Camino de las raíces, por el bosque, entre la fronda; “ “la voz del corazón dice: Un camino circular lo que amamos sólo importa. por el territorio de Ayuntamiento José Luis Puerto de La Alberca Parque natural Las Batuecas - Sierra de Francia Coordinación general Dpto. de Turismo, Diputación de Comisariado, diseño gráfico A Mano Cultura S.L.L. Fotografía: José Agustín Sánchez Imprime Imprenta Provincial Depósito Legal: S.1440-2010 4 Este camino que se inicia en La Alberca es un recorrido por un bosque Ermita de San Marcos de robles y castaños. El camino nos acerca hasta la ermita de Majadas Viejas, Laguna de pasando antes por el Montón de Cantos y por las piedras donde se repre- San Marcos senta la Loa en la romería de la Virgen. Se retoma el camino para llegar a La raíz la laguna y a la ermita de San Marcos, consolidada como un ejemplo de raíz es lo que nos ancla a un territorio y nos hace sentirnos comu- conservada, y desde allí se vuelve a La Alberca pasando por el área recrea- nidad: unos paisajes, unas celebraciones, un modo de entender y de tiva de Fuente Castaño. respetar la naturaleza. También raíz es lo que desde el suelo ayuda a 5 crecer y a extenderse, lo que posibilita despegarse del terreno para El camino se apoya en dos senderos existentes: ver más allá. uno de gran recorrido, el GR-10, otro de pequeño recorrido, 3 Estás en el camino de las raíces. Un camino marcado por las huellas Fuente Castaño-Majadas Viejas. 3 de la memoria. El camino atraviesa espacios donde se evidencia la 3 presencia humana, visible a través de signos en el paisaje que reflejan 6 la vida de sus habitantes, su labor, su imaginario, sus creencias y sus

a Mogarraz anhelos. a Salamanca a La Alberca 2 Y en este camino las propuestas de arte y naturaleza a nos invitan a mirar de nuevo Ermita de Majadas Viejas hacia las raíces y también hacia el cielo. 1 Camino Carreteraamino ! Pistaarretera Sentidosta aconsejado Panel informativo Tiempo aprox. Recorrido 8 Km. Cruce la carretera 2h 45min Dificultad: baja con precaución 4 CARLOS BELTRÁN Ermita de “Panal” San Marcos El panal, nido, origen, 4 Laguna de FERNANDO CASÁS espacio que alberga vida. San Marcos “Asteroide S 09 2010” 5 Acumular alimento para los otros. Construcción animal que, El agua, la laguna, espejo del cielo, desde la sencillez, sorprende. testigo de noches silenciosas. Colmeneros, miel, turrón... Y al lado un recinto sagrado FERNANDO MÉNDEZ Escudo, joyas... el pasado huele dulce. —¿acaso no lo es la naturaleza entera?— “Sombra” Un panal para mirar a través de él. observado por la montaña soberana, La sombra del árbol es una raíz. la Peña de Francia, el lugar, la referencia. La sombra se mueve, Y abrazada por ese espacio, 6 desaparece, una piedra en bruto, arrancada a la tierra, cambia de intensidad. 5 que se deja pulir y transformar. El árbol permanece. Raíces íntimas que invitan al cambio. Las raíces se mueven cuando crecen. El árbol se mueve cuando crece. Direcciones opuestas. 3 Crecimiento continuo o muerte. 3 IRAIDA CANO Materia viva y piedra que recoge 3 “Hojas de roble” un instante y lo congela. El juego de permanecer. Reloj de sol, tiempo detenido. La hoja de roble cae, Sombra. 3 ha sido sombra y refugio y frescor... 6 También cama para los animales en las cuadras. Cae y se funde con la tierra, La Alberca se hace alimento para los nuevos brotes, para la nueva vida. Para que crezca lo que estaba 2 —ramas, raíces...— Hacer la hoja más tangible, sorprendentemente inmutable, con otra dimensión en el espacio Ermita de Majadas Viejas y en el tiempo. Todo cambia. 1 2 1 BEGOÑA PÉREZ LUCÍA LOREN “Del espejismo de un bosque” “La majá” Árboles, plantas que crecen en ¿Qué guardan estas paredes? el silencio de los tiempos marcados ¿Qué protegen? ¿De qué defienden? al ritmo de las lluvias 1,1,2,3,5... ¿Dónde están los pastores? empapando la tierra. ¿Quién come el monte y lo pisa Atrapar el paisaje, reflejar la montaña sagrada, y lo protege de los fuegos? incorporar al caminante. Paredes que son para recordar La obra cambia. La naturaleza cambia. la esencia de lo que fuimos. La vida continúa. Raíces perdidas. Como soporte la divina proporción matemática universal que se impone. Nada es casual. Aquí tampoco.