DICCIONARIO
DE
SINÓNIMOS CASTELLANOS,
POR
SL G-EITSRAL DE Β RIG· ADA
i2y. cr. ty. c¿e 'úz ibatátna,
INDIVIDUO DE LAS ACADEMIAS ESPAÑOLAS DE LA LENGUA
Y DE LA HISTORIA.
MEXICO.
IMPRENTA DE VICENTE GARCÍA TORRES. calle del Espíritu Sar.!t> Num. 2. 1845. Nadie podrá reimprimir este Diccionario, sin previa licencia de eu autor, In magma et volume sat est.
ACASO, si la amistad no se hubiera anticipado á poner un títu lo á la presente colección, no se vería ésta condecorada con el que lleva á su frente, porque en verdad que la voz DICCIONA RIO promete mucho mas de lo que puede dar una diminuta compilación de trabajos que en su mayor parte manifiestan la desconfianza con que los publicaron sus mismos autores. Si aun es tiempo de corregir un yerro involuntario séame lícito ofrecer al publico esta colección como un simple Ensayo forma do únicamente con el fin de conservar reunidos y sujetos á cier to orden, los diversos trabajos de los escritores que mas espe cialmente se han dedicado al examen analítico de los sinónimos de nuestra lengua; y sírvame también de disculpa de todos los defectos que se noten en este Ensayo, la consideración de ser una empresa enteramente nueva entre nosotros. Esta circuns tancia, ademas de otras muchas, me obliga á mirar como úti les y aun necesarias, algunas indicaciones preliminares, que no son mas que deducciones ó repeticiones de las doctrinas de va rios escritores que han dilucidado esta materia con todo el acier to posible. Si por sinónimo entendemos cualquiera voz que siendo di/eren (Π) te de otra en su forma material, tiene exactamente el mismo signi- ficadoy desde luego podemos asegurar que no hay sinónimos en la lengua castellana ni en ninguna otra de las conocidas, por que como dice muy bien Dumarsais, esto seria haber dos len guas distintas en una misma lengua, y la naturaleza quiere que una vez que se ha encontrado el signo propio de una idea, no se busque otro nuevo para expresarla, porque no solamente se ria superfluo, sino embarazoso en la práctica. Mas si entende mos por sinónimo el sustantivo ó el adjetivo con que designa mos las voces que teniendo entre ellas grande conformidad y se mejanza en su sentido general, ofrecen en su acepción particular diferencias verdaderas y esenciales aunque mas ó menos ligeras, es evidente que la lengua castellana excede á todas las vi vas en sinónimos de esta especie, y que en ellos funda gran parte de su admirable riqueza, porque la riqueza de una len gua no consiste en tener muchas voces distintas para expresar una sola y misma idea, sino en tener muchas voces para expre sar muchas ideas distintas, esto es, hasta las modificaciones me nos perceptibles que pueden dar á una idea el entendimiento y la imaginación. Partiendo de este principio, no podía menos de tener un numero de sinónimos, considerable en gran manera, una lengua como el castellano, que reconoce por orígenes prin cipales las lenguas latina^ gótica y arábiga, de las cuales tomó desde un principio y conserva actualmente un crecido caudal de voces que siendo en su origen sinónimos perfectos, esto es, expresando cada una en su respectiva lengua la misma cosa ó idea, vinieron después á ser en el castellano moderno signos de modificaciones de la idea común. Esto puede probarse con in finitos ejemplos; v. gr., la voz al-muhad en la lengua arábiga, significaba lo mismo que la voz coacinus en la baja latinidad; el castellano conservó ambas voces, pero señalando á cada una distinto oficio, hizo que expresaran las diferentes ideas que nos inspiran hoy las voces almohada y cojin: al-cuzet, entre los ára bes significaba lo mismo que acetarium entre los latinos; actual- ( ΙΠ ) mente expresamos nosotros dos cosas diferentes por medio de las voces alcuza y aceitera, derivadas de aquellas: con la voz al mirez tomada del árabe (almihraz), y con la voz mortero, toma da del latin (mortarium), designamos dos cosas diferentes; y lo mismo se observa en las voces cisterna, algtbe y alterca: cama, lecho y catre: albergue, hospedería, fonda, meson y venta, 8çc. Así es, que para expresar solamente las modificaciones de la idea ofender tiene el castellano todas estas voces, Afrenta. Ignominia. Agravio. Improperio. Baldón. Injuria. Contumelia. Insulto. Convicio. Ofensa. Denuesto. Oprobio. Desahogo. Palabrada. Deshonra. Ultraje. Desvergüenza. Vilipendio y otras muchas. legrarse tiene la lengua castellana Alborozo. Fiesta. Alegría. Francachela. Bureo. Frasca. Complacencia. Gozo. Contento. Gusto. Contentamiento. Holganza. Chacota. Holgorio. Delectación. Holgueta. Delectamiento. Holgura. Deleitabilidad. Jaleo. Deleite. Jubilo. Delicia. Placer. Fandango. Regocijo. Festeío. Uegodéo, &c. y pues que seria un trabajo interminable y superfluo citar mas ejemplos, me limitaré á recordar el que nos ofrece la estrofa Ιδ.* (IV) de la conocida composición poética del Maestro Gonzalez, inti tulada El murciélago alevoso, en la cual vemos acumuladas mu chas de las modificaciones de la idea dañar; Te puncen y te rajen, Te tundan, te golpeen, te martillen, Te piquen, te acribillen, Te dividan, te corten y te rajen; Te desmiembren, te partan, te degüellen, Te hiendan, te desuellen, Te estrujen, te aporreen, te magullen, Te deshagan, confundan y aturrullen. Pero si por la diversidad de orígenes es tan rica en sinónimos la lengua castellana, no lo es menos por la variedad de sus ar moniosas terminaciones, en las voces derivadas de un mismo origen; así es que hay diferencia muy considerable entre Acometimiento y acometida. Ardimiento y ardor. Convencimiento y convicción. Fingimiento y ficción. Honra y honor. Encantamiento, encanto y encantación. Significado y significación. Observancia y observación. Brillo y brillantez, ímpetu é impetuosidad. Fuerza y fortaleza. Fortificar y fortalecer. Ejercer y ejercitar- Dulzor, dulzura y dulcedumbre. Espesor y espesura. Verdor y verdura. Grosor, grosura y gordura. Peso, pesadez, pesadumbre y pesantez. Contentamiento y contento. Retardo y retardación. Salvamento y salvación. Dolor y dolencia. Consuelo y consolación. Queja, quejido y quejumbre. Pérdida, perdimiento y perdición. Mancha, mácula y mancilla. Albor, albura y blancura, &c Es cierto que todas estas y otras muchas voces aparecen en el Diccionario de la Academia española como equivalentes rigo rosos respectivamente unas de otras; pero esto consiste en que la Academia se contenta con dar la explicación de las voces re firiéndola á la idea general á que pertenecen, y no á la modifi cación que indican, porque en verdad que no seria empresa muy desembarazada descender á explicaciones y análisis, las mas ve ces prolijos, y otras enteramente metafísicos, en un Diccionario demasiado copioso por su propia naturaleza, y destinado al uso frecuente de toda clase de personas. Estas mismas consideraciones hacen mas sensible la escasez de literatos españoles que han dedicado su ingenio á tan útiles tareas. Apenas se cuentan cuatro 6 cinco filólogos de quienes pueda decirse que han trabajado con acierto, y aun estos á pe sar de su erudición y de su exquisita diligencia todavía dejan un vacío tan grande en sus investigaciones, que debemos mi rarlas únicamente como gérmenes que necesitan de otro auxi lio para llegar á ser fecundos y productivos. Pero no culpe mos del mismo modo á todos aquellos apreciables literatos: sus trabajos debian resentirse del atraso en que tal vez se hallaban ciertas ciencias en la época y en el pais en que algunos de ellos escribían. La metafísica principalmente, y la ideología, ciencia nueva, son las principales antorchas, á cuya luz debe entrar el filólogo en el oscuro laberinto de la sinonimia de cualquiera len gua: sin el auxilio de una y otra ciencia es imposible, absoluta mente imposible, poder fijar la verdadera y exacta diferencia de (TÍ) las voces, y por consiguiente, hacer concebir la idea al entendi miento con la perfección y claridad debidas. Entre los mu chos ejemplos que pudieran citarse en prueba de esta verdad eterna, tomemos el que nos proporciona la diferencia que esta blece March entre las voces acción y acto (pág. 5). Por no ha ber acudido á la metafísica este escritor confunde las ideas dán donos como causas los efectos. Asienta que "acción se dice in- „diferentemente de todo cuanto se hace común ó extraordinario; „y acto, solamente de lo que se hace notable" La metafísica le hubiera subministrado una explicación menos expuesta al error, haciéndole ver que el «cío pertenece al pensamiento, y la acción pertenece á la obra y expresa mas bien el modo de ejecutar el pensamiento: por consiguiente los actos son operaciones inte riores del alma, y las acciones son operaciones exteriores. Esta es la razón porque decimos acto de contrición, de fe, de esperan za, fyc, aunque no se manifieste por medio de demostraciones exteriores; y decimos dejar á uno sin acción, esto es, sin movi miento corporal, y no, dejarlo sin acto. Es cierto que solemos decir un acto de ira, un acto de irreflexión, &c·; pero en este caso referimos la idea al movimiento interior del ánimo que fué la causa de la acción, esto es, del movimiento material y exterior del cuerpo. No puede servir de disculpa á March en este caso haber traducido literalmente al abate francés Girard, porque el que adopta una doctrina agena se hace responsable de ella, y mucho mas si la publica como suya en un tiempo en que los conocimientos humanos permitían rectificarla. Pero por defectuoso que sea el Ensayo que hoy ofrezco á las personas estudiosas, siempre les proporcionará una utilidad in negable. Ya habia dicho Cienfuegos en el prólogo de su tra tado de sinónimos, al orador, al filósofo, al facultativo que tienen que dar á su persuasion ó á su explicación la mayor precision, energía y claridad, les conviene elegir aquellas voces que desmenu cen, por decirlo así, las mas pequeñas modificaciones de las ideas generales que apenas se distinguen en el uso común: y en estas (VII) pocas palabras encerró Cienfuegos todo el fin y toda la utilidad del estudio de la sinonimia, porque no es arbitraria la elección de voces para representar las ideas: la naturaleza quiere que modifiquemos aquellas según modifica á éstas el pensamiento, so pena de no ser entendidos con la perfección que deseamos, ó de incurrir en ambigüedad y confusion. Bien conocía el va lor de las voces castellanas el elegante y armonioso escritor español que decia—eran muy raros los denuestos, las injurias y las murmuraciones, porque solia en aquel ejército amanecer el es carmiento al mismo tiempo que la osadía; y asi ni quedaba vislum bre de injusticia, ni destello de capricho-, ni hallaba pábulo la alta nería, que son los vicios que mas frecuentemente campean en los ejércitos, y mas señorean la condición marcial La condición apocada pronto pasa de pusilánime á débil, y del menosprecio al vilipendio. No es creíble que el que esto escribía, haciendo así brillar la pomposa riqueza de la habla castellana emplease sin intención meditada y solamente por pura casualidad ó capricho las voces denuesto é injuria; vislumbre y destello; campear y se ñorear; altanería en lugar de altivez, soberbia ú orgullo; condi ción, y no carácter, genio, ó índole natural; apocada y pusiláni me; menosprecio y vilipendio. El que lee este trozo, modelo de facundia y de energía, concibe sin el menor esfuerzo las dife rentes ideas de que se hallaba poseído el escritor, y que pintó con toda la precision posible por medio de aquellas voces sinó• nimas, las cuales, son digámoslo así, los matices que precisamen te necesitaba el cuadro para quedar perfecto. Si en todas las naciones es importante y necesario el estudio de los sinónimos de sus lenguas respectivas, entre nosotros es todavía de mayor y mas forzosa necesidad; porque vemos la de cadencia y perdición á que nuestra incuria ha dejado llegar la lengua de nuestros mayores, la lengua mas rica de cuantas hoy se hablan en el universo, la mas rica en número de voces, en diversidad de terminaciones, en variedad de acentos, en inflexio nes y giros, en modismos y propiedades; la lengua, en fin, que ( vin ) en opinion de Carlos V, era lamas propia para hablar á Dios. Ya es pues tiempo de que empecemos á reparar tan grave fal ta que influye en gran manera, y mucho mas de lo que vulgar mente se cree, en la suerte de las naciones, porque el cultivo de la lengua propia, llave de toda ciencia, es uno de los indicios mas seguros, no solo de la civilización y cultura, sino aun del carácter de todo pueblo. Y así como nada es mas á propósito para apreciar una lengua que el conocimiento de su riqueza, así también nada contribuye mas á este conocimiento que el examen analítico de las voces, cuya parte principal es el estu dio de los sinónimos. A fin de facilitar este estudio, haciendo palpable al mismo tiempo su importancia, me ha parecido opor tuno poner al frente de este Ensayo por via de introducción al gunas ligeras observaciones pertenecientes al mecanismo de las lenguas en general puesto que de él depende la existencia de los sinónimos en todas ellas. Pero antes es necesario aclarar una aserción que se halla autorizada en este mismo Ensayo, por uno de los filólogos españoles que en él se citan, y la cual podría causar dudas ó inducir en error á muchos lectores. En el artí culo Calidad, Cualidad (pág. 34), dice Jonama que el buen uso y no la etimología es el que debe decidir sobre la acepción de las voces. Esto es una verdad hasta cierto punto, y debe servir de regla siempre que el buen uso decida sin dejar lugar á ningu na duda; mas en el caso contrario, los principios etimológicos son la única guia que puede conducirnos con seguridad en el camino de las investigaciones, aunque no debemos seguir la eti mología á ciegas, sino empleando las reglas de la crítica. He aquí uno de los tropiezos que mas pueden embarazar al estu dioso. ¿Cuál es el buen uso? Todos hablan de él, pero pocos indagan las condiciones que se requieren para que un uso me rezca la calificación de bueno. A muchas personas basta ver una voz ó una frase algún tanto generalizada en el trato fami liar, para admitirla como buena, y de este modo confunden el buen uso con el abuso, ó con la vulgaridad: á otras es suficiente ( κ) la autoridad de cualquier escritor acreditado que mas les pla ce, y se exponen á tomar por regla segura, tal vez el descuido, o á lo menos la licencia apenas tolerada. El medio de evitar ambos inconvenientes es hacer uso del raciocinio natural. Dos son los modos de hablar ó de producirse que tienen los hom bres cultos: uno por convencimiento, otro por imitación. Los que emplean el primero, usan las voces que el estudio, la obser vación, el conocimiento del mecanismo de las lenguas y la cien cia en general, les presentan como mas propias y necesarias para pintar las ideas con la misma precision, claridad y exactitud con que las concibe el entendimiento: los que adoptan el segun do, no hacen mas que seguir el ejemplo que les dan aquellos por la confianza que les inspiran, y así contribuyen á mantener la lengua dentro de sus justos límites. Los primeros establecen el huen uso; los segundos lo generalizan y conservan, y unos y otros forman lo que se llama opinion general y uso común y cons tante. El vulgo, cuya índole distintiva es obrar sin meditación alguna, no hace regla ni mucho menos puede servir de autori dad en ningún caso, porque adopta á ojos cerrados, todo cuan to cree convenirle y se forma un lenguaje peculiar y arbitrario, sin averiguar si las voces de que se vale, pueden aclarar ú oscu recer las ideas, y menos aún, si pueden menoscabar la pureza del idioma. De estos principios se deduce naturalmente que el buen W50 es "el modo de hablar adoptado por la mayor parte de los "autores, y de los eruditos mas acreditados en cada época." Este es el buen uso de que habla Jonama en el artículo citado, y al que alude Horacio diciendo,
Usus,
Quem penes arbitrimn est, et jus et norma loquendi.
Pero cuando no veamos fijado con precision el uso de las voces por el mayor número de sabios, la razón natural dicta que busque mos un fundamento para asegurar nuestra opinion particular, y (Σ) que este fundamento sea la etimología, por la poderosa razón de que toda lengua conocida proviene de otra, y toda voz se deriva de otra voz (excepto el único caso de que alguna de estas sea ra dical por organización ó por onomatopeya); y puesto que las vo ces no son mas que el resultado de las ideas sensibles, en la eti mología hallaremos necesariamente la idea primitiva que atri buyeron los hombres á cada voz, y podremos deducirla idea que conviene á la voz que tratamos de emplear, según las modifica ciones que nos indiquen su pronunciación y su escritura, únicos medios que nos ha dado la naturaleza, de pintar nuestros pen samientos. Mas si queremos emplear con acierto la etimología, no debe mos perder de vista que las reglas de crítica que pueden guiar nos, se hallan en el sentido, en la figura, y en el sonido de la voz derivada, comparados con el sentido, con la figura y con el soni do de la voz primitiva. La identidad de sentido y de significación hace creer con mu cho fundamento, que siendo iguales ó semejantes la idea, el ob jeto, y la denominación, la voz es también igual siempre que con curran en ella las demás circunstancias necesarias. La figura expresa lo perteneciente á la vista material; sirve para rectificar la alteración continua que causa en el simple so nido, una pronunciación rápida 6 demasiado difícil de ejecutar: e indica por medio de las letras características propias de cada pueblo, la lengua de donde proviene una voz y en donde debe buscarse su orí eren. o El sonido nos hace distinguir los órganos que empleamos para producirlo, y el orden con que proceden; nos enseña que no de bemos atender á las inflexiones cuando se conoce que todas ellas á pesar de su variedad son producidas por el mismo órga no; que tratándose de derivación, importan poco las vocales; es preciso atender á las consonantes para cerciorarse de si proce den del mismo órgano, no obstante la diferencia de figura que tengan en la dos voces comparadas, atendiendo al principio fí- J XI) sico de que cada órgano forma su clase particular de articu laciones fácilmente mudables entre si (*). Cuando concuerdan en una misma voz estas tres reglas de ducidas del raciocinio, del oido y de la vista, puede tenerse por demostrada la etimología, y en este caso es ya muy fácil cono cer el verdadero significado de la voz, porque los sinónimos pro vienen de que mirando ó considerando el hombre las cosas de distinto modo, les dá otros tantos nombres diferentes; pero siem pre relativos á la naturaleza ó esencia primitiva de la cosa. Si esta es un ser que existe materialmente en la naturaleza sin ofrecer diferentes modificaciones, escitará una idea simple y dará por consiguiente pocos sinónimos, como por ejemplo, las voces sol, ¡una, luz; pero si la cosa no es material sino percep ción del hombre relativa á sí solo, esto es, á la idea que el se forma, la cual está en él mismo, y no en la naturaleza; entonces como cada hombre tiene su modo particular de considerar es tas cosas, modificarlas y formarse un orden de percepciones, la cosa debe producir muchos sinónimos; por ejemplo, una cierta extension de terreno se llama region cuando referimos la idea al poder ó á las leyes naturales que rigen (del latin regere) en aque lla extension: la llamamos provincia, cuando la consideramos como un terreno al cual se llega viniendo ó proviniendo (lat. pro- venire} de cualquiera otro; distrito si la miramos como terreno distraído, esto es, separado Çdistr actus, ó districtusj de otro in mediato: partido si atendemos á la parte que forma separada mente respecto de otras: pais, si atendemos á la costumbre de fundar en él las habitaciones (lat. pagusj; estado, si referimos la idea á la existencia (status) según la forma que ha estableci do en él la dependencia política: finalmente, empleamos las vo ces imperio, reino, ducado, condado, gobierno, intendencia, muni cipalidad, diócesis, feligresía y otras muchas para expresar cier to espacio de terreno según los diferentes modos particulares con que lo consideramos. (*) Principes physiques de Vitimohyie. Paris, an IX, ( Χ» ) Pero la abundancia de modos de considerar las cosas, ó por mejor decir, la diversidad de modificaciones que dá el hombre á una idea, depende absolutamente de la riqueza 6 del poder de su imaginación, y de su mayor ó menor sensibilidad; y los mo dos de representar estas modificaciones, esto es, los sonidos ex presados por signos son conformes á la mayor ó menor facilidad que aquellas cualidades, el clima, las costumbres, los hábitos y otras causas naturales ó adquiridas, dan á los órganos de la voz, y he aquí la razón porque se dice con mucha verdad que la len gua es un indicio seguro del carácter de una nación. Sin dete nernos por ahora á hacer aplicaciones particulares de este prin cipio, notemos que la lengua castellana cuenta en sus voces mas de trescientas variaciones ó transformaciones características, ó lo que es lo mismo, de sonidos radicales. El primer Diccionario que publico la Academia española, el año de 1726, sin embar go de resentirse de los defectos anexos á todo ensayo de una empresa gigantesca, contiene 13.365 voces, sin incluir entre ellas muchas usuales (que se ocultaron á la perspicacia de la Acade mia), ni las técnicas de ciencias, artes y oficios, ni un gran nu mero de superlativos, diminutivos, aumentativos y participios activos y pasivos. La diversidad de terminaciones de los voca blos castellanos es tan prodigiosa que D. Tomás de Iriarte llegó á colectar cerca de cuatro mil terminaciones, sin comprender las esdrújulas. La riqueza de voces compuestas es tan grande en nuestra lengua que las tiene hasta de doce sílabas, y aun pue den formarse de catorce en el buen lenguaje familiar (*). No es menos admirable la variedad de acentuaciones, pues tenemos voces que nos presentan el acento determinante, desde la vocal final, hasta la que antecede á las cuatro últimas sílabas (f ), las
(*) Por ejemplo, del adverbio constitucionalmente, tenemos el compuesto inconstitu- cionalxsimametxte, de once sílabas; y del verbo constitucionalizar podemos componer los adverbios superlativos constitucionalizadísimamente, de doce sílabas, y desconstitucionali- sadísimamente, de trece; y añadiendo á éste la partícula in, tendremos una voz de cator ce sílabas. (f ) El castellano tiene voces con el acento en la última sílaba como amó, corazón; en la penúltima, como pena, modo; en la antepenúltima, como bóveda, espíritu; en la ante- ( XIII ) cuales en este caso resultan breves. Si á todo esto agregamos el increíble numero de superlativos, diminutivos y aumentati vos; el no menos copioso de esdrújulos; el de voces que indican acción y al mismo tiempo el instrumento con que ésta se ejecu ta, y aun la parte que recibe ó sufre el efecto de la acción; las di ferencias que expresa una misma terminación, según el modo de emplearla (J); el importante y variado juego que hacen en nues tra lengua los verbos llamados auxiliares, &c, &c, deberemos inferir, que puesto que la lengua castellana tiene tantos modos de diversificar las modificaciones de las ideas generales, debe ser por necesidad igualmente rica en signos propios para expresar las, esto es, en voces sinónimas. Por lo mismo seria una desgracia lamentable en sumo gra- antepenúltima, como dígaselo,póngansele; y en la anterior á esta, como dariamosselo. Ade mas ofrece la lengua castellana el raro ejemplo de voces en que suenan dos acentos de igual valor, como en lánguidamente, pérfidamente, astutamente, oportunamente, &c, y de otras que en su plural mudan la colocación del acento determinante del singular, como carácter, caracteres; régimen, regímenes, &c. (J) Las voceä que indican acción y al mismo tiempo el instrumento ó la cosa con que aquella se ejecuta, terminan generalmente hablando, en ada, como pedrada, puña lada, patada; en aso, como sablazo, garrotazo, escopetazo; en ete, como puñete, piquete; en on, como empellón, empujón, sornaviron, &c. Otras veces, estas mismas terminacio nes expresan ademas el lugar ó la parte en que se dá el golpe, como trompada (encon trón de dos personas cara á cara, dándose en las narices); espaldarazo (golpe recibido en la espalda); coscorrón (en la cabeza); repelón (tirón que se dá del pelo), &c. Finalmen te, estas mismas terminaciones hacen otras veces que las voces expresen á un mismo tiem po acción, instrumento,parley modo, como bofetada (golpe dado en el carrillo con lo in terior de la mano abierta); gaznatada (golpe dado del mismo modo en la parte anterior del cuello ó gaznate); pescozada (lo mismo, en la parte posterior del pescuezo); cachete (golpe que se dá en el carrillo con la mano cerrada); pechugón (golpe que se dá en el pecho con. la mano abierta ó cerrada, empujando al mismo tiempo con violencia á la per sona á quien se le dá); torniscón (golpe dado en la cara con el revés de la mano); mojicón (golpe dado en cualquiera parte de la cara con el puño cerrado), &c.—Las terminacio nes en ado y en ido unas veces son pasivas como amado, partido; y otras son activas como acostumbrado, (el que tiene costumbre); cansado (el que cansa); atrevido (el que se atreve); fementido (el que falta á la fe y palabra dada); presumido (que tiene presunción), &c.—La terminación ada, indica también comparación ó aplicación de cualidades ó de modo, de una persona ό cosa, á otra, como .alcaldada (acción propia de un alcalde); pi llada (acción ó dicho propio de los pillos); monad« (acción ó gesto propio de los mo nos); muchachada, niñada, perrada, &c. ( XIV ) ^ do que una materia tan vasta, tan rica, tan bella y tan necesa ria para el verdadero saber, no tuviera la ventura de caer algún dia en manos mas hábiles que las mias. Entonces, cuando esto llegue á verificarse, se habrá llenado felizmente el vacío que con mengua de los que hablamos la lengua de Luis de Leon y de Cervantes, se advierte hoy en la literatura castellana y en la filología general de nuestro culto siglo; y yo en particular veré colmado un deseo que hierve en mi alma hace mucho tiempo, y de cuya viveza es testimonio irrecusable la osadía con que me he arrojado á dar este débil ejemplo, haciéndome sordo a los gritos de mi propia insuficiencia. OBSERVACIONES
SOBBE EL MECANISMO DE LAS LENGUAS.
1.a V JUL clima, el aire, el terreno, el método de vida y de alimentación, el mayor ó menor número de goces ó de necesidades y otras mu chas causas físicas, producen variedades muy notables en el hom bre, y dan por consiguiente mas fuerza á unos órganos que á otros en la estructura humana. Estas variedades que tal vez podrían ocul tarse á la anatomía, serán evidentes para cualquier filósofo que ob serve con atención los órganos que emplea el hombre para producir la palabra según el uso de cada pueblo. Así desde luego se echará de ver que el hotentote, por ejemplo, hace en su lengua tan frecuen te uso déla garganta, como el inglés de la extremidad de los labios. Estas observaciones por nimias que parezcan, pueden conducirnos á descubrimientos de mayor importancia y utilidad, y á ellas debe mos la certeza de que la costumbre que adquiere un pueblo, de em plear ciertos sonidos determinados, y tales ó cuales órganos, mas bien que otros, es un indicio seguro no solamente del clima, sino tam bién del carácter de la nación, que en mucha parte queda modifica do por el clima, así como el genio de la lengua queda determinado por el carácter de la nación. El uso habitual de sonidos ásperos ú oscuros, y el tropiezo que causa la profusion de letras consonantes sonoras ó mudas, indican un origen bárbaro ó poco civilizado. La abundancia excesiva de le tras líquidas ó de labiales, y la poca variedad de terminaciones, son por el contrario indicio de debilidad, molicie ó delicadeza, tanto de los órganos como del gusto. Citemos por ejemplo de lo primero las lenguas del norte, y en prueba de lo segundo, la lengua de los chi nos, de cuyo carácter muelle é indolente podemos formar idea con (XVI) solo advertir que no tienen en su lengua el sonido fuerte que damos nosotros á la r duplicada (*). La lengua italiana que no es mas que un latin degenerado, per dió su fuerza primitiva, y fué debilitándose (ó si se quiere, dulcifi cándose) á medida que el pueblo que la habla perdió el vigor carac terístico de los antiguos romanos. En general, la costumbre de trans formar los sonidos claros y simples en nasales, oscuros y compues tos; de atenuar las articulaciones naturales de cualquiera órgano; de transformar las inflexiones fuertes en otras lángxúdas, por efecto de una pronunciación viciosa, descuidada, afectada ó débil; y de li quidar con exceso los sonidos de ciertas consonantes, es signo in equívoco de poca fuerza y energía en una nación. Pero como el ita liano se conservó mas cerca de su origen, como contrajo menos bar- barismos que otros odiomas, y como las alteraciones que sufrió re cayeron en una lengua esencialmente vigorosa, que por su inmensa riqueza tenia mucho que perder; que acaso necesitaba suavizar al gún tanto la excesiva severidad de su carácter; y que se modificaba bajo la dulce influencia del sol del mediodía, es hoy el italiano una de las lenguas mas bellas que se hablan en el mundo, y de las mas propias para expresar conceptos agudos, suaves, delicados y patéticos.
(*) J. J. Rousseau dice, que las lenguas de los pueblos meridionales son hijas del gozo, y las de los pueblos septentrionales hijas de la necesidad. Oigamos cómo se expli ca este filósofo, cuya autoridad es irrecusable. "En los climas meridionales en donde la naturaleza es pródiga, las necesidades nacen de las pasiones; en los países fríos en donde aquella es avara, las pasiones nacen de las necesidades, y las lenguas, tristes hijas de la ne cesidad, se resienten de "su duro origen.... ¡Qué diferencia entre las tiernas modulacio nes producidas por los movimientos del alma, y los gritos en que hacen prorumpir las necesidades físicas! En aquellos horrorosos climas, en donde todo permanece muer to durante nueve meses del año, en donde el sol apenas calienta la atmósfera algunas se manas para dar ä conocer á los habitantes el beneficio de que están privados, y prolon gar su miseria; en aquellos lugares en que la tierra nada produce sino á fuerza de traba jo, y en donde parece que el germen de la vida está en los brazos mas bien que en el co razón, los hombres ocupados sin cesar en proporcionarse la subsistencia, difícilmente po dían entregarse á ideas mas halagüeñas; todo se limitaba en ellos al impulso físico.... La ociosidad que es la que alimenta las pasiones, desaparecía ante la necesidad del tra bajo que las apaga: antes de pensar en vivir con desahogo era indispensable pensar en vivir. Uniendo á los hombres la necesidad mutua mas bien que el afecto, la sociedad debió su formación á la industria. El incesante riesgo de perecer no les permitía limi tarse ala lengua del gesto, y la primera frase que profirieron sus labios, no fué ámame, sino ayúdame. Estas dos expresiones son muy parecidas en su forma; pero se pronun- ( XVII ) La lengua latina es severa, vigorosa y sonora, tan libre en sus gi ros é inflexiones, tan fecunda en sus recursos, como lo era el pensa miento del pueblo romano; todos sus sonidos son claros y enteros; su fuerza principal está ingeniosamente repartida en el significado propio y peculiar de cada voz, y en la idea que resulta de la combi nación de éstas; en una palabra, era la lengua propia de un pueblo libre, grande, magnífico y dominador del orbe conocido. Mas si por estas cualidades se asemeja el carácter de la lengua latina al de los antiguos romanos, esto es, si parece propio para expresar cosas fuertes y varoniles, resulta menos á propósito que la griega para expre sar cosas agradables, graciosas y ligeras. La lengua griega abunda en diptongos, en palabras compuestas y en acentuaciones que hacen la
cian en tonos bien diferentes: aquellos hombres no aspiraban á hacer sentir nada, sino á hacer entender todo; no buscaban la energía sino la claridad: álos η centos que no mo dulaba el corazón, sustituían articulaciones fuertes y sensibles, y si llegaban por fin á dar á la forma de su lenguaje alguna impresión natural, ésta contribuía en gran manera á ha cerlo, duro y desapacible." "Los hombres septentrionales no carecen de pasiones, pero estas son de otra espe cie en ellos: las pasiones de los paises cálidos son voluptuosas y propenden á la blandu ra y al amor; la naturaleza hace todo por el hombre y para el hombre, este casi no tiene nada que hacer; pero en los paises del norte en donde los habitantes consumen mucho en un suelo ingrato, los hombres condenados á tantas necesidades son fáciles de irritar: todo cuanto se hace á su rededor los inquieta; subsistiendo con trabajo y dificultad, mientras mayor es su pobreza, mas apegados son á lo poco que poseen; acercarse á ellos es atentar contra su vida. De aquí proviene esa condición irascible tan pronta á convertir se en furor contra todo cuanto les ofende, y esta es la causa de que sus voces ó expresio nes mas naturales sean las de la cólera y de la amenaza, las cuales van siempre acompa ñadas de articulaciones fuertes que las hacen ásperas y duras." "He aquí las causas físicas mas generales de la diferencia característica délas lenguas primitivas: las del mediodía debieron ser vivas, sonoras, acentuadas, armoniosas, elocuen tes y á veces o«curas á fuerza de energía; las del norte debieron ser sordas, ásperas, com- plicadas, chillonas, monótonas y claras á fuerza de palabras, mas bien que por la buena construcción. Las lenguas modernas, aunque mezcladas ya y refundidas, guardan aún el origen de estas diferencias: el francés, el inglés y el alemán, son el lenguaje privado de hombres que se ayudan mutuamente, que razonan entre sí, á sangre fria, pero que pe irritan y montan en cólera." (Para la mejor inteligencia de todo lo que se dice en estas Observaciones, y principal mente en este pasaje de J. J. Rousseau, conviene advertir, que se entiende por paises sep tentrionales o del norte, todos los situados mas allá de los 43grados de latitud septentrio nal; y que Rousseau nació en Ginebra, acia los 47°, y escribía en unapoblacion que se halla miiy cerca de los 49° de la misma latitud.) c ( XVIII ) pronunciación de las voces mas variada, mas prolongada, sonora y me lodiosa, y por esta razón es tan bella su poesía y mucho mas armo niosa que la latina: puede decirse que las palabras de la lengua grie ga no encierran mas que la mitad del sentido; que toda su fuerza consiste en los acentos, y que el inexplicable efecto que estos pro- duc en, llega al entendimiento después de haber encantado al oído y al corazón. Tal era el carácter de los griegos, cuya idea domi nante fué siempre la belleza en todas las cosas, en todas sus empre sas y en todos los actos de la vida, tanto física como intelectual. La lengua francesa conserva todavía un aspecto demasiado hiper bóreo en la estructura de sus voces, en la abundancia de consonan tes superfluas y de sonidos oscuros y nasales, en la escasez de mo- d ulaciones causada por la poca variedad de acentos y en la pobreza de proposiciones adverbiales, de palabras compuestas, y de voces pro pias para expresar grados de comparación (*); pero en recompensa, su claridad, su sencillez, el gracioso deslizamiento de sus frases, la
(*) "Si la poésie française est fort au dessous de celle des latins, ceci ne vient que du peu de prosodie de notre langue, de la monotonie de nos pieds toujours équivalens aux anciens spondées, et du retour fatiguant de nos rimes plates, insuportable à l'oreille dans un poëme de longue haleine."—(Ch. de Brosses, P. P. de Dijon.) "Quoique nous ayons eu d'excellens poètes et même quelques musiciens, je crois notre langue peu propre à la poésie, et point du tout à la musique. Je ne crains pas de m'en rapporter sur ce point aux poètes mêmes."—(J. J. Rousseau.) Voltaire dice igualmente, ¿Est-ce assez, en effet, d'une heureuse clarté? ¿Et ne péchons-nous pas par l'uniformité? Los autores de la Enciclopedia publicada por Diderot y D'Alambert se espresan en es tos términos: "Avouons la vérité; la langue des français polis n'est qu'un ramage faible et gentil: disons tout; notre langue n'a point une étendue fort considérable; elle n'a point une noble hardiesse d'images, ni de pompeuses cadences, ni de ces grands mouvemens qui pourroient rendre le merveilleux: elle n'est point épique; ses veibes auxiliaires, ses articles, sa marche uniforme, son manque d'inversions, nuisent à l'enthousiasme de la poésie; une certaine douceur, beaucoup d'ordre, d'élégance, de délicatesse et de termes naïfs, voilà ce qui la rend propre aux scenes dramatiques." En seguida, deduciendo el carácter de la lengua del de la nación que la habla, añaden los mismos autores.—"Si du mcins en conservant à la langue frar.qaise son génie, on l'enrichissait de la vérité de Γ imitation, ce moyen la rendrait propre à faire naître les émotions dont nous sommes sus ceptibles, et à produire dans la sphère de nos organes, le degré de vivacité que peut ad mettre un langage fait pour des hommes plus agréables que sublimes; plus sensuels que pas- s! oun fe; ph>s su nerf, ciels que profonds." ( XIX ) variedad de sus modismos, y la artificiosa valentía de sus inflexiones y giros, indican bastante un pueblo esencialmente comunicativo y social; emprendedor y atrevido, bullicioso y amable, como eran los griegos, con cuya lengua tiene la francesa mas analogía que con la latina, aunque no en las voces, sino en las frases, giros é idiotismos. La analogía de origen que desde luego se advierte en las lenguas alemana é inglesa, indica la analogía que existe entre el carácter de ambos pueblos á lo menos por sus rasgos mas notables. Una y otra descubren su origen céltico-agreste en la cargazón de consonantes duras, ásperas ó silbadoras; en la abundancia de sonidos oscuros y escabrosos; y en la escasez de vocales sonoras (*); pero también una y otra prueban el ingenio, el tesón y la madurez de los pueblos que las hablan, los cuales han hallado el modo de suplir por medio de voces compuestas, las simples que aquellas lenguas no pudieron re-
(*) En general todas las lenguas septentrionales se resienten mas órnenos de estos defectos, según la mayor ó menor inmediación de los pueblos al norte. En la lengua po laca, por ejemplo, hay voces compuestas de una sola vocal ahogada entre muchas conso nantes de diversa y contraria articulación, como chrszaszcz (mosca); wtrzcimc (caña); y hay otras en que todas las consonantes deben sonar antes que la vocal, como hrzmi (ha cer ruido). En el alemán, aunque los sonidos van siendo ya mas claros, y las modula ciones mas perceptibles, vemos también voces como fortschritt (adelanto) compuestas de solo dos vocales y nueve consonantes; schwanzschraube (culata), de cuatro vocales y doce consonantes; eigenthumsrecht (dominio); verantwortlich (excusable), &c. El inglés tie ne también un aspecto muy semejante, como se ve en las voces spring (primavera); un- willingess (desgano); kneadingtrovgh (amasadera), &c; pero existe una diferencia muy esencial entre ambas lenguas, yes el modo de componer y de pronunciar las voces¿ El alemán hace de varias voces diferentes un todo homogéneo, modificándolas cuanto es po sible, mientras que el inglés se contenta con la simple union délas que le convienen, sin detenerse á trabarlas por medio de alguna modificación, como country-house (quinta ó granja); plough-ridge (caballete); hand-barrow (angarillas); one-horse chair (calesa); silver smith (platero); ale-hoíise-Iceepcr (tabernero); watch maker (relojero); hair-dresser (pelu quero); day-labourer (jornalero), &c. Los alemanes ademas modulan las voces compues tas, de modo que resulta en ellas cierta variedad de acentos; los ingleses las pronuncian con rapidez haciéndolas breves.. He aquí perfectamente representado el carácter de la nación inglesa: siempre va al fin sin pararse en los medios y por el camino mas corto. La lengua inglesa tiene los sustantivos humour y spleen, que no pueden traducirse direc tamente en ninguna otra, tal vez por significar un estado del ánimo, propio y esclusivo de la nación que lo resiente. Eu la gramática inglesa que es tal vez la mas sencilla de todas las de las lenguas modernas, se ve que la regla principal es el uso, esto es, la vo luntad, el sic voló; siejubeo, de una nación que conoce bien sus propios fuerzas ν todo el alcance de su querer. I XX) cibir de su bárbaro origen. La reunion de muchas voces en una sola, ó el uso frecuente de adjetivos compuestos de modo que se comprendan varias ideas ó imágenes en una sola expresión, es la mayor prueba que puede ofrecer un pueblo, no solamente de vi veza de ingenio y fecundidad de imaginación, sino de solidez en su modo de discurrir para dar á cada combinación precisamente lo que le conviene. Por otra parte, los alemanes saben dar á las expresiones un vigor que las hace muy propias para expresar ideas y afectos de fuerza y de energía. ¿Quién no echará de ver in mediatamente la suma diferencia que hay entre el carácter de la na ción alemana y el de la italiana, esto es, entre la condición del se ñor y la del esclavo, al oír á un coronel alemán, v. gr:, pronunciar á la cabeza de su regimiento la enérgica voz ¡achtung! (atención), y á un coronel italiano gritar, ó mas bien decir á sus soldados—-pre parar si á carteare? La nación que así habla á sus guerreros debia necesariamente ser sojuzgada por la que la hace temblar actualmen te con solo aquel marcial achtung. Hablando de la lengua castellana el Presidente de Brosses, que es quizá el extranjero que mejor la ha conocido, dice: "nótase que en "el castellano abundan las palabras polisílabas y compuestas, pero "son, lo mismo que todas las demás, de muy bella proporción, gra- "ves, sonoras, enfáticas, ingeniosas, llenas de fuerza y dignidad, "como los españoles que las emplean." El castellano es, de todas las lenguas vivas derivadas, la que mejor y con mas pureza ha con servado sus orígenes, tanto en la forma material de los vocablos, como en sus articulaciones y sonoridad: no faltaría razón á los españoles para mirar esto como consecuencia precisa del carácter firme y sos tenido que heredaron de los romanos y de los godos, y que modifi caron después tan bellamente aquellos valientes y caballerescos ára bes, cuyas principales virtudes fueron la constancia, la lealtad, el honor, el ardimiento y la magnanimidad. La lengua castellana se escribe lo mismo que se pronuncia; y esta práctica, única y peculiar de los españoles, indica propension á aclarar las ideas, esto es, á fa cilitar la inteligencia de la verdad, á que ésta sea fácilmente cono cida (*). Los españoles, poco inclinados á las exterioridades, apre-
{*) La necesidad de acudir al modo material de escribir una palabra para poder en tender lo 411e significa, porque no lo exprésala pronunciación, es una de las pruebas ma, ( xxi ) cian sobre todo el fin de la intención, y procuran desde luego pene trarla; por consiguiente su lenguaje debía dirigirse á un mismo tiem po al entendimiento yála imaginación, esto es, debia ser eminente mente conceptuoso, libre de cualquiera traba que pudiera retardar el vuelo de la idea: así es que en la lengua castellana no lia}" repe tición continua de artículos ni de pronombres; ni lugar forzoso para la colocación de las palabras; ni fórmulas precisas para casi todas las frases; ni partículas partitivas; ni mucho menos partículas ó ad verbios referentes como el ne de los italianos, ó el en y el y de los fran ceses (*). Puede la lengua castellana hacer tomar ala combinación de sus expresiones todas las vueltas y todos ios rodeos que conven gan al intento; puede colocar las voces principales en el lugar mas propio para hacer resaltar la fuerza de la idea; puede hacer alarde de numerosidad en la estructura de sus frases, y puede reducirlas hasta el laconismo del celebrado llegué, vi, vencí (veni, vidi, vici) de la lengua latina. Pero donde mas brillan á porfía la profundidad γ el ingenio del carácter español, es, sin disputa alguna, en el asom broso número é ingeniosísimo artificio de los refranes que tiene esta lengua. D. Juan de Iriarte colectó veinte y cuatro mil, y todavía se quejaba de no serle posible reunir los que le faltaban. Los refranes son el fruto de una meditación muy sólida y de una penetración tan pronta como profunda: son, por decirlo así, la quinta esencia que saca el entendimiento de la experiencia física y moral de la vida (;£), y
evidentes de la pobreza é imperfección de una lengua. En francés, v. gr., lo mismo sue- najw'e (prado) quebré* (cerca), prêt (préstamo), prêt (Üsto), prêt (pronto): lo mismo suena la (la, nota musical), que là (allí), las (cansado), lacs (lazos), Va (lo ha, ó la ha) lo mismo laid (feo), que laie (jabalina), lait (leche), Fait (lo haya, ó la haya), les (los ó las), legs (legados), Vest (lo es): lo mismo cour (corte), cours (curso), court (corto) court (corre): lo mismo ver (gusano), que verre (vidrio), verre (vaso), vert (verde), vers (verso), vers (acia), &c, y muchas de estas y otras voces ni aun en lo escrito se dife rencian. (*) Por ejemplo: hablando en castellano de un hombre que ya se ha nombrado en la conversación, podemos decir—aquí hay flores; coja cuantas quiera; en francés seria ne cesario expresar la misma idea diciendo: il y a ici des fleurs; qu'il en premie autant qu'il voudra; palabras que traducidas literalmente al castellano, dicen: él aquí hay aquí de las flores; que él de ellas coja tanto que él querrá; de lo que resulta, que para comunicar esta idea á otra persona, el español emplea seis palabras, mientras que el francés necesita catorce. (X) "Los refranes que andan de boca en boca, y son una pequeñísima parte de la tradición verbal (dice Mayans en sus Orígenes) son tantos en la lengua española, que no ( XXII ) el pueblo que esto sabe hacer, debe ser esencialmente pensador, re flexivo y atinado en las investigaciones de lo útil, de lo bueno, de lo bello, y de la verdad en general. Su modo de hablar debe ser la fiel y genuina expresión de sus propios sentimientos (*).
2.a
El hombre habla para dar à conocer lo que sucede ó está en él 6 fuera de él; esto es, lo que siente, lo que percibe, ó lo que ha per cibido, lo cual corresponde á los tres sentidos interiores que son la voluntad, la inteligencia y la memoria. Si expresa una sensa ción interior simple ( porque en un principio no debemos supo ner todavía reflexion ni ideas compuestas), la denota por medio del gesto, del acento, ó de un simple grito, y en esto obra lo hay otra, cualquiera que sea, que contenga igual número de ellos, como se puede obser var e,n las colecciones que hicieron Iñigo Lopez de Mendoza, por mandado del rey D. Juan el Segundo; el comendador Griego Fernán Nuñez, á quien habia comunicado mu chos el eruditísimo Juan Paez de Castro; Mosen Pedro Valles, verdadero autor del Libro de refranes, publicado en Zaragoza, año 1549; el Doctor Benito Arias Montano; Juan Meló Toledano, que escribió Siete Centurias de Adagios castellanos; Blasco de Garay en sus Cartas en refranes, á las cuales van juntas otras dos de incierto autor; Juan Malara en su Filosofía vulgar; su émulo Juan Sorapan de Ris. ros en la Medicina española con tenida en proverbios vulgares de nuestra lengua; á cuyas colecciones de refranes se pudie ran añadir muchos millares mas, que se hallan esparcidos en varios libros, como en el Dialogo de las lenguas, en la Vida de JO. Quijote, en la comedia Eufrosina, y en muchí simos otros; de suerte que entre otras obras de alguna útil invención, me atrevería á dis poner una filosofía moral muy cumplida, compuesta toda de refranes españoles, para cuyo fin tengo recogidos muchos millares de ellos."—(Mayans, Orígenes de la lengua española, torn. 1.° p. 188, edic. de 1737.) El célebre Salmacio califica esta riqueza de refranes de la lengua española, diciendo: inter Europeos, Iíispani in his excellunt.—(Sarm. p. 179.) Posteriormente D. Antonio Jimenez publicó en Madrid una reducida colección de re franes escogidos, dispuesta por orden alfabético.—Imp. de Pierart Peralta, 1828. (*) Para que no se me acuse de parcialidad en esta materia, advertiré que muchos sabios extranjeros dan la preferencia á la lengua castellana, respecto de las demás lenguas vivas, y algunos la confiesan sin rebozo superior á todas. Tales son entre otros, Isaac Vossio (\); el alemán J. Zahn (2); el cardenal Bentivoglio (3); Julian Gotelini (4);
(1) Be poematu, eantu, et viribus rithm, p. 57. (2) ¡Specula phys. mathèm.—T. 2. ° (3) Epist. ad Tob. Math. angl. (4) Cartas à D. J. Sedeño. ( XÍÜII ) mismo que otros muchos animales; pero si quiere indicar un objeto exterior y darle un nombre, la poca relación que hay entre la pala bra y la cosa, obliga al hombre á imitar con su voz, á lo menos en cuanto puede, el sonido del objeto. Esto es lo que se llama ono- matopeya, voz tomada del griego, que literalmente quiere decir for mación del nombre, y que los latinos definían vox repercussa naturae; pero solamente se aplica á los términos que pintan el sonido de la cosa ó del objeto, y así, tanto la palabra onomatopeya, como su acep ción particular, nos demuestran que este modo de formar los nom bres fué el mas natural y por consiguiente el primero que empleo el hombre para empezar á formar una lengua. Las voces onomatópi- cas son, pues, el principio y el fundamento de toda lengua primitiva. La invención de palabras destinadas á designar objetos exteriores, 6 lo que es lo mismo, la causa que obligó á poner nombres á las cosas, es de dos especies, mediata ó inmediata. Es causa mediata, cuando la palabra se compone de otra ya inventada, y como estas palabras así combinadas ó compuestas son las mas abundantes en todas las lenguas, se ha dicho que no hay ninguna palabra que no
Napoli Signoreli; Pagnini; el P. Bouhours (1) : el autor du Génie des langues (2); el del Discurso crítico acerca de los traductores de Tácito, que precede á su Moral, escrito por Mr. Amelot (Z); el abate Pinche; Voltaire en varios lugaree de sus obras (4); D Alam- bert(5); los alemanes Bouterwek, J. J. Keil, J. Herder (6); ' Schaevius (7); A. Perosi- ni (8); Simonde de Sismondi (9), &c, &c, &c. El P. Bouhours, hablando de las tres principales lenguas derivadas del latin, las caracteriza de este modo; y acaso sin advertir lo ni querer, caracterizó en parte al mismo tiempo á las tres naciones que las hablan.—"La "lengua española, dice, es una orgullosa que anda, erguida la cabeza* ostenta grandeza y "dignidad, y ama el fasto y la pompa en todas las cosas: la lengua italiana es una coqueta "siempre aderezada y llena de afeites, que solo piensa en agradar y se divierte con frusle rías: la lengua francesa es una gazmoña, pero agradable, y que á pesar de su modestia y "seriedad, nada tiene de áspero ni de incómodo."
(1) Entret. d'Ariste. (2) Tom. 1.° (3) Pág. 39 y 40. ( 4) Principalmente en sus Mélanges¡ ( S ) Harmonie des langues, (G) Hist. litt, y Colecc. depoes. esp. (7) De orig. linguar. et car. atribuí. (8) Cari, sobre la harm, délas leng. viv. (9) Litterat. du midi, fyc. ( XXIV ) provenga de otra; pero ahora no tratamos de las de esta especie. Es inmediata la cansa, cuando se inventa la palabra imitando al objeto. como se verifica en nuestras voces, balbuciente, borbollón, burbujear, carcajada, cecear, chisporrotear, chiquichaque, murmurio, retumbo, rimbombar, rechinar, silbido, susurro, tartamudear, zumbido, âçc. Las voces de esta especie, formadas por imitación directa de la cosa, son verdaderamente primitivas y radicales, y no hay lengua alguna, an tigua ó moderna, que no las tenga en mayor ó menor número, pero de ellas unas son, por decirlo así, mas primitivas que otras. Desde luego merecen particular.atención las interjecciones que no debemos mirar como simples gritos ó emisiones de voz, en lo cual no nos diferenciaríamos de otros animales; sino tales cuales son en nuestras lenguas formadas ó articuladas, en las que no las aprende mos por imitación; todo hombre las tiene naturalmente de sí y por sí mismo; son voces, ó mas bien, expresiones radicales de un senti miento natural común á todos los hombres, y que todos, sin excep ción alguna, manifiestan del mismo modo con muy corta diferencia, porque las interjecciones no son voces solamente, sino algo mas, pues que expresan el sentimiento que produce una cosa en nuestra alma, y lo pintan por medio de una simple aspiración, ó de una formación de sonido, ó del solo movimiento de un órgano. Todas estas voces son primitivas en todas las lenguas, porque pertenecen inmediata mente á la fábrica general de la máquina orgánica, y al sentimien to de la naturaleza humana, que en todas partes y en todos tiempos es el mismo, en los grandes y primeros movimientos corporales. Pero aunque las interjecciones son voces radicales, tienen muy pocos derivados (*), porque no expresan objetos exteriores, sino afec ciones interiores, y el hombre une, encadena y amalgama fácilmen te las aprehensiones que le vienen de fuera, mas los movimientos de su alma que están dentro de él, que pertenecen exclusivamente á su propia existencia, y que son muy distintos y diversos, permane cen en su alma aislados, cada uno en su clase, según el género de afección que ha producido, y cuyo efecto, aunque permanente, ha
(*) La única voz genuina derivada de interjección que he hallado yo en nuestra len gua, es el verbo ayear, que significa repetir con frecuencia la exclamación ¡ay! pero estoy muy lejos de pretender que no se encuentren otros derivados de esta especie, solamente por haberme impedido descubrirlos mi propia ignorancia. ( XXV ) sido repentino. El dolor, el temor, la sorpresa, la alegría, la duda, la esperanz¿i, &c, nada tienen de común entre si, cada uno de es tos sentimientos es solo y único, 3^ su efecto en el alma ha sido des de luego el que debía ser, sin que en él temra parte la voluntad ni haya derivación de sentimientos, ni conocimiento adquirido, ni com binación facticia. Y sin embargo, las interjecciones son onomato peyas, y tal vez las primeras que empleó el hombre para expresarse, porque la entonación de cada uno de los diverse* sentimientos dei alma, tiene, digámoslo así, sus cuerdas propias y particulares en la palabra para darse á conocer según son aquellos, y esta preferencia, ó mas bien, esta relación común á todos los seres dotados de inteli gencia, no es una relación puramente convencional ó voluntaria", como lo es comunmente la que existe entre las cosas y sus nombres, sino una relación verdaderamente física y de conformidad entre cier tos sentimientos del alma y ciertas partes del instrumento vocal. La voz del dolor, v. gi\, hiere las cuerdas bajas, y siempre es mas ó me nos prolongada, aspirada, gutural ó profunda, como ¡ah! ¡ay! La voz de la sorpresa siempre es rápida, semejante al sentimiento que la produce, y se vale de un tono mas alto, como ¡oh! ¡eh! La del contento se diferencia de ésta en ser por lo común frecuentativa y menos breve. La del disgusto, de la aversion, del tedio·, del asco, &c, es casi siempre labial. La de la duda, del disentimiento ó del recelo, es nasal, con la diferencia de que siendo la duda y el recelo sentimientos inciertos, la voz que los expresa es prolongada; y al con trario, siendo el puro disentimiento una impresión determinada y una operación pronta del alma, su expresión debe ser breve. El so nido nasal (propio de la n, y mas cuando la precede la i) pertenece naturalmente á la negación, como lo prueba nuestro adverbio no: ademas, en la lengua latina y en todas las que se derivan de ella, la idea primitiva, ó lo que es lo mismo, la negación absoluta, se expre sa por la voz nasal in, como ingrato, indómito, innoble, inmundo, Sçc. Después de las interjecciones que debemos mirar como las prime ras onomatopeyas que produjo la voz humana, vienen las voces que inventó el hombre en un principio para designar ciertos animales y ciertas cosas necesarias á su existencia, y ya que seria muy pro lijo y ageno de este lugar descender á explicaciones circunstancia das acerca de la formación de todas las onomatopeyas, bastará decir D ( XXVI) que todas ellas son primitivas y mas limitadas en su significación, que cualquiera otra voz, porque todas expresan cosas que aunque están fuera de nosotros, esto es, aunque son objetos exteriores, no inspiran por su propia naturaleza, ideas capaces de muchas modifi caciones; y no las inspiran porque la sensación que causan no per tenece á las afecciones del ánimo: por consiguiente las onomatope- yas de esta especie deben producir muy pocas voces sinónimas (*).
3.°
No todas las onomatopeyas expresan sonido: las hay que indican movimiento, figura, sensación, accidentes, &c, corno vaivén, relám pago, titilación, dentellear, rodar, deslizarse, Scc, las cuales no pintan la cosa directamente, sino por medio de una operación de la memo- (*) Las principales onomatopeyas con que nuestra lengua expresa la voz de ciertos animales, son estas— Arruar El jabalí. Ladrar El perro. Arrufar \ El perro enojado, cuando Maullar El gato adulto. enseña los dientes. Mayar El gato joven. Arrullar ...... La paloma. Mugir El buey. Aullar El lobo. Piar El pollo. Balar La oveja. Pipiar El pichón. Berrear El becerro y el carnero. El ciervo cuando respon Rebramar. Bramar El toro. de á la hembra. Bufar El tigre. El jabalí', y principalmen Cacarear La gallina. Rebudiar., te la jabalina. Cuchichiar .... La perdiz y la codorniz. Cloquear La gallina clueca. Rebuznar El burro adulto. Crascitar El cuervo. { Las aves, unas á otras en Reclamar Croajar El grajo y las ranas. su especie. Chacharear.... La urraca. Refunfuñar. ,E1 gato montes. Charlar El guacamayo. Relinchar El caballo. Chillar El raton. Rezongar .... .El lobo. Gañir La zorra. Roncar El gamo. Garrir La cotorra. Roznar El burro joven. Gaznar El pato. Rugir El león. Gorjear El jilguero. Silbar La serpiente. Graznar El cisne y el buitre. Susurrar Las abejas. Gruir La grulla. Trinar El ruiseñor. Gruñir El cerdo. Ulular..·. El buho. Jadear El perro cansado. Zumbar El mosquito. De las onomatopeyas castellanas de otra especie he logrado reunir hasta ahora mil seis cientas veinte y una; y movido del deseo de contribuir en cuanto pueda, á hacer brillar las riquezas de nuestra lengua, me propongo publicarlas en forma de diccionario, con tando con 1st indulgencia de los literatos y de todas las personas instruidas. ( XXVII ) ria, por lo que podemos llamarlas de comparación, pues nos hacen recordar el objeto que nos ministra la idea primitiva, para compa rar con ella la secundaria ó derivada, v. gr., la voz vaivén significa un movimiento encontrado, de un lado á otro, ó de atrás á delante; pero no significaría esto, si no nos obligara á acordarnos instantá neamente y sin advertirlo, de la acción de ir, y de la de venir, y si al mismo tiempo no se fijara cuanto es posible la imitación de la cosa, adecuando ä ésta las articulaciones, como lo hacen los dos mo nosílabos va y ven, no menos prontos y cortos que el movimiento que expresan. Esta analogía constante entre el modo de ser de la cosa y la estructura material de la palabra que la expresa, es de la ma yor importancia para las investigaciones etimológicas, y depende tanto de las letras características, como de su combinación, y de la acentuación de las sílabas. Así, en la voz relámpago, v. gr., la onoma topeya consiste primeramente en la sílaba re, cuyo sonido recio, fuer te y vibrante nos hace concebir la idea del ruido; después, en la sí laba lamp, que se produce por un solo sacudimiento de la lengua al pronunciar la vocal a, y cortando este sonido casi al mismo tiempo, por medio de la simple presión de los labios,' que nos obliga á ejecu tar la combinación de las dos labiales mp: y de este modo nos dá aquella sílaba la idea de la rapidez por la ligereza con que move mos la lengua para pronunciar las tres letras amp reunidas. Sigue la onomatopeya en las dos últimas sílabas α-go, de las cuales la pri mera por su combinación con la p, produce un sonido forzado, se mejante á un estallido, y hace que la última sílaba go resulte tan breve corno puede serlo una sílaba en que no se quiere emplear fuer za alguna. Por último, la onomatopeya queda perfecta con la acen tuación que damos á la palabra relámpago; pues en la combinación de toda ella, la sílaba re con que empezamos á pronunciarla, nos da ademas la idea del ruido, de la repetición (que es propia de esta sí laba en nuestra lengua); y la fuerza y la tardanza con que apoyamos la entonación de la voz en lamp, juntas á la prontitud con que emi timos naturalmente las dos últimas sílabas ago, que van deslizándo se por decirlo así, hasta desvanecerse el sonido de la última, nos ha cen formar una comparación instantánea, esto es, la idea de una cosa ruidosa, movible, pesada en uno de sus extremos, ligera y débil en el otro, y que éste se agita ó vibra con velocidad, á la manera de lo ( XXVIII ) que sucede, v. gr-, en una espada delgada, cuando la sacude con fuerza una mano robusta. Lo mismo respectivamente podemos de cir de la voz titilación: la sílaba ti compuesta del sonido golpeador de la dental t, y del de la vocal i que es el mas agudo que puede formar la voz humana, conviene á todo ]o pequeño, delgado y lije- ro (*). La repetición de esta sílaba trae ala memoria la repetición del movimiento de cualquier objeto material que tenga aquellas cua lidades, y haciendo nuestro entendimiento por este medio una com paración repentina, empleamos la palabra titilación para expresar h sensación que nos causa interior ó exteriormente cualquier movi miento acelerado, suave y agradable.
4.a En las investigaciones etimológicas hacen el principal papel los sonidos radicales, esto es, aquellos sonidos que por necesidad han de dominar en todas las voces que pertenezcan mediata ó inmediatar mente á una idea primordial, y esta es la principal base de la etimo logía, porque abraza la forma y la relación de las palabras, las cua les son los signos materiales que deben darnos á conocer las ideas. Estos sonidos radicales pertenecen á determinadas letras, ya solas, ya unidas, que indican la relación, analogía ó.dependencia del sig-
(*) Esta es la razón porque nuestros diminutivos acaban en ito, é ita; ico, é ica; Mo é illa. En todas estas terminaciones domina la característica i, signo, como hemos dicho, representativo de lo pequeño, diminutp, ligero, &c.—La correspondencia de los sonidos de las vocales con los tonos músicos, lejos de ser indiferente como podria parecer, es de suma importancia para el estudio del mecanismo de las lenguas. (Véase la preciosa obra intitulada, Sistema musical de la lengua castellana, impresa en Barcelona, año 1832.)— En general puede tomarse por regla la siguiente comparación: o.... corresponde al bajo. u al...... barítono. a al tenor. e al contralto. i al tiple. Esta correspondencia musical y las combinaciones que admite, llegan á ser caracterís• ticas en las voces, lo mismo que lo son las letras, y en ella consiste nada menos que la eufonía de nuestra lengua. ( XXIX ) niñeado (por cuya razón se llaman letras características), y hacen que los sonidos sean simples ó combinados. Los primeros pertene cen á las vocales; los segundos á las consonantes. La naturaleza nos demuestra que el hombre en su infancia, empieza á caracterizar las voces por medio de los sonidos mas simples y naturales, cuales son los de las vocales, y entre ellas la a especialmente. En segui da caracteriza los acentos figurándolos con las partes, cuyo movi miento le es menos difícil; desde luego con los labios, después con la garganta, y de este modo empieza á emplear los sonidos combina dos mas fáciles, esto es, los labiales que se forman con solo pronun ciar cualquiera letra vocal uniendo y separando alternativamente los labios al mismo tiempo. Así es que en todas las lenguas, las sílabas ab, ha, pa, ma son las primeras que pronuncian los niños, y que com binadas después del modo mas natural, producen las voces mama, papa, raices primordiales, creadas por la misma naturaleza humana, y cuya aparición es, como dicen los filólogos, una consecuencia ab soluta de esta verdad física, el hombre habla. Si seguimos el camino que nos muestra la naturaleza, llegaremos á ver que el hombre naturalmente denomina cada órgano de la pa labra según la inflexion, el movimiento ó el· carácter propio de este mismo órgano. En esta clase de palabras se ve que la caracterís• tica radical es la misma letra propia y conveniente al órgano signi ficado por el nombre; y aunque después se hayan dado otras deno minaciones á estos órganos, la naturaleza ha sido siempre la o-uia que maquinalmente las ha determinado, y por lo mismo debemos mirarlas como voces necesarias, pertenecientes á la lengua primiti va nacida de la conformación humana. Sirvan de ejemplo las in flexiones guturales ga, go, gu: en ellas la característica g, no sola mente ha sido la raiz del nombre dado al órgano, y á lo que á este pertenece, sino también la de otras muchas voces que expresan ó pintan un ruido mas ó menos semejante al que produce el órgano cuando pronuncia la característica g. Así, este órgano se llama en castellano gorja, garganta, ó garguero; en italiano, gola: en francés, gorge; en inglés, gullet; en alemán, gurgel; en latin, guttur; en grie go, glottis; en hebreo, gharon, Sçc. Entre las infinitas voces que tie nen conexión con este nombre, ó que se derivan de él, ó que imitan ó indican el sonido propio de la garganta, puede α citarse gaznate, ( XXX ) gañote, cogote, garganta, gargantilla, guía, goloso, ahogar, glotón, gorjear, gorgnera, golilla, gola, gargajeo, trago, agonía, angina (*)·, angustia, &c., &c, y otras por analogía ó comparación de ideas, como golfo, gruta, grotesco, órgano, angosto. Lo mismo sircede respecto de los sonidos característicos combi nados. El de la combinación st, v, gr., refiere la idea á la firmeza, á la fijación, á la presencia actual ó inmediata. Si pronunciamos estas dos consonantes solas, sin agregarles el sonido de ninguna vo cal, produciremos un sonido particular que es una verdadera inter jección, la cual expresa un deseo ó una voluntad, y la empleamos para hacer callar á una persona repentinamente, ú obligarla á per manecer en estado de inmobilidad. Con mas ó menos extension ex presan las ideas arriba indicadas, las voces estar, estado, estabilidad, consistencia, asistencia, constancia, estanque, estrella, estatua, astro, estructura, construcción, estupor, persistir, &c, y en la lengua lati-
(*) Permítaseme aprovechar la oportunidad que me ofrece la voz angina (escrita con g y no con;') para hacer ver que la ortografía no es arbitraria ni carece de funda mento. Hay razones para que cada palabra tenga precisamente las letras que tiene y no otras: alterar éstas de cualquier modo, sin mas motivo que el capricho, es desfigurar la pintura, y por consiguiente impedir que sea conocido el objeto que ella representa. Véase, por.ejemplo, lo que se dice de las letras a, b, c, l, en los artículos Alma, Beso y Claustro, de este Diccionario. Si no se respeta la etimología, llegará tiempo en que sea casi imposible descubrirla y mas aun el verdadero significado de las voces, y acaso llegaremos á conce bir lo contrario de lo que estas expresan, como puede suceder principalmente en las que se derivan de otras lenguas, v. gr., exotérico, quiere decir lo público, ó lo que está fuera; esotérico, lo secreto, ó lo que está dentro: geología significa ciencia de la tierra; jeología quiere decir ciencia del tiro, o de dispara?; porque la etimología de esta última palabra, escrita con;;, es la voz griega ieoo, yo disparo, ό lanzo; y la de la palabra anterior, escri ta con g, es geo, la tierra. La terminación logia reconoce por raiz logos, discurso; y aque lla misma terminación, escrita con; tiene por raiz loi, de loibomai, hacer libaciones ó sa- crificios. Véase cuan grande y trascendental es la diferencia de las ideas que nos pintan en estas voces las letras
DE SINÓNIMOS CASTELLANOS.
ABA ΑΒΑ
ABAJO, DEBAJO.—El primero considera al sona ó cosa á quien se aplica.—-Dejé la cuerpo con relación á la altura en que casa porque su dueño la tenia abando se halla, sin relación á otro cuerpo; el nada; esto es, "me separé de la casa, segundo le considera con relación á la cesé de habitarla, porque su dueño no situación en que está, respecto de otro la cuidaba ni atendía."—"¿Seráposible cuerpo; esto es: está abajo lo que, en una que me dejes abandonado á mis temo altura determinada, está en un lugar in res?" ferior, aunque no haya otro cuerpo ar Abandonar, nos hace concebir la idea riba; está debajo lo que tiene encima, ó de las consecuencias físicas y morales sobre sí otra cosa. del abandono; dejar, nos da una idea li- ' "Es menos penosa la cuesta acia aba mitada á la separación material en lo fí jo, que acia arriba." "Hoy no ha pi sico, ó á un simple consentimiento de cado ningún pez, porque todos se han la voluntad en lo moral, como cuando quedado abajo." "Se quedó abajo-, no decimos, "deja el libro sobre la mesa." quiso subir." "Está debajo de la mesa." —"Dejemos eso para otra vez."—"Dé "Lo tiene debajo àel pié." Basta subs jame hablar."—Déjame en paz."—"No tituir una voz por otra en estos ejem deje vd. de hacerlo." plos, para conocer la propiedad con que Llamamos dejado al hombre que no explican respectivamente las ideas á que cuida de su aseo personal, ó del arre corresponden. (L. de la Huerta.) glo doméstico de su casa, por pura ne gligencia; pero si ademas de esto, des ABANDONAR, DEJAR.-Podemos abandonar precia su propio interés, y se entrega á una cosa sin dejarla, y al contrario, po la ociosidad ó á los vicios, descuidando demos dejarla sin que la abandonemos. su hacienda, su conveniencia ó sus obli Abandonar, expresa el acto de la vo gaciones, decimos que es abandonado. luntad por el cual nos resolvemos á no Del verbo dejar se deriva el sustanti volver á tomar interés por tal ó cual vo dejadez, que expresa perfectamente cosa, á no hacer aprecio de ella, á mi la falta de voluntad, ó de energía para rarla con indiferencia, y á no alterar el obrar de tal ó cual modo en lo que inte estado que tiene. resa particularmente á nuestra persona. Dejar, supone separación ó despren —V. Desamparar. dimiento, pero sin desprecio de la per- (G, de la Cortina,) ABO ( 4 ) ABO ABDICAR, HACER DIMISIÓN.—Significan mosean á los ojos de un hombre inte en general dejar un empleo, un cargo. resado, la mas execrable de todas las Abdicar, no se dice sino de puestos de criaturas. consideración, y ademas supone dejación (Mardi.) voluntaria, en vez de que la dimisión puede ser for2ada, y aplicarse también, ABOMINABLE, DETESTABLE, EXECRABLE. á empleos grandes y pequeños. —Abominable, se compone de la prepo Cristina, reina de Suecia, abdicó la sición ab, de la voz ornen, agüero, pre corona. Eduardo II, rey de Inglaterra, sagio; y de la terminación able, que es se vio forzado á hacer dimisión del rei la latina bilis, y que significa la fuerza, no. Felipe V, rey de España, hizo vo la capacidad, la facultad de ser ó venir luntariamente dimisión en favor del prín ά ser tal cosa; lo que es propio, á pro cipe su hijo. pósito para hacer ó para ser hecho. (March.) Abominable es lo que no es ominable, lo que no es bueno para los presagios, lo ABOMÍNABLE, DETESTABLE, EXECRABLE. que es de mal agüero. La abominación —La idea primitiva y positiva de estas es propiamente el acto por el cual se palabras, es una calificación de lo malo conjuran los presagios funestos. De en sumo grado. De manera, que no son testable, se compone de la preposición susceptibles de aumento ni de compara negativa de, del verbo, testan, testificar, ción, sino en el caso en que se quiera y de la terminación able. Designa lo dar al objeto calificado el primer lugar no testable, aquello de que no se debe entre todos aquellos á quienes pueda testificar, aquello que merece un testi convenir el género de calificación. Así monio no favorable. Execrable, se com es, que se dice, el mas abominable de pone de la preposición exclusiva ex, del todos los excesos; pero no se diria un adjetivo sacer, sagrado, y de la termi exceso muy abominable, ni mas abomi nación able. Significa lo que debe es nable que otro. Como ellos expresan tar fuera de lo sagrado, lo que está fue por sí mismos todo lo mas fuerte, exclu ra de ello, el que atropella y viola las yen todas las modificaciones que pue»· cosas sagradas. Una cosa ó acción que den hacerse en la mayor parte de los de- amenaza, que es siniestra, que excita el mas epítetos; y en esto son sinónimos. terror, la aversion, es abominable. Lo Su diferencia consiste en que lo abo esencialmente malo, insoportable, que minable parece hacer relación mas di excita el odio, es detestable. Lo que es recta á las costumbres; lo detestable al sacrilego, impío, contrario á las leyes gusto, y lo execrable á la conformación. divinas y humanas, que excita el hor Lo primero denota una obscena corrup ror, la indignación, es execrable. Pro ción; lo segundo, designa maldad ó de curamos alejar de nosotros, disipar lo pravación; y lo último, expresa una ex abominable; hacer que se condene, que trema deformidad. se proscriba lo detestable; que se persi Los que tienen una devoción supers ga, que se aniquile lo execrable. El im- ticiosa pasan al libertinaje, y comun bécil Claudio, especie de mujer, gober mente se encenagan en él, hasta en lo nado por rameras, es un príncipe detes que hay mas abominable. Un manjar table. Catilina, conjurado contra su pa tenido hoy dia por detestable, se sacaba tria con toda la fuerza de los vicios for midables, auxiliado de prendas grandes, en tiempo de nuestros antepasados en es un ciudadano abominable. Cromwel las mejores mesas. Las riquezas her- ACÁ ( δ ) ACÓ con el Evangelio en una mano-, y con la Como las acciones de estos dos ver espada en la otra, derribando el trono y bos son por lo general inseparables, es degollando á su rey por mano del ver poco perceptible su diferencia ; pero dugo, es un vasallo execrable. La ava para distinguirla basta buscarla en un ricia que mancha todas las virtudes, es ejemplo, en el cual lo que se acaba sea un vicio detestable. La hipocresía que las precisamente la acción de otro verbo. remeda, es un vicio abominable· El fa Mañana acabaré de escribir. No aca natismo que mira como virtud el violar ba de llorar. A las doce acabó de cor en nombre del cielo todas las leyes de rer. Acaba de salir, de volver, de en la naturaleza, es un vicio execrable. Es trar. En ninguno de estos ejemplos se tas tres voces se usan en un sentido mas puede usar sin impropiedad del verbo lato para designar los diversos grados concitar, porque no se trata directamen de exceso de una cosa mas mala; y en te de una cosa finalizada y completa por este caso abominable dice mas que de medio de la conclusion, sino puramente testable; y execrable dice mas que abo de una acción que cesa; del término y minable. fin á que llega, no la cosa concluida, sino (A. Cienfvegas,) la operación con que se concluye. (L. de la Huerta.) ABORRECER, DETESTAR.—Estas dos pala bras son de poeo uso, á no ser en tiem ACELERAR, APRESURAR.—Ambos equiva po presente; é indican igualmente sen len á aumentar la velocidad, la diligen timientos de aversion, de los cuales el cia, el movimiento, con el fin de con uno es efecto del orden natural ó de la cluir con mas prontitud una operación; inclinación del corazón, y el otro, de la pero apresurar da idea de un cierto des razón y del juicio. orden, de una prisa dirigida sin regla Se aborrece todo aquello que no se ni concierto al fin. El verbo acelerar puede sufrir, y que es objeto de antipa no supone por sí solo está idea; su ac tía. Se detesta lo que se desaprueba y ción parece mas bien efecto de la con se condena. fianza de llegar antes al fin, mediante El enfermo aborrece los remedios; el el aumento de velocidad y diligencia; desgraciado detesta el día de su naci la del verbo apresurar parece mas bien miento. el efecto del apuro, de la desconfianza, Alguna vez se aborrece lo que seria del temor de no poder llegar al fin. ventajoso amar: y se detesta lo que se El muchacho que ha malgastado el estimaría) si se conociese mejor. tiempo en jugar, apresura, escribe atro El hombre de gran corazón aborrece pelladamente la plana por el apuro en todo lo que es bajeza y cobardía. Una que se halla, y por el temor del castigo. persona virtuosa, detesta todo lo que es Cuando se trata de alcanzar á algu crimen é injusticia. no, ó llegar á tiempo, decimos: no hay (March.) que apresurarse, basta acelerar el paso lo preciso para conseguir el fin; pero ACABAR, CONCLUIR.—Acabar representa sin apuro, sin temor de que nos falte la acción de llegar al término ó find e tiempo. una operación; concluir, representa la Apresurar es el exceso de acelerar. acción de dejar la cosa completa. Hoy (L. de la Huerta.) se acaba mi fatiga. Hoy se concluye la casa. \ ACCIÓN, ACTO.-- Acción se dice indiferen- ACL ( 6 ACÓ temente de todo cuanto se hace, sea dirigen sus rayos acia ella, le comuni común ó extraordinario; y acto, sola can su luz. mente de lo que se hace notable. Consiguiente á esto el uso castella Por sus acciones, mas que por sus pa no ha llamado lumbre á la materia de la labras, descubre uno los sentimientos luz (*), y claridad al efecto de esta de su corazón. Es un acto heroico el con relación á nuestra vista. Así es perdonar al enemigo, cuando se halla que un pedernal da lumbre aunque no uno en estado de vengarse de él. dé luz ni claridad. Así es que llama E! sabio se propone un buen fin en mos lumbreras á los cuerpos luminosos. todas sus acciones. Consiguiente también á lo dicho, se Los príncipes deben señalarse en las llaman claros los líquidos transparentes, diferentes épocas de su vida, con actos y en general, todo cuerpo al través del de virtud y de grandeza. cual pueden pasarlos rayos de luz, co Se dice una acción virtuosa; una bue mo los tejidos, los cristales &c.—V. na ó mala acción; pero no se dirá un Alumbrar, iluminar. acto de virtud, un acto de bondad. (Jormma.) Hácese una buena acción ocultando los defectos del prójimo; y es segura ACLARAR, ILUSTRAR.—Estas voces son mente el acto mas raro de caridad en en el sentido metafórico lo que en el tre los hombres. sentido recto, alumbrar, iluminar. (March.) Se aclara una proposición obscura para que se entienda: se ilustra con ACLARAR, ALUMBRAR.—La significación ejemplos ó con notas lo que se quiere de estos dos verbos es dar luz á una presentar con mayor claridad, para que cosa cualquiera. se perciban sin trabajo todas sus cir Aclarar prescinde de los medios, y cunstancias y relaciones. Se aclaran puede hacerse indirectamente, como las verdades: se ilustran los hombres quitando los estorbos que se oponían con sus hechos. Un entendimiento cla al paso de la luz, ó reuniendo los rayos ro es el que ve lo bastante: un enten de ésta por medio de vidrios y rever dimiento ilustrado es el que está ador beros. nado de conocimientos. La claridad Alumbrar es aclarar directamente a- de aquel se llama luz natural: la ilustra plicando la luz sobre el objeto; por es ción de éste se llama luces; siempre to los hombres, que aclaramos una co consiguiente en que ilustrar, lo mismo sa de varios modos, no podemos alum que su propio iluminar, supone mayor brarla sino por medio de la luz artifi luz de la que se necesita para ver. cial. (Jonama.) Aclarar considera mas la visualidad de los objetos: alumbrar atiende mas á ACOGERSE, REFUGIARSE.—El que busca la materia de la luz: esto es, el prime recurso, ayuda ó protección, se acoge á ro considera la luz como pasiva y exis la. persona que puede dársela: el que tente en los objetos; el segundo la con huye un peligro y busca resguardo ó sidera como activa, y dirigiéndose acia ellos. (*) En otras lenguas no tiene nombre este principio, lo que viene á ser una inconsecuencia en la nomenclatu El sol, la luna, las estrellas aclaran ra química, pues distinguiendo el calor de la materia que la tierra, es decir, la ponen clara, dejan lo produce, exige la analogía que se haga igual distinción entre la luz y su materia, como realmente se verifica en ver los objetos; la alumbran, es decir, la lengua castellana. ACT ( 7 ) ADU asilo, se refugia; y ambas palabras se ADIVINO, PROFETA—El adivino descubre usan de este modo, tanto en sentido lo que está oculto. El profeta predice recto, como en figurado, sin que pueda lo que debe suceder. El primero tiene emplearse una por otra sin faltar á la por objeto lo pasado y lo presente: el propiedad: así lo prueban estos ejem segundo lo futuro. plos. Los griegos refugiados en Fran Un hombre bien instruido y que co cia hallaron en esta nación la mas ge noce la relación que tienen con los mo nerosa acogida.—Para salir de la difi vimientos del alma los mas leves indi cultad, se acogió al sentido literal.— cios exteriores, es tenido fácilmente en La tempestad se nos echaba encima, tre muchos por adivino. Un hombre y no veíamos donde poder refugiarnos. sabio que ve las consecuencias en sus —Si vd. no me acoge benignamente, principios, y los efectos por sus causas, ¿en dónde hallaré un refugio!—V. Re puede hacer que el pueblo le tenga por fugio, asilo. profeta. (O. de la Cortina.) (March.)
ACTITUD, POSTURA.—La postura es una ADULADOR, LISONJERO.— El lisonjero es manera momentánea de poner el cuer mas fino que el adulador. Éste lo alaba po. todo, y sacrifica sin arte ni rebozo, su La actitud es una posición duradera. propia opinion, la verdad, la justicia, y (March.) cualquiera otro respeto, al objeto de su adulación. El lisonjero da mas aparien ACTIVO, EFICAZ.—La diligencia, la pron cia de verdad á su alabanza, persuade titud, la viveza con que se emplean los con mas sagacidad, se vale de medios medios para conseguir un fin, ó con que mas eficaces, y muchas veces indirec obran las causas para producir los efec tos, y se insinúa con mas destreza en tos, constituyen la actividad y el ca el ánimo de la persona lisonjeada. rácter de activo. Un hombre prudente debe despreciar La virtud, la fuerza, la calidad pode la adulación y temer la lisonja; porque rosa de los medios ó de las causas mis aquella solo puede inclinar un ánimo mas, constituyen la eficacia y el carác bajo y despreciable; pero ésta sabe em ter de eficaz. plear con mas arte la fuerza irresistible de nuestro amor propio. Un remedio activo obra prontamen te, produce sin dilación su efecto: un La adulación es siempre directa, la remedio eficaz obra poderosamente, con lisonja puede no serlo. El desprecio fuerza, con seguridad. de la virtud suele servir de lisonja al vicio: el de una hermosura suele serlo Un hombre activo no logra siempre Φ de una fealdad: la conformidad de lo que desea, si no sabe emplear los me gustos lisonjea los del incauto, y le in dios mas eficaces para ello. clina al aprecio del lisonjero. La actividad de un discurso sorpren Por este mismo principio llamamos de, y no da lugar á la duda; su eficacia lisonjeras á las palabras que persuaden persuade y convence, y saliendo al pa y no aduladoras, y usamos con preferen so á la duda, la destruye y disipa. cia del verbo lisonjear para explicar lo El procurador debe ser activo; el que satisface á nuestro gusto, lo que abogado debe ser eficaz. cautiva nuestro corazón, lo que nos ins (L. de la Huerta.) pira confianza. AFI ( 8 ) AGR Se lisonjean los sentidos con la apa AFRENTA, INSULTO,ULTRAJE.—La afren riencia del deleite: se lisonjea el deseo ta es un dicho ó hecho, de que resulta con la esperanza; y así decimos: me li deshonor ó descrédito: ofende mucho y sonjeo del buen éxito de este negocio; mortifica sumamente á los que son de se lisonjea vanamente de ello; y no, me licados en el honor. adulo, ó se adula de ello. El insulto es un acontecimiento de (L. de la Huerta.) obra ó de palabra, repentino ó violento. El ultraje, añade al insulto un exceso ADVERTIDO, AVISADO. — Examínense de violencia que irrita. aquí estas voces en el sentido de sagaz, No es reparar su honor el acudir al capaz, astuto. juez por una afrenta recibida. Los hom La calidad de advertido, es análoga al bres de bien jamas sufren insulto de na talento; la de avisado, al ingenio. die. Es difícil decidir en qué ocasión La penetración en los juicios, la pru es mayor el ultraje, ó cuando se quita dencia en la desconfianza, la solidez en al sexo por violencia lo que rehusa, ó la precaución, son propias del adverti cuando so desecha con desden lo que do. La. viveza en la penetración, la sa ofrece.—V. Agravio. gacidad en la desconfianza, la agudeza (March.) en la cautela, son propias del avisado. El advertido se precave contra el AGRADECER, RECONOCER. — Agradecer, error: el avisado contra el engaño. supone la estimación que hacemos del Los hombres suelen ser mas adverti beneficio recibido. Reconocer, supone dos que las mujeres; pero las mujeres la obligación que nos imponemos de son, por lo común, mas avisadas que corresponder á él. los hombres. Se agradece un regalo de poca mon No se desconfia tanto un hombre ad ta, un obsequio, un saludo. El recono vertido de sus mayores enemigos, como cimiento seria excesivo para correspon una mujer atusada, de sus mayores der á estas frioleras; así como seria poco amigas. enérgica la simple expresión de agrade (L. de la Huerta.) cer una acción generosa que nos ha sal vado la vida, á que debemos estar «£ AFIRMAR, ASEGURAR.—Se afirma con só msKäsamB reconocidos, lidos fundamentos ó con buenos apoyos, (L. de la Huerta.) para que la cosa se sostenga y resista á los impulsos y á los ataques. AGRAVIO, OFENSA.—El agravio atropella Se asegura por la consistencia de la nuestro derecho; la ofensa añade al agra posición ó por lazos que sujetan, á fin vio el desprecio ó el insulto. El que de que la cosa esté fija sin vacilar. tiene derecho á un ascenso que no ha En sentido figurado, la evidencia de conseguido, se cree agraviado; si á este las cosas y la fuerza del entendimiento, agravio se ha añadido un desprecio de afirma al sabio en su modo de pensar su mérito, ó una declaración de su in contra las preocupaciones de los erro suficiencia, se cree ofendido. res del vulgo. La equidad y las leyes, Para el agravio es preciso que haya son los únicos principios en que uno injusticia ; para la ofensa basta que debe asegurar su conducta; los ejemplos haya insulto, aunque no haya injusticia. podrán á veces justificarla; pero no la Aquel nos perjudica tal vez sin afren impiden que varíe. tarnos; ésta nos afrenta siempre ó nos (March.) humilla. ÀGR ( 9 ) AGR No agravia el que dice de uno, que es "con mano armada, y dándole de palos, tuerto, cuando realmente lo es, porque "pone mano á la espada, y hace su de- en decir aquella verdad no hay la injus "ber; pero la muchedumbre de los con ticia que exige el agravio para serlo; trarios se le opone, y no le deja salir pero le ofende el que se lo dice ó se lo "con su intención, que es de vengarse: recuerda, porque insulta su amor pro "éste tal queda agraviado, pero no pio y le humilla. Por eso se disimula "afrentado. Y lo mismo confirmará el agravio mas fácilmente que la ofensa, "otro ejemplo: está uno vuelto de es- no obstante que aquel nos causa un per "paldas, llega otro y dale de palos, y juicio efectivo, privándonos realmente "en dándoselos, huye y no espera, y el de lo que nos pertenece; y ésta solo "otro le sigue y no le alcanza; éste que nos incomoda con un perjuicio fundado, "recibió los palos, recibió agravio, mas por lo regular, en la opinion ó el capri "no afrenta; porque la afrenta ha de cho; porque la ofensa choca directamen "ser sustentada. Si el que le dio los te con nuestro amor propio, que no per "palos, aunque se los dio á hurta cor- dona con facilidad, ni mira como leves "del, pusiera mano á su espada, y se los insultos. "estuviera quedo, haciendo rostro á su De un hombre que baila bien, sin ha "enemigo, quedara el apaleado agravia- a cer vanidad de ello, ni pretender elo do y afrentado juntamente: agraviado, gios, no se puede decir que baila mal, "porque le dieron á traición: afrenta sin hacerle un agravio, de que no que ndo, porque el que le dio, sustentó lo da ofendido; pero sí lo queda una mu "que habia hecho, sin volver las espal- jer, á quien se disputa la buena figura, "das y á pié quedo: y así según las le- aunque ella misma conozca que no la "yes del maldito duelo, yo puedo estar tiene: porque aquel no vé en ello mas "agraviado, mas no afrentado." que una injusticia; pero ésta vé en ello (L. de la Huerta.) un desprecio, un insulto. AGREGAR, ASOCIAR.—Agregar, es añadir, Guardando la misma proporción en uniendo ó juntando unas personas ó co la respectiva propiedad de estas dos vo sas á otras. Asociar, tomar por com ces, se dice figuradamente en lo físi pañero á otr* para que ayude en cual co, que el sol, la luz, el viento, y otras quiera ministerio ó empleo. Se asocia cosas inanimadas ofenden, y no se dice á las empresas, se agrega á una corpo que agravian. ración. Lo uno se hace para tener so (¿. de la Huerta.) corro ó auxilio, ó participar de las ven AGRAVIO, AFRENTA.—Corresponde tam tajas del éxito de la empresa, &c; lo bién á este análisis la distinción que otro, para tener un colega ó compañe hace Cervantes de estas dos voces. ro, ó sostener la corporación con el nú mero y la elección de los individuos. "Entre el agravio y la afrenta hay Los empresarios, mercaderes y asen "esta diferencia (dice D. Quijote, ha tistas se asocian. Los literatos se agre blando del religioso de la casa del du- gan á las universidades y á las acade "que que acababa de injuriarle públi- mias, &c. "camente). La afrenta viene de parte (March.) "de quien la hace y la sustenta; el "agravio puede venir de cualquier par- AGRICULTOR, CULTIVADOR, COLONO.— "te sin que afrente. Sea ejemplo: está Estas tres voces vienen de la latina co "uno en la calle descuidado, llegan diez lère, que en su sentido propio designa AGU ( 10 ) AGU cultivar la tierra, labrarla. De aquí cul to, y en nuestra mente. En todos tiem tivador, que es el que se ejercita en el pos ha mirado el pueblo los fenómenos cultivo. Colère en el sentido traslada extraordinarios del cielo como presa do, designa dar culto, honrar, darse á gios, signos precursores de grandes re una cosa ó persona; y en este sentido voluciones políticas; y á veces han sido decimos, cultivar las ciencias. Esta idea efectivamente funestos estos fenómenos distingue al agricultor {cultor agri), que por los siniestros agüeros que el terror es el que cultiva, que ama, que profe sacó de ellos. La imaginación, la su sa, que se dá al cultivo de la tierra de perstición, el presentimiento, la preo labor. Colère, designa, en fin, habitar, cupación, forman los agüeros. La saga y por eso llamamos colonos á los que cidad, la ciencia, la experiencia, el ra van á establecerse á un pais y á fundar ciocinio, sacan los presagios. Los adi una colonia. Colono, designa el que vinos agüeran engañando, y las pitoni está atado, por decirlo así, á la tierra, sas exaltando la imaginación. Los mé- el morador de ella. dicos considerando los síntomas, y los (A- Cienfuegos.) meteorologistas observando los fenóme nos, presagian. Las almas débiles, vi AGUARDAR, ESPERAR. — La acción de sionarias, son las mas fecundas en agüe• aguardar parece que se funda en la pro ros. Acaso será esta la razón porque babilidad que tenemos, de que venga lo Aristóteles dotaba á los melancólicos, y que se aguarda, y la acción de esperar, los turcos á los idiotas del don de pro en la seguridad que creemos tener, de fecía. Los que son discretos, atentos, que ha de venir lo que se espera. meditadores, son los mas fecundos en Se espera al amigo que ha dado la presagios; y este es el genio que adver cita; se le aguarda, por si viene á la tía á Sócrates, y que inspira á veces á hora á que suele venir. los sabios predicciones verificadas por El buen soldado espera á pié firme al el suceso. Por nuestros agüeros se pue enemigo que le acomete. El cazador, de formar juicio de nuestros temores, aguarda muchas horas la caza que no de nuestras esperanzas, de nuestra Con viene. dición, de nuestro genio. Por nuestros (L. de la Huerta.) presagios puede juzgarse de nuestras lu AGÜERO, PRESAGIO.—El agüero se sacaba ces, de nuestros conocimientos,de nues del canto, del vuelo, y de las demás ac tra aplicación, de nuestros alcances. Se ciones de los pájaros; pero después pasó gún la naturaleza y las disposiciones de á significar toda especie de conjetura los ánimos, un mismo objeto produce sobre lo venidero. Presagio, es voz de agüeros diferentes, y aun contrarios; así la lengua latina, en la cual prœsagire, como según el genio y las pruebas ac significa penetrar lo venidero, anunciar cidentales de los pueblos, el arte agüe- las cosas antes de que sucedan. El ral habia establecido reglas diferentes y agüero, es simplemente la idea que for aun contrarias de interpretación sobre los mismos puntos. Según la exactitud mamos de lo venidero por ciertos pre y la profundidad de los talentos, el mis supuestos. El presagio es á un tiempo mo suceso sugiere presagios diferentes, el signo, la cosa misma que anuncia lo así como según el modo de ver y de dis venidero, y la conjetura del pronóstico currir dos sectas, deducen de los mis que sacamos de los objetos. El agüe• mos principios consecuencias opuestas. ro está en nuestra imaginación, y no en el objeto; y el presagio está en el obje- (A, Cienfuegos.) ALF ( 1 1 ) ALG ALARGAR, PROLONGAR, PROROGAR.— modo de pronunciarlas, lo cual es el Alargar, es añadir uno de los dos cabos principio de toda instrucción, llamamos, ó extender la materia. Prolongar, es ir por analogía, abecedario á los rudimen deteniendo el término de la cosa, ya sea tos de cualquiera ciencia ó facultad, y por la continuación de ella, ya por di por esta razón, también decimos, "es lación de ella, ó por producción de inci tudiar, aprender el abecedano.^ dentes. Prorogar, es mantener la au A los niños se les pone en la mano el toridad, el ejercicio ó el valor de una abecedario no el alfabeto, porque lo que cosa mas allá de su duración regular. se les vá á enseñar es la figura y el so Se alarga el vestido, un triángulo, un nido que deben dar á cada letra; pero al discurso; se prolonga una alameda, un mismo tiempo se les hace conocer el negocio, un trabajo; seproroga una ley, alfabeto, porque las letras están coloca una junta, un permiso, una licencia. das por orden alfabético. (March.) La voz alfabeto, se refiere solamente al orden; la voz abecedario, al modo ALBOROTO, TUMULTO.— Alboroto, lleva de ser de la cosa, esto es, á la figura y consigo la idea de un gran ruido; y tu al valor de las letras, colocadas según multo, la de un gran desorden. el orden que deben tener en la lengua Una sola persona ó un corto número á que pertenecen. de ellas, suele mover alboroto; pero el Ademas, siendo la voz abecedario for tumulto supone siempre que hay en él mada del nombre ó sonido de las cuatro gran número de gentes. primeras letras del alfabeto castellano, Las casas de disolución están expues según el lugar que cada una ocupa en tas á alborotos. Frecuentemente suce él, esto es, a, b, c, d, seria una impro den tumultos en las ciudades de mala po piedad llamar abecedario al alfabeto de licía. cualquiera lengua, como por ejemplo, Alboroto no se dice sino en sentido del hebreo, del griego, del ruso, y de propio, y tumulto se dice también en sen otras, en que la c no ocupa el tercer tido figurado, de la perturbación y agi lugar. tación del ánimo, &c. Mal se sostiene (G. de la Cortina.) una resolución que se ha tomado en me ALGUIEN, ALGUNO.—Alguien se refiere dio del tumulto de las pasiones. ilimitadamente á cualquiera persona. (March.) Alguno, se refiere limitadamente á una ALFABETO, ABECEDARIO.—Empleamos persona indeterminada, de un determi con propiedad la primera de estas vo nado número ó clase.—"Si viene ál- u ces, cuando nos limitamos á indicar el guien á buscarme, di que no estoy en orden de la colocación de las letras, ad "casa, porque temo que ha de venir á mitido en cada lengua, y por eso deci "hacerme visita alguno de mis acree mos "orden alfabético," "índice alfabé dores." tico," "tablas alfabéticas," fyc. Esta es la razón porque se dice algu Nos valemos de la voz abecedario no de ellos, y no alguien de ellos. cuando referimos la idea á la figura y al (L. de la Huerta.) sonido correspondiente á las letras, co Ademas de lo que expone Huerta locadas por orden alfabético. acerca de estas voces, debe advertirse, Como para aprender una lengua, lo que alguien se aplica solamente á per importante es aprender, no tanto la co sonas, y alguno, á personas, á animales locación ordinal de las letras, cuanto el y á cosas; v. g., "este ruido lo hace al- ALM ( I ) ALM guna rata,—"Déme vd. algunas de esas dota ó de un cuento es probar una flores." máxima moral, buena ó mala: su alma (G. de la Cortina.) consiste en la gracia con que se cuenta. A un facineroso, á un hombre duro ALIANZA, LIGA, CONFEDERACIÓN, COA é insensible, lo llamamos desalmado, LICIÓN.—La alianza es una union de hombre sin alma; no obstante suele ser amistad y de conveniencia; la liga, una un hombre de espíritu; esto es, de va union de designios y de fuerza; la con lor, de resolución, y muchas veces de federación, una union de interés y de talento y recursos. apoyo; la coalición, es también una con Se tienen pasiones de animo, y en federación, pero momentánea entre dos ellas se agita mucho el espíritu, exage ó mas partes, contra algún intento daño rando el mal presente y representando so á todos. {March.) el que está todavía por venir. El es píritu se fatiga, se cansa: el ánimo pa ALIENTO, RESPIRACIÓN. — Estas voces dece, se agobia. Solo en estas frases aparecen sinónimas en el Diccionario de se usa ánimo en lugar de alma. nuestra lengua, y parece que lo acredi La acción es en nosotros inseparable ta el uso en las muchas frases en que del sentimiento: el sentimiento no β»1ο se emplean indistintamente, como: fal es de la acción. Por esto cuando con tar el aliento ó la respiración; detener sideramos en general el principio de la la respiración ó el aliento. Pero en ri vida, lo llamamos alma; de modo que gor representan dos ideas diferentes. alma en este sentido, abraza los dos La respiración es la acción de respi principios, el de la actividad y el de la rar, esto es, el movimiento repetido con sensibilidad. De aquí nace que dar vi que se atrae al pulmón el aire exterior, da se llama animar, no espiritar; y que y se vuelve á echar por la boca. se dice alma de un negocio, alma de El aire que se respira es el aliento. una república. Respiración dificultosa, lenta, inter (Jonama.) rumpida. Aliento fétido: arrojar el alien to: empañar un cristal con el aliento. ALMA, ÁNIMA, ÁNIMO.—Empleamos la [L. de la Huerta.) primera de estas voces siempre que re ferimos la idea al principio interior que ALMA, ESPÍRITU.—El principio de la vida nos dá el ser y nos conserva en estado es lo que se llama alma ó espíritu. La de vida, y en este caso tomamos mu vida consiste en sentir y obrar. El chas veces á este mismo principio por principio de la sensibilidad es propia el individuo que vive, como cuando de mente el alma: el de la actividad es el cimos:—"no se vé por las calles ni una espíritu. Todo lo pasivo se refiere al sola alma," en lugar de "una sola per alma: lo activo al espíritu. El alma sona"—"no lo sabrá alma viviente," percibe las ideas: el espíritu las compo en vez de "no lo sabrá nadie."— ne y resuelve; se forma otras. Considerando al alma como parte ó En las demás cosas, espíritu es siem agente principal de la vida, decimos por pre la parte mas activa; alma la parte analogía:—-el alma del negocio, esto es, que las hace sensibles, picantes, gracio lo principal ó lo sustancial del negocio. sas. El espíritu de la pintura consiste —Le arrancaré el alma, esto es, le qui en la invención: el alma de la pintura taré la vida.—Lo siento en el almacén es el colorido. El espíritu de una anác- lugar de lo siento mucho, &c. En nin- ALM ( 13 ) ALM gimo de estos casos podríamos sustituir alimentador. Decimos ánima cuando con propiedad la voz anima. Este sus referimos la idea al mismo principio, tantivo ha quedado destinado por el uso considerándolo como productor de las para significar las almas de los difuntos acciones 6 funciones vitales, por que áni que permanecen en el purgatorio, y es ma reconoce por origen la voz griega tan exacta esta idea, que nos basta oir aliemos, de * ν ευ μ α que significa espí decir simplemente: "las animas," la co ritu, aire, soplo, según la acepción fradía de las ánimas," el toque de áni que dieron á esta voz los filósofos estoi mas," "¡animas benditas!" &c, para cos, considerando á este aire vital co entender que se habla de las del purga mo un quinto elemento, y por esta ra torio. zón llamaron pneumología á la ciencia De la voz ánima tomamos el sustan que trata de los espíritus, y los latinos tivo animación, para expresar el acto de dijeron indistintamente animae silentes, infundirse el alma en el cuerpo, y em las almas de los difuntos,—comprimere pezar la vida; y como esta consiste en animam, detener el aliento ó la respira el ejercicio deJaá funciones vitales, lla ción,—animae thraciae, los vientos del mamos animación con mucha propiedad, Norte, &c. á la viveza ó expresión en las palabras, Pero aun hay mas. Nuestra lengua acciones y movimientos de una perso en el tesoro de su admirable riqueza, na: y del mismo modo, cuando vemos tiene todavía otra voz distinta de áni un retrato, ó una figura humana pinta ma y de alma, y propia para significar da sin la propiedad necesaria para re el mismo espíritu ó principio de vida, presentar al individuo en estado de vi considerado como principio ú origen de da, decimos que le falta animación á la pintura. palabra alma se compone de a, primer sonido vocal, pri mera letra del alfabeto latino, la cual vale una unidad Yo no puedo menos de admirarme en los alfabetos numéricos, y sirvió" para designar lo que es 6 está primero, δ en primer lugar, y al mismo tiempo al ver que ninguno de los filólogos que se refiere al dominio 6 & la posesión, indicando el dueño se han dedicado al análisis de los sinó ó el propietario. Despftes de 1 a a, sigue l, cuya pronun nimos castellanos, haya fijado su aten- ciación es propia para expresar la fluidez, requiere un movimiento de la lengua suave y ligero, y por consi cion en la diferencia filosófica que es guiente debe convenir á las ideas de fluidez, de desliza tablecemos naturalmente entre las vo miento, y que se refieran á las funciones de la lengua dentro de la boca, como lo indican tas palabras lamer, li ces alma y ánima, ateniéndonos, acaso quido, licor tyc. Estos atributos propios de las letras a y sin saberlo, al origen de cada una de l, y que convienen al hombre, constituyen la esencia de la sílaba oí, la hacen pertenecerá toda idea referente ai estas voces. Y no hay remedio; deci hombre haciendo uso del órgano llamado lengua, y la con mos alma cuando queremos referir la vierten en radical de todas las palabras que expresen ideas relativas á esta función, como alere, alimentar; alimentum idea al principio de la vida, considerán alimento; aletudo, gordura; alumnus, el que es alimentado; dolo únicamente como conservador de alumna, y altrix, nodriza; alicarius, el que muele las se millas, y también el que las vende &c.—Y si queremos ella, porque alma se deriva del latin descender ä deducciones ideológicas, veremos que como alere, alimentar, nutrir, mantener, y de el que es bien alimentado, hablando de los hombres, cre este verbo tomaron los latinos el adje ce, adquiere mayor magnitud, y ocupa un espacio mas grande desde el suelo acia arriba, ó (hablando de los ár tivo almus, alma, almum (•*), nutritivo, boles) desde el pie hasta la cima, se aplico la idea produ cida por la rai'í ai, á la separación 6 elevación vertical, y se dijo altus, allitudo, altare, altisonans, exaltare, <$"c, y en (*; Como la formación de las voces no es arbitraria, castellano, alzar, alto, altura, aliar, altisonante, alteza, exal debemos analizar con toda la minuciosidad posible los ele tar, exaltación, altivez, altanería, altivo, altanero; altozano, mentos que entran en la composición de cada una de altimetría $c. tfc., y al instrumento mas natural y propio ellas, si queremos conocerlas con toda la perfección posi para alzarse ö elevarse, se le llamo ala, palabra de las mas ble,.; convencernos de la razón que hay para dar ä cada ideológicas qne tiene la lengua castellana. vos el significado que tiene. En el presente caso, debemos empelar por notar que la sílaba al con que principia la (G. di la Cortina.) ALT ( 14 ) ALT las operaciones racionales, y esta voz í Un príncipe puede y debe desechar es el sustantivo animo, con la cual ex con una altivez heroica, proposiciones presamos ideas de voluntad, de acción ó propuestas degradantes; pero no de y de sensación: y como estas funciones un modo altanero, ni con tono altanero, del alma hacen suponer en ella la fuer ni con palabras altaneras. za y el vigor necesarios para ejecutar Un alma altiva es grande; un alma las, decimos con mucha propiedad: ani altanera es soberbia. mar ó infundir animo, por infundir valor, Se puede tener corazón altivo con —animarse á hacer tal cosa, en vez de, mucha modestia; no se tiene genio al resolverse á hacerla,—no tengo, ó no tanero sin un poco de insolencia. El hago ánimo de decirlo, en lugar de no insolente, es respecto del altanero, lo es mi intención decirlo,—decaer de áni que el altanero respecto del imperioso, mo, desconsolarse, perder las esperan que tiene genio dominante. zas,—¡ánimo! ¡buen ánimo!—dilatar el (March.) ánimo, expresión sumamente significati va y conceptuosa de que nos servimos ALTURA, ELEVACIÓN, EMINENCIA.—La para dar á entender el consuelo ó el altura expresa la situación de un cuer desahogo que proporcionamos ó senti po, separado de la tierra acia arriba y perpendicular á ella, y trae consigo la mos en las aflicciones por medio de la idea de la distancia, ó lo que es lo mis esperanza ó de la conformidad. mo, de la medida.—Así decimos altura Finalmente: el alma nos da la vida de polo—altura de un astro—altura uniéndose á nuestro cuerpo, y pertene barométrica—el Dios de las alturas, Sfc. ce á la esencia, por lo cual decimos que La elevación no indica separación de el hombre se compone de alma y euer- la tierra, prescinde de la medida, y es, po: el ánima hace que la vida sea acti por decirlo así, mas material: por eso va produciendo movimientos y acciones decimos levantar una casa, y no alzar; materiales y pertenece á la acción, y tirar por elevación y no por altura. por esto llamamos animales á todos los Eminencia indica mucho menos que seres dotados de sensibilidad y movi altura y elevación. miento, principalmente á los brutos: el Lo alto es opuesto á lo bajo: lo ele ánimo espiritualiza las acciones y per vado es opuesto á lo llano, y lo emi tenece al consejo, ó mas bien á la re nente es opuesto á lo liso ó á lo igual flexion, como lo prueba el uso que ha de una superficie. cían los latinos de aquella voz, diciendo: Las aplicaciones que hacemos de to in animo meo, en mi opinion, "según das estas palabras en sentido figurado, me parece." (G. de la Cortina.) nos indican exactamente la diferencia que hay entre ellas; v. g., de la frase ALTANERO, ALTIVO.—Altanero se toma „alzar por rey" se derivó el tratamien siempre en mal sentido, pues depende to de alteza, que por mucho tiempo del orgullo que se anuncia por un exte se dio en España á solos los reyes, y rior de arrogancia: es seguramente el hoy se da á los príncipes de sangre medio mas seguro de hacerse aborre real, á diferencia del tratamiento de cer, y defecto del cual se debe tener eminencia que se confirió á gerarquías mucho cuidado en corregir á los jóve inferiores. Cuando para expresar la nes. Puede uno ser altivo con modo, incomodidad que nos causa tal cosa, en algunas ocasiones. nos valemos de la frase familiar "me ALU ( 15 ) ALU levanta en alto,,J damos á entender que A un pretendiente que cree haber es tan fuerte la impresión que nos hace, merecido el favor de un ministro; á un que parece que nos separa de la tierra amante que se considera preferido; á un acia arriba; idea que no podría expresar hombre que cree poder hacer esto ó el verbo levantar solo. Decimos dar aquello, sin mas fundamento que la con un salto muy alto y no muy eminente ni fianza que les inspire el modo particu elevado: ideas altas ó elevadas, y nunca lar con que cada uno vé las cosas, les eminentes, y llamamos eminencias y no decimos: "no se alucinen vds." alturas ni elevaciones, á las desigualda Cuando una luz excesiva nos deslum des ó á los tropiezos que advierte la vis hra é impide distinguir bien el color de ta, ó halla el tacto en una superficie, y las cosas, decimos que "se ofusca nues nos impiden llamarla lisa ó igual. tra vista. " Cuando la profusion de pa (O. de la Cortina.) labras ó de frases nos impide percibir bien lo que se nos quiere dar á entender, ALUCINACIÓN , ALUCINAMIENTO . — La decimos que se ofusca nuestro enten alucinación es el acto de alucinar: alu dimiento. cinamiento es el estado en que queda el La falta de arreglo ó de separación, que ha sido alucinado. Por consiguien nos hace confundir las cosas y las ideas, te debemos considerar á la primera de no permitiendo á nuestro entendimiento estas voces como causa, y á la segunda clasificarlas según convendría. Esta es como efecto; y llamamos también aluci la razón porque llamamos confuso á un namiento (y no alucinación) á las visio autor que no expone sus doctrinas con nes que nos representa nuestra fantasía método ni orden; y por esta razón tam excesivamente exaltada. {β. déla Cortina,) bién decimos que queda confundida la persona á quien el convencimiento re ALUCINAR, OFUSCAR, CONFUNDIR.—Alu pentino de su falta de proceder arregla cinar, es propiamente hacer concebir do, deja penetrada de turbación ó de ideas de cosas que no existen, ó com vergüenza. binar de un modo contrario á lo posi Entre confuso y confundido (aunque ble ό á lo probable las ideas de lo que el primero no es mas que el participio existe. irregular de confundir, y el segundo, el Ofuscar, es perturbar al entendimien participio regular del mismo verbo), hay to de modo que no pueda percibir ó dis la notable diferencia de que confuso se tinguir bien las cosas, según ellas son. aplica á la naturaleza de la cosa ó á Confundir, es dar á unas cosas los su modo de ser; y confundido, al estado atributos que pertenecen á otras, esto de la cosa, ó á su modo de quedar. es, tomar unas cosas por otras. (G. de la Cortina.) Al alucinamiento pertenecen en lo fí sico las visiones de los dementes, y en ALUMBRAR, ILUMINAR.—Se alumbra para lo moral las esperanzas de las personas ver: se ilumina para la claridad, para la que se fingen lo que desean, sin sujetar comodidad, para el adorno: de modo que se á la razón. iluminar supone siempre mas luz de la Al ofuscamiento pertenece la oscuri que se necesita para ver. dad, tanto física como moral. Las luces que diariamente ponen en La confusion, expresa la mezcla des las calles para que la gente pueda an arreglada, el desorden y trastorno, tan dar con seguridad, se llaman alumbrado: to de las cosas como de las ideas. 1 las que se ponen en las fiestas públicas, AMA ( 16 ) ΑΜΒ se llaman iluminación. Se alumbra una lenta, que se siente mejor que se expli antesala: se ilumina un salon de baile ó ca, y en que regularmente tiene poca de tertulia. El sol, que nos alumbra, parte la reflexion; aunque siempre se ilumina la tierra porque la llena de luz. funda en la suposición de algún mérito. Las cartas geográficas y las estampas De aquí se infiere, primero: que no no se alumbran, porque sin esto se vé puede haber amor ni cariño sin algún bien el objeto; pero se ¿/«minan, para grado de estimación; pero que puede ha que se perciba todo con mayor claridad ber estimación sin amor ni cariño: se y mas gusto. gundo, que aunque el amor supone al (Jonama.) gún grado de cariño, no siempre están AMAR, QUERER.—Amamos generalmente en proporción estos dos afectos; yo pue lo que nos gusta, sean personas, sea do amar extremadamente á una perso cualquiera otra cosa; pero no queremos na, sin que propiamente la quiera tan sino la persona, ó lo que hace en algún to como á un amigo íntimo: tercero, que modo parte de la nuestra, como nues el amor y la estimación suelen nacer en tras ideas, nuestras preocupaciones, y un momento, y con el tiempo parar en también nuestros errores y nuestras ilu cariño uno y otro, particularmente la siones. estimación: cuarto, que el amor debe du rar poco; que la estimación puede aca Querer, expresa mas apego, cariño y barse, ó variando las prendas que la cau atención. Amar, expresa mas diversi san, ó descubriendo que habíamos juz dad en el modo. Lo uno no está man gado con error; y que el cariño, como dado ni prohibido; lo otro está mandado que es un hábito, suele ser perpetuo. y prohibido, según el objeto y el grado. El Evangelio manda amar al prójimo Por esto al deseo de nuestra propia como á sí mismo, y prohibe amar á la felicidad y á la inclinación de una ma criatura mas que al Criador. dre á sus hijos los llamamos amor, como El niño querido es á veces aquel de cosa en que tiene menos parte la re la familia que ama menos á su padres. flexion que la pasión. Al contrario, á la (March.) relación de los hijos á la madre, de los hermanos entre sí, &c, se la llama ca AMAR, QUERER, ESTIMAR.—Del aprecio riño, porque se funda en la razón y en ó buen concepto que hacemos de una el hábito. En el sentido hiperbólico, cosa, sea con fundamento ó sin él, nos se dice también amante de las artes, de resulta por lo regular una cierta incli la amistad,, del orden; amor á la virtud, nación, que, según es mayor ó menor, á la justicia; y en general se dá el nom toma las denominaciones de amor, de bre de amor á todo afecto que se supo cariño, ó de estimación. ne violento. La estimación resulta únicamente de Lo opuesto al amor es el odio, al ca la persuasion del mérito de la cosa es riño el aborrecimiento, á la estimación no timada: el cariño, nace del hábito: el sé si corresponde exactamente el desde amor, es efecto de la pasión. ño ó el menosprecio. (Jonama.) Basta regularmente conocer el méri to de una persona para estimarla: solo AMBOS, ENTRAMBOS, AMBOS A DOS.— la conveniencia de caracteres, conocida Ambos no sirve mas que para expresar por un largo trato, puede producir el determinadamente y de un modo abre cariño: el amor es una inclinación vio- viado el número de dos personas ó co- AMO ( 17 ) AMO sas de quienes se ha hablado ya, pres ten en dureza; pero la sensibilidad del cindiendo de que estén juntas ó separa afecto es mas tranquila, porque la ins das. Entrambos hace concebir ademas pira el mérito. la idea de la union y de la comunidad ó Por eso en la idea de afecto se com conveniencia de la cosa; por lo que ha prenden otras inclinaciones mas sóli blando, v. g., de dos consortes, suele das , pues también se llama afecto al decirse, "esto es muy conducente á la que se tiene al amigo, al criado fiel, a felicidad de entrambos." aquel á quien nos inclinamos por sus Ambos à dos, denota con mayor pre prendas ú otro motivo, sin la ceguedad cision la union, y ademas indica coope del amor, ni la ternura del cariño. ración voluntaria de las dos personas de El amor conyugal dura muy poco, si quienes se habla. es amor: se entibia eon el tiempo, si es Los adjetivos ambos y entrambos se cariño: y solo crece y dura, si es afecto aplican indistintamente á las personas, (L.de la Huerta.) á Jos animales y á las cosas, y son de clinables por todos los casos. Decimos, AMOR, GALANTERÍA.—El amor, mas vivo i(ambos ejércitos," "de ambas partes," que la galantería, tiene por objeto la "con ambas manos," "por entrambos la persona, y obliga á complacerla para dos, &c." lograr su posesión; hace que la amemos Ambos ά dos, se aplica exclusivamen tanto como á nosotros mismos; se apo te á las personas, y solo se usa en no dera súbitamente del corazón, y debe minativo. su principio á un no sé qué indefinible, (G. de la Cortina.) que arrebata los sentidos y se granjea la estimación antes de todo examen, y AMONTONAR, ACUMULAR.— Primero se sin informe ninguno. La galantería es amontona, después se acumula. Así pues, una pasión mas voluptuosa que el amor, se dirá: amontonar bienes, acumular ri y cuyo objeto es el sexo· Por ella se quezas. forman tramas y máquinas dirigidas á Tan sabio es amontonar, para gozar, satisfacer el deseo; y el que galantea, como locura privarse de gozar por acu mas ama su satisfacción propia que no mular. la de su dama. La galantería mas afec (March.) ta los sentidos que el corazón, y mas
AMOR, CARIÑO, AFECTO.—Se tiene amor participa y cobra mas fuerzas del tem á una persona cuya posesión nos pare peramento y de la complexion, que no ce la suprema felicidad; se tiene cariño de la fuerza de la he.mosura, cuyo mé á aquella cuya amabilidad excita viva rito descifra con mas conocimiento ó mente nuestra ternura; se tiene afecto con menos preocupación. El uno ha á aquella, cuyo mérito excita vivamen ce agradable á nuestros ojos todas las te nuestra inclinación. personas de que gusta la que amamos, El amor es una pasión violenta; el como no sean las que nos dan celos. canño una pasión tierna; el afecto una La otra nos hace guardar ciertos mira estimación apasionada. mientos con todos aquellos que pueden El cariño se acerca mas al amor, por servirnos ó perjudicarnos en nuestros que aquella misma sensibilidad que es provectos, sin exceptuar nuestro mismo el alma del cariño, es también propia competidor si creemos poder sacar par del amor, aunque exagerada y mezcla tido de él. da de contrastes que á veces la convier- El amor no deja libertad para la elec- 3 AMO ( 18 ) AMO cion: al principio manda como señor; objeto amado: la galantería pinta la después reina como tirano hasta que se imagen agradable del singular placer rompen sus grillos á fuerza de tiempo, que nos causará la posesión del objeto ó por el esfuerzo de una razón podero deseado. Ni el uno ni la otra pintan sa, ó por el capricho de un enfado lle estos casos al natural, y sabemos por vado adelante. La galantería da mu experiencia que sus colores, aunque chas veces treguas á otra pasión, y en graciosos, son falsos. frenada por la razón y por el ínteres, Hay, sin embargo, esta diferencia: no dificulta en acomodarse con nuestra que el amor, como que es mas serio, se situación y con los sucesos. siente mas de la infidelidad de su pin Aquel nos da á una sola persona, á cel, y que la memoria de lo que ha su la cual entregamos nuestro corazón to frido, viéndolo tan mal pagado, sirve do entero, de manera que le llena todo para que rompamos de una vez con él; y nos hace indiferentes para con todas pero la galantería, siendo mas alegre, se las otras, por mérito y por hermosura siente menos de las burlas de sus pintu que tengan. La galantería nos lleva ras, y la vanidad de haber salido bien en pos de todas las personas de belleza de sus proyectos le consuela de no ha y de gracia, y nos une á las que nos ber hallado la satisfacción que se había corresponden; pero de modo que toda propuesto. vía nos queda gusto para las otras. El amor es el que principalmente prueba el placer; y la satisfacción de El amor, como que parece que tiene los sentidos contribuye menos á la dul complacencia en las dificultades, y lejos zura del goce, que cierta alegría inte de arredrarse por ellas, solo sirven pa rior que proviene del pensamiento de ra darle mas pábulo. La galantería licioso de que se posee lo que se ama, trata de abreviar las ceremonias y for y que tenemos las pruebas mas peren malidades, antes prefiere lo fácil que lo torias de una tierna correspondencia. difícil, y las mas veces es una mera di En la galantería no está tan herido el version. ¿Será esta la razón porque corazón, el ánimo está mas libre, y los hay en el hombre un fondo mas inago sentidos atienden mas á satisfacerse, y table de galantería que de amor? Lo disfrutan con mas igualdad el placer; y cierto es que es una cosa rara el ver así es que mas se goza en ella por el que á un primer amor suceda otro se deleite que por la delicadeza de los sen gundo, por que estos gastos le cuestan tidos. mucho al corazón; pero no sucede así con las galanterías, que son á veces in El que se ve demasiado atormentado finitas, y que se suceden hasta la vejez. por los caprichos del amor, pugna por desprenderse de él, y llega á ponerse Siempre hay buena fe en el amor; pe indiferente. El que se siente cansado ro es opresor y caprichoso, y le miran con el ejercicio de la galantería, toma en el dia como una enfermedad ó como el partido de descansar, y viene á ser una flaqueza de ánimo. Su poco de mas sobrio. picardía hay en la galantería; pero es El exceso de amor viene á parar en libre y divertida: nuestro siglo está por celos; el de galantería en disolución: ella. en el primer caso hay peligro de perder El amor graba en la imaginación la la cabeza; en el segundo le hay de per idea halagüeña de una felicidad eterna der la salud. en la constante y entera posesión del El amor no les sienta mal á las don- AMO ( 19 ) AMO celias; pero es muy mal mirada en ellas tería puede razonar mas, pero que cor la galantería, porque el mundo pasa rompe el corazón. Lo cierto es que el porque se aficionen á uno, pero no amor quita la libertad y el discernimien porque se den á la satisfacción de sus to al entendimiento; y que la galantería deseos. aguza el ingenio, como que tiene que No sucede lo mismo fuera de este poner por obra todas sus artes. Por lo estado; pues entonces se disimula la que toca al corazón, siempre decide el galantería en las mujeres, y se mira carácter personal de los sugetos. Es como ridiculo el amor. Como que pa tas dos pasiones obran en él, según va rece que está en razón que un corazón, rían las personas que son heridas de nuevo todavía, se deje llevar de una ellas: si alguna hubiera de sacar parti pasión; y los que lo ven, compadecidos do, seria sia duda el amor; porque sien del caso, se interesan de buena gana en do mas violento que la galantería, mue su favor y no tienen nada que censu ve mas á tomar venganza de aquellos rar. No juzgan así de una que está que le contradicen ó que le causan dis sujeta al yugj del matrimonio y que gusto; y como es también mas perso todavía se ve reducida á ceder auna pa nal, da ocasión á obrar con mas diferen sión no menos tiránica que ciega. Tal cia respecto de todos aquellos que no vez será este el motivo por que una sol son el objeto de él, ό que no le lison tera, aun con el amor mas violento, pue jean. de sin embargo conservar la tierna (A. Cienfuegos.) amistad de los amigos que no exigen otros sentimientos que los de estima AMOR A LA PATRIA, PATRIOTISMO.—El ción y respeto; y es cosa muy difícil amor ά la patria es un afecto natural; que una mujer casada, hallándose( en el patriotismo es una virtud. este caso de un amor tierno y perfecto, Aquel es propiamente el apego que no espante de sí á los otros amigos, ó naturalmente tenemos al suelo en que que no pierda mucha parte del afecto hemos nacido, en que hemos conocido á que la profesaban. Nace esto de que, nuestros padres y amigos, y adquirido en el primer caso, el amor habla siem las primeras inclinaciones; el que gene pre su idioma, sin que por esto pierda ralmente se tiene á la lengua, á los nada el de la amistad; y de consiguien usos, á las costumbres con que nos he te, no perdiendo los amigos nada de mos criado, á los principios de la edu lo que se les debe, no sienten ni se cación, á los objetos que nos recuerdan dan por quejosos de lo que se da al las primeras indelebles impresiones de amante. En el segundo caso, el amor la infancia. Este afecto natural es ca habla uno y otro idioma, y se gobierna si común á todos los hombres, sin ex por ambos, haciendo amigo al amante, ceptuar aquellos que habitan los países por manera que los otros, si no se reti mas incultos. ran, conocen á lo menos que no les dan El efecto que causa el amor ά la patria tanta confianza, ven que los tratan so en un carácter activo y desinteresado, bre otro pié, y participan de la indife es el patriotismo, que consiste en un ar rencia universal que esta nueva afición diente deseo de servirla, de defenderla, ocasiona. de contribuir á sus progresos, á su bien, Dicen que el amor conserva las bue á su prosperidad. nas prendas del corazón, pero que da Aquel que sin poner nada de su par al traste con el juicio; y que la galan- te en la defensa, ó en el bien de su pa- ANC ( 20 ) AN I tria, se complace en sus felicidades, se la última edad del hombre: vejez, es la gloria de haber nacido en ella, encare ancianidad considerada con respecto á ce sus ventajas, y la prefiere á todas, la decadencia de la vida. cree tener patriotismo, pero solo tiene La ancianidad es respetable: la vejez aun amor ά su patria. fastidiosa. Los ancianos, en igualdad En muchos casos se puede decir con de educación, tienen mas experiencia, propiedad, que el amor ά la patria es por consiguiente mas instrucción y mas al patriotismo, como la ceguedad de un juicio que los mozos: los viejos suelen amante, al celo de un buen amigo: aquel tener menos fuerzas de ánimo; por con cree que no hay cosa mejor que lo que siguiente la generosidad y todas las ama; este procura que no haya cosa me grandes virtudes, son mas propias de la jor que lo que estima, juventud. {L. de la Huerta.) La ancianidad se considera absoluta mente: la vejez es siempre relativa. To ANALOGÍA, CONFORMIDAD.—La relacion dos los hombres son ancianos en llegan que tienen unas cosas con otras, es la do á cierta edad; se llaman viejos ó no idea común á estas dos voces. Pero viejos según como los consideramos. la conformidad representa una relacion Una soltera de veinte y cinco años es de identidad; la analogía, una relación vieja; una casada de treinta, no lo es. de conveniencia. , s / Para una niña de quince años es viejo La identidad de tmmammmm, de ac un novio de cuarenta; y no lo es un pa cidentes y de circunstancias que con dre de cincuenta. curren en dos cosas diferentes, consti (Jonama.) tuyen su conformidad: la semejanza ó conveniencia recíproca que tienen en ANHELO, DESEO.—El deseo no es mas que tre sí, constituyen su analogía. el movimiento interior que nos hace La conformidad de los gustos, genios sentir la voluntad cuando apetecemos al ú opiniones de dos personas, supone guna cosa. El anhelo es el deseo lle que sus gustos, genios y opiniones son vado al último grado de vehemencia de idénticas. La analogía de dos meta que es capaz el corazón humano. les, dos vicios, dos ideas, supone que El deseo no supone agitación ningu ios vicios, las ideas, y los metales, son na, al paso que el anhelo expresa turba diferentes; pero la imaginación nos re ción del ánimo, y da la idea de una agi presenta su relacion por la semejanza tación física que nos impide respirar y conveniencia que tienen entre sí sus con libertad. La felicidad pública es un cualidades. deseo de todo hombre honrado. Es im Se hace una copia conforme á su ori posible que un amante pueda ocultar ginal, esto es, idéntica como él. Se ha sus anhelos. (G. de la Cortina.) ce un discurso análogo á las circunstan cias, esto es, que conviene á ellas. ANIMAL, BESTIA, BRUTO.— La palabra De aquí es que decimos: las faldas animal, comprende todos los seres or de los montes, la caida del sol, por la ganizados vivientes. analogía, y no por la conformidad, que La palabra bestia caracteriza una cla tienen aquellas voces con las ideas á se de animales por oposición al hombre. que se aplican. La palabra bruto, indica las especies (£·. de la Huerta.) de bestias poseídas del instinto mas gro sero é incapaz. ANCIANIDAD, VEJEZ.—La ancianidad, es (March. ) ANI ( 2 1 ) ANT ANIMOSO, VALEROSO, VALIENTE, INTRÉ Anonadar, siempre se emplea en sen PIDO.—Llamaremos animoso al que im tido moral: aniquilar, siempre eiixsenti- paciente de atacar ó acometer, no se do físico. Aquel se aplica á las perso» para en las dificultades, y emprende osa ñas solamente; éste á las personas y á damente. Valeroso, al que sostiene el las cosas. Decimos que el alma se ano ataque ó lid con vigor, que no cede á la nada ante la presencia de Dios, y no, resistencia que se le hace, y continúa que se aniquila. Por el contrario, ha la acción á pesar de la oposición y de blando de un pais, de un caudal, &c, los esfuerzos contrarios que se le pre se dice que están aniquilados, y no ano sentan. Valiente, al que corre al peli nadados. Si decimos que fulano está gro sin miedo, y que prefiere el honor aniquilado, damos á entender que las á la vida. Intrépido, al que arrostra y enfermedades, la miseria, los desórde vé á sangre fría el peligro mas eviden nes, &c, han destruido su salud; pero te, sin aterrarse al aspecto de una muer si decimos que está anonadado, signifi te inevitable. camos que está confundido, ó avergon Diremos, pues, que el animoso se zado, ó abatido profundamente, ó su avanza ó adelanta; el valeroso prosigue; mergido en el mas vivo dolor. el valiente se espone; y el intrépido se (O. de la Cortina.) sacrifica. {March.) ANTECEDER, PRECEDER.—El primero ex presa anterioridad de tiempo; el segun ANIQUILAR, DESTRUIR.—Lo que se des do, anterioridad de lugar; por eso lla truye cesa de subsistir, aunque pue mamos antecesores á los antepasados, de den quedar vestigios; lo que se aniquila quienes descendemos; y llamamos pre desaparece enteramente. Aniquilar tie decesores, á los que obtuvieron, antes ne mas fuerza que destruir; de modo, que nosotros la misma dignidad (ó como que aniquilamiento- es una destrucción vulgarmente se dice, ocuparon el mis total. mo puesto) que actualmente obtene Destrucción, se usa comunmente en mos. Pero debe notarse que el verbo el sentido literal para las cosas com preceder, lo mismo que el adjetivo pre puestas y que forman cuerpo por la decesor, indican anterioridad inmediata, union de sus partes. Aniquilar, no se al contrario de anteceder y antecesor, que dice principalmente, sino del ser sim excluyen toda limitación de tiempo.— ple en proposiciones de física: en otro V. Predecesor. caso tiene siempre un sentido hiperbó (Ct. de la Cortina.) lico. (March.) ANTIGUAMENTE, EN OTRO TIEMPO, OTRAS VECES.—Los tres designan el tiempo ANIQUILAR, ANONADAR.·—Estas dos vo pasado; pero antiguamente le designa ces parecerían sinónimos perfectos si se como muy apartado del tiempo presen Mjé»efe solamente á su etimología; pues te: en otro tiempo, como simplemente se la única diferencia que hay entre ellas parado; y otras veces le indica no sola es, que aniquilar, se deriva de la voz mente como separado de lo presente, latina nihil; y anonadar, de la castella sino también como diferente, por los ac na nada, traducción literal de aquella, cesorios. de modo que ambas significan reducir ά Tan injusto es juzgar de lo que se la nada. Pero dejan de ser sinónimos, practicaba antiguamente, por lo que en según el uso que se hace de ellas. el dia está en uso, como seria ridículo APE ( 22 ) ΑΡΟ querer arreglar los usos del dia por lo · mete crímenes, no obstante la santidad que antiguamente se hacia. Mn otro tiem- i del lugar. po se rogaba mucho á los convidados á í (March.) que bebiesen, en el dia ni aun se les in- i LPETENCIA, APETITO.—La apetencia in dica. Las cosas mudan según los tiem dica necesidad: el apetito, deseo. Aque pos y las circunstancias: lo que otras lla es independiente de la voluntad: éste veces era bueno, puede no ser conve puede depender de la voluntad ó del há niente ahora. | bito. La apetencia pertenece á la con (March.) j ! servación del individuo. El apetito mu I chas veces es contrario á ella, y por eso AÑADIR, AUMENTAR.—El aumento es el la moral nos impone la obligación de resultado de la adición. La parte que moderarlo cuando no es efecto de nues se agrega á otra para hacerla mayor, es tra voluntad. Así decimos, que la gula lo que se añade; la que se hace mayor es un apetito desordenado de comer y con la parte añadida, es lo que se au beber, y no una apetencia;—apetitos menta. sensuales, y no apetencias. Si hablan Aumenté el número de mis libros, aña do de un enfermo decimos, que ya ha diendo á los que tenia, algunos que me recobrado la apetencia, damos á enten faltaban. der, que vá mejorando su estado; pero si Este vecindario se vá aumentando de decimos que ha adquirido tal ó cual in dia en dia; y no, se vá añadiendo. clinación nociva, como por ejemplo co Aumento su caudal, añadiendo á él el mer tierra, diremos que tiene el apeti dote de su mujer; y no, añadió el cau to de comer tierra y no la apetencia. dal, aumentando el dote, porque se da (G. de la Cortina.) ría á entender lo contrario de lo que se quería decir. APLACAR, CALMAR.—El viento aplaca, (X. de la Huerta.) i el mar calina. Respecto á las perso
A PESAR DE, KO OBSTANTE.—A pesar de, nas cuando están coléricas ó con el fu expresa una opinion de resistencia sos ror de la ira, se trata de aplacarlas; pero tenida, ya por el hecho, ya por otros me se procura calmarlas cuando están con dios; pero sin efecto por parte del que movidas por el excesivo temor del mal, se opone, enunciado por el complemen ó por el terror ó la desesperación. Así, to de la proposición. A pesar de sus cui pues, la palabra aplacar tiene lugar con dados y de sus precauciones, el hombre lo que procede de la fuerza ó de la vio no puede evitar su destino. El alma lencia, y la palabra calmar en lo que es del filósofo queda libre ά pesar de los ti efecto de turbación ó de inquietud. ros de la muchedumbre, y la razón le Una sumisión nos aplaca, un rayo de ilustra ά pesar de las tinieblas que la esperanza nos calma. (March.) preocupación esparce en rededor suyo. ΝΌ obstante, indica solamente una APÓCRIFO, SUPUESTO.—Llámase apócrifo oposición ligera por parte del comple lo que no es auténtico ni está probado; mento, y de la que parece no hacerse lo que es supuesto, es falso é inventado. caso. La fuerza ha hecho, y hará el de Los protestantes tienen por apócrifos recho de las potencias, no obstante las algunos libros sagrados, que la iglesia protestas de los débiles. El malvado romana reconoce como divinos y autén no respeta tos templos, en los cuales co- ! ticos. La historia apócrifa de la papisa APR ( 23 ) APT Juana, se halla igualmente refutada y El que sabe escuchar, sabe aprender. sostenida por sabios de una y otra creen El que sabe hacer hablar, sabe instruirse. cia. La donación supuesta de Constan Sucede á veces que se olvida lo que tino ha sido por mucho tiempo un pun se habia aprendido; pero es raro el ol to de la historia que no se dudaba. vidar las cosas de que uno ha tenido el (March.) trabajo de instruirse. El que aprende un arte ó una cien APRECIO, ESTIMACIÓN.—Aprecio es úni cia, está en clase de discípulo. El que camente el juicio favorable que se for se ha instruido, tiene el mérito de maes ma de alguna cosa: estimación, es ade tro. mas la inclinación que de allí resulta Para llegar á ser hábil, es menester acia la cosa estimada. Apreciar yo una comenzar por aprender de los que sa cosa, es propiamente ponerle precio, ó ben, y trabajar después en instruirse juzgar de su valor con respecto al co á sí mismo, como si nada se hubiera mún de los hombres: estimarla, es juz aprendido. gar de su valor con respecto á mí. (March.) Una circunstancia particular puede hacerme estimar en mucho una joya de APROPIARSE, ARROGARSE, ATRIBUIRSE poco valor, sin que por eso deje de ha —Apropiarse, es tomar para sí una cosa. cer aprecio, ó conocer el mérito de otras Arrogarse, es requerir, mandar con alhajas mas ricas y preciosas. Yo debo altanería, sin tener facultades para re apreciar el mérito de la Eneyda, aunque querir ó mandar. acaso estime mucho mas una sátira de Atribuirse, es adjudicarse el hombre Juvenal, ó una simple fábula de Fedro. una cosa que quiere se mire como suya. Lo que se opone al aprecio es el des El hombre ambicioso se apropia; el precio; esto es, la persuasion de que la vano y orgulloso se arroga; el envidio cosa no tiene valor ninguno. Lo opues so se atribuye. to á estimar es desestimar, menospre Uno se apropia un campo, se arroga ciar, mirar con repugnancia; últimamen un título ó mando, se atñbuye una in te, es la inclinación que resulta del des vención. precio. (March.) (Jonama.) APTO, CAPAZ.—Apto explica una idonei APRENDER, INSTRUIRSE. — Parece que dad pasiva; capaz, una idoneidad ac se aprende oyendo las lecciones de un tiva. maestro, y que se instruye uno por sí Es capaz de ejecutar cualquiera co mismo haciendo investigaciones. sa, de acometer á un enemigo ma» Es preciso mas docilidad para apren fuerte que él. der, y mucho mas trabajo paramsírwirse. Es apto para aprender, para que se Algunas veces se aprende lo que no le imprima bien en la memoria lo que se quisiera saber; pero siempre se quie se le dice. re saber las cosas de que uno se ins Un buen oficial es apto para la car truye. rera militar, y capaz para formar el Se aprenden y saben las novedades pían de un ataque. públicas por la voz de la fama. Se ins (L. de la Huerta.) truye uno de lo que pasa en los gabine tes por medio del cuidado y la atención APTO, CAPAZ.—Apto en general, significa en observar y en informarse. mas que capaz, ya sea que se hable de AQU ( 24 ) ARE un general, ya de un juez, ó de un lite El primero representa aquel lugar ab rato. Puede muy bien un hombre ha solutamente, y el segundo le represen ber leido cuanto se ha escrito sobre el ta con relación exclusiva del lugar en arte de la guerra, y aun haberla hecho, que hablamos. Allí está, no supone sin ser apto para hacerla; puede ser ca mas relación que aquel lugar en donde paz de mandar, mas para adquirir el tal vez ha estado siempre; allá está, es nombre general apto, es preciso que to es, no está aquí, en donde suele, ha haya mandado mas de una vez con buen estado, ó debe estar. éxito. (L. de la Huerta.) Un juez puede saber todas las leyes ARENGA, DISCURSO, ORACIÓN.—Arenga sin ser apto para su aplicación. es una oración ó razonamiento hecho á Un literato puede no ser apto para una comunidad ó persona de respeto. escribir ni para enseñar. Discurso, el razonamiento, plática ó El hombre apto es pues el que hace conversación dilatada sobre alguna ma mucho uso de lo que sabe: el capaz teria. Oración, razonamiento, locución puede; el apto ejecuta. (Véase capa compuesta sobre algún asunto ó cir cidad, aptitud,) {March.) cunstancia interesante. La arenga se dirige propiamente al Ααυί, ACÁ.—Son adverbios locales, que corazón, teniendo por objeto persuadir valen lo mismo que este lugar, ó en este y mover los ánimos; su mérito y su be lugar en donde se halla la persona que lleza consisten en ser viva, animada, habla. Su diferencia consiste en que interesante, fuerte y enérgica. El dis aquí representa el lugar de un modo ab curso va directamente al entendimiento, soluto y sin referencia alguna á otro lu proponiéndose explicar é instruir; su gar. Aquí vivo, aqui como. Pero acá, mérito principal consiste en ser claro, tiene mayor extension, porque ademas exacto y elegante. La oración trabaja de representar el lugar, añade por sí so en preparar y disponer la imaginación, lo la exclusion de otro lugar determina fundándose su plan comunmente en la do, que directa ó indirectamente se con alabanza ó la critica, y consistiendo su trapone á aquel en que nos hallarnos; belleza y su mérito en ser noble, delica de modo, que sin el recurso del senti da, y su estilo elocuente. do nos presenta la idea, ó del paso de El capitán hace á sus soldados una uno á otro, ó de la comparación, ó de arenga para animarlos á la pelea. La la preferencia, ó de alguna otra circuns academia propone un discurso para de tancia, que los distingue ó separa. senvolver ó sostener un sistema. El Como aqui, vivo aquí, supone sola y orador propone una oración fúnebre pa absolutamente el lugar en donde como ra dar al concurso una grande idea de y vivo, sin excluir determinadamente su héroe. otro lugar, sin representar por sí la me Lo largo de la arenga suele amorti nor idea de duda, preferencia ó rela guar el fuego de la acción. Las flores ción alguna respecto de otro. Pero, del discurso disminuyen muchas veces hoy como acá, excluye determinada las gracias de él. La afectación de lo mente el lugar en donde suelo comer. maravilloso en la oración desluce á es ta, y la hace perder la ventaja de lo Con la misma proporción se distin verdadero. guen lo adverbios locales allí y allá. (March.) ARM ( 2δ ) ART ARMONÍA, MELODÍA. — Aunque parece ideas que hoy se aplican á ellas, y que ageno de este examen el explicar la esencialmente las distinguen; tanto mas, significación de los términos propios de que la definición que aplica el Diccio un arte, no será fuera de propósito el nario á la voz melodía, las confunde analizar aquí estas dos voces, porque implícitamente, pues supone que lo ar también pertenecen al uso común, en monioso es una de las cualidades que el cual no será extraño que se confun constituyen la melodía. dan, por las diferentes significaciones Los maestros y escritores del arte, que han dado á la voz melodía, tanto entienden bajo los nombres de melodía los antiguos, como el uso común, y los y armonía, las dos partes de la música escritores del arte de la música. en que distinguen el canto considerado Los primeros la confundían con la con relación á una voz sola, del otro armonía, atribuyendo á esta la parte que llaman concertado. de la música que hoy entienden los fa Según sus principios, creo que se po cultativos por melodía, porque "no en- drán definir así: La melodía es la in "tendian por armonía (como ahora se flexion agradable de una voz, que pasa "entiende) la combinación y concordan sucesivamente de unos sonidos á otros. cia que se forma de las proporciones La armonía es la combinación metódica "de varias partes de diversas voces, de varias voces, que forman al mismo "que se oyen al mismo tiempo, que es tiempo diversos sonidos. "el objeto del contrapunto moderno; De modo que no puede haber armo "sino la relación que tienen entre sí los nía sin la concurrencia de dos ó mas "grados sucesivos de una voz sola, al voces. La melodía no supone mas que una sola. "pasar del agudo al grave, del grave al Esta es la parte mas esencial del ar "agudo...." (*) te, porque abraza todos los principios El uso común no atribuye á la melo que forman el verdadero fundamento día otra idea que la de la dulzura y la de la música, y puede existir sin la ar suavidad; y el Diccionario de nuestra monía, que es la parte que añade á lengua se limita á este sentido, dicien aquellos principios fundamentales los do que es: la dulzura, pñmor y blandura de las consonancias y disonancias de de la voz y canto suave y armonioso, las voces concertadas, y puede mirarse siguiendo la etimología de la voz, de como el adorno con que el arte realza rivada de la voz griega Metes, que sig la belleza de la melodía. nifica verso ó canto, de donde se llamó {L. de la Huerta. ) Melicus al músico ("f), con relación á Mely ó miel; porque probablemente se AROMA, PERFUME.—Aroma es todo cuer consideraba entre los griegos la dulzu po inanimado que despide fragancia ó ra, como una cualidad inherente al can perfume. to, y este como inseparable del verso. Perfume se dice también del cuerpo Es preciso respetar este sentido adop que perfuma, pero jamas se dice aroma tado en todos tiempos por el uso co al olor mismo. mún: pero no es justo prescindir en el El perfume se dirige únicamente al examen analítico de estas voces, de las j olfato, el aroma lisonjea el olfato, la vista y aun el paladar. (*) Motast. Poet, de Arist. Martini; Hist, de la mû, ! (March.) sica. I (•f ) Melicus vel musicus, à graeco Átelos, «¡rood carmen site cantum significa!. Arnb. <_'al. fíic. Sf.pt. Ling. ARTE, OFICIO, PROFESIÓN.—El arte ha- ASI ( 26 ) ATE ce el artesano y hombre hábil; el ofi ASTRÓNOMO, ASTRÓLOGO.—El astrónomo cio el operario y jornalero: la profesión conoce el curso y el movimiento de los el hombre de un orden ó de cierta clase. astros. El oficio requiere un trabajo mate El astrólogo raciocina sobre su in rial, mecánico ó de manos; la profesión fluencia. un trabajo ú ocupación cualquiera; el El primero observa el estado de los arte un trabajo del ingenio, sin excluir cielos, señala el orden de los tiempos, ni exigir un trabajo material. los eclipses y las revoluciones que pro (March.) ceden de las leyes establecidas por el ASCENDIENTE, IMPERIO, INFLUENCIA.— primer móvil de la naturaleza, en el nú El ascendiente es el poder de una supe mero inmenso de los globos que con rioridad legítima, como el de un ancia tiene el universo, y yerra poco en sus no respetable, de un padre virtuoso. cálculos. Imperio es el poder de la fuerza. In El segundo predice los acontecimien fluencia el de la elocuencia, de la per tos, anuncia la lluvia, el frió, el calor y suasion, y de la insinuación. todas las variaciones de los meteoros, (March.) engañándose las mas veces en sus pre ASIR, AGARRAR.—Estos dos verbos ex dicciones. plican la diferente actividad de la acción El uno explica lo que hace y mere que representan. ce el aprecio de los sabios; el otro char El que agarra asegura, tiene firme; la divulgando lo que imagina, espar porque el verbo agarrar supone la fuer ciendo comunmente mentiras, y buscan za necesaria para lograr su efecto. El do de este modo la estimación del vul que ase, puede ó nó asegurar; porque go, fundándola en su necia credulidad. la acción de anr, no supone precisa y (March. ) positivamente la fuerza necesaria para asegurar y tener firme. ASUNTO, MATERIA.—Asunto, es el obje Corrió tras él, y le agarró; no nos to particular de que se trata: materia, deja duda de que lo tiene asegurado. es la entidad á la cual pertenece el Corrió tras él, y le asió; nos deja la asunto., y constituye su calidad. duda de si le asió de modo que pudo Se propone un asunto cuya materia asegurarle; porque el verbo no lo ex ofrezca medios de lucimiento á la eru plica por sí solo, y asi es preciso aña dición y al ingenio. dir de qué parte, ó cómo le asió, para La murmuración es en la sociedad que se deduzca el efecto por el modo una materia inagotable, porque no hay y circunstancias de la acción: le asió en ella cosa de que no hagan los necios fuertemente del brazo, ó le asió de la un asunto muy serio para ejercerla, su capa. pliendo con este cómodo recurso, su La acción de asir se refiere al uso falta de talento. (L. de la Huerta.) del asa; la acción de agarrar al de la garra. Aquella sostiene tal vez sin es ATENTO, CORTÉS. — Ser cortés, es una fuerzo; ésta asegura con fuerza y tena obligación que nos impone la buena cidad. crianza: ser atento, es una calidad á que Por esta razón, para explicar la po nos inclina la buena educación. ca seguridad de una cosa, se dice que está asida de un cabello; no agarrada. El cortés puede serlo sin pasar los li (L. de la Huerta.) mites de su obligación: el atento no se ATR ( 27 ) ATR atiene á ella, y emplea noblemente los treza, ni lo que puede dar de sí la for medios de agradar ó de complacer. tuna ó la casualidad, sino una ciega pre Decir de un caballero que es cortés, cipitación, que le hace preferir en aquel no es una lisonja, es solo decir que no momento, la probabilidad de quedar es grosero. Decir que es atento, es ha muerto en la plaza, al sonrojo de verse cer sü elogio; es decir, que añade á la despreciado y escarnecido. cortesía el agrado, la complacencia. (L. de la Huerta. ) El cortés lo es siempre sin afectación: el atento puede ser afectado. Hay ATRIBUIR, IMPUTAR.—La voz latina tri- hombres que á fuerza de atenciones nos buere en su sentido primitivo, designa alejan diestramente de su familiaridad partir, hacer muchas partes de una cosa, y confianza. distribuirla entre muchos. De aquí viene (L. de la Huerta.) attribuere, atribuir, dar, apropiar, apli car á. Atribución, es la asignación de ATREVIMIENTO, OSADÍA, ARROJO.—El sueldos, salarios, prerogativas, &c; y atrevimiento supone una resolución de atributo es la propiedad que distingue la voluntad acompañada de confianza a un objeto. De la voz latina putare, en nuestras propias fuerzas para con que significa originariamente podar, lim seguir un fin arduo. La osadía supone piar, mondar, y por traslación, poner en el desprecio de las dificultades ó ries limpio, liquidar una cuenta, calcular, gos superiores á nuestras fuerzas, pero examinar, pensar; de ahí, digo, viene acompañado de una excesiva confianza imputar, que significa calcular sobre, en la fortuna ó en la casualidad. El incluir una suma en otra, ó deducirla. arrojo no supone ningún genero •«* con Como sinónimo de atribuir, opone una fianza, sino una ceguedad con que te operación complicada á una operación merariamente nos exponemos á un ries simple, como que ofrece la idea de cóm go, sin examinar la posibilidad ni la puto, de cálculo, de combinación. Im probabilidad de salir bien de él. putar es en este caso atribuir por com Un torero es naturalmente atrevi binación, por medio de combinaciones, do, y lo debe á la fundada confianza que y con responsabilidad. Estas dos vo tiene en su habilidad, en su ligereza; ces expresan la acción de poner una pero si apartándose de las precaucio cosa á cargo de alguno. Atribuírselo, nes comunes y conocidas del arte, se es cargársela como cosa propia suya, empeña por vanidad, en una suerte ar como obra suya inmediata, por un jui riesgada, decimos que es osado, porque cio, por una simple aserción. Imputár desprecia con excesiva confianza un sela, es cargársela aplicándole el méri riesgo superior á los medios que puede to de ella. Se imputa por lo regular el naturalmente emplear para salir bien mérito de las cosas que se atribuyete. del lance, entregándose demasiado á la Atribuir, se toma indiferentemente en fortuna ó á la casualidad. Si picado de buena y en mala parte; pero imputar, se los desprecios del concurso, ciego de toma por lo regular en mala parte. Se cólera y despecho, expone temeraria atribuye una acción mala así como una mente su vida en una suerte contra to buena, una virtud y un vicio; pero an da probabilidad de salir bien de ella, tes se imputan las acciones malas que decimos que es arrojado, que es un ar las buenas, antes un delito que una vir rojo lo que hace; porque no le mueve á tud. No se crea por esto que imputar ello la confianza que tiene en su des- se aplica siempre en mal sentido; pues AVA ( 28 ) AVE la razón y el usó universal fundado en tiene el afán de guardar: el codicioso e' ella^ prueban lo contrario. Atribuir, se de adquirir^ No se dice ser avarienta usa en el sentido físico lo mismo que en del bien ageno, ni codiciar, el bien pro el moral; y se atribuye una acción á una pio, porque solo es avariento el que po persona, así como el flujo y reflujo del see, y codicioso el que desea. mar á la acción combinada del sol y de El avariento no expone nunca su cau la luna. Imputar, apenas tiene uso sino dal, por miedo de una pérdida. El co en el sentido moral, y por lo común no dicioso le arriesga muchas veces, por imputamos sino á las personas ó seres el afán de la ganancia. personificados, ó á las cosas animadas. Este es mas digno de compasión, por Bien es verdad que no se puede hacer que siempre vé lejos de sí el objeto en de esta observancia, relativa al uso ac que pone su felicidad; pero el avariento tual, una regla absoluta y exclusiva. sabe que posée lo que crée que puede (A. Oienfuegos.) hacerle dichoso, y se complace en cier to modo con la falsa idea de que, si se AUN, TODAVÍA.— Todavía, parece que se priva de mucho, es por poder lograrlo refiere mas bien á la duración actual y todo. su fin: aun, se refiere á lo porvenir. (Z,. de la Huerta.) Aquella por consiguiente se acomoda mejor á las oraciones positivas; ésta á AVERSION, REPUGNANCIA, OPOSICIÓN.— las negativas. La aversion se aplica tanto á las perso Todavía subsisten monumentos de la nas como á las cosas; supone el deseo antigua Roma: aun no se conoce su ver de la separación, conforme lo indica su dadero fundador. Es preciso confesar etimología avertere, apartar, alejar; y es que el sentido de estas dos proposicio independiente de la voluntad. nes aun no se ha fijado bien, y por con La repugnancia hace concebir la idea siguiente conservan todavía mucha ar- del combate de la voluntad, la cual pug bitiariedad. na en vano consigo misma para vencer (Jonama.J se, y por consiguiente aquella tampoco depende de ésta. AUXILIO, SOCORRO, AMPARO.—Se da el La oposición supone resistencia cau auxilio al que ya tiene, y le conviene te sada por un modo de sentir enteramen ner mas; el socorro al que no tiene lo su te contrario, y depende muchas veces ficiente; el amparo al que no tiene nada. de la voluntad ó del capricho. A un ejército considerable se le auxi La aversion puede degenerar en hor lia para hacer mas poderosa é irresis ror: la repugnancia en hastío y en odio: tible su fuerza; á una plaza que sostie la oposición, en aborrecimiento. ne con dificultad un sitio, se la socorre para que no se rinda; á un infeliz ven La repugnancia es mucho mas mate cido y derrotado, se le ampara para que rial que la aversion, y ésta, mas que la no perezca. oposición. Se pide auxilio para vencer; socorro Nos causa repugnancia un alimento, para no ser vencido; amparo para no pe una medicina, una lectura. Tenemos recer. Se auxilia al industrioso; se so aversion á las personas, á la soledad, á corre al necesitado; se ampara al des los insectos. Se nos opone una perso valido. na, cuyo carácter no conviene con el (L, de la Huerta.) nuestro. Somos opuestos á que se nos contraríe. AVARIENTO, CODICIOSO. — El avariento j (O. de la Cortina,) AXI ( 29 ) BAN AXIOMA, MÁXIMA, SENTENCIA, APOTEG sola, expresada con un rasgo enérgico. MA, AFORISMO.—El axioma es una pro El apotegma, es como inspirado por lu posición, una verdad capital, principal, [ ocasión, que con el choque expide cen - tan evidente por sí misma, que cautiva j tella5 El aforismo nace bajo la pluma por su propia fuerza y con una autori del sabio metódico, que después de ha dad irrefragable el entendimiento bien ber considerado bien, concebido con dispuesto. Es la antorcha de la ciencia. claridad, y discernido con acierto, re La máxima es una proposición, una duce sus investigaciones y sus descu instrucción importante, mayor, hecha brimientos á divisiones y á ciertos pun para iluminar y guiar á los hombres en tos capitales. la carrera de la vida; es una gran regla Citaremos como ejemplo algunos axio de conducta. mas. Un cuerpo es impenetrable á otro La sentencia es una proposición, una cuerpo; ó bien dos cuerpos no pueden ocu lección breve, patente y admirable, que par á la vez el mismo espacio cosas deducida de la observación ó tomada en iguales á una tercera, son iguales entre el sentido íntimo, ó en la conciencia, si nos enseña lo que es preciso hacer ó lo Como por ejemplo de máximas. Con que pasa en la vida; es una especie de siderad el fin atended al objeto oráculo. Conócete á tí mismo; inscripción del tem Apotegma es un dicho memorable, un plo de Delfos Queréis, dicen los rasgo sorprendente, que saliendo de un Persas, que crezca el mérito! sembrad las alma enérgica, nos causa una viva im recompensas. presión: es una centella del espíritu, ó Las proposiciones siguientes pueden de la imaginación, de razón y de senti ser miradas como sentencias. La adver miento . sidad es la gran maestra del hombre; ó Es el aforismo una noción, una ense como dice el adagio griego: lo que os ñanza doctrinal, que expone ó resume daña os instruye. en pocas palabras, en preceptos y en Cuéntanse entre los apotegmas estos compendio, lo que se trata de aprender: rasgos. Preguntaban á Leónidas, por qué es la sustancia de una doctrina. los valientes prefieren el honor á la vida? El axioma debe ser claro, geométri —Porque depende la vida de la fortuna, co, de eterna verdad. La máxima debe el honor de la virtud. ser cierta, luminosa y de grande utilidad. Las siguientes proposiciones son afo La sentencia, concisa y de un giro ό es- rismos. Las enfermedades, según la doc presion proverbial. El apotegma agu trina de Hipócrates, las cura la natura do, picante y dramático. El aforismo leza, y no los remedios; y la virtud de los luminoso, dogmático, apoyado en obser remedios consiste en ayudar la naturale vaciones y pruebas desenvueltas y pa za.—(V. Máxima, Sentencia.) tentes. (March.) I Β El axioma se presenta como por sí I mismo al que busca la ciencia y lo sub BANCAROTA, QUIEBRA.—Uno y otro tér yuga. La máxima resulta de la obser- \ mino significan la cesación ó abandono vacíon de los efectos constantes, y de de comercio ó de pago: pero bancaro las conexiones generales que uno redu ta manifiesta propiamente el efecto de ce á un principio. La sentencia parece la insolvencia ó malversación. Hacer formarse de una multitud de verdades, bancarota, es cerrar la tienda, casa de que se confunden y se reducen á una comercio ó de pago, y desaparecer del BAS ( 30 ) ΒΑΤ comercio ó de la pagaduría, renuncian suficientemente, da una idea relativa, con- do á esto de grado ó de fuerza. Hacer trayéndola determinadamente á lo que quiebra, es dejar de pagar al vencimien justamente alcanza, para no carecer de to de los plazos, declararse imposibili lo preciso. Y así se dice en un sentido tado de pagar y pedir tiempo para el absoluto: fulano es bastante rico; y en pago. La bancarota, expresa literal un sentido relativo á sus obligaciones, se mente la cesación absoluta del comer dice que es suficientemente rico. cio &c; la quiebra, la caida ó pérdida El que dice que Leganés es un buen en él. lugar, y que hay en él casas bastante La decadencia, la ruina del comercio grandes, no explica mas que la magni lleva consigo la imposibilidad de conti tud absoluta é indeterminada de las ca nuar. La cesación, el rompimiento del sas de Leganés; y no dirá que hay en comercio da lugar á la alternativa, ó de él casas suficientemente grandes, á no re que uno no puede, ó de que no quiere ferirse determinadamente al objeto para continuarlo. Lo segundo conviene pues el cual se necesita que lo sean. mejor para expresar la bancarota vo {£, de la Huerta.) luntaria ó de intento, fraudulenta ó cri BATALLA, COMBATE.—-La primera es una minal·, lo primero para expresar la quie acción general, y comunmente precedi bra forzosa, desgraciada é inocente: y da de algún plan premeditado. El se aquí está la principal diferencia que el uso establece entre estas dos voces. La gundo parece ser una acción particular, calificación de bancarota es injuriosa; muchas veces imprevista. Así, pues, la de quiebra no lo es. Aquella es mas las acciones que hubo en Canas entre propia de un banquero ó pagador, y aun cartagineses y romanos, en Farsalia en también de un tesorero ó cajero, á no tre César y Pompeyo, son batallas. Pero ser un caso fortuito de la desgracia·, ésta, la acción en que los Horacios y Cu- es decir, la quiebra suele ser mas fre riacios decidieron de la suerte de Roma, cuente, y es mas propia en un comer y de Alba, la del paso del Rhin, la der ciante, en razón de las pérdidas y que rota de un convoy ó de un partido, son brantos naturales de su caudal, ha combates. biéndolo expuesto, y aventurándolo en La batalla de Pavía entre Carlos V. el tráfico y el giro, por buscar la ga y Francisco I., la de San Quintín, tam nancia de que puede privarle un contra bién entre españoles y franceses, la de tiempo cualquiera, arruinando su capi Almansa, entre Felipe V. y Carlos de tal; riesgo á que no tienen necesidad Austria, la de Waterloo, entre Napo de exponer sus fondos aquellos otros á leon y los aliados, fueron acciones de quienes parece mas aplicable la banca- cisivas. La palabra combate es mas rota, y en quienes esto suele ser efec- j relativa á la acción de pelear entre dos to de la mala fe y de malversación. j ó mas combatientes; ó una parte de ejér (March.) i cito disputando ó abriéndose un paso, defendiendo una posición, &c. | BASTANTE, SUFICIENTEMENTE.—El pri Las batallas se dan solamente entre mero de estos dos adverbios parece mas ejércitos enteros, y se ganan ó se pier vago é ilimitado que el segundo; porque den llevando consigo el resultado gran bastante, da una idea absoluta é indeter des consecuencias , trascendentales á minada de la abundancia, suponiendo · todo un reino, una provincia, &c. Los que hay sin escasez lo que se necesita;y | combates se dan entre cierto número de BEN ( ) BES hombres, y so tienen entre todas las de ñas, terminadas en ado, y en ido, ex nme cosas que tratan de destruirse ó de presan la acción ó modificación que su superar la oposición, y solo es fatal su fre la cosa, y refieren la idea á una cau resultado á las personas que entran en sa ó á un agente cualquiera; y las voces la lid ó cosa disputada, &c. que terminan en cho, so, y to, expresan {March.) el estado en que queda la cosa por ha ber sufrido aquella acción. ELLEZA, HERMOSURA.—Tómase aquí la De esta especie son las siguientes: primera de estas dos voces en su rigu Confesado—Confeso. roso sentido, y no en el vulgar, en que Confundido—Confuso. comunmente se usa para dar mas fuer Convencido—Convicto. za á la alabanza, ó encarecer la admi Dirigido—Directo—y Derecho. ración. Elegido—Electo. Una y otra consisten en la buena pro Extendido—Extenso. porción y armonía de las partes que Pervertido—Perverso. componen un todo; pero la voz hermosu Rompido—Roto. ra se limita á representar aquella idea Suspendido—Suspenso, con relación á lo agradable: la voz be y otras muchas que podran verse reco lleza representa la idea de la perfección piladas en diferentes gramáticas. posible. (G.de la Cortina.) En este sentido se admira la belleza del Laocoonte, del Hércules Farnesio, BESO, ÓSCULO.—El primero se da por de los cuales no se dice que son her amor, por cariño, ó por amistad. El mosos; pero la Vénus de Médicis, y el segundo por veneración, por respeto 6 Apolo Pythio son bellísimos para los por ceremonia. Por eso decimos, ubesos inteligentes, y hermosos para todos. de amor," y ósculo de paz. De aquí es, que el gusto viciado por La voz beso, pertenece al estilo fa el capricho ola costumbre, pone mu miliar y puede hacer concebir ideas de chas veces la hermosura en lo que está liviandad ó de doblez. distante de la belleza. Y no seria poco Ósculo pertenece al estilo elevado, y el desconsuelo de muchas que tienen siempre indica decencia y pureza de en el mundo la reputación de hermosas intención. Decimos "el beso de Judas, si supiesen que no parecían bellas á los y no el ósculo de Judas."—Una madre ojos de Mengs, de Rafael ó del Correg- da besos á su hijo, no ósculos; y así es gio. que cuando queremos ennoblecer la [L. de ία Huerta.) idea del beso, y de la persona que lo da ó recibe, lo llamamos ósculo, aunque sea ENDECiDO, BENDITO.—El primero se efecto de amor sexual. refiere á la acción ó modificación que Y ya que se nos ofrece tratar de dos sufre la persona ó cosa de que se habla. ; voces, de las mas ideológicas que tiene El segundo expresa el estado en que la lengua castellana, hagamos, aunque queda la misma persona ó cosa, después ! muy de paso, acerca de ellas, una ob de haber sufrido aquella acción. ; servación verdaderamente curiosa. Así, llamamos agua bendita, pan ben- '· Pues que la formación de las voces dito, al agua y al pan que han sido ben- j no es arbitraria en ninguna lengua, como decidos. ya se ha dicho (V. Alma), debemos En general, todas las voces castella- ¡ examinar la estructura de cada voz BES ( 32 ) BES para conocer la razón en que se funda partes, una. tomada del sustantivo lati su significado. Observemos en el caso no os, la boca, y otra, del supino cultum, presente que la primera letra de la voz de colère, reverenciar, adorar. beso es una b, letra que se pronuncia El doctor Gall tuvo mucha razón uniendo los labios, oprimiéndolos muy para decir que cada lengua, sea mímica, suavemente, y desuniéndolos con cier sea articulada, es un producto natural ta vibración real y efectiva, aunque de los sentimientos y de las ideas inte poco perceptible (como se verifica mas riores del hombre. Por poco que es ó menos en las otras dos labiales m y tudiemos la onomatología de nuestra p); sigue después una e que no tiene lengua, quedaremos muy pronto con mas oficio que hacernos prolongar el so vencidos plenamente de esta verdad, nido de la 6, y hacen mas duradera la así como de la razón que hubo para vibración de los labios, por que la b dar á las letras la figura y el sonido que hace el papel principal en todas las hoy tienen. voces de que nos valemos para referir (O. de la Cortina.) la idea á ciertas acciones, ó cosas per tenecientes á los labios. Tienen ésta BESTIA, ESTÚPIDO, IDIOTA.—Estos tres letra las voces labio, beber, bebida, epítetos son contrarios al entendimien besar, beso, saborear, sabor, sabroso, to, y dan á entender que falta casi del boca, bocanada, bostezar, bostezo, bozo, todo; con la diferencia, de que bestia es borbotón, bocina, bocera, silbar, silbo, por falta de inteligencia, estúpido por sorber, baboso, baba, buche, balbucien la de sentimiento, ¿idiota por falta de te, are, acciones todas en las que tie conocimiento. nen los labios mas ó menos parte. Des En vano es que se den lecciones á pués de la e, sigue la pronunciación de un bestia, pues la naturaleza le ha ne la s, letra silbadora, de sonido igual gado los medios de aprenderlas y apro mente vibrado, y que hace veces de as vecharse de ellas. Inútiles serán los piración fuerte; y por último, termina desvelos y el cuidado del maestro para la voz con una o que nos obliga á en enseñar á un estúpido, si no descubre treabrir los labios, y hacer un contras el secreto de estimularle y sacarle del te repentino de sonidos, y he aquí re embotamiento en que se hallan sus po presentado al mecanismo del beso ma tencias. Con gran dificultad y trabajo terial (esto es, su ruido, la figura que se alcanza á instruir á un idiota: para toman los labios &c.) con cuanta pro ello es preciso tener el arte de hacer piedad puede hacerse por medio de la sensibles las ideas y saberse acomodar palabra. con maña á su modo de pensar, para Como en el ósculo tienen menos par elevar éste al nivel del que se trate de te los labios, porque solo consiste en inspirarle. acercar la boca, naturalmente entrea Hay bestias que creen tener talento; bierta, á una persona ó cosa, debían su conversación es un tormento para dominar en la voz propia para expre las personas que le tienen verdadera sar esta acción, letras que obligaran á mente, y su carácter llega á veces has referir la idea á la boca así entreabier ta ser molestísimo en la sociedad, par ta, y por esto en la VOZ ósculo do ticularmente cuando á la bestialidad y minan la o y la u, sonidos mas ó menos á la vanidad reúnen también el capri rotundos, y que alternan en la compo- ¡ cho. Los estúpidos no se jactan de te sicion de aquella voz, formando dos I ner talento, ni menos buscan á aquellos BUL ( 3 ) CAD que lo tienen; por lo mismo seria una un carro, un cuerpo que cae en tierra, necedad hacer alarde de tenerlo entre &c; pero si decimos que hay bulla en ellos; para nada entran en el trato de la calle, damos á entender, que el ruido las gentes, y su compañía es solo per que se oye, es causado por la gente que judicial é incómoda á quien busca la so habla ó grita en ella. ledad. Los idiotas suelen tener algu (L. de la Huerta.) nos rasgos de imaginación, pero á su manera, por una especie de sorpresa, y c que demuestran de un modo singular, CADUCIDAD, DECREPITUD.—Lo primero capaz de divertir á aquellos que en indica decadencia, ruina próxima ; lo cuentran un placer en cualquier cosa. segundo anuncia destrucción, últimos (March.) efectos de una disolución gradual. Decrepitud, se dice con propiedad BUENAS ACCIONES, BUENAS OBRAS.—El del hombre, y únicamente es aplicable uno se extiende mas lejos que el otro. á los seres animados. Caducidad, se Se entiende por buenas acciones, cuan aplica también á ciertas cosas inanima to se hace por principio de virtud; y no das: asi pues, la caducidad de un edi se entiende por buenas obras, sino cier ficio; caducan los bienes, una posesión, tos principios particulares, que pertene una sucesión, &c. Caduco, se toma por cen mas bien á la caridad con el pró frágil, que no tiene mas que un tiempo, jimo. que se acerca á su fin. Decimos una Es una buena acción declararse con salud caduca, es decir, delicada, vaci tra la corrupción de costumbres y ha lante, y no diremos una salud decrépita. cer guerra al vicio; es una buena acción El uso se vale con propiedad de es resistir á una violenta tentación de pla tos términos para distinguir dos edades cer ó de interés; y esto no es segura ó periodos de la vejez. mente lo que en rigor se llama buena Hay vejez caduca y vejez decrépita. obra. Socorrer al infeliz, visitar á los en La caducidad, es una vejez avanzada y fermos, consolar á los afligidos, enseñar achacosa que vá á tocar en la decrepi al ignorante, esto es hacer buenas obras. tud; esta es una vejez extremada, y di Se hacen buenas obras cuando se vá á las gámoslo así, agonizante, que conduce á cárceles y á los hospitales con espíritu la muerte, ó está cercana á ella. Los de caridad. fisiologistas distinguen los dos estados Toda 6ixeno obra es una óttena acción; con los caracteres siguientes. En el an pero toda buena acción no es una buena ciano ó viejo caduco, el cuerpo se en obra, hablando en rigoroso sentido. corva, las arrugas se ahondan á causa (March. ) de la extenuación, la voz se pone cas carrona, la vista se pierde ó amortigua BULLA, RUIDO.—Toda bulla es ruido; pero de día en dia, todas las potencias se em no todo ruido es bulla. Aquel es el gé botan ó enervan, y la memoria flaquea. nero, ésta, la especie determinada de Todo se deteriora, todo desfallece en el ruido, que forman con la voz una ó mu anciano decrépito; el cuerpo está ago chas personas. biado, el apetito y la memoria faltan ab Cuando decimos que se oye ruido en solutamente, la lengua tartamudea, to la calle, no explicamos por medio de dos los resortes están como gastados; esta voz la especie de ruido, ni el agen los sentidos se pierden, el estómago se te que lo causa; puede ser un caballo, relaja y debilita, la flaqueza es espanto- 5 CAL ( 34 ) CAL sa, la circulación de la sangre se entibia corresponde; y se califica completamen y afloja con exceso, la respiración es te un sugeto llamándolo bueno, malo anhelosa y se apaga, todo se disuelve: sin que realmente se nombre ninguna el anciano caduco acaba de vivir, y el de sus cualidades. Por esto se llama anciano decrépito acaba de morir. también sugeto de calidad y no de cua Felizmente en la caducidad se lison lidad al que está comprendido en cier jea el hombre todavía; y felizmente en ta clase privilegiada. (Jonama.) la decrepitud no siente todo el mal. (March.) CALIDAD, CLASE, ESPECIE.—Hemos di cho que calidad era lo mismo que cla CALENDARIO, ALMANAQUE. — Redúcese se; sin embargo no son exactamente si el calendario á colocar los dias en los nónimas estas dos voces. meses por orden numérico, y en las re Clase, es la idea general de muchas voluciones de la semana por sus nom cosas comprendidas por su semejanza bres ó signos planetarios, con la indica bajo un mismo nombre: calidad, consi ción de las fiestas y las prácticas del rito dera esta idea con relación á la utilidad. eclesiástico. El almanaque no solamen La mejor clase de paño es á veces la te se extiende hasta hacer observacio mas de moda, ó la que mas gusta: la nes astronómicas y pronósticos sóbrelas mejor calidad es siempre la mas fina y diversas temperaturas del aire ó de la la mas durable. atmósfera, sino también á hacer predic Especie es una clase subalterna, que ciones de acontecimientos sacados de consideramos como parte de otra clase la astrología judiciaria: ademas, se dan mas general, que por esto llamamos gé hoy dia, bajo el nombre de almanaques, nero. noticias varias, por las cuales se pueden (Jonama.) observar las mutaciones de cada año. CALIDAD, CUALIDAD, PRENDA, DOTE.— (March.) La calidad determina los accidentes de CALIDAD, CUALIDAD.—El buen uso, y no una cosa; esto es, nos manifiesta si la la etimología, es el que debe decidir so cosa es grande ó chica, blanca ó negra, bre la acepción de las voces. Aunque fuerte ó débil, áspera ó suave, &c; y se calidad no haya sido al principio mas gún se conforman con nuestro deseo es que una variación de la voz cualidad, tos accidentes, decimos que tal cosa es sin embargo me parece que hoy dia tie de buena ó mala calidad, y de este modo nen un sentido muy diferente. calificamos la cosa de mala 6 de buena Cualidad, es una de aquellas modifi en su totalidad. caciones por las cuales percibimos los De aquí se deduce, que la calidad se cuerpos, como la extension, el calor, aplica solamente á las cosas, alguna vez &c. Calidad, es una clase de.cosas que á los animales, nunca á las personas, y convienen en ciertas cualidades. supone un examen materiaL—"Este Se habla de varias calidades de trigo, paño es de buena calidad."—"Este per y de las bellas cualidades que distinguen ro tiene todas las calidades que debe á un sugeto. El género de peor calidad tener un buen lebrel." suele tener la cualidad apreciable de ser La cualidad determina el carácter de barato. una persona, y en este sentido se usa Por esto calificar no es responder á siempre en plural porque son varias las la pregunta cual, ó señalar un individuo, circunstancias ó modificaciones que for sino únicamente determinar á qué clase man el carácter de una persona. Por CAL ( : 5 ) CAN consiguiente, será esta buena ó mala, pecial, ó si se quiere, casual, sin mérito según sean sus cualidades, que necesa alguno de parte de ellas. riamente deben tener gran parte en sus Prenda y dote, nunca se aplican á los costumbres; y así como de este modo animales ni á las cosas. fijamos la idea de las propiedades del (G. de la Cortina.) alma, así también nos valemos muchas CALIDAD, NOBLEZA. — Ambas significan veces de la voz cualidad, para deno el carácter de una persona constituida tar la propiedad ó el modo de obrar en una clase privilegiada del estado; de una cosa, y llamamos cualidad ocul pero con esta diferencia. ta á una propiedad, cuya causa nos es Calidad, considerada la persona úni desconocida. camente como comprendida en la clase, Por todo lo dicho vemos, que las cua ó con relación á sus goces y privilegios: lidades son independientes de la volun nobleza con relación al honor y -virtud tad, aunque ésta puede modificarlas. que se supone debe acompañarla: por Si las cualidades forman el carácter, esto se dice un pecho noble, un alma las prendas constituyen el ornamento noble, y no un pecho ni un alma de ca mas precioso de una persona: hacen que lidad. esta nos parezca útil, agradable, diver Cuanto han escrito los moralistas so tida, &c, y nos son tanto mas aprecia- bre la nobleza, seria falso y ridículo, si bles, cuanto que nos prueban el estudio se le sustituyera la voz calidad. ó el esfuerzo que ha hecho la persona, (Jonama.) para adquirir estas prendas y agradar nos. Por consiguiente, las prendas son CANORO, SONORO.—El primero se refie adquiridas: las tomamos de los senti re ai canto; el segundo al sonido; pero mientos naturales bien dirigidos, y nos como el canto no es mas que el movi valemos de ellas como de las prendas miento de la voz con inflexiones orde · materiales, que vienen á nuestro poder nadas, se aplica el adjetivo canoro, tan por nuestra industria, y nos proporcio to á las personas, como á los animales nan utilidades que podemos comunicar y á los instrumentos músicos; porque á otros. Por esta razón siempre se usa no solamente llamamos voz al sonido de la palabra prendas en buen sentido: que se forma en la garganta de aquellos, nunca se las puede calificar de malas; sino también al que forman ciertas co pues si lo son, dejan de ser prendas, y sas inanimadas, heridas por el viento, serán hábitos, inclinaciones ó defectos. ó hiriendo á éste en ellas, ó por medio Los dotes son un don puramente gra de ellas, de un modo determinado. Por tuito de la naturaleza. Son el dote que eso decimos, "este cantor tiene muy nos trae el alma al unirse á nuestro cuer buena voz"—fulana tiene voz de con po; y como en su adquisición no tene tralto"—"el balido es la voz de las ove mos el menor mérito, ni la menor par jas"—"este órgano, este violin, este te, los llamamos con mucha propiedad fortepiano tienen malas voces." dotes de naturaleza ó dotes de fortuna. Sonoro, se aplica á todo lo que suena Así cuando decimos, fulano está dotado de un modo mas ó menos agradable aun de un gran talento, fulana está dotada que sin variedad de inflexiones. Las de singular hermosura, damos á enten campanas, el cristal, algunos metales, der que ambas personas debieron á la son sonoros, porque dan un sonido agra naturaleza, la primera él talento, la se dable; y nose dirá que son canoros, por gunda la hermosura, como un favor es- que no varían su sonido, el cual es siem- CAN ( 36 ) CAR pre uniforme aunque puede ser mas ó Se cansa uno de oir, se fatiga de per menos fuerte. seguir. Canoro, encierra la idea del arte: so (March. ) noro, la de la naturaleza, y esta es la CAPACIDAD, APTITUD.—Capacidad hace razón porque decimos con mucha pro mas relación al conocimiento de los pre piedad y elegancia, cítara canora., refi ceptos: aptitud á su aplicación: la una riendo la idea al arte con que la hace se adquiere por el estudio, la otra por sonar el músico; y bóvedas sonoras, alu la práctica. diendo á la propiedad que estas tienen El que tiene capacidad es á propó de dar un sonido que les es propio. sito para emprender: el que tiene apti (G. de la Cortina.) tud lo es para salir bien de la empresa. Se necesita capacidad para mandar CANSANCIO, FATIGA.—El cansancio es la en gefe, y aptitud para mandar con bue pérdida de fuerzas, causadotpor el tra nas esperanzas de éxito. bajo excesivo: \& fatiga, es el cansan- i (March.) ció que se manifiesta por sus efectos. Cuando á un hombre cansado le fal CARNICERO, CARNÍVORO.—Estas voces ta el aliento y respira con dificultad, convienen porque son calificaciones ge tiene fatiga. Esta es un efecto visible néricas de los animales que comen car del cansancio, y como se habla del efec ne. Difieren en que carnívoro significa to que se vé, y no de la causa que lo simplemente el que come carne; y car produce, decimos que respira, que ca nicero el que hace su comida de ella. mina con fatiga, y no camina ó respira La primera designa el hecho, y la se con cansancio. gunda el apetito natural, el hábito cons Por eso en un sentido figurado, de tante. El animal carnicero no come cimos que cansa lo que disgusta, y fa otra cosa que carne; su naturaleza le tiga lo que incomoda. obliga á vivir de ella sola. El carnívo• (L. de la Huerta.) ro es el que entre otras cosas come car ne; pero puede vivir sin comerla, como CANSAR, FATIGAR.—La continuación de que no es su único y propio alimento. una misma cosa cansa; la pena fatiga; El tigre, el león, el lobo, se mantienen se cansa uno de estar en pie; se fatiga solo de carne, y por consiguiente son de trabajar. carniceros. El hombre, el perro, el Estar cansado, es no poder obrar mas; gato, comen y gustan de carne; pero no estar fatigado, es haber obrado dema la necesitan para vivir, pues pueden siado. pasar con otros alimentos, y de con A veces se siente cansancio sin haber siguiente son carnívoros. En las es hecho nada, y entonces procede de cier pecies carnívoras, se llaman carniceros ta indisposición del cuerpo y de lenti los individuos que gustan mas de carne, tud de la circulación de la sangre. La y la comen mas á menudo que los otros, fatiga es siempre consecuencia de la pero ya en este caso se usa impropia acción; supone un trabajo rudo, ya por mente de la voz carnicero. la dificultad ó por la duración del mu (A. Cicnfttegot.) cho tiempo. CARRILLO, MEJILLA.— Estas voces se En el sentido figurado, un suplicante confunden muy á menudo en el uso, y cansa con su perseverancia, y fatiga el Diccionario de nuestra lengua lo au con sus importunidades. toriza en el artículo mejilla; pero en CAS ( 37 ) CAU realidad representan dos distintas partes Hay quien es casto sin guardar con de la cara, como allí se supone en el tinencia; y al contrario, quien guarda artículo carrillo. ésta sin ser casto. La castidad es de Para explicar su diferencia me pare todos los tiempos, de todas las edades, ce que convendrá decir, que el carri y de todos los estados; la continencia no llo es, en efecto, la parte carnosa de la es sino del celibato. cara desde la mejilla hasta lo bajo de La edad hace á los viejos necesaria las quijadas; y la mejilla., la parte que mente guardar continencia; y es algo ra está entre el carrillo y el ojo; ó (como ro que los haga castos. lo explica uno de nuestros mas conoci (March.) dos Anatómicos) "la parte interior y "mas blanda de la eminencia ó eleva- CAUSA, MOTIVO.—La voz causa tomada "cion, que está debajo del ojo, entre en el sentido moral, como sinónima de la oreja y la nariz. la voz motivo, explica la razón que te (L dt la Huerta.) nemos para hacer, decir ó pensar algu na cosa, pero con esta diferencia, que CARTAS, NAIPES.—Las cartas son los nai la causa explica una razón forzosa, que pes considerados respecto á su valor en obliga á la acción ó al juicio: y motivo, el juego. una razón voluntaria que mueve, indu Los mejores naipes son los mas finos: ce, inclina. las mejores cartas son aquellas que, se Se rompió una pierna, y esta es la gún las leyes del juego, y el estado ac causa de su cojera. Ha heredado un tual de la partida, son superiores á las mayorazgo, y este es el motivo de haber demás: al mediator, por ejemplo, el as dejado el servicio. de espadas es la mejor carta, siendo en (L. de la Huerta.) clase de naipe igual á todos los de la baraja. Así hablará con tanta impro CAUTIVERIO, CAUTIVIDAD.—Ambas vo piedad el que jugando á la treinta y una ces se derivan del latin capere, (cojer) pida naipes, como el que llame fábrica por lo cual se dijo antiguamente, cap- de cartas al lugar en que se hacen los tiverio, captividad: pero cautiverio no naipes. expresa mas que el estado de toda per (Jonama. ) sona de cualquiera clase que sea, que perdió su libertad, y permanece en po CASTIDAD, CONTINENCIA.—Los dos son der de un enemigo á quien se le hace relativos al uso de los placeres de la la guerra. carne, pero con diferencias notables. Cautividad, expresa la cualidad de La castidad es una virtud moral que cautivo y se refiere á la duración de prescribe reglas al uso de los placeres: aquel estado. Por eso decimos: "du- la continencia es otra virtud que prohi "rante la cautividad de Fernando VII be absolutamente el uso de ellos. "en Francia," y no durante el cautive La castidad extiende sus miras sobre rio. —"Abolición del cautiverio en Ar- lo que puede ser relativo al objeto que "gel," y no "abolición de la cautivi- se propone arreglar; pensamientos, dis udad.» cursos, lectura, actitudes, gestos, com (G. de la Cortina.) pañías, ocupaciones, elección de ali mentos, &c. La continencia no consi AUTiVERio, ESCLAVITUD.—El cautive dera mas que la privación actual de los rio es el estado á que pasa la persona placeres de la carne. que perdida su libertad en la guerra, CAU (" 38 ) CEL vive en poder del enemigo. Esta idea ternidad, de compasión y de ternura, y conviene, ó puede convenir, á la mayor trae consigo la idea de las mazmorras, parte de los esclaves. ¿En qué está, de los grillos y cadenas, y de los pade pues, la diferencia de estas dos voces? cimientos en general; y por esta razón Ya no se emplea la voz cautivo, sino se han apoderado los poetas de las vo cuando se habla de los que se hallan en ces cautivo, cautiverio, y cautividad poder de infieles, pero aquellos son para expresar las penas del amor. también esclavos. La diferencia de la El adjetivo preso supone un delito, y energía de la voz, me parece que con por él, la pérdida absoluta de libertad, siste en que el cautiverio solo se refie haciéndonos considerar al individuo, en re á la falta de libertad que sufre el cerrado en un calabozo, ó cuando me cautivo, sin otra relación alguna; pero nos en una cárcel, ó en un recinto mas la esclavitud añade á la idea de la falta ó menos limitado, á disposición de un de libertad, la de la propiedad y dere juez. cho, que como sobre un bien, una alha Prisionero indica la pérdida momen ja que le pertenece, tiene sobre el es tánea de la libertad, no por delito ó cul clavo su dueño; y así no se dice regular pa, sino por cualquier evento fortuito mente, comprar un cautivo, ni redimir de la guerra: tampoco nos hace supo un esclavo. Los negros que trabajan ner encerramiento en cárcel ni en pri en América se llaman esclavos y no cau sión ninguna, y lejos de inspirar ideas tivos, porque no los consideramos pura vergonzosas ó desfavorables para el mente como hombres sin libertad, sino prisionero, nos hace atribuirle honor, como propiedad, hacienda de sus due valor, grandeza de ánimo, y tal vez he ños. roicidad. {L. de la Huerta.) Es una obra de caridad libertar ó re CAUTIVO, PRISIONERO, PRESO.—Por lo dimir al cautivo. Es un hecho honro dicho en los análisis de las voces cauti so y obligatorio recobrar á un prinone- verio y esclavitud, y cautiverio y cauti ro por cuantos medios sean posibles. vidad puede determinarse con bastante Siempre será un delito dar libertad á precision el significado de cautivo, pues un preso, mientras no lo mande la au esta voz no hace mas que aplicar á la toridad á que se halla sujeto. persona en particular las circunstancias (G. déla Cortina.) de la cosa. Prisionero y preso se derivan del latin CELEBRAR, ENCARECER.—Como no se prehendere,agarrar, coger, pillar; y se di descubre desde luego ninguna acep ferencian en que prisionero se aplica ex ción común á estos dos verbos, parece clusivamente al militar cogido en acción rá tal vez impertinente á nuestro inten de guerra; y preso, á cualquiera perso to su comparación; pero en la realidad na á quien se priva de su libertad, ya no lo es, si se advierte que en la pri sea por sentencia de juez, ya por dispo mera parte del Quijote, capítulo 27, se sición de un superior, ya en fin, por ar encuentra usado el primero como equi bitrariedad del que ejerce la fuerza. valente del segundo: "Esta és, ó seño - La voz cautivo, como nota muy bien "res, dice allí Cardenio, la amarga his- Huerta, no se emplea sino cuando ha "toria de mi desgracia; decidme si és blamos de los que se hallan en poder "tal que puede celebrarse con menos de infieles, y por lo mismo supone ino "sentimientos que los que en mí habéis cencia, excita sentimientos de confia- "visto." CEL ( 39 ) CEL Como nadie celebra sus propios ma los que aplauden á ojos cerrados; pero les en el sentido propio de este verbo, faltándole el voto de los inteligente» es preciso que fuese otra la idea que desapasionados, en quienes está la ver quiso Cervantes explicar con él. De dadera pluralidad, nunca se podrá lla las acepciones en que se puede usar mar propiamente célebre. este verbo, la que puede convenirle (Jonama.) mejor en aquel lugar, es la de encare cer; y en efecto parece muy natural que ELERiDAD, PRONTITUD.—La celeridad dijese Cardenio,que su desgracia no po se refiere al modo; la prontitud se re dia encarecerse con menos sentimientos. fiere al tiempo. En aquella se supo A pesar de aquella autoridad, no pa ne un movimiento ligero y continuado; en esta se supone un acto, se prescinde rece posible, que estos dos verbos pue de la continuación del movimiento. dan usarse con propiedad como equiva Oyó un ruido, se levantó con pronti lentes uno de otro; porque el que enca tud de la cama, y se vistió con una ce rece, puede ponderar sin complacencia, leridad increíble. por interés ó por otros motivos, el mé El correo viene con prontitud, esto rito, el valor, las circunstancias buenas es, tarda poco: viene con celeridad, esto 6 malas de la cosa encarecida; pero el es, corre mucho. que celebra, se complace en la alaban- (L. de la Hutrta.) za, ó en el recuerdo de una cosa deter minadamente plausible y agradable pa /ELESTE, CELESTIAL.—Lo que pertenece ra él. al cielo, es la idea común á estos adje Un mendigo encarece, no celebra su tivos; pero el primero abraza toda la miseria, sus trabajos. Un buen amigo idea; el segundo, la modifica. celebra la parte que ha tenido en una Celeste, se refiere al cielo: celestial, reconciliación, en el buen éxito de una se refiere á la divinidad. solicitud; y es justo que lo celebre, pe Celeste es, sin restricción, todo lo que ro no le está bien el encarecerlo. pertenece al cielo, bien sea considera (L. de la Huerta.) do como la morada de los bienaventu- dos, ó bien como la region superior que CÉLEBRE, CELEBRADO. — Pava que un circunda al universo. hombre sea célebre, no basta que tenga Celestial, no solo se limita á aquel mérito, es preciso que lo celebren; sin primer sentido, sino que aun en él se li embargo, no todo lo celebrado es céle mita á lo mas sublime de su idea: por bre- Mil cosas celebra la preocupación, que se refiere determinadamente á las la pasión ó la ignorancia, que fastidian perfecciones que constituyen la esen al que las mira á sangre fria y con ojos cia divina, y á lo que participa de sus acostumbrados. divinos atributos. Para que una cosa sea célebre es pre La morada celeste de los justos: los ciso que tenga un mérito conocida, y espíritus celestes: el movimiento de los que este sea de tal especie, que intere cuerpos celestes: la esfera, el globo ce se generalmente, y arrebate los aplau leste. sos á todo el que la mire con imparcia La sabiduría, la pureza celestial: las lidad. Si una acción ó una obra cual celestiales perfecciones: la vista celestial quiera es despreciable en sí misma, ó de la divinidad: la celestial bienaventu de un género poco interesante, podrá ranza. ser celebrada por sus partidarios, ó por Por este principio llamamos celeste al OLA ( 40 ) CLA color que nos parece que vemos en el Convento, se deriva del latin conven cielo, y no le damos el nombre de celes tos, y éste, de convenire, esto es, venire tial, como á ninguna otra cosa que no cum, juntarse ó reunirse con otro, en pertenece á aquella determinada idea. un mismo lugar; de modo que convento Y asi no se podría decir, sin una abso quiere decir reunion. luta impropiedad, los astros, ó cuerpos Monasteno, es voz derivada de la celestiales, la esfera celestial, azul celes griega μ.ovar*)piov, y significa perma tial. nencia de una persona sola, sin nin (L. de la Huerta.) guna compañía. El claustro, limita la idea á la parte CHICO, PEQUEÑO.—La voz pequeño re en donde el individuo permanece ό pue presenta siempre la pequenez específica: de permanecer encerrado. la voz chico, representa la pequenez de El convento, al edificio en donde vi un modo absoluto. Por eso no se pue ven reunidos los individuos, haciendo de emplear ésta, cuando se trata de co vida común. sas de gran magnitud, porque lo chico El monasterio, expresa el edificio en siempre representa una cosa de poco donde cada individuo vive separada volumen, siempre que sea menor que mente haciendo vida solitaria. aquellos á que se compara, ó entre cuyo Por consiguiente, claustro refiere la género ó especie se distingue. Un mon idea al encierro; convento, la refiere á la te, un rio es pequeño; pero ni del uno ni reunion; y monasterio, á la soledad, del otro se dice que es chico, porque no Y como en el monasterio, lo mismo se considera su pequenez en- un sentido que en el convento, la parte principal es absoluto, sino respectivo, ó en compa el claustro, empleamos á veces esta úl ración de los demás montes y rios. tima voz en lugar de cualquiera de las Esta es la razón porque, hablando primeras, hablando en sentido figurado, con rigurosa propiedad, no se usa en la y tomando la parte por el todo; pero física de la voz chico, sino déla voz pe esta designación no es propia sino cuan queño, porque en ella no se conoce la do hablamos en general, é indefinida pequenez absoluta, sino la respectiva ó mente, v. g., cuando decimos, "la vida específica. del claustro," "los enclaustrados, &c;" Pequeño, se aplica á lo físico y á lo pues si queriendo determinar particular moral; pero chico se aplica sólo á lo fí mente un convento cualquiera, v. g., el sico: pié chico ó pequeño; hombre pe de los religiosos de San Francisco dijé queño ó chico; pero no: obstáculo chico, ramos, "el claustro de los francisca inclinación chica, espíritu chico, porque nos," daríamos lugar á que se entendie en estos casos solo se aplica la voz para ra que hablábamos solamente de la ga representar expresamente una compa lería, ó de la parte material que en el ración. edificio de aquel convento se designa con (L. de la Huerta.) el nombre de claustro. Convento y monasterio, son mas ma CLAUSTRO, CONVENTO, MONASTERIO.— teriales que claustro, porque hacen con- La primera de estas voces se deriva de cebir la idea nó tanto del modo de vivir la latina claustrum, y ésta de claudere, en ellos, cuanto de la existencia ma encerrar; por consiguiente, claustro no terial de los edificios en donde se vive: significa propia y rigorosamente, mas y por eso se dice, "fundar un conven que encierro. to," "demoler los conventos," "vender COL ( 41 ) COM los monasteríosSvy no fundar, ni derri- i que el tronco déla raiz, decimos que bar, ni vender los claustros (*), | está rabón. (fí. de la Cortina. ¡ La palabra cola se usa en sentido fi gurado, á diferencia de la palabra rabo, COLA, RABO.—La cola se llama asi cuan do es grande y está bien poblada de cer- ί que no se emplea mas que en su senti da ó de pelo; pero si es chica, delgada, ! do recto, y siempre es innoble. Así lla desnuda, se llama rabo: por eso decimos ! mamos vestido de cola al que vá arras la cola de un caballo; el rabo de un cer- ! trando por detrás: decimos ponerse á la do, &c, y cuando al caballo se le cor- | cola en vez de al fin ó detrás. Traer ta la cola de modo que no le quede mas ί cola un asunto, por traer consecuencias. . __. ! •—Llamamos coleta (diminutivo de cola) (*) Si nos detuviéramos á hacer un análisis ideológico | al pelo que llevan algunas personas en «le la voz claustro, considerándola como palabra, esto es, ¡ la parte posterior de la cabeza mas ó como imagen material de una idea, quedaría plenamente probado lo que acerba de ella hemos expuesto. Pero no menos crecido y liado con una cinta ó siendo este lugar, ä proposito para entrar en tan vastas ex. de otro modo; y en ninguno de estos pticaciones, nos limitaremos á indicar que la combinación de la c y de la l, con que empieía la palabra claustro, es el ejemplos podríamos sustituir con pro principal fundamento de la significación que ésta tiene. La piedad la palabra rabo. e entra en la composición de un número infinito de palabras latinas, y por consiguiente de palabras nuestras. Corres {G.dela Cortitia.) ponde á la oncena letra del alfabeto de los orientales, los cuales la representaron en lo escrito de un modo inverso, esto es, con la abertura vuelta acia el lado izquierdo del COMENZAR, EMPEZAR, PRINCIPIAR.— que escribe, en esta forma Q , y su pronunciación corres pondía á la de la k, por cuya razón los latinos no tenían k, Los dos primeros son mas materiales ni los griegos tienen c, y así, la c latina equivalía absoluta que el último. Comenzar, se refiere mas mente á la k oriental. La e pues, con el sonido de la k entro en la composición de palabras inventadas para representar á la duración del tiempo y á la perfec ideas (entre otras muchas), de encerramiento, de capaci ción de la acción ó de la cosa, por lo dad, de todo lo que puede contener, y por consiguiente, ideas de espacio y de lugar sujeto á determinados límites, cual decimos, "ahora comienza la misa;" y de lo que es hueco, como la mano que sirve para coger, "aquí comienza la comedia." contener y encerrar dentro de ella, y esta es la razón por que dieron á la c una figura análoga âla déla mano medio Empezar, se refiere principalmente cerrada. Pero la analogía de esta lelra con las ideas, de á la totalidad é integridad de la acción pende de su combinación con las demás letras, y así como para expresar ideas de lo que está vacio, y que puede con ó de la cosa, como lo expresamos di tener por dentro otras cosas, se combino la c con la o y ciendo, "aquí empieza el caserío de la con la u, y se inventaron las palabras latinas bucea, occupa, concavo, aculo, coro, coluro, coeton, fyc , y por analogía con ciudad;" "lo que no se empieza no se vento, concilio, convenio, continuo, oculto, S¡c, así también acaba." para expresar ideas de encerrar, se combino la misma c con la l; porque los primitivos celtas en su vida sencilla y Principiar, atiende mas ai origen y á agreste, se servían de palos toscos para formar cajas ó re- cintos cerrados en donde guardar sus efectos y objetos de la causa tanto moral como física, y por uso doméstico; representaban por medio de la figura l la eso nos valemos del sustantivo princi idea de un palo; y uniendo esta idea á la de la c que hemos explicado, llamaban al palo cal. Así, por consecuencia ne pio, para expresar la entrada, el exor cesaria, entró la l á combinarse con la c y con la β en to dio, todo aquello por donde empieza das las palabras destinadas á hacer concebir ideas de en cerramiento, de ocultación y de conservación de una cosa una cosa. En moral y en política lla dentro de otra; y los romanos respetando esta etimología mamos principios á las reglas de nues natural, dijeron, claudo, include, conclavium, cUmtura, üaustrum, S¡c, y al instrumento propio para encerrar y tra conducta. En metafísica llamamos mantener encerrada una cosa le llamaron clavis, y noso del mismo modo á las causas primeras, tros le llamamos llave, por haberse convertido en castella y decimos que Dios es el principio (esto no la combinación el en 11 en algunas voces, como clamare, llamar: clavigerus, llavero, &c. En la palabra castellana es, el origen) de todo. En física y en cónclave se vé realizado todo lo expuesto acerca de la c y química, damos el nombre de principios de la l; pues nos representa los cardenales encerrados bajo de llave en un recinto limitado. á las sustancias simples que entran en (O. déla Cortina.) ' la composición de las mixtas. En lite· 6 COM ( 42 ) COM ratura llamamos principios á los prime COMPLACER, AGRADAR»—Estos dos ver ros rudimentos de las ciencias, &c. bos expresan ambas acciones agrada Comenzar, se refiere á la duración del bles á aquellos que son su objeto. tiempo. Lo que comienza concluye; y Complacer es acomodarse al sentir, por eso llamamos concluida á la obra al gusto, al genio de alguno, adherirse que ha sido muy limada y perfecciona á lo que desea con la mira de serle gra da, para lo cual se necesita mas tiempo to. Agradar es efectivamente ser agra del que comunmente se emplea cuando dable á fuerza de deferencias y de aten - no se perfecciona tanto la obra, ciones. Empezar, atiende mas á la integridad. Complacer es un medio para llegar Lo que empieza acaba; y esta es la ra á agradar, y puede decirse, que quien zón porque llamamos acabada á una sabe complacer con dignidad, puede muy obra que tiene todo lo que debe para bien esperar agradar. estar entera. (March.) Principiar atiende al fin. Lo que prin cipia finaliza: y como la voz principio COMPLACIENTE, CONDESCENDIENTE . — es muy indeterminada por referirse al El complaciente sacrifica su voluntad ó origen primero de las cosas, decimos sus inclinaciones con el único fin de que el mundo tuvo principio; pero que agradar á otro, por la satisfacción que no sabemos cuándo llegará su fin. le resulta de este sacrificio. De todo lo expuesto puede fácil El condescendiente depone su autori mente deducirse la diferencia que hay dad, su superioridad, ó la facultad que entre conclusion, acabamiento y fin; y tenia de oponerse á nuestro gusto, ó á por consiguiente, entre los verbos con nuestros deseos, y se conforma con cluir^ acabar y finalizar, de los cuales se ellos, aunque no le resulte utilidad al derivan aquellos sustantivos. guna. (G. de la Cortina,) De aquí se deduce que el condescen- diente es menos interesado que el com COMERCIO, NEGOCIO, TRÁFICO.—El ne gocio considera los asuntos de banque placiente, y que Ja condescendencia su ro y los de mercancías: el comercio y el pone mas necesidad de parte del que la solicita. tráfico consideran solo las mercancías; (O. de la Cortina.) con esta diferencia, que el comercio se hace mas por venta y por compra, y el COMPOSTURA, COMPOSICIÓN . — Aunque trafico por cambios recíprocos. ambas voces representan la operación (March.) de componer, cada una de ellas corres COMPENDIO, EPÍTOME, RESUMEN, Ó SU ponde á una significación diferente de MARIO.—El compendio es la reducción este verbo. Se compone lo que está roto, de una obra á menor volumen. El su ó descompuesto, y á esta acepción cor mario indica las cosas principales que responde la voz compostura. Se com contiene la obra, ó cada uno de sus ca pone una obra, un tomo compuesto de pítulos, á cuyo frente se pone el suma varias partes, y á esta acepción corres rio. El epítome, es mas sucinto que el ponde la voz composición. compendio, aunque extracto de una obra. La compostura de un coche, de un De un sumario no puede hacerse un epí• reloj, de un vestido. La composición tome, ni de un epítome, un compendio; de un aria, de una oración, de un re mas sí, de un compendio un epitome. medio. (March) (£,. deja Huerta.) CON ( 43 ) CON CONCESIÓN, PERMISO, PRIVILEGIO, LI distinciones de los sinónimos, deben ser CENCIA.—La declaración de la voluntad concisas. del superior favoreciendo una acción Los lacedemonios, que dieron el nom determinada, es el sentido que hace si bre al estilo lacónico, respondieron con nónimas estas cuatro voces. un solo sí á una larga carta en que el Concesión se refiere al bien que hace padre de Alejandro les proponía la el superior, ó á lo que pone de su par guerra. te. Permiso hace relación á los estor (L. de, la Huerta.) bos que deja de oponer. Así, aunque CONFIANZA, ESPERANZA.— La seguridad podemos decir con propiedad que se concede ó permite la extracción de gra que creemos tener de υ na cosa que de nos, no podemos decir que el rey per seamos es el sentido que hace sinónimas mite pensiones, ni que nuestras leyes estas dos voces. antiguas concedían el desafio. Tenemos confianza cuando la segu Privilegio y Ucencia suponen cierta ridad de lo presente nos hace descuidar exclusiva; de manera que nunca se po sobre lo por venir: tenemos esperanza drán dar estos nombres á una concesión cuando la seguridad de lo por venir nos ó permiso que comprenda todos los su- hace tolerar el mal presente. getos de un estado. Estas dos voces El hombre confiado duerme tranqui se diferencian en lo mismo que las an lo con lo que tiene: el esperanzado no teriores: esto es, privilegio hace rela reposa un momento hasta lograr lo que ción á lo que se da; licencia á lo que no apetece. Yo confio en Dios porque sé se estorba: todo privilegio es concesión; que es justo: espero en él porque sé que toda licencia es permiso. es bueno. El ministro recto inspira Es de notar, que la exclusiva que confianza al que pide justicia; da espe suponen estas voces no está precisa ranzas al que pretende con razón. El mente reducida á un solo individuo: amo tiene confianza en el criado, el basta que no estén comprendidos todos. criado tiene esperanza en el amo. Se Cuando el superior mismo limita la li llama mozo de confianza al que es hom cencia ó privilegio á una sola persona, bre de bien; mozo de esperanzas al que ó á un solo cuerpo, entonces se llama es hombre de talento. privilegio exclusivo, y nunca se dice Una y otra, según lo dicho, fija sus licencia exclusiva, porque en el mero miras en el porvenir; una y otra se fun hecho de limitarse el superior, ya se da en la idea de una seguridad. ve que pone de su parte: y licencia es La confianza, que funda su seguridad una idea puramente negativa. en lo presente, se supone que es fruto {Jonatna.) de la reflexion y del raciocinio; la espe CONCISO, LACÓNICO.—Lo conciso da mas ranza que no tiene nada de presente, y claridad; lo lacónico da mas energía. se funda toda en lo venidero, se conten El primero de estos dos estilos omite ta por lo regular con una mera probabi las palabras ociosas, los rodeos, los lidad, que muchas veces no es mas que adornos inútiles, para exponer la idea el deseo trasformado. con la mas exacta precision; el segun Si la justicia de Dios me da confian do indica con frases cortas y expresi za, es porque la conciencia no me re vas lo que debe entender ó adivinar el muerde: si su bondad me infunde espe lector. ranza, es porque á pesar de mi mala Las demostraciones geométricas, las i conciencia, me persuado ó deseo per- CON ( 44 CON Buadirme, que me perdonará. Cuando Es verdad, según dicen: llueve, se- el atoo confia en el criado, se funda en gun creo, y no, es verdad conforme di los datos que tiene de la experiencia : cen; llueve conforme creo. cuando el criado espera en el amo, se (L. de la Huerta.) funda en la probabilidad que le da su propio deseo. 3NJETURAR, PRESUMIR.—La conjetura se funda en alguna combinación de cir La misma analogía sigue el verbo cunstancias ó antecedentes que hacen confiar cuando es activo. Confiar un probable la cosa. La,presunción se pue secreto, confiar un negocio, es encar de fundar en una simple sospecha, re garlo á una persona de quien no recela celo, malicia, ó preocupación. De aquí mos traición ni fraude. Tener confian es, que se dice: sacar una conjetura, esto zas con un sugeto es comunicarle cosas es, deducir délos indicios ó anteceden delicadas; hablarle en confianza es abrir tes alguna consecuencia probable. Pe se con él francamente, en la seguridad ro no se saca una presunción. de que es hombre de bien. (Jonama.) De la tristeza de un mal pagador se conjetura que le acosan sus acreedores. De los síntomas del mal, conjetura el CONFORME, SEGÚN.—Explícase con es médico sus consecuencias. tas dos proposiciones la conformidad de una cosa á otra, pero conforme la supo Un avaro presume siempre que le en ne mas exacta é indispensable, y según, gañan. A un cobarde le basta su mie la supone menos absoluta, ó mas volun do para presumir un riesgo. taria. (£. de la Huerta.) Lo doy conforme lo he recibido; se CONSECUENCIA , RESULTADO , ÉXITO , queda conforme estaba; esto es, exac EFECTO.—La consecuencia no es mas tamente como estaba, ó como me lo que la union ó ligazón que existe en han dado. Juan vive según le dicta su tre una proposición y los principios de capricho; habla según se le antoja, esto donde se ha deducido. Por consiguien es, como quiere. En los dos primeros te, tanto en este sentido como en el mo ejemplos no se puede usar de la voz ral, supone premeditación y combina según, porque no explicaría una confor ción de medios. midad tan absoluta y exacta, como exi El resultado, es el producto definiti ge aquella idea; ni en los segundos se vo de una causa ó del concurso de mu puede usar con propiedad de la voz chas causas, y puede ser casual. conforme, porque daria á la idea una El efecto es igualmente el producto conformidad demasiado exacta, y me de una ó de muchas causas; pero es, nos libre y voluntaria de lo que se quie por decirlo así, mas material; ó mas re dar á entender. bien, se aplica con mas frecuencia á las Esta diferencia se hace mas percep cosas materiales. tible, cuando la conformidad, que se El éxito es un resultado puramente quiere explicar con la preposición, se moral. apoya solo en una probabilidad ó en Una providencia tomada por un go una opinion; pues en tal caso se vé cla bierno sin las precauciones necesarias, ramente la impropiedad del uso de la puede tener muy malos resultados, y preposición conforme, que nunca puede fatales consecuencias. Es claro que explicar una conformidad dudosa, sin estos resultados y estas consecuencias una notable impropiedad. «eran ya físicas, ya morales, v. g., la CON ( 45 ) CON guerra civil, el hambre, la desmoraliza Los padres consienten en el enlace de ción, la pereza, la ignorancia, &c.—Se sus hijos; los amantes son fáciles en dice, ésta medicina no me hace efecto, y adherirse á los caprichos de sus queri no, consecuencia, ni resultado, ni éxito.— das; hay gentes que no están de acuer Una batalla puede tener muy buen éxi do en todo lo que se les propone. to, y muy malas consecuencias.—Este (March.) es el resultado de los efectos del rayo. La física es una ciencia que trata de He incluido en este Diccionario los las causas y efectos naturales. dos artículos que anteceden, únicamen La consecuencia debe producirse nece te por ignorar las razones que tendría sariamente por la combinación de las March para considerar al verbo adhe cosas. No así el resultado, que muchas rir como sinónimo de consentir y de veces se ignora cuál será. acordar; y en caso de duda, debemos (O. de la Cortina.) respetar cualquiera opinion, mientras no nos conste que es errónea. Pero CONSENTIR , ADHERIR. — Consentir, se permítaseme decir, que creo sin temor dirá con respecto á lo que otro ú otros de equivocarme, que no ha habido has quieren, cuando nosotros mostramos ta ahora otro escritor que considere nuestro beneplácito, ó damos nuestro como sinónimas aquellas voces. permiso. El verbo adherir, y mas bien, el re Adherir, á lo que deba hacerse ó con cíproco adherirse, puede parecer si cluirse autorizándolo, uniéndonos al par nónimo de unirse y de pegarse, y en este tido opuesto. caso la diferencia que hay entre estos Así,pues, diremos: los padres consien tres verbos consiste en que el primero ten en el matrimonio de la hija. es puramente obra de la naturaleza, y La plebe adhiere al partido tomado los dos últimos pueden ser obra del por los nobles. arte. Por eso decimos, v. g., que las (Mardi.) plantas parásitas se adhieren á otros cuerpos para poder vivir: que la hume CONSENTIR, ADHERIR, ACORDAR.—Con dad se adhiere á las paredes, &c; y en sentimos en lo que quieren los demás, lenguaje de medicina, se llama adheren accediendo y permitiéndolo. Adherimos cia la union accidental que hace la na á lo que está hecho y concluido por turaleza de partes del cuerpo, que de otros, autorizándolo y uniéndonos á berían estar separadas. ellos. Acordamos ó estamos de acuer En sentido moral, el verbo adherirse do en lo que se nos dice, confesándolo encierra un afecto del ánimo, indicán y aprobándolo. donos no solamente aprobación, sino Se opone uno á lo que no quiere con cierta especie de contentamiento en la sentir: no se toma parte en aquello á determinación que tomamos. Por eso que no se quiere adherir: se disputa nos adherimos al partido, ó á la opinion aquello que no se quiere acordar ni es que nos agrada y complace, moviéndo tar de acuerdo. nos á ello el impulso de nuestro cora Parece como que consentir supone un zón, esto es, la naturaleza; mientras poco de superioridad; que en adherir que muchas veces nos unimos á un par entra cierta idea de complacencia, y tido, contra nuestra voluntad, contra que acordar ó estar de acuerdo denota nuestra opinion y por pura necesidad. un poco de aversion á las disputas El uso que hacemos habitualmente CON ( 46 ) CON de estos tres verbos, explica con per La alegría excita en la imaginación un fección su diferencia. Pegamos dos movimiento mas vivo, mas transeúnte maderos para unirlos: podemos unirlos y menos fundado en aquella reflexion. de varios modos sin pegar los: pero nun Causa contento la buena conducta de ca diremos que los adherimos, ni que un hijo, una noticia que satisface al quedaron adheridos, porque esto es obra ánimo, la vista de una acción virtuosa. de sola la naturaleza. Causa alegría el oír un chiste, una gra (G. de la Cortina ) 1 cia que nos divierte, una música que nos agrada, el buen humor de un amigo. CONSONANTE, RIMA.—Consonante y aso nante son dos especies de rima. El regocijo público, con que se cele La rima en general es la semejanza bra una victoria, causa alegría al pue de sonido que hay entre dos ó mas pa blo que se divierte, y contento al gene labras: cuando se trata de la belleza de ral que se complace. ;£. de la Huerta.] este adorno, ó de la dificultad de com binarlo con el buen sentido, debe decir CONTESTAR, RESPONDER, REPLICAR.— se rima y no consonante, pues la dificul Se contesta al que habla, para que sepa tad y la belleza pertenecen también al que le hemos oido: se responde al que asonante. Por lo mismo no debe de pregunta para satisfacer su duda: se re cirse consonantear, ni tampoco asonan- plica al que propone alguna cosa, ne tear, sino rimar, á menos que se quiera gando parte de la proposición. Estas indicar alguna cualidad, que solo perte proposiciones pueden ser de dos mane nezca á una de las especies. ras: ó prescribiendo lo que se ha de ha Se disputa sobre la utilidad ó inutili cer, ó refiriendo simplemente un hecho: dad de la rima, no del consonante en en uno y en otro caso tiene lugar la ré particular. Los poetas españoles del plica, ó negándose á obedecer, ó contra siglo XVI se podían llamar consonante- diciendo parte del hecho. ros: los del dia son mas bien rimadores, Al que me pregunta qué hora es, le porque hacen á todo. responderé diciéndole la hora, verdade (Jonama.) ra ó falsa; pero le puedo contestar di ciéndole que no tengo reloj, ó que no CONTENTO, ALEGRÍA.—El contento es una me da gana de responder. situación agradable del ánimo, causada, Solo con sacar la caja, y dar un pol ó por el bien que se posee, ó por el vo, contesto al que me lo pida; respon gusto que se logra, ó por la satisfacción do al que me preguntaba si tenia taba de que se goza. Cuando el contento se co; y replico al que negaba que yo lo manifiesta exteriormente en las accio tuviese. nes y palabras, es alegría. (Jonama.) Los que tienen el genio naturalmen te alegre, parece que siempre están CONTINUACIÓN, CONTINUIDAD.— Conti contentos y satisfechos de su suerte. Los nuaciones para la duración: continuidad que son naturalmente melancólicos, no es para la extension. están por lo común alegres, por mas Se dice la continuación de un trabajo contentos y satisfechos que estén de su y no de una acción; la continuidad de un fortuna. espacio y de la magnitud; la continua El contento reside en el ánimo, y se ción de una misma conducta; y la con funda en la reflexion ó conocimiento tinuidad de un mismo edificio. del bien, ó satisfacción que lo causa. \ (.More*. > CON ( 47 ) CON CONTINUAR, PROSEGUIR.—Estos dos ver versación ó el discurso de la persona que bos significan igualmente la acción de • nos habla, le decimos, "detente, no pro seguir una cosa comenzada, con el in- j sigas," y no, no continúes. tentó de llegar al fin y completarla. Esto (G.dela Cortina.) no obstante, diremos: continuar la obra ó tarea de otro, proseguir la nuestra. CONTRAVENCIÓN, DESOBEDIENCIA.—Am (March.) bos designan en general la acción de apartarse de lo que se manda. No me parece bastante clara la ex La contravención es á las cósasela des plicación de March.—Continuar, refiere obediencia á las personas. Contravenir á la idea á la sola reiteración de actos, ó un reglamento es una desobediencia. á la adición para formar un todo com {March.) pleto, y por eso su contrario es inter rumpir. La doctrina de March es exacta, pero Proseguir, trae la idea de reiteración el ejemplo que pone, encierra una con de actos en todo idénticos é iguales con tradicción; pues si contravención se re el mismo fin, con las mismas circuns fiere á las cosas, y si desobediencia se tancias y cualidades, del mismo modo, refiere á las personas, el acto de contra y por iguales medios, y esta es la razón j venir á xm reglamento será una contra en que se fundan los ejemplos que pone i vención y no una desobediencia, porque March, aunque no la expresa. i el reglamento es cosa, no persona. Ha brá desobediencia siempre que se con Yo, v. g., podré continuar la obra ó travenga á lo que mande un rey, un ge la tarea de otro, añadiendo lo que me neral, un superior, una persona cual parezca conducente para aumentarla ó quiera que tenga derecho á ser obede. crecerla; pero no podré proseguirla por cida. que no puedo tener las mismas cualida (G.dela Cortina.) des, los mismos medios, ni hallarme en las mismas circunstancias, &c, que te CONVENCER, PERSUADIR.—Se convence nia el autor: él solo podrá hacerlo. Y haciendo conocer con razones ciertas y esto se funda también en otra razón, y evidentes, la verdad del hecho ó la jus es, que continuar admite interrupciones ticia de la cosa. de mayor duración de tiempo, y de ma Se persuade, presentando al ánimo yor extension de lugar, que proseguir, con razones ciertas ó aparentes, el he el cual no las admite sino muy limita cho ó la cosa como verdadera, como das. Por eso decimos, "al dia siguien útil, ó como agradable. te continuó la lectura."—"Dentro de El buen orador convence á su audito un año se continuara esta obra."—Pero rio de las verdades del Evangelio, y le si la lectura fué interrumpida por pocos persuade de las utilidades de la virtud. momentos, decimos que el que lee la Una demostración geométrica conven prosiguió. ce, no persuade; el atractivo que inclina Ademas, continuar se refiere al prin al vicio, persuade, no^convence. cipio que tuvo la acción ó la cosa: pro (£. de la Huerta.) seguir, se refiere al fin de la misma cosa ó acción, y supone una voluntad deter CONVENIO, CONSENTIMIENTO, ACUERDO. minada de llegar á él: por eso su con —El segundo de estos términos desig trario es detenerse, como vemos prácti na la causa del primero; y el tercero de camente cuando para hacer cesar la con- signa el efecto, por ejemplo: estos dos COR ( 48 ) COR sugetos, con consentimiento recíproco, ; El autor que mas correctamente haya han hecho un convenio, por medio del ] escrito, si le traducen literalmente, po cual están de acuerdo. drá ser muy incorrecto en la version he El convenio viene de la inteligencia cha: lo que está escrito exactamente en entre las partes, y destruye la idea de j una lengua, si se traduce bien, será alejarse uno de otro. El consentimiento ; exacto en todos los idiomas; la correc supone derecho y libertad, y hace que ' ción nace de las reglas que son de con desaparezca la oposición. El acuerdo, j vención y variables de una lengua á produce la satisfacción recíproca y hace otra, y aun de un tiempo á otro en una que cesen las contestaciones. misma lengua; la exactitud nace de la (March.) verdad, la cual es una y absoluta, (March.) COPIANTE, COPISTA, COPIADOR.—La pri mera de estas voces se aplica en'gene CORREGIR, ENMENDAR.—Se coméenlos ral á cualquiera persona que copia: la errores, los defectos del entendimiento. segunda, á la que tiene por oficio co Se enmiendan los yerros, los defectos piar, y vive de él: la tercera, al libro en de la voluntad. que se conservan las copias, y á la má Se corrige el hombre prudente, cuan quina con que se hacen mecánicamente. do advierte el error de su opinion, la Así decimos, "yo soy mal copiante de equivocación de sus ideas. Se enmien lo que yo mismo compongo."—"Los da el malhechor cuando conoce el yerro copistas del siglo III alteraron muchos que ha cometido, el riesgo á que le ex pasajes de los autores latinos."—"An pone su mala conducta. tes de la invención de la imprenta, era Las correcciones de un discurso con muy lucrativa la profesión de copista.'1'' sisten en la mejor elección de voces, la —"Copie vd. esta carta en el copia mayor claridad de las ideas, la mayor dor."—"Saque vd. dos copias con el co fuerza de las razones. Las enmiendas piador de madera." consisten en las mudanzas materiales Solamente en sentido burlesco apli que se hacen en el papel, borrando ó camos el adjetivo copiador á la persona; añadiendo lo necesario; y así al ver un como cuando decimos, "fulano es un escrito enmendado, decimos que está copiador eterno; un copiador incansable; corregido. no pasa de un mal copiador " &c. (L, de la Huerta,) (O. de la Cortina.) CORREGIR, REPRENDER, ECHAR REPRI CORRECCIÓN, EXACTITUD.— Ambas son MENDA.—El que corrige indica ó quie relativas al modo de hablar y escribir, re indicar el modo de rectificar la falta: y designan igualmente alguna cosa re el que reprende no hace mas que indicar gular ó de que uno se cuida bien. ό echar en cara la falta: el que echa una La corrección consiste en la escrupu reprimenda^ pretende castigar ó mortifi losa observancia de las reglas de la gra car al culpable. mática y de los usos de la lengua. La Corregir^ se extiende á toda especie exactitud depende de la esposicion fiel de faltas ó defectos, ya sean de lengua de todas las ideas necesarias al objeto je, ya de costumbrej y^ ^-^ talento. que uno se propone. Echar reprimenda^ solo conviene res La corrección recae sobre las palabras pecto de las costumbres y de la con y las frases; la exactitud sobre los he ducta. chos y las cosas. Para corregir es preciso saber hacer COR ( 49 ) COR mejor que el corregido: puede repren exhala lo serian para aquellos que tie derse á otro mas hábil que uno mismo; nen los sentidos delicados. pero solamente los superiores tienen de Se seduce la inocencia, la rectitud, la recho de echar reprimendas. buena fe, la juventud, el sexo, las per Pocos saben corregir: muchos se me sonas que no están alerta contra el ar ten á reprender; y algunos se propasan tificio y que son fáciles de engañar y de a echar reprimendas sin autoridad para manejar, valiéndose para ello de apa ello. Es preciso corregir con inteligen riencias lisonjeras, de atractivos, ilusio cia; reprender con acierto, y echar repri nes y prestigios. Se soborna á los co mendas con bondad y sin exasperar. bardes, los débiles, las personas sin vir (March.) tud, hombres pervertidos, mujeres, tes tigos y criados, gentes dominadas de CORROMPER, SOBORNAR, SEDUCIR, CO alguna pasión ó vicio, dispuestas á de HECHAR.—Seducir, se dice con respec bilidades; y se les gana ó capta con li to al ánimo, á la razón y al juicio, ha sonjas, promesas ó amenazas, y particu blando de opiniones, de preocupaciones larmente por el interés. Se corrompe y de errores; y aun lo mismo de corrom lo que es puro, sano, bueno, virtuoso; per. Sobornar solo es concerniente á las pero corruptible, accesible al vicio ό acciones morales, únicas que tenemos capaz de mudar en mal, y se logra por que considerar aquí. Cohechar, es ganar todos los medios posibles, por el sobor á uno con dádivas, para que haga lo que no, por la seducción, &c. Se cohecha al se desea aunque falte á la razón, á la juez venal, codicioso, poco recto y de •equidad y á la justicia. licado. Sobornar y seducir, se aplican única La mujer, particularmente, posee el mente á las personas, siendo así que se arte de la seducción: el poderoso mas corrompen también las cosas. Corróm• que ninguno otro hace uso de los me peme las costumbres y las leyes, no se dios de sobornar: el sofista, en particu las seduce ni soborna. lar, y el vicioso perverso, propagan la La idea propia de seducir, es atraer y corrupción: el litigante destituido de ra« •conducir al mal, extraviando y apartan zon ó de derecho, cohecha al juez para do á uno de su deber. ganar el pleito. (March.) El sentido propio de la palabra sobor nar, es de tentar, digámoslo así, los áni CORTO, BREVE, CONCISO·— Corlo, se re mos, y ganarlos con manejos sordos, y fiere á la materia: breve, al tiempo: hacerlos artificiosamente de parte de conciso, al modo. aquel que soborna para que cooperen á Un capítulo de pocos renglones es malos fines. corto, porque no hay en él mucha ma Corromper, significa mudar la forma, teria: es breve, porque se lee en poco viciar el fondo de las cosas, alterar sus tiempo: es conciso, porque en pocas pa calidades esenciales; en una palabra, labras dice todo lo que hay que decir. convertir el bien en mal. En lo moral El predicador pudiera ser mas breve, un hombre corrompido, es aquel cuyas si hiciese un sermon mas corto, ó si costumbres son tan nocivas en sí mis fuese mas conciso; esto es, si suprimie mas como una sustancia propensa á po se una parte de él, ό no gastase tantas drirse; y tan contrarias y perniciosas á j palabras en lo que puede decir con cuantos las tienen inocentes y puras, ι pocas f orno aquella sustancia y el vapor que j ,L. Jila Huerta,} CRI ( 50 ) CRI COSTUMBRE, HÁBITO.—La costumbre per- \ la conservación de su vida, de su salud, tenece al objeto y le hace familiar; el de su robustez, como en lo moral para hábito á la acción misma y le hace mas la dirección de su conducta y estudio fácil. El uno se forma por la uniformi de sus obligaciones. dad, y el otro se adquiere por la repe La educación solo recae sobre lo mo tición. ral, y supone ya otros principios mas Cuesta comunmente poco trabajo una elevados, ideas mas extensas, reglas obra á que uno está ya acostumbrado; mas metódicas, para ilustrar la razón, lo que se ha hecho hábito se hace casi adornar el entendimiento, perfeccionar naturalmente, y á veces involuntaria el corazón, y suavizar las costumbres. mente. Un labrador honrado, una buena ma {Marck.) dre, crian bien á sus hijos. Un ayo, CREENCIA, FE.—Se diferencian en que un preceptor educan, no crían, al joven fe se toma á veces como si solo desig que se ha puesto á su cuidado. nara la persuasion en que se está de los La buena crianza y la educación se misterios de la religion. La creencia dirigen esencialmente á un mismo fin, de las verdades reveladas constituye que es la perfección moral del hombre; la/e. pero puede decirse, que la primera la Se diferencian también por las pala desbasta, y la segunda la pule, por me bras á que se las juntan. Las cosas á dio de la instrucción: y así el principal que el pueblo da fe, no siempre mere defecto que suponemos en quien no cen que el sabio les dé creencia. tiene crianza, es la grosería: en quien Ambos términos significan una per- ! no tiene edueacion, es la ignorancia. suasion fundada sobre algún motivo, y j (L. déla Huerta.) hay otra tercera diferencia. Creencia es una persuasion determinada por al CRÍTICA, CENSURA.—El sentido mas ge gún motivo, cualquiera que sea, evi neral en que se pueden tomar estas dos dente ó no evidente; y fe es una persua voces, es la declaración del juicio que sion determinada únicamente por la formamos de tal ó tal cosa. autoridad del que ha hablado. De ahí En este caso se diferencian en que viene que se puede decir que el pueblo la censura no expone como la crítica el da fe á mil fábulas de que tiene llena pormenor de las razones en que se fun da. La crítica de una obra es la ex Ja cabeza, porque solo está persuadido posición detenida de todas sus partes, de ellas por la palabra de los que se las comparando cada una de ellas con el han contado; pero no puede decirse modelo que nos hemos formado de la que un pagano, que determinado por belleza y de la verdad: su censura es las razones naturales, está persuadido la simple declaración de los censores de la existencia de Dios, tenga la/e de de que es útil ó perjudicial, de buena ó esta existencia, porque su persuasion mala doctrina, sin que sea necesario ex no está determinada por la autoridad poner las razones en que funda su pa de la revelación. recer. Hay cosas tan palpables que (March,) 1 se pueden censurar antes de haberlas I CRIANZA, EDUCACIÓN.—La crianza es el ! materialmente examinado, tales son por primer cuidado que el hombre, desde ] ejemplo todas las obras de gusto: para que nace, debe á sus padres, ó á quien j juzgar si un retrato es parecido al ori hace sus veces, tanto en lo físico, para ; ginal no se necesita mucha crítica, has- CRI ( 51 ) CRI ta tener la vista acostumbrada. El de un principio de retórica ó de poéti buen gusto, que no es mas que el hábito ca, que es falso ó no tan general como del buen sentido, ó de sentir con delica se pretende, esto es censurât;probar que deza, nos hace percibir en un momento la cosa es así,- esto es crítica. una infinidad de relaciones, que nece Se debe criticar con buen gusto ν sitaríamos mucho tiempo para exami censurar con moderación. nar: en tal caso censuraremos sin perder (March.) tiempo en una critica que no haría mas que comprobar nuestra censura. CRÍTICA, SÁTIRA.—La crítica es un exa Como el hombre parece que debe men imparcial, en que se elogia lo bue ocuparse mas en corregir defectos que no y se reprende lo malo, exponiendo en admirar bellezas, y como esta ver la razón en que se funda. La sátira es dad útilísima se halla tan conforme con un juicio, en que, desentendiéndose de los resortes de nuestro amor propio; lo que puede merecer elogios, se ridi cuando se dice simplemente crítica ó culizan los defectos. censura, se entiende siempre en contra No hay cosa mas difícil, que hacer de la cosa censurada- una buena crítica. No hay cosa mas En esta acepción hay la misma dife fácil, que agradar al público con una sá rencia entre las dos voces. Censurar tira. será decir que una cosa es mala: criti Así la crítica, como la sátira, pueden car será descubrir sus defectos: por esto tal vez tener por objeto la corrección y el primero se toma siempre mas en ge el desengaño; pero los medios de que se neral que el segundo. Se censura la valen son muy diferentes; porque la crí• conducta de una dama críticando su tica mas moderada, hace ver el error desenvoltura; y la política de un minis como tal, para que se evite; la sátira, tro criticando sus desaciertos. rara vez imparcial, y siempre violenta, En este último sentido la censura se lo representa ridículo, para que se des parece mucho á la murmuración:^ la precie. Aquella instruye mas que re crítica se acerca á la invectiva cHa sá crea, ésta recrea mas que instruye: de tira. aquí es, que su eficacia es mayor, y sus (Jonama.) efectos, mas peligrosos.
CRÍTICA, CENSURA.—Crítica, se aplica á Una critica necesita estar muy funda las obras literarias; censura, á las obras da para corregir, ó establecer una opi teológicas, á las proposiciones de doc nion. Una sátira ligera puede hacer ol trinas ó á las costumbres. vidar el mérito mas sólido, y establecer Me parece que una critica es el exa la opinion menos fundada. men raciocinado de una obra de cual De todos los versos de Cicerón, que quier naturaleza que sea; y que una cen merecieron los elogios de algunos de sus sura es la reprensión precisa y modifi contemporáneos, solo se ha conservado cada de lo que ofende á la verdad ó á uno, que eternizó por malo Juvenal en la ley: así pues, la crítica puede exten una de sus sátiras. Todos desprecia derse aun á las obras teológicas, y la mos por engreído, aquel verso sencillo censura puede recaer sobre obras pura de que se burla Horacio, tal vez por mente literarias. parcialidad: Fortunam Priami cantaba, Decir de un sistema que está mal en et nobile bellum; sin poder dar mas ra lazado ó desmentido por la experiencia, zón del motivo de nuestra risa, que la CUL ( 52 DAN impresión que ha hecho en nosotros la moräjetel de la sátira. D acidad (L.de la Huerta.'; DANZA, BAILE.—La danza pertenece a CUESTIONAR, INTERROGAR, PREGUNTAR. los usos y costumbres de una nación: el —Se cuestiona, se interroga y se pre baile, es el resultado de ciertas reglas gunta para saber: mas parece que cues dictadas por la observación, y fundadas tionar da cierto espíritu de curiosidad: en el buen gusto. La danza trae con que interrogar supone autoridad; y que sigo la idea de la falta de la civilización, preguntar tiene algo mas de político, al paso que el baile hace concebir la urbano y respetuoso. idea de la cultura, y de la dulzura de Cuestionar é interrogar, forman por sí costumbres. Aquella comprende á un solos sentido; pero en preguntar, hay número indeterminado de personas, por que añadir algún caso (gramatical): es que es puramente un acto de naciona decir, que para formar sentido perfecto, lidad: este no admite mas que un nú es necesario indicar la cosa que se pre mero determinado, según lo prescriban gunta. las reglas del arte. Decimos las danzas Un espía cuestiona á las gentes; el de los indios, de los árabes, de los chi juez interroga á los reos; el soldado pre nos, y no los bailes. Meter á uno en gunta sobre la orden del general. la danza, esto es, en un asunto en que (March.) intervienen muchos. Llamamos danza prima á la que usan los gallegos, porque CUEVA, CAVERNA, GRUTA.—La cueva es es propiamente la danza que tenían en una gran cavidad en la tierra hecha ar tiempos antiguos, y pertenece á los usos tificialmente y que está abovedada. y costumbres peculiares de aquellos ha La caverna, es también una cavidad bitantes. Finalmente, llamamos danza- natural; pero muy profunda y oscura, ai conjunto de personas que bailan, imi que inspira horror y espanto, á propó tando cualquiera danza antigua. sito para guarida de fieras y malhecho res. (G. de la Cortina.) La gruta es una cavernilla adornada por la naturaleza, ó susceptible de ser DAÑO, PERJUICIO.—Daño es un mal que lo por el arte. directamente se hace: perjuicio es un {March.) mal que indirectamente se causa, impi CULPA, DELITO.—En el sentido en que diendo un bien. pueden mirarse como sinónimas estas El granizo hace mucho daño al la dos voces, parece que la primera repre brador, y el bajo precio del grano le sue senta mas propiamente una infracción le causar mucho perjuicio. de la ley divina; la segunda, una infrac La misma distinción conviene á es ción de las leyes humanas. tos verbos en lo moral. El robo es una culpa mortal, consi Una joven bien criada, debe tener derado como infracción de la ley de siempre presente que, por mas infun Dios: y un delito grave, considerado co dada que sea la sospecha que recae so mo una infracción de la ley del reino. bre las apariencias de una falta, no de El pecador pide á Dios el perdón de jará de hacer mucho daño á su reputa sus culpas: el delincuente pide al rey el ción, y mucho perjuicio á su estableci perdón de su delito. miento. {L. de la Huerta.) (L. de la Huerta.) DEB ( 53 ) DEB DAR, ENTREGAR.—Dar es ceder, ó pasar tingue las voces debajo y abajo: esto es, á otro )a posesión de una cosa; entregar un cuerpo está debajo de otro cuando es ponerle materialmente en posesión ocupa un lugar inferior en una misma lí de ella: y así, ni el que da es siempre nea vertical: -está bajo de otro cuando el que entrega, ni el que entrega es siem este gravita sobre él, cuando están en pre el que da. contacto inmediato, ó á lo menos cuan El rey da con liberalidad, y el teso do no consideramos los cuerpos inter rero entrega con exactitud. medios. A los niños se les debe inclinar á que Está bajo la losa, quiere decir, que den limosna á los verdaderos pobres, y la losa lo cubre, que está sobre él; está para que se les imprima bien esta doc debajo de la losa, quiere decir, que la trina, conviene que la entreguen ellos losa está encima: esto es, mas arriba, mismos, y se acostumbren á ver de cer aunque no lo toque ni lo cubra. Por ca la verdadera necesidad. esto se dice bajo llave; es decir, depen El que hace una limosna por su mano diente de la llave; bajo mi tutela, bajo á un mendigo, emplea al mismo tiempo mi dirección; es decir, que tengo cier las dos acciones de dar y de entregar, ta autoridad, cierto derecho sobre la así como el mendigo emplea las dos ac cosa de que se trata; bajo mi palabra, ciones de tomar y recibir. bajo esta suposición; esto es, que la cosa (L. de la Huerta.) depende de la palabra ó de la suposi ción, y en ninguno de estos casos se DAR NOMBRE, PONER NOMBRE.—Los puede sustituir el adverbio debajo. franceses dicen indiferentemente donner un nom, á dar y poner nombre. Estas dos (Jonama.) expresiones no son idénticas en caste llano. La primera corresponde á lla DEBE SER, DEBE DE SER.—La autoridad mar ó nombrar, la segunda á lo que vul de Cervantes hace dudosa la diferente garmente se llama bautizar, y propia significación de estas dos locuciones. mente denominar; esto es, aquella per "La verdadera amistad (dice en el ca tenece á las voces ya conocidas; esta á pítulo XXXII de la primera parte del las que inventamos por primera vez. Quijote) no puede ni debe de ser sospe Los hombres han puesto nombre á las chosa." Pero el uso generalmente re cosas al paso que las han ido observan cibido las aplica á dos ideas enteramen do; nosotros, que hemos hallado la len te diferentes. gua ya formada, se lo damos. Debe ser, afirma que es debido, justo La lógica de Condillac me ha sugerido ó conveniente, que la cosa exista. Debe esta diferencia. de ser, supone que es probable la exis (Jonama.) tencia de una cosa, que por sí misma DEBAJO, BAJO.—El señor de Huerta ex parece dudosa ó increíble. La prime plica muy bien la diferencia que hay ra equivale i es preciso que sea; esto es, entre encima y sobre. Dice que aquel las circunstancias, la obligación, la ne adverbio solo presenta la situación lo cesidad lo exigen. La segunda, equi cal de un cuerpo con respecto de otro; vale á parece que es así: las circunstan y que esta preposición índica ademas la cias, las conjeturas, las apariencias in gravitación que ejerce el cuerpo sobre clinan á creerlo. el que lo sostiene. Un hombre rico, como Juan, debe ser Una diferencia análoga creo que dis- generoso y caritativo; pero según lo que. DEB ( 54 ) BED de él se cuenta, debe de ser un mtsera- j DE BUENA GANA, DE BUENA VOLUNTAD. ble. —Obra el hombre de buena gana cuan Lo dice el Evangelio, y debe ser creí do no le fuerzan á ello; de buena volun do; esto es, tenemos obligación de creer tad, cuando no tiene repugnancia en lo, porque en ello no cabe duda. Lo obrar. Lo que se hace de buena gana, dicen los mas, y debe de ser cierto; esto se hace libre y espontáneamente; lo que es, la voz general lo hace probable; nos de buena voluntad, se hace sin incomo inclina á creer que lo es. didad ó pena. (L.dela Huerta.) Debe uno sujetarse de buena gana á las leyes, y obedecer de buena voluntad DEBER, OBLIGACIÓN.—El deber indica al á los amos. guna cosa mas imperiosa para la con (March.) ciencia que la obligación^ y como pro DECADENCIA, RUINA.—Se diferencian en cedente de la ley: la virtud nos condu que decadencia señala ruina que es co ce á su cumplimiento. munmente efecto suyo, por ejemplo: la La obligación indica alguna cosa mas decadencia del imperio romano desde obsoluta para la práctica; y el buen pa Teodosio, anunciaba ya su total ruina. recer, el qué dirán, y los respetos hu También se dice de las artes que van manos exigen su cumplimiento. en decadencia; y de una casa que vá Es deber de un consejero asistir al arruinándose. tribunal á cumplir con su eargo, y es (March.) obligación suya asistir de manto talar. Se dispensa fácilmente de una obliga DECIDIR, JUZGAR.—Estos términos de ción: se falta á un deber. signan en general la acción de tomar partido sobre una opinion dudosa ó te Es un deber del eclesiástico el ir ves nida por tal. tido modestamente, y es obligación el Se decide una contienda ó disputa, ό ir de negro ó de hábito talar. una cuestión: se juzga una persona ó á A los políticos cuesta menos ser ne su obra. Los particulares y los arbitros gligentes en su deber, que olvidar la me deciden: los cuerpos y los magistrados nor de sus obligaciones. juzgan; se decide uno á tomar tal parti (March.) do; se juzga que lo tomará. Decidir, difiere también de juzgar, en DÉBIL, INCONSTANTE, LIGERA, VOLU que este último designa simplemente la BLE, INDIFERENTE.—La mujer débil, acción del entendimiento que toma su es aquella á quien se echa en cara algu partido sobre una cosa después de exa- na falta que ella misma siente, y cuyo minada,y que toma este partido para sí corazón está combatiendo con la razón solo, á veces también sin comunicarlo á que debe curarla, que jamas la curará, los demás; en vez de que decidir, supone ó la curará muy tarde. un dictamen pronunciado á veces sin Mujer inconstante, es aquella que no examen. Se puede decir en este sen ama; ligera, la que ha amado á otro; tido, que los periodistas deciden, y los voluble, la que no sabe si ama, ni lo que inteligentes juzgan. ama; indiferente, la que nada ama. (March.) La mujeres acusan á los hombres de DEDUCIR, INFERIR.—Inferir, es sacar la ser volubles, y los hombres de que ellas son ligeras. consecuencia exacta que resulta de los (March.) antecedentes. Deducir, es formar la DEF (55 ) DEL consecuencia que, según el orden natu DELICIA, DELEITE, PLACER, VOLUPTUO ral, resulta de la conformidad de los an SIDAD.—Enlacfe/icia no tienen parte los tecedentes con ella (*). sentidos corporales, pertenece al alma De las dos premisas de un silogismo exclusivamente y no puede engañarnos. se infiere exactamente su consecuencia. Así decimos,—"los hijos son las deli Las proposiciones geométricas se infie cias de sus padres."—"En la lectura ren progresivamente unas de otras. tengo todas mis delicias,"r—"El justo Del mérito de una obra se deduce el gozará de las delicias celestiales."— talento de su autor. De una probabi Nunca se dice las delicias de los senti lidad se deduce otra, no se infiere. dos, ni las delicias carnales, ni falsas. (L de la Huerta.) El deleite y el placer llegan al alma por medio de los sentidos, aunque mu DEFENDER, SOSTENER, PROTEGER.—Los tres significan en general la acción de chas veces puede aquella percibirlos poner algo al abrigo del mal que se le sin el auxilio de estos. Un avaro tiene hace ó puede hacer. deleite en contemplar su tesoro. Su Se defiende lo que puede ser atacado; alma es la que goza, pero por medio del se sostiene, lo que puede serlo; se prote tacto, de la vista y del oido. ge, lo que necesita ser estimulado. Hay no obstante una diferencia muy Un rey sabio y prudente debe prote notable entre el deleite y el placer, y ger al comercio en sus estados, sostener es, que el segundo denota cierto con le contra los extrangeros, y defenderle tentamiento, cierta alegría, cierta satis de sus enemigos. Se dice defender una facción que es como un resultado nece causa, sostener una empresa, proteger sario del mismo goce que causa el pla las ciencias y artes. Es uno protegido cer; y por esta razón cuando advertimos por sus superiores, y puede ser defendi estos efectos en un hombre, decimos do y sostenido por sus iguales. Es pro que es placentero. El placer, es por de tegido uno por los demás; pero puede cirlo así, mas comunicativo, no indica sostenerse y defenderse á sí mismo. egoísmo, ni poquedad, al paso que el Proteger, supone poder, y no exige deleite se circunscribe mas á la persona acción; defender y sostener la exigen; que lo siente: muchas veces es sombrío pero el primero supone acción mas mar y misterioso, y no pocas se funda en la cada. melancolía. He aquí el motivo porque decimos los placeres del campo: la idea Un estado pequeño en tiempo de guerra es, ó defendido abiertamente, ό que inspira en esta expresión la pala secretamente sostenido por otro mas bra placeres es tan dilatada, tan agrada grande y poderoso, que se contenta con ble y tan diversificada como el campo. la protección en tiempo de paz. Pero tanto el deleite como al placer son (March.) interesados y pueden variar de causas, de modo y de medios, mientras que las {*) Así lo indica Za etimología del mismo verbo deducir; delicias se limitan absolutamente al alma áucer« guiar, conducir, y de (latino), de (5 desde, preposi y solo el entendimiento puede propor ción que se refiere á persona, cosa 6 lugar; y esta raíz es una de las mas fecundas en las lenguas latina y castellana. cionárselas.—"¡Qué delicias no expe En latin hay adducere, condueere, deducere, educere, indu- rimenta el justo cuando examina su con cere, producers, reducere, seducers, traducere, compuestos del simple ducere: en castellano tenemos estos mismos ver ciencia!"—La voluptuosidad es pura bos compuestos, y no tenemos el simple; pues decimos, mente sensual; se acerca mucho al des educir, conducir, dedtteír, ed«ctr, índKcir, producir, redu cir, seducir, traducir, y no decimos ducir. orden ó al exceso, y consiste únicamen (G. de la Cortina.) te en el empleo de medios que puedan DEP ( 56 ) DES contribuir á aumentar las sensaciones don pugna por destruir las cualidades agradables. esenciales que ella debe tener. Lo que (G. de ta Cortina.) se deprava pierde su modo propio de ser y de obrar; lo que se corrompe pierde su DENUNCIAR, DELATAR.—La idea común virtud y su sustancia. La idea de de de estos dos verbos es la de descubrir pravación es contraria de la de lo bello; la infracción de la ley, ó de la obliga la idea de corrupción es mas bien con ción, al juez ó persona competente. traria á la de lo bueno. Comparando Pero denunciar supone un objeto en una persona muy contrahecha con una que tiene menos parte el interés perso de muy mala salud, tendremos en estas nal, que el deseo de evitar el daño ó el dos imágenes las diferencias distintivas delito. Delatar, supone un objeto en de la depravación y de la corrupción. Un que tiene menos parte el deseo de la juicio no recto es depravado; un juicio justicia que el interés personal. no puro es corrompido; Denuncia la conspiración que descu bre, un buen ciudadano, un hombre que (A. Cien-fuegos.) desea la pública tranquilidad; y la dela DERECHO, JUSTICIA.—El derecho es el ta uno de los cómplices por el miedo objeto de la justicia; esto es, lo que es del castigo. debido á cada uno. La justicia es la Denuncia una mala vecindad el que conformidad de las acciones con el de desea evitar el escándalo á su familia. recho, es dar y conservar á cada uno lo Delata un contrabando el que espera que le es debido. El primero lo dicta la recompensa que á él le toca. la naturaleza ó lo establece la autoridad, (L. de la Huerta.) sea divina, sea humana, y puede algu DEPRAVACIÓN, CORRUPCIÓN.—Estas vo na vez variar según sean las circunstan ces designan la mudanza de bien en mal; cias. La segunda es la regla que siem pero la primera denota físicamente una pre se debe seguir, y no variar jamas. grande alteración de las formas, de los No se obra contra las leyes de la. justi caracteres sensibles, de las proporcio cia cuando uno sostiene y defiende sus nes naturales ó regulares de la cosa. La derechos por los mismos medios de que segunda designa una grande alteración se vale para atacarlos. de los principios, de los elementos, de {March.) las partes de la sustancia de la cosa. La DESAGRADECIDO, INGRATO.—Para ser depravación desfigura, hace disforme; desagradecido basta no agradecer el be la corrupción gasta, descompone, disuel neficio; pero el ingrato añade á ella la ve. La depravación anuncia propiamen injusticia de su mal proceder. Aquel te un defecto de regularidad, de recti tud, de orden. La corrupción anuncia puede serlo por indolencia, este lo es un defecto de pureza y de sanidad. Por siempre por malicia. la depravación se nota la oposición di El desagradecido mira con indiferen recta de una cosa con la regla, el orden, cia el bien que recibe: el ingrato lo mira el modelo dado. Por la corrupción se como una carga que le irrita contra su designa la viciación, por decirlo así, la bienhechor, y á veces sirve de estímu deterioración de una cosa, y una fermen lo á su odio, no solo el beneficio que le tación que tira á disolverla. La depra pesa, sino aun la injusticia misma de su vación da á la cosa una dirección con propia ingratitud. traria á la que debe tener; y la corrup- j Por eso decía uno, hablando de un DES ( i • ) DES ingrato: uno le perdonaré jamas el mal La lente fué un descubrimiento: el te que me ha hecho." lescopio fué una invención. (L. de la Hutrta.) La pólvora no se inventó; fué un des cubrimiento, que ha producido después DESAMPARAR, ABANDONAR.—Se desam tantas invenciones, para facilitar la muer para al que se halla necesitado; se aban te y la destrucción. dona al que se halla en riesgo. (L. de la Huerta.) El desamparo se refiere al bien nece sario de que se priva al desamparado; DESDICHA, ACCIDENTE, DESASTRE.—Loa el abandono se refiere al mal inminente tres términos designan ó indican un á que se deja expuesto al abandonado. acontecimiento desagradable; pero des El rico que no socorre á su familia dicha se aplica particularmente á los pobre, la desampara; pero si lo hace acontecimientos de fortuna y de cosas cuando ésta se halla en un inminente extrañas á las personas. Accidente, per riesgo de perecer, ó de sacrificar su ho tenece propiamente á lo que acontece á nor, la abandona. una persona. El desamparado puede no deber su Es una desdicha perder uno su dine desgracia á la malicia; pero el abando ro ó su amigo: es un accidente caer ó nado la debe siempre á un descuido re prensible, ó á una intención maliciosa. ser herido: es un desastre verse de re Un niño que ha perdido sus padres, y pente arruinado y deshonrado. no tiene quien le cuide, está desampa Se dice una gran desdicha, un acci rado. Un joven, á quien sus padres han dente cruel y un horrible desastre.— echado de su casa, ó no cuidan de su (V. Desgracia.) (March.) crianza ó conducta, está abandonado.— (V. Abandonar.) DESEAR, APETECER.—Se desea lo que sa (L. de la Huerta) tisface á la voluntad: se apetece lo que satisface á los sentidos. Como las mas DESCUBRIMIENTO, INVENCIÓN.—Lo que veces se dirige por ellos la voluntad, se se halla ó se eneuentra, es la idea co desea ordinariamente lo que se apetece. mún á estas dos voces, las cuales cor responden á las acciones de los verbos Se desea un ascenso ó una gracia; se apetece un manjar, un deleite. descubrir, inventar. Un enfermo desea, y no apetece un Descubriros hallar ó encontrar lo que está oculto. Inventar, es imaginar ios remedio. Los irracionales apetecen, no desean. medios de conseguir algún fin. La ac ción del primero puede ser efecto del 'JL. de la Huerta.) cuidado, ó de la casualidad;la del segun DESEMBARAZO , DESPEJO , DESENFADO, do lo es siempre del designio, del estu- DESPARPAJO, SOLTURA, DESENVOLTU dio, del cuidado. RA.—He aquí seis voces de las mas sig Con esta misma propiedad, el descu nificativas y conceptuosas que tiene la brimiento no representa por sí solo, mas lengua castellana para expresar otras que la acción de hallar ó encontrar: la tantas modificaciones de la idea que nos invención representa el efecto de los inspira la voz genérica facilidad, y que medios que ha empleado el ingenio para difícilmente pueden hallar traducción ello. directa en otras lenguas. La voz despe Se descubre una mina, no se inventa: jo dio mucho que hacer al Padre Cour- se inventa una máquina, no se descubre. beville y á Mr, Amelot de la Houssaie, DES ( 58 ) DES traductores ambos de varia« obras de Un buen esgrimidor maneja la espada Gracian, y al fin se contentaron con tra con soltura.—Fué muy notable el desen ducirla por Je ne sais quoi. El Padre fado con que Napoleon tomó del altar Bouhours adoptó esta traducción, mien la corona y se la puso él mismo en la tras que el abate Desfontaines, Mr. cabeza.—Es digno de risa el desparpa Oudin y otros escritores, no menos eru jo con que los charlatanes encarecen la ditos, creyeron traducirla mejor dicien eficacia de sus remedios.—Una buena do gaillardise, gaité, aisance, résolution, policía debe contener dentro de ciertos y ciertamente de ninguno de estos mo límites la desenvoltura de las bailarinas dos queda traducida nuestra voz despejo. del teatro (*), (G. déla Cortina.) La voz desembarazo nos hace conce bir la idea de estorbos 6 embarazos qui DESGRACIA, DESDICHA.—La voz desgra tados de enmedio, ó de dificultades ven cia, solo explica el mal en sí mismo; la cidas, esto es, de acciones ejecutadas voz desdicha añade á la idea del mal el con mas libertad de la que comunmen efecto de la desgracia, con lerrelacion á te se acostumbra emplear en ellas. la triste situación en que se halla el des Despejo, expresa no solamente la mis graciado. ma idea, sino también la dé la gracia, El que pierde al juego, sin que le in la del donaire, y de una operación par comode ni le aflíjala pérdida, es desgra ticular del talento. ciado al juego, y solo por pura ponde El desenfado supone viveza, pronti ración llamará desdicha á su desgracia. tud, resolución, y cierta especie de vio Pero el que ha perdido toda su fortuna, lencia. y se halla reducido á la mayor miseria El desparpajo, suma facilidad en ha y aflicción, sin consuelo ni esperanza de blar ó en obrar. alivio, no solo es desgraciado, porque La soltura, denota agilidad y facilidad padece un verdadero mal, sino también en los movimientos puramente corpo desdichado por la triste situación á que rales. le ha reducido su desgracia. El desembarazo y la soltura, pueden Por eso decimos: ayer sucedió una ser naturales ó adquiridos por la prác desgracia en el río; y no: ayer sucedió tica; pero soltura expresa mas, y es una desdicha, porque solo hacemos re mucho mas material que desembarazo. lación al hecho, al mal sucedido. El despejo es efecto de un raciocinio, Por la misma razón se puede aplicar y tiene mucha parte en él la reflexion. la voz desgracia á un mal grave ó leve, El desenfado depende enteramente continuado ó transeúnte;pero la voz des de la voluntad, y es mas bien un movi dicha siempre representa un mal grave miento del ánimo. continuado é inherente á la persona que El desparpajo supone cierto despre lo padece. Tuvo la desgracia de per cio de los miramientos sociales. der el camino, y llegó tarde á la posada. La reunion de todas estas cualidades Si se dijese: tuvo la desdicha, se daria en el bello sexo, constituye la desenvol demasiada fuerza á la expresión para tura, la cual será mas ó menos digna de (*) Consúltense todos los diccionarios franceses-españo aprecio ó de vituperio, según las cir les que existen, y se verá que á las voces desembarazo, despejo, desenfado, desparpajo, y desenvoltura, aplican siem cunstancias que la acompañen. pre los autores indistintamente, en lugar de traducción di· Un buen actor acciona con desemba recta, las perífrasis,aisance,airdUibéré,banne grace,liber té dans Us mattieret. razo, y recita su papel con despejo.— (G. dt la Cortina^ DES ( >9 ) DES explicar un mal leve, que solo duró has movimos, y no la del movimiento len ta llegar á la posada. to, pero continuado, con que fuimos La desdicha de un hombre condena adelantando. do á galeras, es mas que desgracia, por Mas claramente se advierte esta di que esta voz, aunque propia para ex ferencia, cuando decimos: una gotera plicar el mal en sí mismo, no tiene tan arruina poco apoco una casa: la arruina ta fuerza y energía como aquella, para despacio, querría decir que tarda en explicar el estado infeliz en que se halla, arruinarla, pero no explicaría la repeti esto es, la desdicha á que le ha reduci ción progresiva de esfuerzos que la go do su desgracia. tera vá empleando para causar al fin (L- de la Huerta.) aquel efecto. (L. de la Huerta.) DESIERTO, DESHABITADO, SOLITARIO.— Un lugar desierto está vacio, inculto; DESPRECIAR, DEPRIMIR, DEGRADAR.— un lugar deshabitado, no está ocupa Preciar es dar precio, poner precio á do, está sin habitantes, y aun sin habita una cosa; y despreciarla, es quitarle el ciones; y uno solitario no es concurrido. precio que se le había dado, rebajárse El lugar desierto es mas ó menos vas le. Deprimir y es empujar mucho de ar to; el deshabitado, mas ó menos habí- riba abajo, apremiar abatiendo, oprimir, table ó inhabitable; el solitario, mas ó &c. Degradar, es quitar el grado, des menos apartado ó lejano de las habita pojar de su grado, de su clase á una ciones. persona para ponerla en otro inferior. Los landes están desiertos, las rocas Despreciamos una cosa porque no juz inhabitables, y los bosques solitarios. gamos de ella favorablemente, por la Se huye á los desiertos, huyendo del baja estimación que hacemos; lo que trato de las gentes; se huirá hasta los origina que la creamos muy inferior á lugares deshabitados, poniéndose á salvo su tasa. Deprimimos una cosa por un de la persecución; y se retirará uno á un juicio contrario al que los demás for sitio solitario para librarse del mundo. man; por censuras ó sátiras hechas de En los países desiertos se vá á bus intento para que pierda la buena opi car nueva vida, un nuevo mundo, el nion y fama de que goza, para rebajar hombre salvaje, la tierra abandonada á su mérito, y quitarle el buen nombre sí misma, la independencia en fin. En que ha merecido. Se degrada una cosa un paraje deshabitado se busca un nuevo en virtud de un juicio vilipendioso, con orden de cosas, un nuevo aspecto de la una fuerza, por un poder y por una au naturaleza. En un asilo solitario se vá toridad que la desposee de la clase en á buscar el reposo, la calma y la medi que estaba, despojándola de los títulos tación. y dignidades que la ponían en un orden (March.) superior. Despreciar, indica una sim DESPACIO, POCO Á POCO.—Despacio no ple opinion en la persona, el precio ó explica otra idea que la lentitud de la tasa de la cosa, y la rebaja de este pre operación en sí misma. Poco ά poco cio. Deprimir, denota un vehemente exprime la lentitud progresiva del mo deseo de dañar en la persona, la buena vimiento que nos acerca al fin. opinion que tiene sentada la cosa, la des Fui ganando poco á poco terreno. Si trucción de esta buena opinion. Degra se sustituye la voz despacio, presenta dar, designa una especie de orden ó de ré solo la idea de la lentitud con que nos fuerza mayor en la persona, una distin- DES ( t > ) DES cion honrosa en la cosa, la privación in precio, es la arrogancia con que los ne fame de este honor. Por persona debe cios desprecian lo que ignoran. entenderse aquí el agente, y por cosa {L. de la Huerta.) el paciente. Para despreciar el objeto DESPRECIO, MENOSPRECIO.— Desprecio que se estimaba mucho, basta por lo re es el juicio que hacemos de una cosa gular poseerle. Para deprimir la perso que no tiene valor ninguno: menospre na que se exaltaba ó para exaltar la que cio, es la inclinación que de ahí resulta se deprimía, no es menester mas sino contra la cosa juzgada. que mude de fortuna. Para que un hom bre suba á los mas altos honores, y para Se desprecia una persona no hacien que sea degradado de ellos, no hay mas do caso de ella; se menosprecia insul sino ponerle tal cual es en diversos tiem tándola. Los autores deben despreciar pos y lugares. En efecto, lo que hon las críticas infundadas; pero nunca me ra en España, por ejemplo, produce un nospreciarlas ó irritarse contra ellas, efecto contrario en Constantinopla. El porque en esto manifestarían un amor ingrato desprecia los beneficios; el malo propio muy fuera de razón. (V. Apre cio.) deprime la virtud; el impío degrada la (Jonama.) divinidad. (A. Cienfuegas.) DESTINADO Á, DESTINADO PARA.—Fre cuentemente ocurre decir, que una per DESPRECIO, MENOSPRECIO.—El despre sona ó una cosa cualquiera está destina cio supone una desestimación total de da á hacer ó para hacer tal ó tal otra la cosa, porque la preposición des re cosa; y por mas que estas dos expresio presenta una negativa absoluta: de ma nes parezcan sinónimas, creo sin em nera que, en cierto modo, se puede mi bargo que el buen uso no las confunde rar como la exageración del menospre jamas. cio, porque este solo representa el me Un hombre está destinado ά una cosa nos aprecio que hacemos de la cosa, en cuando él solo debe hacerla: está desti el juicio que formamos de ella. nado para ella cuando la cosa debe ha A mí me parece que, refiriéndonos á cerse, y él ha de cooperar de algún este principio, se puede decir que el modo. Por esto no hay ningún hom menosprecio es la opinion que tenemos bre destinado ά construir un puente, ni de la cosa; y el desprecio, el modo des á abrir un camino, á no ser que esta ex deñoso con que manifestamos nuestro presión se aplique figuradamente al que menosprecio. dirige la obra ó al que la manda hacer. Por eso no se dice: hacer un menos Sin embargo los hay destinados ά correr, precio, sino hacer un desprecio. Aquel ά vencer, ά mandar, &c. se manifiesta: éste se ejecuta. La misma analogía siguen las demás Muchas veces se menosprecia lo que cosas. Las palabras están destinadas ά se alaba, y se desprecia lo que se envi representar las ideas, para comunicar dia. los pensamientos. La leña está destina Menos envilece el desprecio con que da ά arder, ά quemarse, &c, para gui nos insulta un enemigo, que el menos sar, para calentar, para tostar, para precio con que nos alaba un adulador. quemar. Entre los efectos de la ignorancia que No diré que en esta parte esté siempre tiene que sufrir y disimular el hombre constante el uso, ni aun en los autores
prudente} el que mas excita su menos- mas exactos; pero esto no prueba nada, DES ( ι6 1 ) DES ni contra mi distincion,ni contra el buen negocios difíciles si no ae manejan con uso. destreza. Así como muchas veces nos basta una No es posible conservarse mucho idea general sin que sea preciso señalar tiempo en favor sin estar dotado de una la especie, así también en la combina grande doblez. ción ó enlace de las ideas unas veces El que no es sumamente sutil, bien nos basta indicar una relación cualquie pronto le penetran en la corte hasta sus ra, y otras es preciso individualizar si mas recónditos pensamientos. queremos expresarnos con toda claridad; Es impropio de* un honrado valerse pero basta que conozcamos la analogía de la astucia, á no ser en casos de re en los casos principales para saber el presalias ó en asuntos de guerra. camino que hemos de seguir en todos A veces se ve uno precisado á valer los demás. se de artificios por no comprometerse {Jonama.) con personas muy delicadas: ó por atraer á la verdad á las muy preocupadas. DESTREZA, DOBLEZ, SUTILEZA, ASTUCIA, (March.) ARTIFICIO.—La destreza es el arte de dirigir las empresas del modo conve DESTRUIR, ARRUINAR.—Son sinónimos niente á su buen éxito. en un sentido recto; pero en la acción La doblez, es una disposición á aco de destruir, se descubre siempre volun modarse á las coyunturas y á los acon tad y objeto. La acción de arruinar pue tecimientos imprevistos por lograr el fin. de ser efecto de circunstancias involun La sutileza, un modo secreto y ocul tarias y casuales. Los enemigos destruyen ]os edificios. to de obrar. El tiempo arruina los palacios. La astucia, un medio ignorado ó en Por esto se dice, que una casa ame cubierto para ir uno á sus fines ó desig naza ruina, y no destrucción, porque su- nios. pondría voluntad y objeto en la acción El artificio, un medio muy estudiado de destruirse. y poco natural para la ejecución del ob (L. de la Huerta.) jeto. Destreza, doblez, y sutileza, sa toman DESVERGONZADO, AUDAZ, ATREVIDO.— mas veces en buen sentido que astucia Los tres designan en general la disposi y artificio. ción de una alma á quien nada se le da de cuanto temen los demás. Desver La destreza hace uso de los medios y requiere inteligencia. gonzado, dice mas que atrevido, y siem La doblez evita los obstáculos y re pre se toma en mal sentido. Audaz, quiere docilidad. supone mas que atrevido, y también se toma en mal sentido casi siempre. La sutileza insinúa de una manera insensible, y supone penetración. El desvergonzado no tiene pudor; el La astucia engaña y necesita una audaz no tiene respeto ni reflexion; el imaginación ingeniosa. atrevido no tiene temor. Un comerciante debe ser diestro; un El atrevimiento con que siempre debe cortesano doble; un político sutil; un decirse la verdad, jamas debe degene alguacil ó espía astuto, y un juez de po rar en audacia, y mucho menos en des licía artificioso. vergüenza. Rara vez se logra el buen éxito en Atrevido se toma también en sentido DET ( ι ! ) DIA figurado. Desvergonzado, no se dice todos los cuerpos de la naturaleza lla sino de las personas;y audaz, de las per mamos cara, frente ó delantero uno de sonas, délas accionesy de los discursos. sus lados (*): por consiguiente, todo lo (March.) que cae á la parte opuesta, se dice que está detrás de aquella cosa. DETERMINAR, RESOLVER, DECIDIR.—Se Para que una cosa esté tras otra, no determina consultando solo á la volun basta que esté detrás, es preciso que la tad; se resuelve examinando la razón que siga inmediatamente, que no haya cuer hay para ello; se decide pesando dos ó po intermedio, ó á lo menos que no ha mas razones opuestas. gamos caso de él. La voluntad determina: el entendi Tras la cruz está el diablo, no quiere miento resuelve; el juicio decide. decir que el diablo se halla á la parte Ayer había determinado ir á caza, y posterior de la cruz, sino que está in viendo que llovía, resolví quedarme en mediato á ella, y que nos sorprenderá casa; pero al fin, luchando entre la afi si nos llegamos incautamente; esto es, ción y la comodidad, me decidí á salir. no que la maldad este' pospuesta á la (L- déla Huerta.) virtud, sino que suele ocultarse bajo la capa de ésta. Yo voy tras una perso DE TODOS LADOS, DE TODAS PARTES.— na cuando la sigo, sea que la busque, ó De todos lados, parece hacer mas rela que esté unido á ella: voy detrás de cuan ción á la cosa misma de que se habla; y tos van delante de mí. El lacayo vá de todas partes, á las cosas extrañas que tras el amo, y detrás de él suelen ir va rodean á aquellas de que se habla. rias gentes. Se vá de todos lados; se llega de to La misma analogía debían seguir las das partes. voces ante y delante; sin embargo, la pri Se vé un objeto de todos lados cuan mera se ha anticuado, y solo se usa en do la vista se vá dirigiendo sucesivamen ciertas frases determinadas, como por te alrededor de él, y se le mira por to ejemplo, ante todo, ante mí, fyc. das partes, se le vé de todas partes cuan do todos los ojos que le rodean le divi (Jonama.) san, aunque no sea visto de cada uno sino por una de sus caras. DIÁLOGOdiálogo. conservaCOLOQUIO.—En su idela comúr.nlnnvinn deν con Í»1 Por mas que el desgraciado se vuel versación entre dos ó muchas personas, va de todos lados en pos de la fortuna, sin distinguirse por las ideas propias del nunca la encuentra. El favor que se soliloquio y del monólogo, que son sus tiene con un príncipe, atrae honores de opuestos. El diálogo no está consagra todas partes, así como la desdicha acar do exclusivamente al teatro, como lo rea desengaños. está el monólogo; ni el coloquio, en su (March.) valor usual, es grave ó filosófico como el soliloquio. El coloquio es propiamen DETRÁS, TRAS.—Estas dos voces se dis te una conversación familiar y libre, no tinguen en lo mismo que debajo, bajo. sujeta á ninguna regla particular; pero Suponiendo un plano vertical tirado el diálogo es conferencia seguida, en que por el ancho de nuestro cuerpo; todo el espacio que cae á la parte de la cara, (*) Este lado, Ö se halla determinado por la figura de loe se llama delante: todo el que cae á la cuerpos, como sucede en las casas, sillas, coches y otros varios utensilios; 6 cuando no, es la parte por donde los mi parte de la espalda, se llama detrás. En ramos. DIF ( 63 ) DIF se discurre, y que está sujeta á reglas. si no los distinguimos, la falta está en Decimos los coloquios de Erasmo, y los nuestros ojos. diálogos de Platon ó de Fenelon. (March.) (A. Cienfuegot.) IFERENTE, DIVERSO, VARIO, DISTINTO. DICCIONARIO, VOCABULARIO.—La pala —Diferencia es aquella parte, cualidad ó bra vocabulario, solo se aplica á nomen circunstancia en que dos cosas no con claturas sin explicacionó definición: dic vienen entre sí, ó por decirlo de otro cionario comprende los de lenguas, los modo, es lo que á una cosa le falta ó históricos, los de ciencias y artes, &c, sobra para ser igual á otra. y requiere definiciones. Un vocabula Diversidad, es la negación de la iden rio puede no ser alfabético, un dicciona tidad, de modo que todo lo diferente ha rio debe serlo. de ser diverso; pero puede una cosa ser {March.) diversa de otra sin que podamos señalar su verdadera diferencia. La blancura, DIFERENCIA, DESIGUALDAD, DISPARIDAD. la dulzura y la fetidez son tres cosas di —Términos relativos á lo que nos hace versas; pero no podemos decir en qué distinguir la superioridad ó inferioridad se diferencian, ni cuál es mas diferente: entre seres que comparamos. de aquí se infiere que una cosa puede El término diferencia se extiende á ser mas ó menos diferente de otra; pero todo cuanto los distingue; pues es géne no mas ó menos diversa. ro, cuyas especies son desigualdad y Variedad es la diversidad con respec disparidad. to á la mudanza y á la novedad. La di La desigualdad parece indicar la di versidad de objetos consiste en que es ferencia en cantidad, y la disparidad la tos sean diferentes: variedad,en que ten diferencia en calidad. gan poca relación entre sí; esto es, que (March.) sean muy diferentes. Una huerta, en DIFERENCIA, DIVERSIDAD, VARIEDAD.— que se cultiva una infinidad de verdu La diferencia, supone una comparación ras y legumbres diferentes, presenta mu que el entendimiento hace de las cosas, cha diversidad de objetos: una fortale para tener de ellas ideas exactas que za antigua en lo alto de una colina ba eviten la confusion. ñada por las aguas del mar, en cuya fal La diversidad, supone una mudanza da se ven algunas casas de campo, y á que el gusto busca en las cosas, para lo lejos una frondosa arboleda; una vis hallar algo de nuevo que le excite ó li ta semejante, hablando propiamente, sonjee. presenta menos diversidad; pero mas La variedad, supone una pluralidad variedad de objetos. de cosas no semejantes, que la imagina Adviértase que mucha diversidad quie ción se representa, para formarse imá re decir muchos objetos diferentes; y genes agradables que disipen el fastidio mucha variedad quiere decir objetos muy de la demasiada uniformidad. diferentes, ó entre quienes hay muy poca La diferencia de las palabras debe ser semejanza, vir para notar la de las ideas. Dos cosas distintas cuando la una no Un poco de diversidad en los manja es la otra, aunque sean idénticas. Así res no daña á la nutrición. esta voz solo tiene uso relativamente á La naturaleza ha puesto una variedad las ideas ó á las cosas representadas con infinita en los mas pequeños objetos: palabras; pues cuando las cosas están DIS ( 64 ) DIS presentes, á nadie le ocurre preguntar si | la sensación opuesta al gusto; y desagra^ dos de ellas son una misma. Un trián dar representa una acción moral, esto gulo equiángulo no es distinto de un es, la que produce en el ánimo la sen triángulo equilátero, porque estas dos sación opuesta al agrado. ideas representan una sola y misma cosa. Pero el verbo disgustar se usa tam Lo opuesto á diferente es semejante; bién figuradamente en el sentido moral, á diverso, idéntico; á vario, monótono. y en tal caso se refiere generalmente á {Jonama.) todo lo que no satisface á la volun tad: desagradar, conservando siempre DIFERIR, DILATAR.—Dilatar, es diferir, la fuerza de sa sentido recto, se refiere retardar alguna cosa. Pero en el rigor, á lo que no satisface al ánimo, y debie lo que se difiere es la acción que se sus ra satisfacerle por obligación, atención, pende por algún tiempo; lo que se dila ú otros motivos. ta, es el tiempo en que no tiene efecto El enojo del padre disgusta á los hi la acción. Porque en la verdadera fuer jos, y la desobediencia de los hijos des za de sus significaciones, diferir es sus agrada al padre. Disgusta el mal hu pender, dilatar es prolongar. mor de un amigo, y desagrada el de un Cuando se difiere la paz, no es la paz criado. Disgusta el mal tiempo, y des la que se dilata, sino la guerra. Se di agrada la mala fe. fiere el congreso, esto es, no tiene lugar (£. de la Hutrta.) por ahora: se dilata, esto es, dura mas tiempo de lo que se creía. DISPARATE, DESATINO.—Uno y otro se Con relación al riguroso sentido de aplican á todo hecho ó dicho fuera de estas voces, se desean dilatados años de razón y propósito; pero cada uno tiene vida, y no diferidos. su extension y energía particular. El (L. de la Huerta.} disparate recae sobre hechos ó dichos fuera de propósito por falta de reflexion, DILIGENTE, EXPEDITO, PRONTO.—Cuan ó por incoherencia, ó disparidad de do uno es diligente no pierde nada de ideas. El desatino recae sobre hechos, tiempo, ni deja la obra de la mano; sien ó dichos fuera de propósito por falta de do expedito no deja para otro tiempo tino, esto es, de inteligencia, de pruden la obra y la concluye inmediatamente; cia, de razón. cuando es pronto, trabaja con actividad Es un disparate el decir que el olmo y adelanta en la obra. puede llevar peras. Es un desatino el La pereza, las dilaciones y la lenti decir que no se debe respetar la perso tud son los tres defectos opuestos á es na de un padre ó de un soberano. Es un disparate el ir á pié, pudiendo ir en tas tres cualidades. coche. Es un desatino el exponerse á un Al diligente nada le cuesta ponerse al riesgo inminente de la vida. trabajo; el expedito no le deja; el que es Un hombre de buen humor suele de pronto en breve acaba su obra. cir disparales que divierten, y no des (March.) acreditan su talento, pero nunca dice desatinos. DISGUSTAR, DESAGRADAR.—Estos verbos (L. de la Huerta.) en su sentido recto tienen muy diferen te significación: porque disgustar repre DISPUTA, ALTERCADO, CONTESTACIÓN, senta una acción puramente física, esto DEBATE.—Disputa se dice comunmen es, la que produce en nuestros sentidos te de una conversación entre dos perso- DIS ( (B 5 ) DIV nas que difieren de parecer sobre un Querer distinguirse demasiado entre mismo punto: llámase altercado, cuan las personas con quienes tenemos que do se agrega alguna aspereza. vivir, es darles ocasión á que se separen Contestación se dice de una disputa de nosotros. entre muchas personas, ó entre dos de La diferencia de los usos y del lengua consideración sobre algún objeto inte je distinguen mas á las naciones que la resante, ó bien entre dos particulares en de las costumbres. asunto judicial. La ausencia separa á los amigos sin Debate es una contestación tumul desunir sus corazones: no podrá decirse tuosa entre varias personas. otro tanto de los amantes. La disputa jamas debe degenerar en (March.) altercado. Los reyes de Francia y Pru- sia están en contestaciones sobre cierto IDISTINTO , DIFERENTE, DIVERSO.—Lodis- articulo de un tratado. En el concilio tinto recae sobre la identidad misma del de Trento hubo grandes contestaciones sugeto; lo diferente y lo diverso, recaen sobre la residencia. Juan y Diego an sobre sus predicamentos; pero diverso dan en contestaciones sobre los límites indica cierta oposición, incoherencia, ó de sus tierras. El parlamento de In disparidad, de que prescinde por sí solo glaterra está sujeto á grandes debates. lo diferente. (March.) Pedro y Juan son dos personas distin tas, esto es, no es de un hombre solo de DISTANTE, LEJOS.—Distante, representa quien se habla, sino de dos individuos la idea del espacio que hay desde un de la especie humana. punto á otro, de un modo determinado El agua y el fuego, considerados pu y relativo; lejos, la representa de un ramente como elementos, son distintos; modo absoluto é indeterminado. considerados como sustancias, que no Se mide lo distante, esto es, la dis tienen las mismas propiedades, son dife tancia ó espacio determinado que hay rentes ; considerados como causas de entre dos puntos: no se mide lo lejos. efectos contrarios, son diversos. Esta voz prescinde de toda dimension. Un perro y un gato son animales de Está una legua distante de aquí, y no distinta especie, de diferente figura, y una legua lejos. Vino de muy lejos, y de diversas inclinaciones. no de muy distante; porque con aque (L. de la Huerta.) lla voz parece que, en cierto modo, se IDIVERSIÓN , ENTRETENIMIENTO.—Aplí- pondera la distancia, suponiéndola inde canse estas dos voces al medio ó modo terminada. {L. de la Huerta.) de procurar al ánimo una ocupación agradable, que le recrea, que le lisonjea, DISTINGUIR, SEPARAR.—Se distingue lo que satisface su gusto; pero en esta idea que no se quiere confundir; se separa común me parece hallar mía diferencia, lo que no se quiere alejar. que distinguen las mismas voces; por Las ideas que uno forma de las cosas, que diversion dice lo mismo que separa las calidades que se les atribuye, las con ción, esto es, distracción del ánimo de sideraciones en que se les tiene y las se aquellas ocupaciones en que regular ñales que ley son anejas ó se les desig mente se emplea, y á que sustituye otras nan, sirven para distinguirlas. El arre mas agradables, que le distraen de aque glo, el sitio, el tiempo, el lugar, sirven lla fatiga ó disgusto; y entretenimiento lo para separarlas. mismo que ocupación interina, ^ntre DON ( 66 ) DON tanto que llega el momento de hacer y en determinadas acciones propias ex· otra cosa. elusivamente de la persona que las eje Me divierto leyendo; me entretengo cuta. leyendo. Al oir la primera de estas pro Una aldeana,v. g.,tendrá cierto modo posiciones, percibo que la lectura agra de hablar, de saludar,ó de moverse, que da, distrae y recrea el ánimo del que se en ella será gracejo, pero que en una divierte con ella, y casi puedo asegurar petimetra de la corte, seria una rustici que no tendrá gusto, que no le será in dad insufrible: y al contrario; en esta diferente el dejarla. La segunda me re misma petimetra, puede notarse cierto presenta otra idea, esto es, que Ja lec modo de hacer ó decir las cosas que en tura ocupa, sirve de pasar el tiempo, al ella será gracejo, mientras que en la al que se entretiene con ella; veo casi la deana seria una afectación ridicula y indiferencia con que el que lee puede in contraria á la naturaleza. terrumpirla, cuando llegue la hora de El donaire quiere oportunidad, natu hacer otra cosa, porque solo le sirve de ralidad y discreción. entretenimiento que tal vez no le divierte. El gracejo, naturalidad, propiedad y Al que está entretenido, no se le hace conveniencia. el tiempo largo. Al que está divertido La labia, dulzura, astucia y cautela. se le hace corto. Los dos primeros pueden consistir en (L. de la Huerta.) acciones, ó en palabras. La tercera, como su mismo nombre DONAIRE, GRACEJO, LABIA.—El donaire lo indica, no puede consistir mas que consiste todo en la discreción, opor en palabras. tunidad y gallardía con que se dice ó La persona que tiene donaire puede se hace la cosa; depende del talento, y tener gracejo al mismo tiempo. prueba buen gusto. La que tiene gracejo puede no ser sus El gracejo es mas festivo, y consiste ceptible de donaire. en un modo de decir, ó de ejecutar las El gracejo en las palabras es siempre cosas,que aunque nos agrada, no le con sencillo é inocente. El donaire es á ve cedemos el nombre general y absoluto ces picante y malicioso. La labia nun de gracia, porque es un modo puramen ca deja de ser aduladora é interesada. te relativo á la persona. (V. Gracioso, Chistoso.) La labia consiste en la afluencia de (G. de la Cortina.) frases y expresiones escogidas, con la mira de persuadir agradablemente, y DONDE, ADONDE.—El adverbio local don- por lo común supone estudio, artificio, de, explica el lugar puramente en abs y segunda intención. tracto, y las preposiciones en, de, por, El donaire requiere cualidades que &c. que se le unen, determinan, por su solo da la naturaleza, y que después con propia significación, la idea exacta que el hábito, vienen á ser modificadas por se le quiere aplicar. Adonde vá: de don la instrucción, por la observaaeST, y por de viene: por donde pasa. De manera, el frecuente roce con personas de edu que no parece hay mas razones para que cación muy fina y esmerada. Así es donde sea sinónimo de adonde, que para que depende en gran parte del estudio que lo sea en donde, de donde, por donde. dirigido por el buen gusto. Es verdad qué muchas.veces deduci Eí gracejo es todo natural, y no lo mos por el sentido la idea que sé quiere descubrimos mas que en ciertos modos ) aplicar al adverbio usado sin preposi- DON ( ( ' ) DUR cion, como cuando decimos: donde está, nes? Por dónde pasa? Mal dicho se dónde anda; pero ademas de que no ria pues: Dónde vas? Adonde estas? siempre suplimos en estos casos pre &c. Es supérflua la preposición en para cisamente la preposición a, como se ad el primero de estos ejemplos. vierte en estos mismos ejemplos, basta (March.) reflexionarlo un poco, para conocer que las significaciones que se dan al adver DURABLE, DURADERO, PERMANENTE, ES bio, no las tiene por sí solo, y dependen TABLE.—Durable es lo que por su na precisamente del sentido. Si encontra turaleza ó por el modo de estar cons mos á un Propio, y en lugar de pregun truido, debe durar. Duradero es lo que tarle, adonde lleva la carta, esto es, á realmente dura. Permanente lo que dura qué lugar, le preguntamos dónde lleva siempre y sir. alteración. Estable lo la carlu; no responderá con impropie que es de naturaleza permanente; de dad si dice: la llevo en las alforjas ó en modo que estable es á permanente lo que la maleta. durable es á duradero. Una cosa durable y estable puede por Cervantes usa con semejante indife. algún accidente no ser duradera ni per rencia de las preposiciones ά y en, uni manente; pero todo lo duradero ó perma- das al adverbio donde. Adonde lepare- ció ά Sancho pasar aquella noche. Adon nente os durable ó estable, aunque no lo de en unos corredores estaban ya el duque parezca. y la duquesa. Pero la obscuridad que Además estas voces se diferencian puede dar á la frase este uso indiferen también en que durable y duradero con te, se vé con bastante claridad en este sideran la duración con respecto á la di ejemplo: "No me aprovechó nada mi solución natural é insensible de las par "buen deseo (dice uno de los galeotes, tes que componen la cosa que dura: es "á quienes dio libertad D. Quijote) para table y permanente se refieren á una di "dejar de ir adonde no espero volver, solución repentina producida por una "según me cargan los años, y un mal causa exterior. Así que las últimas se "de orina que llevo, que no me deja re- aplican con mas propiedad á aquellas "posar un rato." Es claro que el ad cosas que por su naturaleza nos pare verbio adonde se refiere á las galeras á cen eternas, como una torre, un gran que iba condenado; pero ¿quiso decir fuerte, &c; y las otras á cosas débiles, que no esperaba volver de ellas, por ser y que se van gastando poco ά poco. ya viejo y achacoso, ó que no esperaba Un par de medias pueden ser durade volver ά ellas? Por el sentido se podrá ras; la obra de una casa se llama per tal vez deducir, pero será preciso re manente. El amor es duradero cuando currir á él. no se entibia; es permanente cuando no (L. de la Huerta.) se acaba. Se llaman estables y permanentes en DONDE, ADONDE, DE DONDE, POR DON el sentido moral aquellos hábitos ó ins DE.—Sin que se trate de criticar el lar tituciones humanas,que se conocen bajo go artículo de Huerta, donde, adonde, los nombres de legislación, costumbres, parece que está explicado con decir: religion, &c; primeramente porque los que donde únicamente debe usarse con miramos como indisolubles, á no sobre verbos de quietud, y lo demás con ver venir algún accidente ó causa exterior; bos de movimiento. Por ejemplo, Dón• y lo segundo, porque su duración es re de está? Adonde vas? De dónde vie- gularmente tan larga, que para nosotros EFI ( 68 ) ELE es lo mismo que si durasen siempre. La imagen representa la idea. Por esto se dice que no hay nada per La figura demuestra la actitud y el manente^ y no puede decirse con verdad designio. que no hay nada duradero. Por esto di El retrato presenta únicamente la se cen los teólogos que la vida del hombre mejanza del objeto. no es estable, porque la consideran no Diremos pues: ahorcar en efigie á un como una cosa que se vá gastando poco malhechor; representar en imágenes los á poco, sino como que se acaba de golpe misterios de nuestra santa religion; ha por la separación de sus dos componen cer la figura ύ estatua de un rey; pin tes alma y cuerpo. También llamamos tar, esculpir ó grabar los retratos de los permanentes á los colores por conside grandes hombres. rarlos como una cualidad inherente á las mismas cosas, y por lo tal insepara En sentido literal, no se dirá efigie y bles de ellas. retrato, sino con respecto á las perso Lo opuesto á permanente es perecede nas; imagen y figura en cuanto á toda ro: lo opuesto á estable instable, y de clase de cosas; bajo este concepto, la aquí instante, que es un tiempo sin du circuncisión fué la imagen del futuro ración. bautismo; la serpiente de bronce la. fi (Jonama.) gura de la cruz de Jesucristo. En sentido figurado se dirá de un poe DURADERO, CONSTANTE.—Lo duradero es ma que está lleno de bellas imágenes; firme por su solidez y nunca cesa: lo constante es firme por su resolución, y de un panegírico que está adornado de no muda. figuras retóricas; de un canto que retra ta al vivo á su héroe. No hay conexiones duraderas entre {March.) los hombres si no se fundan en el méri- to y la virtud. ELEGANTE, ELOCUENTE.—Si elegante es (March.) Ε lo mismo que compuesto, adornado, cul to, sin afectación, selecto y esmerado; y EDIFICAR, CONSTRUIR.—Edificar, se re elocuente lo bien y perfectamente habla fiere al edificio considerado en general, do, con elegancia, pureza y facundia, es y conducido á su fin, según su plan y preciso mirar como rigurosamente sinó proporciones. Construir, se refiere á la nimas estas voces, porque en estas dos operación material de su fábrica, á los aplicaciones solo se descubre una mis trabajos y operaciones mecánicas con ma idea; esto es, la de la gracia y belle que se ejecuta. za de la elocución. Pero esta parece En tal año se edificó este palacio, y que conviene peculiarmente á la elegan se construyó con solidez y buenos mate cia, la cual consiste en la hermosura del riales. estilo, y en la buena elección de voces Por eso, de las partes de un edificio, y de palabras, porque su objeto es agra no se dice que se edifican, sino que se dar; y no á la elocuencia, la cual consis construyen, porque edificar recae sobre te en la fuerza del discurso y en la bue el todo. Se construye una pared, un te na elección de razones, porque su obje jado, un sótano; no se edifican. to es persuadir. (L. de la HuertaJ Cicerón es elegante en sus epístolas, EFIGIE, IMAGEN, FIGURA, RETRATO.— y elocuente en sus oraciones. La efigie sustituye la cosa misma. (L. de la Huerta.) EMP ( 69 ) ENC ELOGIO, ALABANZA.—Basta para alabar, resulta de conseguir aquello en que nos decir bien de una persona, sin fundar la empeñamos; ya sea el de evitar el sa razón ni el motivo. El elogio es una crificio de nuestro amor propio á la opi alabanza, que funda su razón, y expli nion ó voluntad agena. ca su motivo. La tema supone mas propiamente in Un ignorante alaba lo que le parece docilidad ó espíritu de contradicción. bien, sin detenerse á exponer los fun Uno y otro pueden ser pasivos, esto es, damentos de su alabanza. Un sabio hace sostener pasivamente su objeto ó su ca el elogio de un libro, exponiendo el mé pricho. rito que halla en él. Un discurso aca La porfia es la demostración activa démico, en que se haca una exposición de la tema ó el empeño, cuando estas fundada del mérito de una persona ilus encuentran alguna resistencia ú oposi tre, se llama elogio y no alabanza. El ción. elogio de Carlos III. El elogio de Fe Un hombre hace empeño de salir con lipe V. su gusto, de satisfacer su deseo, de sos El elogio solo puede recaer sobre las tener su opinion; hace tema de no es producciones del entendimiento, ó las cuchar los consejos de sus amigos, de acciones en que tiene parte la volun privarse de sus propios gustos y satis tad: la alabanza puede extenderse á to facciones: si se lo desaprueban, ó se lo das las cosas que nos agradan, de cual contradicen, porfia, sostiene con tena quiera clase que sean. Se alaba la fres cidad el objeto de su empeño, ó el ca cura de un jardin, la bondad de un cli pricho de su tema. ma; se alaba un caballo, un vestido de (L. de la Huerta.) gusto; no se elogian, como el valor de un soldado, la elocuencia de un orador, la ENCANTAMIENTO, ENCANTO, HECHIZO, bondad y la justicia de un soberano. BRUJERÍA.—El encantamiento es la ac (£. déla Huerta.) ción ó el medio: el encanto es el efecto; pero tanto uno como otro, se refieren EMBARCO, EMBARQUE.—Embarco es la principalmente á la ilusión de los sen acción de embarcarse: embarque, la de tidos ser embarcado. El hechizo hace concebir la idea de Por esto la primera solo se aplica á alguna cosa que perjudica ó trastorna los seres racionales: la segunda puede la razón; esto es, se refiere á la alma convenir á las personas y á las cosas. mas bien que á los sentidos. He aquí Se dice el embarque de los heridos, y la razón porque se aplica el hechizo á el embarco de las tropas; el embarque de las personas y animales solamente, al los presos, y el embarco de los pasaje paso que aplicamos el encanto á las per ros, distinguiendo siempre la acción del sonas, á los animales y á las cosas. Por que se embarca por si mismo, de la ac eso decimos palacio encantado, y no he ción del que es embarcado por mano ó chizado. El hechizado por fuerza, y no por mandato de otro. El embarque de el encantado. un regimiento lo verificará el gefe del En sentido moral conservan estas dos puerto ó del departamento: su embarco palabras la misma diferencia. Si ha lo verifica el mismo regimiento. blando de una mujer hermosa, decimos (Jonama.) que nos encanta, damos á entender el EMPEÑO, TEMA, PORFÍA.—El empeño su efecto que su aspecto causa en nosotros, pone algún ínteres, ya sea el que nos sin que ella tenga en esto la menor par- ENC ( 70 ) EN te; pero si decimos que hechiza, ya da ma proposición se percibe la diferente mos á entender que nuestro corazón fuerza de las dos voces; pero examiné - siente algo, ó que ella se vale de cier mosla en otros ejemplos. tos medios para agradar. Esta idea se En lugar de ponerlo debajo, lo puso manifiesta mejor cuando decimos: "lo encima. Se descubre la torre por en tiene hechizado esa mujer:" que es lo cima de la montaña. Se ve el sol por mismo que si dijéramos:—No puede de encima del tejado. En estos casos en jar de amarla, y sufrir por ella las pe que solo se trata de una situación local, nas del amor. no se pudiera emplear la preposición El encanto es mas noble que el hechi sobre con la misma propiedad que en zo. Aquel suspende las penas del alma, los siguientes, en que se considera al y causa admiración. Este supone siem cuerpo con relación determinada á su pre un daño y causa temor; en una pa gravitación: yo estaba sobre un pié; la labra, es sinónimo perfecto de maleficio, casa está fabricada sobre buenos cimien etimología de la palabra hechizo. tos. Se apoya sobre una mesa; reposa La brujería ya no tiene ni puede te sobre el duro suelo. ner en nuestro idioma la acepción que De aquí es, que los físicos dicen que tuvo en otro tiempo: ahora no emplea un cuerpo pesa, gravita, ejerce su atrac mos esta palabra sino en estilo pura ción ó su impulso, sobre otro, y no en mente familiar y jocoso, porque con cima de otro. serva la bajeza que le imprimió enton Según este mismo principio, se dis ces su primitiva significación, y nos ser tinguen claramente dos ideas diferentes vimos de ella para denotar la prontitud en e;ïtas dos proposiciones: daban gol extraordinaria, ó la admirable facilidad, pes encima de mi cabeza; daban golpes ó el modo raro con que vemos practi sobre mi cabeza. Con la primera supon car alguna cosa. go que los golpes se daban en un para íG. déla Cortina.) je mas elevado , y que correspondía perpendicularmente á mi cabeza, ó en ENCIMA, SOBRE.—Úsanse indistintamen la habitación que estaba sobre la mia. te para explicar la situación, ó el lugar Con el segundo doy á entender que yo que ocupa una cosa respecto de otra; recibía los golpes en la cabeza misma. como cuando decimos: está encima de Por eso se dice también en el sentido la mesa; ha quedado sobre la mesa. Pe moral: sobre mi conciencia, sobre mi ho ro si examinamos con rigor su verdade nor, sobre mi palabra, para denotar que ra fuerza y energía, hallaremos que no lo que se asegura ó se promete, se sos representan rigurosamente la misma tiene, carga, y se apoya en la concien idea. cia, el honor, ó la palabra; y no se pue El adverbio encima explica solamen de decir: encima de mi honor, ó mi te la situación local de un cuerpo res conciencia. pecto del que se halla debajo de él. La {L. de la Huerta.) preposición sobre, representa, no solo la EN CUANTO Á MÍ, POR MÍ.—En cuanto à situación, sino también, y mas propia mi es la frase latina quantum ad me mente, la gravitación que ejerce un spectat, en cuanto la cosa me toca ó me cuerpo sobre otro. Y no es extraño que concierne, según el ínteres que tomo los confunda el uso, porque el cuerpo en ella, ó la opinion que tengo. Por que está encima, gravita naturalmente denota la manifestación, la presencia, la sobre el que está debajo. En esta mis- consideración. Por mí significa ó quie- EN ( 71 ) EN re decir: si yo me pongo delante; para elusion. Al fin denota después de to decir mi opinion, con respecto á mi sen do esto, al cabo, en último análisis, por tir, por lo que respecta á mí ó á la par resultado de las cosas. Finalmente te que yo tomo. Por mi es el latino significa al fin final, esto es, por últi ego vero. En cuanto ά mí denota lite ma conclusion, definitivamente. En fin ralmente un interés en la cosa, y una anuncia particularmente, por una espe relación establecida. Por mí no indi cie de transición, el fin ó la conclu ca mas que un juicio ó un hecho. Cuan sion de un discurso, de una relación, de to designa también una medida y una un raciocinio. Al fin anuncia el fin ó proporción, y por solo una cosa vaga. el resultado de las cosas, de los asun Cuanto expresa una relación mas seña tos, de los sucesos considerados en sí lada, una division mas clara, una opi mismos. Finalmente anuncia una con nion mas fuerte, un complemento mas clusion final. esencia], una cosa mas considerable que (A. Cie-ifuegos) por, tomado en esta acepción. Cuan ENTENDER, COMPRENDE?,.— El prime to recuerda p.incipalmente un objeto ó ro de estos dos verbos explica una una relación nueva que se había anun percepción del ánimo, en que tienen ciado antecedentemente con otras. mas parte los sentidos y la memoria, (A. Cienfuegos.) que en la percepción que explica el ENFADO, ENOJO.—Lo que se opone á verbo comprender, en que tiene mas par nuestro gusto, ó á nuestra inclinación, te el entendimiento. nos enfada. Lo que falta á la obedien Se entiende una lengua, una señal da cia, á la obligación ó al respeto que se da; esta percepción la debemos á la nos debe, nos enoja. Por eso el enfado práctica material, ala acción de los sen puede causarse indiferentemente por las tidos. Se comprende la fuerza de un personas y por las cosas; porque unas discurso, la causa oculta de un efecto; y otras pueden disgustarnos. Enfada esta percepción la debemos á la perspi un hablador, enfada el calor, el polvo, cacia, á la sutileza del entendimiento. el ruido. Pero el enojo solo se puede (L.de la Huerta.) causar por las personas, pues estas so lamente son las que pueden faltar á la EN UN TIEMPO, Á UN TIEMPO.—En estas obligación, á la obediencia, al respeto. proposiciones, y todas las que se diri Y así el enojo supone superioridad de jan á señalar un tiempo, la partícula en parte de la persona enojada, pero no se refiere á la presteza; ά se refiere á la siempre la supone el enfado. prontitud. El padre está enojado al ver la des Hacer dos cosas en un mismo tiempo; obediencia é ingratitud de sus hijos; y es decir, gastando el mismo número de estos están enfadados porque no les deja momentos: hacerlas ά un mismo tiempo; salir con sus gustos. es decir, en una misma época. Es evi Por eso no se dice comunmente, que dente que todas las cosas se hacen en Dios está enfadado, como se dice que tiempo; lo que conviene es hacerlas ά está enojado, que nos hace ver muchas tiempo. veces los efectos de su justo enojo. (Jonama.)
(L. déla Huerta.) EN VANO, INÚTILMENTE.—El uso con funde comunmente la significación de EN FrN, AL FIN, FINALMENTE.—Eñ fifi estos dos adverbios; pero á poca re- ¡significa acabando, para acabar, por con- ESC ( 72 ) ESC flexion que se haga, se percibe entre do secundario, ó menos propio, la signi ellos la misma diferencia que entre vano ficación que rigurosamente parece con é inútil. venirla en su sentido recto y principal; En vano supone insuficiencia de los pues así como escasez representa la ca medios, de los esfuerzos, del deseo, del lidad de escaso; carestía representa di conato que hemos empleado para la rectamente la calidad de caro. La pri consecución de un fin. Inútilmente ex mera recae sobre la insuficiencia de la plica la poca necesidad ó utilidad con cantidad, la segunda sobre el exceso de que se ejecuta la cosa, sin relación algu su precio. na á los medios ni esfuerzos. Como el año pasado ha habido mu Habla inútilmente, esto es, habla sin cha escasez de trigo en toda Castilla, no necesidad. Habla en vano, esto es, ha ha podido evitarse la carestía del pan en bla sin fruto. Madrid. Madrugué inútilmente, esto es, me Rara vez deja de andar caro lo que levanté temprano, sin necesidad, sin ob anda escaso, y por eso tal vez se confun jeto, sin que á ello me obligase motivo den la carestía y la escasez; pero esta alguno. Madrugué en vano, esto es; misma reflexion ofrece un ejemplo que aunque me di el mal rato de levantarme hace ver la diferencia rigurosa de las temprano, no conseguí el fin que me dos voces, y de que solo abusivamente propuse, ó que esperaba conseguir. las confunde el uso, cuando se habla de Querer persuadir á un necio, es can las cosas, y en los casos en que la insu sarse en vano. Gasta el tiempo inútil ficiencia puede hacerlas subir de precio; mente el joven que no hace mas que pa y así no se dice: la carestía de luz me searse y divertirse. impidió el verle. En aquella casa se (L, de la Huerta.) vive con mucha carestía. Este año ha ERROR, YERRO.—El error consiste en lo habido mucha carestía de agua en la que creemos; el yerro consiste en lo que Mancha; como se dice escasez de agua, obramos. La voluntad se decide impe escasez de medios, escasez de fortuna. lida del error que la lisonjea ó persua (L.dela Huerta.) de; y la acción que resulta de esta de cision, es un yerro. Cualquiera otro de Es CIERTO, ES VERDAD.—Es cierto se re fecto, que no nace de error, sino de mali fiere directamente al hecho de que se cia, no es yerro, sino culpa. trata: es verdad se refiere á la relación del hecho. El caso es el cierto, la re Incurrimos en el error de creer al fal lación es la verdadera. Y así no se dice: so amigo que nos vende; y cometemos Fulano ha hecho una relación muy cier el yerro de comunicarle nuestros secre ta, ni tampoco: en esta gaceta no hay tos. una palabra de certidumbre. A veces son verdaderos errores las opiniones de los entendimientos mas Si se examinan con atención estas ilustrados. A veces pasan por yerros las dos contradicciones, no es cierto, no es acciones mas prudentes. verdad, dudo que se deje de percibir, (L de la Huerta.) que la segunda desmiente con mas ener gía, y mas directamente que la primera. ESCASEZ, CARESTÍA.—Úsanse como sinó (L. de la Huerta.) nimos, principalmente cuando se trata de géneros comestibles, y solo se da co ESCOGER, ELEGIR.—Se escoge lo que se munmente á la voz carestía en un senti- ha de elegir. Se elige lo que se ha es- ESC ( 73 ) ESP cogido. La acción de separar lo bueno se oye. El primero representa una ope de lo malo, lo útil de lo inútil, lo que ración inmediata del oido, el segundo conviene de lo que no conviene, exami una operación del ánimo. nando y consultando el gusto, la utili El que oye bien al predicador, atien dad y demás circunstancias de la cosa, de, está atento al sermon, no se distrae, es escoger: la acción de este verbo su para no perder nada de él. El que está pone la duda ó la indecision existente lejos, escucha para poder oir. todavía. El acto de decidirse la volun Para escuchar se evita el ruido; para tad, y destinar la cosa al fin propuesto, atender se evita la distracción. es elegir. La acción de este verbo su (Zr. de la Iluer'a.) pone ya vencida la duda ó la indecision. Es DECIR, ESTO ES.—El c'en ά dire fran Cuando queremos hacernos un vesti cés me ha sugerido el asunto de este do, vemos diferentes muestras de paño, artículo. Bs decir, y esto es, son ex examinamos sus colores y calidades, presiones castellanas, que igualmente consultamos el gusto ó la moda, y esta le corresponden; pero si observamos con es la verdadera operación de escoger alguna atención, notaremos que cada para elegir el que nos parece mejor. una de ellas tiene su diferente energía. Se elige un diputado, un arbitro, un Una y otra sirven para amplificar una general, después de haber examinado proposición; pero, ó se quiere explicar comparativamente las calidades y cir su sentido literal para que se entienda, cunstancias que concurren en los suge- ó se quiere aclarar su espíritu para que tos, entre quienes puede recaer la elec se comprenda: en el primer caso es mas ción. Esta previa discusión seria pro propia la expresión es decir; en el se- piamente la acción de escoger; pero el gundo esto es. uso no permite que se aplique sin diso Pondré algunos ejemplos para que se nancia á las personas, á no ser que en comprenda mejor: deben traducirse li ellas solo se considere materialmente al teralmente; es decir, aproximándose á individuo con relación á sus calidades una version: entre tanto los sitiados es puramente físicas: y así se escogen los taban sin víveres ni municiones; es decir soldados de mas talla, para completar que se veían forzados á rendir la plaza: las compañías de granaderos, los hom privilegio y licencia se diferencian en lo bres de mas fuerza, el esclavo de mas ro mismo que concesión y permiso; esto es, bustez; pero no se escoge un magistra privilegio se refiere á lo que se da, y li do, un prelado, un asesor. La elección cencia á lo que no se impide: la conclu es rigurosamente la acción de elegir; la sion de la paz estriba en dos puntos; de escoger debería ser escogimiento (*). esto e?, en que el uno ceda de sus dere (L. de la Huerta.) chos^ el otro modere sus pretensiones.
ESCUCHAR, ATENDER.—La significación (Jonama.) común, que hace sinónimos estos dos verbos, es prestar atención á lo que se ESPERARLO, ESPERÁRSELO.—La persua dice; pero no explican rigurosamente el sion en que estamos de que se ha de mismo objeto de nuestra atención. verificar lo que deseamos ó tememos, es Se eseuha para oir bien lo que se dice. el término ó idea común á este verbo, Se atiende para comprender bien lo que usado como activo y como recíproco. Lo que distingue su exacta y rigurosa i *) La usa Herrera aun en prosa. Notas á Garcilaso. Caoc. V. Est. II. propiedad es, que la acción del activo 10 ΕΤΕ ( 74 ) EXA representa indeterminadamente la per presenta determinadamente la duración suasion en que estamos de que ha de sin fin; la voz infinito, aunque por su suceder la cosa; la del recíproco repre composición parece que debería circuns senta determinadamente el interés con cribir, mas que la otra, su significación que la prevemos. Aquella tiene mas á aquella idea, se extiende no solo á lo relación al deseo, esta tiene mas rela que no tiene fin, sino también, y mas ción al temor. usualmente, á lo que no tiene límite. Mañana hará buen tiempo, así lo es Dios es eterno porque no tuvo princi pero. Ya me esperaba yo esta mala no pio, ni tendrá fin. Su bondad y su sa ticia. biduría son infinitas, porque no tienen (ZÍ. de la Huerta.) límite. Es PRECISO, ES MENESTER.—Lo que es Por eso, para representar lo ilimitado menesíerpuede pender de nuestra volun del espacio, de la medida, del peso, del tad, por exigirlo puramente nuestra uti número, usamos de la voz infinito, no de lidad ó conveniencia; pero lo que es la voz eterno. Grandeza, distancia in preciso, nunca pende de nuestra volun finita. tad, porque lo exige la obligación ó la Las estrellas del firmamento nos pa necesidad. recen infinitas. Para ir desde Madrid á la Granja, es (L. de la Huerta.) preciso pasar un puerto. Es menester ETERNO, PERPETUO.—Eterno, represen llevar con paciencia los trabajos é inco ta una duración sin fin; perpetuo, una modidades de esta vida. duración indeterminada. Es preciso morir, y es menester llevar - Todo lo eterno es perpetuo, porque no lo con resignación. llega jamas á determinarse el fin de su (L. déla Huerta.) duración. La gloria eterna de los biena ESTIMABLE, APRECIABLE.—En el hom venturados es perpetua. Pero no todo bre estimable consideramos las buenas lo perpetuo es eterno. Y así decimos: calidades en sí mismas, sin relación al movimiento perpetuo, destierro perpetuo, bien que resulta á los demás. En el privilegio perpetuo, y no eterno; porque hombre apreciable las consideramos con la idea que se quiere representar es la relación al bien que de ellas resulta. de una duración indeterminada, no la Estimable recae siempre sobre lo que de una duración infinita. lo es para todos; pero apreciable puede (L. de la Huerta.) también recaer sobre lo que lo es para EXACTO, PUNTUAL.—Es exacto el que no pocos. falta: es puntual el que no tarda. Un hombre virtuoso, un joven mo El que hace lo que dehe, es exacto; desto, son sugetos muy estimables por el que lo hace cuando debe, es puntual. sus prendas: un criado fiel es una per Un religioso es exacto en ir al coro, sona muy apreciable para su amo. porque nunca deja de ir; es puntual, El que disipa locamente su patrimo porque nunca llega tarde. nio, no es estimable para nadie; pero es (L. de la Huerta.) muy apreciable para los que disfrutan de su necia simplicidad. EXAGERAR, ENCARECER.—Exagerar re (L. de la Huerta.) cae mas propiamente sobre las circuns tancias que hacen notable la cosa exa ETERNO, INFINITO.—Lo que no tiene fin gerada; y encarecer, sobre las que la ha es infinito, y es eterno; pero esta voz re- cen apreciable, conservando el verbo en EXC ( 75 ) EXP este sentido figurado (en que es sinóni na cosa; pero esta en realidad no pue mo de exagerar) la propiedad de su sen de llamarse excusa, porque es claro, que tido recto. no puede verdaderamente serlo aquello Se exagera el número de los enemi que se quiere hacer pasar falsamente gos, se encarece el valor de nuestras tro por tal. La voz la explica siempre bajo pas. Se exageran las incomodidades de la acepción de verdadera, y por eso pro la guerra, y se encarece el mérito de ha ducimos nuestra razon como excusa, su ber servido al rey en ella. poniendo que, recibiéndola en esta ca lidad, se mira como legítima; pero la Un historiador exaaera los hechos voz pretexto representa por sí misma que refiere; un mercader encarece el pri una razon puramente aparente, y así mor de la alhaja que vende. Un casa nadie la produce en calidad de pretexto. mentero exagera las riquezas, y encare Confieso que he errado, pero sírva ce las buenas prendas de la dama que me de excusa mi poca experiencia. Sír propone. vame de pretexto, seria confesar que, no Se exagera la cosa por buena ó por teniendo excusa legítima que alegar, mala; pero solo se encarece por buena. expongo una razon puramente aparen El murmurador, que exagera los de te, que no puede pasar legítimamente fectos de los otros, encarece su propia por excusa. sinceridad y su odio á la murmuración. Esto no tiene excusa, esto es, no hay [L. de la Huerta.) razon válida que lo justifique. ι (L. de la Huerta. ) EXCITAR, MOVER.—Se excitan ó se mue ven los afectos; pero el verbo excitar es EXIGIR, REQUERIR. — Ser necesario, ó mas á propósito, cuando se trata de los necesitarse, es la idea común,cuyas mo afectos ó movimientos del alma, fuertes dificaciones se buscan en este artículo. y sublimes, como el valor, la indigna Exigir, parece que supone una nece ción, la venganza; y el verbo mover, sidad indispensable: requerir, una nece cuando se trata de los suaves y senci sidad de conveniencia. llos, como la compasión, la ternura, la Sin lo que se exige, no puede, ó no piedad. debe, existir la cosa; sin lo que se re- Excita un poeta el terror, pintando quiere, no puede existir bien, como con los horrores de una batalla: mueve el viene, ó como se desea. orador la ternura, pintando el cariñoso Todo arte ú oficio exige un estudio afán de una madre afligida. proporcionado á su dificultad, y requie (L. de la Huerta.) re gusto y afición en el que lo profesa. La tierra exige cultivo; el baile re EXCUSA, PRETEXTO.—Excusa es la razon quiere gracia. válida, con que justificamos un hecho. (L. de la Huerta.) Pretexto es la razon aparente, de que nos servimos para ocultar la verdadera. EXPERIMENTO, EXPERIENCIA. — El re Se busca un pretexto, para que sirva sultado de la observación es el sentido de excusa. Dio por excusa, el estar ocu en que estas voces se toman por sinó pado; pero después se ha sabido que la nimas. tal ocupación fué solamente un pretexto. Su diferencia consiste en que el ex Llámase impropiamente excusa á la perimento resulta de una observación falsa razon ó motivo con que procura activa, y para las experiencias basta la mos disculparnos ó eximirnos de algu- observación puramente pasiva. EXT ( 1 6 ) FAM Estas han creado la astronomía: aque no esté ni vina en nuestro propio pais. llas son la base principal de la química. Forastero es el que no está avecindado El hábito producido por experiencias re en el pueblo en que se halla, siendo va petidas se llama experiencia: el que se sallo del mismo soberano. Un inglés adquiere con los experimentos se llama es extranjero respecto de un español, propiamente práctica. aunque no esté ni haya estado en Es (Jonama.) paña. Por eso decimos: los extranjeros EXTERIOR, APARIENCIA.—Exterior es lo critican las cosas de nuestro pais sin ha que se ve; hace parte de las cosas, pero berlas visto. Un burgalés, un toleda las mas lejanas del centro. La aparien no son forasteros en Madrid; pero no se cia es el efecto que causa la vista de les da este nombre sino en el hecho de la cosa. estar en Madrid, y asi seria bien dicho: Los techos, las paredes, las ventanas, hay muchos forasteros que no han es &c, son el exterior de un palacio; la fi tado en Madrid. gura, el tamaño, la situación y el plan Un mahonés que es ahora forastero de arquitectura constituyen su aparien en Madrid, era extranjero antes, varian cia. do esta calidad, no obstante ser antes y En sentido figurado, exterior se dice después de la conquista de Menorca, las mas veces del aspecto y la fisono una persona que no es de aquella tierra y mía de las personas; y apariencia, con pais donde está, y donde vive. respecto á las acciones y la conducta. (L. de la Huerta ) El exterior que agrada, no siempre F lleva consigo el verdadero mérito. La práctica de la virtud es muchas FALTA, DEFECTO.—La falta es un acto veces apariencias que nada deciden so con que contravenimos á nuestra obli bre la existencia real de la virtud en gación: el defecto es una costumbre con las personas que la aparentan. que faltamos á menudo á ella. {March.) El que miente una vez, hace una fal ta contra la verdad. El embustero tie ne el defecto de mentir, esto es, la cos EXTRANJERO , FORASTERO. — Según la tumbre viciosa de faltar á menudo á la acepción autorizada de estas dos voces, verdad. parece que forastero debe llamarse la Una distracción es una falta. Ser dis persona que vive ó está en un lugar ó pais traído, es un defecto. de donde no es vecino: y extranjero se Muchas faltas ligeras, que se cele toma por el que no es de aquella tierra ó bran como gracias de la niñez, son la si pais donde esta, y donde vice. Pero si miente imperceptible de los grandes de queremos conformarnos á estas defini fectos del hombre. ciones, será preciso convenir en que un (L. de la Huerta.) valenciano, que se halla en Madrid, es tan extranjero, como un ruso, porque FAMOSO, CÉLEBRE.—La celebridad es una no es de aquella tierra ó pais en donde fama distinguida y consolidada por la esta, y donde vive. universalidad, y por el tiempo. La aplicación que generalmente se El/amoso puede serlo á una distan hace de estas voces, distingue perfec cia y por un tiempo limitado; pero no tamente dos diferentes ideas. Extranje el célebre, cuyo renombre debe recaer ro es el vasallo de otro soberano, aunque [ sobre lo que, ó por bueno ó por malo, FAT ( 'i77 ) FAZ llama ilimitadamente la atención gene El labrador tiene mucha fatiga. El ral, y la de la posteridad. servicio de esta casa es de mucha fa La celebridad que debe á la historia tiga. el patriotismo de Atilio Régulo, la te Con estas expresiones se ponderan el meridad de Heróstrato, se expresarían trabajo del labrador, y el que acarrean con poquísima energía, dándoles sola los muchos quehaceres de la casa. mente el título de famosos. El rico orgulloso^á quien cuesta poco Un predicador, un médico, cuyo re trabajo el ganar su sustento, está muy nombre no sale de su patria, ni pasa de lejos de pensar, en medio de la opulen su tiempo, no serán nunca célebres, por cia y delicias de una espléndida mesa, vaos famosos que los haya hecho entre en la mucha fatiga con que gana su ns- nosotros, su pasajera, y tal vez mere gro pan el pobre jornalero. cida reputación. (L. de la Huerta.) Cano va no solo es famoso, es ya ce- lebre;y se le dará aun con mos propie FAVORITO, VALIDO, PRIVADO.—Favorito dad este nombre, cuando admire sus es el que ha llegado á adquirir el favor obras la posteridad. de una persona. (L. de la Huerta.) Valido es el favorito de un soberano, de un príncipe, ó de cualquiera perso FATAL, FUNESTO.—Los dos significan una na que ejerce autoridad y poder. cosa triste y desgraciada; pero fatal es Privado es el valido que no solamen mas bien un efecto de la suerte: y fu te ha adquirido el favor del príncipe, nesto es mas bien una consecuencia del sino que trata á éste con familiaridad y crimen. llaneza. Los guerreros están en peligro de El favoríto ha logrado favor. acabar sus dias de un modo fatal, y los El valido favor y valimiento. malvados de un modo funesto. El privado favor, valimiento y fami A veces tienen estos dos términos un liaridad. sentido augurai: es decir, que se vale La voz favoríto indica solamente el uno FATIGA, TRABAJO.—Fatigues también si FAZ, SUPERFICIE.—Es lo de afuera, la nónimo de trabajo; y en este sentido, la parte exterior y sensible de los cuerpos; fatiga se emplea como una especie de esta idea los hace sinónimos. ponderación del trabajo. Se dice faz cuando no se quiere hablar FER ( 78 ) FIR sino «le lo que es exterior y visible, sin ó un ingenio fértil 6 fecundo en grandes respeto á lo que no se presenta. ideas; pero seria mal dicho un orador Se dice superfine cuando se intenta fértil en lugar de fecundo; podremos, si, poner lo que está fuera, en oposición decir, que su pluma es fértil, á cau con lo que no se presenta. sa de las muchas y varias producciones De todos los animales que cubren la de asuntos que él da á luz.—( V. Ferti faz de la tierra, solo el hombre es ca lidad, Fecundidad.) paz de conocer todas las propiedades de {March.) este globo; y entre los hombres la ma FERTILIDAD, FECUNDIDAD.—Lo que ma yor parte no perciben mas que la super terialmente produce con abundancia, es ficie; solo sabe penetrar en lo interior el fecundo. La fecundidad de varias espe ojo perspicaz de un corto número de fi cies ó individuos constituye/eV/í/ el todo lósofos. que componen. Esta distinción vale también en sen tido figurado; y de ahí viene que se dice Una tierra, un campo es/ r'il cuan de los talentos vanos, que para hacerse do en él hay muchas plantas fecundas. La provincia en donde se coge mucho valer hablando de todo, hacen ligeras r incursiones en todos los géneros de co aceite ó mucho \ ino, no es fecunda, es nocimientos sin profundizar ninguno; fértil. Las olivas, las vides que produ que no saben mas que la superficie de cen materialmente aquellos frutos, son las cosas, y que solo tienen nociones su fecundas. perficiales. Por la misma razón entre los anima (March.) les no se llaman fértiles las hembras, sino fecundas. FELICIDAD, DICHA.—La felicidad es el (JL. de la Huerta. ) estado permanente de la dicha. Se pue FINO, DELICADO.—Se necesita mucho ta de tener un momento de dicha sin go lento para conocer lo que es fino; pero zar de la felicidad. La dicha como sen ademas se necesita gusto para conocer timiento es una continuación de place lo que es delicado. Lo primero es su res; la felicidad un goce duradero de la perior al alcance de muchos, y lo se dicha. Puede uno tener una dicha sin gundo está al alcance de muy pocos. ser feliz. Un hombre ha tenido la di Un discurso fino se repite alguna vez cha de escapar de un lazo, ó de un pe con utilidad al que no lo ha entendido ligro, sin dejar por eso de ser tan infe desde luego; pero el que no conoce lo liz ó mas que antes, y por consecuencia delicado al momento, no lo conocerá no se puede decir de él que ha experi nunca. Puede buscarse lo uno y es pre mentado la felicidad. (March.') ciso comprender lo otro. Fino tiene un uso mas extenso, pues FÉRTIL, FECUNDO.—Estos dos adjetivos, sirve para los rasgos de malicia como tomados en sentido propio ó figurado, para los de bondad. Delicado, es de un expresan una abundante producción; servicio y mérito mas raro: no sienta mas parece que la. fecundidad proviene bien en los rasgos maliciosos, pero figu de la naturaleza, y que Infertilidad sea ra con gracia en cosas lisonjeras. Así mas bien efecto del arte. Diremos, es que se dice una sátira fina, una ala pues: el calor del sol y la lluvia del cie- banza delicada. lo fecundizan la tierra: el cultivo y el (March.) abono la hacen fértil: una imaginación FIRME, CONSTANTE.—El que no varía, FIR ( 79 ) FIR es constante; el que no cede, es firme. constante y firme al mismo tiempo, por El hecho solo de no mudar de opinion, que será propenso á variar de gusto ó de inclinación ó de conducta, basta para de inclinación, y tendrá bastante firmeza acreditarse de constante. Para ser fir para obrar del modo que le convenga: me es preciso tener que vencer las difi no así el que es constante solamente; cultades ó contradicciones, y todo lo que puede ser constante por carácter, ó por puede oponerse á la constancia. hábito, y verse obligado por falta de fir Un hombre puede ser constante tal meza á obrar contra sus deseos. La vez por costumbre, por irresolución, y constancia parece que lleva embebida aun por debilidad; pero solo es firme el en sí misma la idea de la tranquilidad, que resiste á todo lo que puede sepa de la mansedumbre, de la dulzura de rarle de su resolución. carácter, al paso que la firmeza indica, (L.dela Huerta.) como se ha dicho, fuerza y vigor de es píritu; por esta razón se mira la falta FIRME, CONSTANTE, PERSEVERANTE, ASI de firmeza en las mujeres con mas in DUO.—Firme es el que se resuelve con dulgencia que en los hombres; pero tan decision á obrar de tal ó tal manera, sin to en aquellas como en estos se exige que nada le obligue á mudar de reso la constancia. lución. ha. perseverancia supone continuación Constante es el que por naturaleza de actos, una práctica seguida sin va sigue una misma inclinación, un mismo riar de intención; pero sin grandes es gusto, una misma práctica, pero siem fuerzos, cediendo tal vez á las circuns pre en sentido bueno ó indiferente. tancias, sacrificando acaso nuestras pro Perseverante es el que continúa prac pias inclinaciones para lograr mas fá ticando con ahinco lo que es necesario cilmente el fin principal. para lograr sus fines. Esta es la razón porque se dice—este Asiduo es el que acude con frecuen- hombre persevera en sus errores, en sus cia donde su deseo ó su interés lo llama. vicios, &c, y no—es firme ni es cons La firmeza supone fuerza y energía, y tante. Si persevera en los vicios, es por esta razón se aplica con tanta pro sin grande esfuerzo porque ya se habi piedad á las cosas materiales, pues nada tuó á ellos, y así como no quiere vio de lo que es firme está sujeto á vacilar ni lentarse para dejarlos, tampoco perseve mudarse fácilmente.—"Este hombre es raría en ellos si hubiese de costarle al firme como una roca."—"Todos los co guna violencia. natos de los malvados se estrellaban con La asiduidad trae consigo la idea de tra su firmeza.'''' Pero debe advertirse la repetición frecuente de un acto, pero que la palabra^meza, así como supone mudando de lugar para trasladarse á otro fuerza y energía, supone también justi en donde conviene permanecer: así lo cia y rectitud; pues de lo contrario no indica su misma etimología (sedere ad.) ceria firmeza sino obstinación. La pri Un cortesano, un amante, pueden no mera es una virtud, la segunda un vicio. ser firmes ni constantes y ser sin embar La constancia es, si se quiere, una go muy asiduos, el uno cerca del sobe virtud; pero en ella tiene tal vez me rano, y el otro al lado de su querida. nos parte ln voluntad: las mas veces de De aquí se deduce que el que es asi pende del carácter de la persona, pocas duo, es por fuerza perseverante; pero el veces del esfuerzo que haya hecho por perseverante puede no ser asiduo. adquirirla. Un hombre puede ser in- (O. de la Cortina.) FOR ( 80 ) FUE FLUIDO, LÍQUIDO.—Fluido, representa la corazón, y la dulce tranquilidad del naturaleza del cuerpo; líquido, el esta ánimo. do en que se halla. Conservando esta misma propiedad Los cuerpos físicos se distinguen en la voz fortuna, se toma á veces por el sólidos y fluidos, no en sólidos y líqui• mismo bien fínico; pero no se puede ha dos, porque se trata de la calidad esen cer este mismo uso de la voz dicha, que cial que los distingue; y entre solido siempre representa un goce moral: y así y líquido se contrapondría una calidad no puede substituirse á aquella en es esencial y una circunstancia accidental. tos ejemplos: algunos han hecho gran El agua es siempre un cuerpo fluido, fortuna eh las Indias. Cuando media el quo no siempre es líquido, porque deja honor, se debe sacrificar la fortuna y la de serlo cuando se hiela. vida. (L. de la Huerta.) Los metales no son jamas cuerpos fluidos, aunque son líquidos cuando se FRATERNAL, FRATERNO.—(V.Paternal.) derriten. (L.dela Huerta.) FUERZA, ENERGÍA.—La fuerza del dis curso consiste en la solidez de las ra FORTUNA, DICHA.—La voz fortuna en su zones; la energía en el modo de expo sentido recto se extiende tanto á la bue nerlas. na como á la mala suerte, y solo en el Un argumento escolástico puede ser primero de estos sentidos puede mirar fuerte sin ser enérgico. Una descrip se como sinónima de dicha; pero la voz ción histórica puede ser enérgica sin ser fortuna representa aquella felicidad fí fuerte. sica y materialmente; la voz dicha la re Las lágrimas de Veturia fueron mas presenta moralmente, esto es, en cuan enérgicas, que las fuertes razones que to causa satisfacción al que la posee. Y emplearon los romanos para aplacar la así la primera es mas propia para ex obstinación de Cariolano. plicar el logro ó posesión de aquellos La descripción que hace Boileau de bienes, que todos miran como tales, y la pereza, es enérgica, y no es fuerte; á que se atribuye, por una especie de el discurso de Colocólo en la Araucana opinion ó convención general, la felici es al mismo tiempo fuerte y enérgico. dad en esta vida, y que muchas veces (L. de la Huerta.) no llenan el corazón del que los posee, como los honores, los empleos, la rique FUERZA, FORTALEZA.—La fuerza es para za; j la voz dicha se aplica mas propia obrar: la fortaleza para resistir, tanto en mente al goce de aquellos bienes, que lo físico como en lo moral. el que los disfruta tiene verdaderamen Un hombre necesita mucha fuerza te por tales, sin necesidad de que los para levantar un gran peso. Los cimien califique la opinion general, porque sa tos de una casa necesitan tener mucha tisfacen su gusto ó su deseo. fortaleza, para sostener el peso de su fábrica. Hay muchos hombres que tienen la fortuna de ser ricos, y no por eso logran El varón justo, que conoce la fuerza ser dichosos; pero por el contrario, el con que obran las pasiones, se reviste hombre prudente, abandonado de la for de una fortaleza de ánimo superior á ellas, para resistir al ímpetu de sus es tuna, puede ser dichoso, si sabe conser tímulos. var en su desgracia la inocente paz del (L.dela Huerta.) FÜE ( 81 ) FUE FUERZA, VIGOR, FORTALEZA, ROBUSTEZ. te en todas las direcciones, sino que co —Fuerza llamamos al principio del mo municamos el movimiento á otros cuer vimiento ; así decimos que todos los pos, ó les quitamos el que tenían. cuerpos de la naturaleza están equili En esta acepción parecen sinónimas brados por dos fuerzas contrarias, una las voces fuerza y vigor; sin embargo, que los mueve acia un centro, otra que observando que suelen usarse muchas los aparta de él por una tangente: un veces juntas en una misma proposición, cuerpo decimos que lleva mas ó menos podemos sospechar que no será uno mis fuerza según le vemos ir mas ó menos mo su sentido, pues entonces seria una aprisa. repetición insufrible decir que arrojamos Los seres inanimados, ademas de las una cosa eon fuerza y vigor. fuerzas centrípeta y centrífuga, que les Si bien lo notamos, esta última voz son comunes con todos los demás cuer indica mas bien el esfuerzo y disposición pos, tienen otro principio de fuerza para del espíritu que mueve los resortes de moverse á su arbitrio en todas direccio nuestra máquina: la otra atiende mas á nes. Si no se mueven con igual facili la materialidad de los mismos resortes; dad en todas ellas, es porque hallan otras de modo que vigor es propiamente el fuerzas que contrarestar; y las fuerzas uso de la fuerza. Decir que un hombre se destruyen mutuamente: por ejemplo, repele una cosa con fuerza y vigor, es acia arriba se pierde la mayor parte de indicar que no solo tiene fuerzas para re la fuerza animal en la resistencia de la pelerla, sino que las emplea realmente fuerza centrípeta; y regla general, en en aquella ocasión. Una ley está en su cualquiera dirección se pierde tanta can fuerza mientras no se deroga; está en tidad de fuerza animal, cuanta es la su vigor mientras se observa. Dos per fuerza contraria. Por esto, cuanto mas sonas de iguales fuerzas pueden hacer pesadas son las cosas cuesta mas traba una cosa con mas ó menos vigor según jo moverlas. Si yo empujo una bala de el esfuerzo de cada una. Por esto vi hierro que esté sobre un plano horizon gor solo se dice de los animales, ó de tal, según mi fuerza, sea mayor ó me las cosas personificadas; esto es, solo se nor que la de su gravedad, la haré mo aplica á las fuerzas voluntarias, y de ver, ó me cansaré inútilmente. Cuan ningún modo á la fuerza necesaria que do cogiendo un palo por sus dos extre dirige todos los cuerpos de la naturale mos lo parto sobre la rodilla, mi fuerza za con unas leyes invariables y cons no hace mas que dar movimiento á sus tantes. dos mitades, á pesar del punto de apo Fuerza es en todos los casos el prin yo que lo estorbaba. Últimamente, si cipio del movimiento, y por consiguien dirijo la mano contra una pelota, una te de la acción: fortaleza es al contra bala ó cualquier otro cuerpo que venga rio, el principio de la resistencia; y un acia mí, siendo mi fuerza mayor que la cuerpo decimos que tiene mas ó menos suya, lo haré retroceder; en caso con fortaleza según resiste á los esfuerzos trario él vencerá mi mano, y pasará ade de otro que quiere moverlo ó separar lante: en fin, si nuestras fuerzas son en sus, partes. teramente iguales caerá á mis pies. Un cue*·^ lleva mucha fuerza cuando Por lo dicho se vé que lo que Uama- se mueve c^n rapidez, cuando rompe mos fuerza animal no es mas que la elas por todos los obstáculos: al contrario, ticidad de nuestra musculatura, por la tiene mucha fortaleza cuando nada le cual no solo nos manejamos rápidamen- hace mella, nada lo descompons ni hace 11 GAL ( í : ) GOC mover. Al hombre de fuerzas nada le puede tal vez confundirse con el amor; resiste; el hombre que tiene fortaleza lo éste pudiera mas bien equivocarse con resiste todo. En la guerra se llaman la íntima amistad, si no anduviese casi fuerzas todas las cosas que pueden ser siempre acompañado de las apariencias vir para atacar, como soldados, caba del vicio. llos, artillería, navios: plazas, castillos, El cortejo, á quien disguste esta sig baterías, y todo lo que únicamente pue nificación de la voz, prefiera el nombre de servir para defensa se llama fortale y la calidad de galán, haciendo mas zas, fuertes ό fortificaciones. Forzar una alarde de un obsequioso rendimiento, trinchera es rendirla: fortificar una pla que no exceda los límites del respeto, za es ponerla en estado de defensa. que de una confianza que ostente las La apariencia ó el exterior de la for apariencias de la facilidad ó de la pose taleza es lo que se llama robustez. El sión. grueso de una columna constituye su ro (L. de la Huerta.) bustez, su fortaleza depende de la mate ria. La robustez animal consiste en el GENERAL, UNIVERSAL.—Lo general com grueso de la musculatura, en lo apretado prende la totalidad en grande: lo uni de las carnes, y en el aparente buen es versal por menor. Diremos pues: la ca tado de los humores: para que haya for restía ha sido general en el reino: el di taleza es menester que la máquina ten luvio fué universal. No hay regla ge ga verdadera resistencia, cosa que no neral que no tenga excepción; no hay siempre acompaña la robustez. Hay principio universal del cual, no se reco hombres de mucha robustez que resisten nozca la verdad sin excepción. Es opi muy poco; así como puede haber una nion general que las mujeres rio nacie columna de corcho mas robusta que otra ron para la guerra; es principio univer de mármol. sal que los hijos deben honrar á sus pa El adjetivo de fuerza es forzudo: el dres. {March.) de fortaleza fuerte: vigoroso y robusto son los de vigor y robustez. GLOSA, COMENTARIO.—Los dos son in {Jonama.) terpretaciones ó explicaciones de un texto;, pero la glosa es mas literal y se FUROR, FURIA.—Furor denota mas bien la agitación violenta interior, y fuña la hace casi palabra por palabra; el comen agitación violenta exterior. El furor tario es mas libre y menos escrupuloso está dentro de nosotros; la furia nos en separarse de la letra; sucede á veces saca fuera de nosotros. Nos posee el ser difuso en lo que fácilmente se en furor, nos enagena la furia. Contene tiende, y guardar silencio sobre los lu gares ó pasajes difíciles. mos el furor, nos abandonamos á lafuria. {March.) (A. Cimfuegos.) G GOCE, POSESIÓN.—En el artículo/orftmec, dicha se ha empleado la voz goce para GALAN, CORTEJO.—La voz cortejo se ha explicar la acción del verbo gozar, por admitido ya generalmente como sinó que aunque en este sentido no parece nima de galán; pero hay entre ellas la que está adoptada en nuestra lengua, no diferencia, de que la galantería supone hallo otro substantivo que corresponda respeto y rendimiento; y el cortejo su rigurosamente á este verbo, y explique pone familiaridad y confianza. Aquella por sí solo su acción. Si en su falta que- GOZ ( 83 ) GR A remos substituir un equivalente, no pa imaginación para que suceda un gran rece ofrecerse otro mas análogo á la gozo á las lágrimas mas amargas. idea, que el substantivo posesian. Pero (March.) poseer explica la acción de tener una cosa en nuestro poder, ó á nuestra dis Gozo, GUSTO.—El primero se aplica solo posición, sin relación á la parte moral á lo moral, y el segundo á lo físico, y de la acción, esto es, á la parte que tie solo figuradamente á lo moral. ne en ello la voluntad del que posee, ni El gusto que me causó su vista, llenó á la utilidad que le resulta, cuya idea de gozo mi corazón. explican rigurosamente el substantivo No se dice el gusto del alma, sino el goce, y el verbo gozar. gozo; ni el gozo de comer una pera, sino Muchos hay en el mundo que poseen el gusto. bienes, de que no pueden gozar; ¿pues Aplicados uno y otro puramente á lo por qué no se podrá decir, que lo que moral, el gozo supone un efecto mas in satisface al corazón humano no es la po herente, mas sublime, y causado por sesión, sino el goce de las riquezas? objetos mas nobles; el gusto una sensa {L. de la Huerta.) ción menos sólida, y causada por obje tos mas comunes. El gozo de los bien GORDO, GRUESO.—El adjetivo grueso con aventurados; el gusto de pasear solo. sidera el volumen con relación á solo el (L. de la Huerta.) espacio; el adjetivo gordo le considera con relación al espacio y á la materia. GRACIA, FAVOR —Gracia dice algo de Un hombre corpulento tiene natural gratitud; un beneficio gratuito, un ser mente una mano gruesa, y en esta idea vicio gratuito. Favor dice algo de afec no vemos mas que su volumen; pero tuoso; es la expresión de un interés par una mano gorda nos representa la idea ticular, del cuidado de la felicidad ó de de su carnosidad, de la abundancia de la satisfacción de alguno. Nos gratifi la materia de que se compone. can con un bien, con una cosa que no Se mide lo grueso, no lo gordo; por nos debían: nos favorecen con bienes, que la medida solo recae sobre el es con preferencias que nos distinguen. pacio. (A, Cienfuegos.) Gordo no se aplica con tanta propie GRACIOSO, CHISTOSO.— El gracioso di dad á las materias compactas y resis vierte excitando la risa, por medio de tentes, como grueso. Es grueso un ár acciones ó dichos jocosos; y el chistoso, bol, es gorda una pantorrilla. Solo en recreando el entendimiento con agude un lenguaje muy vulgar se dice: un palo, zas y sales, aplicadas sin estudio, con un garrote muy gordo. viveza y oportunidad, al asunto de que (L.dela Huerta,) se trata. Gozo, ALEGRÍA.—El gozo está en el co El primero puede valerse de imita razón, la alegría en los modos: el gozo ciones,de dichos estudiados, de extrava consiste en un dulce sentimiento del gancias, de las ventajas que puede ofre alma, la alegría en una agradable situa cerle la disposición física de su propia ción del espíritu. figura, ó la singularidad de su carácter; A veces sucede que la posesión de un el segundo todo lo debe á Ja viveza de bien, cuya esperanza nos habia atraído su ingenio, y á la prontitud de su ima mucho gozo, nos acarrea mucho pesar. ginación. Basta soltar alguna vez la rienda á la Un ignorante puede tener gracia, ó GRA ( 8 ) GUI disposición natural para divertir ó mo- dos voces; porque aquella puede con- ver la risa; pero no puede ser chistoso, servar en él su energía y extension pro porque para ello necesita agudeza y dis pia, representando una ilimitada exten creción. sion, y estas no pueden representar con El gracioso puede serlo en una socie propiedad sino un volumen determina dad de ignorantes, pero no el chistoso, do. Y así se dice: grandeza de ánimo, porque necesita que le entiendan. y no magnitud ni tamaño. (L. de la Huerta.) (L. de la Huerta.'} GRANDEZA, MAGNITUD, TAMALVO.— La GRAVE, SERIO.—Es uno grave por pru grandeza considerada físicamente, re dencia y por madurez de reflexion; se presenta al cuerpo con relación al ex rio por carácter y por temperamento. ceso de su volumen, respecto del regu La ligereza es opuesta á la gravedad; lar y común de otros cuerpos, y sin re el regocijarse es opuesto á lo serio. lación determinada á siu· -~ ^'iidas y pro La costumbre de tratar negocios nos porciones; la magnitud le representa da gravedad. Las reflexiones de una bajo una idea determinada, con relación moral severa nos hacen senos. á sus porporciones y medidas. (March.) Se admira la extraordinaria grandeza del sol, y se mide por medio de los ins GUARDAR, RETENER.—Se guarda lo que no se quiere dar: se retiene lo que no se trumentos astronómicos su verdadera quiere devolver. magnitud. Guardamos nuestros bienes: retenemos El tamaño representa también deter los de otros. minadamente el volumen, pero se usa El avaro guarda sus tesoros: el deu con mas propiedad cuando se trata de dor retiene el dinero á su acreedor. cuerpos mas pequeños, de los de nues Al hombre honrado le cuesta mucho tro uso, de los que manejamos, de los guardar lo que posee, cuando por otra que podemos medir fácilmente: y mag parte vemos á un bribón que parece es nitud cuando se trata de cuerpos muy tar autorizado para retener lo que ha to grandes ó inaccesibles. mado. Se calcula la magnitud de un planeta, {March.) se compra una caja de un tamaño pro porcionado. Ni el tamaño se aplicaría GUIAR, CONDUCIR.—Se guia mostrando, con propiedad al planeta, ni la magnitud enseñando el camino, yendo delante. á la caja. Se conduce dirigiendo. La grandeza es respectiva, la magni El postilion inteligente guia bien al tud y tamaño son absolutos; porque no correo que no sabe el camino. El buen es grande ni pequeño un cuerpo consi piloto conduce bien el navio al puerto. derado solo, sino respecto de otro: y Guiar hace relación directamente á esta comparación le constituye tal; pero los medios; conducir hace relación di todo cuerpo tiene por sí, independien rectamente al fin. Un traidor nos guia temente de toda comparación, las me por un rodeo, para conducirnos al para didas y proporciones que forman su mag je en donde está emboscado el enemigo. nitud y tamaño. Por esta razón en la acción de" guiar De aquí es, que la voz grandeza se puede no tener parte la voluntad del usa con mucha frecuencia y propiedad que guia; pero siempre la tiene la del en el sentido figurado, pero no las otras que conduce, en la acción de conducir, GUS ( 85 ) HAL Una estrella nos guia; un amigo nos tra alma los objetos pintados; pero si conduce. decimos que somos aficionados á la pin (L. de la Huerta.) tura, damos á entender que tenemos gusto en practicar ó estudiar este arte. GUSTAR, AGRADAR-—Solo se pueden usar —Una pieza de música puede no gustar uno por otro en un sentido figurado, á muchas personas, y embelesar al mis porque en su sentido recto, gusta lo que mo tiempo á un aficionado. satisface á los sentidos, lo que deleita (G. de la Cortina.) materialmente: agrada lo que deleita al ánimo, lo que satisface á la imagi H nación. HABILIDAD, DESTREZA.—El que sabe ha Gusta una bella figura, un manjar re cer una cosa bien, y con conocimiento galado. Agrada la virtud, la sencillez de lo que hace, tiene habilidad: el que de la aldea. la hace materialmente bien, y con faci \L. de la Huerta.) lidad, tiene destreza. Aquella se refie GUSTO, AFICIÓN.—El gustono es mas que re directamente al saber; ésta se refiere el placer que se siente en satisfacer directamente al ejecutar. nuestras inclinaciones, aun cuando sean Un artífice tiene habilidad, cuando pasajeras. sabe ejecutar bien la obra que le encar La afición es este mismo gusto, fun gan, y destreza en el manejo material de dado en el conocimiento de las cosas los instrumentos de su profesión. que nos lo inspiran. Un maestro tiene habilidad para en Por esta razón llamamos aficionado señar, cuando sabe el buen método, y al que profesa una facultad, una arte ó los medios que debe emplear para ello. una ciencia, solamente por gusto; ó al Una araña forma con destreza su tela. que aun cuando no profese ninguna de (X. de la Huerta.) estas, se halla en estado de juzgar so bre tal ó cual cosa por el estudio que HACER, EJECUTAR.—El primero de estos ha hecho, llevado de su gusto é incli dos verbos representa la acción de un nación. Así decimos—"Concierto de modo absoluto, sin relación directa á aficionados"—Tengo un gusto inespli- otra alguna; el segundo la representa cable en oir el voto de todos los aficio determinadamente con relación á otra nados. acción anterior, esto es, á la resolución, De aquí se deduce que el gusto será á la orden, á la yrimcfa, á la idea que bueno ó malo, según sean las inclinacio ha precedido á la ejecución; y así puede nes; pero nunca podrá calificarse á la hacerse una cosa inesperada, pero no se afición de buena ó mala sin faltar á la dirá propiamente que se ejecuta. propiedad, porque si una persona tiene Se hace una obra, un favor, una in mal gusto, deja de merecer el título de justicia; y en estos ejemplos presenta el aficionado. verbo el hecho en sí mismo, y no como La palabra aficionti&Q consigo la idea consecuencia del motivo ó razón que le de la ciencia, del arte, del estudio y de precede, como cuando se dice, que se la observación, al paso que la palabra ejecuta el proyecto, la sentencia, la de gusto no indica mas que la sensación que terminación. nos causa tal ó tal cosa. Si decimos (L. de ta Huerta.) que nos gusta la pintura, nos limitamos HALLAR, ENCONTRAR.—Hallar es encon á expresar el efecto que causan en nues- trar alguna cosa, ó porque se busca ó so- HEC ( 86 ) HON licita, ό por que la casualidad la ofrece; El hecho tiene una relación directa á pero habiendo dos voces para explicar la cosa ejecutada, representándonos el estas dos ideas diferentes, parece que efecto, la resulta, lo que queda ejecu convendría señalar á cada idea una voz tado por medio de la acción. que la distinga, mas bien que autorizar De aquí es, que las acciones son bue un uso que las confunde, tanto mas que, nas, malas, ó indiferentes, señalando la si se examinan con rigor, se percibe que voz directamente la intención del que la acción de encontrar no supone preci la ejecuta; y los hechos son ciertos, fal samente la de haber buscado lo que se sos ó dudosos, con relación directa á la encuentra; pero la acción de hallar supo esencia, ó calidad del hecho en sí mismo. ne la de haber buscado lo que se halla. Las acciones del hombre, que piensa Al pasar por la plaza he encontrado mal, descubren el carácter de su cora una procesión: á dos leguas de Madrid zón, por mas que las disimule el arte, ó encontré el parte. Nadie diria que halló las disfrace la afectación y la hipocresía. una procesión, ó el parte, à no quérir Un mal historiador suele alterar los dar á entender que los andaba ó iba bus hechos que refiere, cuando le acomoda, cando. A la verdad, si decimos, que el para divertir á sus lectores. que huye por un atajo desconocido, se (L. de la Huerta.) expone á encontrar al enemigo, no pue de dejarse de percibir mayor exactitud HEROICIDAD, HEROÍSMO.—Heroicidad es y propiedad en el uso del verbo encon una acción heroica: heroísmo es el ca trar, contra nuestra voluntad, al enemi rácter del héroe; así esta última voz no go de quien huimos, que en el uso del tiene plural. verbo hallar al enemigo que no bus Sacrificar las pasiones al deber es he camos. roicidad: para ello se necesita heroísmo. Se ofrece el hallazgo de una cosa per (Jonama.) dida que se busca. Hacerse encontra HONRA, HONOR.—El honor es indepen dizo, es hacer como que no se busca, diente de la opinion pública: la honra es, como que la casualidad lo ofrece. ó debe ser, el fruto del honor, esto es, (L.de la Huerta.) la estimación con que la opinion públi ca recompensa aquella virtud. HALLAR, ENCONTRAR.—Hallamos las co sas desconocidas ó las que buscarnos: Mostró el honor que tenia. Un hom encontramos las que están en nuestro ca bre de honor es la honra de su familia. mino ó que se nos presentan y que no Se hereda el honor, y no la honra; buscamos. esta se funda después, en las acciones Aun los mas desdichados hallan siem propias, y en el concepto ageno. pre algún recurso en su desgracia. Los Se honra, no se da honor. El favor que fácilmente se unen á toda clase de puede honrar, pero no restituir el honor gentes, están expuestas á encontrar ma al que una vez lo ha perdido. las compañías. (L, de la Huerta.) (March.) Por consiguiente, debemos mirar al HECHOS, ACCIONES.—La acción tiene una honor como causa, y á la honra como relación inmediata á la persona que la efecto; y debemos también mirar como ejecuta, representándonos la voluntad, galicismos insufribles é innecesarios en el movimiento, la parte que tiene en nuestra lengua las frases, "hágame vd. ella la persona. el honor"—"tengo el honor de"—"sen- HÖR ( 87 ) HUÍ sible al honor que vd. me dispensa"— HUECO, VACÍO.—Si hueco es lo cóncavo ó "el honor que me resulta," y otras ex vacío por adentro, como parece de su de presiones del mismo jaez, no menos im finición, habremos de considerar como propias que contrarias á la ideología. sinónimas estas tres voces; pero cónca• (G. déla Cortina.) vo y hueco de ningún modo parece que se pueden mirar como tales, porque la HORRENDO, HORRIBLE, HORROROSO.— Un objeto que horroriza, es la idea co primera de estas calidades es una cir mún á estas tres voces, que la represen cunstancia propia de la figura determi tan con relación á los efectos que pro nada del cuerpo, y la segunda es pura duce el horror en nuestra imaginación. mente una negación de su solidez, sea Lo horrendo nos horroriza, c orno atroz la figura la que se fuese. Y así un cuer y abominable: lo horrible, como repug po cuyas superficies interiores sean pla nante y desagradable: lo horroroso,como nas, podrá estar hueco sin ser cóncavo. espantoso y temible. Lo vacío parece distinguirse menos de la idea que representa la voz hueco. Es horrendo el crimen de un parrici Veamos cual puede ser la diferente pro da: es horrible la vista de un monstruo, piedad y extension de estas dos voces. la de un cadáver desfigurado: es horro Vacío supone una negación acciden roso el ^effismiOtwlo» de un naufragio, los tal de aquellas cosas que el cuerpo sue efectos de un incendio, la profundidad le ó puede contener, y no contiene ac espantosa de un abismo. (L. de la Huerta.) tualmente. Hueco supone una negación positiva, no precisamente de aquellas HORRIBLE, HORROROSO, HORRENDO.— cosas que puede contener el cuerpo dis Horrible es lo que por su deformidad tintas de la materia, ó materias de que debe causar horror: horroroso y horren se compone, sino de aquella parte del do, lo que realmente lo causa, con la di mismo cuerpo que falta en lo interior de ferencia que horroroso se aplica á lo fí él para constituirle sólido. sico, y horrendo á lo moral. Es hueca la bola de un campanario, Las máximas de Hobbes y Maquia- porque está construida de un modo que velo son horribles, porque deben horro- no tiene mas materia que la que basta rizar á todo hombre de bien, aunque no para formar su superficie esférica. Está sean horrendas para s\is sectarios. Una vacio un jarro cuando no tiene dentro tempestad, un precipicio, un desierto son licor alguno. cosas horrorosas: los delitos y las atro Hueco tiene relación al espacio; va cidades se llaman horrendas. cío prescinde del espacio, y solo hace Alimentarse con el sudor de los infe relación á lo que no contiene el cuerpo. lices es una cosa horrible; ver correr la Una vejiga hueca deja de serlo, si se la sangre de su semejante, es un espectá priva de su extension y capacidad, aplas culo horroroso; hacerla correr, es una tándola, comprimiéndola, retorciéndola acción horrenda. ó de otro modo; pero no deja de estar Este mismo creo que fuese el senti vacía de cualquier modo, y en cualquie do de las voces horribilis, horridus, hor ra figura ó disposición que se halle. rendas. Adviértase que los poetas usan (£·. de la Huerta.) la palabra hórrido en lugar de horroroso. Don José Lopez de la Huerta no con HUIR, ESCAPAR.—No siempre escapa el viene conmigo en el sentido de estas que huye. Huir solo explica la fuga: es tres voces.—(V. su artículo Horrendo.) capar añade á la idea de la fuga la del (Jonama.) logro de su objeto. 1LÜ ( 88 ) 1LV Si no se alcanza, ó se detiene al que ha sabido adquirir gloria con sus haza- huye, se escapa sin remedio. Al ir á ñas, colocándose en una esfera superior prenderle, se les huyó; le siguieron, pero ó realzando el lustre de la suya. Los al fin se les escapó. que quieren hablar latin en castellano (L.de la Huerta.) dicen claros varones en lugar de varo I nes esclarecidos; pero el uso común (que no es tan caprichoso como se cree) no IGNORANCIA, TONTERÍA, NECEDAD.—La permite aquella expresión sino á los que ignorancia es falta de cultura del enten confunden hembra con mujer, y trasla dimiento; la tontería falta de cultura de do con traducción. la razón; la necedad es ignorancia ó ton Insigne, que en su origen quiere de tería acompañada de presunción. cir señalado, indica con mas propiedad El ignorante yerra por falta de prin el estado de un hombre raro, por sus cipios adquiridos; el tonto por falta de grandes vicios ó por sus grandes virtu luces naturales; el necio por falta de lu des. Un hecho muy pequeño, pero ca ces ó principios, y sobra de amor propio. sualmente poco común, puede dar á un El amor propio oculta muchas veces hombre el carácter de insigne; y al con la ignorancia; descubre siempre la nece trario, no se lo darán las acciones mas dad; y no tiene influjo alguno en la ton ilustres, si son de las que estamos vien tería^ porque el ignorante puede saber do frecuentemente. que lo és; pero ni el tonto lo sabe, ni el necio lo cree. Célebre es aquel cuyos hechos son co El que ignora el lenguaje de los ne nocidos y relatados por la fama. El ilus cios, pasa por tonto entre los ignorantes. tre Cervantes, esclarecido por su insig~ {L. de la Huerta.) ne Quijote, no ha tenido celebridad has ta muchos años después de su muerte. ILUSTRADO, ILUSTRE.—El hombre puede Si tuviese que citar hombres ilustres, ilustrar ó su entendimiento, ó su perso los buscaría, por ejemplo, en las casas na. En el primer caso se llamará ilus soberanas de Europa. Si tuviese que trado, en el segundo ilustre. señalar los esclarecidos, no me olvida Cicerón fué un hombre ilustrado por ría de los Alejandros, Césares, Corte sus conocimientos: ilustre por sus obras. ses, Pizarros, Turenas y Bonapartes; ni Los entendimientos mas ilustrados se tampoco de los Virgilios, Racines, Loc- confundirán cuando léanlas ilustres proe kes y Neutones. Entre los insignes con zas de Napoleón. (Jonama.) taría los Diógenes, los Zenones, los Al- cibíades, los Viriatos, los Colones, las ILUSTRE, ESCLARECIDO, INSIGNE, CÉLE Zenobias, las Lucrecias y una infinidad BRE.—Estos cuatro epítetos convienen de romanos de todos tiempos. Todos los al hombre distinguido entre los demás que van citados son personas célebres; en fortuna, poder, talentos, &c, &c. pero debe notarse que la celebridad sue Ilustre pertenece especialmente al que le no estar en proporción con las demás está en una esfera mas elevada, y sobre cualidades: la fama es como la sombra, todo al que nació en ella. Es timbre que aumenta y disminuye los objetos que da la opinion, y que por consiguien según las distancias; por otra parte, no te se halla expuesto á todos sus ca toaos los hechos se llegan á saber, ni prichos. todas las circunstancias son iguales para Esclarecido conviene mejor al que que ellos hagan siempre la impresión IMP ( 89 ) IMP que debieran; por cuyas razones mu en todos tiempos el logro de las pruden chos hombres insignes, ilustres y escla tes ideas de los legisladores. recidos quedan sin la celebridad mere Un cuerpo opaco interpuesto entre cida. los ojos y el objeto, impide el verle; una (Jonama.) niebla no lo impide, pero estorba para verle bien. Los grillos no impiden el IMAGINAR, IMAGINARSE. — Imaginar es andar, pero estorban. formar alguna cosa en la mente; en al (L. de la Huerta.) gún modo es crear una idea, ser inven tor de ella. IMPOLÍTICO, GROSERO, RTJSTICO.—Es ma Imaginarse es representarse en la yor defecto ser grosero que simplemen mente alguna cosa, ó bien creerla ó per te impolítico, y lo es mas aun el ser suadirse de ella. 7-ÚstÍC0. Imaginar necesita tener un objeto por El impolítico es por falta de buenos complemento y que sea nombre; ima modos y á nadie agrada; el grosero por ginarse puede ir con nombre, con ver tener modos desagradables, y á todos es bo, &c. insoportable; el rústico los tiene cho El que imagino los primeros caracte cantes y nadie puede sufrirle. res del alfabeto, hizo un gran beneficio La impolítica es el defecto de gentes al género humano. de una mediana educación: la grosería Los espíritus inquietos se imaginan lo es de los que la han tenido mala, y comunmente las cosas muy diferente la rusticidad de los que no han tenido ninguna. mente de lo que ellas son. La mayor parte de los escritores po En el trato del mundo se sufre al im líticos se imaginan haber humillado á político, se huye del grosero, y no se quiere trato con el rústico. sus adversarios cuando les han dicho (March.) muchas injurias; mas se engañan en ello, pues lo que hacen es envilecerse. Se IMPORTUNO, IMPERTINENTE. — Trátase imagina uno que siempre habrá tiempo aquí del sentido recto de estas dos vo para pensar en la muerte, y así es que ces, y no del secundario, aunque mas se pasa la vida sin pensar en morir. común y conocido, en que ordinaria {March.) mente se usan, llamando importuno al molesto y enfadoso, por la instancia ó IMPEDIR, ESTORBAR.—Impedir supone un continuación con que pide alguna cosa; obstáculo directo. Estorbar supone, é impertinente al displicente ó desagra con mas propiedad, un obstáculo indi dable, por su mal humor, melancolía ú recto, y no pocas veces una mera difi otras causas. cultad ό embarazo. Lo que es fuera de tiempo, es impor El padre impide con su autoridad que tuno; lo que es fuera de propósito, es su hijo salga de casa. La compañía de impertinente. La disonancia que causa un amigo suele estorbar á veces que ha lo importuno, no consiste en la calidad gamos nuestra voluntad. de la cosa en sí misma, sino en la oca Muchas son las leyes que se han pro sión en que se emplea, en la falta de mulgado en todas partes para impedir oportunidad. La disonancia que causa los desafíos; pero la loca presunción lo impertinente está en la misma calidad del amor propio, á que damos impropia, de la cosa que no conviene, no pertene mente el nombre de honor, ha estorbado ce á lo que se dice ó se hace. 12 INC ( 90 ) IND Las chanzas no son de modo alguno pone. Aquella es puramente moral: ésta impertinentes en una comedia, pero pue es moral y física. En la inclinación tie den ser importunas. ne mucha parte la voluntad: no así en la El adjetivo inoportuno solo está au propension que es toda de la naturale torizado por el uso, y parece por su mis za, y por esta razón se dice, que debe ma formación mas conforme que impor mos corregir nuestras malas inclinacio tuno á este sentido. nes, y no nuestras malas propensiones. (£. de la Huerta.) —Un muchacho sale mal inclinado, y INADVERTENCIA, DESCUIDO.— La inad no mal propenso. Por el contrario, de vertencia puede ser un defecto discul cimos—soy muy propenso al llanto, al pable, causado por una tarda percepción temor, á la cólera.—Fulano es muy pro del ánimo, ó de una distracción involun penso á costiparse, á la tos, á la jaque taria. El descuido es siempre un defec ca. En estos ejemplos se nota inme to reprensible, causado por una negli diatamente que la voluntad no tiene par gencia indisculpable, ó una distracción te alguna. voluntaria. Aquella falta á la precau La inclinación supone cierto gus ción conveniente ·, éste falta á la obliga to, cierta preferencia, y por eso se em ción debida. plea esta palabra para denotar el primer Un general que se halla sorprendido grado de amor, ó como sinónimo de por falta de precauciones, no puede ex afecto. cusar su descuido con el título de inad (G.dela Cortina.) vertencia, porque en aquellas circuns INDOLENTE, DEJADO, PEREZOSO, NE tancias, no hay falta que sea disculpa GLIGENTE.—Es uno indolente por falta ble. de sensibilidad; dejado por falta de ar Los recíprocos cumplidos, que ha es dor; perezoso por falta de acción; negli tablecido el uso entre los amigos y fa gente por falta de cuidado. milias, producen á menudo disensiones Nada mueve al indolente; él vive y quejas, por las inadvertencias de los con tranquilidad y sin temor de las fuer amos, y los descuidos de los criados. tes pasiones. Es difieil animar al deja (L. de ία Huerta.) do: en cuanto hace va lentamente. En INCIERTO, DUDOSO.—Lo dudoso supone los perezosos es preferible el deseo de la en el ánimo indeciso razones, motivos, quietud y del reposo á las ventajas que ó antecedentes, que inclinándole igual proporciona el trabajo. La distracción mente á opiniones, ó acciones diversas, y descuido es la dote del negligente, suspenden su resolución. Lo incierto todo se le escapa y no se cuida de ser supone falta de aquellas mismas razo exacto. nes, motivos, ó antecedentes que cons La indolencia embota el gusto. La tituyen lo dudoso, la cual deja al ánimo dejadez teme la fatiga. La pereza huye sin facultad ó luz suficiente pava fijar su del trabajo. La negligencia ofrece dila resolución ó su persuasion. ciones y deja escapar la ocasión. Es dudoso el partido que se debe to Creo que el amor es entre todas las mar en una guerra civil. Es incierta la pasiones la mas á propósito para vencer hora de nuestra muerte. la indolencia. Paréceme que se ataca (L. de la Huerta,) con mas facilidad la dejadez con el te mor del mal, que con la esperanza del INCLINACIÓN, PROPENSION.—La inclina bien. La ambición ha sido siempre el ción nos arrastra: la propension nos ex- enemigo mortal de la pereza. Los inte- INF ( 91 ) INF reses personales y considerables no per respecto á la ignorancia y debilidad que miten ni dan lugar a la negligencia. la acompaña. (Mardi.) Decimos la infancia del mundo, la in fancia de la sociedad, porque conside INESPERADO, IMPREVISTO.— Inesperado, ramos aquella edad en sí misma, ó con supone conocimiento de la posibilidad de relación á sus buenas cualidades: un fi una cosa, que no se espera en una oca lósofo podrá decir que el mundo es to sión, ó circunstancia determinada. Im davía niño si medita sobre la pequenez previsto, supone ignorancia de la posibi lidad de la cosa. de los hombres, y la ignorancia de sus verdaderos intereses. La infancia del La muerte de un hético que se que hombre es la edad de las gracias, de la da hablando, puede ser inesperada, se gún las circunstancias, pero nunca pue inocencia y del candor: la niñez es la de ser imprevista. edad de la ignorancia, de la debilidad y de los males. Cuando acariciamos á un Un buen general prevé en la guerra niño le llamamos infantito: cuando que los lances que parecen mas remotos, y remos excusar sus faltas decimos que es está siempre dispuesto á las sorpresas todavía muy niño. que parecen menos posibles, porque es tos accidentes, aunque inesperados, nun Privar de la existencia á una criatura ca deben para él ser imprevistos. racional se llama infanticidio: el hombre (L. déla Huerta.) que por su inexperiencia ó poco espíri tu se deja gobernar por los demás, deci INFAMIA, IGNOMINIA.—La infamia y la mos que es un niño. Las acciones que ignominia son el efecto de la afrenta pú suponen pequenez de espíritu se llaman blica, con que queda difamado el que la niñadas: los objetos de aquellas accio recibe. nes se llaman niñerías. La distinción que me parece que se De lo dicho proviene que en un esti halla entre estas dos voces, es que la in lo algo elevado decimos infante en lu famia es la tacha misma que envilece: gar de niño; y el llamar infantes á los la ignominia es la humillación vergon hijos de príncipes creo que no tenga otro zosa que padece el que recibe la afrenta. origen. La infamia es siempre efecto de una (Jonama.) afrenta merecida, ó no reparada. La ig nominia puede ser efecto de una vio INFIEL, PÉRFIDO.—Una mujer infiel, si lencia injusta é irreparable. es conocida por tal por la persona in Fara un hombre vil no hay ignomi teresada, no es mas que infiel; si aque lla persona la tiene por fiel, entonces nia, porque para él no es vergonzosa la ya es pérfida. afrenta. Para un hombre de honor no hay in De esto se deduce, que la infidelidad famia, porque la ignominia á que le pue es simplemente la falta de fe, ó una me de conducir una suerte injusta, podrá ra infracción de las promesas hechas, y humillarle, pero no envilecerle. que la perfidia añade á eso el colorido (£. de la Huerta.) impostor ó falso de una constante fide lidad. INFANCIA, NIÑEZ.—Infancia es la prime La infidelidad puede ser tan solo una ra edad del hombre, y por extension la flaqueza; la perfidia un crimen medi primera edad de una cosa cualquiera. tado. Niñez es la infancia considerada con La infidelidad puede no ser mas que INF ( 92 ) 1NH una debilidad; la perfidia es un crimen engañarnos. Este adjetivo se aplica de reflexion. indistintamente en sentido recto y en {March.) figurado á las personas, á los animales y á las cosas, siempre que hay oculta INFIEL, PÉRFIDO, TRAIDOR, FALSO, DO ción de la verdad para engañar. "Este BLE.—El infiel falta á la fidelidad ó á hombre es falso como muía de alqui la fe: el pérfido oculta su infidelidad, y ler." "Es/a/so como moneda de plo aparenta ó finge fidelidad. mo." "Un amigo falso." "Unafirma La perfidia se aplica solamente á las falsa." "Una noticia falsa." personas: la infidelidad se aplica algu Doble,en su sentido recto, es lo que nas veces á los animales en sentido fi contiene ó vale dos veces la misma cosa gurado.—Por esto dice Buífon con mu sencilla, y este adjetivo aplicado á las cha propiedad y elegancia: "El gato es personas, parecería sinónimo perfecto un criado infiel, á quien mantenemos de falso, si el buen uso no hubiese esta por necesidad.''—Se elogia la nobleza blecido una diferencia notable entre am del caballo, y la fidelidad del perro·, bas palabras. Esta diferencia consiste pero cuando no tienen estas propieda en que el adjetivo doble se aplica única des, se dice que el caballo es traidor, y mente al corazón del hombre; esto es, el perro infiel. á sus intenciones, á su alma, al paso que Una esposa será infiel si falta á la fe falso indica no solamente los designios, prometida; mas si procura parecer fiel sino las acciones. Doble pertenece al no siéndolo, es pérfida. carácter, falso á la conducta. Así de El traidor falta á la fidelidad que pro cimos doblez de corazón.—Doble inten metió ó juró á su patria, á su príncipe, ción.—Doble objeto.—En todos estos á su amigo ó á los hombres en general. casos indica el adjetivo doble el fin, de Asi es que su falta influye mas en el signio, intención ó disposición del alma. orden social que la del infiel: es mas pú El hombre doble es acaso menos perju blica, y por decirlo así, pertenece mas dicial que el falso, porque aquel no hace al común de los demás hombres, y por mas que ocultar su segunda intención, lo mismo constituye uno de los delitos y este no solamente la oculta, sino que que castigan las leyes sociales en todo finge que no lo hace. Finalmente, pa pais civilizado. Hé aquí la razón por ra conocer bien la diferencia que hay que llamamos traidor á un hombre que entre estas dos palabras, basta atender nos ataca de improviso y con ventajas in al significado de sus contrarias: falso es debidas ó al que descubre nuestro secreto contrario de verdadero: doble es contra ó nuestros designios cuando se los he rio de sencillo. mos confiado, aunque ni uno ni otro nos La infidelidad puede ser efecto de de hayan hecho promesa ni juramento al bilidad ó de irreflexión; pero la.perfidia, guno; porque existen ciertas promesas la traición, la falsedad y el doblez, su y convenciones tácitas entre los hom ponen premeditación, estudio y apro bres, dictadas por la razón natural, y bación de medios. necesarias para la conservación del or (Cr, de to Cortina.) den social, que obligan á todos aunque carezcan ellas de las formas materiales. INHUMAR, ENTERRAR.— Enterrar es el Se dice que un hombre es falso, cuan acto material de poner ó meter entre do no obra conforme á la verdad y se tierra una cosa. Inhumar es enterrar esfuerza por parecer cual no es, para con las ceremonias religiosas, con los INS ( í ) INS honores fúnebres, los de la sepultura. Se po de alguna, aunque corta duración, entierra todo lo que se cubre en la tier no se puede substituir con igual exac ra; pero no se inhuma sino á la persona titud reposo instantáneo, porque este humana, á quien se hacen los honores adjetivo no presenta á la imaginación fúnebres. Los ministros de la religion la mas pequeña duración de tiempo pa inhuman á los fieles: un asesino entierra ra el reposo. el cadáver de uno á quien ha asesinado. Por el contrario, se puede aplicar con Se entierra en cualquiera parte; pero mas propiedad la voz instantáneo, á un solo se inhuma en lugares santos, en los tiempo en que suponemos que no se que están consagrados para este uso pia percibe duración alguna. doso. La caida del rayo es instantánea. (A, Cicnfuegos.) {L. de la Huerta.) INJURIA, ULTRAJE.—Injuria presenta la idea del agravio violento. Ultraje pre INSTRUCCION, ENSEÑANZA.—La instruc senta la idea del vilipendio público. ción se refiere á los conocimientos, que Desconfiar de la honradez de un hom se adquieren por cualquier medio, y en bre de bien, es una injuria; tratarle pú todo género de materias. La enseñanza blicamente de ladrón, es un ultraje. se refiere á los preceptos, reglas y lec Tratar de fea á una mujer hermosa, ciones, que da el maestro al discípulo. es un agravio, que, cuando mas, no de La instrucción se puede adquirir sin biera pasar de injuria; pero habrá po maestro, porque la lectura, el ejemplo, cas que no lo miren como ultraje. la conversación, nos instruyen-, pero la (L.dela Huerta.) enseñanza supone principios dictados, y lecciones dadas. INSTANTE, MOMENTO.—Una y otra voz Del que tiene diferentes conocimien significan el punto mínimo ó mas breve tos en una facultad, ciencia ó arte, se en que se divide el tiempo. dice que es un hombre instruido, no un Pero así como el punto es la parte hombre enseñado, porque se hace rela mas pequeña en que se divide el espa ción á lo que sabe, no á los medios con cio, y la consideran los geómetras como que lo ha aprendido. ideal, invisible é inconmensurable; y los Un sabio está muy instruido de todo físicos como una cuantidad efectiva y lo que le enseñaron en su juventud, y divisible, como lo es toda cuantidad fí- de los conocimientos que ha adquirido sicaj así parece que se puede concebir después por sí mismo. en el instante un punto ideal de tiempo (L. de la Huerta.) indivisible é inconmensurable, y en el momento una cuantidad efectiva de tiem INSTRUCCIÓN, ERUDICIÓN. — Para que po perceptible y divisible. pueda decirse que una persona tiene Prestar un momento de atención, ofre instrucción, basta que haya adquirido ce al oido una expresión mas exacta, un número considerable de ideas y las que prestar un instante, porque no pa tenga en la memoria. Mas para poder rece que se percibe en este la duración decir que tiene erudición, es necesario que, aunque corta, se percibe en el mo que nos conste que sabe bien lo que sa mento, como necesaria para dar algún be y que la inteligencia que tiene de las tiempo á la atención. ideas adquiridas, lo pone en estado de Un reposo momentáneo. A esta fra juzgar de las cosas y de hacer aplicacio se, con que damos idea de un tiem- nes útiles y oportunas. INS ( 94 ) INS El erudito es necesariamente instrui Con respecto á la beldad del sexo fe do: el hombre instruido puede no ser menino, no creo que haya insipidez sino erudito, por faltarle los medios de sacar en aquellos que son de un temperamen todo el partido posible de su instruc to del todo insensible; pero se dice una ción. beldad insulsa, cuando no está animada La erudición supone un gusto fino y y que no tiene ninguna de aquellas gra delicado, un talento no muy común, y cias, sean de vivacidad ó de languidez, un estudio constante y bien dirigido; al que excitan la vista del espectador. paso que la instrucción no necesita mas (March.) que una memoria feliz y cultivada. (G.dela Cortina.) INSURGENTE, REBELDE, FACCIOSO, AMO TINADO. —El insurgente hace una ac INSUFICIENCIA, INCAPACIDAD, INEPTI ción legítima ó legal: usa de su libertad TUD.—Se designa por estas palabras la ó de su derecho para oponerse á una falta de la disposición necesaria para resolución, ó levantarse contra un de salir con lo que uno se propone, pero signio ó empresa, como lo indica su con esta diferencia. mismo significado, pues se deriva de in- La insuficiencia viene del defecto de surgere, esto es, de surgere y de in, le proporción entre los medios y el fin; la vantarse contra. incapacidad de la privación de los me El rebelde abusa de su libertad ó de dios; la ineptitud de la imposibilidad de sus medios para oponerse á las leyes vi adquirir ningún medio. gentes, y desobedecer á la autoridad le Se puede muchas veces suplir la in gítima. suficiencia; á veces se puede enmendar El faccioso excita los ánimos á la re la incapacidad; pero la ineptitud no tie belión. ne remedio. El amotinado persiste con obstina Es una falta precisar á los jóvenes á ción en la desobediencia. ser eclesiásticos cuando se conoce su La insurrección supone la voluntad insuficiencia; es un crimen cuando se co general de una nación, ó de la mayor noce su incapacidad, y es un desprecio parte de sus individuos. sacrilego de la religion cuando se les La rebeldía casi siempre se funda en fuerza por la razón misma de la inepti intereses particulares. tud; sin embargo, no es raro ver esto. Cuando España se levantó contra la (March.) dominación de Napoleon Bonaparte se insurreccionó, y los españoles que se INSULSO, INSÍPIDO.—Lo que es insulso no opusieron á ella, fueron insurgentes; excita el paladar ó el gusto; pero lo in pero las turbulencias causadas en Cons- sípido no estimula absolutamente nada. tantinopla por los genízaros, fueron re Así el primero excede al último; á este beldía manifiesta, excitada por los fac no falta sino un grado de sazón, y á ciosos que fundaban en ellas su interés aquel le falta todo. particular. Todos los que tuvieron par En las obras del entendimiento están te en estos movimientos fueron repeldes, ambos distantes de lo bello; pero lo in y los que por mas tiempo y mayor obs sulso, queriendo aparentar y buscar las tinación permanecieron rebeldes fueron gracias, displace y choca; lo insípido pa amotinados. reciendo que ni siquiera conoce lo be Sin embargo, la palabra motin, indica llo, displace y desagrada. un número de personas mas corto, me- INT ( 95 ) INT nos considerable, y un movimiento me sas espirituales; interno tiene mas rela nos duradero que la insurrección. ción con las partes del cuerpo; intrínse• (G. de la Cortina,) co se aplica al valor ó á la calidad que resulta de la esencia de las cosas mis INTENCIÓN, DESIGNIO, MIRA, PROYECTO. mas, independientemente de la estima —La intención es un movimiento del al ción que de ellas hagan los hombres. ma, por el cual se propone el hombre La devoción debe ser interior; las en una cosa que está lejana y que tal vez fermedades internas son las mas peligro es incierta. sas. Las frecuentes variaciones en la El designio es una idea resuelta ya y moneda han enseñado á poner mas aten adoptada, y supone meditación y mé ción en su valor intrínseco. todo. (March. ) La mira indica un fin determinado y INTERNO, INTERIOR, ÍNTIMO.— Una de cierto, que no pasa mas allá de lo que las anomalías mas notables de la lengua se desea, ni supone grandes combina castellana, es la conservación de mu ciones. chos comparativos y superlativos pura El proyecto es el arreglo y combina mente latinos, cuyos positivos no se ción de los medios que deben emplear usan, y carece de ellos ó los suplen con se para lograr un fin.—Sus intenciones otros de diferente raiz. Así es, que de eran tan sanas, como vastos sus desig cimos menor y inínimo; ulterior y último; nios.—Puso sus miras en Fulana, aun superior y supremo; exterior y extremo; que el matrimonio no entraba en el nú inferior é ínfimo; y no hacemos uso al mero de sus proyectos.—Este proyecto guno de sus positivos propios, á diferen supone intenciones muy puras, designios cia de mejor y óptimo; peor y pésimo; ma muy vastos y miras muy dilatadas. yor y máximo, cuyos positivos bueno, (G, de la Cortina.} malo y magno son los mismos que con servan en latin. De aquí debemos de INTERIOR, INTERNO.—La idea que ofrece ducir que interior é íntimo, son dos gra la voz interior, es mas extensa, porque dos de comparación, y que ésta deter representa lo que esta de la parte de mina claramente la diferencia de su sig adentro, sin restricción alguna, como lo nificado. interior de la casa, las partes interiores del cuerpo humano. La voz interno mo Interno es lo que está profundamente difica la idea, y no se puede usar con oculto dentro de una cosa, y cuando nos toda aquella extension: y así no se dice servimos de este adjetivo, prescindimos con propiedad: las obras internas de un de la posibilidad que puede tener lo in navio: los adornos internos de un pala terno de no serlo, ó de ser externo. Por cio: la parte interna de una caja. Este esta razón se emplea con mas frecuen adjetivo parece reservado para repre cia en sentido figurado, y nos valemos sentar con mas precision, lo que esta de tanto de interno como de externo para la parte de adentro, y solo percibimos indicar lo que está dentro ó fuera de una por sus efectos, ó en nuestra imagina cosa, porque conviene así en cierto ción, como dolor interno, inflamación in modo á la esencia de la misma cosa. Así terna, persuasion interna. decimos, en este colegio hay discípulos internos y externos. (L. de la Huerta.) Lo interior está oculto por lo exterior; INTERIOR, INTERNO, INTRÍNSECO—Inte esto es, llamamos interior á lo que se rior se dice particularmente de las co- oculta á nuestra vista, porque la super. IRA ( 96 ) JOV ficie de la cosa que lo contiene nos im La venganza premeditada puede ser pide verlo. Por esta razón decimos— efecto de la ira. La cólera no sufre di vida interior; habitación interior; el in lación en la venganza. terior de un reino, &c, y en ninguno de Un insulto grave puede excitar en un estos casos usamos el adjetivo interno. genio tranquilo un momento pasajero (G. de la Cortina.) de cólera; pero no un momento pasaje ro de ira, porque esta no es momentá INVECTIVA, SÁTIRA.—Una y otra de es nea ni pasajera. tas voces significa un discurso dirigido (L. de la Huerta.) á poner en público los defectos de una obra, de una persona, de una nación. IRRESOLUTO, INDECISO.—Estaremos irre Solo se diferencian en los medios de que solutos en las materias en que nos deter se valen. minemos por gusto, por opinion; inde La invectiva declama: la sátira ridicu cisos en aquellas en que decidamos por liza. Las invectivas atroces se llaman razón, y después de una discusión. imprecaciones ó maldiciones: la sátira Estoy indeciso si debo aceptar ó no mordaz se llama sarcasmo. la herencia; irresoluto, aceptándola, á (Jonamu.) cuál de los dos abogados conocidos míos confiaré la causa. El irresoluto no pue IR, IRSE.—Estos dos verbos no pueden de vencer su indiferencia; el indeciso no usarse indistintamente, porque irse tie se atreve á juzgar. ne la fuerza de ausentarse, sin relación El irresoluto, titubea sobre lo que al paraje á que se va, sino solo al que hará; el indeciso sobre lo que debe hacer. se deja; é ir, por el contrario, no hace re A veces está uno decidido sobre la lación al que se deja, sino á aquel adon bondad de un partido, sin estar resuelto de se va. á seguirle; y suele uno estar resuelto á Ha resuelto irse de Madrid: puede no seguir un partido sin decidirse acerca saber' adonde irá, ó qué camino elegirá; de su bondad. y no se dirá en este caso: ha resuelto ir El término indeciso, puede aplicarse de Madrid, sin determinar precisamen á las cosas: como pleito indeciso, sen te el paraje adonde va, ó destino que tencia indecisa; el de irresoluto, solamen lleva. Y así cuando digo: me voy, for te conviene á las personas. mo una frase completa, porque como el {March.) verbo por sí solo hace relación deter J minadamente al paraje en que me hallo, explico completamente que le dejo, que JOVEN, MOZO.—La voz joven explica la me ausento; pero no la hago igualmen idea absolutamente; la voz mozo la ex te completa, si digo solamente: yo voy, plica comparativamente, porque laj». pues falta saber adonde. ventud es la edad del hombre entre la niñez y la edad varonil, como desde los (L. de la Huerta.) catorce hasta los veinte y un años; y la IRA, CÓLERA.—La ira exaltada es cólera. mocedad es el tiempo en que el hombre Esta es la manifestación, el movimien conserva aquel vigor, parecer, ó dispo to que excita la ira. sición que son propios de la juventud, y Se conserva la ira, se exhala la cole, pueden durar mas ó menos tiempo. ra. Aquella es una pasión que puede Un hombre de treinta años no es ya ocultarse en el corazón; ésta es un hu joven, según la rigurosa propiedad de la mor alterado que es difícil contener. voz, pero es mozo todavía. JUS ( 97 ) JUS Por eso se dice con relación á aque plimiento no se le puede obligar con Ia lla disposición física, que caracteriza el autoridad legal; pero que le impone la estado de mozo: es un buen mozo, por honradez, la conciencia, ú otras consi que un buen joven no aludiría á la dis deraciones poderosas. posición física, sino á las buenas pren Los arbitros juzgan muchas veces, das y calidades morales de un hombre, mas bien por una prudente equidad, que que se halla determinadamente en la por el rigor de la justicia. edad juvenil. En la escuela militar de ha justicia exige que paguemos á artillería solo se admiten jóvenes, esto nuestros acreedores, y la equidad, que es: con relación á la edad determinada socorramos á los menesterosos. que allí se requiere. (£, de la Huerta.) Por la misma razón, y con alusión á la idea que aplicamos á la voz mozo, lla JUSTO, EQXUTATIVO.—Estos términos de mamos así vulgarmente al ganapán, aun signan en general la naturaleza de nues que sea viejo, al criado que se ocupa en tros deberes acia los demás. Lo que dis los oficios que suponen, ó requieren la tingue el sentido de estas palabras es la agilidad y disposición, que naturalmen idea del fundamento en que estriban es te acompañan, y son propias de la juven tos deberes. tud. Y en muchas partes se da el nom Lo que es justo se hace en virtud de bre de mozo á todo hombre soltero. un derecho perfecto y rigoroso; su eje (L, de la Huerta.) cución puede exigirse por la fuerza si no se satisface voluntariamente. Lo que JUSTICIA, EQUIDAD.—ha justicia, consi es equitativo no se hace sino en virtud derada como sinónima de equidad, es de un derecho imperfecto y no rigoro una obligación á que se ha sometido el so: su ejecución no puede exigirse, sino hombre reducido á sociedad, y que, por que penda del honor y de la conciencia consiguiente, se debe arreglar por la ley de cada uno. positiva. La equidad es una obligación fundada en los principios de la ley na El contrato de alquiler da al propie tural, que no está sujeta á leyes huma tario el derecho de exigir del inquilino, nas, antes bien estas, para ser justas, aun por fuerza, el alquiler ó paga de la deben arreglarse á ellas. Y así, la. jus casa; es pues justo pagarlo, y es una in ticia impone determinadamente la obli justicia eludir ó rehusar su pago. El gación de dar á cada uno su derecho, de pobre no tiene sino un derecho imper la cual no se puede separar, ni el juez fecto á la limosna que pide, y no puede que la administra, ni el individuo res exigirla de justicia; pero el principio de pecto de su igual, sin exponerse á que la igualdad natural la constituye un de una autoridad superior les obligue por ber para la conciencia del hombre rico; fuerza á su observancia; pero la equidad es pues equitativo cumplir con esta obli modifica aquella misma idea, represen gación, y el dispensarse de ella cuando tándola, respecto del juez, con relación se puede cumplirla, si no es una injusti á aquella moderación prudente, con que cia es al menos una iniquidad. sin faltar á la justicia, regula, en caso Las leyes positivas son las que esta necesario, el derecho dudoso, las cir blecen el derecho rigoroso; los princi cunstancias, las recíprocas convenien pios de la ley natural son los que esta cias, &c; y respecto del individuo, con blecen el derecho menos rigoroso con relación á una obligación, á cuyo cum- forme á la igualdad natural, y los que 13 LAS ( Ε ) LEN por consiguiente determinan lo que es to que causa en el ánimo la reflexion equitativo o inicuo. del mal: porque aquella no explica por La justicia está, pues, fundada en la sí sola mas que la sensación de la pena, ley; pero la ley misma, para someter las ó el disgusto que causa el mal ageno; voluntades á la obediencia, y para no pero la compasión añade á esta idea la ser tiránica, debe estar fundada en la de una cierta inclinación del ánimo acia equidad, cuyas sanas máximas son eter la persona desgraciada, cuyo mal se de nas, y deben ser el tipo de todas las searía evitar. leyes. No nos mueve á compasión la suerte Los arbitros juzgan ordinariamente de un asesino condenado á muerte; pero mas bien por las reglas de la equidad nos da lástima el verle padecer en el su que por el rigor de la justicia; pueden plicio. hacerlo así, porque las partes son libres Nos da lastima el ver morir á un irra en instaurar demanda ante los tribuna cional; nos da compasión el triste estado les, si no quieren conformarse con la de una pobre viuda. decision de los arbitros; y deben hacer La compasión supone siempre un sen lo así, porque ejercen un ministerio de timiento verdadero. La lástima se em conciliación y de paz, que siempre su plea algunas veces para representar un pone medios razonables. sentimiento tan ligero, que apenas me Los jueces subalternos ó inferiores, rece el nombre de tal; como: Es lástima son unos jueces de rigor que no deben que no haga buen tiempo. Y en este desviarse en nada de la justicia, porque sentido se emplea aquel: Pero es lásti no son mas que los ministros de la ley. ma, con que después de un elogio, se Los jueces de los tribunales supremos da á la murmuración un aire de inge deben juzgar según equidad cuando la nuidad. ley, por cualquiera razón que sea, está (L. déla Huerta,) en contradicción con sus máximas; pues LEALTAD, FIDELIDAD.— La observancia la parte de autoridad que les está con de lafe debida á un soberano, es la idea fiada por el legislador los hace á la vez que se considera aquí como común á es ministros é intérpretes de la ley. tas dos voces; pero la fidelidad no ex (March,) plica por sí sola, mas que la exactitud L con que se cumple la obligación contraí da, con que se observa la fe debida al LARGO, DIFUSO.—Largo recae sobre la soberano; la lealtad añade á esta idea duración; difuso sobre el modo. la del afecto personal con que se cum Es largo el sermon que dura mucho; ple aquella obligación. es difuso, cuando el predicador trata con Por eso no se dice: juramento de leal demasiada prolijidad la materia, el pun tad, sino juramento de fidelidad. to ó puntos de que se compone. Un republicano puede tener fidelidad; El opuesto de largo es corto; el de un español tiene mas, tiene lealtad. difuso es conciso. {L. de la Huerta-) (L. de la Huerta.) LENGUAJE, ESTILO.—Cuando queremos LÁSTIMA, COMPASIÓN. —La lástima se expresar un pensamiento que existe en aplica con mas propiedad á la sensación nuestra mente, lo vamos analizando, y que nos causa el mal que se ofrece á resolviendo en todos sus accesorios ó nuestros sentidos; y la compasión al efec- ideas parciales por medio de los signos LEN ( 99 ) LEN de un idioma; por consiguiente sin que puede variar al infinito, pues compren el pensamiento deje de ser uno mismo de las combinaciones de todos los soni pueden variar los accesorios según nues dos apreciables, ya cuando se suceden tro modo de considerarlo. formando lo que llamamos canto ó me Salido se quejaba de los rigores de su lodía, ya cuando reunidos forman la ar amada: esta es una proposición sencilla monía. que se puede considerar bajo diferentes Aplicando esto á los sonidos articu aspectos. Si atiendo á la razón de la lados, llamamos lenguaje á la elección queja, diré por ejemplo: el incauto Sa y colocación de las palabras según las lido, que ήη haber reflexionado jamas so reglas de la gramática; y estilo á la elec bre sí mismo, se había, dejado arrastrar ción de las expresiones, al mayor ó me de su pasión, se quejaba injustamente de nor número de accesorios, ó á lo corto Galatea, porque siguiendo como él los ó largo de los periodos, al orden direc impulsos de su corazón, le miraba con in to ó inverso, á las figuras, tropos, &c. diferencia. Garcilaso queriendo lison Por esto decimos del estilo, que es jear la imaginación, y enternecer el co conciso ó difuso, llano ό florido, bajo ó razón con los lamentos de Ssxlicio, deja sublime: cosas que, hablando con rigu á un lado todas las reflexiones, y se de rosa propiedad, no se pueden decir del tiene en pintar los pormenores de su si lenguaje; y si alguna vez las decimos, tuación en estos versos: es tomando aquella voz en su acepción Saliendo de las ondas encendido, mas general, que igualmente compren Rayaba de los montes el altura de el estilo. El sol, cuando Salicio, recostado Los defectos del lenguaje son los so Al pié de una alta haya, en la verdura, lecismos, los barbarismos, y la dureza Por donde una agua clara con sonido de la pronunciación: los defectos del es Atravesaba el fresco y verde prado; tilo son la hinchazón, la frialdad, la in Él, con canto acordado conexión de ideas, la mala aplicación Al rumor que sonaba de las figuras, la afectación y otros mu Del agua que pasaba, chos. Se quejaba tan dulce y blandamente, El lenguaje de Solís es excelente, el Como si no estuviese de alh' ausente estilo de Cervantes inimitable. Por no La que de su dolor culpa tenia. distinguir como conviene estas dos es pecies, se han equivocado los que ha Aunque rigurosamente no hay nada blando de la acepción de las voces, han en estos versos que no pueda atribuirse dicho que un escritor de una materia no al lenguaje, considerado como instru podía servir de norma á los escritores mento de nuestras ideas; sin embargo de otras: el lenguaje propiamente dicho, conviene distinguir la elección de los esto es, la acepción de las voces y su accesorios, de la material aplicación de enlace gramatical debe ser el mismo en los signos. A lo primero se le llama estilo todos los estilos. del lenguaje, ó simplemente estilo; á lo (Jonama.) segundo se le conserva su nombre ge nérico de lenguaje. LENGUAJE, IDIOMA, HABLA, LENGUA.— El lenguaje de la música es la colo Lenguaje es un conjunto de signos de cación de las claves, notas, accidentes, nuestras ideas: idioma es un sistema de &c, y solo es susceptible de mayor ó estos mismos signos, de modo que una menor sencillez: el estilo de la música parte del idioma ó un cierto número de LEN ( 100 ) LEN signos bastan para formar lenguaje; pero mos con gestos ó notas; al oído si las para ser idioma se necesita no solo que expresamos con sonidos. Hay varias estén todos los signos, sino que por su especies de idioma, y por consiguiente analogía formen un cuerpo ó sistema de lenguaje, tales son el de acción ó el mas ó menos regular. de los gestos arbitrarios, el de los soni El lenguaje es propiamente el instru dos musicales, el de la aritmética, el de mento con que comunicamos nuestras los sonidos articulados y otros varios. ideas: el idioma es el arte que nos guia. Algunas de estas especies tienen un Las buenas cualidades del lenguaje son nombre particular. El idioma y el len la pureza, la propiedad y la elegancia; guaje de la música, por ejemplo, se llamar« la del idioma son la exactitud, la preci solfa; los de la aritmética se llaman nu sion, la riqueza, y también la elegancia. meración. La exactitud y la precision pueden tam Asimismo el lenguaje de los sonidos bién en algún modo pertenecer al len articulados se llama habla, y el idioma guaje; pero la riqueza pertenece exclu de los mismos sonidos se llama lengua; sivamente al idioma, así como la pureza de modo que entre estas dos últimas vo y propiedad no pueden pertenecer sino ces hay la misma diferencia que entre al lenguaje. idioma y lenguaje: esto es, el habla es Esto se entenderá mejor definiendo un conjunto de voces, que representa cada una de estas voces. La exactitud uno ó muchos pensamientos; la lengua consiste no solo en que cada idea tenga es el sistema mas ó menos regular de su signo distinto, sino en que estos guar estas mismas voces. den entre si la misma conexión que las La perfección del habla por consi ideas. La precision consiste en que guiente consistirá en que sea pura, pro no haya mas ni menos signos que los pia y elegante: la perfección de la len necesarios, y que estos sean los mas gua, en que sea no solo elegante, sino sencillos. La riqueza consiste en la también rica, precisa y exacta. abundancia de signos, y por consiguien Habla es la voz propia y específica te de ideas: esta se ve que no puede del lenguaje de los sonidos articulados, pertenecer al lenguaje que no es sino la ó de lo que se llama lenguaje hablado; práctica del idioma; pues la ejecución así como lengua lo es del idioma de los de una cosa no es buena ni mala por mismos sonidos. Sin embargo, es pre ser larga ni corta, sino por estar hecha ciso notar que aquella voz no suele según reglas. usarse en toda la extension de su signi La pureza del lenguaje consiste en ficado; y así no decimos el habla de So- que todos los signos y el orden de ellos lis, sino el lenguaje de Solís. Esto pro pertenezcan al idioma en que se ha viene de dos cosas: primera: de todos bla (*). La propiedad es la buena aplica los lenguajes el habla es el de mayor ción de ellos á las ideas que se quieren uso; es, digámoslo así, el lenguaje por expresar. La elegancia común al idio- excelencia, y por esto le conservamos may al lenguaje consiste en que las ideas su nombre genérico: segunda: la voz estén expresadas, ó puedan expresarse habla es equívoca, pues significa tam de un modo agradable á los sentidos, bién la potencia ó facultad de hablar: por ejemplo: á la vista si las expresa- por consiguiente sirviéndonos de la idea (*} Aquí se toma el verbo hablar en el sentido mas ex general lenguaje, prevenimos la ambi tenso de expresar cualquiera cosa por medio de signos; por güedad que resultaría muchas veces de consiguiente no solo entiendo por hablar el comunicarse con gestos, sino también el escribir, el contar, &c. tomar la idea mas individual habla. LEY ( 1 ) LIB De aquí resulta una regla general, y les está tan generalmente conocida por es, que se debe preferir esta última voz las relaciones morales que hay entre los como mas propia, siempre que se pue seres libres é inteligentes, que no se pue da sin obscuridad ni doble sentido. de apropiar sin ambigüedad á las rela Algunos ejemplos ilustrarán todo lo ciones físicas que tienen los cuerpos entre dicho hasta aquí. Se aprenden los idio sí; en tal caso debe decirse leyes de la mas y las lenguas: se observan y anali naturaleza. zan los lenguajes, y por consiguiente el No solo la claridad pide esta distin habla: unos y otros se entienden. Se ción, sino que la creo fundada. Efec dice el idioma de la razón, y no pode tivamente, las leyes de la naturaleza de mos decir el lenguaje ni la lengua de la ben ser aquellas con que se gobierna razón. Al contrario, se dice el lengua ella misma, y no las que únicamente ha je, no el idioma, de los libertinos ó de dictado á unos seres que pueden des los hipócritas. Aunque se puede decir obedecerlas. Estas son mas bien leyes idioma francés, castellano &c, se dice de los hombres, leyes de los animales, mas comunmente lengua francesa, len &c, y únicamente se llaman naturales gua castellana. para indicar que no son obra de ellos. De aquí podemos deducir otra regla, Por esta razón el epíteto de estas no y es, que en estas expresiones no debe distingue suficientemente las demás. mos usar la voz general idioma sino pa (Jonama.) ra evitar el equívoco que resultaría al gunas veces de la voz lengua que signi LIBERALIDAD, GENEROSIDAD.—La libe fica también el instrumento material de ralidad consiste en el desinterés con la articulación: en todos los casos en que da el que puede dar; la generosidad que esté salvada la equivocación, debe en la nobleza con que da el que puede, mos preferir esta última voz como mas y con que daría el que no puede. propia. Deja de ser liberal el que no tiene En la suposición de que la lengua cas con que serlo, pero el generoso lo es tellana sea mas perfecta que la france siempre, aunque tenga que dar poco, sa, y que las tragedias de Racine estén porque la generosidad no consiste en el mejor escritas que la Raquel, diremos hecho, sino en la noble disposición de que el autor de esta última escribió en la voluntad. mejor lengua; pero que el lenguaje del Un pobre puede ser generoso, dando otro es superior. lo poco que tiene, pero no liberal, por En honor de la verdad permítaseme que le faltan los medios para serlo. una observación algo arriesgada: me pa Está muy lejos de ser generoso el que rece que Condillac debió decir idioma ó es liberal por ostentación. lenguaje, y no lengua de los cálculos; á (L. de la Huerta.) lo menos en castellano creo que es im propio el título de aquella obra. No LIBERTINO, VICIOSO.—El libertino se en podemos decir la lengua ni el habla de trega con libertad á los placeres de los la música, del álgebra &c; pues estas sentidos: peca propiamente contra las voces pertenecen exclusivamente á los buenas costumbres, y la pasión que le sonidos articulados. domina le hace despreciar las leyes de (Jonama.) la decencia sin temor de la publicidad. LEYES NATURALES, LEYES DE LA NATU El vicioso puede no tener mas que un RALEZA.—Esta expresión leyes natura- solo vicio, y ocultarlo toda su vida, ó LIG ( 102 ) LIS por mucho tiempo. Por consiguiente una particularidad, y la frase adverbial es menos malo que el libertino. una singularidad. El primero atribuye (β. de la Cortina.) la ligereza; la otra un carácter, un aire, una forma de ligereza notable y distin LIBRERÍA, BIBLIOTECA.—Parece que am tiva. Soldados armados ligeramente tie bas voces convienen en representar una nen armas y vestidos que no los car porción de libros reunidos en un mismo gan. Soldados armados ά la ligera tie lugar; pero con diferentes relaciones. nen una armadura particular que los Librería expresa esta idea con rela distingue. ción á un fin cualquiera: biblioteca la (A, Cicnfuegos.) expresa con relación á la instrucción: aquella solo considera los tomos: ésta tGEREZA, VELOCIDAD.—Ligereza en su mira particularmente á los tratados. sentido recto no tiene relación alguna Muchos ejemplares de una misma con el movimiento; sin embargo se apli obra ó muchos tomos en blanco, pue ca figuradamente á la presteza de un den formar por sí solos una librería, pe cuerpo ligero. ro no una biblioteca, que pide variedad En este caso es rigurosamente sinó de materias y cierto orden. nima de velocidad. (Jonama.) Una buena librería es la que vale mucho dinero: una buena biblioteca la IMAR, PULIR.—Limar es quitar con la que contiene obras escogidas, manus lima las partes superficiales de un cuer critos y otras preciosidades: por esto po duro. Pulir es poner por la frota una tienda de libros no se puede llamar ción liso un cuerpo, hacerle lustroso y una biblioteca. agradable á la vista. Limar es quitar {Jonama.) las asperezas, las escabrosidades. Pu lir añade á este efecto el de dar finura, LÍCITO, PERMITIDO.—Diremos que es li lustre, el primor que exige la perfección. cito todo aquello que ninguna ley ha Sin el pulido se ven en la obra los gol declarado ser malo; permitido, lo que pes de la lima; pero con él desaparece el ninguna ley expresa ha autorizado. Así trabajo de limar. pues, el comer carne es lícito en sí; (A. Cienfuegos.) mas habiéndolo prohibido la Iglesia en ciertos dias del año, no es permitido sino LISONJERO, ADULADOR.—Unoy otro pro á aquellos que están dispensados por curan agradar á costa de la verdad; pe justos motivos. ro se lisonjea á las personas por parte Lo lícito es indiferente en sí mismo, del corazón: se les adula por parte del mientras que la ley nada pronuncia en entendimiento ó del talento. contra. Lo permitido supone que era El lisonjero nada desaprueba, justifi malo ó prohibido por alguna ley, y dejó ca lo que es vituperable, y aun intenta de serlo en virtud de otra. erigir el vicio en virtud. El adulador (March.) lo alaba todo; hace la apología de lo malo, y aun se atreve á dar aplausos á LIGERAMENTE, Á LA LIGERA.—Ligera- lo ridículo. mente enuncia una simple modificación La lisonja es muy propia para alimen del modo con que las cosas son ó deben tar las pasiones; la adulación satisface ser. A la ligera designa una costumbre la vanidad; la una es el talento del cor diferente de la que tienen las cosas en tesano vulgar; la otra constituye el ca el estado natural. El adverbio denota rácter del pedantuelo asalariado. LOG ( 103 ) LUG No es ser lisonjero el manejar la ver deseo. La consecución es el efecto tie dad con cierta prudencia, ó de un modo la industria y la paciencia; el logro es que no desagrade á aquellos á quienes el término del deseo. chocaría si se la presentasen desnuda. (L. de la Huerta.) Jamas adulador alguno supo el arte de LUEGO, DESPUÉS.—Uno y otro adverbio alabar; únicamente conoce el de vender explican la posterioridad de tiempo; alabanzas. pero luego señala un tiempo mas corto, (March.) un término mas inmediato, conservando LOGRAR, CONSEGUIR, ALCANZAR.— Lo la propiedad de su sentido recto, que grar es propiamente el término de nues corresponde á prontamente y sin dila tro deseo, sin relación á los medios em ción. pleados para ello. Conseguir es el tér Pasearemos ahora, cenaremos luego, mino de nuestra solicitud, el fin á que y nos iremos despites. se dirigen los medios, con relación á ello. Leeremos la gaceta luego que trai Alcanzar es el termino de nuestro rue gan luces, esto es, inmediatamente que go. Lograr y conseguir pueden supo las traigan; solo esperamos que traigan ner justicia; alcanzar supone siempre luces para ponernos á leerla. gracia. Leeremos la gaceta despues que trai Logra una gran fortuna el que puede gan luces, esto es, cuando tengamos lu vivir sin pleitos ni pretensiones. Con ces, sin denotar positivamente que ha sigue un buen empleo el que lo solicita de ser inmediatamente, luego que las con mérito y protección. Alcanza el traigan. perdón el que interpone los ruegos hu Por eso, cuando la posterioridad recae mildes, y pide misericordia. sobre una acción que decididamente su En la diferencia de este último verbo pone dilación ó retardo, solo se puede respecto de ios dos primeros, no cabe usar el adverbio despues, y no luego. Al duda, porque es claro que, solo se pue fin lo erró, después de haberlo pensado de decir que se alcanza lo que se debe tanto tiempo. Despues que todo el mun á la libre voluntad de otro, y así nadie do lo ha visto, ya no tiene gracia el pu dirá que ha alcanzado ganar un pleito, blicarlo. (£. de la Huerta.) que ha alcanzado limpiar de mala yer ba sus heredades. Para distinguirlas LUGAR, SITIO, PARAJE.—Por lugar se en ideas que representan los dos primeros, tiende la parte del espacio que está ocu basta buscar un ejemplo, en que la ac pado por un cuerpo cualquiera. ción que se quiere explicar por medio Lo mismo podemos decir de la pala del verbo, no tenga relación directa á bra sitio, por cuya razón es muchas ve la solicitud, sino puramente al deseo; y ces sinónimo perfecto de lugar, pues se hallará la mayor propiedad y exac ambas palabras indican un punto deter titud que en tal caso tiene el verbo lo minado; pero el buen uso ha estableci grar. Logra la satisfacción de ver que do entçe ellas una diferencia muy no sus hijos le respetan. Logra el gusto table, y es, que cuando nos servimos de de saber que es amado de todos. la palabra lugar, prescindimos de la Las dos ideas diferentes que respec quietμd ó del movimiento, al paso que tivamente explican los dos verbos, se la palabra sitio lleva consigo la idea de descubren con bastante claridad en esta la quietud, del reposo y de la estabili oración: A fuerza de industria y de pa dad: por esto se da el nombre de sitio ciencia, al fin conseguí ver logrado mi á la casa de campo ó de recreación de LUG < 1 ) LLE un rey ó de un magnate, y así decimos Aun en sentido metafórico la pala —el sitio de Aranjuez—el sitio de la bra lugar es la única que se usa, por Granja: igualmente se emplea esta pa que como hemos dicho, es la que mas labra para denotar un espacio determi limita ó circunscribe la idea que quie nado de terreno, propio para alguna re expresarse, y por esta razón decimos cosa, v. g.,—este sitio es á propósito —"en primer lugar" "poner una cosa para sembrar trigo. Al cerco que se le en lugar de otra"—'"dar lugar"—como pone á una plaza ó fortaleza, se le mejor haya lugar"—"lo dice Cicerón llama sitio, cuya palabra da la idea de la en el lugar citado, &c. permanencia fija de los sitiadores en el (G. de la Cortina.) terreno que ocupan. En ninguno de estos casos son sinónimas las palabras LUJURIA, LUBRICIDAD, LASCIVIA.— La sitio y lugar. lujuria es un hábito ó inclinación crimi El paraje es mas indeterminado, com nal, que conduce á los sexos uno acia prende una idea mas extensa, y por lo otro con arrebato y sin consideración. mismo pocas veces es sinónimo de lu La lubricidad es una influencia sensi gar y de sitio. Comunmente se usa para ble de esta inclinación sobre los movi denotar un. espacio indeterminado de la mientos indeliberados, sobre la compos tierra ó del mar, y excluye toda idea tura ó continente de uno, sobre el ges de particularidades ó pormenores, co to, &c. mo demuestra claramente este ejemplo. La lascivia es la manifestación exte "Perdido ya el camino, discurrí por rior de esta inclinación, por actos estu aquellos parajes, sin esperanza de po diados y premeditados. der hallar un sitio (ó un lugar) en don Los célibes lujuriosos, son el azote de conceder á mi cuerpo algún repo mas peligroso para la sociedad, pues á so." veces alteran su físico y moral. Huya La palabra lugar es la que determi se, como del escollo mas terrible de la na mas la idea y la representa, por de castidad, de la compañía de las perso cirlo así, en un ámbito mas pequeño, nas que tienen el rostro y los ojos lú v. g., á un libro que está sobre una mesa bricos y que gustan decir cosas lascivas. se le puede mudar de lugar en la mis (March.) ma mesa, y en este caso no diremos que LL se le muda de sitio ni de paraje. Una persona puede mudar de lugar ó de sitio LLEGAR, ALCANZAR.—Estos verbos son en una sala, y no de paraje. Se dice sinónimos cuando uno y otro significan "ocupar un lugar y hacer lugar, y no bastar, ó ser suficiente una cosa para un un paraje ni un sitio." "Los santos lu fin determinado; pero llegar^ representa gares de Jerusalen," y no los santos si el hecho positivamente: alcanzar, re tios ni parajes. En este último ejem presenta la posibilidad del hecho. La plo vemos cuan bien determina la idea, acción del primero es un efecto de la la palabra lugares, pues la fija exclusi »suficiencia; la acción del segundo es vamente en los reducidos puntos que la «»suficiencia misma. ocupan en el Asia el Santo Sepulcro, La alfombra llega de una parte á otra el pesebre de Belén, &c. Lo mismo se de la sala. Este es un hecho positivo, advierte en el uso que se hace de esta un efecto de la suficiencia de la alfom palabra para denotar una población muy bra; pero si decimos que alcanza, solo pequeña. explicamos la idea de la posibilidad de MAL ( 105 ) MAL que llegue; esto es: llega porque es bas ce su pasión; para no temerle tanto, se tante larga; alcanza·, esto es: es bas procura no ofenderle. tante larga para llegar. El malvado lo es por temperamento De aquí' es que, cuando no tenemos y es muy peligroso; cuando hace daño que explicar puramente una posibilidad sigue en ello su inclinación; para librar sino expresamente el hecho mismo de se de él, lo mejor es huirle. llegar, bajo la idea de positivo, y no El malicioso lo es por capricho, y si de posible, no empleamos el verbo al hace daño es de rabia; para contenerle, canzar. El camino nuevo llega hasta lo mejor es ceder. Burgos. La capa le llega á los pies. El amor es un dios maligno que se (L. de la Huerta.) burla de sus adoradores. El cobarde hace del malo cuando no tiene enemigos M que combatir. Los hombres son á ve MALHECHOR, DELINCUENTE. — Ambas ces mas malvados que las mujeres; pero voces representan al hombre que ha eje éstas siempre son mas maliciosas que los cutado una mala acción; pero la prime hombres. ra considera la acción como mala en sí En el malicioso hay facilidad y astu misma; la segúndala considera como in cia, poca audacia y ninguna actividad. fracción de la ley ó precepto que la pro El maligno solo quiere ocasionar pe hibe. nas leves y no grandes males; á veces La voz malhechor se usa comunmen quiere darse únicamente cierta supe te con referencia á aquellas acciones rioridad sobre los demás á quienes inco malas, que se oponen ai buen orden de moda; se contenta mas bien con poder la sociedad, al derecho de los ciudada hacer el mal que con el gusto de ha nos, á la tranquilidad y buen gobierno cerlo. del estado: y como no hay legislación En el maligno hay mas consecuencia, que no las prohiba, todo malhechor de mas profundidad, mas disimulo y mas linque, quebranta la ley, y no es extraño actividad que en el malicioso. que se tome indistintamente una voz por El maligno no es tan duro ni atroz otra, porque las dos ideas que represen como el malvado: hará derramar lágri tan, aunque diferentes, es difícil que se mas; pero tal vez se enternecerá si las encuentren separadas. ve correr. Si no hubiera leyes, el malhechor no El substantivo malignidad tiene mu seria delincuente. En tiempo de los an cha mayor fuerza que el adjetivo ma tiguos tiranos el delincuente pudo no ser ligno. malhechor. Muchas veces se permite á los niños (L. de la Huerta.) ser malignos; pero nunca la malignidad, sea la que se quiera, por ser esta el es MALIGNO, MALO, MALVADO, MALICIOSO. tado de una alma que perdiendo ya el —Todos cuatro indican disposición á instinto de la benevolencia, deséala des hacer dan o. dicha de sus semejantes, y aun se goza El maligno lo es á sangre fría; astuto en ella. cuando hace daño: para estar á salvo de Se les disimula á los niños el ser ma sus malas mañas, conviene desconfiar liciosos, y á veces se entiende esta con de él. descendencia hasta estimularlos á cier El malo lo es por carácter y se des ta malicia; porque no teniendo esta nada cubre á sí mismo; cuando daña satisfa- de criminal, supone cierto germen de 14 MAR ( 106 ) ΜΑΤ talento, de que en adelante puede sa cion recíproca que le une mas noble y carse buen partido; sin embargo, esta estrechamente á su mujer, separando indulgencia puede ser peligrosa, la as en cierto modo la idea de la superiori tucia que supone la malicia va insensi dad doméstica que le da el estado y ca blemente disponiendo á la malignidad, lidad de marido. Por eso se usa en el y de ser maligno á ser malvado dista á sentido culto, \ cuando se habla de per veces muy poco. sonas de alta clase, como para represen {March.) tar una union, por decirlo así, menos vul gar. MALTRATAR, TRATAR MAL.—Tratar sig nifica obrar con alguno de tal ó tal ma El hombre honrado oye siempre con nera; de ahí viene que maltratar y tra singular ternura el dulce nombre de es tar mal designan un modo de obrar, que poso. Venia el rey acompañado de la no conviene al que es objeto del trato; reina su muy amada esposa. peto la diferencia de la construcción es De aquí es, que en el lenguaje co también grande en el sentido. mún, es por lo general afectado el uso de Maltratar significa hacer ultraje á al esta voz: Que pongan el coche para mi guno, ó con palabras ó á golpes. Tra esposo; mi esposo se ha ido á pasear. A tar mal es no darle bien de comer auno, no ser que su relación sea tan directa ó no tratarle á su gusto. al cariño, que solo se emplee para re Un hombre arrebatado y grosero mal cordarlo, como cuando se empieza ó trata á los que tienen que ver con él: concluye una carta, diciendo: Esposo un avaro y mezquino trata mal a los que querido; tu esposo que te ama de co convida por fuerza. razón. [.March.) (£. de te Huerta.) MARIDO, ESPOSO.—Esposo en su sentido MARIDO, ESPOSO. — Marido designa la recto y riguroso, no es sinónimo de ma cualidad física; es el término físico. Es rido, sino de novio; pero se ha anticua poso denota la obligación social; es el do de tal modo este uso de la voz, que término sacramental ó moral. Marido en el dia pasaría por un galicismo. Ge corresponde á mujer, como macho á neralmente se da el nombre de esposo hembra. Esposo corresponde á esposa, a} hombre casado, y así se dice: la rei como un consorcio á otro. Los latinos na Doña Isabel y D. Fernando el cató llamaban al macho marido; pero esposo lico su esposo. no puede convenir sino á las personas. La diferente fuerza y energía que yo Se toma, se escoge un marido que las hallo entre estas dos voces en el senti formalidades y ceremonias de las bodas, do común á que ahora se aplican, es que tanto las civiles como las eclesiásticas, la voz marido explica, sola y sencilla hacen que sea esposo. mente, la calidad de un hombre casado, (A. Cienfuegos.) sin otra relación que al estado del ma trimonio. Aquella señorita quisiera ca MATERIA, ASUNTO.—La materia es el gé sarse, pero no encuentra marido. Los nero de las cosas de que se trata. dos que allí vienen son marido y mujer. El asunto es el objeto particular que Pero la voz esposo ennoblece, si pode se trata. mos explicarlo así, la idea, represen Las verdades del Evangelio son la tando al hombre casado con relación, materia de los sermones, y el asunto de no solo al estado, sino á aquella aten- un sermon será una de estas verdades. MAX ( 107 ) MER Por consiguiente, la materia abraza ó todas son el resultado de la observación puede abrazar varios asuntos. y de la experiencia; todas son ciertas, La materia del Quijote es la caballe todas son útiles. Las máximas de la Ro ría; la estancia de D. Quijote en el pa chefoucauld, son buenas en general, mu lacio de los duques, el gobierno de San chas impracticables, algunas falsas. Las cho y las demás aventuras de uno y máximas de Maquiavelo son inmorales. otro, son otros tantos asuntos. (G. de la Cortina.) (G.dela Cortina.) MENTIRA, EMBOSTE.—La voz mentira ex MATERIA, OBJETO.—La materia es lo que plica solamente la idea de una cosa fal se emplea en el trabajo; el objeto es sa, puramente como tal; pero la voz em aquello sobre lo cual se trabaja. buste supone por sí sola, ademas de La materia del discurso consiste en aquella falsedad, la malicia con que se las palabras, en las frases y en los pen dice. Y así la mentira no pierde el ca samientos. El objeto es lo que se expli rácter de tal, aunque se extienda de ca por estas palabras, por estas frases unos á otros, á grandes distancias y y por estos pensamientos. tiempos remotos, y se diga y se publi Los raciocinios, los pasajes de la Es que por personas que de buena fe la critura, y los pensamientos de los Pa crean como cierta; pero el embuste no dres de la Iglesia, el carácter de las pa lo es propiamente sino en boca del que siones y las máximas de moral, son la la cree falsa, porque nadie dice un em materia de los sermones; los misterios buste de buena fe. de la fe y los preceptos del Evangelio Anda muy valida una grande mentira deben ser el objeto. por toda la ciudad. Las historias y las (March.) gacetas están llenas de mentiras. Un mu chacho travieso sale con un embuste del MATERNAL, MATERNO.—(V. Paternal.) apuro en que se halla. Por eso á un tramposo, á un hombre MÁXIMA, SENTENCIA.—Máxima es una de mala fe, se le da con mas propiedad proposición que contiene una regla de el nombre de embustero, que el de menti conducta. roso, porque aquel adjetivo explica con Sentencia es un pensamiento moral, mas energía, no solo la falsedad de lo deducido las mas veces de la experien que dice, sino también ia intención ma cia, y de una aplicación muy extensa. liciosa con que miente. Una y otra tienen el mismo objeto, Los yerros de pluma se llaman men pero la sentencia tiene, por decirlo asi, tiras y no embustes, y este uso de la voz unfundamento mas sólido y seguro, cual es conforme á este mismo principio, es la observación constante de la natu porque solo se quiere explicar una fal raleza humana: los resultados que esta ta de verdad y exactitud, no una inven ofrece son ciertos é innegables, al paso ción maliciosa de una cosa falsa. que la máxima puede fundarse muchas (L. dt la Huerta.) veces en el modo de pensar de un hom bre, en su carácter, en sus circunstan MÉRITO, MERECIMIENTO.—El primero cias particulares, y ser por lo mismo se aplica á las personas y á las cosas: imposible en la práctica, ó tal vez per el segundo, á las personas solamente, y niciosa. Las sentencias de Solís se fun ambos pueden tomarse en buena ó ma dan en los mismos hechos que refiere: la parte. Por eso decimos, "un hom- MIE ( 108 ) MIÉ bre de mérito," una obra de mérito, y MIEDO, TEMOR.—El miedo proviene del no de merecimiento. Este viene á ser amor excesivo á nuestra propia conser el efecto, y mérito Ja causa; porque el vación, y porque conociendo la supe merecimiento indica, mas bien, el estado rioridad de la causa que debe decidir moral en que pone al hombre su propio del acontecimiento, estamos convenci mérito. dos de que ella decidirá en mal. El te (G. de la Cortina.) mor nace de conocer simplemente la MIEDO, COBARDÍA.—Miedo solo explica causa que debe decidir del suceso, no en general la situación del ánimo sobre sabiendo si decidirá en mal ó en bien. cogido, con la idea del peligro. Cobar Por lo mismo diremos tener miedo de día es el efecto del miedo, con relación la muerte, de una fiera, de la peste, del á la repugnancia que este nos inspira, fuego ó de otra cosa semejante. Tener de buscar un riesgo, ó exponernos á un temor de un hombre malo, de perder el peligro, á que nos llama el honor, el pleito, de disgustar al amo, de pasar á bien parecer, ó la obligación. nado un rio, &c. Y como buen cristia Una mujer tiene miedo de que entren no tener temor de Dios, porque esto es ladrones en su casa. El hombre que, conocer su infinita superioridad, y con pudiendo, no se defiende, es cobarde. fesar la debilidad nuestra; pero tener Al que no tiene obligación de tener miedo de él, en algún modo es blasfemar, valor, no se puede dar con propiedad el porque es como no conocer el mas glo nombre de cobarde, sino el de medroso; rioso de sus atributos, que es el de su y asi el miedo de un niño no merece el bondad y su clemencia. nombre de cobardía, como el de un (March.) soldado que huye á la vista del enemigo. (L. de la Huerta.) MIENTRAS, ENTRETANTO.—Decimos in distintamente: mientras llega, ó entretan MIEDO, TEMOR.—El miedo es la apren to que llega la hora de comer, podremos sión viva del peligro que sobrecoge y pasear en el jardin; pero aunque expli ocupa el ánimo. El temor es el con camos la misma idea, es con diferentes vencimiento del ánimo, el efecto de la relaciones. reflexion, que le hace prever, ,y le in Mientras, se refiere á la duración del clina á huir el peligro. tiempo presente, ó que corre, antes que Un niño tiene miedo de quedar solo, llegue el que se espera. Entretanto, ó á obscuras. Un hombre que va solo, se refiere al punto, ocasión ó tiempo y sin armas, tiene temor de encontrar que se espera, y que sirve de límite á ladrones en un camino. la duración del tiempo presente. Esta De aquí es, que el miedo siempre es diferencia es la misma que hay entre despreciable, pero no lo es siempre el durante el tiempo que, que equivale á temor; y así se dice: el temor de Dios, y mientras; y hasta que, que equivale á no el miedo. Es noble el temor de la entretanto. deshonra, que hace perder al soldado el vergonzoso miedo del enemigo. En las comunidades religiosas se lee El que se arrojó con ciega resolución mientras se come, esto es, durante el al asalto de una brecha, tiembla tal vez tiempo de la comida. Juguemos á la pe después en su cama á la vista de su cer lota entretanto que se come, esto es, cana muerte. Allá pudo despreciar el hasta que se coma. miedo. Aquí no puede vencer el temor. En este ejemplo se advierte clara (L. de la Huerta.) mente, que la distinción que hago de MIS ( 109 ) MOM las ideas que nos representan estas dos es con diferentes relaciones: en la mise voces, no es tan superflua como parece ricordia pedimos un efecto de la compa á primera vista, porque si fuera lo mis sión; en la clemencia un efecto de la ge mo decir, leer mientras se come, ó en nerosidad. Por eso, á las obras de mi tretanto que se come, no seria tan fácil sericordia no se las puede llamar con distinguir si la lectura debe ser antes, igual propiedad, obras de clemencia. ó al mismo tiempo de la comida. (L, de la Huerta.) Mientras le duró el dinero, tuvo mu chos amigos. Le esperaron los acree MODA, USO.—Moda es un uso nuevo, que dores entretanto que llegaba la letra. no ha llegado á ser general: en llegan (L. de la Muerta.) do á ser adoptado por todos, ó por la mayor parte, y por algún tiempo, ya es MISERICORDIA, CLEMENCIA.—Una pro uso. posición de Séneca me ha suministrado Todo uso ha sido moda en sus prin la idea de este artículo. Aquel célebre cipios. Fué moda el afeitarse, ya es uso. filósofo miraba como virtud á la clemen El principal objeto del que sigue cia, y como defecto á la misericordia; siempre la moda, es el llamar la aten porque, según los principios de los Es ción, distinguirse en el gusto, en la va toicos, tenia por pura debilidad de áni riedad. El objeto del que sigue siempre mo, la sensibilidad del corazón. Cle- el uso, es el no singularizarse entre los mentiam, dice, mansuetudinemque omnes demás. boni praestabunt; misericordiam autem Las mujeres varían tanto y tan á me vitabunt: est enim vitium pusilli animi, nudo sus adornos, que casi siempre con ad speciem alienorum malorum succiden- servan el nombre de modas; rara vez se tis (*). les llega á dar el nombre de uso3. Dejando aparte el error de este prin (L. de la Huerta.) cipio, y considerando la proposición pu ramente con relación á la significación MOMENTO, INSTANTE.—Un momento no determinada de cada una de las dos vo es largo; un instante es todavía mas cor ces, parece que en nuestro idioma pue to; momento tiene una significación mas de hacerse la misma distinción de las extensa; algunas veces se toma por el ideas que representan. tiempo en general, y es de uso en el La misericordia considera al hombre sentido figurado. Instante tiene signifi con relación á su infelicidad y miseria; cación mas limitada: denótala mas pe la clemencia con relación á su fragilidad queña duración del tiempo, y jamas se ó malicia. La primera es el efecto de la usa sino en sentido literal. compasión que inclina á ejecutar aque Todo depende de saber aprovechar llas obras que pueden aliviar los males, el momento favorable; á veces un instan ó consolar las aflicciones; la segunda es te mas tarde ó mas temprano es lo que el efecto de la bondad, ó generosidad hace la diferencia entre el buen óel mal del ánimo, que mitiga el rigor merecido éxito. ó perdona los agravios personales que Por prudente y dichoso que uno sea, puede legalmente castigar. tiene siempre algún momento desagra Se implora la misericordia, ó la cle dable que no puede prever. A veces mencia de aquel, de cuya voluntad de falta un instante para mudar enteramen pende el castigo, ó la venganza; pero te la faz de lo que uno cree hallarse en (*) Séneca de clement, lib, 2, cap. 5. la mejor sazón. MOV ( i ) ) MUCH Todos los momentos son apreciables na sobre una cosa cualquiera, pues en para quien conoce el precio del tiempo. uno y otro caso se considera como di Cada instante de la vida es un paso acia rigiéndose acia un objeto. la muerte. Los malos cómicos creyendo hacer (March.) acciones no hacen mas que movimientos. El pleitista con una sentencia definiti MOVER, MENEAR.—Todo lo que se me va pierde la acción pero no el movimien nea se mueve, pero no se dice con igual to, antes se mueve mas que nunca pa propiedad que todo lo que se mueve se ra buscar un efugio, y continuar sus menea; porque el verbo mover supone in embrollos. determinadamente cualquier especie de (Jonama.) movimiento, y el verbo menear supone un movimiento determinado, esto es, el MUCHAS VECES, FRECUENTEMENTE.—El que hace un cuerpo separándose un po uno es para la repetición de los mismos co del puesto en que se hallaba, y vol actos. El otro para la pluralidad de los viendo inmediatamente acia él, una ó objetos. repetidas veces. Se ocultan muchas veces los pensa Una piedra que cae, se mueve de ar mientos: frecuentemente se encuentran riba abajo; y no se dirá con propiedad traidores. (March.) que se menea de arriba abajo. La hoja de un árbol que se mueve de un lado á MUCHEDUMBRE, MULTITUD.—La lengua otro, se menea. Un pájaro que vuela, castellana se deriva en su mayor parte, se mueve en todas direcciones, y menea no del latin puro que hablaban Horacio, de cuando en cuando sus alas y su cola. Virgilio, Cicerón y los romanos cultos Movemos 3a cabeza, volviéndola, in de aquellos tiempos, sino de la baja la clinándola á un lado para evitar un gol tinidad, esto es, del latin corrompido ya pe; la meneamos para decir que no, por por la introducción de voces godas, cél señas, moviéndola sucesivamente de un ticas, arábigas y de otro origen. lado á otro. El castellano formó casi todos sus no (L. déla Huerta.) minativos de los ablativos latinos, y por MOVIMIENTO, ACCIÓN.—Movimiento de esta razón decimos, hombre de homine, un cuerpo es su mutación de lugar con y no de homo; cielo, de coelo y no de j7J NOMBRAR, LLAMAR—Se nombra para dis NOTAR, OBSERVAR.—Se notan las cosas tinguir en el discurso. Se llama para por la atención, para acordarse de ellas: hacer que uno venga. se observan por examen, para juzgarlas. El Señor llamó á todos los animales El viajero nota lo que mas le da en y los nombró delante de Adán para en rostro; el espía observa los pasos que señarle sus nombres: tal es el sentido del juzga ser de consecuencia. texto hebreo. El general debe notar los que se dis No siempre se deben nombrar las co tinguen entre sus tropas, y observar los sas por sus nombres, ni llamar en auxi movimientos del enemigo. lio á toda clase de gentes. Se puede observar para notar; pero (March.) estará bien al contrario. NOT ( 1 13 ) OBJ Los que observan la conducta de los modo que la cosa sea no solo conocida, demás para notar sus faltas, lo hacen sino indubitable, constante y notoria. comunmente para tener el placer de Se significa lo que se declara con una censurarlas, mas bien que para enseñar resolución expresa; se notifica lo que les la enmienda. se significa según reglas, ó con los re Cuando uno habla de sí, se observa y quisitos necesarios para dar á la signifi se hace notar. Ya no se observan las cación el peso necesario. mujeres á sí mismas tanto como en otro (A, Cienfuegos.) tiempo; su indiscreción corre parejas con la de los hombres: mas quieren ha NUEVO, RECIENTE.—Es nuevo lo que no cerse notar por debilidad, que ser bien ha servido todavía: lo que acaba de su consideradas por una buena reputación. ceder, es reciente. Se dice un vestido (March.) que es nuevo: de un suceso que es recien te. Menos llaman la atención las his torias antiguas que las nuevas. NOTAR, TACHAR, TILDAR.—Se nota lo (March.) ridículo y lo reprensible; se tacha y se tilda lo culpable y lo perjudicial. O La diferencia que hay entre las sig nificaciones de estos dos últimos verbos OBJETO, FIN.—El objeto es término ma es, que tachar, recae sobre la tacha ó terial de la acción; el fin es el término borrón visible, que afea al sugeto, esto moral de la voluntad. Aquel puede su es, sobre los defectos notorios; y tildar, poner un motivo solamente; éste supo recae sobre los defectos que se sospe ne siempre un deseo. chan vivamente, y que, como una tilde, Si yo envió á un criado para que en los tiene señalados nuestra desconfian señe^ conduzca á mi casa á un amigo, á za ó temor. quien estoy esperando, podré decir que Está notado el hombre extravagante mi criado va con el objeto de conducirle ó singular en sus costumbres, el mise á mi casa, que este es el objeto de su co rable, el que falta á las atenciones de la misión; pero no diré, con la misma pro sociedad. piedad, que el fin de mi criado es con ducirle, porque no tiene parte en ello ni Está tachado un hijo ingrato, una mu su voluntad ni su deseo. Yo soy el que jer libre, un embustero, un tramposo. deseo, el que quiero que venga, y este Está tildado un hombre sospechado es el fin que me propongo, enviando á de venalidad; un tratante de dudosa fe; mi criado con aquel objeto. Pero si éste un hombre doble de quien es menester lo ha hecho por puro celo, y sin que yo precaverse. (L, de la Huerta.) se lo mande, podré decir indiferente mente, que mi criado ha ido con el fin NOTIFICAR, SIGNIFICAR.—La nota y el de conducirle, ó con el objeto de condu signo dan á conocer, pero la nota lo hace cirle; porque en tal caso ha tenido su mas distintamente que el signo. Éste acción material un objeto, su deseo y indica, muestra, enseña; pero la nota voluntad un fin. ilustra, explica, caracteriza. El signo El fin es siempre voluntario y libre, hace que la cosa sea conocida, y la nota según este mismo principio; pero no hace que lo sea clara y distintamente. siempre lo es el objeto: y así no se dice, Así notificar es significar claramente, de que una acción se ejecuta con buen ó un modo auténtico, en toda forma, de mal objeto y sino con buen ó mal fin; por- 15 OBL ( 1 U ) OBS que aquel se mira como el término á que El buen parecer obliga á veces á cier se dirige materialmente la acción; pero tas gentes á cosas que no son de su gus este se mira como puro efecto de nuestra to. Por complacer se suele uno empe voluntad, de nuestro buen ó mal deseo. ñar en asuntos delicados, por no saber (L. de la Huerta.) elegir la compañía de los que no quer rán comprometernos. OBLIGACIÓN, DEBER.—Cumplir un hom (March.) bre con su obligación no es exactamen OBSCENO, DESHONESTO.—-Obsceno indica te lo mismo que cumplir con su deber. mucho mas que deshonesto; pues agre Obligación es aquello á que nos pre ga á la deshonestidad la licencia impú cisan las leyes, las costumbres, y gene dica: la idea propia de obsceno es la de ralmente todo convenio tácito ó expre inmundo y lúbrico. Un pensamiento des- so: deber es aquello que manda la vir honesto hace perder la pureza; una pa tud y la conciencia. La obligación pue labra obscena el pudor. Obsceno se dice de ser forzada: el deber es siempre vo de las palabras, de los cuadros ó pintu luntario. ras, de las personas; deshonesto se apli La obligación de un hombre público ca á todo aquello que ofende al pudor es desempeñar aquella parte del gobier ó la pureza. no que se ha puesto á su cargo: su de Violar, engañar, cometer un adulte ber es mirar como propios los intereses rio, dice Cicerón, es una cosa deshones del estado. Las obligaciones de un pa ta; pero esto se dice y se hace sin obs dre y de un esposo están cumplidas con cenidad. Se dirá bien un poeta obsce mantener á su familia y dar á sus hijos no, y lo mismo de un pintor, de un au una educación regular: la fidelidad con tor ó de otra persona cualquiera. yugal, el cariño, el buen ejemplo y un (March.) entero sacrificio de su voluntad al ma yor bien de los hijos constituyen el de OBSCENO, DISOLUTO, LASCIVO, LUJURIO ber de aquel estado. SO, LUBRICO, IMPÚDICO.—Todo lo que El hombre de honor cumple con su es contrario al pudor es obsceno, y este obligación: el virtuoso nunca falta á su adjetivo se aplica indistintamente á las deber. personas, á las acciones y á las cosas. El deber no es mas que uno, porque Disoluto es el hombre que desprecia no hay mas que una justicia y una ra las leyes de la honestidad; y se aplica zón. La lengua castellana es consecuen este adjetivo á las personas y á las cos te en esta parte: y así como no permi tumbres, mas bien que á otra cosa; y te decir las probidades ni las avaricias, ciertamente parece que así lo exige su tampoco ha dado plural á la voz deber. mismo valor ó significado, pues viene (Jonama.) de dissolutus, esto es, solutus lege. Lascivo es el hombre propenso con OBLIGAR, EMPEÑAR.—Obligar indica al exceso á los placeres carnales, que se guna cosa mas fuerte que empeñar: este siente excitado á ellos, no solamente por último tiene algo de gracia ó compla la presencia del objeto que desea, sino cencia. aun por la sola idea del deleite. Se nos obliga á hacer una cosa, im El lúbrico es tal vez menos carnal, poniéndonos el deber ó la necesidad de porque el deseo de aumentar y diversi ejecutarla; se nos empeña á hacerla por ficar sus placeres, le hace hallarlos en medio de promesas ó buenos modos. objetos, en circunstancias ó en acciden- OBS ( 1 15 ) OBS tes, que no tienen atractivo ni valor OBSERVACIÓN, EXPERIENCIA.—La expe alguno para el lascivo. El lúbrico hace riencia realmente no es mas que la ob que su alma tenga gran parte en sus go servación misma que la hace; sin embar ces, al paso que el lascivo no procura go hacer una observación y hacer una mas que satisfacer los estímulos de su experiencia no es exactamente lo mis cuerpo. mo. El hombre hace observaciones mu El impúdico hace alarde de sus ex chas veces sin intentarlo, sobre ellas cesos, ó á lo menos no trabaja por ocul funda sus hipótesis, y para averiguar tarlos ó disimularlos: se entrega á ellos la verdad ó falsedad de estas hipótesis, sin que nada le contenga; á diferencia pasa á hacer nuevas observaciones: estas del lascivo y del lúbrico que pueden ser son las que propiamente se llaman ex lo en secreto, sin faltar públicamente á periencias. las leyes del pudor. La experiencia^ según esto, es la ob Lujurioso se aplica no solamente al servación comprobante de una hipótesi hombre dado á la lujuria, sino también fundada en observaciones anteriores. á todo lo que puede excitarla. {Jonama.) (β. de la Cortina,) OBSTÁCULO, DIFICULTAD.—El obstáculo OBSCURO, TURBIO, ESPESO.—Se llama hace la cosa impracticable; la dificultad claro aquello que tiene la luz suficiente la hace ardua. Mientras duran las di para que lo veamos. Tomado con esta ficultades se adelanta poco; mientras du generalidad se le opone el adjetivo obs ran los obstáculos, no se adelanta nada: curo tanto en lo propio como en lo fi porque lo que llamamos vencer el obs- gurado. Se llama obscura una pieza taculoy es evitarle, ó destruirle; y en tal donde no se distinguen los objetos: se caso, el ser la operación practicable con llaman obscuros los colores que reflejan siste en que el obstáculo no existe ya; poca luz, como por ejemplo el azul tur pero la dificultad se puede vencer sin quí: se dice que es obscuro el lenguaje que deje de existir; y así hay cosas que cuando apenas se entiende. se hacen con dificultad, pero no con obs También se llama claro todo cuerpo, táculo. al través del cual pueden pasar los ra Hay dificultad en andar por un mal yos de luz. En esta acepción se le opo camino, en medio de precipicios, pero nen los adjetivos turbio y espeso; el pri se va poco á poco adelante. El haber mero cuando un cuerpo extraño impide se llevado una avenida el puente, pue el paso de la luz, como cuando el agua de ser un obstáculo que no nos permita tiene alguna materia en disolución, ó continuar el viaje. cuando los cristales no están muy lim (£. de la Huerta.) pios; el segundo cuando el defecto está en el mismo cuerpo, como cuando los OBSTÁCULO, IMPEDIMENTO. — Obstáculo líquidos se hielan, ó cuando los tejidos significa lo que está delante. Impedi están muy apretados. mento es lo que envara, lo que enreda los pies. El obstáculo está delante, de Por consiguiente, aunque estas tres tiene nuestra marcha; y el impedimento voces se oponen á claro, representan está, no precisamente delante, sino al esta oposición de diverso modo, y por rededor, y nos retarda. Para adelan lo mismo no son rigurosamente sinóni tar es preciso superar, allanar el obstá mas. (Janama.) culo; para andar libremente es preciso OCU ( 1 5 ) ODI quitar el impedimento. El obstáculo tie Se oculta la verdad callando, se en ne algo de grande, de alto, de resistente, cubre con palabras artificiosas; pero no y por eso es menester destruirle ó pa podemos decir que se esconde. El hom sar por encima. El impedimento tiene bre de bien oculta sus debilidades; el algo de molesto, de incómodo, de enre impostor hace mas, las encubre. doso, y es preciso desembarazarse de él, Si un malhechor se viene á refugiar romperle. á mi casa, yo que le abro la puerta le (A. Cienfucgos.) oculto: las paredes le encubren: él se es conde. OBSTINACIÓN, TERQUEDAD.—La obstina (Jonama.) ción es el efecto de una falsa convic ción fuertemente impresa en el ánimo, ODIO, ABORRECIMIENTO.—El odio es ana ó de un empeño voluntario con deter pasión ciega y arraigada en el corazón minado Ínteres. La terquedad no nece viciado, por el capricho, por la envidia, sita de interés ni de convicción: es un por las pasiones; un afecto que en nin defecto, ó adquirido ó arraigado por la gún caso deja de ser bajo é indigno de mala educación, ó inherente á la perso un ánimo honrado y generoso. El abor na inclinada á contradecir la opinion ó recimiento es un afecto nacido del con voluntad agena, ó sostener la propia. cepto que forma nuestra imaginación de Está obstinado en su error aquel á las calidades del objeto aborrecido, y quien no convencen las razones mas cla compatible con la honradez, cuando ras y evidentes. Es terco, el que, con su objeto es el vicio. De aquí es que lla vencido de las razones, no cede á ellas. mamos implacable al odio, y no aplica Está obstinado el reo que niega su deli mos ordinariamente este adjetivo al abor to, por miedo del castigo. Es terco un recimiento, porque miramos á aquel co muchacho por pura malignidad de su vi mo una pasión ciega, que nunca perdo ciado carácter. na, antes bien, anda casi siempre acom La Obstinación puede ser efecto de pañada del rencor y de la mala volun un error disculpable del entendimiento. tad; y al aborrecimiento lo miramos como La terquedad es siempre un defecto re efecto de una persuasion, que la razón prensible de la voluntad. ó el desengaño pueden llegar á destruir. (L. de la Huerta. ) Un hombre honrado perdona la ofen sa de un traidor, de un asesino, porque OCULTAR, ENCUBRIR, ESCONDER.—Ocul no cabe el odio en su noble corazón: tar es simplemente substraer una cosa pero no puede dejar de aborrecer tan á la vista ó conocimiento de las gentes. execrables monstruos de la sociedad. Encubrir es ocultar por medio de una El aborrecimiento nos hace mirar con cosa tercera, que se interpone entre lo disgusto á su objeto; el odio nos le hace que se oculta, y la vista, oido, atención, mirar con ira. ó cualquiera otra facultad de las perso (L. de la Huerta.) nas á quienes la encubrimos. Esconder es ocultar una cosa metiéndola en para ODIO, AVERSION, ANTIPATÍA.—La pala je donde no se vea. bra odio se aplica mas ordinariamente á De aquí se infiere que esconder solo las personas. Las palabras aversion y puede referirse á la vista: ocultar y en antipatía convienen á todo igualmente. cubrir no solo se refieren á todos los sen El odio es mas voluntario y parece tidos, sino también á todas las faculta tener su raíz en la pasión y en el resen des intelectuales. timiento de un corazón irritado y lleno ODI ( 1 17 ) OIR de hiél. La aversion y la antipatía no tros que la antipatía; lo mas que pode dependen tanto de la libertad, y parecen mos hacer es disimular. tener su origen en el temperamento ó No debemos tener odio sino al vicio, en el gusto natural; pero con la diferen ni aversion sino acia todo lo que es da cia, de que la aversion tiene causas co ñoso; ni antipatía sino á lo que condu nocidas, y la antipatía las tiene mas ce al crimen. ocultas. (March.) Los modales impertinentes y las ma OFRENDA, OBLACIÓN.—Oblación en rigor las calidades que se notan en las perso es la acción de ofrecer; y ofrenda la cosa nas, ó que se les atribuye, alimentan el que ha de ofrecerse, ú ofrecida, que es odio, y no cesa sino cuando se comien tá destinada para la oblación. Oblación za á mirarlas con otros ojos; ya sea por tiene siempre un sentido mas rigoroso una correspondencia de estimación, ya que ofrenda, y solo se dice para expre por reconocimiento de algún servicio, sar el sacrificio ó el don hecho con las ya por movimiento de interés. Los de ceremonias religiosas prescritas para fectos que miramos con horror, y los este efecto. Así que no toda ofrenda modos de obrar opuestos á los nuestros, es oblación; y la idea del don basta para nos inspiran aversion acia las personas constituir una ofrenda sin ninguna ce que los tienen, la cual no se acaba sino remonia. La mano sagrada ó religiosa cuando las personas mudan y se aco hace su oblación en el altar: el corazón modan á nuestro espíritu, á nuestras hace en sí mismo su ofrenda. Oblación costumbres, ó que nosotros mismos mu es término de liturgia, y el pueblo no le damos tomando sus inclinaciones. La entiende. Ofrenda es el término co diferencia del temperamento, la singu mún y vulgar, aun cuando se trate de laridad del genio, el carácter particu la oblación rigorosa. lar, y cierta cosa inexplicable que des (A. Cienfuegos.) place, producen la antipatía, la cual dura hasta que los resortes secretos de OFUSCAR, OSCURECER.—Ofuscar significa la sangre y de la naturaleza hayan he impedir el ver ó el ser visto, á lo menos cho una mudanza tan grande en el gus ver y ser visto claramente, por la inter to, que llegue á ser universal ó entera posición ú oposición de un cuerpo ó de mente subordinado á la razón. un obstáculo. Oscurecer expresa la ac El odio todo lo hace vituperable en ción simple y vaga de quitar á un obje las personas que se odian, y se denigran to su luz ó su brillo, sin ninguna rela hasta sus virtudes. La aversion hace ción ni con el medio ni con la vista. El que huyamos de las gentes, y que mi sol se oscurece cuando pierde su resplan remos su compañía como una cosa muy dor; pero si le consideramos nublado, desagradable. La antipatía hace que decimos que está ofuscado. Las nubes no se les pueda sufrir, y que nos sea le oscurecen quitándole su luz, y le ofus molesta su compañía. can porque nos impiden verle. (A. Cienfuegos.) Hay menos distancia, como ha dicho un hombre de talento, del odio al amor, OÍR, ESCUCHAR.—Oir es percibir por el que del odio á la indiferencia. órgano del oído cualquier sonido: escu Algunas veces tenemos mas aversion char, aplicar el oido para oir, prestando â aquellos con quienes el debernos hace atención á lo que dicen. vivir. Nada depende menos de noso- A veces conviene fingir que no se oye. OPI ( 118 ) ORÍ Es efecto de mala crianza escuchar lo dictamen es que no salgamos de casa. que pasa en casa age na. Se puede oir El parecer del médico recae sobre los sin escuchar, mas no escuchar sin oir. síntomas y conocimiento de la enferme (March.) dad; el dictamen sobre la resolución que debe tomarse para curarla, sobre los re OLVIDO, DESCUIDO.—El olvido es falta de medios que se deben emplear ó preferir. memoria: el descuido falta de cuidado ó (Z. de la Huerta.) atención. El primero siempre es invo luntario: en el segundo puede tener mas ORILLA, MARGEN, RIBERA.—Entendemos ó menos parte la voluntad. por orilla la línea de tierra que sirve de Si me olvido de que es domingo me límite al mar, á los lagos, á los rios, á quedaré sin misa: si me descuido un los arroyos, á los estanques, á los char poco llegaré tarde. Descuidándose uno cos de agua considerables &c.,y en esto demasiado se olvidan las cosas. respetamos exactamente el valor de la (Jonama.) etimología de la voz orilla, que se deri va de la latina ora, borde, límite, línea OMNIPOTENTE, TODOPODEROSO.—Por su divisoria ó terminadora de un confín, de etimología son sinónimos perfectos es una frontera &c. tos dos adjetivos, porque todopoderoso Margen, indica mayor extension de no es mas que la traducción castellana terreno, y por eso llamamos margen á del latin omnipotente. Pero el buen uso la extremidad de la tierra cercana á la ha querido atribuir á cada una de estas orilla. Esta idea de extension del es voces, una idea diferente, haciendo que pacio que trae consigo la voz margen, se todopoderoso se aplique solo á Dios; ve bien comprobada con el proverbio y que omnipotente ademas de aplicarse vulgar — "andarse por las márgenes:'1'' á Dios, pueda también decirse de las para andar vagando, ó no ir en derechu personas y de las cosas, cuando se habla ra (pues tal es el valor de andarse) por en estilo hiperbólico. un terreno, es necesario que éste tenga ( G, de ta Cortina.) una extension proporcionada. Al con trario, la expresión común de "andar, OPINIÓN, PARECER, DICTAMEN.—Se tiene andar y á la orilla ahogar," determina la opinion, se da el parecer, ó el dicta perfectamente la limitación de la orilla. men. Aquella solo explica el juicio que Por analogía damos los mismos nom se forma en un asunto, en que hay ra bres á las extremidades de un pliego, ó zones en pro y en contra; estos expli de una hoja de papel, diciendo: "esta can la exposición de la opinion. estampa, v. g., tiene demasiado margen, Tiene su opinion, pero la calla. Doy por haberle dejado las orillas fuera del mi parecer ó mi dictamen con arreglo á marco." — "Escriba vd. eso á media mi opinion. margen, " " con no tas al margen, &c. " ( * ). Entre las voces parecer y dictamen, Ribera es toda la extension de tierra hay la diferencia, de que la primera se cercana á los mares, rios, &c. aunque aplica con mas propiedad cuando se tra no esté en su margen, ó considerando ta de la existencia de una cosa, de la al terreno desde la margen acia dentro. aserción de un hecho; el dictamen cuan Aquí la idea de la extension es ma do se trata de lo que se debe ejecutar, yor, y por eso, hablando de un hombre del partido que se debe preferir. (*) El sustantivo margen es ambiguo; pero en plural se Hoy lloverá según mi parecer; mi usa siempre en el género femenino. PAL ( ι: > ) PAL útil para todo, se dice figuradamente considera mas bien la materialidad de que "es de monte y ribera;" y pues que la articulación y del sonido. esta comparación se toma del cultivo del Un libro no está Heno de palabras, campo, bien se concibe, que para que sino de voces. Yo en esta obra no me haya cultivo en un terreno, es necesario propongo examinar la diferencia de las suponer que este sea de una extension palabras, que consiste en sílabas y le algo considerable. tras; sino la diferencia de las voces, que Podemos, pues, decir que la ribera, consiste en ideas y relaciones. Por el acercándose á las aguas, empieza á for contrario, á un hombre no se le dicen mar margen desde cierta distancia, y va voces injuriosas, sino palabras; el vien á terminarse ala orilla.—Puede un ejér to se lleva las palabras, no las voces; y cito recorrer las riberas de un rio, dar propiamente no puede haber voces hue batalla á las márgenes de éste, y derro cas ni insignificantes. tar al enemigo arrojándolo sobre las ori De aquí procede tal vez que prome llas de donde ya no puede pasar. ter se llama dar palabra, y no dar voz; (O. de la Cortina.) pues las palabras, en boca de otro, no sabemos si significan algo, y mucho me Ρ nos en semejante caso. (Jonama.) PAGA, PAGO.—La primera de estas voces expresa la cantidad que se da por remu PALO, MADERA, LEÑA.—La parte sólida neración de un trabajo ó servicio que de los vegetales se llama palo. Este debe ser pagado con una suma de dine es su nombre genérico, considerándola ro convenida anteriormente, ó estable puramente como una sustancia: así de cida por el uso, ó por las leyes: y esta cimos palo de Campeche, palo del Bra es la razón porque se comprende bajo sil, cuchillo de palo, &c.: su etimología el nombre genérico de paga, tanto el probablemente es del latino palus, que sueldo de los empleados, como el prest significaba estaca ó planta sin vida. de la tropa &c. El palo es la materia mas común y Pago es la satisfacción de cualquiera mas general para todos los usos de la deuda, ya se haga con dinero, ya con ob vida: casas, barcas, carros, instrumen jetos de cualquiera otra especie.— Así tos de labranza, instrumentos de las ar- decimos "fulano me completó ó hizo el tes, todo se hace de aquella sustancia; pago de lo que me debia, con trigo, con y de ahí provino el que los latinos lla ovejas, con un reloj, &c." masen materia á lo que nosotros llama (G. de la Cortina.) mos madera. La madera es el palo considerado PALABRA, VOZ.—Don José Lopez de la como materia de las artes. De ahí Huerta conoció perfectamente que la maderamen, enmaderamiento, maderis etimología engañaba muchas veces, y ta, &c. Rigurosamente bien se puede que el uso común era el que debia fijar decir una casa de palo, un reloj de palo; el sentido de las voces. pero con mas propiedad se dirá casa de Efectivamente, á los signos que com madera, reloj de madera. La madera ponen el habla los llamamos voces ó pa labrada conserva su nombre genérico de labras; y precisamente voz es la que palo en estas expresiones, cuchara de prescinde del sonido, y considera el sig palo, tenedor de palo, pierna de palo, y no abstractamente: al contrario, palabra algunas otras; tal vez por considerar PAR ( 120 ) PAR cada una de estas cosas como un solo curó cortarla conversación para no ex pedazo en que el arte no ha hecho casi ponerse, ó por no exponerse á decir nada. mas de lo que quisiera. Pero yo hallo El palo destinado á arder, ó conside entre ellas esta diferencia: con la pre rado bajo este respecto, se llama leña. posición para se explica mas directa Todo el mundo sabe la diferencia que mente el poder ó la influencia del moti hay entre cortar madera y cortar leñai vo ó de la acción en el efecto; con la entre partir madera y partir leña. Las preposición por se explica mas directa maderas mas preciosas llega tiempo que mente la intención, ó el objeto con que no sirven sino para leña. se ejecuta la acción. Y así aquella se Un palo es un pedazo de aquella ma aplica con mas propiedad, cuando se su teria, v. g., el tronco de un árbol, que pone suficiencia en la acción ó seguri puede destinarse para labrar ó para ar dad de su efecto, y ésta cuando se su der. Si lo destinamos para labrar, lo pone solamente probabilidad ó posibili llamaremos un madero: si lo destinamos dad de su logro. para arder, será un Uño. Muevo los pies para andar. Ando (Jonama.) por ver si puedo dormir mejor. Salgo de casa para ir al prado, en donde me PARA, Á FIN DE.—Son sinónimos en el sentido en que significan que se hace pasearé un poco por disipar la melan colía. una cosa con la mira de otra, con la di {L. de la Huerta.) ferencia, de que para denota una mira mas cercana ó presente, y à fin de, una PARALOGISMO, SOFISMA. — Estas voces mas lejana. son puramente griegas. La primera de Se presenta uno delante del príncipe signa un engaño obrado por racioci para hacerle la corte; se le hace la cor nios artificiosos, por argumentos capcio te ά fin de obtener gracias. sos, por conclusiones falaces. Sofisma Parece quedara conviene mejor cuan designa un fraude cualquiera, la sutile do la cosa que se hace con la mira de za, la astucia. El paralogismo y el so otra es cosa mas infalible de ella, y que fisma inducen á error; aquel por defec afin de está mejor cuando la cosa que to de luces ó de aplicación, y éste por se desea haciendo otra, es consecuencia malicia, por una sutileza maligna. menos necesaria de ella. (A. Cienfuegos.) Se tira un cañonazo contra una mu ralla para abrir brecha, y ά fin de to PARARSE, DETENERSE.—Me paré algun marla por asalto ú obligarla á rendirse. tiempo en aquella ciudad para ver sus Para es relativo mas particularmen curiosidades; oí que me llamaban y me te á un efecto que debe producirse. A detttve al instante; son frases con que el fin de, es relativo propiamente á lo que uso común suele confundir estos dos uno se propone. verbos. Las mujeres á cierta edad hacen ya El primero representa el acto mo cuanto pueden para agradar, ά fin de mentáneo de suspender el movimiento encontrar marido. (March.) ó la acción; el segundo representa la sus pension continuada por algun tiempo, PARA, POR.—Cuando se emplean para ex de la acción ó del movimiento. plicar la razón ó motivo de alguna ac La acción de pararse un caballo, se ción, son sinónimos; por ejemplo: pro- refiere al momento mismo en que deja PAR ( 12 ) PAR de andar: la acción de detenerse un ca relativa á nuestro modo de percibir. No minante, se refiere al tiempo continua todo lo semejante es parecido; ni todo lo do que tiene suspendido su viaje. parecido para unos lo es para otros. Llegué tarde, porque me detuve mu Aunque la apariencia proviene siem cho tiempo en casa; y no: porque me pre de alguna semejanza, hay cosas muy paré mucho tiempo en casa. parecidas que apenas se asemejan; así he paró en el primer momento mi re como las hay muy semejantes, que no flexion, y después de haberse detenido se parecen tanto. El hombre es muy largo rato á pesar las dificultades, se in parecido a una estatua; pero mucho mas clinó á lo peor. semejante y no solo á un Urang-utang, (L. de la Huerta.) .vino á cualquier otro animal. Con la PARECIDO, SEMEJANTE.—Cuando por al estatua no conviene mas que en los con gún accidente una cosa hace en nosotros tornos de la superficie, cuando tiene una una impresión distinta de la que debie infinidad de relaciones con el animal ra hacer por su naturaleza, y nos hace mas diferente. formar un juicio errado, á esta impre De la apariencia nunca se habla sin sión la llamamos apariencia, y la cosa referirse á las circunstancias. Así se que se nos figura ver se llama aparente. dice: ά mi me parece tal cosa: mirada El verbo parecer es el que denota la ac desde aquí parece tal otra: si se mira ción de las cosas aparentes sobre nues de este modo parece fea; vestidos así no tros sentidos. Un violin bien tocado dejan de parecerse. Es evidente que da sonidos que parecen de flauta; hay en ninguno de estos casos podemos sus cristales que parecen diamantes: el sol tituir el verbo asemejarse. tiene un movimiento aparente alrededor De la semejanza se habla obsoluta- de la tierra. mente. Lo que es semejante para mí lo Cuando reciprocamente comparamos es para todos, de cualquier modo, y á cosas reales con cosas aparentes, á unas cualquiera distancia que se mire. Lo y á otras llamamos parecidas, ó decimos que podrá suceder, que no se descubra que se parecen. Los sonidos que hemos la semejanza, y entonces no será pareci dicho son parecidos, y lo mismo los cris da la cosa; pero no por esto dejará de tales y los diamantes. asemejarse. Parecidas son pues aquellas cosas Todos los hombres son semejantes que hacen una misma impresión á los mios; esto es, sienten y piensan como sentidos. yo, son de una misma especie, y tienen Semejantes se llaman dos cosas cuan unas mismas facultades; pero hablaría do alguna parte ó cualidad de la una es yo con impropiedad si dijese que todos igual á alguna parte ó cualidad de la son parecidos mios, porque ni á mí, ni otra. Las figuras geométricas son se á los demás hombres causan la misma mejantes cuando sus ángulos respecti impresión. Para que de una persona se vos son iguales. Dos personas serán se diga que es parecida á otra, es preciso mejantes si tienen, por ejemplo, una mis que entre las dos haya una gran seme ma talla, iguales ojos, igual nariz: y á janza. {Jonama.) proporción que convengan en mas y mas partes, irán siendo mas y mas se PARSIMONIA, AHORRO, ECONOMÍA.—La mejantes. economía no consiste precisamente en La semejanza es una idea únicamen gastar poco ni mucho, sino en llevar un te relativa á las cosas: la apariencia es buen sistema de gobierno, que propor- 16 PAR ( 1 ) PAT cione el mayor número de goces con el avaricia: en la verdadera economía no menor costo posible. Asi es que un hom cabe exceso. bre parco, un hombre ahorrativo y un (Jonama.) hombre económico son tres cosas no solo PARSIMONIA, FRUGALIDAD.—La parsimo distintas, sino á veces enteramente di nia es un estado del hombre: la. frugali versas. dad es una virtud. La parsimonia consiste únicamente en Aunque todo el que es frugal vive gastar poco: el ahorro en cercenar todo parcamente, hay muchos que viven par io que no sea absolutamente preciso: la camente sin ser frugales. La esencia del economía en no malgastar, en hacer las pordiosero es la parsimonia; y no hay cosas á tiempo, y en proporcionar el cosa mas opuesta á la frugalidad que la gasto al haber. vida desarreglada y generalmente vicio La parsimonia es una idea absoluta; sa de estos miserables; á mas de que la de modo que el peon de albañil que gas frugalidad, como todas las virtudes, su te, por ejemplo, diez reales en comer, pone voluntad libre. vive mas parcamente que el grande que (Jonama.) gaste veinte; aunque el primero no será ASAR, PASARSE.—Tener una existencia nada ahorrativo, y el segundo lo será limitada y acabar, es el destino y cua demasiado. lidad de las cosas que pasan. El estado La excesiva parsimonia, generalmen actual y la revolución de las cosas que te hablando, es enemiga de la economía: se pasan es de caducidad, el estar en una si es forzosa, la necesidad no permite crisis que trae su fin. Pasar se refiere seguir un sistema constante: si es vicio a la totalidad de la existencia; y pasar sa, la avaricia suele perder por un lado se, á las diferentes épocas de la existen lo que quiere ahorrar por otro. cia. Pasar tiene mas relación con el fin Un hombre puede ser ahorrativo sin de la existencia;y pasarse, con la acción ser nada parco ni económico. El que, por de cierta época, de la degradación. Las ejemplo, gusta de comodidades, y al flores y los frutos pasan, no tienen mas mismo tiempo le mide las viandas al co que una estación: se pasan cuando se cinero, escaséala comida á los criados, ajan ó se marchitan. La mayor parte la cebada álos caballos, &c, no es par de los gustos son como las flores, que co, porque gasta mucho; pero es ahor no hacen sino pasar. Casi todos los bie rativo. Si á este mismo los caballos se nes son como aquellas frutas que en co le mueren, los criados le sirven mal, y giéndolas se pasan. Los colores pasan, el cocinero sabe ajustarle la cuenta, con pues tienen una duración determinada; cluiremos que lleva muy mal sistema de y cuando empiezan á bajar y á perder economía. su lustre, se pasan. Del mismo modo El económico puede ser ahorrativo pasa y se pasa la belleza. hasta cierto punto, y aun allegarse á la (A. Cienfuegos.) parsimonia si las circunstancias lo exi gen; pero hay cosas en que la economía PATERNAL, PATERNO.—El primero refie proscribe el ahorro. El pagar bien á los re la idea á las cualidades morales; el criados es un gran punto de economía segundo á las circunstancias físicas. doméstica: el moderar los impuestos lo Decimos '¿mor paternal; entrañas pa es de economía política. ternales, y no paternas: y al contrario, El abuso de lapardmonia es la mise decimos herencia, casa, autoridad pa ria o la mezquindad: el del ahorro es la terna y no paternal. PEN ( 123 ) PEN Si decimos, fulano es tio paterno, ¡ que ha perdido,y las penas que la aguar damos á entender que es tio por parte dan, de lo que resulta una disposición del padre: si decimos que es un tïo ρ a- | análoga á la del dolor. El pesar conti ternal, damos á entender que observa la I nuado produce verdadero dolor; y aun conducta propia de un padre. sin esto, hablando metafóricamente, se La misma diferencia hay, respectiva llama dolor todo pesar que se supone mente, entre maternal y materno, y en muy grande. El hombre tiene dolor de tre fraterno y fraternal. haber ofendido á Dios, dolor de ver mo (G. de la Cortina.·) ¡ rir á sus hijos, se duele de la suerte de sus hermanos. PELIGRO, RIESGO.—El peligro se refiere El castigo que imponen las leyes se á un mal mas inmediato, que el riesgo. llama pena, porque se dirige á mortifi Aquel se aplica siempre á contingencias car el individuo en general, y sin rela de grande consideración: éste se suele ción determinada: la pena de azotes es aplicar á cosas de poca consecuencia. un dolor: la de infamia es un pesar: las Está en peligro de perder la vida el mas de ellas son uno y otro, y por esto soldado que se halla enfrente de una ba conservan su nombre genérico. tería enemiga. Corre riesgo de caer j (Jomrma,) malo el que pasa sin precaución del ca- j lor al frió. El primero se refiere á un j I ΈΝΑ, SENTIMIENTO, DOLOR.—Explican mal mas inminente y próximo que el se- \ estas tres voces Ja diferente impresión gundo. j que hace el disgusto en nuestros áni Juego á la lotería, aunque con el ries- j mos; pero la pena puede aplicarse mas go de perder mi dinero, y no con peli vagamente, y denotar una aflicción, ή gro, que supondría un temor, y un mal disgusto mas accidental, que el senti mucho mayor que el que corresponde á miento, el cual no presenta la idea de aquella idea. una sensación tan profunda como el Un valiente que desprecia los riesgos, dolor. suele arrepentirse de su temeridad á la Por mas voluntaria que parezca, á vista misma del peligro. primera vista, esta distinción, no deja (L. de la Huerta.) de percibirse en la práctica la fuerza con que cada voz se aplica propiamen PENA, DOLOR, PESAR.—Pena es todo sen te á su idea respectiva. El ver pade timiento desagradable. Cuando proce cer á un hombre desconocido, á un mal de inmediatamente de los sentidos se hechor, un trabajo de poca considera llama dolor; cuando proviene del espí ción, unaincomodidad, causa pena; pero ritu se llama pesar. Uno y otro se ha estos males son demasiado leves ó ac cen en el alma, y provienen de una cier cidentales, para poder confundirlos con ta disposición ó tirantez de nervios; los que nos causan sentimiento; siendo pero hay la diferencia que el dolor tie tal la extension que damos á la idea de ne una causa física inmediata, como la la pena, que decimos que nos causa, ó aplicación de un cuerpo extraño á los da pena, el trabajo con que habla un órganos délos sentidos,la extravasación tartamudo, la dificultad con que oye un de los humores de nuestra máquina, &c: sordo, para explicar una incomodidad la causa inmediata del pesar es el re que padecemos, un disgusto que sufri cuerdo de las sensaciones pasadas: el mos. alma pesa en algún modo los placeres Nos causa sentimiento la pérdida de PER ( 12 4 ) PER un bien que nos interesa, el mal de un de su duración; es continuo, porque no amigo, la muerte de un conocido. Es se interrumpe jamas su curso. tas incomodidades son demasiado fuer (L. de la Huerta.) tes, para contentarnos con decir que solónos causa pena. PERPETUO, INCESANTE, CONTINUO, PE RENNE , PERDURABLE , INMORTAL , Nos causa dolor la pérdida de un pa ETERNO, SEMPITERNO.—La primera de dre amado, la de un hijo único, la del estas voces expresa una duración sin honor, la de un bien de que pendía toda fin determinado, dependiente solamente nuestra subsistencia; y aunque no pue del tiempo, y no de nuestra voluntad, y de negarse que estos males nos dan perca, trae consigo la idea de una cosa que va nos causan sentimiento; no explican es y viene por sí sola; por lo cual decimos tas voces con tanta energía, como el —movimiento perpetuo, esto es, movi dolor, la profundidad de esta aflicción, y miento cuya duración no depende de la gravedad de sus motivos. nuestra voluntad.—Perpetua memoria, La diferente impresión que causan en esto es, recuerdo que hacemos de una el ánimo estas sensaciones, se puede ex cosa por su misma naturaleza, sin que plicar diciendo, que la pena incomoda, hagamos ningún esfuerzo para acordar el sentimiento aflige, y el dolor abate. nos de ella. Decimos también, "tal em (L. de la Huerta.) pleo, ó cargo, es perpetuo,'''' esto es, debe disfrutarlo la persona que lo tiene PERDÓN, REMISIÓN, ABSOLUCIÓN.—El todo el tiempo que ella viva,y este tiem perdón es en consecuencia de la ofensa, po no depende de su voluntad. y mira principalmente á la persona que Incesante es lo que no cesa, ó lo que la ha hecho; depende del ofendido, y no deja de suceder, por repetirse los ac produce la reconciliación cuando since tos, y así decimos "quejps, súplicas, ramente se concede y sinceramente se ruegos incesantes.'''' pide. Continuo se aplica propiamente á una La remisión es en consecuencia del serie de actos ó de cosas que tuvieron crimen, y tiene una relación particular principio, y se siguen unos á otros sin con la pena con que merece castigarse; interrupción. La diferencia esencial que la concede el príncipe ó el magistrado, hay entre perpetuo, incesante y continuo é impide la ejecución de la justicia. es, que el primero deja ilimitada la du La absolución es en consecuencia de ración futura; el segundo no admite in la falta ó del pecado, y concierne pro terrupción; y el tercero expresa una piamente al estado del culpable; se pro cosa empezada y seguida, como cuan nuncia por el juez civil ó por el minis do decimos "continuación de una obra, tro eclesiástico, y restablece al acusado de un trabajo &c." ó al penitente en los derechos de la ino Perenne es todo lo que dura ilimita cencia. damente sin interrupción, pero exclu- (March.) ye la idea de precipitación ó celeridad, y por eso se aplica este adjetivo con PERPETUO, CONTINUO.—Perpetuo, repre tanta propiedad á una fuente cuya cor senta una duración indeterminada; con riente es mansa, apacible, y nunca in tinuo, una duración no interrumpida. terrumpida. El movimiento de un planeta es per Perdurable se dice de todo lo que petuo, porque no conocemos el término principió, y es capaz de durar ilimita- PER ( i: 5 ) PLA damente; pero este adjetivo hace con Esta viña me correspondía á mí, pero cebir la idea del deseo, y por lo mismo se ha adjudicado, en la partición, á mi siempre se toma en buen sentido. Así, hermano. decimos "vidaperdurable." en lugar de Cada uno toma lo que le pertenece. "vida que esperamos comience alguna A cada uno se le da lo que le corres vez y nunca tenga fin;" esto es, la eter ponde. na bienaventuranza, y nunca decimos, (L. de la Huerta.) "penas, ó desgracias, ó trabajos perdu PETARDO, CHASCO.—Ambas voces expre rables.'''' san el éxito ó resultado de una cosa, Inmortal es lo que no está sujeto á contrario á lo que se esperaba; pero con morir, inspírala idea del merecimiento, la diferencia de que el chasco puede ser y aunque en sentido físico, solo se re casual, mientras que el petardo siempre fiere á la vida, en sentido moral se apli es premeditado: aquel es inocente, ó in ca á cualquiera cosa que por su bondad diferente á lo menos; este siempre es nunca debe perecer; y por eso decimos malicioso. "gloria, fama inmortal." Todo lo que Por esta razón llamamos chasco á la merece ó deja una larga y gloriosa me burla inocente y ligera que se hace por moria es inmortal. puro entretenimiento y diversion; y lla Eterno es lo que no tiene principio mamos petardo á cualquiera acción con ni fin; ó á lo menos, lo que no puede te traria á nuestras esperanzas, ó á nues ner fin, sean cuales fueren las circuns tros cálculos, siempre que advertimos tancias de la cosa, y tanto en lo físico en ella malicia por parte de la persona como en lo moral; y así, decimos indis que la ejecuta. tintamente, "Dios eterno, tormentos eter Así es que nos valemos frecuente nos, penas eternas, monumento eterno." mente de la voz petardo para expresar Sempiterno refuerza y determina más cualquiera estafa ó cualquier engaño, la idea excluyendo absolutamente el principalmente cuando se reduce á pe principio lo mismo que el fin. dirnos prestada una cosa con intención Eterno expresa propiamente la du de no volvérnosla. ración del tiempo; inmortal, la duración Decimos "buen chascóme he llevado de la vida; sempiterno, la duración de la este año con la siembra del lino," y no existencia. (G.dela Cortina.) buen petardo—"fulano es un tunante que vive de pegar petardos," y no chas PERSEVERAR, PERSISTIR.—Dícese per cos. severar cuando se continúa la cosa sin (Cr. de la Cortina.) querer hacer mudanza ó variación. Per PLACER, DELEITE.—Todo lo que excita sistir cuando se persevera con constan nuestro contento, nuestra satisfacción cia y obstinación. Así pues, persistir y alegría, sin mezcla de disgusto, es cau es mas que perseverar. {March.) sa de placer. El deleite representa par ticularmente el gusto material que per PERTENECER, CORRESPONDER.—Perte cibimos por nuestros sentidos. necer supone la propiedad; corresponder El placer supone serenidad en el áni declara el derecho á la propiedad. mo, ocupado enteramente con el obje Esta casa perteneció al convento de to que excita en él una apacible satis San Gerónimo, hasta que la compró mi facción. El deleite puede suponer el padre. gusto material de un ánimo inquieto, PLE ( 126 ) POR que satisface una pasión violenta, sin liase comprendido en una de las dos cla aquella apacible serenidad que consti ses, diría cuál de ellas puede convenir tuye esencialmente lacalidaddelpface/-. al hombre de bien. Las tiernas caricias de un hijo, las (Jonama.) delicias del campo, una compañía en POBRE, MENDIGO.—Estas voces no son que reina la alegría y la cordialidad, son sinónimas, porque nadie ignora que po motivos de placer. Un manjar delica bre es el que carece de lo necesario, y do, un lecho cómodo, un gusto que sa mendigo el que pide limosna, con nece tisface la sensualidad, son motivos de sidad ó sin ella; pero la caridad mal en deleite. tendida, á que se ha ido apoyando el No merece el nombre de placer la uso, las ha hecho ya sinónimas; de modo bárbara satisfacción del que en el furor que se dice: se recogen los pobres: no de la venganza, se deleita con la vista he encontrado, no he visto ningún po de la sangre de su enemigo. bre: en este Lugar no se permiten poire*. (Z.. de to Huerta.) El uso de estas voces ofrece una prue ba de la influencia que puede tener el PLEBE, VULGO.—Plebe representa sim lenguaje sobre la imaginación, porque plemente la clase inferior del pueblo. el que se deja llevar de la idea que ofre Vulgo representa esta misma clase como ce la voz pobre, cree siempre haber em revestida de las calidades bajas y comu pleado bien su caridad, dando limosna nes que son propias de ella. á un mendigo, y no se le ofrece la idea Así es, que plebeyo y vulgar no son de que, así como la limosna que se da á sinónimos, porque plebeyo se contrapo los pobres puede fomentar el trabajo y ne á noble; esto es, se refiere á la cla disminuir la pobreza; asila que se da á se; y vulgar se contrapone á culto, ins los mendigos, puede fomentar la ociosi truido, ó que no tiene las inclinaciones dad, y es un medio seguro de multipli y modales que son propias del vulgo; car su número; pues ellos miden la sen esto es, se refiere á las calidades. sibilidad pública, por la facilidad con Hay mas vulgo del que parece, se de que se confunden estas dos voces,y pre cía con propiedad en este sentido, an fieren á una ocupación laboriosa, una tes que fuese tan general la inclinación profesión libre y cómoda, que tiene so á parecerse al vulgo. bre las otras la ventaja de que hay tan (L, de la Huerta.) tos que la respeten y miren como una profanación su desprecio. PLEITEANTE, PLEITISTA.—En estas dos El mendigo que puede trabajar, es un voces la analogía de la terminación está ladrón de profesión, que roba al verda exactamente conforme con eí uso. dero pobre, y el que, con una caridad Pleiteante es el que pleitea, así como mal entendida,le da limosna,es un cóm amante es el que ama, copiante el que plice de su robo. copia, &c. (L. de la Huerta.) Pleitista es el que hace profesión de pleitear, siguiendo la analogía de oculis PORQUE, PUES.—Estas dos voces son si ta, fisonomista, papista, jansenista, que nónimas, cuando se emplean para ex todos representan una profesión. poner la causa ó motivo de una aser Un vizcaíno ó un castellano podrán ción; por ejemplo: espero que mi hijo ser pleiteantes: los catalanes y gallegos ha de dar gusto á sus gefes, porque tie tienen fama de pleitistas. Si no me ha- ne aplicación y buena conducta, y no PRE ( 127 ) PRE dudo que hará fortuna, pues ahora se Los papas sus predecesores: su prede premia el mérito. cesor en el trono: su antecesor en la casa: La diferencia que parece hallarse en el sueldo que tuvo su antecesor. tre estas dos voces, es que porque ex Hablaría con mucha afectación el plica una ilación mas cierta, mas posi criado que dijese: esta es la librea que tiva, que no está sujeta á la duda ó á se hizo para mi predecesor. la probabilidad. (L. de la Huerta.) Hay lodo, porque ha llovido; esto es: el lodo es una consecuencia cierta de la PREROGATIVA, PRIVILEGIO.—Lapreroga- lluvia. Es natural que consiga el em tiva es respecto de los honores y de las pleo que solicita, pues parece que tie preferencias personales; viene princi ne mediadores; esto es: el logro del em palmente de la subordinación. Elp-i- pleo es una consecuencia probable de vilegio es respecto de alguna ventaja de la mediación. interés ó de empleo, y viene de la con cesión del príncipe ó de los estatutos de Voy á dormir un poco,pues no es re la sociedad. gular que mi amo venga antes de las El nacimiento da prerogativas; los doce, porque sé que está jugando. La cargos dan privilegios. tardanza en venir es probable; el juego (March.) es cierto. (L. de la /Tuerta.) PRESTEZA, PRONTITUD.—Presteza es la POSTURA, ACTITUD.—Postura es el modo actividad del movimiento: prontitud la con que está puesto el cuerpo. Actitud anticipación del tiempo. ó aptitud es el modo de estar mas con El que primero llega á una cita es el veniente para el cuerpo y para cada uno que ha venido mas pronto; el que gas de sus miembros. Postura es un modo tó menos tiempo en el camino es el que de poner el cuerpo mas ó menos con ha venido mas presto. El aire vivo en forme á su costumbre ordinaria. La ac la música se llama presto: una ocurren titud es un modo de tener el cuerpo mas cia á tiempo en la conversación se llama ó menos conforme á las circunstancias un pronto. presentes. La postura, aun la mas có (Jonama.) moda, no deja de costar algún esfuerzo, PRESUNCIÓN, CONJETURA.— Presunción y se varía; pero la actitud, aun la me es la acción de presumir de tomar ade nos ordinaria, es conforme á la natura leza y á la conveniencia de las cosas, y lantadamente una opinion. Conjetura se mantiene. La postura nota la posi viene de conjectare, echar ó lanzar, con ción, y ésta es movible. La actitud de agorar, adivinar, interpreter, con alu signa el continente de una persona, el sión á la acción de tirar los dados, de cual es firme. Uno que padece no hace sacar las suertes. Es, pues, conjetura sino mudar posturas. Las actitudes son dicha así de una cierta dirección de la modos de ser dados; las posturas se bus razón acia la verdad, pero con la idea can y suponen movimiento. de acaso, de agüero. La presunción es una opinion fundada en motivos de cre (A. Cienfuegos.) dibilidad; la conjetura no tiene por fun PREDECESOR, ANTECESOR.—El primero damento sino meras apariencias. La pre parece mas propio para las dignidades; sunción tiene mas fuerza de razón que el segundo para los oficios y demás es la conjetura, y forma una preocupación pecies de ocupaciones. legítima, mientras que la conjetura no PRE ( 128 ) PRO pasa de un simple pronóstico. La pre ha. prevención se hace siempre de su sunción tiene realidad, porque se funda perior á inferior; la advertencia se pue en hechos ciertos, en verdades conoci de también hacer entre iguales: pero ni das, en principios de pruebas. La con la una, ni la otra, se pueden hacer de jeturaos ideal, porque se deduce por inferior á superior, porque á este no se discursos, por interpretaciones y supo le previene, ni se le advierte lo que debe siciones. La presunción nace de las co hacer; se le expone ó se le representa. sas; la conjetura de la imaginación. Las (i. de la Huerta.) probabilidades que sin probar directa mente la verdad, establecen una gran ROBLEMÁTICO, DUDOSO, INCIERTO. verisimilitud, forman las presunciones. Del griego problema, proposición que Las conjeturas estriban en relaciones va hay que poner en claro, viene problemá gas, inducciones violentas, y analogías tico. Dudoso viene de dubius, que se imperfectas. compone de duo y de via, y designa lo (A. Cienfwgos.) que tiene dos caminos. Incierto es lo no cierto, lo que puede ser impugnado, PRETENDER, SOLICITAR.—Pretender ex lo que no tiene una verdad irresistible. plica solo la acción de aspirar á una No hay razón para fallar en las cosas cosa, ó con justicia ó por gracia. Soli problemáticas: no hay motivos suficien citar representa las diligencias y medios tes para tomar partido en las cosas du de que nos servimos, y pasos que da dosas: no hay bastantes razones para mos para conseguirlo. creer en las cosas inciertas. En el pri Un caballero que reside en una pro mer caso el ánimo se halla indiferente vincia, pretende en Madrid que se le para el pro y para el contra. En el se confiera un empleo, ó se le declare una gundo se ve embarazado entre el pro y posesión: y no pudiendo abandonar su el contra; y en el tercero ve el pro y casa y familia, encarga á un apoderado teme el contra. La opinion es libre en ó á un amigo, que lo solicite en la se las cosas problemáticas: es difícil la elec cretaría, ó tribunal á que corresponde. ción en los casos dudosos: acerca de los En este caso, ni el caballero solicita, ni objetos inciertos no tenemos mas que una el amigo pretende. opinion. Se busca la solución de lo (L. de la Huerta.) problemático, la verificación de lo dudo so, la confirmación de lo incierto. De PREVENCIÓN, ADVERTENCIA.—Son sinó ben adquirirse ideas claras de lo proble nimos, cuando significan orden, consejo, mático, sobre lo cual no sabemos qué ó aviso anticipado; pero la prevención pensar: razones sólidas respecto de lo lleva consigo la idea de autoridad, ó de dudoso, de que no tenemos sino ideas precepto; la advertencia lleva consigo precarias: pruebas constantes de lo in la idea de buen deseo, ó de consejo cierto, á que no nos resolvemos á dar amistoso. fe. Una verdad aventurada es proble El general hace sus prevenciones á los mática: una verdad altamente impugna oficiales del ejército, y exige que se ar da parece dudosa: una verdad puramen reglen á ellas. El joven que no se ar te creíble es todavía incierta. regla á las prevenciones que le hacen (A. Cienfuegos.) sus superiores, ó cierra los oidos á las prudentes advertencias de los hombres PROCEDER, PROVENIR.—Uno y otro ver experimentados, que le quieren bien, bo explican la causa de una cosa; pero se expone á muchos desaciertos. el primero determina rigurosamente la PRO { 129 ) PRO causa eficiente ó directa; el segundo de- ¡ á conocer. Proferir es pronunciar pa termina la causa motiva ó impulsiva. í labras en voz alta é inteligible. Articu El mal olor del estanque procede de \ lar es pronunciar distintamente, ό no las materias corrompidas que hay en el, ! tar las sílabas uniéndolas unas con otras. y proviene del descuido del jardinero, ι Pronunciar es expresar ό darse á enten que no lo limpia, y renueva sus aguas. ! der por medio de la voz. Solo el hom- De aquí es que, sin separarnos de la i>re profiere palabras, porque él solo ha idea propia y rigurosa del verbo, deci bla para expresar pensamientos. Algu mos que el hijo procede del padre, y no nas aves, los papagayos sobre todo, ar- que proviene. //cttfriftj'perfectamente sílabas, y aun vo· (L. (le la Huerta.) »es enteras. La diferencia de climas y de hábitos hace que unas naciones no RODUCCION, OBRA.—Producir es sacar i puedan pronunciar lo que otras pronun afuera una cosa, engendrar, crear, sacar cian facilísimamente. Una persona cor de si. Decimos las producciones de la · tada no puede proferir una palabra. tierra, de la naturaleza, del entendimien- i (A. Oienfuegos.) to, de toda causa que produce por sí misma, que da ser a 1 :> que no le tenia. PROMESA, OFERTA.—La oferta es una de Obra es del latino opa :i, trabajo, lo que mostración del deseo con que nos halla obra la industria. En las producciones mos, ó afectamos hallarnos, de que se se considera la sustancia de la cosa;pero admita, ó se reciba, el servicio ó la cosa en las obras la forma. La producción y quç. se ofrece. La promesa es una obli la obra contrapuestas difieren como el gación, que nos imponemos, de hacer productor y el obrero, de los cuales aquel algún servicio, ó de dar alguna cosa. da el ser, y este trabaja la producción El que ofrece con poca voluntad de ó la cosa producida. La producción es dar, se expone á que se le admita la obra de la fecundidad; la obra es el re oferta. El que promete con voluntad, ó sultado del trabajo: la producción sale sin ella, debe cumplir su promesa. del seno de la causa productiva, y la Por eso no decimos, que se admite obra de las manos del obrero industrio con agradecimiento la promesa, y se exi so. La producción recibe el ser, y la ge el cumplimiento de la oferta: sino obra la forma. El árbol es una produc que se admite con agradecimiento la ción de ia tierra, y es obra de carpinte oferta, y se exige el cumplimiento de la ría por el trabajo del carpintero. El uni promesa. verso es la producción de un poder in En la voz oferta solo se descubre la finito, y es obra de una sabiduría supre voluntad del que ofrece; en la vez pro ma que ha dado á la materia las formas mesa se descubre la aceptación de aquel y la disposición maravillosa que tiene. á quien se ha prometido. Me ha ofrecido su casa, pero yo no (A. üienfuegos.) la he aceptado. Me ha, prometido ve nir á la mía, y espero que no faltará ä ROFERIR, ARTICULAR, PRONUNCIAR.— su palabra. Proferir es llevar afuera, echar delan (Ir de la Huerta.) te, del latino ferre. Articular es enla PRONUNCIAR, ARTICULAR.—Pronunciar, zar, unir una cosa con otra, del latino es formar las palabras, las sílabas y las articulus,diminutivo de artus, que signi letras, con la voz natural. Articular, fica miembro Pronunciar es anunciar es distinguir bien unas sílabas de otras. á las claras, exponer abiertamente, dar } 17 PRO ( 130 ) PRO para dar mas claridad á lo que se pro- \ Proverbio.—Los proverbios de Salo nuncia. mon. Un tartamudo puede pronunciar bien Adagio.—Dime con quién andas y te cada silaba; pero, precipitando unas ve diré quién eres.—Por un clavo se pierde ces, y retardando otras, su debida sepa una herradura, por una herradura un ca ración, articula mal. ballo, por un caballo un caballero. La perfección del que habla está en Refrán.—A rio revuelto, ganancia de pronunciar con claridad, y articular con ¡ pescadores.—Si el guardian juega ά los distinción. La perfección de una len- ι naipes, ¿qué harán los frailes?—Ahí me gua exige que cada letra tenga su pro- j las den todas.—A la vuelta lo venden tin nunciacion propia, para evitar ambiguë- j to.—A otro perro con ese hueso. dades semejantes á la que en la nuestra Tanto el proverbio como el adagio y nos expone á confundir lo vasto con lo el refrán, tienen por objeto dar precep basto, lo benéfico con lo venéfico. tos útiles para el régimen de la vida, (L. de la Huerta.) pero todos se diferencian en el modo. Los proverbios de Salomon, son bien di PROPICIO, FAVORABLE.—Propicio es lo ferentes de los refranes de Sancho, aun que está dispuesto á favorecer. Favo que unos y otros se dirigen al mismo rable es lo que de hecho favorece. fin. Sin embargo, la palabra refrán trae El reo tiene propicio al juez que le consigo la idea déla repetición frecuen mira con indulgencia, y desea que haya ¡ te, y así decimos hablando de una per algún medio de salvarle: y le tiene fa sona—es su refrán favorito, y no su pro vorable, cuando éste da un voto á su fa- j verbio ni su adagio.—Conocemos mu vor, ó usa de todos los medios ó con- ' chos proverbios y adagios de los antiguos descendencias, que pueden directamen pueblos del Asia, pero no sabemos sus te contribuir al buen éxito de su causa. refranes. Como el primero de estos adjetivos {6. de la Cortina.) solo representa un acto de la voluntad, no se puede aplicar con propiedad á lo 'ROVERBIO, REIRÁN, ADAGIO.— Estas que no la tiene; pero el segundo se apli voces son sinónimas en cuanto signifi ca generalmente á todo lo que favorece can una sentencia breve, que contiene con voluntad ó sin ella. algún precepto moral, ó de conducta Un ministro está propicio. El vien particular; pero hallo la diferencia que to está favorable. el adagio es mas vulgar que el prover [L. de la Huerta.) bio, y de una moral menos austera, y PROVERBIO, ADAGIO, REFRÁN.—El pro que el refrán da siempre la instrucción verbio es una sentencia, un consejo, ó por medio de alguna alegoría ó me un precepto serio, casi siempre moral y táfora. expresado en estilo cnlto. Ademas el proverbio es grave y seco; El adagio es una sentencia ú obser el adagio sencillo y claro, el refrán agu vación llena de agudeza muchas veces do, chistoso, y muchas veces de un es epigramática, pero en estilo culto y tilo bajo. siempre moral. En rigor todo refrán y todo adagio es El refrán es también una sentencia, 1 proverbio; pero no hablaría con propie pero popular, festiva y casi siempre me dad el que llamase adagios ó refranes tafórica, aunque no siempre moral.— · á los proverbios de Salomon. Ejemplos.— j (Jtmama.) PUB ( 131 ) QUE PRUEBA, ENSAYO, EXPERIMENTO.—Es- ! Publicar recae siempre sobre una cosa tos tres términos son relativos al modo ; que realmente existe. Divulgar puede con que se adquiere el conocimiento de \ recaer sobre una cosa falsa, que se in ios objetos. venta con algún fin. Haremos pruebas para conocer; ens«- i Un tramposo, que vive con ostenta yos para escoger y acertar; experimentos ! ción, divulga que es rico, y teme que se para saber. ; publique que es pobre. Con los experimentos, nos asegurare- ; (L. de la Huerta.') mos si la cosa es cierta; con el ensayo, PUESTO, SITIO, PARAJE.—Puesto, dice un cuáles son sus cualidades; con la prueba espacio pequeño y determinado. Sitio, si tiene las cualidades que la atribuimos. una extension indeterminada, de que Hablando, pues, de un químico, diré- ! pueden hacerse muchos puestos. Para mos, que ha hecho el experimento de je, no se limita á espacio alguno, y de ciertas sales, para saber si realmente ! termina mas propiamente la situación tienen la fuerza atractiva que deseaba; ¡ local del puesto ó del sitio. que ha hecho el ensayo de dos minérale? • para escoger el que mas convenga para j ¡Se guarda el puesto; se mide el sitio; un secreto suyo; que ha hecho \u.pri;e- \ pero no se guarda ni mide el paraje, ba de cierta preparación, para conocer ! porque esta voz no representa un espa si puede resistir al fuego sin reducirse ¡ cio, sino una situación. á cenizas. Me ha tocado el mejor puesto que (Marclt,) hay en todo este sitio, porque está en buen paraje. (L. de la Huerta,) PUBLICAR, DIVULGAR.—La idea común, que hace sinónimos estos verbos, es la Q de descubrir un secreto; pero publicar QUERER, DESEAR.—Explican estos ver lo explica la idea absolutamente, sin bos la inclinación de la voluntad á una modificación alguna, esto es, hacer pú cosa que no se posee; pero querer supo blico lo que no era, hacerlo saber á los ne un objeto mas asequible, y en cuyo que lo ignoraban. Divulgar supone que logro tiene mas parte la voluntad, y los el secreto se ha ido diciendo á varias medios que se emplean para conseguir personas ó en varias partes, con alguna lo. En el objeto del verbo desear, pa determinada intención, ó que, contra la rece que tiene menos influencia la vo voluntad del que lo ha confiado con re luntad, y depende menos de los medios serva, se ha esparcido y hecho público. que pueden emplearse para su logro, Se ha divulgado mi casamiento, esto que de la voluntad agena, ó de circuns es, yo no quería publicarlo; pero alguno tancias en que no tiene parte la volun de aquellos á quienes yo lo habia con tad del que desea. fiado, ó que han tenido modo de saber Deseo que mañana haga buen tiempo, lo, ó sospecharlo, lo ha ido diciendo á porque quiero ir á la pradera de San Isi unos y á otros, ha corrido la voz, y lo dro. Deseo ganar el pleito, porque quie saben ya todos. ro fundar un mayorazgo. Un hombre honrado publica con sa (L, de la Huerta.) tisfacción los beneficios que recibe de sus amigos. Un hombre ruin procura QUERER, ESTIMAR.—Estos verbos se sue divulgar con astucia los defectos de sus len confundir en el uso común para ex enemigos. plicar nuestra inclinación á alguna per- QUI ( 132 ) RAP sona; pero querer la explica como diri rado, y que la aplicación propia de las gida por la voluntad, y estimar como di palabras quietud y tranquilidad, es la rigida por el entendimiento, esto es, que indicamos al principio. Una pén como efecto del concepto que tenemos dola que no se mueve está quieta. Una del mérito de la persona. persona que nada teme ni desea está A un enemigo no se le puede querer, tranquila. pero se le puede estimar. No se quiere (G. de la Cortina.,! á quien no se conoce, pero se le puede QUÍMICO, ALQUIMISTA.—Un escritor mo estimar por reputación. derno da el nombre de alquimista á un Una mujer honrada debe hacer mas célebre químico de nuestros dias; ate aprecio del que la estima sin quererla, niéndose probablemente á la etimología que del que la quiere sin estimarla. de. la voz. (L. de la Huerta. ) \ A la verdad, no se puede dudar que quimia y alquimia son una misma voz, QUIETUD, TRANQUILIDAD.—La quietud pues el artículo añadido á una de ellas, es opuesta al movimiento: la tranquili no muda su sentido, porque en los tiem dad á la agitación. Aquella se refiere pos desde los cuales conservamos estas á las cosas materiales; ésta principal voces, se hacia poca distinción de las mente al estado del alma. Se procura ideas que ahora explican una y otra, que un niño esté quieto; que una nación como tampoco se hacia de las operacio esté tranquila. Muchas veces la inquie nes y objetos que hoy las distinguen; y tud indica falta de tranquilidad; y otras así no teman otra denominación latina muchas vemos quieto al que no está que la de Chemia, que trayendo su orí- tranquilo. gen de una voz que significaba ocultar, Pero cuando queremos usar metafóri deja poca duda de la idea que entonces camente de las palabras quietud y tran se tenia de estas operaciones. quilidad, cambiamos la aplicación res Pero en nuestros tiempos, en que el pectiva de cada una, y por este medio adelantamiento de estos estudios ha he damos infinita energía á nuestras ideas; cho variar las ideas, parece vergonzoso v. g. El mar está tranquilo. Esta ex el confundir con estas voces á un quí• presión contiene una comparación filo, mico respetable, que aplica los resulta sófica, pues así como cuando el mar es dos de sus sabias investigaciones á los tá embravecido se dice que está agita útilísimos objetos de la verdadera .qui- do, á semejanza de lo que experimenta mica, con un alquimista, que en la obs el alma cuando la agitan las pasiones, curidad de sus manipulaciones, busca así también lo llamamos tranquilo cuan vanamente la piedra filosofal. do no experimenta ninguna agitación. (L. de la Huerta.) Comparándolo á la alma, debían apli cársele los adjetivos que convienen á R esta. T Del mismo modo decimos—mi alma RÁPIDO, \ ELOZ, ACELERADO.—Estas vo está en una perfecta quietud—esto es, ces rapidez, velocidad y celeridad no son en una indiferencia absoluta para todo otra cosa que \&presteza c onsiderad a bajo aquello que no le interesa; en un estado distintas relaciones. en que nada la mueve ni inquieta. Rapidez considera principalmente la Conviene, pues, no olvidar que en to fuerza impulsiva, y de consiguiente los dos estos casos se emplea el estilo figu estorbos que tiene que vencer la cosa RAR ( 133 ) RAZ movida. Velocidad se refiere mas á la cosa, usamos indiferentemente de estas ligereza que encuentra pocos estorbos. tres voces: es una cosa rara, extraña, Celeridad es una presteza acelerada, 6 singular, suceso raro, singular, extraño; que va aumentando progresivamente. ; pero, aunque las mas veces se aplican fi Una bala de caííon anda con rapidez: guradamente, y por exageración, no se esto es, lleva mucha fuerza, y de consi debe perder de vista la peculiar exten guiente vence con facilidad la resisten sion y energía de cada una de ellas. cia del aire y el impulso de la gravedad. Raro es lo que no es común, lo que La carrera de un galgo es veloz, pues se ve, ó sucede pocas veces, lo que se la suma ligereza de este animal apenas halla con dificultad. Extraño es lo que le deja estorbo que vencer. Ni sus car no es propio, conforme, ó adecuado á nes le pesan, ni su configuración le em la cosa de que se trata. Singular es lo baraza; antes al contrario, todo concur que es único, lo que no tiene igual ó re á que ande sin esfuerzo. ] semejante. Todo cuerpo que se desprende, baja Cuando decimos, que el tener un con celeridad, porque su'presteza va hombre seis dedos en una mano, es una aumentando á proporción que se aleja cosa rara, extraña, 6 singular, no expli del punto de su desprendimiento. camos nuestra admiración con relación Un torrente no puede ser veloz, sino á la misma idea: es raro para quien lo rápido. Una águila bien puede des mira como una cosa poco común, que prenderse rápidatras una palomita;pero se ve pocas veces; es extraño para quien esta solo puede huir con velocidad; ó lo considera como monstruoso, poco bien con celeridad, si el miedo le hace conforme á la natural construcción de sacar fuerzas de flaqueza. nuestras manos; es singular para el que Un hombre que en poco tiempo se lo cree único, y no sabe que ha habido haya elevado á empleo de considera otros hombres que han tenido también ción, no decimos que ha hecho una car seis dedos en una mano. rera veloz, ni que ha ascendido con cele (2λ déla Huerta.) ridad, sino que ha hecho una fortuna rápida: es que fijamos principalmente RAZA, ESPECIE, CASTA.—Cuando quere nuestra consideración en la fuerza del mos expresar un origen común, que se favor ό de la suerte que lo ha elevado, diferencia de otros por ciertos acciden que es lo que nos llama mas la atención, tes que le son propios, y se designan por porque irrita nuestro amor propio. medio de un nombre particular, nos va El hombre que tiene, prisa hace las lemos de la palabra raza; pero ha de ser cosas con celeridad, porque á cada mo necesariamente hablando del hombre ó mento la impaciencia aumenta su pres de los animales. teza: el que está práctico en ellas las Cuando intentamos clasificar los di hace con velocidad; esto es, sin esfuer ferentes individuos, ó los diferentes sé- zo: la suma presteza se llama siempre res que pertenecen á un mismo género, rapidez, porque no podemos concebirla nos servimos de la palabra especie, y la sino imaginando una gran fuerza que la aplicamos á todo cuanto existe. causa. Sin embargo, como la costumbre de (Jonama.) aplicar la palabra raza á los animales la hace parecer poco noble, se prefiere co RARO, EXTRAÑO, SINGULAR. — Cuando munmente la palabra especie hablando queremos encarecer ó exagerar alguna de los hombres, y así se dice la especie REA ( 134 ) REC humana, y no la raza humana: solamen rar; ejecutar es cumplir una cosa confor te para denotar las malas inclinaciones me al plan que antes se habia formado. de una persona, decimos que es de mala Así, pues, realizar hace relación á las raza; pero aun en este caso aplicamos apariencias; efectuar á algún empeño, y á la persona lo que creemos propio de ejecutar á un designio. los brutos, y hablamos en sentido fi (March.) gurado. i REBELDE.,, INSURGENTE.—El insurgente Una especie puede comprender dife usa de su derecho, de su libertad para rentes razas, y por eso decimos.—¿Qué levantarse contra una empresa de agre especie de animal es éste?—Un perro.— sión ú opresión, privación de sus leyes, ¿De qué raza?—Lebrel. &c. ; el rebelde abusa de sus medios La palabra cosía nos indica únicamen para levantarse contra una autoridad te las diferencias accidentales que ofre legítima. ce la especie humana en sus individuos, y que forman, por decirlo así, otras tan El insurgente hace pues una acción tas clases diferentes. Mas como estos legítima ó legal, y el rebelde una acción accidentes no constituyen especies di perversa y criminal. El primero se arma versas, pues consisten únicamente en el contra la opresión y en defensa de la color, en las variaciones del pelo, &c, patria; el segundo por sus fines parti nunca podrá usarse de la palabra casia culares y contra el gobierno legítimo. como sinónimo de raza ó de especie. Aquel resiste al poder enemigo, este Ademas, la palabra casta parece que in ataca al poder tutelar. De aquí la di dica siempre falta de civilización ó de ferencia absoluta entre insurrección y re cultura, ó degradación de facultades in belión. (March.) telectuales, &c. Como la palabra casta designa las di RECIBIR, ACEPTAR.— liecibimos lo que ferencias accidentales, y éstas nos indi nos dan ó nos envían: aceptamos lo que can muchas veces las inclinaciones na nos ofrecen. turales ó adquiridas, nos valemos de Se reciben gracias, se aceptan ser ella para expresar la bondad intrínseca vicios. que cada especie de animales recibe de Recibir excluye simplemente la ne su origen. Así decimos:—"Este perro gativa ó acto de rehusar. Aceptar pa es de buena casta;" y por extension rece indicar un consentimiento ó una para manifestar el recelo que nos inspi aprobación mas expresa. ra una persona, despreciable al mismo Debe uno siempre mostrarse agrade tiempo, decimos también: "¿qué casta cido á los beneficios que haya recibido. de pájaro es éste?" No se debe desechar jamas lo que se ha (G, dB la Cortina. : aceptado. (Marck.) REALIZAR, EFECTUAR, EJECUTAR.—Es RECLAMO, SEÑUELO.—Ambas voces en cumplirlo que se habia tenido por mira cierran la idea de atraer por medio de anteriormente; pero cada uno de estos los sentidos, pero la primera la refiere verbos indica este cumplimiento bajo al del oido; la segunda al de la vista: diferentes puntos de vista. porque llamamos reclamo á la voz con Realizar es cumplir lo que las apa que una ave llama áotra de su especie; riencias daban lugar de esperar; efectuar y por analogía damos el mismo nombre lo que promesas formales hacían espe- no solamente al pájaro enseñado para REC ( i; ) REG que con su canto atraiga otros, sino miento. La gratitud es el reconocimiento también al instrumento que sirve para de un buen corazón, de una alma gran llamar á las aves imitando su voz. de. El que se da prisa á pagar un ser Señuelo es una figurilla con alas que vicio generoso que le hicieron con otro imita á una ave y sirve para engañar á servicio para quitarse el peso del reco las verdaderas y atraerlas al lazo. nocimiento, es un ingrato; y aquel rebo · El reclamo es un medio mas dulce, sa gratitud que no pagando su deuda ni pues que se refiere al clamor: el señue aun atreviéndose á desplegar sus labios lo es mas material, pues que consiste en sobre ello, acompaña á su bienhechor un objeto del arte, como lo indica su en sus placeres, rie en sus gozos, y llora misma etimología, signulum, diminutivo en sus desdichas. El reconocimiento da de signum. lo que debe, paga; pero la gratitud no En sentido moral hacemos uso de am cuenta lo que da, porque siempre debe. bas voces con notable propiedad y ele (A. Cienfuegos. ) gancia. ¡Con qué prontitud no acude un hom RECTO, ÍNTEGRO.—El que no se separa bre, dotado de ternura, al poderoso re de la justicia, es recto; el hombre recto, clamo de la voz de una mujer amable! considerado como inflexible y superior ¡Cuan dulce señuelo son los ojos de esta á la parcialidad ó al interés, es intsgro. mujer cuando expresan una verdadera Esí-ecíoeljuezque, al condenar al reo, pasión! no se deja llevar, ni de la violencia de Y ciertamente, con dificultad podrán su genio inclinado al rigor, ni de la ex presentarse muchos ejemplos de aplica cesiva bondad y sensibilidad de su co ción de voces mas ideológica ni mas fun razón. dada en las leyes de la naturaleza. El Es integro el que, al sentenciar una oído y la vista; he aquí los dos medios causa, no escucha ni las sugestiones de de atracción propios del hombre: solo la amistad, ni el influjo ó el temor del los animales son atraídos por los demás poder, ni los estímulos de la codicia. sentidos. (L. de la Huerta.) (G. de la Cortina.) REFUGIO, ASILO.—El refugio es un re RECONOCIMIENTO, GRATITUD.—El reco curso contra la aflicción, la indigencia ó nocimiento es la memoria, la confesión el riesgo. ElímVoes una protección, de un servicio ó de un beneficio recibi una defensa contra la fuerza y la per do. La gratitud es el sentimiento, el secución. afecto inspirado por un beneficio ó por El hospital es un refugio para los po un servicio. El reconocimiento conser bres; la Iglesia es un adío para los cri va la memoria de las cosas; es el ani minales. mus memor de los latinos. La gratitud conserva esta memoria en el corazón; Busca la nave un refugio en cualquier es su gratus animus. Publicar un be puerto, huyendo de la tempestad que neficio es un acto de reconocimiento; la amenaza: busca en un puerto amigo querer á su bienhechor es el acto pro o neutral un asilo, huyendo de una fuer za superior que la persigue.—(V. Aco pio de la gratitud. Basta ser justo para gerse, Refugiarse.) tener reconocimiento; pero es menester (L. de la Huerta.) ser sensible para tener gratitud. El re conocimiento es el principio de ia gratitud., REGLA, REGLAMENTO.—La regla se re la cual es el complemento del reconoci- fiere propiamente á las cosas que se de- REM ( 1 36 ; REP ben hacer,y el reglamento al modo como i tenecen el primero al verbo mederi, que deben hacerse. En la idea de aquella significa remediar, recuperar, restable entra alguna cosa que participa mas del cer; y el segundo al verbo medicor, me- derecho natural, y en la idea de éste ; dicamentar, dar remedios, poner bajo un alguna cosa que participa mas del dere régimen. Elra?ieLa respuesta se mente debe llamarse gravitar. Una pi hace á una pregunta ó cuestión; la ré rámide ó una estatua decimos que des plica á una respuesta, queja ó repren cansa sobre un pedestal: es decir, que sión. La respuesta debe ser clara, su gravita sobre él. (Jonama.) cinta; la réplica fuerte y convincente. Hay mas mérito en callar al oir una REPOSO, SOSIEGO.—Significan en el sen prudente reprimenda y aprovecharse de tido moral, quietud, tranquilidad, sere ella, que en contestar con una réplica. nidad de ánimo, pero con esta diferen Los escolásticos enseñan á proponer di cia: la idea del reposo excluye absoluta ficultades extravagantes y á dar también mente toda acción; la voz sosiego no la respuestas extrañas. excluye, antes bien supone muchas ve Respuesta tiene mas extension que ces la moderaciony tranquilidad del áni réplica. Se responde á las cuestiones de mo durante la acción. Y así reposo ex las personas que se informan, á las pre plica solamente la tranquila situación guntas de las que esperan gracias ó ser del ánimo; y sonego extiende su rela vicios, á los interrogatorios de los jue ción á la tranquilidad, que el estado de ces, á los argumentos que se proponen un ánimo sereno comunica á las accio en las escuelas, á las cartas que nos es nes exteriores. criben, á las dificultades que nos pro El hombre prudente, que quiere con- ponen, &c. servar el reposo de su espíritu, y tran Réplica es mas limitado; supone una quilidad de su ánimo, es sosegado en su disputa por opiniones ó por diferentes 18 RID ( 138 ) ROS pareceres que se siguen, en los cuales RIQUEZA, OPULENCIA.—La abundancia hay partidos ó intereses opuestos. de bienes es la idea que hace sinónimas Se hace una réplica á la respuesta de estas dos voces; pero la opulencia la re un autor á quien se ha criticado; alas presenta de un modo absoluto: la rique reprimendas de aquellos cuya correc za representa una abundancia relativa. ción no queremos seguir, y á los discur Cuando decimos que un hombre es sos del abogado de la parte contraria. opulento, damos la idea de una grande Se debe enseñar á los niños á dar en abundancia, sin hacer relación mas que lo posible respuestas claras, sucintas y á ella misma. Pero si decimos que es juiciosas, y hacerles conocer que les será rico, damos una idea de la abundancia mas provechoso, honorífico y prudente, de bienes relativa á su estado, á su ca escuchar callando que replicar. lidad, á sus circunstancias. (March.) De un artesano industrioso, que ha adquirido algún caudal con su trabajo, RESTOS, ESCOMBROS, RUINAS.—Estos se dice que es rico, porque lo es relati tres vocablos significan en general los vamente á su estado, y en comparación restos dispersos de una cosa destruida, de los demás de su cía je; pero no se con la diferencia, que restos y escombros dirá con propiedad, y sin exageración, no se aplican sino á los edificios, y que que es opulento. minas supone también que el edificio ó De aquí es, que vivir con opulencia, edificios destruidos son de considera no es solamente gozar de las comodida ción. Se dice los restos de un navio, des que proporciona la riqueza á cada los escombros de un edificio, las ruinas uno, según sus circunstancias; sino vi de un palacio ó de una ciudad. vir con el lujo, lucimiento y ostenta Escombros nunca se dice sino en sen ción, que dan idea de una grande abun tido propio; restos y ruinas se usan en dancia y sobra de bienes. b ntido figurado; pero ruinas en este (L. de la Huerta.) caso, se emplea mas veces en singular que en plural. Los restos de una fortu ROMPER, QUEBRAR.— El verbo romper na brillante; la ruina de un particular, tiene una significación mas extensa, por del estado, de la religion, del comercio. que se aplica á toda acción, por medio (March.) de la cual se hace pedazos de cualquier modo un cuerpo; pero quebrar supone RIDÍCULO, RISIBLE.—Ridículo es lo que que la acción se ejerce determinada debe hacer reir, que no puede dejar de mente en un cuerpo inflexible ó vidrio mover la risa. Risible es lo que puede so, y de un golpe ó esfuerzo violento. hacer reir, pero puede no mover la risa. Se rompe un papel, una tela; pero no Risible se toma en buena y en mala par se quiebra como una taza, un vaso. te; pero ridículo se toma siempre en (L. de la Huerta,) mala parte. Hay cosas que hacen reir, porque son despropositadas, inmodera ROSTRO, CASA, PAZ, SEMBLANTE.—Ros das, desordenadas;, y estas son risibles y tro se dice de los racionales splamente. ridiculas. Hay cosas que deben hacer Cara se aplica á estos, lo mismo que reir para llenar su destino, su objeto, su á los animales y aun á las cosas, y es, fin; y estas son risibles, y no ridiculas: por decirlo así, mas material que rostro, su objeto es el ridículo. pues aquella indica solamente la parte (A. Cienfuegos.) anterior de la cabeza, desde el principio ROS ( i: ) ROT de la frente hasta el extremo de la bar mas á indicar la exterioridad del todo ba; y éste indica las facciones modifica prescindiendo de las partes, como se ve das ya de un modo, ya de otro, lo que cuando decimos ά la faz del mundo en no puede verificarse sino en el hombre. tero, esto es, delante ó en presencia de Por esta razón decimos cara de burro, todos: en paz y en faz (ó en haz, que es cara de mona, y no rostro de burro ni lo mismo), esto es, pública y pacífica de mona, porque en este caso atende mente: á prima faz, esto es, á la pri mos únicamente á la figura material de mera vista: la/a« del sol, de la luna &c, las partes comprendidas en la cara. Si esto es, la figura con que se dejan ver decimos que una persona se cubrió el la luna y el sol, &c. rostro, hacemos concebir la idea de la Llamamos semblante á la manifesta vergüenza, del pudor ó del dolor; y si ción de algún afecto del ánimo en el decimos que se cubrió la cara, no indi rostro; por consiguiente la palabra sem camos mas que el deseo de que no fue blante se refiere á lo moral mas bien que se vista. En sentido figurado nos ser á lo físico. Así decimos componer el vimos de la palabra cara para denotar semblante, esto es, disimular la turba la presencia de una persona y decimos ción ó inquietud, y aparentar seriedad, —se le dije cara á cara: nunca le he vis serenidad ó modestia, &c. Mudar de to la cara: guardar, huir la cara, &c. semblante, esto es, manifestar en el ros En todos estos ejemplos se ve que la tro alteración causada por un afecto del palabra cara, denota, como hemos di alma. Igual uso tiene la palabra sem cho, el efecto puramente material que blante en sentido figurado, pues cuando causa en nuestra vista el modo de pre decimos, "las cosas han mudado de sem sentarse las partes que componen lo que blante," queremos decir que variaron llamamos cara, y por eso decimos cara las circunstancias, y por consiguiente de pascua, cara de pocos amigos, cara deben variar los efectos que de ellas se de vaqueta, cara de vinagre, &c, y aun esperaban. nos valemos de esta voz para expresar (G. de la Orríina.) la superficie ó frente de muchas cosas, como—galon de oro de (ios caras,\acara ROTO, ROMPIDO, QUEBRADO.—limo es el de un palacio. Finalmente, nada pue participio pasivo irregular de romper; y de dar una idea mas exacta de la dife rompido es el participio pasivo regular rencia que hay entre cara y rostro, que del mismo verbo; pero ofrecen diferen las expresiones usuales y comunes—la cias notables. varse la cara, y caérsele á uno la cara Rompido indica violencia, esfuerz ; de vergüenza. de parte del que rompió, y resistencia La/az, cuando se usa en lugar de cara de parte de la cosa rompida. es su sinónimo perfecto, pues no existe Lo roto puede serlo sin que en ello entre ambas palabras mas diferencia, que haya tenido parte la fuerza ni la resis la material de sus respectivas etimolo tencia, en el sentido en que hablamos. gías. Cara se deriva de chara ó che- Por eso decimos—este vestido está roto; ra {*)•>¥ faz de fades. Pero esta última esto es, lo está por el uso, y no porque se aplica con mas frecuencia y propiedad se haya intentado romperlo violenta al aspecto exterior de todas las cosas, mente. Llamamos roto á un hombre y por 'so decimos superficie, que es lo andrajoso: decimos que nunca falta un mismo que sobrefaz. La faz se limita roto para un descosido, y en ambos ejem {*) Mr. Minage deriva la palabra cas-a déí griego kara. plos nos valemos del adjetivo roto, que SAB ( 140 ) SAC nos da la idea indicada. En sentido fi malos caminos á fin de desviarse de gurado decimos—un maniroto, hablan ellos. do de un disipador del dinero, como si Parece que la sabiduría es mas ilus dijéramos—"su mano está ya tan rota, trada, y que la prudencia es mas reser que no puede contener lo que toma en vada. ella." Si en el primer ejemplo llamáse El sabio emplea los medios que le pa mos rompido al hombre andrajoso, y en recen propios para el buen éxito de lo el segundo dijéramos manirompido, da que desea y se conduce por la luz de ríamos á entender que aquel se había la razón. El prudente toma el camino fracturado los huesos, y que éste tenia que cree mas seguro, y no se expone á fracturada ó inutilizada una mano. andar por el que le es desconocido. Tanto lo roto como lo rompido y lo Un antiguo dijo: que es propio de la quebrado, ofrece la idea de la separación sabiduría no hablar sino de lo que se de sus partes; pero indican no solamen sabe perfectamente; sobre todo, cuan te diferentes modos de efectuarse esta do uno quiere hacerse estimar puede separación, sino también otras varias añadirse á esta máxima: que es propio circunstancias que pertenecen al todo de laprudencia no hablar sino de lo que de la acción; por ejemplo; diciendo que puede agradar, principalmente cuando fué necesario romper tal puerta, damos á uno desea hacerse estimar. entender, que se empleó la fuerza; que \_March.) la puerta ofrecía resistencia; que era de materia sólida y fuerte; que la intención SABIO, DOCTO, ERUDITO.—Sabio, se lla era facilitarse el paso; que todo esto fué ma en general todo el que sabe profun damente alguna cosa; y se aplica co efecto de la voluntad, &c; pero si dijé munmente á los que profesan las cien ramos que se quebró la puerta, no da cias. Docto, se aplica particularmente ríamos á entender nada de esto: haría á los que profesan las facultades. Eru mos concebir únicamente una idea ais dito, no supone ni la ciencia profunda lada, producida tal vez por la casuali del sabio, ni ladoctrina profunda del doc dad, sin objeto determinado, y sin nin to, sino una vasta noticia de conocimien guna consecuencia. tos literarios, que requiere mucha lec Cuando decimos que una cosa se quie tura, actividad, curiosidad y memoria. bra, damos á entender que es dura, re Un gran teólogo es docto. Un gran sistente, y que sus partes estallan mas mineralogista es sabio. Un compilador ó menos al desunirse. Se quiebra un es erudito. vaso, un palo, &c, y no decimos que (£. de la Huerta.) se quiebra un hilo, un lienzo, un vesti do, &c. SACRIFICAR, INMOLAR.—En sentido reli (G.dela Cortina.) gioso, se sacrífica cualquiera cosa: no S se inmolan sino víctimas, haciendo sa crificio sangriento de seres animados. SABIDURÍA, PRUDENCIA.—La sabiduría El objeto sacrificado se dedica á la di hace obrar y hablar oportunamente. La vinidad; el inmolado se destruye ó ani prudencia impide obrar y hablar fuera quila en honor de ella. El verbo inmo de tiempo. La primera para conseguir lar viene de mola, nombre de la pasta ó sus fines procura descubrir el buen ca masa sagrada que se ponia en la cabeza mino para seguirlo. La segunda para de la víctima antes de degollarla. no errar el golpe, trata de conocer los Los perseguidores del cristianismo al SAG ( 1 1 ) SAL principio de éste obligaban á los cris SAGAZ, ASTUTO.—El sagaz penetra con tianos á hacer sacrificios en honor de sutileza lo que es difícil de conocer ó los falsos dioses, no haciéndoles inmo descubrir. El astuto oculta con arte ma lar animales, sino únicamente exigien liciosa los medios de que se vale para do de ellos un acto de culto, como el lograr sus intentos. de riuemar incienso, probar las carnes El primero se aplica á buena ó mala sagradas, &c. parte, el segundo supone siempre ma Arístides se sacrifica por su patria licia. sirviéndola aun contra sí mismo, á pe El perro es sagaz: la zorra es astuta. sar de lo ingrata que para él ha sido. Co- El juez debe ser sagaz para descu dro se inmola por ella, alcanzando la brir los enredos de un ratero astuto. victoria sobre sus enemigos, á costa de (L. de la Huerta,.) una muerte obscura é innoble. Es la virtud un sacrificio continuo de SALARIO, ESTIPENDIO, HONORARIO. -— sí mismo; y el hombre no es jamas sino Salario es lo que se satisface á los una víctima inmolada cada dia. criados por el servicio que hacen á sus El que se acostumbrare á sacrificar to amos. dos los dias alguna cosa de sus propios Estipendio el que se paga á las perso intereses, de sus gustos, ó de sus place nas que tienen empleo ó dignidad por el res, llegará en fin á inmolarse, á sufrir estado. las mas duras privaciones, y á hacer los Honorario lo que se paga ó abona á un mayores sacrificios sin esfuerzo alguno. maestro por la enseñanza de una cien cia ó arte liberal. Veránse también padres que se sacri {March.) fican por sus hijos viviendo únicamen te por ellos; pero, ó tiempos! ó costum SALARIO, ESTIPENDIO, SUELDO, SOLDA bres! en nuestros dias se mira esto como DA, HONORARIO.—No me parece muy una locura. En todas partes se ven pa exacto lo que dice March acerca de al dres que por vanidad mas bien que por gunas de estas voces. predilección, inmolan á favor de un pri El salario es la cantidad fija de dine mogénito todos los demás hijos, priván ro que un amo da á su criado en remu doles de unos derechos justos y legíti neración del servicio mecánico de éste. mos que les concedió naturaleza. La voz salario se deriva de la latina so (March.) larium, y ésta de sal, porque fué cos tumbre antiguamente dar en pago á los SAGACIDAD, PERSPICACIA.—Es la saga sirvientes domésticos una cantidad fija cidad la excelencia de un entendimien de sal. to tan despejado, que distingue sin di Estipendio es la cantidad, estipulada ficultad alguna hasta lo mas confuso: de antemano por un trabajo cualquiera, perspicacia es la penetración de un en y así lo demuestra claramente su eti tendimiento tan sutil, que adquiere el mología, pues se deriva de stare y de conocimiento perfecto de lo que hay pondus, estar ó atenerse al peso, ó á la menos penetrable, ha, sagacidad es pe cantidad convenida para pago. netrante, ve de lejos, adivina, prevé; la Sueldo, es la cantidad con que el es perspicacia nada deja por descubrir, ve tado paga á sus empleados, esto es, la á fondo, manifiesta la evidencia. recompensa pecuniaria del trabajo des (March.) empeñado en servicio de la sociedad. SAN ( 142 ) SEC Soldada es el complemento de pago dad, no vean mas que los mejores ejem convenido por servicio mecánico. El plos, y no reciban sino las instituciones significado de estas dos últimas voces mas saludables. está fundado en la etimología. Soldada (March.) se deriva de la latina solídala, y ésta de solidus, entero, moneda de que usaron los SATISFECHO, CONTENTO.— Aunque am romanos, llamada así porque era de va bos términos expresan cierta tranquili lor entero ó redondo, á distinción del dad de ánimo respecto del objeto de su sueldo que inventaron después, cuyo va deseo, el contento manifiesta cierta tran lor era quebrado por contener una frac quilidad que está mas en el corazón. Sa tisfecho es mas propio de las pasiones; ción. Solidare, y solidatus son las eti así es que uno está satisfecho cuando ha mologías de las voces castellanas sol conseguido lo que deseaba, aunque á ve dar, solidar, soldado, &c.,y por eso de ces puede tener mas inquietud después cimos que un hojalatero suelda una pie de estar satisfecho por parte del objeto za cuando la hace entera uniendo las deseado. No siempre por estar satisfe partes ó porciones de que debe cons cho se está contento. tar. Entonces la pieza queda soldada ó completa, En suma; está uno satisfecho cuando ha conseguido lo que deseaba; está con Honorario es la cantidad de dinero tento cuando nada le queda que desear. que se da á un médico, á un abogado, á un maestro científico, &c, en remu La posesión debe dejarnos siempre neración del trabajo intelectual, aun satisfechos; pero solo el gusto y el goce cuando no se haya estipulado de ante tranquilo de lo que ya poseemos, podrá mano, ni se halle sujeta á regla alguna. dejarnos enteramente contentos. La voz honorario hace concebir la idea Un literato laborioso nunca puede es de la nobleza y excelencia tanto del mo tar satisfecho de su trabajo, aunque esté tivo del pago, como de la persona que contento de la elección de la materia que lo recibe. ha preferido. (G.dela Cortina.) (March.) SECAR, ENJUGAR.—Uno y otro expliean SANO, SALTJBLE, SALUDABLE.—Las co sas sanas no dañan; las salubles hacen en general la acción de extraer la hume bien; las saludables salvan de algún pe dad de un cuerpo; pero enjugar repre senta una idea mas limitada, y se aplica ligro, de algún mal, de algún perjuicio; mas propia y exactamente, cuando se así, pues, los tres están en graduación. trata de poca humedad. Lo que está Es interés del gobierno que los sitios mojado, se seca; lo que está húmedo, se destinados á la educación pública estén enjuga. en situación sana, que los alimentos de la juventud sean mas bien salubles que La ropa que la lavandera saca moja delicados, y que nada se economice por da del rio, se seca al sol; pero es preci administrar á los enfermos los remedios so casi siempre enjugarla después en mas saludables. casa, porque regularmente viene algo Pero lo que es también importantísi húmeda. mo, es inspirarles la doctrina mas sana, Se seca una fuente, un estanque, no en cuanto á religion y costumbres, y se enjugan. Se enjuga el sudor, los ojos que sobre sus deberes para con Dios, la húmedos del llanto, no se secan. patria y las diferentes clases de la socie- (L. de ta Huerta.) SEN ( 1 13 ) SEN SECRETO, RESERVA.—Guarda secreto el tenece también al sugeto; pero nace en que calla lo que no debe decir. Tiene algún modo de la reflexion: no es opues reserva el que no dice, ni aun aquello to sino á lo afectado ó buscado; el inge que no está obligado á callar. nio solo conoce sus límites. El secreto es un silencio que nos im Todo pensamiento sencillo es natural; pone la obligación, ó la necesidad. La pero el natural no es sencillo. reserva es un silencio á que nos inclina (March.) la prudencia ó la desconfianza. El hombre de bien debe guardar con SENDA, VEREDA.—Igualmente significan la mayor exactitud el secreto que se le el camino estrecho y poco trillado, di encarga. El hombre prudente debe ha ferente del real. Pero vereda no deja blar con la mayor reserva con personas de explicar mas positivamente un cami que no conoce. no algo mas ancho y frecuentado, una (L. de la Huerta.) comunicación mas conocida y hecha mas de intento, para servir de atajo ó SEMEJANTE, PARECIDO.— La conformi travesía. Senda da idea de un camino dad de figura, de calidad, de propieda mas estrecho, menos conocido, cuyo des, y de otra cualquier especie de cir uso se debe mas al acaso ó al abuso, cunstancias que hay entre dos cosas di que al arte y al cuidado. Senda es siem ferentes, es la idea común que correspon pre un camino para la gente de á pié; de á estos dos adjetivos; pero semejante por las veredas pueden muchas veces ir la explica de un modo absoluto, como carros. Una senda puede no conducir existente, real y verdaderamente en la á parte alguna, una vereda sirve siem cosa misma: parecido la explica de un pre de comunicación. Las líneas que modo relativo, esto es, con relación á dividen las heredades, forman sendas, nuestra percepción, al efecto material que muchas, ó las mas veces, no sirven que causa en nuestra vista, y al juicio de veredas. que ésta nos hace formar de la semejan De aquí es, que á los conductores de za. Triángulos semejantes. Retrato pa los Despachos del Consejo real se les recido. llama verederos, y al Despacho vereda, De aquí es, que semejante se puede con alusión á los caminos de travesía aplicar con igual propiedad á lo físico y por donde andan, para ir á los pueblos á lo moral; pero parecido solo conviene separados del camino real; y á los que con propiedad á lo físico, esto es, á andan extraviados por pasos no conoci aquellos objetos de cuya semejanza pue dos, se les llama asendereados, con alu de juzgar materialmente nuestra vista. sión á los caminos que no conducen á Un color semejante ó parecido. Una lugar ó punto conocido. virtud, una autoridad semejante. (L. de la Huerta.) (L. de la Huerta.) SENSACIÓN, SENTIMIENTO.—Las impre. SENCILLO, NATURAL.—Son dos adjetivos siones que el alma recibe de los objetos que califican los pensamientos y las ex se llaman sensaciones y sentimientos. Si presiones relativas á la naturaleza del me aplican una ascua sobre Ja piel ten sugeto. dré sensación y sentimiento de dolor. Una Lo que es sencillo nace del sugeto y flauta produce en mí una sensación agrá- sale sin esfuerzo; es lo opuesto de lo re dable, y un sentimiento de melodía. flexivo, y solo lo inspira el sentimien Sin embargo no es lo mismo sensación to del hombre. Lo que es natural per- que sentimiento. Cuando los objetos es- SEN ( 144 ) SER tan presentes decimos que hacen sensa cil de cortar, de penetrar, de ser afec ción, y que producen sentimiento: cuan tado. do están ausentes solo pueden producir (A. Cienfuegos.) sentimiento por el recuerdo de las sensa SEPARAR, APARTAR.—Se separa lo que ciones pasadas. La sensación se refiere está unido, mezclado, ó hace parte de mas bien á la acción de los objetos: el un todo. Se aparta lo que toca, está sentimiento no es mas que la percepción junto, ó próximo á otra cosa. del alma, ó el resultado de la sensación. Se separa la paja del grano; se apar Nunca decimos hacer sentimiento, sino ta el pañuelo de la cara. Se separa el producirlo, causarlo, originarlo; porque alma del cuerpo; se aparta una piedra el sentimiento es una operación puramen que impide el paso. te pasiva, que puede muy bien tener (L.de la Huerta.) una causa, pero no un agente. Hay sensaciones agradables y desagra SER, ESTAR.—Al latino esse corresponden dables; pero no sensación de distancia, dos verbos castellanos, ser y estar. de tamaño, de igualdad, de dependen No falta quien los confunda usando cia; porque estas no son mas que ideas indistintamente del uno y del otro; sin generales, y la sensación no puede ser embargo en pocas voces está el uso hecha sino por un cuerpo real y exis mas decidido. tente: en tal caso diremos, por ejemplo, Al que es malo se le aborrece: al que sentimiento de tamaño, producido por la esta malo se le tiene lástima. Las cosas comparación de dos ó mas sensaciones. que están altas se pueden bajar: las que Al efecto que produce en mí una mala son altas se rebajan. El mármol es duro: noticia le llamo sentimiento; porque no el pan esta blando. Un verso puede ser es el sonido de las palabras el que me lleno: un cántaro puede estarlo: una afecta, sino la multitud de consideracio casa puede á un mismo tiempo ser fría nes que se ofrecen inmediatamente á y estar caliente. . mi espíritu, aunque yo no las distinga. De estos ejemplos se colige el verda El sentimiento puede ser físico ó mo dero oficio de los dos verbos y su dife ral; esto es, puede proceder inmediata rencia sinonímica. mente de una sensación, ó ser el resul Ambas convienen en indicar la co tado de una combinación del espíritu. existencia de dos ideas; es decir, en de También puede ser agradable ó desagra notar que el atributo de la proposición dable; pero cuando no va acompañado de está comprendido en el sugeto: cuando ningún adjetivo que lo modifique, siem digo que el pan está tierno, la idea de pre se entiende que es de esta última este adjetivo se encierra en la del pan: clase. si digo que el mármol es duro, en la idea (Jonama.) de mármol comprendo la de dureza. La diferencia consiste en que la co SENSIBLE, TIERNO.—Sensible es lo que existencia denotada por el verbo ser es es capaz de hacer impresión en los sen por la naturaleza del sugeto, y la que tidos, ó de recibirla. Una cosa que ve denota el verbo estar es accidental. El mos por los sentidos ó por la razón, es hombre es débil por naturaleza: está dé sensible en la primera acepción; y un ob bil nor enfermedad: un mismo tintero jeto que es susceptible de sensación ó de no puede ser sino grande ó chico; pero sentimiento, lo es en la segunda. Tier puede estar lleno ó vacío. no es lo contrario de duro, lo que es fá- (Jonama.) SER ( 145 ) SER SER, EXISTIR, SUBSISTIR.—Ser conviene ι absolutamente,sino limitadamente el de á toda clase de objetos, sustancias ó mo la personaque sirve sin libertad, como el dos, y á todas las maneras de ser, ya esclavo. Esta es la idea que explica la reales ó ideales, ó calificativas ó relati voz servitus, que igualmente significa es vas. Existir no se dice sino de las sus clavitud. tancias, y solo para indicar el ser real. Solamente hablando del servicio de Subsistir se aplica igualmente á sus- ! palacio está recibida la voz servidum tancias y á modos, pero con cierto res- j bre, pero en muy diferente sentido; por peto á la duración de su ser, cosa que que no representa el servicio, sino el no expresan los dos primeros términos. conjunto de personas empleadas en él Se dice que son, hablando de formas, eu actualidad. de las acciones, del arreglo, del movi- | La servidumbre del rey; la servidum miento y de todas las relaciones. Se j bre de los señores infantes. dice que existen, tratando déla materia, Un criado no dirá nunca, hablando del espíritu, de los cuerpos y de todos del acto ό ejercicio de servir á su amo, los seres reales. Se dice que subasten, que ha estado en su servidumbre; ni un hablando de los estados, de las obras, oficial á quien el rey ha concedido un de los negocios, de las leyes y estable buen retiro, ó una buena pension, dirá cimientos que hay. que aquel es el fruto de su servidumbre, El verbo ser sirve comunmente para sino de sus servicios. indicar el acontecimiento de alguna mo Con relación á esta rigurosa propie dificación ó propiedad en la cosa: el dad, sfc llama en el estilo forense servi existir no es de uso sino para expresar dumbre, y no servicio, á aquella carga, el acontecimiento de la mera existencia, ó incomodidad forzosa, con que está y se usa el de subsistir para designar un gravada una hacienda, y debe sufrir in voluntariamente su poseedor. suceso de duración que corresponde á esta existencia ó esta modificación. (£, de la Huerta.) Así, pues, se dice que el hombre es in constante: que no existe el ave fénix: que SERVIDUMBRE, ESCLAVITUD.—La escla lo humano subsiste poco. vitud es mas dura que la servidumbre. (March.'} Ésta impone un yugo; aquella una ca dena. La servidumbre oprime la liber SERVICIO, SERVIDUMBRE.—Si es la ser tad', la esclavitud la destruye. En aque vidumbre el acto ό ejercicio de servir, no lla no tiene el hombre nada suyo; en habrá diferencia entre estas dos voces; ésta el hombre es todo de otro. Redu pero la voz latina que corresponde á cido uno al estado de servidumbre queda cada una de ellas, hace ver su diferen como inferior á la especie humana, y en cia, tanto en el sentido recto, como en la esclavitud abatido hasta la condición los secundarios. de los animales domésticos. La servi A mí me parece que el servicio no dumbre humilla; la esclavitud embrute solo es el acto, sino también el ejerci ce. En resumen, la esclavitud es la mas cio déla persona libre que sirve por con dura de las servidumbres. Bajo este con venio ó interés, como el criado, ó por cepto, la servidumbre indica particular gusto ó complacencia, como el amigo; y mente el estado ó la condición del que á esto corresponde la voz latina servi- está sujeto á servir á otro, trabajando á tium. La servidumbre no es el acto, sino favor suyo, y vivir para provecho del solo el ejercicio de servir, ni el ejercicio amo ó del señor. La palabra esclavitud 19 SEV ( 146 ) SIE significa que no está libre, ó que está Según el uso se dice: la severidad de encadenado. Así, pues, la esclavitud es costumbres, el rigor de la razón. en todos sentidos contraria á la libertad (March.) personal. Esta palabra indica propia mente el estado desdichado del hombre SIEMPRE, CONTINUAMENTE.—Lo que se despojado de sus derechos sagrados, y hace siempre se hace en todo tiempo y la otra la condición servil del hombre en toda ocasión; lo que se hace conti sacrificado á los intereses de otro. nuamente se hace sin interrupción y sin (March.) descansar. Es preciso preferir siempre su deber SERVIR PARA, SERVIR DE.—Cervantes al placer. Es difícil estar continuamen usa el segundo como equivalente, ó si te aplicado al trabajo. Para agradar en nónimo del primero, en la segunda par tre amigos es preciso habíar siempre te del Quijote, capítulo XX. "Y dos bien; pero no continuamente. "calderas de aceite, mayores que las (.March.) "de un tinte, servían de freir cosas de "masa;" pero dudo que haya quien imi SIEMPRE, PERPETUAMENTE, ETERNA te esta locución, porque servir para re MENTE.—Hemos dicho que permanen presenta el uso á que se destina, ó en te es lo que dura siempre y sin altera que se emplea una cosa. La pluma sir ción (*) : perpetuo y eterno es lo que dura ve para escribir, los ojos sirven para ver; perpetua y eternamente. pero servir de, representa la equivalen Estos adverbios se diferencian en que cia de una cosa respecto de otra, en siempre γ perpetuamente indican una du cuyo lugar se emplea, como si se dije ración inmensa, ó solo infinita con res se: en lugar ó en vez de. Un sombrero pecto á nosotros ό á las cosas de que suele servir de vaso, el suelo le sirvió de hablamos; y eternamente indica una du cama, el tambor le sirve de mesa; esto ración absolutamente infinita. es, en lugar de vaso, de cama, ó de mesa. La eternidad es incomprensible: siem Y así en el ejemplo de Cervantes se pre y perpetuamente se refieren á un es substituyen las calderas, no á las sarte pacio determinado, y pueden significar nes, sino al acto mismo de freir. una duración muy corta, si se refieren á (L. de la Huerta.) alguna cosa, cuya duración natural sea también cortísima. Hay árboles siem SEVERIDAD, RIGOR.—La severidad se pre verdes ó perpetuamente verdes; pero halla principalmente en el modo dépen no eternamente. sai· y de juzgar; el rigor en el modo de Siempre indica mas bien la sucesión castigar. La primera condena fácilmen del tiempo no interrumpida: perpetua te sin admitir excusa; el segundo ni sua mente se refiere á la existencia de algu viza la pena ni perdona cosa alguna. na cosa en que la otra, de que estamos Los falsos devotos no tienen severi hablando, se supone comprendida ó con dad sino con los demás; prontos á vitu la que tiene mucha relación. perarlo todo, no cesan de aplaudirse á Por esto de un sugeto, que no hace sí mismos. mas de ocho dias que visita continua El rigor no parece bien sino en las mente una casa, se dice qué ahora va ocasiones en que el ejemplo es muy útil; siempre allí; y no puede decirse que va en todo lo demás debe tenerse alguna perpetuamente. Al contrario, de una consideración á la flaqueza humana. j (*) V. Durable, Duradero, Permanente, Estable. SIL ( 147 ) SIM planta se podrá decir que da irutoperpe contribuye con su hipocondría á dismi tuamente; aunque no lo dé masque por nuir el gusto, y la jovialidad de los de- otoño, y de consiguiente no pueda decir mas. se con igual propiedad que lo da siempre. (L. de la Huerta.) Una pension dura nempre si nunca la SIMULACRO, FANTASMA, ESPECTRO.—Si quitan ni la suspenden: es perpetua sien mulacro significa no solo lo que es se do para toda la vida. mejante, del latino similis, sino también Los condenados padecerán siempre lo que es simulado, fingido, contrahe porque nunca tendrán alivio; perpetua cho, del verbo simulare. Se han llama mente porque su pena durará tanto como do particularmente simulacros los ídolos el mismo infierno; eternamente porque ó falsas representaciones de los falsos nunca jamas tendrá fin. dioses; representaciones que no ofrecían La misma diferencia hay entre las vo otra cosa que formas imaginarias de las ces permanente, perpetuo y eterno. Es divinidades. La imagen es una repre permanente lo que no padece alteración; sentación fiel de un objeto, y particu perpetuo lo que dura toda la vida, ó larmente es obra de la pintura; la esta mientras subsista otra cosa déterrai na tua es la representación de bulto en re da; eterno lo que nunca se acabará, ó lieve de una figura, y pertenece á la es nunca tuvo principio. cultura; el simulacro es una representa (Jonama.) ción falsa ó tosca, informe, vana, que no presenta sino un objeto desfigurado, SIGNO, SEÑAL.—El signo da â conocer y si el objeto existe ó ha existido. Se á veces es natural; la señal advierte y dice un simulacro de ciudad, de virtud, siempre es arbitraria. &c, para indicar falsas ó vanas aparien Los movimientos del rostro son co cias. El simulacro vano, el de un obje munmente signos de lo que pasa en el to no real, viene á ser sinónimo de es- corazón; la campanada es una señal que pectro y de fantasma. Fantasma (voz llama al canónigo á la iglesia. griega cuya raíz designa claro, lumino Con los mudos y sordos se explica so, aparente), se toma en filosofía por uno con signos; y se conviene en cierta la imagen que le forma en la mente señal para entenderse con los que es cuando los objetos afectan nuestros sen tán lejos. tidos. En el uso común es una aparición (March.) fantástica, esto es, imaginaria, obra de la fantasía sin ninguna realidad. Aplí SILENCIOSO, TACITURNO.—Silencioso es case esta voz á todo objeto destituido de el que habla poco y con moderación. realidad, y á todo pensamiento que ca Taciturno es el que habla poco y con rece de razón. Espectro es una figuraex repugnancia. Aquel puede serlo con traordinaria que vemos ó creemos ver; tra su genio, por prudencia, por interés, pero figura horrible, espantosa. Se dice por obligación; este lo es siempre por de los objetos que se aparecen, y de las carácter, por hipocondría, ó por natu personas desfiguradas que no parecen ral inclinación al silencio. humanas en su figura. El simulacro es Es el silencioso inútil en una sociedad la apariencia falaz de un objeto vano: de gente divertida, porque contribuye fantasma es el objeto fantástico de una poco por su parte á hacerla agradable; vision extravagante: espectro es la figu pero el taciturno es mas que inútil, es ra ó sombra de un objeto horrible y es gravoso, porque inspira desconfianza, ó pantoso. El simulacro nos engaña; la SIN ( 148 ) SIN fantasma nos rodea; el espectro nos per traordinario. Propiedades raras, cualida sigue. des exclusivas, rasgos distintivos y úni (A. Oienfuegos.) cos forman lo singular; mientras que el mas ó el menos, el exceso ό el defecto, SINCERIDAD, FRANQUEZA.—El sincero no la grandeza y la pequenez en todos sen oculta la verdad; pero el hombre fran tidos, y bajo toda especie de medidas, co la dice secamente, desnuda, sin es caracterizan lo extraordinario. Lo sin tudio, sin reparo. gular excluye comparación, lo extraor Si la verdad es desagradable, la sin dinario la supone. Se llama singular la ceridad disgusta, la franqueza ofende; ley que está sola en un título. Es sin porque aquella se combina fácilmente gular una lucha de hombre á hombre. con la atención; pero ésta rara vez deja Es extraordinario en los juicios lo que de andar acompañada de la impruden no sigue el método ordinario de enjui cia, y en muchos casos no está muy dis ciar. Llamábase tortura extraordinaria tante de la grosería. (L. de la Huerta.) la que no se aplicaba sino en ciertos ca sos. Un correo ó un embajador extraor SINCERO, INGENUO.— La sinceridad es dinario va encargado en un caso urgente una virtud del que aborrece la mentira. de lo que en cualquier otro caso haría el La ingenuidad es una calidad del que no correo ó el embajador ordinario. Lo un sabe mentir. gular es una especie de novedad; lo ex El sincero lo es por reflexion, por traordinario es una especie de extension honradez; el ingenuo lo es por genio, ó de las cosas. La brújula tiene una pro por falta de malicia. piedad que es singular; el vapor del Sacrifica á la verdad su interés el sin agua hirviendo tiene una fuerza extraor cero, porque aborrece la adulación; el dinaria. Todo hombre que tiene un ca ingenuo, porque no la conoce. rácter propio, tiene necesariamente algo (L. déla Huerta.) de singular; y todo el que tiene un ca rácter enérgico y fuerte, tiene algo de SINGULAR, EXTRAORDINARIO.—Hay algo extraordinario. Un hombre que vive de singular en lo extraordinario, y algo solo parece singular; y uno que vivien de extraordinario en lo singular, sea en do entre las gentes no obra como todos, buena ó en mala parte. Singular es el parece extraordinario. Lo que es con latino singulariSf solo, único, raro, dis trario al uso se llama singular; lo que tinto de los otros, sin concurrencia, sin es poco común en el uso se llama ex paridad. Extraordinario es lo que está traordinario. Lo singular y lo extraor fuera del orden, de la medida común, dinario varían de pueblo á pueblo, y desusado. Lo singular no se parece á aun de hombre á hombre. lo que existe, porque es de un género (A. Cienfuegos.) particular; mientras que lo extraordina rio sale de la esfera á que pertenece, es SINGULAR, PARTICULAR.—Ambos repre particular en su género. Lo singular sentan el individuo de una especie, pero no es del orden común de las cosas, sino se distinguen en que singular le repre que, por decirlo así, forma clase apar senta como único y solo, sin relación á te: lo extraordinario no está en el orden los demás individuos; particular le re corriente de las cosas, es una excepción presenta con relación á ellos, como par de la regla. Hay algo de original en lo te de un todo compuesto de varios in singular, y algo de extremado en lo ex- dividuos, entre los cuales se distingue. SOC ( 149 ) SOL Cada uno de los hombres que existen, cencía; en una palabra, el hombre so es un individuo particular de la especie ciable es el verdadero ciudadano. humana. Si existiese un solo hombre, El hombre amable, dice Mr. Duelos, seria singular en su especie. al menos aquel á quien se da en el dta este Por eso decimos: todos y cada uno en título, es muy indiferente al bien público; particular, y no cada uno en angular, solícito en agradar en todas las concur porque consideramos á cada uno como rencias, adonde su gusto ó la casualidad parte de un número, esto es, con rela le lleva, y dispuesto a sacrificar á ellas ción á los demás individuos que com cada individuo, no ama á nadie, ni es prende la voz todos. amado de ninguno; agrada á todos, y Es una cosa singular, esto es: no exis muchas veces es menospreciado y bus te otra como ella. Es una cosa parti cado por las mismas personas. cular, esto es: se distingue entre las de Las conexiones particulares del hom su clase. bre sociable, son vínculos que le ligan El fénix seria particular entre las aves, mas y mas al estado: las del hombre y singular en su especie. amable no son mas que nuevas disipa (I« de. la Huerta.) ciones que disminuyen otro tanto los deberes esenciales. El hombre sociable SITUACIÓN, ESTADO.— Situación indica inspira el deseo de vivir con él; del hom comunmente algo accidental ó pasaje bre amable se desvia ó debe desviarse ro; estado, algo mas habitual ó perma todo honrado ciudadano. nente. (March.) Situación se usa generalmente con SOCORRER, AYUDAR, ASISTIR.—Se dice respecto á los negocios, la fortuna, &c; socorrer en el peligro; ayudar en los estado para la salud. Así se dice pues: apuros; asistir en los trabajos ó necesi el estado de su salud le puso en situa dades. Socorrer proviene de un movi ción bien apurada. La situación en que miento de generosidad; ayudar, de un me hallo es efecto de la pérdida de un sentimiento de humanidad; y asistir, de pleito. un sentimiento de compasión. Estado, no obstante, puede ser apli Se va al socorro en el combate, se ayu cado á entrambos casos en ciertas cir da á llevar un peso; se asiste á los en cunstancias; pero no así situación. Se fermos. ria mal dicho: la situación de mi salud (March.) no me permite salir de casa. SOLÍCITO, DILIGENTE.—El primero de es (March.) tos dos adjetivos explica la ocupación del ánimo, el cuidado, el esmero que SOCIABLE, AMABLE.—Estas dos palabras ponemos en el acierto, ó brevedad del designan un carácter propio para la so negocio ó empresa, en que estamos em ciedad; pero difieren por otra parte tan peñados ó interesados. El segundo ex to, que esta idea común las hace con plica la ocupación material, los pasos, dificultad sinónimos. los medios que empleamos con activi El hombre sociable tiene las cualida dad para conseguir aquel fin. des propias pava el bien de la sociedad: El pleiteante anda solicito, porque el quiero decir, la dulzura de carácter, la procurador ο,ηόβ diligente. humanidad, la franqueza sin aspereza, Del criado se exige, por la misma ra la complacencia sin adulación, y sobre zón, diligencia, y no solicitud. todo, el corazón inclinado á la benefi- (L. d& la Buerta.) sos ( 150 ) suc SOLILOQUIO, MONÓLOGO.—Estas dos vo La sospecha supone reflexion; el re ces, latina la una y la otra griega, de celo temor ó miedo. Un niño no sospe signan el discurso de uno que habla solo. cha nada, porque le falta la reflexion, EL uso las ha distinguido apropiando al que debe servir de fundamento á su sos monólogo una idea particular que le res pecha; pero recela, porque para esto le tringe al teatro, considerándole como el basta el miedo. Por la misma razón, soliloquio de una persona que, sola en la no se dice de un irracional que sospecha, escena, habla solo con los espectadores. y se dice que recela. El soliloquio es una conversación que tiene uno consigo mismo como si fuera (L. de la Huerta.) con un tercero. El monólogo es una es pecie de diálogo en que el personaje SUCIO, PUERCO, INMUNDO, DESASEADO. hace á un tiempo su papel y el de un —Se dice que una cosa está sucia, cuan confidente. La necesidad de deliberar y de controvertir el pro y el contra pro do no tiene el grado de limpieza que ne duce el soliloquio. El inconveniente de cesita, ó se desea que tenga, pudiendo multiplicar los monólogos ha hecho que no ser sucio lo que en este caso se opo-. se imagínenlos confidentes, papeles pe ne á la limpieza. V. g.: este vaso está gados y ridiculos cuando no son nece sacio de leche, esto es, no debe tener sarios á la acción. la leche que tiene, para que podamos (A. Cienfuegos.) decir que está limpio. Este vestido se despinta y ensucia las manos.—En am SORPRENDER, ENGAXAR.—Hacer caer en bos casos, ni la leche ni el color, son lo falso es la idea común de estos dos cosas sucias aunque ensucian. Otras ve verbos. Pero sorprender es hacer caer por ces se aplica el adjetivo sucio á lo que maña aprovechándose de la circunstan es demasiado susceptible de suciedad; cia de que no atienden á lo verdadero. por ejemplo, se dice que el raso blanco Engañar es hacer caer en lo falso con es una tela muy sucia, porque la menor disfraz,dándole ciertaapariencia de ver cosa puede mancharla. dadero. Se llama puerco, lo que contiene su ciedad que ofende á nuestros sentidos. Parece que sorprender indica mas par Lo inmundo y el sustantivo inmundi ticularmente alguna cosa que induce al cia, suponen corrupción de materias de espíritu á error. Engañar parece de cir meramente alguna cosa que hiere á toda especie, que no solamente ofenden la probidad ó la fidelidad. á los sentidos, sino que son contrarias á la salubridad. Así se dice las inmundi Es difícil que la religion de un prín cias de la ciudad. El carro de las inmun cipe no sea sorprendida por uno ú otro dicias, y no las suciedades ni las por de los partidos, cuando hay muchos en querías. sus estados. Hay gentes á quienes la Desaseado, es el hombre que no prac verdad es odiosa; es pues preciso enga tica las leyes de limpieza personal, ad ñarles para agradarles. mitidas entre la gente de buena educa (March.) ción. Pero este adjetivo nunca se usa en sentido moral, á diferencia de los otros SOSPECHA, RECELO.—Se sospecha el bien ó el mal; se recela el mal, y no el bien. tres que se aplican indistintamente á las Una mujer tiene sospecha de estar em cosas, á las personas, á las costumbres barazada, y recelo de malparir. y á las inclinaciones. (O, de la Cortina.) SUG ( 151 ) SUP SUEÑO, ENSUEÑO.—Sueño es el acto de tion es un modo oculto ó disimulado, de dormir. Ensueño es lo que nuestra iina- inspirar á otro una idea que no tiene. srinacion nos hace ver ó sentir mientras La inspiración es un medio insensible dormimos; y esta es la misma acepción y penetrante de hacer que una persona que tienen las voces latinas sornnus, é conciba ciertos pensamientos 6 senti insomnium, de donde se derivan las cas mientos que le parecen nacidos natural tellanas sueño, y ensueño. mente, y por sí solos, en su corazón. El sueño es necesario para la vida: los La insinuación es un modo sutil y as ensueños no son necesarios para nada, tuto de introducirse en el espíritu de aunque suelen ser muy gratos cuando una persona, y apoderarse de su volun los produce el deseo. tad sin que ella lo note. (G. de la Coriina.) La instigación es un modo estimulan te y efectivo de obligar á alguno á obrar SUFRIR, SOPORTAR.— Sufrir, se dice de contra su voluntad ó su gusto. un modo absoluto: se sufre el mal de La persuasion es obligar á otro á pen que uno no se venga. Soportar perte sar ú cbrar del mismo modo que noso nece mas bien á los defectos persona tros, no obstante sus preocupaciones; les. Se soporta el mal humor délas per pero valiéndonos para ello de discursos sonas que tratamos. y razonamientos agradables y que mue La humildad cristiana hace sufrir los ven el corazón, mas bien que de las ra desprecios sin resentimiento. La bue zones fuertes y de los argumentos que na crianza y la urbanidad hacen soportar se necesitan para convencer. En la per en la sociedad multitud de cosas que suasion tiene mas parte la voluntad que nos desagradan. el entendimiento. Se sufre con paciencia: se soporta con Se sugiere una idea: se inspira un mansedumbre.—(V. Sufrir, Tolerar.) afecto: se insinúa, un adulador: un mal (March.) vado instiga: un hombre dulce y elo SUFRIR, TOLERAR.—La diferencia de es cuente persuade. tos dos verbos, considerados como si (G. de la Cortina J nónimos, es que el primero tiene rela SUPLICAR, ROGAR.—Ambos significan pe ción al esfuerzo físico, y el segundo al dir un favor; pero el primero supone esfuerzo moral. respeto, el segundo supone humildad. Se sufren los dolores; se toleran los El que suplica pide, con justicia ó por desprecios. gracia, lo que depende de la voluntad También se usa figuradamente el ver agena; el que ruega pide siempre por bo sufrir en el sentido moral, y entonces pura gracia, lo que depende de la hon- supone una paciencia mas forzosa, to dad de otro. lerar una paciencia mas voluntaria. Un pretendiente suplica; un pecador Un amo prudente tolera algunas ve mega. ces las faltas de sus criados, haciéndose [L. de la Huerta.) cargo de que estos tienen que sufrir á menudo sus vivezas, é impertinencias. SUPOSICIÓN, HIPÓTESIS.—La hipótesis es —(V. Tolerar, Consentir, Permitir.) una suposición puramente ideal; la su (L. de la Huerta.) posición se toma por una proposición ó verdadera ó declarada, ha, hipótesis SUGESTIÓN, INSPIRACIÓN, INSINUACIÓN, es precaria; la suposición, voluntaria, sin INSTIGACIÓN, PERSUASION.—La suges- fundamento. Se impugna ó combate TAL ( 1 2 ) TEM una hipótesis, como insuficiente para dar nocimientos, y aplicarlos á la dirección razón de las cosas; se niega una suposi y acierto de sus operaciones. Tiene in ción. Tómase la hipótesis por un con genio el que está dotado de viveza y junto de proposiciones ó de suposiciones disposición para hallar recursos y me ligadas de manera que forman un siste dios que no se presentan á primera vis ma. Hipótesis no se usa sino en mate ta, para conseguir un fin. ria de ciencia; suposición entra en la El artífice que construye un instru conversación común. Los grandes mis mento según las reglas del arte que po terios se aclaran por medio áehipótesis; see, y que, en fuerza de su estudio, y las ideas particulares por suposiciones de sus combinaciones y cálculos, le per sensibles ó manifiestas. Hipótesis solo fecciona, tiene talento. Un curioso que tiene un sentido relativo á la explica inventa un instrumento por un puro ción de las cosas; suposición se toma en efecto de su imaginación, sin conoci una acepción moral y en mala parte, miento de las reglas y principios del significando cosa fingida ó inventada. arte, tiene ingenio. (March.) Aquel aprende con facilidad lo que le enseñan, adquiere ideas con el estu dio, y sabe dar razón de lo que apren SUSTO, ESPANTO.—Ambas voces explican de. Éste halla en sí mismo ideas, que una consternación del ánimo ocupado no ha debido al estudio, y muchas ve de pronto por un objeto ó accidente im ces no puede dar razón de lo que sabe. previsto. La diferencia que hay entre (L. de la Huerta.) ellas es, que el susto es análogo al mie do; el espanto al horror ó á la admira TEMPORAL, CONTRATIEMPO, TEMPESTAD, ción. BORRASCA, HURACÁN, TRONADA, &c. Un sueño horroroso espanta á un hom — Temporal es el estado de la atmósfe bre que no tiene miedo. Un pequeño ra con respecto á nosotros, y puede ser ruido asusta de noche á un cobarde. bueno ó malo, contrario ó favorable. La La inesperada explosion de una mina tempestad es un trastorno aparente de la volada, puede espantar á un soldado, el naturaleza, que por lo mismo se llama cual se avergonzará de decir que se también contratiempo; pero esta última asustó, porque este efecto supondría voz es mas general, y se aplica á cual miedo. (L. de la Huerta.) quier otra adversidad ó trastorno de la vida. Τ En una tempestad completa se cubre TALENTO, INGENIO.—La voz talento, en la atmósfera de nubes, se mueven vien el sentido en que se mira como sinóni tos recios con truenos y relámpagos, se mo de la voz ingenio, recae sobre la fa alborotan las olas y las crecientes del cultad intelectual de que está adorna mar; en fin,vemo s varios fenómenos en do un hombre, y de que usa para el ar uno solo. reglo de sus acciones y palabras, para Según consideramos mas particular la exactitud de sus raciocinios, y fun mente uno ú otro de estos fenómenos, damento de sus opiniones. Ingenio es toma la tempestad diversos nombres. Se la facultad con que el alma percibe y llama borrasca con relación al alboroto discurre sutilmente. del mar, y por extension, cuando se Tiene talento el que se halla con lu considera el daño causado en los cam ces y disposición para aumentar sus co- pos por las inundaciones y demás. Se TEN ( 153 ) TEO llama huracán con relación á los vien para el primero, y acaso delicioso para tos: tronada con relación á los truenos; el segundo. y con relación á otros fenómenos toma Lo mismo sucede en el sentido me los diversos nombres de pedrea, grani tafórico: se llaman obscuras las proposi zo, nevada, fyc. ciones difíciles de entender; pero nadie Cuando no se considera particular llamará obscura una oración en una len mente ninguno de esos fenómenos, ose gua que le sea desconocida. consideran varios á un tiempo, conser (Jonama.) va su nombre genérico de tempestad, y lo mismo cuando se considera particu- 'f BÓRICA, ESPECULATIVA.—Lo que cons larmente la gran lluvia por mirarse ésta tituye la significación de estas dos vo como inseparable de la tempestad. ces, es su oposición á practica; pera {Jonama.) cada una representa esta oposición de un modo diferente. TENEBROSO, OBSCURO.—El hábito de ver Todo estudio ó conocimiento sobre la idea de las tinieblas asociada casi materia que no tiene relación alguna con siempre con la idea del miedo, y acaso la práctica, es especulativa. El conoci la semejanza de sonido de las voces ter miento de las reglas de un arte, ó ejer ror, temblor, &c, con la palabra tene cicio práctico, es la teórica. broso, ha hecho creer á algunos que no La especulativa pertenece á los cono podia haber tinieblas sin terror, y que cimientos puramente intelectuales, cuyo de consiguiente un lugar tenebroso nece estudio no se dirige á alguna operación sariamente había de ser terrible y pa material. La teórica pertenece á los co voroso. nocimientos adquiridos, y no practica Sin embargo el análisis nos enseña dos, cuyo estudio se dirige á operacio que ni las tinieblas son necesarias para nes materiales. el terror, ni este es una propiedad ab soluta de las tinieblas. Cuando Moisés El estudio de la historia es especula nos dice que las tinieblas cubrían la faz tivo. Un oficial que ha aprendido la del universo, creo que presenta una idea táctica en su gabinete, y no ha estado muy sublime, pero nada terrible; al con en la guerra, no sabe mas que la teórica trario, muy apacible, muy tranquila, y de su profesión. de un género semejante á la del vacuo La geometría se llama especulativaf y á la de la nada· La escasa luz del in cuando se ocupa, de un modo abstracto, fierno es para nosotros una idea mucho en la demostración de sus verdades; por mas terrible que las tinieblas del limbo. que aquella voz representa un estudio Yo creo que tinieblas significa la to puramente intelectual, pues ni aun con tal carencia de luz; esto es, la obscuri sidera materiales los puntos, medidas y dad absoluta independiente de toda otra stiperficies que sujeta á sus cálculos. cualidad. Así en un lugar puede haber Pero cuando la geometría se ocupa en mas ó menos obscuridad; pero no mas ó la aplicación de sus verdades á las ope menos tinieblas, porque la nada no está raciones que sirven para las medidas de sujeta á cantidad. Por la misma razón los cuerpos y distancias, se llama prac un lugar será igualmente tenebroso para tica, porque representa un estudio que un hombre tímido y preocupado que se dirige á operaciones materiales. para un hombre osado y sin miedo; sin El que, por mera curiosidad, estudia embargo, el mismo lugar será terrible estas dos partes de la geometría, será 20 TIE ( 154 ) TIP especulativo en la primera, y teórico en mismo que ahora; pero ?nundoy orbe eran la segunda. sinónimos entre sí, y al mismo tiempo (L·. de la Huerta.) lo eran unas veces de tierra, y otras de TÉRMINO, FIN.— Término es elfin de al universo. guna cosa material ó inmaterial, y en Hoy dia cada una de estas voces tie este su sentido recto, es sinónimo de fin. ne un sentido sumamente distinto. El fin se refiere á la cosa que cesa: el Tierra es el globo ó planeta en que término á la cosa que se completa. Aquel habitamos. Mundo es el conjunto del no supone, como éste, una extension sol y de los planetas que lo rodean. Orbe determinada del tiempo, ó del espacio. es el espacio que ocupa el mundo. Uni La muerte es el fin de la vida del verso es todo lo que existe, y según se hombre, porque cesa de vivir: es el tér puede creer, está formado de una infi mino de ella, porque con él se comple nidad de mundos. ta la medida que la Omnipotencia ha Los planetas ruedan por el orbe: na señalado á la duración de su vida. ruedan por el mundo, sino que son par (L. de la Huerta.) te del mismo mundo. Órbita se ha lla mado el espacio que abraza un planeta TIERNO, BLANDO.— Tierno, es lo blando, al rededor del sol, ó un satélite al rede delicado, flexible y fácil à cualquiera ex dor de su planeta; de modo que el con traña impresión. Y como estas circuns junto de todas las órbitas es lo que com tancias constituyen también la calidad pone el orbe. de blando, parece que se deben mirar (Jonama.) estas voces como sinónimas. TIPO, MODELO.— Tipo es una voz griega Para distinguir la significación de es que designa propiamente rastro, vesti tas dos voces, me parece que deberá de gio, huella, y por una consecuencia na cirse que tierno es lo que se corta ó rom tural figura, forma, imagen. Esta voz pe fácilmente; blando lo que cede fácil viene del Oriente, y su raiz designa la mente al tacto. acción de herir, de estampar, y por una Una oblea es blanda cuando está hú consecuencia natural la de imprimir. meda, y tierna cuando está seca. Así es que por esta razón se ha llama El pan es blando cuando entra en el do la imprenta tipografía. De esta mis horno, y tierno cuando sale de él. ma raiz tip tap, nasalada, se ha hecho (L· de la Huerta,) estampa y estampar. Modelo viene del TIERRA, MUNDO, ORBE, UNIVERSO.—El latino modus, medida, regla, manera; y sentido de las voces varía conforme el es lo que sirve de regla para alguna cosa, estado de los conocimientos, y mientras las proporciones adaptadas á las cosas, haya confusion en las ideas, la habrá el objeto que se trata de imitar. Así se también en las voces que deben repre dice un modelo de escultura, de pintu sentarlas. Si esto fuese cierto, nuestros ra, &c. El tipo lleva la huella, la im autores del siglo XVI no serian los me presión del objeto: el modelo dala regla. jores maestros de propiedad castellana. El tipo representa los objetos tales co Las voces que forman el asunto de mo son á la vista: el modelo dice como este artículo tenían antiguamente una deben ser los objetos. El tipo es fiel, acepción distinta de la que tienen des porque es tal cual es la cosa: el modelo de que se ha hecho general el sistema es buenc, y se deben hacer conforme copérnico. Es verdad que tierra y uni- á él las ob....s. Se sacan copias del tipo verso significaban lo mismo, ó casi lo por impresión, y del modelo por imita- TOC ( 155 ) TOC don. El impresor ó tipógrafo usa de ti TOCAR, TENTAR, PALPAR.— Ademas de pos en su trabajo; el escultor y el pin lo que acerca de estas voces dice Jona- tor trabajan por modelos. Según Platon, ma, y para mayor aclaración de sus doc las ideas son los tipos de todo lo cria trinas, debemos atender al uso tan va do; pero son tales en cuanto represen riado que hacemos de estas voces en tan las cosas aun antes de quesean: mas sentido figurado, porque las dos prime- son modelos si se atiende a que por ellas ras son de las mas expresivas que tiene han de hacerse las cosas. Tipo no anun la lengua castellana. Decimos—"eso cia sino la verdad de la figura, sin in no me toca," en vez de "no me perte cluir la idea de regla ó de modelo. Así nece.''''—"No toque vd. esa materia," en es que se llaman tipos las figuras simbó lugar de "no hable vd. de ella."—"Dios licas que no tienen otra relación con el le tocó el corazón," en vez de "lo con objeto figurado sino una especie de se movió ó estimuló."—" Tocan tres pesos mejanza, y que lejos de .τ modelos, no á cada uno ó toca á razón de tres pesos son sino signos muy interfectos y de á cada uno," en lugar de "cada uno una institución particular. El Cordero debe recibir tres pesos."—"En la lote Pascual es el tipo de Jesucristo; el maná ría me tocó el número 60," esto es, "me lo es de la Eucaristía, Estos tipos son cayó en suerte."—Hablando de un pa meramente símbolos. riente decimos "me toca muy de cer (A. Cienfuegos.) ca," lo cual significa "tiene conmigo parentesco muy cercano." — De todo TOCAR, TENTAR, PALPAR.—Tocar es sim esto se deduce que Jonama no solamen plemente la situación de una cosa que te no determinó con exactitud la signifi está contigua á otra: tentar y palpar cación de tocar, sino que incurrió en una indican la acción determinada del que contradicción, porque este verbo, ade toca. Las hojas de un libro se están to mas de expresar simplemente la situa cando unas á otras; pero no se tientan ni ción de una cosa que esta contigua â otra^ se palpan. como dice aquel autor, indica princi La diferencia de tentar á palpar es palmente el acto de llegar una cosa á que el primero se dirige á averiguar las otra poniéndose en contacto inmediato cualidades de un cuerpo: el segundo á con ella, aunque ligeramente y sin es producir una sensación en nosotros por fuerzo: y por eso decimos, "no le toques medio de la mayor ó menor resistencia. ni un pelo de la cabeza,"—"Su cabeza Se toca la almohada estando sobre tocaba al techo, &c." El mismo Jona ella: se tienta para ver si tiene algo que ma prueba esta doctrina con el ejemplo pueda lastimar: se palpa para percibir de las hojas de un libro; si se están to su blandura. En la obscuridad se va ten cando, es porque la una llega á la otra, tando para no tropezar: se toca y se pal y todas están en contacto inmediato. pa todo lo que se encuentra. Tentamos una cosa para asegurarnos Los instrumentos músicos se tocan: de su existencia; la palpamos para saber se tienta la disposición de los ánimos an cómo es: por eso, si estamos ciegos, ó tes de entablar un negocio: se palpan sus en la obscuridad, como dice Jonama, va inconvenientes. Lo evidente se llama mos tentando para no tropezar, y toca palpable; es decir, que puede sujetarse mos y palpamos todo lo que vamos en al sentido que se mira como menos en contrando. En sentido figurado utenta- gañoso: se puede tocar de modo que se mos el ánimo, la fortaleza, la constan sienta. iJanama.) cia de alguno," esto es, "investigamos TOL ( n ) TOM la existencia de su voluntad, de su cons condescendiendo activamente, dando un tancia, &c." para cerciorarnos de ella. consentimiento abierto que lo autoriza. Nos tienta, nos instiga, nos estimula, ó Muchas veces es forzoso tolerar al nos excita un deseo; si lo satisfacemos, gunos males inevitables en la sociedad, "hemos caído en la tentación."—uPal pero no se debe hacer de modo, que el pamos los inconvenientes de una cosa" público conozca que se consienten, y porque sabemos cuáles, cuántos y de mucho menos que crea que se permiten, qué manera son, y llamamos palpable á porque la tolerancia representa una ig lo que es evidente, no, como dice Jo- norancia artificial, ó una razón poderosa nama, porque podemos sujetarlo al senti que tácitamente desaprueba el mal ine do que se mira como menos engañoso, y vitable; pero el consentimiento !e. aprue tocarlo de modo que se sienta, sino por ba indirectamente, y el permiso le auto que podemos conocer bien todas sus riza con toda formalidad.—(V. Sufrir, cualidades y todos sus accidentes. En Tolerar. ) lenguaje tecnológico llamamos tentácu (L. de la Huerta.) los á los miembros que da la naturaleza TOLERAR, SUFRIR, PERMITIR.—Se tole á ciertos animales ciegos, para que pue ran las cosas cuando conociéndolas y dan tentar el terreno por donde andan, teniendo uno por su parte el poder no y los objetos que los rodean; y llama se impiden. Se sufren cuando uno no mos palpos á los míembrecillos articu se opone á ellas, haciendo como que se lados que tienen casi todos los insectos, ignoran ó como que no se pueden impe para examinar y reconocer bien lo que dir. Se permiten cuando se les autoriza les conviene. por un consentimiento formal. Para tocar no son necesarias las ma Tolerar y sufrir no se dice sino de las nos, pues podemos hacerlo con todo el cosas malas ó que se tienen por tales. cuerpo, ó con cualquiera parte de él: Permitir, se dice tanto por el bien para tentar necesitamos en rigor, no de como por el mal. los dedos particularmente sino de la Los magistrados se ven á veces obli mano, que es en nosotros el tentáculo gados á tolerar ciertos males, por temor natural: para palpar, necesitamos preci de que sucedan otros mayores. Es pru samente de los dedos, que son nuestros dente á veces sufrir abusos en la disci verdaderos palpos, indispensables para plina de la Iglesia, antes que romper su cerciorarnos de los mas pequeños acci unidad. Las leyes humanas jamas pue dentes de las cosas. den permitir loque las divinas prohiben: En sentido físico, la acción de tocar, pero prohiben á veces lo que estas per y en sentido moral la de tentar, pueden miten.—(V. Sufrir, Tolerar.) ser independientes de la voluntad; á di (March.) ferencia de palpar, que expresa una ac ción no solamente voluntaria, sino re TOMAR, RECIBIR.—Recibir es la acción flexiva. formal con que aceptamos ó adquirimos (G. de la Cortina.) lo que se nos da. Tomar es la acción TOLERAR, CONSENTIR, PERMITIR.— Se material con que nos apoderamos de tolera el mal, ó el abuso, haciendo que una cosa. se ignora su existencia, ó su malicia; Se recibe del amigo el regalo que nos se consiente, condescendiendo pasiva envia, y se toma materialmente del cria mente, no prohibiendo lo que conoci do que lo trae. damente se tiene por malo; se permite También hay otra diferencia entre es- TRA ( ) ) TRA tos dos verbos; y es, que para tomar, co que pasa sin alteración de una len basta la voluntad y acción del que toma; gua á otra; las expresiones ó los modos pero para recibir no basta la acción y de decir se mudan en otros, v. g., las voluntad del que recibe, porque se nece expresiones latinas en expresiones cas sita también que concurra la voluntad y tellanas, y esto es precisamente lo que acción del que da. hace la traducción. No puedo recibir lo que no me dan, La version, por el contrario, expresa pero puedo tomarlo: y así, el que hurta, la mudanza de las palabras, conservan toma, no recibe. do las expresiones ó modos de decir, y (L.de la Huerta.) por esta razón, hablando de la Biblia, en la cual se respetan las expresiones ó TONTO, NECIO, IGNORANTE, MENTECATO, modos de decir, decimos ula version de IMBÉCIL·.—El tonto carece de entendi los Setenta," "la version caldea, siria miento. ca" &c. El necio carece de ideas, como lo in Si queremos trasladar al castellano el dica la etimología de esta voz nescire, proverbio latino sepulchrum dealbatum no saber. v. g. podremos hacerlo por medio de El ignorante carece de instrucción. la traducción diciendo—"hermosura en El mentecato carece de imaginación y gañosa." Si queremos trasladarlo por discernimiento. medio de la version, diremos, sepulcro El imbécil carece de razón. blanqueado. Es muy fácil engañar á un tonto; no En el primer caso, hemos conserva lo es convencer á un necio: es inútil dis do la idea ó el pensamiento, pero hemos putar con un ignorante: imposible disua mudado el modo de expresarlo: esto es, dir al mentecato: y muy fácil persuadir hemos hecho una traducción. al imbécil. En el segundo, hemos conservado el En el tonto y en el imbécil hay vicio modo de expresar el mismo pensamien de carácter: en el necio, en el ignorante to, y solamente sustituimos á las pala y en el mentecato hay vicio de carácter, bras latinas, las que les corresponden de educación y de voluntad. en castellano: esto es, hemos hecho una (G. déla Cortina.) version, (G. déla Cortina.) TRADUCCIÓN, VERSION.—Paréceme que todo lo que dice Jonama, no muy cla TRAMA, CONSPIRACIÓN, CONJURACIÓN.— ramente, para explicar la diferencia que Trama es el convenio clandestino de al hay entre trasladar, vertir y traducir, gunas personas unidas ó coligadas para puede reducirse á estas ligerísimas ob abatir ó destruir por algún golpe tan efi servaciones.— caz como impensado lo que les causa Trasladar es voz genérica, y signifi disgusto, envidia, sombra ú obstáculo. ca pasar de una lengua á otra. Pero La idea dominante de la trama es la de hay dos modos de trasladar·, ó por me una empresa complicada, solapada, sor dio de la traducción ó por medio de la da, formada á hurtadillas por dos ó mu versión. chas personas. La traducción es la interpretación de La conspiración es la inteligencia se los pensamientos; la version es la inter creta, sorda, y disimulada de gentes pretación de las palabras. unidas por unos mismos sentimientos y El pensamiento ó el sentido es lo úni- opiniones, para deshacerse ó libertarse TR A ( 158 ) TRA por medio de un gran golpe, de ciertos conspiraciones. Los desórdenes públi personajes, ó de ciertas corporaciones cos, la pasión desenfrenada á la domi respetables y de influencia por su po nación ó la independencia, el fanatis der, &c. en el estado, y mudar la faz de mo de libertad y otros diversos géneros las cosas, ó á veces también para perju de fanatismo, el temor á las leyes y sus dicar á particulares. Su idea natural y abusos; todo lo que propende á la re principal es, pues, la de un proyecto volución inspiran las conjuraciones: este formado en el silencio y las tinieblas, fué el papel de Catilina. por algunas personas que animadas de {March.) una misma pasión se dirigen juntas á un TRANÜUILIDAD, PAZ, CALMA.—Estas pa mismo fin. labras, ya sea que se apliquen al alma, La conjuración es la asociación ó mas ya á la república, ya á cualquiera socie bien la confederación ligada y cimenta dad particular, expresan igualmente una da entre ciudadanos ó subditos podero situación determinada de turbulencia y sos ó armados, para hacer una revolu de agitación; pero la de tranquilidad no ción memorable en el estado, acome se refiere precisamente sino á la situa tiendo empresas ruidosas y violentas. ción, en sí misma, y en el tiempo pre La idea natural y dominante de la con sente, independientemente de toda re juración, es la de una conexión, un en lación; la palabra paz mira esta relación lace estrechado por los compromisos con referencia al exterior y á los ene mas fuertes para una empresa impor migos que podrían causar alteración de tante. ella; la palabra calma la mira con rela La trama se reduce á algunas perso ción al acontecimiento, ya sea pasado ó nas, y aun á dos de ellas: cuanto mas futuro; de suerte, que la designa como se comunica el intento, mas se vende ó subsiguiente á la situación agitada, ó expone á descubrirse. La conspiración como precediéndola. por la naturaleza de sus empresas, re Se tiene la tranquilidad en sí mismo, quiere una liga y mucha mas gente que la paz con los demás, y la calma des la trama. La conjuración, reducida en pués de la agitación. un principio, como una simple conspi Las gentes inquietas no tienen tran ración, á cierto número de conjurados, quilidad en lo interior de su casa. Los se ve forzada á llamar en su socorro y quimeristas pocas veces están en paz comunicar su secreto á una multitud de con sus vecinos. Cuanto mas tumul conjurados necesarios para grandes y tuosa ha sido la pasión, tanto mas se peligrosas empresas; de manera que aprecia la calma. cuanto mas temible se hace por el nú Para conservar la tranquilidad del es mero, tanto mas tiene que temerse á sí tado es preciso hacer respetar la auto misma; de aquí es que la suerte común ridad sin abusar del poder. Para man de las conjuraciones es la de ser descu tener lapas es menester estar en dispo biertas. sición de hacer la guerra. No se res tablece la calma con la debilidad en un Los genios inquietos, envidiosos, dís pueblo sublevado. colos, revoltosos y zizañeros, ambicio (March.) sos, malignos y perversos, forman las tramas. Los hombres malintencionados, TRANSFERIR, TRANSPORTAR.—El prime descontentos, malhechores, malos ciu ro es un verbo de movimiento, que solo dadanos, subditos incorregibles, forman supone el paso á un paraje determina- TRA ( 159 ) TRI do; el segundo supone una acción mate menos de los pormenores del estilo, se» rial, que acompaña á este paso. gun sea la obra; para lo cual se requiere El rey se transfiere mañana á Aran- crítica y buen gusto. juez, y hoy se transportan á aquel sitio De la Biblia se han hecho versiones, varios muebles de la tapicería. Los na porque así lo pedia la delicadeza del vios transportan, no transfieren las mer asunto. Las obras elementales deben caderías; porque la acción que se quiere traducirse literalmente, es decir,aproxi representar, es la material de traerlas ó mándose cuanto sea posible á una ver llevarlas dentro del navio de un puerto sion. Solo las obras del ingenio pueden á otro, y no puramente la mudanza for alguna vez traducirse libremente; y esto mal de lugar. porque de otro modo no es fácil conser De aquí es, que transferir solo se dice varles todas las bellezas que constitu con propiedad de las personas, sin rela yen su mérito, y sin las cuales se per ción á su peso, ni volumen; y transpor día la idea principal. tar de los cuerpos, con relación á su (Jonama.) volumen y peso. Se transporta el oro TREN, EQUIPAJE.—El tren se refiere á la de América. Se transfiere allá un virey. comitiva, y el equipaje al servicio. A no ser que la persona se considere Se dice un gran tren y un bello equi precisamente solo con relación á su peso paje. ó volumen, como cualquier otro cuerpo, Solo á los príncipes corresponde te y á la acción agena que le lleva de un ner trenes numerosos, y soberbio equi paraje á otro; porque en tal caso se paje. usa, por el mismo principio, del verbo (Marckj transportar. Quedó sin sentido en me dio de la calle, y le transportaron en una TRISTE, MELANCÓLICO, SOMBRÍO.—Una escalera, en una silla. pena,una aflicción, una desgracia, cual (L. de la Huerta.) quiera causa que oprime nuestro cora zón nos pone tristes. Pero tanto la tris TRASLADAR, VERTIR, TRADUCIR.—El teza como su contraria la alegría, indi trasladar ó transportar de un lenguaje can un estado de duración determinada, á otro, como de prosa á verso, de fran producido por causas externas que co cés á castellano &c, es lo que se llama nocemos y podemos explicar. vertir ó traducir; y aunque no faltan au El melancólicolo es muchas veces por tores que hayan usado en este sentido carácter, ó porque cualquiera causa hace el mismo trasladar, sin embargo, es ex en su corazón una impresión tan pro presión tan impropia, como lo seria de funda, que siempre lo mantiene en un cir yo introduzco en lugar de yo ceno, estado continuo de languidez, de triste ó llamar á Catón excelente animal, solo za silenciosa, y aun de abatimiento físi porque hombre es animal, y cenar es co y moral. Él mismo ignorará muchas introducir comida. veces la causa de su melancolía. Trasladar el sentido literal ó grama Por esta razón nos valemos del adjeti tical es lo que se llama vertir: traducir vo triste para denotar lo que afecta á so es trasladar el verdadero pensamiento los los sentidos, y llamamos melancólico y espíritu del autor. El que vierte debe á lo que profundiza mas en nuestra alma. conservar el mismo orden de ideas, las —Cuando decimos—esta ciudades muy mismas figuras, las mismas alusiones: triste—esta nación es melancólica, apli el que traduce puede separarse mas ó camos el adjetivo triste á lo exterior y TRI ( lí ) TUM á los accidentes materiales de la ciudad, TRISTEZA, AFLICCIÓN. — La tristeza es, y el adjetivo melancólico al carácter, ó una situación continuada del ánimo ocu por mejor decir, al estado del alma de pado con alguna pena ó disgusto. La aquellos hombres.—"La tristeza que le aflicción es la situación del ánimo en lo causó la muerte de su amigo, degeneró mas fuerte del dolor. en una profunda melancolía." En este El infeliz ocupado continuamente de ejemplo se ve indicada la duración de su desgracia, está triste. Una buena ma ambos efectos.—Si decimos que un niño dre se aflige siempre que se acuerda de está triste, damos á entender que expe la temprana pérdida de un hijo. rimenta una sensación pasajera, común El efecto que causa en el primer mo á todos los niños; pero si decimos que vimiento la pérdida de un padre amado, está melancólico, nuestra imaginación es afliccion;L· situación desagradable en nos presenta la idea del alma, y trata que queda después el ánimo por algún mos de buscar la causa, que en otras tiempo, es tristeza. De aquí es, que hay circunstancias hubiéramos despreciado. genios naturalmente tristes, y no natu La tristeza siempre es desagradable: ralmente afligidos; porque esta expre la melancolía, tiene sus atractivos y sus sión explica una situación continuada goces. del ánimo, no un efecto actual de la vi El adjetivo sombrío, aplicado á las per veza del dolor. sonas, es una de las palabras mas enér- (L. de la Huerta.) o-icas y significativas de la lengua cas TRISTEZA, MELANCOLÍA.—La tristeza es tellana. El hombre sombrío ya no es comunmente una consecuencia de gran triste, ya no es melancólico, ya no es sus des aflicciones. La melancolía un efec ceptible como éstos, de consuelo ni de to del temperamento. sensaciones agradables, ni de pasiones Una mala nueva nos pondrá tristes. suaves. Las suyas son violentas, tu Una indisposición del cuerpo nos pon multuosas, funestas; y si consigue re drá melancólicos. El corazón está do concentrarlas en su corazón, no puede minado de la tristeza, cuando el hombre impedir que su semblante manifieste la por un efecto de sensibilidad se deja violencia continua que le cuesta este es apoderar de ella enteramente. fuerzo. Huye de los hombres, porque La sangre se altera con la melancolía le entristece el bien ageno, y busca la so cuando el hombre no procura distraerse ledad y las sombras porque convienen al ni divertirse. estado de su espíritu. (March.) La tristeza lleva siempre consigo la TRIUNFAR, VENCER.—Triunfar es vencer idea de una causa pasajera. con gloria. La melancolía, indica un carácter apa Un general, que gana una batalla con cible, ó á lo menos un estado de resig tra un enemigo débil, vence, no triunfa. nación adquirida por convencimiento, ó (L. de la Huerta.) por necesidad. Nos causa placer proporcionar algún TUMBA, TÚMULO, SEPULCRO, SEPULTURA. consuelo al triste y al melancólico; pero —Tumba es el latino tumbus, y su tu todos huimos del hombre sombrío. Esta mulus es nuestro túmulo. Ambas voces palabra trae á nuestra imaginación la llevan en sí la idea de elevación; pero idea del crimen y de los remordimien el túmulo es mas alto que la tumba. Esta tos de una conciencia agitada. es propiamente la loga que cubre el hoyo (G. de la Cortina.) que encierra los huesos, ó que contiene TUM ( 161 ) UNA las cenizas de los muertos. En su orí- pulcro. Vamos á orar y á llorar sobre gen sirvió para que se grabasen en ella las sepulturas; vamos á ver la nada de las inscripciones, epitafios, ó los símbo la vida, del mundo y del ser en los se- los de la dignidad, profesión, edad, &c, pulcros. El lugar destinado para reci del difunto. Asi en rigor la tumba es la bir nuestros cadáveres es sepultura; todo piedra sepulcral; pero después se ha to lo que nos abisma para siempre es se mado por un sepulcro de piedra. El tú pulcro, como llamamos al amor y á los mulo es una especie de edificio ú obra monstruos devoradores. La sepultura del arte erigido en honor de los muer conserva siempre su carácter religioso, tos para consagrar é ilustrar su memo que no necesita el sepulcro. La tierra ria por el elogio de su vida, por emble es sepultura del hombre solo, y sepul mas, alegorías, y por cuantos medios cro de todas las cosas, como dice Lu pueden inmortalizar la virtud. Así la crecio. Entre las sepulturas, unas son tumba es humilde, sencilla, modesta, comunes y sencillas, y otras particula comparada con el túmulo: todas las in res y honrosas; pero el sepulcro borra to signias posibles de honor adornan y real das estas diferencias. En el sentido pro zan el túmulo: se derraman algunas flo pio y riguroso, en medio de las sepul res sobre la tumba; expresión metafóri turas destinadas para encerrar los muer ca tomada del uso de los antiguos de ir tos, la tumba cierra los sepulcros parti á echar todos los años en la tumba de culares, y conserva las cenizas y aun sus parientes flores, con especialidad la memoria de los muertos. El túmu rosas, símbolo de la brevedad de la vida. lo mas elevado realza la memoria y la Lloramos sobre la tumba, y admiramos gloria de los muertos que sobresalieron el túmulo ó su vanidad. Hollamos la en otro tiempo por algún motivo, pero que hoy están abatidos y confundidos tumba; pero el túmulo descuella sobre en el fondo del sepulcro por el destino nuestras cabezas. Aquella está desti común á todos los mortales. nada para memoria, éste para gloria. Sepulcro y sepultura se distinguen de (A. Cienfuegos.) tumba y de túmulo por la idea contraria u á la elevación. La sepultura es el lugar en que los cuerpos muertos están en UNÁNIME, ACORDE, CONFORME.— Uná cerrados en la tierra. El sepulcro es un nime, representa una misma voluntad: lugar en que están encerrados también, acorde, una misma opinion: conforme, pero mas hondamente, en un hoyo pro una misma decision. fundo. La idea de la sepultura no es tan Si los ministros de un tribunal están tétrica como la del sepulcro» La sepul unánimes en la intención de hacer justi tura es el lugar destinado ó consagrado cia, y dar á cada uno su derecho; pue para hacer las exequias de los muertos den no estar acordes en las razones que con todas las ceremonias religiosas de asisten á cada una de las partes, según inhumación, volviendo á la tierra los el modo con que cada uno de ellos las cuerpos que salieron de la tierra. El percibe; pero para dar la sentencia bas sepulcro es la huesa, el pozo que recibe, ta que estén conformes, ó por haber adop traga y consume los cuerpos, la» ceni tado al fin el mismo parecer, ó por ha zas, los despojos de los muertos, redu ber adherido los unos al de los otros ciéndolos á la nada de que salieron. So por condescendencia, ó por ceder á la mos enterrados, inhumados en la sepul pluralidad. tura, y sepultados, aniquilados en el se- Por eso, cuando se retarda una deci- 21 USO ( 162 ) UTI sion, no se dice, aun no están unánimes; A veces conviene mas acomodarse á porque de lo que se trata es, de que es un mal uso, que señalarse uno aun en tén todos, ó igualmente persuadidos, alguna cosa que no sea mala sino buena. esto es, que estén acordes, ó mutuamen Hay muchos que siguen la costumbre en te convenidos, esto es, que estén con el modo de pensar, como en el ceremo formes, para proceder después sin sepa nial: solo se atienen á lo que sus padres rarse ninguno del parecer de los demás. ó nodrizas pensaron antes que ellos.— (L.dela Huerta.) (V. Costumbre, Hábito.) (March.) ÚNICO, SOLO.—Es única la cosa que es singular, rara ó excelente en su espe USURPAR, INVADIR, APODERARSE.— cie. Usurpar es tomar injustamente una cosa Sola cuando no tiene compañera. á su legítimo dueño, valiéndose de la Un hijo de familia que no haya teni autoridad ó del poder. Se dice igual do ningún hermano es único. mente de los bienes, de la autoridad, del El hombre que no tiene quien le am poder. pare, socorra, alivie ó conduele en sus Invadir es tomar inopinadamente, ó necesidades ó aflicciones, es solo. de repente ó de hecho algún pais ó ter (March.) ritorio, sin acto alguno de hostilidad ó prevención anterior. URDIR, TRAMAR.— Urdir es disponer los Apoderarse es precisamente hacerse hilos para hacer una tela. Tramar es dueño de una cosa, previniendo á los pasar los hilos por entre los hilos. En concurrentes y á cuantos puedan pre el sentido propio no se confunden estas tenderla con derecho. voces, pero sí en el figurado, en el cual Parece también que usurpar encierra se dice urdir ó tramar un enredo, una á veces una idea de traición, que inva picardía. Tramar supone un designio dir da á conocer que hay mal proceder, mas formado, un enredo mayor, planes y que apoderarse contiene cierta idea mas bien concertados,disposiciones mas de prontitud y diligencia. adelantadas para la ejecución. Urdir No se usurpa la corona cuando estan es empezar; se urde una trama. Tramar do vacante se recibe de las manos de la es adelantar la obra, darle la consisten nación. Tomar provincias después de cia conveniente. declarar la guerra, es conquistarlas y no (A. Cienfuegos.) invadirlas. No hay injusticia en apo derarnos de las cosas que nos pertene Uso, COSTUMBRE.—El vso parece ser mas cen, aunque se disputen nuestros dere universal; la costumbre mas antigua: lo chos y pretensiones, pero á veces pue que practican la mayor parte de las gen de haber temeridad. tes es un uso; lo que se ha practicado (March.) desde mucho tiempo es una costumbre. El uso se introduce y se extiende; la UTILIDAD, PROVECHO, VENTAJA. — La costumbre se establece y adquiere auto utilidad nace del servicio que se saca de ridad. las cosas; el provecho de la ganancia que El uso hace la moda: la costumbre hace producen; la ventaja nace del honor ó el hábito. Uno y otro son especies de de la comodidad que uno encuentra. leyes en un todo independientes de la Un mut¡> e tiene su utilidad; un ter razón, en cuanto conviene al exterior reno trae ¿JL provecho; una gran casa déla conducta. tiene sus ventajas. VAL ( 163 ) VAN Las riquezas no son de utilidad aigu- ι VALOR, PRECIO.—El mérito intrínseco na, cuando no se hace de ellas buen uso: de las cosas constituye su valor; fúnda mayor es el provecho en las rentas; pero se su precio en la estimación que se les mas frecuente en el comercio. El di da. Diremos, pues: esta medalla ade nero da muchas ventajas en los nego mas de su valor, porque es de oro, es cios y facilita el éxito. también de gran precio por ser antiquí Deseo que esta obra sea útil al lec sima y rara. tor, que dé provecho al librero que la Parece como que precio supone algu vende, y que me acarree la ventaja del na relación con la compra 6 venta, lo aprecio público. cual no sucede con la palabra valor. Así (March.} es que se dice, que no es buen inteligen V te el que no juzga del valor de las co VALENTÍA, VALOR.—La valentía es la os sas, sino por el precio á que cuestan. tentación del valor. Aqj.'lla puede ser (March.) efecto de la educación, del amor propio, de la vanidad, y acaso de una pura cos VANAMENTE, INÚTILMENTE, EN VANO. tumbre adquirida con el ejemplo; este —Se trabaja vanamente cuando no es es inherente al carácter, y propio de un uno recompensado de su trabajo ó que espíritu noble, superior á todo riesgo. no se le aprecia; se trabaja inútilmente Aquella busca los lances; este los evi cuando la obra que se hace no sirve de ta, pero no los rehusa, cuando la obli- nada; se ha trabajado en vano cuando uno cion ó la necesidad lo exigen. Por eso no ha podido hacer lo que emprendió. cuando se trata de una acción en que Hubiera trabajado vanamente si esta media el lucimiento, la arrogancia, el obra no me atrajese el aprecio público; deseo del aplauso, se usa con mas pro la habría hecho inútilmente si no se apro piedad de la voz valentía que de la voz vechasen de ella para tener ideas y ex calor, y así á un soldado se le puede presiones mas exactas y justas; y en llamar valeroso,pero no á un torero; éste vano me habré cansado, si no he encon propiamente es valiente. trado la verdadera diferencia y el ca Esta distinción parece hacer Cervan rácter propio de los sinónimos. tes, cuando dice, que los que profesan (March.) las órdenes militares deben ser caballe VANIDAD, PRESUNCIÓN. — La vanidad ros valerosos, valientes, y bien nacidos. puede recaer indistintamente sobre ua La valentía de un espadachín es, no mérito real, ó imaginario. La presun pocas veces, efecto de no tener valor ción recae siempre sobre un mérito, que para despreciar una desatención, ó per solo existe en la imaginación del presu donar una injuria. mido. Por este mismo principio, un valien Un músico excelente tiene tal vez te (usado como sustantivo) no quiere vanidad de su habilidad. Un mal gine- decir precisamente un hombre de vahr, te tiene presunción de su destreza. sino un quimerista que lo ostenta, que Una mujer hermosa puede tener va hace vanidad de él. Y en el sentido fi- nidad, pero una fea solo puede tener gurado se dice, guardando la misma pro presunción. porción, qiie un pintor maneja el pincel De estos dos efectos del amor pro con valentía; que es menester mucho pio, considerados políticamente, resul valor para combatir contra las armas po tan muy diferentes consecuencias: por derosas de la lisonja. que la vanidad no excluye absoluta- (£, de la Huerta.) VAS ( 1 ) VAS mente el deseo del adelantamiento y de to de la voluntad y de la industria. Vas la perfección, antes bien nos inclina á to dice mas que extenso, y mucho mas buscar los medios posibles para satisfa que extendido y dilatado. cerla, ó justificarla: de lo cual pueden Lo vasto y lo extenso prescinden de sacar útiles ventajas la industria, las ar los límites y de los accidentes de las tes, los progresos del buen gusto, &c; cosas: no así extendido ni dilatado, que pero la presunción, lisonjeando el áni muchas veces necesitan de los acciden mo con la idea de que no hay mas que tes para determinar la idea con preci ser, saber, ó adelantar, destruye los es sion; por ejemplo, cuando decimos que tímulos de la emulación, inutiliza los una cosa debe extenderse á lo ancho ó á medios del adelantamiento, y obra efec lo largo, damos á entender que tiene tos sumamente perniciosos. longitud y latitud, y que una de estas (L. de la Huerta.) dimensiones debe determinar el modo: entonces diremos que tal cosa está, ó VARIACIÓN, MUDANZA.—Consiste la va debe estar extendida á lo ancho ó á lo riación en ser ó estar tan pronto de un largo. modo como de otro. Por el contrario, cuando decimos ¡qué La mudanza en cesar de ser lo mismo. campo tan vasto! prescindimos entera Variar en las opiniones ó en el modo mente de los límites que lo terminan, de pensar, es abandonarlos y volverlos de su figura y de todos sus accidentes: á tomar sucesivamente. únicamente atendemos á la impresión Mudar de opinion es desechar la que que causa en nuestra alma la extension se tenia para seguir otra nueva. en abstracto. Lo mismo sucede cuan Las variaciones son comunes. do empleamos la palabra vasto en senti- La mudanza es propia de los incons do figurado, v. g.: es materia muy vasta. tantes. El que no tiene principios cier Extenso es ya menos que vasto, y de tos está sujeto á variar: al que se fia nota limitación indeterminada: por eso mas de la fortuna que de la verdad, nos servimos del sustantivo extensión nada le cuesta mudar de doctrina. cuando queremos expresar un espacio {March.) cualquiera, cuyos límites dependen, por decirlo así, de la arbitrariedad. Esto VARIACIÓN, VARIEDAD.—Lo primero es se verifica tanto en el sentido propio, el acto de variar: lo segundo la diferen como en el figurado.—La extension del cia de algunas cosas entre sí. Así, pues, brazo.—La extension del imperio.—La se dice; la variación del tiempo, varie extension de una ley, de un tratado, &c. dad de colores. Extendido es lo que ocupa un espacio No hay gobierno alguno en que no mayor que el que ocupaba antes: rara haya variaciones: no hay especie algu vez se usa en sentido figurado. na en la naturaleza, en que no se noten Dilatado trae consigo la idea del em muchas variedades. {March.) pleo dßl tiempo. Así nos lo manifiesta su misma etimología—dilatus; esto es, VASTO, EXTENSO, EXTENDIDO, DILATADO. llevado mas allá; y claro está que mien —Todas estas palabras nos dan la mis tras mas allá sea, mas tiempo se nece ma idea, pero producida de diferentes sita. Esta es la razón porque decimos modos. En las dos primeras pueden no que una ausencia es dilatada, y no vas tener parte alguna la industria y la vo ta, ni extensa, ni extendida. luntad. Las dos últimas pueden ser efec- (G. de la Cortina.) VEN ( 1 5 ) VER VELOCIDAD, RAPIDEZ. — La velocidad VENERACIÓN, RESPETO.— La veneración exprime genéricamente el movimiento reside en el corazón; el respeto en la pronto ó acelerado de un cuerpo; pero imaginación. Aquella es efecto de la la rapidez parece que añade mas ener persuasion interior del ánimo; éste lo es gía á la idea, mas ímpetu al movimien de la impresión que causa el objeto en to, representando al mismo tiempo el nuestros sentidos. esfuerzo violento con que el cuerpo cor Por eso se venera la virtud, y se res re, y con que corta, ó separa cualquie peta la autoridad. ra dificultad ό resistencia, que pueda Un varón apostólico excita nuestra oponérsele. veneración; un padre nuestro respeto; un De un torrente se puede decir que soberano virtuoso nuestro respeto y ve baja con velocidad de las montañas; pero neración. El aparato y magestad de la si se dice que baja con rapidez, se ofre casa de un príncipe causa respeto en el ce á la imaginación, con mas energía, que lo ve. La memoria de las acciones el movimiento impetuoso con que se virtuosas de un hombre ilustre, excita precipita, sin que haya obstáculo que nuestra veneración. [L. de la Huerta.) le pueda contener. El fuego se eleva con velocidad, y VENIDERO, FUTURO. — Estos dos voca consume una casa con rapidez. De aquí blos son mas caracterizados por la di es, que la rapidez solo se aplica á la ac versidad de los estilos que por la dife ción, y no al agente. Puede ser rápi rencia de sus significaciones. Futuro da la carrera de un caballo, el vuelo de es de mucho uso en lo dogmático; la un águila; pero ni el caballo, ni el águi gramática conoce los tiempos futuros; la son rápidos, sino veloces. la filosofía escolástica trata de la cues El mal ejemplo hace rápidos progre tión del futuro contingente: hasta la ex sos. Un general hace rápidas conquis presión poética se vale muy bien de las tas. En estos ejemplos el adjetivo ve series futuras. Lo venidero se usa tan loces no representaría con igual propie to en lo moral como en el lenguaje co dad la inocencia, ó la razón atropella mún de la conversación. La reflexion das por el mal ejemplo: la fuerza, la re sobre lo pasado, y la inquietud acerca sistencia, arrolladas por las armas vic de lo venidero, no sirven á veces sino toriosas del conquistador. para quitarnos el g©ce de lo presente. (L. de la Huerta.) Se consuela uno de un infortunio pasa jero con la perspectiva de un porvenir VENENO, PONZOÑA.—L&voz veneno se ex dichoso. tiende, no solo á los simples, que natu- Futuro es relativo á la existencia de raímente son nocivos, sino también, y los seres; venidero á las relaciones de con mas propiedad, á los compuestos, los acontecimientos. Se puede hablar mezclas ó preparaciones que destruyen con certidumbre de las cosas futuras, y la salud, ó quitan la vida. La voz ponzo predecir las de cierto orden por solas ña solo se aplica á los simples, que por las luces naturales; pero sobre lo veni. sí solos son nocivos, y con mas propie dero no se puede hacer mas que conje dad á los que naturalmente se encuen turar, y es imposible predecirlo sin te tran en el cuerpo de varios animales. ner una revelación especial. Se compone, se prepara un veneno, no (March.) una ponzoña; ésta la da preparada la naturaleza. VER, MIRAR.—Se ve lo que se presenta á (L. de la Huerta,) la vista: se mira donde se echa la ojeada. VER ( 166 ) VID Vemos los objetos que se presentan á el pudor. Ambos hacen á veces salir nuestra vista: miramos los que excitan los colores á la cara; pero en este caso nuestra curiosidad. se sonroja uno por vergüenza, se sonro Se ve ó distinta ó confusamente. Se sea por pudor. mira de lejos ó de cerca: ábrense los No conviene vanagloriarse, ni tener ojos para ver: vuélvense atrás para mi vergüenza por el nacimiento, porque son rar. rasgos de orgullo; pero conviene igual Los hombres indiferentes ven, como mente al noble y al plebeyo, tener ver todos los demás, las gracias del bello güenza de sus vicios. sexo; pero las miran aquellos á quienes Aunque el pudor sea una virtud, hay causan admiración. sin embargo ocasiones en que pasa por El inteligente mira las bellezas de un debilidad y timidez. (March.) cuadro que ve: el que no lo es en la pin tura, mira el cuadro sin ver sus belle VESTIGIO, HUELLAS.—Los vestigios son zas. los restos de lo que ha estado en un lu De aquí se deduce que ver es un acto gar; las huellas rastros de lo que ha pa involuntario: no así mirar, que indica sado por allí. Se conocen los vestigios; poner atención con la vista. se siguen las huellas. (March.) Se ven los vestigios de un castillo an tiguo; se advierten ó notan las huellas VERGÜENZA, CORTEDAD.—La ideacomun de un ciervo. á estas dos voces, consideradas como (March.) sinónimas, es la timidez; pero la corte VIA, MEDIO.—Se siguen las vias; se vale dad la considera como un efecto de la uno de los medios. falta de aquel desembarazo que se ad La via es el modo de conducirse para quiere con el trato continuado de cier salir bien. El medio es lo que se pone ta clase de personas; la vergüenza la con en práctica para este efecto. Via tiene sidera como un efecto, ó de poca con una relación particular con las costum fianza del mérito propio, ó del temor bres; medio con los sucesos. del desprecio ó burla de los otros. (March.) Un sabio, que está seguro de que sabe lo que dice, no tiene vergüenza de ha VICTORIA, VENCIMIENTO.—ha victoria es blar delante de gentes; pero poco acos la acción de vencer, el vencimiento la de tumbrado á ello, puede tener cortedad. ser vencido. Uno que no es muy diestro en la músi El general que gana una batalla, pu ca, aunque no tenga cortedad, puede te blica tu victoria: el que la pierde, pro ner vergüenza de cantar delante de gen cura ocultar su vencimiento. tes, que pueden burlarse de él. El vencimiento de las pasiones es la La cortedad es efecto de falta de ex victoria de la razón. periencia, ó de pequenez de espíritu. (L. de la Huerta.) La vergüenza es efecto de desconfianza, VIDA, EXISTENCIA.—La vida no es mas y no pocas veces de amor propio. que el estado de todo animal que sien (L. de la Huerta.) te y se mueve: por lo mismo es aplica ble á todo lo que tiene sensibilidad y VERGÜENZA, PUDOR.—Las acusaciones movimiento, sea animado ó inanimado. de la conciencia causan la vergüenza. Un árbol vive y muere, lo mismo que Los sentimientos de modestia producen un pez, lo mismo que una ave. VIE ( 16577 ) VIO La existencia denota solamente la du jecer: como igualmente se dice: morir ración actual de una cosa, y prescinde de vejez, y no de ancianidad. de las cualidades que constituyen la A los ancianos del pueblo de Israel vida. Así se dice—existen documentos no les daríamos, con igual propiedad, que prueban la muerte de César.—En el nombre de viejos del pueblo. Europa existen muchos edificios de la Así es que, poranalogía con este mis edad media.—Es fabulosa la existencia mo uso de la voz, llamamos viejos y no del ave fénix. ancianos, à los edificios, á los vestidos, Pero cuando se intenta expresar el á los muebles, y aun á los usos. modo de existir de los seres animados, son sinónimos perfectos las palabras vida (L. de la Huerta.) 1 y existencia, y puede decirse, hablando IGOROSO, FUERTE, ROBUSTO. El VigO- de un hombre desgraciado—¡qué vida roso, mas ágil que los demás, debe mu ó qué existencia tan penosa! cho al ánimo; elfuerte, como mas firme, No sucede lo mismo cuando nos ser debe mucho á la construcción de los vimos de la palabra vida para denotar músculos; el robusto, menos sujeto á los el conjunto de obras ó acciones de una achaques, debe mucho á la naturaleza persona, ó el tiempo que hace que vivi del temperamento. mos: en este caso no puede ser sinóni Es uno vigoroso por los movimientos mo de existencia, porque esta denota y esfuerzos que hace; fuerte por la so solamente el ser. Por esta razón deci lidez y la resistencia de los miembros; mos vida ejemplar ó criminal- y no exis robusto por la buena conformación de tencia.—Historia de la vida dt Cicerón, las partes que sirven á las funciones na y no de la existencia de Cicerón.—En turales. mi vida oí decir tal cosa—y no en mi Un hombre vigoroso ataca y lidia con existencia. agilidad y violencia; uno fuerte sobre (G. de la Cortina,) lleva con facilidad lo que á otro agobia ría y oprimiría; uno robusto resiste toda VIEJO, ANCIANO.—La vejez es la última fatiga, la influencia del aire, del clima, y edad de la vida, como lo es igualmente aun los excesos. la ancianidad; pero la primera repre (March.) senta esta idea con relación á lo físico y perecedero, tanto del hombre, como VIOLENTO, ARREBATADO.—El violento de todo viviente; y la segunda con rela llega hasta las acciones; el arrebatado ción á la distinción que se hace de aque se contiene comunmente en los discur lla edad respecto de las demás edades sos. del hombre, contrayendo la idea deter Un hombre violento levanta la mano, minadamente á su especie. y da tan pronto como amenaza; el ar Vemos en la vejez la decadencia de la rebatado está pronto á decir injurias, y vida, y al viejo sujeto á los achaques y se enfada fácilmente. debilidades que acarrean los años. Ve El hombre arrebatado solo tiene á mos en la ancianidad la consideración veces el primer impulso ó fuego de malo; que inspira, ó debe inspirar, la edad, la el violento es mas peligroso. madurez, la experiencia. Se debe estar muy alerta contra los Por eso para explicar el estrago que violentos, y á veces basta con tener pa hace el tiempo, usamos del verbo enve- ciencia con los arrebatados. (March.) VOL ( 168 ) VOZ VISION, APARICIÓN.—Lavision se hace en cer varios volúmenes; pero la encuader los sentidos interiores, y no supone sino naron separa los volúmenes, y la divi la acción de la imaginación. La apari sion de la obra distingue los tomos. ción hace mas impresión en los sentidos No se puede juzgar siempre de la exteriores, y supone un objeto en lo ciencia del autor por el tamaño ó bulto exterior. del volumen. Hay muchas obras en va San José por una vision fuá advertido rios tomos que fueran mejores reducidos de que huyese á Egipto con su familia. á un solo volumen. La Magdalena fué instruida del Salva- (March.) dor por una aparición. oz, PALABRA.—Hemos dicho ya (en el Los cerebros exaltados y débiles por artículo Elegante, Elocuente) que la ele falta de alimento creen á veces tener vi gancia tiene por objeto la buena elec siones. Los espíritus tímidos y crédu ción de voces y de palabras, mirándolas los toman á veces por apariciones lo que como dos cosas diferentes, porque en la no es nada ó solo es un juego. realidad lo son cuando se consideran, (March.) como sucede en este caso, con relación VIVEZA, PRONTITUD.—La viveza depen determinada al idioma, esto es, la voz de siempre de la sensibilidad y del áni ó la palabra que significa tal cosa, ó á mo, la menor cosa produce efecto en el que se aplica tal idea. hombre vivo: al punto conoce lo que le En este caso, la diferencia que se per dicen, y reflexiona sus respuestas me cibe entre ellas es, que voz se refiere nos que otros. mas comunmente á la composición ma Prontitud viene mas bien del genio y terial, y á las circunstancias gramatica de la acción: un hombre pronto está mas les; y palabra á la pronunciación y cir sujeto á los sobresaltos que otro, tiene cunstancias en que tienen parte la pro la mano ligera y es expedito para el nunciación y el oido. trabajo. Almojarifazgo es una voz árabe com La indolencia es opuesta á la viveza, puesta de cinco sílabas, sin contar el y la lentitud á la prontitud. artículo, que miramos ya como parte de (March.) la misma voz; y es una palabra poco agradable al oido, y difícil de pronun VOCES, GRITOS.—Significan el esfuerzo ciar para un extranjero. que hacemos con la voz para que se nos Un predicador usa de voces propias, oiga mejor, ó de lejos; pero voces supo y de palabras armoniosas. Un aman ne un tono natural esforzado; gritos, un te emplea palabras tiernas, y no voces, tono mas agudo que el natural. para ablandar el corazón de su dama. A los sordos se les grita, no se les da Por la misma razón se dice: no oyó voces; porque el tímpano de su oído ne una palabra de cuanto se habló; y seria cesita no tanto un sonido fuerte, como mal dicho, no oyó una voz, porque no un sonido agudo, que le hiera y excite. se trata de la composición gramatical Al que está lejos, se le da voces, porque de la voz, sino del efecto material que para oír de lejos, es mas útil lo fuerte, causa en el oido la pronunciación, el so que lo agudo de la voz. nido de la palabra. (£. de la Huerta. ) (£, de la Huerta.) VOLUMEN, TOMO.—El volumen puede con Voz, PALABRA.— Voz designa los sonidos, tener varios tomos, y el tomo puede ha- sean inarticulados ó articulados, que VOZ ( ] ) VOZ forma el aire desde los pulmones, pa labra es pintura, expresión, supone la sando por la garganta y saliendo por la correspondencia entre el modelo y la boca. Palabra, que antiguamente se copia, entre el signo y la cosa significa decía parabla, corresponde al verbum da, y por consiguiente incluye las ideas latino, que designa la idea de hablar, de propiedad, exactitud, fuerza, ener de comunicar á otros sus pensamientos. gía, ternura, según sea fuerte ó tierno Es, pues, la palabra la expresión vocal lo que pinte. Así un orador emplea pa del pensamiento, la pintura vocal de las labras propias, y no voces; y usa de voces ideas. La voz no expresa mas que so armoniosas, y no de palabras·, Un aman nidos; la palabra ideas, porque sin ellas te para expresar su pasión,dicepalabras no hay habla. Según esto, la voz en tiernas y voces dulces, pero no al con cierra en sí las ideas de sonoridad, de trario: no oyó palabra de cuanto se dijo, dulzura, de aspereza, de armonía. Con significa que no pudo entender nada de forme á esto, diremos con propiedad, la conversación: por eso se usa aquí que Almojarifazgo, por ejemplo, es una propiamente de palabra y no de voz, por voz áspera, desagradable al oido; y que no se trata de sonidos, sino de com hablaría impropiamente el que dijese prender los discursos de los que hablan. que era una palabra áspera: pues lapa- (A. Cienfuegos.) 22 APÉNDICE. TÉRMINOS SINÓNIMOS. A. ]a propiedad de la dicción pertenece dumbre de nuestro juicio, ó nuestra pere antes de todo la elección en el uso de es za, ó nuestina superficialidad. De esto se tas palabras llamadas sinónimos. El dis infiere que el espíritu de discernimiento curso mas elegante y mas adornado care y de exactitud es la verdadera luz que dis cerá de precision, claridad y energía, cuan tingue en un discurso al hombre sabio del do el pensamiento se anega en aquella pro hombre vulgar. lusion de palabras análogas, y siempre in Para alcanzar esta exactitud, el escri cierta la verdadera, cuya redundancia qui tor ú orador ha de ser algo escrupuloso en ta la rapidez y la fuerza á la expresión. el uso de las palabras, hasta llegar á co La delicada diferencia, ó graduación que nocer que las que se llaman sinónimas no se halla entre los sinónimos y esto es, la ín lo son con todo el rigor de una identidad dole particular de estas voces, que guar tan cabal, que el mismo sentido de cada dan en su significado general una seme- una sea común á todas. Examínense de janza común como entre hermanas, las dis cerca, y se echará de ver luego que esta tingue una de otra por alguna idea secun supuesta igualdad no abraza toda la ex daria y peculiar que encierra cada una de tension y valor de su significado; pues ellas. De aquí viene la necesidad de es solo consiste en una idea principal que to cogerlas con inteligencia, y acierto, y co das representan indefinida y latamente. locarlas con oportunidad, para escribir ade Sin embargo, cada una diversifica esta idea cuadamente. por medio de otra secundaria ó accesoria Esta feliz elección, de que depende la que constituye su propia y peculiar acep propiedad del estilo, enseña á decir con ción. verdad y solidez lo que en otros es vana ¿Quién dirá que los nombres tranquili verbosidad: enemiga del abuso de las pa dad, reposo, sosiego, descanso, se pueden labras, hace inteligible nuestro lenguaje: aplicar indistintamente á una misma idea, juiciosa en el uso de los términos, castiga ni juntos ni separados, sin embargo de que y fortalece la expresión: rigurosamente convienen todos, por modo extenso, en la exacta, destierra las imágenes vagas y ge significación de quietud? Examínese cada nerales, y todos aquellos correctivos como, uno en particular, y se verá, que tranqui casi, â modo de , ú poca diferencia, es lidad es la quietud absoluta de lo que no pecie de , que manifiestan la incerti- ha.estado inquieto: que reposo es la quie- ( 174 ) tud de lo que ha sido movido: que sosiego conocimiento del idioma, nunca le asisti es la quietud de lo que ha estado agitado: rá la virtud y eficacia para enseñar y per y que descanso, de lo que ha sufrido fati suadir. El que carezca de este pulso, usa ga ó trabajo. Lo mismo podremos decir rá indistintamente de las palabras avenir, de esotras palabras gusto, placer, deleite; y acomodar,reconciliar; sin advertir que solo de otras, como espantoso, asombroso, horro se aviene á las personas discordes por pre roso; y de otras muchísimas, como gozo, tensiones ú opiniones: que solo se acomo alegría, júbilo, que algunos escritores, ó da á las que han tenido intereses ó dife equivocan su elección, tomando una por rencias personales; en fin, que solo se re otra, por ignorancia; ó las confunden jun concilia á las que por malos oficios se ha tas por falta de seguridad en su juicio·, y bían hecho enemigas. En estos tres ejem otras veces, por ostentación de la riqueza plos tenemos tres actos de conciliación en de su estilo, que es vanidad é ignorancia general, y solo en esta idea vaga son sinó juntamente. Pero las mas veces dimana nimas aquellas tres voces; pero cada uno de la incertitumbre que padece el ánimo determinado por distintos fines, y distintas del que escribe ó habla, vacilante acerca causas. del valor especifico y propio de las pala Lo mismo se puede aplicar á estas vo bras; y en esta duda echa mano de todas ces estado, situación, cuya diferencia se para acertar, entre tantas, con la que bus manifiesta en que la primera dice alguna ca, y no sabe escoger. cosa habitual ó permanente, y la segunda Los que creen que esta exuberancia de como accidental y mudable, Y así lo que palabras, que entre los vicios del estilo se no alcance el raciocinio, lo demostrarán llama pleonasmo, enriquece la oración, ig los ejemplos: Ni el estado de padre de fa noran ciertamente que no es el valor nu milia pudo mudar la situación de su fortu meral de ellas el que enriquece el discur na. Tampoco entre austeridad, rigor, y so, sino el que nace de su diversidad, como severidad se percibe á primera vista la la que luce en las obras de la naturaleza. diferencia; pero dice así un autor de cier Cuando las palabras varían entre sí, solo to magistrado: vivía con austeridad, pen por los sonidos, y no por la mayor ó me saba siempre con rigor, y castigaba con se nor energía y sencillez de su propio sen veridad. tido, en vez de dar riqueza á la sentencia, La propiedad de las palabras se cono la empobrecen, y fatigan la memoria y ce mas por lo que enseñan los ejemplos, atención del oyente, ó del lector. Esto es, que por lo que enseñan sus definiciones, hablando con propiedad, confundir la su si estas no son exactas y luminosas. El perfluidad con la abundancia; hacer, como uso diverso á que aplicamos su significa quien dice, consistir la magnificencia de ción particular nos conducirá á definirlas un banquete en el número de los platos, y con toda propiedad; porque padecen en no en la diversidad de los manjares. Y esto grandes yerros los diccionarios, cuan siendo regla constante que entre las diver do en ellos no se ha llevado por guía esta sas palabras que declaran nuestro pensa operación, que parece de orden inverso. miento, una sola es la propia; todas las El que solo se guía por ellos con ciega otras, teniendo diferente ó inferior grado confianza, se expone á grandes errores: de valor, ó embarazan la expresión, ó la hallará en el de la Academia española de enervan. finida la palabra perdimiento de este modo De aquí es, que si el orador ó escritor tan vago como ambiguo: lo mismo que per no tiene aquel pulso seguro y fino, que dición ó pérdida. Aunque las tres pala- pide la exactitud filosófica, y un profundo ! bras abrazan la idea recta y general de per ( 175 ) dida, se diferencian entre si notablemen cal, vestiduras pontificales; y por el con te por el motivo, la acción, y el objeto. trario, autoridad pontificia, palacio ponti- Busquemos por el uso su aplicación, y ficio, estados pontificios. En el citado dic de esta sacaremos su definición verdade cionario se univocan las voces acuátil y ra. Perdimiento se dice en sentido legal, acuático; mas yo me tomo la libertad de hablando de bienes, de una posesión, de hacer entre ellas esta distinción, aplican un empleo: perdición tiene un sentido mo do lo acuátil hablando de plantas, y lo ral, y se aplica á la ruina de las costum acuático hablando de aves. Lo primero bres, al abandono del honor y de sus obli me parece se apropia mejor á lo que nace, gaciones: y pérdida es un acto ó resulta se cria y mueve en el agua; y lo segunde á contraria á ganancia, sea en lo que com lo que vive entre el agua, ó la frecuenta.— pramos ó vendemos, como en lo que es Lo mismo sucede con las voces vegetable y peramos, ó que poseíamos. vegetal, cuya definición común á entram En el referido diccionario se define la bas, no distingue su uso. Sin embargo, de voz paternal de esta manera: lo que es pro cimos el reino vegetal y no vegetable; de pio del padre, definición muy extensa é cimos tierra vegetal y no vegetable; deci indeterminada; y de la otra paterno se dice: mos vivir de vegetables y no de vegetales. lo que pertenece al padre, ó es propio suyo, Lo mismo sucede en los artículos angé 6 se deriva de él. Esta definición, ademas lico y angelical del citado diccionario, cu de vaga, es oscura, y confunde en ella la yas respectivas definiciones se confunden en una, aunque decimos coros angélicos, primera, de suerte que no se conoce la espíritus angélicos; y pureza angelical, ge verdadera diferencia de las dos palabras, y nio angelical. Lo mismo sucede con es por consiguiente no hay regla ni luz para tas dos voces celeste y celestial;sin adver el uso de ésta, ó de la otra. Obedezca tir que decimos, para hablar con propiedad, mos á la regla sabia del uso, y este maes orbes celestes, fenómenos celestes, cuerpos tro nos dará la particular y propia defini celestes, espacios celestes, esfera celeste, en ción de cada una. Dícese amor paternal, términos astronómicos; y gloria celestial, correcionpaternal, solicitud paternal; y se reino celestial, en sentido místico; y por dice, herencia paterna, autoridad paterna, extension, música celestial, voz celestial, tio paterno. De estas distintas aplicacio en alabanza de su excelencia. Decimos nes sacaremos que paternal es lo que es azul celeste, y no celestial; y este solo propio de los afectos de padre; y paterno ejemplo tan común, y tan conocido, basta lo que es propio de la calidad y represen ba para una clara y distinta definición. tación de padre, ó se deriva de sus dere Si no consideramos con escrupulosa chos, ó de su sangre. atención las palabras, jamas escribiremos Por el diccionario tampoco hallaremos con corrección y propiedad. En este cui la diferencia que se trasluce entre estas dado no hallo nimiedad, por mas que la dos voces, pontifical y pontificio, porque dren los antipuristas. Verdad es que este se identifican de tal suerte, que la defini esmero debe proceder de estudios ante ción de la una sirve igualmente para la riores, pues sin este caudal de prevención, otra. Veamos como se define allí la pri mal podrá el escritor detenerse en estas mera: lo que toca ó pertenece al pontífice. especulaciones, cuando está con la pluma Veamos después como se define la segun en la mano. Escribe, pues, no se detiene da: lo que toca ó pertenece al pontífice. Si el que conoce el valor de las palabras, y estas dos palabras fuesen unívocas, no se este conocimiento le sirve aun después diría ornamentos pontificales^ misa pontifi para ver su yerro, y enmendarlo. ( 176 ) Vuelvo á decir, que nunca sobra cuida dictado de presbítero á los regulares, sino do en la elección de las palabras para ha el de sacerdote. Parece que presbítero se blar con propiedad. ¿Quién dirá que en el aplica mas al orden y al título, y sacerdo uso de estos dos nombres Levante, Orien te al ejercicio y ministerio público de su te, hablando de regiones, puede caber no dignidad. Así, se dice: el orden de los table impropiedad, tomando indistinta presbíteros, cardenal presbítero. Decimos mente el uno por el otro? Lo dirá el que al contrario: cuando el sacerdote alza la sepa que, en lenguaje náutico y mercantil, hostia: cuando sale al altar el sacerdote, y el Oriente se toma por los países del Asia nímea el presbítero: bajo palabra de sa respecto de la Europa, cuando se navega cerdote, y no de presbítero. á ellos por el océano; y Levante, por los El uso nos enseña estas distinciones, mismos, cuando se va á ellos por el Me aun en las cosas mas comunes; bien que diterráneo. todas son importantes cuando se trata de Saber un idioma, no es solo saber su propiedad. Si me es lícito descender á sintaxis, y la nomenclatura de millares de ejemplos de objetos bajos y humildes, pon voces, si se ignórala aplicación que se ha dré éste, por ser de uso mas conocido y ge de hacer de ellas, muchas veces mas por neral. Los nombres puerco, cerdo, cochi- el uso que por razón. En las palabras do no,marrano, representan un mismo animal, méstico y casero, no se presenta mas dife y con todo eso no usamos indistintamente rencia que la extrínseca de ser, la una de de ellos en todos los casos y circunstan rivada de la latina domus, y la otra de la cias: y según son diversos los aspectos vulgar casa. Sin embargo, el uso nos en bajo de que consideramos dicho animal, seña, y aun nos manda, que la primera la es diverso el nombre que le aplicamos, ya apliquemos á unas cosas, y la segunda á en sentido recto, ya en el metafórico. De otras. Por este tenor decimos educación cimos puerco, en estos casos: piara de doméstica, guerras domésticas,animales do puercos, matar puerco, comer carne de puer mésticos, disensiones domésticas, &c, y de co, manteca de puerco, &c, y en sentido fi jando lo doméstico, tomamos lo casero di gurado y proverbial: el puerco de Epicú- ciendo: haciendas caseras, vida casera, pan ro: ú cada puerco le llega su San Martin: rasero, lienzo casero, &c. echar margaritas à puercos. Parece que Este mismo uso nos enseña la diferen este nombre es el propio del animal, y de cia entre regio y real. Aunque ambas voces acepción mas inmediata, como derivado del vienen del nombre rey; decimos el palacio parens latino: porque de él se forman las /cal, los reales ejércitos, la marina real, voces porquerizo, y porqueriza, y no de el consejo real, la real familia, &c; pero los otros nombres. En la caza de monte el epíteto regio va con otros nombres, se llama puerco al jabalí y no cerdo ni co como el regio solio, el censor regio, regia chino; y de aquella sola voz, como origi prosapia, y por comparación se aplica á nal, se forma la compuesta puerco espin cosas magníficas y espléndidas, como fun Usamos del nombre cerdo indiferente ción regia, banquete regio, aparato re- mente, y de puerco en los cuatro primeros gio, &c. ejemplos arriba aplicados: mas no en los También nos enseña la distinción entre restantes, porque en los otros sentidos de sacerdote y presbítero: lo primero se dice semejanza y comparación, solo se extien en la religion católica, en la judía y en la de á estas frases, vive como un cerdo, engor pagana; y lo segundo solo se dice del mi da como un cerdo. nistro católico en cuanto ha recibido el or Usamos del nombre cochino en estos ca den sacerdotal: sin embargo, no se da el sos, casi siempre para chanza y desprecio: ( 177 ) San Antonio y su cochino: corne como un Esta materia era importante tratarla en cochino: no son pelos de cochino: la muer este lugar con alguna extension, porque te del cochino. Por esto se forman de la abundancia misma de nuestro idioma este nombre y no de los demás, estos nos obliga á ser mas cautos, solícitos, y derivados cochinería, cochinada, y llama remirados para acertar nuestra elección mos cochina á la persona sucia y desasea entre la tan varia riqueza de su dicciona da; sin embargo decimos también puerca rio. Me he detenido acaso mas de lo que y porquería. era menester en este género de observa De la voz marrano usamos mas para ciones, así por el motivo que acabo de despreciar y motejar, que para definición exponer, como para hacer mas sensible la d.el animal: Marrano se llamaban unos á falta que padece de un tratado particular otros los moros y los cristianos por apodo: de sinónimos nuestro riquísimo idioma, duerme, ό come, ó engorda comoun marrano, habiéndolo gozado ya casi todas las len también se suele decir. guas vivas de Europa. De la ignorancia del verdadero y pro Igual reseña podríamos hacer de los pio significado de las palabras, procede nombres asno, burro,borrico, jumento. ¿Poi también la impropiedad de su uso en las qué decimos el asno de oro de Apuleyo y aplicaciones figuradas. De aquí nacen tan no el burro, ni el borrico! ¿Por qué deci tas imágenes inadecuadas, tantas metáfo mos burro cargado de letras, y no borrico? ras incoherentes, tantos pensamientos fal ¿Por qué decimos la burra de Balan y no sos. Por ejemplo, el que confundiese las la borrica, ni la asna? ¿Por qué risa de voces sierpe y serpiente, como lo hace el borrico, y no de asno, ni burro? ¿Por qué diccionario, diria: la sierpe engaño à Eva, caer de su burro ó de su asno, y no de su en lugar de la serpiente: diria de una mujer borrico, ni jumento? ¿Por qué orejas de bur colérica y soberbia; es una serpiente en lugar ro, y no de asno, ni borrico, ni jumento? de una sierpe: diria de una persona mor ¿Por qué llamamos borrico al hombre sim daz y maldiciente, tiene una lengua de ser ple y manso, y no burro, ni asno? ¿Por piente, en vez de lengua de sierpe como se qué el que ha caído en un engaño ó equi dice generalmente. En esta impropiedad vocación, dice: he sido un borrico, y no un caen los que confunden el género con la burro? ¿Por qué, si bien todos cuatro nom especie, ó al contrario; y no habrán con bres se aplican á un hombre tonto, solo el tribuido poco á que los incautos ó perezo de burro se aplica al muy sufrido, ó al que sos no conozcan este peligro algunos re lleva todo el trabajo en una casaú oficina, franes nuestros, como aquel de: olivo, oli entre sus iguales? ¿Por qué decimos bur va, y aceituno, todo es uno: y el otro tan co ra de leche, y leche de burra, y no de borri mún, ganso, pato y ansarón, tres cosas sue ca, ni de asna? ¿Por qué llamamos burre nan, y una son: pero yo respondo, que tres ro y no borriquero al que cria burras de le cosas suenan, y tres cosas son. Cuando che, y borriquero y no burrero al que cui decimos, hablar por boca de ganso, y no da y lleva burros al prado? ¿Por qué lla de pato: cuando decimos la oliva de lapaz mamos borricada, y no burrada, á una y no el olivo; damos un claro ejemplo de cavalgada en burros, ó á una manada de que hay alguna diferencia entre aquellos ellos? tres objetos, si no como individuos, á lo ¿Hasta dónde podríamos extender este menos por algún accidente que hace va examen de las voces sinónimas, si quisié riar su uso. semos repasar aquí su interminable serie, contando con la paciencia de los lectores? (C^praany.—Filosoßade la elocuencia.) 23 DEL INGENIO. JjiN vano habríamos pretendido mostrar también toda invención en las artes aro-u- con doctrinas, ejemplos y reflexiones guia ye ingenio, y el que carece de este don na das de la filosofía, las demás calidades que tivo, nunca será sino un imitador mas ó constituyen el talento oratorio, si nos ol menos perfecto de las operaciones de otro. vidásemos de la primaria y principal que Y no por otra razón decimos que en tal ó es elingenio, y la que preside á todas. ¿De tal hombre hay cantera, ó que tiene can qué podrían servir los consejos de la sabi tera, tomándola metafóricamente por in duría, los colores de la imaginación, el ca genio ó talento natural que descubre en lor de los afectos, y las reglas del buen sus hechos ó escritos, al modo como de gusto para hablar y escribir con eminen aquella se saca la piedra viva para labrar cia y aplauso, al que se hallase destituido después los edificios. Por extension se de esta llama, de esta inspiración, de este llama ingenio toda máquina ó artificio en entusiasmo, pues con estas metáforas poé mecánica, como las catapultas y trabucos ticas se define el ingenio? Este conside en la antigua artillería, y los molinos de rado como una lumbre celeste que escla azúcar ó trapiches, por suponerse ingenio rece á nuestro entendimiento, se llama en su invención. Y por otra aplicación también numen y genio, personificando es análoga damos el nombre de ingenio á la tos nombres en figura de deidad ó ángel industria ó maña de que usa el hombre pa que nos inspira, á dicho de Ovidio, hablan ra conseguir sus fines, porque en estos me do de los poetas, est Deus in nobis, para dios se supone siempre artificio. Por úl sobresalir en alguna de las artes de inven timo se llama por sinécdoque ingenio al ción, que por esto las llamamos artes de mismo sugeto ingenioso. ingenio. Pero como en la lengua francesa no se Ingenio significa aquella virtud del áni distingue particularmente el ingenio del mo y natural disposición, nacida con no genio, pues no tiene para lo uno y lo otro sotros mismos, y no adquirida por arte ó mas que el nombre genie; de aquí habrá industria, la cual nos hace hábiles para provenido que en estos últimos tiempos, á empresas extraordinarias, y para el des fuerza de tantas traducciones, se haya in cubrimiento de cosas altas y secretas. Por troducido en los escritos de algunos de esto llamaron los griegos y latinos ingenio nuestros literatos el abuso de llamar cons- á la naturaleza de cualquier cosa: y así tantemante genio á lo que constantemente ( 179 ) han dicho ingenio nuestros padres y abue que entendemos nosotros por ingenio, que los. En aquella lengua, gente se toma por es talento superior ó inventivo en las ope ingenio mas que por genio, porque la di raciones del discurso, y no del ánimo. cha voz se aplica al arte y profesión de Si alguna vez se ha usado, ó se puede ingeniero, y al mismo cuerpo de ingenie usar, la palabra genio, es personificándo ros llamado corps du genie; y cuando se la, tomada entonces por algún sabio singu nombra en particular á un ingeniero es lar que ha hecho época en los adelanta con el nombre de ingénieur, y no genieur, mientos de alguna ciencia; pero siempre como parecía mas regular según la radi acompañada de algún epíteto, como de cal genie. Luego, bien podremos decir que divino, creador, inventor, soberano, original. el genio traducido á la francesa es nuestro Diremos muy bien en este sentido el gaño ingeyíio verdaderamente castellano. de Homero, de Platon, de Aristóteles, de Descartes, de Newton; y no, "Homero Entre nosotros la voz genio vale lo mis fué un genio," "Platon era un genio &c;" ino que el natural, la inclinación con que se porque esta acepción absoluta nada signi siente cada uno para el ejercicio en alguna fica en castellano. Y aun es mas impro ciencia ó arte, así como en las de invención pia, y menos inteligible, si, hablando de las se llama numen. Este numen que levanta artes amenas, dijésemos, como traducido ta mente humana á una region superior, y á la francesa: el genio en un poeta ú orador en cierto modo la endiosa, es aquel es puede ser superior ά su gusto.—En la elo- píritu agente que mueve el talento inven cuenciapuede mas el genio que el arte.—El tor, y abre rumbos no conocidos al discur genio daña ά los sentimientos del orador.— so. Por esto la supersticiosa admiración Hay escritores de mucho gusto para juzgar, en la antigua gentilidad dio los nombres ya y de poco genio para componer.—Al que de genio, ya de demonio á esta potencia in profesa muchas artes le llaman genio univer telectual con la que se distinguieron algu sal Sfc. Tales son los ejemplos que se nos varones sabios por su eminente y ma pueden citar, dejando otros muchísimos ravillosa inteligencia. Este numen era el vaciados en esta misma turquesa, pues son genio de Platon, y el demonio de Sócrates; ya sobrados para el desengaño: y tales los la ninfa Egéria que guiaba á Numa; y la que se leen en la pésima traducción cas cor cilla blanca con quien consultaba Serto- tellana de las lecciones de Hugo Blair. rio. Nose pudo entonces retratar con otros El nombre ingenio en su común signifi emblemas mas significativos la luz miste cación se extiende mas allá de los térmi riosa y oculta de la filosofía, de la ciencia nos de las artes amenas, y de imaginación, política, y del arte de la guerra. Tanta pues se aplica igualmente al talento so fué la veneración y respeto que se adqui bresaliente en las matemáticas, en la poe rió el saber soberano de ciertos hombres, sía, en la táctica, en la elocuencia, en la que la admiración tuvo que atribuir la fuer política,en la pintura, en la astronomía, en za de su ingenio á influjo sobrenatural. la música, en la física, en la mecánica, &c. También se toma la voz genio por la Con el arte y el estudio se puede aumen misma naturaleza ó índole que nos inclina tar este talento, mas no adquirir. á las obras buenas, ó bien á las malas: por No llamamos hombre de ingenio al hom que, como se ha dicho, genius est quod una bre de esquisito gusto, ó de feliz imagina gignitur nobiscum; tales son las personas ción, si no engendra, produce, ó crea por que llamamos de buena, ó mala índole. sí; que es decir, si no trabaja de su propia Pero ninguna de estas propiedades, que invención, que decimos también de propio influyen en la moralidad, pertenecen á lo marte, en señal de suponerse en el inge- ( 180 ) nio algo de divino. Lo nuevo y lo singu- j Plancio, por Sestio, por Fonteyo, y red- lar en los pensamientos no basta para dar be como cosa sonora y agraciada los luga- el nombre de ingenio al orador; es menés· res patéticos del francés Masillon, y deles- ter que sus ideas sean grandes ó suma pañol P. Granada, que debían enternecer mente importantes á los hombres. Y en le y arrobarle; ¿qué idea puede tener de este punto se diferencian las obras de in este don sublime que la especulación de genio de las originales; porque éstas solo las definiciones no puede explicar á quien tienen el carácter de la singularidad, y no no puede sentirlo? Las maravillas de los el de la invención; la cual no debe enten afectos de aquellos grandes maestros nada derse solo en la traza y composición, sino dicen al que no puede imitarlos: y como también en la expresión y estilo. Los el que no puede imitarlos, no tiene en su principios del arte de bien decir, son to ánimo centella alguna de esta llama divi davía tan obscuros, tan varios é imperfec na, en vano espere producir cosa alguna tos, que el que no es realmente inventor excelente, ni como poeta, ni como ora en este género, jamas alcanzará el título dor. Las reglas del arte son inútiles, y los de grande ingenio. No basta un fino gusto, dechados también, al escritor que carece una delicada crítica, ni conocer lo imper de ingenio, pues no puede crear, ni tam fecto, lo sublime, si no produce nuevas poco imitar, porque quien no siente lo que perfecciones, ó las presenta con novedad, el maestro siente en tal pasaje ó situación, que no es pequeña gracia y virtud. Con ¿cómo sabrá jamas ponerse en aquel caso? el gusto se juzga; y solo con el ingenio se Copie, ó robe entonces los pensamientos ejecuta. Este ha precedido siempre á toda ágenos: y véndanos después, como el mer delicadeza y primor, como sucedió en la cader, el trabajo de otras manos. infancia de la poesía, de la elocuencia y Algunos han creido que lo que llama de otras artes, en que las ideas mas subli mos ingenio consistía en la extension de mes, y las expresiones mas vehementes, la memoria: errado concepto de entendi andaban vestidas en traje tosco y plebe mientos vulgares, que hallándose con el yo. A los primeros héroes pinta la anti cerebro amueblado, digámoslo así, de pen güedad desnudos, para presentar el vigor samientos y frases prestadas, han creido y esfuerzo de su naturaleza; y si vistió ai- igualar á los originales, á los escritores cuna vez parte de sus miembros, era con que escriben de propio numen, como si di silvestres despojos de sus propias hazañas, jéramos, que trabajan con materiales de como insignias de trofeo, y no como ador su propia mina. El hombre docto, que no y compostura. cuenta solo con su memoria, viene á ser el El ingenio del orador sujeta al imperio obrero inferior que va á las canteras á es de su palabra todo lo criado: pinta á la na coger el mármol; y el hombre de ingenio turaleza toda con imágenes: enciende ó es el escultor que hace respirar la piedra apaga las pasiones; y hace hablar al silen bajo la forma de la Venus de Guido, ó del cio mismo. Lo hermoso toma bajo de su Gladiador romano. El ingenio, sí, que pue pluma, nueva hermosura; lo tierno, nueva de suplir á la memoria; pero jamas ésta al suavidad; lo enérgico, nuevo vigor; lo ter ingenio. Cervantes produjo su Don Qui rible, nueva sublimidad; en fin, el ingenio jote, sin haber historia verdadera de tal del orador arde sin consumirse. héroe, ni de sus hechos; y Cornelio á La En vano preguntaría qué es ingenio, el pide con toda su maravillosa erudición no que no tuviere de él alguna semilla en hubiera hecho una página de la cuaresma su ánimo: el que queda tibio y tranquilo de Masillon, ni de las oraciones fúnebres leyendo las peroraciones de Cicerón por de Bossuet, ( ι 11 ) . El ingenio, hemos de confesarlo, tiene ron fueron compuestas solo para la lectu también sus extravíos;y suele perderse re ra, y sin embargo, son acaso lo mas vigo montándose en alas de una impetuosa ima roso y penetrante que tiene la elocuencia. ginación. Aquí entra á ejercer su oficio El orador algunas veces ha de hacer ha un severo gusto, y una sabia moderación, blar la pasión, y en este caso no debe se que se forma con el estudio crítico de los guir los pasos lentos y acompasados del maestros del arte; pero siempre con aquel disertor. La verdad misma, realzada con temperamento de no obedecer ciega y ser la novedad de la expresión, y el calor del vilmente al ejemplo de aquellos ánimos estilo, da mas valor á la justicia déla cau flemáticos é insensibles, que parece qui sa, y gana los votos todos del auditorio. sieran arrancar á la elocuencia sus rayos. Digamos en suma: que el orador, ó es Todo lo que está lleno de verdad y razón critor, dotado de ingenio, cuando trata de puede respirar alguna vehemencia; pero objetos que tocan vivamente su corazón, huyendo la ridiculez y fantasía del decla ha de comunicar de necesidad á su estilo mador que, esgrimiendo con palabras hue los movimientos de su ánimo. Por esto cas, se enardece puerilmente representan vemos que ordinariamente los escritores do con ánimo frío lo patético. de ingenio pintan su carácter en sus escri La elocuencia escrita, por estar des tos, y solo de ellos se dice que tienen su acompañada de acción, no necesita menos estilo propio, aunque otros les excedan de la moción, que la pronunciada. Las tal vez en mas hermosa y expléndida elo cución. Veninas, y la segunda Filípica de Cice- •rOapmany.—Filosoßa de la elocuencia.) ^m&oWMfr A Adivino, Profeta 7 Adonde, Donde 66 A—primer sonido vocal—ideas ά que Adonde, Donde, De donde, Por don se refiere.— V. la nota al art. Alma. 13 de 67 Abajo, Debajo 3 Adulador, Lisonjero 7, y 102 Abandonar, Dejar 3 Advertencia, Prevención 128 Abandonar, Desamparar 57 Advertido, Avisado 8 Abdicar, Hacer dimisión 4 Afecto, Amor, Cariño 17 Abecedario, Alfabeto 11 Afición, Gusto 85 Abominable, Detestable, Execrable. 4 A fin de, Para 120 Aborrecer, Detestar 5 Afirmar, Asegurar 8 Aborrecimiento, Odio 116 Aflicción, Tristeza 160 Absolución, Perdon, Remision 124 Aforismo, Axioma, Máxima, Senten Acá, Aquí. 24 cia, Apotegma 29 Acabar, Concluir 5 Afrenta, Agravio 9 Accidente, Desdicha, Desastre 57 Afrenta, Insulto, Ultraje S Acción, Acto 5 Agarrar, Asir 26 Acción, Movimiento 110 Agradar, Complacer 42 Acciones, Hechos 86 Agradar, Gustar 85 Acelerado, Rápido, Veloz 132 Agradecer, Reconocer 8 Acelerar, Apresurar. * 5 Agravio, Afrenta 9 Aceptar, Recibir 134 Agravio, Ofensa S Aclarar, Alumbrar 6 Agregar, Asociar 9 Aclarar, Ilustrar 6 Agricultor, Cultivador, Colono 9 Acogerse, Refugiarse 6 Aguardar, Esperar 10 Acordar, Consentir, Adherir 45 Agüero, Presagio 10 Acorde, Unánime, Conforme 161 Ahorro, Parsimonia, Economía .... 121 Actitud, Postura 7, y 127 Al—ideas ά que se refiere esta silaba. 13 Activo, Eficaz η Alabanza, Elogio 69 Acto, Acción 5 A la ligera, Ligeramente 102 Acuerdo, Convenio, Consentimiento. 47 Alargar, Prolongar, Prorogar 11 Acumular, Amontonar 17 Alboroto, Tumulto 11 Adagio, Proverbio, Refrán 130 Alcanzar, Lograr, Conseguir 103 Adherir, Consentir 45 Alcanzar, Llegar 104 Adherir, Consentir, Acordar 45 Alegría, Contento 46 Adherirse, Pegarse—continuación de Alegría, Gozo 83 Consentir, Adherir, Acordar 45 Alfabeto, Abecedario 11 í 184 ) Al fin, En fin, Finalmente 71 Antiguamente, En otro tiempo, Otras Alguien, Alguno 11 veces 21 Alguno, Alguien 11 Antipatía, Odio, Aversion 116 Alianza, Liga, Confederación, Coali Añadir, Aumentar 22 ción ., 12 Aparición, Vision 168 Aliento, Respiración 12 Apariencia, Exterior 76 Alma, Ánima, Ánimo 12 Apartar, separar 144 Alma, Espíritu 12 A pesar de, No obstante 22 Almanaque, Calendario 34 Apetecer, Desear 57 Alquimista, Químico 132 Apetencia, Apetito 22 Altanero, Altivo 14 Apetito, Apetencia 22 Altercado, Disputa, Contestación, De. Aplacar, Calmar 22 bate 64 Apócrifo, Supuesto 22 Apoderarse, Usurpar, Invadir 162 Altivo, Altanero 14 Apotegma, Axioma, Máxima Senten Altura, Elevación, Eminencia 14 cia, Aforismo 29 Alucinación, Alucinamiento 15 Alucinamiento, Alucinación...... 15 Apreciable, Estimable 74 Alucinar, Ofuscar, Confundir 15 Aprecio, Estimación 23 Alumbrar, Aclarar 6 Aprender, Instruirse 23 Alumbrar, Iluminar 15 Apresurar, Acelerar 5 Amable, Sociable 149 Apropiarse, Arrogarse, Atribuirse... 23 Amar, Querer 16 Aptitud, Capacidad 36 Apto, Capaz 23 Amar, Querer, Estimar 16 Aquí, Acá 24 Ambos, Entrambos, Ambos á dos... 16 Arenga, Discurso, Oración 24 Amontonar, Acumular 17 Armonía, Melodía 25 Amor, Cariño, Afecto 17 Aroma, Perfume 25 Amor, Galantería 17 Arrebatado, Violento 167 Amor á la patria, Patriotismo 19 Arrogarse, Apropiarse, Atribuirse... 23 Amotinado, Insurgente, Rebelde, Fac Arrojo, Atrevimiento, Osadía 27 cioso 94 Arruinar, Destruir 61 Amparo, Auxilio, Socorro 28 Arte, Oficio, Profesión 25 Analogía, Conformidad 20 Articular, Proferir, Pronunciar 129 Analogía, Relación 136 Ancianidad, Vejez 20 Articular, Pronunciar 129 Anciano, Viejo 167 Artificio, Destreza, Doblez, Sutileza, Anhelo, Deseo 20 Astucia 61 Ánima, Ánimo, Alma 12 Ascendiente, Imperio, Influencia.... 26 Animal, Bestia, Bruto 20 Asegurar, Afirmar 8 Ánimo, Ánima, Alma 12 Asiduo, Firme, Constante, Perseve Animoso, Valeroso, Valiente, Intré rante 79 pido 21 Asilo, Refugio 135 Aniquilar, Anonadar 21 Asir, Agarrar 26 Aniquilar, Destruir 21 Asistir, Socorrer, Ayudar. 149 Anonadar, Aniquilar 21 Asociar, Agregar 9 Anteceder, Preceder 21 Astrólogo, Astrónomo 26 Antecesor, Predecesor 127 Astrónomo, Astrólogo 26 ( 185 ) Astucia, Destreza, Doblez, Sutileza, Bruto, Bestia, Animal 20 Artiñcio 61 Buenas acciones, Buenas obras 33 Astuto, Sagaz 141 Buenas obras, Buenas acciones 33 Asunto, Materia 26, y 106 Bulla, Ruido 33 Atender, Escuchar 73 Atento, Cortés 26 Atrevido, Desvergonzado, Audaz.. . 61 C— Observaciones sobre esta letra en Atrevimiento, Osadía, Arrojo 27 la nota al art. Claustro 41 Atribuir, Imputar 27 Caducidad, Decrepitud 33 Atribuirse, Apropiarse, Arrogarse.. . 23 Calendario, Almanaque 34 Audaz, Desvergonzado, Atrevido... 61 Calidad, Clase, Especie 34 22 Aumentar, Añadir Calidad, Cualidad 34 Aún, Todavía 28 112 Calidad, Cualidad, Prenda, Dote... 34 Aunque, No obstante, Bien que.... Calidad, Nobleza 35 A un tiempo, En un tiempo 71 28 Calma, Tranquilidad, Paz. 158 Auxilio, Socorro, Amparo Calmar, Aplacar 22 Avariento, Codicioso 28 116 Canoro, Sonoro 35 Aversion, Odio, Antipatía Cansancio, Fatiga 36 Aversion, Repugnancia, Oposición.. 28 Cansar, Fatigar 36 Avisado, Advertido 8 Capacidad, Aptitud 36 Axioma, Máxima, Sentencia, Apo Capaz, Apto 23 tegma, Aforismo . 29 Ayudar, Socorrer, Asistir 149 Cara, Rostro, Faz, Semblante 138 Carestía, Escasez 72 Β Cariño, Amor, Afecto 17 Carnicero, Carnívoro 36 Β—Ideas ά que se refiere esta letra.— Carnívoro, Carnicero 36 art. Beso, Ósculo 32 Carrillo, Mejilla 36 Baile, Danza 52 Cartas, Naipes.... 37 Bajo, Debajo 53 Casta, Raza, Especie 133 Bancarota, Quiebra 29 Castidad, Continencia 37 Bastante, Suficientemente 30 Causa, Motivo 37 Batalla, Combate 30 Cautiverio, Cautividad 37 Belleza, Hermosura 31 Cautiverio, Esclavitud 37 Bendecido, Bendito 31 Cautividad, Cautiverio 37 Bendito, Bendecido. 31 Cautivo, Prisionero, Preso 38 Beso, Ósculo 31 Caverna, Cueva, Gruta 52 Bestia, Bruto, Animal 20 Celebrado, Célebre 39 Bestia, Estúpido, Idiota 32 Celebrar, Encarecer 38 Biblioteca, Librería 102 Célebre, Celebrado 39 Bien que, No obstante, Aunque.... 112 Célebre, Famoso 76 Blando, Tierno 154 Célebre, Ilustre, Esclarecido, Insig Borrasca, Temporal, Contratiempo, ne 88 Tempestad, Huracán, Tronada &c. 152 Celeridad, Prontitud 39 Breve, Corto, Conciso 49 Celeste, Celestial...... 39 Brujería Encantamiento , Encanto, Celestial, Celeste 39 Hechizo » 69 Censura, Crítica 50, y 51 24 ( 186 ) Chasco, Petardo 125 Conforme, Unánime, Acorde 161 Chico, Pequeño 40 Conformidad, Analogía 20 Chistoso, Gracioso 83 Confundido, Confuso 31 Cl—Observaciones sobre esta combina Confundir, Alucinar, Ofuscar 15 ción en la nota al art. Claustro.... 41 Confuso, Confundido 31 Clase, Calidad, Especie 34 Conjetura, Presunción 127 Claustro. Análisis ideológico de esta Conjeturar, Presumir 44 voz 41 Conjuración, Trama, Conspiración.. 157 Claustro, Convento, Monasterio.... 40 Consecuencia , Resultado , Éxito , Clemencia, Misericordia 109 Efecto 44 Coalición, Alianza, Liga, Confedera Conseguir, Lograr, Alcanzar 103 ción 12 Consentimiento, Convenio, Acuerdo. 47 Cobardía, Miedo 108 Consentir, Adherir 45 Codicioso, Avariento 28 Consentir, Adherir, Acordar 45 Cohechar, Corromper, Sobornar, Se Consentir, Tolerar, Permitir 156 ducir 49 Consonante, Rima 46 Cola, Rabo 41 Conspiración, Trama, Conjuración.. 157 Cólera, Ira 96 Constante, Duradero 68 Colono, Agricultor, Cultivador 9 Constante, Firme 78 Coloquio, Diálogo . 62 Constante, Firme, Perseverante, Asi- Combate, Batalla 30 duo. 79 Comentario, Glosa 82 Construir, Edificar 68 Comenzar, Empezar, Principiar.... 41 Contento, Alegría 46 Comercio, Negocio, Tráfico 42 Contento, Satisfecho 142 Compasión, Lástima 98 Contestación, Disputa, Altercado, De Compendio, Epítome, Resumen, Su bate 64 mario 42 Contestar, Responder 137 Complacer, Agradar 42 Contestar, Responder, Replicar.... 46 Complaciente, Condescendiente.... 42 Continencia, Castidad 37 Composición, Compostura 42 Continuación, Continuidad 46 Compostura, Composición 42 Continuamente, Siempre 146 Comprender, Entender. 71 Continuar, Proseguir 47 Concesión, Permiso, Privilegio, Li Continuidad, Continuación 46 cencia 43 Continuo, Perpetuo 124 Conciso, Corto, Breve 49 Continuo, Perpetuo, Incesante, Pe Conciso, Lacónico 43 renne, Perdurable, Inmortal, Eter Cónclave. Observaciones sobre esta no, Sempiterno 124 voz en la nota al art. Claustro.... 41 Contratiempo, Temporal, Tempes Concluir, Acabar 5 tad, Borrasca, Huracán, Tronada, Condescendiente, Complaciente.... 42 &c 152 Conducir, Guiar 84 Contravención, Desobediencia 47 Confederación, Alianza, Liga, Coali Convencer, Persuadir 47 ción 12 Convencido, Convicto 31 Confesado, Confeso 31 Convenio, Consentimiento, Acuerdo. 47 Confeso, Confesado 31 Convento, Monasterio, Claustro.... 40 Confianza, Esperanza 43 Convicto, Convencido.... 31 Conforme, Según 44 Copiador, Copiante, Copista 48 ( 187 ) Copiante, Copista, Copiador 48 Deducir, Inferir 54 Copista, Copiante, Copiador 48 Defecto, Falta 76 Corrección, Exactitud 48 Defender, Sostener, Proteger 55 Corregir, Enmendar 48 Degradar, Despreciar, Deprimir.... 59 Corregir, Reprender, Echar repri Dejado, Indolente, Perezoso, Negli menda 48 gente 90 Corresponder, Pertenecer 125 Dejar, Abandonar 3 Corromper, Sobornar, Seducir, Co Delatar, Denunciar 56 hechar 49 Deleite, Delicia, Placer, Voluptuosi Corrupción, Depravación 56 dad . „ 55 Cortedad, Vergüenza 166 Deleite, Placer.... 125 Cortejo, Galán 82 Delicado, Fino 78 Cortés, Atento 26 Delicia, Deleite, Placer, Voluptuosi Corto, Breve, Conciso 49 dad 55 Costumbre, Hábito 50 Delincuente, Malhechor 105 Costumbre, Uso 162 Delito, Culpa . 52 Creencia, Fe 50 Denunciar, Delatar ; . 56 Crianza, Educación 50 Depravación, Corrupción 56 Crítica, Censura 50, y 51 Deprimir, Despreciar, Degradar.... 59 Crítica, Sátira 51 Derecho, Directo, Dirigido 31 Cualidad, Calidad 34 Derecho, Justicia 56 Cualidad, Calidad, Prenda, Dote.... 34 Desagradar, Disgustar 64 Cuestionar, Interrogar, Preguntar... 52 Desagradecido, Ingrato 56 Cueva, Caverna, Gruta 52 Desamparar, Abandonar 57 Culpa,Delito 52 Desaseado, Sucio, Puerco, Inmundo. 150 Cultivador, Agricultor, Colono 9 Desastre, Desdicha, Accidente 57 Desatino, Disparate 64 D Descanso, Reposo 136 Danza, Baile 52 Descanso, R eposo, Quietud, S osiego. 137 Daño, Perjuicio 52 Descubrimiento, Invención 57 Dar, Entregar 53 Descuido, Inadvertencia. 90 Dar nombre, Poner nombre 53 Descuido, Olvido 118 Debajo, Abajo 3 Desdicha, Accidente, Desastre 57 Debajo, Bajo 53 Desdicha, Desgracia 58 Debate, Disputa, Altercado, Contes Desear, Apetecer 57 tación 64 Desear, Querer 131 Deber, Obligación 54 y 114 Deseo, Anhelo 20 Debe ser, Debe de ser 53 Desembarazo , Despejo , Desenfado, Débil, Inconstante, Ligero, Voluble, Desparpajo, Soltura, Desenvoltura. 57 Indiferente 54 Desenfado, Desembarazo , Despejo, De buena gana, De buena voluntad. 54 Desparpajo, Soltura, Desenvoltura. 57 Decadencia, Ruina 54 Desenvoltura, Desembarazo, Despe Decidir, Determinar, Resolver 62 jo, Desenfado, Desparpajo, Soltura- 57 Decidir, Juzgar 54 Desgracia, Desdicha 58 Decrepitud, caducidad 33 Deshabitado, Desierto, Solitario.... 59 De donde, Donde, Adonde, Por don Deshonesto, Obsceno 114 de 67 Desierto, Deshabitado, Solitario.... 59 ( 188 ) Designio, Intención, Mira, Proyecto. 95 Disoluto, Obsceno, Lascivo, Lujurio- Desigualdad, Diferencia, Disparidad. 63 so, Lúbrico, Impúdico 114 Desobediencia, Contravención 47 Disparate, Desatino 64 Despacio, Poco á poco 59 Disparidad, Diferencia, Desigualdad. 63 Desparpajo, Desembarazo, Despejo, Disputa, Altercado, Contestación, De Desenfado, Soltura, Desenvoltura. 57 bate 64 Despejo, Desembarazo, Desenfado, Distante, Lejos 65 Desparpajo, Soltura, Desenvoltura. 57 Distinguir, Separar. 65 Despreciar, Deprimir, Degradar.... 59 Distinto, Diferente, Diverso...... 65 Desprecio, Menosprecio 60 Distinto, Diferente, Diverso, Vario.. 63 Después, Luego 103 Diversidad, Diferencia, Variedad... 63 Destinado á, Destinado para 60 Diversion, Entretenimiento...... 65 Destreza, Doblez, Sutileza, Astucia, Diverso, Diferente, Vario, Distinto.. 63 Artificio ;.. 61 Diverso, Distinto, Diferente.- 65 Divulgar, Publicar 131 Destreza, Habilidad 85 Doble, Infiel, Pérfido,Traidor, Falso. 92 Destruir, Aniquilar 21 Doblez, Destreza, Sutileza, Astucia, Destruir, Arruinar 61 Artificio 61 Desvergonzado, Audaz, Atrevido... 61 Docto, Sabio, Erudito 140 Detenerse, Pararse 120 Dolor, Pena, Pesar.... 123 Determinar, Resolver, Decidir 62 Detestable, Abominable, Execrable. 4 Dolor, Pena, Sentimiento 123 Detestar, Aborrecer 5 Donaire, Gracejo, Labia 66 De todas partes, De todos lados.... 62 Donde, Adonde. 66 De todos lados, De todas partes.... 62 Donde, Adonde, De donde, Por donde. 67 Detrás, Tras 62 Dote, Calidad, Cualidad, Prenda.... 34 Diálogo, Coloquio 62 Dudoso, Incierto 90 Diccionario, Vocabulario 63 Dudoso, Incierto, Problemático.... 128 Dicha, Felicidad 78 Durable, Duradero, Permanente, Es Dicha, Fortuna 80 table 67 Dictamen, Opinion, Parecer 118 Duradero, Constante. 68 Diferencia, Desigualdad, Disparidad. 63 Duradero, Durable, Permanente, Es Diferencia, Diversidad, Variedad.... 63 table 67 Diferente, Distinto, Diverso 65 Ε Diferente, Diverso, Vario, Distinto.. 63 Echar reprimenda, Corregir, Repren Diferir, Dilatar 64 der 48 Dificultad, Obstáculo 115 Economía, Parsimonia, Ahorro 121 Difuso, Largo 98 Edificar, Construir 68 Dilatado, Vasto, Extenso, Extendi Educación, Crianza 50 do 164 Efecto , Consecuencia , Resultado, Dilatar, Diferir 64 Éxito 44 Diligente, Espedito, Pronto 64 Efectuar, Realizar, Ejecutar 134 Diligente, Solicito 149 Eficaz, Activo 7 Directo, Dirigido, Derecho 31 Efigie, Imagen, Figura, Retrato.... 68 Dirigido, Directo, Derecho 31 Ejecutar, Hacer 85 Discurso, Arenga, Oración 24 Ejecutar, Realizar, Efectuar 134 Disgustar, Desagradar 64 Electo, Elegido 31 ( 189 ) Elegante, Elocuente 68 Equidad, Justicia 97 Elegido, Electo , 31 Equipaje, Tren 159 Elegir, Escoger 72 Equitativo, Justo 97 Elevación, Altura, Eminencia 14 Error, Yerro 72 Elocuente, Elegante 68 Erudición, Instrucción 93 Elogio, Alabanza 69 Erudito, Sabio, Docto 140 Embarco, Embarque 69 Escapar, Huir 87 Embarque, Embarco 69 Escasez, Carestía 72 Embuste, Mentira 107 Es cierto, Es verdad 72 Eminencia, Altura, Elevación 14 Esclarecido, Ilustre, Insigne, Célebre. 88 Empeñar, Obligar 114 Esclavitud, Cautiverio 37 Empeño, Tema, Porfía 69 Esclavitud, Servidumbre 145 Empezar, Comenzar, Principiar.... 41 Escoger, Elegir 72 Encantamiento, Encanto, Hechizo, Escombros, Restos, Ruinas 138 Esconder, Ocultar, Encubrir 116 Brujería 69 Escuchar, Atender 73 Encanto, Encantamiento, Hechizo, Escuchar, Oir 117 Brujería 69 Es decir, Esto es 73 Encarecer, Celebrar 38 Espanto, Susto 152 Encarecer, Exagerar 74 Especie, Calidad, Clase 34 Encima, Sobre 70 Especie, Raza, Casta. 133 Encontrar, Hallar 85 y 86 Espectro, Simulacro, Fantasma.... 147 En cuanto á mí, Por mí 70 Especulativa, Teórica 153 Encubrir, Ocultar, Esconder 116 Esperanza, Confianza 43 Energía, Fuerza 80 Esperar, Aguardar 10 Enfado, Enojo 71 Esperarlo, Esperárselo 73 En fin, Al fin, Finalmente 71 Espeso, Obscuro, Turbio 115 Engañar, Sorprender 150 Espíritu, Alma 12 Enjugar, Secar 142 Esposo, Marido 106 Enmendar, Corregir 48 Es preciso, Es menester. 74 Enojo, Enfado 71 Estable, Durable, Duradero, Perma En otro tiempo, Antiguamente, Otras nente 67 veces 21 Estado, Situación 149 Ensayo, Prueba, Experimento 131 Estar, Ser 144 Enseñanza, Instrucción 93 Estilo, Lenguaje 98 Ensueño, Sueño 151 Estimable, Apreciable 74 Entender, Comprender 71 Estimación, Aprecio 23 Enterrar, Inhumar 92 Estimar, Amar, Querer 16 Entrambos, Ambos, Ambos á dos... 16 Estimar, Querer 131 Entregar, Dar 53 Estipendio, Salario, Honorario 141 Entre tanto, Mientras 108 Estipendio, Salario, Sueldo, Soldada, Entretenimiento, Diversion 65 Honorario. 141 En un tiempo, A un tiempo 71 Esto es, Es decir 73 En vano, Inútilmente 71 Estorbar, Impedir 89 En vano, Vanamente, Inútilmente.. 163 Estúpido, Bestia, Idiota. 32 Epítome, Resumen, Sumario, Com Eternamente , Siempre , Perpetua pendio 42 mente.. 146 ( 190 ) Eterno, Infinito 74 Faz, Rostro, Cara, Semblante 138 Eterno, Perpetuo 74 Faz, Superficie 77 Eterno, Perpetuo, Incesante, Conti Fe, Creencia 50 nuo, Perenne, Perdurable, Inmor Fecundidad, Fertilidad 78 tal, Sempiterno 124 Fecundo, Fértil 78 Exactitud, Corrección 48 Felicidad, Dicha. 78 Exacto, Puntual 74 Fértil, Fecundo. 78 Exagerar, Encarecer 74 Fertilidad, Fecundidad 78 Excitar, Mover 75 Fidelidad, Lealtad 98 Excusa, Pretexto 75 Figura, Efigie, Imagen, Retrato.... 68 Execrable, Detestable, Abominable. 4 Fin, Objeto 113 Exigir, Requerir 75 Fin, Término 154 Existencia, Vida 166 Finalmente, En fin, Al fin 71 Existir, Ser, Subsistir ...... 145 Fino, Delicado 78 Éxito, Efecto, Resultado, Consecuen Firme, Constante 78 cia. 44 Firme, Constante, Perseverante, Asi Expedito, Diligente, Pronto 64 duo 79· Experiencia, Experimento...... 75 Fluido, Líquido 80 Experiencia, Observación 115 Forastero, Extranjero 76 Experimento, Experiencia 75 Fortaleza, Fuerza 80 Experimento, Prueba, Ensayo 131 Fortaleza, Fuerza, Vigor, Robustez. 81 Extendido, Extenso 31 Fortuna, Dicha 80 Extendido, Vasto, Extenso, Dilata Franqueza Sinceridad 148 do 164 Fraternal, Fraterno 80 Extenso, Extendido 31 Fraterno, Fraternal 80 Extenso, Vasto, Extendido, Dilata Frecuentemente, Muchas veces.... 110 Frugalidad, Parsimonia 122 do.... 164 Exterior, Aparie ncia. 76 Fuerte, Vigoroso, Robusto 167 Extranjero, Forastero 76 Fuerza, Energía 80 Extraño, Raro, Singular 133 Fuerza, Fortaleza 80 Extraordinario, Singular 148 Fuerza, Vigor, Fortaleza, Robustez. 81 Funesto, Fatal 77 Furia, Furor 82 Furor, Furia 82 Faccioso, Insurgente, Rebelde, Amo Futuro, Venidero 165 tinado 94 Falso, Infiel, Pérfido, Traidor,Doble. 92 G Falta, Defecto 76 Famoso, Célebre 76 Galan, Cortejo 82 Fantasma, Simulacro, Espectro.... 147 Galantería, Amor 17 Fatal, Funesto 77 General, Universal...» 82 Fatiga, Cansancio 36 Generosidad, Liberalidad 101 Fatiga, Trabajo 77 Glosa, Comentario 82 Fatigar, Cansar 36 Goce, Posesion 82 Favor, Gracia 83 Gordo, Grueso 83 Favorable, Propicio 130 Gozo, Alegría.. 83 Favorito, Valido, Privado 77 Gozo, Gusto 83 ( 191 ) Gracejo, Donaire, Labia,. 66 Ignorancia, Tontería, Necedad 88 Gracia, Favor 83 Ignorante, Tonto, Necio, Mentecato, Gracioso, Chistoso 83 Imbécil 157 Grandeza, Magnitud, Tamaño 84 Iluminar, Alumbrar 15 Gratitud, Reconocimiento 135 Ilustrado, Ilustre 88 Grave, Serio 84 Ilustrar, Aclarar 6 Gritos, Voces 168 Ilustre, Esclarecido, Insigne, Céle Grosero, Impolítico, Rústico 89 bre 86 Grueso, Gordo.... * 83 Ilustre, Ilustrado 88 Gruta, Cueva, Caverna 52 Imagen, Efigie, Figura, Retrato.... 68 Guardar, Retener 84 Imaginar, Imaginarse 89 Guiar, Conducir 84 Imbécil, Tonto, Necio, Ignorante, Gustar, Agradar 85 Mentecato 157 Gusto Afición 85 Gusto, Gozo 83 Impedimento, Obstáculo 115 Impedir, Estorbar 89 H Imperio, Ascendiente, Influencia... 26 Habilidad, Destreza 85 Impertinente, Importuno 89 Hábito, Costumbre 50 Impolítico, Grosero, Rústico 89 Habla, Lenguaje, Idioma, Lengua... 99 Importuno, Impertinente 89 Hacer, Ejecutar 85 Imprevisto, Inesperado 91 Hacer dimisión, Abdicar 4 Impúdico, Obsceno, Disoluto, Las Hallar, Encontrar 85 y 86 civo, Lujurioso, Lúbrico .·.. 114 Hechizo, Encantamiento, Encanto, Imputar, Atribuir 27 Brujería. 69 Inadvertencia, Descuido 90 Hechos, Acciones 86 Incapacidad, Insuficiencia, Ineptitud. 94 Hermosura, Belleza 31 Incesante, Perpetuo, Continuo, Pe Heroisidad, Heroísmo 86 renne, Perdurable, Inmortal, Eter Heroísmo, Heroisidad 86 no, Sempiterno 124 Hipótesis, Suposición 151 Incierto, Dudoso 90 Honor, Honra 86 Incierto, Problemático, Dudoso.... 128 Honorario, Salario, Estipendio 141 Inclinación, Propension 90 Honorario, Salario, Estipendio, Suel do, Soldada 141 Inconstante, Débil, Ligera, Voluble, Honra, Honor 86 Indiferente 54 Horrendo, Horrible, Horroroso 87 Indeciso, Irresoluto 96 Horrible, Horrendo, Horroroso 88 Indiferente, Débil, Inconstante, Li Horroroso, Horrendo, Horrible..... 87 gera, Voluble 54 Hueco, Vacío 87 Indolente, Dejado, Perezoso, Negli Huellas, Vestigio 166 gente 90 Huir, Escapar 87 Ineptitud, Insuficiencia, Incapacidad. 94 Huracán, Temporal, Contratiempo, Inesperado, Imprevisto 91 Tempestad, Borrasca, Tronada, &c. 152 Infamia, Ignominia 91 Infancia, Niñez 91 I Inferir, Deducir 54 Idioma, Lenguaje, Habla, Lengua... 99 Infiel, Pérfido 91 Idiota, Estúpido, Bestia 32 Infiel, Pérfido, Traidor, Falso, Do Ignominia, Infamia 91 ble 92 ( 192 ) Infinito, Eterno 74 Inútilmente, En vano, Vanamente.. 163 Influencia, Ascendiente, Imperio.... 26 Invadir, Usurpar, Apoderarse 162 Ingenio (del) 178 Invectiva, Sátira 96 Ingenio, Talento. 152 Invención, Descubrimiento 57 Ingenuo, Sincero 148 Ir, Irse 96 Ingrato, Desagradecido 56 Ira, Cólera 96 Inhumar, Enterrar 92 Irresoluto, Indeciso 96 Injuria, Ultraje 93 Inmolar, Sacrificar 140 J Inmortal, Perpetuo, Incesante, Con tinuo, Perenne, Perdurable, Eter Joven, Mozo 96 no, Sempiterno 124 Justicia, Derecho 56 Justicia, Equidad 97 Inmundo, Sucio, Puerco, Desaseado. 150 Insigne, Ilustre, Esclarecido, Céle Justo, Equitativo 97 bre 88 Juzgar, Decidir 54 Insinuación, Sugestión, Inspiración, Κ Instigación, Persuasion 151 Κ Observaciones sobre esta letra en Insípido, Insulso 94 la nota art. Claustro 41 Inspiración, Sugestión, Insinuación, Instigación, Persuasion 151 L Instante, Momento...... 93, y 109 L Ideas ά que se refiere esta letra.— Instigación, Sugestión, Inspiración, V, las notas ά los artículos Alma y Insinuación, Persuasion 151 Claustro 13 y 41 93 Instrucción, Enseñanza Labia, Donaire, Gracejo 66 93 Instrucción, Erudición Lacónico, Conciso 43 Instruirse, Aprender 23 Largo, Difuso 98 Insuficiencia, Incapacidad, Ineptitud. 94 Lascivia, Lujuria, Lubricidad 104 Insulso, Insípido 94 Lascivo, Obsceno, Disoluto, Lujurio Insulto, Afrenta, Ultraje 8 so, Lúbrico, Impúdico 114 Insurgente, Rebelde 134 Lástima, Compasión 98 Insurgente, Rebelde, Faccioso, Amo Lealtad, Fidelidad 98 tinado 94 Lejos, Distante 65 Integro, Recto 135 Lengua, Lenguaje, Idioma, Habla.. 99 Intención, Designio, Mira, Proyecto. 95 Lenguaje, Estilo 98 Interior, Interno 95 Lenguaje, Idioma, Habla, Lengua.. 99 Interior, Interno, Intimo 95 Leña, Palo, Madera 119 Interior, Interno, Intrínseco 95 Leyes naturales, Leyes de la natura Interno, Interior 95 leza 101 Interno, Interior, Intimo 95 Liberalidad, Generosidad. 101 Interno, Interior, Intrínseco 95 Libertino, Vicioso 101 Interrogar, Cuestionar, Preguntar.. 52 Librería, Biblioteca 102 Intimo, Interno, Interior 95 Licencia, Permiso, Concesión, Privi Intrépido, Animoso, Valeroso, Va legio 43 liente 21 Lícito, Permitido 102 Intrínseco, Interior, Interno 95 Liga, Alianza, Confederación, Coali Inútilmente, En vano 71 ción «· 12 ( 193 ) Ligera, Débil, Inconstante, Voluble, Menosprecio, Desprecio 60 Indiferente 54 Mentecato, Tonto, Necio, Ignorante, Ligeramente, A la ligera 102 Imbécil 157 Ligereza, Velocidad 102 Mentira, Embuste 107 Limar, Pulir 102 Merecimiento, Mérito 107 Líquido, Fluido.. 80 Mérito, Merecimiento 107 Lisonjero, Adulador 7 y 102 Miedo, Cobardía. 108 Lograr, Conseguir, Alcanzar 103 Miedo, Temor IOS Lubricidad, Lujuria, Lascivia 104 Mientras, Entre tanto 108 Lúbrico, Obsceno, Disoluto, Lascivo, Mira, Intención, Designio, Proyecto. 95 Lujurioso, Impúdico 114 Mirar, Ver 165 Luego, Después 103 Misericordia, Clemencia 109 Lugar, Sitio, Paraje 103 Moda, Uso 109 Lujuria, Lubricidad, Lascivia 104 Modelo, Tipo 154 Lujurioso, Obsceno, Disoluto, Las Momento, Instante 93 y 109 civo, Lúbrico, Impúdico 114 Monasterio, Convento, Claustro.... 40 Monólogo, Soliloquio 150 LL Motivo, Causa 37 Mover, Excitar 75 Llamar, Nombrar 112 Mover, Menear 110 Llegar, Alcanzar 104 Movimiento, Acción 110 Mozo, Joven 96 M Muchas veces, Frecuentemente... 110 Madera, Palo, Leña , 119 Muchedumbre, Multitud 110 Magnitud, Grandeza, Tamaño...... 84 Mudanza, Variación 164 Malhechor, Delincuente 105 Multitud, Muchedumbre 110 Malicioso, Maligno, Malo, Malvado. 105 Mundo, Tierra, Orbe, Universo.... 154 Maligno, Malo, Malvado, Malicioso. 105 Mutuo, Recíproco 111 Malo, Maligno, Malvado, Malicioso. 105 Ν Maltratar, Tratar mal 106 Malvado, Maligno, Malo, Malicioso. 105 Nación, Pueblo 111 Margen, Orilla, Ribera 118 Nadie, Ninguno 111 Marido, Esposo 106 Naipes, Cartas 37 Materia, Asunto 26 y 106 Natural, Sencillo 143 Materia, Objeto 107 Necedad, Ignorancia, Tontería..... 88 Maternal, Materno 107 Necio, Tonto, Ignorante, Mentecato, Máxima, Axioma, Sentencia, Apo Imbécil..., 157 tegma, Aforismo 29 Negligente, Indolente, Dejado, Pe Máxima, Sentencia 107 rezoso 90 Medicamento, Remedio. 136 Negocio, Tráfico, Comercio 42 Medio, Via 166 Ninguno, Nadie 111 Mejilla,· Carrillo 36 Niñada, Niñería. 112 Melancolía, Tristeza 160 Niñería, Niñada 112 Melancólico, Triste, Sombrío 159 Niñez, Infancia 91 Melodía, Armonía 25 Nobleza, Calidad 35 Mendigo, Pobre 126 Nombrar, Llamar. 112 Menear, Mover 110 No obstante, A pesar de 22 25 ( 194 ) No obstante, Aunque, Bien que.... 112 Notar, Observar 112 Notar, Tachar, Tildar 113 Paga, Pago H9 Notificar, Significar 113 Pago, Paga 119 Nuevo, Reciente 113 Palabra, Voz 119 y 168 Palo. Cómo representaban los celtas O la idea ά que pertenece esta voz.— Nota al art. Claustro 41 Objeto, Fin 113 Palo, Madera, Leña 119 Objeto, Materia 107 Palpar, Tocar, Tentar 155 Oblación, Ofrenda 117 Para, A fin de 120 Obligación, Deber 54 y 114 Para, Por 120 Obligar, Empeñar 114 Paraje, Lugar, Sitio 103 Obra, Producción 129 Paraje, Puesto, Sitio 131 Obsceno, Deshonesto 114 Paralogismo, Sofisma 120 Obsceno, Disoluto, Lascivo, Lujurio Pararse, Detenerse 120 so, Lúbrico, Impúdico 114 Parecer, Opinion, Dictamen 118 Obscuro, Tenebroso 153 Parecido, Semejante 121 y 143 Obscuro, Turbio, Espeso 115 Parsimonia, Ahorro, Economía..... 121 Observación, Experiencia 115 Parsimonia, Frugalidad 122 Observar, Notar. 112 Particular, Singular 148 Obstáculo, Dificultad ·.. 115 Pasar, Pasarse 122 Pasarse, Pasar 122 Obstáculo, Impedimento. 115 Paternal, Paterno 122 Obstinación, Terquedad 116 Paterno, Paternal 122 Ocultar, Encubrir, Esconder 116 Patriotismo, Amor á la patria...... 19 Odio, Aborrecimiento 116 Odio, Aversion, Antipatía 116 Paz, Tranquilidad, Calma. 158 Ofensa, Agravio 8 Pegarse, Adherirse.— Continuación de Oferta, Promesa 129 Consentir, Adherir, Acordar 45 Oficio, Arte, Profesión 25 Peligro,, Riesgo 123 Ofrenda, Oblación 117 Pena, Dolor, Pesar 123 Ofuscar, Alucinar, Confundir 15 Pena, Sentimiento, Dolor 123 Ofuscar, Oscurecer 117 Pequeño, Chico 40 Oír, Escuchar 117 Perdon, Remision, Absolución 124 Olvido, Descuido .118 Perdurable, Perpetuo, Incesante, Con- Omnipotente, Todopoderoso 118 tínuo, Perenne, Inmortal, Eterno, Opinion, Parecer, Dictamen 118 Sempiterno 124 Oposición, Aversion, Repugnancia.. 28 Perenne, Perpetuo, Incesante, Conti Opulencia, Riqueza 138 nuo, Perdurable, Inmortal, Eterno, Oración, Arenga, Discurso 24 Sempiterno 124 Orbe, Tierra, Mundo, Universo.... 154 Perezoso, Indolente, Dejado, Negli Orilla, Margen, Ribera. 118 gente 90 Osadía, Atrevimiento, Arrojo 27 Pérfido, Infiel 91 Ósculo, Beso. 31 Pérfido, Infiel, Traidor, Falso, Doble. 92 Oscurecer, Ofuscar, 117 Perfume, Aroma..... 25 Otras veces, En otro tiempo, Anti Perjuicio, Daño 52 guamente 21 Permanente, Durable, Duradero, Es- ( 195 ) table 67 Predecesor, Antecesor 127 Permiso, Licencia, Privilegio, Con Preguntar, Cuestionar, Interrogar.. 52 cesión 43 Prenda, Calidad, Cualidad, Dote... 34 Permitido, Lícito 102 Prerogativa, Privilegio 127 Permitir, Tolerar, Consentir 156 Presagio, Agüero 10 Permitir, Tolerar, Sufrir 156 Preso, Prisionero, Cautivo 38 Perpetuamente, Siempre, Eternamen. Presteza, Prontitud. 127 te 146 Presumir, Conjeturar. 44 Perpetuo, Continuo 124 Presunción, Conjetura 127 Perpetuo, Eterno 74 Presunción, Vanidad 163 Perpetuo, Incesante, Continuo, Pe Pretender, Solicitar 128 renne, Perdurable, Inmortal, Eter Pretexto, Excusa 75 no , Sempiterno 124 Prevención, Advertencia 128 Perseverante, Firme, Constante, Asi Principiar, Comenzar, Empezar.... 41 duo 79 Prisionero, Preso, Cautivo 38 Privado, Favorito, Valido 77 Perseverar, Persistir 125 Privilegio, Permiso, Concesión, Li Persistir, Perseverar 125 cencia 43 Perspicacia, Sagacidad 141 Privilegio, Prerogativa 127 Persuadir, Convencer 47 Problemático, Dudoso, Incierto.... 128 Persuasion, Sugestión, Inspiración, Proceder, Provenir 128 Insinuación, Instigación 151 Producción, Obra 129 Pertenecer, Corresponder 125 Proferir, Articular, Pronunciar 129 31 Perverso, Pervertido Profesión, Arte, Oficio. ,· 25 31 Pervertido, Perverso Profeta, Adivino 7 123 Pesar, Pena, Dolor Prolongar, Alargar, Prorogar 11 125 Petardo, Chasco Promesa, Oferta 129 125 Placer, Deleite Prontitud, Celeridad 39 Placer, Delicia, Deleite, Voluptuosi Prontitud, Presteza 127 dad 55 Prontitud, Viveza 168 Plebe, Vulgo 126 Pronto, Diligente, Expedito 64 Pleiteante, Pleitista 126 Pronunciar, Articular 129 Pleitista, Pleiteante 126 Pronunciar, Proferir, Articular 129 Pobre, Mendigo 126 Propension, Inclinación 90 Poco á poco, Despacio 59 Propicio, Favorable 130 Poner nombre, Dar nombre 53 Prorogar, Prolongar, Alargar. ,- ... 11 Ponzoña, Veneno 165 Proseguir, Continuar 47 Por, Para 120 Proteger, Defender, Sostener 55 Por donde, Donde, Adonde, De don Provecho, Utilidad, Ventaja 162 de 67 Provenir, Proceder 12S Porfía, Empeño, Tema 69 Proverbio, Adagio, Refrán 130 Por mí, En cuanto á mí 70 Proyecto, Intención, Designio, Mira. 95 Porque, Pues 126 Prudencia, Sabiduría 140 Posesion, Goce 82 Prueba, Ensayo, Experimento 131 Postura, Actitud 7 y 127 Publicar, Divulgar 131 Proceder, Anteceder 21 Pudor, Vergüenza. 166 Precio, Valor 163 Pueblo, Nación 111 ( 196 ) Puerco, Sucio, Inmundo, Desaseado. 150 Réplica, Respuesta 137 Pues, Porque 126 Replicar,Responder, Contestar.... 46 Puesto, Sitio, Paraje 131 Reposo, Descanso 136 Pulir, Limar . 102 Reposo, Quietud, Sosiego, Descanso. 137 Puntual, Exacto 74 Reposo, Sosiego 137 Reprender, Corregir, Echar repri Q menda 48 Repugnancia, Aversion, Oposición. 28 Quebrado, Roto, Rompido...... 139 Requerir, Exigir 75 Quebrar, Romper 138 Reserva, Secreto 143 Querer, Amar 16 Resolver, Determinar, Decidir 62 Querer, Amar, Estimar 16 .. „ [ Respectivo, Relativo 136 Querer, Desear 1 Querer, Estimar „ f Respeto, Veneración 165 _ * Respiración, Aliento 12 Quiebra, Bancarota q Responder, Contestar 137 Quietud, Reposo, Sosiego, Descanso, 137 Quietud, Tranquilidad 132 Responder, Contestar, Replicar.... 46 Químico, Alquimista 132 Respuesta. Réplica 137 Restos, Escombros, Ruinas 138 R Resultado, Efecto, Éxito, Consecuen cia 44 Rabo, Cola 41 Resumen, Sumario, Compendio, Epí Rapidez, Velocidad 165 tome 42 Rápido, Veloz, Acelerado 132 Retener, Guardar 84 Raro, Extraño, Singular 133 Retrato, Efigie, Imagen, Figura.... 68 Raza, Especie, Casta 133 Ribera, Orilla, Margen.. 118 Realizar, Efectuar, Ejecutar 134 Ridículo, Risible 138 Rebelde, Insurgente 134 Riesgo,Peligro. 123 Rebelde, Insurgente, Faccioso, Amo Rigor, Severidad , 146 tinado , 94 Rima, Consonante 46 Recelo, Sospecha , 150 Riqueza, Opulencia 138 Recibir, Aceptar , 134 Risible, Ridículo 138 Recibir, Tomar 156 Robustez, Fuerza, Vigor, Fortaleza. 81 Reciente, Nuevo 113 Robusto, Vigoroso, Fuerte 167 Recíproco, Mutuo 111 Rogar, Suplicar 151 Reclamo, Señuelo 134 Romper, Quebrar 138 Reconocer, Agradecer. 8 Rompido, Roto 31 Reconocimiento, Gratitud 135 Rompido, Roto, Quebrado 139 Recto, Integro 135 Rostro, Cara, Faz, Semblante 138 Refrán, Proverbio, Adagio 130 Roto, Rompido 31 Refugiarse, Acogerse 6 Roto, Rompido, Quebrado 139 Refugio, Asilo 135 Ruido, Bulla 33 Regla, Reglamento 135 Ruina, Decadencia 54 Reglamento, Regla 135 Ruinas, Restos, Escombros 138 Relación, Analogía 136 Rústico, Impolítico, Grosero 89 Relativo, Respectivo 136 Remedio, Medicamento 136 S Remision, Perdon, Absolución 124 Sabiduría, Prudencia..., 140 ( 197 ) Sabio, Docto, Erudito. 140 Servir para, Servir de 14g Sacrificar, Inmolar 140 Severidad, Rigor. 14g Sagacidad, Perspicacia 141 Siempre, Continuamente 146 Sagaz, Astuto 141 Siempre , Perpetuamente , Eterna Salario, Estipendio, Honorario 141 mente 146 Salario, Estipendio, Sueldo, Solda Significar, Notificar 113 da, Honorario « 141 Signo, Señal 147 Saluble, Sano, Saludable 142 Silencioso, Taciturno...... ¿ 147 Saludable, Sano, Saluble 142 Simulacro, Fantasma, Espectro.... 147 Sano, Saluble, Saludable 142 Sinceridad, Franqueza 148 Sátira, Crítica 51 Sincero, Ingenuo 148 Sátira, Invectiva 96 Singular, Extraordinario 148 Satisfecho, Contento 142 Singular, Particular. ·. 148 Secar, Enjugar 142 Singular, Raro, Extraño 133 Secreto, Reserva 143 Sitio, Lugar, Paraje 103 Seducir, Corromper, Sobornar, Co Sitio, Puesto, Paraje 131 hechar 49 Situación, Estado 149 Según, Conforme 44 Sobornar, Corromper, Seducir, Co Semblante, Rostro, Cara, Faz 138 hechar 49 Semejante, Parecido 121 y 143 Sobre, Encima 70 Sempiterno , Perpetuo , Incesante , Sociable, Amable 149 Continuo, Perenne, Perdurable, In Socorrer, Ayudar, Asistir 149 mortal, Eterno 124 Socorro, Auxilio, Amparo 2S Sofisma, Paralogismo 120 Sencillo, Natural 143 Soldada, Salario, Estipendio, Sueldo, Senda, Vereda 143 Honorario .. * 141 Sensación, Sentimiento 143 Solicitar, Pretender. 128 Sensible, Tierno 144 Solícito, Diligente 149 Sentencia, Axioma, Máxima, Apo Soliloquio, Monólogo 150 tegma, Aforismo 29 107 Solitario, Desierto, Deshabitado.... 59 Sentencia, Máxima Solo, Único 162 Sentimiento, Pena, Dolor 123 143 Soltura, Desembarazo, Despejo, Des Sentimiento, Sensación enfado, Desparpajo, Desenvoltura. 57 147 Señal, Signo Sombrío, Triste, Melancólico 159 134 Señuelo, Reclamo Sonoro, Canoro 35 144 Separar, Apartar Soportar, Sufrir... 151 Separar, Distinguir 65 Sorprender, Engañar 150 Sepulcro, Tumba, Túmulo, Sepul Sosiego, Reposo 137 160 tura Sosiego, Reposo, Quietud, Descanso. 137 Sepultura, Tumba, Túmulo, Sepul Sospecha, Recelo 150 cro 160 Sostener, Defender, Proteger 55 Ser, Estar 144 Subsistir, Ser, Existir 145 Ser, Existir, Subsistir • 145 Sucio, Puerco, Inmundo, Desaseado. 150 Serio, Grave 84 Sueldo, Salario, Estipendio, Soldada, Servicio, Servidumbre... 145 Honorario 141 Servidumbre, Esclavitud 145 Sueño, Ensueño 151 Servidumbre, Servicio 145 Suficientemente, Bastante 30 < 198 ) Sufrir, Soportar 151 Tomar, Recibir 156 Sufrir, Tolerar 151 Tomo, Volumen • 168 Sufrir, Tolerar, Permitir 156 Tontería, Ignorancia, Necedad 88 Sugestión, Inspiración, Insinuación, Tonto, Necio, Ignorante, Mentecato, Instigación, Persuasion 151 Imbécil 157 Sumario, Resumen, Epítome, Com Trabajo, Fatiga 77 pendio « 42 Traducción, Version 157 Superficie, Faz. 77 Traducir, Trasladar, Vertir 159 Suplir, Rogar 151 Tráfico, Comercio, Negocio 42 Suposición, Hipótesis 151 Traidor, Infiel, Pérfido, Falso, Doble. 92 Supuesto, Apócrifo 22 Trama, Conspiración, Conjuración.. 157 Suspendido, Suspenso 31 Tramar, Urdir 162 Suspenso, Suspendido 31 Tranquilidad, Paz, Calma . 158 Susto, Espanto 152 Tranquilidad, Quietud 132 Sutileza, Destreza, Doblez, Astucia, Transferir, Transportar 158 Artificio 61 Transportar, Transferir 158 Tras, Detrás 62 Τ Trasladar, Vertir, Traducir 159 Tratar mal, Maltratar 106 113 Tachar, Notar, Tildar Tren, Equipaje 159 147 Taciturno, Silencioso. Triste, Melancólico, Sombrío 159 Talento, Ingenio 152 Tristeza, Aflicción 160 Tamaño, Grandeza, Magnitud 84 Tristeza, Melancolía 160 69 Tema, Empeño, Porfía Triunfar, Vencer 160 108 Temor, Miedo Tronada , Temporal, Contratiempo, Tempestad, Temporal, Contratiempo, Tempestad, Borrasca, Huracán, Borrasca, Huracán, Tronada, &c. 152 &c 152 Temporal, Contratiempo, Tempes Tumba, Túmulo, Sepulcro, Sepul tad, Borrasca, Huracán, Tronada, tura 160 &c 152 Túmulo, Tumba, Sepulcro Sepultu Tenebroso, Obscuro 153 ra 160 Tentar, Tocar, Palpar. 155 Tumulto, Alboroto 11 Teórica, Especulativa 153 Turbio, Obscuro, Espeso 115 Término, Fin 154 173 Términos Sinónimos U Terquedad, Obstinación. 116 Tierno, Blando 154 Ultraje, Afrenta, Insulto 8 Tierno, Sensible 144 Ultraje, Injuria. 93 Tierra, Mundo, Orbe, Universo.... 154 Unánime, Acorde, Conforne 161 Tildar, Notar, Tachar 113 Único, Solo 162 Tipo, Modelo 154 Universal, General 82 Tocar, Tentar, Palpar 155 Universo, Tierra, Mundo, Orbe.... 154 - Todavía, Aún 28 Urdir, Tramar 162 Todopoderoso, Omnipotente...... 118 Uso, Costumbre 162 Tolerar, Consentir, Permitir 156 Uso, Moda 109 Tolerar, Sufrir 151 Usurpar, Invadir, Apoderarse 162 Tolerar, Sufrir, Permitir 156 Utilidad, Provecho, Ventaja 162 ( 199 ) Vereda, Senda 143 Vergüenza, Cortedad 166 Vacío, Hueco 87 Vergüenza, Pudor 166 Valentía, Valor 163 Version, Traducción 157 Valeroso, Valiente, Intrépido, Ani Vertir, Trasladar, Traducir 159 moso 21 Vestigio, Huellas 166 Valido, Favorito, Privado 77 Via, Medio 166 Valiente, Intrépido, Valeroso, Ani Vicioso, Libertino 101 moso 21 Victoria, Vencimiento 166 Valor, Precio 163 Vida, Existencia 166 Valor, Valentía.., 163 Viejo, Anciano 167 Vanamente, Inútilmente, En vano.. 163 Vigor, Fuerza, Fortaleza, Robustez. 81 Vanidad, Presunción 163 Vigoroso, Fuerte, Robusto 167 Variación, Mudanza. 164 Violento, Arrebatado 167 Variación, Variedad 164 Vision, Aparición 168 Variedad, Diferencia, Diversidad... 63 Viveza, Prontitud 168 Variedad, Variación 164 Vocabulario, Diccionario 63 Vario, Diferente, Diverso, Distinto. 63 Voces.—Su formación.—Nota al art. Vasto, Extenso, Extendido, Dilata Alma 13 do..... 164 Voces, Gritos ».. 168 Vejez, Ancianidad 20 Voluble, Débil, Inconstante, Ligera, Velocidad, Ligereza 102 Indiferente 54 Velocidad, Rapidez 165 Volumen, Tomo 168 Veloz, Rápido, Acelerado 132 Voluptuosidad, Delicia, Deleite, Pla Vencer, Triunfar 160 cer..... 55 Vencimiento, Victoria. 166 Voz, Palabra 119 y 168 Veneno, Ponzoña 165 Vulgo, Plebe 126 Veneración, Respeto 165 Venidero, Futuro 165 Y Ventaja, Utilidad, Provecho 162 Ver, Mirar. 165 Yerro, Error 72 LISTA DE SEÑORES SÜSCRITORES. EN LA CAPITAL. Exrao. Sr. Presidente de la República, Castillo, D. Felipe. general de division D. José Joaquín de Cervantes, D. Miguel. Herrera. Cervantes, D. Vicente Cevallos, D. José María. SEÑORES. Compta, D. Paulino. Acuña, D. Pablo. Contreras, D. José María. Aguado, D. Luis G. Covo,D. Juan. Alaman, D. Lúeas. Cruz, Fr. Antonio. Alf aro, D. Agustín. Cuevas, D. Luis G., ministro de Relacio Algara, D. Ignacio. nes. Alva, D. José María. Alva, Dr. D. Mariano. Charum, D. Ramon. Alva, D. J. R. Chaves», D. Juan. Andrade, D. Manuel. Diaz, D. Agustín. Anievas, D. José. Diaz de Bonilla, D. Manuel. Aranda, D. Mariano. Diaz, D. Manuel. Arrióla, D, Guadalupe. Domínguez, D. Juan. Arroyo, D. Miguel. Duran, D. José Ignacio. Badillo, Doña Josefa. Echeveste, D- José. Balderas,D. Antonio. Escobosa, D. Jesus. Barrera, D. Eulogio. Escoto, D. Antonio. Barrera, D. Francisco. Espinosa, D. Antonio. Barrera, D. José María. Espinosa, D. Rafael, coronel de caballe Bay lier es, D. Mariano. ría, director de la Escuela Normal del Buenabad, Lie. D. Mariano. ejército. Bulnes, D. José María. Esteva y Ulíbarri, D. M. Camacho, D. Silvestre. Estrada, D. Francisco. Campillo, D. Joaquin. Falcon, D. Marcos. Cancino, D. Rafael. Flores Alatorre, D. Ignacio. Carbajal, D. Francisco. Floriano, D. Joaquin. Casamadrid, D. Viviano. Fonseca, D. Juan. Castañeda y Nájera, D. Manuel. Fuentes, D. Angel. 26 ( 202 ) García Conde, D. Pedro, ministro de Guer Otero, D. Mariano. ra y Marina. Padilla, D. Ignacio. García, D. Manuel. Palacio, D. Francisco. García Muro, D. Francisco. Palomino, D. Manuel. Gomez García, D. Mariano. Palomo, D. Ignacio. Gonzalez de la Vega, D. José María. Parra, D. Francisco. Gonzalez, D. Manuel. Paz, D. Buenaventura. Gonzalez, D. Miguel. Peña, D Miguel. Guerra, D. Miguel. Pevidal, D. Patricio. Guillon, D. Luis. Peyersfeld, D. Manuel. Gutierrez, D. Genaro. Pineda, D. P. Heredia, D. Francisco. Piquero, D. Ignacio. Hernandez, Fr. Juan. Pulet, D. Pedro. Herrera, D. Francisco. Quitana Roo, D. Andrés, senador. Hidalgo, D. José Manuel. Ramirez, D. Antonio. Huerta, D. José María. Ramirez, D. Fernando. Iglesias, D. José. Ramirez, D. Simon. Jimenez, D. Miguel. Reyes, D. José María. Jimenez, D. José María. Rio, D. Andrés del. Labastida, D. Sebastian. Riva Palacio, D. Mariano, ministro de Ladrón de Guevara, D. Joaquin. Justicia. Laso, D. Miguel Rodriguez, D. Feliciano. Laspita, Br. D. José María, Rector de la Rodriguez, D. José María. Santísima. Rodriguez, Fr. Manuel. Leon, D. Joaquin R. de. Rosa, D. Luis de la, ministro de Hacien Lombardo, D. Francisco. da. Madrid, D. Antonio. Rosas, D. Manuel. Marroquí, D. Joaquin. Salazar, D. Benigno. Martinez, D. Luis. Salinas, D. José María. Martinez, D. José María. Sámano, Fr. Tomás. Medina, D, Gregorio. Segura, D. Vicente. Medina, Fr. Juan. Sierra, D. Felipe. Mendiondo, D. Pedro. Sierra, D. Mariano. Mendoza, D. José María, coronel; Sousa, D. Mariano, capitán. Merlin, Fr. Buenaventura. Terán, D. Felipe. Miñón, D. Juan, general de brigada. Terreros, D. Pedro Romero de, general Moreno y Jove, Dr. D. Manuel, canónigo de brigada. de esta Santa Iglesia Catedral. Torrescano, D. Pablo. Moreno, Fr. Agustín María, Guardian de Troncoso, D. Luis. San Francisco. True va, D. Manuel. Nájera, D. José María. Ulíbarri, D. José Dolores. Navarro, D. Joaquin. Valdes, D. Ramon F. Olarte, D. Ramon. Valdes, D. José María. Orbegozo, D. Juan, general de division. Varas, D. Manuel. Ormaechea, D. Ignacio, general de brigada. Várela, D. Luis. Ortega, D. Francisco. Vazquez, Fr. Rafael. Osollo, D. Francisco. Velasco, D. Juan, ( 203 ) Vera, D. José Joaquin. Villaseñor, Br. D. Juan. Vértiz, D. Juan Ν. Viya, D. José María. Villalva, D. Estevan. Yañez, D. José Isidro. Villamil, D. José Lázaro. Zarate, D. Mariano. »»»Ε ΜΙΜΕ® ACAPULCO. García, D. Pedro. Loranca, D. José María. Rubio, D. Jacinto. Medina, D. Manuel. Perez Gavilán, D. Agustín. DU RANGO. Castañeda, D. Marcelino. ACTOPAM. Gameochipi, D. Gregorio. Cárdenas, D. Marcos, Doctor, Cura pár Gomez del Palacio, D. Francisco. roco y Vicario Foráneo. Olvera, D. Pedro. Ramirez, D. Fernando. AGUASCALÏENTES. Torre, D. Bernardo de la. Arenas, D. Antonio. EJUTLA. ATLIXCO. Martínez, D. Juan C. Genis, D. Francisco. Martinez, D. Pascual. Otero, D. Juan J. Moreda, D. Victor J. Perez de Leon, D. Francisco. Ramírez España, D. Joaquín. FRESNILLO. Zenon, D. Francisco. Santillan, D. Agustín.—4 ejemplares: no mandó la lista. CELAYA. Márquez, D. Víctor. GUADALAJARA. Brambila, D. Juan María.—5 ejemplares: CIUDAD DE BRAVOS. no mandó la lista. Martinez, D. Ramon Ε. GUADALUPE Y CALVO. CIUDAD VICTORIA. Peimbert, D. José María. Cárdenas, D. Manuel. Guerrero, P. Andrés. GUANAJUATO. Campuzano, D. Ruperto.—7 ejemplares: CHALCHICOMULA. no mandó la lista. Castillo, D. Joaquín. HUEJUTLA. DOLORES HIDALGO. Andrade, D. Cristóbal. Corona, D. Francisco Mercado, D. Juan. Diaz, D, José Trinidad Quintero, D. Juan María, ( 2C3 4 ) Rodriguez, D. Francisco. NIEVES. Vera, D. Manuel Arellano, D. Jesus. Viniegra, D. Agustin. OAJACA. IXMIQUILPAM. Alamillo, D. Pedro Perez, Juez de letras. Bolaños, D. Cristóbal.—23 ejemplares: no mandó la lista. JALAPA. Perez y Rincón, D. Francisco.—7 ejem ORIZAVA. plares: no mandó la lista. Lopez, D. Clemente. Mosquera, D. Manuel. MAZATLAN. Soane, D. Ramon María. Estradra, D. Patricio.—4 ejemplares.· no mandó la lista. PUEBLA. MÉRIDA DE YUCATÁN. Castillero, D. Atenógenes.—6 ejemplares: Aznar Perez, D. Alonso. no mandó la lista. Calero, D. Francisco. Gonzalez, D. Marcelino.—25 ejemplares: Calero, D. Vicente. no mandó la lista. Elizalde, D. Pedro. Elizalde Quijano, D. Pilar. PURUÁNDIRO. Elizalde de Domínguez, D. Manuel. Burgos, D. Benito. Este van Carrillo, D. Manuel. Lopez, D. José Tiburcio. QUERÈTARO. Lopez Constante, D. Manuel. Pimentel, D. Mariano.—6 ejemplares: no Pedroso, D. Mariano. mandó la lista. Peraza D. Martin. Sauri Méndez, D. Gregorio. SAN ANDRES TUXTLA. Sierra, D. Justo. Solís Novelo, D. Vicente. García, D. Crispin. Sosa, D. José Domingo. SAN CRISTÓBAL CHIAPAS, Villamil, D. Eusebio. Cuendo Vallejo, D. José. MINERAL DEL MONTE. Pineda, D. Emeterio. Castelazo, D. Ignacio.—3 ejemplares: no mandó la lista. SAN JUAN DEL RIO. Olvera, D. José María.—5 ejemplares: no MO RE LI A. mandó la lista. Calderón, D. Ireneo. Cortés, D. José María. SAN LUIS POTOSÍ. Degollado, D. Santos. Avila, D. Florencio. Elguero, D. Manuel. Blanco, D. Estanislao. Gonzalez, D. Agustín. Conde, D. Manuel. Herrera, D. Rafael. Contreras, D. Estanislao Huerta Anton, D. Juan. Castro, D. Tirso. Lopez, D. Carlos. Castro, D. Marcelino. Pastor, D. Francisco. Echeverría, Fr. Felipe. Sierra, D. Manuel. Gomez, D. Ignacio. ( a > ) Gonzalez, Fr. Manuel. TULA DEL MEZQUITAL. Guzman, D. José Francisco. Fernandez, D. Vicente. Hoyuela, D. Mariano. Macotela, D. Domingo. Huerta, Fr. Francisco. Medellin, Fr. Luis. TULA DE TAMAULIPAS. Morillo, D. José. Villasana, D. Francisco. Rico, D. Antonio. TULANCINGO. Rodriguez, Fr. Estanislao. Carlon, D. Luis. Vega, D. Mariano. VERACRUZ. SAN MIGUEL ALLENDE. Vidal, D. José.—10 ejemplares: no man Bustamante, D. Gavino. dó la lista. Espinosa, D. Lorenzo. Gonzalez, D. Mariano. Moneada, Fr. Antonio. VIGAS. Pastor, D. Juan José. Domingo Casas, D. Manuel María. Santto, D. José Luis. VILLA DE SAN FRANCISCO. SANTA CRUZ. Tapia, D. José María.—5 ejemplares: no Gonzalez, D. Secundino. mandó la lista. SANTA MARÍA DEL RIO. VILLA DE TEHUANTEPEC. Nava, D. Guadalupe. Cházary, Fr. Félix. Robles, D. José María. SOTO LA MARINA. Garza, D. Juan B. de la. ZACAPU. Sierra, D. Jesus. TAMPICO. Escobar, D- Juan.— 11 ejemplares: no ZACAPUAXTLA. mandó la lista. Ochoterena, D. Antonio.—5 ejemplares: no mandó la lista. TEHUACAN. Almazan, D. Pascual. ZACATECAS. Parra, D. Luis G. de la. Zamora, D. Victoriano.—3 ejemplares: no mandó la lista. TEMASCALTEPEC. Alas, D. Manuel. ZIMAPAN. TESIUTLAN. Garrido, D. Alejandro. Castillo, D. Francisco. Gomez, D. Manuel. Gallegos, D. Antonio. Ledesma, D. Guadalupe. Ruiz, D. José G. Noeggerath, D. José. Ruiz, D. Pablo. Obregon, D. Romualdo. Rivera, D. José María. TOLUCA. Monroy, D. José Darío.—10 ejemplares: ZINAPÉCUARO. no mandóla lista Espino, D. Luis. Dice: Léase: suele serlo el de una fealdad: suele serlo de una fealdad: enteramente eternamente á otra á otro no solo es no lo es casualidades, cualidades, atiende atendiera ningún género ni confianza, ningún género de confianza, atribuye. atribuyen. centella. centellas. causado causada práctimente prácticamente ó la sátira. ó á la sátira. censurar; censura; morosidad mordacidad .con la relación con relación de un honrado de un hombre honrado que le son que les son diferencia indiferencia observancia, observación, y así sería bien dicho: y así no sería bien dicho: á la moral, á lo moral, primera, promesa, querar querer espetáctulo espectáculo causada causado se llama se llaman insuficiencia suficiencia insuficiencia suficiencia con los demás con respecto á los demás anda diligente ande diligente Saber un idioma, Saber su idioma,