Reflexiones En Pocas Palabras. EL 23 DE ENERO DE 1958

Reflexiones En Pocas Palabras. EL 23 DE ENERO DE 1958

En pocas palabras… EL 23 DE ENERO Y EL OCASO DE LA DEMOCRACIA Cada vez que comienza el año viene a mi memoria aquella mañana del 23 de enero de 1958, cuando un grupo de estudiantes del Liceo Baralt de Maracaibo, cuyas edades oscilaban entre 12 y 17 años, expresamos nuestro júbilo frente a la emblemática casa de estudios, con motivo de la caída del régimen dictatorial del General Marcos Pérez Jiménez. Los vítores, alegría y el espíritu de libertad que el país comenzó a sentir en la madrugada de ese mismo día cuando el desventurado militar abandonó el gobierno, nos condujo hasta la cárcel de Maracaibo, ubicada en la antigua edificación que hoy ocupa la Casa del Gaitero en la Avenida Bella Vista, en procura del rescate de los presos políticos que aún pernoctaban en el viejo recinto. El dictador Pérez Jiménez había llegado al poder en noviembre de 1948 como parte de la conjura militar que derrocó al Presidente Rómulo Gallegos, erigiéndose cinco años más tarde como presidente constitucional tras ser legitimado por la cuestionada Asamblea Nacional Constituyente de aquel tiempo. La represión militar y las violaciones a los derechos humanos, presentes desde el comienzo mismo de su gestión, no pudieron ocultarse bajo las obras e inversiones de gran envergadura que engalanaron la capital y otros espacios de la República, las cuales no hicieron más que traducir lo que la ciencia económica califica de “crecimiento sin desarrollo”. Los partidos opositores Acción Democrática y Comunista de Venezuela, ilegalizados desde los primeros días del gobierno militar, operaban desde la clandestinidad bajo el oprobio y la persecución continuada por parte de la siniestra “Seguridad Nacional” encargada de garantizar un ambiente infernal donde la disidencia solo tenía tres destinos: el destierro, la cárcel o el cementerio. Uno de los más dolorosos galardones de aquella policía fue el asesinato del líder adeco Leonardo Ruiz Pineda. El descontento de la Iglesia Católica, los sectores económicos y los medios de comunicación, junto al descontento general de la población humillada y maltratada, propiciaron el quiebre del régimen cuando el dictador promovió, faltando pocos días para la conclusión de su mandato, un evento electoral plebiscitario para perpetuarse en el poder, siendo proclamado nuevamente como tal Presidente por el Consejo Supremo Electoral el 15 de Diciembre de 1957. Dicho proceso fue atacado de fraude por los partidos URD y COPEI, circunstancia que fue aprovechada por algunos oficiales de Caracas y Maracay, comandados por el Coronel Hugo Trejo sublevándose contra el régimen el 1° de Enero de 1958. A pesar de que la rebelión fue dominada en pocas horas sin embargo puso en movimiento a todos los partidos políticos y a la población mayoritaria mediante acciones de calle que alimentaron la huelga ejecutada por la prensa nacional el día 21 del mismo mes, así como también la convocatoria a una huelga general por la Junta Patriótica conformada clandestinamente por los partidos opositores. La situación se hizo insostenible cuando al día siguiente los altos jefes militares, particularmente de la Marina, pidieron la renuncia del Presidente, quien sin apoyo militar ni de la sociedad civil huyó junto a su familia y sus más cercanos colaboradores a la Republica Dominicana en la madrugada del 23 de Enero. La presidencia fue asumida entonces por el Vicealmirante Wolfgang Larrazábal, en nombre de la Junta Revolucionaria de Gobierno constituida al efecto. A sesenta y tres años de aquel acontecimiento, el 23 de Enero no ha perdido su vigencia histórica, ni la perderá jamás en razón de la trascendencia que el hecho tuvo para la consolidación de la democracia y, fundamentalmente, por el significado que tuvo la sustitución de la Republica Militar -imperante e irreductible desde los días aciagos de la independencia- por la naciente República Civil. En esto consiste, a nuestro modo de ver, la indiscutible trascendencia histórica y política del 23 de enero. Su virtualidad para abrir el país a la democracia y a la libertad sustentada en un acuerdo nacional, denominado “Pacto de Punto Fijo”, suscrito por los líderes Rómulo Betancourt, Jóvito Villalba y Rafael Caldera con el propósito de enrumbar al país hacia un destino distinto al despotismo prevaleciente, fundado dicho pacto en el respeto recíproco, la consolidación de los principios democráticos y la unión necesaria para la organización de la nación venezolana. Bajo los principios pactados, la gobernabilidad del país se mantuvo en Venezuela durante cuarenta años comprendidos entre 1958 y 1998. Para las nuevas generaciones no pueden quedar ocultos los acontecimientos y motivaciones que hoy justifican, como siempre, la ocurrencia del hecho histórico del 23 de Enero de 1958, hechos que el autor de estas líneas tuvo oportunidad de vivir en pleno desarrollo y documentarse de su trascendencia constitucional con ocasión de su ingreso a la Facultad de Derecho de la ilustre Universidad del Zulia en el año 1961, justo en el preciso momento que entrara en vigencia la Constitución Nacional de la República de Venezuela (1961) que sirvió de cauce al novedoso proceso, sobre todo por el privilegio que tuvo de escuchar de labios del insigne abogado zuliano Dr. Humberto La Roche Rincón, las clases magistrales de Derecho Constitucional que hacían de él uno de los más brillantes expositores de la materia hasta nuestros días. Por todo esto, hoy 23 de Enero de 2021 no podemos dejar de repetir lo que en anterior ocasión escribimos sobre el denominado “Pacto de Punto Fijo” que nació el otrora 23 de enero de 1958 con la: “…asunción a la presidencia de la Republica por Rómulo Betancourt, resultante de un proceso electoral libre que significó un cambio paradigmático en la política venezolana, dado que la toma del poder dejó de ser un acto proveniente de la violencia militar (golpe de Estado) para dar paso al sufragio universal, directo y secreto. La Republica Civil, cuyo primer ensayo había sido truncado por el perezjimenismo en 1948, irrumpió nuevamente en el firmamento político nacional aquel 23 de Enero de 1958 con la clara finalidad de restablecer la institucionalidad, rechazar el despotismo de la gente de uniforme, garantizar un régimen de libertades y conformar una estratificación social de carácter plural. La sucesión presidencial por obra del militarismo prevaleciente fue erradicada durante el periodo de 40 años (1958-1999) a partir del momento que los principales actores políticos, reunidos en la casa “Punto Fijo” de Rafael Caldera sentaron las bases de la gobernabilidad en un histórico pacto concertado por los partidos: Acción Democrática (AD), Copei y Unión Republicana Democrática (URD), en octubre de 1.958, cuya finalidad se concretaba a lo siguiente: Defensa de la Constitucionalidad sobre la base del respeto al resultado electoral; conformación de un gobierno de unidad nacional sobre la base de un gabinete ejecutivo integrado por los partidos firmantes, con excepción del Partido Comunista y de los partidos afectos al régimen militar depuesto; y establecimiento de un programa de gobierno común con objetivos mínimos para ser cumplidos. El denominado “Pacto de Punto Fijo” se mantuvo entre los citados partidos hasta 1962, fecha en la cual Unión Republicana Democrática (URD) se excluyó del mismo en desacuerdo con la política exterior de Rómulo Betancourt respecto a Cuba. Bajo los postulados del “Pacto de Punto Fijo” se sucedieron en el poder: Rómulo Betancourt (1959-1964) de AD; Raúl Leoni (1964-1969) de AD; Rafael Caldera (1969-1974) de Copei; Carlos Andrés Pérez (1974-1979) de AD; Luis Herrera Campins (1979-1984) de Copei; Jaime Lusinchi (1984-1989) de AD; Carlos Andrés Pérez (1989-1993) de AD; Ramón J. Velásquez (1993-1994) Independiente, Rafael Caldera (1994-1999) de Copei y Hugo Chávez Frías en su primera elección en 1999. Desde una visión historiográfica -no politiquera- el “Pacto de Punto Fijo” no fue sino el acta constitutiva de la República Civil cuyos postulados democráticos habían sido consagrados definitivamente en la Constitución de la República de Venezuela de 1961”. Si en estas líneas quisiéramos hacer historia debemos proclamar para conocimiento de los niños desde la escuela, que el 23 de Enero de 1958 constituye la más extraordinaria realización de la política venezolana luego de la declaración de independencia, por ser la fecha frontera que delimitó para siempre la diferencia entre lo que significa un “gobierno civil” y lo que representa un “gobierno militar”, siendo la primera vez que la conformación del parlamento legislativo nacional se produjo en democracia, ajustado a los nuevos tiempos mediante la participación de las personalidades más representativas de la elite política de aquel momento. Revisemos la conformación del primer Congreso Nacional que advino a la caída de Pérez Jiménez para hallar en él la presencia de la flor y nata de las distintas tendencias del pensamiento ideológico en Venezuela: Octavio Lepage, Elpidio La Riva Mata, Jaime Lusinchi, Pedro Ortega Díaz, Miguel Otero Silva, Godofredo González, Humberto Bartoli, Gonzalo García Bustillos, J.M. Siso Martínez, Pedro Miguel Pareles, Enrique Betancourt y Galindez, Francisco Faraco, Antonio Leidez, Luis Miquilena, Aristides Beaujon, Francisco Olivo, Saúl Ron, Jorge Dager, José Manzo González, Luis Herrera Campins, Jesús Pérez Díaz, Eduardo Machado, Joé Nuñez Aristimuño, José Ángel Ciliberto, Luis Alfaro Ucero, Luis Beltrán Prieto F, Luis Hernández Solís, Gonzalo Barrios, Jesús María Casal, Luis Manuel Peñalver, Carlos D’ Ascoli, Rodolfo José Cárdenas,

View Full Text

Details

  • File Type
    pdf
  • Upload Time
    -
  • Content Languages
    English
  • Upload User
    Anonymous/Not logged-in
  • File Pages
    11 Page
  • File Size
    -

Download

Channel Download Status
Express Download Enable

Copyright

We respect the copyrights and intellectual property rights of all users. All uploaded documents are either original works of the uploader or authorized works of the rightful owners.

  • Not to be reproduced or distributed without explicit permission.
  • Not used for commercial purposes outside of approved use cases.
  • Not used to infringe on the rights of the original creators.
  • If you believe any content infringes your copyright, please contact us immediately.

Support

For help with questions, suggestions, or problems, please contact us