Espeleotemas, 4, 1994, 31-42 sentada es la de Ossa-Morena, separa­ Grandes cavidades de la provincia de da de la zona Centroibérica -al NNE de la provincia- por el batolito de los Pedro­ Córdoba ches. Esta zona se caracteriza por la Large caves ofthe Córdoba province abundancia de afloramientos del Pre­ c ámbrlco y Cámbrico y por la frecuen­ *Gonz ález Ríos MJ.,** Lápez Chicano M.,*** Moreno RosaA. cia de las manifestaciones ígneas (JU­ L1VERT et aJ., 1980). Sierra Morena se * Sociedad Grupo de Espeleólogos Granadinos; Museo Andaluz de la Espeleología extiende ampliamente al norte de la ca­ ** Departamento de Geodinámica (Univ. Granada) e IAGM (CSIC-Univ. Granada); pital de la provincia, estando muy bien Grupo Alpino Espeleológico Lucentino delimitada hacia el sur por el río Guadal­ quivir. En esta región, los materiales *** Grupo de Exploraciones Subterráneas de Priego dominantes corresponden a aflora­ mientos del Precámbrico y Paleozoico Resumen 1987). afectados fundamentalmente po r la En 1841 de nuevo se realiza un des­ orogenia hercínica, así como escasos se describen en estetrabajo los rasgos geoIó• censo a la Sima de Cabra; en esta oca ­ afloramientos discordantes de materia­ gic:OS y las cavidac1e6 de la provinciade Córdo• ba conun desnivelsuperiQí" a los 100 m, o con sión un grupo de profesores del Cole­ les poco o nada deformados posterior­ un desarrollo superiora los 1000 m, gio de Humanidades de Cabra, con la mente por la orogenia alpina, de edad cabe destaCarpor su importancla histórica la intención de estudiar y desvelar la for­ Triásico , Mioceno superior y Plioceno­ Simade cabra, con referenciasescritasdesde el siglo X hasta nuestros días; con especial mación geológica de dicha cavidad, Cuaternario. Los materiales karstifica­ mención enobrasclásicas dela literaturacomo convirtiéndose en una de las primeras bies se reducen a pequeños aflora­ El Quijote de M.Cervantes; o bien el descenso efectuado en 1683 para rescatar el cadáver de expediciones científicas realizadas en el mientos aislados de calizas y dolomías D.PedroOdloa. territorio andaluz (GONZÁLEZ Ríos, cámbricas, devónicas y carboníferas M.J. 1988). (Paleozoico), de escaso espesor (me­ PaJabras Clave: catálogo espeIeoiógico, gran­ des cavidades, karst en yesos, historia de la Posteriormente, Manuel de Góngora nor de 50 m) y poco susceptibles a la Espeleología y Martínez (1868), narra sus impresio­ karstificación por las frecuentes interca­ nes sobre la Cueva de los Murciélagos laciones de materiales metapelíticos Abstract de Zuhe ros. (AVALAet al., 1986) . Sólo en el dom inio Con la creación a principio de los Zafra-Alanís, al norte y oeste de la ciu­ In lhis work we describedthe main geoIogIeaI años 60 de varios grupos de Espeleo­ dad de Córdoba, existen importantes karstteaturesandcavesover1000m ordeepest al 100 m fron 1heCordoba province logía en la provincia (Gulmont, G.E.C. afloramientos de calizas y dolomías From1hehistorlcpointofvlew 100famousSima en Córdoba; en Priego, en Cabra, etc.) cambncas, que pueden alcanzar espe­ de Cabra pit is ~. There are llOI11e wrIttenreferencesfrom1001011centuryabaout se da un empuje importante al conoci­ sores de varios cientos de metros. No lhiscave,specialln"E1Quijote"byM.eervantes miento del subsuelo cordobés, y como tenemos noticias de la existencia de ancI aIso the history of a rescue In 1863 lo no, al descubrimiento de nuevas cavi­ cavidades importantes en estas calizas, recover Pedro Ochoa body. dades clasificadas dentro de las dimen­ aunque, dada la posible gran antigüe­ KeyWords: speleoIogical catalogue,great ea­ siones de más de 1000 metros de desa­ dad de la karstificación (la mayor parte ves,carbonatekarst, gypsum karsI, speIeoIogi­ cal hislory. rrollo o 100 metros de profundidad . de los terrenos se encuentran emergi­ Así aparece, entre otras, la Cueva de dos desde hace más de 200 millones de las Palomas (CORTES, P.A. 1969), co­ años) constituyen áreas de cierta po­ nocida también con el nombre de Cue­ tencialidad que podrían desarrollar ca­ va del Yeso; la Sima del G.E.C. en Fuen­ vidades de gran belleza, con frecuentes INTRODUCCIÓN te Alhama con un desnivel estimado en concreciones, si se tomacomo ejemplo 210 m. (según datos realizados recien­ la Gruta de las Maravillas de Aracena La investigación espeleológica den­ temente por el GAE.L. de Lucena -155 (Huelva) y otras de este entorno, situa­ tro del campo de las grandes cavidades m.) das en un contexto geológico parecido. en la provincia de Córdoba, se remonta Sin duda alguna las nuevas genera­ Con el nombre de La Campiña se a los comienzos de la «Espeleología» ciones de espeleólogos aportarán no­ denomina comúnmente en Córdoba a en España. La especial morfología de la vedosos descubrimientos en el sub­ los relieves planos , suaves o alomados Sima de Cabra, atrajo por su curiosidad suelo de esta provincia. de la Depresión del Guadalquivir, al sur a numerosos visitantes, siendo conoci­ de Sierra Morena. Aunque el término es da desde siempre. En el año 1683 D. ASPECTOS GEOLÓGICOS DEL extensible a una gran parte de las zonas Fernando Muñoz Romero , se presenta KARST DE LA PROVINCIA DE con escaso relieve situadas hacia el sur voluntario para descender la gran verti­ CÓRDOBA de la provincia, hemos preferido limitar­ cal absoluta de 116 metros de esta ca­ lo a los materiales de relleno de la fosa vidad, con el propósito de comprobar Desde el punto de vista geográfico­ que no incluyen masas alóctonas de si en su interior se encontraba el cuerpo paisajístico, y también geológico, la rocas emplazadas por deslizamiento de D. Pedro Ochoa, al parecer arrojado provincia de Córdoba se puede subdi­ gravitacional (a modo de grandes olis­ a la sima. vidir, de norte a sur, en tres grandes tolitos) , procedentes del frente de ca­ Fernando Muñoz, es descendido al conjuntos: Sierra Morena, La Campiña balgamiento de las Cordilleras Béticas. interior mediante un torno de cuerda, y Cordilleras Béticas. Es decir, esta región está constituida localiza el cadáver, lo prepara para ser La parte de Sierra Morena corres­ por afloramientos de areniscas (a veces sacado al exterior y narra fielmente una pondiente a la provincia de Córdoba se calcáreas), margas y lutitas marinas de d~scripci6n de la cavidad (GONZÁLEZ . incluye en el Macizo Hespérico o Ibéri­ edad Mioceno, así como por materiales RIOS, M.J . y MORENO ROSA , A., co ; dentro de éste, la zona mejor repre- detríticos aluviales del Cuaternario, Iiga- espeleotemas 4, 1994 31 GRANDES CAVIDADES DE CÓRDOBA PRINCIPALES AFLORAMIENTOS KARSTIFICABLES DE LA PROVINCIA DE CORDOSA LEYENDA Calizas y do lomías cámbricas Trías de facies germánicas Calizas y dolomías jurásicas 8 Sierra de Cabra (0 Sierra de Gaena o 25 (0 Sierra de Rute-Horconera o Sierra de AIbayate Principales afloramientos karstificables de la provincia de Córdoba dos a la dinámica fluvia l del río Guadal­ cretácicos y paleógenos. La zona can las de los sectores de Puente Genil , quivirysus principales afluentes en este Subbética incluye diversas unidades Montilla, Cabra y Baena-Castro del Río, sector. Los materiales karstificables geológicas, con materiales de edad mientras que entre las segundas es no­ son, por lo tanto, muy poco significati­ comprendida entre el Triásico y el Mio­ table la que se extiende entre el embalse vos . ceno inferior, correspondientes a los de Malpasillo y Zamoranos. En cual­ El sur de la provincia de Córdoba subdominios de las Unidades Interme­ quiera de los casos, su estructura es está ocupado por materiales pertene­ dias, el Subbélico externo y el Subbéti­ bastante caótica, con escasa continui­ cientes a las Zonas Externas o Margen ca med io. La estructuración de éstas se dad de las formaciones, lo que conlleva Sudibérico de las Cordilleras Béticas, hace principalmente en mantos de co ­ una gran dificultad en su estudio. Desde los cuales , dependiendo de su menor o rrimiento y escamas, según una tectó­ el punto de vista litológico se recono­ mayor grado consolidación, configuran nica de despegue, en la que el Triásico cen dos de los tres tipos de facies que un paisaje suave (prolongación de La constituye el nivel a partir del cual se constituyen el Trías Germánico (PÉREZ Campiña) o un paisaje montañoso de produce la individualización y el despla­ LÓPEZ, 1991): el Muschelkalk, formado gran vigor (especialmente en el extremo zamiento de las mismas. Las principa­ por dolomías, calizas, margas y margo­ suroriental) . El límite norte de este sec­ les áreas karstficables coinciden con calizas; y el Keuper, constituido por una tor viene marcado por la desaparición los materiales triásicos, ya pertenezcan sucesión de arcillas, areniscas, niveles de grandes olistolitos de rocas triási­ a las Unidades del Guadalquivir o a la carbonatados y yesos (en profundidad cas, englobados en los materiales mio­ Zona Subbética y, sobre todo, con los también existen masas halíticas) . De cenos (ligeramente plegados) de relle­ materiales jurásicos de esta última. Si forma dispersa, también afloran peque­ no autóctono de la Depresión del Gua­ bien , en la región existen otros aflora­ ños enclaves de rocas subvolcánicas dalqu ivir. Se distinguen dos grandes mientos de interés puntual, como, por (otitas) . Desde el punto de vista de la dominios o con juntos de unidades geo­ ejemplo, las calcarenitas tortonienses karstificación, el mayor interés lo pre­ lógicas: las Unidades del Guadalquivir de Iznájar y los travertinos cuaterna rios sentan los materiales calizo-dolomíti• y la Zona Subbética. Las primeras año­ de Priego de Córdoba. cos del Muschelkalk, que a veces año­ ran en el borde meridional de la depre­ Los materiales triásicos del sur de ran en gran extensión (como en el Mo­ sión de igual nombre, en transición con Córdoba afloran, bien en grandes ma­ rrón Grande) , y, sobre todo, los niveles las segundas, y están constituidas por sas aisladas, o en bandas más o menos yesíferos del Keuper, asociados a los materiales olistostrómicos de edad continuas de dirección SO-NE que des­ cuales se observan auténticos poljes Mioceno medio y superior, con olistoli­ articulan los relieves carbonatados con sus ponors o sumideros de drenaje tos de materia les triásicos, jurásicos, subbéticos.