Víctor de Currea-Lugo DE LA VIOLENCIA Y OTRAS COSTUMBRES Una mirada crítica a los años noventas desde el periodismo independiente (1990 – 1997) 1 De la violencia y otras costumbres © Víctor de Currea-Lugo Primera edición: Bogotá, abril de 1997 Edición electrónica: Bogotá, marzo de 2019 Fotografía de la cubierta: © Víctor de Currea-Lugo Bogotá, Colombia, 2016 ISBN: 958-9410-03-0 Todos los derechos reservados Hecho en Colombia 2 A Silvia Duzán y Julio Daniel Chaparro, periodistas. A Janeth, por el amor, A Javier y Eduardo, por la complicidad. “Ser colombiano es un acto de fe” J. L. Borges. 3 PRESENTACION "¿es el infierno? Es la vida moderna, señora" Fernando Savater Un amigo mío decía que el infierno debe ser como Colombia, pero en serio. Esto podría sonar ofensivo para muchos, pero para otros -entre los cuales me incluyo- es tan real como afirmar que en Colombia los santos sudan y les da pecueca. Muchas cosas serían sencillamente ridículas, simplemente folclóricas si a la vez no fueran trágicas. Desde las historias del General Maza en la época de la independencia frente a los españoles -una vez le ordenaron no derramar la sangre de sus prisioneros y entonces los ahogó- hasta la vida, pasión y muerte de Pablo Escobar son una sola tragicomedia. Habían pasado pocas horas de la explosión de un carro-bomba de 500 kilos de dinamita en toda la puerta de la policía secreta, cuando ya alguien había instalado una venta de vidrios en la esquina; cuando el Papa Paulo VI preguntó por Colombia, le dijeron que era un tierra de indios que se alimentaban de una raíz venenosa llamada yuca; tras la muerte de Escobar, muchos vecinos reconocieron haberlo visto en misa el domingo anterior y el escándalo de la fiesta con que celebró su cumpleaños un día antes y a la que asistieron decenas de personas; la vida de un colombiano vale alrededor de veinte mil pesos, que es el precio que cobraba un sicario a comienzos de la década; con los impuestos de la cerveza y el cigarrillo se paga la educación y la salud; en el visitado y religioso cerro de Monserrate encontraron 180 matas de amapola, cultivadas para extraer heroína; un campesino ante la pregunta de un periodista sobre la pena de muerte contestó: que la quiten; es todo tan posible que una campesina de Boyacá "en los campos" me advertía: "no hay que creer en brujas, pero que las habemos, las habemos". Un considerable porcentaje de muertes violentas en América Latina y en el mundo entero, las ponemos en este pedazo de tierra 4 que ha visto nacer héroes y villanos. Este es de los pocos países que pierde por balas asesinas varios precandidatos presidenciales en una misma campaña, casi treinta mil colombianos mueren sepultados por una avalancha volcánica que todo el país sabía que iba a ocurrir con varios meses de anticipación, cientos de miles de personas se buscan el sustento diario entre las canecas de la basura mientras los grupos de limpieza social los exterminan; cuando la Selección Colombia ganó 5-0 a la Argentina, los servicios de urgencias se llenaron de los heridos fruto de la celebración, éste es un país en donde la muerte perdió su seriedad o como dicen los santandereanos: acá lo matan a uno por ver hacer gestos. Tenemos el nada envidiable registro de 77.5 homicidios por cada cien mil habitantes, que nos convierte en el país más violento del mundo, triplicando al país que ocupa el segundo lugar. Los mismos funcionarios reconocen que la impunidad en el país es tan alta que la posibilidad de que alguien quede sin castigo, después de cometer un delito, es del orden de 97 por ciento. Hasta el Divino Niño Jesús parece comprometido en el Proceso 8.000, que vincula al narcotráfico al Procurador, al Contralor, a ocho gobernadores, deportistas, artistas, senadores, representantes a la cámara, al presidente de la Federación Colombiana de Futbol, al perro y al gato. Victor Carranza "convenció" a los japoneses de no invertir en las minas de Esmeralda de Boyacá con algunas emboscadas en las que iban "traductores japoneses". Los exguerrilleros de Cali, sin empleo, terminaron por juntarse con los expolicías retirados por corruptos y armaron bandas de atracadores. Entre 1994 y 1995 fueron asesinados alrededor de 260 obreros de la construcción que al parecer construyeron las caletas de los apartamentos y los edificios de los narcotraficantes del cartel de Cali. El Ministro de Defensa que cogió al cartel de Cali en dos meses, al mes siguiente fue detenido por su relación con la donación de dineros del narcotráfico a la anterior campaña presidencial de donde fue gerente. En los barrios populares de Medellín es común que una niña de quince años le hagan la "vaca muerta": violación por quince o 5 veinte muchachos del sector. Al futbolista de la Selección Colombia Andrés Escobar, le cobraron con seis tiros el autogol que hizo en el mundial de 1994. Al entierro de Pablo Escobar fueron cientos de personas que le gritaban "asesinos" al gobierno y que dieron categoría de héroe a Pablo. En Cali les encontraron una cámara hiperbárica, como la de Michael Jackson, a los Rodríguez Orejuela; y en Medellín, en la época de Pablo, hallaron un horno crematorio en una casa de familia. En Urabá las masacres se las turnan los paramilitares y la guerrilla y de 39 muertos al mes en 1994 pasaron a 75 por mes para 1995. Aunque Pablo Escobar está muerto, aunque ya -nuevamente- se pactó la paz entre esmeralderos, aunque ya no matan indigentes para dotar de cuerpos a las facultades de medicina, porque el grueso de las milicias se disolvió, porque legalizaron las invasiones; para este humilde servidor, en este país las cosas han pasado tan rápido y se han estancado tan hondo que las situaciones que propiciaron tantas muertes y tantas lágrimas siguen permanentes al punto que si volvieran a llamar a dar la bienvenida a la Selección Colombiana de fútbol después de ganarle a Argentina, a censurar a la señorita Amazonas que osó posar de reina siendo una mujer casada, a elegir gobernador al que de alcalde sacó a bailar a la miseria, a guardar silencio porque la paz es una prioridad nacional por encima del hambre y los partidos, a condenar homosexuales por ser "contra natura", a masacrar campesinos y argumentar que no sabían que "matar indios era delito", o si volviera a rifarse las masacres entre guerrilleros, paramilitares, militares y narcotraficantes, volvería a suceder lo mismo. No sólo nos limitamos a contar muertos, sino que los contamos mal y los llamamos N.N. Sabemos quién está detrás de cada masacre, sentimos la oleada de cada injusticia y guardamos respetuoso silencio frente a los asesinos. Como un culebrero sin culebra yo les voy a contar el cuento de unos viajes -otros los contarían más floridos, otros más trágicos- por algunos caminos de lo que no sé por qué llaman "el mejor vividero del mundo"; como encantador sin encantos, no traigo ni la pomada milagrosa, ni el 6 bálsamo contra la rabia, ni el rezo contra el mal de ojo: sólo traigo la huella de una mordida. Todo es tan difícil, tan polémico, tan complejo, que después de tantos análisis fríos sobre la sangre caliente, uno termina adherido a la propuesta de un borrachito para la salvación del país: "que el último cierre la puerta y apague la luz". Victor De Currea-Lugo Laguna de Tota, marzo 17 de 1997 7 INDICE VIAJE EN ZONA DE GUERRA……………………………..12 Barranca y Yondó (Magdalena Medio) (Octubre 1990) ¿POR QUE SE LA JUEGAN AL LADO NUESTRO?...............18 Milicias Populares de Medellín (Mayo de 1991) EN MI VIEJO SAN JUAN……………………………………25 El Hospital San Juan de Dios: Una visión desde adentro (Diciembre de 1991) ÑEROS DE TODAS LAS PELAMBRES, UNIOS……………31 La Calle del Cartucho (Abril de 1992) PABLO ESCOBAR Y LOS HEREDEROS DE WALT DISNEY…………………………………………..36 La salida de Escobar de su cárcel (Agosto de 1992) HISTORIA NO OFICIAL…………………………………….42 Ciudad Bolívar (Agosto 1992) SE AGRANDA LA BOMBA Y SE ACORTA LA MECHA…..49 Comuna Nororiental (Octubre de 1990 - agosto de 1992) "SI LOS RICOS NO PAGARAN, NO HABRIAN SICARIOS"…………………………..……….56 Entrevista a un pelao de Medellín (Septiembre de 1992) 8 NI ENFERMOS, NI ANTISOCIALES…………………….....64 Historia del Movimiento Homosexual (Noviembre de 1992) LA OTRA CARA DE CHAPINERO………………………….69 Barrios Nororientales de Bogotá (Diciembre de 1992) SOBREVIVIENDO ENTRE LAS BASURAS…………...……76 Los cartoneros de Barranquilla (Enero de 1993) DE COMANDANTE GUERRILLERO A DIRECTOR DE CARCEL………………………………….81 Historias asombrosas (Febrero de 1993) QUIEN ESTE LIBRE DE RETRASOS..........................................84 Aborto en Colombia (Marzo de 1993) LA CONQUISTA DEL OESTE (BOYACENSE)………….…89 Zona Esmeraldera (Junio de l993) ESTO ES UN ASALTO……………………………………….96 Piratería terrestre (Septiembre de 1993) ALBERGANDO ESPERANZAS……………………………100 Albergue de campesinos desplazados (Noviembre de 1993) LA OTRA BARRANCA……………………………………...105 Barrios Nororientales (Enero de 1994) 9 NO HAY CAMA PA TANTA GENTE……………………...110 Hospital de la Hortua (Febrero de 1994) EL INFIERNO DEBE SER COMO COLOMBIA, PERO EN SERIO……………………………………...……..116 (Marzo de 1994) TRES VERSIONES DE TACUEYO………………………...120 Ocho años después (Junio de 1994) DE LA VIOLENCIA Y OTROS MIERDEROS……………126 Colombia y los buses urbanos (Junio de 1994) COLOMBIA, REPUBLICA BANANA………………………132 Región de Urabá. (Agosto de 1995) NARCODEMOCRACIA PARA PRINCIPIANTES………...139 -como mi sobrino Andrey- (Enero de 1.996) SIEMBRA COCA Y TE SACARAN LOS OJOS……………146 Marchas de cocaleros. (Agosto - octubre, 1996) POR FIN... LA REFORMA AGRARIA……………………...154 Apunta de desplazamientos por paramilitares. (Agosto de 1996) CUANDO A NUESTROS HIJOS SE LOS LLEVO LA GUERRILLA……………………………158 El drama de las madres de los soldados retenidos.
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