“ ” La participación de la Selección Mexicana en el Primer Mundial de fútbol

Rogelio Jiménez Marce

44 Universidad Iberoamericana-Puebla a primera edición del Campeonato Mun- cos de 1924 y 1928, pero también dial de Futbol se llevó a cabo en se contribuía a la celebración del del 13 de julio al 15 de agosto de 1930. Centenario de la Independencia LLa selección mexicana fue invitada a asistir por el de esa república. país organizador, probablemente porque México Los diarios mostraban entusias- había enviado una representación de este depor- mo por la organización del campeo- te a las Olimpiadas celebradas en Amsterdam en nato en Uruguay, pues sería la primera 1928. La suerte de las dos naciones en el certa- vez que se efectuaba un torneo de “máxima im- men había sido distinta: los mexicanos fueron portancia” en tierras americanas, pero lo más eliminados después de jugar los dos primeros importante era que este “varonil ejercicio” que partidos, mientras que la selección uruguaya se “apasionaba a todo el continente”, ayudaría a alzó con el trofeo. desplazar a las “desprestigiadas” corridas de toros El primer campeonato de futbol se celebraría e impulsaría la difusión de un deporte en el que dos años después de la Olimpiada, lo que mos- preponderaban la cortesía, la fuerza, la resisten- traba el disgusto que sentía la FIFA (Federación cia, la destreza, la habilidad y la velocidad. Internacional de Futbol Asociado) por el hecho de que las autoridades olímpicas hubieran pro- ¿Una “selección nacional”? gramado los partidos de fútbol antes de que co- Después de que se recibió la invitación para par- menzaran las actividades deportivas formales, con ticipar en el mundial, la Federación Mexicana de el argumento de que entre los participantes había Futbol (FMF) anunció que el 25 de mayo de 1930 algunos “profesionales”, lo cual, a decir del Comi- se realizaría en el Parque España un partido para té Olímpico, distaba de cumplir con los objetivos elegir a los jugadores que formarían la selección de la justa pues el deporte debía estar desligado nacional. Excélsior indicaba que los futbolistas se de remuneraciones económicas. De allí que el habían escogido de los equipos que jugaban en futbol organizara un evento propio que, con el las ligas capitalinas y se pusieron a las órdenes del paso del tiempo, igualaría en importancia a las entrenador español Luque de Serrallonga, quien, Olimpiadas y en cuanto al número de espectado- a decir del periódico, les había impuesto un “ri- res las ha llegado a superar. Se eligió a Uruguay guroso entrenamiento militar” y los concentró en como primera sede del certamen, debido a que, el parque Delta de La Piedad. La Selec- según los periódicos Excélsior y El Universal, se El día del partido, el entrenador dividió a los ción Na- cional en rendía así un homenaje a los “bravos jugadores” jugadores en dos equipos: el verde, formado por Uruguay que se habían coronado en los torneos olímpi- cinco jugadores del México, dos del América, dos 1930.

45 “selección nacional”; decía que a ésta no se la po- día llamar selección, debido a que sólo se habían elegido jugadores de los equipos capitalinos, sin tomar en cuenta a los de las ligas de Guadalajara y Orizaba. Sin embargo, lo que mayor animosi- dad generaba al articulista era la designación de Luque de Serrallonga como entrenador, debido a que “carecía de méritos” para tener un pues- to de tanta importancia; lo probaba que, en sus anteriores equipos, Real España y Germania, no había conseguido ningún resultado importante y en el último torneo sólo obtuvo una victoria con el Germania. del Necaxa y dos del Atlante, y el rojo, en el que Sin embargo, la crítica en contra de Serrallon- alinearon cinco del Atlante, cuatro del América y ga ofrecía un argumento de mayor peso; J. M. A. dos del Necaxa. El partido resultó muy disputa- enfatizó en diversas ocasiones que se había dado el do y los rojos lograron la victoria en los últimos puesto de entrenador a un español, lo que recha- minutos. Como la intención del entrenador era zaba pues a su juicio en la selección mexicana sólo comprobar la resistencia de los futbolistas, se ju- debían estar los mejores jugadores y entrenadores garon los 90 minutos sin darles descanso, prueba nacionales. Proponía la formación de una Confe- que, se dijo, todos habían pasado. Después de ob- deración Nacional de Deportes, con el objetivo servar las acciones, en el Excélsior se mencionaba de hacer del deporte un factor decisivo para el me- que la selección nacional debía estar integrada por joramiento de la sociedad. Una de sus atribucio- el portero Soto, los defensas Rosas y Record, los nes sería elegir a los equipos que representaran a medios F. Rosas, Sánchez y Cerrilla y los delante- México en el extranjero, para lo cual debía tomar ros Gayón, Mejía, Carreño, “Pichojos” y López. como ejemplo a la Asociación de Tenis, que sólo Como último partido de preparación, el re- llevaba a los mejores jugadores a competir en los presentativo mexicano se enfrentó al club Astu- torneos internacionales. rias en el Parque España. Antes de que comenzara El periodista consideraba que las “irregulari- el partido, el capitán del Asturias, Sigfrido Rot, dades” que prevalecían en los deportes estaban pronunció un discurso de despedida y los diri- próximas a desaparecer, pues el Departamento gentes de la FMF entregaron a Record, quien era Central pensaba formar una comisión deportiva el capitán de la selección, y al delegado Soto la que manejara los deportes organizados y acredi- bandera con la que México desfilaría en campos tase a los equipos que representarían a México en uruguayos. El juego de preparación generó posi- el extranjero. Con un organismo de este tipo se ciones encontradas en la prensa. Excélsior alabó evitaría repetir el caso de la selección nacional de la actuación de los delanteros, pues habían mos- futbol, en la que el nombramiento del entrena- trado “gran ligereza”. Si bien admitía que erra- dor había sido fruto de la amistad de Serrallon- ron muchos disparos, agregaba que no se debía ga con los encargados del deporte. Sin andarse olvidar que la instrucción de su entrenador era con rodeos, el anónimo crítico afirmaba que se jugar rápido y tirar de inmediato. Pese a todo, la debía preferir a los entrenadores nacionales sobre selección ganó el partido por seis goles a uno. los extranjeros. Para colmo, Serrallonga no tenía El representativo alineó con Bonfligio, Ro- la estimación del público, lo que resultó evidente sas, Record, Sánchez, Amezcua, Rosas, Hilario, durante el partido, cuando un grupo de especta- Gayón, Nicho, Carreño y Pérez. Un artículo del dores requirió su salida, dando los nombres de El Universal, firmado por J. M. A., criticaba a la entrenadores mexicanos, y clamó por Luis Cerri- 46 lla, jugador del América, que no fue incluido en la convocatoria final. J. M. A. agregó que, además de Cerrilla, faltaban Alatorre y Nadal, jugadores del Marte, y otros tres o cuatro más. Sobre este punto, el periódico Excélsior opi- naba que las muestras de repudio no tenían razón de ser, pues si los “jugadores antiguos” se sentían relegados por no ser parte de la se- lección, debían considerar que el objeto de este representativo era preparar a los futuros futbo- listas que darían prestigio al país, pues el por- venir deportivo se encontraba en los jóvenes, no en los viejos. Respecto al partido que jugó la selección contra el Asturias, el articulista indicaba que la primera mostró gran ligereza e hizo combina- los jugadores debían ser “concentrados” para que La Se- lección ciones brillantes, pero los delanteros fallaron mu- ya no jugaran con sus equipos respectivos y no uruguaya chos remates, los medios no lograron cortar los perdiesen efectividad. Reconocía que, si bien los en la fi- nal del avances del enemigo y la defensa evidenció falta jugadores no tuvieron una “adecuada prepara- Mundial de compenetración e inteligencia, motivos por ción”, los 17 elegidos eran los mejores, por lo que de futbol (JULIO 30 los que el equipo Asturias llegó a dominar, pese sin duda harían un buen papel en el campeonato DE 1930). a que sólo logró anotar un gol. En su opinión, el y México obtendría los honores que le correspon- principal problema que enfrentaba el equipo na- dían. cional era saber si contaría con todos los jugado- Resulta interesante mencionar que Excélsior res, pues se decía que varios no asistirían a la justa incluyó una nota en la que refería que Estados en Uruguay debido a sus ocupaciones personales, Unidos ya había elegido al equipo que lo repre- rumor que al final no se hizo realidad. sentaría. La inclusión de esta noticia no debe re- La FMF acordó que la selección nacional par- sultar sorprendente, pues los periodistas mexica- tiera a Uruguay el 3 de junio. Pese a que al inicio nos consideraban que esa selección era “una de del mes anterior la FIFA había determinado que las más poderosas” y tendría una buena partici- sólo se pagaría la estancia y el viaje a 17 miem- pación en el mundial; de hecho, unos días antes bros de cada delegación, al equipo mexicano se de que comenzara la competencia se informó que le autorizó llevar a 20 personas. Por su parte, la sus jugadores habían realizado “demostraciones Asociación Uruguaya de Futbol estaba dispuesta de destreza” en Brasil. México no sólo respeta- a cubrir los gastos de viaje de los representativos, ba a Estados Unidos, sino que había solicitado además de entregar 75 dólares por día a cada uno su ayuda deportiva para desarrollar su propio de los jugadores. futbol. Gracias a la intervención del embajador El Universal consideraba, antes de la salida a la Dwight W. Morrow, de algunas asociaciones y aventura mundialista, que México tenía “madera particulares de este país, se consiguió que el en- para sacar un equipo formidable”, pero se reque- trenador Reginald Root de la Universidad de Yale ría de una “preparación inteligente”; para lograr entrenara durante algunos meses a los estudiantes una selección fuerte tanto en lo técnico como en interesados en este deporte de la Universidad de lo físico, la Federación había debido iniciar los México. Como el sueldo del entrenador era alto, preparativos con la debida anticipación, pero se cinco mil dólares, se esperaba otra oportunidad dejó todo para última hora tal como sucedió en para traerlo de vuelta. la Olimpiada de 1928. El periódico sugería que 47 precisiones” de los mexicanos. El segundo partido lo jugó contra Chile, siendo derrotado por tres goles a cero. Aunque el partido generó expecta- ción, sobre todo por los chilenos, se demostró que los dos equipos tenían “mucho entusiasmo” pero “escasa técnica”. En este partido, que lo eli- minó del certamen, el equipo mexicano alineó con Bonfligio, Garza, Rosas, F. Rosas, Sánchez, Amezcua, López, Ruiz, Mejía, Carreño y Pérez. El último partido tuvo lugar el día 19 de julio, donde perdió el equipo nacional por seis goles a tres. Pese al fracaso, Excélsior sostuvo que tuvimos una representación sin argumentos para competir con una de las potencias sudamericanas. Hay que señalar que en ninguna de las tres confrontacio- nes se repitió la misma alineación.

Las causas de la derrota Si bien es cierto que, desde un principio, ni Ex- célsior ni El Universal consideraron que México Los partidos de México en el Mundial tuviera posibilidades de lograr un buen resulta- Tanto Excélsior como El Universal se mostraban do en el Mundial, el hecho de que se hubieran entusiasmados por el inicio de la justa futbolísti- perdido los tres partidos ocasionó que se trataran ca. Sin embargo, aunque otorgaban importancia de encontrar las razones por las que su selección al campeonato, admitían que le faltaban las pro- no tuvo un buen desempeño. Excélsior recordaba porciones de una Olimpiada. Los periodistas ad- que, antes de que partiera, se postuló que el fin no vertían que no se debía tener grandes esperanzas era “conquistar un galardón, sino entrenarse” con en la Selección Nacional, que tendría que enfren- los equipos más poderosos; como la selección na- tarse con “campeones veteranos” como los “casi cional no tenía una preparación adecuada, se de- invencibles” uruguayos, los “macizos y tozudos” bía estar consciente de que no se iba a “contender, argentinos, los “descollantes” españoles y los “bra- sino a aprender, advertencia con la que se evita- vos franceses”. No obstante, había de considerar- rían decepciones inútiles y aun perjudiciales y no se un privilegio que la selección tomara parte en se fomentarían falsas inflaciones patrióticas”. un torneo al que sólo asistían otras doce naciones El periódico señalaba que los futbolistas mexi- (Argentina, Brasil, Bolivia, Bélgica, Chile, Esta- canos requerían hacer más ejercicio para formar dos Unidos, Francia, Perú, Paraguay, Rumania, los músculos necesarios para practicar este depor- Uruguay y Yugoslavia), lo cual evidenciaba que se te, pues la “constitución racial no los ayudaba”. reconocía a los mexicanos “patente de jugadores” Otro aspecto que se debía modificar era el “sis- y podían codearse con “campeones de reputación tema ordinario e irregular de vida, alimentación universal”, pero que lo más importante era que se y costumbres, debido a que los mexicanos tenían aprenderían las tácticas de defensa y ataque de los vicios como el tabaquismo, el alcoholismo y el “tiburones internacionales”. taquismo, es decir, el hábito invencible de ali- México jugó el 13 de julio su primer partido mentarse con tacos de guacamole y una barbacoa contra Francia y lo perdió por cuatro goles a uno. fantástica y arqueológica, dieta que evitaba a los El Universal informó que la derrota fue producto mexicanos adquirir una estructura atlética”. Se de la “gran movilidad” de los franceses y las “im- debía estar consciente que un buen atleta mante- 48 nía un alto estándar de salud y dedicaba mucho SELECCIÓN DE MÉXICO EN EL tiempo al entrenamiento. Estos dos factores, I CAMPEONATO MUNDIAL DE FUTBOL, aunados a una educación deportiva, llevarían a los mexicanos a trascender. Con bombos y pla- URUGUAY 1930 tillos, Excélsior anunciaba que Root regresaría a Jugador Posición Equipo México para entrenar al equipo de futbol de la Óscar Bonfiglio Portero Marte Universidad de México, lo cual sería pagado por Isidoro Sota Portero América el petrolero Harry F. Sinclair. A juicio del rota- tivo, esto manifestaba el interés estadunidense Alfredo Sánchez “El viejo” Defensa América porque el futbol se desarrollara en México y así Francisco Gutiérrez Garza Defensa América el país ocupase un lugar de primera importan- Manuel Rosas Defensa Atlante cia en las “manifestaciones de la cultura física”. Raymundo Rodríguez Mediocampista Marte Las derrotas sufridas por la selección confir- Efraín Amezcua Mediocampista Atlante maron lo que se sabía de antemano: que Méxi- co no contaba con el nivel futbolístico ni la pre- Felipe Rosas Mediocampista Atlante paración necesaria para desempeñar un buen Dionisio Mejía Delantero Atlante papel en el primer campeonato mundial de fut- Felipe Olivares Delantero Atlante bol. Los malos resultados obtenidos reflejaban José Ruiz Delantero Necaxa el escaso trabajo que había tenido un equipo Roberto Gayón Delantero América que se armó, como se dice popularmente, al cuarto para la hora, al que faltó cohesión entre Luis “Pichojos” Pérez Delantero Marte sus líneas además de que no repitió la misma Rafael Garza Gutiérrez Delantero América alineación en ninguno de los partidos. Aunque Hilario López Delantero Marte Serrallonga consideraba que la velocidad era el José Carreño Delantero Atlante arma fundamental con la que los mexicanos po- Jesús Castro Delantero Necaxa drían competir, lo cierto es que esa selección no tenía con qué luchar con equipos cuyos jugado- res poseían mejor constitución física y también técnicas más depuradas. Así, nuestra selección medios de comunicación, tanto televisivos como sólo pudo vanagloriarse de haber sido una de las periodísticos, intentan, campeonato tras campeo- primeras que participaron en una copa mundial, nato, desarrollar una imagen de la selección de aunque los resultados obtenidos evidenciaron que México que podrá llegar hasta el “quinto parti- México no tenía un equipo competitivo y su pre- do”, con la mira de mantener cautivo al público sencia en la justa respondía a los lazos de amistad espectador que ha creído, y sigue creyendo, que deportiva existentes con Uruguay. en el siguiente campeonato se cumplirá por fin el Un asunto de relevancia se refiere a las espe- sueño de que su país sea el campeón del mundo. ranzas que El Universal y Excélsior depositaban en el futuro desarrollo del balompié nacional, pues PARA SABER MÁS: de manera un tanto ingenua pensaban que con “Copa del Mundo Uruguay 1930”, http://www.youtu- cambiar los hábitos alimenticios de la población be.com/watch?v=KMghWR8O5dg bastaría para tener una selección que trascendiera ROBERT DAVIES, 90 minutes: the greatest moments en las copas mundiales y un día lograra obtener el from the World Cup, London, Merell, 2006. campeonato. Puede parecer curioso, aunque más RAFAEL PÉREZ GAY, Sonido local: piezas y pases de bien resulta trágico, pero la esperanza de contar futbol, México, Cal y Arena, 2006. con un representativo exitoso en un mundial no ALFRED WAHL, Historia del fútbol, del juego al depor- ha logrado ser cumplida hasta este momento y los te, Barcelona, Ediciones B, 1998. 49