique Ruiz, 1929) y Na sa de científica, pero que puede ser un ejemplo simbólico de su épo­ Cortes. Opúsculo histórico y tradiciona!. .. (1943, reeditado en ca. El trabajo, sobre todo en su edición más amplia como folle­ 1974). Todas sus obras lo acreditan como poeta, novelista e tín periodístico, es de necesaria consulta en muchos detalles historiador, sacrificando quizás una posible gloria literaria y concretos, para todos cuantos intentamos desentrañar el pasado científica por encerrarse toda la vida en su ciudad natal, vien­ de Albacete. Las dificultades de edición por las que pasó esta do irremediablemente como desaparecían de ella sus antiguos gran obra pueden servir de ejemplo para muchos, personas y timbres de grandeza, para convertirse paulatinamente en casi organismos públicos de Albacete, y rescatar del olvido, ya a ini­ un verdadero desierto. Una decadencia que Jesús Carrascosa cios del siglo XXI, tTIultitud de obras olvidadas. Muchos inves­ quiso evitar, empleando para ello todo su gran vigor intelectual tigadores incansables del pasado de nuestra provincia aún no y humano. hemos tenido la suerte de encontrar el mecenas adecuado para Francisco Javier SÁNCHEZ TORRES (Albacete, 1854­ la publicación total y completa de nuestros libros, que sin duda 1907). Es uno de los clásicos de la historiografía local de Alba­ desaparecerán también dentro de muy poco, como sin duda ha cete. Durante muchos años fue secretario de Gobierno de la sucedido ya, por poner unos cuantos ejemplos muy sangrantes, Audiencia Territorial, destacándose en su cometido por la crea­ con la multitud de fichas y documentos originales o transcritos, ción de la Biblioteca de este Tribunal, hoy abandonada. Fue de Francisco Javier Sánchez Torres, Rafael Mateas y Sotos, miembro de número o correspondiente de diferentes Acade­ Jacobo Serra Martínez, Marciano Picaza, Joaquín Sánchez mias y Corporaciones científicas, literarias y sociales, como la Jiménez, Alberto Mateas ArcángeL.. Matritense de Legislación y Jurisprudencia, la de Bellas Artes Pascual SERRANO GÓMEZ, maestro nacional de Bone­ de San Fernando, de la Comisión de Monumentos de Albace­ te, murió hacia 1914. Fue uno de los descubridores y primeros te, etc. Publicó multitud de artículos de prensa, sobre todo en en hacer excavaciones en la ciudad de Meca y el Llano de la la local, referentes en su mayoría a cuestiones relacionadas con Consolación en Montealegre del Castillo. También fue el des­ la Historia de Albacete. Entre ellos una serie con el título de cubridor y primer estudioso de las pinturas rupestres de Alpe­ "Los nombres de nuestras calles", en la que propugnaba el rae Colaboró con noticias sobre Bonete, en la Crónica de Alba­ cambio de algunos de los que entonces las rotulaban por el de cete de Joaquín Roa y Erostarbe, quien hace referencias en su hijos ilustres o bienhechores de Albacete. Pero su obra más libro a algunos artículos de temas arqueológicos publicados famosa e importante fue "Apuntes para la Historia de Albace­ por Serrano en el periódico murciano El Correo de la Noche. te". Para escribirla tuvo que hacer pacientes estudios en los Su labor arqueológica obtuvo mayor resonancia, incluso inter­ diversos archivos locales, así como costosas investigaciones en nacional, sobre todo a raíz de su artículo "La Plaine de la Con­ los de Simancas y en el Histórico Nacional. Esta metodología solation et la Ville iberique d/Ello" (Bulletín Hispanique, 1, científica se vio malograda, no obstante, por el excesivo uso 1899, pp. 11 a 19, con croquis). Roa y Erostarbe, en su Cróni• que hizo de cierta bibliografía no científica sobre Albacete, lo ca de Albacete, (Apéndice 6, "Palacio de la Excma. Diputación que muchas veces obscurece el brillante resultado historiográ­ y Museo Provincial", tomo 11, 1894), contraponía la pobreza fico. Logró así reunir un inmenso fichero, que ya estaba dis­ del entonces incipiente Museo Arqueológico Provincial con la puesto para ser publicado desde los últimos decenios del siglo colección particular conservada entonces por el humilde maes­ pasado. Pero, falto de ayuda oficial, el autor no pudo acometer tro nacional de Bonete: "Para que se vea que más que el pres­ una empresa editorial tan cuantiosa y permaneció inédito tigio de las corporaciones y de su acción oficial, influye, como durante mucho tiempo. No obstante, con un desinterés cientí• principal factor en esta clase de trabajos, la constancia, hija de fico inigualado, facilitó sus notas inéditas y hasta monografías una afición decidida, aun a riesgo de que con el estímulo pue­ completas a otros autores más afortunados, que las insertaron da despertarse el sentimiento de la envidia, daremos cuenta del en sus publicaciones. Entre ellos Roa y Erostarbe en su Cróni• Museo particular que posee el modesto profesor de primera ca de Albacete (Albacete, 1891 y 1894). Más tarde, los Apun­ enseñanza de Bonete don Pascual Serrano... ¡Lástima es que tes de Sánchez Torres fueron publicados en forma de folletín esa riqueza escondida en un pequeño pueblo, no se ostente en en el periódico Defensor de Albacete, del que se hicieron algu­ la capital de la Provincia para recreo del público y estudio de nos recortables con el título de Apuntes para la historia de los aficionados!" Albacete por F.S. T. (Albacete, Imprenta de Sebastián Ruiz, José MARCO E HIDALGO, registrador de la Propiedad 1898). Hay que destacar la modestia del autor, que se ocultaba de Alcaraz a finales del siglo XIX y principios del XX. Duran­ bajo un criptónimo. Se conservan pocos ejemplares de esta te su estancia en la histórica ciudad de la sierra albaceteña, publicación, quizá uno tan sólo, en la biblioteca especializada donde su trabajo habitual, dada la penuria de la zona y de los del Museo Arqueológico Provincial. tiempos no debía ser muy abundante, se dedicó fervientemen­ Por el año 1902 el Colegio de Abogados de Albacete con­ te al estudio y la investigación de la historia local, principal­ vocó unos Juegos Florales, y entre los varios temas en concur­ mente la que más le interesaba, los siglos XVI YXVII. Revol­ so apareció uno sobre Historia de Albacete. Sánchez Torres se vió y estudió los papeles antiguos de sus archivos, publicando presentó con una recesión sobre sus apuntes, suprimiendo bue­ tres fundamentales trabajos sobre la misma. Su primera obra na parte del texto que se había publicado en el periódico. Ganó fue una Biografía de doña Oliva de Sabuco (Madrid, Librería el premio, considerando además el Jurado que el trabajo era de Antonio Romero, 1900,91 p.). El autor nos dice en el pró• digno de ser impreso y que había que acometerse inmediata­ logo que este trabajo fue presentado a unos Juegos Florales en mente esta empresa. No obstante, las dificultades de publica­ Albacete sin conseguir el premio, a pesar de que era la prime­ ción fueron graves, por el poco interés de los organismos ra vez que se escribía sobre la célebre y supuesta escritora alca­ correspondientes, y el libro tan sólo salió a la luz en 1916 raceña con documentos fidedignos, aunque aún no se habían 53 encontrado los que esclarecerían la verdad sobre su autoría. textos inéditos, antes de que llegue el día, desgraciadamente Marco Hidalgo reproduce algunos documentos sobre el bachi­ siempre suele llegar, en que, una vez fallecido el investigador, ller Miguel Sabuco y sus nueve hijos, deteniéndose, como es su familia arroje los viejos papeles a la basura, si no son los natural, en su hija doña Oliva y en su esposo Acacio de Buedo. mismos autores quienes los destruyen en vida, cansados de Se nota que para escribir este librito tuvo que manejar los dis­ esperar y agotados por el esfuerzo y la frustración. tintos archivos alcaraceños: municipal y eclesiástico, aunque Esta búsqueda que propiciamos de obras de investigadores aún no el notarial, que después sería definitivo en sus f~turas inéditos, podría, por otro lado, ofrecer otros descubrimientos investigaciones; y que leyó todos los numerosos libros que documentales muy valiosos. Y el ejemplo investigador de Mar­ hacían referencias concretas a doña Oliva y sus supuestas co Hidalgo viene como anillo al dedo. Como ya hemos dicho obras. En resumen: es un apresurado pero interesante ttabajo antes, el registrador de la propiedad alcaraceño, para realizar de investigación, que se lee con bastante provecho. todos estos meritorios trabajos de investigación, tuvo que Tres años más tarde de la publicación de aquel primer tra­ revolver todos los polvorientos y en su tiempo desordenados bajo, en julio de 1903, Marco Hidalgo publicó en la Revista de archivos de Alcaraz. Sin duda, dada su personalidad científica Archivos, Bibliotecas y Museos, la más importante del país en y humana, le dejaron en ellos a sus anchas, para que hiciera y investigación histórica, un nuevo trabajo titulado "Doña Oliva deshiciera todo lo que tuviera por conveniente. Es muy posi­ de Sabuco no fue escritora. Estudios para la historia de la ciu­ ble, incluso, que le dejaran que se llevara los legajos a su casa, dad de Alcaraz". En el mismo reproducía tres documentos para que allí, en la comodidad de su despacho, pudiera inves­ encontrados en el Archivo Notarial de Alcaraz, que demostra­ tigar más fácilmente. Hay que tener en cuenta que, mucho más ban cumplidamente que el verdadero autor de la Nueva Filo­ tarde, cuando en mi labor de archivero acudí a Alcaraz a reco­ sofía no era doña Oliva sino su padre, el bachiller Miguel ger los protocolos notariales centenarios, los encontré entre Sabuco y Alvarez, y que éste lo hizo "solo para darle lal honra boñigas en una cuadra, donde los tenía albergados el Distrito y no el provecho ni interés". Así pues, este nuevo estudio del Notarial. Como es natural, un establo, o en el mejor de los paciente investigador alcaraceño era trascendental para desva­ casos cualquier sótano oscuro, no resulta lugar adecuado para necer un mito histórico que durante muchos siglo habí~ con­ la investigación, sobre todo de documentos de los siglos XVI fundido a grandes tratadistas de nuestra historia y nuestra cien­ y XVII, tan difíciles de leer. cia. Desde entonces, la figura singular de doña Oliva Sabuco También es muy posible que, para poder presentar estos de Nantes Barrera ha perdido casi todo su interés histórico, y documentos a expertos fuera de Alcaraz, posiblemente de la gloria por ella acumulada en la historia de la cultura espa­ Madrid, en aquellos tiempos sin posibilidad de fotocopias, en ñola debe pasar íntegra a su padre, el bachiller Miguel Sabuco algunos momentos surgiera la tentación de desencuadernar y y Alvarez, verdadero autor de los libros que atribuyó a ~u hija. separar páginas de los voluminosos protocolos, para llevarlos Unos años más tarde, entre 1908 y 1909, Marco Hidalgo con mayor comodidad. Lo cierto es que en el Archivo Históri• fue publicando por capítulos en la misma Revista de Archivos, co Provincial de Albacete, donde gracias a mi labor como Bibliotecas y Museos, un trabajo más dilatado, su "Cultura archivero se conservan desde 1967 los protocolos notariales de intelectual y artística. Estudios para la historia de la ciudad de Alcaraz, precisamente faltan en los mismos las páginas de dos Alcaraz". En el mismo recoge todos los datos que logró averi­ de los documentos transcritos por Marco Hidalgo que atesti­ guar después de muchos años de investigación sobre distintos guaban que doña Oliva de Sabuco no fue escritora. Si los personajes alcaraceños, escritores y artistas: Pedro ¡Simón arrancó del protocolo original el mismo investigador, sin duda Abril, el bachiller Sabuco y su hija Oliva, el Padre Sebastián hizo, posiblemente sin proponérselo, un flaco servicio a la His­ Izquierdo, Juan de Sotomayor Peralta, Gabriel de Pareja y toria, a Alcaraz y a la provincia de Albacete. También es posi­ Quesada, Pedro de Vandelvira, el Padre Jacinto Pareja yBue­ ble que fueran sustraídos más tarde por algún otro erudito o do, Fray Leonardo del Espíritu Santo, el Padre Marcos c,le Rio­ coleccionista, que, quizás por su inexperiencia paleográfica, ja, José del Corro y Bustamante, Fray Fermín Sánchez ~tese­ dejó en su sitio el documento más importante, el testamento ros, Andrés de Vandelvira, así como de otros varios escritores original de Miguel Sabuco, en el que precisamente se declara y artistas que, aunque no nacidos en ella, vivieron largo tiem­ como autor del libro. Posiblemente los restantes documentos, po en la ciudad de Alcaraz. Sin duda en este anterior trabajo es junto a otros muchos más, estén aún en Madrid, donde marchó en 10 que quedó finalmente su Historia de la ciudad de Alca­ posteriormente a residir el citado investigador, y se conserven raz, libro que tenía en preparación en 1900 y que se anunciaba en alguna ignorada y por 10 tanto inútil biblioteca de sus des­ en las tapas de su primer libro sobre doña Oliva. cendientes. Aunque también es posible que fueran a parar hace No sabemos si esta referida Historia de Alcaraz llegó en ya tiempo a un trapero, vendidos por dos reales, o a un anti­ realidad a escribirse, y quedó para siempre inédita, igual que cuario, vendidos por algunos pocos céntimos más, o al cubo de otros muchos trabajos de investigación sobre temas alb'aceten­ la basura, que es donde en definitiva van a parar todas las cosas ses, que, desgraciadamente, sus autores nunca lograron ver en queridas de una persona cuando ésta se muere. Es el triste des­ letra impresa, quedando inútiles todos sus grandes es~uerzos: tino de la Historia de la provincia de Albacete: ser estafada, horas y horas, días y días, años y años de fecunda y utilísima robada, maltratada, herida, vilipendiada, zarandeada, aún investigación. Es la servidumbre de escribir en una provincia incluso por aquellos mismos que dedicaron toda su vida a como la nuestra, donde a la falta de interés por estos! temas, amarla hasta la locura. siempre se ha unido, aún en nuestros días, la pobreza de Eladio LEÓN CASTRO, médico titular de la villa, publi­ medios económicos de nuestros organismos públicos, ~, prin­ có unos Apuntes históricos y topográfico-médicos de la Villa cipalmente, la carencia de editoriales privadas. Habría que de (Albacete, Imprenta y Librería de Eduardo hacer un censo de investigadores frustrados que ha tenido Miranda, 1901, 93 p.), que han sido estudiados últimamente Albacete, sobre todo a todo lo largo de la historia del siglo XX, por José Manuel Almendros Toledo. (entre ellos me encuentro yo mismo con varias obras aú~ inédi­ Gerardo GONZÁLEZ GARCÍA, natural de Chinchilla. tas) y rescatar y publicar multitud de textos de investigación Párroco de Fuensanta entre 1897 y 1900 Y posteriormente de que aún permanecen inéditos y polvorientos, olvidados en La Roda, publicó el siguiente libro: Ave María Purísima. His­ arcones de cámaras y sótanos, o en cajones de armarios y toria de Nuestra Señora de los Remedios Patrona de La Roda, estanterías en los despachos. Debe hacerse esta búsqueda de venerada en el Ex-Convento de Padres Trinitarios Calzados de 54 la Villa de Fuensanta. Obispado de Cuenca (Cuenca, Impren­ Mayo de 1908 en conmemoración del primer Centenario de ta de José Gómez Medina, 1902, 105 p.). dicha guerra... (Albacete, La Económica, Tip. de El Diario de Rafael MATEaS y SOTOS (Albacete, 1864-1918), Albacete, 1910, 102 p.). Parte de este trabajo había sido publi­ archivero, bibliotecario, historiador, periodista y poeta, es una cado anteriormente en el libro que sobre estos Juegos Florales de las figuras más interesantes de la historiografía de Albace­ publicó la Comisión Provincial de Albacete de la Cruz Roja te. Realizó estudios en la Escuela Diplomática, e ingresó en el Española: "¡Paso a los patriotas! Datos biográficos de hijos de Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólo• la provincia de Albacete que tomaron parte en la Guerra de la gos en 1889. En dicho año fue destinado a dirigir el Archivo de Independencia (Premio tema 4°)" (Albacete, Imprenta de la Hacienda de Albacete, cargo que desempeñó hasta 1920, así viuda de J. Collado, 1909, pp. 79 a 101). como el de archivero del AyuntalTIiento de Albacete. Alguna Pero financiar la edición de sus propios libros era una alergia desconocida, por culpa sin duda del polvo de siglos empresa imposible para sus pobrísimos ingresos económicos, encerrado en los legajos, le provocó un eccema terrible en las a pesar de aumentar lo que recibía como funcionario con el manos, llegándosele a caer incluso las uñas. Así pues, llevó su pluriempleo. Por ello dejó inéditos numerosos trabajos. Algu­ vocación de archivero hasta el sacrificio. Superó este contra­ nos fueron publicados después de su muerte, bajo el cuidado tiempo gracias a su gran espíritu, que no logró alejarle de sus de su hijo Alberto, en revistas especializadas y en forma de inclinaciones investigadoras, pero no obstante no tuvo más libros: "Doculnentos del Archivo Histórico Municipal de Alba­ remedio que pedir un traslado, para ver si de este modo logra­ cete" y "Servicio de hombres, armas y dinero que hizo a sus ba vencer aquella enfermedad. En 1920 obtuvo un destino más Majestades la villa de Albacete en la Guerra de las Conluni­ cómodo: en la Biblioteca Pública de Albacete, donde estaría ya dades. Año MDXXI" (en el Boletín de la Conlisión de Monu­ hasta el resto de su vida. Alejado de la causa de su alergia, se mentos de Albacete, 1928, pp. 18-21 Y 22-34); Paseos por recuperó rápidamente de su terrible dolencia. Albacete en el siglo XVI (Albacete, Imp. del diario Albacete, Rafael Mateas y Sotos fue cronista oficial de la provincia 1950,66 p.); Templo Parroquial de San Juan Bautista de Alba­ de Albacete y miembro correspondiente de varias academias y cete (Noticias relativas a su construcción) (Albacete, Impren­ sociedades científicas, entre ellas la Real Academia de la His­ ta Provincial, 1951, 44 p., lamo Tirada aparte de Anales del toria y la de Buenas Letras de Málaga, así como representante Seminario de Historia y Arqueología de Albacete), "Lafábri­ en nuestra provincia de la asociación de Escritores y Artistas. ca de tejidos de los Franciscanos de Los Llanos" (Feria, sep­ Su vida fue la clásica de un intelectual de principios de siglo: tiembre 1974), "Sobre los verdugos de la Audiencia Territorial la humanidad y la modestia presidieron sus actos. Rico, archi­ de Albacete" (Al-Basit, n° O, agosto 1975, pp. 92-95), "Des­ millonario en ideas y en riqueza intelectual, pero sin poder manes cometidos en Albacete por unos soldados en el año lograr nunca una retribución económica acorde con sus mere­ 1519 (transcripción por. .. )" (Al-Basit, n° 8, julio 1980, pp. cimientos. Para ayudarse un poco tuvo que dedicarse al plu­ 203-207), y, principalmente, la recopilación Monografías de riempleo: además de archivero del Estado 10 era también del Historia de Albacete, (Albacete, Diputación Provincial. municipio y diariamente daba clases en el acreditado Colegio 1974-1977,359 p., il.). Este volumen, que podría haber sido el de don Isidro GÓmez. Como escritor colaboró asiduamente primero de sus obras completas, cuyo prólogo y cuidado de la con poemas y artículos en la prensa local, divulgando en los edición me fue encomendado por el entonces presidente de la medios provinciales los temas históricos de Albacete. No fue Diputación Antonio Gómez Picaza, contenía algunos de las tan sólo un mero colaborador de prensa, sino que ejerció obras publicadas anteriormente, así como otras dos que per­ ampliamente el periodismo activo, sobre todo en la primera manecían inéditas: "Juntas en el Marquesado de Villena" y etapa de su vida, cuando aun no se habían truncado por el des­ "Albacete bajo el señorío de la reina Isabel, esposa de Carlos engaño del tiempo sus ideales juveniles de batalla. En la pren­ 1(1526-1539)". sa, casi siempre, ocultaba su firma bajo seudónimos humildes, Aparte de todo ello, Rafael Mateas que, como hemos vis­ como "E. Tomás" (anagrama de Mateas) y "Un exclaustrado" to, no pudo ver publicadas la mayor parte de sus obras en vida, (curioso este seudónimo en una persona plenamente anticleri­ tiene aún una gran producción desconocida y olvidada: sus cal como era él en su juventud). En los periódicos publicaba innumerables artículos, desperdigados en lTIultitud de periódi• poemas, artículos literarios y de actualidad y, sobre todo, ensa­ cos ya imposibles de encontrar. Sería interesante hacer una yos de divulgación histórica, con una sección habitual titulada labor de búsqueda en la prensa antigua albacetense, para ir Del tiempo de Maricastaña. En este sentido fue un gran popu­ recopilando toda esta producción y hacer un segundo volumen larizador de la historia de Albacete, y sus investigaciones fue­ con el cual se terminaran las Obras Completas de Rafael Mate­ ron aprovechadas, unas veces con su permiso y otras no, por as. Esto sí que sería honrar definitivamente su memoria. 1? otros muchos historiadores que tuvieron la suerte de publicar Joaquín QUIJADA VALDIVIESO (Albacete, 1869­ en forma de libro. 1947) fue, además de periodista, abogado, secretario del Ayun­ Por modestia económica (no podía convertirse en editor de tamiento de Albacete, escritor de temas generales y cronista sus propias obras como hacían otros muchos) y por incompren­ local. Su pluma estuvo siempre al servicio de las causas nobles sión de quienes en aquellos tiempos tenían que haber editado y principalmente de los intereses de Albacete. Toda su labor sus libros, dejó inéditos numerosos trabajos, que fueron publi­ como abogado, como periodista, como escritor y como funcio­ cados posteriormente, gracias al tesón puesto en esta empresa nario público estuvo ligada muy directamente a la época en que por su hijo Alberto Mateas Arcángel. Publicó en vida Un filán­ nuestra ciudad alcanzó su más rápido progreso, del cual fue tropo albacetense. 36.000 pesos legados por el capitán Berna­ uno de sus más poderosos artífices. Hizo la carrera de Derecho bé de Cantos, cuyo testamento con otros documentos inéditos, en las Universidades de Oviedo y Valencia, siendo discípulo de sácalos a la luz un pobre archivero (Albacete, Establecimiento Melquíades Alvarez. Como periodista empezó en el semanario Tipográfico La Económica, 1908, 62 p., 2 h.); La provincia de La Porra, de 1889, continuando después en el diario de infor­ Albacete en la guerra de la Independencia. Trabajos premiados mación La Provincia, de 1892, publicaciones que dirigía José en los Juegos florales celebrados en esta Capital el día 2 de Cuartero Cifuentes. Después de estos periódicos de su juventud

17 Eduardo Quijada Pérez: prólogo al libro Paseos por Albacete en el siglo XVI; Agustín Ruiz Cabriada: Biobibliografía del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos. 1858-1958 (Madrid, 1958, p. 594); F. Del Campo Aguilar: Albacete contemporáneo (Albacete, 1958, p. 270); Palau. 55 siguió colaborando asiduamente en la prensa local, con algunas Abelardo MERINO ALVAREZ publicó una obra monu­ pocas salidas a periódicos de otras provincias. Sobre todoescri­ mental que, en gran parte, se refiere también a territorios de la bió en El Diario de Albacete, en el que solían aparecer muchos provincia de Albacete, aunque su título es el siguiente: Geo­ artículos y editoriales suyos, bastantes de ellos sin firma. Algu­ grafía histórica del territorio de la actual provincia de Murcia nos demoledores, como digno discípulo de José Cuartero. Por desde la reconquista por D. Jaime 1 de Aragón hasta la época ejemplo, aquel que hizo saltar de su puesto a un gobernador presente. (Madrid, Imprenta del Patronato de Huérfanos de civil que se hahía quedado con los beneficios del juego en Intendencia e Intervención Militares, 1915, 516 p.). La obra Albacete en vez de destinarlos a la beneficencia local. Abando­ fue laureada por la Real Sociedad Geográfica en el concurso de nó pronto su carrera como abogado pafa dedicar su vida a la 1914 con el premio instituido por el Marqués de Aleda. En la función pública. En 1900 fue nombrado secretario del Ayun­ reedición que se ha hecho últimamente de esta obra (Murcia, tamiento de Albacete, cargo en el que estuvo durante 29 años, Academia Alfonso X el Sabio, 1978), se dice que es "un texto hasta su jubilación. Como escritor, Joaquín Quijada obtuvo clásico de la historiografía murciana" (y añadimos, de Albace­ destacados triunfos en diversos Juegos Florales, y publicó te), y que "su interés, pasados más de sesenta años, sigue sien­ libros y folletos, muchos de ellos editados por el Ayuntamien­ do incalculable, por el carácter global en torno a la provincia to sobre asuntos municipales, y que aparecían sin la firIPa del de su enfoque, por la gran profusión de datos, por el rigor en autor. A través de 29 años de secretaría, ¿cuántos reglamentos, el manejo de las fuentes y, sobre todo, por la objetividad y pre­ memorias, informes, etc., no fueron escritos por él, sin que su cisión con que son tratados los hechos históricos estudiados..." modestia le permitiera poner, al final de ellos, su fmna? Entre Julián ZUAZO y PALACIOS (Madrid, 1884-1946), abo­ sus publicaciones destaca una biografía de su suegro, ellilustre gado madrileño, vivió gran parte de su vida en Montealegre del abogado y poeta murciano-albacetense Rafael Serrano Alcázar. Castillo, donde poseía grandes fincas en las que estaban encla­ También hay que destacar el Expediente General de Apeo, des­ vadas los yacimientos ibéricos más importantes de la España linde y amojonamiento de las tierras comprendidas dentro de de su tiempo, el Cerro de los Santos y el Llano de la Consola­ la demarcación noval, con un prólogo sobre la Historia del ción. El estudio de ellos le hizo aficionarse de tal modo a la Real Canal de desagüe llamado de María Cristina (Albacete, arqueología que abandonó por completo su carrera para dedi­ imprenta de la viuda de 1. Collado, 1906, XVI, 303 p., Imap.). carse de lleno a esta nueva vocación intelectual. Hizo grandes Hacia 1916 fue famosa su réplica a un periódico catalán que exploraciones arqueológicas a sus expensas, muchas veces ofendía a Albacete con motivo de la construcción de la nueva auxiliado por eminentes arqueólogos como Obermaier y Sán­ Plaza de Toros. La pluma de Quijada fue una verdadera lanza chez Jiménez. Fue un verdadero mecenas del Museo Arqueo­ quijotesca contra los errores vertidos, constituyendo uno de los lógico de Albacete, ya que la mayor parte de las piezas descu­ documentos históricos sobre el vitalismo de la que por,enton­ biertas pasaron generosamente a engrosar los fondos del mis­ ces denominaba Azorín la "Nueva York de la Mancha". I mo, con lo que este Museo llegó a ser uno de los más impor­ Su libro más famoso fue Albacete en el siglo XX. (Apuntes tantes de España en cuanto a cultura ibérica. para la historia de esta ciudad) (Albacete, Tip. De Eliseb Ruiz, En 1912 hizo el descubrimiento de tres importantes abrigos 1925, 187 p.), donde recoge con extraordinario acierto muy de pinturas rupestres en el Monte Arabí (Yecla), en la raya interesantes documentos sobre la historia local desde principios divisoria de Montealegre. Fueron estudiados por él mismo y de siglo: un libro clásico para la Historia de Albacete. Lo único los eminentes arqueólogos Henri Breuil y Juan Cabré. En su

I que falla de este libro es el título, que da impresión de historia libro La villa de Montealegre y su Cerro de los Santos total, y de todo el siglo, cuando es tan sólo una serie de retazos (Arqueología e Historia) (Madrid, Imprenta Hijos de Gómez históricos, muy documentados pero incompletos para averiguar Fuentenebro, 1915, 223 p. Y 8 Lam.) Zuazo se quejaba del la vida total de la ciudad en esos 24 años. Lo escribió por abandono de aquellas pinturas rupestres, expuestas a los des­

I encargo de la Corporación Municipal, que pretendía dar conti- manes de curiosos y desaprensivos. Por ello consiguió incluso nuidad a la obra de Francisco Javier Sánchez Torres Apuntes hacerse propietario de los terrenos del monte donde se encon­ para la Historia de Albacete, que llegaba tan sólo hasta finales traban, y realizó inmediatamente las obras necesarias (verjas del siglo XIX. En 1925 la publicación de esta obra de Joaquín de hierro y puertas practicables) para protegerlas adecuada­ Quijada Valdivieso levantó un gran revuelo en Albacete. En mente. Otros libros suyos fueron: Meca (Contribución al estu­ todos los periódicos locales aparecieron críticas elogiosas, cali­ dio de las ciudades ibéricas). Noticia de algunos descubri­ ficando la obra como un gran acontecimiento, importantísimo nlientos arqueológicos en Montealegre (Albacete) (Madrid, para el resurgir cultural y económico de la ciudad. Desde el Imp. Hijos de Gómez Fuentenebro, 1916, 97 p. con Grab. y semanario El Duende y por una pluma tan equilibrada como la Lám.); Trabajos arqueológicos en Montealegre del Castillo del profesor José María Lozano, se dijo: "En 10 que va de siglo, (Albacete). Asociación Española para el progreso de las Cien­ este es el acontecimiento bibliográfico más grande y trascen­ cias. Congreso de Sevilla, sesión del 9 de mayo de 1916 dental de nuestra ciudad, cuyo nombre se exalta por ello con (Madrid, Imp. de Eduardo Arias, 1920); Bibliografía ibérica. caracteres insuperables de cultura y de buen gusto..."Y más tar­ Sureste de España. Castellar de Meca. Cerro de los Santos. de: "La obra Albacete en el siglo XX acredita a su brillante Congreso VII (Bilbao) de la Asociación Española para el pro­ autor, don Joaquín Quijada, de hombre experto que maneja la greso de las Ciencias (Madrid, Imp. De Blass y Cía, 1919,52 pluma como sólo los maestros son capaces de moverla! para el p., 9 Lám.); La magia en el arte rupestre. Coleccionismo, numo bien, para la belleza, para la serenidad y la justicia". El 26 de 111 (Madrid, Imp. de Felipe Samarán, 1922)... Aparte de otras octubre de ese mismo año, 1925, el Ayuntamiento acordó ren­ publicaciones de tema filatélico, la otra gran pasión intelectual dir a Joaquín Quijada un merecido homenaje popular'l y se le de su vida, dejó inéditas unas notas interesantísimas, recogidas nombró Hijo Predilecto de la ciudad de Albacete. en sus últimas excavaciones arqueológicas en el Llano de la Antonio GALLEGO CARRETERO, periodista de Tara­ Consolación y en la acrópolis prehistórica del Cegarrón, que zana de la Mancha, en donde dirigió el semanario indepen­ desaparecieron con la incautación de sus fincas durante la gue­ diente El Manchego, (1913 -1914). Publicó algunas obras, rra civil de 1936. entre ellas las biografías de dos personajes albacetenses: El Por sus actividades arqueológicas, Zuazo Palacios fue dis­ Marqués de Molíns. Su vida y sus obras (Albacete, Imprenta tinguido por diferentes instituciones culturales. Fue presidente Comercial, 1912, 68 p.) y Pompeyo Vida l. de la Sociedad Española de Antropología, Etnografía y Prehis- 56 toria; correspondiente de la Real Academia de la Historia y de Director y fundador de algunas revistas profesionales de gran la de Ciencias y Artes Hispanoamericanas de Cádiz; miembro altura científica, como el Boletín de la Comisión Provincial de vitalicio de la Real Sociedad Geográfica y Comisario local de Monumentos Históricos y Artísticos de Albacete (1928-32), Excavaciones Arqueológicas en Montealegre del Castillo, así Anales y Publicaciones del Seminario de Historia y Arqueolo­ como miembro activo de diferentes Congresos y Exposiciones, gía de Albacete (1951-1962). En estas revistas y en otras de donde, como hemos visto, pronunció diversas conferencias. En toda España, divulgó monografías sobre sus campañas arqueo­ suma, fue un enamorado de la arqueología de nuestra provin­ lógicas, que difundió también a través de Congresos nacionales cia, que merece figurar con todos los honores en la Historio­ e internacionales. En forma de libros o folletos publicó La Cruz grafía de Albacete, ya que él se consideraba como un albacete­ de térnüno del Museo de Albacete (1927, La primitiva imagen ño total. Una gran personalidad científica y humana. 18 de Los Llanos, Patrona de Albacete. Estudio histórico-artístico Buenaventura CHUMILLAS LAGUÍA (Villarrobledo, (1944) y Memoria de los trabajos realizados por la Comisaría 1875 - Buenos Aires, 1943), franciscano exclaustrado, sacer­ Provincial de Excavaciones Arqueológicas de Albacete (1943). dote y predicador, fue también poeta, periodista, ensayista y Pedro CASCIARO PARODY (Cartagena, 1889), catedráti­ novelista. En 1902 marchó a Buenos Aires, donde triunfó en co del Instituto de Segunda Enseñanza de Albacete, académico sus aficiones literarias. Escribió Un manchego ilustre. Estudio correspondiente de la Real Academia de la Historia, presidente crítico biográfico del Excmo. Sr. Don Octavio Cuartero y de la Comisión de Monumentos Históricos y Artísticos de Alba­ Cifuentes... (Buenos Aires, Lib. "Las Ciencias", 1917, 93 p.). cete y redactor de su Boletín, donde publicó: "Vulgarización Ejerció el periodismo en América, viniendo como correspon­ histórica. El pueblo ibérico y la ciudad fortificada de Meca" sal de la prensa bonaerense en 1931, cuando la proclamación (núm. 2, septiembre-diciembre 1928, pp. 59-70, y núm. 3, 1930­ de la República Española. 19 31, pp. 20-35, sin concluir por interrumpirse la publicación de la Ernesto MARTÍNEZ TÉBAR (Fuentealbilla, 28 diciem­ revista). Fue también colaborador de la prensa local, sobre todo bre 1899), periodista, secretario de la Cámara Oficial de la Pro­ en Eco del Pueblo (1931) e Instituto (1935-36). piedad Urbana de Albacete, desde que se creó esta institución José ALONSO CORTÉS (Albacete, 1881), abogado, en 1922 hasta 1953, en que pasó a la de Valencia, hasta su jubi­ licenciado en Filosofía y Letras, profesor del Instituto y Archi­ lación en 1974. Ha sido uno de los más ilustres periodistas de vero y Bibliotecario de la Diputación Provincial de Albacete. Albacete, ejerciendo como redactor desde 1919 en el diario Era académico correspondiente de Bellas Artes y secretario de Defensor de Albacete (1919-36), donde llegó a redactor-jefe en la Comisión de Monumentos Históricos y Artísticos de Alba­ 1931. Fue elegido vicepresidente de la Asociación de la Pren­ cete, así como redactor del Boletín de esta entidad. Publicó los sa el 15 de agosto de 1931. Ejerció después de la guerra la pro­ siguientes libros: Las Diputaciones provinciales. Su origen, fesión en los diarios Albacete y La Voz de Albacete, como sub­ constitución, funcionamiento, atribuciones de las nÜSlnas y director, hasta 1953 en que fue trasladado a Valencia. Publicó elección de sus Diputados. Ligeras noticias acerca de la Dipu­ un Estudio crítico-biográfico del ilustre hijo de Albacete Exc­ tación de Albacete y relación de los Diputados de esta provin­ mo. Sr. Don Francisco Fernández y González. Rector que fue cia desde el aíio 1835... (Albacete, Tip. Montesinos hermanos, de la Universidad Central (Albacete, Imprenta "La Minerva", s. a., 61 p.); Catálogo de la Biblioteca Popular de la Excn1a. 1925, 28 p., 1 h.) Y una Crónica general de la provincia de Diputación Provincial de Albacete (Albacete, Imp. de la Dipu­ Albacete, incluida en el Libro de Oro de la Exposición Iberoa­ tación Provincial, 1930, X, 111 p.); Y "La Iglesia Parroquial mericana de Sevilla (1929). En dicha crónica, redactada en de Santa María del Salvador de Chinchilla" (Boletín de la cuanto a Albacete principalmente por él, figuran los siguientes Comisión de Monumentos Históricos y Artísticos de Albacete, epígrafes: "Unos elogios de comienzo; Al correr de la historia; 1, mayo-agosto 1928, pp. 16-17). Descripción geográfica, administrativa y cultural; Otros aspec­ Francisco del CAMPO AGUILAR. (Martas, Jaén, 1899­ tos; El movimiento económico-financiero albacetense; La Albacete, 1965). Vivió su infancia en Ciudad Real. Desde su situación de la agricultura provincial como principal fuente de llegada a Albacete (1915) hasta el mismo día de su muerte no riqueza; Consideraciones sobre la industria y comercio de la faltó nunca a su cita diaria con el periodismo, durante más de provincia; El arte y el turismo; Finalmente..." En este Libro de 50 años, pasando a ser de cronista cotidiano de la realidad ciu­ Oro de la Exposición Iberoamericana de Sevilla, lujosamente dadana a Cronista Oficial de la Ciudad. Su actividad principal editado, de 800 páginas, la parte albacetense viene ilustrada fue en El Diario de Albacete (1916-36), Albacete (1942- 53) y con 9 páginas de 36 x 28, con maravillosas fotografías de La Voz de Albacete (1953-65). Fue también fundador y direc­ Albacete, Chinchilla, Jorquera, Alcalá del Júcar, Ayna, la Cruz tor de Albacete en fiestas (1921- 31) y El Altozano (1945-47). de Término, el cuadro del Greco de El Bonillo (descubierto en Su labor literaria en todas estas publicaciones fue abundante e aquellas fechas por una comisión formada por Casciaro, Pina­ importante, habiendo quedado sólo una parte de ella reunida en za, Belda y Martínez Tébar), , Almansa, muestras forma de libro, entre los cuales aborda la crónica ciudadana e de cuchillería, Alcaraz, y la Dolorosa de Salzillo de Hellín. histórica en los siguientes: Albacete: Guía sentimental (Alba­ Joaquín SÁNCHEZ JIMÉNEZ (Albacete, 1891-1962), cete, Tipografía de El Diario de Albacete, 1922), 1922), Evo­ funcionario de Correos, profesor de Historia del Instituto y, fun­ caciones históricas de la provincia de Albacete (1925), Alba­ damentalmente arqueólogo. Como Comisario Provincial de cete 1935 (Sevilla, 1935, con la colaboración fotográfica de Excavaciones Arqueológicas dirigió, entre otras, las realizadas Jaime Belda y magníficamente publicado, en dicho año, por el en Pozo-Cañada, Hoya de Santa Ana, Llano de la Consolación, editor sevillano Fidel Mesas), Albacete: su feria ((Albacete, Tiriez y Cerro de los Santos, que descubrieron muchos datos Librería Cervantes, 1944), Albacete: sus calles (Albacete, ignorados de la cultura ibérica. Fue también uno de los máxi­ Librería Cervantes, 1945), Tres estampas del Albacete del x/x mos impulsores de la Comisión Provincial de Monumentos (1952), Medallones de la ciudad (Albacete, Imprenta La Voz Históricos y Artísticos y de la creación del Museo Arqueológi• de Albacete, 1955), y Albacete contemporáneo (1925-58) co Provincial, fundado en 1927, que dirigió hasta su muerte. (Albacete, Excmo. Ayuntamiento, 1958). Dejó inéditos otros

18 Sánchez Jiménez: necrología de Zuazo en Boletín Arqueológico del Sudeste Español, 1945; diccionario Espasa.

19 Sandoval, 337-338. 57 libros que el autor decía tener en preparación en 1958: Alba­ Católica Toledana, 1929, 109 p.)~ El Santísimo Cristo de los cete: espuma de la ciudad, Albacete: los mil años del Alto de Milagros de El Bonillo (edición corregida y aumentada con los la Villa (interpretación), Albacete: biografía de la calle Mayor, acontecimientos de la guerra civil) (Toledo, 1942 y Madrid, y Albacete entre dos siglos (evocaciones). Imp. Orbe, 1942, 67 p)~ Impresiones y memorias (Albacete, Francisco NAVAS DEL VALLE (Lebrija, Sevilla, 1878). Talleres Gráficos Diego Fuentes, 1951, 100 p.) y Pensamientos Cursó estudios en la Escuela Superior de Diplomática y alcan­ y producciones (Madrid, Mateos imp., 1954,77 p.). zó el título en 1900. Ingresó por oposición en el Cuerpo Facul­ Joaquín DÍAZ RUEDA (Fuensanta 1897), canónigo de la tativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos en i1904. catedral de Albacete, publicó una Historia de Nuestra señora Durante muchos años fue director de los archivos de Hacien­ de los Remedios de Fuensanta, venerada en el Ex-Convento de da, de la Audiencia Territorial y del Histórico ProvinCIal de PP. Trinitarios calzados de dicha villa (Cuenca, Imprenta Albacete. Antes de la guerra era el jefe en esta provinci& de la Moderna, 1932, 142 p.). Comunión Tradicionalista. Era académico correspondiente de Eduardo QUUADA PÉREZ (Albacete, 1901-1982), abo­ la Nacional de Historia del Ecuador y antes que en Albacete,I gado y periodista. En ambos sentidos, su trayectoria profesio­ su último destino, había prestado servicios en los siguientes nal fue muy brillante: uno de los bufetes más solicitados de la centros: Archivo de Hacienda de Cádiz, Biblioteca Universita­ Audiencia Territorial y valentísimo director de El Diario de ria de Sevilla y Archivo General de Indias de esta misma ciu­ Albacete en épocas cruciales, la etapa más dura e interesante del dad. Era un gran especialista en temas de investigación ameri­ periodismo provincial, 1930-1936, con encontronazos con la cana. Publicó las siguientes obras: España y los indios d~ Amé­ censura en la ultima etapa de la Dictadura de Primo de Rivera rica. Doculnentos para su estudio hastafin del siglo XVI (pre­ y con el combate diario en la II República, donde a la fuerza miada por la Real Academia Sevillana de Buenas Letras) tenía que ser violento, combativo, político, el periodismo que se (Sevilla, Imprenta Sobrino de Izquierdo, 1924, 167 p.)~ Fray hiciera desde un diario monárquico. Supo llevar muy diestra­ Ribera, arzobispo de Méjico~ "Los archivos y bibliotecas de la mente el timón de aquella nave monárquica, aunque muchas provincia de Albacete. Transcripción de documentos del Archi­ veces, en aquel tempestuoso mar republicano, estuvo a punto de vo Histórico Provincialde Albacete: Juramento de losl Reyes naufragar. Y desde su privilegiado puesto al frente de uno de los Católicos a Chinchilla. Ordenanzas de los texedores". En más importantes medios de expresión de Albacete, se convirtió, colaboración con Joaquín Sánchez Jiménez. (Tirada apmte de casi sin proponérselo, en uno de los líderes políticos de la épo­ Anales del Sen1fnario de Historia y Arqueología de Albacete, ca. En agosto de 1932 fue detenido durante dos días en su domi­ 1, 1951. Albacete, Imprenta Provincial, 1951); y, en co'abora­ cilio y su periódico suspendido durante tres meses, por creerlo ción, Colección general de los documentos relativos a las Islas complicado en el alzamiento del general Sanjurjo. En 1935 fue Filipinas existentes en el Archivo de Indias de Sevilla (Barce­ elegido por unanimidad, incluso con los votos de los periodis­ lona, Compañía General de Tabacos de Filipinas, 1918-1930, tas republicanos, presidente de la Asociación de la Prensa de la 9 volúmenes); y Catálogo de los documentos relativos a las provincia de Albacete. Por su actividad profesional fue deteni­ Islas Filipinas... (Barcelona, Compañía General de Tabacos de do el 29 de julio de 1936 por los revolucionarios, viendo muy Filipinas, 1925-1936, 9 volúmenes). de cerca la sombra de la muerte por sus agudas campañas polí• José Salustiano SERNA PÉREZ (José S. Serna) (Alba­ ticas a través del diario. Fue condenado por los Tribunales cete, 1907-1983), fue considerado en vida el "Patriarcd de las Populares a 20 años y un día de prisión, cumpliendo la conde­ Letras Albacetenses", siendo el principal animador de Ila vida na hasta la terminación de la guerra en las cárceles de Albacete literaria local durante el último medio siglo de su historia. Sus y Chinchilla y más tarde en los campos de trabajo de Cehegín dos actividades fueron la profesión de abogado y la vocación y Totana. A la terminación de la guerra, sus esfuerzos por resu­ de escritor, soliendo decir: "Yo vivo de la profesión y ¡para la citar su viejo periódico resultaron baldíos ante la intransigencia Literatura". Si no escaló fama amplia a escala nacional ¡fue por de la censura franquista. Entre 1943 y 1946 fue alcalde de Alba­ su empeño en no salir de Albacete, donde la publicación era cete, entre 1949 y 1950 delegado provincial de Sindicatos y en difícil en forma de libro y sólo se desarrollaban inquietudes 1957, delegado provincial del Ministerio de la Vivienda, cargo literarias a través de los periódicos. Fue periodista pro~esional en el que estuvo por espacio de trece años. Todo ello, sin aban­ y colaborador literario de prensa desde los 14 años hasta su donar nunca el ejercicio activo de la Abogacía, la otra gran muerte. Fundador y en algunas director de las revistas literarias pasión de su vida. Publicó algunas obras literarias y sobre todo, más importantes de la provincia (Agora, Cal y canto, I Feria). un librito de tema histórico que escribió en colaboración con su Como articulista, un gran maestro, y también como n~velista, primo Rafael QUIJADA SERRANO (Albacete, 1902-1956), autor teatral, biógrafo y filólogo. En esta última actividad, también abogado y periodista: La Audiencia Territorial y el Cómo habla la Mancha. Diccionario manchego (1974, 1983), Colegio de Abogados. Notas sobre su historia y aportaciones al le abrió las puertas de la Real Academia Española de la Len­ alnbiente espiritual de la ciudad (Albacete, 1948), que obtuvo gua, como académico correspondiente para toda La Mancha. un premio en los Juegos Florales de aquel año. Es un docu­ Aparte de obras literarias, narraciones, teatro, rozó la ¡crónica mentado trabajo histórico sobre lo que ambas instituciones del histórica y el ensayo biográfico con Cuaderno sentimental Derecho, judicial y profesional, significaron para el porvenir de (Estampas albacetenses) (1928), Siete caricaturas literarias la ciudad de Albacete. (1934), Toreo y azar de Pedrés (1952), Esas vidas en mi espe- José PÉREZ y RUIZ DE ALARCÓN, natural de Ahnan­ jo... (Memorias de un escritor provinciano) (1961), Vida y fan­ sa (1884-1978), secretario de su Ayuntamiento y cronista de la tasía de Azorín (1965), Albacete, ciudad. Primer centenario ciudad. Publicó una documentada Historia de Aln1ansa. Apun­ (1962), Albacete. Espaíia en paz (1964) y la edición dJ la obra tes (Madrid, Editorial Manuel Rollán, 1949,255 p., Lám.). El Albacete, sienlpre, de Azorín (1970). I autor fue nombrado Hijo Predilecto de la ciudad de Almansa. El Leopoldo GUTIÉRREZ CANALES, natural de El Boni­ libro es una continuación de sus trabajos anteriores, sobre todo llo, licenciado en Sagrada Teología, capellán del CJerpo de Apuntes de Historia y Tradición de Almansa, obra premiada en Prisiones, académico de la de Bellas Artes de Toledo jy rector los Juegos Florales celebrados en Almansa en 1913. El autor de la Iglesia de San José de la Montaña de Madrid, publicó los fue periodista activo, colaborando sobre todo en los periódicos siguientes libros con temas históricos sobre su pueblo:, El San­ locales almanseños y, sobre temas de Administración Local, en tísimo Cristo de los Milagros de El Bonillo (Toledo, Editorial la revista madrileña El Consultor de los Ayuntan1ientos. 58

El caudetano Jesús SÁNCHEZ DÍAZ realizó para su pue­ Publicó también un folleto titulado .Yeste: Un pueblo descono­ blo un libro semejante al que su colega Pérez y Ruiz de Alar­ cido (Albacete, Tipografía de Gómez Avendaño, 1969,31 p.). cón había hecho sobre Almansa: la bien documentada Historia Enrique GARCÍA SOLANA (Murcia, 1919). A pesar de de Caudete y su Virgen de Gracia (Alicante, 1950,276 p.), que una enfermedad que le privó de la vista y le impidió terminar describe con cierto método todos los avatares de la población sus estudios, ejerció activamente el periodismo y la literatura, desde las épocas más primitivas hasta el siglo XX. ayudado eficazmente por su esposa, Amparo Gavidia Murcia, Marciano PICAZO SORIANO (Tarazana de la Mancha, maestra y bibliotecaria de Munera. La máxima ilusión de su 1913), abogado, fue, junto con Jacobo Serra Martínez, uno de vida fue el periodismo y la literatura. En 1945 fundó en el pue­ los primeros infatigables investigadores del Archivo Histórico blo el periódico Ecos, mantenido económicamente a sus Provincial, sacando multitud de notas de los protocolos nota- expensas durante doce años consecutivos. Después, durante . riales centenarios de Albacete, que la muerte le impidió publi­ más de 25 años, fue corresponsal en Munera de la agencia car. Sin embargo, su fITma fue muy asidua en la prensa local de periodística Cifra, facilitando casi diariamente noticias de su Albacete y en la revista de fiestas de su pueblo. De su obra pueblo o de los limítrofes. Al mismo tiempo empezó a trabajar sobresale la biografía de Manuel Jiménez, Chicuelo JJ (Alba­ también para La Voz de Albacete y la emisora Radio Albacete. cete, Imprenta La Voz de Albacete, 1953, 147 p. 3 h., Lám.), Posteriormente, también, en el Centro Emisor del Sureste, de obra de verdadera importancia, interés y amenidad. Entre sus Radio Nacional de España. Algunas de sus crónicas fueron artículos periodísticos y literarios hay que destacar "Los celtí• reproducidas por los lnás grandes diarios nacionales de su épo­ beros sedientos" (en Revista de Albacete y de su feria, 1956). ca y en algunas revistas profesionales, sobre todo de temas Padre Elías BAÑÓN, O.C. Publicó una Memoria históri• agrícolas. En 1967 publicó Don Bartolomé Rodríguez Soria ca sobre la fundación y reinstauración del Convento de San (Ellnártir de Munera) (Albacete, Imprenta La Voz de Albace­ José de Caudete (Albacete) (Caudete, 1956). te, 1967, 27 p.), Y "Yacintientos arqueológicos de Munera Francisco GONZÁLEZ BERMÚDEZ (Barrax, 1920). (Albacete) y sus aledaños" (Separata de la revista Saitabi, XI, Periodista, colaborador habitual de casi todos los periódicos y 1967, 14 p..). Pero su obra fundamental es su libro Munera por emisoras de la provincia de Albacete, principalmente como dentro (Albacete, Caja de Ahorros Provincial, 1974, 246 p.), redactor de plantilla en los diarios Pueblo (edición de Albace­ del que tuvo que hacer una edición privada al año siguiente, te), La Voz de Albacete, Albacete, La Tribuna de Albacete, y en para cumplir con la demanda comercial del libro, al haberse la revista Crónica de Albacete. Es cronista oficial de Barrax agotado rápidamente la primera edición. Es un libro valioso desde 1954 y creador de las famosas Cuervas Literarias en el desde el punto de vista etnográfico y folklórico, que nos des­ molino de viento de su pueblo. Ha publicado Geografía e His­ cribe diversas facetas inéditas de Munera y de buena parte de toria de Barrax (1960), imprescindible para el conocimiento la comarca manchega del noroeste de la provincia. El éxito de profundo de este pueblo, cuna de Benjamín Palencia y escena­ esta publicación le animó más tarde a otra más amplia en cuan­ rio de los famosos "toros de fuego". to a la demarcación geográfica, en la que se incluía a una serie Francisco FUENTES GARCIA, (La Gineta, 1909), canó• de pueblos de los alrededores de Munera: Biografía del Nor­ nigo de la Santa Iglesia Catedral de Albacete desde 1952, pro­ oeste de la provincia de Albacete (Albacete, edición del autor, fesor de Lengua Latina y Preceptiva Literaria en el Seminario 1978, 230 p.). En resumen, Enrique García Solana fue un hom­ Diocesano, delegado episcopal de Prensa·de la Iglesia, colabo­ bre extraordinario, que supo vencer las mayores dificultades rador fijo de La Voz de Albacete y de Radio Popular. Su acti­ para cumplir fielmente su vocación literaria ineludible. El mis­ vidad literaria fue habitual y constante, reflejada en una copio­ mo me 10 decía en una carta, antes de su muerte: "Todo eso sa colección de artículos, reportajes, crónicas y comentarios mientras mi vista declina desde hace unos diez años de forma variadísimos. Por encargo del director de la BAC (Biblioteca alarmante. El escribir me ayuda a pasar todo 10 que me viene de Autores Católicos), colaboró, representando a la Diócesis, y a llevarlo incluso con alegría. "El Señor me lo dio, el Señor en el libro titulado Historia la Persecución Religiosa en Espa­ me 10 quitó, Bendito sea el Señor", es 10 que digo, como Job." ña, compilado por el famoso obispo Antonio Montero Moreno Con su familia, verdaderamente ejemplar, organizó en su en 1961, y así mismo en el Diccionario de Historia Eclesiás­ "Molino de la Bella Quiteria" unas veladas literarias inolvida­ tica de España, del del C.S.LC., Instituto Enrique Florez. bles, que aún continúan después de su muerte. Casimiro FERNÁNDEZ BAUDÍN, de familia natural de Agustín SANDOVAL MULLERAS (Vi11arrobledo, Socavas, donde residía largas temporadas, fue el descubridor 1904-1994). Maestro nacional, y escritor. Sobre todo destacó de las pinturas rupestres de Peña Bermeja y autor de las explo­ como poeta y su obra es una de las más representativas del raciones arqueológicas en el Castillo y en otros parajes del tér­ Albacete de la generación de las revistas albacetenses Agora y mino de este pueblo. Publicó un buen ensayo de investigación, Altozano, donde se integraban los nombres más interesantes de primera aproximación histórica a aquellas tierras serranas: la poesía de Albacete en los años anteriores a la guerra civil. "Datos para la historia de la villa de Socavas (Albacete) y de Después su actividad se desarrolló en las revistas Feria (Alba­ sus pueblos limítrofes", (en La Mancha. Revista de estudios cete) y Cervantino (Villarrobledo). Publicó también otros regionales, 1961), que se difundió como separata de 47 pági­ libros de divulgación histórica local: Historia de mi pueblo (La nas, con láminas. Muy Noble y Leal Ciudad de Villarrobledo) (Villarrobledo, Bartolomé BELTRÁN RODRÍGUEZ (Granada, 1916), 1961), Maraña de familias de Villarrobledo (Villarrobledo, residió en Albacete desde 1939 hasta su muerte. Académico 1978), La batalla de Villarrobledo (Villarrobledo,1986), La correspondiente y delegado provincial de'Bellas Artes. Estuvo palabra exterior (conferencias e intervenciones) (1988), El encargado durante muchos años por la Diputación Provincial de círculo en mi Inemoria (1991), Cuadernillo de cuadros históri• Albacete de realizar trabajos sobre inventario del Patrimonio cos (1991), La palabra exterior. Apéndice (1991). Artístico de la Provincia. Solía colaborar de vez en cuando en Samuel de los SANTOS GALLEGO (Madrid, 1925­ la prensa local, sobre todo en La Voz de Albacete con artículos Albacete, 1983), residió en Albacete desde su juventud, des­ de temas políticos o sobre arte e historia de la provincia de pués de haber aprendido arqueología en Córdoba con su padre, Albacete. Entre los trabajos más extensos que publicó por este Samuel de los Santos Gener, y en Madrid con Julio Martínez medio figuran "Vandelvira, genio del Renacimiento" y estudios Santa-Dlalla, quien lo designó (1948) como ayudante del estilísticos de las iglesias parroquiales de Yeste y La Roda. director del Museo de Albacete Joaquín Sánchez Jiménez en 59 las excavaciones del Llano de la Consolación. Su amor por la y caricaturas, son el elemento imprescindible para el estudio de hija del arqueólogo, Nieves Sánchez Carrilera, y por los yaci­ nuestra ciudad desde los años 20 hasta finales de los años 80. mientos albacetenses, le impidieron abandonar ya para siem­ Hijo del gran historiador y archivero Rafael Mateas y pre estas tierras. Consiguió para situarse la plaza de archivero Sotos, la educación recibida de su padre le inclinaría bien de la Diputación, siendo profesor en diversos centros de Ense­ pronto a la vocación familiar, y así, tras aprobar el Bachillera­ ñanza Media y, más tarde (1962), director del Museo de Alba­ to en el Instituto de Albacete en 1916, estudió la carrera de cete, como miembro del Cuerpo Facultativo de Archiyeros, Filosofía y Letras (Sección de Historia), titulándose en la mis­ Bibliotecarios y Arqueólogos. En este sentido fue el gran con­ ma como archivero-bibliotecario, desempeñó la plaza de ayu­ tinuador de su suegro, realizador de importantes campañas dante numerario en la Sección de Letras del Instituto, y consi­ arqueológicas y verdadero creador del grandioso Museo! en el guió por oposición el cargo de archivero municipal del Ayun­ Parque, modelo de instalaciones museísticas, que él pretendía tamiento de Albacete. Pero su verdadera vocación, desde siem­ que fuera "el centro cultural catalizador de la vida artístfca de pre, fue la literatura y el periodismo. En este sentido colaboró Albacete", "un museo vivo, que se proyecte a la sociedad desde la niñez en la mayor parte de la prensa de Albacete. Una como elemento de información, de formación y de ocio a tra­ colaboración más profesional fue la realizada en Eco del Pue­ vés de la cultura". Su insobornable carácter le hizo renunciar blo (1930-31), Hoy (1932) y Vida Obrera (1937), en las que al nombramiento de Consejero Provincial de Bellas Artes, por fue redactor de plantilla, y sobre todo en El Diario de Albace­ mantener un criterio opuesto al oficial sobre el envío a Madrid te (1937), donde fue director, con trabajos literarios y con cari­ de piezas procedentes de la provincia. Vivió siempre por y para caturas y chistes gráficos. su Museo, a menudo luchando contra corriente, en plend cora­ En este último sentido llegarían a tener sus trabajos una je, y finalmente, el Museo, "su hijo", le costó la vida, ante el repercusión nacional, sobre todo desde que, haciendo el servi­ disgusto del traslado de unas piezas arqueológicas realizado cio militar en Valencia, empezó una colaboración diaria que inadecuadamente sin atender sus consejos y que fueron dete­ duraría tres años consecutivos en La Voz Valenciana, encar­ rioradas. Según el arqueólogo Antonio Beltrán, "durante más gándose de las caricaturas de la actualidad cotidiana. Su fama de 30 años Samuel de los Santos Gallego ha significado uno de llegaría a otras provincias. Vida Manchega, de Ciudad Real, los componentes más efectivos de la cultura de Albacete', en la publicaría desde 1917, cuando Mateas tenía sólo 16 años, que se integró, a la que entregó su esfuerzo de cada día y pro- muchos trabajos suyos, así como noticias de sus actividades bablemente su vida". I artísticas. Después daría el salto hasta Madrid, donde los mejo­ Mariano ACEBAL LUJÁN (Alhama, Murcia, 1927), res periódicos de humor nacionales, Gutiérrez y Buen HU1110r, vivió su infancia y juventud en Albacete, antes de hacerse fran­ solicitarían sus trabajos, que se fueron publicando con asidui­ ciscano, historiador, bibliotecario y documentalista ide su dad durante todos los años 20. También, por esta época cola­ Orden. Después de haber sido rector del Seminario de Filoso­ boró con sus caricaturas en otros periódicos de carácter liberal fía de Consuegra (Toledo), trabaja en Florencia y en Roma en como La Correspondencia de Valencia, y los famosísimos El la redacción del Archivum Franciscanum Historicum, ericarga­ Liberal y Heraldo de Madrid, donde alternaba los trabajos do del estudio y recensión de obras en castellano y de temas humorísticos con el gran caricaturista Olivares Gil. No cabe históricos franciscanos de los paises hispánicos. Colabora en duda, pues, que en los años 20, Alberto Mateas estaba en la varias obras colectivas: Regestum Observantiae Cismohtanae cima del periodismo gráfico nacional, y que de no haberse (1982), Vol. XII de la Colección Analecta Franciscana, Apén­ encerrado en Albacete, en el amor imperioso y absorbente dice de la Bibliotheca Sanctorum (1988), Dictionnaire d "His­ hacia la tierra natal, hubiera escalado los más altos destinos en toire et de Géographie Ecclesiastiques, Dictionnaire dei Spiri­ el Arte, en la Literatura y en la cultura del país. Firmaba sus tualité, Dizionario degli Istituti di Peifezione, etc. Tras su jubi­ dibujos con su apellido, "Mateos", y, muchas veces con los lación, vuelve a España, y vive retirado en el conventol de La seudónimos "Ali-K-Ido" y "Tanito". Y otras veces sin firma, Cabrera (Madrid). En sus vacaciones solía venir a Albacete, a como en multitud de cabeceras y de gráficos para secciones estar con su numerosa familia, siendo uno de los más incansa­ fijas de periódicos locales. Pero a pesar de ello, su personali­ bles investigadores del Archivo Histórico Provincial d~ Alba­ dad y su fino humor eran inconfundibles, y todo el mundo, cete. Ha publicado algunos artículos sobre la historia f~ancis­ sobre todo en Albacete, sabía identificar perfectamente la ver­ cana de estas tierras. Precisamente la publicación apresurada dadera paternidad de aquellos detalles humorísticos de la de uno de sus artículos sobre "La fundación franciscana ide Los actualidad que aparecían cada día en los mejores periódicos y Llanos" en la prensa local (La Voz de Albacete, 5 noviembre revistas nacionales y albaceteños. 1972), a falta de una auténtica revista local de investigación, La guerra civil 1936-1939 fue el gran trauma de su vida. La fue lo que me sugirió la idea de la creación de una rev;ista de España vencedora no supo perdonarle la sátira combativa que esta índole, que finalmente recibió como nombre AI-Basit. encerraron sus dibujos durante la contienda, cuando unas veces Para terminar con esta ya larga lista de historiadores de se luchaba en el frente con el fusil y otras en la retaguardia con Albacete anteriores a 1967, quiero extenderme un poco más la pluma, y Alberto Mateas fue, primeramente condenado a sobre la figura entrañable de una persona a quien consideré muerte y, más tarde perseguido y separado de todos sus cargos como un ejemplo a imitar y a quien quise como a un padre. públicos y profesionales. Si el exilio exterior fue traumático y Alberto MATEOS ARCANGEL (Albacete, 190011987), lamentable para los perseguidos por el régimen franquista, el archivero municipal de Albacete, escritor, periodista y dibujan­ exilio interior aún fue peor. Los que escaparon al extranjero te humorístico. Cuando alguien se decida a escribir seriamen­ pudieron desarrollar sus vocaciones ampliamente y triunfar. te sobre el Albacete de nuestro tiempo, no tendrá más remedio Los que no pudieron o no quisieron alejarse de España, casti­ que acudir a su obra inimitable. Sin haber recibido. nunca la gados o perseguidos por los ganadores de la contienda, duran­ distinción -que por otra parte no necesitó nunca- de ser nom­ te décadas desarrollaron su vida en unas circunstancias más brado cronista oficial de su ciudad, sin embargo, desde ,mucho difíciles. Unos, como Eduardo Quijada Alcázar y Ginés Pica­ tiempo, fue el mejor testigo y observador de su evolución ciu­ za Carboneras, fueron condenados a alejarse de Albacete, dadana y sus crónicas periodísticas cuando podía ejercbr acti­ incluso fuera de los límites provinciales. Alberto Mateas vivió vamente el periodismo y, después, sus artículos de telllas his­ una de las experiencias más singulares y terribles de la pos­ tóricos y retrospectivos y, sobre todo, sus graciosísimos,monos guerra, la de los topos. Vivió nueve años encerrado en la cáma- 60 ra de su casa, mientras sabía que su sentencia era la de pena de en estos años. Esta es la gran obra que en el futuro habrá que muerte, y saliendo de su encierro cuando rectificaron la sen­ tener siempre presente, a la hora de intentar cualquier estudio tencia y sólo le imponían el apartamiento de su profesión como serio sobre el Albacete contemporáneo. archivero municipal y como periodista. Ni que decir tiene que aquella negativa a colaborar en los Tuvo entonces que ganarse la vida con otra profesión, la de periódicos diarios de Albacete se vio orillada desde el momen­ agente comercial, muy alejada de sus más auténticas inclina­ to en que empezó a publicarse en Albacete una Prensa auténti­ ciones. Su alejamiento de los archivos fue fatal para la historio­ camente democrática, y Alberto Mateas, en los últimos años de grafía albacetense, ya que en él había madera de buen histo­ su vida, publicó algunos artículos suyos y otros de su padre, riador y podría, como su padre, haber desvelado secretos muy que permanecían aún inéditos, en La Verdad. Pero ya eran importantes del pasado aún ocultos de nuestra ciudad. Los Tri­ muchos los años y muchos los mazazos sentimentales que últi­ bunales franquistas de la inmediata posguerra supieron hallar la mamente le había dado la vida, para continuar con el empuje pena más cruel y dolorosa para un historiador: el alejamiento periodístico de los años mozos. forzoso de los fondos documentales, prohibiéndole expresa­ Conocí a Alberto Mateas en 1967, recién incorporado a mi mente que nunca se acercara a los archivos, su lugar de trabajo trabajo al Archivo Histórico Provincial, cuando aún desconocía y de vocación anterior. Más tarde su amigo el impresor Antonio todo sobre la capital de la provincia que me vio nacer. Fue en González Alcázar consiguió que le permitieran colaborar en sus casa de una amiga común ya también desaparecida, Carmen revistas feriales: Revista de Albacete y su Feria (1947-56) y Castellanos, en una tarde y una velada inolvidables. Hablamos Feria (1957-1980). Estas revistas sirvieron maravillosamente de miles y miles de cosas interesantísimas para conocer el pasa­ para dos objetivos importantes: para que Alberto Mateas nos do de Albacete. De la mano de aquellos dos grandes conocedo­ pudiera seguir transmitiendo su mensaje interior, y para que el res del alma de la ciudad, en aquella y otras muchas tardes, me autor no se consumiera, no se frustrara, no se adocenara, no fui enterando, poco a poco, de algunos retazos valiosísimos de enloqueciera, con el trabajo ajeno a su auténtica vocación que un pasado ciudadano entrañable, que era imposible conocer a le habían obligado a seguir, el de visitador médico, al que tuvo través de los legajos de los archivos. Las anécdotas chispeantes que asirse para ganar el pan de su familia. Sus colaboraciones y graciosísimas, humanizadas por el ingenio y el recuerdo amo­ en la revista de la Feria 10 tenían durante todo el año sujeto a roso, se mezclaban con los datos más interesantes para la una inquietud espiritual beneficiosa para Albacete. Y en la reconstrucción científica de la historia ciudadana. Me quedé colección completa de esta revista está la parte más importante fascinado ante el mundo que me abrían aquellos amigos y estoy de la obra literaria y artística de Alberto Mateas. Allí divulgó plenamente seguro que desde entonces mi vocación hacia la temas retrospectivos albaceteños, donde el estilo literario se historia local se había confmnado plenamente. aúna con el rigor histórico, a pesar de no haber podido realizar En Alberto Mateas siempre tuve, desde entonces, no sólo a ningún tipo de consultas personalmente en los fondos docu­ un amigo entrañable, sino a un auténtico colega profesional, mentales de los archivos albacetenses, y una sección gráfica, como archivero, como historiador, como escritor, al que acudir Quijos, donde comentaba humorísticamente (aunque con inten­ en busca de consejo y, sobre todo, en busca de datos anecdóti• cionalidad satírica mesurada a causa de la censura), el devenir cos de Albacete, imposibles de encontrar en otro lado que no de las cosas de Albacete.· Ante el éxito de esta obra literaria y fuera el pozo sin fondo, peto totalmente transparente y cristali­ gráfica quisieron abrirle otras puertas periodísticas, que siem­ no, de su lnemoria. Fue siempre una relación constante, entra­ pre rechazó. Para él, casi todos los medios periodísticos que ñable y fructífera, a lo largo de casi veinte años. Si yo recibí de entonces se publicaban en Albacete eran totalmente opuestos a él muchísimo, a mi vez logré convencerle en algunas empresas su pensamiento y a sus ideales democráticos. Los tímidos ini­ conjuntas que era preciso realizar. Entre 1974 y 1977 todos los cios de la apertura intelectual llegaban demasiado tarde a un esfuerzos se cifraron en conseguir que la Diputación Provincial corazón con cicatrices muy profundas. publicara las obras olvidadas de su padre, el también archivero Alberto Mateas llevaba tan profundamente clavada en su e historiador Rafael Mateas y Sotos. La empresa logró conver­ interior la historia de su ciudad, que no necesitaba en absoluto tirse en realidad gracias al apoyo del presidente de entonces, documentarse para poder escribirla. El mismo era un archivo Antonio Gómez Picaza. Presentamos aquellas obras en un acto viviente, y en su memoria privilegiada se encontraban miles y entrañable, en el salón de sesiones del Palacio Provincial, y la miles de datos fidedignos para la reconstrucción de nuestro oratoria brillante y humana de Juan José García Carbonell y mi pasado más entrañable. A pesar de estar basados casi exclusi­ acuciante petición pública, ya plenamente iracunda por el can­ vamente en la memoria yen notas anteriores a 1939, no hay en sancio de predicar en desierto, de que se crease de una vez el ninguna parte de sus artículos de tema histórico ningún dato prometido Instituto de Estudios Albacetenses, quedaron total­ dudoso de autenticidad, ninguna noticia carente de sentido his­ mente oscurecidas ante las lágrimas que brotaban de los ojos tórico y científico. Esa es la gran lección historiográfica que cansados de Alberto Mateas al evocar la figura de su padre. nos legaron a nivel local personas como Alberto Mateas, y a Después don Alberto sufrió el gran mazazo de su vida, peor nivel nacional Tomás Navarro Tomás, América Castro, Clau­ aún que todos los sufrimientos y persecuciones de la posgue­ dia Sánchez Albornoz y tantos otros, a los que el alejamiento rra: la muerte de su esposa. El pobre hombre estaba plena­ forzoso de las fuentes documentales de sus estudios no impi­ mente desesperado, y la depresión sentimental amenazaba con dió en absoluto el poder seguir realizando una obra científica llevarlo a él también, rápidamente, detrás de la mujer amada. imperecedera. Era preciso lograr que saliera de aquel estado, que buscara en Desde un campo diferente al de la historia, pero muy liga­ otras empresas vitales el hálito necesario que lo sujetara a este do a sus actividades periodísticas de los años anteriores a la mundo. Primero logramos convencerlo para que volviera de guerra, lo más importante que realizó en sus últimos años fue nuevo a investigar en los archivos, él que no necesitaba en la sección "Quijos", donde comentaba humorísticamente las absoluto apoyarse en fuentes documentales que cimentasen sus cosas de Albacete, siendo con sus dibujos (donde aún se en­ recuerdos albaceteños. Y todos los días bajaba, cansadamente, contraba latente todo el talento que le llevó a colaborar en Gu­ las pocas escaleras que lo conducían al sótano de la antigua tiérrez) el verdadero notario de su tiempo. el auténtico cronista Casa de la Cultura, en la calle Isaac Peral, donde estaban las -aunque no fuera "oficial"- de la evolución histórica, eco­ catacumbas de la documentación albacetense; y más tarde nómica, social, cultural, folklórica y sentimental de la ciudad subía, en los más cómodos y rápidos ascensores, hasta las altu- 61 ras de la planta 6a del edificio de la avenida de la Estación, a decía que contenían excesivos piropos para su persona y su donde habíamos logrado elevar, provisionalmente, las oficinas obra. Finalmente fueron publicados ambos volúmenes, pero fal­ del Archivo Histórico Provincial. ta sin embargo la publicación de sus "Quijos" Y los chistes y Las visitas de Mateos eran lo mejor de las aburridas! vela­ caricaturas publicados a lo largo de más de 60 años de fecunda das de trabajo cotidiano. Y más de una vez, 10 confieso, la labor. Este libro póstumo debe publicarse algún día, porque, mañana, o la tarde, se convertían en una verdadera tertulia his­ como los anteriores, es también una crónica del pasado más toriográfica, donde participábamos todos, investigadores y reciente de nuestra ciudad, a través del humor, de la ciencia funcionarios. Porque nuestro archivo nunca fue un lugar eJe tra­ sociológica, y del periodismo gráfico más incisivo y veraz. bajo aburrido, en el que todo el mundo tenía que estar en :silen- Finalizaba el prólogo de una de sus obras con este párrafo .E " l. CIO. ra, entonces, un centro muy raro en su genero, qu~ qUI- final, que Alberto Mateos se resistía a que se publicara, porque zás abunde muy poco, donde se respiraba humanidad y alegría, decía que era demasiado para su humilde personalidad. Pero y donde junto a algún chiste y alguna anécdota se trabajaba yo lo publiqué, a pesar suyo, porque sabía que era totalmente muy seriamente, consiguiendo entre todos empresas científicas cierto, de verdadera justicia: "Alberto Mateos no ha tenido de verdadera categoría, que han permitido que el pasado de suerte con la ciudad y ~a tierra donde nació. Para la Mancha, nuestra provincia sea mejor conocido y que la bibliobrafía Mateas debía ser lo mismo que Castelao es para Galicia, por­ local haya aumentado de modo extraordinario. Porque no hay que las obras de los dos dibujantes españoles son totalmente que olvidar que la mayor empresa cultural de nuestra provin­ paralelas en calidad, en inspiración, en intencionalidad, en sig­ cia se coció y germinó en el núcleo de investigadores del nificado. Obras enteramente dedicadas a la redención cultural, Archivo, entre los cuales se encontraba también Alberto Mate­ social y política de sus regiones, a enaltecer los valores eternos os, que fue, naturalmente, uno de los primeros miembros del de sus Patrias chicas. Pero Galicia ha hecho de Castelao un

Instituto de Estudios Albacetenses. I mito y Mateos aún permanece totalmente desconocido y, lo Me parece interesante insertar aquí la carta en que Mateos que es peor, inédito para la Mancha, e incluso para la misma aceptaba su designación como miembro: "Albacete, 5 de abril ciudad que le vio nacer. Remediar esta situación lamentable no de 1978.- Señor don Alfonso Santamaría Conde, Director del es tan difícil, y este libro puede ser el camino inicial. Que se LE.A.- Muy señor mío: Fue en mi poder su atento comunicado continúe en esta línea, y que el autor y todos nosotros podamos notificándome haber sido distinguido con la designación de ver este sueño, esta justicia, esta necesidad, en su más fecunda miembro de número del Instituto de Estudios Albaceten1ses de y urgente realización." su digna dirección, con gran sorpresa por mi parte, ya q~e por Gracias a Dios, el Albacete de entonces me hizo caso. Aun­ mi falta de méritos no me considero acreedor a tal honÓr, que que el triunfo de Alberto Mateos, al que su ciudad honró COIno

agradezco muy profundamente.- Procuraré colaborar I en la se merecía, le llegaba tan sólo al final de su vida, en plena pequeña medida que me es posible al logro de los fines de ese ancianidad, después de las amarguras que le hicieron tragar en Instituto, no teniendo en la actualidad trabajo alguno sobre sus años de madurez, con la gran injusticia de querer apartarlo tema albaceteño, ofreciéndole colaborar con alguno en ~l futu­ para siempre de su Archivo Municipal, y, por consiguiente, de ro, pese a que mis escritos carecen de la entidad necesaria para la investigación de la historia de su amada Albacete. Debajo del ser publicados por ese Instituto, opinión de que participa la balcón del Ayuntamiento, en septiembre de 1986, otro investi­ redacción de su órgano de expresión "AI-Basit", toda vbz que gador del Archivo, Domingo Henares y yo, contemplábamos un original que destiné a su primer número me fue rechqzado.­ emocionados el acto del pregón de la Feria, que Alberto Mate­ He recibido, asimismo, copia de los Estatutos del LE.A. yde su os tuvo que escribir apresuradamente, con tan sólo unas horas lista de los señores que, actualmente lo componen.- Y si a usted de encargo, y leer entrecortadamente ante un servicio de mega­ bien le parece, pueden adscribirme a la Sección "Publ~cacio­ fonía que no funcionaba y una emoción inenarrable que le nes".- Con la expresión de mi reconocimiento, quedo suyo atto. embargaba y que le impedía pronunciar las palabras. Era el s.s. Alberto Mateos". Como vemos, el viejo peleón daba las gran momento de Alberto Mateos, la gran noche de su triunfo gracias de la manera más fina, y también muy finamente lan­ final, y mucho mejor que su nombramiento tardío de Hijo Pre­ zaba sus críticas al excesivo rigor crítico de la revista y del mis­ dilecto de Albacete, que al final ni siquiera pudo recoger. mo Instituto, a la hora de aceptar sus colaboraciones. Quizás, al mismo tiempo que yo 10 quería como a un padre, Pero volvamos a las visitas al Archivo de Alberto Mateos, él también me consideraba como un hijo. Juan José García que entonces vivía, a pesar de sus achaques, una anc~anidad Carbonell me relató, emocionado y lloroso, lo que, según él, plenamente creativa. Allí, en mi despacho, que compartía con fueron algunas de las últimas palabras de Alberto Mateos, en los investigadores, preparamos ambos la edición de susllibros. su lecho de muerte: "Y Fuster. ¿Dónde está Fuster?" Pero yo Fueron testigos de estas frecuentes visitas, Víctor Luis Malvar, entonces estaba muy lejos de Albacete. Trabajaba entonces en mi gran colaborador en el Archivo, también otro padre piara mí, Viso del Marqués, Ciudad Real, y pasaba casi todos los fines y muchas veces también un colaborador ocasional, nuestro hoy de semana en Murcia, acompañando a mi madre, ya muy llorado Juan José García Carbonell, que entonces era delegado enferma también. Así, una noche de domingo, me enteré de su del ministerio de Cultura, y que también demostró cu~plida­ muerte, y estas circunstancias las conté a los lectores de La mente su gran admiración por Alberto Mateos. Sobre todo, las Verdad, a los pocos días del suceso: "Nada más llegar a casa, veladas tenían como objeto la preparación de su libro más los periódicos, arrojados por debajo de la puerta, me dan la importante, que constituyó un verdaderb "boom" editorlal, Del triste noticia. Las circunstancias singulares de mi vida en estos Albacete antiguo (Imágenes y recuerdos) (Albacete, Instituto últimos meses (mi obligado exilio laboral lejos de Albacete, mi de Estudios Albacetenses, 1983): selección y clasificación de constante deambular de una provincia a otra, mi condición fotografías, maquetación, corrección de los originales del mag­ actual forzada de devora-kilómetros, con el trabajo a dos horas nífico texto literario... Y al mismo tiempo las gestiones piara que y media del hogar familiar) me ha hecho no estar presente en la Diputación Provincial publicara su otro gran libro, ,Evoca­ unos momentos en los que tendría que haber estado en la ciu­ ciones y recuerdos albaceteíios (Albacete, Diputación Provin­ dad para despedir a un gran amigo y para acompañar a sus cial, 1983). Mucha parte del tiempo de estas veladas se gastó en hijas y nietos en esos momentos amargos de sus vidas. En esa discusiones, en mi lucha constante con el autor, que se¡Iresistía breve noche albaceteña apenas tengo tiempo para comunicar­ a ambas publicaciones y sobre todo a mis prólogos, porque les mi pena por teléfono, a unas horas en que son imposibles

I 62 las visitas, dormir un poco y, a las seis de la mañana, rompien­ y más tarde en la revista AI-Basit, es la que me está haciendo do apenas con el limpiaparabrisas la fiera oscuridad y la lluvia, reaccionar desde hace algún tiempo, revisando de nuevo mis partir de nuevo para mi trabajo en el Archivo General de la antiguas fichas del Diccionario de Escritores de Albacete, que, Marina, en la provincia de Ciudad Real, junto a Despeñape­ a pesar de la publicación de la mayoría en mi sección semanal ITaS, desde donde, en esta tarde del lunes, también lluviosa y del diario La Verdad, quedaron finalmente inéditas en forma de lnelancólica, escribo estas líneas en recuerdo de don Alberto, y libro. Es ésta la obra de mi vida, mi auténtica contribución his­ que, sin que pueda evitarlo, me empujan también a la añoran­ tórica sobre Albacete: mis incansables investigaciones sobre za de estos últimos años pasados en Albacete." multitud de personajes de la cultura de la provincia que no han Esa añoranza, revivida después de muchos años al releer mi muerto, que no morirán nunca, siempre que alguien como yo sentida necrología de Alberto Mateas, publicada en La Verdad sepa resucitar algunos datos de su existencia. VILLATOYA, LA LARGA YCOSTOSA DISOLUCIÓN DE UNA PROPIEDAD SEÑORIAL. José Manuel ALMENDROS TOLEDO Del l. E. A Don Juan Manuel

ANTECEDENTES

I

Villatoya es una pequeña población albacetense situ~da en importante de tanta pérdida documental, no sería menor la la margen derecha del Cabriel, en el límite con Valencia, don­ ocultación y destrucción de pruebas practicada por la Casa de de la provincia da su primer abrazo al Levante; es, por !tanto, Villatoya, especialmente en lo referente a la forma de adquisi­ una de sus villas más septentrionales. En su término, y más ción y modo de ejercer el gobierno municipal, ya que por ser concretamente en su aldea Cilanco (o Gilanco, según épocas), una propiedad señorial estuvo sujeta a numerosos pleitos se han podido documentar numerosos hallazgos que nos durante las etapas liberales del siglo XIX, por incumplimiento l hablan de un pasado romano y visigodo . ! de los señores de las leyes desvinculadoras, pleitos en los que Tras la reconquista cristiana, que en la provincia de Alba­ convenía a sus propietarios la ocultación de pruebas. Ambas cete comenzó por estas tierras nororientales, Villatoya basó a circunstancias han ocasionado la destrucción de casi toda la integrarse en la amplia demarcación de Jorquera, ' documentación municipal o, al menos, que al presente perma­ Aunque en la configuración que hizo del término, en 1 1267, nezca oculta, lo que añade no pocas dificultades a la elabora­ Alfonso X el Sabio no se hace mención de su comprens~ón en ción del presente trabajo. la tierra de Jorquera, sí que se acredita su pertenencia al dicha De todos modos, y volviendo a nuestra presentación inicial, demarcación en un contrato de compraventa firmado el,11 de como queda dicho, ignoramos el momento en que Toya se julio de 1380, ante el escribano valenciano Guillermo Valse­ declaró villa con jurisdicción propia, así como el mecanismo guer: "Martín Martínez de Parelles, hijo en tiempos de utilizado por sus propietarios para conseguirla. No obstante García Martínez de Parelles (oriundo vecino) habitador de algún dato aproximativo nos informa que a principios del siglo Requena, confieso a vos Fernando Martínez de Parelles XV ya poseía el privilegio de villazgo. En este sentido, el Doc­ consanguíneo y hermano mío, presente, que de l~s 800 tor Don losé Genovés y Tamarit, que ejerció algunos años de morabetinos de moneda castellana por los quales; a vos médico-director del balneario en la primera mitad del siglo vendí una heredad mía, es decir, la parte a mí pertinente en XIX, y que, al parecer, tuvo acceso a la documentación custo­ la misma llamada Cilanco, situada en el término deI .Jor- diada en el archivo municipal, documentación que le era nece­ quera con escritura pública hecha en Valencia por el nota­ saria para elaborar una Memoria sobre los baños, trabajo de rio citado, el año 1379, me pagasteis 600 morabetibos de obligado cumplimiento para los mencionados directores de los dicha moneda"2. La citada venta indica que Cilanco, a¿ejo de establecimientos balnearios, nos dejó algunos datos sobre el Toya, ambas tierras de propios de la villa de Jorquera, 'fueron pasado de la villa. El citado facultativo, en su "Memoria sobre cedidas por el concejo, tal vez por venta, a un particulaf' veci­ las aguas y baños ferruginosos de Villa-toya", incluye en su no de Requena, en el transcurso de un proceso privatizador que apartado 18, el siguiente párrafo: "Antigüedad. -Aunque se dio en aquella villa durante la segunda mitad del siglo XIV. parece que por la corta población debía contar una fecha Desconocemos las condiciones en las que se realizó la l venta, muy reciente, sin embargo, los documentos que más alcan­ pero de ella se deduce que la propiedad, pasó a ser un here­ zan la consideran villa, con su ayuntamiento e iglesia, por damiento familiar no vinculado. La cesión por el conchjo, tal los años 1429, de donde se infiere que cuando a esta fecha vez, pudo hacerse con intención de atender al repoblamiento contaba con las regalías indicadas, debía ser extraordina­

I del deshabitado término, pues así lo hacía necesario la fragili- ria su antigüedad" 3. dad de su posición fronteriza con tierras valencianas. Sin A pesar de todo lo dicho, hemos de reconocer que nuestros embargo, al situar el protocolo notarial el heredamientÓ como puntos de apoyo en esta época son muy imprecisos por la fal­ perteneciente al "término de Jorquera", nos confirma que ta de documentación en que nos movemos. aunque Toya y Cilanco hubieran pasado a ser tierras de pro­ En cualquier caso, cuando en 1576 Don Diego de Zúñiga y piedad privada, seguían sujetas a la jurisdicción de lorquera, a Fonseca, Abad de Parraces4, adquirió Toya y Cilanco (también cuyo gobierno municipal se subordinaban. Hemos de decir que compró la villa de Huélamo, e16 de enero de 1576, compra que tampoco nos han llegado noticias del momento en quel ambas hizo bajo el consentimiento de Felipe 11 y refrendó su secreta­ demarcaciones pasaron a ser de dominio particular, ni hl forma rio, Don Pedro de Escobedo), declaraba que el dominio terri­ en que se traspasó la jurisdicción de Toya a sus propiet'arios. torial llevaba incorporada la jurisdicción pues: "había com­

I Por su condición de villa fronteriza con Valencia fue fre- prado la villa de Toya y Gilanco a Martín de Vallestero, cuentemente invadida en el transcurso de los conflictos suce­ vecino de Requena con todos sus vasallos, tierras, huertas, sorios de la monarquía española y sus archivos saqueados en molinos, prados, dehesas, pastos y montes y pinares, con la numerosas ocasiones, especialmente durante las guerras carlis­ jurisdicción civil y criminal, alta, vaxa, mero, mixto, impe­ tas. Si las etapas de beligerancia no dejaron de ser ¡'motivo rio, de las dichas villas, con todos los pechos, derechos y

I

) Quien esto escribe asistió al descubrimiento casual de un enterralniento visigodo, con su ajuar correspondiente, en el casco urbano de Cilanco.

I 2 Archivo Histórico. Valencia Protocolos. 2772. Guillermo Valseguer. Acta 11,de julio de 1380.

3 Genovés y Tamarit, José. "Memoria sobre las aguas y baños f~rruginosos de Villa- Toya". Imprenta López y Compañía. Valencia, 1845.

I También se publicaron algunos parágrafos de la citada "Memoria" en el Boletín Oficial de la Provincia. Albacete. Entre el 20 y 29 de enero de 1847.

4 Parraces, antigua Abadía de la Provincia y Diócesis de segoviaf Territorio exento que comprendía varias poblaciones. Su capital era el Monasterio de Santa María de Parraces. 64 martiniega, con su riuera, río, fuentes, aguas estantes y su jurisdicción y otras partes que pertenezen al Maiorazgo corrientes, desde la piedra del río hasta la Oya de el Mon­ que fundó Don Diego de Zúñiga y Fonseca, Abad que fue te ¿Oumo? Muerto.•."s. de Parraces, que se venden para hazer pago a sus acrehe­ Con las nuevas posesiones recién adquiridas Don Diego dores, vengan y parezcan ante Joséph Martínez de Robles, fundó el mayorazgo de los Zúñiga, familia en cuya propiedad escribano de el número desta villa, que se admitirán las quedaría el término de Toya y sus anejos durante varias gene­ posturas que se hicieren. Doi fee. Joseph Martínez". raciones. En la villa de Madrid, a veinte y tres de nouiembre, año Años después, el 20 de Septiembre de 1621, a uno de sus de mili seiscientos ochenta y tres, por voz del dicho Juan descendientes, Don Diego López Zúñiga y Velasco, se le otor­ Galiano, pregonero, se dio otro pregón a las dichas villas y gó el título de marqués de Baides (o Baydes)6, para sí y sus vienes conthenidos en estos autos, y no hubo quien hiciese sucesores en la posesión del mayorazg07• postura y lo firmé. Martínez. ID Entre los años 1579 y 1588, los Zúñiga, casi arruinados, Elide diciembre de del año citado, Don Antonio Fernán­ contrajeron ciertas deudas con otra familia, los Anzures, con la dez de Araujo hizo postura por las villas en 82.000 reales, aun­ que estaban emparentados. que, naturalmente, tuvo que esperar hasta la expiración del pla­ Con el tiempo, los Anzures, que durante muchos años zo que marcaba la subasta. El sábado 20 de mayo de 1684, últi­ venían reclamando sus derechos por vía amistosa, después de mo día declarado para el remate de la venta, a las 6,30 de la tar­ muchos intentos previos pasaron a hacerlo por medios más de, sin otros postores que el dicho Don Antonio Fernández, se expeditivos; al no ser atendidas sus reclamaciones por los adjudicó el lote en su persona. Don Antonio resultó ser un tes­ Zúñiga, comenzaron por "molestar a sus arrendatarios de taferro de Don Francisco Pacheco Duque de Estada, pues tras­ hacienda y les hacían vejaciones" 8, pues con ello intentaban currido algún tiempo le traspasó sus derechos de compra. cobrar sus deudas directamente de manos de los terrazgueros. Don Francisco recibió ambas villas por escritura el 7 de Naturalmente, durante algunos años las quejas de los colonos diciembre de 1685: "según y en la forma que la tubo e pose­ asentados en Villatoya fueron permanentes ante los despachos yó el dicho Don Diego de Fonseca y Zúñiga y los demás sub­ de los administradores de rentas de los Zúñiga. ~esores en el dicho Maiorazgo... Y declaro que el justo y En enero de 1624, Doña Catalina de Anzures y una larga verdadero precio de dicha jurisdicción, señorío y vasallaje lista de acreedores reclamaron el pago de la vieja deuda ante de las dichas villas de Toya y Cilanco, tierras dehesas, mon­ los tribunales que sentenciaron por decisión del juez Luis te, aguas, sitio de molino y lo demás a ello perteneciente es Ordoñez que fuese pagada. No obstante, el fallo judicial no se los dichos ochenta y dos mili reales, y que no vale más..." I I ejecutaría inmediatamente y Doña Catalina murió en 1659 sin Una vez en posesión de ambas villas Don Francisco Pache­ ver cumplida la sentencia. Su esposo, Don Francisco Pacheco co las incorporó al mayorazgo de los Anzures, del que era titu­ Duque de Estrada (Duque de Estada es apellido), como here­ lar y propietario por muerte de su esposa', como se ha dicho: dero inmediato de los bienes de su esposa, continuó el pleito "...y desde oy día del otorgamiento desta escritura en ade­ contra Don Francisco López Zúñiga, marqués de Baides, nieto lante desisto y aparto al dicho mayorazgo que fundó el del fundador del mayorazgo, y su propietario por entonces. Por dicho Don Diego de Fonseca y Zúñiga y sus posehedores, fin, otro juez, Don Julián de Ortega, elide abril de 1683, man­ del derecho, acción y propiedad y señorío que tenían y dó que se tasasen y evaluasen los bienes del Mayorazgo de los podían tener a las dichas villas (se refiere, naturalmente, a las Zúñiga y se vendiesen las villas de Toya y CHanco "con sus de Toya y Cilanco), su jurisdicción señorío y vasallaje, mon­ términos y señorío y vasallaje" en pública subasta, hasta te, tierras, sitio de molino yaguas y demás a ello pertene­ cubrir la deuda con Don Juan Francisco Pacheco y el resto de ziente; y en el dicho Mayorazgo de Diego de Anzures y su acreedores 9. muger y sus sub~esores en él lo cedo, renuncio y traspaso El valor de salida de ambas villas acordado por los tasadores para que ande unido e incorporado con los demás vienes se estimó 132.000 reales. El pregón que las ponía en venta estu­ del dicho Mayorazgo..." 12. De esta forma ambas villas se vo expuesto, en el tablón de anuncios de la notaría de Don incorporaron al mayorazgo de los Anzures. Como curiosidad Joséph, Martínez Robles, de Madrid, a partir del 23 de Noviem­ habría que decir que por entonces Toya era una pequeña pobla­ bre de 1683. Decía: ción que contaba con sólo "diez casas pequeñas maltratadas, "En la villa de Madrid, a veinte y dos de Nouiembre de un sitio de molino, que está quemada la cubierta y la tabla mili seiscientos y ochenta y tres, estando a la puerta del ofi­ del río"13 Aquel año la propiedad estaba arrendada a un veci­ cio de mí el presente escribano del número por voz de Juan no de la villa llamado Lúcas Martínez, que a su vez había sub­ Galiano, pregonero público que es en la Platería desta villa, arrendado tierras a otros colonosl4• se dio el pregón siguiente: Quien quisiere comprar las villas Cuando Don Francisco Pacheco Duque de Estada se hizo de Toya y Gilanco con tierras y dehesa y otros vienes raíces cargo del mayorazgo de los Anzures no estaba todavía en pose­ y censo perpetuo de pan que están en la tierra de Cuenca, sión del título nobiliario. Una vez dueño del término se apre-

5 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Catastro del Marqués de la Ensenada. Libro de Autos Generales. Villatoya. "Escritura de venta judicial de la juris­ dicción, señorío y vasallaje de las villas de Toya y eilanco, con el monte, sitio de molino, aguas, tierras dehesas y demás dellas tocante y perteneciente que oy posehe el Señor Marqués de Villatoya". Traslado de documentos hecho en enero de 1753. CAT. libro 215.

6 Villa de tal nombre en la provincia de Guadalajara, partido judicial de Sigüenza.

7 Julio Atienza. ''Nobiliario Español". Madrid 1959. Concedido el título de Marqués el2ü de septiembre de 1621. Real despacho de 12 de febrero de 1622.

8 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Catastro del Marqués de la Ensenada. Libro de Autos generales. Villatoya Cato Libro 215.

9 Ibídem.

10 Ibídem.

11 Ibídem.

12 Ibídem.

13 Ibídem.

14 Ibídem. 65 suró a solicitar de la Corona la creación del título de marqués cendencia, pues le heredó su sobrino Don Luis de Arellano y de Villatoya, título que compró y se le otorgó por Real Despa- Pacheco, hijo de su difunta hermana Doña María Pacheco 15 cho de 18 de febrero de 1686 • I Duque de Estrada, casada con el caballero Don Alonso de Are­ Parece que el primer marqués de Villatoya murió sinl des- llano y Menese.

LOS PLEITOSI DEL SIGLO XIX

I Los titulares del Marquesado de Villatoya fueron, como se acudían a Villatoya al reclamo del trabajo, aunque no podamos ha dicho, tanto dueños territoriales como señores jurisdiccio­ incluir aquí todos, dadas las características del presente trabajo. nales y, por consiguiente, durante centurias usaron del derecho Hasta bien entrada la primera mitad del siglo XIX los titu­ a poner alcaldes y regidores para el gobierno de ambas v~llas a lares del mayorazgo solían arrendar el total de las tierras a dos su voluntad, aunque Cílanco permaneció prácticamente despo- o tres personas, quienes, a su vez, las subarrendaba al resto de

blada durante los siglos XVIII y XIX. I los vecinos con el consiguiente malestar entre ellos, pues, Si bien la ley de 6 de Agosto de 1811 había devue,lto la según sus propias palabras, "quedaban en la mercenaria cIa­ jurisdicción a la Nación, en Villatoya, los cargos municipales se de jornaleros"17 Era costumbre que los titulares del señorío que debían componer el Ayuntamiento eran "sugeridos" por el exigieran a los terrazgueros una cuantía global de dinero, el administrador de la casa de Villatoya, cuyos titulares lds ele­ "principal", por derecho de señorío, que los vecinos debían de gían anualmente, generalmente entre aquellos vecinos de su pagar cada año colectivamente: "Sin que durante este arren­

más absoluta confianza. I damiento no an de poder pedir vaja ni descuento alguno La explotación de las tierras la hacían los señores firmando del precio del principal por ninguno caso pensado o no pen­ contratos de arrendamiento con colonos que hasta allí llegabanI en sado de esterilidad que suzeda en él, de pocas o muchas busca de trabajo y sustento; se hacían a corto plazo con una dura­ aguas, piedra, niebla, langosta ni por otra cosa que benga ción, al menos desde la primera mitad del siglo XVIII, de nueve del zielo ni de la tierra porque dicho arrendamiento lo años, pues la ley no permitía que se hicieran por más de diez. hazen los susodichos a su riesgo y abentura ..., y por lo que El régimen de arrendamientos que los propietarios impo-I en contrario se pretendiere dijese o alegase, no han de ser nían a los terrazgueros fue muy duro durante los siglos X~III y oydos los dichos arrendadores en juizio ni fuera de él"18. primera mitad del XIX, tan duros como nos recuerda el mode­ Añadido al pago de la mencionada renta feudal, que, como lo de relaciones de vasallaje propias de una economía fe¿dal. queda dicho se repartía entre todos los colonos, también se Normalmente el absentismo era la norma general 6n los obligaban a hacer frente a obligaciones que por su condición de señores, que ejercían el control de sus tierras mediante la aten­ vasallos se les imponía individualmente por el arriendo de las ta vigilancia de sus administradores de rentas, que acdstum­ tierras, que generalmente resultaban abusivas. braban a elegir entre leales miembros de familias acomddadas El Ayuntamiento de la villa quedaba como garante de lo de la comarca, generalmente vecinos de Villamalea, AlbÓrea, y pactado y estaba obligado a confiscar las cosechas de los veci­ otras poblaciones próximas. El vecindario de Villatoya s~ com­ nos hasta que éstos pudieran pagar lo concertado en el contra­ ponía de una población flotante de colonos que allí llegaban en to " •••sea obligación del Ayuntamiento de embargar y depo­ busca de trabajo y su permanencia en la villa dependíal claro sitar los frutos que haya pendientes en las tierras que cul­ está, del comportamiento de las cosechas y la posibilidad de tibe cualquier vecino que en el día 3 de enero no haya com­ hacer frente a los pagos establecidos en los contratos de I arren­ pletado el pago del arrendamiento que le corresponda en el damiento. El colono que caía en desgracia, falto del amparo de año anterior, quedando en el mero hecho desalojado de las sus arrendadores, debía abandonar el término; los marqueses, propiedades que cultive y casa que havite sin más reque­

como dueños en .pleno y absoluto dominio de todas las I fincas rimiento ni citación"19. rústicas y urbanas, derechos y servidumbres, se atribJían la Conforme fue avanzando el siglo XIX creció el descontento facultad de expulsar de la población a aquellos agricultores entre los vecinos de Villatoya, que veían cómo las leyes desvin­ que no cumplieran escrupulosamente con las condicion6s pac­ culadoras y antiseñoriales emanadas de los gobiernos liberales de tadas, sin que pudieran alegar derecho alguno, ni objetar sobre la época no ponía fin a la ancestral arbitrariedad de sus señores. las clausulas convenidas. Cualquier intento de desobedi6ncia o A partir del la ley de 26 de agosto de 1837 parece enten­

agitación era castigado con la expulsión. I derse que ni Ayuntamiento ni colonos estuvieron dispuestos a

Se han conservado muchos de los contratos de I arren­ seguir cumpliendo con las condiciones suscritas en el último damiento 16 firmados entre los señores y los campesinos que arriendo. La resistencia de los colonos, alimentada con toda

I

15 Archivo Histórico Nacional Consejos suprimidos. Títulos del Reibo y Grandezas de España. Legajo 5240-Rel-N° 3 bis. También, "Asiento de Decreto de Gracia de Don Juan Francisco Pacheco sobre perpetuidad del título de Marqués de Villatoya". Libro 2752-a-1695-Núm. 49.

16 Año 1759, 12 de Diciembre. Protocolos de Bias de la Questa HeJeros, notario de Alborea. Agradecemos la consulta a nuestro amigo Ismael Civera. Archivo Histórico Provincial. Albacete. Sección Protocolos. Año 11808. Villamalea. Protocolos de Bartolomé Joséph Pardo de la Casta. Legajo 641.

I A.H.P Albacete. Protocolos. Año 1814. 2-Noviembre. Villamalea.' Protocolos de Bartolomé Joseph Pardo de la Casta. Legajo 641. A.H.P. Albacete. Protocolos. Año 1823 ViIlamalea. Protocolos delcayetano Carrasco. A.H.P. Albacete. Protocolos. Alborea. Año 1832-14-Marzo Protocolos de Cayetano Carrasco. Legajo 644. A.H.P. Albacete. Protocolos. Casas Ibáñez. Año 1844 - Septiemb~e-27. Protocolos de Juan Manuel Mayoral. Legajo 545. A.H.P. Albacete. Protocolos. Casas Ibáñez. Año 1854. 23-Septiembre. Protocolos de Juan Manuel Mayoral. Caja 549. I 17 A. H. P. Albacete. Protocolos. Casas Ibáñez. Protocolos de Juan f'1anuel Mayoral. 27 de Septiembre de 1844, folio 167 y ss. Legajo 545. También Protocolos de Castor Mayoral. Año 1857. Libro 761.

18 Contrato de Arrendamiento firmado en 1759 entre el mayordomo pe Don Alonso de Arellano y Pacheco Duque de Estrada y los colonos de Villatoya. Protocolos de BIas de la Questa Herreros. Propiedad particular.

19 A. H. P. Albacete. Protocolos. Alborea. Protocolos de Cayetano Carrasco. Clausula que figura en el contrato firmado el 14 de Marzo de 1832. Legajo 644.

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seguridad por un grupo de hacendadas familias ibañesas, fue la ilegalidad de las escrituras por no estar en el momento de su creciendo en los años que siguieron hasta hacerse insostenible. otorgamiento suficientemente representados cada uno de los El año 1832 el marqués de Villatoya, Don Rafael María vecinos, pues solamente unos pocos las fITmaron, ni siquiera Ramírez de Arellano y los colonos habían renovado el contra­ que aquel compromiso gozara de legitimidad pues se trataba t020 de arrendamiento por los nueve años acostumbrados. Al de tierras pertenecientes a un señorío jurisdiccional, como se final de dicho período y amparándose en el incumplimiento de había demostrado y, por tanto, suprimido por las leyes de 3 de la legislación desvinculadora, los terrazgueros dejaron de mayo de 1823 y de 26 de agosto de 1837. A más abundar, la mantener lo pactado con el noble y se negaron a pagar los ley de 1837 que incorporaba a la Corona los señoríos jurisdic­ 13.000 reales "del principal" en que se les había ajustado, por cionales, en su artículo 4° negaba el antiguo derecho de los considerar que eran rentas propias de señorío jurisdiccional y señores a recibir las prestaciones personales que de su condi­ consideraban que los señoríos jurisdiccionales estaban ya ción de señoriales se derivaban, a la vez que eximía a los pue­ extinguidos. Por otra parte, como era habitual que en los con­ blos de la obligación de pagarlas y aceptarlas, razones todas tratos quedara como subsidiario de lo pactado el Ayuntamien­ que ponían de manifiesto la ilegalidad de las imposiciones que to de la villa, que debía de responder de los compromisos estaban obligados a soportar los terrazgueros. Tanto más cuan­ adquiridos por el vecindario, éste se negó a cumplirlos, ale­ to que en su artículo 5° concedía a los titulares un plazo para gando que lo convenido nueve años atrás por una corporación presentar la documentación precisa que debía de decidir sobre anterior, ya cesada en sus funciones, no le comprometía. Por la clase de propiedad que constituían los derechos del señorío tanto, la corporación de 1841, que debía figurar como inter­ y el concepto de su tenencia. Los señores de Villatoya, además mediaria en la renovación de los contratos se negó a formar de no presentar tales títulos acreditativos, agotaron los tiempos parte de los nuevos acuerdos, interesada como estaba en des­ exigidos por la Ley que reseñamos, lo que jugaba en favor de pegarse de la tutoría señorial. Además, que como parte consti­ los demandantes. Ante el giro que iban tomando los aconteci­ tutiva de los terrazgueros temporales allí asentados, veía con mientos, los vecinos pidieron que se cumpliera la legislación buenos ojos el desencadenamiento de los hechos que se ve­ vigente y el tribunal procediera al secuestro de los bienes y nían dando, tal vez con la esperanza de que la resistencia veci­ derechos del marqués. En la exposición de los autos, el aboga­ nal diera paso a una situación de propiedad libre, de la que do de los toyanos expresaba el sentir del vecindario con no ellos serían los primeros beneficiados. Ante la oposición del poca vehemencia, tal que no nos resistimos a incluir aquí sus vecindario el marqués procedió ejecutivamente contra la palabras: "Sabido es, Señor, que el pueblo de Villatoya, des­ mayor parte de ellos arrojándolos de casas y tierras y embar­ tinado a vivir bajo la tutela de los Señores feudales y a gándoles sus menguados enseres. Como respuesta el vecinda­ sufrir el duro azote de los que, ajenos a la voluntad y capri­ rio disidente se puso bajo el amparo del Juzgado de Primera cho de aquellos que a la manera de absolutos disponían a Instancia de Casas Ibáñez, pidiendo en primer lugar que se su gusto de la vida y hacienda de todos los vecinos, ejer­ considerara ilegal el derecho de la casa de Villatoya a nombrar ciendo la facultad obnímoda de prescribirles y nombrarles alcaldes para la villa, pues aun seguía ejerciendo dicho dere­ las autoridades que habían de gobernarles y, en una pala­ cho cuando ya había quedado suprimido ese privilegio seño­ bra, estaban rebertidos del carácter de Señores Jurisdic­ rial por la obra legislativa de las Cortes de Cádiz (especial­ cionales exijiendo para este concepto las prestaciones tan mente por la ley 6 de agosto de 1811). En el transcurso del jui­ monstruosas como inconsideradas que absorvían todos los cio el abogado de los colonos trató de demostrar que el mayo­ productos que sus trabajos les suministraba a la vez esta­ razgo de Villatoya no procedía de dominio particular, sino que ban obligados a rendirles cierta especie de vasallaje que les debía considerarse señorío jurisdiccional, pues, efectivamente, constituía en la posición más humillante y tiránica que afli­ la casa nobiliaria siempre había gozado de la jurisdicción y gir pudo a la humanidad. Así transcurrieron los años sin gobierno del término, como tal municipio "público es que la esperanza de sacudir la terrible condena que pesara sobre justicia encargada de governar a los vecinos de Toya ha sus antepasados y sin descubrir el día en que, libres de sus sido elejida por los Marqueses de Villatoya y que sus crueles opresores, pudieran hacer cesar tanta vejación•••••.; representantes han percibido cantidades por poner en pero en el día, restablecido finalmente el gobierno constitu­ posesión a los que componían el Ayuntamiento"21, y por cional y conociendo la ociosidad que tal estado devía origi­ tanto era un derecho extinguido por el artículo 1° de la ley de nar procuró reducir en lo posible las facultades que tan 3 de Mayo 1823, además de declarar nulas y de ningún valor arbitrariamente les fueron concedidas, y efectivamente, se ni efecto todas las prestaciones reales y personales, regalías y dictaron leyes que abolían los derechos jurisdiccionales derechos anexos e inherentes, que tenían su origen en esa cla­ incompatibles con la unidad de la Monarquía•••• y que a se de señorío. Se presentaron recibos demostrando que los todos nos revela la ilegitimidad, el ningún fundamento que mayordomos de rentas cobraban 200 reales por poner en pose­ al Marqués de Villatoya asiste para percivir prestaciones sión a los c~rgos concejiles,22 así como también fue unánime de que está olbidándose de las obligaciones que la ley le la postura del vecindario al declarar que el primer filtro a la imponía dejó de edsivir los títulos en la época determinada, elección de cargos municipales lo imponían los marqueses al pero continuando, sin embargo en la percepción de aque­ impedir que ningún vecino pudiera residir en la villa sin su llos (derechos), que acaso cesaron ya en el año 1811, y que consentimiento. Así las cosas, con las pruebas aportadas, el solamente la ignorancia de los avitantes de Toya ha podido letrado elevó seguidamente a la consideración del tribunal que, influir en que todavía continúen. Dícese que el Marqués por los citados motivos, el pueblo debería quedar eximido de carece de justo título, carece de razón y de justicia y, en sus obligaciones de pagar entre otros derechos "el principal". efecto, así lo combence la resistencia que ha opuesto, ora en Exacerbadas las posiciones de los terrazgueros y, opuestos las épocas citadas, ora en la actualidad, no obstante la pro­ de forma legal contra el señor, también alegaron en su defensa mulgación de la ley de 26 de Agosto de 1837 y la pena que

20 El contrato anterior se había fITmado en 1823, ante el escribano Cayetano Carrasco, de Villamalea. A. H. P. Albacete. Protocolos Villamalea. Notario mencio­ nado. Folios 60-67. Legajo 642

21 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Audiencia Civil. Casas Ibáñez 27 de julio de 1842. Caja 1026.

22 Ibídem. 67 se marca en su artículo 5°, y no ha cumplido con este requi­ ria, que escasamente sufrió la expropiación en la medida que sito... Casas Ibáñez 27 de julio de 1842"23. la sufrieron las propiedades eclesiásticas y comunales. La bur­ Don Pedro Sotos Juez de Primera Instancia de Casas Ibáñes guesía revolucionaria pretendía transformar la propiedad terri­ y miembro de una las familias acomodadas de la villa dio la torial feudal en propiedad capitalista, es decir, en propiedad

I razón a los colonos de Villatoya, embargando y dejando libres sujeta a la libre circulación del mercado, aunque, de momento, las tierras, aguas, molinos, etc, del término, que quedarían en la nobleza pudiera seguir manteniendo la titularidad. lo sucesivos sujetas al derecho común, reglas y ordenhnzas Si bien, como ya se ha visto, las leyes desvinculadoras de

municipales que se aprobaran y establecieran en la villa. I 1823 y 1837 Y 1841 no consiguieron el secuestro definitivo de El día 9 del mes siguiente se constituyó el primer Ayun­ las tierras de Villatoya, sí que se produjo una transformación tamiento de representación ciudadana en la sala consistor~al de en la forma de ejercer la propiedad, y la situación cambió. La la villa para proceder al secuestro de los bienes de los ¡Mar­ nueva interpretación jurídica y cambio de sentido del concep­ queses "todas las huertas, tierras en secano, dehesas ~on­ to de propiedad permitió que después del juicio ejecutivo del tes y demás pertenecientes al Ilmo. Sr. Marqués de esta año 1842 fueran desapareciendo de los contratos algunas obli­ referida villa de Toya para que los reciba Don Raym~undo gaciones, gravámenes y prestaciones cuyo origen fuera inhe­ de Sotos (padre del Juez que había sentenciado y hermano del rente a derechos de señorío jurisdiccional, aunque, claro está, ilustre ibañés Don Bonifacio Sotos), vecino de la de Casas la Casa de Villatoya siguió manteniéndose en su derecho a Ibáñez, corno administrador judicialmente nombrado"24 expulsar a los colonos levantiscos. Era por aquel año titular del mayorazgo Doña Juana Rabírez Pero, retomando de nuevo nuestro relato, diremos que tras de Arellano. Su esposo Don Francisco Xavier Castillo Nabia los pleitos anteriormente reseñados, los señores, en señal de Osario, Marqués de Jura Real, recurrió por medio de sus abo­ disgusto por el comportamiento decididamente desleal de los gados la sentencia del Juzgado de Primera Instancia ante la colonos, opusieron una tenaz resistencia a seguir firmando Audiencia Provincial de Albacete, tribunal que, como eh tan­ contratos con ellos. Pasado algún tiempo, las constantes peti­ tas otras ocasiones y latitudes25 , falló en favor de los señores, ciones al perdón y a la concordia de aquellos vecinos que toda­ al considerar que no era un señorío incorporable a la nabión y vía pudieron mantenerse en la villa les hicieron desistir de su sí tierras de propiedad particular pues " ••Ios títulos de adqui­ actitud. No obstante, en los nuevos contratos, como ya dijimos, sición de la espresada villa de Toya no son de los que deban se procuró evitar algunas cláusulas de carácter especial que presentarse, pues dicho pueblo le ha correspondido ¡siem­ pudieran parecer imposiciones fundamentadas en derechos pre corno propiedad particular, adquirida por título hone­ señoriales, o bien de naturaleza odiosa al sentir del vecindario, roso y, por consiguiente, están exceptuados de la referida tales como figurar en ellos los terratenientes como propietarios presentación con arreglo al artículo 3° de la Ley de 1 26 de de colonos y tierras, o aquellas que obligaban a embargar y agosto de 1837•••es, por tanto injusta la providencia ~n que depositar en el Ayuntamiento los frutos para la seguridad de su se acordó una medida tan prematura e ilegal. Nada irttpor­ venta, que, a su vez, garantizara el pago de los colonos al mar­ ta que el Marqués fuera señor jurisdiccional de Villa~oya si qués, ni ciertas prestaciones personales de dependencia vasa­ prueba en el juicio que la ley prescribe que los predios rús­ llática, ni derechos de cobro de determinadas rentas ya extin­ ticos y urbanos y los censos consignativos y reser~ativos guidas, todas ellas de origen feudal, propias del señorío juris­ que disfruta allí le han pertenecido hasta ahora corno pro­ diccional, que real y efectivamente habían venido ejerciendo piedad particular. En tal caso, ni puede ser perturbJdo en sus titulares hasta entonces. I su posesión ni hay derecho para exigirle la presentación de Después de que los ánimos se calmaron, y como señal de los títulos de adquisición, ni menos pueden secuestrarle buena voluntad, los marqueses, optaron por celebrar los con­ aquella...Albacete, 16 de Noviembre de 1942"26. I tratos de arrendamiento de las tierras a favor del Ayuntamien­ La ley de 26 de agosto de 1837, en su artículo 3° no obli­ to, "a nombre del común de vecinos y luego repartiera las gaba a la nobleza que tuviera sus propiedades a título particu­ fincas a proporción de las que buenamente podía cultivar lar a presentar la documentación acreditativa del carácter de su cada uno cobrando de ellos la cantidad que a prorrata les propiedad; en cambio exigía a los arrendatarios a pagar las ren­ correspondía y pagando luego al Señor Marqués el precio tas hasta que hubiesen finalizado los juicios en curso sobre la total del arrendamiento..."27. Aunque la ley obligaba a firmar posesión de tierras "que los pueblos continúen pagando las contratos individuales, de particular a particular, como se verá, prestaciones y rentas correspondientes interím se debide el en Villatoya se hizo un bucle para evitarlo, poniendo al Ayun­ pleito••", lo que dejaba sin efecto, por tanto, el secuestro de las tamiento de la villa, nada independiente, por cierto, y a un gru­ tierras dictado por el Juez de Casas Ibáñez, a la vez qJe obli- po de ocho mayores contribuyentes de la comarca como fiado­

gaba a los colonos al pago de las rentas convenidas. I res subsidiarios, que garantizaran el cumplimiento de los com­ En realidad las leyes desvinculadoras de los años treinta y promisos contraídos por los colonos. La solución encontrada, cuarenta no pretendían otra cosa que transformar el derecho de por una parte satisfacía el deseo de las familias acomodadas de propiedad de las tierras, sin que significara necesariamente su los pueblos circunvecinos al poder participar en los beneficios traspaso al Estado. Con ellas, según Anes, Clavero y otros de las rentas de Villatoya, a la vez que de la otra sus propieta­ autores, la alta burguesía aliada con la nobleza no pretendía la rios se aseguraban el cobro de los arrendamientos y aplacaba enajenación ni acabar con el derecho de la propiedad nobilia- sus miedos de verse asaltados y despojados de sus tierras.

23 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Audiencia Civil. "Denun6ia sobre el secuestro de bienes del Marquesado de Villatoya por no haver presentado los títu• los en tien1po, según ley de 26 de agosto de 1837". Año 1842. CJja 1026. Expediente Núm. 5.

24 Ibídem. I

I 25 Concretamente en nuestra provincia la Audiencia Provincial tam9ién revocó la sentencia del Juzgado de Pritnera Instancia de Almansa, respecto al secuestro de las propiedades en Montealegre, del Marqués de su nombre. Ver:Archivo Histórico Provincial. Albacete. Audiencia Civil. Expediente Núm. 2. folio 149. Caja 1026.

26 Archivo Histórico Provincial. Audiencia Civil "Los vecinos de Villatoya hacen parte al Señor Fiscal con el Marqués de dicho pueblo sobre presentación de títu• los y secuestro de sus rentas. Casas Ibáñez 1842". Expediente Núm. 5 Caja 1026.

27 A.H. P. Albacete. Protocolos. Casas Ibáñez. Protocolos de Juan ianuel Mayoral. 27 de Septiembre de 1844, folio 167 y ss. 68

Pero, si bien el régimen señorial apareció en lo sucesivo qués de Villatoya, usando de su derecho trataba de cultivar notablemente devaluado, en cambio, dadas las condiciones de por su cuenta los bienes de su propiedad en este término o aislamiento e incomunicación de esta pequeña villa, permitió de arrendarlo a sola una persona, entonces los vecinos de la que se diera paso a otro cOlnportalniento, tal vez lnás inmise­ villa se verían privados de un grande veneficio y en la clase ricorde, el caciquil. de precarios jornaleros, o cuando más de subarrendatarios, Los contratos de 184428 y 185429 coinciden literalmente en y teniendo presente la justa resistencia del actual Señor las cláusulas y en ellos se incluyen, de parte de la casa señorial, Marqués a celebrar con los componentes del Ayuntamiento el reconocimiento por la otra parte de su condición de propieta­ bajo el carácter de corporación municipal representativa rios particulares de un suelo no vinculado: "que los Señores del común de vecinos por la misma escepción que éstos ale­ Marqueses de Villatoya desde tiempos muy antiguos cuyo garon de no poderles afectar la obligación contraída por principio no alcanza la memoria de los vecinos más ancia­ aquella corporación, después de varias conferencias y peti­ nos, vienen poseyendo todos los predios rústicos y urbanos ciones que dirigieron al Señor Marqués por medio de dos de esta villa y los montes; y ejerciendo con ellos no sola­ comisionados que mandaron el año de mil ochocientos cua­ mente los derechos de posesión sino también los de dominio renta y cuatro y otras que le han remitido posteriormente pleno, como igualmente en los montes, aguas, yervas o pas­ por lo respectivo al modo de celebrar en nuebo contrato de tos de las dehesas que en uso de este derecho les arrendaban arriendo y condiciones con quienes deben conceder y admi­ reserbándose para los usos que les acomodaban los que te­ tir, y de haber convenido últimamente en éstas y que el nue­ nían por conveniente, percivían el precio del arrendamien­ vo contrato se celebre con el Ayuntamiento y todos los veci­ to, cuyo contrato renovaban o hacían de nuebo cada vez que nos en concejo público, previa convocación ante-díem para espiraba el término prefijado en el último: Que siendo pro­ el citado efecto, que de haber manifestado todos los concu­ piedad de los señores Marqueses de Villatoya, todo el terre­ rrentes quedaba practicada; yo el escribano doy fe y que no comprendido dentro del término jurisdiccional de esta debían quedar tenidos y obligados especialmente al cumpli­ villa y conociendo que de darlo en arrendamiento a solas miento de dicho contrato ocho de los vecinos mayores con­ dos o tres personas, las demás que componen el vecindario tribuyentes, y el Ayuntamiento que lo es o el que fuere quedaban en la mercenaria clase de jornaleros, había teni­ durante la duración de él mancomunadamente"30 do la consideración dicho Señor Marqués de celebrar los La ley de 1 de mayo de 1855, que ponía fin a los señoríos contratos de arriendo a favor del Ayuntamiento, cuya cor­ residuales, trajo pocos cambios para los vecinos que siguieron poración intervenía y otorgaba a nombre del común de veci­ en su la ancestral hambre de tierras . nos y luego repatía las fincas a proporción de las que bue­ Para evitar en lo sucesivo preocupaciones y sobresaltos, el namente podía cultivar, cobrando de ellos la cantidad que a 31 de diciembre de 1857, Don Javier Castillo Nabia Osario y prorata les correspondía, y pagando luego al Señor Mar­ su esposa Doña Juana Ramírez de Arellano, escrituraron las qués el precio total del arrendamiento, cuyo orden habían tierras en sus hijos Don Joaquín Castillo y Don Francisco guardado con grande beneficio de los vecinos según consta Javier, que inscribirían posteriormente en el Registro de Casas de escrituras públicas hasta el año de mil ochocientos cua­ Ibáñez como bienes heredados3l • Con ello los titulares de la renta y uno en que se resistieron a pagar el precio del arren­ casa de Villatoya quedaron convertidos en meros propietarios damiento alegando que la obligación contrahida por el privados y legitimada su titularidad, neutralizándose así cual­ Ayuntamiento y algunos vecinos mayores contribuyentes no quier intento legal de enajenación. En adelante los Marqueses afectaba al vecindario; y insertando pleito sobre el origen de tuvieron la firme voluntad de no dividir su patrimonio, siendo la propiedad de los Marqueses de Villatoya. Que al presen­ el titular el encargado de la administración de las tierras. te, libres de las sugestiones que los determinaron a seguir Los señores siguieron fumando contratos de arrendamien­ aquella conducta, conociendo que nunca fueron prestacio­ to cada nueve años. Los colonos aparecían representados por nes originadas del Señorío Jurisdiccional los pagos que le un alcalde elegido por los mayordomos de rentas de la casa de han hecho a los Señores Marqueses por el disfrute de sus Villatoya, y la guardia rural que custodiaba los campos y cul­ predios, sino propios de los arrendamientos celebrados, tivos del término eran puestos por la casa nobiliaria, lo que puesto que siempre aquellos Señores han ejercido el domi­ facilitaba el control absoluto sobre las propiedades. nio y gozado la posesión que extrajudicialmente les consta Al finalizar uno de estos períodos, en 1882, el vecindario se adquirieron por justos y antiquísimos títulos de compra; y resistió a celebrar nuevas escrituras no sin antes consultar con los vecinos y sus antepasados sólo el carácter de arrendata­ un prestigioso político y abogado alicantino, Don Eleuterio rios o colonos. Considerando también que si el actual Señor Maisonnave, que les aconsejó que llevaran su denuncia a las Marqués de Jura Real en representación de sus Señores puertas de los altos estamentos del Estado, pues la ley de 1 de hijos, Don Joaquín, Don Francisco Javier y Doña Concep­ mayo de 1855, anteriormente reseñada ya había sentenciado ción Castillo y Ramírez, el primero como primogénito, Mar- sobre el particular32•

28 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Protocolos. Casas Ibáñez. Protocolos de Juan Manuel Mayoral, 27 de Septiembre de 1844. Legajo 545. Folio 167 y ss.

29 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Protocolos. Casas Ibáñez. Protocolos de Juan Manuel Mayoral, 23 de septiembre de 1854. Legajo 549. Folio 216 y ss.

30 Archivo Histórico Provincial. Albacete. Casas Ibáñez. Protocolos. Protocolos de Juan Manuel Mayoral, 27 de septiembre de 1844. Legajo 545. Folios 167 y ss.

31 Se inscribió en el folio 2° del libro 42 de Registro Antiguo, actualmente depositado el Colegio de Registradores de la Propiedad, en Madrid.

32 "Respuesta a la consulta que le formula el Ayuntamiento de Villatoya al letrado que suscribe sobre cuales son los derechos que a los vecinos de Villatoya corresponden enfrente de los que se atribuye el nmo. Sr. Marqués de Jura Real y procedimiento que en su caso debe seguirse para que pueda prospe­ rar. E. Maisonnave. Abogado. Madrid 21 de abril de 1883". Informe presentado al Ayuntamiento de Villatoya, según su consulta, por el abogado Don E. Maisonnave en abril y junio de 1883. Procedente del Archivo familiar de los Marqueses de Jura Real y Villatoya. S. C. Propiedad particular. Agradecemos la copia y consulta del docUlnento citado a nuestro amigo Ismael Civera. Eleuterio Maisonnave y Cutayar, político y periodista, nacido en Alicante el 6 de Septiembre de 1840. Estudió Derecho en Valencia y Madrid. Desde muy joven par­ ticipó en los movimientos políticos más progresistas de su tiempo. Al estallar la Gloriosa, revolución que él había contribuido a preparar, desempeñó varios cargos políticos. Fue concejal y alcalde de Alicante y diputado por su provincia varios años. Llegó a ser lninistro de Estado y Gobernación. Fundó la Caja de Ahorros de Alicante y siempre estuvo muy vinculado a los movimientos sociales y políticos que redundasen en beneficio del pueblo. Murió en Madrid el 5 de mayo de 1890.. 69

Los vecinos iniciaron nuevamente un juicio, denunciando cuenta que se estaba ante la pervivencia de un señorío juris­ la ilegalidad de las prestaciones que se incluían en los contra­ diccional, que debería, como tal, estar ya incorporado a la tos de arrendamiento, como peonadas, custodia del monte, la Nación. No obstante, pronto se vio que iba a ser un largo plei­ obligación los vecinos de moler en el molino señorial, apro­ to con la casa de Villatoya y que no estaba al alcance de las vechamiento de aguas, montes, y otras condiciones en ¿l uso arcas del vecindario el poder mantenerlo. Los colonos desis­ de la tierra, que la casa de Villatoya justificaba como privati­ tieron finalmente de seguir adelante, al entrar en la considera­ vos de sus derechos de propiedad. Los vecinos pedían a la jus­ ción de la inutilidad de dicho pleito, pues con ello no ganaban ticia que se declarasen nulos dichos privilegios y prestac,iones nada, ya que tanto daba que las tierras fuesen del marqués, personales consignadas en los contratos entre los colonos y como del Estado.

los señores de Villatoya, pues tenían su origen privativo I en la En adelante los campesinos siguieron una política de resis­ consideración de propiedad feudal y, consecuentemente, tencia al negarse a seguir firmando los arrendamientos de la carentes de la fuerza y eficacia que les daba el derecho ~igen­ tierra mientras los propietarios se mantuvieran en la actitud de te. Los defensores de los intereses de los colonos sostenían no hacerlos en los términos de equidad y justicia que las dis­ que había cláusulas introducidas por los marqueses deI Jura posiciones del derecho común requerían. Real y Villatoya en los contratos que no debían cdnstar, Ya en las últimos años del siglo XIX las escrituras de arren­ impuestas en los contratos por los dueños de las tierras, y estar damiento comenzaron a hacerse individualmente con cada regulados exclusivamente por la voluntad de los contratantes vecino, que se representaba a sí mismo, contra el que el mar­

y el derecho común. I qués de Jura Real y Villatoya podía entablar juicio sin quedar Deberá entenderse, no obstante, que este juicio no era más subsidiario el Ayuntamiento, ni hacer extensiva su demanda a que una maniobra de los colonos dirigida a llamar la atdnción los demás colonos, ni tener que desahuciar a todo el pueblo. En de la Fiscalía del Estado para que entrara en la consideración la redacción de los contratos firmados entre ambas partes se sobre el origen y naturaleza de la propiedad de la casa de:Villa­ evitó incluir aquellas cláusulas que pudieran parecer prestacio­ toya, con el intento de obligar, de paso, a que el Estado se per­ nes señoriales, consiguiéndose un modelo de documento de los sonara como parte en el litigio. Podía resultar, por tanto, ven­ que se otorgaban ordinariamente en la época. tajoso implicar al Estado en él, pues pronto se caería! en la

LA DISOLUCIÓN DE LA PROPIEDAD SEÑORIAL

El siglo XX heredó los ancestrales problemas que I desde 1°._ Un edificio destinado a Iglesia Parroquial en la Pla­ siempre venía arrastrando la agricultura española, entre los que za Mayor.." sobresalía por su importancia la distribución de la propiedadI 2°._ Un edificio destinado a casa-habitación del Sr. de la tierra que en buena parte aún continuaba en manos de la Cura..." nobleza terrateniente. Es de suponer que en los primerqs años 33 .-Un edificio destinado a ermita del Balneario de la del siglo no se reavivara la contestación social en el término, o Concepción, situado en extramuros....." no fuera lo bastante firme para iniciar un nuevo pleito cqntra la Los edificios expresados anteriormente eran propiedad de casa de Villatoya, pues la situación seguía sin variación desta­ la Iglesia. cable, y la propiedad continuaba en manos de los titulates sin 4°._ Un edificio destinado a Cementerio viejo, en extra­ mutilación alguna, pues así Jo confirman las contestaciones muros..." que dieron las autoridades municipales al interrogatotio del SO.-Un edificio destinado a Cementerio nuevo en la administrador de rentas públicas de la Provincia encargado de Loma de Sabina fijar la cuantía de las contribuciones en la villa. La contesta­ Ambos de propiedad municipal. ción del año 1923 de los representantes municipales fue como 63 Un edificio destinado a Casilla de Peones camine­ sigue: "Y visto que en este pueblo no hay mayores contri­ ros...35• buyentes por rústica ni urbana que puedan figurar hor tal Aunque con unas condiciones más adaptadas a la concien­ circunstancia en las referidas listas por tratarse ~e que cia social de la época, los colonos tuvieron que seguir acep­ todo el término municipal es propiedad de la Excma. Sra. tando los contratos de arrendamiento que imponían los mar­ Marquesa de Villatoya, resultando por tal motivo Ique el queses. vecindario es arrendatario de dicha Señora, no tributa al Con el advenimiento de la II República se abrieron nueva­ Tesoro por los conceptos antes apuntados..."33. mente las esperanzas de saciar el ancestral hambre de tierra de En parecidos término se manifestaron las autoridades loca­ los colonos de Villatoya. El 15 de septiembre de 1932 se apro­ les cuando se procedió a cumplir con el R.D. de 8 de septiem­ bó la Ley de Reforma Agraria, cuya base 5a establecía trece bre de 1925, que mandaba hacer en cada Ayuntamibnto el categorías de tierras expropiables. Desde el primer momento registro fiscal de fincas urbanas. Una vez realizado el i:nventa­ se comenzó a recoger información sobre las tierras que podían rio se comunicó al Sr. administrador de rentas públicas de la ser susceptibles de expropiación. A principios de enero de provincia "que en este término no existe más contri~uyente 1933, la Dirección General del Instituto Nacional de Reforma que la Excma Sra. Marquesa de Villatoya..."34. En el recin­ Agraria abrió un período declaratorio en los registros de la pro­ to urbano de Villatoya solamente quedaban fuera de la Ipropie­ piedad de las fincas aptas de ser embargables36• dad de la marquesa, aunque estaban exentas de pago tributario, La Junta Provincial de la Reforma Agraria entendió que las fincas siguientes: I Villatoya y Pétrola resultaban ser las candidatas más destaca-

I 33 Archivo Municipal de Villatoya. Acta de la sesión municipal de ~ de enero de 1923. Sin Clasificar.

34 Archivo Municipal de Villatoya. Sesión extraordinaria del Ayuntamiento de 10 de noviembre de 1925. S. C.

35 Ibídem.

36 El Defensor de Albacete, 2 de enero de 1933. 70

das para ser declaradas susceptibles de expropiación3? Des­ vivió con visible desesperanza pues veían, como en tantas pués de un amplísimo informe del Ingeniero Jefe del Servicio otras ocasiones, que la República tampoco satisfacía su pro­ Agronómico provincial, señor Garrido, sobre la propiedad en mesa de entregarles aquella tierra tantas veces pedida y siem­ Villarrobledo, Hellín y Yeste, se convino en "Que los casos pre negada. típicos y más destacados que la provincia ofrece son Villa­ El triunfo de la candidatura frente-populista en febrero de toya y Pétrola, en los que por la concentración de la pro­ 1936 llegó sembrado de promesas para el vecindario. La eufo­ piedad rústica y calidad de los terrenos se podía ensayar un ria cundió por la villa, donde las izquierdas habían ganado sistema de asentamiento individual de riego en el primero mayoritariamente, pese a los intentos de algunas familias de y colectivo en secano, en el segundo." comprar el voto para la derecha. El aire de victoria era general El 28 de julio de 1933 se reunió la Junta Provincial para entre la población y una improvisada copla contra aquellos que tomar el acuerdo de informar a la Dirección General de la intentaron torcer la voluntad del voto se cantó por las calles en extensión y límites que se fijaban a efectos de expropiación en esos días. La letra decía: el municipio de Villatoya, según quedaba establecido en el "En Villatoya, señores, apartado 13 de la Base 5a de la Ley de Reforma Agraria. Como estamos todos muy unidos, es sabido, las Juntas Provinciales eran meramente consultivas menos cinco "morcilleros"41 y no tenían ningún poder ejecutivo, que se reservaba la Direc­ que con el cura se han ido". ción General del 1. R. A. En la reunión mencionada, la Junta Eran vecinos de significadas tendencias derechistas que, tal tomó el acuerdo de considerar expropiable38: vez por miedo a represalias, abandonaron sus domicilios. La Tierras dedicadas al cultivo de herbáceas 450 Hectáreas. copla habla por sí sola del general entusiasmo que se estaba Plantaciones dedicadas al cultivo de la vid 125 Has. viviendo en la villa. Olivar 225 Has. La orden de la Dirección General de la Reforma Agraria, Arboles frutales 150 Has. de 4 de marzo de 1936, que restablecía el derecho de ocupa­ Aunque el Instituto de Reforma Agraria inició el expedien­ ción por los campesinos de las tierras que había derogado la te de expropiación, bien es verdad que los vaivenes, retrocesos ley de 21 de septiembre de 1935, siempre que las Juntas Pro­ y ambigüedades resultantes de los gobiernos de centro-derecha vinciales de Reforma Agraria hubieran tomado posesión de que siguieron en la nación dejarían en suspenso los proyectos ellas, encendió los ánimos del campesinado de Villatoya, que reformistas. viendo el desarrollo de los acontecimientos, comenzaron a El el gobierno de centro-derecha que se estrenó en octubre hacer planes para ocupar por su cuenta las tierras que la Repú­ de 1934 significó un retroceso para el desarrollo de la Ley de blica les había prometido. La calma se hizo pronto entre la Reforma Agraria. El ejecutivo conservador no tardó en borrar población de la villa al recibirse en el Ayuntamiento una circu­ toda memoria de la legislación progresista elaborada en los lar fechada el 27 de Marzo de 1936 y enviada por el Director primeros años de la República, lo que significó el olvido del General de la Reforma Agraria, en la que llamaba a los arren­ proyecto inicial, y, por tanto, se extendió más aun entre los datarios a la tranquilidad, a la vez que les prometía que la colonos la frustración y con ella en su rebeldía. El vecindario redistribución de la tierra la haría el Instituto ordenadamente y toyano veía con inquietud pasar el tiempo sin que la Repúbli­ con arreglo a las disposiciones emanadas del Gobierno. En ca cumpliera sus compromisos, lo que generó un notable fer­ caso de no guardar la calma el Director General amenazaba mento revolucionario, diariamente alimentado por la corpora­ "con excluir de los beneficios del asentamiento a los obre­ ción de afiliación izquierdista de cuyo desenlace, naturalmen­ ros que asalten las fincas", lo que trajo consigo que, de te, desconfiaban las autoridades provinciales. Ante tal situa­ momento, se aplazasen los intentos de los colonos de ocupar ción entre las medidas que tomó el gobernador civil de la pro­ las tierras42 • Tras algunos meses de espera, el Instituto de vincia, señor Aparicio Albiñana, fue destituir al alcalde Sr. Reforma Agraria anunció la próxima incautación de las tierras Juan de Dios Jiménez y a la corporación socialista, con fecha pertenecientes a la casa de Villatoya, acontecimiento que se 8 de octubre, a la vez daba orden al comandante de puesto de vería reflejado en la prensa provincial. El viernes 5 de junio de .la guardia civil para que nombrara una comisión gestora, has­ 1936, "El Defensor de Albacete", anunciaba: "Mañana día 6 ta tanto se-nombrara un nuevo Ayunúimient039• a las 12 tendrá lugar el acto de ocupación de la finca deno­ La situación, como en tantos otro lugares, desencadenó el minada Villatoya, sita en el término municipal de su nom­ descontento del campesinado y se insinuaron algunos conatos bre..."43 Al acto acudieron el Ingeniero Jefe provincial del Ins­ de agitación, que no llegaron a cuajar dadas las características tituto de Reforma Agraria de Albacete, Don Andrés Abasolo que presentaba ser una pequeña villa de escaso vecindario. Herrero, el diputado. socialista Don Jo'sé Prat, el Director Con el fin de prevenir dichas alarmas sociales no deseadas, las General del 1. R. A., señor Vázquez Humasqué, y otras perso­ autoridades provinciales solicitaron de la marquesa un local en nalidades provinciales y nacionales. El acontecimiento, tantos Villatoya donde alojar una pareja de la guardia civil40 • años esperado, cumplía un deseo sin parangón en la memoria Durante los meses que siguieron el expediente de expro­ de la villa. Tal vez habría que remontarse a un siglo atrás, piación de Villatoya quedó paralizado y, por tanto, no se con­ cuando el juzgado de Casas Ibáñez, con un criterio más liberal sumó la incautación de las tierras, proceso que el vecindario del que se podía esperar, según se vio por el resultado poste-

37 Ibídem. Viernes 7 de julio de 1933.

38 El Defensor de Albacete. 29 de julio de 1933. También figura en la relación provincial publicada en el suplemento del diario mencionado el 26 de Agosto de 1933 y en el Boletín Oficial de la Provincia de 20 de Septiembre de 1933.

39 Archivo Municipal. Villatoya. Acta 16 de octubre de 1834. S.C.

40 Archivo Municipal de Villatoya. Sesión de 28 de octubre de 1934. S.C.

41 Se refiere a cinco votantes de derechas que habían tratado de comprar el voto para su partido a cambio de una orza de morcillas por voto. La copla la hemos recogido de Doña Victoria Murcia, vecina de la villa.

42 Boletín Oficial de la Provincia de Albacete. 28 de marzo de 1936. Así mismo, telegrama enviado por el Gobierno Civil de la Provincia al Ayuntamiento.S.C.

43 "El Defensor de Albacete" Viernes, 5 de junio de 1936. 71 rior de los hechos, decidió incautarse de las tierras del señorío, arriendo a las familias de colonos allí asentadas, en espera de como anteriormente relatábamos. tomar otra determinación. A pesar de que el día siguiente fuera domingo, el pleno Los regidores municipales aprovecharon la ocasión para municipal se reunió en sesión extraordinaria para: "Seguida­ intentar dotarse de algunos servicios que hasta entonces eran mente y por unanimidad se acordó declarar fiesta local el impensables. Entre otros solicitaron al gobierno de la Repúbli­ día SEIS DE JUNIO de todos los años en conmemor~ción ca la dotación de fluido eléctrico para el pueblo, del que care­ de la reivindicación de todo el vecindario de este término cían, aun tratándose de una época tan tardía y contando con municipal, el cual con su abnegada fe y fervor republicano, una central eléctrica próxilna en El Molinar. Con estas palabras ha sabido romper para siempre las gruesas cadenas de la se dirigieron al Sr. Delegado de la Dirección General de Eva­ esclavitud, desterrando al amo y señor de vidas y hacien­ cuación y Refugiados de Valencia: " •.•Que enterado este con­ das, que desde tiempos remotos ha venido soportando y sejo Municipal y vecinos de que en el antiguo Balneario de hubiese seguido en la misma esclavitud si el 16 de febrero la Concepción de este término municipal se va a instalar el pueblo español no hubiese sabido cumplir con su deber por el Ministerio de Trabajo y Asistencia Social un alber­ de ciudadanía votando a los nombres del poderoso F:rente gue para Refugiados ancianos y de que dicho Albergue va Popular, los cuales con la voluntad del pueblo en sus manos a ser dotado del necesario fluido eléctrico. Y como quiera guiaron la nave española por el camino de la prosperidad y que este pueblo carece de alumbrado eléctrico y carecerá de la justicia social". En la misma sesión también se catnbia­ siempre si el Gobierno de la República Democrática no le ban los nombres de la calles, dándole a la de Alborea el huevo presta auxilio necesario.."46. Como puede verse los propieta­

de " Calle del Seis de Junio"44. 1 rios del término tenían sumido al vecindario en la mayor de las Algunos días después el Ministerio de Agricultura ebvió a carencias y en el texto queda patente un tono de súplica al la prensa provincial y nacional la siguiente nota: "Madrid. ­ gobierno democrático para dotarse de un servicio que, por otra Con gran entusiasmo se realizó el sábado próximo pasado parte, casi todos los pueblos circunvecinos ya habían saludado la incautación y entrega al vecindario de la finca "Villato­ al comienzo del siglo. ya" que constituye todo el término municipal de su ndmbre El alzamiento de las tropas del general Franco contra el en la provincia de Albacete, por haber sido declarada de gobierno de la República vino a trastocar la situación. Desde el utilidad social. Dicha finca de 1.870 Has. de secano, regadío comienzo de la sublevación se puso especial énfasis en restau­ y monte, fue un antiguo señorío jurisdiccional, cuy~s tie­ rar las antiguas estructuras económica modificadas por la rras vuelven hoy al poder de los campesinos. El acto se República, destacando entre todas el interés por dejar sin efec­ celebró con una gran sencillez. Suscribió el acto el Ditector to las disposiciones contempladas por la legislación emanada General, señor Vázquez Humasqué y el Secretario Gene­ por la Reforma Agraria. El artículo segundo del decreto 133, ral, Señor Ayensa, procediéndose a la lectura del misino en fIrmado en Burgos el 25 de septiembre de 1936, por el bando medio de los acordes del himno de Riego. vencedor, revocaba la Ley de Reforma Agraria de la Repúbli­ ~ , En Albacete ha causado una magnífica impres~on el ca, restituyendo los derechos de la vieja oligarquía terratenien­ acto que representa la liberación de un centenar de' fami­ te47 Naturalmente, la restauración del viejo orden se ejecutaría lias que viven en aquella zona y esperan que continúe tan al mismo concluir la contienda. beneficiosa labor por la paz campesina, actuando eri otros Durante los años que siguieron la casa de Villatoya siguió términos tan necesitados como el de Villatoya, que ell Insti­ arrendando sus tierras a los colonos instalados en la villa como tuto de Reforma Agraria proceda a la incautación y ~ntre­ siempre 10 había hecho. La hoja-resumen del censo, fITmada ga a los trabajadores de la tierra cuya posesión dese~n con por la corporación municipal el 20 de marzo de 1941, nos todo ahínco"45. Las tierras pasaron a ser propiedad del Insti­ informa que la villa estaba habitada por 97 familias, población tuto de Reforma Agraria que las dejó momentáneamente en que se distribuía como sigue:

I

I CENSO DE POBLACIÓN

I TRANSEÚNTES ~USENTES TRANSEÚNTES Varones. Mujeres ';'arones. Mujeres Varones. Mujeres

I 213 206 20 18 5 7

I Total.- De hecho 431 habitantes. De derecho 457.48

I El mes de julio del año siguiente, Doña Pilar Castillo y de comerciante de vinos valenciano. La venta estuvo casi cerrada la Torre, Ramírez de Arellano y Ortiz, marquesa de Villatoya, y se llegó a dar cierta cantidad de dinero adelantado en señal viuda de Don Andrés de Covarrubias y Laguna, últimalposee­ de compromiso. dora del mayorazgo, decidió venderlo al Señor Monzón, un

I

44 Archivo Municipal de Villatoya. Libro de acuerdos municipales 1934-36. Acta de 7 de junio de 1936. S.C.

1 45 Nota del Ministerio de Agricultura inserta en "El Defensor de Albacete" Diario independiente de la tarde. Albacete, 12 de junio de 1936.

46 Archivo Municipal. Villatoya. Comunicado del Ayuntamiento al Qelegado de Valencia de la Dirección General de Evacuación y Refugiados. Villatoya, 5 de abril

de 1938. Sin clasificar. I

47 Boletín Oficial de la Junta de Defensa Nacional de España, Burgos 28 de Septiembre de 1936. Decía: "Las fincas rústicas invadidas por campesinos o jornale­ ros, con posterioridad a la fecha 16 de febrero de 1936, cuya situación no haya sido legitimada por la superioridad, y cuyos propietarios deseen recuperarlas para su explotación, se reintegran a la plena disposición de sus d~eños, quedando anulados y sin valor, mientras no se renuevan por voluntad de las partes los pactos o contratos que, para formalizar la situación creada, hayan podido firmarse Los propietarios no tendrán obligación de satisfacer las labores que en las mismas hayan realizado los intrusos. Burgos 25 de septiembre d9 1936. Miguel Cabanellas.

48 Archivo Municipal de Villatoya. Censo de población propuesto por el decreto de 4 de junio de 1940. Papeles sin clasificar.

I 72

Día 6 de junio de 1936. El vecindario de Villatoya en el balneario de Fuentepodrida, donde se celebró la comida de hermandad con motivo de la confiscación de las tierras del señorío. En ella el senador Don José Prat y el Director General Sr. Vázquez Humasqué, entre otras personali­ dades. Fotografía cedida por Don Ángel Gómez Murcia, nieto de Don Jenaro Murcia Gómez, alcalde de la villa por el partido Izquierda Republicana.

Día 6 de Junio de 1936. El vecindario de Villatoya ante la puerta de Ayuntamiento del la villa. Como la anterior, también cedida por Don Ángel Gómez Murcia. 73

Alertado el Alcalde de la Villa de los acontecimiento que se de adquisición al Ministerio de Agricultura, el Ministro acce­ estaban desarrollando acudió al Secretario del Ayuntamiento dió a ella, por Orden Ministerial de dieciséis de junio del año de Alborea para que le informara sobre la existencia de qlguna que llevamos dicho, "en el sentido de adquirir esta finca por ley que permitiera a los vecinos tener preferencia de cdmpra, un millón setecientas cincuenta mil pesetas, más veintidós

pregunta que quedó sin respuesta. I mil setecientas cincuenta pesetas por el uno treinta por Sincronizados ambos hechos en el tiempo, en ese Ihismo ciento de pagos, con la facultad de vender la parte agrícola instante también llegaba a la puerta de casa de Doña Pilar una y edificaciones en ella enclavadas al Instituto Nacional de representación del vecindario a pedir audiencia y solicitar de Colonización"51. ella que reconsiderase sus intenciones. Si bien la Señora estu­ En la gestión de compra-venta, Doña Pilar Castillo de la vo conforme en anular la venta en tanto que los toyanos pudie­ Torre, marquesa de Villatoya estuvo representada por Don ran recaudar fondos para quedarse con las tierras, un pariente Javier Molina Molniero, en virtud de los poderes que la citada político de la familia se negó rotundamente a que se deshicie­ Señora le había dado ante el notario de Madrid, Don Rodrigo ra lo convenido con el industrial valenciano. Molina Pérez; el organismo oficial comprador estuvo repre­ Por otra parte, el gobernador provincial de Albacete, Sr. sentado por Don Francisco Díaz de Arcaya y Miravete, mar­ Lamata, terció para informar al municipio que los v~cinos qués del Fresno, expresamente facultado por el Director Gene­ podían acogerse al derecho de retracto que se contemplaba en ral del Patrimonio Forestal del Estado, por comunicación expe­ la ley de arrendamientos y, por tanto, acudir preferencillmen­ dida el ocho de julio de 1943. El pago se hizo lnediante un che­ te a la compra de las tierras49. que contra el Banco de España, extendido a nombre del porta­ A pesar de que el vecindario lo intentó y se hicieron wuchas dor. El trato se hizo bajo la condición de que el organismo ofi­ asambleas para tomar acuerdos al respecto, el hecho es que se cial se reservaría el derecho a vender la parte que estimara acababa de salir de una de las guerras más crueles de nuestra oportuno al Instituto Nacional de Colonización. La escritura de conflictiva historia y las carencias eran enormes. Tras Iriuchas compraventa del término de Villatoya se firmó en Madrid el reuniones y arduas negociaciones, se confirmó que un número veintidós de julio del año 1943, ante el notario de la capital, importante de vecinos no disponía de la suma de dinero q~e exi­ Don Manuel Amorós Gonzálvez52 • Mediante la mencionada gía la compra y se desistió de reclamar el derecho de retracto. compra las propiedades del señorío de Villatoya revertían de Mientras los hechos que relatamos ocurrían en la v~lla, un nuevo al Estado, y con ella concluía uno de los últimos vesti­ vecino acudió a las oficinas del Patrimonio Forestal del Esta­ gios feudales en nuestra provincia. do, en Madrid, y puso los hechos en conocimiento dellDirec­ La superficie total del término comprada por el Estado fue tor General, que se dirigió a la Marquesa para ponerlJ sobre estiInada por el Ingeniero Jefe de la Delegación Nacional de aviso de que su venta podría ser ilegal, a efectos de la Ley y del Colonización de la Región de Levante en 1.840 Has., superfi­ Reglamento del Patrimonio Forestal del Estado, pues s~ trata­ cie que se distribuía así: ba de un terreno de considerable superficie y el Estado tenía Huerta 78 Has. derecho preferente de compra. En la misma comunicayión se Secano 215 id. informaba a la señora marquesa que debía remitir información Monte alto, pinar y otros aprovechamientos forestales 1.522 id. sobre la venta a dicho organismo, al que correspondía el dere­ Improductivo y descuento 25 id. cho de tanteo. Con fecha 11 de enero de 1943 Doña Pilar noti­ Total 1.840 Has. 53 ficó al Patrimonio Forestal del Estado tener concertada ¡la ven- El Instituto Nacional de Colonización parceló la tierra

I ta por precio de "un millón setecientas cincuenta mil pese- agrícola54 y la ofreció a los vecinos a muy bajo precio, que tas" información que el organismo oficial trasladó a la Jefatu­ debían pagar inicialmente el 20% de la cantidad tasada y pagar ra de la Obra Sindical de Colonización de la DelJgación el resto en los diez años siguientes, prorrogables a veinte. Nacional de Sindicatos, toda vez que, de quedarse el Patrimo­ En las valoraciones preliminares el Patrimonio Forestal nio Forestal con la propiedad, se tenía pensado traspasa~ la par­ pensó quedarse con el Balneario y las huertas de alrededor, te agrícola a la Agrupación Local Sindical de Villatoy~, que a pero sus técnicos propusieron dejarlos en propiedad del Ayun­ tal efecto se constituyó con toda celeridad, con intención de tamiento, pues podrían servir de patrimonio a la villa con el que pudiera ejercer el derecho de compra50, que la ley d6 arren­ que poder hacer frente a las necesidades municipales. damientos le permitía. Con fecha 10 de febrero del mismo año El Instituto levantó un templo parroquial sobre el mismo la sección primera del Patrimonio propuso la adquisición de la terreno que durante centurias había ocupado la vieja iglesia finca por el precio indicado, y se le comunicó a la propietaria local, edificación que ya apenas podía mantenerse en pie. Tam­

y a la Obra Sindical de Colonización. I bién construyó la ermita de CHanca, a la vez que dotó a ambas Seguidamente se inició el expediente de compra, pues los villas de escuelas. informes previos de los técnicos la habían informado ¡favora- El informe que el Ayuntamiento hizo, en 1944, a la Comi­ blemente. ' saría General de Abastecimientos y Trasportes del Ministerio La Dirección General del Patrimonio Forestal dell Estado de Industria y Comercio de la provincia de Albacete, de la en sesión del día veintisiete de mayo autorizó la compra de la recién estrenada situación de la villa fue el siguiente: finca por el precio tasado, aunque peritó un incremtfnto del "Este pueblo así como todo el término municipal perte­ 1'30% en concepto de pagos al Estado. Elevada la pr6puesta neció hasta el mes de junio del año 1943 a la Señora Mar-

I

49 Desde comienzos de aquel año de 1943 el gobernador provincial Sr. Lamata se había ocupado de constituir Hermandades Sindicales en los pueblos de la pro­ vincia, entre ellas la de Villatoya, con los fines aquí expuestos.

50 Archivo del Registro de la Propiedad. Casas Ibáñez. Folio 8 VtoJ Villatoya. Libro 183.

I 51 Ibídem.

52 Ibídem. I

53 Archivo Municipal. Villatoya. Oficio del Ingeniero Jefe del I.N.C. de Valencia al Alcalde de Villatoya. Fecha 13 de diciembre de 1944. Hoja suelta sin clasi­ ficar.

54 La parte cedida al Instituto de Colonización tenía una superficie ~otal de quinientas cuarenta y cuatro hectáreas, noventa y seis áreas y ochenta y dos centiáreas. De ellas, seis hectáreas, setenta y ocho áreas y ochenta centiárea~ correspondían a edificios, solares, eras y ejidos. El resto lo componía la parte rústica.

I 74

quesa de Villatoya, en cuyo mes fue comprada toda la fin­ En invierno los vientos del Oeste son los que dominan, ca por el Servicio Forestal del Instituto Nacional de Colo­ no siendo notables las heladas pues dada su situación geo­ nización, quedándose éste los montes y pasando a depender gráfica constituyendo un gran valle u hondonada la mayor la edificación y los terrenos de secano y huerta del Institu­ parte del término no se. dejan sentir de forma sensible los to Nacional de Colonización, haciendo éste parcelas para fríos. A partir de fines de febrero desaparecen los fríos casi ser adjudicadas a los ex-arrendatarios de la citada Señora en su totalidad y puede decirse que a diario se advierte Marquesa que quieran participar previo pago del 20% del bonancibilidad del tiempo. Las lluvias no son muy fre­ total del valor de la parcela, para continuar pagando el res­ cuentes en ninguna época del año, siendo excesivas en pri­ to de su valor en 20 años. mavera y más abundantes en otoño e invierno. En este término no existe ningún propietario actual­ Los habitantes beben aguas del Cabriel y de los Baños, mente. que están destruídos, pero las aguas están canalizadas En la población hay dos edificios públicos y 150 vivien­ hacia el pueblo por acequias. Dejan mucho que desear las das. condiciones de salubridad e higiene, principalmente en la No hay empedramiento de calles y el Ayuntamiento forma de coger las aguas y la forma de extinguir los focos obliga a dar peonadas a los ciudadanos para mantenerlas infecciosos. transitables. Sobre todo en época de lluvias. El plato típico de la villa es el potaje de judías con patas Hay dos calles principales: la Mayor y la de Alborea, de cerdo. que son paralelas y van de Este a Oeste. Estas dos calles tie­ No se celebran ferias ni mercados".55 nen otras dos adyacentes: Abrevador y Requena. Balance éste de logros y carencias que cerraba una etapa y En la población hay una escuela mixta, único centro de abría otra desde la que en la villa cualquier proyecto empeza­ enseñanza. Su matrícula es de 50 alumnos y la asistencia ba a ser posible. media es de 35 alumnos.

APÉNDICE DOCUMENTAL

CONTRATO DE ARRENDAMIENT056 montes y lo demás que de uso y costumbre le perteneze de 1759 - 12- Diciembre - Alborea dicha villas por prezio y cuantía de cinco mil reales de vellón Contrato de arrendamiento entre el mayordomo de ren­ en cada un año de los nuebe, puestos y pagados de su cuenta y tas de Don Alonso de Arellano, Marqués de Villatoya y los riesgo en poder de dicho Señor Marqués o de su apoderado en colonos de la villa. la villa de Madrid y a costa de los dichos arrendadores con las "En el lugar de Alvorea jurisdicción de la villa de Jorquera condiziones siguientes: en doze del mes de diziembre de mil setecientos cinquenta y 1a._ Primeramente es condizión que durante este arren­ nuebe años, ante mí el escribano público y testigos infaescrip­ damiento no an de poder pedir vaja ni descuento alguno al pre­ tos parecio presente Andrés Carrasco Sánchez, vezino de este zio del prinzipal por ningún caso pensado o no pensado de dicho lugar y Alcalde Mayor de las villas de Toya y Jilanco y esterilidad que suzeda en él, de pocas o mucha aguas, piedra, Mayordomo dellas, y en nombre y en birtud del poder que tie­ niebla, langosta, ni por otra cosa que benga del zielo ni de la ne del Señor Don Alonso Arellano y Pacheco Duque de Estra­ tierra porque dicho arrendamiento lo hazen los susodichos a su da Balázquez de la Canal, Marqués de Villatoya, Señor de las riesgo y abentura, y con todo 10 que expresa la ley de la Reco­ villas de Jilanco, Turillas y Castellano, del Castillo de Tena­ pilazión, y por lo que en contrario se pretendiere dijere o ale­ lloz, Regidor perpetuo de la villa de Talavera y Ciudad de Gua­ gare no an de ser oydos los dichos arrendadores en juizio ni dalajara, dado en la villa de Madrid en veinte y cuatro de octu­ fuera de él porque declaran que en dichos zinco mil reales va bre deste presente año firmado de Su Señoría y autorizado de vajada la esterilidad que puedan tener y pedir durante este Domingo Josep de Casas escribano público del número de arrendamiento, y renuncian las leyes del engaño y de la lesión dicha villa de Madrid, que de ser bastante dicho poder para enorme y enormisma y las demás que en este caso se pueden hazer este arrendamiento lo que havajo irá declarado, el pre­ valer y aprobechar porque con todas las hazen. sente escribano da y haze fee en cuia birtud dixo: que otorga y 2°._y es condizión que los frutos deste arrendamiento de conoze por esta escriptura que da en arrendamiento a Miguel qualesquiera género que sean an de quedar hipotecados espre­ de Onrrubia, Benito Ximénez, Alonso Monteagudo, Christoval samente a la paga del prezio de él sin perjuizio de la obligación Martínez, Joseph Defez, Andrés de Arze, Andrés López, Jinés general ni por el contrario aunque estén con poder de terzero o Ximénez, menor, y Jinés Ximénez, mayor, vezinos de dicha más posehedores porque sean de poder sacar dellos y vender­ villa de Toya, las lavares de secano y regadío que ay en su tér­ los para dicho efecto. mino y en la de Jilanco, sus casas, tinadas y demás edifizios 3°._ y es condizión que los tres años primeros de su arren­ que en ellas ay, molino arinero dehesas, aguas, pastos, y todo damiento los referidos renteros que haviten en dicha villa an de lo demás que perteneze a dicho Señor Marqués en las referidas plantar de su cuenta y riesgo en el paraje que llaman de las Val­ villas, por tiempo y espacio de nuebe años que empezaron a sillas, mil moreras por ser éste el más CÓlTIodo para ese fin, correr el día del Señor San Miguel de septiembre del año que señalando la tierra que fuere nezesaria para dicho plantío, y a biene de setezientos y sesenta y nuebe, corriendo dichos nue­ de estar en forma de soto, de modo que género ninguno de be años subzesivamente, y an de entrar barvechando dichas tie­ ganado mayor ni menor an de poder entrar en tiempo alguno rras de secano y regadío este presente año el cual dicho arren­ vajo la pena de cuatro reales siendo cavallería mayor o menor, damiento haze como dicho es con sus aguas, pastos, lavares, y siendo bacuno, por el mucho más daño que haze, ocho rea-

55 Archivo Municipal de Villatoya. Informe del Ayuntamiento a la Comisaría General de Abastecimientos y Transportes del Ministerio de Industria y Comercio. Año 1944. Sin Clasificar

56 Archivo Privado de la Casa de Villatoya. S.C. Contrato de arrendamiento entre el Marqués y los colonos en el año 1759. Debemos agradecer su consulta a nues­ tro amigo Ismael Civera que nos proporcionó una copia del documento. 75 les por caveza, siendo cabrío dos reales por cada planta que se 8.- Y es condición que dichos arrendadores an de conservar corta, y si fuere lanar a de ser la pena arreglada a las orqenan­ el plantio de moreras y demás árboles que ay en la huerta y zas de dicha villa, y ésto se entienda por la primera bez qrte rei­ fuera de ella limpiándolos y basurándolos para que permanez­ terando a de ser a elección del Señor Alcalde Mayor qu~ es o can y fructifiquen, y an de ormar las calzadas de dicha huerta fuere, y al cavo de los tres años primeros si an de contar dichas limpiando el azequiado de todas malezas de forma que el rie­ moreras por estar obligados y obligasen en esta escriptura a go vaya corriente, y a ello se les a de apremiar por el Alcalde dejarlas plantadas, que con las mil ochocientas y veinte que oy Mayor que es o fuere, y por todo ello no han de pedir des­ tiene la Huerta ha de haver el número de dos mil ochoc:ientas cuento alguno. y veinte, y faltando algunas de éstas, por dicho Alcalde Mayor 9.-y es condición que para ebitar la ruina de los montes han de ser apremiados a su cumplimiento y desde es~e año que causan los zircunbecinos, quizas dimanado por encubrirlos sucesivamente a los seis que quedan se han de contar I todos los mismos vezinos de dicha villa, obrando éstos contra los asta el último que cumple, y a de ser por el mes de diziembre capítulos de las ordenanzas de la expresada villa cortando la y dar cuenta cada uno de los renteros de las que tiene para que leña y madera para fuera del término, de aquí en adelante la deste modo se consiga el aumento deste plantío, cuia Irazón Justicia Hordinaria y arrendadores zelen con grande vigilanzia puntual la an de dar a dicho Alcalde Mayor que es o fuere para sobre este particular para su remedio y conservazión, así del que a el rentero que le falte el número de las que deve teher en monte alto como del vajo, penando y castigando a los que la tierra que cultive sea apremiado a que las cumpla, y si no lo delinquieren en conformidad de los capítulos de dichas orde­ hizieren y cumplieren en esta forma, se plantarán y criarán de nanzas; y sí por omisión o malizia se siguieren algunos daños

cuenta del que fuese desidioso. I a el Señor Marqués, el Alcalde Mayor que es o fuere los casti­ 4.- Y es condizión que los reparos de tejados, corrales tina­ gue y pene conforme a derecho, así a dichos renteros como a das, casa molino, y lomeras han de ser de cuenta de loslrente­ vezinos que pasten en el término. ros, y las paredes de las casas.... de ellas y los precisos por 10.- y es condición que dichos renteros de su cuenta an de dentro de cuenta del Señor Marqués y destos an de ser obliga­ trahillar la tierra que a cada uno toque, y estando dentro del rie­ dos dichos renteros a ynmediatamente que reconozcan cada go de la huerta de dicha villa y en las zcercanías del molino ari­ uno en la casa que biviere, ay que hazer algún reparo Ide los nero della, las an de aormar reduciéndolas a riego corriente que están a cargo de Su Señoría, a dar cuenta a dicho Alcalde como está lo demás de la huerta principal, no pidiendo des­ Mayor que es o fuere para componerlo, pues de no haz¿rlo así cuento por el travajo los arrendadores, y a ello se les a de apre­ se esperimenta tiene más coste dichos reparos que reniedián­ miar por el Alcalde Mayor que es o fuere. dolos al principio; y el rentero que no procure este rerrtedio y 11.-Y es condición que dichos arrendadores y renteros no por su omisión fuese causa de lo que queda dicho lo a deI com- an de pastar con sus ganados mayores ni menores la huerta de poner a su costa para lo que pueda ser apremiado por l~ dicha dicha villa con ningún pretesto, exzepto los vancales que no justicia. tubieren moreras ni otros árboles, que éstos los podrán pastar 5°._ y es condizión que al fin de dicho arrendamiento a de desde primero de marzo asta fin de octubre de cada año, y por quedar el agua de los riegos conforme oy está, y éste ¿uando lo que mira al cabrío se proibe en todo tiempo atendiendo a los principie, y por la parte del nazimiento del agua ju~ncar y grabíssimos perjuizios que se siguen y an seguido a los plan­ varranco que por la furia de las venidas de las aguas tiene con­ tíos de moreras y árboles, cuía causa es el atraso de dichas tingencia a deteriorarse el agua de las fuentes, y en este caso plantas, y para ebitar este abuso de aquí en adelante el ganado perderse el riego de dicha huerta, sin embargo de haber echa­ bacuno y otros aberíos mayores los an de guardar en forma do los refuerzos y reparos a que se obligaron en el i arren­ debida una persona de razón, de cuenta de sus dueños, y lo damiento que fina, dichos renteros an de plantar de su cuenta mismo se a de practicar en los ganados menudos; y esta con­ y riesgo a trechos a donde se les diere orden por el Alcalde dizión, atendiendo no se a observado durante este arren­ Mayor que es o fuere, olmos, álamos zarzas tarayes y cañas, y dalniento, desde oy día de la fecha de ésta en adelante se a de de la misma suerte en dicho barranco an de hazer los teparos poner en práctica, pues se a esperimentado en el arrendamien­ con estacadas reformándolas con piedra y atocha y otros to presente el poco cuidado en dichos plantíos de moreras, y refuerzos que se tengan por combenientes para dicho fin, y de por esta desidia no se deve dar lugar se rretarde el cumplimien­

lo contrario se les apremiará a su cumplimiento. I to desta condizión por ser en perjuizio del hazienda de Su 6.- Y es condición que si para evitar el que se pierda el Señoría, la que es notoria pues se ven que las moreras se agua en el dicho varranco del Juncar fuese preziso ~l hacer encuentran algunas descortezadas de lo que se sigue el secar­ cequia arrimado al zerro para el riego de dicha huerta ade ser se, por cuia razón se proybe en las tierras que están éstas plan­ de cuenta de dichos arrendadores y renteros el executarlo; pero tadas la entrada de todo género de animales, y para que tenga si se hiziere mina por el dicho zerro para pasar agua! a parte esta condizión el más puntual cumplimiento y total remedio, se segura hu otros reparos mayores para dicho fin, a dd ser de pone la pena que va expresada en la condizión terzera, y ade­ I cuenta del Señor Marqués y de los arrendadores el dar el dine- más de ésto an de pagar el daño a el Señor Marqués que se con­ ro para dichas obras lo que se les pasará en quenta de sh arren­ sidere, y cualquiera rentero que repugne esta condizión o vaya damiento. contra ella en alguna de sus circunstanzias, sin más justifica­ 7.- y es condición que en el segundo barranco por donde se zión que su poca considerazión en el aumento de dicho Señor trae el agua del Juncar para dicho riego, a de ser de cuenta de Marqués se espeJa de dicha villa por ynobediente. dichos arrendadores para ebitar la ruin~ que amenaza l",s aguas 12.- y es condizión que la justizia y arrendadores de dicha de su benida el lebantar a trechos las calzadas que se an echo villa con ningún pretexto, no admitan en ella ni en sus casas . I en este arrendaIlliento y a donde se les ordenare por el (\lcalde vandidos, forajidos, asesinos, ni otra jente fazinerosa ni de mal

Mayor que es o fuere, lebantar otras de bara en alto y Iatocha­ vivir por cuanto de hazerlo así, refuxiándolos y receptándolos, das con sus cuerdas y en los yntermedios se an de poner ramas se ocasionan gravísimas ofensas a Dios, al Rey, y a la bindicta de pino para detener la furia de las aguas, y en llenándose los pública, y para que no llegue este caso, si se justificase que vasos an de levantar a proporzión dichos reparos asta que que­ dicha justizia, renteros y vezinos auxiliaren a este jénero de de seguro el riesgo, sin que por ello puedan pedir ddscuento gente, dicho Alcalde Mayor que es o fuere prozederá contra alguno, y los mismo de la condizión de arriva. ellos en conformidad de las órdenes expedidas por Su Majes- 76 tad (que Dios guarde) penándolos con lo demás que aya lugar, asta el día que fine este arrendamiento presente, este se entien­ y sin recurso alguno, los espela de dicha villa, y no pudiéndo­ da por el perjuizio que se puede seguir a dichas tierras y por si sen libertar de dicha clase de gente por benir en cuadrilla, den se traspasan a otros renteros; y a ello se les pueda apremiar. cuenta a la Justizia para que lo notizie a dicho Alcalde Mayor 21.- y es condizión que si el Alcalde Mayor que es o fuere para que ponga los medios que correspondan a Justizia. y mayordomo de estas rentas propias del Señor Marqués pasa­ 13.- y es condizión que en dicha villa sólo an de poder se a dicha villa personalmente a hazer la cobranza de lo que havitar los dichos renteros y éstos an de ser buenos christianos, deven pagar anualmente estos arrendadores por la obligazión temerosos de Dios y de sus conzienzias, quietos y pazíficos y que hazen en esta escriptura no habiéndolos pagado, por su de buenas costumbres, aplicados a el travajo, cuidadosos, de morosidad quando son obligados, le an de pagar en cada un día sus aumentos y de la hazienda de Su Señoría, y si no fueren los que fuesen morosos quinze reales como es costumbre para desta clase se an de espeler de dicha villa por el Alcalde Mayor su manutenzión, criado y mula. actual o el que suzeda, poniendo otros en su lugar. 22.- y es condizión que la dehesa que ay en el término de 14.- y es condizión que los renteros que haviten en dicha dicha villa la an de guardar los vezinos de ella el tiempo acos­ villa sólo han de tener los ganados mayores y menores corres­ tumbrado y a de ser de cuenta de dicho o al que se le zeda el pondientes y nezesarios para el cultivo y beneficio de sutento arrendarla con los montes Blancos a las personas que le pare­ y vasurar lo que tengan en riego, y de lo contrario, resultando ziere y en los prezios que se ajustó y de la cantidad que diesen perjuizio a los demás vezinos por dicho Alcalde Mayor lo pue­ o ya, lleve dicho Alcalde Mayor en cada un año doszientos rea­ da correjir y enmendar con penas y aperzibimientos que sean les que Su Señoría tiene consignado como es costunbre por de justizia y arreglado a esta condizión. visitar el monte y término, y cuidado de su aumento y conser­ 15.- y es condizión que dichos renteros para el riego de bazión y que rindiere más con el estiercol que en dicha dehesa dicha huerta an de llevar el agua por donde asta que sea lleva­ se hiziere por sus ervajantes la an de partir ygualmente los ren­ do, y en efecto a la formalidad del riego que deven hazer se an teros, según tierra tubiesen, y si fuere de combenienzia destos de arreglar a las ordenanzas que tiene dicha villa en su archivo el quedarse con dicha dehesa para sus aberíos an de ser prefe­ para ebitar disturbios y desórdenes. ridos; y en atenzión a haversen esperimentado en este arrenda­ 16.- Y es condizión que el agua que pasa por ynmediato a miento algunas diferenzias entre dichos renteros sobre el modo las casas y la Parroquia de Nuestra Señora de la Misericordia de repartir dichos doszientos reales para ebitar esto de aquí en la an de guiar y apartar de sus paredes, y lo mismo de las de la adelante, en atenzión a que el sobrante de dicha catidad si a de casa de Su Señoría, de forma que no siga perjuizio, y de lo con­ repartir con proporzión entre los expresados si a dichos rente­ trario los daños que se ocasionen los an de pagar dichos ren­ ros les fuese de combenienzia quedarsen para sus haveríos con teros. la dicha dehesa y montes Blancos para el reparto de la expre­ 17.- Y es condizión que el molino arinero que tiene dicha sada cantidad an de atender a los que la pastan y se aprobechen villa antes que cumpla este arrendamiento presente se a de de sus yerbas escluyendo para dicho reparto a los que se apeo­ reconozer como lo recivió el molinero y condiciones con que bechen dejando así mismo dos cavallerías a cada rentero lo tiene, la bondad de sus piedras, cubo, tejado, y lo demás que excluidas para la paga, y no combeniendo sin a ésto dicho le perteneze, en cuyo tiempo se a de apreziar por persona ynte­ Alcalde Mayor a de correr en pública almoneda dicha dehesa ligente de ciencia y conciencia, el que a de ser a elección de separada de los montes Blancos, rematándola en el mejor pos­ dicho Alcalde Mayor presente o benidero cuio prezio a de tor, y de estas dos condiziones, para ebitar dichas diferenzias, constar por las diligencias judiciales que de dicho fin se han de dicho Alcalde Mayor los a de premiar a que se acomoden a una formar por dicho Alcalde Mayor para que estos Arrendadores u otra, la que Inás útil le parezca. le recivan, y entreguen a los que subzedan al siguiente arren­ 23.- y es condizión que si los renteros y vezinos de dicha damiento vajo del precio que lo recivan, y si tubiere algunas villa no cumpliesen con las condiziones expresadas en esta quiebras o menoscavo durante este arrendamiento lo an de escritura o alguna de ellas le a de quedar su derecho a salvo al habonar en esta forma: que si a Su Señoría le tubiése más cuen­ Señor Marqués y Alcalde Mayor que es o fuere en su nombre ta el percibir en dinero dicho menoscavo lo an de entregar en para hazerles cesar en dicho arrendamiento, o que prosigan, esta espezie, y si dicho Señor dispusiese que el menos cavo que como gustaren. hubiese se reintegre en componer la quiebra que tubiese dicho 24.-y es condizión que si los dichos arrendadores y rente­ molino, se a de hazer uno u otro con yntebención de dicho ros por lo respectivo a lo que deven guardar de montes y pas­ Alcalde Mayor y consentimiento del Señor Marqués; y no se tos por sí o por los forasteros, como tales vezinos de dicha villa pone en ésta la prebención de los reparos por yncluirse en la de Toya se someten a los capítulos de las Hordenanzas que entrega y prezio que lo reciven dichos arrendadores. dicha villa tiene en su Archivo, y no guardándolos, desde aho­ 18.- y es condizión que al fin de este arrendamiento, echa ra se dan por yncursos en sus penas, y a ellas se remiten. la cosecha, an de quedar los rastrojos sin que los puedan sem­ 25.- y es condizión que los vezinos y renteros de dicha brar de maíz ni de otra semilla, para que los arrendadores que villa siempre que la Justizia les mande que salgan con cuales­ entraren empiezen a varbechar, y si los resembrasen pierdan quiera ofiziales de su Ayuntalniento a visitar el término de barvecho y todo . ambas villas de Toya y Jilanco sean tenidos y obligados a 19.- Y es condizión que antes que cumpla este arren­ hasistir a dicha visita sin escusa alguna, con calidad que de las damiento presente que es a San Miguel que biene de setezien­ penas que aprehendieren y a Su Señoría tocaren quedan y an tos y sesenta an de quedar las casas y el molino retejados con de quedar a disposición y boluntad del Señor Marqués o Alcal­ lomeras de yeso, y lo demás que expresa la escriptura que se de Mayor en su nombre, y lo demás lo partan entre las perso­ otorgó por ante Benito García Manes, escribano que fue de nas que salieren a dicha visita, y si encontraren algun foraste­ este lugar. ro haziendo leña en dicho término y si resistiere a su aprensión 20.- y es condizión que los renteros que en esta villa ay y haziendo armas o en otra forma, daran cuenta a la Justizia cumplen dicho año de setezientos y sesenta, aunque no se men­ Mayor para que dé la probidenzia que corresponda a Justizia, zionen en esta escritura por tales arrendadores, en virtud de y si algún vezino se resiste para salir a dicha visita, porque no esta obligazión, las tierras de sus rentos sin ygnorar las an de se retarde el servizio del Señor Marqués, la zitada Justizia les estercolar y benefiziarlas como lo an practicado asta ahora y sacará de pena por cada bez cuatro reales para que vaya otro en 77

su lugar y lo pondra en la carzel por la ynobedienzia, y se pre­ 31.- y es condizión que con un rento de los diez de dicha biene que si en la visita del término y aprehensión de per)as se villa los dichos arrendadores no an de poder disponer de él, justificase algunos fraudes serán castigados como aya lJgar y pues a de quedar a la disposizión y voluntad del Alcalde Mayor se espeleran de dicha villa por el Alcalde Mayor que es ofue­ que es oficial a el que se le a de yncorporar y añadir el pedazo re, y por lo que toca a las penas, se tendrán presentes dichas de tierra quequedó por de dicha villa en el deslinde y amojo­

ordenanzas y sus capítulos. I namiento que se hizo con el término de Casas de Ves, que lo 26.- Y es condizión que en atenzión a que se a esperlmen­ tenía la viuda de Colás, de dicho lugar, el que puede regar con tado y esperimenta que dichos vezinos y renteros luegb que el agua de Gilanco, y el rentero que elijiere dicho Alcalde hazen alguna aprehensión en dicho término se interesan dichos Mayor lo a de tener el que no se le a de poder quitar por nin­ vezinos y admiten empeños para que no se les lleve penrl a los guno de dichos renteros pagando la cantidad que le pertene­ que cojen con leña, perdonando asimismo la parte que le~ toca ziere como a uno de los dichos diez rentos, y con las demás los mismos que salen a dicha visita, cuia causa es de darl,eI alas penas y condiziones de esta escriptura. a los zircumbezinos para que no teman de entrar en dicho mon­ 32.-y es condizión que respecto que los renteros de dicha te a cortar leña, y no haviendo bastado varias prebencionysl que villa son diez y para su cultivo se nezesitan de más se les per­ se les a echo a dichos vezinos y renteros por el presente Alcal­ mite los ocupen quinze vezinos y renteros de los más viejos

de Mayor, pues sólo miran a respetos humanos y a fines ! parti­ quietos y pazíficos y estos ayan de entrar con la aprovazión del culares no atendiendo al cumplimiento de su obligazión ni al Señor Marqués o Alcalde Mayor que es ofuere en su nombre, aumento y conservazión de dicho monte; de aquí en adblante pues de 10 contrario se entrase alguno sin dicha aprovación se cualquiera vezino o rentero de la villa que ynterbenga por sí o pueda espeler y poner otro en su lugar; y ésto bien entendido por ynterpósita persona, que se interese, a fin de que no se cas­ es mirando a que pueden entrar en dicha villa algún rentero o tigue y pene al que cojan con leña, se le a de llevar de pena un renteros que no sean de la clase que en dos condiziones de esta ducado, y a de pagar la que debiere el aprehendido, y rl cual­ escritura va ya expresado, pues de lo contrario se pueden quiera vezino o rentero que perdone el derecho que le corres­ seguir muchos daños contra el servicio de Dios y hacienda de ponda por su salida, a de pagar lo mismo y unos y otrbs por Su Señoría y a la bindicta pública, y en el caso que combenga, contrabenir las hordenanzas reales de montes y plantíosl an de se mantengan en dicha villa más de los mencionados quinze ser castigados con las penas prebenidas en dichas reale~ orde- vezinos, queda también a la elección de dicho señor Alcalde nanzas y espelidos de dicha villa. : Mayor el admitirlo.Y, así mismo, es condizión que por lo res­ 27.- y es condizión que si fuere de combenienzia de dichos pectivo a la casa de Su Señoría no ha de havitar persona algu­ arrendadores el poner el dinero de la renta en poder dell Señor na en ella escepto el vezino que elijiere dicho Alcalde Mayor, Marqués donde se allare, 10 agan así de su cuenta y riesgo, y si para que la tenga limpi~ para cuando vaya; y sólo se permite no cumplan con entregarlo a dicho Alcalde Mayor qUF es o que dichos renteros usen de las cámaras de ella y a de ser de fuere dándole real y medio por ziento para su conduzión~ como cuenta de éstos el retejar los tejados de ella y componer cua­ se a acostumbrado, y esto se entiende sin embargo de lla con­ lesquiera quebranto que tubiese por dicho servizio o dimanan­ dizión que sobre los salarios se pondrá en esta escriptur¡a. do de su descuido. 28.-y es condizión que los expresados cinco mil rea~es del 33.- y es condizión que respecto de estar regulados por prezio deste arrendamiento an de quedar cuatrozientos! reales diez rentos la huerta y demás lavares que ay en dicha villa los en cada un año de los nuebe, para que se distribuyari en la que deven ser yguales en la cualidad por la cual deben pagar estensión de las casas de dicha villa para que de este modo se dichos renteros respectivo a la tierra que tienen, y haverse ape­ consiga el mayor aumento de la cosecha de seda en ateÓzión a ado y medido por orden de dicho Alcalde Mayor comunicada ser cortas las biviendas, cuia cantidad es boluntad de Su Seño­ a Su Señoría de lo que a resultado estar desiguales dichos ren­ ría se queden en poder de dicho Alcalde Mayor o el ,que le tos en grave perjuizio de los subarrendadores que en este arren­ suzeda, para que los distribuya en dicha estensión de casas damiento a havido, por cuia razón y para que aya la equidad conforme nezesidad tubiesen, coaiubando el vezino o rentero a que corresponde a justizia y desagrabiar a el que estubiere, se quien se le adelante su casa con la mitad del coste que así está an de hazer diez partes yguales en quanto a la calidad de tie­ tratado~ y sí se dispusiese por combenir así el levantar lalguna rras, y éstas se an de partir y dividir con proporzión dándole a casa de zimientos haciéndola nueba, a ser con el permiso y cada uno de dichos vezinos y renteros la tierra que sus fuerzas lizencia de Su Señoría y el vezino o rentero que haya de havi­ puedan benefiziar y pagar, para que deste modo se consiga tar enella no se le a de contribuir con más de la terzera ~arte de dicha equidad pagando cada uno la tierra que tiene, añadiendo su coste. a esta condizión que una bez echo el repartimiento de tierras en 29.- y es condizión que los vezinos y renteros nd an de la forma que queda dicho cumpliendo cada uno de los renteros poder tomar a guarda, a medias ni a el renuebo, ganadb algu­ en cultivar y pagar lo que le corresponda, ninguno de los otroa no que paste en el término de dicha villa, pena de veint* reales a de poder quitárselas no dejandolas voluntariamente, si no es su aplicazión a el arbitrio del Alcalde Mayor y echarles el que icurran en las penas de esta escritura por las cuales puedan

ganado fuera. I ser espelidos de dicha villa, que en este caso a de interbenir 30.-Y es condizión que dichos arrendadores y rent~ros en dicho Alñcalde Mayor que es o fuere en nombre del Señor atezión a que los ganados mayores y menores no puedfln salir Marqués. de la villa por el camino de Gilanco a pastar a aquellos :parajes 34.- Así mismo es condizión que dichos renteros y vezinos por su estrechez y les obliga por este motivo y el no havyr bere­ no an de poder cortar pino alguno en el término de dicha villa da, el tomar un grande rodeo en grave perjuicio de los vezinos para leña, ni madera aunque lo uno y otro no sea para fuera y sus ganados y para su remedio los renteros que tienerl tierras pues para leña se pueden valer de la caída y por lo que toca a

I en regadío a un lado y a otro de dicho camino, sean obligados la madera, necesitándola para componer alguna casa o taynada asta pasar en varranco del Juncar a dejar paso vastantelzerran­ de las de dicha villa siendo cosa prezisa pedirán lizencia para do sus pertenenzias, con latas u otros reparos los dos lados de cortarla a el Alcalde Mayor que es o fuere para sí es justo dar­ dicho camino, para que dichos ganados no puedan dañar en la la, y de todo lo referido, lo cotrario haciendo, sean penados y huerta, y no hauiendolo así, la Justizia o Alcalde M~yor les castigados por dicho Alcalde Mayor, y también dará dicha pueda compeler a que lo cumplan. lizencia para que corten leña para el consumo de sus casas de 78 los pinos que no puedan aprovechar para madera con arreglo a miados como por el principal de esta deuda sobre que renun- las reales ordenanzas. cian todas las leyes y . Con cuales dichas condiziones y lo demás en derecho nece­ y así lo dijeron y otorgaron ante mí el escribano; firmó el sarias dicho Andrés Carrasco Sánchez, Alcalde Mayor de que supo y por los que no con testigos a su ruego, que lo fue­ dichas villas, en birtud de su poder antedicho arrendamiento y ron Juan Ximénez, vezino deste lugar a los que con los otor­ se obliga y obliga a el Señor Marqués de dichas villas de Toya gantes doy fee, conozco.Andrés Carrasco Sánchez. Miguel de y Jilanco a que por nuebe años les será zierto y seguro dicho Honrrubia. Andrés Arze. Pasqual Pérez. Juan Ximénez. Ginés arrendamiento a los dichos Miguel de Honrrubia, Benito Ximénez. Alphonso Talavera. Ante mí, BIas de la Cuesta Ximénez, Alonso Monteagudo, Cristobal Martínez, Joseph Herrero. Signado." Defez, Andrés de Arze, Andrés López y Jinés Ximénez, mayor y menor a quien su derecho representare, y no se les quitare CONTRATO DE ARRENDAMIENTO.57 durante dicho tiempo, pena de que se les pagará todas las cos­ 1832 - 14 - Marzo - Alborea. tas daños e yntereses y menoscabos que se les siguiese y recre­ Contrato de arrendamiento de las tierras de Villatoya hiziere, y los susosdichos confesando ser zierta la relazión de entre Don Miguel Cañada, apoderado del Marqués y los esta escritura y condiziones que en ella se expresan, vajo las colonos de la villa. cuales otorgan que azeptan esta escriptura en todo y por todo En el lugar de Alborea, a catorce días del mes de marzo de como en ellas se contienen; y los referidos como principales, y mil ochocientos treinta y dos, ante mí el escrivano público y Alphonso Talavera, Pasqual Pérez García y Juan Fonte Casti­ testigos que se espresarán, Don Miguel Cañada y Galiana llo, vezinos de este lugar de Alvorea,como fiadores de los vecino del lugar de Villamalea a quién doy fe conozco, Apo­ expresados renteros y vezinos de la dicha villa de Toya y prin­ derado Administrador del Excmo Señor Duque de Estrada y cipales pagadores que se hazen y constiyuyen de todo lo con­ Marqués de Villatoya según el poder original que exive para tenido en esta escriptura y haziendo como dijeron hazían de documentar esta escritura, el cual a la letra es del tenor siguien­ deuda ajena suya propia bajo lo cual aceptan esta escriptu- te : (sigue la carta de poder del Marqués que autoriza a su ra por los dicho nuebe años que an de empezar a correr y con­ administrador a arrendar las tierras de VillatoyaJ. tarse desde dicho día de San Miguel de septiembre del año que Corresponde con el poder original que devolví al dicho biene de setezientos y sesenta cumpliendo otro tal día de sete­ Cañada y firma su recibo de que doy fe y en su consecuencia zientos y sesenta y nuebe, y reciven con ésta las dicha villas de y en virtud de las facultades que se confieren en el poder usan­ Toya y Jilanco, con sus diez casas y las demás que hubiere do de ellas dixo: Que dava en arrendamiento por espacio de fabricadas, cavallerías, tinadas, corrales y todo lo demás que nueve años los que empezaran a correr el día de San Miguel les perteneziere por el dicho tiempo, con sus aguas montes, Arcángel, veinte y nuebe de septiembre del corriente año y pastos, lavares en secano y regadío, molino arinero, con la cali­ finarán en otro igual día del año mil ochocientos cuarenta y dad y condizión de que los vezinos y renteros de dichas villas uno a todos los vecinos que son y en adelante fueren de la villa no an de poder con pretesto alguno moler en otro molino que de Toya todas las tierras, de regadío, secano, casas y molino el que ay y reciven dichos renteros, por combenir así a el bien arinero que al referido Señor Marqués le pertenece en propie­ común y conservazión de dicho molino vajo las mismas penas dad y posesión en las referida villa de Toya y Silanco vajo las de las obligaciones contenidas en esta escriptura, con su casa y condiciones siguientes: demás términos que les perteneze y sus aprobechamientos de la._ Primeramente es condición que los vecinos de Toya lo que se dan por contentos y integrados; y se obligan al fin de han de pagar al Señor Marqués, su Dueño, su Administrador, o este arrendamiento a dejar las casas arriva dichas con sus puer­ quién represente sus derechos en cada un año de los nueve por tas y ventanas como ay las reciven y lo demás a nejo a dichas que se amplía este arriendo, trece mil reales de vellón manco­ casas, y renunzian las leyes de la entrega y su prueba y demás munadamente, e insólidum en moneda metálica de oro, o de que en este caso ablan, y los dichos Miguel de Honrrubia, plata, y no vales reales ni otro papel moneda, satisfechos en Benito Ximénez, Alonso Monteagudo, Cristoval Martínez, dos plazos iguales, el primero en treinta de junio, y el segundo Joseph Deféz, Andrés de Arce, Andrés López Jinés Ximénez, en treinta de octubre de cada un año, puestos en casa y poder mayor y menor, Pasqual Ruiz, Alonso Talavera y Juan Fonti de Su Excelencia de cuenta y riesgo de dichos vecinos, y con Castillo, se obligan a pagar en cada un año de dichos nuebe, y las circunstancias que se esplicarán en la condición que tratará en dichos días del Señor San Miguel de cada un año los expre­ de este particular. a sados zinco milI reales de vellón a dicho Marqués o a la per­ 2 _ Que en los dos primeros años de este arrendamiento se sona que su poder hubiere para los perecivir en su nombre o a han de aumentar trescientas moreras en los sitios que señale el quien por derecho y título lexítimo los devan pagar y deba Administrador más proporcionados y conbenientes para el haver y perzivir, puestos y pagados a su costa y riesgo a donde mayor beneficio de las huertas, las que deverán plantar los residiere Su Señoría o la persona que para ello poder tenga y vecinos según el terreno que para ello tengan. a en su defecto pagar real y medio por ziento de su conduzión a 3 _ Que los tres primeros años de este arrendamiento y en el apoderado de Su Señoría que para perzivirlos tenga orden en el parage que hay desde Villatoya a las Valsillas, u otro donde conformidad de la condizión veinte y siete de esta escriptura, con acuerdo del Administrador combenga, han de plantar cua­ y si así no lo cumplieren puedan ser ejecutados y apremiados tro mil vides de viñas cada uno, o a prorrata del terreno que por todo el rigor de derecho y vía ejecutiva con las costas de la disfruta, según sus fuerzas. a cobranza y se obligan a pagar a la persona que fuere a hazerlo 4 ._ Que han de cuidad y conserbar con todo esmero los quinientos maravedies de salario en cada un día de los que se árboles y plantas que hay en la huerta y fuera de ella, para­ ocupare en ella contando benida, estada y buelta asta la efecti­ deándoles y reparándolos, según lo necesitase, con lo demás va y real paga, por cuias costas y salarios an de poder ser apre- perteneciente a su cultivo, limpieza y estavilidad.

57 A. H. P. Albacete. Protocolos. Alborea. Protocolos de Cayetano Carrasco. 14 de marzo de 1832. Legajo 644. Esta escritura de arrendamiento se incluyó en el expediente de expropiación abierto por el Instituto de la Reforma Agraria en 1934, y sirvió de prueba. Al margen del protocolo se lee: Nota: El día diez de Noviembre de mil novecientos treinta y cuatro libró primera copia de esta escritura...para el Ilustrísimo SeFior Director General del Instituto de Reforma Agraria en siete pliegos de clase undécima ....Doy fe. Herrero. 79

Sa.-Que los referidos vecinos han de plantar y dejar prendi­ cidencia como cómplices de este reprensible exceso,serán unos dos en los dos primeros años por que se haze el arriendo, cutro­ y otros castigados con las penas prevenidas por ordenanza y cientos olmos en los parages que señale el Administrador a despedidos de dicha villa por el propio Administrador. proporción del terreno que cultiva cada uno. 12a.-Que no han de poder cortar pino alguno los vecinos, 6a.-Que han de quedar como quedan espresamente hipote­ aunque sea para hazer casas u otro edificio sin espreso con­ cados a la seguridad de las pagas de este contrato, tod9S los sentimiento y licencia del Administrador, sirbiéndose sólo para frutos que produzcan las referidas huertas y tierras de secano, lumbre de la leña caída. con la misma mancomunidad e insólidum, y para que esta no 13a.-Que no han de poder en tiempo alguno introducir en la sea tan gravosa a los vecinos por razón de los retrasos quP sue­ huerta ganado cavrío ni vacuno, y sí sólo cuando se necesite len hazer algunos de ellos, sean obligación del Ayuntamiento para lavorear las tierras, y al que no lo cumpla se le esigirá la el embargar y depositar los frutos que haya pendientes en las multa con arreglo a ordenanza; y para que el ganado lanar pas­ tierras que cultibe cualquier vecino que en el día treinta de ene­ te en tiempo que no sea perjudicial a los árboles y frutos, ha de ro no haya cOlupletado el pago de arrendamiento que le corres­ proceder para ello acuerdo de Ayuntamiento. a ponda en el año anterior, quedando en el mero hecho desaloja­ 14 .- Que para el buen orden, distribución del riego y lim­ do de las propiedades que cultive y casa que havite, sin más pieza de las acequias, se han de nombrar por el Ayuntamiento requerimiento ni citación. I en cada un año dos personas que cuiden de ello, para que todos 7a._ Que en la casa que se ofreciese añadir o adelantar:algún perciban el agua con igualdad, incluyendo la tierra que se le da cuarto u oficina y en la que se edifique de nuevo desde los al sacristán. cimientos con anuencia de Su Excelencia o el Administrador, ISa.-Que ha de ser de cuenta y cargo de dichos vecinos

I ha de tener obligación el Señor Marqués de contribuir con la tener corriente el molino arinero y entregarlo del mismo modo tecera parte del coste siendo también de la de los vecinos que lo reciban al fin de este arrendamiento para lo cual se prac­ arrendadores hacer todos los reparos de las casas, cuyo ystado ticará reconocimiento del estado que tiene, a excepción de si se ha de reconocer en seguida al repartimiento y distribución del cubo se berificase algún quebranto, que en este caso por ser de las tierras, para que a su conclusión las dejen en el mismo de consideración ha de ser de cuenta del Señor Marqués el estado en que las recibieran con los aumentos que ayan ~enido repararlo y respecto a que el producto de dicho molino ha de durante el arriendo. quedar en veneficio de los vecinos para que puedan satisfacer ga._ Que si algún vecino se opusiese a cualquiera de las los gastos de verdad y otras cargas precisas, por que reducida condiciones que comprende este instrumento, sin más causa en su beneficio todos los vecinos han de moler sus granos en que ésta pueda despedirle de dicha villa, el referido AdJUinis­ él por que de lo contrario no se podría mantener molinero y se trador poniendo otro en su lugar, o distribuir sus tierras entre pribaría la villa de este arbitrio y para subenir a las urgencias los demás arrendadores, según lo juzgue más combeniente. que pueden originarsen. 9a.-Que los vecinos de Villatoya han de dar cien peonadas 16a.- Que ningún vecino ha de poder subarrendar las tierras en cada uno de los nueve años que comprende esta es~ritura que se le adjudiquen lavrándolas y cultibándolas por sí solo, y para cualquiera obra que se haga en el varranco para cohducir si no pudiese hacerlo el dicho Administrador las entregará a las aguas y las tierras de regadío; y si en uno, dos, o tre¡s años quien tenga por conbeniente para su cultivo. no se necesitasen, no las darán hasta que llegue el caso en el 17a.- Que sólo podrán pastar en la dehesa de dicha villa los que darán cada uno las que le correspondan con proporción al ganados que tengan propios de los vecinos y en el caso de no rento que pague, no solo las del año corriente sino también las tenerlos podrán tomarlos a medias o al el renuevo, no esce­ que aya retrasadas de años anteriores, para lo que se llebará diendo de sesenta cavezas cada becino y señalando antes los asiento formal de acuerdo con el Administrador de las bue se ganados propios de los vecinos la dehesa necesaria para man­ dan en cada año; pero si no se necesitasen, no estarán óbliga• tenerse, la que deverán guardar con todo esmero y cuidando de dos a pagarlas en dinero. tener abierto el camino que ba a Silanco, dejando el paso sufi­ loa.- Que ha de ser obligación de dichos arrendadorys des­ ciente para el tránsito de los ganados. de donde principia la huerta que es donde estava el Puente Vie­ ISa.- Que el terreno que hay en el pinar, fuera de la dehesa, jo hasta fin de ella, poner en la orilla del río, cañares, olmos y y los vecinos tienen costumbre cederlo a los forasteros para el sargas para fortificarla e impedir cualquiera estragos qJe pue­ pasto de sus ganados, ha de quedar livre y expedito por cuenta dan causar las abenidas del río en la huerta, cuyo plantío se ha de el señor Marqués, para que como dueño de él disponga lo de repartir a proporción de la tierra que en aquél parage yorres­ que tenga por conbeniente. ponda a cada uno. 19a.- Que los rendimientos de la dehesa de abajo que son 11 a. - Que ha de ser cargo y obligación de los vecinos el celar doscientos reales han de ser para el salario del Administrador, guardar y custodiar el monte, y por ser su recinto de coI1a con­ cuyo reparto y cobranza se egecutará por el Ayuntamiento con sideración, hayan de salir cada uno por su turno de tres en tres respecto al ganado que tenga cada vecino. días, y además cuantas veces fuese preciso, y sean abisados por 20a.- Que un rento de los diez en que se divide y comprende algún ministro de justicia, y con atención a que la esperiencia la huerta y tierra de secano ha de quedar livre para que lo dis­ acredita que los denunciantes admiten empeños para que no se frute o reparta el Administrador a su arbitrio, satisfaciendo la les lleve pena a los denunciados por leña u otro motivo, perdo­ parte de rento que le corresponda y los nueve restantes se divi­ nando la parte que les corresponde, y que balidos de esta pro­ dan entre los vecinos, con interbención de el mismo Adminis­ tección toman aliento los circumbecinos para trasterminar la trador, guardando la igualdad correspondiente, con arreglo a las leña con notable decadencia del monte, sin reflexionar lel per­ fuerzas de cada uno escluiendo de este repartimiento los tres juicio que se origina cuando se deve solicitar su aumento! y con­ huertos que hay bajo la casa del Señor Marqués, por estar desti­ serbación desde aora en adelante cualquiera vecino dé dicha nados para el propio Administrador, y por la misma razón el villa que interbenga por sí, o se interese por interpósita perso­ pedazo de tierra que quedó por (sic) de dicha villa en el deslin­ na, a que se les imponga el condigno castigo a los delincuentes, de y amojonamiento que se hizo con el término de Casas de Ves. incurra en la pena de un ducado, además de lo que huviere 21 a.-Que han de dejar livres y desembarazadas las tierras de pagar el aprendido; y en la misma incurra aquél que perdonare secano, concluido el arrendamiento y sin que procedan sus veci­ el derecho que le corresponda por su salida y se verificase rein- nos a resembrarlas el último año; pero si les acomodase hazer- 80 lo en la de las huertas, de adaza o vajocas, las dejarán así mis­ Señor Marqués dar el terrazgo de que se trata en este instru­ mo desembarazadas, a mediado de octubre de el propio año. mento a censo perpetuo y si se conbiniere con los vecinos 22a.-Si por fallecimiento de algún vecino o por otra causa mTendadores, en este caso ha de quedar sin ningún balar ni quedase vacante alguna suerte de tierra o casa, ha de ser árbi­ efecto la presente y sus condiciones vajo de las cuales y no en tro el Administrador a aplicarla a la persona o personas que otra forma da en m-endamiento por el precio de trece mili rea­ tubiere por conbeniente . les de vellón que han de pagar en cada un año de los nueve que 23a.-Que la tercera pmte de condenaciones de denuncias que comprende el contrato, asegurando que en ellos no serán se hagan en el término de Toya y corresponden al Señor Mar­ inquietados, siempre que cumplan lo pactado; y en el caso de qués las ha de percivir la villa por el tiempo de este mTen­ que lo fuesen por alguna de las causas legales se les abonarán damiento para inbertirlos en los gastos de veredas y otros fines los menoscavos que tuvieren y mejoras que resultaren tener la que el Administrador considere útiles y pm-a la devida cuenta y parte de que fueren despojados.Por tanto, y allándosen presen­ razón se ha de nombrar una persona con el título de Mayordo­ tes los señores Pedro la Parra, alcalde ordinario, Juan BeJtán, mo, en cuyo poder entre, y al final de cada un año se le haga cm-­ menor, regidor; Francisco HonlTubia, menor, Alguacil mayor; go de los maravedies que haya percibido por el livro de denun­ Andrés Ximénez, menor, procurador síndico y Juan José Gar­ cias que se han de sentar, y en el que deve constm- sus distribu­ cía Ponze, secretario, únicos indivíduos que forman el Ayun­ ciones, guardando el orden prevenido por derecho aplicando el tamiento de la espresada villa de Toya, juntamente con Mateo tanto en que se condene por el juez denunciador por terceras par­ Ximénez, mayor, Mateo Ximénez, Menor, Julián Villanueva, tes. Y si resultase alcanzado dicho Mayordomo en las cuentas Juan Gómez, Alonso González y Andrés López, todos vecinos que ha de rendir anualmente al Administrador en algunos mara­ de la contenida villa de Toya, por sí y a nombre de cuantos vedies lo deverá entregar a la persona que suceda en su cm-go. vecinos son en ella, enterados de cuanto contiene esta escritu­ 24a .-Que se ha de cuydar y cultivar con la exactitud que ra, juntos y de mancomún a boz de uno y cada uno de por sí el corresponde las moreras y demás árboles, sin cuyo requisito todo insólidum renunciando como espresamente renuncim-on serán escluidos los vecinos. las Leyes de la mancomunidad y los beneficios de la división 25".- Que si durante este arrendamiento acaeciere alguno execución y orden de derecho, se obligan a cumplir exacta­ de los casos fortuitos del cielo o de la tierra, de piedra, hielo, mente sin tergibersación alguna según el literal sentido de las incendio, langosta u otros semejantes, no han de pedir por ésto condiciones que quedan asentadas, para cuya inteligencia e descuento ni minoración alguna de pago pues pm-a evitar esta instrucción se darán al Señor Marqués, su apoderado y demás solicitud se ha tenido presente el arrendamiento anterior para otorgante la copia o copias testimoniadas que se pidieren sin la mayor equidad y moderación en el precio del presente, por necesidad de mandato judicial, lo que consienten ambas par- redundar en alivio y utilidad de los vecinos de Villatoya. tes Así otorgamos la presente ante mí el escrivano del Rey a 26 .- Que han de poner en el día de San Miguel de sep­ nuestro Señor, público del número y juzgado de la villa de Jor­ tiembre de cada un año en poder del Administrador que es o quera y pueblos de su Estado y del Ayuntamiento del lugm· de fuere el real y medio por ciento que se tiene costumbre para Villamalea, siendo testigos presentes Francisco Trifón Gómez, que conduzca de su cuenta y riesgo los trece mil reales a poder Francisco Gómez Saez y Roque Navarro, a quienes yo el escri­ del Señor Marqués. bano conozco y de todo doy fe. Siguen varias firmas. Ante mí, a 27 ._y finalmente es condición que si durante el tiempo de Cayetano CaITasco. Signado. este aITendamiento le pareciere útil y necesario al referido

Dibujo de Don José Luis Armas de la Casa de Villatoya. El Sampedro. escudo lo componen seis cuarteles: 1°._ Dos calderas (por los pacheco). 2°._ Un águila y bandas (por duque de estrada) 3°._ Un castillo. 4° y 5°._ Qinas portu- guesas. 6°._ Un león. DESAMORTIZACIÓN ECLESIÁSTICA. LOS BIENES MUEBLES DE LOS CONVENTOS DE SAN FRANCISCOI Y SANTA CLARA DE LA ~ VILLAI DE HELLIN Lucio GALLEGO GINER

Desde la Edad Media los bienes de la Iglesia habí~n ido Desde 1833 a 1874, el poder estuvo alternado entre liberales incrementándose progresivamente a través de testamentos, progresistas y liberales moderados; hay que destacar la década legados, donaciones, o bien mediante censos, foros, prirpicias de 1833-1843 como la más prolija en el proceso desamortizador y sobre todo diezmos. con la actuación de Mendizábal y Espartero: 25 de julio de Al aumentar el número de fieles, el sujeto de la propiedad 1835, supresión de conventos con menos de 12 profesos, los eclesiástica no fue sólo la Comunidad presidida por el obispo, libros, archivos y obras de arte pasan a disposición del Estado sino también grupos más pequeños como monasterios~ con- para crear Museos y Bibliotecas. El 21 de enero de 1836 se ventas, parroquIas,• etc. 'I ordena la formación de una Junta Provincial que prepare la ven­ Ahora bien, este tipo de propiedad no podía ser enajenada, ta de los conventos. El 19 de febrero de 1836 en la Ley de des­ con lo que se sustraía de la libre circulación, es decir, son amortización de Mendizábal, se exceptúan los edificios destina­ bienes de manos muertas l . dos al servicio público o con gran valor artístico. El 31 de agos­ Al mismo tiempo la deuda naciona12 iba en aumento¡ debi­ to del mismo año, se decreta que lo obtenido de la venta de los do al coste de las guerras3; a su vez los vales reales se depre­ edificios y el producto de su demolición se destinaría a financiar ciaban con la contínua emisión de otros nuevos4• la guerra. En septiembre se crea la Junta de Edificios de Comu­ La desamortización española abarca desde 1769 hasta nidades Religiosas Extinguidas, encargadas éstas de buscar uti­ 1924. En este período están comprendidas tanto la desamorti­ lidad a los edificios, más tarde se crea una por provincia. En zación civi}5 como la eclesiástica, en la que destacan las ~tapas noviembre los productos obtenidos de los edificios y sus bienes de Mendizábal y Espartero y la etapa de Pascual Madoz. (campanas, alhajas, muebles, etc.) se destinarían a financiar la El proceso desamortizador conllevó en primer lugar la guerra; fueron numerosas las órdenes para las requisas de alha­ nacionalización6 de los bienes mediante decretos, que fueron jas e incluso para la venta de las maderas doradas. En julio del acompañados de órdenes a las autoridades provinciale,s para año siguiente, 1837, se decreta la ley de supresión de conventos que procediesen a la evacuación de los religiosos, al cierre y masculinos, reducción de los femeninos y nacionalización de vigilancia de los conventos, al examen de sus papeles y a la los bienes del clero secular; todos sus bienes deben utilizarse

realización de los inventarios de bienes muebles. I para extinguir la deuda pública salvo algunas iglesias conven­ El decreto de 13 de Septiembre de 1813 reconocía la deu­ tuales destinadas ahora a parroquias y los objetos de arte que da posterior a marzo de 1808 al tiempo que se garantiz"ban el quedarían para Museos y Academias. En 1838 se crean las pago de sus intereses con cargo a las rentas de las fincas exis­ Comisiones Provinciales de Monumentos encargadas de la pro­ tentes en el fondo de amortización, que se abastecería de la tección del patrimonio desamortizado. En agosto de 1838 se venta de bienes nacionales; éstos comprendían, entre ot~os, los ordena dar diferentes usos a los conventos como viviendas para bienes confiscados o por confiscar, a traidores, las temporali­ viudas y pensionistas. En enero de 1840 se da un plazo de 60 dades de los jesuitas, así como los conventos y mona1sterios días para que los Ayuntamientos reclamen conventos para usos suprimidos o destruidos durante la guerra. No obstante, ~odo el de utilidad pública, ya que los no reclamados se venderían. En programa liberal se truncó con el golpe absolutista qu~ duró dicielnbre se suprimen las Juntas de enajenación de edificios. entre 1814 y 1820. Elide octubre de este año, en el llamado En septiembre de 1841 se amplían las ventas a los bienes del trienio liberal, se decretó la supresión de conventos masculinos clero secular, se exceptúan los edificios de las iglesias, catedra­ con menos de 24 profesos; se realizaron inventarios! de su les, parroquias y las casas de morada de obispos y curas así patrimonio y se ordenó que los libros, archivos y obras de arte como los seminarios. En julio de 1842 se da un nuevo plazo a pasaran al patrimonio público con la creación de MJseos y los Ayuntamientos para solicitar conventos para uso público. En Bibliotecas. El 11 de junio de 1823, con la nueva contrarrevo­ abril de 1845, con la llegada de los moderados, se suspenden las lución absolutista que duraría 10 años, se decreta el r~stable- ventas de edificios, que se reanudarán tres años después.

I cimiento de los conventos extinguidos y la devolución de sus La desamortización eclesiástica llevada a cabo entre 1836 bienes. y 1854 no fue un fenómeno nuevo ni un hecho aislado sino un

1 Los econonlistas ilustrados sostenían que el estancamiento econót,nico y social de España se debía a la gran cantidad de tierras amortizadas en manos de la igle­ sia y la nobleza. Para Jovellanos era imprescindible para poder implantar una economía de mercado, desarrollar la agricultura, lo que conllevaba la desaparición

de los baldíos, tierras concejiles, manos muertas y La Mesta. I En el período de 1808 a 1814, la primera revolución liberal admitió como problema prioritario la deuda nacional. Canga Argüelles presentó una memoria en 1811 en la que defendía el reconocimiento de la deuda contraída como único medio de restablecer la seguridad de los acreedores y del crédito público.

3 Entre 1833 y 1840 se desarrolló la primera guerra carlista, para c~ya financiación se destinaron gran parte de la venta de bienes nacionales.

4 Bello Vasco, Josefina. Frailes, Intendentes y Políticos. Madrid. Tauros, p. 31. "El déficit financiero en 1797 ascendía a 644 millones de reales, y a comienzos de mayo del año siguiente, la tesorería solamente disponía de 10 millones de reales y se preveía que al finalizar el año el déficit acumulado alcanzaría los 800 millones... Al subir al trono Fernando VII la situación era peor q~le en 1798, cifrándose la deuda en unos 7.000 millones de reales".

5 Rueda, Germán. El Reinado de Isabel 11. La España Liberal, en ,Historia de Espajia, n° 22. Historia 16, Madrid, 1996, pp. 66-68. En 1834 se autoriza a los Ayuntamientos a la venta de bienes raíces (bienes de propios), r~tificadas y ampliadas a todos los bienes civiles en 1837. Los Ayuntamientos se quedaron con parte de los ingresos de las ventas para acometer obras de carácter público.

6 La nacionalización partía del principio de que una vez suprimid~ la comunidad, los bienes comunes ya no le pertenecían porque había dejado de existir como tal. Entre 1835 y 1836, bajo los ministerios de Toreno y Mendizábal, se llevó a cabo la total nacionalización de los bienes de la Iglesia regular. 82 proceso que se enmarca en un contexto general de transforma­ y de sus bienes artísticos que, salvo casos excepcionales, se ciones políticas7, sociales y económicas, conocido como Revo­ perdieron irremediablemente. lución Burguesa. Los más importantes decretos desamortiza­ Sin lugar a dudas el ambiente bélico activó el proyecto de­ dores formaban parte de un programa cuyo objetivo más samortizador, pues los frutos de ésta ayudaron a ganar la gue­ importante era la transformación del sistema político y econó• rra, sin embargo, la magna operación de desvinculación de mico del Antiguo Régimen, sin olvidar que, al mismo tiempo, bienes raíces de las manos muertas no se hizo con la calma satisfacían las aspiraciones de la burguesía8, creando para ello necesaria. Hubiera sido preciso una tranquilidad política y una gran familia de propietarios nuevos que diera fruto a estas social para que no se perdieran multitud de objetos cuya ocul­ propiedades tanto rústicas como urbanas, y, en definitiva, con­ tación era sumamente fácil, dada la informalidad con la que se solidar con ello el cambio político de la revolución burguesa.9 hicieron los inventarios y se realizó la entrega de bienes 13 • La desamortización eclesiástica en Castilla-La Mancha La mala gestión que se hizo sobre el patrimonio propició, estuvo comprendida en cuatro períodos: el primero abarcaría además, la pérdida irreparable del mismo, dando lugar al expo­ desde 1836 a 1841, en el que se subastaron los bienes del cle­ liO l4 del tesoro de monasterios, conventos e iglesias. Aunque ro regular (órdenes militares y mendicantes); el segundo y más gran parte de obras valiosas fuesen devueltas a España tras la importante, el período pleno de la desamortización eclesiásti­ derrota de Napoleón, otras permanecieron en Francia, sin olvi­ ca, desde 1841 a 1844; el tercer período entre 1844 y 1851 dar el gran auge del coleccionismo propiciado por la divulga­ donde se produce una ralentización de las ventas que sólo afec­ ción a nivel internacional de la desamortización15. taron a las órdenes religiosas masculinas, aunque se reanima­ En mayo de 1855 los liberales progresistas legislan la Ley ron a partir de abril de 1847 a causa de las subastas de bienes de Desamortización General 16, en la que se exceptúan los edi­ diversos del clero, tanto regular como secular que no habían ficios destinados a servicios públicos, a establecimientos de sido devueltos a la Iglesia en 1845; Ypor fin un último perío• beneficencia e instrucción, las casas de los obispos y curas, y do entre 1851 y 1855, en el que se podían vender de nuevo cualquier edificio que el gobierno no crea oportuno. En octu­ gran parte de los bienes eclesiásticos en virtud del Concordato bre de 1858 se paraliza la desamortización eclesiástica, hasta de 1851 y bajo control eclesial hasta que, a causa de la discu­ el 7 de abril de 1861 con la Ley acordada con la Santa Sede, sión del nuevo proyecto de ley sobre desaluortización, se sus­ para la reanudación de las ventas de bienes eclesiásticos. penden todas las ventas ellO de febrero de 1855, diecinueve ElIde septiembre de 1837 la Junta Superior de Enajena­ años después de haberse iniciadolo. ción de Edificios y Efectos de los Conventos Suprimidos esta­ Las ventas de bienes urbanos originan, por una parte, la blece unas instrucciones a seguir en este sentido 17 en el capítu• aparición en el mercado de cierta cantidad de espacio urbano 11 lo VI artículos 29 y 30: "Las juntas intentarán y procederán y, por otra, permitió que se pudieran iniciar cambios urbanísti• desde luego a la venta de todos los muebles y efectos existen­ cos que significarían el comienzo de la conformación de la tes de los recogidos en los conventos suprimidos, procurando nueva ciudad burguesa. En este sentido, el caso de los conven­ obtener en provecho del Estado las lnayores ventajas posibles tos será el elemento clave para la transformación espacial de en dicha venta. A este fin acordarán los medios lnás expeditos las ciudades del siglo XIX. para verificarla, y los pondrán en ejecución sin necesidad de Tras la exclaustración muchos conventos 12, fueron cerrados consulta. Si entre dichos muebles y efectos hubiere algunos de y sin dedicación alguna por lo que provocó un deterioro pro­ considerable valor y mérito se venderán por separado en gresivo, lo que en este caso, propició la venta de los trabajos de pública almoneda, y por el importe al menos de las dos terce­ demolición y venta de los materiales aprovechables. Antes se ras partes del valor que se les diere en tasación ". les habían requisado sus bienes artísticos y culturales, sin olvi­ El patrimonio en bienes muebles era más iluportante por su dar el caso concreto de las campanas, por lo que, desgraciada­ cantidad que por su calidad18. Además, los responsables de mente, significó la pérdida de las bibliotecas de los conventos hacer los inventarios carecían de la preparación necesaria para

7 Bello Vasco, Josefina. Opa Cito p. 81. "Los organismos que intervinieron en la incautación de bienes fueron el Ministerio de Hacienda, encargado de los bienes destinados a la amortización de la deuda, el Ministerio de la Gobernación se haría cargo de la bibliotecas, pinturas, esculturas, etc., los obispos se harían cargo de los objetos religiosos, vasos sagrados y onlamentos; también intervinieron instituciones culturales como la Academia de Bellas Artes de San Fenlando y la Academia de la Historia y Sociedades Económicas".

8 La gran beneficiada de la venta de bienes nacionales fue la burguesía; la gran perdedora, la clase social más baja; pues a pesar de que los fines de la desamor­ tización era la creación de una gran masa de propietarios, fueron los burgueses, tenedores del papel de la deuda consolidada, quienes adquirieron las propieda­ des e incrementaron las rentas de los arrendamientos, acaparando, en detrimento del clero regular, e incrementando su patrimonio rústico y urbano.

9 Gaceta de Madrid, 21 de febrero de 1836, exposición de Juan Álvarez de Mendizábal a S. M. La Reina Gobernadora.

10 Del Valle Calzado, Ángel Ramón. Desamortización y cambio social en La Mancha, 1836-1854. Biblioteca de Autores Manchegos. Diputación de Ciudad Real. Ciudad Real, 1996. p. 63.

II Íbidem, p. 88 ss. "Había ciudades que por el gran número de edificios religiosos que poseía consiguieron salvarse al instalar en ellos las nuevas instituciones del Estado liberal".

12 En especial los masculinos, pues al ser éstos en mayor número suponían a la sazón más cantidad de edificios para enajenar, mientras que los femeninos iban a depender de su propia subsistencia.

13 Bello Vasco, Josefina. Opa Cito p., 19.

14 En 1835 Revista Española hablaba de la gran riqueza en escultura, pintura y manuscritos existentes en España, que atraían a los extranjeros no sólo para copiar­ las sino también, para sustraerlas hacia sus países.

15 Bello Vasco, Josefina. Opa Cito p. 36. "Los coleccionistas se mantuvieron en guardia para no desperdiciar las oportunidades que las nuevas desamortizacio­ nes les brindarían, llegando en los años 1835 Y 1836 a obtener un acopio taL de obras valiosas, que fue eL origen de muchas de Las colecciones privadas e hizo posible que en los distintos museos europeos se expongan hoy originales de gran mérito que durante siglos habían permanecido en los monasterios y conventos."

16 Tendrá vigencia hasta 1925.

17 Archivo Histórico Nacional. Sección de Hacienda. Serie General. Legajo 3895. En adelante A.H.N.

18 Bello Vasco, Josefina. Opa Cito p., 148. 83 hacer una valoración real de este patrimonio; en este sentido, das a aquellos edificios adecuados que pasarían a ser los mu­ Josefina Bello nos dice en la página 294: "Hubo provincias en seos y bibliotecas provinciales. las que la incautación de estos efectos se había realizado casi No obstante, tanto los inventarios como los efectos incau­ a granel; se confundieron cuadros con estampas, libros b~enos tados estaban repartidos bien en las oficinas de amortización, y antiguos con libros de coro; quedaba el campo abierto para en la sede del Gobierno Civil, o bien en las iglesias y conven­ que se produjesen sustracciones de obras buenas y valiosas tos, incluso algunos efectos se dejaron sin inventariar debido a

sustituyéndolas por otras de ningún valor". I la desidia de estas comisiones, pues no era un trabajo remune­ Se destinaban a la venta obras, en el caso de las pinturas, rado ni había medidas coercitivas que les obligasen. Tal fue el por su color apagado y se conservaban aquellos que tenían más caso de la comisión subalterna de Albacete, a quien se le pidió brillo o el color más vivo. El informe del Gobierno Civil de que rectificasen los inventarios por las muchas anomalías que Albacete a la Comisión de Monumentos decía: "No se ha~reco­ presentaba; los componentes de esta comisión renunciaron a su gido ni existido tampoco en ningún convento de la provincia cargo y ni siquiera se molestaron en responder al Gobernador cuadro alguno de un mediano pincel, ni otro objeto ar~ístico Civil. digno de poderfigurar en ninguna galería de arte"I9. Las bibliotecas de los conventos recibieron poca atención Los bienes muebles afectos a la desamortización se organi­ por parte de los comisionados porque, por regla general, éstas zaron en dos grupos en base al destino que se les aplicp. Un se encontraron bastantes incolnpletas, bien por las ocultacio­ primer grupo estaría comprendido por aquellos efectos desti­ nes de los religiosos en su deseo de poner a salvo las mejores nados a la venta, tales como muebles, utensilios de cocina, obras, bien por la actuación del acuartelamiento de las tropas ajuar, víveres, aperos de labranza, bodegas, aceite, vinos, !gana­ quienes las utilizaron para abrigarse o hacer fogatas, o bien dos, etc. El convento de Santa Clara de Hellín debía ser bas­ fueron desapareciendo por robos sucesivos. tante rico en estos bienes a deducir por la propiedad rustica Las relaciones sobre el contenido de las bibliotecas eran desamortizada20, y por la riqueza de sus retablos, pit~turas, bastantes exiguas, se limitaban a decir el número de libros y la esculturas, ornamentos y vasos sagrados21 • temática. En la relación del convento de San Francisco de Un segundo grupo que comprendería aquellos bienes de Hellín fechada el diez de octubre de 1835 nos dicen: "En su carácter cultural y artístico así como los objetos de culto y biblioteca se hallan mil quinientos catorce libros grandes, alhajas22 de las iglesias; a este grupo se les denominaba;como l1zedianos y pequeños de diversas obras de filosofía, teología, conservables, aunque, no obstante, parte de ellos tamb~én se sacranlentos, ¡noral, catecismos, directorios, sermonarios, destinaron a la venta23 • cuasi todos en pergamino, y otros lnal tratados de diferentes En cuanto a estos bienes de carácter cultural, una vez rea­ materias "27. lizado el inventario, fueron llevados en algunos casoS a un En 1844, estando Pidal como ministro de gobernación del lugar seguro, pero en otros se dejaron en los mismos conven-I nuevo gobierno de Narváez, se crearon las Comisiones de tos con muy pocas medidas de seguridad24• Monumentos Históricos y Artísticos, quienes aprovecharon los En cada capital de provincia se constituyó una comisión de datos facilitados durante años anteriores para evitar la pérdida cinco personas nombradas por el Gobernador Civil qu~ tenía de tan valiosos bienes; estas comisiones sustituían a las ante­ como misión clasificar convenientemente los objetos artísticos riores comisiones científicas y artísticas. y literarios de los conventos; a estas comisiones se le sumaron Para facilitar sus cometidos se dividieron en tres secciones: otras subalternas25 en los pueblos donde existían conventos, sección de archivos y bibliotecas, sección de escultura y pintura cuyos inventarios los remitirían a las comisiones provinciales y sección de arqueología y arquitectura. Tras organizar un pro­ para elaborar uno general26• Todas estas obras serían tr"slada- grama de visitas por los distintos pueblos, cotejaron los inventa-

19 Ibídem, pp. 165-166.

20 Molina Grande, María C. y Morales Gil, Alfredo. "desamortización de bienes de l1ística en Hellín, en Murgetana", n° 43, 1975, páginas 75-88. "...en HelUn, con una extensión municipal de 77.863 ha., algo mayor que la de Yecla e inferior a la de Jumilla, se subastaron lotes que sumaban 705 Ha. Como se aprecia­ rá, la proporción de propiedad eclesiástica es muy superior a la d~ los dos municipios murcianos. Además, hay que destacar que estos bienes no estaban repar­ tidos entre diversas comunidades y organismos religiosos, sino qu~ un sólo convento, el de las Monjas de Santa Clara, poseía 694 Ha., quedando el resto -úni­ camente Ji Ha.- repartido entre J2 propietarios".

21 Archivo Histórico Provincial de Albacete. Sección Clero. Caja 6. ~n adelante A.H.P.A.

22 A.H.N. Sección de Hacienda. Serie General. Legajo 3895. En el Capítulo VII, artÍCulos 31 al 33, de la Instrucciones de la Junta Superior de Enajenación de Edificios y Efectos de los Conventos Suprimidos de fecha 1 de septiembre de 1837 establece: "Las alhajas procedentes de los conventos suprimidos que exis­ ten a disposición de las juntas en su poder, en el de los comisionados principales de Amortización, o en el de cualquier otra persona o corporación serán pues­ tas en venta sin dilación ni necesidad de consulta a esta junta superior. Para ella se formará expediente en que se exprese determinantemente el número y clase de las alhajas, conventos a que pertenecían y su peso y tasación. ¡Conocida esta se anunciará la subasta por término de quince días, para la que se admitirán proposiciones con baja hasta de un cuatro por ciento del valor de {as alhajas, y verificado el remate con las debidas condiciones de que la cantidad en que que­ dase se ha de satisfacer al contado y precisamente en dinero met6lico, que será único y quedará cerrado en el acto y que los compradores habrán de satisfa­ cer los gastos de la tasación referida: se remitirá el expediente a esta junta superior para la aprobación de S. M., y obtenidas se adjudicarán las alhajas al rematante, antecediendo el pago de la cantidad en que hubiesen ql!edado a su favor. Mediante a haberse mandado en real orden de 28 de julio último que cuan­ do la plata y alhajas que se subasten no tengan licitadores con el moderado beneficio expresado en el artículo anterior, se trasladen a la casa de nloneda del reino con las seguridades convenientes, cuidarán las juntas de dar parte a esta superior, con remisión de los expedientes originales de los remates de dicha plata y alhajas que queden sin efecto porfalta de compradores, indicando los medios que les ocurran para hacer la conducción de ellas a las casas de mone­ da más inmediatas con toda seguridad y con el menor costo posible, para que la junta superior, con conocimiento de todo resuelva lo que estime oportuno".

23 Se refiere a aquellos efectos de carácter científico y artístico que no eran susceptibles de conservarse por su escaso valor, así como los vasos sagrados y alhajas

no necesarios para el culto. I

24 En un espacio de apenas dos años, bien por deterioro, venta o r090' los cuadros y pinturas experimentaron una reducción considerable cuando los comisiona- dos llegaron a recogerlos.

25 En Hellín el presidente de la comisión subalterna fue Juan Batuones.

26 Bello Vasco, Josefina. Op. Cit. p., 290.

27 A.H.P.A. Sección Clero. Caja 6. 84

rios de las anteriores comisiones, al menos los que encontraron, cuya riqueza no correspondiese con la pobreza de las iglesias3l • con los efectos existentes en los conventos, para posteriormente Se hizo una clasificación de tres categorías: 1a._ los objetos des­ hacerse cargo de ellos y trasladarlos a un edificio ideal para su tinados al culto se entregarían al obispo quien los repartiría entre a depósito. Esta labor no estaba exenta de problemas, en Albace­ las parroquias más necesitadas. 2 ._ Los objetos de metales pre­ te, por ejemplo, el gobernador se lamentaba ante la Comisión ciosos y pedrerías se reservarían para la venta por ser demasia­ a Central que todos los edificios de la ciudad estaban ya aplicados dos suntuosos para el culto y 3 ._ Aquellos efectos que, aunque a algún fin, y no disponía de ningún sitio para alojar los cuadros destinados para el culto, tuvieron un marcado valor artístico, se y libros recogidos por las Comisiones de Monumentos; en este enviarían a los museos provinciales correspondientes32• sentido decía: "Los cuadros y los libros cuya selección se está Con las campanas también se procedió a su venta33, aun­ haciendo los colocaré en una habitación del Gobien'lo Político que, en realidad, lo que se vendía no eran las campanas, sino hasta que se halle mejor sitio "28. el metal, se vendían al peso al mejor postor34• En la provincia Podemos adivinar cómo habían menguado el número de de Albacete se inventariaron en 1838 un total de 48 campanas libros desde la relación a la que nos hemos referido de 1837 en procedentes de los conventos desamortizados de la provincia35 • la que solamente en el convento de franciscos de Hellín había Como los trámites burocráticos eran muy largos produjo el mil quinientos catorce libros, a la relación enviada por el retraimiento de los compradores y muchas cosas quedaron sin gobernador de la provincia de Albacete en 1845 a instancias vender. Para retnediarlo se dictó una orden fechada el 21 de Junio del Ministerio de Gobernación en la que se pedía el número de de 1836, referida exclusivamente para monasterios y conventos, libros recogidos en toda la provincia, que en este caso tan sólo en la que se agilizaba el proceso por el que los bienes muebles se ascendía a 1.259. Otro tanto pasaba en cuanto a las pinturas, se pondrían en pública almoneda previa tasación pericial. remitió un total de 46 para toda la provincia, mientras que tan Aunque gran parte de estos bienes muebles ya se habían ena­ sólo en el convento de franciscos había 56. jenado a lo largo de 1836, todavía quedaban bastantes sin vender, En cuanto a las ventas de libros y pinturas, era conocido en especial de los conventos de religiosos. Se pidieron inventa­ por la administración que desde el momento mismo en que se rios a partir de esta orden, pero éstos referían sólo muebles sin tuvo conocimiento de la supresión de las comunidades29, valor o desvencijados, es decir, inservibles36• En definitiva los comenzó a abundar la existencia de especuladores que aprove­ muebles de los conventos se malvendieron, y los que quedaron se charon la confusión inicial para hacer lucrativos negocios obte­ entregaron al ejército y a instituciones de beneficencia3? niendo obras de arte a muy bajo precio. El convento de San Francisco se fundó en 1524, mante­ En este sentido, las pinturas más preciadas eran aquellas niéndose la estructura original del patio y de la iglesia, ejem­ que se referían a escenas bíblicas, episodios de la vida de Cris­ plo fidedigno de fisonomía franciscana, aunque está muy des­ to, de la Virgen, retratos de monjes, mártires y santos, en espe­ figurada por la reestructuración realizada en los años cincuen­ cial San Francisco. ta del siglo XX por un arquitecto de la orden. El esquema com­ En cuanto a la venta legal se refiere, la subasta de efectos positivo era el de nave única con capillas entre contrafuertes y artísticos no conservables se convertía en un arma de doble filo techumbre de madera, que daba la sensación de infinito, pro­ en base a los criterios de selección poco fiables: se subastaron pia de estos centros de culto mendicantes. libros al peso, por estar viejos o deteriorados; las pinturas se De las paredes de la portería se suspendían nueve cuadros valoraban en función de su colorido más o menos intenso o el que representaban a Jesucristo y a santos de especial devoción estado de conservación de los lienzos. de la orden, como San Jerónimo, San Buenaventura, segundo Con respecto a los vasos sagrados, ornamentos y alhajas30, el fundador de la orden franciscana, Santa Rosa, La Magdalena, Real Decreto de 13 de julio de 1835 establecía que estos objetos la madre Agüeda, Escoto, San Bemardino y San Antonio de no se aplicarían a la extinción de la deuda, sino al culto, salvo Padua, que era después de San Francisco el más popular de los aquellos efectos de reconocido mérito artístico o económicos santos franciscanos38•

28 Bello Vasco, Josefina. Op. Cito p. 339.

29 Ibídem, p. 360. "La venta de objeto artísticos y literarios por parte de las comunidades, antes y después de la exclaustración, fue un hecho bastante común...".

30 En el reinado de Carlos IV, las alhajas de oro y plata que poseían las iglesias y conventos de España a finales del XVIII se valoraban en 1.104 millones de reales.

31 Bello Vasco, Josefina. Op. Cit., p. 364.

32 En algunos casos, la oposición de clérigos y seglares devotos consiguió que algunos cuadros, esculturas y joyas fuesen dejadas en las iglesias por la enorme devoción popular de la feligresía.

33 A.H.N. Sección de Hacienda. Serie General. Legajo 3.895. en el Capítulo VII, artículo 34, de la Instrucciones de la Junta Superior de Enajenación de Edificios y Efectos de los Conventos Suprimidos de fecha 1 de septiembre de 1837 establece: "Por ahora y hasta que órdenes particulares se detennine definitivamente el destino de las campanas, se conservarán éstas a disposición del gobierno."

34 Bello Vasco, Josefina. Op. Cit. p. 370.

35 A. H. P. de Albacete. Sección Clero. Caja 15. Inventario del 10 de Junio de 1838 por el Comisionado Provincial de Arbitrios de AlTIOrtización.

36 En unos casos porque se vendieron de inmediato en pública subasta, quedando solamente los más viejos; y en otros los soldados destruyeron gran parte y los más fueron robados ante la falta de seguridad de los edificios.

37 Real Orden de 1 de Diciembre de 1836.

38 Desconocemos la descripción iconográfica de sus atributos, pues no se especifican, no obstante, estarían definidos por el espíritu de la Contrarreforma en el ámbito artístico del Barroco. En este sentido, San Jerónimo lleva la piedra, la calavera, la paloma; a veces lleva el capelo cardenalicio, león domesticado; A San Buenaventura se le representa con rostro imberbe, aunque los capuchinos lo representan barbudo. Lleva dos vestiduras superpuestas: un hábito ceñido a la cin­ tura por el cíngulo de cuerda y encima la capa magna de los cardenales; sus atributos son la mitra episcopal, capelo cardenalicio, recibido en 1526, y, sobre todo, su crucifijo biblioteca; Santa Rosa lleva las rosas en la mano o recibe de Jesús. A veces, como San Antonio de Padua, sostiene al niño Jesús en sus brazos. La Magdalena es representada con una larga cabellera suelta. Sus atributos son un vaso de perfumes cuyo contenido esparce sobre los pies de Cristo. La Madre Águeda tiene como atributos sus dos senos arrancados, matrona de las nodrizas y las madres que amamantan a sus hijos. A San Bernardino se le representa viejo, con rostro de asceta febril, demacrado y lleno de arrugas. Vestido con el hábito franciscano y descalzo. Sus atributos el disco con el trigama inscrito J.H.S. ro­ deado de llamas. Con frecuencia se le suman tres mitras echadas a sus pies. 85

En el claustro bajo, donde los monjes realizaban la refle­ rales había dos altares pequeños con sus retablos con San Fran­ xión y la meditación, estaban colocados trece óleos39, ~epro­ cisco y Santo Domingo respectivamente. ducciones de las escenas la Vita redactada por San Buenaven­ En el Camarín de la Virgen había una escultura de la Purí• tura, representando la vida y la muerte de San Francisco, de sima en su trono45 y en las paredes había cuatro óleos repre­ forma que la sucesivas secuencias de la vida del fundador de la sentando su Historia. orden les estimulasen los pensamientos piadosos, que trarsmi­ En la capilla de los Dolores había un retablo con la Virgen tiesen el sentido último de la vida a través de su melancolía en de los Dolores y a sus pies una escultura de un Ecce Horno, y el microcosmos de la vida monacal40• en los costados en un nicho una escultura de San Francisco, cus­ En la escalera principal había cuatro óleos, uno de la Purí• todiados por un cuadro de San Rafael y otro de San Miguel, san­ sima Concepción, patrona de los franciscanos, otro de San to psicopompo, conductor de los muertos cuyas almas pesará el Antonio de Padua41 , cuya legendaria vida es una copia de la de día del Juicio. En el siglo XVII, con la Contrarreforma, el culto San Francisco, otro de Jesús Nazareno y un Ecce Horno. El a San Miguel adquirió un nuevo carácter: simboliza el triunfo de desarrollo iconológico de la escalera principal viene determi- la Iglesia católica contra el dragón de la herejía protestante.

I nado por la contrarreforma tridentina, quien, frente a la ~eolo- En la capilla de la Purísima, la Virgen en un retablo pinta­ gía protestante que niega la posibilidad de la redención a tra­ do al fresco flanqueada por el teatino San Cayetano, a quien la vés de las obras humanas, la figura del Ecce Horno recogiendo Virgen confía a su hijo, y San Juan Evangelista. sus vestiduras tras la flagelación, nos indica que aquel que se En el resto de la Iglesia había: Dos cuadros de San Rafael, reviste de Cristo e imita sus virtudes, le ayuda en sus m6men- ángel médico y guardián; y un Vía Crucis al óleo. I tos de dolor y sirve como justificación para la redención42• Varios retablos dorados y policromados: dos con la escul­ En el claustro alto, que da acceso a las celdas, había cinco tura de San José, y en uno de ellos, a los pies del santo, hay una cuadros representando pasajes de la vida de San Francis~o; un urna con Virgen de las Angustias46• Otro con Jesús Nazareno. Vía Crucis al óleo, con un sentido contrarreformista, en ~l que Otro pequeño con el santo sanador San Antonio47• Otro con el se acentúa el valor y el mérito de las obras, y, a imitación de Santo Cristo de la Salud, y a ambos lados el sanador San BIas Cristo, incita al monje a levantar la cruz de cada día para con­ y San Luis48 en sendos nichos. Otro pequeño con una escultu­ seguir la vida eterna; otro óleo con un Cristo; otro co:n San ra de Cristo.

Francisco orando y otros dos con San José, como padre I nutri­ Retablos sin policromar: Uno con San Benito de Palermo. cio de Jesús, y Santo Domingo, santo dominico muy querido Otro con San Pascual Bailón, y otro con la Virgen del Rosario. por los franciscanos.43 Varios retablos pintados al fresco sobre yeso: Uno con San En la torre campanario había tres campanas de dif~rentes Diego. Otro con una escultura de madera de San Buenaventu­ tamaños44• ra en el centro. Otro idéntico con Santa Rosa. En la iglesia, la Capilla Mayor con el Retablo Mayor con La Virgen de las Angustias, de medio cuerpo, en una urna de las esculturas de San Fernando de Castilla, patrón de toda madera acristalada. Otra urna más pequeña que la anterior con un España, San Jerónimo, San Luis y Santa Margarita; en lds late- niño Jesús vestido y con un cordero. Otra urna con una reliquia49

39 A.H.P.A. Sección Clero. Caja 6. Según la relación estos cuadros se denominan como ordinarios, al menos ese es el criterio que tiene el encargado de hacer la relación, aunque, no obstante, este criterio se podía basar exclusiv1amente en el colorido más o menos apagado de la pintura, sin hacer un análisis más profun­ do del cuadro. El inventario está fechado el diez de Octubre de 1835 con asistencia del prelado fray Manuel Pérez Gálvez, manifestante del contenido del con­ vento, y por el Sr. Administrador de Rentas Estancadas D. Andrés Pradel y Alarcón, y como escribano D. Juan Batuanes.

40 En la actualidad hay varios cuadros, realizados en la década de 1940, intentando ser copia de los existentes (según nos dice el padre Pedro, prior del convento) que relatan también la vida y muerte de San Francisco.

41 Reau, Louis. Iconografía del Arte Cristiano. Iconografía de los Santos, de la A a la F. Tomo II, volumen 1. Barcelona, Ediciones del Serbal. 1996, p. 126. Sus atributos son las llamas, la rama de lirio, el niño Jesús, el crucifijo dorado, los peces escuchando el sermón y la mula arrodillada ante la hostia. Aparece aso­ ciado a San Francisco de Asís o San Antonio Abad, y a veces a S~n Juan Bautista presentando al cordero sobre un libro.

42 Concilio de Trento. Capítulo décimo. Sesión VI.

43 Después del Concilio de Trento, el arte barroco de la Contrarreforma creó una iconografía muy diferente a la del treccento y quatroccento. La imagen y el tipo físico del santo se transformó en lugar del monje sonriente con aspecto feliz, que considera la alegría una virtud, se prefirió presentarlo con los rasgos de un asceta malicento y descamado y expresión torturada, un espectro fn sayal. Al mismo tiempo, su hábito de franciscano fue reemplazado por otro de capuchino, pues estos franciscanos reformadores encarnaban con mayor fideli1dad el espíritu de la penitencia. Las representaciones de San Francisco en oración y los telnas primitivos como la imposición de las llagas y su ocultación aparece con la Contrarrefonna con un carácter de éxtasis, sin vínculo con la realidad; San Francisco es recreado como una máscara de asceta con pómulos prominentes y mejillas hundidas, consumido por el ardor místico.

44 A.H.P.A. Sección Clero. Caja 15. Relación fechada en Chinchilla:el 23 de Junio de 1838, donde se especifican tanto los edificios conventuales como sus cam­ panas que están bajo la custodia del Comisionado Provincial de Arbitrios de Amortización de la provincia de Albacete. En cuanto al convento de San Francisco

de Hellín aparecen tres campanas. I

45 Alfonso Rodríguez G. De CebaBos. "El retablo Barroco", en Cuadernos de Arte Español, n° 72. Editorial Historia 16. Madrid, 1992, p. 28. "lo más frecuente fue venerar a la Virgen bajo una advocación local determinada o conlO patrona de una ciudad, pueblo o comarca en un camarín que ocupaba el centro del reta­ blo. La imagen era entonces, casi sin excepción, una imagen de ~estir, es decir un maniquí con el rostro y las manos talladas y el resto del cuerpo recubierto de lujosos vestidos, telas y joyas.. en tomo a ellas se organizó un fohorte de camareras y azafatas que la acicalaban y vestían antes de ser expuestas a la vene­ ración de la feligresía."

46 Isabel del Río y de la Hoz. "Gregorio Fernández y su escuela ", en Cuadernos de Arte Español, Historia 16, Madrid, 1992, p. 17 ss. Muchas esculturas exentas están Inetidas en una caja de cristal; el cristal simboliza el paso d~ la duración mundana a la eterna.

47 Es un santo curador y se le representa anciano y barbudo que vistb sayal con capucha. Sus atributos particulares son la tau, la esquila, el cerdo y las llamas del

I fuego de San Antón. Las llamas salen de sus pies o del libro que tiene en la mano: alusión a la enfermedad curada por los antonitas. A veces las llamas salen de los dedos de los enfermos. A causa de esta confusión, este emblet;na también fue atribuido a San Antonio de Padua.

48 A San Luis de Anjou se le representa con los rasgos de un joven obispo. Encima de su sayal franciscano, ajustado con el cordón de la orden, lleva una capa cons­ telada de flores de lis doradas. Tocado con la mitra que dos ángelbs a veces colocan sobre su cabeza, y corona tirada a los pies.

49 Rodríguez G. De Cevallos, Alfonso. Opa Cit. p. 10. La contrarrefprma impulsó el culto a las reliquias de los Santos, encerrados en arquetas, urnas y fanales de todas clases y formas. 86

de la cabeza de San Félix50• Una escultura de un niño Jesús ves­ crucifijo, un libro y una calavera, encima de unas barras de tido con su peana. Este tema del niño Jesús es el más divulgado espino, con un cordón a la cintura y una capucha en la cabeza. en la iconografía barroca; no se quiere representar ningún El libro y la Cruz tienen su fuente en los ejercicios espirituales momento concreto de esta etapa de la vida de Cristo, sino incor­ de San Ignacio de Loyola, el cual tuvo una meditación ante la porar a la imagen aislada de Jesús infante un contenido simbóli• muerte. También los franciscanos se mostraron siempre fami­ co-alegórico de carácter devocional. liares con la muerte, pero, es a partir de Trento cuando los pin­ Para las procesiones, tan afines al gusto barroco, había una tores representan a santos contemplativos con la calavera, el cruz de madera con embutidos de nácar que porta un Santo libro y el breviario como signos de santidad; entre los que más Cristo de metal. Dos ciriales y una cruz de madera todos pin­ fomentaron esta iconografía franciscana se encuentran Zurba­ tados. Unas andas en forma de urna para el sacramento. Ocho rán y El Greco. Las espinas que acompañan a estos atributos, andas de madera para llevar diferentes santos. aluden al episodio de la vida de San Francisco, en el cual el Cuatro confesionarios de madera de pino. Ocho misales. santo se arroja a unos espinos para librarse de una tentación54• En la biblioteca se encontraban mil quinientos catorce libros, Según Jacobo Serra Martínez el convento de Santa Clara de diferentes tamaños y que versaban sobre Filosofía, Teología, fue fundado por el bachiller don Luis de Caravaca quien donó Sacramentos, Moral, Catecismo, Directorios y Sermonarios. en su testamento "unas casas propias que son en el barrio que En dependencias anexas había diferentes enseres para el dicen de la Canaleja, que lindan con casas caídas de Sancho uso litúrgic05l • Martínez y de Juan Yánez, y con la calle pública nueva que En cuanto a los vasos sagrados, había un copón y dos cáli­ dicen de la Canaleja.". Precede a la relación de los bienes ces de plata, dos cálices bronce, uno de ellos repujado; una muebles del convento esta descripción del mismo: "Este con­ ampolleta de plata para el santo óleo y una llave de plata para vento está situado en el centro de la población, ocupando una el sagrario. pequeña altura, aislado por tres calles públicas, y por la otra En la sacristía había dos cuadros de San Francisco, uno con con casas de particulares, y su obra es de tapia de tierra, y por la impresión de las llagas, y otro ocultándolas; un cuadro de la lo general sus abitaciones son lóbregas, poco cónl0das, 1nal Virgen; diez cuadros con las imágenes de diferentes santos distribuidas y muchas escaleras, estando de presente repara­ para adorno de la sacristía, y una escultura de San Dieg052• do. La Yglesia es de una sola nave, y de una regular capaci­ En la cajonería de la Sacristía había un rico vestuario para dad, sin que nada se admire en ella "55. los celebrantes de la Misa. Los colores dependían de la festivi­ A la orden de los franciscanos se suma la orden de las cla­ dad litúrgica del día53 • risas, fundada por Santa Clara de Asís, para las mujeres, y la Destacan, como hemos visto, las representaciones de San tercera orden, reservada para los laicos. Francisco. En este sentido recordemos que en la iconografía de En el Coro Bajo había un Cristo de talla, un óleo con mar­ San Francisco de Asís el vestido y los atributos no han variado co dorado de la Purísima Concepción, y otro más de Jesús cru­ nunca. Lleva siempre el hábito franciscano sujeto al talle con cificad056• tres nudos que representan los tres votos: pobreza, castidad y En el Coro Alto había una talla de Cristo dentro de un nicho obediencia, simbolizando las virtudes franciscanas. Otros atri­ al que rodean y adornan siete cornucopias doradas con espejos; butos son el crucifijo, ante el que puede estar orando o tenerlo cuatro óleos: con el Buen Pastor57, San Antonio, la Soledad y en la mano y los estigmas que laceran las extremidades supe­ de la Virgen de los Llanos, y dos mas pequeños de Jesús y riores, inferiores y el costado. María; un Vía Crucis de estampas pequeñas sobre lienz058• La representación iconográfica de San Francisco después En la capilla Mayor estaba el Retablo Mayor de color azul, de Trento aparece definida por una imagen en éxtasis ante un con las esculturas de Santa Clara59, la Purísima Concepción, San

50 San Félix Cantalicio lleva hábito marrón de la orden mendicante con alforja y rosario; con frecuencia lleva al niño Jesús en brazos.

51 Un Cristo de metal en una cruz pequeña para decir Misa. Dos marcos tallados y dorados en el interior. Seis cornucopias viejas. Un sagrario pequeño de made­ ra tallada. Cinco candelabros de bronce. Otros cuatro más pequeños también de bronce. Una lálnpara de bronce pequeña. Tres lámparas de hojalata. Tres sillo­ nes forrados de seda. Tres campanillas de bronce para las Misas. Una caldereta. Dos platos de peltre para las vinajera,s. Una mesa o pedestal circular de mármol encarnado (actualmente está en la Sacristía). Tres alfombras pequeñas y una grande.

52 Réau, Louis. Op. Cit. pp. 377-8. Franciscano español representado con sayal buriel entallado con el cordel de la orden y un manojo de llaves en la cintura.

53 Once ternos de diferentes modelos, negro de raso, con flecos negros y encarnados, blanco de medio tisú, blanco de Damasco, verde con galón de seda blanca, encarnado carmesí con galón de plata, encarnado de Damasco y morado con galón blanco; sesenta y cuatro casullas que podían ser negras, de medio tisú, blan­ cas, verdes y encarnados; treinta y seis estolas; tres capas; dos paños de facistol; treinta y ocho manípulos; tres dalmáticas; treinta y una bolsas; dos frontales, uno negro y otro bordado con talco y lentejuelas; seis paños de púlpito; treinta cubre cálices; un facistol; cinco bandas; cinco cíngulos, dos de ellos de seda; siete vestidos, tres para el Niño Jesús y cuatro para distintos santos; un paño de palio de color encarnado; una almohada de color verde bordada de seda; tres paños de colgadura de color encarnado; Un estandarte azul en el que está bordada la Purísima Concepción; Nueve mantos de diferentes santos; dos mitras y una capa de San BIas; nueve albas de lienzo; siete amitos también de lienzo; doce corporales con sus respectivas palias; ochenta purificadores; nueve paños de altar; cinco roquetes; una toalla para la cruz, y un paño para el comulgatorio.

54 A.F.M.C. "Un San Francisco del siglo XVII", en ANTIQUARIA, 1991, p. 70.

55 A.H.P.A. Sección Clero. Caja 6.

56 En este coro estaba amueblado y decorado con tres sillones de madera tallada con respaldos de seda, diecisiete cornucopias con Santos y espejos, cuatro ban­ cos de pino y dos cortinas de lienzo y otra de indiana con baretas de hierro.

57 Réau, Louis. Op. Cit. p. 38. Cristo puede aparecer de pie o sentado en medio de sus ovejas, imagen de los ti eles que serán defendidos por el Buen Pastor fren­ te a los ataques del lobo, dando su vida por ellos.

58 El mobiliario de este coro comprendía un facistol de madera de pino, cuatro bancos con respaldo todos de pino, dos cortinas de lienzo negro con baretas de hie­ rro, siete candelabros grandes de madera de pino, cinco libros de coro, cuatro cornucopias, y los asientos del coro de madera de pino empotrados en la pared.

59 Santa Clara de Asís era hija espiritual de San Francisco de Asís y fundadora de la Orden de las Clarisas. Se le representa joven o vieja. Su hábito es el de las monjas franciscanas, con un cordón de tres nudos y un manto con rayas trasversales. Sus atributos son: la custodia eucarística y una cruz rematada en ramo de olivo por su apasionado amor al crucifijo. Algunos le ponen un tallo de lirio como símbolo de pureza, y una lámpara de arcilla o linterna procesional como patro­ na de los ciegos. 87

José, San Francisco, Santa Rosa y San Antonio Abad6o• Cuatro Se completaba el contenido de la Sacristía con otros ense­ retablos colaterales61 más pequeños con un nicho donde se alo­ res de entidad menor y la ropa para las celebraciones litúrgicas ja, en uno la talla de la Virgen del Rosario vestida con un man­ y adorno de altares68 . to de seda, la devoción por esta virgen es una prolongación del Desde el siglo XVII, España se fue transformando en un culto a la Virgen de la Misericordia y era muy del gusto de los país conventual; las órdenes monásticas proliferaron pese a la conventos femeninos; en otros dos las de San Juan Evangelista pobreza del país, pues siempre encontraban algún mecenas­ y la de San Juan Bautista62, y en el cuarto un óleo de lal Con­ protector; a su vez, los recintos conventuales suponían un refu­ cepción sobre la pared. Un último retablo en esta capilla, dora­ gio para la indigencia. En las celdas de estos monásticos era do y policromado en cuyo centro se halla un óleo de la Virgen necesario colgar cuadros o imágenes que estimulasen los pen­ del Consuelo, con tres sacras de caoba con clavos romanos63 • samientos piadosos, Debajo del coro hay tres óleos, uno de San Antonio de Tras el Concilio de Trento, estas imágenes debían ante todo Padua, otro de la Santísima Trinidad64 y otro de San Di~go. incitar a la fe e ilustrar los sermones de la misa en las parroquias. Sobre las dos puertas de la iglesia había en una un ól60 con En el convento de San Francisco había 17 retablos69 y 6 en la Purísima Concepción y sobre la otra la Dolorosa y Jesucristo. el de Clarisas. El retablo barroco debe concebirse como un En el resto65 de la iglesia había un Vía Crucis con est~mpas mueble de carácter litúrgico con una función devocional, cul­ de papel; un púlpito de madera tallada tanto su escaleraicomo tural y religiosa. Las diferentes tipologías de los retablos esta­ el tornavoz; un órgano pequeño de cuatro octavas y ~einte ban sobre todo condicionadas, al margen de las características registros. artísticas, que en cuanto se refiere a los existentes en Hellín Para procesionar había cinco cruces de madera anac1arada: estaban intluenciados por su proximidad a la región de Murcia cuatro con un Cristo metálico y en la otra de talla; dietiocho y el Arte Levantino, por los usos a desempeñar, como eran la candeleros, dos de bronce torneados, seis de hojalata y diez de enseñanza al pueblo de las verdades de la fe y los principios de

madera torneada y pintados de rosa. I la moral católica. En cuanto a los vasos sagrados había dos cálices, uno de En este sentido, el Concilio de Trento se encargó de recor­ plata y otro de bronce, y un copón de plata. I dar la enorme eficacia de las imágenes para el adoctrinamien­ En la sacristía había una talla de la Virgen del Rosario, doce to y propaganda del mensaje católico. La figura del crucifica­ cuadros: tres con diferentes escenas de la vida de Jesús, San do barroco adquiría una transignificación como imagen pura­ Antonio, San José, San Pascual, la Anunciación, una r~ligio­ mente devocional; se sitúa en lugares sencillos de capillas late­ sa66, San Juan con un grupo de religiosos, la Magdalena, la rales, a la entrada de las iglesias, a la altura humana, para que 67 Santísima Trinidad y la Santa Cena • I el devoto pudiese situarse frente a ellos, orar y besarle los pies.

60 El sagrario es de madera tallada y dorada y la mesa de altar también de madera.

61 Con mesa de altar de yeso y frontal de madera pintada. I

62 Réau, Louis. Op. Cito p. 488. Es el precursor del Mesías y primerc~ de los mártires de la fe de Cristo.

63 Junto a este retablo se encontraban una cruz de madera anacarada~ tres sacras de talla y una lámpara pequeña.

64 Réau, Louis. Op. Cito pp. 49-50. Tras el Concilio de Trento, la Igl~sia Católica repudió las representaciones tricéfalas y triteístas de la Santísima Trinidad, adop­ tando la fórmula del "Trono de Gracia", como manifestación del monoteísmo de la fe cristiana. Creemos que esta representación podía ser la más probable fren­ te al resto de otras posibles representaciones tales como geométri:cas (triángulos, círculos), simbólicas (1os tres ángeles a la mesa de Abraham), antropolllórfi• cas (cabeza de tres rostros, similitud de las tres personas divinas), antropozoomórficas (dos personas de forma humana y la paloma, agrupados horizontalmen­ te o ve~icalmente). Iconográficamente el "Trono de Gracia" está ¿ompuesto por Dios Padre, sentado sobre su trono, presenta como signo de la Gracia redento­ ra el cuerpo de su Hijo en la cruz. La palOlna del Espíritu Santo Iplanea entre las cabezas del Padre y del Hijo de manera que las tres personas se encuentran

estrechatnente unidas, fundidas en una totalidad. I

65 Completaba los muebles de la iglesia: una perilla portátil de madpra para confesar, tres atriles, uno de ellos pintado, doce sacras con marco de madera y pin­ tadas de encarnado, cincuenta ramos de hojalata para adornar los altares, tres sillones de madera tallada forrados con tela de lana, otro más para el confesio­ nario, tres campanillas pequeñas metálicas para los altares, dos facistoles de madera de pino, seis bancos con respaldo de madera de pino, un banquito de Inade­ ra con dos escalones para el uso de los altares, nueve aras de piedia, seis para los altares y tres para los tabernáculos y una urna de madera dorada para el monu­ mento.

66 Sin especificar.

67 Después del Concilio de Trento, con la Contrarreforma adquirió nueva vida como glorificación de este sacramento. La Santa Cena se convirtió en un medio de

defender la Eucaristía frente a la reforma protestante. I

68 Un espejo mediano y roto con su marco de madera; una cruz anaparada pequeña; dos misales; siete casullas, entre blancas rameadas, de Damasco, morada ra­ meada de blanco, encarnada rameada, verde con galones de plat~ todas con sus respectivos cubre cálices y bolsas; un terno completo de raso negro con galón de seda dorado; tres capas, dos forradas de seda de colores y un~ de Damasco de color morado; tres frontales de tela, uno forrado de seda negra, otro también de seda con decoración de flores y el tercero de Damasco carmesí; dos paños, uno de azul de tafetán blanco bordado de colores y el otro de filoseda con galo­ nes morados; una manga negra y otra blanca de cruz de tafetán; 4na banda de seda blanca con los extremos bordados de puntilla de hilo de oro; un sobre mesa de seda morada con flores blancas y fleco de color carmesí; dos ciriales y una cruz de madera plateada; una vara de madera tallada y plateada para las Marías; un candelero grande de madera pintada para el cirio y el tenebrJio; un acetre de latón con su hisopo; un hostiario de peltre; una caja de madera para las hos­ tias; unos hierros para hacer hostias con otro más pequeño para. formas; cuatro albas de tané con encaje, amitos y cíngulos c·orporales; tres cíngulos de seda; cuatro pares de corporales con encaje; doce purificadores; quincé manteles para los altares, cinco de encaje y el resto de lienzo; tres paños de manos; tres toa­ llas; un roquete con mangas para dar la comunión, más tres de li9nzo de manga tirada que usan las religiosas; dos floreros de hoja de lata; un facistol grande de pino.

69 Rodríguez G. De Cevallos, Alfonso. Op. Cito p. 4. El origen del ~etablo se remonta a la costulllbre litúrgica de poner reliquias de los santos sobre los altares; al agotarse éstas, se colocaron imágenes. Posteriormente, la figura qel santo, de Cristo o de la Virgen se pintó sobre una tabla y se colocó delante del altar, pero el sacerdote ilnpedía su visión al celebrar la misa de espaldas al pueblo, por lo que se cOlnenzó a ubicar detrás y por encima del altar para hacerlo visible a la feli­ gresía. A partir del siglo XVII y XVIII, con el barroco, el retablo alcanzó su mayor plenitud. Se colocaron no sólo en la cabecera, sino en el crucero, las naves, las capillas solían ser de madera por su ductibilidad a la talla, y s'obre todo porque eran más susceptibles de recibir una capa de oro que los hacía refulgir como un ascua a la luz de las velas, como si fuese una aparición celestial. Al mismo tiempo, estos retablos conferían a los templos una sensación de movilidad y expan­ sión del espacio, produciendo una ilusión típicamente barroca. I

I 88

El retablo adquirió el carácter de retablo didáctico o cate­ que representan la Historia de la Purísima.."74. En cuanto al quético, de modo que las enseñanzas de las catequesis y de los convento de Clarisas, todavía son más escuetos los detalles de sermones se complementaban con la enseñanza visual. En los inventarios: "Un cuadro viejo de Jesús en la columna "... definitiva, lo importante era la imagen, bien pintada, esculpida "otro... de San Juan y un grupo de religiosos"... "Otro... de en relieve o en bulto redondo, de forma que represente de una Jesús en el desierto"... "... de Jesús y mujeres piadosas". La manera más realista los ciclos biográficos de los distintos per­ magnitud de los bienes artísticos, las representaciones icónicas sonajes (San Francisco, Cristo, etc.). Para ello se multiplicaron de los diferentes santos y vírgenes que existían en estos con­ los encasamentos, los tableros, los nichos y hornacinas, dis­ ventos en el período desamortizados manifiesta de forma clara puestos en cuerpos horizontales y calles verticales, de modo la enorme devoción de la feligresía de Hellín, al mismo tiem­ que el dispositivo arquitectónico de columnas, entablamentos po que nos indican una tipología de decorativa propiamente y frontispicios fuera exclusivamente el marco de aquellas franciscana en decoración conventual. En este sentido, las representaciones. representaciones iconográficas, tanto en pinturas, esculturas y Tras la disposición tridentina de considerar las especies en cuanto al número y santo y dedicación en los respectivos consagradas del pan y del vino como presencia real del cuerpo conventos75 nos da un total de 91 representaciones en el con­ y sangre de Cristo, se transformó la conformación del retablo, vento de Franciscos y 42 en el de Clarisas. donde ahora el sagrario, que custodiaba las especies sagradas, En resumidas cuentas diremos que, salvo en las capitales ocuparía un lugar de honor en el centro del altar, por lo que los de provincia, los bienes muebles de los conventos de los pue­ retablos hipertrofiaron sus dimensiones, de modo que todo blos quedaron al cargo de comisiones civiles, pero éstas no dis­ estaría subordinado al tabernáculo u ostensorio. Con el Barro­ ponían de recursos para salvaguardar tales bienes. Al no exis­ co se introdujeron dos principios: el dinamismo y la subordi­ tir estas garantías, propició la desaparición de muchos bienes nación; las partes no serán todas iguales, como ocurría en el culturales y a la desaparición de muchos otros, fruto en Renacimiento, sino que se subordinan a una que parece asumir muchos casos de la ignorancia y falta de sentimientos artísti• el poder de orientación, lo que rompía la armonía clasicista70. cos de los responsables de su custodia, cuando no fueron roba­ La contraofensiva católica por la negación del culto a los dos o vendidos por las mismas comunidades. De hecho, tan santos por parte de erasmistas, alumbrados y protestantes, pro­ sólo dos años después de la elaboración de los inventarios, los pició que en los retablos se representasen la vida y milagros cuadros y pinturas sufrieron una reducción considerable. bien de los santos, apóstoles o evangelistas, o bien se impusie­ A su vez, a pesar de las medidas para la promoción de los ron nuevas devociones propias del sentir y la mentalidad colec­ museos provinciales, no se procuró por parte del Gobierno que tiva de la época, como la del patriarca San José7}, la Sagrada éstas se cumplieran, pues primaban los asuntos que producían Familia, como figuración terrenal de la trinidad celeste, los un mayor beneficio económico, lo que provocó el desinterés de fundadores de las órdenes religiosas y sus santos litúrgicos; los responsables provinciales con enormes consecuencias para incluso santos curadores o protectores de enfermedades y epi­ el patrimonio cultural y artístico, ya muy menguado tras la demias, así como ángeles72 custodios. exclaustrración. A pesar de la parquedad de los detalles en los inventarios El objetivo de esta comunicación era poner al descubierto de los referidos conventos: "Trece cuadros ordinarios pintados la enorme riqueza cultural y artística del patrimonio eclesiásti­ al óleo que representan la vida y la muerte de San Francis­ co en la villa de Hellín, como punta de iceberg de la magnitud co "73. HCinco dichos [cuadros] viejos.... que representan de lo que se perdió con la desamortización. pasajes de la vida de San Francisco "... H Un dicho [cuadro] Queda, por tanto, un inmenso trabajo de seguimiento de también al óleo con San Francisco puesto en oración "..."Un todos estos bienes artísticos, con lo que la investigación queda cuadro de San Francisco... que representa la impresión de las abierta a futuros historiadores que se interesen por la Historia llagas"... HOtro dicho [cuadro de San Francisco] ocultándo­ del Arte, como manifestación y exponente de nuestra cultura. las",. en cuanto a la Virgen: "Cuatro cuadritos pintados al óleo

70 García Cárcel, Ricardo. La Cultura del siglo de Oro. Pensamiento, arte y literatura, en Historia de España. Historia 16, n° 17. Madrid, 1996., p. 91.

71 Del Río y de la Hoz, Isabel. Op. Cito p., 18. La devoción de San José, de la que Santa Teresa es una de las mayores divulgadoras, es de una significación espe­ cial en el Barroco, y sobre todo tras la reforma. Así como la advocación de la Sagrada Familia, tema este último con el que se intentaba reducir el problema social de la falta de responsabilidad por parte de los padres anónimos, cuya concupiscencia obligaba a muchas madres a abandonar a sus hijos en portales, casas de hospicio y puertas de iglesias.

72 Rodríguez G. De Cevallos, Alfonso. Op. Cito p., 30.

73 A.H.P.A. Sección Clero, caja 6. Inventario n° 4. 1 de Marzo de 1837.

74 A.H.P.A. Sección Clero, caja 6. Inventario n° 5. 1 de Marzo de 1837.

75 A.H.P.A. Sección Clero, caja 6. 89

APÉNDICE DOCUMENTAL

[ARCHIVO HISTÓRICO PROVINCIAL DE ALBACE­ dicho de lnadera pintado con el Santo Cristo de la Salud y en TE. Sección Clero, Caja 6.] dos nichos al lado San BIas y San Luis. Otro dicho de madera 0 Numero 4 I cortado con San Benito de Palermo. Otro dicho de madera cor­ RELACIÓN DEL ARCHIVO, BIBLIOTECA, PINTU- tado con San Pascual Baylón. Otro retablo de madera cortado

, I RAS Y DEMAS ENSERES DE UTILIDAD A LOS INSTI- con Nuestra Señora del Rosario. Un Santo Cristo de talla TUTOS DE CIENCIAS Y ARTES DEL ESPRESADO grande en un pequeño retablo de madera dorado. Una cruz de SUPRIMIDO CONVENTO DE SAN FRANCISCO DE LA l11adera con embutidos de nácar y un Santo Cristo de metal.

VILLA DE HELLÍN ! Otra dicha (cruz) nzás chica con un Santo Cristo de metal para En este convento no se ha encontrado archivo determina­ decir misa. Una urna de madera con la Virgen de las Angustias do, más que los papeles y documentos que van relacionadosI de medio cuerpo de talla con su cristal. Otra más pequeña con en el n° 2 I un niño Jesús vestido con un cordero. Otra urna con reliquia En su biblioteca se hallan lnil quinientos catorce .libros de la caveza de San Félix. Un niño Jesús de talla vestido con grandes, medianos y pequeños de diversas obras de filbsofia, su peana suelto. Dos marcos de talla dorados y grandes sin teología, sacralnentos, moral, catecismos, directorios, sermo­ nada. Seis cornucopias viejas pequeñas sin nada. Dos ciriales narios, cuasi todos en pergamino, y otros lnal tratados de dife- y una cruz de nzadera pintados. Unas andas en forma de urna

rentes materias I para el sacranzento. Un sagrario pequeño de talla cortado. Un PINTURAS San Diego de talla en la Sacristía. Cinco candelabros de bron­ Trece cuadros ordinarios pintados al óleo que repre~entan ce grandes. Cuatro candelabros de bronce. Una lámpara de la vida y muerte de Sanfrancisco. Uno dicho grande al óleo de bronce pequeña. Tres lámparas de oja de lata. Cuatro confeso­ la Purísilna Concepción con su marco tallado colocadh en la narios de pino. Tres sillones forrados de seda inútiles. Tres escalera principal. Otro dicho lnediano de San Antorio de canzpanillas de bronce para las misas. Tres campanas de dife­ Padua. Otro dicho de Jesús Nazareno. Otro dicho El Ecce rentes talnaños en la torre. Ocho misales bastantes estropea­ Homo. Cinco dichos viejos en el claustro de arriva que! repre­ dos. Una caldereta muy vieja y estropeada. Dos platos de pel­ sentan pasages de la vida de San francisco. Un vía crucis en tre para las vinagreras. Una mesa o pedestal circular de már­ cuadritos pintados al óleo con su marco. Un dicho pintado al mol encarnado. Tres alfombras pequeñas del todo inútiles. óleo con un Santo Cristo con su marco. Un dicho tambien al Otra dicha grande del todo inútil. Ocho andas de lnadera para óleo con San francisco puesto en oración. Uno dicho cpn San llevar diferentes santos. José. Uno dicho con Santo Donúngo. Un cuadro de Sali Fran­ En la cajonería de la Sacristía, un terno negro compuesta cisco en la sacristía que representa la impresión de las ¡llagas. de dabnáticas, casullas, capa, estola, manípulos y paño de Otro dicho ocultándolas. Uno dicho pequeño con la Virgen facistol. Otro terno negro de rasete muy usado, sin capa, facis­ Nuestra Señora. Diez cuadritos chicos y medianos conl santos tol ni paño de púlpito. Otro dicho mui estropeado con fleco para adorno de la Sacristía. Cuatro cuadritos pintados ¡al óleo negro y encarnado, sin casullas, estolas, facistol ni paño de que representan la Historia de la Purísinla y están coiocados púlpito. Siete casullas negras con estolas y lnanípulos. Siete en el Camarín de la Yglesia. Un cuadro de San Miguifl colo­ bolsas y cuatro cubre cálices del miSlno color. Dos ternos blan­ cado en la capilla de los Dolores. Otro dicho de San Rafael en cos de ll1edio tisú con un facistol y banda sin paños de púlpito, la capilla de los Dolores. Dos dichos en las paredes de la ygle­ y con falta de una bolsa y un cubre cáliz. Dos casullas sueltas sia. Un vía Crucis en cuadros con 11'larCOS cortados pintados de medio tisú, sin estolas ni manípulos correspondientes. Dos en lienzo. En la portería nueve cuadritos viejos que mhnijies­ ternos blancos de Danzasco, el uno de algún uso, y el otro del tan retratos de San Gerónimo, Nuestro señor, San Buenaven­ todo inservible con una capa, cuatro paños de púlpito y dos tura, Santa Rosa, La Magdalena, La Madre Agreda, f:scoto, bandas. Veinte y dos casullas blancas muy deterioradas con San Bernardino, y San Antonio de Padua. (Rúbrica) Juan estolas y lnanípulos no correspondientes la lnayor parte. Nue­ Batuones (Rúbrica) Fco. Manuel Pérez Gálvez ve bolsas y otros tantos cubre cálices. Un terno verde a medio Numero 50 uso con galón de seda blanca, con capa y casullas distintas, sin Relación de la Yglesia, ornamentos y vasos sagrQ-dos de collarines Sagrados Tres casullas (verdes) de buen uso, sin bol­

San francisco de esta villa de Hellín. I sas y cubre cálices correspondientes. Cinco casullas muy Primeralnente la Yglesia con su coro, Sacristía y otras ofi­ estropeadas con tres bolsas y otros tantos cubre cálices. Un cinas agregadas. El Altar Mayor con su retablo de talla corta- terno encarnado cannesí con galón de plata muy usado. Dos do con San Fernando, San Geróninzo, San Luis y SantaI Mar- ternos encarnados de Damasco a lnedio uso con dos paños de garita que lo adornan todos de talla, y en el Camarín la Purí• púlpito, una capa, un paño de facistol y dos bandas. Trece sima Concepción con su trono tanzbien de talla. Dos altares casullas encarnadas bastante usadas con nueve bolsas y once

1 con sus retablos de talla cortados pequeños en la I Capilla cubre cálices. Un terno lnorado con galón blanco bastante Mayor con San francisco y Santo Domingo. Otro retablo en la usado, y le falta una estola y un paño de facistol. Dos planetas capilla de la Purísima de yeso figurando talla pintadb con la sueltas dellnislno color muy usadas y un paño de púlpito. Seis virgen y San Cayetano y San Juan Evangelista a lo~ lados. casullas lnuy usadas con seis manípulos y estolas, tres bolsas y Otro retablo de talla pintado con San José tambien de talla. tres cubre cálices. Un frontal bordado con talco y lentejuelas I Otro retablo de yeso pintado con San Diego. Otro dicho de muy usado. Un paño de palio encarnado regulal: Una almoa­ talla pintado con Jesús Nazareno. Otro dicho de talla Icortado da verde bordada en seda. Tres paños de colgadura encarna­ con San José y una urna al pie, con la Virgen de las AngustiasI dos ll1UY estropeados. Un estandarte azul con una purísima metida en ella todos de talla. Otro retablo con la Virgen de los bordada en el. Nueve mantos de diferentes ymágenes muy bue­ Dolores y al pie un Ecce Homo de talla y un San Fran"cisco en nos. Cuatro vestidos de distintos santos. Tres vestidos del niño un nicho al costado de esta capilla. Otro retablo de ~an Bue­ Dios. Una capa y dos nzitras de San BIas. Un frontal negro. naventura de madera pintado al fresco. Nueve alvas de lienzo muy usadas. Siete amitos de lienzo muy Otro retablo pintado alfresco de talla con Santa Rosa. Otro usados. Tres cíngulos de seda. Dos dichos ordinarios. Doce retablo de madera pequeño pintado con San Antonio. Otro corporales con sus palias. Ochenta purificadores usados. Nue- • I 90

ve paños de altar estropeados. Cinco roquetes estropeados. dichas de caova con clavos ronlanos en el altar de la virgen del Una toalla para la cruz. Un paño para el comulgatorio. Consuelo. Doce dichas con nzarco de nladera pintados de Un copón de plata liso con peso de veinte y ocho onzas. Un encarnado. Cincuenta ramos de oja de lata pequeños y grandes cáliz de plata liso con su patena y cuchareta con peso de vein­ para adorno de los altares. Una lálnpara pequeiia en el Altar te y cinco onzas y media. Otro dicho con su patena y cuchare­ Mayo 1: Tres Sillones biejos tallados forrados de tela de lana. ta con peso de veinte y siete onzas. Un cáliz de bronce con la Tres calnpanillas pequeñas de metal para los altares. Dosfacis­ taza de plata rota. Otro dicho labrado con su patena y cucha­ toles de nladera de pino. Cuatro bancos con respaldo de una reta con peso de veinte y siete onzas. Una alnpolleta de plata tabla de pino. Dos dichos viejos. Un órgano pequeño de cuatro para el santo óleo, con peso de dos onzas y nzedia. Un viril de octavas y veinte registros corrientes. Un sillón con asiento de plata sobredorado. Una llave de plata para el sagrario. Una tablas sin respaldo pata confesionario. Un banquito de madera soyoza que cubre el copón. con dos escalones para el uso de los altares. Seis aras de pie­ Con esto queda concluido el presente Ymbentario de rein­ dra para los altares. Tres dichas para tabernáculos. Una urna tegra a esta Comisión Subalterna en el día de la .fecha, el cual de nladera tallada y dorada para el Monumento. es cierto y positivo su contenido y certifico no haber o,nitido SACRISTÍA pertenencia alguna que corresponda a este convento de cuan­ Un espejo Inediano roto con su Inarco tallado. Una cruz to se Ine ha nlanifestado por el eSJ)resado prelado Fr. Manuel ennacarada pequeña. Una Virgen del Rosario pequeiia de talla. Pérez Gálvez y el Sr. Administrador de Rentas Estancadas D. Dos misales usados. Un cuadro de talla cortado con San Anto­ Andrés Pradel y Alarcón al tiempo de su forlnación, y lo fir­ nio. Dos casullas blancas ranzeadas de 2a clase con cubre cáli­ Inamos en la villa de Hellín a diez de Octubre del año mil ces y bolsa. Otra blanca de Danzasco ordinario con cubre cáli­ ochocientos treinta y cinco ces y bolsa. Una dicha morada rameada de blanco con cubre (Rúbrica) Juan Batuones (Rúbrica) Fco. Manuel Pérez cálices y bolsa. Otra encarnada rameada antigua con cubre Gálvez cálices y bolsa. Otra dicha verde y galoneada de plata con [ARCHIVO HISTÓRICO PROVINCIAL DE ALBACE­ cubre cálices y bolsa. Otra tambien verde con cubre cálices y TE. Sección Clero, Caja 6.] bolsa. Un terno de raso negro con galón de seda dorado, cOln­ RELACIÓN DEL CONVENTO, SU YGLESIA, ORNA­ pleto. Dos capas blancas forradas de colores de seda. Una MENTOS Y VASOS SAGRADOS DE SANTA CLARA DE dicha de Damasco ¡norada. Un frontal de tela de seda negro ESTA VILLA DE HELLÍN forrado. Otro dicho de Damasco carnzesí. Uno dicho de seda Este convento está situado en el centro de la población, pajizo floreado. Un paño de azul de tafetán blanco bordado de ocupando una pequeña altura, aislado por tres calles públicas, colores. Uno dicho de filoseda ¡norado galoneado. Dos nlangas y por la otra con casas de particulares, y su obra es de tapia de cruz de tafetán, una negra y otra blanca. Una banda de seda de tierra, y por lo general sus abitaciones son lóbregas, poco blanca con puntilla de oro en los estremos. Una sobre nzesa de cómodas, ,nal distribuidas y muchas escaleras, estando de pre­ seda Inorada floreada de blanco y fleco carnlesí. Una cruz y sente reparado. dos ciriales de madera plateados. Una bara tallada plateada La Yglesia es de una sola nave, y de una regular capacidad, para las Marías. Un candelero grande para el cirio y tenebra­ sin que nada se ad,nire en ella. rio de madera pintada. Un acetre de latón con su hisopo. Un El retablo de la Capilla Mayor es de ¡nadera tallado, pinta­ hostiario de peltre. Una caja de madera para las ostias. Unos do de azul y cortado con Santa Clara y otros cinco santos de yerros de hacer ostias con otro pequeño para fornzas. Cuatro talla, que son San José, la Purísima, San Francisco, Santa Rosa alvas de tané con encaje, anzitos y cíngulos corporales. Tres y San Antonio Abad, con su sagrario de talla dorado, Inesa de cíngulos de seda. Cuatro pares de corporales con encaje. Seis altar y frontal de madera pintados. Otro dicho pequeño de talla co,nu altares de lienzo. Doce purificadores. Cinco nzanteles cortado, con su m.esa de altar de yeso, y frontal de madera pin­ finos con encaje para altar. Cinco pares dichos de lienzo nlás tado con la virgen del Rosario vestida con su manto de seda, en ordinario. Tres paños de 'nanos. Tres toallas. Un roquete con su nicho. Otro idem con su mesa de altar de yeso y frontal de nzangas para dar la cOlnunión. Tres dichos de lienzo de ,nanga Inadera pintado con San Juan Evangelista de talla en su nicho. tirada que usan las religiosas. Dos floreros de oja de lata. Un Otro dicho con su mesa de altar todo de talla pintado y dorado facistol de nladera de pino grande. Un cuadro biejo sin marco con un cuadro pequeño de la virgen del Consuelo. Otro dicho de San José. Uno dicho idem de la Anunciación. Uno dicho de talla pintado y cortado con su mesa de altar de yeso y fron­ ideln con San Pasqual. Uno dicho de una benerable religiosa. tal de madera pintado con San Juan Bautista de talla en su Tres bastidores y una porción de tabla para fornlar el monu­ nicho. Otro dicho de talla pintado y cortado con su nzesa de ¡nento y sus gradas todo de prespectiva. Un cuadro biejo con altar de yeso y frontal de madera pintado, con un cuadro de la Jesús en la colunzna. Otro dicho con marco de San Juan y un Concepción pintado al óleo. Un cuadro grande con su marco de grupo de religiosos. Otro dicho de Jesús en el desierto. Otro madera sobre la puerta de la Yglesia, pintado al óleo de la Purí• dicho de Jesus y Inugeres piadosas. Uno dicho grande de medio sima Concepción. Otro dicho sobre la otra puerta, de la Dolo­ punto de la Santísima Trinidad. Uno dicho sin Inarco pequeño rosa y Nuestro Padre Jesús. Otro dicho más pequeño bajo del de la Magdalena. Un cuadro grande de la Cena del Señor. Una coro de San Antonio de Padua también al óleo. Otro dicho de la cajonera compuesta de tres cajones para ropas de Yglesia. Santísima Trinidad al óleo. Otro dicho de San Diego al óleo. Un CORO BAJO vía crucis de estampas de papel con su nlarco de Inadera. Un Tres sillones de talla con respaldos de seda. Un Santo Cris­ púlpito de madera tallado y cortado con su tornavoz de lo mis­ to de talla grande. Un cuadro grande de la Concepción al óleo ,no y su escalera. Una perilla portátil de madera para confesar. con marco dorado. Otro dicho del señor Crucificado. Diez y Cuatro cruces de madera ennacarada con cristo de metal. Una siete cornucopias con Santos y con espejos. Cuatro bancos de dicha con un cristo de talla pequeño nuevo. Una cruz de made­ pino. Dos cortinas de lienzo y otra de indiana con baretas de ra ennacarada en el Altar mayor. Dos candeleros de bronce tor­ yerro. neados nuevos. Seis dichos de oja de lata viejos. Diez dichos CORO ALTO (candeleros) de madera torneados pequeños pintados de color Un Santo cristo mediano de talla en si nicho y lo adornan de rosa. Dos atriles de talla cortados. Uno dicho de madera siete cornucopias doradas con espejos. Un cuadro sobre lien­ pintado. Tres sacras talladas y cortadas en el Altar Mayor. Tres zo del buen pastor. Dos dichos pequeños de Jesús y de María. 91

Un .facistol de pino. Cuatro bancos con respaldo tanlbien de Convento de San Agustin de Albacete: Tres campanas. pino. Dos cortinas pequeñas tambien de lienzo negro conbare­ Convento de Santo Don1ingo de Chinchilla. El Edificio con­ tas de yerro. Un vía crucis de estanlpas pequeñas sobre lienzo. vento. Tres campanas. Convento de San Francisco de Albace­ Seis candelabros de pino grandes. Cinco libros de coro viejos. te. El Edificio convento. Cuatro campanas. Convento de San Cuatro cornucopias. Los asientos del coro de tabla son d~ pino Francisco de los Llanos. El Edificio convento. Una calnpana. prendidos en la pared. Un cuadro de la Virgen de los Llanos. Convento de San francisco de Hellín. El Edificio convento. Otro de la Soledad. Otro de San Antonio. Tres campanas. Convento de Carmelitas descalzos de Lietor. VASOS SAGRADOS El edifico convento. Dos campanas. Convento de San Francis­ Un cáliz de plata con su patena y cuchareta que pesa vein­ co de Tovarra. El Edificio convento. Dos campanas. Convento te y dos onzas y Inedia. Uno c!icho (cáliz) de bronce, con copa, de San Francisco de Alnlansa. El Edifico convento. Una cam­ patena y cuchareta de plata. Un copón de plata con peso de pana. Convento de Capuchinos de Caudete. El Edifico con­ diez onzas. Una ampolleta de plata para el Santo Óleo con vento. Una campana. Convento del Cannen Calzado de Cau­

peso de dos onzas I dete. El edificio convento. Tres campanas. Convento de Justi­ Queda concluido el presente in1bentario, siendo clerto y nianas de Albacete. Dos campanas. Convento de Don1inicas de positivo su contenido y certifico, no haber olnitido pertenencia Chinchilla. El edificio convento. Dos campanas. Convento de alguna que corresponda a este convento de Santa Clara de DOlninicas de Chinchilla. El edificio convento. Dos campanas. cuantos documentos de censos y escrituras de propiedJd que Convento de Santo Don1ingo de Alcaráz. El Edificio convento. me han sido entregadas por la Madre Abadesa Sor Da. Maria Dos campanas. Convento de San Agustin de Alcaráz. El edifi­ de la cruz Lopez Manso y denlas enseres que se lne hanln1ani- cio convento. Dos calnpanas. Convento de San Francisco de festado a la presencia del sr. Cura Parroco D. Jose Ruiz San­ Alcaráz. El edificio convento. Tres campanas. Convento de chez y el Sr. Administrador de Rentas Unidas de este partido San Juan de Dios de Alcaráz. El Edificio. Dos campanas. Con­ D. Jose Maria Camacho que todos fornlalnos en la v(lla de vento de San francisco de Villaverde. El Edificio convento. Hellin a primero de Marzo de mil ochocientos treinta y 'siete. Una campana que servia para llamar la comunidad por no essi­ (rúbrica) Juan Batuones(rúbrica) Sor Maria de la Cruz tir ninguna en la torre. Convento de San Agustin del Bonillo. El Lopez Manso I Edificio convento. Cuatro campanas. Convento de Trinitarios Abadesa de Fuensanta. El edificio convento. Tres campanas. Convento (rúbrica) .lose Ruiz Sanchez(rúbrica) Jose Maria Ca/nacho de San francisco de Mahora. El edificio convento. Una cam­ [ARCHIVO HISTÓRICO PROVINCIAL DE ALBACE- pana. Convento de Trinitarios de La Roda. Dos campanas. TE. Sección Clero, Caja 15.] Convento de San Francisco de Jorquera. El Edificio convento Provincia de Albacete Comisión Provincial de Arbitrios Una canlpana. Convento de Franciscos calzados de la

,·, I de Amortizaclon ' Roda. El edificio convento. Ynventario de los monasterios y Conventos essistentes en Chinchilla 23 de junio de 1838. (rúbrica) Santiago Alva­ dicha provincia y de las alhajas, muebles y demas efectos que rran. Con intervencion de la Contaduría. (rúbrica)Seb. de ellos se conserban bajo mi custodia como Comisionado Dorronsoro provincial de la misma, en conformidad de lo dispuesto en la

Instrucción de }o de Setiembre ultima arto o 37, a saber. I

EN TORNO A LA CREACIÓN DE LA AUDIENCIA TERRITORIAL DEI ALBACETE Carmen GARCÍA SERRANO.

I Secretario de la Administración de Justicia Sala Civil - Penal d.el Tribunal Superior de Justicia Castilla-La Mancha. Albacete.

I ~ EN TORNO A LA CREACION DE LAI AUDIENCIA TERRITORIAL DE ALBACETE. DECRET0 DE 26 DE ENERO 1834 1

I

, I MARCO HISTORICO EN QUE HEMOS DE SITUARNOS ta a la actual, ya que englobaba a Villena y Requena pero sin Estamos en la primera mitad del siglo XIX. Albacete ~s una Villarrobledo. Después de diversas Reales Órdenes, una de 1836 pequeña villa agreste, que carece incluso de lo lnás elerrlental, por la que Villena era incorporada a Alicante, otra en 1846 por pero que tiene algo importante: goza de una situación geográ- la que se incluía a Villarrobledo en la provincia, y otra en 1851 fica privilegiada. I por la que Requena pasaba a pertenecer a Valencia, la provincia Es el mercado donde La Mancha deposita sus pro~uctos de Albacete quedó configurada en su forma definitiva actual4• para llevarlos a los puertos de Cartagena, Alicante y Val'encia, Durante el Antiguo Régimen, las tierras que actualmente y es punto importantísimo para recibir y transmitir la acción integran la provincia de Albacete se encontraban segregadas; del Gobierno a los pueblos. I formaban, en efecto, parte de tres unidades provinciales: Cuen­ Desde el punto de vista jurisdiccional, depende de la Chan­ ca, La Mancha y Murcia5 cillería de Granada, creada en 1505 por las Cortes de Toro y Podemos afirmar que la organización territorial del Estado que abarca la mitad de la Península -Andalucía, C~stilla, español moderno nació en aquella época, o mejor, que la orga­ Extremadura, Murcia y Canarias-o nización territorial del Estado se hizo moderna en ella6• En el año 1822, concretamente el 27 de Enero, se hab;ía rea­ Unos meses mas tarde, siendo Ministro de Gracia y Justi­ lizado una división provisional del territorio español en provin­ cia D. Nicolás María Garelly, se aprobarán importantes decre­ cias, I en la que figuraba la provincia de Chinchilla, con Sll capi­ tos, entre otros, el que nos ocupa, de 26 de Enero de 1834, tal Chinchilla, y ya en el manifiesto de la Junta Superiorl de La sobre Demarcación de las Audiencias, que trata de uniformar Mancha reunido en el 16 de Junio de 1822 se la división judicial del territorio, con la división administrativa solicitaba la creación de una Audiencia para su territorio. que acaba de practicarse7• De antiguo, venía considerándose como necesidadI apre- "Todos los Tribunales Superiores de las provincias tendrán miante, el aumento del número de Tribunales Superiore's, más el nombre de Reales Audiencias de las respectivas capitales en el Consejo de Castilla, se opuso muchas veces a la realización que están situadas a excepción del Consejo Real de Navarra y de un proyecto que disminuía la importancia y extensiónlde sus las Audiencias de Canarias y Mallorca que conservarán el que funciones2• ahora tienen." Por Decreto de 30 de Noviembre de 1833 tendrá lugar la Se establecerán además otras dos nuevas Audiencias: Una división definitiva de Javier de Burgos, que se ha maqtenido en la ciudad de Burgos y otra en la Villa de Albacete8 que com­ vigente hasta la actualidad, en virtud de la cual surge la provin­ prenderá9, las provincias de Albacete lO , Murcia, Cuenca, y cia de Albacete3, aunque con una configuración un poco Idistin- Ciudad Real con un total de 35 Juzgados de Partido.

Con el fin de dar cumplimiento al Arl. 11 de la Constitución de L812 que establecía: "Se hará una división más conveniente del territorio español por una ley constitucional, luego que las circunstancias políticas de la Nación! lo permitan. SANCHEZ TORRES Francisco. Secretario de Gobierno de la Audiencia Territorial de Albacete "Apuntes para la Historia de Albacete." Premiados en los jue­ gos florales celebrados en Albacete en 1902.

3 Esta provincia confina. Por el Norte con la de Cuenca, por el EJ con las de Valencia y Alicante, por el S. con las de Murcia y por el O. con las de Ciudad Real y Jaén. Su límite N. empieza en el río Záncara, entre El PrD'vencio y Socuéllamos y se dirige hacia el E. por el N. de y S. de las Casas de Haro, acortar el Júcar por el N. de Villalgordo de este nombre; continua por el N. de Tarazana; S. de Villagarcía entre Villatoya hasta el río Cabriel, en el punto el antiguo límite de Cuenca con Valencia. Su límite E. es la actual línea divisoria con Valencia hasta el término divisorio de Sax y de Villena. El límite S. principia en este punto y sigue por el N. del primero de estos pueblos, de Yec1a, de Jumil1a y Puerto de Malamuger, dirigiéndose a la confluencia de los dos ríos Mundo y Segura; atravesando este río sigue luego por el N.; de Moratalla y por los orígenes del río de este nombre va a terminar en el actual límite de Granada y Murcia, en la Sierra de Grillemona, pasando por elli~dero del término de Caravaca. Su límite O. empieza en dicha Sierra; sigue al N., con algu­ nas inflexiones ya al E., ya al O. por el E. de Siles, y la confluencia de Riofrio y Guadalimar, continúa por el E. de Villarrodrigo, acortar Guadarmena al Este de Villan1anrique sigue por el E. de Montiel, Villanueva de la Fuente, O. de la Ossa de Montiel, de El Bonillo y E., de Villarrobledo hasta el Záncara

donde termina. I

4 FUSTER RUIZ Francisco. "La guerra de la Independencia y ell1aci11liento de la provincia". Publicado en Castilla-La Mancha. Albacete. Edil. Mediterráneo. Página 94. ,

I 5 PANADERO MOYA, Carlos. "Albacete en el siglo XIX" publica?o en Historia de Albacete 1833-1985 y su Caja de Ahorros. 1985.

6 Nieto Alejandro: "Los Primeros Pasos del Estado Constitucional." Edil. Ariel Derecho. 1996 Pág. 238.

7 El Arl. 272 de la Constitución de Cádiz establecía: "Cuando llegue el caso de hacerse la conveniente división del territorio español, indicada en el Arl. 11, se determinará con respecto a ella el número de Audiencias que han de establecerse, y se les señalará territorio."

8 Todavía no tenía Albacete la condición de ciudad. Esta consideración la otorgó la Reina Isabel 11 el 26 de Noviembre de 1862.

9 Territorio de la Audiencia de Albacete: Provincia de Albacete.- Albacete, Alcaraz, Aln1ansa, Casas Ibáñez, Chinchilla, Hellín, La Roda, Yeste. Provincia de Ciudad Real.- Alcázar de S. Juan, Almadén, Almag~o, Almodóvar del Campo, Ciudad Real, Daimiel, Manzanares, Piedra Buena, Valdepeñas, 94

La creación de la Audiencia no fue debida a intereses de España, y con el fin de que todas las Reales Audiencias que partido, sino a la necesidad de solucionar los apremiantes pro­ acaban de crearse, tengan la posible uniformidad en su planta, blemas de la Justicia, siendo grande el desorden reinante en extensión de Jurisdicción, en sus atribuciones y facultades, así aquellas fechas. como en su régimen interior para el despacho de los negocios Son muchos los cambios que vamos a observar en el ámbi­ de su cargo, y en el número, clasificación y funciones respec­ to judicial, basados en el deseo de poner en armonía la justicia tivas de sus dependientes, serán aprobadas las Ordenanzas de en todo el Reino. las Audiencias por R.O. de 19 de dicien1bre de 1835. Por estas fechas se ordena11 formar un nuevo código civil I2, Creada pues en Albacete la Audiencia TerritoriaP8, será y de igual forma, para la reforma del Código de Comercio, se necesario buscarle ubicación, y a tal fin, comienzan -a partir designará la comisión correspondiente 13. del mes de Marzo- a exalninarse diversos edificios de la ciu­ Dos meses después de creadas las Audiencias Territoriales, dad que pudieran servir al Tribunal y sus dependencias, por Decreto de 24-3-1834 se suprimirán los Consejos de Cas­ constituyéndose una comisión de la que formará parte el tilla y de Indias y se establece el Tribunal Supremo de España Arquitecto de la Real Academia de la Corte D. Juan Pedro e Indias 14, además de otros Supremos Tribunales para Guerra, Ayegui 19. Marina y Extranjería 15. Se suprime el Consejo Suprelno de Se examina el Convento de S. Agustín2o, considerándose Hacienda, instituyéndose en su lugar un Tribunal Suprenlo de inicialmente inútil por encontrarse en mal estado, una casa par­ Hacienda 16, y se anuncia la reforma del Consejo Real de las ticular perteneciente a un vínculo de D. Francisco Saavedra, Ordenes Militares I7• Se creó, además, un órgano consultivo: El que talubién fue desechada; se vio así mismo el Convento de Consejo Real de España e Indias. S. Francisco, desechado igualmente, y por último la casa pro­ El R.O. de 21 de Abril de 1834 sobre división de Partidos pia del Ayuntamiento en la que estaba establecida la cárcel y el Judiciales vendrá a sustituir a los Alcaldes ordinarios de los matadero, que pareció ser el sitio más conveniente. pueblos por Jueces letrados de Partidos. El Tribunal quedó instalado en primer lugar en una casa Queda así, configurado el organigrama de la justicia en particular del Sr. D. Miguel Carcelén que la desocupó con este

Villanueva de los Infantes. Provincia de Cuenca.- Belmonte, Cañete, Cuenca, Huete, Motilla del Palancar, Priego, S. Clemente, Tarancón. Provincia de Murcia. Caravaca, Cartagena, Cieza, Lorca. Murcia, (Distrito de la Catedral, y distrito de S. Juan.), Totana, Yecla..

10 La provincia de Albacete tendrá 8 partidos judiciales muy dispares en extensión, número de Inunicipios, y habitantes: Albacete, con ocho pueblos: Albacete, Balazote, Barrax, Herrera, La Gineta, Pozo Cañada, Pozo Rubio, y El Salobral. Alcaraz, con 30 pueblos: Alcaraz, Ballesteros, , Bogarra, Bonillo, Canaleja, Casa Lázaro, Cilleruelo, , Cubillo, Horcajo, Ituero, Las Fábricas de S. Juan, , Navaluenga, Ossa de Montiel, Paterna, Peñascosa, Pinilla, , Reolid, Riópar, Robledo, , Solanilla, Vegallera, , Villapalacios, Villaverde y . Almansa, con 5 pueblos: Almansa, Alpera, Caudete, Montealegre y Villena. Chinchilla con ]2 pueblos: Bonete, Chinchilla, Corral-Rubio, Fuente-Álamo , Hoya-Gonzalo, Peñas de S. Pedro, Pétrola, Pozo-Hondo, Pozuelo, Sabuco y Vi llar. HelUn con 7 pueblos: Agramón, Albatana, Hellín, Ontur, Iso, Liétor y . Casas Ibañez con 30 pueblos: , , Alborea, Alcalá del Río Júcar, Balsa, Bormate, Campoalbillo, Carcelén, Casas de Juan Gil, Casas de Juan Núñez, Casas de Montilleja, Casas de Valiente, Casas de Ves, Casas Ibáñez, , Cubas, Fuente-Albilla, , Jorquera, Mahora, Marimínguez, Motilleja, , Pozo Lorente, Recueja, Serradiel, , Ves, VillaInalea, y Villatoya. La Roda con ]3 pueblos: Cañada-ancha, Carmen, Casa del Olmo, Fuensanta, La Roda, Lezuza, Madrigueras, Marta, Minaya, Montalbos, Munera, Tarazona y Villalgordo. Yeste con ]3 pueblos: Abejuela, Aina, Elche de la Sierra, Férez, La Dehesa, , Los VilIares, , , Peña-Rubia, Sierra, Socobos, y Yeste.. Boletín Oficial de la Provincia de Albacete de 29-5-] 834.

11 R. O. 30 de Enero de 1834.

12 Crónica de la Codificación. Introducción, Pág. 15 Y ss.

13 R. D. 13-6-1834.

14 Arts. 1° Y 2° R. D. de 24-3-1834 Vid Arts. 9 y Art. 10 R.D. 26-5-1834 sobre competencia del Tribunal Supremo de España e Indias. El R.O. de 29-5-1834 atribuirá al Presidente del Tribunal Supremo de España e Indias la Presidencia de la "Nueva Junta Suprema de Competencias" que tendrá las atribuciones de la creada por R.O. de 24-2-34 recordando los ventajosos resultados de esta Institución, cuyo objeto es remover los obstáculos que embara­ zan la acción de la Justicia por el encuentro de Jurisdicciones privilegiadas y Tribunales que reconocen distintos superiores. También compondrán la Junta, dos Ministros de cada uno de los tres Tribunales Supremos y otros dos del Consejo Real de las Ordenes Militares.

15 Arts. l° y 2° R. D. III de 24-3-1834.

16 Arts 1° Y2° R. D. IV de 24-3-1834.

17 Decreto V 24-3-1834 "Deseando poner en armonía la administración de Justicia en todo el Reino, y que los pueblos del territorio de las Ordenes Militares dis­ fruten las ventajas que han de resultar de las importantes reformas que estoy planteando, vengo en Inandar: Que mi Secretario del Despacho de Gracia y Justicia me proponga a la posible brevedad, la nueva planta y organización que haya de tener el Consejo Real de las Ordenes haciendo en el las mejoras y economías que sean convenientes, y presentándome la minuta de preces que hayan de dirigirse a la silla apostólica para impetrar de SU Santidad la bula o bulas que al efec­ to fueren necesarias."

18 A pesar de todos los avatares, y traslados provisionales, permanecerá en Albacete. En 1854 se plantea una nueva reforma judicial, -que no llega a ser rea­ lidad- que incorpora las provincias de Ciudad Real y Cuenca a Madrid, la de Murcia a Valencia y la de Albacete a Granada. De hecho se publicó en la Gaceta del 4 y del 17 de Enero de ese año la incorporación de la Audiencia de Albacete a la de Granada. Afortunadamente el autor del proyecto cesó al día siguiente.

19 Al no haber en Albacete Arquitectos aprobados. A. H. A. Gubernativo A. T. A. Vol. I Caja ]5, Leg. 30.

20 La iglesia de este convento de frailes agustinos, cuyo patronato también estuvo a cargo de los Srs. de Carrasco, se bendijo el día 15 de Febrero de ]579, según consta en un viejo manuscrito perteneciente al Archivo de la Delegación de Hacienda de Albacete, desde la exclaustración de la Comunidad tuvo diversos des­ tinos. Según consta en "Crónica de la Provincia de Albacete". de Joaquín Roa Erostarbe. 189] Pág. 251. 95 objeto y se redujo a vivir en otra que le privaba de la comodi­ y haciéndose entrega al Escribano de Cámara y Secretario de dad a que estaba acostumbrad021 . Gobierno D. Antonio Miguel de los Ríos3o. Otro problema importante para la instalación de la AJdien­ Para la dotación de la Real Audiencia de Albacete se desig­ cia era el aspecto económico, pues en estos momentos las arcas nó por Real Decreto de 15 de Abril de 183431 a: del Estado están completamente vacías22 . Cinco Oidores: D. Ramón José de Mendiola, D. Pascual El Ministro remite una comunicación al Sr. Regente a :fin de Méndez Acuña, D, José Valdenebro, D. Lorenzo Casaux y D. que se ponga de acuerdo con el Ayuntamiento y con la Inten­ Buenaventura Asensi. dencia de Rentas y adopten las medidas más eficaces dara la Cuatro Alcaldes del Crimen: D. Manuel Romero Briones, recaudación de fondos destinados al establecimiento del Tribu­ D. Andrés Masegosa, D. Mariano José Olañeta y D. José Huer­ naP3. Al mismo tiempo, del presupuesto del Ministerio d6 Gra­ ta Fiscal electo de la Audiencia de Albacete. cia y Justicia se ponen a disposición del Regente Diez mil ~eales Dos Fiscales: D. Manuel Seijas para lo civil y D. Francis­ de vellón, con calidad de reintegr024 y se aprueba que el Minis­ co Pascual Ramón de Moncada para lo criminal. terio pagara la cantidad de treinta y seis mil reales, también con No incluye el R.D. al Sr. Regente D. Pedro Simo que había cargo a dicho presupuesto, reclamándose dicha cantidhd de sido nombrado anteriormente por Decreto de 2 de Febrero de

Hacienda en compensación de contribuciones vencidas25 . ! 1834, comunicándose al Ayuntamiento de Albacete su llegada, La Intendencia de Rentas consideró que el medio mas! equi­ por Real Orden de 13 de Febrero de 183432. tativo y justo de satisfacer los pueblos de la Jurisdicción de Lo fue por corto espacio de tielnpo, pues ellO de Octubre esta Real Audiencia los gastos de su establecimiento, es él par­ de ese luismo año renuncia al cargo y es sustituido por D. Juan tirlos en proporción al número de vecinos26, y a tal fin, ~n una Antonio Almagr033 . -siendo la causa de la dimisión el de­ reunión celebrada en el Ayuntamiento, se designaron cobrado­ sacuerdo existente desde un principio con motivo de la circu­ res, encargados de la recaudación por profesiones y ofitios27 , lar que había de dirigirse a los Jueces y sobre la formación de abriéndose al efecto el oportuno expediente, siendo Juez ~omi­ Ordenanzas y Aranceles-. sionado, el Sr. Corregidor por S.M. D. Bartolomé Belmqnte, y Para la Secretaría y despacho de los negocios de Acuerdo tramitado por el Escribano y Notario de Reynos Alonso f3riz y se habilita D. Luis Vicen. MuñoZ28 quien quedaba encargado de citar en el Ayuntamiento El Ministerio comunica al Sr. Regente que en tanto se a los Srs. encargados del cobro a fin de que rindieran cÓentas aprueban los presupuestos para la construcción del edificio, de lo cobrado y de lo que restaba por cobrar29• comience a ejercer sus funciones el Tribunal, y se fijará la sede Inicialmente la Audiencia recibirá el mobiliario de las dos provisional en la Iglesia de S. Agustín34. Salas suprimidas del Tribunal de Granada, efectuánd6se el El 14 de Julio tendrá lugar la solemne cere11'lonia de aper­ correspondiente inventario por el Secretario del Acuerdo!Civil, tura de la Audiencia TerritoriaP5.

I

21 ROA EROSTARBE Joaquín. "Crónica de la provincia de Albacete-j' 1981. Pág. 261. Idea que comparte el Secretario de la Audiencia D. Luis Vicen en un folle­ to que escribió impugnando la supresión y traslación de la Audiencia.

I 22 la necesidad de recursos era apremiante para hacer frente a la gueva Carlista. Los vales reales fueron los primeros documentos de la deuda que circularon en España como papel moneda que surgen fundamentalmente para ~nanciar gastos de guerra. Guerra que había comenzado un año antes de la creación de la Audiencia, que fue lo suficientemente cruel y persistente como pa~a paralizar el país, y que como veremos más adelante vendría a alterar la tranquilidad de los

primeros años de la Audiencia Territorial de Albacete. I

23 A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. V. Ij Caja. 15, Leg. 30.

I 24 Cantidad que se devolvería de los fondos que se ingresaran de los de penas de Cámara. A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. V. I. Caja

15 Leg. 30. I

25 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. V. 1. Caja 15,; Leg. 30.

I 26 Oficio de Intendencia de Rentas de la Ciudad de Murcia de 8-7-1834. A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. V. 1. Caja 15. Leg. 30.

27 A. H. P. Albacete. Albacete. Gubernativo. V. I Caja 15. Leg. 30. Se.· designaron a los siguientes cobradores:

I Por la Nobleza al Sr. D. Pedro la Mata. I I Por el Reverendo Clero y Comunidad Religiosa el Presbítero D. S~lvador María Muñoz.

Por la de Abogados y Escribanos al Licenciado D. Antonio Torres. I

Por la de Facultativos en Veterinaria a D. Antonio Cañizares. I

I Por la de Comercio de una parte Mamerto Parras, Juan Dusac y Jayier Aparicio. Por la dellnismo de otra parte y mercería Francisco Masó, Francisbo López Risueño y Juan Parras.

I Por Labradores y Hacendados Francisco Gómez García y José Mupoz.

Por Mercería y Cortadores a Ramón Soriano. I Por otra parte de Artesanos Antonio Catalán. Por los demás oficios en general Domingo Albuger, Juan Sanz y J~lian Villanueba. Por la de Panaderos a Felix Sánchez y PascuaL López. '

Por la de Posaderos a José Contreras. I Por los Facultativos en Farmacia, Medicina y Cirugía D. Críspulo Navarro.

I 28 A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. V. IJ Caja 15. Leg. 30.

29 A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. V. IJ Caja 15. Leg. 30.

3D A. H. A. Gubernativo A. T. A. Caja 15. Como nota anecdótica dire~os que se conservan en la actualidad las dos Escribanías de plata con sus campanillas, habien­

I do desaparecido, como es lógico todo lo demás.

31 COlnunicado al Sr. Regente con fecha 18-4-34.

32 A. H. P. Albacete Sección Audiencia. Gubernativo. Leg. 30. I

33 No se encontraba alojamiento al Sr. Regente, acordándose ocupar por la fuerza la vivienda de Ramón Barnuevo de Chinchilla lo que finalmente no se efectuó, según cuenta Sánchez Torres Op. Cit., y ROA EROSTARBE "Crónica de la provincia de Albacete" 1981 Pág. 266.

34 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo caja 15.

35 El4 de Julio de 1834 se produjo la expulsión de los Jesuitas por el Gobierno liberal del Conde de Toreno. 96

Antes ya había quedado fijado el ceremonial que debería Por Acuerdo del Tribunal, se ordena al Escribano Luis observarse en la entrada pública y solemne de apertura de la Vicen, haga saber a todos los dependientes de la Real Audien­ Audiencia TerritoriaP6. cia, la obligación de concurrir a la Secretaría de Acuerdo a Finalmente el 7 de Agosto será la fecha en que se redacta­ sacar copias de dichos Aranceles. Ese Acuerdo fue notificado rá, ante el Secretario D. Gabriel María Mouxon, el Acuerdo al Teniente Canciller, a los Agentes Fiscales, a los Relatores y General sobre instalación por la Reina Isabel 11, de la Audien­ a los Escribanos de Cámara D. Rafael Alfara, D. Antonio cia Territorial de Albacete 37. Miguel de los Ríos, y a D. Vicente María de Canta, así como a En él se recoge la necesidad de redactar una circular que se los Srs. Procuradores41 . remitirá a todas las justicias del territorio en la que se aluda a Unos meses después de publicados los Aranceles -concre­ las normas que han de regir su conducta. tamente el 29 de Diciembre de 1835- se recibe una comunica­ En la estadística correspondiente al año 1834, se observa, ción del Ministerio de Justicia ordenando se redujeran a la que la mayor parte de las causas penales tramitadas lo serán mitad, al haberse recibido quejas por considerarse excesivos. por delitos contra las personas y de traición al Rey, así como Sin embargo, al año siguiente42, se resolverá que se observen contra el orden y seguridad interior38 . los aranceles concedidos a la Audiencia el 19 de Junio de 1835, Cada año, el día 2 de Enero, tendrá lugar la apertura solem­ hasta la publicación de los aranceles generales de que se ocu­ ne de Tribunales39, pronunciándose el oportuno discurso por el pa el Gobierno, quedando suprimido todo lo demás43 . Excmo. Sr. Regente4o• El mayor número de asuntos tramitados durante el año El dos de Junio de 1835, se recibe una comunicación del 1835, corresponderá a robos, seguidos de homicidios44• Ministerio de Justicia sobre dotación de personal en la Audien­ A principios del año 183645 compondrán las Salas de esta cia estableciéndose: Real Audiencia: 1° Seis Relatores, tres para lo civil y tres para el crimen. Sala 1a: Sr. D. Diego Ossa y Ochoa, Sr. D. Pablo María Paz, 2° Dos Agentes Fiscales y un Secretario de Acuerdo que lo Sr. D. José García Suelto, Sr. D. Miguel GÓmez. será uno de los Escribanos de Cámara. Sala 2a: Sr. D. Pedro Ayuso, Sr. D. Antonio Rentero, Sr. D. 3° Seis Escribanos de Cámara, en igual forma que los Rela- Ginés María Serrano, Sr. D. Francisco Ainat, Sr. D. Benito tores. Romero. - Un Canciller Registrador que será también Archivero. Fiscales: Sr. D. Francisco Pascual Ramón de Mancada, Sr. - Un Tasador Repartidor. D. Rafael Almonacid. - Un Receptor. Escribanos de la Sala de lo Civil: Sr. D. Luis Vicén y Sr. D. - Doce Procuradores de número, entendiéndose todos estos Nicolás del Castillo. oficios sin sueldo, cobrando los que los sirvan los derechos de Esclibano de la Sala de lo Criminal: Sr. D. Francisco Navarro. arancel. A un año escaso de la instalación en Albacete46, la Real 4° Cuatro Porteros de Cámara, con sueldo anual de 2.200 Sociedad Económica de Murcia dirigirá oficio a S.M. solici­ reales y los derechos que les correspondan. tando el traslado a esa capital47 . Con anterioridad distintas cor­ - Un Conserje o mozo de oficios con 2.000 reales anuales. poraciones se habían dirigido a la Reina a fin de solicitar que - Seis Alguaciles con mil seiscientos de dotación y los dere- la instalación de la Audiencia se hiciera en Murcia. chos de arancel. Esta ciudad, -yen algún momento Cartagena- luchó deno­ En cuanto a los Aranceles, que deberían servir de base para dadamente durante muchísimos años por conseguir que el Tri­ el cobro de los distintos profesionales, la confusión en aquellos bunal se trasladara a aquellas poblaciones. La lucha fue titáni­ tiempos era general. ca y si Albacete logró salir triunfante, a pesar de las grandes Cada Tribunal tenía los suyos, siendo muy diferente lo per­ influencias murcianas en el Gobierno fue tan sólo por que cibido en unos y en otros. Madrid no olvidó nunca los intereses de las provincias man­ Al momento en que comienza a funcionar la Audiencia en chegas, y se consideró siempre los grandes perjuicios que el año 34, no estaban redactados, y hubo de elaborar unos pro­ sobrevendrían a sus habitantes si se les alejaba el Tribunal48 . visionales en tanto se redactaron los definitivos, de fecha 19 de En efecto, S.M. oyó a los Gobernadores de las cuatro pro­ Junio de 1835. vincias, a las Diputaciones Provinciales, a la Comisión mixta

36 A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Leg. 30. Consta en Apéndice Doc. Docs. n° 1 y 2 dándose las oportunas órdenes al Decano de Procuradores, al Corregidor de la Villa, al Decano de Abogados, al Cura Párroco, a la Priora del Convento de monjas Justinianas, a la Abadesa de las monjas Franciscanas...

37 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. Consta en Apéndice Doc. Doc. n° 3.

38 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. Consta en Apéndice Doc. Docs. n° 4 Y 5.

39 El Art. 12 de las Ordenanzas de las Audiencias establecía que a la apertura de Tribunales deberían concurrir todos los subalternos. Al suscitarse dudas acerca del lugar que deberían ocupar cada uno, el Ministerio de Justicia redactó el correspondiente protocolo el 22 de Diciembre de 1848.

40 A. H. P. Gubernativo. Caja. 30. una serie de folletos que se editan por la Audiencia de Albacete en cada apertura.

41 Los cambios políticos se suceden. El 14 de Septiembre Mendizábal forma gobierno. La legislación desamortizadora (desamortización de bienes eclesiásticos, no nobiliarios) y la política anticlerical, con los asesinatos de religiosos son algo normal, constituyendo uno de los acontecimientos político-económico, no sólo religioso, mas trascendentales de toda la historia contemporánea, que no tendría marcha atrás hasta 1851, tan sólo parcialmente.

42 El 9 de Diciembre de 1836.

43 A. H. P. Gubernativo. Caja 30.

44 A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. Constan en Apéndice Documental, Doc. n° 7.

45 Estamos en pleno apogeo del liberalismo progresista y de los gobiernos de tinte radical, ante los que la Regente María Cristina nada podía hacer, casada en secre- to en un matrimonio ilegal, que podía ser denunciado por cualquier político deseoso de chantagear a la Monarquía.

46 Oficio de 31 de Marzo de 1835.

47 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja. 30 Doc. n° 6.

48 FUSTER RUIZ Francisco. "La Audiencia Territorial de Albacete." publicado en Albacete 600 años. Museo de Albacete. Mayo 1982. Catálogo publicado por el I. E. A. Pág. 52 97 del territorio, a la Audiencia y al Tribunal Supremo de Justicia. las Peñas de S. Pedro de los archivos y todos los efectos perte­ El informe sobre el particular se solicitó del Sr. Rege~te el necientes a esa Audiencia, lo que tiene lugar haciendo entrega 28 de Enero de 183649 . Informe, que de forma extensa, queda el portero de la Audiencia al Gobernador Militar del Castillo redactado ellO de Febrero de 1836 y fmnado por los fi~cales del Archivo del Tribunal el 12 de Noviembre de 1836. D. Francisco Pascual Ramón de Moncada y D. Rafael J\lmo­ Los traslados traen consigo atrasos en la Administración de nacid y Moxó. En el mismo se alegan las razones por las que Justicia51 y el extravío de expedientes. se considera la ciudad de Murcia más adecuada para el ¡pejor A tal efecto se ordena a los Escribanos Vicen, Navarro, Tra­ y más expedito ejercicio de la Administración de Justici~:50 banes, Canta... que verifiquen exámen de todas las causas a fin "La humilde e informe portería de una mala casa -cohven- de comprobar si hay alguna extraviada, efectuándolo estos to ruinosa y miserable es en Albacete el sitio donde se ostentaI seguidamente52. el solio majestuoso de la Justicia. ~E ve que unos pequeñ~s tro­ La Audiencia, el 22 de Enero de 1837, hace saber al zos de ese claustro bajo, reducido, mezquino, húmedo y oscuro, Gobierno político que el Tribunal saldrá de la ciudad en la

I sirven de local a cuatro relatorías, cuatro Escribanías de madrugada del 26 de Enero, pernoctará en Cieza y en la noche Cámara, un archivo, cancillería, y demás oficios que mezclados del 27 llegará a Hellín53 . unos con otros por necesidad, no pueden prestar el servi¿io de ElIde Febrero de 1837 se instala nuevamente en Albacete.

I ordenanza a la vez que con sentimiento presentan al públi~o un Por Reales Ordenes de 28 de Febrero y 7 de Abril de 1837, todo, objeto de depresión y menosprecio. se dispone continúe por ahora la Audiencia en las Peñas de S. La Audiencia lo toca todos los días, y que anegada la p!obla­ Pedro por lo inexpugnable de su fortaleza54. ción en agua de las repetidas lluvias de este clima, sus calles La acogida dada a la Audiencia por el pueblo de las Peñas terrizas, batidas con el sinnúmero de riadas que hay, el tránsi­ de S. Pedro fue buena por ser sus habitantes todos adictos al to por ellas se reducen a zangares malsanos e intransitabl~s, de legítimo trono, no obstante, eran frecuentes las quejas dadas manera que, o no pueden absolutamente concurrir al Tri~unal por los subalternos ante los inconvenientes con que se encon­ los magistrados y subalternos, o celosos por la asistencia, se traban para cumplir con sus obligaciones, careciendo la villa encuentran rendidos en un momento sobre los lodazales de las incluso, de alimentos de primera necesidad, pues hasta el pan calles envueltos con la toga y con elfango, sirviendo de irrisión llegó a faltar, habilitándose como Sala, en unas ocasiones el del vecindario. Cuando los fiscales u otro cualquiera ministros patio de la Iglesia parroquial, en otras el Ayuntamiento, tienen que retirarse de alguna de las dos salas donde hani ejer­ habiendo seguido a la Audiencia solamente cuatro Abogados, cido su ministerio para dar lugar a la votación que no deben número insuficiente para las muchas causas civiles y crimina­ presenciar ruboroso es, pero preciso decirlo, no encue1ntran les que se tramitaban.

I más local donde permanecer que la entrepuerta del lugar excu- Ante esta situación, el martes 17 de Junio de 1837, el Tri­ sado, y cuando hay necesidad de formar sala extraordiharia, bunal dicta un Acuerdo de traslado desde Las Peñas a la capi­ sabe VS. que no se cumple con la ordenanza porque no hay más tal de Albacete, solicitándose del Ayuntamiento para dicho local que para las dos ordinarias." traslado, veinticuatro galeras y treinta carros de una mula o de A pesar del contenido de dicho informe, -totalmente pega­ un par de mulas. La ayuda del Ayuntamiento no llega, y el 22 tivo para la ciudad de Albacete- el 30 de Julio de 1836 se publi­ de Junio regresará a Albacete, debiendo continuar sus tareas el cará una Real Orden sobre construcción del Palacio de Justicia 27 martes. en Albacete abriéndose el oportuno expediente, y no ad~itién- Establecida la Audiencia desde el 22 de Junio en Albacete, dose recursos ulteriores. I cesó algún tanto el peligro por haberse situado en Utiel y pue­ blos inmediatos la columna del Mariscal de Campo D. José ¡ AVATARES SUFRIDOS POR LA AUDIENCIA TERRITORIAL Puig de Lamprea.

COMO CONSECUENCIA DE LA GUERRA CARLISTA ¡ Más volvió nuevamente la inseguridad, sucediéndose dia­ Albacete vive tiempos de inseguridad por causa de l~ gue­ riamente los partes que anunciaban la aproximación de los fac­ rra, y habiendo sido invadida la ciudad por las faccion~s del ciosos hasta el punto de que siendo la situación de emergencia, bajo Aragón reunidas con la de Gómez, por R.O. de 27 de Sep­ el tres de Septiembre de 1837, reunidos en Acuerdo Extraordi­ tiembre de 1836 se estableció provisionalmente en la ciudad de nario el Sr. Regente, los Ministros, y el Fiscal Chacón, en la Murcia la Audiencia Territorial de Albacete, conservanpoI su casa posada del Sr. Regente, y siendo las dos de la tarde, ante nombre, debiendo ser restituida tan pronto como cesaren las el avance de las facciones de Forcadell, Zollada y el Serrador, circunstancias adversas. I desde la ciudad de Utiel, suspenden la actividad del Tribunal Este traslado fue por poco tiempo, pues por Real Orden por tres días ordenando sean recogidos todos los expedientes, participada ellO de Octubre de 1836, S.M. ordena que sin y preparados para su salida, quedando encargado de su custo­ 55 demora se traslade el Tribunal a Albacete, obligándose i a los dia el Secretario del Tribunal Plen0 . Srs. Ministros a regresar, y ordenando el traslado al castipo de Las funciones del Tribunal quedarían definitivamente sus-

49 Unos días antes, el Sr. Regente había leído su discurso de apertura.,

50 A. H. P. Albacete. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

51 Durante el traslado a Murcia, el Tribunal estuvo un mes sin funciortar.

52 El Escribano de Cámara D. Francisco Navarro alegará que falta un~ causa que se ha sustanciado contra Julian Maldonado y José Antonio Castillo vecinos de S. Carlos del Valle sobre robos, la cual se encontraba en poder del Prqcurador BIas Martinez, para implorar la súplica que interpuso de la sentencia de la Sala. El Escribano D. Luis Vicen comunica que ha echado en falta caus~ tramitada contra Cristobal...en el desempeño de su oficio; la causa del Juzgado de Alcázar de S. Juan tramitada contra D. Gabriel Martinez Valero y D. Pedro Muñoz sobre desafío por asuntos políticos con Agustín Barbero. Y otra de Huete contra Angel Bonilla y contra otros sobre voces suvbersivas; cuyas dos últimas dausas se hallaban en poder del Tasador. También se observa que faltan dos libros voteros. A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

53 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. I

54 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. I

55 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. Se ob1serva la situación crítica que se está viviendo, al observar el documento, redactado con letra de rasgos atolondrados e inseguros. 98 pendidas por Acuerdo del día cuatro, a las siete y media de la Las Peñas de S. Pedro, y contraria también a la Real Orden de mañana, para dar tiempo a cada uno de los individuos que lo 7 de Abril, en el mismo sentido, no obstante, a fin de evitar un componen de que se procuren los medios para salvarse56. nuevo traslado del Tribunal de un punto a otro, lo que podría El Ayuntamiento había ofrecido al Sr. Regente el envío de perjudicar a la pronta administración de Justicia, y a la conve­ auxilio y carruajes para los traslados del Tribunal, pero no pasó niente economía, ordena continúe por ahora la Audiencia en de ser mera oferta, a pesar de ser estos reiteradamente recla­ Cartagena59. mados. Finalmente el 3 de Octubre de 1837, los Magistrados ale­ Los siete carros pedidos en esta ocasión no llegan y el garán las causas por las que se efectuó el traslado a Carta­ Escribano D. Francisco Navarro redacta, a las cuatro de la gena60. madrugada, un oficio de su puño y letra que será fITmado por De igual modo, enterada S.M. del comportamiento del el Sr. Regente, reiterando la petición, y comunicándole que los Ayuntamiento de Albacete, quien se había negado a colaborar papeles quedan en el local de la Audiencia y en la Escribanía en dicho traslado, hizo la oportuna advertencia al Alcalde de Cámara ya encajonados, y el portero mayor comisionado Constitucional a fin de que en lo sucesivo no se repitiera tal para hacerlos cargar y salir inmediatamente. Este oficio se conducta61 . entregaría en mano en presencia del también Escribano D. En menos de un año serán pues, cuatro los traslados que Vicente María de Canta, al Sr. Alcalde constitucional, D. Fran­ deba sufrir el Tribunal: de Albacete a Murcia, nuevamente a cisco Gómez, declinando en el mismo su responsabilidad57, Albacete, después a Peñas de S. Pedro -huida precipitada en quien lo entró en el bolsillo sin leerlo y manifestó: que en la que un Magistrado y uno de los dos Fiscales se vieron for­ aquel desorden y confusión todos andaban cada uno por su zados a salir a pie y andar cuatro leguas cubriéndose del gra­ lado, y el estaba atontado, y que se quedaba responsable de nizo y el temporal. de nuevo a Albacete y después a Carta­ todos los papeles y que los haría conducir aunque fuese en gena. burro, si no aparecían los carros. El 4 de Julio de 1838 se creará en la ciudad de Cartagena, El Tribunal seguirá su marcha a Cartagena el cinco de Sep­ el Colegio de Abogados, pues por Real Orden del Secretario de tiembre sufragándose los gastos de la conducción de los pape­ Estado y Despacho de Gracia y Justicia, se comunicó al Sr. les por los subalternos quienes se ofrecieron voluntariamente Regente de la Audiencia Territorial de Albacete con sede en siempre que les fuera reintegrado dicho importe tan pronto Cartagena, que.. En conformidad con lo resuelto por las Cor­ como hubiera fondos. tes, para el régimen de los Colegios de Abogados....para que Los Magistrados del Tribunal remitieron las oportunas que­ se instituyan en la forma establecida en el expresado Real jas en exposiciones de fecha 5,9 y 16 de Septiembre de 183758 Decreto Los Regentes de las Audiencias se dirigirán a los recogiendo todos los avatares sufridos, ante la precaria situa­ Decanos y a los Abogados lnás antiguos con el fin de que se ción en que administraban justicia. reúnan bajo una presidencia y en Junta General en la que se Con anterioridad habían sido los Escribanos quienes ha­ procederá a la instalación del Colegio. 62 bían remitido un escrito al Ministro recogiendo igualmente las A pesar de las reiteradas invitaciones a regresar por parte quejas ante las situaciones tan precarias en que habían de cum­ del Ayuntamiento Constitucional de Albacete63 , -contestadas plir con sus respectivos deberes. Los inconvenientes de tantos por el Fiscal de S.M. en el sentido de que este traslado tendría traslados -cuatro en menos de un año-, y los costes elevadísi• lugar tan pronto como se recibieran órdenes del Gobierno de mos que tienen que soportar de tales traslados, teniendo en S.M64. -el Tribunal se mantendrá en Cartagena65 hasta el 21 de consideración que ellos no perciben sueldo alguno del Estado, Octubre de 1840, en virtud del Acuerdo de las Juntas provisio­ los medios de subsistencia dependen de su trabajo, y tienen, a nales de Albacete y Murcia, instalándose, a su retomo, en el su vez, que pagar los sueldos de los oficiales aún cuando el Convento de S. Agustín que sufre diversas reparaciones. Tribunal esté cerrado. Será Regente en 1840 D. José Diaz Gil (electo por la Junta Cuando el Tribunal manda encajonar los papeles porque la de Murcia) y D. Eugenio Barreycoa, (electo). población se ve amenazada de las facciones, desde ese Desde un principio a pesar de la provisionalidad, se pensó en momento acaban sus recursos y se aumentan sus gastos de un la constnlcción de un edificio, mas dicha construcción se dilató modo insoportable. Además no habiéndose satisfecho la asig­ por diversas dificultades. Pasaron 11 años del partido moderado nación fijada para los gastos del Tribunal en la Ley General de sin que nada se adelantase. Si este partido hubiera ocupado un Presupuestos, se veían obligados, el Secretario y Escribanos de año más el poder, el Tribunal habría sido suprimido. Cámara, a suplir hasta el papel. En 1841 se formaron por los Arquitectos D. Alfonso Diego Fueron contestadas por comunicación del Ministerio de Aroca y D. Manuel de los Villares Amor, los oportunos planos fecha 22 en la que se entendía que la decisión de trasladar la y presupuestos por la cantidad de 998.187 reales. Audiencia a Cartagena era contraria al espíritu de la Real En 1857 se proyecta la reforma total del Convento. El nue­ Orden de 28 de Febrero, por la cual se ordenaba continuara en vo Palacio de Justicia -de los mejores de los de su clase en

56 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

57 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

58 El Ayuntamiento había remitido a S.M. varias comunicaciones alegando que restablecida la paz no habían regresado los Magistrados a administrar Justicia.

59 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

60 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

61 A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

62 Datos sacados del Prólogo al Catálogo de la Biblioteca de 1. Colegio de Abogados de Albacete de Da Rosario Juncos Sáez (Bibliotecaria). Albacete. Eneró 1994.

63 El Ayuntamiento remitirá comunicación de fecha 27 de Junio de 1840, al Regente de la Audiencia invitando al oportuno regreso a Albacete, una vez restableci- da la paz.

64 En 3 de Julio de 1840. A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30.

65 Comunicación del Ministro Arrazola al Regente de la Audiencia de Albacete de 3 de Dicien1bre de 1838. A. H. P. Sección Audiencia Territorial. Gubernativo. Caja 30. 99

España- no quedará terminado hasta el 19 de Julio de 186066, El Tribunal Supremo, comparando los trabajos de unas y según proyecto del Arquitecto Albaceteño Francisco Jqreño, otras Audiencias, apreciará los de la Audiencia de Albacete quien no cobraría honorarios67• viniendo a colocarla entre las primeras de España, por la El edificio de estilo griego, nos recuerda a la Biblioteca importancia de sus servicios68 •

Nacional que fue su obra más importante. I

~ i

APENDICEI DOCUMENTAL.

CEREMONIAL QUE DEBERÁ OBSERVARSE EN LA Regentes en lo sucesivo para la que hay otro ceremonial y

I ENTRADA PÚBLICA y SOLEMNE DE APERTURA DE ESTA reglamento.

REAL AUDIENCIA DE ALBACETE I Albacete 26 de Mayo de 1834. 10.... Señalado el día por el Sr. Regente, se congregar6 este Doc. n° 1 con los señores Ministros y Fiscales; todos los SubaltJrnos, Abogados, y Dependientes vestidos de ceren10nia ~n el DÍA 14 Convento de Monjas Justinianas. ORDEN DEL ACOMPAÑAMIENTO 2°.... A la hora que señale el misn10 Sr. Regente con~urri­ Reunidas todas las corporaciones en el Convento de Monjas rán el Corregidor con el Ayuntamiento en traje de ceremonia Agustinas, a las diez de la lnañana, ron1perán la lnarcha los y asimismo la Nobleza avisada por el AyuntamientoJ Los Alguaciles de la RealAudiencia divididos por mitad en dos filas. Maceros se quedarán a la puerta esperando que buelba al salir Seguirán a estos los porteros de la misma.

I

el Ayuntamiento para acompañarles. ! Sucederán en la colocación los Procuradores. 3°.... Por su orden y presidiendo el Tribunal, se encalnina­ Luego los Receptores, y Escribanos de NÚlnero de esta rán a la Real Audiencia donde estará el Clero secular y [regu- villa y Ayuntalniento.

lar para recibir al Tribunal. ¡ Luego los Escribanos de Cámara y Relatores. 4°.... Llegados a la Real Audiencia seguirá la comitiva for­ Luego el Colegio de Abogados. mando calle hasta la antesala del Acuerdo, entrará por medio Luego la Nobleza. el Tribunal y haciendo el Sr. Regente cortesía desde la YlJislna Luego el Ayuntamiento.

puerta al acolnpañamiento despedirá a éste. i UltÍlnamente cerrará la comitiva el Real Acuerdo. 5°.... Subirá el Sr. Regente a tOlnar su asiento y sucesiva- A la entrada de la Real Audiencia es- mente los SS. Ministros, y los Subalternos efectuarán IdI mis- tará el Clero, secular y regular para recibirla. mo, y aquél dirá una oración alusiva a la solemnidad y cir­ Los Alguaciles se detendrán a la puerta cunstancias de día tan notable, después se despejará,! y se de la Audiencia a su llegada, y después que haya pasado el podrán leer algunas Ordenas de las que se deben hace~ pre- Real Acuerdo, regresarán al Convento para conducir las capas

sentes al Acuerdo. I de los señores. 6°.... Para solemnizar más el acto se tocarán las campanasI Los Porteros no interrumpirán su marcha hasta llegar a las de las iglesias y conventos de la villa desde que el Tribunal sal­ segundas centinelas, haciendo alto para que lo haga el acom­ ga del Acuerdo hasta que se disuelva. pañamiento, y verificado pasarán a abrir las barandillas del 7°.... En el día siguiente se congregará el Tribunal a la Tribunal, a cuyo lado permanecerán. hora que señale el Sr. Regente, en la Real Audiencia, y conI el mismo acompañamiento y los mismos términos que el ant~rior, CEREMONIAL PARA EL DÍA 15 se dirigirá a la parroquia de San Juan, y detenido el ac~mpa- Para solemnizar mas el acto. Se tocarán las campanas de

ñalniento a la puerta,... delante aquel. I las Iglesias y conventos de la villa, desde que el Tribunal sal­ 8°.... A la puerta de la iglesia se hallarán ambos cleros y se ga del Acuerdo hasta que se disuelva. dará por el Vicario o cura el agua bendita a los Sres. R~gen- En el día siguiente se congregará el Tribunal a la hora que

tes y Ministros y después al Ayuntamiento y Nobleza. ! señale el Sr. -. Regente en la Real Audiencia y con el lnismo 9°... En la iglesia ocupará el Tribunal el sitio de prejeren­ acompañamiento y los propios términos que el anterior se diri­ cia disponiéndose los asientos con10 permita la localid~d de girá a la Parroquia de S. Juan y detenido el acompañalniento aquella, se pondrá Sitial al Sr. Regente y a los Ministros qln10- a la puerta, cerrará delante de aquel. hadas y a ningún otro. , A la puerta de la Iglesia se hallarán an1bos cleros, y se 10°.... Se cantará el Te Deum y dirá nlisa solemne en dará por el vicario o cura el agua bendita a los Srs. Regente y acción de gracias, rogando por la importante salud de SSlMM. Ministros y después al Ayuntamiento y Nobleza. la Reyna Ntra. Sra. y su Augusta Madre y demás Real Fa~ilia, En la Iglesia ocupará el Tribunal el sitio de preferencia, dis­

y se dará la paz solo al Sr. Regente. I poniéndose los asientos como permita la localidad de aquella. 11°.... Concluida la función el clero despedirá en !igual Se pondrá sitial al Sr. Regente, y a los Ministros almohadas. forma al Tribunal que lo recibió, y el : Se cantará el Te Deum, y dirá Misa solemne en acción de Corregidor, Ayuntamiento y Nobleza lo acompaíiaráfÍ has- gracias, rogando que importante salud de S.S.M.M. la Reyna

I

ta su casa. I Ntra. Sra. y su Augusta Madre y demás Realfamilia, y se dará 12°.... Este caso es singular y no tiene transcendencia 'algu- la paz solo al Sr. Regente.

na a la entrada de los señores I

I

I I 66 Por estas fechas estaban destinados a la Administración de Justicia: ¡lO Magistrados, 1 Fiscal de S. M, 3 Tenientes Fiscales, 1 Secretario, 35 Jueces, 35 Fiscales. Se aumentó un Vicesecretario de la Audiencia. También había 114 t:J"otarios y Escribanos y al propio tiempo había 180 oficios públicos vacantes. Datos sacados de Crónica General de España (Albacete) Madrid 1866. Editores Ribnchi y Compañía. Pág. 25 manejamos fotocopia del original de fondo antiguo de la biblio-

teca del 1. E. A I

67 SANCHEZ TORRES Francisco. "Apuntes para la Historia de Albacete." 1916. Pág. 146.

68 SANCHEZ TORRES Op. Cito Pág. 270 100

Concluyendo la función el clero despedirá en igual forma DISCURSO PRONUNCIADO EN EL ACTO DE APERTURA al Tribunal que lo recivió, y el Corregidor Ayuntamiento y DE LA AUDIENCIA PROVINCIAL DE ALBACETE, POR EL Nobleza lo acompañaran hasta su casa. EXCMO. SR. REGENTE DE LA MISMA DON JUAN ANTONIO Doc. n° 2 ALMAGRO EL DIA 2 DE ENERO DE 1.835 Señores: "Acuerdo General" de 7 de Agosto de 1834, sobre la ins­ El honor que debo a la bondad de S.M. la Reina Goberna­ talación, por la Reina Isabel 11, de la Audiencia Territorial de dora de presidir a esta Corporación tan ilustre por el alto des­ Albacete. tino de adnzinistrar la justicia a una parte considerable de la Al margen Superior izquierdo SELLO DE 4 MRS Oficio granfamilia española, como por los non1bres y ellnérito de los Año 1834.- Al centro Sello Real en redondo, con escudo y el Magistrados que componen el Tribunal, n1e impone la obliga­ Toison y Leyenda Particular )...""HISP. ET IND. R. FERD. ción de n1anifestar en este dia cuales han de ser los principios VII. D. G. 1834. y máxin1as que he de observar en mi conducta, y que he de Al margen Srs. Valderrama, Casaux, Mendez, Romera, recomendar incesantemente a mis dignos compañeros. Huertas, Srs. Fiscales, Seijas, Moncada. Un sabio publicista ha dicho que la justicia es una virgen, "VALGA PARA EL REINADO DE S.M. LA REINA DOÑA y que el aliento solo de las pasiones basta para manchar su ISABEL 11" ( Hay una rúbrica) celeste candor. En el santuario de las leyes no debe tener En la Villa de Albacete, a siete de Agosto de mil ochocientos entrada ningun afecto por legítin10 que sea, ninguna acepción" treinta y cuatro. Reunidos en Acuerdo general ordinario los Srs. de personas, ninguna consideración extraña a la causa. Las del margen acordaron que estando ya en esta capital casi todos pruebas jurídicas y el texto del Código: he aquí las unicas los Srs Ministros, y señalada ya la dotación de esta Tribunal, y arlnas que debe manejar el terrible poder que se nos ha con- habiéndose verificado la solemne instalación se está en el caso fiado. Las pasiones privadas o políticas no tienen entrada en de notariatla así a los Jueces y Justicias del territorio señalado este sagrado recinco. a esa Real Audiencia para que les conste; pero en consideración y no se crea que por esta abnegación de toda opinión polí• a que es un Tribunal nuevamente establecido cuya creación a tica en la adnlinistración de justiciafaltaremos al mas esencial tenido por objeto expeditar la Administración de Justicia y de nuestros deberes como españoles y como jueces, que es la remediar los abusos que naturalmente se introducen cuando la fidelidad y adhesión a nuestra REINA Y SEÑORA DOÑA ISA­ vigilancia e influencia de la Superioridad está a cierta distancia BEL 11 Y AL ESTATUTO REAL: Al contrario, la mayor prue­ entender a los Jueces y Justicias del Territorio cuales deben ser ba que podremos dar de esta adhesión y de esta fidelidad será los principios de la administración, para secundar las intencio­ nuestra imparcial rectitud en la aplicación de las leyes. Porque nes del M. E identificarse en base con esta superioridad: Aste nada hay mas popular que la justicia: nada contribuye mas a fin se determinó se redacte y conlunique a todas las Justicias del unir los ciudadanos entre sí y con el Gobierno, que la acción Territorio una circular en que se les inculquen estos principios impasible de la ley cuando el Magistrado se oculta, digamos­ para que reglen a ellos la conducta y nunca aleguen ignorancia lo así, bajo su velo, no deja ver su propia persona ni a los reos en las responsabilidades que puedan asignárseles, y para lafor­ ni a los litigantes. ¡nación de otra Circular se dio comisión al Sr. Fiscal de lo Civil. Estos principios son de eterna verdad en todo sistema de Asílo acordaron y rubricaron el Sr. Decano y el Sr. Ministro más gobierno: pero mucho mas en el que felizmente nos rige. El moderno de que certifico= Sigue una firma ilegible y otra per- nombre de Isabel 11 merced a los sentimientos generosos y fectamente legible del Secretario "Gabriel María Mouxon". patrióticos de su inmortal Madre, está ya ligado con el de las Doc. n° 3 libertades patrias por medio del ESTATUTO REAL. Y ¿qué otra cosa es la libertad sin el in1perio de la ley? Las institu­ EXPEDIENTES E INFORMES QUE SE HAN DESPACHADO ciones liberales tienen todas por último resultado preservar al DESDE 14 DE JULIO ÚLTIMO EN QUE SE INSTALÓ ESTA hon1bre de la dominación de otro hombre, y someterlo unica­ REAL E INFORMES QUE SE HAN DESPACHADO DESDE 14 nlente a las leyes: de modo que éstas sean las que hablen por DE JULIO ÚLTIMO EN QUE SE INSTALO ESTA REAL boca de los magistrados cuando pronuncian sentencias, orde­ AUDIENCIA HASTA FIN DEL AÑo 1834 POR EL REAL nes o decretos. La voluntad pues, de nuestra Reina Goberna­ ACUERDO dora, el espíritu del Estatuto Real, y sobre todo, los sagrado­ Pendientes a consecuencia de Reales Cédula y sintereses del Solio de Isabel II exigen de los hombres llama­ Ordenes para informar, once 11 dos a la alta misión de administrar justicia, que dejen en cier­ Idem, de particulares con providencias definitivas, catorce 14 ta manera de ser personas, y se conviertan en Ineros órganos Autos de sustanciación de expedientes, noventa 90 de la ley. Las opiniones políticas del acusado o del litigante, Recibimiento de Abogados, uno 1 sus precedentes en la larga carrera de infortunios y convulsio­ dem de Escribanos y Procuradores, seis 6 nes que desde tantos años ha sufrido nuestra desventurada ramento de Corregidores y Alcaldes Mayores, nueve 9 patria, en fin, los infandos nombres de partido que haya podi­ do merecer, o que se le atribuyan calumniosamente, nada Suman 131 deben ser ante nuestros ojos. Tampoco deberemos atender para el fallo de las causas a PLEITOS y EXPEDIENTES DESPACHADOS EN LA SALA los servicios hechos verdaderamente, o jactados, con arrogan­ DE LO CIVIL DE 14 DE JULIO A FIN DE 1834 te falsedad a favor de la justa causa que defendemos, por Pleitos de sucesiones, contratos, cuentas y particiones 11 aquellos que se creen todo permitido cuando se proclaman Competencia...... 1 adictos al Gobierno. El Gobierno, sabio e ilustrado, rechaza de sí con indignación a esos hombres violentos, que se creen Suman 12 inviolables bajo su protección, y que con sus delitos e injusti­ Expedientes de la Sala Pública 84 cias desacreditan los sistemas que afectan defender. En fin, no deberemos reconocer otro principio para nuestras decisiones Pleitos pendientes 66 que las pruebas legales y el mérito de los procesos. Doc. n° 4 Esta misma imparcialidad, que hará respetable el santua- 101 rio de la justicia y que contribuirá poderosamente a aUlnen­ Parte superior izquierda sello 4° 40 MRS. Al centro sello tar la adhesión de los pueblos al Trono de Isabel 11 y a las año 1835. Isabel 11, P.L.G.D DIOS. R?ina de Esp. Y de IND.­ sabias instituciones que nos rigen, establecerá en el Tribunal A la derecha año de 1835. mismo la unión entre todos sus individuos de un modo !dura­ SEÑORA dero y permanente: porque si las cuestiones y los intereses La Real Sociedad Económica de Murcia a ~M. con el mas políticos, tan complicados y variables dividen entre sí a los profundo respeto expone: que cuando se proyectaba la división honlbres, y dan origen a opiniones y partidos diversos, la jus­ judicial del territorio, noticiosas varias corporaciones de que ticia, que es una y sola, y cuyos elen1entos son tan claros y estaba designada la villa de Albacete para la residencia de un Tri- conocidos, los reune y los estrecha, pueden ocurrir casos par- bunal Superior, se apresuraron a manifestar a ~M. por diferentes

I ticulares en que haya divergencia de dictán1enes entre los jue- conductos, los graves inconvenientes que en ello se seguirían: el ces o por la oscuridad del texto de la ley, o por la probabili­ voto general de estos países se demarcaba a Murcia como punto dad del hecho que no aparezca la misma a todos, o por las muy a propósito para establecer la Audiencia. La Real Sociedad circunstancias del caso que hagan dudoso, cual de dos leyes se preparaba talnbién a elevar sus súplicas al Trono, cuando vio opuestas, o a lo menos diversas, debe aplicarse. Pero estas sancionado el decreto, y estinló por mas conveniente dar un ejen1­ divergencias, a que estan expuestos todos los Tribui(zales, plo de sunlisión y respeto. Esperaba asbnismo el tiempo y los todas las legislaciones del mundo,cuando no son producidas ensayos patenticasen la mayor conveniencia de una trasla­ por el secreto deseo de favorecer un sistema político en las ción: así ha sucedido. Por mas esfuerzos que ha hecho el pue­ personas de sus adeptos, no alteran en nada el espíritu de blo de Albacete no ha conseguido todavía proporcionar loca­ unión: porque son variables, así como los casos que ocurren. les para la casa Audiencia ni habitación para los jueces, sub­ Quien hoy opina de diferente manera que yo, porque asi se lo alternos y litigantes; y con un crecido... en las circunstancias persuade su conciencia, nlañana por la misnla razón op:inará del día, apenas podría obtenerse lo que en Murcia se conse­ conmigo. guiría a nlUY poca costa. Aquí hay en cuestión edificios públi­ La concordia y buena armonía entre los magistrados pro­ cos muy capaces, algunos de ellos son propiedad del Estado, ducirá su efecto ordinario en los subalternos del Tribunal. Yo y la ciudad posee todos los elelnentos para la con10didad y espero (y nü esperanza no será engañada) que cada uno ejer­ decencia de cuantas personas lleva en pos de sí un Tribunal cerá las funciones que le pertenecen con el celo, prudencia e Superio1: Se ha hablado mucho de la centralidad de Albacete integridad que exigen los juramentos prestados, y que c~rres­ con respecto a la extensión del país que alcanza; verdad evi­ ponden al noble destino de contribuir a la recta administra­ dente, si se tratara de adoptar una medida puramente mate­ ción de justicia. mática; n1as si son atendibles otras consideraciones, no apa­ Fieles súbditos de Isabel 11, jamás se desnlentirá nuestra recerá tan clara esta ventaja: en efecto señora las ciudades de veneración y obediencia a la sucesora legíthna de cien reyes. Cartagena, Lorca y Orihuela y aun la de Murcia, pueblos los Encargos por S.M. la Reina Gobernadora de una lnisión de n1as considerables del distrito, se hallan en el extremo del paz, enseñaremos a los pueblos con nuestra unión y con ,nues­ radio de Albacete; al par que los demás a quienes tanto se tra imparcialidad a no dar oidos a los gritos descompasados atiende, jalnás podrán tener la importancia de los referidos ni de la discordia. Ciudadanos españoles bendeciremos perpe­ tanto nún1ero de causas; si se presenta un estado de ellas sen1­ tuamente la augusta mano que nos ha restituido en el Estatu­ brará la den10stración: principio que decidió a vuestras to Real las leyes fundanlentales de la Monarquia y dado' en él Manos, para la elección de Albacete, fue intereses de la lnayo­ la prenda de nuestra felicidad futura: y en fin, Magistrados ría de esta porción de españoles: ellnisn10 principio aconseja, íntegros dignos de nuestros mayores, administraremos ju~ticia que el nuevo Tribunal se traslade a Murcia: la Real Sociedad recta según las leyes sin distinción de personas ni opiniones; y correspondiendo dignamente a la confianza que ha merecido mostrarelnos de hecho a esta parte benemérita de la nación de vuestro gobierno regenerador, faltaría a su deber si guar­ española, que en el reinado de Isabel 11 ha acabado el in1perio dase silencio por mas tiempo, en perjuicio de un país cuyos de la arbitrariedad, y la dOlninación de los partidos, y empe- intereses protege por su mismo instituto: por tanto = A ~M.

I zado la era de la verdadera libertad. Yo os precederé si~mpre rendidanlente suplica se sirva tomar en consideración cuanto en la gloriosa empresa de cimentar el trono de nuestra atnable ha expuesto, y decretar la traslación de la Audiencia de Alba­ e inocente Reina sobre la paz, las leyes y la justicia. cete a esta Capital. Gracia que espera conseguir de vuestra No temo oposición de ninguna especia contra una obra tan piedad y queda rogando a Dios guarde la vida de ~M. y de su necesaria, porque conozco el carácter de las personas, y el excelsa hija doña Isabel Segunda dilatados años para bien de mio no debe series tampoco desconocido. He dicho. la Monarquía. Murcia 31 de Marzo de 1835. Doc. n° 6. Sra. A los Rs. Ps. De S.M. Firm,ado.- José Muro y Valiente Director. Rafael García Esparcia Vicecensor.- Diego Garcia de Osorio Secretario. Doc. n° 7 102

CAUSAS Y EXPEDIENTES DESPACHADOS EN LA SALA DEL CRIMEN DESDE 14 DE JULIO HASTA FIN DE 1834 Delítos públicos Causas Resultas de las De Infidencia 2 Causas despachadas

De Traición al Rey contra De RebeliónllO,.,. ".,." ",1IO.3 Al presidio de Málaga"", 110 110 25 el orden y seguridad De Sedición 4 interior De Expr. Subversivas 49 A los menores de Africa.,,45 De Pesquines Sub 8 Contra la Admón de Al canal de Castilla 28 Justicia y sus Ministros De Desobediencia a Contra la fé pública Preceptos judiciales....."""" ,11.,,4 A las armas..."...... •..".,,, .. ,, ..2 y privada De Falsificación de firmas ....",.,2 A pena de carceJ.II .." ..,,, .....21 De incontinencia Contra las buenas A prisión o mu/ta , ,..",11

Costumbres De Amancebamientos I •••• ,."•••2 A destierro., .." , 27 De Blasfemia "." ..".." 2 A privación de oficio..", 9 Delitos privados De Vagancia."." .. " . Por expedición A casas de beneficencia."..2. O uso de armas A prisión por pena.""III 58 prohibidas 8 Multados y aoercibidos ".54 Efectos públicos De Homicidios simp/es,. 57

Id. voluntarios.. u 1O Apercibídos./I ..,.., "." 7B Contra las personas Id. casuales 4 Absueltos liDremente.."." 82 De heridas 11 ••••• "•••••••••••• 84 De suicidio "., 1 Absueltos de la instancia...68 De violencia contra las

Personas... II ••••• " •• " ••••••••• , •••• 8 Reos ausentes De injurias., ,.3 Mandados prender" /I 28 Contra la opinión Pesquínes injuriosos A particulares." 4 Total ""."" "..""",,,.,, ..350

De robos simples u 8

De robos caJificados",,,,,,,,,,15 Causas en poder de /05

Id. de población l0 Re/atores para la vista." lO 10 •• 51 Id. co malos trata Contra la propiedad Mlentos , ,., 3

Id. en despoblado ,.. u 14 Id. con malos trata mientas 6

de incendio ", ".u "l de encubridores de Recursos 779 malechores 3 CI pendientes de otros varios excesos.,. 41 total 356 103

ESTADO DE LAS CAUSAS DESPACHAS EN LA SALA DEL Pleitos Pendientes CRIMEN DE LA REAL AUDIENCIA DE ALBACETE EN EL En Secretaría de Audiencia Plena y Escribanías de Cámara de AÑo 1835 lo Civil 130. De honúcidio 157 Doc. n° 9 De heridas 116 De robos y raterias 248 COMUNICACIÓN DEL MINISTERIO AL SR. REGENTE DE De sediciones, alborotos y expresiones subversivas 220 HABER EFECTUADO LA OPORTUNA ADVERTENCIA AL De fabricación y expedición de moneda falsa 000 ALCALDE CONSTITUCIONAL De suplantación de firmas 000 Al nlargen superior izquierdo: Ministerio de Gracia y De fijación de pasquines 42 Justicia. De resistencia a la justicia 38 Al Sr. Ministro de la Gobernación de la Peninsula digo de De estupro y amancebamiento 9 Real Orden con esta fecha lo siguiente: De uso de arlnas prohibidas 31 Excn10 Sr. = cuando en primeros del mes actual amenaza­ De vagancia y conductas sospechosas 47 ron las facciones la provincia y capital de Albacete, resolvió la De injurias 33 Audiencia trasladarse a la plaza de Cartagena llevandose con

i De conspiración 3 sus Ministros y Subalternos los papeles, todos relativos al Tri­ De suicidios 3 bunal, poque nada interesaba tanto como su conservación y De incontinencia 000 seguridad, por ser el respetable depósito de tantos y tan sagra­ De incendios 14 dos derechos de los particulares y de la sociedad en general. De blasfenúas y palabras obscenas 9 Para conseguir este objeto pidió con antelación la Audiencia a De fuga de la cárcel 21­ la Autoridad Municipal, los carros que necesitaba, mas esta TOTAL 1.494 no facilitó un auxilio tan debido, y que ella misma hubiera debido anticipar atendida la naturaleza del servicio que se Destino que se le ha dado a los procesados reclamaba. En tal conflicto recurrió el Regente al medio de Sentenciados en rebeldía o pena capital 000 pasar el oportuno oficio con el Secrtario del Tribunal pleno y Ajusticiados 7 un Escribano de Cámara al Alcalde 1 0 Constitucional, inti­ Destinados a presidios 387 mandole que a su cargo quedaban los papeles y libre el Tribu­ A las armas 22 nal de toda responsabilidad por no haberle facilitado los Presidio correccional 148 bagajes reclamados, y a pesar de una medida tan rigurosa A la galera 5 capaz de activar el celo del funcionario Inas indolente, se vie­ Desterrados 24 ron obligados el Regente y los Ministros de aquel Tribunal, a Multados 314 salir sin llevarse dichos papeles. oso seria que yo me empeña­ Condenados en costas 612 se en pesuadir a VE. el interes de la causa pública en que Apercibidos y prevenidos 170 aquellos se salvasen, y la reprensible omisión del Alcalde en Absueltos 128 no prestar al Tribunal el auxilio solicitado. En el ánimo de la Condenados a prisión temporal 102 Augusta Reina Gobernadora ha producido selnejante condcta Puestos a disposición de otras autoridades 000 el isgusto que es consiguiente y me manda diga a VE. ser su Azotes o vergüenza pública 000 Real voluntad que por el Ministerio de su cargo se haga A obras publicas 8 entender así al referido Alcalde 10 Constitucional de Albacete TOTAL 1927 a fin de que en lo sucesivo no incurra en tales faltas, ni se de Doc. n° 8 con este ejen1plo lugar a que ros las cometan. Causas Pendientes De la propia Real Orden lo traslado a VS. para inteligen­ En poder de los relatores 41 cia del Tribunal y efetos convenientes. Dios Guarde a ~S. En las Escribanías para sustanciar 249 lnS.as. Madrid 22 de Septiembre de 1837. TOTAL 290 Finnado. Ramón Salvato.r Regene de la Audiencia de Albacete. ESTADO QUE MANIFIESTAN LOS PLEITOS, CAUSAS CRI­ El Tribunal queda enterado de la precedente soberana MINALES Y EXPEDIENTES DESPACHADOS EN AUDIENCIA resolución, cuyas disposiciones se guarden y cumplan sin per­ PLENA, Y LAS DOS SALAS DE LA DE ALBACETE EN EL! AÑO juicio de lo que y acerca de los precedentes que establece, diri­ PRÓXIMO PASADO DE 1835 jase a S.M. la correspondiente respetuosa exposición, a cuyo fin pase el Sr. Collado, con los autos que necesite y pida, Audiencia Plena Pleitos librandose para docun1entarla las certificaciones que S.S. Despachados 328 designe y sean de dar. Cartagena primero de Octubre de mil Sala de lo Civil ochocientos treinta y siete. Sentenciados en definitiva 83 Firlnado Luis Vicen. Expedientes 796 Acto seguido se pasa este expediente al Sr. Collado con Sala del Crimen todos los antecedentes relativos a las traslaciones que ha Causas en definitiva y consulta 1494 hecho el Tribunal. Resumen Firmado Luis Vicen Doc.n° 10 Audiencia Plena 328 Sala de lo Civil 88 COMUNICACIÓN DEL AYUNTAMIENTO DE ALBACETE A ID. del Crimen 1494- S. M. ALEGANDO QUE RESTABLECIDA LA PAZ NO HAN TOTAL 1910 REGRESADO LOS MAGISTRADOS A IMPARTIR JUSTICIA No se cOlnprenden los expedientes de la Sala del Crimen que Sra. el Ayuntamiento de vuestra leal y decidida capital de

son en nluchísimo número. ! Albacete, se congratula y llena de sus sagrados deberes acer­ candose al trono angelical de vuestra augusta hija, su adora- 104 da Reyna; con el feliz anuncio de su reposo, paz y seguridad restituidos al seno de sus destino y tranquilo ejercicio de sus inalterables que disfruta toda la provincia, a la veloz desapa­ superiores funciones, menos los Magistrados de esa Audiencia rición del vandalismo, capitaneado por el rebelde Gomez, des­ que en vez de cumplir, tratan sin duda faltar a la Real Orden pavorido, aterrorizado, espantado de la heroycidad, con un de 22 de Septiembre último, cuando ya no han regresado a puñado de valientes le ha vencido, destrozado su enorme masa administrar justicia en esta capital, co/no lo tiene mandado y causado con gloria la mayor de las derrotas en tan injusta ~M. para el caso llegado de haber cesado las azarosas cir­ guerra, se aleja como fugitivo, corta la parece la distancia de cunstancias, que motivaron aquella resolucion; que dolor este Reino, en este circulo en derredor de si n1Ísnla tan caval seiiora!; que ejemplo!, que falta tan intolerable! La prudencia, destrucción precipita sus marchas, todo menos volver a pisar la rectitud, y sabiduría de ~M., la voluntad expresa del Trono, el suelo que tan por entero dio principio a su deseado exter­ los sacrificios /nas interesantes de este venemerito vecindario minio. Perseguido por los leales en todas direcciones, con se intentan burlar por los misn10s que debieran garantizarlos! especialidad por la victoriosa división de Espartero al mando En tan ... evento señora, el Ayuntamiento ofenderia su de su actual jefe el digno general Alaiz que a nadie cede la representación, si no elevara a ~M. su humilde voz, suplicato­ gloria de amignorarlo, y cubierta por las tropas nacionales la ria del puntual cumplimiento de los sabios decretos de ~M. finca del Jucar, cuyo transito pudiera ofrecer a la horda rebel­ para evitar los males consiguientes a su violación, con perjui­ de algun asilo, no debe ya esperar sino su prematura ruyna al cio notorio de una capital que por su inmediacion al castillo intentarlo cuando no la reciba antes en el hermoso terreno que inconquistable de Las Peñas de San Pedro, afianza la seguri­ ahora pisa. No existe por tanto, el n1as remoto peligro de que dad del Tribunal mas que la ciudad de Murcia y Cartagena, esta capital sea de nuevo invadida, y con tan fundada espe­ aun en circunstancias angustiosas. Albacete, fecha ilegible. ranza los vecinos y autoridades emigradas, cuentan ya dias de Doc. nO 11. LA SEGURIDAD MUNICIPAL DE ALBACETE DURANTE EL SIGLO XIX A TRAVÉS DE LOS SERENOS.

Matilde MORCILLO ROSILLO Universidad de Castilla-La Mancha

PLANTEAMIENTO

El rey Carlos 111, secundado por el marqués de Florida­ pal y sus cuidadores -origen del Cuerpo de Serenos- tuvieron blanca y el Conde de Aranda, trató de remediar dos car~ncias en ésta su primera función, a la que posteriormente se fueron fundamentales: la infraestructura de la ciudad de Madrid y la añadiendo otras. estructura de los servicios de seguridad. A tal efecto dicto una Lo de bautizarlos con el nombre de serenos se debió a su R.O. de 25 de septiembre de 1765 que decía: obligación de gritar de vez en cuando la hora, añadiéndole una "He resuelto liberar al vecindario de Madrid del cuidado coletilla sobre el estado del tiempo: ventoso, lluvioso, sereno, de encender, limpiar y conservar los faroles y a los poseedores etc. Como esta última era la más corriente, el pueblo decidió de casas de Madrid de la contingencia de los gastos de ¡repo­ llamarlos serenos. nerlos, creando para ello un Director de esta policía, para que La institución de los serenos se hizo popular por los nume­ con los precisos dependientes y operarios la establezca y rija rosos servicios de tipo práctico que prestaba a los vecinos: avi­ en todo lo gubernativo y económico con inmediata sujección a sos al médico, a la comadrona, voces de alerta en caso de mi primer secretario de Estado ". incendio y otras muchas. Los faroles pasaban de este modo a ser propiedad munici-

l. LA CREACIÓN DE LOS SERENOS

La creación de los serenos se llevó a cabo por un edicto Las funciones que les fueron encomendadas a los serenos publicado en Madrid el 28 de noviembre de 1797, siendo rey sobrepasaron en gran manera el mero cuidado del alumbrado. Carlos IV. En él se decía: La protección de los serenos quedó regulada en un edicto de la "He resuelto establecer en Madrid los serenos o celadores siguiente manera: nocturnos, bajo el cuidado e inspección de los alcaldes de mi "El vecindario recibirá con la estin1ación y aprecio que Real Casa y Corte y de Cuartel y demás, ocho celadores para merece una providencia dirigida a su común utilidad y benefi­ los ocho cuarteles ". cio, teniendo un auxilio efectivo con que concurrir a las nece­ El servicio estaba regulado de forma clara y sencilla:, sidades particulares en los accidentes imprevistos que se ofre­ "Mando que los serenos empiecen sus funciones desde las cen a las horas extraordinarias de la noche, en las cuales es nueve de la noche en invierno, y desde las once de la noche en difícil encontrar pronto recurso para llamar al Médico, Con- verano, aumentándose el número de los acordados otros cin­ fesor, avisar a la Parroquia para la suministración de los San­ cuenta ,nás, para que hagan con más comodidad el servicio y tos Sacramentos y atender a otros socorros de esta clase que se hallen bien asistidos los vecinos en las ocurrencias repenti­ no admiten espera, sin que fuera de estos casos urgentes y el nas que les sobrevengan". de llamar por particular encargo a algunos de los vecinos del Quienes cometieran excesos mientras desempeñab~n su distrito a hora determinada, sea lícito ocupar a los serenos, ni servicio, sobre todo robar o encubrir, eran muy duramente cas­ éstos tomar sobre sí nuevos cuidados que les impidan el exac­ tigados: to cumplimiento de las obligaciones que les tienen prescritas; "Así mismo quiero que los serenos que faltasen a lq con­ sobre lo cual velará muy particularmente la Justicia, con10 fianza pública y al auxilio sean castigados irremediablemente bien en contener con providencias serias y eficaces cualquier con la pena de muerte, si en el acto del ejercicio de su empleo insulto, agravio o burla que se haga a los serenos, ya sea reco­ robasen o hiciesen capa a otros para que lo ejecutasen". lnendándolos o ya haciéndoles encargos fingidos ".

11. LA EXTENSIÓN DEL SERVICIO DE SERENOS POR TODA ESPAÑA

El paso de Javier de Burgos por el Ministerio de FOl}1ento El motivo y las causas que originaron el R.D. se expresan fue muy breve, apenas llegó a un año. Pero en tan poco Jiem­ en el mismo: po hizo mucho más de lo que se podía esperar. "Persuadido de que el establecimiento del alumbrado y Cosas dignas de recordar son la nueva división provincial, serenos en los pueblos, al mismo tiempo que se contribuye en la supresión de los gremios y la liberalización del coIIiercio. gran n1anera a la comodidad y seguridad de sus habitantes, Junto a estas grandes actuaciones hizo otras de menor ~ango, evita la perpetración de varios delitos que no llegarían a come­ pero mucho más prácticas. I terse si la soledad y las sombras de la noche no asegurasen la Así, Javier de Burgos creó el Cuerpo de Bomberos de ~adrid impunidad de sus autores: considerando además que si bien es en 1834, promovió el cambio de numeración de las casas de la generabnente conocida la utilidad de ésta y de otras medidas capital y extendió por toda España el alumbrado y los serenos. de policía urbana, sufre no obstante en su ejecución largas y La extensión de los serenos se hizo a través de un R.D. de aún interminables dilaciones, si se abandona a la voluntad de fecha 16 de septiembre de 1834, publicado en la Gaceta de sus habitantes o de las autoridades locales, que bajo este Madrid cuatro días después. aspecto es objeto digno de ocupar a una administración que 106 aspira a corresponder a las miras ilustradas de ~M. para que Pero la aprobación y exacción de impuestos debería hacerse los pueblos de la monarquía obtengan en la policía urbana las para cada caso por el Ministerio del Interior. mejoras inseparables de una civilización progresiva ". b) Los gastos de mantenimiento eran mucho menores y se Las dos grandes causas por las que se extendieron los sere­ distribuían siguiendo el mismo sistemal. nos y el alumbrado a toda España eran la comodidad y la segu­ El R.D. de 16 de septiembre de 1834 organizaba el Servi­ ridad de sus habitantes; sin embargo, fue esta última la deter­ cio de Serenos en las capitales de provincia. Según sus dispo­ minante para que esa medida fuera tomada. siciones, dicho servicio debía establecerse en las poblaciones, El horario sería el mismo que el que prestaban en Madrid; villas y lugares donde no existiese, admitiéndose para su sos­ es decir, desde las 9 de la noche hasta el amanecer. De tenimiento una imposición vecinal sobre las casas y demás edi­ momento sería obligatorio en todas las ciudades que fueran ficios urbanos de los pueblos. capitales de provincia, "y aunque no se obliga por ahora a El Ayuntamiento debía nombrar dos regidores y dos pro­ ello a las demás ciudades, villas y lugares, darán los que lo pietarios de casas, vecinos del lugar donde se tratase de adopten un testimonio de su celo en coadyuvar a mis benéfi­ implantar el servicio, designados por la suerte entre los mayo­ cas intenciones ". res contribuyentes, siendo obligación de los nombrados deter­ En la financiación de los serenos se distinguían dos aspec­ minar el capital o valor de cada casa, fábrica, hospital, etc., tos: el establecimiento y el mantenimiento. tomando como datos la renta o canon del inquilinato y las con­ a) Para conocer los costes del establecimiento se calcula­ tribuciones que debían satisfacerse por la finca. rían el número de faroles que fueran necesarios en relación con El valor de las casas habitadas por sus dueños o el de las la dimensión de las calles, los costes de su construcción y desalquiladas y el de las fábricas o cualquier otro estable­ colocación, el gasto del aceite, la lilnpieza y el mantenimiento, cimiento particular era fijado por un cálculo prudencial entre incluyendo las escalas. Como es lógico, habría que calcular el los propietarios designados y la Comisión municipal. Igual número de serenos en relación con la población de la ciudad cálculo debía hacerse para los establecimientos públicos. En que se tratase. las capitales de provincia y pueblos donde estaba establecido Se hallarían después los capitales de las fincas urbanas, de el servicio, podían manifestar al Gobernador Civil su voluntad todo tipo, incluso edificios públicos, religiosos, hospitales, de no modificarlo y continuar con el mismo si se encontraba particulares, etc. Después se distribuiría proporcionalmente el aceptable; en caso contrario, el Gobernador acudía al Ministro gasto entre todos los vecinos y entidades públicas o privadas. de la Gobernación.

111. ESTABLECIMIENTO DEL SERVICIO DE SERENOS Y ALUMBRADO EN ALBACETE

Aunque la creación del Cuerpo de Serenos en Albacete se "Ayuntamiento a 7 de abril de 1825. Pasé informe al Sín• llevó a cabo a raíz del R.D. de Javier de Burgos el 16 de sep­ dico Personero Pedro del Real para que exponga sobre esta tiembre de 1834, como veremos después, se sabe por docu­ solicitud lo que se ofrezca. Y como así se acordó, yo el Secre­ mentos hallados en el A.H.P.A. que existen nombramientos o tario certifico: ceses de serenos con anterioridad al primer Reglamento de (firmado) Juan del Peral". Serenos de Albacete aprobado en 1841. En el reverso de la misma hoja hay otra anotación: De entre los documentos encontrados podemos destacar los "La solicitud del establecimiento de Serenos y Alumbrado fechados en 1825 y 1826, lo que contrasta con lo que nos dice que el adjunto contiene: es muy análoga a mis deseos, por las Sánchez Torres, al poner como fecha oficial de la creación del ventajas y brillantez que resaltarían a esta villa poblada de Cuerpo de Serenos el año de 1836. En cualquier caso, se trata­ once mil almas; acreedora por consiguiente a toda considera­ ría de los antecedentes más directos del primer Cuerpo de ción interior y exterior. Exponerme a esta verdad sería ofender Serenos en Albacete. la ilustración del Ayuntamiento y su celo. El documento más antiguo referido a los serenos, como ya ~S. podrá ver si existen fondos o medios para que pueda he señalado, data de 1825: se trata de una petición de los veci­ tener efecto la propuesta de estos interesados. Albacete y abril nos para ocupar las plazas de dos serenos. El texto dice así 2: 20 de 1825. "Antonio de Lucas, peón público de esta villa y Manuel El Síndico Personero Gallego residentes en ella, con el mayor respeto hacen pre­ (firmado) Pedro Pascual del Peral". sente a ~S.S. que siendo útil al propósito del establecimiento Siguiendo con el mismo documento una nota debajo de la de serenos en los pueblos de gran vecindario, persuadiendo anterior dice: los componentes de que pueda ser del beneplácito de ~S.S. el "Ayuntalniento 28 de abril de 1825. que los sea en esta villa, desde luego, y bajo las costumbres Luego que hayafondos se determinará: y como asíse acor­ que ha habido otras veces con los que han servido en este des­ dó, yo el Secretario certifico: tino, se ofrecen a ejercer dicho encargo si ~S.S. lo tuviesen a (firmado) Juan del Peral". bien y además, si se estableciesen faroles por las calles, cui­ Del documento podemos deducir que no había serenos en dar el alumbrado dándoles cargadas sus candilejas, como se el momento de la solicitud, sino que se "proponía el estable­ practica en Hellín y otras poblaciones. cimiento" de los mismos, pero sí que los había habido ante­ Gracia que esperan merecer los con1ponentes del favor de ~S.S. riormente, cuando nos dice: "...bajo las costumbres que ha Albacete y marzo 28 de 1825". habido otras veces con los que han servido en este destino". En el margen izquierdo hay una nota escrita con otra letra Desde finales del siglo XVIII hasta estas fechas fueron que dice así: varias las formas en que se prestaba la vigilancia nocturna por

TURRADO VIDAL, M.: Estudios sobre la Historia de la Policía local, tomo I1, Ministerio del Interior, Secretaría General Técnica, Madrid, 1991, Págs 81-105; MORCILLO, M.; CAÑIZARES, J. YMANUEL SÁNCHEZ: La Guardia Municipal de Albacete y la seguridad municipal en el siglo XIX, Ayuntamiento de Albacete, Albacete, 1998, Págs. 63-68. 2 Archivo Histórico Provincial de Albacete = (A.H.P.A.) Sección Municipios. Caja 513. 107

las conocidas rondas, que estarían compuestas unas veces por provincia, real disposición a la que el Ayuntamiento de Albace­ Alcaldes de Barrio con sus Alguaciles, Ministros de Jvsticia, te prestó cumplimiento el 13 de octubre ocupándose en llevarla soldados, milicianos, voluntarios o serenos, según la época, y a efecto, para lo que en agosto de 1835 acordó destinar a este nos imaginamos que en períodos tranquilos incluso se abando­ servicio el 4% de los alquileres de las casas cobrados por los naría el servicio. vecinos, medio con el cual se establecieron el 18 de septiembre A través de esta información sabemos que en Hellín y otras de 1837 cuatro serenos y se colocaron otros tantos faroles, vigi­ poblaciones cercanas sí tenían el Servicio de Serenos y' que el lancia y faroles que al parecer duraron poco tiempo. alumbrado no se podía considerar público ya que era propiedad Sobre el establecimiento del Servicio de Serenos en este de los vecinos, quienes se encargaban del mantenimiento y la caso tenemos un documento con fecha 30 de agosto de 18374• reposición del mismo. Como veremos, hasta 1837 no de hizo Es una petición de cuatro vecinos de Albacete para ser nom­ cargo el Ayuntamiento de los faroles y del mantenimiento. brados serenos. La fecha de 18 de septiembre que figura en el No existe confirmación alguna de que esta petición tuviera documento, como la de admisión de estos cuatro solicitantes, contestación positiva a pesar de la predisposición a est~blecer es justo un año después del nombramiento de cuatro serenos en el servicio. No sabemos si fue por cuestiones económicas lo la villa de Albacete que nos relata Sánchez Torres. Por lo que que impidió hacerlo. es fácil pensar que incluso pueda ser una errata de la impresión Otro documento de 1826 hace referencia a la solicitud de y que se trata del mismo hecho que documentamos con el men­ José Francisco Menchor para ejercer la plaza de sereno en la cionado texto, que dice así: villa por cuenta de los vecinos y con el alojamiento a caigo del "Señores del Ayuntamiento. Ayuntamiento. En estos términos se expresaba el interesado 3: Ranlón Serrano y Pérez, Francisco Anís Muñoz, Juan "José Francisco Menchor, vecino de Callosa, estante (ll pre­ Catalán y Juan Minuesa, todos vecinos de esta capital. Con el sente en esta de Albacete: a ~S.S. con el respeto debido~ hago nlayor respeto exponen a ustedes, que por haberfalta de cua­ presente: como a efecto de buscar la subsistencia de mi rhujer y tro serenos para dicha población desean estos dichos ya refe­ familia que también se hallan en esta villa, he pensado dedicar­ ridos, el que se les admita cOlno tales serenos por ser más me a ejercer la plaza de Sereno, publicando las horas¡ de la acreedores que ningunos otros suplican estos ya dichos a noche desde el toque de la queda hasta el amanecer, en cuyo todos ustedes, señores del Ayntamiento se sirvan mandar se les tiempo con mi desvelo se evitarán bastantes daños que pudieran admita como a tales serenos. Favor que esperan de los buenos ocurrir, y cuya plaza me obligo a servirla por sólo el estipendio corazones de ustedes. que cada domingo quieran darme los vecinos a quienes ,requi­ y por no saber firmar los demás, firma a ruego, Juan riere; y también proporcionándome el Ilustre Ayuntamiento una Minuesa. simple habitación aun cuando sea en uno de los cuartos de la Albacete y agosto de 1837". plaza o lonja. Estando como estoy pronto a presentar el levan­ En la parte de abajo de dicho documento se lee: "Admiti­ tamiento de la vecindad de dicho mi pueblo con el correspon­ dos en 18 de septiembre de 1837". diente testimonio de mi conducta política y moral, y adhesión al Los vecinos solían colocar farolillos en sus fachadas, que Rey Nuestro Señor (que Dios guarde) siempre que ~S.S. me per­ aunque poco, en algo contribuían a las necesidades del alum­ mitan desenlpeñar dicho destino, por cuya gracia rogará al todo brado, pero las gentes del pueblo los rompián. El 8 de octubre Poderoso dilate su vida muchos años. de 1837 se acordó recomponerlos con los bienes de propios a Albacete, 13 de abril de 1826". reintegrar con el importe de las multas. Más tarde, el 18 de En una nota escrita en el margen izquierdo se puede leer: diciembre se dispuso que toda persona que saliera de noche "Ayuntamiento de 16 de abril de 1826. llevase luz. Admítese a este interesado la propuesta que hace a propó• En 1840 se decidió volver a restablecer el alumbrado como sito que sirva la plaza de Sereno sin otro interés que el que estuvo tres años antes, pero al siguiente se trajeron de Madrid también señala, proporcionando por síla habitación que nece­ 54 faroles de reverbero, que se colocaron con los cuatro anti­ site y acreditando en dicha forma haber urbanizado su vecin­ guos y algunos otros de candileja y se nombraron serenos dad de la villa de Callosa con informe de su Ayuntamiento de encargándoles anunciar la hora. Hasta en la voz preventiva la conducta que ha observado en el tiempo del abolidoi siste­ influyeron las ideas políticas dominantes. La santa salutación ma constitucional y después de restituido S.M. a la plenitud de "Ave María PurísiIna", que se estableció al principio de la crea­ su Dios. Y de haberse así acordado. Yo el Secretario certifico: ción del Cuerpo de Serenos y se utilizaba con los gobiernos (firmado) Juan del Peral". moderados de Ma Cristina e Isabel 11, se vio sustituida por el Según se desprende de este documento, en 1826 hubo un grito "Viva la Libertad", después se cambiaron uno y otro, dis­ sereno al menos en la villa de Albacete y la aprobación para poniendo que se empezase el anuncio de la hora con las pala­ que el mencionado José Francisco Menchor tomara posesión bras "han dado..."5. de ese puesto queda bastante clara. Quizá, las condiciones que El 18 de noviembre de 1841 el Ayuntamiento de Albacete aquel hombre pedía para desempeñar el cargo facilitaron al aprobaba un Reglamento de Serenos, siendo de los primeros de Ayuntamiento su decisión. la Península6• El Servicio se ajustaba al que se hacía en la Cor­ En esta solicitud ya aparecen algunas de las misiones pro­ te, de donde vino un sereno para organizarlo. Se dotó a los pias de los serenos y que José Francisco Menchor se compro­ serenos de capotes, lanzas y farolillos, costando esta mejora al mete a seguir, como son las de dar las horas y evitar posibles Ayuntamiento un total de 20.916 reales y 17 maravedíes. daños a las cosas o personas. Recogemos aquí algunos de los puntos del citado Regla­ Se sabe que por R.O. de 16 de septiembre de 1834 se¡ man­ mento por contener las bases programáticas del Cuerpo de dó establecer serenos y alumbrados públicos en las capitales de Serenos. Este Reglamento tiene gran importancia, tanto por la

3 Ibídem. Caja 513. 4 Ibídem. Caja 513. 5 SÁNCHEZ TORRES, F.: Apuntes para la Historia de Albacete, del folletín del periódico "Defensor de Albacete", Imprenta de Sebastián Ruiz, Albacete, 1898, Págs. 509 y Sigs. 6 Reglamento de Serenos, Ayuntamiento de Albacete, Imprenta de Hrrrero Pedr6n y Compañía, Albacete, 1841,28 Págs. 108 antigüedad del mismo, pues se puede considerar de los prime­ También tenían que impedir los gritos y ruidos, así como la ros de España, como por la amplitud y detalle con que nos rela­ venta de bebidas alcohólicas a partir de las diez de la noche en ta las actividades de los serenos. invierno y de las once en verano y cerrar las t"abernas que se En los primeros artículos del Reglamento, que consta de 28 excedían a su horario. Igualmente prohibían que se hiciesen páginas y 48 artículos, encontramos el nOInbramiento de dos hogueras en las calles; los portales mal iluminados los cerra­ Comisarios Inspectores, extraídos de los Concejales y que serán ban por la noche, tomando nota y dando parte al Alcalde de nombrados rotativamente entre éstos. Los Regidores Comisarios Barrio en caso de negativa por los dueños de la casa. Así mis­ serán los jefes inmediatos de los Serenos-Faroleros y por tanto mo cuidaban que no se arrojasen o sacase.n a la calle aguas tendrán a su cargo el control de todos los gastos, nombramiento sucias o basuras. de distritos, así como la organización y duración del servicio de Cuando se producía un robo en el distrito donde prestaba alumbrado, teniendo en cuenta la estación del año y muy espe­ servicio el sereno, era separado del cargo, salvo que demostrase cialmente la luna llena, con la cual se turnarán los faroles para que había puesto todo lo que estaba de su parte para evitarlo. un ahorro del combustible. Podrán amonestar, imponer multas En el artículo 20° se les da el trato de "Vigilantes de Poli­ de hasta 20 reales e incluso podrán suspender al Sereno-Farole­ cía Nocturna", en los casos que no se hallase presente ningu­ ro, dando cuenta de todo ello al Ayuntamiento. na autoridad o delegado de la misma. El Reglamento nombra "Celadores del alumbrado" en los El pito era un medio de comunicación muy útil entre los sere­ cuatro distritos o barrios de la capital a los señores Regidores nos y hacían uso del mismo en caso de resistencia para pedir ayu­ de Cuartel, los cuales controlarían el trabajo de los serenos, da cuando encontraban una persona herida o enferma en la calle, especialmente el suministro de aceite a los faroles. un cadáver, etc. Los primeros compañeros que llegaban iban en En los artículos 8° al 12° habla del nombramiento de los busca de ayuda y los siguientes se encargaban de dar parte al Serenos-Faroleros, competencia del Ayuntamiento, el cual los Alcalde de Barrio, Juez o persona a quien correspondiera. nombrará prefiriendo: "de los que soliciten dichas plazas a los A los serenos se les facilitaba con claridad el distrito que que reúnan las cualidades de robustez, agilidad proporciona­ debían vigilar, constando por escrito las calles y plazas del da al objeto, cinco pies (1,39 cln.) a lo 11'zenos de estatura, no mismo, número de faroles, etc. No podían salir de esa demar­ ser menor de veinte y cinco años, ni lnayor de cuarenta, tener cación, salva que se les autorizase, como podía ser para ir a fuerte y clara la voz, saber leer y escribir si es posible, obser­ buscar al médico, cirujano, comadrón, sacerdote, etc.; aún así, var buena conducta...y talnbién ilnprescindible no tener otra cuando salía debía avisar a sus compañeros para que se encar­ ocupación diaria que le priven del descanso necesario para gasen de su zona. No podían salir con nadie fuera de su distri­ ejercer la vigilancia nocturna". Como dato curioso señalar, to simplemente para acompañarles o alumbrarles, pues el ser­ que en alguna ocasión fue preferido un solicitante a otro por el vicio particular no estaría por encima del posible auxilio que hecho de tener una mejor o más bonita voz. En igualdad de pudieran prestar en caso de una verdadera necesidad. condiciones eran seleccionados los que habían prestado servi­ El dormirse en el servicio era de las faltas más graves que cios a la villa o al Estado. podían cometer y se sancionaba con multa de diez reales la pri­ En el acto del nombramiento les era leído el Reglamento y mera vez, de quince la segunda y de veinte la tercera, encar­ era requisito indispensable el compromiso de observar todo 10 gándose los Comisarios del ramo de tomar otras medidas en que en él se prevenía para poder tomar posesión de su cargo. caso de nuevas reincidencias. El sueldo de los Serenos-Faroleros estaba fijado en cinco Más grave era y se sancionaba con el despido al que se reales diarios, a cobrar mensualmente, previo descuento de las encontrase embriagado o dormido con abandono de sus armas. multas cuando hubiese lugar. Además recibían cuatro reales al En varios capítulos se habla de las armas, pero sin especificar mes por el "lavado y reposición de paños y rodillas para tener cuáles. Sabemos que llevaban al menos una lanza por la com­ peifectamente limpios los cristales, quinqués, reverberos, vasi­ pra que hizo el Ayuntamiento de lanzas, farolillos y capotes. llos, tubos y demás piezas que constituyen los faroles comple­ De algunos artículos como el 24° cabe pensar que eran más tos para el buen servicio del alumbrado público". de una las armas que portaban: "...si se hallase dormido con Todos los días tenían que presentarse los serenos media las armas...", podemos suponer con facilidad que llevasen una hora antes al servicio, incurriendo en una multa de una peseta carabina, ya que era muy usual en aquella época, tanto por el el que no asistiese sin legítima causa. ejército, la Inilicia nacional, los guardas y posteriormente la El artículo 16° hace referencia a las obligaciones de los misma Guardia Municipal. Según el Reglamento los serenos Serenos-Faroleros: "permanecer hasta que alnanezca en la debían resistir con las armas los atentados que se quisieran plaza, anunciar las horas y estado de la atmósfera, impedir la cometer contra su persona estando de servicio. sorpresa y robo de las personas que transitan por las calles, Por el artículo 31° se puede ver que a los Serenos-Faroleros las riñas, fracturas de puertas y ventanas, escalamiento de se les consideraba en calidad de lo que hoy podríamos llamar casas, la conducción de cajas, fardos o bultos...". agentes de seguridad, cuando nos dice: "... Todo insulto o aten­ En los artículos siguientes se explican aún más las funcio­ tado cOlnetido contra los serenos, se considerará como si fuera nes de los mismos. Así, la obligación de avisar la hora y el tem­ hecho directamente a las Autoridades, y por consiguiente será poral tenía que ser al menos cuatro veces en cada hora, hacién­ castigado el agresor con todo el rigor que marca la Ley". dolo de cuarto en cuarto y con las palabras precisas. En caso También se les exigía por otra parte un mayor celo en su de incendio, después de la hora tenían que indicar: "fuego en comportamiento, siendo "echados del ramo" aquellos que se tal calle". No podían entrar bajo ningún pretexto en casa algu­ excediesen en sus facultades, abusasen de su cargo, molestasen na y para descansar debían hacerlo en las esquinas, para una al vecindario o perturbasen el orden público. mejor vigilancia y ser vistos con más facilidad. En el artículo 43° se vuelve a insisitir en este tema, dicien­ Cuando el sereno viese incendio u oyera tocar a fuego, tenía do: "Debiendo distinguir al sereno una conducta irreprensible, la obligación de avisar en primer lugar a la Parroquia, si aún no honradez y probidad, si cometiese algún delito que mereciese tocaba, y después a los Alcaldes constitucionales, Cuerpos de la peIJa corporal o infamatoria será depuesto de su plaza, Guardia, Regidores del Distrito, Alcalde de Barrio, Alguacil recogiéndole el nombramiento, con la nota correspondiente Mayor y a los Celadores de Policía Urbana que vivían en su para que no pueda volver a ser admitido". Es contundente, una demarcación. vez más, en el comportamiento que debían tener los serenos. 109

En cuanto a su trabajo como faroleros, tenían que encar­ Alcaldes, Alcaldes de Barrio, Celadores y cualquier otro agen­ garse de la limpieza y conservación de los faroles, surtirlos con te municipal de policía urbana o rural. aceite, encenderlos a la hora señalada y cuidar que luciesen En octubre de 1872 se hicieron proposiciones para estable­ perfectamente todo el tiempo que debían estar encendidbs. cer un gasómetro, pero a pesar de las buenas intenciones del En esta función también tenían faltas que podían costarles Ayuntamiento -se sabe que España vivía en aquella época una directamente el puesto de trabajo, como era el utilizar aceite de situación crítica-, el estado de la Hacienda municipal no per­ clase inferior en las lámparas al que habían recibido del alma­ mitió que prosperaran, como tampoco las presentadas diez cén o echar menos cantidad de la asignada, así como: sacar años después por Ramón Cañete, de Madrid, para establecer el hilos del tejido de las torcidas para que consumiesen menos alumbrado de gas o eléctrico. • I aceIte u otras raterías que tendiesen a economizar el combusti- En 1876 aparece publicado un extracto de las Ordenanzas ble. Si los Comisarios del ramo encontraban bajos de luz los Municipales en el que se alude a varios artículos referentes al faroles de una plaza, les costaría a sus encargados una multa la alumbrado, que si bien son una copia idéntica de los contenidos primera vez y el despido en caso de reincidencias. en el primer Reglamento de 1841, con algunas correcciones de Dentro de lo extenso y detallado que es este Reglamento, ortografía, únicamente aparece un artículo nuevo (80° de las encontramos precisada la multa por no tener la escaleral utili­ Ordenanzas Municipales), que hace referencia al sueldo que zada para la limpieza y encendido de los faroles en la argolla cobraba el cabo de escuadra: un real más que cada Sereno-Faro­ destinada al efecto y con el candado correspondiente¡ Así, lero, cuyo sueldo era de una peseta y 75 céntimos diarios9• pagaban la primera vez una peseta, dos la segunda y trtfs por De esta misma época tenemos un expediente que la Corpo­ las sucesivas. ración municipal de Albacete redactaba para contestar una peti­ Todas las mañanas debían dar parte, antes de retirarse~ a los ción que el Ayuntamiento de Villarrobledo había realizado con Inspectores del ramo y, en caso necesario, a los señores Alcal­ el fin de recabar información para la creación del servicio en esta des. También debían informar a todos los señores CapitÚlares población. El documento describe el uniforme y el armamento: a los que tenían como Jefes naturales en todo aquello concer­ "Los serenos usan traje particular. Para el año pasado se niente al ramo desempeñado por los serenos. hizo por cuenta de los fondos de este Excmo. Ayuntamiento: Este reglamento fue aprobado en sesión ordinaria de !18 de capotes de paño, color gris, clase particular, hechura estilo noviembre de 1841, siendo Alcalde don Francisco Gómez Gar­ ruso, botón dorado, siendo el coste de los nueve que se cons­ cía y estaba claramente inspirado en el Reglamento del ~xce­ truyeron el de 405 pesetas, y llevaban también gorra del mis­ lentísimo Ayuntamiento de Madrid de 22 de junio de 1840, y mo paño con las iniciales encinta de la visera. que se menciona en el artículo 46°, como subsidiario en caso Durante la ronda llevaban su correspondiente lanza y farol de que algo no esté recogido en el Reglamento de Albacete, y además carabina, las cuales proceden de unos fusiles que se teniendo en cuenta las circunstancias locales. recortaron ". La colaboración de Madrid a la creación de este Servicio en En 1833 el señor Osmond Lonergan presentó una propues­ Albacete viene dada por la experiencia que en la Corte ya exis­ ta de alumbrado con gas. También en 1844 y 1886 hubo ofre­ l tía al respecto, motivo por el que, como vimos con anteriori­ cimientos de compañías británicas que no prosperaron a pesar dad, un sereno de dicha Corte se desplazó a Albacete para ayu­ de que el Ayuntamiento proporcionaba el terreno necesario. dar a organizar dicho servicio. Cuando en 1877 ni siquiera se encendía el alumbrado por El servicio de farolero decayó pronto. Se trató de reorgani­ falta de recursos en las arcas del municipio, se aceptaron las zarlo en enero de 1859, pero siguió funcionando mal, aJnque proposiciones de D. Tomás Duch Montero para el sistema eléc­ de vez en cuando se añadiera algún farol. En 1860, al edificio, trico, en nombre de la "Sociedad Albacetense de Electricidad", ya desaparecido, de la Sala Capitular que existía en la !plaza sociedad que se creó ante el notario señor López con poco más Mayor, llamado Lonja, y que desde 1817 desempeñaba el ser­ de cien acciones de a mil reales, y se otorgó escritura en 7 de vicio de sede de la Corporación local, se le instaló un reloj al diciembre de dicho año, inaugurándose el alumbrado con 254 que se le aplicaron las campanas del que existía en las antiguas focos elIde abril de 1888 después de pruebas satisfactorias, Casas Consistoriales de la Estrella. El citado reloj teníh una entre las que cabía destacar la iluminación del recinto ferial a esfera transparente e interiormente se iluminaba con dos ¡quin­ cargo de los señores Cases y Duch bajo la dirección técnica del qués que el cabo de serenos municipales tenía la obligación de ingeniero alemán señor Schilling en la feria del año 1887. alimentar, encender y apagar? Albacete fue la primera población de España en que se Ese mismo año se sustituía por petróleo el aceite que ,venía estableció este sistema de alumbrado general10. En 1889 sólo siendo la materia combustible utilizada para los faroles, p~ro al había cuatro ciudades alumbradas con sistema eléctrico: Gero­ año siguiente hubo que volver al aceite por falta de existehcias. na, Albacete, Pontevedra y Huesca. El contrato fue poco favo­ Sabemos que el precio en que el Ayuntamiento subastó la arroba rable para el Ayuntamiento, pues se abonaban 30.500 pesetas de aceite en 1863 fue de 63 reales8• En 1866 se empleó de nue­ anuales y fue necesario mejorarlo, primero entregando 18.000 vo el petróleo, adquiriendo 170 quinqués. En 1883 había u~ total pesetas y después pagando sólo el consumo a razón de 4 cén­ de 253, que gastaban a razón de 17 céntimos de peseta diarios. timos por la luz y hora. En 1865 se dio un nuevo impulso al servicio de alumprado Los faroles y hierros del alumbrado antiguo se quitaron en comprando 25 faroles, de los cuales dos tenían columna y se 1888, pero se volvieron a colocar los hierros con objeto de instalaron en el Altozano. tenerlos dispuestos y utilizar faroles de petróleo en caso de La Ley de Enjuiciamiento Criminal de 1872 ya les di a los inutilizarse el generador o la línea eléctrica. serenos el carácter de policía judicial, como auxiliares ~e los De los faroles antiguos retirados se remitieron 24 a Pozo jueces, al igual que lo hace con los Alcaldes, Tenientes de Cañada, 12 al El Salobral, 6 a Tinajeros e igual número a Arga-

7 MATEOS ARCÁNGEL, A.: Evocaciones y recuerdos albaceteños,!Diputación de Albacete, Albacete, 1983, Pág. 129. 8 A.H.P.A. Sección Municipios. Caja 543. 9 Archivo del Ayuntamiento de Albacete = (A.A.A.) Ordenanzas Municipales de Albacete. Copia de los artículos refereridos a aIUn'lbrado, Alcaldía Constitucional, Imprenta Sebastián Ruiz, Albacete, 1876, 14 PágS.j 10 MATEOS ARCÁNGEL, A.: Evocaciones y recuerdos albaceteños. ., Págs. 20 Y40.

I 110 masón y a Santa Ana, teniendo que correr con los gastos del Reglamento de 1841, corregido de nuevo, pero modificado en alumbrado los vecinos de estas pedanías. Después de haberse su base. Consta de 26 artículos únicamente y de él desaparecen prestado este servicio en turno con la luna en algunas ocasio­ los dedicados a la especialidad de farolero: mantenimiento, nes, a finales de siglo ya había mejorado algo, pues permanecía limpieza y compostura de los faroles, pues, como ya hemos toda la noche y sin excepción desde que la fuerza hidroeléctri­ dicho, no era necesario, ya que la iluminación era eléctrica. La ca se producía en Moranchel, aunque aún dejaba que desear por misión de éstos será, pues, la vigilancia nocturna. En el Archivo Histórico Provincial se encuentran las 11 la deficiente instalación de la red de distribución11. 12 El 30 de junio de 1890 se aprobó por el Ayuntamiento una cuartillas fechadas en 30 de junio de 1890 que declaraban reforma del servicio de Policía Urbana por la que se suprimía cesados a 11 serenos, algunos de los cuales fueron luego reco­ el cargo de "Serenos". Esta reforma fue llevada a cabo por el locadas en los nuevos cargos. Del contenido de estas cuartillas Teniente Alcalde Antonio Picaza. Dejaba el servicio de la se deduce, por tanto, la última plantilla oficial de serenos del noche en manos de los llamados "Vigilantes Nocturnos". La siglo XIX, que era la siguiente: llegada de la electricidad a la ciudad en 1888 y la creación de 1. Francisco López, sin destino. la llamada "Sociedad Albacetense de Electricidad" provocó 2. Juan Montesinos, nombrado Peón de Policía Urbana y que el alumbrado ya no fuera de gas y, en consencuencia, no Rural. dependiera en su mantenimiento y funcionamiento de los sere­ 3. Pedro Aparicio, nombrado Peón de Policía Urbana y Rural. nos, puesto que al ser eléctrico no necesitaba la limpieza dia­ 4. Benito Amoraga, nombrado Agente de Seguridad. ria ni la reposición de aceite o petróleo cada noche. La princi­ 5. Agustín Olmedilla Moreno, Peón de Policía Urbana y Rural. pal misión de este Cuerpo era suprimida, quedando relegado 6. Pedro Escribano Moraga, Peón de Policía Urbana y RuraL únicamente a la vigilancia nocturna. 7. Antonio Martín Monte, sin destino. La creación de los "Vigilantes Nocturnos" dio lugar, por 8. Julián Portero, nombrado Agente de Seguridad. tanto, a la desaparición del Cuerpo de Serenos con tal denomi­ 9. Ramón Ruiz, Cabo de la Escuadra, sin destino. nación. A partir del 1 de julio de 1890 no aparece en ninguna 10. Antonio Martínez, sin destino. hoja de nóminas el término de sereno, pero sí de vigilante noc­ 11. Ramón Pérez Malina, nombrado Agente de Seguridad. turno. No obstante, la confusión entre el anterior servicio y el En la documentación existente sobre los nombramientos y nuevo va a ser algo frecuente hasta la nueva reimplantación del ceses de serenos y de vigilantes nocturnos, no hay mención al término sereno en 1901. término de "serenos" como tal a partir del 1 de julio de 1890. El ciudadano en general reconocía como sereno a aquel El primer Reglamento de Serenos de 1841 servirá como encargado de la seguridad durante la noche, como de hecho se modelo a seguir durante todo el siglo XIX. El Reglamento de había producido en Albacete desde 1837 con la creación de 1892 13 para los serenos pertenece a un período en que se renue­ este Cuerpo. Incluso en algunos documentos del propio Ayun­ va también la Guardia Municipal, ya que ésta desde 1890 tamiento se hacía mención al término sereno cuando querían empieza a reestructurarse y organizarse, terminando esta fase referirse a un vigilante nocturno. Prueba de ello es que dispo­ con la creación en 1893 de un reglamento de la misma. nemos de un Reglamento denominado de Serenos, fechado en Desde 1837 en que aparecía el nombramiento o la acepta­ 1892 y que es en realidad un extracto de las Ordenanzas Muni­ ción de los cuatro serenos hasta 1852 no hemos encontrado cipales. Se titulaba exactamente: "Ordenanzas Municipales ninguno en la documentación consultada14• Sin embargo, sí Obligatorias que deben tener presentes los serenos para el aparecen entre los años 1852 y 1890. Con los nombramientos, buen desempeño de su cargo". presupuestos, reglamentos y algún dato procedente de otras Al igual que sucedió con el Reglamento de 1876, el de fuentes, hemos realizado esta tabla de la plantilla de los sere­ 1892 es una copia, desde el artículo 15° hasta el 48°, del primer nos desde 1825 hasta 1890.

TABLA l. PLANTILLA DE SERENOS, 1825-1890

1825 2 Serenos (solicitud) 1826 1 Sereno (al menos) 1837 4 Serenos-Faroleros 1841 4 Serenos-Faroleros 1852-1863 5 Serenos-Faroleros 1 Cabo de Serenos-Faroler. 1863-1865 6 Serenos-Faroleros 1 Cabo de Serenos-Faroler. 1865-1866 7 Serenos-Faroleros 1 Cabo de Serenos-Faroler. 1866-1877 8 Serenos-Faroleros 1 Cabo de Serenos-Faroler., 1883-1890 10 Serenos-Faroleros 1 Cabo de Serenos-Faroler.

FUENTE: Elaboración propia a partir de la documentación consultada en el A.H.P.A. Sección Municipios, Albacete.

11 SÁNCHEZ TORRES, E: Apuntes para la Historia de Albacete..., Págs. 509 y Sigs. 12 A.H.P.A. Sección Municipios. Caja 513. 13 A.A.A. Ordenanzas Municipales. Obligaciones que deben tener presentes l~s serenos para el buen desempeño de su cargo. Imprenta de Luciano Ruiz, Albacete, 14 Págs. 111

Del sueldo de los serenos también podríamos concretar los vecinos le querían dar los domingos a la salida de Misa. En algunos años, los comprendidos entre 1841 y 1890, pues sabe­ el caso de los cuatro serenos de 1837 no tenemos datos para mos que el sereno que fue nombrado en 1826 lo hacía a cam­ saber sus honorarios. bio de una habitación con cargo al Ayuntamiento y de lo que

TABLA 11. EVOLUCIÓN DE LOS SUELDOS DE LOS SERENOS, 1841-1890

AÑos SERENOS-FAROLEROS CABOS DE SERENOS 1841 5 real~s vellón al día, más 4 reales vellón al mes por limpieza

1852-1863 5 reales vellón al día, más 4 6 reales vellón al día, más 4 reales 'vellón al mes por reales vellón al mes por limpieZa. limpieza.

1863 6 reales vellón al día, más 4 7 reales vellón al día, más 4 reales vellón al mes por reales vellón al mes por limpie:za. limpieza.

1864-1865 7 reales vellón al día, más 4 8 reales vellón al día, más 4· reales vellón al mes por reales vellón al mes por limpieza. limpieza.

1866-1868 700 milésimas de escudo al 800 milésimas de escudo al día y ~OO milésimas de día y 400 milésimas de escudo al mes por limpieza. escudo al mes por limpieza. 1868-1871 7 real~s vellón al día, más 4 8 reales vellón al día, más 4 reales vellón al mes por reales vellón al mes por limpieZa limpieza.

1871-1875 1,75 p~setas al día, más 1 2 pesetas al día. peseta,al mes por limpieza. 1875-1877 1,75 pesetas al día, más 1 2 pesetas al día, más 1 peseta:al mes por limpieza. peseta al mes por limpieza.

1877-1883 1,75 pesetas al día. 2 pesetas al día. 1883-1890 2 peseras al día. 2,24 pesetas al día.

FUENTE: Elaboración propia a partir de la documentación consultada en el A.H.P.A. Sección Municipios, Albacete.

LA ACTIVIDAD ARTÍSTICO-,MUSICAL DE ALBACETE A FINALES DEL SIGLO XIX DESDE "EL DIARIO DE ALBACETE" ~ (PERIODICOI INDEPENDIENTE)

M3 Luz LÁZARO SALAS OIga SÁNCHEZ HUEDO

INTRODUCCIÓN

Creemos imprescindible, como paso previo a la proffIndi­ alta burguesía terrateniente y la escasa nobleza, muy influen­ zación en la realidad artístico-musical del Albacete de finales ciadas por modas y gustos de la corte. del siglo XIXl, hacer un breve y variado recorrido por diversos La infraestructura de la ciudad de Albacete mejora para­ aspectos de la sociedad de la época, que nos hará más fácil este lelamente al aumento de población, y así desde 1887 se abor­ acercamiento a las actividades que en aquel entonces se lleva­ dan numerosas reformas, aunque no todas llegan a buen fin. ban a cabo, y qué lugar ocupaban en el discurrir cotidiano del Entre las que sí se llevaron a cabo destacamos las siguientes: ciudadano albaceteño finisecular. adoquinado y embaldosado de diversas calles del centro, Si comenzamos haciendo un desglose de la estructura alcantarillado, el telnplete del círculo ferial, edificación del social del Albacete del período que tratamos, veremos queapa­ nuevo cementerio, el servicio público de alumbrado (que se recen tres ¡:rupos sociales claramente diferenciados: l.-Una inauguró elide Abril de 1888) y el agua corriente (servicio del clase social alta, con predominio de los propietarios agrícolas que se careció hasta 1908, año en que se empezaron a instalar que ocupaban la zonas más notables de la ciudad (que cdnsti­ las canalizaciones). Pero de entre todas ellas cabe destacar la tuían una minoría). 2.-Una clase media formada por profesio­ que hace referencia a la inauguración del Teatro Circo el 7 de nales liberales, el clero secular, comerciantes y algunos em­ Septiembre de 1887, coincidiendo con la fecha de apertura de pleados de la administración (se da el hecho de que gran parte la Feria de ese año (y tantos otros). de esta clase social tenía sus orígenes en ciudades y municipios Junto a este teatro citaremos, unas líneas más abajo, y con foráneos, sobre todo de Levante, por lo que posteriormente más minuciosidad los otros centros de recreo con los que con­ esta clase social no se identificó con las raíces albacetenses taba nuestro Albacete de finales de siglo. tradicionales). 3.-Por último, las clases populares, que presen­ También es un punto importante el que hace referencia a los taban un índice de analfabetismo del 85% en'toda la provibcia. acontecimientos socioeconómicos de esta época acaecidos fue­ Las construcciones respondían, en general, a una pobla­ ra de España, puesto que de una manera o de otra, encuentran ción rural grande. Señalaremos algunos datos sobre el número eco en el resto del panorama nacional y local. De esta manera de habitantes: reseñamos dos hechos que serán de gran importancia a nivel Año 1897 21.637 habitantes mundial, que tendrán frecuente presencia en "El Diario de Alba­ Año 1900 21.512 cete" y que impregnaran en mayor o menor medida todos los Año 1910 24.805 ámbitos de la vida cotidiana. Quedan realzados estos dos hechos A partir de aquí se dará un crecimiento demográfico conti­ históricos concretos en el presente trabajo ya que adquieren un nuado hasta 1950, que será notable sobre todo en la capital. significado especial en el mismo (como más adelante veremos): Es reseñable la escasa existencia de edificaciones impor­ 1.- La Guerra de Cuba, en 1898, y momentos álgidos de tantes: esta contienda ocuparon numerosas planas y columnas de este El Ayuntamiento, que se trasladó en el año 1879 a la Plaza y otros diarios de la ciudad. Así encontramos referencias al del General Espartero (hoy del Altozano), y que se reformó en Desastre del Cavite (1 de Mayo), el Desastre de Santiago de 1902; la Audiencia, que cerca de 1881 estuvo a punto de ser Cuba (3 de Julio), el Tratado de París, que supuso el fin de la trasladada a Murcia ante su estado ruinoso, gracias a las apor­ Guerra Hispano-americana (10 de diciembre, perdiéndose las taciones económicas del Gobierno Central, la Diputación"y el colonias en América), etc. Ayuntamiento (destinadas a la restauración del edificio y a 2.- La Exposición de París de 1900, por la que desfilaron mejoras y amueblamiento del mismo) permaneció en esta más de cincuenta millones de visitantes, con un deliberado población; el Palacio de la Diputación, que tiene su origen y carácter de muestra internacional (al igual que las celebradas asentamiento en la década de los ochenta; la Feria, para 1883 con anterioridad en éste y otros lugares del mundo a partir de estaba terminado este singular edificio; la Parroquia de San 1851), que encontró difusión en periódicos y revistas de la Juan Bautista (hoy Catedral) que hacia 1515 comenzó. sus época en los que sobresalieron en gran medida noticias refe­ obras, quedando inconclusa y edificada hasta su mitad en rentes a la electricidad y al cinematógrafo. 1597, con numerosos intentos de terminación que no viero:n su Pese a que la redacción de estas páginas viene iluminada en final hasta nuestro siglo, en 1921 (año en que se inició la actual su gran lnayoría por la información que se desprende de las fachada principal). planas de "El Diario de Albacete" no está de más hacer una En cuanto a los materiales utilizados señalaremos la pie­ breve referencia a los diversos periódicos y diarios de esta dra y la cal, utilizados en los cimientos de mampostería, I y el ciudad que conviven en estos años de final y principio de siglo. tapial para los alzados. Contrastaban las viviendas populares En primer lugar hablaremos de "El Diario de Albace­ (adaptadas a las necesidades más perentorias), con las qe la ¡g"(Periódico Independiente), cuya existencia abarca desde el

I I Hemos de aclarar que al referimos a los últimos años del siglo XIX,no se hace mención al año 1899 por no hallarse recogidos en catálogo diarios de ese año concreto en el Archivo Histórico Provincial (lugar donde hemos realizado la presente investigación). Entendendemos que la actividad artístico-musical en ese

I año no difería en exceso de los imnediatamente anterior y posterior; de hecho numerosos datos así lo corroboran.

I 114 año 1881 hasta 1939. Una serie de detalles sobre las diferentes y la tercera plana, junto con secciones fijas como HMesa Revuelta" que incluye: registro civil, Santos del día, cultos y etapas por las que pasó: Empezó a publicarse en calidad de "'periódico indepen- espectáculos (si los había). , diente", el 1 de diciembre de 1881, ocupándose de asunto refe­ Pasando pues a la tercera plana, podemos ver en H Ultilna rentes a "'literatura, política, noticias y anuncios". El cargo de Hora" otra constante a reseñar en este diario. Por lo general director-propietario se encontraba sobre el impresor Luciano refleja noticias breves que llegan a última hora a la redacción Ruiz López, que vino a ser relevado por su hijo José Ruiz del sobre cuestiones en el candelero, como política, guerra, etc., de Castillo llegado su fallecimiento. carácter nacional e internacional. Vemos ejemplos de ello en el Fue vendido en 1906 por los hijos de D. Luciano a D. Caso Dreyfus, la Guerra de Cuba, el Papa León XIII, políticos Tomás Serna González, que lo refundió con "El Noticiero" en boga (Sagasta, Bermúdez, Becerra, Castelar, etc.). (fundado en 1905), pasando a erigirse en la empresa periodís• Vemos también anuncios y crónicas de bailes, donde hace tica de más importancia en Albacete. mención a las personas que asistieron, los trajes que lucían, la Se mantuvo hasta el año 1939. repostería que se presentó, y otros temas similares. Son cróni• HEI Defensor de Albacete" comparte muchos años de exis­ cas sociales acerca de tales acontecimientos, que en caso de tencia con HEI Diario de Albacete", aunque su nacimiento data tener carácter benéfico, vienen acompañadas en días posterio­ del 1896 y su vida se prolonga hasta 1939. res por la relación de la suma económica recogida. Otros periódicos y diarios a nombrar en este punto son: "El Los asuntos que se tratan son así muy variados~ no hemos Eco de Albacete", "El Heraldo de Albacete", "La Unión de olvidar a grandes figuras del toreo ("Mancheguito", "Minu­ Democrática de Albacete", "La Provincia", "'La Revista de to", etc.), artistas y otros muchos. Albacete", "La Porra", "El Noticiero", "El Reflector", "El Tre­ La cuarta plana, salvo rara excepción, se dedicaba exclusi­ ce", "Albacete", '"Albacete en Fiestas", ""Hoy", etc. vamente a la publicidad. Son típicos los remedios para la tos El carácter de los diversos asuntos que tratan estos periódi• (pastillas del Dr. Andreu), purgantes, antidispépsicos, etc. cos abarca una gama muy amplia y variada: información gene­ También se incluye en esta última página, y durante largas ral, política, temas oficiales, literarios, satíricos y humorísti• temporadas, novelas y folletines por entregas, en el fragmento cos, de espectáculos, comerciales, etc. inferior de la segunda página, por el anverso y el reverso. Como dice D. Francisco Fuster Ruiz en el libro "Albacete Como dato a añadir a los temas tratados en este periódi• en su Historia" en el capítulo dedicado a la prensa: co, podríamos hablar de las publicaciones a las que hace men­

H ••• Una población como Albacete, que a lo largo de los últimos 150 anos ción en sus columnas de manera frecuente. De esta manera, de ha producido más de trescientos títulos de periódicos, no puede ser con­ carácter nacional, encontramos extensos artículos, y no sim­ siderada como una ciudad sin cultura, muerta y sin esp{ritu. La prueba de ples referencias a revistas y periódicos como "La Revista una brillante historia periodística es la prueba irrefutable de que es y ha Cómica", ""Madrid Moderno", '"Blanco y Negro", "El País", sido una ciudad viva, progresiva, dinámica, preocupada en todo momen­ "La vida Galante", "Madrid Cómico", "Instantáneas", "Misce­ to por el conocimiento de sí misma para así establecer las bases que la lánea", '"Nuevo Mundo", "Album Salón", etc. De carácter condujeron a su máximo desarrollo, tanto material como espirituaL.". internacional no faltan numerosas referencias a "Le Matin". Sirvan estas líneas para reconocer la importancia de este "Le fígaro", y otros muchos. medio informativo como principal arma escrita recopiladora de Se tratan también temas sociales de importancia; por ejem­ la historia, en una época en que de pocos medios de comuni­ plo, 1898 es catalogado como "Año del Desastre". Así, se cación más se disponían. tomaron diversas medidas tendentes a reducir la tensión social Centrándonos en el análisis del periódico en el cual hemos facilitando pan barato a la población. Numerosísimas reseñas basado nuestra investigación, pasamos ahora a hacer una des­ anunciando las diversas rebajas en su precio, se pueden encon­ cripción de "El Diario de Albacete". trar en cada una de las publicaciones de este año. Es una publicación diaria (salvo domingos), que mantiene Un tema que requiere una especial atención es el del ves­ dentro de unos márgenes, una estructura básica. Cuenta con tuario y las modas que en este sentido imperaban en la época. dos páginas (cuatro planas en total). Los lunes inserta en la ter­ Por el tema que nos ocupa, nos referiremos exclusivamente a cera plana una sección denominada "Los Lunes de El Diario", 10 tocante al teatro y los bailes. (Transparencia n°1) página literaria en la que se incluyen sonetos, cantares, breves En una crónica de moda enviada por la "Agencia Europea", cuentos, etc., de muy variadas firmas. nos llega noticia de un traje de baile que fue presentado a con­ En la primera plana es frecuente encontrar anuncios breves curso en la Exposición Universal de París de 1900: (venta de casas y enseres, dentistas, alimentación, etc.) que HCrónica de la !noda.. preceden a los artículos propiamente dichos. Encontramos en Servicio especial de la "Agencia Europea". esta primera cara apuntes sobre aspectos de lo que acontece en Una de las grandes atracciones de la actual Exposición de París, la nación (que por lo general hacen alusión a Madrid, Sevilla y es sin duda alguna, para las seiioras, el salón destinado a la Exposición otras capitales importantes) y fuera de ella (como París, Was­ de las grandes toilettes de baile y de recepción(... ). hington, etc.). En estos artículos se tratan temas de lo más A dicho salón los más afamados modistos de Parfs, han mandado sus variado y con asiduidad se refieren a aspectos de la vida artís• más ricas y últinzas creaciones, para disputar más que el premio del tica y teatral a nivel nacional (sobre todo de Madrid y sus tea­ jurado, las miradas y la atención de los visitantes. tros) e internacional. El traje que hasta la presente llama Inás podelvsamente la atención En la segunda plana podemos hallar la sección HNoticias" es el siguiente: que normalmente recoge aquellos sucesos que atañen a los TRAJE DE BAILE lugares y personajes más cercanos a la localidad de Albacete: Es de raso blanco con transparente de tul rosa con aplicaciones viajes, regresos, fallecimientos, actos en los centros de recreo de tafetán blanco formando aplicaciones. Los adornos complementarios y críticas sobre los mismos, mercado, observatorio metereoló• son guirnaldas de rosas pálidas y gico, juntas, sesiones, enlaces, incorporación a filas, audien­ blancas, que circundan los hombros, el escote y bajan en cascada cias, funciones religiosas, titulaciones de maestros, plazas hasta el borde del vestido. vacantes, opositores, etc. La falda es hechura princesa y su borde va guarnecido con un rus de A menudo encontramos estas HNoticias" entre la segunda tafetán blanco, formando a trechos rosetones. 115

El forro interior de la falda es de seda color rosa pálido. eran diversos aunque no muy numerosos. La sociedad del Formando pendant, con este modelo (... ) ". momento se reconfortaba en una vida de costumbres hogare­ Era habitual que se introdujera algún artículo mostrando en ñas y tradicionales, en que las reuniones y veladas familiares dibujo algún modelo exclusivo para las lectoras; habitualmen­ constituían la predominante ocupación invernal, mientras que te éstos procedían de los grandes almacenes de ciudades en la época estival era frecuente acudir a las sesiones musica­ importantes del país (como por ejemplo, muy frecuentemente les con que la Banda Municipal amenizaba el paseo del Istmo de los Grandes Almacenes EL SIGLO, de Barcelona ). Veamos y el de la Cuba. a continuación un ejemplo, fechado el 18 de Enero de 1898: Pero no por ello faltaban asistentes a los diversos bailes "TRATE PARA TEATRO. reuniones sociales, veladas musico-literarias, conciertos: Cuerpo ajustado y adornado con galón de acero y oro; canesú de guipur, representaciones teatrales, zarzuelas, etc. que tenían lugar a lo alrededor del cual lleva lazadas de lo mismo y al borde de éstas plisé de largo del año en estos centros, y que variaban en número fue­ gasa. Mangas de glisé azul pálido tornasol, adornadas con galón y plisé se o no temporada. de gasa. Falda con cola, y alrededor de la misma guipur y galón; el Por lo excesivo que sería extendernos en este punto, nos delantero de esta falda va cubierto de guipur y lazadas de cinta iguales a ceñiremos a enumerar e indicar los datos más significativos de la del cuello ". los centros y teatros que abrían sus puertas en nuestro Albace­ En este mismo año se aborda con frecuencia la "problemá­ te durante los años que nos ocupan. En cuanto a los primeros tica" suscitada por los sombreros de las señoras en el teat,ro (a citaremos: nivel no sólo local, sino también nacional). Sobre este tema y El "Casino Primitivo", fundado el 18 de Marzo de 1849 en la manera más adecuada de ir vestido a los eventos teatrales auté~tic~ la calle Pertusa (hoy Rosario) n° 29, posteriormente trasladado registramos durante un largo período de tiempo una en 1854 a la calle Mayor n° 42. En el año 1900 fue derruido y lucha y persecución en torno a los sombreros que las d~mas reconstruido nuevamente. Posteriormente, y en distintas oca­ lucían en la celebración de determinados espectáculos. Si :bien siones, sufrió obras de ampliación en 1914 y 1921 (año este podían ser lnuy elegantes, constituían un auténtico suplicio último en que se adquiere un solar adyacente), para aumentar para la desafortunada persona que se situaba detrás. el espacio, ya que era insuficiente para el número de socios con No en vano intenta "El Diario de Albacete" extender i una que contaba esta sociedad, y para darle acceso principal por la moda más cómoda a través de sus diversos artículos (como calle Tesifonte Gallego. éste que encontramos el Sábado 15 de Enero de 1898): Este casino albergaba socios de nivel aristocrático y elitis­ " ...A míse m,e ocurre que éstas últimas debían disminuir la altura qe sus ta, del mundo de la autoridad, del funcionariado, etc. El núme­ sombreros, y conste que me pesa muy mucho tratar este asunto agotddísi• ro de socios no era elevado, y esto le confirió una unidad inter­ mo ya en toda España. Pero es preciso hacerlo porque, por la parte que na bastante fuerte. me toca es irritante eso de pagar butaca para ver lo que ocurre en el ~sce­ Sin embargo, unos cuantos disidentes de este casino se nario y contemplar sólo los pájaros, flores y frutas de la seJ10rita que se constituyeron con el nombre de Círculo "La Piña" por los años nos pone delante. de 1878 a 1879, ubicado en la calle del Rosario n° 21 duplica­ En esta provincia, en el mismo Hellín, hay costumbre de ir las sei1or~s sin do, que pasó posteriormente a la calle Mayor n° 43. Aunque en nada a la cabeza a las butacas del teatro. principio la intención de esta sociedad fue hacer sombra al En ningún sitio me gusta el sombrero de mujer. En el teatro me desespera". "Primitivo" no lo consiguió, y a los pocos años quedó conver­ A lo largo del año distintas notas van reflejando el cambio tido en café público-casa de juego. que en este sentido se iba produciendo. Observamos cómo las También de gran representatividad fue el "Casino Artísti• señoras van adecuando su vestir, haciéndolo más funcional co" que se inauguró el 15 de Marzo de 1861 en la calle Sala­ para ellas y los demás asistentes: (Viernes 11 de Febrero de Inanca nO 24 (en una casa del marqués de Montartal) desde 1898) donde se traslada de manera definitiva el 25 de.Diciembre de "MODAS-ARTES-SPORT. 1865 a la calle Concepción, lugar que ocupó hasta su desapa­ (... )En los sombreros se observa que son bastante más bajos de copa y no rición en Octubre de 1936. Además de las actividades realiza­ llevan aquellos penachos que tanto maldecían los caballeros en el teatro. das en él como casino, es destacable este centro recreativo y Ahora ya hay muchas que van al teatro con la cabeza bien pein,ada, social por dos razones: (Transp. n02). envuelta en un velo de blonda o una nube de finísimo cachimir, y al ¡sen­ En primer lugar, es importante señalar que en su planta baja tarse en la butaca, quedan con la cabeza descubierta, y tan eleganfes y encontró refugio el "Ateneo Albacetense", sociedad en la que, tan bonitas." como dice D. Ángel Ñacle García en su libro "El Ateneo Alba­ Añadimos un último ejemplo sobre este tema, porque ade­ cetense, 1880-1993": más permite destacar la influencia que las actrices del momen­ "...junto a algunos bailes de máscaras y fiestas sociales organizadas por to tenían en las tendencias, a la hora del vestir: (Miércoles 9 de distintos motivos (principalmente en Feria y Navidad) hay sobre todo un Marzo de 1898) projimdo interés cultural y formativo en todos los órdenes: literario, artís• HA LAS ELEGANTES. tico, científico, histórico, político y socia!...". (... )Los sombreros han entrado en el período de descenso, y los de ',esta Esta sociedad pasa por diversa fases: la primera de ellas se primavera no se adornarán con aquellas exageradas plumas que quitaban extiende de 1880 a 1886 (hasta donde se tiene noticia de ella); la vista del espectador de los teatros (... ) Las actrices en los teatros,' son la segunda abarca los años 1907 a 1936; y una tercera com­ las que presentan las confecciones de más al gusto (... ) María GuelTero prende el tramo de 1976 a la actualidad. en el drama "La Duda", María Tubau en "La Dama de las C4me- Hacemos referencia a esta sociedad por su importante labor

lias"(... )". I sociocultural en la época, aunque el lapso temporal por el que En el discurrir del año vemos cómo disminuyen la afluen- discurre esta investigación coincide con una época de inexis­ cia de artículos a este respecto, y al final de éste encontramos tencia informativa sobre la misma. alguna reseña que refleja cómo el sombrero gradualmente de- En segundo lugar, otro hecho que pone de relieve el "Casi­ saparece del patio de butacas. I no Artístico" como centro sociocultural importante de la épo­ Pasando ahora al capítulo referente a los centros de recreo ca, es que en uno de sus salones de baile, en concreto en el (Teatros y Casinos) de los que se podía disfrutar en el Alba­ Salón Japonés (Transp. nO]), funcionó durante los años 1866 a cete de finales de siglo XIX y principios del XX, diremos que 1871 el "Teatro Liceo" (cuyo aforo era de 422 personas), don-

I 116

370 localidades, tan impropio del arte de Lope y Calderón con10 de la de tuvieron lugar las representaciones de las mejores obras de importancia de una ciudad que es residencia de los Gobiernos Militar y nuestro teatro clásico, y donde los adoradores del género líri• Civil y una de las primeras Audiencias territoriales de EspaFía...". co, los melómanos y otros devotos del arte, pudieron recrearse Da a continuación reseña breve sobre algunos de los pro­ en sus numerosas veladas. yectos frustrados a los que hemos hecho mención, y enumera Una vez se disolvió el "Liceo" tuvieron lugar en el salón algunas de las características estructurales del edificio referen­ que éste ocupó algunas representaciones dramáticas, que fue­ tes a los materiales empleados en su construcción y el estilo de ron languideciendo hasta extinguirse. En el año de 1880 (el 20 la fachada (jónico) y el interior (árabe) (Transp. nOS). Pero qui­ de Junio), se inauguró con la compañía de Ricardo Calvo en el zá sí es interesante detenernos ligeramente en el comentario escenario, un teatro que en principio fue de verano, pero que luego sufrió una serie de mejoras que lo hicieron apto para que este ilustre cronista hace del recinto en cuanto a su calidad "todo tiempo": el "Teatro Vidal", sito en la calle del Bosque acústica: (hoy Ricardo Castro) que se bautizó con el nombre del promo­ H ••• Pertenece, pues, por el número de sus localidades (1800) a los teatros tor de su construcción , Godofredo Vidal, y que pese a sus de primer orden, y si bien el eco de la voz de los artistas puede resultar malas condiciones (carecía de retretes, entre otras cosas) y a en las alturas algtín tanto apagado, a pesar de lo avanzado del escenario, ser más bien de dimensiones reducidas (una sola planta) hizo verdad es que la techumbre de la rotonda carece de tornavoz. Lo que sí es un encomiable papel como único centro donde se desarrolló el imperdonable (suum cuique) es el defecto (mejor diríamos exceso) de las género teatral e incluso zarzuelístico, hasta el año 1889, en que corrientes de aire colado que, a la continua se perciben, particularmente cerró sus puertas al público. en los asientos de butaca...". Una serie no breve de proyectos de construcción de un ver- De esta manera deja retrato D. Joaquín Roa de este teatro, dadero templo de Talía tuvieron lugar en la década de 1876 a que durante muchos años y de manera continuada ha sido cuna 1886, aunque no pasaron de ser trazos en papel (Transp. n04). y refugio de numerosísimas representaciones y veladas que los Hasta que es en el año de 1887 cuando comienza la construc­ albaceteños pudieron disfrutar hasta su cierre. ción del "Teatro Circo", verdadero centro neurálgico de la acti­ Podríamos extendemos, llegados a este punto, en otros cen­ vidad zarzuelística y teatral de Albacete. Recordemos ahora en tros y sociedades de los cuales tenemos constancia de su exis­ palabras de D. Joaquín Roa de Erostarbe, en su "Crónica de la tencia en la época que nos ocupa, si bien al no encontrar una Provincia de Albacete", una serie de detalles sobre el "Teatro referencia clara del desarrollo de actividades artístico-ITIusica• Circo" y la necesidad de que un edificio de estas característi• les en los mismos entre las columnas del periódico del que se cas hiciese aparición en esta ciudad: nutre este trabajo, quedan apartados de nuestra investigación

H ••• La capital de Albacete contaba antes de ahora con un mal teatro de por rebasar los límites marcados en este estudio.

TEATRO CIRCO

Como en el primer epígrafe de este trabajo que desarro­ Agosto y Octubre. Este hecho puede quedar explicado de la llamos, existían en la capital de Albacete varios centros don­ siguiente manera: de se desarrollaban diversas actividades ligadas al ámbito En el caso de Semana Santa, por tratarse de una época de artístico-musical que estamos tratando, sobre todo en su ver­ recogimiento y oración, en la que como ya hemos visto en tiente teatral y zarzuelística; de hecho se recogen documen­ apartados anteriores, las manifestaciones musicales predo­ tos que atestiguan la actividad escénica en esta ciudad desde minantes son aquellas que se llevan a cabo con motivo de el siglo XVI. la celebración de la Pasión y Muerte de Cristo. A pesar de las representaciones llevadas a cabo en teatros En Agosto, las preferencias del público se desplazaban de como el del Hospital de San Julián, el Liceo, el Vidal, y otros, los teatros a otros lugares al aire libre, como los paseos (con­ sólo haremos en este punto referencia a las llevadas a cabo en cretamente el del Istmo o el de la Cuba) algo que también el Teatro Circo, puesto que desde su inauguración en 1887, se hemos comentado previamente. A este respecto hemos erigió como el coliseo más destacado del panorama albacete­ encontrado prueba fehaciente en alguna columna de "El Dia­ ño. Es éste el centro donde se daban cita las compañías teatra­ rio de Albacete", comentando cómo algupa compañía llega­ les más importantes que asistían en la capital. da a esta ciudad en los meses estivales había perdido dinero, Pero antes de centrar nuestra atención en las compañías y dado que el público albaceteño prefería marchar a los citados artistas que nos visitaban, debemos señalar en primer lugar las paseos a tomar el fresco, antes que asistir al teatro. diferentes temporadas que se dan a lo largo del año. En cuanto a Octubre, es fácil entender que hubiera un pe­ Según los datos que nos aporta "El Diario de Albacete" de ríodo de descanso tras un mes cargado de actos culturales estos años, podemos destacar ciertos períodos en los que de diversa índole, no sólo teatral y de otros muchos exce­ aumenta el número de representaciones~ así señalamos: sos (económicos, etc). Una "temporada de invierno", en la que encontramos En un segundo punto podemos abordar el tema referente a actuaciones durante los meses de Enero y Febrero. los fléneros que más frecuentemente tomaban las tablas escé­ Una "temporada de carnaval", que variaba con el calenda­ nicas de este insigne coliseo. Analizando las diferentes com­ rio litúrgico (Semana Santa), entre los meses de Febrero, Mar­ pañías y las muchas obras que se representaban, encontramos zo y Abril. que el género más aplaudido es sin duda el de la zarzuela de Una "temporada de primavera", durante los meses de género chico. Mayo, Junio y Julio. En numerosos casos estas compañías de género chico Una "temporada de Feria", coincidiendo con la celebración incluían en su repertorio determinados números sueltos perte­ de la misma, en Septiembre. necientes a zarzuelas de género grande o a óperas. No obstan­ Una "temporada de otoño", con actuaciones en el mes de te son pocas las compañías que se autodenominan en estos tér­ Noviembre y Diciembre. minos e incluso éstas representaban en la mayoría de los casos Podemos observar que hay vacíos entre una y otra tempo­ zarzuelas y otros géneros menores, puesto que ésto es lo que el rada en este teatro, sobre todo en las fechas de Semana Santa, público demandaba. 117

, ~stos ot~os géneros menores tomaban la forma de juguetes comlcos, saInetes, etc. También encontramos algunos números En relación a este conflicto nos parece interesante resaltar por su asiduidad, la suspensión de numerosas funciones a l~ carentes ?e música, como monólogos, recitados, diálogos, declamacIones, proverbios y otros. : largo del año 1898, por lo general relacionada con el acontecer que el mundo vivía en esos momentos, sobre todo en fechas Cerrado el epígrafe referente a las temporadas y géneros, c?ncretas en las que se había producido alguna tragedia espe­ hemos de hacer una distinción acerca de los tipos de funcio­ cIalm~nte ~ relevante. Pongamos como ejemplo el fragmento de nes que se.l!evaban cabo en los escenarios albaceteños (y por ~rtlculo e~trapolaclon, un tomado de "El Diario de Albacete", fechado el 7 de espanoles). Esta diferenciación se refiere prin­ Juho de este año: cIpalmente al/los destinatario/s de la recaudación que I en la "Teatro Circo. función se hiciera con la entrada. De esta manera encontramos los siguientes: La empresa de nuestro coliseo, asociándose al dolor que embarga a toda Funcio~es bené~ca~: la nación espa/lola, tuvo ayer el excelente acuerdo de suspender la fun­ aquellas en las que los fondos recogi­ ción anunciada para anoche ". dos se destInan a dIversas organizaciones de carácter humani­ Hace referencia a la función del 6 de Julio. Hemos de supo­ tario. Ejemplo de ellas son las funciones a beneficio de la Tien­ ner la relación existente entre este artículo y el Desastre de Des~mpa­ da-asilo, a beneficio de las Hermanitas de Ancianos Santiago de Cuba del día 3 del mismo mes. rados, a beneficio de la Cruz Roja, etc. Debemos señalar que también localizamos abundantes zarzu~Iísti­ Funciones a beneficio de la Compañía teatral o noticias sobre las funciones patrióticas que se daban en algu­ ca al completo, o bien a beneficio de uno de los artista en par­ nos pueblos de la provincia (La Roda, Almansa, La Gineta, ticular. Este tipo era bastante frecuente debido a la prdcaria etc.) indicando su calidad benéfica o patriótica. En relación a situación económica en la que la mayoría de los artistas se las obras representadas y las compañías que las ponen en esce­ encontraban. De este segundo supuesto reproducimos un Ifrag_ na, no aportan datos nuevos a los que ya hemos indicado acer­ mento hallado en el diario, fechado el 29 de Septiembre de ca de las de Albacete capital; por tanto, no nos detendremos en 1900: este asunto. "Teatro Circo. Podemos añadir, en relación a la forma de estructurar las A beneficio del director de orquesta D. José Cesáreo López, agobiado por funciones, que en general se daban unas tres o cuatro repre­ la pérdida de su hija y su difícil situación, se celebrará maíiana en 'nues­ sentaciones por función, comenzando éstas en horario que tro coliseo una escogida función en la que tomarán parte distinguid¿s afi­ oscilaba entre las 8 y las 9 de la tarde (dependiendo de la épo­ cionados de esta capita!...". ca del año en que se llevasen a cabo). Cada representación Otro fragmento que estimamos conveniente incluir es el estaba prevista para que se desarrollase en una hora completa. que a continuación lTIOstramos, con fecha del Viernes 3b de Veamos un ejemplo de esto en un anuncio de una función para Noviembre de 1900, ya que es fiel reflejo del ambiente en el 28 de Diciembre de 1898: que discurrían estas funciones de beneficio: "Teatro-Circo: función para hoy: "Teatro Circo. A las 8 "La Duda". Beneficio de Avelina López-Píriz. A las 9 "Curro Vargas". Revistió la función de anoche caracteres de verdadera solemnidad. (... ) A las /0 "La Muralla". (... ) Nuestro coliseo estaba anoche brillantísimo, ocupado por un públiclo tan A las JJ "Gol1zalo de córdoba". selecto como numeroso, que se dio cita en el teatro para aplaudir con ver­ En los intermedios grandes conciertos por el cuarteto Turia ". dadero entusiasmo a su artista predilecta, que celebraba su beneficio.(... ) Desde el periódico se lanzan diversas críticas hacia la exce­ La beneficiada fue objeto de innumerables felicitaciones y recibiD los siva duración de las funciones, y se pedía encarecidamente ali­ siguientes obsequios, entre otros cuyos donantes fueron incógnitos: gerar los entreactos para que no se prolongasen en demasía las Varios dependientes del comercio, una caja de bonitos pa/luelos, UIU~ pol­ representaciones. vera y algo más positivo dentro de ésta. En cuanto al precio de las butacas, variaba según su ubica­ Pepe Bastidor, una preciosa caja de dulces. ción en el recinto, pero podemos decir que el precio máximo D. Luis García Celada, una valiosa pulsera de oro. por función llegaba a la peseta, y el mínimo a los 50 céntimos D. Germán León y sellora una caja de caprichosos pal2uelos. (aproximadamente). También se observa un decrecimiento del D. Juan Pérez Romero y familia, una elegante rinconera japonesa con importe de la entrada según se iba avanzando dentro de la mis­ espejo. ma temporada. D. Domingo Díaz Jiménez, un palluelo de seda y encaje con dos inspira­ A lo largo de estos años encontramos en "El Diario de das quintillas. Albacete" información bastante completa de aquellas juntas, D. Luciano A. Ruíz, un programa del beneficio y varios consejos, decisiones, etc., que se realizan en torno a la números del diario de ayer2 lujosamente impresos en raso. empresa del Teatro Circo: pliegos de condiciones (ventajosos D. Fernando Franco Fernández, dos ramos de flores y un taljetón c~n un para la sociedad y el público); arrendamiento del mismo y soneto dedicado a la bella tiple. porcentajes que ha de satisfacer la compañía que actuara, Además palomas, versos y el delirio de aplausos. según de qué clase fuera ésta (el 4, 5 ó 6%), subastas para su Creo que la se/lora López-Píriz estará satisfecha de su beneficio y icon- cesión en la temporada de Feria, y las condiciones en cada vencida de que ninguna otra artista ha alcanzado aquí los triunfosI que caso (el 8% en zarzuela grande u ópera, 9% en zarzuela del ella..." género chico, 10% en declamación); elección de los miem­ Funciones patrióticas: las bautizadas con este nombre Ison bros de la Junta, etc. aquellas cuya recaudación estaba destinada a sufragar gastos Debido a la excesiva extensión que supondría nombrar derivados de la guerra que se desarrollaba en esos momentos todas y cada una de las compañías y artistas de cuyo trabajo (la Guerra de Cuba, en 1898), y para incrementar los fondos de se pudo disfrutar en el Teatro Circo en los años que nos ocu­

la suscripción nacional. I pan, haremos una selección de ellos:

2 La primera página de "El Diario de Albacete" del día anterior, del qu era impresor D. Luciano (como ya comentamos anteriormente) se dedicó exclusivamen­ te a esta artista. En ella se publicó su biografía, acompañada de dos po~mas alabando sus dotes artísticas y humanas, junto a su fotografía (destacamos este hecho porque probablenlente se trate de una de las primeras fotos aparecidas en este diario). 118

artista en concreto por las críticas que de ella se realizan en el Conlpañía de Zarzuela de género Cómico: visitó la capital diario del día 5 de Septiembre de 1898: albaceteña durante el período del 9 de Abril al 10 de Mayo "...En "El dúo de La Africana" se presentó al público Marina Gurina, de 1898. joven y bella tiple a la que, sin temor de ser falsos profetas, auguramos Directores: D. Pascual Gregori, D. José María Lorente y D. un brillante porvenir. Su voz es fresca, extensa y agradable, viste bien y V. A. Pellicer. Artistas más destacados: Srta. Quetcuti, Srta. Pepita Jimé- tiene mucha gracia..." Gran intuición del redactor de esta crítica, puesto que nez, Sra. Cortés, Sr. Gregori, Sr. Gascó, Sr. Rodríguez, Sr. (como luego veremos), se recogen reseñas procedentes de Villasante y Juanita Ramón. Madrid del mes siguiente, alabando su buen hacer y los éxitos Con'lpañía de D. Francisco Fuentes: visitó la capital alba- cosechados por ésta en el teatro Parish, en la puesta en escena ceteña durante el período del 30 de Junio al 26 de Julio de de la ópera "María del Carmen" (que Granados, con gran éxi­ 1898. to, estrenó en ese mismo mes de Octubre, en el citado coliseo). Director y primer actor: D. Francisco Fuentes. - Pero no sólo esta artista lnerece ser mencionada en estas Compañía de Zarzuela de ambos géneros: visitó la capital páginas; otras artistas destacaron en la escena albaceteña en albaceteña durante la temporada de Feria de 1898. estos años, y entre ellas especialmente la tiple Avelina López• Directores: Sr. Gorgé y Sr. Grajales. Píriz (Transp. n06). Apareció esta artista en Albacete con la Artistas más destacados: Marina Gurina. Compañía internacional de Variedades: visitó la capital compañía de D. Fernando Viñas y el maestro D. Francisco albaceteña durante la temporada que se extiende del 18 de Lozano, el 17 de Noviembre de 1900, y desde el momento de su debut comenzó a cosechar innmejorables críticas. Enero de 1900 hasta ? La señora López-Piriz arrasó en la capital, llenando todas Director: D. Félix Wigo. Artistas destacados: Nella Martini (con preciosos cou­ las noches el coliseo con un público que se le rindió sin condi­ plets), Concepción Gutiérrez, Manuel de Infantes (violín), ciones. Desde el periódico aparecen extensas columnas ala­ Hnos. Ariset y Félix Wigo (patinador). bando sin cesar las dotes de la artista. El 29 de Noviembre, Compañía de Zarzuela chica de D. Lino Ruiloa: visitó la celebró Dña. Avelina su función de beneficio, y con motivo de capital albaceteña durante el período del 20 de Febrero al ello el periódico le dedicó toda su primera página, publicando, 11 de Abril de 1900. junto a la foto de la artista, sendos artículos sobre sus magnífi• Directores: D. Francisco Lozano y D. Lino Ruiloa. cas cualidades para desenvolverse tanto en el género cómico Artistas destacados: Rita Florindo (primera tiple), Francis­ como en el dramático, con una voz agradable y muy bien afi­ ca Portavitate (tiple), María González, Leonor de Diego nada. En la misma página, D. Domingo Díaz Jiménez, le dedi­ (ambas primeras tiples), Irene Correa (tiple característica), có una poesía. José Ródenas (tenor cómico) y Lino Ruiloa y Antonio Analizando los diferentes comentarios que se le dedican Camacho (tenores cómicos). desde el periódico, podemos concluir que Dña. Avelina López• Compañía dramática de D. Miguel Cepillo: visitó la capi­ Píriz3 fue, sin duda, la tiple más aplaudida en Albacete de todas tal albaceteña durante el período del 10 al 17 de Mayo de cuantas pasaron por el Teatro Circo en el año de 1900, dejan­ 1900. do, tanto a público como a crítica encantados con su arte. Director: Miguel Cepillo. Además de las compañías profesionales de teatro y zarzue­ Artistas destacados: Dña. Julia Sala (primera tiple), Sra. la que actuaron en nuestra ciudad, distintos grupos de aficio­ Llorente (tiple característica), Sras. Royo, Val, Bagá y nados y jóvenes de la capital tomaron las tablas escénicas para Carrascosa, Sr. Muñoz (primer actor), Sr. Gil, Sr. Simó, acercar al público albaceteño algunas de las obras que a conti­ Hnos. Nieva (E. y G.) . nuación citaremos. Estas actuaciones de aficionados eran lle­ Compañía de zarzuela Cómica de Emilio Mesejo: visitó la vadas a cabo mayoritariamente con fines benéficos, de lnanera capital albaceteña durante el período del 5 al 20 de Sep­ esporádica, pero a lo largo de todo el año. tiembre de 1900. Pasemos ahora a realizar un resumen de las obras de Directores: Emilio Mesejo (de escena) y José Cesáreo repertorio que se pudieron disfrutar en el Teatro Circo duran­ López (maestro director de la orquesta). te los últimos años del siglo XIX: Artistas más destacados: Dolores Millanes (primera tiple "El lucero del Alba" "La locura contagiosa" cómica), Emilio Mesejo y Rafael Guzmán (primeros acto­ "Chateau Margaux" "Los descalnisados" res), Juana Benítez, Ana Gutiérrez, Dolores Millanes, Con­ "¡Viva mi niña!" "El último chulo" suelo Mesejo, Blanca Urrutia (actrices todas ellas), Fran­ "La Diva" "Los presupuestos de cisco Alcoba, Rafael Guzmán, Juan Robles (actores). "Cuadros Disolventes" Villapierde" Compañía de Zarzuela Cómica de Fernando Viñas: visitó "Los cocineros" "Los rancheros" la capital albaceteña durante el período del 17 de Noviem­ "Las Bravías" "El Señor Joaquín" bre al 1 de Diciembre de 1900. "La banda de trompetas" "La fiesta de San Antón" Director: D. Fernando Viñas y D. Francisco Lozano. "Los dineros del sacristán" "Los camarones" Artistas destacados: Sra. Avelina López-Píriz (primera tiple), "La marcha de Cádiz" "El traje de luces" Sra. Dña. Soledad Álvarez de Gil, Srtas. Blanca Urrutia y "Las zapatillas" "Tabardillo" Dolores Valero (primeras tiples), Dña. Soledad Molina (tiple '''La mascarita" "El rey de la Alpujarra" característica), D. Fernando Viñas (primer actor). "La madre del cordero" "Caramelo" Debemos hacer referencia especial a una artista que en la "El tambor de granaderos" "La alegría de la huerta" temporada de Feria del año 1898 actuó en la capital albacete­ "Las campanadas" "La tonta de capirote" ña con la compañía de zarzuela de ambos géneros de los Sres. "Agua, azucarillos y aguardiente" "¡Al agua, patos!" Gorgé y Grajales: la joven Marina Gurina. Destacarnos a esta "La viejecita" "Un punto filipino"

3 Nacida en Badajoz, el 15 de Noviembre de 1874, cOlnenzó sus estudio de canto en Enero de 1894 bajo la dirección del Marqués de Alta-Villa. Tras su debut en Madrid (en Diciembre del mismo año), Dña. Avelina triunfó también en las principales poblaciones del territorio español. Cuando su presentación en Albacete, había concluido recientemente una campaña de ocho meses en Méjico, alcanzando allí gran éxito. 119

"Los aparecidos" "La Mari Juana" "El monaguillo" "Instantáneas" eje.mpIos son: "Tierra", "La tempestad", "La Dolores", "El "Campanero y Sacristán" "La preciosilla" anIllo de hierro", etc. "La verbena de la Paloma" "El Gran Visir" De cualquier manera, se detecta en la redacción de las "Tiple en puerta" "Cambios naturales" colu~nas, cómo los mismos críticos no mostraban mucha segurIdad a la hora de denominar los distintos títulos. De esta "El Santo de la Isidra" "E 1querer de la Pepa" "La Revoltosa" ~anera encontramos referencias a la misma obra catalogada de "Plan de ataque" dIversas formas. "¡El gran petardo!" "La cara de Dios" "El rey que rabió" "Los baturros" Observando los títulos de las obras que colgaban en car­ "La leyenda del monje" "La Restauración" tel de una temporada a la siguiente, llama la atención el hech~ "La fuente de los milagros" "Las tentaciones de :San de que muchas de ellas se repetían de manera asidua; ~or e!e~plo "¡Amor y Patria!" Antonio" "Chateau Margaux" (que se estrenó en 1887), M~rlna "Viento en popa" "El cura del regimiento" (zarzuela en 1855, ópera en 1871), "El Dúo de la "El gorro frigio" "Triple Alianza" AfrIcana" (de 1893), "El Rey que rabió" (estrenada en 1892), y otras muchas. "El cabo primero" "¡Quién fuera libre!" También nombraremos, aunque de manera breve al Cuarte­ "Juan José" "El barquillero" to "El Turia", agrupación musical que visitó este coliseo y "Lanceros" "La chavala" (como vamos a ver) los demás centros de recreo que nombra­ "Los asistentes" "Pití Miní" Capitana~' mos al principio de esta investigación, en numerosas ocasiones "Las amapolas" "La Señora durante estos años de final de siglo. "Marin,a" "El Missisipí" En cuanto a las obras de autores albaceteños que se estre­ "La Buena sombra" "Los puritanos" naron en la capital manchega durante estos años de fin de siglo, "La Czarina" "Jugar con fuego" concretamente en el año de 1900, "Albacete ante el tiempo", "Certamen Nacional" "Los africanistas" con letra de D. Tomás Serna, música del maestro D. Francisco "La nieta de su abuelo" "Campanone" Lozano y decorado de D. Ángel Tévar Orozco, y "La Mode­ Debemos, no obstante comentar, que no sólo hemos citado lo", con libreto de D. Tomás Serna, música del maestro D. zarzuelas entre todas estas obras, sino que también podemos Daniel Prat (director de la Banda de Música del que hablare­ encontrar entre ellas algunas denominadas como comedias sain~tes: mos ampliamente más adelante) y decorados de D. Ángel dramas, monólogos y diálogos lírico-coreográficos, Tévar. Por otro lado debemos nombrar a D. Sinesio Delgado, entremeses, etc. I un colaborador asiduo de "El Diario de Albacete" que triunfa­ También hemos de destacar la aparición en cartel de algu­ ba en Madrid con las zarzuelas "Ligerita de cascos" y "El gol­ nas "óperas" (o fragmentos de éstas) que se cantaban entre: las pe de los siglos". obras que se representaban en una misma función. Algu~os

OTRAS SOCIEDADES Y CASINOS I

I Además del Teatro-Circo, coliseo del que hemos habhido Piñata en Carnaval, que se celebraban generalmente con obje­ larga y profundamente, cuenta el Albacete de los últimos años to benéfico sobre el mes de Febrero. Así recoge estos eventos del siglo XIX con numerosos centros y sociedades de recreo, "El Diario de Albacete": (Sábado 3 de Marzo de 1900). en los que se desarrollaban eventos artísticos y musicales! de "BAILES DE PIÑATA. diversa índole. Ya los nombramos al principio de estas págin'as, Esta noche segundo baile de máscaras de la temporada en los salones del y ahora nos detendremos en aquellas actividades, artistas, etc. "Casino Primitivo ". que ocuparon sus escenas. Flores. * CASINO PRIMITIVO: en él actuó en varias ocasiones el Para el baile de esta noche se venderán en el "Casino Primitivo" precio­ conocido Cuarteto "El Turia" formado por los hermanos Tere­ sos bouquets a 50 céntimos cada uno. Durante el día se expenderán tam­ sa, Magencia, Manuel y Estanislao Marco, los cuales tocaban bién en la calle de la Carnecería n014, al mismo precio". respectivamente una lira-laúd, una bandurria-lira, una banqu­ * CíRCULO "LA PIÑA": es destacable la visita del Sr. rria y una guitarra. A continuación reproducimos una reseña de Limas, que se anuncia en el diario como "jongleur-equilibris­ la actuación de los hermanos Marco en esta sociedad en su pri­ m", que hizo las delicias del público (como rezan las críticas) mera actuación del año de 1898, del Viernes 21 de Octubre con sus sorprendentes ejercicios, en los que no faltaban varios (actuaron en días sucesivos en el Círculo "La Piña" y en el números de conocidas zarzuelas con rápidas transformaciones "Casino Artístico"): de trajes. Así se recoge el paso de este curioso artista por la "CONCIERTO MUSICAL: Ha llegado a esta ciudad el aplaudidísimo ciudad albaceteña: (11 de Enero de 1898) cuarteto musical titulado "El Turia" compuesto de afamados guitarristas, "Anoche se presentó al público albacetense en el Círculo "La Piña" el conocidos ventajosamente en nuestra capital, los cuales se proponen qar afamado jongleur-equilibrista seiior Limas, cuyos excelentes trabajos fue­ varios conciertos en los casinos de la misma(... ) Esta noche dan su pri­ ron objeto de merecidísimos aplausos. Verdaderamente resultan notables Iner concierto en el "Casino Primitivo" bajo el siguiente programa: su agilidad y peifección, condiciones que le han valido justísimas ova­ Primera parte: ciones en cuantos sitios ha actuado. 1.- "Si yo fuera rey". Sinfonía. Cantó además el señor Limas escogidos trozos de las obras "El lucero del 2.-"EI anillo de Hierro". Preludio. alba", "Chateau Margaux", "¡Viva mi niiial", y "La Diva", con gran afi­ 3.- "La Dolores". Jota. nación y gracia. Segunda parte: En el mismo centro de recreo, prepara para esta noche una excelente vela­ 1.- "Rigoletto". Fantasía. da en la que ejecutará el aplaudido artista nuevos juegos, cantando 2.-"Spirto Gentil" de "La Favorita". números de "Cuadros Disolventes", "Los cocineros" y otras populares

3.-Potpourrí de Aires nacionales". I zarzuelas ". De este centro recogemos noticias y anuncios de bailes de Además, se pudieron disfrutar en este círculo veladas musi-

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También tenemos noticias de que se celebraban en sus salo­ (acordeon~s~~ cales ofrecidas, entre otros, por el señor Zamora nes (frecuentemente en el salón jap?~és) ~na~ velada,s ~ue Tun~ afamado) y también aquí actuó el aplaudido Cuarteto "El , recibían la triple denominación de muslco-cIentI~co-artIStICaS compuesto por los hermanos Mar.c~" los cua~;s, e.n las ~Ct~~Cl?,­ a las que acudía el Sexteto musical de D. JoaquIn Monserrat nes ofrecidas tras su primera apancIon en el CasIno PnmItlVo. ' ~I epígraf~). "Semiramí~", Afn,~ (pero de ésto hablaremos en sigui:nte " _ incluyeron fragmentos de obras como: "La No debemos olvidar, el cInematografo LumIere, cuya pn " "La Tempestad", "Fantasía Morisca", "GuIllermo Tell cana , " "T. mera exposición tuvo lugar en el año 1897, en uno de los salo­ ,,cF~ntasla), l~O~OurS (Sinfonía), "Cavallería Rusticana" on nes de la planta baja de este casino del que hablamos (aunque ~a.Dolores jamais" (valses), "Rapsodia Húngara y Gota), etc. el invento databa de dos años atrás) y que desde .su p~esenta­ que eran escuchadas con deleite por el publIco en general. ." ción en esta capital manchega tuvo una presenc.Ia aSIdua en CASINO ARTÍSTICO: los hermanos Marco tamblen * distintos puntos de la ciudad (entre ellos, los caSInos que nos deleitaron a aquellos que acudían a este centro. social. D~ igual manera también tenemos constancia de los ocupan). baIles de mascaras * SOCIEDAD "EL RECREO": no era excepción este cen- que allí se celebraban, así como aquellas velad~s en las q~e se tro en cuanto a la organización de veladas musicales, como las podía disfrutar de la música que ofrecían .Instrume~tIstas, ofrecidas por el célebre violinista don José Cela, conocido por como el señor Femández (acordeonistas premIado en dIversos gran parte del público de la capital. En algu~os casos la entra- concursos) o el pianista D. Domingo Bosch, que en ocasiones da estaba vedada a aquellos que no eran SOCIOS. . formaban dúo con otros artistas, como el notabilísimo ilusio­ Talubién aquí se ofrecían bailes de máscaras en la época nista y adivinador Francis, llamado "El Brujo Moderno", con navideña en la que se concedían regalos a los mejores disfra­ sus impresionantes experimentos. Encontramos, con fecha 20 de Enero de 1900, noticia de la ces, e incluso premios (que en algunos casos ascendían a inauguración de la "Escuela de Adultos", que se ubicó en los 1000 Ptas.) al que más se distinguiera en el cotillón de úl- salones de este centro. A este acto asistió la Banda de Música tima hora. Municipal, ofreciendo una agradabilísima velada musical.

AGRUPACIONES MUSICALES DE ALBACETE

En todos los ámbitos de la vida social y cultural albacete­ Feria de estos últimos años de siglo. Desde "El Diario de Alba­ ña, tenían una enorme presencia las distintas agrupaciones cete" se alaba frecuentemente el buen hacer de esta agrupa­ musicales existentes en la capital, ya que su asistencia era ción, así como el de su director D. Félix Soler. requerida en los múltiples actos desarrollados. COIUO se ha dicho anteriomente, eran muchos los actos a Entre las páginas de "El Diario de Albacete", encontramos los que acudían las diferentes agrupaciones citadas, asÍ, en las citadas una serie de agrupaciones que desarrollaban su activi­ fechas cercanas a Navidad (Diciembre y Enero), la Banda de dad musical en la ciudad, tales como: Música Municipal acudía al Paseo de la Cuba para amenizar a La Banda de Música Municipal (Transp. n07). los asistentes con las piezas de su repertorio. Sin embargo, más La Orquesta de capilla y Voces de capilla. notoria que en el Paseo de la Cuba será su presencia en el del Sexteto musical. Istmo, puesto que llegadas las noches estivales, actuará todos Orquesta y voces. los Jueves y Domingos desde finales de Junio hasta finales de Banda de Música Provincial. Agosto. Estas veladas musicales se verán muy concurridas, y Los dos primeros conjuntos contaban con la dirección del hay quien opina desde las páginas del periódico que son insu­ maestro D. Daniel Prat (Transp. n°8), mientras que del Sexte­ ficientes, puesto que en otras ciudades españolas podía escu­ to Musical y del otro conjunto de orquesta y voces se encarga­ charse música todas las noches. En otro comunicado referente ba D. Joaquín Monserrat. A cargo de la Banda de Música Pro­ al mismo asunto, se pedía al alcalde (D. Gabriel Lodares) el vincial se encontraba D. Arturo Alarcón. arreglo del Paseo, y la colocación de un puesto de refrescos, Se cita también entre las páginas del Periódico otra agru­ para lnejorar las condiciones de las citadas veladas a las que pación, la Orquesta de la capital que asiste a amenizar los bai­ con tanto gusto asistían los habitantes de Albacete. Dicho les celebrados en los casinos, tanto el "Artístico" como el "Pri­ comunicado se publicó en "El Diario de Albacete" como una mitivo" y en la sociedad "El Recreo"; sin embargo, no se llega nota para el alcalde, la cual muestra claramente el ambiente a aclarar quién dirige esta agrupación. Podría estar al cargo D. que se vivía en el citado Paseo del Istmo llegadas las noches de Joaquín Monserrat, algo bastante probable, puesto que es este verano (Transp. nog): músico el que acude normalmente a los Casinos para amenizar "Para el Alcalde. las veladas musicales; por otro lado talnbién contemplamos la Las plácidas noches de estío (... )nuestras paisanas se confeccionan vesti­ posibilidad de que pudiera tratarse de una sección de la Banda dos para lucirlos en el paseo del Istmo. Municipal o Provincial, en cuyo caso estaría dirigida por D. (... ) y es preciso que usted SI: Lodares también se luzca para proporcio­ Daniel Prat o D. Arturo A1arcón. Sin embargo, tenemos cons­ narnos el mayor solaz en el antedicho paseo. tancia de que la Banda Provincial actuó por primera vez en el Daniel y los suyos ejecutarán las más escogidas piezas de su repertorio. año de 1900, el día 6 de Septiembre, y también tenemos noti­ los Jueves, Domingos y días feriados de por en medio, según costumbre. cia en esas fechas de su reciente reorganización. Es por ello y por lo tanto no estaría de más el que se colocara un tablado, no el anti­ que consideramos improbable que amenizara los bailes de los guo de famosa recordación, sino otro de mejores vistas. Casinos en los meses de Marzo y Abril. Debqjo del susodicho tablado es de parecer general el que se coloque Hemos de citar también, entre las agrupaciones musicales algo que tenga ribetes de horchatería (...) ". que circulaban por la capital manchega, en estos últimos años No serán éstas las únicas ocasiones en las que puedan apre­ del siglo XIX, a otro conjunto que, sin estar formado por músi­ ciarse las actuaciones de la Banda Municipal, puesto que su cos de la ciudad, contaba con muchas simpatías en ésta. Se tra­ presencia era requerida en diferentes actos tales como la inau­ ta de la Banda de Música del Regimiento de Guadalajara, cuya guración de hoteles y restaurantes (como el Nuevo Hotel de D. presencia fue muy activa en la ciudad en las temporadas de Francisco Zornoza, o el restaurant "La Española", el 28 de 121

Enero y el 11 de Junio de 1900 . ción del Frontón-Recreo' 1 .' respectI:~mente); la inaugura­ Adultos . ' a Inauguraclon de la Escuela de A pesar de todo para D Daniel el ' , establecIda en el "Casino Artísti ". se enfrentaba la banda era ia falta de :a~?r obstaculo con que la ofrecida al actor Emilio Mes' I co, ser~natas!como se utilizaría en la é ' IOSCO o templete que Pujol el 4 d S . eJo y os empresarIOS Massa y no Sobr poca que mas se tocaba, las noches de vera- , ~ eptIembre de 1900; así como el recibimiento d 'Alb e este aspecto y~ hemos comentado cómo la vecindad que hac~ la c~udad a las diferentes personalidades que la visi­ s~ acete era de la mIsma opinión, expresando su parecer t~n. Habla qUIen la contrataba a título personal como D ¡ C. J b~e ~I asunto en la nota para el alcalde publicada el 7 de tobal Valera, el 28 de Mayo de 1900 .' ·1 ns­ unlO e 1900, y que hemos citado anteriormente Al~ , qUIen en el Paseo de onso XII organizó un acto de despedida a '- a Con .t~do ello, la Banda Municipal acudía ~ numerosos del "Hotel España". sus compaperos ctos. re]¡glO~os: a,muchos de los cuales estaban obligados por Durante I~ Feria, la Banda de Música Municipal se e~car­ ~ontr~to: ASI aSlstlan a la administración del sacramento de la gaba de amenIzar el Círculo Central (Transp nO}O) que • , ucans.tIa a los reclusos de la cárcel-correcional, y a las nume­ .. ., se vela rosas FIestas religiosas consagradas en honor a d·'¡: muy concurndo. TambIén con motivo de esta fecha tan· I t tI· , Impor- lterentes san- an e para a CIudad, se requería su participación en actos como tos que se celebraban en la ciudad; así como a procesiones y la apertura del edificio del Mercado. otros actos religiosos que desarrollaremos más detalladamente . Sobre la historia y el estado de la Banda de Música MI ._ cuando tratemos el apartado de la música en las Iglesias. 1 ·b·' unI Par~ este apartado dejaremos también la Orquesta y Voces cIpa escrl 10 su director,.D Daniel Prat,emonauna M. en 1902, dando cuenta del ~al estado en que se encontraba é~ta y de,CapIIIa de D. Daniel Prat, y la Orquesta y Voces de D. Joa­ qUIn Monserrat. aportando algunas SolucIones para mejorarla. Este último, asistía con su Sexteto Musical a amenizar las D. Daniel Prat se había hecho cargo de la banda en 1891 veladas músico-científico-artísticas que se realizaban en el primero como director interino, y más tarde en propiedad. Des~ Casino Artístico (en el año de 1900 recogemos esta actividad de 1891 hasta la redacción de la citada memoria, la bandÁ se t~d?s los fines.de semana, el Sábado o el Domingo, desde prin­ ha~ía disuelto dos veces, volviéndose a crear al poco tiempo CIpIOS de NOVIembre). En ellas, destacadas personalidades de baJo la misma dirección. I la ciudad exponían sus trabajos, poéticos, en algunos caso y Según cuenta D. Daniel en su memoria, desde 1893, las científicos en otros, disertaciones todas amenizadas por el Sex­ obligaciones de la banda habían ido aumentando, señalando teto Musical de D. Joaquín Monserrat. Sobre el triple nombre algunas que antes no se verificaban o las abonaban otras enti­ con que se designaban estas veladas, leyó D. Domingo Díaz dades. Entre estas obligaciones estaban las fiestas de calle, Jiménez un discurso a finales de Noviembre de 1900 (publica­ como la de San Antonio, San Ildefonso, Candelaria, San José do en "El Diario de Albacete" el 5 de Diciembre del mismo y San Cayetano (que antes retribuían los vecinos de los año). ReproduciInos lo que en el mismo dice sobre la música: barrios); la Misa de San Antonio; cinco procesiones más; la ..... ¡Música!. Arte bella ( ... ), sublime, explicada por la naturaleza en su música en los Paseos (antes los Jueves no tocaba)' serenata a lenguaje hechicero con trinos de ave, rumores de aguas y murmullos de la Patrona el 7 de Septiembre (antes la pagaban l¿s devotds); viento, y por el hombre, con notas, escalas y compases, lo cual forma ese juegos florales, etc. vaivén delicioso de sentidfsimas cadencias que, rizando y esmaltando la Sobre todas estas actividades encontramos reseñas en 'tEl atmósfera con ricas joyas, le da voces, ecos y armonías (... )". Diario de Albacete", anunciando la presencia de la banda y En cuanto a la Banda de Música Provincial, dirigida por D. comentando su participación. Arturo Alarcón, no es mucha la información obtenida desde El instrumental y atriles con que contaban eran muy anti­ ""El Diario de Albacete". De hecho los únicos actos en los que guos y estaban en muy malas condiciones. A este mal estado encontramos su presencia es en aquellos que se producen en contribuía el efecto que las condiciones climatológicas tenían los días de Feria. En una nota publicada el 6 de Septiembre de sobre ellos y al hecho de que los integrantes de la banda ho 1900 se dice que la Banda de Música Provincial había sido eran músicos profesionales (el sueldo que les pagaban no les reorganizada recientemente por el maestro O. Arturo Alarcón. permitía vivir exclusivamente de ello). Puede que ese sea el motivo de que no aparezca citada dicha Los uniformes eran de verano, también algo viejos, de dist,n­ banda anteriormente. Sobre D. Arturo sí encontramos alguna tos colores, con el mal efecto que ello causaba en el recibimien­ otra información que señalaremos más adelante. to de las distintas personalidades que visitaban la ciudad.

SOBRE EL CULTO EN LAS IGLESIAS

I

Con relación a los diferentes cultos religiosos que tenían Orquesta y Voces de Capilla de D. Daniel, el Sexteto Musical lugar, a lo largo del año, en las parroquias, iglesias y ermitas de D. Joaquín Monserrat y la Orquesta y Voces del mismo. ubicadas dentro de los límites de la ciudad, se encuentra enire Entre las reseñas de cultos que aparecen en "El Diario de las distintas secciones del periódico local, objeto de nuestra Albacete" encontramos Novenarios y Fiestas en la Parroquia investigación, cumplido anuncio en los días precedentes a ¡la de San Juan, en la Parroquia de la Purísima Concepción, en la realización de los actos, así como algunos comentarios poste­ Iglesia de Justinianas, en la de DOlninicas, en la ennita de San riores al desarrollo de los mismos. Antonio Abad y en la del Asilo de Ancianos Desamparados. Siendo San Juan Bautista el templo más importante de Ila A los distintos Novenarios que se celebraban a lo largo del

I ciudad, existían otros en los que taInbién podía disfrutarse de año, acudían los músicos de D. Daniel o D. Joaquín según el interpretaciones musicales consagradas a diferentes momentps templo del que se tratara, ya que cada uno de ellos ostentaba la del Calendario Litúrgico. I dirección musical de uno u otro. En "El Diario de Albacete" se En distintos meses y en diferentes iglesias se celebraban recogen Novenarios a San Antonio Abad, al Santísimo Cristo solemnes Novenarios a algunos Santos, Vírgenes, etc., así como de la Agonía, a Nuestra Señora de los Desamparados, a María las Fiestas al Santo y las Funciones Religiosas. En estas activi­ Santísima de los Llanos, a Santa Rita de Casia, a Santo Domin­ dades se contaba con la música que proporcionaban agrupacio­ go de Guzmán, etc. Junto a estos Novenarios encontramos Flo­ nes como la Banda de Música Municipal de D. Daniel Prat, Ila res a María y Misas cantadas.

I 122

. d 1 Virgen de los Llanos. El Sábado, en el NovenariO e a A las Fiestas Religiosas dedicadas a San llde~onsodo a ~u~~ (... ) 'd d . 1 Parroquia de San . de los Santos citados anteriormente acu e, a "emas , - se celebró con gran suntuoSl a . en a Ayer manana d' I lentí qUIera. . d D Daniel o D. JoaquIn, segun '. . 1 fu ." que el último día de Novena de lca e exce· .. - agrUPlacBIonedsamd:s~:~~~a ~u~icipal. Juan BautIsta a nClon las Este detalle lo hemos sima Ayuntamiento de esta ciudad a nuestra augusta y venerada patrona el caso, a an . " LB da . . .d d al hablar de esta corporacIon. a an VIsto con anterIorI a . ., 11 María Santísima de los Llanos. estaba obligada a asistir a estos actos, sm rec~blr en e ~s, por (... ) , 'e Eue muy arte de la Iglesia, remuneración alguna, cIr~u~stancIa que · d D Daniel Prat que gusta cuanto mas se O), JI . La notable MIsa e .' S Puede apreciarse tanto en los contratos de los mUSICOS como en bien interpretada por la orquesta Y excelentemente cantada por D. ote- fos Libros de Fábrica (papeles de cuentas) ~e los templos. ro Oñate, D. les,!s Martínez Guardiola Y D. Joaquín Monserrat. fiel~s En estas festividades religiosas era habitual que los Adernás de la orquesta asistió la Banda Municipal "." . acudieran a los alrededores del recinto sagrado dond:, a~enI­ Por otra parte, D. Joaquín Monserrat soha acudIr. con su zados por la música municipal, participaban en cucanas, Joyas Sexteto Musical o su Orquesta y Voces a la ParroqUIa ~e. la y bailes de rúbrica. .' . purísitna y otras iglesias menores. Referente a este musI.co Dentro del Calendario Litúrgico adquIeren especIal Impor- recoge el periódico una carta, remitida por uno de sus suscrIp­ tancia los cultos de Semana Santa, entre los que aparecen pro- tores, en la que alaba el buen hacer del.pr~fesor en el templo cesiones, Misas, etc. . de las Justinianas, sobre el que dice lo SIgUIente: Durante este tiempo Pascual, desde el AyuntamIento de la "...A lo dicho, he de afladiJ; quizá como nota más saliente, el doble resul- ciudad el Alcalde Constitucional hace saber a los habitantes de tado del sexteto Y elementos de voz que dirige el aventajado e inteligente Albac~te que las Ordenanzas Municipales contienen, rela~ivos director D. Joa~uíll Monserrat, que con verdadero acierto ha procurado a Fiestas religiosas, una serie de artículos de los que nos inte- escoger de su buen repertorio de l1uísica religiosa, preciosas piezas; y que resa el n° 12: con la interpretación dada por escasos músicos que él dirige, demuestra "Art.J2: En las solemnidades religiosas las puertas de los templos esta- mi buen amigo que re'lne condiciones excepcionales para llevar no sola­ rán expeditas para la entrada y salida de los concurrentes, no permitién­ mente su dirección en lustiniallas, sino también a otro "templo mayor". dose cantar o dar voces durante la celebración de aquellas (... ), asícomo No basta que el que suscribe estas líneas lo diga; el que quiera conven­ tampoco situar puestos de venta ni celebrarjuegos ni espectáculos de nin- cerse de lo expuesto que se pase por dicha iglesia y se convencerá de la guna clase ". De esta manera, la única actividad que recoge el periódico veracidad de los hechos. de las realizadas en Albacete durante estas fechas, se refiere a Verá al joven Monserrat e ilustrado profesor dirigir el sexteto, tocar el la llevada a cabo en las iglesias con motivo de la celebración armoniu111 al propio tiempo y también oirá su magnífica y simpática voz de la Pasión y muerte de Cristo. Se recoge en "El Diario de que unida a la de los demás que toman parte en el canto e instrwnentis­ Albacete" el programa de actos y las iglesias donde éstos se tas que acompaflan, forman un conjunto armonioso y admirable..." celebran: Misas cantadas y rezadas, Maitines cantados y reza­ Sobre D. Arturo Alarcón encontramos una reseña el 8 de dos, procesiones, etc. Como ejemplo, la Procesión del Santo Octubre de 1900: Entierro del Viernes 13 de Abril de 1900 en la que la Orquesta "... En la iglesia de Dominicas se celebró Misa con acompaíiamiento de y Voces de D. Joaquín Monserrat ejecutó el "Miserere" y el órgano (... ). Durante el Ofertorio y la C0111unión cantó con mucho gusto "Stabat Mater"; o la Misa cantada que el Domingo de Resu­ dos inspiradas plegarias el distinguido joven D. Mariano Rodrigo, acom­ rrección se realizó en la Parroquia de San Juan. paFlado al armoniU111 por su maestro D. Arturo Alarcón". Don Daniel Prat era el encargado de la música que se inter­ Como director de la Banda de Música Provincial acude a la pretaba en la Parroquia de San Juan. La Orquesta y Voces de serenata que en honor a la Virgen de los Llanos se da en la Pla­ capilla que él dirigía participaba en los distintos actos que se za de San Juan. celebraban en el templo más importante de la ciudad, e inclu­ Con todo esto se puede apreciar la música que era inter­ so llegaron a interpretar en repetidas ocasiones una Misa a tres pretada dentro de los templos de la capital, como parte del acto voces y orquesta, compuesta por D. Daniel en honor a la Vir­ litúrgico o como parte de la fiesta que se celebra dentro de los gen de los Llanos. De ella leemos el Lunes 1 de Junio de 1896 actos de alabanza a determinados santos por los que el pueblo en "El Diario de Albacete" : albacetense siente devoción. "Notas sagradas.

LA FERIA

El acontecimiento festivo más importante del año en Alba­ confección del programa de festejos. A través del periódico, la cete lo constituye la Feria, que se desarrollaba en los días com­ sociedad propietaria del Teatro Circo anuncia la admisión de prendidos entre el 7 y el 15 de Septiembre aproximadamente proposiciones de arriendo para la temporada de Feria, asunto (hoy día llega, oficialmente, hasta el 17). Se trata de una fiesta sobre el que se especulará hasta que se haga oficial el nom­ que se vive en toda la ciudad, de manera que los actos llevados bramiento de alguna compañía. Un ejemplo de lo dicho 10 a cabo durante esos días no se centran en un lugar concreto, ya encontramos en el diario, a partir del Miércoles 4 de Julio de que, aparte del recinto ferial, tienen lugar actividades en diver­ 1900 en varios números del mismo: sos puntos del casco urbano. De ella disfrutan por igual todos "TEATRO CIRCO los albaceteños, sea cual sea su clase social, participando en La sociedad propietaria de dicho coliseo ha acordado admitir proposi­ todas las diversiones programadas al efecto. Dichos actos son ciO/les de arriendo para la próxima temporada de Feria, hasta el día 20 de carácter muy diverso, tanto religiosos como profanos: tea­ del actual. tro, bandas de música, funciones religiosas, corridas de toros, Dichas proposiciones se admiten a un tanto alzado o a tanto por ciento juegos florales, etc. siendo la sociedad empresa de gastos. Durante los meses de Julio y Agosto "El Diario de Alba­ Al comisionario se le exigirá una fianza de 1000 pesetas para responder cete" hace un seguimiento exhaustivo de los avances o retro­ a cuantas condiciones se estipulen en el contrato de arriendo. cesos que el Ayuntamiento de la capital hace con respecto a la Se exige como condición precisa relación de los artistas que han de for- 123

mar la compal1ía, pues la sociedad tiene el propósito de annonizal; en lo ta y afinada, digna en verdad de los unánimes elogios que anoche se le posible, sus intereses con los del público, ofreciendo en la citada tempo­ tributalvn. rada una compaiiía de verdadelv mérito. A todos agradó anoche la banda provincial y la numerosísima concurren­ Albacete 3 de Julio de 1900.- El Presidente, Juan P. Romero". cia que la escuchaba en el Paseo de Alfonso XII tenía justas frases de sin­ Se invita a varias Bandas Municipales de Música para ame­ cero encomio para el seiior Alarcón y para la Diputación que con tanto nizar los actos, aunque en algunos casos la venida de estas no acierto ha encomendado a profesor tan inteligente y activo la dirección de se hará efectiva. En estos últimos años del siglo XIX, sí se con­ la indicada corporación musical." tó con una banda de música que gustaba mucho en Albacete, la Esta columna hace referencia a un tema que anteriormente del Regimiento de Guadalajara. Así entre las actividades que la hemos citado: la reciente reorganización de la Banda Provincial. Banda de Música de dicho Regimiento llevó a cabo, se encuen­ Con respecto a los actos religiosos, en Feria se celebra la tran actuaciones en las veladas musicales organizadas en Los festividad de la Virgen de los Llanos, patrona de la ciudad, el Jardinillos, situados en el Paseo de la Feria. De esta manera, en 8 de Septiembre. Con motivo de ello se ofrece una serenata a días sucesivos, interpretaron obras incluidas en diversos pro­ la Virgen de los Llanos en la Plaza de San Juan, a la cual asis­ gramas recogidos en "El Diario de Albacete". También partici­ ten las tres Bandas de Música anteriormente citadas. En la paron en los actos de apertura del edificio del Mercado, así madrugada del día 8 se celebraba en la Parroquia de San Juan como en algunos Pasacalles y la serenata que se ofrecía a la una Misa cantada, contando con la participación de la Orques­ Virgen de los Llanos en la Plaza de San Juan. ta y Voces de Capilla dirigida por D. Daniel Pral. Durante ésta Como ya hemos dicho, esta banda gozaba de gran aprecio se cantó, en la Feria de 1900 la Misa a tres voces y orquesta en la ciudad de Albacete, y el periódico llegó a publicar una que en honor a la patrona de la ciudad había compuesto D. extensa columna dedicada al director de la misma, D. Félix Daniel en 1895. Posteriormente se celebraba solemne Función Soler, alabando grandemente su dotes artísticas, así como la dedicada a María Santísima de los Llanos. labor ejercida en la citada corporación. Otro acto destacable de la Feria son los Juegos Florales, Por otro lado, la Banda de Música Municipal de Albacete, mencionados en determinados números del periódico albace­ además de participar en los actos de apertura y en la serenata a teño: la Virgen, tocaba en el Círculo Central de la Feria, ejecutando "...Se le hará el recibimiento que en justicia merece, y las bandas de músi­ varias piezas de su repertorio ante el concurrido público que ca de Guadalajara, Provincial y Municipal, ejecutarán a su llegada pre­ animaba las noches festivas. ciosos números de su repertorio..." La otra Banda de Música de la ciudad, la Provincial, se Entre las múltiples actuaciones situadas en el Paseo de la unió a las anteriores en la apertura y la serenata, aparte de ofre­ Feria para disfrute de los habitantes y visitantes de la ciudad, cer otra serenata en el Palacio de la Diputación el 6 de Sep­ encontramos inventos tan recientes para la época como el cine­ tiembre de 1900. A este respecto dice "El Diario de Albacete" matógrafo: el día 7 de Septiembre de 1900 lo siguiente: "Cinematógrafo. "La Banda Provincial. El Pabellón que el SI: Berbis instaló en el Paseo de la Feria, es el predi­ En el Palacio de la Diputación ejecutó anoche escogidas composiciones lecto del público. la Banda de Música Provincial, reorganizada como ayer dijimos, por el En el cinematógrafo Wargraph mágico se exhibe en cuadros de gran efec­ conocido maestro D. Arturo Alarcón, cuya laboriosidad y competencia to, entre ellos "La Cenicienta" y "Noche de Bodas"". han logrado formar en escasísimo espacio de tiempo una banda cornple-

ECOS DE MADRID

Podemos formarnos una idea bastante clara de la realidad empresas teatrales realizan: las obras que se anuncian en cartel artística en que estaba imbuida la España de finales de siglo, ya son las mismas de una temporada a otra (incluso durante que son tónica asidua en "El Diario de Albacete" las innumerables varias), hecho que disminuye el interés del público por acudir columnas dedicadas al Madrid teatral, y a tantas otras capitales a palcos y lunetas. El artículo que hallamos en el diario, el 15 españolas significativas. Estos artículos constituyen, a la manera de Enero de 1898 ejemplifica claramente lo dicho: de un mosaico, piezas sueltas que quizá individual y aisladamen­ "Pesa la más completa atonía sobre los teatros, cómicos y autores de esta te no muestren de manera evidente el valor que en potencia po­ corte. Se encuentra helado el entusiasmo artístico. seen, pero encajadas, configuran una fotografía lo suficientemen­ Teatlv espaJ1ol: comedia de Pablo Parellada (Melitón GonzáleZ),"EI Regi­ te fiable como para darnos una imagen bastante global e integra­ miento de Lupión" (en cuatro actos brevísimos y bastante aburrida), "Los dora de esta realidad artístico-musical de la que hablábamos. asistentes" no ha logrado su propósito. Debemos mencionar que a principios de año se reflejan Teatro de la Calle del Príncipe: En cuanto a comedia nada bueno. Para nUluerosas notas anunciando la clausura de diversos teatros, remediarlo han contratado a Bonifacio Pinedo para dirigir la campa/lía hecho que podemos justificar por tres razones principales: de la Comedia. 1.- Por la finalización de la temporada de Navidad; 2.- Por la esca­ Apolo: en HLa Revoltosa" BrÚ y Carreras lucen sus excelentesfacultades. sez de obras de repertorio (nuevas y de calidad); 3.- Por la escasez Teatlv de la Calle de Alcalá: zarzuelas como HEI Dúo de La Africana" y de actores y actrices con los que cuenta la escena española. otras similares. Si bien el primer punto es habitual en estas fechas, tras Zarzuela: "La Guardia Al11arilla" casi la única de la que pueden echar una larga temporada de representaciones de diversa índole, mano. hemos de detenernos en los dos últimos puntos y profundizar Eslava Cómico, Martín, Novedades y Moderno tienen las puertas cerra­ más en ellos. das al comenzar Enero. En cuanto al segundo punto, ya comentamos anteriormen­ No hay obras que llamen la atención del público". te este tema, referido a Albacete y su provincia, y lo dicho Son escasas las excepciones en que se dan obras puntuales entonces es perfectamente extrapolable a la capital española, e en escena que ayudan a algún teatro a esquivar la situación de incluso (es fácil suponer) al resto del país. Es tónica general cierre inminente. Otro escueto fragmento de fecha 16 de Mar­ encontrar quejas fundadas en cuanto a la selección que las zo del mismo año nos muestra esta realidad: 124

"MADRID TEATRAL. dice que la empresa del Romea, buscando el éxito asegura­ D. José Simón, autor dramático que ha surgido como un astro en la esce­ do, contrató a la artista Loreto Prado, que junto con Chico­ na espaiiola, salva del cierre al Teatro Moderno con su drama "La noble te eran los que más simpatías despertaban, registrando en y rica pastora" (... )". aquella telnporada llenos todas las noches. Por otro lado encontramos muy relacionada con esta cues­ b) Esta escasez de personalidades artísticas, no sólo viene tión de la escasez de obras, la de la corrupción de la crítica dada por la infrecuente ascensión de artistas al escalafón (que también tratamos con anterioridad al hablar de nuestro más alto; también se agrava debido a la tendencia de aban­ Albacete finisecular). Nos referimos al enlace de las empresas donar los escenarios por parte de las grandes artistas (algu­ teatrales con la crítica. Recogemos numerosos artículos que nas tras casarse) como Teodora La Madrid, Elisa Boldun, reflejan que alnbas han hecho pacto de unión, y así, obras Pepa Hijosa, etc. También se habla en esta reseñas de geniales no llegan a representarse, mientras que otras carentes María Guerrero, La Tubau, y Balbina Valverde como las de contenido pero "cargadas de chocarrería", disfrutan de las más destacadas artistas con las que se cuenta en ese ovaciones del público. De esta forma, y como se afirma en momento para apreciar el arte en todo su esplendor. estas columnas, el nivel crítico del público no se consigue ele­ c) Es interesante destacar un artículo de Abril, en el que ade­ var; todo lo contrario, queda rebajado y sin aspiraciones ni más de los puntos que hemos tratado más arriba, se comen­ expectativas de calidad. ta un dato que no podemos ignorar: la cláusula que el Real Esto repercute en los ánimos y espíritu del mundo teatral y tenía con el Gobierno, en la cual se obliga al empresario de pueden escucharse con frecuencia comentarios acerca de que este teatro a presentar cada temporada a un alumno del Con­ el entusiasmo de los artistas pasa en esas ocasiones por lapsos servatorio de Madrid. No obstante, este requerimiento no se de tiempo que se catalogan como "de enfriamiento artístico". cumple. Plantea el diario la siguiente cuestión: Si en el Con­ Como ejemplo de lo dicho en referencia a la corrupción de servatorio existen más de trescientas alumnas para presentar la crítica un fragmento de "El Diario de Albacete" del día 26 ¿por qué no lo hace nadie, y cuando se presenta, tiene una de Febrero de 1898: aparición lneteórica en escena? Sin embargo, continúa este "MADRID TEATRAL. artículo, ante el anuncio de la venida de cualquier artista Es un público especial sui generis el que asiste a los estrenos, y que difie­ extranjera (por ejemplo la italiana Eleodora Dusse, que re bastante del que acude al teatro las demás noches. actuó en el regio coliseo) se agotaban las localidades. Ter­ C011lpónenlo literatos, periodistas, autores dramáticos, críticos y unos mina la columna con la siguiente reflexión: "¿No produce cuantos se1zoritos gomosos sin otro afán ni otro interés que hablar mal de esto alnargura y tristeza para los amantes del arte español?". la obra, sin comprenderla y a ayudar a reventarla si se les presenta oca­ Una artista que no podemos olvidar (dado que ya la resalta- sión. mos por el éxito obtenido en Albacete en una temporada de Pues desde mi pasada revista, ya hace quince días, he visto todos esos Feria) es Marina Gurina. Si en la capital albaceteña las críticas micos y otros, cuatro veces consecutivas en el Circo de Parihs, en la Zar­ ya le auguraban un futuro bastante prometedor allá por el mes zuela, en Lara y en Apolo. de Septiembre, encontramos ratificación de ello en las de En ninguno de los cuatro coliseos se han podido lucir los reventadores. Madrid pertenecientes a la segunda quincena del mes de Octu­ ¡Qué desgracia!(... )". bre de 1898, reflejando las ovaciones recogidas por ésta en el Sin embargo, a estas temporadas suelen seguir otras mucho Teatro Circo de Parihs. Y no sólo se queda aquí: de la misma, más activas y animadas. Incluso en las fechas en que la situa­ pero en el mes siguiente, hallamos noticia de su brillante actua­ ción política es crítica, las referencias a los llenos en teatros y ción en la ópera "María del Carmen" en el papel protagonista, bailes son frecuentes, así como aquellas que anuncian la apari­ obra que el maestro Granados (que en aquel entonces contaba ción de nuevas obras en cartel. Un ejemplo más de esto que con 31 años de edad) estrenó el 12 de Noviembre de 1898 en el comentamos: (26 de Febrero de 1898) mismo coliseo antes mencionado. Tras una \arg~ '; exaltada crí• "POLÍTICA EUROPEA. tica hacia este gran músico y hacia la partitura que había com­ (... )No es fácil preveer qué ocurriría: la situación de España es muy pare­ puesto para transformar la hermosa producción dramática de cida a la en que encontrarían doce fumadores de cigarro puro alrededor Feliú y Codina, expresa su opinión sobre la actuación de los de un barril de pólvora. artistas que la pusieron en escena; entre ellos la que destacamos: y mientras tanto los candidatos empujando, los caciques en ejercicio, los "(... )La ejecución fue de lo más notable. Las seíioritas Gurina y Navarro teatros llenos de gente para el Carnaval, bailes de máscaras, bailes de arrancaron nutridos aplausos al auditorio, aquella por su delicada sociedad. Quién sabe si por este camino llegaremos a un punto que nos pasión en el desenlpeiio en el papel de protagonista, y ésta por su gracia digan con razón a la nación entera ¡Qué baile!(... )". y discreción en el de Fuensanta (... )". En relación a la tercera de las razones que hemos señala­ Otra cuestión que nos interesa sobremanera en este epígra• do para la clausura de los teatros en los primeros días del año, fe que titulamos "ECOS DE MADRID", es sin duda comparar debemos comentar varios puntos que se interrelacionan for­ las realidades artístico-musicales de Albacete y Madrid, en mando un círculo difícil de romper: cuanto a obras y artistas. a) Pocos son los altistas que alcanzan renombre, pero cuando En relación a las priIneras, podemos afirmar que, al margen lo hacen, se aseguran la adjudicación de papeles en obras de lo ya comentado acerca de su escasez, llegaban a provincias que se escriben en especial para ellas (o ellos). La conclu­ unos meses después de ser estrenadas en la capital española o sión es sencilla: las obras fracasan en las provincias, por­ en otras capitales españolas significativas. Así podemos señalar, que al llegar a ellas son puestas en escena por otras COln­ "Agua, azucarillos y aguardiente" (1897), de Chueca y Valver­ pañías y artistas, y el conjunto no convence (aún cuando de, "La Revoltosa" (1897), de Chapí, con libreto de López Sil­ han alcanzado gran éxito en la capital). Las empresas tea­ va y Carlos Fernández Shaw (que como ya apuntamos anterior­ trales se aseguran así el éxito contratando a artistas queri­ mente llegaron a la capital albaceteña en Abril del año siguien­ dos y aclamados por el público para que encarnen a los per­ te a su estreno) o "El Santo de la Isidra", del maestro Torregro­ sonajes del arte y pluma de los maestros músicos y libre­ sa, con libreto'de Carlos Arniches, que se estrenó en Febrero de tistas; artistas que les van a asegurar un lleno en las sucesi­ 1898, y llegó a nuestra capital con la misma compañía que las vas representaciones. Un ejemplo claro refleja esta nota en anteriores (compañía de zarzuela de género cómico de los Sres. "El Diario de Albacete" del 28 de Septiembre, en el que se Gregori, Lorente y Pellicer) y en el mismo mes. 125

Aunque no estaría contenido en este epígrafe, no está de María Guerrero y a Fernando Díaz de Mendoza triunfando en más hacer una breve alusión a los artículos y columnas que París, y a la compañía Álvarez Tubau en Buenos Aires, ambas hablan del éxito español en el extranjero; así encontramos a por las fechas de Octubre de 1898.

OTROS TEMAS DE INTERÉS TRATADOS EN "EL DIARIO DE ALBACETE"

Se pueden apreciar entre las páginas de "El Diario de Alba­ de organizar la formación de un archivo fonográfico en el que las gene­ cete", algunas noticias que dan muestra de cómo los avances raciones venideras encontrarán mucho que admira!; y base para la com­ técnicos tratan de ser utilizados con aprovechamiento por los probación de muchos hechos que de otra manera sería fácil escapara a la profesionales de distintos campos; en el caso que nos ocupa, más minuciosa investigación. por los profesionales de la música. Así el 2 de Abril de 1900 El mencionado archivo se dividirá en tres secciones. La primera com­ aparece una publicación que expone lo que el músico Camille prenderá todas las lenguas conocidas y sus dialectos especiales, con lo Saint-Saens opina sobre el uso del fonóKrafo: cual no se perderá ni su eufonismo ni su verdadera pronunciación. "EL FONÓGRAFO EDUCADOR. La segunda estará reservada a la música, y contendrá cilindros de los más Le Temps publica una carta de Camilo Saint Saens muy curiosa. notables cantantes del mundo, cuyos apasionados acentos pasarán de Nadie se conoce a sí mismo, dice el insigne nu/sico y distinguido escritor. este modo a la posteridad. Asíes que los cantantes no conocen su voz ni los instrunlentistas su talen­ Por último la tercera contendrá palabras y discursos de hombres célebres to, lo cual les hace muy inteligentes consigo mismos y muy severos con los y notables expresados cada uno en su idioma particulal:

demás. Asíya no podrá decirse "palabras las lleva el viento" tI. El fonógrafo está llamado a modificar esta situación. Albacete no podía quedar apartada de las nuevas técnicas y Encontrándose ahora en Las Palmas, su habitual residencia de invierno, de esta forma, el 17 de Junio llegó a la ciudad D. Ramón Bla­ Saint-Saens, un amigo suyo le rogó impresionase un cilindro del fonógra• nes, representante del gabinete fonográfico de los Sres. Puerto fo que había hecho llevar de París. Novella, de Valencia. El Sr. Blanes vendía una numerosa Así lo hizo el eminente músico, ejecutando su "Vals Canario ", el cual colección de fonogramas y varios modelos de fonógrafos, y el escuchó después con mucha atención e interés la repetición de su obra. gabinete al que representaba gozaba de fama universal por la "Dos graves defectos-dice Saint-Saens- me saltaron a los ojos o, mejor limpieza y claridad del sonido del material que vendía. dicho, al oído; un pasaje de una veintena de notas era precipitado con Creemos preciso también, dejar constancia de un artículo en exceso y e/nbrollado; otro, que yo creía haber ejecutado con el ritmo con la sección "Noticias", fechado el 22 de Octubre de 1898, y que que lo había escrito, resultaba desfigurado por completo. Por consecuen­ hace referencia a la situación de la educación musical en las cia de esto, después he corregido estos defectos en la ejecución. escuelas especializadas, a nivel nacional por aquellas fechas: Cree el eminente mllsico que los profesores de canto, de instrumentos y de "ESCUELAS DE MÚSICA. declamación pueden encontrar un auxiliar poderoso en el fonógrafo para Dicen de Madrid que el señor Camaza prepara una reforma de las Escue­ proporcionar a sus discípulos un medio de oírse a sí mismos y de com­ las de mlÍsica de provincias, a cuyos estudios concederá validez oficial, praba!; por la audición, los defectos seíialados por el maestro ". equiparándolas a la de Madrid. Unos meses más tarde, concretamente el 12 de Junio, el Ésta será reformada ampliando el tiempo que dura la enseñanza, exi­ periódico retoma este tema publicando un comunicado de la giendo un profesorado para la ampliación de los conocimientos y verifi­ Agencia Europea sobre los archivos fonográficos. En él se cando sucesivas oposiciones." explica claramente la evolución que dicho invento había tenido Esto da idea de los cambios que ya se perfilaban en este desde su aparición. Aunque es extensa, creemos imprescindible tema. su transcripción exacta y completa por el interés que encierra: Por otro lado, es curioso destacar otro artículo, éste fecha­ "ARCHIVOS FONOGRÁFICOS. do el 26 de Octubre de 1898, y que hace mención a un tema del (De la Agencia Europea). que ya hablamos en la introducción del presente trabajo: la Desde que el sabio norteamericano Alba-Edison dio a conocer su tras­ Exposición de París de 1900. Ésto es lo que podemos leer en cendental invento del fonógrafo, el mundo entero de apresuró a conocer el diario de la fecha indicada, en relación a la creación de un y poseer el nuevo invento tan sencillo como maravilloso. interesante instrumento: Acadernias de ciencias distinguidas personalidades, hombres de capital, "UN INSTRUMENTO COLOSAL: Su autor es Zibordi; ha empleado se apresuraron a adquirirlo, a admirarlo y a recrearse con la audición de quince alias en hacerlo, y lo ha expuesto recientemente en Mirandola sus cilindros. (Módena). Pronto el comercio se apoderó del invento, y abaratando su coste, facili­ Se llama el instrumento Auto Electro Polífono, y se dispone a enviarlo a tó la creciente afición del público, montando en poco tiempo una indus­ la Exposición de 1900 en París.

tria nueva, en la que encontraron sustento, no sólo buen número de obre­ Él sólo es lUI concierto: en su construcción ha empleado el autor más de ros, sino también numerosos artistas de canto y declamación, sino tam­ 60000 liras. bién músicos solistas y de conjunto. Es un prodigio de mecánica y de electricidad; al propio tiempo que toca, Los cilindros impresionados por artistas de fama adquirielvn gran precio, ilumina la sala en que está colocado y deja ver su interior, que puede ser y los de artistas de menos categoría, al alcance de todas las fortunas, sur­ visitado por los espectadores. caban los m.ares, llevando en sus entra/las para reproducirlos en lejanos El espacio que ocupa, es el equivalente a los vagones de ferrocarril.

países, romanzas, dúos, corales, solos de piano, y músicas intelpretadas Zibordi ha dedicado su invento a la Reina Margarita tI. por sextetos, bandas y orquestas. Otro tema de interés a destacar es el de la venta a través

Fue tal su generalización 1 que hoy no se comprende casa medianamente de la imprenta de "El Diario de Albacete" de diversas montada, que no tenga sufonógrafo o grafófono, con su caja de cilindros composiciones musicales. Distintos apuntes acerca de de artistas, de amigos o de aficionados. publicaciones musicales encontramos en este periódico. Pero el fonógrafo no pasaba de ser una curiosidad científica, un entrete­ Un ejemplo: nimiento fin de siglo, y una nueva forma de la audición musical. Carecía (28 de Junio de 1898) de aplicación práctica y trascendental. "BELLAS ARTES: Revista semanal ilustrada. A nuestros suscriptores. Afortunadamente la Academia de Ciencias de Viena ha tenido la feliz idea Álbum musical de Bellas Artes. 126

En la administración de este periódico se halla de venta al precio de 30 zaroll en Madrid y provincias". céntimos para nuestros suscriptores y de 40 para el público en general el Del mismo modo encontramos el vals para piano "'Recuer­ primer cuaderno de esta importantísima biblioteca musical. dos de la Mancha", escrito por D. Arturo Alarcón (ya hablamos Consta dicho cuaderno de ocho páginas de música admirablemente gra­ de él C0l110 director de la Banda de Música Provincial), que se badas y perfectamente inéditas. vendía en la imprenta al precio de dos pesetas. Otra cOlnposi­ Colaboran en el álbum los mejores compositores espaFlOles; y se publica­ ción musical del mismo compositor encontramos en otro rán los números más originales de las zarzuelas que mayor éxito alcan- número del diario: "Gavota Infantil".

CONCLUSIONES

Tras el repaso efectuado por los datos recogidos de entre se de fin de siglo o comienzo de centuria, según los juicios de las páginas de "'El Diario de Albacete" (que nos han acercado unos u otros), se anuncian extraordinarias veladas. Un último aquellos sucesos más relevantes de los que configuran la vida ejemplo incluimos en este apartado conclusivo, recreando el artistico-musical de Albacete, a finales del siglo XIX, y su rela­ ambiente festivo de aquellas fechas: (31 de Diciembre de 1900) ción con el panorama nacional), podemos concluir una serie de "Promete resultar brillantísima la velada extraordinaria que para despe­ puntos que dan una visión global del ambiente cultural que en dir el siglo XIX y saludar al XX ha de celebrarse esta noche en el salón esta ciudad se vivía durante el período de tiempo señalado. principal del Casino Artístico. L[~josamente adornado para la fiesta (... ). De esta manera, haciendo un recuento de las distintas acti­ Habrá varios discursos, lectura de poesías y excelente parte musical y de vidades artísticas llevadas a cabo a lo largo del año, confeccio­ canto. naremos un resumen de las mismas, y así encontramos bailes La velada tenninará antes de las doce". (de máscaras, de sociedad, etc.), veladas musicales (violinistas, Se anuncian también para esa noche en todas las parroquias pianistas, pequeñas agrupaciones instrumentales, etc.), compa­ e Iglesias de la capital, a las doce, Misa y Te Deum, para des­ ñías de teatro y zarzuela (de género cómico, dramático, ambos pedir el año. Estas celebraciones también contaban con una géneros, etc.), funciones (patrióticas, a beneficio de una socie­ escogida presencia musical. dad, de un artista, etc.), conciertos, pasacalles, y otras muchas. Al margen de todas las actividades que se hallaban más o Desglosando el año, es fácil comprobar que es Septiembre menos establecidas a lo largo del año, y que en general se rela­ el mes en el que más movimiento se observa dentro de esta ver­ cionan en mayor o menor medida con celebraciones estableci­ tiente artística. Es normal que ello ocurra, dado que es en esta das en el Calendario (Navidad, Carnaval, Semana Santa, Feria, fecha cuando se celebra la fiesta grande de la ciudad (la Feria), etc.), hemos podido comprobar cómo el discurrir de los acon­ en la que, durante diez días aproximadamente se producen todo tecimientos a nivel mundial, iban configurando nuestro Alba­ tipo de espectáculos, en el Paseo de la Feria, en Los Jardinillos cete finisecular. Las tendencias musicales, los inventos más de la misma, en el Teatro Circo, en los distintos centros de recientes (fonógrafo, cinematógrafo, la fotografía en color, recreo, en las parroquias, etc. En los apartados anteriores ya se etc.) impregnan la vida albaceteña, y hacen avanzar esta ciudad han visto los distintos actos que para el entretenimiento de la hacia la modernidad. población eran consignados en los programas de Feria. Para cerrar este epígrafe conclusivo, nos gustaría destacar La segunda época más rica en actividades artísticas, es la la prensa COlno una riquísima fuente de historia. A través de que coincide con los meses de Carnaval, ya que en esta tempo­ este estudio hemos podido conocer la realidad del lugar donde rada confluyen casi todas las noches actuaciones de compañías discurren nuestras vidas, con una distancia temporal de cien de teatro y zarzuela, bailes en los diversos centros de recreo y años, y reconstruir esa realidad viéndola como algo más cer­ animación en las calles con motivo de esta celebración. Sin cano (en verdad, no tan diferente al panorama actual como en embargo, tras estos ajetreados días, la Semana Santa se distin­ principio podríamos pensar). gue por la escasez de eventos artistico-musicales, fuera de los La prensa nos sumerge en los acontecimientos relevantes producidos dentro de las diferentes Iglesias, en los actos consa­ de la época, y arroja luz sobre los distintos ámbitos de aquel grados a la Muerte y Resurrección de Cristo. Esta falta de noti­ entonces. El artístico-musical, abordado en esta investigación, cias musicales dentro de los límites albaceteños es suplida por cobra sentido al ver la relación con el resto de eventos de la "El Diario de Albacete" con las diferentes informaciones que vida social. llegan desde otros puntos del país y del extranjero. Realmente, es mediante el trabajo realizado sobre las fuen­ Los meses estivales son también bastante pobres en cuanto a tes de información directa como se llega a conocer en profun­ la realización de actividades, y las que se realizan se ajustan casi didad una realidad con todas sus peculiaridades. De esta mane­ exclusivamente a las que se llevan a cabo en el Paseo del Istmo ra se ven los acontecimientos (tanto los musicales como los de los Jueves y Domingos. Sin embargo, desde el periódico también cualquier otro tipo), no como algo aislado, sino como depen­ se interesan por las actividades en otros puntos de la provincia y diente e inmerso en el conjunto de una sociedad influida por del país, y de los actos programados para el mes de Feria. numerosos aspectos. Son estas peculiaridades las que dan vida En el mes de Diciembre, podían disfrutarse los cantos eje­ a los datos, que reflejados en los libros parecen perderla y care­ cutados en las Iglesias, dentro de los Novenarios organizados. cer de relevancia o interés. Nada más lejos de la verdad como Con motivo de la celebración de la última noche del año, y más queda reflejado en las páginas que configuran este trabajo de aún en el año de 1900 (año cargado de controversias por tratar- investigación.

BIBLIOGRAFÍA

* "Albacete en su Historia", Edita el Museo de Albacete, 1991. segunda mitad del siglo XIX. Documentos, cartelera y estu­ * BRIGGS, Assa, "'Historia de las civilizaciones: el siglo dio", Albacete, 1999. XIX", Ed. Alianza/Labor. * FUSTER, Francisco, "Historia del teatro en Albacete". * CORTÉS IBÁÑEZ, Emilia, "'El teatro en Albacete en la Albacete 1974. 127

* MATEOS ARCANGEL, Alberto, "Evocaciones y * QUIJADA VALDIVIESO, Joaquín, "Albacete en el siglo Recuerdos Albaceteños", Albacete, 1983. XX", Albacete, 1925. * MATEOS ARCANGEL, Alberto, "Del Albacete Antiguo * ROA DE EROSTARBE, Joaquín, "Crónica de Provincia (Imágenes y Recuerdos)", Albacete, 1983. de Albacete", Albacete, 1891. * ÑACLE GARCÍA, Ángel, "El Ateneo Albacetense: * SÁNCHEZ TORRES, Francisco Javier, "Apuntes para la 1880-1993", Albacete, 1993. Historia de Albacete", Albacete, 1916.

ANEXO FOTOGRÁFICO

TRAJE PARA RECEPCION . ··Oe beng;}lina r(\3~. Cu'erpo' ;;¡justa:- ~o e~cote o y escot::¡d ü , adornando el' MODAS uoatuXa . de\'riiu5elíria-;~.dé~scda· bl

'(.rJ-' ;r \ ,.Z-.J.· "....' . ::1.1 Traj. paTa lea/TO

\ De lana y lile Doa pieza el cuerp. y l~ bId•• V .. ;a.dorO&do con motit.l.S bord~d;¡a toJo ~I. y forro •.~\ cuello de IIJ tria : escote \InOl ma:c!lfica. aplicHioa de bao cnc.je con luo ea el delantero ca. for­ ma de corbah..T-&lDbicn I!C.V& una a'n-

o du de tcraiopclo que: putc: dd bom­ ·bro·dercch. y le a.jll"tOl en el broche del oiDtu~oD (ormando un 111%0. AURORA

(1) J..quellu d. na..Btru loctoru que i ...... a.tall... d. loa modelo8 de 1& pr6­ ..nta nTi.sta, pueden a.ac:ribir 6. 1.. 3ocojon el. cODfeceioDe8 d. loa GT'.l.nd~1 .dlmaanu d. El Siglo, Barcelona, 'J nc.ibirh. ~rati. UaoKia.h.•••h.ta.o.i••.

"El Diario de Albacete" de 18 TRAJE TEATRO de Abril de 1900. PARA Cuerpo ajustado y adornado con galOll;d~ acero y oro; canesú de gUI-

(1) Aquellas de nu~strall lectoras que d~tl\llos deseen o de 108 modelos de la pre­ sente reVl:lta, pueden escribir ¡" la Seccion de confecciones de los G'randes Almacene~ de El Siglo, Bai"celonn.. y recihirAn P-TI\t i<; mediant.~conte8tacion.: - .,

"El Diario de Albacete" de 18 de enero de 1898.

Transparencia n° 1: Trajes para teatro. 128

Transparencia n° 2: Fachada del Casino Artístico, en la Calle Concepción: instalado aquí el 25 de Diciembre de 1865. Mateas Arcangel, Alberto, "Del Albacete antiguo", Ed. Instituto de Estudios Albacetenses. Págs. 122 y 124.

Transparencia nO 3: "Salón japonés", situado en la planta baja del Casino Artístico; en él se celebraban veladas artístico-musicales. Desapareciendo para dar cobijo al "Salón Liceo". 129

Transparencia n° 4: Proyectos frustrados para un teatro en Albacete. "Albacete en su historia", Ed. Museo de Albacete, 1991, Pág. 540. 130

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Fachada del Teatro Circo.

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Transparencia n° 5. Aspecto interior del Coliseo, con tendencia al estilo Árabe. Mateos Arcangel, Alberto. "Del Albacete antiguo". Ed. Instituto de Estudios Albacetenses, Pág. 106. 131

Transparencia nO 6. "El Diario de Albacete" de 29 de Noviembre de 1900. 132

Transparencia n° 7: La Banda Municipal de música acompañando a un ensayo del Batallón Infantil (1905). Mateas Arcángel, Alberto "Del Albacete Antiguo". Ed. Instituto de Estudios Albacetenses. Pág 170.

Transparencia n° 8: en el año 1915, tras una comida, distinguidos aficionados de la capital. Entre ellos, de abajo a arriba y de izquierda a dere­ cha, el primero de la segunda fila es el maestro de música D: Daniel Pral. Mateas Arcángel, Alberto "Del Albacete Antiguo". Ed. Instituto de Estudios Albacetenses. Pág 219.

Transparencia n° 9: Principio del Paseo del Istmo junto a la estación férrea. En él se celebraban veladas musicales en la temporada estival. Mateas Arcángel, Alberto "Del Albacete Antiguo". Ed. Instituto de Estudios Albacetenses. Pág 71. 133

Transparencia n° 10: Kiosco del círculo interior de la Feria en el año 1908. En él actuaba durante la Feria la Banda de Música Municipal. Mateos Arcángel, Alberto "Del Albacete Antiguo". Ed. Instituto de Estudios Albacetenses. Pág 130.