NOTAS SOBRE FOLKLORE Y ETNOLOGÍA DEL VALLE DEL TIÉTAR

PEDRO LAHORASCALA y asesoramiento musical de ÁNGEL TIRADO GARCíA

Comarca al sur de la sierra de Gredas, 1891 Y 1894, según cita el arenense que publica el programa de fiestas de co nformada con la de San Vicente, el Faustino García Fraile en un traba jo (1997) en honor Valle del Tiétar se extiende de Oriente a Occidente a lo largo del río de su nombre, desde Casillas y San ta Ma ría del Tiétar, en el límite con la provincia APÉNDICE MUSICAL l. RONDA DE LOS PUEBLOS DE GREDOS de Madrid, hasta y El Transcripción de Ángel Tirado Garc ía Raso, tocando con la de Cáceres. y al Med iod ía, Toledo . A todo lo largo de Piedralaves y este valle , sin solución de con tinuidad con la Vera de Plasencia, corre la ca­ rretera comarcal de Plasencia a Alcorcón, en otro tiempo vía roma na de segundo orden (véase mapa de l profesor Criado del Val, 1960 ), y sen­ da sin duda preh istórica. También cita­ da por el Arcipreste de Hita en el Libro de Buen Amor y otros autores en sus viajes y estadías.

HÁBITAT Y PAISAJE

Esta condición de estar al Med iodía, entre sierras y beneficiado por un río but.no.. ~ principal y sus gargantas afluentes , 'f'cLS_ un .,.../1 tu vc.o- Ramacastañas, Arb illas , San ta María, ~ - _ . g =---: _ ~- ~~" _ =1 Chilla y otras , y numerosas fuentes y ------_:*= _. - - ~ ~ - - .- '---j veneros, confiere a este va lle de l t.o. no. \Jt.- rá..s _ un fQ.- c:If. -- \i~'ba. bu.n",--':::::::... I Tiétar un microclima prop io que le ha­ ce gozar de temperatura suave y salu­ ~~ tíferos aires de para íso cas i siempre ~~ l'jdetu 1'1••' - ~.. _ .o j.- lla.ma. I verde todo el año , con abundancia de .. lA.. . frutas y de productos tempranos . Sus casas, que miran al sur, muestran una d.-d"!'l s.; lIQJl14. (la~ ro. ",.~ - - 1 arquitectura popu lar serrana con bal­ tu = _ cones enmacetados y alerones sa lien­ tes , entramados de madera y teja ára­ 1) ROMANCE Ramito de hierbabuena. los de tu mano be. En los campos de cultivo y prados Coronado está el cordero malila de perejil, que se llaman claveles cinco en un ramo serranos, pueden verse edificios rura­ no de perlas ni zafiros, las flores de abril y mayo ni de claveles ni flor es, son parecidas a ti. (bis las les de singu lar armo nía, prop ios pa ra (bis) dos últimas) De la reguera. vivir las temporadas del laboreo y co­ sino de juncos marinos. Como vives enfrente secha, así como para albergue de ga­ Su santísimo cerebro (bis) En el cuarto donde duer ­ de la reguera. nados y aperos de labranza. lo traspasa el atrevido. mes pareces clavellina Es tierra de asentamientos antiguos para santo y bien hallado... hay un almendro florido de primavera. tus cabellos son las ramas con repoblaciones naturales, la de la 2) JOTAS yo cantando me despido. No para siempre. Reconquista y pos te riores , incluida, Mañana por la mañana (bis las dos últimas) Adiós que me voy. niña. probablemente, alguna de grupos an­ levántate la primera no para siempre, daluces, de donde quizá le venga el y a tu ventana verás 3) SEGUIDILLAS que mañana por la noche remoquete de «La Andalucía de Ávi­ un ramo de hierbabuena . Los de tu mano. volveré a verte. la», amén de por otras co nside racio­ (bis las dos últimas) Ya no se llaman dedos y adiós, adiós. nes geográficas y med ioambientales, con señas de vegetación como palme­ El texto literario de la primera parte va de tres en tres versos que se repiten musical­ ras, naranjos , balcones enmacetados mente como aquí se indica. Las otras dos partes acogen cada una sus coplas literarias. y hortensias a pie fijo en planteles y también como se indica. arr iates; que hasta se editó un periódi• co con dicha cabecera entre los años 29 NARRIA

(1994), popular de Piedralaves y Casavieja; seguidillas castellanas que, a mi modesto juicio, son madrileñas o tienen ese aire. Esta ronda, que recoge Teresa Cortés Testillano y edita en una de acompañamiento a su Cancionero Abulense en 1991 y titulada con el pri­ mer verso:" Coronado está el cordero »; esta ronda, digo, es muestra y resumen de un día de fiesta. Comienza con lo que parece ser restos de un romance religioso (Coronado está el cordero/ no de perlas ni zafiros/ ni de claveles ni tto­ tes/ sino de juncos marinos...), en to­ nalidades de rondeña; le sigue la ronda de mozos con la jota que lleva letras de galanteo (Ramito de yerbabuena,! ma­ nita de perejil,! las flores de abril y mayo/ con parecidas a ti) y cierra con unas se­ guidillas cuyos cantares son piropos (Ya no se llaman dedos/los de tu mano,! que se llaman claveles,!cinco en un ra­ mo.) (Apéndice musical 1) . Son las tres Baile en la plaza de Guisando. Foto de Wunderlich de principios de siglo, una de las más conocidas de su obra . partes de los días de fiesta: la función religiosa, la ronda de calles y el baile en la plaza. Jotas de ronda y rondas de albada; rondeñas, que por aquí dicen veratas a su Virgen del Pilar de Arenas , ima­ marcas toledanas de Escalona y (Apéndice musical 11) ; coplas de estilo gen procedente, precisamente, de Almorox y Talavera de la Reina todo a para el lucimiento y el baile bravo, que Córdoba, de tiempos de la invasión lo largo sur del río Tiétar hasta su paso llaman del cruzao y del uno; quedan árabe y encontrada en 1054, que dice a la provincia de Cáceres tras seguidillas, algún fandango castellano José Serrano Cabo en su Historia y Candeleda. Así no es de extrañar in­ y otros bailes de corro y persegu imien­ Geografía de Arenas de San Pedro y fluencias madrileñas en el folklore del to, de carnaval y bulla. Las enramadas de las villas y pueblos de su partido, Valle del Tiétar y de éste en aquélla ; se echaban , y se echan (hay pueblos , haciendo referencia a " un antiguo ma­ como las seguidillas que cierran el con­ como Arenas de San Pedro y Poyales nuscrito que se conserva religiosa­ junto que con el título " Ronda de los del Hoyo que están recuperando esta mente en Arenas» (y que no hemos Pueblos de Gredas» tiene grabado tradición), la noche de San Juan , a no­ podido conseguir). " Manantial Folk» en su CD Del Natural vias , primas hermanas, amigas del En cuanto a la emigración de anda­ luces, de lo que en Arenas de San Pedro hay, precisamente, un " Barrio de Triana », así rotulado, tras el río, a la salida de la carretera de Plasencia ha­ cia Cande leda, podr ía pensarse en los moriscos , que emigraron a Castilla y a León , y llevaron nombres de sus ba­ rrios como este de Triana y otros (" El Albaic fn» en Pastrana , Guadalajara) y sus conocimientos, como el de la se­ da, de lo que en esta comarca hubo una industria floreciente siglos pasa­ dos, tanto de la seda como del lino y el cáñamo, como recoge José Serrano Cabo en su obra anter iormente citada. Tema para una monog rafía, quizá.

CANCIONES Y COSTUMBRES

Volviendo a lo nuestro, conviene recor­ dar la prox imidad de la prov incia de Madrid al levante, la coma rca de San Martín de Valdeiglesias, en cuya zona de contacto se encuent ran los Toros de Día de fiesta en Candeleda, donde se bailan jotas y se visten refajos y mantones, pa­ Guisando, y la de Cadalso de los ñuelos, a la manera tradicional de forma natural y espontánea. Fotografía facilitada Vidrios, muy cantado ra y de gran rique­ por el Ayuntamiento de Candeleda. za folklórica. También se da con las co-

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coincidiendo con el pino que ponen APÉNDICE MUSICAL 11 RONDEÑAS los quintos en la plaza o lugar tradicio­ Transcripción de Ángel Tirado Garc ía nal (Apéndice musical 111 ). Es de notar la calidad y delicadeza de muchas le­ Candeleda tras, en ocasiones notable cultismo y juegos de palabras de variada inten­ ción: religiosa, sexual, política, como esta oída en Candeleda: Eres más hermosa , niña,! que la nieve no pisa­ da,!que el perejil en el huerto/ y el tré­ bol en la cañada; en la que se introdu­ ce una alusión sexual en el tercer verso, toda vez que «perejil» es la pa­ labra que alude ocultamente al vello público masculino. Alusiones religio­ sas, sexuales, políticas y de otra índo­ ~~~f:i-~~~ JltM~~~i le que, juntamente con formas y mo­ re. l)Cl ml _ Q. -- ~ mt. tusos en lo. CCl- He.--- QLIt. w ne. la dos de construir estrofas y estribillos, así como variantes y analogías , es­ ~J>jiJ~~[ - - -= :~ ~~~t~~ tructuras musicales y literarias de las ~ .. . tUl. del dt._ a. Mt. de. bl -·o. cid '0 du -1"05 __o , .- diversas rondas y jotas , rondeñas, cantos de Carnaval y toreras de quin­ ff?~~~t~~mtm1f~;-~~té~-P~I~~~ª tos, etcétera, hasta más de una vein­ u _ na. se ",,-_ na. d

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reces; calderos que , con residencia en se hacen sonar ba­ Piedralaves. También por este valle tiendo el asa contra el paseó su melancolía Juan Ramón borde o palmeándolo Jiménez y don Jacinto Benavente si­ en vilo en posición de tuó aquí la acción de su celebrado dra­ agarrar; huesos enta­ ma La Malquerida. De Vill arejo del blillados que se ras­ Valle, una de las cinco villas del can con otro o un me­ Barranco, regadas por el río Rama­ tal, como el asa de castañas, era Francisca Sánchez , la una cuchara; cántaros mujer del poeta nicaragüense Rubén golpeados en la boca Daría cuando estaba en España y to­ con la mano o con davía allí mantiene casa un nieto de una alpargata; entre­ esta unión sentimental estable. Pero chocar de tapaderas; todo esto requeriría otro estudio. la botella de anís la­ Finalmente hay que señalar cómo brada, batida a golpe estas notas rápidas pueden aplicarse, de cuchara o con el en líneas generales, a la vecina co­ lomo sobresaliente de marca de la Vera de Plasencia, sin so­ la hoja de acero de lución de continuidad con el Valle del una navaja cerrada . Tiétar, río abajo en comunicación por Así, y mucho más; Candeleda y El Raso. Así lo considera echándo le imagina­ Gabriel Azedo de la Berrueza, escritor ción y gracia a la ne­ menor del Siglo de Oro, natural y veci­ cesidad o al bullicio; no de Jarandilla de la Vera, en su como en Candeleda, Amenidades, florestas y recreos de la en donde los mucha­ provincia de la Vera Alta y Baja en la chos, según me cuen­ Extremadura, que comienza en ta Santiago Guzmán, Casillas y Santa María de Tiétar, en el el «Pillo», de cuando nacimiento del río, llamada por aquel él lo era (y ahora tiene entonces Escarabosa. Como así dice 48 años), que eran el escritor arenense Faustino García espantados de las Fraile en un trabajo que publica en el Boda en ; en primer térmi no, músicos rondando rondas de mozos, pa­ programa de fiestas de Arenas de San a los nov ios. Foto Cortina. Publicada en 1958 como saban las calles can­ Pedro de este año, recordando que postal para el pabellón de España con ocas ión de la tando a grito pelado y «toda esta zona pertenecía a la villa Exposición Universal de Bruselas. haciendo sonar, a fal­ romana de Mérida, Emérita Augusta ta de guitarras, el palo creada 150 años a.C. (sic), y capital, pelado de la planta por lo tanto, de todas estas comarcas del tabaco, rajado a al sur de la Sierra de Gredas» y tra­ e incluso recuperando viejas formas y media caña y golpeado con otro. yendo tam bién aquí la opinión de sonidos, incorporándose la guitarra Camilo José Cela expresad a en acústica y el bajo eléctrico, las cajas y Judíos, moros y cristianos, de que el lí­ los bongos en los grupos de folk y tra­ OTRAS mite de la Vera está en el río Ha­ dicional es, tanto para dar fiestas y re­ CONSIDERACIONES macastañas. Item más, José Serrano citales en escenarios y plazas, como Cabo, en su Historia y Geografía de para continuar la transmisión oral de Aunque al final, para que sirva paraam­ Arenas de San Pedro, ya mencionada jotas, rondas de calle, echar enrama­ pliar otras consideraciones anteriores, anteriormente, en el último párrafo del das, villancicos, cantos de albada y de como las influencias en el vestir y en último capítulo se refiere a «las legíti­ carnaval, de toros, romances religio­ la edificación, conviene señalar que mas aspiraciones de todos los mora­ sos y de ciegos, de amores contraria­ esta comarca ha venido siendo lugar dores de esta VERA», así, con mayús­ dos y de intenciones pícaras. La guita­ de veraneo de la burguesía baja ma­ culas, avalando, quizá, a Gabriel de la rra, el laúd, la bandurria que vienen de drileña, desde cuando la alta burgue­ Berrueza; como que algunos viejos de vihuelas y mandolinas , el rabel y la sía veraneaba en las playas de San Candeleda me han manifestado llana­ zanfona... Apa rece en ocasiones el Sebastián con los reyes, poniéndose mente que «nosotros también somos violín (de bastante uso en Candeleda, de moda Arenas de San Pedro, que veratos, pero de Ávila», Por no traer la por ejemplo) , y no faltan la flauta de ya tenía la impronta del infante don mención del Arcipreste de Hita en el caña y el silbido, primera forma , sin Luis de Barbón y su pequeña cort e Libro de Buen Amor: «Prados de duda , de imitación y modulación del desde la segunda mitad del XVIII, con Medellín de C ánceres, de Troxiello,! la sonido más puro de pájaros y gargan­ la influenc ia de notables y artistas co­ Bera de Plasencia fasta Valdemo­ tas chorreras y el viento en los ála­ mo Boccherini, Gaya y otros persona­ riello,! toda la Serranía el presto mos. jes del arte y la cultura. Punto principal rnanceblello.zalboroco ayna e fizo En cuanto a percusiones, a falta en de las postas reales, como puede ver­ grand portiello» (1962, pág. 119, capí• ocasiones de instrumento e instrumen­ se en un mapa en el Museo Postal de tulo De lo que faze miércoles corvillo e tistas, guitarreros y otras más por re­ Madrid, fechado en 1783, luego termi­ en la Quaresma). Pero, fuera de espe­ forzar el ritmo y la bullanga, se acom­ nal de líneas regulares de autobuses y culaciones, éste podría ser otro tema pañan los instrumentos y las voces ahora estación de líneas que cruzan el para estud iar en profundidad . Si se con percusiones de las más variadas Valle y la Vera, Ávila y Toledo. El poe­ quiere. Como el más reciente de la índoles: sonajas, zambombas y almi- ta León Felipe ejerció de boticario en fundación de El Raso de Candeleda .

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APÉNDICE MUSICAL 111 LA ENRAMADA Me echaste la enramada Transcripción de Ángel Tirado García de peros verdes, olé, serrana, Poyales del Hoyo (Ávila) de peros verdes, déjalos que maduren que aquí me tienes olé serrana, que aquí me tienes.

ESTRIBILLO A cortar el trébole, el trébole, el trébole, a corta el trébole la noche de San Juan, a cortar el trébole los mis amores van.

Me echaste la enramada ~-no~he. de. San_ ''''''' A

BIBLIOGRAFíA

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Fiesta en Mijares con una novill ada celebrada en la plaza del pue­ blo. Foto ocasión de cantar las Toreras Cortina editada como pos­ tal de publicidad turística en la Exposición Universal de Bruselas de 1958.

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