Revista de Ciencias Sociales (Ve) ISSN: 1315-9518 [email protected] Universidad del Zulia

Ruiz Chataing, David La historiografía política tradicional en la obra de Laureano Villanueva Revista de Ciencias Sociales (Ve), vol. XVI, núm. 3, septiembre-diciembre, 2010, pp. 547-559 Universidad del Zulia , Venezuela

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Cómo citar el artículo Número completo Sistema de Información Científica Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto Revista de Ciencias Sociales (RCS) Vol. XVI, No. 3, Julio - Septiembre 2010, pp. 547 - 559 FACES - LUZ · ISSN 1315-9518

La historiografía política tradicional en la obra de Laureano Villanueva

Ruiz Chataing, David* Resumen Se investigan las ideas políticas e historiográficas de Laureano Villanueva. Consultamos su producción escrita bibliográfica (libros y folletos) y parcialmente la hemerográfica. La indagación arrojó que Villanueva es un escritor político liberal, nacionalista, romántico, apegado a la historia política tradicional. Empero, sus bio- grafías de José Antonio Páez, José María Vargas, Antonio José de Sucre y Ezequiel Zamora arrojan significati- vo conocimiento sobre la historia de Venezuela. Palabras clave: Laureano Villanueva, liberalismo, historiografía tradicional.

Traditional Political Historiography in the Work of Laureano Villanueva

Abstracts The political and historiographic ideas of Laureano Villanueva are investigated. His entire written bib- liographical production (books and leaflets) and part of his newspaper articles were consulted. The investiga- tion demonstrated that Villanueva is a political liberal, a nationalistic, romantic writer, attached to traditional political history. However, his biographies of Jose Antonio Paez, Jose Maria Vargas, Antonio Jose de Sucre and Ezekiel Zamora offer significant knowledge about the history of Venezuela. Key words: Laureano Villanueva, liberalism, traditional historiography.

* Doctor en Historia, Magister Scientiarum en Historia de VenezuelaRepublicana, Licenciado en Historia, Universidad Central de Venezuela. Profesor a tiempo completo en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, adscrito al Departamento de Geografía e Historia del Instituto Pedagógico de . Teléfono: 04143237571. E-mail: [email protected]

Recibido: 09-01-25 · Aceptado: 09-11-12

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Introducción plantarse un proyecto nacional liberal. Igual- mente alcanzó a observar durante los inicios Esta reflexión sobre Laureano Villanue- de la hegemonía andina (1899-1945), el cese va está inscrita en el marco de nuestro interés de la anarquía, el cierre del ciclo histórico de por las ideas políticas e historiográficas de los jefecillos guerreros y los inicios de la dic- nuestros más destacados escritores del siglo tadura -de cobertura nacional- de Juan Vice- XIX venezolano. Se reconstruye la vida, la nte Gómez (1908-1935). Fue testigo, al final obra y el pensamiento de este distinguido re- de su vida, del proceso de concentración polí- presentante del liberalismo y del cientificismo tica del poder y de la definitiva integración na- nacional de la segunda mitad del siglo antepa- cional. Se graduó de Médico, ejerció el perio- sado. Registraremos sus adherencias a las ideas dismo, la política y el oficio de historiador. de progreso, civilización, igualdad en la liber- En su condición de profesional de la tadyalapercepción heroica y decisiva de las Medicina practicó el arte de curar con un sen - grandes individualidades en la historia. tido de vocación de servicio. Auxilió amplia- Villanueva ausculta con sus trabajos el mente a la gente humilde, ganándose una re- período independentista, las Repúblicas oli- conocida fama como un gran filántropo. En la gárquicas -conservadora y liberal-, y culmina parte administrativa fue cofundador del Hos- con la guerra federal. Ubicándolas en sus con- pital Vargas y Director de la Inspectoría Ge- textos traza las vidas de José Antonio Páez, neral de Hospitales en 1888 y fundador de la José María Vargas, Antonio José de Sucre y gaceta informativa de esta institución. Ezequiel Zamora. Como higienista de orientación huma- Intentaremos precisar, luego de la revi- nista, escribió Consejos a las madres para que sión de su producción escrita, su ubicación en críen a sus hijos según la Medicina y la Moral el plano de las ideas y la historiografía. Su (1887); y de carácter más científico, publicó el abordaje de las fuentes, el modo de exponer capítulo “Las ciencias médicas en Venezuela”, los resultados de sus investigaciones y la valo- incluido en el Primer Libro Venezolano de Lite- ración de personajes fundamentales de nues- ratura, Ciencias y Bellas Artes- Ofrenda al Gran tra historia. Mariscal de Ayacucho, publicado en 1895. En este texto realiza un balance de la historia de las 1. La historiografía política investigaciones realizadas en el país tanto en las tradicional en la obra de ciencias naturales, como en las médicas, desde Laureano Villanueva los tiempos coloniales hasta finales del siglo XIX. Su reconocida solvencia académica lo ele- El historiador venezolano Laureano varon a la alta jerarquía de máxima autoridad, Villanueva nació en San Carlos, estado Coje- Rector, de la Universidad Central de Venezuela, des, el 23 de marzo de 1840 y falleció en Cara- entre finales de 1905 hasta mediados de 1906. cas, el 12 de febrero de 1912. Es decir le tocó Igualmente fue Ministro de Instrucción Pública vivir en la República Oligárquica, en la Vene- éste último año. zuela monoproductora del café, en la de las En su rol de periodista creó El Constitu- guerras civiles, los caudillos y los alzamientos cional (1868), de San Fernando de Apure; El permanentes. Pero, así mismo, transcurrió su Carabobeño (1872-1874); El Progreso (1873- juventud en un país en el que trataba de im- 1874); El Pueblo (1887), editados en Valencia.

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El Demócrata (1882), El Deber (1883), El motivo de efemérides históricas. Es palpable País (1875-1878 y 1883), La Prensa Liberal la impronta cientificista y positivista en su (1897), El Corresponsal, todos estos de Cara- obra. Fue uno de los historiadores oficiales del cas. Así mismo, colaboró con varias publica- liberalismo amarillo y edificador, en parte, de ciones periódicas tanto nacionales como forá- su imaginario político y mitología del poder. neas. A la reflexión sobre el Laureano Villanueva, Desde el punto de vista político, fue un político e historiador, le dedicaremos las pró- entusiasta militante de la ideología y el Parti- ximas páginas. do Liberal y la masonería. Sociedad secreta y filantrópica, ésta última, donde alcanzó el 2. El escritor político Grado 33. Héctor Parra Márquez, uno de sus biógrafos, lo muestra como un ambicioso y Su óptica como escritor político lo perpetuo aspirante a la Suprema Magistratura acerca a una corriente que en el siglo XIX ve- Nacional. Consejero Político fundamental del nezolano la podemos llamar cristiana, liberal, caudillo y Presidente de la República, el Ge- masónica, democrática y cientificista. Perte- neral Francisco Linares Alcántara. De éste nece a la misma estirpe ideológica de Antonio jefe guerrero fue Ministro de Relaciones Ex- Leocadio Guzmán (1801-1884), Luis Geróni- teriores y de Interior y Justicia y se encargó de mo Alfonso (1833-¿?), Antonio Guzmán la Presidencia de la República a mediados de Blanco (1829-1899), entre otros. Hay en sus 1878 y a finales de éste mismo año. Como la escritos constantes referencias a la Biblia, a la mayoría de los políticos venezolanos de aquel vida y el ejemplo de Jesús, al plan divino para entonces, disfrutó de las mieles de las victo- que el hombre alcance la perfección. rias, algunas veces, y probó la hiel de la derro- Dentro del espíritu liberal reivindica la ta y del exilio entre los años 1879 y 1883. Fue necesidad de cumplir las prácticas republica- candidato a la Presidencia de la República en nas tales como las elecciones libres, estable- 1890 y dirigió, en 1897, la Asamblea Liberal cer gobiernos de leyes e instituciones e incen- Eleccionaria, que apoya la postulación del tivar la educación para la forja de ciudadanos General Ignacio Andrade (1836-1925) a los participativos e industriosos. comicios presidenciales. Además fue Gober- Las ideas de las logias secretas son nador del Estado Carabobo y Secretario Ge- identificables en su pensamiento en la simpa- neral de esa entidad. Fiel a los personalismos tía por las causas progresistas tales como la de nuestro siglo XIX fue zamorista, alcanta- abolición de la esclavitud, la secularización de rista, antiguzmancista, andradista y castrista. la sociedad, la más amplia divulgación de los En los predios de Clío se desenvolvió con gran avances técnicos, etc. Su exaltado democra- solvencia. Fue miembro fundador de la Aca- tismo lo ponen del lado de los humildes en las demia Nacional de la Historia, en 1888. Sus tí- luchas políticas venezolanas a favor de la im- tulos principales son: Biografía del Doctor plantación de la igualdad: “La idea de progre- José María Vargas (1883), Apoteosis de Páez so, de perfectibilidad, de aproximación a la li- (1888), Vida de Antonio José de Sucre (1895), bertad en la igualdad, que es lo que constituye Vida del Valiente Ciudadano General Eze- la idea liberal…” (1). Esa aspiración de mejo- quiel Zamora (1898), también pronunció dis- rar la condición de los sectores sociales desfa- cursos en colegios y fue orador de orden con vorecidos mediante la educación y el recono-

549 La historiografía política tradicional en la obra de Laureano Villanueva Ruiz Chataing, David ______cimiento del esfuerzo individual serán las ba- de la libertad; de la divina libertad que es, se- ses de su planteamiento justiciero. Que se co- ñores, el filtro mágico que inspira a la moder- rresponde, por otro lado, con la combinación na humanidad las grandes cosas del siglo de la lucha por la igualdad y por la libertad XIX” (2). presente en el proceso histórico venezolano Villanueva indica como con los cam- desde los tiempos preindependentistas. bios tecnológicos, quedan abolidas las distan- El amor por la ciencia y el progreso cias; por el avance de las ciencias humanas es complementan esta cosmovisión como se evi- el corazón humano develado y es promisoria dencia en su exaltación del progreso y, en es- la paz entre los pueblos; las comunicaciones pecial de las innovaciones técnicas: “La in- se aceleran y la producción de bienes y servi- dustria y el comercio metamorfosean maravi- cios mejoran en calidad y cantidad. Y todo llosamente la naturaleza física. En breve tiem- esto, y es lo más importante que resalta Villa- po se da hoy la vuelta al mundo; el derecho in- nueva, en un marco jurídico político de esta- ternacional ha abierto a todas las banderas la blecimiento de la libertad. Por supuesto que es navegación de todos los mares y de todos los notorio el idealismo y el utopismo del autor ríos; por el telégrafo se conversa diariamente ante la realidad de que esos avances no alcan- de continente a continente; los caminos de zan a todas las naciones de la tierra por igual ni hierro trasplantan con la velocidad del rayo las a todos los habitantes de cada país de la misma poblaciones que emigran en masa entre el manera. En todo caso, se muestra un sincretis- Ecuador y los Polos; el fluido eléctrico alum- mo ideológico, combinación de tradiciones bra, como el sol, la tierra; el magnetismo hace hispánicas, europeas y estadounidenses, muy milagros; Lesseps convierte el África en una común en la Hispanoamérica del siglo XIX. isla; y así como ha mezclado los mares de la Su acendrado republicanismo lo con- India con las aguas del Mediterráneo, pronto firmamos en la siguiente, igualmente, exten- habrá de partir la América en dos pedazos para sa, cita: “…la República es, en el movimiento cambiar, no sólo las corrientes del comercio y progresivo de la política, el bello ideal de la ci- de la civilización, sino también las corrientes vilización moderna; el grado más alto de per- de las aguas y confundir en un solo océano el fectibilidad de los Estados; como un Sinaí, co- Atlántico con el Pacífico; la industria fabril ronado de rayos, a donde van las nuevas gene- prepara en sus telares gasas tan finas, etéreas, raciones, peregrinas de la libertad, a recibir impalpables como los vapores con que se ves- del Dios de los pueblos las tablas de la ley mo- tían las sílfides; los químicos nos dan perfu- derna; o si decimos, el decálogo de los dere- mes que habrían codiciado las diosas del chos del hombre. (…) Desde entonces [la des- Olimpo, y descubren diariamente para la in- trucción de las monarquías absolutas Nota dustria y para la medicina cuantos tesoros DRCH] quedó escrito con sangre humana en guardó la Providencia en las entrañas de la tie- la cumbre de la historia, el derecho impres- rra, en las venas de los vegetales, en las ondas criptible de las naciones de gobernarse por sí del aire, en el fondo de los mares; y en la agri- mismas, bajo el sistema de la República, que cultura, la mecánica y las artes liberales, todo es la forma de gobierno más conforme a la se multiplica, se engrandece y perfecciona por dignidad del hombre y a la soberanía absoluta los progresos de la ciencia, por el trabajo fe- del pueblo. (…) De las monarquías absolutas cundante del hombre y la acción vivificadora se ha pasado a las de régimen constitucional, y

550 ______Revista de Ciencias Sociales, Vol. XVI, No. 3, 2010 de estas a las de régimen parlamentario, para mos inmersos en una evolución universal del ir llegando en la serie de transformaciones del género humano en correspondencia con los mundo político a la República, como la fór- designios divinos. En la antigüedad -diserta mula definitiva de la soberanía de las nacio- Villanueva el 19 de diciembre de 1880, en el nes” (3). Colegio La Concordia- se asociaban los ade- Quien violente, los preceptos republi- lantos con la guerra y los gobiernos absolutos. canos, las leyes, las instituciones republicanas Con el advenimiento de Jesús se desmoronan y las garantías de los ciudadanos, se encontra- por la acción de los bárbaros los grandes im- rá con el derecho de insurrección de los pue- perios. Entre la Edad Media y el descubri- blos contra los gobiernos tiránicos. Como en miento de América se van construyendo la su momento se vieron obligados los liberales historia con elementos contradictorios: por un federalistas, en 1846 y 1859, a realizar sus re- lado los poderes comunales hispánicos y la voluciones contra la oligarquía goda y centra- carta magna inglesa, simultáneamente con las lista (4). guerras y la Inquisición. Villanueva insiste en el respaldo desin- Van surgiendo el comercio, las manu- teresado que deben brindar los individuos que facturas, los inventos científicos, se van puedan a la creación de instituciones progre- creando las bases de la “filosofía natural” y de sistas: “En las repúblicas los ciudadanos de- un mundo más perfecto. Alcanzada la edad ben hacerlo todo en obsequio y servicio de to- moderna, arrecia la lucha por la educación, dos: así como cada miembro de la comunidad contra la ignorancia y la superchería. Se com- debe ser un guardián del orden público, un de- bate contra el absolutismo y la teocracia. fensor celoso de las leyes, por la misma razón Enarbolando la caridad se emancipa al no se le permite ser indiferente a la formación hombre y se accede: “…al reinado feliz de las del ciudadano. El que quiera ser republicano, instituciones políticas que hacen libre al hom- debe educarse para la república; una sociedad bre, respetado el hogar, sagrada la familia, in- que aspire a consolidar su independencia y a dependiente la palabra, la conciencia inviola- vivir al amparo de las instituciones, gobernán- ble, a los municipios autónomos, al pueblo so- dose por sí misma tiene que velar incesante- berano” (6). En este contexto impera la toleran- mente por la educación de sus individuos, tie- cia religiosa, se concilian las creencias y la ne que fomentarla y desarrollarla sin limita- ciencia, los avances económicos y técnicos fa- ción, y aplicar con patriotismo sus riquezas, cilitan la llegada de la divina libertad. Insiste tiempos y aptitudes a la obra común” (5). Laureano Villanueva en la necesidad de la ins- La prensa, el libro del pueblo, debe es- trucción. Esta debe reunir las más puras cos- timular esta orientación. Propone la creación tumbres, los buenos métodos de enseñanza, el de bibliotecas públicas para todas las especia- amor a la patria y la adoración a Dios. Y ¿Qué lidades y con horarios flexibles para que tanto debemos aprender? : “…todo lo indispensable el estudiante, como el científico y el trabaja- para la vida del hombre social: filosofía, mate- dor puedan instruirse. La educación, en espe- máticas, moral, religión, historia sagrada y pro- cial de la juventud, debe ser la meta de todo fana, el latín, el holandés, el inglés, el español, gobierno bien establecido. el francés y el alemán, la teneduría de libros, la La historia evidencia que la evolución geografía, el dibujo, la caligrafía y la música, y es hacia el progreso, hacia lo perfectible. Esta- muchos otros ramos de los conocimientos hu-

551 La historiografía política tradicional en la obra de Laureano Villanueva Ruiz Chataing, David ______manos que preparan a los jóvenes para entrar Rechaza la pena de muerte por delitos en el estudio de las ciencias superiores, o para políticos, reivindica la amnistía para restable- dedicarse con buena copia de ilustración a los cer la concordia en los pueblos desgarrados negocios ordinarios de la vida” (7). por las guerras civiles. Estas últimas, auténti- Con esas nuevas generaciones alta- cas plagas de la vida pública del país, se con- mente capacitadas alcanzaremos la República trarrestan por ejemplo, con el sostenimiento democrática. Así como reivindica la educa- del principio que el ejército no debe deliberar ción, repudia la esclavitud y exalta la iniciati- sobre los asuntos públicos y subordinarse a las va individual: “…el trabajo libre es la fuente leyes y el poder civil. Para desarraigar la anar- de la prosperidad de la naciones: pues con él quía, el personalismo, la amenaza de empeños en fin se honra el sudor del pueblo; transfor- pretorianos, hay que implantar el poder civil mando al siervo, que trabaja para enriquecer a que es: “El gobierno de la libertad y la justicia, su amo, en hombre libre, en hombre autóno- del derecho y de la razón: o si decimos, el go- mo, en ciudadano, en propietario, en patriarca bierno de las instituciones republicanas, de- de un hogar pobre, pero digno, glorificado por mocráticas y libres. Y si no nos equivocamos, la virtud y por la libertad” (8). En Venezuela, es esta la mayor manifestación de la vitalidad por supuesto, la base de esa diaria, fructífera, de un pueblo, el síntoma principal de que se ha labor es la agricultura. El trabajo en el campo llegado o a una normalidad envidiable en el debe mejorarse con el apoyo de la ciencia y el orden político y administrativo; de que el país mejoramiento de las estadísticas (9). realmente se gobierna por sí mismo, o como Sugiere la creación de bancos popula- dicen otros, de que ha entrado en mayoridad, res con bajas tasas de interés para sus socios que puede administrar sus intereses y desarro- (10). Exige del Congreso de la República pro- llarse en la vasta esfera de su actividad auto- tección a la industria, la enseñanza pública y nómica, sin poderes tutelares que le den inspi- lucha contra la pobreza. Defiende ardorosa- raciones y que le marquen el rumbo” (12). mente al gremio de los artesanos que serían Pero el poder civil necesita la paz para los grandes beneficiarios de todas estas reali- hacerse costumbre, para arraigarse, de prensa zaciones sociales. libre, y de partidos doctrinarios. En Venezue- La gran tarea colectiva es la participa- la se han creado las condiciones para el esta- ción de los ciudadanos en los asuntos públi- blecimiento de la república democrática. To- cos. El fundamento de la República es la vir- dos son liberales y federalistas. Nadie piensa tud que es más que el amor a la patria, a las le- en el fuero militar, ni en liberalismos econó- yes, y la más profunda maduración humana micos exagerados, ni en la pena de muerte, ni para vivir en libertad sin afectar los derechos en la restricción de la prensa, ni en penas infa- de los demás. El hombre público, el ser huma- mantes, ni en prácticas centralistas (13). Al re- no, convertido en ciudadano, es un ideal que cordar los gobiernos locales federalistas del se sustenta en una profunda transformación Oriente venezolano en tiempos de la emanci- ética: “La independencia del carácter, la sobe- pación, aprovecha para hacer un elogio de la ranía de la razón, la autonomía personal, el descentralización. Exalta el Poder Municipal respeto a sí mismo, son los signos que indican como la primera potestad de una nación civili- cuanto valen las cualidades morales del ciuda- zada. Este ámbito de la política local debe ser dano” (11). autónomo y deben respetárseles sus funciones

552 ______Revista de Ciencias Sociales, Vol. XVI, No. 3, 2010 y los recursos para desempeñarlas. Siendo la Para Laureano Villanuevala historia instancia política más próxima a los ciudada- tiene como objetivo exaltar a los grandes nos, es una escuela de democracia. Allí deben hombres. Para que sirvan de modelo inspira- converger los hombres de todas las toldas po- dor de obras de belleza, civilización y progre- líticas para solucionar sus problemas inme- so. Como tales considera tanto a José María diatos (14). Vargas (1786-1854), a Antonio José de Sucre En este orden de ideas Laureano Villa- (1795-1830), José Antonio Páez (1790-1873) nueva hace campaña a favor de los partidos y a Ezequiel Zamora(1817-1860). En cierta doctrinarios. Los ciudadanos deben agrupar- forma su modo de hacer la historia lo lleva a se, ligarse, discutir, divulgar, las diversas destacar el papel de los individuos en su de- ideas y programas. Urgen hombres de firmes senvolvimiento: “Distínguese en la historia la convicciones que resistan los embates del po- estirpe esclarecida de los personajes civiliza- der, la corrupción o la adulación. Las luchas dores por la ambición útil y magnánima que la de los partidos políticos, en cierta forma, repi- anima a empresas grandiosas a favor de la Pa- ten la evolución de la humanidad que se en- tria, ora para emanciparla de dominadores ex- cuentra impelida por fuerzas que la empujan traños o domésticos, ora para ilustrarla con ac- hacia delante, hacia lo perfectible. Sin diná- ciones beneméritas” (16). mica la sociedad se petrifica (15). La ciencia de Clío es: “…la impecable vestal, sin odios, ni amor, que alumbra las 3. Idea de la historia sombras de lo pasado con la sacra antorcha de la ciencia y del arte, para que la humanidad, En su formación como historiador Vi- por escarmiento propio, rectifique sus méto- llanueva hace explícitas las influencias de au- dos de mejora en la vía, por lo común dificul- tores europeos, especialmente de la historio- tosa, de su progreso y civilización” (17). La grafía francesa, tales como Francois-René de historia debe ser objetiva, desapasionada: Chateaubriand(1768-1848), el Louis Adolphe “Cuando se estudia la historia con una razón, Thiers (1797-1877), Jules Michelet (1798- serenamente educada en la escuela de filóso- 1874), Hipolito Taine (1828-1893) y Ernest fos eximios como Taine y Renan, que aconse- Renan (1823-1893). En ellos abrevó liberalis- jan hacer el escrutinio de los sucesos, con la mo, nacionalismo, romanticismo, republica- helada impasibilidad con que los médicos nismo, racionalismo y cientificismo y la rei- abren las entrañas de los muertos, en los gabi- vindicación del genio del pueblo. La filosofía netes de anatomía…” (18). Así ha de escribir- de la historia tiene, como ciencia, el objetivo se la historia. Con la separación rotunda del de establecer “la verdad de los hechos” y sujeto que indaga de lo investigado. La histo- como arte darles el aliento de la vida, una ver- ria es también maestra de la vida. La historia dadera resurrección como dice Michelet. El consiste en el relato detallado de los aconteci- epígrafe que inicia este texto, de reminiscen- mientos, en el establecimiento de la verdad de cias hegelianas, nos señala que otro objetivo los hechos, descritos con exactitud, especial- de la Historia es estudiar la evolución del alma mente los políticos y militares, aunque no des- de los pueblos, el devenir y la realización de su carta por completo los de otro tipo. Su expe- espíritu nacional. riencia como médico, historiador, periodista y

553 La historiografía política tradicional en la obra de Laureano Villanueva Ruiz Chataing, David ______político lo hace aproximarse a cierta idea de la preciada por los odios de partido surgidos pos- totalidad (19) pero aunque llega a formularla teriormente. como propuesta historiográfica e ideal y amor En la Vida de Don Antonio José de Su- por el conocimiento, sus escritos reflejan más cre. Gran Mariscal de Ayacucho (1895) no se la preocupación por los fenómenos generales limita a los elementos militares del personaje y, en especial, político-militares. sino que: “…es preciso hacerles conocer sus La historia debe mostrar la verdad y la hechos y carácter moral, los instintos que le justicia y: “reprobar lo que de alguna manera movían, su ingenio militar, sus ideales en la viola las leyes de Dios y los fueros de la huma- política y sus procedimientos en la ciencia del nidad”. Es decir la disciplina histórica es una gobierno” (21). Y consideramos que alcanza a suerte de jueza de las acciones de los hombres cumplir con su biografía del patriota cumanés del pasado. Una cantera para tomar ejemplos estos cometidos. que nos indiquen el camino a seguir. Una dis- Pero su consagración como historiador ciplina moral para educar a la humanidad. la alcanza con la Vida del Valiente Ciudadano El medio fundamental para reconstruir General Ezequiel Zamora (1898) en la que ubi- la historia son los documentos escritos. Villa- ca al general liberal-federalista en su contexto nueva se ufana de consultar para escribir sus histórico con verdadera maestría. Reconstruye obras, fuentes que no pueden sino considerar la historia de Venezuela desde las postrimerías como “primitivas”. Escribe basado en: “…los de la independencia, la hegemonía paecista empolvados y antiguos manuscritos de algunos (1830-1847), la supremacía monaguista u oli- archivos públicos y de muchos privados” (20). garquía liberal (1848-1858) (22), y los cruen- Los cita in extenso, introduce en sus libros do- tos años de la guerra federal (1859-1864), hasta cumentos completos, como si ellos hablaran, y la muerte de Zamora, en 1860. nos dijeran la verdad de lo acontecido. Laureano Villanueva realiza una suerte Adentrándonos en lo que fue su per- de síntesis de su óptica de la historia de Vene- cepción de la historia de Venezuela en su Bio- zuela en 1897. Forja una “filosofía de la histo- grafía del Doctor José María Vargas (1883) ria” para explicar la evolución histórica nacio- realiza una visión panorámica de la vida y el nal. Sostiene que la implementación de la tiempo histórico del eminente sabio. Lo anali- “idea liberal” en el país comprende tres etapas za como médico, científico naturalista, educa- estelares: la primera, la Revolución Nacional dor y político. de Independencia, a partir de 1810; la segun- En la Apoteosis de Páez (1888) revalo- da, entre 1821 y la disolución de la Colombia riza la actuación militar, durante la guerra de bolivariana, en 1830 y los años inmediata- independencia (1810-1821), del General José mente posteriores. Y la tercera la época del Antonio Páez. Sin éste carismático, genial y gobierno del General José Gregorio Monagas, valeroso guerrero, agregaríamos nosotros, no entre finales de los 1840 y mediados de 1850, hay emancipación, pues, facilitó la incorpora- cuando éste último gobernante decreta la abo- ción del pueblo -los temibles hombres de a ca- lición de la esclavitud, el 24 de marzo de 1854. ballo, los llaneros- al bando republicano que Esgrime que los grandes logros históri- habían peleado inicialmente bajo las banderas cos, materiales, intelectuales y civilizatorios en del Rey. Analiza luego la hegemonía del mis- Venezuela se deben a la idea y al Partido Libe- mo Páez, de los años 1830-1847, tan menos- ral. Entre estas, la abolición de la esclavitud. Sin

554 ______Revista de Ciencias Sociales, Vol. XVI, No. 3, 2010 embargo, elogia la conocida como la hegemo- carecían de riquezas. Aquel venezolano era nía paecista o conservadora (1830-1847). Le analfabeta, sometido a relaciones económicas atribuye a este período la eliminación del fue- de peonaje muy duras en hatos y haciendas, ro militar, la Ley de Patronato eclesiástico, el donde las enfermedades tales como el palu- Código de Instrucción Pública, el estableci- dismo, la tuberculosis, la gastroenteritis, man- miento de los primeros colegios y escuelas, la tenían muy altas las tasas de mortalidad; el reforma universitaria iniciada en 1827, la tole- promedio de vida no rebasaba los treinta años, rancia religiosa, se abolieron los diezmos, los y las prácticas caudillistas y personalistas pre- estancos y las alcabalas, se promulgó la ley de dominaron en nuestra vida pública amén del manumisión. Reconoce la presencia de gran- alto costo económico y en vidas humanas des personalidades intelectuales que formula- arrojadas por las guerras. También es repro- ron ideas y las debatieron, con altísimo nivel, chable que el liberalismo venezolano del siglo en las tribunas del Parlamento y en los escritos XIX, asumió de manera sumisa la división in- de la prensa (23). Ya en 1888 había reivindi- ternacional del trabajo que nos impuso Ingla- cado los logros de los tiempos paecistas. terra de meros productores de materias primas Villanueva expone las realizaciones de y consumidores de sus manufacturas. la Oligarquía Liberal o monaguista (1848- Su idea de progreso, proveniente de la 1858): la derogación de la liberal ortodoxa Ley modernidad europea, es hoy severamente de 10 de abril de 1834, abolición de la pena de cuestionada. La destrucción de la capa de ozo- muerte, reforma del código de imprenta a favor no, el calentamiento global, la crisis mundial de la libertad de pensamiento, distribución de de alimentos, la sobrepoblación humana, la baldíos y la abolición de la esclavitud. desertización de amplias zonas del planeta, la Respecto de esta visión de nuestro siglo extinción de muchas especies de fauna y flora, XIX, es necesario realizar algunas consideracio- la carencia de agua potable, el hambre y la po- nes críticas, y en general, sobre su obra que he- breza de millones de seres humanos, eviden- mos simplemente expuesto y sobre la cual, aho- cian que la perfectibilidad humana tienen un ra pasamos a realizar algunos planteamientos. límite en la destrucción del ambiente natural y estamos al borde, si no modificamos los patro- 4. Valoración histórica de la obra nes de consumo y civilizatorios, de la desapa- de Laureano Villanueva rición del homo sapiens. Igualmente sus crite- rios de lo que es lo civilizado es acusado hoy Refiriéndonos a la parte de sus ideas de eurocéntrico. No se puede reducir a toda la políticas pudiéramos objetarle que su espíritu humanidad a la periodización de Historia An- democrático e igualitario se estrella contra la tigua, Medieval y Moderna como la sustenta- realidad de unos regímenes, entre ellos los li- ba Villanueva y con él muchos otros historia- berales amarillos (1864-1899) a los que esta dores. El ideal de desarrollo humano no se adscrito, donde prevalecieron los privilegios puede minimizar al camino que ha trazado la de la oligarquía y la indescriptible pobreza de Europa Occidental. La crítica cultural con- la gente humilde. En efecto la Venezuela del temporánea a revalorizado a todos los pueblos siglo XIX se caracterizó por una población y sus culturas. Nuestro supuesto salvajismo y predominantemente excluida: las mujeres, las barbarie no son más que diferencia, como di- personas que no sabían leer y escribir y que ría Leopoldo Zea.

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Desde el punto de vista histórico, luce sabido, perseguido político del “Autócrata Ci- inaceptable su reducción de las causas de los vilizador”. movimientos históricos a las grandes indivi- Laureano Villanueva, además, cuando dualidades. Sin embargo, en su descargo, he- estudia los tiempos de José Tadeo Monagas y mos hecho notar su saludable tendencia a es- su hermano José Gregorio Monagas, conoci- tudiar en su contexto, en su marco de totali- do como la “hegemonía monaguista” (1848- dad, los hechos históricos. 1858), no hace ninguna alusión al nepotismo, Sobre la añosa discusión sobre la obje- la corrupción, ni a las prácticas autocráticas de tividad en la historia hoy día se ha generaliza- estos caudillos orientales. do la idea, según la cual, es imposible separar La repartición de baldíos se hizo en de- completamente el sujeto que investiga y el ob- trimento de las comunidades indígenas, cam- jeto estudiado si ambos son parte de socieda- pesinas y de las tierras públicas que termina- des humanas. La veracidad surge más bien del ron ensanchando los latifundios de los terrate- uso de metodologías adecuadas (la crítica his- nientes. La República Oligárquica, comanda- tórica) y de la amplia discusión de las distintas da por las élites criollas, impusieron más du- versiones sobre los acontecimientos. La histo- ras condiciones contra las tradiciones comu- ria tampoco es considerada un juez superior e nitarias que la dominación española. Idealiza irrebatible. En vez de juzgar hoy los amigos a Ezequiel Zamora servidor de estos déspotas. de Clío se empeñan en comprender, en expli- Le atribuye banderas agraristas y revolucio- car, el origen y la dinámica de lo acaecido. narias que la evidencia documental no permi- Aquél culto decimonónico a los docu- te sostener. Zamora no pasó de un republica- mentos está hoy superado. Más importante nismo y federalismo democrático y liberal. que la reproducción o la simple narración de Que, a nuestro parecer, es bastante avanzado lo que contengan los documentos, se trata es para aquella época. La lucha de aquél enton- de cotejarlos con muchas otras fuentes (ora- ces era liberal, no democrática y mucho me- les, audiovisuales) que nos ofrece la contem- nos socialista. Un agrarismo revolucionario poraneidad para intentar reconstruir segmen- tendrá que esperar al siglo XX, a la Revolu- tos del pasado. También aceptamos hoy, con ción Mexicana y a la muerte del General Juan cierta humildad, que el agente intermediario Vicente Gómez, el 17 de diciembre de 1936, para esa reconstrucción histórica, más que el para formularse e intentar aplicarse. Sin em- documento, es el historiador basado en su for- bargo los intentos reformistas agrarios en Ve- mación y en su capacidad interpretativa. nezuela fueron fallidos en 1945, 1948, en los La síntesis del proceso histórico vene- años sesenta durante el gobierno constitucio- zolano que realiza en 1897 Villanueva está nal de Rómulo Betancourt y da signos de po- signado por la circunstancia de una prosa de bre realización en el presente 2008. efemérides. El tercer gran momento del pro- En lo que respecta a la guerra federal yecto nacional liberal en Venezuela no es la (1859-1864) la cual fue larga, devastadora y época de los Monagas, sino la hegemonía del cruel, Villanueva es benigno con el bando que General Antonio Guzmán Blanco (1870- respalda, traicionando así su cometido histo- 1888) por todas sus realizaciones materiales, riográfico de no deformar la realidad por pa- culturales y educativas. Pero Villanueva odia- siones de partido. Los liberales federalistas ba a muerte a Guzmán Blanco y fue, como es (amarillos) eran un ejército apegado, según

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Villanueva, a las leyes. Pero por lo contrario 5. Conclusiones los centralistas cometieron las mayores atro- Desde el punto de vista ideológico, Lau- cidades. En realidad, ambas facciones arma- reano Villanueva se asume cristiano, masón, li- das cometieron violencias y abusos realmente beral y demócrata. Apoyó las causas progresis- dantescos. Y han arraigado, las guerras civiles tas tales como la abolición de la esclavitud, la y las dictaduras, una cultura de la violencia educación del pueblo, el sufragio libre, la Repú- nada fácil de superar. blica democrática, la no deliberación del ejército Su reivindicación del Poder Municipal, y su subordinación al poder civil, las sociedades del federalismo no lo conduce a la revaloriza- de socorro mutuo, las cajas de ahorro, la paz, los ción de las historia de los procesos locales ni gobiernos de instituciones y no personalistas. regionales. Su historia es, siempre, nacional, Auspició el federalismo, la autonomía de los es- predominantemente político-militar, y no fi- tados y el poder municipal. Reflexionó sobre la guran mucho ni las mujeres, ni los indígenas, necesidad de partidos doctrinarios que no res- ni los colectivos, ni las localidades. Simple te- pondieran a facciones personalistas. lón de fondo de la actuación de los héroes. Au- En el campo historiográfico, estudió fi- ténticos motores de la historia. guras cimeras de nuestra historia. Villanueva En cuanto a su estilo, si bien alcanza, en considera que los individuos geniales desem- ocasiones, innegable belleza expresiva, pode- peñan un rol fundamental en el desenvolvi- mos decir que su exposición está plagada de miento de los procesos históricos. Su concep- descripciones excesivas, digresiones, inser- ción heroica del rol del individuo en la histo- ción de extensos documentos. Pesadas y lar- ria, en cierto modo, se corrige con la ubicación gas narraciones provenientes de la historia de en su contexto histórico de estas personalida- Grecia, Roma, la Edad Media y la Europa de des, que parcialmente realiza Villanueva. su tiempo. Abundan también las autocitas. La historia para Villanueva debe narrar Sin embargo, no recarguemos con críti- los hechos, ser objetiva. La valoración moral cas anacrónicas a Laureano Villanueva. No le de lo acaecido, sirve a la humanidad para co- podemos reclamar que no hiciera la historia, rregir sus errores y avanzar por el curso de la hace casi cien años, como se escribe hoy. Fue evolución hacia la perfección. un intelectual profundamente consustanciado A pesar de las críticas que se haga de con su tiempo histórico. Y es innegable su sus libros (eurocéntricos, centrados en lo polí- aporte al intento de conocer la historia de Ve- tico-militar, etc.), aún hoy es útil su lectura, nezuela mediante su estudio de figuras cime- para conocer capítulos fundamentales de ras, ubicadas en su contexto histórico, tales nuestra historia venezolana del siglo XIX. como José Antonio Páez, Antonio José de Su- cre, José María Vargas y Ezequiel Zamora. Notas Sus libros, con un poco de paciencia, se leen 1. Laureano Villanueva. “La idea liberal” El De- aún con provecho. Es un eminente exponente ber, Caracas, 7 de junio de 1883, Año I, Mes V, de la historiografía tradicional, romántica, he- Número 91, p. 2. roica, liberal, nacionalista, pretendidamente 2. Laureano Villanueva. Primer Libro Venezo- científica, del siglo XIX venezolano. lano de Literatura, Ciencias y Bellas Le- tras… p. 518.

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3. Laureano Villanueva. Vida de Don Antonio 16. Laureano Villanueva. Vida de Don Antonio José de Sucre. Gran Mariscal de Ayacucho, José de Sucre. Gran Mariscal de Ayacucho, pp. 95-96. p. 1. 4. Laureano Villanueva. Vida del Valiente Ciu- 17. Laureano Villanueva. Vida del Valiente Ciu- dadano General Ezequiel Zamora,T.I,pp. dadano General Ezequiel Zamora,t.I,Pp. 142-150. 20-21. 5. Laureano Villanueva. “Necesidades públicas” 18. Discurso del Doctor Laureano Villanueva El Deber, Caracas, 16 de febrero de 1883, Año en el Panteón Nacional el 24 de marzo de 1, Mes 1, número 6, p. 2. 1897 con motivo de la inauguración del mo- 6. Discurso pronunciado por el Dr. Laureano Vi- numento del General José Gregorio Mona- llanueva en el Colegio Concordia el 19 de di- gas Redentor de los esclavos,p.9. ciembre de 1880 como orador de orden en el 19. La idea de totalidad la desarrolla cuando estu- acto de la repartición de premios. Curazao: dia la sabiduría del Doctor José María Vargas Imp. De La Librería, 1880, 8 p. Reproducido en en: Laureano Villanueva. “Las ciencias en Ve- el Primer libro venezolano de Literatura, Cien- nezuela” Primer libro venezolano de Litera- cias y Bellas Artes (Ofrenda al Gran Mariscal tura, Ciencias y Bellas Artes…, pp. 214-215. de Ayacucho, 1895, pp. 517-519. 20. Laureano Villanueva. Biografía del Doctor 7. Laureano Villanueva. Ob. Cit., p. 519. José María Vargas,p.70. 8. Discurso del Doctor Laureano Villanueva en el 21. Laureano Villanueva. Vida de Antonio José Panteón Nacional el 24 de marzo de 1897 con de Sucre. Gran Mariscal de Ayacucho,p. motivo de la inauguración del monumento del XV. General José Gregorio Monagas redentor de 22. La hegemonía monaguista ha sido muy bien los esclavos, p. 8. estudiada por: Rafael Castillo Blomquist. José 9. Discurso del señor Dr. Laureano Villanueva al Tadeo Monagas: auge y consolidación de un tomar posesión de la Presidencia del Estado en caudillo. Caracas: Monte Ávila, 1987, 277 p. el Salón de recepciones del Capitolio de Valen- 23. Discurso del Doctor Laureano Villanueva cia el 28 de enero …, 13 p. En términos simila- en el Panteón Nacional el 24 de marzo de res se manifestará en un periódico del interior 1897 con motivo de la inauguración del mo- del país: Laureano Villanueva. “Agricultura” numento del General José Gregorio Mona- El Constitucional, Valencia, 23 de junio de gas redentor de los esclavos, pp. 7-8. 1870, p. 2. 10. Laureano Villanueva. “Monte de Piedad de los Bibliografía citada artesanos” El Deber, Caracas, 13 de febrero de 1883, Año I, Mes I, número 3, p. 2. Villanueva, Laureano (1880). Discurso pronun- 11. Laureano Villanueva. Ob. Cit., p. 201. ciado por el Dr. Laureano Villanueva 12. Laureano Villanueva. “El Poder civil” El De- en el Colegio Concordia el 19 de di- ber, Caracas, 29 de mayo de 1883, Año I, Mes ciembre de 1880 como orador de orden IV, Número 83, p.2. en el acto de la repartición de premios. 13. Laureano Villanueva. “El poder civil II” El Curazao: Imp. De la Librería, 8 p. Deber, Caracas, 30 de mayo de 1883, Año I, Villanueva, Laureano (1883). Biografía del doc- Mes IV, 84, p. 2. tor José María Vargas. Caracas: Im- 14. Laureano Villanueva. Vida de Don Antonio prenta editorial de Méndez y Ca., 375 p. José de Sucre. Gran Mariscal de Ayacucho, pp. 25-26. Villanueva, Laureano (1888). Apoteósis de 15. Laureano Villanueva. “Partidos políticos” El Paéz, descrita por el doctor Laurea- Deber, Caracas, 4, 5, 12 y 14 de mayo, de no Villanueva de orden de la Junta 1883, Año I, Mes IV, números 64, 65, 70 y 71, Directiva. Caracas: Imp. y Lit. del Go- p. 2. bierno Nacional, 254 p.

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Villanueva, Laureano (1895). “Las ciencias mé- Villanueva, Laureano (1895). Vida del Gran dicas en Venezuela”. En: Primer Li- Mariscal de Ayacucho. Caracas: Tip. bro Venezolano de Literatura, Cien- Moderna, 590 p. cias y Bellas Artes. Ofrenda al Gran Villanueva, Laureano (1897). Discurso del doc- Mariscal de Ayacucho. Caracas: Tip. tor Laureano Villanueva en el Pan- El Cojo, Pp. 213-230. teón Nacional el 24 de marzo de 1897 Villanueva, Laureano (1895). “Discurso”. En: con motivo de la inauguración del Primer Libro Venezolano de Litera- monumento del general José Grego- tura, Ciencias y Bellas Artes. Ofren- rio Monagas, redentor de los escla- da al Gran Mariscal de Ayacucho. vos. Caracas: Imprenta Nacional, 18 p. Caracas: Tip. El Cojo, Pp. 517-519. Villanueva, Laureano (1898). Vida del Valiente Villanueva, Laureano (1895). “Discurso”. En: Ciudadano General Ezequiel Zamora. Primer Libro Venezolano de Litera- Caracas: Imprenta Federación, 455 p. tura, Ciencias y Bellas Artes. Ofren- Villanueva, Laureano (1899). Discurso. Valen- da al Gran Mariscal de Ayacucho. cia: Imp. García, 13 p. Caracas: Tip. El Cojo, Pp. 517-519.

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