Año I, Nº 3 - 2012 ISSN 1853 -7677

CIENCIA Y TECNOLOGIA DE LOS CULTIVOS INDUSTRIALES

Maní

Coordinador Programa Nacional de Cultivos Industriales: Ing. Agr. (MSc.) Alejandro Valeiro

Director Centro Regional Córdoba: Ing. Agr. (MSc.) Emilio Severina

Director Centro de Investigaciones Agropecuarias: Ing. Agr. (PhD) Sergio L. Lenardon

Editor Ejecutivo: Ing. Agr. Guillermo J. March

Editores Adjuntos: Ing. Agr. (MSc.) Alejandro M. Rago (IPaVe/CIAP, Córdoba). Ing. Agr. (MSc.) Roberto Sopena (EEA Famaillá, Tucumán). Ing. Agr. (MSc.) Daniel Díaz (Instituto de Genética/CICVyA, Buenos Aires). Ing. Agr. (PhD.) Rodolfo Bogiovanni (EEA Manfredi, Córdoba). Ing. Agr. (MSc.) Marcelo Mayol (EEA Cerro Azul, Misiones). Ing. Agr. (MSc.) Diana Piedra (CR Chaco-Formosa, Chaco). Ing. Agr. (PhD.) Luis Erazzú (EEA Famaillá, Tucumán). Ing. Agr. (MSc.) Jorge Morandi (CR Tucumán-Santiago del Estero, Tucumán).

INTA – CIAP Av. 11 de Septiembre 4755 - X05020ICA - Córdoba, Argentina

Impresión: Biglia Impresores, Corrientes 3362, Córdoba. Diseño de Tapa: Enrique Biglia. Diagramación de Texto: Enrique Biglia.

La información que consta en los distintos artículos es de responsabilidad exclusiva de los autores de los trabajos, los que no necesariamente manifiestan el punto de vista del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. El contenido puede reproducirse dejando expresa constancia de la fuente.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 191 192 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 CONTENIDO SECCIONES Página

OPINIÓN/REVISIÓN

Cadena de valor del maní: hitos y desafíos. 195 Mario Buteler.

La sustentabilidad biológica de los suelos. 197 Silvina Vargas Gil.

INVESTIGACIÓN

Caracterización ecofisiológica de genotipos de maní ( hypogaea L.) en Córdoba, Argentina. 201 Oscar Giayetto, Elena Fernández, Guillermo Cerioni, Federico Morla, María Rosso, Marcelo Kearney y María Violante.

Cambios en el rendimiento y la calidad comercial de dos cultivares de maní debido a variaciones de la fecha de siembra, temperatura y radiación. 212 Oscar Giayetto, Elena Fernández, Guillermo Cerioni, Federico Morla, María Rosso, Marcelo Kearney y María Violante.

Estrés lumínico en maní sobre crecimiento, partición, rendimiento y sus componentes, y la calidad comercial. 218 Federico Morla, Oscar Giayetto, Elena Fernández, Guillermo Cerioni, María Rosso, Marcelo Kearney, María Violante y Cecilia Cerliani.

Viabilidad del clavo de maní: respuesta a la sequía e impedancia al enclavado. 223 Ricardo J. Haro, Anita Mantese y María E. Otegui.

Efecto del régimen hídrico y la impedancia al enclavado sobre la eficiencia en el uso del agua del cultivo de maní. 229 Ricardo J. Haro, Julio L. Dardanelli, Daniel J. Collino y María E. Otegui.

Anfidiploide sintético desarrollado para ampliar la base genética del maní cultivado (Arachis hypogaea). 236 Laura Torres, Paula Bima, Beatriz Costero, Adriana Ordoñez, Cecilia Turina, Claudia Martino, Juan A. Soave, Sara J. Soave, Claudio Oddino, Paola C. Faustinelli, Alberto Moresi y Mario I. Buteler.

Estimación de la diversidad genética en germoplasma de maní (Arachis hypogaea) por medio de microsatélites. 243 Valeria Etchart, Florencia I. Pozzi, Mariela Giustetti, M. Valeria Moreno, Olegario Royo, Daniel Díaz y Jorge O. Gieco.

Evaluación y selección de germoplasma de maní (Arachis hypogaea) tolerante a estrés hídrico. 249 Paola C. Faustinelli, Sara J. Soave, Claudio Oddino, Juan A. Soave, Alberto Moresi y Mario I. Buteler.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 193 Enfermedades virales del cultivo de maní en el noroeste argentino. 256 Soledad de Breuil, Fabián Giolitti, Nicolás Bejerman, Ceferino Flores y Sergio Lenardon.

Eficiencia de fungicidas en el control de la viruela del maní según presión de enfermedad. 261 Guillermo J. March, Claudio M. Oddino, Julián García, Adriana D. Marinelli y Alejandro M. Rago.

INFORMES ESPECIALES y TECNOLOGÍAS

Disminución de la densidad de plantas en el cultivo de maní ¿cuál es el límite?. 266 Guillemo Cerioni, Federico Morla, Marcelo Kearney, Diego Della Mea, Emanuel Fernández, Oscar Giayetto, María Rosso, Elena Fernández y Gabriela Violante.

Granometría de maní en diferentes genotipos y ambientes. 271 Elena Fernández, Oscar Giayetto, Guillermo Cerioni, Sebastián Gastaldi, Ariel Bessone, Valeria Girardi, Federico Morla, Marcelo Kearney y María Rosso.

Comportamiento de maníes silvestres frente a viruela (Cercosporidium personatum) y mancha en V (Lepthosphaerulina crassiasca). 277 Claudio Oddino, Juan Soave, Sara Soave, Alberto Moresi, César Bianco, Mario Buteler, Diego Torre y Paola Faustinelli.

Producción de maní según intensidad de la viruela (Cercosporidium personatum). 281 Claudio F. Capiello, Guillermo J. March, Adriana D. Marinelli, Julián García, Lucía Tarditti, Luis D´Eramo, Santiago Ferrari, Alejandro Rago y Claudio. M. Oddino.

Evaluación de fungicidas curasemillas y su efecto en el carbón de maní causado por Thecaphora frezii. 287 Alexis R. Buffoni y Francisco Marraro Acuña.

Control de Amaranthus spp. con saflufenacil (Heat®) en postemergencia de maní (Arachis hypogaea). 292 Alberto Moresi, Claudio Oddino, César Bianco, Juan Soave, Sara Soave, Diego Torre, Mario Buteler, Rubén Berlaffa y Paola Faustinelli.

Efecto de las rotaciones sobre la intensidad del carbón del maní (Thecaphora frezii) y la densidad de inóculo, y relación de éstos parámetros con los rendimientos. 297 Claudio M. Oddino, Adriana D. Marinelli, Julián García, Lucía Tarditti, Luis D’Eramo, Santiago Ferrari, Alejandro Rago y Guillermo J. March.

Análisis de la calidad e inocuidad del maní de Córdoba: contribución a su denominación de origen. 302 María José Martínez, Mirtha Nassetta, Alejandra Ricca, Raúl Badini, Mercedes Silva, Roxana Aguilar, Irene Cañas, Dante Rojas, Marcela Inga, Gabriel Spahn, Maria Victoria Poliotti, Beatriz Ackerman y Nelson Rubén Grosso.

ECONOMÍA y PROYECTOS DE DESARROLLO

Análisis del consumo de maní comestible en la ciudad de Córdoba. 310 Noelia Barberis y Rodolfo Bongiovanni.

Normas de Publicación 318

194 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 OPINIÓN / REVISIÓN

Cadena de valor del maní: hitos y desafíos

Mario I. Buteler Director de Innovación Tecnológica. Secretaría de Innovación y Vinculación Tecnológica. Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Provincia de Córdoba Correo-e: [email protected]

En un sentido literal, un hito es un mojón hitos, entre otros, nos permiten exportar a de piedra que indica la dirección o distan- más de 70 destinos productos elaborados cias en los caminos. En un sentido conno- encuadrados bajo las más estrictas normas tativo, es un hecho que introduce un gran de calidad, que generan un ingreso de cambio en una sociedad dada y en un divisas creciente en la región productora- tiempo determinado. Sucesos que pasan procesadora de maní. desapercibidos para la mayoría, muchas Si observamos retrospectivamente la si- veces generan consecuencias trascenden- tuación global de la economía argentina tes y positivas para el bienestar general de frente a la competencia internacional y la población como para las estructuras y haciendo un paralelo con el camino reco- sistemas alrededor de los cuales organiza- rrido por la cadena de valor del maní, ad- mos nuestra vida. vertimos diferencias evidentes. Por ejem- Es natural considerar bajo esta óptica la plo, Japón, que recién alcanzó a equiparar situación lograda a partir del 2010 en Ar- el PBI per cápita de nuestro país a media- gentina por la cadena de valor del maní; dos de la década del 60 en el siglo pasado, año en el que se consolidó definitivamen- actualmente se ubica entre las tres prime- te como el primer exportador del mundo ras economía del mundo. A este camino de maní para consumo directo y algunas lo recorrió sobre la base de un sistema de de sus manufacturas, que en más de un innovación continuo aplicado a todos los 90% se produce y procesa en la provincia sectores de su economía; esto es la intro- de Córdoba. ducción sistemática de conocimientos en Esta situación se logró en base a un pro- procesos, productos o servicios para obte- ceso de innovación continuo, sistemático y ner nuevas aplicaciones y/o mejores resul- dinámico, que comienza a fines de los 70´s tados. Entonces, cabe preguntarse cómo del siglo pasado con la introducción desde Argentina poseedora de un sistema de EE.UU. de cultivares para producir granos generación de conocimientos —Ciencia—, aptos para la industria confitera en reem- que se ha desarrollado con notable soli- plazo de las variedades «aceiteras» em- dez y es señero en nuestro continente, no pleadas localmente. Otros hitos son el de- recorrió un camino semejante al de tan- sarrollo local de maquinaria específica para tas naciones como Japón. Analizando los el cultivo de estas variedades y de plantas diversos sectores que componen nuestra procesadoras con tecnología de última economía, la respuesta se hace evidente generación; la obtención de nuevas varie- al evaluar la velocidad en la que el stock dades, que desde el 2003 permite contar de conocimientos acumulados es trans- con cultivares alto oleico actualmente do- formado en nuevos procesos, servicios o minantes en la producción local; el avance productos justipreciados en el mercado, es continuo en las prácticas de cultivo y en la decir la velocidad de Innovación; en otros introducción, ensayo e incorporación de términos, la competitividad depende sus- nuevos productos fitosanitarios, etc. Estos tancialmente, entre otros factores, de la

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 195 velocidad de apropiación del conocimien- Brasil, éste es más dinámico, con una ma- to por parte del sector socio-productivo yor inversión por parte de los sectores pú- local, que en el caso de la cadena del maní blico y particularmente privado. vemos, fue muy alta a diferencia de otras Otro de los retos es ampliar aún más la actividades o sectores. participación de la industria en la defini- ción de los grandes lineamientos y objeti- ¿Y el mañana? vos de investigación y desarrollo tecnoló- Pregunta pertinente al considerar si la po- gico estratégicos —largo plazo—, lo que sición lograda por el maní argentino en el permitirá la interacción entre las empresas escenario internacional es permanente y locales y su entorno científico-tecnológico estable, o para mantenerla se debe inten- inmediato. Estas acciones darán sustento sificar el proceso de generación de nuevos a una dinámica virtuosa de creación y rá- conocimientos y su rápida transferencia pida incorporación de conocimientos, en al sector socio-productivo que conforma campos tan variados como la biotecnolo- esta cadena de valor. Tal vez se llega a una gía, la genética, la patología, la química, rápida respuesta cuando observamos lo las ciencias de la salud, la tecnología in- ocurrido, por ejemplo en Sudáfrica; que dustrial, el aprovechamiento de los recur- por años fue el tercer exportador mundial sos naturales, la sustentabilidad ambien- y que actualmente ha desaparecido del tal, la comercialización, etc. escenario internacional y continúa produ- En este contexto, la aparición de la revista ciendo el mismo tipo de maní con tecnolo- «Ciencia y Tecnología de los Cultivos In- gías semejantes a las de 30 años atrás. dustriales» es una iniciativa que fortalece Estimamos que la dinámica de la innova- el modelo local de producción de conoci- ción es el principal desafío a conquistar mientos científicos, su difusión y transfe- para mantener el liderazgo alcanzado en rencia; además, genera un espacio común el escenario internacional y continuar am- y específico para las cadenas de cultivos pliando las fortalezas que este sector tiene industriales, que hace posible compartir mientras se supera la principal amenaza, y comparar experiencias propias de estas que es la aparición de otros competidores; cadenas de valor. circunstancia previsible dadas las condicio- Solo el robustecimiento del Sistema de nes sumamente atractivas que el mercado Innovación, que articula a los actores so- presenta actualmente. A pesar del lugar ciales, económicos y académicos, nos per- alcanzado, si comparamos el ritmo de ge- mitirá desempeñar un rol protagónico en neración de conocimientos vemos, que en un mundo cada vez más complejo y com- países como EE.UU, China o aún más cerca petitivo.

196 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 La sustentabilidad biológica de los suelos

Silvina Vargas Gil Instituto de Patología Vegetal (IPAVE), CIAP-INTA. Correo-e: [email protected]

Situación actual enfermedades indica el deterioro de las Al igual que en el resto del mundo, la con- condiciones edáficas, por el desequilibrio versión de la vegetación nativa de los pai- generado entre las poblaciones microbia- sajes agrícolas en la Argentina está avan- nas en respuesta tanto a las condiciones zando a un ritmo acelerado (3, 9). Este ambientales desfavorables como al tipo proceso se ve agravado por la creciente de manejo empleado (13). demanda de productos a base de soja para la producción de biocombustibles, que ha Los microorganismos en la sustentabili- llevado a un aumento 100 veces mayor del dad área de tierras agrícolas dominadas por el Los principales efectos negativos de la in- monocultivo de soja en nuestro país (1, 2). tensificación y expansión de la agricultura Además de la conversión de la vegetación en nuestro país, incluyen la contaminación nativa a cultivos anuales, tierras previa- por agroquímicos, la degradación del sue- mente utilizadas para otros fines agríco- lo, la pérdida de biodiversidad, y las altas las, como pastizales o cultivos de cober- tasas de deforestación (15). La degrada- tura, también se están empleando para ción del suelo se refiere a la reducción de cultivos intensivos, con preponderancia de su fertilidad debido a los cambios en sus monocultivo, en un esfuerzo por aumen- propiedades físicas, químicas y biológicas, tar la productividad (1, 2). siendo la principal consecuencia, la pérdi- Esta expansión productiva no muestra en da de su productividad (14). Este proceso el corto y mediano plazo señales de des- de degradación de los suelos disminuye la aceleración. Acompañando esta situación, biomasa microbiana y sus funciones, que existe una sostenida demanda por tecnolo- son fundamentales para el crecimiento de gía (como la siembra directa) directamen- las plantas. Los microorganismos partici- te relacionada a mejorar la productividad pan de los ciclos biogeoquímicos median- del sistema, para una gran diversidad te el ciclado de nutrientes, mineralizando, de ambientes que se corresponden con oxidando, reduciendo e inmovilizando mi- las distintas zonas productivas del país. nerales y materiales orgánicos en el suelo Sin embargo, esta intensificación ejerce (6), además de inactivar contaminantes y presión sobre los recursos naturales, que de participar activamente en la inhibición debe ser atendida para propender a una de patógenos de plantas (8). Cualquier producción sustentable (5). cambio edáfico puede alterar el número Ante esta realidad, en nuestro país con- o la actividad de los microorganismos del vergen problemáticas diferentes, como suelo, modificándose los procesos bioquí- respuesta al cambio climático y a la in- micos de los que forman parte, y el rol tensificación de la actividad agrícola. Una fundamental que desempeñan en la sani- evidencia de esto es el avance de los cul- dad vegetal (12). tivos sobre territorios con condiciones ambientalmente extremas sometiendo a Los microorganismos y la incidencia de las plantas a situaciones de estrés, lo que enfermedades incrementa las enfermedades limitando Los patógenos son microorganismos que la producción. Es decir que el aumento de normalmente se encuentran entre los

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 197 componentes del suelo, y existen en rela- monocultivo, evitando desequilibrios quí- tivamente baja cantidad en la naturaleza. micos de importancia, aunque se comple- La comunidad microbiana en la que un mente con fertilización que contemple las agente patógeno se desarrolla es deter- diferentes necesidades de cada cultivo. La minante para la manifestación y posterior rotación de cultivos puede ser más exitosa evolución de la enfermedad debido a la con patógenos biotróficos, que requieren naturaleza biológica de la supresividad del tejido vivo del hospedante para su desa- suelo (13). Muchas estrategias de manejo rrollo, en comparación con los patógenos de enfermedades como el uso de agro- con bajo capacidad de supervivencia como químicos, se focalizan en el control del los saprófitos. Sin embargo, esta práctica patógeno cuando los síntomas de la en- produce efectos que suelen ser más soste- fermedad ya son evidentes, siendo dema- nibles en el tiempo como la modificación siado tarde para un manejo eficiente. Sin de las propiedades edáficas. Esto se debe a embargo, deberían tenerse en cuenta las que la rotación de cultivos determina que condiciones previas a la infección, creando el ambiente del suelo sea menos favorable un ambiente menos favorable para el de- para los patógenos, ya que la actividad y sarrollo del patógeno. Por esta razón, se la biomasa microbiana se encuentran más puede inhibir a un patógeno a través de incrementados que en los sistemas bajo la modificación de las comunidades micro- monocultivo, debido a la presencia de bianas del suelo, mediante el empleo de mayor diversidad de fuentes nutricionales herramientas incrementen la diversidad disponibles. En consecuencia, incrementa microbiana edáfica (7, 13). Estas herra- la competencia entre los microorganis- mientas pueden tener un impacto diferen- mos, produciéndose exclusión de nicho, te sobre las características y actividades de elevándose los niveles de estrés nutricional las comunidades microbianas, por lo que o fungistasis, o induciéndose la resistencia su apropiada combinación es fundamental sistémica adquirida en la planta. Además, en el manejo de una enfermedad. los microorganismos pueden liberar anti- En nuestra experiencia, sabemos que las bióticos o sideróforos, o actuar por para- prácticas conservacionistas favorecen el sitismo o predación, propiedades con las mantenimiento de la salud del suelo, incre- que cuentan los biocontroladores, que en mentando el desarrollo de la riqueza mi- general se encuentran en mayor cantidad. crobiana nativa que aumenta la absorción En consecuencia, cuanto mayor es la bio- de nutrientes y agua por parte de la planta, diversidad, mayores son las posibilidades mejora el desarrollo radicular y la estructu- de control biológico de los patógenos (4). ra del suelo, y participa en bioremediación. Por otra parte, los sistemas de labranza Por lo tanto, se sostiene el equilibrio natu- tienen también una marcada influencia ral en el suelo entre las poblaciones de mi- sobre el suelo, siendo las labranzas con- croorganismos, dentro de las cuales los pa- servacionistas las que producen menor tógenos se encuentran menos adaptados disturbio, comparadas con las convencio- (12). Debido entonces a que un ecosistema nales, lo que facilita el establecimiento y se encuentra en estado de equilibrio cuan- mantenimiento de los microorganismos do alcanza su máxima diversidad, conser- en el suelo. Además, la presencia de ras- var la biodiversidad del suelo tiene un rol trojos en el suelo como consecuencia de la fundamental en el desarrollo de los cultivos siembra directa, favorece la conservación potenciando su productividad. de la humedad debido a que aumenta la infiltración y disminuyen las pérdidas de Las prácticas de manejo y su efecto sobre agua por evaporación directa del suelo, los microorganismos y se atenúan las fluctuaciones de tempe- La rotación de cultivos hace un uso ba- ratura, aumentando la microbiota total lanceado de nutrientes comparado con el y sus actividades (11). Además, el mayor

198 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 contenido de humedad en las capas su- que habitan en el suelo. perficiales del suelo permite el desarrollo Finalmente, como habitantes del mundo, de sistemas radiculares más saludables, tenemos el desafío más crítico de aumen- reduciendo las posibilidades de infección tar la producción de alimentos y reducir por patógenos. No obstante, en algunos al mínimo la degradación del suelo, em- casos las poblaciones de patógenos se han pleando prácticas de manejo que propor- visto beneficiadas por la siembra directa, cionen suficientes alimentos y mantengan jugando el tipo de suelo un papel crucial la sustentabilidad del ambiente. Como en la constitución de las comunidades mi- investigadores, tenemos la tarea de bus- crobianas, más que las especies vegetales car métodos avanzados para conservar el o los sistemas de labranza, lo que señala suelo, desarrollar herramientas y enfoques la importancia del suelo y sus propiedades que sean accesibles para los especialistas en la manifestación de una enfermedad. agrícolas y los productores, y que permi- Otra práctica comúnmente empleada es tan evaluar la calidad del suelo y la susten- la fertilización inorgánica, que también tabilidad de las prácticas culturales que se produce modificaciones en los niveles de emplean en el sector productivo. fertilidad del suelo, favoreciendo el cre- cimiento de las plantas y determinando AGRADECIMIENTOS Y FINANCIAMIENTO la estructura de las comunidades micro- bianas (10). Las plantas deficientes en Agradecemos a todos los investigadores determinados nutrientes se desarrollan que contribuyeron con su experiencia y es- débilmente y son más susceptibles a los fuerzo, para lograr los resultados que nos patógenos. Sin embargo, los patógenos permiten la elaboración de este artículo. también deben encontrar un ambiente Las investigaciones que se realizaron fue- edáfico que favorezca su desarrollo, pero ron financiadas por INTA (PE AERN 295582, en suelos adecuadamente fertilizados la AEPV 214032, PNIND 2252), FONCYT Nº biomasa microbiana activa generalmente 442, MINCYT de la provincia de Córdoba se incrementa, como también su capaci- (PID Nº 69), MINCYT-DAAD (DA/0909), a dad para utilizar C y otros nutrientes, y en través de diferentes subsidios. consecuencia los recursos serán más limi- tados para los patógenos. A pesar de esto, BIBLIOGRAFÍA CITADA en diferentes cultivos y con distintos pa- tógenos se han obtenido resultados con- 1. Donald P.F. 2004. Biodiversity impacts of tradictorios en cuanto a los efectos de la some agricultural commodity production fertilidad del suelo sobre el desarrollo de systems. Conservation Biology 18 (1): 17- enfermedades,. 37. 2. Fearnside P.M. 2001. Soybean cultivation Aunque sabemos que tanto la planta como as a threat to the environment in Brazil. el suelo pueden “dirigir” la estructura de Environmental Conservation 28 (1): 23- las comunidades microbianas, los detalles 38. de estas interacciones no son completa- 3. Filloy J., and Bellocq M.I. 2007. Patterns mente claros y deben estudiarse en más of bird abundance along the agricultural detalle. Hasta ahora, la mayoría de los es- gradient of the Pampean region. Agricul- tudios en los que se analizan el efecto de ture, Ecosystems & Environment 120: 291- las prácticas de manejo del cultivo sobre 298. las poblaciones microbianas del suelo han 4. Fry W.E. 1982. Principles of Disease producido una gran cantidad de informa- Management. Academic Press, New York. pp. 378. ción descriptiva, pero solo en algunos ca- 5. Grenz J., Vetouli T., Tzitzikli E., and Sauer- sos se ha intentado correlacionar a las co- born J. 2007. The Ecological consequences munidades microbianas con la incidencia of the Global Soybean Economy: Resour- de enfermedades causadas por patógenos ce and Value Flows in Argentina, Brazil,

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 199 and Germany. GAIA - Ecological Perspec- 386. tives for Science and Society 16 (3): 208- 11. Vargas Gil S., Meriles J., Conforto C., Fi- 214. goni G., Basanta M., Lovera E., and March 6. Kennedy A., and Doran, J. 2002. Sustaina- G.J. 2009. Field assessment of soil biolo- ble agriculture: role of microorganisms. gical and chemical quality in response to In: Bitton, G. (Org.) Encyclopedia of Envi- crop management practices. World Jour- ronmental Microbiology, New York: John nal of Microbiology and Biotechnology Wiley & Sons. pp. 3116-3126. 25: 439-448. 7. Larkin R.P., Honeycutt C.W., Griffin T.S., 12. Vargas Gil S., Meriles J.M., Haro R., Casi- Olanya O.M., Halloran J.M., and He, Z. ni C., and March G.J. 2008. Crop rotation 2011. Effects of different potato crop- and tillage systems as a proactive strategy ping system approaches and water ma- in the control of fungal soilborne nagement on soilborne diseases and soil diseases. BioControl 53 (4): 685-698. microbial communities. Phytopathology 13. Vargas Gil S., Pedelini R., Oddino C., Zuza 101: 58-67. M., Marinelli A., and March G.J. 2008. 8. Mendes R., Kruijt M., de Bruijn I., Dekkers The role of potential biocontrol agents E., van der Voort M., Schneider J.H.M., Pi- in the management of peanut root rot in ceno Y.M., DeSantis T.Z., Andersen G.L., Argentina. Journal of Plant Pathology 90 Bakker P.A.H.M., and Raaijmakers J.M. (1): 35-41. 2011. Deciphering the rhizosphere micro- 14. Vargas Gil S., and Vargas Gil J.R. 2011. biome for disease-suppressive bacteria. Sustainable management of agricultural Science 27 (332): 1097-1100. systems: physical and biological aspects 9. Molinari R.L. 1987. Biografía de la Pampa: of soil health. In: Encyclopedia of Envi- 4 siglos de historia del campo argentino. ronmental Health (J.O. Nriagu, ed.). Else- Fundacion Colombina V Centenario, Bue- vier, Burlington, vol. 5: 297-301. nos Aires. 15. Zaccagnini M.E. y Calamari N.C. 2001. La- 10. Vargas Gil S., Becker A., Oddino C., Zuza branzas conservacionistas, siembra direc- M., Marinelli A., and March G.J. 2009. ta y biodiversidad. In: Siembra Directa II Field trial assessment of biological, che- (J.L. Panigatti, D. Buschiazzo y H. Marelli, mical, and physical responses of soil to ti- eds.). Ediciones Instituto Nacional de Tec- llage intensity, fertilization, and grazing. nología Agropecuaria (INTA), Argentina. Environmental Management 44 (2): 378- pp. 29-68.

200 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 INVESTIGACIÓN Caracterización ecofisiológica de genotipos de maní (Arachis hypogaea L.) en Córdoba, Argentina

Oscar Giayetto1, Elena Fernández1, Guillermo Cerioni1, Federico Morla1,2, María Rosso1, Marcelo Kearney1 y María Violante1 1- FAV, UNRC, Ruta Nac.36 Km 601, Río Cuarto, Córdoba, Argentina. 2- CONICET- Min- CyT Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN trigo, maíz, soja, arroz; pero en maní la in- formación disponible es aún escasa, debi- La ecofisiología de cultivos ha hecho apor- do a la variación genética, de hábitos de tes significativos a la genética en la identi- crecimiento y estructura de planta (1, 12). ficación de las bases fisiológicas y bioquí- Algo similar ocurre con el conocimiento micas determinantes del rendimiento y de de los procesos fisiológicos involucrados aquellas responsables de la adaptación de en la formación del rendimiento. Algunos las especies cultivadas a un determinado estudios reportan efectos del número de ambiente. También ha orientado en la co- frutos por planta sobre el rendimiento rrecta elección de las prácticas de mane- como consecuencia de diferentes condi- jo tendientes a optimizar el rendimiento ciones ambientales y factores de manejo y la calidad del producto, y asegurar un (5, 8, 10, 12) y sugieren que es un com- manejo eficiente de los recursos e insumos ponente importante en la determinación (2). Por eso, la mayor comprensión de los del rendimiento. Sin embargo, los meca- procesos fisiológicos relacionados con la nismos que determinan el número de fru- formación del rendimiento, en particu- tos por superficie, no han sido totalmente lar el conocimiento sobre la incidencia en esclarecidos ni se conoce mucho sobre las los componentes del rendimiento, puede características genotípicas responsables de contribuir a identificar aquéllos más rele- las diferencias en rendimiento entre culti- vantes y posibles de ser empleados en el vares de maní. Según los resultados obte- proceso de selección y mejora. nidos, Phakamas et al. (16) indicaron que Conceptualmente, el rendimiento de un el número de frutos por superficie es el cultivo de granos es una función del nú- principal determinante de las diferencias mero de granos fijados y de su peso. El en rendimiento de frutos entre líneas de primero de esos componentes está es- maní y que esas diferencias están influen- trechamente influenciado por la tasa de ciadas por la TCC durante el periodo R6-R7 crecimiento del cultivo (TCC) alrededor (R2=0,44). Cuando estos mismos autores del período crítico; mientras que el peso aislaron el efecto estacional detectaron, depende de la TCC después de floración y además, una relación significativa 2(R = de la movilización de asimilados fijados en 0,45) entre número de frutos por super- pre-antesis como se ha demostrado en soja ficie y la TCC entre S y R4. Para Haro et (13), maíz (15), trigo (7), girasol (14), entre al. (12), el número de semillas se relacio- otros cultivos. También se sabe que la pro- nó con la TCC durante el período R3-R6.5, ducción de materia seca es una integral de pero también con la tasa de crecimiento varios factores y que la identificación de de los frutos en ese mismo período. Como los atributos morfofisiológicos inherentes la TCC está directamente relacionada con hace posible la síntesis de ideotipos para la fotosíntesis, Phakamas et al. (16) pro- maximizar la productividad. ponen examinar las características que Esas características ya fueron descriptas en pudiesen aumentarla a nivel de canopeo

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 201 durante R6-R7; entre ellas, la estructura de MATERIALES Y MÉTODOS la canopia, el tamaño y orientación de las hojas, el área foliar específica y el conteni- El estudio se realizó en el Campo Expe- do de clorofila. rimental de la Facultad de Agronomía y Awal e Ikeda (3) observaron que el nú- Veterinaria (FAV) de la UNRC (Córdoba, mero de ramas primarias y su longitud Argentina), ubicado a 33º07’ LS, 64º14’ se correlacionaron positivamente con el LWG y 421 m msnm, durante el ciclo agrí- rendimiento de frutos. Anteriormente, cola 2005/06 en un suelo Hapludol típico Baydar (4) había mostrado que el número de textura franca-arenosa fina. Los trata- de ramas primarias de seis cultivares tipo mientos estuvieron constituidos por 7 ge- Virginia varió entre 6 y 10, y que ese nú- notipos de maní: 2 cultivares comerciales, mero tuvo un rol importante en el rendi- Florunner y Tegua, del tipo Virginia run- miento de frutos. Estas evidencias confir- ner, y 5 materiales obtenidos de un Progra- man la importancia del número de frutos ma de Mejoramiento de la FAV (período y ramas en la determinación del rendi- 1991-2003): Utre-UNRC y Uchaima-UNRC, miento de frutos en maní. Sin embargo, inscriptos en el Instituto Nacional de Se- existen ambientes donde las temperaturas millas, y tres líneas avanzadas LF40, LF42 y medias durante la estación de crecimien- ET6 (Cuadro 1). to del cultivo son subóptimas y el ciclo de Los tratamientos se asignaron a un diseño los genotipos se extiende por 150 o más experimental de bloques al azar con tres días, como sucede con los cultivares Virgi- repeticiones. El experimento fue sembra- nia runner sembrados en la provincia de do el 17/10/2005, colocando una semilla Córdoba (Argentina). En estas condicio- cada 0,08 m en surcos separados a 0,70 m nes, el proceso de formación de las ramas, entre sí. El estudio se condujo sin limita- en sus distintas categorías (cotiledonar, ciones hídricas mediante el suministro de primarias, secundarias y terciarias) y la dis- aplicaciones de agua por aspersión. El sue- tribución de las yemas reproductivas so- lo no registró deficiencias de nutrientes. bre ellas, se consideran determinantes del Malezas y enfermedades fueron contro- rendimiento porque condicionan el inicio, ladas mediante el empleo de herbicidas y la duración y la TCC de la fase lineal (FCL) fungicidas. Se registró diariamente la tem- de cada rama, durante la cual se definen peratura del aire y del suelo (a 5 cm de los componentes del rendimiento. Puede profundidad), precipitaciones y radiación hipotetizarse que la influencia sobre el solar incidente durante el ciclo del cultivo. rendimiento de cada categoría de rama La duración de las etapas fenológicas se dependerá del momento ontogénico en expresó en tiempo térmico (TT) calculado que se produzca esa fase de crecimiento por el método directo y una temperatura lineal y de las condiciones ambientales (ra- base de 10,4°C (9), para facilitar las com- diación y temperatura) prevalecientes. paraciones entre genotipos. Los objetivos de este estudio fueron: (i) El crecimiento se cuantificó mediante la describir la secuencia ontogénica de las biomasa acumulada por planta y su dis- distintas categorías de ramas, identifican- tribución en los diferentes órganos. Para do inicio, final y duración de sus respecti- ello, desde el 12/12/2005 (28 a 38 días des- vas fases de crecimiento lineal, (ii) deter- de la emergencia, según los genotipos) y a minar la relación entre esos parámetros y intervalos de 12-14 días se tomaron mues- la tasa de crecimiento de los frutos (TCF) y tras de cinco plantas por tratamiento y re- entre ésta y el peso final de los frutos en petición, se separaron los órganos presen- cada categoría de rama, y (iii) documentar tes y secaron en estufa a 70°C hasta peso la variabilidad genotípica de estos atribu- constante. Los datos de peso seco fueron tos entre cultivares comerciales y preco- corregidos según el contenido energético merciales. de los frutos maduros con un coeficiente

202 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 1. Algunas características de los genotipos de maní evaluados en este estudio.

X S= siembra y C= cosecha. y G/C=grano caja. z Rend. Conf.= rendimiento confitería. de 1,65 propuesto por Duncan et al. (11). cosechó una superficie de 1,4 2m por par- Entre las etapas R3 (inicio de crecimiento cela, se determinó el rendimiento y el peso de vainas) y R8 (madurez de arrancado), se seco de los frutos maduros por planta. cuantificó la proporción y el peso de fru- Se determinaron regresiones lineales entre tos clasificándolos por grado de madurez variables mediante el empleo de Infostat (6) y la ubicación en la parte aérea de la (versión 2011, FCA-UNC Córdoba, Argenti- planta en las siguientes categorías vege- na. URL http://www.infostat.com.ar.) tativas: tallo principal “n”, ramas n+1 co- tiledonares (cot.), otras ramas primarias RESULTADOS (n+1), ramas secundarias (n+2) y tercia- rias (n+3). Con la biomasa corregida por La temperatura media del aire y del suelo costo energético (11) se construyeron las reprodujo la tendencia estacional carac- curvas de crecimiento en función del TT, terística de la zona y ambas se correspon- discriminando los componentes vegetati- dieron con la radiación solar incidente del vos (tallo+ramas+hojas) y reproductivos ciclo 2005/06 (Figura 1). Las lluvias fue- (frutos) por categoría de rama y el total ron inferiores al promedio histórico (serie por planta. A partir de estas curvas se es- 1977-2006, 659 mm), entre la 2° década de timó el TT de inicio, final y la duración de octubre y la 1° de abril, con 460 y 553 mm cada fase de crecimiento lineal (FCL) de entre S y R8 de cultivares precoces y tar- la biomasa total y de frutos por categoría díos, respectivamente. vegetativa. El inicio de cada fase lineal se La emergencia (Ve) se completó entre 18 calculó como la intersección de la línea de y 32 días de la siembra, siendo Utré el cul- regresión de mejor ajuste con el eje de las tivar más precoz (134 °Cd), Florunner (229 abscisas (cociente entre el valor del inter- °Cd) y Tegua (266 °Cd) los más tardíos e cepto y la pendiente de la ecuación de la intermedios (154°C) los otros genotipos. recta) y el final se definió como el TT co- Utre mostró, además, buena capacidad rrespondiente al peso seco máximo alcan- para germinar con temperaturas subópti- zado por el órgano respectivo. Para cada mas, como las registradas en el suelo en- fase lineal se calculó la tasa de crecimiento tre el 23 y 31 de octubre (13,8°C), debidas del cultivo (TCC), de los frutos (TCF) y el co- a un frente frío con lluvias. El ciclo Ve-R8 eficiente de partición (TCF/TCC). En R8, se varió con los genotipos con extremos de

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 203 dencia creciente. Uchaima, también redu- jo su peso seco total y vegetativo pero el reproductivo sólo sobre ramas cot, ya que en n+1 y n+2 siguió en aumento. Estos tres cultivares acumularon un peso total entre 100 y 112 g/planta. Utre y LF40 tuvieron un patrón de creci- miento semejante con menos producción de biomasa total por planta (entre 87 y 98 g/pl), debido al bajo peso de frutos so- bre ramas cot y n+1 y al escaso aporte de las n+2 y tallo n. Hacia el final del ciclo, Figura 1. Patrones de temperatura media del aire y la producción de frutos sobre ramas n+1 del suelo, radiación solar incidente y lluvias acumu- y, eventualmente sobre tallo n, mantuvo ladas por períodos decádicos durante la estación de una tendencia creciente en ambos geno- crecimiento de maní (2005/06) y el período 1997- tipos, al tiempo que el peso seco de las 2006. Las líneas horizontales, de trazo continuo y punteado, in- otras estructuras disminuía. Esta descrip- dican la duración del ciclo del maní (S-R8) para los cultiva- ción puede aplicarse a LF 42, excepto en lo res precoces (17/10/2005-13/03/2006) y tardíos (17/10/2005- referido al tallo “n”. 05/04/2006), respectivamente. El material ET6 presentó el ciclo más lar- 129 y 143 días para Utre y Uchaima, res- go (1809 °Cd) y una cantidad intermedia pectivamente. de biomasa total (96 g/pl). Las curvas de peso seco reproductivo (Figura 2), tuvie- Biomasa ron una tendencia creciente del peso de La figura 2 muestra los pesos secos vege- frutos sobre ramas n+1 y n+2 hasta el final tativo (tallo+ramas+hojas), reproductivo del ciclo, con una tasa de crecimiento alta (frutos>R4) y total por planta en función (0,041 g/pl/°Cd) para la primera de estas del TT desde la emergencia de cada ge- dos categorías. notipo. Los cultivares runner (Florunner y Así, entre la emergencia (134 y 229 °Cd) y Tegua) tuvieron valores de peso seco ve- el inicio de la FCL de la biomasa total por getativo máximo similares (49,3 y 48,2 g/ planta (515-608 °Cd), la tasa de crecimien- pl, respectivamente) y la mayor propor- to de todos los genotipos se ubicó en un ción de biomasa reproductiva se cuantifi- rango de 23 a 34 mg/pl/°Cd. có sobre ramas cot, algo menos en n+1 y La FCL de la biomasa total por planta un aporte bajo de las ramas n+2. El patrón (Cuadro 2) tuvo una duración promedio de Uchaima, tipo Virginia de porte rastre- de 1020 ±79°Cd, variando entre 953 (Flo- ro decumbente, fue similar a Florunner y runner) y 1177 °Cd (ET6), con escasa dife- Tegua en la magnitud de la biomasa ve- rencia genotípica en el momento de ini- getativa (52,6 g/pl); aunque el peso seco cio (577 ±28 °Cd desde Ve). Durante esta reproductivo por planta fue aportado en fase, Tegua alcanzó la mayor TCC (104 mg/ proporciones similares por las ramas cot y pl/°Cd), seguido de Uchaima y Florunner; n+1 y en menor medida por las n+2. No mientras que Utre (86 mg/pl/°Cd) se ubicó obstante, los frutos de esta última ubica- en el otro extremo del gradiente genotí- ción alcanzaron el valor más alto registra- pico. Estas TCC se relacionaron positiva- do en este estudio (7,1 g/pl). Hacia el final mente con la biomasa máxima acumulada del ciclo, Tegua y Florunner experimenta- al final de la fase (110, 112, 100 y 87g/ ron una disminución del peso seco total, pl, respectivamente) y ajustaron a un mo- vegetativo y reproductivo sobre ramas delo lineal con un R2= 0,830 (p<0,05) para cot, mientras que el peso de frutos sobre todos los genotipos, pero no fue así para n+1 y n+2 se estabilizó, o mantuvo, su ten- la duración de la FCL y biomasa máxima

204 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Figura 2. Biomasa vegetativa (PS Veg), peso seco de frutos (PSF), corregido por energía, sobre ramas co- tiledonares (s/cot), tallo “n” (s/n), ramas n+1 (s/n+1), ramas n+2 (s/n+2) y total por planta (PS Total) en función del tiempo térmico (TT) desde la emergen- cia de cada cultivar de maní (primer valor en el eje de las abscisas). Fecha de siembra 0= 17/10/2005.

(R2= 0,030 ns). Por ello, ET6, con la ma- yor duración de FCL (1.177 °Cd) acumuló 96,4 g/pl al final de la misma debido a su TCC (88 mg/pl/°Cd); mientras Florunner, con una duración 224 °Cd más corta y una TCC más alta (97 mg/pl/°Cd), alcanzó 100 g/pl. Uchaima, combinó una dura- ción algo menor a la de ET6 (1104 °Cd)

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 205 Cuadro 2. Inicio, final y duración de la fase de crecimiento lineal (FCL) de la biomasa total, tasa de crecimien- to (TCC) durante la fase y peso seco máximo acumulado por planta al final de la misma.

* El coeficiente de determinación corresponde al mejor ajuste de la regresión lineal calculado para la biomasa de cada genotipo durante la FCL. con una TCC similar a la de Florunner (99 Biomasa de frutos sobre ramas n+1 mg/pl/°Cd) y produjo la máxima biomasa La FCLn+1 fue similar a la descripta para ra- (112,1 g/pl). mas cotiledonares (Cuadro 4); comenzó 67°Cd más tarde y finalizó 103 °Cd des- Biomasa de frutos sobre ramas cotiledo- pués de ésta (1701 ±69 °Cd) resultando nares 36 °Cd más larga. La FCLn+1 de Tegua y ET6 La FCL de los frutos formados sobre ramas fue la más extensa (747 y 724 °Cd, respec- cot (Cuadro 3) comenzó, en promedio, a tivamente) y la de LF40 la de menor dura- los 1005 ±51 °Cd después de la emergen- ción (552°Cd), mostrando escasa variabili- cia y se extendió por 593 ±88 °Cd. Tegua y dad entre genotipos. Las TCF de esta fase ET6 fueron los primeros en comenzar esta fueron, en promedio, inferiores a las re- fase a los 946 y 916 °Cd, respectivamente; gistradas en ramas cot (36 ±8 mg/pl/°Cd), mientras que Uchaima y ET6 la completa- excepto la de Uchaima que la superó (52 ron más tarde (1692 °Cd) que el resto de mg/pl/°Cd) siendo la mayor de todos los los genotipos. Florunner tuvo la TCF más genotipos. alta (61 g/pl/°Cd), seguido por Tegua (57 g/ El peso seco de frutos por planta más pl/°Cd), Uchaima (47 g/pl/°Cd) y, después, alto al final de esta fase fue de Uchai- el resto de los materiales (43-45 g/pl/°Cd). ma y ET6 (34,7 y 37,9 g, respectivamente) Los genotipos se ordenaron de manera porque ambos combinaron las tasas de similar según el peso máximo de frutos crecimiento de frutos más altas y las du- alcanzado al final de la FCLcot, con valores raciones más prolongadas. Los restantes extremos de 41,6 g/pl y 23,4 g/pl para Te- genotipos se ubicaron entre 23 y 17 g/ gua y Utre, respectivamente. pl. Para todos los materiales, la bioma- Similar a lo ocurrido con la biomasa total, sa de frutos al final de la FCLn+1 y la TCF el peso seco de los frutos se relacionó posi- durante la misma, ajustó a un modelo li- 2 tivamente con la TCF durante la FCLcot, con neal con un R = 0,683 (p<0,05); pero con un ajuste lineal aceptable (R2= 0,441) y re- la duración de la fase el ajuste fue débil sultó débil la relación con la duración del (R2= 0,287 ns). 2 periodo de FCLcot (R = 0,233 ns).

206 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 3. Inicio, final y duración de la fase de crecimiento lineal (FCLcot) de frutos sobre ramas cotiledonares, tasa de crecimiento (TCF) durante la FCLcot, y peso seco máximo de frutos acumulado al final de la etapa.

* El coeficiente de determinación corresponde al mejor ajuste de la regresión lineal calculado para la biomasa de frutos de cada genotipo durante la FCL de las ramas cotiledonares (FCLcot).

Cuadro 4. Inicio, final y duración de la fase de crecimiento lineal (FCLn+1) de frutos sobre otras ramas n+1, tasa de crecimiento de frutos (TCF) durante la FCLn+1, y peso seco máximo acumulado al final de la etapa.

* El coeficiente de determinación corresponde al mejor ajuste del modelo lineal calculado para la bio- masa de frutos de cada genotipo durante la FCL de las ramas n+1 (FCLn+1).

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 207 Biomasa de frutos sobre ramas n+2 Coeficiente de partición a fruto La FCL de frutos sobre ramas n+2 comen- En promedio, la partición a frutos fue ma- zó, en promedio, a los 1266 ±144 °Cd de la yor en ramas cotiledonares (0,52), inter- emergencia y se extendió hasta los 1714 media en n+1 (0,38) y menor en n+2 (0,12) ±65 °Cd, con una duración promedio de (Cuadro 6), y se relacionó con la ontogé- 448 °Cd entre genotipos (Cuadro 5). La nesis de cada categoría de rama (Figura línea LF40 y Tegua presentaron una du- 2). Tegua y Florunner, reprodujeron este ración extrema de 184 °Cd y 693 °Cd, res- patrón general con valores de partición pectivamente. La TCF también presentó superiores al promedio general en ramas gran variación, con valores extremos de cotiledonares (0,55 y 0,64; respectivamen- 21 y 5 mg/pl/°Cd. Considerando esta dos te) e inferiores en ramas n+1. Sobre ramas variables, Uchaima con una TCF inferior al n+2 difirieron entre sí, pues Tegua pre- promedio (8 mg/pl/°Cd) y una duración de sentó el menor factor de partición (0,05) y 535 °Cd, produjo el mayor peso de frutos Florunner uno de los mayores (0,22). Utre, sobre ramas n+2 (7,1 g/pl); mientras que LF40, LF42 y ET6 presentaron patrones si- LF40 o Florunner con mayores TCF (20 y 21 milares a los anteriores, pero Utre no de- mg/pl/°Cd, respectivamente) pero meno- sarrolló frutos en ramas n+2 y, junto con res duraciones, acumularon 3,8 y 5,8 g/pl, LF40 dispusieron de frutos sobre tallo “n” respectivamente. con valores de partición de 0,09 y 0,10, El cultivar Utre y la línea LF40 desarrolla- respectivamente. Uchaima manifestó un ron frutos sobre el tallo “n” y los paráme- comportamiento diferente a los restantes tros fueron similares en ambos. El inicio de genotipos, pues particionó menos biomasa la FCL de este órgano se produjo a 1152 °Cd que el promedio general hacia ramas co- y su duración fue de 439 °Cd. La TCF prome- tiledonares y n+2 (0,47 y 0,08, respectiva- dio fue de 9 mg/pl/°Cd y el peso de frutos mente) y más hacia ramas n+1 (0,53). acumulado al final de la fase de 5,3 g/pl. Un modelo de tipo lineal (R2= 0,984;

Cuadro 5. Inicio, final y duración de la fase de crecimiento lineal (FCL n+2) de frutos sobre ramas n+2, tasa de crecimiento (TCF) durante la FCLn+2, y peso seco máximo de frutos acumulado al final de la etapa.

* El coeficiente de determinación corresponde al mejor ajuste de la regresión lineal calculado para la biomasa de frutos de cada genotipo durante la FCL de las ramas n+2 (FCLn+2). x La falta de datos del cultivar Utre se debió a que sólo hubo registros de pesos de frutos en los dos últimos muestreos (1560 y 1622 °Cd desde la emergencia), no siendo posible el cálculo de los demás parámetros.

208 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 6. Factor de partición a frutos calculado para el tallo “n” y las tres categorías de rama de los cultivares de maní evaluados.

p<0,001) se ajustó para la respuesta del factor de partición a la tasa de crecimien- to de los frutos durante su fase lineal y los pares de datos de cada categoría de rama se distribuyeron sobre la línea de regre- sión según el orden de formación de las estructuras vegetativas. Así, las ramas cot. se ubicaron en el extremo superior dere- cho de la línea de regresión y lo contra- rio ocurrió con las ramas n+2 y tallo “n”. Un modelo de tipo lineal se ajustó para la respuesta del peso máximo de los frutos al factor de partición (R2=0,84; p<0,001; Figura 3).

Contribución relativa de la biomasa de frutos al rendimiento Figura 3. Regresiones lineales entre la tasa de cre- La mayor proporción de la carga repro- cimiento de los frutos (TCF) durante su fase lineal y el factor de partición de biomasa a frutos sobre ductiva (ca. 84 a 92%) se halló en las ra- tallo “n” y las categorías de rama (arriba); y entre mas cotiledonares y n+1, en tanto que la el factor de partición de biomasa a frutos y el peso carga restante se distribuyó en las ramas seco máximo de los mismos al final de su crecimien- n+2 (2 al 10%) y en el tallo “n” (5-13% to (abajo). sólo en Utre y LF40), configurando dos racterística del segundo grupo (excepto LF modelos de distribución del peso de los 42), fue el contraste entre ramas n+1 y cot. frutos sobre la planta. Uno, integrado La contribución relativa de las estructuras por los cultivares Tegua y Florunner, con vegetativas al rendimiento del cultivo por la mayor proporción sobre ramas cot. (47 hectárea se muestra en la figura 4. y 50%, respectivamente) y el otro, corres- pondiente a los restantes genotipos, con DISCUSIÓN el 51% del peso de los frutos sobre ramas n+1. Un caso extremo de este grupo fue Las condiciones ambientales de la estación ET6 que acumuló el 62% del peso de fru- de crecimiento fueron similares a los valo- tos sobre esa categoría de rama. Otra ca- res normales de la zona y la distribución

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 209 temporal errática de las lluvias se corrigió les sobre ramas cot y n+1; mientras que el con riegos para evitar períodos de estrés peso de frutos en n+2 no mostró una ten- hídrico. dencia clara. El cultivar Utre expresó la capacidad de Además de los efectos genotípicos y de germinar y emerger con temperaturas le- manejo sobre el desarrollo de los cultivos vemente superiores a la Tbase, que según (7,13,14,15); en maní debe prestarse im- Prasad et al. (17) está entre 9,8 y 11,7°C. portante atención al patrón de distribu- Mientras que, la variabilidad genotípica ción de yemas y al grado de ramificación de los otros materiales en el tiempo a Ve, que, en conjunto, determinan la ubicación reflejó la influencia de la temperatura del y edad de los frutos. A su vez, todo esto suelo sobre la germinación y el desarrollo determina el momento de ocurrencia y la de plántulas de maní sembrado tempra- duración de los períodos de definición de no en la primavera (17). Las respuestas número y peso. de Tegua y Florunner podrían involucrar, Las diferencias genotípicas en el crecimien- además, aspectos deficitarios de la calidad to, inicio y fin de las fases lineales de cre- fisiológica de la semilla ligados a su proce- cimiento, la magnitud de los pesos secos dencia (industria procesadora). máximos y la tendencia al final del ciclo, La planta maní es de crecimiento inicial fueron similares a lo hallado por Aboagye lento porque los componentes de capaci- et al. (1). Florunner fue el único con una dad (área foliar) y de intensidad (tasa de tendencia declinante del crecimiento en incremento del peso seco por unidad de todas sus estructuras desde los 1692 °Cd; área foliar) durante los primeros estadios mientras los otros genotipos mostraron son pequeños. El ciclo Ve-R8 de los culti- una tendencia creciente sólo en ramas n+1 vares se correspondió con la duración de (LF40 y LF 42) y en ramas n+1 y n+2 (Tegua, la FCL de biomasa total por planta (R2= Uchaima y ET6). ET6 mantuvo el crecimien- 0,55), diferenciándose dos grupos: Tegua, to de las ramas n+1 con una pendiente su- Florunner, Utre, LF42 y LF40 con una du- perior a los otros materiales hasta R8. Utre ración media de 972 °Cd y, Uchaima y ET6 llegó al final del ciclo con una tendencia con más de 1100 °Cd. Sin embargo, la TCC creciente en tallo “n” y ramas n+1. durante la FCL se relacionó positivamente El inicio de la FCL de biomasa total del con la biomasa máxima acumulada al final conjunto de genotipos varió sólo en 93 de esa fase. Una relación similar se verifi- °Cd, siendo ET6 el primero en comenzar có entre la biomasa de frutos y su tasa de (515 °Cd de Ve), aunque la duración de la crecimiento en las respectivas fases linea- fase mostró más variabilidad (224 °Cd en- tre valores extremos), con dos genotipos por encima de 1100 °Cd (Uchaima y ET6) y el resto entre 953 y 994 °Cd. También fue variable el inicio y la duración de la FCL de frutos en las distintas categorías de rama, con rangos de 122 a 383 °Cd para el comienzo y 195 a 509 °Cd para la dura- ción, con la mayor variación en ramas n+2. Los genotipos precoces en comenzar la FCL de frutos fueron ET6 sobre ramas cot (916°Cd) y Tegua sobre n+1 y n+2 (1009 y 1063 °Cd, respectivamente), y los tardíos Figura 4. Contribución de las estructuras de la plan- LF40 en ramas cot (1068 °Cd), Uchaima en ta de maní (tallo “n” y categorías de rama) a la pro- n+1 (1131 °Cd) y Florunner en n+2 (1446 ducción de frutos por hectárea de los genotipos °Cd). La duración de la FCL de frutos más estudiados. corta se registró en las tres categorías de

210 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 rama de LF40; mientras que la más extensa (combinación del patrón de ramificación y fue para ramas cot en ET6 y sobre n+1 y disposición de yemas en los órganos vege- n+2 de Tegua. Estos cambios en la cronolo- tativos) sobre el proceso de formación y la gía de cada categoría de rama, no fueron disposición espacio-temporal de los frutos, suficientes como para producir modifica- su tasa de crecimiento y el factor de parti- ciones de la temperatura y radiación pre- ción de biomasa durante el crecimiento de valecientes durante el desarrollo de cada los mismos; todos estos parámetros ecofi- una de ellas; debido, posiblemente, a que siológicos relacionados con la definición todos los genotipos fueron sembrados en del rendimiento de los distintos genotipos una misma fecha. y de utilidad para el mejoramiento y la Sin embargo, el rendimiento de frutos de calibración de modelos de simulación de cada genotipo y su distribución relativa este cultivo. sobre tallo “n”, ramas cot, n+1 y n+2, es- tuvo asociado con la dinámica temporal BIBLIOGRAFÍA CITADA de la tasa de crecimiento y el factor de partición a frutos de cada estructura, des- 1. Aboagye L.M., Isoda A., Nojima H., Taka- tacándose el aporte de las ramas cot y n+1 saki Y., Yoshimura T., and Ishikawa T. 1994. Por su parte, la variabilidad detectada en Plant Type and Dry Matter Production in Peanut (Arachis hypogaea L.) Cultivars. la duración de la FCLn+2 y la TCF durante Jpn. J. Crop Sci. 63 (2): 289-297. la misma fue responsable, en parte, de 2. Andrade F.H. y Sala. R. 2007. Ecofisiología la escasa importancia que tuvo el aporte comparada de cultivos. Interacción entre de estas estructuras al peso total de frutos Ecofisiología y biotecnología. Workshop por planta. La combinación de respuestas Internacional: Ecofisiología Vegetal Apli- permitió identificar dos patrones de distri- cada al Estudio de la Determinación del bución de frutos: el de Tegua y Florunner, Rendimiento y la Calidad de los Cultivos con el mayor aporte de ramas cot, y el de de Granos. In: Primer Encuentro Red Raí- los otros genotipos donde las ramas n+1 ces de Ecofisiología SECyT. 6 y 7 de sep- hicieron el aporte mayor. Ambos patrones tiembre, Mar del Plata, Argentina: IX-XII. tuvieron un aporte mínimo de las ramas 3. Awal M.A., and Ikeda T. 2003. Controlling canopy formation, flowering, and yield n+2 y del tallo “n” (sólo en Utre y LF40). in field-grown stands of peanut (Arachis Además, la variación genotípica del peso hypogaea L.) with ambient and regulated máximo de frutos al final de la FCL de cada soil temperature. Field Crops Res. 81: 121- categoría de rama, se correspondió con su 132. tasa de crecimiento, similar a lo demostra- 4. Baydar H. 1992. Some agronomic and do por Haro et al. (12) y Phakamas et al. quality characters of Peanut (Arachis (16), y con el factor de partición de bio- hypogaea L.) Cultivars. Ankara Uni. Insti- masa a frutos. La mayor contribución de tute of Natural Science. Field . Mas- las ramas primarias (cot y n+1) hallada en ter Thesis. este estudio, concuerda con lo determina- 5. Bell M.J., and Wright G.C. 1998. Ground- nut growth and development in contras- do por Baydar (4) y Awal e Ikeda (3). ting environments. 1. Growth and plant density. Exp. Agric. 34: 99–112. CONCLUSIONES 6. Boote K.J. 1982. Growth stages of peanut (Arachis hypogaea L.). Peanut Science, Destacamos que la información genera- 9:35-40. da sobre la variabilidad genotípica, tanto 7. Calderini D.F., Maddonni G.A., Miralles de cultivares comerciales del tipo Virginia D.J., Ruiz R.A. y Satorre E.H. 1994. Alta runner como de otros experimentales, productividad en trigo de secano, Mode- es regionalmente inédita. En particular, los para la zona norte de Buenos Aires y la comprobación empírica de la influen- sur de Santa Fe de AACREA. In: E.H. Sato- rre (ed.), Revista CREA 187. cia de la estructura de la planta de maní

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 211 8. Caliskan S., Caliskan M.E., and Arslan M. tion use efficiency and crop growth rate. 2008. Genotypic Differences for Repro- Field Crops Res. 103 (3): 217-228. ductive Growth, Yield, and Yield Compo- 13. Jiang H., and Egli D.B. 1995. Soybean seed nents in Groundnut (Arachis hypogaea number and crop growth rate during L.). Turk J AgricFor 32: 415-424. flowering. Agron. J. 87: 264-267. 9. Canavar O., and Kaynak M.A. 2010. 14. Mercau J.L., Sadras V.O., Satorre E.H., Mes- Growing degree day and sunshine ra- sina C., Balbi C., Uribelarrea M., and Hall diation effects on peanut pod yield and A.J. 2001. On-farm assessment of regional growth. African Journal of Biotechnology and seasonal variation in sunflower yield Vol. 9(15): 2234-2241. in Argentina. Agric. Syst. 67: 83-103. 10. Cerioni G.A. 2003. Déficit hídrico en la 15. Otegui M.E., Nicolini M.G., Ruiz R.A., and etapa reproductiva del maní (Arachis P. Doobs. 1995. Sowing date effects on hypogaea L.), su influencia sobre el cre- grain yield components for different mai- cimiento, desarrollo, rendimiento y cali- ze genotypes. Agron. J. 87: 29-33. dad. Tesis MSc. Facultad de Agronomía y 16. Phakamas N., Patanothai A., Jogloy S., Veterinaria, Universidad Nacional de Río Pannangpetch K., and Hoogenboom G. Cuarto. 95 p. 2008. Physiological determinants for pod 11. Duncan W.G., McCloud D.E., McGraw R.L., yield of lines. Crop Science, 48: and Boote K.J. 1978. Physiological aspects 2351-2360. of peanut yield improvement. Crop Scien- 17. Prasad P.V.V., Boote K.J., Thomas J.M.G., ce 18: 1015-1020. Allen Jr. L.H., and Gorbet D.W. 2006. In- 12. Haro R.J., Otegui M.E., Collino D.J., and fluence of soil temperature on seedling Dardanelli J.L. 2007. Environmental emergence and early growth of peanut effects on seed yield determination of cultivars in field conditions. J. Agronomy irrigated peanut crops: Links with radia- & Crop Science 192: 168-177.

Cambios en el rendimiento y la calidad comercial de dos cul- tivares de maní debido a variaciones de la fecha de siembra, temperatura y radiación

Oscar Giayetto1, Elena Fernández1, Guillermo Cerioni1, Federico Morla1,2, María Rosso1, Marcelo Kearney1 y María Violante1 1- FAV, UNRC, Ruta Nac.36 Km 601, Río Cuarto, Córdoba, Argentina. 2- CONICET- Min- CyT Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN ciones climáticas afectan la duración de la etapa de crecimiento vegetativo, así como El maní (Arachis hypogaea L.) es un cultivo la fecha de floración y el desarrollo de los de gran importancia en zonas tropicales, frutos (10). En coincidencia con esto, Colli- subtropicales y templadas (4) y la produc- no y Racca (5) mostraron que la tempera- ción de Argentina en la campaña 2009/10 tura y la disponibilidad de agua afectaron fue de 611 mil toneladas en un área de la duración de cada una de las etapas del siembra de más de 200 mil hectáreas (14). ciclo del cultivo. El crecimiento y desarrollo de este cultivo La elección de la fecha de siembra adecua- está regulado por la temperatura, el foto- da de un cultivo tiene por objetivo maximi- período y la radiación solar (1, 2, 4), entre zar tanto el rendimiento como la calidad otros factores. del producto cosechable, ofreciéndole las Las variaciones interanuales de las condi- mejores condiciones para la expresión del

212 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 potencial genético (6, 7). Padmalatha et Virginia x Español), el 08 de octubre, 10 al. (11) encontraron que cultivos de maní de noviembre y 09 de diciembre de 2009, sembrados tardíamente en la estación de y el 08 de octubre, 10 de noviembre y 10 crecimiento alcanzaron los menores ren- de diciembre de 2010 (1°, 2° y 3° fechas de dimientos con respecto a otros sembrados siembra, respectivamente). La elección de en fechas más tempranas. De manera simi- los cultivares se basó en la estructura de lar, Sardana y Kandhola (13), obtuvieron la planta (porte y grado de ramificación) los mayores rendimientos en siembra tem- y la duración del ciclo, siendo Granoleico pranas (mes de mayo en Punjab, India). un cultivar rastrero con ramificaciones de Según Haro et al. (8) en siembras tempra- hasta tercer orden y ciclo de más de 150 nas el cultivo está expuesto, inicialmente, días; mientras Utre presenta porte semie- a menor temperatura y radiación solar y, recto, menor grado de ramificación y ci- luego durante el periodo crítico, a tempe- clo dos semanas más corto. Cada parcela raturas más altas y más cantidad de radia- experimental tuvo nueve surcos de 12 m ción, respecto a la fecha tardía. Para Souza de largo, espaciados a 70 cm y con plantas da Silveira (15), la fecha de siembra fue el distanciadas a 8 cm en el surco. factor que más influenció la producción y El diseño experimental fue de bloques al el rendimiento final de maní. azar con arreglo factorial de parcelas di- Resolver la combinación de fecha de siem- vididas y tres repeticiones por tratamien- bra y cultivar apropiada para un deter- to, siendo la parcela principal la fecha de minado ambiente de producción es una siembra y la sub-parcela el cultivar. práctica de manejo orientada a armonizar El experimento se realizó sin limitantes hí- el crecimiento del cultivo con las condi- dricas previéndose la aplicación de riego ciones de temperatura, radiación solar y por goteo para mantener el contenido de fotoperíodo más favorables para lograr agua útil del suelo (0-100 cm) por encima el rendimiento máximo posible. Existen del 60% de su capacidad de almacenaje. estudios sobre el efecto de las fechas de Cuando fue necesaria, la reposición de siembra (4, 11, 13, 15); sin embargo, como agua se realizó semanalmente y la dota- la mayoría de los resultados son sitio y ción de riego se estimó mediante la eva- genotipo dependientes, resulta necesario potranspiración de referencia (ETP) ob- explorar las respuestas del cultivo a esas tenida de la Estación Agrometeorológica prácticas de manejo en las condiciones de (FAV-UNRC) y el coeficiente Kc dependien- producción locales. El objetivo de este es- te el grado de cobertura del cultivo. tudio fue evaluar las interacciones entre También se previeron y aplicaron contro- factores ambientales, condicionados por les fitosanitarios de malezas, enfermeda- distintas fechas de siembra, y dos cultiva- des y plagas durante el ciclo del cultivo res de maní a través del rendimiento de según requerimiento y siguiendo las me- frutos y su calidad comercial en la región didas de seguridad establecidas en la Ley de Río Cuarto. de Productos Químicos o Biológicos de uso Agropecuario Nº 9164. MATERIALES Y MÉTODOS Se registraron datos de temperatura del aire (media, mínima y máxima) y radiación El estudio se llevó a cabo en el Campo Ex- solar incidente de la estación meteoroló- perimental de la FAV-UNRC, Río Cuarto, gica instalada en el campo experimental Córdoba (33° 07´LS, 64° 14´LW y 421 msnm) donde se realizó el estudio. Con los datos durante las campañas agrícolas 2009/10 y de temperatura se calcularon los valores 2010/11, en un suelo Hapludol típico de promedio para los estadios fenológicos textura franca arenosa fina. Se sembraron S-R1 (siembra - inicio de floración), R1-R5 manualmente dos cultivares, Granoleico (inicio de floración - inicio de llenado de (tipo Virginia runner) y Utre (cruzamiento frutos) y R5-R8 (inicio de llenado de fru-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 213 tos-madurez de arrancado), según la esca- la comparación de medias se realizó con la propuesta por Boote (3), y la radiación el test de Duncan (p<0,05) empleando el fotosintéticamente activa interceptada programa Infostat (9). se calculó a partir de la radiación global incidente (afectada por el coeficiente de RESULTADOS Y DISCUSIÓN 0,48) (12) y el porcentaje de cobertura del canopeo del cultivo, medido a intervalos No se detectaron diferencias significativas regulares de 10 días, utilizando LI-191SA debidas al factor año para ninguna de las Line quantum sensor (Lincoln, NE-USA). variables evaluadas, por lo que los resulta- La biomasa del cultivo se midió a interva- dos se presentan como promedio de am- los regulares de muestreo de 10-13 días bos ciclos de producción, y tampoco hubo hasta madurez de cosecha (R8). En cada interacción significativa cultivar por fecha oportunidad, se tomaron muestras de cin- de siembra de modo que los efectos de co plantas por tratamiento y repetición, estos factores se refieren de manera inde- luego de identificada su etapa fenológi- pendiente. ca, se secaron en estufa con circulación de aire forzado a 70°C hasta peso constante y Condiciones meteorológicas y fenología se registró el peso seco. El ciclo desde siembra (S) a madurez de A cosecha se midieron el número y peso de arrancado (R8) tuvo una extensión, en frutos maduros e inmaduros, y el índice de promedio de ambas campañas y cultiva- cosecha (calculado como la relación entre res, de 159, 152 y 137 días para la 1°, 2° el peso de frutos y la biomasa total). Los y 3° fecha de siembra, respectivamente. parámetros de calidad evaluados fueron La mayor proporción (~65%) de ese acor- la relación grano-caja, estimada a partir tamiento debido al atraso de la siembra, de los pesos de frutos y semillas, y el rendi- se produjo en la etapa S-R1 y el resto del miento confitería mediante las categorías cambio entre R1-R5 y R5-R8, con porcen- granométricas (tamaños de semillas) em- tajes de reducción similares en ambas eta- pleando zarandas de tajo según los méto- pas, y diferencias significativas en las dos dos estándares de comercialización. primeras (Cuadro 1). Esta disminución del Los datos fueron sometidos a ANOVA y ciclo se produjo en coincidencia con el au-

Cuadro 1. Temperatura media, radiación fotosintéticamente activa interceptada y acumulada y duración de las etapas fenológicas S-R1, R1-R5, R5-R8 y del ciclo total de los cultivares de maní Utre y Granoleico para las fechas de siembra analizadas.*

* Valores promedio de las campañas 2009/10 y 2010/11. ††† p<0,001; †† p<0,01; † p<0,05; NS no significativo (test de Duncan).

214 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 mento progresivo de la temperatura me- componentes. El cultivar Granoleico su- dia diaria, asociado al avance de la esta- peró en rendimiento de frutos a Utre en ción estival. Así, la temperatura media de las tres fechas de siembra y experimentó la etapa S-R1 aumentó 3,4°C entre la 1° y una disminución de 32,4 kg/ha por cada 3° fecha de siembra (Cuadro 1), aceleran- día de atraso en la siembra respecto al 8 do la tasa de desarrollo del cultivo que re- de octubre. En Utre, esa caída del rendi- sultó en una disminución de 14 días en la miento fue de 19,7 kg/ha por día de atra- 3° fecha de siembra respecto a la 1°. so pero sin diferencias entre las siembras Contrariamente, la temperatura media de de octubre y noviembre (Figura 1). Estos la etapa final del ciclo (R5-R8), disminuyó resultados coinciden con Padmalatha et entre la 1° y 3° fecha de siembra, y la dura- al. (11) y Caliskan et al. (4) para quienes ción de esa etapa también se redujo pro- el rendimiento también se incrementó sig- bablemente en respuesta al acortamiento nificativamente con el alargamiento de de la longitud del día (Bell y King, 1991, la duración del ciclo del cultivo y con Sar- citado por 6). En la 3° fecha de siembra, las dana y Kandhola (13) por las ventajas de menores temperaturas registradas duran- la siembra temprana. El comportamiento te la etapa de llenado de frutos, pueden diferencial de estos cultivares hizo que las producir una disminución del rendimiento brechas de rendimiento entre ambos fue- como lo encontrado por Giayetto et al. (7). ran dependientes de la fecha de siembra. La temperatura media de la etapa R1-R5 se El retraso en la fecha de siembra también mantuvo estable alrededor de 22,4 ±0,8 °C. produjo una disminución significativa del Con respecto a la respuesta fenológica de peso de frutos maduros, igual a lo hallado los genotipos, el ciclo del cultivar Grano- por Sardana y Kandhola (13), y de semillas leico tuvo una duración media de 154 días por planta, del peso individual del fruto y superó significativamente a Utre con 145 y de la relación grano-caja; pero sin cam- días entre S y R8. Esa diferencia se expli- bios significativos en el número de frutos ca por los cambios ocurridos en las etapas maduros e inmaduros por planta. Grano- S-R1, R1-R5 y R5-R8, todos de duración leico superó significativamente a Utre en mayor en Granoleico, pero significativos el número de frutos maduros y el peso sólo en las dos primeras. de frutos maduros y semillas por planta; Los cambios en el desarrollo y la localiza- mientras que el peso individual del fruto y ción temporal de los ciclos de los cultiva- la relación grano-caja no se diferenciaron res en la estación estival, causados por las entre cultivares (Cuadro 2). fechas de siembra, determinaron que los El índice de cosecha promedio fue similar cultivos sembrados temprano (comienzos de octubre y noviembre) recibieran y acu- mularan una mayor cantidad de radiación solar. Esas diferencias fueron significativas y a favor de la 1° fecha de siembra en las etapas R1-R5, R5-R8 y en el ciclo completo (S-R8) (Cuadro 1), coincidiendo con Haro et al. (8), quienes observaron que el maní en siembra temprana tuvo un mes más de ciclo de crecimiento y mayores niveles de radiación acumulada en la totalidad del ciclo de cultivo. Figura 1. Rendimiento de frutos de los cultivares de maní Granoleico (barras negras) y Utre (barras Rendimiento y sus componentes grises), promedio de 2009/10 y 2010/11 y el ajuste La fecha de siembra y el genotipo pro- lineal (Granoleico línea punteada y Utre línea conti- dujeron cambios en el rendimiento y sus nua) en función de la fecha de siembra.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 215 Cuadro 2: Efecto de la fecha de siembra y cultivar de maní sobre parámetros evaluados del cultivo.*

* Valores promedio de las campañas 2009/10 y 2010/11. †† p<0,01; † p<0,05; NS no significativo según test de Duncan. NM: número de frutos maduros por planta; NI: número de frutos inma- duros por planta; PM: peso de frutos maduros (g/planta); PS: peso de semillas (g/planta); GC: relación grano-caja; PF: peso de un fruto (g) y RF: rendimiento de frutos (kg/ha). en las dos primeras fechas de siembra y Esto podría deberse, según Padmalatha disminuyó significativamente en la tercera et al. (11), a la mayor superposición de los (Figura 2 B). estadios vegetativo y reproductivo en siem- bras tardías, por lo que la formación de ta- llos y hojas en crecimiento activo compite por asimilados con los procesos de forma- ción de órganos reproductivos que definen el rendimiento. También hubo diferencias entre los cultivares, siendo el índice de cose- cha de Granoleico significativamente mayor al de Utre (Figura 2 A). El rendimiento confitería por cultivar re- sultó 86 y 80% para Granoleico y Utre en la primer fecha de siembra, en la segunda fecha de siembra fue de 71% para ambos cultivares, y en la tercera fecha de siembra 59 y 60% para Granoleico y Utre, respec- tivamente (Figura 3 A). La tendencia de este parámetro de calidad comercial en función de la fecha de siembra, ajustó a un modelo lineal con 0,45 y 0,33 puntos porcentuales en Granoleico y Utre, respec- tivamente por cada día de retraso respec- to a la siembra del 8 de octubre (Figura 3 A); similar a lo hallado por Haro et al. (8), quienes encontraron en la siembra tem- prana el mayor porcentaje de la fracción maní confitería y mayores tasas de creci- miento del cultivo y los frutos. Las categorías granométricas mayores (se- Figura 2. Índice de cosecha de maní en función del millas retenidas en las zarandas 10, 9 y 8) cultivar (A); y de la fecha de siembra (B), promedios disminuyeron con el retraso de la fecha de de ambas campañas (2009/10 y 2010/11). siembra; mientras que lo contrario se re-

216 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 de Río Cuarto la duración del ciclo S-R8 fue mayor y el cultivo capturó más cantidad ra- diación. Ambos parámetros disminuyeron con el atraso de la siembra (noviembre y diciembre) debido a la respuesta inversa a la temperatura de la tasa de desarrollo del cultivo, particularmente notoria en la ter- cera fecha de siembra. Los cambios feno- lógicos afectaron la ubicación del período crítico de definición de los componentes del rendimiento y la cantidad de energía radiante capturada por el cultivo durante los mismos. En particular, resultó afectado el peso de frutos maduros y semillas, que disminuyó al atrasar la fecha de siembra, con un comportamiento similar en ambos cultivares y años de estudio. En consecuencia, el rendimiento de frutos y la calidad comercial del producto (menor rendimiento confitería y mayor propor- ción de tamaños granométricos <7 mm) se redujo lineal y negativamente con el atraso de la fecha de siembra en ambos cultivares. Finalmente, el índice de cosecha también disminuyó con el atraso de la fecha de siembra, particularmente en la más tardía (comienzos de diciembre).

Figura 3. Rendimiento de maní confitería (%) pro- medio de los dos años de los cultivares Granoleico BIBLIOGRAFÍA CITADA (barras negras) y Utre (barras grises), y ajuste lineal en función de la fecha de siembra (Granoleico línea 1- Bagnall D.J., and King R.W. 1991a. Res- punteada y Utre línea continua) (A); y tamaños gra- ponse of peanut (Arachis hypogaea) to nométricos promedio de ambos cultivares y años temperature, photoperiod and irradian- según la fecha de siembra (B). ce. 1. Effect on flowering. Field Crops Res. 26: 263-277. gistró en los tamaños granométricos me- 2- Bagnall D.J., and King R.W. 1991b. Res- nores (semillas retenidas en las zarandas 7; ponse of peanut (Arachis hypogaea) to 6,5; 6 y D). El calibre 7,5 se mantuvo equi- temperature, photoperiod and irradian- librado entre las tres fechas de siembra ce. 2. Effect on peg and pod develop- (Figura 3 B). Mozingo et al. (10) observa- ment. Field Crops Res. 26: 279-293 ron que fechas de siembra tempranas pro- 3- Boote K.J. 1982.Growth stages of peanut dujeron granos más grandes, además de (Arachis hypogaea L.). Peanut Science 9: otros efectos genotípicos (cultivares) y de 35-40. 4- Caliskan S., Caliskan M.E., Arslan M., and manejo del cultivo (e.g. fechas de arranca- Arioglu H. 2008. Effects of sowing date do) sobre este parámetro. and growth duration on growth and yield of groundnut in a Mediterranean- CONCLUSIONES type environment in Turkey. Field Crops Research 105: 131-140. En fechas de siembras tempranas (primera 5- Collino D. y Racca R. 1997. Factores am- década de octubre) de maní en la región bientales que afectan el desarrollo. In:

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 217 Manual de Maní, 2º Ed. (R. Pedelini y C. Peanut Science 18: 55-62. Casini, eds.). INTA Manfredi. pp. 12-13. 11- Padmalatha Y., Reddy S.R., and Reddy T.Y. 6- Fernández E.M., Giayetto O., Cholaky So- 2006. The relationship between weather bari L. y Cerioni G.A. 2006. Ecofisiología parameters during developmental phase y factores ambientales. In: El cultivo de and fruit attributes and yield of peanut. maní en Córdoba (E.M. Fernández y O. Peanut Science 33: 118-124. Giayetto, compiladores). Ed. UNRC, Río 12- Righini R. y Grossi Gallegos H. 2005. Aná- Cuarto, Argentina. pp. 89-112. lisis de la correlación entre la radiación 7- Giayetto O., Fernández E.M. y Cerioni, fotosintéticamente activa y la radiación G.A. 2006. Fecha y modelos de siembra. In: solar global en San Miguel, provincia de El cultivo de maní en Córdoba (E.M. Fer- Buenos Aires. Avances en Energía Reno- nández y O. Giayetto, compiladores). Ed. vables y Medio Ambiente 9(11): 1-4. UNRC, Río Cuarto, Argentina. pp. 157-169. 13- Sardana V., and Kandhola S.S. 2007. Pro- 8- Haro R., Macedo C., Gastaldi L. y Casini ductivity of semi-spreading and bunch C. 2007. Efecto de las labranzas, cultivos type varieties of groundnut as influenced antecesores y fechas de siembra sobre la by sowing dates. Journal of SAT Agricul- producción y calidad del grano de maní. tural Research 5 (1): 1-3. In: Resúmenes XXII Jornada Nacional de 14- SIIA. Sistema Integrado de Información Maní. Gral. Cabrera, Córdoba, Argentina. Agropecuaria. Ministerio Agricultura, Ga- p. 54. nadería y Pesca. 2010. http://www.siia.gov. 9- Di Rienzo J.A., Casanoves F., Balzarini M.G., ar/index.php/series-por-tema/agricultura. González L., Tablada M. y Robledo C.W. In- 15- Souza daSilveira P. 2010 Época de semea- foStat versión 2011. Grupo InfoStat, FCA, dura e densidade de plantas em cultivares Universidad Nacional de Córdoba, Argen- de amendoim no recôncavo sul baiano. tina. URL http://www.infostat.com.ar. Universidade de Federal do Recôncavo Da 10- Mozingo R.W., Coffelt T.A., and Wright Bahia Centro de Ciências Agrárias, Am- F.S. 1991. The influence of planting and bientais e Biológicas. Programa de pós- digging dates on yield, value, and grade graduação em Ciências Agrárias Curso de of four Virginia-type peanut cultivars. mestrado. p 85.

Estrés lumínico en maní sobre crecimiento, partición, rendimiento y sus componentes, y la calidad comercial

Federico Morla1,2, Oscar Giayetto1, Elena Fernandez1, Guillermo Cerioni1, María Rosso1, Marcelo Kearney1, María Violante1 y Cecilia Cerliani1 1- FAV, UNRC, Ruta Nac.36 Km 601, Río Cuarto, Córdoba, Argentina. 2- CONICET- Min- CyT Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN del cultivo de maní en estos ambientes es altamente dependiente de las variaciones Argentina es el sexto productor mundial en las condiciones climáticas, por lo que (campaña 2010/11) y el segundo exporta- incrementar el conocimiento de sus efec- dor de maní tipo confitería de los últimos tos sobre la fisiología de la generación del 10 años (7). El 90% de la producción nacio- rendimiento, permitirá desarrollar planes nal se concentra en el área centro-sur de la de mejoramiento genético y manejo agro- provincia de Córdoba donde, además, se nómico que estabilicen los rendimientos lleva a cabo su procesamiento industrial y y reduzcan los riesgos. Es frecuente que comercialización, conformando así una ca- el cultivo de maní se encuentre, durante dena agroalimentaria con características algún período de su ciclo de crecimiento, de economía regional. La productividad sujeto a condiciones de estrés causado

218 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 principalmente por factores abióticos, los te el ciclo se realizaron prácticas culturales cuales se hacen más evidentes cuando el para mantener el cultivo sin estrés provoca- cultivo se encuentra en la fase reproduc- do por insectos, malezas y enfermedades. tiva (formación y comienzo de llenado de Luego de identificado el inicio de forma- frutos) (2, 5). ción de frutos (etapa R3), se aplicaron tra- Durante el crecimiento y desarrollo del tamientos de sombra con una malla comer- maní un estrés lumínico o hídrico pue- cial de 85% de exclusión de luz en períodos de causar grandes reducciones en el cre- consecutivos de 10 días cada uno, 3 para cimiento (2, 6) y la partición de biomasa Granoleico (GS1, GS2 y GS3), 2 para Utre del cultivo (2, 3). Cortos períodos de estrés (US1 y US2) (Figura 1) y un control (sin som- (de hasta 10 días de duración) durante las bra) para cada cultivar, los que se asigna- etapas de definición del número y peso de ron a un diseño de bloques al azar con tres frutos pueden producir pérdidas de rendi- repeticiones. Cumplidos los períodos de miento (del 12 al 20%) y disminución de la sombreado, se tomaron muestras de cinco calidad comercial (granometría) del culti- plantas en competencia perfecta por trata- vo de maní (2, 8). Estudios del efecto del miento y repetición a intervalos regulares sombreo aplicados en diferentes etapas de 10 a 13 días, donde se midió la materia del período vegetativo y reproductivo so- seca acumulada por órgano de la planta bre los procesos fisiológicos que determi- (hojas, tallos, frutos y semillas) y se calcula- nan el rendimiento del maní, encontraron ron las tasas de crecimiento y la partición. cambios en la partición de biomasa, la tasa Al momento de cosecha (R8), se cuantifica- de crecimiento vegetativo y reproductivo, ron los componentes del rendimiento y la el número final de frutos maduros y el calidad comercial del producto. rendimiento (3, 8). El objetivo de este trabajo fue evaluar el efecto del sombreo durante el periodo de

definición del número y peso de frutos, so- planta

bre el crecimiento, partición, rendimiento por y sus componentes y la calidad comercial

frutos

(granometría) en dos genotipos de maní de

de diferente longitud de ciclo y grado de (g) indeterminación.

peso

o y MATERIALES Y MÉTODOS

Númer Se sembraron dos cultivares, Granoleico (G)

tipo virginia runner de 155 días de ciclo y planta

Utre (U) tipo español de 135 días de ciclo, por el 08/10/2010 en el Campo Experimental de

frutos

FAV-UNRC, Río Cuarto, Córdoba (33° 07´LS, de

64° 14´LW y 421 msnm), sobre un suelo (g) Hapludol típico de textura franca arenosa

peso

fina. El cultivo se desarrolló sin restricción o y hídrica, para esto recibió periódicamente riegos complementarios mediante un siste- Númer ma por goteo, con el objeto de mantener el nivel de agua útil en el suelo (0-100 cm) Figura 1. Evolución del número y peso de frutos para los cultivares de maní Utre (U) y Granoleico por encima del 60% desde la siembra hasta (G) en función del tiempo después de la siembra. la madurez de cosecha (R8) (1). Las semillas (Adaptado de Morla et al. (5). Las líneas horizontales fueron desinfectadas e inoculadas. Duran- representan los períodos de sombreo.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 219 Las variables fueron sometidas a análi- 2B), como los resultados encontrados por sis estadísticos para detectar diferencias Hang et al. (3) en un estudio con trata- significativas mediante ANAVA y compa- mientos de sombreo de intensidad y dura- raciones múltiples según test de Fisher ción variable. (a<0,05) empleando el programa estadís- Después de superado el estrés por som- tico INFOSTAT Versión 2011 (4). breo se produjo un aumento de la par- tición de biomasa a hojas como una RESULTADOS Y DISCUSIÓN estrategia del cultivo para recuperar rápi- damente el aparato fotosintético (Figura La biomasa total y reproductiva acumula- 3), como lo describieron Rao y Mitra (6) en da al final del ciclo disminuyó por efecto plantas crecidas bajo sombra, las que pre- del sombreo en ambos cultivares, obser- sentaron mayor desarrollo de hojas y altu- vándose una detención del crecimiento ra del cultivo. Por su parte, Hang et al. (3) en todos los tratamientos mientras estu- observaron un aumento en el contenido vieron bajo la sombra (Figura 2A). Supe- de clorofila luego de finalizado el estrés, rado el estrés, el crecimiento continuó a efecto al que podría estar relacionado el tasas similares o algo inferiores, al testigo, cambio de coloración de las hojas obser- siendo la biomasa total acumulada al fi- vado en este trabajo (datos no presenta- nal inferior en todos los tratamientos con dos). El aumento de biomasa foliar poste- disminuciones de 13 y 20% en US1 y US2 rior al estrés fue mayor en los sombreos y de 12, 18 y 35% en GS1, GS2 y GS3, res- tempranos (US1 y GS1) iniciados en R3 y pecto a los testigos (U y G, respectivamen- disminuyó en los posteriores, posiblemen- te). Una tendencia similar se observó en la te porque éstos últimos coincidieron con producción de biomasa de frutos (Figura la etapa de frutos en formación (R4-R5) y

Figura 2. Biomasa total aérea (A) y de frutos (B) de los cultivares de maní Granoleico y Utre en los trata- mientos control y de sombreo en función del tiempo después de la siembra.

220 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Figura 3. Coeficientes de partición de biomasa vegetativa (A) y de frutos (B) de los cultivares de maní Gra- noleico y Utre en los tratamientos control y de sombreo en función del tiempo después de la siembra. la planta direccionó la biomasa para su lle- es mayor al final de la misma (tratamien- nado. Así, durante los tratamientos US1 y tos GS3 y US2). GS1 no hubo partición hacia los frutos, en Los componentes indirectos del rendi- cambio en US2, GS2 y GS3 ésta fue igual o miento, como porcentaje de frutos madu- mayor que en los controles, evidenciando ros y número de semillas por fruto, no difi- con ello la fuerza de los destinos sobre el rieron entre tratamientos comportándose patrón de partición de biomasa, tal como como variables estables durante los perío- lo hallado por Cerioni (2) y Hang et al. (3) dos de estrés. Mientras que, por el contra- luego de superado momentos de estrés rio, los componentes directos presentaron aplicados en diferentes etapas del período una alta correlación con el rendimiento, reproductivo. número de frutos (R2: 0,85; p<0,0001) y El rendimiento de frutos disminuyó en peso de frutos (R2: 0,57; p<0,05). Este úl- respuesta a la sombra 14, 22 y 33% para timo, se redujo significativamente en to- GS1, GS2 y GS3; y un 17 y 34% en US1 y dos los tratamientos siendo mayor la dis- US2 respecto a los testigos, que rindieron minución en los periodos de sombreo más 8.494 (G) y 6.143 kg/ha (U) (Figura 4); en tardíos. El número de frutos disminuyó, coincidencia con Williams (8), Hang et al. en promedio de ambos cultivares, un 11% (3) y Rao y Mitra (6), quienes identificaron por efecto del sombreo aunque esa dife- la etapa de formación e inicio de llenado rencia no fue significativa (Cuadro 1). Esta (R3-R6 (1)) como la más susceptible al es- tendencia también fue observada en otros trés. Pero en este trabajo se encontró, ade- trabajos que analizaron etapas del cultivo más, que esa sensibilidad al sombreo no es similares a las evaluadas en este estudio uniforme durante toda esa etapa sino que (3, 6, 8).

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 221 Cuadro 1. Resultados del ANAVA aplicado a los componentes directos e indirectos del rendimiento de los cultivares de maní Granoleico y Utre en los tratamientos de sombreo y sus respectivos controles.

* Medias con letras mayúsculas (G) y minúsculas (U) iguales en columnas, no son significativamente dife- rentes entre sí. ††† p<0,001; †† p<0,01; † p<0,05; NS no significativo (LSD Fisher).

Los pesos individuales de frutos y semi- CONCLUSIONES llas disminuyeron, en promedio, 15% (p<0,001 y p<0,05 en Granoleico y Utre, El rendimiento del cultivo de maní presen- respectivamente), afectando el rendimien- tó sensibilidad al estrés lumínico causado to del cultivo y su calidad comercial. Así, el por sombreo durante los momentos de rendimiento confitería fue 78, 72 y 69% definición del número y peso de los frutos para GS1, GS2 y GS3 y 71 y 65% para US1 (desde R3 a R6), con una mayor magnitud y US2; mientras que los testigos produje- del efecto en la etapa final del periodo ron 87 (G) y 79% (U) de maní tipo confite- de evaluación (R5-R6), siendo el peso de ría (Figura 5). Otra variable de calidad, la los frutos la variable que más disminuyó, relación grano/caja (g/g) fue ligeramente afectando a su vez la calidad comercial superior cuando el estrés se aplicó al final (granometría). del periodo en estudio de ambos cultiva- El porcentaje de partición de biomasa res (0,82 y 0,79 para GS3 y US2, respectiva- cambió de manera diferencial según los mente), pero sin diferir significativamente momentos de aplicación del estrés; au- (p=0,24) de los otros tratamientos (U: 0,77; mentando hacia hojas y deteniendo el US1: 0,78; G: 0,8; GS1: 0,81; GS2: 0,79). crecimiento reproductivo para reponer el aparato fotosintético una vez restablecida las condiciones normales, en los momentos de sombreo tempranos; y viceversa, a me- dida que el número y tamaño de los frutos

Figura 4. Rendimiento de frutos de los cultivares de maní Granoleico y Utre en el control y trata- mientos de sombreo. Letras mayúsculas y minúsculas distintas indican diferencias significativas entre tratamiento testigo Figura 5. Rendimiento de maní confitería de los y sombreo en Granoleido y Utre, respectivamente cultivares Granoleico y Utre en el control y trata- (LSD Fisher, p<0,05). mientos de sombreo.

222 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 (destino de fotoasimilados) fue creciendo, FCA, Universidad Nacional de Córdoba, en respuesta a lo cual el cultivo priorizó Argentina. URL http://www.infostat.com. el llenado de los frutos ya formados para ar. garantizar un mínimo de producción. 5. Morla F.D., Giayetto O., Fernández E.M., and Cerioni G.A. 2011. Peanut pod pro- duction in genotypes with different BIBLIOGRAFÍA CITADA growth habit and branching pattern. Bio- cell. 35 ( 2). (en prensa). 1. Boote K.J. 1982. Growth stages of peanut 6. Rao L.J., and Mitra B.N. 1988. Growth and (Arachis hypogaea L.). Peanut Science yield of peanuts as influenced by degree 9(1): 35-40. and duration of shading. J. Agron. Crop 2. Cerioni G.A. 2003. Déficit hídrico en las Science 160(4): 260-265. etapas reproductivas del maní (Arachis 7. SIIA. 2011. Sistema Integrado de Infor- hypogaea L.), su influencia sobre el cre- mación Agropecuaria. Series temporales cimiento, desarrollo, rendimiento y cali- relacionadas a cultivos, ganadería y agro- dad. Tesis MSc. FAV-Universidad Nacional meteorología. In: http://www.siia.gov.ar/. de Río Cuarto. 95 pp. Consultado el 15/06/2011. 3. Hang A.N., McCloud D.E., Boote K.J., 8. Williams J.H. 1979. The influence of sha- and Duncan W.G. 1984. Shade effects on ding during the pre-flowering phase of growth, partitioning, and yield compo- groundnut on subsequent growth and nents of peanuts. Crop Science 24(1): 109- development. Rhod. J. agric. Res. 17: 31- 115. 40. 4. InfoStat versión 2011. Grupo InfoStat,

Viabilidad del clavo de maní: respuesta a la sequía e impedancia al enclavado

Ricardo J. Haro1, Anita Mantese2 y María E. Otegui3 1- INTA, EEA Manfredi, Córdoba. 2- Departamento de Recursos Naturales y Ambiente, Facultad de Agronomía-Universidad de Buenos Aires (FAUBA). 3- Instituto de Investi- gaciones Fisiológicas y Ecológicas Vinculadas a la Agricultura del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas, FAUBA. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN desecamiento de la capa superficial del mismo (2). Esto último produce reduccio- El 80% de la producción mundial de maní nes del rendimiento que responden prin- se realiza en regiones con lluvias estacio- cipalmente a disminuciones en el número nales, las cuales son escasas y de ocurrencia de granos provocadas por la merma en la errática (14), por lo cual la sequía es consi- fijación de vainas (7). Estudios previos de- derada el principal factor limitante de los muestran comportamientos contrastantes rendimientos (3). El déficit hídrico genera entre cultivares en el número de vainas fi- efectos negativos propios de la sequía per jado ante impedancia al enclavado (4, 13), se, pero además se adiciona la impedancia lo cual sugiere variabilidad genotípica en al enclavado resultante de la imposibilidad este rasgo. Sin embargo, aunque se sabe de penetración del clavo en el suelo por que la sequía reduce el número de clavos

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 223 que penetra en el suelo (13), los estudios vado, pero existen diferencias genotípicas no brindan información precisa sobre el en los parámetros de la relación (e.g. lapso decaimiento de la capacidad reproductiva sin decaimiento de la viabilidad y tasa de (i.e. cuaje) hasta que el rehumedecimiento decaimiento superado el lapso anterior) y, del suelo permite la penetración. Si bien el (ii) a medida que los períodos de impedan- contenido hídrico en la zona de enclavado cia al enclavado son más prolongados se es un factor importante que afecta la pe- producen cambios en la histología de los netración de los clavos en el suelo (14), el óvulos fecundados de los clavos, que final- estatus hídrico de las plantas es un factor mente provocan la pérdida de viabilidad adicional que no debe ser ignorado ante del clavo (i.e. capacidad de generar vaina). la impedancia al enclavado, pues puede transmitir al clavo la capacidad de vencer MATERIALES Y MÉTODOS la resistencia que le opone el suelo y así incrementar el número de granos fijado. Manejo del experimento y diseño experi- Cuando la ausencia de lluvias es prolon- mental gada y existe impedancia al enclavado, los El experimento se realizó durante la cam- clavos permanecen sobre la superficie del paña 2005/06 en la EEA Manfredi del INTA. suelo hasta que lluvias posteriores permi- El estudio incluyó la combinación factorial ten su penetración. Todo indica que el cla- de dos cultivares (Cv), dos disponibilidades vo mantiene su viabilidad ante períodos hídricas (DH) y 10 períodos de impedancia de impedancia, aunque por tiempo limita- (PIn). La siembra y la cosecha se realizaron do. En la actualidad, sólo existen estudios el 10 de noviembre y 26 de abril, respecti- exploratorios que advierten sobre la dese- vamente. Se cultivaron plantas de las varie- cación del suelo y sus efectos negativos so- dades Florman y ASEM en macetas a razón bre el enclavado (1, 11). Sin embargo, en de una planta por maceta. Los tratamien- ningún caso se analizó la capacidad de los tos se distribuyeron en un diseño en par- clavos de mantener su viabilidad ante pe- celas divididas con tres repeticiones (i.e. 3 ríodos de impedancia, la cual se convierte macetas por cada combinación de Cv × DH en una característica importante para am- × PI). La disponibilidad hídrica se ubicó en bientes con lluvias erráticas y con conse- la parcela principal y todas las combinacio- cuentes períodos de desecación superficial nes de Cv × PI en la subparcela. Se evaluó del suelo, y que debe ser considerada en un total de 10 PI (7, 11, 15, 19, 22, 26, 29, planes de mejoramiento en la búsqueda 32, 36 y 41 días a partir de la identifica- de nuevos genotipos aptos para esos am- ción de cada clavo). El inicio de la forma- bientes. Para responder a este interrogan- ción de un clavo se definió cuando alcanzó te se realizó un experimento cuyo objetivo una longitud de 5 mm. En cada planta, los fue establecer la probabilidad de genera- clavos para el estudio se identificaron su- ción de vainas en clavos expuestos a dife- jetando sobre la rama un marcador plásti- rentes períodos de impedancia al encla- co contiguo a cada clavo. Los períodos de vado y regímenes hídricos contrastantes, impedancia artificial al enclavado fueron y determinar su relación con los cambios impuestos a partir del momento en que histológicos observados. Las hipótesis pro- se identificaron los clavos, para lo cual se puestas sostienen que, (i) la probabilidad colocó una lámina plástica entre las ramas de generación de vainas a partir de clavos y el suelo. Al finalizar cada período de im- sujetos a períodos variables de impedan- pedancia predeterminado, la lámina plás- cia es afectada por la condición hídrica de tica fue extraída de la maceta para per- la planta. Consecuentemente, la pérdida mitir que los clavos ingresen en el suelo. de viabilidad del clavo (i.e. capacidad de La restricción hídrica se logró mediante la generar vainas) guardará relación directa colocación de un túnel de polietileno so- con la duración de la impedancia al encla- bre las plantas exclusivamente durante los

224 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 períodos de lluvia para evitar el ingreso de Análisis estadístico agua al suelo. Este tratamiento se impu- Se analizó simultáneamente el efecto del so sólo durante el período de imposición cultivar, de la disponibilidad hídrica y del de impedancia (i.e. pre y post-impedancia período de impedancia a través de un mo- las plantas crecieron sin restricción hídri- delo lineal generalizado (GML, modelo de ca), y consistió en la supresión del riego regresión logística) con componente alea- por períodos de ca. 4 días consecutivos, toria Binomial y función de enlace Logit adicionándose agua por debajo de la lá- (10). Para ajustar el modelo de regresión mina plástica de cada maceta al término logística, se consideró probabilidad de de cada período. Durante la supresión del éxito a la “probabilidad de generación de riego, el agua almacenada en la maceta vaina”, codificando la misma con valor de disminuyó progresivamente hasta alcan- uno (1). Las variables regresoras cultivar zar niveles cercanos al punto de marchitez y disponibilidad hídrica fueron codifica- permanente y provocar síntomas severos das con una función indicadora, donde el de marchitamiento en las plantas. Para cultivar ASEM y la condición de riego fue- cuantificar el contenido hídrico de cada ron representados con uno, mientras que maceta se empleó un sensor (ECH2O Die- el cultivar Florman y la restricción hídrica lectric Aquameter, Decagon Devices, Pull- (sequía) fueron codificados con cero. El man WA, USA) conectado a un lector de modelo ajustado para la probabilidad de milivoltios (Cavadevices, Argentina). Las generación de vaina (Ecuación 1) fue: plantas bajo riego crecieron sin limitantes hídricas durante todo el ciclo del cultivo. Como indicador indirecto de la transpira- dónde (x) es la probabilidad de generar ción se midió la temperatura foliar utili- vaina y 1- (x) es la probabilidad de no zando un termómetro infrarrojo Horiba IT generar vaina. La probabilidad de éxito 330. La diferencia de temperatura entre ( (x))derivada del Logit se computó según las plantas y el aire se empleó para calcu- la Ecuación (2): lar los valores del GDE (grado de estrés en ºC) sugerido por Jackson et al. (5).

Histología de clavos y generación de vai- nas RESULTADOS Al término de cada período de impedan- cia se cosecharon clavos que se conserva- Disponibilidad hídrica y grado diario de ron en una solución de FAA (formol, ácido estrés acético, alcohol y agua destilada) para su Plantas creciendo bajo riego dispusieron fijación y posterior descripción histológi- siempre de al menos 75% de agua transpi- ca. Se obtuvieron cortes transversales y rable, mientras que aquéllas que crecieron longitudinales con un micrótomo rotati- bajo sequía presentaron una disminución vo de Minot y, los preparados se tiñeron gradual del de agua transpirable desde con la doble coloración de safranina-fast 75% a 10 - 15% entre el inicio y finaliza- green y se montaron en bálsamo de Cana- ción de cada subperíodo de supresión de dá para fotografiado con microscopio. Si- riegos. El GDE de las plantas reflejó di- multáneamente, se aplicaron riegos, hasta ferencias significativas (p< 0,001) entre la cosecha, al lote de plantas para permi- condiciones hídricas, evidenciándose un tir la penetración de clavos en el suelo. A fuerte incremento en plantas bajo sequía cosecha, se observó si se generaron vainas respecto a aquellas bajo riego. Ante una a partir de los clavos identificados previa- misma condición hídrica no se registraron mente a la imposición de los tratamientos diferencias significativas entre cultivares de impedancia. para este índice.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 225 Producción de vainas El cultivar ASEM presentó una probabili- dad significativamente (p= 0,0232) mayor de generar vainas respecto de Florman, ante la impedancia. La condición hídrica y los períodos de impedancia también afec- taron significativamente la generación de vainas (p= 0,0012 y p< 0,0001, respec- tivamente), existiendo una menor pro- babilidad bajo sequía y a medida que la duración de los períodos de impedancia incrementaron. El modelo ajustado para la probabilidad de generación de vainas (Fi- Figura 1. Probabilidad de generación de vainas a gura 1) determinó que, (i) clavos creciendo través de períodos de impedancia al enclavado en bajo sequía perdieron más rápidamente los cultivares de maní Florman (círculos) y ASEM la máxima probabilidad (Probabilidad= (cuadrados), bajo riego (negros y líneas llenas) y se- 1) de generación de vainas que aquellos quía impuesta (blancos y líneas cortadas). que crecieron sin restricción hídrica, (ii) la disminución al 50% en la probabilidad de

Figura 2. Secciones de cortes longitudinales (a, b, c) y transversales (d, e, f) de clavos de maní. Las figuras corresponden a diferentes momentos del desarrollo del estudio; imposición de la restricción al enclavado y período de maxima probabilidad de generación de vainas (a y d), al 50% de probabilidad de generación de vainas (b y e), y a mínima o nula probabilidad de generación de vainas (ca. 33 días de impedancia) (c y f). Abreviaturas: oa, óvulo apical; ob, óvulo basal; e, epidermis; se, saco embrionario; i, tegumento interno; mi, meristema intercalar; o, óvulo; pa, parénquima; t, células con taninos; hv, hacecillo vascular. Barras en (a), (b) y (c) = 180 μm; barras en (d), (e) y (f) = 110 μm.

226 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 generación de vainas entre condiciones hí- go y sequía, respectivamente, y hasta ca. dricas se manifestó con diferencia de ca. 33 días de impedancia impuesta, se pro- 8 días y, (iii) luego de ca. 33 días de im- dujeron cambios paulatinos en el clavo (Fi- pedancia, todos los tratamientos manifes- guras 2b y e) asociados a respuestas nega- taron una mínima o nula probabilidad de tivas sobre la generación de vainas (Figura generación de vainas. 1). Los tejidos presentaron inicialmente desorganización celular, continuando con Histología de clavos atrofia y muerte de las mismas; en tanto Al momento de imposición de la impedan- que los óvulos manifestaron un deterio- cia al enclavado, la porción apical del clavo ro que implicó inicialmente desaparición presentó una histología característica del del óvulo apical y más tarde deterioro del estado ontogénico en que se encontraba óvulo basal. Finalmente, a partir de ca. 33 el cultivo (Figuras 2a y d). Esta constitución días de imposición de impedancia al encla- histológica se mantuvo, además, durante vado, la viabilidad de los clavos minimizó el período en que los clavos mantuvieron hasta manifestar una nula probabilidad la máxima probabilidad de generación de de generación de vainas (Figura 1). Este vainas. Los clavos estaban constituidos de período involucró atrofia y muerte gene- (i) una delgada capa de células epidérmi- ralizada de todos los tejidos, resultando cas hacia el exterior, (ii) ca. 15 filas de cé- en masa de tejido no diferenciada (Figuras lulas parenquimáticas hacia el interior del 2c y f). Además, no se observaron restos clavo y con ubicación adyacente a la epi- de óvulos fecundados preexistentes. dermis, (iii) 4-5 hileras de células parenqui- máticas de forma rectangular adyacentes DISCUSIÓN a la cavidad del ovario, (iv) dos sacos em- brionarios con sus óvulos fecundados (em- Se observaron cambios en los tejidos de briones) en la parte centro-inferior del cla- los clavos y en su capacidad de generación vo, (v) un meristema intercalar en la parte de vainas cuando se impidió el enclavado basal y central del clavo, (vi) células endos- a través de los períodos de impedancia. permadas adyacentes a cada óvulo, y (vii) Estas respuestas sucedieron bajo ambas 11-13 hacecillos vasculares, con disposición condiciones hídricas y para ambos cultiva- radial con xilema hacia el interior y con res, pero la condición hídrica condicionó la floema hacia el exterior, acompañados de oportunidad de ocurrencia de las mismas. fibras pertenecientes al tejido esclerenqui- En plantas bajo sequía aumentó el GDE, mático. Alrededor del cilindro vascular se indicando disminución en la transpiración establecieron dos a tres capas de células del canopeo por intensidad del estrés hí- parenquimáticas y algunas células con con- drico, y manifestaron más tempranamen- tenido de taninos. A medida que los días te cambios negativos en la histología del de impedancia incrementaron, cambios en clavo y en la probabilidad de generación los tejidos y en el desarrollo de los óvulos de vainas. En consecuencia, la disponibili- fecundados repercutieron negativamente dad hídrica fue un factor adicional a los sobre sus viabilidades y, en consecuencia, períodos de impedancia que incidió sobre sobre la probabilidad de generación de el momento de expresión de las diversas vainas. Dichos cambios fueron similares respuestas manifestadas por los clavos de bajo ambas condiciones hídricas (i.e. riego maní. Este estudio demuestra que el clavo y sequía), pero se manifestaron más pre- de maní debe ser considerado una estruc- cozmente en clavos creciendo bajo sequía tura con cierto grado de tolerancia a la im- que en aquellos creciendo bajo riego, y en pedancia, permitiendo resistir determina- clavos del cultivar Florman respecto a los dos períodos de ausencias de lluvias hasta del cultivar ASEM. A partir de ca. 15 y 11 que la ocurrencia de las mismas permitan días de impedancia al enclavado bajo rie- su ingreso en el suelo. El período de máxi-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 227 ma viabilidad de los clavos demostró que babilidad= 1) registrada entre condiciones esta estructura tolera períodos de restric- hídricas advierte del efecto negativo que ción a la penetración en el suelo y, además, produce la sequía sobre la viabilidad de los períodos de sequía sin que su capacidad clavos y, en consecuencia, sobre su capaci- de generar vainas sea afectada. Cuando se dad de generación de vainas. impuso la impedancia, los clavos manifes- taron mayor desarrollo del endosperma CONCLUSIONES respecto al de los óvulos, comportamien- to que fue revertido en el tiempo. A su Los clavos de maní demostraron ser estruc- vez, existió mayor crecimiento del óvulo turas con cierto grado de tolerancia a la im- basal respecto al óvulo apical. Los com- pedancia y a la sequía, lo cual se expresó portamientos observados coincidieron mediante la producción de vainas por cla- con los de estudios previos (8, 10) en los vos que fueron expuestos a períodos de im- cuales se determinó que el endosperma y pedancia y condiciones hídricas contrastan- el óvulo basal inician sus crecimientos 1 - tes. La tolerancia del clavo a la impedancia 2 días más temprano que el embrión y el fue afectada por la condición hídrica de óvulo apical, respectivamente. En este es- la planta, pues clavos sujetos a sequía ma- tudio se verificó que a través del tiempo nifestaron más tempranamente cambios se produje la degeneración de las células negativos en su histología y estructuras in- endospermadas y un marcado crecimiento ternas que clavos creciendo bajo riego, lo de los embriones u óvulos fecundados en que repercutió sobre sus probabilidades de los sacos embrionarios (9). Además, se ob- generación de vainas. En general, a medi- servó una disposición celular ordenada en da que los períodos de impedancia se in- la epidermis, en la capa de células paren- crementaron, los tejidos de los clavos mani- quimáticas, en el meristema intercalar y festaron desorden celular, atrofia y muerte en los hacecillos vasculares (12). A medida de las células y, en algunos tejidos, desapa- que los períodos de impedancia y la dura- rición de masa celular. Una situación simi- ción de la sequía fueron incrementándose, lar se registró con los óvulos fecundados, se produjeron cambios en la histología y ya que a medida que transcurrió el tiempo en las estructuras del clavo que repercu- se observó su deterioro, produciéndose la tieron negativamente sobre su probabili- desaparición del óvulo apical en primera dad de generación de vainas. Cuando esto instancia y finalmente la desaparición del sucedió, el desarrollo de los sacos embrio- óvulo basal. Los cambios descritos sucedie- narios manifestó deterioro de los embrio- ron de manera paulatina y se tradujeron en nes, en primera instancia el apical (óvulo una lenta y constante pérdida de viabilidad apical) y luego el basal (óvulo basal). En de los óvulos fecundados, lo que se expre- igual sentido, las células endospermadas, só mediante la pérdida de probabilidad de la epidermis, el parénquima, el meristema generación de vainas. intercalar y los hacecillos vasculares, tam- bién sufrieron alteraciones que implicaron BIBLIOGRAFÍA CITADA deterioro de los tejidos. Las respuestas descritas se acentuaron a través del tiem- 1. Collino D.J., Dardanelli J.L., Sereno R., and po, traduciéndose en desorganización y Racca, R.W. 2001. Physiological responses muerte celular generalizada en los tejidos of argentine peanut varieties to water y desaparición de los embriones preexis- stress. Light interception, radiation use tentes, lo cual indicó que existió un dete- efficiency and partitioning of assimilates. rioro general del clavo y, por consecuencia, Field Crops Research 70: 177-184. imposibilidad de generación de vainas. La 2. Coolbear P. 1994. Reproductive biolo- diferencia temporal en los días de máxima gy and development. In: The groundnut crop. A scientific basis for improvement probabilidad de generación de vainas (Pro-

228 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 (J. Smartt, ed.). Chapman and Hall, Lon- ture megagametophyte through heart- don, U.K. pp. 138-172. shaped embryo. Botanical Gazette 148: 3. Gibbons R.W. 1978. Adaptation and uti- 156-164. lization of groundnuts in different en- 9. Periasamy, K., and Sampoornam, C. 1984. vironments and farming systems. In: The morphology and anatomy of ovule Advances in Legume Science (R.J. Sum- and fruit development in Arachis hypo- merfield y A.H. Bunting, eds.), Royal gaea L. Annals of 53: 399-411. Botanic Gardens, Rixhmond, Surrey, En- 10. Smith B.W. 1956. Arachis hypogaea L. gland. pp. 483-493. Embryogeny and the effect of peg elon- 4. Harris D., Mathews R.B., Nageswara Rao gation upon embryo and endosperm R.C., and Williams J.H. 1988. The physio- growth. American Journal of Botany 43: logical basis for yield between four ge- 233-240. notypes of groundnut (Arachis hypogaea 11. Underwood C.V., Taylor H.M., and Hove- L.) in response to drought. III Develop- land, C.S. 1971. Soil physical factors affec- mental processes. Experimental Agricul- ting peanut pod development. Agronomy tural 24: 215-226. Journal 63: 953-954. 5. Jackson R.J., Reginato R.D., and Idso S.B., 12. Webb A.J., and Hansen A.P. 1989. Histo- 1977. Wheat canopy temperature: a prac- logical changes of the peanut (Arachis tical tool for evaluating water require- hypogaea L.) gynophore and fruit surface ments. Water Resource Res. 13: 651-656. during development, and their potential 6. McCullagh P., and Nelder J.A. 1989. Ge- significance for nutrient uptake. Annals neralized linear models, 2nd Ed. London: of Botany 64: 351-357. Chapman and Hall. 13. Wright G.C. 1989. Effect of pod zone mois- 7. Ono Y., Nakayama K., and Kubota, M. ture content on reproductive growth in 1974. The effects of soil temperature and three cultivars of peanut (Arachis hypo- soil moisture in podding zone on pod de- gaea L.). Plant and Soil 116: 111-114. velopment of peanuts. Crop Science So- 14. Wright G.C., and Nageswara Rao, R.C. ciety of Japan Proceedings 43: 247-251. 1994. Groundnut water relations. In: The 8. Patte H.E., and Mohapatra S.C. 1987. groundnut crop. A scientific basis for im- Anatomical changes during ontogeny of provement (J. Smartt, ed.). Chapman and peanut (Arachis hypogaea L.) fruit: ma- Hall, London, U.K. pp. 281-335.

Efecto del régimen hídrico y la impedancia al enclavado sobre la eficiencia en el uso del agua del cultivo de maní

Ricardo J. Haro1, Julio L. Dardanelli1, Daniel J. Collino2 y María E. Otegui3 1- INTA, EEA Manfredi, Córdoba. 2- INTA CIAP, Córdoba. 3- Instituto de Investigaciones Fisiológicas y Ecológicas Vinculadas a la Agricultura del Consejo Nacional de Investiga- ciones Científicas y Tecnológicas (CONICET), Facultad de Agronomía, Universidad de Buenos Aires. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN miento es incrementar el rendimiento de granos por unidad de agua disponible (1), En la provincia de Córdoba, principal re- como resultado del producto entre el agua gión manisera de la Argentina, los déficits transpirada por el cultivo, la eficiencia en hídricos son frecuentes e impredecibles el uso del agua para producir biomasa durante el período de fijación de vainas, (EUAB) y el índice de cosecha (IC) (11). El in- pudiendo afectar fuertemente el rendi- cremento en la EUAB es uno de los rasgos miento del cultivo (4). Allí, un importan- críticos para que un cultivar sea cataloga- te objetivo de los programas de mejora- do como “tolerante a la sequía” (5). Se ha

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 229 determinado variabilidad genotípica en la bajo riego fueron distribuidas al azar en EUAB a nivel de cultivo (9,13), pero aún no ubicaciones adyacentes a las parcelas de se- se han analizados los efectos que produci- quía. El diseño experimental del Exp1 fue de ría la impedancia al enclavado producida parcelas sub-subdivididas, donde la dispo- por sequía sobre aquella. Esta restricción nibilidad hídrica constituyó la parcela prin- generada por incrementos en la resisten- cipal, las fechas de siembra integraron la cia del suelo (3, 8) y el bajo estatus hídrico subparcela y los cultivares constituyeron la de la planta (8) es considerada un factor sub-subparcela. En el Exp2, la disponibilidad adicional a la sequía per se que controla hídrica fue la parcela principal y los cultiva- la fijación de granos en maní. Collino et res conformaron las subparcelas. Todos los al. (3) determinaron diferencias entre cul- experimentos contaron cuatro repeticiones tivares en el enclavado frente a aumentos por tratamiento. Las parcelas a las que se de la resistencia del suelo, lo que redun- les impuso sequía recibieron: (i) riego hasta dó en variabilidad genotípica en la EUAV. R1 (2) y luego supresión del mismo (Exp1), y No obstante, aún se carece de evidencias (ii) riego parcial (ca. 44% de la cantidad de que esclarezcan la contribución de cada agua aplicada a las parcelas regadas) hasta factor (régimen hídrico, enclavado varia- R5, seguido de la aplicación de pequeñas lá- ble promovido por la resistencia superfi- minas de riego (ca. 5 mm/día tres veces por cial del suelo y cultivar) sobre la variación semana) entre R5 y Cosecha para minimizar en la EUAB y EUAV. Ante esto se llevaron los efectos negativos de la resistencia del a cabo dos experimentos a campo donde suelo sobre el enclavado (Exp2). el cultivo fue expuesto a niveles superfi- ciales y subsuperficiales de desecación del Mediciones y análisis estadístico suelo generados por la combinación de Se midió el contenido de humedad volumé- (i) regímenes hídricos contrastantes, y (ii) trica a intervalos de 20 cm mediante una demandas evaporativas variables resultan- sonda de neutrones Troxler 4301 (Troxler tes de diferentes fechas de siembras. Estas Electronic Laboratorios, USA). Las medicio- condiciones promovieron un amplio rango nes comenzaron a la siembra y continuaron de enclavado sobre los cultivares Florman cada 15-20 días hasta la cosecha. El consu- INTA y ASEM 485 INTA. mo (C, en mm) fue calculado a partir del balance de agua entre mediciones sucesi- MATERIALES Y MÉTODOS vas, empleándose la ecuación C = Pef + DA + RA, donde Pef es la precipitación efecti- Manejo del cultivo, tratamientos y diseño va, calculada de la precipitación diaria (P) experimental como 2,43 x P0,667 (6), DA es la variación de Se realizaron experimentos durante (i) agua almacenada dentro del perfil del sue- 2002-2003 en IFFIVE INTA, y (ii) 2005-2006 lo, y RA es el riego aplicado. Todas estas en la Estación Experimental Manfredi de variables están expresadas en mm. Simultá- INTA. Los cultivares Florman y ASEM fueron neamente con las mediciones de humedad sembrados el 17-Oct. y el 29-Nov. de 2002 volumétrica, se realizó cosecha de biomasa (Exp1), y el 14-Nov. de 2005 (Exp2) a una donde se diferenció la biomasa vegetativa densidad de 14 plantas/m2 en hileras a 0,70 (hojas y tallos) de la biomasa reproductiva m. Se dispusieron dos regímenes hídricos: (clavos y vainas), y todas las fracciones fue- (i) riego, donde las parcelas fueron rega- ron secadas a 70°C hasta peso constante. Al das para mantener un contenido de agua momento de la cosecha final, se contó ma- útil superior al 60%, y (ii) sequía impuesta, nualmente el número de vainas con granos donde el aporte de agua por las lluvias fue y el número total de granos, y estos últimos excluido por medio de estructuras móviles. fueron pesados para la determinación del Cada estructura tuvo una dimensión de 6 rendimiento. La biomasa total corregida m de ancho y 12 m de largo y, las parcelas (en g/m2) fue calculada como la suma de la

230 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 biomasa vegetativa y la biomasa reproduc- Rendimiento de granos y sus componentes tiva multiplicada por el factor de corrección El rendimiento de granos varió marcada- de costo energético 1,65 (11). Las EUAB y mente a través de los tratamientos y expe- EUAV (en g/kPa mm) fueron calculadas me- rimentos. La disponibilidad de agua fue el diante la relación entre la biomasa total principal factor que afectó al rendimiento acumulada corregida por costo energético de granos en el Exp1 (p< 0,0001) y promo- y la biomasa de vainas acumulada respecto vió la mayor variación en este rasgo (rango al consumo corregido por déficit de pre- entre 35 - 476 y 55 - 520 g/m2 para Florman y sión de vapor (CDPV). ASEM, respectivamente). La reducción en el Se realizaron regresiones entre variables y rendimiento de granos en las parcelas bajo la significancia de las diferencias entre los sequía en este experimento fue en prome- parámetros de los modelos ajustados fue dio de un 91% para la fecha de siembra 17- evaluada empleando un test-F (12). Oct. y de un 75% para la fecha de siembra 29-Nov. Los efectos de la disponibilidad de RESULTADOS agua sobre el rendimiento de granos en el Exp2 (p< 0,05) fueron menos marcados Agua disponible para la planta y consumo (rango de rendimiento entre 199 y 504 g/ El contenido de agua volumétrica varió mar- m2) y causaron una reducción promedio del cadamente a través de los regímenes hídri- 51% en las parcelas bajo sequía. Las varia- cos y los experimentos. Al inicio del período ciones en el rendimiento de granos fueron de déficit hídrico, las parcelas bajo sequía principalmente explicadas por las variacio- 2 del Exp1 presentaron valores de contenido nes observadas en el número de granos/m de humedad volumétrica próximos a capa- (7,5 veces de incremento del valor máximo cidad de campo en todas las capas del perfil respecto al mínimo, promedio entre cultiva- de suelo, en tanto que las parcelas del Exp2 res) y en una menor medida por las varia- manifestaron una disminución sostenida de ciones en el peso por grano (1,6 veces de la humedad volumétrica desde los estra- incremento del valor máximo respecto al tos superiores a los inferiores del suelo. La mínimo, promedio entre cultivares). variación de almacenaje de agua del suelo fue mayor en Exp1 (224 mm para siembra Producción de biomasa y EUA 17-Oct. y 228 mm para siembra 29-Nov., La sequía redujo la producción de biomasa promedio entre cultivares) que en Exp2 (202 en ambos experimentos. La relación entre mm, promedio entre cultivares). Sin embar- la biomasa total corregida y el CDPV, a par- go, el C medio de las parcelas bajo sequía tir de R1, difirió en general entre regímenes durante los estadios reproductivos fue ma- hídricos, pero se diferenció entre cultivares yor en Exp2 (341 mm, promedio entre culti- en uno sólo de los tres ambientes (riego vares) que en Exp1 (229 mm, promedio en- 29-Nov.) (Figura 1 y Cuadro 1). Modelos tre fechas de siembra y cultivares), debido lineales ajustaron adecuadamente la ma- a que el primero recibió riegos adicionales yoría de los datos, excepto para el cultivar con el objetivo de reducir la resistencia del Florman bajo riego en Exp2 que manifestó suelo en los 15 cm superiores del perfil. El una respuesta curvilínea como indicadora promedio del C acumulado en las parcelas de una declinación de la EUAB, a medida bajo sequía entre R1 y cosecha (266 mm), a que progresó el ciclo del cultivo. Las pen- través de los tratamientos y experimentos, dientes de los modelos lineales ajustados se redujo 53% respecto al de las parcelas representaron las EUAB y fluctuaron entre bajo riego (567 mm). La mayor reducción 6,1 y 6,7 g/kPa mm para los tratamientos en el C (60%) entre condiciones hídricas se de riego, y entre 2,9 y 7,1 g/kPa mm para cuantificó en el Exp1 (229 mm sequía vs 565 los tratamientos de sequía. El mayor ran- mm riego) y la menor (40,4%) en el Exp2 go observado para esta última situación (341 mm sequía vs 572 mm riego). podría ser atribuido a la combinación de

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 231 Figura 1. Relación entre la biomasa total acumulada corregida por costo energético de síntesis y el consumo acumulado de agua corregido por déficit de presión de vapor (CDPV) de los cultivares Florman (círculos) y ASEM (cuadrados) sembrados en (a) 17-Oct. Exp1, (b) 29-Nov. Exp1, y (c) Exp2. Los símbolos negros y las lí- neas llenas representan las parcelas bajo riego, y los símbolos blancos y las líneas cortadas representan las parcelas bajo sequía.

Figura 2. Relación entre la biomasa acumulada de vainas y consumo corregido por déficit de presión de va- por (CDPV) de parcelas bajo riego de los cultivares Florman (círculos y líneas cortadas) y ASEM (cuadrados y líneas llenas) sembradas en (a) 17-Oct. Exp1, (b) 29-Nov. Exp1, y (c) Exp2.

Figura 3. Relación entre la biomasa acumulada de vainas y consumo corregido por déficit de presión de va- por (CDPV) de parcelas bajo sequía de los cultivares Florman (círculos y líneas cortadas) y ASEM (cuadrados y líneas llenas) sembradas en (a) 17-Oct. Exp1, (b) 29-Nov. Exp1, y (c) Exp2.

232 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 1. Modelos ajustados para la respuesta de biomasa total corregida (Figura 1) y de biomasa de vai- nas (Figuras 2 y 3) al consumo corregido por déficit de presión de vapor en dos cultivares de maní creciendo bajo dos disponibilidades hídricas.

la sequía per se (i.e. efectos directos de la (Figura 2 y Cuadro 1). Florman bajo riego sequía) y la impedancia al enclavado (i.e. de fecha de siembra 29-Nov. del Exp1 ajus- efectos indirectos de la sequía). La dismi- tó un modelo cuadrático siendo indicativo nución en la disponibilidad hídrica afectó de una disminución en el tiempo (Figura 2b más severamente a las parcelas bajo sequía y Cuadro 1). La EUAV disminuyó marcada- del Exp1 que a las del Exp2, y también ge- mente bajo sequía del Exp1 respecto a su neró mayor resistencia del suelo a la pene- contraparte de condición de riego, aunque tración de los clavos. Aunque estos efectos esta disminución fue menor en ASEM (ran- son confundidos, se puede deducir que es- go 1,09 - 1,18 g/kPa mm) respecto a Florman tas condiciones pudieron provocar valores (rango 0,73 - 0,74 g/kPa mm). Por lo contra- menores de EUAB en los tratamientos bajo rio, la EUAV se incrementó moderadamente sequía del Exp1 (2,9 y 3,8 g/kPa mm para en el Exp2 respecto a sus contrapartes bajo siembra 17-Oct. y 29-Nov., respectivamen- riego (2,10 g/kPa mm vs 2,67 g/kPa mm te) respecto al tratamiento bajo sequía del como promedio entre variedades para rie- Exp2 (7,1 g/kPa mm). go y sequía, respectivamente), mantenién- La respuesta de la producción de biomasa dose bajo sequía las diferencias entre cul- de vainas al CDPV ajustó a modelos de tipo tivares mencionadas anteriormente (2,51 lineales y reflejó las diferencias entre cul- g/kPa mm y 2,84 g/kPa mm para Florman tivares en EUAV (coeficiente b) (Figuras 2 y y ASEM, respectivamente). Los efectos de 3 y Cuadro 1). ASEM presentó pendientes la resistencia del suelo sobre el enclavado mayores de EUAV respecto de Florman, a sumados al severo estrés hídrico serían las través de un amplio rango de restriccio- responsables de fuertes reducciones sobre nes para el crecimiento de las vainas. Los la EUAV de los tratamientos bajo sequía del valores de EUAV para los tratamientos bajo Exp1 (Figuras 3a vs 2a y 3b vs 2b, y Cuadro riego ajustaron a funciones lineales que 1). Estas reducciones de EUAv no fueron fluctuaron entre 2,13 - 2,61 g/kPa mm para observadas en el Exp2 (con escasa o nula ASEM y 2,08 - 2,25 g/kPa mm para Florman impedancia al enclavado), aunque los efec-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 233 tos de la sequía per se fueron reflejados en mayor control estomático sobre la trans- aproximadamente 50% de reducción sobre piración respecto al ingreso de carbono, la biomasa final de vainas (Figuras 3c vs 2c, se habría combinado con el efecto de la y Cuadro 1). fuerza del destino para determinar la EUAB post-R6. Respuesta de la EUA durante el período de llenado de granos DISCUSIÓN La EUAB post-R6 manifestó una relación consistente con el número de granos me- El rango de EUAB para la mayoría de las diante modelos de tipo lineal bajo am- condiciones bajo riego fue 6,1-6,7 g/kPa bas condiciones hídricas (sequía y riego), mm y fue más variable bajo sequía. Nu- pero que se diferenciaron entre sí por el merosas evidencias indican que el déficit valor de sus ordenadas aunque presenta- hídrico promovió incremento en la EUAB ron pendientes similares (Figura 4 y Cua- (5, 9), respuesta que es atribuida al efec- dro 2). Este comportamiento sugiere que to diferencial del cierre estomático sobre (i) el tamaño del destino (i.e. número de el intercambio gaseoso reduciendo en granos) controló fuertemente a la acti- mayor medida la pérdida de agua que la B vidad de la fuente modulando la EUA captura de CO2 (10). La mayor estimación post-R6 y (ii) otro mecanismo, como un de EUAB se manifestó en las parcelas bajo sequía del Exp2 y la menor en las parcelas Cuadro 2. Modelos ajustados para la respuesta de bajo sequía del Exp1, donde el principal la EUAB post-R6 al número de granos por m2 de dos cultivares de maní creciendo bajo dos condiciones contraste entre estas condiciones fue la re- hídricas en tres ambientes. sistencia superficial del suelo (Exp1 > Exp2, datos no mostrados) que afectó el patrón normal de enclavado y por consecuencia el número final de vainas. La tendencia de una mayor EUAV en ASEM respecto de Florman bajo ambas condiciones hídricas (riego y sequía) puede ser atribuible a di- ferencias en la dinámica de la floración y en la capacidad de enclavado (8). Las di- ferencias entre ASEM y Florman fueron de mayor proporción cuando existió im- pedancia al enclavado, sugiriendo que ante estas condiciones ASEM presentaría mayor capacidad de enclavado ante esta condición adversa. La partición diferencial de los cultivares resultante de característi- cas genotípicas combinadas con diferentes restricciones ambientales determinaron la fuerza del destino (i.e. número de gra- nos), que modula la actividad de la fuente durante la ventana del período de llenado Figura 4. Respuesta de la EUAB post-R6, al número de granos por m2. Los datos corresponden a los cul- de granos (post-R6), y en consecuencia la tivares Florman y ASEM creciendo bajo dos condi- eficiencia del recurso agua. Por ende, el ciones hídricas en tres ambientes. amplio rango en EUAB sería consecuencia Los símbolos negros son para riego y los símbolos del contrastante tamaño de los destinos blancos son para sequía. Los cuadrados correspon- resultante de las variables combinacio- den para la siembra 17-Oct. en Exp1, los círculos co- rresponden a la siembra 29-Nov. en Exp1, y los trián- nes genotipo x ambiente. Sin embargo, gulos corresponden al Exp2. el agrupamiento diferencial de los datos

234 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 de riego y sequía sugiere que el tamaño assess transpiration efficiency of peanut. In: de destino (i.e. número de granos) no es Breeding of Drought Resistant Peanuts (A.W. el único factor que afectó ambas propor- Cruickshank, N.C. Rachaputi, G.C. Wright y S.N. Nigam, eds.). Aciar Proceedings Nº 112, ciones de eficiencias. Para la EUAB post-R6 los comportamientos diferenciales entre Australian Centre for International Agricultu- ral Research, Canberra. pp. 3-9. las parcelas de riego y sequía inducen a 2. Boote K.J. 1982. Growth stages of peanut inferir que además del tamaño del desti- (Arachis hypogaea L.). Peanut Science 9: 35-39. no, otros efectos como el cierre parcial de 3. Collino D.J., Dardanelli J.L., Sereno R., and estomas bajo sequía y por consecuencia el Racca R.W. 2000. Physiological responses control estomático sobre la transpiración e of argentine peanut varieties to water ingreso de carbono están involucrados en stress. Water uptake and water use effi- la EUAB post-R6. ciency. Field Crops Research 68: 133-142. 4. Collino D.J., Racca R.W. y Dardanelli J. CONCLUSIONES 1998. Factores ambientales que condicio- nan el rendimiento del maní tipo runner. In :Manual del Maní, 2nd Ed. (R. Pedelini La producción de biomasa de los cultivos y C. Casini, eds.). Ediciones INTA EEA Man- de maní respondió a las variaciones en el fredi, Córdoba. pp. 14-18. consumo promovidas por la condiciones 5. Craufurd P.Q., Wheeler T.R., Ellis R.H., variables de crecimiento del cultivo (regí- Summerfield R.J., and Williams J.H. 1999. menes hídricos, años, fechas de siembra) Effect of temperature and water deficit y por los cultivares. La leve mayor EUAB se on water use efficiency, carbon isotope obtuvo bajo las parcelas de sequía, pero discrimination and specific leaf area in también la mayor variación en este rasgo Peanut. Crop Science 39: 136-142. producto de la influencia de los niveles de 6. Dardanelli J.L., De la Casa A.C., Ateca impedancia que afectó el número de gra- M.R., Zanvettor R., Núñez Vazquez F. y Salas H.P. 1992. Validación del balance hi- nos. La EUAV fue consistentemente mayor drológico versátil para la rotación sorgo- en ASEM respecto de Florman indistinta- soja bajo dos sistemas de labranza. Revis- mente de la condición hídrica analizada, ta Agropecuaria de INTA Manfredi e INTA reflejando la mayor partición del primero Marcos Juárez 7(2): 20-29. de los cultivares mencionados. La venta- 7. Duncan E.G., McCloud D.E., McGraw R.L., na post-R6 permitió establecer que el nú- and Boote K.J. 1978. Physiological aspects mero de granos contribuyó a explicar las of peanut yield improvement. Crop Scien- variaciones en la EUAB durante el llenado ce 18: 1015-1020. de granos bajo ambas condiciones hídri- 8. Haro R.J., Dardanelli J.L., Otegui M.E., cas, pero bajo sequía otros efectos de- and Collino D.J. 2008. Seed yield determi- nation of peanut crops under water de- bieron estar involucrados. Bajo sequía, la ficit: Soil strength effects on pod set, the variación del número de granos fue prin- source-sink ratio and radiation use effi- cipalmente provocada por diferencias en ciency. Field Crops Research 109: 24-33. el enclavado (producto de la resistencia 9. Hebbar K.B., Sashidhar V.R., Udayakumar del suelo y la condición ambiental) y de M., Devendra R., and Nageswara Rao R.C. las características genotípicas, mientras 1994. A compartive assesment of water que bajo riego esta variación estuvo dada use efficiency in groundnut Arachis( hypo- por las condiciones ambientales inheren- gaea L.) grown in containers and in the tes a diferentes fechas de siembra. field under water-limited conditions. Jour- nal of Agricultural Science 122: 429-434. 10. Martin B., and Ruiz-Torres A. 1992. Effects BIBLIOGRAFÍA CITADA of water deficit stress on photosynthe- sis, its components and component limi- 1. Bindu Madhava H., Sheshshayee M.S., tations, and on water use efficiency in Shankar, A.G., Prasad, T.G., and Udayakumar, wheat (Triticum aestivum L.). Plant Phy- M. 2003. Use of SPAD chlorophyll meter to siology 100: 733-739.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 235 11. Passioura J.B. 1996. Drought and drought 13. Wright G.C., Nageswara Rao R.C., and tolerance. Plant Growth Regulation 20: Farquhar G.D. 1994. Water use efficien- 79-83. cy and carbon isotpoe discrimination in 12. Statistix V7, 2000. Analytical Software. Ta- Peanut under water deficit conditions. llahassee, FL. Crop Science 34: 92-97.

Anfidiploide sintético desarrollado para ampliar la base gené- tica del maní cultivado (Arachis hypogaea)*

Laura Torres1, Paula Bima1, Beatriz Costero1, Adriana Ordoñez1, Cecilia Turina2, Claudia Martino1, Juan A. Soave3, Sara J. Soave3, Claudio Oddino3,4, Paola C. Faustinelli3,5, Alber- to Moresi3,6 y Mario I. Buteler3 1- Facultad de Ciencias Agropecuarias, UNC. 2- Becaria SeCyT, UNC. 3- Criadero El Car- men, General Cabrera, Córdoba. 4- Fac. de Agronomía y Veterinaria–UNRC. 5- Universi- dad Católica de Córdoba. 6- Agrifood S.A. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN a las especies diploides silvestres (2n = 20, x=10 y 2n = 18, x=9) en la sección, en tanto Si bien muchas de las especies vegetales que las únicas tetraploides A. hypogaea y cultivadas más importantes son poliploides A. montícola, cultivada y silvestre respec- naturales, este fenómeno puede producir tivamente, contienen los genomas A y B y un cuello de botella genético importante son indistinguibles a nivel de su ADN. Las debido al aislamiento reproductivo que especies silvestres A. duranensis, donante se establece respecto a los progenitores y del genoma A y A. ipaënsis, del genoma B, especies relacionadas; además, si a la po- son los progenitores putativos de A. hypo- liploidización se le suma la domesticación gaea (12). y selección de genotipos élite para el culti- Extensas evaluaciones de especies silvestres vo, la reducción de la variabilidad genética del género Arachis han revelado que éstas puede llegar a ser extrema. En el caso del constituyen fuentes valiosas de genes de maní tetraploide cultivado (Arachis hypo- resistencia a insectos y enfermedades, los gaea L.; 2n = 4x = 40), a diferencia de otras cuales podrían ser transferidos a híbridos especies domesticadas, se postula que en mediante cruzamientos interespecíficos su origen hubo un solo evento de poliploi- (10, 11). Al respecto, Simpson y Starr (13) dización reciente, que restringió seriamen- han demostrado la posibilidad de transfe- te las posibilidades de intercambio génico rencia de resistencia a nemátodes desde lo cual se refleja en la escasa variabilidad las especies silvestres al maní cultivado, detectada a nivel del ADN (1). mediante la construcción de anfidiploides Sin embargo, la riqueza genética conteni- sintéticos derivados de híbridos diploides. da en especies silvestres muy relacionadas Estos anfidiploides artificiales de 40 cromo- es notable. El género Arachis comprende somas pueden cruzarse exitosamente con nueve secciones que agrupan 80 especies variedades de maní cultivado. Entonces, (7), siendo Arachis la sección más impor- mediante un programa de hibridación y re- tante, ya que además del maní cultivado, trocruzas junto a técnicas eficaces y rápidas incluye a aproximadamente 40% de las es- de selección, se pueden obtener variedades pecies descriptas. Al menos cinco tipos de de maní con diversos atributos no presen- genomas, A, B, D, F y K han sido asignados tes en la especie cultivada.

* Parte de los resultados del presente trabajo fueron presentados en las XXVI Jornada Nacional de Maní, 2011. Gral. Ca- brera, Córdoba; y adaptados para su ublicación en esta revista..

236 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 En el desarrollo de un programa de me- v/v). Para lograr la germinación, las semi- joramiento, la selección asistida por mar- llas se colocaron en cápsulas de Petri con cadores (MAS), permite caracterizar la algodón y papel de filtro humedecido y constitución genómica de los materiales esterilizado en autoclave. Comenzada la sintéticos y de sus progenitores incremen- emergencia de las radículas, las semillas, tando así la eficiencia y predictibilidad de se colocaron individualmente en tubos de los resultados (3). Entre los marcadores ensayo, con 10 ml de medio de cultivo Mu- moleculares basados en la Reacción en rashige & Skoog (9), suplementado con 0,1 Cadena de la Polimerasa (PCR por su sigla mg/l de ácido naftalenacético (ANA), para en inglés) se encuentran los microsatélites su establecimiento in vitro. Al cabo de 45 ó secuencias simples repetidas (SSRs). A días, las plántulas establecidas, fueron sec- partir de librerías genómicas tanto de A. cionadas (estacas uninodales) y repicadas hypogaea (genoma AA-BB) como de otras a medio de cultivo fresco. Al cabo de 10 pertenecientes a tribus o secciones relacio- ciclos de multiplicación (repiques cada 30 nadas a Arachis, se han desarrollado cien- días), de las plántulas de uno de los clones tos de marcadores SSRs (6). obtenidos, fueron diseccionados los ápices El objetivo de este trabajo fue generar un y colocados en microprobetas de 2 ml de anfidiploide sintético [(A. correntina x A. capacidad con una solución de colchicina cardenasii ) x A. batizocoi]4x, que reúna ge- al 0,2%. Las probetas fueron previamen- nes de interés y posible de cruzar con culti- te esterilizadas y la solución de colchicina, vares adaptados de maní, para ampliar la filtrada. Se plantearon cuatro tratamien- base genética de este cultivo. tos: combinando tiempos de inmersión en la solución de colchicina (8 y 24 h) y posi- MATERIALES Y MÉTODOS ción del ápice (hacia arriba o hacia aba- jo). Transcurrido el tiempo de inmersión El banco de germoplasma activo del Cria- se cultivaron nuevamente in vitro para su dero El Carmen, situado en la localidad de enraizamiento, desarrollo y multiplicación General Cabrera, Pcia. de Córdoba, cuenta (clonación). Plantas enraizadas de cada con una colección de más de 15 introduccio- clon fueron trasplantadas en macetas in- nes de nueve especies silvestres del genero dividuales y aclimatadas en cámara de cría Arachis relacionadas con la especie cultiva- a 28/24ºC (día/noche) y 12 h de fotoperío- da, entre ellas A. correntina y A. cardenasii, do. Al cabo de 30 días fueron nuevamente caracterizadas previamente por Oddino et trasplantadas y puestas a crecer en condi- al. (10, 11) como especies notablemente re- ciones de campo. sistentes a hongos del suelo y enfermeda- des foliares, particularmente viruelas. Análisis citológico A fin de determinar el nivel de ploidía del Producción de híbridos y anfidiploides material obtenido in vitro, se extrajeron Para reunir en un solo individuo genes de ápices de raicillas de los clones tratados con interés transferidos desde las especies sil- colchicina en diferentes momentos. Los vestres con genoma A (A. correntina y A. mismos se trataron con 8-hidroxiquinolina cardenasii) y genoma B (A. batizocoi) a las por 3 h a temperatura ambiente, y se fija- cultivadas tetraploides (AB) (2), en el pre- ron en una solución 5:1 (alcohol absoluto: sente trabajo, se realizó el cruzamiento acido láctico) por 24 h a 4ºC. Para la obten- [(A. correntina x A. cardenasii) x (A. bati- ción de los preparados citológicos las raíces zocoi)], denominado híbrido Ah1. fueron tratadas con una solución de ácido Las semillas obtenidas de estos cruzamien- clorhídrico 0,5N: alcohol etílico 1:1, por 5 tos fueron desinfectadas por inmersión en min y fijadas en etanol: ácido acético gla- alcohol 70% por 1 min y luego en hipo- cial: cloroformo 3:1:2, por 10 min a tempe- clorito de sodio 5,5 g/l p.a. (dilución 1/3 ratura de 25ºC. Luego fueron teñidas con

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 237 carmín acético y aplastadas sobre una gota el híbrido Ah1 [(A. correntina x A. carde- de ácido acético glacial al 45%. nasii ) x A. batizocoi ] y el anfidiploideAh 2 Para seleccionar anfidiploides fértiles que obtenido por duplicación cromosómica permitieran realizar cruzamientos con el del híbrido Ah1. Para el análisis molecu- maní cultivado, se determinó la viabilidad lar se realizó la extracción de ADN total del polen como el porcentaje de granos según el método propuesto por Doyle y germinados in vitro, recolectados de cua- Doyle (4). Aproximadamente 0,5 g de hojas tro flores obtenidas de cada planta con y pecíolos jóvenes de plantas mantenidas genomas duplicados por el tratamiento en invernadero, fueron finamente molidos con colchicina, teniendo como control en nitrógeno líquido y el ADN se extrajo en plantas no tratadas con colchicina. Las buffer CTAB. La calidad y cantidad de ADN flores se recolectaron entre las 8 y 9ho- fue evaluada por comparación con ADN de ras de la mañana, momento en el que se concentración conocida, en geles de agaro- produce la dehiscencia de las anteras y se sa al 1%. El ADN se visualizó bajo luz UV las colocó en recipientes rodeados de una previa tinción con bromuro de etidio. atmósfera húmeda para evitar su deshi- Para este estudio se seleccionaron los dratación. En el laboratorio bajo lupa se microsatélites genómicos 24 Lup-lino1, procedió a abrir la flor y esparcir el polen 34-Lup-app, 63-Stylo-IGSa, IPAHM 109, en una gota de solución básica de medio IPAHM 117, Ah041 y Ah 193 con alto gra- de cultivo sobre un portaobjeto. Se colo- do de polimorfismo y capacidad discrimi- có el portaobjeto en una caja de Petri con nante entre especies y tipo de genoma. atmósfera húmeda a una temperatura de Estos microsatélites poseen un alto grado 28ºC en oscuridad y bajo luz, por un pe- de transferibilidad, mayor al 76% para es- riodo de 4 h. Luego se cubrió la gota de pecies de la sección Arachis. También, se la solución de cultivo con un cubreobjeto probó el marcador de tipo EST-SSR, EM-31 dividido en tres secciones para facilitar el específico de A. hypogaea (7, 8, 14). Las conteo. Las observaciones se realizaron en condiciones de ciclado y de reacción fue- un miscropio óptico Carl Zeiss modelo Pri- ron las propuestas por los autores y en mo Star trinocular y con el objetivo 10X aquellos casos donde los patrones electro- se recorrió cada sección registrando el nú- foréticos resultaron confusos, se repitie- mero de granos germinados y no germina- ron los análisis modificando alternativa- dos, calculándose el porcentaje de germi- mente los diferentes componentes de la nación correspondiente. mezcla de reacción y condiciones de cicla- Continuando con el programa de mejora- do. Los productos amplificados por PCR se miento genético de maní del Criadero El resolvieron mediante electroforesis verti- Carmen, en la campaña 2009/10 se proce- cal en geles de poliacrilamida al 15% y gel dió a cruzar una línea Alto Oleico de A. de apilamiento al 5%, a 80V durante 16 hypogaea JS 17304-7-B (AO) con el anfi- h aproximadamente, en buffer Tris-glicina diploide sintético obtenido como progeni- 1x pH 8,3. El ADN amplificado se visuali- tor masculino. zó bajo luz UV previa tinción con bromuro de etidio y los patrones electroforéticos se Análisis genético molecular analizaron con el programa PB2 de libre A fin de ajustar un sistema para la selec- circulación, que permite determinar, en ción asistida por marcadores moleculares, pares de bases (pb), el tamaño de las ban- se realizó la caracterización genética me- das obtenidas. diante microsatélites, de los materiales silvestres de Arachis registrados como A. RESULTADOS Y DISCUSIÓN correntina y A. cardenasii (genoma A), A. batizocoi y A. magna (genoma B), dos in- Mediante cruzamientos controlados se ob- troducciones del poliploide A. montícola, tuvo un híbrido interespecífico (A. corren-

238 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 tina x A. cardenasii ) que en la campaña de germinación de 26,8% en oscuridad y 2004-2005 por cruzamiento con A. batizo- 25% con iluminación. Esto muestra dife- coi, generó el híbrido interespecífico a tres rencias claras de fertilidad del polen, atri- vías Ah1 (2) que reúne los genomas A y B. buibles a una meiosis más regular al dupli- Las semillas obtenidas de estos cruzamien- car el genoma del híbrido interespecífico. tos se hicieron germinar y se multiplicaron El cruzamiento JS 30210, realizado entre la in vitro, para disponer de una cantidad de línea Alto Oleico de A. hypogaea JS 17304- plantas clonadas que garantizara la conti- 7-B (AO) y el anfidiploide sintético [(A. co- nuidad del proceso hasta la obtención de rrentina x A. cardenasii ) x A. batizocoi]4x los anfidiploides sintéticos fértiles. produjo cinco semillas que sembradas a Respecto a las pruebas para la duplicación campo, originaron plantas fértiles que se de cromosomas, en 11 de los 45 ápices so- autofecundaron y dieron origen a la ge- metidos a tratamiento con colchicina, se neración F2 compuesta por 1014 semillas. comprobó citológicamente la presencia A partir de éstas y aplicando el método de de 40 cromosomas (datos no mostrados). “Single Seed Descent” (descendencia de No se observaron diferencias según la po- una semilla), se comenzó a conformar una sición del ápice, y hubo mayor eficiencia población de más de 200 Líneas Recom- cuando permanecieron 24 h en la solu- binantes Endocriadas (RILs), para mapeo ción de colchicina. Este protocolo permitió de atributos de interés luego de lograda rescatar un anfidiploide de tres vías y clo- la homocigosis teórica (F6). También por narlo, lo que constituye una herramienta retrocruza, se conformó una población valiosa para lograr la duplicación de cro- de 30 líneas BC1Fn, que se están evaluan- mosomas sin perder el material inicial, a do para desarrollar nuevas variedades. La diferencia de lo que ocurre cuando se uti- fertilidad de los híbridos obtenidos entre lizan otros protocolos. maní cultivado y el anfidiploide sintético Para establecer la hora mitótica y lograr corrobora la hipótesis de que, el anfidi- los preparados citológicos que permitie- ploide sintético obtenido es portador de ran el recuento cromosómico, fue nece- los genomas A y B, presentes también en sario adaptar los protocolos ya utilizados el maní cultivado originado a partir de la para plántulas provenientes de semillas, hibridación natural y posterior duplica- dado que el ritmo de desarrollo de los te- ción espontánea de cromosomas de A. du- jidos in vitro es diferente al igual que las ranensis y A. ipaënsis. condiciones de cultivo, por ejemplo el foto- Para todos los materiales analizados en el período de 12 h exactas. De ésta manera presente trabajo, y según la metodología se estableció que sólo en las raicillas recién empleada para determinar el peso mole- emergidas -no mayores de 3 mm- y luego cular de cada producto amplificado, cinco de 5 h del encendido de las luces, se ob- de los ocho loci, (24 Lup-lino1, 34-Lup-app, servaban células en metafase. Cuando las 63-Stylo-IGSa, IPAHM 109 e IPAHM 117) plántulas fueron trasplantadas a macetas y presentaron patrones inconsistentes, que mantenidas en condiciones de campo, al- no permitieron discriminar los materia- gunas, mostraron características morfoló- les en estudio (datos no mostrados). Este gicas diferentes con respecto a sus progeni- resultado podría deberse a que estos mi- tores -mayor vigor, hojas y flores de mayor crosatélites fueron diseñados de librerías tamaño- lo que indicaba que se trataban genómicas de las tribus Genisteae, Aeschy- de individuos con distinto nivel de ploidía. nomeneae y y la transferibili- El polen de plantas con genomas no du- dad de un marcador es mayor, cuando más plicados del híbrido Ah1 germinó en baja estrecha es la relación genética entre las proporción: 2,2% en oscuridad y 5,86% especies analizadas. con iluminación; mientras que el anfidi- Koppolu et al. (7) probaron que aquellos ploide sintético Ah2 presentó porcentajes cebadores diseñados a partir del genoma

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 239 de A. hypogaea presentan una tasa pro- de heterocigocidad en el material anali- medio de transferibilidad del 81% dentro zado, como a la presencia de loci dupli- de la sección Arachis y del 59% entre otras cados; esta última sería la hipótesis más secciones, con un rango de 43% al 73%. aceptada considerando el nivel de ploidía Tal es el caso de los SSRs Ah193 y Ah041 de la especie y su sistema reproductivo, con los cuales se obtuvieron amplificacio- preferentemente autógamo (8). Respec- nes bajo las condiciones propuestas por to al microsatélite Ah 041 Moretzsohn et Moretzsohn et al. (8). al. (8) proponen que los alelos de 292 y Con el SSR Ah193 y de acuerdo a lo espe- 280 pb serían marcadores de especies con rado según la bibliografía, no se obtuvo genoma A y B respectivamente. Nuestros amplificación en A. batizocoi y A. magna resultados difieren con los esperados por (genoma tipo B) en tanto que para las es- cuanto un fragmento de 280 pb se ampli- pecies A. cardenasii y A. correntina (con ficó tanto a partir del genoma tipo A deA. genoma tipo A) este microsatélite presen- cardenasii como del híbrido Ah1 (Cuadro tó un patrón de bandas polimórfico carac- 1). Por otra parte con este microsatélite se terístico para cada una de estas especies detectó la permanencia del genoma B do- (fragmento de 393 y 378 pb respectiva- nado por A. batizocoi, e identificado por mente). la banda de 433 pb, presente también en La amplificación de un fragmento de 393 A. magna y en el híbrido Ah1. Con los mi- pb en el genoma del híbrido Ah1 y el anfi- crosatélites genómicos probados en este diploide Ah2 (Cuadro 1) resulta de interés estudio no fue posible detectar la presen- por ser A. cardenassii, un silvestre diploide cia de A. correntina, progenitor femenino que aporta alto nivel de resistencia a ne- del híbrido simple con A. cardenasii, pero mátodes, Cercospora arachidicola, Cercos- se descuenta su participación por la direc- poridium personatum, Puccinia arachidis y ción del cruzamiento (2). Sclerotium rolfsii (5). El marcador EST-SSR, EM31, resulta pro- El patrón de bandas múltiples correspon- misorio no sólo por la consistencia de los diente a ambas accesiones de A. montíco- resultados de acuerdo a lo propuesto por la, podría deberse tanto a un alto grado la bibliografía, sino también por el poli-

Cuadro 1. Patrón de bandas para los microsatélites Ah193, Ah041 y EM 31 correspondiente a cinco espe- cies silvestres del género Arachis, un híbrido a tres vías (Ah1’) y el anfidiploide derivado (Ah2‘). SSR GENOTIPOS Ah193 Ah041 EM 31 A. batizocoi (genoma B) s/ax 248, 339, 389, 433 104, 114, 132 A. cardenasii (genoma A) 393, 407, 439 250, 280, 343,430 94, 106, 116 114, 124, 145, 194, A. correntina (genoma A) 378, 407, 439 250, 343, 436 275, 375

A. ipaënsis (genoma B) s/dy s/d 104,114,128,135 A. magna (genoma B) s/a 250, 339, 389, 433 104, 114, 124,135 A. montícola1 (poliploide 397, 426, 468, 519, 104, 119,129,151, 250, 514, 619 natural) 559 177, 232 A. montícola4 (poliploide 397, 426, 468, 519, 104, 119 250, 514, 619 natural) 559 106, 114, 132,142, 158, 196, 277, Ah1’ (híbrido simple) 393, 407,432, 250, 280, 343, 433 197,220, 239, 279, 313, 351 Ah2‘ (anfidiploide) 393, 413 255 106,114

x s/a: sin amplificación.y s/d: sin dato

240 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Figura 1. Electroforesis en gel de poliacrilamida al 15% de productos de PCR con el cebador para el micro- satélite EM31. 1: MPM (50 pb Fermentas); 2: A. batizocoi ; 3: A. cardenasi; 4: A. correntina; 5: A. ipaënsis 6: A. magna; 7: A. montícola1; 8: A. montícola 4; 9: Ah1’; 10: Ah2’. morfismo presentado entre especies de los materiales sintéticos, partiendo de cru- genoma A, y entre éstas y las especies de zamientos interespecíficos dirigidos y pos- genoma B según la metodología emplea- terior duplicación cromosómica, puedan da para determinar el tamaño de los frag- ocurrir eventos tales como, pérdida al azar mentos amplificados. También resulta de de cromosomas de los genomas silvestres y interés la banda de 132 pb amplificada con ellos de los marcadores asociados, o de tanto en A. batizocoi como en el híbrido reordenamientos de secuencias a lo largo Ah1 (Cuadro 1 y Figura 1). de los cromosomas, que podrían explicar En el mejoramiento del maní, los micro- en parte la dificultad para el seguimiento satélites o SSRs resultan una herramienta de los genomas parentales en los descen- biotecnológica de gran utilidad para ana- dientes (5). Esto plantea la necesidad de lizar la variación genética en el germoplas- seguir analizando los materiales en estu- ma de especies silvestres de Arachis (7). Los dio con otros microsatélites, Est-SSRs u otro microsatélites evaluados en el presente tipo de marcador molecular, para determi- trabajo, permitieron explorar por primera nar su reproducibilidad a partir de la infor- vez en Argentina, el germoplasma silves- mación bibliográfica, para el seguimiento tre diploide de Arachis y de los materiales de los genomas parentales en los híbridos sintéticos obtenidos en un programa de y anfidiploides y que además permitan ex- mejoramiento. Los resultados obtenidos plorar la diversidad existente en las espe- muestran que los SSRs probados resulta- cies silvestres y materiales sintéticos. ron insuficientes para la caracterización En conclusión, se construyó un afidiploide indubitable de los genomas reunidos en sintético, que permitió superar el cuello el híbrido a tres vías, Ah1 y conservados de botella y las barreras al intercambio gé- en el anfidiploide sintéticoAh 2. Es posible nico establecidas a partir del cruzamiento que durante el proceso de obtención de interespecífico y la poliploidización, cuyo

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 241 resultado fue el origen de la especie tetra- Biotechnology Vol 13, Nº3. ploide Arachis hypogaea L. El resultado de 7. Koppolu R., Upadhyaya H.D., Dwivedi los estudios moleculares del ADN realiza- S.L., Hoisingngton D.A., and Varshney dos, confirman la contribución de los ge- R.K. 2010. Genetic relationships among nomas de dos de las tres especies silvestres seven sections of genus Arachis studied by using SSR markers. BMC Plant Biolo- empleadas, A. cardenasii y A. batizocoi; gy http://www.biomedcentral.com./1471- sin embargo, por la dirección de los cruza- 2229/10/15. mientos (2) se puede afirmar que la única 8. Moretzsohn M.C., Hopkins M.S., Mitchell no detectada por los SSRs empleados, A. S.E., Kresovich S., Montenegro Valls J.F., correntina, también realizó su aporte de and Ferreira M.E. 2004. Genetic diversity material genético. Se deberá persistir en la of peanut (Arachis hypogaea L.) and its caracterización fenotípica y genotípica de wild relatives based on the analysis of nuevas especies silvestres, ya que el mode- hypervariable regions of genome. BMC lo desarrollado permite expandir la base Plant Biology http://www.biomedcentral. genética del maní y aprovechar la riqueza com./1471-2229/4/11. 9. Murashige T., and Skoog F. 1962. A revi- presente en las especies silvestre emparen- sed medium for rapid growth and bioas- tadas. says with tobacco tissue culture. Phisiol Plant 15: 473-497. BIBLIOGRAFÍA CITADA 10. Oddino C, Soave J, Soave S, Moresi A. y Buteler M. 2006. Comportamiento de ma- 1. Burow M.D., Simpson C.E., Starr J.L., and níes silvestres frente a la “podredumbre Paterson A.H. 2001. Transmission genetics parda de la raíz del maní” causada por of chromatin from a synthetic amphidi- Fusarium solani. In: Resúmenes V Encuen- ploid to cultivated peanut (Arachis hypo- tro Internacional de Especialistas en Ara- gaea L.) broadening the gene pool of a chis. Río Cuarto, Córdoba. 4-7 de abril de monophyletic polyploid species. Genetics 2006. pp. 21-26. 159: 823-837. 11. Oddino C., Soave J., Soave S., Moresi A., 2. Buteler M.I., and Soave J.H. 2011. Current Buteler M. y Bianco C.A. 2008. Comporta- status and objectives of Nursery El Car- miento de maníes silvestres frente a en- men peanut breeding program. In: 5th fermedades foliares en Argentina. In: VI International Conference of the Peanut Encuentro Internacional de Especialistas Research Community on Advances in Ara- en Arachis y II Simposio de Maní del Mer- chis through Genomics and Biotechnolo- cosur. San Lorenzo, Paraguay. gy. Brasilia, Brazil, June 2011. p. 35. 12. Robledo G., and G. Seijo J.G. 2010. Species 3. Chu Y., Wu C.L., Holbrook C.C., Tillman relationships among the wild non-A ge- B.L., Person G., and Ozias-Akins P. 2011. nome of Arachis species (section Arachis) Marker-assisted selection to pyramid ne- based on FISH mapping of rDNA loci and matode resistance and the high oleic trait heterochromatin detection: A new pro- in peanut. The Plant Genome Vol. 4, N°2. posal for genome arrangement. Theor 4. Doyle J.J., and Doyle J.L. 1990. Isolation of Appl Genet. 121(6): 1033-1046. plant DNA from fresh tissue. Focus 12 Nº 13. Simpson C.E., and Starr J.L. 2001. Regis- 1:.13-15. tration of ‘COAN’ peanut. Crop Science 5. García G.M., Tallury S.P., and Stalker H.T. Vol. 33 Nº 6: 14. 2006. Molecular analysis of Arachis inters- 14. Xuanqiang L., Xiaoping Ch., Yanbing H., pecific hybrids. Theor Appl Genet 112: Haiyan L., Guiyuan, Z. Shaoxiong, L., and 1342-1348. Baozhou G. 2009. Utility of EST- derived 6. Guo Q.S., Meng J.L., Hang X., Xing J.W., SSR in cultivated peanut (Arachis hypo- Rong H.T., Han X., Chuan Z.Z., and Yu P. B. gaea L.) and Arachis wild species. BMC 2010. EST sequencing and SSR marker de- Plant Biology. http://www.biomedcentral. velopment from cultivated peanut (Ara- com./1471-2229/9/35 chis hypogaea L.). Electronic Journal of

242 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Estimación de la diversidad genética en germoplasma de maní (Arachis hypogaea) por medio de microsatélites.

Valeria Etchart1, Florencia I. Pozzi2, Mariela Giustetti1, M. Valeria Moreno2, Olegario Royo3, Da- niel Díaz1 y Jorge O. Gieco2 1- Laboratorio de Biología Molecular-Instituto de Genética Ewald A. Fravret - INTA Castelar. 2- Laboratorio de Biotecnología en Cultivos-EEA INTA Manfredi. 3- Responsable del Banco Activo de Germoplasma de Maní-EEA INTA Manfredi. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN especie y, en este sentido, los bancos de germoplasma constituyen un reservorio El maní (Arachis hypogaea) es una de las de genes a partir de los cuales pueden ob- leguminosas con mayor importancia eco- tenerse materiales que posean los genes o nómica a nivel mundial, encontrándose arreglos génicos superiores para caracte- ampliamente distribuido en China, India, res de interés agronómico. Esto requiere Estados Unidos, África y varios países de de una cuantificación de la diversidad ge- Sudamérica (Argentina, Bolivia, Brasil, Pa- nética existente, para lo cual los marcado- raguay y Uruguay). Las semillas son utiliza- res moleculares resultan de gran utilidad. das para consumo humano directo y como En maní, los microsatélites o SSRs (Single fuente de proteína y de aceite vegetal. Sequence Repeats) son los marcadores El género Arachis es nativo de Sudamé- moleculares más informativos por la varia- rica, probablemente de la región que in- bilidad que detectan y por su condición de cluye el centro de Brasil y Paraguay. Hay codominantes, comparados con RFLP (Res- descriptas 80 especies dentro del género, triction Fragment Length Polimorphism), agrupadas en nueve secciones de acuerdo RAPD (Random Amplified Polymorphic a la morfología, distribución geográfica DNA), y AFLP (Amplified Fragment Lenght y capacidad de producir híbridos fértiles Polymorphism) (4) .Otra ventaja importan- (9). El maní cultivado es un alotetraploide te de estos marcadores es su alta reprodu- (AABB, 2n=4x=40), originado a partir de cibilidad, lo que permite consensuar datos una o pocas hibridaciones relativamente genotípicos entre diferentes laboratorios, recientes en términos evolutivos de dos siendo muy útiles, por ejemplo, para los especies silvestres diploides y la poste- proyectos de mapeo de genomas. rior duplicación del número cromosómico Durante los últimos años, se ha identifica- (5). Se ha propuesto a A. duranensis y A. do en el genoma de maní un considera- ipaënsis como origen de los genomas A y ble número de SSR (más de 1500), a par- B, respectivamente. tir de librerías de ADN genómico y de EST El origen reciente y la autogamia reduje- (Expressed Sequence Tags) (3, 4, 6, 8, 12). ron significativamente el intercambio ge- Estos marcadores se han utilizado para nético entre la especie cultivada y las sil- realizar distintos estudios de diversidad vestres, conformando un fuerte cuello de genética en germoplasma de maní tipo botella para la diversidad genética de A. Valencia (11) y en colecciones de germo- hypogaea. Esto se ve reflejado en el bajo plasma de Estados Unidos (10) China (15) nivel de polimorfismo molecular encon- y Japón (13). trado. No obstante, existe una importan- El Banco Activo de Germoplasma de maní te variación en caracteres morfológicos y de la Estación Experimental Agropecuaria agronómicos. En los programas de mejora- (EEA) INTA Manfredi, posee actualmen- miento, es prioritario maximizar el uso de te 3.560 accesiones de maní cultivado (A. la variabilidad disponible dentro de cada hypogaea) y 40 especies de maní silvestre

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 243 provenientes de diversos países, incluyen- se precipitó agregando rápidamente 0,6 do los que comparten el centro de ori- vol de isopropanol frío (-20ºC), mezclan- gen del género Arachis. En el transcurso do suavemente por inversión. Se centrifu- de los años agrícolas 2004/05 al 2007/08 gó, se lavó dos veces con alcohol 70% frío se caracterizaron agronómicamente 500 (-20°C), se secó y se resuspendió en 50 µl accesiones, evaluándose los siguientes de agua calidad HPLC. La cantidad y cali- atributos: a) comportamiento frente a pa- dad de ADN obtenido se determinó me- tógenos fúngicos tales como Cercospora diante electroforesis en geles de agarosa arachidicola (viruela temprana), Cercospo- 0,8% p/v teñidos con bromuro de etidio, ridium personatum (viruela tardía), Lep- y mediante la absorción a 260 y a 280 na- tosphaerulina crassiasca (mancha en “V”), nómetros. b) porte (erecto, semi erecto y rastrero), c) madurez aparente (ciclo), d) altura de Análisis molecular con marcadores micro- planta, e) coloración de tallo, y f) presen- satélites. cia de folíolos adicionales (com. pers. J. En maní no existe una base de datos con Gieco). información sobre microsatélites, por lo En este trabajo se analizó mediante micro- cual fue necesario recopilar la información satélites la variabilidad genética presente a partir de los trabajos de los distintos au- en un conjunto de 40 accesiones del Ban- tores. Se seleccionaron 40 pares de oligo- co Activo de Germoplasma de la EEA-INTA nucleótidos de las series Ah (12), PGP (4), Manfredi, como primer paso en la identifi- PGS (3) y PM (6) (11). El nombre, fuente cación de regiones genómicas asociadas a bibliográfica y características de los marca- caracteres de interés agronómico para su dores utilizados se presentan en el cuadro utilización en selección asistida. 2. Las reacciones de amplificación se efec- tuaron en un volumen final de 15 µl con- MATERIALES Y MÉTODOS teniendo 60 ng de ADN, 1X de buffer de PCR (20 mM Tris-HCl pH 8,4– 50mM ClK), Material Vegetal. 1,5 mM de Cl2Mg, 0,2 mM de cada dNTP, Se emplearon 40 accesiones de maní culti- 0,25 µM de cada oligonucleótido y 0,5 U vado seleccionadas por su comportamien- de Taq DNA-polimerasa (Invitrogen). El to ante enfermedades (viruela temprana programa de amplificación utilizado fue: y tardía y Aspergillus), por representar 1 ciclo de 3 min a 94ºC, 5 ciclos de 30 s a orígenes geográficos diversos y por - per 94ºC, 40 ss a 61ºC (bajando 1ºC/ciclo) y 60 s tenecer a las dos subespecies del género a 72ºC, 30 ciclos de 30 s a 94ºC, 30 s a 56ºC (hypogaea y fastigiata) (Cuadro 1). y 60 s a 72ºC, finalmente 1 ciclo de 10 min a 72ºC. Los productos de PCR se separaron Extracción de ADN. por electroforesis en geles desnaturalizan- Se utilizaron hojas provenientes de varias tes de poliacrilamida 6% (p/v) teñidos con plantas jóvenes de maní en estado vege- nitrato de plata, los patrones se identifica- tativo, pertenecientes a cada una de las ron visualmente y se calificaron según su accesiones. El ADN se extrajo en base al tamaño, comparándolos con un marcador protocolo descripto por Doyle y Doyle (2) de peso molecular (50bp). modificado. La modificación consistió en resuspender el precipitado final en 500 µl Análisis de datos. de NaCl 2M e incubarlo durante 1 h a 65ºC. Se utilizó el programa Infogen (1) para Se agitaron suavemente los tubos para re- estimar el valor informativo de cada mar- suspender y se incubaron a 4ºC durante cador por medio del contenido de infor- 45 min. Posteriormente, se centrifugaron mación polimórfica (PIC). Así mismo, se durante 10 min a 2000 rpm y se transfirió calculó la distancia genética entre los ma- el sobrenadante a un nuevo tubo. El ADN teriales mediante el coeficiente de Roger

244 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 1. Lista de accesiones del Banco Activo de Germoplasma de la EEA INTA Manfredi analizadas.

u Nombre Local REMv Lugar de origenx Taxóny Accesiones/Cultivares/ Landraces utilizadas en el análisis Accesión 45 s/d s/d Accesión 393 Corrientes, Argentina Ahf Accesión 566 Santa Cruz, Bolivia Ahf Accesión 638 Rancho chico de Irupana, Bolivia Ahhh Accesión 754 Santa Cruz, Bolivia Ahf Accesión 971 Tarija, Bolivia Ahhh Accesión 1220 Carmen, Bolivia Ahhh Accesión 1222 La Paz (Yungas), Bolivia Ahhh Accesión 1225 La Paz (Yungas), Bolivia Ahhh Accesión 1783 Río Grande Sur, Brasil Ahf Accesión 2067 Pernambuco, Brasil s/d Accesión 2120 s/d s/d Accesión 2348 s/d s/d Accesión 2404 El oro, Ecuador Ahfa Accesión 2486 Catalán, Ecuador Ahfp Accesión 2574 s/d Accesión 2575 s/d Accesión 2686 Georgia, USA Ahhh Accesión 2706 Gainesville, USA s/d Accesión 2841 México s/d Accesión 2842 México s/d Accesión 3785 Valle de la convención, Perú Ahfp Accesión 5153 Vietnam, Japon Ahf Accesión 5276 Valencia, España s/d Accesión 5331 Portugal Ahhh Accesión 5351 Com. de Estados Independientes s/d Accesión 6516 Samayac, Guatemala Ahhh Overo Landrace 406 Argentina Ahhh A 505 Cultivar 414 Argentina Ahf Manfredi 68 Cultivar 259 Argentina s/d Colorado Cultivar 216 Argentina Ahf Irradiado Granoleico Cultivar s/d Argentina s/d R10 Cultivar s/d Argentina s/d Flavor Runer Cultivar 2737 USA s/d Accesiones/ cultivares con más de 10% de datos perdidos Accesión 2701 USA s/d Accesión 5145 Taiwán, China s/d Accesión 5351 Com. de Estados Independientes s/d Accesión 6515 Chiquimula, Guatemala Ahhh Manigran Cultivar 415 Argentina s/d Florman Cultivar 399 Argentina s/d Guanaco Cultivar s/d Argentina s/d uNombre local: nombre dado a la muestra en el lugar de origen. vREM: Registro Entrada de Maní. xLugar de origen: Área o región donde la muestra fue colectada u obtenida. yTaxón: género, especie, subespecie, variedad botánica (Ahhh: Ara- chis hypogaea hypogaea hypogaea; Ahfa: Arachis hypogaea fastigiata aequatorialis; Ahfp: Arachis hypogaea fastigiata peruviana). s/d: sin dato.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 245 dos, de los cuales 34 produjeron patrones L 1 1 A 2 de amplificación claros y reproducibles D = ()i - j que permitieron caracterizar las accesio- P al Pal L S 2 S nes con precisión. De los 34 microsatélites utilizados, 22 (64,71%) resultaron poli- Donde L es el número de loci caracteriza- mórficos, es decir que en al menos una de dos en las variedades i- y j; A es el número las accesiones analizadas presentaron un i j de alelos observados en el locus l y P al y P al, patrón diferente; los 12 restantes fueron la frecuencia del alelo a del locus l en las monomórficos (Cuadro 2). Seis accesiones variedades i y j. (2701, 5145, 6515, Manigran, Florman y Para representar la relación existente en- Guanaco) presentaron más del 10% de da- tre las muestras evaluadas se realizó el tos faltantes y, por lo tanto, no fueron con- análisis de agrupamiento mediante el sideradas en el análisis genético. En todos método UPGMA (Unweighted Pair-Group los cálculos se incluyeron los marcadores Method Averages). monomórficos, pues su exclusión llevaría a una sobreestimación de la variabilidad. RESULTADOS Y DISCUSIÓN Se observó un total de 105 fragmentos am- plificados, con un promedio de 3 bandas y Se caracterizaron molecularmente 40 ac- un rango que va de 1 a 8 bandas por mi- cesiones de maní cultivado. Para ello se crosatélite. El microsatélite PM183 fue el seleccionaron 40 pares de oligonucleóti- que presentó el mayor número de bandas.

Cuadro 2. Descripción de los oligonucleótidos utilizados. N° de N° de

Marcador PatrónPatrón PIC Fuente Marcador Patrón PIC Fuente Bandas Bandas Microsatélites utilizados en el análisis PM3 Px 5 0,7 6 PGS10H01A M 1 - 3 PM15 P 3 0,55 6 PGS13E07 P 4 0,46 3 PM32 P 4 0,38 6 PGP09G12 P 2 0,08 4 PM35 P 5 0,59 6 PGP02A06 P 3 0,40 3 PM36 P 7 0,78 6 PGP03B06 M 2 - 3 PM45 P 4 0,56 6 PGP07B03 P 4 0,66 3 PM50 P 6 0,6 6 PGP01B09 P 6 0,79 3 PM53 My 1 - 6 PGP06B08 P 3 0,52 3 PM65 P 4 0,67 6 PGP07H06 P 2 0,32 3 PM137 P 4 0,57 6 PGP04D04 M 1 - 3 PM145 M 1 - 6 PGP07H09 M 1 - 3 PM183 P 8 0,7 6 PGP03D09 M 1 - 3 PM201 P 2 0,26 6 PGP03B10 M 2 - 3 PM210 P 5 0,56 6 PGP04G02 M 1 - 3 PM305 M 1 - 6 Ah-041 P 2 0,37 12 PM346 M 4 - 6 Ah558 M 2 - 12 PGS10C12 P 2 0,13 4 Ah193 P 2 0,27 12 Microsatélites descartados para el análisis PM188 6 PGS13E06A 4 PM200 6 PGS13E11 3 PGS12A07 4 PGP03C02 3 xP: Polimórfico.y M: Monomórfico.

246 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 El contenido de información polimórfi- ción de subespecie. Estos resultados con- ca (PIC) varió entre 0,08 y 0,79, con una cuerdan con lo publicado por Ferguson et media de 0,32. Los microsatélites PM36 y al. (4) y Kottapalli et al. (10). La correlación PGP01B09 fueron los que presentaron los cofenética fue altamente significativa, mayores valores de PIC. El conjunto de 34 con un valor r= 0,858; lo cual indica que el accesiones tuvo una diversidad genética dendrograma representa adecuadamente promedio de 0,22, que es similar al encon- la matriz de similitud entre genotipos. trado por Kottapalli et al. (10) en una mini Para 14 de los 40 microsatélites utilizados colección núcleo del banco de germoplas- se conoce el grupo de ligamiento o cro- ma del USDA (0,18). mosoma al cual pertenecen (Cuadro 3). No se detectaron muestras duplicadas, es Se observa que debido a la sintenia entre decir no se observaron accesiones que ten- cromosomas homeólogos, un mismo gru- gan el mismo perfil a través de todos los po de ligamiento se puede localizar en dos marcadores. cromosomas (GL 3 y GL 19). Teniendo en La distancia genética entre pares de geno- cuenta ambos, grupos de ligamiento y cro- tipos calculada utilizando el coeficiente de mosomas, se observa que están represen- Roger, fluctuó entre 0,02, que correspon- tados 15 de los 22 grupos de ligamiento de al par A 505-Colorado Irradiado, y 0,43, existentes (7), lo cual indica una cobertu- que corresponde a los pares Overo-Grano- ra bastante extensa del genoma del maní leico y Flavor Runner-Colorado Irradiado. cultivado. Este es un estudio preliminar Estos valores no pueden atribuirse a una de la variabilidad molecular de un pri- relación de parentesco entre los genotipos mer grupo de accesiones pertenecientes integrantes de cada par, dado que no exis- al Banco Activo de Germoplasma de maní te una vinculación genealógica conocida de la EEA-INTA Manfredi. Con este análisis entre ellos. se ha iniciado la evaluación de genotipos El agrupamiento de las accesiones de maní a utilizar en un proyecto de localización analizadas se representa en el dendrogra- de regiones genómicas involucradas en ma de la figura 1. En el mismo se observan la determinación de caracteres de interés claramente dos grupos. Uno de ellos (II) agronómico. comprende principalmente las accesiones correspondientes a la subespecie fastigia- AGRADECIMIENTOS Y FINANCIAMIENTO ta, mientras que en el otro (I) se agrupan las accesiones de la subespecie hypogaea y Los autores agradecen al Ing. Agr. Pascual la mayoría de las accesiones sin determina- Franzone por la lectura crítica del texto y

Cuadro 3. Asignación de grupos de ligamiento y cromosomas para los marcadores utilizados. Marcador Grupo de Lig Cromosoma Marcador Grupo de Lig Cromosoma

PM 32 3 A2, B10 PM 188 16 s/d PGP07B03 3 s/d PGP02A06 16 s/d PM 201 4 s/d PM 36 19 A5, B5 PM 35 6 s/d Ah 041 22 s/d PGP01B09 11 s/d PGP04D04 s/d B1 PM 137 12 B6 PM 45 s/d B2 PGS10H01A 13 s/d PGP03B10B4 s/d B4

s/d. sin dato

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 247 Figura 1: Dendrograma basado en el coeficiente de Roger para las accesiones de maní estudiadas. por sus sugerencias. Este trabajo fue finan- L.). Theoretical and Applied Genetics 108 ciado con fondos del PE 081411 “Bases Ge- (6): 1064-1070. néticas, Moleculares y Ecofisiológicas de la 5. Halward T.M., Stalker H.T., Larue E.A., and Productividad y de la Resistencia a Estrés Kochert G. 1991. Genetic variation de- Biótico y Abiótico” del Programa nacional tectable with molecular markers among unadapted germplasm resources of cul- del Cultivos Industriales de INTA. tivated peanut and related wild species. Genome 34: 1013-1020 BIBLIOGRAFÍA CITADA 6. He G., Meng R., Newman M., Gao G., Pittman R., and Prakash C. 2003. Micro- 1. Balzarini M.G. y Di Rienzo J.A. InfoGen satellites as DNA markers in cultivated versión 2011. FCA, Universidad Nacional peanut (Arachis hypogaea L.). BMC Plant de Córdoba, Argentina. URL http://www. Biology, 3:3. (http://www.Biomedcentral. info-gen.com.ar. com/1471-2229/3/3.) 2. Doyle J.J., and Doyle J.L. 1987. A rapid 7. Hong Y., Chen X., Liang X., Liu H., Zhou DNA isolation procedure for small quan- G., Li S., Wen S, Holbrook C.C., and Guo tities of fresh leaf tissue. Phytochemical B. 2010. A SSR-based composite genetic Bulletin 19(1): 11-15. linkage map for the cultivated peanut 3. Ferguson M., Bramel P., and Chandra, S. (Arachis hypogaea L.) genome. BMC Plant 2004a. Gene diversity among botanical Biology 2010, 10:17 http://www.biomed- varieties in peanut (Arachis hypogaea L.). central.com/1471-2229/10/17 Crop Science 44: 1847-1854. 8. Hopkins M.S., Casa A.M., Wang T., Mit- 4. Ferguson M., Burow M., Schulze S., Bramel chell S.E., Dean R.E., Kochert G.D., and P., Paterson A, Kresovich S., and Mitchell Kresovich S. 1999. Discovery and charac- S. 2004b. Microsatellite identification and terization of polymorphic simple sequen- characterization in peanut (A. hypogaea ce repeats (SSRs) in peanut. Crop Science

248 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 39 (4): 1243-1247. M.A., Martins W.S., Valls J.F.M., Gratta- 9. Koppolu R., Upadhyaya H.D., Dwivedi paglia D., and Bertioli D.J. 2005. A micro- S.L., Hoisingngton D.A., and Varshney satellite-based, gene-rich linkage map for R.K. 2010. Genetic relationships among the AA genome of Arachis (). seven sections of genus Arachis studied Theoretical and Applied Genetics 111 (6): by using SSR markers. BMC Plant Bio- 1060-1071. logy 10:15. http://www.biomedcentral. 13. Naito Y., Suzuki S., Iwata Y., and Kuboya- com./1471-2229/10/15 ma T. 2008. Genetic diversity and relation- 10. Kottapalli K.R., Burow M.D., Burow G., ship analysis of peanut germplasm using Burke J., and Puppala N. 2007. Molecular SSR markers. Breeding Science 58 (3): 293- characterization of the U.S. peanut mini 300. core collection using microsatellite mar- 14. Sánchez R., Baldessari J., and Royo O.M. kers. Crop Science 47: 1718-1727 2010. Peanut Genetic Resources Catalo- 11. Krishna G.K., Zhang J., Burow M., Pittman gue 2010. 1era edición. Manfredi, Córdo- R.N., Delikostadinov S.G., Lu Y., and Pu- ba (AR). 150 pp. ppala N. 2004. Genetic diversity analysis 15. Tang R., Gao G., He L., Han Z., Shan S., in Valencia peanut (Arachis hypogaea L.) Zhong R., Zhou C., Jiang J., Li Y., and using microsatellite markers. Cellular and Zhuang W. 2007. Genetic diversity in cul- Molecular Biology Letters 9 (4A): 685-697. tivated groundnut based on SSR markers. 12. Moretzsohn M.C., Leoi L., Proite K., Gui- Journal of Genetics and Genomics 34 (5): marães P., Leal-Bertioli S.C.M., Gimenes 449-459.

Evaluación y selección de germoplasma de maní (Arachis hypogaea) tolerante a estrés hídrico.

Paola C. Faustinelli1,2, Sara J. Soave1, Claudio Oddino1,3, Juan A. Soave1, Alberto More- si1,4 y Mario I. Buteler1. 1-Criadero El Carmen, General Cabrera-Córdoba. 2- Universidad Católica de Córdoba. 3- Fac. de Agronomía y Veterinaria–UNRC. 4- Agrifood S.A. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN serios efectos sobre la producción con un estrecho panorama varietal disponible, lo En el último quinquenio Argentina se que no le permite optar por variedades ha consolidado como primer exportador mejor adaptadas a cada una de las con- mundial de maní (Arachis hypogaea) para diciones locales, a nuevas demandas, o consumo directo o “maní confitería”, lo a otros nichos de mercado. Ampliar este que actualmente la posiciona por sobre panorama varietal e incorporar atributos sus competidores tradicionales, China y que respondan a las condiciones locales Estados Unidos. Anualmente se exportan debe ser un objetivo prioritario y perma- más de 600 mil toneladas en manufactu- nente. En la plantación de más del 70% ras de maní a más de 70 destinos (7). En de la superficie con maní en Córdoba y en el contexto de la producción nacional, el NOA se emplea solo una variedad alto Córdoba es la primera provincia producto- oleico “Granoleico”, obtenida en el 2003 ra con un aporte de más del 90% al total (1). nacional, lo que convierte actualmente a El desarrollo normal y la alta productivi- esta provincia en uno de los principales ex- dad del cultivo muchas veces se ven afec- portadores mundiales de maní. tados o interrumpidos por condiciones El sector productivo enfrenta una diver- ambientales desfavorables. Dentro de los sidad de factores bióticos y abióticos con estrés abióticos, la sequía es el que espe-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 249 cialmente más preocupa. La obtención de Un programa de mejoramiento más diná- plantas con mayor tolerancia a la sequía mico y rápido se podría conseguir median- no sólo aseguraría la estabilidad de los te la selección conjunta de rasgos mor- rendimientos en años de escasez hídrica, fológicos/fisiológicos como el índice de sino que permitiría extender la frontera cosecha (IC), eficiencia en el uso del agua productiva a regiones consideradas ac- (EUA), área foliar específica (SLA) y conte- tualmente como marginales. nido de clorofila (SCMR); junto con rasgos El maní presenta una sensibilidad dife- bioquímicos, como la medición del estrés renciada al estrés hídrico según el estadio oxidativo (10, 15). de crecimiento/desarrollo en el que se en- Dentro de los rasgos fisiológicos, Passioura cuentre, de allí que en las etapas iniciales (12) planteó que el rendimiento (Y) sería de la ontogenia del cultivo la cantidad de función de la transpiración (T), la eficien- agua requerida es menor; requerimiento cia de transpiración (ET) y el índice de co- que aumenta paulatinamente hasta lle- secha (IC). En el maní, se demostró una gar a un valor máximo hacia la mitad del variación genotípica significativa para ciclo para luego disminuir en la etapa de dichos índices, tanto en condiciones bajo maduración. El momento más crítico es el maceta como en campo. Sin embargo, la de la formación de vainas, pudiendo el dé- aplicación de este modelo fisiológico en ficit hídrico poner en peligro el total de programas de mejoramiento no ha sido la producción (11). Fenotípicamente, este posible debido a los inconvenientes en la periodo inicia cuando las vainas comien- medición de la T y ET bajo condiciones de zan a engrosarse (R3) y finaliza cuando el campo (17). grano se separa del tejido interno de la Estudios realizados por Wright et al. (17) vaina. Según el genotipo y las condiciones en maní, sugieren que el área foliar es- agroecológicas de que se trate, este perio- pecífica (AFE) puede ser utilizada como do ocurre entre los 30 y 90-100 días des- sustituto en la medición de ET. Sin em- pués de la emergencia de la planta (8). En bargo, Nageswara Rao et al. (9) resaltan los genotipos actualmente empleados en la importancia de estandarizar el método Argentina dentro de la principal área de de muestreo para seleccionar por AFE e in- cultivo, este período tiene lugar entre los forman que la medición del contenido de 60 y 90-100 días después de la emergencia. clorofila (SCMR) puede ser utilizado como Hasta la fecha, la contribución más impor- una técnica rápida, de bajo costo y no des- tante a la tolerancia/resistencia a la sequía tructiva para este tipo de programas de proviene del mejoramiento por selección mejoramiento. El medidor de contenido de rasgos fenotípicos como la madurez y de clorofila, fluorómetro CCM-200, usa la floración temprana, que esencialmente fa- absorbancia de ciertas longitudes de onda vorecen al escape de la condición de estrés para estimar el contenido de clorofila en en lugar de inducir una resistencia real a la el tejido foliar, que puede ser correlacio- misma. La selección de poblaciones segre- nado directamente con la salud y condi- gantes bajo condiciones de estrés hídrico ciones de la planta (14). ha sido un enfoque estándar para desarro- Dentro de los rasgos bioquímicos, el es- llar cultivares con tolerancia/resistencia a trés por sequía puede resultar en la acu- la sequía. La selección directa por rendi- mulación de especies reactivas de oxigeno miento bajo condiciones de estrés puede (ROS), que son especies químicas altamen- ser efectiva, pero las limitaciones de este te reactivas y con poder oxidante con la recurso son la alta inversión de recursos capacidad de dañar diversos componentes y la pobre repetitividad de los resultados celulares, como lípidos, proteínas y ácidos debido a la alta interacción Genotipo/Am- nucleicos. Estas especies pueden dar a lu- biente, lo que produce un proceso lento gar a reacciones de oxidación indeseadas, del mejoramiento (17). contra las cuales los organismos han de-

250 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 sarrollado defensas antioxidantes, aunque 2008/09, a 23 genotipos, que se sembraron cuando se produce un desequilibrio entre y evaluaron para llegar a 13 genotipos a el balance de ROS y las defensas antioxi- evaluar en la campaña 2009/10, resultados dantes tienen lugar el daño en los tejidos que se informan en este trabajo. y el estrés oxidativo. Existen varios marca- En las campañas 2007/08 y 2008/09 se sem- dores que indican el grado de daño oxida- braron 25 semillas de un tamaño uniforme tivo, entre ellos el malondialdehido (MDA) por cada genotipo a probar, en un surco que es un subproducto de la peroxidación de 2,5 m de longitud dentro de una par- de lípidos en las membranas biológicas. El cela que se sometería a estrés hídrico. Se aumento en el contenido de esta molécula repitió el mismo esquema en otra parce- es indicativo de un incremento del daño la que se mantuvo a capacidad de campo; oxidativo (2). mientras que en la campaña 2009/10 se El objetivo de este trabajo fue evaluar y sembraron dos líneas de 25 semillas por caracterizar por tolerancia/resistencia a cada genotipo seleccionado bajo el mismo estrés hídrico a genotipos de maní (Ara- esquema. En todos los casos las ubicacio- chis hypogaea), provenientes de distintas nes de cada genotipo dentro de cada par- regiones productoras del mundo, que con- cela fue determinada al azar. forman el banco activo de germoplasma En los tres años de ensayo, a partir de los del Criadero El Carmen, para emplearlos 60 días de la siembra, una de las parcelas como progenitores en programas de me- sembradas con la totalidad de los geno- joramiento para obtener nuevas varieda- tipos se cubrió completamente mediante des. un túnel de polietileno cada vez que se producían precipitaciones -tratamiento MATERIALES Y MÉTODOS Sequía- lo que permitió lograr el potencial mátrico objetivo, −100 kPa en los prime- Los ensayos se llevaron a cabo en el cam- ros 30 cm de suelo alrededor de los 15-20 po experimental del Criadero El Carmen, días después de iniciado el tratamiento de ubicado en la localidad de General Ca- cobertura. El tratamiento Control se man- brera, departamento Juárez Célman, pro- tuvo siempre a capacidad de campo me- vincia de Córdoba, durante las campañas diante riego, según se requiriera. 2007/08, 2008/09 y 2009/10. A los 15 días luego de alcanzar un poten- Para la campaña 2007/08 se eligieron 50 cial mátrico de −100 kPa, se realizó un genotipos de maní pertenecientes al ban- muestreo sobre la segunda hoja totalmen- co activo de germoplasma del Criadero El te expandida (4 foliolos) en cinco plantas Carmen. Los criterios para seleccionar estos por línea sembrada y por tratamiento. Se 50 genotipos iniciales fueron: i) origen, ya registro el contenido de clorofila utilizan- que además de evaluar variedades élite lo- do el fluorómetro CCM-200 (Opti-Sciences, cales, se incluyeron genotipos provenien- Inc. NH, EE.UU.). Luego se extrajeron estos tes de otras regiones donde se cultiva el mismos foliolos para la determinación en maní en secano susceptibles a sufrir perio- el laboratorio del contenido de malondial- dos relativamente prolongados de sequía; dehido (MDA). ii) características morfológicas propias de El contenido de MDA se determinó de la especie; iii) ciclo de cultivo para una fá- acuerdo a una técnica modificada en base cil adaptación a las condiciones agroeco- a la de Heath y Packer (6). El extracto se lógicas regionales; y iv) comportamiento obtuvo moliendo discos foliares con tri sanitario óptimo bajo las condiciones re- cloro acético (TCA) 0,1% y centrifugan- gionales evaluadas. El análisis preliminar do durante 30 min a 14.000 rpm. A 0,5 de estos genotipos (datos no mostrados) ml del sobrenadante, se le agregó 0,5 ml permitió reducir el número de materiales de TCA/TBA (ácido tiobarbitúrico) (TCA/ a evaluar durante la campaña siguiente, TBA=0,25%) y se lo calentó a 95ºC duran-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 251 te 30 min. La concentración de peróxidos vo que se emplearon fueron las habituales de lípidos fue cuantificada en términos para el cultivo del maní en esta región. de concentración de MDA expresándolo En los ECR se emplearon algunas de la lí- como mM/mg de peso fresco. neas y variedades probadas en los ensayos El índice de cosecha (IC) y el rendimiento con tratamiento de sequía, y consideran- total de vainas se registraron luego que la do que los registros pluviométricos toma- planta alcanzara la madurez de cosecha. dos entre el 01 de noviembre y el 30 de El primero se calculo como la relación en- abril de las tres campañas para General tre peso seco total de la planta y el peso Cabrera -campaña 2008/09: 653 mm; cam- seco de las vainas producidas. paña 2009/10: 454 mm; campaña 2010/11: Para cada genotipo y para cada planta se 647 mm- muestran que en la campaña calculó la diferencia entre los valores re- 2009/2010 se registró una escasez de pre- gistrados para cada variable en la parcela cipitaciones, es posible validar con otra control menos los valores registrados en metodología de trabajo algunas de las la parcela bajo condiciones de estrés hí- conclusiones de los ensayos con sequía. drico. Estas diferencias fueron sometidas a análisis de componentes principales y RESULTADOS construcción de gráficos “biplot”, análisis de conglomerados, y análisis de árbol de Campaña 2008/9 recorrido mínimo (3), manteniéndose en En primera instancia, se realizó un análi- todas las campañas a la variedad alto olei- sis de las Componentes Principales y un co “Granoleico” como testigo. gráfico “biplot” (Figura 1) de las variables Para validar los criterios y métodos plan- objeto de estudio: diferencias en el conte- teados en los párrafos anteriores para la nido de MDA (dif_MDA), en el Contenido selección de genotipos tolerantes/resisten- de Clorofila (dif_CC), en el Índice de Cose- tes, se analizaron los resultados de los en- cha (dif_IC) y en el Rendimiento (dif_Rto). sayos comparativos de rendimiento (ECR) Esto permite inferir que el mayor valor de, de Criadero El Carmen de las campañas por ejemplo dif_Rto, indica una mayor di- 2008/09, 2009/10 y 2010/11, que contenían ferencia en rendimiento entre ambos tra- materiales que empleados en los ensayos tamientos, lo que implicaría una menor con sequía inducida, y que en la campaña tolerancia al estrés hídrico provocado. Los 2009/10 sufrieron sequía por las condicio- puntos que se alejen de esas diferencias y nes meteorológicas. se concentren alrededor del punto de ori- Los ECR se realizaron en la localidad de gen del gráfico representarían al grupo de General Cabrera, bajo un diseño de blo- genotipos más resistentes/tolerantes a las ques completos al azar con tres repeticio- condiciones de sequía. También, se obser- nes. Las parcelas consistieron en dos surcos vó que hay una correlación positiva -ángu- de 12 m de longitud distanciados a 0,70 m, lo entre los vectores que las representan lo que integró una superficie útil de 16,80 menor a 90º- entre las variables dif_CC, m2 que fue cosechada, trillada y pesada en dif_Rto e dif_IC, las cuales se correlacionan el laboratorio para obtener el rendimien- negativamente con el contenido de MDA. to total de granos, que se expresa en este La variable Dif_CC forma un ángulo cer- informe en kilogramos por hectárea. Lue- cano 180º con la variable dif_MDA lo que go, para esta variable se validaron los su- indicaría que ambas muestran una fuerte puestos del análisis de la varianza (norma- correlación negativa. Esto es teóricamen- lidad y homocedasticidad) y se realizó un te correcto, ya que si el contenido de clo- análisis de la varianza con el programa es- rofila en la hoja es alto implica una casi tadístico InfoStat (3). Se emplearon como nula peroxidación de lípidos, por lo tanto testigos a las variedades Granoleico (AO) el contenido de MDA es bajo o nulo. Esta y Don Pepe (INTA) y las prácticas de culti- línea permite dividir el plano en dos sec-

252 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 tores. Los puntos que se hallen por debajo inclusive se concentran por debajo de la de la misma y cercanos al origen señala- recta dif_MDA – dif_CC en la cercanía del rían que se está en presencia de materiales punto origen. Esto permite vincular lógi- cuyo comportamiento frente a sequía es camente los resultados obtenidos con los superior al de otros más sensibles. tres tipos de análisis y postular que estos El Análisis de Conglomerados distingue genotipos son los que presentaron una re- asociaciones posibles entre los valores de sistencia/tolerancia a sequía superior, por las variables y los genotipos estudiados. lo que fueron seleccionados para el ensa- El dendograma seleccionado (datos no yo de la campaña 2009/10. mostrados) distinguió cuatro grupos en función de las distancias euclideanas entre Campaña 2009/10 los distintos genotipos. Las líneas I-03-78 y El gráfico “biplot” obtenido mostró las 13103-3-B (AO) fueron tratamientos don- asociaciones entre las variables y genoti- de se perdieron muestras debido a conta- pos, observándose una correlación posi- minaciones con Sclerotinia sp., por lo que tiva -ángulo entre los vectores menores a estas observaciones fueron tratadas como 90º- entre las variables dif_CC, dif_IC y dif_ “outliers” ya que no proceden de un gru- Rdto, coincidente con los observados en la po de valores estadísticamente confiables. campaña anterior. Por otro lado se obser- El gráfico del Árbol de Recorrido Mínimo va una correlación negativa con el conte- (Figura 1) muestra sobre un gráfico “bi- nido de MDA. La variable dif_CC formó un plot” las uniones entre los puntos que ángulo obtuso con la variable dif_MDA representan a los genotipos mediante coincidente con la correlación negativa vectores de distancias mínimas dentro del observada en la campaña anterior, lo que espacio multidimensional. Se observó que ratifica que si el contenido de clorofila en los materiales genéticos que se unen con la hoja es alto la peroxidación de lípidos es trazos más cortos verifican los resultados baja y consecuentemente el contenido de del análisis realizado en los párrafos ante- MDA es bajo o nulo. riores. En el grupo de genotipos encerra- El dendrograma construido en base al dos por un polígono construido con líneas Análisis de Conglomerados (datos no punteadas encontramos materiales que se mostrados) permitió definir una serie de alejan de las variables dif_Rdto y dif_IC, e agrupamientos. El conformado por los ge- notipos I.99-25, I.03-79, I.03-81, 8199-1-F (AO), 13201-1-1, incluye a aquellos mate- riales asociados a mayores diferencias en el Rendimiento e Índice de Cosecha, lo que implicaría mayor sensibilidad a condicio- nes de estrés hídrico. Por otro lado, en el grupo conformado por 12601-2-B-II (AO), I.99-11, EC-48, Pronto (AO), 7698-7-A(AO) y 17104-2-A (AO) encontramos genotipos que se alejan de esas variables e inclusive se Figura 1. “Biplot” de las dos primeras componentes princi- concentran por debajo de la recta dif_MDA pales (CP1 y CP2) y Árbol de Recorrido Mínimo con las va- – dif_CC. Esto permite inferir que estos ge- riables objeto de estudio: diferencias en el Contenido de MDA (dif_MDA), en el Contenido de Clorofila (dif_CC), en notipos son los que presentaron una re- el Índice de Cosecha (dif_IC) y en el Rendimiento (dif_Rto) sistencia/tolerancia a sequía superior. Este y con los genotipos: 1)I.03-56, 2)I.03-81, 3)I.99-5, 4)I.99-18, resultado es coincidente con los materiales 5)I.99-6, 6)I.99-25, 7)I.03-27, 8)13103-3-B (AO), 9)I.03-70, 10)I.03-78, 11)I.03-79, 12)I.99-11, 13)GRANOLEICO, 14)EC que se unen con trazos más cortos en el Ár- 48, 15)4796-4-A-2-B/PRONTO, 16)EC 12, 17)4796-14-B-46- bol de Recorrido Mínimo (Figura 2). C-II rojo, 18)7698-7-A (AO), 19)8199-1-F (AO), 20)12401-6- A (AO), 21)12601-2-B-2 vir. (AO), 22)13201-1-1, 23)17104- 2-A (AO) (Campaña 2008/09).

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 253 vés de todos los ensayos (Cuadro 1). Sin embargo, cabe destacar el contraste entre el rendimiento total en caja o vai- na y el rendimiento total en grano. Com- parando ambos rendimientos en las tres campañas se observa una tendencia clara de un mejor comportamiento en cuanto a rendimiento en grano de la línea 7698-7-A (AO) sobre los otros dos testigos. Se puede

Figura 2. “Biplot” de las dos primeras componentes prin- afirmar que la línea en selección avanza- cipales (CP1 y CP2) y Árbol de Recorrido Mínimo con las da 7698-7-A (AO) rinde consistentemen- variables objeto de estudio: diferencias en el Contenido te a un nivel equivalente y aún superior de MDA (dif_MDA), en el Contenido de Clorofila (dif_CC), en el Índice de Cosecha (dif_IC) y en el Rendimiento (dif_ a las mejores variedades alto oleico bajo Rto) y con los genotipos: 1)I.03-81, 2)I.99-25, 3)17104-2-A cultivo, Granoleico y Don Pepe (INTA), (AO), 4)I.03-79, 5)I.99-11, 6)GRANOLEICO, 7)EC 48 (AO), particularmente en los años en los que se 8)4796-4-A-2-B/PRONTO, 9)7698-7-A (AO), 10)8199-1-F (AO), 11)12601-2-B-2 vir. (AO), 12)13201-1-1 (Campaña presenta mayor estrés hídrico como en la 2009/10). campaña 2009-2010.

Ensayos Comparativos de Rendimiento DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES (ECR) Luego de comprobar que la prueba de F Los ensayos con tratamientos de sequía señalaba la existencia de diferencias sig- inducida permitieron discriminar genoti- nificativas entre las medias de los trata- pos con atributos de resistencia/tolerancia mientos ( = 0,05) de los ECR, se empleó a este estrés. Si bien dos campañas con la prueba de Tukey para comparaciones este tipo de ensayos son aún insuficientes múltiples entre medias, resultado que no para tomar decisiones a mediano o largo se muestra, para seleccionar los genotipos plazo, como selección de progenitores, los que exhibieron rendimientos superiores y ECR demostrarían que genotipos detecta- una prueba de diferencias mínimas signifi- dos en los ensayos de sequía como tole- cativas (LSD) entre la línea 7698-7-A (AO) y rantes al estrés, se comportan de manera los respectivos testigos según la campaña semejante bajo condiciones de cultivo con de que se tratase. Ambos tipos de compa- escasez hídrica, como la campaña 2009/10 raciones se realizaron con un nivel = 0.05. con precipitaciones en General Cabrera de Los resultados mostraron a las variedades solo 454 mm durante la época de cultivo, Granoleico y, Don Pepe (INTA) -testigos- y mientras que la precipitación normal es de a la línea 7698-7-A (alto oleico) entre las alrededor de 650 mm. de mayor rendimiento en todos los casos Irigoyen et al. (4) mostraron que la cuan- y, aunque se detectan diferencias signifi- tificación del contenido de MDA en hoja cativas ( = 0,05) entre estos materiales, fue un buen parámetro para estimar la re- estas diferencias no son consistentes a tra- sistencia o susceptibilidad de un genotipo

Cuadro 1. Análisis de varianza del rendimiento en caja y en grano de maní en Ensayos Comparativos de Rendimiento del Criadero El Carmen, en las campañas 2008/09, 2009/10 y 2010/11.

* Letras distintas en la misma columna indican diferencias estadísticas significativas ( = 0,05) según Prueba LSD.

254 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 al estrés hídrico, ya que su incremento re- zar a las mejores variedades actualmente sultó ser producto de la peroxidación de lí- bajo cultivo, y que además muestra tole- pidos causados por el estrés. Así mismo, el rancia a las condiciones de estrés hídrico. contenido de clorofila en el tejido foliar se puede correlacionar directamente con la BIBLIOGRAFÍA CITADA salud y condiciones de la planta de allí que, 1. Buteler M.I., and J.H. Soave. 2011. Current una correlación positiva entre las variables status and objectives of nursery El Car- dif_CC, dif_Rto y dif_IC permitió agrupar men peanut breeding program. In: 5th materiales con comportamientos diferen- International Conference of the Peanut Research Community on Advances in Ara- ciales frente al estrés hídrico. La selección chis through Genomics and Biotechnolo- de genotipos considerando estos atributos gy. Brasilia, Brazil, Junio 2011. p. 35. fue también postulada por autores como 2. Hossain Z., López-Climent M.F., Arbona Reddy y Rao (13) quienes informaron que V., Pérez-Clemente R.M., and Gómez- los niveles de clorofila se ven disminuidos Cadenas, A. 2009. Modulation of the an- al producirse la inhibición de su síntesis y tioxidant system in citrus under waterlo- por ende lo consideraron un parámetro de gging and subsequent drainage. Journal susceptibilidad. También, Janamatti et al. of Plant Physiology 166(13): 1391-1404. (5) informaron que un déficit durante el 3. InfoStat 2009. InfoStat versión 2009. Gru- desarrollo de la vaina o de la semilla, re- po InfoStat, FCA, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. duce el peso de ellas, lo que impacta nega- 4. Irigoyen J.J., Emerich D.W., and Sánchez- tivamente sobre el rendimiento potencial Díaz M., 1992. Alfalfa leaf senescence in- del cultivo y su índice de cosecha. duced by drought stress: photosynthesis, Estos ensayos a lo largo de las tres campa- hydrogen peroxide metabolism, lipid pe- ñas, permitieron conformar un grupo de roxidation and ethylene evolution. Phy- seis genotipos que muestran característi- siologia Plantarum 84: 67-72. cas de resistencia/tolerancia al estrés hídri- 5. Janamatti V.S., Sashidhar V.R., Prasad co aplicado, integrado por: 7698-7-A (AO), I.G., and Sastry K.S.K. 1986. Effect of I.99-11, EC-48 (AO), PRONTO (AO), 17104- cycles of moisture stress on flowering 2-A (AO) y 12601-2-B-I (AO). pattern, flower production, gynophore length and their relationship to pod yield Las técnicas empleadas en este trabajo han in bunch types of groundnuts. Narendra sido propuestas por autores como Songs- Deva Journal Agriculture Research 1(2): ri et al. (16) debido a la baja interacción 136-142. Genotipo x Ambiente y la alta heredabi- 6. Heath R., and Packer, L. 1968. Photope- lidad de los atributos empleados, por lo roxidation in isolated chloroplasts. I. Ki- que se ratifica su utilidad para seleccionar netics and stoichiometry of fatty acid pe- progenitores para la obtención de nuevas roxidation. Arch. Biochem. Biophys. 125: variedades. Se demuestra que es posible 189-198. evaluar un número notable de materiales 7. López G.M. 2011. Serie de estudios sec- genéticos con una infraestructura relativa- toriales: Caso del maní y derivados del maní. In: Programa de Inserción Agrícola. mente sencilla. Apoyo a los procesos de apertura e inte- Concluyendo, los ensayos realizados cons- gración al comercio internacional ATN/ tituyen un avance de relevancia para el ME-9565-RG BID/FOMIN (Fundación INAI, mejoramiento genético del maní en Ar- Coord.). 128 pp. gentina, ya que se demuestra que con mé- 8. Mazzani B. 1983. Cultivo y Mejoramiento todos relativamente rápidos es posible de- de Plantas Oleaginosas. FONAIAP, Cara- tectar genotipos con resistencia/tolerancia cas, Venezuela. 629 pp. al estrés hídrico. Durante el desarrollo de 9. Nageswara Rao R.C., Udaykumar M., Far- este trabajo se identificó un genotipo -lí- quhar G.D., Talwar H.S., and Prasad, T.G. nea 7698-7-A- que reúne condiciones de 1995. Variation in carbon isotope discri- mination and its relationship to specifi c calidad y rendimiento como para reempla-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 255 leaf area and ribulose–1, 5–bisphosphate Rachaputi N.R., Prasad T.G., Udayaku- carboxylase content in groundnut geno- mar M., Wright G.C. & Nigam S.N. 2006. types. Aust. J. Plant Physiol. 22: 545-551. Leaf chlorophyll concentration relates to 10. Nigam S.N., Chandra S., Rupa Sridevi transpiration efficiency in peanut. Ann. K., Manoha Bhukta A., Reddy G.S., Na- Appl. Biol. 148: 7-15. geswara Rao R.C., Wright G.C., Reddy 15. Songsri P., Jogloy S., Holbrook C.C., Kes- P.V., Deshmukh M.P., Mathur R.K., Basu mala T., Vorasoot N., Akkasaeng C., and M.S., Vasundhara S., Vindhiya Varman P., Patanothai A. 2008a. Association of root, and Nagda A.K. 2005. Efficiency of phy- specific leaf area and SPAD chlorophyll siological trait-based and empirical selec- meter reading to water use efficiency tion approaches for drought tolerance in of peanut under different available soil groundnut. Ann. Appl. Biol. 146: 433–439. water. Agricultural Water Management 11. Pallas J.E. Jr., Stansell J. R., and Koske T.J. 96: 790-798. 1979. Effects of drought on Florunner 16. Songsri P., Jogloy S., Kesmala T., Vorasoot peanuts. Agron. Journal 71: 853-858. N., Akkasaeng C., Patanothai A., Holbro- 12. Passioura J.B. 1977. Grain yield, harvest ok C.C. 2008b. Heritability of drought re- index and water use of wheat. Journal of sistence traits and correlation of drought Australian Institute of Agricultural Scien- resistance and agronomic traits in peanut. ce 43: 117-120. Crop Science 48: 2245-2253. 13. Reddy A.J., and Rao I.M. 1968. Influence 17. Wright G.C., Hubick K.T., and Farquhar of induced water stress on chlorophyll G.D. 1988. Discrimination in carbon isoto- components of proximal and distal le- pes of leaves correlates with water-use aflets of groundnut plants. Curr. Science efficiency of field grown peanut cultivars. 5(3): 118-121. Australian Journal of Plant Physiology 15: 14. Sheshshayee MS., Bindumadhava H., 815–825.

Enfermedades virales del cultivo de maní en el noroeste argentino

Soledad de Breuil1,2, Fabián Giolitti1, Nicolás Bejerman1, Ceferino Flores3 y Sergio Lenar- don1,4 1- INTA, IPAVE-CIAP, Córdoba. 2- CONICET. 3- INTA, EEA Yuto, Jujuy. 4- UNRC, FAV, Río Cuarto, Córdoba. Correo-e: [email protected] / [email protected]

INTRODUCCIÓN en la provincia de Salta (4). El maní argentino junto con sus manu- El maní (Arachis hypogaea) es afectado facturas son reconocidos a nivel mundial por alrededor de 30 virosis en diferentes por sus atributos de calidad y sanidad, lo regiones del mundo. En Argentina se han que le ha permitido a nuestro país ser el identificado cuatro virosis que afectan al principal proveedor de la Unión Europea cultivo. En Córdoba, el maní es afectado y de otros países que demandan altos es- naturalmente por Cucumber mosaic virus tándares de calidad. Aproximadamente el (CMV, género Cucumovirus) (2), Ground- 96% de la producción nacional de maní nut ringspot virus (GRSV, género Tospovi- se concentra en la región centro-sur de la rus) (5) y Peanut mottle virus (PeMoV, gé- provincia de Córdoba. Sin embargo, en los nero Potyvirus) (6, 10); mientras que en el últimos años, la superficie sembrada con norte del país han sido detectados GRSV maní ha mostrado un creciente aumen- en la provincia de Jujuy (3) y Cowpea mild to en provincias del NOA. El objetivo del mottle virus (CPMMV, género Carlavirus) presente trabajo fue identificar las virosis

256 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 presentes en maní en lotes cultivados en 3 mM KCl, 3 mM NaN3, 8 mM Na2HPO4, las provincias de Salta y Jujuy. 1 mM NaH2PO4, y 0,13 M NaCl [tampón fosfato salino] con 2% de polivinilpirroli- MATERIALES Y MÉTODOS dona-40.000 y 0,05% Tween 20, pH 6,8). Se utilizaron inmunoglobulinas G (IgGs) e Recolección de muestras IgGs conjugadas con fosfatasa alcalina es- Se realizó un estudio prospectivo duran- pecíficas para cada virus siguiendo el pro- te dos campañas agrícolas consecutivas tocolo suministrado por los fabricantes. Se (2009/10 y 2010/11) donde se evaluaron 18 agregó el sustrato de la enzima y se mi- lotes de producción, 11 en la provincia de dieron las reacciones con un lector de ELI- Salta (localidades de Apolinario Saravia, SA (Dynex MRX II) a 405 nm. Las muestras Gral. Pizarro, Salta y Tartagal) y los siete que presentaban un valor de absorbancia restantes en la provincia de Jujuy (localida- mayor a la media de los controles negati- des de El Carmen, Palma Sola y Viñalito). En vos (maníes sanos) más tres veces el desvío cada lote se tomaron muestras (brotes jóve- estándar fueron consideradas positivas. nes) provenientes de plantas que manifes- taban síntomas típicos de enfermedad viral Dot-blot (mosaico, moteado, clorosis, ampollamien- Todas las muestras de maní fueron anali- to, amarillamiento de nervaduras, pun- zadas para determinar la presencia de Pe- tos, estriado, diseños y/o anillos cloróticos, MoV y PStV. Membranas de nitrocelulosa disminución y/o deformación de folíolos y (Bio-Rad, Richmond, CA) fueron embebi- achaparramiento). Cada muestra fue indivi- das por 5 min en tampón tris salino (TBS; dualizada en una bolsa plástica y etiqueta- 20 mM Tris-HCL, 0,5 M NaCl, pH 7,4). Las da con la descripción de los síntomas y su muestras fueron homogeneizadas (1:10 procedencia. Las muestras se mantuvieron peso/vol.) en tampón de extracción (0,05% refrigeradas hasta su análisis en laboratorio. Tween 20, 0,01 M dietilditiocarbamato en TBS) y se sembraron 25 μl de cada extracto Fuente de antisueros y controles positivos sobre las membranas. Las mismas fueron La detección de CPMMV se realizó con el sumergidas en tampón de bloqueo (TBS antisuero DSMZ AS-0566 (Alemania), utili- + 5% de leche descremada + 2% Triton zando el respectivo control positivo. Se uti- X-100) y mantenidas en agitación leve toda lizaron antisueros comerciales específicos la noche a temperatura ambiente. Después de la empresa Agdia Inc., con sus respecti- de tres lavados de 5 min cada uno con TBS vos controles positivos, para detectar CMV, + 0,05% Tween 20 (TBS-T), las membranas GRSV, Peanut stunt virus (PSV) y Tomato fueron incubadas por 2 h con el antisue- spotted wilt virus (TSWV). Los antisueros ro primario (1:400 en TBS + 2% de leche utilizados para determinar la presencia de descremada) el cual fue previamente ad- PeMoV y Peanut stripe virus (PStV), cuyos sorbido con tejido de plantas sanas. Las síntomas son semejantes, junto con sus membranas fueron lavadas con TBS-T e controles positivos, fueron provistos por el incubadas con un antisuero de cabra-anti Dr. W.D. Dar (ICRISAT, India). conejo conjugado con fosfatasa alcalina (Bio-Rad, Richmond, CA), diluído 1:3.000 Análisis serológicos en TBS + 2% de leche descremada, por 2 DAS-ELISA (double antibody sandwich- h a temperatura ambiente. Por último, se enzyme-linked immunosorbent assay). agregaron 30 mg/ml de nitroazul de te- Todas las muestras fueron analizadas para trazolio y 15 mg/ml de 5-bromo-4-cloro- determinar la presencia de CMV, PSV, 3-indolil fosfato al tampón sustrato (0,1 M

GRSV, TSWV y CPMMV (1). Aproximada- Tris, 0,1 M NaCl, 5 mM MgCl2, pH 9,5). Las mente 0,1 g de tejido vegetal fue molido membranas fueron incubadas con el sus- en tampón de extracción (1:10 peso/vol.; trato hasta que los controles positivos de-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 257 sarrollaron un color púrpura bien definido. para PeMoV y PStV, mientras que CPMMV fue detectado sólo en la campaña 2010/11 Análisis molecular (Cuadro 1). CMV, PSV, GRSV y TSWV no fue- Las muestras positivas por serología a Pe- ron detectados en ninguna de las mues- MoV y/o PStV fueron analizadas median- tras analizadas en los dos ciclos agrícolas. te la técnica de antígeno captura (AC) CPMMV fue el virus encontrado en menor (13), seguida de una transcripción reversa frecuencia, sólo el 3% de las muestras re- (RT) reacción en cadena de la polimerasa sultaron positivas por serología. PeMoV (PCR). Para la AC cada muestra fue moli- fue detectado en el 20% de las muestras da (1:10 peso/vol.) en tampón de captura analizadas, mientras que PStV fue el virus esterilizado (0,5 M Na2CO3, 0,5 M NaH- con mayor prevalencia, encontrándose en

CO3, pH 9,6), y se incubaron 50 µl del ho- el 39% de las muestras sintomáticas. Un mogeneizado en microtubos de 0,5 ml de grupo de muestras (42%) no reaccionó capacidad a 4ºC durante toda la noche. con ninguno de los antisueros probados. Luego de lavar los microtubos con PBS-T Asimismo, se identificaron muestras infec- esterilizado, se desarrolló una RT-PCR dú- tadas con más de un virus, dos muestras plex con el kit Access RT-PCR (Promega, presentaron coinfección de PStV y PeMoV Madison, WI) siguiendo las recomenda- y una muestra estuvo infectada con los ciones del fabricante, más el agregado de tres virus detectados en este estudio (PStV 0.4 µM de cada cebador. Se utilizaron dos + PeMoV + CPMMV) (Cuadro 1). juegos de cebadores: PST1 y PST2 especí- Las muestras positivas por serología a ficos para PStV, y PeMo14 y PeMo17 (es- CPMMV provenían de plantas que presen- pecíficos para PeMoV) (9). Los parámetros taban achaparramiento, disminución del de ciclado fueron: 48ºC por 45 min, 94ºC tamaño de los folíolos, severa defoliación por 2 min (40 ciclos de 94ºC por 45 s, 54ºC y clorosis severa en todas las hojas. Es pro- por 45 s, 68ºC por 1 min), y una extensión bable que estos síntomas hayan estado final de 68ºC por 10 min. Los productos causados por exceso de agroquímicos, en- de PCR fueron evaluados por electrofore- mascarando los síntomas característicos de sis en gel de agarosa al 2%, teñidos con esta virosis. Las plantas infectadas con Pe- bromuro de etidio y observados bajo luz MoV manifestaban un moteado sistémico, ultravioleta. suave o moderado (Figura 1a y b). Este sín- toma también se manifestaba en las plan- RESULTADOS tas afectadas con PStV, las cuales además En ambas campañas agrícolas se recolec- podían presentar moteado severo, estrías taron muestras que resultaron positivas a lo largo de las nervaduras y manchas ver-

Cuadro 1. Análisis serológicos positivos por DAS-ELISA y dot-blot de muestras de maní recolectadas en lotes comerciales de distintas localidades de Salta y Jujuy.

258 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Figura 1. Hojas de plantas de maní infectadas sistémicamente con Peanut mottle virus mostrando (a) mo- teado suave y (b) moteado moderado.

Figura 2. Hojas de plantas de maní infectadas sistémicamente con Peanut stripe virus manifestando (a) moteado suave y (b) moteado severo, estrías y manchas verdes. des en las hojas (Figura 2a y b). y PStV, siendo los síntomas ocasionados La identidad de PStV y PeMoV fue verifi- por los últimos muy similares por lo que se cada por RT-PCR. En las muestras positivas desarrolló la técnica molecular de RT-PCR por serología a PeMoV se amplificó un para la identificación del agente causal. fragmento del tamaño esperado de aproxi- En algunas muestras sintomáticas no se madamente 327 pb, mientras que las mues- tras positivas a PStV rindieron una banda de unos 234 pb, correspondiente al tamaño esperado. Ambos fragmentos fueron visua- lizados también en aquellas muestras que presentaban infección mixta (Figura 3).

DISCUSIÓN Figura 3. RT-PCR dúplex con juegos de cebadores Este trabajo constituye el primer estudio PST1/PST2 y PeMo14/PeMo17. 1: Marcador (100 bp prospectivo con el objetivo de determinar DNA Ladder, Promega); 2: PeMoV+; 3: PStV+; 4 y 5: las virosis presentes en el cultivo de maní muestras con infección mixta; 6, 7 y 14: muestras infectadas sólo con PStV; 9, 12 y 13: muestras infec- en las provincias de Salta y Jujuy. Los pató- tadas sólo con PeMoV; 8: maní sano; 10 y 11: mues- genos detectados fueron CPMMV, PeMoV tras negativas para ambos virus.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 259 detectó ninguno de los virus estudiados. de semillas pueden estar contaminados Esto pudo deberse a baja concentración con el virus. Asimismo, estos virus pue- viral, infección causada por otro virus u den dispersarse a través del intercambio otras causas como toxemia provocada por de germoplasma, como ocurrió con PStV insectos, daños producidos por herbicidas, que fue introducido a los EE.UU. a partir deficiencias nutricionales, malas condicio- de maní proveniente de China (8). El uso nes generales del cultivo, etc, las cuales de semilla certificada libre de virus es una podrían inducir síntomas similares a los práctica preventiva que debe ser conside- ocasionados por virus (14). rada en el sistema productivo nacional de CPMMV está ampliamente distribuido en maní. regiones tropicales, infectando natural- mente especies cultivadas y malezas perte- FINANCIAMIENTO necientes principalmente a las familias Fa- baceae y Solanacea. En el NOA, esta virosis Proyectos INTA PNIND-082511 y AEPV- ha sido reportada en los cultivos de soja y 214012. Fundación Maní Argentino. poroto (11, 12), además de haberse encon- trado infectando naturalmente maníes BIBLIOGRAFÍA CITADA cultivados en la localidad de Senda Ha- chada (prov. de Salta) durante la campaña 1. Clark M.F., and Adams A.N. 1977. Cha- agrícola 2004/05 (4). El virus es transmitido racteristics of the microplate method of en la naturaleza por la mosca blanca Be- enzyme-linked immunosorbent assay for misia tabaci de manera no persistente, por the detection of plant viruses. Journal of General Virology 34: 475-483. lo que la presencia de esta enfermedad en 2. de Breuil S., Giolitti F., and Lenardon S. el cultivo de maní probablemente esté re- 2005. Detection of Cucumber mosaic virus lacionada con la dinámica poblacional de on peanut (Arachis hypogaea L.) in Ar- su vector. gentina. Journal of Phytopathology 153: PeMoV y PStV son transmitidos en la na- 722-725. turaleza por áfidos de manera no persis- 3. de Breuil S., López Lambertini P., Ducas- tente y a través de las semillas de maní (7). se D. y Lenardon S. 2005. Detección de Este hecho, sumado a la utilización de se- Groundnut ringspot virus en el cultivo de millas de origen y sanidad desconocido y a maní. In: Resúmenes XIII Congreso Latino- la práctica habitual de los productores de americano de Fitopatología. In: III Taller de la Asociación Argentina de Fitopatólo- almacenar granos para ser utilizados como gos. Carlos Paz, Argentina. p. 587. simiente en la próxima campaña, asegura 4. de Breuil S., Nome C., Giolitti F., Oddino C. la constante presencia de estas virosis. Los y Lenardon S. 2006. Evidencias de Cowpea porcentajes de transmisión por semilla al- mild mottle virus (CPMMV) sobre maní en canzan valores de hasta 8,5% para PeMoV la provincia de Salta. In: Resúmenes XII y de casi el 38% para PStV (7), esto explica- Jornadas Fitosanitarias Argentinas. Cata- ría que éste último sea el virus detectado marca, Argentina. pp. 206-207. con mayor frecuencia en las muestras ana- 5. de Breuil S., Abad J., Nome C.F., Giolit- lizadas. Además, la identificación de PStV ti F., López Lambertini P., and Lenardon representa el primer informe sobre esta S. 2007. Groundnut ringspot virus: an emerging Tospovirus inducing disease in virosis en nuestro país. peanut crops. Journal of Phytopathology Las virosis transmisibles por semilla tienen 155: 251-254. gran importancia desde el punto de vista 6. de Breuil S., Nievas M.S., Giolitti F., Giorda epidemiológico en cuanto a la dispersión L.M., and Lenardon S. 2008. Occurrence, de la enfermedad. Además, la contamina- prevalence and distribution of viruses in- ción de las semillas puede transformarse fecting peanut in Argentina. Plant Disea- en un factor limitante para los programas se 92: 1237-1240. de mejoramiento genético porque stocks 7. Demski J.W., and Reddy D.V.R. 1997. Di-

260 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 seases caused by viruses. In: Compendium mild mottle virus infecting soybean crops of Peanut Diseases (N. Kokalis-Burelle, in Northewestern Argentina. Fitopatolo- D.M. Porter, R. Rodríguez-Kábana, D.H. gía Brasilera 31: 283. Smith y P. Subrahmanyam, eds.). Ameri- 12. Rodriguez Pardina P.E., Arneodo J.D., can Phytopathological Society Press, St. Truol G.A, Herrera P.S., and Laguna I.G. Paul, MN. pp. 53-59. 2004. First record of Cowpea mild mottle 8. Demski J.W., Reddy D.V.R., Sowell G. (Jr.), virus in bean crops in Argentina. Austra- and Bays D. 1984. Peanut stripe virus - a lasian Plant Pathology 33: 129-30. new seed-borne potyvirus from China in- 13. Rowhani A., Maningas M.A., Lile L., Dau- fecting groundnut (Arachis hypogaea). bert S.D., and Golino D.A. 1995. Develo- Annals of Applied Biology 105: 495-501. pment of a detection system for viruses 9. Dietzgen R.G., Callaghan B., Higgins C.M., of woody plants based on PCR analysis of Birch R.G., Chen K., and Xu Z. 2001. Diffe- immobilized virions. Phytopathology 85: rentiation of peanut seedborne potyviru- 347-352. ses and cucumoviruses by RT-PCR. Plant 14. Sherwood J.L., and Melouk H.A. 1995. Disease 85: 989-992. Viral diseases and their management. In: 10. Giorda L.M., Nome S.F. y Laguna I.G. 1985. Peanut Health Management (H.A. Melo- El virus del moteado del maní en la Ar- uk y F.M. Shokes, eds.). American Phyto- gentina. IDIA 433-436: 53-57. pathological Society Press, St. Paul, MN. 11. Laguna I.G., Arneodo J.D., Rodríguez Par- pp- 59-63. dina P.E., and Fiorona M. 2006. Cowpea

Eficiencia de fungicidas en el control de la viruela del maní según presión de enfermedad*

Guillermo J. March1,2, Claudio M. Oddino2,3, Julián García3, Adriana D. Marinelli2,3 y Ale- jandro M. Rago1 1- INTA IPAVE-CIAP. 2- Facultad de Agronomía y Veterinaria, UNRC. 2- Oro Verde Servi- cios. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN (8). En esta región productora la viruela es normalmente controlada a través de la La viruela (Cercospora arachidicola, Cer- aplicación de mezclas comerciales de fun- cosporidium personatum) es la principal gicidas triazoles y estrobilurinas. enfermedad foliar que afecta al maní (Ara- Los componentes epidemiológicos de un chis hypogaea) en la mayoría de los países patosistema son los que corresponden al productores (5, 9, 10, 11). En Córdoba, la patógeno o “componentes de agresivi- principal región manisera de Argentina, la dad”, los del cultivo o “componentes de especie prevalente durante la última déca- resistencia”, y los del ambiente o “com- da ha sido C. personatum (viruela tardía); ponentes de la enfermedad” (12, 14, 19). la cual causó en la campaña 2006/07 pér- En Argentina no se han detectado hasta didas estimadas en 35 x 106 USD debido a el presente subpoblaciones de C. persona- los elevados valores de severidad alcanza- tum, y las variedades de maní utilizadas dos en la mayoría de los cultivos, no obs- actualmente tienen un comportamiento tante los tratamientos químicos realizados similar frente a la viruela, por lo que los

* Un resúmen parcial de este trabajo fue presentado en la XXVI Jornada Nacional del Maní, Gral. Cabrera (2011), y adoptado a las Normas de Publicación de esta revista.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 261 componentes del ambiente o enfermedad Cuadro1. Fungicidas usados en el control de la tienen un rol clave en la determinación de viruela del maní (Cercosporidium personatum). Gral. Deheza y Vicuña Mackenna, campañas la presión de enfermedad. La presión de 2007/08/09/10/11. enfermedad es cuantificada a través de la máxima severidad alcanzada por la en- fermedad sin control químico, citándose entre los factores que influyen en ella, la ubicación de los ensayos y las condiciones meteorológicas (17). En estudios recientes que incluyeron de- cenas de ensayos de control químico de distintas enfermedades en varios cultivos, empresas que proporcionaron estos fungi- se comprobó que la eficiencia de los fungi- cidas y dosis dobles. cidas podía variar según estos factores (13, En todos los ensayos se utilizó un diseño 15, 17); de allí la importancia de realizar en bloques completos al azar con cuatro los ensayos experimentales de evaluación repeticiones, correspondiendo cada trata- de fungicidas en distintos sitios y años (4). miento fungicida y el control, a parcelas En este trabajo nos planteamos como ob- de cuatro surcos de ancho por 10 m de lar- jetivo evaluar la eficiencia de las mezclas go, efectuándose distinto número de tra- de triazoles+estrobilurinas usadas en el tamientos en cada año. control de la viruela y de sus componentes Las aplicaciones de los fungicidas se reali- separadamente (trizoles y estrobilurinas), zaron cada 15-21 días según las condicio- según distintas condiciones ambientales nes meteorológicas, usando una mochila conducentes a epidemias. de gas carbónico con seis picos a 35 cm de distancia, con pastillas tipo cono hueco, MATERIALES Y MÉTODOS 2,5 bares de presión y un caudal de 180- 200 L/ha. El primer tratamiento se efectuó A fin de evaluar la eficiencia de los fungici- cuando la severidad alcanzó 1,5-2,0%. das en el control de la viruela del maní, se La severidad de la viruela se estimó a partir efectuaron ensayos de control químico en de los 45 días de la emergencia en cuatro las localidades de General Deheza y de Vi- ramificaciones laterales extraídas al azar cuña Mackenna, durante cuatro campañas en los dos surcos centrales de cada parcela, agrícolas (2007/08/09/10/11). Los ocho ensa- según St (%): {[(1 - d) Sv] + d} x 100, donde yos se realizaron en lotes en los cuales no St representa la severidad total para cada se había sembrado maní en los tres últimos rama muestreada, Sv la proporción visible años, empleándose la misma variedad. de tejido enfermo estimada según escala En estos ensayos se evaluaron las mezclas diagramática, y d la proporción de defolia- comerciales de triazoles y estrobilurinas ción (16). registradas en Argentina para el control La eficiencia de cada fungicida fue esti- de esta enfermedad, y de manera separa- mada según la relación entre la severidad da los triazoles y/o estrobilurinas que for- final en el tratamiento fungicida (Sft) y la man estas mezclas, incluyéndose además severidad final en el control (Sfc) (presión el tebuconazole que no se encuentra en de enfermedad en cada ensayo), expresada mezclas comerciales, pero que fue uno de como porcentaje respecto al control no tra- los triazoles más utilizados en el control tado [1-( Sft/ Sfc) x 100], con lo cual cuanto de la viruela en Argentina (Cuadro 1). En mayor sea el valor de la diferencia mayor el caso de las mezclas se usaron las dosis será la eficiencia del fungicida (7, 13). de marbete y dosis dobles, y en el caso de Con todos los valores de eficiencia de cada los triazoles y estrobilurinas aplicados so- grupo fungicida obtenidos en los ocho en- los, las dosis sugeridas por técnicos de las sayos (mezclas: 44; triazoles: 40; estrobiluri-

262 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 nas: 31), se estimaron las medias y estadísti- cos asociados a ellas, y realizaron análisis de regresión lineal entre Sft (variable depen- diente) y Sfc (variable independiente) para cada uno de los tres grupos de fungicidas. Dado el diferente número de tratamien- tos realizados con cada grupo de fungici- das durante los ocho ensayos en los cuatro años del estudio, para comparar las medias de eficiencia y las tasas de los correspon- dientes análisis de regresión, se usaron las varianzas asociadas generadas al estimar Figura 1. Severidad final (presión de enfermedad) las medias de cada grupo fungicida y las de la viruela del maní (Cercosporidium persona- provenientes del análisis de regresión res- tum) en Gral. Deheza y Vicuña Mackenna en las pectivamente, ponderando por el número campañas 2007/08/09/10/11. de datos (tratamientos fungicidas) de cada grupo según (µ1 - µ2) ± t[P/2; n1 + n2 - 2(p)] tratamientos realizados para el control . s[d], donde µ es la variable estimada (me- de la viruela en este trabajo (7,2 - 99,8%), dia o tasa), p el número de parámetros (1 también fue registrada en estudios que ó 2), n1 y n2 el número de dato para cada abarcaban decenas de ensayos de control grupo de fungicidas, t[ ] el valor de una ta- químico de enfermedades en distintos cul- bla “t” con nivel de significancia P/2 y [n1 + tivos (13, 15, 17). La intensidad de las en- n2 - 2(p)] grados de libertad, y s[d] el error fermedades varía entre años y entre sitios estándar de la diferencia, que se calcula debido a la dinámica de sus componentes como la raíz cuadrada de la suma de las epidemiológicos (4). A diferencia de estos varianzas correspondientes a ambos pará- trabajos, en todos los ensayos de control metros: s[d] = [s2 (µ1) + s2 (µ2)]1/2. Cuando de la viruela siempre se uso la misma me- la diferencia entre las variables (µ1 - µ2) es todología para realizar los tratamientos mayor que el error estándar ponderado (t[ (dosis fungicida, volumen del caldo, pre- ] x s[d]), son significativamente diferentes sión, momento de primer tratamiento y a nivel de P, caso contrario son iguales (2). siguientes) y se sembró la misma variedad, por lo que la eficiencia de los fungicidas RESULTADOS Y DISCUSIÓN en cada sitio y año estaría determinada principalmente por las propiedades intrín- En las campañas agrícolas 2007/08/09/10/11, secas de cada compuesto frente a la pre- C. personatum fue la única especie cau- sión de enfermedad. sante de la viruela del maní en los ensayos A similitud de lo comprobado en otros efectuados en ambos sitios (Gral. Deheza y trabajos con distintas enfermedades (6, Vicuña Mackenna), variando la presión de 13, 17, 18), en este también se observó enfermedad (Sfc) entre 14 y 99 % (Figura que cuanto mayor era la presión de enfer- 1). La Sfc es una medida indirecta de las medad, menor era la eficiencia fungicida, condiciones conducentes a epidemias (17), independientemente de los compuestos y que en este trabajo fueron principalmente de las dosis (Cuadro 2). debidas a las condiciones meteorológicas La eficiencia media de las estrobilurinas y a la presión de inóculo (sitio y años), ya (84%) fue significativamente mayor que la que se utilizó la misma variedad (hospe- correspondiente a los triazoles (67,5%) y a dante) y no se han identificado subpobla- las mezclas (65,1%), las cuales resultaron ciones de C. personatum con distinta agre- similares entre si (Cuadro 2). Por su parte, sividad en nuestra región productora. la tasa de disminución de la eficiencia de La amplitud del rango de eficiencia de los las mezclas fue significativamente mayor

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 263 Cuadro 2. Eficiencia de fungicidas en el control de Como señaláramos, en Argentina es gene- la viruela del maní (Cercosporidium personatum) ralizado el uso de mezclas comerciales de en Gral. Deheza y Vicuña Mackenna en las campa- ñas 2007/08/09/10/11. triazoles y estrobilurinas para el control de la viruela del maní, con el objetivo de complementar sus modos de acción. Con- siderando los resultados obtenidos en este trabajo, debería analizarse como influyen * Letras diferentes en columnas indican diferencias signifi- diferencialmente ambos componentes de cativas (p<0,05) según Campbell y Madden (2). las mezclas a los fines de mejorar su com- x Sfc: severidad final en el control o presión de enferme- dad. plementación y con ello la eficiencia de las mezclas, especialmente en condiciones de elevada presión de enfermedad. que la correspondiente a las estrobilurinas pero no a los triazoles, siendo similares las AGRADECIMIENTOS Y FINANCIAMIENTO de triazoles y estrobilurinas; observándose que por cada 1% de aumento de la pre- Nuestro agradecimiento a las empresas sión de enfermedad, la tasa de disminu- que nos proporcionaron las formulaciones ción de la eficiencia de las mezclas era 10 de triazoles y de estrobilurinas para poder y 16% mayor que para los triazoles y las realizar este estudio. estrobilurinas respectivamente (Cuadro 2). Este trabajo ha sido posible a través de Considerando estos resultados y los obte- fondos y/o logística aportados por FON- nidos por los autores citados, de acuerdo CYT, INTA (Programa Nacional de Cultivos con Cook et al. (4), la realización de en- Industriales), UNRC (Programa SCyT), Fun- sayos experimentales para evaluar fungi- dación Maní Argentino y Oro Verde Servi- cidas en diferentes sitios y años, permiten cios Fitosanitarios. detectar diferencias entre los tratamien- tos, otorgándole marcada solidez a los re- BIBLIOGRAFIA CITADA sultados. Por otra parte, al evaluar en EE.UU. estra- 1. Aquino V.M., Shoekes F.M., Gorbet D.W., tegias de manejo de la viruela del maní and Nutter, F.W. 1995. Late leaf spot pro- combinando resistencia genética y trata- gression on peanut as affected by compo- mientos fungicidas, se logró disminuir el nentes of partial resistance. Plant Disease número de los tratamientos en los culti- 79: 74-78. vares con resistencia (3, 11, 18). Los ma- 2. Campbell C.L., and Madden L.V. 1990. In- teriales resistentes a C. personatum se troduction to Plant Disease Epidemiology. caracterizan por un período de latencia John Wiley & Sons. 532 pp. 3. Cantonwine E.G., Culbreath A.K., Steven- más extendido (menor severidad) y menor son K.L., Kemerait R.C., Brenneman T.B., esporulación (menor presión de inócu- Smith N.B., and Mullinix B.G. 2005. Inte- lo) (1), lo que significa menor presión de grated disease management of leaf spot enfermedad. Sin embargo, en condicio- and spotted wilt of peanut. Plant Disease nes ambientales altamente conducentes 90: 493-500. a epidemias la severidad se incrementa- 4. Cook R.J., Hims M.J., and Vaughan T.B. ba marcadamente, incluso en los cultiva- 1999. Effects of fungicide spray timing on res resistentes al disminuir el número de winter wheat disease control. Plant Pa- tratamientos (18). También en estos casos thology 48: 33-50. en que se combinan resistencia genética 5. Culbreath A.K., Brenneman, T.B., and Kemerait R.C. 2002. Management of early y control químico para el manejo de la leaf spot of peanut with pyraclostrobin as viruela, la eficiencia de los tratamientos affected by rate and spray interval. Plant fungicidas fue afectada por la presión de Health Progress doi:10.1094/PHP-2002- enfermedad. 1018-01-RS.

264 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 6. Demirci F., Bayraktar H., Babaliogullu I., grams. In: General Concepts in Integrated Dolar F.S., and Maden S. 2003. In vitro and Pest and Disease Management (A. Ciancio In vivo effects of some fungicides against y K.G. Mukerji, eds.). Springer. pp. 45-79. the chickpea blight pathogen, Ascochyta 13. Ojiambo P.S., Paul P.A., and Holmes G.J. rabiei. Journal Phytopathology 151: 519- 2010. A quantitative review of fungici- 524. de efficacy for managing downy mildew 7. March G.J., Oddino C.M. y Marinelli A.D. in cucurbits. Phytopathology 100: 1066- 2010. Manejo de enfermedades de los 1076. cultivos según parámetros epidemiológi- 14. Parlevliet J.E. 1979. Components of resis- cos. Biglia Impresores, Córdoba. 193 pp. tance that reduce the rate of epidemics 8. March G.J., Oddino C.M., García, J., Mari- development. Ann. Rev. Phytopathol. 17: nelli A.D. y Rago A.M. 2011. Disminución 203-222. de la eficiencia de fungicidas en el control 15. Paul, P.A., Lipps, P.E., Hershman, D.E., Mc- de la viruela del maní según severidad de Mullen, M.P., Draper, M.A., and Madden, la enfermedad. In: Resúmenes XXVI Jor- L.V. 2007. A quantitative review of tebu- nada Nacional del Maní. General Cabrera, conazole effect on Fusarium head blight Córdoba. pp. 23-24. and deoxynivalenol content in wheat. 9. Marinelli A.D. y March G.J. 2005. Viruela. Phytopathology 97:211-220. In: Enfermedades del Maní en Argentina 16. Plaut J.L., and Berger R.D. 1980. Develo- (G.J. March y A.D. Marinelli, eds.). Biglia pment of Cercosporidium personatum Impresores, Córdoba. pp. 13-39. in three peanut canopy layers. Peanut 10. McDonalds D., Subrahmanyam P., Gib- Science 7: 46-49. bons R.W., and Smith D.H. 1985. Early and 17. Schern H., Christiano R.S.C., Esker P.D., Del late leafspots of groundnut. International Ponte E.M., and Godoy C.V. 2009. Quan- Crops Research Institute for the Semi-Arid titative review of fungicide efficacy trials Tropics. Inf. Bull. 21. Patancheru, A.P., In- for managing soybean rust in Brazil. Crop dia. Protection 28: 774-782. 11. Monfort W.S., Culbreath A.K., Stevenson 18. Woodward J.E., Brenneman T.B., Keme- K.L., Brenneman T.B., Gorbet D.W., and rait R.C., Culbreath A.K., and Smith N.B. Phatak, S.C. 2004. Effects of reduced tilla- 2010. Management of peanut diseases ge, resistant cultivars, and reduced fungi- with reduced input fungicide programs in cide inputs on progress of early leaf spot fields with varying levels of disease risk. of peanut (Arachis hypogaea). Plant Di- Crop Protection 29: 222-229. sease 88: 858-864. 19. Zadoks J.C, and Schein R.D. 1979. Epide- 12. Nutter F.W. 2007. The role of plant disea- miology and plant disease management. se epidemiology in developing successful New York, Oxford University Press, 1979. integrated disease management pro- 427 pp.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 265 INFORMES ESPECIALES y TECNOLOGÍAS

Disminución de la densidad de plantas en el cultivo de maní ¿cuál es el límite?

Guillemo Cerioni1, Federico Morla1, 2, Marcelo Kearney1, Diego Della Mea1, Emanuel Fer- nández1, Oscar Giayetto1, María Rosso1, Elena Fernández1 y Gabriela Violante1 1- FAV, UNRC, Ruta Nac. 36 Km 601, Río Cuarto, Córdoba, Argentina. 2- CONICET- Min- CyT Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN no menos. La mejor densidad de siembra de maní tipo runner es la que permite ob- Argentina es uno de los tres principales tener 10 a 12 plantas bien distribuidas por exportadores de maní de alta calidad, o metro lineal de surco a 70 cm de distancia, maní tipo confitería, aunque su produc- por lo que los productores de la región ción representa menos del 2% del volu- siembran 16-20 semillas (de buen poder men mundial. Ambos parámetros, el ren- germinativo) por metro lineal para obte- dimiento de frutos y la calidad comercial ner alrededor de 12 plantas (14). del grano, son determinantes de la renta- Por otra parte, se han encontrado relacio- bilidad de este cultivo (15). nes directas entre la densidad de plantas y El número de plantas por unidad de super- el rendimiento (13, 12). En estos trabajos ficie y su disposición espacial (distancias se evaluaron diferentes rangos de densi- entre y sobre hileras) afectan el crecimien- dades con respuestas positivas del rendi- to y rendimiento del maní (6). Para lograr miento hasta 14 plantas/m2, en el primero una correcta distribución en la hilera, es de ellos, y hasta 14 u 11 plantas/m de sur- necesario utilizar semilla de tamaño uni- co a 0,60 m en suelos de alta y media/baja forme, la cual según ensayos realizados fertilidad, respectivamente en el segundo. (14), se corresponde con valores medios Otros autores hallaron que la relación en- (granometrías 50/60 ó 60/70). Además, la tre el rendimiento y la densidad de plantas cantidad de semilla requerida para sem- ajustó a modelos polinómicos de segundo brar una hectárea, depende de su tamaño orden con coeficientes de determinación y poder germinativo (14). significativos (p<0.01). Hasta 12-14 plan- En general, la calidad fisiológica de la tas/m2, el aumento del rendimiento con la semilla utilizada para sembrar en la pro- densidad fue pronunciado; con incremen- vincia de Córdoba es baja, por lo que se tos decrecientes a densidades mayores (8). recomienda aumentarla entre 20 y 25% Estas respuestas se correspondieron con respecto al número de plantas a lograr las relaciones existentes entre los atribu- (14). Pero, en condiciones de campo es tos vegetativos, por planta (materia seca común que esos valores se incrementen y número de ramas) y sus equivalentes a hasta 35-40%. La experiencia indica que nivel de población (biomasa e IAF), con el un cultivo de maní “ralo” nunca logra el rendimiento de frutos por superficie. máximo rendimiento posible, en cambio Casini et al. (2), trabajando con diferentes el “exceso” de plantas no disminuye el densidades (9 a 17 plantas/m) no encon- rendimiento pero aumenta los costos de traron efectos sobre la calidad y el rendi- implantación, por lo que es preferible te- miento de maní confitería, afirmando que ner más plantas que la cantidad óptima y se debe adecuar la densidad de siembra

266 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 para obtener 10 plantas por metro lineal Córdoba (latitud 33º 06´ S, longitud 64º 18´ de surco ya que mayores densidades incre- O), sembrado con un cultivo de maní sin mentan los costos de implantación sin me- limitaciones hídricas ni nutricionales, en jorar la productividad del cultivo. un suelo Hapludol típico de textura franca En otras experiencias (4, 11), el aumen- arenosa, siendo maíz el cultivo antecesor. to de la población de plantas produjo Se evaluaron distintas densidades de siem- mayor porcentaje de semillas de tamaño bra establecidas mediante raleos aplicados grande; atribuyéndose este efecto a que a la densidad obtenida por el productor la alta competencia tiende a suprimir el (17 plantas/m lineal). Los valores resultan- crecimiento reproductivo tardío del maní tes fueron 12 pl/m lineal), según lo reco- y que, como se conoce, las primeras flores mendado en la bibliografía y disminucio- son las más exitosas en formar frutos. nes del 25% (9 pl/m), 50% (6 pl/m) y 75% En nuestra región el manejo de la densi- (3 pl/m) sobre ese valor. Los tratamientos dad de siembra continúa siendo un tema fueron denominados D3, D6, D9, D12 y no resuelto. La problemática combina pa- D17 para 3, 6, 9, 12 y 17 plantas/m lineal. rámetros de calidad fisiológica (regular po- Los raleos se realizaron a los 30 días des- der germinativo) y tamaño de semilla con pués de la siembra (DDS) con un repaso a condiciones ambientales subóptimas en el los 50 DDS empleando una cinta métrica momento de la siembra (fechas tempra- marcada con las distancias entre plantas nas y bajo cubierta), entre otros aspectos. correspondientes a cada tratamiento. El Por ello, una práctica correctiva es sem- cultivar utilizado fue Granoleico sembra- brar densidades altas (18-20 semillas/m) do el 18 de octubre con una sembradora que aseguren la implantación y compen- de grano grueso de 16 surcos a 70 cm. sen parcialmente esas limitaciones. En ese El experimento se dispuso en un diseño de contexto, el productor obtiene general- bloques al azar con tres repeticiones y las mente densidades menores a las deseadas parcelas tuvieron ocho surcos de 7 m de y se enfrenta a la situación de decidir si largo (39,2 m2) a las que se aplicaron trata- mantiene el cultivo o lo resiembra. Esta mientos fitosanitarios durante el ciclo de decisión es complicada debido al incre- cultivo para el control de malezas, plagas mento de costos que supone la resiembra y patógenos. y a que la duración del ciclo de los geno- A cosecha (R8) se tomaron cuatro mues- tipos utilizados en la región (>150 días) tras de 1 m2 por tratamiento y repetición no se adapta a siembras tardías (diciem- para determinar los componentes del ren- bre). Por ello, es importante determinar dimiento (número y peso de frutos madu- un umbral de plantas efectivamente esta- ros e inmaduros y peso de semillas). blecidas compatibles con un rendimiento La calidad comercial de las semillas cose- óptimo en cantidad y calidad. El objetivo chadas se evaluó mediante el porcentaje de este estudio fue evaluar la disminución de maní tipo confitería, relación grano/caja del número de plantas establecidas sobre y granometría. Las muestras se procesaron los componentes del rendimiento y la ca- empleando la metodología utilizada en las lidad comercial del maní e identificar un plantas industrializadoras con zarandas de valor umbral de plantas como parámetro tajo de 10; 9; 8; 7,5; 7; 6,5 y 6 mm de an- de decisión. cho, para obtener las categorías de tama- ños (expresadas en número de semillas por MATERIALES Y MÉTODOS onza, 28,35 g):<38, 38-42, 40-50, 50-60, 60- 70, 70-80, 80-100 y >100, respectivamente. El ensayo se realizó en la campaña 2009/10 Los resultados obtenidos fueron someti- en un campo de producción ubicado en dos a ANAVA y comparación de medias se- cercanías de la Universidad Nacional de gún el test de Duncan (0,05), mediante el Río Cuarto, departamento Río Cuarto, programa estadístico INFOSTAT (5).

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 267 Cuadro 1. Componentes del rendimiento de maní para diferentes densidades de siembra evaluadas.

* Para cada variable letras distintas indican diferencias significativas entre tratamientos según test de Duncan (p<0,05). RESULTADOS Y DISCUSIÓN variación en el número de frutos. Asociado a los cambios en los componen- El cuadro 1 presenta el peso y número de tes del rendimiento, la partición a los dife- frutos maduros e inmaduros por superfi- rentes órganos también varió. Así, en den- cie. Ambos parámetros se modificaron con sidades bajas hubo mayor porcentaje de la disminución de la densidad de 17 a 3 partición a hojas (9,5%) y menor a frutos plantas/m. El peso de frutos maduros pasó (9,6%) y un efecto contrario se evidenció de 539 a 319 g/m2, sin diferencias signifi- en las densidades altas; similar a lo encon- cativas entre las dos densidades más bajas trado por Cerioni (3) bajo condiciones de (D3 y D6) y entre las dos más altas (D12 y estrés hídrico. D17); mientras D9, con un valor interme- El número de semillas por fruto (1,65), ca- dio (465 g/m2), difirió significativamente racterística de alta heredabilidad genotí- de ambos extremos. El número de frutos pica, no se modificó con la densidad. maduros también disminuyó de 456 a 331 El aumento de la densidad redujo signifi- frutos/m2 y lo inverso ocurrió con los fru- cativamente la producción de frutos por tos inmaduros, cuyo número aumentó de planta pero la aumentó por superficie, de- 94 a 135 frutos/m2 lo mismo que su peso bido a que la tasa de aumento del rendi- (de 9,5 a 15 g/m2). Este mayor grado de miento por m2 fue cinco veces mayor que inmadurez en las plantas crecidas a den- la tasa de caída del rendimiento individual sidades bajas (D3 y D6), se relaciona con (Figura 1). Así, la producción de frutos por lo encontrado por Kvien y Bergmark (11). planta disminuyó de 80 (D3) a 23 g (D17) y Sus resultados señalan que el aumento de por superficie aumentó de 319 a 539 g/m2. densidad redujo la longitud de las ramas, Resultados similares a los reportados por concentrando la floración y el crecimiento de frutos en la base de la planta. Se redu- jo así la inmadurez y aumentó la cantidad y el peso de frutos maduros por superfi- cie. Giayetto et al. (6), también muestran que el aumento de densidad disminuyó el número y peso de frutos y semillas por planta con un aumento de ambos por su- perficie. La magnitud de esos efectos varió con la condición del año, siendo mayor en los ciclos agrícolas con estrés hídrico. Otra respuesta similar fue reportada por Naka- Figura 1. Rendimiento de frutos de maní por plan- gawa et al. (12), para quienes el cambio en ta (g) y superficie (g/m2),en función del número de la densidad de plantas ocasionó la mayor plantas por metro lineal de surco.

268 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Nakagawa et al. (12). Calidad comercial Las dos densidades más altas (D12 y D17) El cuadro 2 presenta la distribución por- alcanzaron los mayores rendimientos por centual en peso de los tamaños granomé- hectárea sin diferencias entre ellos supe- tricos de las semillas, el rendimiento tipo rando significativamente a los otros tra- confitería y la relación grano/caja para las tamientos (Figura 2). Por su parte, la den- distintas densidades de plantas. Las modi- sidad intermedia (D9) fue mayor que las ficaciones de estos parámetros de calidad dos más bajas (D6 y D3), que tampoco difi- comercial fueron debidas a la inmadurez rieron entre sí. Estos resultados confirman de los frutos asociada con la disminución parcialmente lo indicado por Pedellini (14) progresiva de plantas/m (Cuadro 1) como para quien la mejor densidad de siembra lo describió Kvien y Bergmark (11). de maní “runner” es la que permite obte- Las densidades altas (D17 y D12) tuvie- ner 10 a 12 plantas bien distribuidas por ron significativamente mayor proporción metro lineal de surco. Nakagawa et al. de semillas en los tamaños granométricos (12), reportaron que el rendimiento au- 8 y 9 mm respecto a las bajas densidades mentó con la densidad hasta 14 pl/m, en (D3 y D6), en las que la respuesta fue in- suelos de alta fertilidad, y hasta 11 pl/m en versa ya que tuvieron mayor proporción los de mediana a baja fertilidad. de semillas pequeñas (7; 6,5; 6 y <6 mm). En la zaranda de 7,5 mm todos los trata- mientos tuvieron un porcentaje similar. En otras experiencias, el incremento de la po- blación de plantas causó un aumento del número de semillas de tamaños grandes (11) o del peso de 100 semillas (12); siendo éste último atribuido a la disminución de la longitud de las ramas por efecto de la mayor competencia y el consecuente me- nor número de frutos procedentes de las Figura 2. Rendimientos de frutos y semillas (kg/ha) primeras flores (11). en función del número de plantas por metro de sur- La respuesta del rendimiento confitería co. (Cuadro 2) coincidió con Coolber (4), quien Para cada variable letras distintas indican diferencias significativas entre tratamientos según test de Duncan reportó que el incremento en la densi- (p<0,05). dad de plantas produjo un aumento en el porcentaje de semillas de tamaño grande Los ajustes lineales del rendimientos de (tipo confitería). Los tratamientos D12 y frutos (R2= 0,923) y de semillas (R2= 0,913) D17 tuvieron los rendimientos de maní al rango de las densidades estudiadas, mos- confitería más altos (79,8 y 74,9%, respec- traron que por cada planta por metro de tivamente) sin diferencias significativas surco que se pierde, ocurre una disminu- entre ellos; la densidad D9 tuvo 70,9% y ción de 171 y 143 kg/ha, respectivamente. las más bajas (D6 y D3) los menores valores Otras experiencias mostraron que, como (64,5 y 53,3%, respectivamente) a diferen- consecuencia de la mayor cantidad de cia de lo encontrado por Casini et al. (2) biomasa acumulada, del número de ra- quienes no hallaron respuestas como las mas por superficie, del incremento del IAF descriptas. y de la cobertura anticipada, los diseños La relación grano/caja fue significativa- de siembra compactos producen mayores mente menor en las densidades bajas (D3 rendimientos de frutos y semillas por hec- y D6) y mayor en las altas (D9, D12 y D17) tárea que los modelos menos densos (1, 6, como consecuencia de la menor inmadu- 7, 8, 10). rez de los frutos en éstas últimas. Naka- gawa et al. (12) reportaron resultados si-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 269 Cuadro 2. Distribución porcentual de los tamaños de semilla de maní según zarandas (10; 9; 8; 7,5; 7; 6,5; 6 y <6 mm de diámetro), rendimiento confitería (Conf.) y relación grano/caja en función de la densidad de plantas por metro (pl/m).

* En cada columna letras distintas indican diferencias significativas entre tratamientos, según test de Duncan p( <0,05). milares; mientras que Giayetto et al. (9) y rarse un valor umbral de referencia para Cassini et al. (2), no encontraron efectos decidir sobre la continuidad del cultivo. de los modelos de siembra sobre esta re- lación. BIBLIOGRAFÍA CITADA

CONCLUSIONES 1. Cahaner A., and Ashiri A. 1974. Vegeta- tive and reproductive development of Las plantas crecidas en bajas densidades Virginia-type peanut varieties in different (D3 y D6) produjeron más frutos por plan- stand densities. Crop Science 14: 412-416. 2. Casini C., Rolando R.O., Haro, R. y Yacci ta que las densidades altas debido a la me- M.R. 2008. Efecto de la densidad de siem- nor competencia intraespecífica, pero con bra sobre el rendimiento y la calidad del una mayor proporción de frutos inmadu- maní (Arachis hypogaea) apto para ali- ros. mento humano. IDIA XXI 10: 95-98. El mayor rendimiento de frutos por m2, 3. Cerioni G. 2003. Déficit hídrico en la etapa obtenido con las densidades altas (D12 y reproductiva del Maní (Arachis hypogaea D17), resultó de la relación entre la tasa de L.) su influencia sobre el crecimiento, de- incremento del peso de frutos por super- sarrollo, rendimiento y calidad. Tesis MSc. ficie y la tasa de disminución por planta, Facultad de Agronomía y Veterinaria, Uni- la que en valores absolutos fue alrededor versidad Nacional de Río Cuarto. 95 pp. 4. Coolber P. 1994. Reproductive biolo- de 5. gy and developmet. In: The Groundnut El rendimiento de maní tipo confitería y Crop A scientific basis for improvement la relación grano-caja disminuyeron con (J. Smartt, ed). Departament of Biology, las densidades bajas, debido a una menor Southampton University. UK. pp. 157-158. proporción de los tamaños granométricos 5. Di Renzo J.A., Casanoves F., Balzarini grandes (calibres 8 y 9), causada por la ma- M.G., Gonzalez L., Tablada M. y, Robledo yor inmadurez de los frutos ya referida. C.W. InfoStat versión 2011. Grupo InfoS- Una respuesta contraria se registró en los tat, FCA, Universidad Nacional de Córdo- calibres 7 y menores. ba, Argentina. URL http://www.infostat. El rendimiento de frutos y semillas ajustó com.ar 6. Giayetto O., Asnal W.E. y Cerioni G. lineal y negativamente a la disminución A.1995. Respuesta del Maní (Arachis de la densidad de plantas con una tasa de hypogaea L.) a diferentes modelos de pérdida de 171 y 143 kg/ha para frutos y siembra en Córdoba, Argentina. In: Com- semillas, respectivamente por cada planta pendio de trabajos presentados, Tomo II: perdida en el metro de surco para el rango 46-53I Congreso Nacional de Soja y II Re- estudiado. unión Nacional de Oleaginosos. Pergami- La densidad de hasta 9 pl/m de surco, dis- no (Buenos Aires), octubre de 1995. tribuidas uniformemente, podría conside- 7. Giayetto O., Cerioni G.A., and Asnal W.

270 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 E.1998. Effect of sowing spacing on vege- tion, planting date and water availability. tative growth, dry matter production and Peanut Science 14(1): 11-16. peanut pod yield. Peanut Science 25: 86- 12. Nakagawa J., De Campos Lasca D., De 92. Souza Neves G., De Sousa Neves J.P., Nu- 8. Giayetto O., Cerioni G.A., and Amín M. S. nes Da Silva M., Veraguas Sanchez S., Bar- 2003. Use of asymptotic model to obtain bosa V. & Rosseto C.A.V. 2000. Densidades optimun plant density in peanut (Arachis de plantas e produção de amendoim. Sci. hypogaea L.). J. of Peanut Science 32(1): agric. 57(1): 67-73. 1-6. 13. Pedellini R. 1991. Efecto de la densidad 9. Giayetto O., Cerioni G.A., and Amín M. S. y distribución de plantas sobre el rendi- 2005. Water use, growth and pod yield of miento y calidad comercial del maí tipo two peanut cultivars under different inte- Runner. In: Resúmenes 6º Jornada Na- rrow spacings. J. of Peanut Science 34(2): cional de Maní. Gral. Cabrera (Córdoba), 5-13. septiembre de 1991. pp. 26-27. 10. Giri G., and Saran G.1985. Response of 14. Pedellini R. 1998. Densidad de siembra groundnut (Arachis hypogaea L.) varieties de maní tipo runner. In: Manual de maní, to plant densities under semi-arid condi- 3º edición (R. Pedelini y C. Cassini, eds.). tions. Indian J. Agron. 31(3): 264-268. INTA EEA Manfredi. p: 12-13 11. Kvien C.S. and Bergmark C.L.1987. Grown 15. Pedellini R. 2008. Maní. Guía práctica para and development of the Floruunner su cultivo. Boletín de divulgación técnica peanut cultivar as influenced by popula- Nº 2, INTA, EEA Manfredi. 20 pp.

Granometría de maní en diferentes genotipos y ambientes

Elena Fernández1, Oscar Giayetto1, Guillermo Cerioni1, Sebastián Gastaldi1, Ariel Besso- ne1, Valeria Girardi1, Federico Morla1,2, Marcelo Kearney1 y María Rosso1 1- FAV, UNRC, Río Cuarto, Córdoba, Argentina. 2- CONICET - MinCyT Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN En Argentina, el mejoramiento genético del cultivo de maní ha producido cultiva- La distribución del tamaño de los granos res y líneas con alta proporción de granos de maní (Arachis hypogaea) en diferentes grandes con el fin de satisfacer la deman- categorías define la granometría y el valor da del mercado internacional de maní tipo comercial del lote. Uno de los parámetros confitería, lo que le ha permitido ocupar de calidad utilizado para la comercializa- el segundo lugar como exportador a nivel ción de granos de maní rosado en Argen- mundial (11). tina, es la proporción de semillas retenidas La ocurrencia de estrés hídrico durante el en las zarandas de tajo 7,5 mm (granos periodo reproductivo del cultivar Florman, grandes), la que determina el rendimiento redujo más la proporción de semillas rete- de maní confitería en el tipo Virginia (10). nidas en las zarandas 7,5 mm que cuando El tamaño de los granos depende del tipo el estrés se aplicó en el periodo vegetati- botánico, el genotipo y la posición del fru- vo (6); específicamente, la falta de agua to en la planta. Además, por tratarse de entre R3-R4 restringe más el crecimiento una especie de crecimiento indeterminado, de los granos que cuando ocurre en otras las condiciones ambientales que prevale- etapas del periodo reproductivo disminu- cen durante el crecimiento y desarrollo de yendo la granometría, al retrasar el desa- frutos y semillas pueden variar en diferente rrollo y exponer los frutos a condiciones magnitud, con la edad de los frutos (7). de temperatura subóptima (4). El estrés

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 271 hídrico también provoca modificaciones MATERIALES Y MÉTODOS en la forma de los granos, ya que disminu- ye el crecimiento en diámetro resultando Se sembraron 12 genotipos (comercia- más finos, principalmente en los tamaños les y líneas avanzadas): ASEM 484, ASEM menores (8). 485, ASEM 505, Florman INTA, Florunner, En algunas de las regiones productoras de EC 48, ET 6, Granoleico, LF 42, Manigran, maní se registra una elevada amplitud tér- Tegua, Uchaima-UNRC, Utre-UNRC cuyas mica que provoca estrés en los genotipos principales características se describen en sensibles (9). También se ha constatado el cuadro 1. variación genotípica en la respuesta a la Las evaluaciones se realizaron en Río Cuar- tasa de llenado de los frutos, cuando las to (RC) (33º 00’ LS; 64º 40’ LW, suelo Ha- temperaturas nocturnas son inferiores a pludol típico franco arenoso fino) duran- 20°C (1) o superiores a 37°C (12). También te dos ciclo 2005/06 (RC1) y 2006/07 (RC2) las características morfológicas de los ge- bajo condiciones climáticas diferentes notipos, que modifican el microclima don- (aplicación de riego en uno de los años) de se desarrollan los frutos, y el tiempo de y en Del Campillo en el ciclo 2005/06 (DC) exposición a las bajas temperaturas pro- (34º 22’ LS, 64º 29’ LW, suelo Haplustol tí- ducen diferencias entre ellos (2). Las altas pico arenoso-franco) durante un año. Las temperaturas (>36°C) retrasan el inicio del tres experiencias, representaron combina- desarrollo de los frutos (13). ciones sitio-año características de la zona Muchas veces la generalización forma manisera de la provincia de Córdoba. parte de las descripciones o recomenda- Las parcelas experimentales a campo de ciones y no se considera la identidad de cada genotipo fueron de 4,9 m de ancho los genotipos y sus atributos. Por ello, el por 6 m de largo (7 surcos 0,70 m de dis- objetivo del presente trabajo fue evaluar tancia entre hileras) y fueron distribuidas el comportamiento genotípico relativo a en un diseño en bloques al azar con tres la granometría, rendimiento confitería y repeticiones. La siembra fue realizada ma- al peso de 100 granos en cada categoría nualmente colocando las semillas a una en diferentes condiciones de producción distancia de 0,08 m. de la provincia de Córdoba. Durante el ciclo del cultivo se registró la

Cuadro 1. Descripción de los genotipos de maní utilizados en la experiencia.

x R: rastrero. y E: erecto. z RP: rosado pálido. v : sin datos.

272 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 ocurrencia de las etapas fenológicas (3) y (RC). Aquí, en cambio, la disponibilidad de en el periodo reproductivo se registraron agua fue mayor en RC2 por lluvias y en RC1 las precipitaciones, radiación solar y tem- por la aplicación de riego y la temperatura peraturas máximas y mínimas diarias, con similar a los valores normales con un me- las que se estimó la temperatura media, nor número de episodios de temperaturas la amplitud térmica, e identificaron episo- extremas, aunque la amplitud térmica en dios con temperaturas > a 36°C y entre 9 a la estación con menores precipitaciones 12°C durante lapsos a cuatro días. (RC2) fue mayor (Cuadro 2). Las semillas cosechadas fueron clasificadas Los resultados hallados mostraron que por tamaño (granometría) con zarandas la granometría de los cultivares varió en de tajo de 10; 9; 8; 7,5; 7; 6,5 y 6 mm de las diferentes situaciones experimentales ancho, determinando el peso de 100 se- (Cuadro 3). Las condiciones estresantes re- millas de cada una de las categorías y con gistradas en DC, incrementaron, en gene- el conjunto de las semillas retenidas en la ral, la proporción de granos más pequeños. zaranda 7,5 mm se estimó el rendimiento En cambio, el desarrollo de las semillas en confitería. las condiciones ambientales sin estrés (RC), Los datos fueron analizados estadística- favoreció la obtención de los granos que mente con el programa Infostat, versión conforman el rendimiento confitera. Estos 2007. La granometría, rendimiento confi- resultados coincidirían con los de otros au- tería y peso de 100 granos fueron analiza- tores que estudiaron el efecto individual dos individualmente para cada cultivar en de las condiciones ambientales como las las tres situaciones experimentales estu- registradas en DC y constataron que tanto diadas y los valores medios fueron compa- la amplitud térmica (9), como la baja (1) y rados con el test de Duncan (p≤0,05). Con la alta temperatura (12) redujeron el ta- los datos de granometría y rendimiento maño de las semillas. confitería se realizó un análisis de compo- Esta forma de distribución de los diferen- nentes principales. tes tamaños de grano en respuesta a las condiciones ambientales se explica, en RESULTADOS Y DISCUSIÓN parte, por lo hallado por Cerioni (4), quien verificó que el estrés hídrico durante el ini- En Del Campillo (DC) durante el periodo cio del periodo reproductivo redujo la gra- reproductivo del cultivo se produjo un es- nometría al exponer el fruto en crecimien- trés hídrico muy severo con varios episo- to a condiciones de menor temperatura. dios de temperaturas elevadas (>36°C) y Wheeler et al. (13) constataron este efecto bajas (9-12°C), como así también una ma- pero en respuesta a las altas temperaturas yor amplitud térmica que en Río Cuarto (>36°C). El elevado estrés hídrico registra-

Cuadro 2. Fechas de siembra y cosecha y condiciones ambientales durante el periodo reproductivo de genotipos de maní en cada una de las situaciones experimentales evaluadas.

x Valores de lluvia y temperatura media según el ciclo de los genotipos.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 273 Cuadro 3. Significancia de los valores de granometría y rendimiento confitería de genotipos de maní que crecieron en tres situaciones experimentales.

* En negrita valores de significancia (p<0,05) según test de Duncan. do durante todo el ciclo reproductivo en (6), y con diferencias entre genotipos. El DC, independientemente del genotipo, no mayor rendimiento confitería en las mejo- le permitió al cultivo alcanzar el cierre de res condiciones ambientales puede ser ex- la canopia y, por ende, expresar la estrate- plicado por el incremento de la proporción gia de compensar la pérdida de flores con de granos de mayor tamaños (los retenidos otros pulsos de floración, clavado y fructi- en las zarandas de 10, 9 y 8 mm), ya que el ficación (4). Además, la falta de agua re- análisis de componentes principales deter- dujo el peso de las semillas (4, 8). minó una relación estrecha entre estas va- El rendimiento confitería se redujo con las riable (Figura 2). Se detectó una relación condiciones ambientales estresantes (Fi- (R2) positiva entre el rendimiento confite- gura 1), coincidiendo con Fernández et al. ría y las semillas retenidas en las zarandas

Figura 1. Rendimiento confiteria (%) según genoti- po de maní y ambiente. Letras distintas entre columnas de cada cultivar, indican diferencias significativas entre las situaciones experimen- Figura 2. Relación entre la granometría y el rendi- tales estudiadas según test de Duncan(p<0,05). miento confitería de los genotipos de maní que cre- RC: Río Cuarto (2 años). DC: Del Campillo cieron en tres situaciones experimentales.

274 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 de 10 (0,39), 9 (0,72) y 8 mm (0,74), y otra ASEM 485, LF 42, Manigran, Tegua, Uchai- negativa a partir de la zaranda de 7,5 mm ma UNRC, Utre UNRC y ET 6 no presenta- (-0,36), con ajustes en aumento con la dis- ron diferencias entre ambientes. minución del tamaño de zaranda (7: -0,74; El peso individual de la semilla es función 6,5: -0,79 y 6: -0,82). Esto demuestra que de las características genéticas del culti- las semillas de maní rosado retenidas en la var, la tasa de crecimiento, la duración zaranda de 7,5 mm no son las que definen del periodo de llenado y las condiciones el rendimiento confitería sino las de tama- climáticas durante el mismo, que son muy ños mayores. En otras experiencias (5, 6), importantes por el marcado crecimiento se observó que las semillas retenidas en indeterminado de este cultivo. En esta ex- la zaranda 7,5 siempre están presentes en periencia se observó que el peso de 100 los lotes aún en aquellos que no alcanzan granos retenidos en cada zaranda (gra- el valor mínimo para ser comercializados nometría) varió entre genotipos y con las como maní confitería (10). condiciones ambientales. Debido al alto Los resultados obtenidos demostraron va- grado de interacción se analizó el compor- riabilidad genotípica en la proporción de tamiento de cada genotipo en los tres am- granos retenidos en la zaranda de 7,5 mm, bientes (Cuadro 4), siendo mayor el peso según las condiciones del ambiente. Así, de las semillas retenidas en las zarandas en Granoleico hubo un incremento (10,1 que definen el rendimiento confitería (10: vs 6,4%) cuando se desarrolló en condi- 75%; 9: 58%; 8: 75%) comparativamente ciones de estrés (DC); en cambio en otros con las otras categorías componentes del (ASEM 505: 28,9 vs 19,0%; Florman: 27,6 lote (7,5: 50%; 7: 25%; 6,5: 50%; 6: 50%). vs 17,5%; Florunner: 28,4 vs 19,9%) la pro- En general, el ambiente de RC, indepen- porción de semilla de ese tamaño fue ma- dientemente de la condición específica del yor cuando tuvieron condiciones hídricas año, permitió la expresión del mayor peso y térmicas favorables (RC1), mientras que de los granos. Estos datos confirmarían lo

Cuadro 4. Significancia del peso de 100 granos en cada granometría de los genotipos de maní que crecie- ron en tres situaciones experimentales.

* En negrita valores de significancia (p<0,05) según test de Duncan.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 275 observado por Giambastiani (8), quien en 6. Fernández E.M., Bonadeo E., Moreno I., un ambiente estresante registró reducción Hampp E., y Marzari R. 1998. Niveles de del diámetro de las semillas. Ca y K de un Haplustol típico relacionados a la producción de maní. In: Resúmenes CONCLUSIONES XXIII Jornada Nacional del Maní. Gral. Ca- brera, Córdoba. pp. 18-19. 7. Fernández E.M. y Giayetto O. 2006. Cali- Los resultados verifican la existencia de dad Comercial y Alimenticia de los Gra- variabilidad genotípica en la granometría, nos. In: El Cultivo de Maní en Córdoba. peso de 100 granos de cada categoría de (E.M. Fernández y O. Giayetto, compila- tamaño y el rendimiento confitería, en di- dores). Ed. Universidad Nacional de Río ferentes condiciones de producción de la Cuarto. pp. 49-69. provincia de Córdoba. 8. Giambastiani G. 1998. Calidad fisiológica Se identificó una relación positiva entre de las semillas de maní obtenidas con di- el rendimiento confitería y las semillas ferente disponibilidad hídrica en el culti- retenidas en las zarandas 8, 9 y 10 mm, y vo madre. Tesis MSc. Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional de Córdo- negativa a partir de la zaranda 7,5 mm y ba. 32 pp. menores. 9. Khan A.R. 1988. Effect of tillage on soil temperature. Intern. Agrophysics 4(4): BIBLIOGRAFÍA CITADA 317-324. 10. INTA PRECOP. 2012. Norma de Calidad 1. Bell M.J., Gillespie T.J., Roy R.C., Michaels para ser Aplicada en la Comercialización T.E., and Tollenaar M. 1994a. Peanut leaf del Maní Mercado Interno, Exportación e photosynthetic activity in cool field envi- Importación (Resolución nº 1075/ ANEXO ronments. Crop Science 34(4): 1023-1029. XIII) Modificada por Res. SAGPyA 814/00. 2. Bell M.J., Roy R.C., Tollenaar M., and Mi- In: www.cosechaypostcosecha.org/data/ chaels T.E. 1994b. Importance of variation postcosecha/bases Comercializacion/ba- in chilling tolerance for peanut genotypic sesComercializacionMani.asp. Consulta- adaptation to cool, short-season environ- do: 15/02/12. ments. Crop Science 34(4): 1030-1039. 11. SIIA 2012. Oferta y demanda mundial de 3. Boote K.J. 1982. Growth stage of peanut. maní. In: www.siia.gov.ar/sst_pcias /usda. Peanut Science 9: 35-40. php nro= 2221000. Consultado: 15/02/12. 4. Cerioni G.A. 2003. Déficit hídrico en la 12. Vara Prasad P.V., Craufurd P.Q., Summer- etapa reproductiva del maní (Arachis field R.J., and Wheeler T.R. 2000. Effect hypogaea L.), su influencia sobre el creci- of short episodes of heat stress of flower miento, desarrollo, rendimiento y calidad. production and fruit set of groundnut Tesis MSc. Fac. Agronomía y Veterinaria. (Arachis hypogaea L.). J. Exp. Bot. 51: 777- Universidad Nacional de Río Cuarto. 95 784. pp. 13. Wheeler T.R., Chatzialioglou A., Crau- 5. Fernández E. M. 2004. Condición hídrica furd P.Q., Ellis R.H., and Summerfield R.J. de la planta madre y tamaño de la semi- 1997. Dry matter partitioning in peanut lla: Emergencia de plántulas. In: Resúme- exposed to high temperature stress. Crop nes XIX Jornada Nacional del Maní. Gral. Science 37: 1507-1513. Cabrera, Córdoba. pp. 44-45.

276 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Comportamiento de maníes silvestres frente a viruela (Cercosporodium personatum) y mancha en V (Lepthosphaerulina crassiasca)*

Claudio Oddino1,2, Juan Soave1, Sara Soave1, Alberto Moresi1, César Bianco1,2, Mario Buteler1, Diego Torre1 y Paola Faustinelli1,3 1- Criadero El Carmen. 2- FAV-Universidad Nacional de Río Cuarto. 3- Universidad Cató- lica de Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN tas más utilizadas para disminuir la tasa de incremento de enfermedades policíclicas, El maní es un importante cultivo de la pro- las más importantes son la resistencia ge- vincia de Córdoba, donde se produce más nética y el control químico (10). del 90% de las 300.000 ha sembradas en En todas las regiones productoras el con- Argentina (7). trol de la viruela se realiza mediante la La principal limitante de la producción de aplicación de fungicidas (5, 8, 13); sin em- maní en nuestro país son las enfermeda- bargo el manejo eficiente de la enferme- des (8), a las cuales podemos dividir en en- dad debería contemplar también a la re- fermedades del filoplano (enfermedades sistencia genética como una herramienta foliares) y del rizoplano (enfermedades importante en el manejo de la misma (10). por patógenos de suelo). Las enfermeda- Considerando la importancia del mejora- des foliares de mayor prevalencia en esta miento genético como una herramienta región productora son la viruela (Cercos- clave para el manejo de las enfermedades pora arachidicola y Cercosporidium perso- en maní, que las variedades sembradas en natum), considerada la principal enferme- Argentina son susceptibles y con compor- dad foliar que afecta al cultivo en todos tamiento similar frente a la viruela y a la los países productores del mundo (5, 6, 8, mancha en V (2), y que a nivel mundial la 13, 14), y la mancha en V (Lepthosphaeru- mayoría de las variedades citadas con tole- lina cassiasca), calificada como enferme- rancia a enfermedades foliares han surgi- dad emergente en los últimos años (12). do de cruzamientos con especies silvestres Como todas las enfermedades policíclicas, del género Arachis (1, 17, 18); conside- las estrategias de manejo deben basarse ramos importante evaluar el comporta- en disminuir el inóculo inicial y la tasa epi- miento de especies silvestres de Arachis en démica (10). En el caso de viruela, para dis- nuestro país frente a estas enfermedades, minuir el inóculo inicial han sido evaluadas para determinar una posible fuente de to- varias estrategias basadas principalmente lerancia. en rotaciones y labranzas (13, 15); aunque el alto potencial de producción de inóculo MATERIALES Y MÉTODOS secundario de C. arachidícola y C. perso- natum, hace que no obstante la presencia El presente trabajo se realizó durante las de escaso inóculo inicial, la enfermedad se campañas agrícolas 2005/06 y 2006/07 en pueda presentar con características epidé- el infectario de maníes silvestres del cam- micas si las condiciones ambientales le son po experimental de Criadero El Carmen, favorables (14). Dentro de las herramien- ubicado en General Cabrera, provincia de

* Un resúmen parcial de este trabajo fue presentado en la XXIII Jornada Nacional del Maní del 2008, y adaptado a las Normas de Publicación de esta revista.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 277 Córdoba. final, severidad total final, tasa de incre- Las especies silvestres evaluadas fueron mento y área bajo la curva de progreso de Arachis batizocoi, A. cardenasii, A. corren- viruela (ABCPE) e incidencia final de man- tina, A. duranensis, A. ipaensis, A. mag- cha en V, a través de ANAVA y test de com- na, A. monticola y A. hypogaea variedad paración de medias de Duncan (p<0,05). Tegua. Cada una de estas especies fue Las tasas de incremento y ABCPE se esti- sembrada en parcelas de un surco de 5 m, maron según March et al. (9). en un diseño en bloques completamente aleatorizados con tres repeticiones. No se RESULTADOS Y DISCUSIÓN aplicaron fungicidas durante la realiza- ción de estos ensayos. En ambas campañas la viruela del maní se Las evaluaciones se realizaron a partir de presentó con características epidémicas, la aparición de los primeros síntomas de alcanzando el 90% de incidencia, y el 38 y las enfermedades, identificando a través 43% de severidad final en el maní cultiva- de la presencia del signo el patógeno cau- do (A. hypogaea), en las campañas 2005/06 sal de viruela. En cada fecha de muestreo y 2006/07 respectivamente (Cuadro 1), co- de cada parcela se extrajeron cinco ramas incidiendo con los valores registrado a ni- laterales para la evaluación de ambas en- vel regional en esas campañas (16). fermedades. Si bien esta enfermedad puede ser cau- La cuantificación de la mancha en Vse sada por dos patógenos, C. arachidícola y realizó a través de su incidencia (% de fo- C. personatum (5, 8, 13), el agente causal líolos afectados), mientras que la viruela que se presentó causando la enfermedad se cuantificó a través de incidencia (% de en ambas campañas fue C. personatum, folíolos afectados) y severidad total (% de siendo la especie más prevalente en la úl- área foliar pérdida). Este último paráme- tima década (8, 16). tro calculado a partir de la fórmula ST = La mancha en V alcanzó valores de inci- ((1-D) * Sx) + D, donde ST: severidad total, dencia final inferiores al 10% en A. hypo- D: defoliación y Sx: severidad promedio, gaea en ambas campañas (Cuadro 1), si- calculada a partir de una escala diagramá- milares a los registrados en promedio en tica de severidad validada para nuestra re- esas campañas en la región manisera de la gión productora. provincia de Córdoba (16). Esta enferme- La comparación entre especies se realizó dad se presenta habitualmente en toda el considerando los valores de incidencia área manisera con elevada prevalencia (8,

Cuadro 1. Incidencia y severidad final de viruela (Cercosporidium personatum), e incidencia final de man- cha en V (Leptosphaerulina crassiasca) según especies del género Arachis. General Cabrera. Campañas 2005/06 y 2006/07.

* Letras iguales en las columnas indican diferencias no significativas según test de Duncan (p<0,05).

278 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 16); sin embargo los valores de incidencia esporulación de los mismos (18, 20), re- son bajos y se mantienen a través de los duciendo la fuente de inóculo secundario últimos años, considerándola una enfer- de estas enfermedades policíclicas, lo cual medad emergente, pero sin alcanzar ca- afecta directamente la tasa de incremento racterísticas epidémicas (12). y el área bajo la curva de progreso de la El mejor comportamiento frente a viruela enfermedad (3, 4), parámetros utilizados de especies silvestres de Arachis ha sido se- por numerosos autores para evaluar estra- ñalado por numerosos autores (1, 17, 19, tegias de manejo en viruela del maní (3, 5, 20). Como se observa en el cuadro 1, salvo 11, 13). A. montícola, en todas las especies silves- La severidad final de viruela en los maníes tres del género Arachis disminuyó signifi- silvestres alcanzó valores que no llegan al cativamente la incidencia y severidad final nivel de daño económico, por lo que aún de viruela, y la incidencia final de mancha sin aplicación de fungicidas, la intensidad en V, con respecto a A. hypogaea; desta- final de la enfermedad en estas especies cándose A. cardenasii, A. correntina y A. produciría pérdidas inferiores al costo de magna que presentaron los menores valo- control (11). res de intensidad final de viruela. A. mon- Los resultados de este trabajo muestran tícola ha mostrado mayor susceptibilidad que las especies silvestres del género Ara- a viruela que el resto de las especies silves- chis presentes en nuestro país, pueden tres (20), encontrándose los mayores valo- proporcionar una fuente de resistencia res de resistencia en algunas accesiones de frente a viruela (C. personatum) y mancha A. duranensis, A. stenosperma, A. magna, en V (L. crassiasca), para la obtención de A. correntina y A. cardenasii (6, 17). variedades de mejor comportamiento del La tasa de incremento y el ABCPE, pará- que presentan hoy las variedades de A. metros epidemiologicos usados frecuen- hypogaea sembradas en Argentina (2). temente para evaluar la viruela (3, 5, 10, 12), fueron significativamente menores en BIBLIOGRAFÍA CITADA A. duranensis, A. ipaensis, A. batizocoi, A. magna, A. correntina y A. cardenasii con 1. Abdou Y.A.M., Gregory W.C., and Cooper respecto a A. montícola y A. hypogaea W.E. 1974. Sources and nature of resistan- (Cuadro 2). Se ha señalado que estas es- ce to Cercospora arachidicola Hori. and pecies de maníes silvestres presentan reac- Cercosporidium personatum (Beck. and Curt.) Deighton in Arachis species. Peanut ciones hipersensibles frente a infecciones Science 1: 6-11. por patógenos foliares que disminuyen la 2. Accastello N. 2012. Comportamiento de

Cuadro 2. Tasa de incremento y área bajo la curva de progreso de viruela del maní (ABCPE) según especies del género Arachis. General Cabrera. Campañas 2005/06 y 2006/07.

* Letras iguales en las columnas indican diferencias no significativas según test de Dun- can (p<0,05). x Según March et al. (9).

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 279 genotipos de maní frente a viruela cau- In: Resúmenes XXVI Jornada Nacional del sada por Cercospora arachidicola – Cer- Maní. General Cabrera, Córdoba. pp. 48- cosporidium personatum. Tesis de grado 49. de Ingeniería Agronómica. Facultad de 12. Marinelli A., March G., Oddino C., Kear- Agronomía y Veterinaria. UNRC. 28 pp. ney M. y Zuza M. 2004. Mancha en V por 3. Cantonwine E.G., Culbreath A.K., Steven- Leptosphaerulina crassiasca en maní ¿Una son K.L., Kemerait R.C.Jr., Brenneman, enfermedad emergente?. In: Resúmenes T.B., Smith N.B., and Mullinix, B.G.Jr. 2006. XIX Jornada Nacional del Maní. General Integrated disease management of leaf Cabrera, Córdoba. pp. 32-34. spot and spotted wilt of peanut. Plant Di- 13. Monfort W.S., Culbreath A.K., Stevenson sease 90: 493-500. K.L., Brenneman T.B., Gorbet D.W., and 4. Chiyembekeza A.J. 1992. Inheritance of Phatak S.C. 2004. Effects of reduced tilla- components of resistance to late leafspot ge, resistant cultivars, and reduced fungi- in peanut. Ph.D. thesis, University of Flori- cide inputs on progress of early leaf spot da, Gainsville. of peanut (Arachis hypogaea). Plant Di- 5. Culbreath A.K., Stevenson, K.L., and Bren- sease 88: 858-864. neman, T.B. 2002. Management of late 14. Nutter F.W., and Shokes F.M. 1995. Mana- leaf spot of peanut with benomyl and gement of foliar diseases caused by fun- chlorothalonil: A study in preserving fun- gi. In: Peanut Health Management (H.A. gicide utility. Plant Disease 86: 349-355. Melouk y F.M. Shokes, eds.). APS press, St, 6. Fávero A.P., Moraes S.A., Vello N.A., and Paul Minnesota, USA. pp. 65-73. Valls J.F.M. 2001. Caracterização de es- 15. Oddino C., Vargas Gil S. y Kearney M. pécies silvestres de amendoim quanto à 2000. Efecto de sistemas de labranza so- resistência à mancha castanha visando à bre patógenos y antagonistas en maní. introgressão de genes ao amendoim cul- In: Resúmenes XV Jornada Nacional del tivado. Anais do I Congresso de Melhora- Maní. Gral. Cabrera, Córdoba. pp. 54-55. mento de Plantas, Goiânia, GO. 16. Oddino C., Marinelli A., Zuza M., García 7. Fiant S., Alonso C., Fontana T., Spinazzé J. y March G. 2008. Situación sanitaria re- C., Costero D. y Bonvehi L. 2011. Caracte- gional del maní. In: Libro de Resúmenes, rización de la producción de maní. Cam- 1º Congreso Argentino de Fitopatología. paña 2010/11. In: Resúmenes XXVI Jorna- Córdoba. p. 158. da Nacional del Maní. General Cabrera, 17. Pande S., and Narayana Rao J. 2001. Resis- Córdoba. pp. 34-36. tance of wild Arachis species to late leaf 8. March G.J. y Marinelli A. (eds.). 2005. En- spot and rust in greenhouse trials. Plant fermedades del maní en la Argentina. Bi- Disease 85: 851-855. glia Impresores, Córdoba.142 pp. 18. Sobolev V.S., Baozhu Z., Guo C., Holbrook 9. March G., Marinelli A. y Oddino C. 2007. C., and Lynch R.E. 2007. Interrelationship Epidemiología aplicada al manejo de en- of Phytoalexin Production and Disease fermedades de los cultivos. Manual del Resistance in Selected Peanut Genotypes. Curso de Especialización en Protección Journal Agricultural Food Chemical 55(6): Vegetal. Universidad Católica de Córdo- 2195-2200. ba, Córdoba, Argentina. 96 pp. 19. Stalker H.T., and Moss J.P. 1987. Specia- 10. March G., Oddino C. y Marinelli A. 2010. tion, citogenetics and utilization of Ara- Manejo de enfermedades de los cultivos chis species. Advances in Agronomy 41: según parámetros epidemiológicos. Bi- 1-40. glia Impresiones, Córdoba. 194 pp. 20. Subrahmanyam P., Moss J.P., McDonald 11. March G., Oddino C., García J., Marinelli D., Subba Rao P.V., and Rao V.R. 1985. Re- A. y Rago A. 2011. Umbral de daño econó- sistance to leaf spot caused by Cercospori- mico de la viruela del maní según eficien- dium personatum in wild Arachis species. cia fungicida y potencial de rendimiento. Plant Disease 69: 951-954.

280 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Producción de maní según intensidad de la viruela (Cercosporidium personatum)

Claudio F. Cappiello1, Guillermo J. March1,2, Adriana D. Marinelli1,3, Julián García3, Lucía Tarditti3, Luis D’Eramo3, Santiago Ferrari3, Alejandro Rago1,2 y Claudio M. Oddino1,3 1- Fac. de Agronomía y Veterinaria-UNRC. 2- INTA, IPAVE-CIAP. 3- Oro Verde Servicios. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN utilizados en el caso específico de la virue- la del maní (7, 20). Argentina es uno de los principales pro- La viruela afecta la producción no solo ductores-exportadores de maní (Arachis en cuanto a cantidad (rendimiento), sino hypogaea) del mundo, con más del 90 % también en la calidad del producto obte- de la superficie sembrada en la provincia nido a partir del 20% de defoliación regis- de Córdoba (5). trada al momento de la cosecha (2, 8, 14). La viruela (Cercospora archidicola, Cercos- A este respecto es importante señalar que poridium personatum) es la principal en- el productor de Argentina recibe un pre- fermedad foliar que afecta al cultivo en la cio diferenciado por su cosecha según sea mayoría de los países productores (7, 13, el porcentaje de «maní confitería» que ha 14). Las manchas y la defoliación produci- obtenido, ya que éste es el principal pro- das por esta enfermedad causan disminu- ducto de exportación de esta economía ción del área fotosintéticamente activa, lo regional (5). que ocasiona una reducción de la produc- Como la mayoría de los estudios de pérdi- ción (17, 19). das producidas por viruela de maní fueron En trabajos realizados durante la déca- realizados hace más de 20 años en la re- da del 80’ en el área manisera de la pro- gión centro-sur del área manisera de Cór- vincia de Córdoba, se determinó que por doba, y que desde entonces han ocurrido cada 1% de incremento de la defoliación importantes cambios en el sistema pro- a partir de un umbral del 20%, la produc- ductivo, incluyendo cultivares sembrados, ción disminuía entre el 15 y 35 kg/ha; lo fungicidas utilizados, área de siembra y que significaba que una defoliación final tecnologías, se considero importante rea- del 30% arrojaría pérdidas comprendidas lizar estudios sobre el efecto de la intensi- entre 150 y 350 kg/ha (13). Este rango de dad de la enfermedad en el rendimiento pérdidas fue atribuido a factores como del cultivo y en la calidad del producto la etapa del cultivo en la cual se presen- obtenido. taba la enfermedad, su tasa de incremen- to, rendimientos potenciales y sistema de MATERIALES Y MÉTODOS producción. Estudios epidemiológicos sobre diferentes Los estudios se llevaron a cabo en campos enfermedades foliares en distintos culti- de productores ubicados en General De- vos, demostraron que la severidad final a heza y Vicuña Mackenna en la campaña cosecha y el área bajo la curva de progreso agrícola 2008/09; los que habían sido sem- de las enfermedades, son parámetros uti- brados con maní cv Granoleico en la pri- lizados frecuentemente para estimar las mera quincena del mes de noviembre. pérdidas que producen, siendo también A los fines de desarrollar modelos que

* Este trabajo es parte de la tesis de grado para optar al título de Ingeniero Agrónomo del estudiante de Ingeniería Agro- nómica (FAV-UNRC) Claudio F. Cappiello.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 281 permitan estimar niveles de pérdida en cada tratamiento y repetición. Las vainas función de la intensidad de la enfer- se separaron manualmente y dejaron se- medad, se realizaron ensayos de con- car en laboratorio, siendo trilladas al 10- trol químico con la mezcla comercial 12% de humedad. Se estimaron rendi- picoxystrobin+ciproconazole. Para gene- miento (kg/ha) y calidad, según relación rar distintos valores de intensidad de la grano/caja (%) y granos tamaño confitería enfermedad, los tratamientos se efectua- (%) en zaranda de 7,5 mm. ron según diferentes frecuencias de apli- cación, cada 7, 14, 21 y 28 días, e incluyó Análisis estadístico un tratamiento control sin fungicida. Las Con los datos obtenidos se compararon los parcelas correspondientes a cada trata- tratamientos considerando los valores de miento tenían cinco surcos de ancho y 10 St final (%), ABCPE, rendimiento (kg/ha), m de largo, y estaban distribuidas en un relación grano/caja (%) y granos confitería diseño en bloques completos al azar con (%), a través de ANOVA y test de compa- cuatro repeticiones. Las pulverizaciones se ración de medias de Duncan (p<0,05), uti- realizaron con una mochila de gas carbó- lizando el programa Infostat-Windows (9). nico con seis picos a 35 cm de distancia, Para determinar el efecto de la intensidad utilizando pastillas tipo cono hueco y arro- de la enfermedad sobre el rendimiento y jando un volumen de caldo 180-200 L/ha. la calidad de la producción, se realizaron análisis de regresión entre St final y ABC- Intensidad de la viruela PE (variables independientes) con la pro- Se estimaron dos parámetros de intensi- ducción y la calidad de granos (variables dad de la enfermedad a cosecha, severi- dependientes), considerando modelos li- dad total final (St) y área bajo la curva de neales y no lineales (exponencial y loga- progreso de la enfermedad (ABCPE). rítmico) mediante el programa Infostat- A partir de los 45 días de la emergencia se Windows (9). evaluó la aparición de los primeros sínto- mas de la enfermedad, cuantificándose la RESULTADOS severidad de la viruela cada 15 días, iden- tificando en laboratorio el patógeno a tra- La única especie causante de la viruela en vés de la presencia del signo. En cada tra- la campaña 2008/09 fue C. personatum, tamiento y repetición se obtuvieron cinco alcanzando valores cercanos al 80% de se- ramas laterales para estimar la severidad veridad final en ambas localidades en el total (% de área foliar pérdida) según St = control sin tratamiento (Figura 1). [(1-D) Sx) + D], donde St es la severidad to- tal, D la defoliación y Sx la severidad visual Intensidad de la viruela promedio según escala diagramática (16). En ambos sitios se generaron diferentes Cuando St = 0,1% se efectuó el primer tra- curvas de progreso de la viruela. En Gral. tamiento. Deheza los valores de severidad del trata- El área bajo la curva de progreso de la en- miento efectuado cada 7 días fueron simi- fermedad (ABCPE) se estimó de acuerdo lares durante los muestreos, siendo cerca- a ABCPE: S[(yi+1 + yi) 2 ] [ti+1 - ti] donde yi nos al 0%, mientras que en la aplicación e yi+1 son los valores de St registrados en cada 14 días se incrementó levemente en dos evaluaciones consecutivas, ti+1 - ti es los últimos 30 días del estudio, llegando a el intervalo de tiempo entre ambas eva- un valor de severidad final de aproximada- luaciones, y n la duración del período de mente el 10%. Cuando las aplicaciones se evaluación (6). realizaron cada 21 y 28 días se obtuvieron curvas de progreso similares, alcanzando Producción el 15% de severidad final (Figura 1A). Se efectuó la cosecha manual de 2 m2 de Por su parte, en Vicuña Mackenna, las apli-

282 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 caciones cada 7 y 14 días, generaron cur- vas de progreso similares, con valores de severidad inferiores al 1% durante todo el ciclo del cultivo. Los otros dos tratamien- tos, cada 21 y cada 28 días, tuvieron ma- yor severidad desde el segundo muestreo, llegando a valores de severidad final de aproximadamente 10 y 30% respectiva- mente (Figura 1B). En la comparación entre tratamientos, en Gral. Deheza se observó que todos dismi- nuyeron la severidad final y el ABCPE con respecto al control sin tratar (Cuadro 1). En los valores de severidad final se obser- varon diferencias significativas (p<0,05) entre los tratamientos cada 7 días con respecto a los tratamientos cada 21 y 28 días, teniendo el tratamiento cada 14 días una posición intermedia entre ellos. Por su parte al considerar el ABCPE no se obser- varon diferencias significativas entre los tratamientos fungicidas, pero si respecto al control (Cuadro 1). En Vicuña Mackenna los tratamientos cada 7 y 14 días fueron similares en la St Figura 1. Curvas de progreso de la viruela del final y ABCPE, diferenciándose significati- maní (Cercosporidium personatum) según interva- vamente (p<0,05) de los restantes; mien- los de aplicación de picoxystrobin+ciproconazole. Gral. Deheza (A) y Vicuña Mackenna (B), campaña tras que los tratamientos cada 21 y 28 días 2008/09. y el control, con valores significativamente mayores, tuvieron también diferencias sig- nificativas entre ellos (Cuadro 1). Producción En Gral. Deheza todos los tratamientos registraron un rendimiento significativa- mente mayor que el control (p<0,05), co- Cuadro 1. Severidad final y área bajo la curva de rrespondiendo los mayores a las aplicacio- progreso de la viruela del maní (Cercosporidium nes efectuadas cada 7 y 14 días (Cuadro 2). personatum) según intervalo de aplicación de Al analizar los parámetros de calidad, en picoxystrobin+ciproconazole. Gral. Deheza y Vicuña Mackenna, campaña 2008/09 la relación grano/caja se observó un com- portamiento similar a de los rendimientos, no comprobándose diferencias significati- vas en granos confitería. En Vicuña Mackenna todos los tratamien- tos presentaron también un rendimiento significativamente mayor que en el con- trol (p<0,05). Al analizar la calidad de la producción no se comprobaron diferen- cias significativas en la relación grano/caja * Letras distintas en la misma columna indican diferencias ni en el porcentaje de granos confitería significativas según test de Duncan (p<0,05). X SF: severi- dad final. y ABCPE: área bajo la curva de progreso de la (Cuadro 2). viruela del maní. Al analizar el efecto de la intensidad de la

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 283 Cuadro 2. Rendimientos y calidad de granos de maní según intervalo de aplicación de picoxystrobin+cipro- conazole para el control de viruela del maní (Cercosporidium personatum). Gral. Deheza y Vicuña Macken- na, campaña 2008/09.

* Letras distintas en la misma columna indican diferencias significativas según test de Duncan (p<0,05). x Granos por zaranda de 7,5 mm. viruela (St final y ABCPE) sobre la produc- (15). ción, se comprobó que el primer paráme- De acuerdo con lo señalado por distintos tro fue un mejor estimador logrando me- autores para esta misma enfermedad, en jores ajustes, por lo que solo se presenta el ambas localidades el rendimiento y la ca- efecto de la St final (Cuadro 3). lidad de granos se relacionaron negativa- En ambos sitios, aunque con diferentes ta- mente con la intensidad de la enfermedad sas, a medida que se incrementaba la in- (1, 3, 15, 19). tensidad de la viruela disminuían los rendi- Como ocurre generalmente, los trata- mientos y la calidad. El modelo exponencial mientos fungicidas disminuyeron la inten- resultó el de mejor ajuste para estimar los sidad de la viruela con respecto al control. rendimientos y el logarítmico para los gra- Cuando mayor fue la frecuencia de los nos confitería en ambos sitios. Por su parte tratamientos menor fue la intensidad de el modelo logarítmico en Gral. Deheza y el la enfermedad, siendo en general simi- exponencial en Vicuña Mackenna fueron lares los valores de severidad cuando los los de mejor ajuste para estimar la relación tratamientos fueron efectuados cada 7 y grano/caja. En todos estos casos fueron sig- 14 días. Los rendimientos fueron marca- nificativos los modelos y sus respectivos pa- damente superiores al control cuando los rámetros (p<0,05) (Cuadro 3). tratamientos se efectuaron cada 21 días o Al comparar los rendimientos y granos menos, mientras que cuando se realizaron confitería entre ambas localidades, se cada 28 días no se diferenciaron significa- comprobó que eran significativamente di- tivamente del control. ferentes. Al analizar la relación grano/caja, excepto para el tratamiento cada 28 días y el con- DISCUSIÓN trol en Gral. Deheza, los valores oscilaron entre 74,7 y 77,5%, considerados normales Durante la campaña 2008/09 la viruela para este parámetro de calidad (10). Por del maní se presentó con características su parte, el porcentaje de granos confite- epidémicas alcanzando valores de severi- ría no presentó prácticamente diferencias dad final cercanos al 80% en ambos sitios, significativas entre tratamientos en cada Gral. Deheza y Vicuña Mackenna. Como se localidad, indicando que los tratamientos ha registrado en las últimas campañas, C. fungicidas no afectaron este parámetro. A personatum fue la única especie presente similitud de otros trabajos, estos resulta-

284 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 3. Estimación de rendimientos y calidad de granos de maní según severidad final de la viruela (Cercosporidium personatum). Gral. Deheza y Vicuña Mackenna, campaña 2008/09.

dos nos indican que el efecto de la viruela mente con el aumento de la severidad; lo es principalmente sobre los rendimientos que señala claramente la importancia de (4, 13, 18). No obstante, dada la incidencia iniciar los tratamientos con bajos valores de los granos confitería en la formación de severidad (12). Por su parte, el efecto del precio final pagado a productor (5), es de la intensidad de la viruela sobre la pro- interesante señalar que los granos confite- ducción de granos confitería esta mejor ría en Gral. Deheza superaron en un 10% representado por el modelo logarítmico, a los de Vicuña Mackenna, por lo que los lo que nos indicaría un efecto menos mar- menores rendimientos en Gral. Deheza, cado de la enfermedad sobre este pará- serían parcialmente compensados por el metro de calidad. mayor porcentaje de granos confitería. Como señaláramos, estudios realizados so- La influencia de la intensidad de la viruela bre el efecto de la intensidad de viruela (St final y ABCPE) sobre los rendimientos, sobre los rendimientos de maní hace de estuvo determinada principalmente por el 15 a 40 años, señalaban que a partir del modelo exponencial. Al desarrollar mode- 20% de defoliación se producían pérdidas los generalizados no lineales flexibles para de cosecha (2, 8, 14). Sin embargo, en este caracterizar la relación entre intensidad trabajo se comprobó que los rendimientos de enfermedad y pérdidas de cosecha en disminuyen marcadamente a partir del 7% distintos patosistemas, Madden et al. (11) de severidad final, siendo importante se- comprobaron que en el caso de la viruela ñalar que este parámetro incluye, además del maní el mejor modelo era de tipo ex- de la defoliación a la severidad visual (16), ponencial. Considerando ambos trabajos, por lo que sería un estimador más preciso las pérdidas por viruela se incrementan o de la intensidad de la enfermedad, ya que los rendimientos disminuyen exponencial- como se ha señalado para la viruela del

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 285 maní, manchas y defoliación disminuyen la región centro-sur de Córdoba. Diag- el área fotosintética (16, 19). nósticos y propuestas de políticas para el Los resultados obtenidos en este trabajo fortalecimiento de la cadena. Universidad demuestran que la viruela de maní causa Nacional de Río Cuarto. Río Cuarto, Ar- importantes disminuciones del rendimien- gentina. 163 pp. 6. Campbell C.L., and Madden L.V. 1990. In- to aún con bajos valores de severidad a troduction to Plant Disease Epidemiology. cosecha, y si bien se considera necesario John Wiley & Sons. 532 pp. ampliar estos estudios incluyendo distin- 7. Culbreath A.K., Stevenson K.L., and Bren- tas tecnologías de manejo del cultivo, po- neman T.B. 2002. Management of late dría estimarse en 10% de severidad final leaf spot of peanut with benomyl and al valor de referencia del nivel de daño chlorothalonil: A study in preserving fun- económico de la viruela considerando tres gicide utility. Plant Disease 86: 349-355. aplicaciones de fungicidas. Acorde con es- 8. Cummins D.G., and Smith D.H. 1973. tos resultados, recientemente March et al. Effect of Cercospora leaf spot of peanut (12) sugirieron como valor de referencia on forage yield and quality on seed yield. Agronomy Journal 65: 919-921. para realizar el primer tratamiento fungi- 9. Di Rienzo J.A., Casanoves F., Balzarini cida un umbral de control inferior al 2% M.G., González L., Tablada M. y Robledo de severidad, y Madden et al. (11) deter- C.W. 2011. InfoStat versión 2011. Grupo minaron que las pérdidas por viruela del InfoStat, FCA, Universidad Nacional de maní se incrementan exponencialmente a Córdoba, Argentina partir de valores de severidad del 2%. 10. Fernández E. y Giayetto O. 2006. Calidad comercial y alimenticia de los granos. In: El FINANCIAMIENTO Cultivo de Maní en Córdoba (O. Giayetto y E. Fernández, compiladores). Ed. Universi- Este trabajo tuvo el apoyo financiero de dad Nacional de Río Cuarto. pp. 49-69. 11. Madden L.V., Pennypacker S.P., Antle C.E., proyectos específicos de FONCYT, UNRC, y and Kingslover C.H. 1981. A loss model del Programa Nacional de Cultivos Indus- for crops. Phytopathology 71: 685-689. triales del INTA. 12. March G., Oddino C., García J., Marine- lli A. y Rago A. 2011. Umbral de daño BIBLIOGRAFIA CITADA económico de la viruela del maní según eficiencia fungicida y potencial de rendi- 1. Alderman S.C., Nutter F.W., and Labrinos miento. In: Actas de Resúmenes XXVI Jor- J.L. 1989. Spatial and temporal analysis of nada Nacional del Maní. General Cabrera, spread of late leaf spot of peanut. Phyto- Córdoba. pp. 48-49. pathology 79: 837-844. 13. Marinelli A.D. y March G.J. 2005. Viruela. 2. Backman P.A., and Crawford M.A. 1984. In: Enfermedades del Maní en la Argenti- Relationship between yield loss and seve- na (G.J. March y A.D. Marinelli, eds.). Bi- rity of early and late leafspot diseases of glia Impresores, Córdoba. pp. 13-39. peanuts. Phytopathology 74: 1101-1103. 14. Nutter F.W., and Shokes, F.M. 1995. Ma- 3. Boote K.H., Jones J.W, Smerage G.H., Bar- nagement of foliar diseases caused by field C.S., and Berger R.D. 1980. Photos- fungi. In: Peanut Health Management yntesis of peanut canopies affected by (H.A. Melouk y F.M. Shokes, eds.). Ame- leafspot and artificial defoliation. Agro- rican Phytopathological Society. St. nomy Journal 72: 247-252. Paul, MN. pp. 63-73. 4. Bourgeois G., Boote K.J., and Berger 15. Oddino C., Marinelli A., Zuza M., García R.D.1991. Growth, development, yield, J. y March G. 2008. Situación sanitaria re- and seed quality of Florunner peanut gional del maní. In: Actas de Resúmenes, affected by late leaf spot. Peanut Science 1º Congreso Argentino de Fitopatología. 18: 137-143. Córdoba. p. 158. 5. Busso G., Civitaresi M., Geymonat A. y 16. Pixley K.V., Boote K.J., Shokes F.M., and Roig R. 2004. Situación socioeconómica Gorbert D.W. 1990. Disease progression de la producción de maní y derivados en and leaf area dynamics of four peanuts

286 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 genotypes differing in resistance to late 19. Waggoner P.E., and Berger R.D. 1987. De- leafspot. Crop Science 30: 789-796. foliation, disease, and growth. Phytopa- 17. Plaut J.L., and Berger R.D. 1980. Develo- tology 77: 393-398. pment of Cercosporidium personatum in 20. Waliyar F., Adamou M., and Traoré A. three peanut canopy layers. Peanut Scien- 2000. Rational use of fungicide applica- ce 7: 46-49. tions to maximize peanut yield under fo- 18. Troeger J.M., Williams E.J., and Butler J.L. liar disease pressure in West Africa. Plant 1976. Factors affecting peanut peg atta- Disease 84: 1203-1211. chment force. Peanut Science 3: 37-40.

Evaluación de fungicidas curasemillas y su efecto en el carbón de maní causado por Thecaphora frezii

Alexis R. Buffoni1 y Francisco Marraro Acuña2 1- Actividad privada. 2- EEA. INTA Manfredi. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN tógeno a través de la semilla, introducién- dolo de esta manera en nuevas regiones El carbón del maní fue identificado como productoras (12). nueva especie fúngica por José Maria Ca- Este hongo sobrevive en el suelo como rranza y Juan Carlos Lindquist en 1962 (4), teliospora, y en presencia del cultivo de sobre una especie silvestre de Arachis pro- maní, al producirse la elongación e intro- cedente de Brasil. En la campaña agrícola ducción en el suelo de los clavos, las telios- 1994/95 se observaron por primera vez en poras que se encuentran en la proximidad Argentina frutos de maní cultivado (Ara- son estimuladas a germinar, produciendo chis hypogaea) de los cultivares Colorado basidiosporas que ingresan al ginecóforo Irradiado INTA y Florunner procedentes y colonizarían el ovario. Si en el proceso del centro-norte del área manisera de la de colonización son alcanzados los dos provincia de Córdoba afectados por car- óvulos el fruto presentará las dos semillas bón, el cual fue identificado como Theca- afectadas, como la infección es localiza- phora frezii Carranza & Lindquist (8). da, y limitada a los tejidos del ginecóforo, En un trabajo realizado en las zonas mani- puede presentarse una o solo una porción seras de la provincia de Córdoba durante de la semilla con carbón (7). la campaña 2006/07, donde se evaluó la Los frutos afectados presentan hipertro- prevalencia e intensidad de enfermedades fia y malformaciones, observándose que causadas por hongos que afectan al cul- en el interior una o todas las semillas se tivo de maní, el carbón se registró en las transforman en una masa carbonosa. Las regiones centro-norte con baja prevalen- semillas afectadas pueden tener pequeñas cia (13). Desde su detección, el carbón se áreas hipertrofiadas y decoloración del te- había observado con bajos valores de pre- gumento, debajo del cual se encuentra la valencia e incidencia, pero en las últimas masa carbonosa compacta de color casta- campañas se ha comprobado un incre- ño rojizo, canela a castaño oscuro, o toda mento en su intensidad, principalmente la semilla puede estar totalmente trans- en la región norte con más historia del cul- formada en un grano carbonoso. Esta tivo (12). En la campaña 2007/08, el carbón masa carbonosa es formada por teliospo- se registró en todas las áreas maniseras, lo ras solitarias o en glomérulos (7). que estaría marcando la dispersión del pa- En general, los hongos patógenos trans-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 287 portados por semillas poseen la capacidad nativo y la emergencia, y negativa entre de adaptarse a sus hospedantes, aprove- estos parámetros y la carga fúngica total chando los sustratos que este les brinda, (CFT) y el porcentaje de Aspergillus spp. y formando esporas en sus frutos (15). Penicillium spp,. Además, el agregado de Se conoce que el tratamiento de la semilla un fungicida protector, como es el caso del con fungicidas curasemillas es una prác- captan, mejoró la acción de ambos curase- tica eficiente para el control de hongos millas (17). transportadas por las mismas. Esta técnica Por otra parte, in vitro se probó el efecto asegura un stand óptimo de plantas y una de dos curasemillas comerciales (carboxin- protección en los primeros estados de de- tiram e ipconazole-metalaxil) en la germina- sarrollo del cultivo, principalmente frente ción de teliosporas de T. frezii, concluyendo a Fusarium spp., en donde los curasemi- que ambos principios activos resultaron al- llas ipconazole-metalaxil y carboxin-tiram tamente eficientes en el control de germi- mostraron un eficiente control de la carga nación de esporas del patógeno (2). fúngica y una baja incidencia de Fusarium La semilla contaminada con teliosporas a campo (9). es el vehiculo de diseminación e incorpo- Debido a que el maní se forma en el suelo, ración de la enfermedad desde una zona es uno de los cultivos con mayor carga fún- hacia otra. Para el hongo T. frezii todavía gica en su semilla, por lo cual el tratamien- no se conoce con exactitud que curasemilla to de estas con fungicidas curasemillas es posee mejor efecto de control, por lo que un método eficiente para el control de se debería analizar la acción de fungicidas patógenos transmitidos por las semillas, curasemillas para evitar la dispersión e in- principalmente para Aspergillus niger, A. corporación del patógeno en áreas libres flavus, Fusarium spp. y Rhizopus spp. (3). (1, 10), como fue realizado en EE.UU. para En un ensayo realizado con fungicidas cu- el patosistema S. minor-A. hypogaea (17). rasemillas para evaluar su efecto sobre F. El presente trabajo plantea como objetivo solani, agente causal de la podredumbre evaluar la eficiencia de diferentes fungici- parda de la raíz de maní, se concluyo que das curasemillas en el control de T. frezii los principios activos fludioxinil-metalaxil, transportado por semilla. carboxin-tiram y carbendazim-tiram, con y sin el agregado de captan disminuyeron MATERIALES Y MÉTODOS significativamente los valores de inciden- cia de la enfermedad, logrando valores El ensayo se llevó a cabo en las inmedia- aceptables de emergencia de plántulas ciones del laboratorio de fitopatología (14). Asimismo los ensayos realizados por de la EEA INTA Manfredi. Se sembró en Cavallo et al. (5), evidenciaron que los cu- macetas de 18 L de capacidad con tierra, rasemillas carboxin-tiram + tolclofós metil previamente esterilizada en autoclave a o carbendazim controlaron eficientemen- 120ºC, 1 at de presión, durante 40 min; de te en condiciones de laboratorio colonias esta forma se asegura una cama de siem- fúngicas de hongos asociados a la semilla bra libre de agentes patógenos. Este es un de maní, seguido por los principios activos factor de suma importancia dado que el carboxin-tiram + carbendazim, pencycu- objetivo del presente trabajo es contro- ron + tiram, carboxin-tiram + PCNB (pen- lar la dispersión por semilla de T. frezii y tacloronitrobenceno). para poder evaluar esto es necesario que En un trabajo realizado durante las campa- las esporas del hongo solo provengan de ñas 2005/06 y 2006/07, con previo conoci- las semillas. Se utilizó el cultivar Colorado miento del comportamiento de los fungici- Irradiado INTA, ya que es altamente sus- das carboxin-tiram y fludioxinil-metalaxil, ceptible a carbón (10). se observó que en ambas campañas hubo Se empleó un diseño en bloques comple- una relación positiva entre poder germi- tos al azar con tres repeticiones. El tamaño

288 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 de las parcelas fue de 10 macetas, con una RESULTADOS Y DISCUSIÓN planta por maceta. Se realizaron cinco tratamientos, evaluán- Incidencia de la enfermedad dose tres curasemillas comerciales inocu- Al analizar la incidencia del carbón del lados con esporas del patógeno; dejando maní se observa que el testigo sin esporas dos tratamientos como testigo. Uno de los (tratamiento 1) no presentó incidencia de testigos se inoculó con esporas del hongo carbón, mientras que los tratamientos quí- y el otro se sembró sin ser contaminado micos (tratamientos 3, 4 y 5) presentaron (Cuadro 1). valores relativamente bajos de incidencia (menores al 10%) en comparación al tes- Cuadro 1. Tratamientos fungicidas a semilla de tigo inoculado con esporas (tratamiento maní contaminada con Thecaphora frezzi. 2), que alcanzó un valor de incidencia del 21%. Esto indica que la enfermedad es dis- persada por las semillas y a su vez se obser- va que los tratamientos químicos contro- lan parcialmente la dispersión por semillas contaminadas (Cuadro 2). Se observa tam- bién que las esporas trasportadas con la semilla pueden producir el desarrollo de la enfermedad durante la campaña agrí- La inoculación se realizó con esporas T. cola en que se siembran (Cuadro 2, testigo frezii de la campaña 2008/09, con una inoculado). concentración de 8 millones de esporas cada 90 semillas sanas. Luego de la conta- minación, las semillas fueron tratadas con Cuadro 2. Incidencia de Thecaphora frezii según el curasemilla correspondiente a cada tra- tratamientos fungicidas a la semilla de maní. tamiento. La cosecha se realizó a los 136 días después de la siembra cuando el cultivo alcanzó su madurez fisiológica. Se identificaron ade- cuadamente cada una de las muestras y el material fue llevado al laboratorio de fito- patología del INTA Manfredi en donde se dejó orear por 15 días, luego se realizó el descapotado manual del total de las vainas * Letras distintas indican diferencias estadísticamente de cada planta de los distintos tratamien- significativas según el test DGC (α = 0,05). tos y repeticiones. Se evaluaron las varia- bles de intensidad de enfermedad, 1) pro- porción de frutos afectados por carbón por En un primer análisis de la varianza se ob- planta y por tratamiento (Nº de frutos con servó que no hubo diferencias estadísti- carbón/Nº total de frutos) (10), y 2) Inciden- camente significativas entre bloques (p= cia, como porcentaje de plantas que pre- 0,3231), por lo cual fueron quitados del sentan al menos una caja con carbón (11). modelo de análisis para así trabajar con un El análisis estadístico de los datos se realizó diseño completamente aleatorizado. En el mediante el uso del programa Infostat. Los nuevo análisis de la varianza del modelo datos se sometieron a un análisis de la va- completamente aleatorizado, se observa- rianza con su correspondiente test de com- ron diferencias estadísticamente significa- paración de medias, test DGC (Prueba Di tivas entre los tratamientos (p =0,044). Tras Rienzo, Guzmán y Casanoves) con un nivel realizar el test de comparación de medias de significación dea = 0,05 (6). se detectó que los tratamientos 3, 4 y 5

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 289 (tratamientos fungicidas) no presentaban Proporción de frutos afectados diferencias estadísticamente significativas La proporción de frutos afectados por car- entre ellos ni con el tratamiento 1 (testigo bón (Cuadro 3) fue más alta en el testigo sin esporas), pero si resultaron diferentes inoculado con esporas (tratamiento 2), estadísticamente del testigo inoculado que en aquellos tratamientos a los cuales con esporas (tratamiento 2) (Cuadro 2). se les aplicó curasemilla (tratamientos 3, Marinelli et al. (9) y Capello et al. (3) de- 4 y 5), los cuales presentaron bajos valo- mostraron que diferentes curasemillas son res de proporción de frutos afectados. En eficientes en el control de la carga fúngica el testigo sin inocular (tratamiento 1) no de las semillas y por ende en la inciden- hubo cajas afectadas por carbón. cia de enfermedades causadas por hon- gos transportados por semilla (cuando el Cuadro 3. Proporción de frutos afectados por The- inóculo solo proviene de la semilla). Por su caphora frezii según tratamientos fungicidas a la semilla. parte, Oddino et al. (14) demostraron que es posible disminuir la incidencia de F. sola- ni con los principios activos carboxin-tiram y fludioxinil-metalaxil. Algo similar fue demostrado por Cavallo et al. (6), en don- de en condiciones controladas se logró un control eficiente de colonias fúngicas, en- tre ellos, el principio activo carboxin-tiram logró una alta eficiencia en el control de patógenos asociados a la semilla de maní. * Letras distintas indican diferencias significativas según Resultados similares fueron obtenidos por el test DGC (α = 0,05). X Nº de frutos con carbón/Nº total de frutos Astiz Gasso y Wojszko (2) en su trabajo rea- lizado in vitro con el principio activo car- boxin-tiram, el cual resultó altamente efi- Al igual que en la variable incidencia, se ciente en el control de la germinación de quitó del modelo de análisis a los bloques esporas de T. frezii. En el presente trabajo ya que no presentaron diferencias estadís- este tratamiento demostró ser eficiente ticamente significativas (p= 0,3282) y se en el control de la dispersión de la enfer- trabajó también, con un modelo comple- medad, lo que pudo deberse a una inhibi- tamente aleatorizado. ción de la germinación de las esporas. En En el correspondiente análisis de la varian- este trabajo se observó que existen otros za del modelo completamente aleatoriza- curasemillas efectivos en el control de la do, se observaron diferencias estadística- dispersión de la enfermedad por semillas. mente significativas (p =0,021). Estos curasemillas lograron disminuir la in- El test de comparación de medias (Cuadro cidencia de la enfermedad en condiciones 3), arrojó como resultado que los trata- controladas. Pero deben realizarse nuevos mientos químicos (tratamientos 3, 4 y 5) estudios para determinar si estos produc- tenían diferencias estadísticamente sig- tos tienen efecto sobre la germinación de nificativas respecto del testigo inoculado las esporas o bien actúan afectando otros con esporas, pero no se diferenciaban en- aspectos del ciclo de desarrollo del hon- tre ellos ni del testigo sin esporas. El trata- go. Los curasemillas utilizados resultaron miento 4 (metalaxil) fue el que presentó eficientes en controlar la dispersión de T. menor proporción de frutos afectados por frezii a través de la semilla, ya que lograron carbón, mientras que el testigo con espo- disminuir la incidencia de la enfermedad ras fue el de mayor proporción de frutos a valores por debajo del 6%, en compara- afectados. Es importante destacar que en ción al testigo inoculado (tratamiento 2). el tratamiento 4 la concentración de me-

290 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 talaxil fue del 35% mientras que en el tra- tivos Industriales del INTA, PNIND 082511. tamiento 5 el metalaxil se encontraba en un 3,75 %, esto explicaría el porque el uso BIBLIOGRAFÍA CITADA de metalaxil solo fue más efectivo. En su trabajo Astiz Gassó y Wojszko (2) observa- 1. Astiz Gassó M.M., Leis R. y Marinelli A. ron que ipoconazole+metalaxil también 2008. Evaluación de incidencia y seve- inhiben la germinación de las esporas de ridad del carbón de maní (Thecaphora frezii) en infecciones artificiales, sobre T. frezii. cultivares comerciales de maní. In: Resú- Zuza et al. (17) demostraron que la mez- menes 1º Congreso Argentino de Fitopa- cla de principios activos en el curado de tología. Córdoba. p. 161. semillas mejora la acción fungicida en el 2. Astiz Gassó M.M. y Wojszko A.R. 2010. Eva- control de hongos transmitidos por semi- luación in vitro de fungicidas para el con- lla; en este ensayo dado que los tres trata- trol de carbón del maní (Thecaphora frezii) mientos químicos se comportaron de igual en semilla (Arachis hypogaea). In: Resúme- manera se supone que la adición de princi- nes XXV Jornada Nacional de Maní. Gene- pios activos no mejora la acción fungicida ral Cabrera, Córdoba. pp. 32-34 frente a T. frezii. 3. Capello G., Marinelli A., Oddino C., Zuza M., March G. y Garcia J. 2007. Evaluación de un nuevo fungicida para tratamiento CONCLUSIONES de semillas. Campañas 2004/05, 2005/06 y 2006/07. In: Resúmenes XXII Jornada Na- Todos los tratamientos curasemillas eva- cional de Maní y 1er Simposio de Maní en luados resultaron eficientes en el control el Mercosur. General Cabrera, Córdoba. de la dispersión por semilla de maní del pp. 6-7 patógeno Thecaphora frezii. Si bien el tra- 4. Carranza J. y Lindquist J. 1962. Thecapho- tamiento con metalaxil fue el que presen- ra frezii n. sp, parasita de Arachis sp. Bole- tó menor incidencia y menor proporción tín de la Sociedad Argentina de Botánica de frutos afectados, los demás tratamien- X: 11-17 5. Cavallo A., Novo R. y Pérez M. 2005. Efi- tos químicos: carboxin-tiram y carboxin- ciencia de fungicidas en el control de la tiram + fludioxinil-metalaxil, también se flora fúngica transportada por semillas consideran eficientes debido a que no se de maní (Arachis hypogaea L.) en la Ar- observaron diferencias estadísticamente gentina. Agriscientia XXII (1): 9-16 significativas para las variables analizadas. 6. Infostat. 2007. Infostat/ profesional, ver- Ninguno de los tratamientos realizados sión 2.0. Grupo Infostat/ FCA. Universidad actuó como erradicante del patógeno. Nacional de Córdoba. Ed. Brujas, Córdo- El tratamiento químico carboxin-tiram + ba, Argentina. fludioxinil-metalaxil no mejoró el efec- 7. March G. y Marinelli A. 2005. Enfermeda- to logrado por carboxin-tiram frente a T. des del maní Argentina. Córdoba, Biglia Impresores, Córdoba. 143 pp. frezii transportado en semilla de maní. 8. Marinelli A., March G., Oddino C., Kear- La semilla contaminada con esporas del ney M., Giuggia J., Crenna C., Costabella patógeno es responsable de la trasmisión L. y Milos M. 2002. Etiología y aspectos de la enfermedad, sirviendo de vehiculo al epidemiológicos del carbón del maní The- patógeno para colonizar nuevos lotes, y caphora frezii. In: Resúmenes XVII Jorna- los terápicos de semillas utilizados común- da Nacional de Maní. General Cabrera, mente en el cultivo de maní no controlan Córdoba. p. 14. totalmente este patógeno. 9. Marinelli A., Oddino C. y Garcia J. 2009. Efecto de fungicidas curasemillas sobre el FINANCIAMIENTO poder germinativo, la carga fúngica y la emergencia de maní. Campaña 2008/09. In: Resúmenes XXIV Jornada Nacional de La presente investigación fue financiada Maní. General Cabrera, Córdoba. pp. 40-42 con fondos del Proyecto Nacional de Cul-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 291 10. Marraro Acuña F., Mazzini P., Morello L. posio de Maní en el MERCOSUR. General y Zazzetti M. 2009. Evaluación de cultiva- Cabrera, Córdoba. pp. 10-13 res de maní frente al carbón: Thecaphora 14. Oddino C., Marinelli A., Zuza M., Garcia frezii. In: Resúmenes XXIV Jornada Nacio- J., March G. y Vargas Gil S. 2006. Efecto nal de Maní. General Cabrera, Córdoba. de fungicidas curasemillas sobre la carga pp. 28-30 fúngica se la semilla, la emergencia y la 11. Marraro Acuña F., Muñoz J. y Mazzini P. incidencia de la podredumbre parda de la 2007. Evaluación a campo de fungicidas raíz del maní. Campaña 2005/06. In: Re- para el control químico del carbón de súmenes XXI Jornada Nacional de Maní. maní. In: Resúmenes XXII Jornada Nacio- General Cabrera, Córdoba. pp. 12-14 nal de Maní y 1er Simposio de Maní en 15. Wade H. 2001. Seed as vehicles for patho- el MERCOSUR. 20 de setiembre. General gen importation. Biological Invasions 3: Cabrera, Córdoba. pp. 48-50 263-271. 12. Oddino C., Marinelli A., March G., Zuza 16. Wadsworth D., and Melouk H. 1985. Po- M. y Ferrari S. 2008. Carbón del maní tential for transmission and spread of (Thecaphora frezii) y tizón por Botritys Sclerotinia minor by infected peanut seed (Botritys cinerea) ¿Enfermedades poten- and debris. Plant Disease 69: 379-381. ciales o importantes?. In: Resúmenes XXIII 17. Zuza M., Oddino C., Marinelli A., March Jornada Nacional de Maní.. General Ca- G. y Garcia J. 2008. Importancia de la car- brera, Córdoba. pp. 8-9 ga fúngica para la elección de la semilla 13. Oddino C., Marinelli A., March G., Zuza de maní y el fungicida curasemillas a utili- M. y Garcia J: 2007. Evaluación regional zar. In: Resúmenes XXII Jornada Nacional de enfermedades en maní. In: Resúmenes de Maní. General Cabrera, Córdoba. pp. XXII Jornada Nacional de Maní y 1er Sim- 14-17

Control de Amaranthus spp. con saflufenacil (Heat®) en postemergencia de maní (Arachis hypogaea)*

Alberto Moresi1,3, Claudio Oddino1,2, César Bianco1,2, Juan Soave1, Sara Soave1, Diego Torre1, Mario Buteler1, Rubén Berlaffa3 y Paola Faustinelli1,4 1- Criadero El Carmen. 2- Fac. de Agronomía y Veterinaria-UNRC. 3- Agrifood S.A. 4- Universidad Católica de Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN la producción para consumo directo (3). Si bien, como se mencionó anteriormente En los últimos años, Argentina se ha conso- nuestra provincia es la principal producto- lidado como el primer exportador mundial ra, en las últimas campañas se ha registra- de maní confitería con aproximadamente do un fuerte desplazamiento hacia los de- 500.000 t. En el contexto de la producción partamentos del sur y provincias limítrofes nacional, Córdoba es la primera provin- como San Luis y La Pampa (3). cia productora con un aporte de más del Este desplazamiento se ha desencadenado 90%, contando además con casi la totali- principalmente por problemas de suelo y dad de la industria transformadora (plan- sanitarios. Considerando los aspectos sa- tas de secado, procesamiento y acondicio- nitarios, uno de los principales problemas namiento de maní confitería) y las fábricas en este cultivo son las malezas, destacán- aceiteras que procesan los excedentes de dose gramíneas, como Digitaria sanguina-

* Este trabajo fue ganador en el Concurso Top Ciencia Latinoamericano (San Pablo-Brasil), organizado por Basf en el año 2011, y adaptado para su publicación según las Normas de Publicación de esta revista.

292 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 lis, Eleusine indica, Sorghum halepense; leza supera los 20 cm, principalmente para ciperáceas, principalmente Cyperus rotun- 2,4-DB que es el herbicida latifolicida más dus; y dicotiledóneas como Chenopodium utilizado durante el ciclo del cultivo (4). album, Datura ferox, Ipomoea nil, I. pur- Cuando el control con este herbicida no purea, Portulaca oleracea y varias especies es efectivo se recurre generalmente al uso del género Amaranthus (2, 18). de productos de contacto, principalmente Con respecto al manejo de malezas, es im- lactofen, que si bien al comienzo causa un portante considerar que el maní es un po- bronceado de hojas en el cultivo este efec- bre competidor frente a las mismas, por lo to luego desaparece (18). que debe recurrirse a un eficiente control Un herbicida de contacto de reciente in- para mantener al cultivo limpio durante el troducción en nuestra región es el saflu- período de competencia, que abarca entre fenacil (Heat®), un inhibidor de la proto- los 30 a 70 días desde la siembra (4, 17). porfirinógeno-IX-oxidasa (PPO) utilizado Para lograr este objetivo, es frecuente el principalmente en mezclas con glifosato uso de herbicidas aplicados en preemer- en el barbecho de cultivos estivales, y que gencia o postemergencia temprana que se caracteriza por un rápido y eficiente tengan una residualidad capaz de cubrir control de malezas de hoja ancha (8); in- la mayor parte del período de competen- clusive de Amaranthus quitensis, donde cia. Los herbicidas más frecuentes son las en mezclas con glifosato e imidazolino- cloroacetamidas, como acetoclor o s-me- nas mostró la máxima velocidad de acción tolacloro, apuntando al control de gramí- (16). neas y las imidazolinonas, como imazapic No obstante que el saflufenacil no ha sido o imazetapir para el control de dicotiledó- registrado para el uso postemergente en neas, ciperáceas y algunas gramíneas (7). maní, y que posiblemente al provocar Si bien este último grupo químico de herbi- destrucción de membranas celulares (11) cidas se caracteriza por tener alta eficiencia puede causar algún efecto fitotóxico, es en el control de numerosas malezas de hoja importante destacar que este cultivo ha ancha, su uso masivo en el cultivo, como demostrado generalmente una elevada así también la rotación con herbicidas que recuperación al efecto de fitotoxicidad de actúen en la misma enzima (acetato lacta- herbicidas graminicidas y latifolicidas (14, to sintetasa-ALS), como el caso de diclosu- 15, 18). lam; ha generado la aparición de biotipos Considerando el incremento de lotes con de especies del genero Amaranthus con escape de especies de Amaranthus a los resistencia a estos grupos químicos (9, 12, herbicidas residuales normalmente utili- 13, 20). Diferentes especies de este género zados en el cultivo, y el deficiente control están causando problemas que preocupan de esta maleza por los herbicidas post- no solo por la cantidad, sino por la amplia emergentes, se planteó como objetivo de difusión que tienen en la región manisera; este trabajo, evaluar el efecto de la apli- ya que las mismas son consideradas espe- cación en postemergencia de saflufenacil cies altamente invasoras y con una ventana (Heat®) en el control de Amaranthus spp. de nacimiento muy amplia, que ocupa gran y la fitotoxicidad en maní. parte del ciclo del cultivo y puede ocasio- nar pérdidas importantes tanto en los ren- MATERIALES Y MÉTODOS dimientos (35-85%), como en la calidad del grano de maní (5, 6). El ensayo se realizó en un lote de maní Si bien existen algunos productos poste- sembrado con la variedad Guasu, en el es- mergentes registrados para el control de tablecimiento “La Colorada”, ubicado en malezas dicotiledóneas en maní, la efi- el área rural de Huinca Renancó, departa- ciencia de los mismos es muy variable y mento General Roca, provincia de Córdo- poco efectiva cuando el tamaño de la ma- ba.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 293 La siembra, con una densidad de 200.000 je de control visual (0-100%) de acuerdo a semillas/ha, se realizó el día 22 de octubre la escala de la Asociación Latinoamerica- de 2010, sobre un rastrojo de maíz, al que na de Malezas-ALAM (1); mientras que la previamente se le realizó una labor mecá- evaluación de plantas muertas (0-100%) y nica de presiembra con una rastra de dis- grado de fitotoxicidad sobre la maleza (0- cos con rolo. 5), se realizó considerando la escala de la Para el control de malezas en barbecho se European Weed Research Council (EWRC). utilizó en preemergencia una mezcla de Además se evaluó la fitotoxicidad visual herbicidas, formada por glifosato (1700 sobre el cultivo, considerando la misma cm3 i.a./ha) + 2,4-D sal amina (400 cm3 i.a./ escala que para la maleza. ha) + acetoclor (1170 g i.a./ha). Además, La comparación entre tratamientos se rea- en postemergencia temprana (30 días des- lizó considerando los valores de porcenta- pués de la aplicación - DDA) se aplicó ima- je de control visual, porcentaje de plantas zapic (52 g i.a./ha) + 2,4-DB (600 cm3 i.a./ muertas y fitotoxicidad sobre las malezas, ha). a través de ANAVA y test de comparación Los tratamientos postemergentes que se de medias de Duncan (p<0,05). aplicaron a los 60DDS, fueron 1) diclosu- lam (25,2 g i.a./ha) + 2,4-DB (745 cm3 i.a./ RESULTADOS Y DISCUSIÓN ha), 2) clorimuron (10 g i.a./ha) + 2,4-DB (465 cm3. i.a./ha) + diclosulam (16,8 g i.a./ Como ocurre frecuentemente en el área ha), 3) bentazon (360 cm3 i.a./ha) + 2,4-DB manisera, en el lote donde se realizó el (465 cm3 i.a./ha) + diclosulam (16,8 g. i.a./ ensayo se observó un elevado escape de ha), 4) fomesafen (87,5 cm3 i.a./ha) + 2,4- Amaranthus spp. a la aplicación de ima- DB (465 cm3 i.a./ha) + diclosulam (16,8 g zapic en postemergencia temprana, de- i.a./ha), 5) lactofen (60 cm3 i.a./ha) + 2,4- mostrando así el escape de esta maleza a DB (465 cm3 i.a./ha) + diclosulam (16,8 g herbicidas que actúan a nivel de la enzima i.a./ha), y 6) saflufenacil (17,5 g. i.a./ha) + ALS (9, 12, 13, 20). 2,4-DB (465 cm3. i.a./ha) + diclosulam (16,8 A los 7 días DDA se observó que el agre- g i.a./ha). gado de saflufenacil a diclosulam+2,4-DB Los tratamientos se realizaron en parcelas mostraba un efecto significativamente de tres surcos a 70 cm y 10 m de largo, en mayor que en el resto de los tratamientos, un diseño en bloques completos al azar con un 75% de plantas muertas y un 85% con cinco repeticiones. de control, lo cual significaba un efecto La aplicación se realizó con una mochila de control “muy bueno” de acuerdo a la de presión constante a gas carbónico con escala de ALAM (1) (Cuadro 1), coincidien- una barra porta-picos de cinco boquillas do con el rápido efecto sobre Amaranthus a 35 cm entre picos, utilizando pastillas spp. observado por Papa et al. (16). Los abanico plano estándar 80015. La presión tratamientos con lactofen y fomesafen utilizada fue de 2,7 bares, arrojando un presentaron también un buen efecto con caudal total de 190 L/ha, registrándose al valores de control de 70 y 75% respectiva- momento de la aplicación (7,45 AM) los mente, considerado “bueno” de acuerdo siguientes datos climatológicos, velocidad a escala ALAM (1). del viento de 15 km/h, humedad relativa A los 14 DDA, el tratamiento con saflufe- ambiente de 58% y temperatura del aire nacil ya presentaba un control del 100% de 23°C. y grado de fitotoxicidad en la maleza de Esta aplicación se realizó cuando las plan- 5 (control excelente), con diferencias esta- tas de Amaranthus spp. presentaban una dísticamente significativas con respecto al altura entre 20-30 cm, evaluándose su resto de los tratamientos, seguido por los control en cuatro momentos, 7, 14, 21 y tratamientos con lactofen y fomasafen. 28 DDA, donde se consideró el porcenta- En este momento se observó un control

294 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 significativamente mayor de la mezcla Con respecto a la fitotoxicidad sobre el diclosulam+2,4DB a dosis completa (con- cultivo, los tratamientos que provocaron trol suficiente), que la mezcla de ambos a síntomas foliares visibles fueron lacto- 65% de la dosis completa, con bentazon y fen y fomesafen, donde se observó a los clorimuron (control pobre) (Cuadro 1). 7 DDA una fitotoxicidad de daño mínimo Cabe señalar que en el momento de apli- (grado 1, EWRC), y el saflufenacil con una cación de estos productos, es muy impor- fitotoxicidad regular (grado 3, EWRC). Sin tante lograr un rápido control, ya que el embargo, y de acuerdo con lo señalado cultivo se encuentra en su período crítico por numerosos autores, al ser el maní un de competencia con malezas, siendo el cultivo con crecimiento indeterminado, momento donde más se afecta al rendi- presentó una excelente recuperación (14, miento (5, 6). 15, 18), diluyéndose los síntomas con la Como puede observarse en el cuadro 1, producción de nuevos nudos a los 28 DDA, a los 28 DDA los tratamientos de menor a pesar de las escasas precipitaciones re- efecto fueron, diclosulam+2,4-DB y esta gistradas. mezcla más clorimuron, los cuales no lle- Si bien este producto todavía no ha sido garon a un control bueno (<70%), de- registrado para ser utilizado en poste- mostrando la escasa eficiencia de control mergencia de maní, los resultados de de las sulfonilureas (clorimuron etil) y las este ensayo muestran que el agregado triazolpirimididas (diclosulam), herbicidas de saflufenacil a la mezcla de latifolicidas que también actúan sobre la ALS (10, 19). más utilizadas en postemergencia de este

Cuadro 1. Efecto sobre Amaranthus spp. de mezclas de herbicidas postemergentes en maní.

* Letras diferentes en la misma columna indican diferencias significativas según test de Duncan (p<0,05). x DDA: días después de la aplicación de las mezclas herbicidas. y Según escala ALAM (1). z Según escala de European Weed Research Council.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 295 cultivo, 2,4-DB y diclosulam, utilizados al mic crops. SS-AGR-338. 65% de su dosis completa, permite un 7. Grichar W., Dotray P., and Sestak D. 1999. control eficiente de Amaranthus spp. que Diclosulam for weed control in Texas se escapan a herbicidas que actúan sobre peanut. Peanut Science 26: 23-26. la ALS. Este efecto es mejor y significati- 8. Grossmann K., Niggeweg R., Christiansen N., Looser R., and Ehrjardt E. 2010. The vamente más rápido que otros herbicidas herbicide saflufenacil (Kixor ™) is a new de contacto utilizados para el control de inhibitor of protoporphyrinogen IX oxida- esta maleza, permitiendo controlarla rápi- se activity. Weed Technology 58 (1): 1-9. damente, cuando la misma está afectando 9. Hinz J.R.R., and Owen M.D.K. 1997. Ace- en el período crítico de competencia con tolactate synthase resistance in a common este cultivo (5, 6). waterhemp (Amaranthus rudis) popu- lation. Weed Technology, Champaingn, AGRADECIMIENTOS 11(1): 13-18. 10. Horak M.J., and Peterson D.E. 1995. Bio- A la empresa BASF por permitirnos pre- types of palmer amaranth (Amaranthus palmeri) and common waterhemp (Ama- sentar este trabajo para su publicación en ranthus rudis) are resistant to imazetha- la revista Ciencia y Tecnología de los Culti- pyr and thifensulfuron. Weed Technolo- vos Industriales. gy, Champaign, 9(1): 192-195. 11. Kogan M. y Pérez A. 2003. Herbicidas. BIBLIOGRAFÍA CITADA Fundamentos fisiológicos y bioquímicos del modo de acción. Universidad Católica de Chile. pp. 213-217. 1. ALAM. 1974. Evaluación de ensayos en 12. Lovell S.T., Wax L.M., Horax M.J., and control de malezas en latinoamérica. Peterson D.E. 1996 Imidazolinone and In: Actas de Resúmenes. II Congreso de sulfonylurea resistance in a biotype of ALAM. Cali, Colombia. Revista de la Aso- common waterhemp (Amaranthus rudis). ciación Latinoamericana de Malezas. pp. Weed Science, Champaing, 44(4): 789- 6-12. 794. 2. Bianco C., Soave J., Moresi A. y Kraus T. 13. Monqueiro P.A., Christoffoleti P.J. y Dias, 2006. Malezas del cultivo de maní. Identi- C.T.S. 2000. Resistência de plantas danin- ficación y control. 1º ed. Universidad Na- has aos herbicidas inibidores da ALS na cional de Río Cuarto. Río Cuarto, Argenti- cultura da soja (Glycine max). Planta Da- na. 118 pp. ninha 18 (3): 419-425. 3. Busso G., Civitaresi M., Geymonat A. y 14. Moresi A., Soave J., Soave S., Bianco C., Roig R. 2004. Situación socioeconómica Buteler M. y Oddino C. 2009. Fitotoxici- de la producción de maní y derivados en dad de herbicidas latifolicidas postemer- la región centro-sur de Córdoba. Diag- gentes en el cultivo de maní. In: Resúme- nósticos y propuestas de políticas para el nes de XXIV Jornada Nacional de Maní, fortalecimiento de la cadena. Universidad Gral. Cabrera, Córdoba. pp. 46-48. Nacional de Río Cuarto. Río Cuarto, Ar- 15. Oddino C., García J., March G., Marinelli gentina. 163 pp. A., Ferrari S. y Tarditi L. 2009. Efecto de la 4. Daita F. 2006. Control de malezas en el aplicación de graminicidas sobre la inten- cultivo de maní. In: El cultivo de maní sidad de viruela del maní. In: Resúmenes en Córdoba (E. Fernández y O. Giayetto, de XXIV Jornada Nacional de Maní, Gral. comp.). pp. 215-238. Cabrera, Córdoba. pp. 50-52. 5. Fast B.J., Wellis J.B., Murray D.S., Murdock 16. Papa J., Tuesca D. y Nisensohn L. 2010. S.W., and Farris R.L. 2009. Critical timing Control tardío de rama negra (Conyza bo- of palmer amaranth (Amaranthus palme- nariensis) y peludilla (Gamochaeta spica- ri) removal in second-generation glypho- ta) con herbicidas inhibidores de la proto- sate-resistant Cotton. Journal of Cotton porfirin-IX-oxidasa previo a un cultivo de Science 13: 32-36. soja. Soja - Para mejorar la producción 45: 6. Ferrel, J., Brecke, B., and Smith, C. 2010. 85-89. Control of palmer amaranth in agrono- 17. PauloE., Kasai F., and Cavichioli J. 2001.

296 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Effects of weed competition periods on inhibiting herbicides. In: Herbicide resis- peanuts: II. Wet season crop. Bragantia tance in plants: biology and biochemistry 60(1): 27-33. (S.B. Powles y J.A.M. Holtum, eds.). Boca 18. Rainero H. y Rodríguez N. 2001. Malezas Raton, Lewis. pp. 83-139. y su control en el cultivo de maní. Agro- 20. Tuesca D. y Nisensohn L. 1996. Resisten- mercado 63: 30-32. cia de Amaranthus quitensis a imazetapir 19. Saari L.L., Cotterman J.C., and Thill D.C. y clorimuron-etil. Pesq. agropec. bras.36 1994. Resistance to acetolactate synthase (4): 601-606

Efecto de las rotaciones sobre la intensidad del carbón del maní (Thecaphora frezii) y la densidad de inóculo, y relación de éstos parámetros con los rendimientos*

Claudio M. Oddino1,3, Adriana D. Marinelli1,3, Julián García3, Lucía Tarditti3, Luis D’Eramo3, Santiago Ferrari3, Alejandro Rago1,2 y Guillermo J. March1,2 1- Facultad de Agronomía y Veterinaria-UNRC. 2- INTA, IPAVE-CIAP. 3- Oro Verde Servi- cios. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN granos. En las células colonizadas se for- man las teliosporas que son la estructura Las enfermedades por hongos del suelo en de supervivencia del patógeno en el suelo maní (Arachis hypogaea), fueron la causa y su inóculo, siendo la semilla infestada la principal del abandono de este cultivo principal forma de dispersión del patóge- en la región productora más importante no (10, 12). En la XXV Jornada Nacional de Argentina (Córdoba ≈ 95% de la pro- del Maní realizada en 2010, se dedico un ducción) durante la década del ´90, y del módulo especial para analizar esta enfer- desplazamiento del cultivo hacia el sur del medad dado su impacto sobre la produc- área histórica (2). Entre esas enfermeda- ción, tanto en rendimientos como en la des, las que produjeron las mayores pér- calidad del grano y la semilla. didas de cosecha fueron el tizón (Scleroti- Las enfermedades causadas por hongos nia minor), el marchitamiento (Sclerotium del suelo que causaron severas pérdidas rolfsii) y la podredumbre parda de la raíz en maní en la última década del siglo XX (Fusarium solani) (7). y primeros años del siglo XXI, como tizón, En esta región manisera se identificó por marchitamiento y podredumbre parda primera vez en el mundo a Thecapho- de la raíz son monocíclicas, por lo que su ra frezii como agente causal del carbón intensidad depende esencialmente de la del maní cultivado (9). Transcurrido poco cantidad de inóculo presente en el suelo más de una década, la enfermedad fue al momento de la siembra (7, 8). Debido a calificada como endémica por su rápida esta característica epidemiológica, se desa- diseminación, incremento paulatino de rrollaron estrategias de manejo cultural a su intensidad y presentación en todas las través de rotaciones y labranzas (7, 14, 17, campañas agrícolas (12). 18). En general, estas estrategias disminu- Thecaphora frezii produce infecciones lo- yen la densidad de propágulos infectivos cales ocasionando hipertrofia en cajas y de los patógenos en el suelo, favorecen el

* Un resumen de este trabajo fue presentado en la XXV Jornada Nacional del Maní, Gral. Cabrera (2010), y adoptado a las Normas de Publicación de esta revista.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 297 incremento de la densidad poblacional de se realizan diversos ensayos, uno de los los biocontroladores nativos y reducen el cuales comprende rotaciones incluyendo estrés físico-mecánico e hídrico del suelo principalmente maní, maíz y soja, los cua- favoreciendo el desarrollo radicular del les son implantados en macroparcelas de cultivo, disminuyendo la intensidad de las 80 surcos de ancho (0,70 m entre surcos) y enfermedades (7). 100 m de longitud, según distintas secuen- En sistemas productivos de todo el mundo cias desde 2001/02 (Cuadro 1). las rotaciones han sido señaladas como cla- Durante los primeros años la presencia de ves para el manejo de numerosas enferme- carbón afectando los frutos fue detectada dades en distintos cultivos, especialmente con muy baja intensidad, pero a partir de de las causadas por hongos del suelo (1, las campañas 2005/06/07/08/09 se registra- 3, 15, 19, 20). Al ser T. frezii un patógeno ron elevados valores en algunas macropar- biotrófico, las rotaciones adquieren un rol celas sembradas con maní, por lo que en la clave en el manejo de la enfermedad, ya campaña 2009/10 se sembró este cultivo en que el incremento del inóculo es depen- todas las macroparcelas a fin de evaluar el diente de la presencia de su hospedante. efecto de las rotaciones. Considerando que el carbón es también Para la cuantificación de la densidad de una enfermedad monocíclica cuyo agen- inóculo del carbón (número de teliospo- te causal tiene en el suelo su habitat de ras de T. frezii/gr de suelo), antes de la sobrevivencia, en este trabajo se planteó siembra se obtuvieron en cada macropar- como objetivo evaluar el efecto de las ro- cela 10 muestras de suelo compuestas de taciones sobre la densidad de inóculo, la 10 submuestras de 2,5 cm de diámetro y intensidad de la enfermedad y la influen- 10 cm de profundidad a lo largo de 1 m. cia de estos parámetros epidemiológicos Cada estación de muestreo estaba ubicada en los rendimientos. aproximadamente cada 5-6 m sobre una diagonal comenzando a 5 m de la cabe- MATERIALES Y MÉTODOS cera. En laboratorio las muestras de suelo fue- Este estudio se llevó a cabo en el módulo ron homogeneizadas y en cada una se rea- experimental de la Fundación Maní Ar- lizaron cinco mediciones del número de gentino (FMA) ubicado en proximidades las teliosporas por gramo de suelo, para lo de Gral. Deheza, Córdoba. En este sitio cual se recurrió a la técnica de suspensión

Cuadro 1. Secuencia de cultivos en ensayo de rotaciones. Fundación Maní Argentina. Módulo Experimen- tal Gral. Deheza.

* Mn: maní. Sj: soja. Mz: maíz. Alf.: alfalfa. Sg: sorgo.

298 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 en agua y conteo al microscopio del nú- los menores donde se realizó una rotación mero de teliosporas en 5 µl de agua desti- de tres años sin maní, y principalmente en lada estéril. aquellas parcelas donde al menos un año La evaluación de la enfermedad se llevó a se sembró maíz (Cuadro 1). cabo al arrancado del cultivo, para lo cual Las rotaciones actúan generalmente a tra- se cosecharon ocho estaciones de mues- vés de efectos directos sobre los propágu- treo de 2 m2 de cada macroparcela, distri- los de los patógenos presentes en el suelo buidas regularmente sobre una diagonal. 4500 Las cajas de cada planta fueron separadas 4000 A manualmente, colocadas en bolsa tipo red suelo) 3500 y llevadas al laboratorio para estimar la 3000 intensidad del carbón (incidencia y severi- 2500 dad) y la producción. Inóculo 2000 La cuantificación de la intensidad del car-

teiosporas/gr 1500 bón se realizó considerando su incidencia 1000 (% de cajas afectadas) y severidad según (Nº 500 una escala de 0-4 (0: sanas, 4: máximo 0 daño). El rendimiento se estimó en kg/ha 50 B de vainas, con una humedad del 11%. 45 A través de ANAVA y análisis de regresión 40 35 se estableció la relación entre la densidad (%) 30 de inóculo y la incidencia y severidad de 25 la enfermedad; y entre la intensidad de la 20 enfermedad y la densidad de inóculo con 15

Incidencia la producción. 10 5 RESULTADOS Y DISCUSIÓN 0 1,6 C 1,4 La detección del carbón con muy baja in- 1,2 cidencia en el módulo experimental de la FMA prácticamente desde comienzos de (0-4) 1,0 este siglo, y su incremento en las parcelas 0,8 con maní, nos indicaba la introducción de 0,6

T. frezii por la semilla y un posible efec- Severidad 0,4 to diferencial de las rotaciones. La semilla 0,2 infestada ha sido señalada como la causa 0 principal de diseminación de la enferme- 4500 D dad en toda la región productora (12). 4000 3500

La densidad de inóculo registrada en este (kg/ha) 3000 trabajo osciló entre 18 y 4.400 teliosporas/g 2500 de suelo, según la secuencia de cultivos en 2000 la rotación (Figura 1 A). Por su parte, la 1500 intensidad de la enfermedad se presentó Rendimiento 1000 con valores de incidencia que oscilaron 500 entre 15 y 51%; y de severidad entre 0,5 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 y 1,7 (escala de 0-4) (Figuras 1 B y C). En Rotaciones general, los mayores valores de densidad Figura 1.Densidad de inóculo de Tecaphora frezzi del inóculo y de intensidad de la enfer- en el suelo (A), incidencia (B) y severidad (C) del medad correspondieron a las parcelas en carbón del maní y rendimientos (D) según rotacio- monocultivo o con un año de rotación, y nes. Gral. Deheza, campaña agrícola 2009/10.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 299 al no sembrar su hospedante, y de efectos ción, se obtuvo una relación inversa eleva- indirectos al favorecer la acción supresiva da y altamente significativa, siendo mayor de los suelos a través de las poblaciones en el caso de utilizar la incidencia como de biocontroladores nativos y mejorar el estimador (Cuadro 2). Una incidencia de desarrollo general de los cultivos (3, 4, 5, solo 1% significa una pérdida estimada en 16, 19). En nuestra región manisera tam- 70 kg/ha, lo que nos señala el potencial de bién se ha comprobado que la implemen- daño de esta enfermedad al afectar direc- tación de estrategias basadas en rotacio- tamente al fruto, a diferencia de los otros nes y labranzas, contribuyen a disminuir la hongos del suelo en maní que afectan intensidad de enfermedades causadas por principalmente a la planta. hongos del suelo a través de estos efectos, Si bien los resultados de este trabajo son destacándose la inclusión del maíz como indicativos de la importancia de las ro- un factor determinante por el aporte de taciones como estrategia de manejo del materia orgánica que significaba su ras- carbón, la secuencia de los cultivos en la trojo (7, 14, 17, 18). rotación debe ser determinada cuidadosa- En este trabajo se comprobó una relación mente, ya que en algunos patosistemas se elevada para ensayos de campo y además puede favorecer la intensidad de algunas altamente significativa, entre la densidad enfermedades (8). Esta estrategia debe de inóculo de T. frezii y la intensidad del complementarse con otras herramientas carbón, estimada como incidencia o como de manejo, particularmente con la deter- severidad (Cuadro 2). La relación entre la minación de la carga fúngica de la semilla densidad de inóculo de un hongo del sue- para restringir la dispersión del inóculo lo causante de enfermedades en maní y la (12). intensidad de ésta, ha sido también esta- blecida en nuestra región productora para AGRADECIMIENTOS Y FINANCIAMIENTO marchitamiento y podredumbre parda de la raíz (7, 13). La disponibilidad de meto- Este trabajo ha sido posible a través de dologías de detección y cuantificación de fondos y/o logística aportados por INTA hongos patógenos del suelo, y su relación (Programa Nacional de Cultivos Industria- con la intensidad de la enfermedad y las les), UNRC (Programa SCyT), Fundación pérdidas ocasionadas, es una importante Maní Argentino y Oro Verde Servicios Fi- herramienta para el manejo pro-activo de tosanitarios. estas enfermedades, ya que posibilita la correcta elección del lote antes de la siem- BIBLIOGRAFÍA CITADA bra, y/o conocer los riesgos que se tienen según la densidad de inóculo (7, 8). 1. Abawi G.S., and Widmer T.L. 2000. Im- El rendimiento del cultivo varió entre pact of soil health management practices 1.300 y 4.200 kg/ha (Figura 1 D). Del aná- on soilborne pathogens, nematodes and lisis de regresión entre la intensidad del root diseases of vegetable crops. Applied Soil Ecology 15: 37-47. carbón (incidencia, severidad) y la produc-

Cuadro 2. Estimación de intensidad del carbón del maní (Tecaphora frezii) según densidad del inóculo en el suelo, y estimación de los rendimientos según intensidad de la enfermedad y densidad del inóculo.

300 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 2. Busso G., Civitaresi M., Geymonat A y 13. Oddino C., Zuza M., March G. y Marinelli Roig R. 2004. Situación socioeconómica A. 2005. Relación entre la incidencia de la de la producción de maní y derivados en podredumbre parda de la raíz del maní la región centro-sur de Córdoba. Ed. Uni- y la densidad de inóculo de Fusarium so- versidad Nacional de Río Cuarto. 163 pp. lani. In: Resúmenes XIII Congreso Latino- 3. Cook R.J. 2000. Advances in plant health americano de Fitopatología. Carlos Paz, management in the twentieth century. Córdoba, Argentina. p. 372. Annu. Rev. Phytopathol. 38: 95-116. 14. Oddino C.M., Marinelli A.D., Zuza M., and 4. Finckh M.R., and Wolfe M.S. 2006. Diver- March, G.J. 2008. Influence of crop rota- sification strategies. In: The Epidemiolo- tion and tillage on incidence of brown gy of Plant Diseases, 2nd edition (B.M. root rot of peanut caused by Fusarium Cooke, D. Gareth Jones y B. Kaye, eds.). solani in Argentina. Canadian Journal of Springer, The Neteherlands. pp. 269-307. Plant Pathology 30: 575-580. 5. Ghorbani R., Wilcockson S., Koocheki A., 15. Peters R.D., Sturz A.V., Carter M.R., and and Leifert C. 2008. Soil management for Sanderson J.B. 2003. Developing disease- sustainable crop disease control: a review. suppressive soils through crop rotation Environ. Chem. Lett. 6: 149-162. and tillage management practices. Soil & 6. March G.J. y Marinelli D.M. (eds.). 2005. Tillage Research 72: 181-192. Enfermedades del maní en Argentina. 16. Stone A.G., Scheuerell S.J., and Darby Bglia Impresores. 142 pp. H.M. 2004. Suppression of Soilborne Di- 7. March G.J., Vargas Gil S., Marinelli A., seases in Field Agricultural Systems: Or- Oddino C. y Zuza M. 2008. Enfermedades ganic Matter Management, Cover Crop- causadas por hongos del suelo en maní. ping, and Other Cultural Practices. In: Soil Estrategias de manejo. Idia XXI: 42-45. Organic Matter in Sustainable Agricultu- 8. March G.J., Oddino C.M. y Marinelli A.D. re (F. Magdoff y R.R. Weil, eds). CRC Press, 2010. Manejo de enfermedades de los Boca Raton, Florida, USA. pp. 131-177. cultivos según parámetros epidemiológi- 17. Vargas Gil S., Haro R., Oddino C., Kearney cos. Biglia Impresores, Córdoba. 193 pp. M., Zuza M., Marinelli A., and March G.J. 9. Marinelli A., March G.J. y Rago A. 1995. 2008a. Crop management practices in the El carbón del maní Thecaphora frezii so- control of peanut diseases caused by soil- bre Arachis hypogaea L. In: Resúmenes VII borne fungi. Crop Protection 27: 1-9. Congreso Argentino de Micología y XVII 18. Vargas Gil S., Pedelini R., Oddino C., Zuza Jornadas Argentinas de Micología. Rosa- M., Marinelli A., and March G.J. 2008b. rio, Argentina. p. 134. The role of potential biocontrol agents 10. Marinelli A.D. y March G.J. 2005. Carbón. in the management of peanut root rot in In: Enfermedades del Maní en Argentina Argentina. Journal of Plant Pathology 90: (G.J. March y A.D. Marinelli, eds.). Biglia 35-41. Impresores, Córdoba. pp. 88 y 89. 19. Vargas Gil S., and Vargas Gil J.R. 2011. 11. Marinelli A., March G.J. y Oddino C. 2008. Sustainable management of agricultural Aspectos biológicos y epidemiológicos systems: physical and biological aspects of del carbón del maní (Arachis hypogaea soil health. In: Encyclopedia of Environ- L.) causado por Thecaphora frezii Carran- mental Health (J.O. Nriagu, ed.), Elsevier. za & Lindquist. Agriscientia XXV(1): 1-5 pp. 297-301. 12. Marinelli A., March G., Oddino C., Gar- 20. Weller D.M., Raaijmakers J.M., McS- cía J., Rago, A. y Zuza M. 2010. El carbón padden Gardener B.B., and Thomashow del maní de 1997 a 2010. De enfermedad L.S. 2002. Microbial populations respon- emergente a enfermedad endémica y sible for specific soil suppressiveness to epidémica. In: Resúmenes XXV Jornada plant pathogens. Annu. Rev. Phytopathol. Nacional del Maní. Gral. Cabrera, sep- 40: 309-348. tiembre de 2010. pp. 28 y 30.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 301 Análisis de la calidad e inocuidad del maní de Córdoba: contribución a su denominación de origen

María José Martínez1, Mirtha Nassetta2, Alejandra Ricca3, Raúl Badini2, Mercedes Silva1, Roxana Aguilar1, Irene Cañas2, Dante Rojas3, Marcela Inga2, Gabriel Spahn2, Maria Vic- toria Poliotti2, Beatriz Ackerman4 y Nelson Rubén Grosso5 1- INTA EEA Manfredi, Lab. Calidad de Granos. 2- CEPROCOR- MinCyT, Lab. Plaguicidas y Lab. Espectroquímica. 3- INTA ITA Castelar, Lab. Contaminantes Químicos. 4- Cámara Argentina del Maní. 5- Cat. Quím. Biológica FCA-UNC. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN mentaria internacional exige alimentos de muy alta calidad y óptima condición sani- El maní es una economía regional neta- taria. Los estudios dedicados a calidad nu- mente cordobesa y exportadora. Argenti- tricional, inocuidad y manejo sustentable na se está consolidando como el mayor ex- del cultivo, realizados durante más de una portador mundial de maní confitería. Hoy década por INTA, la Universidad Nacional exporta 600.000 t anuales de maní y pro- de Córdoba y Ceprocor, sirvieron para que ductos de maní a 88 países, con un ingreso en 2007 la Legislatura Provincial impulsara de divisas de USD 800 millones. Nuestro el proyecto de ley que protege la Designa- país exporta exclusivamente manufactu- ción de Origen Maní de Córdoba. ras (maníes para confitería, pasta y man- La comercialización del maní y sus produc- teca, aceite, harinas y pellets de maní) con tos debe ser sustentada con aspectos cla- alto componente de valor agregado. En- ves de la composición química del grano tre los principales demandantes de maní que generen un balance entre la óptima de Argentina están los 27 EMs de la Unión conservación del producto, aportes nu- Europea, y otros mercados no menos im- tricionales y beneficios para la salud hu- portantes como Rusia, Argelia, Chile, Emi- mana, y un sabor apetecible. El grano de ratos Árabes, Israel, Pakistán y Canadá. Los maní contiene aproximadamente el 50% propios países productores de maní com- de su peso como aceite y, generalmente, pran maní argentino para sus nichos gour- las proporciones de ácidos oleico y linolei- met (China, India, EEUU, Australia, Méxi- co representan más del 80% de los ácidos co, Brasil, Turquía y Sudáfrica). Entre los grasos (2, 3, 6). La tasa de oxidación es un instrumentos de agregado de valor, juega factor importante que afecta la estabili- un rol primordial la indicación geográfica dad de conservación del maní (4) y el ácido cuyo sustento son los estudios desarrolla- oleico y linoleico cumplen un papel impor- dos por el INTA, Facultad de Ciencias Agro- tante en este aspecto. El ácido linoleico es pecuarias de la Universidad Nac. de Córdo- más susceptible a la oxidación que el ácido ba y el MINCyT-CBA-Ceprocor, quienes han oleico y por ello la relación oleico/linoleico venido caracterizando desde el período constituye un determinante de la calidad 2000/12 la composición nutricional, senso- del aceite de maní y, habitualmente, ha rial e inocuidad de este producto agroa- sido empleada para predecir la vida útil y limenticio. Los estudios desarrollados por la estabilidad del aceite (14) y condiciona las citadas instituciones demuestran que las cualidades nutricionales y de almace- la composición nutricional del maní cor- namiento del maní (13). En resumen, una dobés le confiere al producto calidad y va- mayor relación oleico/linoleico confiere lores nutricionales superlativos (5, 6, 8, 9, mayor estabilidad y vida útil al producto, 13, 14, 20). La legislación de seguridad ali- mientras que una menor relación oleico/li-

302 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 noleico contribuye a la oxidación de los lí- distinguir los elementos en esenciales y no pidos transmitiendo sabor desagradable a esenciales (Cuadro 1). los productos para consumo (5, 11, 15, 18). Los elementos minerales presentes a nive- Otra variable química importante sobre la les traza son componentes esenciales de vida útil del producto y directamente re- las estructuras biológicas humanas, pero lacionada a los ácidos grasos son los toco- al mismo tiempo pueden tornarse tóxicos feroles los cuales son considerados como en niveles superiores a los necesarios para antioxidantes naturales solubles en lípidos su función biológica. (19). Diversos estudios hacen referencia al En el presente trabajo se caracterizaron efecto protector de los tocoferoles contra la composición nutricional y sensorial del la oxidación de los lípidos y contribuyen maní argentino confitería listo para ex- a la vida útil, a la estabilidad oxidativa de portación de variedades runner común y granos almacenados. Cuatro tipos diferen- alto oleico, los elementos traza con la in- tes de tocoferoles son sintetizados en los clusión de lantánidos y se determinaron granos de maní maduros, alfa (α-), beta los residuos de plaguicidas y metales pe- (β-), gamma (γ-) y delta (δ-) los cuales di- sados presentes en el grano con el fin de fieren según su poder antioxidante (19, complementar el respaldo científico para 20). En relación a los atributos sensoriales, la Denominación de Origen. los carbohidratos en especial el contenido de sacarosa es determinante el gusto de MATERIALES Y MÉTODOS este producto agroalimenticio por lo que cobra importancia su análisis (6, 9). Muestreo Por otro lado es importante cuantificar en El estudio se realizó sobre 39 muestras de los agroalimentos de consumo humano di- maní tipo confitería de la cosecha 2010, recto, los elementos minerales por el fun- listos para exportación. Las muestras pro- damental aporte nutricional que hacen a vinieron de todas las plantas industriales la dieta diaria. Una manera de clasifica- de las empresas asociadas a la Cámara ción de los elementos químicos es la que Argentina del Maní. Las muestras fueron considera su importancia biológica para recolectadas discriminando entre los tipos el ser humano, de esta manera se pueden de maní runner común y alto oleico. Cuadro 1. Clasificación de elementos químicos según su rol biológico en el ser humano.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 303 Análisis químico lidad del método, se ensayaron las mues- La materia grasa se extrajo en caliente tras por duplicado. Para establecer la exac- utilizando un equipo de extracción Twis- titud del método se ensayó el material de selmann (según especificación de la Ame- referencia SRM 2387 Peanut Butter en los rican Oil Chemical Society (1), usando nutrientes principales y a fin de verificar la como disolvente n-hexano. El contenido confiabilidad analítica para otro grupo de de proteína se determinó por el método analitos no certificados se incluyó también Kjeldahl, utilizando el factor de conver- la medición del material NIST RM 8414 Bo- sión 6,25 (1). El porcentaje de acidez fue vine Muscle Powder, con digestión asistida determinado según AOCS (1). Los Ésteres por microondas. Para las mediciones de K, Metílicos de los Ácidos Grasos así como Ca, Mg, Cu, Zn y Fe se recurrió a la espec- también los contenidos de oleico/inoleico trometría de absorción atómica (FAAS). (O/L), índice de Yodo fueron preparados Otros 44 elementos se analizaron por es- según AOCS (1) y analizados en un Croma- pectrometría de plasma de acoplamiento tógrafo Gaseoso marca Hewlett Packard inductivo con detección por espectrome- 6890 equipado con un detector de ioni- tría de masas (ICP-MS). Se operó a 1350 zación de llama y utilizando una columna W de potencia de plasma, con conos para capilar marca HP-INNOWax (Crosslinked aplicaciones ambientales en dos condicio- Polyethylene Glycol), de 0,32 mm x 30 m nes, a) modo convencional para los ele- de largo y 0,5 mm de espesor del film. Por mentos Li, Be, Al, B, Y, Ag, Cs, Th, Hg, Tl, otra parte los tocoferoles totales así como Bi, U y lantánidos, y b) celda de colisión/ también la vitamina E fueron determina- reacción (CCT) gas He/ 7% H2 para: P, Mg, dos midiendo la concentración de α, β, γ, Ca, Cr, Mn, Fe, Co, Ni, Cu, Zn, Ga, As, Se, Sr, y d tocoferoles por cromatografía líquida Rb, Mo, Cd, Ba y Pb. Asimismo se realiza- de alta resolución (HPLC). Los tocoferoles ron algunas comparaciones entre las dos fueron detectados por absorbancia a 292 técnicas para algunos elementos de una nm después de haber sido separados por selección de muestras (n = 16). una columna tipo Zorbax RX-SiL de 4,6x Las determinaciones de residuos de pla- 250 mm con una fase móvil de 2-propanol guicidas se realizaron siguiendo la meto- en hexano HPLC (99,5 / 0,5% v/v). dología descripta por Nassetta et al. (12) Las azúcares fructuosa, glucosa y sacaro- y Ricca et al. (17). Los equipos utilizados sa (SGF) fueron determinadas siguiendo el fueron CG Perkin Elmer Autosystem XL método descripto por Matissek et al. (10) (ECD- 63N) CG Shimadzu GC 14 B (FPD) CG y analizados por HPLC, utilizando un equi- Shimadzu GC 17 A (detector de masa) y po Agilent Serie 1100 equipado con un GC-MS Perkin Elmer (Clarus 600-MS) qua- inyector automático standard marca Agi- drupolar, en modo SCAN (EI+) y HPLC- tan- lent Serie1100. Los GSF fueron separadas dem mass spectrometry with quadruple/ en una columna Supelco NH2 a 25 cm x linear ion trap instrument. 4,6 mm a una temperatura controlada de 25ºC. El sistema de solvente fue acetonitri- Análisis sensorial lo/agua (75:25 v/v) a un flujo isocrático de Se realizó un análisis descriptivo para ob- 1,5 ml/min. El detector usado fue un RID tener el perfil sensorial del maní tostado (refractive index detector). (runner común y alto oleico) describien- Para la determinación de elementos mine- do cuali y cuantitativamente los atributos rales tales como macronutrientes, elemen- sensoriales que los caracterizan utilizando tos traza con la inclusión de lantánidos y la metodología descripta por Grosso et al tóxicos se desarrolló el método en diges- (4). Las muestras de maní se tostaron a una tión seca con resuspensión de cenizas en temperatura de 170ºC durante 30 min, las ácido nítrico según Inga et al. (7) y Poliotti mismas fueron evaluadas por un panel et al. (16). A fin de determinar la variabi- constituido por nueve jueces previamente

304 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 entrenados y calibrados (4, 5). A los resul- buye de forma significativa a las necesida- tados de las evaluaciones se le asignaron des de ingesta diaria recomendada según valores de intensidades para cada atributo MERCOSUR Res. 46/03. Además contiene en una escala de 0-150 puntos. otros nutrientes importantes para mante- ner un buen estado nutricional y de im- RESULTADOS portancia nutracéutica, tales como ácidos grasos omega 6 y 9, vitamina E, acido fó- En los cuadros 2, 3 y 4, se muestran los va- lico, beta-sitoesterol, antioxidantes como lores medios y demás estadísticos descripti- taxifolina, quercetina, luteolina y resvera- vos de las variables químicas de importan- trol y los elementos minerales escenciales cia nutricional en las muestras de granos y trazas. Los resultados obtenidos para los de maní confitería correspondientes a la macronutrientes se visualizan en el cuadro cosecha 2010. En este análisis se puede ob- 4. Los valores observados para los mate- servar que el maní se caracteriza por un riales SRM Peanut Butter 2387 y RM 8414 alto contenido de materia grasa y proteí- Bovine Muscle Powder fueron aceptables. nas. Los valores de acidez se encuentran Los valores hallados para Li, B, Ba, Ni, Al, por debajo del límite máximo aceptado. Sr y Rb fueron > 1 mg/kg (Cuadro 5). Los Estos resultados indican que la composi- resultados para elementos tóxicos, As, Pb ción nutricional del maní argentino contri- y Cd, fueron inferiores o cercanos al límite de cuantificación (50 ng/g) mientras que Cuadro 2. Variables químicas de importancia nu- para Tl y Hg no superaron los 10 ng/g o tricional determinadas en el maní producido en la fueron No detectables. Para otros elemen- región manisera de Córdoba en la cosecha 2010. tos no esenciales los resultados fueron inferiores al límite de detección (10 ng/g) como es el caso del Be, Ag, Te, Cs, Tm, Yb, Lu, Tl, Bi, Th y U. La metodología desarro- llada fue adecuada para la medición de maní crudo y el material de referencia lo que genera un antecedente en relación a los elementos propuestos. El maní run- ner argentino contiene bajos valores de elementos tóxicos, en concordancia con estudios anteriores. La relación entre la composición elemental de maní a niveles traza, como por ejemplo de lantánidos y la concentración correspondiente en el suelo y agua de riego podría proveer informa- ción relacionada a la denominación de ori- gen alimentaria. En la figura 1 se muestra el perfil sensorial de las muestras de maní analizadas en este trabajo, no presentando diferencia en el perfil sensorial entre el maní runner y maní alto oleico, el cual se caracteriza por un fuerte sabor a maní tostado, una suave reminiscencia dulce dado gracias al impor- tante contenido en sacarosa característi- * Estadísticos descriptivos: media, desviación estándar y valores mínimos y máximos. x Tocoferoles en ppm en acei- co del maní producido en Córdoba (6, 9). te de maní. yAzucares en harina desgrasada de maní. Su alto contenido de calcio le otorga una z Taxifolina, Luteolina, Quercetina en %. moderada dureza (9), que resulta agra-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 305 Cuadro 3. Perfil de ácidos grasos de maní confitería alto oleico y runner común de la región manisera de Córdoba en la cosecha 2010.

C16:0, ac. Palmítico; C18:0, ac. Esteárico; C18:1, ac. Oléico; C18:2, ac. Linoléico; C18:3, ac. Alfa-Linolénico; C20:0, ac. Araquídico; C20:1, ac. Eicosenoico; C22:0, ac. Behénico, C22:1, ac.Erúcico y C24:0, ac. Lignocérico. O/L,: Relación oléico/linoléico; IY: índice de yodo.

Cuadro 4. Elementos esenciales medidos por FAAS y ICP-MS (mg/kg).

* K: Potasio; Ca: Calcio; Mg: Magnesio; Cu: Cobre; Zn: Zinc; Fe: Hierro; P: Fósforo.

dable al paladar y le confiere una textura particularmente crocante. Su coloración marrón clara se destaca por su uniformi- dad, en tratamientos mediante procesos de calor, dicha coloración se realza con un tenue brillo dorado, muy agradable a la vista. Por otro lado los plaguicidas analizados en la identificación de residuos fueron alfa- endosulfan, beta-endosulfan, fludioxi- nil, metalaxil-M, diclorvos, l-cialotrina, deltametrina, acetoclor, cyproconazole, pycoxistrobin, dimethoate, clorpyrifos, cyflutrina, lambdacialotrina, cipermetri- Figura 1. Atributos sensoriales del maní confitería na, 2,4-D, 2,4-DB, clethodim, diclosulam, de la región manisera de Córdoba de la cosecha 2010. imazapic, haloxyfop-R-methyl, imazetha- pyr, S-metolacloro, fomesafen, sulfentra- zone, glifosato, azoxistrobin, pyraclostro-

306 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Cuadro 5. Elementos traza medidos por espectrometría de masas (ICP-MS) (mg/kg).

Estadís. Li*B Al Cr Mn Co Ni Ga Se Promedio 9,4893 14,858 16,999 0,192 18,9843 0,0385 1,557 0,0061 0,0266 DE 9,4676 3,754 9,823 0,212 3,4918 0,0108 0,4910 0,0035 0,0202 CV (%) 99,8 25,3 57,8 110,2 18,4 28,0 31,5 57,1 76,1 Min 1,376 3,015 3,934 0,004 13,4090 0,0192 0,610 0,0011 0,0041 Max 42,034 22,895 53,035 0,911 31,1555 0,0803 2,779 0,0209 0,1421 Rb Sr YMo Cd Ba Ce Pr Nd Promedio 4,154 6,082 0,0053 3,720 0,0490 5,4542 0,0203 0,0019 0,0069 DE 0,805 2,066 0,0034 1,380 0,0430 1,7818 0,0112 0,0011 0,0042 CV (%) 19,4 34,0 65,0 37,1 87,7 32,7 55,3 57,1 60,5 Min 2,517 3,389 0,0009 1,357 0,021 1,831 0,0022 0,0006 0,0013 Max 6,250 14,485 0,0160 6,882 0,315 10,635 0,0569 0,0057 0,0217 Sm Eu Gd Tb Dy Ho Er Pb Promedio 0,0015 0,0009 0,0015 0,00019 0,0011 0,00018 0,00047 0,0349 DE 0,0009 0,0004 0,0009 0,0001 0,0006 0,00013 0,00034 0,0397 CV (%) 58,0 44,7 60,8 60,5 59,1 70,3 74,0 113,9 Min 0,0004 0,0003 0,0003 0,00003 0,0002 0,00001 0,00000 0,0005 Max 0,0048 0,0029 0,0053 0,00053 0,0031 0,00061 0,00149 0,2762 * Litio; B: Boro; AI: Aluminio; Cr: Cromo; Mn: Manganeso; Co: Cobalto; Ni: Níquel; Ga: Galio; Se: Selenio; Rb: Rubidio; Sr: Estroncio; Y: Itrio; Mo: Molibdeno, Cd: Cadmio; Ba: Bario; Ce: Cerio; Pr: Praseodimio; Nd: Neodímio; Sm: Samário; Eu: Európio; Gd: Gadolínio; Tb: térbio; Dy: Disprósio; Ho: Holmio; Er: Erbio; Pb: Plomo bin, epoxiconazole. Cabe aclarar que en la de la calidad del Maní Argentino, por lo producción argentina no se utiliza endo- cual se trata de un aporte sustancial para sulfan-, pero es utilizado en algunos cul- la denominación de origen y sostener en tivos antecesores por lo que se incluye en el tiempo su valor comercial en el mer- este estudio por el riesgo que se detecten cado internacional, favoreciendo de esta residuos a causa de algún efecto residual manera el ingreso de divisas y alentando en suelos. Los resultados indicaron ausen- al desarrollo agro-industrial en la región cia total (No Detectado) de residuos en manisera Argentina. las muestras de maní analizadas teniendo en cuenta los límites máximos permitidos AGRADECIMIENTOS Y FINANCIAMIENTO según Resol. 934/2010 de SENASA, Codex ALINORM PR 05/28/24, CAC/GL PR 40-1993, Cabe destacar un especial agradecimiento Rev.1-2003 y UNION EUROPEA: Dir. 91/414/ al Ing. Agr. Guillermo Olivera Coordinador EEC; Reg. (EC)149/2008, Reg.(EC)839/2008, de la FMA y Patricia Fabro (técnica del La- Reg (EC)459/2010, Reg (EC)750/2010, Reg boratorio Calidad de Granos del INTA EEA (EC)765/2010 y Reg (EC)893/2010. Manfredi). Analizando los resultados encontrados en Este trabajo fue realizado con fondos este trabajo en comparación con los des- aportados por subsidios del INTA a través criptos con anterioridad (5, 6, 8, 9, 13, 14), los Proyectos PNIND 083611 y el Convenio resultan muy similares y se complementan de vinculación Tecnológica con la Funda- a estos valores hallados en cuanto a los ción Maní Argentino Nº 20562. componentes nutricionales y los niveles de residuos tóxicos siempre por debajo del lí- BIBLIOGRAFÍA CITADA mite máximo. De este modo los resultados alcanzados en este trabajo, contribuyen a 1. AOCS. 1998. Official methods and re- una más amplia y exacta caracterización commended practices of the American

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 307 oil chemist’s society, 5th,ed. American oil tación. In: Cultivos Industriales Avances chemist society, Champaign, IL. 2006/09 (J.A. Mariotti, ed.). Ediciones 2. Casini C., Dardanelli J., Martínez M.J., INTA. pp. 28-32. Balzarini M., Borgogno C., and Nassetta 10. Matissek R., Schnepel F. M., and Steiner G. M. 2003. Oil Quality and Sugar Content 1992. Análisis de los Alimentos. In: Funda- of Peanuts (Arachis hypogaea) Grown in mentos, Métodos y Aplicaciones, 2da Edi- Argentina: Their relationship with Clima- ción. Editorial ACRIBIA, S.A., 7 Zaragoza, tic Variables and Seed yield. J. Agric. Food España. 416 pp. Chem. 51: 6309-6313. 11. Mestrallet M.G., Nepote V., Quiroga P. 3. Casini C., Martínez M.J., Silva M., Mans- R., and Grosso N.R. 2009. Journal effect sur M., Lamarque A., Nassetta M., Cañas of prickly pear (Opuntia ficus-indica) and I., Ferrayoli C., Badini R., Spahn G., Torres algarrobo (Prosopis spp.) pod syrups coa- A., Barros G., Chulze S., Gastaldi L., Silva tings on the sensory and chemical stabili- C., Avalis D. y Balzarini M. 2005. Caracte- ty in roasted peanut products. Food Qua- rización de la calidad del maní argentino: lity 32: 334-351. Hacia su denominación de origen. Aceites 12. Nassetta M.M., Cañas A.I., Córpora R., & Grasas 59 (2) XV: 330-337. Reartes N., Ackermann B., and Martinez 4. Grosso N.R., and Resurreccion A.V.A. M.J. 2011. Studies of pesticide residues in 2002. Predicting consumer acceptance peanuts from Córdoba, Argentina. 2011. ratings of cracker-coated and roasted In: 3º Workshop Latinoamericano sobre peanuts from descriptive analysis and Residuos de Pesticidas Alimentos y Me- hexanal measurements. Journal of Food dio Ambiente. 8, 9 y 10 de Mayo de 2011. Science 67(4): 1530-1537. Montevideo, Uruguay. 5. Grosso N.R., Resurreccion A.V.A., Walker 13. Nepote V., Mestrallet M.G., and Grosso G.M., and Manjeet J. Chinnan. 2008. Sen- N.R. 2006. Oxidative stability in fried-sal- sory profiles and hexanal content of crac- ted peanuts elaborated with high-oleic ker-coated and roasted peanuts stored and regular peanuts from Argentina. In- under different temperatures. Journal of ternational Journal of Food Science and Food Processing and Preservation 32(1): Technology 41: 900-909. 1-23. 14. Nepote V., Olmedo R.H., Mestrallet M.G., 6. Haro R., Dardanelli J., and Martínez M.J. and Grosso N.R. 2009. A study of the re- 2012. Effects of soil temperature on oleic/ lationships among consumer acceptance, linoleic ratio, tocopherol and sugar con- oxidation chemical indicators and sen- centrations in peanut (Arachis hypogaea sory attributes in high-oleic and normal L.) seed. Crop & Pasture Science (en pren- peanuts. Journal of Food Science 74(1): sa). 1-8. 7. Inga C.M., Poliotti M.V., Spahn J.G., Ba- 15. Olmedo R.H., Nepote V., and Grosso N.R. dini R.G., Martinez M.J., Silva M.P., and 2012. Sensory and chemical stability in Aguilar R.C. 2010. Non esencial element coated peanuts with addition of essential maximum levels in runner and high oleic oils and synthetic antioxidants. Grasas y raw peanuts of Córdoba-Argentina by Aceites-International Journal of Fats and ICPMS”. Eleventh Rio Symposium on Ato- Oil 63(1): 5-12. mic Spectrometry. Octubre de 2010. Mar 16. Poliotti C.M., Inga J.G., Spahn R.G., Badini del Plata, Argentina. R., Martinez M.J., Aguilar R.C., and Silva 8. Martinez M.J. 2010. Maní de Córdoba/ M.P. 2010. Nutricional mineral contents Cordoba Peanuts: Denominación de ori- in runner and high oleic raw peanuts of gen certificada.In : Libro de Actas de INTA Córdoba-Argentina by atomic spectros- Expone sus aportes al país. 1º de julio copy techniques. In: Eleventh Rio Sympo- 2010, Centro de Convenciones de la UCA. sium on Atomic Spectrometry. Octubre de Puerto Madero, Ciudad de Buenos Aires, 2010. Mar del Plata, Argentina. Argentina. pp. 76-77. 17. Ricca A., Rojas D., Sancho A., Martinez 9. Martinez M.J., Silva M.C., Casini C., Agui- M.J., Santajuliana M., Casini C., Strada J., lar R., Spahn J.G., Inga C.M. y Badini R.G. Piatti F. y Silva M. 2011. QuEChERS me- 2010. Calidad del grano de maní produ- thodology for analyzing pesticide resi- cido en Córdoba destinado a la expor- dues in wheat. In: Book of abstracts LA-

308 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 PRW 2011; 3º Workshop Latinoamericano D. 2002. The role of 2-methyl-6-phytybe- sobre Residuos de Pesticidas Alimentos y bziquinone methyltrenferase in determi- Medio Ambiente. 8, 9 y 10 de Mayo de ning tocopherol composition in Synecho- 2011. Montevideo, Uruguay. p. 146. cystis sp. Fed Eur Biochem Soc Lett 511: 18. Riveros C.G., Mestrallert M.G., Gayol M.F., 1-5. Quiroga P.R., Nepote V., and Grosso N.R. 20. Silva M.P., Martinez M.J., Casini C., and 2010. Effect of storage on chemical and Grosso N.R. 2010. Tocopherol content, sensory profiles of peanut pastes prepa- peroxide value and sensory attributes in red with high-oleic and normal peanuts. roasted peanuts during storage. Interna- Journal of the Science of Food and Agri- tional Journal of Food Science and Tech- culture 90: 2694-2699. nology 45: 1499-1504. 19. Shintani D.K., Cheng Z., and DellaPenna

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 309 ECONOMÍA y PROYECTOS DE DESARROLLO Análisis del consumo de maní comestible en la ciudad de Córdoba

Noelia Barberis y Rodolfo Bongiovanni INTA EEA Manfredi, Córdoba. Correo-e: [email protected]

INTRODUCCIÓN campañas promocionales implementadas por las empresas que venden productos de El mercado de maní en Argentina se ca- maní explican parte del bajo consumo. En racteriza por estar destinado en su mayor base a lo anterior la hipótesis es que el ma- parte a la exportación, alrededor del 90% yor desarrollo del mercado interno de maní del total producido se comercia interna- se puede lograr con adecuadas estrategias cionalmente, principalmente a Europa, de marketing, que promuevan el consumo donde goza de una muy buena posición y la información acerca del producto. respecto a sus competidores (1). Los datos Es así que se plantea como el objetivo ge- de comercio exterior y producción nacio- neral de este trabajo identificar los facto- nal permiten inferir que en Argentina el res internos y externos del bajo desarrollo consumo de maní es muy bajo, sólo se con- del mercado del maní en la Argentina, a sume internamente entre el 5 y el 10% del través de: total producido (2, 3). El hecho de que la 1. Caracterización de las estrategias co- mayor parte del maní se exporte, convierte merciales de las principales marcas que al sector muy vulnerable a las condiciones venden maní comestible en la ciudad internacionales y hace que su rentabilidad de Córdoba. esté determinada en gran parte por facto- 2. Determinación de las principales causas res externos al productor, como la oferta y por las cuales el consumo de maní es la demanda mundial. bajo es relación con otros países. La figura 1 muestra la estructura de la ca- En la discusión se proponen acciones es- dena del maní, los tipos de producto y los tratégicas y comerciales que permitan mercados destino. En Argentina, el maní desarrollar el mercado de maní, no como sólo se consume como snack y en la indus- una estrategia para reemplazar las ventas tria de golosinas. La manteca y el aceite de al exterior, sino como una alternativa para maní se destinan al exterior, mientras que atenuar el efecto que condiciones adver- la harina se exporta un 60% y el resto se sas externas pueden tener en la industria usa como ingrediente en alimentos. nacional. No hay investigaciones específicas sobre La industria manisera cordobesa elabora las causas del bajo consumo interno de las siguientes manufacturas: maní confite- maní en Argentina, pero se pueden inferir ría entero; maní confitería partido; maní como principales, los hábitos y costumbres blancheado; maníes preparados y/o sabo- de la población, donde el maní no está in- rizados; pasta de maní, manteca de maní, corporado en la rutina alimentaria. Otra grana de maní, aceite de maní, harina y causa puede estar relacionada con una pellets (Figura 1). Los porcentajes de la idea errónea de que el producto es per- producción que se dedican a cada produc- judicial para la salud, en general, la gente to dependen del volumen, calidad, y sani- asocia el consumo de maní con un produc- dad de la cosecha; en años buenos, la ma- to menos sano de lo que en realidad es. yoría se dedica a consumo directo, en años Por otro lado, el tercer motivo se busca malos, se destina un porcentaje mayor a del lado de la oferta, donde la ausencia de la elaboración de aceites, harinas y pellets.

310 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012

6 6

Fuente: 3,5,6,7 Fuente:

Figura la 1. Estructuracadena del maní de

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 311 MATERIALES Y MÉTODOS Demanda de maní Oferta de maní Durante el mes de agosto de 2010 se efec- El estudio de la oferta manisera, se efectuó tuaron, en 35 barrios de la ciudad de Cór- por medio de un análisis descriptivo de las doba, 410 encuestas a consumidores de políticas comerciales llevadas a cabo por maní. las principales firmas a partir del releva- Los barrios relevados fueron los siguien- miento de las acciones emprendidas en di- tes: versos puntos de venta. La caracterización de estas políticas comerciales se efectuó a través de las cuatro “P” del marketing: Pro- ducto, Precio, Plaza y Promoción (4). 1 Juniors La fuente de información consistió en un 2 Parque República relevamiento en supermercados, hipermer- 3 Residencial V. Sarsfield cados, autoservicios, kioscos y estaciones de 4 Nueva Córdoba 5 Las Violetas servicios situados en diferentes barrios de 6 Villa del Libertador la ciudad de Córdoba en el mes de mayo 7 Cáceres de 2010. Se obtuvo información sobre los 8 El Solar productos de maní dentro del comercio en 9 Santa Isabel relación con variedades, precio, promocio- 10 Villa Cabrera nes, presentaciones, envases, disposición 11 San Ignacio dentro del comercio, ubicaciones especia- 12 Altos del Chateu les, marca. Se relevaron un total de 29 co- 13 San Martín Anexo mercios, ocho supermercados, cinco hiper- 14 Cerro de las Rosas mercados, dos autoservicios, diez kioscos 15 Granja de Funes 16 20 de Junio y cuatro estaciones de servicio. Además, 17 Centro durante la tercera semana de diciembre 18 Brig. San Martín Sud de 2010 se efectuó un relevamiento en 19 Paso de los Andes tres hipermercados y en tres supermerca- 20 Observatorio dos con el objetivo de observar las mismas 21 Mercantil variables pero en vísperas de las fiestas na- 22 Ayacucho videñas y de fin de año. 23 Chacras de la Merced La selección de variedades de productos a 24 Alberdi analizar se efectuó en base a una observa- 25 Parque Montecristo ción previa de los puntos de venta donde 26 El Quebrachal 27 Los Eucaliptus se identificaron tres variedades del pro- 28 Ampliación Pueyrredón ducto maní a la venta: en vaina, en grano 29 SEP y con chocolate. La figura 1 muestra que 30 Independencia existen otras variedades, pero debido a 31 Parque San Vicente que su presencia en los comercios casi nula 32 Santa Rita o escasa no se las incorporó como una ca- 33 Villa Ábalos tegoría en sí, sino se dejó una cuarta varia- 34 San Vicente ble para estos productos, donde el requi- 35 California sito fuera un contenido en su composición de más del 50% de maní. El sistema de muestreo efectuado fue con- La información obtenida se procesó con glomerado por área previa estratificación un software estadístico SPSS (2003) (Statis- de los radios censales por NSE (niveles tical Package for the Social Sciences) ver- socioeconómicos) en función de paráme- sión 12.0 efectuando análisis descriptivos tros censales principalmente necesidades univariados y bivariados. básicas insatisfechas. Se seleccionaron los

312 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 radios censales de cada estrato de NSE; cuestas a los consumidores de maní, en el de los radios se seleccionó una manzana, cuadro 2 se presenta un cálculo estimado donde se debía efectuar la encuesta cada de la penetración de las principales mar- tres casas, dando la vuelta a la manzana cas de maní y un cálculo de las cantidades en sentido horario, y cumpliendo la cuota vendidas. La segunda columna representa de sexo y edad. El reemplazo estuvo esti- el total de individuos del departamento pulado en cruz. Córdoba Capital, 1.330.023, según el Cen- Se optó por exigir un error máximo de so Provincial 2010. El porcentaje de pene- 4,94% para proporciones desconocidas. tración (tercera columna) se estima como Para el cálculo de la muestra se aplicó la el cociente entre el total de individuos que fórmula de muestreo aleatorio para po- compraron maní en el último mes y el nú- blaciones infinitas: mero total de encuestas. A partir de ese dato, y con las respuestas de compras por paquete se estimaron las compras prome- dio de paquetes de 100/200 gramos (cuar- ta columna) para cada marca. Finalmente, donde, n = tamaño de la muestra; Z = des- para obtener la cantidad total vendida se viación de la distribución normal (2), para efectuó la multiplicación entre el total de un nivel de confianza del 95,5%; e = error la población (n=1.330.023 habitantes en la muestral, 4,94%; P = proporción de con- ciudad de Córdoba), el porcentaje de pe- sumidores que consumen maní, 0,5 y Q = netración y las compras promedio. proporción de consumidores que no con- sumen maní, 0,5. RESULTADOS Por tanto queda: Oferta de maní 1) Producto. En el relevamiento en super- mercados, hipermercados y autoservicios se observó que la oferta estaba compuesta Es decir que 410 es el número mínimo por dieciséis marcas y trece fabricantes. Las admisible de encuestas a realizar, con un marcas líderes en cuanto a presencia de error muestral inferior al 4,94%. productos fueron Croppers y Pehuamar; El cuestionario constó de cuatro partes, la la primera fue responsable de un 43,4% primera donde se identifica el encuesta- de los registros y la segunda del 16,9%, le dor, la segunda en la que se caracterizó al siguen en orden de importancia Krachitos encuestado, la tercera fue respecto a po- y Craket, entre otras. sicionamiento e imagen de las marcas de El producto de maní con mayor presencia maní y finalmente la cuarta, y más amplia, fue el maní en grano, con un 78,3%; den- estuvo destinada específicamente al con- tro de esta categoría se encontraron dis- sumo de maní. tintas variedades de productos: salado sin Para analizar la información obtenida se piel 30,2%; salado con piel 22,2%; sin sal y usó el mismo software estadístico SPSS ya sin piel 6,9% y la variedad mix 19,6%, que mencionado. son paquetes que incluyen, además, otros Se efectuó un análisis univariado de esta- productos, como pasas de uva, castañas de dística descriptiva, que implica represen- cajú, almendras, entre otros. La siguiente tar característica por característica, los da- categoría en orden de importancia fue el tos aisladamente. Este es el análisis básico, maní con chocolate donde los registros in- donde se miden una a una las propiedades dicaron un 11,6%, maní en vaina sólo re- que se buscan estudiar. presentó un 4,8%. En la última categoría Finalmente, a partir de los datos de las en- de análisis el único producto que se en- contró fue la manteca de maní, con 4,8%

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 313 de los registros. Cuadro 1. Registros (%) por marcas de maní en la En relación a los comercios relevados, en ciudad de Córdoba. kioscos y estaciones de servicios, sólo se Marca % encontraron tres variedades de producto: maní en grano (34%), maní con chocola- 1 Croppers 43,4 te (50%) y una categoría que no se había 2. Pehuamar 16,9 observado en los supermercados, maníes 3. Krachitos 7,4 saborizados (16%). 4. Cracket 6,3 5. M&M 5,3 2) Precio. En esta variable se observó un 6. Rocklets 3,7 amplio rango que va desde los 14 $/kg a 7. Dame Maní 2,6 los 125 $/kg (mayo 2010). Los distintos pre- 8. Arcor 2,1 cios están relacionados básicamente con 9. Leader Price 2,1 las diferentes variedades de productos, y 10. Le Cultive 2,1 con los gramajes ofrecidos por paquetes, 11. Great Value 1,6 aunque también se observaron pequeñas 12. Sytari 1,6 diferencias entre los mismos productos en 13. El Salvador 1,1 distintas cadenas. Nuevamente, un dato que merece especial mención es del Cro- 14. Maní Salteño 1,1 ppers, donde las variedades de productos 15. Shot 1,1 mix presentan un elevado precio y calidad 16. Speedy 1,1 distinguida que posicionan al producto dentro de la categoría Premium. 4) Promociones. Se observó que las cade- En los kioscos y estaciones de servicios se nas no incitan a la compra, ni apoyan las observaron variaciones más notorias en acciones de las marcas con promociones los precios de un mismo producto entre ni con publicidad, solamente lo hacen a distintos comercios. En el caso de Arcor, través de la variable precio y la exhibi- por ejemplo, el maní con chocolate en en- ción. vases de 40 gramos se encontró tanto a Finalmente, con el consumo estacional de $2, como a $2,50. Pehuamar muestra aún fines de diciembre, se observa una impor- un rango más variable de precios que va tante presencia de productos con maní en desde los $2 a los $4, el paquete de 100 los supermercados, con una fuerte cam- gramos de maní en grano pelado. paña de marketing que abarca ubicacio- nes especiales, amplia oferta de produc- 3) Plaza o distribución. Las marcas que ma- tos e innovación en envases. Asimismo, yor presencia tienen son Pehuamar y Cro- se posicionan como líderes nuevas marcas ppers, la primera de las marcas abarca un de esta categoría de productos: Arcor y amplio ramo de comercios, exhibiendo sus Georgalos. productos tanto en grandes cadenas de su- permercados, como en los más pequeños, Demanda de maní llegando hasta autoservicios y kioscos. Por La información obtenida del relevamien- otro lado, Croppers, muestra una presencia to permite afirmar que hay tres marcas fuerte en grandes cadenas como Wal Mart, líderes que son recordadas espontánea- pero no logra tener un alcance a toda la mente por los consumidores: Pehuamar, población ya que sus productos no se co- Croppers y Krachitos en lo que respecta mercializan en comercios más pequeños. a maní salado. Por otro lado, en la ca- En el cuadro 1 se pueden observar los por- tegoría de maní con chocolate la marca centajes de registros (cada registro repre- más reconocida fue Arcor, tanto en su senta a cada producto encontrado en cada etiqueta de Rocklets, como en la que lle- sucursal de las cadenas) por marcas. va la misma marca. También aparecen en

314 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 lugares secundarios Shot y M&M. Final- mente en el supermercado (47,8%), en mente, la última categoría de producto los kioscos (44,4%) y le siguen los alma- considerada fue la manteca de maní, las cenes (37,3%) e hipermercados (31,2%). respuestas espontáneas demostraron el Al indagar en los hábitos de consumo, se escaso conocimiento de este producto en encontró que la mayoría de las personas el mercado argentino, sólo el 1,5% de los consume maní en su hogar (87,6%), y un casos nombraron marcas que comerciali- porcentaje muy elevado también lo con- zan manteca de maní. Asimismo, el posi- sume en lugares públicos como bares, res- cionamiento de las marcas por medio del taurants, boliches, entre otros (42,35%). reconocimiento coincide con la preferen- En este sentido, es importante hacer cia de compra por cada una de ellas; Pe- mención que en muchos de estos sitios se huamar tiene el liderazgo con el 66,10%, ofrece gratuitamente el maní para acom- Croppers (30,98%) y Krachitos (18,5%), pañar una bebida, uno de los hábitos más para maní en grano. En el caso de maní fuertemente arraigados en el consumo de con chocolate, la marca más reconocida maní en nuestro país. Más del 60% de los fue Arcor, y es la que tiene el liderazgo encuestados señaló que había consumido en cuanto a cantidades efectivamente el maní con cerveza, luego en porcentaje compradas, un 51,22% para Rocklets y un menores se observa consumo de maní con 47,56% para los paquetes con la marca picadas (53,7%) o solo (52,4%). Arcor. Referido al gasto, la información extraída En lo referido al consumo del producto de la encuesta muestra que alrededor del un 77,32% de los encuestados respon- 86% de las personas gastó menos de $20 dió que sí había consumido productos de (agosto 2010) en productos de maní, tan maní en el último mes, mientras que el sólo un 13,17% gastó entre $20 y $40 y 22,68% dijo que no. En relación con las al incrementar los montos los porcentajes razones por las cuales se lo consumió las disminuyen paulatinamente. principales fueron por su rico sabor, para Con los datos de las encuestas, en el cua- acompañar bebidas, principalmente cer- dro 2 se presenta el cálculo estimado de la veza, o para acompañar picadas. penetración de las principales marcas de La variedad de maní más consumida es el maní y un cálculo de las cantidades ven- maní snack (86,1%), le sigue en orden de didas, en éste se observa el liderazgo de importancia el maní con chocolate (72%), Pehuamar en cuanto a ventas estimadas, luego el maní saborizado (42%) y el maní ocupando las posiciones siguientes Cro- en vaina (32%). En relación con hábitos ppers, Krachitos, Great Value y Craket. de compra, la gente compra maní mayor-

Cuadro 2. Penetración de las principales marcas de maní y estimación de cantidades vendidas por año en la ciudad de Córdoba. Penetracióny Compra promedio Cantidad total Marca IndividuosX (%) (paquetes 100/200 g vendida estimadaV por persona) (paquetes marca) Pehuamar 1.330.023 66 1,930 1.696.590 Croppers 1.330.023 31 1,921 791.526 Krachitos 1.330.023 18 1,660 397.385 Great Value 1.330.023 8 1,910 197.881 Craket 1.330.023 6 1,430 107.051

X Según Censo Provincial 2010. y Total de individuos que compraron maní/Total de encuestas. V Individuos x Penetración x Compras promedio.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 315 DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES de bebidas. Para llevar a cabo un análisis completo La investigación planteó como hipótesis respecto a la posibilidad del desarrollo que el desarrollo del mercado interno de de mercado de maní, sería necesario am- maní se puede lograr por medio de una pliar la investigación efectuando un aná- implementación adecuada de estrategias lisis comparativo de costos y beneficios de marketing, en base a ello se efectuó del desarrollo del mercado. Además, se una caracterización de la oferta y de la de- requiere la consulta al sector empresario manda, como punto de partida de un plan indagando sobre qué motivos consideran de marketing. En base a este sondeo pre- como causa del bajo consumo interno y liminar, el análisis conjunto de la informa- las razones por las que no se observa des- ción permitió elaborar una serie de estra- de el sector interés en promover el con- tegias tendientes a fomentar el consumo sumo. También sería necesario ampliar la de maní en el mercado interno. investigación a otras provincias del terri- 1) Producto. Difundir masivamente los es- torio argentino, para tener un panorama tudios sobre las características nutriciona- más completo del sector les del maní y sus efectos benéficos para Este trabajo puso énfasis en el análisis de la salud; ampliar la variedad de productos las tradicionales cuatro “P” del marketing ofrecida; y ofrecer presentaciones en en- (Producto, Precio, Plaza, y Promoción); vases más pequeños. mientras que en nuevos estudios sería útil 2) Precio. Es importante tener en cuenta incorporar las tres nuevas “P” del marke- que la gente gasta poco en el consumo de ting: Personas, que se refiere a todos los productos de maní, menos de $20 al mes individuos involucrados en el negocio, ($ agosto de 2010). La estrategia a asignar proveedores, empleados, gerentes, con- debe considerar los precios de la compe- sumidores, etc.; Proceso, que apunta a los tencia, la calidad del producto y el merca- mecanismos y actividades que hacen que do objetivo. un producto o servicio llegue al cliente y, 3) Plaza o distribución. Profundizar la es- finalmente, Presencia física, que se centra trategia de distribución en los kioscos; en el ambiente en que el producto o servi- acuerdos con el sector hotelería, restau- cio es entregado. rantes y catering. La industria de maní en Argentina tiene 4) Promoción. La campaña de promoción un definida orientación hacia las exporta- debe resaltar los aspectos nutricionales ciones y no es posible reemplazar las ven- del maní y sus efectos benéficos para la tas al exterior con ventas en el mercado salud. Por otro lado, se podrían imple- interno. Sin embargo, tener un mercado mentar auspicios y promociones en pro- doméstico más desarrollado permitiría a gramas de cocina. Inclusión en las dietas los distintos eslabones de la cadena del de los programas de alimentación del maní disminuir la vulnerabilidad que les Ministerio de Salud pública, hasta dietas impone la dependencia casi exclusiva de de planes de desnutrición, entre otros. las ventas a la Unión Europea. A su vez Apuntando al consumo impulsivo que también, para disminuir esta dependen- caracteriza al maní, a su vez se podrían cia se podrían explorar las posibilidades implementar distintas estrategias de pro- del desarrollo de nuevos mercados, como moción en kioscos, inclusión de cartelería países de América Latina u otros destinos y exhibidores; también la participación menos conocidos. de las marcas como patrocinadoras en No se propone el reemplazo de las expor- eventos. Dado que el consumo de maní taciones argentinas a los mercados a los tiene fuerte relación con el consumo de que se vende actualmente, sino que se cerveza, se podrían implementar, desde busca disminuir el riesgo de la cadena ma- el sector privado, alianzas con empresas nisera por medio de la diversificación de

316 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 sus mercados. El desarrollo del mercado Calidad Agroalimentaria. 2011. Buenos interno se presenta como una alternativa Aires (Argentina). Disponible en: http:// desafiante, pero que a su vez ofrece una www.senasa.gov.ar/indexhtml.php. [Cita- demanda más estable y menos riesgosa do el: 11 de julio de 2011.] que la externa. 3. MAGyP, Ministerio de Agricultura Gana- dería y Pesca. 2011. Sistema Integrado de Información Agropecuaria. Ministerio de AGRADECIMIENTOS Y FINANCIAMIENTO Agricultura, Ganadería y Pesca. Programa de Servicios Agrícolas Provinciales http:// Este trabajo es un resumen de la tesis de www.siia.gov.ar/ y http://www.minagri. Maestría en Agronegocios y Alimentos de gob.ar/site/index.php [Citado el: 31 de oc- la Lic. Noelia Barberis, Convenio INTA-Uni- tubre de 2011]. versidad Católica de Córdoba, se presentó 4. Lambin J. 1995. Marketing Estratégico. en la XLII reunión anual de la Asociación Edit. McGraw – Hill. España. 610 pp. ISBN: Argentina de Economía Agraria, 9 y 11 de 2-84074-103-2. noviembre de 2011, Valdivia, Chile y fue 5. López G. 2011. Serie de estudios sectoria- les. Caso del maní y derivados del maní. financiado con fondos provenientes del ATN/ME-9565-RG BID/FOMIN. Programa Proyecto Específico 083621, Economía de de Inserción Agrícola. Fundación INAI, los Cultivos Industriales/PNIND INTA. Buenos Aires, Argentina, 138 pp. http:// www.inai.org.ar/sitio_nuevo/archivos/In- BIBLIOGRAFIA CITADA forme%20Final%20de%20Mani_10-5-11. pdf 1. Ackermann B. 2011. Una Década Testigo 6. Pedelini R. 2009. Cadena Productiva [en línea]. In: Resúmenes XXVI Jornada MANÍ. Presentación Power Point de dis- Nacional del Maní. Gral. Cabrera, Córdo- tribución interna, no publicada. ba, 15 Septiembre 2011. Disponible en: 7. Hermida R. [Dir.] 2006. El Balance de la http://www.ciacabrera.com.ar/ jornadas_ Economía Argentina 2006. Capítulo 15: historia_26_copia (2).htm. [Citado el: 21 Maní. Instituto de Investigaciones Econó- de Noviembre de 2011.] micas de la Bolsa de Comercio de Córdo- 2. SENASA, Servicio Nacional de Sanidad y ba. CD.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 317 CIENCIA Y TECNOLOGÍA DE LOS CULTIVOS INDUSTRIALES Normas de Publicación Los manuscritos se enviarán vía correo electrónico ([email protected]) a: Sr. Editor Ejecutivo Ciencia y Tecnología de Cultivos Industriales Ing. Agr. Guillermo J. March

El envío de un manuscrito para su publicación en la revista “Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales”, implica que los autores aceptan las Normas de Publicación de la revista. De manera independiente al envío del manuscrito, cada autor del mismo deberá enviar al Editor Ejecutivo, su expresa conformidad de presentarlo para su consideración en la revista. Manuscritos que no respeten estrictamente las normas no serán considerados y serán devueltos a los autores. Se incluyen en cultivos industriales a aquellos cultivos que forman parte del Programa Nacional de Cultivos Industriales del INTA, algodón, caña de azúcar, mandioca, maní, tabaco, té y yerba mate. La frecuencia de esta revista será cuatrimestral, por cultivo (Ej. Caña de Azúcar) o grupos de éstos (Ej. Té, Yerba Mate y Mandioca) y constará de Secciones, algunas de las cuales podrán ser eventuales. La Sección en que será incluido el manuscrito es atribución del Editor Ejecutivo en consul- ta con el Coordinador del Programa Nacional de Cultivos Industriales (PNIND). Dadas las obligaciones por parte de CAICYT (Centro Argentino de Información Científica y Tecnológica) para revistas de publicación periódica, los tiempos de recepción de los ma- nuscritos, su revisión por Editores Adjuntos y/o Revisores y la repuesta correspondiente por los autores, deberán sujetarse a los tiempos que impone esta periodicidad.

Secciones Opinión/Revisión Este artículo estará a cargo de un invitado por el Editor Ejecutivo en acuerdo con el Coor- dinador del PNIND, y se referirá a un tema de interés general relacionado a los cultivos industriales o a la producción agrícola en general. Previo a su publicación este artículo será también revisado por el Comité Editor, con la finalidad de contribuir a su mejor redacción si ello se juzga necesario.

Investigación Trabajos originales que sean el resultado de una investigación científica-técnica. Trabajos publicados como Resúmenes, Resúmenes ampliados y Trabajos en Jornadas-Con- gresos, adaptados a la orientación y Normas de Publicación de la revista; de lo que se dejará constancia en nota pie de página En estos artículos tendrá especial importancia la inclusión de citas de trabajos similares, especialmente de otros autores, que permitan justificar los objetivos y enriquecer el aná- lisis y discusión de los resultados.

Informes Especiales yTecnologías En esta Sección es incluirán artículos referidos a: a- Relevamiento (survey) de plagas, malezas, enfermedades y adversidades o por acción del hombre que afectan al cultivo.

318 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 b- Estimación de pérdidas de cosecha a nivel regional causadas por plagas, malezas, en- fermedades, adversidades climáticas, etc. c- Manejo de un cultivo, incluyendo plagas, enfermedades, fertilización, labranzas-siem- bra, rotaciones, riego, cosecha. d- Desarrollo de equipos, maquinarias, procesos de agregado de valor a la cosecha, desa- rrollo y/o implementación de tecnología específicas al cultivo. La estructura de estos artículos podrá ser similar a la de un artículo de Investigación; no obstante, se aceptarán subtitulados acordes al artículo, lo que será considerado por el Editor Ejecutivo para su aceptación previa consulta por los autores.

Economía y Proyectos de Desarrollo Dada la particularidad de redacción que significan trabajos incluidos en estas temáticas, serán incluidos en una Sección aparte.

Artículos de Investigación Los autores deberán seguir estrictamente las Normas de Publicación a fin de facilitar el trabajo de edición. En caso de no hacerlo el artículo será devuelto para su adecuación a estas Normas previa evaluación del mismo. Los artículos (incluyendo cuadros y figuras) deberán ser escritos en español y procesados como Microsoft Word for Windows, en tipografía Arial 11, papel blanco tamaño A4, con márgenes 20 mm (superior, izquierdo y derecho) y 30 mm margen inferior, con espacio sencillo entre líneas, en un solo lado de la hoja. Si bien no hay limites sobre la extensión de los artículos, no obstante en lo posible éstos no deben exceder el número de páginas usuales en una revista técnica (5-6), ya que los costos de edición son elevados y no se cuenta en esta primera etapa con presupuesto específico y/o requiere del aporte de los autores. El Editor Ejecutivo podrá devolver el artículo en caso de ser demasiado extenso y/o no adaptarse a las características de una revista. Evitar las llamadas a pie de página y en caso de incluir símbolos y abreviaturas consultar el cuadro correspondiente al final de las Normas de Publicación. De no encontrase en este cuadro deberá aclararse explícitamente para su consideración de acuerdo a las nor- mas internacionales e inclusión en el cuadro referido para una próxima edición. Cada página será numerada al pie a la derecha. Cuadros (tablas) y Figuras (gráficos, fotografías) en páginas separadas y en tipografía Arial 11. Una vez que el artículo ha sido revisado por los Revisores y/o Editores Adjuntos según la temática, podrá ser calificado según tres niveles: a- aceptado sin correcciones, b- aceptado con correcciones, c- no aceptado. En el caso b) el artículo retornará a los autores para que sean introducidas las correccio- nes correspondientes y/o consideradas las sugerencias y críticas realizadas. En caso de no acordar con las sugerencias y/o críticas deberá explicar su desacuerdo, en cuyo caso será nuevamente considerado por el Editor Ejecutivo.

Proceso de Impresión En Imprenta se realizará el trabajo de adecuación al diseño de la revista obteniéndose la correspondiente Prueba de Galera (pdf), la que será enviada al primer autor mediante correo electrónico para su corrección final. Además se enviará el trabajo como fue edita- do (en Word) una vez consideradas las sugerencias y correcciones de los Revisores y Edi-

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 319 tores, a fin que puedan comprobar si se ha producido algún error durante el procesado en la imprenta, como omisión de párrafos, alteraciones en cuadros y/o figuras. La Prueba de Galera (pdf) deberá ser devuelta al Editor Ejecutivo dentro de las 48 h, incluyendo las correcciones: donde dice… ….debe decir…...., convenientemente indivi- dualizada su ubicación en el texto (página, columna, reglón). En caso de no devolverse a tiempo la prueba de galera con su correspondiente acepta- ción y/o correcciones, el trabajo no será incluido en la edición de la revista.

Formato Los artículos serán en blanco-negro. 1- Título Título tipo oración en negrita. Debe ser sintético y reflejar el objetivo principal o el con- tenido del trabajo realizado. En caso de incluir nombres científicos,no acompañar de las siglas. Relación entre los nutrientes en el tejido foliar y la roya marrón (Puccinia melanocephala) en caña de azúcar

2- Autores Primer nombre y apellido completos de cada uno de los autores en negrita. A continuación institución a la que pertenecen y lugar en que se encuentra (NO dirección completa), y dirección electrónica del autor corresponsal. No incluir posiciones del inves- tigador en su Institución ni la dirección de ésta. Jorge Morandi1, Héctor Neme2 y Luis Forns2 1- INTA, Centro Regional Tucumán-Santiago del Estero. 2- Consejo Federal de Inversiones (CFI). Correo-e: [email protected] Si los autores pertenecen a la misma unidad no colocar los números identificatorios.

3- Texto INTRODUCCIÓN Presentación y evaluación sintética del tema, incluyendo la bibliografía más relevante sobre el mismo y evitando la referencia excesiva a información no publicada. Se incluyen claramente el ó los objetivos del trabajo. Las referencias en el texto lo serán con núme- ros entre paréntesis, las que se corresponderán con el mismo número en BIBLIOGRAFÍA CITADA. En caso de citar expresamente un autor, deberá constar a continuación entre paréntesis el número de orden correspondiente: .....de acuerdo a Madden et al. (9)..... En caso de incluir una comunicación personal: (com. pers. R. Sopena) Si se incluyen nombres científicos, en cursiva y NO colocar las siglas (Ej. Gossypium hirsu- tum, Anthonomus grandis), excepto que se trate de un trabajo taxonómico. Evitar las citas en pie de página.

MATERIALES Y MÉTODOS Lo suficientemente amplio para ser comprendido y eventualmente repetido por otros investigadores. En caso de corresponder análisis estadístico, describir el diseño experimental utilizado y los análisis efectuados con suficiente detalle para que el lector pueda verificar los resul- tados. Los productos agroquímicos, especialmente plaguicidas, estarán en minúscula por su

320 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 nombre común, No por su marca comercial:.....clorpirifós (50 %). En caso de ser un único producto el incluido en el trabajo, se podrá colocar la marca registrada si la empresa que lo tiene registrado lo autoriza específicamente para ese trabajo por escrito. Usar los Símbolos y Abreviaturas que se encuentran al final de las Normas de Publicación.

RESULTADOS Ser sintéticos y claros en el desarrollo de los resultados. Cuadros y Figuras (fotografías, gráficos, esquemas) en páginas individuales, sin títulos y numeradas luego de BIBLIOGRAFÍA CITADA. Ser cuidadosos en el tamaño de los Cuadros y las Figuras (incluyendo el título de los ejes Y), ya que deberán adaptarse al ancho del texto sin tener que disminuir la calidad de interpretación. Títulos de Cuadros en la parte superior y de Figuras en la inferior (observar que a conti- nuación de Cuadro 1. o Figura 1. va un punto, no dos puntos). Para el diseño de los Cuadros usar “Tabla” de Microsoft Word, encuadrando en línea punto 1.5 y separando las filas con líneas de punto ¾, evitando en lo posible las líneas verticales interna.

Cuadro 1. Insumos utilizados en la producción de caña de azúcar para dos niveles tecnológicos y sus equi- valentes energéticos en Tucumán (Argentina).

x Nivel tecnológico bajo: productores con rendimiento medio anual de 60 Mg/ha en un ciclo de seis cosechas que se realizan manual y/o mecánicamente). y Nivel tecnológico medio a alto: productores con rendimiento medio anual de 75 Mg/ha en un ciclo de cinco cosechas realizadas mecánicamente).

Cuadro 2. Severidad final y tasa de incremen- to de viruela del maní (Cercosporidium per- sonatum) según intervalo de aplicación de picoxystrobin+ciproconazole. General Deheza, campaña 2008/09.

* Distintas letras en la misma columna indican diferen- cias significativas según test de Duncan (p<0,05).

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 321 Figura 1. Curvas de progreso de la viruela del maní (Cer- cosporidium personatum) según tratamientos fungici- das. Gral. Deheza (Córdoba), campaña agrícola 2007/08.

Los títulos de cuadros y figuras deben explicar por si mismos el contenido, sin necesidad de recurrir al texto. En caso de siglas o palabras incompletas definir con una llamada (ver Cuadro 1). No reiterar la misma información en cuadros y figuras.

DISCUSIÓN Hacer un esfuerzo por sintetizar sin disminuir calidad, incluyendo suficientes citas biblio- gráficas que enriquezcan el análisis, evitando limitarse a solo autoreferenciación. Se aceptará RESULTADOS Y DISCUSIÓN

CONCLUSIONES En caso de juzgarlo oportuno para señalar un resultado que sea de impacto. Evitar ambigüedades o supuestos impropios de una conclusión.

BIBLIOGRAFÍA CITADA Máximo 20 citas ordenadas alfabéticamente según la primera letra del apellido del pri- mer autor. Primero apellido y luego siglas de nombres. Citas numeradas correlativamente en correspondencia con las incluidas en el texto. Cuando se citen varios trabajos del mismo autor, primero aquél en que esté solo y luego cuando sean dos o más autores. En ambos casos las publicaciones irán según el orden cronológico del año de la publicación, de la más antigua a la más reciente. De ser pu- blicaciones en una misma revista, ocupará el primer orden el trabajo con las páginas de menor numeración. En caso de citas de trabajos en una revista, incluir el nombre completo de ésta. Se transcriben diferentes posibilidades según la publicación.

Revista Phipps P.M., and Porter D.M. 1982. Sclerotinia blight of soybean caused by Sclerotinia minor and S. sclerotiorum. Plant Disease 66: 163-165. Libro Vanderplank J.E. 1963. Plant Disease: Epidemics and Control. Academic Press, New York. 349pp.

322 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Capítulo de libro Kranz J. 1988. Measuring Plant Disease. In: Experimental Techniques in Plant Disease Epi- demiology (J. Kranz y J. Rotem, eds.). Springer-Verlag, Germany. pp. 35-50. Congresos o Jornadas Ruiz López L., Troncoso Rojas R., Guerrero Ruiz C. y Garza Ortega S. 1999. Identificación de especies de Fusarium en melón reticulado (Cucumis melo L.) y su control bajo con- diciones in vitro. In: Actas X Congreso Latinoamericano de Fitopatología. Guadalajara, México. p. 66 Moreno R.E., Biffis F., Diz J. y Courreges D. 2002. Mesotrone: Nuevo herbicida postemer- gente en maíz. In: Resúmenes XI Jornadas Fitosanitarias Argentinas. Río Cuarto, Argen- tina. p. 196. Tesis: Marinelli A. 2000. Biología y epidemiología del tizón del maní causado por Sclerotinia minor y S. sclerotiorum. Tesis Doctorado, Fac. de Cs. Ex. Fis. Quim. y Naturales, Universi- dad Nacional de Río Cuarto. 108pp. Observación: no colocar coma ( , ) luego del apellido. On line Para literatura citada en publicaciones on line que fueron originalmente publicadas en forma impresa, deberá citarse esta versión. Si el material esta solo publicado on line, de- berá constar. autor, fecha, título, nombre de la publicación u organización de la página y número de identificación digital. Opinión/Revisión Si bien en líneas generales deberán respetarse las normas de publicación que rigen para los trabajos de investigación, su estructura será diferente a la de éstos y responderá a las necesidades del tema a tratar. No podrá exceder de seis páginas impresas, incluyendo cuadros, figuras y bibliografía citada. Informes Especiales y Tecnologías Su estructura será similar a Investigación.

ACEPTACION FINAL La decisión final de no aceptación de un artículo es responsabilidad del Editor Ejecutivo y del Coordinador del Programa Nacional de Cultivos Industriales. En caso de No Aceptación el artículo original será devuelto a los autores. Observación Si el trabajo ha sido aceptado deberán enviarse las figuras (gráficos, mapas, fotos) en su archivo original, no como “pegado al texto del artículo”, a fin de facilitar el proceso por Imprenta.

Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 323 SIMBOLOS y ABREVIATURAS

324 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 Ciencia y Tecnología de los Cultivos Industriales, Año 1 Nº 3 - 2012 325