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Provided by Universidad Academia de Humanismo Cristiano: Portal de Revistas Académicas Universidad Academia de Humanismo Cristiano. Tiempo Histórico. N°3 /147-165/. Santiago-. 2011.

ESTADO Y COMPAÑÍA EXPLOTADORA. APUNTES PARA UNA CARACTERIZACIÓN DEL PODER COLONIAL EN RAPA NUI (1917-1936)*

Miguel Fuentes** Cristián Moreno Pakarati*** Alejandro Montecinos****

Resumen Abstract

Este trabajo busca aportar con algunos ele- This paper seeks to contribute to the charac- mentos para una caracterización de la situa- terization of the situation of colonial power ción del poder colonial en Rapa Nui duran- in Rapa Nui during the 1917-1936 period. te el periodo 1917-1936. Teniendo por base Based on the study of documents acquired la revisión de documentos provenientes del from the archives of the Naval Ministry and Archivo del Ministerio de Marina y del Ar- the Administrative Division of Valparaíso, chivo de la Intendencia de Valparaíso, lle- varemos a cabo una reflexión en torno a la the study provides a reflection on the- ac acción del Estado chileno y la “Compañía tions of the Chilean State and the “Com- Explotadora de Isla de Pascua” durante estos pañia Explotadora de Isla de Pascua” during años. those years.

Claves Key Words

Rapa Nui, estado, compañía, poder colo- Rapa Nui, state, company, colonial power. nial.

Recibido: 07 de diciembre de 2011 Aceptado: 06 de enero de 2012

* Se agradece la colaboración de los miembros del proyecto de investigación en el cual se inserta este artículo: “La Compañía Explotadora de Isla de Pascua. Patrimonio, Memoria e Identidad en Rapa Nui”, a cargo de Claudio Cristino y Miguel Fuentes (FONDART 2010, V Región). Agradezco además la ayuda de Alberto Hotus, Felipe Pakarati y Rolf Foerster, con quién llevé a cabo un trabajo de colaboración mutua en el Archivo del Ministerio de Marina durante el año 2010. Finalmente, es importante mencionar el importante apoyo de Elizabeth Grant (lingüista) y Riet Delsing (antropóloga) en la elaboración de este trabajo. ** Licenciado en Antropología con mención en Arqueología. Universidad de Chile. Correo electrónico: [email protected] *** Licenciado en Historia. Pontificia Universidad Católica de Chile. Correo electrónico: [email protected] **** Licenciado en Historia. Universidad de Santiago de Chile. Correo electrónico: [email protected]

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acia comienzos del siglo XX, promoviendo una reconfiguración del se desarrolla en Rapa Nui uno marco de relaciones sociales en Pascua. de los más importantes levan- Htamientos indígenas en contra del do- A continuación, teniendo por minio colonialista de la isla y las opre- base la revisión de documentos prove- sivas condiciones de vida impuestas por nientes del Archivo del Ministerio de la “Compañía Explotadora”. Esta fue la Marina y del Archivo de la Intendencia llamada “Rebelión de ”, desarro- de Valparaíso, este artículo se propone llada a mediados de 1914 y descrita por desarrollar, a partir de una reflexión en varias fuentes contemporáneas: Por los torno a la acción del Estado chileno y la documentos de un sumario de la Ar- “Compañía Explotadora”, una caracteri- mada llevado a cabo en la isla en 19141, zación inicial de la situación del poder por el relato de los nativos obtenido por colonial en Rapa Nui durante el periodo 6 el profesor Vives Solar2 y finalmente el 1917-1936 . relato testimonial de Katherine Rout- ledge3. Aunque derrotada4, esta rebelión tuvo como efecto dar inicio a una serie El Estado de significativos cambios en la estructu- ra política de la presencia colonial en la ¿Qué forma de Estado existe en isla. Pascua durante este periodo? ¿Cuál es el carácter de la presencia estatal? ¿Co- Producto del desarrollo de esta re- lonialismo? No hay duda. Sin embargo, belión y de la necesidad de impulsar un ¿cuál es la naturaleza de este último? nuevo “pacto colonial” entre el Estado, la Comunidad rapanui y la Compañía Una primera cuestión que resalta Explotadora, el gobierno realiza en 1915 en este punto es, sin duda, el carácter se- la designación de un Subdelegado Ma- mi-colonial (atrasado) de la propia “po- rítimo independiente (nominalmente) tencia” anexionista: Chile7. A diferencia de la CEDIP5. Igualmente, la firma del de los grandes imperios coloniales de la “Temperamento Provisorio” de 1917 época, la presencia chilena en Polinesia significa el establecimiento de un nuevo se destacó, efectivamente, por poseer un contrato entre la Compañía y el Estado, carácter sumamente precario. Durante

1 Consejo de Jefes de Rapa Nui, Alberto Hotus y otros, Te Mau Hatu ‘o Rapa Nui: Los soberanos de Rapa Nui. Pasado, presente y futuro (Santiago: Editorial Emisión, Primera edición, 1988). 2 José Ignacio Vives Solar, “Una revolución en la Isla de Pascua en 1914” en Pacífico Magazine, vol. X, 60 (1917): 655-664. 3 (Mrs. Scoresby Routledge), The Mystery of (London: 1919). 4 Si bien es cierto que la alianza CEDIP-Estado logró asestar un importante golpe en contra del movimiento indígena liderado por Angata, es necesario mencionar que esta rebelión obtuvo algunas ventajas estratégicas para los rapanui, en especial la disminución del poder de la Compañía en la isla. 5 CEDIP: Compañía Explotadora de Isla de Pascua. 6 Para una revisión sintética de los antecedentes de la colonización europea y chilena en Pascua, revisar Claudio Cristino et al. Isla de Pascua: Proceso, Alcances y Efectos de la Aculturación (Santiago: Instituto de Estudios Isla de Pascua Universidad de Chile, 1984). 7 Para un desarrollo de esta afirmación pueden revisarse los siguientes trabajos: Luis Ortega, “Acerca de los orígenes de la industrialización en Chile, 1860-1879”, en: Nueva Historia 2 (1981): 3-54 y Gabriel Salazar, Historia de la acumulación capitalista en Chile: apuntes de clase (Santiago: editorial LOM, 2003).

148 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos gran parte del periodo 1917-1936, Pas- tación del periodo, el arribo anual de cua fue considerada, en los hechos, tan misiones de la Armada. Estas misiones solo como un “territorio fiscal” destina- cumplían el papel de informar al Minis- do a la explotación privada de una po- terio de Marina acerca de la situación en derosa firma extranjera8. Durante estos la isla, así como la tarea de resguardar la momentos, aunque defendiendo su so- obediencia de las autoridades locales y beranía política sobre la isla, el gobierno la población a las directrices del gobier- ni siquiera fue capaz de certificar la pro- no. Al mismo tiempo, dichas misiones piedad fiscal de este territorio, así como debían velar por el cumplimiento de los tampoco de exigir a la CEDIP el cobro acuerdos entre el Estado y la Compañía de un canon de arrendamiento por la establecidos por el Temperamento de utilización de las tierras y el ganado exis- 1917, a la vez que controlar y regular el tente en Rapa Nui9. desempeño de los subdelegados. Otra de las funciones de estas misiones con- Con todo, a pesar de sus limita- sistía en resolver los conflictos que se ciones, la acción del aparato estatal llegó suscitaban entre la población y las au- a ejercer un alto impacto en el contexto toridades, realizando para ello investiga- isleño. La existencia de instituciones gu- ciones sumarias en las cuales se recababa bernamentales permanentes encargadas información de las partes en desacuer- de la regulación de la vida de los nativos, do. Generalmente, con el aval de fuertes constituyó en este sentido una influen- contingentes armados, las decisiones de cia que afectó fuertemente el marco so- los comandantes de la Armada tenían cial rapanui. Tanto el arribo periódico un carácter resolutivo, siendo respetadas de funcionarios militares, civiles, profe- transversalmente. sionales y la llegada una vez al año de barcos de la Armada, con el peligro la- Aunque por cortos periodos, la tente de la deportación10, dotaron al po- llegada de estas misiones tenía por re- der estatal de una corporeidad imposible sultado un sustantivo fortalecimiento de ser soslayada. de las instituciones y del poder estatal en la isla. Durante algunos días, los co- En general, la presencia del Estado mandantes parecían tener la capacidad chileno en Rapa Nui se manifiesta de di- de “resolverlo todo”, desde cuestiones de ferentes formas. Una de las más impor- orden meramente administrativo has- tantes fue, como constata la documen- ta problemas de tipo moral como, por

8 Más allá de producirse durante estos momentos una mayor integración de este territorio en el marco nacional, dicha situación queda de manifiesto en las tratativas impulsadas por el gobierno chileno (producto de lacrisis económica mundial de 1929) para arrendar o vender la isla a algunas potencias como Estados Unidos, Reino Unido, Japón o Alemania. Los primeros contactos fueron en el gobierno de Ibáñez (1930) y casi se consigue durante el segundo gobierno de Alessandri Palma (1937), siendo los únicos interesados EEUU y Japón. De esta manera, la transformación de Rapa Nui en “Parque Nacional” y “Monumento Histórico” durante los años 30’s podría en tenderse, igualmente, como una política de “puesta en valor” de la isla para su posterior venta. Véase sobre esto el artículo de Grant McCall “Japan, Rapa Nui and Chile’s uncertain sovereignty”, en Rapa Nui Journal, tomo 9, 1 (1995). 9 Víctor Vergara, “La Isla de Pascua: Dominación y Dominio” (Seminario de Derecho Público, Memoria de Prueba Licenciatura en Leyes, Biblioteca Nacional 1939). 10 Véase el artículo de Rolf Foerster, “Voluntary Trip or Deportation? The Case of King Riroroko and Policies of Deportation on Easter Island (1897-1916)”, en Rapa Nui Journal, volumen 24, 1 (2010).

149 Estado y Compañía explotadora. Apuntes para una... ejemplo, la existencia de familias rapa- funciones similares a las llevadas a cabo nui “mal constituidas”11. por los comandantes. Como dijimos: in- formar periódicamente al Ministerio de “Tan pronto se hubo fondeado en [se refiere a la corbeta Ba- Marina, autoridades y gobierno central quedano] viene a bordo el Sub-De- sobre la situación en Pascua, velar por el legado de la Isla y representante de cumplimiento de las directrices de este la Casa Williamson Balfour […] Los último y por el respeto a los acuerdos Oficiales inician el cumplimiento de las comisiones recibidas que se dis- entre el Estado y la Compañía estable- tribuyen así: Capitan de Corbeta Sr. cidos en 1917. Figuraba asimismo entre Fernández: Atención e investigación las responsabilidades del subdelegado de los reclamos elevados por los nati- resolver los conflictos surgidos entre la vos, tanto los escritos como aquellos verbales […] Contador Io. Sr. Astor- población, las autoridades locales y la ga: Revisación de inventarios de los empresa ganadera, la administración de efectos fiscales y de las dependencias las oficinas del registro civil, la policía y confeccionadas el año 1917. Ciruja- la escuela, al igual que el buen funcio- no Io. Sr. Merino: Exámen sobre la propagación de la avariosis entre los namiento de caminos, lugares públicos, nativos y el mismo sobre la lepra y sí cementerio, leprosería, etc. los leprosos recluídos en la leprosería son atendidos conforme al acuerdo Tal como en el caso de los coman- vijente del año 17 por la Comisión dantes, la función del subdelegado tenía consultiva de la isla. Capellán Sr. Fer- mandois: Fuera de la misión propia como objetivo, por lo tanto, regular la de su Ministerio, tuvo especial encar- mayor parte de los aspectos de la vida go de cerciorarse si se cumple con la pública y privada de los rapanui. Entre obligación respecto a la alimentación otras tareas, aquel llevaba adelante pe- de los nativos y averiguar los nom- bre de aquellos que no tenían lejiti- riódicos censos de población, inventa- mamente constituida la familia […] rios de bienes fiscales, ordenanzas para Finalmente, los reclamos recibieron resguardar el aseo y la higiene de los in- solución con arreglo a la Ley el mis- mo día de nuestra salida en lo que dígenas, incluyendo además una serie de respecta a familias no lejitimadas y iniciativas para el fortalecimiento de la los casos de amancebamiento”12. “moral y las buenas costumbres” entre aquellos13. Muy distinta era la situación del poder estatal una vez que estas misiones Sin embargo, especialmente en hacían abandono de la isla. En los he- momentos en los cuales no se encon- chos, el papel del Subdelegado Maríti- traban en Pascua contingentes militares mo, principal representante del gobier- para asegurar el cumplimiento de las no chileno en Rapa Nui, debía cumplir ordenanzas estatales, la actuación del

11 Uno de los efectos de la llegada de estas misiones era, bajo la constante amenaza de la deportación y otros castigos, la generación de un clima de auto-disciplina (y auto-represión) entre la población indígena. 12 “Parte del 22 viaje de instrucción alrededor del Pacífico”, Capitán de Fragata Don Felipe Wiegand Rodríguez, “General Baquedano”, Archivo del Ministerio de Marina (desde ahora AMM), vol. 2503, Pascua, 25 de diciembre de 1921. 13 Para una mayor información sobre este punto revisar los siguientes documentos: “Memoria y Balance Jeneral del año 1926”; “Resumen Jeneral del año 1927 en Isla de Pascua” y “Resumen, Inventario Jeneral del año 1928”, Archivo de la Intendencia de Valparaíso (desde ahora AIV), volumen 919, años 1926-1947.

150 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos subdelegado se veía permanentemente nativos abusan y no se les quita la cuestionada. No solo los nativos, sino mala costumbre, porque los mismos marinos tienen la culpa. […] habría que en ocasiones también los funciona- sido preferible un puesto de portero rios gubernamentales locales, e incluso de la Moneda, pues ese insignificante los mismos administradores de la CE- puesto, lo considero mas digno que el DIP, se encargaban de resistir, a veces de Subdelegado de ésta Isla, aunque de todo lo que me ha pasado no me con frecuencia, las decisiones de este úl- debía extrañar, porque en una comi- timo14. En ciertas oportunidades, estas da que me dio de despedida mi hijo, tensiones estallaban públicamente, en- Mayor de Carabineros José Manuel contrando con motivo de la visita anual Olalquiaga Ibarra, un Sr. Coman- dante que se encontraba presente, de los comandantes una solución mu- me dijo que el puesto de Subdelega- chas veces desfavorable para los propios do de la Isla de Pascua no era nada, subdelegados. porque un Sargento de su escuadron tenía mas atribuciones, de lo que yo Hacia mediados de la década de me quise ofender, sin saber que me estaban diciendo toda la verdad”15. 1930, esta situación es retratada por el Subdelegado Marítimo Manuel Olal- La debilidad del cargo del Subde- quiaga. Indignado por la actitud de los legado Marítimo (y, por tanto, la debili- oficiales de la Armada hacia su persona, dad del conjunto de la estructura estatal este funcionario se queja de aquellos en en la isla) se explica durante este perio- los siguientes términos: do por varias causas. Por un lado, como “Todo [esto] lo considero improce- ya dijimos, debido a la inexistencia por dente, y aún hasta si se quiere, es [in- parte del Estado de una política colonial digno], porque […] estos procederes efectiva, lo que se tradujo en un aban- rebajan la Autoridad, poniéndola en dono casi constante de los habitantes situación ridicula, haciéndole hacer un papel verdaderamente desprecia- isleños por parte del gobierno chileno. ble, y siento el decirlo que esto pasa solo en la Isla de Pascua, pues en el Al nivel de las instituciones guber- Continente en cualquier Reten de namentales locales, lo anterior significó Carabineros, que es atendido solo por un simple Sargento, el capitán una carencia casi crónica de recursos del cuerpo, al hacer su visita, no vá básicos en materia de alimentación, ves- a interrogar a los habitantes de alre- tuario, medicamentos, implementos de dedor del Reten, para preguntar de educación, materiales de construcción, la conducta, ni si tienen reclamos en su contra, y si encuentra alguna recursos agrícolas, etc. De hecho, en falta en el Sargento, lo cambia y le gran medida, los únicos insumos con aplica el castigo que merece, pero sin los cuales contaba el subdelegado eran que nadie se dé cuenta de ello, esto las tierras y animales del fisco (muchas se hace para no denigrar al Sargento, a la Autoridad […]; pero aquí suce- veces en pésimas condiciones), así como de lo contrario y es por eso que los con los recursos que debía proporcionar

14 Entre otras particularidades de este cargo en Rapa Nui, los propios subdelegados se desprestigiaban a sí mismos debido a un evidente doble discurso sobre moralidad. Es cosa de tener en cuenta que varios de ellos tuvieron relaciones extramaritales con mujeres nativas, dejando varios hijos no reconocidos en la isla. 15 “Memoria del Subdelegado Marítimo Manuel Olalquiaga”, AMM, vol. 3675, Hanga Roa, Abril de 1936, p. 24.

151 Estado y Compañía explotadora. Apuntes para una... la CEDIP, de acuerdo al Temperamen- Otra de las causas de esta verda- to16. dera debilidad estructural del Estado chileno en Rapa Nui podemos encon- Durante la administración del trarla, desde el punto de vista de las au- Subdelegado Marítimo Carlos Recaba- toridades estatales, en la inexistencia de rren, por ejemplo, muchas de sus peti- un sólido aparato coercitivo. La carencia ciones al continente ni siquiera son res- de un cuerpo de carabineros y de una pondidas. En el caso de las solicitudes dotación estable de contingentes arma- más urgentes como las de medicamen- dos, así como la falta de una estructura tos o semillas, debió ser este mismo sub- carcelaria acorde a las necesidades del delegado quién, a fines de la década de gobierno local, fue, precisamente, una 1920, se encargara de adquirirlas en uno queja permanente de los funcionarios de sus esporádicos viajes a Valparaíso. chilenos18. Durante estos años, lo único Es precisamente este funcionario quien con lo que contaba el subdelegado para hace mención a la lentitud (y por tanto imponer sus decisiones era, en muchas desinterés) del gobierno en responder ocasiones, un escuálido cuerpo de po- ante las variadas necesidades de la isla. licía formado por isleños. Este último, para colmo, no podía ser siquiera finan- “[…] Desde que me hice cargo de mis puestos, constantemente hé pe- ciado de forma permanente por la Sub- dido muchas cosas, a la Dirección del delegación, dependiendo económica- Territorio Marítimo de Valparaíso, mente de la Compañía (que pagaba sus para los habitantes de la Isla de Pas- cua, primeramente pedí un galpón sueldos para evitar los robos de ganado) para los leprosos qué costó 4,000$ y de la caridad de algunos filántropos [la leprosería había sido destruida “amigos de Pascua”. por un incendio en 1926] y que lo conseguí siendo Jefe del Territorio “La actual Policía de la Isla de Pas- Marítimo Don Santiago Lorca, Ca- cua, es la misma de 1927. Se necesita pitán de Navío, como también con- ropa y otros elementos más, para que seguí con él mismo […] para la Poli- sea más respetada y al mismo tiempo cía y otras cosas más; nuevamente he tomen más interés y cumplir con los escrito al Señor Ministro de Marina, reglamentos de Policía, que existen al Señor, Don Luis Escobar Molina, en la República. He escrito sobre éste Jefe del apostadero naval de Valpa- particular, al Señor Director del Te- raíso, al Señor Visitador de Escuelas rritorio Marítimo y al jefe de Carabi- de Valparaíso, para dos galpones para neros, Señor Don Cárlos R. Director, escuelas, qué son mui necesarios y pidiendo, ropa zapatos, monturas, y muchas cosas útiles para la Isla, que todas las demás cosas que son nece- poco a poco va llegando, y que mu- sarias para éste ramo. La Policía, ac- cho se me há prometido para la Isla tualmente y antes las paga la Cia Ex- de Pascua”17. plotadora Isla de Pascua. Sus sueldos

16 Tanto la entrega de cincuenta corderos mensuales, así como las periódicas donaciones de alimentos, medicamentos y otros bienes que realizaba la Compañía, eran prácticamente los únicos recursos estables a disposición de las autoridades estatales. 17 “Resumen Jeneral del año 1927 en Isla de Pascua”, AIV, Folio 26-27(14). 18 Durante el año 1937, describiendo sus actividades en Rapa Nui, el Subdelegado Olalquiaga da cuenta del precario estado del calabozo y de la inexistencia de implementos para evitar fugas: “En vista que el calabozo no reunía ninguna seguridad, le hice reforzar completamente y además le hice colocar una barra de fierro con sus respectivos anillos, de manera que ahora no se pueden fugar los reos, también hice fabricar pares de esposas y cuatro grillos”. “Memoria del Subdelegado Marítimo Manuel Olalquiaga”, AMM, vol. 3675, Hanga Roa, 7 de Enero de 1937, Anexo A.

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son los mismos que del año 1925, torio Maritimo y otras personas más, 1926, 1927 y el actual 1928. El año pidiendo carabineros, para él órden 1926, mandó ropa para la Policia, el público para evitar robos y castigar á Señor Capitán de Navío, Don San- los culpables, y que marche por él ca- tiago Lorca P”19. mino del bien, como tiene ordenado el Subdelegado Marítimo que suscri- 20 En otros casos, debido a la disolu- be” . ción de este cuerpo de policía, producto de su ineficacia para combatir los- ro Esta situación generó, en repeti- bos de ganado de los que era víctima la dos casos, frecuentes episodios de vacíos Compañía, el subdelegado simplemente de poder, alentando no solo a los habi- tantes isleños a desafiar la figura del sub- no contaba con ningún medio para ha- 21 cer respetar sus órdenes. Consciente de delegado , sino que también a los mis- lo anterior, Recabarren realiza durante el mos funcionarios estatales a desconocer año 1929 una serie de urgentes peticio- las decisiones de este último. Destacan nes de carabineros al continente. aquí las agrias disputas entre Recaba- rren y el Prefecto de Policía Cupertino “Dejo constancia en mi libro de Martínez, quien arribó a la isla en 1930 apuntes diarios, los continuos robos para fortalecer el cuerpo de policías de de los habitantes de la Isla de Pascua; 22 él poco respecto á la autoridad de la Pascua . Asimismo, a mediados de esta Isla, a la Cia Explotadora, etc. La Cia década, puede mencionarse el conflicto Explotadora me comunica seguido entre Olalquiaga y su predecesor en el los robos que hay a diarios, sin po- der pillar a los ladrones. Existia aquí cargo, el Subdelegado Hernán Cornejo, una Policia pagada por la Cia Explo- quién se habría dedicado a sembrar la tadora, se componía esta Policia, de 7 desconfianza de los isleños en su contra. personas, que són, Juan Aracki, Juan Acorralado por sus continuos ataques, Tepano y Matias Hotus que eran los jefes y de cuatro guardianes, sin pillar Olalquiaga se lamenta de este conflicto ningún ladrón; en vista que siempre en sus memorias: continuaban los robos, la Cia Explo- tadora no pagó más á ésta Policia, “Como U.S. comprenderá, desde el desde el 31 de Enero de 1929. La primer momento mi antecesor se en- población no tuvo guardianes, hasta sañó conmigo, hostilizándome en lo el 1. de Abril que nombré uno para más mínimo que pudo, y no conten- la vigilancia, etc, pagado por ésta to con todo esto, creó y posesionó a Subdelegación Maritima, en la ac- todos los nativos de una pésima at- tualidad cuento con un solo guardia, mósfera a mi persona, atmósfera que siendo él censo último de 385 habi- me ha orijinado un sinnúmero de tantes. En éstos momentos críticos contratiempos y transtornos, porque para la Isla me hé apresurado escribir como les dijo a los nativos, que yo era a mis jefes, Director Jeneral del Terri- un pobre diablo que venía a quitarles

19 “Resumen, Inventario Jeneral del año 1928”, AIV, Folio 31(16)-32. 20 “Carta del Subdelegado Marítimo C. Recabarren solicitando el envío de carabineros a Pascua”, AIV, 1 de Mayo, 1929. Folio 75(38). 21 Era común entre los rapanui desconocer cualquier autoridad que no fuera la de los comandantes. Esta actitud no se encuentra exenta de una importante cuota de astucia, especialmente si se tiene en cuenta que el periodo de permanencia de aquellos en la isla era muy corto y distanciado en el tiempo. 22 De acuerdo a los testimonios de Recabarren, Martínez habría sido culpable de numerosos abusos de poder en contra de la población isleña, la CEDIP y las autoridades estatales. Para un mayor detalle de lo anterior revisar los folios 153(88), 154 y 164 de los Archivos de la Intendencia de Valparaíso (AIV) ya citados.

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los plátanos y camotes, éstos no tre- de la policía y funcionario de la CEDIP, pidaron en demostrar su desconfian- 23 varios otros rapanui participaron activa- za y desobediencia al suscrito” . mente del marco institucional chileno, Una de las fórmulas que ensayó la brindando un activo apoyo a los orga- nismos estatales, la compañía ganadera autoridad marítima para dotar a las ins- 25 tituciones estatales de una mayor efica- y la iglesia . Algunos de estos rapanui cia y legitimidad fue incluir en aquellas fueron, entre otros, Juan Araki, Pedro a algunos isleños. En poco tiempo, estos Atán, así como también Mariana Atán y Andrés Chavez (profesores), por men- últimos llegaron a cumplir un impor- 26 tante rol de soporte de los mecanismos cionar algunos . del poder colonial, aunque sin llegar a La necesidad que tuvieron las au- transformarse en meros funcionarios del toridades de incorporar habitantes nati- mismo. La relevancia de estas figuras es vos en la estructura institucional chilena refrendada, a comienzos de la década de se expresó, además, en algunos esfuerzos 1920, por el relato del capitán de la Ba- como la creación de ciertos organismos quedano con ocasión de una de sus visi- formales de representación indígena. Se tas a Pascua. buscó con esto, junto con combatir la “Al Sub-delegado [se refiere al -Sub indiferencia o resistencia de los isleños delegado Marítimo Exequiel Acuña] ante las instituciones estatales (muy pre- se le comunicó la órden cablegráfica sente entre los nativos) la generación de que lo autorizaba a viajar en el buque para Valparaíso y en consecuencia espacios en los cuales los rapanui tuvie- determino nombrar Sub-Delegado ran, aunque fuera tan solo en apariencia, Maritimo interino y Oficial del Re- un grado de injerencia (limitada) en el jistro Civil al Sr. Luis Zepeda […] así gobierno local27. mismo, nombró jefe de los nativos y Comandante de Policia al más respe- tado de ellos, llamado Juan Tepano Durante el año 1921, debiendo (ex-rey) que es querido y considera- enfrentar la enconada antipatía de los do por la mayoría de los pascuenses, isleños, el Subdelegado Marítimo Exe- para que actúe entre ellos y los dirija secundado por cuatro ayudantes de quiel Acuña realizó la propuesta de crear su propia elección […]”24. un “Juzgado de Paz” compuesto ínte- gramente por indígenas. La función de Además de Juan Tepano, quién este juzgado habría sido la de refrendar ocupó diferentes cargos como miembro las penas, sanciones y castigos impues-

23 “Memoria del Subdelegado Marítimo Manuel Olalquiaga”, AMM, vol. 3675, Hanga Roa, Abril de 1936, p. 3. 24 “Parte del 22 viaje de instrucción alrededor del Pacífico”. Capitán de Fragata Don Felipe Wiegand Rodríguez. “General Baquedano”, AMM, vol. 2503, Pascua, 1921, 25 y 26 de Diciembre. 25 Aún cuando el Estado y la Iglesia se encontraban todavía unidos, esta última no puede ser reducida a una mera ins- titución estatal. Ejemplo de esto fue la actuación durante este periodo del catequista Nicolás Pakarati, siempre más cercano a la Iglesia de Tahiti. Ahora bien, con todo, la iglesia católica habría contribuido poderosamente al afianzamiento de la presencia chilena en Pascua. Entre otras cosas, colaboró con el alimento de un progresivo sentimiento de “integración nacional” entre los nativos. El papel jugado durante estos años por el Obispo Edwards, así como la labor desempeñada por el Padre Englert a partir de 1935, constituyen un buen ejemplo de lo anterior. 26 A grandes rasgos, podemos mencionar también dentro de este grupo a Rubén Hotus y Nicolás Pakomio Angata. 27 Sin embargo, es cierto que personajes como Juan Tepano o, más tarde, Pedro Atán Pakomio, llegaron a tener bastante injerencia en las estructuras de poder continental asentadas durante estas décadas. En muchas ocasiones, dicha influencia llegó a rivalizar con la de los sucesivos Subdelegados Marítimos.

154 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos tas por el subdelegado en contra de los chilenas continuaran protagonizando nativos, así como también velar por la permanentes atropellos en contra de los protección y desarrollo de la “moralidad nativos. Este fue el caso, precisamente, pública”. Si bien esta propuesta fue re- de la actuación del Subdelegado Acuña chazada en el continente, debido a que durante la década de 1920, quién debe estos juzgados no se encontraban pre- enfrentar un sumario por las denuncias sentes en la legislación chilena28, aquella realizadas en su contra por oficiales de la puede entenderse también como otro Baquedano. intento de las autoridades estatales por alcanzar una mayor legitimidad entre la “Vuestra señoria se sirve extractar las informaciones habidas por los población indígena. Esta misma necesi- Comandantes de la corbeta “Jeneral dad motivó al Subdelegado Olalquiaga, Baquedano” en contra del citado Sr. quince años más tarde, a efectuar la de- Acuña y termina en que es imposi- signación de Pedro Atán Pakomio como ble su permanencia en este puesto. 29 Aprovechando las circunstancias de primer alcalde rapanui . encontrarse en ésta con permiso del inculpado, le he leido los cargos que “Para efectuar una labor eficaz, como existen en su contra, contestando lo también para introducir las normas siguiente; […] 3. Respecto al núme- de las ciudades y pueblos civilizados, ro 2, de abusos de administración y resolví darles una conferencia sobre judiciales, dice que efectivamente la Autoridad Comunal […] Una vez hace mucho tiempo hizo azotar a al- convencido que se habían posesiona- gunos indígenas confesos de robos, do bien de mi explicación, procedí ha pero que no continuó con esa prác- hacer el nombramiento de Alcalde y llevar a cabo la elección de regidores tica cuando se le hizo saber que ello […] Si bien es verdad que la labor de- no era correcto. 4. Sobre el cargo de sarrollada por estos hombres ha sido usufructúo de víveres alimenticios casi nula, es menester tomar en cuen- pertenecientes a los indígenas, dice ta que es la primera vez que se cons- que jamas ha recibido víveres para su- tituye una Municipalidad en la Isla, ministrarlos a los habitantes de la isla razón fundamental para comprender y que por lo tanto este cargo carece que ellos no han podido en 4 meses en absoluto de fundamento. 5. Niega desplegar todas sus actividades en su que haya hecho azotar a mujeres y ni- cometido, tanto por no estar perfec- ños y manifiesta que esos cargos son emanados de los mismos castigados tamente al corriente de sus deberes, 31 como también por no contar con los por estar confesos de robos […]” . medios elementales para ello”30. Con motivo de esta denuncia, fue Sin embargo, ni la mencionada el mismo Obispo Edwards quién seña- debilidad de las instituciones estata- ló la culpabilidad de Acuña ante dichos les ni la creación de dichos organismos cargos. ¿Retiro inmediato de este fun- de representación rapanui, fueron un cionario? Nada de eso. Sin pronunciar- impedimento para que las autoridades se ante el problema de la realización de

28 “Comunicación al Ministro de Marina acerca de la petición del Subdelegado Acuña para crear un Juzgado de Paz en Isla de Pascua”, AMM, vol. 2503, 1921. 29 La fecha de la elección de este alcalde pudo haberse realizado hacia fines de 1935 o durante los primeros meses de 1936. 30 “Memorias del Subdelegado Marítimo Manuel Olalquiaga”, AMM, vol. 3675, Hanga Roa, 1936, p. 12. 31 “Sobre cargos contra el Subdelegado Acuña”, AMM, vol. 2503, Valparaíso, 28 de Marzo de 1922.

155 Estado y Compañía explotadora. Apuntes para una... abusos en contra de la población nativa, para ocupar ese puesto (¡!), que se en- las autoridades continentales deciden contraba recientemente casado y que era mantener a Acuña en su puesto. Fun- necesario, por supuesto, evitar un futuro damentan su decisión en los años de escándalo que empañara la imagen exte- servicio de este último, su capacidad de rior de la república. administrar farmacias…y, ¿acaso no está “Mi querido almirante: Yo no creo a demás decirlo?, en sus habilidades en el Acuña, el Subdelegado de Pascua, un tejido y su conocimiento del telar. tanto; pero, según mis informaciones ha sido de todos los empleados chi- “En vista de la autorización verbal lenos el menos deficiente en Pascua. dada por US. de dejar este asunto a Ahora él se ha casado con la señora mi determinación, estimo que por que va de preceptora de modo que lo anteriormente expuesto y de que hay una garantía más de buena con- el señor Acuña ha prestado mas de ducta futura. Mandar allá un solte- seis años de servicios en el Ejército ro o un casado que se vaya solo será como Sarjento Enfermero; que tiene [para provocar] errores que pueden autorización suprema para rejentar traernos denuevo amargas críticas del boticas; que ha pasado por un curso extranjero. Tengo cartas de dos sabios de telar con el objeto de instruir en extranjeros […] Bryan y Skoltheag tejidos de lana a los indígenas; que su que se espresan de Acuña con agra- esposa tiene nombramiento supremo decidos elogios después de su perma- de Directora de la Escuela que man- nencia en Pascua. Por eso, yo le ruego tiene el Estado en la isla y él de Ayu- que amoneste a Acuña pero que no dante, circunstancias todas éstas que lo cambie porque quedaremos peor a juicio del infrascrito hacen del se- de lo que [estamos]. Suyo, respe- ñor Acuña y esposa personas adecua- tuosamente +Rafael Edwards. Hizo das á los propósitos que en este senti- únicamente el bien de los indios y el do persigue el Supremo Gobierno; y, prestigio de Chile”33. finalmente, que no todos los Coman- dantes que han formulado cargos en Como veremos a continuación, si su contra lo han llamado para que presente sus descargos, como era na- en el caso de la relación entre el Estado tural, considero que por esta vez se le y la Compañía se consolida, a pesar de la puede permitir continuar en su pues- disputa legal existente por la propiedad to; pero por cualquier nueva queja en su contra será motivo para exonerarlo de las tierras, una alianza de intereses de su empleo […]”32. orientada a la explotación económica de la isla, la actitud de las autoridades ¿Cuál fue la posición del Obis- estatales hacia los indígenas reproduce, po Edwards en este asunto? Obviando por el contrario, un régimen de relacio- igualmente el problema (¿marginal?) de nes coloniales no muy diverso al de co- las acusaciones de abusos en contra de mienzos del siglo XX. De acuerdo a esto, los nativos, aquel recomienda, en con- lo que en definitiva constituye otro de cordancia con el gobierno, mantener los rasgos característicos de la presencia a Acuña en la isla. ¿Sus razones? Que estatal en Rapa Nui durante este perio- aquel era el funcionario más “idóneo” do, la función de las autoridades guber-

32 Ídem. 33 “Carta del Vicario Castrense Rafael Edwards”, AMM, vol. 2503.

156 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos namentales no podía ser otra que la de do), “la venta o arriendo de Isla de Pas- “educar” e “instruir” a los nativos, bus- cua” con el fin de obtener financiamien- cando para esto controlar cada aspecto to para construir dos cruceros de guerra de la vida pública y privada de los mis- para la marina chilena. La isla habría mos. Desde el punto de vista de los fun- sido ofrecida, según este mismo informe cionarios chilenos, la sociedad indígena a Estados Unidos, Alemania, Gran Bre- era entendida, por lo tanto, como una taña y Japón35. mera receptora (pasiva) de la acción de las instituciones estatales, “únicas” por- De forma evidentemente contra- tadoras de la “civilización”. dictoria, el presidente Alessandri había declarado la isla “Parque Nacional” por Ahora bien, al mismo tiempo, medio del decreto 103 del 16 de enero es necesario aclarar que una cosa era de 1935. El 23 de junio del mismo año la política interna en Rapa Nui y otra la isla es declarada Monumento Histó- la visión geopolítica chilena en el mar- rico (decreto 4536) y se prohíbe la ex- co de la nebulosa situación de los años tracción de sus piezas arqueológicas. A posteriores a la crisis de 1929. Estas dos fines de ese año se declara un gran plan nunca siguieron la misma línea durante de reforestación a cargo del danés Georg este periodo, llegando a estar, muchas Schlatzer contratado por el Minagri. El veces, en abierta contradicción. Como 13 de febrero de 1936 se renueva el con- ejemplo se puede mencionar el reporte trato de arrendamiento a la Compañía enviado el 17 de noviembre de 1930 por Explotadora de Isla de Pascua y se esta- el agregado naval de EE.UU. en Chile, blece un nuevo canon de arrendamien- I.H. Mayfield, a la oficina naval de inte- to. Además se diseña un reglamento de ligencia norteamericana, en el que se ex- régimen interno de vida y trabajo en la presa por primera vez el interés de Chile isla. Estos son sólo algunos ejemplos de por vender la isla debido a sus urgentes la incoherente posición “geopolítica” necesidades económicas34. Reportes si- chilena respecto a Isla de Pascua hacia el milares aparecen en comunicaciones a la final del período 1917-1936. armada estadounidense desde la emba- jada norteamericana en Chile el día 8 de junio de 1937, firmado por A.S. Merril La Compañía Explotadora en el que señala que el Comandante en Jefe de la Armada, Almirante [Olegario] ¿Cuál fue el papel jugado por la Reyes del Río propuso al Presidente (Ar- “Compañía Explotadora” durante este turo Alessandri Palma) y al Ministro de periodo? ¿Qué tipo de Compañía actúa Defensa Nacional (Emilio Bello Codesi- durante estos años en Pascua? ¿Cuál es

34 I.H. Mayfield, “Possibility that Chile desires to sell Easter Island (Isla de Pascua)”, en Attaché’s Report Blank Issued by Office of Naval Inteligence, serial n° 283, file n° 102, 17 de noviembre de 1930. Copia disponible enla Biblioteca del Museo Antropológico Padre Sebastián Englert, Hanga Roa, Isla de Pascua. 35 A.S. Merrill, “Proposed sale or lease of Easter Island (Isla de Pascua) by Chilean Government”, en Attaché’s Report Blank Issued by Office of Naval Inteligence, serial n°109, file n°102-100 & 902-100, 8 de junio 1937. Copia disponible en la Biblioteca William Mulloy del Museo Antropológico Padre Sebastián Englert, Hanga Roa, Isla de Pascua.

157 Estado y Compañía explotadora. Apuntes para una... el tipo de relación que se establece entre ño, la CEDIP focalizó así sus energías esta última, el Estado chileno y la Co- en el proceso productivo, estableciendo munidad isleña? para esto un trato de virtual “patronaz- go” con las autoridades chilenas. Finan- Gracias a la firma del Tempera- ciando las actividades de estas últimas, mento, la Compañía es eximida durante dependientes en buena medida de su estas décadas del pago de un canon de entrega mensual de corderos y otros bie- arrendamiento anual, usufructuando nes, costeando incluso los salarios del gratuitamente de las tierras y del ganado cuerpo de policía y realizando periódi- existente en la isla. Por otra parte, la se- cas donaciones a favor de la población37, paración de la figura del administrador la Compañía logró consolidar una po- de la CEDIP y la del Subdelegado Ma- derosa influencia sobre los funcionarios rítimo, libró a esta empresa de una parte estatales. Como lo relata Olalquiaga en importante de las responsabilidades (y 1936, describiendo su excelente y cor- costos) del gobierno local. dial amistad con el administrador de esta empresa, el “señor” Colin Morrison: Todo esto hizo posible, entre otras cuestiones, la generación de una “Cumpliendo instrucciones superio- convivencia menos conflictiva entre di- res con respecto a las buenas relacio- nes que era necesario mantener con cha empresa y los isleños, basada ahora la Administración de la Cia. Explo- principalmente en el establecimiento de tadora de Isla de Pascua, debo decir contratos laborales y en el impulso de a US. que desde mi llegada a la Isla hemos mantenido una cordial amis- una serie de políticas de corte asistencia- tad y una muta comprensión. […] lista (caridad)36. Por otro lado, elemento Es así como durante mi permanen- clave en el desarrollo de la Compañía cia en ésta Isla, jamás ha habido una durante estos momentos fue el rol de pequeña dificultad entre esa Admi- nistración y ésta Subdelegación, y soporte que jugaron a su favor las ins- para toda medida que he tenido que tituciones estatales, las cuales, aunque tomar relacionada con la Compañía, débiles, cumplieron la misión de garan- la he tomado en completo acuerdo tizar (a la vez que regular) las condicio- con Mr. Morrison, de manera que no hubieran inconvenientes y ellas fue- nes del desarrollo del ciclo económico ran motivos de tropiezos en nuestra ganadero. amistad y estrechas relaciones”38.

Desligada como hemos dicho de ¿Cuál fue, en cambio, el tipo de una gran parte de sus responsabilidades relación que estableció la Compañía con en la administración del gobierno isle- la población rapanui durante estos años?

36 Además de las obligaciones establecidas por el Temperamento (entrega de cincuenta corderos mensuales a la Subdelegación, mantención de los leprosos, construcción de un leprosario y el respeto a las 2000 hectáreas adjudicadas a los indígenas), la Compañía realizó durante este periodo una serie de “donaciones sociales” de alimentos, madera y medicamentos. Destacaron entre estas últimas las periódicas entregas de pastillas traídas desde el extranjero para los leprosos. Para un mayor detalle revisar los siguientes documentos: AIV. “Memoria y Balance Jeneral del año 1926”, folios 1, 11(6), 12 y “Resumen Jeneral del año 1927 en Isla de Pascua”, folio 23(12). 37 Puede revisarse sobre esta materia la siguiente documentación: “Memoria y Balance Jeneral del año 1926”, “Resumen Jeneral del año 1927 en Isla de Pascua” y “Resumen, Inventario Jeneral del año 1928”, AIV. 38 “Memorias del Subdelegado Marítimo Manuel Olalquiaga”, AMM, vol. 3675, Hanga Roa, 1936, p. 20.

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Como dijimos anteriormente, sentarse ante la comunidad como una aquella relación empezó a girar ahora, “empresa moderna” que beneficiaba a principalmente, alrededor del estableci- la comunidad al ofrecer trabajo perma- miento de lazos laborales y comerciales nente o temporal a una gran parte de la (potenciando el intercambio de maíz y población, así como alimentar la ima- ganado con los nativos), así como alre- gen de una “institución social” preocu- dedor del impulso de medidas de corte pada por el bienestar isleño. Esta ima- asistencialista en beneficio de la comu- gen “positiva” que intentó proyectar la nidad (caridad). Gracias a lo anterior, la CEDIP se vio fortalecida, además, por Compañía adquirió el margen suficiente el importante intercambio de productos para la aplicación de una serie de nuevos agrícolas y ganado (especialmente maíz, métodos de explotación económica so- caballos y vacunos) que se desarrolló en- bre los indígenas, los cuales parecieron tre esta empresa y los nativos, principal- tener ahora, especialmente en compara- mente a partir de los años 30’s40. ción con los utilizados en décadas pre- vias, un rostro menos opresivo. No obstante, la Compañía no solo aprovechó la firma del Temperamento El manejo de los salarios y los pre- para usufructuar gratuitamente por más cios de las mercaderías traídas desde el de dos décadas de las tierras y el ganado continente, al igual que el monopolio existente en la isla, sino que aquella se de la venta de las mismas en la pulpe- encargó, además, de incumplir varias de ría (ubicada en Mataveri), fueron así las obligaciones de aquel acuerdo. Du- algunas de las formas preferidas por la rante el año 1936, la intervención de CEDIP para rentabilizar, con el máximo un diputado en la cámara, con motivo provecho, su convivencia con los rapa- de la discusión de un nuevo contrato de nui39. Nuevos métodos de explotación y arrendamiento entre el Estado y la Wi- opresión sobre la población nativa que lliamson Balfour, nos dice sobre esto lo debieron desplegarse, aunque como siguiente: hemos dicho con una cara ciertamente más “amable” que bajo las administra- “A pesar de que en esa ocasión [la firma del Temperamento] se le im- ciones previas, bajo la precondición de ponían a la Compañía explotadora la actuación de las (menos amables) ins- muy pocas obligaciones [entre otras, tituciones estatales y sus funcionarios. la construcción del ya mencionado lazareto] no les dio cumplimiento […] Ese lazareto se instaló apenas a Libre de la responsabilidad de li- 1.000 metros escasos de las casas del diar directamente con la resistencia de pueblo y en terrenos de los nativos lo los indígenas, la Compañía pudo así pre- que constituye un peligro inminente

39 Con relación a esto, S.R. Fischer (2005) nos dice que a los nativos se los “acostumbró” a pagar precios exorbitantes por comidas procesadas y a una serie de productos que no necesitaban, sobre todo si consideramos el patrón alimenticio previo: tubérculos, ti, plátano, pescado, pollo, langosta, frutas, etc. 40 Al igual que en el caso del grupo de isleños cercanos a los funcionarios chilenos, existió también un sector de rapanui procli- ves a un mayor entendimiento con la CEDIP. Entre estos podemos mencionar a los mestizos de las familias Paoa Bornier, Tuki Kaituoe y más adelante los hijos de los jefes de la CEDIP Percy Edmunds y Lachlan Mackinnon con mujeres nativas (familias Rapahango y Haoa).

159 Estado y Compañía explotadora. Apuntes para una...

de contagio. El artículo 70 obliga a cales, de todo el aumento obtenido la Compañía a llevar a la isla como por la reproducción de los animales administrador de sus intereses a “un año tras año, de la lana, leche y de- chileno casado que se radique allí con más beneficios de éstos desde el 7 de su familia”, obligación que tampoco Noviembre de 1916, fecha en que ha sido cumplida por la Compañía se puso término al arrendamiento Explotadora. Esta concesión debió otorgado por el Fisco al Sr. Enrique haber durado hasta el 19 de abril de Merlet, o por lo menos desde el 5 de 1929, fecha en que por decreto su- Mayo de 1917, fecha en que comen- premo número 946 del Ministerio zó a regir el llamado temperamento de Marina se le puso término. Sin provisorio […]”42. embargo, señor Presidente, esta po- derosa firma extranjera que parece En el caso de las relaciones estable- disponer de una mano oculta que paraliza en la sombra lo que dispone cidas entre la Compañía y los rapanui, ese decreto, hasta el 12 de noviembre nuevamente a pesar del Temperamento de 1933 y hasta hoy día [alienta] la y del “perfil social” que intentó proyec- prolongación de una concesión que tar esta empresa, aquella continuó prota- es atentatoria para nuestra sobera- nía e intereses nacionales. […] Si gonizando numerosos abusos en contra existieran razones morales que justi- de los indígenas43. Son principalmente ficaran ciertas contemplaciones,- es funcionarios continentales quiénes se tarían ellas de más compensadas con encargan de plasmar, con ocasión de sus los 40 años de explotación de la isla que ha disfrutado esa Compañía con periódicos viajes a Pascua, diversas de- grandes utilidades pecuniaras, pero nuncias sobre esta materia. Una de estas nunca se justificaría un nuevo arren- últimas, contenida en el informe de un damiento; ya que si él se efectúa, se oficial de la corbeta Baquedano,- men prolongarán por 20 años los abusos y explotaciones que esa firma extran- ciona lo siguiente: jera ejerce sobre los nativos […]”41. “Señor Comandante: En cumpli- Una vez expirado el plazo de vi- miento de la comisión que Ud. tuvo a gencia del Temperamento en 1929, como bien confiarme, de averiguar si había, vemos, la CEDIP continuó beneficián- entre los naturales de la Isla de Pascua, dose de dicho acuerdo. Esto permitió algunas quejas o cargos contra la Casa que esta empresa pudiera acumular fa- Williamson Balfour y Co, e informarle bulosas ganancias, a costa de los inte- por escrito, comunico a Ud. que, noti- reses fiscales y de la propia comunidad ficada las averiguaciones que el tiempo nativa. Como constata en 1935 un in- permitió, no constaté ningún cargo con- forme al Ministro de Marina: creto contra de dicha Casa, aunque fue común y general la queja de que “los jor- “Es de considerar, también, que la Compañía Explotadora de la Isla de nales están muy bajos y los precios de la Pascua se ha aprovechado gratuita- tienda muy subidos”, pero sin dar prue- mente de los terrenos y animales fis- bas claras de ninguna de las dos afirma-

41 “Documento de intervenciones (Cámara de diputados)”. AMM, vol. 3501, Sesión 47. A Extraordinaria, 28 de Enero de 1936, pp. 2647-2648. El apellido del diputado es Carrasco, perteneciente al Comité Independiente. 42 “Informe al Ministro de Marina”, AMM, vol. 3463, 29 de Octubre de 1935. (Documento confidencial). 43 Documento Grupo de Trabajo del Pueblo Rapa Nui (No oficial), p.15. 2002. Comisión de Verdad Histórica y Nuevo Trato.

160 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos ciones. En cuanto a la primera, creo que los más significativos fue, entre otros, el la Casa se ajusta al reglamento aprobado estallido de una masiva huelga de tra- por el Supremo Gobierno; y en cuanto a bajadores durante el año 1928, la que la segunda, estimo necesario, para evitar llegó a sumar, incluso, a miembros del probables alzas exageradas, que la au- cuerpo de policía local. Como relata Re- toridad convenga con la Casa una lista cabarren, la mayor parte de las reivin- anual de precios, para todas las merca- dicaciones de los huelguistas plantean derías que se venden a los naturales de una mejora de los salarios y las raciones la Isla, y que esta lista sea prontamente alimenticias, así como también la parti- conocida por todos los interesados”44. cipación de los isleños en las ganancias de la esquila. ¿Qué sucedió luego? Estribillo co- nocido, las denuncias de los isleños no “[…] Los nombrados más arriba [se fueron tomadas en cuenta. Sin cono- refiere a los líderes de la huelga] se presentaron á ésta Subdelegación a las cer todavía si dicha lista de precios fue 2.P.M del dia 5 de Agosto y espusie- realmente establecida, los salarios de los ron los siguientes puntos. 1er Punto. nativos continuaron tan bajos como an- Mejoramiento de sus jornales, hom- tes45. Tendrían que ser los propios rapa- bres a razon de 4$ diarios y su ración en café almuerzo, y comida, horas de nui quiénes, más tarde, exijan el aumen- almuerzo 11 A.M y comidas 5 P.M. to de los mismos. 2 Punto. Mejoramiento de sus jor- nales para los niños y las mujeres 3$ Ahora bien, a pesar de que el gra- diarios y sus raciones y horas como do de conflictividad entre la Compañía los demás hombres. 3. No entrarán a trabajar ninguna persona, si él Señor y los rapanui disminuyera considerable- Administrador no acepta nuestra pe- mente durante este periodo, su relación tición. 4 Punto. Para los trabajos de no estuvo libre de graves conflictos. Las la esquila, que se efectúa en el mes de constantes quejas de los administradores Octubre y Noviembre, del presente año, se pide por él ciento de ovejunos de la CEDIP en contra de los robos de 10$ ciento ó 100$ él mil, con sus res- ganado realizados por isleños, al igual pectivas raciones. 5. Punto. Los que que los periódicos reclamos de los indí- quieran trabajar voluntariamente, los genas con motivo de su situación laboral trabajos de la administración y los del campo se opondrán, hásta el úl- y los altos precios de la pulpería, alenta- timo hásta que la Cia arregle defini- ron durante estos momentos el desarro- tivamente. 6. Punto. Si la Cia acepta llo de importantes tensiones sociales. nuestras condiciones y la de todos los habitantes de ésta Isla, queda arregla- do y todo el mundo se irá a traba- Este ambiente de conflicto latente jar tranquilos. 7. Punto. Quedan en promovió el desarrollo de fuertes roces ésta Subdelegación las firmas de los entre los rapanui y la CEDIP. Uno de representantes de ésta guelga jeneral.

44 “Carta del Cap. 1 de la Armada al Comandante de la Corbeta Baquedano”, AMM, vol. 2503, 27 de Diciembre de 192, (En la mar.). El subrayado en el original. 45 A comienzos de la década de 1940, mientras que en el continente el salario de un trabajador común podía ascender a 60 pesos por semana, el sueldo de un rapanui no llegaba a más de 100 pesos anuales. Ver Alberto Hotus, “Dos relatos de la vida de un isleño: El salir de la isla y la lepra en Rapa Nui”. En: Claudio Cristino y Miguel Fuentes, La Compañía Explo- tadora de Isla de Pascua. Patrimonio, Memoria e Identidad en Rapa Nui (Santiago: editorial Escaparate, 2011), 279-285.

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Señor Administrador; agradeceré a 1917 la firma del “Temperamento Pro- ud contestar sobre éste particular. Sin visorio”, sentando las bases de un nuevo otro particular tiene el agrado de sa- ludar a ud su mui […] y amigo. Car- tipo de organización política en Pascua. los A. Recabarrén”46. A partir de este instante, se dota Pues bien, esta no fue la única ma- al aparato de poder colonial de dos cabe- nera con que los rapanui intentaron en- zas visibles. Por un lado, una de índole frentar sus injustas condiciones de vida. político-administrativa: la Subdelegación Efectivamente, el desarrollo de una serie Marítima, ubicada en Hanga Roa, don- de prácticas de rebeldía por parte de la de comienzan además a funcionar otras población nativa ante las autoridades, instituciones estatales como el Registro fue un aspecto clave del marco social y civil y la Escuela Pública. Por otro lado, político de este periodo. Aunque sin lle- una segunda cabeza de carácter económi- gar a alcanzar la intensidad que tuvieron co ubicada en Mataveri, residencia del los levantamientos indígenas de prin- administrador de la Compañía y lugar cipios del siglo pasado, estas prácticas de dirección del proceso ganadero. de resistencia indígena, entre las cuales podemos mencionar la realización de Mientras que el deber del Subde- actos de desobediencia, robos, insubor- legado Marítimo fue asumir las respon- dinaciones sociales y huelgas, llegaron sabilidades del gobierno local, tomando a constituir un verdadero (y constante) en sus manos la tarea del control de la escollo para la acción de los poderes co- vida pública y privada de los isleños, el loniales, representados en la isla por las rol del administrador de la Compañía se instituciones estatales y la Compañía47. remitió a una esfera más ligada al ámbito productivo, estableciendo con la pobla- ción indígena una relación de naturaleza fundamentalmente salarial y comercial. Conclusiones

Hacia comienzos del siglo XX, Con todo, la presencia del Esta- debido a los graves conflictos surgidos do en Pascua continuó destacándose por entre los rapanui, la Compañía y el go- presentar un carácter sumamente preca- bierno chileno, se hace necesario impul- rio. Transversal al periodo 1917-1936 sar una serie de importantes reformas a fue el impulso de una particular forma la estructura política isleña. de colonialismo, sin política colonial efectiva. La inexistencia por parte del En 1915 se lleva a cabo la desig- gobierno chileno de un plan consistente nación de un Subdelegado Marítimo de poblamiento y ocupación efectiva de independiente del administrador de la este territorio, así como la extrema de- CEDIP. Posteriormente, se realiza en bilidad del conjunto de los organismos

46 “Carta de Carlos Recabarren a Enrique Edmunds”, AIV, Hanga Roa, 5 de Agosto de 1928, folios 51(26)-52. 47 Se encuentra en preparación un artículo sobre esta temática.

162 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos estatales y de la figura del subdelegado rol de soporte que jugaron a su favor los constituye, en este sentido, una muestra organismos estatales, los cuales tuvieron gráfica de esto último. la misión de garantizar las condiciones de reproducción del ciclo económi- Sin embargo, a pesar de lo ante- co. Debido a esto último, la CEDIP se rior, la acción del Estado chileno tuvo encargó de establecer una relación de durante estos momentos un alto impac- verdadero “patronazgo” sobre las auto- to en el contexto isleño. La presencia ridades chilenas, financiando sus activi- permanente de instituciones encargadas dades, costeando los salarios del cuerpo de la regulación de la vida de los nati- de policía, realizando periódicas dona- vos, así como la aplicación de distintas ciones sociales, etc. políticas en el ámbito de la educación, urbanización y “civilización” de estos Sobre esta base, la empresa ove- últimos, fue sin duda una influencia de jera fue capaz de desplegar una serie de largo alcance sobre la comunidad indí- formas de control social y explotación eco- gena. Asimismo, la aplicación de una nómica sobre los rapanui, muchas de las constante política de control social y dis- cuales, en comparación con las utiliza- ciplinamiento del modo de vida rapanui, das durante las lamentables (y brutales) tuvo una fuerte repercusión sobre el administraciones de Sánchez Mantero- conjunto de la población originaria. la y Cooper, parecieron tener ahora un rostro más “amable”. Tanto el manejo de En el caso de la Compañía, gra- los salarios y precios de las mercaderías cias a la firma del Temperamento, esta traídas desde el continente, al igual que empresa es eximida del canon de arren- el monopolio de la venta de estas últi- damiento anual que había debido pagar mas en la pulpería, fueron así algunos de anteriormente. Esto implicó que aquella los métodos preferidos por la Compañía pudiera usufructuar gratuitamente de para rentabilizar, con el máximo prove- las tierras y del ganado existente en Pas- cho, su convivencia con los isleños. cua. Por otra parte, la separación de la fi- gura del administrador de la CEDIP y la Mención aparte debe hacerse con del subdelegado libró a esta empresa de respecto al rol cumplido por los grupos tener que cargar con las responsabilidades de rapanui que jugaron un papel de cola- (y costos) del gobierno local. La Com- boradores tanto de la Subdelegación Ma- pañía pudo así desarrollar una convi- rítima como de la Compañía. Aunque vencia menos conflictiva con los isleños, sin llegar a convertirse en meros funcio- estableciendo con ellos una relación de narios al servicio de las autoridades, di- naturaleza fundamentalmente salarial y chos grupos ejercieron una importante comercial, basada además en el impulso influencia en el marco político isleño, de políticas de corte asistencialista (ca- actuando no solo como agentes transmi- ridad). sores de los intereses de uno u otro polo del poder colonial, sino que cumplien- Elemento clave en el desarrollo de do muchas veces un activo papel en la la Compañía durante este periodo fue el resolución de las tensiones entre estos

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últimos y en el cambio de la balanza del dos de los años 30’s, constituye un buen poder político isleño. ejemplo de lo anterior.

Durante estas décadas empieza a En el caso de los permanentes configurarse en Rapa Nui, en definitiva, abusos cometidos durante este periodo un sistema de gobierno que adquiere un en contra de la población nativa, reali- nivel de complejidad institucional cada zados tanto por funcionarios chilenos vez mayor. A diferencia del periodo an- como por la Compañía, es posible en- terior, caracterizado por la existencia de contrar otra importante concordancia un aparato de poder con una cabeza úni- en el accionar de los agentes coloniales. ca, se produce ahora una ramificación Una y otra esfera del poder colonial tuvo del mismo, como dijimos, en dos gran- como elemento común de su actuar no des esferas: la económica y la política- solo el total desconocimiento de la sobera- administrativa, con sus respectivas cabe- nía de los rapanui sobre Pascua, sino que zas en la administración de la CEDIP y además una concepción de estos últimos en la Subdelegación Marítima. por la cual aquellos debían ser reduci- dos, paradójicamente, a una condición Destaca aquí la constante dinámi- de extranjeros en su propio territorio. ca de retroalimentación entre ambas esfe- Virtualmente cercados en el poblado de ras del poder colonial, actuando la Sub- Hanga Roa, impedidos de abandonar la delegación como un ente encargado de isla y obligados a aceptar las condiciones la regulación de las relaciones sociales y de vida impuestas por el régimen de ex- como un garante del buen desarrollo del plotación ganadera, los rapanui fueron ciclo económico, ejerciendo a su vez la concebidos, de este modo, como una primera (la administración de la Compa- población incapaz de garantizar su pro- ñía) un papel de verdadero padrinazgo pio “progreso”. sobre las instituciones estatales y estable- ciendo sobre estas un poderoso influjo. Desde el punto de vista de los ra- Por otra parte, a diferencia de décadas panui, la labor de los organismos esta- previas en las cuales el ámbito religioso- tales se presenta ante ellos a la manera institucional constituyó una esfera al- de un poder ejercido de manera directa, tamente permeable a los intereses de la ya sea a partir de la acción desplegada comunidad indígena48, se produce ahora por el subdelegado, las misiones de la una sustancial integración de aquel en Armada o el resto de las instituciones el marco de acción de los poderes colo- estatales. Por el contrario, la influencia niales. Tanto la acción desplegada por el de la CEDIP, el verdadero corazón del Obispo Edwards, así como la labor ejer- aparato de poder colonial, adquiere en cida por el Padre Englert desde media- cambio el carácter de un poder detrás del

48 Un ejemplo de esto puede verse con ocasión de la rebelión indígena de 1914 y el papel que jugó la iglesia como espacio físico articulador del movimiento. Para un mayor detalle sobre este punto véase Nelson Castro, Rapa Nui: El Diablo, Dios y la Profecía. Evangelización y Milenarismo en Rapa Nui, 1864-1914 (Isla de Pascua: editorial MAPSE, 2006).

164 Miguel Fuentes / Cristián Moreno P. / Alejandro Montecinos poder, resguardado tras la acción de los conjunto de la estructura social y política funcionarios estatales (que actuaban con existente en Pascua. el acuerdo de este empresa) y del mar- co de relaciones salariales y comerciales Sin embargo, la propia precarie- establecidas entre esta empresa y la co- dad de la estructura institucional isleña munidad. y la mantención de importantes tensio- nes sociales entre la comunidad nativa y Esto último no solo hizo más di- los agentes foráneos, posibilitó (y alentó) fícil a los rapanui identificar en la Com- el desarrollo de diversas formas de resis- pañía a uno de los principales causantes tencia indígena. En algunos casos, por de la intensa opresión de la que eran ejemplo con motivo del estallido de la víctimas, presentándose aquella como huelga general de 1928, dichas formas una empresa con un “perfil social” que de resistencia permitieron a los nativos ofrecía trabajo y oportunidades comer- enfrentar, unitariamente, ambas cabezas ciales a través del intercambio, sino que del poder colonial personificadas en el además fue un importante factor en la binomio estado-compañía, amenazando inhibición de un nuevo estallido social así uno de los pilares de la presencia co- que, tal como el ocurrido en 1914, hu- lonial en Rapa Nui, las ganancias de la biera sido capaz de poner en peligro al explotación ganadera.

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