revista de la Asociación Geológica Argentina 68 (3): 445 - 463 (2011) 445

el aBate Juan iGnacio Molina: una vida dedicada a la HistoRia natuRal Y civil del Reino de

Reynaldo cHaRRieR 1,2,3 y Francisco HeRvÉ 1,2

1 Departamento de Geología, Facultad de Ciencias Físicas y matemáticas, universidad de Chile 2 escuela de Ciencias de la tierra, Facultad de Ingeniería, universidad Andrés bello, , Chile. 3 Advanced mining technology Center (AmtC), Facultad de Ciencias Físicas y matemáticas, universidad de Chile, santiago, Chile. e-mails: [email protected], [email protected]

ResuMen

Juan Ignacio molina (1740-1829) nació cerca de , Chile, y falleció en bolonia, Italia. es el primer científico chileno. Desde pequeño se interesó por la naturaleza. se educó con la Compañía de Jesús en diversos lugares de Chile central, lo que le per - mitió conocer su geografía, fauna, flora y población. Con 15 años ingresó a la Compañía. en 1767, abandonó el país al ser expulsada esta orden de españa y sus dominios. se radicó en los estados pontificios, donde se ordenó de sacerdote y perma - neció hasta su muerte. Allí enseñó ciencias naturales y produjo su obra científica: Compendio de la historia geográfica, natural y civil del reino de Chile de 1776, una versión aumentada, Ensayo sobre la historia natural de Chile de 1782 y una segunda en 1810. en ellas, abordó aspectos climáticos, botánicos, geológicos, zoológicos, mineralógicos y geográficos del territorio. Describió el terre - moto de Concepción, las erupciones del Villarrica y peteroa, e hizo referencia a recursos minerales. Diferenció cuatro unida - des litoestratigráficas para Chile central. Clasificó plantas y animales siguiendo los criterios de linneo. en una de sus 14 me - moria s, Analogías menos observadas de los tres reinos de la Naturaleza , sin podérselo calificar de evolucionista, se destaca su intento de integración entre los “seres” de los tres reinos, y en Sobre la propagación del género humano en las diversas partes de la tierra , pro - puso tres vías diferentes para el poblamiento de América. en 1802, ingresó a la Academia de Ciencias de bolonia. Naturalista chileno, Jesuitas, Ilustración.

aBstRact

Abbot Juan Ignacio Molina: A life devoted to the natural and civil history of Chile. Juan Ignacio molina (1740-1829), born next to talca, Chile, and dead in , , is the first Chilean scientist. His edu - cation in establishments of the , in several localities of central Chile, allowed him to learn about its geography, flora, fauna, and population. At 15 years old he entered the society. In 1767, he left Chile when the Jesuits were expelled from the spanish territories. In bologna he produced his scientific contribution. molina published in 1776 the first of his books, Compendio della storia geográfica, naturale, e civile del regno del Chile . In this one and the others, molina treated different topics as cli - matology, , geology, zoology, mineralogy, and physical geography. He described his impressions on the Concepción earthquake, the eruptions of the Villarrica and peteroa volcanoes, and made detailed descriptions of minerals and ore depo - sits. He differentiated four major lithostratigraphic units. In his descriptions of plants and animals he followed the classifica - tion of linneus. He wrote 14 scientific memoirs. In Analogie meno osservate dei tre regni della Natura , he supports the idea of a gradual transition between all “beings” in the three kingdoms of nature, however, in it he makes no proposition that can be qualified as evolutionary. In Sulla propagazione sucesiva del genere umano he suggests three sources for the population in America. In 1802, he entered the bolognese Academy of sciences.

Chilenian naturalist, Jesuits, Illustration.

IntroDuCCIón tuvo influencia importante en el curso de estudiosos de su vida y obra lo cataloga - las ideas de sus contemporáneos y suce - ron como “ un cerebro de corte europeo ”, “ un la obra de Juan Ignacio molina, sabio chi - sores en el ámbito científico. su espíritu sabio que dejó niño la tierra natal para ser ciu - leno de fines del siglo XVIII y comienzos inquieto y gran capacidad de observación dadano del mundo por el intelecto y chileno por del XIX, conocido como el Abate moli- lo condujeron a indagar en aspectos muy el corazón ” (encina 1946), como uno de na, representó un multifacético aporte al variados de las ciencias naturales, la geo - los “ grandes pensadores americanos, al nivel de conocimiento de su época y, sin duda, grafía y la historia civil de Chile. Algunos los más finos intelectuales europeos de la época ” 446 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

(rojas 1965), y como el primer científico término, la figuración que alcanzó el pen - chileno y único entre los científicos de samiento de molina en los destacados ese país que alcanzó renombre interna - círculos intelectuales europeos en los que cional entre los siglos XVI a XIX (Jara- participaba, en una época de trascenden - millo 1987). ronan (2002) concluye su li - tes progresos en el conocimiento científi - bro sobre molina señalando que el abate co y geográfico como fue la de la Ilustra- fue el más destacado jesuita hispanoame - ción o siglo de las luces, nos estimuló ricano expulsado de los dominios espa - para exponer algunas consideraciones res- ñoles por el edicto de Carlos III (Fig. 1). pecto del lugar que ocupó molina en el en este trabajo no se pretende dar una desarrollo de las teorías relacionadas con cuenta completa de la vida, obra, notas, la variación de las especies. la pertinen - correspondencia y pertenencias del Aba- cia de este segundo objetivo se sustenta te molina. la documentación al respecto en la importancia que detentan la geolo - es abundante y exhaustiva (santágata 1845, gía y la paleontología en la concepción de Vicuña mackenna 1856, 1860, 1872, Fon- esas teorías. tecilla 1929, Hederra 1929, opazo 1942, este trabajo, presentado en 2010 en el Se- Gunckel 1929, 1965, 1966, 1970a, 1970b, gundo Congreso Argentino de Historia de la 1980, espinosa 1946, reilly 1958, rojas Geología , en buenos Aires, es un homena - 1961, 1963, 1965, 1997, 2001, laval 1965, je al Abate molina al cumplirse el bicen - Figura 1: el Abate molina a la edad de 50 Jaramillo 1965, 1968, 1987, briones 1968, tenario de la publicación de su ensayo años. retrato realizado por el grabador espa - ñol moreno, que acompaña el artículo de 1997, Jiménez 1974, Hanisch 1999, ro- ampliado sobre la historia natural de Chi- Fontecilla (1929). nan y Hanisch 1979, González 1993, ro- le (molina 1810). nan 2002, stuardo 2007, Hachim 2008, miento de Concepción, habían sido total - entre otros). sus notas, manuscritos y co - AnteCeDentes mente destruidas por el terremoto y el rrespondencia se encuentran en el Archi- bIoGráFICos maremoto asociado, de modo que éstas vo nacional en santiago. existen núme - se reinstalaron en el emplazamiento ac - ros de revistas científicas chilenas dedica - Juan Ignacio molina y González nació el tual de la ciudad. estando allí, a los 15 dos entera o casi enteramente a la obra 24 de junio de 1740 en la hacienda “Gua- años, realizó la promesa de ingresar a la científica del abate, tales como los edita - raculén” (Huaraculén), en la localidad de Compañía. A partir de este momento ini - dos por porter (1929), Fuenzalida (1962) loncomilla, un poco al oriente de la ac - ció el noviciado en instituciones de la or - y rojas (1965). los interesados pueden tual Villa Alegre y cerca de lo que sería den en santiago y bucalemu. en ese pe - referirse a éstos, aunque algunos son difí - dos años después la ciudad de san Agus- riodo estudió griego, latín, francés, italia - ciles de encontrar y, frecuentemente, las tín de talca, en la región del maule, Chile no, matemáticas y física. en los períodos referencias que se han hecho de ellos son (Fontecilla 1929). era oriundo de una fa - de descanso, en la hacienda de Carén, que incompletas y poco precisas. existe tam - milia que se destacó en lo militar y lo ci - abarcaba desde las cercanías de santiago bién información sobre el Abate molina vil, avecindada en Chile desde 1557 (Fon- hasta melipilla, mientras estuvo en san- en Internet. tecilla 1929, opazo 1942). Falleció en bo- tiago y en bucalemu, ubicada entre los la relativamente extensa literatura que lonia, Italia, en 1829, a la edad de 89 años, ríos maipo y mataquito, aprovechó su revisa la obra del abate se concentra prin - después de 62 años de exilio. tiempo libre para hacer largos recorridos cipalmente en su notable y aun vigente según sus biógrafos, habría recibido su pri- por la Cordillera de la Costa y la región contribución a la botánica y la zoología, y mera educación en establecimientos de la costera observando la naturaleza (Fonte- a la influencia que su pensamiento tuvo Compañía de Jesús en Concepción, ubi - cilla 1929, Hederra 1929). Después de tres sobre las ideas desarrolladas en los siglos cada en ese entonces donde hoy día se le - años en bucalemu regresó a la capital pa- XIX y XX. no parecen existir mayores vanta la localidad de penco, y talca, don - ra cursar estudios de teología y filosofía referencias respecto de su contribución al de aprendió caligrafía, gramática, retórica en el Colegio máximo de san miguel. Fue conocimiento de la geología de esta re - y mapudungún. poco después falleció su en ese momento que contraería la virue - gión del continente. un intento inicial lo padre y regresó a talca por unos años la, que le dejaría marcas por el resto de su representó la corta nota de menichetti y hasta que sus mentores decidieron reen - vida, y es de esa época que data la elegía Hervé (2007), de la cual el presente ensa - viarlo al sur a continuar los estudios. es- sobre su enfermedad. los progresos en yo pretende ser una continuación. el ob - tando allí, en 1751, se produjo el terre - sus estudios fueron rápidos, lo que le ha - jetivo principal de este artículo es, en con- moto de Concepción. las construccio - bría valido ser colocado en el cargo de bi - secuencia, llenar ese vacío. en segundo nes de los jesuitas, en el antiguo emplaza - bliotecario (santágata 1845), algo que Fon- el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 447

tecilla (1929) contradice por considerar a años y ya cumplidos los sesenta recibió en 1855, benjamin Vicuña mackenna to- molina demasiado joven y concentrado altos reconocimientos académicos, entre mó la iniciativa de recolectar fondos para en sus estudios para ejercer esa ocupa - otros, ofertas de cátedras universitarias de erigirle una estatua. el monumento fue ción. esta preparación se desarrolló con - lengua y cultura griega, de ciencias natu - inaugurado en 1861 frente a la Casa Cen- forme a la marcadamente escolástica Ra- rales en el Instituto de las Ciencias de la tral de la universidad de Chile en la Ala- tio Studiorum jesuita (Jiménez 1974, Jara- universidad, que él no aceptó, el nombra - meda, arteria principal de la capital (Vicu- millo 1987, ronan 2002). miento, como único miembro extranjero ña mackenna 1872). posteriormente, en en 1767, cuando contaba con 27 años de del Instituto de Italia, hecho por eugenio 1927, fue trasladado a talca y colocado edad, fue forzado a abandonar el país, jun - de beauharnais, hijo adoptivo de napo- frente al liceo de Hombres que lleva su to con unos 300 sacerdotes y novicios, león bonaparte y virrey de Italia en 1812, nombre. A fines de 1966, sus restos fue - cuando la Compañía de Jesús fue expul - y la designación como primer académico ron repatriados y actualmente reposan en sada de españa y sus dominios por edic - americano de la Academia de Ciencias de la iglesia parroquial de Villa Alegre, en las to del rey Carlos III. en este éxodo lo bolonia (Fontecilla 1929, espinosa 1946, proximidades de la hacienda “Guaracu- acompañaron otros jesuitas, como los pa- Jaramillo 1987). en 1820, fue nombrado lén”, donde nació. dres miguel de olivares y manuel la cun- miembro de número de la Academia za, y el seminarista Felipe Gómez de Vi- truentina en Ascola, y, en 1822, miem - personAlIDAD daurre, quienes alcanzarían también pres- bro adjunto de la Academia de palermo tigio en europa. Después de dos meses (espinosa 1946). el interés que molina manifestó por la en lima, emprendió viaje, primero a Cá- A partir de 1814 su salud fue decayendo naturaleza le fue inculcado por su padre. diz, españa, y desde allí hacia spezzia, en gradualmente. en agosto de 1829 le so - “Mi inclinación me llevó desde mis más tiernos Italia, desde donde llegaría a los estados brevino una intensa fiebre que lo llevó a años a observar las producciones de la naturale - pontificios casi dos años después de ha - la muerte el siguiente mes. se refiere que, za y particularmente los animales, sobre los cua - ber partido del Callao (Fontecilla 1929, con la fiebre de su agonía, padeció una les mientras viví en el país, hice todas las inves - Hederra 1929, espinosa 1946). las auto - intensa y constante sed que le hizo recla - tigaciones posibles. Un conjunto de circunstan - ridades eclesiásticas dispusieron que pri - mar “¡ Aquella agua de la cordillera !” (Vicuña cias conocidas de todo el mundo me obligaron a mero se instalara en Imola, donde per - mackenna 1860). Fue sepultado en el pan- interrumpir mis observaciones ” (molina 1987: maneció cuatro años, hasta 1773, fecha teón de Hombres Ilustres en bolonia, 108). en que se ordenó de sacerdote. ese año, donde se colocó un busto suyo en már - Vicuña mackenna (1860) lo describe co- el papa Clemente XIV, cediendo ante la mol. sus restos descansan hoy en la igle - mo “ pequeño de estatura i algo moreno de color; presión ejercida por las principales mo - sia de Villa Alegre, cerca de talca. sus ojos grandes y expresivos tenían una vivaci - narquías europeas, ordenó la disolución el abate fue un decidido defensor de las dad extraordinaria, pero su boca i narices eran de la Compañía de Jesús. eso determinó ideas de independencia americana y un de proporciones disformes ” y, según su discí - que Juan Ignacio molina fuese a vivir a gran amante de su tierra, a la que siempre pulo santágata (1845), “ era tan manso como bolonia, donde encontraría mayores po - añoró. A su muerte, legó a la patria los jovial, tan enemigo del rigor como inclinado a la sibilidades de subsistir, un ambiente cul - bienes familiares que todavía poseía con clemencia ”. Jaramillo (1987) lo describe “ de to para desarrollarse y donde residiría por el objeto de fundar en talca una bibliote - un lado, excelente y preciso observador, con gran el resto de su vida (Fontecilla 1932). sa- ca pública provista de instrumentos para capacidad imaginativa; del otro, alegremente po - cerdote sin ubicación precisa en orden el conocimiento de la astronomía, náuti - sitivo y astutamente irónico ”. De la lectura de religiosa, convento o parroquia, se lo co - ca y matemáticas, dando lugar en 1830 a sus textos se percibe la humildad con que nocerá en adelante como el ‘‘Abate mo- la creación del Instituto literario (opazo expresó sus ideas y se reconoce la admi - lina’’ o simplemente el ‘‘abate’’ (espinosa 1942, espinosa 1946). uno de sus deseos ración que le inspiraron algunos científi - 1946). más fervientes, el de regresar a Chile, no cos. sin embargo, fue capaz de criticar en bolonia, molina se dedicó a la ense - pudo ser concretado en dos ocasiones. con dureza a quienes continuaban aferra - ñanza de las ciencias naturales, latín y en un primer intento, en 1800, desistió dos a ideas antiguas, no aceptaban las evi - otros idiomas, retórica, geografía e histo - por la inseguridad inherente de un viaje dencias de la ciencia y opinaban sin fun - ria. Dio clases pagas a niños de familias por mar y la inestabilidad política de Chi- damento, como se mostrará más adelan - adineradas y gratuitas a niños de escasos le en los tiempos previos a la indepen - te. recursos . por su sabiduría, y carácter bon- dencia, y en su segundo intento, a los 80 molina era muy laborioso en sus trabajos dadoso y acogedor, fue un maestro que - años, debido a su avanzada edad (Hede- preparatorios; visitaba las bibliotecas y rido y buscado por sus alumnos (opazo rra 1929, opazo 1942). en ese momento, tomaba notas de todo lo que pudiera in - 1942). Allí produjo su contribución cien - la orden de expulsión de los jesuitas ha - teresarle. opazo (1942) refiere que el Ar- tífica e histórica. Después de muchos bía sido revocada. chivo nacional conserva, en numerosas 448 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

tiras de papel escritas de su propia mano, con el consiguiente perjuicio para su di - en este caso, de autopatografía. el testimonio de su laboriosidad. en otro vulgación, en una época que se caracteri - Compendio della storia geográfica, naturale, e ci - orden de cosas, sus biógrafos destacaron zó por la rápida evolución de las ideas. vile del regno del Chile de 1776 (Fig. 2) fue su ferviente patriotismo y su decidido Además, la sospecha de herejía le alejó a publicado bajo autor anónimo y, en un co- apoyo a la causa independentista que re - muchos de sus alumnos. mienzo, atribuido, erróneamente a Fe lipe corría el espíritu de los países americanos por su condición de sacerdote jesuita, su Gómez Vidaurre (Fontecilla 1929, opa zo (espinosa 1946, Jaramillo 1987, ronan visión integradora de la naturaleza, el exi - 1942, espinosa 1946). sin embargo, stuar- 2002). lio, sus problemas con la Inquisición y las do (2007) sostiene aun hoy la autoría de dificultades para publicar su obra, Jara- Felipe Gómez Vidaurre para la obra. el entorno CulturAl en millo (1965) estableció un paralelismo en- Compendio es el primer recuento que se lA CIuDAD De bolonIA tre el Abate molina y el “ que sería, un siglo hizo de la historia natural de Chile. la más tarde, su hermano jesuita Pierre Teilhard preparación de esta obra fue realizada so - la universidad de bolonia, fundada en de Chardin, cuya vida y pasión había de ser, asi - bre la base de los recuerdos que guarda - 1119, es una de las más antiguas de occi - mismo, tan asombrosamente semejante a la ba molina de sus observaciones y recopi - dente. en la época del abate, se la deno - suya ”. laciones efectuadas antes de su partida de minaba Instituto pontificio por encon - América, debido a que las notas, que ha - trarse esa ciudad en los estados papales. lA obrA Del AbAte bía preparado durante largos años en Chi- bolonia era uno de los principales cen - molInA le, le fueron sustraídas al partir. esta obra tros culturales de europa, al cual conflu - fue traducida al francés en 1779, al ale - ían alumnos de todas partes de Italia y del el Abate Juan Ignacio molina escribió las mán en 1791 y al inglés en los estados continente (espinosa 1946). obras que se mencionan y comentan a unidos. la primera parte, referida a geo - A pesar de la apertura cultural que reina - continuación. su obra poética fue escrita grafía e historia natural, fue traducida al ba en ese ambiente, la iglesia seguía man - en griego y latín, y sus trabajos científi - español por Domingo Joseph de Arque- teniendo un ojo atento sobre las corrien - cos, en italiano. De estos últimos existen llada mendoza y publicada en 1788 por tes de pensamiento, las posturas que so - traducciones a varios idiomas. Antonio de sancha en madrid. la traduc - cavaran la integridad de la fe y los libros la obra poética y literaria de molina es ción al español de la segunda parte, dedi - que se considerasen ofensivos para la or - bastante extensa (briones 1968, 1997). A cada a la historia civil de Chile, fue reali - todoxia. las ideas de molina no estuvie - continuación se hace referencia sólo a zada por un acaudalado coterráneo ami - ron exentas de este control. en 1815, des- aquella que ha sido traducida y publicada, go de molina residente en Cádiz, nicolás pués de presentar en el Instituto pontifi- las Elegías Latinas , escritas en latín cuando de la Cruz y bahamonde, Conde del mau- cio su memoria titulada Analogías menos ob - aún era estudiante y alumno de novicia - le (opazo 1942), y se publicó en la mis - servadas de los tres reinos de la Naturaleza , fue do, fueron traducidas al castellano por ma Imprenta de sancha en madrid (mo- acusado ante las autoridades eclesiásticas Jiménez (1974). esta obra incluye: i) De lina 1795). de herejía. el problema, según ro nan Conceptionis Urbis Ruina , un poema inspi - Saggio sulla storia naturale del Chili vio la luz (2002), residía en la poca claridad con que rado en el terremoto de Concepción de en 1782. el éxito del Compendio , su prime - hacía uso de términos como discerni - 1751, que habría escrito, según Jaramillo ra obra, lo indujo a preparar una segunda miento e inteligencia en relación con (1976), con solo 14 años, aunque briones edición más completa (molina 1782). pa- plantas y animales, atributos reservados (1997) considera esta aseveración como ra ello contó con las notas que le habían sólo al género humano. esto hizo que, un dislate; ii) De peste variolatum , inspirado confiscado al embarcarse en lima, que le mientras se desarrollaba la investigación en el ataque de viruela que sufrió en san- habían sido restituidas por un chileno que correspondiente, se le cancelara el permi - tiago a su regreso de la hacienda de bu- las había adquirido en Valparaiso (Fonte- so de enseñar. la comisión encargada de calemu, en 1761, escrito a los 21 años (Ja- cilla 1929). Así mismo, parece que por estudiar el manuscrito determinó, final - ramillo 1976); iii) Elegia autobiografica , ins - esa época habría recuperado también mente, que el texto no atentaba contra la pirado en su propia vida, escrito también otras notas tomadas durante su viaje del fe y que los términos cuestionados, según a los 21 años; y iv) De fluviis chilensibus , ins- Callao a Cádiz que le habían sido confis - indica la nota aclaratoria de los censores pirado en la naturaleza (Gunckel 1980, cadas por el capitán (espinosa 1946, ro- eclesiásticos (molina 1821a), habían sido ronan 2002). respecto de la segunda, Ja- nan 2002). un resumen de esta obra fue utilizados en “ sentido puramente analógico ”. ramillo (1976) opina que es la más impor - publicado en 1782 en el número 5 de Me- A pesar de esto, se le solicitó diferir la pu - tante obra poética de molina y Costa- moria Enciclopedia de Bolonia. el mismo año blicación del manuscrito para que no fue - Casaretto (1979a, b) destaca la precisa apareció la versión completa. esta obra se mal interpretado por los lectores. el descripción que hizo de la enfermedad y fue traducida al alemán en 1786 y 1791, al texto fue finalmente publicado en 1821, la toma como un ejemplo de patografía y, francés en 1789 y al inglés en estados uni- el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 449

en esta obra consisten en un catálogo de menos telúricos y, por esta razón, dedicó términos mapuches y una sinopsis de la solo contados versos al terremoto y al flora chilena ajustada al sistema linneano. maremoto en sí mismos. la descripción molina dedicó esta obra al Virrey de ná- de este terremoto es más completa en el poles, eugenio de beauharnais, hijo car - Compendio y las diferentes versiones del nal de Josefina de beauharnais y adopti - Saggio . la misma se reproduce más ade - vo de napoléon bonaparte. el ensayo fue lante. traducido al castellano por rodolfo Jara- los compendios y ensayos publicados por millo en 1987. la tercera edición del Saggio molina permitieron un conocimiento más (molina 1810) cumplió doscientos años preciso y documentado sobre Chile, su en 2010. historia, su geografía, los fenómenos na - Memorie di storia naturale, lette in Bologna, ne - turales que en él ocurren, su flora, su fau - lle adunaze dell’istituto, dall’abate Gion-Igna- na, recursos económicos, y las caracterís - zio Molina, Americano, miembro dell’istituto ticas y costumbres de su población abo - pontificio apareció en 1821. esta obra de rigen para la cual tienen elogiosos co - dos tomos es una colección de 14 memo - mentarios. en efecto, al igual que el aba - ria s sobre historia natural leídas por mo- te jesuita mexicano Francisco Xavier Cla- lina en sesiones académicas del Instituto vijero (1731-1787), autor de Historia anti - pontificio de la universidad de bolonia gua de México y su conquista de 1780, y su (molina 1821a). en ella están incluidas antecesor el jesuita dos memoria s que representan algunas de (1603-1651), quién sostuviera: “ Habién- sus ideas que han tenido mayor repercu - dome venido del reino de Chile y hallando en es - Figura 2: portada del Compendio della storia geo - sión y trascendencia: Analogie meno osserva - tos de Europa tan poco conocimiento de él que en gráfica, naturale, e civile del regno del Chile de te dei tre Regni della Natura (Analogías menos muchas partes aun ni sabían su nombre, me ví molina (1776). observadas de los tres reinos de la Naturaleza ), obligado a satisfacer el deseo que me instaron die - dos e Inglaterra en 1808 y 1809, respecti - sexta memoria leída en 1815, y Sulla propa - se conocer lo que era tan digno de saberse ” (ova- vamente (Fontecilla 1929). gazione sucesiva del genere umano nelle diverse lle 1646), su declarado propósito fue au - una nueva versión del Saggio sulla storia ci - parti della terre (Sobre la propagación del géne - mentar el conocimiento de su terruño. vile del Chili fue dada a conocer unos años ro humano en las diversas partes de la tierra ), en el prefacio de su Ensayo señaló: “ Pese más tarde (molina 1787). Ésta recibió décimo segunda memoria leída en 1818, a las ventajas con que la naturaleza se complace menos atención que la anterior ya que sus ambas traducidas al español por el profe - en distinguirlo entre tantas otras regiones céle - compañeros de éxodo, los padres miguel sor Felipe Alliende, en 1965 (molina bres, Chile era entonces, por así decirlo, comple - de olivares y Felipe Gómez de Vidaurre, 1821b, c). tamente desconocido en Italia. El amor que na - habían publicado, entre tanto, sendos tex- De acuerdo con lo anterior, la produc - turalmente inspira la patria me indujo a propor - tos sobre la historia de Chile (espinosa ción de molina se puede separar en tres cionar alguna idea sobre ella ” (molina 1987: 1946). líneas o grupos de obras. un primer cor - 3). Con ese propósito también, molina la tercera y más completa versión del pus formado por sus obras poéticas des - rebatió en sus obras y, en ocasiones dura - Saggio sulla storia naturale del Chili fue pu - criptivas, el segundo, relacionado con el mente, a los autores que expresaron so - blicada en 1810. Ésta cuenta con nume - Compendio y los ensayos, y el tercero, co - bre este continente ideas que él conside - rosos agregados respecto de la anterior, rrespondiente a las memoria s científicas. raba equivocadas, sesgadas e incluso fan - los que no se habían incluido en el “ sucin - el aporte contenido en estos tres grupos tasiosas. respecto de las menciones de to Compendio de las observaciones hechas por se analizará a continuación destacando ciertos autores sobre el estado primitivo mí, acerca de los seres pertenecientes a los tres los aspectos de interés para la Ciencias de de la población aborigen señaló en su de - reinos de la Naturaleza que existen en ese país ” la tierra. fensa: “ Confesemos que todas las naciones sean puesto que “ fueron presentados de un modo americanas, europeas o asiáticas, han sido seme - demasiado conciso, como para cumplir los anhe - el pensAmIento Del jantísimas en estado salvaje, del cual ninguna ha los de los naturalistas doctos, pero que resultó su - AbAte molInA tenido el privilegio de eximirse ” (molina 1795: ficiente para satisfacer la curiosidad de aquellas 359). rebatió con argumentos científicos personas que sólo buscan darse una idea de la ca - en las elegías a la destrucción de Con- las ideas del naturalista francés Georges lidad y producciones de los países lejanos. Este cepción, según la traducción de briones louis buffon (1707-1788) respecto de la fue el único fin que me propuse al componer ese (1997), molina se refirió fundamental - degeneración de las especies en América, opúsculo ” (molina 1987: 3). los agregados mente a la condición humana ante fenó - pero ridiculizó los planteamientos de Cor- 450 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

nelius Franciscus de pauw (1739-1799), tánica y zoología chilenas. los aspectos en geología y que, por lo tanto, sus cono - quien, a pesar de no haber visitado Amé- botánicos y zoológicos tratados por mo- cimientos los debió adquirir en forma au - rica, intentó demostrar no solo la dege - lina han sido frecuentemente analizados todidacta. sobre los fósiles expresó: “ No neración de las especies causada por las y continuados por científicos nacionales sabemos con certeza de qué manera procede la condiciones climáticas en el continente, y extranjeros, y la lista bibliográfica al res - naturaleza en las vísceras de la Tierra para for - sino también la degeneración, tanto física pecto es extensa (Gunckel 1980). su apor- mar los diversos fósiles que en aquellos tenebro - como intelectual del hombre americano. te en estos campos sigue vigente y su me - sos subterráneos se generan ” (molina 1987: Al respecto escribió: “ En suma Pauw ha es - moria ha sido honrada con la definición 7). sin embargo, en los párrafos que se crito de las Américas y de sus habitantes con la de varias especies vegetales y animales reproducen a continuación se reconoce misma libertad que pudiera haber escrito de la que llevan su nombre. las detalladas ob - que la interpretación que hizo sobre la luna y de los Selenitas ” (molina 1788: xvi- servaciones de la naturaleza realizadas por presencia de estratos “ incrustados de pro duc - xvii). en su intento por mostrar las virtu - molina en su Compendio y ensayos, y las ciones marinas ” es correcta y se ajusta a la des de su tierra, cayó él también en algu - generalizaciones que realizó basado en definición de fósil en el sentido de restos nas exageraciones de importancia menor. ellas lo muestran aplicando a la ciencia de organismos conservados en las rocas. Curiosamente, en ninguna de sus obras natural criterios empíricos e inductivos probablemente, en el párrafo anterior se hace mención a su contemporáneo el bió- que rompieron con la tradicional doctri - refería a formas hoy desconocidas y que, logo Georges Cuvier (1769-1832). na escolástica y lo colocaron en una posi - por lo tanto, no era capaz de asignar a el corpus descriptivo de su obra es la ción crítica con las enseñanzas recibidas. ningún tipo de organismo viviente cono - principal contribución de molina y la que este aspecto de la personalidad de mo- cido. causó mayor efecto en las ideas de su lina que lo ubicó en avance de muchos de en cuanto al Chile de entonces señaló que época. son precisamente estos los aspec - sus contemporáneos está muy bien ex - al oeste limita con el “ Océano Pacífico, en el tos que interesaron a científicos como presado en el discurso de santágata (1845) septentrión con Perú ”', y “ al oriente con Tucu- (1769-1859), y fue también señalado por Hederra (1929) mán, Cuyo y la Patagonia y al sur con Maga- quien pasó a visitarlo en septiembre de y, posiblemente, subyacía en los cuestio - llanes ” (molina 1987: 9) (Fig. 3). en rela - 1805, aunque no pudieron encontrarse namientos que se le hicieron en relación ción con la Cordillera de los refi - debido a que el abate estaba en el campo a sus ideas sobre las analogías menos ob - rió: “ Esta montaña, en la parte que respecta a (Fontecilla 1929, opazo 1942, espinosa servadas de la naturaleza. Chile, tiene 120 millas de ancho y está compues - 1946), y el mismo (1809- ta de tres cadenas, casi paralelas. La del centro 1882), quien citó a molina en algunos pa - ContrIbuCIón Al supera algo en altura a las dos colaterales, cuyas sajes (Darwin 1845, 1846). Con estas des - ConoCImIento De faldas son más escarpadas hacia el occidente que cripciones del nuevo mundo, molina y lA ConstItuCIón al oriente ” (molina 1987: 12). molina con - los otros criollos de la Ilustración inte - GeolóGICA De lA sidera aquí, de acuerdo con la división graron el continente americano al resto reGIón política anterior a su expulsión, un terri - del mundo e influyeron en América con - torio chileno que incluía a la provincia de figurando una idea de identidad que afir - A pesar de la abundante literatura exis - Cuyo, o sea, “ desde los 68º a los 75º30’ de maría las ideas de emancipación, siendo, tente sobre nuestro abate, es poco o nada longitud occidental, desde el meridiano de Paris ”. en ese sentido, sus precursores ideológi - lo que se ha escrito sobre su aporte a la las cadenas a las que se refiere son, por cos (Hederra 1929, rojas 1997). geología. Humberto Fuenzalida Villegas, lo tanto, de oeste a este: la Cordillera de en los textos dedicados a la historia na - uno de los tres fundadores de la escuela la Costa, la Cordillera principal y Frontal, tural de Chile, molina abordó diversos de Geología (hoy Departamento) de la y la precordillera, que son las unidades aspectos del país como climatología, bo - universidad de Chile dictó una conferen - que se individualizan bien desde un pun - tánica, geología, zoología, mineralogía, cia en 1965 sobre “la mineralogía en la to de vista morfológico. geografía física y características y cos - obra del abate molina” (Gunckel 1980). en el resto de su texto no hace mayor re - tumbres de sus habitantes. De interés son un intento de análisis de su contribución ferencia a las regiones ubicadas al este del sus descripciones de animales y plantas a esta ciencia se encuentra en menichetti eje de la Cordillera principal, excepto al para lo cual siguió los criterios de clasifi - y Hervé (2007). A continuación se anali - señalar las dificultades que representa el cación binaria propuestos por Carlos lin- za, a la luz de los conocimientos actuales, cruce de la cordillera y la existencia de re - neo (1707-1778). Con estas descripcio nes el aporte del abate al conocimiento de la fugios para uso de los correos (molina permitió la incorporación de un número geología de esta región del continente 1987), y al realizar la siguiente descrip - importante de las especies descritas por (molina 1987). Al inicio de este análisis es ción de un interesante fenómeno natural: él a la taxonomía zoológica internacional necesario tener presente que molina no “El río Mendoza , antes de salir de los Andes, (stuardo 2007) y sentó las bases de la bo - había tenido ninguna preparación formal pasa bajo un puente de yeso hecho por la corro - el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 451

rítimas ”, “ son como los antemurales de los Andes; sus estratos no son horizontales. Visibles, tal como los de las montañas maríti - mas, ora se alzan verticalmente, ora se curvan de diferentes maneras. Esta estructura y la índole de sus partes constitutivas le asignan a los mis - mos un lugar entre las montañas primitivas o, al menos, entre aquellas de transición. En efecto, ellas están adosadas a la cadena exterior de los Andes, como formando su pedestal ” (molina 1987: 64). estas rocas corresponderían a los depósitos volcánicos y volcanoclásti - cos que posteriormente fueron incluidos en las formaciones Abanico (Aguirre 1960, González y Vergara 1962, thiele 1980), Coya-machalí (Klohn 1960, Charrier 1981), Colbún (Karzulovic et al. 1979), Cura-mallín (González y Vergara 1962, niemeyer y muñoz 1983, muñoz y niemeyer 1984). A partir de esto se de - duce que molina incluyó entre las monta - ñas primitivas o de transición a los estra - tos “ verticales ” o “ curvados ”, o sea plega - dos, del flanco occidental de la Cordillera principal, de la Cordillera de la Costa oriental y de los cordones que conectan a estas dos cordilleras, y que esto lo hizo basado en el criterio de que las rocas más deformadas son las más antiguas. entre Figura 3: mapa político de la parte sur de América del sur en el siglo XVIII, tomado de Castedo los estratos de la Cordillera de la Costa (1953), en que se muestra la extensión de Chile hasta la región de Atacama y abarcando la pro - reconoció venas de gneis o granito estra - vincia de Cuyo al este de la Cordillera de los Andes. en sus descripciones de la cordillera, molina tificado, pórfido primitivo y otros tipos se refiere a esa región. litológicos, que consideró de segunda sión de sus olas, el cual está adornado con gran y Cordillera por los europeos, la cual recorre al formación. número de hermosas estalactitas. Esta simple país por el oriente ” (molina 1987: 9), o sea, Al referirse a la cadena marítima utilizó obra de las aguas, de la que tantas maravillas la Cordillera principal, y “ otra cadena de otros criterios basados en la existencia de cuentan los viajeros, ha sido distinguida con el montañas, paralela a los Andes, formadas anti - vestigios “ del batir de las olas ” y la presen - glorioso nombre de 'Puente del Inca' ” (molina guamente por el mar ” (molina 1987: 14), que cia en ciertos depósitos occidentales de 1987: 22). en el resto de su ensayo se re - corresponde a lo que actualmente deno - organismos marinos que consideró ante - mite a describir la región que él denomi - minamos Cordillera de la Costa. señaló, riores a la llegada de los europeos. estos nó el bajo-Chile, es decir, “ la franja de tie - además, que: “ La falda occidental de esta ca - depósitos, que denominó el “ estrato ma - rra comprendida entre los Andes y el océano dena, antes bañada por el mar está compuesta, rino ” (molina 1987: 58), parecen corres - Pacífico, es aquella parte a la que de ordinario se en su mayor parte, por estratos esquistosos poco ponder a los que en la región costera del le da el nombre de Chile. Por ser ésta la porción coherentes ” (molina 1987: 21), haciendo re - país recubren a las rocas que constituyen más cultivada, a ella se aplican especialmente la ferencia a las rocas del “basamento cris - las montañas primitivas o de transición. mayor parte de las cosas que diremos sobre este talino” (González-bonorino 1970, 1971) Al respecto escribió: “ Los montes de la ca - Reino ” (molina 1987: 14). o ''Complejo de subducción'' (Hervé et al. dena marítima, que se avecinan más al mar, molina diferenció en la región compren - 1981). muestran en general un origen no muy antiguo. dida entre Valparaiso y Valdivia, que es la más adelante señaló que “ las montañas que Ellos están compuestos de estratos alternada - región de Chile que recorrió (Fig. 4), dos flanquean la gran cadena de los Andes y las ra - mente calcáreos, arcillosos y arenarios, incrusta - cordones montañosos principales: una mificaciones que, de trecho en trecho, se despren - dos de producciones marinas… ”; más adelan - “gran cadena llamada Andes por los nacionales den de ésta y van a unirse con las montañas ma - te continúa: “ El célebre Ulloa dejó una des - 452 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

cripción circunstanciada de varias colinas obser - vadas por él en el litoral del puerto de Concepción, las cuales están enteramente com - puestas de conchillas en su estado natural. Yo observé otras similares sobre las costas de la pro - vincia de Maule, cuya altura era de más de 200 pies sobre el nivel del mar. Pero lo que me pare - ce más necesario de hacer notar fue que todas ellas no contenían sino testáceos del mismo géne - ro, esto es, choros, camas, peines u otros géneros, separadamente. Rara era la colina donde se en - contrasen mezcladas las especies. De allí se ve que muchos testáceos se reúnen en familias nu - merosas en el fondo del mar, donde los flujos agi - tados los expulsan a todos juntos desde un mis - mo lugar. Estas colinas están cubiertas por más de un pie de tierra. Los campesinos extraen con facilidad las conchillas y, quemándolas, hacen una cal excelente. No es fácil indagar cuál sea la época de su expulsión; ciertamente es anterior al arribo de los europeos a aquellas partes. Pero el estado de conservación perfecta en que se encuen - tra no muestra una antigüedad notable ” (mo- lina 1987: 62). es interesante notar que, si bien había en un principio mencionado que la falda occidental de la cadena marí - tima estuvo “ antes bañada por el mar ” y que es “ un antiguo producto de las aguas marinas ” (molina 1987: 21-22), explicara luego la presencia de restos de organismos mari - Figura 4: mapa de ubicación de las localidades visitadas por molina en los años vividos en nos en estratos de la región costera me - Chile. existen algunos autores que señalan que molina conoció la vertiente oriental de los Andes diante una “ expulsión ” por flujos agitados (espinosa 1946), aunque de las descripciones que molina realizó de la región de uspallata y mendoza no se desprende que la haya visitado personalmente. y no dedujese un alzamiento costero, a pesar de escribir que el “ estrato marino ” más adelante agregó: “ Sin embargo, la cima información imprecisa recibida de viaje - se formó cuando el mar “ cubría la antigua del gran monte descabezado -que como había - ros, ya que él no refiere haber estado en superficie ” (molina 1987: 52). por otra par - mos dicho, se ha encontrado, según las últimas esa región. estos fósiles, que de ninguna te, cabe preguntarse si, al referirse “ al observaciones, igual en altura perpendicular al manera podrían encontrarse en la cum - arribo de los europeos ”, estaba pensando en famoso chimborazo - está cubierta de patenas, bre de algún volcán, deben corresponder el arribo de alguna de las migraciones que bocinas, remolinos y otras conchas evidentemente a los depósitos marinos de los ciclos de más adelante postularía para explicar el marinas, en parte petrificadas y en parte calcina - transgresión y regresión del Jurásico y del poblamiento de América, las que habrían das. Ulloa ya había observado conchas similar - Cretácico Inferior de la cuenca de sido, por cierto, anteriores a la llegada de mente petrificadas sobre las faldas de la misma mendoza-neuquén. este error podría los españoles (molina 1821c); un tema que montaña andina en el Perú, a la altura de haber sido reforzado por su definición será tratado más adelante en este artículo. 2.337 toesas sobre el nivel del mar y Humboldt, del “ estrato marino ”, ya que lo observó en relación con la presencia de restos a 4.200 metros sobre el mismo nivel. La dispo - en la parte occidental de la cadena marí - marinos en “ la cadena exterior de los Andes ” sición de tales cuerpos marinos parece indicar tima (Cordillera de la Costa) recubriendo (molina 1987: 64), o flanco occidental de que -después de la formación o cristalización de estratos esquistosos, que son rocas que la Cordillera principal, extiende su idea aquella montaña, ciertamente anterior a la exis - atribuyó a montañas primitivas o de tran - de que esta presencia es una evidencia de tencia de los seres orgánicos- las aguas volvieron sición. juventud: “ Allí los avances de los cuerpos ma - a cubrirla por algún tiempo ” (molina 1987: Finalmente, en relación con las rocas rinos se muestran raras veces, y solamente en la 64-65). este comentario del abate es constitutivas de la alta cordillera, señaló: superficie, en un estado apenas discernible ”. erróneo y fue posiblemente inducido por “En otro lugar ya habíamos expuesto nuestra el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 453

opinión, corroborada por observaciones del céle - existe entre la subdivisión propuesta por ostentar, con todo vigor, su potencia generativa; bre Humboldt y algunas experiencias personales molina para las unidades litológicas de la los efectos que de ello derivan alcanzan toda la nuestras, sobre la estructura de la misma monta - región central de Chile con la subdivisión perfección posible. Las minas, de toda suerte de ña, la que suponemos no es granítica como aque - de las rocas de la tierra propuesta por metales, son allí copiosísimas ” (molina 1987: lla de las otras montañas primitivas, sino por de - Abraham Gottlob Werner (1749-1817), 64). A continuación, precisa: “ Yo no he he - más porfirítica. El tiempo confirmará o modifi - aún cuando molina estableció un orden cho, hasta aquí, sino indicar en general las par - cará la generalidad de estas aserciones ” (molina cronológico algo diferente al del alemán tes constitutivas de las montañas chilenas en 1987: 65). el abate hace notar, de esta que incluía: Urgebirge (montañas primiti - cuanto me fue posible observarlas. Los mineralo - manera, que las rocas porfiríticas de los vas), Übergangsgebirge (montañas de transi - gistas que vendrán más tarde tendrán mayores montes más altos de los Andes serían más ción), Flötzebirge (depósitos estratificados oportunidades que las que yo he tenido de exa - jóvenes que las que forman el flanco oc - remanentes de la contracción de los océ - minar aquéllas, pudiendo especificar así, esmera - cidental de la Cordillera principal, que el anos), Aufgeschwemmte (aluvio) y rocas vol - damente, las localidades, correspondencias y na - consideraba “ primitivas o, al menos, de tran - cánicas (Werner 1787). Considerando, turaleza de sus componentes. Por ahora, según sición ”. por una parte, la escasa formación geoló - mi plan, me limitaré a exponer brevemente los en el modelo que esboza molina, está cla- gica de molina, y, por otra, el conoci - productos minerales que son más conocidos y ro el concepto de destrucción de la cade - miento prácticamente nulo que se tenía apreciados en el país. Los dividiré, para mayor na montañosa por la erosión puesto que, sobre la geología de esta región de Amé- claridad, en los cuatro órdenes comunes, esto es como último nivel estratigráfico, propo - rica en la época, sus escritos fueron, sin en: tierras y piedras, sales, bitúmenes y metales ” ne denominar “ estrato andino ” (molina duda, un valioso aporte a la geología del (molina 1987: 65). Correspondería a otro 1987: 58) a los depósitos resultantes de la país. sería, posteriormente, Darwin (1846), Ignacio -Ignacio Domeyko (1802-1889)-, erosión de la cordillera. quien con su formación de geólogo, pro - que vendría de la europa donde había vi - resumiendo, se puede señalar que, en opi- duciría el próximo gran aporte al conoci - vido molina, continuar esta primera gran nión de molina, las rocas más antiguas, por miento de la configuración y evolución introducción en el tema (Domeyko 1860) . su deformación, son las del flanco occi - geológica de la Cordillera de los Andes. en esta parte de su ensayo, molina inter - dental de la Cordillera principal, las del caló observaciones personales con abun - basamento de la Cordillera de la Costa, y ContrIbuCIón dante información recopilada por otros las de los cordones que las conectan; es - A lA mInerAloGÍA, naturalistas y viajeros, como louis Feui- tas últimas con un núcleo de granito (mo- YACImIentos mInerAles llée y Amédée Frézier. Feuillée es el au - lina 1987: 80). Éstas serían montañas “ pri- Y otros reCursos tor de Journal des observations physiques, ma - mitivas o, al menos, de transición ” y corres - mIneros thématiques et botaniques, faites par l’ordre du ponden a las unidades litoestratigráficas Roy sur les côtes orientales de l'Amérique méri - que actualmente están asignadas al paleo- en el libro II, o segunda parte de su en- dionale et dans les Indes occidentales , de 1707 à zoico, mesozoico y Cenozoico (paleóge- sayo, titulada Minerales de Chile , que prece - 1712 de 1714, y Suite du Journal des observa - no). Éstas habrían sido sucedidas por las de a las dedicadas a los vegetales y anima - tions physiques, mathématiques et botaniques, rocas porfiríticas de los montes más al - les de la región, después de una introduc - faites sur les routes orientales de l'Amérique mé - tos; en este caso se trata de los volcanes ción sobre algunos rasgos geológicos del ridionale et dans un autre voyage fait à la Nou- y, eventualmente, de la Formación Fare- territorio chileno y la actividad volcánica velle-Espagne et aux îles de l'Amérique de llones del neógeno (Aguirre 1960, Klohn y termal, el abate se extiende en una de - 1725. en tanto que Frézier había publica - 1960). en un tercer grupo habría ubica - tallada exposición sobre “ los productos mi - do en 1716 su Relation du voyage de la mer do a su “ estrato marino ” que incluye los nerales que son más conocidos y apreciados en el du sud aux côtes du Chily et du Perou, fait pen - depósitos del borde occidental de la Cor- país ” (molina 1987). en relación con los dant les années 1712, 1713 & 1714. dillera de la Costa, “ incrustados de produccio - ingentes recursos que, según señala exis - en su ensayo, molina, no solo describió nes marinas ”', y cuyo origen sería anterior ten en Chile, expresa frecuentemente su la existencia de los recursos minerales si- a la llegada de los europeos. Finalmente, optimismo de que tal o cual de ellos sea no que se refirió a sus aplicaciones. sobre vendrían los depósitos del “ estrato andi - utilizado en el futuro, cuando esta región los diferentes tipos de tierras que recono - no ”, provenientes, como sabemos ahora, adquiera mayor desarrollo, para mejorar ce -“ aluminosas, calcáreas, magnesíacas, silico - no sólo de la erosión de la Cordillera construcciones, elaborar productos de ca- sas y baríticas ”-, indicó sus bondades agrí - principal, sino también de la actividad vol- lidad o desarrollar el arte y la cultura. colas y el empleo de algunas de ellas en cánica, como lahares y avalanchas, algu - sobre los minerales, señaló que estos “ re - cerámica, en la construcción y el blan - nas de las cuales habrían llegado hasta la siden más espontáneamente ” en las montañas queo de edificios. en relación con algu - región costera (encinas et al. 2006a, b). que flanquean la gran cadena de los An- nos tipos de rocas señaló que han servi - es interesante hacer notar la analogía que des: “ Allá la naturaleza se ha complacido en do para la construcción de iglesias, como, 454 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

por ejemplo, un “ mármol ” que proviene (1915) y rodríguez y muñoz Cristi (1931). pura. Al tiempo de nuestra partida, los copiapi - de una “ colina de los suburbios de la capital del estas corresponden actualmente a la aso - nos adoptaban todas las diligencias posibles para Reino ” que se utilizó para la construcción ciación lacustre del miembro río pedre- ubicar el lugar de donde se había desprendido de la catedral y de la iglesia de los domi - goso de la Formación Cura-mallín, asig - aquel mineral ” (molina 1987: 110). Hizo nicos (molina 1987: 73). en cuanto a los nada al mioceno Inferior a medio (suá- mención, además, que en la mina uspa- minerales propiamente tales, basado en rez y emparan 1997). llatana, descubierta en 1638, en el para- observaciones del francés Frézier, hizo en cuanto a los recursos metálicos, que millo, cerca de uspallata, “ la cual es la más una interesante referencia a las “ piedras describe latamente, realizó una extensa lis- vasta y rica de cuantas jamás se han descubierto crucíferas ” del río laraquete, en la región ta basada en autores como ovalle, el ge - y trabajado en Chile ”, hay abundancia de de Arauco, señalando que “ se acercan a ógrafo francés nicolas sanson d’Abbe- minerales de plata (molina 1987: 111). aquellas que los franceses llaman Maclas ” y al ville (1600-1667), autor de Atlas Nouveau en cuanto al oro señaló: “ El oro no busca lapislázuli, que según este autor se encon - de 1692, Frézier y en artículos publicados el frío, como la plata; ama los climas templados. traría a “ poca distancia de Copiapó y a 100 le - en los Anales de Ciencias Naturales de Es- No sé que se haya encontrado mina alguna en - guas al este de Concepción ”. paña , revista creada por el sacerdote botá - tre las rocas de la cordillera. Todas las que se molina mencionó las salinas naturales de nico Antonio José Cavanilles (1745-1804). han descubierto en Chile se encuentran entre las bucalemu, boyeruca y Vichuquén, en la en esa lista incluyó variedades minerales faldas de dicha montaña y las costas del mar costa central de Chile, y la existencia de de cobre, plata, oro, hierro, plomo, zinc, Pacífico ”. “ Se le encuentra, asimismo, entre los sal en la cordillera de las provincias de Co- antimonio, mercurio y manganeso. el aba- polvos de las llanuras y más frecuentemente entre piapó y Coquimbo. en relación a estas te mencionó luego los yacimientos de zinc las arenas de los ríos y torrentes, en pequeños últimas regiones indicó que se presenta de los montes de Alcoraya en Coquimbo, granos o en pajuelas de diverso tamaño, las cua - contigua y entrelazada con estrías de arci - la existencia de abundante manganeso les cuando exceden el volumen ordinario se lla - lla y yeso; aquí, evidentemente, hace refe - -sin indicar localidades específicas-, la man pepitas ”. “ En las provincias australes, si - rencia al yeso oxfordiano o “Yeso prin- presencia de arsénico como pirita arseni - tuadas entre el río Bio-Bio y el archipiélago de cipal” (schiller 1912). A continuación agre- cal en los montes de san Félix -un acom - Chiloé, se han descubierto muchas minas de oro ga que “ Hasta ahora resulta incierta para los pañante “ incómodo de casi todos los filones me - estimado superior en finura a todos los que se en - geólogos la proveniencia de tanta abundancia de tálicos ”- y de rejalgar en los cráteres de los cuentran en el resto del Reino. De ellas los espa - sal mineral en aquellos lugares y en otros de volcanes. basado en Frézier, hizo refe - ñoles extraen cantidades inmensas y por este mo - nuestro globo. Algunos la creen formada por los rencia a yacimientos de estaño en torno a tivo han abierto una Casa de Moneda en val- fluidos elásticos, otros gustan, más bien, creerla la ciudad de Copiapó y en el distrito de divia y otra en osorno ”. “ Las minas de oro depositada por el mar, luego que éste se retiró de lampangue, en Coquimbo. en relación más considerables que se trabajan en el Chile es - las alturas, actualmente descubiertas ”, señalan - con el hierro, señaló que éste no escasea pañol son las de Copiapó, Guasco, Coquimbo, do que se inclina por la segunda posibili - en el país, rebatiendo nuevamente a Cor- Petorca, Ligua, Tiltil, Putaendo, Carén, Alhué, dad (molina 1987: 84). encontramos aquí nelius Franciscus de pauw, quien afirma - Rancagua, Maule, Huilli-patagua y Rere, las una reiteración de la idea de molina de ba que en Chile este metal no existía. cuales -a excepción de las cinco últimas, que son que fue el mar el que se retiró de esas al - mencionó en este sentido la existencia de de reciente excavación han rendido siempre, des - turas y no la cordillera la que se alzó, lo ricas minas de este metal en las regiones de que este Reino fue conquistado por España, cual podría ser una evidencia adicional de de Coquimbo, Copiapó, Aconcagua, mau- un producto constante y considerable ” (molina influencia werneriana (neptunista). en le y Huilquilemu, cerca de talca, en dis - 1987: 114-116). cuanto a los depósitos de nitratos explica tritos célebres como: remolinos, Agua- el abate dedicó finalmente algunas pági - que estos son abundantes en las regiones Amarilla, rosario y uspallata, y su pre - nas al cobre, sus yacimientos y sus proce - boreales del país, menos expuestas a las sencia en el cerro la Campana de Qui- sos de extracción y refinación: “ En Chile lluvias (molina 1987: 85). entre los recur - llota. refirió luego que el mercurio, bus - las minas de cobre parecen, por ahora, más co - sos no metálicos indicó la existencia de cado para la extracción del oro y la plata, piosas y extensas que las de otros metales… ”. ricos yacimientos de carbón mineral en la no es escaso en el país en forma de cina - “Ellas están situadas desde los límites con Perú región de Arauco, incluidos por Darwin brio, en las minas de Copiapó, Coquimbo hasta la extremidad del archipiélago de Chiloé o, (1846) en su Formación Concepción, y (punitaqui) y Quillota. en cuanto a la pla - por decirlo mejor, hasta el Estrecho de Magalla- que darían posteriormente lugar a los clá - ta señaló lo siguiente: “ En 1767, un campe - nes ”. “ Estas minas se dirigen, por lo general, de sicos estudios de Fenner y Wenzel (1942), sino encontró, en las faldas de los montes de norte a sur, siguiendo el curso de las montañas, tavera (1942) y muñoz Cristi (1946), y de Copiapó, un pedazo de mineral de plata de esta que tienen la misma dirección. Su corteza está bitumen en el “ Estado araucano ”, refirién - especie, de color verde, el cual, en diversos ensayos ordinariamente compuesta de esquistos arcillosos dose, seguramente, a las pizarras bitumi - hechos con todo el cuidado necesario, rindió cons - o de una especie de pórfido blando y algunas ve - nosas de lonquimay, descritas por Felsch tantemente más de tres cuartas partes de plata ces de piedras cuarzosas, córneas y calcáreas. La el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 455

mayor parte se extiende sobre las faldas de las mente, el oxígeno se une al azufre formando el titución (35º15’s). montañas; las otras se encuentran en los valles al ácido sulfúrico; el hidrógeno, entonces libre, esca - el tercero, del 15 de marzo de 1657, aso - pie de las colinas ” (molina 1987: 99-105). pa con gran estruendo, sacudiendo el terreno su - ló, según molina, gran parte de la capital. Agrega que este cobre se encuentra de perior; el incendio y el movimiento se van propa - este sismo se generó en la zona com - ordinario mezclado con oro, pero en pro - gando poco a poco; todo empieza a sacudirse; se prendida entre Chanco (36ºs) y lebu (37º porciones diferentes. Curiosamente no ha- forman nuevos fluidos elásticos que hacen au - 30’s), en la parte sur de la península de ce mención a la existencia de mineraliza - mentar el desconcierto; la tierra tiembla o se abre Arauco. en consideración al área relativa - ción en las localidades de los actuales ya - en grietas profundas, de donde nacen los volcanes, mente reducida del movimiento, en com - cimientos de clase mundial río blanco - según la mayor o menor cantidad de agentes que paración con los anteriores, y su lejanía los bronces y el teniente (Camus 2003), allí actúen, promoviendo la efervescencia ” (mo- de santiago, llama la atención que molina que a la sazón no serían más que minas lina 1987: 42). según lo experimentado señale que el mismo produjera gran des - menores de las que se extraían los óxidos por molina los sismos “ se propagan hori - trucción en la capital. esta vez, en Con- superiores. entre los minerales de cobre zontalmente y son precedidos, como habíamos di - cepción, el mar se salió tres veces conse - mencionó especialmente el muriato (clo - cho, por un ruido fácilmente perceptible ” (mo- cutivas (Castedo 1953). ruro) de cobre, comentando que “ parece lina 1987: 47). molina también se planteó el cuarto, ocurrido el 8 de julio de 1730, hasta ahora sólo propio de este reino ” (molina el problema de cómo predecir los sismos. empujó, según molina, el mar contra la 1987: 103), y la turquesa, agregando, sin Con la frase siguiente, en la que pone en ciudad de la Concepción, derribando to - explicar por qué, que la provincia de evidencia su espíritu inquieto y observa - dos sus edificios. la zona de fractura de Copiapó debe su nombre a este mineral. dor, expresó su experiencia al respecto: este sismo abarcó desde aproximada men - “Ciertos autores sostienen que, según el estado de te los Vilos (32ºs) hasta un poco al sur sobre el CAlor la atmósfera, se puede predecir con seguridad la de Chanco (36ºs), con lo cual, efectiva - Interno De lA tIerrA, próxima venida de un terremoto. No niego esa mente, debió causar fuertes daños en Con- los terremotos Y el posibilidad; sin embargo, confieso ingenuamente cepción y, sin duda, también en la capital. VolCAnIsmo. que, habiendo empleado toda la atención de que según Castedo (1953), la zona afectada soy capaz, al combinar los diversos aspectos que abarcó desde la serena hasta Valdivia. molina atribuyó el origen de minerales, presenta la atmósfera cuando la tierra se sacude, es posible, entonces, que, en relación terremotos, volcanismo y aguas termales nunca logré obtener ningún indicio análogo que con la destrucción asignada al tercer sis - al calor interno de la tierra: “ El calor cen - no fuera falso en otra circunstancia ” (molina mo en la capital, molina haya incurrido tral del globo terrestre -cuya existencia ya no pa - 1987: 46). en un error y sea éste el que realmente rece ponerse en duda- sostiene aquella admirable según molina, desde la llegada de los es - produjo los fuertes daños mencionados. fecundidad que, con permanente sucesión de ellos, pañoles hasta aproximadamente 1805, fe - el quinto, acaecido el 24 de mayo de promueve el desarrollo de los seres orgánicos y, cha en que debió estar redactando su en- 1751 -fecha precisada por el traductor formando un perpetuo círculo, la formación de sayo, esto es, en el espacio de 263 años, se rodolfo Jaramillo; curiosamente, molina los minerales ” (molina 1987: 51). es im - habrían sentido en Chile cinco terremo - había correctamente señalado la fecha del portante hacer notar aquí, que, al referir - tos grandes, todos los cuales correspon - 24 de mayo en su elegía al terremoto-, sa - se a un “ perpetuo círculo ”, está aparente - den a sismos por subducción (Comte y cudió nuevamente la ciudad de Concep- mente haciendo mención a su concepto beck 2010). ción, a sólo 21 años del anterior. la des - de la “ unicidad de los seres ” de los tres rei - en 1550 -el 8 de febrero de 1570, según cripción que sigue es interesante pues nos de la naturaleza, desarrollado por el su traductor rodolfo Jaramillo-, el sismo molina tenía a la sazón 11 años y fue tes - mismo molina (1821b), al que se hará re - afectó, de acuerdo a lo expresado por mo- tigo presencial del terremoto: “ el mar vol - ferencia más adelante en este artículo. lina, algunos pueblos en las regiones aus - vió a sepultarla bajo la arena y los escombros. el abate comienza sus referencias al tema trales. la información disponible actual - Este gran terremoto se anunció noches antes con de los terremotos y el volcanismo con mente permite precisar que la zona de pequeños temblores y especialmente con uno que una explicación para su origen: “ Chile, en fractura abarcó desde un poco al sur de se sintió un cuarto de hora antes; además, con un medio de su envidiable prosperidad, es golpeado Constitución (35º15’s) hasta lebu (37º globo de fuego que pasó hacia el poniente con una funestamente, cada cierto tiempo, por los terre - 30’s). especie de silbido. La gran sacudida empezó cer - motos. Su misma riqueza es la causa. La tierra el segundo sismo, sucedió el 13 de mayo ca de medianoche y duró más de un minuto, pero es rica en azufre y en todo tipo de minerales. La de 1647 y abatió, según molina, muchas la tierra tembló casi continuamente hasta la au - gran cantidad de sulfuros que se forma en sus en - construcciones de la capital. la zona de rora. Antes del terremoto, el cielo estaba total - trañas, al ser mojados después de la sequedad del fractura de este sismo abarcó desde la re - mente claro, pero inmediatamente después se cu - verano por las lluvias otoñales, fermenta y luego gión de la ligua (32º30’s), al norte de brió de densas nubes, que trajeron una fuerte llu - se enciende. El agua se descompone instantánea - Valparaiso, hasta un poco al sur de Cons- via durante ocho días. Una vez pasada la lluvia 456 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

volvieron los movimientos de tierra, prolongándo - partes, lanzando piedras y cenizas abrasadas, en phail y saa 1967, marangunic et al. 1979), se por espacio de un mes, con intervalos de quin - tal cantidad, que las aguas desbordadas de los se agregan los flujos laháricos canaliza - ce a veinte minutos. No se registró la muerte de dos ríos vecinos, allipén y toltén , cubrieron dos a lo largo de los valles que bajan, en ninguna persona en todo el Reino, salvo siete in - una vasta extensión del país, con gran daño y es - esta región, desde los volcanes y mues - válidos que fueron tragados por el mar al sumer - panto de los habitantes. El olor contraído por las tran cómo estos afectaron principalmen - girse la ciudad de Concepción. Fue igualmente aguas, a causa de las materias precipitadas, as - te al lado chileno (Davidson 1971, 1974, baja la mortalidad en los terremotos precedentes, fixió todos los peces que en ellas moraban y las Fuenzalida 1974, macphail 1973, Abele también ocurridos de noche. La dirección de to - tornaron por mucho tiempo inaptas para la be - 1982, González-Ferrán 1995), algunos de das estas conmociones siempre ha sido de sur a bida. Ha llegado a ser famosa en nuestros tiem - los cuales llegaron hasta la vertiente occi - norte, es decir, relativa a las corrientes marinas pos la erupción del volcán Peteroa , por haberse dental de la Cordillera de la Costa (Ce- que siguen el mismo rumbo. Por lo tanto, es bas - sentido el estampido en gran parte del Reino. El cioni 1978, encinas et al. 2006b), mien - tante probable que el mar influya en muchas 3 de diciembre de 1762 se formó en este antiguo tras que las nubes de piroclásticos de es - partes. El daño causado a la ciudad de Concep- volcán un nuevo cráter, como aquel del Villarri- tas erupciones tienden a dispersarse hacia ción por los dos últimos terremotos mencionados ca, hendiendo en dos partes un monte vecino. Las el lado argentino (brüggen 1950, Gon- no hubiera sido tan grande, si las aguas -agita - cenizas y lavas lanzadas rellenaron los valles ad - zález-Ferrán 1995). das, tal vez, por alguna explosión volcánica in - yacentes y engrosaron por dos días las aguas del en relación con las aguas termales escri - terna- no se hubieran volcado sobre las construc - río tinguiririca . Un pedazo de montaña se pre - bió: “ Entre las compensaciones más o menos es - ciones ya vacilantes. De donde se deduce, proba - cipitó sobre el río Lontué, deteniendo su curso timables que se presentan en una región, en lu - blemente, el porqué los países situados al este de por espacio de otros tantos días; habiéndose for - gar de los perjuicios que suelen acarrear los fue - los Andes sufren poco o nada dicho infortunio. mado un gran lago con las aguas estancadas, és - gos subterráneos, no deben olvidarse las aguas Sin embargo, dos provincias chilenas: Copiapó y tas se abrieron, al fin, paso violentamente e inun- termales y minerales. De ellas la medicina puede Coquimbo, ambas marítimas y ricas en minera - daron los campos circunvecinos. El cielo se cubrió sacar notable utilidad en ciertas enfermedades ” les, tampoco están sujetas a este fenómeno ” de espantosas nubes hasta el día siguiente. Fue (molina 1987: 55). molina mencionó que (molina 1987: 44). cosa digna de notar que convulsión tan estrepito - los baños termales más frecuentados en sa no fuese seguida de una sacudida general de su época eran los de peldehue, al norte de sobre el VolCAnIsmo aquellas provincias; tal vez los montes interme - santiago, y los de Cauquenes, en el valle dios impidieron los progresos de la conmoción de Cachapoal, al este de rancagua. molina sostenía que el volcanismo se de - iniciada. Feuillé, insigne botánico y astrónomo, bía, además del calor central terrestre, del hace mención en su diario de una lluvia de are - el AbAte molInA que ya se dio a conocer su punto de vis - na, vista caer en su tiempo en aquella parte de Y el ConoCImIento ta, a un calor originado por la efervescen - las montañas andinas ubicadas entre los volca - CIentÍFICo De su ÉpoCA cia de las materias combustibles internas, nes chillán y antuco . Sin duda, esta arena no entre las que mencionó al carbón mine - pudo ser otra cosa que una masa de escorias des - el Abate molina no sólo fue un estudio - ral, fosfuros, pirita, azufre, bitúmenes, menuzadas durante el hervir de uno de aquellos so de las ciencias naturales, sino que a turbas, etc. (molina 1987: 51). señaló que volcanes, lanzada al aire por alguna explosión partir de sus amplios conocimientos plan- los “ volcanes se encuentran en las montañas violenta ” (molina 1987: 54-55). la refe - teó ideas generales sobre la naturaleza. principales, o sea, en la cadena del medio de los rencia que hace a los aluviones de origen en el prólogo de espinosa (1946), Fran- Andes ”. más adelante se refirió a estas volcánico coincide con el registro geoló - cisco A. encinas, el gran historiador de montañas como “ ignívomas ”, donde, se - gico. en algunos sectores de la Depre- Chile, expresó sobre nuestro personaje: gún él, existía en esa época escasa y bár - sión longitudinal de Chile central, el pai - “Aun prescindiendo de la cultura y el ambiente bara población y, por lo tanto, “ existe redu - saje está caracterizado por la presencia de que lo moldearon, no puede comprendérsele ni cida información sobre la actividad volcánica que pequeños lomajes, que recuerdan drum - juzgársele dentro de nuestro grado de desarrollo se desarrolla en ellas ” (molina 1987: 54). A lins y que en la región de Curicó se han cerebral. Hay que referirlo a los sabios europeos, continuación describió las erupciones de denominado “cerrillos de teno” (brüggen de su época: Lamarck, Darwin, Humboldt, los volcanes Villarrica y peteroa, ocurri - 1950, macphail y saa 1967). estos depó - George Edwards, etc. ”. das en 1640 y 1792, respectivamente: “ Las sitos clásticos, por su muy heterogénea la originalidad y dimensión de la pro - historias sólo hablan de la terrible erupción del selección y la presencia de una matriz ce - ducción de molina y su notable figura in - volcán Villarrica, acaecida en el mes de febrero nicienta, fueron interpretados como de - telectual han despertado el interés de nu - de 1640, al mismo tiempo que se observaba la pósitos morrénicos y referidos como “mo- merosos estudiosos que dedicaron múlti - gran Aurora austral de que hicimos mención en rrenas de piedra pómez” (brüggen 1950). ples estudios y ensayos a su vida y obra. el libro precedente. La explosión fue tan horri - A estas extensas cubiertas, que ahora sa - eso no es de extrañar, dado que su esta - ble, que el monte se hendió de alto a bajo en dos bemos son de origen volcánico (mac- tura científica lo puso por encima de mu - el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 457

chos de sus contemporáneos y que las vegetal para concluir en el animal, clasificando de maneras diferentes, lo que en nuestra ideas concebidas por él debieron tener los elementos desde lo menos evolucionado, hasta opinión genera las diferentes interpreta - una fuerte influencia sobre el mundo cien- el hombre ” lleva implícito un planteamien - ciones en torno a los conceptos vertidos tífico de la época en la manera de conce - to de carácter evolucionista. Hanisch por molina en esta memoria : “ Pero puesto bir la naturaleza. se ha señalado, en este (1999) lo ubica también entre los precur - que los productos de la naturaleza forman un sentido, que su pensamiento fue uno de sores de la teoría de Darwin. todo único en el diseño -en traducción de los más ricos y sugestivos de todos los existen, por otro lado, estudiosos de mo- Felipe Alliende 1965- o designio -según que escribieron durante la Colonia (rojas lina que no le otorgan a su obra tal tras - Jaramillo (1965, 1987)- y vario -en traduc - 1965). cendencia. el historiador chileno, Fran- ción de Felipe Alliende 1965- o variable - es de destacar, a este respecto, su texto cisco A. encina, en el prólogo al libro de según Jaramillo (1965, 1987)- en la ejecu - Analogías menos observadas de los tres reinos de espinosa (1946), señaló que en Analogías ción, y teniendo en cuenta su progreso gradual, la Naturaleza , leído en 1815 en bologna. menos observadas de los tres reinos de la Natu- no me ha parecido fuera de propósito sea prece - en él sustenta la idea de la “ unicidad ” de raleza , molina “ da vueltas y revueltas en torno dido por algunas ideas sobre la conexión sensible los seres de los tres reinos -mineral, vege - de la actual concepción del cosmos y de la vida ”. que existe entre minerales y vegetales ”. la dife - tal y animal- y de una gradación estable - en su opinión, estos planteamientos “ por rencia entre vario , en el sentido de varia - cida por la naturaleza entre sus productos momentos superan la embrionaria visión de sus do o diverso, y variable , en el sentido de que va siempre creciendo en perfección contemporáneos ”, pero, acusando a molina que puede modificarse, nos parece sus - desde la ínfima planta criptógama hasta de verlo todo, sin profundizar nada, co- tancial. Jaramillo (1965), parafraseando, el más perfecto de los animales como es mo buen criollo hispano americano, sen - pero contradiciendo, a encina (1946), con- el hombre (molina 1821b). refiriéndose tenció que no alcanzó a organizar los an - cluyó taxativamente: “ Molina da vueltas y a los “ filósofos antiguos ”, señaló que éstos tecedentes que disponía “ en una nueva con - revueltas alrededor de la concepción entonces “establecieron como una verdad fundamental que cepción del cosmos, que por lo demás le estaba ve - existente del Cosmos y de la Vida, preconizan - la naturaleza no procede por saltos; que no exis - dada por la investidura sacerdotal y por el medio do un progreso gradual de las especies o, lo que te ni puede existir ninguna distinción absoluta en que vivía ” (encina 1946). rojas (1965) es lo mismo, la evolución de éstas ”. entre los seres creados; que todos están conjunta - opinó que la visión de molina sobre la la teoría de molina se puede considerar mente encadenados por recíprocos vínculos, de naturaleza es estática y no dinámica co- más amplia que las de sabios como la- modo que existe entre ellos una progresión gra - mo debiera ser para un evolucionista y marck (1744-1829) y Darwin en el senti - dual, en virtud de la cual los minerales llegan in - concluyó taxativamente que “ Molina es fi - do de que incorpora a los tres reinos, es sensiblemente a vincularse con los vegetales, y es - jista ”. briones (1968) señaló que en cuan - decir, a lo animado y lo inanimado, y no tos, con los animales ” (molina 1821b: 176). to a que el abate molina sea considerado se restringe a las formas vivas “ Yo no digo un análisis comentado del contenido de “como precursor de Charles Darwin, como algu - que el modo de vivir de los minerales sea igual al esta memoria se encuentra en Gunckel nos lo han pretendido, ya no es tan evidente ”. modo de vivir de los vegetales; la gradación esta - (1965). sin bien del contexto general de esta me - blecida por la naturaleza en sus productos no lo Con esta obra se establecen entre los es - moria es evidente que los planteamientos permitiría ” (molina 1821b: 180). sin em - tudiosos del abate diferencias respecto del de molina no se relacionan con la evolu - bargo, en ella no se aprecia una variación alcance de las ideas contenidas en ella. pa- ción de las especies, es posible que la in - en el tiempo entre los “ seres ” animados e ra espinosa (1946: 147) y Jaramillo (1965: terpretación de algunos términos y frases inanimados de los tres reinos, sino que la 45, 1987) las ideas de molina dieron fun - del inicio de este texto hayan inducido a variación o gradación que describe está damentos al darwinismo y contienen el algunos autores a vislumbrar en él aso - inserta en un mundo fijo inmutable, está germen de la teoría de la evolución, res - mos evolucionistas. A nuestro parecer, “establecida por la naturaleza ”. esta grada - pectivamente. este último autor, refirién - esto tendría en cierta medida su origen ción sería tal que la escala mineral -infe - dose a lamarck y Darwin, expresó que en la interpretación del segundo párrafo rior- participa en algo en las escalas supe - los planteamientos de molina constitu - de las Analogías menos observadas … la fra - riores -vegetal y animal, respectivamente- yen “ una teoría todavía más amplia y avanza - se original de molina es “ Ma siccome le pro - y, a su vez, la vegetal de la escala superior, da que la de ambos sabios ”. en la introduc - duzione della natura formano un tutto unico del asignada a los animales. en este sentido, ción de Gunckel (1980), sergio martínez disegno, e vario nell’esecuzione, cosi per tener die - molina (1821b) desplegó una cantidad de baeza expresó que “ Molina planteó una teo - tro del loro progresso gradualle, non mi è sem - antecedentes apoyando la “conexión sen - ría original y trascendente sobre la evolución bio - brado fuor de proposito il far precedere al mio sible” que existiría entre los reinos de la lógica ”. González (1993: 58), consideró discorso alcune idee sulla conessione sensibile, che naturaleza y mostrando, de paso, su gran que la presentación jerárquica de su ma - esiste anche tra i Minerali e i Vegetali ” (mo- erudición y actualización sobre los pro - terial en el Compendio de 1776 y en el lina 1821b: 172). Algunas palabras de esta gresos de la ciencia de su época. Con es - ensayo, “ comenzando por los reinos mineral o frase han sido traducidas y comprendidas tos planteamientos, molina aportó un só - 458 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

lido complemento a la idea de una scala parte, la inquietud por determinar cómo esto es, en cuerpos orgánicos y cuerpos inorgáni - naturae o cadena de los seres, que plantea se originaron, “ de generación en generación ”, cos ” (molina 1821b: 178). esta crítica a la existencia de una gradación continua las variaciones exteriores de los “ seres ” per- los conceptos de lamarck parecería en - desde el átomo hasta los organismos vi - tenecientes a los tres reinos de la natura - tonces reafirmar su conocimiento de la vos, un concepto desarrollado por Char- leza, o, en términos del mismo molina, obra del francés, en tanto que la ausencia les bonnet (1720-1793), un adherente a la “los innumerables atributos que los avecinan ”, de menciones a ese autor podría eviden - teoría de la preformación, quien señalaba bien representados en la scala naturae . es- ciar de que no compartió sus plantea - que la sucesión de los seres es completa ta inquietud flotaba desde hacía tiempo mientos. lejos estuvo molina de las ide - (comprende a todos los seres), continua en el ambiente científico y los intentos as de Alfred russel Wallace (1823-1913) y (la naturaleza no hace saltos) y ascenden - por comprender qué es lo que determina Darwin sobre el ori gen de las especies. es te. la teoría de la preformación, enuncia - esas transiciones y cuáles son los proce - muy probable que sin lamarck, Darwin da a fines del siglo XVII, planteaba que sos que las rigen eran intensos en esa no hubiese existido, puesto que, en suma, todos los seres fueron creados por Dios época. para ello, sin embargo, fue necesa - Darwin concibió una explicación más só - al mismo tiempo y que estos habrían es - rio romper con la inamovilidad creacio - lida y fundamentada que la de lamarck tado encapsulados uno dentro de otros, o nista y hacer intervenir procesos de varia - para explicar la variación de las especies, bien, habrían sido dispersados como gér - ción gradual y prolongada de una misma pero, no cabe duda que Darwin podría menes en la naturaleza y que, a su debido forma en los que el tiempo juega un pa - haber existido sin molina. tal vez, los es - tiempo, cada germen se habría desarro - pel esencial. en este sentido no se puede casos conocimientos de geología, y aún llado en un organismo adulto mediante considerar estrictamente a molina como más escasos de paleontología, que tenía un simple proceso mecánico. Al respecto, un precursor de la teoría de la evolución. molina no le permitieron profundizar en escribió: “ Nuestro mismo globo, como lo mues - el siguiente escalón en la cadena de las la noción his tórica implícita en esta cien - tra su figura elíptica, no fue al comienzo más que ideas sería el transformismo de lamarck, cia, pero que el geólogo Darwin tuvo un gran huevo que, fecundado por la enérgica vir - un contemporáneo de molina, que se muy clara al mo mento de exponer su teo - tud de la Divina Omnipotencia, y habiendo lle - basó en la influencia del medio sobre los ría (Darwin 1859, Charrier en prensa). es gado a convertirse en animal (analogía presen - organismos, y planteó las leyes del uso y probable, por otra parte, que molina no tada en el párrafo anterior al aquí trans - del desuso de los órganos y de los carac - conociese el inglés. sus biógrafos señalan crito), produjo en seguida los huevos de los que teres adquiridos. De este modo la varie - que, además de su idioma materno, do - salieron los primeros minerales, vegetales y ani - dad entre las especies se explicaría por minaba el mapudungun, el italiano, el males. Estos huevos primigenios contenían en acumulación de caracteres adquiridos en francés, el latín y el griego, pero ninguno miniatura todos los huevos que debían producir el curso de las generaciones. en ella está de ellos hace men ción a ese idioma. es sucesivamente de generación en generación en vir - implícita una noción de tiempo que no se posible pensar, entonces, que no debió tud de la fuerza plástica que les había sido co - encuentra en molina. el abate no hizo estar familiarizado con las ideas de James municada por el padre común. De aquí ha deri - alusión explícita a las ideas transformistas Hutton (1726-1797) sobre los extensos vado la famosa hipótesis sobre la evolución de los de su contemporáneo; sin embargo, se períodos de tiempo que fueron necesa - gérmenes, adoptada y expuesta con todas las gra - puede deducir que las conoció, puesto rios para la formación de la tierra cias del discurso por el célebre Bonnet en sus con - que rechazó la división hecha por la- (Hutton 1788). Principles of geology, being an sideraciones sobre los cuerpos orgánicos, la que, marck entre cuerpos orgánicos y cuerpos attempt to explain the former changes of the a decir verdad, parece la más probable entre to - inorgánicos (molina 1821b). tal vez, ha - Earth's surface, by reference to causes now in das aquellas que se han imaginado acerca de la berlo citado podría haber sido una prue - operation, obra capital de Charles lyell propagación de los seres vivientes ” (molina ba más de su supuesta herejía, como lo (1797-1875), vio la luz entre 1830 y 1833, 1821b: 173-174). señalara espinosa (1946). tampoco po - años después del fallecimiento de mo- en el párrafo anterior hay una frase que día aceptarla, tomando en cuenta su ad - lina. requiere atención adicional: “ Estos huevos hesión a la teoría de la “ unicidad de los se - en la memoria Sobre la propagación del género primigenios contenían en miniatura todos los res ”. en relación con esta división entre humano en las diversas partes de la tierra , huevos que debían producir sucesivamente de ge - lo orgánico y lo inorgánico escribió: “ A molina (1821c) planteó con intuición que neración en generación en virtud de la fuerza esta partición -aquí se refiere a la separa - el impropiamente llamado nuevo mun- plástica que les había sido comunicada por el pa - ción entre los reinos mineral, vegetal y do habría sido poblado en oleadas suce - dre común ”. esta frase lleva implícito, por animal- , por así decir, política, que no determi - sivas y por tres partes diferentes, desde: i) una parte, el trasfondo fijista que domi - na nada acerca de los seres comprendidos en ella, Asia nor-oriental, por el estrecho de be- naba el pensamiento de molina y bonnet, sucedió inmediatamente otra, más opuesta a los ring, ii) polinesia, a través de las islas del es decir, que todo lo que vendría ya esta - designios de la naturaleza. Tal es la que divide pacífico sur-oriental, y iii) europa nor- ba definido o configurado, y, por otra todos sus productos en dos secciones generales, occidental. molina propuso orígenes di - el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 459

ferentes para las poblaciones que ocupa - dios que analicen en profundidad su con - organizado en diferentes ocasiones ho - ron a América del norte y América del tribución a las Ciencias de la tierra. sin menajes en su recuerdo. espinosa (1946), sur, difiriendo de las ideas de Alexander embargo, existe una copiosa literatura na - al término de su libro, y ronan (2002) re - von Humboldt, quien consideraba un so- cional y extranjera generada a lo largo de fieren una serie de estos actos realizados lo origen desde Asia oriental para el hom - décadas que describe su vida, que indaga en este sentido. existen, además, en di - bre americano. Con estos planteamientos en toda su obra, o bien, en aspectos par - versas ciudades del país, como Antofa- se adelantó a algunas teorías posteriores ticulares de ella, y que muestra la influen - gasta, santiago, Valparaíso, punta Arenas, que propusieron, además de una gran mi - cia que molina tuvo sobre el conocimien - entre otras, calles que llevan el nombre gración por el estrecho de bering, por lo to de nuestro continente, el origen de su Abate molina. Incluso, se fundó en 1834, menos, algunos contactos con otras re - población, y la visión cosmológica de la en homenaje al pensador chileno la “Villa giones con anterioridad a la llegada de los época. existen numerosos artículos y li - de molina”, hoy la ciudad de molina, en españoles. respecto de esta idea, encina bros que enfocan aspectos de su vida y los llanos de Quechereguas, a 48 km al (1946) consideró que molina “ cae dentro de obra, algunos de los cuales no se abordan norte de talca y 14 km al sur de Curicó, lo genial ”. en este tema, molina fue sin en este artículo, tales como su formación en la región del maule. esta ciudad es la duda precursor de las hipótesis posterio - y personalidad religiosa (Jiménez 1974), cabecera de la Comuna de molina, que res sobre el poblamiento de América. su obra poética (Jiménez 1974, Jaramillo incluye a varios pequeños pueblos aleda - Ampliando su proposición respecto de 1976, briones 1997), su correspondencia ños y es actualmente uno de los grandes una migración a través de las islas del (ronan y Hanisch 1979), su influencia en polos de la industria vitivinícola chilena. pacífico, molina señaló, que los grupos la historia de Hispano América (rojas en el frente del liceo de hombres de la provenientes de la polinesia podrían te - 1963, 2001) y en la concepción de “'pro - ciudad de talca, construido con los bie- ner su origen en la India oriental, y fun - greso”' en los usos y costumbres de los nes generosamente legados por molina damentó esta proposición con la siguien - indígenas (Hachim 2008), su aporte a la para ese efecto y que lleva el nombre del te frase: “ Los remotos conocimientos de los chi - medicina (laval 1965), a la etnología (lat- abate, se erige su estatua realizada por lenos, para no hablar de los peruanos, en el arte cham 1929), a la antropología (Jaramillo iniciativa de benjamín Vicuña mackenna del tejido, de la fusión de los metales, en el culti - 1968), a la botánica y la zoología (philippi (Vicuña mackenna 1872). Correos de Chi- vo de las plantas gramíneas, que utilizaban en 1863, 1867, porter 1929). existen traba - le realizó, en 1963, una emisión de dos su pan fermentado con levadura, en la táctica jos dedicados a dar a conocer algunos pa - sellos postales con la imagen del abate y, militar, en la hidráulica, en la astronomía, en el sajes de su vida (Fontecilla 1932, 1933), en 1999, emitió un sello en el que se reú - juego del ajedrez, de las tablas y de la bola; y, so - difundir sus ideas científicas (Gunckel nen las imágenes del Abate molina y de bre todo, la estructura de su lengua, que dispone 1965, 1966, 1970a, b), a dar a conocer la Alexander von Humboldt (Hanle 1999, de duales, aoristos, participios para todos los bibliografía referida al abate y a su obra Cubillos 2008). en varias universidades tiempos, de todo tipo de composición y, lo que es (Gunckel 1980) e, incluso, la genealogía del país existen salas de conferencias con más admirable, la gran cantidad de vocablos ne - de la familia molina (pilleux 2010). en el nombre del abate y la subsecretaria de tamente griegos y con la misma significación, que opinión de Jaramillo (1965), este olvido pesca bautizó su buque oceanográfico no dejan duda alguna sobre su origen greco-in - sería deliberado. se puede comprender con el nombre Abate molina. la Acade- dio ” (molina 1821c: 191). este pobla mien - esta aseveración en la medida que este mia Chilena de Ciencias naturales rindió to sería, según él, posterior al de América autor considera que la “teoría” de molina en 1965 un homenaje al abate con moti - del norte puesto que debería haber ocu - preconiza una evolución gradual de las vo del sesquicentenario de su memoria so - rrido con posterioridad a la llegada de especies y que, en consecuencia, se debe - bre las Analogías menos observadas ... (Gun- Alejandro magno a las llanuras del Indo. ría incluir al abate entre los creadores de ckel 1966). la universidad de talca ha la teoría de la evolución, lo cual no se le realizado un particular esfuerzo en recu - reCuerDo De molInA ha concedido. sin embargo, el plantea - perar y mantener la memoria del abate cre - miento es injustificado, si se consideran ando el Instituto de estudios Humanís- Algunos estudiosos de la vida y obra de los innumerables libros y artículos escri - ticos Abate Juan Ignacio molina e instau - molina (espinosa 1946, Jaramillo 1965, tos sobre la obra de molina y los home - rando, en 1992, la medalla al mérito 1987, briones 1968, 1997) señalaron que najes que se le han rendido en bolonia y “Abate molina” destinada a destacar a se ha producido un olvido de nuestro per- en Chile, lo que demuestra el interés y personajes del ambiente cultural nacional sonaje. en relación con esto hay que se - aprecio que han suscitado sus ideas (es- y extranjero. Así mismo, la Comisión na- ñalar que aun es posible seguir resaltando pinosa 1946, Jaramillo 1965, briones 1968, cional de Investigación Científica y tec- la obra de molina desde diferentes pun - ronan 2002). nológica (ConICYt), encargada de ad - tos de vista. un ejemplo de esto último el país natal de molina no ha olvidado a ministrar los recursos destinados a la in - es que no existiesen hasta la fecha estu - su hijo ilustre y ha dado muestras de ello vestigación en Chile, creó en conjunto 460 r. CHArrIer Y F. HerVÉ

con la Fundación Alexander von Hum- boldt, de Alemania, el premio de exce- lencia Científica Abate Juan Ignacio mo- lina, con el objeto de potenciar la coope - ración entre investigadores de ambos pa - íses. Finalmente, cabe señalar que en el jardín de la biblioteca nacional en san- tiago, cerca de la esquina de las calles moneda y mac Iver existe un busto del abate (Fig. 5).

ConClusIones

el análisis de la obra molina permite re - conocer que nuestro abate fue un hom - bre culto, como sin duda lo fue la mayo - ría de los jesuitas de su época. Fue un en - tusiasta y cuidadoso observador de la na - turaleza, que además supo transmitir sus observaciones. sus detalladas descripcio - nes sobre el territorio chileno de enton - ces y sus pobladores representaron una ventana al conocimiento de esta región de América e influyeron en la visión que europa se formaría en el siglo XIX sobre la totalidad del mundo y sobre América, en particular. su contribución a las Ciencias de la tie- rra, en una época en la que no se tenían mayores antecedentes de esta región, y a pesar de mantenerse esencialmente en lo descriptivo, permitió una visión general de la constitución geológica y las condi - ciones geodinámicas del territorio, desta - cando su riqueza en recursos minerales. sus contribuciones más controvertidas, aparecidas en las memoria s de historia na - tural presentadas en el Instituto pontifi- cio ponen en evidencia su verdadera fa - ceta de investigador. sus planteamientos Figura 5: busto del Abate molina en los jardines de la biblioteca nacional de santiago de Chile. sobre las analogías entre los tres reinos de la naturaleza o sobre la dispersión del los “seres” de los tres reinos. en la se - en fecundas sugerencias, como aquella que sólo género humano, dejan en claro su inde - gunda, se puede afirmar que se anticipó a conciben los espíritus de intuición poderosa y fan - pendencia de ideas y su capacidad para sus contemporáneos. tasía no domeñada por la excesiva erudición ”. generar planteamientos nuevos en rela - la obra de molina, por sus varias facetas, ción con el entorno natural. los concep - ha sido considerablemente analizada des - AGrADeCImIentos tos desarrollados por molina en la prime - de diversos puntos de vista. De eso da ra de ellas permiten señalar que se man - cuenta la nutrida literatura que existe so - se agradece la invitación de los organiza - tuvo en un marco que precedió a las ide - bre ella. sobre la diversidad de temas dores del Segundo Congreso Argentino de His- as evolucionistas que ya estaban circulan - abarcados en la obra, es pertinente el co - toria de la Geología , buenos Aires, 12-14 de do en esa época; no obstante, no se debe mentario realizado por rojas (1965) quién agosto de 2010, para dictar una conferen - desmerecer su intento de integración de expresó que el abate “ nos legó una obra rica cia sobre el tema de este artículo. este el Abate molina y la historia natural del reino de Chile. 461

trabajo es una contribución del Grupo de Darwin’s navidad Formation near santiago, la Cordillera principal en el área de la nacien- especialistas en Historia de la Geología Chile. museo nacional de Historia natural, tes del teno, Curicó, Chile. tesis del Departa- de la sociedad Geológica de Chile y fue publicación ocasional: 3-26. mento de Geología, universidad de Chile, 160 presentado también en el Primer Simposio Charrier, r. 1981. Geologie der chilenischen p. santiago. de Historia de la Geología organizado por Hauptkordillere zwischen 34º30’ südlicher Davidson, J. 1974. A quaternary volcanic flow (la - esa sociedad científica el 17 de agosto de breite und ihre tektonische, magmatische und har) down the Claro and teno valleys from 2010, en santiago de Chile. se agradece la paleogeographische entwicklung. berliner planchón volcano. International symposium entusiasta y diligente colaboración de ro- Geowissenschaftliche Abhandlungen (A) 36, on Volcanology. Andean and Antarctic pro- sa leal Fajardo, bibliotecaria de la Facul- 370 p. blems, International Association of Volcano- tad de Ciencias Físicas y matemáticas de Charrier, r. en prensa. Darwin, el geólogo, y la logy and Chemistry of the earth Interiors la universidad de Chile, en la búsqueda influencia de su experiencia sudamericana. (IAVCeI), Abstracts: 14-15, santiago. de literatura relacionada con el abate Juan en: Armesto, J. y tambutti, m. (eds.) por la Domeyko, I. 1860. elementos de mineralojía. Ignacio molina, que se fue tornando senda de Darwin en Chile. Instituto de eco- segunda edición. 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