Yuyarccuni Año I N° 1 Axel Sanchez FÚTBOL Y SOCIEDAD BRASILERA: MARACANAZO, IDENTIDAD VERDEAMARELA Y MINEIRAZO1 Axel Sánchez Fano2 Universidad Nacional Federico Villarreal Resumen El objetivo de este artículo es estudiar la conducta de la sociedad brasileña a partir de las fuentes históricas del deporte, luego de dos acontecimientos nefastos para la historia del balompié brasilero. Hablamos del “Maracanazo” de 1950, partido final del Campeonato Mundial de Fútbol organizado en Brasil, que enfrentó a los loca- les con la selección de Uruguay. Así mismo del “Mineirazo”, match por el mismo certamen en su vigésima edición organizado por segunda vez en el país amazónico en el 2014, que enfrentó en las semifinales a las selecciones de Brasil contra Ale- mania. Se analiza la formación de la identidad de la sociedad brasileña a través del fútbol, el jogo bonito, porque este deporte les dio éxitos durante los campeonatos de fútbol, luego de 1950, a partir de los títulos mundiales que consiguió la “Cana- rinha”. Palabras clave: Mundiales de Fútbol, Selección Brasilera, Fútbol, Maracanazo, Mineirazo, Identidad, Juego profundo, Representación. Abstract The aim of this paper is to study the behavior of Brazilian society from historical sources of sport, after two disastrous events in the history of Brazilian football. We speak of "Maracana" 1950, final match of the World Cup held in Brazil, which faced local with the selection of Uruguay. Also, the "Mineirazo" match for the same event in its twentieth edition organized for the second time in the Amazonian country in 2014, he faced in the semifinals the teams of Brazil against Germany. The identity formation of Brazilian society through football, the jogo bonito, because this sport is analyzed gave them success during the football champion- ships, after 1950, from the world titles he got the "Seleção". Keywords: World Cup, Brazilian Team, Football, Maracana, Mineirazo, Identity, deep play, Representation. 1 Artículo presentado para el curso de Historia Social dictado por el Mg. Frank Huamaní Paliza y para el curso de Historia de las Mentalidades dictada por el Lic. Juan Fuentes Sánchez. Presentado al I Seminario de la Red Chilena de los Estudios Sociales del Deporte realizado el 5 y 6 de agosto en la Universidad Católica de la Santísima Concepción en la Región del Bio Bio, Chile. 2 Estudiante de Historia de la Universidad Nacional Federico Villarreal. Ponente en eventos académicos a nivel nacional e internacional, participando en Chile y Brasil. Contacto: [email protected] 79 Yuyarccuni Año I N° 1 Axel Sanchez Introducción El fútbol como lo conocemos en la actualidad, surgió en Inglaterra a mediados del siglo XIX. Teniendo presencia económica, social y cultural en gran parte de Eu- ropa y América Latina, el país anglosajón fue la principal potencia económica mundial de aquella época. Dentro de este contexto, el “deporte rey” empezó a ex- pandirse por casi todo el mundo. Según Jaime Pulgar Vidal3, el análisis de este deporte tiene que partir desde su definición, como un deporte colectivo de confrontación, con una determinada cantidad de jugadores, en igualdad de condiciones, que se desenvuelven llevando un balón con los pies, el objetivo es introducirlos en un arco rectangular, esto se da en un terreno de juego con un rango de espacio, con un reglamento de juego a cumplir. El fútbol, dentro del contexto de fines del decimonónico e inicios del siglo XX, fue un deporte incorporado por la mayoría de los países sudamericanos como parte de un proyecto de modernización, desde “arriba” para alejar a la población urbana de los principales vicios que aquejaba a la sociedad (Muñoz; 2001), además servía para ejercitar a los hombres, hacerlos jugar colectivamente bajo los princi- pios burgueses de disciplina. Existen estudios psicoanalíticos del fútbol como, por ejemplo, el de Renzo Guerra, quien atribuye la unicidad de este deporte a partir de lo que significa el tránsito colectivo rumbo a su objetivo principal que es meter un “gol”. Ese mo- mento sublime de excitación por parte del individuo colectivo, porque, como se aprecia en deportes como el básquet, vóley o el rugby —deportes de confronta- ción— ese momento único se repite continuamente que casi no altera los ánimos grupales. De forma usual, en estos deportes se utiliza la mano que está a nuestro alcance; en cambio, para el balompié, se utilizan las extremidades inferiores, mo- vimientos corporales, tácticas e inteligencia colectiva, que implican una mayor di- ficultad. Además, el fútbol lo podemos interpretar como una guerra simbólica, de carácter pacífico, enfrentado a dos equipos grupales. Esto se puede llevar al ámbito de los partidos de futbol entre países, creando identidades dentro de la sociedad, a partir de una selección de once jugadores que representan a una nación. Por ejem- plo, para el caso de la final del Mundial de 1950, la pérdida del título de Brasil a manos de Uruguay, significó dentro de los asistentes que fueron al estadio, y los que estuvieron detrás de una radio u otro medio de comunicación, una gran trage- dia nacional, como se puede reflejar en los diarios de la época. La prensa expresaba que antes de jugar el partido, la selección brasileña ya era campeona del mundo; 3 Esta reflexión forma parte de la ponencia expuesta en el Fórum: “Historia de una Pasión: el fútbol en el Perú”, realizada el 26 de junio de 2014 en la Universidad Nacional Federico Villarreal. 80 Yuyarccuni Año I N° 1 Axel Sanchez por eso disputar el partido para los fanáticos solo era un acto de compromiso, sin embargo, Uruguay dio la gran sorpresa. Desde 1930, la Federación Internacional de Fútbol Asociación organiza el Campeonato Mundial de Fútbol. Cada cuatro años, se elige un país designado para albergar la máxima fiesta del balompié, captando la atención mayoritaria de la po- blación mundial a las multitudes. Dicho evento surgió como la independencia fut- bolística de las Olimpiadas, Jules Rimet, Presidente de la FIFA, entre 1921-1954, planteó realizar un torneo internacional entre los países exclusivamente del fútbol y designó a Uruguay que albergue el I Campeonato Mundial, dado que Rimet tenía una buena relación con los dirigentes uruguayos, además, Uruguay celebraba el Centenario de su Independencia, y su Selección de Fútbol se había adjudicado el bicampeonato olímpico.4 Podemos definir a los grandes eventos deportivos como “fenómenos que surgen en ocasiones no rutinarias y que tienen objetivos de ocio, culturales, perso- nales u organizativos establecidos de forma separada a la actividad normal diaria, cuya finalidad es ilustrar celebrar, entretener o retar la experiencia de un grupo de personas” (Shone, 2001, p.4). En la actualidad, los más esperados por casi todo el mundo, son los mundiales de fútbol y los Juegos Olímpicos, ambos realizándose cada cuatro años en un determinado país o ciudad que. Los medios de comunica- ción también influyen en la transmisión de estos acontecimientos deportivos, como por ejemplo: la radio, para el caso del Mundial de Brasil en el 50; los diarios y periódicos; y la televisión, que desde el Mundial de México 70 se transmitió a la mayoría de países por la vía satelital., Para los dos últimos mundiales5 influencio mucho las redes sociales que sirvieron como espacio de opinión pública de estos sucesos deportivos en la que se puede reflejar aspectos como; el apoyo hacia una selección, comentarios de un partido de futbol o la burla. “Final profunda” de Maracaná, el trauma de una sociedad futbolera, Rio de Janeiro – 1950 Para la organización del IV Campeonato Mundial de Fútbol, la FIFA designó a Brasil, por la coyuntura económica que atravesaba, para que albergase, dicho cer- tamen puesto que Europa, se encontraba en proceso de reconstrucción por los es- tragos que habían dejado la Segunda Guerra Mundial. Dentro de este simbólico ritual mundialista de fútbol, en Brasil se decidió construir el estadio más grande del planeta, para demostrar así el gran impulso económico brasileño al mundo, ese 4 París 1924 y Ámsterdam 1928. 81 Yuyarccuni Año I N° 1 Axel Sanchez estadio era el Maracaná, con respecto a los escenarios en Brasil, José Eduardo de Carvalho nos detalla: Había campos de fútbol en buenas condiciones de Sao Paulo (Pacaembú), Belo Horizonte (Independencia), y Porto Alegre (Eucaliptos) y, lo principal, el país cumpliría la promesa de inaugurar el mayor estadio del mundo en Rio de Janeiro, ya en construcción desde mediados de 1948. El Maracaná Estadio Mario Filho (en principio Estadio Municipal), se convirtió en la gran atracción del mundial en 1950, un coloso para 150 mil espectadores, construido en uno de los extremos del barrio de Tijuca. (Carvalho, 2014, p.115) El Mundial arrancó a fines de junio de 1950, cada vez que jugaba la selec- ción brasileña las calles de Rio se tornaban en una fiesta, y gran cantidad de perso- nas asistiría al Maracaná, rebalsando los límites de su capacidad, para alentar a su selección. El Scratch ganaría en su debut a México por cuatro a cero; empataría a dos con Suiza, en su único partico que jugo en Sao Paulo, y, finalmente derrotaría por dos a cero a la selección de Yugoslavia, para este mundial se había compuesto una canción publicitaria para identificarse con la selección, la siguiente canción expresaba, la alegría por albergar el mundial la cual fue muy importante la cons- trucción del Estadio Municipal de Maracaná, y el deseo por ver a la selección bra- silera campeón en su país: Viva, viva nuestro estadio, municipal en el campeonato mundial, viva nuestra bandera,
Details
-
File Typepdf
-
Upload Time-
-
Content LanguagesEnglish
-
Upload UserAnonymous/Not logged-in
-
File Pages21 Page
-
File Size-