Revista de Estudios Sociales ISSN: 0123-885X [email protected] Universidad de Los Andes Colombia Greiff, Pablo de Drogas, soberanía nacional y legitimidad democrática Revista de Estudios Sociales, núm. 8, enero, 2001, p. 0 Universidad de Los Andes Bogotá, Colombia Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=81500804 Cómo citar el artículo Número completo Sistema de Información Científica Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto DROGAS, SOBERANÍA NACIONAL Y o transformar radicalmente el orden legal LEGITIMIDAD DEMOCRÁTICA * responsable de la creación de incentivos económicos virtualmente irresistibles en el negocio Pablo de Greiff** de las drogas. En contraste con los otros autores en este volumen, ¿Es justa la política de Estados unidos? estoy interesado en la cuestión de la justicia de la política antinarcóticos de los Estados Unidos desde El curso del debate actual sobre la equidad de la una perspectiva internacional. La mayoría de los política de los Estados Unidos sobre las drogas ensayos precedentes examina si esa política es suministra pocas razones para pensar que la justa para los ciudadanos dentro de una sociedad cuestión de justicia puede ser decidida apelando liberal particular, es decir, la de los Estados Unidos. sólo a consideraciones concernientes a la El enfoque de mi ensayo es más bien el de si la distribución equitativa de las cargas y los política estadunidense sobre las drogas es justa beneficios. Por años, este debate ha estado para aquellos cuyas vidas son afectadas por la marcado por infructuosas recriminaciones más que legislación antidrogas de los Estados Unidos más por pensamientos claros. Los representantes de allá de las fronteras de ese país. Uno de los diferentes gobiernos estadunidenses han insistido propósitos de este ensayo es el de articular y repetidamente, en contra de las leyes elementales justificar el reclamo de que esa política no es justa del modelo clásico del mercado libre, que por lo para los países productores de drogas. En la demás en otras cosas no sólo han defendido sino primera parte de este ensayo, tomo nota de que también han tratado de imponer, que la algunas de las dificultades asociadas a los intentos demanda estadunidense de drogas está en función de justificar este reclamo por medio de la noción de su disponibilidad, de la cual los miembros de los ordinaria de justicia, lo que implica examinar la países productores son los principales distribución de las cargas y los beneficios. Por responsables. Un tardío (y muy insignificante) consiguiente, de aquí paso a una discusión teórica reconocimiento de una parte de la responsabilidad para fijar el fundamento de mi tesis. En la segunda estadunidense en el problema de las drogas ha parte, argumento que uno puede hacer uso de la hecho poco para calmar las reservas versión de Habermas acerca de la relación entre latinoamericanas respecto a la posición de los moral y ley para argüir en favor de una concepción Estados Unidos; fue sólo en 1991, durante la de legitimidad democrática que muestra por qué la Cumbre sobre Drogas de Cartagena, cuando los política de los Estados Unidos no es equitativa. En Estados Unidos finalmente firmaron un documento la tercera parte, me muevo del ideal normativo a la en el cual se reconoce que la demanda, y no sólo realidad empírica mediante el examen de tres la oferta, alienta el negocio de las drogas. Sin posiciones que pueden defenderse con base en las embargo, este reconocimiento no ha tenido premisas habermasianas. Primero, señalo la clase consecuencias, porque no ha llevado a cambios de estructuras cosmopolitas democráticas que apreciables en las estrategias o en la composición satisfarían los requisitos morales y legales del presupuesto antidrogas de los Estados Unidos. expuestos detalladamente por Habermas. Luego, Desde 1989 hasta 1993, la parte destinada a la considero la formación de jurisdicciones reducción de la oferta compromete entre 65% y internacionales para crímenes como el tráfico de 70% de los presupuestos anuales cada vez más drogas como una posibilidad más inmediata que la elevados. Bill Clinton, quien durante su campaña construcción de un orden democrático mundial. Sin enfatizó la reducción de la demanda, como embargo, al final argumento que en el corto plazo, y presidente ha hecho poco para cambiar el enfoque en ausencia de la clase de instituciones que de la guerra contra las drogas: los presupuestos de garantizarían la equidad de las dos posiciones 1994 y 1995 dedican de 62% a 64% de los gastos acabadas de mencionar, deberíamos desmantelar de programas de reducción de oferta1 el argumento central es uno que todavía merece consideración. *El presente ensayo, escrito en 1995, hace parte de una Agradezco a Francisco Leal y a Germán Rey la honrosa colección titulada Drugs and the Limits of Liberalism (Ithaca: invitación a participar en el presente número de la Revista de Cornell Unversity Press, 1999), de la cual tuve el gusto de ser Estudios Sociales. compilador. Una edición ampliada de esta colección, aparecerá **Laurance S. Rockefeller Fellow Center for Human Values este año, bajo el título Moralidad, legalidad y drogas (México: Princeton UniversityMi gratitud a mis colegas del Departamento Fondo de Cultura Económica, 2000). Esta última tuve el gusto de Filosofía en SUNY Buffalo, Newton Garver, Jorge Gracia, aún más grande de compilar junto con mi padre, Gustavo de Carolyn Korsmayer y Barry Smith. Andreas Follesdal, Thomas Greiff. El artículo se reproduce aquí, con la amable autorización McCarthy, Thomas Pogge y Jason Adsit también leyeron este de ambas editoriales. A pesar de que algunos hechos han ensayo y me dieron sugerencias valiosas. También estoy cambiado (auncuando no los fundamentales) y de que he vuelto, agradecido con los participantes en la conferencia que originó con más detenimiento sobre algunos aspectos del presente los ensayos que se publican en este libro, especialmente con argumento, (ver, por ejemplo mi ensayo "Habermas on William Connolly, Donald Moon y Thomas Pogge, por sus Nationalism and Cosmopolitanism" que aparecerá en ratio Juris) importantes comentarios y desafíos. La insistencia de los Estados Unidos en sostener la relativamente bajos.4 Los traficantes colombianos y existencia de una excepción al esquema los productores no están en el negocio por la gracia económico explicativo clásico, de acuerdo con el de un mercado interno; ellos están en el negocio a cual es la demanda la que crea la oferta y no lo consecuencia de un mercado internacional cuya contrario, es parcialmente responsable de las ansiedad por las drogas es capaz de generar quejas de Latinoamérica acerca de la política ganancias de miles de millones de dólares. estadunidense sobre las drogas. Estas reservas Lo que es más importante, y está más cerca también surgen de la convicción de que los países de la tesis de esta sección, es que los colombianos productores han sido culpados por un problema sienten que no sólo el negocio no es que no es "suyo". Los latinoamericanos creen esto primordialmente suyo, sino también --legítimamente en dos sentidos diferentes: ellos no ocasionaron el desde mi perspectiva- que han tenido que pagar problema, y en segundo lugar, ellos no consumen una parte inequitativa de la carga de combatirlo. La el producto. Primero, aun cuando la coca y la guerra contra las drogas ha generado niveles de marihuana se habían cultivado en Latinoamérica violencia que han llegado a extremos intolerables. por siglos, no hubo un comercio internacional de La violencia ha estado dirigida tanto a blancos estas sustancias hasta cuando los traficantes oficiales como privados; no existe ninguna rama del estadunidenses se involucraron en el negocio. El gobierno colombiano que no haya sufrido comercio colombiano de la droga, en el cual tribulaciones en la lucha contra las drogas. concentraré la atención en este capítulo, solamente Miembros de la legislatura, más de 70 jueces y tres comenzó a finales de los años setenta como una candidatos a la presidencia, incluyendo a Luis instancia más del fenómeno del "se aprieta aquí, se Carlos Galán, quien era el candidato con mayor infla allá"; a saber: de la mera transferencia de la probabilidad de ganar la elección en 1989, han sido producción de la droga de un país a otro,2 cuando asesinados por razones que tuvieron que ver con el los comerciantes estadunidenses se movieron a las negocio de las drogas. Sin embargo, más allá de costas caribeñas colombianas como consecuencia las víctimas políticas están las 11 000 vidas del éxito de los Estados Unidos al forzar a los sacrificadas por la violencia relacionada con las gobiernos mexicanos a fumigar los campos de 3 drogas sólo en 1990. En los primeros ocho meses cultivo de marihuana con el defoliante Paraquat. El de 1995, 15 000 personas fueron asesinadas en el sentimiento colombiano de que el problema, 5 país, y aun cuando no toda la violencia estaba estrictamente hablando, no es suyo, está fundado relacionada con las drogas, nadie duda que el también sobre la circunstancia de que los niveles negocio de las drogas la ha exacerbado. internos de consumo se han mantenido Febrero de 1992, reunión de los presidentes de los Estados 1La distribución de los presupuestos antidrogas ha variado de Unidos, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador y México, y el ministro año en año como sigue (el primer porcentaje se refiere al de Relaciones Exteriores de Venezuela. Véase Tokatlián, "Col- presupuesto para la reducción de la oferta y el segundo al E.U.", p. 12. 2 presupuesto para la reducción de la demanda): 1989: 71.2% y Para un extenso estudio sobre este fenómeno, véase Ethan 25.2%; 1990: 69.9% y 26.6%; 1991: 67.90% y 28%; 1992: 68.6% Nadelmann, Cops across Borders: The Intemationalization of y 27.2%.