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Petenera, el cante más negro

do de la mano, alimentándose mutua- Las fuentes bibliográficas nos pue - mente y creando un vínculo más fuerte den ayudar a encontrar cierto rasgo que la vida misma. cronológico, si bien no es posible lle- Paterna de Rivera, un pueblo hu- gar a una conclusión absoluta. Esté- milde, sencillo, popular, agrícola, re- banez Calderón cita la existencia de gado con el sudor de sus habitantes, ciertas coplillas que reciben el nombre castigado y premiado por la vida… de peteneras, y que “son como se- pero, sobre todo, orgulloso de ser la guidillas que van por el aire más vivo, Cuna de la Petenera. No importa real- pero la voz penetrante de la cantaora mente el verdadero origen del tesoro débanles una melancolía inexplicable”. paternero más preciado, puesto que Afirma además que ya en 1845 existió lo han hecho suyo, y con su esfuerzo una gitana llamada Dolores que cantó Zara Ruiz Romero y dedicación la petenera se ha hecho coplillas por peteneras. Por su par- Licenciada en Humanidades grande. te, Demófilo afirma que si bien hasta Sus orígenes, sus características, 1879 no se pusieron de moda las pete- “Dicen que la petenera su devenir histórico, las personalida- neras en Sevilla, muchos cantaores se trae mal fario y maldición. des que han destacado en su seno, la ponen de acuerdo al afirmar que son En el arte no hay fronteras, en el arte no hay fronteras, literatura que ha generado, su valori- bastante antiguas, y deben su origen a que eso es lo que quiere Dios… zación actual… No resulta fácil contar una cantaora llamada Dolores. Dicen que la petenera la historia de la petenera, al igual que Hipólito Rossy encuentra el ori- trae mal fario y maldición” (La Niña de los Peines) tampoco es nada sencillo interpretar- gen de las peteneras, no en el siglo la. La petenera se configura como una XIX, sino que su ritmo y compás “se Arte, sentimiento, flamenco, cante, mujer rebelde, bella y complicada, que corresponde con el de algunas “villa- baile, cultura, superstición, belleza, una vez que se comprende, otorga nescas” del siglo XVI, aunque hay in- enigma, tristeza… La petenera es una una total satisfacción a aquel que la dicios de que sea de época anterior, manifestación artística proveniente del pretende. como el romance de Gerineldo (siglo alma misma, que mediante el cante y XII?), en versión musical de Arcos de el baile es capaz de expresar los más Orígenes de la petenera la Frontera”. Rossy también encuentra enraizados sentimientos de una sola crédito en la idea de que fue un cante persona, de un colectivo, del mundo Sobre el origen de la petenera es mu- desarrollado por los judíos sefarditas, entero. La petenera es algo más que cho lo que se ha hablado y escrito, sin entre los que abundaban los trovado- un cante, algo más que una expresión poder llegar a una conclusión definiti - res y juglares, que cultivaron el cante artística; la petenera avanza por el va, y es que según Hipólito Rossy “de popular. La tesis del origen judío de la tiempo con personalidad propia, levan- la petenera se ha hecho más literatura petenera se refuerza con la existencia tando miedos y pasiones, y creando a que de todas las demás canciones que de una conocida letra que alude a la su alrededor toda una corriente cultu- componen el folklore andaluz y levan- etnia judía: ral y popular. Para un pueblo gaditano tino”. Son varias las versiones que se como Paterna de Rivera, la petenera aportan acerca de la aparición de este ¿Dónde vas bella judía, tan compuesta y a deshora? forma parte de su cultura más arraiga- flamenco, como por ejemplo el Voy en busca de Rebeco da, de sus sentimientos más profun- hecho de que tiene origen semita, de que estará en la sinagoga. dos y de su historia más apasionada. que puede provenir de la Habana o de La Petenera es Paterna y Paterna es la región del Petén, o que se gestó en Sin embargo, es esta una teoría no la Petenera, puesto que han avanza- manos de una joven llamada Dolores. compartida por todos los estudiosos

36 del flamenco. De otra parte, surge del resto de los cantes. la petenera, y la historia y los entendi- la creencia de que la petenera tiene Son muchas las voces que afirman dos del flamenco no han sido capaces origen hispanoamericano, concreta- que el vocablo “Petenera” proviene de de esclarecer por completo el verda- mente de la Habana o de la región del “Paternera”, gentilicio de Paterna. No dero origen de este cante. Sin embar- Petén. Entre las peteneras más cono- es de extrañar esta afirmación, puesto go, hay una cosa que queda clara, y cidas, se dan también algunas letras que el cambio vocal de la –e por la –a es que independientemente del lugar que ayudan a reforzar esta teoría: puede darse perfectamente con la evo- originario de donde proceda, hace ya lución del habla. Es conocido lo que se bastante tiempo que la petenera ha En la Habana nací yo cuenta acerca de la equivocación de pasado a formar parte de la localidad debajo de una palmera allí me echaron el agua los oyentes ante la presentación de gaditana de Paterna de Rivera. Por cantando la petenera. Dolores la Petenera. Un pequeño error medio de la celebración del concurso vocal puede darse con facilidad, y en anual, y a través de todos los esfuer- La relación con la Habana solo se en- este caso, derivó en la creación de un zos de los cantaores autóctonos, de cuentra en las letras de las coplas más nombre propio tanto para la cantante los estudiosos del cante, de los es- conocidas. Por su parte, la teoría que como para lo cantado. tamentos municipales… la petenera habla sobre el Petén, se basa en la si- José Blas Vega, un importante ha crecido y se ha consolidado como militud de la nomenclatura, puesto que estudioso del flamenco, encuentra cante. Ha pasado a formar parte de los puede darse con facilidad la conver- muchas dificultades a la hora de es - sentimientos más arraigados de la lo- sión de Petén en Petenera. Sea como tablecer los verdaderos orígenes de la calidad, siendo ya imposible negar la fuere, prácticamente todas las teorías petenera. Sin embargo, se posiciona paternidad de la petenera. existentes se basan en lo narrado en a favor de la paternidad de Paterna las coplas peteneras, y aun no existe de Rivera, al afirmar que: “Este can- Dolores La Petenera unanimidad entre los flamencólogos. te debe su origen a una cantaora de Por último, queda por resaltar la flamenco llamada La Petenera, que Quien te puso Petenera no te supo poner nombre, teoría que convierte a la petenera en es igual a Paternera, es decir, oriunda que debió de haberte puesto, Andaluza, en Gaditana, en Paternera. de Paterna de la Ribera (Cádiz) ”. La ¡niña de mi corazón!, Es esta la más aceptada por los fla - cuestión sobre la paternidad del can- la perdición de los hombres. mencólogos y entendidos del flamen - te es abordada también por Demófilo, co, puesto que se poseen evidencias quien afirma que la petenera proviene ¿Quién fue la Petenera? Orgullo- históricas de la existencia de Dolores de un pueblo gaditano como es Pater- sa moza paternera, que con arte y la Petenera, y son muchos los artistas na de Rivera. con gracia creó un palo de flamenco. que hablan de las peteneras como Una vez aceptado el hecho de que Como Dolores la Petenera ha pasado procedentes de Paterna de Rivera. la petenera proviene de Paterna, es a la historia, como una “cantante de En palabras de Rafael Marín: “ Pe- necesario concretar otro elemento, ya fuste” y una “señorita de rompe y ras- tenera. Ese cante también proviene de que en Andalucía existen varias loca- ga en cuestión de amores y amoríos”. una mujer, según dicen, a la que ape- lidades con este nombre. En palabras No se conoce mucho de Dolores la llidaban así; pero no cabe duda de que de Ángel Caffarena: “¿ De qué Pater - Petenera, tan solo ciertos comentarios el origen es el Paño Moruno, cante y na se trata? En Andalucía no hay solo de sus coetáneos. Sin embargo, creó toque antiquísimo, como lo es también una, sino que varias Paterna, al me- un cante, y se convirtió también en la el Punto de la Habana. Se ha cantado nos tres: una en Almería, otra en Huel- protagonista de muchas de sus letras. también una petenera llamada Bola de va y Paterna de la Ribera en Cádiz. Cuentan que en una de sus actua- Fillo ”. Esta afirmación hace suponer el Nos inclinamos a creer que se trata de ciones, en las que se hacía llamar la hecho de que probablemente exista esta última por multitud de razones, no “Paternera”, el vocablo fue confundido un antecedente de la petenera en can- siendo la menos que Cádiz es precisa- por el de “Petenera”, extendiéndose tes morunos y semitas, si bien, a partir mente la provincia más representativa no solo a su figura y personalidad, sino de la influencia de Dolores, se torna - de todo el cante andaluz ”. también a la de su cante, que creó una ron en petenera, y acogieron un estilo Son varias las “Paternas” que se nueva escuela y dio lugar a un nue- y una forma concreta que la distinguirá han disputado el honor de ser cuna de vo género flamenco. Son muchas las

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dudas en torno a su existencia y per- plas y coplillas, debió de ser una bella su pueblo natal. Con humildad, cariño sonalidad, pero son varios los enten- moza, capaz de desatar la locura entre y mucho respeto se trata en Paterna didos en flamenco que la mencionan los hombres. Ha pasado a la historia el legado dejado por una de las pai- como artífice de la petenera. como una “mujer fatal” que causó la sanas más importantes que ha dado Antonio Machado Álvarez, Demófi - desgracia de aquellos que perdida e la historia. La importancia otorgada a lo, escribió en 1881 que las peteneras irrevocablemente se enamoraron de la petenera, tanto al cante como a su “(…) deben su origen a una cantado- ella. Vivió en Paterna de Rivera, en el creadora, es fácilmente rastreable a ra de flamenco llamada La Petene - Callejón de los Ahorcados, muy cerca partir de la realización de concursos, ra a quienes unos hacen natural de del Pozo de Medina, donde ella iba a festivales y demás festejos. Málaga y otros de la Habana. ¿Pero recoger agua y donde actualmente se Sin embargo, como máximo reco- qué significa este mote o apodo de la encuentra su escultura. Imaginémonos nocimiento y admiración a la figura de Petenera (…)? He aquí una pregunta a una joven muy bella, de cabello ne- Dolores la Petenera, se ha erigido una que podemos contestar satisfactoria- gro y ojos penetrantes, que mientras escultura en su honor. Actualmente se mente, a nuestro juicio, merced a los acude cada día a recoger agua, can- encuentra en el mismo emplazamiento autorizados informes del célebre can - ta de manera pausada, sentimental y donde la joven solía acudir a recoger tador Juanelo. Petenera o Patenera, majestuosa, dejando una huella imbo- agua, en el Pozo de Medina. La obra nos dijo éste, es igual a paternera, rrable en todos aquellos que alguna de arte en cuestión fue llevada a cabo esto es, natural de Paterna. Semejan- vez tuvieron el placer de observarla. en 1982 por el prestigioso artista Je- te afirmación es para nosotros digna sús Cuesta Arana, natural de Alcalá de crédito: 1º porque algunos suponen Calle del Pozo de Medina de los Gazules. Realizada en bronce, pon crespón en tus ventanas que la Petenera era de Málaga, otros representa con majestuosidad la figu - porque ya “La Petenera” aseguran que era de la provincia de ra de una moza guapa, enérgica y con no bajará más por agua. Cádiz; 2º, porque en esta provincia solera, tal y como debió ser Dolores la hay efectivamente un pueblo llamado Petenera, el espejo de Paterna de Ri- Dolores la Petenera debió de ser una Paterna de Rivera; 3º, porque la con - vera ante el mundo. mujer majestuosa, querida por el pue- versión de Paternera en Petenera es blo, y valorada como artista. Su vida perfectamente explicable por razones Influencia de la petenera ha generado toda una leyenda plas- eufónicas y muy creíble en una razón mada en las letras de la copla, pero que convierte vidriera en beriera; 4º, Su vida y su muerte se convirtieron en sobre todo, será su muerte el aconte- porque la formación del adjetivo es co- las protagonistas de las letras de un cimiento más recordado. A este res- mún y corriente; así vemos Triana, tria- cante que ella misma creó. Sin embar- pecto, Domingo Manfredi Cano afirma nera; 5º y último, porque Juanelo, que go, fue tan grande su leyenda y tan que “La copla da fe de que la Petenera es muy entendido en cante flamenco y fuerte la huella dejada en la cultura murió en olor de muchedumbre, ungi- completamente veraz, no tenía interés popular, que en torno a su figura apa - da de popularidad, como suelen morir en engañarme acerca de la patria de reció una literatura no solo reflejada en los toreros”. la Petenera, a quien él mismo llegó a las letras de las coplas. escuchar ”. La Petenera se ha muerto, Antonio Murciano le dedica unas Además, ratificando a Demófilo: y la llevan a enterrar, páginas en su obra Poesía flamenca ; “Juanelo, que según dicen, llegó a oír y en el panteón no cabe mientras que Serafín Galán compone personalmente a la Petenera, que se la gente que va detrás… un verso ya referido en el presente es- llama de esta forma por ser creación crito sobre la pena de no volver a ver o recreación de esta célebre cantaora, Dolores la Petenera dejó una huella a la Petenera saliendo a buscar agua. natural de Paterna, y que fue la que imborrable en el flamenco, en una de Manuel de Góngora y Serrano Anguita puso de moda este cante. No es ex- las manifestaciones artísticas más im- componen una obra teatral ambien- traño el cambio de Paternera por Pe- portantes y características de Anda- tada en el pueblo natal de Dolores, tenera” (1). lucía. Pero si grande ha sido su hue- estrenada en 1928, y que recibe el Dolores la Petenera vivió en el si- lla en el flamenco, gigante ha sido la nombre de La Petenera. Fue esta una glo XIX, y por lo que cuentan las co- marca dejada en Paterna de Rivera, obra de teatro que ahondó en los tópi-

38 cos que se tenían sobre la petenera, A partir de la petenera y de lo que Es sobre todo la etnia judía la que anunciándose en el Abc de 1928 de la su cante significa y aporta, ha surgi - alimenta la superstición en torno a la siguiente manera: “ Dolores la Petene- do también una expresión bastante petenera, una superstición que aún ra, bailaora de tronío, mujer de trágico conocida: “salirse por peteneras”, que hoy en día sigue vigente. Por ello, es destino, que ya nació a la vida ungida literalmente hace referencia al arte de destacable el hecho de que una de las por el signo de la fatalidad ”. la moza gaditana, que con gran sale- mayores cantaoras que ha cultivado Por su parte, Federico García Lor- ro y compás deleita a todos los que el género, La Niña de los Peines, sea ca, en su obra Poema del cante jon- la observan. “Salirse por peteneras” gitana. do dedicó diez poemas a la Petenera, es símbolo de entusiasmo, de arte, La superstición en torno a la pete- configurándose así el llamado “Gráfico de ganas… y se lleva a cabo cuando nera se acentuó por lo sucedido a Mari de la Petenera”; donde aparece uno una persona rompe a cantar y a bailar, Paz, una artista que interpretaba una de los poemas más bellos dedicados demostrando su arte y contagiando su escena de Gloria a la Petenera del a nuestra Petenera, que reza tal cual: entusiasmo. espectáculo Cabalgata , que muere Sin embargo, de una manera colo- meses después de una intoxicación. Muerte de la Petenera quial, otra derivación en torno al signifi - La joven dio vida a Dolores la Pete- cado que ha acogido la expresión “sa- nera en la escena en la que la llevan En la casa blanca muere la perdición de los hombres. lirse por peteneras”, hace referencia al a enterrar y es aclamada con cantes, hecho de hacer o decir algo sin venir al aplausos y lloros. Según el autor de la Cien jacas caracolean. caso. A la actuación espontánea y que obra: “ Mar Paz una noche lloró por- Sus jinetes están muertos. provoca sorpresa porque no se espe- que aquel paso la impresionaba como Bajo las estremecidas ra; o incluso hace referencia a hacer o augurio ”, por lo que tras su muerte, la estrellas de los velones, decir algo que se encuentra fuera de superstición en torno al mal fario de la su falda de moaré tiembla tono, fuera de contexto. En palabras petenera no hizo sino aumentar. entre sus muslos de cobre. de la Real Academia Española: “hacer Sin embargo, la negativa en mu- Cien jacas caracolean. o decir algo fuera de propósito”. chos ámbitos a interpretar una pete- Sus jinetes están muertos. nera no solo se debe a la superstición Superstición en torno a la petenera en torno a su “mal vahío”, sino que Largas sombras afiladas vienen del turbio horizonte, la dificultad de su ejecución provoca y el bordón de una guitarra La petenera ha conseguido traspasar que sean pocos los que se atrevan a se rompe. las fronteras de lo musical para ser interpretarla. Es fácil interpretar pasa-

Cien jacas caracolean. algo más que un cante flamenco. Ha blemente una petenera, pero es muy Sus jinetes están muertos. generado una literatura y ha arraigado complicado y muy pocos son capaces en lo más profundo de la cultura po- de interpretarla con mayúsculas. En lo referente a la influencia ejercida pular. La presencia de una mujer de La superstición en torno a la pete- sobre otros palos del flamenco y esti - bandera y lo narrado en torno a su per- nera se alimenta de elementos diver- los de cante y de baile: “ Se dice que la sona, y lo que en los hombres desen- sos. Acoge la presencia de una mala Petenera no ha influido ni inspirado nin - cadenaba, ha generado una importan- mujer cuyos amantes no han acaba- gún cante posterior flamenco pero esto te superstición en torno a la petenera. do demasiado bien para atribuir mala no es exacto. La melodía métrica de la Los gitanos lo denominan “el cante de suerte a todo lo relacionado con ella. Petenera ha servido de patrón para El la guasa”, porque todos los amantes El sentimiento de mal fario se ve ade- Vito (o al revés), aunque este se escriba de Dolores tuvieron un final trágico. La más acentuado por la muerte de Mari en temario sincopado y no en compás petenera se encuentra rodeada por la Paz, una joven que interpreta el papel alterno, y este mismo ritmo ha servido superstición y el “mal fario”, por lo que de Dolores la Petenera durante una de base al de la americanas, hay muchos cantaores que se niegan representación teatral. El ambiente y más tarde a la Siguiriya gitana, a la a interpretarla. A veces, la sola men- cargado de negatividad y superstición Liviana, a la Serrana, y va camino de ción de su nombre hace que se san- es ya típico en todo lo que se refiere servir de asiento rítmico y acompasa- tigüen, hagan cruces o se retiren los a las peteneras, siendo un sentimiento do al Martinete y a la Debla ” (2). cantaores. vigente aún hoy en día, puesto que se

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ha ido transmitiendo de generación en de la siguiriya y cubre su cabeza con que se consolida con las aportaciones generación, y sobre todo entre la etnia su mantón. Como acompañamiento de diversos artistas, hasta que llega el gitana. pueden emplearse unas castañuelas, momento en que Paterna de Rivera, Sin embargo, cabría resaltar otro aunque son preferibles los pitos, las Cuna de la Petenera, toma el relevo, elemento que ha contribuido a formar palmas sordas y, sobre todo, el len- y se encarga de mimar, cuidar y trans- la imagen de mal fario en torno a la guaje mudo de las manos ” (4). mitir su cante. Con la realización de petenera. Y es que 1881 es el año en Ya sea en el cante o en el baile, la un Concurso Anual de Cante por Pe- que la petenera entra en su punto ál- exposición de los sentimientos más teneras, se incentiva que este cante gido; siendo este un año marcado por profundos, dolorosos e incluso difíci- no desaparezca, dándole caché e im- la pobreza y la escasez de alimentos. les de expresar, es una de las carac- portancia en el mundo del espectáculo Fueron años de hambre, y el hecho de terísticas más importantes y profundas flamenco. Además, la existencia del que la petenera destacase en un pa- de la petenera. Según Hipólito Rossy, mencionado concurso supone una ga- norama tan negativo, se relaciona con es posible realizar una distinción entre rantía no solo de la supervivencia del su mal fario, con la mala suerte que diferentes tipos de petenera: petene- palo flamenco, sino de su propia for - contrae en todos los aspectos. Existe ra antigua, petenera corta o chica y ma y configuración. El concurso pone una coplilla que lo narra tal cual: petenera larga o grande. Todas ellas especial cuidado en que se interprete caracterizadas por la repetición de un la petenera en su formato original, sin Del año de las peteneras verso y la introducción de determina- incluir cambios ni nuevos elementos, nos tenemos que acordar, que anduvo Pura y Limpia das expresiones; pero sobre todo, con el fin de transmitir el cante de la en el canasto del pan. caracterizadas por la melancolía y la manera más pura posible. majestuosidad. Sea cual sea su origen verdadero, e Las expresiones que se introducen Temáticas peteneras independientemente de la ficción que en medio de la copla caracterizan a la se haya generado a partir de la figu - petenera, puesto que ayudan a crear Son diversas las temáticas abordadas ra de Dolores, la petenera, coloquial- el clima propicio para la expresión de por las coplas peteneras, aunque to- mente conocida como “la pete”, es un los sentimientos, del dolor, la pena y das se caracterizan por una profunda palo flamenco dotado de sentimientos, la melancolía que caracterizan a este tristeza y melancolía. El sentimiento que canta y baila a la tristeza y el des- cante. Así por ejemplo, en medio de se hace imprescindible a la hora de amor. una petenera, aparecen expresiones interpretar una petenera, puesto que como “ ¡Soleá, ay, ay, ay, ay!”, “¡soleá, forma parte de su esencia y de su Características de la petenera y más soleá!”, “¡niña de mi corazón!” o forma de ser. La petenera muestra el “¡soleá, triste de mí! ”. sentido dramático del en Es un “ cante con copla de cuatro ver- Con el paso de los años, la forma y estado puro. Sin duda, para mostrar la sos octosílabos que al cantar se con- las características de la petenera han temática en que las peteneras se han vierten generalmente en seis por repe- ido cambiando. Sobre todo gracias a centrado, conviene mostrar algunas tición de uno de ellos y el añadido de los aportes de los diversos artistas que de sus letras. Así, las que aparecen a otro ajeno a la copla. Es de entonación la han cultivado, y que han ayudado continuación fueron dictadas a Demó- pausada, melódica, sentimental y ma- a fortalecer la petenera como un im- filo por el artista Juanelo de Jerez. jestuosa. Se distinguen en él varias portante palo del flamenco, como por Como ya se ha mencionado con modalidades, por lo que el término ejemplo Don Antonio Chacón o la Niña anterioridad, Dolores la Petenera apa- petenera debe considerarse como ge- de los Peines. Parece ser que la pete- rece en muchas de las coplas petene- nérico, aunque las distinciones entre nera que se produjo en torno al siglo ras. Es uno de los temas más recu- los varios tipos sean, a veces, signifi - XIX es mucho más ligera que la actual, rrentes, y con ella se hace referencia cativas ” (3). Así, la petenera es cante, puesto que se concedía mucha impor- al desamor, al dolor provocado ante la es sentimiento, es “ baile flamenco que tancia al baile. De hecho, en 1887, los ausencia o el rechazo de la mujer a la se acompaña con la petenera corta y maestros Otero y Segura realizaron el que se ama; al mismo tiempo que se la que es propio de mujeres. La bailaora modelo coreográfico de la petenera. menciona como gran artista, que tanto ejecuta pasos muy semejantes a los Hablamos de un modelo de cante en vida como tras su muerte generó

40 expectación y admiración. bre, para hacerse extensible a todas de Medina el Viejo. La Niña de los Pei- las penas de amor. La mujer, bella y nes, gitana famosa por su calidad ar- Malhaya la Petenera cruel, es la culpable del sufrimiento de tística, hizo suyas las peteneras, con- y quien la trajo a esta tierra, que la Petenera es la causa, muchos hombres. virtiéndose en la mayor divulgadora de soleá y más soleá, este cante. Interpretaba las peteneras que la Petenera es causa, No me mires, que me matas, en público, y dejó grabaciones con to- de que los hombres se pierdan. con esos ojos tan tristes, dos sus tocaores. En lo referente a las porque se me representa, Petenera de mi vida; ¡niña de mi corazón!, grabaciones, la más antigua grabación Petenera del corazón; porque se me representa de petenera que se conoce fue llevada por causa de la Petenera, el mal pago que me distes. a cabo por Telésforo del Campo. soleá y más soleá, por causa de la Petenera Una mujer fue la causa Sería imposible nombrar a todos estoy pasando dolor. de mi perdición primera: los artistas que se han atrevido a in- no hay perdición en el mundo, terpretar una petenera, puesto que si ¡niña de mi corazón!, La pena, el dolor y el sufrimiento ca- bien se trata de un palo complicado, no hay perdición el mundo racterizan las letras de las peteneras. que por mujeres no venga. está dotado de una extraña magia, que dota de prestigio a aquel que es Acaba penita, acaba, Unos ojos negros fueron dame muerte de una vez; capaz de interpretar una buena pete- causa de mi enfermedad, que con el morir se acaba nera. Podríamos destacar por ejemplo no quiero más ojos negros, ¡soleá, triste de mí!, ¡niña de mi corazón!, a El Mochuelo, La Niña de la Alfalfa, que con el morir se acaba no quiero más ojos negros la pena y el padecer. Manuel Pavón, Manuel Torre, Pepe el que me tiran a matar. de la Matrona, Rafael Romero, José Aquel que tenga penitas Menese, Naranjito, Fosforito o Car- venga a reunirse conmigo, Intérpretes de la petenera men Linares. a ver si llorando sangre, ¡soleá, ay, ay, ay, ay!, Punto y aparte en la mención, se a ver si llorando sangre Bastante conocidas resultan estas le- merecen por supuesto los cantaores tenemos algún alivio. tras, interpretadas una y otra vez por autóctonos, aquellos que han crecido los grandes del flamenco, que encuen - en Paterna de Rivera, y que se han ali- Además, concretamente la pena del tran en la petenera un cante difícil, ma- mentado de toda la experiencia que se desamor y el dolor que causa la au- jestuoso y dotado de gran sentimiento. puede encontrar en la Cuna de la Pe- sencia del ser querido aparecen con- A lo largo del presente escrito, se ha tenera. Enorme debe ser el sentimien- tinuamente representados en la pete- ido mencionando y engrandeciendo la to de orgullo que recorre el cuerpo de nera. figura de Dolores la Petenera, que creó un paternero mientras interpreta una un nuevo palo flamenco al que incluso petenera; puesto que está mostrando En el cementerio entré; dio nombre. Sin embargo, son otros le dije al sepulturero con todo su arte y sentimiento el teso- si hay un sitio señalado, muchos los artistas que han cultivado ro más preciado del que el pueblo dis- ¡soleá y más soleá!, las peteneras, aportando una pizca de pone. Así, como cantaores paterneros si hay un sitio señalado arte, convirtiéndolas en un cante jondo para aquel que muere queriendo. destacan el Perro de Paterna, el Niño digno de admiración. de la Cava, Rufino de Paterna, Manolo La pena y la que no es pena José Rodríguez Concepción, Me- el Siguiriya, el Niño de la Palma o An- todo es pena para mí: dina el Viejo, un cantaor asiduo a los tonio el Ruiseñor. ayer penaba por verte Cafés Cantantes de Sevilla, hizo de la ¡soleá, y más soleá!, ayer penaba por verte petenera el palo principal de su reper- Concurso nacional de cante por y hoy peno porque te vi. torio, definiendo su estilo y populari - peteneras zándolo en los años 80 del siglo XIX.

Por supuesto, la figura de la mala mu - Digna de mención son también las En 1972 se celebró en Paterna de Ri- jer es un clásico del cante por petene- aportaciones de Don Antonio Chacón y vera el I Concurso Nacional de Can- ras. Comenzó con Dolores la Petene- Tomás Pavón, que siguieron con gran te por Petenera, un evento que tiene ra, creadora del cante al que da nom- fidelidad el modelo implantado a partir como objetivo promocionar el estatuto

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del pueblo como Cuna de la Petenera, esfuerzo y dedicación ha conseguido ta. La Petenera es Paterna y Paterna promocionando y dando a conocer el resaltar el cante, dándole importancia es la Petenera, puesto que se ha crea- cante a través de la geografía espa- en el mundo del flamenco, guardando do un vínculo que va más allá de las ñola. sus formas y custodiando su futuro. consideraciones en torno a su origen. A través del Concurso, y con el paso El Concurso Anual de Cante por Pe- Para un pequeño pueblo gaditano, la de los años, se han ido estableciendo teneras tiene mucho que aportar, y no posesión de un cante flamenco es mo - las formas y características de la pete- solo al mundo del flamenco. Sirve para tivo de orgullo, puesto que se motiva y nera, creando un modelo de cante que promocionar al pueblo, y para darlo a promociona una manifestación intrín- se debe perpetrar y promocionar sin conocer a través de una de sus más seca al carácter andaluz. Dolores la variantes. La participación en el con- bellas manifestaciones; otorgando una Petenera es digna de elogio y admira- curso exige unos cánones a aquellos bella excusa para visitar la localidad. ción, puesto que ha conseguido apor- que desean formar parte de él, confi - La promoción del flamenco crea una tar a su pueblo el mayor tesoro que en gurando una forma concreta en que importante satisfacción en un pueblo la actualidad posee. las peteneras deben ser interpretadas. como Paterna de Rivera, donde sus De este modo, si bien se van produ- habitantes llevan el arte en las venas, ciendo cambios minúsculos a lo largo y el flamenco se encuentra muy arrai - (1) Caffarena, A. Cantes Andaluces. La . La Petenera. 1964. Edit. El Guadal- de los años, no se producen variacio- gado en la propia forma de ser, en la horce. Málaga. nes bruscas, haciendo que el cante se esencia de su localidad. (2) Rossy, H. Teoría del cante jondo. 1966. mantenga en estado puro. Paterna de Rivera muestra su cara Barcelona. Es el deber de Paterna de Rivera, a través del flamenco, a través del (3) Ríos Ruiz, M. El gran libro del flamenco. 2002. Madrid: Calambur. como localidad de origen de la pete- arte, a través de los sentimientos. Por (4)Ríos Ruiz, M. El gran libro del flamenco. nera, el preservar el cante, actuando medio de la celebración del concurso 2002. Madrid: Calambur. consecuentemente con el fin de pro - demuestra el valor y el mimo con que mocionar, cuidar y transmitir la pete- trata a la petenera; además del interés BIBLIOGRAFÍA nera. A partir de 1972, el concurso se que posee en preservarla y sobre todo celebra anualmente, cosechando cada en observarla en su estado más puro, - Álvarez Caballero, Á., El cante flamenco . vez más éxitos, y colocando a Paterna en el punto álgido, que sin duda es la 2004. Madrid: Alianza Editorial - Álvarez Caballero, Á., El toque flamenco. de Rivera como una de las localidades representación. 2003. Madrid. Alianza D.L. más destacas en cuestión de flamen - - Caffarena, A. Cantes Andaluces. La sae- co. Así, como quien no quiere la cosa, Conclusiones ta. La Petenera. 1964. Edit. El Guadalhor- se ha ido acumulando la experiencia y ce. Málaga. - Gamboa, J.M., Una historia del flamenco. se han sucedido anualmente los con- En definitiva, Paterna de Rivera se ha 2005. Madrid. Espasa Calpé D.L. cursos, hasta llegar al número 37, que erigido como Cuna de la Petenera, - Martín Salazar, J., Los cantes flamencos. se celebrará el presente año. La ce- como padre y madre del cante flamen - 1991. Granada: Diputación Provincial de Granada. lebración del Concurso por Peteneras co más negro. La tristeza, el dolor, la - Ríos Ruiz, M., El gran libro del flamenco. fue cosechando un gran éxito desde dificultad y la superstición crean un os - 2002. Madrid: Calambur. su primera edición, convirtiéndose en curo aura en torno a la petenera, una - Rossy, H. Teoría del cante jondo. 1966. un evento reconocido y valorado a representación artística que ha sabido Barcelona. - Federico García Lorca. Gráfico de la Pete - nivel nacional. A él acuden cantaores traspasar las fronteras del cante fla - nera. Dirección URL: [Consultado el 12 de abril de 2012] - El mundo del Flamenco. Los palos. La Pe- andaluza. de luz, de cultura y de belleza; para tenera. Dirección URL: nera es un gran privilegio, que por su- se trata de promocionar y dar vida al [Consultado el 12 de abril de 2012] - Horizonte Flamenco. Los Palos. La Pete- puesto también trae consigo muchas cante paternero por excelencia, pues- nera. Dirección URL: [Consultado el 12 de abril de 2012]

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