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Con-spirando Women's and Gender Studies

12-2002

Nº42: “Re-visitando” los ciclos: Historias de mujeres

Colectivo Con-spirando

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Recommended Citation Colectivo Con-spirando, "Nº42: “Re-visitando” los ciclos: Historias de mujeres" (2002). Con-spirando. 40. https://digitalcommons.lmu.edu/con-spirando/40

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ientras más indagamos sobre los ciclos, más se nos desarma la idea de que éstos pudieran tener una correspondencia me Mcánica con edades cronológicas. Los ciclos se entrelazan, los momentos de giro, las transiciones, ocurren en momentos dispares: una coyuntura histórica deja extraviada, en una parte de nosotras, la niñez o la adolescencia; una catástrofe familiar y/o nacional nos sobredetermina la memoria y podemos oficiar de “ancianas de la tribu” a los 20, a los 30, a los 40… Esto es lo que constatamos cuando escuchamos o leemos las historias de vida de muchas mujeres. Queríamos rescatar la memo- ria de las mayores, pero fuimos encontrando que no sólo ellas eran las portadoras de “toda una vida” (con transiciones, inflexiones, puntos de giro) que contar. A veces, la historia de la madre repercute, resuena en su hija y hay continuidad allí donde el estereotipo cultural dice que sólo debería haber ruptura. Continuidad que no es mera repetición, claro. Un aspecto se reitera en algunas de estas historias de mujeres: la necesidad de narrar la presencia del mal en sus vidas. En otras prima el rescate de la vida cotidiana. O la mezcla. El mal de la opresión que hizo posible el bien de los sueños, del desacato, de la resistencia. El mal de la tortura que trajo consigo la promesa de no olvidar a todas las/os que la han sufrido y el cumplimiento de esta promesa en tribunales interna- cionales, en peticiones, en un libro de memorias. Nuestra memoria puede hacerse presente en una galería de fotos, en una cronología, en un relato. Es ella la que nombra, la que ordena, la que da sentido: éste fue un momento (o una persona) clave, nos deci- mos mucho tiempo después; ésta, una transición que cerró un larga eta- pa de mi vida. Así los enfrenté, esto aprendí; mira, éstas son las marcas. Es el recuento el que arma la historia personal. Conjura el trauma, al mismo tiempo que la memoria de la felicidad. Sólo cuando logramos acceder a la leyenda (en el sentido de lectura y también de relato) de la propia historia, dice la poeta Nicole Brossard, podemos abrir el presente a nuevos escenarios, a nuevos personajes — podemos seguir haciendo historia(s).

Colectivo Editorial

nº42/0342/02 Con-spirando ● 1 ¿Como¿Como haha-- ccerer parapara queque ccadaada quienquien quieraquiera ccanan-- tartar ccuatrouatro verdades?verdades?

Ximena Wolff Reyes*

(…) ¿Cómo vo de la Nación, en este cuer- darle cabida en po... de volúmenes y tomos de el cuerpo social a libros; en sus escritos: soportar tanto cuerpo pri- la huella de sus censuras y vado de palabra, e sustentar sus omisiones. inundado de dis- Alguna vez intenté, en curso? esta biblioteca, rescatar el ¿Es posible transitar de la discurso de Salvador Allende privación a la memoria activa, del Once de Septiembre de actuante? (…) 1973. Mi búsqueda en diarios, Eso es lo que intentamos periódicos y semanarios de hacer aquí, en el espacio que la época fue infructuosa. No nos cobija; en este gran archi- era, para mí, encontrable en

2 ● Con-spirando nº42/02 este espacio; probablemente fraternidad, libertad”; valores la memoria pasiva, paciente, estaba en alguno de los textos vividos como impotencia ante padeciente de esta “familia que constituyen su patrimonio. un absolutismo ignaro que chilena”—generación tras No sabía yo cómo buscar. Yo aún inunda los decires, sus generación. no encontraba. silencios y silenciamientos. Es necesario un largo y No obstante, a pesar de no Pero la otra memoria en- angosto diván para Chile: tener la textualidad inalterada capsulada, la memoria privada el ejercicio extremo de una de esa despedida, mi memoria de sus nexos —particulares práctica constante de la pa- —es decir, mi cuerpo y sus y colectivos— también re- labra, develando los miedos, sentires— conservaba retazos cuerda. las trampas, los eufemismos de frases: “yo no voy a renun- Recuerda desgraciada- e imposibilidades; revelando ciar”, “generales rastreros”, mente con el cuerpo, en el los lugares anquilosados don- “agradezco a los jóvenes y las cuerpo de cada uno de aquellos de la práctica de la violencia mujeres de mi patria”, “serán que han sufrido los así llama- extrema instaló a sujetos como perseguidos”, “creo en Chile dos “efectos post-traumáti- cuerpos privados de derechos y su futuro”, “sigan ustedes cos” y que no son otra cosa que y convirtió en riesgo todo decir sabiendo...”. el cuerpo como monumento de verdadero. Jirones de frases que han los desastres —particulares y Porque si bien la memoria organizado la percepción e colectivos—, petrificación y se explaya en acto y justa interpretación de lo que va y cronificación de una identidad palabra, también discurre y ha ido siendo, de lo sucedido dislocada, de un “hablar por repite su fracaso. desde ese fatídico 11 hasta el las heridas y las llagas”. Clo- El gran desafío para las día de hoy. nación mediática­ masiva en la “disciplinas” y sus “áreas de Probable función de la panacea de la pura pantalla. trabajo” es mover la inercia memoria —la de hilar el Es el hablar silencioso de de lo tantas veces dicho y ya tiempo—, que como acto y los síntomas y la depresión; “disciplinado”; es desarticular repetición, hace de pantalla por tanto acontecer irresuelto, el miedo que traba las lenguas, de contraste a comparaciones en constante duelo. Injusto e es hacer caer los muros de los odiosas y amorosas, e identi- injustificado. oídos y dar lugar a verdades, fica allí a los míos y los otros. Cuerpos privados de que “tabuídas” parecieran ser Memoria funcionando alegría. “ofensas”, “imprudencias” o opuesta a la ignorancia, a Aislamiento forzado, for- “agresiones” en el discurso contrapelo del no querer saber zoso silencio de las mayorías: público. nada; memoria viva de “haber por borramiento de las huellas ¿Cómo hacer para que cada sido de otra manera”, añoranza lúcidas de una trayectoria, quien quiera cantar cuatro y anhelo de un modo de ser por temor ante lo henchido y verdades? que fue, fui, fuimos. agobiado de propaganda, por Este saber ha sostenido horror a vivir otra vez más la una identidad y sus transfor- mismidad de la Historia. maciones, y mantiene aún Por la exaltación activa ha- erguido un cierto cuerpo de cia un futuro desplegado sobre * Psicóloga y psicoanalista. Docente valores que con represiones, el territorio del olvido colecti- en las facultades de psicología de la Universidad Diego Portales y la dificultades y obstáculos acce- vo, apelando a la capacidad de Universidad de Santiago. Este texto es de a los espacios del discurso perdón de lo imborrable. una parte de su artículo “Ejercicio de público. Valores herederos de Los cuerpos privados, pri- memorias”, publicado en el libro Volver a la memoria, compilado por Raquel esa imposibilidad maravillosa vados aún incluso de sepultu- Olea y Olga Grau (Santiago de Chile: enunciada como “igualdad, ra, son aquellos que pesan en Lom Ediciones/La Morada, 2001).

nº42/02 Con-spirando ● 3 Recuerdo el gran portón Evelyn Truman de madera de color verde que permanecía casi siempre abierto, como incitando a en- trar y descubrir el submundo que en ella habitaba. Un camino de tierra con- ducía al visitante hacia la casa grande, una vez que se atrave- saba el pequeño y destartalado puente bajo el cual corría un canal. Sus aguas venían desde arriba, regando parcelas y aún revivo nuestra sorpresa cuando el primo Elías que nos visitó desde Israel miraba el canal con reverencia diciendo que en su país ese era un río. Los tres sauces que mecían lánguidamente sus ramas so- bre él producían una sensación de imperturbable paz que no correspondía exactamente a lo que se vivía cotidianamente­ en la parcela. La casa tenía un gran living-comedor con anchas paredes de adobe, vigas de madera y amplios ventanales. Era una hermosa construc- ción, orgullo de Sansón, mi marido, junto con una pirca de piedra en la que se respiraba la fragancia de la flor de la pluma que la cubría. En 1967, cuando nos trasladamos a la parcela yo era un perfecto producto urbano, que trabajaba como abogada el día entero en un

* Eliana Bronfman, abogada, chilena, feminista, fue una de las primeras inte- grantes del MEMCH, la más importante de las organizaciones que luchó por LALA PARCELAPARCELA 2929 conseguir el voto para las mujeres en Chile. Fue fundadora de la primera “Casa de Todos” para adultos mayores en San- Eliana Bronfman W.* tiago y es una incansable luchadora por los derechos de la mujer adulta mayor.

4 ● Con-spirando nº42/02 Ministerio de cuyas oficinas nuestro, mirando a la Avenida población y eran famosas salía sólo a tomar un café y Departamental, y cuyos due- las reuniones en el comedor nada conocía de la vida de ños vivían en Santiago, fueron de la parcela, al calor de una campo. La verdad es que nun- objeto de una toma de la cual gran salamandra, en las que se ca logré saber mucho, pero lo surgieron dos grandes pobla- deliberaba largamente sobre seguí a Sansón en la aventura ciones. Se llamaron Unidad la mejor forma de ayudarlos. de vivir ahí, porque siempre Popular y Nueva Habana. En En esos años la actividad fui su cómplice en todos los un solo día llegaron miles de laboral de ambos y el mo- proyectos que emprendía, aún personas, hombres, mujeres mento histórico que vivíamos los más audaces y éste era uno y niños cargando sus pocos nos absorbía en tal forma, de ellos. enseres. Verlos instalarse fue que debo confesar que, tanto Se trataba de juntar a todos un espectáculo impresionante. yo como Sansón, minimizá- nuestros hijos —los cuatro Con qué habilidad, esfuerzo y bamos la importancia de las de Sansón y las tres hijas alegría se levantaban techum- relaciones humanas entre mías— además del menor bres provisorias, se almace- las diversas familias que teníamos en común —en naba agua en grandes tarros, total sumaban ocho— para se fabricaban le- hacer una vida de familia en trinas, se trazaban comunidad y compartir valo- calles provisorias. res y afectos. Junto a la casa Las mismas cosas grande en que vivíamos noso- que nosotros dába- tros había otra más pequeña a mos por sentadas la que se trasladó la primera en nuestras vidas mujer de Sansón con los dos —el agua, la luz, la hijos de ambos. Esta iniciativa escuela, la parroquia, de incorporar a su primera la posta de primeros señora no tenía otro objeto que auxilios— todo eso el de permitirle estar cerca de era para ellos una sus dos hijos sin alejarlos de conquista por lograr. su madre. No había ya entre Al verlos rememoraba­ ellos ningún otro vínculo, y viejas lecturas sobre cuando me lo propuso pensé la conquista del Oeste, que era algo justo y además un y admiraba en ellos el acto de suma civilización. Re- hecho de que a pesar de cuerdo el rostro perplejo de mi la necesidad extrema, padre cuando se lo comenté, tenían una dignidad y diciéndole que mantendría- una fuerza vital que era mos una total independencia contagiosa. Por supuesto y sin imaginarme el costo que que fuimos sus amigos. tendría esta experiencia para Entre los años 70 y 73, la mi propia intimidad. (...) Parcela se transformó en el centro de reunión desde Entre los años 70 y 73… el cual profesionales diver- sos (médicos, arquitectos, A principios de los años se- odontólogos, educadores, tenta las grandes extensiones matronas) ofrecían sus de campo sembrado al frente servicios voluntarios a la

nº42/02 Con-spirando ● 5 que artificialmente habíamos talaría con su personal para nuestras vidas como las de unido. Se producían conflic- identificar desde la parcela tantas otras personas de este tos entre los hijos además de a nuestros vecinos los pobla- país. Yo fui expulsada del Mi- rivalidades, todas situaciones dores. No pude negarme y vi nisterio en que trabajaba. No que debíamos haber previsto cuando todos los hombres de era sediciosa. Sencillamente y no lo hicimos. Creímos la población desfilaban por se me dijo que a pesar de mis ingenuamente que esta sería la parcela para ser fichados e calificaciones ya no contaba una experiencia tolstoyana, interrogados, siendo después con la confianza del amo. Y en para la cual no nos habíamos trasladados a una cancha media hora tuve que abando- preparado ni nosotros ni nues- deportiva contigua. Sus mu- nar el edificio donde habían tros hijos. jeres en la calle esperaban sin transcurrido once años de mi Mucho tiempo después, al hablar, con los niños en sus existencia. Se me prohibió mirar en retrospectiva nuestras brazos, en un silencio expec- entrar y muchos años después, vidas, coincidimos ambos tante. En sus miradas se leía cuando pude recorrer nue- en que la experiencia de una la incertidumbre, sin saber que vamente sus pasillos busqué “familia tolstoyana” más bien ocurriría. Tampoco sabíamos con emoción contenida los fue una locura que dejó en cada nosotros, a quienes nos habían rincones, las salas, los lugares uno de nuestros hijos buenos confundido con propietarios queridos, pero todo estaba recuerdos y también fuertes acomodados y serviles a la transformado y parecía que la rechazos. autoridad, qué pasaría con historia sólo siguiera viviendo Lo que sí fue un aprendi- nuestras vidas. Habría bastado en mi mente. zaje inolvidable fue nuestro con que un poblador nos men- La parcela siguió siendo enfrentamiento con la realidad cionara como amigos de ellos, acogedora y frecuentada por de la pobreza, a través de la para que pasáramos a formar amigos. Los visitantes mu- estrecha comunión que se parte de los que se agrupa- chas veces se llamaban por produjo con los vecinos de la ban en la cancha. Eramos los precaución con otros hombres. población. En pleno golpe mi- otros y también éramos ellos Conocí a Felipe el Hermoso, al litar, se vivía al día, y con ello y así permanecimos toda una Rufián, a Daniel, la Ana Lía, a quiero decir que no se sabía mañana aparentando una falsa Raúl y a otros. Sabía que bajo que ocurriría al día siguiente. hospitalidad. Las historias del esos hombres había espíritus holocausto de mis antepasados rebeldes que arriesgaban sus El golpe militar cambió judíos pasaron por mi memo- vidas por recuperar la liber- nuestras vidas ria, y sentí que la historia podía tad, aunque en ese entonces repetirse en cualquier rincón parecía una utopía, porque la Veo como una pesadilla el del mundo en que se entroni- tortura, los arrestos, las des- 11 de septiembre de 1973. Pa- zaba el poder y la soberbia de apariciones, las muertes en rece increíble como las perso- unos pocos. Esta vez y después supuestos enfrentamientos, nas, las cosas, la vida de todos de una espera que parecía in- eran cosa de cada día. los días puede cambiar en un terminable, fueron devueltos instante cuando se apodera en a la población. Mis miradas Han pasado más de 20 años cada uno el temor, el miedo y se cruzaron con las de ellos y desde esta historia la desconfianza hacia el otro. pude leer en sus rostros que Recuerdo en los inicios ninguno mencionó nuestros Paradojalmente, Sansón de la dictadura el día en que nombres. Con esa mirada y yo, nunca pensamos que la golpeó la puerta del gran muda y ese silencio elocuente parcela no podía escapar al living-comedor un teniente se selló nuestra amistad. escenario político que le tocó quien me informó que se ins- El golpe militar cambió vivir. Fue en pleno invierno —

6 ● Con-spirando nº42/02 en julio de 1980. Hacía pocos días, había sido asesinado en una emboscada un oficial de inteligencia, el teniente coro- nel Roger Vergara, y se reali- zaban toda clase de operativos para encontrar a los culpables. En esa atmósfera, los servi- cios de inteligencia actuaban unidos para demostrar a toda costa su eficiencia de- teniendo rápi- damente a cual- quiera a quien se le pudiera atribuir culpabilidad. La parcela era un buen recurso. El 17 de julio, El Mercurio anunciaba con grandes titula- res: “Allanada célula extremista en Parcela de Macul y sacados del lugar 17 personas entre los cuales se encontraba un alto dirigente del MIR. El General Gordon infor- ma que en la parcela fueron encontrados elementos explosivos, documentos de tipo marxista que nos hacen creer que estamos bastante adelantados en la investiga- ción del asesinato del Coronel Roger Vergara”. La peligrosa cé1ula extre- fiter que el día del si estabamos detenidos o des- mista resultó ser todo nuestro alla­namiento se encontra- aparecidos, nosotros vivíamos grupo familiar, incluidos ba arreglando unos artefactos al interior una pesadilla difícil mis nietos de un año y un sanitarios, un tapicero que de describir por lo siniestra y mes y medio que vivían con casualmente reparaba unos absurda. nosotros, además de la vieja muebles. Sansón y yo fuimos de- Olguita que había criado a Mientras afuera los aboga- tenidos al regresar de nues- todos nuestros hijos, la señora dos de derechos humanos exi- tro trabajo. Escoltados por Elena encargada de la cocina, gían infructuosamente que el policías nos encontramos el chofer, el parcelero, un gás- Poder Judicial se constituyera con la parcela bloqueada por en nuestra casa para constatar soldados y camiones. Más

nº42/02 Con-spirando ● 7 que un allanamiento aquello Se nos prohibió movernos de parado como tarro por culpa de era un saqueo. Alrededor de la casa, usar el teléfono que la prensa, hizo firmar un papel cien personas vestidas de civil, se desconectó y hablar entre a Sansón. En él reconocía armados como en un operativo nosotros. Debíamos pedir que el allanamiento se había de guerra, habían invadido la permiso para ir de una pieza a realizado en conformidad a casa. Todos sus habitantes, otra e incluso para ir al baño. la ley, después de lo cual se salvo los niños pequeños, la Llegó un momento en que yo retiraron todos con rifles y vieja Olguita y nosotros los no habría podido saber dónde walkie-talkies. En los diarios dueños de casa, fueron tras- estaba, a pesar de que estaba la parcela dejó de ser noticia, ladados en un furgón amarillo en mi propia casa, tal era la sin la menor contemplación y con la vista vendada a un sensación de despojo en que por el daño que todo esto nos lugar desconocido. A Sansón me sentía. había causado. lo salvaron sus muletas y a mí A1 parecer, la doble na- Se abrió nuevamente al la credencial del organismo in- cionalidad de mis tres hijas, mundo el portón verde de la ternacional al cual pertenecía. cuyo padre era inglés, y mi parcela y nos quedamos solos, El techo y piso del dormi- condición de funcionaria de en una supuesta normalidad, torio y demás piezas estaban un organismo internacional pero nunca más fuimos los destruidos en muchas partes; impidieron los golpes físicos, mismos. Es verdad que pudi- la ropa, libros, fotografías, pero se nos amedrentaba psi- mos sobrevivir, pero nos quedó papeles, revueltos y botados en cológicamente diciéndonos esa sensación indescriptible de el suelo, todo en la búsqueda primero que todo terminaría dolor que se produce cuando de cosas que ellos llamaban pronto, y luego que habían se pierde la confianza en el subversivas. La radio de recibido nuevas instrucciones otro como ser humano. aficionado de Sansón había para investigar. Han pasado más de 20 años desaparecido y después supe En esta convivencia obli- desde esta historia. La parcela que los diarios la describían gada y esquizofrénica, yo ya no existe y en su lugar como una radio transmisora escuchaba desde mi dormito- hay una población de casas de alta potencia. rio a los guardias conectar el prefabricadas, todas iguales. Me veo nuevamente sola en teléfono para hablar con sus Mis nietos se ríen al saber que el inmenso living, alumbrada mujeres, decirles que ya lle- cuando niños y recién nacidos apenas por una lámpara, bajo vaban varios días, que estaban los confundieron con una su- la vigilancia de un guardia, en cansados y no sabían cuando puesta célula extremista. Para una angustiosa espera y sin podrían llegar con dinero a sus ellos, la Parcela 29 ha pasado saber que ocurriría con mis hogares. Me costaba creer que a ser un mito o una leyenda. hijos, hasta que en la madruga- ellos también eran personas Para mí, estos sucesos son la da regresó el furgón amarillo como nosotros, con mujer e memoria de una época en que con todos menos Raúl quien hijos, a pesar de sus miradas la realidad, de tan siniestra y accidentalmente estaba en la duras y de la forma en que absurda, parecía inverosímil. casa y una de mis hijas que dejaban caer nosotros el peso era su novia. Lo que a ellos de un poder omnímodo. les ocurrió serî motivo de Al tercer día y cuando ya otra historia. nos preparábamos para per- Durante tres días y bajo la manecer indefinidamente en vigilancia de unos diez hom- esta detención, súbitamente bres estuvimos detenidos y Cristóbal, el Jefe, recibió una aislados sin poder comunicar- llamada de radio y después de nos con nuestros familiares. comentar que esto se había dis-

8 ● Con-spirando nº42/02 difícil y muchas veces dramática, EEll eenvnveejjececimiimieentonto pero a pesar de su vulnerabilidad, sólo un 3% a un 5% de los adultos eeststaa mmarcaarcadodo ppoorr mayores están postrados o son dependientes al extremo de haber elel ggeennereroo perdido totalmente su autonomía. Eliana Bronfman W.* Por eso, este trabajo está focali- zado en el adulto mayor sano.

El doble patrón de significa- dos de la vejez

Es un hecho que el mundo la esperanza de vida era de 45 En cada una de estas catego- envejece, y que en los últimos años, hoy es de 80 años para las rías —edad cronológica, social y cincuenta años la expectativa de mujeres y 75 para los hombres. fisiológica— el envejecimiento vida ha aumentado considera- Por ello, se habla de una marcada está marcado por el género. En blemente, no sólo en los países feminización de la vejez. otras palabras, no es lo mismo desarrollados sino que en un Cabe preguntarse: ¿desde ser mujer mayor que hombre ritmo mucho mayor en los países cuándo se es adulto mayor? Si mayor. Susan Sontag en su texto en desarrollo. A nivel planetario, bien las Naciones Unidas utilizan “El doble patrón para envejecer” el tema del envejecimiento ha los 60 años para el inicio de la denuncia la existencia de un doble pasado a ser uno de los desafíos tercera edad, esa definición tiene patrón respecto del significado de este milenio, ya que será nece- un uso basicamente para fines de del envejecimiento para hombres sario responder adecuadamente jubilación o de terminación de la y mujeres, y considera que dicho al impacto que en términos eco- edad productiva. patrón es mucho más severo para nómicos, sociales y de relaciones Sara Asler distingue tres ca- juzgar a las mujeres. 2 Al respecto, humanas significará esta nueva tegorías diferentes en la edad de hay que recordar que en gran parte realidad demográfica. las personas: la edad cronológica de las sociedades la vejez es sinó- La sociedad chilena no se (o de calendario) que es esencial- nimo de estereotipos negativos, ha quedado al margen de estos mente biológica y se refiere a la marginación y aislamiento. Se cambios. Chile es la tercera edad en años, la edad social, que suele caracterizar a las personas nación de América Latina más alude a las actitudes y conductas mayores como enfermas, pasivas, envejecida, precedida por Ar- sociales que se consideran ade- seniles, insuficientes, conserva- gentina y Uruguay. Cuba está en cuadas para una determinada doras, dese­cha­bles y, por lo tanto, un cuarto lugar. Actualmente, de edad cronológica, y la edad innecesarias para el desarrollo los 16 millones de personas que fisiológica que se relaciona con económico. constituyen la población total las capacidades funcionales, la Asimismo, por lo general, del país, un millón y medio son fragilidad y la discapacidad que suele referirse a los adultos ma- adultos mayores, es decir, un suele producirse con el peso de yores como si fueran un grupo 10% tienen más de 60 años. De los años. 1 homogéneo, sin considerar que este porcentaje, un 56, 7% son La edad fisiológica está se envejece de distintas maneras mujeres y un 43,2% varones, ligada generalmente a severas según la presencia de diferentes ya que las mujeres viven más. limitaciones físicas, y en muchos variables, como el país (indus­ Si en Chile en los años treinta casos al deterioro, sin embargo, trializado o en desarrollo), el nivel existe una tendencia a analizar socioeconómico, el medio (urba- *Este texto es una parte del trabajo final los problemas de la vejez exclu- no o rural), la clase social, la etnia presentada por la autora en cum­ sivamente desde este ámbito, es y la cultura, la geografía del lugar plemiento de un pos-grado en género y cultura ofrecida por la Universidad decir, desde la enfermedad. Esta donde se ha vivido, las migracio- de Chile en 2000. realidad, la edad fisiológica es nes cuando ellas han existido. Sin

nº42/02 Con-spirando ● 9 situaciones que se producen en La menopausia y sus efectos la misma época en el medio en la mujer mayor familiar. Los hijos han cre- cido, dejan el hogar y crean La primera señal de enve- su propia familia, muchas jecimiento para la mujer es la veces los cónyuges tam- menopausia, es decir, la pérdida bién atraviesan por una de la menstruación. Los síntomas época de cambio que físicos de la menopausia (algunas las mujeres interpretan veces sofocos, sequedad vaginal, como un rechazo a sus cambios de humor) reciben el propios cuerpos que ya nombre de climaterio. Existe una no son tan jóvenes. Por gran variedad en la presentación todo ello, las mujeres de estos síntomas, y mientras unas sienten que al des- mujeres apenas lo notan, otras lo aparecer su papel perciben con intensidad. de madre y esposa, Vivimos en un mundo en han perdido poder que el principal valor social de y sus vidas dejan la mujer se basa en su potencial de tener sentido. reproductivo y en su atractivo Las mujeres, por sexual. Este mensaje es tan fuerte lo tanto, además que las mujeres lo internalizan de arrastrar las y creen que con la llegada de discriminacio- la menopausia están perdiendo nes propias de su identidad como mujeres. La su condición realidad es que la menopausia de mujeres, nos excluye únicamente de la son discri- posibilidad de tener hijos. No minadas por nos excluye de la sexualidad. la edad. Si Sin embargo, como en nuestra además en cultura se nos ha valorado más la vejez la como madres que como mujeres, mujer es po- se considera esta etapa de la vida bre, entonces sufre de una como una pérdida de la identidad em- triple discriminación. femenina. bargo, y a La pobreza se ha femini­zado Germaine Green en su libro pesar de lo heterogéneo por diversas razones, entre otras El cambio se refiere al significado del envejecimiento, subsiste porque las mujeres viven más que tiene la menopausia en una como rasgo dominante de nuestra que los hombres, lo que significa sociedad en que existe un culto a cultura patriarcal el sometimiento enviudar antes y quedar desprote- la juventud. En lugar de conside- de la mujer basado en las relacio- gidas económicamente. A esto se rarlo un tránsito hacia una nueva nes de poder entre los géneros. agrega que si han desempeñado identidad, es mirada como una En el caso de las mujeres, una actividad laboral, recibirán fatalidad y perder la condición de el mito que más las afecta en lo una jubilación más reducida ya jóvenes es para muchas como una que respecta a su identidad como 3 que sus sueldos en la mayoría de especie de muerte social. mujeres, es el que considera los casos fueron inferiores a los Todas estas valoraciones que la sexualidad desaparece del varón, y por último, cuando negativas inciden con mucha con el climaterio y la pérdida han sido dueñas de casa no cuen- intensidad en la autoestima de de su capacidad reproductiva. tan con una pensión de vejez. las mujeres en esta etapa de la Las repercusiones psicológicas vida. En la baja autoestima influ- de la menopausia coinciden con

10 ● Con-spirando nº42/02 ye asimismo el lenguaje que se es llegar entendiéndose personas relacionarse con los demás. utiliza para designar los procesos plenas, autónomas y fuertes, y por • Las personas mayores debe- de la menopausia como un signo eso la lucha por la autoes­tima debe rán ser consideradas como identifica­dor del envejecimiento comenzar con la vida misma. agentes activos del desarrollo femenino. Muchas veces se cons- Hay un creciente movimiento y no sólo beneficiarias, es truye una realidad medicalizada­ de mujeres mayores en el mundo decir, deben sentirse ple- de la menopausia que transforma que trabajan con perspectivas de namente integradas a una una transición natural de la vida género. Menciono entre otras, sociedad multigeneracional. en una enfermedad. la Red Mundial de Mujeres Ma- • Deben procurar seguir ha- La menopausia puede a veces yores en Europa (Old Women’s ciendo historia, recuperan- coincidir con la andro­pausia en Network OWN), las Panteras Gri- do todas las experiencias los varones. En estos casos el ses en Francia y Estados Unidos. acumuladas en su memoria hombre sufre pequeñas depresio- También en este último país los para traspasarlas a las nuevas nes y tiende a una vida rutinaria, movimientos que se denominan generaciones. con frecuencia encerrado en sí Viejas Sabias (Crones), VEMEA • Deben plantearse como meta mismo y con poca manifestación en México es un importante el envejecer con dignidad, externa de su afectividad. Sin centro de documentación cuya con nuevos roles, aceptando embargo, el juicio social tiene fundadora fue Betsie Hollants. En sus cuerpos sin resignación, un impacto más atenuado cuando Chile existen las Casas de Todos permitiendo que sus rostros se trata del envejecer masculino que surgieron bajo la inspiración muestren la vida que han en detrimento de lo femenino. de la Organización No Guberna- vivido. Son diferentes los calificativos mental AÑOS después de la dicta- • La problemática de la vejez con que se asocia a los hombres dura militar. Constituyen lugares no debe ser mirada como que a las mujeres. Se habla de de encuentro de adultos mayores un hecho aislado, sino en el un “seductor de sienes grises” en organizados en forma autónoma contexto de una nueva cultura lugar de un “viejo lindo”. Nunca para enfrentar el proceso de en- de los derechos humanos, que se utilizan estos calificativos para vejecimiento desde la perspectiva postula a una sociedad más las mujeres. de un cambio cultural. Todos justa y solidaria, respetuosa El doble patrón social para estos movimientos de mujeres de la condición humana y de considerar el envejecimiento mayores responden a ciertos las diferencias. se hace mucho más evidente principios que cuestionan las en el ejercicio de la sexualidad. representaciones convencionales Cuando un hombre de 50 años se sobre la vejez de la mujer. Entre Notas exhibe con una mujer joven, se ellos mencionaremos algunos: 1. Asler, Sara y Gin Jay. Relación entre el género y envejecimiento: Enfoque le considera “aún atractivo”, sin • Contribuir al “empode­ sociológico. Marcea. SA de Ediciones. que nadie se asombre demasiado ramiento” (empowerment) 1996. Pág. 22. si tiene relaciones afectivas con de las personas mayores para 2.Cuadernos Mujer Salud/4, 1999. La revolución de las canas. Reflexiones mujeres más jóvenes, con algunas que ellas mismas luchen por y experiencias sobre el envejecer de de las cuales puede llegar a tener los cambios necesarios para las mujeres. Págs. 6 y 35. un hijo. vivir una vejez más humana. 3.Op. Cit. Pág. 7. • Asumir una nueva conciencia El movimiento de mujeres de sí mismas, entendiendo mayores que el envejecimiento puede representar la liberación de Las mujeres podrán o no las rígidas expectativas del rol llegar a ser profesionales, inte- de género y una oportunidad lectuales, militantes políticas, etc. para que las mujeres sean pero siempre llegarán a ser viejas independientes y autónomas, y menopáu­sicas. Lo importante y para que los hombres adop- ten nuevos roles y formas de

nº42/02 Con-spirando ● 11 Rick Reinhart El día 2 de noviembre de 1989, Diana Ortiz, una religiosa de origen hispano de la Congregación Ursulina de Bardstown, Kentucky, EE.UU., fue secuestrada por miembros de la seguridad militar guatemalteca y bru- talmente torturada por un periodo de 48 horas antes de poder escapar. En ese momento Diana tenía 31 años y estaba trabajando como misionera, enseñando a niños en la aldea de San Miguel Acatán, con otras miembros de su comunidad religiosa, incluyendo su querida amiga, también religiosa, Mary Elisabeth (“Mimi”) Ballard. Ahora, 13 años más tarde, Diana Ortiz ha decidido publicar sus memorias (The Blindfold´s Eyes. My Journey from Torture to Truth. Maryknoll: Or- bis Books, 2002), un retrato conmove- dor del impacto psicológico y espiri- tual de la tortura que la dejó primero con una amnesia casi total y después con un estrés post- traumático que la llevó muy cerca del suicidio y con años de pesadillas y regresiones hacia el lugar de su tortura. Su tortura fue, sin duda, dramática, pero no inusual en donde la tortura sigue siendo común en manos de los escua- drones de la muerte. El caso de Diana Ortiz llamó la atención internacional, no sólo porque ella logró escapar para contar lo que pasó, sino también por- que implicó a un agente del gobierno de los EE.UU. —probablemente un miembro de la CIA— que la liberó de sus torturadores. Lo que sigue es una selección de sus memorias.

12 ● Con-spirando nº42/02 En Noviembre de 1989, para sobrevivir, nadie te va a parece horas, nos sostenemos mientras trabajaba como creer”, dijo el policía. la una a la otra. De repente, misionera en Guatemala, fui “Cara, voy primero, sello, el policía y dos hombres más secuestrada por las fuerzas vas tú”. “Cara. Es mía”. Están llegan al cuarto. Uno de ellos de seguridad y llevada a un apostando mi ropa. No, no es tiene una cámara de video. centro secreto de tortura en la mi ropa. Es mi cuerpo...”. “Ah, veo que ya se conocen”, capital. Así, entré en un mundo Mis torturadores me llevan dice el policía. “Ahora ¿estás del cual pocos regresan. Esta a otro cuarto y me dejan allí. lista para hablar? Si no, te memoria es un resultado de Las paredes y el piso de este pasará lo mismo”. Señala a una promesa que hice: nunca cuarto están llenos de sangre. la Mujer. Me doy cuenta que los voy a olvidar; diré a todo En el centro del cuarto hay una el policía tiene un machete. el mundo lo que he visto y camilla y algo o alguien está Se acerca, ofreciéndome el escuchado. He tratado de debajo de una sábana mancha- machete. Pensando que final- cumplir mi promesa durante da de sangre. Encuentro un mente la hora ha llegado, que estos años, de varias mane- rincón, me siento y pongo mis por fin me van a matar o van ras. Presenté querellas, fui brazos alrededor de mis rodi- a dejar que me mate, tomo el entrevistada por la prensa y la llas y lloro. Lo que está debajo machete. Entonces el policía televisión, di testimonio ante de la sábana está vivo —puedo se pone detrás de mí, sujeta mis los investigadores, hice vigi- escuchar una respiración irre- manos y me obliga a apuñalar lias. Pero esta es la primera vez gular y la sábana se levanta a la Mujer una y otra vez. La que me he atrevido a escribir casi imperceptiblemente con sangre salpica por todos lados. mi historia. Antes no podía, cada respiración. Saco fuerzas Mis gritos se pierden en los no estaba preparada emocio­ de no sé donde, voy hacia la gritos de la Mujer. nalmente. El dolor, acompa- camilla, tomo una esquina Además de estos horrores, ñado por mi viejo amigo, el de la sábana y lentamente la Diana Ortiz fue llevada a una miedo, reaparecieron durante levanto. Una Mujer. Ella abre fosa abierta, llena de cuerpos cada etapa de este libro. He sus ojos y éstos son de color humanos, algunos todavía vi- aprendido que mis palabras café en una cara morada. Sus vos, pero muchos decapitados. —incluso las verdaderas— dientes aparecen entre sus la- Había perros y ratones en esta pueden traicionarme. bios hinchados. Está tratando fosa. Finalmente, fue “resca- de sonreír. Reprimo un grito tada” por un hombre, el jefe que sube por mi garganta y, de los torturadores, llamado La tortura suavemente, la tomo de la “Alejandro”. Me han quitado la polera mano. Sus pechos han sido “Idiotas, déjenla. Ella es y están explicando las reglas: cortados y hay gusanos en sus una monja norteamericana y “Vamos a hacerte unas pre- heridas. Ella aprieta mi mano su desaparición está en todos guntas. Si nos gustan tus res- como si quisiera decir que todo los canales y en los perió- puestas, te dejaremos fumar. Si va a salir bien. Con lágrimas dicos”. Su español tiene un no nos gustan, te quemaremos en los ojos, me pregunta mi fuerte acento norteamericano. con el cigarro”. “Las reglas no nombre. Se lo digo. Ella me Me saca la venda de los ojos. son justas”, digo. Me queman dice el suyo o, al menos, Es alto y rubio. “Vámonos (Diana Ortiz tenía 111 quema- eso trata de hacer. No puedo de aquí”, me dice. “Lo siento duras de cigarillo en su espalda entenderlo y como le cuesta mucho. Tienes que perdo- cuando finalmente escapó). tanto hablar, no quiero pedirle narlos. Se han equivocado “Si tu sobrevives para ha- que lo repita. Ella dice, “Dia- de persona”. “No, no se han blar de esta experiencia, si de na, sé fuerte. Van a tratar de equivocado, me han enviado alguna maneras te las arreglas quebrarte”. Por un tiempo que mensajes con amenazas de

nº42/02 Con-spirando ● 13 El aborto Pero eso no fue todo lo que le pasó a Diana Ortiz. Poco después de su tortura, se dio cuenta de que estaba embarazada. Y contra todas su formación religiosa, se hizo un aborto, el que trató de mantener en secreto por muchos años. Cuando regresé a los EE.UU. después de salir de Guatemala, no fui capaz de decirle a nadie que había sido ¿Quién es Alejandro? violada. No podía reconocer a nadie y tenía miedo de que nadie me creyera. Pensaba que había sido culpa mía porque muerte y estos no pude defenderme —y, en estaban dirigidos última instancia, no resistí. a Madre Diana”. Todo lo que había pasado en “Intentamos ad- Guatemala era culpa mía. Eso vertirte para pre- es lo que los torturadores trata- venir todo esto, ron de meter en mi cabeza. Y pero no quisiste yo les creí. Pero, además, me irte de acá. “No convencí de que nadie tenía me fui porque que saber lo que me había tengo un compro- pasado y que con el tiempo miso con la gen- podría olvidar esa horrible te...”. “Yo también pesadilla. Casi logré hacerlo. tengo un compro- Pero, algo pasó —algo que miso con la gente hasta hoy día no puedo olvidar. —liberarlos del Mi cuerpo comenzó a expe- comunismo...”. rimentar cambios. Creo que Empieza a hablar no necesito decirles a qué me en inglés. “Bue- refiero. No sabía qué hacer. No no, tú ya sabes, sabía a quién recurrir. La gente tenemos fotos de que me rodeaba eran extraños. ti y un video... No reconocía a nadie. Lo único puede ser vergonzoso...”. real para mí en ese momento Al llegar a un semáforo, era que había algo creciendo Diana Ortiz saltó del jeep de dentro de mí —algo que venía Alejandro y corrió hasta una de la semilla de uno de mis casa donde fue acogida, gra- torturadores —quizás de todos cias a lo cual vivió para contar ellos. En ese momento, yo su historia. estaba sangrando y recé como

14 ● Con-spirando nº42/02 nunca antes para expulsar lo que fuera que estaba creciendo entrevistaentrevista concon dentro de mí. Intenté entender Mimi Ballard: qué estaba pasando. ¿Dios me Mimi Ballard: estaba castigando porque había ver a Diana después de participado en la tortura de ver a Diana después de otro ser humano? ¿Qué estaba susu torturatortura yy verlaverla ahoraahora creciendo dentro de mí? ¿Era humano? Tenía tantas pregun- eses unun milagromilagro tas pero ninguna respuesta. Mary Judith Ress Todo lo que sabía era que algo estaba creciendo dentro de mí y, para mí, era un monstruo, un producto de los hombres que Una de las mejores amigas de la Hna. Diana me habían violado. No podía Ortiz es la Hna. Elisabeth “Mimi” Ballard. Mimi traer algo a este mundo que acompañó a Diana durante todo su largo camino de sanación. Mimi estaba trabajando en San Mi- era producto del mal —tenía guel cuando Diana llegó a Guatemala como una que ser destruido o me iba a joven monja misionera de la misma comunidad. destruir a mí. Para hacer corta Ella se preocupó cuando Diana comenzó a recibir una larga historia, busqué ayu- amenazas y empezó a sentir una fuerte necesidad da. Destruí este algo que estaba de protegerla. Después de su tortura, Mimi fue creciendo dentro de mí. Pero la persona en quien Diana pudo confiar y quien recordaba cada día cuán pare- insistió en que Diana debía ser tratada en un centro cida era yo a los torturadores. especial para víctimas de la tortura en Chicago, en Primero, había participado en vez de en una clínica para gente abusada donde la tortura de otra mujer y luego estuvo hospitalizada e incomunicada. Hace 10 años destruí lo que podía haber sido Mimi volvió a Chile y fundó una casa de la mujer una vida inocente. ¿Cómo una que se llama Casa Diana Ortiz”. monja católica podía cometer tales actos? La vergüenza y - Tu has sido la contenedora de Diana durante la culpa me acechaban día y todos estos años después de su crisis. ¿Harías lo noche. Después de que todo mismo otra vez? esto pasó, traté de poner mi - Por muchos años me sentí culpable por no haber vida nuevamente en orden. hecho más por Diana. Diana igual me quiere y En la medida en que me que- no reconocería que yo hubiera podido hacer más. daba callada, estaba segura. - ¿Cuando despertó este fuerte sentido de que tu Eso fue lo que pensé. Pero tenías que protegerla? es imposible escaparse del Cuando empezaron a llegar las amenazas hacia ella pasado. La violación es una (cartas, mensajes, etc., mientras Diana trabajaba en San Miguel). Yo traté de convencerla de que forma de tortura utilizada por saliera de Guatemala porque tomé muy en serio los gobiernos para castigar a el peligro. Yo pienso que no insistí suficiente, pero las mujeres que son percibidas Diana me dice que no había nada que yo hubiera como una amenaza. Muchas podido hacer para que ella se fuera de Guatemala. veces las mujeres descubren - ¿Qué sentiste frente a todo lo que pasó con Diana, que llevan el fruto de sus tor- al vivirlo tan de cerca? turadores y, al igual que yo, Mucha rabia, pero algunas veces una rabia mal se ven forzadas a tomar una enfocada, porque no sabía qué hacer con la rabia.

nº42/02 Con-spirando ● 15 La mayor parte de lo que yo - Una pregunta sobre el aborto sentía tuvo que ser poster- que se hizo Diana. Sabemos gado. Desde el secuestro de el daño que le causó decidir Diana en adelante, por más abortar. ¿Cómo te afectó a ti de dos años, no pude darme esta decisión? el lujo de entrar en lo que Una de las cosas que lamento yo sentía porque me iba a es no haber pensado desde quitar fuerzas que necesitaba el primer momento en la para Diana. Así es que no lo posibilidad de que estuviera hice no más. Y como soy tan embarazada. Probablemente práctica y los sentimientos la hubiera llevado a hacerse se alejaban cada vez más, el aborto. Al principio ella pensé ¿por qué entrar en no podía ni decir que había esto? Hubo, quizás, dos o tres sido violada, pero una sabe momentos donde me pude eso. Debería haberme pre- desahogar. Uno de esos fue ocupado más, pero deje de durante un retiro con alguien preocuparme porque siempre con quien pude hablar un estaba sangrando. Pensé que buen rato y despejar mi rabia. no podía estar embarazada con - Igual supongo que estás tanta sangre. Además, estoy marcada para toda tu vida segura de que aunque ella no por lo que le pasó a Diana. se hubiera hecho un aborto, ¿Cuáles son las secuelas de nunca iba a llevar un embarazo esto en tu propia vida? a término por su estado de salud. Era imposible. - Pienso que soy más compasiva, más tolerante. - Y tus propias creencias católicas ¿han sido También, esto de ver a Diana después de su tortura afectadas? y verla ahora es un milagro. Es impresionante. Es Bueno, no creo en el aborto, pero hay casos… un milagro que no haya sido aplastada esta fuerza y este es uno. Habría sido seguir con la tortura que tenía adentro. Sigue creciendo y creciendo. exigirle a ella que intentara llevar ese embarazo a - Hubo un momento cuando te sentiste realmente término. Estoy muy de acuerdo con las leyes contra escandalizada por lo que pasó con Diana… el aborto, pero ninguna ley puede contener todos Me costó mucho creer que el gobierno de los los casos. Y no creo que Dios querría que alguien EE.UU. estaba detrás de todo eso. Uno siempre llegara a este mundo de esta forma. ha sabido que el gobierno de los EE.UU. ha hecho ¿Cuáles son tus propias preguntas, ya después que algunas cosas malas, pero que existiera un com- salió toda la historia de Diana en el libro que acaba promiso total con la institución que planificaba de ser publicado? y ejecutaba la tortura de manera sistemática en Sigo preguntándome, ¿cómo puedo seguir pro- Guatemala, me impactó muchísimo. Todos sabe- tegiéndola? ¿Está todavía en peligro? Es una mos que la CIA hace estas cosas, pero no que el preocupación mía porque ha recibido amenazas Departamento de Estado, la Embajada, el Depar- viviendo en Washington. Hubiera querido que ella tamento de Justicia, el Senado también —todos llegara a un momento en el que pudiera poner fin a estaban involucrados, absolutamente todos. Un todo eso —y venirse a vivir conmigo en Chile (se momento en el que pude descargar algo de mi ríe). Pero yo sé que eso no va a pasar porque este rabia fue cuando tuve que dar testimonio frente al proceso no termina jamás. Ella ya es parte de una Departamento de Justicia. Allí pude decirles lo que organización para los sobrevivientes de la tortura tenía que decir: por qué han optado nítidamente por y por ahí va su camino. el gobierno de Guatemala y sus escuadrones de la muerte en vez de hacerlo por una mujer ciudadana de los EE.UU. que, además, es monja.

16 ● Con-spirando nº42/02 decisión que las marca de por destina —que iba a hacer todo de técnicas de tortura en mi vida. Yo sé que hay personas lo que pudiera para prevenir presencia y que no me inviten que desaprobarán mi decisión. que algo tan horrible como a películas violentas. A causa Y estoy segura que dirán que lo que nos pasó, le pasara a de estas peticiones, algunas yo no tenía derecho a decidir cualquier otra persona. Cuan- personas me han acusado de si este humano o no-humano do miro para atrás y trato de tener “una necesidad malsa- debía vivir o morir. Todo lo comprender lo que pasó, todo na de control”. Es como es que puedo decir es que hice parece una pesadilla que no y me imagino que así será lo que tenía que hacer. Odio terminará nunca. Terminará, siempre. En mis días malos la elección que estuve forzada me dicen, una vez que yo sigo sosteniendo que debería a tomar. misma me pueda liberar del haber muerto en prisión antes Ustedes encontrarán esto oscuro secreto. He comenzado de haber sido usada para in- un poco raro, pero con todo lo a compartir este secreto oscuro fringir dolor, antes de haber terrible que fue esta experien- al confiarlo a ustedes. No hay tenido que decidir sobre la cia, soy una persona mucho vuelta atrás. vida o muerte de otra persona. mejor. Soy más sensible ante Todavía deseo haber muerto. las demás personas. Me pre- Mi Mujer Amiga La otra noche soñé, como ocupo por aquellos que están lo hago muchas veces, con oprimidos y por aquellos que Todavía estoy buscando la Mujer y las personas que cometen crímenes contra la respuestas en la Biblia. Releí estaban en el hoyo. Lloraban. humanidad. Y no juzgo a las el milagro de los panes y los Yo no sabía por qué lloraban. personas, eso lo dejo a Dios. peces hace poco tiempo atrás. Estábamos en el bosque. Los Tengo una comprensión más Jesús aceptó lo que estaba allí: árboles tenían brotes verdes profunda de la fragilidad de cinco panes y dos peces ofre- claros y podía escuchar el la humanidad y del mal que cidos por un muchacho. No canto de los pájaros. Podía habita en medio de nosotros. se quejó, ni se desesperó. Dio escuchar gemir a la Mujer y a Solía pensar que Dios se ha- gracias a Dios por ello, aunque las otras personas que estaban bía equivocado al permitirme parecía muy insuficiente, y en el hoyo. Miraban la base del sobrevivir, pero ya no pienso comenzó a repartirlo. Toma árbol. Sentí olor a lirios y me que sea así. Dios, por alguna lo que tengas en una actitud di cuenta que ellas las tenían razón que desconozco, me dio de agradecimiento y da lo que en sus manos. Comenzaron el valor necesario para seguir tengas en una actitud de fe y a colocarlas a los pies de un viviendo. Créanme, sobrevivir esperanza, y será suficiente. árbol. Estaban haciendo la es más doloroso que el mo- Será más que suficiente. tumba. Estaban llorando con mento mismo de la tortura. A medida que me voy re- alegría porque ella no estaba No sé cómo poner esto en cuperando, tengo nuevamente más conmigo (Diana Ortiz palabras —pero yo entiendo fe, esperanza y confianza, en dedica su libro a “Mi Mujer lo que le pasa a las personas mis días buenos. Pero incluso Amiga” —la Mujer a quien, que sobreviven los horrores de en mis días buenos, el olor forzada por sus torturadores, la tortura. Por mucho tiempo, del humo de cigarrillos me contribuyó a apuñalar hasta su sufrimiento, ya sea físico, recuerda al policía. Salto si la muerte, y que se convirtió psicológico o espiritual ha sido alguien corre detrás de mí y en su Espíritu Guía en el largo mal entendido y ha pasado cuando alguien está parado viaje para develar la verdad). desapercibido. Cuando salí de demasiado cerca y me mira, Guatemala en 1989 hice una retrocedo. Duermo con la luz promesa a las personas que prendida. Pido a las personas dejé allá en la prisión clan- que no fumen, que no me miren fijo, que no hablen

nº42/02 Con-spirando ● 17 Para ciertos grupos fe­ entrego a mí misma y a mis ministas, la subjetividad, la posibles lectores y lectoras al­ emoción, la sensibilidad y la gunas experiencias de mi vida. interconexión entre los dife­ rentes niveles de la existencia La experiencia de haber son mediaciones fundamenta­ nacido mujer les para todo conocimiento. Comparto esta perspectiva. Nacer mujer, cuando la Por lo tanto, mi propuesta es familia de inmigrantes origi­ a partir de mi subjetividad, narios del Cercano Oriente es­ más precisamente de ciertos peraba un hijo, un hombre, fue aspectos del mal vivido en mi muchas veces un sufrimiento. propia vida. Me gustaría inten­ Siempre me acompañó la tar decir, a pesar de sentirme expresión del deseo frustrado con un cierto pudor y malestar, de mis padres y fue para mí lo que experimenté como mal. como una herida. No soy, por Mi palabra sobre “mi mal” es mi sexo, lo que ellos querían por lo tanto una palabra que se que fuera. Jamás podría rea­ busca en medio de los recuer­ lizar sus deseos, sus sueños, dos y de las interpretaciones. su orgullo. No soy más que Al expresarme, me revelo y una mujer y, en su cultura, me oculto al mismo tiempo. eso quería decir, dependiente, ¡Muestra alguna cosa y oculto sumisa, sin posibilidad de tantas otras! No tengo control poder continuar el nombre de total sobre los acontecimien­ la familia. Mi padre no podría tos que describo ni sobre mi tener el orgullo de tener un análisis. Por su objeto, mi hijo, sobre todo porque él ya narración es incompleta y está era mayor cuando yo nací. marcada por la ambigüedad. Una niña, nada más que una Es una interpretación de los niña... ¿¡Por qué misteriosos hechos de mi experiencia o una designios de Dios tenemos una lectura actual de los hechos del hija, nosotros que tanto deseá­ pasado que puede ser, incluso bamos un hijo?! No hay nada en algunos aspectos, injusta que hacer, sólo aceptar este para con otras personas que destino imposible de cambiar. formaron parte de mi vida. Son palabras que siempre es­ Es la condición frágil de toda cuché, aunque fuesen dichas, a palabra humana que es nece­ veces, con gentileza y humor, sario acoger en su riqueza y de parte de padres y parientes ambigüedad. Perfectamente cercanos. consciente de estos límites me Crecer marcada por este destino, marcada por esta * Ivone Gebara, teóloga y religiosa brasileña, vive en Recife. Este artículo frustración, significó tener ha sido tomado de su último libro, siempre que luchar por mos­ Rompendo o silêncio. Uma fenome­ trar mi valor. Que una niña nologia feminista do mal (Petrópolis: Editora Voces, 2000). tenía valor por sí misma, no era

Ivone Gebara* Ivone Gebara* Traducción: Ute Seibert intento de una fenomenología personal El mal y yo: algo evidente. Los hombres, sí, intento de una fenomenología personal El mal y yo:

18 ● Con-spirando nº42/02 ellos valen por sí mismos, por derramar durante años lágri­ un coraje que siempre me su esfuerzo de autonomía, por mas de sufrimiento frente a la impresionó, una fidelidad al su lucha para convertirse en incomprensión, comprensible, deber para con su familia y una persona de bien y alguien de mis padres. El deseo de li­ una capacidad increíble de socialmente reconocido. Y yo, bertad me llevó muchas veces renunciar a sí mismas. Pero, sin ser un hombre, buscaba mi a vivir una culpabilidad que todo eso suscitaba en mí, al valor, esto es, quería valerme dejó huellas profundas en mí. mismo tiempo, admiración por mí misma. Por eso, fui Cada día me preguntaba: ¿por y una crítica silenciosa, un muchas veces acusada de qué tanto sufrimiento? ¿Por malestar y un bienestar frente rebeldía y recriminada por qué mi felicidad debía pasar a tales ejemplos de entrega. perder mi tiempo con libros, por la infelicidad de mis pa­ Ellas eran fuertes en su conferencias, cosas absoluta­ dres? ¿Por qué mis sueños de sumisión a un sistema de va­ mente inútiles para las mujeres. libertad y de valor debía signi­ lores culturales en el que las Llegar a ser yo misma, va­ ficar la muerte de los sueños de mujeres, aunque fueran muy lerme por mí misma, fue una ellos? La capaces, forma de placer y de orgullo, reflexión aunque de desafío y aventura, pero sobre las maneja­ al mismo tiempo una cruz, a contradic­ ran muy veces, difícil de cargar, porque ciones de bien su necesitaba remar siempre la vida formaba parte de mi lugar en la educación de las/ contra la corriente. Necesitaba pan de cada día y así sigue os hijas e hijos, públicamente, soportar las quejas en casa y siendo, después de tantos años debían dar siempre testimo­ buscar un lugar en el mundo de lucha y perseverancia feliz nio de la dependencia de sus de los estudios, diferente del en mi camino. maridos o hijos. A veces me mundo de la familia. Este hacía mal su actitud, otras mundo se anunciaba como el La experiencia de la fuerza veces provocaba mi compa­ lugar donde yo podría, por fin, y de la fragilidad de las sión, despertaba en mí una valerme por mí misma. matriarcas revuelta, un deseo de libertad La opción de entrar a sin objeto preciso. Sospechaba una congregación religiosa Para la feminista en que que había cosas que chocaban daba continuidad a mi lógica me convertí, la fuerza de en su sumisión. Yo no sabía personal de valerme por mí las matriarcas de mi familia cómo nombrarlas a pesar de misma. A primera vista puede aparece como una prueba que siempre sospechaba su parecer una contradicción, del valor de las mujeres. A la malestar. Yo sufría y, sobre especialmente hoy cuando vez, si bien es cierto que esas todo, sufría de miedo de repro­ las instituciones religiosas mujeres —mi abuela materna, ducir en mí este malestar que femeninas están pasando por mi madre y mis tías— tenían yo veía en la vida de ellas. Yo el filtro de la crítica antipa­ mucho coraje para llevar sufría en silencio, con miedo triarcal. Pero, para mí, en adelante su vida y la de sus de revelar mis sentimientos aquel momento, era un camino hijos, su coraje estaba preso tan diferentes a la tradición de libertad y justicia. Era un en un sistema cultural que del medio en donde vivía. Yo lugar, donde podía vivir los establecía con toda claridad el pensaba que sólo yo tenía estos valores evangélicos sin las papel de las mujeres. Yo vivía sentimientos, ni siquiera los constric­cio­nes impuestas por en mí una contradicción. Yo compartía con mis hermanas mi cultura familiar de origen. las amaba mucho y, al mismo que me parecían más o menos Esta opción me llevó a huir de tiempo, no quería reproducir felices de reproducir este mo­ la casa y, consecuentemente, a su fuerza sumisa. Ellas tenían delo. Yo vivía el mal de aspirar

nº42/02 Con-spirando ● 19 a un mundo diferente, soñaba miento de pertenecer a mi país, con mi libertad, deseaba luchar Brasil, pero al mismo tiempo contra las injusticias sociales, me he sentido muchas veces deseaba justamente aquello extranjera. En mi infancia y Simón Pachamo que parecía prohibido desear juventud no conocía otro país, para una hija de inmigran­ otra patria, a pesar de que mis tes. Este mal impregnó mi padres compartieron conmigo adolescencia y mi juventud, sus recuerdos y nostalgias. haciéndome soñar con otra Oí decir frecuentemente que música, con otra danza donde éramos extranjeros cuando las bailarinas podrían acomo­ las personas querían subra­ dar sus pasos a la música de yar nuestras costumbres y su cuerpo, de su corazón y de tradiciones diferentes. Pero sus sueños. Y este mal, fuente Brasil era mi país. Comencé del bien de mis sueños, todavía entonces, a tener miedo a no persiste, presente de varias ser aceptada como hija de maneras en mi trabajo de cada extranjeros: un miedo que día. Mi mal se mezcla con el todavía me acompaña muchas bien y mi bien me hace mal. veces. Me aterrorizaba el mie­ do de que los niños y jóvenes La experiencia de estar en se riesen de mí a causa del una patria sin tener una acento de mis padres. Quería Me aterrorizaba el patria siempre protegerme, prote­ miedo de que los ger a mis padres. Comencé a ¿Dónde encontrar el mal en esconderlos, no hablar de su niños y jóvenes esta situación cada vez más co­ país, de su situación social, de se riesen de mí a mún en nuestras sociedades? su cultura, de su idioma, de causa del acento de ¿Cuál es el mal del que estoy su acento. Necesitaba ocultar hablando? En esta situación, el Oriente en mí, mostrar el mis padres. Quería ¿qué fue para mí el mal? ¿Y rostro aceptable, ser como siempre proteger- por qué fue vivido como mal todo el mundo. Era necesario me, proteger a mis por mí, cuando otras personas ser del Occidente latinoame­ lo vivieron como bien y con ricano. ¿Qué acontecimiento padres. Comencé orgullo de sus orígenes? Hay preciso desencadenó en mí a esconderlos, no cosas que son vividas como este miedo? Honestamente, hablar de su país, mal sin saber si son realmente no soy capaz de decirlo, no sé, cosas malas. El mal es una no me acuerdo y lo intento en de su situación so- relación vivida por sujetos de vano. Pero el miedo existía en cial, de su cultura, una variedad inmensa, lo que mi piel, en mi cuerpo, en mi de su idioma, de su torna difícil comprenderlo. pensamiento. La subjetividad desempeña ¡Qué mal, qué malestar, acento. Necesitaba un papel de gran importancia qué maldición traía dentro de ocultar el Oriente en porque es ella la que, hasta mí misma la división de dos mí, mostrar el rostro cierto punto, determina la mundos culturales, de dos intensidad del mal y, en parte, idiomas, de amar tanto uno aceptable, ser como su calificación como mal. como el otro y de no querer todo el mundo Siempre he tenido el senti­ ser rechazada por ninguno de

20 ● Con-spirando nº42/02 ellos! ¡Qué riqueza —diría Vivir el bien y el mal de línea de pensamiento de la hoy—, pero qué sufrimiento ser teóloga feminista de la teología. La mediación del en aquel tiempo! ¡Qué an­ liberación género me ayudó a compren­ gustia y cuántas lágrimas y der cuán fuerte la estructura heridas cada vez que sentía la ¡Qué mal contradictorio! jerárquica y dualista estaba menor señal de desprecio por ¿Cómo se puede sufrir por anclada en nuestra teología, el hecho de ser teóloga, y causa de mi doble pertenencia al punto de convertirse casi en cultural! Cuantos dolores fren­ además “teóloga feminista”? su esencia, su especificidad. te a cada burla infantil sobre ¡Qué sufrimiento bizarro! Mi Además tomé conciencia de el acento de los extranjeros y sufrimiento teológico comenzó la lentitud de los cambios particularmente, de los árabes. con una cierta autonomía de mi teológicos, tomando en cuenta Este mal, lo viví igualmen­ pensamiento. La búsqueda de que la teología actual, directa te en mis prácticas religiosas. autonomía, sentida como un o indirectamente, mantiene Tenía dificultad para aceptar bien, me llevó a sufrir el mal. la estructura jerárquica de como verdaderas las liturgias Cuando yo repetía las ideas nuestras sociedades llamadas orientales de las cuales mis de los otros, particularmente cristianas. padres participaban de cuando de los hombres, no había pro­ Muchas veces escuché en cuando. Yo vivía ese culto blema. Podía ser profesora de decir, que yo no era teóloga como pecado, como grave filosofía y de teología. Podía de verdad, sino filósofa. Y falta contra Dios. Y eso era contentarme en preparar bien eso porque mi título era un fuertemente acentuado en mis clases a partir de libros de doctorado en filosofía y no la escuela, en las clases de teología y de filosofía ya escri­ en teología. Eso explicaba religión. ¡Cuántas contradic­ tos y publicados por hombres, para algunos el desvío de mi ciones, conflictos y dolores sin y jamás tenía dificultades. Fui pensamiento. Parece que es el solución tuve que vivir dentro muy apreciada como una pro­ título académico que legitima de mí! En el fondo, pensaba fesora muy competente. y no los descubrimientos del que el occidente siempre tenía Pero llegó el tiempo de los pensamiento. Pienso que eso la razón, que las religiosas de frutos maduros y con ellos el es verdad también para los mi colegio tenían más razón deseo y el coraje de decir mi hombres, pero tratándose de que mi familia, que los padres palabra sobre las cosas. La mujeres, este juicio es más que predicaban en los retiros autonomía me llevó a vivir duro y más incisivo. eran los más sabios del mun­ una considerable distancia Las luchas de mi pasado do y que lo más simple sería en relación a mis colegas, la todavía forman parte de mi adaptarme totalmente a su mayoría hombres. Una de las presente. Sin duda, el femi­ música. Yo debía amarla más fuentes de la distancia fue mi nismo teológico ha logrado que aquella que escuchaba en adhesión a una perspectiva abrir algunas brechas en un mi casa. feminista, muchas veces con­ pensamiento anclado en una La vida me abrió otras pers­ siderada como un problema estructura dogmática mas­ pectivas y me hizo madurar del primer mundo, que aspira culina pero seguimos siendo en relación a mis juicios de a influenciar y cooptarnos. ciudadanas de segunda catego­ juventud. Pero siempre quedan Pero mi experiencia y mi ría en la Iglesia Católica. Por algunas migajas, vestigios de trabajo con varios grupos de lo tanto, este mal todavía está recuerdos que vuelven y que mujeres, sobre todo del medio presente en mi vida y me incita todavía me hacen sentir el popular, me hicieron ver que continuamente a superarlo. gusto amargo de situaciones había una cosa en particular vividas de aquel pasado que a tomar en cuenta, una opre­ me habita y me nutre. sión especial vivida por las mujeres que no entraba en la

nº42/02 Con-spirando ● 21 Hace más de 20 años, tomando en serio la sugerencia de un amigo ermitaño, hice un “koan”, un ejercicio Zen. Este ejercicio consiste en cubrir un ¿Quien¿Quien soy?soy? ojo con la mano y mirarse la cara en el espejo por un buen rato. Mi amigo me advirtió ¿era?¿era? que, a partir de este “koan”, podría ver mi “esencia”. Lo hice —y de veras vi “quien soy/era/¿seré?”. Mirando mi ¿sere?¿sere? cara en el espejo con un solo ojo, dentro de algunos minutos pude verme ya vieja —una visión que, a los 20 años, me unauna revelaciónrevelación dede-- asustó. Pero seguí mirando a esta Judy vieja y de repente mi cara cambió sutilmente y trástrás dede laslas fotosfotos vi a mi abuela materna —mi querida “Ca”— mirándome. Mary Judith Ress* ¡Yo tenía su cara! Pero el ejer- cicio no terminó allí. Detrás de la cara de mi abuela, vi otras caras viejas —caras algo co- nocidas, algo familiares, algo semejantes a la mía. Llegue hasta ver una cara parecida a la mía hecha de piedra. Sin duda estuve mirando mi linaje, mis ancestros. Pero realmente * Mary Judith Ress es una teóloga eco- feminista que vive y trabaja en Chile.

22 ● Con-spirando nº42/02 me asusté y nunca más repetí 1942. tal “koan”. Acá estoy con mi Este año cumplí 60 años mamá. Una guagua y ya no necesito cubrirme un linda y gordita, una ojo para ver la cara de la vieja mirada clara y de- Judy en el espejo. La veo con terminada. ¿Soy yo? todas sus espléndidas arrugas Tengo que ser, pero a y manchas que forman un esta altura de la vida “collage” de memorias, de es difícil reconocerme mi historia. en ella. ¡Esta pequeña Uno de los regalos que es pura potencia! Le recibí para mis cumpleaños deseo buena suerte. Me fue de mi hermana menor: interesa más la imagen de Kathy me regaló un calendario mi mamá, esta mujer joven hecho por ella, con una foto de 26 años, linda y delgada. de mi niñez y juventud para Sé que la quería mucho, pero cada mes de 2002. Tengo aquel a la vez no me reconozco en calendario pegado en la pared la cara de ella. Su historia ha de mi cocina y cada mañana, sido tan diferente de la mía y mientras tomo mi café, dialogo durante la mayor parte de mi conmigo misma, haciendo el vida estuve convencida de que viaje por medio de las fotos ella no podría comprender las para encontrarme con la luchas y los sueños de su hija Judy-bebé, niña, adolescente, mayor. Mi mamá murió rela- joven monja guerrera. Es algo tivamente joven y siento que desconcertante porque surgen todavía tengo unas conversa- un conjunto de emociones ciones pendientes con ella que que me sorprenden —siento debo llevar a cabo— quizás una mezcla de pena y tristeza por medio de los sueños o por por esta Judy tan inocente e medio de una imaginería. ingenua y también una cierta impaciencia y hasta rabia por 1945. sus tonterías y sus principios Acá, sí, reconozco y idealismos tan altos y in- a esta Judy niña. Re- flexibles. Pero quizás más conozco su sonrisa que nada, siento una tremenda medio forzada, su pelo ternura por esta persona que castaño arreglado con conozco y no conozco a la trenzas y cintas (obra vez y siento tantas ganas de paciente pero sin tregua aconsejarla desde este lado de la mamá) y sus piernas de la vida. Te invito a recorrer gorditas (¡siempre serán algunos de estas fotos con- así!). Mirándola allá en la migo y escuchar mis propios pared mientras tomo mi café, preguntas. ¡Ojalá que sirva la quiero abrazar, casi como para darte un empujón para si fuera una hija mía. Quiero hacer lo mismo con tus propios soplar en su oído que a pesar álbumes de fotos! de todo, su vida estará llena

nº42/02 Con-spirando ● 23 de belleza. Quiero cantarle “alegre” que gano el premio una canción de cuna de sus de “la chica más simpática” de ancestros irlandeses: “Tu-ra- su curso, que luchaba contra lu-ra-lu-ra, Tu-ra-lu-ra-lay. la llamada de un Dios (súper Shhh... no llores, que será, patriarcal, por supuesto) que la será...”. invitaba a consagrar su vida en una forma especial y abrazar la vida religiosa. Mirándola desde acá, todavía apoyo su decisión de ser monja. Más 1958. que la llamada de Dios — Acá soy que hoy criticaría fuer- una seño- temente desde mi rita de 15 mirada de teóloga años. Es feminista— pienso la foto que esta joven Judy “ofi- se sentía atraída cial” por el convento de mi por las mujeres colegio que ella conoció (primer en el colegio. año de La mayoría la escuela fueron mu- secundaria) jeres alegres, donde mis com- fuertes y llenas pañeras han puesto sus comen- de una dedicación tarios chistosos para captar la y un entusiasmo personalidad de cada una. La contagioso. A pe- mía dice: “Sanity?” (¿Loca?). sar de que la vida 1970. Supuestamente, una joven religiosa estaba Acá alegre, simpática, buena para regida por normas estoy a las fiestas, buena compañera. patriarcales de una los 28 Pero yo la conozco más al iglesia que quería años con fondo. Sé que es muy tímida que “sus” mujeres mi papá. —y muy inquieta a la vez. No fueron aut maro u aut Soy una joven quiere simplemente resignar- muro (dicho en latín que monja misionera se a ser profesora, enfermera o significa “bajo un marido o trabajando en . secretaria (las tres profesiones detrás de un muro”), muchas Esta foto fue tomada durante básicas para la mayoría de las monjas simplemente escapa- unas breves vacaciones en mi mujeres de mi época) y des- ban de este control y vivían casa. Esta Judy está en plena pués casarse con un príncipe una vida plena y feliz dentro etapa de ser una guerrera: azul para vivir feliz “para de una comunidad de mujeres. luchando contra la guerra siempre”. Ella quiere hacer Mirándola allá en la pared, le en Vietnam, luchando por algo más significativo con su gruño, sonriendo: “Sí, chica, los derechos civiles de los vida —algo que le dé sentido seguiste tu encanto” —y siento negros en mi país (EE.UU.), y una vida aventurera a la vez. que me gruñe de vuelta. luchando contra la pobreza y Durante estos años soy la Judy opresión de los campesinos en

24 ● Con-spirando nº42/02 El Salvador. La veo con mucho entusiasmo por sus “causas” y con una total confianza y certeza de que “la tortilla se volverá y los pobres co- merán pan y los ricos mierda, mierda”. Ay Judy, Judy de mi juventud — todavía puedo identificarme con tus convic- ciones y sueños de un mundo mejor, un ma foto para dentro de mundo lleno de justicia completar­ el un círculo, sin y paz. Todavía me cae bien calendario. Acá estoy principio y sin final”. tu fervor revolucionario, tu en medio del laberinto en A la vez, mirándome en “¡hasta la victoria siempre!”. la catedral de Charteres en el espejo, sé que ya soy vieja Te saludo con mi taza de café, Francia. Esta catedral gótica y me deprimo —pero dentro medio orgullosa de tu entrega dedicada (por supuesto) a la de un rato, olvido esta cara pero a la vez medio incómoda Virgen María, es la más grande en el espejo y pienso que mi con tus expectativas. Sospe- en Europa. El laberinto fue cara es la de la joven monja— cho que si tu hubieras podido “redescubierto” solamente hasta que alguien me cede su verme/te acá sentada a los 60 en la década de los setenta y asiento en el autobús por ser años, hubieras gritado, “¡No! todavía está cubierta con sillas “adulta mayor”. Y, más y más ¡No puede ser! Ni fuiste la y bancas porque la iglesia pre- a menudo, siento el “peso” de Madre Superiora de la congre- fiere que los feligreses dirijan mis ancestros susurrando en gación, ni la líder ideológica sus oraciones al Altísimo en mi interior —sus consejos, del partido o movimiento de el cielo y no se fijen tanto en sus reclamos, sus exigencias. liberación, ni una profesora de el “viaje hacia el centro”—el Sé que camino bien acompa- la teología de la liberación, ni laberinto— que se encuentra ñada. Sé que pertenezco a un una mártir que entregó su vida en el piso. En la foto, estoy linaje cuyos miembros siguen por la causa de los pobres”. haciendo un pequeño acto brotando a través de mí— y No, querida, no he llegado ser de rebeldía a reclamar esta sospecho que brotaré otra vez lo que tu imaginabas que ibas antigua práctica, poniéndome en una mirada de rebeldía, a lograr ser, al llegar a los 60. en el centro del laberinto para en un gesto, en una risa, en Sorry! Han pasado más de 30 meditar y conectarme con mi/ algún par de piernas gorditas años ya y no soy tu ideal, tu tu/nuestro centro. en el futuro. Y eso —a fin y monja revolucionaria. Dejé la Tanto el laberinto con sus a cabo— me da una gran paz. vida religiosa, me casé, tengo/ vueltas hacia el centro, como tenemos dos hijos lindísimos el calendario con las fotos de que llevan algo de tu mirada mi niñez y juventud, y el ejer- revolucionaria en sus ojos. Tu cicio Zen de ver la antigüedad sabes todo eso. de mi propia cara, me con- 2002. Incluyo esta últi- firma que “somos un círculo

nº42/02 Con-spirando ● 25 Volver a los diecisiete después de vivir un siglo es como descifrar signos sin ser sabio competente; volver a ser, de repente, tan frágil como un segundo, volver a sentir profundo como niña frente a Dios eso es lo que siento yo en este instante fecundo

Se va enredando, enredando como en el muro la hiedra, y va brotando, brotando como el musguito en la piedra, como el musguito en la piedra ay, sí, sí, sí

Violeta Parra, Chile.

26 ● Con-spirando nº42/02

Chantal de Rementería

nº42/02 Con-spirando ● 27 La domesticacion de la sexualidad en las sociedades jerarquicas

María Emma Mannarelli* Revista Lola Press Nº4

Lo público y lo privado del mundo doméstico y a sus propia y están más matizados relaciones e intercambios con por otras presencias afectivas.1 La forma de experimentar las instancias que están más Para entender la sexua­ la sexualidad es una comple­ allá de las fronteras de ese lidad, entonces, también es ja confluencia de factores a universo. importante atender a los desentrañar para entender la La vida de hombres y mu­ vínculos que se establecen cantidad de elementos que jeres adquiere sus significados entre hombres y mujeres, intervienen y cómo lo hacen. y sus referentes emocionales considerando la gran varie­ Supone una determinada de­ y por lo tanto de conducta, de dad de estructuras familiares finición de las fronteras del acuerdo a las configuraciones existentes, resultado tanto de mundo privado y público. Esto de la estructura familiar. En una combinación de vertientes quiere decir que para entender esto último se encierran tam­ culturales diversas como de el significado de la experien­ bién muchas dinámicas. Por una jerarquía social particular­ cia del sujeto, debe prestarse eso es básico distinguir entre mente marcada, la que articula atención a las configuraciones una casa que se va cerrando y sin homogenizar. Esto no está va definiendo de otra forma ajeno, sino todo lo contrario, * María Emma Mannarelli, antropóloga sus linderos con la calle y los a las formas y a los rasgos del peruana, forma parte del Programa de espacios públicos, creándose comportamiento estatal, que Estudios de Género de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en Lima. en su interior vínculos más interactúan con los patrones Seleccionamos una parte de su ponencia cercanos, cuando se privatiza de ejercicio de la autoridad presentada en el seminario Sexualidad y Culturas (Santiago, noviembre, 2002). y se convierte en un espacio privada. La ponencia de la autora analiza el tema relativamente propicio para El mito de la familia como refiriéndose específicamente al caso de la intimidad, de aquella más célula básica de la sociedad Perú. En la selección que ofrecemos a continuación hemos omitido las referen­ permeable, más abierta, donde ha tenido consecuencias ne­ cias explícitas al Perú, como una manera los vínculos entre hombres y gativas en términos de las de proponer la aplicación de este análisis a la realidad de otros países de América mujeres tienen una calidad propuestas para pensar la se­ Latina. y una intensidad emocional xualidad y sus orientaciones.

28 ● Con-spirando nº42/02 Es cierto que las organizacio­ entre hombres y mujeres y ha hostil a la presencia femenina, nes familiares, y sus discutidas delegado a la iglesia católica las posibilidades emancipato­ variaciones, son recursos buena parte del control de esos rias se restringen y los espacios inmediatos e imprescindibles vínculos. Así ésta mantiene para el despliegue del yo están para la sociedad y su funcio­ una ascendencia considerable reducidos. Estos son reempla­ namiento. Sin embargo, eso no en el ámbito del control de la zados por el enclaustramiento quiere decir que de la familia sexualidad y en el universo de disfrazado, la libertad pública emerjan naturalmente formu­ las relaciones familiares. La no existe para las mujeres. laciones en torno a los patro­ presencia clerical, lo mismo Mejor quedarse en casa. nes de vida y a la nor­matividad que la servidumbre, resultan En general la servidumbre del comportamiento social y un freno para la intimidad es un referente jerarquizan­ que éstos sean los que mejor y para la disolución de los te, deteriora e inferioriza lo moldean la conducta y el vínculos jerárquicos en el doméstico, que es lo natu­ proceder de los individuos. De universo familiar. ralmente identificado con lo allí que para pensar en la se­ femenino. Es una invitación xualidad sea crucial prestarle Sexualidad y servidumbre a la naturalización de la atención a cuáles han sido las jerarquía. Es una relación y características del intercambio En la fundación de la una presencia que se resiste a normativo y emocional entre sociedad colonial las relacio­ ser normada desde fuera. Así, los vínculos de parentesco y nes entre hombres y mujeres define las fronteras del lugar las instituciones. Esto pasa estuvieron impregnadas de al que el estado renuncia, sin por observar los grados o las vínculos serviles, y el servicio lamentarse, a intervenir. Por formas de renuncia de las doméstico se confundía con el otro lado, el acceso a este autoridades y de las respon­ favor sexual. Esta situación recurso de poder atrofia las sabilidades, tanto del estado tuvo efectos severos en la con­ demandas ciudadanas de ser­ como de los poderes familia­ formación de la privacidad, así vicios públicos que alivian el res. Las instituciones públicas como en los mecanismos de trabajo doméstico. en general han invertido poco interiorización de la norma y El correlato rural de la en la modificación de las cos­ de la contención del impulso servidumbre se complejiza y tumbres y no han producido entre los miembros del ámbito se hace crónico en la cultura de un discurso extra doméstico doméstico. Además, favoreció la hacienda, donde se inserta que convoque y convenza a el acceso sexual masculino a la figura del padre/patrón. los miembros de los grupos las mujeres de distintos grupos Aquélla se ha configurado a familiares de distintas proce­ sociales. través de la tutela vasallática dencias sociales y culturales. La servidumbre doméstica definida por un tipo de respeto Paralelamente, esa forma de también se proyecta en el mun­ asentado en el sometimiento identificar a la familia y a do público; como presencia en incuestionable de los subordi­ su ubicación en la sociedad el escenario callejero recuerda nados a la voluntad de éste. En también ha fortalecido aquella la ostentación del prestigio, al esta tradición la benevolencia actitud que le ha entregado a mismo tiempo que remite a la se ha combinado con el trato los miembros poderosos del exclusión de las mujeres del despótico y los sentimientos grupo doméstico un dominio mundo público. Las mujeres amorosos han quedado exclui­ fuera de cuestión sobre sus que sirven en casa son la com­ dos. La persuasión y la actitud subordinados. pañía callejera de las otras para amorosa no son parte de este El discurso público laico se salvar la reputación del grupo paternalismo señorial y pre ha resistido a asumir el papel familiar al que pertenecen. moderno.2 Más bien se asocia regulador del comportamiento Cuando la ciudad permanece la obediencia, la protección y

nº42/02 Con-spirando ● 29 la tutela, trilogía que se apoya Esta combinación padre no es una figura que en la ausencia de un poder pú­ de jerarquía y culpa haya inter­cambiado elementos blico que regule las relaciones o signos de su poder con otro entre amos y siervos, y todas religiosa externa no depositario reconocido de las acepciones de esta verti­ propició una inte­ autoridad. calidad, relaciones jerárquicas riorización de la entre hombres y mujeres. El La palabra masculina, el prestigio del patriarca se ha norma con respecto poder privado y la iglesia sustentado en su capacidad de a la experimentación proteger, controlar y someter a de la sexualidad. La Las sociedades jerárqui­ su obediencia al mayor núme­ cas poseen una determinada ro de individuos dentro de las autoridad quedaba in­ distinción y repartición de fronteras reales y simbólicas defectiblemente fuera poderes para la división del de su casa. Así se construyó un de la persona, y esto trabajo en el control de la modelo de virilidad señorial sexualidad, equivalente o con un dominio con pocos también debió tener análoga al control de sus sub­ límites sobre los sometidos consecuencias en tér­ alternos. Más que una doble al poder doméstico. El pa­ minos de la estructura moral se trata de una ausencia triarca se erigió como el gran de control extradoméstico proveedor, siempre y cuando de las del comportamiento sexual recibiera la total fidelidad. El emociones. masculino, en contraste con patrón sostenía la estabilidad discursos altamente prescrip­ interna y hacía de conexión tivos sobre la conducta de con el mundo exterior, pero las mujeres. Mientras más sobre él no pesó ninguna ins­ jerarquía mayor prescripción, tancia externa que regulara su política, la cultura patrimonial y a mayor prescripción externa poder. De otro lado, la actitud y clientelista.3 menor incorporación de las pater­nalista ha mitigado los La gravitación del pa­ normas. Esto tiene implican­ rasgos más duros del sistema ternalismo, del clientelaje y cias en la experimentación de y debilitado la capacidad del de la moral de la servidumbre la sexualidad. La sexualidad individuo de verlo en términos mediatizó las relaciones de no transforma a la persona, políticos. El paternalismo afecto. Las figuras paternas no se incorpora como parte de inter­cambia protección y sus­ y maternas no estuvieron al un proceso civilizatorio y de tento por sumisión y trabajo no margen de esta combinación. individuación y diferenciación remunerado. El patriarcado es La autoridad paterna tuvo que interna. el poder personal dentro del construirse ajena a controles Las cortes civiles se han hogar y se desarrolla a través extradomésticos, lo que pue­ encargado secularmente de de la dependencia personal. de haber contribuido a una los aspectos patrimoniales de Es esta una de las coordenadas acentuación de los vínculos la conyugalidad (herencias, sustanciales sobre las que se autoritarios. Pero el autorita­ filiación, dotes, donaciones, han erigido los patrones de rismo tiene variedad de con­ testamentos). No obstante, autoridad por un lado, y de notaciones. En este caso sería pese al carácter secular de afecto por otro. Por eso pen­ un riesgo no tener presente que este tipo de regulaciones, las samos que reflexionar sobre se trata de una autoridad cuyo consideraciones a propósito la sexualidad exige incluir ejercicio no se orienta por una de la sexualidad jugaron un el problema de patriarcado/ ley escrita sancionada por una papel importante en los fallos pater­nalismo, y su contraparte institución público/estatal. El producidos por los jueces de

30 ● Con-spirando nº42/02 audiencias y cabildos. Llevar siendo una de las hipótesis fuera de la persona, y esto una vida honesta y recogida centrales de este texto. también debió tener conse­ ante los ojos de los demás La unión conyugal propia­ cuencias en términos de la ayudó en muchas ocasiones mente tal, su curso y las formas estructura de las emociones. a obtener una sentencia favo­ de apareamiento pasaban por Al quedar fuera, en la medida rable. También, claro está, se la iglesia, y desde Trento, muy en que las referencias para dio lo contrario. detalladamente, pasaban por elaborar esas experiencias se Los casos más flagrantes la iglesia y su doctrina. Esto ubicaban más bien fuera de las de transgresión sexual, como significaba que el discurso personas (grupo de parentes­ el adulterio por ejemplo, se sobre la sexualidad, sus formas co, código de honor, la gloria ventilaban en las cortes cri­ aceptadas (unas cuantas) y sus de dios, el fuego eterno del minales sólo en el caso que prohibiciones (una lista bas­ infierno) el impacto en el apa­ el marido ofendido hubiese tante más extensa) emanaban rato psíquico no tiene mayor decidido quedarse con la dote del púlpito y del catecismo; relevancia como experiencia de la esposa adúltera y no y el perdón de las transgre­ emocional del yo. Lo que se defender su honor terminando siones, de los confesionarios. desprende de aquí es que en con la vida de los amantes El estado y la iglesia, en las sociedades jerárquicas la ofensivos, acción amparada combinación con el código experiencia de la sexualidad por la ley de la época. Hay de honor, definido preferen­ se encuentra con dificulta­ dos explicaciones para que temente por los jefes de los des para incorporarse en la la fidelidad conyugal pasara clanes familiares, y del que interioridad, o más bien para por la justicia secular: monto eventualmente los jefes de complejizar el mundo interno, a ser traspasado de un cónyuge discretas y pequeñas familias para ampliarlo; esto también a otro, es decir, redefinición extraen modelos de conducta, significa que no contribuye a de un derecho patrimonial; han emitido una normatividad una proceso de diferenciación en segundo lugar, hasta que sobre la sexualidad femenina entre el yo y el afuera. el adulterio no pusiera en en particular. Creo que esta ha riesgo la indisolubilidad del sido bastante más explícita y sacramento matrimonial, no pública que en el caso de la pasaba a la corte eclesiástica, población masculina. Estas y se ventilaba solo como una regulaciones son producto de cuestión de honor, es decir, negociaciones no pocas veces Notas 1. Norbert Elias, El proceso de la civiliza­ como algo relativo al grupo ajenas al conflicto. ción. Transformaciones sociogené­ticas de parentesco, pero no al En las sociedades colonia­ y psicogenéticas. (México: Fondo de individuo como tal. La sexua­ les jerárquicas se combinaron Cultura Económica, 1987). 2. Peter Elmore, “La violencia del lidad y sus transgresiones en las prescripciones externas tiempo. El mestizaje y sus desconten­ términos sociales no apelaban en torno a la orientación del tos”, Márgenes XI, 16, 1998, Roland Anrup, El taita y el toro. En torno a la a una individualidad, a la in­ comportamiento sexual y los configuración patriarcal del régimen terioridad de la persona. Las enunciados propios de una hacendario cusqueño, (Estocolmo: tensiones estaban referidas al organización corporativa/ Instituto de Estudios Latinoamericanos, Universidad de Gotenburgo, 1994). grupo y las instituciones. Al estamen­tal. Esta combinación 3. Esta relación la he trabajado ser así, la experiencia sexual de jerarquía y culpa religiosa en “Sexualidad y cultura pública. Los poderes domésticos y el desarrollo de no configuraba al individuo, externa no propició una inte­ la ciudadanía”, Estudios culturales. discurría en lo externo, allí riorización de la norma con Discursos, poderes, pulsiones, S. López se significaba; entonces no respecto a la experimentación Maguiña, G. Portocarrero, R,. Silva .Santistevan, V. Vich, (Lima: Red para había una transformación del de la sexualidad. La autoridad el desarrollo de las Ciencias Sociales, aparato psíquico. Esta vendría quedaba indefectiblemente 2001).

nº42/02 Con-spirando ● 31 Madres e hijas i: Eliana y Verónica

Como parte de las historias de mujeres, entrevistamos a madres e hijas, sus expe­ riencias compartidas —tanto en la vida como en proyectos comunes. Presentamos aquí a Eliana y Verónica; Lucía y Teresa.

Eliana: Yo venía de los gente muy valiosa como Jua­ grupos de mujeres capacita­ nita Alvarado, por ejemplo. das para hacer arpilleras. Fui Y me gustaba entregar lo que parte de la Coordinación de aprendía —planificar, desa­ Mujeres que pertenecía a la rrollar talleres y llevar eso a la población. Entonces, cuando

testimonios entrevistas Iglesia Católica (la Vicaría testimonios entrevistas de la Solidaridad). Aprendí Susan (una misionera laica de mucho en esos años —con Maryknoll) llegó preguntando qué podríamos hacer dentro de la población, inmediatamente dije: algo para las mujeres, pero que tuviera un enfoque de género, que incluyera los derechos de las mujeres. ¿Y a quién más podemos invitar? Ahí salió la idea de invitar a mi hija, Verónica, que estaba saliendo de la Comunidad Cristiana (1990). Y fundamos Las Araucarias. Vero: Así pasó. Estaba trabajando en la parroquia con jóvenes pero quería empezar otra etapa de mi vida. Tenía 29 años y me gustó la idea de capacitar y capacitarme a mí

Cotidiano Mujer Nº35 misma al mismo tiempo. Mi Lourdes Castro mamá me dio la oportunidad

32 ● Con-spirando nº42/02 de crecer como mujer, invi­ pa­recen bastante cercanas en confianza. Es increíble lo tándome a ser parte de Las edad, pareces más socias, her­ que converso con mi mamá. Araucarias. No sé si hubiera manas. Supongo que habrán Ahora, como estoy pololean­ podido estar en otro grupo. tenido que trabajar mucho la do, reflexiono mucho con ella Siento que este grupo tiene relación entre Uds. sobre mis luchas internas. A la nuestro sello, nuestro sueño Eliana: En la etapa de la vez, estoy tratando de armar de un proyecto común, aunque adolescencia, nuestra relación un grupo de amigas más de no sepamos exactamente hacia fue difícil —hemos peleado mi edad. Por ejemplo, hay un donde vamos. mucho. Pero una vez que grupo de chicas que se reúnen Uds. llevan 10 años en estamos trabajando con el en la noche y aunque las es­ esta organización trabajando grupo, se me olvida que es mi cucho, necesito que ellas me juntas como madre e hija. Eso hija. Ella es más una amiga, escuchan a mí también. es algo interesante... una compañera, en la que se Eliana: Yo no voy a eso, Vero: La que lleva la última puede confiar. pero me siento un poco sola. palabra es mi mamá. Yo doy mi Vero: Es que compar­ Me cuesta tener un grupo de opinión y a veces me escucha y timos un mismo proyecto. amigas. Siempre he sido así, otras veces no. Y como yo soy Quizás eso viene de nuestra bien reservada. Pero siento la de reacciones lentas, muchas participación en la parroquia. necesidad de eso. Sobre todo veces me surgen más reflexio­ En un momento, tres de mi ahora que estoy pasando por nes una vez que estamos en la familia eran miembros del la menopausia, le cuento mis casa. Conversamos mucho, Consejo Pastoral y conver­ dolores a la Vero. Si no fuera mucho sobre la organización sábamos mucho sobre como por ella, no tendría con quien en casa. A veces, pienso que iba la parroquia, teníamos conversar estas cosas. no es tan bueno eso y que debo que hacer fuertes, Vero: Este ha sido un año de separar más las cosas de la casa resolver conflictos juntos, encuentros y desencuen­tros. y las cosas de Las Araucarias. etc. Entonces, siempre mi De dependencia e independen­ Eliana: Yo siempre valoro familia ha tenido un proyecto cia. Buscando nuestras propias lo que dice la Vero porque ella más grande que es más reflexiva y yo soy más la familia —un impulsiva. Siempre la consul­ proyecto común, to porque es muy importante hacia el mundo la opinión de ella. Pienso que de afuera. Eso nos ella es el cerebro del grupo, ayudó a formar y porque cuando tenemos que mantener el grupo hacer un proyecto, todas de mujeres. confiamos en ella. Además Uds. traba­ ella tiene más estudios que jan temas sobre el resto del grupo y yo estoy el cuerpo, la se­ consciente de eso. Nosotras xualidad, el abuso tenemos la experiencia y ella sexual. ¿es difícil el saber. trabajar juntas es­ Vero: Sí, yo soy más la que tos temas? piensa, idea, reflexiona y mi Vero: Con los madre es la que ejecute las mismos procesos cosas, pone orden. con las mujeres, Es difícil verlas, muchas hemos podido lle­ veces, como madre e hija — gar a una gran

nº42/02 Con-spirando ● 33 autonomías. Pero seguimos atrás y ven todas las cosas confianza. Me llena de alegría. conversando. que no han hecho de lo que Algo más sobre sus fuen­ ¿De qué se nutren Uds.? hubieran querido hacer o tes, su espiritualidad... ¿De las conversaciones? que hay muchas cosas que Eliana: Mi espiritualidad ¿Dónde recargan las pilas? faltan. Yo estaría contenta si es muy propia. La iglesia ya ¿Cuáles son sus fuentes de tuviera un espacio para hacer no me dice nada, está fría. inspiración? sanación. No necesito más. Contemplar la luna —me Vero: Yo hago muchas co­ Ni liderazgos grandes, ni fascina la luna llena— me da sas sola. Escribo poesía, algo dirigencias importantes. El una conexión clave. También que yo había dejado y después propio espacio privado es mi me encanta estar en mi jardín retomé. Tratando de escribir lugar. En cuanto a mi pololo, —¡mi jardín fluye más que lo que siento, mis emociones. él es parte de mi vida ahora yo! Siempre quiero ver si salió También el grupo me ayuda y estoy contenta. Pero antes algo nuevo. mucho. Es un espacio para de que él entrara en mi vida, Vero: Siempre he sentido mí, la vida de las mujeres me estaba contenta igual. Eso me la necesidad de vivir en comu­ nutre—escucharlas, abrazar­ enseña que puedo apegarme nidad. Mi grupo de chicas es las. A mí eso me fortalece, me y desprenderme de personas. clave para eso. Eso está rela­ hace muy bien. Yo creo que este año aprendí cionado con seguir mi encanto. Eliana: Yo estoy más sola, eso —el apego y el desapego. En la medida en que sigo mi porque la Vero está polo­leando Puedo amar y soltar y dejar encanto, voy levantando mi y ahora pasa poco por la casa. vivir. Yo me siento tranquila. espíritu. Las relaciones son Como mamá, me preocupa No quiero más. Quizás más muy importantes: el abrazo, lo que no salga herida de esta estabilidad económica. Pero que uno dice, los gestos —son relación. En este momento no quiero más de lo que tengo. regalos. ¡Y los sueños! Creo estoy tratando de alejarme Eliana: Me siento plena que vivo más en mis sueños un poco de Las Araucarias. cuando miro a otras y veo lo que en la realidad. Son una Estoy buscando otras ins­ que he hecho. Me doy cuenta fuente de inspiración y di­ tancias donde pueda estar que quisiera ser siempre una rección que no hemos sabido solar, como yo, como Eliana. mujer activa. Cuando no tengo apreciar. Sigo las intuiciones El año pasado estuve en este algo que hacer, me siento mal. que me dan. Me encantan proyecto de aprender como Necesito estar con otras perso­ los ritos que hacemos, me editar una revista y me quedé nas, tener un proyecto común encanta el espacio sagrado de contenta haciendo entrevistas, es importante para sentirme mi cuarto. escribiendo, etc. El grupo en bien. En este momento me este momento no me satisface siento algo estancada en eso completamente. Quiero estar porque no estoy haciendo mu­ con otras mujeres de mi edad chas cosas. Estoy tratando de donde pueda compartir mis fluir, como dijo la Vero, pero cosas. me cuesta. Me cuesta estar ¿Se sienten Uds. como tranquila sin hacer nada. Por mujeres plenas? lo general, necesito un plan Vero: Yo diría que sí. No sé para el año, no eso de “fluir” si tengo proyectos terminados con lo que llega. Me siento pero, sí, tengo proyectos más contenta cuando terminamos claros. Sé lo que quiero y lo bien un taller, una actividad. que no quiero. Al cumplir los Eso me llena. El contacto con 40 años, muchas miran para las personas me da mucha

34 ● Con-spirando nº42/02 Teresa: Esa historia de que limos los tres y ahí quedamos yo estaba embarazada de ella pegoteados hasta que ella tuvo e iba a tomas y todo eso, se ocho años. Toda la parte del la contaron los pobladores... exilio, cuando estuvimos en Lucía: Sin planificarlo yo Italia, cuando estuvimos en me enteré de mis orígenes... Panamá, después estuvimos Yo tenía 18 años, estaba en la en Nicaragua, éramos como Jota en Santiago y nos tocó ir una. Si yo no la tengo cerca, el año ’90 a distintas poblacio­ es como que me faltara algo... nes de Concepción y Coronel. orgánico. En Italia entré a la Yo fui a Lagunilla, justo donde actividad con las italianas, había yo había estado cuando chica, un grupo que trabajaba talleres cuando ella cayó detenida y de autoconciencia,­ te hablo del Revista Lola Press Nº15 Revista Lola Press mi padre estaba fondeado... año ’75, ’74, y ahí yo iba con él era brasileño y estaba ella siempre, la Lucía todo este exiliado de Brasil. Allí, de período estuvo pegada a mí, yo repente, estábamos haciendo la llevaba, yo tenía que salir una fiesta en la calle, con la con ella... gente del campamento y una Lucía: Yo tengo conciencia señora me quedó mirando y de todos los períodos, yo me me dijo: usted es hija de Te­ acuerdo cuando me llevaba acá resa Lastra. Yo le dije: sí, ¿por arriba, a las concentraciones qué?... ¡porque usted tiene el feministas en Italia, tengo poto igual a ella! recuerdos... Como dice ella, Teresa: A ella yo la saqué éramos una sola carne, un solo de Coronel al año, me puedes cuerpo... creer, y la gente la Teresa: Imagínate, yo tenía reconoce con 18 22 años, un exilio a los 22 años, años... con una hija... todas las peri­ pecias, todas las situaciones MMadresadres ee hijashijas ii:ii: 2 más lamentables que podría LucíaLucía yy TeresaTeresa Teresa: Desde haber vivido en el exilio, que me embaracé, las viví con ella: quedarnos a los tres meses, yo sin vivienda, no tener donde sabía que era mujer, dormir... En un momento, no­ yo soñé con ella y sotras nos vamos desde París a sabía que era mujer Roma porque yo estaba prác­ y el nombre que ticamente desfallecién­dome 1 iba a tener, porque cuando me separé del padre. el nombre Lucía Afortunadamente a través de Lucía: Ella era muy viene de la película cubana. los grupos de resistencia que activa durante mi embara­ La fuimos a ver con el padre se fueron creando en el exilio, zo, porque era dirigente de de ella y dijimos: si es niña le tuve el apoyo de la gente en toma... yo nací en paro de vamos a poner Lucía... Hasta Roma. Ahí pudimos estar en los hospitales... yo siempre los ocho años la Lucía era una casa, porque en París, a he tenido esa imagen de mi adosada a mí. Al año ocho mí me prestaban un colchón madre, muy aguerrida. meses salimos a Francia, sa­ y dormía en ese colchón con

nº42/02 Con-spirando ● 35 ella, y tenía que preparar la ella, la sentí muy cercana, mamadera, tenía que hervir muy cálida... después vino la todo esto en un anafre, porque rabia... Después de que nos estábamos en un departamento encontramos era la alegría de en el que no había nada, sólo el que yo volviera con ella, que colchón donde dormíamos las estuviera viva, y que pudiera dos, un anafre, donde yo hacía seguir esta historia de a poco... la mamadera, el almuerzo, la Lucía: Yo creo que trabajar comida y todo. Ahí estuvimos juntas hoy día es un acto de casi dos semanas y, entonces, amor... nos fuimos a Roma, y allá tuvimos casa, nos acogió un grupo de gente de lo que era la izquierda italiana. Llegamos a Roma y la gente la adoraba, la gente la quería mucho, nos querían a las dos, las dos caía­ Cuando una deja mos bien. No tengo recuerdos Cuando una deja de dolor, me acuerdo de cosas dede trabajartrabajar que me producen placer. Es que no eran dolorosas porque yo estaba con ella. Y a los 22 años la dimensión del dolor es otra también, como que Elisa de Paut es una Mujer entre los 80 y los 90 años. el mundo te pertenece... Ella Vive en el Barrio Bellavista de Santiago de Chile, casi frente me da una fuerza tremenda, al zoológico. Escritora de poesía, libros de cuentos, apa­ sentido de vida, de fuerza, de sionada por la ecología, Elisa es una mujer maravillada y todo... Ahí se creó este lazo agradecida de la vida. Su marido murió en un accidente muy fuerte, fuerte... Que a veces trágico y ella recuerda: “…cuando me di cuenta que él iba a la agobia. Yo tengo claro que morir, yo sentí unas ganas de vivir… un instinto; yo sentía a veces la agobia. A mí no que la vida que él iba perdiendo, se me iba traspasando a me importa, no me importa mí…». Comenzamos nuestra conversación hablando sobre agobiarla... Yo siempre le digo ciertos momentos claves en su vida, sobre cómo ha integrado a ella que yo la amo, yo no la estas transiciones, sobre sus aprendizajes... quiero, la amo.

3 Yo creo que un momento ambientes agradables, me ...pero hubo un tiempo en clave, bien importante para influye mucho el ambiente— que se separaron... la gente madura, es cuando fue arreglar el departamento, Teresa: Sí, cinco años una deja de trabajar, porque hacerle todos los cambios que estuvimos separadas... Fue le cambia la vida, queda con necesitaba y que yo podía doloroso, muy doloroso, más libertad, entonces una hacer. Lo segundo, me com­ tremendamente doloroso. Yo tiene que adaptarse a una nueva prometí mucho a trabajar en creo que para ella fue algo modalidad, a otros horarios y a Amac, organización de iglesia difícil, le costó mucho tiempo otras posibilidades. Lo prime­ a la cual pertenezco. asumirlo... aún así cuando yo ro que pensé en hacer —como Yo trabajaba en el Servicio vuelvo a reencontrarme con yo soy sola y me gustan los Agrícola Ganadero y aunque

36 ● Con-spirando nº42/02 no tenía título figuraba como tiempo al dolor porque tie­ de todo. Cada vez lo aprecio experta en comunicación. nes que sobreponerte. Yo he mejor. Eso me da optimismo, Ahí me vinculé mucho con el sido una persona muy activa, porque veo que las cosas siem­ campo ecológico y gracias a entonces cuando enviudé, lo pre han sucedido: han habido ese trabajo “aterricé” en este primero que hice fue escribir. calamidades, cosas negativas campo y me apasionó. He He tenido la inclinación a y la humanidad sigue adelante. escrito varias publicaciones de escribir desde siempre, pero Yo veo ahora que los/as ecología para niños/as —ten­ no me dediqué con mucho niños/as de hoy son tan vivos, go una por publicarse— refe­ empeño a hacerlo hasta que tan participativos/as, despier­ rente a los recursos naturales quedé más libre: la absorbe tos; nosotras éramos unas renovables: Las aventuras de a una el tiempo, las preo­ muñecas, unas , no una gotita de agua, La tierra cupaciones, una necesita su nos dejaban hablar. Eso es una mágica, El bosque es un co­ tranquilidad. De todo lo que he maduración de la conciencia razón verde... escrito, lo más sistemático ha que corresponde al proceso Mientras trabajaba en el sido la escritura de los libros de evolución en qué vivimos. SAG, me pasaron un libro de de cuentos. Espero que esta evolución nos Rafael Elizalde, un precur­ He aprendido que soy ca­ lleve a una mayor conciencia sor, una especie de profeta, paz de hacer muchas cosas. justiciera, porque la concien­ ese libro me dio un golpe a Mis actividades me gratifican cia no es sólo conocer y saber; la conciencia. Dije: estamos y estoy muy feliz —a pesar que está también la conciencia aquí viviendo como estú­ tengo problemas y carencias. moral de no perjudicar al pró­ pidos, destruyendo nuestro Toda la vida es un proceso, jimo, a tu hermano, hermana, planeta y nadie se preocupa. físico, psíquico. Una va descu­ en ningún sentido. Se habla mucho de ecología, briendo cosas que pero ¿quién la vive, quién la hacen vivir. He hace algo? A veces te brotan descubierto la be­ cosas que una cree totalmente lleza del mundo... dormidas o que no existen en cada vez más. Una una, por ejemplo, este descu­ es tan male­ducada, brimiento de la ecología. En­ que todos los días contré que había que meterse cuando salgo de la en eso de alguna manera. Y ducha, digo: ¡Ay como a mí me gusta escribir, agua, no conversé me dije: yo no soy científica, contigo, no te sen­ pero esto hay que decirlo, hay tí como debería que divulgarlo. ¿Y a quién? A haberte sentido!. los niños, porque los niños y Cada cosa es tan las niñas son los que pueden maravillosa, de­ cambiar. beríamos ser más Enviudé a los 29 años de concientes. Cuan­ casada. Afortunadamente do una es más ma­ estaba trabajando y fuera de dura, piensa más las cosas, la pérdida, tenía a mi mamá las mira mejor. Cada día me muy enferma, así es que tenía maravillo más de la creación, que seguir viviendo para ella. de todo lo que sucede, de la Cuando una está tan absorbida presencia de Dios a través de con tanto quehacer, no le das la historia, de la naturaleza,

nº42/02 Con-spirando ● 37 algo en todo esto que no me gusta. Hay algo de pequeño burgués... (y esa fue la clave para reconocernos).

1978 Fernanda nació y creció entre las guitarras, flautas y melodías de Santiago del CronologiaCronologia Nuevo Extremo: “En mi Josefina Hurtado Neira ciudad murió un día el sol de primavera a mi ventana me fueron a avisar...” Las letras y sonidos de 1972 las canciones recomponían No hubo más encuentros sueños, daban señales identifi­ Caminamos por las ca­ ni lecturas aplicadas de mar­ catorias, para saber quién era lientes calles de las poblacio­ xismo leninismo. Los libros cada quien... nes escondidas, insospechadas cayeron desde el cuarto piso al Santiago, quiero verte enamo­ para muchos de los que viven incinerador. Las clases de ruso rado en la pseudo aristocrática inconclusas e inservibles para y a tu habitante mostrarte sin ciudad de La Serena. Rebelde tan brusco cambio de rumbo. temor en mano, entramos en casas Los planes no eran ir al país en tus calles sentirás mi paso con piso de tierra, tiempo de representante del imperialis­ firme, intensa “concientización”.­ mo por excelencia, ni vivir con y sabré de quien respira a mi Mi cabeza en tu hombro, en tranquila familia luterana en lado... el último asiento de la micro: una granja al norte de Estados préstame tus manos, sumemos nos iremos a vivir a esa pobla­ Unidos. Menos que me gustara soledades ción. Decisión clara, cercana, tanto. Pero así fue. si viene algún amigo somos tres coherente, hasta la pregunta de rompamos las distancias de aquí mi padre, hecha así como a la 1976 hasta el mañana pasada: ¿así que tú no vas a ir De vuelta en Chile, nue­ así podremos cantarle al amor a la universidad? vos escenarios, nuevos (des) sólo quiero saber quienes miran conocidos.­ La universidad, hacia donde miro yo 1973 la gran ciudad. ¿Qué señales quienes son los que enredadas Mi mano enfundada en reconocer? ¿En quién confiar? las manos se acuerdan del guante de primera comunión Nos juntamos un día a cantor... dibuja plano destinado a ma­ estudiar para la prueba del A los desaparecidos se les pro­ nos clandestinas. La puerta lunes, dejamos los libros y no metía memoria... con llave, el tiempo quieto. sé cómo ni por qué las manos se Ausentes El delantal de colegio asegu­ comenzaron a untar de pinturas volverán en el futuro ra inocencia, las miradas se y tiñeron las otras caras y nos que comienza a ser presente y encuentran a la hora señala­ fuimos a la calle con bufandas contarán da: “es mejor que te metas a de papel higiénico, subimos su historia dentro de la historia... estudiar yoga, sirve en caso en micros, bailamos rondas, La vida fluía entre casa, de tortura” (y tu caíste el día invitamos a transeúntes. cafés, universidad, concier­ siguiente). Y después del éxtasis: hay tos, pañales, mamaderas y la

38 ● Con-spirando nº42/02 música del Santiago. a las niñas chicas”? fuerzas hay ahí, cómo operan las inercias, cómo nos trans­ 1981 1991 formamos. Sospecha ante Haremos un acto simbó­ La opción política había cualquier discurso armado lico: la mancha roja subirá arrasado con la religiosidad vi­ coherentemente, explicativo, las escaleras e inundará las vida en la infancia. Mi encanto de visiones holísticas globales. oficinas del rector... por la magia, religiones y espi­ Y hubo otros actos más ritualidades se había volcado 2002 que simbólicos y nos encon­ hacia fenómenos vividos por Encuentro estos textos y tramos varias veces en las otros. Me había transformado me propongo continuarlos calles céntricas, arrancando en una observadora sobreinvo­ para publicarlos ahora que del “guanaco”, después de lucrada, incorporando imáge­ ya hay más distancia de todo. alguna acción relámpago: “¿y nes, percibiendo la detención Y nuevas cercanías. Mis dos tú no estabas cuidando a la del tiempo, hundiéndome en la preciosos nietos. Javiera vi­ Fernanda?”, “¿y tú no dijiste certeza de momentos únicos. viendo lejos. El nido vacío. que ibas a estudiar?”. Involucrada­ pero ajena, vi­ Los dos gatos heredados. Dos Los grupos de estudio, viendo a través de las creencias viajes de ensueño: India y colectivos de reflexión, ta­ de otros. Gana. Uno casi luna de miel; lleres de sexualidad, género Quizás por eso mismo la el otro fantasía de libertad y... (todo lo imaginable). invitación de Elena pareció para encontrar la esclavitud. Primer seminario de mujer y interesante: hay un grupo de Recorriendo la fortaleza de antropología. Campaña soy mujeres que se está juntando a Elmina desde donde “expor­ mujer tengo derechos. Con­ celebrar sus propios ritos, ¿te taban” a mujeres y hombres. vención nacional de salud de interesa ir? Ojalá que no sea A orillas del mar: ¿cómo nos las mujeres. Celebraciones del una onda esotérica. Bueno, hemos podido hacer esto entre Día Internacional de la Mujer. total no pierdo nada con ir nosotros? Nos mirábamos Campañas por una educación una vez... Con-spirando se unas a otras al pasar. El viaje no sexista. Campañas en contra abrió así como una posibili­ de vuelta el más largo de todos, de la violencia doméstica... dad de explorar en un mundo vomitando pena y rabia. Viajes nacionales e internacio­ que incluyera espiritualidad, Hoy día, de vuelta de Villa nales. Mujer y.... Género y.... feminismo, compromiso so­ Grimaldi, ahora parque de la Trabajo remunerado e cial. Intento de conjugar las paz, después de escuchar la intereses y motivaciones per­ realidades en cifras, con la música y ver tanta gente re-ha­ sonales. Todo junto. Hasta el complejidad de “la realidad” bitando aquel lugar de tortura cansancio. irreductible a análisis ni texto y dolor, después de saludar alguno. la araucaria que recuerda a 1984 Rodrigo y de encontrarme con Javiera nació. No quiero 1996 su mamá, y con amigas que correr como loca todo el día. Anhelo de otra comunica­ no quieren olvidar, renuevo Quiero estar en la casa. Quiero ción, de otros lenguajes, de un sentimiento de saber qué ver como crece, repercutir con poesía, música, movimiento quiero... de saber qué y para sus sonidos, dejarme mara­ “desideologizado”. Obsesión qué... villar con sus exploraciones. por la memoria en el cuerpo Algunas amigas del barrio me y por la forma en que operan miran con lástima. ¿Para qué las resistencias a los cambios habrá estudiado tanto si iba a personales, a las expresiones terminar en la casa, “amarrada diferentes, a la libertad. Qué

nº42/02 Con-spirando ● 39 Mis recuerdos sobre Ma- maniña Fueron momentos difí­ ciles. Una, entre cientos de miles, dejaba mi país ator­ mentada por la tragedia de RReeccordandoordando aa septiembre del 73 en Chile y MMamaniñaamaniña traía una bella realidad que crecía en mi vientre. Henriette Hurtado Llegué a vivir en un país extraño. Ella fue una de las pocas personas, que sin pre­ El 30 de octubre de 1904 nació, en Loja, Agueda guntas ni condiciones, aceptó María Cristina Eguiguren Riofrío. La fecha que figura mi irrupción en su familia. A en una de sus cédulas de identidad y pasaporte es el 19 través de los años, entre vela­ de marzo de 1901. Esta corresponde a su hermana María das y recuerdos comenzaron Cristina, muerta al nacer. Mamaniña, Agueda Eguiguren a tejerse lazos. En tertulias con sus familiares y amigas, a de Carrión, narra sus recuerdos. La primera parte nos veces a solas con ella o rodeada lleva a una pequeña ciudad de provincia, donde transcu­ de sus nietos fui conociendo rre su niñez y adolescencia. Nos cuenta de la ciudad y a esta extraordinaria mujer su gente, sobre costumbres y anécdotas, sus impresiones de vida tranquila y hablar sobre pequeños detalles y sobre aquellos eventos que pausado. atrajeron su atención. El texto está ambientado a prin­ Mamaniña comentaba con agudeza los avatares de la vida cipios de siglo, desde sus primeros recuerdos hasta que política, los condimentaba deja la provincia para vivir en Quito. Su hogar fue un con anécdotas inéditas y pro­ lugar de encuentro y diálogo para familiares y amigos, nosticaba con mayor certeza entre los que se encontraban personalidades de la vida que reconocidos politólogos. cultural y política. Sus recuerdos son la expresión de una Hablaba de cultura como una mujer que valoró la vida familiar y las relaciones cerca­ experta y se refería a perso­ najes de la plástica o de la nas. Siempre acompañada por cigarrillos e interminables literatura como a personas tejidos, a parientes y amigos, nos dio la oportunidad de comunes y corrientes. Para compartir diálogos y sueños, comentar acontecimientos, ella, la poetisa Gabriela Mis­ escuchar sus recuerdos, recibir apoyo y cariño. En 1986 tral era su comadre; Osvaldo comencé a recopilar los recuerdos de su vida, sencilla y Guaya­samín: un amigo que llena de valores. Así nació un proyecto conjunto que se se distanció. Presidentes, es­ critores, amigos y aprendices concretó en la grabación y, luego, en la edición de los pasaron por su casa. Recuerdos de Mamaniña. Quien lo lea recordará histo­ Pero no fue su cultura artís­ rias y anécdotas parecidas, contadas por mujeres que tica o literaria, ni su acierto en tuvieron la lucidez, tenacidad y ternura al transmitir una sus comentarios sobre la polí­ cultura, pocas veces valorada: la cultura de la vida coti­ tica ecuatoriana y latinoameri­ diana. cana, lo que llamó mi atención. Fueron sus recuerdos de una

40 ● Con-spirando nº42/02 desapercibida vida cotidiana en provincia lo que me mo­ tivó a recoger apuntes en un comienzo y juntas comenzar LLaa gentegente eraera muymuy devotadevota un proyecto para la edición de un libro. Esa mujer que se de­ La gente era muy devota, sumamente devota, claraba analfabeta, fue mi muy creyente. Yo creo que la ciudad entera era amiga y consejera, cómplice devota. Siempre estaban haciendo fiestas para y confidente. La quise como la Virgen, para la Santísima Trinidad, para San a la abuela que no tuve y la Antonio, para San Francisco, las Hijas de María... aprecio como a una maestra Todas las chicas éramos Hijas de María. Todas en los difíciles caminos que teníamos que cumplir con ir a misa, llevar la nos pone la vida. Este libro fue cinta colgada y el escapulario. Eramos muy, muy mi reconocimiento y cariño devotas. Pero en el fondo no éramos fanáticas, a Mamaniña y la más bella no. ¡No! Los lojanos nunca han sido fanáticos. despedida a una familia a la Nadie lloraba por pecados ajenos, ni por crímenes que pertenecí. La desunión y ajenos, cada uno cargaba con sus pecados, pero el olvido es otro signo de los martirizarse: ¡No! tiempos. Creo que era la falta de distracciones. Enton­ Algún día, quisiera volver a ces, era una muy sana diversión ir a rezar. A las recoger historias y escribirlas seis de la tarde se llenaban las iglesias, no sólo (para recuperar experiencias en días especiales, sino todos los días. La gente de un pasado deseando un que no tenía otra cosa que hacer, que no tenía futuro mejor); buscar en mis una obra que terminar, se iba a rezar el rosario. Tenía una tía, primera hermana de mi padre, propias fantasías y deletrear que se iba a la iglesia, se aflojaba las polleras, se cuentos. En fin, por mientras, sentaba y decía: “Señor Jesucristo, no te vengo intento superar el afán de cada a rezar, no te vengo a molestar, no te vengo a día, hacer frente al maltrato pedir. Lo único que te vengo a decir es que me laboral e intento asirme a va­ des un puestito para rascarme las pulgas y olvi­ lores y principios para superar darme de mi casa, porque mucho me molestan”. un medio adverso. Se sentaba y se quedaba dormida. Solo iba a descansar. ¡Fíjense! Era hermana de un obispo, sumamente creyente y muy católica. Ella sabía que en la iglesia podía descansar, que nadie la iba a molestar. Seguramente, esperaba que de su casa no lleguen a preguntarle si se planchaba o si se lavaba la ropa. Así que la gente, en verdad, tenía un gran apoyo en la iglesia para vivir, para soñar, para descansar y para conseguir cosas que creían que no las podían conseguir en otra forma.

Fuente: Henriette Hurtado Neira. Recuerdos de Mamaniña. Quito: Casa de la Cultura Ecuatoriana “Benjamín Carrión”, 1998. Pp. 32-34.

nº42/02 Con-spirando ● 41 “Ciranda, cirandinha, culpa, el sacrificio, el infierno. Vamos todos a cirandar. Qué nostalgia del Papá en el Vamos a dar la media vuelta, Cielo que se quedaba en el Pa­ Vuelta y media vamos a dar”. raíso. Pero, ahora, sus puertas estaban cerradas. Esas fueron las rondas Pero también fue en el de cirandas, acompañando los mundo donde perfeccioné la ciclos de la luna que pasé en resistencia. La historia del mi infancia. Las muñecas no asesinato de María Goreth me lograron cautivarme: eran duras enseñó más sobre la violencia y frías. Correr por los campos en sexual que sobre el valor de la días de viento, rodar en la gra­ virginidad. Una relación sexual ma, trepar árboles y nadar en el saludable era más atractiva que riachuelo, eran actividades más guardar la virginidad como dote placenteras. Pero nada mejor de casamiento o para comprar que mi relación con los libros. una entrada al cielo. Barba Azul Entrar en este mundo mágico, fue mi mejor maestro en asuntos conocer otras costumbres, otras de casamientos. Nunca me sentí hablas, otras creencias, otras atraída por el dinero y la violen­ vidas, permitió que mi ángel cia del hombre. La primera cosa de la guarda disfrutara de unas de la que me preocupé, más allá buenas horas de descanso. de mis estudios, fue de adquirir mi independencia financiera. “Toda niña Al pie de la máquina de que rechaza las muñecas coser, alrededor de una mesa es señal de que el amor desgranando maíz, al lado de ya llegó al corazón.”. una tabla de lavar ropa fue que conocí la diferencia entre ser De repente, mi cuerpo se una mujer correcta y ser una pe­ transformó en un universo lento, cadora, a través de las historias sereno, donde llega­ contadas por las mujeres. Si ser ron a vivir nuevos correcta significaba pasar por sonidos, nuevos sa­ todos estos sufrimientos, me di bores, nuevos olores. cuenta que jamás podría serlo. Mi mirada tomaba Y fue entre caricias y peca­ ahora otras direccio­ dos, lágrimas y risas, encuentros nes. El paraíso pare­ y nostalgias, prohibiciones y cía pequeño y mo­ desobediencias que viví mi ju­ nótono para mí. Me ventud. Sospecho que también expulsó a un mundo mi ángel de la guarda tiene algún lleno de novedades y parentesco con el lado de los complicaciones. “rebeldes”. Al contrario de Eva, encontré a Dios “Ven, con cuidado en el mundo. Y fue, cuando voy a morir, al encontrarlo, que padre cariñoso conocí al Diablo, el pecado, la me va a defender”.

42 ● Con-spirando nº42/02 Pensar sobre la muerte me salud y en la enfermedad, hasta de cómo me siento en esta fase traía dos sentimientos negativos: que la muerte... Y fue la muerte de la vida. Comienzo diciendo miedo y rabia. La visión del la que nos separó. Sola, sin hijos, que me siento muy bien. La Juicio Final revelaba cuán cruel llena de nostalgias, con 21 años mitad de la vida la viví dudan­ era Dios. Creaba a los humanos de edad. do si llegaría a los cincuenta. y a las humanas pecadores antes Después de algunos años, La otra mitad la quiero pasar de nacer, y después los juzgaba ya estaba nuevamente a los pies “haciendo penitencia” por este y entregaba al diablo, a morir. del altar jurando fidelidad hasta mal pensamiento. No sé nada Al mismo tiempo permitía que que... Y claro, el Padre no oía sobre el mañana, pero a partir todos los habitantes del cielo y las palabras dichas en silencio: de unos cinco años atrás, ésta de la tierra presenciaran la vida hasta que la infidelidad nos viene siendo la “mejor parte”. íntima de las personas. ¿Habría separe, hasta que la ausencia Hacer las paces con el cielo tantas salas en este juzgado? de amor nos separe, hasta que fue para mí dar otro sentido a la ¡Eran tantos los que morían al las peleas nos separen, hasta penitencia y a la salvación. Vivir mismo tiempo! ¿Cómo iba a que las mentiras nos separen... hoy en el cielo es soñar y luchar aguantar pasar la vida entera Esta vez no fue la muerte. Fue junto con mujeres alimentadas, quemándome en aquel fuego mi decisión. No me siento sola, amadas, respetadas en su huma­ sólo porque no lograba cumplir tengo dos hijos y dos hijas, sin nidad y en su espiritualidad, para con toda aquella lista de buenas nostalgias. la salvación de cuerpo y alma de acciones? Y cuando en la peque­ Casarme fue la solución que la Madre Tierra. ña iglesia, los días domingos, las encontré para vivir una relación Quiero dar a mi cuerpo el personas pedían a San José que amorosa. En aquella época yo derecho a envejecer en paz. las defendiera en el Juicio Final era profesora en un colegio de Cada fase de la vida tiene su be­ yo indagaba, sorprendida: ¿Pero, hermanas dominicanas. Tam­ lleza, sus placeres y sus dolores cómo? ¿Invocar a San José para bién mis padres eran católicos propios. No pienso desistir del que actúe como abogado? El, y mi madre participaba en los amor, de los placeres sexuales, siempre tan callado, ¿cómo osa­ trabajos de la iglesia. de una mesa llena, de una buena ría enfrentar las miradas de Dios Varios años permanecí eno­ bebida y de la fiesta. En este Padre, del Diablo, de los ángeles jada con las liturgias y las acti­ momento, uno de mis placeres y los santos, de las maestras, de vidades pastorales. La Teología es participar en el Movimiento los padres? de la Liberación me trajo de Feminista María Sin Vergüenza, El, tan puro, tan callado... vuelta. Pero fueron la Teología celebrando, haciendo Tai Chi, Yo, tan amante, tan pecadora, tan Feminista y la Teología Eco­ bebiendo un buen vaso de cai­ ligada a los placeres del cuerpo... fe­minista las que me hicieron pirinha para calentar el corazón Yo, tan bien con la vida y tan mal quedarme, aunque procurando y fortalecer los pies. Y si no con el cielo. ¿De qué lado estaría caminos bien diferentes. Volví a hay una Santa Inquisición que mi ángel de la guarda? hacer las paces con el cielo, pero me lleve a la hoguera, dedicaré el cielo, también, es diferente. una buena parte de mi vida a la “Te gusto, oh niña, causa de la mujer. tu también me gustas, oh niña. “Yo nací así. Gracias a la vida que me ha Voy a pedirle a tu padre, Yo crecí así. dado tanto; a mí y a mi ángel oh niña. Así mismo soy. de la guarda que también tiene Casarme contigo, oh niña”. Voy a ser siempre así”. los cabellos canosos.

Y ya estaba yo, a los pies Hoy, a los cincuenta años, del altar, jurando fidelidad en recibí una invitación de la re­ la alegría y en la tristeza, en la vista Con-spirando para hablar

nº42/02 Con-spirando ● 43 submarinaLa corriente “…mucha religión, ¡señor, joven! Yo aquí no pierdo ocasión de religión. Apro- vecho de todas. Bebo agua de todo el río… “Una sola para Una sola para mí es poca, quizás no me alcance. Rezo cristiano, católico; acepto las mi es poca, oraciones de mi compadre Quelemém, su doctrina, de Cardéque. Pero, cuando puedo, voy al Mindubim, donde un señor Matías es quizas no me creyente, metodista: uno se acusa pecador, lee la Biblia, ora, cantando himnos bellos alcance”: de ellos. Todo me tranquiliza, me sostiene. Cualquier sombrita me refresca. Pero es experiencias todo solamente provi­ sorio…­ Mire: hay una negra, María Leôncia, lejos de aquí no vive, de tránsito sus oraciones tienen fama de mucha virtud de poder. Así que a ella le pago, todos los religioso meses, le encargo que rece por mí un tercio, todo el santo día y, los domingos, un rosario. Sandra Duarte de Souza* Vale, si vale…” J. Guimarães Rosa, Grandes Sertões, Veredas

Para tratar del fenómeno del ir y venir religioso creo interesante caracterizar los tipos de tránsito con los cuales estoy trabajando. Llamamos “corriente submarina” En primer lugar, podemos reconocer el trán- a una zona de límites imprecisos por sito ocasionado por el cambio de pertenencia la que circulan quehaceres, produc- religiosa, donde el sujeto religioso cambia ciones culturales, prácticas políticas, de confesión religiosa, adoptando dogmas y doctrinas de su nueva religión. Esa adopción cuyos circuitos no son los de la “co- no está inmune a las hibridaciones, a pesar de rriente principal” de la cultura. En ser supuestamente excluyente de otros sistemas esa ocasión presentamos un texto de simbólicos, de acuerdo con las orientaciones Sandra Duarte que forma parte de de la institución religiosa a la cual pertenece. una investigación sobre los nuevos A ese tipo de traspaso lo denomino “tránsito movimientos religiosos producidos de pertenencia”. Para ejemplificar este tipo de traspaso, me gustaría citar la experiencia de uno por la Modernidad, el vaivén reli- de mis entrevistados durante el desarrollo de un gioso y los procesos temporales de proyecto de investigación para la Universidad construcción simbólica observados Católica de Goiás. Hijo de madre soltera, Carlos en la sociedad contemporánea. inició su trayectoria religiosa en una casa de candomblé, en São Paulo, adonde acompañaba

44 ● Con-spirando nº41/0242/02 a su madre en “todas las celebraciones”. Con el Ese sujeto se entiende a sí mismo como un tiempo se fue “alejando”, desarrollando otros “buscador” incesante, constructor de su propio intereses, conociendo “una u otra iglesia”, pero sistema simbólico. El testimonio de Ludimi- nunca “encontrándome en ninguna de ellas”. la, una joven profesora de educación física, El hecho de mudarse de São Paulo a Goiânia también entrevistada por mí en Alto Paraíso, provocó “grandes cambios” en su “modo de ejemplifica ese transitar. Ludimila afirma no vida”, incluso en lo que se refiere a la religión. haber encajado nunca en ninguna religión. Carlos conoció a Lucía, católica, participante Hija de padres separados y “desviados” de la del Movimiento de Renovación Carismática, religión, ella misma se considera “sin religión”. bastante expresivo en esa ciudad. Carlos pasó Sin embargo participa en algunas reuniones de a frecuentar los encuentros de la RCC, siendo la Irradiação Espírita, va “de vez en cuando” bautizado y confirmado. Se casó por la iglesia a un templo budista cercano a su casa y visita católica y, actualmente, participa junto con su “frecuentemente” una comunidad alternativa esposa, de las reuniones de la Federação Espí- en Alto Paraíso, donde practica meditación rita, asistiendo, “de vez en cuando”, a algunos zen, participa en “danzas sagradas” y busca la encuentros de la RCC. “comunión con la naturaleza”. Un segundo tipo de tránsito sería aquel en En verdad, esta tipología que propongo es que, a pesar de admitir una pertenencia reli- simplemente para ayudar a “visualizar” el fenó- giosa específica, el sujeto de fe “visita” otras meno de este transitar religioso. Si quisiésemos expresiones religiosas. A ese tipo de vaivén lo podríamos sintetizar todo esto bajo el título de denomino “tránsito perteneciente”, toda vez que “tránsito de pertenencia provisoria”, toda vez el sujeto religioso admite la pertenencia a una que todos ellos son indicadores de provisorie- expresión religiosa específica, participando, dad o, si preferimos, de la transitoriedad de las inclusive, de sus actividades, sin embargo, va relaciones entre el sujeto religioso y un sistema y viene por varios otros círculos religiosos. Ese simbólico específico. tipo de tránsito puede ser ejemplificado en el Las personas entrevistadas justificaron su testimonio siguiente, recopilado en entrevis- vaivén de las más diversas formas, ya sea por tas que realicé a mujeres pertenecientes a un la búsqueda de “una nueva espiritualidad”, de grupo de “danzas circulares sagradas”, en Alto “una mayor profundización espiritual”, de “una Paraíso, lugar considerado el centro místico mayor proximidad con lo sagrado”, y de una del Brasil: “Soy hija de madre-de-santo, pero respuesta aún no alcanzada. El hecho es que cuando me casé lo hice en la iglesia católica. esas personas transitan, con mayor o menor Soy católica, me gusta la Iglesia, la homilía, velocidad, por campos religiosos similares los cánticos, pero le falta más naturaleza. En la u opuestos, construyendo y reconstruyendo casa de la madre-de-santo la gente siente más sistemas simbólicos a partir de un trabajo de la naturaleza que en la iglesia. Danzando las bricolaje continuo. Creo que el ser humano danzas sagradas yo me conecto con el universo religioso nunca fue tan creativo y tan sujeto y regreso a casa con más energía para vivir mi de invención de su sistema simbólico como día a día”. actualmente. Es evidente que todo esto es fruto Un tercer tipo posible de traspaso es el que de un contexto mucho más amplio, que abarca, yo llamo “tránsito sin pertenencia”, debido a inclusive, los medios de comunicación. Sin la no admisión de pertenencia a cualquier ex- duda la accesibilidad de la religión lograda vía presión religiosa por parte del sujeto religioso. mecanismos de distribución en masa, amplió ilimitadamente el campo hermenéutico de la significación religiosa. De cualquier manera, * Sandra Duarte de Souza, teologa feminista brasileña, es el ser humano religioso contemporáneo se pre- docente de la facultad de filosofia y ciencias de Religion de la Universidad Metodista de Sao Paulo. senta como un fantástico buscador religioso.

nº41/0242/02 Con-spirando ● 45 Una religiosidad caleidoscópica verdadera “metanoia”, implicando un cambio radical de vida, marcando para siempre la bio- En la sociedad contemporánea, las institu- grafía del convencido y demandando fidelidad ciones tradicionales productoras de sentido se del mismo, hoy, quizás ni podamos hablar de han topado con la precariedad del compromiso cambio de religión o de vida, y la imagen del de las personas con su sistema de creencias. “fiel” debe ser repensada. Nos parece más ade- Mientras las instituciones religiosas exigen cuada la noción de “tránsito”, pues, mientras la exclusividad de seguimiento, demandando un noción de “conversión” implicaba la negación compromiso permanente del “fiel” para con un de la religión y vida pretérita del converso y el sistema simbólico particular, el sujeto de fe ha establecimiento de un compromiso rígido con la hecho sus propias combinaciones simbólicas, religión elegida, la idea de “tránsito religioso” yendo entre diversas expresiones religiosas y admite el “pasearse” por diversas religiones (in- apropiándose de significantes específicos de cluso, en algunos casos, teniendo predilección acuerdo con la especificidad de sus necesidades. por una u otra), no requiere cambios internos en De ahí ese fenómeno denominado “situación de la forma de vida de los “transeúntes” ni cancela mercado religioso”, donde la oferta de bienes o atenúa el compromiso anterior. No es que simbólicos y las demandas simbólicas provo- esto no sucediera anteriormente, pero estamos can una movilidad religiosa incesante. En esta hablando de una intensificación de este hecho. coyuntura religiosa, la religión heredada o de Además, incluso para aquéllos y aquéllas que conversión comparte el lugar simbólico con la afirman una pertenencia y participan en otras experiencia religiosa polisémica, experiencia expresiones religiosas, verificamos que para la pautada en combinaciones efímeras, variables mayoría de los entrevistados esa participación es de acuerdo con el “momento” del sujeto de fe, complementaria, combinando tranquilamente, esto es, de acuerdo con sus demandas (variables sin ningún sentimiento de culpa, elementos de de tiempo en tiempo), produciendo un cierto sus tradiciones religiosas. tipo de “religiosidad caleidoscópica”. Quizás podríamos hablar de una dispersión de la reli- Cultura del tránsito, modernidad, New Age gión, una vez que la búsqueda contemporánea de significados no se limita ya más al plano La actual renovación de los intereses es- institucional ni a un sistema simbólico monolí- pirituales apunta a una recomposición de las tico, yuxtaponiendo, impune e incesantemente, relaciones entre la religión y la modernidad, no los más diversos recursos simbólicos. en la dirección de una negación de la teoría de la En la tentativa de trazar la biografía reli- secularización, que postula el desencantamiento giosa de mis entrevistados/as, observé que un progresivo del mundo, sino en la dirección de número significativo de ellos vivenció o estaba una complejización de la misma, intensificando vivenciando una situación de tránsito religioso, la disolución de la ya efímera línea divisoria no considerando, sin embargo, buena parte de entre lo profano y lo sagrado. La llamada “crisis ellos/as, incompatible la asistencia paralela a de las instituciones tradicionales, generadoras varias expresiones religiosas. Sus historias eran de sentido”, atestigua que la religión entendida de lo más diversas, pero todos buscaban formas como fuerza organizadora de la sociedad ha alternativas de representación simbólica. No perdido ese lugar. La proliferación de los más necesariamente formas estáticas. Cada uno/a variados movimientos religiosos y el tránsito de ellos/as hacía su propia selección, creaba religioso son indicadores de que los “modelos sus propias representaciones, producía sus oficiales de religión” han sido sustituidos por propias combinaciones, construía su propio (o coexisten con, o son parte de) referentes reli- sistema simbólico. giosos cambiantes, concurrentes, respondiendo Si antes el cambio de religión significaba una a la demanda de los sujetos de fe. El fenómeno

46 ● Con-spirando nº41/0242/02 del tránsito religioso se interés religioso por presenta pues, como el temas ecoló­gicos. Los efecto típico de esta plu- “nuevos movimientos ralidad de modelos re- religiosos seculares” ligiosos, constituyendo han demostrado una una forma particular de predilección por la responder a esta plurali- agenda ecológica, in- dad. Sugiere una espiri- fluenciando, inclusive, tualidad desen­carnada, a algunos importantes esto es: “sin territorio teólogos cristianos. En cultural o religioso rígidamente demarcado”, sin América Latina, especialmente a partir de la la necesidad de tener como punto de referencia década del 90, una infinidad de escritos acerca un hecho fundante, permitiendo la interacción de la relación religión/ecología han circulado de los más variados credos, y relativizando el en los más diferentes grupos. Surgiendo tími- dominio espiritual. La disolución de las fronteras damente, pero ganando rápida expresión, los religiosas, la religión “sin lugar”, las formas movimientos de espiritualidad ecológica han religiosas híbridas, son producto de este mundo atraído a un sinnúmero de sujetos individuales contemporáneo secularizado, y no su negación. que “pasean” por sus “cultos” y/o ideas. En esta “cultura del tránsito”, las formas Para los participantes de grupos de dan- religiosas híbridas toman configuraciones aún zas sagradas, de rituales de espiritualidad más fuertes si consideramos las influencias New ecológica, de rituales de rememoración de Age sobre la conformación religiosa actual. divinidades de la naturaleza, etc., no existe Los movimientos de espiritualidad ecológica ninguna contradicción entre estas prácticas han convocado a personas de diversos orígenes rituales y la tradición religiosa a la cual afir- religiosos, afirmando estar buscando “mayor man pertenecer. Participan de esos rituales y proximidad con la naturaleza”, atribuyéndole “retornan” a aquella tradición religiosa que un intenso contenido simbólico, desarrollando eligieron como de su preferencia. De esa rituales de evocación de los cuatro elementos forma, pueden transitar impunemente en los (tierra, agua, fuego y aire), meditando, can- más variados espacios, que comprenden desde tando y participando de experiencias extáticas rituales de rememoración de las Diosas y el posibilitadas por la música, por la danza y, en culto a la Tierra, hasta el desarrollo de técni- algunos casos, por la ingesta de hierbas aluci- cas de meditación zen y medicina alternativa. nógenas, asimilando o desarrollando técnicas Posiblemente mañana, estas personas podrán de “dilatación de la conciencia”, dedicándose constituir nuevas síntesis, duraderas hasta el al autodesarrollo, y sacralizando la naturaleza, momento en que otra se haga necesaria. En a través del discurso acerca de la conciencia este actual movimiento religioso, se combi- ecológica. Esos discursos y prácticas, han traído nan y reinventan tradiciones, se establecen la perspectiva ecológica al campo religioso. síntesis provisorias, se crea una cosmovisión La emergencia de lo que convencionalmente acuosa, adaptable a las demandas temporales se llamó “Nueva Era”, intensificó la prolife- de quienes las aprecian. Una cosmovisión que, ración de los movimientos de espiritualidad haciendo uso de las palabras del famoso poeta ecológica en el Brasil, intensificando también el y compositor brasileño, Vinicius de Moraes, “tránsito religioso a dos manos”, esto es, la no es tan “infinita cuanto dure”. necesidad del abandono o cambio de una tradi- ción religiosa por otra, aquello que, al inicio de este trabajo denominé como “tránsito pertene- ciente”. Actualmente es perceptible el creciente

nº41/0242/02 Con-spirando ● 47 antandoantando unun lamentolamento ccfúnebrefúnebre porpor elel planetaplaneta Ruthmary Powers, HM*

Muy en el principio del Antiguo Testa- fúnebre por ellos/as, nuestro silencioso pla- mento, encontramos el relato de Caín y Abel. neta incluido. Cada mito antiguo parece contener su propia Para hacer esto tenemos que sentirnos capa- versión de una toma de poder patriarcal que ces de expresarnos sin miedo a la vergüenza pone a un hermano contra el otro y deja a las o a la inhibición. Entonces, cada una de las madres llorando la pérdida y preguntándose participantes debe sentarse en una posición ¿por qué? cómoda y cubrir su cabeza con un velo grande. Antes de comenzar nuestro rito para ex- Durante algunos minutos, escuchamos mú- presar nuestro dolor sobre las matanzas y sica suave. Después de algunos minutos, la violencia sin sentido, llamamos a los espíritus mujer que está guiando el proceso comienza de nuestras ancestras que han llorado con las a leer una lista de penas o tristezas (antes de mismas lágrimas que nosotras. comenzar el rito, cada grupo puede hacer su En este ritual, intentaremos dar voz a lista de tristezas). Después de escucharlas, una nuestro dolor y llorar por las pérdidas que por una, cada mujer responde con su propio hemos experimentado en un nivel personal gemido o lamento. Si alguien del grupo quiere, y también en un nivel global. Sabemos que puede nombrar una pena que desee compartir. nuestro planeta y su gente están viviendo un Una sesión de “canto-lamento fúnebre” puede momento muy crítico: las guerras, hambru- durar el tiempo necesario según las necesi- nas, genocidio, enfermedades y desastres dades del grupo y según la intensidad de la ecológicos son el pan de cada día. Ha llegado angustia. Por lo general, toma por lo menos la hora de reconocer esta destrucción que 30 a 40 minutos y, muchas veces, puede durar parece sin fin y llorar por ella. más de una hora. Un canto fúnebre (keening) es un lamen- Cuando el grupo se queda en silencio, la guía to,un sollozo, un sonido lleno de dolor que advierte: “No podemos dejar ni al planeta ni emitimos cuando sentimos una gran aflicción a nosotras mismas desequilibradas. Tenemos o angustia. Puede ser casi un murmullo o un que reconocer que desde nuestro dolor puede grito fuerte, pero, en cualquier caso, toma el venir nueva vida, pero tenemos que nutrirla y dolor de nuestros corazones y lo convierte en convocarla. Entonces, así como hemos llorado un sonido sin palabras. Cantamos un lamento y ‘cantado’ nuestras pérdidas, dancemos ahora fúnebre por nosotras mismas, por cada una desde nuestro dolor hacia nuevas posibilida- de nosotras, por todos/as aquellos/as que no des”. La guía invita el grupo a convertir sus tienen alguien que pueda cantar un lamento velos de lloronas en velos de danzantes y empezar a moverse con la música (una música * La hermana Ruthmary Powers, presidenta de la Con- suave). Los movimientos nos ayudan a sacar gregación religiosa de la Humildad de María, hizo este el dolor de nuestros cuerpos y a empezar el rito —que viene de la tradición céltica de Irlanda— con proceso de sanación del planeta. Hacemos esto un grupo de mujeres que quisieron juntas llorar a los y las que murieron en los atentados ocurridos en Estados muy conscientemente, dándonos cuenta de Unidos el 11 de septiembre del 2001. que hay un gran equilibrio en danzar el dolor y encarnar la intención de ser sanadoras para

48 ● Con-spirando nº42/02 el planeta y cada una de nosotras. varias veces a Irlanda. Empecé a explorar la mente nativa de mis ancestros y cómo ésta Un canto-lamento fúnebre colectivo estaba moldeada por la geografía de la isla. En los relatos cosmológicos más antiguos, la Durante un retiro de mujeres en Santiago isla misma fue concebida como el cuerpo de de Chile, el pasado enero, algunas de noso- la diosa del sol que mantenía la relación de tras decidimos juntarnos para hacer un rito la tierra y el sol como la más primordial de de “canto-lamento fúnebre”. Fue un espacio todas las relaciones del universo. Esta fue la maravilloso para dar voz al dolor —una voz forma básica de la imaginación de los primeros sin palabras— desde lo más profundo de irlandeses. Sin embargo, la última vez que nuestros seres. Lo que más recuerdo de ese visité Irlanda, vi la escalada dramática de la día fue el poder de aquella voz. visión industrial y tecnológica del mundo y Mientras nos reuníamos, conversamos un pude sentir en mis huesos su seducción y cuán poco sobre por qué queríamos hacer este rito. rápidamente ha cambiado miles y miles de Todas nos sentíamos muy conscientes de un años de una cultura increíblemente coherente. profundo dolor que necesitaba una voz. Por Y me di cuenta de una pena y de un senti- mi parte, estaba muy consciente de que había miento de no poder hacer nada para detener estado muy cerca de llorar cuando me reí a esta caída libre en una economía monetaria. carcajadas después de una sesión con nuestra Durante mi última noche en Irlanda, fui guía del retiro. Cuando toqué lo profundo de invitada a quedarme en una pequeña casita de mi risa, me di cuenta que era realmente dolor campo en las montañas de Galway. Mientras lo que estaba buscando expresarse. Esto no es caminaba por los senderos montañosos y veía nuevo para mí: siempre estoy consciente de como las otras casitas habían sido convertidas una tristeza profunda dentro de mí que puedo en casas de vacaciones para los nuevos ricos tocar en cualquier momento. y las granjas habían sido abandonadas, sentí Seguimos conversando un rato más sobre una tristeza tan profunda que apenas pude en qué consistía este dolor para cada mujer seguir caminando. Estaba llorando. A la vez, presente. Después nos tomamos de la mano me di cuenta de que me estaba abriendo a ese y encontramos el coraje para simplemente dolor y emitiendo un sonido que ahora puedo permitir que este dolor tuviera una voz. Yo me identificar como un “canto-lamento fúnebre”. sentí protegida porque estábamos lejos de don- Es lo que las mujeres harían cuando muere un de alguien pudiera vernos. No me importaba miembro de la familia o la comunidad. Las demasiado que alguien pudiera escucharnos, mujeres se juntarían y cantarían un lamento aunque no pensé nuestro lamento iba a ser fúnebre y éste sonaría como un profundo tan poderoso. Fue como una voz alzándose gemido que contendría el dolor y la pena de desde lo más profundo de mí. Experimenté un toda la tribu. Y, entonces, me di cuenta que despeje y una tremenda libertad en el acto de es en este nivel que la sabiduría de la diosa, cantar un lamento fúnebre. Lo sentí tan real. la sabiduría feminista y la sabiduría de los No creo que “cantar un lamento fúnebre” sea pueblos originarios debe aparecer. La energía para todas, pero el grupo le da a la experiencia debe aparecer desde el dolor profundo de fuerza y autenticidad. decir: “No. ¡No podemos hacer esto!”. Toni Ryan, Irlanda. Después de esta experiencia, sé, en lo pro- fundo de mi corazón, que la sabiduría que Una experiencia individual tenemos que hacer aparecer tiene que ser lo suficientemente profunda como para tocar Mis propios ancestros vienen de Irlanda, estos niveles de nuestra energía psíquica donde Escocia e Inglaterra y he sentido la necesidad las voces de los que no tienen voz pueden de entender la geografía desde la cual han vivir en nosotros. emergidos. Durante la década pasada, fui Miriam Therese McGillis, E.E.U.U.

nº42/02 Con-spirando ● 49 recursos

En el principio era el sueño: nos caracterizamos por tres clases el cosmos y el corazón hu- de tendencias, que son, así mis- mano mo, capacidades y necesidades. Ellas son las de conservación, David Molineaux. Santiago: acrecentamiento y sentido. Sello Azul, 2002. 173pp. Mantener lo propio, defenderse de perder la integridad, lo que se En un juego complejo de posi- posee, los proyectos; innovar, te- bilidades y limitaciones, los seres ner vivencias, ampliarse, cumplir humanos debemos encarar nues- metas; tener un para qué, un norte, tros proyectos de vida y nuestra un marco referencial. visión de la evolución dentro de Hoy el tema del sentido ha una cultura dominante orientada pasado a constituir el problema a un hacer de cortos alcances, sin de la humanidad en su conjunto. marco referencial sobre quiénes Vivimos de distintas maneras somos, cómo conocemos, cuáles la tensión entre la necesidad son nuestras alternativas de futu- de conservación y la de acre- ro. ¿Cómo podemos participar centamiento en las luchas por más allá de la pálida democracia la defensa del medio ambiente, del voto y la representatividad? en el enfrentamiento entre la El libro de David Molineaux, globalización homogeneizadora articulando el cosmos y el cora- y las identidades culturales; en zón humano, desde la considera- los esfuerzos para preservar la ción de que el universo lleva la paz y la justicia y la pugna por el impronta de una creación y de acrecentamiento del poder. una impresionante creatividad Ante un mundo en que impera permanente que debiéramos la racionalidad instrumental, el asumir, señala toda una vía de dinero, la égida de occidente, coherencia y de visión iluminado- el individualismo, la trivialidad ra, generosa, esperanzadora, para y una antinomia integrista que encarar lo que es claramente una amenaza frutos muy queridos del crisis epocal confundida con una desarrollo humano, emergen di- verdadera crisis del planeta Tierra. versas respuestas como líneas de Haciendo una gran síntesis, conocimiento, de acción cultural, podríamos decir que los humanos de búsqueda espiritual. Hay búsquedas de conserva-

50 ● Con-spirando nº42/02 ción y de expresión de jóvenes y siguiente reflexión poética: ño auniversó en átomos, vías mujeres, de ecologistas y defen- lácteas, en células y arboledas, sores de los derechos humanos. Es la Nada con una tibieza en gritos de guerra y en manos Desde la espiritualidad y desde maternal. juntas en crepúsculos videntes, la ciencia han emergido líneas Sonríen raicillas de sueños. en secretos maravillosos y en de referencia que muestran un Van eligiendo, dialogando, sinfonías transcritas para otras posible desarrollo de visiones lozanos, sus colores. realidades. orientadoras comunes, con res- Las flores preparan con tiempo Sueño recogido en doscientos peto a la diversidad. su salida a escena. mil millones de galaxias, en El libro de David Molineaux El alma de las galaxias insinúa quince mil millones de años, en muestra, desde la ciencia, en su un vagido tembloroso. incontables sinapsis y sinergías. camino en los últimos años, una Nada en una respiración donde Sueño tuyo. perspectiva de sentido impregna- se asoma, curioso, el tiempo a Invitación a despertar a la rea- da de espiritualidad. Los huma- punto de nacer. lidad de que eres el gran sueño y, nos somos parte de un cosmos, Allí arrebujado en futuro, a la vez, tu propio sueño una tierra, una vida, llena de alimentado de encanto, el ser Eres la extrañeza de no sentir intencionalidad que es difícil de humano espera. Va perdiendo el misterio. distinguir de la inteligencia. Ya no familiaridad con la nada. Eres el regalo de recibir ese podemos hablar de materia bruta. El sol aprende su lenguaje, amor matinal del primer fuego Prigogine dijo en un congreso en La tierra se hace cargo de su con sus hijos, de fraternidad Buenos Aires hace unos años: misión. absoluta, el tiempo, el espacio, “Estamos estupefactos ante la Las galaxias y las flores ayudan la energía, las leyes primeras, la complejidad del universo”. En a la nada, en un murmullo atónito, intención inteligente. este universo, nacido misteriosa sin trizaduras, a que el ser humano Eres el recuerdo de cuando y sabiamente, como provisto de germine en cada ser humano a lo auniversó un sueño y siguió na- un sueño, nosotros somos los largo del tiempo. vegando y está palpitando en ti. seres capaces de admirar, de Nada con rostro de haber Es el momento de cantarlo, de encantarnos, de cooperar. tenido antes otros universos, ponerle los colores personales, de David Molineaux ha hecho una siempre guardando el secreto de sembrarlo, de ayudarlo a sonreír contribución clara, educativa. Lo la paternidad. en los niños. que la ciencia y el cosmos nos Nada a sabiendas que el parto Despertemos a la verdad de que están diciendo es que hay una será un collar pleno de infinitos somos sueño, hijos de sueños, fuente de sentido en el universo y eternos sueños. mirando sueños. y que nosotros participamos de Sueño de muchos números Somos parte de la sinfonía de ella. David lo dice: en el princi- donde se eriza el infinito. sueños. pio era el sueño, un sueño que Vasta noche donde, ínfimas y Invitados a compartir nuestras debemos asumir, despertando de nobles, titilan futuras miradas a raicillas de sueños para que el sue- nuestra letárgica, para hacernos la noche. ño auniversado siga aterrizando, cargo de que somos testigos y Desde todos los universos, des- baile en el suspenso ante la ge- cooperadores de la evolución. de todos los seres, desde cosmos nerosidad de las flores, discurra Podemos ser militantes de la de nadas suspendían el sentido. en la humanización, mantenga el gran aventura, del misterio que se A Dios se le humedecieron los calor del descubrimiento de un tú. inicia con el fuego original y que ojos pensando en las primeras negamos en el sentido común de sonrisas de los niños. Luis Weinstein la época. Tenemos ante nosotros Era el parto de un sueño que un texto que contribuye a un debía verse a sí mismo miles de cambio en ese sentido común. millones de años después. Leer el libro de David Moli- La inteligencia se hacía fuego neaux, me llevó resumirlo con la intencionado, y, certero, el sue-

nº42/02 Con-spirando ● 51 Argentina Costa Rica Nicaragua Mabel Filippini Janet W. May Anabel Torres CEASOL Apartado 901 “Cantera” Terrada 2324 1000 San José Apdo. A-52 1416 Buenos Aires [email protected] Managua Tel : 54-1 503-3674 Tel: 505-2775329 Fax: 54-1 503-0631 Fax: 505-2780103 [email protected] Coca Trillini Hna. Elsie Monge Comisión Ecuménica de C.C. 269 Suc 20 (B) México 1420 Buenos Aires Derechos Humanos Argentina Casilla 1703-720 Mujeres para el Diálogo Telefax:54 11 4300 9808 Quito, Ecuador Apartado Postal 19-493 [email protected] Fono/fax: 58025 Col. Mixcóac [email protected] 03910 México, D. F. Grupo Ecuménico de Mujeres F.E.C. Europa Perú Pedernera 1291, Lene Sjørup San José 5519 Skattebollevej 22 Rosa Dominga Trapasso Mendoza DK-5953 Tranekaer Talitha Cumi Dinamarca Apartado 2211 [email protected] Lima 100 Australia Tel: 51-14-235852 Maggie Escartin Catherine Norris P.O. Box 165 Britain & Ireland School Hunters Hill, NSW, 2110 of Feminist Theology Fax: 612-9 879 7873 Rush Cottage Gladys Parentelli Wheldrake Lane Apartado Postal 51.560 Caracas 1050 A Crockey Hill York, YO19 4SH [email protected] Centro de Estudios y Inglaterra Trabajo de la Mujer Tel: 01904-624259 Calle Junín 246 * Los Contactos son aquellas Casilla 4947, Cochabamba organizaciones­ o personas a Tel: 591-42-22719 Estados Unidos las cuales puedes solicitar infor­ WATER mación aceca de la revista y/o de th nuestro Colectivo Con-spirando. Brasil 8035 13 Street Silver Spring, MD 20910 Ivone Gebara Fax: 301 589-3150 Rua Luis Jorge dos Santos, 278 [email protected] Tabatinga 54756-380 Camaragibe - PE CAPACITAR 23 East Beach Street, Suit 206 NETMAL Watsonville, CA 95076 Caixa Postal 5150 Fax: 408 722-77043 09731 Rudge Ramos [email protected] Sao Bernardo do Campo IMS SBC, SP Fax: 011 455-4899

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