FIDEL MIRÓ SOLANES Memorias anarquistas de un catalán exiliado Fernando Cabrera Parra FIDEL MIRÓ SOLANES Memorias anarquistas de un catalán exiliado Fernando Cabrera Parra Revés Histórico – Pasajes Anarquizantes Cabrera Parra, Fernando. Fidel Miró Solanes. Memorias anarquistas de un catalán exiliado / Fernando Cabrera Parra.- Puebla, México: Revés Histórico - Pasajes Anarquizantes, 2019. Este texto sí puede ser reproducido total o parcialmente, por cualquier medio o impresión digital, en forma idéntica, extractada o modificada, en español o en cualquier otro idioma, siempre y cuando sea con fines no lucrativos, se reconozca al autor y se respeten sus derechos morales. Revés Histórico – Pasajes Anarquizantes Mayo 2019, Puebla, México. ÍNDICE Presentación………………………………………………………….………6 Introducción…………………………………………………….……………7 FIDEL MIRÓ SOLANES. MEMORIA Y TESTIMONIO………………...15 Semillas de rebeldía, 1910-1924 “Hacer la América”. Una incierta idea, 1925-1928 Cuba y Jamaica. Dos experiencias caribeñas, 1928-1933 VIDA POLÍTICA E IDEOLÓGICA……………………………………..…41 De la Segunda República a la Guerra Civil Española En busca del anarquismo español, 1933-1936 Fidel Miró y la Guerra Civil Española, 1936-1939 HOMBRE DE EXILIOS……………………………………………………89 Exiliado en Francia, Suiza y Santo Domingo, 1940-1944 Exilio republicano español en México Fidel Miró en México, 1944-1970 Ante el exilio prolongado, 1970-1998 Epílogo: El anarquismo revisionista de Fidel Miró Solanes………………160 Apéndice. Obras de Fidel Miró…………………………………………....182 Fuentes…………………………………………………………………….186 Bibliografía………………………………………………………………...187 A la memoria de Fidel Miró Solanes PRESENTACIÓN Escribir la vida sigue siendo una esfera inaccesible y, sin embargo, sigue siempre impulsando el deseo de narrar y de comprender. François Dosse Este libro trata sobre la vida de Fidel Miró Solanes, un anarquista catalán exilado en diversos países debido a su participación activa en la Guerra Civil Española. Con el propósito de dar a conocer, comprender y valorar su aportación política e ideológica a través de relatos de diversos acontecimientos en palabras del propio Miró. Cabe destacar que, originalmente, el texto corresponde a mi tema de investigación del posgrado en Historia del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades “Alfonso Vélez Pliego”, de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Sin embargo, debido a la necesidad de difundir ampliamente tanto los datos biográficos, el pensamiento ácrata y el panorama como exiliado de Fidel Miró, surge la posibilidad de editarlo a través de los proyectos Revés Histórico y Pasajes Anarquizantes. Esperando contribuya a rescatar un poco de la complejidad del movimiento anarquista español, así como integrar a la historiografía del exilio republicano español en México, el aporte de los exiliados catalanes de filiación anarquista, que han sido en general menos estudiados. Por último, y no menos importante, expreso mi agradecimiento a todos aquellos (investigadores, profesores, compañeros, amigos y familiares) que acompañaron el proceso de investigación y edición a través de observaciones y comentarios para que este texto circule hoy libremente. Fernando Cabrera Parra Mayo del 2019 6 INTRODUCCIÓN Cuentan que al Dante, cuando iba por la calle, la gente lo señalaba diciendo: “He aquí a un hombre que viene del infierno”. A Fidel Miró, ahora, podremos señalarlo diciendo: “He aquí a un hombre que ha logrado salir del limbo”, pues nuestra emigración ya se ha convertido, querámoslo o no, en un limbo político. Miró demuestra que se puede salir de él y volver a la vida activa, la de las ideas.1 Si hay algo que defina el carácter fundamentalmente político del exilio español es que estuvo determinado por diversas coordenadas. En el interior del exilio mismo la división en grupos políticos, que se fraguó durante el Frente Popular y la guerra civil, una vez fuera de España se produjo, además, el enfrentamiento entre dos grandes programas o líneas de actuación políticas, a saber: el legitimismo republicano -que toma forma de la resurrección de un gobierno republicano en el exilio-; y la “solución plebiscitaria”, es decir, el reconocimiento de la muerte efectiva de la II República y la construcción de un sistema alternativo a Franco.2 La política de los exiliados españoles estuvo determinada por la situación internacional; la Segunda Guerra Mundial, el pacto germánico-soviético y posteriormente, el fin de la guerra y la postura de los comunistas frente al mundo. Hechos que no significaron esperanzas para los exiliados, sino la decadencia del apoyo internacional. Cada posición política del exilio republicano (el legitimismo republicano y la solución plebiscitaria) reaccionó de forma diversa ante la influencia de estos factores, mostrando un 1 Víctor Alba, prólogo a Fidel Miró Solanes. ¿Y España cuándo? El fracaso político de una emigración. México: Libro Mex-Editores, 1959, p. 11. 2 Luis de Llera Esteban (coord.). El último exilio español en América Latina. Grandeza y miseria de una formidable aventura. Madrid: MAPFRE, 1996, pp. 121-314. 7 ostracismo o utopismo revolucionario respectivamente, pese a la conexión con otros grupos exiliados. Así, el exilio político español fue minado por los acontecimientos europeos. La evolución de la línea política del exilio en América, es punto clave para establecer el papel jugado por cada una de las partes involucradas en la Guerra Civil Española (la oposición exterior, la oposición interior y el régimen mismo),3 así como los motivos de la división de las diversas fuerzas políticas tras la derrota y las reconfiguraciones que cada grupo realizó estando en el exilio (republicanos, socialistas, comunistas, falangistas, monárquicos, masones, nacionalistas, la Junta Central de Acción Republicana Española en México, la Junta Suprema de Unión Nacional, la Junta Española de Liberación entre otras) pero sobre todo, para nuestro interés, el proyecto político de los anarquistas españoles y su presencia histórica en el exilio en México. Sin duda, un aspecto relevante que la historiografía del exilio español ha ignorado, no sólo en México, sino en toda América Latina, es el exilio anarquista y su participación política- ideológica tanto en España como en México y gran parte de América Latina. De ahí la dificultad de encontrar, en los estudios del exilio español que se han venido aludiendo, algún aporte acerca de este grupo exiliado, ya que la mayoría de las investigaciones realizadas se apoyan en una extensa documentación oficial y responden a intereses político- académicos específicos. La visión que se ha elaborado del exilio, cuyo inicio se podría fijar en el año de 1938, ha imposibilitado el reconocimiento de otros exilios como bien podría ser el caso de los anarquistas. La preeminencia de esta visión, particularmente en las esferas de la cultura, fue determinante en la consolidación de la imagen sociocultural que se institucionalizó del exilio: en la serie de libros, monografías, artículos, memorias, entrevistas, etc., escritos por esos intelectuales republicanos, se evidencia el proceso mediante el cual se elaboró e instituyó esta monovisión 3 Ibid., p. 123. 8 del exilio español. En tanto que opera como un concepto ideológico el término de “transterrados” ejemplifica adecuadamente este proceso.4 La visión que instituyeron los intelectuales de 1938, particularmente reforzada y consolidada por los refugiados que ingresaron al país a partir de 1939, marginó a todos aquellos grupos políticos que, al no incorporarse de lleno tanto en la cultura oficial mexicana como en la republicana-española, fueron relegados a un segundo plano. Los intereses políticos han sido prácticamente los móviles que han llevado a relegar o ignorar todas aquellas manifestaciones ideológicas que nada tienen que ver con el proyecto político de los republicanos, como bien podría ser el caso de los masones, los cuáqueros, los vascos católicos, los monárquicos, los nacionalistas, los anarquistas y todos aquellos grupos que, aun cuando fueron minorías con respecto al predominio republicano también formaron parte de los llegados a México a raíz del conflicto armado en España.5 Los anarquistas exiliados en México Una vez en América, los anarquistas se repartieron por todo el continente, siendo México el lugar donde se concentró el mayor número; según las actas de las asambleas que celebró la central anarcosindicalista durante los primeros años, se registran 250 afiliados que la organización libertaria llegó a aglutinar en tierras mexicanas. Cabe recordar que la CNT fue la central laboral más fuerte en la España republicana y, aunque no todos sus miembros eran anarquistas confederados, la mayor parte de 6 ellos compartían la orientación anarquista de la directiva. 4 Jairo Francisco Castillo Díaz. “La literatura del anarquismo mexicano (1901-1921) y los anarquistas del exilio español del 39 en México”. México: UNAM, Facultad de Filosofía y Letras, 2003, pp. 233-234. [Tesis de Doctorado en Letras]. 5 Idem. 6 Véase Ángel Herrerín López. “Políticas de los anarcosindicalistas españoles exiliados en México”. Tzintzun. Revista de estudios históricos. Morelia: Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, núm. 39, enero-junio, 2004. 9 Mientras las esferas políticas negaron apoyo a campesinos y obreros hacia una participación directa en los asuntos sociales, el movimiento anarquista en torno a la CNT alentó las sublevaciones revolucionarias populares así como los atentados, las acciones directas y las respuestas espontaneas, con el propósito de vincular a grupos independientes a
Details
-
File Typepdf
-
Upload Time-
-
Content LanguagesEnglish
-
Upload UserAnonymous/Not logged-in
-
File Pages202 Page
-
File Size-