Asociación Entre Pinto Y Valdemoro
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18-22_Ecclesia 5/11/18 13:33 Página 2 Asociación Entre Pinto y Valdemoro El hogar de la misericordia on las 17:47 horas en el hogar de Ca- de quietud y de fe, resucita la atención sarrubuelos (provincia de Madrid, de todos los presentes reafirmando ese diócesis de Getafe) que más años de credo… «Estamos sin apenas medios y Salir de los barrotes de la prisión Scondena custodia. Es lunes de un otoño sin ayudas, pero esto sigue existiendo no configura siempre la palabra li- que agota las últimas hojas de un maravi- desde hace nueve años porque actúa la bertad. Tras la condena cumplida, lloso mes de octubre. La casa de acogida Providencia». A veces, es el mejor recurso Isla Merced donde me esperan huele a del corazón, le rebato. «¡Pues eso lo te- llega lo más complicado: volver a paz, a confianza arropada, a lágrimas sa- nemos enorme!», exclama. vivir. Sobre todo para aquellos que nadas. Mendigo de un destino que siempre han perdido cualquier arraigo fa- sorprende, tras el primer paso, me en- miliar. Con ese deseo nace la aso- cuentro en torno a un altar construido Misericordia hecha brisa ciación madrileña Entre Pinto y sobre madera, barro y espinas. en anhelos tristes Valdemoro (ePyV), para cuidar a En pocos segundos, con un solo abrazo, esas personas que necesitan olvidar acaricio unas heridas de salvación que Todo me sabe a Dios, aunque ni si- hablan en el reflejo de ocho deslumbrantes quiera se pronuncie. Para qué hacerlo, el ensordecedor eco de las rejas y miradas. Son Juan, Sindo, Miguel, Juan si es Él quien ha escrito las páginas más recobrar la paz que su alma ansía. Antonio, Martín, Jesús, Mike y Alberto. bellas del poemario que en este hogar se Allí, donde el corazón palpita entre Libres, por fin, del amasijo de cemento, lee en voz alta… Con la respiración a mandamientos de humanidad, condena y soledad donde han pasado los flor de piel, el corazón de cada uno de mansedumbre y ternura, los ofrecen peores inviernos de su vida… «Este pro- estos hermanos quiere desenvolver, con yecto sigue en pie porque a Dios le gusta», un lugar donde volver a escribir su puño y letra, las cargas de un pasado confiesa Mari Carmen Guardia, la pre- que solo arde si reconoce el dolor de su —ya sin miedo— el verbo amar. sidenta de esta asociación y también vo- huella. «Mi condena es de cuatro años y luntaria, con la emoción de sus manos medio», «yo cumplí cuatro, aunque ya tañendo en carne viva. Y, en un silencio estoy en libertad total», «la mía fue de 18 1626 3.961 10 de noviembre de 2018 18-22_Ecclesia 5/11/18 13:33 Página 3 Reportaje un año y medio», «mi condena están pero también son, por lo es de seis», «yo he cumplido sie- que esta morada sigue oliendo te», «la mía fue de cinco», «yo a hogar. «¡Los voluntarios son llevo tres y cumplo en 2019», «y los que mantienen esta casa!», yo estoy en esta casa desde que apunta, desde el fondo de la se abrió»… sala, el capellán. Pablo Morata Así, poco a poco, van des- llegó a Casarrubuelos para tres cansando sobre la mesa que meses, y lleva 22 años. atempera nuestras manos el peso Y aunque él afina las cuerdas de sus penas. En total, más de de los instrumentos en la casa 30 años de condena reunidos en de acogida que me recibe, se menos de cinco metros cuadra- esconde tras la última butaca dos. Más de 30 años cumplidos del teatro para dejar la canción de soledad, rabia, tristeza, deso- en manos de otros músicos… lación, abandono, desamparo y «El director de orquesta mueve perdón. Sobre todo de perdón. la batuta. Y la batuta es el ins- Porque en el reflejo arrepentido trumento que menos pesa. Hay de este segundo mandamiento, que coordinar, sí, pero el pro- el primero es el amor, habita la tagonismo es de ellos», advierte, ternura de un Dios que no mira señalándolos con alegría. «Mí- el pecado cometido, sino la mi- ralos —advierte, con un ges- sericordia hecha brisa en anhelos Alfonso, voluntario de la casa de acogida. to—, ahí se ve el rostro de Jesús: tristes. «Yo, a través de la aso- en la misericordia, en la ternura, ciación ePyV y de las personas en el no juzgar». Es un misterio que están privadas de libertad, que embiste por el quicio de la puedo ver la misericordia de vida, trato de responder. «Sí», Dios», revela Alfonso V. Hidalgo, confiesa el delegado de Pastoral voluntario desde 2014. Penitenciaria en Getafe y ca- pellán de la prisión de Valde- moro, «cuando en la Misa de- «Dios está en la prisión» cimos “Este es el misterio de El 27 de marzo de 2009 fue inaugurada Isla Merced, en Casarrubuelos. nuestra fe”, no es solo el misterio Alfonso lleva la bondad escrita en el sentido que nos supera». en su mirada. Cuando abraza, Así, con la mirada puesta deja en la piel del hermano un en esa Cruz resucitada y resu- surco de ternura para que, si al- citadora, se forjaron, en el año gún día tropieza, lo llene con su 2000, los cimientos de la aso- amor el Dios en quien él tanto ciación Entre Pinto y Valdemoro: confía. «En ellos habita el rostro en la entraña de un grupo de de Dios», revela, tan emocionado voluntarios de Pastoral Peni- como cuando pronuncia el nom- tenciaria que acompañaba al bre de sus cuatro hijos y nietos. capellán para visitar a los in- El club Rotary de Madrid y Sturgar regalaron una furgoneta a la asociación. Y en el brillo de ese juramento, ternos del centro penitenciario antepone el regalo de sus 63 años Madrid III, de Valdemoro. Mo- al clamor de un pasado que da sentido hace latente y patente mucho más cuando tivados por creer que la reinserción era a su creencia presente. «Si estas personas la pobreza, la humillación y el ser esclavo posible, nació en la Delegación de Pastoral son lo más abandonado de la socie- de las pasiones te llevan a romper familias, Penitenciaria de la diócesis de Getafe. dad… El Jesús sufriente ante Pilatos y hogares, hijos, situaciones…». Trabajan en las cárceles de Navalcarnero, ante Caifás era el Jesús preso de hoy». Junto a Alfonso, Pilar, Paquita, Mari Valdemoro y Aranjuez. Estando en pri- ¿El mismo que permanece sobre la Cruz?, Carmen Guardia, Felipe, Mari Carmen sión, los internos solicitan el aval, tienen le pregunto. «Ellos son el Dios hablante de las Heras, Cari y Marifrán conforman una entrevista y empiezan a allanar el a los hombres de hoy. Dios está en la el voluntariado presente en este lunes terreno con el taller Vivir sin cadenas, prisión y en todos los hombres, pero se otoñal. Y es por ellos, y de los que no de preparación para la vida en libertad. 10 de noviembre de 2018 3.961 1627 19 18-22_Ecclesia 5/11/18 13:33 Página 4 Reportaje Este «puente de unión», como lo describe El padre Pablo, que permanece a la saliva y decide confesar algo que parece Mari Carmen, les lleva de la prisión a escucha, pone en entredicho la misión sagrado para él: «Está mal decir esto, esta casa y, en función de la situación de la prisión. «Todos cometemos con- pero aquí me siento más querido que penitenciaria, será el número de días ductas antisociales y la cárcel no restituye en mi propia casa». que permanezcan aquí. nada a las víctimas. Una sociedad que Alberto, el abuelo, vino a la casa por se siente pagada porque castiguen al in- 15 días, y lleva desde que abrieron el fractor, yo me planteo qué tipo de so- hogar. Preserva su pasado carcelario, «La cárcel te enferma ciedad estamos construyendo… Tenemos supongo que para no dejarse doler. Es y te destruye» el legítimo derecho a que se nos defienda una institución, y ninguno de sus com- y proteja, sí, y ahora está empezando la pañeros ha escapado a sus propinas y En la casa ríen y lloran de igual manera, alternativa de la justicia retributiva, consejos. Risueño y bonachón, desde la en el mismo lenguaje y con las mismas donde realmente puede haber un en- otra punta de la mesa donde permane- cadencias. Y lo hacen a carcajadas. ¿Acaso cuentro entre víctima e infractor». cemos sentados, aprovecha la coyuntura les quedará algo a lo que temer?, pienso Por tanto, destaca que «hay alternati- para contarme que, cuando era pequeño, para mí. Se saben a salvo, y expresan vas, y se pueden dar pasos, pero…». En jugaba en su barrio con el Papa Fran- constantemente su sentir. No solo con la ese momento, se hace el silencio en la cisco… «Éramos vecinos y lo habré visto palabra, sino también con la sonrisa. Ha- estancia que nos aúna, y todos miran al varias veces. Lo estimo mucho». En el blamos, compartimos la rutina del vivir capellán… «¿Las cárceles?», sugiere, en Año de la Misericordia, fue a verle a y discutimos sobre el poder de curación forma de consulta, «pregúntale a un ca- Roma con un grupo de internos y vo- de la prisión… «La cárcel no cura; todo nario la diferencia que hay entre una luntarios. «Fui con mi bandera argentina, lo contrario… ¡te enferma y te destruye!», jaula de cobre y una jaula de oro». y pasó por mi lado, aunque no pude sa- subraya Jesús, con todo el conocimiento ludarlo». A sus 88 años, este argentino de causa que carga sobre sus espaldas.