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DIRECTORA PROPIETARIA, CONCEPCION DIMENOnEF^AgNER DOMINGoTde Esero de 1885. /" ~ Año 3o—Tomo 4o

MARIA BARRANI ACTRIZ ALEMANA 2 EL ÁLBUM DE LA MUJER

Dirección, LEANDRO VALLE 15. privaciones, hasta el punto de verse reducida á habitar una mísera guardilla, prestando solícitos cuidados á una madre enferma, y soportando con heroica resignación los más duros y humildes trabajos, bien en discordancia con su de­ SUMARIO licada contextura? ¿Desconocéis que tan sublimes esfuerzos son hijos de la cari­ dad, madre de todas las virtudes, cualidad inherente á la mujer? TEXTO:— La mujer y sus detractores, por Concepción Gimeno de Flaquer.—Im­ presiones de viaje, por José de J. Cuevas.—Sección dedicada á las madres: La vida en ¿Negaréis que en alas de la caridad la encopetada aristócrata vuela á la triste familia, por la Baronesa de Olivares.—Escéptico y creyente, por Narciso Diaz de Esco- y recóndita mansión del indigente, nivelando de este modo la barrera que sepa­ var.—A mi madre, por Vicente Riva Palacio.—Bebé, por Juan de D. Peza.—Chapul- ra las diferentes clases sociales, y constituyéndose en el ángel bueno de aquel? tepec, por José M. Roa Barcena.—En el álbum de la inspirada escritora Concepción ¿Y qué diréis de esas señoras misericordiosas que, ungidas por el dulce bálsamo Gimeno de Flaquer, por Narciso Campillo.— Crónica Española, por un madrileño.— de tan piadosa virtud, se lian consagrado al servicio de la humanidad doliente, Revista de modas, por Joaquina Balmaseda de González.—Un viaje de novios. Novela original de Emilia Pardo Bazan.—Explicación de las ilustraciones.—Anuncios. ora llevando el consuelo al que sufre en los benéficos asilos hospitalarios; ora ILUSTRACIONES:—Retrato de María Barkani.—Retratos de los Señores: recorriendo los campos de batalla para curar á los heridos sin que su valor vacile General Porfirio Diaz, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos; Ignacio Mariscal, ante la muerte, exponiéndose al contagio de malignas epidemias; ora endul­ Ministro de Relaciones Exteriores; Manuel Romero Rubio, Ministro de Gobernación; zando los últimos momentos del que agoniza, prodigándole cuidados maternales, Manuel Dublan, Ministro de Hacienda; Carlos Pacheco, Ministro de Fomento; Joaquín derramando sobre su frente, abrasada por los ardores de la fiebre, el rocío re­ Baranda, Ministro de Justicia é Instrucción Pública; Pedro Hinojosa, Ministro de Guerra y Marina. frigerante de sus dulces lágrimas? En estos tipos, que someramente os he bosquejado, encontrarán los detrac­ tores de la mujer la refutación de su propaganda. Creednos: no hay nadie que aventaje á la mujer en todo lo que se refiere á la mayor intensidad del senti­ miento. Y en resúmen: ¿qué seria el mundo sin la mujer? Un páramo, un LA MUJER Y SUS DETRACTORES. desierto erial. Sin ella, no se comprendería el amor, esa pasión tan santa como sublime, esa especie de asimilación de dos almas que se ponen en contacto, que se armonizan y producen sonoros conceptos, esa pasión que tiene el poder ONSAGRADA á demostrar la influencia de la mujer en la cultura de suavizar el yugo más fiero, de hacer brotar flores donde ánles hubo espi­ délos pueblos, y su fuerza moral sobre éstos, no puedo renun­ nas, de darnos valor para acometer árduas empresas, y de poetizar hasta la ciar al deseo de dirigir algunas lineas á los detractores de miseria. mi sexo. Y no me negaréis que esta pasión, cual todas las más bellas y nobles, tiene Mucho se ha desarrollado en el mundo la injusticia; ata­ su morada en el corazón de la mujer, puesto que ella lo inspira, ya con una carla ahora y siempre, es y será el lema constante de mi vida : frase ó con una mirada. Si ha existido una Dalila, Catalina de Mediéis y Me- ardua es la misión que me impongo, teniendo en cuenta la salina, se alzan las virtudes de Eslher, Débora, Susana, Hortensia, Porcia, inmensidad del terreno que ha recorrido y los adalides que Octavia, y otras muchas que seria difícil enumerar. la apoyan; mas no retrocedo ante la idea de hacer brillar la verdad, que es mi Los escritores de todas épocas han censurado cruelmente á la mujer: unos firme propósito, la cual espero tenga buena acogida en las conciencias rectas, han hablado de todas, impresionados fuertemente por la ingratitud de alguna; y de este modo no habrá sido estéril mi trabajo. otros, porque les han sido rechazadas sus pretensiones y han visto humillada Severo es el sexo que ha de juzgarme, pero no me intimida, esgrimiendo una su vanidad; los más, sacrificando sus opiniones á un epigrama gracioso ó á una arma tan poderosa como es la de la razón. sátira de efecto. Decidme: ¿por qué hay individuos que censuran á la mujer? Por la igno­ El hombre pospone frecuentemente el corazón á un rasgo de ingenio. Seria rante rutina, más que por la sólida convicción del estudio. ¿Por qué la calum­ muy curioso reunir en un libro cuanto se ha dicho en contra de la mujer: el nian otros? Porque no tienen opinión fija, y se dejan arrastrar por las absurdas volumen resultarla interminable. Ese mismo empeño de zaherir á la mujer, teorías de algunos insensatos. ¿Por qué varios la motejan haciendo alarde de manifiesta claramente su gran importancia; si la mujer valiese poco, no se ocu­ un escepticismo que no sienten? Porque son seres pedantes que, apénas han parían de ella personas notables. dado sus primeros pasos en la vida, empiezan por decir que la existencia les La opinión del eminente José Sclgas nos venga de todos los ultrajes que se hastía, que es una carga odiosa é insoportable, lamentándose de tener el alma nos han dirigido. Exclama así el eminente escritor: triturada y el corazón hecho trizas por la aguda y acerada punta del desengaño; « ¡Mujeres! Sólo llegáis á ser malas después de haber tratado mucho á los ¿y sabéis de quién proceden tan irrisorias lamentaciones? Precisamente de aque­ hombres.» llos á quienes no ha habido mujer alguna que se haya querido tomar la molestia Un escritor francés, hablando de los impugnadores de la mujer, entre mil de fingirles amor. ¿Creeis que los que con tanta falla de sensatez como buen ideas graciosísimas y brillantes que sostiene contra éstos, añade la siguiente: criterio nos atacan, merecen los laureles del heroísmo cuando en último resul­ « Cuando oigo á los hombres vanagloriarse porque piensan muy mal de las tado vienen á atacar á un ser que ellos apellidan débil ó indefenso? ¡Oh! con­ mujeres; cuando los veo luchar entre si por el empeño de apreciar á cual más vendréis conmigo en que al lanzar tan injustas diatribas, arrojáis entre vosotros severamente sus cualidades, paréceme hallarme en una antesala en que los cria­ y nosotras el puñal de dos puntas, que hace resaltar más y más vuestra inferio­ dos esperan colocaciones, y, como es natural, se postran en seguida que el amo ridad, hasta ponernos de manifiesto que habéis perdido lo último que debe aparece.» perder el hombre: la caballerosidad. Esto es exacto: el hombre lanza mil denuestos contra la mujer, ó porque Los que de tal manera se conducen respecto á la mujer, son séres desgra­ ésta no le ama ya, ¡> porque no le ama aún; el hombre está sometido á la ciados que han llegado á la triste situación de ser monstruosamente ingratos, mujer por el atractivo de su belleza. El dia que la mujer se ilustre, hará su por haber olvidado que deben su existencia á una mujer, á la madre, á ese sér imperio más duradero, porque los encantos del espíritu son superiores á la be­ lodo ternura, amor y abnegación, en cuyo pecho lia vibrado dolorosamente el lleza física. gemido del que será hombre, y sin temor á la inclemencia del tiempo le La mujer es superior al hombre por el corazón, mas le falla ser igual á él ha presentado el desnudo seno, dándole parle de su propia vida, y quedando por la inteligencia. Apresúrese la mujer á cultivar ésta, y será glorioso su sentenciada á no dormir sin que su sueño sea interrumpido; molestia que sufre reinado. con la sonrisa en los labios. Pasados estos primeros meses de dulce martirio, Si, es preciso ilustrar á la mujer, es conveniente desarrollar su inteligen­ empieza el penoso trabajo de formar el corazón del niño, dirigiéndole por el cia, es necesario hacerle amar lo bello y lo sublime, es indispensable iluminar sentimiento y la ternura, arraigando en su alma una fe ardiente hácia el Todo­ su alma, es muy útil hacerle conocer la' verdad. poderoso, y dulcificándole sus instintos. En cambio, este niño, 'apénas adquie­ Pasaron aquellos tiempos, crueles para la mujer, en que fué convertida en re la facilidad de poder expresarse, gracias, repito, á la constancia y desvelos de hembra ó cosa; han desaparecido aquellas épocas (vergüenza causa recordar­ la mujer, emplea ese don en proferir mil injurias contra ella. Y no sólo pode­ las) en que se discutió entre doscientos obispos y abades sobre si podia ó no mos presentaros este tipo. Decidnos, ¿será frivola, como vosotros apellidáis á ser calificada de criatura humana la mujer; las frases que contra ella lanza­ la mujer, la hija que educada en la opulencia, se ve en la primavera de su vida ron el canciller Mampeon y el duque de AVurlemberg, si se recuerdan, es arrancada de aquella por la mano del infortunio, para descender á una vida de con indignación; los anatemas de Pitágoras, Tito Libio y Tucidides, ins­ EL ÁLBUM DE LA MUJER 3

piran el desprecio que deben inspirar los injustos impugnadores que nos han coptos iban también con nosotros, al lado de armenios, abisinios y judíos, que dirigido injuriosas diatribas, mordaces cual las de Queremon, Diógenes y Me­ rehusaban comunicar con los peregrinos, temerosos, y no sin razón, de que tra­ nandro. jesen éstos, en los pliegues de sus aquiceles y entre las vueltas de sus turban­ Olvidemos el pasado de la mujer, y desprendámonos un poco del presente, tes, el cólera y la fiebre. pues, como dice Chateaubriand: «lo pasado y lo presente son dos-estatuas in­ Nuestro buque iba enteramente lleno, y en él se habían reunido las razas más completas: la una ha sido salvada de entre las ruinas del tiempo, medio mu­ distintas y extrañas entre sí. Cuando á la luz de la tarde, vacilante ya, pero tilada; la otra, aun no ha recibido toda su perfección de lo venidero.» clara aún, fijé la atención y la mirada en los grupos que se agitaban en el en­ Lo antiguo se va, lo moderno nace y le sustituye brillantemente. Hoy no trepuente, creíame trasportado á un mundo desconocido, veia con sorpresa fiso­ avanza el progreso en linea espiral, como dijo tiempo ha un autor muy inge­ nomías, actitudes y trajes'que sólo en la imaginación me eran conocidos, y que nioso; hoy marca el progreso, con vertiginosa rapidez, todas las innovaciones. sólo había visto en pinturas ántes de visitar el Oriente. Los árabes asiáticos, La civilización tiende el vuelo hacia su ideal, declarando caducas, perniciosas envueltos en sus blancas marlotas, iban sentados en actitud grave y melancólica: y retrógradas las ideas de ayer. guardaban silencio, y al meterse el sol se pusieron á orar con inclinaciones re­ Conviene la emancipación de la mujer (no os asustéis); su emancipación verentes y majestuosas. Me sorprendía la singular belleza de esa raza primiti­ ha de ser en las esferas de la inteligencia. La mujer debe ser cosmopolita de va y patriarcal. Sus ojos, de una fulgidez deslumbrante, habituados á mirar en los mundos del arte y de la ciencia. el desierto, arrojan la mirada á una distancia inmensa: su aguileña nariz y su Reclamamos nuestros derechos; roas tranquilizaos, nosotras sabemos per­ negra barba, acabada en punta, se destacan artísticamente sobre los blancos fectamente que cada derecho nos exige el cumplimiento de un deber, y en aras pliegues que envuelven su cabeza y engastan su fisonomía. Al mirarlos, seconoce del deber nos inmolamos siempre; al deber, palabra que tenemos grabada en en el acto que son los verdaderos descendientes de los patriarcas. En la fiso­ el corazón, rindiéndole un culto respetuoso. nomía y esbeltez de sus mujeres, de ojos de belleza increíble y de una gentileza No queremos á la mujer libre del deber; no queremos para ella la libertad de palma y de gacela, hay mucho de Lia y de Sara, de Agaar y de Rebeca. que adquirió en el segundo período de la ciudad de los Césares, licenciosa La turca es una raza enteramente diversa. Es la dominadora y parece la libertad que fué una fuente de corrupción: queremos á la mujer libre de la esclava. La fisonomia ancha y aplastada de los turcos, su color atezado, sus ignorancia; de la ignorancia, que es la orfandad del entendimiento, la miseria movimientos, su agilidad y su mirada áspera y uraña, recuerdan su origen tár­ de la inteligencia y el luto del espíritu. taro y que fué su cuna el Turkestan salvaje. Era fácil conocerlos entre Iqs ¡Mujeres, es preciso que trabajéis sin desaliento! Probado está que teneis grupos que henchían el entrepuente, por su aire insolente y tímido á la vez, facultades para ilustraros. Los alemanes dicen que la mujer posee seis senti­ como de hombres habituados á ser alternativamente oprimidos y opresores, escla­ dos: despertad éstos, tal vez un poco narcotizados, y salid de la apalia en que vos y tiranos. estáis sumidas, para alzaros enérgicas y valerosas, repitiendo mil veces que es Los griegos, de sus ascendientes no conservan más que los lineamientos ca­ un crimen social mutilar las facultades intelectuales de la mujer. pitales de la fisonomia helénica. Mucho llamaban mi atención sus trajes pinto­ Se hace muy necesaria una revolución en el mundo de las ideas; mas no rescos y de brillantes. Una chaquetilla corla, cubierta de bordados, se creáis que intentamos hacerla tras las barricadas ó encendiendo la tea de la ajusta á sus espaldas, abriéndose sobre el pecho: ciñe su cintura una faja ancha discordia; nuestra misión es misión de paz y de amor; nuestro destino, endul­ de color azul ó rojo: su calzón ancho les baja en pliegues hasta la rodilla, y zar las amarguras de la vida, verter una gota de esencia en el cáliz del dolor, la parte inferior de la pierna está resguardada por botas altas ó polainas de cue­ cuando el infortunio abruma al hombre. Practicar el bien por placer y no por ro. Sobre la cabeza llevan una gorra de color morado que cae liácia atrás y deja recompensa; es el deber que debemos imponernos. La caridad debe ejercerse flotar á la espalda una gran borla de seda negra. Tienen la barba oscura, es­ respetando todas las conciencias y predicando el amor á todos nuestros seme­ pesa y rizada; es ancho el óvalo de su rostro, sus ojos brillantes é inquietos, y jantes, sea cual fuere su patria, su hogar, su familia, sus costumbres y doctri­ vigorosas y elegantes sus formas. nas. Lo contrario es empequeñecer, desprestigiar las sublimes máximas de La mirada de sus mujeres es, en lo general, osada é impúdica, y la de los Jesucristo. Hay que ejercer la caridad en todas sus ramificaciones. hombres siniestra. El cruzamiento otomano los ha envilecido, y el tiempo y La caridad no consiste únicamente en dar una moneda al indigente: la los infortunios los han bastardeado; pero á través de su rostro actual, cree ver­ caridad consiste en llevar el consuelo al espíritu atribulado, en perdonar á los se, sin embargo, algo de lo de Milciades, Pericles ó Epaminondas: aún corren enemigos, en ilustrar al ignorante, en vestir la inteligencia de quien la tiene en la suya, gotas de la antigua sangre griega. Sus popes de cabelleras y barbas desnuda, en secar las lágrimas del aflijido, en ofrecer la dicha y parlir el do­ crecidas, de macilentas caras, y con sus oscuros y sucios trajes talares, inspiran lor de las víctimas próximas á caer en la sima de la desesperación. repugnancia y miedo. Son como la personificación de la impostura, los rencores ¡Llene dignamente la mujer su misión, y vivirá tranquila con el aplauso de y la infecundidad de un cisma. Su gravedad taciturna y hosca, me inspiró aver­ su conciencia, sin conmoverse ante las injurias de sus detractores! sión desde que los vi. Despreciemos los irrisorios epigramas, las sátiras, diatribas é impugnaciones Es mucho más franca y simpática la fisonomia de los armenios, y la de los de nuestros detractores, y pongamos en nuestra bandera el lema de Cárlos X: maronitas también. Los maronitas son hombres de altas y robustas tallas y de «i Siempre adelante!» varonil aspecto. Su traje mucho se asemeja al de los turcos y griegos. Los ma- CONCEPCION filMEXO DE Fl.AQUEU. ronilas católicos son casi europeos, por la educación y las costumbres: sus muje­ res, como las del Líbano y Reyruk, son robustas y hermosas, pero de facciones toscas y de movimientos duros. Los armenios, más que altos, son gruesos, y su desarrollo propende más que á robustez á obesidad. Sus amplios rostros están rodeados de una larga barba que da á los ancianos un aspecto venerable: su tez IMPRESIONES DE VIAJE. no es colorada, sino ligeramente morena ó de un blanco pálido: tienen los ojos de un color oscuro y espesas las cejas, lo que imprime á su fisonomía un aspecto DE PUERTO SAID A JAFFA. duro. Por lo común, usan trajes blancos y talares. Es singular y desagradable en esta raza, que por el traje y aun por las facciones, los dos sexos apénas se A salida de Puerto Said'de nuestro vapor había coincidido con la distinguen. Los armenios no son de aspecto femenil; son, por el contrario, sus llegada oportuna á este puerto de la caravana santa de peregri­ mujeres las que tienen rostros y maneras enteramente masculinos. Los hombres nos mahometanos que volvía de la Meca, donde habían, en cum­ llevan descubierta la cabeza, y cubierta con lienzos blancos, semejantes á tocas plimiento del precepto religioso del Coran, ido á visitar la tumba monjiles, las mujeres. Lleva esta raza el sello de una remota antigüedad: algo del Profeta. Muchos de ellos pasaron á nuestro bordo y se diri­ irradia en ella de primitivo; á través del armenio cree, aunque borrado, distin­ gían á sus domicilios, contentos de haber lavado su alma y ansio­ guirse siempre el viejo mesopolamio, coetáneo y grande amigo del camello, sos de tornar al seno desús familias, si es que tal nombre merece austeramente religioso, y dado por piedad y por instinto á las largas y lentas el fondo de sus serrallos, donde la mujer vegeta en esclavitud peregrinaciones. estúpida y ide los hijos son sólo una molesta excrecencia del placer. Sus „ José de J. Cuevas. (Se continuara.) rostros tostados revelaban los muchos soles y los fuertes vientos que habían su­ frido en su dilatado y peligroso camino. Muchos griegos, árabes, maronitas y 4 EL ÁLBUM DE LA MUJER

SECCION DEDICADA Á LAS MADRES.1 ESCÉPTICO Y CREYENTE.

LA VIDA EN FAMILIA. i

CONDICIONES PRECISAS Á UNA AMA DE CASA. ació escuchando el tumor sordo de las olas del mar: su cuna tu­ vo por dosel el cielo trasparente, y acompañaron sus primeros Consecuentes con nuestro propósito de escribir sobre asuntos que sean de gemidos las sentidas canciones de los marineros, y los graznidos alguna utilidad para la mujer en su vida práctica é intelectual, vamos á indicar de las aves que se posaban en los altos palos del bergantín Mer­ las cualidades morales que deben adornar á una ama de casa, cargo que exige cedes, á bordo del cual eran trasportados á Málaga sus jóvenes tesoros de inteligencia, de cariño y de abnegación. Dar una idea del empleo padres. de estas tres facultades en el seno de la familia, será el objeto de este articulo. Era hijo de un comerciante cubano, á quien primero las con­ La inteligencia es la primera cualidad: por ella sabe colocarse en el terre­ trariedades de una sangrienta guerra civil, y más larde la des­ no á donde al casarse la lleva su nuevo estado; porque hay muchas que al gracia que presidió algunos de sus más importantes negocios, le hicieron per­ casarse mejoran de fortuna, mientras otras dejan comodidades de la casa de der cuantiosos bienes que había en no lejano tiempo heredado. sus padres por una modesta medianía; unas y otras necesitan gran inteligencia Al verse sumido en la más completa ruina, D. Juan de Arteaga, que éste para comprender su nueva posición, y la rica no debe envanecerse con su for­ era el nombre del comerciante, dispuso venir á España y fijar su residencia tuna, y si tratar á los inferiores con cariño, porque el cariño es la única mo­ en Archidona, pueblo donde había nacido su bella esposa, y donde ésta con­ neda que compra voluntades, y nadie más necesitado de ellas que el rico, por taba con un pequeño patrimonio. lo mismo que su fortuna suele crearle enemigos. Debe por si, rica ó pobre, Al terminar este viaje, su hijo, nacido durante la travesía, fué cristianamente examinar cuentas, hacer las compras de alguna importancia y estudiar el carác­ bautizado, y recibió el nombre de Ricardo. ter de los individuos de su familia, para ser el iris de concordia en toda que­ rella doméstica. La influencia del ama de la,casa debe reflejarse en lodo; en II el orden que en ella reine, en el bienestar de los criados, en la elección de En Andalucía, y no muy lejos de la tradicional peña que llaman de los Ena­ los amigos, en la consideración y cariño que á los suyos deba, porque todas morados, á la falda de una alta sierra en que brilla un pequeño santuario, que las ridiculas declamaciones de los derechos de la mujer, son teorías hechas para semeja en lontananza una blanca tórtola desafiando imprudente las iras de atre­ los espíritus débiles ó las imaginaciones pobres: los derechos de la mujer los vido cazador, se dibuja un pequeño pueblo, cuyas casas diseminadas, sus altos aseguran sus propias cualidades. campanarios y numerosas torres, le hacen aparecer ante los ojos del viajero, El cariño es la segunda cualidad, y acaso se admirarán mis buenas lectoras que su importancia desconoce, como una espaciosa ciudad. Tiene Archidona, de que figure en segundo lugar, porque el cariño es capaz de todas las pre­ la antigua Arz-duna de los árabes, algo especial que atrae las miradas, que venciones, de todos los sacrificios, y lo que á'veces descuida la inteligencia seduce y cautiva á primera vista. previénelo el cariño...... Asi es en muchas ocasiones, pero en otras, ¡cuánto Allí vió pasar sus primeros y mejores dias Ricardo de Arteaga; allí murió no ciega el cariño! El mismo San Agustín afirma: «que cada uno es seme­ su joven madre á los pocos meses de abandonar el suelo de Cuba; allí compren­ jante á aquello que ama, y cual es el amor de cada uno, tal es él.» Bella y dió cuán inmensos son los tesoros del cariño paternal, y allí se unió en eterno terrible apreciación del cariño, por la cual se comprende que no estando escu­ lazo con una joven, tan pura como hermosa, tan buena como modesta. dado por la inteligencia, es capaz de todos los errores; el cariño al marido de­ Angela tenia por nombre. Era de baja estatura, pero de esbeltas é incitan sordenado, hace á la mujer disculpar sus fallas y muchas veces secundarlas; el tes formas. Eran sus ojos grandes y azules, misteriosos espejos donde se re­ cariño ciego á los hijos hace á la madre no corregirlos á tiempo en sus extra­ flejaban sus pensamientos inocentes, y los anhelos de su alma virgen; sus la­ víos...... Cariño, mucho cariño está obligada á tener la esposa y la madre, bios podían competir con la roja flor del granado; sus cabellos largos y negros, pero cariño economizado con juicio y dirigido por la inteligencia. sueltos casi siempre, besaban su alabastrina espalda, formando seductoras on­ ¡La abnegación! Qué bella palabra; cómo realza la corona de la mujer y dulaciones; en su frente se mostraba la blancura del mármol, y en sus mejillas embellece su misión sobre la tierra! Sin la abnegación de la mujer no existiría se unian, en delicioso contraste, el reflejo de la nieve con el tinte de la ena­ la felicidad doméstica, ni llegaría á veces el hombre á los grandes destinos á que morada rosa. le llama la sociedad. ¡Qué sentimiento tan rico en beneficios es la abnegación! Ricardo y Angela se amaban por instinto. Compartieron sus juegos de la El frecuente trato con ella nos hace leves los sacrificios, llevaderas las contra­ infancia y las alegrías de la adolescencia. Se amaban como hermanos, antes de riedades, y ofrecé, en fin, tales ventajas, que por egoismo propio debiéramos unirse como esposos. llamarla, encerrarla dentro de nuestro pecho, y arrojar la llave de él á donde no fuera posible hallarla. La abnegación es la fortaleza del espíritu, el olvido del III bienestar propio para pensar en el ajeno, y por eso esta virtud es necesaria, so­ Aquel matrimonio, sin embargo, no era feliz. Ricardo no habia recibido en bre todo, al ama de la casa; por ella acalla su propia pena para convertirse en su primera edad esa educación religiosa que siembra la fe en nuestra alma y enfermera del padre ó del esposo; por ella presenta risueña faz al marido arrui­ hace comprender la grandeza del Sér Omnipotente, autor de todo lo creado. nado, y esconde sus lágrimas al preparar la maleta del hijo que parte á la El escepticismo reinaba en la inteligencia de Ricardo, y era tarde, muy lar­ guerra.... de, cuando sus padres comprendieron las consecuencias de aquel abandono en Bien se ve, por estos breves apuntes, lo que estas tres cualidades realzan que Rabian sumido la educación moral de su hijo. á la mujer, esposa y madre, y no se crea por ésto que sólo puedan aplicarse en La semilla del indiferentismo habia echado hondas raíces en aquella alma estos dos estados, pues es indiscutible que puedan aplicarse en todas las distintas fuerte; y los viajes, y cierta clase de lecturas, en vez de corregirlos, aumenta­ situaciones de su existencia. ron sus extravíos. La mujer, en cualquier estado, en cualquiera edad, si emplea con acierto las Angela, al unirse á Arteaga, habia llevado la esperanza de convertirlo y tras­ tres cualidades que son objeto de estas lineas, encontrará grata la vida y los afec­ formarlo en un sér piadoso y creyente. Él amor no fué más afortunado que la tos que la acompañen hasta la tumba. ternura paternal lo habia sido.

La Baronesa de Olivares. IV (Se continuará.) Desde este momento, negras nubes de desgracias se cernieron sobre aquel hogar, antes tan tranquilo. Ricardo empezó á olvidar á su esposa, pero como su corazón necesitaba 1 En esta sección incluirémos cuanto pueda ser útil á una madre y á una buena ama de casa. amar, cifró de nuevo todo su cariño en su anciano padre, que paralitico, casi ciego, presenciaba aquellas reyertas conyugales, y comprendía su origen y con­ fesaba su culpa. Arteaga tuvo aspiraciones; quiso salir del circulo pequeño en que se agitaba. EL ÁLBUM DE LA MUJER 5

Tuvo valiosos protectores, que le hubieran tal vez elevado, á no tener que lu­ char con aquella estoica indiferencia, con aquel ateísmo, que hacia temer y des­ Á MI MADRE. confiar.

El mundo lo cree asi. No puede ser perfecto el hombre que en su pecho no ¡Oh! cuán léjos están aquellos días abriga creencias religiosas y no levanta altares en su alma á la divinidad. Y En que cantando alegre y placentera, efectivamente, sin la educación religiosa es imposible abarcar las nociones del Jugando con mi negra cabellera bien y del mal. En tu blando regazo me dormías. Ricardo llegó á odiar á todos sus convecinos. Le apellidaban el descreído, y Con qué santo embeleso recogías los niños.huían de su lado como de un ser dañino, y los hombres evitaban acer­ La balbuciente frase pasajera, carse á él como si temiesen contagiarse por el simple roce. Que por ser de mis labios la primera, Hubo un día en que se vió precisado á dejar aquel pueblo y á vivir con su es- ! Con maternal orgullo repetías. posa y con su padre en una casa de campo, distante una legua de Archidona. ■ Hoy que de la vejez con el quebranto Tantas contrariedades, tantas desgracias, no fueron bastantes á entibiar su Mi barba se desata en blanco armiño, ateísmo. Y contemplo la vida sin encanto, Al disputar con su esposa, dijo más de una vez: Al recordar tu celestial cariño —¡Convéncete, ni ahora creo en nada sobrenatural, ni jamas creeré! De mis cansados ojos brota el llanto, Porque pensando en tí me siento niño.

V Vicente Riva Palacio. México, Octubre de 1884. R. Juan de Arteaga sintió llegar su última hora. La conducta de su hijo, los j desprecios de que había sido objeto, los altercados conyugales que presenciaba, : concluyeron por minar fatalmente su existencia. Sentado en un ancho sillón de cuero, reclinada su blanca cabeza sobre el i BEBÉ. hombro de Angela, y teniendo un rosario entre sus manos, D. Juan de Arteaga í conoce que el frió de la muerte invade su cuerpo y paraliza la sangre de sus í Cuenta Bebé dos meses no cumplidos, venas. Pero burlando al tiempo y sus reveses, Su hijo Ricardo, arrodillado ante de él, le contempla con ojos avarientos, co- > Como todos los niños bien nacidos mo si diera su existencia toda por retener aquel átomo de vida que se escapa. ! Parece un señorón de veinte meses. Tras un ligero estremecimiento, el enfermo exclama:—¡Dios de bondad, í Rubio, y con ojos como dos luceros, acoge mi alma y protege sobre el mundo á mi hijo! Lo vi, con traje de color de grana, En un escaparate de Pluteros Un minuto después era cadáver. Un Domingo de Pascua en la mañana.

Iban conmigo Concha y Margarita, VI Y al mirarlo las dos, ambas gritaron: «Mira, padre, qué cara tan bonita,» Ricardo se abalanzó al cuerpo de quien tanto amó en vida. Le movió una y ; Y trémulas de gozo me miraron. otra vez con afan. ¿Quién, al ver que á sus hijas las subleva Besó su rostro. En vano trató de aspirar su aliento. En vano hizo por sen- ¡ La ambición de adueñarse de un muñeco, tir los latidos de aquel corazón ya muerto. No se siente vencido, cuando lleva Después se entregó á la más completa desesperación. Se mesó sus cabellos | Dos duros en la bolsa del chaleco? y maltrató su cuerpo, hasta que fatigado y jadeante, trajo á su memoria dulces í Ya vencido pensé: si está comprado, recuerdos de la infancia, y entonces las lágrimas brotaron de sus ojos como cas- i Y como es natural, tiene otros dueños, cada de perlas de roclo, que devuelven la vida á flores agostadas por la inele- < Mis hijas perderán el encantado mencia del sol. Palacio de sus mágicos ensueños.

Algo extraño agitó su sér, y arrastrándose hasta un crucifijo, que muy cerca ¡ Pero movido el paternal cariño. del cadáver de su padre se veia, exclamó con voz ahogada: Entré á la tienda á realizar su antojo, —¡Dios mío! ¡Dios mió! Creo en tí. Acoge en tu seno el alma de mi padre. í Y dije al vendedor: quiero ese niño De crenchas blondas y vestido rojo.

Vil Abrió entónces la alcoba de cristales, Tomó á Bebé, lo puso entre mis manos, Desde aquel instante la vida de Ricardo varió por completo: volvió á obtener ; Y convirtió á mis hijas en rivales el cariño de sus convecinos y á disfrutar esa paz del alma, que es patrimonio del s Porque el amor divide á los hermanos. verdadero creyente. «Para mí»—Concha me gritó importuna, Su esposa murió al poco tiempo, no sin dejarle un hijo, hermoso como un án- i «Para mi»—me gritaba Margarita, gel y bueno como la bella mujer que le había llevado en sus entrañas. Y yo les grité al fin, «para ninguna» Con la seca aridez de un cenobita. Ricardo decía con frecuencia: —Ante el cadáver de un padre no hay escéptico posible. En ese trance fa- ; Reinó un silencio entre las dos, profundo, tal, ¿quién es el hijo que no eleva al cielo sus ojos y reconoce la grandeza de ■ Y yo recordé entónces conturbado. Este axioma tristísimo del mundo: Dios y la pequeñez del hombre? «Ser rival es odiar y ser odiado.»

Y así pensé: no debo en corazones viii Que de la vida llaman á la puerta, Encender con el celo esas pasiones En un convento de capuchinos de Antequera existe un religioso que es mo- i Que el odio atiza y el rencor despierta. délo de humildad cristiana y cuyas santas palabras graban en el alma del más ; empedernido corazón las virtuosas máximas de la religión de Cristo. La historia del amor con dos premisas Iguala á lá mujer, y no os asombre; Aquel religioso es llamado el Padre Juan de Nuestra Señora de Gracia. ¡Un muñeco en la edad de las sonrisas En el mundo era conocido por Ricardo de Arteaga. Y en la edad de las lágrimas un hombre!

Narciso Díaz de Escovar. i Juan de D. Peza. México, Io de Enero de 1885. I

PEDRO HINOJOSA Ministro de Guerra y Marina 8 EL ÁLBUM DE LA MUJER

CHAPULTEPEC. EN EL ÁLBUM

DE LA INSPIRADA ESCRITORA CONCEPCION GIMENO DE FLAQUER. A las ciudades y comarcas todas Que bajo un cetro y ley congrega Tula, Tras recios temporales, en dos años Soy ola y llego desde los climas Yo soy estrella del alto cielo, Niega el cielo irritado blandas lluvias. Donde su cuna tiene la aurora; Luzco en las noches con rayo frío, Y seco el rio y sin verdor el monte, En tus arenas, playa sonora, Y hasta la tierra dormida envío La generosa tierra ya infecunda De Dios el nombre vengo á grabar. El de otros mundos beso sin fin.

De Norte á Sur se parte en hondas grietas Soy rayo y caigo desde la nube Soy primavera llena de vida, Y es de sus propios hijos sepultura. Que allá en los aires volcan parece; Aromas vierto, luz y colores, Huyendo un macehual horrores tales, En ese monte que se estremece Doy voz al ave y al sol fulgores, Presa del hambre y sed, vagó tres lunas Rastro de fuego vengo á dejar. Fuego á la rosa, nieve al jazmín. Sin derrota ni rumbo, y llega, al cabo, Soy dulce viento de la mañana, ¡Ay! deja todo, veloz pasando, Ensangrentado el pié, la frente mustia, Despierto y salgo de entre las flores, Alguna huella, memoria alguna, A la falda de un cerro árido enlónces, Hijo querido de los amores, Amor, perfumes, gloria, fortuna, Dulces delirios, triste verdad. Dominador del valle por su altura. Palpito amante, respiro amor. Al cansancio y al sueño allí rendido, Mi vuelo esparce ténucs efluvios, Si yo, poeta, si yo del cielo Oye sordo rumor de aguas ocultas Alzan mis alas leve armonía, Igual destino también lograra, En tu alma pura sólo dejara Del cerro en las entrañas: ve que brotan Y son mis huellas vaga poesía, Sueños, delirios, fragante olor. Grabado un nombre: felicidad. Un copioso raudal que le circunda; Que.á su influjo benéfico la tierra Narciso Campillo. Ornan con su verdor lotos y juncias; Que al viento como flámulas sus hojas Tiende la milpa y de su caña rubia Cuajándose el maíz en blancas perlas Muestran ya las espigas melenudas. Mira á Tlaloc, divinidad del agita, CRÓNICA ESPAÑOLA. Vagar cual sombra, y que su diestra augusta A su hambre y sed señala á un tiempo mismo El grano alimenticio, el onda pura, Y al tocar uno y otra, el vivo gozo Súbito le despierta. Observa y juzga Ruando mis lectores lean estas lineas, el teatro Real habrá Por la marcha y el brillo de los astros abierto ya sus puertas al público. Ser média noche: en temerosa angustia Despues de la ruidosa cuestión de los abonados de este co­ Fija el oído, y el rumor del agua liseo con la empresa del mismo, hay quien, temeroso de. in­ Que entre sueños oyó, despierto escucha. Rompiendo su prisión de arcilla y rocas, justas represalias, llama al teatro de la Opera Circo de gla­ Como serpiente indómita en su furia, diadores. Brota el fresco raudal y, desalado, Al fin y al cabo la locha quedará reducida á aire. Salpica al indio el ¡lié su blanca espuma. La Contaduría, en esta ocasión, lia hecho de Spoliarium. ¡No le engañó Tlaloc!... Y á la influencia Los ex-abonados han sido las victimas. Del rico don, el aridez inculta Cerro y llano trocaron por la pompa Con que los ven después ocho centurias. Desde enlónces la verde falda pueblan En los primeros dias del mes actual se inauguró el teatro de la Comedia. Los que en sus canas hoy y en las arrugas Había cierto interes entre la gente del oficio y los aficionados en presenciar Del ancho tronco augustos ahuehueles, Mudos su prodigiosa edad denuncian. esta apertura, en la cual, la compañía que dirige el Sr. Mario iba á presentarse Al bardo rey de Acolhuacan proscrito al público, como los libros antiguos, corregida y aumentada. Vieron pasar al rayo de la luna, El virus dramático se ha inoculado en el elegante coliseo de la calle del Y en el zenit de su poder contóles 'Principe. Presagios y tristezas Moctezuma. La Mendoza 'tenorio y Cepillo dan cierto color subido á la compañía, en Dieron albergue al Castellano altivo Que á la gentil Malintzin tierno adula. donde, en años anteriores, figuraban la Tubau y Julianito Romea. Del alcázar del cerro en las almenas Ya la obra elegida para la inauguración delataba las nuevas tendencias. Un día ven y al otro en vano buscan Lo positivo, de D. Manuel Tamayo y Baus, es una hermosa producción es­ El pabellón que alzó Cortés bizarro cénica, mitad comedia, mitad drama, ó como ahora se dice en el lenguaje técni- En los llanos magníficos de Otumba. co de bastidores, alta comedia. A su sombra acampó con hueste invicta. En su ejecución el público ha aplaudido, en primer término, el previsor ta­ Del valor coronado y la fortuna, El caudillo de Iguala, cuya sangre. lento del Sr. Mario, que tiene el don envidiable de hacer homogéneo y dar uni­ No derramada en la gloriosa lucha, dad á todos los distintos elementos que á su dirección se someten. En nuestras playas irritado el ponto Sin embargo, en la obra citada se han manifestado dos defectos de origen Con inútil afan lavar procura. casi imposible de extirpar. Muestran en su corteza los extragos Del plomo anglo-sajon á que en lid ruda La Srila. Mendoza Tenorio ha exagerado un tantico, y aun dos tanticos, su Juventud denodada expuso el pecho, papel; las inflexiones de su voz, sus gestos, sus actitudes y su tono, ha resul­ Si vencedora no, domada nunca. tado más diamatico que natural, sin que ésto quiera decir que no lo ha des­ Vieron... mas ¡tanto han visto! Triunfos, gloria, empeñado á mai avilla, mereciendo, y con justicia muy mucho, los aplausos que Orgullo vano, humillaciones, fugas, le ha tributado el público. La vida, en fin, del hormiguero humano Contrastaba con la Srila. Mendoza Tenorio el actor Sánchez de León, jó- Que dellos en redor tiene sus grutas. ¡Bosque, sagrado bosque, altivo cerro yen inteligente y estudioso que posee en alto grado la difícil facilidad de ceñirse Que hasta la más remota edad futura á los tipos y caracteres que se le encomienda, pero cuyas buenas cualidades hace De los pasados siglos y el presente desmerecer desgraciadamente una estudiada frialdad que raya en afectación de Habéis de hablar tal vez con lengua muda! no muy buen gusto. Generaciones cien logren miraros Cepillo se lia presentado en escena con el arreglo en tres actos de Ventura A nuestro sol espléndido sin brumas, Gozando de la paz y la concordia de la Vega, intitulado Un inglés y un vizcaíno, en cuya interpretación ha me­ Que la nuestra hallará sólo en la tumba! recido entusiastas aplausos y calurosas felicitaciones. J. M. Roa Bárcena. Se anuncia la reprisse de La Pasionaria de Cano en la Comedia. México. EL ÁLBUM DE LA MUJER 9

Decididamente, Mario, que comenzó su carrera artística como actor cómico, « « Como las primeras brisas primaverales abren las primeras flores, los tempra­ pretende terminarla trágicamente. nos fríos del otoño abren, como por encanto, las puertas de los palacios y de los Cúmplase su voluntad. hoteles que, semejantes á las flores, son ricos en luces, en 'color y en aromas. * * * La marquesa de Villa-Mantilla ha solemnizado el dia de la Virgen del Pilar, En el teatro Español se lia estrenado esta quincena un drama en verso y tres reuniendo en su casa de la plaza de Colon lo más notable y elegante de la so­ actos, llamado Las dos ideas. Al fin del acto primero el autor salió á la escena, ciedad de Madrid. volvió á salir al segundo, y al tercer acto, como era muy propio, volvió á salir En su entresuelo, decorado al estilo árabe, ha dado la primera fiesta del in­ otra vez, según es cuenta. Antonio Vico muy bien, muy mediana la Cirera, re­ vierno. gular su hermano Alfredo; los demas, ellos y ellas, medianos: el decorado es­ La marquesa, discreta hasta en los más pequeños detalles, ha recibido á sus tuvo también á medias. amigos vestida de azul, que es el color de la esperanza y también el de la —Pero, ¿y la obra? alegría. —La obra se llama Las dos ideas. Se habló muy poco de política, se jugó al tresillo y no se bailó. —¿Pero es buen drama, ó es malo? Los concurrentes salieron complacidísimos de tan grata y amena reunión. — Diré á vd.: cuestión es esa que su titulo lo dice. En ella tuvimos el gusto de saludar á la duquesa de Teluan, á las marque­ — ¡No entiendo! sas de Donadlo, Laguna, Valdeiglesias, Jura-Real y Retorlillo, á la baronesa —Pues, como reza el tal titulo, la gente se dividió en dos opuestas opinio­ de Eróles, á la esposa é hija del secretario de embajada de Portugal, y á las nes; la de un lado decía: la obra es buena; la del otro porfiaba que era mala; y bellas y graciosas hijas de la ciudad del Guadalquivir, Sritas. de León. de esta gresca saco yo, que la verdad se encuentra en...... Las dos ideas. También vimos al señor presidente del Consejo de ministros, ocurrente y de­ cidor entre sus amigos, como de costumbre, á los ministros de Marina y Ultra­ ♦ mar, y á multitud de personas del ejército, de la banca y de la diplomacia. « ♦ La marquesa de Villa-Mantilla, mostrando su sonriente rostro entre su toca­ Apolo también lia estrenado; no Apolo dios, sino Apolo teatro. do azul, semejaba á la rosada aurora asomando en un claro y hermoso firma­ La zarzuela hace allí de las suyas. mento...... ¡qué hermosa estaba! * Todas las noches se canta en él por todo lo alto y se declama por todo lo bajo. * # El corazón humano es incomprensible, y los -autores de zarzuela más incom­ ¡El ramillete de bodas que se prepara es magnifico! prensibles todavía. D. Carlos Sedaño, hijo de los condes de Casa-Sedaño, ha pedido ya en ma­ No parece sino que todos los dias, al abandonar la cama, se dan de cachetes trimonio á una de las bellísimas hijas de Casa-Flores. con la lógica y el buen gusto. Hé aquí dos casas que formarán una dichosa y feliz manzana. Porque___ veamos si estoy yo equivocado. El último dia de este mes contraerán matrimonio el director de Beneficencia La zarzuela es un género híbrido, un monstruo, que á ser fuerte seria espan­ y Sanidad, D. Ezequiel Ordoñez, con la elegante Srila. Da María Lecaroz. table; pero que siendo como es, débil y enteco, resulta ridiculo. El director de Sanidad, que tan brillante campaña ha hecho contra el cólera, Ahora bien; tomar en serio estas cosas, es el colmo de la ridiculez, es de­ en fuerza de perseguir y anotar casos, habrá terminado por decirse á sí mismo: cir, lo insoportable. —¡Pues me caso! Por esto la zarzuela seria es insufrible, y tan malos los libretos melodramá­ Como es de ene, serán padrinos el señor ministro de la Gobernación v su ticos que para ella se escriben, y la música sinfónica que componen nuestros discreta señora. maestros profesores pseudo-alemanófdos. El jefe va á conferir á su subordinado la gran cruz..... del matrimonio. Lo más natural y dentro de razón seria que, siendo dicho género convencio­ Otrosí: en breve se verificará el enlace de la hija del marqués de Fontanar nal, artificioso .y falso de suyo, se tomase á risa, á broma y á chacota; y que, en con D. Fernando Fontes. vez de escribir San Francisco de Sena y otros abortos por el estilo, se com­ Formarán familia feliz. pusiesen obras como Boceado, El dia y la noche y La Mascota. El Sr. Estéban Muñoz, primer accionista del Banco de España, casa á su Asi nuestros autores darian pruebas de talento, y no tomarían, como toman, segunda hija con el marqués de las Encinas. el rábano por las hojas. La lista seria interminable. De lo contrario, al freír será el reír. Enamorados esposos Por ejemplo, hace pocos dias se estrenó en Apolo la zarzuela en tres actos, que vais de la dicha en pos, mi enhorabuena y que Dios letra de Mariano Pina Domínguez y música de Chapi, titulada El milagro de os haga á todos dichosos. la Virgen, y...... ¿qué ha resultado? que siendo tan discreto y fácil escritor es­ • cénico el Sr. Pina, y tan excelente compositor músico el Sr. Chapi, El milagro • ♦ de la Virgen ha consistido en pasar de su primera representación. Se ha escrito un apropósito cómico para que la Judie destroce el castellano. Y si los escépticos quieren convencerse de que todavía se hacen milagros en De hoy más no se dirá: manos blancas no ofenden, sino: labios hermosos pleno siglo XIX, vayan al teatro de Apolo y se harán cruces de ello. no han menester prosodia.

Madrid, Octubre de i884. Un Madrileño. * « *

La célebre actriz francesa Mad. Judie, ha dado en la corle unas cuantas re­ presentaciones teatrales del género bufo-truanesco, en el que es una especia­ REVISTA DE MODAS. lidad. La Judie, cantando coplas alegres y picarescas, parece una inocente virgen profesa, y cantando el Santo Dios, Santo fuerte, liaría ruborizarse á toda una x los últimos dias del otoño, los árboles del Parque de Ma­ comunidad de monjas infantiles y castas. drid tienen el reflejo dorado de que las hojas se visten para Entre toda la sociedad madrileña que ha corrido al teatro de Jovellanes á morir, y toma todo cuanto alcanza la mirada ese tinte melan­ aplaudirla, la Judie ha distinguido á un torero: Mazzantini. cólico, que armoniza con el alma de la mujer. Por eso el Re­ La actriz ha regalado al diestro un estoque para que descabelle á los toros, y tiro ha estado espléndido todo el mes de Noviembre, y en él Mazzantini ha dado por cuenta propia, y en obsequio de la Judie, una corrida de y en los teatros, algunos salones y no escaso número de bo­ toros en el vecino pueblo de Vallecas. das celebradas, se han lucido atavíos encantadores, que res­ Todo me lo explico, ménos la actitud del público que ha aplaudido como ter­ ponden á todos los géneros y á todos los gustos. La moda cero este dúo flamenco. actual préstase también á esta melancolia de la naturaleza, y para los trajes de —¡Viva la sangre, torero!—como dice en el Circo de Price el clown Tony calle y de pasco, aprovecha todos los verdes oscuros y muertos, todos los marrón Gryce. y todos los de reflejos amarillos. 10 EL ÁLBUM DE LA MUJER

serva aún el privilegio de vestirse de alegres colores en las circunstancias regocijadas Tengo á la vista modelos seductores en dos tonos y en dos telas de un to­ y festivas. Entre aquellas hormigas humanas habíalas de pocos años y buen palmito, ri­ no mismo; v aunque algunos vestidos afectan gran sencillez, la tienen sólo á sueñas unas y alborotadas con la boda, otras quejumbrosicas y encendidos los ojos de llorar, los ojos de padres y maridos, es decir, á los ojos profanos, porque yo, aunque con la despedida. Media docena de maduras dueñas las autorizaban, sacando de entre el por todas partes busco en la moda actual la sencillez, la modestia tan decan­ velo del manto la nariz, y girando á todas partes sus pupilas llenas de experiencia y ma­ tada por mí y tan del gusto de mis lectoras, debo confesar que no la encuen­ licia. Todo el racimo de amigas se apiñaba en torno de la nueva esposa, manifestando tro. Inveníanse las trencillas como adorno. ... No puede inventarse nada más la pueril y ávida curiosidad que despierta en las multitudes el espectáculo de las situacio­ humilde; pero en cambio las hacen tejidas con oro, plata, acero, y si además nes supremas de la existencia. Se estaban comiendo á miradas a la que mil veces vieran, adornan terciopelo ó paño, resulta un vestido suntuoso. Los brochados, que á la que ya de memoria sabían: á la novia, que con el traje de camino se les figuraba son la nota dominante de la estación, en abrigos y trajes, les prestan también apariencias de un lujo extraordinario; y por eso repito que los trajes que afec­ otra mujer, muy diversa de la conocida hasta enlónces. Contaria la heroína de la fiesta unos diez y ocho años; aparentaba ménos, atendiendo al mohín infantil de su boca y al tan sencillez, es únicamente para engañar á los incautos. Como vestidos de combinación, he podido ver uno para jovencita, en cache­ redondo contorno de sus mejillas, y más, consideradas las ya florecientes curvas de su talle, mir color de nuez y terciopelo azul oscuro; la falda, color de nuez, se abría al y la plenitud de robustez y vida de toda su persona. Nada de hombros altos y estrechos, costado sobre otra plegada con quilla de terciopelo azul, y las dos orillas de la nada de inverosímiles caderas como las que se ven en los grabados de figurines, que traen falda superior, una se adornaba de terciopelo y la otra de trencillas marino y á la memoria la muñeca rellena de.serrin y paja; sino una mujer conforme, no al tipo con­ plata; la chaqueta, de terciopelo y aldeta corla plegada por detrás, llevaba los vencional de la moda de una época, pero al tipo eterno de la forma femenina, tal cual la delanteros abiertos sobre chaleco del mismo terciopelo con escote cuadrado y quisieron natura y arte. Acaso esta superioridad física perjudicaba un tanto al efecto del ocupado por camiseta de surah azul, y ribeteaban trencillas el chaleco en peto, caprichoso atavío de viaje de la niña: tal vez se requeria un cuerpo mas plano, líneas cuello alto y manga. Este vestido encantador le he admirado en una de las más duras en los brazos y cuello, para llevar con el conveniente desenfado el traje semi- bodas efectuadas el mes anterior, y diréis:—¡Traje de lana en una boda!— masculino de paño marrón, y la toca de paja burda, en cuyo casco se posaba, abiertas Sí tal; hoy los trajes de lanas combinadas con terciopelo y con brochados, se las alas, sobre un nido de plumas, tornasolado colibrí. Notábase bien que eran nuevas llevan á los actos de mayor etiqueta. Como traje de calle, acaba de traer un para la novia tales extrañezas de ropaje, y que la ceñida y plegada falda, el casaquin que modelo la casa de Aguado, en la calle del Carmen, que merece describirse: modelaba exactamente su busto, le estorbaban como suele estorbar á las doncellas en el es de paño azul oscuro, abierta la falda por delante sobre delantal de seda á primer baile la desnudez del escote: que hay en toda moda peregrina algo de impúdico rayas azul y oro, puestas atravesadas, y los dos paños primeros recogidos en para la mujer de modestas costumbres. Además, el molde era estrecho para encerrar la paniers de punta, que toca al borde del delantal, y se esconden debajo de la bella estatua, que amenazaba romperlo á cada instante, no precisamente con el volúmen, parle de atrás, plegada á cañones. El cuerpo, abierto sobre tela rayada igual, sino más bien con la libertad y soltura de sus juveniles movimientos. No se desmentia en se adornaba con dos hileras de botones, prolongándose en doble aldeta. Cha­ tan lucido ejemplar la raza del recio y fornido anciano, del padre que allí se estaba derecho, queta con postilion, preciosamente drapeado en conchas, que dejaban ver un sin apartar de su hija los ojos. El viejo, alto, recto y firme, como un poste del telégrafo, forro de raya azul y oro. y un jesuíta, bajo y de edad mediana, eran los únicos varones que descollaban entre el con­ El vestido de salon, para comidas y conciertos, se hará de cola, pero de cola sabido hormiguero femenil. muy distinta de las ya vistas hasta hoy: es un gran lazo, lazo monumental con Al novio le rodeaba hasta media docena de amigos, y si el séquito de la novia era el dos lazadas de todo el ancho de la tela, que caen graciosamente hácia abajo para eslabón que une á clase média y pueblo, el del novio locaba en esa frontera, en España, modelar el pouf, y debajo sale la cola en un solo paño cuadrado, suelto y forrado tan indeterminada como vasta, que enlaza á la mesocracia con la gente de alto copete. de raso del color de los adornos. Esta cola, estrecha y lisa, es en extremo gra­ Cierta gravedad oficial, la tez marchita y como ahumada por los reverberos, no sé qué ciosa, y debajo de ella, la falda, redonda, necesita su adorno completo, porque la inexplicable matiz de satisfacción optimista, la edad tirando á madura, signos eran que de­ cola se mueve con demasiada facilidad. No hay para qué decir que puede po­ notaban hombres llegados á la meta de las humanas aspiraciones en los países decaden­ nerse y quitarse, según lo exijan las circunstancias. Para sociedad se emplean tes: el ingreso en las oficinas del Estado. Uno de ellos llevaba la voz, y los demás le mucho el terciopelo con encajes y los brochados con raso brillante, enriquecidos manifestaban singular deferencia en sus ademanes. con pasamanerías y bordados en cristal de colores: este adorno de cristal, em­ (Continuará.) pleado con economia, es de gran efecto en los salones, pero recomiendo mucho la economía, porque el exceso de cristal conduce á la chocarrería. He reci­ bido un modelo para traje de baile, cubierta la falda de raso mirlo por tres encajes blancos, ligeramente sostenidos por bieses muy dobles de raso, que re­ EXPLICACION DE LAS ILUSTRACIONES. mataban en lazos á la izquierda; gran manto, liso y majestuoso, de terciopelo mirlo, forrado de raso, y cuerpo de petos, hecho en terciopelo, abierto sobre fichú de encaje, que sale de debajo del delantero derecho á plegarse sobre el i María Barkani, Actriz alemana.—Esta insigne actriz ha alcanzado una reputa- izquierdo con un lazo.— ¡Qué magnificencias! me diréis. Sin duda olvida nues­ > cion sólida y envidiable, colocándose á la altura de las primeras actrices del mundo. Ma- tra cronista que no todas sus lectoras son duquesas...... —¡Qué queréis! El ; ría Barkani es muy bella, y se halla dotada de majestuosa presencia, lo cual le es muy deber de la cronista es hablar de todo, y de lo más belloyrico,más; pero luego, > favorable para su carrera. Sabe unir los dos grandes elementos de la perfección en el aparte, como en secreto, puede decir á las más modestas de sus lectoras: ¡ No > arle escénico, la delicadeza de sentimiento y la delicadeza de observación; el caudal na- es la riqueza lo que constituye la elegancia! Una tela modesta, una hechura irre­ ; tural y el propiamente artístico, sin cuya unión no puede haber realidad escénica. María prochable, v un carácter sin ambición ni envidia, hermana la elegancia con la i Barkani goza de grandes simpatías en Alemania, por su talento y su lino trato. tranquilidad y la hermosura. ; El Presidente de la República y sus Ministros.—No nos es posible dar ■ una biografía de cada una de las personas que constituyen el Gabinete del General Por- Madrid, Diciembre de 1884. Joaquina Balmaseda de Gonzalez. > tirio Díaz, pues ni el espacio ni la índole de nuestro periódico lo permiten, pero sí cum- > pie á nuestra imparcialidad manifestar que los actuales ministros con cuyos retratos en- : galamos nuestro número, tienen perfectamente justificada la alta reputación que les rodea. : El Sr. Dublan, es sin duda uno de los más sabios y entendidos jurisconsultos de México; : el Sr. Baranda es un abogado de clarísimo talento y elegantísima palabra; el Sr. Maris- UN VIAJE DE NOVIOS. > cal, por sus elevados méritos, viene ocupando desde los tiempos de Juárez el encargo de

NOVELA ORIGINAL : Ministro de Estado unas veces y Plenipotenciario otras; elSr. Romero Rubio posee no : lables facultades, y tiene prestados buenos servicios á su país; acerca de los méritos del POR EMILIA PARDO BAZAN. > General Carlos Pacheco ya nos hemos ocupado en nuestros números del año anterior, y < el Sr. General Ilinojosa es un antiguo y aguerrido militar que en otra época ocupó como I > hoy, la carta de guerra. ; La elección de estas personas, hecha por el General Diaz, ha sido muy bien aceptada. ue la boda no era de gentes del gran mundo, conocíase á tiro de ballesta, ------:------á la primer ojeada. No hay duda que los desposados podían alternar con la más selecta sociedad, al ménos por su aspecto exterior; pero la mayo- FELICITACION. ría dcI acompañamiento, el coro, pertenecía á la clase média, en el límite ~ en que casi se funde con la masa popular. Rabia grupos curiosos y dig­ $ El Album de la Mujer saluda muy atentamente á sus suscritores en el nuevo año, y nos de examen, ofreciendo el andén de la estación de León golpe de vista > la Directora envía las mas expresivas gracias á los autores de los galantes y sentidos te- muy interesante para un pintor de género y costumbres. ; legramas que ha recibido en el primer dia del año. Ni más ni ménos que en los países de abanico cuyas mitológicas pin­ turas representan nupcias, se notaba allí que el séquito de la novia lo componian'líembras, y sólo individuos del sexo fuerte formaban el del novio. Advertíase BRILLANTE FIESTA. asimismo gran diferencia entre la condición social de uno y otro cortejo. La escolta de la novia, mucho más numerosa, parecía poblado hormiguero: viejas y mozas llevaban el ; Espléndido lia sido el baile con que la muy estimable y conocida familia Campero ha sacramental traje de negra lana, que viene á ser como uniforme de ceremonia para la mu­ obsequiado á sus amigos en la noche del Juéves; la Directora de este periódico ofrece jer de clase inferior, no excnla, sin embargo, de ribetes señoriles: que el pueblo con­ i una detallada revista de la suntuosa fiesta para el próximo número. ANUNCIOS PROSPECTO. EL ALBUM DE LA MUJER EN 1885.

Deseosos de corresponder á la buena acogida que se ha dispensado á nuestro periódico, estamos dispuestos á hacer los mayores esfuerzos para mejorarlo. Desde el próximo mes de Enero, el Album SERÁ DE GRAN TAMAÑO y los dibujos finísimos. El Album de la Mujer es una ilustración Hispano-Mexicana que no se ocupa de política, y tiene por objeto la pro­ pagación de lecturas morales para las familias, el desenvolvimiento del amor á lo bello y la reproducción de retratos, paisajes y monumentos de cuanto célebre exista en Europa y América. Este periódico hace conocer las mejores novelas de autores mexi­ canos y españoles, con objeto de desterrar lasjcorruptoras novelas, que tanto perjudican á la juventud. Nuestro periódico aumen­ tará la parte literaria con secciones científicas, religiosas, variedades, galería de tipos de todos los países, y biografías. Darémos crónicas mexicanas, parisienses y madrileñas, y publicarémos todo lo notable que se lea en el Ateneo de Madrid. El Album de la Mujer, que será de GRAN TAMAÑO, rico papel y parte tipográfica á la altura de las primeras publicaciones europeas, no au­ mentará de precio á pesar de sus notables mejoras. CONDICIONES DE LA SUSCRICION. El Album de la Mujer se publicará todos los domingos, resultando cuatro y á veces cinco números mensuales. La suscricion se paga por trimestres adelantados, costando ésta UN PESO cada mes en la Capital, y UN PESO CINCUENTA CENTAVOS en los Estados, franco de porte. Los números sueltos, VEINTICINCO CENTAVOS en la Capital, y en los Estados TREINTA Y SIETE Y MEDIO. Números atrasados, CINCUENTA CENTAVOS.

■A, . W W i A rra i. YcA

Atoaje i ix/N-j OBBA ORIGINAL

DE CONOEPCION GtIMENO DE Flaquer..

ÍNDICE DE LAS MATERIAS QUE CONTIENE EL LIBRO;

Biografía. > Lai Madre de San Fcrnando. > La Madre de Schillcr y la Madre de . La Madre de Lord Byron y la Madre de Prologo. > A« Madre de Coriolano. > Goethe (paralelo). Lamartine (contraste). La Madre de Chateaubriand. > La Madre dei futuro rey de Porlugal. > La Madre de San Luis. La Madre de los Gracos y la Madre de La Madre de Constantino. > La Madre de IFashinglon. > Im Madre de Pielro Cossa. Nerón (contraste). La Madre de Rafael. $ L,aMadre de Napoleon. > La Madre de Fernando el Emplazado.

ILUSTRACIONES: — Retrato de la autora.— Retrato de la Madre de Constantino.— Retrato de la Madredc San Fernando.—Retrato de la Madre del futuro rey de Portugal.—Retrato de la Madre de Napoleon.—Retrato de la Madre de San Luis.—Retrato de la Madre de Lamartine.—Retrato de la Madre de Goethe. Este libro está á la venta en las principales librerías de México, y en la redacción

NACIONAL MONTE DE PIEDAD. LA ELEGANCIA í LA IMPERIAL Vergara 11, y a ¿ISTURIAO AVISO.—Se participa ni público que las prendas empelladas en B ; BAJOS DEL TEATRO NACIONAL la Casa Matriz y sus sucursales en Junio de 188-1, se rematarán el presente mes en el Orden siguiente: ----- Fabrica, } MÉXICO {££5 Casa Motril.—Ropa...... Jntree ti Libertad núm. Objetos varios...... Juhtt tS GRANDES ALMACENES DE CALZADO Alhajas...... minóles ti Sucursal io° l.-Scguoda de Mesones número U...... ¡Ane» t9 1.a comían te protección que el público en general dispensa á mi* acreditad'a puro« Y DEPÓSITO DE EFECTOS CONCERNIENTES AL RAMO. n® 2,—Primera de la Merced números...... Sábado t7 y cigarro« El Borrego y Ln Asturiana, obliga mt gratitud, ofreciéndole «egulr n®S.—Calle de Chararrts número 31...... ¡Artes IS empleando los mejore« tabaco« que «e cosechan en la República.—En cuanto al | n? 4.—Calle de Sao Aodrís número H...... Vífrnti 19 para cigarrillo«, «dio «e emplea el de la marca KaraSa r México, reputado co RAMON SOBRINO. n?5.—Ksqclna de Sao José de Gracia y Puente dejerus. Sábado tí mejor que ae elabora en Barcelona Para loa puros de perilla que ae elaboran ni C — Kiquloa de las Morasy Sei uleros de Santo Domingo Há'ln » niiirna fábrica, noomiiiré metió alguno por costoso que sea, no aúlo para que co Depósito general: n® 7.—Esquinado l^on y Sao Loreoto...... Fiémes t6 ven la aceptación que boy tienen, aino para que aean los únicos que se c n«um> ni 8 - Esquina del Zapo y Callo Aocba...... Sábado 90 esta piara. I)e la bondad de éstosmo da la prueba los muchos pedidos que de El MEXICO.—Callo del Cinco do Mayo núm. 5.—MEXICO. co Puebla...... Hárte 93 recibo La venta que blcodemls establecimientos El Boanxoo r SuccasaLdela m». me permite dedicarle más atención á la citada fábrica; y tanto los cigarrillos pi­ Kilos dos Establecimientos, los mayores que le conocen en el ramo, tienen toda Las personas Interesadas pueden ocurrir li desempeñarlas, refren­ cadura de bebra estilo francés, como los do tabaco cernido, son, aln discusión, loa ela­ clase de callado, con perfección, elegancia, buenos materiales y siempre de última darlas O ft presenciar su venta conforme A lo estipulado en los billetes; borados con más limpíela cu esta capital. -Sigue el expendio de tedia mis labrados moda. Hay en ellos un salón, especial para señoras, donde puedan con libertad en concepto de que los remates comenzarán en la Casa Matriz A las al precio de fábrica, en la calle de Capuchinas núm. 12 y cu las citadas tiendas del probarse el callado. CU*Los precios muy equitativos.' diez, y en las sucursales á las nueve de la mañana, con la concurren­ Boas too v Sucursal de la misma, propiedad estas dos últimas do los Sres. Basagoitl continuación del gran Almacén LA ELEGANCIA, se encuentra un grao Dcpd- cia que hubiere, continuándose los días siguientes A las lioras de des­ y Potada, á quienes be rendido los referidos establecimientos con esta fecha. e pieles extranjeras y del pal«, asi como lodo lo concerniente al ramo de rapa- pacho. México, Octubre 1? de 183«.—Rxmiuio Nouaos, propietario. : en pieles extranjeras, precios de Curopa; en pieles del país, precios de fábrica. México, Enero Io de 1883.-V* Bp, Fuentes y MutUz.-A. VUlamil.

Ferrocarril Interoceánico de ACAPULCO, MORELOS, MEXICO, IROLO y VERACRUZ.

Itinerario de los trenes desde el dia 1Í2 de Setiembre de 1884, hasta nueva disposición.

LINEA DE MORELOS. LINEA DE IROLO.

TREN MIXTO DE Tren de Polque Tren Mixto de TREN MUTO DE TRES MIXTO DE TREN MIXTO DE Tren Mixto Tren de Pulque MEXICO ESTACIONES. TAUTEPEC A de México & México á ESTACIONES. OZUMBA A MEXICO de Calpulalpam de la Luz á MELICO A 0ZUMBI A ÏAUTEPEC MEXICO. la Lux Calpulalpam á México México Llega Llega Sale Llega Sale Llega Sale Llega Sale Sale Llega Salo Llega Sale llega Sale ...... México (s. Lázaro)...... 9.40 S.OOA.M 6, JO A M ...... México (s. Lázaro)...... 5.10 10.20 J.OO P.M 8.00 A.M 4-4S 8J5 7.00 ...... REVES...... 9”3S s’L ...... REYES...... 4.00 4?io 8.50 90S 8- 45 . 7-05 4-35 4-40 9.20 3- 3 S 3- 50 8.50 9.30 8.00 ...... TEXCOCO...... 9.IO ...... AYOTLA...... J.40 8.20 8.J5 9- 4S 7-4S 3-40 3S5 8.15 8.jo 4- 05 4’5 9°S 3-45 10.05 10.10 5.20 8.25 ...... -.TBPETLAXTOC...... -compaSia-...... 3.10 3»5 7.50 S.05 3->S 3.20 7-4S 7-SS 4-3° 4- 45 9-*S 9-35 IO.45 10.50 8.55 9.00 ...... SAN ANTONIO...... 10.20 10. JO ...... TENANGO —...... 2.25 2.40 7-30 2.40 MS 7.C0 7.05 5.J0 5- 45 11 10 11.20 9.20 9. JO ...... METEPEC...... 2.10 6.10 6. jo 10.55 ii.10 ...... A MECA MECA...... 1.40 1.55 6.40 6.5S 6.15 6. jo 12.CO 1.00 6.00 11.40 11.50 9.50 9-S5 ...... OTUMBA...... «■So 7.00 II.«0 12. JO ...... OZUMBA...... 12.00 12.10 «-SS S-45 s-ss ...’...... NBPANTLA-...... 10.00 10.15 10.05 10.10 ...... —SOAPAYUCA...... «•35 1.40 5.20 S.jo 1-35 140 1.00 10.40 10.50 ...... -.IROLO-...... 8.20 8. jo 114S I2.S5 «-OS 4.20 4-35 Mí 1-55 1.20 I-3S 11.05 11.20 ...... SAN LORENZO...... CUAUTLA...... 7.20 , 735 12. JO 12.40 3-45 4.00 3-30 3-45 11.35 ...... CALTULALPAM...... 12.15 4.50 ...... — VAVTBPEC-...... 6.00 A.M 3.00 3-00 A.M...... -LA LUZ-...... 2.

SOTA.— El tren Mixto, línea do Irolo, se detiene en el crucero de San Vlcento p»ra tomar y dejar pasajeros y carga. El tren de Pulque lleva basta Tcxccco coches de primera y segunda para pasajeros, y salede la Estación "Peralvlllo" y llega á la misma. México, Setiembre de 1681.—D. do Peón, Supcrlntente General—Precios do paanjo.-iínea do Morolos.— México á Yautcpec, 1» clase, $3.22; 2» clase, $1.61—Linea do Irolo.—Méxloo á Calpulalpam, 1» clase, $ 1.87; 2» clase, $0 67. ANUNCIOS COMPAÑIA MEXICANA TRASATLANTICA LINEA DE INGLATERRA LINEA DE INGLATERRA

DIRECCION DIRECCION CAPUCHINAS CAPUCHINAS NUM. 10 MÉXICO MÉXICO

Vapores correos:

Viajes íueusnales entre LIVERPOOL y VERACRUZ, con escnla en el Havre, Suntauiler, Corulla, Sta. Cruz (le Tenerife, Habana y Progreso.

AGENCIAS:

Baring Bros A Ci...... Londres. I Bd. Santos & C.. . Pans. [Martin______de Carnearte...... Cornil». I Santa Crui de Oviedo 4 CJ. Progreso. Liverpool. Angel 61 Valle. ■ Santander. 2'„Gbirlanda’—.L Z------Hermanas. ---- 8ta. Cru» de Tenerife, forstall, Clayton 4 CJ....:. New Orlean». H. Genestal A Délions. Havre. | Angel Palacio .. - Bilbao. |J...... Ï. Avendafio 4 CJ...... Habana | C. A. Martine« 4 CJ...... Veracruz. Velaste y Compañía..?...... Gijon.

PASA JE.-Se darán boletos de ida y vuelta de cámara, valederos por doce meses, con el 25 por ciento de rebaja sobre el precio de la tarifa vigente en el puerto donde se tome el billete. La misma rebaja se concede á los pasajeros para las puertos Intercolonlales,siendo valederos los boletos por dos meses.—BOLETOS DE FAMILIA.—A toda familia que de una vez tomase por lo ménos cuatro pasajes enteros de cámara, se le rebajará e1 15 por ciento sobre su Importe total, siempre que éstos consten de un solo billete. Los criados no formarán parte integrante de la familia. Esta rebaja no comprende las ventajas que se conceden á los boletos de Ida y vuel" ta — MENORES DE EDAD.—A los níflosde ménos dé 3 aflos se les concederá pasaje gratis; los de 3 aflos cumplidos á 8 por cumplir, pagarán la cuarta parte del pasqje: los de 8 aflos cumplidos á 12 por cumplir, pagarán la mitad del pasaje; y los de doce aflos para arriba pagaráu pasaje entero. Se concede una litera para dos niQos. pagando cada uno medio pasaje, y para cuatro niños pagando cada uno un cuarto de pasaje. Dado el caso de que una familia tuviese varios nlDos de ménos de tres aflos, tan sólo uno de ellos gozará de pasaje gratis, debiendo pagar los demas un cuarto de pasaje cada uno.— CRIADOS.—Los criados de los pasajeros pagarán los precios fijados por la tarifa correspondiente á los pasajeros de entrepuente. Las criadas pagarán los dos tercios del pasaje de cámara, relativo á la clase que hubieren tomado las personas á cuyo servicio viniesen.—CLASE DE MONEDA.—Los boletos de pasaje que se tomaren en México para las Antillas, Estados-Unidas y Europa, serán pagaderos en pesos fuertes mexicanos, con exclusión de cualquiera otra moneda. Los boletos que se tomaren en Europa y las Antillas para México, serán pagaderos en moneda equivalente á pesos Alertes de á cinco francos 6 cinco pesetas cada uno.' Oportunamente se fijarán los días de salida de cada uno de los puertos en que toquen los vapores de esta línea, así como los puertos en que han de hacer escala á su viaje de retorno á LIvetpooL Para otros informes, di­ rigirse á la Dirección, Capiicliluan ndiu. 10, y á los Asente*.

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