San Ignacio De Agaña, Primera Ciudad De Oceanía
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CIUDAD Y TERRITORIO Estudios Territoriales, XXX (116) 1998 429 La presencia española en Micronesia. San Ignacio de Agaña, primera ciudad de Oceanía Javier GALVÁN Guijo Arquitecto RESUMEN : Los archipiélagos de Palaos, Marianas y Carolinas, en el Pacífico, fueron los últimos vestigios de soberaní a española en Ultramar, hasta su venta a Alemania en 1899 . En las Marianas, descubiertas por Magallanes y Elcano, en 1521, la soberanía española comienza a hacerse efectiva en 1668, con la llegada del jesuita Diego Luis de San Vitores . Es en la isla de Guam, donde la presencia hispana fue más dilatada e intensa, dada su importancia como única escal a del galeón de Acapulco . La actividad urbanizadora fue reducida, dadas las limitaciones tanto del marco físico com o poblacional . «Los pueblos» de Marianas mantenían el carácter rural del poblado indígena, con edificaciones aisladas , alineadas dentro de una incipiente trama urbana en la que se van injertando «casitas», como sacadas de un puebl o blanco peninsular. San Ignacio de Agaña representa el único caso de ciudad, la primera y por mucho tiempo la única de Oceanía . Fue, hasta su destrucción en 1944, máximo exponente de una civilización, fruto de la fusión y el mestizaje, con unas estructura s que se articulan en torno a un espacio, la Plaza de España, hija de la filosofía «Ley de Indias» . En las Carolinas la presencia política española se redujo a unos pocos años a finales del siglo XIX. Los españole s establecieron dos bases navales, a partir de 1886 : Santa Cristina, en la isla de Yap, y Santiago de la Ascensión, en la de Ponapé. Descriptores: Territorio. Historia del Urbanismo . Palaos . Marianas. Carolinas. I . INTRODUCCIÓ N Poco o nada conocidos estos territorios, y menos su vinculación a España, parec e demás de Cuba, Puerto Rico y Filipinas, bastante obvia la necesidad de «situarlos » otros territorios, también insulares , geográfica e históricamente . ormaban parte en 1898, de los «restos » Micronesia comprende más de 2.100 islas del imperio español: los archipiélagos d e diseminadas por 7,5 millones de kilómetro s Palaos, Marianas y Carolinas, en el Océan o cuadrados (unas quince veces la extensió n Pacífico . De hecho fueron las islas de España) en el Pacífico occidental , micronésicas los últimos vestigios de situadas entre Filipinas y Hawai, al nort e soberanía española en Ultramar, ya que a del Ecuador y (excepto las dos Mariana s excepción de la isla de Guam que pasó e n más septentrionales) al sur del Trópico d e 1898 a ser de soberanía norteamericana po r Cáncer. Abarca además de a lo s el Tratado de París, el resto continu ó archipiélagos antes citados al de la s perteneciendo a España un año más, hasta s u Marshall. La superficie conjunta de toda s venta a Alemania en 1899 . las islas micronésicas es de 2.380 kilómetro s Quiero agradecer a Mrs . Marjorie Driver, de la este artículo- de la Asociación Española de Estudios del Universidad de Guam, y al Dr. Rafael Rodriguez Ponga, de l Pacifica su apoyo documental que ha facilitado la redacción de Ministerio de Cultura, ambos miembros -corno el autor de este artículo . Recibido : 17/09/98 . Ministerio de Fomento 430 La presencia española en Micronesia cuadrados (210 veces menor que la de tenemos en cuenta que estas islas y sus España). mares fueron escenario de las batallas más Las islas de mayor superficie son Guam , formidables entre japoneses y americano s en las Marianas, con unos 550 kilómetros durante la Segunda Guerra Mundial , cuadrados, Babeldoaob, en Palaos, con 396, y comprenderemos que el patrimonio Ponapé, en las Carolinas, con 334. El punto construido en Micronesia, ya de por sí un más alto de la orografía micronesia, 96 5 tanto humilde, no pueda ser comparado ni metros, se encuentra en la despoblada isla de con el de la América virreinal ni siquiera con Agrihan, en las Marianas. Frente a las el de Filipinas. Por si todo ello fuera poco, no costas de Guam se abre la mayor sim a debemos olvidar la hostilidad tradicional marina del mundo, denominada Fosa de la s mostrada por los norteamericanos hacia el Marianas, con una profundidad de más d e legado español, cuando suplantaron a 10.900 metros. España en la isla de Guam como poder Esos territorios, españoles hasta hace u n colonial y donde actuaron en no pocas siglo, forman parte en la actualidad de ocasiones como un agente devastador más. cuatro realidades geopolíticas diferentes (ver El enorme poder destructivo que han tenido fig. 1): Guam es un territorio, no incorporado , que soportar otorga a los bienes que se de los Estados Unidos de América . El resto conservan un valor añadido de importancia de las Marianas forma la Mancomunidad de histórica incalculable, constituyendo un las Islas Marianas del Norte, cuyo estatuto legado cuyo valor testimonial es enorme. es el de estado asociado a EEUU, similar a l Es en la isla de Guam donde podemo s de Puerto Rico. Los cuatro estados de las encontrar el mayor número de vestigios y de islas Carolinas -Yap, Chuuk (Truk), Pohnpei mayor entidad, dada la importancia que (Ponapé) y Kosrae- forman Ios Estados tenía esta isla como escala del «galeón de Federados de Micronesia (FSM), nación Acapulco» y lo dilatado de la presencia soberana, aunque dependient e española en ella . económicamente de los EEUU. En Palaos En la Mancomunidad de las Isla Marianas rechazaron su incorporación a los Estados del Norte, además de en la isla de Saipán, Federados de Micronesia, constituyéndose l a hubo presencia efectiva española en Rota y República de Belau, como estado soberano e Tinián, si bien no parece que en esta última, independiente, con representación en lo s arrasada en la Segunda Guerra Mundial , organismos internacionales, al igual que los hayan quedado vestigios españoles de alguna FSM. relevancia. La población total de Micronesia se sitúa En las Carolinas la presencia política en torno a los 330 .000 habitantes, de los que española se redujo a unos pocos años a 127.000 se concentran en la isla de Guam finales del siglo pasado, por lo que las (datos de 1992). Tanto en Guam, como en la huellas de esa presencia no fueron tan Mancomunidad de las Islas Marianas del profundas como en Marianas. Norte, y también en Palaos hay que considerar como población más o meno s flotante al importante contingente de 2 . APUNTES HISTÓRICOS trabajadores extranjeros, principalment e filipinos, y a los más de un millón de turistas Fueron las Marianas las primeras isla s (japoneses y coreanos principalmente) qu e habitadas del Pacífico, de las que tuvieron cada año visitan estas islas . conocimiento los europeos . Magallanes y En todos estos territorios la presencia Elcano, llegaron a las costas de Guam el 6 de española además de dejar su impronta en la . marzo de 1521, dándolas la denominación d e religión, lengua, costumbres y cultura e n islas de las Velas Latinas, en alusión a las general, produjo una serie de bienes embarcaciones de sus pobladores, que s e inmuebles: edificios, fuertes, puentes , mostraron complacientes con la llegada de puertos, caminos, murallas, arquitectur a los europeos, proporcionándoles agua y funeraria, etc., la mayor parte de los cuale s alimentos frescos . Este hermoso nombre fu e ha desaparecido. Si a los estragos que prontamente sustituido por el estigmático de produce una atmósfera tropical, añadimo s islas de los Ladrones, debido a la diferente los producidos por tifones y terremotos, y concepción que sobre la propiedad privad a Ministerio de Fomento Cr. FIGURA I .- Plano de situación de las Islas de la Micronesia de soberanía española hasta 1899 . Los recuadros no representan límites territoriales sino conjuntos de islas pertenecientes a una misma entidad política actual. Por J . Galván sobre una Carta General del Océano Pacífico, de Gregorio Miguel : Estudios sobre las Islas Carolinas, Madrid, 1887 . 432 La presencia española en Micronesia tenían los «incontaminados» guameños, qu e Resuelto el problema del tornaviaje por visitaron las naves de Magallene s Urdaneta, se producen desde 1568 viajes apropiándose de aquello que les convenía - anuales de los galeones, entre Acapulco y como por ejemplo de un esquife- lo que er a Manila -hasta 1815- que hacen escala en perfectamente admisible desde su las Marianas. La ruta se conoce como Galeó n perspectiva ético-social. No pensaba lo de Acapulco, Galeón de Manila o Nao d e mismo Magallanes, que montó en cólera, China. tomó represalias, y dejó para la posterida d En 1596 el franciscano descalzo fray ese nombre que tan poco favor hacía a sus Antonio de los Angeles, permanece durante habitantes y que se mantuvo en uso hast a casi un año en las Marianas, junto a do s mucho después de que las islas pasaran a miembros de la tripulación del galeón Sa n denominarse definitivamente Marianas. Se Pablo que les llevaba a Manila, ha considerado tradicionalmente que el luga r convirtiéndose en el primer misionero d e de desembarco fue la bahía de Umatac en l a Micronesia . En 1602-1603 Juan Pobre de isla de Guam, lo cual no ha podido probars e Zamora y otros dos padres capuchinos de manera fehaciente . permanecen durante algunos meses en la A la de Magallanes-Elcano siguieron otras isla de Rota. En 1668 los jesuitas, con e l expediciones españolas que surcaron el sacerdote burgalés Diego Luis de Sa n Pacífico, descubriendo nuevas tierras e Vitores a la cabeza, inician l a incorporándolas nominalmente a la Corona , evangelización de las islas de los Ladrone s pero cuyo objetivo básico era el de abrir un a (1668), dándoles el nombre de Marianas, e n ruta occidental hacia las islas de la s honor de Mariana de Austria, madre d e especias, las Molucas .