Retrato de Agustín I, Emperador Constitucional de México — Primitivo Miranda Pharus Academiæ

«Retrato de Agustín I, Emperador Constitucional de México, de Primitivo Miranda»

El cuadro presentado en nuestra portada, Agustín de Iturbide por Pri- mitivo Miranda, pintado en óleo sobre tela en 1865, se encuentra en la Expo- sición temporal: Amanecer de una nación en el Castillo de Chapultepec, en la Sala 6, junto con un óleo sobre tela de Leona Vicario, de autor desconocido del siglo xix; otro óleo sobre tela de José María Morelos y Pavón, pintado por «El Mixtequito» en 1812; un facsímil de los Sentimientos de la Nación de José María Morelos y Pavón; un estatua en madera tallada y policromada de la Virgen de los Dolores, obra de Laureano Montañez quien la realizó en 1813 y finalmente un Estandarte de la Virgen de Guadalupe, en óleo y acuarela sobre tela de algodón. Es oportuno recordar que la pintura mexicana del siglo xix, estuvo influi- da grandemente por el neoclasisismo que le dio un sentido moderno, a pesar de la influencia del academicismo de la Real Academia de la Tres Bellas Artes de San Carlos fundada por decreto de Carlos III. Una vez consumada la Independencia nacional y a la caída del efímero Imperio Mejicano de Agustín de Iturbide, los pintores de la Academia dejaron de producir el registro visual de lo que ocurría en esos turbulentos años. Prácticamente todas las escenas que glorifican la Independencia y el pri- mer imperio y plasman los hechos del momento, fueron realizaciones de arte- sanos, por lo que la mayor parte de cuadros fueron obra de pintores anónimos que no tenían ni por pienso, la calidad de los academicistas Así es que vemos que los grandes acontecimientos, como la entrada del Ejército Trigarante a la capital, la jura de la Independencia, la proclamación de Iturbide como emperador y su coronación son obritas de un estilo que po- dríamos calificar de «naive» totalmente alejadas de la estética académica. Esos artesanos fueron los que dejaron evidencia de personajes y momentos históricos y sus obras, son apenas pálidos reflejos de la realidad aunque algu- nos logran mostrar gran fuerza expresiva como son los cuadros del generalí- simo Morelos y de Doña Ana Huarte de Iturbide, esposa de Don Agustín y los pocos del poco emperador que han sobrevivido a casi dos siglos de incuria y olvido, desde que la política lo excluyó del santoral patrio. El cuadro que presentamos en nuestra portada fue pintado en 1865 por el pintor neoclásico y escultor, Primitivo Miranda, que fue alumno de la Aca- demia de San Carlos y en el año de 1844, fue becado por para perfeccionar su arte en Roma. El 23 de enero de 1850 aparece como firmante de un recibo por 150 pesos, producto de la venta de su cuadro La virgen con el niño. También es conocido por las litografías que diseñó para el famoso El Libro Rojo de Vicente Riva Palacio y Guerrero y Manuel Payno impreso en 1870 por Díaz de León y White. Otras obras atribuidas a «el liberal» Primitivo Miranda, son las primeras las primeras dos estatuas del Paseo de la Reforma, la de Leandro Valle y la del escritor Ignacio Ramírez, «El Nigromante», develadas el 5 de febrero de 1899 en Reforma esquina con Bucareli en la capital del país. La crítica fue impla- cable con Miranda, a quien le decían «el sastre», porque no ponía arrugas en la ropa. Otras obras de Miranda son: Tropas republicanas en una Venta del camino de Puebla de 1858, un cuadro alusivo a la batalla del 5 de mayo de 1862, de 1863, y una República Mexicana con símbolos masónicos.

Diciembre 2011 09 Año v

Directorio / Contenido

Rector vi Prólogo C.P. David Gómez Fuentes

Vicerector académico 12 Agustín de Iturbide, mitos y verdades: Dr. Alejandro Montano ¿Autor o consumador de la independencia? ¿Héroe? ¿Traidor? ¿Víctima? Comité editorial Emilio lamadrid

José Villaseñor 36 El Texto Líquido Ernesto Peña Alonso Alberto Bazaldúa 44 Quelación de Cadmio mediante esencia de clavo de Enrico Martínez olor «syzygium aromaticum» (Eugenol), y su aplicación en el tratamiento de residuos sólidos peligrosos con Emilio Lamadrid contenido de Cadmio Marisol Martínez Hernández Francisco Gámez 55 La Religión desde el Conocimiento Diseño Ivette Chang Bencomo Ernesto Peña 61 Gestión del Conocimiento Formación Francisco Solís Solano Alejandra Sánchez Salas (ldg 80.) 67 La Escatología de la Postmodernidad Revisión y corrección de estilo José Luis Villaseñor Martín Castillo 79 La Valentía: de Platón en nuestros días Juan Carlos Rendón Aguilar

81 Ensayo sobre el Amor Ernesto Sosa Díaz

Pharus Academiæ, Revista de divulgación e in- vestigación del Instituto de Estudios Superiores de Tamaulipas. Número 9, año v. Este número se terminó de editar en diciembre de 2011, el tiraje total de esta edición es de 1 000 copias. Reserva de derechos: 04-2008-062316205000-102 Pharus Academiæ

Prólogo

Uno de los más notables fenómenos de los últimos años, ha sido la renovada controversia acerca del papel del Papa Pio XII en la Segunda Guerra Mundial, especialmente en su actitud ante el esfuerzo de Adolf Hitler que llevó al holo- causto, en el que murieron 6,000.000 de judíos. Eugenio Pacelli ha sido some- tido a la crítica pública llegando incluso hasta el vilipendio por su presunta falta por no haber hablado contra Hitler para prevenir el Holocausto, que in- cluso lleva a sus vilipendiadores a acusarlo de «simpatizante de los Nazis» o un nefando «antisemita». La gran calumnia contra Pío XII está de moda y ha sido tantas veces repe- tida que es ya aceptada por muchos como una verdad irrefutable. Con estas mentiras, se quiere desprestigiar a Pío XII y de este modo desprestigiar el papado. En 1999 el periodista John Cornwell creó un escándalo internacional con la publicación del «best seller» Hitler’s Pope, El Papa de Hitler. Los últimos años han visto la publicación de ocho libros más relativos a la presunta «indolencia» de Pío XII durante el Holocausto. Ha habido también algunos defensores, pero sus detractores son los que han recibido mayor co- bertura mediática, mientras que los libros de estudiosos católicos como: el abogado norteamericano, Ronald J. Rychlack; el jesuita francés, Pierre Blet; la monja italo-norteamericana, Margherita Marchione y el filósofo norteame- ricano, Ralph McInerny, apenas si han recibido un par de líneas en la prensa internacional. Por el contrario, los libros Hitler’s Pope, del periodista y escritor John Cor- nwell; Papal Sin del también periodista y escritor Garry Wills y Constantine’s Sword de James Carroll se convirtieron el grandes éxitos, generando enorme discusión y debate. El ataque de Susan Zucotti contra el papa Pacelli con su libro Under His Very Windows: The Vatican and the Holocaust in Italy recibió también gran atención de los medios. No solo se ha renovado la controversia sobre Pio XII, sino que se ha ex- tendido a otros papas a quienes se califica como «antisemitas», ampliándose incluso el apelativo a toda la Iglesia. Diciembre 2011 09 Año iv

Es evidente que durante la segunda guerra mundial y judíos. Hitler nunca respondió a esa carta con palabras. el Holocausto, Pio XII tuvo que lidiar con un crecimiento Lo que hizo fue desatar una campaña brutal de depor- repentino del mal en el mundo que lo obligó a tomar deci- tación en Holanda en la que miles de católicos y judíos siones críticas. Tuvo que determinar si una buena acción murieron, incluyendo la monja Edith Stein y Anna Frank. (como por ejemplo lanzarse a discursar en contra de las La Iglesia europea entendió el «mensaje» de Hitler. atrocidades) eliminaría la maldad o causaría peores pro- Mientras tanto, dentro de Roma y por toda Europa, blemas. los conventos y monasterios abrían sus puertas para es- Al principio de la Segunda Guerra Mundial, la prime- conder miles de judíos. En Roma, cientos de judíos eran ra encíclica de Pio XII resultó ser tan claramente anti- alimentados diariamente por el Vaticano durante la ocu- nazi que la Real Fuerza Aérea Británica y la Fuerza Aérea pación alemana de Italia. El Vaticano rescató a muchos Francesa dejaron caer 88.000 copias sobre Alemania. de ellos por medio del pago de rescates en oro. Como Esto jamás hubiera sucedido si el Papa hubiera sido un testimonio de esos actos bien documentados, tenemos el aliado secreto de Hitler. ejemplo del Gran Rabino de Roma, Eugenio Zolli (nacido La historiadora católica Margherita Marchione re- como Israel Zoller.) El 5 de julio de 1944, el Rabí Zoller fue porta que durante una audiencia privada con el Cardenal recibido por Pio XII. En notas tomadas por el Secretario Paolo Dezza en diciembre de 1942, Pio XII mencionó su de Estado Vaticano, Giovanni Battista Montini (quien lle- frustración con algunos que lo presionaban para hablar garía al papado como Paulo VI) se muestra que el rabino de las atrocidades nazis. Aquellas personas no entendían agradeció al Santo Padre por todo lo que hizo para salvar que los nazis estaban esperando escuchar la más ligera a la comunidad judía de Roma. Su agradecimiento fue reacción del Vaticano para golpear aún más fuerte. transmitido por radio. La manera de operar de la Santa Sede siempre se ha El 13 de febrero de 1945, el rabino Zolli fue bautizado caracterizado por su prudencia, por ejemplo durante por Monseñor Luigi Traglia, el Obispo Auxiliar de Roma, la Revolución Bolchevique en Rusia. Los nazis eran un en la iglesia de Santa María degli Angeli. En agradeci- nuevo enemigo con tácticas similares a las de los bolche- miento a Pio XII, Zolli tomó el nombre de Eugenio. viques. Por supuesto, el Papa no podía ni siquiera men- La historia del vilipendio de Pacelli se inició con una cionar el esfuerzo secreto que estaba haciendo por sacar obra de teatro titulada El Vicario de un joven dramaturgo tantos judíos como fuera posible de los territorios ocupa- alemán, Rolf Hochhuth, estrenada en Berlín en febrero de dos por los nazis. Tuvo que llamarse a silencio para evitar 1963 que inició la controversia al presentar a Pio XII como que pasara algo peor. un colaborador del Nazismo, y condenarlo de «cobardía Es preciso recordar la sangrienta represalia que ocu- moral» por el presunto «silencio culpable» ante uno de rrió, cuando el 20 de julio de 1942 se leyó en todas las los más monstruosos crímenes de la historia humana, Iglesias de Holanda una carta pastoral de los Obispos de cuando su voz como líder moral y como cabeza de la Igle- aquel país condenando enérgicamente el trato dado a los sia Católica posiblemente habría evitado, o —al decir de Pharus Academiæ

algunos— dificultado los planes de los Nazis para lograr En 2007, el ex general rumano Ion Mihai Pacepa reveló la «Solución Final» (Endlösung) al «Problema Judío» en que El Vicario fue el fruto de un plan de desacreditación Europa. ordenado por Nikita Khrushchev y pergeñado por la kgb A pesar de que la obra El Vicario era una puesta en es- en 1960, y al igual que 60 años antes se publicaron Los cena ficticia y altamente polémica, que ofrecía muy poca protocolos de los sabios de Sion, El Vicario tuvo como ob- o ninguna evidencia histórica para su alegato contra Pío jetivo minar la autoridad moral del Vaticano y su influen- XII, fue aclamada por la crítica de muchos países, incluso cia en Occidente. México. De hecho, es inspirador de una nueva generación La obra de Hochhuth encendió la controversia pública de periodistas e intelectuales revisionistas, que preten- que continúa en nuestros días. den desacreditar los bien documentados esfuerzos de En 2002 la obra teatral fue llevada al cine por Costa Pacelli para salvar judíos durante el Holocausto. Gavras, que la tituló Amén, tomándola de la expresión Esta denuncia contra Pio XII, recibió amplia publici- hebrea que significa «así sea». dad con el éxito comercial del libro de Cornwell, que lo Libros como A Question of Judgment (1963) del Dr. acusa de ser el «el eclesiástico más peligroso de la his- Joseph Lichten, en respuesta a El Vicario, defienden la toria moderna», sin el cual, «Hitler nunca hubiera po- conducta de Pío xii durante la guerra. Lichten afirma que dido… llevar a cabo el Holocausto». Aunque este es un cualquier crítica a las acciones del Papa durante la Se- juicio lleno de rencor, otros autores han concurrido con gunda Guerra Mundial es una «sorprendente paradoja» él, como es el caso de otros detractores recientes como y que «nadie que conozca el historial de las acciones de Wills y Zucotti. Pío XII a favor de los judíos puede suscribir las acusacio- Más aún, en sus persistentes esfuerzos por vilipendiar nes de Hochhuth». Hannah Arendt también comentó la a Pacelli y calumniar su memoria, sus detractores igno- obra (y la reacción pública ante ella) en su ensayo de 1964 ran el estudio del teólogo y diplomático israelí, Pinchas The Deputy: Guilt by Silence? («El vicario: Culpable por su Lapide, judío ortodoxo, que en su amplio y profundo es- silencio?») tudio que documenta claramente el papel principal del Ante el ruido provocado por El Vicario, Pablo VI res- Papa Pío XII en el rescate y cobijo de judíos durante el pondió abriendo los archivos secretos del Vaticano y Holocausto. En la preparación de este estudio, titulado pidiendo a cuatro jesuitas, entre ellos el padre Blet, que Tres Papas y los Judíos y publicado en 1967, Lapidas habló hicieran pública toda la documentación publicable. con muchos sobrevivientes del Holocausto que debían En un artículo aparecido en la revista jesuita Civiltà sus vidas a la intervención de Pío XII y que les dio la base Cattolica, de Pierre Blet, el único superviviente del equipo empírica de su gratitud. Lapidas concluye que Pío XII sal- que recogió en doce volúmenes las Actas y Documentos vó a no menos de 700,000 y posiblemente hasta 860,000 de la Santa Sede relativos a la segunda guerra mundial. judíos de una muerte cierta a manos de los Nazis. una imponente obra documental en la que se publican Diciembre 2011 09 Año iv

todos los documentos de la Santa Sede en ese candente del Papa a favor del pueblo judío. Cuando las ss exigieron período, a excepción de aquellos que afectan a cuestiones a las comunidades judías de Roma que les entregaran 50 íntimas de personas en vida. kilos de oro, el gran rabino de Roma se dirigió al Papa El padre Blet hace una interesante constatación. Has- para pedirle su colaboración con 15 kilos. «Pío XII dio ta antes de 1963 todos los protagonistas de aquel período, inmediatamente orden a sus oficinas para que hicieran en especial, los exponentes de la comunidad judía, reco- lo necesario para conseguir esa cantidad», asegura Blet. nocieron la labor realizada por Pío XII en favor del pueblo Gestos como éste llenan los doce volúmenes de la judío. Declaraban que el «silencio» del Papa se debía a su obra. Y dado que la Santa Sede no se podía permitir el conocimiento del nazismo (había sido nuncio en Alema- lujo de ocultar documentos que en muchas ocasiones ya nia y recibía constantes informes de las nunciaturas de se encontraban en el «Foreign Office» de Londres o en el los países europeos): hablar contra las purgas de Hitler «Département d’Etat» de París, la colección es histórica- hubiera supuesto provocar la ira del Führer y condenar mente completa. El jesuita asegura que cuando llegue el instantáneamente a muerte a todo aquel que tuviera san- momento establecido de abrir totalmente los archivos gre hebrea. Blet cita en su artículo algunos testimonios del Vaticano de esa época, muchos quedarán decepcio- representativos de la labor realizada por Eugenio Pacelli. nados, pues toda la información importante de aquel pe- «El mundo —declaró el presidente Eisenhower— ahora ríodo ya ha sido publicada. es más pobre después de la muerte del Papa Pío XII». Y El padre Blet concluye asegurando que las críticas Golda Meir, ministro de Asuntos Exteriores del Estado contra Pío XII no son de carácter histórico o científico, de Israel: «La vida de nuestro tiempo ha sido enriquecida sino que constituyen una auténtica «leyenda, construida por una voz que expresaba las grandes verdades morales con elementos disparatados y con gran trabajo de ima- por encima del tumulto de los conflictos cotidianos. No- ginación». Aunque no lo menciona explícitamente, se re- sotros lloramos a un gran servidor de la paz». fiere a la obra teatro que en 1963 hizo estallar el «caso» Sin embargo, a partir de 1963 comenzó a elaborarse Pío XII. Se trata de El Vicario, escrita por el alemán Rolf una «leyenda negra» alrededor de Pío XII. Las acusacio- Hochhuth, en la que se acusó por primera vez al Papa de nes consideran que «durante la guerra, por cálculo políti- haber callado durante el Holocausto. La obra causó gran co o pusilanimidad, el Papa se habría quedado impasible polémica en toda Europa. Hasta entonces nadie había y silencioso ante los crímenes contra la humanidad, que lanzado acusaciones semejantes contra su pontificado hubieran podido detener una intervención suya». que abarcó desde 1939 a 1958. Es más, la prensa había El resto del artículo, constituye una defensa científica publicado siempre numerosos testimonios de hebreos del trabajo de documentación que contienen las «Actas y a favor de Eugenio Pacelli. Entre ellos, se encuentra un Documentos de la Santa Sede relativos a la segunda gue- sentido artículo de agradecimiento firmado por Albert rra mundial». En ellas se recoge la extraordinaria labor Einstein y publicado por la revista Time. Pharus Academiæ

Para los líderes judíos de la generación anterior, el ma- judíos. La entera generación de los que han sobrevivido al lévolo retrato del Papa Pío XII y la campaña de vilipen- Holocausto testimonia que Pío XII fue auténticamente y dio en su contra, hubiese sido motivo de profundo dolor. profundamente un “justo”». Desde el fin de la segunda guerra mundial hasta cinco El Rabino cita un gran número de hechos, documen- años después de su muerte, el Papa Pío XII gozó una en- tos, declaraciones y libros. Por ejemplo, afirma que «Pío vidiable reputación lo mismo entre cristianos que entre XII fue uno de los personajes más críticos del nazismo. judíos. Al final de la guerra, Pío XII fue aclamado como De los 44 discursos que Pacelli pronunció en Alemania, el «inspirado profeta de la victoria» y recibió aclamación entre 1917 y 1929, 40 denuncian los peligros de la ideolo- casi universal por haber ayudado a los judíos europeos. gía nazi emergente. En marzo de 1935, escribió una car- Numerosos líderes judíos, incluyendo a Albert Einstein, ta abierta al obispo de Colonia denominando a los nazis los primeros ministros de Israel, Golda Meir y Moshe “falsos profetas con la soberbia de Lucifer”». El mismo Sharett y el Gran Rabino en Jefe Isaac Herzog, expresa- año, denunció, en un discurso, en Lourdes, las ideologías ron su públicamente su gratitud a Pio XII, nombrándolo «poseídas por la superstición de la raza y de la sangre». «justo gentil» que salvó miles de judíos durante el holo- Su primera encíclica Summi Pontificatus, de 1939, fue causto. tan claramente antirracista que los aviones aliados lan- Incluso un judío ha saltado a la palestra en defensa de zaron millares de ejemplares sobre Alemania con el fin Pío XI. El Rabino de Nueva York, David G. Dalin publicó de instigar un sentimiento antinazi. en 2005 el libro «The Myth of Hitler’s Pope» afirmando que En respuesta a quienes se quejan porque Pío XII no el Papa Pio XII ayudó a salvar las vidas de 860,000 judíos habló más alto contra el nazismo, Dalin trae las palabras durante la segunda guerra mundial. de Marcus Melchior, el rabino jefe de Dinamarca, que so- David Dalin, un reconocido escritor y conferencista brevivió al Holocausto, quien dijo: «Si el Papa hubiera ha- judío, su libro Religión y Estado en la Experiencia Judía blado, Hitler habría masacrado a muchos más de los seis Estadounidense considerado como uno de los mejores millones de judíos y quizá a diez millones de católicos». trabajos académicos de 1997, propuso que el Papa Pío XII Robert M. W. Kempner, fiscal por Estados Unidos en el fuera proclamado «Justo entre las Naciones», el máximo Juicio de Nuremberg, añadió: «Cualquier acción de pro- reconocimiento que ofrece el Estado de Israel a las per- paganda, inspirada por la Iglesia católica, contra Hitler, sonas que se han destacado por ayudar a judíos perse- habría sido un suicidio y habría llevado a la ejecución de guidos. muchos más judíos y cristianos.» Dalin afirma: «En el Talmud está escrito: “quien salva Sobre la obra de asistencia a los judíos, el rabino Dalin una vida, salva el mundo entero”. Pues bien, más que nin- recuerda que «en los meses en los que Roma fue ocupada gún otro en el siglo xx, Pío XII ha respetado esta indica- por los nazis, Pío XII instruyó al clero para que salvara ción. Ningún otro Papa ha sido tan magnánimo con los a los judíos con todos los medios». El cardenal Pietro Diciembre 2011 09 Año iv

Boetto de Génova, por sí solo, salvó al menos a 800. El que lo han traído tres Juanes; Juan XXIII el primero, aquel obispo de Asís a 300. Cuando al cardenal Pietro Palazzi- papa «de transición», se le calificaba, que se convierte en ni, le fue entregada la medalla de los Justos entre las Na- el del «aggionamento» de la Iglesia. Con el efímero, pero ciones por haber salvado a los judíos en el Seminario Ro- no por ello menos amado, Juan Pablo I y finalmente por mano, este afirmó: «el mérito es enteramente de Pío XII Juan Pablo II, el papa que llegó de oriente, el polaco Karol que ordenó hacer todo lo que estuviera a nuestro alcance Wojtyła, que ubicaron al papado en un papel mucho más para salvar a los judíos de la persecución.» trascendente, como líderes católicos, verdaderamente La obra de asistencia del Papa Eugenio Pacelli fue tan universales. notable que, en 1955, cuando Italia celebró el décimo ani- Repetir como perico las diversas acusaciones endere- versario de la Liberación, la Unión de las Comunidades zadas contra Pacelli, sin la menor honestidad intelectual Israelitas de ese país proclamó el 17 de abril «Día de la no sólo no deturpa su imagen, sino que provoca en mu- gratitud» por la asistencia proporcionada por el Papa du- chos miembros de la nación que supuestamente Pío XII rante el periodo de la guerra. traicionó, saltar a la palestra en su defensa. Enorme ver- Dalin concluye afirmando que «contrariamente a güenza para tantos y tantos intelectuales católicos que todo lo que ha escrito John Cornwell, según el cual Pío no solo no hacen nada por defender al líder de su supues- XII fue el Papa de Hitler, yo creo que el Papa Pacelli fue la ta religión, sino que repiten los falsos que otros emiten. persona que más apoyó a los judíos» Seguramente, imbuidos del espíritu Nazi, siguen la máxima de su santón Goebbels, Una mentira repetida L’Envoy adecuadamente mil veces (esperan que) se conviert(a) en una verdad. Se puede no ser creyente de una religión dada. Incluso se puede no simpatizar con los primados de esa religión. Pero lo que no es admisible es el vilipendio por el simple hecho de no estar de acuerdo con tal religión o personaje. Eugenio Pacelli, mejor conocido con su nombre papal de Pío XII era un personaje adusto, hierático que a quie- nes en aquellos años éramos niños nos producía temor, especialmente cuando en el cine lo veíamos sobre aquel resabio del Imperio romano, la «Silla Gestatoria». Su em- paque principesco, iba bien con aquel papado, hoy des- aparecido y llevado al grado de popularidad universal al Pharus academiæ

Agustín de Iturbide1, mitos y verdades ¿Autor o consumador de la independencia? ¿Héroe? ¿Traidor? ¿Víctima?

«Bonaparte en Europa e Iturbide en América, son los dos hombres más prodigiosos, cada uno en su género, que presenta la historia moderna.»

—Simón Bolívar 2 12

Emilio Lamadrid Sánchez Agustín de Iturbide y Aramburu, militar realista, o sea, del ejér- Periodista, editorialista y cito del rey de España en 1821, emitió el Plan de Iguala. ensayista, ha publicado una novela histórica Santa Anna de Tampico, En un cuadernillo impreso en 1821 en la oficina de D. José María Betancourt, saga de una familia, investigador Calle de San José el Real Núm. 2, intitulado «Acta celebrada en Iguala. El pri- en el iest, Coordinador del mero de marzo y Juramento que al día siguiente prestó el Sr. Iturbide con la Consejo de la Crónica Municipal 3 para el Municipio de Tampico. oficialidad y tropa de su mando» se encuentra el siguiente texto (se ha mo- dernizado la ortografía, dejando la puntuación original): El autor del cuadernillo, que sólo firma como mm, escribe una introducción en la que asegura: 1 Este apellido suele hacerse esdrújulo indebidamente y, a sí se encuentra escrito en «Por el convencimiento de esta razón me he resuelto, amados conciuda- libros y periódicos. Es voz danos, a imprimir la acta celebrada en el pueblo de Iguala, el primero del vascuence compuesta de próximo pasado marzo, y juramento que al día siguiente prestó el Sr. Itur- iturri, fuerte, y bid. camino, como OIavide, camino de la bide con la oficialidad y tropa que se halló presente, cuya copia por una herrería, y otros del mismo casualidad llegó a mis manos y es a la letra como sigue:» tenor. (Longinos Cadena).

2 Carta de Simón Bolívar a José Y a continuación transcribe el documento: De La Riva Agüero, Lima, 4 de septiembre de 1823. «En el pueblo de Iguala a primero de marzo de mil ochocientos veinte y

3 La versión electrónica uno, se unieron en la casa habitación del Sr. Comandante general coronel del «Acta celebrada en D. Agustín de Iturbide los señores jefes de los cuerpos de la guarnición los Iguala…» se puede ver, e comandantes particulares de los puntos militares de toda la demarcación incluso conservar, en http:// digitalcollections.smu. y demás señores oficiales. Colocados en sus asientos con el mejor orden edu/all/cul/, de la Southern y arreglo, el Sr. comandante general tomando la voz indicó, que la inde- Methodist University, pendencia de la América, la veía como necesaria, así porque se persuadía Central University Libraries, DeGolyer Library, (consultada ser ésta la opinión general, como porque se anunciaba un pronto rompi- el día 9 de enero de 2011). miento, que sin duda nos anegaría en sangre, confusión y desastres acaso Diciembre 2011, número 9

más crueles que los últimos experimentados desde el sala se hallaba puesto en la mesa un Santo Cristo y año de ochocientos diez a la fecha, que un plan que el libro de los Santos Evangelios: colocados en pie los arreglase la común opinión con contento de todos, Señores oficiales, leyó el padre capellán del ejército era el único remedio: que había tomado todas las me- D. Fernando Cárdenas el del día, el Sr. Jefe se acercó a didas necesarias para ello, y no obstante que al mili- la mesa y poniendo la mano izquierda sobre el Santo tar le es muy glorioso el vencer, era mucha más gloria Evangelio y la derecha en el puño de su espada le fue a las tropas restauradoras de la libertad, conseguida tomado el juramento por dicho eclesiástico… sin que se derrame una sola gota de sangre. Concluida esta indicación se leyó en voz alta clara Siguiendo en el mismo tono, informa de los juramentos y comprensible por el capitán de Tres villas D. José del «teniente coronel D. Rafael Ramiro del Regimiento María de la Portilla el plan, oficio y lista nominal de de Tres villas, como jefe más antiguo» y así consecutiva- los señores vocales para la junta preparatoria, remi- mente de todos los «Señores oficiales», para pasar todos tida al Excmo. Sr. Conde del Venadito; volvió a tomar «a la Iglesia Parroquial de este pueblo» (Iguala). la voz el Sr. Comandante general y dijo, creía firme- Acabado el acto religioso, y de regreso a la casa del Sr. mente de la bondad así del Sr. Conde del Venadito Jefe, frente a la cual desfiló la tropa y se sirvió «un de- como de los sabios que se hallan a su lado y lo dirigen cente refresco». accederían a tan justa pretensión; pero de no, que era Después de relatar los incidentes de la fiesta, la mú- indispensable sostenerla a toda costa. El entusiasmo sica, y el juramento de las tropas, el Sr. MM dice, dirigién- de los Señores oficiales interrumpió el silencio y entre dose a un «jefe que nos gobierna»: vivas y aclamaciones prometieron sostenerlo hasta derramar la última gota de sangre. Que es un principio de eterna verdad que el superior El Sr. Iturbide impuso silencio con la moderación que no cuenta con la opinión pública es imposible que le es característica y añadió que su edad provecta pueda hacer feliz y acertado su gobierno. En esta in- y despreocupación, le dictaban servir a las órdenes teligencia V. E. más que ninguno debe coger el fruto del que eligieran por general de los mismos jefes de de este papel. Si depone toda preocupación y exa- mayor graduación, que pudiera haber y manifestaría mina atentamente el común sentir, él será sin duda en caso necesario, que puramente el amor a su Patria el termómetro por donde con facilidad vea el deseo y conservar la religión que profesó desde el Bautismo general y hasta qué grado llega la adhesión al sistema 13 le habían obligado a emprender una obra que creía su- que debe forzosamente hacernos felices, daré la ra- perior a sus alcances, y no el aspirar a ascensos, man- zón; unos suponen temerariamente que V. E. está de dos ni otra especulación personal. Aquí se pararon los acuerdo con el Sr. Iturbide para plantear la indepen- Señores oficiales y tomándose la palabra unos a otros dencia bajo el sistema antiguo y con las mismas leyes le daban la enhorabuena, y le decían que persuadidos de la arbitrariedad: otros creen (y lo confirma un ofi- de su integridad y resolución, tenían jactancia sola- cio de Acapulco) que el Sr. Iturbide se ha valido para mente en servir a sus órdenes: que cuantas penalida- alucinar a la tropa y pueblos de que procede con órde- des habían sufrido en la carrera, y especialmente en nes de V. E. más luego que vean las formalidades prac- este país sin recursos, se daban por contentos, por ticadas en Iguala, se convencerán de que ni V. E. ha tener la gloria de ser los verdaderos conquistadores estado de acuerdo, ni el Sr Iturbide se ha valido de las de la libertad de la América del septentrión; que se viles armas del engaño, sino que los que han estado, sirviese tomar la investidura de teniente general y re- y están hoy a su lado han entrado con pleno conoci- cibir el tratamiento de Excelencia. Rehusó con pala- miento de sus miras y planes; con este desengaño se bras bastante enérgicas el tratamiento y nombre de cimentará la opinión pública y V. E. se aprovechará de general, no obstante ser la voluntad única y decidida ella para arreglar sus disposiciones. de todos los señores oficiales, declarando que el ejér- cito se le denominase el de las tres garantías por de- Hasta aquí el contenido de dicho cuadernillo. fender religión, independencia y unión. Concluyó este solemne acto con las mayores aclamaciones a la reli- El Plan de Iguala, origen de la gión, al digno general D. Agustín de Iturbide y a cada Independencia, fue creado por Iturbide. uno de los Señores vocales de la junta preparatoria.» El Plan de Iguala es el origen, causa y motivo eficiente de A continuación da los pormenores del que marca como la Independencia de México. Recurramos al historiador Día dos: que más ha estudiado la época del Imperio mexicano, el inglés Timothy E. Anna, que en su libro The Mexican … se juntaron a las nueve de la mañana en la casa del Empire of Iturbide, explica, a vuelo de pájaro, lo que para primer jefe (único título que ha admitido) los Señores él es el plan. jefes y oficiales del ejército de las tres garantías; en la Pharus academiæ

«La fuerza fundamental del Plan de Iguala, el primero La separación de España y la independencia se conside- de los muchos que jalonarán la historia de México, fue raron como sinónimos, lo que explica por qué muy pocos que hizo posible el consenso. Fue el primero y nece- autores han observado que el resultado de los Tratados sarísimo paso —que había eludido a los insurgentes de Córdoba no era independencia sino autonomía5. desde 1810— para la separación política de España. El Plan de Iguala trató la separación como un hecho Iturbide y la consumación de consumado, cuando en realidad el plan no era más la Independencia que una propuesta alrededor de la cual Iturbide, espe- raba que todo el país se uniera. Hace décadas los niños, al estudiar la historia de la inde- Tiene un aire de autoridad que llevaría, por lo menos pendencia, aprendieron que su culminación era el 27 de a Iturbide, a creer que era ley fundamental, acep- septiembre de 1821 y que quien la culminó fue Agustín tada sin objeciones por todo el país, especialmente de Iturbide y Aramburu. Era común que aquellos niños después de haber sido respaldado en los Tratados de se preguntasen ¿Por qué no festejamos el 27 de septiem- Córdoba. Iturbide con fe ciega se adhirió a lo que él bre nuestra independencia que fue cuando los esfuerzos interpretaba como sus puntos básicos: la creación de de Hidalgo, Morelos y Guerrero y tantos otros fueron co- una monarquía constitucional moderada, la protec- ronados, por fin, con éxito? ¿Por qué a Iturbide no se le ción de la Iglesia y la protección de los españoles que menciona jamás en el grito de independencia que dan las se quedaran en un México independiente»4. autoridades el día 15 en la noche, no el 16 en la madru- gada, como debía ser y como se hizo por más de 60 años? El plan enumera hasta 23 las garantías que englobaban Hoy en día se dice que Guerrero fue el consumador y no los tres estamentos, pueblo, clero y ejército, para con- Iturbide, quien está muerto en la historia, a pesar de ser cluir con las siguientes palabras: el verdadero libertador de México. La respuesta es muy sencilla: el Plan de Iguala estaba «Americanos: constituido alrededor de la unión, de criollos y españo- He aquí el establecimiento y la creación de un nuevo les, que daría al pueblo mexicano la religión católica. imperio. He aquí lo que ha jurado el Ejército de las Además, Iturbide fue elegido Emperador por aclama- Tres Garantías, cuya voz lleva el que tiene el honor de ción, por buena parte del pueblo —primero de la capital 14 dirigírosla. He aquí el objeto para cuya cooperación del país y después de todas las provincias— debido a su os incita. No os pide otra cosa que la que vosotros gran carisma. Eso no agradó a muchos de los adversarios mismos debéis pedir y apetecer; unión, fraternidad, ideológicos de la monarquía que, muy poco tiempo an- orden, quietud interior, vigilancia y horror a cualquier tes, se desvivían por postrarse ante él. movimiento turbulento. Estos guerreros no quieren Sería ocioso enumerarlos, pero nos enfocaremos en otra cosa que la felicidad común. Uníos con su valor uno solo, un personaje interesante y poco conocido, don para llevar adelante una empresa que por todos as- Vicente Rocafuerte6, ecuatoriano, que se afilió al par- pectos (si no es por la pequeña parte que en ella he tido enemigo del Imperio apenas coronado Iturbide. Las tenido) debo llamar heroica. No teniendo enemigos logias escocesas comisionaron a Rocafuerte para que que batir, confiemos en el Dios de los ejércitos, que lo fuese a los Estados Unidos a lograr que no se reconociese es también de la paz, que cuantos componemos este a Iturbide, cuya inminente caída el ecuatoriano auguró cuerpo de fuerzas combinadas, de europeos y ameri- y preparó. canos, de disidentes y realistas, seremos unos meros El festejo a las 11 de la noche del día 15, es un rema- protectores, unos simples espectadores de la obra nente del porfiriato, cuando algún cortesano lambiscón grandiosa que hoy he trazado, y retocarán y perfec- cionarán los padres de la patria. 5 Ibídem, p. 6. Asombrad a las naciones de la culta Europa, vean que 6 Nacido en Guayaquil Vicente Rocafuerte fue elegido diputado por su provincia natal a las Cortes de España en 1812. En las Cortes la América Septentrional se emancipó sin derramar se vincula al partido reformista, donde se hizo amigo de los una sola gota de sangre. En el transporte de vuestro diputados mexicanos conocidos por la audacia de sus ideas. júbilo decid: ¡Viva la religión santa que profesamos! Después de breve permanencia en la Habana y en Estados Unidos, pasa a México, para propagar la idea de emancipación. Este país le ¡Viva la América Septentrional independiente, de acoge como hijo adoptivo y le honra con importantes comisiones. todas las naciones del globo! ¡Viva la unión que hizo A partir de 1822 se documenta su participación en la lucha contra nuestra felicidad! el general Iturbide en México, y luego como diplomático de este país ante Estados Unidos, Dinamarca y Hannover, pero sobre todo Agustín de Iturbide, Iguala». ante Londres. En 1829 regresó nuevamente a México, pero se negó a colaborar con el presidente Bustamante, porque había derrocado 4 anna, Timothy E.: The Mexican Empire of Iturbide, Lincoln, Neb. and a Guerrero. Se le negó pasaporte para viajar a Guayaquil. Escribió London, University of Nebraska Press, p. 5, 1990. un Ensayo sobre la tolerancia religiosa, por el cual fue apresado y sometido a juicio. Otra obra, El Fénix de la libertad, le mereció de nuevo mes y medio de arresto. Finalmente pudo dejar México y llegar a . Allí sostuvo una agria entrevista con Bolívar a quien calificó de «usurpador». Diciembre 2011, número 9 decidió —con la autorización de Don Porfirio, sin duda— sin que el objeto que se proponía llegara jamás á ve- empatar el festejo por el cumpleaños del héroe del 2 de rificarse. El tiempo demostró la certeza de mis pre- abril a la ceremonia del grito. dicciones. Hidalgo y los que le sucedieron, siguiendo A Iturbide se le ha negado, sobre todo tras el encono su ejemplo, desolaron el país, destruyeron las fortu- de la intervención francesa y del segundo imperio, pues nas, radicaron el odio entre europeos y americanos, Maximiliano —que no podía tener hijos— adoptó al sacrificaron millares de víctimas, obstruyeron las nieto, Agustín Iturbide y Green, como príncipe heredero. fuentes de las riquezas, desorganizaron el ejército, A diferencia de otros libertadores de América como Bolí- aniquilaron la industria, hicieron de peor condición var, San Martín y Washington, la inquina en su contra en la suerte de los americanos, excitando la vigilancia de vida, se ha extremado hasta el grado de negarle el sitio los españoles, á vista del peligro que les amenazaba, que merece en el calendario cívico y el título de padre de corrompieron las costumbres; y lejos de conseguir la la nación y libertador de México. independencia, aumentaron los obstáculos que á ella se oponían. Iturbide constructor de la patria mexicana D. Antonio Lavarrieta, en un informe que dirigió contra mí al virrey, dice: que yo habría tenido uno de A través de los años, Agustín de Iturbide, ha sido conde- los primeros lugares en aquella revolución, si hubiera nado al ostracismo por el gobierno mexicano que no ha querido tomar parte en ella. Bien sabía Lavarrieta las dejado conocer su verdadera historia al país. Se omite propuestas que se me hicieron.7» decir que fue él quien construyó la nación mexicana in- dependiente como tal, que fue él quien dio los colores Veamos una opinión al respecto: a la bandera, La enseña patria fue el único triunfo que Iturbide le arrebató a la historia oficial. Nadie, ni sus ene- «¿Podía D. Agustín Iturbide aceptar los procedi- migos ni sus detractores, pudieron quitarle tal honor. mientos de revolución elegidos por el cura Hidalgo? Gracias a él que ahora este país es reconocido con el No, indudablemente, por la misma razón que no los nombre de México, y no con el nombre copiado de Es- aceptaban Allende, Aldama y Abasolo; la diferencia tados Unidos Mexicanos; pero, como siempre pasa, a la radica en que los liberales, sobre todo los jacobinos, sociedad se le cambia la información y, desde pequeños a consideran su héroe a Allende y no a Iturbide, siendo los mexicanos se les ha dicho que Iturbide fue un traidor. así que ambos son muy semejantes: los dos jóvenes, 15 Sería hora de reconciliarnos con nuestra historia y cono- robustos, ágiles, impetuosos, valientes, parranderos cer la verdad, no sólo acerca de este personaje si no de y sobre todo militares de su época, estrechamente todos aquellos que han sido convertidos en villanos. aristócratas por donde no podía pasar el más delgado Es indudable que Iturbide, al igual que Santa Anna hilo democrático; ambos de mediana inteligencia, y Porfirio Díaz, contribuyeron de una u otra forma a la de gran carácter, y escandalosamente ignorantes de creación del México actual; sin lugar a dudas, ellos lu- todo lo que no fuera militar, dentro de su ciencia de charon por formar un México mejor e incluso arries- subalternos…8» garon sus vidas, cosa que no ha hecho ninguno de los políticos del pasado inmediato ni los actuales. Miguel Hidalgo se levantó en armas sin tener un plan de Agustín de Iturbide fue un hombre que supo aprove- lo que iba a hacer después de consumarla, ni cuáles eran char las oportunidades que vio frente a él, fue el militar los objetivos que quería alcanzar aparte de la indepen- que dio una bandera a los mexicanos, hecha a partir de dencia. Por eso Iturbide no se unió al grupo; vio desde un la unión, la religión y la independencia, el caudillo que principio que era una lucha perdida. consumó la Independencia. Fue parte esencial para lo- Iturbide consumó la independencia sin derramar san- grarla. Hidalgo mismo le pidió unirse a la causa inde- gre y presentó un resultado perfecto: Independencia sin pendentista, pero él no aceptó, porque sabía que era una destrucción del Estado. lucha sin un ideal político específico. Para lograrlo, supo negociar de manera correcta con Dice Iturbide en su Manifiesto: los insurgentes y con la corona. Tanto realistas como In- surgentes lo aceptaron como líder para la independencia «En el año de 10, era yo un simple subalterno: hizo sin poner resistencia. su explosión la revolución proyectada por D. Miguel Por ejemplo, aquí la última carta a Vicente Guerrero Hidalgo, cura de Dolores quien me ofreció la faja de antes de Acatempan: teniente general. La propuesta era seductora, para un joven sin experiencia y en la edad de ambicionar; la 7 Manifiesto del General D. Agustín de Iturbide Libertador de México, Edición de la Voz de México, Imprenta a cargo de M. Rosselló. pág. 3 y desprecié sin embargo porque me persuadí a que los siguientes, 1871 planes del cura estaban mal concebidos; ni podían 8 Bulnes, Francisco: La guerra de independencia Hidalgo-Iturbide, Talleres producir más que desorden, sangre y destrucción, y Lino tipográficos de «El Diario», p. 311, 1910. Pharus academiæ

Ultima carta de Agustín de Iturbide previa al encuentro en muchedumbre llegó hasta su casa, hoy conocida como Teloloapan Palacio de Iturbide. Al día siguiente, 19 de mayo, se re- unió el Congreso; Iturbide manifestó que se sujetaría a lo «Amigo querido: que decidieran los diputados, representantes del pueblo, Aunque estoy seguro de que Vd. no dudará un mo- mientras la gente aclamaba. mento de la firmeza de mi palabra, porque nunca di Ante el rechazo de Fernando VII para reconocer la in- motivo para ello, pero el portador de ésta D. Antonio dependencia de México, junto a la prohibición a sus pa- Mier y Villagómez la garantizará á satisfacción de Vd., rientes para aceptar la corona que se le ofrecía, el pueblo por si hubiese quien intente infundirle la menor des- propuso que Iturbide fuera coronado. confianza. Una manifestación cívico-militar fuera de su casa Al haber recibido antes la citada de Vd., y á haber sorprendió a Iturbide con los gritos de «¡Viva Agustín estado en comunicación, se habría evitado el sensibi- Primero!». Tuvo que salir al balcón para pedir calma a lísimo encuentro que Vd. tuvo con el teniente coronel sus seguidores. No estuvo seguro de aceptar la corona D. Francisco Antonio Berdejo el 27 de diciembre, por- hasta que sus amigos y colaboradores cercanos lo con- que la pérdida de una y otra parte lo ha sido como Vd. vencieron de ceder a las demandas del pueblo. escribe á otro intento á dicho jefe, pérdida para nues- Días después, Iturbide le confiaría sus pensamien- tro país. Dios permita que haya sido la última. tos en una carta a Bolívar, a quien consideraba el único Si Vd. ha recibido otra carta que con fecha de 16 hombre de América que podía comprenderlo: le dirigí desde Cunacanotepec, acompañándole otra de un americano de México cuyo testimonio no debe «Carezco de la fuerza necesaria para empuñar un serle sospechoso9, no debe dudar que ninguno en la cetro; lo repugné, y cedí al fin por evitar males a mi Nueva España es más interesado en la felicidad de patria, próxima a sucumbir de nuevo, si no a la anti- ella, ni la desea con más ardor, que su muy afecto gua esclavitud, sí a los males de la anarquía10.» amigo que ansia comprobar con obras esta verdad, y S. M. Agustín de Iturbide». Ante una multitud exaltada, el Congreso no tenía ele- — Sr. D. Vicente Guerrero mentos para su control; se dieron dos alternativas: con- sultar a las provincias o proclamarlo inmediatamente. 16 Iturbide fue un héroe popular, su figura fue reverenciada Iturbide insistió en la primera opción. por propios y extraños. Inclusive para los republicanos Ante la aclamación del pueblo, el Congreso se reunió radicales —que para 1821 eran minoría—, no vieron con a deliberar, los diputados votaron en secreto y el resul- malos ojos el artilugio legal que significaba el Plan de tado fue que sesenta y siete votaron a favor de hacerlo Iguala. Veían como traición la posibilidad de un sobe- inmediatamente, mientras quince propusieron consul- rano europeo, pero el que Guerrero haya aceptado el li- tar a las provincias, por lo que, por mayoría, se proclamó derazgo de Iturbide, hizo ver que la insurgencia también a Iturbide emperador constitucional de México. Dos días era capaz del pragmatismo indispensable para la forma- después la decisión sería ratificada, esta vez, por unani- ción de un Estado. Y de este pragmatismo nació México. midad. Logró que Juan de O’Donojú firmara la Independen- Iturbide explica su insistencia en consultar a las pro- cia, que España no reconocería sino muchos años des- vincias: pués. Y en el acta de Independencia, señaló que se ofrecería «La cuestión de mi nombramiento se discutió inme- la corona a Fernando VII o a alguno de su familia, y si no, diatamente, y ni un solo diputado se opuso a mi ele- que aquella recaería en algún mexicano. Ciertamente vación al trono. La excitación que manifestó un corto Agustín de Iturbide buscó el poder y la Independencia número, provino de que no creían bastante amplios como propósito final. ¿Es por eso un villano? Iturbide na- vegó de héroe a emperador. Fue emperador no al traicio- 10 «Por la naturaleza de las localidades, riquezas, población y carácter de los mexicanos, imagino que intentarán al principio establecer una nar su heroísmo, sino al ejercerlo. república representativa, en la cual tenga grandes atribuciones el poder Ejecutivo, concentrándolo en un individuo que, si desempeña sus Cómo fue que Iturbide se convirtió en Agustín i funciones con acierto y justicia, casi naturalmente vendrá a conservar una autoridad vitalicia. Si su incapacidad o violenta administración excita una conmoción popular que triunfe, ese mismo poder ejecutivo En septiembre de 1821, Iturbide era Presidente de la Re- quizás se difundirá en una asamblea. Si el partido preponderante es gencia, pero el trono seguía vacío y el Plan de Iguala es- militar o aristocrático, exigirá probablemente una monarquía que al principio será limitada y constitucional, y después inevitablemente tipulaba un gobierno de monarquía moderada por una declinará en absoluta; pues debemos convenir en que nada hay más Constitución. La noche del 18 de mayo de 1822, el pueblo, difícil en el orden político que la conservación de una monarquía mixta; por aclamación, exigió que Iturbide fuera emperador. La y también es preciso convenir en que sólo un pueblo tan patriota como el inglés es capaz de contener la autoridad de un rey, y de sostener el espíritu de libertad bajo un cetro y una corona». Carta de Jamaica, 9 El licenciado D. Carlos María de Bustamante. Simón Bolívar, Kingston, 6 de septiembre de 1815. Diciembre 2011, número 9

sus poderes para resolver esta cuestión, les parecía había sido llamado, exigía trajese á mi lado quien co- que era necesario consultar a las provincias, y pedir- municara mis órdenes, en casos necesarios». les una adición a los poderes que habían acordado a sus diputados, u otros nuevos aplicables a aquel solo Por deseo popular y decisión legítima del Congreso, Itur- caso. bide fue proclamado emperador. Yo apoyé esta opinión, porque me ofrecía una oca- Lo anterior desmiente a quienes alegan que la elec- sión de buscar un modo evasivo para no aceptar una ción de Iturbide como emperador no contaba con el voto dignidad que yo renunciaba de todo mi corazón. popular. Lucas Alamán manifiesta que todas las provin- Pero la mayoría expresó una opinión contraria, cias del imperio aceptaron con grandes muestras de jú- y fui elegido por sesenta votos contra quince. Los bilo su elevación al trono; y el liberal Lorenzo de Zavala miembros de la minoría no me rehusaron sus sufra- reconoce que la inmensa mayoría de la nación estaba a gios; se limitaron simplemente a expresar su opinión favor del Imperio12. Francisco Bulnes, historiador repu- de que se consultase a las provincias, porque no se blicano y liberal, lo confirma en pleno siglo xx: creían con poderes amplios. Me declararon al mismo tiempo que sus comitentes estarían de acuerdo con «En 1910 he visto sostener unánimemente por todos la mayoría, y pensarían que lo que se había hecho era los escritores jacobinos, que para que haya democra- bajo todos aspectos ventajoso al bien público. Jamás cia basta que el gobernante emane de la voluntad de vio México un día señalado por una satisfacción más la mayoría del pueblo. Conforme a esta doctrina(...), completa; y todas las clases de sus habitantes la ma- debe asegurarse que Iturbide con su imperio fundó nifestaron del modo menos equívoco. Volví a mi casa la democracia mexicana de la manera más correcta lo mismo que había ido al congreso; mi coche era lle- y completa». vado por el pueblo, y una multitud de ciudadanos a mi rededor me felicitaban y daban testimonios de la La coronación se llevó a cabo el 21 de julio de 1822 en la alegría que experimentaban al ver cumplidos sus vo- Catedral Metropolitana, él y su esposa Ana María Huarte tos. fueron nombrados emperador y emperatriz del Imperio La noticia de estos acontecimientos se trasmitió a mexicano. La bandera trigarante fue modificada por el las provincias por correos extraordinarios, y las res- mismo Iturbide, poniendo ahora las franjas verticales en puestas que llegaron sucesivamente, no sólo expresa- el orden de verde, blanco y rojo, además del águila del 17 ban, sin excepción de una sola ciudad, la aprobación Imperio coronada sobre un nopal, en representación de de lo que se había hecho, sino aún añadían que aque- la leyenda Náhuatl. llo era puntualmente lo que deseaban, y que hubie- Mientras tanto: ran expresado sus votos mucho tiempo antes, si no se hubiesen considerado como impedidos de hacerlo «[…] la francmasonería había tomado creces; en ella por el plan de Iguala y tratado de Córdoba que habían se habían alistado, á más de los ambiciosos sin des- jurado. Recibí también las felicitaciones de un hom- tino, los empleados civiles y militares y muchos de los bre que mandaba un regimiento y ejercía un grande funcionarios públicos que á la sombra del misterio de influjo sobre una porción considerable del país. Me las sociedades secretas entraban á conspirar sin más decía que su satisfacción era tan grande, que no po- planes que los que pudiera presentar la eventualidad, día disimularla; pero que había tomado disposiciones y sin más fin que el de dirigir los negocios de la po- para proclamarme en caso de que no se hubiese ve- lítica bajo la influencia de los personajes que desde rificado en México. (Esto hace alusión a D. Antonio el fondo de las logias imprimían movimiento al par- López de Santa-Anna.)11 tido que, como antes hemos dicho, tomó el nombre Se ha dicho también que no hubo libertad en el de escocés. Determinóse por éste, como se dijo en congreso para mi elección, alegándose que asistí á el capítulo iii, fundar un periódico intitulado El Sol, ella. Ya se ha visto que lo hice porque el mismo con- aludiendo con él al nombre de una de sus principales greso me llamó: que las galerías no dejaban hablar á logias, y que al fin dejó ver que su exclusivo objeto era los diputados, no es tan cierto: que cada uno expuso el de hacer á Iturbide la más ruda oposición. Frente á su parecer, sin más que algunas interrupciones: esto ese periódico apareció otro, El Noticioso, que se publi- sucede siempre que se discute una materia impor- caba una vez por semana y que defendía muy débil- tante, sin que por ello los decretos así discutidos, de- mente al gobierno.13” jen de ser tan legítimos como los que resultan de una sesión secreta: que me acompañaron algunos jefes: el 12 «No es esto decir que la nación no hubiera nombrado en aquellas circunstancias emperador á Don Agustín de Iturbide mejor que destino que yo entonces obtenía, el objeto para que á otro alguno. Las ideas republicanas estaban en su cuna: todos parecían contentos con una monarquía constitucional.» Ensayo 11 Zavala, Lorenzo de: Ensayo histórico de las revoluciones de México desde histórico de las Revoluciones de México desde 1808 a 1830. 1808 hasta 1830, fce-Instituto Cultural Helénico, 1985. 13 Olavarría y Ferrari, Enrique y Riva Palacio, Vicente, México a través de los siglos, México Barcelona Ballescá, Espasa y Comp. Editores, Tomo iv, p. 67, 1880. Pharus academiæ

Menos de un año después Iturbide abdicaría. «Sesión de la Cámara de diputados celebrada el día 29 de Manuel Payno explica las razones de Iturbide para septiembre de 1921», apenas dos días después de ser cele- abdicar sin oponer mayor resistencia: brado el primer siglo de la entrada a México del ejército trigarante, a cuya cabeza marchaba Iturbide: «No había trascurrido un año, cuando el emperador, que no podía saciar tantas grandes y pequeñas am- «… en la que se discute la moción presentada a la H. biciones; que no podía acallar las murmuraciones ni Asamblea Legislativa por un grupo de diputados de curar las fiebres de cerebros, llenos más de orgullo y la misma y en donde se pide sea borrado el nombre presunción que de saber, abdicó la corona, y el capi- de Agustín de Iturbide del Salón de Sesiones de la H. tán de 1809, el coronel de 1820, el generalísimo de 1821, Cámara de Diputados». y el emperador de 1822, era el 19 de Abril de 1823 un preso infeliz á quien habían perseguido los españo- Y en la sesión del 4 de octubre: les, engañado sus amigos, traicionado sus adictos, y olvidado sus soldados y su pueblo. La nación que él «…continúa la discusión del dictamen de la 1era. Co- hizo libre lo arrojaba de su seno, porque su conducta misión de Puntos Constitucionales, para que en el había dejado de ser justa. ¡Lección enérgica para los recinto de la Cámara de Diputados se substituya el ambiciosos! ¡Tan cierto es que la adulación cambia los nombre de Iturbide por el del Senador Belisario Do- mejores sentimientos! mínguez». El pueblo, dicen los historiadores, sintió algo á su rey; pero el hecho es que por la noche se retiró á descansar Finalmente, en el Diario Oficial, Órgano del Gobierno tranquilo y satisfecho como el día en que lo proclamó. Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, de fe- En cuanto al emperador, como hizo juramento de no cha 30 de noviembre de 1936: derramar en lo sucesivo una sola gota de sangre, se dejó insultar y arrojar de México. Muchos lo acusan «…en el que se publica el decreto que dispone se ins- de debilidad, yo creo que el no haber quebrantado su criba con letras de oro en el recinto de la Cámara de juramento y preferido su sacrificio al de sus conciuda- Diputados el nombre de Belisario Domínguez». danos, es un mérito que dio cima y lustre á la grande 18 obra que comenzó al meditar el plan de Iguala. Se acusa a Iturbide de: Veamos ahora las cuestiones que se caen de su peso. ¿Subió Iturbide al trono porque así lo deseaba, ó por «…haber desvirtuado los altos fines de la revolución contentar al pueblo y á sus amigos? ¿Creyó Itur- insurgente que anhelaba el fin de aquel oprobioso bide que efectivamente el pueblo lo proclamó rey, ó estado social en que el régimen virreinal mante- que sólo era obra de las maquinaciones de sus adic- nía al pueblo mexicano. Es bien sabido que Iturbide tos? ¿Pensó Iturbide en lo poco que dura el favor del consumó la independencia de acuerdo con los abso- pueblo, y lo mucho que puede la envidia de los que lutistas de la época, con el fin de garantizar sus tra- no siendo héroes tampoco son pueblo? ¿Fue malo ó dicionales privilegios y que hoy, los mantenedores de bueno su corto gobierno? Si hubiera durado en el po- las ideas conservadoras, son los únicos que se obsti- der todo el tiempo de su vida, ¿cuál hubiera sido su nan en presentarlo como nuestro libertador, porque carácter? A ninguna de estas cuestiones me atrevería ven en este soldado realista el símbolo de sus tenden- yo á responder, y simple narrador de lo que me han cias reaccionarias»15. contado, me limito á decir que el día 11 de Mayo de 1823, en que se embarcó Iturbide en Veracruz, no era A principios del siglo xx, el intelectual y político liberal ya ni capitán, ni coronel, ni generalísimo, ni empera- Francisco Bulnes escribió: dor, sino sólo un hombre desgraciado. Bajo este as- pecto es digno de tanta veneración, como cuando se «¿Cómo se explica el atentado contra la memoria de le considera libertador de México; porque me avanzo de Iturbide, denigrándolo y dirigiendo sobre ella la á creer que la desgracia debe ser más respetada que el odiosidad del pueblo? La respuesta es tan bochornosa poder y que la gloria14». como fácil, dado el analfabetismo de nuestras masas y su organización tan científica para el servilismo Iturbide, el Olvidado demagógico. El jacobinismo dispone temporalmente de todos los lugares de la historia patria, sin que en Iturbide no sólo se olvida. Se fuerza su olvido. En el Dia- frente puedan ponérsele los pocos escritores elevados rio de los Debates de la Cámara de diputados aparece la 15 Osorio Espinosa, Federico: Inscripciones con letras de oro en la Cámara 14 Payno, Manuel: Bosquejo biográfico de los generales Iturbide y Terán, de Diputados, Tomo i, Expediente parlamentario 6 Centro de Manuel Payno, Impreso por Ignacio Cumplido, calle de los Estudios de Derecho e Investigaciones Parlamentarias, pp. 8, 167. Rebeldes no. 2, pp. 10 y 11, 1843. Diciembre 2011, número 9

que en México se ocupan de asuntos históricos. Entre siempre que fue la prueba más tristemente célebre de nosotros, y desgraciadamente, la historia es una espe- ingratitud que pudo haber dado en aquella época la cie de club faccioso, en cuya tribuna dominan los que nación mexicana. —Iturbide reportaba, si se quiere, el hacen de la literatura un puñal, de la verdad un delito, peso de grandes delitos políticos, venía á conspirar á de la lógica una ofensa a la nación, y de la justicia un la República, bien; ¿pero no hubiera bastado con re- vaso de embriaguez, pérfida y degradante. Mientras embarcarle? que el pueblo mexicano, en sus masa sin instrucción y El pueblo que pone sus manos sobre la cabeza de moral pública, tenga por la demagogia el culto que de- su libertador, es tan culpable como el hijo que atenta bía tener por la civilización, no conocerá como debe contra la vida de su padre. —Hay sobre los intereses ser a sus grandes hombres, pues no son todos los que políticos en las naciones, una virtud que es superior á están, ni están todos los son». todas las virtudes, la gratitud. El pueblo que es ingrato con sus grandes hombres, Y con una notable penetración del futuro, envía el reco- se expone á no tener por servidores, más que á los que nocimiento de Iturbide hasta el siglo xxii: buscan en la política un camino para enriquecer y so- focan todas las pasiones nobles y generosas. «Espero que para el Centenario de 2110, dentro de Dios permita que las generaciones venideras per- doscientos años, se habrá reconocido que los tres hé- donen á nuestros antepasados la muerte de Iturbide, roes prominentes de nuestra independencia, fueron ya que la historia no puede borrar de sus fastos esta Hidalgo, Morelos e Iturbide. Como los muertos no se sangrienta y negra página»17. cansan de reposar en sus tumbas, Iturbide bien puede esperar algunos cientos de años, a que el pueblo mexi- Ya en la época de Alamán se ignoraba a Iturbide, de cano, en la plenitud de su cultura, le reconozca con quien Alamán aseguraba que junto a Simón Bolívar, eran moderados réditos lo que le debe. los dos mejores hombres que había dado la América. Mientras no se honre como debe ser a los verdaderos Don Lucas lo relata así, al recordar que el gobernador héroes de la independencia y se suprima de los home- de Michoacán al hablar en «la función nacional de 16 de najes, la figura de uno o algunos de los más grandes, Setiembre de este año» (1852): habrá derecho para decir que en las solemnes fiestas del bicentenario de la Independencia quedó vacío el “…él mismo hablando en público en la ciudad que fue 19 lugar del primero de los personajes: la Justicia…16» la cuna de Iturbide, en un discurso encomiástico de la independencia, ni aun siquiera mienta el nombre Don Vicente Riva Palacio, prominente liberal y nieto de del que procuró á la nación mexicana, este inmenso don Vicente Guerrero escribió: beneficio. ¿Sería ignorancia? Parece indisculpable en el gobernador del Estado de Michoacán, y si ésta estu- «Iturbide libertador de México, Iturbide emperador, diada omisión ha de atribuirse á otro motivo, no pudo Iturbide ídolo y adoración un día de los mexicanos, hallarse sino en la opinión absurda que han querido expiró en un patíbulo, y en medio del más desconso- establecer, los que para atribuir la independencia á lador abandono. los que la promovieron en 1810, pretenden persuadir Los partidos políticos se han pretendido culpar que el mérito de la empresa consistió en haber dado mutuamente de su muerte. Ninguno de ellos ha que- el primer paso, aunque de una manera tal que fue el rido hasta ahora reportar esa inmensa responsabili- obstáculo que impidió el buen éxito de ella, y lo nie- dad. gan al que con el mayor tino y felicidad ejecutó lo que En todo caso, y cualquiera que haya sido el partido aquellos intentaron y no pudieron llevar al cabo. No que sacrificó á D. Agustín de Iturbide, yo no vacilaré me habría detenido á hablar de este insignificante en repetir que esa sangre derramada en Padilla, ha escrito, condenándolo al olvido ó al desprecio que el sido y es quizá una de las manchas más vergonzosas orador pide para mí a sus oyentes, si él no fuese el eco de la historia de México. de un partido que quiere todavía sostener la máquina Guerrero é Iturbide consumaron la independen- de engaños que á la luz de la verdad ha caído desbara- cia, y ambos, con el pretexto de que atacaron á un tada, para no restablecerse jamás» gobierno legítimo, espiraron á manos de sus mismos conciudadanos. 17 Riva Palacio, Vicente; Payno, Manuel; Mateos, Juan A. y Rafael Martínez de la Torre; El Libro Rojo, Ángel Pola, Editor, págs. 119 No seré yo quien pueda hablar de la muerte de y 120. Guerrero; pero en cuanto á la de Iturbide, exclamaré

16 Bulnes, Francisco: La Guerra de Independencia, Hidalgo-Iturbide, talleres Lino tipográficos de «El Diario», pp. 417 y 425, 1910. Pharus academiæ

Es una vergüenza que se haya quitado su nombre del de 1821 nunca existió. Es un mito que ha prevalecido, in- himno nacional18, y también que se hayan eliminado las ventado y repetido por los historiadores mexicanos. Esto letras de oro con su nombre de la Cámara de diputados, lo señala don Lucas Alamán (contemporáneo de Iturbide y que sus restos estén en la Catedral de México y no en la y con quien no simpatizaba): «Casi todos los escritores columna de la independencia, con todos los demás. cometen el error de suponer, que Iturbide tuvo una con- Ahí, uniendo la ofensa al insulto en su interior: ferencia con Guerrero antes de la publicación del plan de Iguala. Esto es falso: Iturbide nunca vio a Guerrero, hasta «Oculto de la vista del público, entre las dos puertas, estar en marcha hacia el Bajío»21. un monumento de carácter peculiar, guardián de las De Guerrero no se conoce evidencia histórica con- cenizas de los héroes. Es el monumento de Guillermo fiable, que afirme que hubiese, ya no digamos partici- de Lampart,19 personaje bastante oscuro que, sin em- pado, sino tan sólo haber estado siquiera presente en la bargo, encuentra su lugar en la historia patriótica proclamación del Plan de Iguala, o en la jura de ese Plan porfiriana. Lampart fue un irlandés del siglo xvii, efectuado el 2 de marzo, fecha en que nació la bandera que dedujo, de una extraña lectura de la Biblia, que creada por Iturbide —no como se celebra actualmente España no tenía ningún derecho de soberanía sobre el día de la bandera, el 24 de febrero, que corresponde a las colonias, cosa que aprovecha para urdir un mo- la proclamación del Plan—. De haber sido cierto el mí- vimiento de independencia. Después de años de no- tico abrazo de Acatempan, que se supone ocurrió el 10 de madismo, perece en 1650 quemado por la Inquisición. enero, el insurgente Vicente Guerrero hubiese acudido a Este monumento parecería honrar al precursor de ambos eventos. la Independencia, pero su emplazamiento significa Lucas Alamán, reconocido como historiador obje- también que los intelectuales y la burocracia del por- tivo por el bando liberal, revela que Iturbide y Guerrero firiato —la mayoría liberales jacobinos— no estaban sólo se habían comunicado por carta o por medio del muy inclinados a reabrir hostilidades contra la Igle- representante personal del insurgente, y que se conocie- sia. El ubicar este tipo de monumento en un lugar ron hasta el 10 de marzo de 1821 en Teloloapan como lo tan público como el Monumento a la Independencia, anuncia la carta que Guerrero envía a Iturbide y que cita habría provocado si duda, un importante conflicto Alamán: político, religioso e historiográfico. Sea quien sea, 20 Lampart se encuentra siempre ahí, en ese antro casi «En Teloloapan se presentó Guerrero a Iturbide, como se secreto, haciendo guardia a los héroes que precedió, y lo había anunciado en carta escrita desde el campo del simbolizando las convicciones historiográficas de un Gallo el 9 de marzo, en que le decía: pequeño grupo.20» “Mañana muy temprano marcho sin falta de este punto para el de Ixcatepec, y en breve tendrá V.S. a su Hay la esperanza de que el tiempo llegará en que los vista, una parte del ejército de las Tres Garantías, del que mexicanos sólo vean el servicio que Iturbide prestó a la tendré el honor de ser un miembro y de presentármele Patria, consumando su Independencia, y entonces apa- con la porción de beneméritos hombres que acaudillo, recerá el Libertador de un pueblo agradecido, que le per- como un subordinado militar. Ésta será la más relevante dona sus errores y extravíos, para ver en él únicamente prueba que confirme lo que le tengo ofrecido, advir- al Libertador y al Héroe. tiendo que mi demora ha sido indispensable para arre- Sin embargo, ahora Iturbide fue nuevamente excluido glar varias cosas, como le informará el militar D. José en la conmemoración del mal llamado bicentenario. Secundino Figueroa, que pondrá ésta en manos de V.S., y con él mismo espero su contestación”22». Los mitos Continúa Alamán: Acatempan El abrazo de Acatempan entre don Agustín de Itur- «En efecto, Guerrero se adelantó hasta las inmedia- bide y don Vicente Guerrero que se fecha el 10 de enero ciones de aquel punto, y dejando a su gente acampada en una altura, entre su campo y el pueblo tuvo su primera 18 Estrofa vii (dedicada a Iturbide): entrevista con Iturbide»23. Si a la lid contra hueste enemiga / Nos convoca la trompa guerrera, / De Iturbide la sacra bandera / ¡Mexicanos! valientes seguid / Y a los 21 Lucas Alamán desmiente esta versión. Según él, Iturbide no logró fieros bridones les sirvan / Las vencidas hazañas de alfombra; / inspirar suficiente confianza en Guerrero, y éste envió en su lugar Los laureles del triunfo den sombra / A la frente del bravo Adalid. al teniente José Figueroa, quien estaba facultado por Guerrero 19 Probablemente el irlandés más famoso de México, William Lamport, para arreglar todas las condiciones. Historia de Méjico, tomo v, mejor conocido por los mexicanos como Guillén de Lamport, Imprenta de Victoriano Agüeros y Comp., Editores. Calle 2a de la precursor y autor de la primera proclamación de Independencia Aduana Vieja no. 14. p. 76, nota 46, 1885. en el nuevo mundo. Algunos piensan que es el que inspiró el 22 Alamán, Obra citada, p. 119. personaje de El Zorro a Johnston McCulley. 23 Alamán, Obra citada, pág. 50 20 Monnet, Jérôme: L’urbanisme dans les Amériques: modèles de ville et modèles de société, Karthala Editions, 2000 – p. 72. Diciembre 2011, número 9

Luego, Iturbide y Guerrero no se conocieron el 10 de puesto que todos los documentos y opiniones de con- enero de 1821 cuando no hubo tal abrazo de Acatem- temporáneos imparciales, lo presentan esforzándose en pan, ni antes del 24 de febrero (Proclamación del Plan evitar su nombramiento tan temprano como el 27 de de Iguala) o el 2 de marzo (jura de dicho Plan y creación septiembre, desde su entrada en la capital hasta el mo- de la bandera) sino hasta el 10 de marzo de 1821. Nada mento mismo de estar reunido el congreso, apoyando tuvo que ver directamente Guerrero en ninguno de estos la idea de los diputados que opinaban que se debía con- eventos como hace creer la historia oficial. sultar a las provincias; pero sí son dignos de censura los Vicente Guerrero se unió a Iturbide como «subordi- autores del movimiento que, sin cuidarse de la opinión nado militar», como él se llamó a sí mismo. que pudiera tener el país en general, quisieron que preva- Haciendo honor a su apellido fue un bravo guerrero leciese la suya, sin comprender que así abrían la puerta á insurgente pero con insuficiente ilustración como para los motines: y que si, por medio del uno elevaban al hom- idear y redactar un plan. Así, sus cartas a Iturbide muy bre que juzgaban con relevantes méritos para sentarse bien escritas, eran firmadas por él pero redactadas por en el trono, por medio de otro, promovido por los que an- don José Secundino, según señala Lucas Alamán. helaban un sistema de gobierno distinto, podía caer de la Luego, sin quitar ningún mérito a don Vicente Gue- altura en que le habían colocado. rrero, presentarlo como el creador de nuestra bandera Los representantes de las diversas provincias habían nacional, ideólogo del Plan de Iguala y realizador de la jurado respetar el tratado de Córdoba; pero nulificado independencia de México, es un mito histórico sin nin- éste por las cortes españolas, estaban en el derecho de gún sustento, cuando por el contrario, todas las pruebas discutir sobre el sistema de gobierno que la nación de- históricas demuestran de manera abrumadora y contun- sease tener, sin que la fuerza armada ni la sola voluntad dente que todas fueron obras exclusivas de don Agustín de un punto, obligase a adoptar á las demás poblaciones de Iturbide, verdadero Padre de la Patria y libertador de lo que acaso repugnaba á sus ideas. México. Los diputados, pues, en masa, aún aquellos que anhe- Es falso que Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero laban premiar los servicios de Iturbide dándole un trono, desfilaran juntos el 27 de septiembre de 1821. Al frente del debieron protestar contra el motín, si es que lo había, ejército marchó Iturbide. En la retaguardia, al mando de ó no haber asistido á la sesión para manifestar así que la última división del contingente venía Guerrero como nunca transigirían con nada que no llegase al congreso, subordinado militar, y sus tropas no contaban con uni- por la vía legal y en la forma digna y pacífica que corres- 21 formes para el desfile, a diferencia del resto del ejército pondía. Trigarante que iba perfectamente uniformado. Para sal- Hecho el nombramiento de emperador, los diputados var el escollo fue necesario utilizar, de último momento, que habían votado en contra, viendo que era preciso con- los uniformes del Cuerpo Urbano de Comercio de la ciu- formarse con lo que había dispuesto la mayoría, no sólo dad de México. se resignaron con ello sino que, deseando evitar discor- Ninguno de los viejos insurgentes como Guerrero o dias que pudiesen envolver á la patria en males de terri- Victoria, firmó el acta de independencia que firmó en bles consecuencias se manifestaron dispuestos de buena primer lugar Iturbide, el 28 de septiembre de 1821. fe á revalidar y confirmar lo hecho en la sesión del día 19. Por su parte, Iturbide ordenó se enviase a todos los Que su nombramiento fue «producto de una asonada» comandantes militares con la instrucción de que se lle- vase de inmediato a los Ayuntamientos, la proclama he- La elección de Iturbide dejó justamente disgustados á cha por Iturbide la noche del 18 de mayo: una minoría de los diputados, que se pronunciaron por- que se suspendiese toda resolución, hasta no conocer la «Mexicanos: opinión de las provincias y comprobar que dicha opinión Me dirijo a vosotros sólo como un ciudadano que estaba de acuerdo con la manifestada por el pueblo y la anhela el orden y ansía vuestra felicidad infinita- guarnición de la capital. mente más que la suya propia. Las vicisitudes políti- No hay duda que la proposición de los que esto pi- cas no son malas cuando hay por parte de los pueblos dieron era la más prudente y justa —Iturbide asegura la prudencia y la moderación de que siempre disteis haberla respaldado— y la deberían haber aceptado los pruebas. partidarios de Iturbide, puesto que de esta manera su El ejército y el Pueblo de esta Capital acaban de elevación al trono, que sin duda se habría efectuado, tomar un partido: al resto de la Nación corresponde pues las provincias, en su mayor parte, se hallaban en- aprobarlo o reprobarlo: yo en estos momentos no tusiasmadas por él, en vez de aparecer como efecto de puedo más que agradecer su resolución y rogaros, un motín de la guarnición y de la plebe, hubiera tenido el sí, mis Conciudadanos, rogaros, pues los mexicanos carácter de un acto de la voluntad nacional. no necesitan que yo los mande, que no se dé lugar a No se puede culpar á Iturbide de que su nombra- la exaltación de las pasiones, que se olviden resenti- miento recurriese a una asonada para ceñirle la corona, mientos, que respetemos las autoridades, porque un Pharus academiæ

pueblo que no las tiene ó las atropella, es un mons- jetarse, en bien de la patria, á la opinión de la mayoría, truo. (¡Ah no merezcan nunca mis amigos, este nom- sosteniendo la elección de emperador los que habían bre!) Que dejemos para momentos de tranquilidad la disentido. Todos contestaron que estaban prontos á ha- decisión de nuestro sistema y de nuestra suerte; van a cerlo así. Ciento seis diputados asistieron a ésta sesión, y suceder luego, luego. en consecuencia del acuerdo que acababan de hacer, se La Nación es la Patria: la representan hoy sus Dipu- acordó el decreto para publicar la elección. tados: sigámosles: no demos un escándalo al mundo; El acta del congreso decía así: y no temáis errar siguiendo mi consejo. La ley es la vo- luntad del pueblo: nada hay sobre ella: entendedme, «En la corte de Méjico, á 19 de Mayo de 1822, se- y dadme la última prueba de amor que es cuanto de- gundo de la independencia, el soberano congreso seo, y lo que calma mi ambición. Dicto estas palabras constituyente mejicano, congregado en sesión ex- con el corazón en los labios, hacedme la justicia de traordinaria, motivada por las ocurrencias de la no- creerme sincero y vuestro mejor amigo. che anterior y arte que de ellas dio el generalísimo —Iturbide. —México, 18 de Mayo de 1822.24» almirante, con reunión de varios documentos que se transcriben en la acta de este día: oídas las aclama- Una respuesta típica de un Ayuntamiento: ciones del pueblo, conformes á la voluntad general del congreso y de la nación: teniendo en consideración «Señor: que las cortes de España por decreto inserto en las Cuando este Ayuntamiento se anticipo en expre- Gacetas de Madrid de 13 y 14 de febrero último, han sar al Soberano Congreso Constituyente, que su vo- declarado nulo el tratado de Córdoba, y que, por lo luntad y la del fidelísimo Pueblo cuyas confianzas mismo, es llegado el caso que no obligue su cumpli- desempeña, es y ha sido corresponder a V. M. con la miento á la nación mejicana, quedando ésta con la Diadema del imperio, el inmenso bien que disfruta, de libertad que el artículo 3 de dicho tratado concede ser libre; nada más hizo que seguir los impulsos de la al soberano congreso constituyente de este imperio, Naturaleza. Ella le dice que está consumada la obra para nombrar emperador por la renuncia ó no admi- de su felicidad con el Gobierno Paternal de V. M., que sión de los allí llamados: ha tenido á bien elegir para se conservará en todo su esplendor, la Religión santa emperador constitucional del imperio mejicano al Sr. 22 que profesa: y que consolidada la unión entre todos D. Agustín de Iturbide, primero de este nombre, bajo los habitantes de Anáhuac, se realizará en ellos el fin- las bases proclamadas en el plan de Iguala y acep- gido siglo de oro. Entre tanto, reciba V. M. las más sin- tadas en generalidad por la nación, las cuales se de- ceras felicitaciones de un pueblo y su Ayuntamiento, tallan en la fórmula del juramento que debe prestar que por ser fiel, obediente, y procurar la conservación ante el congreso el día 21 del corriente.» de V. M. sacrificará gustoso su existencia. Dios guarde V. M. muchos años. Sala capitular del Acto continuo se nombró una comisión de veinticuatro Ayuntamiento Constitucional de San Luis Potosí, 29 diputados, incluso dos secretarios, para poner este de- de Mayo de 1822, segundo de nuestra feliz indepen- creto en manos del emperador. También se redactó la dencia. fórmula del juramento que debía prestar al aceptar el —Señor Juan M de Azcarate. —Ignacio Azte- alto puesto á que se le elevaba, fórmula que, así como el gui. —Juan N. García Diego. —Eusebio Esparza. ceremonial con que había de ser recibido el emperador —Ignacio Guerrero. —Ignacio del Conde. — para aquel acto, habían sido aprobados en la sesión del Félix Escobar. —Antonio Soto. —Francisco día anterior. En consecuencia de lo dispuesto, D. Agustín Condelle. —Ignacio Erguía. —José Vicente de Iturbide se presentó en la tarde del mismo día 21 al Linden. —Ignacio Ortiz. — Lic. Víctor Rafael congreso, y prestó el juramento que estaba concebido en Márquez, Srio.25» los términos siguientes:

El presidente del congreso Don Francisco García Can- «Agustín, por la Divina Providencia y por nombra- tarines, los exhortó a obrar de esa manera en la sesión miento del congreso de representantes de la nación, del día 2, presentándoles los peligros que podrían ame- emperador de Méjico, juro por Dios y por los santos nazar a la nación la divergencia de opiniones, que darían Evangelios, que defenderé y conservaré la religión ca- por resultado convulsiones políticas que envolverían al tólica, apostólica, romana, sin permitir otra alguna país en desgracias sin fin; que para evitar las calamida- en el imperio: que guardaré y haré guardar la cons- des que sin duda resultarían de la desunión, debían su- titución que formare dicho congreso, y entre tanto la española en la parte que está vigente, y asimismo 24 Muro, Manuel: Historia de San Luis Potosí, Imprenta litografía y las leyes, órdenes y decretos que ha dado y en lo suce- Encuadernación de M. Esquivel y Cía., p. 321, 1910. sivo diere el repetido congreso, no mirando en cuanto 25 Muro, Manuel, obra citada, pp. 324 y 325. hiciere, sino el bien y provecho de la nación: que no Diciembre 2011, número 9

enajenaré, cederé ni desmembraré parte alguna del políticos, generales, comandantes, colegios, comunida- imperio: que no exigiré jamás cantidad alguna de des religiosas, todas las clases, en fin, de la sociedad, le frutos, dinero, ni otra cosa, sino esas que hubiere de- dirigieron felicitación por la elección del congreso de cretado el congreso: que no tomaré jamás á nadie sus premiar sus servicios á la patria de la manera que corres- propiedades, y que respetaré sobre todo la libertad pondía. El regocijo era general. En muchas de esas felici- política de la nación y la personal de cada individuo, taciones, no sólo aprobaban los que las suscribían todo y si en lo que he jurado ó parte de ello, lo contrario lo hecho, sino que añadían que aquel había sido su de- hiciere, no debo ser obedecido, antes aquello en que seo, el cual no lo habían manifestado antes por hallarse contraviniere, sea nulo y de ningún valor. Así Dios me comprometidos á observar el plan de Iguala y el tratado ayude y sea en mi defensa, y si no, me lo demande.»26 de Córdoba que habían jurado. Las corporaciones de la capital se presentaron personalmente á besar la mano Prestado el anterior juramento, Iturbide dirigió un dis- al emperador, y no había pueblo, por pequeño que fuese, curso al congreso y á la nación entera, en que reiteró las que no enviara sus plácemes al hombre elegido para re- mismas protestas, terminando con estas palabras: gir los destinos de la patria. Entre las felicitaciones enviadas por los jefes militares «Quiero, mejicanos, que si no hago la felicidad del aparece la del brigadier López de Santa-Anna, coman- Septentrión; si olvido algún día mis deberes, cese mi dante de Jalapa, y la otra del general Guerrero, que se imperio.» hallaba en su capitanía general del Sur. El primero, que estaba a la cabeza del 8º regimiento de infantería, decía á Frases que revelan el buen deseo que le animaba de ha- la tropa que estaba bajo su mando, al anunciar la procla- cer la felicidad del país, así como la esperanza que abri- mación del emperador: gaba de conseguirlo; pero que si no lo alcanzaba, podían ser una arma poderosa para hacerle descender del trono. «No me es posible contener el exceso de mi gozo, por Los mismos sentimientos de amor á la patria, de desin- ser ésta medida la más análoga á la prosperidad co- terés y de afán en el acierto de la dirección de la nave del mún; por la que suspirábamos y estábamos dispues- Estado, manifestó en las proclamas que dirigió al pueblo tos a que se efectuase, aun cuando fuese necesario y al ejército, diciendo á los soldados, que el título con que exterminar algunos genios díscolos y perturbadores, más honrado se creía era el de compañero y de primer distantes de poseer las verdaderas virtudes de ciuda- 23 soldado del ejército trigarante. danos: anticipémonos, pues, corramos velozmente á Todas las opiniones políticas parecían haber termi- proclamar y jurar al inmortal Iturbide por empera- nado con el nombramiento de emperador. El congreso, dor, ofreciéndole ser sus más constantes defensores juzgando la unión como el elemento más necesario para hasta perder la existencia —sea el regimiento que que el gobierno condujese á la nación por la senda del mando el que primero acredite con esta irrefragable progreso y la prosperidad, publicó un manifiesto con prueba; cuan activo, cuan particular interés toma en motivo del juramento del emperador, dando á conocer al ver recompensado el mérito y afirmado el gobierno país los acontecimientos que precedieron á la proclama- paternal que nos ha de regir. Multipliquemos nues- ción. En él, lejos de atribuir á la presión ni á la violencia el tras voces llenas de júbilo, y digamos sin cesar com- voto que había dado para que ocupase el trono D. Agus- placiéndonos en repetir, viva Agustín I, emperador de tín de Iturbide, decía que le había elegido, Méjico.»27

«…porque habiendo sido el libertador de la nación, En una carta de felicitación que al mismo tiempo escri- sería el mejor apoyo para su defensa; porque así lo bió á Iturbide, le decía que experimentaba la mayor satis- exigía la gratitud nacional: así lo reclamaba imperio- facción en verle ocupando el trono, pues era «una digna samente el voto uniforme de muchos pueblos y pro- recompensa al mérito más sublime, y un dique poderosí- vincias, expresado anteriormente, y así lo manifestó simo que oponer á la furiosa avenida de las pasiones más de una manera positiva y evidente el pueblo de Mé- exaltadas.» jico y el ejército que ocupaba la capital.» (Gacetas de Luego agrega: aquellos días) «Viva V. M. para nuestra gloria, y ésta expresión sea La noticia de la elevación de Iturbide al trono, fue tan grata, que el dulce nombre de Agustín I se trans- recibida en todas las provincias con regocijo. Diputa- mita á nuestros nietos, dándoles una idea de las me- ciones provinciales, cabildos eclesiásticos, obispos, jefes morables acciones de nuestro digno libertador. Ellos

26 Gaceta del gobierno imperial del 31 de Mayo de 1822, no. 42, fol. 316, 27 Gaceta del gobierno imperial de 14 de Junio, no. 54, fol. 401 en Zamacois, en Zamacois, Niceto: Historia de Méjico, desde sus tiempos Niceto, Historia de Méjico, desde sus tiempos más remotos hasta más remotos hasta nuestros días, Tomo xi, I. F. Parres y Compa. nuestros días, Tomo xi, I. F. Parres y Compa. Editores. Barcelona Editores. Barcelona – Méjico (1879). – Méjico (1879). Pharus academiæ

por la historia se eternizarán como es justísimo, y yo, sado á los habitantes de aquel pueblo su proclamado que en unión del regimiento de infantería de línea número había sido celebrada con repique de campanas salvas de 8 que mando, y que bajo mi dirección estaba prontí- artillería y otras demostraciones de júbilo añade: simo á dar tan político como glorioso paso mucho an- tes de ahora, sintiendo no hayamos sido los motores «nada faltó á nuestro regocijo sino la presencia de V. de tan digna exultación; mas sí los primeros en ésta M. I. resta echarme á sus imperiales plantas y el ho- provincia que tributamos á V. M. nuestros sumisos nor de besar su mano: pero no será muy tarde cuando respetos; sí los primeros que ofrecemos nuestras vi- logre ésta satisfacción, si V. M. I. me lo permite. Bien das y personas por conservar la respetable existencia querría marchar en este momento á cumplir con mi de V. M. y corona que tan dignamente obtiene, lo que deber; pero no lo haré ínterin no tenga permiso para cumpliremos exactamente y nos complacemos gus- ello; y si V. M. I. llevare á bien que con este objeto pase tosos en repetir, somos constantes súbditos que ver- á esa corte, lo ejecutaré en obteniendo su licencia terán su sangre por el más digno emperador.» que espero á vuelta de correo. Esta es contestación á la muy apreciable carta de V. M. I. de 29 del próximo La felicitación de Guerrero en carta escrita en Tixtla con pasado Mayo con que me honró, presentándole de fecha 28 de mayo dice así: nuevo mi respeto, mi amor y eterna gratitud. Creo ha- ber dado pruebas de estas verdades y me congratulo «Cuando el ejército, el pueblo de México y la nación de merecer la estimación de V. M. I, en quien recono- representada en los dignos diputados del soberano ceré toda mi vida á mi único protector.» congreso constituyente, han exaltado á V. M. I. á ocu- par el trono de este imperio, no me toca otra cosa Muchos de los que en sus felicitaciones se manifestaron que añadir mi voto á la voluntad general, y reconocer altamente satisfechos de la elevación de Iturbide al trono como es justo las leyes que dicta un pueblo libre y so- de Méjico, fueron, transcurrido algún tiempo, partida- berano. Éste, que después de tres siglos de arrastrar rios del sistema republicano, figurando en las convulsio- ominosas cadenas, se vio en la plenitud de su libertad, nes políticas entre los más exaltados liberales. debida al genio de V. M. I. y á sus mismos esfuerzos con que sacudió aquel yugo, y así como haya afian- Que quiso convertirse en monarca absolutista 24 zado el pacto social para poseer en todo tiempo los derechos de su soberanía, ha querido retribuir agra- Otra acusación sin bases fue que disolvió el congreso decido los servicios que V. M. I. hizo por su felicidad, para convertirse en monarca absoluto. La realidad es to- ni es de esperar de quien fue su libertador, sea su ti- talmente diferente. rano: tal confianza tienen los habitantes de este im- El congreso en vez de dividirse en dos cámaras o em- perio, en cuyo número tengo la dicha de contarme.» pezar a redactar la Constitución esperada, se dedicó a obstaculizar o a conspirar en contra del emperador, gra- Después de encarecer el noble proceder con que había re- cias a la influencia e intervención, por un lado, de los ma- husado admitir la corona cuando por dos veces le habían sones escoceses, monarquistas, que querían a Fernando ofrecido el ejército y el pueblo, termina diciendo: VII por rey, y por otro, las maniobras del turbio Joel Poin- sett, agente de Estados Unidos. «Mi corto sufragio nada puede, y sólo el mérito de V. El 3 de noviembre de 1822 Poinsett visita a Agustín M. I. supo adquirirse, es lo que le ha elevado al alto de Iturbide, emperador de México desde el 18 de mayo puesto á que lo llamó la Providencia, donde querrá el de ese año. Así describió Poinsett su visita y su opinión imperio y yo deseo que se perpetúe V. M. I. dilatados acerca del Emperador: años para su mayor felicidad. Reciba por tanto V. M. I. mi respeto y las más tiernas afecciones de un corazón «Día 3. Hoy en la mañana fui presentado a Su Ma- agradecido y sensible. A los imperiales pies de V. M. jestad. Al apearnos en la puerta de palacio, que es I.28» un edificio amplio y bello, nos recibió una numerosa guardia y en seguida subimos por una gran escalera En otra comunicación, escrita el 4 de Junio, en el mismo de piedra, entre una valla de centinelas, hasta un es- Tixtla29, manifestando á Iturbide el placer que había cau- pacioso salón en donde encontramos a un general brigadier que nos esperaba ahí para anunciarnos al 28 Gaceta del gobierno imperial de 6 de Junio, no. 50, fol. 375. En Zamacois, soberano. El Emperador estaba en su gabinete y nos Niceto, Historia de Méjico, desde sus tiempos más remotos hasta nuestros días, Tomo xi, I. F. Parres y Compa. Editores. Barcelona acogió con suma cortesía. Con él estaban dos de sus – Méjico (1879). favoritos. Nos sentamos todos y conversó con noso- 29 Gaceta del gobierno imperial de 18 de Junio, no. 55, fol. 415 En Zamacois, tros durante media hora, de modo llano y condes- Niceto, Historia de Méjico, desde sus tiempos más remotos hasta cendiente, aprovechando la ocasión para elogiar a los nuestros días, Tomo xi, I. F. Parres y Compa. Editores. Barcelona – Méjico (1879). Estados Unidos, así como a nuestras instituciones, y Diciembre 2011, número 9

para deplorar que no fueran idóneas para las circuns- y ansiosamente instituir relaciones diplomáticas y tancias de su país. Modestamente insinuó que había enlazarse con el de la Gran Bretaña. Están temerosos cedido, contra su voluntad, a los deseos de su pueblo y del poder de esa nación y comprenden que sus intere- que se había visto obligado a permitir que colocara la ses comerciales requieren el apoyo de un gran pueblo corona sobre sus sienes para impedir el desgobierno y industrial y comercial. la anarquía. Nosotros recogeremos alguna parte del comercio Su estatura es de unos cinco pies y diez u once pul- de dichos países, pero la cosecha será para los ingle- gadas, (muy alto para la época en México) es de com- ses. plexión robusta y bien proporcionado; su cara es Juzgando a Iturbide por sus documentos públicos, ovalada y sus facciones son muy buenas, excepto los no le considero como hombre de talento. Obra rápi- ojos que siempre miran hacia abajo o para otro lado. damente, es audaz y resuelto y nada escrupuloso en Su pelo es castaño, con patillas rojizas, y su tez es ru- elegir los medios para lograr sus fines.» bicunda, más de alemán que de español. Como oiréis pronunciar de distintos modos su nombre, os diré que Las pugnas por el poder entre facciones, la envidia y la se debe acentuar por igual cada sílaba, I-tur-bi-de. No amenaza de la Santa alianza no se hicieron esperar. Así pienso repetir las versiones que oigo a diario acerca las cosas, se descubrió una conspiración contra Iturbide del carácter y de la conducta de este hombre. Antes de y se aprehendió a sus participantes, de los cuales, no po- la última revolución, en la que triunfó, tuvo el mando cos eran diputados. de una pequeña fuerza al servicio de los realistas y Agustín I, después de recibir miles de cartas de las se le acusa de haber sido el más cruel y sanguinario provincias y escuchar el parecer de muchos, disolvió el perseguidor de los patriotas y de no haber perdonado congreso y estableció de manera provisional una Junta nunca a un solo prisionero. Sus cartas oficiales al vi- Nacional Instituyente mientras convocaba a elecciones rrey comprueban este hecho. En el intervalo, entre la para un nuevo congreso. Nadie lamentó la desaparición derrota de la causa de los patriotas y la última revolu- de este órgano político y el pueblo, por este hecho, volvió ción, residió en la capital, y en una sociedad que no se a llamarlo libertador. distingue por su estricta moral, él se destacó por su En febrero de 1823, mediante el Plan de Casa Mata inmoralidad. Su usurpación de la autoridad principal maquinado por Antonio López de Santa Anna respal- fue de lo más notorio e injustificado y su ejercicio del dado por Vicente Guerrero, a pesar de que ambos en su 25 poder ha sido arbitrario y tiránico. De trato agradable momento, apoyaron la coronación de Agustín I, se levan- y simpático, y gracias a una prodigalidad desmedida, taron en armas exigiendo la reinstalación del Congreso ha atraído a los jefes, oficiales y soldados a su persona, que había sido disuelto por el Emperador, la anulación y mientras disponga de los medios de pagarles y re- del Imperio, y que la monarquía deviniera en República, compensarles, se sostendrá en el trono. Cuando le fal- aunque casi nadie sabía qué era eso30. En el mundo había ten tales medios, lo arrojarán de él. Es máxima de la una sola, la de los Estados Unidos, nacida 46 años antes. historia que probablemente se ilustre una vez más con Iturbide pensó que todo era un malentendido, puesto este ejemplo, que un gobierno que no está fundado en que él deseaba que sí hubiera un congreso; pero una vez la opinión pública, sino establecido y sostenido por la convencido de la mala fe de quienes dirigían el movi- corrupción y la violencia, no puede existir sin amplios miento en su contra, pensó en combatirlos. Contaba en recursos para pagar a la soldadesca y para mantener todo momento con el apoyo popular, así como con los a sus pensionados y partidarios. Sabedor del estado medios necesarios y gran parte del ejército. Pero, ¿cómo de sus finanzas y de las consecuencias probables para reafirmar militarmente un trono que nunca ambicionó, él de la falta de fondos, está desplegando grandes es- si su lucha había sido por detener el derramamiento de fuerzos para negociar empréstitos en Inglaterra, y tal sangre? es la ceguera de los hombres adinerados de ese país, que es posible que logre su objeto. Se han concertado 30 Años después durante su prisión en Tejas, visitado por el Coronel Bernard Bee, adinerado cooperador de la República tejana, que se las condiciones de un empréstito y recientemente ha había reunido recientemente con J. R. Poinsett durante un viaje a salido un agente para Londres —hay otro más que se los Estados Unidos, llevaba un mensaje de reproche a Santa Anna prepara a partir rumbo al mismo destino, con toda la de su amigo el anterior Ministro norteamericano en México. Poinsett lamentaba el hecho que Santa Anna se había vuelto pompa de una embajada— y los profesores de botá- contra los Principios del Federalismo y comentó duramente nica y de mineralogía me participaron ayer con gran que el Presidente merecía su destino, porque había «cambiado consternación que habían recibido órdenes de prepa- la libertad en despotismo». Santa Anna contestó con una rara explosión de honestidad: «Sea tan amable de decir al Sr. Poinsett, rar colecciones para su envío a Inglaterra. Entre todos que es muy cierto que yo lancé mi sombrero por la libertad, con los gobiernos de la América española existe un deseo gran ardor y perfecta sinceridad, pero muy pronto encontré muy fuerte de conciliar a la Gran Bretaña y aunque la absoluta tontería de ello. Señor, durante un siglo por venir nuestro pueblo no estará listo para la libertad; ellos no saben lo el pueblo mismo en todas partes siente mayores sim- que es. Ignorantes como son y bajo la influencia del clero católico, patías por nosotros, los gobiernos intentan uniforme el despotismo es el único gobierno apropiado para ellos; pero no hay ninguna razón por qué no debería ser uno sabio y virtuoso.» Hanighen, Frank C., Santa Anna: The Napoleon of the West 1934. Pharus academiæ

Resentido por las voluntades desleales, restableció nancia con sus convicciones, tendencias históricas y el viejo congreso y abdicó. El congreso, para humillarlo objetos finales, propios de cada uno. todavía más, no quiso discutir su abdicación, manifes- Así, los borbonistas y coloniales, más claro, los mo- tando, contrario a lo dicho meses antes, que la corona- narquistas adictos a la independencia, y los que de- ción había sido obra de la violencia. seaban constituir el país como colonia, debían optar A nueve meses escasos de haber sido coronado, fi- y lo hicieron decididamente, más o menos tarde, por nalizó el breve Imperio de Agustín I al abdicar el 19 de la República central, tan análoga en su concepto, con marzo de 1823 ante el Congreso que lo había nombrado. la monarquía, de que veían algunos destellos, aunque El 11 de mayo partió al exilio.31 pálidos, en tal forma. Veamos cual fue el resultado de esta abdicación en la Los otros se decidieron por la Democrática pura: política mexicana: verdadera reacción que cambiaría todo lo hasta allí existente, como lo anhelaban; y llevaría al país a la «Concluido el motivo de unión de los enemigos de cima de la civilización y adelantos que creían consi- Iturbide y de su trono, quedaron los partidarios, guientes a la adopción de dicha forma o sistema de presa, unos del pavor, y otros de la fascinación: produ- gobierno. Suponían a México en decadencia, y (que) cidos por el derrumbamiento en el corto período de esta (era) debida a la forma hasta entonces existente y veinte meses, de dos tronos; el primero de trescientos al vecino norteamericano en el apogeo, debido exclu- años y el último de diez meses de existencia fundado sivamente a dicho sistema democrático. en el prestigio del triunfo sobre el primero. De aquí la división de los partidos en centralista y Víctimas también de la novedad y boga de ciertas demócrata federalista; cuyos nombres tomaron de los doctrinas, llamadas filosóficas, y de la falsa compa- de las formas indicadas, porque se habían decidido. ración y exagerados encomios de la prosperidad de Los iturbidistas faltos de bandera como expre- los Estados Unidos, atribuida exclusivamente a tales sión de principios qué seguir y reglas consiguientes ideas sintetizadas en la democracia; era ley de con- qué acatar, supuesto que habían rasgado su historia: secuencia revolucionaria, reactiva y forzosa que, ha- en odio de los borbonistas y a los adeptos al antiguo bían de trasladarse al terreno político; los adictos a sistema colonial: en odio también a los monarquistas Iturbide, a la monarquía y a la colonia, optando por la constitucionales, o adictos a los Tratados de Córdoba; 26 forma republicana con tanto entusiasmo iniciada por todos los cuales se habían unido a los republicanos Morelos en la Constitución que promulgó en Apatzin- para derribar, como derribaron a Iturbide, cuando gán el 24 de octubre de 1814. menos quitándole su importante apoyo: los Iturbidis- Hubo más que a tal asimilación los indujo. La his- tas, victimas, del pánico consiguiente al triunfo com- toria de la República en Francia era bien reciente, pleto que veían en los radicales enemigos32. conocida por todos, y profundamente temida su re- A la ausencia de Iturbide, las conspiraciones a fa- producción aquí, aún por sus adeptos. vor de él se hacían cada vez más presentes y borbonis- Si bien lo expuesto creó en todos la necesidad de tas e iturbidistas unidos, ponían trabas y dificultades reconocer en común, como sistema de gobierno que al gobierno republicano que empezaba a formarse.33 debía sustituir al imperial, al republicano, quedaron como se comprende fácilmente, vivas las conviccio- El destino de un libertador nes y creencias, los hábitos y propensiones de cada partido. Poco después de su abdicación, Agustín de Iturbide sa- Ceñidos a la República, se encontraron los parti- lió de Tacubaya hacia Veracruz para partir al exilio. Lo dos, en el caso de obrar dentro de ella, pero en conso- acompañaban su esposa, sus ocho hijos; un amigo de nombre José López; su confesor José Treviño; su sobrino 31 «Es más difícil —dice Montesquieu— sacar un pueblo de la servidumbre, José Malo; Francisco de Paula Álvarez, su secretario, que que subyugar un libre.» Esta verdad está comprobada por los anales de todos los tiempos, que nos muestran las más de las llevaba a su padre, su esposa y dos hijos, y 10 sirvientes. naciones libres, sometidas al yugo, y muy pocas de las esclavas Eran escoltados por 500 hombres al mando de Nicolás recobrando su libertad. A pesar de este convencimiento, los Bravo, que por el grave temor de que se atentara contra meridionales de este continente han manifestado el conato de conseguir instituciones liberales y aun perfectas, sin duda por la vida del ex emperador, ordenó ir a campo traviesa evi- efecto del instinto que tienen todos los hombres de aspirar a la tando pasar por ciudades. mayor felicidad posible, la que se alcanza infaliblemente en las sociedades civiles, cuando ellas están fundadas sobre las bases de 32 Martínez, Víctor José, Sinopsis histórica, filosófica y política de las la justicia, de la libertad, y de la igualdad. Pero, ¿seremos nosotros revoluciones mexicanas, Segunda edición, México, Imprenta capaces de mantener en su verdadero equilibrio la difícil carga de Tipográfica, Parte cuarta, la revolución en su marcha y desarrollo; una república? ¿Se puede concebir que un pueblo, recientemente desde Padilla al Cerro de las Campanas. 1884. desencadenado, se lance a la esfera de la libertad, sin que, como a Ícaro, se le deshagan las alas y recaiga en el abismo? Tal prodigio es 33 Un año antes de morir Bolívar habría dicho: «No pudiendo nuestros inconcebible, nunca visto. Por consiguiente, no hay un raciocinio pueblos soportar ni la libertad ni la esclavitud, mil revoluciones verosímil que nos halague con esta esperanza”. Carta de Jamaica, harán necesarias mil usurpaciones». Simón Bolívar, Kingston, 6 de septiembre de 1815. Diciembre 2011, número 9

Llegaron a la Antigua, pues en Veracruz campeaba la En diciembre partió hacia Londres, a donde llegó el 1 fiebre amarilla. El 11 de mayo, el grupo se embarcó en el de enero de 1824. Primero se alojó en Saint Paul’s Coffee buque Rawlins, de la Compañía Alemana de Indias, que House, pero al enterarse de que ahí no se hospedaba la tardó 83 días en llegar al puerto italiano de Liorna, en gente «decente», se trasladó a George Street Picadilly. donde Iturbide vivirá en una villa propiedad de Paulina, El fervor por el ex monarca y la noticia de su próximo la hermana de Napoleón. Durante su estancia de algu- regreso, provocaron que el congreso expidiera un de- nos meses, la correspondencia del libertador de México creto declarando traidor y fuera de la ley a Iturbide, y lo nos muestra que pasó grandes estrecheces, pues la pen- condenó a muerte, sin más trámite, en caso de que se sión prometida por el Congreso a su abdicación —le presentara en territorio mexicano. asignaron veinticinco mil pesos anuales para subsistir Los partidarios de Iturbide lo motivaban para regre- en Italia—, jamás llegó, por lo que se vio obligado vender sar a salvar el país, y él, ingenuamente, envió un oficio al sus servicio de plata y joyas de su esposa y a pedir pres- congreso, ofreciéndose a defender la libertad mexicana tado a amigos. frente a la amenaza que significaba la Santa Alianza, Como ejemplo sirvan estas cartas34: formada por Austria, Prusia y Rusia en apoyo a España. Documento # 1697; Webb & Co. Escribe a Iturbide Este oficio aparentemente no llegó a tiempo para evitar avisando que tienen una letra de cambio a su favor que la declaración de traidor. envía el señor Echenique y que se ponen a sus órdenes. Veamos como lo relata en su libro35 un testigo con- Documento # 1708; Carta de Iturbide a Pedro del Paso temporáneo —que además es el más grande admirador y Troncoso que las letras de cambio contra Cádiz no pue- de Santa-Anna— José María Tornel y Mendivil: den ser cobradas en Liorna debido a la situación actual de España. «Iturbide desde que pisó á Londres, dio sobradas Documento # 1831; Webb & Co. escribe a Iturbide so- muestras en todos sus hechos, de que obraba bajo las bre la protesta de sus cartas de crédito en Cádiz. impresiones de la alucinación mas funesta. Documento # 1852; Webb & Co. escribe a Iturbide so- Como por medio del español Torrente, el mismo bre los problemas de un préstamo en Londres. que escribió la historia de las revoluciones de las Documento # 1859; Carta de Iturbide a Macbean so- colonias sublevadas, se le habían hecho ventajosas bre la venta de su plata y sus brillantes y entrega del va- proposiciones, esperando que se prestara á servir de lor a su sobrino, José Ramón Malo, y al presbítero José instrumento de venganza, y que cooperara con sus 27 Antonio López; Fletcher. relaciones y con su influencia en México, al designio Documento # 1871; Macbean & Co. escribe a Iturbide que abrigaba Femando VII de someterlo otra vez á su sobre la venta de la plata y entrega del dinero a José An- cetro de hierro, adquirió numerosos datos de que Es- tonio López. paña contaba para realizar su proyecto con poderosos Documento # 2038; Iturbide escribe cartas a Gómez auxilios de algunos de los soberanos que componían Navarrete… quejándose de no haber recibido un solo real la Santa Alianza, especialmente del rey de Francia. Su y la mucha necesidad que tiene. Desde Londres, 14 de honrosa negativa cambió enteramente su situación, y febrero y 8 de marzo. En ellas hace referencia a las difi- precisado á buscar un asilo, donde únicamente podía cultades para cambiar dinero a través de Cádiz; la nece- encontrarlo, que era en Inglaterra, se persuadió de sidad de proveer para su familia. que este servicio, muy importante aunque negativo, Documento # 2047; Mylins (?), Charles. Carta a José destruiría las prevenciones contra su persona, que Malo sobre una oferta de trescientos mil francos por las dejó tan animadas al tiempo de ausentarse. perlas que le dejó a consignación. Entonces resolvió manifestar al Congreso mexi- Documento # 2050; Malo, José. Carta a Charles Mylins cano los nuevos y graves riesgos á que estaba ex- aceptando la venta de las perlas y pidiendo se remitan puesta su común patria, y le ofreció su corazón y su los fondos al señor Mathew Fletcher. espada para el día del peligro. El libertador ignoraba, Todo esto y la presión que ejerció la Santa Alianza, sin duda, que contenta la nación con la expectativa de provocaron que cambiara de domicilio, a pesar de que bienandanza con que el nuevo sistema le brindaba, los diplomáticos de las Alianza, intentaron por todos había de recibir con disgusto, y más que con disgusto, los medios de impedir su partida, como lo demuestra el con desconfianza, la probabilidad de que se pre- documento # 2056, un artículo de un periódico italiano. sentara un caudillo, cuyas miras ambiciosas le eran Copia sin firma, de febrero de 1824 que hace referencia a harto conocidas. los esfuerzos de Cónsul francés en la Toscana, para im- La nota dirigida al Congreso, era un aviso que él pedir la partida de Iturbide; y los esfuerzos de todas las mismo daba á sus enemigos, con inexplicable candor, potencias incluyendo a Inglaterra, para impedir que la de su aventurera resolución de venir á mezclarse en la Señora Iturbide se reuniera con su marido. 35 Tornel Y Mendivil, José María, Breve reseña histórica de los 34 Juan E. Hernández y Dávalos Manuscript Collection, Benson Latin acontecimientos más notables de la Nación Mexicana, desde el año American Collection, General Libraries, The University of Texas 1821 hasta nuestros días; Edición de La Ilustración Mexicana, p. 16. at Austin. at Austin, 1852. Pharus academiæ

política del país; y como su carácter fogoso y decidido «Los historiadores no están conformes en el modo autorizaba para recelarlo así, no dudaron de su tenta- con que fue aprehendido D. Agustín de Iturbide. tiva, y se prepararon para frustrarla con la actividad Algunos de sus biógrafos, más apasionados de la tan propia de los que saben que juegan el todo por el memoria del desgraciado emperador que de la ver- todo.» dad, afirman que Iturbide llegó á las playas mexica- nas ignorando el decreto de proscripción formulado En Londres, Iturbide se entrevistó con José de San Mar- contra él en la República, y agregan que desembarcó tín —libertador de y Perú que vivía exiliado allí—, disfrazado, fingiéndose colono, en compañía de Be- quien trató que disuadirlo de regresar a México. nesky; pero que fue reconocido por el modo expedito Pero Iturbide no hizo caso y zarpó el 11 de mayo y airoso que tenía de montar á caballo. de 1824 en el barco inglés Spring desde el puerto de Todas estas dudas se disipan y todas esas relacio- Southampton, acompañado de su esposa y de sus dos hi- nes se desmienten con sólo trascribir el principio de jos más pequeños. Iban con él su sobrino, José Malo, los una carta que en el momento casi de desembarcar sacerdotes José López y José Treviño, el italiano Macario escribía Iturbide á su corresponsal en Londres D. Ma- Morandini, el impresor inglés John Armstrong y Carlos teo Fletcher, y que inserta D. Carlos Bustamante en su Benesky, coronel polaco que le había acompañado en sus apéndice á los Tres siglos de México. campañas mexicanas. Llevaba consigo una prensa, do- «A bordo del bergantín ‘Spring’ frente á la barra de cumentos personales, joyas de la familia y un manifiesto Santander, 15 de Julio de 1824. que dirigiría al pueblo mexicano. «Mi apreciable amigo: Antes de regresar, se puso de acuerdo con dirigentes Hoy voy á tierra, acompañado sólo de Benesky, á ingleses para la explotación de las minas de plata y para tener una conferencia con el general que manda esta abrir el país a la introducción de sus productos textiles, provincia, esperando que sus disposiciones sean favo- pues aquéllos ambicionaban apoderarse del mercado rables á mí, en virtud de que las tiene muy buenas en americano. Iturbide se embarcó en Londres el cuatro de beneficio de mi patria. Sin embargo, indican no estar mayo, en compañía de su familia y del coronel polaco Be- la opinión en el punto en que me figuraba, y no será nesky. difícil que se presente grande oposición, y aún ocu- Los británicos pensaban que su retorno era necesa- rran desgracias. Si entre éstas ocurriere mi falleci- 28 rio, incluso un autor escribió que se trataba «de una de- miento, mi mujer entrará con Vd. en contestaciones cisión patriótica y desinteresada». En cambio, para los sobre nuestras cuentas y negocios.» mexicanos, incluido Alamán, regresaba a México porque pretendía restaurar la monarquía. Y esta carta está firmada: Agustín de Iturbide. El Spring se dirigía a Tampico pero las corrientes ma- Toda la versión, pues, sobre el incógnito de Iturbide, rinas obligaron a desembarcar en Soto La Marina. Itur- no pasa de ser una novela. bide envió a Benesky para que se pusiera en contacto con En el folio 11 del libro de actas del Congreso de Ta- el general Felipe de la Garza, comandante general de las maulipas, consta lo ocurrido en la Sesión extraordinaria Provincias Internas de Oriente —hombre a quien había del 18 de julio de 1824 y dice como sigue: perdonado por protestar por la prisión de algunos dipu- tados cuando era emperador—. «Leída y aprobada el acta anterior, el ciudadano De la Garza dijo ser partidario de Iturbide y respaldar presidente dijo: que se acababan de recibir pliegos por su regreso al país. El 17 de julio bajó a tierra y acudió con la secretaría, del ciudadano general de las armas, que De la Garza. Después de la entrevista que sostuvieron, contenían asuntos de gravedad. fue apresado y escoltado hasta Padilla, donde se hallaba El ciudadano Gil, expuso: que hallándose actual- sesionando el Congreso del estado. mente en esta villa dos de los diputados suplentes, y Dos días más tarde, De la Garza se reunió con siete de faltando cuatro de los propietarios, se llamasen aque- los once legisladores que estaban presentes y dos susti- llos á tomar el asiento que en el caso les corresponde, tutos. Un total de nueve miembros sentenciaron a Itur- y más cuando la gravedad del asunto así lo exige, pues bide a la pena capital, acatando lo dispuesto por la ley aunque uno de ellos estaba nombrado gobernador del federal del 28 de abril que proscribía su regreso al país Estado, (El Sr. Gutiérrez de Lara.) aún no se recibía del por considerarlo traidor y fuera de la ley. mando, y debía por ahora venir á desempeñar en ésta El oficio enviado por De la Garza al Congreso de Ta- augusta asamblea las funciones que le tocan. Así se maulipas, dio origen a la sospecha de que Iturbide inten- acordó, después de una corta discusión, y fueron lla- taba entrar subrepticiamente a México, aunque desde mados los ciudadanos suplentes Juan Bautista de la un punto insospechable, el relato de Don Vicente Riva Garza, y Bernardo Gutiérrez, que siendo presentes, Palacio de los últimos momentos de Iturbide, se verá que otorgaron el correspondiente juramento, y tomaron esto es falso: asiento. 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A continuación, se leyó un oficio del comandante niente, conciliando la piedad cristiana con los dere- general, ciudadano Felipe de la Garza, insertando el chos de la patria.» parte que dio al S. P. E. (supremo poder ejecutivo), de haber aprehendido en el paraje de los Arroyos, seis le- Nada impidió que Iturbide fuera ejecutado. Ni sus servi- guas distante de Soto la Marina, á D. Agustín de Itur- cios al país ni haber consumado la independencia. Nada bide, que disfrazado, en compañía de un extranjero fue suficiente para perdonarle la vida. De ese modo, la llamado Carlos de Benesky, marchaba con el objeto de clase política de entonces, acabó con uno más de los hé- internarse en ese continente, según se advertía. Hace roes de la independencia. ver asimismo, que á ambos individuos condujo (En El 19 de julio Iturbide escribió una carta al Soberano el acta está escrito «condució») el bergantín inglés Congreso de México, en la que pedía que se le explicara Spring, procedente de Londres, con sesenta y cuatro qué crimen había cometido para merecer ese castigo36. días de navegación, y que el segundo, al día siguiente Poco después, un ayudante de De la Garza, le informó de su desembarco, se presentó á dicho ciudadano ge- que a las 6 de la tarde sería pasado por las armas. neral, quien preguntándole por el primero, dijo que- No se le concedió su último deseo de oír misa y el cura daba en Londres, pasando una vida mediana con su que lo confesó era miembro del congreso que lo había familia; y por último, expone el citado general, que condenado a muerte. á ambos individuos conduce á presentar á este con- Escribió una carta a su esposa en la que le decía: «La greso, para que disponga lo que juzgue conveniente. legislatura va a cometer en mi persona el crimen más Se leyó también un oficio, que D. Agustín de Itur- injustificado: acaban de notificarme la sentencia de bide dirige á este honorable congreso, demostrando muerte por el decreto de proscripción; Dios sabe lo que que el objeto de su venida no es otro, que el de ayudar hace y con resignación cristiana me someto a Su sagrada á sus hermanos á consolidar su independencia, inclu- voluntad.» yendo dos ejemplares de las exposiciones que hace al D. Antonio Gutiérrez de Lara, presidente de la legisla- congreso general, con fecha, 13 de Febrero y 14 del co- tura de Tamaulipas, sacerdote, le administró los últimos rriente; igual número de las proclamas que dirige al sacramentos a Iturbide quien confesó tres veces sus pe- pueblo. cados. El ciudadano Fernández, dijo: que los papeles que Crónicas de la época dicen que se veía sereno: incluía Iturbide, pedía no se leyeran, ni los tomase en 29 consideración el congreso, hasta que se declarase la «Marchó con firme paso hasta el lugar de la ejecu- suerte de este individuo. ción, encargó al cura que lo acompañaba, que tomase El ciudadano presidente, dijo: que habiendo tres un reloj y el rosario que llevaba al cuello para que se lo eclesiásticos en el seno de este congreso, le parecía, enviase a su hijo mayor, le entregó también una carta no debían tomar conocimiento en la suerte de Itur- de despedida para su esposa, y tres onzas y media en bide, pues si se decretaba fuese decapitado, quedarían oro para que se distribuyesen a la tropa que iba a ha- en tal caso irregulares: que él por su parte pedía, se le cer fuego sobre él, y con voz clara y segura, dijo di- permitiese separarse de la sesión, para no incurrir en rigiéndose a los asistentes al indisculpable desacato: la irregularidad. ¡Mexicanos! en el acto mismo de mi muerte, os re- Los ciudadanos Garza García, y Fernández, de- comiendo el amor a la patria y observancia de nuestra mostraron no ser incursos en la irregularidad, por santa religión; ella es quien os ha de conducir a la glo- cuanto el congreso no hacía otra cosa en esto, que cumplir y mandar que se cumpla la ley. No hubo lugar 36 1824 Extracto de las sesiones del congreso general, en que se declaró á D. Agustín Iturbide fuera de la ley. á la petición del ciudadano presidente, y luego se leyó la ley de 28 de Abril último, en que se declara pros- En 3 de abril. Se puso á discusión el dictamen reducido á los artículos crito á D. Agustín de Iturbide. siguientes:

El ciudadano Gil, pidió al honorable congreso, 1° Se declara traidor á D. Agustín de Iturbide, siempre que se presente en cumpla con la ley que se acaba de leer, el goberna- cualquier punto de nuestro territorio bajo cualquier título. dor del Estado, haciéndole responsable de la más leve 2° Igualmente se declaran traidores á la federación, á cuantos cooperen falta. directa ó indirectamente por escritos encomiásticos ó de Después de una larga discusión, se entró á vota- cualquiera otro modo, á favorecer su regreso á la República. Se ción, en la que salvaron sus votos los ciudadanos pre- declaró haber lugar á votar, salvando su voto los Sres. Romero, Alcocer, Castillero, Berruecos, Sierra (D. Ángel), Ibarra, Martínez sidente y Fernández; siendo los demás unánimes por (D. Florentino), Castro, Castoreña, Rejón, , Moreno, la afirmativa sobre la proposición hecha por el ciu- Mangino y Llorente.—El artículo fue aprobado, suprimiéndose los dadano Gil, y en virtud de ello, se mandó comunicar adverbios directa ó indirectamente.

esta resolución al gobernador, á quien se le autorizó Los Sres. Lombardo, Gordoa (D. Luis), y Barreda, hicieron la siguiente para que haga la ejecución cuando lo juzgue conve- proposición, que fue aprobada, «ó protejan las miras de cualquier invasor extranjero.» Pharus academiæ

ria. Muero por haber venido a ayudaros, y muero gus- que servía de sala de sesiones del Congreso, y al día si- toso porque muero entre vosotros: muero con honor, guiente se le hizo un funeral que Garza costeó, y cuya no como traidor; no quedará a mis hijos y su poste- misa canto el diputado D. José Miguel de la Garza ridad esta mancha; no soy traidor, no. Guardad sub- García, que fue uno de los que votó la muerte de Itur- ordinación y prestad obediencia a vuestros jefes, que bide; ¿tiene conciencia un hombre semejante?» haciendo lo que ellos os manden es cumplir con Dios; no digo esto lleno de vanidad, ¡porque estoy muy dis- Después de pasear el cadáver por la plaza del pueblo: tante de tenerla! Rezó después, besó el crucifijo que se le presentó, «…se le dio sepultura en una iglesia vieja sin tejado.» y a la voz de mando de D. Gordiano del Castillo, Itur- bide cayó muerto. Una bala le abrió la cabeza y otras Días después, el diputado José Antonio Gutiérrez de varias el pecho.» Lara, quien presidía la legislatura de Tamaulipas en esos momentos, escribió a un amigo cercano que había acom- Puesto de rodillas cuatro hombres le dispararon, pero pañado al caudillo en sus últimos momentos. sólo tres balas lo alcanzaron: una, mortal, dio en la parte izquierda de la frente; otra en el costado izquierdo, en- «Muchas veces, Iturbide dijo en el Congreso gene- tre la tercera y cuarta costillas; la tercera penetró en el ral que para él no se había hecho el miedo; y aún esta lado derecho del rostro, junto a la nariz. Tenía 40 años verdad confirmó en su muerte, la recibió sin que le de edad. temblara un dedo y la precedió con una elocuente y Su cuerpo fue recogido y vecinos del pueblo de Padi- bien concertada arenga, que produjo con los ojos ya lla lo reconocieron para cumplir con el papeleo legal. Fue vendados y en una voz tan sonora y entera como la velado en la habitación que servía como recinto legisla- que vio en el Soberano Congreso reducida a los mexi- tivo. El general De la Garza cubrió los gastos del funeral canos para que siempre unidos y sujetos a sus auto- que se efectuó a la mañana siguiente y José Miguel De la ridades evitaran segunda esclavitud, concluyéndola Garza García, quien votó a favor de la ejecución, ofició para manifestar que no era traidor a su Patria supli- una misa a la que concurrieron los diputados37. cando, que no recayese esta impostura sobre su fami- Los agentes del gobierno, con loca y bárbara alegría, lia.» 30 aplaudieron el funesto y trágico fin del hombre de cuya cabeza inmortal nació la independencia y soberanía de Gutiérrez de Lara no pudo olvidar la ejecución: México, así como Minerva de la de Júpiter. El Congreso que se había saboreado con el buen resultado de otro «Vi su cuerpo despedazado por las balas y su san- decreto semejante para terminar el motín del general gre corriendo sobre la tierra que antes había liber- Lobato, pudo espantarse de su obra terrible, y no sería tado: mi corazón quedó herido de este primer estrago extraño que se arrepintiera del cumplimiento de una ley que habían visto mis ojos y lo vieron por fin en una que acaso no dictó más que para inspirar terror, supo- persona tan amada.» niendo que la ilustre víctima la conociera con oportuni- dad. Los Congresos de todos los Estados felicitaron al de Ta- maulipas; se ofreció a su aprehensor la banda de General «Amortajado con un hábito de San Francisco, el de Brigada; Los nombres de los diputados que votaron cadáver estuvo expuesto toda la noche en la capilla por su muerte fueron inscriptos con letras de oro en los salones de varias legislaturas; en fin, hubo muchas de- 37 1824 Extracto de las sesiones del congreso del Estado de Tamaulipas, mostraciones de júbilo. reunido en la villa de Padilla, relativas á la ejecución de D. Agustín de Iturbide. Copias sacadas de un libro en folio, forro de cuero Más tarde, en 1838, se llevaron a la Capital los restos colorado, que se titula: «Libro de actas del congreso constituyente del infortunado Emperador, rehabilitando temporal- del Estado libre de las Tamaulipas.» — «Una águila por trofeo. — mente su memoria. Año de 1824.» Hoy descansan dentro de una urna de mármol, en la —Empieza en la villa de San Antonio de Padilla, á los siete días del mes de Julio de 1824, y concluye con la sesión del 80 de Abril de 1825. Capilla de San Felipe de Jesús, en la Catedral Metropoli- á fojas 198. tana de la Capital de la República. El congreso lo instalaron los diputados siguientes: Veamos lo que dice el historiador español Niceto de 1. — Presbítero, D. Antonio Gutiérrez de Lara, presidente. Zamacois, autor de una monumental «Historia de Mé- 2. — Presbítero, D. Miguel de la Garza García, vicepresidente. jico», respecto al regreso de Iturbide: 3. — Presbítero, D. José Eustaquio Fernández. 4. — D. Juan Echeandía (e). «Iturbide había salido expulsado del país; bien sabía, 5. — D. José Antonio Barón. 6. — D. José Ignacio Gil, secretario. por lo mismo, que no podía volver a él, sin que el go- 7. — D. José Feliciano Ortiz. secretario bierno no lo autorizase á ello. No ignoraba, pues, al ponerse en marcha para el suelo natal, que se expo- Diciembre 2011, número 9

nía á grave peligro, y mucho más cuando era llamado En cuanto al general Garza, como llegó su hora fi- por los que anhelaban un cambio político, como se nal, habrá reunídose en la eternidad con su víctima. ve manifiestamente por las comunicaciones que al El héroe y el verdugo han dado cuenta de sus obras á disponer su partida dirigió al ministro Canning, a un tribunal más justo y más severo que el de los hom- Lord Cochrane y a su agente Don Miguel José Quiny; bres. Lloremos sobre la tumba del desgraciado, y ro- lo comprueba el haber llevado con él una imprenta y guemos al cielo por el criminal. papel moneda grabado en Londres. Se dirá que esta Conclusión. imprenta, y yo lo creo así, la llevaba para manifestar Un día llegué á Padilla. El pueblo estaba casi desierto, á los mejicanos, desde el punto en que desembarcase, y me pareció que la maldición del cielo lo agobiaba. que no lo conducían al suelo de la patria, la ambición Busqué al alcalde y tuve la fortuna de encontrar un de mando y de honores, sino el noble sentimiento de hombre de buenos modales y algún talento. Como fue procurar unir todos los partidos para poner fin á las testigo presencial de la muerte de Iturbide, me contó discordias intestinas. No quiero dudar, ni por un mo- algunas particularidades que unidas á los apuntes mento, en que este era ciertamente su noble anhelo, históricos que existen impresos, me han servido para como lo expresa en un manifiesto á los mejicanos, im- formar este artículo. Me enseñó los sitios donde se preso en el mismo bergantín en que marchaba. desenlazó este drama histórico, que comenzó por un “Vengo,” decía en él, “no como emperador, sino alegre grito de libertad, y concluyó con un lúgubre como un soldado, y como un mejicano, más aun por lamento de muerte. La sala donde se reunió el con- los sentimientos de su corazón, que por los comu- greso para sentenciar al supuesto reo, es una galera nes de la cuna: vengo como el primer interesado en de veinte varas de largo, sucia y lóbrega, y que enton- la consolidación de nuestra independencia y justa li- ces, lo mismo que ahora, estaba ocupada con algunos bertad: vengo atraído del reconocimiento que debo al costales de maíz. El sitio es muy digno de los repre- afecto de la nación en general, y sin memoria alguna sentantes que legislaban y juzgaban en él. de las calumnias atroces con que quisieron denigrar La pieza donde estuvo preso Iturbide es un cuarto mi nombre mis enemigos. Pretendo asimismo mediar estrecho con una alta claraboya por donde recibe es- en las diferencias que existen entre vosotros, y que os casa y triste luz. Las paredes están llenas de letreros y arrastrarían por sí solas á la ruina.”38» rúbricas pintadas con carbón; pero entre esas líneas mal formadas se encuentra un barquito pintado. El 31 Pero seguramente el responso por Agustín de Iturbide alcalde me aseguró que este barco lo pintó el mismo más interesante, es el que escribió Manuel Payno en su Iturbide. «Bosquejo biográfico de los generales Iturbide y Terán»39: Del palacio nos dirigimos á una iglesita de adobe, que está amagando ruina. A un lado de la puerta esta- «Como el pueblo amaba á Iturbide, se temió un levan- ban dos palos que sostenían una pequeña campana, tamiento, y se apresuró la ejecución; así es que al día y frente á la puerta de la iglesia una gran lápida sin siguiente salió del llamado palacio para la esquina de inscripción, debajo de la cual reposaban los restos del la plaza, donde estaba el suplicio. Allí dio sus disposi- mártir de la independencia. En la esquina, que forma ciones para el regreso de su familia, y la encomendó á un jacal situado frente de la iglesia, se halla una cruz la piedad de su patria. Exhortó en seguida á los mexi- de madera clavada en un montón de piedras. En este canos á la unión y á la concordia; perdonó á todos sitio fue fusilado Iturbide. La cruz estaba cayéndose, sus enemigos, y les deseó acierto y prosperidad. Hizo por lo cual me entretuve en amontonar más piedras al Señor su última oración, y aguardó la muerte con y ponerla derecha, cavilando mientras en el destino tranquilidad. Los soldados que lo fusilaron lloraron que arrastra á los hombres desde un lecho de púr- de dolor y despecho. ¡Dios haya recibido su alma! pura, hasta el camaranchón de un calabozo; desde el La familia del héroe de Iguala vive en los Estados esplendor de un trono hasta la oscuridad de una se- Unidos. Su hijo el mayor lleva al pecho la cruz de Aya- pultura40.» cucho, que ganó combatiendo por la independencia de Colombia á las órdenes de Simón Bolívar, y es ac- Iturbide, hombre de carne y hueso tualmente secretario de la legación mexicana en In- glaterra. Benesky se suicidó. ¿Es acaso Iturbide culpable de todos los pecados con que la historia oficial lo envuelve? No lo sabemos a ciencia 38 Zamacois, Niceto: Historia de Méjico, desde sus tiempos más remotos cierta. Por los documentos nos podemos dar la idea de hasta nuestros días, Tomo xi, I. F. Parres y Compa. Editores. Barcelona – Méjico (1879). 40 Esta experiencia iba a servir a Bolívar para rechazar, con sabio criterio, 39 Payno, Manuel: Bosquejo biográfico de los generales Iturbide y Terán la corona que le ofrecían amigos como el caudillo llanero Páez y Manuel Payno, Impreso por Ignacio Cumplido, calle de los enemigos solapados como Santander. «Ni Colombia es Francia, Rebeldes no. 2, pp. 17 y 18, 1843. ni yo Napoleón —escribe al caudillo venezolano. Tampoco quiero imitar a César, menos a Iturbide». Pharus academiæ

que mucho de lo que se le acusa es falso de toda falsedad. encargado de ejecutar la sentencia dentro de un breve Hay otros casos, en los que un asomo de duda aparece término. al carear la información oficial con la documental, por Volvió entonces á notificarse á Iturbide que podía ejemplo, ¿ignoraba las innumerables conspiraciones que contar con tres horas para arreglar sus negocios, des- existían tomando su nombre como justificación? Tal vez pués de los cuales debía morir. sí, pero aún cuando lo supiera, ¿estaba dispuesto a enca- Iturbide se preparó á morir como cristiano y se bezarlas a su regreso a México? Tal vez sí, tal vez no. No confesó con el presidente del congreso que era un hay evidencia de que esa fuera su voluntad, y sí la hay de eclesiástico, y que había salvado su voto cuando se su ingenuidad. trató de la muerte del prisionero. Iturbide fue un héroe, no un santo, un héroe de carne Las seis de la tarde del día 19 fue la hora señalada y hueso, con virtudes y defectos, como todo ser humano. para ejecutar la sentencia. —Iturbide salió de la pri- Dejamos el mito y la forja de seres perfectísimos para sión sereno y firme, y deteniéndose al encontrarse en los inventores de la historia de bronce pagados por la el campo exclamó: nómina oficial. Pero, sin negar la carga de virtudes y de- — Daré al mundo la última vista. fectos innata a todo hombre, nadie puede honradamente Después pidió agua, que apenas tocó con los la- negar el amor de Iturbide por su Patria y su alta calidad bios, y se vendó él mismo los ojos. moral. Se trató entonces de atarle los brazos; resistióse al Esto se evidencia, de una manera particular, cuando principio, pero después se resignó con humildad. el libertador abdica como emperador para evitar derra- Detúvose allí, caminó cosa de setenta u ochenta mamiento de sangre y, más tarde, cuando a su regreso a pasos y llegó al lugar del suplicio, repartió el dinero México, la forma en que enfrenta la muerte. que llevaba en los bolsillos entre los soldados, y en- Liberales honrados, que los hay y los hubo, como Justo tregó su reloj, un rosario y una carta para su familia al Sierra, Lorenzo Zavala, Guillermo Prieto, Carlos María eclesiástico que le acompañaba. de Bustamante, Francisco Bulnes y Vicente Riva Palacio, En seguida, con firme acento habló á la tropa, rezó contrarios a la postura conservadora han reconocido la en voz alta algunas oraciones y besó fervorosamente calidad moral y los méritos del libertador de México. un crucifijo. Veamos aquí algunos renglones del relato que hace En ese momento el jefe hizo la señal de fuego y se 32 Don Vicente Riva Palacio, prominente liberal y nieto de escuchó el ruido de la descarga. Vicente Guerrero acerca de Iturbide primero, y después Cuando se disipó el humo de la pólvora, D. Agustín de lo ocurrido en Padilla: de Iturbide no era ya más que un cadáver cubierto de sangre.» «Padilla III. Amaneció el día 17, y se notificó á Iturbide que den- Los intentos por sacar a Iturbide del olvido tro de pocas horas debía morir. Su muerte estaba decretada por Garza, que se fun- Después de la Segunda Guerra Mundial, la política mexi- daba para dar esta determinación en la ley que pros- cana dio un giro conservador que propició la aparición cribía á Iturbide para siempre de la República. de varias obras en torno a Iturbide, intentando superar Notificóse al preso la sentencia, y la escuchó sin la campaña de denigración y calumnia que la historia inmutarse; pidió que viniera, para auxiliarle en el úl- oficial había vertido contra Iturbide. Se publicó entonces, timo trance, su capellán que había quedado en el bu- en 1944, Iturbide, varón de Dios, de Rafael Heliodoro Va- que, y envió á Garza un manifiesto que había escrito lle, en 1946 apareció Iturbide: oficial realista, el libertador, para la nación. el emperador, de José Macías y al año siguiente vio la luz La serenidad de Iturbide y la lectura del manifiesto El libertador. Documentos selectos de D. Agustín de Itur- conmovieron sin duda al general, porque mandó sus- bide, de Mariano Cuevas. pender la ejecución y se puso en marcha para Padi- Estos trabajos ofrecían una visión idílica de Iturbide lla, en donde estaba reunido el congreso del Estado, que lo describía como héroe de la causa independentista, llevando consigo al prisionero y tratándole con tantas injustamente denostado y acusado de traicionar a su pa- consideraciones como si él fuera mandando en jefe. tria, y lo elevaba a la categoría de mártir tras su ejecu- Llegaron por fin á Padilla, y el congreso determinó ción. que sin excusa ni pretexto fuese pasado por las ar- Valle dedica prácticamente la totalidad de su libro a mas. En vano Garza, que asistió á la sesión, procuró reproducir cartas y documentos de fuentes secundarias probar, convertido entonces en defensor de Iturbide, para reconstruir paso a paso la vida de Iturbide desde que el decreto de proscripción no alcanzaba á tanto, su nacimiento hasta su muerte. Aunque el autor intenta que Iturbide daba pruebas de sus intenciones pací- ofrecer una visión imparcial, no deja de llamar la aten- ficas, trayendo consigo á su esposa y á sus pequeños ción que en el relato cronológico no incluye la disolución hijos. El congreso se mantuvo inflexible, y Garza fue del Congreso constituyente. Diciembre 2011, número 9

Mariano Cuevas considera que, del mismo modo que que dañaron su causa y lo condujeron a la ruina junto Bolívar es llamado El Libertador de América del Sur, con sus seguidores. Pero en presencia de la muerte el México debía llamar a Iturbide El libertador de México. Padre Hidalgo volvió a ser quien antes era, y afrontó La recuperación de la figura de Iturbide tuvo un su final con entereza y dignidad. Debemos recordarlo efecto breve que traspasó las fronteras nacionales mexi- igual que a todos los personajes de nuestra historia: canas. El historiador norteamericano William Spence con sus luces y sus sombras; como a hombre, no como Robertson publicó en 1952 su Iturbide of , un volu- a estatua». men que se convirtió rápidamente en la obra más citada sobre la vida del ex emperador y, casi, en su biografía El 27 de septiembre pasado, México cumplió 191 años «oficial». como nación independiente. No es cierto que hayamos cumplido «200 años de ser orgullosamente mexicanos». L’Envoy Las últimas palabras que el hacedor del Plan de Iguala dejó en sus memorias deben hacernos reflexionar: ¿Qué fue lo desorbitado que hizo Iturbide? ¿Hacer lo que era corriente hacer en su tiempo? ¿Imitar lo que sucedió «Cuando instruyáis a vuestros hijos en la historia de apenas dos décadas antes en Francia? Ese era el mundo la patria, inspiradles amor por el jefe del ejército triga- de principios del siglo xix. Los gobernantes eran reyes o rante (...) quien empleó el mejor tiempo de su vida para emperadores. La invención de la República de los Esta- que fueseis dichosos». dos Unidos era muy reciente, y aún aquella apenas se lo- gró, pues a George Washington el Ejército Continental le ofreció la corona, aunque el libertador la rechazó. Así que lo que hizo Iturbide era moneda corriente en la época. Si acaso podríamos acusarlo de no haber sacado el ejército a las calles, como Napoleón para sentarse en el trono, o no haber rechazado el ofrecimiento, como hizo Washington. «¿Qué aberración tan monstruosa, sólo vista en 33 México —dice Alfonso Junco42— ... loar la libertad y mal- decir al libertador, glorificar la obra y desdeñar al obrero, tomar el don y escarnecer al que lo da? … Iturbide es una gloria de México... Su genio militar, su visión política, su gobierno magnánimo, su abdicación gloriosa, su decen- cia personal, su amor al pueblo y el amor de su pueblo, pónenlo entre las figuras universales». Iturbide no debe ser héroe o apestado de cada una de las facciones que, desde hace dos siglos, mantienen una lucha por la hegemonía política e, incluso, por el pensa- miento de los mexicanos; no, Iturbide debe ser, porque lo es, un héroe nacional. Para honrarlo bastará con conocer la verdad acerca de quién fue y cuál fue su comportamiento y optar por la justicia. Armando Fuentes Aguirre —Catón— escribió en su columna De política y cosas peores del 15 de septiembre de 2009:

«La emancipación de México la hizo —que no la consumó*— Agustín de Iturbide. Los hechos lo de- muestran; pretender ocultarlos es negar la verdad y desvirtuar la historia. México es una gran nación, y no necesita de la mentira para ser amado. Decir esto no es agraviar a Hidalgo. Fue él un hombre iluminado a quien las circunstancias llevaron a las oscurida- des en que cae quien deja de ser dueño de sí mismo. Arrebatado por la muchedumbre, cayó en excesos Pharus academiæ

Bibliografía

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35 Pharus academiæ

El cálculo de densidad de caracteres por línea, como herramienta en el diseño editorial.

36

Ernesto Peña Alonso En su momento, los psicólogos Miles Tinker y Donald Paterson Licenciado en Diseño Gráfico por la Universidad Autónoma de generaron investigación de mucho interés para el campo de la tipografía y el diseño Tamaulipas. Maestro en Diseño editorial. de la Información por la Sin embargo, mucha de esta obra permanece desconocida por diferentes moti- Universidad de las Américas, Puebla. vos. En su trabajo La investigación olvidada de Miles Albert Tinker, Sandra Wright Sutherland (1988) expone tres de ellas: en primer lugar; muchos de estos resultados fueron presentados en revistas de psicología y no puestos a disposición de la indus- tria editorial o de los diseñadores, «herederos y depositarios» del ejercicio editorial y de toda la responsabilidad que ello implica. En segundo lugar, cuando estas inves- tigaciones fueron publicadas en el libro How to make type readable (Tinker, 1940), un texto dedicado —literalmente, según el título— a «tipógrafos, impresores y publi- cistas», los expertos en estas áreas se sintieron ofendidos por la presunción de dos psicólogos con nula experiencia en sus campos. Y en tercer lugar, los impresores de la época no entendieron que el enfoque de Tinker y Paterson era exclusivamente dirigido a la eficiencia de lectura, no la calidad de las publicaciones. Tinker presentó en su momento resultados de estudios sobre el tamaño de la le- tra, el largo de la línea y el interlineado como factores de influencia para la lectura desde un punto de vista científico. Pero debemos considerar que, siendo los inves- tigadores psicólogos y no tipógrafos o diseñadores, dichos resultados no se apegan del todo a los cánones de la tipografía como disciplina. Sabemos, por ejemplo, que cuando hablamos de legibilidad, la altura de x es un factor de mucha mayor influen- cia que el tamaño del cuerpo. Recientemente, textos como el de Bringhurst (2002) o el de De Buen (2008), recu- peran mucho de estos cánones, reivindicando indirectamente a Tinker. Diciembre 2011, número 9

Densidad de caracteres

Específicamente, en lo referente a longitud de línea (Ll), ambos autores establecen parámetros o rangos mínimos, óptimos y máximos dependiendo —en el caso de Bringhurst— de las características del texto o —en el caso de De Buen— de la expe- riencia del lector. Estos rangos están dados en caracteres por línea o densidad de ca- racteres (Dyson, 2004) (ρcc) un criterio mucho más objetivo que el de palabras por línea propuesto en su momento por el mismo Tinker y convertido informalmente en un estándar hasta la fecha. Determinar la longitud de línea en función de la densidad de caracteres permite dejar fuera de consideración factores que pueden enrarecer el establecimiento de un protocolo de diseño, como es el caso del idioma. Consideremos, que no todos los idiomas se comportan igual y de uno a otro el pro- medio de caracteres por palabra puede variar mucho, (como del español al alemán, por ejemplo); incluso entre géneros literarios escritos en el mismo idioma este promedio puede tener variaciones (De Buen [2008] reporta que la prosa en español tiene 4,72 ca- racteres por palabra contra 5,14 del ensayo en español). Los rangos de densidad de caracteres establecidos por De Buen y Bringhurst pueden resumirse en estas tablas:

Según Bringhurst:

Columas Rango Mínimo Óptimo Rango Máximo Monocolumna 45 66 75 Multicolumna 38 45 60

Según De Buen: 37 Tipo de Lector Rango Mínimo Óptimo Rango Máximo Bajo 34 45 60 Alto 45 60 80

De Buen (2005), en su caso, explica que la densidad de caracteres en líneas de texto va aumentando en función de la experiencia del lector, empezando con líneas muy cortas cuando se está aprendiendo a leer y aumentando progresivamente hasta llegar a los rangos máximos. Esto se debe (explica De Buen) a la necesidad de proveer estímulos en función de la experiencia del lector, así, un lector neófito necesitará más estímulos (más líneas cortas) que uno experimentado (menos líneas largas). Esta observación se puede comprobar empíricamente en el uso que los niños en edad escolar le dan a los cuadernos de forma italiana (de orientación horizontal) cuando se les solicita hacer «planas» de letras, palabras o frases: Es común observar que el niño busque llenar la página avanzando por columnas y no por filas (aun cuando el sentido original del ejer- cicio es seguir el orden convencional de lectura). La razón podría estar en la cantidad de estímulos (entendiendo «estímulo» como una sensación de avance) que se obtiene en cada una de las situaciones; un cuaderno de formato horizontal tendrá —evidente- mente— más columnas que filas, un cuaderno de formato vertical, más filas que co- lumnas. De Buen explica que un lector que se considere «alto» encuentra estímulos a la lec- tura ya no en las líneas, sino en páginas, capítulos o libros enteros; para este tipo de lectores, la densidad de caracteres puede ser muy alta (tanto como la establecida en los rangos máximos de la tabla). Si atendemos a lo planteado por ambos autores (y por Tinker, en su momento), la densidad de caracteres debería ser —en atención al lector— el criterio (o por lo menos uno de los criterios) para determinar el largo de la línea del texto. Pharus academiæ

En su obra, Bringhurst ofrece una tabla para determinar la densidad de caracteres a partir de la medida de la línea de texto y la longitud del alfabeto básico occidental en minúsculas (abcdefghijklmnopqrstuvwxyz). Sin embargo, bajo este sistema, es impo- sible determinar el largo de línea sin dicha tabla. De Buen, por su parte, le asigna las siglas lca para referirse a esta medida (longitud de los caracteres del alfabeto) y ofrece un recurso aritmético para determinar rangos; recurso que (sin considerar su efectivi- dad) resulta más fácil de utilizar que la tabla de Bringhurst. De acuerdo con De Buen, el valor lca deberá multiplicarse por 1,75 para obtener una medida óptima de largo de línea; una vez obtenido este valor, se multiplica a su vez por 0,75 para longitud mínima y por 1,5 para una longitud máxima. Aparentemente, De Buen determina estas constantes a partir de los 26 caracteres del alfabeto; de modo que 26 multiplicado por 1,75 se tiene por resultado 45,5, (la densidad óptima de carac- teres para bajo lector de De Buen y la densidad óptima de texto multicolumna y rango bajo para texto monocolumna de acuerdo con Bringhurst); al multiplicar 26 por 1,75 y posteriormente por 0,75 tendríamos por resultado 34,125, (la densidad mínima de ca- racteres para bajo lector de De Buen, y el rango mínimo para texto multicolumna de acuerdo con Bringhurst); al multiplicar 26 por 1,75 y posteriormente por 1,5 tendríamos como resultado 68,25. Aunque como punto de referencia este recurso se puede considerar suficiente, no es del todo exacto. Obsérvese el porcentaje de error o variación de la cifra ideal, presen- tada en cada caso.

Fuente lca l=(lcax1,75) m= l x 0,75 n= l x 1,5 Adobe Jenson 9p6,83 (114,83) 16p8,953 12p6,714 25p1,43 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 49,14 cc 34 / 36,6 cc 68 / 75,6 cc Variación (%) 9.2% 7.64% 11.17% Adobe Garamond 9p8,425 (116,425) 16p11,744 13p2,808 25p5,616 38 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 49,85 cc 34 / 39,15 cc 68 / 77,17 cc Variación (%) 10.7% 15.14% 13.48% Baskerville 10p0,36 (120,359) 17p6,628 13p1,971 26p3,942 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 50.7 cc 34 / 36.86 cc 68/ 76,23 cc Variación (%) 12% 8.41% 12.10% Officina Serif 10p4,24 (124,242) 18p1,423 13p7,068 27p2,136 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 51.26 cc 34 / 34.7 cc 68 / 77,05 cc Variación (%) 13.91% 2.05% 13.31% Meta 10p8,88 (128,88) 18p9,54 14p1,155 28p2,31 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 50.11 cc 34 / 36.86 cc 68 / 76,29 cc Variación (%) 11.35% 8.41% 12.19%

Tabla 1. Determinación de densidades según la fórmula de De Buen. En todos los casos se empleó el mismo texto (lorem ipsum) de 200 palabras con la fuente elegida a un tamaño de 10 puntos, con formación en bandera y separación silá- bica, limitada a 3 guiones seguidos. El cálculo de caracteres se hizo dividiendo los caracteres totales entre la cantidad de filas resultantes.

Lo cierto es que la determinación de un largo de línea por densidad de caracteres involucra muchos otros factores que solo el factor lca. Evidentemente, la medición del lca se debe hacer con la fuente elegida al tamaño con el que se va a formar, pero también con el espacio como se va a utilizar. En programas como InDesign de Adobe se ofrecen tres opciones de kerning: automá- tico, métrico y óptico. Las diferencias entre cada uno de estos procedimientos tiene por consecuencia un desfase en la lca, el cual, en los rangos óptimos y máximos puede significar una variación de hasta uno a dos caracteres. Diciembre 2011, número 9

En azul: lca establecido con kerning métrico En rojo: lca establecido con kerning óptico

La determinación del criterio de kerning es entonces una decisión de im- portancia similar que el tamaño de la letra o el interlineado porque todos los métodos planteados (a reserva de que exista uno que desconozca) requie- ren una medición relativamente exacta del largo de caracteres del alfabeto; y más aún si se pretende ser lo más preciso posible en la determinación del largo de línea en función de la densidad de caracteres. Ahora bien, la razón de esta precisión puede no solo estar en lo planteado en las investigaciones de Tinker, Bringhurst o De Buen con respecto a la con- ducta del lector; además, puede ser un factor de control muy importante en el diseño editorial en general. Hablando de libro, por ejemplo, la densidad de caracteres que se decida inducir en una línea de texto (en función del posible tipo de lector), el interli- neado y la proporción de la página serían suficientes para tener una cantidad promedio aproximada de los caracteres que puede tener cada página; y este dato con la cantidad de caracteres totales de toda la obra (medido por cada capítulo) nos puede dar la cantidad aproximada de páginas de la obra com- pleta. Con esta información previa a la formación, se puede tener más control sobre la elección de papel, tamaño de los márgenes, tipo de encuadernación, etc. En el caso de revista o periódico, en función del diseño de la retícula (can- tidad de columnas, modulación), se puede saber cuántas palabras solicitar a 39 los colaboradores o cuál puede ser la cantidad probable de páginas, conside- rando los porcentajes de ocupación de imágenes contra textos. Para cumplir estos dos posibles propósitos del cálculo de la densidad de caracteres, es recomendable que se considere en el procedimiento: 1) que el índice de variación o error sea el menor posible (menor al que ofrece la fór- mula de De Buen), 2) estar más cercano a los rangos establecidos por ambos autores, 3) pero ser fácilmente modificable en función del lector y el texto. La intención de este documento es presentar un protocolo para calcular largos de línea en función de densidades de caracteres, que cumpla con estos tres objetivos. Este protocolo partiría de la obtención de la medida lca (implícito en la tabla de Bringhurst y explícito en la opción aritmética de De Buen), escri- biendo el alfabeto básico occidental (26 caracteres) al tamaño y sistema de kerning, al cual se formará el documento en sí. La medida resultante consi- dera la cantidad de caracteres, pero no considera el comportamiento de los espacios, que suele variar de acuerdo con la fuente elegida. Estas variaciones responden a las características formales de la letra. Por ejemplo, las fuentes con serif suelen tener menos espacio (métrico, no óptico) entre letras que las fuentes sin serif.

Adobe Caslon, kerning óptico Pharus academiæ

Meta Pro, kerning óptico

En la fórmula presentada por De Buen, la medida de lca adquiere un valor de 1, y este valor se modifica en virtud de la cantidad de caracteres que se quiere inducir. Para esta propuesta, el espacio entre caracteres se considera como un factor independiente al carácter mismo, al asignarle al espacio una medida derivada del promedio de lca sin espacios. Aunque esta medida —evidentemente— será variable, en función de la cantidad de la letra elegida, se consideró una constante de 3 caracteres. Así, lca (con un valor de 1) se tendría que dividir entre 29 caracteres para obtener otra constante a la que llamaremos c, con un valor de 0.0345 [c=1/ (26+3)=0.0345].

40 Proforma Regular

Este valor, multiplicado por lca y a su vez por la cantidad de caracteres que se quiere contener en la línea, nos dará por resultado la medida de la misma: lca x c (0.0345) x cc = Ll. Por ejemplo, siendo el valor lca de Adobe Jenson a 10 puntos con kerning óptico de 114,83, y 45 la densidad de caracteres deseada, tendríamos que: 114,83 puntos x 0.0345 x 45 = 178,273575 puntos = 14p10,274. Evidentemente, es imposible descartar un margen de error dado que no se puede controlar: la aparición de palabras en un texto determinado, pero este margen de error quedaría reducido a un +/- 4% de la densidad de caracteres en la línea, siendo mayor mientras más corta es la línea. En el caso del ejem- plo anterior, la densidad de caracteres es de 44.47, con un margen de error del 1.17%. A manera de comprobación, se comparan los resultados obtenidos por medio de la fórmula presentada en el texto de De Buen, mostrada con ante- rioridad, con otros en los cuales se aplicó la fórmula que acaba de explicarse. Diciembre 2011, número 9

Fuente lca 45 cc 34 cc 68 cc Adobe Jenson 9p6,83 (114,83) 16p8,953 12p6,714 25p1,43 14p10,274 11p2,695 22p5,391 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 49,14 cc 34 / 36,6 cc 68 / 75,6 cc 45 / 44,46 cc 34 / 32,975 cc 68 / 68,89 cc Variación (%) 9.2% 7.64% 11.17% -1.2% -3.01% 1.3% Baskerville 9p8,425 (116,425) 16p11,744 13p2,808 25p5,616 15p0,75 11p3,566 22p9,133 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 49,85 cc 34 / 39,15 cc 68 / 77,17 cc 45 / 45,17 cc 34 / 33,1 cc 68 / 68,94 cc Variación (%) 10.7% 15.14% 13.48% 0.3% -2.64% 1.4% Adobe Garamond 10p0,36 (120,359) 17p6,628 13p1,971 26p3,942 15p6,857 11p9,181 23p6,362 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 50,7 cc 34 / 36,86 cc 68/ 76,23 cc 45 / 44,46 cc 34 / 32,975 cc 68 / 68,89 cc Variación (%) 12% 8.41% 12.10% -1.2% -3.01% 1.3% Officina Serif 10p4,24 (124,242) 18p1,423 13p7,068 27p2,136 16p0,886 12p1,949 24p3,472 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 51,26 cc 34 / 34,7 cc 68 / 77,05 cc 45 / 45,13 cc 34 / 32,975 cc 68 / 68,94 cc Variación (%) 13.91% 2.05% 13.31% 0.3% -3.01% 1.4% Meta 10p8,88 (128,88) 18p9,54 14p1,155 28p2,31 16p8,086 12p7,176 25p2,352 Densidad de cc. ideal /densidad real 45 / 50,11 cc 34 / 36,86 cc 68 / 76,29 cc 41 45 / 44,46 cc 34 / 32,73 cc 68 / 68,73 cc Variación (%) 11.35% 8.41% 12.19% -1.2% -3.73% 1.07%

Tabla 2. Determinación de densidades según la fórmula de De Buen compara- da con la presentada en este documento según las condiciones presentadas en la tabla 1.

El reducir el margen de error en el cálculo de densidades de línea (por el mé- todo presentado en este documento, o por cualquier otro existente o por existir), es más un recurso de organización y control que una curiosidad. El método expuesto en este documento, su consideración del espacio in- terletra medido en términos de caracteres y la posibilidad de hacer un cál- culo de densidades, busca acercarnos a una noción que podemos denominar «texto líquido», haciendo referencia a la propiedad de fluidez que pareciera adquirir el texto. Muy probablemente, el potencial y valor de este recurso en su dimensión completa será mejor entendido en la práctica y en el ejercicio del diseño edi- torial. Pharus academiæ

Bibliografía

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42 Diciembre 2011, número 9

43 Pharus academiæ

Quelación de Cadmio mediante esencia de clavo de olor «syzygium aromaticum» (Eugenol), y su aplica- ción en el tratamiento de residuos sólidos peligrosos con contenido de Cadmio.

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Marisol Martínez Resumen Hernández Este trabajo presenta la síntesis de quelacion de Cadmio, utilizando como materia prima óxido de Cadmio, esencia de la especia conocida como clavo de olor (Syzygium aromaticum) eugenol y agua; en la síntesis se obtuvo un producto sólido de estructura petrificada e insoluble en agua, mismo que fue caracterizado mediante espectroscopia infrarroja. Para poder proponer la síntesis como una ruta química para el tratamien- to de metales pesados, se evaluó la toxicidad de los lixiviados del quelato obtenido, mediante bioensayos de germinación, utilizando semillas de Lens esculenta. Como resultado del bioensayo, se observó que en ambientes ácidos hubo disminución significativa en el crecimiento de las raíces en las semillas, y en ambientes neutros no hubo efectos negativos en el crecimiento de las semillas. Las ventajas que ofrece el estudio de esta síntesis son: la participación de compuestos naturales como los aceites esenciales de «Syzygium aromati- cum», además de que la materia prima principal es un residuo peligroso y que el producto final, al petrificar, impide la dispersión de partículas de Cadmio; de acuerdo con la estructura química se mantiene estable a pH neutros y al- calinos, y en estas condiciones los efectos tóxicos de sus lixiviados, dismi- Diciembre 2011, número 9 nuyen o no se presentan, lo cual hace de la síntesis una Mercurio metodología candidata para poder aplicarse como trata- miento de residuos sólidos peligrosos. El mercurio puede estar presente en dos formas prin- cipalmente: mercurio inorgánico y especies órganomer- Metales pesados curiales, de las cuales el metilmercurio es la más estu- diada, por su alta toxicidad al atravesar fácilmente las En la industria, uno de los tratamiento que se aplica a los paredes celulares y entrar al sistema biológico. Por otro efluentes para eliminar metales pesados, consiste en la lado, ha sido demostrado por varios autores que muchos precipitación en forma de hidróxidos; los metales precipi- organismos vivos pueden transformar el mercurio inor- tados en forma de hidróxidos terminan en confinamien- gánico a sus formas orgánicas. Los compuestos más peli- tos y, en muchos casos, otras empresas se encargan de la grosos del mercurio son los alquilmercurio, los cuales se disposición final; sin embargo, el riesgo de su ingreso a encuentran en la cadena alimenticia1. los ecosistemas —y por ende a la cadena trófica— depen- La gravedad de los daños que puede ocasionar a la po- derá de la reactividad de sus formas químicas finales, es- blación se ilustra por los episodios de intoxicación ocu- pecialmente de su capacidad para disolverse en el agua. rridos en Minamata y Nigata, Japón, en 1956 y en 1965 res- El término «metal pesado», a pesar de ser ampliamen- pectivamente, como resultado de la ingestión de pescado te utilizado entre los profesionales y científicos, no tiene que contenía metil-mercurio, procedente de las aguas una base científica rigurosa o una definición química. contaminadas con descargas de plantas fabricantes de Aunque muchos de los elementos que se enlistan en el acetaldehído, que involucraron a 2255 personas en el pri- término «metal pesado» tienen una gravedad específica mer caso y a 700 en el segundo. Estos sucesos pusieron mayor que cinco, existen diversas excepciones a esta re- de relieve las transformaciones que sufre el mercurio en gla. el ambiente, ya que se vertió al agua como mercurio me- Una forma opcional de nombrar este grupo es: «ele- tálico y fue biotransformado a metilmercurio, además de mentos tóxicos», los cuales —de acuerdo con la lista de que fue bioacumulado a través de la cadena alimenticia. contaminantes prioritarios de la Agencia de Protección También ocurren efectos tóxicos por inhalación de Ambiental de los Estados Unidos (usepa)—, incluyen los vapor de mercurio, el cual daña especialmente el siste- siguientes elementos: Arsénico, Cromo, Cobalto, Níquel, ma nervioso. Las exposiciones leves están caracterizadas Cobre, Zinc, Plata, Cadmio, Mercurio, Titanio, Selenio y por pérdida de la memoria, temblores, inestabilidad emo- 45 Plomo. cional (angustia e irritabilidad), insomnio e inapeten- cia. A exposiciones moderadas, se observan desórdenes Afectaciones a la salud por metales pesados mentales más importantes y perturbaciones motoras, así como afecciones renales. Las exposiciones breves a Ciertos metales funcionan como venenos metabólicos, elevados niveles de vapor de mercurio pueden producir ya que pueden reaccionar e inhibir una serie de sistemas daños pulmonares y la muerte. El empleo de cosméticos enzimáticos; elementos como Hg+2, Cd+2 y Ag+1 forman y medicamentos que contienen mercurio es una fuente complejos tóxicos inespecíficos en la célula, lo que pro- adicional de exposición. duce efectos tóxicos para cualquier función biológica. Elementos como el Hg, As, Sn, Tl, y Pb, pueden formar Cadmio iones órgano-metálicos liposolubles capaces de penetrar membranas y acumularse en las células. Aún elementos La población abierta se expone al cadmio principalmen- sin propiedades toxicas en baja concentración, como te a través de la cadena alimenticia, aunque también por Zn+2 o Ni+2, y especialmente Cu+2, son tóxicos en con- el consumo de tabaco contaminado con cadmio presente centraciones mayores. en los fertilizantes fosfatados. El cadmio se acumula en En México, el Instituto Nacional de Ecología (ine), el organismo humano fundamentalmente en los riñones, órgano dependiente de la Secretaria Medio Ambiente y causando hipertensión arterial. La absorción pulmonar Recursos Naturales (semarnat), considera que son tres es mayor que la intestinal, por lo cual, el riesgo es mayor de los denominados metales pesados, cuyo manejo re- cuando el cadmio es aspirado. presenta mayor preocupación en el país. A continuación La concentración crítica en la corteza renal, que da lu- se citan sus principales efectos en la salud. gar a una prevalencia de 10% de proteinuria —presencia de proteína en la orina— en la población en general, es aproximadamente de 200 mg/kg, y que se alcanza con una ingestión alimentaria diaria de unos 175 µg por per- sona durante 50 años.

1 Morel, et al (1978). ops. Pharus academiæ

como oligoelementos. En la ciudad de Toyama, en Japón, ocurrió un brote En el suelo, los metales pesados como iones libres, epidémico de intoxicación (síndrome de Itai-Itai), ocasio- pueden tener acción directa sobre los seres vivos, lo que nado por la ingestión de arroz contaminado con cadmio, ocurre a través del bloqueo de actividades biológicas, es el cual era irrigado con agua contaminada por «jales». decir, la inactivación enzimática por la formación de en- Las personas afectadas, principalmente mujeres postme- laces entre el metal y los grupos —SH (Sulfidrilos) de las nopáusicas, sufrieron deformación de los huesos, acom- proteínas, causando daños irreversibles en los diferentes pañada de intenso dolor y fracturas, además de protei- organismos. nuria y glaucoma. Se considera que estas alteraciones Cuando el contenido de metales en el suelo alcanza se produjeron favorecidas por factores dietéticos, como niveles que rebasan los limites máximos permisibles, deficiencia en vitamina d. causa efectos inmediatos como inhibición del crecimien- El cadmio ha sido asociado con la aparición de cáncer to normal y el desarrollo de las plantas, y un disturbio en animales de experimentación, así como con casos de funcional en otros componentes del ambiente, así como cáncer de próstata en humanos. la disminución de las poblaciones microbianas del suelo. El término que se emplea es «polución de suelos». Plomo Los metales pesados incorporados al suelo pueden se- guir cuatro diferentes vías; la primera, quedar retenidos Las intoxicaciones ocasionadas por plomo, conocidas en el suelo u ocupando sitios de intercambio; segunda, desde la antigüedad, se han debido al consumo de be- específicamente adsorbidos sobre constituyentes inorgá- bidas contaminadas por este metal, principalmente de nicos del suelo; tercera, asociados con la materia orgáni- fabricación clandestina, como el vino. Más común, sobre ca del suelo; y cuarta, precipitados como sólidos puros todo en países en desarrollo, es la intoxicación provocada o mixtos. Por otra parte, pueden ser absorbidos por las por el consumo de alimentos preparados o almacenados plantas y así incorporarse a las cadenas tróficas, pueden en recipientes de barro vidriado, de los cuales se despren- pasar a la atmósfera por volatilización y pueden ser mo- de plomo. vilizados a las aguas superficiales o subterráneas. Para En las zonas urbanas con intenso tráfico vehicular, elucidar el comportamiento de los metales pesados en la principal fuente de exposición al plomo resulta de la los suelos y prevenir riesgos tóxicos potenciales, se re- 46 inhalación de partículas extremadamente pequeñas que quiere la evaluación de la disponibilidad y movilidad de persisten en el aire durante algunas semanas, antes de los mismos. sedimentarse, y que son emitidas por los autotranspor- La toxicidad de los metales depende no sólo de su con- tes que consumen las gasolinas que contienen tetraetilo centración, sino también de su movilidad y reactividad de plomo. Se ha visto que el plomo es el principal conta- con otros componentes del ecosistema. minante metálico en la atmósfera. En los países en los Los metales pesados contribuyen fuertemente a la cuales se han empleado pinturas de interiores con óxidos contaminación ambiental. La cantidad de metales dispo- de plomo, es común la intoxicación de niños al ingerir la nibles en el suelo está en función del pH, el contenido de pintura descascarada. arcillas, el contenido de materia orgánica, la capacidad de intercambio catiónico y otras propiedades que las ha- Afectaciones al ambiente por metales pesados cen únicas en términos del manejo de la contaminación.

Los metales pesados pueden incorporarse a un sistema Principales fuentes de contaminación en México de abastecimiento de agua por medio de residuos indus- triales que son vertidos sin previos tratamientos, los que México es uno de los países de Latinoamérica que se en- posteriormente se depositan en lagos, ríos y distintos sis- cuentra localizado en una región volcánica rica en mi- temas acuíferos. La absorción de metales pesados por las nerales. La tradición minera en el país se remonta a la plantas es generalmente el primer paso para la entrada época prehispánica, con la explotación de yacimientos de éstos en la cadena alimentaria. La absorción y poste- ubicados principalmente en las zonas de Taxco, Pachu- rior acumulación dependen en primera instancia del mo- ca, Guanajuato y Querétaro. Dicha actividad adquirió vimiento —movilidad de las especies— de los metales, una gran relevancia económica y social hasta el periodo desde la solución en el suelo a la raíz de la planta. de la Colonia, convirtiéndose entonces en el motor del Algunos elementos metálicos son indispensables para crecimiento económico y modernización de la Corona el metabolismo vegetal, ya que algunos de ellos son nece- española. La minería suministró insumos a la industria sarios para activar enzimas; de manera natural es posi- de la construcción, metalurgia, siderurgia y química, por ble encontrar Níquel en los primeros horizontes del suelo más de tres siglos, ayudando a generar infraestructura y que aparece ligado a formas orgánicas. Este elemento, polos de desarrollo en el país. A nivel mundial, el auge de junto con el Zinc, son requeridos por el metabolismo ve- la minería mexicana se tradujo en un importante flujo getal en bajas concentraciones, de ahí que se conozcan de metales preciosos, especialmente plata, hacia los cir- Diciembre 2011, número 9 cuitos comerciales europeos. Actualmente, la posición de la minería dentro de las industrias del sector primario es significativa, aún cuando enfrenta problemas de mercados deprimidos. La explotación minera en el país se realiza básicamente en dos modalida- des: explotación y beneficio de metales (preciosos e industriales), y explota- ción de piedras preciosas y minerales industriales, como los ópalos y caolines, respectivamente. También es común la explotación de rocas para la elabo- ración de artesanías y construcciones. Entre los estados que destacan por su contribución con la producción de metales y minerales siderúrgicos, se encuentran Coahuila, Jalisco y Michoacán. El ejemplo más común de la contaminación de suelos por actividades mineras en México es la generada durante la explotación del oro y la plata, realizado comúnmente por amalgamación con Hg y por cianuración. En nin- guno de los dos casos es posible la recuperación total de los compuestos y/o elementos adicionados, por lo que es común encontrarlos en los residuos del proceso (jales) en forma soluble. Durante el proceso de cianuración se incre- menta el pH por la adición de hidróxido de calcio; al generarse hidróxido de sodio (en el caso de beneficio con plata) como producto de la reacción, tam- bién se forma cianuro de sodio. En México, la separación del mineral de los materiales sin valor se lleva a cabo básicamente a través de dos métodos: la flotación y la hidrometalurgia. Como se mencionó, los impactos ambientales ocasionados por los métodos de flotación aumentan proporcionalmente al incremento del uso de reacti- vos, para favorecer el proceso. En el caso de México, los elementos potencial- mente tóxicos más comunes derivados de estos procesos, son: Pb, Cd, Zn, As, Se y Hg. De acuerdo con la ubicación del yacimiento, la minería en el país se realiza a cielo abierto (cuando los minerales se encuentran en zonas más o menos 47 superficiales), o bien, opera de forma subterránea. Debido a lo anterior, los volúmenes de descapote varían mucho, desde relaciones desperdicio/mineral de 1:1 hasta 6:1. En el caso de minas no metálicas, como las de sal en Guerrero Negro o de yeso en Baja California, existen diferencias notables con respecto a las minas en las que se extraen metales. La peligrosidad de los residuos generados en este tipo de minas se debe más a los grandes volúmenes ma- nejados y a su dispersión, que a la toxicidad de sus componentes (Gutiérrez y Moreno; 1997) NO ESTÁ EN LA BIBLIOGRAFÍA. Otra fuente importante de contaminación por metales pesados en México es la actividad industrial. Desde el inicio de la industrialización y hasta la actualidad, este tipo de actividades genera diversos tipos de residuos peligro- sos que, ante la falta de una regulación jurídica adecuada que los identificara como tales, se dispusieron en sitios inadecuados como terrenos aledaños a las plantas industriales, especialmente adquiridos para ese propósito, patios de las propias instalaciones industriales, o bien, se depositaron indiscrimi- nadamente en barrancas, ríos, basureros, terrenos baldíos y cañadas, entre otros (SEMARNAT: 2004b) NO ESTÁ EN LA BIBLIOGRAFÍA. Pharus academiæ

Tabla 1. Número de distritos mineros y zonas mineralizadas por estado hasta 1999

Estado Zonas Mineralizadas Metaleras y Minerales bc 4 Au, Ag, Pb, Zn, Cu, W, Mn, cuarzo, barita, ónix calcáreo, ceniza vol- cánica pétrea, zeolita, roca caliza, magnetita Coah 5 Fe, Cr, Sm, Zn, Cu, Ag, Au, Mg, Na, barita, óxidos de Pb y Zn, galena, fluorita, cuarzo, pirita, carbón, yeso Chih 32 Au, Ag, Pb, Zn, Cu, Fe, mármol, fluorita, yeso, pirita, malaquita, óxidos de Fe, caolín Dgo 13 Au, Ag, Pb, Cu, Zn, cuarzo, andesitas, pizarras, granito, mármol

Gto 4 Au, Ag, Cu, Pb, Zn, cuarzo, calcita, calcopirita, pirita, arcillas, clori- ta, galena, granito, sulfuros Gro 18 Au, Ag, Pb, Cu, Zn, Fe, Al, Cd, Ba, Sn, W, Cr, Sb, caliza, yeso, dolomita

Hgo 15 regiones mineras Au, Ag, Pb, Cu, Zn, Mn, cal hidratada, bitumen, mármol, caliza, caolín, pómez, carbón, arena, sílica Jal 2 (4 regiones mineras) Au, Ag, Pb, Cu, Zn, Mn, Fe, Sn, cantera, ópalo, diatomita, caolín, granito, barita, caliza, yeso, arcilla, mármol, fosforita Mex 6 (7 regiones mineras) Au, Ag, Pb, Cu, Zn, Cd, cantera, grava, arena, ceniza volcánica pé- trea, tepetate, caliza, sílica Mich 19 (13 regiones mineras) Au, Ag, Cu, Pb, Mo, W, Ba, Fe, Mn, caolín, cuarzo

Qro 2 (7 regiones mineras) Ag, Pb, Zn, Au, Cu, sulfuros, mármol, ópalo, cantera, caolín

slp 23 (14 regiones mineras) Fe, Au, Ag, Zn, Cu, Pb, Hg, arena, caliza, cuarzo, pirita

48 Sin 13 Au, Ag, Cu, Pb, Mo, Fe, Zn, Ni, Co, Pt, Ru, Ir, cuarzo

Son 10 + 1 región carbonífera (regiones Au, Ag, Cu, Fe, carbón mineras) Zac 12 (18 regiones mineras) Au, Ag, Cu, Pb, Zn, Fe, cantera

Entre las principales fuentes de emisión de los metales de mayor preocupa- ción en México según el Instituto Nacional de Ecología, destacan:

Tabla 2. Fuentes de contaminación por metales pesados en México

Mercurio Plomo Cadmio - Actividades mineras de extracción - Fundición primaria y secundaria de - Baterías Recargables de Níquel/ de oro, plata y cobre metales Cadmio (Ni/Cd) - Fundición primaria y secundaria de - Loza vidriada - Fertilizantes. metales - Producción de pinturas - Pigmentos y Estabilizadores en - Producción de carbón y coque - Elaboración de latas soldadas con Plástico y PVC. - Combustión de combustóleo y car- plomo - Pigmentos en Pinturas. bón en la generación de electricidad - Industria electrónica y de cómputo - Galvanización. - Industria de cloro-sosa - Uso de gasolina con plomo. - Catalizadores y Conservadores en la -Incineración de residuos peligrosos Industria del Plástico. y biológico-infecciosos. - Elaboración de Pinturas. Aleaciones. Diciembre 2011, número 9

Importancia del estudio nica), pueden incrementar su toxicidad. Por otra parte el Instituto Nacional de Ecología (en su Los metales pesados son un tema actual en el ámbito sitio de Internet oficial) cuenta con diversas publicacio- ambiental y de salud pública. Los daños son tan severos nes acerca de estudios y estadísticas sobre el consumo que las autoridades en materia de salud y medio ambien- de pilas en México, debido a que estos materiales están al te fijan sus objetivos en minimizar la exposición de la alcance de toda la población en general. Esta condición le población a estos elementos tóxicos. El sector industrial da importancia como fuente de contaminación por me- representa una fuente importante de contaminación por tales pesados, por los riesgos que la población desconoce metales pesados, especialmente la industria metalúrgica sobre su manejo y disposición final. y de pigmentos. Los metales pesados tienen la particula- Uno de los métodos eficaces para eliminar metales ridad de bioacumularse en los seres vivos, y el incremen- pesados en los seres humanos es la quelación, método to de la bioacumulación depende de la interacción dentro que consiste en la reacción entre un complejo (a partir de la cadena trófica. de un compuesto orgánico) y un metal. El cuerpo huma- La importancia del desarrollo e innovación en tec- no, al poder metabolizar el compuesto formado, termina nologías, para la disminución de la bioacumulación de excretándolo. El eugenol, un derivado fenólico extraído metales pesados, radica en el hecho de que algunos se principalmente de la especie Syzygium aromaticum (Cla- consideran no esenciales, cuando no tienen una función vo de olor), tiene una aplicación importante en odonto- biológica conocida, y otros esenciales, cuando son ne- logía, ya que por sus características puede reaccionar cesarios para el desarrollo y crecimiento normal de los con oxido de Zinc y formar un quelato. El compuesto que organismos, como el caso del Zinc, que —a pesar de ser se forma fragua con el agua, formando un cemento de esencial— algunos estudios han demostrado que tiene muy baja toxicidad e insoluble en agua, y que mantiene efectos adversos en concentraciones altas. al Zinc en una forma no bioacumulable. El presente tra- El cadmio es un elemento no indispensable para el ser bajo aprovecha la información sobre los cementos den- humano, que es muy dañino en bajas concentraciones. tales, para proponer el uso de Oxido de Cadmio debido a El envenenamiento por cadmio produce osteoporosis, que pertenece al mismo grupo químico 2b y, por lo tanto, enfisema pulmonar, cáncer de pulmón, cáncer de prós- posee propiedades químicas similares, dándole una apli- tata, hipertensión, diversas cardiopatías y retraso en la cación diferente. habilidad verbal de los niños; puede ingresar al organis- 49 mo mediante la ingesta de polvo contaminado por el uso Metodología de utensilios de plástico en la alimentación, por inhalar humo de tabaco y por ingerir agua contaminada. El desarrollo experimental se dividió en dos etapas: En México, el cadmio es un elemento cuya concentra- ción en agua, suelo y atmosfera, se encuentra regulada Reacción de quelación por autoridades federales (semarnat-conagua). La quelación se llevó a cabo en laboratorio, bajo las si- En el caso del sector industrial, es muy común que sus guientes condiciones: plantas de tratamiento de aguas generen residuos sóli- dos, comúnmente llamados lodos. Éstos se producen al adicionar sustancias químicas para eliminar la turbidez Tabla 3. Condiciones para la síntesis presente en el agua, a partir de la precipitación de sólidos que se encuentren suspendidos, etapa conocida como Temperatura 70°c clarificación. Los residuos generados en esta operación CdO 1.0061 g son de naturaleza química y orgánica, y de no recibir un Eugenol 2.74 ml adecuado tratamiento o confinamiento final, se incre- Agua 0.1 ml menta la probabilidad de que diversos contaminantes, Agitación 25 rpm como los metales pesados, se incorporen de manera per- Tiempo de Reacción 5 min judicial a los ciclos biogeoquímicos. El asunto se agrava al tratarse de la industria minera. Otra problemática en el país radica en los tratamien- tos que utilizan algunas industrias cuyo giro es el trans- porte, tratamiento y disposición final de residuos, ya que en muchos casos el método que utilizan estas empresas es la incineración de residuos, para posteriormente de- positar las cenizas remanentes en rellenos sanitarios. La preocupación surge al considerar que las cenizas pueden ser óxidos de diversos metales, y que en esta forma quí- mica (al entrar en contacto con humedad o materia orgá- Pharus academiæ

Bioensayo de germinación para evaluar la toxicidad de los lixivia- dos

Debido a la baja solubilidad del producto obtenido, se optó por preparar lixi- viados; se eligieron dos escenarios de pH para el experimento, pH ácido para simular el efecto que tendría el producto al entrar en contacto con la materia orgánica del suelo o con lluvia ácida; y pH neutro para simular el efecto que tendría el producto al entrar en contacto con agua dulce o ligeramente alca- lina (agua dura). Preparación de Testigo pH Ácido. La acidez es una característica que por sí sola puede provocar efectos tóxicos. Para tener presente el efecto producido únicamente por la acidez, se realizó un bioensayo donde la muestra fue la so- lución de HCl que se utilizó para obtener el lixiviado ácido del quelato. Preparación de Testigo pH Neutro. El agua destilada con la que se prepa- ró el lixiviado, pudiera estar contaminada o tener alguna característica que aumentara el efecto toxico. Para asegurar que no provocara ningún efecto, se prepararon pruebas de germinación, utilizando únicamente 5 ml de agua destilada, y se registraron los resultados. Preparación de Lixiviado de Ph Neutro. En un vaso de precipitado de co- locaron los 0.2 g del producto sintetizado y se agregaron 100 ml de agua des- mineralizada, previo Ph verificado. Se aseguró que el Ph estuviese en 7, con tira reactiva, se agitó por 5 min a 25 rpm, y se dejó reposar media hora. Poste- riormente se filtró la mezcla usando papel filtro No 40, y el líquido filtrado se identificó como «Lixiviado Ph Neutro». Preparación de Lixiviado de Ph Ácido. En un vaso de precipitado de co- locaron los 0.2 g del producto sintetizado y se agregaron 100 Ml de HCl 0.4% (Ajustada mediante solución con NaOH 0.4% hasta Ph 3), se verificó mediante 50 tira reactiva, se agitó por 5 minutos, y se dejó reposar 30 min. Posteriormente, se filtró la mezcla usando papel filtro No 40; el líquido filtrado se consideró como muestra al 100% y se identificó como «Lixiviado Ph ácido». Se decidió trabajar con HCl y NaOH, debido a que no forman precipitados, no reaccionan con el eugenol, y este ácido no reacciona con el alto contenido de proteínas que contienen las semillas de Lens esculenta —conocidas comúnmente como lentejas— que se utilizaron en el bioensayo

Tabla 4. Condiciones del bioensayo

Organismo de Prueba Semillas de Lens Esculenta Temperatura 20 ± 2 Duración 120 h Calidad de Luz Oscuridad Volumen de la Solución de Prueba 5 ml de muestra Agua de Dilución Agua desmineralizada Semillas Expuestas 20 Número de Réplicas 2 Efecto Medido Porcentaje de Germinación. Crecimiento radicular promedio Criterio de aceptabilidad de los Resultados Germinación >90% en testigo Diciembre 2011, número 9

Protocolo del bioensayo de germinación:

• Colocar en una caja Petri un disco de papel filtro • Marcar correctamente cada caja con la dilución correspondiente. • Saturar el papel filtro con 5 ml de la dilución • Colocar cuidadosamente 20 semillas, dejando espacio suficiente en- tre ellas para permitir la elongación de las raíces Figura 1. Esquema general del • Tapar las cajas Petri e inmediatamente cubrir de la luz durante todo bioensayo el periodo de ensayo

Caracterización estructural

Obtención de espectro ir

La caracterización estructural consistió en preparar una muestra del pro- ducto sintetizado para análisis por espectroscopía infrarroja. Para lo cual se tomaron 5 muestras de 0.1 gr del producto. Cada muestra se lavó con 25 ml Figura 2. Espectro ir Producto de Cloruro de Metileno grado reactivo para eliminar el exceso de eugenol sin sintetizado reaccionar; se identificó cada muestra, se resguardó en papel de fibra celulo- sa, y se envió al departamento de posgrado del Instituto Tecnológico de Cd. Madero, para su posterior análisis.

Determinación de la concentración de Cd en el quelato obtenido

Para determinar la concentración de Cd en el producto de síntesis se conside- ró la metodología de la nmx-aa-051-scfi-2001. El principio de esta metodolo- gía se basa en la eliminación de materia orgánica mediante digestión con áci- 51 do nítrico. Una vez que se ha eliminado la materia orgánica en forma de CO2, los metales contenidos quedan completamente ionizados y listos para leerse Figura 3. Espectro ir Eugenol en el Espectrofotómetro de Absorción Atómica. Este parámetro fue determi- nado por personal del Centro de Investigación y Tecnología en Saneamiento Ambiental, del Instituto de Estudios Superiores de Tamaulipas, A.C.

Resultados

Caracterización químico-estructural

Como resultado de la caracterización estructural, la Figura 2 muestra el es- pectro de absorción ir del producto sintetizado y la Figura 3 muestra el es- pectro de ir del eugenol. De acuerdo con la estructura propuesta por la literatura, se esperaba que el espectro de absorción del producto obtenido fuese parecido al espectro Figura 4. Estructura propuesta del eugenol, y la única diferencia que se esperaba sería la desaparición de la del producto sintetizado. banda de absorción típica de los enlaces O-H; sin embargo, en la Figura 2 se observa que persiste la banda de absorción de este enlace (A) y aparece una banda en la región de los 2250 cm-1 (B), que no se presenta en el espectro de la Figura 3; en consecuencia, esta banda puede ser de relevancia para la identifi- cación del quelato. Por lo demás, la banda en la región de los 1500 y 1700 cm-1 (C y D) son típicas en el eugenol. La Figura 4 muestra la estructura propuesta del producto sintetizado.

Como resultado del análisis por Absorción Atómica para determinar la concentración de Cd en el quelato, ésta equivale a 84,67 mg Cd/g de producto. Figura 5. Cadmio quelatado

Pharus academiæ

Caracterización toxicológica

En el caso de las pruebas de germinación se obtuvieron los siguientes resul- tados.

Tabla 5. Efectos tóxicos de lixiviados ácidos

Concentración de Lixiviado No. de Semillas Germinadas % de Germinación Longitud Radicular cm 100% 0 0 0 50% 9 45 2.2 25% 18 90 4 12.5% 20 100 4 6.25% 20 100 4 Promedio 67 2.84 Lixiviado ácido pH Inhibición de la Germinación 33 —

Tabla 6. Efectos tóxicos de lixiviados ácidos en la prueba testigo

Concentración de Lixiviado No. de Semillas Germinadas % de Germinación Longitud Radicular cm 100% 1 5 0 50% 12 60 4.2 25% 20 100 3 12.5% 20 100 3,7 6.25% 20 100 3,3 Promedio 73 2.84 Testigo pH ácido pH Testigo Inhibición de la Germinación 27 — 52

Tabla 7. Efectos tóxicos de lixiviados neutros

Concentración de Lixiviado No. de Semillas Germinadas % de Germinación Longitud Radicular cm 100,00% 20 100 6 50,00% 20 100 8 25,00% 20 100 8 12.50% 20 100 9 6.25% 20 100 9,5 Promedio 100 8,1 Lixiviado neutro pH Inhibición de la Germinación 0 —

Tabla 8. Efectos tóxicos de lixiviados Neutros (Testigo)

No. de Semillas Germinadas % de Germinación Longitud Radicular cm 20 100 8 20 100 9 20 100 8 Promedio 100 8.3 Testigo pH neutro pH Testigo Diciembre 2011, número 9

Conclusión

Con respecto al análisis del espectro ir de la Figura 2, se notó un pico atípico con respecto al espectro teórico del eugenol en la región de los 2,250 cm-1, que pudiera ser un dato importante para identificar la formación del quelato. Diversos autores citan que en los quelatos de eugenol, éstos se denotan por la ausencia de la banda de absorción de los enlace O-H; sin embargo, en la literatura consultada se habla de moléculas de agua ocluidas en la estructura sólida de los quelatos formados. Con respecto a la información del bioensayo de germinación, cabe men- cionar que en el caso del efecto tóxico sobre la germinación de las semillas expuestas a lixiviados ácidos, según la tabla 5, los lixiviados al 100% y 50% presentaron efectos tóxicos; sin embargo, la prueba testigo indica que el efec- to tóxico es generado sólo por la acidez de la solución; por tanto, consideran- do la información de la prueba testigo, el producto sintetizado al interactuar sobre ambientes ácidos, generó lixiviados que inhibieron la germinación en un 33%, y afectó severamente el crecimiento radicular, pues el promedio de crecimiento radicular fue de 2.84 cm c. Estos efectos se generaron al sumarse la acidez a la naturaleza química de los lixiviados generados, y pueden si- mular el comportamiento del quelato sintetizado si este último se llegara a depositar en suelos con alto contenido de materia orgánica o con incidencia de lluvia ácida. En el caso del Cd, diversos autores han citado su citotoxicidad sobre células vegetales: en un ambiente ácido se rompe el enlace coordinado en la estructura, y el metal logra ionizarse y disolverse, incrementando así su efecto tóxico. Ver figura 4. En contraste, en ambientes de pH neutros, y de acuerdo con la tabla 5, los lixiviados del cadmio quelatado no presentaron efectos tóxicos sobre la ger- minación en las semillas expuestas, hubo un 100% de germinación y tampoco 53 se notó efecto tóxico sobre el crecimiento radicular, ya que la longitud radicu- lar promedio fue muy similar a los valores de la prueba testigo. Esta respuesta se esperaba por la estructura química. Ver figura 4. De acuerdo con la polaridad del eugenol, éste solo se disuelve en solventes no polares. Por lo tanto, los efectos tóxicos en los lixiviados sólo se asocian a la presencia de iones de cadmio, y no a la presencia de eugenol, dado que este último no es soluble en la matriz acuosa con la que se elaboraron los lixiviados. Analizando los resultados y observando las propiedades de los lixiviados, principalmente los generados a pH neutros, la información se puede apro- vechar para experimentar a nivel de laboratorio el diseño, por ejemplo, de humedales salobres artificiales, en cuya base queden asentados pelets de ce- mentos a base de la síntesis propuesta, dado que el agua salobre tiene carác- ter alcalino suficiente para el desarrollo de organismos como los moluscos bivalvos, que son excelentes bioindicadores que permitirían monitorear la calidad del agua, una forma sustentable de tratar los residuos sólidos peli- grosos. Desde luego, esta aplicación involucra una caracterización de mayor alcance, que permita evaluar riesgos y beneficios. Pharus academiæ

Bibliografía

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54 Diciembre 2010, número 7

La religión desde el conocimiento

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Ivette Chang Bencomo Resumen Periodista, editorialista y ensayista, ha publicado una novela histórica Santa Anna de Tampico, El presente ensayo es una aproximación a la religión, no como positividad sino saga de una familia, investigador como la «religación», la unión primordial, el acto fundante que abre al hombre a en el iest, Coordinador del la deidad, el primer y fundamental paso en la espiritualidad humana, en el que se Consejo de la Crónica Municipal para el Municipio de Tampico. exponen las concepciones que se tienen sobre la religión y que obstaculizan su ejer- cicio, y se identifica como constante la exclusión de la capacidad racional en esta doble relación entre el hombre y Dios. Se presenta a la religión fundamentada en la racionalidad, pero no constreñida por ella, sino plena y completa. Pues sólo cuando se ponen en juego todas las ca- pacidades se realiza enteramente la espiritualidad. La carencia de una vida espiri- tual limita el perfeccionamiento de todas las demás dimensiones, y la existencia del hombre se encuentra incompleta.

Lo que creemos que es la religión

La religión puede considerarse como la forma acabada de la dimensión espiritual. En ella se desarrolla plenamente la capacidad del hombre, de concebir y aspirar a la trascendencia. Esto no es resultado de una necesidad social, intelectual o psicoafec- tiva, sino que todas ellas son y se fundamentan por la religión. Se le confunde con leyes de atracción, «buena vibra», «autosugestión» y pensa- miento positivo, con el fin de atraer lo que se desea obtener; todo se ve reducido a la subjetividad de la persona que la emplea, pues su objetivo no es su bienestar integral sino la obtención de satisfactores materiales. Se le convierte en una especie de «va- rita mágica» para obtener no lo que necesitamos sino lo que creemos necesitar, de manera rápida y sin esfuerzo alguno. Pharus academiæ

También se toma como sinónimo de represión, Todo tiene un inicio opuesto a la vanguardia, lo anticuado. Aquello que no permite «ser» en completa libertad y que somete al hom- El ser humano entra en contacto con su entorno, vive en bre de manera autoritaria. y de él, no como el animal lo hace, sino como ser racional; A su vez, suele ser considerada como identificación es por esto que llega un momento en que se busca tras- inmediata con los referentes, es decir, la religión como cender la realidad y el sentido de lo sagrado impregna positividad, donde los ritos, símbolos, posturas, etc., de todo aquello que percibe; es decir, sabe que eso que se le ser medios que auxilian para llegar a la deidad llegan a hace presente en la naturaleza por medio de los sentidos sustituir la religación primera y fundante, dejando atado no es obra suya. Entonces, dirige su mirada a esa causa al hombre a éstos, provocando una dependencia total eficiente de su mundo, se descubre en medio de todo que transmuta en un cumplimiento ciego y mecanizado, aquello, y sabe que él tampoco es obra suya: la existencia y relegando el ejercicio de la religación, de la comunión del hombre se vuelve una pregunta que la mera razón no con la divinidad. le basta para explicar, y se remonta fuera de los límites También se le concibe como una concepción pu- de ésta para intentar vislumbrar lo divino. ramente sentimental. Se cree que esta relación con la En un primer momento es «la derelicción como el he- trascendencia es completa y únicamente visceral; los cho experimentable por toda persona, en cualquier mo- sentimientos inundan y son el motor para dirigir las ac- mento y que consiste en percibir la existencia como algo ciones a partir de esta experiencia; la subjetividad define que no nos damos, que no producimos nosotros, sino la religación y se le despoja de un fundamento intelec- que nos viene dado»2 . Aquí es cuando sucede el hecho tual. religioso, la irrupción de los cuestionamientos: ¿quién?, ¿cómo?, en la conciencia del ser humano, de su contin- El problema gencia y dependencia de algo que se encuentra por en- cima de él. Aunque la espiritualidad es parte de las dimensiones En un segundo momento se establece no sólo una antropológicas del ser humano, fuera de los círculos identificación de causa sino una relación que trasciende: académicos no se le concede capital importancia a la problematización de la religión. «El hombre no es sólo «Religación significa un doble lazo. El primer lazo con 56 cuerpo material, sino que está constituido por algo Dios nos viene dado por la existencia recibida. El se- que trasciende a los sentidos, a las dimensiones físicas gundo lazo es el reconocimiento consciente de esa exis- del espacio y del tiempo»1. De esta manera, una falta tencia en tanto recibida»3 . de reflexión profunda acerca de él mismo, le impide un desarrollo completo, porque pensar acerca de «su espiri- En su libro Naturaleza, Historia, Dios, Xavier Zubiri tualidad» es reflexionar sobre el humano mismo, desde habla de la religación como el carácter personal absoluto una perspectiva totalizante que lo lleva de la inmanencia de la realidad humana actualizado en los actos que eje- a la trascendencia. cuta4. El hombre se religa a lo trascendente, a la deidad, Así, el problema tiene origen—principalmente—, no por una causa específica sino por el solo hecho de ser. en dos momentos: el primero, considerar a la religión como un territorio donde se proscribe el ejercicio racio- En el campo de la religión: la hierofanía nal, pues ésta es definida y vivida sólo en función de las pasiones. En segundo lugar, y en relación directa con el De las raíces griegas hieros que significa «sagrado» y momento anterior, es el cotidiano, en el cual la religión, phainomai que significa «manifestarse»5 , el término se como ejercicio de la espiritualidad, se vive como una lee como la manifestación de lo sagrado, una irrupción realidad que existe solamente dentro de límites repre- en el mundo natural a través de objetos comunes. No sentados por referentes característicos, y que irrumpe tiene demasiadas implicaciones, solamente esta presen- directamente dentro del ejercicio de la voluntad, de tal cia divina que se descubre en modos mundanos que in- manera que toda la experiencia religiosa es vivida en tentan ser accesibles a la capacidad humana. modo «automático». La clasificación de las hierofanías puede ser muy va- Ambas cuestiones mantienen como constante la no riada, dependiendo de lo que se ha considerado como tal participación de la racionalidad en la religación, soste- a lo largo de la historia de la humanidad, aun así, hay dos niendo la imposibilidad de participación de la capacidad categorías principales en cuanto a su valoración: la ele- intelectual del hombre en este campo. 2 Ibídem 1 Gutiérrez, Raúl: Introducción a la antropología, Editorial Esfinge, sa de 3 Ibídem cv, México, 1987. 4 Zubiri, Xavier: Naturaleza, Historia, Dios, Alianza Editorial, sa, Madrid, 1994. 5 Armstrong, Karen: Los orígenes del fundamentalismo, Tusquets Editores, España, p. 12, 2010. Diciembre 2010, número 7 mental y la suprema. En la primera forma está incluida la obtenemos la hierofanía como el objeto que, anterior- manifestación de la sacralidad en cualquier objeto; la se- mente profano y ahora revestido de sacralidad, comu- gunda categoría comprende la revelación, los «elegidos» nica algo distinto de su condición normal de objeto: para la transmisión del mensaje o el dios encarnado6. La dificultad estriba en su identificación por el- ex «La dialéctica de la hierofanía supone una selección tenso número que hay, y por su dependencia del contexto más o menos manifiesta, una singularización»7. social. Independientemente de sea cual sea el objeto, éste tiene que cumplir con ciertas características que, «Un hierofanía supone una selección, una separación aunque inserto en la realidad, sean únicas y muestren clara del objeto hierofánico con respecto al resto que le lo sobrenatural, algo distinto de todas las demás de su rodea. Este resto existe siempre…»8. clase, y que a partir de ese momento ya no serán única- mente parte de la naturaleza, sino que serán capacitadas Por consiguiente, una hierofanía no es el mero asom- para unir al individuo con la divinidad. Un ejemplo claro: bro ante la naturaleza, a manera de lo expuesto por la en la lectura sagrada judaica pudieron existir muchas teología natural, no es ese saber espontáneo de algo que zarzas en el desierto, pero la zarza ardiente de Moisés nos trasciende ante el espectáculo majestuoso de un presentaba elementos únicos: paisaje. Porque este tipo de reflexión no incluye la in- tervención de la divinidad en lo sagrado, solamente cir- «Allí se le apareció el ángel de Yahvé en llama de cunscribe el esfuerzo de la propia razón. fuego, en medio de una zarza. Moisés vio que la zarza no se consumía. Dijo pues Moisés: Voy a acercarme para ver Predeterminación de la concepción hierofánica este extraño caso: porqué no se consume la zarza» (Ex. 3, 2−3) Se debe comprender la hierofanía como histórica. El hombre es un ser temporal, existe en un continuo en el Después del primer acercamiento a esta hierofanía, le si- tiempo y ese devenir crea la historia. De tal manera que gue su reconocimiento como lugar sagrado: cada una de sus experiencias está inserta en un mo- mento determinado, formado por diversas variables que «Cuando Yahvé vio que Moisés se acercaba para mi- deben ser tomadas en cuenta para entender la hierofa- rar, le llamó de en medio de la zarza: ¡Moisés, Moisés! nía como tal: «cada documento estudiado sobre religión 57 El respondió: Heme aquí. Le dijo: No te acerques aquí; revela una modalidad de lo sagrado y una situación del quita la sandalias de tus pies, porque el lugar que pisas hombre en la historia respecto de lo sagrado»9. es sagrado.»(Ex. 3, 4−5) La religión desde la razón: un proceso La comunicación de la sacralidad es característica nece- saria para que el objeto sea considerado hierofánico, es Existe un momento definitivo en el proceso del conoci- decir, irrupción de lo sagrado del mundo a través de los miento, donde la voluntad mueve al entendimiento hacia objetos profanos confiriéndoles un estado ontológico di- un asentimiento con certeza y sin miedo a una opinión ferente; siendo así una hierofanía la materia sobre la cual contraria, provocando la religación. se fundamenta toda religión. En el proceso de la obtención del conocimiento —el En el aspecto cognoscitivo de la religión, la hierofanía conocer—, el primer paso es obtener información de lo se considerará como evidencia de lo sacro y como dialéc- que nos rodea; esto sólo puede hacerse mediante lo sen- tica de lo sagrado y lo profano. tidos externos: vista, olfato, gusto, oído y tacto. Cada La evidencia siempre será en sí misma en dos modos: uno de ellos capta una parte de la información, exis- inmediata y mediata. La evidencia inmediata se hace ac- tiendo una especialización en ciertas características, cesible al hombre directamente y la mediata a través de unificando los datos obtenidos de manera posterior en objetos conocidos. Lo sagrado, como aquello que rompe el sentido común y almacenándolo en la imaginación. A con lo profano, al hacerse evidente mediatamente, es este captar el objeto se le llama intuición: «no existe in- hierofanía. tuición sin sensibilidad»10; o bien, dicho de otra manera, La dialéctica de lo sagrado y lo profano refiere a la es la aprehensión instantánea de lo que se me presenta. contraposición de ambos. Lo sagrado es aquello que re- Después se procede a la generación de juicios y poste- vela un nivel que trasciende la realidad; en el opuesto, lo riormente a los raciocinios, como formas elaboradas del profano se mantiene dentro de la misma sin presentar al- pensamiento. guna significación especial. Cuando ambos se enfrentan 7 Eliade, Mircea: Lo Sagrado y lo Profano, Ediciones Paidós Ibérica; España, p. 79, 1998. 6 Eliade, Mircea: Tratado de la Historia de las religiones, Ediciones Cris- 8 Ibídem, p. 80. tiandad sa, España, p. 197, 2000. 9 Eliade, Mircea; Tratado… Op. cit., p. 65. 10 Eliade, Mircea; Lo Sagrado… Op. cit., p. 79. Pharus academiæ

En religión, la intuición juega el mismo papel que en 1) Material cualquier proceso del conocimiento. Con referencia al 2) Ontológico tema, Schleiermacher afirma: 3) Psíquico.

«La intuición del universo es la piedra angular de En el plano material constituye la violación de los prin- todo mi razonamiento… Toda intuición deriva de un in- cipios de la naturaleza, y ésta puede mostrarse clara u flujo del objeto intuido sobre el sujeto que intuye…»11. obscura: Es clara cuando la transgresión se hace comple- tamente evidente en un «catálogo» de infracciones que «Toda intuición particular (lo captado por el indivi- se ve limitado a las posibilidades del objeto, quedando duo) implica la religión»12. reducido a tres grandes grupos de propiedades espe- ciales: físicas, biológicas y psicológicas; esto se ha visto Comprendiendo que no toda la información que obtene- ejemplificado con el caso de la hierofanía de la zarza ar- mos es materia de religión, pues en ese caso cualquier diente en el libro del Éxodo de la Biblia. Por otra parte, cosa que se nos presenta como objeto de conocimiento es obscura cuando la infracción sólo puede hacerse evi- sería considerado dentro de este campo. dente a través del conocimiento de símbolos, lenguajes y mediadores específicos. Las ideas: materia prima del pensamiento En el plano ontológico, es la parte donde el hombre, partiendo de los datos sensibles —plano material—, lo- En el ámbito religioso, específicamente el de la hierofa- gra captar un rompimiento de la realidad, que se abre a nía, el proceso para generar la idea no difiere de otros un nivel superior que rebasa tiempo y espacio: «es la so- momentos, pues nos encontramos frente a un objeto brenaturaleza la que se deja aprehender… a través de los cualquiera, la diferencia radica en ese nuevo añadido aspectos naturales del mundo»14. que tendrá: la sacralidad, que es captada por lo sentidos La percepción del plano ontológico es acompañada como algo diferente, y al mismo tiempo, unido al con- —también— por los sentimientos, siendo que sólo puede cepto, se mantiene fuera de éste, pero no separado como medirse su impacto en la psique del hombre. Existe, en- algo independiente sino como una característica que se tonces, un perfecto psiquismo, haciendo una síntesis de asumirá en una forma mental diferente y que al mismo elementos racionales e irracionales: 58 tiempo forma parte de él. Sobre este asunto, el antropólogo Pascal Boyer co- «Irrumpe de la base cognoscitiva más honda del alma, menta que esta identificación de «lo sagrado» en el pro- pero no antes de poseer datos y experiencias cósmicas ceso cognitivo sucede, debido a que el hombre cuenta y sensibles, sino en éstas y entre éstas. Pero no nace de con «categorías ontológicas» creadas en las primeras ellas, sino merced de ellas. Las impresiones sensibles son etapas de aprendizaje del ser humano, el género en la Ló- estímulos»15. gica, que contienen aspectos específicos que las identifi- carán como «lo sagrado» y que se activarán al entrar en Juicios: núcleo del pensamiento contacto con los objetos que pertenezcan a ellas. Sobre estas categorías existirán ciertas «expectati- Se definen elementalmente como la afirmación o ne- vas» fundadas en sus características. De esta manera, gación de una idea respecto de otra cuya característica cuando exista algo que salga del marco establecido se principal es el verbo «ser». La concepción epistemoló- le llamara «infracción ontológica», (porque) contradice gica de la religión se conforma por una sucesión de jui- una parte de la información. Los conceptos religiosos cios que van dando lugar a los elementos necesarios en «son combinaciones especificas de representaciones que este proceso. cumplen con dos requisitos: infringen predicciones de El orden en el que se generaran los juicios para el co- categorías ontológicas y conserva otras»13. nocimiento de la religión es el siguiente: la religación, el Las infracciones ontológicas aluden a uno o varios as- asentimiento o negación y la valoración de sacralidad. pectos que no se incluyen en la naturaleza del objeto per- La religación es un juicio hipotético, de causa y efecto, cibido y que aparecen como parte de él. Llevando esto en el que la infracción ontológica fundamenta el descu- más lejos, se pueden describir tres planos en los que se brimiento de la relación con la deidad; el asentimiento desenvuelve esta infracción: en el juicio problemático es posterior a la develación de la existencia de una deidad, acto seguido deviene la aceptación o negación voluntaria de ese doble lazo y el 11 Reale, Giovanni; Historia del pensamiento filosófico y científico; Editorial Herder; España: 1988, p. 44. incorporación de la creencia como estado de la mente; y 12 Abbagnano, Nicolás; Historia de la filosofía; Montaner y Simón; España: 14 Sánchez, José: Filosofía y Fenomenología de la religión, Editorial 1978, p. 36. Secretariado Trinitario, España, p. 341, 2003. 13 Boyer, Pascal; Y el hombre creó a los dioses; Editorial Taurus; México: 15 Sahagún, José: Fenomenología y Filosofía de la religión; Biblioteca de 2010, p. 82. Autores Cristianos; Madrid, p. 97, 1999. Diciembre 2010, número 7 la valoración de la sacralidad como juicio disyuntivo se «Ahora bien, como aquí todo se incorpora gra- deriva del asentimiento a la religación, y origina poste- dualmente en el entendimiento, de tal modo que riormente la religiosidad en el ser humano y la posibili- primero se juzga algo problemáticamente, luego se dad de una religión positiva. admite asertóricamente como verdadero… resulta que se puede decir que las funciones de la modalidad Religación: Juicio hipotético son otros tantos momentos del pensar en general»17.

Habiendo identificado previamente la infracción onto- La sacralidad: un raciocinio lógica con su propio desarrollo, se origina en el proceso cognitivo una afirmación que descansa sobre un juicio La sacralidad en el conocimiento es un simple racioci- hipotético que se enuncia de la siguiente manera: Hay nio, que se puede explicar a través de un silogismo: algo que transgrede los límites de la naturaleza (esen- cia como operatividad) de este objeto, entonces, existe 1. Es sagrado aquello que me relaciona con la dei «algo» que da origen y que intenta comunicar algo. dad. La característica cardinal de este juicio es la relación 2. Este objeto me vincula con la divinidad. bilateral que se establece con ese «algo divino» al que se 3. Luego este objeto es sagrado. le atribuye dicho fenómeno. Es un doble lazo: de lo hu- mano con lo divino y de lo divino con lo humano, a tra- Lo sagrado es el calificativo que se otorgará a todo aque- vés del objeto; a esto se le llamará la religación o religión. llo que se circunscriba a la religación, la religión primi- Zubiri dirá que estamos religados a lo que nos brinda la genia, y que, por tanto, permita ponerse en relación con existencia creando un vínculo ontológico que es la reli- la deidad. Lo sagrado tiene como características esen- gación: ciales: la apertura a un nuevo nivel ontológico y la se- paración de la realidad en dos: lo sacro y lo profano, «La «La religión (o la religación) no es una propiedad ni sacralidad es ante todo real. Cuanto más religioso en un una necesidad; es algo distinto y superior: una dimen- hombre, más real, más se aparta de la irregularidad de sión formal del ser humano. Religión en cuanto tal no un devenir carente de significación»18. es un simple asentimiento, ni un nudo conocimiento, ni un acto de obediencia, ni un incremento para la ac- Conclusión 59 ción, sino actualización de ser religado del hombre… un fundamento para ser»16. Es claro que la dimensión espiritual o religiosa es inse- parable del ser humano, y aún cuando se niega sobre ella, Asentimiento: Juicio problemático es sólo una vía negativa de hacerla presente. El hombre se encuentra abierto a la trascendencia que le es comu- Descubierto el vínculo de la religación, sigue el momento nicada por algo «superior», y sobre ella dirige sus esfuer- en que el hombre debe decidir aceptar o no tal unión. zos en un intento de superar su humanidad. Pero, para Esta adhesión del pensamiento se efectúa en un juicio poder hacerlo es necesario que acceda a esta de alguna problemático que expresa una posibilidad lógica, es de- manera. Proscribir el uso de la razón en el campo de lo cir, una elección libre que le proporciona valor a la pro- religioso no es más que un andar a ciegas para el hom- posición elegida, descrita por Kant como una admisión bre. Sólo conociendo la parte que de ella pertenece al caprichosa de la misma en el entendimiento. desarrollo de la espiritualidad humana podremos desen- En esta decisión de reconocimiento —o lo contra- volvernos como seres completos. rio— interviene la voluntad como fundamento; por con- siguiente, el juicio es voluntario, no añade nada nuevo al contenido y sólo se refiere al valor de la unión con el pensar. Simultáneamente a la adhesión de la segunda propo- sición del juicio hipotético en el juicio problemático, ésta se convierte en juicio apodíctico que cumple con la fun- ción de identificar tal proposición con la verdad, mos- trando el enlace con el entendimiento; la verdad lógica que consiste en la identificación del pensamiento con la realidad:

17 Kant, Emmanuel; Crítica a la Razón Pura; Editorial Porrúa, S. A.; México: 2008, p. 81. 16 Zubiri, Xavier: Op. cit., p. 411. 18 Eliade, Mircea; Tratado… Op. cit., p. 638. Pharus academiæ

Bibliografía

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Gestión del Conocimiento y el cambio en las Universidades

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Dr. Francisco Solís Solano Resumen Licenciado en Filosofía y Maestro en Educación por el iest y en Filosofía por la ucime. El presente artículo aborda la necesidad de cambio por parte de la univer- sidad, ante los paradigmas de la educación superior en la postmodernidad. Asimismo, la gestión del conocimiento como una alternativa de orientación de dicho cambio. Para ello se inicia con el paso de la sociedad moderna a la postmoderna, y se presentan tres características de esta última, a manera de rasgos deconstructivos vinculados con los desafíos de la universidad. Dichos rasgos son los antecedentes de la gestión del conocimiento.

La modernidad y la gestión del conocimiento

La racionalidad de la modernidad modificó significativamente la manera como anteriormente se concebía el trabajo y el conocimiento. Este cambio se manifiesta principalmente en la forma de entender la actividad humana, así como la concepción y manipulación del medio ambiente. Estas transfor- maciones han impactado en el mercado laboral (Navarro, 2000) y, por ende, en la dinámica interna de la universidad, la cual experimenta el dilema de reorientar sus fines y sus medios (Ramphele, 2000). Pharus academiæ

En lo que se refiere al modo de producción conviene La universidad y sus fines desatacar el modelo taylorista, que permitió «a los em- presarios, apropiarse del saber artesanal» (Barba y Solís, La universidad —por su parte—, desde su nacimiento, 1997. p. 9), separando a los trabajadores tanto del objeto al separarse de las órdenes religiosas, definió como sus como del fin de su labor, que en no pocas ocasiones se metas prioritarias la generación, conservación y trans- identificaba con su tradición familiar y su hogar. Ello ge- misión del conocimiento. Finalidad que en la actualidad, neró un cambio en el estatus ancestral, de «artesano» de pese a continuar siendo válida, debe ser complementa- determinado gremio a «proletariado» en una maquina- da con otras metas sociales, como lo son: la contribu- ria de producción que sólo compra su «mano de obra», ción en la participación social y la vida democrática, la dando origen a una crisis de identidad cultural —situa- conservación y transmisión de la cultura, la generación ción que ha sido ampliamente criticada por el marxis- y aprecio de las manifestaciones artísticas (Ramphele, mo—, y desarticulándolo del conocimiento de su pro- 2000) y, juntamente con ello, la universidad experimenta fesión en segmentaciones aisladas, modelos que siguen la demanda de los estudiantes, para quienes cursar una siendo vigentes en muchas de las industrias y fábricas de carrera universitaria ha significado tradicionalmente un la actualidad, en especial en los países subdesarrollados medio para obtener un trabajo como profesionista, con la (Auping, 2004). esperanza de obtener la compensación económica y so- Bajo este paradigma, la producción pudo ser prees- cial que de ello supuestamente se deriva (Navarro, 2000). tablecida con precisión matemática, de modo que el es- tudio de los tiempos y movimientos permitió predecir lo Tres paradigmas de la Gestión del conocimiento que sucedería en los sistemas de producción en serie. en la postmodernidad Paralelamente a la racionalidad de la producción ta- yloriana, la modernidad fue testigo del auge del positi- Quizá han sido las promesas no alcanzadas de la moder- vismo, corriente filosófica que explica el desarrollo histó- nidad, la influencia del nihilismo existencialista tras las rico, social e individual como un proceso de superación dos guerras mundiales o simplemente por lo insostenible continua del entendimiento de la realidad, y que culmina del modelo, lo cierto es que la postmodernidad descansa con el conocimiento científico, ello mediante una dialéc- sobre la tesis que la modernidad ha sido «fracturada» y, tica histórica en la cual inevitablemente la ciencia logra- en efecto, los conceptos científicos y sociales que sirvie- 62 rá dominar a la naturaleza, haciendo realidad el ideal de ron para entender la modernidad son insuficientes para todo grupo humano, a saber, «el orden y progreso» (Anti- representar o predecir la sociedad actual (Beck, 1998). Por seri, 1999), promesa que resultó utópica en el plano social ello, los paradigmas de la modernidad han sido severa- (Beck, 1998), dando origen a la postmodernidad. mente cuestionados en la postmodernidad y, para efec- El paradigma del positivismo supone que el único co- tos de la vinculación con el cambio en las universidades, nocimiento válido es el obtenido por métodos empíricos, se pueden distinguir tres deconstrucciones de la socie- partiendo de hipótesis y experimentación, y presentando dad y el conocimiento que exigen transformación en la sus conclusiones como una verdad objetiva, reduciendo a vida de la universidad. quimeras y estados de conocimiento inferiores todo tipo La primera es la concepción de la información como de explicación diferente de la realidad. De esta reducción base de la economía, lo cual supone definir al conoci- al criterio empírico se deriva la universalidad del conoci- miento como causa eficiente de la productividad y el de- miento científico, de modo que los modelos de análisis, y sarrollo. especialmente los de intervención de la realidad, pueden Esta idea es compartida por el Banco Mundial (2003) ser reproducidos en cualquier contexto. y la ocde (1996). No obstante que ambos organismos con- Esta postura estructural−funcionalista de interve- cuerdan en que es un factor que produce riqueza, y dada nir en las sociedades, reproduciendo modelos exitosos, la relevancia que el conocimiento tiene en el desarrollo acompaña la tendencia mundial a la globalización, y de económico y social de los países, este documento preten- aquí a la internacionalización de la educación, esto es, de identificar las mejores prácticas para implementar la replicar los criterios de los países desarrollados en los economía basada en el conocimiento. menos desarrollados. Ello explica el énfasis de organis- Al ser el conocimiento una variable que influye signi- mos trasnacionales por identificar indicadores válidos ficativamente en la producción, los economistas buscan para distintos tipos de conocimiento y aplicables a todos nuevas formas de incorporar directamente los conoci- los países. mientos y tecnologías en sus modelos y teorías y, como Los efectos que acompañaron ambas racionalidades, consecuencia, se acentúa la demanda —en el mercado la- tanto la producción en serie como el paradigma científi- boral— de nuevas habilidades por parte de los trabajado- co, se evidenciaron principalmente en la transformación res, particularmente de los egresados de la universidad, de una vida más cómoda y la promesa de un dominio to- en especial la de aprender, y una demanda de trabajo más tal sobre la naturaleza, con ello la ciencia se convirtió en especializado. referencia de certeza y fuente de verdad (Beck, 1998). Diciembre 2011, número 9

Por lo anterior, resulta significativamente importante tidos, como en una especie de laboratorio social. para las universidades, específicamente para las particu- Frente a este paradigma de la ciencia como domi- lares, dado que representa una de las tendencias actuales nadora y controladora, el desarrollo científico ha traído a las cuales se debe atender para dar respuesta. consigo la posibilidad latente de daño de toda la sociedad Una de las primeras aproximaciones para tratar al en su conjunto, denominado riesgo (Beck, 1998). El riesgo conocimiento como una de las variables del desarrollo, es global, no excluye a los pobres, pese a que en no pocas consiste en identificar las categorías en que se pueden ocasiones el riesgo es gradualmente mayor por trabajar agrupar los distintos tipos, la ocde (1996) distingue cua- o vivir en cercanía de industrias, cuyos desechos afectan tro: significativamente la calidad de vida. Una peculiaridad de esta concepción del riesgo es que es real, padecido a) El qué del Conocimiento, que es la parte de los más no codificado, por lo menos no bajo la idea de clari- contenidos dad y distinción cartesiana. El riesgo es producto de una b) El porqué del Conocimiento, como conoci- configuración de variables, y por ende no hay responsa- miento de las causas de los fenómenos propio bilidad y menos culpabilidad. de la ciencia, los principios y las leyes de la na- La ciencia, y con ello la gestión del conocimiento, jue- turaleza ga un papel decisivo en la conciencia subjetiva y social del c) El conocimiento del cómo, que se refiere a las riesgo, contraria a la racionalidad crítica sobre la cual se habilidades o capacidad para hacer algo basa, y sus conclusiones son empleadas como «dogmas d) El conocimiento del quién (saber quién), mis- infalibles» por quienes ven favorecidos sus intereses en la mo que involucra la información acerca de explotación e industrialización de la natura. No obstan- quién conoce y quién sabe hacer qué. Estos te, el riesgo los incluye a tal grado, que incluso el término conocimientos son aprendidos principalmente de propiedad privada tiene una nueva connotación al ser en la relación social (Lam, 2000) ésta afectada por el riesgo. Por tanto, se presenta una transmutación del término Por ello las demandas, tanto del mercado laboral como «privado» como protección al riesgo posible, como reali- de los estudiantes universitarios, se caracterizan por la dad. Sin embargo, el efecto del riesgo es un símbolo que necesidad de un continuo aprendizaje de la información puede y es comercializado: entre más se expande la ame- codificada y de competencias en el uso de la información. naza más lucrativa se vuelve la industria de la protección, 63 Lo cual se traduce en la necesidad de incorporar nuevas que no es más que un riesgo en otra perspectiva. formas de aprender y —además— de transformar las ya Ante ello, la educación y el modelo de gestión del co- existentes. nocimiento son las variables que influyen significativa- En lo referente a los programas universitarios, ante la mente en la conciencia que se tiene o se ignora del riesgo. velocidad con la cual se generan los cambios, resulta casi Resulta evidente que el planteamiento de una gestión del imposible adecuar los planes de estudio a las vanguar- conocimiento desde la escuela como institución, estaría dias tecnológicas, por lo menos bajo el modelo de ense- incompleto de no incluir un modelo de pensamiento «éti- ñanza aprendizaje (Ginés 2004). co» o de «cuidado»: por ejemplo el modelo de investiga- Lo anterior exige a la universidad romper con este mo- ción participativa denominado raaks. delo educativo, de modo «que los estudiantes aprendan Esta segunda deconstrucción plantea un segundo a pensar de manera crítica y a interactuar socialmente» desafío para la universidad ¿cómo lograr egresados con (B.M. 2003: 46), de manera que sean capaces de transferir conciencia de responsabilidad ética, y una visión integral a nuevas realidades los conocimientos adquiridos du- —contra la fragmentada— de la realidad? rante la universidad, con la actitud crítica de búsqueda La tercera deconstrucción de la sociedad postmoder- continua. na se refiere al significativo aumento en la generación de Una segunda deconstrucción es la referente al impac- la información, por parte de las organizaciones no acadé- to social de la ciencia y la forma de generarla. A este res- micas, especialmente de las empresas trasnacionales. Lo pecto, como se vio anteriormente, la sociedad moderna anterior debido a que el conocimiento es una causa de la tiene sus orígenes históricos y fines ideológicos en la idea productividad y ésta, a su vez, de la generación de rique- de progreso, generando la promesa de la modernidad de za (ocde, 1996) lo cual ha motivado una carrera entre las «tiempos nuevos», donde el efecto de las fuerzas natura- empresas por desarrollar los procesos y tecnologías que les y sociales estaría bajo control. Asimismo, la moderni- les proporcionen ventaja. dad ha venido construyéndose y deconstruyéndose sobre En este contexto se presenta una nueva propuesta en la tesis estructural−funcionalista. Ello implica aplicar la manera de hacer investigación claramente distinta al modelos de desarrollo que tienen resultados «exitosos» a modo tradicional, donde la resolución de los problemas grupos humanos subdesarrollados, dando por supuesto es una consecuencia secundaria y no el motor primario que existe una naturaleza humana y biodiversa lo sufi- de la ciencia pura, y con la peculiaridad de ser transdis- cientemente similar como para que los efectos sean repe- ciplinar, implicando con ello una comunicación de diver- Pharus academiæ

gencias sin necesariamente generar una metadisciplina La disyuntiva de todas las organizaciones, particular- que congregue y unifique los resultados en un sistema mente la de las universidades, es cambiar sin perder los (Gibson, 1997). rasgos esenciales de la organización y con ello la identi- De facto, este modo de investigación (Gibson, 1997) in- dad de la misma; o resistirse al cambio, permanecer in- centiva a las organizaciones para invertir considerables mutables y poco a poco dejar de existir, por no responder recursos en la investigación, generando con ello cono- las demandas del contexto (unesco, 2005). cimientos nuevos, en no pocas ocasiones más rápido y Mientras que todas las organizaciones cambian, unas en mayor cantidad que la misma universidad. Todo ello lo hacen a tiempos más pertinentes que otras. Esos tiem- ha trasmutado el rol tradicional de la universidad, que pos de tardanza al cambio pueden representar la gran di- ha pasado de ser fuente de cultura, ciencia y tecnología ferencia entre tener éxito o fracasar, posicionarse o morir. —a tal grado que es posible observar sinópticamente el Un ejemplo de universidades que se ajustó a las nuevas desarrollo del pensamiento científico y la estrecha vin- circunstancias es la Pontificia Universidad de México, culación de sus protagonistas con las Universidades, por y más específicamente su Facultad de Filosofía. En ella, lo menos hasta principios del siglo xx (Antiseri, 1999)—, además de enseñar las llamadas «lenguas clásicas» y el a una entidad atenta a las necesidades y avances de las pensamiento aristotélico tomista, que por siglos han do- empresas para preparar profesionistas competentes para minado su currícula, se han adecuado a los cambios que trabajar en ella. Ante este cambio resulta disfuncional los tiempos demandan, incorporándose los estudios de pensar que es suficiente con proporcionar al egresado inglés, francés y filósofos postmodernos upm( , 2005). las competencias propias de la disciplina académica que Pero aun cuando en el caso concreto de la vida univer- estudia, como si el mundo —al cual se dirige— estuvie- sitaria, la adaptación e innovación son necesarias para se más o menos estable. Por otro lado, el conocimiento dar continuidad a un proyecto educativo, el elemento avaza a una velocidad tal, que no es posible mantener humano de las mismas no siempre está dispuesto a in- actualizados los planes de estudio para dar respuesta a corporar cambios, y lo más común es que se resista a ello las exigencias del mercado laboral, mediante egresados (Wise, 2005). En efecto la literatura muestra abundantes acordes a los nuevos conocimientos. evidencias acerca de cómo los seres humanos se resisten Al tiempo que las empresas generan investigación a hacer las cosas de manera distinta a como tradicional- para la obtención de riqueza, se acentúan las desigual- mente se hacen, sea para obtener distintos resultados 64 dades sociales y económicas, dado que —paradójica- o para satisfacer nuevas demandas antes no atendidas. mente— las organizaciones y sociedades con más recur- Sabiéndose estas resistencias, los directivos de las or- sos económicos son al mismo tiempo quienes tienen la ganizaciones son generalmente los indicados a inducir, infraestructura para generar y acceder la información, promover y reforzar el cambio dentro de la organización, haciendo con ello más difícil de recorrer la citada bre- enfrentando las resistencias (Ramphele, Mamphela, et al. cha (Castells. 2000). Ello indica que el desarrollo técnico 2000). y científico por sí mismo no garantiza la equidad, como Como consecuencia de los paradigmas deconstruc- pretendían los teóricos del liberalismo (Auping, 2004). tivos de la postmodernidad, la actual dinámica social ¿Qué debe hacer la universidad ante esta circunstancia? exige de los egresados de una universidad habilidades, conocimientos y actitudes distintas a las tradicional- La necesidad de cambió en la Universidad. mente desarrolladas en la misma. Así, por ejemplo, la globalización implica un dominio no sólo de otras len- Παντα ρει (Todo cambia) guas sino de la cultura de otros países. Por ello se espera — Heráclito de Efeso de un profesionista que, además del conocimiento de su especialidad, posea una actitud crítica, y aprender a tra- Tanto la evolución de la naturaleza como el devenir his- bajar en equipo para llegar a acuerdos con personas de tórico de la humanidad han evidenciado cómo gran can- especialidades diferentes (Cuéllar, 2004). tidad de especies, sistemas y modelos, perecen por no Evidentemente que estas demandas sociales generan realizar pertinentemente los cambios necesarios ante las nuevas expectativas entre los aspirantes a ingresar en nuevas circunstancias. Este mismo principio se puede las instituciones particulares; y sus padres, quienes en la aplicar a buena parte de las organizaciones, que han de- mayoría de los casos pagan la colegiatura, evidentemen- jado de existir debido que no realizaron los ajustes nece- te prefieren a las universidades que formen profesionales sarios para satisfacer las necesidades del entorno. Otras y postgraduados aptos para la sociedad presente. siguen vigentes pese a ser muy antiguas, debido funda- Por lo anterior, es necesario que las universidades, mentalmente a los cambios que les han permitido ofrecer encabezadas por sus directivos, adopten una cultura respuestas a necesidades demandadas por la sociedad. donde la transformación sea un eje central que les per- Las universidades, como organizaciones, se ajustan to- mita tomar las decisiones adecuadas, para así estar en talmente a estas premisas. condiciones de dar respuesta a las nuevas problemáticas sociales y satisfacer las expectativas de los alumnos. Los Diciembre 2011, número 9 directivos de las instituciones representan el mayor nivel Si bien el ideal de la metafísica de la ciencia —de en- de conciencia en los cambios (Deal, 1999). En esta diná- contrar los primeros principios de la realidad natural y mica, las organizaciones más efectivas en cambiar son social— que diera como consecuencia una metaciencia las encabezadas por directivos que promueven constan- común a todas las disciplinas es prácticamente imposi- temente una cultura de transformaciones (Gene, 2001). ble, no es menos cierto que dadas las circunstancias ac- tuales, por una parte de especialización de las disciplinas La alternativa desde la Gestión del conocimiento académicas como de diversificación en la naturaleza de los problemas sociales, una parte significativa del reto de Indudablemente que la universidad tiene que modificar- las universidades es generar condiciones tales que per- se a fin de dar una respuesta a la situación postmoderna. mitan formar profesionistas capaces de interactuar y Aunque es claro que no existe una solución, por lo menos generar conocimientos, con y a partir del diálogo inter- no bajo el paradigma de la ciencia moderna, como una disciplinario. relación causa−efecto, no obstante una de las propuestas La planeación en las organizaciones académicas, pe- de la Gestión del conocimiento, que pienso es pertinente culiarmente en las de educación superior, a menudo es estudiar y vincular con la universidad, es la alternativa central (Deal, 1999). Ello implica que el diseño de estra- para armonizar los intereses económicos, tanto de los tegias y la elaboración de planes son producto de diag- productores como de los distribuidores y consumidores nósticos que no reflejan la perspectiva de los actores, de de los bienes, como las condiciones para un medio am- quienes se espera apliquen y ejecuten estos planes. Esta biente sustentable denominado raaks —cuyas siglas en es una de las influencias próximas de la resistencia al inglés significan «Evaluación Rápida (o relajada) de sis- cambio en las universidades. Considero de mucha utili- temas de Conocimiento Agrícola»—. Dicha metodología dad investigar si este modelo de raaks ha sido aplicado ha sido inicialmente desarrollada en la Universidad de a organizaciones académicas, qué modificaciones se han Wageningen, y aplicada en distintos programas de Eu- hecho y cuál ha sido el resultado. De no localizar la infor- ropa y América. mación, sería importante generar una adaptación con un Justamente el planteamiento inicial de este modelo es grupo de interesados —no podría ser de otra manera—, e que las respuestas científicas y tecnológicas son necesa- implementarlo en los directivos de una universidad. rias más insuficientes ante la complejidad del fenómeno, y la multiplicidad de actores con igual número de pers- Conclusiones 65 pectivas que le configuran. Una de las tesis que sustentan al documento es la epis- A manera de conclusión, se puede apreciar que las pecu- temología configuracional, en la cual un fenómeno no liaridades de la sociedad postmoderna están vinculadas obedece a una causa aislada ni a la gradual influencia de con una sociedad de riesgo, el conocimiento como base varias, como habían pretendido Aristóteles, Kant, Des- de la economía, la innovación y la nueva forma de hacer cartes, por mencionar algunos, sino a una configuración investigación. Por ello, la pertinencia, o mejor dicho, la de actores. Este modelo es más próximo para describir la necesidad por parte de la Universidad, de implementar complejidad de un problema social, en el que cualquier los cambios que influyan más directamente en la for- solución afecta los intereses de uno de los actores. mación de profesionistas competentes en la dimensión Así como el raaks considerara a los actores sociales crítica y social, con una aptitud para la preparación cons- como innovadores de sus propias prácticas, se puede tante y continua. pensar en un modelo de educación crítica que no tenga Comparto la pregunta del Banco Mundial (2003. 149) como paradigma formar egresados especialistas sino ¿Cuál es la combinación correcta de la enseñanza para profesionistas capaces de debatir y construir con otras hacer generar en la universidad espacios de debate y de- personas, en un diálogo interdisciplinario que genere un sarrollo de la criticidad? Asimismo, la postura de quie- modelo sustentable de totalidad, de modo que se pro- nes afirman que es precisamente en la educación don- mueva un aprendizaje social, mismo que sea transferible de se pueden formar las personas en la justicia social, lo a nuevas o distintas situaciones, y con ello formar una cual incluye la solidaridad y subsidiariedad, como dice definición compartida del problema y de la solución. E. Fromm (1977), «La formación de la conciencia ética es Este modelo implica la aplicación concreta tanto de la más una exigencia de supervivencia social que un impe- construcción del conocimiento como del aprendizaje so- rativo moral». cial. En buena parte la especialización de las disciplinas Y es en este contexto donde un modelo de educación académicas ha dejado de lado este enfoque, generando critica y social, mediante la transferencia de la metodolo- en quienes las estudian, y principalmente en quienes las gía del raaks a la universidad, es una opción que merece enseñan, «racionalidades» que en no pocas ocasiones la pena que consideremos. propician una visión parcial y, por ende, ofrecen una so- lución similar a problemáticas complejas. Pharus academiæ

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La Escatología de la postmodernidad

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1 Naturaleza de la visión cristiana de la historia

Dr. José Luis Villaseñor La visión cristiana de la historia consiste en creer en la intervención de Dávalos Licenciado en Derecho y con Dios en la vida humana, por una acción directa en ciertos tiempos y lugares Maestría en la misma disciplina. determinados. Tal visión es unitaria, en cuanto tiene un principio, luego Doctorado en Educación por un punto central —que es la Encarnación—, y un punto final. Este proceso la Universidad de Houston, Texas, eeuu. Actualmente funge como trasciende la historia, porque no son eventos históricos en el sentido corriente Director de Investigación en el de la palabra, sino actos de la divina creación a la que se subordina toda la iest, en donde se imparte además, historia. Así, la visión cristiana de la historia es una visión que considera lo algunas materias de licenciatura y posgrado. eterno y humano a la luz de la Revelación y, por tal motivo, la historia cristiana es inevitablemente apocalíptica, ya que el Apocalipsis es el equivalente cristiano de las filosofías seculares de la historia1. 1 Dawson, Christopher: La Esta visión abarca toda la vida de la humanidad sobre este planeta, y ter- Visión Cristiana de la mina con el fin de este mundo y de la existencia temporal del hombre. El fin Historia; Pensadores Católicos Contemporáneos, Edit. de la historia no es el desarrollo de una nueva clase de sociedad económica, Grijalbo, S.A., Barcelona, sino de una humanidad que rebasa al hombre, así como éste sobrepasa a los Tomo ii, p. 290, 1964. animales. El curso total de la historia fuera de la gracia divina es la relación de 2 Ibídem, p. 303. los sucesivos intentos de construir torres de Babel, que fracasan por el egoís- mo y la codicia inherentes a la raza humana2. Relacionado con este aspecto, el Catecismo de la Iglesia Católica nos dice: Pharus academiæ

«Este orden a la vez cósmico, social y religioso de la Aquella realidad escatológica o de los últimos pluralidad de las naciones, confiado por la providencia tiempos resulta de un proceso interno gradual de la divina a la custodia de los ángeles, está destinado a li- historia; pero si —en cambio— se supone una ruptura mitar el orgullo de una humanidad caída que, unánime brusca y total con el orden histórico, para llegar a una en su perversidad quisiera hacer por sí misma su unidad realidad de otro orden, se tiene entonces la concep- a la manera de Babel. Pero a causa del pecado, el poli- ción apocalíptica8. teísmo así como la idolatría de la nación y de su jefe, son una amenaza constante de vuelta al paganismo para esta 2 Filosofía de la historia y revelación economía aún no definitiva»3. Un esfuerzo filosófico que se niega metódicamente a una El sentido histórico y escatológico de la creencia cristia- apertura a la teología, deja simplemente de ser filosófico, na se acentúa en los escritores de la Iglesia cristiana. Es y ello por tres importantes razones: la primera, porque la decir, la tensión entre trascendencia y «aquendidad», en- historia es un proceso o marcha, la cual no puede conce- tre el Reino de Dios y el Reino terrenal, será sentida por birse o representarse desde un de donde —principio— y ello con mayor rigor. De este dualismo escatológico par- un adonde —o fin. Es decir, toda imagen histórica está te San Agustín para moderar la urgente esperanza en la condicionada por algún tipo de concepción de un co- venida del Reino de los Cielos. La raíz de este dualismo mienzo y un fin, de los cuales no hay experiencia huma- habrá que buscarlo, según aquel, en la oposición entre el na, pues tanto uno como el otro, no se captan en el fluir «hombre natural», que vive para sí mismo y desea solo concreto de la historia. Por tanto, aquellos sólo son con- la felicidad y la paz temporales; y el hombre «espiritual» cebibles cuando se acepta una interpretación «tradicio- que vive para Dios, anhelando la beatitud espiritual de nal» o pre−filosófica de la realidad; o nos son revelados o una paz eterna4. son inconcebibles. La segunda es referible a quien filosofa sobre la histo- 1.1 Apocalíptica o escatología ria, el cual se pregunta por lo que ocurre. A lo cual, si se responde que se trata —por ejemplo— de una decadencia La apocalíptica como género literario tiene como obra de un imperio, de un desarrollo económico o de una lu- central y característica en el Nuevo Testamento, el cha de clases, quedaría sin respuesta tal pregunta. Por- 68 Apocalipsis de San Juan. Esta obra quiere mostrar cla- que lo que sucede realmente es la salvación o la conde- ra y globalmente el carácter del tiempo final, es decir, nación. Conceptos que sólo pueden comprenderse desde de la época que va de la primera a la segunda venida la revelación, sólo accesible al creyente, y el filósofo que de Cristo. Pone a la historia final al servicio de la histo- los eliminara, eliminaría con ello también lo que —por ria temporal, la cual —a su vez— viene reflejada, con definición— se refiere a la investigación filosófica, aun- múltiples rasgos, en las imágenes del tiempo final o que se podría recurrir a categorías de índole psicológica, escatológico5. política o sociológica, pero con ello, no se alcanzaría el Por lo que se refiere a la escatología, se vincula di- verdadero núcleo del acontecer9. rectamente a la materia específica del Apocalipsis, La tercera se refiere a que la revelación no expresa una que está constituida por los hechos que tienen que imagen de la historia, sino que más bien es una historia suceder6. Tales hechos consisten en los acontecimien- de la salvación, pues su contenido no responde a la pre- tos finales de carácter salvífico, como son: la muerte, gunta ¿qué es?, sino ¿qué ha sucedido? y ¿qué sucederá? el juicio, el cielo y el infierno; hechos en que termina Es el razonamiento sobre una única corriente del acon- la historia de la salvación de cada individuo, pero tecer histórico, empezando por la creación y terminando también de la humanidad y del cosmos. Así pues, se con el juicio del último día. Esta razón que vincula la fi- entiende por escatología la doctrina o conjunto de losofía de la historia y la teología es particularmente in- creencias relativas a la llegada —querida y realizada tensa: al remitirse a la teología, quien investiga la historia por Dios—, de un orden nuevo y definitivo, de acuerdo da de lleno en el blanco de la afirmación teológica, que es con el ideal divino de justicia, santidad y paz, que es- una afirmación sobre la salvación en curso del hombre10. tablece en la tierra el reinado de Dios7. No hay un argumento de razón que pueda probar que el mundo ha tenido principio, aunque sí lo hay para de- 3 Asociación de Editores del Catecismo; Catecismo de la Iglesia Católica: 2a. mostrar que recibe de Dios el ser que tiene. Sólo la fe nos Edición, Madrid, p. 26, 1996. permite saber que el mundo ha tenido comienzo y, de 4 Diez del Corral, Luis: Secularización y dinamismo histórico; Pensadores Católicos Contemporáneos, Editorial Grijalbo, S.A., Barcelona, Tomo ii, p. 338, 1964. 7 Mateos, Juan: Marcos 13. El Grupo Cristiano en la Historia; Ediciones Cristiandad, S.L., Madrid, p. 32, 1987. 5 Schick, Eduard: El Apocalipsis, Editorial Herder, S.A., 3a Edición, Barcelona, p. 8, 1958. 8 Ibídem, p. 32. 6 Vanni, Hugo: Apocalipsis; Una Asamblea Litúrgica interpreta la historia, 9 Pieper, Josef: El Fin del tiempo. Meditación sobre la Filosofía de la Editorial Verbo Divino, Navarra, España, p. 25, 1991. Historia; Editorial Herder, S.A., Barcelona, p. 16, 1984. 10 Ibídem, p. 21. Diciembre 2011, número 9 todas formas, un mundo sin inicio temporal habría sido posible siempre que Dios le hubiese mantenido desde la eternidad en el ser. Es decir, no tendría inicio ni fin. Y sin fosis—, la ética devino [en] dietética; la antropología embargo, su eternidad no sería divina pues en su ser se [en] trofología y la teología [en] ethología o ateología; daría la sucesión y el movimiento como signo de contin- sin contar con que la psicología, ahora sin la “p” y con gencia y de su dependencia del Creador11. En resumen: permiso de la Real Academia, deviene —no podía ser «sólo entenderemos la historia si creemos»12. menos— [en] sicología: ciencia del higo, si hacemos caso a las etimologías; y el nihilismo, incapaz de ani- 3 Noción de modernidad y su extensión durable dar en nada, propuso toda una “nada” como alterna- tiva frente al todo, nada que, no contenta con situarse Para Carlos Valverde13, la modernidad es un proceso de por cuenta propia “más allá del bien y del mal”, se afir- secularización o laicización concebido como ruptura y maba como nueva metafísica más allá de la realidad progresivo distanciamiento entre lo divino y lo humano, física misma17». entre la revelación y la razón. O, si se prefiere de otra manera, es la lenta y sucesiva sustitución de los principios 3.2 La filosofía de la modernidad y valores cristianos que habían dado unidad y sentido a los pueblos europeos durante al menos diez siglos, por Dentro de la filosofía había de surgir, como surgió los pretendidos valores de la razón pura. Este proceso, y en la esfera de lo religioso, la destrucción de la la pugna consecuente, inicia en el siglo xiv y concluye, en filosofía. Descartes (1596-1650), gran filósofo de la algún sentido, en 1841 —siglo xix—, cuando Feuerbach Edad Moderna, inicia el proceso de la destrucción cierra su libro La esencia del cristianismo con la sentencia de la filosofía, por cuanto que si las cosas son en su «Homo homini deus», que es la expresión más completa ser independientes del hombre, también lo son en del espíritu secular y del inmanentismo. Así, Dios se ha su conocer. Así, el error cartesiano destruye todo su hecho innecesario, a los hombres les basta la razón; y, por posterior discurso filosófico, al afirmar «cogito ergo su parte, Nietzsche pronunciará su sentencia mortuoria: sum» —pienso, luego existo—, de hecho la realidad «Dios, ha muerto. Nosotros le hemos matado». está determinada por su pensamiento. Como si el pensamiento humano fuera causa y fuente de la 3.1 Laicización de la escatología cristiana realidad de las cosas. Con Descartes, la filosofía se cierra en la inmanencia del acto de pensar del propio Uno de los más lamentables cálculos en la historia sujeto. Y allí ha de quedar aprisionada. Porque no nos 69 del pensamiento, nos dice Carlos Díaz14 , fue el de ha de decir lo que son las cosas, sino lo que el hombre los que pretendieron laicizar la escatología cristiana piensa que son. Así, el idealismo es la negación de la por referentes intramundanos. De esta manera, mu- filosofía, y el proceso de la filosofía moderna que se chas doctrinas que nos prometen «cambiar la vida» inicia en Descartes y acaba en Hegel —pasando por se apoyan sobre ideologías ruidosas que son otras Kant— no es sino el suicidio de la razón humana en pseudociencias: la ideología comunista, la ideología manos de la propia razón18. psicoanalítica —el freudismo vulgar—, la ideología En el presupuesto cartesiano no es posible la estructuralista15; el postmodernismo16. «De aquellos metafísica porque, al no llegar al ser el entendimiento polvos, sin embargo, he aquí estos Iodos: el marxismo, humano, no puede llegar a Dios, que es causa y luego de producir abundante marxiología, devino en fuente de todo ser. Por eso la filosofía moderna, al Kremlinología y burocracia; el positivismo no conten- ser impotente para llegar a Dios, es profundamente to con encontrar a la razón como deidad, vio cómo atea. En consecuencia, dada su impotencia para llegar ésta degeneraba en racionalidad instrumental, hasta a Dios, a la verdad más grandiosa de su campo de que finalmente, a su vez —baile de las tres metamor- actividad, es una filosofía necia, absurda y sin objeto19. El resultado de esta inversión, es otra inversión de 11 Sayes, José A.: Ciencia, Ateísmo y Fe en Dios, Ediciones Universidad de la misma filosofía, que conforma el idealismo dualista, Navarra, S.A., 2a. Edición, España, p. 342, 1998. porque Descartes ha separado las cosas del espíritu de 12 Sáenz, Alfredo, S.J.: El Fin de los Tiempos y seis autores modernos, Asociación Pro-Cultura Occidental, A.C., Buenos Aires, p. las de la materia; las del alma de las del cuerpo; las del 287, 1997. hombre en su saber y en su actividad superior de las 13 Valverde, Carlos: Génesis: Estructura y Crisis de la Modernidad, B.A.C.; del mundo; entregando con ello la esfera de la cultura, Madrid: 2003; p. XIII.Historia; Editorial Herder, S.A., Barcelona, p. 16, 1984. de la economía, de la política, al campo mecanicista, 14 Díaz, Carlos: Escucha Posmoderno, Ediciones Paulinas, Madrid, p. 27, de lo terrestre, de la materia de lo laicista. Después 1985. de Lutero, agotado el hombre teológico y después 15 Leonard, André: Pensamiento Contemporáneo y Fe en Jesucristo. Un discernimiento intelectual cristiano, Ediciones Encuentro, Madrid, p. 27, 1997. 17 Díaz, Carlos: Op. cit.; p. 28. 16 Maíz, Ramón y Marta Lois: Postmodernismo: La libertad de los 18 Meinvielle, Julio: La Iglesia y el Mundo Moderno; Ediciones postmodernos; Ideologías y Movimientos Políticos Contemporáneos, Theoria, S.R.L., Buenos Aires, p. 170, 1960. Editorial Tecnos, S.A., Madrid, p. 403, 1998. 19 Ibídem, p. 172. Pharus academiæ

de Descartes, agotado el hombre filosófico, han de Dios realizado sobre la tierra de, modo análogo producirse destrucciones cada vez más profundas al de Eusebio de Cesárea; será un tiempo de en las capas inferiores, pero fundamentales de la bienaventuranza eterna, ya sin problematismo sustancia humana20. verdadero aunque en principio siga atravesado por el eje de la dialéctica histórica24. 3.2.1 Idealismo alemán y paroxismo de lo secular Marx, por su parte, convertiría el idealismo dialéctico de Hegel en materialismo dialéctico, Tocó al idealismo alemán verter en la filosofía, para cual el proceso histórico decisivo no acontece lo que la Revolución Francesa significó en el en el plano superior del espíritu y de las formas ámbito político. En el paralelismo de filosofía y culturales, sino en el plano primario y elemental revolución trazado por Heinrich Beine21, se señala de la producción. Vista con rigurosa perspectiva que: «Jacobinos de la filosofía, nuestros hombres materialista, el sujeto verdadero de toda la pensantes congregáronse en torno a la razón cultura europea es la masa anónima, es decir, el pura y su crítica, para no dejar en pie, sino lo que proletariado que es consecuencia de presentarse ésta consintiese. Kant fue nuestro Robespierre. como masa desposeída, como proletariado Después vendrá Fichte, con su “yo”, el Napoleón de biológico, inorgánico desde el punto de vista social. la Filosofía... el imperio hegemónico del pensar..., Para el marxismo coincidirían los momentos de la voluntad soberana..., el despótico, lúgubre y la redención, del juicio final y del advenimiento desértico idealismo. Con su lógica aplastante del reino de Dios; la primera y segunda venida del secaría las flores escondidas que lograron eludir Salvador. Marx considerará la salvación como algo la guillotina kantiana o alcanzaron después súbito, tremendo, revolucionario, por obra de un a abrirse inadvertidamente... vino luego la protagonista concreto de carne y hueso, que no contrarrevolución, y con Schelling el pasado... viene del más allá, sino de los infiernos cercanos sería nuevamente reconocido..., hasta que Hegel— del mundo social. Posteriormente, el marxismo el Orleáns de la Filosofía— instituyese un nuevo será llevado a China por la revelación del mensaje régimen. Felizmente hemos cerrado un círculo mesiánico y el programa político de Lenin25. perfecto en la filosofía, y es completamente lógico El paroxismo de todo el proceso, que va desde 70 que ahora nos estemos pasando a la política». el siglo xiv hasta el siglo xix, logra su máxima Así como Schelling, a partir del espíritu del expresión en una corriente de pensamiento, que romanticismo, introduce la Cábala en la filosofía por un lado es una violenta reacción contra los protestante del idealismo alemán, han sido los grandes relatos ideológicos, y por el otro, es una pensadores judíos —amigos de Walter Benjamin—, consecuencia de ellos. Se trata pues del vitalismo los que han pensado hasta el final, la dialéctica o filosofía de la vida, que pretende que ésta, es hegeliana de la Ilustración, tanto cuanto la propia más significativa e importante que las ideas, persistencia del origen permite mirar a un final aún y por ello es prioritaria. Atiende, además, el pendiente: Habermas22 se refiere a Theodor Adorno, torrente voluntarista, instintivo y vital más que Marx Horkheimer y Herbert Marcuse, a los que se al pensamiento objetivo y lógico, que no deja de adelanta el primer Georg Lukacs; y añade, que es ser secular y secularizante, que hace de la vida espíritu alemán lo que está a la base de la influencia inmanente un absoluto principio y fin de todas judía, «esa herencia judía que el espíritu alemán las cosas. Entre las múltiples manifestaciones del lleva dentro de sí, se ha vuelto imprescindible para vitalismo podemos señalar el vitalismo pesimista nuestra propia vida y supervivencia... Ernst Jünger, e historicista, cuyos representantes más señalados Martín Heidegger, Carl Schmill son representantes son Friedrich Nietzsche y William Dilthey26. de este espíritu en su grandeza, pero también en su peligrosidad»23. 3.2.2 Apocalipsis y modernismo La idea de progreso que abanderó el positivismo comtiano es la misma que, en términos de rigurosa En Ap. 16, 13-16 se nos relata lo siguiente: «Y vi filosofía, había desenvuelto Hegel, para el cual, que de la boca del Dragón, de la boca de la Bestia el Estado prusiano viene a ser como reino de y de la boca del falso profeta, salían tres espíritus inmundos como ranas. Son espíritus de demonios, 20 Ibídem, p. 173. que realizan señales y van donde los reyes de todo el 21 Graf Huya, Hans: Seréis como dioses: vicios del pensamiento político y mundo para convocarlos a la gran batalla del Gran cultural del hombre de hoy, eunsa. S.A., Barcelona, p. 33, 1991. 22 Habermas, Jürgen: El Idealismo alemán de los filósofos judíos (1961), Perfiles filosóficos-políticos, Aguilar, Taurus, S.A. de 24 Diez del Corral; Op. cit.; p. 349. C.V.,Madrid, p. 55, 2000. 25 Ibídem, p. 350. 23 Ibídem, p. 56. 26 Valverde, Carlos; Op. cit.; p. 365 Diciembre 2011, número 9

Día del Dios Todopoderoso (Mira que vengo como quien calificó como «maestros de la sospecha» a ladrón. Dichoso el que está en vela y conserve sus Marx, a Freud y a Nietzsche, distintos en su trabajo vestidos, para no andar desnudo y que se vean sus concreto pero coincidentes en no fiarse de lo que se vergüenzas). Los convocaron en el lugar llamado ve, en buscar el condicionamiento oculto29. en hebreo Armagedón». Como hemos visto anteriormente, si Descartes En esas tres ranas, Leonardo Castellani27 dudaba de lo sensible para concluir afirmando la cree ver el liberalismo, el comunismo y el auto-evidencia y la auto-transparencia del «ego modernismo, en cuya alianza alcanza su plenitud cogito», a partir de estos maestros dudamos el viejo naturalismo, que es —en el fondo— el de la conciencia misma, es decir, del sujeto. gran proyecto del Anticristo. Las tres herejías Ahora, tanto el sujeto, así como sus supuestas parecen ranas porque son vocingleras, saltarinas, representaciones verdaderas, son dudosas; más pantanosas y tartamudas. Es decir, tanto el aún, éstas suelen ser mentiras que aluden a otra liberalismo como el marxismo tienen todas las verdad escondida o disimulada en su literalidad. características de una religión. Sin embargo, el Entonces, la estrategia es sospechar de esas modernismo es el fondo común de aquellas dos verdades, porque hay un inconsciente, dirá Freud; ideologías contrarias, aunque no contradictorias, hay una voluntad de poder, dirá Nietzsche; hay una que algún día las copulará estrechamente por obra clase social explotadora, dirá Marx. Es la hora de del pseudoprofeta. El modernismo será entonces las interpretaciones y de la construcción de reglas la herejía suprema, a juicio de Pío x, porque las para esas interpretaciones. Es el tiempo de las engloba a todas y será la última, por cuanto que en hermenéuticas30. materia de falsificación del cristianismo no parece Como puede observarse, en cada uno de esos posible ir más allá. ¿Habrá una apostasía más tales maestros es fácil reconocer un ejercicio execrable que la adoración del hombre en lugar de diferente de la sospecha. La fórmula negativa Dios? común a ellos es el de la verdad como mentira, y Frente al tema de las ultimidades, caben por ende la conciencia del sujeto es una conciencia posiciones erróneas y contradictorias entre sí. El falsa. Así, estos tres maestros de la sospecha no lo iluminismo de los siglos xviii y xix despreció la son del escepticismo, son seguramente tres grandes escatología cristiana con toda la religión revelada, destructores. El mismo Paul Ricoeur trata de dar 71 burlándose del Anticristo y del Dragón como de una explicación atenuante a la labor destructiva cuentos medievales. El resultado fue que cayó en de tales maestros, pues hace suya la opinión una escatología espúrea; o mejor, desembocó en de Heidegger, el cual dice que la destrucción es dos escatologías opuestas, fragmentos de la síntesis un momento de toda fundación, incluida la cristiana: la optimista, del progreso indefinido, y destrucción de la religión, en cuanto es—según la pesimista, del nihilismo sin sentido. Aquella, la palabras de Nietzsche— «un platonismo para representa Kant, quien creyó en el reino instaurado el pueblo». Es más allá de la destrucción donde por la sola fuerza de la Razón pura, profetizando se plantea la cuestión de saber lo que todavía la Paz Perpetua sobre el fundamento del ideario significan pensamiento, razón e incluso fe31. de la Revolución Francesa. La segunda, la visión Insiste Paul Ricoeur en justificar las estrategias pesimista, ha sido expuesta por los nihilistas como de la sospecha, porque —según él— aquellos Schopenhauer y Nietzsche, que heredaron el otro tres despejan el horizonte para una palabra más fragmento de la concepción cristiana. Estas dos auténtica, para un nuevo reinado de la verdad, no corrupciones ideológicas perduran en el ateísmo sólo por una crítica destructora sino mediante un contemporáneo, esperando la hora en que el arte de interpretar. Es que ellos triunfan de la duda Anticristo las reúna en amalgama perversa. Así que sobre la conciencia por una exégesis del sentido, y cuando venga el Anticristo, no necesitará más que es a partir de ellos que la comprensión se convierte tomar a Kant y a Nietzsche como base pragmática en una hermenéutica: buscar el sentido será de su religión auto-idolátrica28. descifrar las expresiones de la conciencia32.

3.2.3. Los maestros de la sospecha y la interpretación como ejercicio de la sospecha 29 Gómez Cafarena, José: La entraña humanista del Cristianismo, Editorial Verbo Divino, 2ª Edición Corregida, Navarra, p. 267, 1987. 30 Dirección: http:/www.antroposmoderno.com/antroarticulo.ph.p.id.109 La denominación de «filosofía de la sospecha» 31 Ricoeur, Paul: Freud: una interpretación de la cultura; Siglo xxi editores, proviene del gran filósofo francés Paul Ricoeur, S.A. de C.V., México, p. 32, 2002. 32 Ibídem, p. 33. 27 Sáenz, Alfredo, S.J.; Op. cit.; p. 365. 28 Ibídem, pp. 395 y 398. Pharus academiæ

3.2.4 El Fraude de la Modernidad Nietzsche, Heidegger, Spengler, Freud y el judaísmo, del cual se explica su actitud antimodernista. Este Esta tesis afirma que si bien es cierto que la último, vinculó a la Escuela de Frankfurt con el formación humana de los primeros tiempos del postmodernismo en cuanto que conforma una actitud cristianismo cuidó de desarrollar los valores de de condena de la modernidad, como represión de la la persona, de la libertad, de la responsabilidad naturaleza y de la cultura. Con la filosofía de Adorno y dignidad individuales, así como el respeto se percibe una clara influencia —vía Benjamín— de mutuo y reciproca ayuda, al igual que la Edad la visión cabalística, que concebía a la historia del Media fomentó la vida interior y la práctica de la lenguaje como un permanente oscilar del péndulo caridad. No obstante, la autonomía de la persona de Babel, y un retorno a la armonía de lo unísono, en hizo posteriormente su aparición, y se trata de ciertos instantes mesiánicos y privilegiados donde una conquista del orden natural, independiente reinaba la inteligibilidad34. del cristianismo. Una manifestación de tal Como el marxismo trivial del siglo xix se venía situación son los llamados derechos del hombre amorteciendo por fallar continuamente los vaticinios proclamados por la Revolución Francesa. Sin de Marx, porque en los países desarrollados se embargo, tales valores y actitudes están vinculados carecía del proletariado —pues se había integrado a la Revelación, en relación específica con lo que es a la burguesía—, y porque el esclerótico marxismo humano por naturaleza. Procede de la liberalidad soviético ya no interesaba en occidente, fue necesario de Dios, pero asume lo humano dentro de su reavivar los colores del cadáver a fin de que el armonía, naciendo así la estructura cristiana de marxismo recobrara su atractivo. Así, esta obra de la vida. Por tanto, la tesis de que estos valores y cosmética va a corresponder a los marxistas tardíos actitudes en cuestión corresponden al desarrollo —o postmarxistas de la Filosofía Social—, que como de la naturaleza humana, ignora el sentido real Herbert Marcuse y Theodor Adorno componen de los mismos; más aún, desemboca —digámoslo la llamada Escuela de Frankfurt. Luego, una vez sin rodeos— en un fraude que pertenece al cuadro que la Escuela designa al hombre autónomo como de la Modernidad. Es decir, al hecho de que no protagonista de la revolución, en vez del proletariado, se reconociera la relación de la revelación con lo tal revolución dará comienzo ahora por obra no de 72 humano, de que la Modernidad se adjudicara la la clase obrera, sino del individuo; es decir, dentro autoría de la cualidad de la persona y de la esfera de cada hombre en particular, en la familia, en de los valores personales, pero que rechazará las escuelas y universidades, y en todas las demás la revelación, que constituirá la garantía de esa instituciones culturales y sociales en general —sin cualidad y, de esa esfera, ha dado origen al fraude que la iglesia sea la excepción. Esto poco tiene que ver intrínseco de que antes hablábamos33. con Marx, pero sus ideas serán el conducto hacia una post−filosofía, que constituya no más que un eslabón 3.3 Intentos de destruir la fe: postmarxismo y escuela de más de esa cadena tendida por el hombre que se alza Frankfurt contra Dios, desconociendo el pecado original35. Una de las manifestaciones más destructivas de la Esta última, como se le llamó cuando fue constituida Escuela de Frankfurt, que se opone tanto al Estado a través de la creación del Instituto de Investigación Nacional como a la civilización occidental judeo− Social, se fundó en 1923 a partir de la inspiración cristiana, es el desconstruccionismo. Con las teorías de Félix Weil, con el objetivo de crear un marco de la «personalidad autoritaria», Theodor Adorno institucional independiente, tanto económica como determinó las bases del análisis psicosocial que dio intelectualmente. Sus diferentes miembros tenían apoyo al desconstruccionismo, el cual cuestiona, o vínculos formales que compartieron en propósitos plantea la pregunta de ¿quién es autoritario? Según comunes, con más coincidencias que diferencias, entre Adorno, todo aquel que sostenga que la vida humana las cuales se podrían mencionar: ser judíos de clase debe regirse por conceptos «metafísicos», tales como: media alta; sus orígenes marxistas; su eclecticismo Dios, la verdad, la razón, la moralidad, los principios, como reacción de intelectuales radicalizados e etc. Así, el presunto caos universal sobre el que tal insatisfechos con la burguesía; así como compartir Escuela funda sus teorías, es justamente el caos que tesis similares en cuanto a la crítica del sujeto, quiere imponer al mundo36. de la razón, de la ilustración y de la modernidad. Entre las raíces filosóficas, en su primera etapa, 34 Arriaran, Samuel: Filosofía de la Postmodernidad. Critica a la Modernidad desde América Latina; Facultad de Filosofía y pueden citarse a Hegel y Marx, y posteriormente a Letras, unam; México, p. 36, 2000. 35 Graf Huyn, Hans; Op. cit.; p. 161. 33 Guardini, Romano: El Ocaso de la Edad Moderna, Obras de Romano Guardini, Ediciones Cristiandad, S.L., Madrid, Tomo i, p. 36 Villasana Munguía, J. Alberto: Entre el Caos y la Esperanza, 112, 1981. Editorial Diana, S.A. de C.V., México, p. 116, 2000. Diciembre 2011, número 9

3.4 El mundo de la modernidad, sus características y su de sus esperanzas utópicas39. relación con la posmodernidad Existen, sin embargo, otros diagnósticos diferen- tes al de la muerte de la modernidad, decretada por José María Mardones37 nos ofrece un perfil de la los postmodernos dándole a la postmodernidad el modernidad que se caracteriza por los siguientes efecto de enterrador de aquella. Es el caso de Arnold rasgos: J. Toynbee40 que ve la presente situación —posmoder- na— bajo el signo de la ambivalencia; es decir, exis- 1. Un proceso de racionalización, en el cual se te la posibilidad de la decadencia pero también de la configura un tipo de ser humano orientado al plenitud; y la elección de entre ambas estaría en fun- dominio del mundo, con un estilo de pensa- ción de la respuesta a los retos de la sociedad actual; miento formal, una mentalidad funcional, mo- pues la decadencia supondría la carencia de vibración tivaciones morales autónomas, junto con un ante tales problemas, mientras que la plenitud supo- modo de organizar la sociedad alrededor de la ne la creatividad, el afrontar tales retos con sentido institución económica y la burocracia estatal de responsabilidad. Tal diferenciación es la que puede permitir distinguir entre modernismo o postmoder- 2. Un centro productor de relaciones sociales: la nismo como decadencia y genuina postmodernidad economía, que desplaza la religión cada vez como resistencia. Sin embargo, modernidad y post- más a la esfera privada modernidad no se pueden entender como dos épocas autónomas e independientes, pues hay grandes cues- 3. Una cosmovisión descentrada, desacralizada y tiones que las atraviesan, y que por tanto las conec- pluralista tan, relacionándolas por cuanto que una se define en correspondencia con la otra41. 4. Una razón que muestra varias dimensiones o esferas que tienen su propia autonomía 4 Orígenes del término postmodernidad

5. La dimensión científico−técnica adquiere pre- El prefijo «post» que precede a moderno ha sido objeto eminencia social de varias interpretaciones, de las cuales elegimos la de Jean−François Lyotard42, que dice que: el «post» de post- 73 6. Una estructura social configurada por dos ins- moderno no significa un movimiento de comeback, de tituciones o sistemas predominantes: la técni- flashback o de feedback —de repetición—, sino un proce- co−económica y la burocrático−administrati- so a manera de «ana»: un proceso de análisis, de anam- va nesis, de anagogía y de anamorfosis, que elabora un olvi- do inicial. Entre otras cosas, el «post» indica un anhelo 7. Un tipo de hombre moderno celoso de su au- de despedirse de la modernidad; y es más que un tiempo tonomía individual, pero con ambivalentes o una demarcación cronológica, expresa un desdobla- manifestaciones de hiperindividualismo nar- miento que supone ante todo la pérdida de confianza en cisista. la razón, que es un rasgo típico de la modernidad43. El término moderno, en su forma latina «modernus», Este pórtico nos introduce en la postmodernidad que se empleó por primera vez a finales del siglo v d.c. para quiere ser, según Lyotard, una reestructura de la so- distinguir el presente, que se había convertido oficial- ciedad y cultura modernas, un corte superior de la mente en cristiano, del pasado y pagano. Con contenido modernidad. En este sentido, la posmodernidad se variable, el término «moderno» expresa una y otra vez presenta como el intento de cancelar la concepción de según ha reaparecido en la historia, la conciencia de una la razón, la historia, la sociedad, el ser humano y el época que se pone en relación con el pasado de la anti- arte que engendró la modernidad. Así, la posmoder- nidad es la modernidad que, al desarrollar sus propios 39 Scherpe, Klaus R: «Dramatización y desdramatización de “El fin”. La 38 conciencia apocalíptica de la modernidad y la postmodernidad.» mitos, ha llegado a descubrir su propio autoengaño . En: Modernidad y Postmodernidad; compilación de Joseph La teoría postmoderna prefiere pensarse en términos Picó, Alianza Editorial, S.A., Madrid, p. 356, 2ooo. de la «muerte de la modernidad», es decir como la li- 40 Ballesteros, Jesús: Postmodernidad: Decadencia o Resistencia, quidación del potencial ilustrado de la modernidad, y Editorial Tecnos, S.A., 4a Reimpresión; Madrid, p. 101, 1997. 41 Amengual, Gabriel: Modernidad y Crisis del Sujeto. Hacia la como la praxis de la contradicción y desconstrucción Construcción del sujeto solidario, Caparras Editores, S.L., Madrid, p. 148, 1998. 37 Rodríguez Vertiz, Felipe de Jesús: «La Crítica Posmoderna a la 42 Lyotard, Jean-Francois: La Postmodernidad (explicada a los niños); Religión», En: Modernidad y Posmodernidad, Editorial Limusa, Editorial Gedisa, S.A., 6a. Edición; Barcelona, p. 89 y sigs, S.A. de C.V. Grupo Noriega Editores, México, p. 236, 2000. 2001. 38 Ibídem, p. 236. 43 Rodríguez Vertiz, Felipe de J.; Op. cit.; p. 246. Pharus academiæ

güedad para verse a sí misma como el resultado de una En la Grecia clásica se produce la primera gran transición de lo viejo a lo nuevo. Desde el siglo xix, el ras- confrontación del problema, entre metafísicos y no go distintivo de las obras que cuentan como modernas, metafísicos. Confrontación entre la filosofía de Par- es lo «nuevo», que será superado y hecho absoluto por la ménides y los sofistas. El primero, inaugurando la idea novedad del próximo estilo44. de que el ser es uno, idéntico, inmutable, intemporal; y, La suma del prefijo «post» más el término moderno, en consecuencia, el mundo del cambio o la diversidad es decir, postmodernidad, lo empleó Baudelaire en 1864, es pura ilusión, meros nombres según Parménides. En aunque como fenómeno cultural es reciente45. Charles cambio Heráclito, concibe el ser en equivalencia con el Jencks asigna el minuto preciso de inicio de la postmo- devenir; es decir, no piensa una unidad sin multiplici- dernidad: Agosto 15 de 1972 a las 3:32 horas de la tarde; dad, un ser fuera del tiempo ni una razón sin vista, sin fecha correspondiente a la famosa voladura de viviendas oídos o palabras; visión integral y unitaria50. sociales de St. Louis, Missouri. En realidad esta precisión no deja de ser un simulacro de periodización, indecible 4.2 Derrida y las visiones apocalípticas posmodernas entre irónica suspensión y pretensión de protagonismo en el mercado cultural46. En realidad, el calado del tér- Es interesante la postura que este autor51 asume frente mino «postmodernidad» va más allá de una operación a las tesis postmodernas que predican o declaran el ideológica, de propaganda o incluso de un cambio cul- fin del hombre o del sujeto, de la conciencia, de la his- tural: designa un modo de producción en el que la pro- toria, del Occidente o de la literatura y de las últimas ducción cultural ocupa un lugar funcional específico. novedades del progreso mismo, cuya idea no se ha Posiblemente la postmodernidad haya servido para res- manejado nunca tan mal tanto por la izquierda como quebrajar tanto el euro-yanquicentrismo como la narra- por la derecha. Dicha postura es de cuestionamiento a tiva teológica de la modernidad, y estemos entrando en lo que proponen tales tesis; es decir, nos aconseja que una fase diseminadora en la que los flujos de mercado les preguntemos por los efectos que buscan producir, sean apropiados por las masas subalternas de modos no por el adónde quieren llegar o con qué fines predican previstos47. la terminación del hombre, de su conciencia, de la his- toria, de Dios, y un gran etcétera. A esta postura, el 4.1 El sentido de la postmodernidad autor citado la califica de «estrategia apocalíptica», la 74 cual es fundamentalmente una, ya que su diversidad Si hemos de encontrarle un sentido al discurso de la es solamente de procedimientos, de máscaras, de apa- postmodernidad acerca del fin de la modernidad, es la riencias o de simulaciones. interpretación del mundo que durante la modernidad Para mi punto de vista, no hallan como ocultar sus siempre tuvo como fundamento la metafísica cristia- grandes fracasos y, para mantenerlos vivos, también na, y que la razón moderna fue en todo momento un recurren a sofismas y elucubraciones absurdas, que la producto de la secularización del concepto cristiano realidad y la verdad se han encargado de descubrir. El de Dios. El punto de partida común de todos los pen- diagnóstico postmoderno se concreta, como hemos sadores postmodernos es —en cambio— la muerte visto, en torno a determinadas actas de defunción, de la metafísica, es decir, de esa certeza de un mun- «no se ha llegado a pensar que los muertos que la do sobrenatural, de un valor supremo legitimador del postmodernidad mata, gozan de cabal salud; pero sí, mundo48. Habrá que considerar el hecho de que lo ver- que los síntomas en que se han basado para darles por daderamente originario de la metafísica, y que subya- fallecidos son complejos, ambiguos y susceptibles, por ce incuestionado, es la escisión misma entre el ser y tanto, de otras interpretaciones»52. el devenir. Aceptada la separación, los metafísicos se sitúan del lado del ser, y los no metafísicos y antime- 4.3 Nihilismo y acedia tafísicos del lado del devenir. Pero ambos comparten el mismo supuesto metafísico de que el ser no es el de- El nihilismo, nos dice Gianni Vattimo53, que signifi- venir y el devenir no es el ser; éste es realmente el foco del problema49. 49 González, Juliana: «¿Post metafísica y posmodernidad?» En: La Muerte de Dios… Op. cit.; p. 119. 44 Habermas, Jürgen: «Modernidad versus Postmodernidad» En 50 Ibídem, p. 139. Modernidad y Postmodernidad. Compilación de .J. Picó, 51 Derrida, Jacques; Sobre un tono apocalíptico adoptado recientemente Alianza Editorial, S.A., 4ª Reimpresión; Madrid, p. 87, 2002. en filosofía; Siglo xxi Editores, S.A. de C.V., Madrid, p. 52, 45 Rodríguez Vertiz, Felipe de J.; Op. cit.; p. 245. 1994. 46 Ripalda, José María: De Angelis. Filosofía, mercado y postmodernidad, 52 Amoros, Celia: «Feminismo, Ilustración y Postmodernidad. Notas para Editorial Trota, S.A., Madrid, p. 54, 1996. un debate», En: Retos de la Postmodernidad; Editorial Trotta, S.A.; Madrid: 1999; p.p. 59-60. 47 Ibídem, p. 68. 53 Vattimo, Gianni: El Fin de la Modernidad. Nihilismo y hermenéutica 48 Frey, Herbert: «El Nihilismo como Filosofía de nuestro tiempo» En: La en la cultura posmoderna, Editorial Gedis, Barcelona, 2000; Muerte de Dios y el Fin de la Metafísica, Facultad de Filosofía y p. 23. Letras, unam, México, p. 57, 1997. Diciembre 2011, número 9

ca lo que para Nietzsche es la situación en la cual el hombre abandona el centro para dirigirse hacia la x. 4.4 Orígenes de la postmodernidad filosófica Esta acepción es idéntica a la definida por Heidegger: el proceso en el cual, al final, del ser como tal «ya no Afirma Vattimo57, que se puede sostener que la post- queda nada». Estas definiciones de ambos autores no modernidad filosófica nace en la obra de Nietzsche, en se refieren al hombre en un plano psicológico o socio- forma precisa, en el lapso que separa la Segunda Con- lógico, sino que atañen al ser mismo, aún cuando no sideración Inactual de 1874 del grupo de obras que en se acentúan, como para significar que el nihilismo pocos años se inaugura con Humano, demasiado Hu- atañe a algo más que «sencillamente» al hombre. mano de 1878 y que comprende también Aurora de 1881 Esa dirección hacia la nada no es el movimiento y la Gaya Ciencia de 1882, de las cuales se deduce que propio del hombre, ni del ser natural, pues siempre la esencia de la modernidad es una época que reduce se dirigen al bien; la dirección hacia la nada —el ni- el ser a lo nuevo. Es decir, es la idea del eterno retor- hilismo— se presenta por la falta de aquel movimien- no de lo igual, que significa —entre otras cosas—, el to propio, pues a pesar de todas las posibilidades de fin de la época de superación; esto es, de la época del abismarse en la nada, la dirección del camino apunta ser concebido bajo el signo de lo «novum». En fin, lo al ser, tanto que incluso la decisión por la nada, para que busca Nietzsche con «la expresión filosófica de la ser posible, ha de tener la máscara de una decisión por mañana» y que es la hipótesis que Vattimo propone, el ser54. constituye la esencia de la posmodernidad filosófica. La mentalidad nihilista tiene que ver con un vicio verdaderamente capital, que es una especie de triste- 4.4.1 Pensamiento débil y utopía za relativa al bien divino del hombre; tristeza porque Dios lo ha elevado al orden sobrenatural. Precisamen- El «pensamiento fuerte» del cientificismo—propio te la «laboriosidad» enfermiza del hombre burgués de la modernidad—, llevaba en sus genes un for- puede ser fácilmente una expresión de la acedia. Tra- midable germen anti−utópico que dio fin al sujeto; tase ésta de una «humildad» pervertida que se resiste entonces, ¿cómo es posible que pueda sobrevivir a aceptar los bienes sobrenaturales, porque suponen la utopía a la muerte de su sujeto activo, que es a exigencias para quien las recibe. Y en este sentido, la vez su beneficiario? Cuando ese germen fructi- implica una aversión consciente del hombre, una au- fique, entonces emergerá la tesis postmoderna del 75 téntica huida de Dios, con el deseo expreso de que pensamiento débil, cuyo más auténtico represen- Dios no lo debería haber elevado, sino dejado en paz. tante, G. Vattimo, está convencido de que el proce- Así, Santo Tomás de Aquino ha reunido en la Suma so histórico no es capaz de suscitar novedad, y está Teológica ii-ii, 35,4 las hijas de la acedia. Para Josef resuelto a anunciar «el fin de la historia», no en el Pieper55, la acedia es uno de los rasgos característicos sentido apocalíptico o escatológico, sino en cuanto de la fisonomía espiritual de nuestra época, por la cual que la historia no puede contemplarse como pro- sería interesante aplicar las derivaciones de la acedia ceso unitario, progresivo y teleológico. Todo ello a nuestra civilización, sobre todo en sus vertientes pe- significa, en expresión de Lyotard58, el fin de «los simistas o desesperadas. grandes relatos», con sus ofertas globales de valor Por lo que respecta a Heidegger, la base de su re- y sentido. flexión la constituyen ciertos sentimientos funda- Sobre este particular, Vattimo está de acuerdo, mentales que se refieren a la existencia en general y porque la utopía, sea religiosa o laica, ha muerto sus modalidades, como la inquietud, la angustia, el juntamente con la de la verdad y la del ser; cuando tedio y la soledad, sentimientos que son característi- el pensamiento posmoderno se percata de la incu- cos de la acedia, por lo cual, nos dice Antonio Caso56, rable debilidad del ser, no puede menos de hacerse vemos en el ingenioso pensador alemán, al genuino sensible a su propia debilidad y, por tanto, al inexo- representante de la filosofía de la acedia, al filósofo rable «oscurecimiento de la verdad». A tal pensa- que, recogiendo en su obra personal los valores y las miento, sólo le queda ejercitarse en la anamnesis, inspiraciones de su momento histórico, hubo de recu- no en la prognosis; es decir, recorrer como parásito rrir a la angustia y al tedio, para demostrar los funda- aquello que ya ha sido pensado, y en un postrero mentos de la existencia del ser, o como el mismo dice gesto de lucidez, podría también confeccionarse del ser-en-el-mundo. una apología del nihilismo, al constatar que del ser

54 Pieper, Josef; Op. cit.; p. 314. 57 Vattimo Gianni; Op. cit.; p. 145. 55 Ibídem, p. 315. 58 Ruiz de la Peña, Juan Luis: La Pascua de la Creación. Escatología; 56 Caso, Antonio: La Persona Humana y el Estado Totalitario; Obras Biblioteca de Autores Cristianos; Madrid, 2000; p. 15. Completas; unam; México: 1975; Vol. viii; p. 168. Pharus academiæ

ya no queda nada y que es preciso ir a la cura de la chtung heideggeriana. El tercero, el pensamiento tec- anorexia del sujeto. nológico, es el que trataría de descubrir y preparar la manifestación de las «chances» ultrametafísicas o 4.5 Postmodernidad: nueva imagen del mundo postmetafísicas de la tecnología mundial.

Según Romano Guardini59, las señales que revelan el 4.7 Juicio apocalíptico de la postmodernidad ocaso de la Edad Moderna, y que a su vez indican la gestación de una época futura, son tres fenómenos La modernidad parece transmitir a la postmoder- que constituyen una unidad, y son: el del hombre no nidad una doble herencia del fin: una dramática, en humano, el de la naturaleza no natural y el de una cuanto que sitúa la funcionalización del proceso social cultura no cultural. Esta última presenta un rasgo y su fe, en el expresivo y explosivo momento del «esca- esencial: el de riesgo, como integrante derivado hacia parse» o el «abrirse camino», mientras que la otra es el poder, porque si el hombre domina en cierta medida desdramatizadora. La penúltima, soporta la sonrisa los efectos inmediatos de la naturaleza, no domina los descarada de una racionalidad social pervertida y la indirectos, incluido el dominar mismo; es decir, tiene transforma en una conciencia estética de indiferencia. poder sobre las cosas, pero no sobre su poder. Un punto de partida contemporáneo podría ser la ac- En lo religioso, continúa Guardini, seremos testi- tual y tibia recepción de las ideas posmodernas sobre gos del fuerte progreso de la forma de existencia no el fin. Jugar con el Apocalipsis es una parte integral de cristiana, desarrollándose un nuevo paganismo, ca- la filosofía posmoderna. Una conciencia de la «condi- racterizado por la voluntad de quitar a la Revelación ción posmoderna», es que la desdramatización del fin su carácter trascendente y fundamental. La fe católica ha llegado a ser una imagen dominante, a pesar del tendrá que escapar a la secularización y, añadiríamos hecho de que entre los seguidores de Baudrillard, una nosotros, al neognosticismo; con un sello especial de redramatización del fin está a mano . La conciencia confianza y fortaleza que nos conduzca a comprender de aquel filósofo, de carácter estético, que se supone los textos escatológicos, sin que se pueda decir que se encarna el pensamiento postmoderno, ha sido «enri- acerca el fin, cuando Cristo mismo hizo saber que el quecida» con reflexiones sobre el «fin de la finalidad», fin de las cosas sólo lo conoce el Padre (Mt 24,36), el y es identificable como una «teoría de la catástrofe» o 76 cual puede ser no cronológico sino substancial, es de- como una catástrofe teórica, cuando se compara con cir, que nuestra existencia está entrando en las fron- la conciencia y la teoría de la crisis contenida en la mo- teras de la opción absoluta y de sus consecuencias; dernidad62 de que se aproxima a una zona, tanto de las máximas Sin embargo, Baudrillard63 se cura en salud: la posibilidades como de los riesgos supremos. autoconciencia contemporánea es «paroxista», está condenada a permanecer siempre al borde de un final 4.6 Caracteres del pensamiento postmoderno que en realidad ya ha tenido lugar. El advenimiento de lo virtual es nuestro apocalipsis, y él nos priva del Sobre las bases del pensamiento de Nietzsche y Hei- acontecimiento en el que Baudrillard64 declara no degger, Vattimo60 propone tres caracteres propios del creer, pues en último término, si hubiera razones para pensamiento de la postmodernidad: creer en ese cataclismo, lo que habría que hacer se- ría precipitado, no oponerse. Parece entonces, que tal a) un pensamiento de la fruición autor, al igual que el pensamiento posmoderno, no ha b) un pensamiento de la contaminación encontrado otra salida que la de una actitud ecléctica, c) un pensamiento tecnológico ya sea por la vía del historicismo o del pragmatismo. Por otra parte, el pensamiento postmoderno es un es- El primero, equivale a un revivir —entendido en sen- fuerzo de la cultura por superar un juicio apocalípti- tido estético— de las formas espirituales del pasado, co, que caracterizó la imagen de la sociedad industrial que tiene como función un efecto emancipador en sí según la filosofía moderna; y así, si aquel pensamien- mismo. Tal vez a partir de aquí, una ética postmoder- to trata de cambiar la actitud de la filosofía frente al na podría oponerse a las éticas aún metafísicas del mundo tecnológico, ya no tiene sentido esa crítica ra- desarrollo, del conocimiento, de lo nuevo como valor último. El segundo, se trataría de un saber residual, 61 Scherpe. Klaus R: Op. cit.; p. 369. es decir, sería un saber que se colocaría en el nivel de 62 Ibídem, p. 62. 63 Naveiro, Juan Carlos: El Fin del Siglo Posmoderno; Ediciones del una verdad «débil», cuya debilidad podría referirse a Serbal, Barcelona: 2002; p. 51. la ambigüedad del velar y descubrir, propia de la Li- 64 Févre, Fermín: «La Posmodernidad o la transformación de las utopías». Charla con el filósofo italiano Gianni Vattimo, en Clarín, 59 Guardini, Romano; Op. cit.; p.p. 70-120. B. Aires, Agosto 15 de Octubre de 1987. En: Filosofía, 60 Vattimo, Gianni; Op. cit.; p. 155 Modernidad, Posmodernidad de Marta López Gil; Editorial Biblos, ; Texto 9, p. 17 del Anexo (1993). Diciembre 2011, número 9

dical y apocalíptica a dicha sociedad industrial65.

4.7 Juicio apocalíptico de la postmodernidad

El pensamiento postmoderno propone, desde el punto de vista religioso, lo que se conoce como New Age: la nueva religiosidad del mundo postmoderno. Este pensa- miento y esta religiosidad, predican el fin o terminación del cristianismo, o mejor, del catolicismo, el cual está por desaparecer, si no es que ya de plano desapareció; pues se le identifica —o se le ubica— en la Era de Piscis, la del cristianismo, y hoy ha surgido la Nueva Era, la de Acuario. La Nueva Era y su principal fuente ideológica que es el gnosticismo, cuentan con un esquema escatológico que se opone frontalmente al descrito en la Biblia y, según Vidal Manzanares66, se asienta sobre dos pilares: la creencia en la reencarnación y la fe en el triunfo de la Nueva Era. Este movimiento anuncia que estamos a punto de entrar en una época distinta de la historia de la Humanidad, una época que —de he- cho— concluirá la historia; la cual estará dominada por los principios de la New Age y donde sólo existirá un gobierno, una economía y una religión mundiales. La versión contemporánea de la gnosis más ampliamente extendida hoy es la ideología, es decir, una doctrina cuyo objetivo es social o político, apoyada por una amplia visión del mundo, representada como garantizada por la ciencia y merecien- do a causa de su infalibilidad, casi mágica, una adhesión absoluta de naturaleza casi religiosa. El gnosticismo cristiano contemporáneo consistirá, pues, en abandonar el magisterio auténtico de la Iglesia como criterio de la verdad cristiana, para buscar el lugar de interpretación en una u otra de tales ideologías. Es el caso de todos los cristianos que practican lo que M.J. Guillou llama «“la heterointerpretación” de la fe cristiana, es decir, que interpretan la Revelación, no ya según la regla de la misma fe cristiana, sino según las exigencias de una cultura ajena al cristianismo ortodoxo: así, por ejemplo, interpretan el Evangelio a la “luz” de un marxismo, de un nietzsche- 77 anismo o de un freudismo de bolsillo. En vez de bautizar o de transubstanciar dentro de la fe cristiana la parte de verdad que contienen estas ideologías, o —en el mejor de los casos— “filosofías”, que disuelven la verdad de la Iglesia en un sistema intelectual impermeable al misterio del Padre que se revela en Jesucristo. Entonces, el nombre de Jesús “venido en la carne” (Jn 4,2) ya no es sino un pretexto para una visión del mundo que podría igualmente prescindir de ÉI»67.

65 Vidal Manzanares, César: En las raíces de la Nueva Era; Editorial Caribe; Nashville, U.S.A., 1996, p. 155. 66 Leonard, André: Pensamiento Contemporáneo y Fe en Jesucristo; Un discernimiento intelectual cristiano; Ediciones Encuentro; Madrid, 1997, p. 27. 67 Ibídem. Pharus academiæ

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La valentía: de Platón a nuestros días

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Juan Carlos Rendón Aguilar En el «Gorgias», Platón nos relata algunos diálogos entre Sócrates y sus Estudiante de Filosofía en el iest amigos. Primero con Gorgias, continua con Polo y después entra en diálogo con Calicles: — «A los de buen juicio para el gobierno de la ciudad y a los de- cididos, les toca regir las ciudades, y lo justo es que ellos tengan más que los otros, los que gobiernan más que los gobernados». Esta es la idea de justicia de Calicles. No obstante, Calicles no es —en absoluto— el único que ha dirigido su mirada hacia esta superioridad. También otros pensadores, como Herbert Spencer, Nietzsche e incluso Darwin, han encontrado esa constante en la na- turaleza: el que es más fuerte tiene la facilidad de actuar sobre el que es débil. Pero entonces nos encontramos, como Calicles, con las leyes impuestas por el hombre, que se contraponen a la ley natural. Al ser más —en número— los débiles, acomodan las reglas de forma tal que quedan limitados aquellos a quienes por naturaleza les corresponde más. Y es que, si observamos a la naturaleza, podremos confirmar que Calicles no está en un error. El león más fuerte exige y gana su comida, y en las ma- nadas son los machos más fuertes los que ganan su derecho a aparearse. Y, si así es como actúa la naturaleza; por tanto, aunque no es una conclusión definitiva, sabemos al menos que así actúa la naturaleza. ¿No será que así es como el hombre, que no vive al margen de la naturaleza sino que la refleja en cada aspecto de su vida, debe regirse también? ¿O es que las leyes de la fuer- za deben establecerse para dar paso a una superación como especie, muy al estilo de Nietzsche? ¿O quizá el valor, que toma el centro de la conversación —y que será el que aquí trataremos nosotros— pueda tener un sentido tras- cendente, que no sólo sea ubicado en cuanto a la fortaleza física o al poder que procede del dinero o de posiciones ventajosas, sino también en cuanto a la posición respecto de las propias creencias, del propio crecimiento, espiri- Pharus academiæ

tual y psíquico, y del control de nuestro ser, ordenándolo de vida cristiana —para lo cual no es necesario practicar hacia un bien mayor? la fe católica (o ninguna otra), sino simplemente respirar Para poder entender los planteamientos anteriores, en el ambiente de nuestra cultura—, nos lleva a conside- debemos tener en cuenta los puntos de vista de Calicles rar la valentía socrática, valorarla y vivirla desde los ojos y Sócrates, y también echarle un vistazo al contexto del modernos, donde se necesita más valor para no hacer lo diálogo. Hacia el final de la conversación entre Sócrates y que el mundo nos apremia, sólo porque nos es casi exigi- Calicles, el primero toma la palabra y termina en un mo- do por la sociedad. nólogo en el que lo resume todo, pasando rápido por la di- Claro que —en algunos casos— también hará falta ferencia entre lo agradable y bueno, para luego observar una adecuada educación que no forme a la persona con que las cosas buenas deben llevar un orden, y terminar un código moral impuesto, sino con uno que sea com- aceptando que, para ordenar el cuerpo y el alma, hay que prendido y, desde la comprensión, sea aceptado. Creo castigar ciertas pasiones que —de otra forma— no se po- que este es un asunto vital, pues la valentía que propone drían corregir, y que —por fin—llegando a esta bondad, Sócrates —y que yo sostengo—, no se logrará sin la acep- se podría gozar de la felicidad en la vida. Durante todo tación de un código moral propio que exija a la misma el trayecto de la conversación, la palabra griega ανδρεíα, persona el autocontrol y la fuerza de voluntad. Este era que se traduce al español como valor o valentía, encuen- precisamente el primer problema de Calicles: entender tra un lugar especial. que la bondad de los actos no siempre corresponde a Nos enfocaremos al sentido socrático que correspon- nuestros apetitos, y a nuestros deseos o dolores. de al de tener el valor de aceptar que tenemos pasiones Aprendamos pues a movernos en la dirección en la que no nos llevarán a nada, más que a nuestra destruc- que nuestro espíritu realmente encontrará el crecimien- ción. Debemos observar que ahora, el cambio que se da to. No nos dejemos arrastrar por las pasiones que nos es- en la forma de entender esta palabra no corresponde al clavizan. Encontremos la verdadera libertad. Y así, como cliché de las películas de acción, donde el protagonista Calicles, convenzámonos de que es mucho más valiente es más valiente entre más esforzado o atrevido sea. Es el el que se hace frente, el que se anima a crecer, el que no cambio entre un héroe valiente, cuyo valor es medido por se esconde en una apariencia de fuerza exterior para di- el número de «malos» que mata, y el hombre sensato que simular que no puede dominar lo que lleva dentro. En- se hace frente a sí mismo. tendamos que los verdaderos dolores y necesidades que 80 Es la diferencia de la valentía de aparente arrojo a lo debemos satisfacer, son aquellos que nos conducen por desconocido, ante la valentía de un verdadero arrojo al un camino deseable. Y, finalmente, seamos nosotros los camino de la virtud. Y debemos estar alerta, porque po- que controlemos estas hambres, y no permitamos que és- demos perdernos en aquel concepto que la sociedad se tas nos controlen a nosotros. crea —y que conviene a la falta de conciencia popular— y terminar por no ver esta idea del valor interior en ¡Caminemos con los pies de la razón! absoluto. Ahora bien, tampoco debemos pasar por alto que nuestra sociedad está regida por un grupo de normas y con un código moral, que proviene de la ideología cristia- na, la que a su vez fue traída desde un continente donde esta misma se consolidó, sobre la base que estos persona- jes propusieron y otros afianzaron más tarde. Es por esto que me cuestiono que la comunidad de esta era postmo- derna adopte con tanta facilidad esa cobardía frente a sí, y que tenga en tanta estima la valentía de pantalla que —a mi parecer—, nada vale. Usted tendrá su propia opi- nión, y la mía puede o no gustarle. Continuando con este tópico, tomemos en cuenta que, en esta cultura de base cristiana, los valores son elogiados y muy «ponderados» a la hora de decir pala- bras bonitas, y que copiosas alabanzas les son dadas a aquellos (valores) que son importantes, pero muy poco de esto refleja sinceramente la valentía de la que estamos hablando. Antes, es más fácil que las personas piensen cosas completamente contrarias sobre estas virtudes que tanto alaban, y esto queda muy claro para cualquiera que observe la incoherencia de las actitudes de la gente. Por eso hoy la reflexión de estos temas y de la cultura Diciembre 2011, número 9

El verdadero sentido del amor

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Ernesto Sosa Díaz El hombre por naturaleza siempre ha tendido hacia el bien, y este bien Lic. En Filosofía por el seminario trascedente se vuelca hacia el mismo hombre, a través de la principal virtud Ignacio Lehonor Arroyo, de Tuxpan, Veracruz. Diplomado que existe en el ser humano: el «amor», principio de todo y fuente última de en síntesis filosófica por la todo. Universidad Pontificia de México. Es por eso que en este ensayo se analiza el sentido primario del amor, su Actualmente estudiante de Psicología en el iest. valor contemporáneo, la interpretación griega acerca de su grafía y su inter- pretación metafísica, para una valoración ética y una aplicación, a través del principio de alteridad. A través del largo proceso humano, el hombre se ha encontrado con la di- ficultad de constituirse en un ser social: la tendencia a formar una familia, una comunidad, crear un grupo, jugar un determinado rol en la sociedad, a buscar siempre el bienestar comunitario y personal. La misma historia manifiesta cómo el hombre siempre se ha preocu- pado por ser alguien en la vida, por su familia y en general por su prójimo (próximo). No obstante percibe una fuerza motora que lo impulsa a realizar todas estas acciones, muchas veces no conoce cómo se llama esta realidad que lo conduce a auto−realizarse, a contemplar su fin último, para que su vida obtenga un sentido, es decir, obrar conforme a sus facultades espiritua- les (razón y voluntad) para que tiendan hacia el bien. Pharus academiæ

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Esta fuerza motora es el amor, muchas veces mal en- d) Philia (φιλία) es un amor virtuoso desapa- tendida, e interpretada fuera de su justa dimensión, que sionado, cuyo concepto fue desarrollado por le hace perder de vista su valor y su propia esencia. Por Aristóteles. Incluye la lealtad a los amigos, eso, la principal preocupación de esta reflexión es retor- la familia y la comunidad, y requiere virtud, nar a la esencia propia del amor, y responder si éste es un igualdad, y familiaridad4 sentimiento más del grupo concupiscible, o si está deter- minado por una constitución metafísica que trasciende e) Ágape (ἀγάπη) significa amor en griego ac- la realidad misma. tual. La palabra agapó es el verbo «amo». Ge- En la vida no se comienza a ser alguien por una inter- neralmente se refiere a un tipo ideal de amor pretación racional de lo que somos, o por cuestiones éti- «puro», más que a la atracción física sugerida cas implantadas por nuestros padres en la vida familiar. por Eros. Por lo regular los griegos lo aplicaban Se comienza a ser alguien por un acontecimiento experi- a la divinidad, y fue el término más utilizado mentado desde el primer día de nuestra existencia: «ser en la Biblia, para referirse al amor de Dios por amados». Este es el suceso que determina nuestra vida y su pueblo5 nos cautiva para responder a nuestro proyecto existen- cial. Como se puede apreciar, los griegos tenían diferentes En la actualidad, nuestro mundo cada vez más prag- términos para referirse al amor. Ellos entendían que matizado y relativizado ha perdido el contexto propio de existían amores propios y sagrados como el ágape, y la palabra amor, que ha sustituido por violencia, destruc- que éste es la expresión máxima del amor en todas sus ción, guerra, odio y, en su grado máximo, muerte. circunstancias. Todo hombre debía aspirar a este tipo La sociedad, en su mayoría, ya no habla de amor, de de amor, pues purificaba el alma, la mente, el corazón amar a nuestros hermanos, de tener una identidad fi- y dignificaba a la persona; daba una certeza mayor que lantrópica. Hoy se habla de yo: de ser yo y no importar cualquier tesoro humano. Por eso la Biblia en el Nuevo nada más que yo. Por eso me atrevo a descontextualizar Testamento, que es puramente de procedencia griega, la palabra guerra, para invitar a la humanidad a hacer expresa que por seguir el reino de Dios, bien valdría ven- «la guerra del amor”» para traer la paz que tanto nece- der todo lo que se tiene para obtener ese tesoro que no se sitamos. Sólo a través de este camino, el hombre puede roe, ni se corrompe6. regresar a su principio deontológico, es decir, la felicidad. Así, el amor adquiere otro significado; ahora ya no es 83 En la antigua Grecia, ya los grandes pensadores en- de carácter personal o algo que se pueda padecer o no contraban un problema para poder aplicar el término padecer. El amor es amarse a sí mismo pero amando a amor a diferentes realidades existentes en su época, pues todas las personas, al medio ambiente y a Dios, como su no era posible predicar el amor a nuestros padres, amor grado máximo. a la esposa, a los amigos, a Dios, en un mismo sentido. San Agustín nos refiere en su libro confesiones: «Nos Así, a través de un largo proceso semántico, llegaron a la hiciste Señor para ti, y nuestro corazón inquieto está gran empresa de tener diferentes grafías para el término hasta que no regrese a ti»7 , o al mismo Jesucristo expre- amor, con diferentes significados. sando: «Ama a tu prójimo, como a ti mismo»8 . En el mundo actual, la palabra amor ha perdido el sig- a) Eros (ἔρως) es un amor pasional, con deseo nificado propio, como lo ha expresado el papa Benedicto sensual y duradero. Aunque Eros se siente ini- xvi, en su carta encíclica Deus Caritas Est, «Hoy el amor cialmente por una persona, Eros ayuda al alma se ha prostituido»9. Hoy se habla de amar a todo mundo, a recordar el conocimiento de la belleza y con- de amar cualquier cosa, pero con el mismo significado. tribuye a la comprensión de la verdad espiri- Encontramos expresiones como amor a la esposa, tual1 amor a nuestros hijos, amor a Dios, que serían los prin- cipios sobresalientes del amor; sin embargo, también b) Storge (στοργή) es un afecto natural, como escuchamos expresiones como amor a la bandera, amor aquel que sienten los padres por sus hijos2 al trabajo, amor al dinero, amor al perro, e incluso expre- siones como «vamos a hacer el amor», para referirse al c) Xenia (ξενία), la hospitalidad, era una práctica acto sexual humano. extremadamente importante en la Antigua Grecia. Era una amistad casi ritualizada, for- mada entre un anfitrión y su huésped, quienes 4 Benedicto xvi: Deus Caritas Est; Dabar; México, p. 2, 2006. podían haber sido previamente desconocidos3 5 Ibídem, p. 2-3. 6 Cfr. Mt 6, 19-20. 1 Serraima Cirici, Enrique: Gramática Griega, upm, México, p. 56., 2003. 7 Agustín: Confesiones, Gredos, España, Libro i, cap. 1, 2000 2 Ibídem. 8 Cfr. Mt 22, 34-40. 3 Ibídem. 9 Benedicto xvi: Deus Caritas Est, Dabar, México, p. 3, 2006. Pharus academiæ

El amor hoy se ha empantanado, ha perdido su rea- de un binomio metafísico: materia y forma10 o, en un lidad sublime y se ha denigrado así en una realidad contexto más entendible, de alma y cuerpo. Este bino- dionisiaca, donde se ha llegado a confundir con placer, mio está formado por una constitución intrínseca, es obsesión, deseo, celos e ira. decir, inalienable, puesto que sin alma no hay vida en Ya los griegos nos advertían de esta realidad, y bien un cuerpo, y sin un cuerpo no habría existencia medible valdría elogiar su tenacidad por diferenciar los tipos de de un alma. En otras palabras, se puede certificar que amor en un orden jerárquico, puesto que hoy en día se el alma está hecha para un cuerpo y un cuerpo para su entiende la palabra amor en un mismo sentido, y para alma. aplicarse a cualquier realidad. Por eso existen personas Por tanto, el hombre no puede aceptar sólo su alma o que aman más su trabajo, que a su familia; o jóvenes que únicamente su cuerpo; éste tiene que aceptar su consti- confunden el placer con el verdadero amor; o mujeres tución hilemórfica y aceptar esta realidad metafísica, ya deshumanizadas que por «amor a su reputación» pre- que el amor (Eros) mal entendido tiende a exaltar sólo el fiere abortar y matar a un niño, que tiene su pleno dere- cuerpo, es decir, si el amor sólo se vuelca hacia la exterio- cho a nacer; o los familiares de un enfermo terminal que ridad y la aceptación del cuerpo, sin darle importancia prefieren aplicarle la eutanasia; o personas deshumani- al alma, se está promoviendo la tendencia del hombre zadas que contaminan los ríos y provocan el calenta- a elogiar la belleza exterior; el hombre pierde de vista la miento global del planeta, a través de la contaminación, dignidad de cada persona; y, como afirma el sumo pon- sin importarles los animales, las plantas y todos los que tífice Benedicto xvi, el amor se convierte en puro sexo, vivimos en este planeta, y que lo necesitamos para nues- en mercancía, en simple «objeto» que se puede comprar tra sobrevivencia; o encontrar países que en nombre de y vender; más aún, el hombre mismo se transforma en un amor patriótico declaran la guerra a otros países, sin mercancía11. No obstante, el hombre no debe perder de importarles la vida de las personas y el sufrimiento que vista al alma, ya que la persona en su conjunto exige y re- provocaran en toda la región; o países ricos que prefieren clama mutua compresión y donación de parte de ambos. gastar su dinero en armamento, que destinar ese dinero Cada persona debe tener en cuenta esta frase del gran a los niños de África que se están muriendo de hambre filósofo San Agustín de Hipona «ama et quod vis fac»12 por no tener que comer. (ama y haz lo que quieras). San Agustín manifiesta un Lamentablemente esta es la cuestión neurálgica por nuevo estado de vida, una condición plena de la per- 84 la que nuestra sociedad se ha corrompido: se ha creado sona humana; sin embargo, cabría encuadrar bien esta una subcultura de la muerte. Hoy, en nombre de la liber- afirmación, puesto que Agustín manifiesta un amor tad, se han perdido los principios primeros de nuestra trascendente (Ágape), no un mero sentimentalismo pri- constitución metafísica. mario, para hacer después un libertinaje. En este sen- Ya no nos inmuta ver en la televisión la muerte de tan- tido, la frase manifiesta algo sublime, no es únicamente tas personas a causa del crimen organizado, a causa de hacer las cosas por capricho, es un estado en el que se la guerra, a causa del odio entre países. Actualmente lo manifiesta lo que como individuo puedes querer, puesto vemos como cualquier noticia sin trascendencia ni im- que todas tus acciones tendrán este sentido de amar, «si portancia. Ya no nos dice nada, no nos conmueve, no nos callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si lleva a elevar una oración por todos ellos, por sus fami- corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás lias, y este es el síntoma claro de nuestra deshumaniza- con amor. Si tienes el amor arraigado en ti, ninguna otra ción. Es por eso que el amor no puede ser un sentimiento cosa sino amor serán tus frutos»13. como muchos lo expresan: el amor no es un sentimiento, Ya con esta afirmación agustiniana se puede perci- el amor es un estado de vida, es una opción fundamental bir la existencia propia del amor, y que no es único de la que debe tomar toda persona, en nombre de su felicidad naturaleza humana. Este estado de vida tiene su funda- y la de sus hermanos. mento metafísico: ¿cómo se llega a percibir? La respuesta Como se ha afirmado, el amor no es solamente un es: a partir del trascendental «bien», puesto que el hom- sentimiento, no queda sólo ahí sino que trasciende la bre por naturaleza tiende hacia el bien, hacia la perfec- realidad misma: tiene un constitutivo metafísico. El ción, hacia buscar la plenitud de vida, y en la búsqueda amor no es solamente establecido en un carácter inma- de esa plenitud, que es primeramente la búsqueda de fe- nente al ser humano, ya que se afirma que éste se tiene licidad. Y en la búsqueda de esta felicidad se encuentra que adecuar a aquél para establecer una adaequatio inminentemente con el amor. Ahora, ¿qué es el amor? plena, puesto que el amor tiene su fundamentación en Ante esta pregunta que socava nuestra existencia se el ser, del cual también la humanidad posee su carácter debe responder: el amor es Dios mismo. Por eso san Juan ontológico. Aristóteles manifestaba la constitución metafísica 10 Aristóteles: Física, Gredos, España, Libro vi, 2000. del ser humano, al firmar que el hombre está compuesto 11 Benedicto xvi: Deus Caritas Est, Dabar, México, p. 4, 2006. 12 Agustín: Confesiones, Gredos, España, Libro vii, 2000. 13 Ibídem Diciembre 2011, número 9 manifiesta «Dios es amor»14 en todas sus manifestacio- que muera; para lanzarle olas de frescura ante su proble- nes. Por tanto, la definición de amor nos da una nueva mas, y no olas turbulentas hasta que lo ahoguen. perspectiva. Ahora se puede manifestar que el hombre es Entendido el amor en este sentido, resulta muy sen- imagen y semejanza de Dios, puesto que fuimos creados cillo llevar una ética plena en toda nuestra vida, puesto como expresión máxima de su amor. Es por eso que se que el amor ha sido puesto como base preeminente de tiene que responder a ese amor amando a los demás, ya toda la realidad. Es por eso que quien tiene amor, será que no existe en el mundo ninguna persona que pueda una persona que busque siempre el bien por sí mismo, en decir que no ama, pues su constitución óntica es el amor su vida, en su trabajo, en la escuela, que busque el bien en su esencia propia. común antes que una remuneración económica, donde Bien valdría evocar a la memoria la frase de Virgi- exista una sociedad más justa, más humana, llena de lio en las bucólicas «Omnia vincit amor, et nos cedamus plenitud de vida. amori» (el amor todo lo vence, rindámonos también no- ¡Hombres! Volvamos a nuestra esencia original. Fui- sotros al amor). mos creados para amar, para perdonar, para tomarnos Como ya se ha visto, sólo a través de la vivencia del de la mano, y ver que el mundo puede ser feliz si todos amor es como el hombre puede y debe ser un hombre empezamos a cambiar nuestra manera de pensar. Hoy nuevo, trasformado, dignificado, pues su constitutivo estamos en una sociedad gimiendo dolores, asqueados metafísico es amor. Por tanto, el hombre tiene que res- de tanto odio, de tanta guerra, de tantas muertes, de ponder al amor infinito, amando a las personas que ro- tanto dolor. Hoy vivimos atemorizados, encerrados en dea. nuestras casas, temblando ante el monstruo que noso- Es así como surge este principio: «la alteridad», que tros como sociedad fuimos creando, y que hoy se ha sa- no es más que el amor al prójimo, es decir; adquirir im- lido de control. Por eso, te invito a hacer esta «guerra del portancia en tanto cuanto el otro también adquiera su amor», para que la paz que tanto necesitamos reine en importancia. Ahora lo esencial no es lo que yo pienso nuestro mundo, en nuestro país, en nuestro estado, en sino lo que piensa el otro: es una renuncia a mi ego, para nuestra sociedad, en nuestra familia, en nuestro hogar, hacerme más con mis hermanos. en nuestro corazón. Este es el camino en el que el mundo ahora debe vol- carse, porque cuando vemos la cara del otro, su cara nos habla y nos dice el quinto mandamiento —no ma- 85 tarás—15, y el no matar significa cambiar nuestros pla- nes, que muchas veces atentan contra la muerte del otro para satisfacer nuestros placeres; en sumo grado, el otro ahora manifiesta el rostro de Dios, y ahora Dios está en el sencillo, en el pobre, en el hambriento, en el desprote- gido, en el que la muerte se hace patente, pero también es el que está en nuestras manos arrancarlo de esa opre- sión, para darle vida. Porque sólo el hombre puede cambiar a este mundo cada vez más lleno de maldad. Hoy, «hay que amar hasta que duela, porque cuando amas hasta que duela ya no puede haber más dolor, sino más amor»16. En esta frase se resume el sentido máximo del amor, la donación por el otro. El amor implica dolor, esfuerzo, sacrificio, miras su fin último y no el medio para llegar a él. Es así como queda expresado el sentido máximo del amor. Ahora nos toca vivir la ley del amor, donde todos adquirimos una importancia, puesto que todos somos ahora vasijas de barro, puestas en las manos del otro. Ahora nuestras manos las podemos utilizar para dárse- las al que más la necesita, y no para tirarle piedras hasta

14 Cfr. 1 Jn, 4, 7-8. 15 Lévinas: Ética e Infinito, Porrúa, México, pp. 71-72, 1999. 16 Discurso de la madre Teresa de Calcuta. Pharus academiæ

Bibliografía

Agustín: Confesiones, Gredos, España, 2000. Aristóteles: Física, Gredos, España, 2000. Benedicto xvi: Deus Caritas Est, Dabar, México, 2006. Biblia de Jerusalén, Descleé de Brouwer, España, 1998. Lévinas: Ética e Infinito, Porrúa, México, 1999. Serraima Cirici, Enrique: Gramática Griega, upm, México, 2003.

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