Religión Romana Y Religión Indígena En Las Ciudades De La Céltica Hispana
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LVCE/VTVMXXI-XXII, 2002-2003 RELIGIÓN ROMANA Y RELIGIÓN INDÍGENA EN LAS CIUDADES DE LA CÉLTICA HISPANA JUAN CARLOS OLIVARES PEDREÑO Universidad de Alicante El presente artículo estudia la interacción entre los cultos romanos e indígenas en las ciudades del área céltica de la Península Ibérica. La difusión del culto a deidades romanas en Hispania es evidente, pero ello no tuvo como consecuencia la eliminación de las deidades autóctonas, puesto que éstas pervivieron con una considerable solidez. Fue en las ciudades donde la romanización religiosa fue más intensa y ello contribuyó a que sólo determinadas divinidades indígenas fueran veneradas en ellas, principalmente femeninas y de carácter popular, relacionadas con la familia y la fecundidad, mientras que las deidades indígenas masculinas con un acusado carácter público y de identidad colectiva pervivieron en las comunidades rurales. The present paper studles the interactlon between the Román and indigenous cults ¡n the cities of the Celtio área of the Iberian Península. The diffusion of the cult to Román deities in Hispania is evident, but it didn't have as consequence the elimination of autochthonous dei ties, since these stayed with a considerable solidity. It was in the cities where the religlous romanization was more intense and it caused that only certaln indigenous divinities were wor- shlpped in them, mainly feminine and of popular character, related with the family and the fecundity, while the masculine indigenous deities with public character stayed in the rural com- munities. Los estudios sobre la romanización reli incluir todos los estudios que han considerado giosa de Hispania llevados a cabo, principal la relación entre los cultos romanos e indíge mente, durante la segunda mitad del siglo XX, nas y los fenómenos de sincretismo. Entre es han acometido objetivos de diversos tipos1. Al tos últimos, algunos se realizaron hace déca gunos autores pusieron el acento en los aspec das y, por tanto, fueron hechos con menos in tos filosófico-políticos del proceso, atendiendo formación, mientras que otros se dedicaron a a sus causas y centrándose en el carácter de territorios concretos, sin establecer un balance la actuación de la administración romana y de general de los procesos de contacto entre am las comunidades indígenas durante el mismo, bos universos religiosos. contemplando, a su vez, los problemas teóri Creemos, por tanto, que es necesario el cos en el contexto general del proceso de desarrollo de nuevas vías de investigación que romanización de Hispania (Alvar, 1990; Alvar, partan de una información actualizada y que, 1993; Alvar, 1996; Etienne ef al., 1976; Marco, abarcando amplios territorios o, en su caso, el 1996). La segunda vertiente que, en algunas conjunto de la Península Ibérica, centren su ocasiones, fue puesta en marcha por los mis objetivo en las transformaciones religiosas que mos investigadores, se dedicó a estudiar el re se produjeron en Hispania durante los siglos sultado, las consecuencias y, en general, la posteriores a la conquista romana, en los mo casuística de dicho proceso. Dentro de esta dos de difusión de la religión romana y en el segunda perspectiva podemos incluir estudios impacto que causó sobre la religión autóctona, de dos tipos. En primer lugar, podemos consi teniendo en cuenta también los mecanismos de derar los dedicados a definir la religión roma adaptación de las sociedades indígenas para na en Hispania que, aunque han intentado abar encontrar el equilibrio entre sus tradiciones re- car toda la información disponible, no han teni do en cuenta su relación con los cultos 1 Este trabajo ha sido realizado con la financiación de una autóctonos (Vázquez Hoys, 1977; Vázquez beca post-doctoral de Historia concedida por la Fundación Hoys, 1979-80). En segundo lugar, podemos Caja Madrid. 207 ligiosas y el nuevo sistema socio-político Tranoy, si bien sus estudios principales se de instaurado por Roma. El presente trabajo es un dicaron únicamente al noroeste hispano. Para primer acercamiento a estos objetivos. Nos Tranoy, lo más relevante de la situación reli centraremos en el estudio de las ciudades del giosa en Gallaecia fue el mantenimiento de las área céltica hispana partiendo de diversos aná tradiciones locales, a pesar de que para ello se lisis estadísticos de las ofrendas votivas para utilizaran elementos culturales de los conquis establecer un primario balance de la interacción tadores, como la lengua, las fórmulas y los entre las religiones romana y autóctona en los monumentos. Según el investigador francés, ámbitos urbanos de ese territorio. las dos características principales de la religión Uno de los primeros investigadores que indígena fueron su vitalidad y su permanencia. llevó a cabo un estudio general de la religión Su vitalidad, en contra de las ideas de Toutain, en la antigua Hispania fue Toutain. El investi se plasmaba en el hecho de que fue en las gador francés establecía, en las primeras dé áreas del noroeste más abiertas a la roma cadas del siglo XX, una relación inversa entre nización donde más se mantuvo el culto a los las áreas romanizadas del territorio peninsular dioses autóctonos, de modo que, a medida que y aquellas en las que se observaban pervi- progresaban las costumbres monumentales vencias de cultos indígenas. En su opinión, el romanas, más fácilmente se expresaban las mantenimiento de las tradiciones religiosas prácticas cultuales indígenas. En resumen, autóctonas era patente en aquellos lugares Tranoy percibía una coexistencia y no un en- donde la irrupción de la cultura romana había frentamiento entre ambas tradiciones religio sido más débil (Toutain, 1967, 184). Esta con sas (Tranoy, 1981, 360-361 )2. clusión venía dada por el hecho de que los cul La idea de una contraposición entre tos indígenas habían desaparecido durante la romanización y pervivencias indígenas fue tam época alto-imperial en las regiones del sur y bién rebatida por Alfóldy quien, además, de este de la Península Ibérica, mientras que se mostraba que esta relación inversa no funcio habían mantenido con profusión en las áreas naba en muchos territorios de Hispania ni en célticas. La tesis de Toutain se mantuvo duran otras provincias del imperio (Alfóldy, 1983, 14 te décadas en la historiografía llegando a con ss.). Este debate que, como ya hemos avanza vertirse en un tópico. do, venía dado por la disparidad existente en Un trabajo posterior que tuvo una gran tre la relevante pervivencia de testimonios de repercusión sobre la romanización religiosa en religiosidad indígena en el área céltica de la Hispania fue el de Lambrino. Este autor plan Península Ibérica y la casi total ausencia de teó la existencia de un proceso progresivo por los mismos en toda el área ibero-turdetana, fue el cual las divinidades indígenas fueron toman resuelto por Alfóldy argumentando que las dei do, según varias fases observables en los epí dades indígenas cumplían un papel importante grafes, el nombre de sus equivalentes roma entre las comunidades que mantenían ciertas nos (Lambrino, 1965, 224 ss.). Creía, por tan formas indígenas de organización social, mien to, que el sincretismo era cada vez más inten tras que perdían su sentido y tendían a des so entre la religión romana e indígena y dejaba aparecer en sociedades que habían sufrido la entrever una tendencia de las deidades destrucción de dichas estructuras. Desde este autóctonas a la desaparición. Por otra parte, punto de vista, las comunidades célticas his en su opinión, la mayoría de los testimonios de panas, que habían conservado tradiciones religiosidad indígena se daba al norte del Due como las llamadas organizaciones supra- ro, en Gallaecia y las regiones de los Astures y familiares, habrían mantenido también el culto los Cántabros, es decir, en "la región menos a sus divinidades ancestrales (Alfóldy, 1983, 16- romanizada de la Península" (Lambrino, 1965, 17). 227). Esta tesis de que la mayor densidad de Otro autor que participó de esta discu las deidades indígenas se daba en las áreas sión fue Curchin, quien proponía en su trabajo menos romanizadas le llevaba, sin embargo, a publicado, por primera vez, en 1991 que, a determinadas contradicciones, como que en los territorios coloniales de Emérita Augusta o Norba Caesarina hubiera registradas numero 2 Esta conclusión es la que, de modo general, ya planteaba sas inscripciones que aludían a deidades el mismo investigador en un estudio anterior realizado junto autóctonas. a otros autores (Etienne ef al., 1976, 107). Barruol también utilizaba el término "coexistencia" para referirse a la relación La más importante revisión de las teo entre las religiones romana e indígena en la Galia meridional rías de Toutain y Lambrino fue efectuada por (Barruol, 1976, 404). 208 pesar de los fenómenos sincréticos, existía una este punto, podría indicar una perfecta simbio clara dicotomía entre las regiones rurales, don sis entre las dos, podría significar que ambos de eran predominantes las deidades indígenas, mundos religiosos convivieron de modo equili y las urbanas, donde se habían llegado a im brado y que, en consecuencia, el panteón ro poner los dioses romanos. La preeminencia de mano se difundió en toda su integridad por to dioses autóctonos en numerosos ámbitos le lle das las áreas de Hispania y, a su vez, no pro vó a calificar el proceso romanizador, desde dujo un impacto relevante sobre la religión los puntos de vista cultural y religioso, como autóctona. Esto, en nuestra opinión, también un fracaso