I.o 396 I qgp 1—fago] Wallace Reid u Gloria S u n n E N é Lros bureaos cíe Anatolio » Al hablar de esta pareja del cinema, presentada en el film de las doce estrellas, habría que gastar todos los vocablos admira­ tivos, porque no es frecuente verlos juntos a los dos grandes y felices artistas de la «Paramount . Una labor, inspirada en un Año I propósito de arte superior es desenvuelta con inteligencia y su­ mo acierto por los dos artistas centrales de *Los Enredos de A n a to lio». Todos los personajes actúan en episodios de la histo­ ria, y solo Wallace Reid y Gloria Swanson aparecen en la pan­ talla en el curso de todo el film. Es un matrimonio entre seres N.° 11 de temperamento distinto. Ella, es una esposa apasionada, anhe­ lante de atenciones y de afectos. Están en la «luna de miel», y es justo que florezca en el alma de la mujer el rosal de las más bellas ilusiones, de los deseos más dulces. El. es un joven cán­ dido y atolondrado. Cree que el mundo femenino no tiene doblez y se lanza a la ingrata misión de redimir a las irredimibles Evas, y lo que cosecha no son precisamente flores. Su esposa, en tan­ to queda abandonada y en peligro de ser atraída al abismo de la infidelidad. La obra, con sus altas cualidades, con sus situaciones bien planteadas, brinda ocasión a esta pareja para demostrar lo mu­ |c ® 3 l= f ^ 1 cho que Valen en la escena muda. Montevideo, 2.a quincena de Julio 1922 Administrador: Juan May Julio Herrera y Obes 1480 “ HI Pin del mundo ” Por primera vez se nos brinda opor­ un temperamento artístico que sabe re­ tunidad de admirar a Betty Compson, gistrar con el mismo encanto la pasión ejecutando el rol estelar de una película dominante o el medio tono de una de la marca Paramount. Y a fé que emoción dulce y embriagadora. Bastaría su «debut» en la categoría de estrella, su talentosa interpretación para salvar el "Betty Compson m the Pa.ramou.nL Picture »At the End.of the "World* no pudo haber resultado más feliz y más buen éxito de esta película, si no fuera merecedor de encomio o admiración. que en «Al fin del mundo», hay valores En el papel de una mujer que allá en de sobra para lograr un triunfo completo un cafetucho de Shangai, ciudad en la y resonante. Y uno de los más firmes que se confunden todas las razas y es puntales de la obra, es la labor de los lugar propicio a la inmoralidad y a la tres grandes intérpretes que colaboran en aventura, electriza a los hombres con el la película: Milton Sills, Mitchell Lewis y influjo de su belleza honda y sugestiva, Carson Ferguson. Un destino común une la emotiva Intérprete evidencia poseer las vidas de los tres personajes que esos actores in- terpret an. Los tres han sido -victi­ mas del he­ chizo mági­ co de una mujerde be­ lleza diabó­ lica que se divierte en destrozar corazones. Y los tres van a buscar ali­ vio a la so­ ledad, en un faro miste­ rioso y dis­ tante, al fin del mundo. El uno, que es novelis­ ta, a vaciar en un libro la amargu­ ra que re­ bosa en su alma; a pa­ sear su locu­ ra, el otro, junto a las rocas inconmovibles en que se estrellan las olas bravias perennemente; a purgar en la soledad un delito que cometió en nom­ bre del amor, el tercero. Tiene un fuerte sabor dramático esta película. Su trama, vigorosamente concebida por el escritor Ernest Klein, pone un estremecimiento de emoción en los nervios. Las escenas fina­ les, en las que impera una atmósfera de locura y de muerte, se aclaran y dulcifican poco a poco, y traen una solución optimis­ ta y reconfortadora: el amor. «Al fin del mundo» es una admirable combinación de valores cinematográficos, valores de inter­ pretación, de argumento, de técnica, de di­ rección. Esta última, que ha sido ejecutada por el célebre director Penrhyn Stanlaws, es sencillamente perfecta. Ni por asomo una incorrección o una falla. Presto se en- trevee la mano maestra de un hombre du­ cho en toda clase de recursos teatrales, que sabe sacar el máximo provecho de ca­ da situación. »Al fin del mundo» es una película que nadie debe dejar de contem­ plar, ya que significa uno de los pasos más seguros que ha dado hasta el presen­ te la cinematografía norteamericana. La empresa Max Glucksmann que no es­ catima sacrificio a fin de ofrecer al público los mejores programas hasta el presente Betty Gompson and. Milton Sills presentados, sumará a su haber de resonan­ in a. scene from the Paramount Picture tes éxitos logrados esta temporada, uno <CAt the End o f the U/orld' más y bien significativo con el estreno de esta película a todas luces extraordinaria. GLORIA SWANSON 'Sia -^ y En toda su avasallante belleza, su fasci na n te mirada, pre­ sen ta mo s aquí a la mujer más extraordina­ ria que tie­ ne la cine- matrografía a me rica na : GLORIA SWANSON. En el film Los Enre­ dos de Ana- tolio», que Max Glucks- mann pre­ senta el 10 de Agosto, aparece en nuestro cie­ lo la gran estrella , y tiene en esa obra el pa­ pel más sim­ pático: una Gloria Swanson starring m QaramouniQictureSs- esposa , en los días lu­ minosos de la «luna de miel». Esta pri- cional de los últimos días, es en !a obra mera presentación de Gloria, ha de <La Jaula Dorada». Trátase de un film causar el más extraordinario fervor ad­ de la vida de teatro que tiene muchos, mirativo por la gran artista. puntos de contacto con «Candilejas», por su argumento, aunque no por su Su segunda aparición será en otro técnica. film magnífico, tanto por su argumento novedoso y original como por la labor Este film está dirigido por S a m Wo artística del escenarista: los paisajes de od el director favorito de Gloria Swan­ imponderable belleza, los muebles de son. El escenarista ha hecho algo mara­ lineas nuevas y los aposentos amplios villoso y se llama Elmer Harris. El ar­ dispuestos modernamente de acuerdo gumento, brinda un tema de interés con los gustos más avanzados y exigen­ para el cine, porque es muy movido y tes en tal género. Gloria Swanson, pro­ amplio. Todos los misterios del teatro tagonista de >El Instante Supremo», aparecen allí como son realmente Ya presenta los trajes más ricos que hasta es la audacia de un empresario que a ahora han aparecido en la pantalla. costa de gastos extraordinarios hace pa­ Aquello, es la apoteosis real de la rique­ sar a una muchacha pobre al rol de ar­ za. El rol de G'oria, en esta obra es el tista rusa con un escabroso pasado don­ de una mujer de ascendencia gitana, de las imaginarias aventuras abundan que lleva en su sangre la llama viva y ya es la combinación del empresario con enloquecedora de las nómadas de Orien­ inescrupulosos millonarios y que quiere te, su pasión ardiente. también financiar los sentimientos ínti­ mos, el afecto y el amor de la bella mu­ En Norte América, su aparición sensa­ chacha convertida en gran artista. MONROE ISEN * El Cerro está donde estaba, a pesar que metido por Isen, no se ha producido con mo­ vino a Montevideo el caballero de la alegre tivo de su venida. Puede ser que llegue más figura: don Monroe Isen. tarde. El vapor de la carrera lo ha traído. No El caballero Isen, quizás nos va a asom­ llegó en aeroplano, ni siquiera en un vapor brar con su sistema de negocios. Según bu­ especialmente fletado, como sus gustos aris­ nios en una revista porteña, pondrá casa en tocráticos lo imponían y nosotros esperába­ Montevideo. mos. Sucursal, para el alquiler de sus films. El gremio de cinematografistas, no ha he­ Nosotros no nos dimos cuenta de que ha­ cho objeto de un homenaje al señor Isen, y bía entre nosotros un gran hombre, el finan­ ni siquiera le ha brindado la ocasión de que cista cinematográfico más financista que pu­ él pudiera ofrecernos un baile y banquete do haber habido, hay o habrá en el mundo. fabuloso como el que tiene prometido en Bue­ Ningún síntoma de alarma, de inquietud o nos Aires al gremio porteño, para el mes de de asombro, hubo en el gremio cinematográ­ Octubre. Y, eso es una injusticia. Un hom­ fico que nos delatara la presencia del gran bre como el señor Isen, merecía un poco más hombre, con ser el gremio dado a soñar con de atención que cualquier hijo de vecino. Al los Mesías, con los profetas, con los hom­ fin de cuentas, es nada más y nada menos, bres salvadores. que el genio de la cinematografía desde la El reinado de las siete vacas gordas, pro­ era de Noé y su arca hasta nuestros días. Las películas en series más notables LA CASA MAX GLUCKSMANN OFRECE A LOS CINEMATOGRAFISTAS DE CAMPAÑA LOS SIGUIENTES FILMS EN SERIES La Ciudad Perdida. — Una notable y ma­ nuevos artistas audaces en sus proezas, ver­ ravillosa producción en series de la marea daderos héroes de la pantalla: Julio Bruns y Selig. Desfilan por la pantalla todas las fieras Renée Fagaan. que habitan las profundas selvas africanas. La Dueña del Mundo. — (May Film.) — Suceden, en los quince episodios que tiene TJna película de grandes valores artísticos. esta obra, las más extraordinarias aventuras.