TEOFILO JAIME JOSE MARIA LE GUILLOU (1790 - 1843) GOBERNADOR MILITAR Y POLITICO DE LA ISLA ESPAÑOLA DE VIEQUES 1832 - 1843

Don Teófilo Jaime José María Le Guillou es conocido en la historia viequense como el "fundador" del pueblo. Fue Gobernador Militar y Político de la Isla Española de Vieques de 1832 hasta su muerte en 1843. Estableció la primera importante hacienda azucarera, la Patience, y fue dueño de varias otras propiedades: las estancias “La Reussite”, “Puerto Santo”, “La Chere”, y “La Palma”. En 1839 era el principal amo de la isla con más de ochenta esclavos.

El profesor viequense, Benjamín Rivera, (UPR) encontró en los archivos parroquiales del pueblo natal de Le Guillou - Quemperle, Francia - el acta de bautismo del "Fundador", que establece su nacimiento el día 4 de mayo de 1790. Un documento preparado y firmado por Le Guillou el 15 de septiembre de 1840, informa que el Gobernador de Vieques reconoció como hija natural suya a Adele, nacida el 6 de abril de ese año a Adeline, esclava del francés. En el mismo ordenó a sus hijos legítmos, Constant y Teophile, a amar y proteger a Adele como hermana suya.

Otro documento del Registro de Gobierno de Vieques nos informa de otro hijo de Adeline y Le Guillou:

“Declaro haber dado la libertad a Sansón Soto, hijo de mi esclava Adeline, nacido el 16 de febrero último. Ordeno que se alimente y que se aloje en mi hacienda, “Patience”, hasta la edad de 18 años. A esta edad se le mandará a Francia donde se le colocará en colegio y donde recibirá una pensión de 1500 francos anual. Al cumplir los veintiún años recibirá 2000 francos para la compra de ropa y una pensión de 500 francos adicionales hasta que viva. Así es mi deber y mi voluntad. (Firmado por Le Guillou, 10 marzo de 1843)

La esposa legítima de Don Teófilo Le Guillou, doña Guillermina Ana Susana Poncet de la Grave, natural de Francia, murió en Vieques a la edad de sesenta y cuatro años el 4 de julio de 1855.

Don Teófilo J.J. María Le Guillou es una figura significativa en el desarrollo histórico de Vieques. Es importante, sin embargo, no exagerar la importancia de los individuos en los procesos históricos. Son los grupos humanos - esclavos, jornaleros, pescadores, obreros de las centrales, etc. - las masas trabajadoras los actores principales en la historia. El sacrificio y sudor de los esclavos de Le Guillou, por ejemplo, crearon por su amo (a son del látigo) una impresionante

riqueza y un gran poder político en el Vieques del siglo pasado.

(Notas sobre Teófilo JJ María Le Guillou tomadas de, Así empezó Vieques, del Dr. Antonio Rivera Martínez (UPR, Río Piedras. 1963)

...no se tiene constancia de que se naturalizase como ciudadano español, al final va a perder su influencia por creérsele un francés aventurero. En una isla que había sido escondrijo de piratas, malhechores, e insurgentes, labra una Hacienda en la cual disponía de 17 peones, 26 esclavos, 20 bueyes, y 25 cabras dentro de un predio de terreno que abarcaba 70 cuerdas cultivables. Escribió mucho, siempre en francés. Redactó peticiones en nombres de los terratenientes; y propuso planes de administración que posteriormente sirvieron de base para la regimentación de Vieques. Si fabricó fantasmas que iban a caer sobre la isla, siempre los justificó con noticias que le enviaban sus amigos desde diversas fuentes antillanas; pues su servicio de inteligencia poseía una ubicuidad asombrosa.

El 1º de mayo de 1823 llegó (...) a Vieques (...) el Bergantín ombrado "Cadelan", de porte de 14 cañones, al mando de su Capitán Don Teófilo Jaime José María Le Guillou. Le Guillou, el cual había perdido sus bienes en 1821 en la invasión de la parte española de Santo Domingo por los esclavos insurgentes de la parte francesa, y el cual hizo conocimeinto bien pronto con el Comandante Roselló que se constituyó a bordo del Bergantín. El Capitán Le guillou venía a Vieques con el objeto de comprar maderas. El Comandante le fué bastante útil por las noticias que le dió del modo de tratar con los cortadores de maderas. Le Guillou visitó la isla, y le agradó bastante. El Comandante le dió conocimiento de los ladrones de bestias de Puerto Rico, los contrabandistas, los receladores de toda suerte de robos, sobre los que se hacína en San Thomas; entre otros, los de esclavas negritas y mulatitas que se llevaban bajo pretexto de transportalas a Santo Domingo, y luego las depositaban en Vieques para de allí traerlas a Puerto Rico; sobre los piratas de Vieques de los cuales uno de los Capitanes era una linda negrita llamada María la Mota. El Capitán Le Guillou se propuso establecerse en Vieques, y determinó hacer la guerra a estos piratas, purgando la isla de todos los malhechores que la infestaban. El Comandante pidió su beneplácito al Exmo. Sr. Capitán General Don Miguel de La Torre, que se la concedió al instante. Le Guillou cargó su buque, dejando provisiones al Comandante, y dió la vela para Guadalupe, de la cual volvió al princiipio de Mayo, con doble tripulación. Compró una posesión de un cortador nombrado Patricio Ramos, que se habia refugiado en Vieques con el depravado objeto de

asesinar en un momento de frenesí a toda una familia. Le Guillou, observando el sistema de los piratas, de los receladores, de los ladrones de bestias y esclavos, que tomaban el título de contrabandistas, cargó de nuevo y se volvió a la Guadalupe. Allí compró un Pailebot de pirmera marcha nombrado "La Tethis", la puso en buen orden, y tomó en San Bartolomé en lugar de la tripulación del bergantín y Pailebot, 20 pícaros que armó bien, y se volvió con ellos a Vieqweus para principiar el ataque de los piratas. El caurtel general fué instalado en la posesión que Le Guillou había comprado. El Comandante estaba allí casi siempre. Le Guillou le hizo respetar de todos aquellos malcontentos, y le suminstró una guardia para seguridad de su persona. (...) El orden ya principiaba a establecerse, pero todo permanecía aún en alarma. El Comandanta cayó enfermo, y se vió precisado a trasladarse a Fajardo al lado de un h ijo, permaneciendo algunos meses con él hasta su merte que acaeció en el año 1827.

El Señor Coronel Don Ramón Aboy, Comandante del 8º Departamento de Puerto Rico, y , teniendo noticias de los servicios prestados por Le Guillou, le nombró Comandante interino, lo que causó el último golpe a los piratas y ladrones, que feron aprehendidos y arrojados por él de la isla. El herman del Comandante Don Juan Roselló, Don Francisco, que tenía el comercio de maderas en el sitio llamado Río Bana (sic) hizo una petición al Exmo. Sr. Capitán General Don Miguel de la Torres, fundándola en sus muchos y buenos servicios, en vista de lo cual dicho Señor le expidió el nombramiento de Comandante Civil y Militar. Como Don Francisco no podía leer ni escribir bien, el Capitán Le Guillou le ayudaba voluntariamente haciendo el servicio militar, y las funciones de Juez, pues que los habitantes en 1828 hablaban muchos idiomas. El Señor Coronel Don Ramón Aboy, habiendo recibido una Comisión del Capitán General para pasar a Vieques a fin de repartir las tierras a los habitantes en proporción a los medios que tuviesen para cultivarlas, y proceder a la formación de una Compañía de Milicias Urbanas, fué elegido Le Guillou por unanimidad Capitán de ella; Don José Moyano, Subteniente de Milicias Disciplinadas, fué nombrado 2º Comandante. Pero estos señores no se llevaban bien. Moyano pidió volver a Puerto Rico, y le fué concedido. El Capitán Le Guillou hacía las funciones de Teniente a Guerra para lo cual se hallaba autorizado. Este era aconsejado y dirigido por el Señor Coronel Don Ramón Aboy, que le concedió su amistad, y Le Guillou ha tenido la dicha de conservarla siempre. Don Francisco Roselló tenía una pequeña llaga en una pierna, cual habiendo mirado con bastante descuido se le volvió maligna, le entraron gusanos, viniendo por sin la gangrena a conducirlo al sepulcro en el año de 1832. Por las buenas recomendaciones que el Señor Coronel Don Ramón Aboy había hecho al Señor Capitán del Teniente a Guerra y Capitán Le Guillou, mereció éste que le nombrase Comandante Civil y Militar, y en recompensa de haber purgado la isla de los piratas y malhechores que la

infestaban fué promovido al Grado de Mayor Jefe Principal de la Milicia, y Gobernador Político y Militar".

(...) Le Guillou (...) sometió su "Plan para la Administración de Vieques" el 15 de Diciembre de 1828, cuando solo era un "hacendado afortunado". Ese plan o "Proyecto de Colonización" mereció un análisis favorable de parte del gobierno en Madrid; pues en él Le Guillou aseguraba que "sin que sea a cargo de la Metrópoli, ni de Puerto Rico, 10 años bastarán para formar de Vieques una linda Colonia". Le Guillou proponía "que se envíe allí a un Comandante primero, y un segundo Comandante, un Cura, un Capitán, y un Teniente de Milicias; que se forme un Consejo Colonial del cual será presidente el primer Comandante, vicepresidente el Cura, Consejero el segundo Comandante, el Capitán, y el Teniente de Milicias; y Jurados 7 de las personas acreditadas de la isla. Que para pago de esta Administración u fomento de la isla sirvan los derechos que paguen los buques". Esas rentas se dividirían en sextas y octavas para los sueldos del Comandante, del Secretario, el Cura; y todavía quedaban fondos para auxilio de los pobres, y la construcción de la Iglesia, dos fuertes pequeños, los caminos, y atender a los gastos de Milicia. Igualmente se proveía que "todos los habitantes consagren al año para el bien común una Semana de sus fuerzas; que los delitos y señaladamente el robo sean castigados con doble pena que en Puerto Rico; que a los buques no se les exija mas que una tercera parte de lo que allí pagan por derechos; y finalmente que las mercancías, provisiones, y utensilios que se traigan a la isla no paguen derecho alguno por espacio de 10 años".

En dicho plan se dictaminaba que "los perezosos y los que no quieran trabajar serán despedidos de la Colonia". Asegurando que Vieques tenía víveres para el doble de su población, Le Guillou recomendaba conveniente admitir a los que de las islas vecinas estaban solicitando terrenos; mientras que al gobernador de Puerto Rico le escribía que "V.E. puede enviar 50 personas de ambos sexos que sean perjudiciales en esa, que se repartirán con los habitantes hasta que puedan proporicionarse los medios de trabajar por cuenta propia".

(Descripción de Le Guillou incluida en documento descriptivo de la situación de Vieques para fines de 1839 por el gobernador de Puerto Rico, Don Miguel López de Baños)

"...Francés de toda confianza llamado Don Teófilo José María Le Guillou; cuyo sujeto es activo, valiente, y firmemente adherido al Gobierno Españo, sin que tenga otro carácter militar que el de Jefe, o de las Milicias Urbanas de aquella isla."

En 1840, don Miguel López de Baños recomendó que "por los muchos y

singulares servicios que ha prestado a la España en el largo período de 12 años que hace desempeña aquel penoso destino, el que ha servido siempre a satisfacción de todos sus antecesores...debiéndose a dicho Le Guillou exclusivamente todo el fomento y prosperidad de Vieques, así como su conservación a la España, por lo cual no puedo menos de suplicar se le recompense, a cuyo fin propone y solicita en favor del mismo el grado y consideración de Primer Comandante de Milicias Disciplinadas de aqella Isla, que es el premio a que le considero acreedor". Esa solicitud fué transferida al Secretario de Guerra, quien en Abril 24 de 1841 informó haber concedido a Le Guillou el grado de Teniente Coronel, que es el correspondiente a Primer Comandante de las Milicias Disciplinadas en Puerto Rico.

(info. sobre familia, nacimiento, etc. de Benjamín Rivera; documento de defunción; documento de defunción de la esposa; documentos de reconocimiento de partesco con Adeline y Sansón, hijos de la esclava Adele, propiedad de Le Guillou.)

Documento de defunción de Doña Guillermina Ana Susana Poncet de la Grave, viuda de Le Guillou:

Folio 164 #799

"En esta parroquia de la Inmaculada Concepción y Apostol Santiago de Ysabel 2ª de Vieques, a los cuatro de Julio de mil ochocientos cincuenta y cinco, yo el Prbo. D. Pedro Leon Garcol, cura economio de ella, dí sepultura ecca al cadáver de Dª Guillermina Ana Susana Poncet de la Grave viuda de D. Teofilo Santiago José María Le Guillou natural de Francia; murió ayer en la edad de sesenta y cuatro años se administró, doy fé = P.L. Garcol

(Entº doble)

Natural de Francia Murió el 4 de julio de 1855 (Le Guillou murió en julio de 1843; nacido 4 mayo 1790) A la edad de 64