EL TIEMPO PARA SANTIAGO EDICION DE 24 PAGINAS Temperatura de ajer. Majoma, tío* Mínima, 12 grados re rtp o deti- Año XIV Núm. 4,771 ProbaJlda/if' par. La- pejaao Leve descenso alrededor L A N A C I O N temperatura máxima grados- |rt>DADO EL 14 DE ENERO DE 1917 ------------------------------ ------------------- ____________ es p r o p , t im o m . K _______________ cíe 29 grados, y la f IV^sesta í la» »•** Sol.— Sale a las 5.41. ('hUe. EN TODO EL PAIS: 30 CENTAVOS s.'xtlígo pe l h ii.e, jleves « de febrero de m u AGUSTINAS 1269 — CASILLA 81-D Oficina Meteoroioslca de * nur E-Nie ,1',lll° J leyenda de un castillo inglés construido* ,[ La curiosidad___ ___ a #i Soberamdel Soberano el cual morau bondadosos co- ' 1 I razones, vivirá dos veces lo que miden sus 1 d“ P" v por ouí croo» Ruó t. | murallas. coiKrprüo'a Jlvo »«»'•" 7 “1« .: M la guerra ni las luchas lutoítliias — "Vuestra Majestad, leed la in« i,o harán caer. pero, como un gato que juega con en el siglo XVII cripetón que hu# soore ¡ * [una rata, del castillo, estampada al I el a g i n demonio rojo con fiera gallardía que comenzó la l»laf ? >ro A Recorrerá sus majestuosos salones. Como en uno de los últimos meses del año pasado se cumplió la profecía de un hermitaño, quien dijo que Luí último por un P<*r? vi*J r® u quien se le dló hosoUaHdad «° ia Estos elngulares versos, . descu- worth tendría solamente trescientos veinte años de vida y que un "demonio rojo se pasearía por sus mansión y lo sabréis’. _ blertos recientemente n viejo volumen, han vcaldo a arrojar luz majestuosos salones” Kl real slalt.inte alzó ■“ J‘*¡* . n el misterioso Incendio que en áLmSSáo°pÜÍ' 5n 1609 ? hacia ''l punto Indi* ado^y «obrt I* uno de los últimos meres del año Este mismo espíritu dominaba en gran puerta principal del caatíuo oa6ado destruyó el histórico casti­ P3r. r . ~ ' f ¿ ‘ü f i 'í . a i b -. 1 e¡ cástüfo allá por la época en que. pudo Icér lo siguiente: llo de Lulworth. en el Condado de digámoslo asi. íué oficialmente abler- ! **fci ie cubrirá ron *u plumaj« Doreet. Inglaterra. i to en 1609. T era también legenda- ; rio qi e el mismo espíritu protegía y bajó sus nln» «leu tara Tu Escritos originariamente en el año flan/a; su serdail sera Tu escudo 1065. estos versos profetizaban la ¡ al castillo y sus caritativos morado- i res. v Tú adarga No debes temer *1 devastación de una histórica man­ terror j»or las not’hesf ni a la tris­ sión que había sido ¿1 alojamiento [ Tal vse nunca la superstición tu- I vo más auge en Inglaterra que du- teza en el día. ni n! dem onio ffn » lempo.-,l üe siete Reye. de Ingle- vendai m en tr™ i ;7¿'S m I° e S ,a°h,°elS m di j rant» la cual gran cantidad «le se pasea en la obscuridad: " J * historia real ‘ "S!V<np.-. desde W09. „ ü . liermo- ¡ D¿' , cadáveres de personas muertas por muerte qué aparece a mediodía la horrenda plaga eran enterrados f» mansión campestre había d esa - rece que la con^-o^-ión Trn Miles caerán a Tú la<lo. v dl«w n a l ftado orgullosa a los elementos y al castillo el *n0 u « " n ‘, “ en enormes agujeros cavados en las a Tú mano derecha : pero nada tr tltmpo. V he aquí que hace solí- ¡ ‘-o, Conde dé C ’ .- . afuera* cíe Ladres. Día a día mo­ sucederá a tí Sólo con tus ojos mente unos pocos meses, llamas d? 1 rían cisníoa, tai ves miles de per- son»*;. Casas enteras quedaban solí- podrá* ob*rrsnr y ser la recompets- misterioso origen envolvieron total- { ~j que espera a ú>< malyados- T*or- mente la maciza estructura, sin embargo, la construcción podría ha­ qur h.-s hecho de Dios, m íe es mi ber sido salvada, pues los volun‘a- refugio, aun el »le los más podern­ rlcs del cuerpo de bomberos de la os. Tó morad1»” cercana ciudad acudieron a tiempo ' Después que él Rey hubo leído y trabajaron entusiastamente. ■Aquello, se volvió al ermitaño y Pero algo trágico y curioso ocu­ Ic dijo: rrió. En el momento culminante —“¿lis del Verbo de Dios". ^ del acontecimiento, el agua se ago- ¡ — “ Del Salmo P f.o de D avid” tó v las brigadas de bomberos tu­ vieron que cruzarse de brazos \ contestó el ana<*oreta. Kñtonces •» contemplar Impotentes el a\ance del Monarca ordenó que s» le permitie­ fuego. Y mientras tanto, el propio- ' ra 1a entrada al ermitaño y él íarlo del castillo, Herbert Weld. fa- ¡ imblén pasó la puerta del casti­ nioso yatc-hman y viajero británico, llo. miraba silencioso y tranquilo cómo I T aquella noche hubo una gran su suntuosa residencia del Conda­ , fiesta, una fiesta de acción de g r a ­ do era consumida por el elemento. | dan y de bienvenida al Rey. Por unas semanas se creyó que el castillo podría ser renovado. Pero ; cuando ella huoo tocado a su tér­ ol mayordomo de él y de todcs los I mino. el Soberano habló y otroa terrenos que lo rodean, tuvo qu- ambién hablaron. Entoncez John* convencerse definitivamente que e' ! ¡ d ermitaño, explicó la profesía.. edificio Jamás podría ser rccons- 1 Dijo que “este castillo de justos, íiruido. Encontró que las murallas •n el cual moran bondadosos oora- estaban a punto do derrumbarfe. jonea. vivirá dos veces lo que m i­ Aun los viejos y sólidos muros de tón sus murallas’' . plstíra. en los cuales estaban las es­ Nadie comprendió aquello. Ef caleras de acceso a los nisos suoe- ..gníflcado de las palabras del er­ rlor.es, se habían derrumbado. Las chimeneas habían desaparecido. II?- mita fio no fué adivinado por per- *la. salvo la terraza que rodeaba la ; r.a alguna, tal vez. hasta que Ta base del edificio, quedaba. ■ ase de la profesía fué descuoier- El castillo y su curiosa suerte pu­ a réelentem ente. dieran haber sido olvidados si no Kn vista de la tradición de bon-* hubiera sido por ciertos estudiantes lad y de caridad que prevaled* da las curiosidades antiguas de In­ acc-rca del astillo. la catástrofe qu^ glaterra. Hurgoneando entro' viejos io hizo desaparecer el ario pasado r .chivos, ellos encontraron un raro marees muy misteriosa y hasta v antiguo volumen, en el cual esta­ irónica. El fuego fué descubierto ban registradas la historia y curio­ sidades del Condado de Dorset, Este ñor una doncella. Las llamas h i- volumen contenía muchas referen­ ; cioron irrupción en una pequeña ha cias al castillo que nos ocupa. ’•ilación que quedaba al lado del Los estudiantes se asombraron, de pabellón que ocupada la servidum­ cnoontrar en el libro la historia bre. en <*l cuarto piso. La brigada completa del castillo v la suerte que de bomberos do Dorchester llegó él correría con el tlenioo.. La -le­ »Tontamente al luga- del suceso yenda hablaba de un .ermitaño, al y luego se le unieron otras de las cual se le concedió permiso para demás ciudades cercanas. En un* entre r a la mansión en la época en hora de rudo trabajo, las llama* oye el Rev Carlos.II se hallaba Mo- ‘-•lo en él. Entonces el anacoreta ..asi estaban ya extinguidas. S* '-'no la poética profecía que ha sido la-i habla reducido a dos piezas. á’ -rnclucida al comienzo de esta r •- Repentinamente, el agua, que s* aba sacando de cuatro pozos cercanos, sé agotó. Eu fuego es­ talló nuevamente con renovad* ruria y se extendió con gran rapi­ dez por todo el castillo. El histó­ rico dormitorio del Rey, que er* de un valor inestimable, quedó to­ talmente destruido. Taplcertas y. efectos particulares (le los miem­ bros de la lamilla Weld fueron re­ ducidos a cenizas. Las n^rdida»- aicanzan a un millón doscientas m j m cincuenta mil libras esterlinas. L>os hombres sufrieron graves quemadura* mientra* trataban ds salvar de la voracidad de las lla­ mas las riquezas de la mansión „ Todo el amoblado de Mr. Weld* que había sido vendido y que sir nuevo propietario no lo había lle­ vado aún a su residencia, fué tam ­ lina vista a vuelo de pájaro de las ruinas del histórico castillo de Lulworth. rcpenluiamen bién destruido. Los scouts y lo.** te destruido por un misterioso incendio. Cuando ya el fuego iba a ser totalmente apagado, el f bomberos, sin embargo, pudieron, água se concluyó de súbito y los bomberos tuvic ron que presenciar impotentes el avance del ele­ salvar del siniestro muchaa cosas mento destructor. le dló todo el lujo que tenía hasta ’ El castillo era notablemente lamo- j de valor, entre ellas muchas pie­ Ilerbcrt Weld, descen­ zas de va jilla de oro que un tiem ­ e¡ momento en que ocurrió la con- do no porque hubiera estado aso- diente de una antigua la ­ )ílagraclón que lo hizo desaparecer, ciado a hechos de guerra o Intrigas po usaran los Reyes que se habían mina, Inglesa, actual pro­ refugiado en el castillo. j Los Weld llenen lo que s9 puede | sino por actos humanitarios y di [ pietario uel tastillo ae llamar un origen tradicional o de I piedad. Mientras otros castillos tie- J T durante todo esto. Mr. Weld* leyenda y uno histórico. Alicia, La- nen tras 6l una leyenda sanguinaria nulworlh. i*lr. Weld pre­ sencio estoicamente, silen­ descendiente de los antiguo, pro­ dy Lovat, en una obra suya acerca y de muerte.