374Z-4C3-15 TRIBUNAL DE SENTENCIA : , Departamento de La Paz, a las once horas y cincuenta minutos del veintisiete de octubre de dos mil quince. Visto en juicio oral y público, el proceso penal 374Z-4C3-15 seguido a MANUEL ANTONIO O. C., quien nació el quince de julio de mil novecientos sesenta y cinco, de cuarenta y nueve años de edad, con Documento Único de Identidad número […], originario de […], residente en Calle […], Residencial […], jurisdicción de […], hijo de […], acusado de la comisión del delito calificado provisionalmente como OTRAS AGRESIONES SEXUALES (Art. 160 Pn.) y ACOSO SEXUAL (Art. 165 Pn.), en perjuicio de la menor víctima de autos, representada legalmente por la señora [...] De conformidad al Art. 53 Inc. último Pr.Pn., la vista pública fue presidida por la señora Jueza Licenciada Rosa Delmy Hernández Ávalos, que dio inició a las ocho horas y treinta y cinco minutos y finalizó a las once horas y treinta y cinco minutos, ambas de horas de este mismo día. Han intervenido como partes técnicas: como Agente Auxiliar del señor Fiscal General de la República la Licenciada Violeta Edith Molina Ayala y como Defensor Público del procesado el Licenciado José Elías Santos Espinoza. Se hace constar que al acusado se le hizo saber y se le explicó sus derechos conforme lo establece en los Arts. 12 de la Constitución de la República, 81 y82 del Código Procesal Penal, expresando que haciendo uso del derecho a la Defensa Material, rendiría en su momento su declaración indagatoria, lo cual plantearía su Defensor Técnico oportunamente. CONSIDERANDOS: La vista pública se declaró abierta y se iniciaron los debates, en el desarrollo de la misma se observaron las prescripciones y términos de ley.La suscrita Jueza resolvió todos los puntos que fueron sometidos a su consideración, conforme al Art. 394Pr.Pn. En consecuencia siendo procedente el ejercicio de la acción penal pública, por ser la persecución de oficio de los delitos de OTRAS AGRESIONES SEXUALES y ACOSO SEXUAL , promovida por la representante fiscal, de conformidad a los Arts. 193 No 3 y 4 de la Constitución de la República, Arts. 17 N° 1 y 74Pr.Pn.; y, competente el Tribunal para el caso en examen se procedió a la apertura de la vista pública, en cuanto a la existencia de los delitos acusados por la parte fiscal y la participación del encartado, así como la responsabilidad civil, las que se basan en los fundamentan que en adelante se expresaran. I. HECHO ACUSADO Y SOMETIDO AL JUICIO. El dos de julio de dos mil quince, la representante Fiscal, presentó ante el Juzgado de Instrucción de , acusación formal (fs. 88 al 90), contra el procesado MANUEL ANTONIO O. C., por el delito calificado provisionalmente como OTRAS AGRESIONES SEXUALES (Art. 160 Pn.) y ACOSO SEXUAL (Art. 165 Pn.), en perjuicio de la menor víctima de autos, representada legalmente por la señora [...], celebrándose la Audiencia Preliminar a las nueve horas del ocho de septiembre de dos mil quince, en el Juzgado de Instrucción de San Luis Talpa, que calificó el hecho como OTRAS AGRESIONES SEXUALES (Art. 160 Pn.) y ACOSO SEXUAL (Art. 165 Pn.), en perjuicio de la menor víctima de autos, teniendo por descrito los hechos siguientes: “Que según diligencias iniciales de investigación los hechos: “Que según diligencias iniciales de investigación los hechos sucedieron el día diecisiete de febrero del dos mil quince, como a eso de la una y media de la tarde aproximadamente, en momentos que la joven, quien en el presente proceso tiene calidad de víctima, cubría a su hermana de nombre de nombre Rosa Margarita H., en su lugar de trabajo siendo este en la Biblioteca del Instituto Nacional de , ya que dicha hermanase desempeña como bibliotecaria, y le pidió a ésta que la cubriera como bibliotecaria, ya que en otras ocasiones lo ha hecho; por lo que a la hora antes mencionada llegó a la biblioteca en mención el profesor MANUEL ANTONIO O., quien se desempeña como director de dicho instituto, y en el presente proceso tiene calidad de imputado , y este le comenzó a preguntar cosas referentes al trabajo y la víctima se las contesto, y aprovechando que la víctima se encontraba sola en la biblioteca, el ahora imputado le puso la mano en el hombro y le dijo “MAMACITA ESTAS BIEN LINDA”, por lo que la víctima le quito la mano de su hombro; pero el imputado insistió y continuo abrazándola y en contra de la voluntad de la víctima le beso la boca a lo que la víctima se resistía y le decía que dejara de hacer eso , calmándose por un momento el ahora imputado y cuando la víctima iba a pagar el aire acondicionado de la biblioteca, porque ya era hora de retirarse el ahora imputado volvió a abrazarla, fue en ese momento que la joven víctima le sonó el teléfono celular que ella andaba y al contestar era su madre y fue en esos momentos que el ahora imputado se retiró de la biblioteca como si no hubiera hecho nada, posteriormente la víctima le llamó a su madre y le contó lo sucedido; asimismo con anterioridad el ahora imputado le ha manifestado a la víctima que estaba bien linda. Después de los hechos la víctima junto con su madre se presentan a interponer la denuncia al CONNA de Zacatecoluca y él hasta el día dieciocho del presente mes y año, que se presentan a la Policía de Arcos y estos proceden a la detención del ahora imputado por estar en el término de flagrancia.” II. INCIDENTES. La Representación Fiscal, con base en los Arts. 178 y 380 Inc. 2 Pr.Pn., presentó como incidente, que con la Defensa Técnica acordaron con base al artículo ciento setenta y ocho había llegado a un acuerdo con la Defensa sobre estipular la prueba documental ofrecida y admitida; dicha prueba consiste en: DOCUMENTAL: 1) Acta de detención y remisión del imputado MANUEL ANTONIO O. C., de fecha dieciocho de febrero del dos mil quince, 2) Acta de entrevista de la víctima, tomada en cámara Gesell (Fs. 105), asimismo el CD donde consta el video de la entrevista. La Defensa Técnica manifestó su acuerdo con la estipulación de la prueba documental referida en el párrafo anterior por la Representación Fiscal, ello porque conversó con su Defendido, manifestándole éste entender en qué consisten esos acuerdos y sus consecuencias jurídicas, consintiendo libre y voluntariamente. La Señora Jueza explicó al acusado en qué consistía la estipulación de la prueba documental y las consecuencias jurídicas derivadas de todo ello; consultando al acusado al respecto, éste le manifestó entender en qué consistía y las consecuencias jurídicas que de ello se derivaban, que consciente de ello era su voluntad estipular la prueba documental referida en el párrafo anterior. Habiendo escuchado a las partes técnicas y al enjuiciado, referente a los incidentes planteados por las partes técnicas, habiéndose cumplido con los requisitos de ley, de conformidad a los Arts. 1, 2, 3, 4, 5, 6,10, 11, 12, 16, 82, 105 N° 1, 106,143, 144, 178 y 380 Inc. 2Pr.Pn. 160 y 165 Pn., la suscrita Jueza RESOLVIÓ: TENER POR ESTIPULADA la prueba consistente en: DOCUMENTAL: 1) Acta de detención y remisión del imputado MANUEL ANTONIO O. C., de fecha dieciocho de febrero del dos mil quince, 2) Acta de entrevista de la víctima, tomada en cámara Gesell (Fs. 105), asimismo el CD donde consta el video de la entrevista. Concluido los incidentes, se les concedió la palabra a las partes técnicas, exponiendo el Fiscal del caso: quien ratificaba el dictamen de acusación que presentó, que por ello con la prueba documental y testimonial que se incorporaría, desvirtuará la presunción de inocencia; y en su alegato final solicitó una sentencia condenatoria, ya que con la misma confesión del enjuiciado, con la prueba documental y sobre todo con la prueba testimonial, principalmente con el testimonio de la víctima brindado en Cámara Gesell, se había logrado dar por establecido el hecho y la participación directa del enjuiciado, en haber proferido a la víctima frases de índole sexual y tocamientos a ésta, conducta sexual abusiva, lo cual había dejado una afectación psicológica en la víctima; solicitó como consecuencia una pena de tres años de prisión por el delito de ACOSO SEXUAL y que se le otorgara la suspensión condicional de la ejecución de la pena; asimismo un fallo conforme a derecho con relación al delito de OTRAS AGRESIONES SEXUALES. Por su parte la Defensa Publica manifestó en su orientación del caso que basaría su caso en la comunidad de la prueba; en su alegato de cierre expuso que se de imponérsele los tres años de prisión solicitados por la Fiscalía, se concediera a su patrocinado el beneficio de la suspensión condicional de la ejecución de la pena, pero solo con relación al delito de ACOSO SEXUAL, pues no se había probado el delito de OTRAS AGRESIONES SEXUALES, por el cual solicitaba un fallo absolutorio. III. INCORPORACIÓN DE LA PRUEBA SOMETIDA A JUICIO. En la vista pública, de la prueba admitida por el Juzgado de Instrucción de San Luis Talpa, conforme al Art. 345Pr.Pn. derogado, desfiló legalmente la siguiente: A) PRUEBA TESTIMONIAL 1. Testimonio de MENOR VÍCTIMA, rendida en cámara Gesell, quien identificándose con su nombre, en lo medular dijo: “[…], estudio Tercer año de Bachillerato, opción […], en el Instituto Nacional de San Luis La Herradura, vivo con mis padres en Caserío […], mi mamá es […]; he venido por lo que me pasó a mí; mi hermana empezó a trabajar en el Instituto de San Luis La Herradura, pero como todavía no había terminado las horas sociales en la Universidad; por eso arregló que ciertas tardes de la semana faltaría; entonces le pidieron que si me podía dejar a mí a cargo de la biblioteca, porque yo ya había hecho ahí mis horas sociales, en primer año; eso fue en febrero de este año; yo ya le había cubierto ciertos días cuando ella no iba, solo en los recreos porque tenía clases; siempre me iba con una amiga; el Director del Instituto Manuel Antonio O. me hablaba todo siempre en doble sentido, lo que a veces me incomodaba; me decía por ejemplo, una vez que llegó mi mamá a la institución ¿Y a que ha venido mi suegra?. Un día que mi hermana no iba a poder llegar yo me iba a quedar en la tarde y le pedí a una amiga que siempre se quedaba conmigo; porque un día antes habíamos estado ahí y yo siempre le decía que me incomodaba la actitud de él; pero me dijo que ese día no se podía quedar conmigo; mi grado siempre salía a las dos, entonces yo me iba a quedar hasta las tres para cubrir el turno de mi hermana; no sé por qué motivo ese día los grados salieron temprano, todavía el grado que estaba a la par de la biblioteca se quedó hasta la una y media de la tarde, que fue el que más tarde salió; incluso unos muchachos que estaban ahí trabajando y unos compañeros míos se fueron; no habían pasado ni cinco minutos cuando se habían ido todos, cuando llegó él a la biblioteca – refiriéndose al acusado-; habían unos compañeros pero estaban retirados de la biblioteca, porque ésta está retirada, al fondo de un pasillo; él llegó preguntándome cómo había estado el día, si había estado ocupado, a lo que le contesté que no; entonces se sentó a la par mía y me preguntó qué estaba haciendo en la computadora; yo estaba viendo imágenes, porque estaba aburrida y no había nada que hacer; entonces fue que él me abrazó así con el brazo tomándola del cuello y tomándome de la cintura; yo me trataba de apartar porque la actitud de él me estaba incomodando; si le respondía es con medias palabras; así fue como él se paró y me decía que estaba nerviosa y luego me empezó a tocar la espalda y me daba como masaje en el cuello y la espalda; se sentó de nuevo a la par mía y entre abrazos, fue que no sé cómo de repente logró besarme el cuello y luego la boca; en ese momento es que me llamó mi mamá por celular y él se alejó de mí; me preguntó mi mamá si estaba sola y le dije que no, que estaba con el Director; le pregunté al Director si me podía retirar y él me dijo que sí, que solo apagara el aire acondicionado y que ya me podía ir; cuando me dirigí a apagar el aire (declara visiblemente afectada) me empezó a decir que estaba bien linda, “mamacita” y cosas así; yo lo que hice fue apagar todo rápido y ya, ya me voy, adiós; un día antes había llegado ahí y me había pedido el número de teléfono pero yo no se lo di; ya que había salido de la biblioteca le hablé a mi mamá y le conté todo lo que había pasado, me llegó a traer y ya al día siguiente se fue poner la denuncia; ese día que le hablé a mi mama, ésta reaccionó asustada y me dijo que ella tenía el presentimiento que algo así podía pasar, porque yo ya le había dicho que me incomodaba la actitud de él y que me había pedido el número de teléfono; ella también estaba llorando y no sabía qué hacer; le llamamos a unas tías y ellas le dijeron que se presentara la denuncia; así fuimos a poner la denuncia el día dieciocho de febrero de 2015; yo ese día, el diecisiete de febrero de 2015, con lo que me hacia el Director me sentía asustada, prácticamente no podía ni moverme, sino es por la llamada de mi mamá, quizás yo no me lo hubiera logrado quitar; no sé, estaba impactada, asustada, nerviosa, no sé, sentí que ni me podía mover; desde que llamó mi mamá es que él se apartó de mí; él como una semana antes fue que llegó a la biblioteca y me pidió el número de teléfono; solo eso pasó ese día, pues en ese momento llegaron unos alumnos a comprar a la biblioteca y entonces en ese momento él se retiró; el día que me tocó, el diecisiete de febrero de dos mil quince, eran entre la una y media a la una y cuarenta de la tarde; ese día me empezó a tocar desde que se sentó a la par mía, quizá durante unos cinco minutos y luego, al momento que iba a apagar el aire, me siguió diciendo cosas pero ya no me tocó; las acciones que me hizo no las vio nadie porque estábamos totalmente solos, la Secretaria estaba en la institución pero estaba lejos de la biblioteca, estaban también los que hacen limpieza pero estaban lejos; a uno de estos lo vi cuando salí de la biblioteca, estaba en el pasillo y desde ahí no se ve a donde estábamos nosotros; mi compañera con la que me quedaba, ella lo que vio es cuando me decía cosas en doble sentido; una vez que estábamos en la biblioteca, él llegó ahí y me dijo que se me quedaba viendo raro, mi amiga es N. B. M. M.; ese día la biblioteca estaba abierta, pero como la biblioteca está aislada y queda al final de un pasillo no se podía ver hacia adentro; habían algunas personas en la institución pero se encontraban retirados, una era la Secretaria que estaba retirada, cuando salí, vi a un ordenanza por el pasillo; ese día los alumnos se habían retirado lejos”. B) PRUEBA DOCUMENTAL: La prueba documental que fue estipulada, se incorporó por su lectura literal y consistió en: 1. Acta de remisión del imputado. EN EL PUESTO POLICIAL DE LA VILLA SAN LUIS LA HERRADURA DEPARTAMENTO DE LA PAZ, A LAS ONCE HORAS DEL DÍA DIECIOCHO DE FEBRERO DEL AÑO DOS MIL QUINCE.- Los suscritos agentes, D. D. J. S. L. y G. L. D. E., por encontrarnos destacados en esta Unidad Policial, dejamos constancia de la aprehensión en flagrancia del señor MANUEL ANTONIO O. C. de cuarenta y nueve años de edad, […] quien actualmente desempeña el cargo de Director del Instituto Nacional de San Luis la Herradura según el ministerio de educación en su clasificación escalafonaria […], con fecha de expedición del […], casado, quien fue identificado con su documento de identidad […], siendo originario del departamento de la Unión y con residencia actual en calle […] de la Lotificación […] jurisdicción de […], siendo hijo de […] ambos con residencia en Zacatecoluca la Paz, por atribuírsele inicialmente el delito de ACOSO SEXUAL Y ACOSO SEXUAL, en perjuicio de la adolecente […], quien es representada legalmente por su madre la señora [...] de cuarenta y cuatro años de edad, quien se identificó con su documento de identidad personal número […], residente en caserío […] del cantón […] jurisdicción de […], La detención se realizó a las diez horas con treinta minutos del día dieciocho de los corrientes, en las instalaciones del Instituto Nacional de la villa de San Luis la Herradura. RELACIÓN DE LOS HECHOS. En momentos que nos encontrábamos en el puesto policial como a eso de las siete treinta horas se hace presente a esta unidad policial la señora C. H. con su hija la adolecente […] la cual vino a manifestar que su hija estudia tercer año de bachillerato en el Instituto Nacional de esta villa y que desde siempre el director de dicho instituto de nombre Manuel Antonio O. C. la ha acosado diciéndole frases de amor como hola mi amor, como estas, estas bien rica, estas bien linda entre otras cosas que tienen doble sentido, queriendo siempre tocarla pero ella no se lo ha permitido, tal es el caso que la semana pasada en el interior del instituto donde ella va dicho señor siempre la buscaba para sentársele en las piernas de forma forzosa, manifestando dicha adolecente que su hermana quien es de nombre ROSA MARGARITA M. H. la cual trabaja en la biblioteca de ese instituto le manifestó al señor Manuel que el día de ayer ella no podía trabajar por que tenía que ir a la universidad pidiéndolo este señor a su hermana que la mandara a ella a cubrirle el turno siendo así que efectivamente ella fue a cubrir dicho turno, siendo el caso que como a eso de las trece horas cuando ella se encontraba en el interior de dicha biblioteca el señor Manuel llego a hablarle de trabajo, posteriormente comenzó a decirle palabras de amor y a la vez comenzó a tocarla de las hombros, besándole el cuello y sobándole la espalda con la intención de tocarle sus nalgas todo esto de una forma forzosa, cosa que ella no se dejó siendo en ese momento que le sonó el teléfono celular y ella como pudo logro contestar la llamada la cual era su madre quien le llamaba y dicho señor cuando escucho la frase de hola hija donde estás la soltó y se retiró del lugar, sigue manifestando la menor que estas actitudes del señor Manuel Antonio O. ya las venía haciendo desde hace mucho tiempo pero ella por temor no le había contado a sus padres, minutos después de escuchar a la adolecente los suscritos salen de esta unidad policial al referido centro Educativo a buscar al ahora detenido encontrándolo en su oficina de trabajo y al cual se le explico el motivo de nuestra presencia. Fue en ese momento que se le manifestó que quedaría detenido por el delito antes mencionado. Al detenido se le ha informado sobre el motivo de su detención, también de los derechos que la Ley le confiere de acuerdo a lo establecido en los Artículos doce de la Constitución de La República y ochenta y dos del Código Procesal Penal. Se le ha preguntado si puede nombrar abogado que le asista en su declaración y dice que no puede, en relación se le hace saber que se solicitara a la Procuraduría General de La República para que le nombre la defensoría legal. También se le ha preguntado al detenido a quien se debe dar aviso de su detención manifestando este que a nadie porque su esposa ya tiene conocimiento de su detención, al ser registrado en esta unidad policial en presencia del agente de atención al público agente G. E. este no deja nada en calidad de depósito, ni en calidad de incautación. Y no habiendo nada más que hacer constar en la presente acta de remisión se da por terminada la cual para constancia firmamos no así el detenido por manifestar no querer hacerlo (fs. 5). 2. Acta de entrevista de la víctima, tomada en Cámara Gesell (Fs. 105), en la que consta que en el Centro Judicial "Isidro Menéndez" de , se tomó la declaración de la menor víctima a las nueve horas del veintiuno de agosto de dos mil quince; la cual se registró en CD, donde consta el video de la entrevista. C) DEPOSICIÓN DEL ENJUICIADO: El enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C. en lo esencial dijo: “El hecho fue el diecisiete de febrero de dos mil quince; yo ingresé a la Biblioteca del Instituto; ahí se encontraba la menor de dieciocho años; las cosas fueron solamente en una ocasión; me le acerqué y le dije “mamacita estás rica”; recuerdo que otro día también se lo había dicho y le dirigí palabras en doble sentido; cuando la encontré sola ese día diecisiete, me senté a la par de ella; la abracé tocándole la espalda y la tomé de la cintura y le masajeé el cuello, también la besé en el cuello y en la boca.” IV. FUNDAMENTOS JURÍDICOS A) DETERMINACIÓN DE COMPETENCIA De conformidad a los Arts. 15, 21, 86. Inc. Final y 172 Inc. 1º y 3º de la Constitución de la República: 146 L.O.J.; 17 del Código Penal, 17, 47, 49, 53 Inc. final, 57 del Código Procesal Penal, este Tribunal de Sentencia ha sido competente en razón de la materia, grado y territorio para conocer jurisdiccional y funcionalmente del hecho punible objeto de controversia en el presente juicio en contra del procesado MANUEL ANTONIO O. C. B) VALORACIÓN INTEGRAL DE LA PRUEBA Concluida la vista pública es necesario hacer un análisis de cada uno de los elementos probatorios aportados por la representación Fiscal y por la defensa técnica, por lo que el Tribunal examinará bajo las reglas de la sana crítica, cada uno de los medios de prueba desfilados, analizándolos individualmente y conjuntamente de un modo integral, a fin de considerarse si es posible establecer el hecho acusado y la participación del enjuiciado en el mismo. Así, durante el juicio, desfiló prueba testimonial, pericial y documental, consistente en: 1. DEPOSICIÓN DEL ENJUICIADO La convicción acerca de la responsabilidad del enjuiciado de autos en el hecho que se le imputó, se configuró en su núcleo a partir del dicho del propio enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C., que este Tribunal advirtió que en lo medular de su dicho, la hizo conforme el Art. 258 Pr.Pn., de forma clara, espontánea y determinante, sin presiones de ningún tipo, hablando directo y con soltura, aunque escuetamente, pero guardando coherencia y complementariedad los hechos que narró, sin advertir trazas de contradicción o imposibilidad de ocurrencia sobre lo dicho, siendo en todo concordante con lo establecido para el resto de elementos de prueba, por lo que a este Tribunal le mereció fe su dicho; en efecto, por su admisión de los hechos sabemos que el núcleo de los hechos ocurrió el diecisiete de febrero de dos mil quince, ocasión en que ingresó a la Biblioteca del Instituto, donde se encontraba la menor víctima sola; se le acercó y le dijo “mamacita estás rica”; de ese tipo de expresiones recuerda que otro día también se las había dicho, dirigiéndole palabras en doble sentido; precisamente ese día diecisiete, como la encontró sola, se sentó a la par de ella; procedió a abrazarla y a tocarle la espalda y la cintura, masajeándole el cuello, siendo que también le besé en el cuello y en la boca. Semejante conducta resulta a todas luces de connotación sexual y constituye un acoso contra una persona que no le manifestó ningún signo en su actitud de desear ser objeto de semejante trato, siendo que aparece en todo ello más bien una conducta pasiva de la menor, que ya habrá ocasión de comprender el porqué de ella. La Representación Fiscal habiendo escuchado la confesión del encausado, manifestó que por considerarla sobreabundante, prescindía del resto de testigos ofertados y admitidos, considerando además que se contaba con la declaración de la menor víctima en Cámara Gesell. Postura a la que se adhirió la Defensa Técnica y el encausado, al no tener interés en los elementos de prueba que se podrían derivar de dicha prueba; asimismo estos manifestaron que también prescindían de los testigos de descargo ofertados, ante la confesión del encausado, postura a la que se adhirió la Representación Fiscal por no tener interés en dichos testigos. Ante la postura de las partes la suscrita Jueza tuvo por prescindido tanto los testigos de cargo como los testigos de descargo, ofertados y admitidos en la instrucción. 2. PRUEBA TESTIMONIAL. Lo manifestado por el encausado encuentra plena confirmación por el dicho de la menor víctima y una palmaria clarificación de todo lo ocurrido, del contexto en que ocurre, de su alcance, profundización y sentido. Todo ello justamente con base en el Testimonio de la menor víctima de autos. Así, se advirtió que aun cuando lo realizó reflejando afectación emocional por los hechos que narraba, reflejando la pena que le causaba declarar al respecto, lo hizo con suficiente convicción, sencillez de lenguaje, pero sin mostrar vacilación sobre sus afirmaciones, razones por las que a la suscrita Jueza le mereció entera fe su dicho; así se estableció que la menor víctima, residente en Caserío […] de San Luis […], en febrero de este año, era estudiante de Tercer año de Bachillerato, en la opción de Contaduría, en el Instituto Nacional de ese municipio, siendo su Director el señor MANUEL ANTONIO O. C.; ocurre que en algunas tardes del mes de febrero de dos mil quince, la menor víctima quedó a cargo de la Biblioteca de ese Instituto, cubriendo algunos turnos en los que su hermana –que había empezado a trabajar en esa biblioteca- no asistiría, pues siendo que no había terminado las horas sociales en la universidad donde estudiaba, había arreglado que esos turnos serían cubiertos por su hermana (la víctima), quien ya había atendido en la Biblioteca cuando estudiaba primer año, por haber realizado ahí horas sociales; la menor la cubría solo en los recreos, siendo que su sección terminaba clases a las dos de la tarde, turnos en los que pedía a su amiga N. B. M. M. que la acompañara. La víctima era incomodada por el Director del Instituto Manuel Antonio O. que le dirigía palabras en doble sentido o con cierta connotación sexual, como en una ocasión en que llegó la mamá de la víctima a la institución y le dijo: “¿Y a que ha venido mi suegra?”; en otra ocasión llegó incluso a pedirle el número de teléfono, pero la víctima no se lo proporcionó. Así, para la tarde del diecisiete de febrero de ese año, la víctima solicitó a su amiga –con quien había estado el día anterior y a quien había confesado que le incomodaba la actitud del Director hacia ella- que la acompañara a atender esa tarde la Biblioteca, pues sabía que debía cubrir ese turno que se prolongaría hasta las tres de la tarde; siendo que su amiga no pudo acompañarla ese día, la víctima quedó sola atendiendo la biblioteca, pues debía cubrir el turno de su hermana; justo ese día ocurrió que las clases del turno de la tarde terminaron temprano, por lo que los alumnos dejaron las instalaciones de la institución, siendo el último grado en terminar clases el que era atendido a la par de la biblioteca, que salió de la institución a la una y media de la tarde. Unos usurarios que se encontraban trabajando en la Biblioteca, incluidos unos compañeros de la víctima, salieron de la Biblioteca, quedando ésta sola en ese lugar; los escasos alumnos y personal del instituto que permanecían en las instalaciones, se encontraban retirado de la recinto de la biblioteca, que por su ubicación, al final de un pasillo, impedía la vista de cualquier curioso hacia su interior. Unos cinco minutos después de quedar sola en la Biblioteca, entre las trece horas y treinta minutos a la trece horas y cuarenta minutos, llegó el Director MANUEL ANTONIO O. C., preguntándome cómo había estado el día, si había estado ocupada, a lo que la víctima contestó escuetamente; aquel se sentó a la par suya, preguntándole qué hacía en la computadora, la víctima, nerviosa por la actitud del Director, le contestó que veía algunas imágenes; el Director le rodeo el cuello con un abrazo y tomándole de la cintura, acción a la que la víctima incomodada, tímidamente intentó apartarse, contestando con medias palabras las preguntas que le hacia el Director; luego éste se puso en pie diciéndole que estaba nerviosa; en efecto, las acciones y actitudes del Director, provocaron en la víctima una intensa turbación emocional, al punto de no poder reaccionar, asustada y nerviosa, mientras el Director procedió a tocarle la espalda y masajearle el cuello y la espalda; luego el Director volvió a sentarse a la par de la menor víctima, rodeándola con un abrazo, llegando al punto de besarme el cuello y luego también en la boca; todas esas acciones del Director se prolongaran durante unos cinco minutos; durante esas acciones y en ese estado, la víctima recibió una providencial llamada en su teléfono móvil, que seguramente sorprendió al Director pues hizo que éste se separara de la víctima, logrando oportunamente también sacar a ésta de su estado de inacción, procediendo a atender la llamada, aún impactada, asustada y nerviosa; era su madre, que le preguntó si estaba sola; ésta le contestó que no, que estaba con el Director. Después de atender la llamada, la víctima preguntó al Director si podía retirarse y éste le dijo que sí, que solo apagara el aire acondicionado; aun turbada se dirigió a apagar el aire acondicionado, mientras el Director le seguía lanzando frases como “mamacita, estas bien linda”; la menor víctima se apresuró a apagar el aparato, diciendo luego “ya me voy, adiós”; fue precisamente un día antes de estos eventos, que el Director llegó a pedirle a la Biblioteca su número de teléfono móvil, siendo que en esa ocasión el Director se retiró luego, pues ingresaron unos alumnos a comprar a la Biblioteca; ese día veintisiete de febrero, ya que había salido de la biblioteca, habló a su mamá quien llegó a traerla, contándole todo lo que le había ocurrido; su madre reaccionó también asustada, confiándole que presentía que algo así podía ocurrir, pues la víctima ya le había confiado como la incomodaba el Director, su actitud hacia ella y respecto a que le había pedido el número de teléfono; ambas lloraban sin claridad sobre qué hacer, por lo que llamaron a unos familiares quienes les sugirieron que denunciaran el hecho; así fue que al día siguiente, dieciocho de febrero, concurrieron a interponer la denuncia. La conducta desplegada por el Director la realizó aun a sabiendas de la condición de alumna de la víctima, estando en condiciones de saber que ésta era menor de dieciocho años de edad, pues era alumna de la institución que presidía; no hay duda que el encausado era consciente de la connotación sexual de su conducta para con la víctima, que conocía de la dinámica de comportamiento del entorno escolar y de los horarios en que podía encontrarse a solas con la menor en la Biblioteca; se explica entonces que su conducta la haya podido realizar furtivamente, conteniendo la misma una invitación velada a tener un encuentro sexual, cuidándose de no realizarla en las ocasiones en que la víctima estaba acompañaba; al declarar esta víctima, le resultó palmario además a la suscrita Jueza, que la víctima reflejó con su lenguaje verbal y para verbal, que sentía pena y al referirse a su agresor, lo hizo con temor, angustia y una cierta desazón, pero no se advirtió que hubiera en su dicho odio o una especial animadversión, notando que lo que decía reflejaba que lo sentía, tratándose de una persona sencilla, que a juicio de este Tribunal no podría estar fingiendo al declarar, consolidándose así las convicciones planteadas derivadas de este dicho. PRUEBA DOCUMENTAL Esa versión encontró una coherente y complementaria confirmación con la prueba documental. En efecto, el acta de remisión del imputado, levantada en el Puesto Policial de Villa San Luis La Herradura, Departamento de La Paz, a las once horas del día dieciocho de febrero del año dos mil quince, suscrita por los agentes D. d. J. S. L. y G. L. D. E., pues en ella dejaron constancia de la aprehensión en flagrancia del señor MANUEL ANTONIO O. C., de cuarenta y nueve años de edad, Maestro, quien se desempeñaba como Director del Instituto Nacional de San Luis la Herradura, casado, con Documento Único de Identidad número […], originario del Departamento de La Unión, residente en Calle […], jurisdicción de […], hijo de […], por atribuírsele inicialmente el delito de ACOSO SEXUAL y ACOSO SEXUAL, en perjuicio de la adolecente menor de edad, representada legalmente por la señora [...], residente en Caserío […], Cantón […], jurisdicción de […], Departamento de La Paz, detención realizada a las diez horas y treinta minutos de ese día, en las instalaciones del Instituto Nacional de San Luis la Herradura; ello con relación a los hechos conocidos en la vista pública de la causa. Con el Acta de entrevista de la víctima, tomada en Cámara Gesell se estableció que en el Centro Judicial "Isidro Menéndez" de San Salvador, se tomó la declaración de la menor víctima a las nueve horas del veintiuno de agosto de dos mil quince, la cual se registró en soporte material en CD, donde consta el video de la entrevista; de este justamente fue tomado y valorado el testimonio de la menor víctima. Se tiene que estos documentos resultan coherentes con lo declarado tanto por el dicho de la víctima como por lo admitido por el enjuiciado; resultando que con ello se reforzó la convicción a que ya había arribado este Tribunal. En consecuencia se formó en la suscrita Juzgadora, un estado de certeza positiva sobre la participación del enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C. en la comisión de los hechos que le fueron imputados en perjuicio de la víctima menor de edad de autos, en lo medular tal como fueron propuestos por la Representación Fiscal en el plano fáctico y jurídico, resultando en todo caso configurado únicamente el delito de ACOSO SEXUAL, tal como regula el art. 165 Pn., que establece que lo comete quien realiza una conducta sexual indeseada por quien la recibe; conducta que implica frases, tocamiento, señas u otra conducta inequívoca de naturaleza o contenido sexual y que no constituya por sí sola un delito más grave, que es el caso de la conducta del encausado. Ello en tanto que llegó a establecerse de modo fehaciente e inequívoco, que MANUEL ANTONIO O. C. contra la voluntad de la menor víctima de autos, le profirió frases de inobjetable contenido sexual que constituían una invitación sutil a tener un encuentro sexual, llegando incluso a los tocamientos como abrazarla y besarla. No ocurrió lo mismo con el delito de OTRAS AGRESIONES SEXUALES (Art. 160 Pn.), pues según esa norma ese delito lo comete quien realizare en otra persona cualquier agresión sexual que no sea constitutiva de violación; ello implica superar necesariamente el límite de solo proferir frases y realizar tocamientos indeseados con connotación sexual, que es el caso del delito de ACOSO SEXUAL, aunque sin llegar a comportar acceso carnal por vía vaginal o anal, caso en que se convierte en delito de VIOLACIÓN. En esas circunstancias, en que en las acciones que se probó realizó el encausado, no llegó a configurarse la comisión del delito de OTRAS AGRESIONES SEXUALES, resulta legal y oportuno en consecuencia, en aplicación del principio de legalidad, declarar absuelto al enjuiciado por atipicidad respecto a ese delito, siendo que además se colige que al carecer de objeto, resulta inoficioso realizar ulteriores análisis respecto a la tipología del delito, así como respecto de la responsabilidad penal y civil del enjuiciado en el mismo. C) CALIFICACIÓN DEL DELITO 3. Tipicidad La Fiscalía calificó el hecho imputado a MANUEL ANTONIO O. C. como ACOSO SEXUAL, en perjuicio de la víctima menor de edad de autos, que conforme al art. 165 Pn., y según el caso, lo comete el que realice conducta sexual indeseada por quien la recibe, que implique frases, tocamiento, señas u otra conducta inequívoca de naturaleza o contenido sexual y que no constituya por sí sola un delito más grave, será sancionado con prisión de tres a cinco años; conducta que se sabe realizó de modo recurrente, incluso antes del hecho acreditado en autos. Ahora bien, atendiendo al hecho imputado con base en la prueba desfilada, resulta evidente que se establecieron los elementos típicos de este delito. Así, el bien jurídico protegido es la libertad sexual en su doble vertiente, positiva o negativa; positivamente al disponer libremente con quien implicarse sexualmente y negativamente al negarse con la misma libertad a no implicarse sexualmente; en el caso de autos la víctima menor de dieciocho años, se encontraba en una situación en que siendo una adolescente, no deseaba ser objeto de la conducta desplegada por el encausado, que la acosaba con acciones por las que prácticamente le proponía tener un encuentro sexual. En este delito los Sujetos Activos o Pasivos pueden ser hombres o mujeres; sujeto activo el que determina que se realice la conducta sexual indeseada por quien la recibe, que implica frases, tocamiento, señas u otra conducta inequívoca de naturaleza o contenido sexual y que no constituya por sí sola un delito más grave –para el caso fue MANUEL ANTONIO O. C. - y pasivo en quien recae la conducta determinada, siendo ésta la víctima menor de edad de autos. La Conducta Típica consiste precisamente en realizar la conducta sexual indeseada por la víctima, que bien puede implicar frases, tocamiento, señas u otra conducta inequívoca de naturaleza o contenido sexual, por supuesto que excluye conductas que por sí mismas constituyan un delito más grave. Para el caso de autos, implicó frases por las que el encausado insinuaba la posibilidad de un encuentro sexual, con tocamientos en el cuello, la espalda y besos, conductas indudablemente de naturaleza sexual, hechos más graves en tanto que la persona receptora de esas conductas era una alumna de la institución donde el encausado ejercía de Director. Tipo Subjetivo: Solo es posible la realización de la conducta con dolo directo. Respecto a las fases de ejecución del delito, se tiene que es de mera actividad y se consuma desde la mera realización de las frases, tocamientos, señas u otra conducta inequívoca de naturaleza o contenido sexual; en el caso de autos hubo frases y tocamientos de inequívoca de naturaleza o contenido sexual. Respecto de la autoría y participación, en sentido estricto solo es autor el que realiza la conducta sexual, para el caso MANUEL ANTONIO O. C. Sobre el concurso de delitos, conforme al art. 42 Pn., puede darse el delito continuado, en tanto que se produzca por una misma persona más de un evento de frases, tocamiento, señas u otra conducta inequívoca de naturaleza o contenido sexual en el mismo sujeto pasivo; para el caso, según la acusación se trató de varios eventos, pero se determinó que lo principal de la conducta del encausado ocurrió al menos en unas dos ocasiones. 4. Antijuricidad. Los hechos en mención son antijurídicos, en virtud de que las acciones realizadas por el enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C. es contraria a lo establecido en el ordenamiento jurídico del art. 165 Pn. y no existe ninguna causa justificante (arts. 27 al 28-A Pn.) para su comportamiento que se comprobó realizó y por el que la Fiscalía lo acusó, consistente en haber proferido frases y realizado tocamientos de inequívoca naturaleza sexual a la víctima de autos, en perjuicio del derecho a la libertad sexual de ésta. 5. Culpabilidad Habiéndose establecido que el enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C. cometió un hecho típico y antijurídico, no se ha probado que éste sea inimputable, en consecuencia tiene la madurez psíquica y la capacidad suficiente para motivarse de manera distinta a la norma que prohíbe proferir frases y exhibiciones de inequívoca naturaleza sexual a otra persona contra su voluntad y que ello es antijurídico, comportamiento que no es difícil cumplir, ya que no ha existido obstáculo que se lo impidiera, y tenía la capacidad de haber elegido no realizarlos, en ese sentido debió de conducirse de forma diferente a la realizada, por lo que no existe causa que le excluya del hecho punible acusado. En razón de lo anterior, a criterio de este Tribunal la conducta efectuada por el enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C. se adecua al ilícito penal de ACOSO SEXUAL, tipificado y sancionado en el Art. 165 Pn. D) DETERMINACIÓN PRECISA Y CIRCUNSTANCIADA DE LOS HECHOS ACREDITADOS Aproximadamente entre las trece horas y treinta minutos y las trece horas y cuarenta minutos, en las instalaciones de la Biblioteca del Instituto Nacional de San Luis La Herradura, Departamento de La Paz, la víctima de autos menor de edad, se encontraba a cargo de la atención de la Biblioteca; ese día terminaron temprano las clases, por lo que los alumnos dejaron las instalaciones del Instituto aproximadamente a las trece horas y treinta minutos, quedando dentro de las instalaciones pocas personas, entre personal y alumnos; el área de la Biblioteca y sus partes aledañas quedaron solas, permaneciendo en la Biblioteca únicamente la menor de edad víctima de autos, que estaba fuera del alcance de la vista de curiosos por encontrase la Biblioteca al final de un pasillo. La víctima se encontraba cubriendo un turno de su hermana que había empezado a trabajar en esa biblioteca, para lo cual había sido autorizada; aunque en otras ocasiones la acompañaba en esa tarea su amiga N. B. M. M., porque así se lo pedía, en esa ocasión se encontraba sola porque ésta le manifestó que ese día no podría acompañarla. Ya en anteriores ocasiones la víctima era incomodada por el Director del Instituto, señor MANUEL ANTONIO O., quien le dirigía palabras en doble sentido con connotación sexual, como en una ocasión en que viendo a la madre de la víctima en la institución, le dijo: “¿Y a que ha venido mi suegra?”, incluso llegando a pedirle el número de su teléfono móvil, a lo que la víctima se negó; para ese veintisiete de febrero, en las circunstancias en que se encontraba la víctima, unos cinco minutos después de que salieran los últimos usuarios, ingresó el Director MANUEL ANTONIO O. C., al recinto de la Biblioteca, preguntándome cómo había estado el día; se sentó a la par de la víctima, preguntándole qué hacía en la computadora; la víctima nerviosa se incomodó por la actitud del Director; éste la rodeo del cuello con un abrazo y tomándole de la cintura, acción a la que la víctima tímidamente intentó apartarse; luego se puso en pie diciéndole que estaba nerviosa, mientras la víctima entró en una intensa turbación emocional, que le impedía reaccionar, asustada y nerviosa; el Director mientras tanto procedió a tocarle la espalda, a masajearle el cuello y la espalda, luego se sentó nuevamente a la par de la víctima y rodeándola con un abrazo nuevamente, procedió incluso a besarme el cuello y la boca de la menor, acciones todas que se prolongaran durante unos cinco minutos; fue en ese estado que la víctima recibió una llamada de su madre en su teléfono móvil, que sorprendió al Director e hizo que éste se separara de la víctima, sacó de su inacción a ésta que procediendo a atender la llamada; impactada, asustada y nerviosa, contestó a su madre que no estaba sola, que el Director estaba con ella. Luego preguntó al Director si podía retirarse y contestándole éste que sí, que solo apagara el aire acondicionado, aun turbada procedió a apagar el aparato, siendo que aun ese momento el Director aprovechó para lanzarle frases como “mamacita, estas bien linda”; la menor víctima se despidió perturbada y ya estando afuera del recinto de la Biblioteca, habló a su mamá que llegó a traerla, contándole todo lo que ocurrido; esta, que ya conocía los antecedentes del comportamiento del Director con su hija, reaccionó también asustada, por lo que sintiéndose sin claridad sobre qué hacer, llamaron a unos familiares, quienes sugirieron que denunciaran el hecho; efectivamente, al día siguiente, dieciocho de febrero, concurrieron a interponer la denuncia. E) ADECUACIÓN Y DETERMINACIÓN DE LA PENA La participación delincuencial del acusado MANUEL ANTONIO O. C., en el delito de ACOSO SEXUAL (art. 165 Pn.) en perjuicio de la víctima menor de edad de autos, se estableció en grado de autor; y a su favor no se ha determinado ninguna causa que le excluya de responsabilidad penal y por esa razón es procedente dictar sentencia condenatoria en su contra, considerando como pena justa y equivalente al daño al bien jurídico tutelado, la pena de TRES AÑOS DE PRISIÓN FORMAL . Para efecto de determinar la responsabilidad penal que para el caso de autos corresponde, el Tribunal, hace las consideraciones siguientes: A) Porque de acuerdo a lo dispuesto en el Art. 165 Pn., se concluye que la pena que corresponde al delito de ACOSO SEXUAL es de TRES AÑOS A SEIS AÑOS DE PRISIÓN FORMAL. B) Que de acuerdo a los Arts. 62, 63 y 65 Pn., a los autores se les debe aplicar la pena señalada para cada caso sin pasar de los limites mínimo y máximo establecido por la ley para cada delito; y además se deben apreciar las circunstancias siguientes: 1) La extensión del daño y del peligro efectivo provocados, que para el caso se estableció que los abusos más significativos ocurrieron únicamente un día, el veintisiete de febrero de dos mil quince; 2) La calidad de los motivos que impulsaron al hecho, que no se estableció ninguno fuera de los propios de la naturaleza del delito establecido; 3) La mayor o menor comprensión del carácter ilícito del hecho, sobre lo que se supo que ciertamente el enjuiciado era una persona con educación superior; 4) Las circunstancias que rodearon al hecho y, en especial, las económicas, sociales y culturales del autor, sobre las cuales se estableció que era el Director de la institución donde ocurrió el hecho; 5) Las circunstancias atenuantes y agravantes, cuando la ley no las considere como elementos del delito o como circunstancias especiales, que para el caso puede considerarse que el encausado mostró su colaboración con el esclarecimiento del caso durante la vista pública, al confesar los hechos. Por todo lo anterior, haciendo un balance considerando de las circunstancias ya descritas, este Tribunal considera que la pena que se adecua al presente caso y en atención al principio de necesidad que regula el art. 5 Pn., debe establecerse en el mínimo señalado para el delito. En consecuencia, este Tribunal encuentra justo imponer a MANUEL ANTONIO O. C., de las generales antes expresadas, una pena de TRES AÑOS DE PRISIÓN FORMAL por su responsabilidad en el delito de ACOSO SEXUAL , previsto y sancionado en el Art. 165 Pn., en perjuicio de la menor de edad víctima de autos, representada legalmente por la señora [...]. F) RESPONSABILIDAD CIVIL Con relación a la responsabilidad civil, éste Tribunal para este caso considera procedente condenar al acusado por daños psicológicos y morales, porque es de considerar que la víctima menor de edad de autos le ha causado una fuerte afectación a su estado emocional, haber sido objeto del delito de ACOSO SEXUAL, en tanto que fue sometido a una situación moral y psicológicamente de afectación intensa, al punto de ser concebible que la menor ameritaría tratamiento psicológico especializado, para equilibrar su estado emocional. Por ello la suscrita Jueza considera que sería de justicia que se indemnice a la víctima menor de edad de autos, por los daños y perjuicios de orden moral y psicológicos que se le ocasionaron a raíz del delito de ACOSO SEXUAL (art. 165 Pn.); ello a efecto de que ésta con el poder liberatorio del dinero, se procure acciones buenas. Este Tribunal advierte que no obstante que la Fiscalía solicitó un pronunciamiento al respecto, pero en el caso en particular, no se presentó evidencia para sustentar tal petición en los planos de lucro cesante (de modo suficiente) y por los daños psicológicos y morales de las víctimas; es decir, no se contó con los oportunos, suficientes y necesarios elementos de juicio para determinar la afectación causada a la víctima menor de edad de autos, considerando la naturaleza del delito, en los planos materiales, morales y psicológicos, por lo que se considera procedente declarar EN ABSTRACTO responsable civilmente al enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C., derivado del delito de ACOSO SEXUAL (Art. 165 Pn.), en perjuicio de la menor víctima de autos, representada legalmente por la señora [...]. V. FALLO. POR LO TANTO , con base en las consideraciones anteriores y a los artículos 2, 11, 12, 13, 14, 15, 27 inc. 2, 172 y 181 de la Constitución de la República; 1, 2, 3, 4, 5, 17, 32, 33, 45, 46, 47, 51, 58, 63, 65, 114, 115, 116, 165 del Código Penal; 1, 2, 4, 8, 9, 10, 13, 14, 15, 17, 18, 53 Nº 3, 130, 162, del 324 al 332, 336, del 338 al 342, del 345 al 354, del 356 al 359, 360, 443 , 448, 449 y 450; y 43 de la Ley Penitenciaria; SEGÚN LO PRESCRIBEN LOS ARTÍCULOS 356 Y 357 DEL CÓDIGO PROCESAL PENAL DEROGADO, EN NOMBRE DE LA REPÚBLICA DE , LA SUSCRITA JUEZA DE SENTENCIA FALLA: 1. DECLÁRASE a MANUEL ANTONIO O. C., de las generales referidas al inicio de esta sentencia, PENALMENTE RESPONSABLE de la comisión del delito de ACOSO SEXUAL , tipificado y sancionado en el Art. 165 Pn., en perjuicio de la víctima menor de edad de autos; en consecuencia, CONDÉNASE a MANUEL ANTONIO O. C. a la pena de TRES AÑOS DE PRISIÓN FORMAL . Asimismo se le condena por igual período de la condena total impuesta, a la pena accesoria de inhabilitación absoluta en lo que se refiere a la pérdida de los derechos de ciudadano y a la capacidad para obtener toda clase de cargo o empleo público. 2. DECLÁRASE a MANUEL ANTONIO O. C., CIVILMENTE RESPONSABLE EN ABSTRACTO de la comisión del delito de ACOSO SEXUAL , tipificado y sancionado en el art. 165 Pn., en perjuicio de la víctima menor de edad de autos. En consecuencia, CONDÉNASELE a MANUEL ANTONIO O. C. a pagar el monto que determine el juzgado civil competente, en el respectivo proceso que le queda expedito iniciar a la víctima menor de edad de autos; a ese respecto, extiéndasele oportunamente certificación de la presente sentencia, a través de su representante legal. 3. DECLÁRASE a MANUEL ANTONIO O. C., de las generales referidas al inicio de esta sentencia, ABSUELTO de toda RESPONSABILIDAD PENAL Y CIVIL por el delito de OTRAS AGRESIONES SEXUALES , tipificado y sancionado en el Art. 160 Pn., en perjuicio de la víctima menor de edad de autos. VI. SUSPENSIÓN CONDICIONAL DE LA EJECUCIÓN DE LA PENA. Que en la presente sentencia este Tribunal condenó al enjuiciado MANUEL ANTONIO O. C., a la pena de TRES AÑOS de prisión, al declararlo penalmente responsable como autor directo del delito de ACOSO SEXUAL , previsto y sancionado en el artículo 165 Pn., en perjuicio de la víctima menor de edad de autos. Que según el artículo 77 Pn., en los casos de pena de prisión que no exceda de tres años y en defecto de las formas sustitutivas señaladas en el artículo 74 del mismo Código, el Tribunal podrá otorgar motivadamente la suspensión condicional de la ejecución de la pena dejando en suspenso su cumplimiento por un período de prueba de dos a cinco años, atendiendo las circunstancias personales del condenado, las del hecho y la duración de la pena; y que esta decisión se fundamentará en lo innecesario o inconveniente de la pena de prisión y de cualquiera de las que la reemplace; y que el beneficiado haya cancelado las obligaciones civiles provenientes del hecho determinada en la sentencia, garantice satisfactoriamente su cumplimiento o demuestre su absoluta incapacidad de pagar. Que con base en lo establecido en el artículo 399 del Código Procesal Penal, es competencia de este Tribunal resolver en la sentencia condenatoria sobre la procedencia de la suspensión condicional de la ejecución de la pena de prisión impuesta y las obligaciones que deberá cumplir el condenado. Que en el caso concreto, este Tribunal considera que no es conveniente reemplazar o sustituir la pena de prisión impuesta al condenado por las previstas en el artículo 74 Pn.; pero sí es procedente dejar en suspenso el cumplimiento de la pena por un período de prueba de tres años; esto atendiendo a lo inconveniente que resulta para su resocialización la imposición de una pena corta de prisión, así como las circunstancias personales del condenado, en tanto que se trata de persona mayor, sobre la que no se probó que tenga antecedentes penales. Que en esta sentencia la responsabilidad civil del beneficiado, derivada del delito por el que se le condenó, si bien no fue declarada extinguida, se le ha condenado en abstracto, considerando que resulta razonable que el condenado pueda efectivamente realizar los pagos que eventualmente se deriven, por lo que esta circunstancia no se constituye en un impedimento para que pueda otorgársele el beneficio. Que con el objeto de propiciar el proceso de reinserción social del condenado MANUEL ANTONIO O. C., este Tribunal considera necesario y conveniente otorgarle el beneficio de la suspensión condicional de la ejecución de la pena, el cual quedará sujeto a ciertas obligaciones verificables, que deberá cumplir durante el período de prueba, tal como lo regula el artículo 77 Pn. EN CONSECUENCIA , con base en las consideraciones anteriores y a las disposiciones citadas, este Tribunal de Sentencia RESUELVE: SUSPÉNDASELE CONDICIONALMENTE LA EJECUCIÓN DE LA PENA a MANUEL ANTONIO O. C., de generales ya dichas, la pena impuesta de TRES AÑOS DE PRISIÓN FORMAL , y cumplir con las siguientes condiciones: a) No salir del país; b) Evitar todo contacto o acercamiento con la víctima y con el grupo familiar de ésta, sea directamente o por interpósita persona, evitando asimismo toda clase de comunicación con la víctima y su grupo familiar, sea de forma verbal, para verbal, escrita, o por cualquier otro medio, incluyendo los electrónicos, sea directamente o por interpósita persona; c) No cambiar del lugar en que reside actualmente, salvo con autorización debidamente calificada por el juzgado competente; d) Presentarse al Juzgado de Vigilancia Penitenciaria y Ejecución de la Pena con sede en San Vicente, cada tres meses y cada vez que tal autoridad lo requiera; e) Cumplir fielmente con el pago de la responsabilidad civil una vez que ésta se determine, de lo cual se dará cuenta al Juzgado de Vigilancia Penitenciaria y de Ejecución de la Pena de San Vicente. El incumplimiento de las condiciones anteriores, la comisión de un nuevo delito o la sustracción del beneficiario a la vigilancia a que será sometido de parte del funcionario competente, permitirá ha dicho Juzgado revocar el beneficio concedido y ordenar la ejecución inmediata de la pena impuesta o aplicar cualquier otra de las opciones previstas en el art. 79 Pn. La suspensión condicional de la ejecución de la pena y las condiciones impuestas al condenado MANUEL ANTONIO O. C., serán controladas por el Juez de Vigilancia Penitenciaria y de Ejecución de la Pena con sede en San Vicente. No existen objetos puestos a disposición de este Tribunal, respecto de los cuales este Tribunal deba pronunciarse sobre su devolución, comiso o destrucción (art. 500 Pr.Pn.). Una vez firme esta sentencia certifíquese al Juez de Vigilancia Penitenciaria y Ejecución de la Pena de San Vicente, a la Dirección General de Migración y Extranjería, a la Unidad de Registro y Control Penitenciario de la Dirección General de Centros Penales y al Tribunal Supremo Electoral. ARCHÍVESE oportunamente este expediente. NOTIFÍQUESE esta sentencia a las partes mediante su lectura integral y entrégueseles una copia de la misma.-